Articulo Cientifico Escuela

Diagnóstico situacional y factores de riesgo de la biodiversidad de especies vegetales medicinales en el centro poblado de Combayo, Cajamarca

Situational diagnosis and factors of risk of the biodiversity of vegetable medicinal species in the populated center of Combayo, Cajamarca

1 Alejandro Seminario Cunya2 Isidoro Sánchez Vega

Ing. Agrónomo, profesor auxiliar de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Cajamarca. Cajamarca, Perú. Email: [email protected] Docente investigador Universidad Nacional de Cajamarca. Director del Herbario CPUN. Cajamarca, Perú.

Palabras clave: plantas medicinales, conservación, factor de riesgo

RESUMEN: El estudio involucró el centro de acopio y las zonas productoras. El primero, se ubica en el centro poblado de Combayo (distrito de La Encañada), a 3264 msnm y entre las coordenadas UTM 786023E y 9222334N. Las zonas productoras se ubican en los distritos de Sorochuco, Huasmín, La Encañada y Bambamarca, (región Cajamarca), ubicadas entre 3100 a 4200 msnm y entre las coordenadas UTM 781636E y 9232517N, 795161E y 9239636N, 793692E y 9229623N y 782166E y 9222647N. Se inventariaron y pesaron las especies, se conoció su uso, se aplicaron encuestas y entrevistas en el centro de acopio y en los lugares de producción, que involucró ecosistemas naturales e intervenidos, se evaluó la diversidad de especies, los factores ecológicos, el estado de conservación y los factores de riesgo para su conservación. Se inventariaron 58 especies, de las cuales 12 % son cultivadas, 16 % arvenses y 72 % silvestres. El 62 % son propias de la Jalca y el 38 % de la Quechua Alta. Dentro de las formas de crecimiento, el 24 % son arbustivas, el 69 % herbáceas, el 3 % arbóreas y el 3 % parásitas. Su hábitat tiene temperaturas entre 4 y 10 °C, suelos turbosos, de pH ácido a fuertemente ácido, medianamente profundos a superficiales e incluso degradados. Las especies predominantes del entorno son principalmente gramíneas como el walte (Stipa ichu) y el calamagrostis (Calamagrostis sp.) y las mismas especies medicinales, pues todas comparten el mismo hábitat, donde las diversas actividades humanas están poniendo en grave riesgo su conservación. El factor de mayor amenaza es la minería, los otros factores de riesgo son el comercio y la ganadería que en muchos casos provoca la sustitución de los pastos naturales y, finalmente la agricultura, que poco a poco va ganando espacio en la Jalca.

ABSTRACT: The study involved the storing center and the areas producers. The first, is located in the populated center of Combayo (district of Encañada), to 3264 msnm and among coordinated UTM 786023E and 9222334N. The areas producers are located in the districts of Sorochuco, Huasmín, The Encañada and Bambamarca, (region Cajamarca), located among 3100 to 4200 msnm and among coordinated UTM 781636E and 9232517N, 795161E and 9239636N, 793692E and 9229623N and 782166E and 9222647N. You inventoried and weighed the species, your use was known, surveys and interviews were applied in the storing center and in the production places that it involved natural and intervened ecosystems, the diversity of species was evaluated, the ecological factors, the conservation state and the factors of risk for your conservation. 58 species were inventoried, of which 12% is cultivated, 16% arvenses and 72 wild%. 62% is characteristic of Jalca and the 38% of the Quechua High. Inside the forms of growth, 24% is arbustivas, 69 herbaceous%, 3 arboreal% and 3% parásitas. Your habitat has temperatures between 4 and 10 °C, black ground, of acid pH to strongly acid, fairly deep to superficial and even degraded. The predominant species of the environment are mainly gramineous as the walte (Stipa ichu) and the calamagrostis (Calamagrostis sp.) and the medicinal same species, because all share the same habitat, where the human diverse activities are putting in serious risk your conservation. The factor of more threat is the mining, the other factors of risk are the trade and the cattle raising that it provoke the substitution of the natural grasses in many cases and, finally the agriculture, that little by little comes winning space in Jalca.

Key words: plant medicinal, conservation, factor of risk

INTRODUCCIÓN

En las últimas décadas, en occidente hay un gran interés por las plantas medicinales. La investigación hacia ellas es cada día más evidente tanto en los países desarrollados como en vías en desarrollo, como el Perú (Obregón 2000), donde existe una gran diversidad de especies medicinales, especialmente en la selva tropical y en la Jalca, pero a la vez surgen actividades que ponen en riesgo su conservación.

