Objetivo Natural Oct 2013

164
 www.objetivona tural.com N5 Gratuita

description

Ciencia, fotografía, medio ambiente

Transcript of Objetivo Natural Oct 2013

 
Hola Amigos.
Después de mucho trabajo presentamos el numero 5 de nuestra revista digital. Este numero es el ulmo numero de la temporada 2012/2013 de fotograa de naturaleza y por eso viene cargada de varios repor- tajes interesantes para el fotógrafos. Como todos sabemos estos meses de calor son meses malos para hacer fotograa tanto de fauna como paisajes en nuestro país , debido a las elevadas temperaturas, por eso es el momento de formarse a través de revista y reportajes para que así empec-
emos la nueva temporada con varias ideas para fotograar y organizar un poco el año fotográco. Este numero nos invita a visitar uno de los desiertos mas conocido del mundo como es Atacama, conoceremos diferentes pos de orquídeas, aves y fauna.  Presentamos la Asociación Gaditana de Fotógrafos de Naturaleza ( AGAFONA), también conoceremos una de las mayores empre -
sas para fotograar fauna de una manera fácil y por ulmo desde objevonatural.com seguimos apoyando los pintores naturalista de nuestro país ,este numero presentamos uno de los mejores dibujante de naturaleza “Antonio Ojea”.
Seguimos trabajando para ofreceros cada vez mas calidad de una manera gratuita.
Un saludo y Feliz Verano a todos . Foto Portada: Antonio Atienza
Director: Reklu Fenández
  - Tomás Cerón   Corresponsales:   - Argentina: Belen Etchegaray   - Florida: Juan C Aguero   - Colombia: Andres Salgado
Colaboradores en On 5   - Andrés M. Domínguez   - Francisco Martínez - José luis Ojeda
  - Antonio Ojea   - Jorge Miró - Rosa Isabel Vázquez - Participantes del concurso
  - Martin-iglesias   - Foto a foto fotoruta   - Revista macro magazine   Maquetación: y diseño web   - Enfoqueactivo.com
Redacción - Cris luque
Sumario www.objetivonatural.com Año2 Número 5
Queda prohibida la reproducción total o par- cial de esta publicación,las fotograas son propiedad de sus Autores.Está totalmente prohibido ulizar estos trabajos sin el consen-
miento de sus Autores. Objevonatural.com
1- Desierto de Atacama p 6
2- Orquideas Silvestre p 18
3- La Espátula p 30
4- Cabra Montesa p 44 
5- Retales de Mar P 60
6- Andrés M. Domíguez P 74
7-  Águila Culebrera P 88
8- Sierra de Cazorla P 96
9- Iberian Lynx Land P 108
10- Premio N. Paisaje P 122
11- AGAFONA P 128
12- Pintor de Naturaleza P 140 13- Resultado Concurso P 158
  4
ama
En esta ocasión, documentaré un lugar que bien puede ser un escenario de otro planeta. Lo dividiré en seis partes debido a su diver- sidad paisajística y fotográfica, compuesta por valles similares a los paisajes del satélite lunar, desiertos de sal y tierras humeantes. El lugar en cuestión, es el desierto de Atacama, en Chile. En esta primera parte, me centraré en el valle de los GÉISERES DEL TATIO (el valle del “abuelo que llora”) donde, a más de 4.200 msnm, unas 80 fumarolas de agua en ebul- lición de unos 80 ºC de temperatura, crean erupciones de baja altura, formando el campo geotérmico más grande del hemisferio sur y el tercero más grande de la Tierra. Al amanecer, y tras un duro camino a través de paisajes de- sérticos, hábitat de animales como la vicuña (Vicugna vicugna) y la vizcacha (Lagidium vis- cacia), es el mejor momento para contemplar todo su esplendor, y ser testigo de uno de los espectáculos naturales más sobrecogedores..
 7
 
 
 
En las proximidades de San Pedro de Atacama se en- cuentra el lugar donde el Desierto de Atacama adqui- ere su máximo significado, el VALLE DE LA MUERTE, denominado así por la prácticamente inexistencia de vida, tanto animal como vegetal. Este árido paisaje, formado por conglomerados de arena rojiza y ro- cas, esculpidos por el efecto erosivo del viento y de las escasas lluvias, crea una de las esculturas natu- rales más sobrecogedoras que parecen representar los esqueletos de animales que, en alguna época pasada, osaron adentrarse en este valle creyendo ser
 
15
No hay lugar en la Tierra que se acerque más al satélite lunar que el VALLE DE LA LUNA, en el desierto de Atacama chileno. No hace falta recorrer miles y miles de kilómetros a través del espacio, para encontrar uno de los paisajes más extraterrestres. Es como si un trozo del satélite se hubiese desprendido y hubiese aterrizado en esta remota zona. Caminar a través de su fina arena, entre es- culturas rocosas moldeadas por el paso del tiempo y sus condiciones extremas que pro- mueven la escasez de signos de vida, hacen que con el pensamiento, parezcas levitar a cada paso y que al alzar la vista al cielo, creas observar un planeta azul. Cuanto más cami- nas, más vas descubriendo este lunático en- torno, adentrándote en estrechas galerías y pequeñas cavernas, salpicadas por frág- iles y punzantes formaciones rocosas, cre- ando un diminuto mundo y escenarios que harían las delicias de los mayores direc- tores cinematográficos de ciencia ficción.
 
 
tres han desatado un enorme interés den-
tro del colecvo de fotógrafos de natura-
leza. Estas pequeñas plantas de tamaño tan insignicante, enen por contra, una belleza deslumbrante que nada ene que envidiar a las del trópico.
En España hay según diversas fuentes, más de 110 especies, y 25 géneros, a los que hay que añadir las hibridaciones en -
tre especies.
Las orquídeas europeas, a diferencia de las especies tropicales y subtropicales, son terrestres, y de menor tamaño, y no necesariamente buscan bosques húm-
 
 21
La oración de estas plantas varía muchísimo de unas zonas a otras, por lo que una buena guía sobre las orquídeas de la zona, que nos oriente sobre las épocas de oración de cada especie nos será de gran ulidad. No ob-
stante, dependerá mucho de la climatología, pues de una primavera húmeda y de tem-
peraturas suaves, a una primavera seca, fría, con heladas tardías etc. los ciclos naturales de estas plantas varían como es lógico. Inclu -
so en zonas muy próximas entre si podemos encontrar prados enteros de orquídeas en perfecto estado o orquídeas secas, heladas o rotas por una tormenta de granizo. Los amantes de las orquídeas sabemos que práccamente durante todo el año se en-
cuentran especies en oración en nuestro país, eso si, en algunos casos ese periodo de oración es relavamente corto, por lo que en función de la especie que queramos foto-
graar, hay que saber las zonas y las épocas, y estar atento. Dos semanas a veces son un margen demasiado amplio y habrá que espe -
rar al año siguiente.
Una vez que estamos enganchados a estas bellas plantas, sorprende la facilidad para localizarlas, así como la variedad de espe -
cies, que antes pasaban completamente des-
apercibidas. No obstante hay lugares que son verdaderos santuarios, y en las que pueden observarse una variedad increíble de estas pequeñas joyas botánicas.
Al amante de las orquídeas no le puedo dejar de recomendar el asisr al encuentro anual organizado en Biéscas (Huesca) por Manuel Lorenzo, un verdadero experto, que ha in-
 
EQUIPO NECESARIO
El equipo necesario para fotograar estas plantas va desde un objevo especíca-
mente macro para primeros planos de las ores, hasta un angular para sacar la planta en su entorno o grupos de plantas, o un tele corto para buscar desenfoques. Úlmamente ulizo el 300 mm f:2,8 con resultados espectaculares, a máxima ap -
ertura, para conseguir efectos creavos, o incluso el 50 mm f:1,4.
Otros accesorios fundamentales son el trípode, el ash, o un buen reector. Manolo Lorenzo me enseño otro ac-
cesorio fundamental para fotograar orquídeas, que es la mochila, ulizada a modo de trípode. A veces permite re-
alizar fotograas de forma rápida y evita el engorro de cargar con un trípode du -
rante largas sesiones. Respecto del ash, personalmente preero un ash normal, situado fuera del cuerpo de la cámara a través del correspondiente cable sin-
cro, o mediante un disparador remoto, a los ashes anulares, que para mi gusto aplanan demasiado la imagen.
 
