FCE - CID 1Ífce.unal.edu.co/publicaciones/images/documentos-economia-65.pdf · 1 Universidad...
Transcript of FCE - CID 1Ífce.unal.edu.co/publicaciones/images/documentos-economia-65.pdf · 1 Universidad...
ISSN 2011-6322 · Junio 2015
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis yCristiano Codagnone
Sobre algunos efectos sociales y cognitivos de la restitución de tierras
Some Cognitive and Social Effects of Land Restitution
Documento Escuela de Economía
N˚ 65
DocumentosFCE - CID
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina2
P
ágin
a2
Francesco Bogliacino1, Gianluca Grimalda
2, Laura Jiménez
3, Daniel Reyes Galvis
4, Cristiano
Codagnone5
Sobre algunos efectos sociales y cognitivos de la restitución de tierras6
Resumen
En este estudio se presentan los resultados preliminares de una serie de experimentos de
campo con una muestra de desplazados y una muestra de beneficiarios de programas de
restitución de tierras. No tuvimos acceso a datos oficiales y por lo tanto la restitución es
declarada por los participantes. El trabajo se realizó con varias comunidades de la
región de Montes de María en la segunda mitad del 2014. En término de características
socio-demográficas, los beneficiarios no son significativamente diferentes de los
desplazados.
Los beneficiarios muestran un incremento significativo de la tasa de devolución
en el juego de confianza. No existen comportamientos diferentes de sanción en el juego
del dictador con castigo, pero un patrón parece emerger en los más pobres.
Finalmente, no se observan diferencias sistemáticas en el desempeño cognitivo en las
pruebas Raven y Stroop. Eso implica que no se estén logrando reducciones
significativas del efecto ancho-de-banda de la pobreza, coherentemente con las críticas
según las cuales la restitución tiene que ir acompañada de medidas que la vuelvan
sostenible a mediano plazo.
Palabras Claves: Confianza, Raven, Stroop, Normas Sociales, Titulación de tierra
Clasificación JEL: C93, I38, Q15
1 Universidad Nacional de Colombia [email protected] correspondencia: F. Bogliacino,
Universidad Nacional de Colombia, Carrera 30, No 45-03, Bloque 311, oficina 12b, 3165000
ext. 12431 2 Universidad Jaume I; Kiel Institute for the World Economy, Centre for Global Cooperation Research [email protected] 3 Becaria Fondazione Franceschi. [email protected] 4 Becario Open Evidence. [email protected] 5 Università degli Studi di Milano. [email protected] 6 Agradecemos la financiación de Open Evidence para cubrir parte de los gastos. Laura Jiménez agradece
a la Fondazione Franceschi por la beca. Daniel Reyes agradece a Open Evidence por la beca. Francesco
Bogliacino agradece a la Fundación Universitaria Konrad Lorenz por la disponibilidad de tiempo ofrecida
en el mes final de su contrato para llevar a término el primer trabajo de campo. Igualmente agradece el
Igualmente agradece el apoyo de la Universidad Nacional por el apoyo en el segundo trabajo de campo.
Todo el equipo agradece al personal de Cedecampo y a Gabriel Urbano por la disponibilidad y por los
contactos. Agradecemos a los líderes campesinos por la disponibilidad y la ayuda en involucrar la
población de sus comunidades.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina3
Some cognitive and social effects of land restitution
Abstract
In this study we show the preliminary results of a series of field experiments with a
sample of displaced population and a sample of beneficiaries of land titling programs.
We didn‟t get access to official data, thus land restitution is self-declared by
participants. The fieldwork was carried out in Montes de María region in the second
half of 2014. Regarding socio-demographic characteristics, beneficiaries are not
statistically different from displaced.
Beneficiaries show a significant increase in return rate in the trust game. There is
no difference in the sanctioning behavior in dictator game with punishment, although a
difference in the pattern seems to emerge in the poorest.
Finally, there isn‟t systematic difference in cognitive performance in Raven and Stroop
tests. This latter result implies that no significant reduction is achieved in the poverty
induced bandwidth effect, coherently with the existing critiques that this program
should be coupled with other measures to make it sustainable in the medium run.
Keywords: Trust, Raven, Stroop, Social Norm, Land titling
JEL classification:: C93, I38, Q15
FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS
CENTRO DE INVESTIGACIONES PARA EL DESARROLLO - CID
RectorIgnacio Mantilla Prada
Vicerrector GeneralJorge Iván Bula Escobar
Facultad de Ciencias Económicas
VicedecanoRafael Suárez
DecanoJosé Guillermo García Isaza
Escuela de Economía
DirectorÁlvaro Martín Moreno Rivas
Coordinador Programa Curricular de EconomíaRaúl Chamorro Narváez
Centro de Investigaciones parael Desarrollo CID
DirectorManuel José Antonio Muñoz Conde
SubdirectoraVilma Narváez
DocumentosFCE - CID
La serie Documentos FCE considera para publicación manuscritos originales
de estudiantes de maestría o doctorado, de docentes y de investigadores de
la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Colombia;
resultado del trabajo colectivo o individual y que hayan sido propuestos,
programados, producidos y evaluados en una asignatura, en un grupo de
investigación o en otra instancia académica
Documentos FCE-CID Escuela de EconomíaISSN 2011-6322
La serie Documentos FCE-CID puede ser consultada en el portal virtual:http://www.fce.unal.edu.co/publicaciones/
Director Centro Editorial-FCEÁlvaro Zerda Sarmiento
Equipo Centro Editorial-FCENadeyda Suárez Morales
Pilar Ducuara López
Yuly Rocío Orjuela Rozo
Contacto: Centro Editorial FCE-CID
Correo electrónico: [email protected]
Este documento puede ser reproducido citando la fuente. El contenido y la forma del presente
material es responsabilidad exclusiva de sus autores y no compromete de ninguna manera a la
Escuela de Economía, ni a la Facultad de Ciencias Económicas,
ni a la Universidad Nacional de Colombia.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina5
Sobre algunos efectos sociales y cognitivos de la restitución de tierras
Por Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis,
Cristiano Codagnone
1. Introducción
La Ley de Víctimas o Ley de Restitución de Tierras (1448 de 2011) cumple en el 2015
cuatro años. Representa un compromiso enorme del Gobierno colombiano con las
numerosas víctimas del conflicto y crea escenarios novedosos a nivel mundial en
término de reconocimiento y reparación. Ha sido también ampliamente criticada
(Sección 2 abajo), por falta de financiación, por la lentitud de la ejecución, por las
condiciones de inseguridad y el estrecho margen económico en el cual se está
desarrollando el proceso, evidentemente afectando las posibilidades de lograr
sostenibilidad a largo plazo del retorno.
Hay un seguimiento en curso de las personas beneficiadas a través de una
encuesta, pero estos datos todavía no están disponible para la comunidad académica.
Cuando se tendrá acceso, se volverá fundamental un esfuerzo de evaluación para poder
identificar el alcance y proponer eventualmente reajustes.
En general, desde una perspectiva académica la actual falta de información ha
tenido un peso enorme en poder formular un juicio, sin embargo la opinión pública
también ha carecido del insumo necesario para poderse formar una opinión razonada.
Este estudio nace precisamente con esta motivación: identificar posibles alcances del
proceso de restitución a través de un ejercicio de recolección y análisis de datos. La
fuerza de este estudio está en que se rige sobre una metodología de experimento de
campo: los datos no se refieren a respuestas a preguntas, sino a comportamientos y
decisiones por parte de los participantes en tareas incentivadas. Se trata de un estudio en
escala pequeña, por los límites presupuestales de la investigación y por falta de acceso a
la información oficial de las autoridades (y a pesar de nuestro esfuerzo de contacto).
La lógica de este estudio es comparativa: se intenta comparar una serie de
variables entre la población que ha recibido la tierra y la población que todavía se
encuentra desplazada. Obviamente la asignación de tierra no es una variable que pueda
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina6
P
ágin
a6
ser objeto de manipulación experimental dentro de nuestro diseño, y en cuanto tal no
podemos sostener que lo que estimemos tenga interpretación causal. Sin embargo
tuvimos mucho cuidado a la hora de diseñar la medición, contactamos varios grupos a
través de líderes comunitarios y esto nos permitió tener heterogeneidad en la muestra y
variabilidad de la asignación de tierra dentro de cada comunidad. Adicionalmente,
controles estadísticos muestran que las características socio-demográficas están
efectivamente balanceadas dentro de los dos grupos de desplazados y beneficiados
(Sección 6.1 abajo).
El trabajo de campo se llevó a cabo entre Julio y Septiembre 2014 en la región
de Montes de María, logrando la participación de personas de varias comunidades en
María La Baja, Carmen de Bolívar, San Jacinto, Mampuján, entre otras.
El tema de asignación de tierra es muy estudiado en la literatura económica
porque la transición desde títulos informales hacia formales se ve como un cambio
institucional capaz de alinear los incentivos de los agentes económicos con el objetivo
del desarrollo, básicamente dando garantía jurídica de goce de los frutos de la inversión
y posibilidad de utilizar el bien como colateral en el caso de acceso a crédito (Sección
4.1).
En este estudio nos enfocamos en el desempeño cognitivo de los que recibieron
la tierra, comparado con el desempeño de los desplazados y analizamos en qué medida
el proceso ayuda a reconstruir tejido social.
En la literatura científica más reciente se subraya como la pobreza actúe como
un impuesto cognitivo: la presión ejecutada por las consecuencias de los errores
cometidos en condición de escasez induce a equivocarse porque absorbe “ancho de
banda”, o sea capacidad cognitiva (Sección 4.2). Objetivo de este trabajo es investigar si
el proceso de restitución es capaz de suavizar el impacto de la pobreza en los
desplazados. Con el fin de medir el impacto cognitivo, se implementaron dos pruebas
(Raven y Stroop test) que han sido utilizados en otros experimentos con campesinos en
la India.
En segundo lugar, a través de dos series de experimentos se pretende medir
como el proceso de restitución afecta la reconstrucción del tejido social. La falta de un
sistema de relaciones y conexiones es parte de los obstáculos de los desplazados en salir
de la pobreza. Adicionalmente, la condición de víctima crea desconfianza que afecta la
vida social y comunitaria. En nuestra medición nos enfocamos en la medición del grado
de confianza y en la actitud hacia las normas sociales (Sección 4.3).
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina7
Entre los resultados principales encontramos que el proceso de restitución afecta de
manera positiva y robustamente significativa una de las medidas de confianza. Al
opuesto, no hay diferencias significativas en el desempeño cognitivo de desplazados y
beneficiarios de la restitución, coherentemente con las críticas según las cuales la tierra,
sola, no basta para lograr salir de la pobreza. La actitud hacia las normas sociales no es
significativamente diferente entre los dos grupos, aun si parece serlo entre los más
pobres (Sección 6).
Como siempre ocurre, también es importante señalar los límites de la
investigación. Primero, no ha sido posible cruzar los datos con fuentes oficiales y por lo
tanto la asignación de tierra es medida a través de una respuesta de los participantes.
Segundo, la muestra de participantes no es aleatoria, por lo tanto no es representativa.
Tercero, la dimensión de la muestra es limitada, lo cual afecta la robustez del análisis
econométrico. Cuarto, estos resultados son preliminares, en el sentido que el marco del
estudio es más amplio.
Este informe continúa con la siguiente estructura. La Sección 2 introduce
brevemente las características de la Ley y la discusión que ha generado. La Sección 3
presenta una panorámica no exhaustiva de la región de Montes de María donde se
realizó el trabajo. La Sección 4 aclara el contexto teórico detrás del análisis. La Sección
5 explica los procedimientos experimentales para un público que no tenga conocimiento
técnico del tema. La Sección 6 presenta los resultados. Finalmente la Sección 7 formula
algunas observaciones finales. En los varios Anexos es posible encontrar todos los
materiales utilizados para el trabajo de campo.
2. La Ley de Restitución de Tierras
La Ley de Victima o Ley de Restitución de Tierra (1448 de 2011) es el combinado de
dos estrategias políticas: por un lado la decisión de garantizar continuidad institucional
al tema de la garantía de las víctimas, recogiendo y consolidando lo que ya estaba
dentro de la Ley de Justicia y Paz del 2005; por otro lado, la apuesta de este ciclo
político de “normalizar” la situación de la tierra como contribución hacia el anhelado
acuerdo de paz con la guerrilla de las FARC, puesto que el tema de la tenencia de la
tierra ha sido siempre señalado como una de las determinantes claves del medio siglo de
conflicto que vive el país (Grupo Memoria Histórica, 2013).
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina8
P
ágin
a8
A la vez, la apuesta por los diálogos de paz se puede considerar como el primer
resultado del debilitamiento de los grupos ilegales, consecuencia del fortalecimiento del
ejercito bajo el ciclo político Pastrana-Uribe, y que derivaron en la muerte de „Tirofijo‟,
Raúl Reyes, „Mono‟ Jojoy y Alfonso Cano, líderes de dicha organización. Al estar la
guerrilla confinada en pocas áreas estratégicas, se requiere una puesta en discusión de la
estrategia militar. Secundariamente, la senda de crecimiento de Colombia, fuertemente
sesgada hacia la inversión extranjera directa y el modelo „extractivista‟ se ve
negativamente afectada por la presencia de factores como el conflicto, que aumentan el
riesgo del país y la tasa a la cual el país logra endeudarse.
Sobre estas bases, el gobierno de Juan Manuel Santos (desde 2010) ha lanzado una
iniciativa ambiciosa en pro de la resolución del conflicto armado (manteniendo la
iniciativa militar).
Dentro de esta estrategia política el programa de reforma de tenencia de la tierra,
enmarcado dentro de la llamada ley de víctimas, entró en efecto en junio 10 de 2011
(Robinson, 2013).
La Ley de Víctimas, está agrupada en torno a tres componentes principales, a
saber: a) asistencia y atención, b) prevención y protección y, c) reparación integral.
Dichos componentes principales están, adicionalmente, apoyados por cinco
componentes transversales, enfoques: a) diferencial, b) territorial y, c) psicosocial;
además de d) participación efectiva de las víctimas y e) sistemas de información
(Comisión de Seguimiento de los Organismos de Control, 2013). De esta forma, la Ley
pretende delimitar las medidas judiciales, administrativas, sociales y económicas,
individuales y colectivas; para beneficiar a las víctimas de las violaciones del conflicto
armado interno. Todo esto, dentro de un marco de justicia transicional, que les facilite a
las víctimas el ejercicio de sus derechos a la verdad, la justicia y la reparación de forma
tal que estas personas puedan ser dignificadas a partir de la cumplimentación de sus
derechos constitucionales. La implementación de esta Ley implica grandes progresos en
cuanto a los derechos de las víctimas, puesto que supone la implementación de “una
política integral de atención, asistencia y reparación y superar un enfoque netamente
asistencialista y humanitario” (Comisión de Seguimiento de los Organismos de Control,
2013).
Para algunos, este es el programa más ambicioso nunca realizado (Rettberg,
2015). Consecuentemente, se subrayan problemas financiación, puesto que dentro del
CONPES (2011), se identificaban 56 billones de pesos y en el actual Plan Nacional de
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina9
Desarrollo (PND, 2015) el rubro para el goce efectivo de derechos de las víctimas es de
7 billones, mientras que Vargas y Villaveces (2015) estiman que el compromiso sería
alrededor de 13.5% del PIB (a pesos del 2011).
Pero esta no ha sido la única crítica, puesto que en general varios organismos han
señalado tanto la lentitud del proceso como en general los problemas de garantizar un
regreso seguro y a condiciones sostenibles en el mediano plazo. Han sido publicados
varios informes que intentan documentar la dinámica de implementación de la ley
(Forjando Futuro, 2015, 2014a, 2014b).
Como ejemplo de las críticas se puede ver más en detalle el informe de Amnistía
Internacional (2014). Este documento fue construido a partir de investigaciones que
lideró la organización en 2013 y 2014. La delegación de Amnistía recorrió diferentes
zonas del país: Cauca, Valle del Cauca, Sucre, Cesar, Magdalena, Atlántico, Meta y
Bogotá. En diferentes oportunidades, se reunió con varios sectores de la población
colombiana: reclamantes de tierras y sus representantes, miembros de organizaciones no
gubernamentales, representantes de comunidades indígenas y afrodescendientes,
abogados, campesinos, académicos, defensores de Derechos Humanos, entre otros.
Además, sostuvo también encuentros con entidades nacionales y regionales: Unidad de
Restitución de Tierras, Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas,
Unidad Nacional de Protección, Centro Nacional de Memoria Histórica, Defensoría del
Pueblo, Fiscalía General de la Nación, Procuraduría General de la Nación, Contraloría
General de la República, Instituto Geográfico Agustín Codazzi, Superintendencia de
Notariado y Registro, entre otras.
Este informe tenía como objetivo analizar el actual proceso de restitución de
tierras, teniendo en cuenta los intentos anteriores de otros gobiernos por solucionar el
tema de la tierra en Colombia (reforma agraria). Además, se hace una revisión de los
avances que han tenido las diferentes autoridades involucradas en garantizar el avance
de la Ley 1448. Dentro de estos análisis, Amnistía Internacional identifica ciertos
aspectos problemáticos mencionados en 2013 por la Comisión de seguimiento de los
organismos de control. Esta Comisión había mencionado, entre otros, que el problema
de la ley de restitución consiste en que la reparación integral que se pregona, no se ha
dado. Se sigue estando bajo una “política de asistencia, atención y reparación a las
víctimas del conflicto (…) enfática en el componente de ayuda humanitaria, frente a un
componente de más largo aliento como la reparación integral” (pág. 11). Dicha ayuda
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
0
Pág
ina1
0
humanitaria ha sido simplemente una indemnización que se le ha dado a los
desplazados. Entonces, la reparación integral a las víctimas es una aspiración, pero no
una realidad. Además, la comisión también afirmó que todo está en etapa de diseño, es
decir, que no se están implementando las políticas. No sólo hay incumplimiento de las
metas trazadas inicialmente, sino incumplimiento sobre las correcciones a dichos
plazos; hay dificultades para las víctimas en cuanto al acceso a los programas de
beneficios y servicios estipulados en la ley; has escaso o nulo control para dar cuenta de
las obligaciones adquiridas; e inconsistencia en los datos publicados. Como si fuese
poco, ha habido lentitud en la atención a las víctimas. Al año 2013 había 43.509
solicitudes sobre 286.409 predios. La Unidad de Gestión de Restitución de Tierras
Despojadas ha atendido únicamente el 19,5%, y fallado sólo el 1,0%. El tiempo valioso
que se ha perdido en el avance de la Ley, puede tener que ver con las tardanzas en los
trámites de la expedición del protocolo (Comisión de Seguimiento de los Organismos
de Control, 2013).
Los diferentes análisis que realizó Amnistía Internacional (2014), no sólo
subrayan los aspectos ya mencionados, sino que dejan como resultado el planteamiento
de una serie de otros obstáculos que, desde su perspectiva, se están presentando en la
implementación de la Ley. Las dificultades que se plantean en el informe resaltan: 1) la
exclusión de ciertas categorías de víctimas; 2) la falta de garantías de seguridad y
necesidad de una protección completa; 3) la falta de garantías de una restitución
sostenible de tierras; 4) la falta de capacidad y coordinación institucional; 5) una
discriminación persistente de género; 6) la no restitución de los territorios indígenas y
afrocolombianos; y 7) la falta de garantías al derecho a la no repetición, incluida la
impunidad.
A partir de lo anterior, la organización hace referencia a una serie de
recomendaciones. Entre estas últimas se destacan: 1) la protección de los participantes
en el proceso de restitución de tierras; 2) la necesidad de garantizar la sostenibilidad de
la restitución de tierras; 3) hacer valer los derechos de las mujeres y las niñas; 4) hacer
valer los derechos de los pueblos indígenas y las comunidades afrodescendientes; 5)
ofrecer garantías de no repetición y poner fin a la impunidad por los desplazamientos
forzados; 6) dar instrucciones a la Unidad de Restitución de Tierras (consultar el
informe para conocerlas en detalle); 7) aspectos a ser considerados por los jueces y
magistrados (consultar el informe para conocerlos en detalle); y 8) aspectos puntuales
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
1
dirigidos al Gobierno, la guerrilla y la comunidad internacional (consultar el informe
para conocerlos en detalle).
Efectivamente el proceso ha encontrado desde el comienzo dificultades,
vicisitudes y un clima de inseguridad que refleja también la existente situación de
conflicto.
En 2012 hubo momentos de mucha tensión, cuando el 28 de agosto hubo un
atentado contra la líder del proceso “Narrar para Vivir” (brinda colaboración a mujeres
de los Montes de María sobre el proceso de tierras), en el municipio de San Juan
Nepomuceno. Posteriormente, en octubre y noviembre de 2012, hubo dos amenazas en
cada mes contra los integrantes de la Mesa de Víctimas del Carmen de Bolívar.
Adicionalmente, hubo amenazas contra varios jueces y magistrados encargados de los
procesos de restitución de tierras y hostigamientos a campesinos víctimas del
desplazamiento para que retiren sus solicitudes de reparación o para que vendan los
predios otorgados; y cuando los carteles de la Unidad de Restitución de Tierras de
Bolívar son colocados para informar públicamente el inicio de los procesos
administrativos de restitución sobre algún predio, estos son removidos rápidamente
(Becerra, 2012).
A pesar de todos los problemas que puede presentar la Ley de Tierras y
Reparación de Víctimas, entre los primeros beneficiados con la implementación de la
Ley son los habitantes del municipio de María la Baja, ya que la Unidad Administrativa
Especial de Gestión de Restitución de Tierras (organismo encargado de atender los
reclamos de las víctimas y de presentarlas ante los jueces), ha declarado que tienen
prioridad en el proceso (Verdad Abierta, s.f.c.) Lamentablemente, han sido identificadas
más de 1600 infracciones sobre 4000 hectáreas, en los procesos abiertos en los Montes
de María. Las faltas incluyen, siguiendo al Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural
y al Instituto Colombiano de Desarrollo Rural (2011), violaciones a las “normas de
protección de tierras por desplazamiento forzado inobservancia de prohibiciones para la
venta de predios objeto de reforma agraria y fraudes en los procesos de transferencia de
bienes pertenecientes al Fondo Nacional Agrario” (pág. 1). Según le explicó el ministro
de Agricultura al diario el Colombiano, “(…) se infringieron las normas en las ventas de
tierras, [se encontraron] documentos de ventas adulterados y falsificados, otros que
violan la protección de bienes por ser una zona especial de desplazamiento, ventas a
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
2
Pág
ina1
2
muy bajos precios, y otros en que se utilizó información de campesinos deudores para
presionarlos a vender sus tierras” (Monroy, 2011).