No se puede precisar desde cuando se comercializan plantas medicinales en Cajamarca. En el caso de Combayo, se realiza desde hace más de 23 años, cuyos volúmenes eran entre tres y cinco veces mayor al actual. Es una actividad que involucra a toda la familia y está ligada a las de menores recursos económicos.La actividad minera es la de mayor riesgo para la conservación de las especies medicinales, le sigue en importancia el incremento del comercio y biocomercio. El tercer factor, la ganadería, que reemplaza los pastos naturales por cultivados, o

Diagnóstico situacional y factores de riesgo de especies vegetales medicinales Alejandro Seminario Cunya

son quemados para renovarlos. Finalmente, el avance de la agricultura hacia la Jalca contribuye a depredar las especies medicinales.

Los objetivos del estudio fueron: (1) inventariar las especies vegetales medicinales comercializadas, (2) estudiar sus usos, mercado, producción, recolección y, (3) identificar los factores de riesgo para su conservación.

MATERIALES Y MÉTODOS

a. Descripción de la zona de estudio

El estudio comprendió al centro de acopio y las zonas productoras. El centro de acopio se ubica en el centro poblado de Combayo a 3264 msnm y en las coordenadas UTM 786023E y 9222334N. Las zonas productoras se ubican en doce caseríos de Combayo, dos zonas del centro poblado San Juan de Hierbabuena y una zona del centro poblado Yanacancha, (distrito La Encañada), asimismo comprendió tres caseríos del distrito de Sorochuco (Chugurmayo, Las Pozadas, y Agua Blanca), el caserío Minas Conga (distrito de Huasmín) y un sector del caserío Quengorío Alto (distrito de Bambamarca), distribuidos entre las coordenadas UTM 781636E y 9232517N, 795161E y 9239636N, 793692E y 9229623N y 782166E y 9222647N. Todas ubicadas en la cima de los Andes Occidentales, entre los 3100 y 4200 msnm, en las cabeceras de las cuencas de los ríos: Cajamarquino, Sendamal y Llaucano, involucrando la parte alta de la región Quechua (3100 y 3500 msnm), la región Jalca (3500 y 4000 msnm) y una pequeña área ubicada entre los 4000 y 4200 msnm. Todas ubicadas en la zona de vida bosque muy húmedo – Montano Tropical (bmh-MT), bosque húmedo – Montano Tropical (bh-MT) y escasamente en el Páramo Pluvial Subalpino Tropical (pp-SaT).

b. Metodología de la investigación

Se inició con el seguimiento semanal en el centro de acopio, contactando a los compradores y vendedores para conocer los nombres locales e introducidos, realizar el inventario e identificar los lugares proveedores. El volumen se determinó, pesando 10 tercios/especie. Asimismo se contó la cantidad de plantas/tercio para estimar la cantidad de plantas extraídas por área. Identificados los 15 caseríos productores, se seleccionaron 4 (25%) para hacer las evaluaciones. Se seleccionaron las especies de mayor demanda para evaluar su densidad, hábitat, suelo, especies acompañantes, estado de conservación, rango altitudinal, ubicación georeferencial y registro fotográfico. Para la densidad se tomó al azar áreas de 4 m², donde se contó el número de especies. En cada zona se muestrearon 20 áreas al azar. Las muestras colectadas fueron secadas, identificadas, montadas y etiquetadas para luego ser ingresada al Herbario de la Universidad Nacional de Cajamarca (CPUN). La identificación se hizo por comparación y revisión bibliográfica. Luego se hizo el análisis e interpretación de la información de campo, actividad que se complementó con la revisión de fuentes secundarias.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

a. Inventario de la diversidad local de plantas medicinales en el centro de acopio

Se inventariaron 63 especímenes, agrupadas en 58 especies (49 nativas), 49 géneros y 27 familias. La familia Asterácea aportó 17 especies, la Gentianácea, Lycopodiácea y Lamiácea 4 cada una. Las especies con una demanda permanente fueron la escorzonera (Perezia multiflora (H. et B.) Less.), la vira vira (Senecio canescens (H. B. K.) Cuatr.), la pachachamcua (Satureja nubigena (Kunth) Brig), el carnero (Puya fastuosa), la valeriana (Valeriana pilosa), el cóndor (Huperzia crassa (Willd) Rothm), la purunrosa (Bejaria aestuans), la ortiga (Urtica urens), la manzanilla (Matricaria chamomilla), los órnamos (Valeriana sp.), los amargones (Gentianella sp.), el chinchimalí (Gentianella sp.), andacushma (Geranium sessiliflorum Cav) y el romero de Jalca (Satureja sericea (C. Presl ex Benth) Briquet).

El 62 % de especies medicinales son propias de la Jalca y el 38 % de la Quechua Alta. El 100% de especies de la Jalca son silvestres, crecen en peñas, laderas, lomadas, hondonadas y planicies, a veces en lugares inaccesibles, convirtiéndose éstos en su único y último refugio.