MANOS A LA OBRA
Una vez en el campo, si es posible conviene usar la técnica del cuerpo a erra. Para ello es úl una esterilla po camping. Digo si es posible, porque hay situaciones que es tal la densidad de orquídeas que es imposible tumbarse porque se destruirían plantas al hacerlo. Las tomas a ras de suelo son las más efecvas, buscando siempre fondos homo-
géneos, para intentar aislar a la planta y que no distraiga en exceso la atención, si lo que buscamos son primeros planos o detalles de las ores.
Un truco infalible para desenfocar los fondos es que la distancia al sujeto fotograado sea inferior a la distancia entre este y el fondo. Lógicamente esto depende de la distancia fo -
cal usada y de la apertura que ulicemos.
Respecto de la luz, desde luego las primeras y la úlmas horas del día, y los días nubla -
dos sin viento. Los días nublados permiten sacar los colores naturales de las orquídeas, así como evitar las molestas sombras, in-
evitables con sol, sobre todo a determinadas horas del dia. Otra opción es llevar un para -
guas o un gran reector y dar sombra con el a la planta, pero ello obliga a llevar una persona que nos ayude, o alternarse en la posición de fotógrafo y ayudante.
No es recomendable arrancar hierba o limpi - ar alrededor de la planta para quitar todo lo que nos moleste, pues dejariamos a la planta desprotegida. Es mejor buscar otro espéci- men más aislado. Rerar un poco la hojar- asca seca o alguna paja que saldría quemada dentro del encuadre es una cosa, pero po -
dar toda la hierba que nace alredor es otra muy diferente. En alguna de las zonas donde fotograo orquídeas en los alrededores de mi ciudad, es posible saber que ejemplar ha sido fotograado por encontrarse completa-
mente segada la hierba alrededor.
26
 
Una técnica usada cada vez más es la de llevar un fondo artificial tipo cartulina o aglomerado fino, con lo cual evitaríamos alterar el entorno inmediato de la planta.
En cuanto al problema del viento, aunque hay algún truco o artilugio, yo personalmente prefiero elegir días sin viento y así eliminar el problema de raíz. Esta tem- porada esta siendo especialmente ventosa, con lo que encontrar un día óptimo no está siendo fácil.
27
IDENTIFICACION
Las flores de las orquídeas son lo más llamativo de esta familia, y a pesar de su enorme diversi- dad son fácilmente reconocibles o identificables, pero para ello hay que tener unas nociones bási- cas sobre las diferentes partes de la planta, y más específicamente de las flores. Así, términos como sépalo, pétalo, espéculo, labelo etc, son básicos para la identificación de algunas especies.
Con una buena guía y esos mínimos conocimien- tos, es posible la identificación de la mayor parte de orquídeas, mención aparte el mundo de los híbridos, ya que la hibridación es un fenómeno muy común entre las orquídeas, y un hibrido al tener características de dos especies diferentes, pueden inducir a error o a despiste.
Por último he de mencionar el curioso fenómeno de la resupinación, que me mostró por primera vez y me explico, como no, Manuel Lorenzo. Con- siste en un giro de 180º del ovario, de tal forma que el labelo se va girando a medida que la flor se va desarrollando.
BIBLIOGRAFIA
Yo me considero de la vieja escuela, y prefiero los libros para la identificación, a las identificaciones online.
Para mí personalmente los libros básicos de cam- po son los siguientes:
1. Guía de las orquídeas de España y Europa.- Pierre Delforgue.- Lynx Ediciones 2. Guía de las orquídeas de Europa.- Bauman y otros.- Ediciones Omega 3. Guía de las orquídeas silvestres de la montaña oriental Leonesa.- José Manuel Diez Santos.- Ed- itado por el Grupo de Acción Local Montaña de Riaño
Este último para mí ha sido toda una revelación. Lo primero, por centrarse en mi zona, donde yo viví durante más de 20 años; lo segundo por lo- calizar en unos mapas genéricos, las diferentes especies; y lo tercero, por descubrirme especies que desconocía que existieran en esa zona, des- plazándome a otras provincias e incluso comuni- dades para fotografiarlas. Mi enhorabuena a José Manuel Diez Santos, por esa tarea de años, que ha culminado con este fantástico libro, y que he usado para documentarme para este artículo.
 28
 
Huelva, Doñana y Cádiz son los grandes santuarios en España para la Espátula Común (Platalea leucoro- dia), catalogada cómo vulnerable a la extinción por la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza (UICN). Me voy a centrar particularmente en la colonia de cría en Marismas del Odiel.
 
 
Cada año en época de cría se entra en las colo -
nias para hacer el seguimiento de la colonia de cría que consisten en contar los nidos, esmar el número de poyos que puedan salir adelante, idencar a la pareja reproductora gracias a sus anillas y anillar a los pollo si es posible.
La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Anda-
lucía lleva años intentado hacer trabajos de conservación en las disnta colonias de cría de Espátulas de Marismas del Odiel, cómo la elevación de los nidos gracias a una estructura metálica o plataformas otantes para cuando haya un porcentaje alto de mareas suba y baje el nido si causar daño a la nidada.
 32
 
La Espátula se trata de un ave grande, blanca con as -
 
 
Las podemos ver en aguas poco profundas, tranquilas y fangosas, con poca vegetación. Los poyos abandonan el nido aproximadamente al mes de nacer y formando guarderías de pollos y tres o cuatro adultos los cuales se van turnando para poder ir cebando a sus pollos.
 36
 
Su manera de alimentarse es introduciendo el pico en el agua poco profunda y fangosa y con un vaivén constante de derecha a izquierda localiza a sus presas lanzándola al aire y tragándoselas. Su dieta consta de plantas acuáticas, larvas de insectos, pececillos, renacuajos, huevos de ranas, lombrices, cangrejos, caracoles de agua…
Tiene una amplia distribución, desde España hasta Japón, pasando por África. Es un ave mi- gradora siendo más escasa en invierno pero la tenemos presente durante todo el año. En Eu- ropa se encuentra sobre todo en los Balcanes e Italia y en el sur de España en Huelva y Cádiz.
Fotográficamente hablando son aves muy lla- mativas y vistosas, tremendamente activas pues siempre están alimentándose. Mi trato con ellas me hacen saber que son fieles a una zona para su alimentación al igual que a su aseo diario lle- gando a tener a un mismo individuo durante más de tres meses a diario en una misma zona la cual hace confiarse al fotógrafo y experimentar imá- genes distintas.
Tremendamente confiadas, la gran mayoría de la veces también las podemos encontrar con un gran número de otras especies conviviendo adultos y jóvenes en to- tal armonía.
Todas las imágenes han sido tomada con los permisos correspondientes.
 40
Por Tomás Cerón
 
Buenas amigos, hoy os voy a hablar de la fotograa de la cabra montesa en un lugar muy peculiar, cerro gordo. Y digo peculiar porque en pocos sios podemos encontrar la posibilidad de fotograar cabras monte -
sas en estado salvaje a nivel del mar, cosa que no es fácil de ver, junto con la relava facilidad de verlas y/o fotograarlas. Pero antes de nada conozcamos un poco sobre este emplazamiento.
Cerro gordo es un imponente monte que se encuentra en la bahía de la herradura (Granada). La Herradura es el único pueblo costero granadino que manene una pequeña zona de vegetación y fauna virgen compren -
dida entre Cerro Gordo y Maro. La zona fue declarada Paraje Natural en los 80 por el gobierno autonómico, tanto la supercie como el fondo marino, el cual conserva corales y especies en peligro de exnción.
Monte gordo o Cerro gordo visto desde la playa de la herradura, en la imagen se puede Observar la torre vigía desde la que se divisa gran parte de la costa.
 47
 