Esta es una de las razones que ha llevado a que esta zona de los Montes de María
sea el lugar elegido para llevar a cabo este seguimiento de la Ley de Tierra.
Cabe señalar que dentro de la muestra objeto del estudio está la población de
Mampuján. Las 1465 víctimas de Mampuján fueron un caso símbolo de reparación que
ocurrió dentro del anterior marco legal definido por la Ley de Justicia y Paz. Alcanzaron
la etapa final del proceso, con la reparación integral y la condena de los victimarios.
„Juancho Dique‟ y „Diego vecino‟ se vieron obligados a hablar acerca de los actos
criminales cometidos y acerca de los bienes y garantías con las cuales van a reparar a las
víctimas. La comunidad de Mampuján ha sido reconocida como una víctima colectiva,
dado que sus redes históricas, económicas y socio – culturales se han visto trastocadas.
Así, los paramilitares causantes del desplazamiento deben responder por “la ruptura del
tejido social; el ataque a una identidad cultural y a tradiciones ancestrales; la
desarticulación de los movimientos sociales y económicos; la imposición de un modelo
violento y autoritario en las relaciones de la comunidad; y la estigmatización de los
campesinos de Mampuján, que siguen siendo señalados como supuestos guerrilleros en
las ciudades en donde buscaron refugio hace ya más de diez años” (Verdad Abierta,
2010).
3. La región de los Montes de María
3.1 Características geográficas
Los Montes de María (MM) son una subregión perteneciente a la costa caribe
colombiana, una de las seis grandes regiones en las que está dividido el territorio
colombiano. Está ubicada en la zona norte del país, entre los departamentos de Bolívar y
Sucre (De los Ríos, 2011). Los Montes de María tienen una extensión total de 6297
Km2, de los cuales 3719 Km
2 corresponden al departamento de Bolívar y 2578 Km
2 al
de Sucre; esta es una zona que posee gran biodiversidad de flora y fauna, en donde la
quinta parte del área total departamental está compuesta por quince municipios de
ambos departamentos (Aguilera, 2013). A saber, los municipios de Carmen de Bolívar,
María la Baja, San Juan Nepomuceno, San Jacinto, Córdoba, El Guamo y Zambrano se
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
3
encuentran Bolívar; y los de Ovejas, Chalán, Colosó, Morroa, Los Palmitos, San
Onofre, San Antonio de Palmito y Toluviejo, en Sucre (De los Ríos, 2011).
Según Promontes (citado por Aguilera, 2013), los suelos, la cobertura vegetal y,
desde luego, el paisaje de los Montes de María, son altamente dependientes del clima
característico de la región. Este es influido por la presencia de múltiples fuentes
hídricas, aparte de la cercanía al mar y el régimen de precipitaciones; los vientos alisios
del norte y del noroeste y la ubicación de las montañas. De esta forma, hay una gran
variedad de paisajes, con pisos térmicos cálidos y medios, y regímenes climáticos secos
y húmedos. Entonces, la temperatura oscila entre 20°C y 24°C en las áreas de clima
medio y entre 26°C y 30°C en las áreas de clima cálido; por su parte, las humedad
oscila entre 75% y 85%, y las precipitaciones anuales promedio de lluvias están
alrededor de 1500mm. El régimen pluviométrico es bimodal, en donde los niveles más
altos se registran de mayo a junio y entre septiembre y noviembre.
3.2 Características económicas
Promontes (citado por Aguilera, 2013), afirma que MM tiene tres zonas principales: 1)
La zona plana, localizada entre la carretera Troncal de Occidente (Sector El Vizo -
Sincelejo) y el río Magdalena. Hacen parte de esta zona los municipios de El Guamo,
Zambrano, Córdoba y parte de los municipios de San Juan Nepomuceno, San Jacinto y
Carmen de Bolívar. La actividad económica predominante en el área es la ganadería
extensiva y la explotación maderera. No obstante, hay suelos ideales para la agricultura
en la zona comprendida entre la carretera Transversal del Caribe y el canal del Dique
(parte del municipio de María la Baja), debido a que hay disponibilidad de un
importante distrito de riego; así, también son habituales los cultivos campesinos de
maíz, arroz, yuca, ñame, plátano, tabaco, café y aguacate, aunque recientemente se han
introducido cultivos empresariales de ají picante, cacao y palma de aceite (Aguilera,
2013). Adicionalmente, como lo indica De los Ríos (2011), estas zonas también son
importantes para empresas agroindustriales que necesitan grandes terrenos para
monocultivos de maderables (Teca), y de agro combustibles (Palma africana), además
de la minería.
2) La zona montañosa, localizada entre la Transversal del Caribe y la Troncal de
Occidente y de la que hacen parte los municipios de Chalán, Colosó, Morroa, Ovejas y
parte de los municipios de Toluviejo, San Antonio de Palmito, Los palmitos, San
Onofre, Carmen de Bolívar, San Jacinto y San Juan Nepomuceno. En esta zona se
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
4
Pág
ina1
4
encuentra la serranía de San Jerónimo, ubicada en dirección suroeste-noroeste y que
tiene una longitud de 110km de largo y una altura aproximada de 700 metros sobre el
nivel del mar. La actividad económica en esta zona está regida principalmente por
cultivos de economía campesina (como los descritos anteriormente). El problema radica
en que, como lo afirma Aguilera (2013), ha habido enormes daños ambientales a los
recursos naturales debido a que los campesinos desarrollan sus actividades
agropecuarias de subsistencia en las faldas de las montañas y en los nacimientos de las
cuencas hidrológicas y así, los bosques característicos de esta zona, con inmensa
diversidad de fauna y flora y, además, grandes productores de agua; han sido afectados
por la deforestación, lo que ocasiona problemas ambientales de deslizamientos,
erosiones de suelos y deterioro del hábitat.
3) La zona de litoral, situada al occidente de los Montes de María, y la cual
corresponde en toda su extensión al Municipio de San Onofre. Es un territorio con
abundancia de manglares, grandes paisajes marítimos con posibilidades de ecoturismo y
recursos costeros; según Aguilera (2013), estos incluyen ecosistemas asociados como
ciénagas, lagunas y aguas subterráneas, formaciones coralinas, playas marinas y una
variedad de flora y fauna.
Los MM han sido históricamente una región humilde pero con abundancia de alimentos,
hasta el punto de ser considerada “la despensa del Caribe”. Dicha denominación
responde a la enorme cantidad de alimentos allí producidos, así como a su calidad
(UNDP, 2010). Además, como bien lo indica De los Ríos (2011), los Montes de María
son un corredor geográfico fundamental, no sólo por la gran biodiversidad de
características geográficas, sino por las importantes vías terrestres a las que está
conectado, además de la salida al mar con la que cuenta. De esta forma, la zona de
Montes de María es estratégica para la producción, tráfico y venta de drogas ilícitas en
toda la zona caribe. Esto ha hecho que la zona esté en permanente disputa de diversos
grupos armados ilegales. Por lo tanto sus habitantes nunca han podido aprovechar las
grandes ventajas de vivir en dicha región. Cerca de un 40% de la población de Montes
de María vive en el campo (casi el doble de porcentaje de ruralidad del país) y tiene
acceso a las tierras cultivables, bosques y recursos hídricos anteriormente descritos; sin
embargo tienen índices de pobreza elevados, derivados de deficiencias en empleo y
educación, además de deficiencias en el sistema de salud y en servicios públicos como
electricidad, agua y alcantarillado (Aguilera, 2013).
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
5
3.3 Características poblacionales
Según el censo de 2005, en los Montes de María viven cerca de 438.119 personas. De
este casi medio millón de personas, únicamente el 12.8% de las viviendas cuenta con
los servicios básicos de electricidad, agua y alcantarillado. Otros datos del censo
nacional de 2005, muestran que en la región no hay cobertura de salud para un 23,7 %
de las personas, que uno de cada cuatro niños menores de cinco años presenta
desnutrición aguda mientras que otro está en riesgo de desnutrición; además, 75.891
personas, no saben leer ni escribir, lo que representa un índice de 22,8% de
analfabetismo. Ahora, en términos económicos, el promedio de ingreso diario es de
$15.000 diarios por hogar (para el año 2005), es decir, sólo el 40% del ingreso
requerido para comprar lo mínimo necesario. Así. El 59,7% de la población tiene
necesidades básicas insatisfechas (UNDP, 2010). Dicho índice, conocido también como
NBI por sus siglas, es uno de los más altos del caribe colombiano: casi todos sus
municipios tienen entre 50 y 100 personas con NBI por cada cien, siendo Colosó, El
Carmen de Bolívar y San Jacinto lo más pobres.
El problema de pobreza está relacionado con el tema de la tierra y las políticas
seguidas por el INCORA hoy INCODER. En la época del presidente Carlos Lleras
Restrepo, las decisiones gubernamentales iban enfocadas a promover la
descentralización, comprando tierras a grandes propietarios para vendérsela a los
campesinos a bajo costo y con financiación a través del crédito agrario. El problema
surgió cerca de una década más tarde, con el auge de los productos químicos para abono
y anti-parasitarios. Los campesinos se empezaron a endeudar para poder comprar estas
nuevas tecnologías, quedando sin recursos para producir y sin las semillas naturales.
Para poder sanar sus balances se vieron obligados a vender sus terrenos especialmente a
cultivadores de palma de aceite para la producción de biocombustibles. A los
campesinos se les ofrecieron las opciones de la compra de la tierra, o de sembrar palma
en sus tierras. Siendo la palma un cultivo de rendimiento tardío, esto de alguna manera
expuso los campesinos a riesgos excesivos que no podían cubrir (UNDP, 2010).
3.4 El conflicto
El estudio del conflicto en Montes de María es un argumento demasiado amplio para ser
abordado dentro de este estudio. El verdadero objetivo de este párrafo, a través de
evidencia anecdótica, es recordar brevemente que el conflicto en la región tiene una
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
6
Pág
ina1
6
historia larga, con múltiples actores armados involucrados y que los niveles de violencia
alcanzaron topes muy altos, con hechos documentados muy graves.
El surgimiento de la lucha armada en la región data ya cerca de 50 años. Si bien
las partes involucradas en el desplazamiento suelen ser las mismas (Guerrillas,
Paramilitares e incluso la Fuerza Pública), las formas en que estas se articulan con
estructuras económicas o, inclusive políticas, varía. En general, en esta zona ha habido
muchos intentos de reforma agraria (que datan desde los años 60) como forma de
combatir la concentración de tierras (Gallón, 2011). Precisamente, los primeros en tratar
de combatir dicha concentración de tierras, fueron los miembros de la ANUC
(Asociación Nacional de Usuarios Campesinos) línea Sincelejo. Esta llegó a ser una de
las organizaciones campesinas más fuertes del país durante los años 70, promoviendo la
redistribución de la tierra, a fin de que cada campesino tuviera un terreno propio,
incluso a través de la toma o recuperación de tierras de ganaderos y grandes propietarios
(UNDP, 2010). Llegaron incluso a obtener apoyo gubernamental, debido a que el ya
desaparecido Instituto Colombiano de Reforma Agraria (INCORA hoy denominado
INCODER), adquirió grandes terrenos en los años ochenta para dividirlos y
posteriormente otorgarlos a campesinos que lo necesitaban (Verdad Abierta, 2013). Así,
este movimiento campesino logró que algunos de los municipios que componen los
Montes de María tuvieran una participación activa en las luchas agrarias de esa década a
partir de métodos pacíficos. No obstante, este pacifismo llegó a su fin cuando se
involucraron grupos armados en la lucha.
El primer grupo insurgente que ingresó en esta lucha fue la guerrilla. Ellos
sentían cierta simpatía por los campesinos, dado que los de la ANUC buscaban
oportunidades para aquellos campesinos sin tierra, para que pudieran producir sus
propios cultivos y terminar con la concentración de la tierra. Entonces, las guerrillas
empezaron a amenazar a los terratenientes, que eran en su gran mayoría, ganaderos.
Dichos terratenientes, al no estar de acuerdo con la pérdida de sus tierras, apoyaron el
surgimiento del paramilitarismo, como forma de evitar la toma de sus tierras y de
recuperar aquellas que ya habían perdido. Así, la violencia de los paramilitares se desató
también contra los miembros de la ANUC (UNDP, 2010). Entonces, fue cuando la
guerrilla aumentó sus actividades delictivas, incluyendo las „vacunas‟, el „boleteo‟ y el
secuestro, además del terrorismo. A mediados de los años ochenta, todas las
organizaciones al margen de la ley llevaron a cabo trabajos políticos en la población, a
partir de la pérdida de poder de los movimientos campesinos (como la ANUC). Esto
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
7
llevó a que en la década de los noventa, tanto las Fuerzas Armadas Revolucionarias de
Colombia – FARC-, como el Ejército Revolucionario del Pueblo – ERP- y el Ejército de
Liberación Nacional – ELN-, se disputaran con las Autodefensas Unidas de Colombia –
AUC-, el control de los Montes de María, para transformarlo en punto estratégico para
el tráfico de armas y estupefacientes (Aguilera, 2013). Allí, el despojo de las tierras se
dio primordialmente por las compras ilegales, las tomas violentas de predios, incluso
aquellos otorgados por el INCORA, pero que habían acabado a manos de foráneos,
testaferros y ayudantes de las facciones paramilitares de las AUC (Verdad Abierta,
2013). Las disputas territoriales agravaron la crisis humanitaria en los Montes de María,
incluso hasta el siglo XXI, causando masacres y desplazamientos masivos (Museo
Itinerante de la Memoria, s.f.). Los „paras‟ se impusieron por la fuerza, a través de los
bloques „Héroes de los Montes de María‟ y „Canal del Dique‟, quienes entre 1995 y
2005 perpetraron 42 masacres, destruyeron bienes y ocasionaron el desplazamiento
forzado (Aguilera, 2013). Como autores de algunas de estas masacres, se responsabiliza
a varios grupos, llamados El guamo, María la Baja, Zambrano y Calamar, quienes
operaban en el departamento de Bolívar (Verdad Abierta, 2013).
Uno de estos crímenes fue cometido el 10 de marzo de 2000. Tal como lo
confesaron Édwar Cobos Téllez, alias „Diego Vecino‟ y Úber Enrique Bánquez, alias
„Juancho Dique‟, exjefes del Bloque Héroes de los Montes de María; ese día fueron
desplazadas 300 familias. Cuentan ellos que ese día se reunieron en la finca llamada „El
Palmar‟, de San Onofre, Sucre. Allí, el entonces jefe del Bloque Héroes de los Montes
de María de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), Rodrigo Mercado Pelufo
alias „Cadena‟, reunió 60 de sus hombres. Se transportaron en tres camiones,
atravesando Palo Alto y Retiro Nuevo hasta llegar a María la Baja. Una vez allí, se
encontraron con otros 90 hombres, bajo las órdenes de Luis Francisco Robles Mendoza,
alias „Amaury‟ y de otro hombre conocido como alias „Gallo‟. Una vez arribaron,
cortaron armas de árboles y exhibieron sus armas de fuego; raspaban el suelo con sus
machetes, y lograron que las familias de María la Baja huyeran, recordando que cerca
de un mes antes, el mismo grupo de autodefensas había masacrado a 60 campesinos de
Carmen de Bolívar (Verdad Abierta, s.f.). Entre esa misma noche y el día siguiente,
alias „Diego Vecino‟ y alias „Juancho Dique‟, planearon y ejecutaron la masacre de 11
campesinos de „Las Brisas‟, una vereda de Mampuján. Este hecho produjo que se
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
8
Pág
ina1
8
desplazaran a Cartagena, Sincelejo y otros municipios de la región, más de 1200
personas (Verdad Abierta, 2010).
Actos delictivos de esta índole se han presentado por doquier. En la tabla 1 se
resumen las masacres que tuvieron lugar en los Montes de María. Cabe destacar que
según la fuente que se consulte, pueden encontrarse diferencias en cuanto a, por
ejemplo, el número de víctimas o el lugar exacto donde ocurrió. Se encuentra también
que algunas masacres están reportadas como una sola junto con otras, ya que tuvieron
lugar una tras otra espacio-temporalmente.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
9
Tabla 1. Masacres que tuvieron lugar en los Montes de María
Dónde Cuándo Autor(es) Número de víctimas
El Carmen de Bolívar: corregimiento El Salado, sitio
Loma de las Vacas y vereda El Balguero. Ovejas:
corregimientos de Canutal y Canutalito, y veredas
Pativaca, El Cielito y Bajo Grande. Córdoba: vereda La
Sierra1
Entre el 16 y 21 de
febrero de 2000
Bloque Norte de los Paramilitares – Salvatore
Mancuso, “Jorge 40” y “H2” (delegado de
Carlos Castaño)
60 víctimas: 52 hombres
y 8 mujeres
Macayepo, Carmen de Bolívar2 Octubre 16 de 2000
Alias “Juancho Dique” – Ex jefe paramilitar
del Frente Héroes de los Montes de María 35 víctimas
11
Chengue, Ovejas (Sucre)3 Enero 17 de 2001
Alias “Cadena” – Ex jefe paramilitar del
Frente Héroes de los Montes de María 35 víctimas
11
Las Brisas, Bolívar4 Marzo 11 de 2000
Alias “Juancho Dique” y alias “Diego
Vecino” – Ex jefes paramilitares Frente
Héroes de los Montes de María
12 víctimas
Pichilín, Sucre5
Diciembre 4 de 1996 AUC (en complicidad con Policía y Armada) 14 víctimas (aprox.)
Colosó, Sucre6 Octubre 8 de 2004
Frente 35 del bloque Martín Caballero –
FARC 5 víctimas
Pijiguay, Ovejas (Sucre)7
Septiembre 6 de
1997 Salvatore Mancuso – Ex jefe paramilitar 6 víctimas
Caserío El Parejo – Chinulito, Colosó (Sucre)8
Septiembre 13 de
2000
Bloque Montes de María de las AUC
11 víctimas
Chalán, Sucre9 Marzo de 1996 Frente 35 de las FARC 11 víctimas
Retiro Nuevo, Bolívar (habitantes de El Limón, San Pablo
y María La Baja)10 1998-1999
AUC – “Juancho Dique” siguiendo órdenes
de alias “Cadena” 5 víctimas
Fuente: 1(Centro nacional de memoria histórica, 2009);
2(Verdad Abierta, s.f.a.);
3(Mejía, 2008);
4(Montaño, 2013);
5(El Espectador,
2014); 6
(Rutas del conflictoa, s.f.);
7(Fiscalía General de la Nación, 2011);
8(Rutas del Conflicto
b, s.f.);
9(El Espectador, 2010; Grupo de memoria
histórica, 2013); 10
(Verdad Abierta b, s.f.b.).
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina2
0
Pág
ina2
0
Las cifras de desplazamiento, otorgadas por lo que antes se conocía como Registro
Único de Población Desplazada – RUPD-, afirman que sólo en María la Baja en 1999
hubo 326 desplazados; en 2000, el número aumentó hasta 1691; y en 2001, la cifra llegó
a 6221 (Verdad Abiertac, s.f.). Las cifras de Acción Social indican que en total entre
1998 y 2009 fueron desplazados forzadamente de la región de los Montes de María
215.505 personas. De este total, el 33% pertenece al municipio de Carmen de Bolívar,
seguido por el 11,7% del municipio de San Onofre, el 9,6% de Ovejas, y el 8,3% de
María la Baja (De los Ríos et al., 2012)
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina2
1
4. Marco teórico y metodológico del estudio
4.1 El método experimental
En economía, el método experimental se refiere a la posibilidad de controlar el ambiente
dentro del cual se miden las variables dependientes y el proceso a través del cual se
asignan las variables independientes.
Un ejemplo puede ser esclarecedor. Imaginemos que queramos estudiar el
impacto de una variable, por ejemplo el estado emocional, sobre las actitudes hacia el
riesgo. Desde luego, es posible obtener datos observacionales de ambas variables y
buscar alguna forma de asociación estadística. Sin embargo, para poder probar una
asociación causal, en la forma débil del ceteris paribus7, es importante poder excluir
explicaciones alternativas plausibles. Cuando se trabaja con datos observacionales,
existe el riesgo asociado con variable omitida, con causalidad invertida o con error de
medición (por ejemplo por selección, en el caso que los datos se observen solo bajo
condiciones particulares): si bien refutar una hipótesis alternativa es
epistemológicamente más “fácil” que confirmarla, las posibles explicaciones
alternativas son a priori ilimitadas (Shadish et al. 2002).
El método experimental se basa en la asignación aleatoria a los participantes, de
la variable independiente que se quiere estudiar, por ejemplo el estado emocional, y en
la recolección de los datos de las variables dependientes sobre las cuales se mide el
impacto. Se asigna dicha variable independiente a un grupo seleccionado al azar
mientras que la variable dependiente (en este caso por ejemplo la decisión en condición
de riesgo) se mide tanto en el grupo experimental (el que recibe la “dosis” de la variable
independiente) como en un grupo al cual no se asigna (grupo control). La aleatorización
sirve para dos funciones: (1) elimina el impacto de variables omitidas; (2) en promedio,
balancea las características iniciales (pre-test) que impactan sobre la variable
dependiente (Shadish et al. 2002).
