De la dictadura a la democracia.pdf

download De la dictadura a la democracia.pdf

of 106

Transcript of De la dictadura a la democracia.pdf

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    1/106

    DELA

    DICTADURAALA

    DEMOCRACIAUn Sistema Conceptual para la Liberacinpor

    Gene Sharp

    Traduccin al Espaol por

    Caridad Inda

    La Institucin Albert Einstein

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    2/106

    La Misin del Instituto Albert Einstein

    La misin del Instituto Albert Einstein es promover a nivel mundialel estudio y uso estratgico de la accin noviolenta en casos de

    conflicto. La Institucin se compromete a: Defender libertades e instituciones democrticas Oponerse a la opresin, las dictaduras y el genocidio, y Reducir la dependencia en la violencia como herramienta politica

    Para lograr estos fines se proceder de tres maneras: Fomentando investigaciones y estudios sobre los mtodos de

    accin noviolenta y su uso en diferentes conflictos en el pasado, Compartiendo los resultados de estos estudios con el pblico

    por medio de publicaciones, conferencias, medios decomunicacin masiva, etc.

    Asesorando a grupos en conflicto sobre el potencial estratgicode la accin noviolenta.

    The Albert Einstein Institution427 Newbury Street

    Boston, MA 02115-1802, USA

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    3/106

    DELADICTADURAALADEMOCRACIA

    Un Si st ema Concept ual para l a L i beracin

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    4/106

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    5/106

    DELA

    DICTADURAALA

    DEMOCRACIAUn Sistema Conceptual para la Liberacin

    porGene Sharp

    Traduccin al Espaol por

    Caridad Inda

    La Institucin Albert Einstein

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    6/106

    Todo el material que aparece en estapublicacin es del dominio pblico y

    se puede reproducirsin el permiso de Gene Sharp.

    Se agradece mencin de la fuente.

    Primera impresin, diciembre 2003

    De la Dictadura a la Democraciase public primero en Bangkok en1993 por el Comit para la Restauracin de la Democracia enBirmania conjuntamente con Khit Pyaing (El Peridico de la NuevaEra).Desde entonces se ha traducido a ms de ocho idiomas y seha publicado en Serbia, Indonesia y Tailandia, entre otros pases.

    Impreso en los Estados Unidos de AmricaImpreso en papel reciclado.

    The Albert Einstein Institution427 Newbury StreetBoston, MA 02115-1801, USA

    Tel: USA + 617-247-4882Fax: USA + 617-247-4035E-mail: [email protected]

    Web site: www.aeinstein.org

    ISBN 1-880813-13-0

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    7/106

    CONTENIDO

    PREFACIO VII

    UNOENFRENTANDOLAREALIDADDELASDICTADURAS 1

    Un problema que contina 2A la libertad mediante la violencia? 4Golpes de estado, elecciones, salvadores

    del extranjero? 5Encarando la dura verdad 8

    DOSLOSPELIGROSDELASNEGOCIACIONES 9

    Ventajas y limitaciones de las negociaciones 10Rendicin negociada? 10El poder y la justicia en las negociaciones 12Dictadores "agradables" 13Qu clase de paz? 14Razones para la esperanza 14

    TRESDEDNDEVIENEELPODER? 17

    La fbula del "Amo de los Monos" 17Las recursos que necesita el poder poltico 18Centros del poder democrtico 22

    CUATROLASDICTADURASTIENENPUNTOSDBILES 25

    Identificando el "taln de Aquiles" 25Puntos dbiles de las dictaduras 26Atacando las debilidades de las dictaduras 28

    De la Dictadura a la Democracia v

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    8/106

    CINCOEJERCIENDOELPODER 29

    La dinmica de la lucha noviolenta 30

    Las armas y la disciplina noviolentas 30Franqueza, clandestinidad y comportamientointachable 34

    Cambios en las relaciones de poder 35Cuatro mecanismos del cambio 35Efectos democratizadores del desafo poltico 37La complejidad de la lucha noviolenta 39