Es curioso ver como una zona tan picamente turísca como la costa de la herradura posee una po -
blación tan interesante de cabra montesa así como la supercie tan reducida, relavamente, en la que podremos observar el pico comportamiento de estos ungulados. Huelga decir que esto no fue siempre así, puesto que las montesas llegaron a esta zona huyendo de un incendio acaecido hará unos veinte años, una vez llegaron prosperaron sin ningún problema.
Para llegar hasta este lugar deberemos de hacerlo desde la herradura, mediante la A-7 entre Málaga y Motril o a través de la N-340, una vez en la herradura deberemos coger la carretera que lleva exclusi -
vamente a monte-gordo (o cerro gordo indisntamente), Andando se encuentra del pueblo a unos 4-5 kilómetros. Una vez llegados habrá que ponerse manos a la obra y puesto que se trata de rececho fotográco lo más recomendable es ir con el menor peso posible, puesto que en algunas ocasiones el terreno se puede mostrar algo escarpado y agreste, aunque no es nada que pueda suponer un impedimento a la hora de recechar la mayoría de las veces. Nada más llegar se dejará el coche en la misma puerta del bar que hay a los pies de monte gordo. Si lo hacemos a primera hora de la mañana es más que probable que nos encontremos con alguna sorpresa, bien sea alguna hembra o algún pequeñín de 1-2 años.
 50
 
Pues bien, tras estos primeros avistamientos por lo general lo mejor es dirigirse en dirección a la angua torre vigía, desde allí podremos ver tanto a un lado como a otro gran parte del monte, prestando gran atención a las zona de matorral y de hierba baja, debido a que muchas veces los harenes suelen estar agazapados y no serán fácil de ver, decir que habrá que bajar por la ladera con cuidado debido a que es muy escarpada. Lo primero que nos puede llamar la atención de estas cabras montesas a diferencia de los machos que podamos encontrar en Gredos o el torcaz de Antequera es su po de cornamenta, que al igual que todos los machos de la sierra de Tejeda-Almihara se caracterizan por tener una cornamenta de po acarnerado, en donde se podrán observar en los ejemplares más adultos como se cierra la cornamenta hasta casi tocarse las puntas en algunos casos.
Lo bueno de esta zona, es que si bien no vemos nada, caminando por la cresta del monte podemos avanzar, e ir observando cualquier po de acvidad y debido a su relavo pequeño tamaño lo más normal es que tarde o temprano nos topemos con algo. También es importante aprovechar las estampas que nos brindará el paisaje pues no es fácil poder fotograar estampas de cabras montesas con el mar de fondo. Para ello habremos de acercarnos a las cabras con mucho cuidado, para no levantarles sospechas, Puede ser algo duro por algunas zonas, pero es algo que posteriormente ene su recompensa una vez que tengamos esas maravillosas imágenes que nos brinda este lugar. Os pongo algunos ejemplos:
En zonas de matorral como esta podremos encontrar pequeños arenes agazapados, para los que habrá que andar con tiento para poder avistar sin que se asusten.
 52
 
Pues bien, visto esto, también hay que hablar del celo de las cabras. Estas nos brindarán grandes imágenes y momentos llenos de energía y dureza, como cabría esperar de cualquier celo de ungulado. Es un espectáculo increíble poder observar como dos machos se disputan tan ferozmente el favor de las hembras, si bien es ver -
dad que los machos que por estas zonas habitan no poseen una cornamenta especialmente grande (debido a que son jóvenes y a que los machos mas grandes han sido cazados de forma furva), esto no desmerecerá este espectáculo.
En el caso de las fotograas que a connuación os mostraré fueron tomadas un par de kilómetros carretera abajo de monte-gordo, una vez escuché las cornadas seguí carretera abajo hasta que pude localizarlas a un lado de la carretera en una zona bastante escarpada. Para la fotograa de una disputa entre machos hay que ser bastante rápido a la hora de poder fotograar la acvidad, a ser posible y muy recomendable ulizar velocidades de obturación altas y disparo en ráfaga, puesto que la acción se desarrolla muy rápidamente al principio cuesta trabajo marcar las distancias si se uliza una lente ja, puesto que veremos que con demasiada frecuencia se nos saldrá fuera del encuadre la imagen que queremos tomar, debido a movimientos inesperados, por lo que se hace casi imprescindible dejar algo de aire en las imágenes. Debido a que en celo los machos dejan que te muevas con más o menos libertad sin recelar demasiado, será posible el poder moverse para buscar un encuadre adecuado.
Aquí podemos observar la típica forma de la cornamenta de estos machos monteses en este macho mientras olisquea a una hembra receptiva en celo.
 53
 
Así pues, se puede concluir que monte gordo es un enclave privilegiado que cualquier amante de la fotograa de fauna y de naturaleza no debe de dejar de visitar, puesto que a nadie dejara indiferente.
 58
ral en nuestras primeras inmersiones por que-
rer plasmar en una única imagen la inmensidad que nos rodea, empezó a interesarme el detalle, pequeños peces, crustáceos, anémonas, corales y otros organismos que tapizan el azul de este mundo líquido.
 61
 
A menudo lo que ha llamado mi atención ha sido el ojo de un pez dormido o la boca de una anémona, en ocasiones el diseño caprichoso de las escamas de este mismo pez o los tentáculos ondeantes de la misma ané- mona son los que me han fascinado.
Estos brillantes fragmentos de vida, patrones de una belleza únicamente igualada por nuestros mejores artis- tas, nos cuentan historias de orden y caos, de mutaciones repentinas y tortuosas, al tiempo que sus cuerpos y estructuras son tallados, modelados y adaptados a las leyes biológicas y necesidades concretas de la vida marina.
 65
 68
 
 
Sus mayores conocimientos en Botánica los adquirió realizando Ingeniería Técnica Forestal, completando esos conocimientos una nalizado sus estudios. Des- de hace casi 20 años se dedica a la fotograa de la naturaleza en todos sus aspectos de forma autodi- dacta. Ha obtenido diversos premios entre los que destacan: Highly commended en la categoría Botanic realms en 2012 y nalista con dos imágenes en 2011 en las categorías aves y retrato animal en el VEOLIA inglés (Wildlife Photographer Of The Year) patroci- nado por el Museo de Historia Natural de Londres y la BBC Worldwide, Highly Commended (mención honoríca) en la categoría de plantas y hongos en el concurso germano European Wildlife Photographer of the Year 2009 de la GDT (Gesellscha Deutscher Tierfotografen) y Highly commended en 2012 en la categoría aves. Highly commended en la categoría de plantas y hongos en el ASFERICO italiano. Dos segundos premios en FOTOCAM 2010 y 2012 en la categoría de fauna y AEFONA respecvamente y var- ias mencines honorícas en 2009, 2010 y 2012 en las categorías de paisajes, plantas y hongos y AEFONA. Primer premio Montphoto 2009 categoría aves. Primer premio del año 2005 y 2010, Premio temá- co FAUNA en 2006 y PAISAJES en 2008 y nalista en 1999, 2001, 2002, 2004, 2005, 2006, 2008 y 2009 en el Concurso de la Consejería de Medio Ambiente de Andalucía Día Mundial del Medio Ambiente. 3er pre-
mio en el Concurso Fotográco “Cádiz a la Vista” para promocionar nacional e internacionalmente esta pro-
vincia, publicaciones en varios periódicos nacionales y provinciales. En cuanto a revistas: BIRDING MAGA-
ZINE revista especializada en aves (Estados Unidos), revista NATURA, Superfoto, NATURALEZA SALVAJE, IRIS, VISION SALVAJE, LA GARCILLA, TERRE SAUVAGE (Francia), Vögel (Alemania). Ha parcipado con sus imágenes en una decena de libros de fotograa, la mayoría de naturaleza: Las Aves de España de la edi- torial Lynx edicions, El corzo en Andalucía, Fotógra-
fos 2007 Visión Salvaje, Nómadas del Estrecho, Uñas de Cristal, Orquídeas del parque natural “Sierra de Grzalema, Guía de especies amenazadas (Grecia), en-
tre otros. Es socio de la Asociación de Fotógrafos de
Naturaleza en España (AEFONA) y de SEO/Birdlife.
75
 
