Revista de la Cruz Roja Media Luna Roja No. 1, 2013

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    La aventura humanitariaLa concepcin del renovado Museo del Movimiento

    Del horror a la esperanzaUn nio refugiado convertido hoy en escritor habla sobre la humanidad

    Testimonios de la humanidadA Cruz Roja Media Luna Roja le interesa su opinin

    Un viaje al corazn

    de la humanidad

    N M E R O 1 . 2 0 1 3

    L A R E V I S T A D E L M O V I M I E N T O I N T E R N A C I O N A LD E L A C R U Z R O J A Y D E L A M E D I A L U N A R O J A

    Cruz Roja Media Luna Rojaw w w . r e d c r o s s . i n t

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    El Movimiento Internacional de la Cruz Roja

    y de la Media Luna Roja est integrado por

    el Comit Internacional de la Cruz Roja, la Federacin

    Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la

    Media Luna Roja y las Sociedades Nacionales.

    El Comit Internacional de la Cruz Roja

    (CICR) , organizacin imparcial, neutral e

    independiente, tiene la misin exclusivamente

    humanitaria de proteger la vida y la dignidad de

    las vctimas de los conflictos armados y de otras

    situaciones de violencia, as como de prestarles

    asistencia. El CICR se esfuerza asimismo en

    prevenir el sufrimiento mediante la promocin y

    el fortalecimiento del derecho humanitario y de

    los principios humanitarios universales. Fundado

    en 1863, el CICR dio origen a los Convenios de

    Ginebra y al Movimiento Internacional de la Cruz

    Roja y de la Media Luna Roja, cuyas actividades

    internacionales en los conflictos armados y en

    otras situaciones de violencia dirige y coordina.

    La Federacin Internacional es la mayor red

    humanitaria de servicio voluntario en el mundo

    que, cada ao, presta asistencia a 150 millones de

    personas por intermedio de sus 188 Sociedades

    Nacionales miembros. Juntos, la Federacin

    Internacional y las Sociedades Nacionales

    trabajan antes, durante y despus de los desastres

    y las emergencias sanitarias para atender a las

    necesidades y mejorar las vidas de las personas

    vulnerables, sin distincin de nacionalidad,

    raza, sexo, credo, clase social u opinin poltica.

    Orientada por la Estrategia 2020 el plan de accin

    colectivo para superar los principales desafos

    humanitarios y en materia de desarrollo de este

    decenio, la Federacin Internacional afirma sudeterminacin de salvar vidas y cambiar menta-

    lidades.

    El Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja

    se rige por siete Principios Fundamentales:

    humanidad, imparcialidad, neutralidad, independencia, voluntariado, unidad y universalidad.

    Todas las actividades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja tienen un nico objetivo fundamental:

    ayudar sin discriminacin a quienes sufren, contribuyendo a mantener y promover la paz en el mundo.

    CICR

    Federation Internacional de Sociedades

    la Cruz Roja y de la Media Luna Roja

    Las Sociedades Nacionales de la Cruz

    Roja y de la Media Luna Roja perso ni-

    fican la labor y los principios del Movimiento

    Internacional de la Cruz Roja y de la Media

    Luna Roja en ms de 187 pases. Auxiliares de

    los poderes pblicos de su respectivo pas en el

    campo humanitario, las Sociedades Nacionales

    brindan una gama de servicios que van desde

    la prestacin de socorros en casos de de-

    sastres a programas de asistencia social y de

    salud. En tiempos de guerra asisten a los civiles

    afectados y apoyan a los servicios mdicos de las

    fuerzas armadas donde sea necesario.

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    Ecos del pasado, vislumbres del futuro

    AFINES DE AGOSTO DE 1945, un joven

    llamado Fritz Bilfnger ue el primer de-

    legado del CICR que lleg a Hiroshimadespus de que la ciudad uera devastada por

    una bomba atmica. Condiciones horrorosas,

    escribi en su primer telegrama a Marcel Junod,

    delegado del CICR en Tokio. Ciudad arrasada.

    Ochenta por ciento hospitales destruidos o con

    graves daos Eectos de bomba misteriosa-

    mente graves

    As como las enermeras y los mdicos de la

    Cruz Roja Japonesa presenciaron un horror que

    sobrepasaba su imaginacin, tambin Bilfnger

    se enrent con algo totalmente desconocido:

    una situacin que no se asemejaba en nada a lo

    que haba vivido anteriormente.

    Los archivos del CICR, de la Federacin Inter-

    nacional y de muchas Sociedades Nacionales

    estn repletos de historias en las que se repiten

    las luchas de Bilfnger. Arteactos, cartas, otos y

    dibujos revelan un inquebrantable esuerzo por

    encontrar soluciones en condiciones extremas, a

    menudo hostiles.

    Gracias a la valenta, al trabajo incansable y a la

    humanidad de voluntarios, delegados y miembros

    del personal en los ltimos 150 aos, el mundohumanitario del siglo XXI cuenta con una red de

    colaboradores y un conjunto de conocimientos y

    de normas que hoy respaldan y protegen (aunque

    de manera imperecta) sus esuerzos.

    Pero incluso en el mundo actual, en el que nos

    jactamos de la magnitud del sector humanitario,

    nos enrentamos todava a muchas incgnitas. La

    necesidad de valenta, humanidad e innovacin

    sigue siendo siempre la misma. Al igual que Louis

    Appia, undador del Movimiento, que dibuj deta-

    lladamente camillas rodantes y carros que sirvieran

    de ambulancia con el fn de compartir las mejores

    prcticas con las sociedades de socorro en ciernes,

    de la misma orma los delegados y los voluntarios

    de hoy resuelven problemas complejos gracias a

    innovadoras ideas y al uso creativo de la tecnologa

    ms avanzada. Los esuerzos del Movimiento por

    compartir los primeros auxilios basados en pruebas

    y las mejores prcticas quirrgicas, crear sistemas

    de alerta temprana y detectar un brote epidmico

    mediante las redes de teleona mvil son tan solo

    algunos ejemplos.

    Un nmero especialEl presente nmero de la revista Cruz Roja Media

    Luna Roja, que conmemora los 150 aos de la

    undacin ofcial del CICR, est dedicado a estos

    innovadores humanitarios: voluntarios, delegados

    y miembros del personal, cuyo empeo ha sido in-cansable para hacer de este mundo un lugar ms

    humano. Es diversa su procedencia, pero comn

    su humanidad que los ha llevado a actuar incluso

    en situaciones sumamente diciles.

    Nuestro tema central es la humanidad y con-

    memoramos los 150 aos de accin humanitaria

    con una cronologa que va acompaada de art-

    culos de la realidad actual, en los que se ve cmo

    se repiten muchas de las difcultades con que se

    encontraron nuestros predecesores. El artculo

    de ondo presenta el conicto de Aganistn que

    es, en muchos aspectos, emblemtico de los pro-

    blemas que se plantean a los trabajadores huma-

    nitarios en la actualidad. Nuestra serie sobre la

    historia del Movimiento continuar durante todo

    el ao y pasaremos revista a la evolucin de las

    Sociedades Nacionales y al 150 aniversario de las

    primeras Sociedades Nacionales. Despus, a prin-

    cipios de 2014, conmemoraremos el 150 aniver-

    sario del primer Convenio de Ginebra analizando

    los retos histricos, presentes y uturos para el

    derecho internacional humanitario.

    En un mundo donde la accin humanitarianeutral e imparcial an no es universalmente

    entendida ni respetada, estos aniversarios nos

    recuerdan a todos que el humanitarismo est

    aqu para quedarse, que los valores deendidos

    por Dunant y por los embajadores humanitarios

    actuales representan normas de conducta que

    deben respetarse.

    Estos hitos brindan tambin la oportunidad de

    reexionar sobre cuestiones undamentales a las

    que se ve abocada la accin humanitaria. Espera-

    mos que los artculos contenidos en este nmero

    sirvan de inspiracin en esta reexin. En la p-

    gina 28 explicamos cmo se puede contribuir al

    debate. Cmo debe adaptarse el Movimiento?

    Qu hemos aprendido? Cules son las tenden-

    cias ms inspiradoras? Cules las ms amena-

    zantes? Teniendo en cuenta lo que se ha logrado,

    empezando de cero, en los ltimos 150 aos,

    qu podemos y debemos lograr antes del 200

    aniversario del Movimiento con las herramientas

    que tenemos ahora? El uturo es suyo, ahora le

    toca a usted. Escribamos la historia juntos.

    Malcolm Lucard

    Redactor jee

    Revista Cruz Roja Media Luna Roja

    Hoy, el Movimiento utiliza la tecnologa para

    reconectar a las familias y enviar alertas

    de tormentas y mensajes de salud duranteun desastre natural o, como se muestra en

    esta foto, para controlar la propagacin y el

    tratamiento de enfermedades infecciosas.

    Ese espritu de valenta y de invencin frente ala desgracia segua vivo cuando los equipos del

    CICR realizaron una intervencin quirrgica

    en un remoto lugar del desierto yemen en el

    decenio de 1960.

    Uno de los primeros delegados del CICR, Louis

    Appia, us dibujos para compartir innovaciones

    humanitarias.

    Fotografa:ArchivosdelC

    ICR

    Fotografa:ArchivosdelCICR

    Fotografa:BenotMatsha-C

    arpentier/FICR

    Editorial

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    20. Puedo hacer de todo

    16. Una aventura humanitaria

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    En la portada: Mah Bibi tena 10 aos cuando el otgrao NickDanziger document su historia en 2001. Tras perder a sus padres,

    qued al cuidado de sus dos hermanos menores en la provincia deGohr, en el centro de Aganistn. La gente me dice que hay guerra,pero yo solo pienso en el hambre, dijo.Fotograa: Nick Danziger. Fotograas de esta pgina desde arriba: Archivos

    del CICR; Nick Danziger; Nick Danziger; Alain Germond; Nick Danziger.

    Reportaje especial 4150 aos de accin humanitaria, conAfganistn en primer plano

    Un siglo y medio despus de la creacin del CICR, elhumanitarismo sigue vivo, pero los obstculos que tiene pordelante son enormes. Este artculo contiene una cronologaque empieza justo antes de la undacin del Movimiento yun examen de un conficto cotidiano que es emblemtico delos logros que han cosechado los trabajadores humanitariosy de las dicultades que enrentan hoy en da.

    No poda dejar a esas mujeres 6En la cronologa, se consigna el surgimiento de las primerasSociedades Nacionales y la elaboracin de los Conveniosde Ginebra y, en el artculo de ondo, se describe elcompromiso de un delegado de la Media Luna Roja Agana

    que ejemplica lo que ha motivado a los trabajadoreshumanitarios desde un principio.

    El impulso de ayudar 8Desde los albores del Movimiento, el impulso de ayudar alos dems ha llevado al CICR, a la Federacin Internacionaly a los delegados de las Sociedades Nacionales a impedirlos enrentamientos, muchas veces por iniciativa propia, ensituaciones complejas y a veces peligrosas.