El estudio demostró la predominancia de especies silvestres de porte herbáceo (figuras 1 y 2); asimismo, se determinó la existencia de dos especies medicinales: Helosis cayennensis (Swartz) Sprengel var. Cayennensis y Tristerix longebracteatus, que parasitan especies forestales.Con respecto al aporte por localidad, Sorochuco aportó el 57% de especies, Combayo 39%, Yanacancha 3% y San Juan de Hierbabuena 1%, que incluye silvestres, cultivadas y arvenses. Respecto al volumen de especies silvestres, Sorochuco aportó el 71%, Combayo el 23%, Yanacancha el 4% y San Juan de Hierbabuena el 2%. Hasta 1998, Combayo y sus caseríos aportaba el 100% de especies comercializadas, luego, estos volúmenes empezaron a disminuir y se prevé que sigan disminuyendo en los próximos años debido a la afectación de sus hábitats.

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Figura 1. Condición de las especies medicinales Figura 2. Formas de crecimiento de las especies medicinales

b. Mercado y comercialización

Según la OMS, el 80% de la población mundial utiliza las plantas como remedio (Obregón 2000), demanda que crece y pone en riesgo su conservación. En Cajamarca, hasta el 2005, su comercialización era una actividad informal ligada a familias de bajos recursos. En el 2006, se inicia el biocomercio de la valeriana y se prevé la incorporación de otras especies. En el Perú, ninguna especie medicinal nativa silvestre es cultivada, todas provienen de poblaciones sometidas a un proceso de extracción masiva, poniendo en riesgo su conservación. El Ministerio de Agricultura tiene un registro de 88 plantas medicinales que se vienen exportando, muchas de ellas silvestres. Cada una tiene su ficha técnica, sin embargo, se incurre en graves errores, tal es el caso de la valeriana, que para nuestro país, no es la Valeriana oficinalis como se describe en la ficha, sino la Valeriana pilosa.

El precio de especies ofertadas en tercios, entre el 2005 y 2009 fue de S/. 0.05/tercio, ocasionalmente se compró 3 tercios/10 céntimos. Las inflorescencias de Puya fastuosa se vendieron 3 por S/1.00. La Huperzia crassa “trenza”, en el 2008, en Cajamarca se vendió, 3 ó 4 plantas por S/ 5.00 y el kilo en S/. 60.00. La arroba de Valeriana pilosa seca en Chiclayo se vendió en S/. 160.00 y el proyecto de biocomercio pagó S/. 42.00/arroba.

Figura 3. Canal de comercialización. Sólo la valeriana tiene destinos diferentes (Línea punteada).

El destino de las plantas es Moshoqueque (Chiclayo). Sólo en el caso de la Valeriana pilosa, la cadena de comercialización se modifica debido la existencia de un acopiador en Sullana, cuyo destino sería Ecuador y Colombia. Los acopiadores van a Sullana, cuando los volúmenes son considerables. El segundo factor está determinado por el biocomercio, donde el acopiador además de acopiar de los vendedores tradicionales promueve la incorporación de nuevos vendedores de zonas conocidas y de nuevas. El destino final es Lima y posiblemente el exterior. Ramírez y Terán (2003), determinaron que la valeriana va a Chiclayo, Sullana y Lima. La que va a Chiclayo y Lima tiene también como destino los laboratorios.Desde 1998 los volúmenes de las especies medicinales han disminuido enormemente, se atribuye a la minería, pues muchos hábitats han sido destruidos y otros desaparecerán. Hasta la década del 90 había tres acopiadores en Combayo, hoy sólo queda una familia que acopia una tercera o quinta parte de lo que acopiaba la década pasada.

c. Estado situacional de las especies medicinales

Las poblaciones vegetales cada vez se reducen tanto en área como en densidad. Zonas que hasta inicios de 1990, eran pastos naturales, hoy casi el 100% se encuentra incorporado a la agricultura o a la ganadería. No se encontraron poblaciones vegetales intactas. Para especies cuyos hábitats son las peñas, rocas, laderas o zonas pantanosas, la

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Recolector campesino

Acopiador/recolector campesino

Acopiador urbano Combayo

Mayorista Chiclayo (Moshoqueque)

Minorista Chiclayo

Acopiador Sullana

Usuario final A

Mayorista Ecuador

Usuario local

Brujo o curandero

Usuario final B

Acopiador urbano Cajamarca

Lima

Instituto Cuencas

Biocom

ercio

Exterior


agricultura o la ganadería no es amenaza significativa, sin embargo, si lo es la minería. La otra amenaza es la extracción descontrolada de plantas medicinales con fines comerciales. Las especies más amenazadas son:

Valeriana pilosa L. “Valeriana”. De amplia distribución en la Jalca Alta. Raramente se la encuentra a altitudes inferiores a 3600 msnm. Tiene cierta resistencia al fuego, debido a que la parte vegetativa se encuentra en la raíz, sin embargo, a veces se quema la planta completa, incluso hasta el suelo. Es la especie más depredada, cuyo valor comercial está en la raíz. Puya fastuosa “Sugar o carnero”. También se ve afectada por el fuego. Sus poblaciones son muy escasas, únicamente en los alrededores de las lagunas El Perol, Cortada y aledañas, las poblaciones alcanzan varias ha. Se comercializan las inflorescencias cuyas flores no han abierto, lo que impide la producción de semillas y por ende su regeneración.