 
 
 Actualmente combina su profesión como Profesor de Enseñanza Secundaria con la fotografía. Cuenta con un amplio archivo de especies salvajes fotogra- adas en libertad, unas doscientas especies de aves, además de ora, hongos, reptiles y anbios, inver - tebrados, mamíferos, paisajes, en conjunto más de 35.000 diapositivas y 120.000 raw digitales de las cuales la mayoría corresponden al Parque Natural
Sierra de Grazalema y al Parque Natural Los Alcor - nocales, aunque también de Los Pirineos, Cantabria,  Asturias, Navacerrada, Sierra Nevada, Sierra de Ca - zorla Segura y Las Villas, Sierra de Andújar, Torcal de Antequera, Fuentedepiedra, en España y Polonia, Francia, Italia, Croacia, Grecia, Finlandia , Noruega, Escocia, Inglaterra y Rusia en el extranjero.
 76
  Andrés M.  Domínguez
P: Hola Andrés. Como vemos en tu biograa la fotograa ha formado parte de tu vida desde Joven, ¿como comenzaste en este mundo de la fotograa de naturaleza?
R: Desde pequeño me ha atraído la vida animal y más tarde la botánica. En el campo con mi padre aprendía el nombre y los sonidos de los animales en general y de las aves en parcular, más tarde con los documen -
tales y fascículos de Félix Rodríguez de la Fuente y por úlmo con la lectura y anotaciones que tomaba desde los nueve años aproximadamente en la Biblioteca del Colegio y los libros que me regalaban. Pero hasta que no comencé a trabajar hace unos 20 años no tuve la oportunidad de adquirir mi primer equipo fotográco. Ya desde hace unos 10 años me lo tomo más en se -
rio, dedicándole bastante empo. Lo hago como ocio, aunque es verdad que al vivir en un lugar privilegiado entre el parque natural Sierra de Grazalema y Los Al - cornocales le dedico como antes cité mucho empo, desarrollando este trabajo una media de cuatro o cin -
co días a la semana. El 99% de mi trabajo lo hago de forma autónoma, sin ayuda, ya que me gusta todo el proceso desde el inicio del proyecto de la especie que pretendo trabajar hasta que consigo resultados con los que me doy por sasfecho, aunque siempre pen -
sando en como mejorar la próxima vez.
P: Son muchas las salidas al campo y diferentes espe -
cialidades dentro de la fotograa de naturaleza ¿ que es lo que mas te gusta fotograar ?
R: Las aves es lo que más me atrae, dedicándole el 80 % de las jornadas de trabajo. Sin embargo cuando he iniciado un proyecto con mamíferos hasta que no he conseguido resultados ópmos no he dejado de inten -
tarlo. Paisajes y ora y macro en general lo hago en momentos puntuales en los que la ocasión lo merece.
P: El equipo es parte del trabajo fotográco de un fotógrafo. ¿que equipo sueles usar para hacer las foto -
graas impresionante que nos muestras?
 77
R: Dependiendo del motivo, el equipo normal que
suelo utilizar de forma general, un 500 jo f/4 y un
100-400 para fauna, un angular 17-40 para paisajes
y un macro 100 2.8 para ora y macro. Luego los
demás accesorios que se necesitan como trípodes,
hide, ashes, tubos de extensión, multiplicadores, etc
P: Ya sabemos que eres un fotógrafo que has pro-
bado la fotografía analógica y digital. ¿ como te fue
el cambio?
R: La verdad es que al principio tenía un poco de
“respeto” pero no por el tema informático que más o
menos dominaba sino por el cambio tan grande que
conllevaba a rasgos generales. En poco tiempo ya
sabemos todos las ventajas de todo tipo que tenemos
como las económicas, control de la imagen, ahorro
de tiempo, calidad actual, etc...
P: ¿como ves el nivel de fotografía actualmente en
España?
El nivel es grandísimo, sólo hay que ver los nom-
bres de fotógrafos nacionales que aparecen en los
certámenes internacionales más prestigiosos. Eso
no quiere decir que los que no aparecen no tengan
calidad suciente, porque ya vemos en las galerías
virtuales las grandes imágenes que realizan. La moti-
vación es tal que la capacidad de trabajo y sufrimiento
de nuestros compañeros es grandísima. Además se
valora mucho el esfuerzo personal y todos sabemos
que quien se lo trabaja tiene un plus muy importante
en el reconocimiento a la hora de valorar una imagen.
P: En tu curriculum fotográco sabemos que has ga-
nado muchos premios internacionales. ¿ Cual es el
que mas ilusión te ha hecho?
Posiblemente el Highly commended de la BBC 2012
Veolia Environnement Wildlife Photographer of the
Year Competition en la categoría de reinos botánicos.
 80
 
P: La conservación de la naturaleza dentro del fotógrafo es muy importante, ya que hay que de -
 jar el mundo en mejores condiciones en que nos la encontramos. ¿ Que aconsejarías a nuestros lectores que hay que hacer antes de hacer fotos y tener en cuenta en la naturaleza?
R: Hay que reconocer que siempre que hacemos nuestro trabajo hay molesas por mínimas que sean a las especies a las cuales nos acercamos. La cuesón es minimizarlas al máximo y no anteponer el trabajo fotográco a una situ -
ación de estrés al ave más de lo que lo haría el paso de predador cercano durante un corto período de empo. Si se hace un trabajo adecuado en la mayoría de las ocasio -
nes la perturbación es mínima.
 84
 
P: Son muchas las fotograas que enes en tu discos duros, pero seguro tendrás alguna muy especiales ¿Cuál es la fotograa que mas te gusta de vuestro ar -
chivo?
R: La verdad es que me es dicil de decidir pero quizás algunas de aves en arbustos congelados, abubilla con lagarja y elanio.
P: Bueno, pues para despedirnos, queremos darte las gracias por esta entrevista y hacerte una ulma pre-
gunta ¿ que le recomendarías a los usuarios de nuestra revista que se inician en la fotograa de naturaleza?
Gracias por la invitación y en cuanto a la segunda cuesón disfrutar de cada día en la naturaleza, pacien -
cia, trabajo y modesa.
  www.dendrocopos.com 
 
No me voy a extender mucho describiendo a esta gran rapaz planeadora, para eso están la innidad de guías que hay en el mercado, tan solo puntualizar que al ser un ave migradora transahariana , solo podremos disfrutar y trabajar con ella en la época de primavera, cuando ya hayan ocupado su territorio de repro -
ducción, en algún bosque o dehesa Española, aunque es cierto que con el cam -
bio climáco, algunos ejemplares aislados, deciden quedarse a pasar el invierno, pero sin territorio concreto establecido , lo que complica sus localizaciones y querencias para la observación y fotograa.
 90
 
Los que me conocéis, sabéis que antes de empezar a montar hide y hacer fotos , dedico mucho empo a observar y analizar posaderos, luces, horarios, etc , Con ello consigo varios objevos : pasármelo bien, disfrutar y aprender del animal y sobre todo no perder el empo y pasar calamidades , montando arlugios inadecuadamente para no conseguir mas que molesas e irritaciones en vez de resultados.
 92
 