    SEISNECESIDADDELAPLANIFICACINESTRATGICA 41

    Planificacin realista 42Obstculos a la planificacin 43Cuatro trminos importantes en la planificacin

    estratgica 45

    SIETEPLANIFICANDOLAESTRATEGIA 49

    Escogiendo los medios 50Planificando para la democracia 51

    Ayuda del exterior 52Formulando una gran estrategia 53Planificando las estrategias de campaa 55Difundiendo la idea de la nocooperacin 58La represin y las contramedidas 59Adhirindose al plan estratgico 60

    OCHO

    APLICANDO

    EL

    DESAFO

    POLTICO

    61Resistencia selectiva 61El reto simblico 62Distribuyendo la responsabilidad 64Apuntando hacia el poder de los dictadores 64Cambios en la estrategia 67

    vi Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    9/106

    vii

    NUEVEDESINTEGRANDOLADICTADURA 69

    La escalada de la liberatad 71Desintegrando la dictadura 72Manejando el triunfo responsablemente 73

    DIEZTRABAJOPRELIMINARPARAUNADEMOCRACIADURADERA 77

    Amenaza de una nueva dictadura 78Cerrndoles el paso a los golpes de estado 78Redactando una constitucin 79Una poltica democrtica de defensa 80

    Una responsabilidad meritoria 81APNDICELOSMTODOSDELAACCINNOVIOLENTA 83

    UNASPALABRASACERCADETRADUCCIONES 93YREIMPRESIONESDEESTAPUBLICACIN

    De la Dictadura a la Democracia vii

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    10/106

    PREFACIO

    Una de mis mayores inquietudes durante muchos aos ha sido cmopodra la gente evitar que una dictadura se estableciera y cmodestruirla. Esto se ha nutrido en parte por la conviccin de que losseres humanos no deben ser ni dominados ni destruidos porsemejantes regmenes. Esta creencia se ha fortalecido con lecturassobre la importancia de la libertad humana y la naturaleza de lasdictaduras (desde Aristteles hasta los analistas del totalitarismo) yla historia de las dictaduras (especialmente en los sistemas nazi ycomunista).

    A travs de los aos, he tenido la oportunidad de conocer per-sonas que vivieron y padecieron bajo el rgimen nazi, algunos in-clusive que sobrevivieron los campos de concentracin. En Noruega,encontr algunos que haban trabajado en la resistencia al rgimenfascista y que haban sobrevivido, y o hablar de los que habanperecido. Habl con judos que se haban escapado de las garras delos nazis y con personas que haban ayudado a stos a salvarse.

    Sobre el terror en los regmenes comunistas de los diversospases he sabido ms por libros que por contactos personales. El

    terror en estos sistemas me ha parecido ms agudo, ya que estosregmenes se impusieron en nombre de liberacin de la opresin yde la explotacin.

    En dcadas ms recientes, la realidad acerca de las dictadurasde hoy se me ha hecho ms patente por la visita de personas quevienen de pases gobernados por dictaduras, tales como Panam,Polonia, Chile, el Tbet o Birmania. De los tibetanos que pelearoncontra la agresin del rgimen comunista chino, de los rusos que enagosto de 1991 le cerraron el paso al golpe de estado de lnea dura, o

    de los trabajadores tailandeses que con prcticas noviolentasimpidieron el retorno del rgimen militar, he ido adquiriendo puntosde vista perturbadores sobre la prfida naturaleza de las dictaduras.

    Mi sentimiento de tribulacin y ultraje frente a la bestialidadimpuesta, as como mi admiracin ante el sereno herosmo dehombres y mujeres increblemente valientes, a veces se fortalecicuando visit lugares donde el peligro an era muy grande y, a pesarde ello, el valor de la gente se empeaba en desafiarlo. Esto ocurra

    viii

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    11/106

    en el Panam de Noriega, en Vilnius, Lituania, bajo la continuarepresin sovitica; en Beijing, en la plaza de Tiananmen, tanto du-rante la manifestacin festiva por la libertad como cuando lostransportes del primer contingente armado entraron en la noche fa-tal; y en los cuarteles de la oposicin democrtica, en Manerplaw,en la "Birmania liberada".

