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Colección coordinadapor Rubén Jiménez Ricárdez

Primera edición: 1989ISBN: 968-41t-24t-6DR o Ediciones Era, S. A. de C. V.Avena 102, 098 l0 México, D. F.Impreso y hecho en MéxicoPrinted and Made in Mexico

ÍNorcB

Primera partepor dsa C¡istina Laurell

L lntroducción, 11

II.1 La investigación latinoamericana sobre trabaio y

IT.2

II.3

salud, 16El estudio del proceso de trabajo y salud: análisis críticode cuatro propuestas metodológicas, 40Para el estudio de la salud ein su relación con el Drocesode producción. 65

Segunda partepor Asa Cristina Laurell y Mariano Noriega

III.1 La empresa y los obreros, 95III.2 El proceso laboral, II2III.3 Las cargas laborales, 13+III.4 El desgaste obrero, 150IIL5 Las estrategias respecto a la salud obrera, 183III.6 A modo de conclusión. 202

Notas, 213Bibliografía 227

(

lntroducción

Durante los últimos ciiez años hemos presenciado el surgimiento de una

tantes de las ciencias sociales. De esta manera interesan tanto a Ia sociolo- '

11

ta desarrollar un instrumentai metodoìógico-técnico pensado especíñca-mente en función del objeto de estudio que nos concrerne.

arma de transformación de la realidad. Planteado así el problema, Ia expe-riencia obrera no es sólo una fuente de información que puede ser aprove-chada en los estudios para conocer un centro de trabajo concreto, sino queinvolucra Ia relación entre los investigadores y los investigados; entre elsujetc y el objeto del proceso de investigación. Este problema ha sido tra-bajado especialmente por el movimiento sindical italiano a través del mé-todo llamado el Modelo Obrero. Sin embargo, adolece de una serie de limi-taciones que tienen que ser superadas para poder articularlo en el procesode investigación-transformación.

l-In te¡cer problema -íntimamente ligado a los anteriores- es la pocaatención qqq se ha dado en las investigaciones a la organización soci-4l_{e

iár dé què el pro-clase, se ha estu-

diado muy deficientemente cómo ia correlación de fuerza entre trabajo ycapital gravita sobre el desgaste generado en el espacio fabrii.

9onçre-

"rrïïide estu-dios específicos de diferentes centros de trabajo, todavía falta profundizaren ellos para enriquecer los puntos de vista sobre la relación entre el proce-so de producción y el patrón de desgaste obrero.

En el libro se pretende contribuir al esclarecimiento de estas cuatrocuestiones. De esta manera, consta de dos partes; una primera, que sepuede caracterízar como una investigación teórico-metodológica, y unasegunda, que es un proceso de investigación basado en los planteamientosde la primera parte. A pesar de la evidente relación entre las dos partesdel trabajo, tienen cierta independencia. Es así, porque la parte teórico-

t2

de producción en su relación con la salud obrera y que sea capaz de gene-rar el conocimiento necesario tanto para sustentar una nueva práctica res-pecto a la salud obrera como para proporcionar los elementos necesarios

r la legislación laboral.Iiteratura I atinoameri-os trabajadores usandosistematizar cuáles son

es, poren rele-el otro,ropues-

miento-transformación de la realidad.La segund

y el desgasteCiudad Lázajuntamente c

r1

la simple "aplicación" de Ia propuesta de la primera parte de la tesis,

dado que no utiliza todos los eleEl primer capítulo analiza esen generales

î î;'li;Tl-laboraÌ, a

iendo dos ejes analíticos. El primerof,rco como se articulan, Por un lado,unción de los elementos teçqqlÓgiqoslorno y Aceración- y el desfase tec-

1

te allí se desprende Y, Por el otro, las I

mente cómo el trabajo de mantenrmlentopermite un mayor giado de decisión obrera, está restringid.o por el movi-*i"rrto de la prôduðción, por la particular división del trabajo y por el con-

trol burocrático'El rercer capítulo profundiza en las gargas- laborales alaluz del análisis

a"ip¡qjt"r" liboral. b" .ttu manera, aespîéi äê lnãdescripðión de ellas,lãþictcndc mostrar su relación con la conformación específica de la baserécnica y con la división y organización del trabajo en SICARTSA. Es de-cir, en vez de hacer una lista de "riesgos de Ia siderúrgica", se explorala dinAmide cargasboral y laquc cada

as y enfermedades según área y según'eros en las discusiones colectivas. Lagún tipo de trabajo y antigüedad, ba-icos realizados por los servicios médi-rccidentabilidad según ârea y tipo de

rotación-expulsión por área , too de trabajo útil" captado con Ia

El quintó capítulo, finalmén obrera en su rela-ción con el proceso de producc las estrategias qq,edes stitucion_çs e_stet.aleî ilos õþIglsaDã er aistitrtãiUna se lefrerJäì6moestá plas la cuestión de la salud. Una segundaanaliza I a uno de los involucra.dos con un én-fasis esp erza entre ellos alrededor del controlsobre cómo usar la fuerza de trabajo en Ia fábrica. Finalmente, se pretendecaptar las estrategias a través de los mom.t9ld. çg4!t.tg_qgggo, lo que

permite resaltar especia-lmerlte Ia relación entre la de la patronai y la de

ias instituciones estatales' ntado como tesis cie doctorado en so-

1ue explica que Ia prirne.ra parte sea

oracron fuerõ¡r de gran importancia

r'est sores del comitiato ulsó Y garantiz('un entre Ia secciótr

señ uerdo' Cabe rc-

:ción sindical a plantear la realizacióit,s obreros de SICARTSA resPecto irl

esta manera un número imPortanlt'a:i

P.o

rcer el carácter colectivo de los plantea

o del libro,rbros de IagruPos de i

.n dedicadoto central en la estructuración de ultr¡

urgente e indis 'rl

Lndirectamente tA

L esPeranza de rÀ

objetivos compartidos y sirva para iåpulsar la I rl

obrera.

í5l+

II.1 La investigación latinoamericanasobre trabajo Y salud

tiva en cu los que pretendenestudiar Ia edad tienden a con'verger en e rayectos sean diver-sos. La for bordar la investiga-ción ciertamente han sido diferentes, pero queda el hecho de que todos loscaminos llevan a la exigencia de penetrar y explorar la relación trabajo-sa-lud para poder co-mprender cómo se articula Ia salud-enfermedad en elproceso social y cómo expresa a éste.

Sin embargo, el estudio del proceso de trabajo ¡, \a s3ùud obrera no es,en rigor, una preocupación reciente. El impacto de la Revolución Indus-trial en Europa durante el siglo pasádo fue tan espectacular y expoliadorde la vida obrera, que necesariamente se convirtió en una temática de es-tudio y de acción. De esta manera Marx y Engelst dedican una parte desu obra a anaJizar este problema como una de las expresiones concretasde la explotación capitalista, basándose en diversos estudios realizados so-bre todo en Inglaterra. Asimismo, existían en Francia y Alemania corrien-tes importantes de médicos,2 identificados con la causa obrera, que docu-mentaron a través de una serie de estudios los efectos devastadores de laindustrialización sobre la salud y la vida obrera.

La situación era tan seria que de hecho ponía en peligro la reproducciónde la fuerza de trabajo al superar las tasas de mortalidad a las de natali-dad. Es decir, la reproducción de la fuerza de trabajo sólo tenía soluciónmientras existiera la posibilidad de transferir población de las zonas rura-

16

Ies a las urba¡ras. Por otra parte, ante esta situación las nacientes organiza-

ciones obreras hicieron ..ttã ..ti. de planteamientos en defensa de la vida

relevantes de salud de ìa población'7^ l- fáL-i¡â -o.o À.o.i

e Permitieron re-

ffilarelación -cornPrenderele

carâcLer to.iul d.l proceso salud-enfermeda.d.¡ de sustancrar una nueva

práctica social respêcto a la salud obrera, exigida por los movlmtentos so-

1-tt

mo elemento importante, finalmente, el surgi-corriente hegemónica en las ciencias socialesse constituyeron en el eje analítico de la explo-

lucrados que, sin embargo, tienen que-ser rearticuladas en una nueva Pers-pectiva. É*e.ge, ademås, como p-roblema central en este contexto, y Poräl -ir*o , rút , de la problemâtica, el papel de los trabajadores en el

proceso de generación de conocimiento.' La temátfta ¡atada tiene relevancia en tanto nos indica, por un lado,

lucha obrera.

LOS TEMAS, LOS PLANTEAMIENTOS TEÓRICO'METODOLóGICOS

Y LOS PROCESOS DE INVESTICACIÓN

:

18

a] EI rnaþeo de riesgos 1t su exþLicacirln socioþoLítica

19

ân cadadía más no sólo de la insalubridad laboral "normal", sinoque en ellos se está concentrando selectivamente la producción industrialy agrícola más dañina'ro

Durante los últimos años se ha ¡ealizado una serie de estudios encami-nados a generar un conocimiento concreto resPecto.a estos risgos ocupa-cionales específicos en los distintos centros laborales y, en algunos casos,su extensión al territorio circundante. En términos teórico-metodológicosestos estudios generalmenteproducciér¡_y-Ia salu{ dadocina del trabajo dominante y emplealógicas. Sin embargo, incorporan,a-anaJizar el contexto económico-político que aplica el surgimiento de estainsalubridad.

Ejemplif,rcan este tipo de estudios las investigaciones sobre la intoxica-ción con plomo realizadas en Argentina,rr Brasil y por el Centro de Eco-logía Humana y Salud de la OPS/OMS en México;l2 la intoxicación ycontaminación mercurial en Venezuelat3 y Nicaragua;r{ los estudios so-bre el uso de pesticidas en México y Centroamerica'15'16 los estudios dediferentes riesgos específicos en la industria colombianat? y la distribu-ción de los accidentes graves según tamaño de la industria en Brasil.l8'1e

Estos estudios no sólo verifican Ia importancia de dichos problemas res-p.ecto a la salud de los trabajadores y los habitantes de las zonas fäbriles,sino que muestran, además, que tienden a ser de una gravedad extrema,Es decir, no encuentran una frecuencia "esperable" de víctimas de losriesgos laborales sino situaciones que llegan al extremo, por ejemplo, deintoxicaciones de grupos humanos enteros. Vistas en esta perspectiva, lasgrandes catástrofes industriales (como, por ejemplo, la de SanJuanico enMéxico) no son fenómenos aislados sino más bien el pico espectacular deliceberg de las pésimas condiciones de higiene y seguridad de la industrialatinoamericana.