Bejaria aestuans Mutis ex L.f. “Purunrosa”. Se comercializan flores y hojas por separado; para la extracción de flores se rompen las ramas floridas, afectando así su ciclo biológico. Cuando se cosechan las hojas se corta la planta o parte de ella. Ambos casos ponen en riesgo su conservación. Por crecer dentro de los pastos naturales, es afectada por el fuego.

Clethra sp. “hotel, murmun u hoja del olvido”. Se comercializan sus hojas, por lo que se tiene que cortar las ramas o la planta. Es afectada por el fuego, por crecer dentro de los pastos naturales y por compartir su hábitat con una especie de Puya que tiene espinas cortantes y son quemadas para evitar que el ganado o los pastores se lastimen.

Loricaria leptothamna (Mattf) Cuatrecasas “Maqui maqui chico”. Comparte su hábitat con otras especies arbustivas y arbóreas en suelos degradados y con poca materia orgánica. También crece dentro del pajonal, por lo que también es afectada por el fuego. Su valor comercial radica en las ramas tiernas.

Loricaria ferruginea (R & P) Weddel “Maqui maqui dorado”. Es muy escasa. Está exenta del fuego, debido a que crece en zonas pantanosas. Se la encuentra en áreas reducidas que una extracción masiva haría peligrar su conservación. Se comercializan sus ramas tiernas y debido a sus poblaciones muy reducidas también se encuentran en grave riesgo.

Aa palaceae H.B.K. “Pajasola”. Muy escasa, solitaria, pequeña y de escaso follaje. Crece dentro del pajonal, y es visible a través de su eje floral que se alarga cuando florece y es lo que se comercializa. Estas características la convierten en más vulnerable. La extracción masiva, el fuego y la minería amenazan gravemente su conservación.

Plantago serícea R & P “Paja blanca”. Muy escasa. Crece entremezclada con las gramíneas. Su valor comercial está en toda la planta, por lo que su comercialización y demás factores antropicos ponen en riesgo su conservación.

Jamesonia peruviana A.F. Tryon “hierba del oso”. Muy escasa, crece junto a las rocas. También se ven amenazadas por la extracción, el fuego y la minería principalmente.

Senecio canescens H.B.K. “Vira vira”. Sus poblaciones son muy reducidas debido la extracción y a la quema de los pastos naturales. La agricultura, la ganadería y la minería amenazan su conservación. Su valor comercial radica en toda la planta.

Senecio sp. 2 “Órnamo amarillo”. Su valor comercial radica en las plantas floridas. Las constantes quemas, la extracción, la sustitución de pastos naturales, la agricultura y la minería ponen en riesgo su conservación.

Satureja nubigena (Kunth) Brig “Pachachamcua”. Crece debajo del ichu en poblaciones reducidas y en terrenos que han sido cultivados, su presencia no es muy frecuente. Por su carácter cespitoso y rasante se ve protegida por los pastos naturales. También se ve amenazada por el fuego, la sustitución de pastos naturales, las extracciones descontroladas y la minería.

Gentianella gramínea (HBK) Fabris “Corpus huait”. Sus poblaciones y su distribución son muy reducidas. Crece en zonas secas y degradadas. Su valor comercial radica en las plantas floridas. Las extracciones descontroladas, la quema de sus hábitats, el avance de la agricultura y la actividad minera amenazan su conservación.

Geranium sessiliflorum Cav. “Andacushma”. Desde el 2006 se viene promocionando para el biocomercio, de darse generaría una fuerte presión en su extracción y no se podría abastecer la demanda. Las extracciones descontroladas, las quemas constantes de sus hábitats y el avance de la agricultura y la minería ponen en riesgo su conservación.

Huperzia crassa (Willd) Rothm. “Cóndor”. Sus poblaciones son muy escasas. Las poblaciones ubicadas en zonas pantanosas, están exentas de las quemas pero no de los extractores, como tampoco del avance de la actividad minera.

Gentianella sp. 2 “Amargón anaranjado y morado”. Las poblaciones y distribución del anaranjado son más amplias que el morado. Su valor comercial son las plantas floridas. Ambas especies sufren gran presión extractiva. Las quemas constantes, la sustitución y modificación de sus hábitats y el avance de la minería amenazan su conservación.

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Halenia sp. “Amargón amarillo”. Crece en los pajonales poco densos, tiene una amplia distribución. Su valor radica en las plantas floridas. Las quemas de pastos, el avance de la ganadería, la agricultura y la minería amenazan su conservación.