    En ocasiones visit el lugar de los cados, tales como la torre detelevisin y el cementerio de Vilnius, el parque pblico en Riga dondela poblacin haba sido ametrallada, el centro de Ferrara, al norte deItalia, donde los fascistas pararon en fila a los de la resistencia y losfusilaron, y hasta un sencillo cementerio en Manerplaw repleto decadveres de los que haban muerto an demasiado jvenes. Es

    triste advertir cmo cada dictadura deja tras de s una larga secuelade muerte y destruccin.De estas experiencias y consideraciones me fue creciendo una

    esperanza muy firme de que s poda impedirse el establecimientode las dictaduras, que se poda llevar a cabo una lucha victoriosacontra ellas sin provocar una carnicera masiva, que s se podandestruir las dictaduras y evitar que surgieran otras nuevas de suspropias cenizas.

    He tratado de pensar minuciosamente acerca de los mtodos

    ms efectivos para desintegrarlas con xito y con el menor costoposible en vidas y sufrimientos. Para ello he repasado mis estudiosde muchos aos sobre las dictaduras, los movimientos de resistencia,las revoluciones, el pensamiento poltico, los sistemas de gobiernoy, especialmente, sobre la autntica lucha noviolenta.

    El resultado de todo eso es esta publicacin. Estoy seguro quedista mucho de ser perfecta. Pero quizs ofrece alguna orientacinque apoye tanto el pensamiento como la planificacin tendientes aproducir movimientos de liberacin que resulten ms poderosos y

    eficaces de lo que seran de haber sido otro el caso.Tanto por necesidad como por opcin libre, este ensayo enfoca

    el problema genrico de cmo destruir una dictadura y cmo impedirel surgimiento de una nueva. No puedo realizar un anlisis detalladoy dar una recomendacin precisa en cuanto a un pas determinado.Sin embargo, espero que este anlisis genrico sea til a los pueblosque, desafortunadamente, todava en demasiados lugares tienen queenfrentarse con las realidades de un rgimen dictatorial. Necesitarn

    Gene Sharp ix

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    12/106

    examinar la validez de este texto en cuanto a su situacin especficay determinar hasta qu punto las principales recomendaciones sonaplicables, o si puede hacerse que lo sean, para su lucha de liberacin.

    He incurrido en varias deudas de gratitud durante la redaccinde este ensayo. Bruce Jenkins, mi ayudante especial, ha hecho unacontribucin inestimable al identificar los problemas en cuanto a sucontenido y presentacin, y, mediante sus agudas sugerencias, encuanto a una exposicin ms clara y rigurosa de las ideas ms difciles(en especial en lo tocante a estrategia), a la reorganizacin estructuraldel texto y al mejoramiento de la edicin. Estoy tambin muyagradecido a Stephen Cody por su asistencia editorial. El Dr. Chris-topher Kruegler y el Sr. Robert Helvey me brindaron su importante

    crtica y consejo. Las Dras. Hazel McFerson y Patricia Parkman mesuministraron informacin sobre las luchas en Africa y AmricaLatina respectivamente. Aunque este trabajo se ha beneficiado porun tan noble y generoso apoyo, nicamente yo soy responsable delanlisis y las conclusiones que contiene.

    En ningn lugar de este trabajo asumo que el desafo contra losdictadores ser una empresa fcil y poco costosa. Todas las formasde lucha tienen sus complicaciones y costos. El combate contra losdictadores por supuesto causar bajas. Sin embargo, espero que este

    anlisis estimular a los lderes de la resistencia a considerarestrategias que puedan incrementar su poder efectivo y al mismotiempo reducir el nivel relativo de bajas.