Es justamente para explicar esta insalubridad e inseguridad comparati-vamente más alta, que se ha introducido en estas investigaciones el análi-sis del contexto económico-político, pero sin plantear la cuestión del proce-so de producción. Generalizando se puede decir que este análisis muestraque las condiciones insalubres y de seguridad precaria se derivan de for-mas de maximizar la ganancia basadas, entre otras cosas, en minimizarla inversión en medidas de higiene y seguridad y escamotear a los trabaja-dores sus derechos en este campo.2o

La viabilidad de esta actuación se explica, esencialmente, en el terreno

20

rarcialmente eI nivel relativamenteproblemas. Sin embargo, caben al

r, existe una serie de elementos Paraancla "construidat' a través de la)nte por parte de las.empresas y las

le la ãescalifrcación sistemática de Iaque

cto anoci-tas y

ganancia. Otra ilustración de Ia extr

õnfoque es que, aun cuando no se oF

lu ".ri".*"däd,'Ia

explicaría como el

se realiza. No está presente' pu€s? (

como ambiente de trabajo donde Io

terminados riesgos; cuestión que a^su vez explicapor,qué aparecen como

relevantes únicamen't-e l"r-;i.ì;., ffsico-quími:ro-biológico_1 ¡1,1ecánicos.Consecuentemente no hay nin[una preocupació" P9t loT,t*,t-t

un proce-

so de investigación que permita dar cuenta de la articulación compleja del

öä'ãã-lioa"..i¿" !" su relación con la salud' :

b) La salud como referente de la condición obrera

Otro grupo de investigaciones, que ha generado información sobre Ia sa-

ìíää."i;";L",irri¿.¿., obreras, son aquellas realizadas por científicos so-

2t

ledicados al estudio de la "condición obrera". Resulta signihcativoexplorar este tema se llega casi ineludiblemente a Ia saludlomo una

central, ya que su-rge como una,expresión concreta del conjuntode ias relaciones y contradicciones que vive la clase obrera. Así. estás in-vestigaciones ofrecen una entrada distinta aI estudio del trabajo y la salud.yvùrró4L¡u¡¡çù v¡¡çLçr¡ uu4 çrllréu¿ ursLr¡.rLa a¡ cstuo,ro oer traoalo v la salud.Algunos de estos trabajos actua.lizan de modo claro ciertos pöbiemas cla-ve,de la investigación social en.este campo, pues carecen der prejuiciomédico; esto acla¡a

"ls"n3.: cuestiones, mie¡¡traì qrre su propio seËgo"disci-¡r_¡çu¡LU) çùLU ¿c¡¿r¡-a a¡gunas cuestlones, mlentras que su proplo sesgo drscl-

plinario oscurece otras_, Ello significa, por ejempio, qrrè Iu propu-esta ielcarácter social de la salud de los trabaiàciores nó se cõnvierie en tema depoiémica-sino que las_complicaciones surgen más bien al intentar precila especihcidad del ob.ieto de estudio -"proceso salud-enfermedad"

1v y". ¡4ù LuurprrL4Lrutlç¡ ¡rurBcu rr¡as olen ar tntentar preclsarla especihcidad del objeto de estudio -t'proceso salud-enfermedad"-,corno se verá más adelante.

la que en la medida en que Ia robotización tiende a ser un Proceso desigraldentro de un determinado centro de trabajo -o sea' se Presenta como undesfase tecnológico-, genera una nueva constelación de elementos dañi-nos a¡tes qrr. .Ïi*itt"r"los riesgos tradicionales como exposición a ruido,calor, tóxicos, trabajo pesado, etcétera. Asimismo, tiende a profundizarla tensión ,r"óioru, yr q"" inciementa el trabajo Por turno, Ia-monotonía,los altos ritmos, el aislamiento y la falta de control. Respecto a la industriamicroelectrónica como tal, Mertens enfatiza especialmente el uso abun-dante de químicos y sus efectos en ia salud: Ias intoxicaciones agucias ycrónicas, là irritación de las vías respiratorias y el cáncer. Esta reflexiónpermite, pues, ubicar una serie de temas que es preciso explorar en estu-dios que profundicen tanto en la conformación de los procesos laboraìesconcretos como en su expresión en Ia salud, considerando a ésta más alláde lo puramente médico

A nivel latinoamericano interesa destacar al grupo de trabajo "Claseobrera y condiciones de trabajo" de CLACSO, que de¡rtro de esta temá-tica general frecuentemente ha tratado la salud obrera. F,s-de especial rele-vancia el trabajo de un grrpo de argentinos25 que identifica el estudio deIas condiciones de trabajo con el del proceso de trabajo en su defLniciónmarxista y que privilegia como referente empírico la salud de los trabaja-dores. Uno de los principales instrumentos de investigación que se ha apli-cado en varios estudioi es el llamado método LEST, elaborado por ungrupo francés y posteriormente adaptado a las condiciones latinoamerica-nas.zu El LEST, como se analízarâ más adelante, es un esfuerzo por sis-

tematizar, formalizar y medir los elementos a recog'er en un sitio de traba-jo a frn de caracterizar las condiciones de trabajo; problema bastantecomplejo pero central en el proceso de'investigación concreto. El LESTsignifica una propuesta novedosa por cuanto pretende abarcar desde Ios

riesgos tradicionales hasta los elementos psicosociológicos. _Sin embargo,al cèntrar el anáIisis en las características del puesto de trabajo, no logracaptar la lógica global del proceso de trabajo y su relación con el Procesode valoracién. Cabe resaltar que en este método la salud aparece máscomo indicador que como un problema en sí.

Otra investigaðión importante emanada del grupô de CLACSO es larcaJízada por õalin27 parã la OIT sobre el trabajo Por turno en el Perú'Es la explôración más-completa que se ha hecho en América Latina sobreeste aspècto particular del frabajó industrial y muestra que dicho régmende trabajo eJ mucho más común en ese país que en los países capitalistasdesarrollados y que está en expansión. Asimismo, el análisis de las condi-ciones laborales generales de los trabajadores Por turno demuestra que so¡más precarias eñ prácticamente todos los rubros: proporción mayor de

eventuales, menor tasa de sindicalización, jornada más larga y comPacta'ritmos de trabajo más altos y menor acceso a servicios médicos de calidad.A pesar de que es conocido2s que el trabajo rotativo tiene profundas con-

(r, 23

secuencias en la salud obrera, este aspecto no está tomado en cuenta, sinoque aparece sólo como un indicador y dato autoexplicativo, como si no re-quiriera de mayor exploración. Por otra parte, en esta investigación no sehace un anáIisis propiamente hablando, del proceso laboral.-

Lo que interesa destacar con los ejemplos anteriores es que este tipo deestudios científico-sociales, al igual que los referentes a los riesgos ocupa-cionales específicos, registran daños a la salud en un contexto laboral, pèrono consideran ni la "cuestión sa-lud" ni la relación proceso de trabajo pro-ceso salud-enfermedad. Es decir, no hay una reflexión teórica y concep-tual dirigida a desentrañar la articulación entre ambos procesos ãe.tt.o d.una lógica social global. Esto se refleja a su vez en el terieno metodológicocomo la yuxtaposición de instrumentos de investigación o, si se quière,como.la parcialización y aislamiento de los diversos aspectos del objeto deestuoro.

Otra aportación al estudio de la salud obrera hecha por un grupo esen-cialmente lase obreialt enfer-m¿dad.2sN - ---'nlosãu-tores, de

t:å:ít Lo más

innovador bastante bien logrado de desamollarel d;cu ortiene prioridad entre los problemas teóricos por resolver dado que -hastala publicación del mencionado libro- a las dificultades propias de esreconcepto, derivadas de sus distintas interpretaciones se añadía otra máscuando se intentaba incluirlo en el anáIisis de la salud obrera. Me ref,reroa otros trabajos, dolde implícita o explícitamente, se hace ,,enajenación"equivalente a "enfermedad".3t Obviamente es legítimo plantear unaprofunda reconceptualízací6n de los conceptos de salud y enférmedad, queen cuanto conceptos no son neutrales ni existen al margen de Ia sociedad,Sin embargo, habría que proceder corhay que romper con la "mirada medestudiar y entender. Por ejemplo, si ecia por lo menos los marxistas no ducblema el renombrarla "enfermedad'esta manera la apertura del campo sa

riamente pasa por la reconstitución d,cado que éste se diferencia bien del c

se diluye en los objetos de las ciencique este tipo de problemas se aclarennes que no tienen solución en el pla

cl La þroblematización de la relación trabajo-salud

l]n tercer grupo de estudios sobre fabajo-salud son los realizados dentro

ot

del marco de la denominada corriente latinoamericana de medicina social

sanitario.32 Relativamente pronto el materialismo histórico llegó a ser he-

gemónico en esta corriente, lo que tiende a dar un bagaje teórico común

nálisis del contexto socio-sino que las convierte enla interpretación del pro-carácter social.

Es, Pprocesola relaciles es el

ZJ

salud de la rro-la cual enc colaalta que el sur-

sen como problema teóricoi.o."to salud-enferrnedad Yõonceptualización que ubicaternas de la enfermedad, ya que cenlla caja negra de mediación os

cos) y lo biológico (la enfer es

ma por resolver se reduciría es

te los cua-les lo social se traduce en e¡: nde interrogarse respecto a la constelación de los "factores de riesgo" rela-tiva a un grupo específico de la población.

El grupo de Ia U,A.M-X optó por otra interpretación a,l intentar sustan-ciar teórica y metodológicamente "el carácter social de Ia salud-enferme-dad"; frase sugerente y arnpliamente utilizada, Pero en rea-lidad poco cla-ra. La propuesta teórica que adelantó es que lo social no es externo a lobiológico humano sino que este biológico está subsumido en lo social, ypor tanto asume formas históricas específicas y diversas. EI problema cen-tral, entonces, consiste en el estudio de un aspecto de la producción socialde Ia naturaleza. Plantea¡se Ia cuestión de esta manera tiene consecuen-cias inmediatas por cuanto signifrca transformaciones de toda la teoríza-ción de la problemática de salud. En primer lugar el objeto de conocimien-to cambia y ya no es la enfermedad, sino el proceso b-i.pp-t.tqgic-o-Lrr¡ttano(que se puede llamar proceso de desgaste-reproducción para evitar confu-siones semánticas), el cual tiene como expresión particular momentosidentifrcables como enfermedad. En la investigación práctica este procesoes verificable ante todo en los grupos constituidos en función de sus carac-terísticas sociales esenciales, o sea, su inserción en la producción. una vezdefrnido el objeto científico específico, la construcción teórica se centra enel problema de establecer cuáles son las categorías analíticas que permitensu exploración.35

Es aquí donde se llega al estudio de la relación salud-trabajo al propo-ner que una de las categorías analíticas principales es "proceso de produc-ciónt'.30 Se llega a esta categoría por considerar que, en la sociedad capi-talista, el proceso de producción organiza a toda la vida social y porquees, simultáneamente, el proceso de valorización del capital y el modo espe-cífico de trabajar -o sea, el proceso laboral. Esta categoría permite, en-tonces, estudiar sobre una realidad concreta la lógica de acumulación(proceso de valorización) y su medio -el proceso laboral- como unmodo específico de trabajar-desgastarse y como enfrentamiento de claseen términos de estrategias de explotación y de resistencia, que a su vez de-terminan patrones específicos de_reproducción. La combinación particularentre los procesos de desgaste y de reproducción origina el nexo biopsíqui-

26

co humano históricamente específico. En esta concepción no hay una se-

;;;;;tã;"tre lo social y to biopsíquico, que luego se unen Por un vínculo

de mediación externo, yr q.t. "i

pt-o.eto Iaboral es a Ia vez social y biopsí-

quico. Ciertamente eáti" lôt elementos críticos para el desgaste se cuentan

åiî^"it*åt r*ioiågi"ot, etcétera, Pero son de orden pTityJT y variable

v no mediaciones generales entre ui social externo y. un biológic.o interno.'' î ;;;'. s'.