Valeriana sp. “Órnamo morado” y “Órnamo blanco”. Muy escasas y comparten el mismo hábitat. El órnamo blanco está en estado crítico de conservación. Se comercializa toda la planta. La extracción y la minería, son sus únicas amenazas. Las últimas poblaciones se ubican en zonas inaccesibles, que los extractores utilizan sogas para descolgarse y extraerlas.

Senecio sp. 1 “Cholo lindo y Senecio coymolachensis “china linda”. Su presencia es escasa. En algunos casos se ubican en lugares inaccesibles y sólo la actividad minera y la extracción ponen en grave riesgo su conservación.

Satureja serícea (C. Presl ex Benth) Briquet. “Romero blanco o de Jalca”. Es quizá la única especie silvestre que por su amplia distribución geográfica y su abundancia no se encuentra amenazada por ninguna de las actividades antrópicas.

d. Características de la depredación

El nivel de depredación depende del desarrollo de la especie, floración, viabilidad de semillas, hábitat, abundancia, ubicación, época de cosecha, entre otros factores. Las especies solitarias y de poblaciones reducidas son las más vulnerables. La distribución geográfica de las especies no es homogénea por lo que para extraerlas se depreda grandes extensiones. Entre marzo de 2006 y agosto de 2007, a través del biocomercio, se comercializaron aproximadamente 12 tm de valeriana seca, afectando aproximadamente 141.36 ha. que se suman a las ha afectadas por el comercio convencional. Según la UICN, ninguna especie inventariada se encuentra en estado crítico de conservación, sin embargo, localmente, varias de ellas lo están. Pues todas están sometidas a una serie de factores antrópicos que amenaza su conservación.

e. Factores de riesgo para la conservación de las especies medicinales

La extinción de especies es un proceso natural, sin embargo, existen tres factores que contribuyen: el incremento poblacional; la urbanización de áreas agrícolas y la demanda mundial (Cabieses 1993). Localmente se carece de normas de calidad, protección de germoplasma e instituciones que las regulen (Zapata 2001). A esto debemos agregar la minería moderna, que ha disturbado miles de ha. que ni en quinientos años de minería ocurrió. La apertura de vías y las actividades humanas, están degradando todos los ecosistemas de la Jalca. El gobierno promueve actividades en esta región, siendo la más peligrosa la minería. También se prevé el fomento del cultivo de la canola para biocombustibles, esto alteraría muchos ecosistemas que deberían constituirse en zonas de reserva.

Hasta la década del 90, el rango altitudinal de las especies medicinales era mucho más amplio; el hombre las ha ido arrasando desde la parte más baja hacia la más alta, en un inicio con la ganadería, luego la agricultura y la comercialización basada en el conocimiento tradicional local y externo y desde 1992 la gran minería. Los tres primeros factores reducen su área y su rango altitudinal, quedando confinadas a las zonas más altas de la Jalca, donde la agricultura y ganadería no son posibles. Lo más preocupante es la minería, destruye zonas que son el único y último refugio de éstas. En tal sentido, los factores de riesgo para la conservación son: El factor demográfico, la ganadería y agricultura, la minería, el comercio y el biocomercio que en los últimos años se vienen complementando, magnificando el riesgo de conservación de las especies.

Factor demográfico

La Jalca tuvo presencia humana desde hace muchos años. Inicialmente fue por la ganadería, luego la pequeña agricultura, la extracción de plantas medicinales y últimamente la minería. Rodríguez (2002), manifiesta que la ocupación de la Jalca se intensifica a partir de 1940 por la fragmentación, la venta de tierra de haciendas y el crecimiento del mercado de la leche. Evidencia también la presencia de centros ceremoniales donde se realizaban pagos a los cerros o apus. Así, el ya extinto cerro Carachugo, era un centro poblado fortificado, con una compleja red de caminos que integraban los diferentes sitios y conducían al parecer a lugares tan distantes como Kuntur Wasi (San Pablo) y Pacopampa (Chota).

Los hacendados realizaban sus actividades productivas en las mejores tierras y la Jalca era destinada a los campesinos. En algunas áreas de Combayo, la población aumenta porque el hacendado permitió a los campesinos el acceso a estas tierras (Rodríguez 2002). Entre 1912 y 1917 el número de familias de Combayo se incrementó en 50%, durante los siguientes 23 años aumentó en un 5% anual (Departamento de Medio Ambiente de Minera Yanacocha 2005).

La presencia humana en la Jalca Alta es cada vez mayor. Por un lado, los criadores de ganado que llegan cuando el pasto escasea en la zona baja y por otro lado, la actividad minera que está transformando lo que hasta inicios de 1990 era una zona inhóspita, ocupada por ganaderos de bajos recursos, propietarios o inquilinos, tal como sigue ocurriendo.