    Tampoco se interprete este anlisis como que cuando se acabecon una dictadura especfica todos los dems problemas habrndesaparecido. La cada de un rgimen no trae por consecuencia unautopa. Ms bien abre el camino a un trabajo ingente y a esfuerzosdenodados a fin de construir unas relaciones polticas, econmicasy sociales ms justas y erradicar otras formas de injusticia y opresin.

    Es mi esperanza que este breve examen de cmo puede desintegrarseuna dictadura sea til en cualquier lugar donde la gente vivedominada y desea ser libre.

    Gene Sharp6 de octubre de 1993

    The Albert Einstein Institution427 Newbury StreetBoston, Massachusetts, 02115USA

    x De la Dictadura a la Democracia

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    13/106

    UNOENFRENTANDOLAREALIDADDELASDICTADURAS

    En aos recientes, diversas dictadurasde origen tanto interno comoexternohan cado o se han tambaleado cuando se les ha enfrentadouna poblacin desafiante y movilizada. Aunque a menudo se las vecomo firmemente afianzadas e inexpugnables, algunas de estasdictaduras demostraron ser incapaces de soportar el desafoconcertado del pueblo en lo poltico, lo econmico y lo social.

    A partir de 1980, las dictaduras han cado ante un desafopredominantemente noviolento del pueblo en Estonia, Latvia y

    Lituania, Polonia, Alemania Oriental, Checoslovaquia y Eslovenia,Madagascar, Mali, Bolivia y las Filipinas. La resistencia noviolentaha hecho avanzar el movimiento por la democratizacin en Nepal,Zambia, Corea del Sur, Chile, Argentina, Hait, Brasil, Uruguay,Malawi, Tailandia, Bulgaria, Hungra, Zaire, Nigeria y en variaspartes de la antigua Unin Sovitica (llegando a jugar un papelsignificativo en la derrota del intento de golpe de estado de lneadura de agosto de 1991).

    Mas an, el desafo poltico masivo1se ha hecho presente en

    China, Birmania y el Tbet en aos recientes. An cuando estas luchasno han destruido a las dictaduras ni le han puesto fin a la ocupacinterritorial impuesta, s han puesto al descubierto ante la comunidadmundial la naturaleza brutal de esos regmenes represivos, y han

    1El trmino "desafo poltico masivo", que se usa en este contexto, lo introdujo Ro-bert Helvey. El "desafo poltico" es una confrontacin noviolenta (protesta,nocolaboracin e intervencin) que se lleva a cabo de manera desafiante y activa,con fines polticos. El trmino se origin en respuesta a la confusin y distorsincreadas cuando se daban por iguales la 'lucha noviolenta' con el "pacifismo" o la'noviolencia reIigiosa'. La palabra "desafo" denota una deliberada provocacin ala autoridad mediante la desobediencia, y no deja lugar para la sumisin. El trmino'desafo poltico' describe el entorno en el cual se emplea la accin (poltico), ascomo el objetivo (eI poder poltico). Se usa principalmente para describir la accinrealizada por la poblacin para retomar de manos de la dictadura el control de lasinstituciones gubernamentales mediante el constante ataque a las fuentes de podery el uso deliberado de la planificacin estratgica y de las operaciones paraalcanzarlo. En este sentido, "desafo poltico", "resistencia noviolenta" y "luchanoviolenta" se usarn aqu como sinnimos intercambiables, aunque los dos ltimostrminos, por lo general, se refieren a las luchas que persiguen una gama ms ampliade objetivos (sociales, econmicos, sicolgicos, etc.).

    1

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    14/106

    aportado a la poblacin una valiosa experiencia en cuanto a estaforma de lucha.