-,i. i""e sti g ació n tîîJ;:"""iïXå,nä å:'.:ï"

tl:*åi,ï

obreros.

con las organizaciones obreras, Las I

riadas v vãn desde el análisis docume

Últi*á-..tte se ha intentado desarrvolucren activamente

" lor t.uUujudores en la generación. del. conocimien-

to'Dentrodeestalíneasehanrealizadoestudiosencamlnadosaconocer

orsanización y división del trabajo, '

en-su relación-con el desgaste' De est

como el incremento en la Productiv:sico en los accidentes,+6 los Proceso!iersión industrial,aT'aB etcétera' Finaconocimiento existente de varias disr

to de desgaste, Este Proceso colectiv'caciones iustanciales de los plantea:sión de áreas Problemáticas Y de au

tiempo que hä revelado una Parte ¿

dad fabril mexicana.--ò,;; i"";stigación, que tiene su raíz teórica en la UAM-X' pero que

-) I

diferentes es ìancia reside l,a del no-trab i'e modo satis :

cambios en los patrones de morbilidad ocurridos durante un periodo rela- :

tivamente largo como resultado de la restructuración de los piocesos labo- .

ra-les.

28

confrontación crítica y en la negociación sindical con las instituciones esta-

tales.

clases sociales.El estudio Saúde e trabalho de Possas56 recoge parcialmente el enfoque

de CEBES aI acercarse al estudio de la salud de los trabajadores. Así, pro-

la salud es entendida como un Proceso social.La dihcultad de este tipo de piopuesta está en el proceso de verificación

te p .1"ó:las " el

las odee vi no Ia'

lo que dificulta elegir los referentes emP P-vesiigación. La segunda, de orden técn rn-

dicadìres requeridos no se encuentran se-

cundarios, ya que éstas no Pe es

entre grupos constituidos en Y

sociale"s. Sin ernbargo, esta di la

adores y no-cuentran Pocaiales no son ele la generan Y

29

de orden teórico se subsana, dado que permite abrir considerablemente elabanico de posibles referentes empíricos y el diseño de estudios sobre as-pectos particulares del tema.

Guarda ciertas semejanzas con el estudio de Possas el trabajo de Capiø-äsrrto 1 enfermedad,s1 por cuanto se propone hacer un estudio global delproceso salud-enfermedad en México, tanto de la clase obrera como delresto de las clases abarcando desde la explotación hasta el papel del Estadoy la seguridad social. A pesar de una insistencia reiteracia en la necesidadde verificar empíricamente los planteamientos teóricos propuestos, se en-frenta al problema de que los referentes empíricos requeridos no se puedenextraer de las fuentes secundarias, dado que su lógica de ordenamiento nocoincide con el marco teórico adoptado. Con una formulación teórica ymetodológica más clara, sin embargo, esta difrcultad podría haber sicioevitada con la construcción de un proceso de investigación que abra nue-vas alternativas de comprobación cie las hipótesis estudiadas.

Otro trabajo brasileño, coordinado por Tambellini,5s reviste especialinterés por la originalidad de su proceso de investigación. Los anteceden-tes del estudio son un trabajo teórico-metodológico y empírico sobre losaccidentes de tránsito realizado con una fundamentación inspirada en lacausalidad genético-estructural de Sagatovski,u' y una primera explora-ción de la salud obrera en Brasil.60 Estos estudios abrieron una serie deinterrogantes que se pretende resolver en la investigación ahora en mar-cha. De esta manera tiene como uno de sus objetivos centrales lograr undesanollo teórico-metodológico y técnico. El estudio está construido alre-dedor de un objeto real: una fábrica, los obreros y el territorio circundan-te. Es a tavés de la penetración de este objeto real que se pretendeconstruir el (los) objeto(s) científico(s), precisar consideraciones teóricasde orden general y lograr un desarrollo metodológico y técnico. Está plan-teado, pues, como un experimento teórico-metodológico-técnico basadoen el encuentro de distintos cuerpos de conocimiento y su instrumentalcientífico sobre un objeto único. Este ensayo interdisciplinario no está es-tablecido a priori sino que obedece a las exigencias surgidas del carácterdel objeto.

Una primera dimensión, exploracconstitución del objeto como expresi,lista, de la formación de la burguesízcambiantes. Una segunda dimensió¡

istra su descrip-exploración clí-

:ncra parauna nueva #:#:ttoltåttl

30

En el contexto centroamerrcano cabe mencionar' también' el estudio

3t

sobre Ia salud de los mineros de oro que se está desarrollando en Nicara-

d) Los estudios sindicales

Como ya se señaló, hay una relación directa entre el creciente caudal deestudios sobre la salud obrera y el interés sindical de luchar por demandasmás complejas en este terreno. Significativamerrte son los sindicatos o lascorrientes sindicales democráticas los que han encabezado esta tendencia,

o no- durante los últimos años. La salud como terreno de lucha en

de la salud.

losEIùles-

tos trabajadores por causas relacionadas con el estrés, que se traducía en

32 33

una sobrevivencia disminuida. Posteriormente se comPlementó este estu-dio6s con el análisis del proceso de trabajo y del proceso histórico que ex-plica su actual conformación. A pesar de lo concluyente de las fuentes deinvestieación v el apovo combativo de los trabaiadores a su demanda. larnvestrg y el apoyo combativo de los trabajadores a su demanda, laempresa no la ha aceptado hasta hoy, nueve años después. Primero Iogró"cánjearla" por otras de tipo económico en las negociaciones y luego sos-tuvo la necesidad de hacer otro estudio a.l respecto encargándoselo alTMSS w a la Secretaria ¡fe Trabaio v Previsión Social ISTPS). Se oactó.Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS). Se pactó,IMSS y a la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (S'I'PS). Se pactó,sin embargo, que el protocolo de la investigación por realizar debe seracordado con la representación sindical; cuestión que ha impedido des-viarlo al terreno de los riesgos aislados.T0

Otro estudio sindical.?t reaJizado con el Sindicato de Telefonistas de la

presencia de enfermedades relacionadas con el trabajo no¡eco¡ocidas porla Ley Federal del Trabajo (LFT). Los datos recolectados documentanque efectivamente las hay y su relación con el trabajo se muestra por suincremento con la antigüedad y mediante el análisis del proceso de trabajo.

La suerte de esta demandaT2 muestra algunas coincidencias alecciona-doras con Ia de los electricistas, en cuanto a la estrategia patronal para

egociaciónpor 45 mi-la vigilan-rte decidió

la LFT, evi-ronal respec-con la intro-la salud está

datos de un estudio del IMSS. la frecuencia extremadamente alta de enfer-

(

la vía de la intensificación del trabajo.E

tuacenfeuna

las huellas y el dolor del trabajo en el cuerpo, la empresa -Altos Hor-nos- argumentó con la f¡¡erza: el despido de los luchadores más destaca-

base a la "experiencia obrera". Es decir, aunque en varias investigacionesanteriores, como la del SME y la de los Telefonistas, se había recogido elconocimiento obrero respecto a su centro de trabajo como primera etapa

de Salud Laboral y otros tantos asesorados por centros académicos. Esta

34

tendencia no es exclusiva de México, sino que se está generalizando en

PARA UN BALANCE CRÍTICO; AVANCES Y PROBLEMAS

NO RESUELTOS

La r,-,visión de Ia investigación latinoamericana sobre el trabajo y Ia salud

ã"..rru que se ha dado"un avance imPortante en este 9amp9. durante los

lfii."or diez años. Destaca como el rasgo tâl vez más sobresa-liente la con-

formación bastante origina-l de esta âreã de conocimientg, qye se distingue

à;;;il^ de Ios países"capitalistas avanz¿dos hegemonizada p.o¡ los pun-

;.;¿;;..;oIa iredicina ocrrpaciorral y la ingeniería de seguridad indus-

i.i¡. nr," conformación distirta se explica indudablemente por un Proce-,ã nirt¿ri.o de constitución diferent. d" .tt. campo de cono-cimiento en el

subcontinente. Así, el atraso relativo de Ia medicina del trabajo en el mo-

;;;; .; que la cláse obrera empieza a proponerse a la salud como terre-

no reivindicativo hace que los pianteamìerrtos de la medicina social' que

ubica a las ciencias sociales co¡no una de las herrarhientas analíticas cen-

trales, llegan a s

de explorar la s n

na ocupacional n

la potencialidad de generar un c o

bajo-salud que no se reduzca alsionales. Esto ha Permitido genesalud obrera empiece a perfilarse cc

ineludible. Además, se observa '

co-metodológicos que permiten definiry .å-o pro.Jd". på.ã é..t"..cerlas. Sin embargo, el análisis sistetnatizado

muestra tanto avanÃt .ã^o una serie de problemas no resueltos, sobre

todo en los terrenos metodológico, técnico ¡' prqct-igo'..y lagunas rmPorta¡l'

iãt a" conocimiento concretJsobre la realidad fabril'

la gravedad de los Problemas imPon

3s

,-

tal obrera.

un vacío teórico que conlleva necesariamente otro metodológico respectoa cómo abordar el estudio del proceso laboral en su relación con la salud,o sea, a la individuación de los elementos críticos Para su exploración.Esta cuestión resulta particularmente visible en el método LEST por dos

razones. Por una parte, centra sú análisis en la medición cuantitativa decada una,de las distintas cargas en el puesto de trabajo obviando su inte-

36

qué ésta se Planteó Iajalud" a fin de logrcomo un Proceso so

r I ^-r^---À-Å ¡a!luc rrcY4 ¿ lçuv-oración' Sin em-a salud colectivannnel del consu-

37

ción del proceso de desgaste.

ra Y eI PaPel d9 la exPe-

. A Pesar de su rmPo-rtan-

ttió; del consumo obreroud mental, dado que son

f para requerir de una re-

*i"uot d.l Presente trabajo'

Los asþectos de los esludios sindicales que permiten la reflexióri sobre

,.o..ró de constitución de una nuevâ práctica respecto a la salud obrerageneralmente no están exPlícitopropia dinámica. Así, destaca colas organizaciones sindicales quevindiðativo. Es decir, para que esto (

el Droceso de constitución de una nuevâ prácti a la salud obrera

obreros tengan una organlzrJlqn- +-_a-r--------T-izøfu democrática y con exPerienciaiencia de lucha;

irnt;rganñ"aciõ que þermita trrcer.socialmente visible la problemática de

salud. Én segundo lugar estos estudios, por sus resultados concretos, Per-miten entrevier la resiitencia patronal, apoyada por las instituciones esta-

tales, a que los obr;os vá!ãi-ffiãldo una práctica plopia respecto a lasalrrá: situación que actualizauniserie de cuestiones. Dado que la prime-

proceso labora-l son claves parala interpretación del proceso de desgaste.Ès decir, permiten entrever que la fuerza obrera capaz de modifrcar lascondicionês desgastantes es anie todo la que está organizada y materiùiza-da en el trabajo diario en la fábrica; la que se expresa como un !99y9I-c!4:

daremos especialmente los elementos concretos de la construcción. del pro-ceso de invãstigación sobre el proceso de producción en su relación con el

3B

II

IL2 El estudio del proceso de trabajo y salud: análisiscrítico de cuatro propuestas métodológicas

conoclmlentos para ta acclon srnolcat drrecta en los centros de trabajLo oue se ouiere resaltar en el análisiS son aorrellns elam--+^. -.+,É,..i ä er i, r " ã r ö äiË".iïiå"ï å,]'31,2'f ;Lo que se quiereLO que se qurere rcs¿r¡r¿if clr cl ¿ulanrsls son aquellos elementos. estén o

no explícitos en los textos, que dehnen las diferèncias cr,r"i"l.*-"J,'r." ,,.^y otro método en cuanto Procesosentrañar sus supuestos ePistemodeterminai/cuál ês la concepción

le tNsPaccróN ESTATAL

A1tt

aquello que se relaciona con los accidentes. Así, casi un 807o de los puntosde observación se refiere a un reöuento bastante detallado de los elementosy situaciones que pueden causar accidentes con consecuencias de dañotanto a las instalaciones como a los t¡abaiadores.