    No se olvid 10La idea naci en Solerino cuando Henry Dunant, undadordel Movimiento, se encontr con un soldado moribundo que

    quera enviar un mensaje a sus padres.

    Desastres silenciosos 12Los asesinos inadvertidosCreada tras la Primera Guerra Mundial, la Liga de Sociedades dela Cruz Roja (hoy Federacin Internacional) interviene en ms yms desastres naturales. Hoy, ante la recuencia cada vez mayorde los desastres, la Federacin Internacional asegura que losgrupos humanitarios y de desarrollo tienen que ayudar a lascomunidades a reducir los riesgos y reorzar la resiliencia.

    4. 150 aos de accin

    6. No poda dejar a esas mujeres

    8. El impulso de ayudar

    La Segunda Guerra Mundial 14Marcha hacia el abismoLa Segunda Guerra Mundial gener una vasta respuesta

    humanitaria y plante algunas de las situaciones msdiciles en que se haya encontrado la humanidad:bombardeos areos masivos de las zonas urbanas, el uso dedos bombas atmicas y el Holocausto.

    Historia del Movimiento 16Una aventura humanitariaMientras nuestra cronologa recorre el tiempo desdelos aos cincuenta hasta los setenta, llevamos al lectordetrs de los bastidores para visitar el renovado MuseoInternacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja.

    Mujeres, guerra y mediosde subsistencia 20Puedo hacer de todoLlegamos al decenio de 1990 y damos un vistazo a la historia demujeres aectadas por la guerra, que hoy salen adelante graciasa la ayuda de nuevos medios de subsistencia.

    Agua 22Si tenemos agua, lo tenemos todoDurante un conficto o un d esastre natural, el acceso al aguapotable es primordial.

    Los Principios Fundamentales 24Del horror a la esperanzaEl escritor nigeriano Okey Ndibe, nio reugiado durante

    la guerra de Biara, examina el Principio Fundamental dehumanidad. Tambin pedimos al lector su opinin sobre esteprincipio, 150 aos despus de undado el Movimiento.

    Movimiento 28Es tu futuro, t decidesEn qu consistir la accin humanitaria dentro de 10, 20 o50 aos?

    Material 29

    ndiceNmero 1 . 2013 . www.redcross.int

    Artculos, cartas a la redaccin y dems correspondencia han deremitirse a:Cruz Roja Media Luna Roja

    Apartado de correos 372, CH-1211 Ginebra 19, SuizaCorreo electrnico: rcrc@FICR .org ISSN No. 1019-9357

    RedactorMalcolm Lucard

    Versin en espaolMara Eliana InostrozaAna Elena Guyer

    Responsable de edicinPaul Lemerise

    DiseoBaseline Arts Ltd, Oxord, RU

    DiagramacinNew Internationalist, Oxord, Reino UnidoImpreso en pap el sin cloro. IRL PLUS SA, Lausana (Suiza)

    Consejo de RedaccinCICR Federacin InternacionalDorothea Krimitsas Andy ChannelleSophie Orr Susie ChippendaleFlorian Westphal Pierre Kremer

    Agradecemos la ayuda prestada por los documentalistas y elpersonal de apoyo del CICR, la Federacin Internacional y lasSociedades Nacionales. La revista se publica tres veces por ao enrabe, chino, espaol, rancs, ingls y ruso y se distribuye en 188pases con una tirada de 80.000 ejemplares.

    Las opiniones de los autores no coinciden orzosamente con las delMovimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja.Se agradecen los artculos enviados por iniciativa propia pero nopodrn ser devueltos a los autores.

    Cruz Roja Media Luna Roja se reserva el derecho de modiicarartculos y cartas antes de publicarlos. Los artculos y otosque no lleven mencin de copyright pueden reproducirse sinautorizacin previa, haciendo constar la uente.

    Los mapas que iguran en esta publicacin son slo con ines deinormacin y no tienen ningn signiicado poltico.

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    Crimea. A pesar de que las condiciones

    en los hospitales de guerra son atroces,

    al principio el personal mdico militar no

    da una buena acogida a las enermeras

    voluntarias. Los soldados heridos,

    carentes hasta de mantas, suren en

    habitaciones superpobladas y sucias.

    Muchos murieron de tius, clera y

    disentera.

    24 de junio de 1859: los ejrcitos de

    Francia y Cerdea se enrentan con las

    uerzas austracas cerca del pueblo de

    Decenio de 1850: se dan las

    condiciones para la accin humanitaria

    internacional organizada. Se intensica

    el movimiento contra la esclavitud

    y, al mismo tiempo, se toma mayor

    conciencia de la dicil situacin de los

    presos y los pacientes psiquitricos.

    Las uerzas militares crean mejores

    sistemas para el tratamiento mdico

    durante los confictos aunque amenudo resultan insucientes pese

    a los avances en el conocimiento

    mdico. Las principales eminencias

    mdicas abogan por nuevos sistemas,

    entre ellos las redes de voluntarios,

    para el tratamiento de los heridos de

    guerra. Los inormes de prensa sobre

    las condiciones en tiempo de guerra

    para los soldados heridos consternan al

    pblico y obligan a algunos gobiernos a

    tomar medidas.

    JNoviembre de 1854: FlorenceNightingale llega a Turqua con 38

    enermeras de Inglaterra para atender

    a los soldados heridos en la guerra de

    AL IGUAL QUE MUCHOS HABITANTES de su

    aldea, Hazar Bagh, situada en el extremo norte

    de Afganistn, Qualam (foto a la derecha)

    trabajaba en los campos de algodn y trigo, cuando

    aquella fue atacada durante una ofensiva de los taliba-

    nes poco antes del 11 de septiembre de 2001.

    En el pnico que se apoder de la aldea, Qualam no

    pudo encontrar a sus cinco hijos y tom la difcil de-

    cisin de salvar a los que estaban con ella en vez de

    buscar a los que faltaban, pues quizs haban perdido

    la vida en el bombardeo.

    Conocamos el peligro, que poda manifestarse en

    cualquier momento, pues ya haba ocurrido con los

    pueblos vecinos, dice Qualam. Camin con sus hijos

    durante dos das y tres noches pasando hambre y fro,

    antes de encontrar refugio en un campamento para

    personas desplazadas en Khoja Bahauddin.

    Fue tambin en este campamento donde Qualamescuch hablar por primera vez de la Media Luna

    Roja Afgana, del CICR y de otras organizaciones hu-

    manitarias, como Mdicos Sin Fronteras (MSF), que

    entregaban mantas, jabn, lonas impermeables y ali-

    mentos. Sin la intervencin del CICR nos habramos

    muerto de hambre, recuerda.

    Fue tambin el primer encuentro de Qualam con

    grupos humanitarios organizados y la nocin de que

    los civiles tienen derechos en virtud del derecho inter-

    Podramos haber muertonacional. No saba que haba normas que protegen a

    los civiles que no participan en las hostilidades, asegura.

    En el campamento, gracias a MSF, segu un curso

    sobre higiene. Me convert en capacitadora en hi-

    giene... Ahora que he vuelto a casa, hago lo mismo, esmi funcin pblica.

    En estos ms de 11 aos que pasaron desde que

    conoc a Qualam en el campamento de refugiados de

    Khoja Bahauddin, la historia de su huida desesperada

    aquella noche de 2001 no se me ha borrado de la me-

    moria. Me reencontr con ella hace unos meses y esto

    nos hace pensar en la visin de Dunant, que sigue sal-

    vando y cambiando vidas.

    De hecho, muchas de las personas a las que se ayud

    aqu en Afganistn han recibido salud, energa y expe-

    riencia para ayudar a los dems, fueran amigos, vecinos

    o desconocidos. La vida de decenas de miles de perso-

    nas ha cambiado para mejor. Se les ha dado abrigo y

    comida, han recibido noticias de sus seres queridos a

    travs de mensajes de Cruz Roja o sus historias se han

    difundido mientras estaban en cautiverio. Beben agua

    potable o pueden caminar y trabajar ms fcilmente

    gracias a las prtesis.

    Pero aun con todo lo que se ha aprendido y logrado,

    los retos siguen siendo enormes. El sector humanitario

    de hoy, diverso como es, no tiene todas las respuestas, los

    recursos o el acceso que necesita para aliviar la pobreza y

    la violencia. Los trabajadores humanitarios y de salud en-frentan amenazas a su seguridad, la labor humanitaria se

    confunde a veces con los objetivos polticos y, a pesar del

    alcance mundial del Movimiento, muchos combatientes

    y civiles conocen mal el CICR, el derecho humanitario o

    los emblemas de la cruz roja y la media luna roja. Hemos

    recorrido un largo camino en 150 aos, especialmente en

    los ltimos decenios. Pero, lamentablemente, en muchos

    sentidos, nuestra historia se asemeja a lo que presenci

    Dunant en el campo de batalla de Solferino.

    En muchos sentidos, los esfuerzos del Movimiento en Afganistnson emblemticos de los logros obtenidos por los trabajadores

    humanitarios y los retos que enfrentan hoy, 150 aos despus de la

    creacin del CICR. Le pedimos al fotoperiodista Nick Danziger, que

    ha informado sobre el conflicto en Afganistn durante tres dcadas,que regresara y hablara con la gente acerca de lo que significa

    prevenir y aliviar el sufrimiento humano en los campos de batallay las zonas de desastre del siglo XXI.

    1 5 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a 1 5 0 a o s d e a c c i

    Fotografa:Archivos

    delCICR

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    Solerino, en el norte de Italia. Henry

    Dunant, hombre de negocios suizo, es

    testigo de las cruentas secuelas, ayuda

    a organizar la asistencia para los

    soldados heridos y regresa a Ginebra

    proundamente conmovido y resuelto

    a mejorar la suerte de los heridos en el

    campo de batalla.

    J1861: Clara Harlowe Barton seconvierte en uno de los primeros

    voluntarios en el Hospital de

    Washington tras el estallido de la

    Guerra Civil de Estados Unidos y, ms

    tarde, sera un aliado clave de los

    undadores del CICR, Henry Dunant y

    Gustave Moynier. Funda la Cruz Roja

    Americana.

    I1862: pagando l la edicin, Dunant

    publica 1.600 ejemplares de Recuerdo

    de Solferino e inicia una intensa

    campaa para obtener el apoyo a suidea de crear un cuerpo internacional

    de voluntarios con el fn de asistir a los

    soldados heridos en la guerra.

    17de febrero de 1863: creacin del

    Comit Internacional de socorro a los

    militares heridos, precursor del CICR y

    del Movimiento Internacional de la Cruz

    Roja y de la Media Luna Roja.