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La ganadería y agricultura

A partir de la construcción de la carretera a Combayo en 1982, muchas áreas de cultivo se fueron remplazando por pastos cultivados. Rodríguez (2002), manifiesta que esta hacienda que en 1917 tenía 47 000 ha sólo se había sembrado 765 ha (1.63%). Las tierras entregadas a los campesinos en usufructo constituía el 81% de la tierra en producción y el número de familias era 72. Antes de 1960 ya se habían vendido varias parcelas a campesinos arrendatarios y en 1964, antes del temor de la reforma agraria, casi toda la hacienda estaba parcelada.

Los mejores terrenos agrícolas ubicados en la Quechua, han sido remplazados por pastos mejorados, provocando que la agricultura se traslade hacia la Jalca. Sánchez et al. (2006) manifiesta que el crecimiento de la población de la Quechua ocasionó escasez de áreas de cultivo y pastoreo, motivando la conquista de la Jalca, sumándose a ello la minería. Hoy es común encontrar cultivos hasta los 3700 msnm, a altitudes mayores, las extensiones agrícolas son mínimas, sin embargo, debido al calentamiento global, varios cultivos se vienen aclimatando en la Jalca. Al respecto Sánchez et al (2006) manifiestan que este fenómeno ha contribuido para el ascenso de la agricultura hacia niveles cercanos a los 3600 msnm. Lo cual ha determinado que grandes extensiones de pajonales sean sustituidos por cultivos altoandinos.

Con la llegada de PERULAC (hoy Nestlé) a Cajamarca y la apertura de carreteras se inicia la crianza masiva de ganado lechero y la sustitución de pastos nativos por mejorados. Para Rodríguez (2002), la ocupación de la Jalca fue para aprovechar los pastos naturales. A partir del siglo XX la ocupación se intensifica asociada a la fragmentación de las haciendas, la instalación de PERULAC, la extensión de las carreteras y la migración de campesinos de la Quechua.

Nestlé y Gloria, vienen extendiéndose hacia la Jalca. Se estima que más de 90 % de la Jalca Alta está dedicada a la ganadería. Las áreas de pastos mejorados en esta zona no alcanzan el 5%, pero se está incrementando.

La minería a tajo abierto

La minería establecida en Cajamarca a partir de 1992 está ubicada en la Jalca, en zonas muy vulnerables, cuyos impactos negativos son muy notorios. El peligro radica en su magnitud, localización y persistencia. El caso más evidente es la desaparición de lagunas como Yanacocha, San José, Maqui Maqui y otras. Rodríguez (2002), sostiene que la minería seguirá impactando económica, social y ecológicamente, modificará el paisaje y alterará las relaciones sociales y las vinculaciones del hombre con la tierra. La demanda por las lagunas y otros cursos de agua colocará en competencia a las empresas mineras, los campesinos, las aves y otros animales.

La propiedad de minera Yanacocha al 2006 era de 25 000 ha, de las cuales se había perturbado 5 000 ha, cinco veces la ciudad de Cajamarca. El proyecto Yanacocha Este, es de 10 760 ha; Yanacocha Oeste, 10 949 ha, Carachugo II, 407 ha, Minas Conga, 9 830 ha, El Galeno, 1 347 ha y Michiquillay 4 550 ha, todos ubicados en la Jalca. En la Encañada, San Silvestre de Cochán, Tongod y Tumbadén las concesiones alcanzan el 100% de su territorio. A febrero de 2007, el 86.65% de Baños del Inca; el 75.24% del distrito de Cajamarca; el 97.11% de Sorochuco; el 53.76% de Huasmín; el 64.76 % de Bambamarca y el 86.35% de Hualgayoc están concesionados, áreas con gran diversidad de especies medicinales que los lugareños extraían y hoy están prohibidos de hacerlo. El proyecto Minas Conga ubicado en las cabeceras de las cuencas de los ríos: Cajamarquino (naciente del río Grande, afluente del Chonta), Sendamal y Llaucano, entre los 3700 a 4262 msnm, afectará las lagunas El Perol, Brava, San Nicolás, Empedrada, Cortada, Mamacocha y otras, en cuyos alrededores se ubica la mayor producción de plantas medicinales.

En junio de 2006, el caserío Las Lagunas estaba siendo explorado por la Minera Yanacocha. En agosto de 2006, 180 ha fueron adquiridas con fines de explotación, ello implicará la desaparición de una gran diversidad de especies de flora y la fauna, así como de las lagunas de la zona, dentro de ellas la Laguna Mishacocha.

El 100% de las áreas productoras de especies medicinales se ubican en zonas de exploración, explotación o concesión minera. En tal sentido, éstas se encuentran en grave riesgo de conservación. Todas las actividades antrópicas afectan su conservación, pero no todas alcanzan ciertos hábitats como peñas, faldas de cerros, pantanos, rocas y otros que sirven de refugio a especies de flora y fauna, sin embargo la minería, afecta todos los hábitats, incluso los acuáticos superficiales y subterráneos.