El resto de los elementos de observació'n y/o medición se refieren a laventilación (9 . I % ), la_ iluminaci 6n (3 . 4 %), gl¡r¡id_o (3 .0 %), Ia temperatu-ra (1 .7 %) , los gases ( 1 . 1 %) y los polvos (1 ,l %). La escueia enumèräciónde estos factores contrasta con el análisis pormenorizado de los elementos

.9.1-, Ia qu-e se reduce a si hay o no y cuánto. No se indaga ni respectod a-rpo de polvos, ni acerca de la proporción de obre¡os que está expuestaa ellos.

bajo como actividad y relación social. El manual, pues, expresa una nota-ble cosificación ya que, eliminado el trabajo como acrividad y relación

+2

ausente en todas las vertientes de la propuesta de la STPS, no inesperada-mente siguen sin jugar papel ninguno en la exploración del espacio despo-blado construido en la ruta básica de inspección del manual.

Resulta claro que este método ofrece pocos elementos rescatables parael estudio del proceso de producción en una perspectiva marxista, aun enel terreno puramente empírico. Su utilidad se restringe a Ia sistematiza-ción de las condiciones inseguras que puede facilitar cierto tipo de medidascorrectivas. En esta medida sirve a los sindicatos, pero no les permite te-ner una visión dinámica de los accidentes.

EL MÉTODO LEST

El llamado Método LEST fue formulado, originalmente, por un centro deinvestigación francés -el Laboratorio de Economía y Sociología del Tra-bajo del CNRS- sin relación directa con las "partes" interesadas en Iacuestión de la salud obrera, o sea, los trabajadores y Ios patrones. Sus au-tores lo ofrecen a modo de intermediario, científico y objetivo, en el con-flicto entre las partes, como "herramienta y reglas del juego aceptablespara todos".e Así, resalta como su idea central la conciliación entre losdistintos intereses a través de un "leng'uaje común'' basado en "datos tanobjetivos como sea posible".ro

A fin de construir este lenguaje común se parte en el Método LEST dela definición de Ias condiciones de trabajo como el "contenido del trabajoy las repercusiones que puede tener sobre la salud y la vida personal delos asalariados".rr En función de esta defrnición el LEST desarrolla cin-co dimensiones por estudiar, a co, la Carga Física,la Carga Mental, el Aspecto iempo de Trabajo.Quedan excluidos todos los ot a laboral como sonel salario directo e indirecto, lasción sindical, etcétera. IJna vezcomo objeto de estudio el puestodescripción objetiva en términoenumeradas.

El instrumer,ttg que lo permite es una guía de observación que ordenala recolección de información y la cuantifica por medio de una ierie de es-

Á^a1

Añaden los autores que, al socializar el conocimiento y establecer un siste-ma común de referencia, crea un terreno objetivo de discusién donde pue-den participar las "partss" -6¡¡p¡esarios y asalariados- junto con lostécnicos; cuestión que signifrca la desespecialización del estudio del puestode trabajo. El establecimiento de indicadores del conjunto de las condicio-nes de trabajo en la empresa es, finalmente, para los autores, el punto departida para la modificación del puesto de trabajc bajo una forma que per-mite prever las implicaciones de los posibles cambios.

La concepción de la relación entre él trabajo y ia salud expresada enei Método LEST es más compleja que la de la inspección estatal del traba-jo, dado que pone un mayor énfasis en ei conjunto de los elementos noci-

o ¡establecimiento de un equilibrio natural.ls Y es en función de estos su-puestos de normalidad ahistórica y de proceso como eterno retorno o rup-tura catastrófica, que se busca en el trabajo "todo lo que pone en peligrola salud del asalariado".

- En esta búsqueda el gida del tra-b¡jo al entenderlo com este ángulo,el trabajo como ¡elació e a ser oscu-

entre ambos y fraccionarse el proceso laboral en una sucesión desarticula-

+6

+7

pêra el csrudio comparativo.Ìn segund-o.lugar resulta bastante arbitrariaIa separación entre lacarga Mental y.el Aspecto psicosociológico, ya que

scuelas psicológicas que en función d"e dimensio_rentes. del proceso laboral. Aun así, la distincióngido tiende a borrarse en la seleccién de los indi_

ensión se incluyen indicadores de so_en la segunda se encuentran sobre

ativa.

tandarización de las dimensiones a edesespecializan este método. O semas de higiene y seguridad indust

rto cuanto como instrumento de ac_gación.e una serie.de elementos que poten_en el estudio empírico de ia rejaciónpoder hacer un uso adecuado de élcipales limitaciones como Þunto deimer lugar prevaìece una visión está_

;.*Ã" ã;;¡ ".¿".-i¿î'

fi JJ :ñlEn segundo lugar, al realizar unä

y mlra sus partes por separad-o_, se pmanera, se incrementan las dificultåinternas y externas. En tercer lugar,diciones de trabajo" hace que el-ca¡,la máquina, entre los obreros y entr(

+B

I-A PROPUESTA DE GARDELL Y FRANKENHAEUSER

ranejable' 1

"iO'iï"Uu¡o-salud que subyace a esta

51

(

(

compensada.20 El estrés repe-nera enfermedades demostra-el o los mecanismos específi-

Queda claro en esta conce deltrabajo en Ia fábrica moderna es-tudios una conexión entre eI casdel proceso laboral. Es decir, del

otécnico y se aleja explícitamente deológico respecto a la organización yxplicación del por qué la tecnologíao se han desarrollado de una manera

específica. Esta ausencia, como se verá, tiene efectos ulteriores sobre elmarco interpretativo de los hallazgos concretos. Por otra parte, destacaque no hay ninguna reflexión crítica respecto a la "enfermèdad", que setoma tal cual la concibe la medicina dominante. Es más, frecuenremenrese produce la impresión de que la inclusión en los estudios de los efectos

m resulta una cierta yuxtaposición entrelo nológico y lo médico, y nò una concep-tu

52

La misma manera de construir el proceso de investigación implica unatendencia predominante a cuantificar y medir objetivamente utilizandotoda la tecnología de medición existente. Sin embargo, esto no excluye laincorporación de elementos subjetivos y cualitativos. Es más, hay un pro'ceso sistemático de validación que muestra una correlación muy alta entreambas formas de generar información. Llama Ia atención, empero, quela mayor parte de los elementos cualitativos son cuantificados por mediode escalas; cuestión obligada por la lógica investigadora basada en "laprueba de hipótesis" con procedimientos estadísticos. Es decir, implí-citamente hayla aceptación epistemológica de un criterio de verdad soìa-mente captable en términos de correlación y diferenciación cuantitativapositiva. De nuevo habría que subrayar que este procedimiento no es aic-no a la estrategia de investigací6n traza.da, por.clì¿nto pretende produ-cir conocimiento como base para Ia acción sindical y legisìativa directa.Esto conlleva la necesidad, por Io menos a corto plazo, de asumir cor¡rr.r

propio el marco epistemológico científico dominante. Y en la era deì empi-rismo esto significa producir "datos duros" para poner sobre la mesa dcdebate.

Este mismo hecho se conecta con la relación entre suieto y obieto del

ción.Resulta evidente que esta propuesta metodológica contiene una serie de

elementos utilizables para el estudio de la relación entre el proceso de Pro-ducción y la salud. Sin embargo, es necesario tener presente que muchosde ellos ion de difícil aplicaciõn, dado que presuponen el Iibie acceso al

lo que se añade, además, una m¿ìnera insuficiente de definir el estrés ensí mismo y en su relación con la salud. Estas cuestiones, más que invalidarlos elementos conÇretos utilizados en el proceso de investigación, marcanla necesidad de escogerlos y ordenarlos en función de un marco interpreta-

J+

s permiìen caPtar los procesos prin-

EL MODELO OBRERO ITALIANO

55

objetivismo -basado en la suposición de la no-conflictividad- del Méto-

do LEST y de la propuesta de Gardell-Frankenhaeuser vinculada aI movi-miento sin-dical, pero dentro del marco específico de conciliación generadopor la socialdemocracia sueca.

El Modelo Obrero, en cuanto método de generación de conocimientosobre el proceso laboral en su relación con li salud, depende ta¡to de Iaforma de ordenamiento de los elementos estudiados corÃo de la dinámicadel mismo proceso de investigación. A fin de ordenar y delimitar la obser-vación se parte en él de la definición del ambiente como "el coniunto deIas condiciones de producción en las cuales la fuerza de trabajo y el capitalse transforman en mercancía y ganancia".3a Así, aunque se use el èon-cepto "ambiente" se le da un contenido distinto que en la medicina deltrabajo, ya que se ubica explícitamente como la expresión concreta -o elmedio- del proceso de valorización. Partiendo de èsta definición se distri-buyen en cuatro grandes grupos los elementos'del ambiente que son noci-vos para la salud.

. El prim.er^g-rupo abarca los factores que definen aI ambiente fuera ydentro-_de.la fábrica, a saber, temperatura, iluminación, ruido, humedaây ventilación. Ef s9gu1_do. grupo_está constituido por los facrores de riesgocaracterísticos de la fábrica: poìvos, gases, vapores, humos y sustanciãsquími^cas sólidas o líquidas. El tercer grupo se ref,rere al'¿-ratigaderivadadel esfuerzo fTsico. Efcuarto grupo, finalmente, incluye el restä de los fac-tores que causan cansancio, o sea, los ritmos de trabajo, la monotonía ylarepetitividad, lasposiciones incómodas, la tensión nËrviosa y la respon-sabilidad inadecuadã. Esta manera de ordenar los factores då nocividad

tetiza, por una parte, el conocimientona bajo la cual el obrero se representaica. De este modo se convierte en elobreros. Es importante anotar, sin

ón del grupo cuatro, no media en esta

órico de ras disciprinas involucrao.rlu t"totceptualización del cuerpo te-

-.Para apreciar la innovación del Modelo obrero respecto a estas disci-plinas hace falta remitirse a su opera(tenta¡:.eJ Srupo homogéneo, la exptdelegación y la validación consensuconocimiento respecto a un lugar deno-delegación, o sea, su sujeto son I

representantes niloS técnicos o profes

åilîlH"lmonio común consciente'jj'iåii2:na de los cuatro grupos de factores de

56

--1

polvos, el esfuerzo fTsico y las posiciones inc ra-

ï.s. De esta manera la principal innovación ideen una reconceptualizaciín dè los problemas de

los factores de riesgo de tal forma que sean coincidentes con Ia experienciaobrera directa en la fábrica. La ausencia de una reconceptualización no

resulta tan evidente respecto aJ grupo cuatro, que se refiere a los factoresfatigantes, excepción hecha del esfuerzo fisico. Incluye, así, ritmos y car-

gasãe trabajo, monotonía y repetitividad, grado inadecuado de responsa-¡itiaua, ercétera. Existe cierta ambigüedad respecto al contenido concep-tual de este grupo, ya que podría ser elernentos

señalados poi ti psicología industrial insatisfac-ción" Iaboral, o bien Ia enumeración d caracteri-za¡, a- ùna organización taylorista o fordista del proceso laboral y, Por tan-to, un intentó de concretar a través de estos elementos asPectos,esenciales

del impacto de la organizaciín capitalista del trabajo en la- salud.La åusencia de uná reconceptualízacíín de la relación trabajo-salud en

el Modelo Obrero se confirma además en la insistencia de Ia necesidad de

que los obreros "reapropien los modelos técnicos", sean los de los médi-cãs, los ergónomos o los ingenieros industriaìes. Esto revela una concep-ción instnmentalista de la ciencia para Ia cua-l su contenido es neutral ylo que importa es quién controla su uso social. Curiosamente esta visiónde La ciencia se contrapone con la que se expresa en el Modelo Obrero res-

rmo premisa que las opciones tecnoló-adoptado una mirada finalmente mé-

i::i: iä,'.|îåîii i::::å ;: ï;1rdológica de ubicarse en un horizonte

de visibilidad distinto a través de Ia recuperación de la subjetividad obre-ra. En suma, contiene una contradicción ya que' al mismo tiempo que se

enfatiza la potencialidad de la subjetividad-experiencia obrera de revelarla realidad de un modo distinto que Ia ciencia formal, ordena a la expe-riencia en el molde de ésta.