    Noviembre de 1863:se unda la

    primera Sociedad Nacional de la Cruz

    Roja en Stuttgart, entonces parte

    del Reino de Wrttemberg. La CruzRoja de Wrttemberg se convertira

    posteriormente en la Cruz Roja

    Alemana en 1921.

    n h u m a n i t a r i a 1 5 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a

    Fotografa:Archivos

    delCICR

    Fotografa:Archivos

    delCICR

    Fotograa: Nick Danziger

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    NO TENA NADA dice Shahnaz, el da en

    que, poco despus de que su marido

    desapareciese, se fue a vivir almarastoon

    (lugar de asistencia en pastn), un asilo de la Media

    Luna Roja Afgana para mujeres indigentes, viudas y en-

    fermas mentales. No poda volver con mi familia, no les

    sobraba nada y vivan de la tierra en Nejrab. Al igual que

    mi esposo y en el mismo momento, desapareci uno de

    mis dos hermanos. Sin saber adnde ir y sin poder man-

    tenerme, me fui a vivir al marastoon, donde me qued

    cinco aos.

    Hoy, Shahnaz, con 54 aos (foto a la derecha), es una

    de las dos mujeres que, en el marastoon de Kabul, se

    encargan de ayudar a las enfermas mentales. No hay

    tarea demasiado difcil ni demasiado degradante para

    Shahnaz. Se ha ocupado de estas mujeres y de estos

    nios, que han sido abandonados o cuyos padres estn

    encarcelados, como si fueran suyos, limpindolos, con-

    solndolos, contenindolos en sus estados de nimo,

    que en un abrir y cerrar de ojos pueden pasar de la agre-

    sividad a la docilidad.

    Los trabajadores de los marastoons de Afganistn (el

    primero fue creado por el gobierno en el decenio de

    1930 y traspasado en 1964 a la Media Luna Roja Afgana)

    son un ejemplo de cmo los sistemas locales tradiciona-

    les de proteccin y asistencia se han fortalecido graciasa los esfuerzos y a las inversiones del Movimiento. Otras

    Sociedades Nacionales han prestado apoyo a los ma-

    rastoons y, en 1994, el CICR intervino para rescatar a las

    personas del marastoon de Kabul, cuando esta ciudad

    era la lnea del frente en la guerra civil del pas.

    En 2001, mientras trabajaba en un artculo para esta

    revista, Shahnaz habl de esos das, cuando el reco-

    rrido diario hasta el trabajo se haba convertido en una

    cuestin de vida o muerte: Estaba aterrorizada por los

    6 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | N M E R O 1 . 2 0 1 3

    Agosto de 1864: Primer Convenio

    de Ginebra rmado por 16 Estados,

    ocialmente denominado Convenio

    de Ginebra para el mejoramiento

    de la suerte de los militares heridos

    en los ejrcitos en campaa; en los

    diez artculos del documento se

    sientan las bases para una accin

    humanitaria neutral y se solicita

    a las partes contendientes querespeten al personal sanitario en

    campaa.

    En denitiva, toda Europa se

    reuna para examinar la orma de

    poner un reno a las brutalidades

    de la guerra y crear la emulacin de

    la abnegacin entre las naciones,

    los pueblos y las razas, sin importar

    las dierencias de origen, idioma

    y color*.

    Extracto deMemoires de Henry

    Dunant

    *traduccin no ocial

    1864

    Casi asfixiadospor el froCon estas palabras, Charles Van de Velde describe las condiciones de su

    viaje a Dinamarca como parte de la primera delegacin del Comit en

    un conficto internacional. La misin iba a inspirar el uturo de la accinhumanitaria y los esuerzos incipientes para crear un

    convenio internacional. Se utiliz, adems, por primera

    vez, el emblema de la cruz roja. En el invierno de 1864, Van de Velde y Louis

    Appia ueron a reunirse con cada una de las partes del conficto que opona

    a las uerzas danesas y austro-prusianas, observarlas y ayudar a organizar

    la asistencia. Las bajas temperaturas no ueron la nica dicultad. Las

    autoridades, la prensa y las uerzas militares se mostraron escpticas y

    criticaron sin ambages esta misin neutral ante un conficto en el que los

    daneses eran atacados por una uerza de combate muy superior. Este nuevo

    comit tena que condenar la agresin contra los daneses, dijeron inormes

    de prensa, y no orecer ayuda a ambas partes. Ms tarde,

    Van de Velde pidi una tregua para ir a los hospitales

    de Prusia con el n de averiguar los nombres de los

    prisioneros y heridos daneses, y compartir noticias

    con sus angustiadas amilias. La misin ue rechazada por tratarse

    de una comunicacin con el enemigo. Sin duda, esto

    pone de maniesto escribi, la

    necesidad de dar vigencia a la resolucin

    sobre la neutralidad de los ayudantes

    voluntarios.

    I 1864: la primera delegacin

    del Comit ayuda a encauzar los

    Convenios de Ginebra y la utura

    labor humanitaria neutral sobre el

    terreno.

    No poda a

    s o r e a neu tr a i a e os ayu ante s

    vo untarios.

    K 1864: a nes de 1864, ya hay

    11 Sociedades Nacionales para la

    asistencia de los heridos en Europa.

    Fotografa:Archivos

    delCICR

    Fotografa:ArchivosdelCICR

    Fotografa:Archivos

    delCICR

    Mire la cronologa interactiva

    de la historia del CICR:

    www.icrc.org/spa/who-we-

    are/history

    15 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a 1 5 0 a o s d e a c c i

  • 7/30/2019 Revista de la Cruz Roja Media Luna Roja No. 1, 2013

    9/32

    bombardeos. Pero no poda abandonar a su suerte a esas

    mujeres. No habra habido nadie ms para cuidarlas.Hace unos meses durante mi visita ms reciente, los

    recuerdos estn an vivos. Dejaba mi casa y cruzaba la

    ciudad, la lnea de combate y las barricadas que no esta-

    ban lejos delmarastoon. Saba que era peligroso y estaba

    asustada. Cuando no poda dejar a mis hijos en casa, los

    llevaba conmigo al trabajo. Un da hirieron a Basir, mi

    hijo mayor, y a una de mis hijas, que tena 7 aos en ese

    momento. A m tambin me hiri una metralla. Todava

    me duelen el brazo y la mano cuando los levanto. Sha-

    hnaz incluso llev a los hurfanos y las mujeres a su casa

    cuando elmarastoon dej de ser un lugar seguro.La historia de Shahnaz es un ejemplo de la natura-

    leza transformadora de la accin humanitaria. Hoy se

    ve como una persona afortunada, capaz de trabajar y

    aportar un verdadero cambio en la vida de los dems en

    una poca de relativa paz. Soy una madre afortunada,

    mis hijos tienen un matrimonio feliz, los nios hurfanos

    de los que me ocupaba han sido adoptados... Tengo una

    buena vida, lo que me hace pensar que soy una mujer

    que ha tenido xito.

    N M E R O 1 . 2 0 1 3 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | 7

    J1866: el Convenio de Ginebra se

    aplica por primera vez en la guerra

    entre Prusia y Austria.

    I Salto en el tiempoEn 2012, la Repblica de Sudn del

    Sur, el pas ms reciente del mundo,

    con una de las Sociedades Nacionales

    ms recientes del Movimiento, frma

    los Convenios de Ginebra de 1949 y sus

    Protocolos adicionales. Hoy, 166 pases

    han ratifcado los Convenios y los dos

    Protocolos de 1977, que se remontan

    directamente al Convenio elaborado

    por los undadores del Movimiento de

    la Cruz Roja y de la Media Luna Roja.

    bandonar a esas mujeres

    Fotografa:NickDanziger

    Fotografa:Archivos

    delCICR

    Fotografa:ConorAs

    hleigh/Federacin

    Internacional

    Haciendo historia

    Desde el 8 de mayo, Da Mundial

    de la Cruz Roja y de la Media Luna

    Roja, la Federacin Internacional

    publicar una cronologa interactiva

    en lnea que muestra la creacin

    y evolucin de las Sociedades

    Nacionales: www.ifrg.org/8May

    n h u m a n i t a r i a 1 5 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a

  • 7/30/2019 Revista de la Cruz Roja Media Luna Roja No. 1, 2013

    10/32

    8 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | N M E R O 1 . 2 0 1 3

    sentido de que se brinde asistencia

    a todos los heridos y enermos con

    prescindencia de su nacionalidad:

    1875: el Comit Internacional enva

    su primera misin a Montenegro.

    Es la primera vez que el CICR presta

    asistencia a la poblacin desplazada

    y ayuda a establecer una Sociedad

    Nacional.

    1876: durante el primer

    conlicto con Rusia, la sociedad

    1870: la Sociedad Nacional de

    socorro a los enermos y los heridos

    de guerra de Gran Bretaa enva

    ayuda a ambos bandos en la

    guerra ranco-prusiana; este es

    tan solo un ejemplo de la labor

    de socorro en el extranjero de las

    primeras Sociedades Nacionales.

    Durante el sitio de Pars por los

    prusianos, Henry Dunant trabajacon voluntarios bajo el uego

    para distribuir alimentos y ropa.

    Mientras tanto, los prusianos

    utilizan trenes hospitales por

    primera vez.

    Julio de 1870: se establece la

    Agencia de Basilea para prestar los

    primeros servicios de bsqueda

    y asistencia de otra ndole a los

    soldados enermos y heridos.

    I 1875: Gustave Moynierexpone los cuatro principios

    undamentales de trabajo que las

    Sociedades del Movimiento deben

    observar: previsin, que signifca

    que se deben hacer preparativos por

    anticipado, en tiempo de paz, para

    brindar asistencia en caso de que

    estallase una guerra;solidaridad,

    por medio de la cual las Sociedades

    se comprometen a establecer

    vnculos mutuos y a ayudarse entre

    s; centralizacin, que signifca que

    no debe haber sino una Sociedaden cada pas, con actividades que

    se extiendan a todo el territorio

    nacional, y mutualidad, en el

    Partir solo, o casi solo,sin ningn conocimiento

    tcnico ni del idiomaalemn, que me permitiera

    por lo menos decir unas

    palabras, recin salido delhogar amiliar, expuesto atodos los peligros de la vida

    militar y hacerlo por propiavoluntad, ue una locura.

    Frdric Ferrire,estudiante de medicina

    de 22 aos, escribi sobresu misin en la guerra

    ranco-prusiana en1870. All, trabajando en

    circunstancias horrendas,se le trata con desconfanza

    y es hecho prisionero yacusado de ser espa.

    Tambin se salva por pocode ser ejecutado. Muchos

    aos ms tarde, se convierteen vicepresidente del CICR.

    15 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a 1 5 0 a o s d e a c c i

    1870

    Fotografa:NickDanziger

    Fotografa:ArchivosdelCICR

    Fotografa:Archivos

    delCICR

  • 7/30/2019 Revista de la Cruz Roja Media Luna Roja No. 1, 2013

    11/32

    N M E R O 1 . 2 0 1 3 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | 9

    DESDE LOS ALBORES DEL MOVIMIENTO, los de-

    legados del CICR y de las Sociedades Nacionales

    han seguido el impulso de ayudar a los dems yhan tratado de impedir el enrentamiento en situaciones

    complejas y a veces peligrosas.