En economía, las mediciones de las variables dependientes se hacen a través de
incentivos monetarios. Este procedimiento se basa en la llamada utilidad inducida. La
idea es crear una relación directa y prominente entre comportamiento en el ambiente
experimental y la remuneración que se recibe para la participación al experimento
7 En economía el concepto de causalidad suele expresarse de forma débil: la causa precede el efecto, la
causa covaría con el efecto y explicaciones alternativas plausibles se pueden excluir.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina2
2
Pág
ina2
2
(Smith, 1994; 2010). Empíricamente, el uso de incentivos monetarios es muy debatido:
no parecen generar efectos sistemáticos pero reducen el ruido estadístico en las
respuestas (Camerer & Hogarth, 1999). En muchos casos, la presencia de incentivos
monetarios sirve para reducir el sesgo de deseabilidad social en las respuestas, porque
induce a que las personas se enfoquen en las tareas. Es estándar en economía no mentir
nunca a los participantes (no deception): la transparencia sirve para que el participante
confíe en el mecanismo de enlace entre comportamiento y pago, y por lo tanto, que el
comportamiento que se mide no termine siendo afectado por algún sesgo.
El tema del control ambiental y de la asignación aleatoria sirve para garantizar
validez interna, que es la posibilidad de interpretar causalmente una correlación
estadística. Sin embargo, la evidencia de cualquier experimento es altamente local, es
decir no puede inmediatamente interpretarse de manera general. Los problemas de
generalización se refieren a la posibilidad de extender los resultados a otros contextos,
tratamientos usados y participantes (Cronbach et al. 1980), y obviamente la posibilidad
de interpretar las mediciones de laboratorio en términos del constructo teórico que se
pretende medir (por ejemplo la confianza o la actitud hacia el riesgo). En términos
técnicos, estos suelen llamarse respectivamente problemas de validez externa y de
validez de constructo (Shadish et al. 2002).
Para obviar algunos problemas relacionados con los experimentos y en particular
la posibilidad de tener acceso a algunas poblaciones8, o de hacer medición afuera del
contexto aséptico de un laboratorio, en economía se usan experimentos de campo,
donde es importante tener presente que el control experimental es menor (Levitt & List,
2009).
Es obvio que muchas variables de interés no se pueden asignar de manera
aleatoria, y este es precisamente el caso de la asignación de la tierra. Por esta razón en
este estudio se combinan datos observacionales (a través de cuestionarios pos
experimento, que se reportan integralmente en los anexos 5 y 6) y mediciones
experimentales.
8 En otras palabras, es obvio que si nos limitamos a experimentos de laboratorio en Bogotá, muy
difícilmente lograremos tener acceso a mediciones sobre poblaciones campesinas o indígenas, por
ejemplo.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina2
3
4.2 El problema de la propiedad de la tierra
Desde una perspectiva económica, la titulación de la tierra tiene que ver primero que
todo con un proceso de asignación del derecho de propiedad, o sea la identificación de
una persona como titular residual (residual claimant) de los productos de un bien o
activo. La teoría económica suele subrayar el papel de los derechos de propiedad en
garantizar que los que invierten a largo plazo puedan gozar el fruto de dichas
inversiones. Esto hace que el sistema de incentivos que se cree sea favorable al
crecimiento económico (Demsetz, 1967; North, 1981). Asimismo, estudios realizados a
niveles de paises muestran una fuerte correlación entre crecimiento económico lento (y
menor inversión) y derechos de propiedad menos seguros (Knack & Keefer, 1995;
Mauro, 1995; Svensson, 1998; Acemoglu, et.al., 2001; Johnson, McMillan & Woodruff,
2002). La falta de seguridad en los derechos de propiedad también implica, como
mencionan De Soto (2000) y Do & Iyer (2008), que uno de los mayores impedimentos
para la prosperidad en los países en vía de desarrollo es la incapacidad de transformar
las propiedades en bienes que se puedan utilizar, debido a la falta de reconocimiento
legal de los derechos.
Un propietario espera que su comunidad prevenga actos de otros que puedan
interferir con sus mismas acciones, siempre y cuando estas últimas no estén prohibidas
en las especificaciones de sus derechos (Demsetz, 1967). Aquí, a diferencia de los
derechos contractuales, los derechos de propiedad se hacen cumplir por la ley (in rem),
siendo afectados unicamente con el consentimiento del propietario. Esto asegura el
cumplimiento de la ley, pero es sumamente costoso (no sólo económicamente) cuando
hay multiples derechos colaterales relacionados con el mismo bien. Es decir, las
obligaciones de ley sobre un derecho de propiedad son independientes de quien sea el
dueño de los derechos de propiedad, así sean diferentes derechos de propiedad
pertenecientes al mismo bien. Ergo, se considera que los derechos de propiedad tienen
ventaja dado que sobreviven inmutables a través de todo tipo de transacciones y
transformaciones con otros derechos de propiedad sobre la misma tierra o sobre una
tierra aledaña (Arruñada, 2003).
Adicionalmente, se subraya que la tierra tiene un papel importante en la
reducción de los costos de transacción (Arruñada, 2003). Entonces, cuando un granjero,
o un empresario es propietario de los derechos sobre una tierra, es más propenso a
invertir en ella, por dos razones principalmente: el efecto garantía (assurance), y el
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina2
4
Pág
ina2
4
efecto realizabilidad. Este último se da cuando los granjeros se sienten más seguros en
su derecho o capacidad de mantener un uso sobre la tierra a largo plazo, y entonces, es
mayor la tasa de retorno por las mejoras y la conservación que se haga de la tierra; de
esta forma, está mayormente incentivado a hacer inversiones. En cambio, el primer
efecto se da cuando una tierra puede ser fácilmente transable, y utilizada como colateral
dentro de transacciones (Brasselle, Gaspart, & Platteau, 2002). Por todo esto, es
razonable que los empresarios no estén dispuestos a invertir si se espera que no puedan
retener los beneficios propios de su inversión (Johnson, McMillan, & Woodruff, 2002).
Este es el problema al que se enfrentan recurrentemente las poblaciones que cuentan
con menos recursos. Las personas pobres tienen limitaciones debido a la ausencia de
derechos de propiedad formales. Estas limitaciones se extienden a la imposibilidad de
tener herramientas de ahorro o bienes, para ser usados como seguro que les pueda
proveer protección durante épocas de escasez, y los obliga a refugiarse en familiares
(Galiani & Schargrodsky, 2010).
Así, en los círculos políticos, los programas de titulación de tierras han sido
promovidos como parte de una intervención eficiente en la lucha para reducir la pobreza
(Galiani & Schargrodsky, 2010). Mas aún, desde las organizaciones internacionales
también se han estado promoviendo proyectos de administracion de tierras en la
mayoria de paises en via de desarrollo y en paises que anteriormente estaban bajo un
regimen socialista (Arruñada, 2003).
Un paso intermedio adoptado por algunos gobiernos, es el uso de titulaciones
colectivas, en vez de titulaciones privadas. Los puntos de vista convencionales asumen
que una propiedad común implica acceso abierto, que genera riesgos de sobre-
explotación. Dichas oportunidades se generan a partir de sistemas de titulación colectiva
que se supone no hacen cumplir reglas respecto a las acciones individuales de los
miembros de la comunidad. Ahora bien, así como la intervención gubernamental se
justifica en casos de falla de los mercados debido a bienes públicos o a monopolios
naturales, la titulacion colectiva es una respuesta estándar a fallas en la eficiencia
asociadas con instituciones de propiedad privada (Powell, 1998). De hecho la evidencia
sobre la posibilidad de crear reglas de juegos alternativas a estado y mercado, es decir
creando institucionalidades locales que permitan manejo eficiente de recursos comunes
es bastante amplia (Ostrom 2009).
Evidencia empírica de la relación titulación-pobreza es obviamente dificil de
demostrar de manera causal. En general, personas de mayores ingresos tienen mayores
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina2
5
activos en propiedad, lo cual postula existencia de causalidad invertida. Además,
programas de repartición de títulos pueden ser afectados por individuos que ya han
planeado las inversiones, y que a través de formas de presión pueden influir en los
mecanismos de asignación - o sencillamente las inversiones hechas pueden llevar a
lograr la obtención del título (Brasselle, Gaspart, & Platteau, 2002; Alston, Libecap, &
Schneider 1995). Finalmente, es obvio que muchas variables externas pueden co-
determinar tanto las inversiones como la titulación.
El más importante estudio que se conozca sobre el tema es sin duda el de Galiani
& Schargrodsky (2010), que revela la efectividad de la titulación de tierra como
herramienta para disminuir la pobreza, a través de un experimento natural.
Aprovechando un episodio de titulación de tierras que se dio por etapas, en la Argentina
pos dictadura, ellos estudiaron las diferencias en una serie de variables de inversión por
parte de las familias tanto propietarias como ocupantes. Dicho episodio ocurrió en
Argentina, en las zonas aledañas a Buenos Aires. Allí, en 1981 algunos terrenos baldíos
fueron ocupados ilegalmente por algunas personas. Dichos habitantes vivían sin pagar
arriendo, pero no tenían los títulos de las tierras, así que legalmente no tenían derecho
sobre ellas. El gobierno local negoció las tierras con los propietarios originales, para
poder dar a dichos habitantes ilegales la titulación respectiva, pero así como algunos
terratenientes aceptaron negociar con el giobierno local, algunos otros aún se encuentran
disputando las tierras en las cortes, porque no les satisfacía la compensación económica
ofrecida por el gobierno. Esta asignación diferencial – además no relacionada con las
caracteristicas de los ocupantes – generó “naturalmente” un grupo experiemntal y un
grupo de control. Se encontró que las personas invertían más en sus terrenos y que
construían cerca de un 12% más. Son familias con menos miembros, dado que hay una
reducción de la fertilidad de las cabezas de familia y a que no viven con miembros de la
familia extensa; y, además, un incremento en el número de años estudiados y de
porcentaje de cumplimentacion de la educacion secundaria (53% contra 26%).
En nuestro trabajo de campo, no podemos contar con la dimensión temporal
necesaria para hacer un seguimiento de las inversiones. Este estudio se enfoca en
averiguar si el programa, de la manera en la cual se está implementado, reduce los
efectos negativos a nivel cognitivo de la pobreza, y si contribuye a reconstruir tejido
social a través de algunas mediciones de capital social. Estos dos argumentos se tratan
en los dos siguientes apartados.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina2
6
Pág
ina2
6
4.3 Los efectos cognitivos de la pobreza y la restitución de tierra
Estudios recientes (Mullanaithan & Shafir, 2013; Mani et al., 2014) sobre el tema de la
pobreza han replanteado la mirada académica sobre este problema. Existe amplia
evidencia empírica que afirma que las personas en condiciones de pobreza suelan
cometer más “errores”, es decir, en temas claves como la planeación familiar, el ahorro
o la oferta de trabajo, estas personas terminan tomando decisiones equivocadas que
impactan negativamente sobre su condición socio-económica (Katz & Hofer, 1994;
Edin & Lein, 1997; McLoyd, 1998; DiMatteo, Giordani, Lepper & Croghan, 2002;
Kim, Sorhaindo & Garman, 2006; Blank & Barr, 2009; Barr, 2012). El resultado final
es que las personas pueden terminar en la llamada trampa de la pobreza.
Sin embargo, Mullanaithan y coautores no buscan ni mecanismos estructurales
de carácter sociológico para explicar este fenómeno, ni tesis de comportamientos
racionales que expliquen estos hechos estilizados. Su tesis es conductual: ellos parten de
un supuesto, a la vez obvio pero ignorado por el enfoque convencional en economía,
que afirma que la capacidad cognitiva, como el ancho de banda de un computador, es
limitada. En muchas situaciones cotidianas, el hambre, el sueño u otro tipo de
preocupaciones afectan el ancho de banda disponible, induciendo decisiones
equivocadas. La pobreza se puede ver como una condición de escasez: es decir una
preocupación de que cualquier error pueda tener consecuencias muy graves que la
persona pobre no necesariamente es capaz de enfrentar (monetariamente o de otra
manera).
Ellos afirman que las preocupaciones en situaciones de escasez (scarcity),
disminuyen las habilidades cognitivas (IQ) y el autocontrol. En su trabajo, Mani et al.
(2014) aprovechan una condición natural similar a un experimento: ejecutan las pruebas
cognitivas antes y después de que los campesinos hayan logrado llevar la cosecha al
molino. Es obvio que de esta manera una persona puede ser contrafactual (grupo
control) de sí mismo y se puede realizar un control de otras características que afecten el
desempeño cognitivo. Además es obvio que por los ritmos del campo, ese momento (la
consigna de la cosecha), cambia de manera abrupta la situación económica. Sus
resultados muestran de manera clara el empeoramiento del desempeño en condición de
escasez. Curiosamente, este resultado con grande validez externa (o sea
representatividad de la condición real), tiene hallazgos confirmados por otro que ellos
llevan a cabo en laboratorio, donde crean artificialmente una condición de escasez a
través del suministro de un problema a resolver.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina2
7
Es obvio que la población en análisis en este informe se caracteriza por muy
escasa capacidad de pago; por lo tanto resulta interesante ver si el tema de restitución
logra afectar de manera positiva las capacidades cognitivas, suavizando el impacto de la
pobreza.
Para poner a prueba esta hipótesis se utilizarán dos tareas cognitivas similares a
las usadas por Mani et al. (2014). La primera prueba es un test lógico, basado en la
capacidad de identificar la figura que completa una secuencia (test de Raven, ver Tabla
3) que mide la capacidad cognitiva general. La segunda prueba es un test de control
cognitivo, que básicamente mide la capacidad de una persona de manejar la atención
sobre las informaciones relevantes. Se trata de una versión numérica del test de Stroop
(ver Tabla 2). Los participantes tienen una secuencia de números repetidos (2 2 2) y
tiene que decir la cantidad de dígitos sin confundirse con el número que aparece. En el
caso “2 2 2” por ejemplo la respuesta correcta es “3”.
4.4 La ley de restitución y el tejido social
Otro elemento de interés en el análisis y seguimiento de la Ley de Restitución es la
posible presencia de efectos positivos en la reconstrucción de capital social. Este último
se refiere al agregado de recursos o activos que estén relacionado con la red de
contactos o relaciones de una persona (Bordieu, 1986). El capital social es de difícil
medición, y en la literatura empírica, se suele recurrir a un abanico de indicadores
indirectos (Grootaert & Van Bastelaer, 2002). La literatura de corte sociológico subraya
la relación positiva que existe entre la conectividad y la propensión a cooperar, esta
última una evidente fuente de generación de excedente social, por reducción de costos
de transacción (Arrow, 1973), porque es necesaria para manejar recursos comunes o
bienes públicos (Hardin, 1968) o por la posibilidad de mejorar la eficiencia institucional
(e.g. Putnam et al. 1993).
Es obvio que la población victimizada sufre de condiciones de desconfianza
generalizada, y en el caso de la población desplazada en particular, la falta de
conexiones es evidentemente una de las determinantes de las pobres condiciones socio-
económicas (Ibáñez, 2008).
En este trabajo nos enfocamos en dos rubros en particulares. Por un lado en el tema de
la confianza. Hay evidencia empírica de que la confianza actúa como lubricante social y
donde es generalizada, está asociada a un mejor desempeño económico e institucional
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina2
8
Pág
ina2
8
(Arrow, 1973; Putnam et al., 1993; Zak and Knack, 2001; Knack and Keefer, 1997; La
Porta et al., 1999; Rothstein and Uslaner, 2005; Sampson et al., 1997).
En ámbito experimental, la confianza se suele medir a través del juego de
confianza o juego de inversión (Berg et al. 1995), una situación de interacción
estratégica donde „dar‟ confianza permite generar recursos adicionales, pero expone al
riesgo de aprovechamiento gratuito. Una explicación se encuentra abajo en la Tabla 4.
A través de la aplicación de una versión simplificada de este juego, basado en Charness
et al. (2011), se intenta medir si el grado de confianza (tasa de inversión) y la tasa de
devolución de confianza (tasa de retorno) son más altas entre la población que ha
recibido tierra (restitución) respeto a la población desplazada.
Adicionalmente, implementamos unos tratamientos que ya se aplicaron entre la
población campesina en un trabajo anterior (Bogliacino et al. 2015). En particular, en
ese trabajo se pone a prueba la hipótesis de que poder evaluar el comportamiento
óptimo a través de un mecanismo de voto consultivo favorece la confianza
interpersonal. Los mecanismos a través de los cuales eso ocurre pueden ser varios:
Bogliacino et al. (2015) sugieren que mecanismos participativos de este tipo favorezcan
el establecimiento de normas sociales (Duffy et al. 2013) o la formación de expectativas
normativas (Bicchieri & Xiao, 2007).
En este caso, además del voto consultivo, se propone un tratamiento adicional:
se leen los resultados de las votaciones realizadas en Cundinamarca por Bogliacino et
al. (2015), para ver si existe un efecto diferente al de las votaciones participadas.
Adicionalmente se estudia la propensión de los participantes a sancionar
violaciones de normas igualitarias cuando dichas violaciones no los afectan
directamente.
Sabemos desde un amplio espectro de evidencia empírica que la cooperación
sistemática es un trato distintivo de las sociedades humanas dentro del mundo animal
(Boyd & Richerson, 2003). Existen otras excepciones dentro del mundo de los insectos
donde hay extensa división del trabajo, pero en ese caso son más fuertes los vínculos de
cercanías genéticas (Fehr & Fischbacher, 2003). En el debate sobre las determinantes de
la cooperación y del respeto de las normas sociales, se puede simplificar diciendo que
existen dos principales hipótesis teóricas. La primera ha sido dominante en enfoques
biológicos y en general entre los estudiosos de la evolución. De acuerdo a esta hipótesis,
la reciprocidad guía el comportamiento altruista: el comportamiento cooperativo
induciría respuestas cooperativas por parte de otros agentes. Se trata de una explicación
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina2
9
que funciona bien en sociedades pequeñas; sin embargo encuentra muchos problemas
donde los grupos son grandes y las transacciones repetidas, limitadas. Una versión más
estructurada sugiere que el comportamiento altruista contribuye a construir reputación y
viene remunerado como medio para construir a la vez reputación (Leimar &
Hammerstein, 2001; Nowak & Sigmund, 1998; Nowak et al. 2000). Sin embargo, la
migración de individuos entre grupos, reduce drásticamente la tasa de cooperación y al
parecer, se requiere una sobre-estimación constante de los beneficios de la cooperación
(Fehr & Fischbacher, 2003).
La tesis anterior se basa principalmente sobre argumentos de selección genética
de tratos que garanticen un mayor fitness en contextos de interacción. En este marco
teórico siempre se rechazó la idea de que el puro trato altruista pueda difundirse porque
el único sustento estaría en la selección entre grupos (opuesta a la infra-grupo), cuya
evidencia es sin embargo bastante limitada (Williams, 1966).
Por el contrario, modelos de selección genético-cultural sugieren que la
transmisión por aprendizaje social de tratos culturales puede ser favorable al
comportamiento altruista (Kelly, 1985). Esta literatura en particular subraya el papel del
castigo desinteresado a los que no respetan normas sociales: se trata de individuos que a
pesar de no ser directamente afectados por la violación de dichas normas, enfrentan
costos para sancionar los que no las respeten (Marlowe et al. 2008; Fehr & Fischbacher
2004; Boyd et al. 2003). Estas personas se pueden llamar altruistas de segundo nivel.
Existe amplia evidencia empírica sobre el altruismo de segundo nivel (Marlowe
et al. 2008; Boyd et al. 2003). La literatura experimental la ha puesto a prueba empírica
introduciendo en un amplio abanico de juegos estándares la posibilidad por terceros de
sancionar comportamientos de dos partes que realizan una transacción o interacción.
Típicamente se trata de situaciones donde entre dos o más personas existe un conflicto
entre interés social e interés individual o donde existe claramente una opción igualitaria
que pueda llamar en causa una norma social, y se le agrega una tercera persona, no
directamente involucrada, que puede sancionar el comportamiento de las partes
(sosteniendo un costo) a pesar de no ser beneficiada directamente o monetariamente por
el respeto de la norma. Dicha literatura muestra que efectivamente la presencia de
sanción es significativa.
En este caso, se utilizó la situación de interacción estratégica más sencilla
posible: el juego del dictador (ver Tabla 5). El funcionamiento es el siguiente: a una
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina3
0
Pág
ina3
0
persona (remitente) se le asigna una suma de dinero que puede libremente dividir con
otra persona (destinatario). Esta segunda persona no tiene papel estratégico alguno, es
decir, sólo recibe la suma que el remitente le envíe.
En este caso los participantes de MM representan los terceros (o supervisores):
pueden sancionar los remitentes por no dar lo que consideren suficiente a los
destinatarios, pero eso implica un costo, es decir tienen que renunciar a una parte de la
dotación de dinero que reciban. En cambio, los remitentes y destinatarios son
participantes de Bogotá que tomaron su decisión en sesiones organizadas antes del
trabajo de campo y recibieron el pago correspondiente una vez cruzadas las decisiones
con los participantes en MM.
En este caso se quiere ver si el ser objeto de asignación del título aumenta la
probabilidad de ser altruista de segundo nivel.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina3
1
Tabla 2. Una explicación básica de la Prueba de Stroop.
Prueba de Stroop
La Información irrelevante puede interferir en el desempeño de una persona en una
tarea (Tang, Critchley, Glaser, Dolan, & Butterworth, 2006). Desde 1935 los
experimentos llevados a cabo por J.R. Stroop le han podido dar cierta formalidad a los
métodos de estudio de dichas interferencias sobre diversas tareas (Stroop, 1935).
En los experimentos originales, se comparó el tiempo que toma leer los nombres de los
colores y el tiempo que toma nombrar los colores per sé. Es decir, se comparaba el
efecto de interferencia del estímulo “color” sobre la lectura de los nombres de los
colores (ambos estímulos eran presentados simultáneamente) con la interferencia
producida por el estímulo palabra (algún color escrito) sobre el nombramiento de los
colores per sé (Stroop, 1935).
En la revisión que hace McLeod (1991), se encuentra que esta familia de tareas puede
ser dividida en tres categorías principalmente. La primera de ellas es la Interferencia
Color-Palabra, la segunda es la Inteferencia Imagen-Palabra, la tercera categoría, es la
de Interferencia Auditiva. Esta prueba se suele llamar de control cognitivo.