La innovación del Modelo Obrero no consiste, pues, en una visión dife-rente de la relación entre el trabajo y la salud, sino en que cambia Ia lógica

Lmientos al respecto. De esta maneranvestigación no es el cientíhco, sino elor los especialistas. Asimismo, la fuen-reriencia obrera colectiva. Se plantea,: el conocer y el transformar, ya queo de un problema es Ia búsqueda de

su solución. Sin embargo, la concepción del Modelo Obrero respecto alproceso de generación del conociPiglto y a la relación entre teoría y prác-iica, que poäe en el centro la subjetividad obrera y la no-delegación, plan-tea una serie de problemas.

5B

(o

tener una a sus alcances y limitaciones. Esto sólo puedelograrse c s estudios concretos, ya que, a pesar de utili_íåï#i ,Ë::îî:'iii:';ïï:*:'åiiJdií,il.' quere-

Así, lo os durante la fase ascendente de las luchasobreras italianas, de 1969 a 1975. svisión globalizadora. Partiendo del

-sin diferenciar entre ambiente v <

duando los riesgos y daños a la sjurportantes problemas como ritmos ynotonía, turnos y horarios, o ruido,iluminación, etcétera.37 Son estuávida en la fábrica, que merced a ell,individualmente. Eipresan, así, enplanteado como la lucha contra la

tria y tengan como lema ..la salud no;nación de la monetarizacíónde la en-Ite, pero al mismo tiempo revela una:xtrayéndola de la lógicá mercanril de3xlgencra_ya no es más que se paguenino que el trabajo se orgänice para serctora.realizados en base al Modelo Obrero

mlnantes.

ón, a mi modo de ver, son,a una lógica de negociaciónla correlación de iuerzas a

mo palanca la reconversiónrea-lizados, asimismo, tien-s en el proceso de investiga-

60

ecíficos requiere en mayor medidase caracteriza, así, por el estableci-

.a del trabaio y por Ia cristalización,n Ia cuestión ialud, a saber, los

salud.--iã.,,",tión de qué, cómo v dónde

ä;j;Ï:Ë1ffi:::::.iåä:flit: ;.ivo Por encima de lo subjetivo' Es

tiviãad obrera como el instrumentolos riesgos Yedad resPect

Porque sólo'eal de la fáb: riesgos Y daños que Ia ciencia for-:n lo

"referido al gruPo cuatro'4l¡o resulta novedoso en la medida en

a la cuestión de la medición' Es de-

ental el referir todas las mediciones

'géneo'delo Obrero que se guía la decisión

61

abajo v los daños a la salud que gene_

rc.el qué y cómorl¡lecido ,ino q,..,.:ación de la eipeoceso labora_l no

ns necesidades específicas de cada si_

ada de las másde donde pro-tudios globali-riesgos especí-

ìancras, parece necesario analizar al_

'¡ntttcron a los trabajadores refutar la)fl prcsentes en los centros de trabajola¡ nredidas y acciones instrumenta-

:cir, pudiero Å for"a, t^ u.i,r¿iru.iOnte a las situaciones concretas v acabar¡ado del conocimiento profesional en

"'3tüT,,Jlij':Ilï,'J,,rl':r"J;i;îå," i:i""'iil"1flr. -craramente exi osos cuando

o. inrent¡r lrttttllrttt :''-"-:';^::"-^::-Ïl""'Srento generado. En este con-::..l|:i::i:;;',i,, ¡,1,"'t"utte

dos presuntas' ¿Se hu lo;.;à;;;";;; conoci-LV^!v v' - - 63

:

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II

(i2

.:

nomenológico del pasado y del presente hasta_que haya pasado Por un mo-mento de ieorización. La ausencia de generalización y teorización del co-

6+

iI.3 Para ei estudio de

con el Proceso dela salud en su reiación

producción

cron.

LA HISTORICIDAD DEL NEXO BIOPSÍQUICO HUMANO

65

ración de la esencia de lo húrfano2 pasando por una conceptuaiizaciónde la enfermedad como equivalente a Ia enajenación y, por tanto, de lasaiud como la desenajenación.3

Al margen de las confusiones, Io especificamente nuevo que ha surgidodel estudio de la salud-enfermedad en cuanto proceso sociaì, es plantearel nexo biopsíquico como la expresión concreta en la corporeidad humanadel proceso histórico en un fnomento determinado. Esta concepción tienecomo piedra angular la identificación de la historicidad de los procesosbiológicos y psíquicos humanos. Es decir que plantea una ruPtura a Pro-fundidad con ei pensamiento médico, cuyo postulado fundamental es elcarácter ahistórico de la biología humanaa y, aunque más ambiguamentev con menos capacidad de hegemonizar el pensamiento científìco, de losprocesos psíquicos.5

La exploración del nexo biopsíquico humano históricamente esPecíficorequiere necesariamente de Ia construcción de un nuevo objeto de conoci-miento, dado que este nexo no es pensable ni estudiable a través del objeto"salud-enfermedad" establecido por la medicina dominante, y menos aúndel objeto "enfermedad". A fin de llegar a establecer este nuevo objetoes necesario hacer algunas precisiones respecto a qué significa ubicar enel centro de la preocupación la historicidad de los procesos biopsíquicoshumanos. Así, una primera cuestión se refiere a cómo pensar el hecho deque Ia'niología humana adquiere historicidad, contrario a lo que general-rnente se piensa. Esto invoiucra, por una Parte, un interrogante resPectoal nivei de complejidad a partir del cual esto ocurre y, por la otra, la recu-peración de la noción de "estereotipos de adaptación" o, según Ia expre-sión de Tambellini, "modos de andar por la vida".6 De esta manera, noes a nivel de los procesos celulares o subcelulares donde se manifiesta másclaramente la historicidad de Io biológico sino a los niveles de integraciónmayores y, especialmente, al nivel de complejidad que representa el cuer-po humano; cuestión que lleva inmediatamente a los modos de andar porla vida y los esterotipos de adaptación. Respecto a éstos habría que adver-tir de entrada que la concepción de adaptación que da la clave para enten-der la historicidad de la biología humana no es aquella de adaptacióncomo eterno retorno -o de vuelta a lo "normal"- basada en la concep-

Por el contrario, lo que está involucradosponder con plasticidad ante sus condicio-que se traduce en cambios específicos en

expresan como formas biológicas caracte-rísticas.

ente son

li,::åi :miento teleológicoe pierde de vista que muchos de los procesos de adapta'ción no sólo significan la sobrevivencia en condiciones corporales precarias

ón en estrés crónico se convierte en

) estructuras y Procesos corporales.lls mecanismos específrcos a través decidad a las observaciones epidemio-

pecífico. Los procesos Particulares dicaracterísticas a este nexo, que se col

termina la conformación áef proceso de desgaste y deì perhl patológico de

rsario hacer se refiere a cómo se con-,co en lo social, o, lo que es lo mismo,biológicas humanas. A Pesar de quen los individuos, ello no imPide quean sociales, Por cuanto emergen dei

;iå: T :"ä.:". ]'"1?i i$ :: i x."l å11::

-si es que alguna vez existieron estas "robinsonad¿5"- en que los hom-

si bien se puede dar el caso aislado,, qu" ambientè' ' , esto no invalida en absolde adaptaciórr" d"l grupo al cual pertenece' Por otra parte' estos casos ln-

ãiriJ;i;r "o prr"a.å-*'.la base säb.e la cual se const;uya una concepción

del nexoEstas

obieto cidið de lapecto a este objeto' En Ia medida enrzcterizan a las colectividades huma¡el nexo biopsíquico históricamente t

dos. Sin embargo, no es sutrcrente

Þ

È

t

;{

I

t,

t.i{I¡Èrf

o166

de andar por Ia vida. Arribamos aquí a la centralidad del concepto de

los elementos esenciales de la inserción socialar por una teorÍa de lo social, ya que cada unade manera distinta este problema llegando a

teorizaciones diferentes. La problemática que nos ocupa, si bien ha sido

abordada Dor el estructural-funcionalismo, ha tenido un desarrollo muchomás fecundo desde el enfoque del materialismo histór.ico,ra que se segui-rá, también, en este trabajo. EI fundamento teórico específico de optar porel concepto "proceso de trabajo" en su acepción marxista como categoríacentral én eÌ ánálisis de la producción social del nexo biopsíquico humanoes que permite dar cuenta de las formas sociales esPecíficas bajo las cuales

se da lá relación entre el hombre y la naturaleza. Es decir, ubica Ia clavedel entendimiento del carácter social del proceso biopsíquico humano en

de andar por- tabolismo ocurrebajo formas s nados medios deprôducción y , de los hombresäon los medio 'condiciones am-bientales" son la síntesis de estas formas sociales y no las condiciones na-turales ahistóricas.

Es preciso recuperar, t?TÞié_", el trabajo como la actividad específica-mente humana; como actividad consciente orientada a un fin, base de la

dar cuenta de ella.,

EL PROCESO DE PRODUCCIÓN CAPITALISTA

6869

secundaria pcro que en realidad determina en,gran medida la cuestión tec-nológica, se refiere a la relación_e-q1r_e_-capit_al y tlabajo. Es decir, es necesa-rio tener présente que el proceso de producción capitalista se desarrolla nosólo en condiciones de competencia entre los capitalistas individuales sinoante todo en un campo de lucha entre las fuerzas antagónicas del capitaly el trabajo.