    Hoy en da, los trabajadores humanitarios tienen una

    ventaja sobre sus colegas pioneros de pocas anterio-

    res: los emblemas de la cruz roja y de la media luna roja

    son ahora muy conocidos y respetados, las normas de la

    guerra, al menos en el papel, protegen la accin huma-

    nitaria, los delegados reciben capacitacin proesional

    antes de ir al terreno y el humanitarismo ha pasado a ser

    una proesin. Al mismo tiempo, el personal local, con

    impresionantes credenciales humanitarias, orece una

    mezcla de saber local y conocimientos tcnicos, lo que

    mejora considerablemente la efcacia, la seguridad y el

    alcance de las operaciones.

    Sin embargo, al igual que los primeros delegados

    como Van de Velde, Appia y Ferrire, los trabajadores

    humanitarios actuales siguen conrontados a muchas in-

    cgnitas, peligros y nuevas ronteras. El jee de la ofcina

    del CICR en Kunduz (norte de Aganistn), Nicolas Lam-

    bert (oto a la izquierda), por ejemplo, tena una amplia

    experiencia en zonas de conicto antes de incorporarse

    al CICR, pero no por ello el trabajo es ms previsible.

    La intensidad, duracin y organizacin de las accio-nes de los grupos armados uctan y no es cil estar

    al da con las alianzas que cambian constantemente,

    asegura Lambert. Las necesidades estn ah, pero las

    posibles acciones se ven difcultadas por la situacin de

    seguridad. Incluso si tenemos buenos contactos con un

    grupo de oposicin armada y recibimos luz verde (para

    seguir adelante con una operacin), hay tantos grupos

    que un comandante a menudo no puede hablar por

    los dems.

    Debemos ser optimistasSayed Sarajuddin Sadat es un miembro del personal

    local agano en la ofcina de Kunduz, donde se encargade los programas de seguridad econmica. Comenz

    a trabajar para el CICR en el decenio de 1990 y tiene

    una gran experiencia en diversas organizaciones. El

    personal nacional tiene las competencias para trabajar

    en este entorno, pero incluso asumiendo mayores res-

    ponsabilidades necesitamos a los expatriados para la

    credibilidad, afrma.

    La prolieracin de grupos armados, dice, signifca

    que hay que trabajar ms indirectamente con los aso-

    ciados locales tales como la Media Luna Roja Agana o

    los grupos de la comunidad, por ejemplo en los pro-

    yectos de agua y saneamiento.

    A pesar de que el acceso humanitario ha ido cam-

    biando a lo largo de los aos, dice Sarajuddin, el

    compromiso del CICR con principios slidos le ha per-

    mitido mantener su efcacia y credibilidad. Ha habido

    muchos cambios (en Aganistn) a lo largo de los aos,

    sobre todo polticos, pero el CICR ha mantenido su

    poltica. La neutralidad, la independencia y la impar-

    cialidad son aceptadas por la mayora, incluso por los

    talibanes. Yo dira que el CICR contina consolidando

    su reputacin incluso si tenemos un acceso limitado.

    Debemos ser optimistas.Para Lambert, valen la pena los largos das de tra-

    bajo lejos de casa. El trabajo es gratifcante, siempre

    quise viajar, descubrir nuevos pases, pero despus

    quise retribuir de alguna orma a las comunidades que

    visit, as que se convirti en mi carrera, mi pasin. A

    pesar de que estoy lejos de mi amilia y mi novia, aqu

    podemos realmente aportar algo.

    de socorro del Imperio Otomano

    adopta el emblema de la media

    luna roja para sus socorristas,

    instala hospitales de campaa y

    convierte los transbordadores en

    barcos hospitales.

    Decenio de 1880: las Sociedades

    Nacionales comienzan a ampliar

    las actividades en tiempo de pazcomo respuesta a los desastres: la

    Cruz Roja Japonesa tras la erupcin

    del Monte Bandai en 1888; la Cruz

    Roja Americana tras los incendios

    orestales, ciclones e inundaciones;

    la Cruz Roja Francesa tras las

    inundaciones en Pars y el clera en

    Marsella.

    1901: Henry Dunant y Frdric

    Passy reciben el primer Premio

    Nobel de la Paz, en honor a dos

    aspectos de la lucha contra laguerra: el esuerzo por poner lmites

    al surimiento de las vctimas

    de la guerra mediante la accin

    humanitaria y la lucha contra la

    guerra misma, o el pacifsmo.

    I Salto en eltiempoEn la actualidad, hay

    ms de 13 millones de

    voluntarios en todo el

    mundo y muchas Sociedades

    Nacionales son importantes

    actores humanitarios

    internacionales.

    El impulso de ayudar

    El CICR contina

    consolidando su

    reputacin incluso si

    tenemos un acceso

    limitado. Debemos

    ser optimistas.

    Sayed Sarajuddin Sadat,

    miembro del personal del CICR

    en Kunduz, Aganistn.

    n h u m a n i t a r i a 1 5 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a

    Fotografa:NickDanziger

    Fotografa:Ibrahim

    Malla/MediaLunaRojarabeSiria

  • 7/30/2019 Revista de la Cruz Roja Media Luna Roja No. 1, 2013

    12/32

    desplegando su accin humanitaria

    en muchos rentes nuevos. Pierden

    la vida unos 10 millones de soldados

    y un nmero igual de civiles.

    Agosto de 1914: el CICR crea

    la Agencia Internacional de

    Prisioneros de Guerra en el

    Museo Rath de Ginebra. Ms de

    1.200 voluntarios trabajan pararestablecer el contacto entre las

    personas separadas por la guerra,

    entre ellas los prisioneros, los

    internados civiles y los civiles en los

    territorios ocupados.

    IEnero d e 1915:primera

    visita de un delegado del CICR

    a los prisioneros de guerra en

    el campamento de Gardelegen

    (Alemania). Durante la guerra

    se hacen ms de 10 millones de

    prisioneros de guerra.

    1915: Se utiliza gas venenoso en las

    trincheras.

    1906: en el terremoto de San

    Francisco se puso a prueba el valor

    del personal capacitado de la Cruz

    Roja Americana en tiempo de

    paz. La Cruz Roja Japonesa enva

    152.000 dlares para ayudar a los

    damnifcados.

    El Movimiento crece

    Las Sociedades Nacionales siguenampliando las actividades de

    respuesta en casos de desastre en

    tiempo de paz. En 1913, la Cruz Roja

    Britnica haba capacitado a unas

    57.000 personas en primeros auxilios.

    La Emperatriz del Japn crea el Fondo

    de la Emperatriz Shken para apoyar

    la labor de las Sociedades Nacionales

    en todo el mundo.

    1914: estalla la Primera Guerra

    Mundial. La llamada guerra para

    acabar con todas las guerras seextiende por Europa y partes de

    rica. El Movimiento interviene

    en el primer conicto mundial

    No se olvid

    10 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | N M E R O 1 . 2 0 1 3

    L

    A IDEA ESTABA ALL DESDE EL COMIENZO, en la

    batalla de Solferino, cuando el fundador del Mo-

    vimiento, Henry Dunant, se encontr con un soldadomoribundo que deseaba enviar un mensaje a sus padres.

    Un cabo de unos veinte aos, de rostro afable y expresivo,

    llamado Claudius Mazuet, haba recibido un balazo en el cos-

    tado izquierdo, escribi Dunant en Recuerdo de Solferino.

    Dunant le prometi contactar a sus padres y al vol-

    ver a Ginebra no se olvid del joven que muri en

    sus brazos escribi Caroline Moorehead en su libro

    Dunants Dream (El sueo de Dunant). Busc a sus

    padres en Lyon, en el nmero 3 de la rue dAlger,

    para contarles lo que haba ocurrido a su nico hijo.

    Poco ms de una dcada despus, la idea se institucionaliz

    cuando el CICR cre la Agencia de Basilea para prestar servi-

    cios de bsqueda y otra asistencia a los soldados enfermosy heridos. Tras el estallido de la Primera Guerra Mundial, el

    CICR cre en Ginebra la Agencia Internacional de Prisio-

    neros de Guerra para ayudar a restablecer el contacto entre

    las personas separadas por la guerra. Un ao despus, en

    1915, el CICR realiz, por intermedio de un delegado, su pri-

    mera visita a un campo de prisioneros de guerra.

    Casi 100 aos despus, la tecnologa de la telefona

    mvil e Internet ha revolucionado la bsqueda de familia-

    res separados. Hoy delegados y voluntarios participan en la

    bsqueda de personas usando telfonos mviles, enlaces

    Fotografa:NickDanziger

    Fotografa:Archivos

    delCICR

    1 5 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a 15 0 a o s d e a c c i

  • 7/30/2019 Revista de la Cruz Roja Media Luna Roja No. 1, 2013

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    satelitales e Internet, mientras que el nuevo sitio web del

    CICR Restoring Family Links (www.amilylinks.icrc.org) per-

    mite ahora a la gente emprender sus propias bsquedas.

    Sin embargo, la mayora de los mensajes de Cruz Roja

    siguen siendo escritos en papel y los delegados del CICR o

    los voluntarios de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja los

    entregan despus de recorrer barrios a pie o en bicicleta.

    Un voluntario de la Media Luna Roja Agana, Saddiqa (iz-quierda/oto pgina 10) lee los mensajes con Mohammed

    Ali Hakim, el encargado de las actividades de bsqueda

    del CICR, para asegurarse de que no contienen nada que

    pueda comprometer la neutralidad, independencia e im-

    parcialidad del CICR.

    La mayora de las cartas estn en pastn y otras en dari,

    urd o incluso en ingls. Algunas contienen hermosos dibu-

    jos, que son admirables, ya que estn hechos con bolgrao,

    cuenta Saddiqa. Mensajes como estos son entregados luego

    por voluntarios o delegados, como Abdul Razaq, que ha

    trabajado durante muchos aos en la primera lnea de los

    confictos de Aganistn, entre ellos la guerra civil en Kabul

    en el decenio de 1990. Los cohetes caan por todas partes,

    era muy peligroso. Todos los das me tocaba recoger en las

    calles a los combatientes y civiles muertos y heridos.

    Hoy Abdul dice que entregar mensajes de Cruz

    Roja es una de sus tareas avoritas. Suele ser muy

    emocionante, la gente est tan eliz de recibir no-

    ticias de un ser querido. A veces las personas han

    desaparecido, la gente no sabe lo que ha ocurrido a

    un hijo o un hermano... y luego le llevas un mensaje.

    Sin embargo, no hay como el contacto directo. En Aga-

    nistn, por ejemplo, el CICR organiza viajes en autobs ala base de la Fuerza Area de Bagram para los amiliares de

    las personas detenidas en ese pas o en otras instalaciones

    militares de Estados Unidos, tales como la Base Naval esta-

    dounidense en la Baha de Guantnamo (Cuba).