El problema con las anteriores categorías radica principalmente en que se hace
necesario saber leer y dominar un léxico. Entonces, tal y como lo señalan Kulaif &
Valle (2008), no es posible evaluar los efectos de la interferencia, por ejemplo en
población de muy bajos recursos, sin educación, o directamente analfabeta, con los test
tradicionales. Es así como los test con componentes numéricos sirven de base a los
Illiteracy Stroop Test, o test de Stroop para población analfabeta.
Dadas las condiciones de la población de los Montes de María, en su gran mayoría
campesinos colombianos desplazados por la violencia, con poco o nulo acceso a
escuelas y sistemas de educación, se optó por trabajar con una tarea numérica del
Stroop. Sin embargo, para facilitar y asegurar el seguimiento instruccional en la
muestra, se prefirió usar un test que sólo midiera una característica, a saber, la cantidad
de dígitos en cada hilera de números (ver Anexo 8).
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina3
2
Pág
ina3
2
Tabla 3. Una explicación básica de la Prueba de Raven.
Prueba de Raven
El Test de Matrices Progresivas de Raven (RPM por sus siglas en inglés), consiste en
escenarios con casillas ubicadas en forma de matriz que pueden ser de 2x2 o de 3x3. En
cada una de las casillas hay una imagen, excepción hecha de la casilla inferior derecha,
que está en blanco. Es dicha casilla la que debe ser reemplazada por los participantes,
identificando el segmento faltante que mejor se ajusta al patrón que siguen las demás
imágenes (Brouwers, Van de Vijver, & Van Hemert, 2009). El RPM, mide la “habilidad
cognitiva general” (Raven, Raven & Court, 1998/2000; Raven & Raven, 2003). Debido
a que es un test que no requiere conocimientos específicos o sociales para su ejecución,
es una medida de inteligencia en la que no se encuentra influencia de factores culturales,
respecto a otros test (Brouwers, Van de Vijver, & Van Hemert, 2009). Además, es un
test que se presenta en formato no verbal, lo que lo hace una herramienta de fácil
aplicación a niños, ancianos y a poblaciones en las cuales el uso del lenguaje puede
estar disminuido. Respecto a los procesos, algunos indican que las respuestas que se den
en las matrices de Raven están estrechamente relacionadas con la capacidad de la
memoria de trabajo o la inteligencia de la persona. Al respecto, Loesche, Wiley y
Hasselhorn (2015) afirman que en el proceso de resolución del test de Raven subyacen
dos sub-procesos: inducción de reglas (rule induction) y manejo de metas (goal
management).
La versión implementada en MM presenta un grado de facilidad mayor y se constituye
de solo diez preguntas en cinco minutos. Un ejemplo se encuentra en el Anexo 7.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina3
3
Tabla 4. Una explicación básica del juego de la confianza
Juego de confianza
El juego de confianza (llamado también juego de la inversión) fue aplicado por primera
vez por Berg et al. (1995). Esta situación de interacción estratégica captura las dos
características básicas de la confianza: a) el dar confianza genera excedente social; b) el
dar confianza expone al riesgo de aprovechamiento gratuito.
En su forma básica, el juego se desarrolla de la siguiente manera. Hay un jugador uno
que se llama remitente. El remitente recibe una suma de dinero y decide cuánto de esa
suma de dinero mandar al destinatario. Puede ser una decisión continua, dicotómica o
discreta, es decir las opciones de cuánto se pueda enviar dependen del objetivo del
diseño, pero puede que el número de alternativas sea finito, sea restringido a dos o sea
continuo.
El destinatario recibe tres veces (u otro múltiplo) la suma enviada por el remitente. En
esta segunda etapa, a la hora de tomar la decisión, el destinatario puede: (a) quedarse
con todo lo que recibe; (b) devolver una parte al remitente. En este último caso,
dependiendo del diseño, es posible limitar las opciones disponibles (por ejemplo reparte
de manera equitativa o dejar total libertad).
Es un juego secuencial a información completa: el destinatario conoce la decisión del
remitente antes de tomar la suya y la estructura del juego es conocimiento común (es
decir todos saben que todos conocen la estructura del juego). En este tipo de juegos, la
teoría estándar prevé que si los participantes son racionales y auto-interesados el
destinatario debería siempre aprovecharse y no devolver nada, y el remitente,
anticipando dicho comportamiento, debería transferir cero.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina3
4
Pág
ina3
4
Tabla 5. Una explicación básica del juego del dictador
Juego del dictador
El primer experimento con el juego del dictador se encuentra en Kahneman, Knetsch &
Thaler (1986), con un formato que limitaba las decisiones a dos opciones.
El juego del dictador es el mecanismo más sencillo para medir altruismo. Hay dos
jugadores como en el juego de la confianza o en el juego del ultimátum (Güth,
Schmittberger, & Schwarze, 1982), sin embargo, se elimina completamente el elemento
estratégico, porque el segundo jugador es dummy, es decir no toma ninguna decisión.
La situación es la siguiente. El jugador uno (remitente) recibe una suma de dinero. En
calidad de dictador decide cómo repartir el dinero con su contraparte (destinatario).
Dependiendo del diseño, puede decidir libremente el monto entre las opciones
presentadas. La decisión del remitente se implementa.
La única solución racional auto-interesada es claramente no enviar ninguna suma de
dinero.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina3
5
5. Procedimientos experimentales
5.1 Primer trabajo de campo
Reclutamiento
Las sesiones realizadas en el mes de julio de 2014, tuvieron lugar en La Pava, Bolívar
(Montes de María). Días antes, el investigador principal se reunió con algunos líderes
comunitarios de la zona para hablar sobre la investigación (sin ilustrar en detalle cada
uno de los tratamientos) y conocer la viabilidad de la misma. Una vez dado el visto
bueno, eran ellos los encargados de invitar a las personas de sus comunidades a
participar en una actividad que estaba enmarcada dentro de un proyecto sobre
restitución de tierras, en la cual tendrían que tomar algunas decisiones. Se debía
mencionar, además, que sería reembolsada la suma que gastaran en transporte. Para
garantizar grupos heterogéneos (personas de diferentes comunidades) en cada sesión,
los líderes se organizaron para enviar cierto número de participantes en días específicos.
Se trabajó del 21 al 25 de julio. Fueron realizadas 9 sesiones, en las cuales participaron
111 personas. En el Anexo 1 se encuentra el diagrama de flujo de este primer
experimento.
Fase de registro
El desarrollo de las sesiones estaba a cargo de 3 personas: el investigador responsable
de la investigación, quien dirigía toda la actividad, y dos asistentes que se encargaban de
colaborar con la fase de registro, la distribución del material, la digitación de la
información en el computador, la preparación de los pagos, y cualquier otra situación de
la sesión en la que los participantes necesitaran alguna orientación. Con anterioridad, el
investigador y los asistentes preparaban todo el material para cada sesión. Más adelante
se explica en detalle este punto.
Todas las sesiones se realizaron en Cedecampo. A medida que las personas iban
llegando, eran recibidos en el quiosco, espacio de la sede donde todo estaba
previamente organizado para el desarrollo de la sesión. Tanto las mesas en las cuales se
ubicaba de manera individual a los participantes como el espacio donde se realizaba el
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina3
6
Pág
ina3
6
registro, fueron dispuestos de manera tal que, en todo el desarrollo de la sesión, pudiese
ser garantizada la confidencialidad de todas las personas.
Cuando ya estaban presentes todos los participantes, el investigador daba la bienvenida,
leía el consentimiento informado, explicaba cómo sería la fase de registro, mostraba los
sobres que sortearían más adelante, hablaba de manera general sobre las etapas de la
sesión, pedía que se organizara una fila suficientemente retirada de la mesa de registro y
así, una a una, las personas se acercaban a los asistentes para entregar el consentimiento
(o firmarlo en ese momento si necesitaban ayuda), tomar uno de los sobres, indicar el
código que les correspondía, el lugar desde el cual viajaban, y el costo del transporte
para llegar a Cedecampo y regresar a su casa. El investigador, mientras tanto, se
aseguraba de que las personas se sentaran en el lado correcto del quiosco de acuerdo al
código obtenido (pares o impares), y pedía a los participantes no abrir el sobre y no
hablar entre ellos a lo largo de la sesión.
Los sobres a los cuales se está haciendo alusión, contenían las hojas que los
participantes iban a utilizar en toda la actividad. Estaban organizados en dos pilas:
sobres con números pares y sobres con números impares. Previamente, el investigador
sorteaba, para cada una de las sesiones, si la primera persona debía elegir un sobre par o
uno impar. Si, por ejemplo, en la sesión uno el primer participante debía tomar un sobre
par, entonces el participante dos debía tomar uno impar, el participante tres tomaría uno
par y así sucesivamente hasta que todos tuvieran el material. Además, los asistentes
mezclaban los sobres de cada una de las pilas y los dejaban ubicados de manera tal que
los números no se vieran. Cuando el participante iba a tomarlo, el asistente elegía al
azar tres sobres de la pila correspondiente, y la persona debía tomar sólo uno de estos.
Únicamente luego de tener el sobre en sus manos, podía darle vuelta para ver el código.
La aleatorización de los códigos tiene la función de garantizar el emparejamiento
aleatorio a través de un algoritmo elaborado en el computador donde se registran las
decisiones.
Inicio de la sesión
Culminada la fase de registro y ubicados los participantes en sus respectivas mesas, se
daba inicio a la sesión. Los asistentes se encargaban de ingresar al computador la
información obtenida previamente. El investigador daba nuevamente la bienvenida a
todos, brindaba alguna información introductoria sobre la investigación, y hablaba sobre
las reglas básicas que debían tener presente para poder recibir el pago al final de la
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina3
7
sesión. Dicho esto, empezaba la explicación de la primera actividad: el juego de la
confianza.
El juego de la confianza
Esta actividad era presentada con palabras tales como remitente, destinatario, enviar,
recibir y transferir. En ningún momento se habló sobre dar o recibir confianza,
compartir o devolver, para así evitar interpretaciones no deseadas en los participantes.
Inicialmente, se explicó que la mitad de los participantes actuarían como remitentes y la
otra mitad como destinatarios, y que para saber quiénes tendrían cuál rol, se realizaría
una rifa para determinar si pares serían remitentes e impares destinatarios o viceversa.
Luego se habló sobre lo que remitentes y destinatarios podían hacer. Se hizo énfasis en
que únicamente sería pagada una de las decisiones que tomaran (la cual también se
determinaría por medio de un sorteo) y que nunca llegarían a estar emparejados con la
misma persona. En la Figura 2 se puede observar la condición inicial del juego.
Figura 1. Condición inicial del juego de la confianza
Fuente: elaboración propia.
El remitente, al inicio, tendría $8000, lo cual equivaldría a 2 fichas (cada una valía
$4000). Quien tuviese que tomar una decisión desde este lado del juego, debía pensar si
quería o no enviar dinero al destinatario. Si no enviaba ficha alguna, la interacción
terminaba y ambos jugadores quedaban con la cantidad de fichas que empezaron
(Figura 2). Si quería hacerlo, podía enviar una ficha o las dos. Además, se explicó que la
suma de dinero que el remitente decidía enviar al destinatario, era triplicada por el
investigador. Por ejemplo: el remitente elegía enviar una ficha ($4000) al destinatario.
El investigador triplicaba la suma, es decir, el destinatario recibía en total $12000 (3
fichas), quedando así con $20000 (5 fichas). Pero si el remitente decidía enviar dos
fichas, es decir, $8000, el destinatario recibiría los $8000 más $16000 que añadía el
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina3
8
Pág
ina3
8
investigador, es decir, 4 fichas más. En total el destinatario, en este caso, recibía $24000
y quedaba con $32000 (8 fichas). En las Figuras 3 y 4 se pueden ver en detalle estas dos
interacciones.
Figura 2. Remitente envía una ficha al destinatario
Fuente: elaboración propia.
Figura 3. Remitente envía dos fichas al destinatario
Fuente: elaboración propia.
Al quedar claro lo que podía hacer el remitente, se habló sobre el destinatario. De este
lado del juego, los participantes empezaban también con 2 fichas, es decir, $8000
(observar nuevamente la Figura 2). Como no era posible que los destinatarios supiesen
cuántas fichas habían enviado los remitentes, era necesario que ellos tomaran una
decisión para cada uno de los posibles escenarios. Si el remitente con quien había sido
emparejado (al azar) el destinatario enviaba una única ficha, el destinatario recibía 3
fichas ($12000), quedando entonces con $20000 (observar de nuevo la Figura 3). Pero
si el remitente enviaba sus dos fichas, el destinatario quedaba, en total, con 8 fichas
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina3
9
(observar nuevamente la Figura 4). Ahora bien, el destinatario debía elegir, para cada
caso, entre transferir o no una parte de sus fichas al remitente. Si decidía hacerlo las dos
partes quedaban con la misma cantidad de fichas.
Por ejemplo, en el primer caso, únicamente podía transferir al remitente 2 fichas
($8000), quedando entonces cada uno con la misma suma de dinero: $12000 (Figura 5).
Ahora, si el destinatario en este primer caso no quería transferir las dos fichas al
remitente, entonces éste quedaba con una ficha ($4000) y el destinatario con 5, es decir,
$20000 (Figura 6). En cuanto a la segunda situación, podía pasar lo siguiente: el
destinatario no transfería fichas al remitente, razón por la cual éste quedaba sin fichas
porque las habría enviado todas, y el destinario finalizaría con $32000 (Figura 7). Pero
si sí quería transferir una cantidad al remitente, entonces serían 4 fichas, para que así
ambos participantes quedaran con $16000 (Figura 8). La forma en que el destinatario
debía tomar sus decisiones, se conoce como método de las estrategias.
Figura 4. Situación 1 - Destinatario transfiere fichas al remitente
Fuente: elaboración propia.
Figura 5. Situación 1 - Destinatario no transfiere fichas al remitente
Fuente: elaboración propia.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina4
0
Pág
ina4
0
Figura 6. Situación 2 - Destinatario transfiere fichas al remitente
Fuente: elaboración propia.
Figura 7. Situación 2 - Destinatario no transfiere fichas al remitente
Fuente: elaboración propia.
Para que hubiese una mejor comprensión de la explicación, el investigador pedía a todos
que sacaran del sobre las hojas que, más adelante según el rol que representaran, debían
marcar. Adicionalmente se hacían una serie de preguntas con ilustración de las
respuestas en un tablero para controlar la comprensión.
Hasta este punto, todas las sesiones tenían la misma estructura. Ahora bien, en
este momento de la actividad podía pasar una de las siguientes tres cosas: 1) pasar a
tomar las decisiones inmediatamente (condición de control), 2) votar sobre cómo creían
correcto que tanto remitentes como destinatarios tomaran decisiones, se socializaba el
resultado de la votación y ahí sí tomaban las decisiones (condición de voto), o 3)
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina4
1
recibían una señal acerca de las mismas votaciones realizadas en otros experimentos
llevados a cabo en una zona rural de Colombia, y tomaban las decisiones. Así como con
los sobres, la decisión de cuál de la tres condiciones sería desarrollada en cuál sesión,
era decida previa y aleatoriamente en el computador.
Test de Raven
Cuando el juego de la confianza terminaba, los participantes realizaban una actividad
más: una prueba cognitiva estructurada como un test de Raven. Primero se explicaba
paso a paso en qué consistía esta tarea y cómo debían responderlo. El investigador
aclaraba que por cada respuesta correcta ganarían $1000 y que dispondrían de 5 minutos
para dar respuesta a las preguntas (10 en total). Cada participante recibía una hoja con
un ejemplo. El investigador y los asistentes se aseguraban (en la medida de lo posible)
de que las personas comprendieran el ejemplo para que luego, solos, pudieran dar
respuesta al test.
En el Anexo 3 se encuentra el protocolo completo del desarrollo de la sesión, en el
Anexo 4 está un cuestionario que los participantes respondían al final, en el Anexo 7 un
ejemplo de una de las diez pregunta de la prueba.
5.2 Segundo trabajo de campo
Reclutamiento
En el mes de septiembre se llevó a cabo el segundo experimento, el cual también tuvo
lugar en los Montes de María. Inicialmente, el reclutamiento se realizó de la misma
forma en como ya se había implementado en el mes de julio, mencionando, además, que
la participación en esta ocasión sería individual y por este motivo serían recibidos
conforme su orden de llegada a lo largo del día. Sin embargo, fue necesario realizar las
sesiones en dos lugares diferentes: la primera semana (del 8 al 11 de septiembre) se
trabajó en Cedecampo (La Pava) y la siguiente semana en Mampujancito (así lo llaman
sus habitantes). El cambio fue necesario dada una alerta que surgió relacionada con la
seguridad de los miembros del equipo por estar desarrollando actividades que
involucraban la ganancia de dinero. Para evitar alguna situación no deseada, se decidió
que no era conveniente seguir trabajando en Cedecampo, así que el líder comunitario de
Mampujancito ofreció un espacio dentro de la comunidad para trabajar algunos días más
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina4
2
Pág
ina4
2
Los días de trabajo en La Pava, dejaron como resultado la participación de 102 personas
de diferentes comunidades. En Mampujancito, 69 personas participaron. En total,
durante los siete días de trabajo, hubo 171 participantes. En el Anexo 2 se encuentra el
diagrama de flujo del segundo experimento.
Fase de registro
En esta ocasión la fase de registro tuvo elementos diferentes. A medida que las personas
iban llegando, eran invitadas a tomar asiento en un espacio apartado de las mesas en las
cuales se desarrollaban las actividades, garantizando así en todo momento la
confidencialidad de cada participante. Para el desarrollo de estas sesiones, se contó con
la colaboración de dos investigadores y dos asistentes de investigación. Eran los
investigadores los encargados de dar la bienvenida a las personas, luego hacían entrega
de la hoja de consentimiento informado, la leían e iban explicando algunos detalles
adicionales y, además, mostraban una bolsa que contenía trozos de papel, cada uno con
un número escrito en él. Las personas debían tomar uno, ya que sería éste el código que
los identificaría a lo largo de todas las actividades. Debían recordar el orden de llegada
porque serían llamados uno por uno.
Cuando el participante debía pasar a la zona de las actividades, se pedía su
código, el lugar desde el cual había viajado y el monto de dinero que gastaba en llegar
allí y en regresar a su casa. Además, si decidía participar, debía firmar el consentimiento
y entregarlo. Dicho esto, empezaba la sesión.
Inicio de la sesión
Antes de la actividad principal, se realizaban una prueba numérica de Stroop. Esta
actividad era presentada a los participantes como el juego de los números. El
investigador encargado, primero explicaba detalladamente al participante cómo estaba
construido el juego y cómo debía responderlo. Se daba un tiempo para que el jugador
respondiera unas preguntas a modo de ejemplo, para así poder detectar si había
comprendido o no la actividad. Luego de esto, el tiempo que tenía el participante para
jugar podía variar: se contabilizaban 45 o 90 segundos. En total eran 45 preguntas y la
ganancia era de $200 por cada respuesta correcta.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina4
3
Juego del dictador
Culminada esta primera etapa, se daba inicio al juego del dictador con castigo. Como en
el caso del juego de la confianza y como se muestra en la guía de sesión en el Anexo 4,
la descripción no presenta ningún tipo de palabra que pueda generar sesgo, por lo tanto
no se habla de castigo ni de dictador. El investigador encargado de la sesión, ubicaba
sobre la mesa del participante una cartulina (ver Figura 9). Lo primero que se explicaba,
era que en esta actividad interactuaban tres personas, pero dos de ellas ya habían
tomado sus decisiones. Ellos eran llamados Participante 1 y Participante 2. (En concreto
estos dos eran estudiantes Bogotano que habían tomados sus decisiones y que iban a ser
pagados después de recolectar las decisiones en Montes de María.) El Participante 3 era
quien estaba participando en ese momento, es decir, quien estaba frente a la cartulina.
Otro detalle aclarado en un comienzo, era que el dinero que Participante 2 se llevaba, ya
había sido decidido por Participante 1 anteriormente, pero que la suma de dinero para
Participante 1 dependía de lo que Participante 3 decidiera. Además, de esa decisión
dependía también su propia ganancia. Se aclaró también, que ninguno de los
participantes sabría en ninguna etapa del juego con quién estaba interactuando, ya que
todos los emparejamientos serían realizados de manera aleatoria por un programa en el
computador.
Figura 8. Ubicación del participante, del investigador y del material en el juego del
dictador
Fuente: elaboración propia.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina4
4
Pág
ina4
4
Aclarados estos aspectos, el investigador pasaba a explicar la condición inicial del juego
(ver Figura 10). Participante 1 tendría $12000, Participante 2 $0 y Participante 3 $6000.
Participante 1 podía hacer una de las siguientes cinco cosas: no enviar dinero a
Participante 2 o enviar $3000, $6000, $9000 o $12000. Ahora bien, Participante 3 debía
decidir, para cada una de las situaciones posibles, si quería o no gastar $2000 para restar
$6000 a Participante 1. Únicamente podía gastar esa cantidad. Si decidía no hacerlo,
conservaría los $6000 que inicialmente le habían sido asignados. Para favorecer la
comprensión del participante, el investigador explicaba paso a paso cuatro ejemplos,
como ilustrado en las Figuras 11-14.
Figura 9. Condición inicial del juego del dictador
Fuente: elaboración propia.
Figura 10. Participante 1 envía $3000 a Participante 2. Participante 3 gasta $2000. Se
retiran $6000 a Participante 1
Fuente: elaboración propia.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina4
5
Figura 11. Participante 1 envía $3000 a Participante 2. Participante 3 decide no gastar
los $2000. No se retira dinero a Participante 1
Fuente: elaboración propia.
Figura 12. Participante 1 envía $6000 a Participante 2. Participante 3 gasta $2000. Se
retiran $6000 a Participante 1
Fuente: elaboración propia.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina4
6
Pág
ina4
6
Figura 13. Participante 1 envía $6000 a Participante 2. Participante 3 decide no gastar
los $2000. No se retira dinero a Participante 1
Fuente: elaboración propia.