Esta lucha se presenta en condiciones ordinarias (cuando no está plan-teado el cuestionamiento elobal de la dominación capitaiista) como la dis-puta por el plusvalor þerol también, como Ia disputá por cóÁo generarlo,o s€a, por cómo usar La fuerza de trabajo; cuestión indisolublemente ligadaal control sobre el proceso laboral. Ambas luchas tienen momentos de con-densación, por ejemplo en las revisiones contractuales o en las moviliza-ciones obreras, pero se expresan también cotidianamente en lgs centros detabajo. Allí se absorben en una sola, que es la conflictividad en el procesolaboral concreto. De modo que la disputa por cómo usar la fuerza de tra-bajo se convierte simultáneamente en la palanca de la disputa por cómodistribuir el valor producido entre plusvalor y salario. De esta manera, sipara el capital el proceso laboral es el medio del proceso de valorización,para el trabajo es el ámbito primario de la lucha contra la explotación.22Para ambos este proceso es inevitable y, por tanto, un espacio ineludiblede confrontación.- La conformación concreta del proceso laboral es uno de los elementosclave para la comprensión de los determinantes de la salud obrera, ya quepermite desentrañar de qué manera se constituye el nexo biopsíquico dela colectividad involucrada en é1. Resulta, pues, necesario descomponerloen sus elementos constitutivos a fin de analizarlos para luego volver a re-construirlo como proceso global, rescatando su movimiento dinámico res-pecto a la salud obrera.

Los elementos básicos de todo proceso laboral son el objeto de trabajo,los instrumentos de trabajo y el trabajo mismo.23 EI análisis de ellos tienedos vertientes, una técnica y otra social. Es preciso anaTízar no sólo las ca-racterísticas fÏsicas, químicas y mecánicas del objeto de trabajo sino tam-bién por qué y cómo llega a serlo, esto es, su vertiente social. De la misma

/U

la organización y división del trabajo que inpone,.de. la misma manera

.ãÃ.ifár caracte'rísticas del objeto ho se cumplen cabeimente más que en

boral corresponden a Ia subsunción

o a la conformación del proceso labo-icas de la base técnica y de la organi-más que sustentarse sobre formas dis-rr el modo concreto de lograrlo en el

:ra fase tenemos' así, la cooperación

;

Cada una de estas subetaPas muestJ..t;;;"r"to a la base técnica y Ir organización y división del traba3o,

mientras que entre una Y otra hayEl motor de estas transformacion

ta es, justamente, Ia comPetencia iIv trabaio. En la medida en que reP

íorno-a:situaciones anteriores, las et

como una sucesión histórica, vistas r

ts fases históricas tiende a predominareterminado de proceso de producción'hacer dos acotaciones. La primera es

77

-, frontación cotidiana entre trabajo y capital le imPrime3l y la heterogenei-dad técnica.en su interior.

El planteámiènto de que sólo el análisis del proceso de producción per-mite dar cuenta de cómo se viene constituyendo el nexo biopsíquico deuna colectividad obrera todavía resulta insuficiente, Falta, de esta mane-ra, un concepto para ir desde el proceso laboral concreto, analizándolocomo "condiciones ambientales", hasta sus expresiones en el cuerpoobrero.':-.4 fin de resaltar la diferencia entre el modo como se reDresenran esralcueStión la medicina del trabajo y la corriente de medicina iociaJ, es nece=sario hacer primero una distinción metodológica básica entre ambas. Deesta manera, el método de la primera, que es el del pensamiento médicodominante, se basa en gran medida en las reducciones sucesivas del objetode estudio particular, delimìtando componentes cada vez menos comple-jos y estudiándolos aisladamente. Y su construcción de conceptos está enfunción de éste. Este procedimiento tiene una ventaja innegable visto des-de la perspectiva experimental, va que permite "controlar" todos los ele-mentos menos el que se pretende estudiar. Sin embargo, su debilidad esque supone la posibilidad de entender el conjunto a partir de la suma desus partes. O sea, pierde de vista, o por lo menos no logra explicar satisfac-toriamente, mediante su propio planteamiento teórico-metodológico, Iasdife¡encias cualitativas entre los distintos niveles de compleiidad. Elmétirdo de la medicina social busca lo contrario, ya que .. piopär,. .o*-prender el nexo biopsíquico como proceso complejo con especihcidadcomo tal, lo que excluye reducirlo a la suma de sus partes. O sea, no puedeplantear reducciones sucesivas sino por el contrario Ia integración cadavezmás compleja de los elementos en el marco de una dinámica global quermprrme una nueva cualidad al conjunto. Sus conceptos deben, entonces,permitir: captar esta complejidad.

LAS CARGAS LABORALES Y EL PROCESO DE DESGASTE

teórico aquí propuesto..A frn de superar estos obstáculos es necesarioconstruir otra categoría, que es la de "cargas laborales".

La categoría "catga laboral" pretende lograr una conceptua-lizaciónmáS precisa de Io que hemos consignado hasta ahora con la prenoción de"condiciones ambientales" en lo que se refiere al proceso laboral. De estamanera busca resaltar en el análisis del proceso labora-l a los elem,entos deéste que interactúan dinámicamente entre sí y con el cuerpo obrero, gene-rando aquellos procesos de adaptación que se traducen en desgaste, enten-dido como pérdida de la capacidad corpor4 y psíquica potencial y/o efecti-va. Es decir, el concepto de carga posibilita un análisis del proceso laboralque extrae y sintetiza los elementos que determinan importantemente elnexo biopsíquico de la colectividad obrera y le confieren a ésta un modohistórico específico de "andar por la vida". Cabe señalar que esta nociónde "cargas laborales" se distingue de la utilizada en el método LEST fun-damentalmente porque no se refiere a ca-racterísticas estáticas del puestode trabajo partiðulai sino al movimiento dinámico. de los elemenfos delDroceso labora-I.3a-

En-eIÞaóõeso investigador ciertamente el primer acercamiento a lascargas es descomponerlas en tipos específicos, clue incluso abarcan los ries-gos particulares. Sin embargo, esto no quiere decir que son la simple sumade éstos, ya que sólo adquieren signifrcado pleno a partir de la dinámicaglobal del proceso laboral. EI segundo paso analítico, entonces, consisteen reconstruirlas con la lógica global de éste como punto de partida. Así,para aprehender mejor las cargas se pueden distinguir distintos tipos, agru-pándolas en físicas, químicas, biológicas y mecánicas, por un lado, yfisiológicas y psíquicas, por el otro, Las primeras tienen una materialidadexterna al cuerpo, que a-l interactuar con él se convierte en una nueva ma-terialidad interna. Las últimas -las frsiológicas y psíquicas-, por el con-trario, sólo adquieren materialidad en el cuerpo humano al expresarse entransformaciones de sus procesos internos; cuestión que resulta más com-prensible si analizamos cada una de ellas.-

Las cargas físicas pueclen ser ejemplif,rcadas por el ruido y el calor, quepueden ser detectados y hasta medidos sin involucrar al cuerpo humanoy d.

"rtu manera tienen una materialidad externa a é1. Al actùar sobre el

ðuerpo, o mejor dicho aI interactuar con é1, sufren un cambio de calidad,dado que dejan de contar como "ruido" o ''calor" y se convierten en pro-cesos intracorporales complejos. Por ejemplo, el ruido actúa sobre las'célu-las del oído medio e interno pero, también, sobre el sistema nervioso y

tz t.)

de tejidos, etcétera.31 La rotación de turnos en cuanto carga hsiológicaes, de la misma manera, ruptura de los ritmos fisiológicos básicos (los ci-

ción sostenida, la supervisión con presión, la conciencia de la peligrosidaddel trabajo, los altos ritmos de trabajo, etcétera. Pertenecen al segundogrupo cuestiones como la pérdida del control sobre el trabajo al estar elobrero subordinado al movimiento de la máquina; la descalificación deltrabajo resultado de la separación entre su concepción y ejecución; la par-celación del trabajo que redunda en monotonía y repetitividad; etcétera.a'Se advierte, claramente, que las cargas psíquicas no tienen existencia másque como relación entre los hombres y de los hombres con las cosas y quesólo adquiereri materialidad en los procesos psíquicos y corporales de ellos.En è-ste sentido la monotonía, la repetitividad y la desca-lificación signifi-

co y la fatiga nerviosa.En el casó de las cargas psíquicas resalta con particular claridad que son

:de¡¡--ser-=eomprendidas'eomo-l' ries-que las-generan.Ias cargas, inclu-rporeidad huma-

i como tal origina transformaciones

eri.ios procesos biopsíquicos, no es irrelevante p.reg-uni3T por qué se produ-

;; t på. qué se -àrrti"t" a un determinado nivel' Al intentar responderdos

a estas preguntas respecto a cuaJquiercarga fica

Ia bas lea-y división del trabajo). El otro es que

, de las cargas no es ajena a las rela-rjo en un centro de trabajo concreto

Iponer y agruPar las cargas en distin-iado, más que un Primer Paso analí-

;nihcado si no es dentro de Ia dinámi-indo paso en el proceso-investigadorde lás cargâs laborales a través del

aná-lisis de la interacción entre ellas en ei marco. ãe-la.lógica global del pro-

ceso laboral -.orno-pÃceso técnico y escenario de lucha- determinado

(

(

la realizacíín de un trabajo pesado e

rólo Iu suma de los efectos desgastant

". y J.l gasto calórico derivaão de remento

en âmbo-s." De la misma manera' has oca-

riã"".-"r..,os sinérgicor .î :l_,.^1"11 :,^i'"tT::resultan tóxicos en concentraclones

que, por

do"mistide la

15

74

sales" y una articulación totalmente distinta entre ellos. E¡rtendiendo a las, cargas corno los elementos que lìn1s¡i2a¡ la mediación entre el trabajo y

el desgaste obrero, la dinámica del accidente casi siempre involucra a va-rias de ellas; la carga mecánica, que interrumpe la integridad física corpo-ral, se desprende de las características de la maquinaria

-relación socialmaterializada-, pero no actúa aisladamente sino en combinación conotras cargas que determinan la condición en la cual el obrero se enfrentaa la máquina. Esta combinación de cargas tiène en cada caso una confor-mación singular. Ejemplificando, pudiera ser un obrero trabajando enuna posición incómoda (carga fisiológica), fatigado porque rota turnos(carga frsiológica y psíquica), aturdido por el ruido (carga fisica) y con ten-sión nerviosa por la presión de la supervisión y el alto ritmo de trabajo(cargas psíquicas); atravesado,þues, por una serie de cargas que, sin em-bargo, no sólo se suman sino que se potencian entre sí y concretan el procesode producción de modo singular. El "acto inseg'uro", es decir, la conductaequivocada o el "descuido" del obrero, en estas condiciones difícilmentepuede considerarse "culpa" de él -de la víctima- sino el producto deuna combinación de cargas determinada por la lógica glgbal del procesoIaboral.

Otro ejemplo de la interacción de las cargas en el marco de Ia lógicaglobal del proceso laboral pudiera ser el modo como se potencian entre síuna carga física como el ruido y algunas cargas psíquicas. De nuevo hayque pensar en un obrero frente a una máquina

-materialización de unarelación histórica entre capital y trabajo- que genera ruido ella mismay en su contacto con el objeto de trabajo, y que impone un modo específrcode trabajar: el movimiento de unas partes del cuerpo y de otras no; el rit-mo; las operaciones rutinizadas, monótonas y repetitivas. El ruido se tra-duce, aquí, en tensión nerviosa que se combina con los efectos de las car-gas_psíquicas, específicamente la sobrecarga cuantitativa y la subcargacualitativa, provocando un aburrimiento irritable y fatigante.