    El derrumbamiento de las dictaduras en los pases antesmencionados ciertamente no erradic todos los problemas de esassociedadespobreza, criminalidad, ineficiencia burocrtica,destruccin del medio ambienteque han sido frecuentemente laherencia de aquellos regmenes brutales. No obstante, la cada deesas dictaduras ha reducido, aunque poqusimo, mucho delsufrimiento de las vctimas de la opresin, y ha abierto el caminopara la reconstruccin de esas sociedades con una mayor democraciapoltica, ms libertades personales y justicia social.

    Un problema que contina

    Ha habido, en verdad, una tendencia hacia una mayor demo-cratizacin y libertad en el mundo durante las ltimas dcadas.Segn "Freedom House", que compila un expediente anual sobre elestatus de los derechos polticos y las libertades civiles, el nmerode pases en todo el mundo clasificados "libres" ha crecido de manerasignificativa en los ltimos diez aos.2

    Libres Parcialmente Libres No Libres

    1983 55 76 641993 75 73 38

    Sin embargo, esta tendencia positiva se halla atenuada porquehay un gran nmero de pueblos que an viven bajo condiciones detirana. Hasta enero de 1993, el 31% de la poblacin del mundo, de5.45 billones, viva en pases y territorios calificados como "no libres"3;esto es, en lugares donde los derechos polticos y las libertades civilesestn en extremo restringidos. Los 38 pases y 12 territorios incluidosen la categora de "no libres" estn gobernados por una serie dedictaduras militares (como en Birmania y el Sudn), monarquastradicionales represivas (como Arabia Saudita y Bhutn), porregmenes de partido nico dominante (como China, Iraq y Corea

    2 Gene Sharp

    2Freedom House, Freedom in the World: The Annual Survey of Political Rights and CivilLiberties, 1992-1993(La Libertad en el Mundo: un informe anual sobre los derechospolticos y las libertades civiles,1992-1993), p. 66 (Las cifras de 1993 son hasta enerodel mismo). Ver pginas 79-80 para una descripcin de las categoras "libre","parcialmente libre" y "no libre" de Freedom House.3Freedom House, Freedom in the World,(La Libertad en el Mundo), p. 4.

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    15/106

    del Norte), bajo una ocupacin extranjera (como Tbet o TimorOriental), o en un estado de transicin.

    Muchos pases se hallan hoy en un estado de cambio rpido enlo econmico, poltico y social. Aunque el nmero de pases "libres"ha aumentado en los ltimos diez aos, existe un gran riesgo de quemuchas naciones, al enfrentar cambios fundamentales tanrpidamente, se desplazarn en direccin opuesta, y acabarnexperimentando nuevas formas de dictadura. Las camarillasmilitares, los individuos ms ambiciosos, los funcionarios electos ylos partidos polticos doctrinales, repetidamente buscarn cmoimponerse. Los golpes de estado seguirn estando a la orden delda. Los derechos humanos y polticos bsicos les sern negados aun gran nmero de personas.

    Desafortunadamente, el pasado an est con nosotros. Elproblema de las dictaduras es profundo. En muchos pases el puebloha vivido experiencias de dcadas y hasta siglos de opresin, oradomstica ora de origen extranjero. Con frecuencia se les hainculcado insistentemente la sumisin incondicional a las figuras ygobernantes que detentan la autoridad. En casos extremos, lasinstituciones sociales, econmicas, polticas y hasta religiosas de lasociedadaquellas fuera del control estatalhan sidodeliberadamente debilitadas, subordinadas o an reemplazadas por

    otras nuevas, y regimentadas. El estado o el partido dominante lasusa para dominar a la sociedad. A menudo la poblacin ha sidoatomizada (convertida en una masa de individuos aislados),incapaces de trabajar juntos para conseguir su libertad, de confiarlos unos en los otros y hasta de hacer algo por su propia iniciativa.