He trabajado bastante con culebreras , tanto salvajes como cauvas, su mirada y sus ojos de color azufre , sus táccas de caza y cernidos , atrapan y cauvan al mas experto de los naturalistas , nunca te cansas de verlas. Como toda la fauna y sobre todo la alar , sus querencias y posaderos suelen ser muy ulizados y son mas o menos jos, es cuesón de paciencia y tranquilidad, y si desde el principio hemos hecho todo correcto y con mucho tacto, solo hay que dejar que lleguen al sio para poder meter el dedo en el disparador y obtener resultados. Un saludo
www.antonioatienzafuerte.com
 95
 
  El crujido que producen mis pisadas al caminar sobre la extensa costra de nieve que cubre el ter- reno -al resguardo aún de los rayos del sol en esta fría madrugada- es el único sonido que se perc -
ibe en la zona de la Sierra de Cazorla por la que me desplazo con mi pesado equipo en busca de un movo interesante con el que comenzar la toma de imágenes.
  Aunque la primavera puede considerarse ya próxima, la cruda presencia del invierno la experi - mento en toda su plenitud al senr cómo sus aladas garras hieren mi piel allá donde no ha quedado convenientemente cubierta.
Sierra Por la  
 
e Cazorla    La pista forestal por la que he accedido -dejando atrás Vadillo Castril para llegar hasta el Puente de la Herrería- comenzó a mostrarse intransitable por la nieve acumulada a parr de la casa forestal de la Cañada de las Fuentes, donde creí prudente abandonar la comodidad del automóvil y connuar camino a pie.  
En estos parajes me sorprenden las primeras luces del alba, que ya se asban sobre la crestería de la Cuerda de los Agrios, frente a los Poyos de la Mesa: unos impresionantes cortados (poyos) donde es frecuente la visión de aves de presa y carroñeras planeando en torno a estas elevadas paredes rocosas en busca del ineludible sustento.
 97
 
  Mi intención es llegar, en un primer momento, hasta el lugar en el que se alzan con esbeltez unos tejos (árboles coníferos de la familia Taxaceae) que por su extraordinaria longevidad denominan milenarios, los cuales -es de supon -
er- ya anclaban sus raíces en estas altas erras hace muchos siglos. Por el camino hallo pisadas en la nieve que delatan la pres-
encia de cérvidos, muy habituales por esta zona pero dicil de sorprender en época invernal ya que se desplazan
connuamente en busca de prados donde poder pa -
star y su anado insnto de conservación les hace muy suscepbles a cualquier ruido extraño por leve que éste sea. La fotograa de fauna al rececho en es -
pacios abiertos tan amplios como la Sierra de Cazorla es preferible dejarla para mejor ocasión -primavera u otoño- cuando el clima es más propicio y resulta más fácil aproximarse a la pieza -en el lance nal- an-
tes de iniciar la ráfaga de disparos con la cámara.
98
 
  El sol comienza a abrirse paso entre las sombras del bosque y su luz revela un paisaje soberbio y arrebatador; momento en que urge plantar el trípode para dispon -
erse a captar el instante: la claridad del día venciendo a la obscuridad de la noche… Después, cierro los ojos y acumulo las sensaciones que perciben mis sendos: en mi mente connúa impreso el paisaje que tengo ante mí, pero al mismo empo capto el silencio que reina en el lugar, la fragancia del ambiente… respiro profun -
damente y disfruto a pleno pulmón de la Naturaleza.
Son instantes de auténca sasfacción… el plac -
er del fotógrafo naturalista que ejerce y disfruta al mismo empo de su mayor ación: contemplar y retratar; senr y deleitarse espontáneamente del hábitat natural que ene por fortuna pisar. Naturale -
za y arte, senmiento y gozo, todo ello en empo real.   Pero suele ocurrir con frecuencia que el paisaje llega a acaparar tanto nuestra atención que eclipsa los pequeños detalles que salpican el entorno y que,
 99
 
discretamente, reclaman nuestra atención. Apercibi- do de este fenómeno, me dedico a buscar la belleza en aquellos elementos que normalmente pasan inadver- dos y que encierran en sí un gran valor fotográco.
Elevo mi vista y descubro las ramas de un alvo y vig -
oroso pino salgareño (Pinus nigra) intentando alcanzar el cielo con sus hercúleos brazos, en un claro desao ciclópeo hacia la naturaleza que lo creó. Esta especie conífera, también llamada pino “laricio”, debe su orgullo a ser el rey indiscuble de cuantos bosques pueblan es-
tas latudes. Su gran corpulencia le lleva a alcanzar al - turas de hasta 40 metros y su longevidad entra en disputa con la lograda por los tejos, ya que existen ejemplares que podrían alcanzar más de 1.200 años de existencia.
Y me atrevería a añadir que, además de seres vivos, po -
seen alma…
Y volviendo la vista al suelo encuentro, asomando en -
tre el denso manto de nieve, detalles menores que me hacen reexionar y buscarles la vuelta hasta encon-
trar el encuadre que considero mejor para conseguir la imagen que espero afortunada. Se trata en este caso de un simple trozo de rama seca desprendida de algún árbol y cuya sombra marca el camino que debo seguir hasta alcanzar mi próximo objevo: los tejos milenarios.
Cuando por n me hallo ante estos vetustos ejem -
plares -no obstante sanos y vigorosos y prueba evidente de la pujanza de la naturaleza- no puedo por menos que pararme a pensar en cómo serían estos parajes cuando antaño comenzaran a echar raíz. Porque según tengo entendido, uno de estos majestuosos árboles que ten -
go frente a mí podría llegar a alcanzar la friolera de dos mil años. O sea, la época -más o menos- en que Jesu-
cristo andaba por este mundo-. Casi nada… de ser cierto.
  Tomo unas instantáneas cuando el sol comienza a acariciar la copa de uno de estos hermosos y otrora míscos árboles y con todo respeto y mi mayor ad-
miración por la naturaleza me alejo del lugar para proseguir mi camino con la rme esperanza de que fu -
turas generaciones puedan seguir disfrutando de su presencia -aunque mucho cuidado con sus hojas y semi- llas porque, por otra parte, son altamente tóxicas-.
103
 