    La labor del CICR en avor de las personas privadas de li-

    bertad tambin ha evolucionado de orma espectacular. En

    lugares como la crcel de Takhar, una instalacin tosca en

    la provincia agana de Taloqan, el CICR ayuda a los uncio-

    narios penitenciarios a hacer ms humanas las condiciones

    bsicas de detencin. La poblacin de 527 detenidos es casi

    cuatro veces mayor que la capacidad con la que se cons-

    truy la crcel, as que la mitad de ellos vive en tiendas de

    campaa improvisadas en el patio principal. Adems de

    visitar a los detenidos y entregarles mensajes de Cruz Roja,

    el CICR ha ayudado a mejorar el dispensario y las letrinas

    del establecimiento, instal un depsito elevado de agua

    y ha iniciado la construccin de un cobertizo que cubrirparte del patio y proteger del sol y la lluvia a los deteni-

    dos. Abdulrab Motmaen, el director de la crcel, dice que la

    ayuda del CICR ha transormado la calidad de vida en una

    orma que el gobierno no puede hacer. El detenido Hakim

    Mohammed conviene en lo anterior: El agua potable y el

    dispensario han cambiado totalmente nuestra vida.

    Nick Danziger

    Periodista y otgrao independiente radicado en Mnaco.

    Salto en el tiempoEn 2011, aproximadamente el

    46% de los delegados del CICR

    recin reclutados eran mujeres.

    socorro de la Cruz Roja, como esta

    conductora de ambulancia que

    evaca heridos de las lneas de

    combate.

    1919: Margarita Cramer se

    convierte en la primera mujer

    miembro del Comit. Pauline

    Chaponniere-Chaix, Suzanne

    Ferrire y Znaide Dessonnaz sonlas primeras delegadas.

    Febrero de 1918: el CICR insta a

    todos los pases contendientes a

    que no utilicen armas qumicas.

    Abril de 1919: primera visita del

    CICR a detenidos civiles en Hungra.

    I Nuevas funciones para las

    mujeres durante la guerra

    En muchos pases, el reclutamientode hombres jvenes crea

    oportunidades y nuevas unciones

    para las mujeres en la labor de

    guerra, el nmero de miembros

    de la Cruz Roja Americana pasa

    de 300.000 a 20 millones y la

    Sociedad Nacional recluta a 20.000

    enfermeras para servir con las fuerzas

    estadounidenses.

    1917: el CICR recibe el primero de

    tres Premios Nobel de la Paz por

    su labor durante la Primera GuerraMundial.

    Movilizacin en tiempo de

    guerra

    El personal de las Sociedades

    Nacionales aumenta en forma

    espectacular. En Alemania, 250.000

    hombres y mujeres se inscriben

    para prestar asistencia a los heridos

    en 84 trenes hospitales y en ms

    de 3.000 hospitales. Unos 63.000

    miembros del personal francs sirven

    en hospitales, unidades quirrgicas

    motorizadas y cocinas. Cuando, en

    1917, Estados Unidos entra en la

    N M E R O 1 . 2 0 1 3 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | 11

    Fotografa:NickDanziger

    Fotografa:Archivos

    delCICR

    Tratados en todo momento con humanidadLa guerra es un inerno. Pero, tal como se expresa en es ta rase del Convenio de Ginebra de 1929 relativo al

    trato debido a los prisioneros de guerra, la humanidad puede quedar a salvo segn los captores traten a los

    detenidos. . En este ejercicio prctico que las autoridades aganas realizaron recientemente, se pidi al CICR

    que observara y ormulara comentarios sobre el derecho internacional humanitario. Esto orma parte de los

    esuerzos generales que el CICR ha desplegado durante este conficto, como en muchos otros, para dialogar con

    todas las partes sobre el trato debido a los detenidos, la proteccin de la poblacin civil, el uso de armas que

    podran causar muertes indiscriminadas entre los civiles y muchos temas ms.

    n h u m a n i t a r i a 1 5 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a

  • 7/30/2019 Revista de la Cruz Roja Media Luna Roja No. 1, 2013

    14/32

    LA IDEA DE LOS DESASTRES silenciosos u olvi-

    dados no es totalmente nueva. Estos trminos se

    utilizaron ya en el decenio de 1930 cuando una Liga

    de Sociedades de la Cruz Roja cada vez ms globalizada

    (hoy Federacin Internacional de Sociedades de la Cruz

    Roja y de la Media Luna Roja) comenz a hacer rente a

    ms y ms desastres naturales en todo el mundo.

    Hoy el mundo se entera de los desastres de gran

    magnitud casi instantneamente. En algunos casos, las

    personas aectadas usan Skype, YouTube, Facebook o

    Twitter para inormar sobre los acontecimientos que

    estn ocurriendo.

    Pero como la mayora de la poblacin mundial no

    dispone de telonos inteligentes ni de buenas co-

    nexiones a Internet sigue producindose el llamado

    eecto CNN: los eventos que captan la atencin son

    los que reciben una cobertura sostenida con imgenes

    potentes, los otros caen en el olvido y se convierten as

    en desastres silenciosos.

    Pero desastre silencioso es un trmino extrao. Los

    vientos que arrancan un techo o las aguas que arrasan

    una casa entera son cualquier cosa menos silenciosospara los aectados. El silencio tiene que ver con lo que

    se escucha, o no se escucha, en los pases donantes,

    especialmente en pocas de difcultades econmicas.

    Dada esta realidad, algunos donantes y las orga-

    nizaciones humanitarias consideran que para hacer

    rente a estos desastres lo ms acertado es reducir la

    vulnerabilidad de las personas antes de la tormenta, el

    terremoto o la sequa siguiente.

    Este es un cambio sustancial de mentalidad y de

    prctica, que va de distribuir la asistencia a las per-

    sonas aectadas por la sequa con el fn de sobrevivir

    hasta la prxima sequa, a invertir en el largo plazo:

    instalacin de sistemas de riego, promocin de culti-

    vos ms resistentes, ayuda a los pastores a manejar su

    ganado, escriben dos comisionados de la Unin Eu-

    ropea (UE), Kristalina Georgieva y Andris Piebalgs (en

    representacin de la asistencia humanitaria de la UE ylas organizaciones de desarrollo, respectivamente), en

    una editorial conjunta elaborada para el sitio web de

    Cruz Roja Media Luna Roja.

    Hoy gracias a las fnanciacin del Departamento de

    Ayuda Humanitaria y Proteccin Civil de la Comisin

    Europea (ECHO), la Federacin Internacional y 11 So-

    ciedades Nacionales de pases de la Unin Europea

    llevan a cabo 55 proyectos de preparacin para desas-

    tres en 36 pases en colaboracin con las Sociedades

    Nacionales anitrionas. En ebrero, emprendieron,

    conjuntamente con diez Sociedades Nacionales, una

    campaa de sensibilizacin pblica sobre los desastres

    silenciosos (www.irc.org/silentdisasters).

    Ha sido una progresin natural. En los aos setenta

    y ochenta, muchas naciones donantes y el sector hu-

    manitario comenzaron a sentirse rustrados por la

    repeticin cclica de los desastres en las zonas vul-

    nerables. Muchos se percataron de que los desastres

    naturales tienen tanto que ver con los sistemas de de-

    sarrollo humano como con las pautas meteorolgicas.

    Algunos crticos de las operaciones de socorro afrman

    que su objetivo principal es devolver a las vctimas al

    statu quo, concluy un artculo en 1984, titulado Losdesastres naturales: actos de Dios o actos del hombre?

    Sin embargo, es el statu quo el que los vuelve vulnera-

    bles y propensos a los desastres.

    Algunos temen que el cometido humanitario se di-

    luya o est en peligro si las organizaciones de socorro

    de emergencia asumen una carga demasiado pesada o

    se atienen demasiado a los programas de los gobiernos

    o del desarrollo. Otros sostienen que la preparacin

    para desastres debe ser un aspecto clave del desarrollo

    Liga de Sociedades de la Cruz Roja,

    que pasara a ser posteriormente la

    Federacin Internacional. La creacin de

    la Liga permite incluir a las Sociedades

    Nacionales de la Cruz Roja en el Pacto de

    la Sociedad de Naciones, que entra en

    vigor en enero de 1920. En pocos aos,

    la Liga de Sociedades de la Cruz Roja

    abarcara a las Sociedades Nacionales

    de los pases derrotados en la guerra.

    Febrero de 1921:La Cruz Roja

    Americana hace saber que cerca de

    20.000 nios mueren anualmente

    en accidentes de trnsito en Estados

    Unidos.

    Salto en el tiempoEn 1999, el Informe Mundial

    sobre Desastres de la Federacin

    Internacional califca los accidentes

    de trnsito de importante crisis

    humanitaria, que se cobra la vida

    de 1,2 millones de personas al ao.

    Once aos despus, la Federacin

    Internacional y su proyecto acogido,

    la Asociacin Mundial para la

    Seguridad Vial, son actores clave en

    el Decenio de las Naciones Unidas

    de Accin para la Seguridad Vial,

    2011-2020.

    1921: se celebran ante la Corte Suprema

    de Alemania los juicios de Leipzig

    para enjuiciar los crmenes cometidos

    durante la Primera Guerra Mundial. El

    alcance de los juicios es limitado, pero

    sienta las bases para los tribunales

    penales internacionales ulteriores.

    Noviembre de 1918:Declaracin

    del armisticio tras la guerra. Muchas

    partes de Europa padecen hambre y

    enermedades como el tius y la gripe.

    Despus de la frma por las potencias

    de los tratados de paz en Versalles y

    la retirada de los ejrcitos, muchos

    se preguntan qu va a pasar con las

    organizaciones de socorro. Deben

    ser clausuradas o transormadaspara ocuparse del surimiento de la

    posguerra? El presidente del Consejo

    de Guerra de la Cruz Roja Americana,

    Henry Davison, lidera una ambiciosa

    campaa para unir en la posguerra a

    las Sociedades Nacionales de los pases

    aliados. El presidente del CICR Gustave

    Ador objeta que los principios de

    universalidad y neutralidad exigen que

    se incluya en la Liga a las Sociedades

    Nacionales de los pases vencidos.

    Mayo de 1919: los dirigentes de lasSociedades Nacionales de las potencias

    aliadas se renen en el Hotel Regina

    de Pars y frman los estatutos de la

    Asesinos

    silenciosos

    12 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | N M E R O 1 . 2 0 1 3

    :

    Fotografa:Archivos

    delCICR

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    local y de la comunidad en un mundo donde no todos

    los desastres se tratan de igual orma.

    A veces en un mismo desastre se da ese trato desigual.

    Tomemos el caso del huracn Sandy, (vase grfco) que

    azot la costa este de Estados Unidos en noviembre

    pasado, causando gran destruccin y la muerte de 131

    personas. Dado el contexto de eleccin presidencial en

    la que el cambio climtico era un tema central, la aten-cin meditica ue intensa. En cambio, casi no se habl

    de las consecuencias del huracn en las Bahamas, Cuba,

    Jamaica, Hait y la Repblica Dominicana, pese a que

    la tormenta ue igual de devastadora (unas 137 perso-

    nas muertas o desaparecidas; grandes daos en casas

    y cultivos). Sabemos que nuestros sistemas de alerta

    temprana son excelentes y nos permiten estar bien

    preparados, pero simplemente no podemos aceptar la

    prdida de tantas vidas , dijo Luis Foyo Ceballos, Secre-

    de muchos pases y difcultades

    econmicas en todo el mundo

    durante muchos aos. Estados

    Unidos retira toda la ayuda que

    presta en el extranjero, paralizando

    muchos esuerzos de socorro de la

    Cruz Roja en diversos pases.