    El resultado es predecible: la poblacin se ha vuelto dbil, carecede confianza en s misma y es incapaz de ofrecer resistencia alguna.Las personas por lo general estn demasiado asustadas paracompartir su odio por la dictadura y su hambre de libertad ni an

    con su familia y amigos. Estn, con frecuencia, demasiadoaterrorizadas para pensar en serio en la resistencia popular. Decualquier manera, de qu iba a servir? En vez de esto asumen elsufrimiento sin objetivo y un futuro sin esperanza.

    Las condiciones bajo las dictaduras contemporneas puedenser peores que antes. En el pasado, algunas personas pueden habertratado de resistir. Quiz hubo breves manifestaciones y protestasmasivas. Quiz los nimos se levantaron temporalmente. En otras

    De la Dictadura a la Democracia 3

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    16/106

    ocasiones, individuos y pequeos grupos pueden haber hechovalientes pero impotentes demostraciones, afirmando algnprincipio o simplemente su desafo. Por muy nobles que hayan sidolos motivos, estos actos de resistencia pasados frecuentemente hansido insuficientes para vencer el miedo de la gente y su habitualobediencia, condicin esencial para destruir una dictadura. Esasacciones, lamentablemente, pueden en cambio haber causadosolamente ms sufrimiento y muerte, no una victoria, ni an unaesperanza.

    A la libertad por la violencia?

    Qu ha de hacerse en semejantes circunstancias? Las posibilidades

    ms evidentes parecen intiles. Los dictadores generalmente hacencaso omiso de las barreras constitucionales y legales, las decisionesjudiciales y la opinin pblica. Reaccionando a las brutalidades, latortura, las desapariciones, las muertes, se entiende que todo estoha hecho pensar al pueblo que slo por la violencia se puede acabarcon una dictadura. Las airadas vctimas a veces se han organizadopara combatir a los brutales dictadores, con el poco poder militar yviolencia que hayan podido reunir, y a pesar de tenerlo todo en con-tra. Esta gente, por lo general, ha peleado valientemente, pagando

    un alto precio en sufrimientos y vidas. Sus logros a veces han sidoconsiderables, pero casi nunca han obtenido la libertad. Lasrebeliones violentas desencadenan violentas represiones que confrecuencia dejan a la poblacin ms indefensa que antes.

    Sin embargo, cualesquiera que sean los mritos de la opcinpor la violencia, un punto est claro. Al depositar la confianza en losmedios violentos, se ha escogido precisamente el modo de lucha en el cuallos opresores casi siempre tienen la superioridad. Los dictadores puedenaplicar la violencia irresistiblemente. No importa cunto ms o cunto

    menos estos demcratas puedan aguantar, a fin de cuentas unogeneralmente no se puede escapar de las duras realidades militares.Los dictadores casi siempre disponen de la superioridad militar, encuanto a calidad de armamentos, pertrechos, transportes y tamaode las fuerzas armadas. A pesar de su valenta, los demcratas nopueden emparejrseles (casi) nunca. Cuando se reconoce que larebelin militar no es viable, algunos disidentes se inclinan por laguerra de guerrillas. No obstante, slo muy raramente, si es que

    4 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    17/106

    De la Dictadura a la Democracia 5

    alguna vez, la guerra de guerrillas beneficia a la poblacin oprimidao le abre paso a una democracia. La guerra de guerrillas no esninguna solucin evidente, especialmente por la inmensa cantidadde bajas que suelen producirse entre la gente. Esta tcnica de luchano ofrece ninguna garanta frente a la posibilidad del fracaso, a pesarde apoyarse en la teora y el anlisis estratgicos, y de que a vecesrecibe respaldo internacional. Las luchas guerrilleras por lo generalduran mucho. Con frecuencia el gobierno en el poder reubica a lapoblacin, con la secuela de inmensos sufrimientos humanos ytrastorno social que esto conlleva.