Con el paso de las horas, la temperatura ha ido eleván -
dose y -aunque no puede decirse que haga calor- se hace más llevadera al superar la línea del termómetro la barrera de los cero grados. Y este fenómeno se evi - dencia al comprobar cómo la nieve comienza a fundirse formando pequeños arroyos que irán creciendo y apor- tando vida a lo largo de todo su recorrido, montaña abajo, hasta alcanzar el valle, donde se remansarán en la presa del Tranco de Beas, pequeño mar interior de la Sierra de Segura.
  Son cientos de arroyos y saltos de agua los que irán modelando el paisaje y seduciendo al fotógrafo de na -
turaleza conforme los vaya descubriendo. Próximo al lugar donde ahora me encuentro se forma una cascada -que llaman de los Goterones- a la que me dirijo para tomar algunas imágenes. No es el momento mejor ya que en primavera, con el deshielo, el salto de agua es soberbio; pero ahora la vista queda compensada con la nieve del entorno, cuyo manto ejerce un especial atracvo que no podrá contemplarse más tarde con la llegada del calor.
Mi presencia en el lugar, frente al salto de agua, es lo único que altera la tranquilidad de este placentero rincón de la Sierra de Cazorla. El suave murmullo del agua al deslizarse por la roca es cuanto se escucha y mis pisadas en la nieve sólo vienen a perturbar el silen -
cio que reina a mi alrededor. El ambiente de quietud y la fragancia que se percibe en este santuario natural penetra hasta el fondo de los sendos y, de nuevo, me siento dichoso .
  Con el paso de las horas y conforme avanza el día la claridad de la atmósfera comienza a diluirse hasta converr el paisaje en una sinfonía de sules contras-
tes que aprovecho para captar con mi cámara. Son momentos majestuosos -desde el punto de vista de la fotograa- que no hay que desaprovechar.
El empo en la montaña -durante los meses de invier- no- acostumbra a ser cambiante, y aunque esto pueda suponer una contrariedad para el excursionista no lo es así para el fotógrafo de naturaleza, quien con toda seguridad sabrá sacar pardo de ello en cualquier mo -
mento. Aunque hay que tenerlo siempre muy presente para evitar posibles percances que nada tendrían que ver con la toma de imágenes.
  Vuelve a caer la temperatura y al nivel de altud en que me encuentro hace que el frío se muestre con cru-
eldad después de que el sol dejara de ser -en este caso- un aliado del fotógrafo. La lente se empaña y me veo obligado a pelear connuamente con este contraempo añadido cada vez que pretendo tomar una instantánea.  
El frío ha endurecido la nieve y se forman placas de hielo, por lo que esmo prudente descender de cota y tomar un sendero por el que moverme con mayor se -
guridad ya que el equipo limita bastante mis movimien -
tos. Y es que a mi edad creo rmemente que ninguna fotograa jusca el riesgo de un posible daño sico.
  Conforme desciendo encuentro mejor temperatura, pero la humedad forma espesas nieblas que impiden ver en la distancia. Otro fenómeno atmosférico que no qui - ero dejar escapar pero que me obliga a afanarme con el manejo de la lente y su constante enturbiamiento.
  Me considero muy afortunado por las oportunidades que hoy me ha brindado la naturaleza -de las que creo haber sacado todo el pardo a mi alcance- pero creo llegado el momento de regresar y experimentar las co-
modidades que brinda el automóvil… pero no sin antes visitar el nacimiento del río Guadalquivir.
Durante la temporada de eso, este arroyo suele ca -
recer de agua y únicamente es visible un pequeño char -
co, donde se supone que mana el río al que los árabes denominaron “río grande” (wadi al-Kabir) y que tras un largo recorrido acabará desembocando en la población gaditana de Sanlúcar de Barrameda.
Aprovecho la quietud y soledad del lugar para localizar -sin prisas y sin estorbo alguno- los mejores encuadres para mis fotograas y, de paso, gozar de su pintoresco y bucólico entorno.
El día invernal -corto en horas de sol- comienza a lan -
guidecer. Y llegados a este punto, no queda más reme -
dio que volver a desandar el camino de regreso antes de que se presente la noche y se adueñe de estos espacios.
Pero cuando ya estaba a punto de guardar deniva -
mente el equipo para acomodarlo en el automóvil apa -
reció en escena el amigo raposo en solicitud de alguna migaja que llevarse a la boca. El otrora taimado zorro se ha familiarizado tanto con los humanos -quienes le proveen graciosamente de alimentos- que ha termina-
do cambiando sus hábitos esenciales. 104
 
 
Evidentemente, no dejo escapar la ocasión y tomo las úlmas imágenes de esta jorna -
da que -hasta el nal- tantas oportunidades me ha brindado; pero al raposo le digo que si qui -
ere peces… Porque el fotógrafo de naturaleza nunca deberá tener comportamientos que al -
teren la relación de los seres vivos con el medio. Por el bien de todos y de la propia Naturaleza.
107
LYNX LAND  108
En estos empos, la fotograa de naturaleza se en -
cuentra en gran auge, sobre todo debido a la evolu -
ción de la fotograa digital y las inmensas posibili - dades que esta ofrece.
No todos enen los conocimientos ni posibilidades para poder inverr gran candad de empo para conseguir ese avistamiento o fotograa soñada. Asi - mismo, tampoco creemos que sea benecioso para el Medio Ambiente que se realicen trabajos de cam -
po por personas que no poseen los sucientes cono -
cimientos, tanto de las especies a fotograar, de sus problemácas de conservación, o posibles efectos negavos a corto o medio plazo.
En la Sierra de Andújar se ha incrementado el núme -
ro de visitantes con el objevo principal de avistar, o incluso poder llevarse la “foto del Lince”. Muchos de ellos no son conscientes de las molesas que sin querer pueden causar a tan emblemáco felino,  junto con innumerables viajes infructuosos a nuestra querida Sierra Morena, conllevando gastos económi - cos y de empo.
109
 
No podemos ser más claros, y la realidad es que la mayor y mejor población de lince ibérico, se encuen -
tra en Sierra Morena, y más concreto en la Sierra de Andújar. Es la zona donde se han conservado, mien -
tras en el resto de España iba desapareciendo de forma verginosa, incluyendo la población de Doña -
na, con graves problemas de consanguinidad y dis -
minución alarmante de la población. Tenemos por tanto la supercie donde el gran gato ha campeado y se ha conservado hasta la actualidad, incluso en los momentos más desfavorables.
Para el visitante, el principal problema de la Sierra de Andújar es que casi la totalidad es propiedad privada, y aunque es cierto que hay zonas de carácter públi - co, estas se limitan a las carreteras y caminos, con vallados cinegécos a ambos lados. Hay épocas del año, en las que se llegan a formar verdaderas aglom -
eraciones en puntos concretos donde hay alguna po -
sibilidad de poder observar al Lince Ibérico, aunque sea a distancias solamente aceptables para el uso de digiscoping o telescopios terrestres.
111
 
Iberian Lynx Land S.L., nace con la idea de canalizar esa auencia de turismo de natu-
raleza, ampliando las zonas de observación a zonas privadas, realizando convenios con las mejores ncas linceras, y así poder ofrec-
er a los fotógrafos y observadores de natu -
raleza la posibilidad de adentrarse en el ter- ritorio del Lince Ibérico. Se da por supuesto, que todo se hace de un modo controlado, con guías expertos que nos adentrarán en un mundo fascinante, los cuales son amplios conocedores de las mejores zonas en cada momento, de enseñarnos todo lo relacio-
nado con este felino, para que no sea una simple visita turísca, sino un verdadero acercamiento al lince ibérico. Su sionomía, costumbres, problemas de conservación, proyectos de recuperación, etc. Por supues- to, se intentarán los mejores avistamientos, en los que nuestros clientes pueden disfru-
tar de su belleza o inmortalizarla con su cá-
mara.
Desde Iberian Lynx Land, se pretende la ob-
servación y fotograa de fauna de forma respetuosa, siguiendo estrictas normas de metodología de las especies a tratar, pre -
vio estudio de cada una de ellas, colocando escondites (hides) para disntas especies, integrados en su medio, alejados de nidos, cubiles o puntos crícos, que permirán la fotograa de las mismas sin ocasionar mo -
lesas. El impacto es mínimo, ya que no se moles- tan a las especies. Se adecuan los escondites o puntos de observación al terreno para que se encuentren lo más integrados posible, se acompaña personalmente a los fotógrafos, y se les recoge al nal de la sesión. En el caso de las visitas guiadas, contamos con vehícu-
los 4x4 desde los que disfrutaremos de ex -
periencias inolvidables.
Queremos demostrar, que el Lince y la rique -
za faunísca de Sierra Morena, puede ser un gran aliado a la hora de obtener un ingreso extra a la actual mermada economía, que también afecta a la explotación cinegéca, y que es perfectamente compaginable con este po de turismo. De igual forma hacemos ver a nuestros clientes que gracias a las ncas privadas, la fauna en general puede subsisr sin ser molestada ni amenazada en zonas pro -
tegidas y vigiladas.
También tenemos como clientes a otras em-
presas, las cuales no enen acceso a ncas privadas, pudiendo canalizar las visitas bajo nuestros conocimientos y supervisión.
Además, todo se hace con los pernentes permisos de Medio Ambiente, para cumplir estrictamente los criterios de conservación de la naturaleza y siguiendo el Código Éco de AEFONA (Asociación Española de Fotógrafos de Naturaleza). Aparte del lince, trabajamos cn innumerables especies. Para la ubicación deniva de los hides, en caso de especies especialmente sensibles, independientemente de los estric-
tos criterios conservacionistas seguidos para la ubicación de los mismos, se consensua con técnicos de medio Ambiente o responsables de los disntos programas.
Desde Iberian Lynx Land apoyamos total- mente el trabajo y los esfuerzos que se están realizando desde las correspondientes admin -
istraciones para la reintroducción y asenta-
miento de las especies más vulnerables, apostando por la total compabilidad entre turismo y respeto al medio ambiente. Es por ello que estamos en contacto directo con los técnicos responsables de los disntos proyec -
tos, colaborando estrechamente con ellos.
 