El investigador explicaba uno a uno los casos que podían darse y pedía también al
participante que manipulara el material para que la comprensión fuese mayor. Además,
antes de que se tomaran las decisiones, el participante respondía a unas preguntas que
formulaba el investigador, buscando así que el juego y las decisiones que debía tomar,
estuvieran comprendidas en su totalidad. Finalmente, las decisiones que debía tomar
Participante 3 cubrían todos los casos posibles de envío (strategy method).
Cuando cada persona terminaba de participar en los juegos, pasaba a otra mesa en la
cual respondía a un cuestionario dirigido por uno de los asistentes (reportado en el
anexo 6).
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina4
7
6. Resultados
6.1 Características de la muestra
En los dos trabajos de campo participaron las comunidades de María La Baja (Trinidad,
Cena, Playón, Pueblo Nuevo etc.), San Jacinto, Malagana, Oveja, la Pista, Carmen de
Bolívar (Palmito, Cocuelo, Los Angeles etc.) y Mampuján.
En las Tablas 6 y 7 abajo resumimos brevemente las características de los
participantes. En la primera Tabla se muestran los descriptivos para el primer trabajo de
campo. Los que fueron beneficiarios de restitución son alrededor del 20% de la muestra.
Se ve claramente que por el indicador de ingreso disponible (estrato) que el nivel de
pobreza es muy alto.
La muestra tiene una prevalencia de hombres, y cerca del 50% tienen más de
cuarenta años. La gran mayoría de los participantes tiene grado de educación nulo o de
primer nivel. A la pregunta “¿A cuál grupo étnico piensa usted que pertenece?” el
63.21% contestó Afrocolombiano y el 12.26% Indígena.
Tabla 6. Características de la muestra, primer trabajo de campo
Variable Distribución
Observaciones 117
Sexo Mujeres 33% Hombres 67%
Edad 18-24 (8.55%)
25-30 (10.26%)
31-40 (17.95%)
41-55 (25.64%)
56-83 (37.61%)
Estado Casados/Unión Libre 72.32%
Estrato Estrato 1: 91%
Educación Ninguno: 31.53%
Primaria:35.14%
Bachillerato o más: 33.33
Juego de confianza Control: 24.32%
Anuncio: 34.23%
Votación: 41.44%
Tierra 19.66%
Fuente: Primer trabajo de campo, Julio 2014, Cedecampo (La Pava).
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina4
8
Pág
ina4
8
En la Tabla 7 se muestran las características de la muestra del segundo trabajo de
campo. En este caso los beneficiarios fueron cerca de la mitad de la muestra, también en
gran mayoría de estrato uno. En este caso logramos diferenciar de manera más eficaz
los más pobres gracias a la pregunta sobre el gasto de emergencia: representan alrededor
de un tercero de los participantes. A diferencia del primer trabajo de campo la edad
promedia es más baja y el nivel de educación más alto en promedio. A la pregunta “¿A
cuál grupo étnico piensa usted que pertenece?” el 80.58% contestó Afrocolombiano y el
10.07% Mestizo.
Tabla 7. Características de la muestra, segundo trabajo de campo
Variable Distribución
Observaciones 142
Sexo Mujeres 56.34% Hombres 43.66%
Edad 18-24 (21.13%)
25-30 (15.49%)
31-40 (17.61%)
41-55 (33.10%)
56-65 (12.68%)
Estado Casados/Unión Libre 68.31%
Estrato Estrato 1: 86.52%
Educación Ninguno: 9.93%
Primaria: 38.30%
Bachillerato o más: 51.77%
Gasto de emergencia9 No tendría dificultad: 6.38%
Dificultad pero lo conseguiría: 58.16%
No sabe si so lo conseguiría: 9.93%
No lo conseguiría: 25.53%
Tierra 52.82%
Fuente: Segundo trabajo de campo, Septiembre 2014, Cedecampo (La Pava) y Mampujancito
(María la Baja).
Es importante subrayar que las características socio-demográficas son balanceadas entre
beneficiarios y desplazados. En particular, en el primer trabajo de campo no hay
diferencias significativas de sexo (chi2 = .20, p = .65), edad (chi2 = 51.20, p = .46),
educación (chi2 = 2.52, p = .64), estado civil (chi2 = 1.92, p = .38). En el caso del
estrato, para la población beneficiada el 86.36% es de estrato uno, y para la población
9 Si tuviera que conseguir 400 mil pesos en una semana para enfrentar un gasto no planeado, ¿qué tanta
dificultad cree que tendría en conseguir el dinero?
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina4
9
de desplazados el 91.02%, sin embargo la diferencia es significativa y por eso se incluye
como variable de control en el análisis (chi2 = 12.65, p = .02).
En el caso del segundo trabajo de campo no hay diferencias significativas de sexo (chi2
= 1.21, p = .27), edad (chi2 = 48.94, p = .31), estado civil (chi2 = 2.73, p = .43), estrato
(chi2 = .81, p = .93). En el caso de la educación la diferencia es significativa (chi2 =
13.01, p = .01) y también para el caso del gasto de emergencia (chi2 = 11.69, p = .01),
por esta razón se consideran estas variables como controles en el análisis.
En las Figuras 14 y 15 se muestran algunas imágenes del proyecto.
Figura 14. Una imagen del primer trabajo de campo en Cedecampo (La Pava)
Fuente: Primer trabajo de campo, Julio 2014, Cedecampo (La Pava). Los rostros de los
participantes han sido ocultados.
Figura 15. El laboratorio en Mampujancito
Fuente: Segundo trabajo de campo, Septiembre 2014, Mampujancito (María la Baja). Los
investigadores Gianluca Grimalda (a la izquierda) y Laura Jiménez (a la derecha) preparan los
equipos.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina5
0
Pág
ina5
0
6.2 Juego de la confianza
Para todo el análisis del juego de confianza, identificamos como beneficiarios de
asignación de tierra los que contestaron si a uno de los ítems 5, 6 o 7 de la pregunta 4
del cuestionario pos experimento. El texto de la pregunta se encuentra en el Anexo 5.
Los tres ítems hacen referencia respectivamente a la Ley de Tierra, a otros proyectos de
titulación eventuales, o a procesos colectivos. No tenemos potencia estadística para
diferenciar entre varios procesos y por supuesto, no tenemos datos oficiales para
confirmar la información reportada por los participantes.
En la Figura 16 reportamos los resultados de las tasas de inversión y tasa de
retorno. La primera se calcula como número de fichas enviadas divididas por el total
(dos) y se puede interpretar como un porcentaje. Esta mide la tasa de confianza, o sea,
cuánto los participantes están dispuestos a transferir a sus contrapartes.
La segunda, se calcula como la tasa de devolución de fichas. Como se explica en
la sección sobre los procedimientos (y se puede ver en los materiales en el Anexo 3) se
utiliza el método de la estrategia, es decir pedimos a cada participante que declare lo
que quiere hacer en cada escenario posible (cinco y ocho fichas en este caso). La tasa de
retorno es sencillamente la tasa de devolución en los dos casos ponderada por el número
de fichas de cada escenario. La fórmula se reporta en la ecuación (1):
(1)
Donde es la variable igual a 2/5 si el participante comparte fichas para el caso
de i=5 y a 4/8 en el caso de i=8, igual a cero cuando decide no compartir.
Como se puede ver, no existen diferencias significativas en el caso de la tasa de
confianza pero si en el caso de la tasa de devolución (t = -2.07, p = .04).
Es interesante ver cómo actúan las personas frente a los estímulos recibidos. En
particular se puede observar que no hay diferencias entre los dos tratamientos de voto y
anuncio (por eso los presentamos conjuntamente). En particular, el envío promedio para
el caso de votación es 65% (33% de desviación estándar, sd) y por el caso de anuncio es
64% (sd 36%), mientras que la tasa de retorno es de 32% (sd 18%) y 27% (sd 19%),
respectivamente. De paso, es importante señalar que los participantes votaron en su
mayoría (52.63%) por transferir el máximo, el 63.16% por compartir fichas en el primer
escenario y el 65.79% por compartir fichas en el segundo escenario, confirmando los
resultados de los campesinos de Cundinamarca (Bogliacino et al. 2015).
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina5
1
Sin embargo, se ve claramente que en el caso de la tasa de devolución (Figura
18), el mismo patrón agregado se da dentro de las condiciones, con la restitución de
tierra que aumenta la tasa de devolución. En el caso de la tasa de confianza, la
asignación de tierra aumenta la confianza del 35% pero la interacción con la norma
social elimina el efecto, como se ve en la Figura 17.
Si bien las dimensiones de la muestra no permiten hacer pruebas estadísticas con
la potencia requerida, el patrón es bastante evidente. La prueba t de la tasa de confianza
da como estadístico -1.57 (p = .17) para la condición de control y .22 (p = .82) para el
caso de norma social. En el caso de la tasa de retorno, las pruebas son, respectivamente,
-.47 (p = .66) y -1.96 (.05) para la condición de control y la de norma social.
En las tablas 8 y 9 el análisis se extiende a nivel econométrico para poder añadir
variables de control adicional que puedan estar relacionadas con la tierra y con la
confianza. En particular se controla por sexo, edad, educación, condiciones
experimentales (incluyendo el día de la sesión), estrato socio-económico, estado civil,
tamaño del hogar. Se confirma que el efecto sobre la tasa de devolución es robusto,
mientras que en el caso de la tasa de confianza existe un incremento del 2-3%, pero no
es significativo.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina5
2
Pág
ina5
2
Figura 16. Tasa de inversión y tasa de retorno
Fuente: Primer trabajo de campo, Julio 2014, Cedecampo (La Pava). Tasa de inversión: número fichas enviadas dividido por dos. Tasa de
retorno: número de fichas devueltas, en promedio para el caso de cinco y ocho fichas. El t-test reportado controla por varianzas desiguales, y el
valor p reportado se refiere al test a dos colas.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina5
3
Figura 17. Tasa de inversión por condición experimental
Fuente: Primer trabajo de campo, Julio 2014, Cedecampo (La Pava). Tasa de inversión: número fichas enviadas dividido por dos. Tasa de
retorno: número de fichas devueltas, en promedio para el caso de cinco y ocho fichas. Control es la condición base sin tratamiento, Norma Social
es el caso de votación o de anuncio de los resultados de las votaciones hechas por campesinos en Bogliacino et al. (2015).
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina5
4
Pág
ina5
4
Figura 18. Tasa de retorno por condición experimental
Fuente: Primer trabajo de campo, Julio 2014, Cedecampo (La Pava). Tasa de retorno: número de fichas devueltas, en promedio para el caso de
cinco y ocho fichas. Control es la condición base sin tratamiento, Norma Social es el caso de votación o de anuncio de los resultados de las
votaciones hechas por campesinos en Bogliacino et al. (2015).
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina5
5
Tabla 8. Tasa de inversión: análisis econométrico
(1) (2) (3) (4) (5)
Tasa Inversión Tasa Inversión Tasa Inversión Tasa Inversión Tasa Inversión
Anuncio -0.0419 -0.0956 -0.159* -0.181** -0.170*
(0.0842) (0.0967) (0.0933) (0.0900) (0.0870)
Voto -0.0352 -0.0618 -0.116 -0.126 -0.102
(0.0776) (0.0920) (0.0878) (0.0873) (0.0891)
Restitución 0.0236 0.0680 0.0685 0.0691 0.0319
(0.0871) (0.0966) (0.103) (0.104) (0.102)
Sexo -0.0721 -0.0539 -0.0508 -0.0193
(0.0789) (0.0781) (0.0791) (0.0805)
Edad 0.00491* 0.00297 0.00331 0.00490*
(0.00281) (0.00277) (0.00282) (0.00255)
Estado Civil 0.00686 -0.0172 -0.0218 -0.0242
(0.0526) (0.0581) (0.0574) (0.0597)
Hogar Numeroso -0.0753
(0.0784)
Educación 0.112*** 0.100*** 0.0987*** 0.117***
(0.0300) (0.0318) (0.0321) (0.0346)
Estrato 0.00171 0.000352 0.00188
(0.0311) (0.0274) (0.0278)
Sesión 0.00997 0.00852
(0.0125) (0.0138)
Constante 0.682*** 0.358** 0.558*** 0.518*** 0.454**
(0.0619) (0.175) (0.176) (0.193) (0.185)
Obs 111 93 80 80 77
R-2 0.003 0.127 0.126 0.130 0.155
Fuente: Primer trabajo de campo, Julio 2014, Cedecampo (La Pava). Tasa de inversión: número fichas enviadas dividido por dos. * Significativo
al 10%, ** significativo al 5%, *** significativo al 1%.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina5
6
Pág
ina5
6
Tabla 9. Tasa de retorno: análisis econométrico
(1) (2) (3) (4) (5)
Tasa Retorno Tasa Retorno Tasa Retorno Tasa Retorno Tasa Retorno
Norma Social 0.00708 0.0226 0.0296 0.0328 0.00434
(0.0447) (0.0514) (0.0558) (0.0587) (0.0597)
Participativo 0.0468 0.0587 0.0431 0.0445 0.0272
(0.0422) (0.0516) (0.0561) (0.0569) (0.0605)
Tierra 0.0808* 0.116** 0.100** 0.100** 0.0997**
(0.0408) (0.0453) (0.0482) (0.0486) (0.0499)
Sexo -0.0113 -0.00636 -0.00679 -0.0103
(0.0440) (0.0456) (0.0461) (0.0489)
Edad -0.000678 -0.000382 -0.000428 -0.000306
(0.00154) (0.00165) (0.00169) (0.00189)
Estado Civil -0.0110 -0.0218 -0.0212 -0.0195
(0.0316) (0.0349) (0.0358) (0.0365)
Hogar Numeroso 0.0531
(0.0486)
Educación 0.0353* 0.0309 0.0311 0.0288
(0.0178) (0.0190) (0.0194) (0.0211)
Estrato 0.0148 0.0150 0.0163
(0.0158) (0.0155) (0.0147)
Sesión -0.00139 0.000182
(0.00878) (0.00895)
Constante 0.254*** 0.250*** 0.255** 0.260** 0.230*
(0.0320) (0.0921) (0.115) (0.120) (0.133)
Obs 111 93 80 80 77
R-2 0.047 0.116 0.097 0.097 0.104
Fuente: Primer trabajo de campo, Julio 2014, Cedecampo (La Pava). Tasa de retorno: número de fichas devueltas, en promedio para el caso de
cinco y ocho fichas. * Significativo al 10%, ** significativo al 5%, *** significativo al 1%.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina5
7
6.3 Efectos cognitivos
Los test cognitivos que se efectuaron en MM fueron (respectivamente) un test lógico
tipo Raven y un test de control cognitivo del modelo, Prueba Stroop. Como está
documentado en la Sección de procedimientos y en las guías de sesión (Anexos 3 y 4),
el Raven se hizo en el primer trabajo de campo y el Stroop en el segundo. Esto es
importante porque las características de las muestras, aunque similares, presentan
diferencias entre ellas.
Adicionalmente para este segundo trabajo de campo construimos la dummy
„tierra‟ de la siguiente manera. La variable es igual a uno para los que contesten
positivamente a los ítems 3, 4 y 5 de la pregunta 4 presentada en el Anexo 6. Los ítems
se refieren al haber sido objeto de titulación, al haber sido objeto de titulación pero sin
entrega y al haber adquirido el título de otra manera. Estos últimos casos no afectan las
conclusiones principales del análisis pero se incluyeron porque hubo casos de personas
que recibieron títulos a través de proyectos de ONGs y organizaciones de la zona.
Ex post, es evidente que a pesar de los esfuerzos, el test de Raven fue
excesivamente difícil, puesto que el 89.74% de la muestra no superó cuatro respuestas
correctas sobre diez. En cambio la elección del Stroop numérico fue acertada puesto que
se logró variabilidad pero la mediana de aciertos está cerca del 90%.
La precisión en ambas pruebas se muestra en la Figura 19, mostrando el
resultado promedio para desplazados y beneficiarios del título. En cada gráfico se
reporta también una prueba t (que controla por varianzas desiguales). Como se ve no
hay diferencias significativas en la prueba lógica, mientras que hay un efecto negativo y
significativo en el caso de la prueba de control cognitivo (es decir el desempeño de los
beneficiarios es peor).
Sin embargo en el análisis econométrico esta última diferencia pierde
significatividad, confirmando que no hay efectos robustos. Las regresiones se reportan
en las Tablas 10 y 11. En el caso de Raven se usan las mismas variables de control del
juego de confianza. En el caso de Stroop tenemos algunos controles adicionales, tanto
de la estructura del experimento10
como de ingreso. En particular, para este último
10
En este caso en particular, como había más de un experimentador se controla por eso también y por
algunas condiciones adicionales que se introdujeron con motivo otro estudio que se está llevando a cabo,
en particular en la prueba Stroop aleatoriamente se modificaba el tiempo máximo para las respuestas
(variable escasez).
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina5
8
Pág
ina5
8
tenemos una medida de gasto per cápita equivalente11
(preguntas 17 y 18 del
cuestionario en Anexo 6) y una pregunta sobre qué tanta dificultad tendría el
participante en enfrentar un gasto no planeado, en escala Likert (de uno a cuatro,
creciente en la dificultad).
11
Las escalas de equivalencia sirven para tener en cuenta las economías de escala. Por simplicidad en este
caso se divide el gasto familiar por la raíz cuadrada del tamaño del hogar.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina5
9
Figura 19. Raven y Stroop test
Fuente: Primer trabajo de campo, Julio 2014, Cedecampo (La Pava) y Segundo trabajo de campo, Septiembre 2014, Cedecampo (La Pava) y
Mampujancito. Precisión en las respuestas (% correctas sobre el total).
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina6
0
Pág
ina6
0
Tabla 10. Precisión en las respuestas a la prueba Stroop: análisis econométrico
(1) (2) (3) (4)
Stroop (%) Stroop (%) Stroop (%) Stroop (%)
Tierra -7.043 -6.935 -7.199 -6.937
(5.125) (5.266) (5.310) (5.268)
Sesión 1.589 1.598 1.416 1.602
(2.103) (2.101) (2.037) (2.082)
Orden de sesión -0.292 -0.281 -0.226 -0.262
(0.480) (0.468) (0.453) (0.469)
Experimentador 4.432 4.936 4.330 4.828
(3.900) (3.990) (3.937) (3.917)
Educación 9.663*** 9.634*** 9.101*** 9.675***
(2.521) (2.532) (2.544) (2.534)
Primacía -8.312** -8.261** -8.222** -8.263**
(3.564) (3.551) (3.543) (3.567)
Escasez -23.50*** -23.42*** -23.24*** -23.43***
(3.691) (3.645) (3.646) (3.649)
Edad -0.433** -0.428** -0.455*** -0.423**
(0.175) (0.168) (0.163) (0.169)
Genero -5.328 -5.191 -4.459 -5.199
(4.157) (4.131) (4.048) (4.161)
Estrato -0.278
(0.790)
Activos 0.514 0.291 -0.507 0.504
(4.808) (5.024) (4.854) (4.887)
Mampuján 2.034 1.826 1.852 1.805
(10.19) (10.15) (9.878) (10.13)
Hogar numeroso -1.312
(4.192)
Emergencia -2.501
(2.096)
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina6
1
Consumo 6.24e-08
(1.19e-05)
Constante 95.32*** 95.17*** 103.2*** 93.85***
(13.07) (12.64) (13.57) (11.73)
Obs 141 141 141 141
R-2 0.417 0.417 0.423 0.416
Fuente: Segundo trabajo de campo, Septiembre 2014, Cedecampo (La Pava) y Mampujancito. Precisión en las respuestas (% correctas sobre el
total). * Significativo al 10%, ** significativo al 5%, *** significativo al 1%.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina6
2
Pág
ina6
2
Tabla 11. Precisión en las respuestas a la prueba Raven: análisis econométrico
(1) (2) (3)
Raven (%) Raven (%) Raven (%)
Tierra 1.263 1.101 2.368
(3.733) (3.447) (3.993)
Norma Social -1.279 -2.646 -2.259
(4.283) (3.780) (4.639)
Participativo -2.422 -1.218 -1.956
(4.029) (3.656) (4.360)
Sexo -3.201 -1.264 -2.129
(3.600) (3.239) (3.951)
Edad -0.301** -0.203* -0.302**
(0.118) (0.106) (0.126)
Estado 1.025 1.025 0.674
(2.123) (1.845) (2.142)
Educación 1.704 3.134* 1.596
(1.793) (1.604) (1.779)
Estrato 1.524 1.502
(0.938) (1.038)
Sesión -0.426 -0.305 -0.186
(0.607) (0.517) (0.666)
Hogar numeroso -5.701*
(3.098)
q34 -0.271
(0.910)
Constante 26.77*** 23.52*** 27.58**
(8.241) (7.086) (11.09)
Obs 86 96 82
R-2 0.171 0.188 0.161
Fuente: Primer trabajo de campo, Julio 2014, Cedecampo (La Pava). Precisión en las respuestas (% correctas sobre el total). * Significativo al
10%, ** significativo al 5%, *** significativo al 1%.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina6
3
6.4 Altruismo de segundo nivel
Finalmente concluimos el análisis con el tema del altruismo de segundo nivel que se
discutió en la Sección 4. Recordemos que el dictador podía enviar cero, tres, seis, nueve
o doce mil de los doce que recibía. Recordemos también que el participante de MM sólo
actuaba como supervisor, es decir podía sancionar al dictador. En particular recibía seis
mil, de los cuales podía gastarse 2000 para restar seis mil al dictador12
. Para el análisis
consideramos la decisión de sancionar cuando el dicatador envíe cero, tres y seis mil,
que son los más relevantes y claramente asociados a normas igualitarias13
. Por esta
razón consideramos el número de sanciones ejecutadas en estos casos (divididos por
tres). La tasa de sanción se puede interpretar como porcentaje.