    I 1931 : El ro Huang He (tambin

    conocido como Huang Ho o RoAmarillo) en China inunda unos

    104.000 km cuadrados, dejando

    ms de un milln de muertos.

    Agosto de 1922: China es azotada

    por un tin, en el que mueren unas

    60.000 personas.

    J Septiembre de 1923: las

    ciudades japonesas de Tokio y

    Yokohama son devastadas por el

    gran terremoto de Kanto que se

    cobra entre 99.000 y 143.000 vidas.

    Octubre de 1929: el mercadode valores estadounidense se

    viene abajo, causando un colapso

    fnanciero en las instituciones

    N M E R O 1 . 2 0 1 3 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | 13

    tario General de la Cruz Roja Cubana.

    Del mismo modo, el sper tin Bopha mat a ms

    de 1.000 personas y da o destruy ms de 216.000

    viviendas en la isla de Mindanao (Filipinas). La Fede-

    racin Internacional, la Cruz Roja de Filipinas y el CICR

    proporcionaron socorros a miles de personas. Pero el

    llamamiento de la Federacin Internacional por valor

    de 16,2 millones de rancos suizos para Bopha haba re-cibido en ebrero solo el 30% de los ondos solicitados,

    lo que signifcaba que se poda proporcionar materia-

    les para la reparacin de albergues solo para 5.000 de

    las 15.000 amilias benefciarias. Fue una tormenta

    de categora 5, la ms elevada en la escala, dice Ne-

    cephor Mghendi, jee de operaciones de la Federacin

    Internacional en Filipinas. Si este desastre no capta la

    atencin de los donantes, el uturo para los sobrevi-

    vientes se ve bastante sombro.

    Fro extremoen Mongolia

    0,24%

    Terremoto en Tayikistn0,09%

    HuracnSandy

    en elCaribe

    6,76%

    Huracn Sandy enEstados Unidos

    89,40%

    Inundacionesen Ecuador

    0,10%

    Tormenta tropical en Bangladesh0,49%

    Inundaciones e inseguridadalimentaria en Camboya

    0,34%

    Enermedad de manos,pies y boca en Viet Nam

    0,07%

    Inseguridad alimentariaen Sudrica

    0,31%

    Retornadosburundianosdesde Tanzana

    0,12%

    Epidemias en Uganda0,73%

    Inseguridaden el Sahel

    1,29%

    Brote de dengueen El Salvador

    0,05% Salto en el tiempoEn 1992, el Centro para

    la Investigacin de la

    Epidemiologa de los

    Desastres (CRED) registra

    221 desastres naturales,

    que se cobran un total de

    14.811 vidas, afectan a 78

    millones de personas y

    causan prdidas econmicas

    por valor de casi 70.000millones de dlares. En 2011,

    CRED registra 336 desastres

    naturales, que se cobran

    unas 31.105 vidas, afectan a

    209 millones de personas y

    causan prdidas econmicas

    sin precedentes por un total

    de casi 366.000 millones de

    dlares.

    Fotografa:Archivos

    delCICR

    El huracn Sandy en Estados Unidos capt la atencin de los medios decomunicacin nueve veces ms que 12 desastres silenciosos juntos

    Porcentaje de cobertura meditica total de 13 desastres en el mundo a fnes de 2012 y principios de 2013.Fuente: Un estudio por encargo de la Federacin Internacional y ECHO, y realizado por Infuence Communications con sede en Montreal

    como parte de la campaa sobre los desastres silenciosos.

    n h u m a n i t a r i a 1 5 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a

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    POR INTERMEDIO DE SUS SECRETARAS deGinebra en la Suiza neutral, el CICR y la Liga(hoy Federacin Internacional) negociaronacuerdos complejos para hacer llegar escasos sumi-

    nistros desde Suiza o diversos puertos martimos a las

    personas que los necesitab an tanto. En 1940, el CICR y la

    Liga ormaron una Comisin Mixta de Socorros, que en-

    treg ms de 160 millones de toneladas de suministrosentre 1941 y 1946. Basndose en su labor de bsqueda

    eectuada durante la Primera Guerra Mundial, el CICR

    cre la Agencia Central de Prisioneros Guerra, que en-

    treg unos 36 millones de paquetes e intercambi unos

    130 millones de cartas entre los prisioneros de guerra y

    sus amilias.

    A pesar del herosmo y la valenta de miles de

    trabajadores del Movimiento, tambin ue una poca

    oscura para el humanitarismo. Las autoridades nazis ne-

    garon o limitaron el acceso a los campos de prisioneros de

    guerra, los guetos judos y los campos de concentracin,

    o lo permitieron en orma sumamente controlada. El CICR

    se plante si hacer o no una denuncia pblica apoyndose

    en lo que los delegados vean en los campos. Sin embargo,

    dada la actitud de las autoridades alemanas, se corra el

    riesgo de perder la oportunidad de salvar vidas. La Cruz

    Roja Alemana, por su parte, haba cado por completo bajo

    el control nazi. Para el Movimiento, ue una de las mayores

    pruebas de la aplicacin de la neutralidad durante un

    conicto y, en opinin de la mayora, ue su mayor racaso.

    En respuesta, la Cruz Roja Alemana emprendi una amplia

    investigacin pblica de su historia en la guerra y el CICR

    tambin abrira sus archivos de la era de la guerra a los

    historiadores independientes. En 1997, se disculp ofcial-

    mente. Uno de los historiadores ms eminentes del CICR,

    Franois Bugnion, concluy que segn los archivos, el ra-

    caso ms evidente del Comit ue el intento rustrado de

    ejercer el derecho a llevar a cabo acciones humanitarias en

    avor de los civiles que habitaban las reas ocupadas o los

    deportados a campos de exterminio. Los actos heroicos

    de algunos de sus delegados, que trataron de ayudar a los

    condenados a muerte, no alcanzaron a mitigar el racaso

    del Comit como institucin en su lucha contra la perse-

    cucin nazi, escribi el historiador y aadi que de los

    documentos histricos del CICR de la poca se desprenda

    un sentimiento de impotencia. Incluso los miembros del

    Comit que se mostraron ms claramente en avor de un

    llamamiento reconocieron que este no cambiara nada y

    que el CICR sera incapaz de detener la marcha hacia el

    abismo.

    civiles: el genocidio perpetrado

    por la Alemania nazi; el abuso

    de prisioneros en los campos de

    prisioneros de guerra en Europa

    y el Pacco; el bombardeo areo

    masivo y, por ltimo, el uso por

    primera vez de armas nucleares.

    Se calcula que hasta 1945 la guerra

    haba dejado unos 50 millones de

    muertos.

    La asistencia en casos de

    desastre contina

    A pesar de que gran parte de Europa

    y el Pacco se encuentra dominada

    por la guerra, prosiguen los grandes

    esuerzos para brindar socorro a las

    vctimas de desastres naturales, entre

    ellos los terremotos de Chile y Turqua.

    1943:Suiza mantiene una neutralidadprecaria, con las tropas alemanas

    estacionadas en las montaas

    rancesas cerca de Ginebra.

    1936 la guerra civil espaola:

    el CICR abre ocinas en los

    bastiones nacionalistas y

    republicanos. Durante gran parte

    del conficto, no se hace caso de

    la distincin entre combatientes y

    no combatientes y los civiles son

    los que ms suren las represalias

    y los bombardeos. El ataque areo

    sobre Guernica seala el comienzode una nueva era que presagia el

    uso indiscriminado de bombardeos

    areos sobre las ciudades durante

    la Segunda Guerra Mundial.

    I 1939 la Segunda Guerra

    Mundial: con este conficto de

    escala verdaderamente mundial,

    la asistencia humanitaria

    alcanza proporciones totalmente

    nuevas y el nmero de personas

    asistidas se cuenta por millones.

    Asimismo, el conficto plantealas amenazas ms graves a los

    principios humanitarios y ocasiona

    las mayores prdidas de vidas

    La marchahacia el abismoILa Segunda Guerra Mundialprovoc la mayor movilizacinde la Cruz Roja y de la MediaLuna Roja hasta ese momento.La neutralidad de Suiza uedecisiva ya que permiti enviarayuda en orma masiva, comolos suministros almacenadosen Ginebra (derecha), durantetodo el conficto. Sin embargo,la neutralidad del pas ue unade las razones por las que elCICR no conden debidamentelas atrocidades cometidas porlos alemanes en los campos deconcentracin como Auschwitz,otograado en 1947 (abajo).

    Fotografa:Archivos

    delCICR

    Fotografa:KarenMargretheSommer/CICR

    15 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a 1 5 0 a o s d e a c c i

  • 7/30/2019 Revista de la Cruz Roja Media Luna Roja No. 1, 2013

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    N M E R O 1 . 2 0 1 3 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | 15

    Noviembre de 1945: se inician

    en Nremberg los juicios de los

    principales dirigentes nazis, a los

    que siguen tribunales similares en

    Europa y Extremo Oriente, lo que

    prepara el terreno para la Corte

    Penal Internacional y los tribunales

    especiales para el enjuiciamiento de

    los crmenes de guerra en el decenio

    de 1990.

    1946: el Consejo de Gobernadores

    de la Liga de Sociedades de la Cruz

    Roja (hoy Federacin Internacional)

    conrma cuatro Principios

    Fundamentales.

    1949: la experiencia de la Segunda

    Guerra Mundial da orma a los

    Convenios de Ginebra de 1949, de los

    cuales el IV Convenio estipula por

    primera vez protecciones

    especcas para los civiles durante losconfictos internacionales.

    I Agosto de 1945: Se arrojan

    bombas atmicas sobre Hiroshima y

    Nagasaki. Mdicos y enermeras de la

    Cruz Roja Japonesa intervienen; Fritz

    Bilnger, primer delegado del CICR

    en Hiroshima, inorma: Condiciones

    espantosas. Ciudad arrasada. Marcel

    Junod, mdico y delegado del CICR

    que se encontraba ya en una misin

    de socorro, es uno de los primerosextranjeros que viajan a Hiroshima

    despus de estallar la bomba

    atmica.

    Un inorme desdelos infernosA pesar de que trabajaban a la intemperie, las personas tienen una tez

    plida, cinrea... Cada internado en la KZ (una unidad dentro del campo),

    hombre o mujer, viste un gran lienzo con rayas desteidas azul y gris. En

    el brazo derecho llevan marcado un nmero. Todas las cabezas rapadasdan la impresin desde la distancia de una similitud asombrosa. Vistos de

    cerca, con la cabeza descubierta o con una boina inclinada hacia la rente,

    muestran una inteligencia notable. Sin mover la cabeza, sus ojos nos

    miran con curiosidad.

    Inorme de misin de un delegado del CICR que visit los campos y

    guetos durante la Segunda Guerra Mundial. En un relato escaloriante,

    describe el ruido de las duchas que se utilizaban para gasear a los

    internados. Pero este hecho no se pudo probar, seal el delegado.