TABLA 1. Especies inventariadas, órganos comercializados y amenazas para su conservación Especie Órgano de la planta comercializado Amenazas

Raíz Rama Hoja Flor Toda sin raíz

Toda con raíz

Agricultura Pastoreo Quema Sustitución de pastos

Comercio Biocomercio Demografía Minería

Aa palaceae H.B.K. (Hierba sarita, pajasola) X X X X X X X X XAdianthum capillus veneris L.. (Culantrillo) X X X XAlternanthera macbridei Standl (sanguinaria, cargasangre) XArtemisa absynthium L. (Ajenjo) X XBaccharis genistelloides (Lam.) Pers) (Carqueja) X X X X X X X X

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Baccharis sp. (asmachilca) X X X X X X XBefaria aestuans Mutis ex L. f. (Purunrosa) X X X X X X X XBrugmansia sanguínea R & P (misha) XCampiloneurum angustifolium (Sw) Fée (Lengua de ciervo) X X XCapsella bursa pastoris (L.) Hay (bolsilla, bolsa de pastor) XClethra sp. (Hoja del olvido u hotel) X X X X X XDesmodium molliculum (H.B.K.) D.C.(pie de perro) X X XElaphoglossum sp. (cucharilla) X X X XEquisetum bogotensis Kunth (cola de caballo) X X XErodium cicutarium (L) L`Herit (alfiler) XFoeniculum vulgare Millar.(hinojo) X X XGentianella gramínea (HBK) Fabris (Corpus huait) X X X X XGentianella sp.1 (Amargón morado y anaranjado) X X X X X X X XGentianella sp.2 (chinchimalí blanco y morado) X X X X X X X XGeranium sessiliflorum (L) L' Herit. (Andacushma) X X X X X X X X XGnaphalium dombeyanum “Complex” (Ishpingo) X X X X X X XHalenia sp. (Amargón amarillo) X X X X X X X XHelosis cayennensis (Swartz) Sprengel var. cayennensis (Huanarpo macho)

X X X XHuperzia crassa (H & B ex Hill) Rothm (cóndor y camantuco) X X X X X X X XHuperzia sp. (Cóndor hembra o trencilla) X X X X X X X XHuperzia tetragona (Hook & Grev)Trevis (Trencilla cuatro filos) X X X X X X X XHypericum sp. (Canchalagua de jalca) X X X X X X X X XJamesonia peruviana A.F. Tryon (Hierba del oso) X X X XLoricaria ferruginea (R & P) Weddel (Maqui maqui dorado) X X X XLoricaria leptothamna (Mattf) Cuatrecasas (maqui maqui chico) X X X X X X X XLycopodium clavatum L. (Enredadera) X X X X X X X XMatricaria chamomilla L. (manzanilla) XOriganum vulgare L. (orégano) X X XOtholobium pubescens (Poiret) Grimes (culén) X X X X XParanephelius uniflorus Poep. & End (cargarosa,chicoria grande) X X X X X XPellaea ternifolia (Cav.) Idnk (cuti cuti) X X X X X XPeperomia sp. (Piri piri) X X X X XPerezia multiflora (h.b.k.) Less (Escorzonera) X X X X X X XPernettya postrata (Cavanilles) Sleumer (Pushgay) X X X X X X XPetroselinum sativum L. (perejil) X X XPhyllactis rigida (Estrella) X X X X X X X XPhytolaca bogotensis H.B.K. (Aylambo) X X X X X XPlantago sericea R & P. (Paja blanca) X X X X X X X XPuya fastuosa (Carnero, tuyo o sugar) X X X X X X XSambucus peruviana Kunth (sauco) XSatureja nubigena (Kunth) Brig. (Pachachamcua) X X X X X X X XSatureja serícea (C. Presl ex Benth) Briquet (Romero de jalca) X XSenecio canescens H.B.K. (Vira vira) X X X X X X X XSenecio coymolachensis Cabrera (Chinalinda) X X XSenecio sp.1 (Chololindo) X X XSenecio sp.2 (Ornamo amarillo) X X X X X X X XStachis arvensis L. (supiquegua) XTajetes pusilla H.B.K. (anis) XTanacetum sp. (manzanilla amarga) XTristherix longebracteatus (Desrousseaux) Barlow & Weims (popa) X X X X X XUrtica urems L. (ortiga) XValeriana pilosa R & P (valeriana) X X X X X X X X XValeriana sp (órnamo blanco y morado) X X X X X

Comercio y biocomercio de plantas medicinales

En Combayo, la comercialización de especies medicinales se viene dando desde hace más de 23 años. En la década del 80 los volúmenes comercializados eran entre tres y cinco veces mayores a los actuales. Es en los últimos años que se está generando un comercio descontrolado, constituyendo un grave riesgo para su conservación. Este negocio se ha reforzado con el biocomercio, basado en el uso de la biodiversidad nativa con criterios de sostenibilidad ambiental, social y económica. En nuestro país poco o nada se viene haciendo para reforzar estos principios. En el Perú y en Cajamarca, se comercializan varias especies silvestres sin tener en cuenta su sostenibilidad, así por ejemplo, se hacen extracciones irracionales de Valeriana pilosa, incrementada por el biocomercio, convirtiéndose en una biodepredación, que puede continuar con otras especies. El biocomercio es promovido por los objetivos del Convenio de Diversidad Biológica. En nuestra región se inició a finales de 2005, fomentando una mayor depredación, pues los volúmenes solicitados se han sumado a los ya requeridos, e incluso se fomenta la extracción en nuevas zonas y la incorporación de un mayor número de familias que se ven motivadas por el mayor precio y la garantía de compra.