    An cuando resulte victoriosa, la lucha de guerrillas tiene, alargo plazo, considerables consecuencias negativas en lo estructural.De entrada, el rgimen atacado se hace ms dictatorial como

    resultado de sus contramedidas. Si en definitiva gana la guerrilla,el nuevo rgimen que de ella provenga es con frecuencia ms dicta-torial que el anterior, debido al impacto centralizador de las fuerzasmilitares al expandirse, y por el debilitamiento o la destruccin du-rante la lucha de los grupos e instituciones independientes de lasociedad--cuerpos stos que son vitales para establecer y mantenerdespus una sociedad democrtica. Los que se opongan a lasdictaduras deben buscar otra opcin.

    Golpes de estado, elecciones, salvadores extranjeros?

    Un golpe militar contra una dictadura puede parecer, relativamentehablando, una de las maneras ms rpidas y fciles de quitarse deencima un rgimen particularmente repugnante. Sin embargo,existen serios problemas con respecto a esta tcnica. Lo msimportante es que deja intacta la distribucin negativa del poderentre la poblacin y la lite de control del gobierno y sus fuerzasarmadas. Lo ms probable es que la supresin de personas o

    camarillas de las posiciones del gobierno, d pie para que otro gruposemejante ocupe su lugar. Tericamente este grupo puede ser menosduro en su comportamiento, y ms dispuesto a abrirse de maneralimitada a las reformas democrticas. Sin embargo, el caso opuestoes lo ms probable.

    Despus de consolidar su posicin, la nueva camarilla puederesultar ms despiadada y ms ambiciosa que la anterior. Por lotanto, la nueva camarillasobre la que quiz se haban fincado las

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    18/106

    esperanzaspodr hacer lo que quiera sin preocuparse de lademocracia o los derechos humanos. Esta no es una respuestasatisfactoria al problema de la dictadura.

    Bajo una dictadura las elecciones no se pueden usar comoinstrumento para un cambio poltico significativo. Algunosregmenes dictatoriales, tales como los del antiguo bloque orientaldominado por la Unin Sovitica, simularon elecciones slo con elpropsito de aparentar ser democrticos. Pero estas elecciones eransimples plebiscitos rigurosamente controlados, para obtener laaprobacin pblica de los candidatos escogidos por los dictadores.stos, de cuando en cuando, debido a la presin a que estnsometidos, podran tal vez aceptar nuevas elecciones, pero stasestaran manipuladas para colocar marionetas civiles en los puestos

    de gobierno. Si a los candidatos de la oposicin se les hubierapermitido concurrir a las elecciones, y hubieran sido electos comoocurri en Birmania en 1990, o en Nigeria en 1993, los resultadoshabran sido simplemente ignorados y los supuestos "vencedores"habran estado sujetos a intimidacin, arrestados o hasta ejecutados.Los dictadores no estn interesados en unas elecciones que puedanapartarlos de su trono.

    Muchas personas que actualmente estn padeciendo bajo unadictadura, o que han tenido que exilarse para escapar de sus garras,

    no creen que los oprimidos puedan liberarse por s mismos. Ellosno esperan que su pueblo pueda ser liberado sino por la accin deotros. Ponen su confianza en las fuerzas extranjeras. Creen queslo una ayuda internacional puede ser lo bastante fuerte como paraderribar a los dictadores.

    Esa visin de que los oprimidos son incapaces de actuareficazmente es algunas veces correcta por tiempo limitado. Comohemos apuntado, con frecuencia la poblacin sometida no quiere lalucha, y est temporalmente incapacitada para ella, porque no tiene

    confianza en su propia capacidad de enfrentar la dictadura feroz, yno ve una manera razonable de salvarse por su propio esfuerzo. Enconsecuencia, no es extrao que confe sus esperanzas de liberacina la accin de otros. Las fuerzas externas pueden ser: la "opininpublica", las Naciones Unidas, un pas en particular o sancionesinternacionales econmicas y polticas.

    Una situacin as puede parecer consoladora, pero existengraves problemas en cuanto a la confianza depositada en un salvador

    6 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    19/106

    De la Dictadura a la Democracia 7

    forneo. Esa confianza puede estar puesta en un factor totalmenteerrado. Por lo general, no van a llegar salvadores extranjeros. Siinterviene otro estado, probablemente no deba confiarse en l.