    Desde las ruinas de este primer conlicto verda-

    deramente mundial brill un rayo de esperanza: la

    elaboracin de los cuatro Convenios de Ginebra de

    1949, que el CICR ayud a redactar y, en virtud de los

    cuales, se protega por primera vez a los civiles en caso

    de conficto. Fundndose en los Convenios de 1949 y los

    dos Protocolos adicionales de 1977, el CICR ha hecho

    numerosos llamamientos durante los confictos paraproteger a los civiles. Hoy e l Movimiento desempea un

    papel preponderante en los esuerzos mundiales por lo-

    grar un tratado que prohba el uso de las armas nucleares

    basndose en los Convenios que exigen la proteccin de

    la poblacin civil. Despus de la Segunda Guerra Mun-

    dial, la Cruz Roja Alemana se estableci de nuevo como

    una entidad independiente y este ao tambin celebra

    su 150 aniversario.

    Fotografa:Archivos

    delCICR

    Fotografa:ArchivosdelCICR

    n h u m a n i t a r i a 1 5 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a

  • 7/30/2019 Revista de la Cruz Roja Media Luna Roja No. 1, 2013

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    ES UN ESPECTCULO ASOMBROSO. Un pie impo-nente que parece descender desde un cielo oscurose apoya sobre unas imgenes de personas aecta-das por algn desastre o conicto proyectadas en el suelo.

    En las paredes que rodean la sala, hay unas pequeas pla-

    cas que muestran las tentativas de la humanidad a travs

    del tiempo de sobreponerse a la opresin, ayudar a los

    indigentes o imponer una conducta honorable durante la

    guerra: desde el cdigo de Hammurab de Babilonia (hacia

    1752 AC) hasta los Convenios de Ginebra de 1949 y sus

    Protocolos adicionales de 1977.

    Esta imagen audaz y monumental es una de las mu-

    chas escenas evocadoras que contiene el recin reabierto

    Museo Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna

    Roja, donde se exhiben las mltiples, y a menudo contra-

    dictorias, acetas de la naturaleza humana.

    El pie, despus de todo, podra simbolizar muchas

    cosas: el poder de la opresin o el de la uerza perdurable

    de la humanidad. Un pie gigantesco podra ser uno que

    aplasta a los dems o uno que corre rgil y descalzo para

    sobrevivir, dice Gringo Cardia, uno de los tres arquitectosescogidos para crear los tres nuevos espacios del Museo.

    Bajo el lema La aventura humanitaria, las nuevas

    exposiciones son una iniciacin en la accin humanita-

    ria contempornea destinada a inculcar el sentido de la

    esperanza, la resiliencia humana y el sentimiento de que

    incluso las pequeas acciones pueden aportar un cam-

    bio. De hecho, la experiencia del Museo es cualquier cosa

    menos esttica. Los visitantes tendrn la oportunidad de

    interactuar con muchas exposiciones: en un caso, los vi-

    sitantes pueden tomar parte en un juego interactivo que

    simula las complejidades de una respuesta ante un de-

    sastre natural. Frente a diversos escenarios, los jugadores

    toman decisiones, actan y ven los posibles resultados.

    Un recorrido por el museo tambin llevar a los visi-

    tantes a toparse con personas damnifcadas. En la Sala

    de los Testigos, unas proyecciones en tamao natural de

    personas aectadas por un conicto, un desastre natural o

    una intervencin humanitaria relatan sus vivencias.

    Una de ellas es la de Emmanuel Jal de Sudn , un ex nio

    soldado que cuenta que al principio quera vengar la violen-

    cia perpetrada contra su amilia hasta que un trabajador

    humanitario me envi a la escuela, y recuper algo de su

    humanidad olvidada. Empec a rapear y a tomarme muy

    en serio las canciones, dice. Finalmente, el cielo pareca

    menos negro y pude redescubrir un poco de mi inancia.

    A lo largo del recorrido, los visitantes tambin podrn

    conocer, entre otras personas, a un fscal al que le han

    tocado casos de crmenes de guerra, una vctima de una

    mina terrestre que dirige el centro ortopdico del CICR en

    Kabul, una migrante econmica que lucha por alimentara su amilia, un periodista detenido durante seis aos en

    la base naval de Guantnamo y una joven hurana por el

    genocidio en Rwanda.

    La exposicin de la humanidadEl replanteamiento radical del Museo comenz en

    2006. El director del Museo, Roger Mayou, y su perso-

    nal pusieron a integrantes de todo el Movimiento de la

    Cruz Roja y de la Media Luna Roja a trabajar con des-

    en avor de 100.000 personas que

    haban huido a los pases vecinos.

    I1955: Jean Pictet, autor y artce

    clave en la labor del CICR con relacin

    a los Convenios de Ginebra de

    1949, dene y analiza los valores y

    principios que son el undamento

    del Movimiento de la Cruz Roja y

    de la Media Luna. Su comentariotodava infuye en el modo cmo los

    Principios Fundamentales se aplican

    hoy en da.

    Abril de 1950: el CICR emite una

    declaracin instando a los pases a

    que prohban el uso de la energa

    nuclear con nes blicos: La

    proteccin de la persona humana

    contra la destruccin masiva est

    ntimamente ligada con el principio

    que dio nacimiento a la Cruz Roja:

    la persona que no participa en las

    hostilidades o que es puesta uerade combate, debe ser respetada y

    protegida.

    J1950-1953 la guerra de Corea:

    el primer gran conficto de la guerra

    ra tambin anuncia el inicio de una

    era de detencin de la carrera nuclear

    entre las superpotencias.

    1954 la guerra de Argelia:

    durante esta guerra de

    descolonizacin, el CICR entabla

    contactos con los movimientos deliberacin nacional; mientras, la

    Federacin Internacional hace un

    llamamiento en 1956 y otro en 1957

    16 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | N M E R O 1 . 2 0 1 3

    Una aventura

    humanitaria

    Fotografa:Archivos

    delCICR

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  • 7/30/2019 Revista de la Cruz Roja Media Luna Roja No. 1, 2013

    19/32

    tras la Segunda Guerra Mundial

    da lugar a la creacin de muchas

    Sociedades Nacionales nuevas, con

    lo que aumenta a 100 el nmero de

    miembros de la Liga.

    1956 : la Unin Sovitica

    aplasta un levantamiento en

    Hungra. La Liga (hoy Federacin

    Internacional) interviene cuando

    los reugiados hngaros huyen a

    Austria y Yugoslavia. Al cabo de

    un ao, se encuentra a cargo de

    la gestin de 50.000 reugiados

    en 44 campamentos. Entre tanto,

    las Sociedades Nacionales delMedio Oriente responden a la

    guerra rabe-israel, mientras

    el perodo de descolonizacin

    1955 la guerra de Viet Nam:

    lo que empieza como una guerra para

    independizarse de Francia se convierte

    en una guerra entre la Unin Sovitica

    y los Estados Unidos que se intensica

    en el decenio de 1960 y termina con

    la retirada de Estados Unidos y un

    tratado de paz en 1973. La guerra de

    Viet Nam iba a ser el conficto ms

    largo y ms mortero de la era de laguerra ra.

    Salto en el tiempo:Un chiste de un redactor clave de los

    Convenios de Ginebra de 1949: Se me

    acus una vez de elaborar convenios

    demasiado largos. As que me dije,

    pues muy bien, lo har en dos artculos.

    Artculo primero: en caso de guerra,

    todos los hombres se comportarn como

    ngeles. Artculo segundo: El presente

    Convenio contiene un solo artculo.

    Jean Picte t, principal autor de los

    Convenios de Ginebra para el CICR, citado

    en el peridico The Guardian en 1999.

    N M E R O 1 . 2 0 1 3 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | 17

    Fotograa: Alain Germond

    Fotografa:Archivos

    delCICR

    n h u m a n i t a r i a 1 5 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a

    Ponga a prueba sus

    conocimientos

    Responda al cuestionario

    sobre la historia de la Cruz

    Roja y la Media Luna Roja:

    www.redcross.int

  • 7/30/2019 Revista de la Cruz Roja Media Luna Roja No. 1, 2013

    20/32

    tacados pensadores en el campo de los museos para

    explorar ideas y determinar temas clave. Por ltimo,

    deban elegir a tres arquitectos (uno de rica, uno de

    Amrica del Sur y uno de Asia) para el diseo de los

    tres espacios temticos principales: Deender la digni-

    dad humana, Restablecer el contacto entre amiliares y

    Reducir los riesgos naturales.

    El Museo escogi una importante frma de arquitectura

    suiza, Atelier Oi, para que coordinara y colaborara en varios

    de los espacios comunes centrales.La arquitectura del Museo es en s misma una experien-

    cia interesante. Aunque no todo en el Museo ha cambiado

    (los Mecenas de siempre recordarn muchos de los mis-

    mos arteactos y algunos elementos muy queridos), se ha

    aadido un toque orgnico a la slida base de hormign,

    diseo de los aos ochenta del arquitecto Pierre Zoelly.

    Hojas estrechas y verticales de madera se alinearon a lo

    largo de las paredes curvas para crear una cinta de materia

    viva que se desliza por pasillos y salas diseadas sin ngu-

    los rectos y con pocas lneas rectas.

    Cada rea temtica, por su parte, provoca una sensacin

    nica. El arquitecto japons Shigeru Ban, que utiliz tubos

    de papel reciclado para construir todo, desde los puentes

    hasta los reugios temporales de emergencia, ue elegido

    para disear la exposicin Reducir los riesgos naturales.

    Hemos construido viviendas temporales, algunas es-

    cuelas e iglesias en los campamentos de reugiados de

    rica y en las zonas aectadas por desastres naturales utili-

    zando tubos de papel reciclado, explica. En el Museo, lostubos estn dispuestos en curvas y olas orgnicas que re-

    cuerdan un bosque o humedales: un sentido de exibilidad

    orgnica y resiliencia

    Usamos los mismos tubos de papel para construir las

    paredes y el techo, y crear as un espacio clido y orgnico,

    dice Ban. Esperamos que esto nos permita acabar con el

    prejuicio segn el cual el papel es un material rgil.

    En el espacio Restablecer el contacto entre amiliares,

    el arquitecto Francis Kr Dibdo de Burkina Faso utiliza

    18 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | N M E R O 1 . 2 0 1 3

    centenario. Se entrega el Premio

    Nobel de la Paz a la Federacin

    Internacional y al CICR con ocasin

    del centenario del Movimiento.

    1965: los siete Principios

    Fundamentales del Movimiento,

    tal como los conocemos hoy, ueron

    aprobados unnimemente en 1965

    por la XX Conerencia Internacionalde la Cruz Roja y de la Media Luna

    Roja.

    1967: con la guerra de los seis

    das, el CICR establece la primera

    delegacin permanente en Oriente

    Prximo. Surge el cometido de

    intermediario neutral en las

    negociaciones por los rehenes.