A finales de 2006, funcionarios del INRENA Cajamarca, afirmaban que la valeriana destinada al biocomercio procedía de áreas cultivadas. Sin embargo ello no ocurre, todo el volumen procede de poblaciones silvestres, ello demuestra el total desinterés y desconocimiento de quienes deberían velar por la conservación de las especies silvestres.

Los primeros biocomercializadores provenían de Combayo, Chugurmayo y La Encañada. A inicios de 2007 gran parte fueron captados como trabajadores de las empresas mineras, dejando desabastecido a los intermediarios. En febrero de

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2007, fueron incorporados los caseríos de Carachabamba, Aguas Claras, Patahuasi y Hierba Buena Alta, (Bambamarca), Jadibamba y Pampa Verde, (Huasmín) y Chanta Alta (La Encañada) y últimamente Huanico (Namora).

Existe la posibilidad de exportar a Japón y España; de darse, la presión sobre esta especie sería mayor, pues estos nuevos volúmenes se sumarian a los requeridos y habría la necesidad de buscar nuevas áreas abastecedoras.

La comercialización tradicional de plantas medicinales involucraba a pocas familias de bajos recursos y como una actividad alternativa; sin embargo, con el biocomercio, este número se ha incrementado y diversificado, así como el número de intermediarios, involucrando a grandes empresarios quienes se quedan con las grandes ganancias, mientras que los recolectores seguirán en su extrema pobreza, poniendo además en grave riesgo la conservación de la biodiversidad.

CONCLUSIONES

Entre el 2005 - 2008 en el mercado de Combayo se comercializaron 58 especies medicinales, agrupadas en 49 géneros y 27 familias. El 62 % de especies son nativas, propias de la Jalca y el 38 % prosperan en la Quechua.

Las especie más comercializadas fueron: Perezia multiflora, Senecio canescens, Satureja nubigena, Huperzia crassa, Matricaria chamomilla, Puya fastuosa, Halenia sp., Gentianella sp. Valeriana pilosa, Urtica urens, Bejaria aestuans y Valeriana sp.

Los volúmenes de ingreso de plantas medicinales en los últimos diez años ha descendido entre tres y cinco veces del volumen actual, debido a la destrucción de sus hábitats y por el desplazamiento minero, provocando en los últimos años la extracción en nuevas áreas de vegetación silvestre.

La especie más abundante y de mayor distribución geográfica es la Valeriana pilosa, sin embargo el nivel de depredación cada vez es mayor. El resto de especies se distribuyen en poblaciones reducidas y en determinadas zonas únicamente, siendo igualmente depredadas.

Las especies menos abundantes son Aa palaceae, Plantago serícea, Baccharis genistelloides, Peperomia sp., Jamesonia peruviana, Senecio sp. y Senecio coymolachensis que se las puede considerar en alto riesgo de conservación y la Valeriana sp. (órnamos) en estado critico de conservación.

Especies cuyos hábitats, son las rocas, peñas, laderas de cerros, pantanos y lugares inaccesibles se ven fuertemente amenazados únicamente por la minería y las extracciones descontroladas con fines comerciales.

El biocomercio que se viene dando en Cajamarca no cumple con las normas internacionales para este fin.

Las plantas medicinales son recursos renovables, sin embargo, debido a la complementariedad de diversos factores antropicos, se está poniendo en grave riesgo su conservación, siendo los de mayor riesgo la minería y la informalidad del comercio y biocomercio.

Urge iniciar investigaciones sobre biología floral, morfología, estados fenológicos, formas de propagación, estudios fitoquímicos y trabajos de domesticación de las diferentes especies medicinales silvestres; asimismo, promover políticas que permitan proteger los hábitats de las especies medicinales, mediante planes de ordenamiento territorial.

AGRADECIMIENTO

A los recolectores, vendedores, acopiadores e informantes de Combayo, Sorochuco y demás caseríos. Asimismo, a los Ing. Zenón Quispe Mamani, Santiago Medina, Juan Seminario, Patricia Rojas, al Rvdo. Marco Arana, al técnico Amado Saucedo y a todos quienes contribuyeron en la realización de este trabajo. Finalmente, agradezco a la Asociación Peruana para la Conservación de la Naturaleza (APECO), por haberme financiado parte de esta investigación.

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