Otra vez, como ocurrió en el caso del juego de confianza, se ve que el proceso
de reparación no interactúa con la instauración de normas sociales. Las diferencias en
las tasas de sanción, como se muestra en la Figura 20, no son significativas (t = .41, p =
.67). Sin embargo un elemento que llama la atención es que parece existir un efecto en
los más pobres. Estos últimos han sido identificados como los que claramente
encuentran dificultad a enfrentar un gasto no planeado (categorías tres y cuatro de la
pregunta 19 del anexo seis). En el caso de estos últimos, el incremento de la tasa de
sanción es del 28%, si bien no estadísticamente significativo (debido a que la prueba no
tiene la potencia estadística necesaria).
Finalmente, el análisis económetrico, donde las regresiones incluyen los mismos
controles utilizados para la precisión en la prueba Stroop, muestra que el impacto de la
restitución es marginal y no significativo en la muestra completa (Tabla 12).
12
Cabe subrayar que para el diseño de este experimento seguimos fielmente las instrucciones del Roots of
Human Sociality Project que estudió los problemas de cooperación en varias sociedades a escala pequeña
(Roots of Human Sociality Project II, 2004). 13
Técnicamente en el caso del envío de nueve y doce mil no se pueden restar los seis mil, porque ningún
participante puede perder dinero. Obviamente esta información se revelaba a los participantes.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina6
4
Pág
ina6
4
Figura 20. Tasa de sanción
Fuente: Segundo trabajo de campo, Septiembre 2014, Cedecampo (La Pava) y Mampujancito. Tasa de sanción (% castigos ejecutados en los
primeros tres escenarios). * Significativo al 10%, ** significativo al 5%, *** significativo al 1%.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina6
5
Tabla 12. Tasa de sanción: análisis econométrico
(1) (2) (3) (4)
Tasa de sanción Tasa de sanción Tasa de sanción Tasa de sanción
Tierra 0.0195 0.0144 0.00897 0.0143
(0.0666) (0.0679) (0.0681) (0.0662)
Sesión -0.0572* -0.0579* -0.0615** -0.0610**
(0.0303) (0.0297) (0.0300) (0.0295)
Orden de sesión 0.00316 0.000891 0.00241 0.00325
(0.00908) (0.00881) (0.00857) (0.00875)
Experimentador 0.0986 0.0838 0.0692 0.0811
(0.0617) (0.0619) (0.0605) (0.0608)
Educación -0.0221 -0.0245 -0.0345 -0.0151
(0.0388) (0.0394) (0.0410) (0.0404)
Primacía -0.0277 -0.0301 -0.0293 -0.0271
(0.0583) (0.0582) (0.0575) (0.0581)
Escasez 0.0658 0.0628 0.0661 0.0605
(0.0582) (0.0582) (0.0571) (0.0580)
Edad -0.000437 -0.00116 -0.00159 -0.000899
(0.00274) (0.00278) (0.00273) (0.00270)
Genero -0.00923 -0.0152 -0.000305 -0.0108
(0.0632) (0.0624) (0.0630) (0.0618)
Estrato 0.0134
(0.0111)
Activos 0.0587 0.0507 0.0385 0.0495
(0.0717) (0.0729) (0.0720) (0.0708)
Mampuján 0.0119 0.0228 0.0231 0.0701
(0.124) (0.124) (0.123) (0.128)
Hogar numeroso -0.0535
(0.0661)
Emergencia -0.0514*
(0.0300)
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina6
6
Pág
ina6
6
Consumo -2.66e-07*
(1.48e-07)
Constante 0.448** 0.570*** 0.710*** 0.594***
(0.177) (0.193) (0.206) (0.178)
Observations 141 141 141 141
R-squared 0.120 0.118 0.128 0.128
Fuente: Segundo trabajo de campo, Septiembre 2014, Cedecampo (La Pava) y Mampujancito. Tasa de sanción (% castigos ejecutados en los
primeros tres escenarios). * Significativo al 10%, ** significativo al 5%, *** significativo al 1%.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina6
7
7. Algunas observaciones finales
¿Cómo interpretar estos resultados? Primero que todo, es imperativo mencionar una vez
más las limitaciones que se anticiparon en la introducción. Este es un primer
acercamiento al problema, mientras que un verdadero estudio de impacto necesitaría
acceso a los datos oficiales de los beneficiarios y obviamente necesitaría una muestra
mucho más amplia para poder usar un conjunto de pruebas que cumplan con los
requerimientos en término de potencia y significatividad. La necesidad de utilizar una
medida auto-reportada de ser beneficiario de la Ley u otro programa es claramente un
límite; sin embargo no tuvimos acceso a la información oficial a pesar de los esfuerzos
de contactar las autoridades competentes.
En segundo lugar, es obvio que muchas de estas mediciones requerirían un
seguimiento longitudinal, o por lo menos poder seleccionar de manera más apropiada a
aquellos que ya se establecieron de manera permanente en donde se les asignó el título.
Tercero, este es un primer análisis enfocado a contribuir a la discusión pública que se
está realizando en el aniversario de los cuatro años de la Ley de restitución de tierras.
Las contribuciones académicas para revistas científicas vendrán más adelante, así que
los resultados claramente se tienen que interpretar como preliminares.
Por el contrario, subrayamos que el enfoque experimental, al permitir la
medición de comportamientos, ofrece una perspectiva única que en cualquier otro tipo
de seguimiento que se haga a la Ley evidentemente se verá denegado, por tres razones
en particular: (1) solo en un contexto experimental podemos acercarnos a mediciones de
conductas sin incurrir en sesgo de medición que las encuestas inevitablemente implican,
sobre todo la deseabilidad social de las respuestas; (2) Sólo en un contexto experimental
podemos lograr ese abanico de medidas, desde el capital social hacia las capacidades
cognitivas, que son el objetivo del enfoque integral que la misma Ley identifica como
su norte; (3) Si bien la identificación causal del impacto de la Ley no puede ser objeto
del diseño del experimento, porque requeriría una asignación aleatoria de los títulos a
las víctimas para poder construir un grupo de comparación por lo menos
transitoriamente, es obvio que existen otros tipos de preguntas “causales”, relacionadas
con la interacción con la titulación y que sólo se pueden contestar a través de un diseño
experimental. El diseño de este estudio, por ejemplo, aborda el tema de la exposición a
violencia, que no se discute en este informe pero que en breve será presentado por
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina6
8
Pág
ina6
8
algunos de los autores. Sin embargo hay muchas otras preguntas abiertas que valdría la
pena poner a la atención de la academia y de la opinión pública.
Dadas estas aclaraciones iniciales en el análisis se identificaron cuatro resultados
principales.
El primer resultado es el siguiente. Las victimas que se beneficiaron del proceso
de restitución muestran un incremento robusto y significativo en una de las medidas de
confianza (tasa de devolución). Este resultado se puede interpretar en el sentido que el
proceso establecido a través de la Ley contribuye a la reconstrucción del tejido social.
El segundo resultado es que la muestra (tanto de desplazados como de beneficiarios), no
“reacciona” a normas sociales. De hecho, la otra medida de confianza (tasa de
inversión) muestra una tendencia al incremento bastante fuerte en el escenario base
(condición de control), pero ese efecto se pierde en las condiciones de normas sociales
(el voto participativo y el anuncio de las expectativas normativas de otra muestra). El
diseño no permite abordar el porqué; sin embargo podemos conjeturar que la
experiencia de abandono de la población en cuestión, posiblemente genere
“desconfianza institucional”, es decir, hacia la instauración de mecanismos normativos.
El tercer resultado es que la restitución de tierra no afecta de manera significativa el
desempeño cognitivo. Esta hipótesis de investigación fue propuesta a partir del enfoque
conductual hacia la pobreza que identifica los efectos negativos de la condición de
escasez sobre el “ancho de banda” cognitivo de las personas. Sin embargo, no hay
alguna „suavización‟ lograda a través del proceso de asignación. Como se subrayó, hay
que tener cuidado en la interpretación de una de las dos tareas, que probablemente era
demasiado difícil, pero el resultado es bastante robusto. En este caso la interpretación es
bastante evidente. Para reducir la pobreza se requiere algo más que la simple titulación,
es necesario que se creen condiciones contextuales favorables para que el proceso sea
sostenible a largo plazo.
Finalmente, dentro del estudio se midió la tasa de sanción de los participantes.
Esto se refiere a la propensión de los participantes a enfrentar costos para castigar
comportamientos que vayan en contra de normas sociales, en este caso específico,
normas igualitarias. El resultado no es claro: por un lado no hay efecto significativo en
la muestra completa, pero por otro lado, si seleccionamos aquellos participantes con
condiciones económicas más desfavorables, se ve claramente una tendencia fuerte de
incremento (si bien no significativa estadísticamente, porque los números son
limitados). En este caso es difícil sacar conclusiones, por un lado es evidente que puede
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina6
9
estar operando algo que se relaciona con el segundo resultado de arriba; por otro lado la
tendencia señalada sugiere que probablemente con una muestra más grande el efecto sea
detectable.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina7
0
Pág
ina7
0
Referencias
Acemoglu, D., Johnson, S. & Robinson, J. (2001) The Colonial Origins of Comparative
Development: An Empirical Investigation. American Economic Review, 91(5),
pp. 1369–401.
Aguilera, M. (2013). Montes de María: una subregión de economía campesina y
empresarial. Banco de la República, Cartagena, Colombia.
Alston, L., Libecap, G., & Schneider, R. (1995). The Determinants and Impact of
Property Rights : Land Titles on the Brazilian Frontier. The Journal of Law,
Economics, & Organization, 12(1), 25-60.
Amnistía Internacional (2014). Un título de propiedad no basta: por una restitución
sostenible de tierras en Colombia. Madrid: Centro de Lenguas de Amnistía
Internacional.
Arrow, K. (1973). The limits of organization. New York: Norton. Arruñada, B. (2003).
Property Enforcement as Organized Consent. Journal of Law, Economics, and
Organization, 19(2), 401-444.
Barr, M. (2012). No Slack: The Financial Lives of Low-Income Americans.
Washington, DC: Brookings Institution Press.
Becerra, C. (2012). El difícil camino de la restitución de tierras en los Montes de
María. Recuperado el 14 de noviembre de 2014, de La Silla vacía:
http://lasillavacia.com/historia-invitado/37202/carmen-andrea-becerra-
becerra/el-dificil-camino-de-la-restitucion-de-tierras.
Berg, J., Dickhaut, J., & McCabe, K. (1995). Trust, reciprocity, and social
history. Games and economic behavior, 10(1), 122-142)
Bicchieri, C., & Xiao, E. (2007). Do the right thing: but only if others do so. Journal of
Behavioral Decision Making, 22, 191-208.
Blank, R. &. Barr, M. (2009). Insufficient Funds: Savings, Assets, Credit, and Banking
among Low-Income Households. New York: Russell Sage Foundation
Publications.
Bogliacino, F., Jiménez, L., & Grimalda, G. (2015). Consultative Democracy and
Trust (No. 012696). UN-RCE-CID.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina7
1
Brasselle, A., Gaspart, F., & Platteau, J. (2002). Land tenure security and investment
incentives: puzzling evidence from Burkina Faso. Journal of Development
Economics, 67(2), 373-418.
Bourdieu, P. (1986). The forms of capital. In: Handbook of Theory and Research for the
Sociology of Education, Ed. J. Richardson. New York, Greenwood, 241-258.
Boyd, R., Gintis, H., Bowles, S., & Richerson, P. J. (2003). The evolution of altruistic
punishment. Proceedings of the National Academy of Sciences, 100(6), 3531-
3535.
Brouwers, S., Van de Vijver, F. & Van Hemert, D. (2009). Variation in Raven's
Progressive Matrices scores across time and place. Learning and Individual
Differences, 19(3), 330-338.
Camerer, C., & Hogarth, R. (1999). The effects of financial incentives in experiments:
A review and capital-labor-production framework. Journal of risk and
uncertainty, 19(1-3), 7-42.
Charness, G., Du, N., & Yang, C. (2011). Trust and trustworthiness reputations in an
investment game. Games and Economic Behavior, 72(2), 361-375.
Comisión de Seguimiento de los Organismos de Control. (2013). Segundo informe de
seguimiento y monitoreo a la implementación de la Ley de víctimas y
restitución de tierras 2012-2013. Bogotá, D.C.
CONPES (2011) PLAN DE FINANCIACIÓN PARA LA SOSTENIBILIDAD DE LA
LEY 1448 DE 2011
https://colaboracion.dnp.gov.co/CDT/Conpes/Econ%C3%B3micos/3712.pdf
De los Ríos, E., Lefkaditis, P., Luna Capa, C. A., Ramírez Vargas, R. M., Folgueira
Castro, I., Cogollo Cabarcas, J. E. (2012) MONTES DE MARÍA: Un escenario
de riesgo para la exigibilidad de los Derechos de la población víctima del
conflicto armado. Publicaciones ILSA, Bogotá
De los Ríos, E. (2011). La región de Montes de María: Escenario actual de riesgo y de
violación de Derechos en Colombia. III Seminario Internacional Derechos
Hacia una Cultura de Paz. Madrid.
Demsetz, H. (1967). Toward a Theory of Property Rights. The American Economic
Review, 57(2), 347-359.
De Soto, H. (2000) The Mystery of Capital: Why Capitalism Triumphs in the West and
Fails Everywhere Else. New York: Basic.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina7
2
Pág
ina7
2
DiMatteo, M., Giordani, P., Lepper, H. & Croghan, T. (2002). Patient adherence and
medical treatment outcomes: a meta-analysis Medical Care, 40, 794–811.
DNP (2010) LEY NÚMERO 138 DE 2015 SENADO, 200 DE 2015 CÁMARA por la
cual se expide el Plan Nacional de Desarrollo 2014-2018: “Todos por un nuevo
país”. Bogotá, D. C., mayo de 2015. Gaceta Oficial
Do, Q. T., & Iyer, L. (2008). Land titling and rural transition in Vietnam. Economic
Development and Cultural Change, 56(3), 531-579.
Duffy, J., Xie, H., & Lee, Y. (2013). Social norms, information, and trust among
strangers: Theory and evidence. Economic Theory, 52(2), 669-708.
Edin, K. & Lein, L. (1997). Making Ends Meet: How Single Mothers Survive Welfare
and Low-Wage Work. New York: Russell Sage Foundation Publications.
El Espectador, (2010). El Espectador.com. Capturado responsable de burro-bomba que
mató 11 policías. 5 de Mayo de 2010
http://www.elespectador.com/noticias/judicial/articulo201653-capturado-
responsable-de-burro-bomba-mato-11-policias.
El Espectador, (2014). A pedir perdón por masacre de Pichilín: 16 de Julio de 2014
http://www.elespectador.com/noticias/judicial/pedir-perdon-masacre-de-
pichilin-articulo-504878.
El Tiempo. (2010). El Tiempo.com. Recuperado el 11 de diciembre de 2014, de
Capturan a presunto responsable de burro-bomba que mató 11 policías en
1996: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-7695325
Fehr, E., & Fischbacher, U. (2003). The nature of human altruism. Nature, 425(6960),
785-791.
Fehr, E., & Fischbacher, U. (2004). Third-party punishment and social norms. Evolution
and human behavior, 25(2), 63-87.
Fiscalía General de la Nación. (2011). Fiscalía General de la Nación.com. Recuperado
el 04 de diciembre de 2014, de Mancuso asegurado por masacre de
Pijiguay(Sucre):http://www.fiscalia.gov.co/colombia/noticias/mancuso-
asegurado-por-masacre-de-pijiguaysucre/.
Forjando Futuro (2015) Análisis de 1.000 Sentencias de restitución de tierras - Falsas
víctimas, no! Publicado en Revista Semana, Disponible a:
http://forjandofuturos.org/documentos/publicacion-restitucion-de-
tierras_falsas-victimas-no_1000-sentencias_junio-2015_fundacion-forjando-
futuros.pdf
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina7
3
Forjando Futuro (2014a) Restitución de Tierras, “Gota a Gota” disponible a
http://forjandofuturos.org/documentos/informe-general-restitucion-de-tierras-
2014-12.pdf
Forjando Futuro (2014b) Así fallan los jueces de tierras: 500 sentencias disponible a:
http://forjandofuturos.org/documentos/publicacion-restitucion-de-tierras-asi-
fallan-los-jueces_500-sentencias_septiembre-2014-fundacion-forjando-
futuros.pdf
Galiani, S., & Schargrodsky, E. (2010). Property rights for the poor: Effects of land
titling. Journal of Public Economics, 94(9-10), 700-729.
Gallón, G. (2011). Locomotoras del desplazamiento forzado. El Espectador. Obtenido
de http://www.elespectador.com/opinion/locomotoras-del-desplazamiento-
forzado-columna-287573.
Grootaert, C., & Van Bastelaer, T. (Eds.). (2002). Understanding and measuring social
capital: A multidisciplinary tool for practitioners (Vol. 1). World Bank
Publications.
Grupo Memoria Histórica. (2013). Informe Basta Ya. Colombia: Memorias de guerra y
Dignidad. Bogotá, Colombia: Centro Nacional de Memoria Histórica.
Grupo Memoria Histórica. (2009). La Masacre de El Salado: esa guerra no era nuestra.
Bogotá: Centro Nacional de Memoria Histórica.
Güth, W., Schmittberger, R., & Schwarze, B. (1982). An experimental analysis of
ultimatum bargaining. Journal of economic behavior & organization, 3(4),
367-
Hardin, G. (1968). The tragedy of the commons. Science, 162(3859), 1243-1248.
Ibáñez, A. M. (2008). El desplazamiento forzoso en Colombia: un camino sin retorno
hacia la pobreza. Bogotá: Uniandes - CEDE.
Johnson, S., McMillan, J., & Woodruff, C. (2002). Property Rights and Finance. The
American Economic Review, 92(5), 1335-1356.
Kahneman, D., Knetsch, J. L., & Thaler, R. (1986). Fairness as a constraint on profit
seeking: Entitlements in the market. The American economic review, 728-741.
Katz, S. & Hofer, T. (1994) Socioeconomic Disparities in Preventive Care Persist
Despite Universal Coverage Breast and Cervical Cancer Screening in Ontario
and the United States JAMA 272, 530–534.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina7
4
Pág
ina7
4
Kelly, R. (1985). The Nuer conquest: The structure and development of an expansionist
system. University of Michigan Press.
Kim, J., Garman, E. T., & Sorhaindo, B. (2006). Relationship between financial stress
and workplace absenteeism of credit counseling clients. Journal of Family and
Economic Issues, 27 (3), 458-478.
Knack, S., & Keefer, P. (1997). Does social capital have an economic payoff? A cross-
country investigation. The Quarterly journal of economics, 1251-1288.
Knack, S., & Keefer, P. (1995). Institutions and economic performance: Cross-country
tests using alternative institutional indicators. Economics and Politics, 7(3), pp.
207–28.
Kulaif, T. & Valle, L. (2008) Alternative to the Stroop Color Word Test for Illiterate
Individuals. The Clinical Neuropsychologist, 22(1), 73-83.
La Porta, R., Lopez-de-Silanes, F., Shleifer, A., & Vishny, R. (1999). The quality of
government. Journal of Law, Economics, and organization, 15(1), 222-279.)
Lassen, G. (1975). Extension of the Stroop interference effect to pictures and words.
(Doctoral dissertation, University of Arizona, 1974).
Leimar, O., & Hammerstein, P. (2001). Evolution of cooperation through indirect
reciprocity. Proceedings of the Royal Society of London B: Biological
Sciences, 268(1468), 745-753.
Levitt, S. D., & List, J. A. (2009). Field experiments in economics: the past, the present,
and the future. European Economic Review, 53(1), 1-18
Loesche, P., Wiley, J. & Hasselhorn, M. (2015). How knowing the rules affects solving
The Raven Advanced Progressive Matrices Test. Intelligence, 48, 58-75.
Mackintosh, N. & Bennett, E. (2005). What do Raven‟s Matrices measure? An analysis
in terms of sex differences. Intelligence, 33, 663-674.
MacLeod, C. (1991). Half a century of research on the Stroop effect: An integrative
review. Psychological Bulletin, 109(2), 163-203.
MacLeod, C. (1992). The Stroop Task: The "Gold Standard" of Attentional Measures.
Journal of Experimental Psychology, 121(1), 12-14.
Mani, A., Mullainathan, S., Shafir, E. & Zhao, J. (2013). Poverty Impedes Cognitive
Function. Science, 341, 976-980.
Marlowe, F. W., Berbesque, J. C., Barr, A., Barrett, C., Bolyanatz, A., Cardenas, J. C.,
Ensminger, J., Gurven, M., Gwako, E., Henrich, J., Henrich, N., Lesorogol, C.,
Mc Elreath, R. & Tracer, D. (2008). More „altruistic‟ punishment in larger
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina7
5
societies. Proceedings of the Royal Society of London B: Biological Sciences,
275(1634), 587-592.
Mauro, P. (1995). Corruption and growth. The quarterly journal of economics, 110(3),
681-712.
McCown, D. & Arnoult, M. (1981). Interference produced by modified Stroop stimuli.
Bulletin of the Psychonomic Society, 17, 5-7.
McLoyd, V. (1998). Socioeconomic disadvantage and child development American
Psychologist 53, 185–204.
Mejía, J. (2008). Chengue, un pueblo sin justicia ni perdón. Recuperado el 03 de
diciembre de 2014 de: http://www.semana.com/on-line/articulo/chengue-
pueblo-justicia-ni-perdon/90620-3.
Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural; Instituto Colombiano de Desarrollo Rural.
(2011). Libro Blanco de las Irregularidades en la Tenencia de la Tierra en
Colombia.
Monroy, J. C. (2011). Montes de María reveló más despojo de tierras. El Colombiano.
17 de octubre de 2011, de
http://www.elcolombiano.com/BancoConocimiento/M/montes_de_maria_revel
o_mas_despojo_de_tierras/montes_de_maria_revelo_mas_despojo_de_tierras.
asp
Montaño, J. (2013). Monumento recuerda a mártires de masacre de “Las Brisas”.
Recuperado el 03 de diciembre de 2014 de:
http://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-13152941.