Atención al cliente
Es necesaria la realización de un buen tra- bajo de campo para que nuestros clientes solo tengan que ocuparse de disfrutar, y para ello también ponemos toda nuestra infrae- structura a su disposición, pudiendo hacer uso de nuestros equipos de observación, hides portátiles o cualquier tipo de mate- rial que necesiten, contando además con el asesoramiento de un gran profesional de la materia como es José Luis Ojeda, reconocido fotógrafo de naturaleza.
Actualmente, el cliente puede elegir desde pasar un día completo con nosotros, a estar varios días con alojamiento y pensión com- pleta, en cómodas y agradables estancias ru- rales de total confianza, con las que trabaja- mos desde el principio. Tenemos una oferta muy amplia y personalizada, dependiendo del gusto del cliente.
Estamos en contacto con el mercado ex- tranjero que está empezando a ver que no solo hay Linces en Doñana y que la Sierra de Andújar atesora una de las mayores riquezas y biodiversidad de España. Ofertamos pa- quetes completos en el que incluimos desde la recogida en el aeropuerto, alojamiento y entrada a las fincas, hasta el regreso al mismo aeropuerto de partida.
También trabajamos habitualmente con productoras de documentales nacionales y extranjeras; estas suelen solicitar desde la filmación de especies concretas hasta el alquiler de aeronaves para las tomas aéreas.
El idioma no es una barrera, pudiendo traba-  jar con clientes de diversas nacionalidades sin problema, controlando las especies que pueden encontrarse en nuestras fincas.
114
Nuestros Servicios
 
 
Talleres y cursos Organizamos de forma regular cursos y talleres de fotografía de naturaleza. Procuramos que la temática sea variada y de distintos niveles. En todos ellos se cuenta con especialistas en la materia a tratar, tanto fotógrafos como naturalistas de reconocido pres- tigio. En ellos combinamos la técnica con el conocimiento y el profundo respeto por la naturaleza.
Todos conllevan una parte teórica, aunque la práctica es muy importante, para poner en práctica los conocimientos adquiridos. Hemos realizado con gran éxito talleres de berrea, en las mejores fincas privadas, de mac- ro, de fotografía de anfibios y reptiles, aves forestales, manejo de cámaras etc.
118
 
Ya tenemos en marcha las inscripciones para los talleres de berrea 2013, en los que se ga- rantizan un buen puñado de fotos de impre- sionantes ciervos en su momento más espe- ctacular. Los resultados obtenidos se pueden ver en nuestra web www.iberianlynxland.com
Para un futuro tenemos en proyecto la organización de viajes fotográficos al Sur de África y la colaboración con otras empre- sas para la realización de trabajos en común. Aunque nunca dejamos de investigar y estudiar nuevas ubicaciones para la colocación de hides para especies nuevas.
www.iberianlynxland.com
119
 
La primera edición del Premio Nacional de Fotograa de Paisaje, convocado por la aso -
ciación ACDC FOTO (Asociación Cultural para la Divulgación y el Conocimiento de la Fotograa), bajo el patrocinio de Hahn -
emühle Fine Art Papers, la escuela de foto -
graa Aula Imagenat, el laboratorio Taller Digigráco y el fesval Fotogenio 2013, se ha cerrado con una alsima parcipación.
Las más de 1.500 fotograas presentadas a concurso y su alto nivel de calidad, se lo han puesto dicil al presgioso jurado com -
puesto por Francisco Carpio, Mónica Lo -
zano, Arkaitz Morales, Jose Quintanilla, Juan S. Calventus y Rosa Isabel Vázquez. s .
Accesorios indispensables como los Pocket Wizard Plus II Transceiver para las fotograas remotas y algunos ashes como el Nikon SB 900 y algunos Nikon SB 800. En algunas oc-
asiones he ulizado el Nikon SB 900 con un lente Fresnel, concretamente en fotograas nocturnas en el que aparece algún animal.
También se ha instalado alguna barrera IR de construcción propia, pero en contadas oca -
siones, especialmente para fauna nocturna.
Y nalmente, algunos accesorios más como: trípodes de la marca Benro y Manfroo, cables disparadores y linternas de gran potencia para pintar con luz algunos escenarios industriales.
El pasado sábado 1 de junio de 2013, dentro del marco del macrofesval de fotograa Foto-
genio 2013, se hizo público el fallo del jurado, obteniendo el Primer Premio Gonzalo Mayor- al por su obra “Hayas”, consistente en un pre -
mio de 1.000 Euros en metálico, más una beca de estudios de 1.000 Euros en la escuela de fotograa Aula Imagenat y una bolsa de pro -
ducción en el laboratorio Taller Digigráco.
Además, el jurado otorgó 5 Menciones de Honor a Juan San Sebasán por “Landscape Tetris”, a Pilar Cano-Lasso por “Atrapadas al vuelo”, a Carlos G. M. Quandt por “El roble”, a Miguel Monasterio por “Tor -
menta de arena” y a Mariano Belmar por “La alameda”.
Coincidiendo con el fesval Fotogenio 2013, se presentó la exposición del concurso, com-
puesta por las 30 fotograas nalistas, para lo que se realizaron copias de alta calidad en papel Hahnemühle. Dicha exposición estará ineran-
te por varias ciudades españolas durante un año.
124
 
La galería con las obras premiadas y finalistas se puede ver en la página web del concurso (http://premionacionalde- fotografiadepaisaje.com), así como el audiovisual que se proyectó durante la entrega de premios en Fotogenio.
La organización del premio quiere agradecer a todos los concursantes su participación, así como a los patrocina- dores que han hecho posible esta edición del concurso.
Organización Premio Nacional de Fotografía de Paisaje http://premionacionaldefotografiadepaisaje.com ACDC FOTO
 
 AGAFONA  Por Jorge Miró
 
Nace la Asociación Gaditana de Fotógrafos de Naturaleza, Agafona, que busca promover y fomentar el desarrollo y protección del Medio Ambiente en la provincia a través de la fotografía
129
 
Aman por igual la naturaleza y la fotografía, la sen- sación de perderse en la montaña, de esperar pa- cientes la llegada de su particular musa y de hacer click el tiempo justo antes de que ave, mamífero o insecto puedan captar su presencia.
Son los llamados fotógrafos de naturaleza, que des- de hace escasas semanas ya cuentan con una aso- ciación que les representa en la provincia. De nom- bre Agafona (Asociación Gaditana de Fotógrafos de Naturaleza), y establecida en San José del Valle, el objetivo que se ha marcado es el de promover y fomentar el desarrollo y protección del medio ambi- ente a través de la fotografía.
Los primeros pasos para crear Agafona se dieron hace un año. Su presi- dente, Antonio Jesús Fernández, Reklu, cuenta que todo surge a raíz de las excursiones que organizaba su grupo de amigos para ir a la Sierra a hacer fotos.
 