    1968: el CICR unda el primer centro

    ortopdico en la ciudad yemenita de

    San; se crean luego cinco centros,cuya responsabilidad se traspasa

    posteriormente a las autoridades

    yemenitas.

    1968: la guerra de Biara. La

    guerra de Biara capta la atencin

    de los medios internacionales y

    el Movimiento entra en accin

    mientras el conficto de Biara se

    convierte en un punto de infexin

    en la evolucin de la asistencia

    humanitaria. Debido en gran

    parte a la experiencia en Biara,

    algunos miembros del personaldel CICR dejan posteriormente la

    organizacin para ormar Mdicos

    sin Fronteras.

    I 1962 el conficto de Yemen:

    cuando estalla el conficto armado

    entre las uerzas republicanas y

    las uerzas realistas despus de la

    cada del Imanato en el norte del

    pas, el CICR despliega su accin. A

    lo largo de los aos, los delegados

    prestan asistencia mdica, visitan

    a los prisioneros de guerra de

    ambos bandos y actan comointermediario neutral.

    1963: el Movimiento celebra su

    JA travs de algunas de lasnuevas exposiciones del Museo,los visitantes se hallan en plenaaccin humanitaria. En esta otose ve a los visitantes participaren un juego que los lleva a tomardecisiones en respuesta a undesastre natural complejo.Fotograa: Alain Germond

    Fotografa:Archivos

    delCICR

    1 5 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a 1 5 0 a o s d e a c c i

  • 7/30/2019 Revista de la Cruz Roja Media Luna Roja No. 1, 2013

    21/32

    metal y hormign para crear ormas naturales que evocan

    la necesidad humana de mantenerse en contacto con las

    propias races en medio de los acontecimientos que nos

    arrancan del mundo natural y de la amilia. A lo largo de

    toda la exposicin se realza el vnculo intrnseco entre la

    amilia, las races y los elementos, dijo. Un ejemplo son

    las estructuras en orma de rbol que muestran mensajes

    de Cruz Roja: a partir del tronco de un piln de hormign,unos tubos de metal en orma de ramas sirven de soporte

    para marcos que exhiben notas escritas a mano o dibujos

    hechos con bolgraos.

    En otras partes, el sentido de lo orgnico y el toque

    humano se expresan en el tecnicolor de la era digital. La

    exposicin Los colores de la dignidad, una colaboracin

    entre la Escuela Politcnica Federal de Lausana y la Es-

    cuela Cantonal de Arte de Lausana, es una pantalla tctil

    interactiva del tamao de una pared que muestra cmo

    incluso las pequeas acciones, en este caso un simple

    toque, pueden generar reacciones espectaculares. Para

    el arquitecto Cardia, que cre el espacio donde se exhibe

    Los colores de la dignidad, la exposicin llevar a la gente

    a reexionar sobre su actuacin en el mundo y la orma

    en que puede ayudar a los dems. Y de eso se trata en

    defnitiva con estas nuevas galeras: servir de inspiracin

    a travs de una experiencia vvida para que todos puedan

    aportar su grano de arena.

    N M E R O 1 . 2 0 1 3 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | 19

    El CICR moderno naci precisamente

    en rica, al fnal del decenio de 1960,

    sobre las ruinas humeantes de Biara.

    Fue all donde el nuevo CICR ue

    llevado a la pila bautismal de una era

    humanitaria nueva cuando se organiz

    la gigantesca operacin de socorro para

    cientos de miles de vctimas de la guerra

    civil en Nigeria, segn escribe Jean-

    Marc Bornet, en Between Enemy Lines(Entre lneas enemigas), delegado del

    CICR, 1972-2003.

    A la guerra de Biafra se la presenta a menudo como el comienzo de

    una nueva etapa en la historia del humanitarismo, escribe Marie-Luce

    Desgrandchamps en una edicin especial de la Revista Internacional de

    la Cruz Roja dedicada a los 150 aos de la accin humanitaria. La guerra

    civil poscolonial plantea una serie de retos al CICR, una organizacin que

    todava se estaba reponiendo de las consecuencias de la Segunda Guerra

    Mundial y que no estaba del todo preparada para montar una operacin

    masiva y compleja, escribe. Los problemas logsticos, un nmero

    insufciente de delegados debidamente capacitados y los problemas de

    comunicacin con otras organizaciones, gobiernos y grupos armadosdan lugar a numerosas lecciones aprendidas y reormas. De esta

    experiencia provienen una mayor proesionalizacin y la realizacin de

    esuerzos para coordinar mejor la entrega de ayuda humanitaria.

    LUn dibujo del arquitectoDibdo Francis Kr muestrasu orma de concebir una torre,hecha de hormign y fbras de

    camo, para evocar la sensacinde la cabaa tradicional de ricacentral. Las paredes de la torre seutilizan para mostrar otograasde nios que se quedaronhuranos durante el genocidio deRwanda.Ilustracin: Dibdo Francis Kr

    IKr tambin us columnas deapoyo para exhibir mensajes deCruz Roja de todo el mundo.Fotograa: Alain Germond

    Fotografa:Archivos

    delCICR

    n h u m a n i t a r i a 1 5 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a

  • 7/30/2019 Revista de la Cruz Roja Media Luna Roja No. 1, 2013

    22/32

    como intermediario neutral entre

    las uerzas gubernamentales y los

    grupos armados. Entre tanto, las

    Sociedades Nacionales de la regin,

    undadas algunas de ellas pocos

    decenios despus de la creacin del

    Movimiento (la del Per en 1879 y la

    de Argentina en 1881, por ejemplo),

    desarrollan sus competencias y

    desempean un papel decisivo enla respuesta a las necesidades de

    las comunidades aectadas por un

    desastre o un conficto.

    Tendencias

    Segn Beyond Confict, una obra que

    relata la historia de la Federacin

    Internacional, las Sociedades

    Nacionales de la Cruz Roja y de

    la Media Luna Roja, en su debate

    interno, comienzan a impugnar lo

    que ven como un modelo anticuado

    de la asistencia humanitaria basado

    en las actitudes europeas depaternalismo en lugar de colaborar

    con las poblaciones aectadas.

    I1975: el CICR inicia sus primeras

    acciones en Amrica Latina durante

    la era de dictaduras y confictos.

    En el decenio siguiente, el CICR

    iba a trabajar con las Sociedades

    Nacionales para brindar atencin de

    salud a las comunidades remotas,

    hacer gestiones con regularidad

    ante las autoridades en relacin

    con ms de 2.000 desaparecidosen Argentina y visitar a miles de

    presos polticos en Bolivia y Chile, y

    asumir un papel ms preponderante

    20 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | N M E R O 1 . 2 0 1 3

    PARA MUCHAS MUJERES que ueron heridas o se

    quedaron viudas a raz de una guerra, las lesio-

    nes sicas son solo una aceta de las mltiples

    consecuencias que aectan a la supervivencia de amilias

    enteras. En el caso de Wahida (oto de la derecha, vestida

    de negro), la explosin ocasionada por un atentado sui-

    cida la dej parcialmente ciega, sin brazos y sin marido, lo

    que signifca que no puede mantener a su amilia. No me

    alcanza, pero trato de enrentar las muchas difcultades,

    dice con respecto al dinero y la ropa que recibe del centro

    Puedo hacer de todo

    Desastres frecuentes

    Segn Beyond Confict, en el decenio

    de 1970, se registraron desastres

    recuentes y la entonces Liga (hoy

    Federacin Internacional) eectu

    ms de 200 llamamientos, ms de los

    que haba hecho en el perodo de1945

    a 1969. En 1970 hubo 16 llamamientos

    internacionales.

    Fotografa:NickDanziger

    Fotografa:Federacin

    Internacional

    15 0 a o s d e a c c i n h u m a n i t a r i a 1 5 0 a o s d e a c c i

  • 7/30/2019 Revista de la Cruz Roja Media Luna Roja No. 1, 2013

    23/32

    1979: el CICR crea su programa

    de rehabilitacin sica, un

    compromiso para rehabilitar

    a los heridos de guerra, cuyo

    nmero se increment a lo largo

    de todo el decenio de 1980. En

    1983, el Fondo Especial para los

    Discapacitados ampla su labor

    a los entornos posblicos y no

    blicos.

    Diciembre de1979: la Unin

    Sovitica invade Aganistn.

    1977: los gobiernos adoptan

    los Protocolos I y II adicionales

    a los Convenios de Ginebra,

    cuyas disposiciones permiten

    proteger a los civiles de los

    ataques indiscriminados y

    extienden a los confictos

    armados no internacionales

    la proteccin que conere

    el derecho internacionalhumanitario.

    N M E R O 1 . 2 0 1 3 | C R U Z R O J A M E D I A L U N A R O J A | 21

    Pero no se trata solo de autonoma sica y econmica,

    sino de ayudar a la gente a recuperar su capacidad para

    seguir adelante con su vida, aunque sea con limitaciones.Me qued sorprendida cuando llegu al centro y vi a

    tantas personas discapacitadas que viven normalmente,

    dice Nilouar, de 19 aos (pgina anterior, izquierda), que

    se qued paraltica a causa de una herida de bala. Hasta

    entonces, estaba deprimida, recuerda. Ahora soy otra

    persona, no la Nilouar de antes. Puedo hacer de todo.

    Soy uerte.

    ortopdico del CICR. Sin los 3.000 aganis [60 dlares],

    mis hijos no podran ir a la escuela, no tendramos para

    comer ni vestirnos.

    Para las mujeres jvenes y las nias, una herida

    de guerra puede repercutir en todo: la educacin, las

    perspectivas de matrimonio, la capacidad para traba-

    jar o p ara contr ibuir a sus hogar es. Yo tena 17 aos y

    me senta deprimida, cuenta Farzana, que perdi unapierna cuando tena 3 aos. Me quedaba en casa.

    Cuando se enter de la ormacin que daba el CICR en

    corte y coneccin, se inscribi y el CICR le otorg un mi-

    croprstamo, por valor de 15.000 aganis (300 dlares).

    Compr una mquina de coser por 10.000 aganis, una

    mesa y tela. Reembols el prstamo en 18 meses y soli-

    cit luego un segundo prstam o. Hoy, Farzana capacita

    a otras mujeres que se inician en el ofcio de costureras y

    es duea de la tienda donde trabaja. No pago alquiler y

    mantengo a toda mi amilia.

    El camino de la recuperacin suele ser largo, dolo-

    roso y dicil. Los gestos suaves pero seguros de Karima

    y Rahima, isioterapeutas en la unidad de mujeres del

    centro ortopdico del CICR, ayudan a muchas pacien-

    tes a dar pasos importantes hacia la normalidad. Karima

    tiene una razn especial para comprender a las dems.

    Tena 12 aos cuando cuatro balas le per oraron la ro-

    dilla, lo que requiri la amputacin inmediata y una

    prtesis.

    La pirmide de la saludEn 1979, en la rontera entre Tailandia y Camboya, ms de 1 milln de

    reugiados se instalaron en los campamentos, y ue entonces cuando el

    mdico Pierre Perri