Mullainathan, S. & Shafir, E. (2013). Scarcity: why having too litle means so much.
New York: Henry Holt and Company, LLC.
Museo Itinerante de la Memoria. (s.f.). Realidad social y política en los Montes de
María. Recuperado el 14 de noviembre de 2014, de
http://www.caracolaconsultores.com/MIM/node/12
North, D. (1981). Structure and Change in Economic History. WW Norton & Company
Inc.
Nowak, M. A., & Sigmund, K. (1998). Evolution of indirect reciprocity by image
scoring. Nature, 393(6685), 573-577.
Nowak, M. A., Page, K. M., & Sigmund, K. (2000). Fairness versus reason in the
ultimatum game. Science, 289(5485), 1773-1775.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina7
6
Pág
ina7
6
Ostrom, E. (2009) Beyond Markets and States: Polycentric Governance of Complex
Economic Systems [Nobel Prize lecture]. Stockholm, Sweden
Peretti, P. (197l). Effects of noncompetitive, competitive instructions, and sex on
performance in a color-word interference task. Journal of Psychology, 79, 67-
70.
Powell, P. (1998). Traditional production, communal land tenure, and policies for
environmental preservation in the South Pacific. Ecological Economics, 24(1),
89-101.
Promontes (2003). “Programa de Desarrollo y Paz de los Montes de María -Promontes”,
Bogotá: PNUD, Corporación Territorios, Universidad de Cartagena.
Putnam, R. D., Leonardi, R., & Nanetti, R. Y. (1994). Making democracy work: Civic
traditions in modern Italy. Princeton university press.
Rand, G., Wapner, S., Werner, H. & McFarland, J. (1963). Age differences in
performance on the Stroop color-word test. Journal of Personality, 31, 534-
558.
Raven, J. C. (1998). Court, JH, & Raven, J. (1998). Progressive matrices standard
(PM38).
Raven, J., & Raven, J. C. (2000). Court, JH (2000). Manual for the Raven’s Progressive
Matrices and Vocabulary Scales. Section 3: The Standard Progressive
Matrices.
Raven, J., & Raven, J. (2003). Raven Progressive Matrices. En S. McCallum (Ed.),
Handbook of Nonverbal Assessment (pp. 223-237). New York: Kluwer
Academic / Plenum Publishers.
Raven, J. (2008). General introduction and overview: The Raven Progressive Matrices
Tests: Their theoretical basis and measurement model. En J. Raven & J. Raven
(Eds.), Uses and Abuses of Intelligence: Studies Advancing Spearman and
Raven’s Quest for Non-Arbitrary Metrics (pp. 17-68). Unionville, New York:
Royal Fireworks Press.
Regan, J. (1978). Involuntary automatic processing in color-naming tasks. Perception
and Psychophysics, 24, 130-136.
Rettberg, A. (2015). Ley de víctimas: logros y retos. 6 Junio 2015:
http://www.elespectador.com/noticias/politica/ley-de-victimas-logros-y-retos-
articulo-564984
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina7
7
Robinson, J. (2013). Colombia: another 100 years of solitude. Current History. Harvard
University.
Roots of Human Sociality Project II (2004) ROOTS OF HUMAN SOCIALITY
PROJECT: SESSION INSTRUCTIONS AND SCRIPTS Available at:
http://jee.caltech.edu/files/2011/06/Scripts-Core-Games-DG-UG-TPP.pdf
Rosinski, R., Golinkoff, R., & Kukish, K. (1975). Automatic semantic processing in a
picture-word interference task. Child Development, 46, 247-253.
Rothstein, B., & Uslaner, E. M. (2005). All for all: Equality, corruption, and social
trust. World politics, 58(01), 41-72.)
Ruiter, C., & Brosschot, J. (1994). The emotional Stroop interference effect in anxiety:
atentional bias or cognitive avoidance? Behavioral Research and Therapy,
32(3), 315-319.
Rutas del Conflicto. (s.f.a). Rutas del Conflicto.com. Recuperado el 04 de diciembre de
2014, de Masacre de Colosó 2004:
http://rutasdelconflicto.com/interna.php?masacre=251
Rutas del conflicto. (s.f.b). Rutas del conflicto.com. Recuperado el 04 de diciembre de
2014, de Masacre del El Parejo:
http://rutasdelconflicto.com/interna.php?masacre=18.
Santos, J. & Montgomery, J. (1962). Stability of performance on the color-word test.
Perceptual and Motor Skills, 15, 397-398.
Sampson, R. J., Raudenbush, S. W., & Earls, F. (1997). Neighborhoods and violent
crime: A multilevel study of collective efficacy. Science, 277(5328), 918-924.
Schubö, W. & Hentschel, U. (1977). Reliability and validity of the serial Color-Word
Test: Further results. Psychological Research Bulletin, 17(6). University Press.
Schubö, W., & Hentschel, U. (1978). Improved reliability estimates for the serial Color-
Word Test. Scandinavian Journal of Psychology, 19, 91-95.
Semana. (2008). Semana.com. Recuperado el 03 de diciembre de 2014, de Chengue, un
pueblo sin justicia ni perdón: http://www.semana.com/on-
line/articulo/chengue-pueblo-justicia-ni-perdon/90620-3
Semana. (2013). Semana.com. Recuperado el 03 de diciembre de 2014, de Monumento
recuerda a mártires de masacre de 'Las Brisas':
http://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-13152941
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina7
8
Pág
ina7
8
Shadish, W. R., Cook, T. D., & Campbell, D. T. (2002). Experimental and quasi-
experimental designs for generalized causal inference. Boston: Houghton
Mifflin Company.
Sichel, J. & Chandler, K. (1969). The color-word interference test: The effects of varied
color-word combinations upon verbal response latency. Journal of Psychology,
72, 219-231.
Sjöberg, L. (1969). On serial scoring of the color word test. Acta Psychologica, 29, 150-
162.
Smith, G. (1959). Comparisons between adaptive patterns in two serial experiments.
Acta Psychologica, 16, 302-315.
Smith, G. & Borg, G. (1964). The problem of re-testing in the serial color-word test.
Psychological Research Bulletin, 4, 1-8.
Smith, G. & Klein, G. (1953). Cognitive controls in serial behavior patterns. Journal of
Personality, 22, 188-213.
Smith, G. & Nyman, G. (1974). The validity of the serial color- word test: A reply to
Lennart Sjöberg. Scandinavian Journal of Psychology, 15, 238-240.
Smith, V. L. (1994). Economics in the Laboratory. The Journal of Economic
Perspectives, 8(1), 113-131.
Smith, V. L. (2010). What are the questions?. Journal of Economic Behavior &
Organization. Journal of Economic Behavior & Organization, 73, 3-15.
Stroop, J. (1935). Studies of interference in serial verbal reactions. (C. Green, Ed.)
Recuperado el 23 de Octubre de 2014, de Classics in the History of
Psychology: http://psychclassics.yorku.ca/Stroop/.
Svensson, J. (1998). Investment, property rights and political instability: Theory and
evidence. European Economic Review, 42(7), 1317-1341.)
Sysoeva, T., & Lyusin, D. (s.f.). Cognitive Bases of Emotional Intelligence: Emotional
Stroop Effect. Rusia. Recuperado el 24 de Octubre de 2014, de
http://www.ecpa11.lu.lv/files/Sysoeva_Lyusin.pdf.
Tang, J., Critchley, H., Glaser, D., Dolan, R., & Butterworth, B. (2006). Imaging
informational conflict: a functional magnetic resonance imaging study of
numerical stroop. Journal of cognitive neuroscience, 18(12), 2049-62.
Tecce, J., & Happ, S. (1964). Effects of shock-arousal on a card-sorting test of color-
word interference. Perceptual and motor skills, 19, 905-906.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina7
9
Uechi, Y. (1972). Cognitive interference and intelligence: Reexamination of the
measures of SCWT, Japanese Journal of Educational Psychology, 20, 92-100.
UNPD. (2010). Los Montes de María: Análisis de la Conflictividad. Área de Paz,
Desarrollo y Reconciliación.
Vargas, J. & Villaveces, J. (2015). No sabemos cuánto cuesta el postconflicto; lo que sí
sabemos es que financiarlo va a ser terriblemente difícil. Recuperado de:
http://focoeconomico.org/2015/03/31/no-sabemos-cuanto-cuesta-el-
postconflicto-lo-que-si-sabemos-es-que-financiarlo-va-a-ser-terriblemente-
dificil/
Verdad Abierta (2013) La Paradoja de la Restitución en Montes de María. (31 de
Octubre de 2013). http://www.verdadabierta.com/despojo-de-tierras/4997-la-
paradoja-de-la-restitucion-en-montes-de-maria
Verdad Abierta (2010) Mampuján, las primeras víctimas que serán reparadas por los
'paras'. (26 de abril de 2010). Recuperado el 14 de noviembre de 2014,
http://www.verdadabierta.com/despojo-de-tierras/2412-mampujan-las-
primeras-victimas-que-seran-reparadas-por-los-paras
Verdad abierta (s.f. a). Verdadabierta.com. 'Juancho Dique' reconoce la autoría de la
masacre de Macayepo. Recuperado el 03 de diciembre de 2014, de
http://www.verdadabierta.com/justicia-y-paz/2416.
Verdad abierta (s.f. b). “Juancho Dique” reconoció asesinato de alcalde y tres
masacres. Recuperado el 11 de diciembre de 2014 de:
http://www.verdadabierta.com/justicia-y-paz/versiones-seccion/501-juancho-
dique-reconocio-asesinato-de-alcalde-y-3-masacres.
Verdad Abierta (s.f. c) El terror que desplazó a María la Baja
http://www.verdadabierta.com/tierras/despojo-de-tierras/4812-el-terror-que-
desplazo-a-maria-la-baja
Williams, G. C. (1966). Adaptation and Natural Selection: A Critique of Some Current
Evolutionary Thought: A Critique of Some Current Evolutionary Thought.
Princeton University Press.
Williams, B. & Pearlberg, S. (2006). Learning of three-term contingencies correlates
with Raven scores, but not with measures of cognitive processing. Intelligence,
34, 177-191.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina8
0
Pág
ina8
0
Wolitzky, D., Hofer, R. & Shapiro, R. (1972). Cognitive controls and mental
retardation. Journal of Abnormal Psychology, 79, 296–302.
Zak, P. J., & Knack, S. (2001). Trust and growth. The economic journal, 111(470), 295-
321.
Zajano, M., Hoyceanyls, E. & Ouellette, J. (1981). A confound in the standard control
condition of the Stroop experiment. Perceptual and Motor Skills, 53, 835-841.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina8
1
Anexo 1: Diagrama de flujo del primer trabajo de campo
Análisis
Cuestionario.
Prueba de Raven
Condición número 3 - Norma social (n=46)
Luego de responder las preguntas de ejemplo y antes de tomas las
decisiones como remitentes y destinatarios, los participantes recibían una
señal acerca de las mismas votaciones, pero realizadas en otros
experimentos llevados a cabo en una zona rural de Colombia.
Condición número 2 – Voto (n=38)
Luego de responder las preguntas de ejemplo y antes de tomar las
decisiones como remitentes y destinatarios, los participantes votan acerca
de cómo creen deben elegir los remitentes y los destinatarios. Los
resultados de la votación se socializan inmediatamente.
Condición número 1 – Control (n=27)
Luego de responder las preguntas de ejemplo, los participantes toman las
decisiones de remitente y destinatario.
Aleatorización (n=111).
Reunión con los líderes comunitarios
para hablar sobre la investigación y para
convocar a los participantes.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina8
2
Pág
ina8
2
Anexo 2: Diagrama de flujo del segundo trabajo de campo
Análisis
Responder a un cuestionario.
Actividad principal – Juego del dictador (n=171).
Los participantes tomaban decisiones siempre como Participante 3.
Prueba de Stroop en condición de tiempo reducido o ampliado
Aleatorización (n=171).
Convocatoria de los participantes a
cargo de los líderes comunitarios.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina8
3
Anexo 3: Guía experimental del primer trabajo de campo
Las partes en cursiva no se tienen que leer. Buenos días. Queremos agradecer a todos
por aceptar está invitación. Gastaremos alrededor de dos horas explicando toda la
actividad, realizándolo y finalizando con una encuesta corta a la salida. Entonces
empecemos.
El siguiente ejercicio es una forma entretenida y diferente de participar
activamente en un proyecto acerca de las decisiones individuales. De acuerdo a las
decisiones que usted tome el día de hoy podrá ganar una cantidad de dinero, por eso es
importante que usted preste mucha atención a estas instrucciones. Los fondos para
cubrir estos gastos han sido donados por una universidad. Cualquier pregunta que cada
uno de ustedes pueda tener durante el día, cualquiera de nosotros (presentar al resto de
colaboradores) puede contestarle.
Cada uno de ustedes se preguntará porque damos dinero en estos ejercicios.
Usamos dinero porque el ejercicio necesita que las personas tomen decisiones de tipo
económico, es decir que sean decisiones con consecuencias para el bolsillo, como
sucede en la realidad.
Es importante que sepa que en cualquier momento puede retirarse, sin embargo,
solamente si completa el ejercicio y diligencia la encuesta, podrá recibir la cantidad de
dinero que gane por sus decisiones.
El objetivo del ejercicio es entender cómo las personas toman decisiones a la
hora de interactuar con otras personas. Las ganancias que usted haga así como la
información que usted nos proporcione, se trataran de forma anónima. Nosotros
registraremos todas sus decisiones y sus respuestas a la encuesta final a través del
número que han sorteado. Nunca usaremos su nombre y apellido para asociar su persona
a sus decisiones y respuestas. En nuestro registro lo que aparecerá será que el señor o la
señora que extrajo el número, por ejemplo 2100, decidió así así y así, y contestó en el
cuestionario así así y así. Guardaremos sus decisiones en un registro electrónico en
nuestra computadora. Si quieren pueden averiguar al final de la sesión como hemos
registrado sus decisiones en nuestro registro.
Ahora les vamos a decir cómo se establecen las ganancias: estas ganancias son el
resultado de las decisiones que usted tome en dos actividades. Al final usted va a recibir
las ganancias de solo una de estas dos actividades. La actividad que se paga entre las
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina8
4
Pág
ina8
4
dos se escogerá por sorteo enfrente de ustedes, cuando todos terminen de contestar todas
las actividades. Es importante que piense cuidadosamente sus decisiones en cada una de
las actividades, porque usted solo sabrá cuál de ellas se le pagará hasta cuando termine
de contestar todo. En resumen, una vez usted termine de contestar todas las actividades
y se seleccione la actividad a pagar entre las primeras dos, le repartiremos un
cuestionario anónimo mientras nosotros calcularemos su pago. Pasaremos a repartir los
pagos al final de la sesión.
INSTRUCCIONES GRUPALES PARA LA PRIMERA DECISIÓN
1) Cada uno de ustedes interactuará con otra persona. No sabrán quien es la contraparte.
Cuánto dinero pueda ganar dependerá de sus decisiones y de las de su contraparte.
2) Llamamos las dos personas Remitente y Destinatario. Los dos están presentes en este
mismo salón. Antes de empezar le indicaremos si actuará como remitente o como
destinatario.
3) Esta es la representación de la interacción. Al comienzo remitente y destinatario
reciben dos fichas cada uno. Cada ficha es equivalente a 4000 pesos.
4) Hay dos etapas en esta interacción. En la primera etapa, es el remitente quien tomará
la decisión, en la segunda etapa, es el destinatario quien decide. Las sumas finales se
determinan de acuerdo a las decisiones de los dos jugadores asignados al mismo grupo.
5) Primero, explicaremos la decisión del remitente. El remitente decide si enviar 0
fichas, 1 ficha o 2 fichas al destinatario.
6) Si el remitente no envía nada, la interacción se acaba y ambos (remitente y
destinatario) se quedan con el dinero asignado al inicio de la interacción. O sea, dos
fichas para el remitente y dos fichas para el destinatario.
7) Si el remitente envía una ficha al destinatario, nosotros los investigadores añadiremos
dos fichas, así que el destinatario va a recibir tres nuevas fichas.
8) Si el remitente envía dos fichas, nosotros los investigadores añadiremos cuatro fichas
así que el destinatario recibirá seis nuevas fichas.
9) Dicho de otra manera, siempre el destinatario recibirá tres veces el número de fichas
enviadas por el remitente.
10) El destinatario tiene ahora que tomar su decisión. El destinatario tiene que decidir si
transferir fichas al remitente o no transferir nada. Si no transfiere nada, el remitente se
queda con cuanto está en sus manos al final de la primera etapa. Si el destinatario
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina8
5
transfiere dinero, entonces remitente y destinatario se quedarán exactamente con la
misma cantidad de fichas.
11) Volvamos a explicarlo. Si el remitente envía 1 ficha, el remitente tiene una ficha y
el destinatario 5 fichas al final de la primera etapa. Si el destinatario no transfiere nada,
se quedan con estas sumas finales. La suma final del remitente es de una ficha, la del
destinatario es de 5 fichas.
12) Si el destinatario transfiere dinero, entonces dos fichas serán asignadas al remitente.
Como resultado, la suma final del remitente se vuelve de 3 fichas (la que tenía más las
dos que le fueron transferidas), la del destinatario se vuelve de 3 fichas (5 fichas menos
dos que fueron transferidas).
13) Si el remitente envía dos fichas, la suma del remitente al final de la primera etapa es
de cero fichas, la del destinatario es de ocho fichas. Si el destinatario no transfiere,
entonces las sumas no cambian. La suma total del remitente es de cero fichas y la del
destinatario de 8 fichas.
14) Si el destinatario decide transferir algunas fichas, entonces cuatro fichas serán
transferidas al remitente. Como resultado, el remitente tiene ahora como suma total
cuatro fichas (no tenía ninguna ficha y se le transfirieron cuatro fichas), el destinatario
tiene una suma total de cuatro fichas (8 menos las cuatros que se transfirieron al
remitente)
¿Está claro lo que remitente y destinatario pueden hacer? Hay cincos escenarios
posibles entre remitente y destinatario. Los cincos están representados en estas gráficas.
15) Miramos ahora como aparece la decisión del remitente. Por favor todos saquen la
hoja número 3. No escriban nada porque todavía no saben si actuarán como remitente o
destinatarios. El remitente tiene que indicar si quiere enviar cero, una o dos fichas.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina8
6
Pág
ina8
6
Hoja 3
Código:
Por favor, indique cuántas fichas quiere mandar al destinatario. Acuérdese que cada
ficha es equivalente a 4000 pesos. Marque claramente una sola de las opciones en la
tabla de abajo.
0 1 2
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina8
7
16) Ahora echémosle un vistazo a la decisión del destinatario. Por favor todos saquen la
hoja número 4. No escriban nada porque todavía no saben si actuarán como remitente o
destinatarios. El destinatario tiene que indicar su opción preferida en la siguiente tabla.
Como el destinatario todavía no sabe cuánto el remitente decidió enviarle, tiene que
tomar una decisión para cada escenario posible. Por favor marque sólo una de las dos
opciones en cada uno de los renglones.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina8
8
Pág
ina8
8
Hoja 4
Código:
Para cada escenario, marque con una cruz si quiere o no transferir al remitente una parte
de las fichas:
Escenario 1: si el remitente me manda una ficha, entonces:
No transfiero nada; nos quedamos
con:
- 1 ficha ($4000) para el remitente;
- 5 fichas ($20000) para mí
□
Transfiero una parte de mis fichas,
nos quedamos con:
- 3 fichas ($12000) para el remitente
- 3 fichas ($12000) para mí
□
Escenario 2: si el remitente me manda dos fichas, entonces:
No transfiero nada; nos quedamos
con:
- cero fichas ($0) para el remitente;
- 8 fichas ($32000) para mí
□
Transfiero una parte de mis fichas,
nos quedamos con:
- 4 fichas ($16000) para el remitente
- 4 fichas ($16000) para mí
□
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina8
9
EJEMPLOS
Ahora miraremos algunos ejemplos. Por favor intenten contestar a estas preguntas de
manera individual. Luego revisaremos las soluciones al tablero. Su respuesta no va a
afectar las decisiones o la asignación al papel de remitente o destinatario.
Hoja 1
Código:
Q1. El remitente envió una ficha al destinatario, el investigador agregó 2 fichas. El
destinatario trasfirió 2 fichas al remitente.
1) ¿Cuál es la suma final del destinatario? _______12000______
2) ¿Cuál es la suma final del remitente? _________12000_________
Q2. El remitente envió una ficha al destinatario, el investigador agregó 2 fichas. El
destinatario no trasfirió ninguna ficha al remitente.
1) ¿Cuál es la suma final del destinatario? _____20000________
2) ¿Cuál es la suma final del remitente? ________4000_________
Q3. El remitente envió 2 fichas al destinatario, el investigador agregó 4 fichas; el
destinatario trasfirió al remitente 4 fichas.
1) ¿Cuál es la suma final del destinatario? ________16000________
2) ¿Cuál es la suma final del remitente? ___________16000_______
Ahora les vamos entregando estas preguntas y les dejamos tiempo para que contesten.
En este caso, también, estas preguntas sólo sirven para controlar que efectivamente
hayan entendido, no afectan los pagos ni la asignación al papel de remitente o
destinatario. Por favor si algo no está claro, levanten la mano.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina9
0
Pág
ina9
0
Hoja 2
Código:
Q1. Supongamos que el remitente no envíe ninguna ficha. ¿Cuál será la suma final para
el remitente y el destinatario?
A) 2 fichas
B) Cero fichas
C) 1 ficha
D) Depende de lo que haga el destinatario
Q2. Supongamos que el remitente envíe dos fichas y el destinatario no transfiera nada.
¿Cuál será la suma final del remitente?
A) 2 fichas
B) Cero fichas
C) 1 ficha
D) 8 fichas
Q3. Supongamos que el remitente envíe 1 o 2 fichas al destinatario. ¿La suma final del
remitente será más o menos de dos fichas?
A) Seguramente más de dos fichas
B) Seguramente menos de dos fichas
C) Depende de lo que haga el destinatario
Q4. Supongamos que el remitente envíe 1 o 2 fichas al destinatario. ¿La suma final del
destinatario será más o menos de dos fichas?