Al concepto de carga laboral tiene que añadirse otro más -el de des-gaste- para que se pueda reconstruirción coherente de la relación entre el ppsíquico de una colectividad obrera, ocomo se da en ella el proceso biológico

I

la desviació ste, Pues, la destrucción abrupta o lenta

lde ór!áhos de desarrollar una potelcialidad psíqui-

ca o b"iológi que añadir.que Ia noción de desgaste no'necesariairente se refiere a proceros irreversible^s' ya que frecuentemente

;" ñ;å;;;.;perar las pérdidas de capacidad efectiva y/o desa*ollar po-

tencialiciades antes hipotrofi adas'' , define como la pérdida de capacidaduede o no exPresarse e-ñ lo que la me-Iemás es necesario considerar el des-

ctivos -de reposición y desarrollo derlmente determinados por las caracte-n las sociedades capitalistas. Es decir,no ya se había dicho- bajo el capita-el uso deformadc y deformador tanto

Ies psíquicas, se convierte-en una acti-

". -rrãho mayor que el de rePosiciónpues, la combinación entre el desg?-ste

.a constitución de las formas históricasôstas a su vez son el sustrato generala constelación característica de enfer-ro el perfil patológico de un grupo so-

rción, ya que resalta como proceso ge-

t a la "enfermedad" como Proceso

Dartrcular.'-i;;;;rplejidad del desgaste supone que haya dificultad.es p_ara mos-

trarlo directamente, maxiñe potqùt en su mayor parte es inespecífico y' le-mentos fácilmente observables o medi-as veces no es

,nes o por medire más frecuencos, el perfrl patológico, los años de

o acelerado Y la muerte Prematura'los tres últimos carecen de sentido a

rn a un referente social' cuyo procedi-ito. Es decir, de nuevo habría que ad-

veftir contra la noción de una normalidad ahistórica concebida como el

aptar el desgaste, hasta ahoraque imPlica, es a través de Ios

"åsionei. En esta línea lo más

mitirían caPtar la Preseque referirlos a un dañeìtos indicadores de Pry ot.o, parámetros cbmo el gasto e ingesta calóricos'

Finalmente habría que recalcar que los procesos de desgaste caracteri-zan a las colectividades humanas y no primariamente a ios individuos.Esto es, si bien es cierto que el patrón de desgaste se expresa a través delos individuos que integran a Ia colectividad no es sino én era donde ad-

ajo, es posible decantar las particulari-eto y extraer las características genera-distintas etapas y subetapas típicas delas De esta manera) en la medida en

LA coNSTRUcclóN o¡,1 pRocESo DE rNVESTrc,q,cróN

7B

I

I

I

'.i

I

dicina social predomina en Ia investigación e incluso ha logrado permearel discurso de las instituciones estatales involucradas,as pero la prâctícade éstas se desenvuelve dentro del marcò, bastante empobrecido por cier-to, de la medicina dei trabajo y Ia seguridad industrial. Esta situación tie-ne una doble implicación, ya que, por un lado, existen condiciones parazrvanzat hacia una nueva comprensión de la salud obre¡a y generar unanueva práctica al respecto, péro, po, el otro, las Ìuchas poi l. salud se

desenvuelven parcial e inicialmente en el terreno impuesto por la legisla-ción, o sea, el de la seguridad e higiene laboral. Se requiere, por esto,de una metodología que genere conocimientos tanto para avanzar en Ianueva comprensión y práctica de Ia salud obrera como para su defensa in-medlata.

El planteamiento teórico expuesto respecto a la relación entre el procesode producción y la salùd colectiva prefigura como principio metodológicocentral el establecimiento de ia dinámica global que se da entre los distin-tos elementos involucrados. Así, ningún elemento aislado puede dar cuen-ta de cómo se constituye el proceso de desgaste de una colectividad obreray cómo se expresa en su nexo biopsíquico, ya que sólo son comprensiblesa partir del análisis de las relaciones entre el proceso de valorización, elproceso laboral y las cargas laborales en el marco de la correlación de fuer-zas entre capital y trabajo. Sin embargo, a fin de lograrlo resulta necesarioexplorar primero cada una de las dimensiones involucradas pero bajo unprocedimiento que permita, a cada paso, su reconstrucción dentro de ladinámica global. Es decir, al mismo tiempo que se requiere del estudio de,por ej ral concreto, la exploración de sus elementosdebe su relación con el proceso de valorizacióncomo s y debe enriquecer, a su vez, la comprensiónde éstos. El proceso investigador, de esta manera, es un movimiento cons-tante entre descomponer el proceso gl.obal en sus partes constitutivas y re-componerlo depurando los elementos secundarios; movimiento cuya di-reccionalidad se desprende, de nuevo, de la concepción teórica de larelación entre sus elementos.

todológica general, que adquiere particular im-p el tema que nos ocupa, se refiere al sujeto delp ecir, si está planteada la generación.de conoci-miento sobre Ia salud desde el horizonte de visibilidad de la clase obrera

BO

permite llegar a una to significa'

segun Oddãne,'que a que surge

de la acción directa rgutnentó':'r

las princiÞales obleciones a este plante; rte' que se

äå^1.;ä*.iàad'de los momentos de teorización en eì proceso de genera-

ción de conocimiento y, por la otra, que hace de la experiencia del l'gt"po;;;;h;;;géneo" áigä air..,.m.ht. equivalente a Ia experiencia de Ia

clase obrera.A pesar de estos problemas el plante

cuestiones que abordadas de otra mansut

máscam

ner acceso tanto a este conoclmlento: Ia visión obrera. No obstante, esto

lentido de ordenarlo, sino extraer losue van más allá de las particularida- I

des de Ia situación concÌ:eta. Esto ¿

teorización que no se Puede tomarcientíficas dominantes sino que se co

encuentro entre el conocimiento obr

de que los trabajadores desempeñenrólo iu objeto pasivo sino uno de sus

son esPontáneamente depositarios niLcePción teórica'Lco-de los trabajadores en Ia transfor-rcción de una distinta práctica social,nento respecto a la relación necesarian embargã, haY que r'r,alizar cómo se

)curre. Así, de nueva cuenta haY que

t que cual.quier grupo obre.ro emPrerl-: su ProPia exPeriencia, sino que de-

de su constitución, que sintetizan tan-

otros destacamentos obreros, tant(

r

tI

B1

pero é acer de loss. dado acterísticase como general en

cas en las cuales se desarrolló la investigación.

A MODO DE ILUSTRACIóN: I,¡. CONSTRUCCIÓN

DE LA INVESTIGACIÓN DEL DESGASTE EN SICARTS.Ä.

La investigación sobre el desgaste obrero en SICARTSA se piante6 a raízde una crãciente preocupacién de los trabajadores por el deterioro, cada

entrar a la empresa ni tener acceso a la información generada por ella ypor otras instituciones relevantes como el IMSS. IguaJmente había restric-èiones importantes er¡ cuanto a los recursos diagnósticos disponibles. Sin

. En la exposición se discuten aquellos eler^entos que tienen interés general para la construc-

ción de un proceso de investigación; en las notas se explican los detalles particulares del estudio

específico.

82

el apoyo casi-irrestricto de los traba-¡rmacrón sindical. Asimismo, se dis-robre la siderúrgica.ológicos arriba expuestos permitíanestudiar para poder analizar el pro-

blema de la salud en esta empresa en particular. Así, a frn de tener unavisión global de ésta era neceiario construir un proceso investigador quepermitiera conocer las relaciones entre el proceso de valorización, el pro-ãeso laboral, las cargas laborales y el proceso de desgaste, en el marco de

la correlación de fuérza entre capital y trabajo'ecidir qué técnicas de investigaciónr que permitiría captar mejor los as-ión inmediatamente relacionada, porrtitativo y, por Ia otra, con las distin-ación teórica dada al problema desta-

ca la preeminencia de su carácter cualitativo, dado que se enfatizan, porun laåo, la dinámica global de las relaciglcl a estudiar y, por el otro, los

aspectoé políticos. De a¡i surgió la necesidad de elegir instrumentos de ge-

neìaciónãe información aptos para caPtar estos Procesos sin excluir la po-sibilidad de cuantifrcar algunos-de sus elementos, Particularmente los refe-ridos al desgaste, ya que interesaba conocer su magnitud y no sólo sus

características cualitativas.En base a estas consideraciones se optó Por usar como uno de ios instru-

mentos básicos de investigación una encuesta levantada en las áreas de

trabaio a través de la discusicada ïna de ellas siguiendoObreros2 pero introduciendoanálisis de la información. Esta encucas del proceso laboral, Ias cargas laborale rnedi-das de þrotección existentes ylas propues o a las

medidai de prevención a instrumentar. C sta co-

lectiva además ayudó a sistematizar las preocupaciones obreras respecto

al deterioro de sú salud e impulsar Propuestas concretas de acciones a to-

ía automáticamente, emPero' qué ele-ni cómo analizarlos. De esta manera''eguntas-temas de discusión" en fun-tmente elaborada de las relaciones en-

tre proceso laboral, cargas laborales y daños a la salud. En cuanto a la for-

;;ã;h;;.".rtu, t. rifrti.ron los señalamientos del Modelo Obrero sobre

83

la necesidad de tener acceso aI conocimiento obrero a través del modo con-creto como los obreros se representan Ia realidad. La "encuesta-temas de

discusión" resultante era, pues, semejante en forma a las utilizadas en lasinvestigaciones realizadas con la metodología ortodoxa del Modelo Obre-ro, pero con algunas modificaciones importantes en el contenido. Asimis-mo, en el proceso de análisis sus resultados no fueron tomados como Iaúnica fuente de conocimiento, sino que fueron confrontados y comple-mentados con información generada con otros procedimientos; cuestiónque será retomada adelante.

El levantamiento de la encuesta se hizo siguiendo bastante de cerca elprocedimiento d manera se formaron gruposde trabajadores trabajo53 más importantes.Después de una alidad, el contenido y la ma-nera de llenar la adores interesados que parti-ciparan en una serie de reuniones de discusión y que colabo¡aran en la ve-rificación de los resultados de éstas en sus áreas de trabajo y con sus

compañeros. La discusión de las "preguntas-tema" generalmente reque-ría de tres o cuatro reuniones de unas dos horas. Durante las discusionesse validaron consensualmente los resultados, o sea, sólo se registró Io quetodos los participantes reconocían como verdadero. Los puntos dudososfueron llevados a las áreas de trabajo para su aclaración, sea a través deIa observación o en la discusión con otros trabajadores de éstas.

La parte de la encuesta referida al proceso labora-l abarca la insercióndel área de trabajo en el proceso labora-l global

-especialmente en función

de los núcleos que dan orden al conjunto-, el flujograma del área, su dis-posición espacial y sus subsegmentos. Estos elementos permiten tener unaidea global respecto a las articulaciones externas e internas del ârea, yaque dan un primer acercamiento a Ias transformaciones y el traslado delobjeto de trabajo, a los instrumentos de trabajo usados para ello y aI nú-mero y tipo de obreros que intervienensa y las características de sus ta-reas y de Ia relación entre ellos. Posteriormente se profundiza en el análisisdel o de los objetos de trabajo y las materias auxiliares, los instrumentosde trabajo y la orgatización y división del trabajo. Respecto a los primerosse precisan sus cualidades fisicas y químicas y su tamaño. Los aspectos de ,

los instrumentos de trabajo (maquinaria y equipo) que se recogen son su r

tipo en función de las operaciones realizadas (simples o complejas; regula-ridad del ciclo o no; su duración), los mecanismos de control sobre ellas,la fuente edivisión yentre opermento entquien y su relación con las otras tareas; Ia repartición de la toma de deci-siones sobre c6mo reafizar las tareas; el grado de destreza y conocimientonecesarios para realízar la tarea y el grado de responsabilidad en su ejecu-

su funcionamiento normal como cuando hay trastornos en la producción,o sea de su "segunda normalidad", ya que se puede saber lo que en reali-dad se hace y no lo que se supone que se hace. Asimismo, sê aprecia quese puede tener acceso mucho más fácilmente a la información relevante através de un procedimiento que parte del conjunto del proceso laboral yIuego despliega sus elementos constitutivos, que con un procedimientoque recoge las individualidades y las suma para llegar al conjunto, comosería el caso de la reconstrucción del proceso laboral con una encuesta in-dividua-l a los ob¡eros.