 
Agafona está abierta a todo el mundo, acionados y pro -
fesionales, y aunque no se exige ningún equipo fotográ-
co especial, como mínimo se debería tener una cámara réex, dado que una cámara compacta no sirve para to -
mar este po de imágenes.
“Queremos aglunar al mayor número de personas que quieran formar parte de este mundo. Para los aciona -
dos, vamos a crear una escuela de fotograa, para que puedan aprender no sólo a hacer fotos, sino a disfrutar de la naturaleza en todo su estado. También pretendemos colaborar con congresos, organizar concursos, hacer en -
cuentros con otras asociaciones andaluzas… Queremos ser una asociación viva”, destaca su presidente.
Más que un ‘click’
La furva mirada de un búho, la escurridiza huida de una salamandra, el elegante vuelo de una mariposa o la in-
mensa belleza de La Sauceda, por citar algunos ejemplos, no se captan sólo apretando un botón. Detrás de cada fotograa, de cada imagen, hay un largo proceso de estu -
dio y observación, señala Reklu.
“Esto no es llegar y hacer la foto. Sólo enes que pen -
sar que cuando un gorrión te ve en la calle, sale volando. Y eso que está acostumbrado al contacto con humanos. Imagínate un animal que está en su ambiente. Es igual o peor. Por eso decimos que el fotógrafo de naturaleza, an -
tes que fotógrafo, es naturalista, porque ene que con -
ocer perfectamente el entorno que le rodea. Nosotros nos pasamos horas observando cuál puede ser el mejor sio para hacer una fotograa sin que, además, molest -
emos al animal”. Así, recuerda “las 18 horas que pasé en Extremadura para fotograar a una avutarda, dentro de un hide (enda de campaña camuada) de un metro y medio de ancho”.
Pero si estas fotograas son complicadas, no menos lo son las de paisajes, por mucho que pudiera parecer lo contrario al tratarse de un objevo jo. “Hay que tener en cuenta que los fotógrafos dependemos mucho del clima.
132
 
No es lo mismo que esté despejado que nuboso, que llueva… E incluso ni eso. Nosotros nos hemos ido a El Palmar a hacer fotos con días con un cielo azul y nos hemos vuelto sin hacer nada. La modalidad de paisajes es de las más complejas, más que las de fauna”.
La riqueza de Cádiz
Una de las grandes riquezas de la provincia es su diversidad biológica y sus diferentes paisajes, que práccamente convierten a Cádiz en un pequeño país. Eso da mucha ventaja a los amantes de la fotograa de naturaleza.
133
taña o sierra, aquí enes Los Alcornocales o Grazalema.
Si quieres marisma, Sanlúcar. Si preeres campiña, toda la que quieras, por no hablar de los kilómetros de costa que tenemos…” destaca Reklu, señalando que, aún así, mu-
cha gente aún desconoce los contrastes de la provincia. “Hace poco vinieron unos amigos de Cataluña para hacer fotos. Se creían poco más o menos que se iban a en-
contrar con Caslla La Mancha. Cuando me los llevé a La Sauceda se quedaron aluci- nados. Pensaban que estaban en Galicia”.
Andrés Barrera, vicepresidente de Aga-
fona, también destaca el hecho de que la provincia cuente con numerosas especies autóctonas, pero recuerda que la provincia ene la suerte de ser lugar de paso de nu -
merosas aves migratorias, que en su cami - no hacia África paran en nuestra erra.
Andrés, que a pesar de sus años haciendo fotos aún se considera “un aficionadillo”, se ha especializado en fotografía de flora y paisajes. Para él, El Pinsapar, en Graza- lema, “tiene unos colores y unas luces que hacen que todas las fotos sean diferen- tes”. Igualmente, destaca Algeciras. “Los
amaneceres y atardeceres allí son únicos”.
135
De momento, el objevo que se marca Agafo-
na para este año es el de darse a conocer entre los fotógrafos de la provincia. “Sabemos de la gran ación que hay por este po de foto -
graa en la provincia, por eso queremos ser una referencia dentro de las de naturaleza”, indica Reklu, que también destaca la necesi- dad de “ir conociéndonos poco a poco. Que -
remos hacer, como mínimo, tres grandes que -
dadas al año con todos nuestros asociados, así como las que podamos con otras asociacio -
nes andaluzas con las que tenemos contacto”.
Para asociarse a Agafona:
Por Antonio Ojea
Cuando se me propuso participar en esta sección, mi cabeza se llenó de dudas. ¿ Qué puede ofrecer un pintor en una revista de fotografía, aunque se tenga la naturaleza como denominador común? Fácil sería nar- rar mi biografía, anécdotas, o explicar las técnicas de las obras mostradas… entre otras cosas. En cambio me he permitido gracias a la ocasión que se me brinda, en tratar de exponer unas breves reflexiones personales, a pesar de poder no ser inter- pretado como me gustaría.   No recuerdo mi primer garabato, no recu- erdo siquiera si nací con un cuaderno y un lápiz debajo del brazo. A lo que sí alcanza mi memoria, es que desde siempre me apa- sionó la pintura como un particular modo de expresión tan antigua como el hombre. Una pasión, que no sé si por suerte o por desgracia, condiciona mi vida y la forma de traducir lo que me rodea. Rendido de inten- tar despojarme de ella si no es prescindien- do de mí mismo. Elixir de vida, y a la misma vez un tormento que exige su justa propor- ción. Son muchos los artistas que hablan del efecto gratificante del ejercicio del dibujo o la pintura, y en gran medida es cierto. Tam- bién quién reconoce el sufrimiento que se padece, la autoexigencia y el desgarro de uno mismo en cada trazo y en cada pincel- ada. El artista se despoja de parte de sí mis- mo en cada obra y solo reconforta el último trazo de la firma.
124
 
Puede parecer fuera de tono, pero la motivación inicial que me arrastra a pin- tar es de puro egoísmo buscando una satisfacción personal. Siempre digo que para un pintor de naturaleza, trabajar del natural es la máxima que proporciona esa comunión del artista con su medio. Y digo esto, pues en esas circunstancias es cuando se produce la verdadera magia y, por unos instantes esbozar la imagen retenida en la cabeza, en un intento de- sesperado de congelar el tiempo. Nada importa, solo ese preciso instante, y la impronta del momento queda presa en una hoja, en un simple boceto a lápiz ex- puesta con toda su desnudez.
Pasado el trance, la necesidad se trans- forma en mostrar la captura impregnada de sensaciones como si de un trofeo se tratara, compartiendo el resultado de la vivencia con el espectador y preten- diendo su aprobación, cerrándose así el círculo. El trabajo de estudio exige otro proceso más pausado y meticuloso donde se pre- mia la composición o el virtuosismo con la técnica y, salvo que esté basado en estudios del natural nada tiene que ver con el trabajo de campo, recreándose entonces una versión del momento.
144
 
La ilustración es la hermana gemela prostituida del arte de la pintura ( al me- nos en lo que a mí respecta). Donde las exigencias del guión y el juicio del es- pectador son factores determinantes y, solo la maestría del autor puede crear una ilustración a priori calculada y sujeta a un contexto, en una obra de arte total- mente creíble. El estilo personal en estos casos se hace casi imprescindible a pesar de las limitaciones.
Como profesional de la pintura y la il- ustración, desde hace ya unos años, he incorporado la técnica digital como otro método más de pintura. Mucho se dis- cute sobre la profanación de este medio dentro del concepto de arte, y más en el arte de naturaleza, por parte de los más puristas. Nadie discute que cualquier téc- nica o medio nunca sustituirá al resto, y para mí es otra forma más de pintar, con sus ventajas y sus inconvenientes como todas. Hablado claro está, de avanzados programas de pintura y no de retoque o tratamiento de imágenes. La habilidad y el estilo personal queda reflejado de igual forma, y en poca medida suple las carencias que pudiera tener el artista. Las posibilidades no son nada despre- ciables a pesar de no ser un medio en es- encia tangible. Por mi parte hace tiempo quedó cerrado el debate.
149
 
Cuando se tiene la fortuna de con- vivir y observar seres vivos con la cercanía del día a día, es fácil descu- brir que no solo se trata de motivos para pintar, o especies concretas, si no de individuos que comparten la misma aventura de la vida. Seguiré buscando con la pintura como her- ramienta, esa comunión y simbiosis con lo vivo, en un intento desespera- do de indulgencia y crecimiento per- sonal. Poder compartirlo es todo un placer… y una necesidad.
154
157
¿A qué esperáis para mandar vuestras aportaciones?
163