A) Seguramente más de dos fichas
B) Seguramente menos de dos fichas
C) Depende de lo que haga el destinatario
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina9
1
Ahora, aleatoriamente, o se lee la sección siguiente, o se salta a la Condición Norma
Social, o se salta a la decisión.
CONDICIÓN VOTO
Ahora vamos a determinar cómo ustedes consideren oportuno que todo el mundo
decida. En esta hoja encontrarán las decisiones del remitente y destinatario. Tienen que
indicar su respuesta para cada situación, luego evaluaremos a mayoría cuál es la
decisión oportuna en cada situación por ustedes. Esta decisión no determina ningún
pago y no será vinculante.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina9
2
Pág
ina9
2
Hoja 5
Código:
Por favor, indique cuántas fichas cree oportuno que el remitente mande al destinatario.
Acuérdese que cada ficha es equivalente a 4000 pesos. Marque claramente una sola de
las opciones en la tabla de abajo.
0 1 2
Para cada escenario, marque con una cruz si cree oportuno o no que el remitente
transfiera una parte de las fichas:
Escenario 1: si el remitente manda una ficha, entonces:
El destinatario no tiene que transferir
nada, se quedan con:
- 1 ficha ($4000) para el remitente;
- 5 fichas ($20000) para el destinatario
□
El destinatario tiene que transferir
una parte de las fichas, se quedan
con:
- 3 fichas ($12000) para el remitente
- 3 fichas ($12000) para el
destinatario
□
Escenario 2: si el remitente manda dos fichas, entonces:
El destinatario no tiene que transferir
nada, se quedan con:
- cero fichas ($0) para el remitente;
- 8 fichas ($32000) para el
destinatario
□
El destinatario tiene que transferir una
parte de las fichas, se quedan con:
- 4 fichas ($16000) para el remitente
- 4 fichas ($16000) para el
destinatario
□
Los asistentes incluyen los datos de las votaciones en el computador que calcula en
automático los resultados.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina9
3
Listo. Entonces, de acuerdo a sus decisiones, la mayoría considera oportuno que el
remitente envíe XXX.
Siempre de acuerdo a sus votaciones, la mayoría considera oportuno que el destinatario
TRANSFIERA/NO TRANSFIERA cuando el remitente envía una ficha.
Siempre de acuerdo a sus votaciones, la mayoría considera oportuno que el destinatario
TRANSFIERA/NO TRANSFIERA cuando el remitente envía dos fichas.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina9
4
Pág
ina9
4
CONDICIÓN NORMA SOCIAL
Las personas que participan en estas investigaciones, a veces quieren saber las
opiniones de otras personas que participaron previamente. En la hoja 5 encontrarán las
opiniones de la mayoría de los participantes en unas sesiones previas hechas en algunos
pueblos de Colombia.
Esta información no determina ningún pago y no será vinculante.
Hoja 5
Código:
Las personas que participan en estas investigaciones a veces quieren saber las opiniones
de otras personas que participaron previamente.
La información por debajo se ha repartido a cada participante de esta sesión.
Esta información no determina ningún pago y no será vinculante.
De acuerdo a las sesiones previas realizadas en algunos pueblos de Colombia, la
mayoría de los participantes ha creído oportuno que el remitente envíe 2 fichas al
destinatario.
Siempre de acuerdo a estas sesiones, la mayoría ha considerado oportuno que el
destinatario transfiera cuando el remitente envíe una ficha.
Siempre de acuerdo a estas sesiones, la mayoría ha considerado oportuno que el
destinatario transfiera cuando el remitente envíe dos fichas.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina9
5
Listo, ahora vamos a empezar. Primero vamos a sortear quién es remitente y quién es
destinatario. En esta bolsa hay un cubito rojo y un cubito negro. Vamos a sacar un
cubito. Si sale rojo, los que tienen números pares serán remitentes y los que tienen
números impares destinatarios. Si sale negro, los que tienen números impares serán
remitentes y los que tienen números pares serán destinatarios. Les recuerdo que los
emparejamientos son aleatorios.
SEGUNDA DECISIÓN
Ahora llegamos a la segunda decisión. La segunda decisión sigue la misma regla de
antes. Habrá un remitente y un destinatario. Los que antes eran remitentes ahora serán
destinatarios y viceversa. Tengan en cuenta que las parejas serán diferentes. Es decir, su
contraparte remitente será diferente a su contraparte destinatario y viceversa.
Acá finalizaba el jugo de la confianza. Luego seguía una actividad adicional y un
cuestionario.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina9
6
Pág
ina9
6
Anexo 4: Guía de sesión del segundo trabajo de campo
INTRODUCCIÓN
Buenos días, muchas gracias por su participación. Mi nombre es XXX, aquí está mi
colaborador/a XXX y manejaremos la primera parte de la sesión de investigación de
hoy. Luego XXX manejará la segunda parte. Esta primera parte está dividida en tres,
mientras la segunda es contestar a un cuestionario. Listo, podemos empezar.
Acá se desarrollaban primero dos actividades relacionadas con otro proyecto de
investigación.
DECISIÓN
Usted jugará con otras dos personas, sin saber quiénes serán. Esas personas ya
participaron. ¿Cómo vamos a determinar quiénes serán ellas? A través de una rifa.
Usted es Participante 3, las otras personas son Participante 1 y Participante 2.
El Participante 1 recibió 12000 pesos, y el Participante 2 nada. Le pedimos al
Participante 1 que diera una suma de dinero al Participante 2. Esta suma puede ser: 0,
3mil, 6mil, 9mil, 12mil pesos. El Participante 1 se queda con lo que sobre. El
Participante 2 ya se llevó a su casa lo que Participante 1 decidió darle. Participante 1
tiene que esperar la decisión del Participante 3, o sea de usted, para saber cuánto podrá
llevarse.
Usted recibe 6000 pesos. Puede hacer una de dos cosas. Puede quedarse con los 6000
pesos o bien gastarse 2000 pesos. Si se gasta 2000 le vamos a quitar 6000 pesos al
Participante 1.
Usted tiene que tomar esta decisión 5 veces, por cada posible suma de dinero que
Participante 1 pudo darle a Participante 2.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina9
7
Aquí van algunos ejemplos (se hacen los ejemplos con plata verdadera y utilizando la
cartulina).
¿Está claro? ¿Puede contestar las siguientes preguntas?
a) Si Participante 1 decide darle $6000 a Participante 2 y usted se queda con sus
$6000, ¿cuánto recibe Participante 1? ¿Y Participante 2? ¿Y usted?
b) Si Participante 1 decide no darle nada a Participante 2 y usted se gasta $2000
para quitar $6000 a Participante 1, ¿cuánto recibe Participante 1? ¿Y
Participante 2? ¿Y usted?
Ahora, dígame por favor qué quiere hacer en las siguientes situaciones:
1) Imagine que Participante 1 no dio nada a Participante 2. ¿Quiere gastarse
$2000 para quitarle $6000 a Participante 1? ¿Sí o no?
2) Imagine ahora que Participante 1 dio $3000 a Participante 2. ¿Quiere gastarse
$2000 para quitarle $6000 a Participante 1? ¿Sí o no?
3) Imagine ahora que Participante 1 dio $6000 a Participante 2. ¿Quiere gastarse
$2000 para quitarle $6000 a Participante 1? ¿Sí o no?
4) Imagine ahora que Participante 1 dio $9000 a Participante 2. ¿Quiere gastarse
$2000 para quitarle $6000 a Participante 1? ¿Sí o no? En este caso, como
Participante 1 terminaría perdiendo plata, se lleva cero pesos.
5) Imagine ahora que Participante 1 dio $12000 a Participante 2. ¿Quiere
gastarse $2000 para quitarle $6000 a Participante 1? ¿Sí o no? En este caso
también, como Participante 1 terminaría perdiendo plata, se lleva cero pesos.
Listo, hemos terminado con las decisiones. Ahora puede proseguir con el cuestionario.
Yo preparé su pago, que recibirá dentro de en un sobre al final de la sesión. Puede
seguir con mi compañero/a.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina9
8
Pág
ina9
8
Anexo 5: Cuestionario primer trabajo de campo
Q1) Sexo:
M F
Q2) Edad: ____________
Q3) ¿Cuál es su estado civil?
Casado/Unión
Libre/Conviviente
Soltero Separado/Divorciado/
Viudo
Q4) ¿Cuál de las siguientes situaciones cree que representa mejor su situación?
(1) Estoy ocupando sin título una tierra
(2) No tengo acceso a tierra
(3) No puedo volver a la tierra a la cual tengo derecho por presencia de un proyecto
agroindustrial
(4) Pido que me garanticen un título colectivo sobre la tierra junto con mi
comunidad
(5) He sido beneficiado por la Ley de Restitución de Tierras
(6) He sido beneficiado por otros procesos de formalización de títulos de propiedad
(7) He sido beneficiado por un proceso de titulación colectiva de tierras
Q5) En su vida ¿ha tenido que abandonar su tierra?
(1) Si
(2) No
Q6) Si ha contestado sí a la pregunta anterior, ¿puede indicar la razón? (puede
indicar más de una respuesta)
(1) Amenaza
(2) Chantaje
(3) Estafa
(4) Violencia directa hacia usted o uno de sus familiares (ej. secuestro o
desaparición)
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina9
9
(5) Cesión bajo amenaza
(6) Otra razón (explique por favor______________________)
Q7) ¿Desde hace cuántos años vive usted en su actual residencia? : _________
Q8) ¿Cuál es el pueblo o la ciudad donde usted vivía antes de mudarse? : _________
Q9) ¿Resulta usted registrado en el Registro Único de Victima?
(1) Si
(2) No
(3) No sé
Q10) ¿Ha sido beneficiado por alguna medida de reparación a víctimas?
(1) En materia de salud
(2) En materia de trabajo y formación
(3) En materia de créditos y deudas
(4) A través de indemnización administrativa
(5) A través de restitución jurídica o material de los bienes despojados
(6) A través de reparación colectiva
(7) No he sido beneficiado
Q11) ¿Ha pedido la titulación de un predio?
(1) Si
(2) No
Q12) Si la respuesta a la pregunta anterior fue No, ¿por qué?
(1) Desconfianza
(2) Desconocimiento de los procedimientos y requerimientos
(3) Miedo
(4) Falta de atención institucional
Q13) ¿Con cuántas personas vive en su hogar? |__||__|
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
00
P
ágin
a10
0
Q14) ¿Todas las personas con las cuales vive son miembros de su familia?
□1
Sí
□2
No
Q15) Hablando en general, ¿Diría Usted que se puede confiar en la mayoría de las
personas o que uno nunca es lo suficientemente cuidadoso en el trato con los
demás?
Se puede confiar en la
mayoría de las
personas
□
Uno nunca es lo
suficientemente
cuidadoso en el trato
con los demás
□
Q16) Por favor indique el nivel de confianza que tiene hacia cada una de las
instituciones que aparecen en la siguiente tabla en una escala de uno a cinco, donde
1 indica “ninguna confianza” y 5 indica “mucha confianza”
Fuerzas Armadas 1 2 3 4 5
Policía 1 2 3 4 5
Prensa escrita 1 2 3 4 5
Televisión 1 2 3 4 5
Sindicatos 1 2 3 4 5
Congreso 1 2 3 4 5
Gobierno 1 2 3 4 5
Partidos Políticos 1 2 3 4 5
Sistema Judicial 1 2 3 4 5
Sistema de Seguridad Social 1 2 3 4 5
INCODER 1 2 3 4 5
Gremios ganaderos 1 2 3 4 5
Líderes campesinos 1 2 3 4 5
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
01
Q17) ¿Qué tan efectiva es la policía en reducir la violencia? Por favor conteste usando
la siguiente escala de uno a cinco, donde uno indica “nada efectiva” y 5 indica “muy
efectiva”
Nada
efectiva
1 2 3 4 5 Muy
efectiva
Q18) ¿Cree que hay voluntad política en Colombia para resolver el problema del
acceso a la tierra?
(1) Si
(2) No
Q19) ¿Cree que hay voluntad política en Colombia para resolver el problema de las
víctimas?
(1) Si
(2) No
Q20) De lo siguientes instrumentos legales, ¿de cuáles ha escuchado o leído
información al respeto?
(1) Ley 1448 de 2011, conocida como la Ley de Victimas o Ley de Restitución
(2) Ley 975 de 2005, conocida como Ley de Justicia y Paz
(3) Ley 70 de 1993, o de mecanismo de protección de las Comunidades Negras
(4) Ley 160 de 1994, o de reforma agraria
Q21) ¿Ha sido objeto de asalto físico en los últimos doce meses?
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
Q22) ¿Ha sido objeto de asalto físico antes de los últimos doce meses?
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
02
P
ágin
a10
2
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
Q23) ¿Algún familiar suyo ha sido objeto de asalto físico en los últimos doce meses?
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
Q24) ¿Algún familiar suyo ha sido objeto de asalto físico antes de los últimos doce
meses?
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
Q25) ¿Algún familiar suyo ha fallecido por efecto de asalto físico u otra forma de
violencia?
No
Sí, una vez
Por favor indique en qué año: _________
Q26) ¿Se ha encontrado en medio de una confrontación que involucre el uso de
pistolas u otras armas de fuego en los últimos dos años?
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
Q27) ¿Se ha encontrado en medio de una confrontación que involucre el uso de
pistolas u otras armas de fuego antes de los últimos dos años?
No
Si, una vez
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
03
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
Q28) Indique si algunos de los siguientes acontecimientos ocurrieron a usted. Si la
respuesta es positiva, indique por favor, aun aproximativamente, los años en los que
dichos acontecimientos ocurrieron.
a) Emboscada en la carretera
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
b) Captura o secuestro
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
c) Trabajo sin remuneración
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
d) Tortura o amenaza
No
Si, una vez
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
04
P
ágin
a10
4
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
e) Pagar chantaje
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
f) Robos de objetos de su propiedad
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
g) Robos de dinero
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
h) Robos de su producción agrícola
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
Q29) Indique si algunos de los siguientes acontecimientos ocurrieron a miembros de
su familia. Si la respuesta es positiva, indique por favor, aun aproximativamente, el
año en el que dichos acontecimientos ocurrieron.
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
05
a) Emboscada en la carretera
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
b) Captura o secuestro
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
c) Trabajo sin remuneración
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
d) Tortura o amenaza
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
e) Pagar chantaje
No
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
06
P
ágin
a10
6
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
f) Robos de objetos de su propiedad
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
g) Robos de dinero
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
h) Robos de su producción agrícola
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
Q30) ¿De acuerdo a las facturas de sus servicios cuál es el estrato de su actual
vivienda o de su barrio?
1 2 3 4 5 6
Q31) ¿Cuál es su nivel de educación?
Primaria
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
07
Bachillerato
Algún semestre universitario, pero no graduado
Técnico
Universitario
Q32) ¿Cuál es el nivel de educación de su padre?
Primaria
Bachillerato
Algún semestre universitario, pero no graduado
Técnico
Universitario
Q33) ¿Cuál es el nivel de educación de su madre?
Primaria
Bachillerato
Algún semestre universitario, pero no graduado
Técnico
Universitario
Q34) ¿Cuál es su ocupación?
Director o Gerente
Profesional científico o intelectual
Técnico o profesional de nivel medio
Personal de apoyo administrativo
Trabajador de los servicios o vendedor de comercios y mercados
Agricultor o trabajador calificado agropecuario, forestal y pesquero
Oficial, operario o artesano de artes mecánicas y de otros oficios
Operador de instalaciones y máquinas ensambladoras
Ocupación elemental
Ocupación militar
Desocupado, jubilado, amo de casa
Estudiante
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
08
P
ágin
a10
8
Otro (especificar)
Q35) ¿A cuál grupo étnico piensa pertenecer?
(1) Mestizos
(2) Blancos
(3) Afrocolombianos
(4) Indígenas
(5) Árabes
(6) Judíos
(7) Gitanos
(8) Otro (Especificar) ___________________
Antes de tomar sus decisiones le rogamos que recuerde una experiencia de su vida
pasada. ¿Nos puede comentar como se sintió después? Elija la opción que es más
cercana a su estado:
Después de haber contado un acontecimiento importante en mi vida pasada, me sentí:
a. Triste
Mucho Bastante Poco Para nada
□1 □2 □3 □4
b. Irritado
Mucho Bastante Poco Para nada
□1 □2 □3 □4
c. Mi habilidad de concentración y razonamiento disminuyó
Mucho Bastante Poco Para nada
□1 □2 □3 □4
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
09
d. Aislado de los demás
Mucho Bastante Poco Para nada
□1 □2 □3 □4
e. Probé miedo y ansiedad
Mucho Bastante Poco Para nada
□1 □2 □3 □4
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
10
P
ágin
a11
0
Anexo 6: Cuestionario segundo trabajo de campo
Q1) Sexo: (0) M (1) F
Q2) Edad: ____________
Q3) ¿Cuál es su estado civil?
(0) Casado/Unión
Libre/Conviviente
(1)
Soltero
(2)
Separado/Divorciado/
Viudo
Q4) ¿Cuál de las siguientes situaciones cree que representa mejor su situación?
(1) Estoy ocupando una tierra y no tengo el título
(2) No tengo acceso a tierra
(3) He sido beneficiado por la Ley de Restitución de Tierras u otra medida de
restitución pero no me han entregado la casa o la tierra todavía
(4) He sido beneficiado por la Ley de Restitución de Tierras u otra medida de
restitución y ya me han entregado la casa o la tierra
(5) He adquirido la propiedad de la tierra pero no a través de un proceso de
restitución
(6) Otro:___________________________
Q5) En su vida ¿ha tenido que abandonar su tierra? (¿Ha sido desplazado/a?)
(0) No
(1) Sí, una vez
(2) Sí, más de una vez
Q6) ¿Desde hace cuántos años vive usted en su actual residencia? : _________
Q7) ¿Cuál es el pueblo o la ciudad donde usted vivía antes de mudarse (/ser
desplazado)? : _________
Q8) La casa donde vive actualmente:
(1) Es de su propiedad
(2) Está en arriendo
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
11
(3) Se está quedando donde amigos/familiares
(4) Otro: _____________________________
Q9) ¿Ha pedido la titulación de un predio?
(0) No
(1) Sí
Q10) Si la respuesta a la pregunta anterior fue no, ¿por qué?
(1) Desconfianza
(2) Desconocimiento de los procedimientos y requerimientos
(3) Miedo
(4) Falta de atención institucional
(5) Otro: _____________________
Q11) ¿Con cuántas personas vive en su hogar, incluyéndolo a usted? |__||__|
Q12) ¿Cuántas de las personas que viven en su hogar son menores de edad? ________
Q13) ¿Qué tan satisfecho está con su vida?
(0) Nada (1) Poco (2) Mucho (3) Demasiado
Q14) Indique si algunos de los siguientes acontecimientos le ocurrieron a usted. Si la
respuesta es afirmativa indique por favor, aproximadamente, los años en los que
dichos acontecimientos ocurrieron (Preguntar luego para su familia y registrar
como Q15 en la base de datos).
a) Emboscada en la carretera
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
b) Atraco u otro asalto físico
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
12
P
ágin
a11
2
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
c) Captura o secuestro
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
d) Tiroteo u otra confrontación que involucre el uso de armas de fuego
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
e) Trabajo sin remuneración
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
f) Tortura o amenaza
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
13
g) Pagar chantaje
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
h) Robos de dinero u objetos de su propiedad
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
i) Robos de su producción agrícola
No
Si, una vez
Si, más de una vez.
Por favor indique cuantas veces: _________
¿En cuales años? _____________________
Q15) Preguntas sobre la familia, secuencia de arriba
Q16) De acuerdo a las facturas de sus servicios, ¿cuál es el estrato de su actual
vivienda o de su barrio?
1 2 3 4 5 6
Q17) ¿A cuánto ascienden sus gastos semanales para usted y su familia para comida,
transporte y otros bienes de primera necesidad?
_______________________________
Q18) ¿A cuánto ascienden sus gastos mensuales para usted y su familia, excluyendo
comida, transporte y otros bienes de primera necesidad?
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
14
P
ágin
a11
4
________________________
Q19) Si tuviera que conseguir 400 mil pesos en una semana para enfrentar un gasto no
planeado, ¿qué tanta dificultad cree que tendría en conseguir el dinero?
1. No tendría dificultad
2. Tendría alguna dificultad pero lo conseguiría
3. No sé si lo conseguiría
4. Definitivamente, no lo conseguiría
Q20) ¿Cuál es su nivel de educación?
0. Ninguno
1. Primaria
2. Bachillerato
3. Algún semestre universitario, pero no graduado
4. Técnico
5. Universitario
Q21) ¿Cuál es su ocupación? (1) Campesino (2) Otro:_________________
Q22) ¿A cuál grupo étnico piensa usted que pertenece?
(1) Mestizos
(2) Blancos
(3) Afrocolombianos
(4) Indígenas
(5) Árabes
(6) Judíos
(7) Gitanos
(8) Otro (Especificar) ___________________
Q23) Antes de empezar la sesión les pedimos que recordaran una experiencia de sus
vidas, ¿Ha sentido miedo y/o ansiedad al momento de acordarse de esa experiencia?
Nada (0) Poco (1) Mucho (2) Demasiado (3)
Francesco Bogliacino, Gianluca Grimalda, Laura Jiménez, Daniel Reyes Galvis, Cristiano
Codagnone
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
15
Anexo 7. Ejemplo de la prueba lógica tipo Raven implementada
Identifique la figura que sigue en la secuencia.
Documentos FCE-CID Escuela de Economía N° 65
Junio de 2015
Universidad Nacional de Colombia Sede Bogotá - Facultad de Ciencias Económicas
Pág
ina1
16
P
ágin
a11
6
Anexo 8. Ejemplo de la prueba Stroop implementada
1) 1
2) 111
3) 22
4) 111
5) 2
6) 222
7) 333
8) 22
9) 111
10) 1
11) 3
12) 333
13) 11
14) 1
15) 22