La reconstrucción y análisis del proceso laboral es el punto de partidade la segunda parte de la encuesta colectiva que se rehere a las cargas labo-rales. Su estudio no es más que el análisis del proceso laboral desde otroángulo que permite resaltar la interacción de sus elementos con el cuerpoy la mente obreros. En la encuesta colectiva las cargas fueron ordenadasde una manera semejante a los "grupos de riesgos" del Modelo Obrero,en la medida en que éste argumenta convincentemente que sintetizan larepresentación obrera de la realidad fabril.55 Sin embargo, el contenidode las "preguntas-tema de discusión" fue modificado en función de nues-tra teorización. Asimismo se incluyeron algunos elementos que permitenuna evaluación semicuantitativa de la intensidad de las iargas, dado quela simple constatación de su presencia o ausencia no es suficiente paraapreciar sus implicaciones en los procesos de desgaste.

El primer grupo de riesgos -caracterizado

según los elemêntos presen-tes fuera y dentro de la fábrica- incluye principalmente las cargas físicascomo son la temperatura, la humedad, la ventilación, el ruido, Ias vibra-ciones y la iluminación. Respecto a ellas se recoge si son un problema ono; cómo se generan (su relación con los objetos de trabajo, la maquinariay las condiciones de las instalaciones); su intensidad y duración aproxima-das; los lugares más críticos; los trabajadores más expuestos; y la influen-cia de la organización y división del trabajo sobre su intensidad y el tiempode exposición.

El segrrndo grupo -caracterizado

conforme a los elementos típicos dela fábrica- abarca esencialmente las cargas químicas, o sea, los polvos,fibras, humos, gases, líquidos y vapores, pero también las radiaciones. La

84 B5

8786

A pesar de que la encuesta colectiva permite un acercamiento rico a laproblemática del desgaste obrero se decidió complementarla y confrontarsus resultados con información generada mediante otros instrumentos.Dado que ninguna fuente proporciona simultáneamente información so-bre el proceso labora-I, las cargas labo¡ales y el proceso de desgaste, resultónecesarro usar varras de ellas para abordar cada una de estas vertientes.Respecto al proceso laboral lo más deseable hubiera sido poder estudiarloa través de la observación directa, utilizando un procedimiento semejanteal de Gardellss para la evaluación objetiva del proceso laboral, recogien-do por otra vía los elementos discutidos en la encuesta. Es decir, la hnali-dad de la observación no sería estudiar otros elementos del Droceso laboralsino validar lo vertido en la encuesta. Cabe recordar en éste contexto elalto grado de coincidencia encontrado en los estudios de Gardell entre laevaluación objetiva del proceso laboral realizada por un experto y la subje-tiva basada en encuestas con los obreros,ss lo que señala que es innecesa-rio usar ambas. Ante Ia imposibilidad de entrar al centro de trabajo -si-tuación que se presenta frecuentemente al investigador- se optó porconfrontar la información de la encuesta con la literatura especializada so-bre la siderúrgica6o y con los informes de la Secretaría del trabajo y Pre-visión Social (STPS).61 Ambas fuentes dan una visión mucho más þobredel proceso laboral, pero permitieron confirmar una serie de cuestiones re-portadas en Ia encuesta y no invalidaron ninguna.

A frn de enriquecer la información sobre las cargas labora.les hubo querecurrir de nuevo a las fuentes de información existentes. De esta manerase revisó la literatura especializada sobre los "riesgos" en la industria si-derúrgica,62 lo que permitió verificar y precisar sobre todo cuáles son lascargas fïsicas y químicas características de ella. Asimismo, la revisión delos informes de las inspecciones-de la STPS confirmaron las graves defi-ciencias de las instalaciones y el equipo de protección general. Por otraparte, los informes revelan no sólo la mirada limitada dè esta initituciónsobre las condiciones de trabaþ en su relación con la salud, que ya se dis-cutió en el capítulo anterior,63 sino también su actuación cóncreta en elconflicto obrero-patronal alrededor de Ia- cuestión de la salud de los traba-

nicas ba-qtante comple¡a1. r unan con

I_n con_n conbargo,

cabe hacer varias consrderaclones al respecto. Lã-Smediciones no sustitu-yen al anáIisis global de las relaciones entre el proceso de producción y el

proceso de desgaste, sino que se hacen para enriquecerlo. De esta manerano son interpretables en función de sí mismas o algr"rna norma abstracta,sino justamente a la luz de Ia dinámica global del proceso laboral. ISurl-mente resulta necesario reafizar las mediciones en función de la compren-sión de Ia dinámica del proceso laboral, ya que de otro modo pueden daruna representación falsa de qué ocune en él por estar hechas en lugaresy momentos irrelevantes.

En el proceso de confrontación y enriquecimiento de la información re-sulta especialmente importante la exploiación de las distintas vertientesdel desgaste y su cuantificación. En la investigación de SICARTSA se hi-cieron tres acercamientos complementarios al de la encuesta colectiva,usando distintas fuentes de infor-mación. De esta manera) se usaron Ios daitos de los exámenes médicos periódicos realizados por la empresa66 paraconstruir el perfil de morbilidad qeneral de los obreros y en función deltipo de trabájo, antigüedad y edaä;67 los datos de accidentes corrigipndolos denominadores con base en el escalafón;68 y los datos de rotación-ex-pulsión según tipo de actividad y áreas de trabajo en base al escalafón yIa nómina.6e Esto permitió, por una parte, verificar la validez de Ia infor-mación de la encuesta colectiva y, por la otra, hacer un análisis más preci-so de Ia relación entre el proceso laboral y el desgaste, especialmente a par-tir de la inserción específica en éste y del incremento en la morbilidad enfunción del tiempo trabajado. Asimismo, el análisis de la rotación-expul-sión de los obreros abrió Ia posibilidad de formular algunas hipótesis res-pecto a qué tipos de desgasie son obstáculos absolutoì para sèguir en eltrabajo siderúrgico y, por tanto, acortan definitivamente la vida laboralde los obreros aun sin llevarlos a la muerte.

Existen varias otras alternativas para enriquecer el análisis del desgasteque sin embargo no fueron usadas debido a las limitaciones ya señaladas.Así, el acceso a los expedientes clínicos del IMSS, con todo y las limitacio-nes que tienen, hubiera permitido hacer un análisis semejante al hechocon los exámenes médicos periódicos, pero con las ventajas de disponer deun volumen mayor de información y poder trabajar con una muestra re-presentativa.To lgualmente, hubiera sido importante rea-lizar cierto tipode exámenes clínicos. Finalmente hubiera sido de suma importancia hacerun seguimiento en el tiempo del perhl de morbilidad de los obreros (estu-dio prospectivo)7r tanto para resolver los problemas de las temporalidadesdistintas del estudio de las características del proceso laboral y las cdrgasy el proceso de desgaste, como para precisar su impacto sobre la duraciónde la vida laboral de los trabajadores. Es además la única manera de con-trolar el llamado "efecto del obrero sano".72 Sin embargo, el análisis dela morbilidad en función de antigüedad y tipo y ârea de tiabajo compensaparcialmente esta información.

La segunda gran vertiente de acercamiento aI problema, que_represen-ta otro eJe analítico del proceso laboral (las cargas laborales y el desgaste)

B9

-1

del zEst tdeefar c

que les imponen las dimensiones eco-a manera de conocerlas es justamenteeso laboral concreto t t"."î":I.Lå11:

ä T:î:Xiiåli:obrera.

Ensayamos varias maneras de aconcreto de investigación. Así, se

como "estrategia de generación dmejor su contenido específico y su.r

chã de clases y en la cãmpetcncia intercapitalista. Por otra Parte, a fin de

COnOcer el "trabajo" en Cuantg protagonista obrero.colectivo, era necesa-

rio precisar las caiacterísticas de su proceso de constitución específicl Peroen êl contexto general de la clase obrera mexicana. Finalmente, dado que

Ia confrontació-n de clase no ocurre en un camPo abstracto de fuerzas, re-

sultaba indispensable abarcar en el análisis Ia actuación de las instanciasestatales invólucradas en el tema, incluyendo al sindicalismo ofrcial.

Pa¡a el aná-lisis de la estrategia de generación de plusvalor se explorarontres vertientes, a saber, el desárrollo-de la productividad, el desarro[o de

los salarios y laa éstas se usó irias. En base ada de explotaci

ostos de producción.76 En cuanto a lafábrica se hizo un primer acercamien-

' :ï'ïî å: i: n :;"¿ 1ï.f :, ::t\î :1::bargo, en la medida en que éste.es uno de los terrenos más aguäos.de con-

froritación entre capital y trabajo, fue retomado en el análisis de los con-

flictos laboraJes y lue además analizado a la luz de información de laencuesta colectivâ respecto a la organización y división del trabajo. A finde ubicar la cuestión de la competencia intercapitalista, que èn el caso es-

pecífico de la industria siderúrgica está matizada por su papel estratégicoän el desarrollo industrial, se revisaron en base a documentos algunos as-

pectos de la "crisis mundial del acero" y de la reconversión de la siderur-gra mexlcana."" Los elementos recogidos, esencialmente a través de estudios anterio- tres,78 para conocer el froceso de- constitución del obrero colectivo en.SI-

iCARTSA fueron su oiigen social, experiencia laboral previa, característi- I

cas educativas y edad, pero ante todo su historia de organización.y de¡

lucha. Para estó se analizó el contrato colectivo -expresión formalizadalivindicativas-, distinguiendo entree trabajo y Io referido a su uso;7s

ninar la correlación de fuerzas entre¡obretlae s

ura-rado Ia experiencia colectiva respectonflictos ponen además al descubiertos. Son, así, momentos especialmente i

er las características específicas de Ia

io ..,^. vertientes se entretejen en la

cuestión concreta de la salud obrera; cómo cada uno de los protagonistas

desplieea sus estrategias al respecto' nu

^ïã,. i""f.t^ación ãocumentals. y e la

Þarticipante" (no como estrategia de or

ä"rr.ttãut por'la propia investigació: s€

ãontenidos-del contrato colectivo res¡ ra;

defensa de la salud. Asimismo, se ani

námica alrededor de la salud en los r

:ión y la retroalimentación entre estas

Inocer la relación dinámica entre el

frontarlos entre sí y atalizar la capac

blecidas en ia formulación teórica' I

si la información considerada relevavamente permite una reconstrucciórde lo esencial) de las relaciones qutIas relaciones de determinación que

si decimos que la conformación del

9031

Segunda parteoor Asa Cristina Laurelly Mariano Noriega

III.1 La empresa Y los obreros

LA SIDERURGIA MEXICANA Y SICARTSA

q5