    Hay unas cuantas speras realidades con respecto a esaconfianza en la intervencin extranjera que habra que destacar aqu.

    Con frecuencia los estados extranjeros tolerarn, o ayudarn in-clusive, a la dictadura a fin de avanzar sus propios intereseseconmicos o polticos.

    Los estados extranjeros podran estar dispuestos a vender alpueblo oprimido a cambio de otros objetivos, en lugar demantener las promesas que le hicieran de ayudarlo en suliberacin.

    Algunos estados extranjeros actuarn contra la dictadura, peroslo a fin de ganar para s mismos el control econmico, polticoy militar del pas.

    Los estados extranjeros podran involucrarse activamente parafines positivos slo cuando hubiere un movimiento interno queya haya comenzado a sacudir la dictadura y logrado que laatencin internacional se enfoque sobre la ndole brutal del

    gobierno.Por lo general, la causa principal que explica la existencia de

    las dictaduras es la distribucin interna del poder que existe en elpas. La poblacin y la sociedad son demasiado dbiles para causarleun problema a la dictadura; la riqueza y el poder estn concentradosen muy pocas manos. Aunque las acciones internacionales puedenbeneficiar, o de alguna manera debilitar a las dictaduras, lacontinuacin de stas depende primordialmente de factores internos.

    Sin embargo, las presiones internacionales pueden ser muy

    tiles cuando apoyan un poderoso movimiento de resistenciainterna. Entonces, por ejemplo, el boicot econmico internacional,los embargos, la ruptura de relaciones diplomticas, la expulsindel gobierno de organizaciones internacionales, la condena delmismo por alguno de los cuerpos de las Naciones Unidas y otrospasos semejantes, pueden contribuir grandemente. A pesar detodo,si no existe un fuerte movimiento de resistencia interna, talesacciones por parte de otros es poco probable que se den.

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    20/106

    Encarando la dura verdad

    La conclusin es dura. Cuando se quiere echar abajo una dictaduracon la mayor efectividad y al menor costo, hay que emprender estas

    cuatro tareas: Se debe fortalecer a la poblacin oprimida en su determinacin

    de luchar, en la confianza en s misma y en sus aptitudes pararesistir;

    Se debe fortalecer a los grupos sociales e institucionesindependientes del pueblo oprimido;

    Se debe crear una poderosa fuerza de resistencia interna; y

    Se debe desarrollar un amplio y concienzudo plan estratgico

    global para la liberacin, y ejecutarlo con destreza.Una lucha de liberacin es un tiempo en que el grupo que luchaadquiere confianza en s mismo y se fortalece internamente. CharlesStewart Parnell, durante la campaa de huelga de los rentatarios enIrlanda, 18791880, dijo:

    No vale la pena confiar en el gobierno... Debis confiar slo envuestra propia determinacin... Ayudaos a vosotros mismos apoyndooslos unos a los otros Fortaleced a los ms dbiles de entre vosotros...

    Agrupaos y organizaos... y ganaris...Cuando hayais madurado las condiciones para que este asunto seresuelva, entoncesy nunca antes de ese momentose resolver.4

    Confrontada con una fuerza firme y confiada en s misma, conuna estrategia concienzuda y de genuina solidez, la dictaduraeventualmente se desmoronar. Estos cuatro requisitos tendrn queser de algn modo satisfechos siquiera en un mnimo nivel.

    Como lo indican estos argumentos, el liberarse de las dictaduras,en ltima instancia, depende de la capacidad que la gente tenga deliberarse a s misma. Los casos antes mencionados en que el desafopolticoo la lucha noviolenta con fines polticosha tenido xito,sugieren que s existen los medios para que la poblacin se libere a smisma, pero esta opcin no se ha ejercido plenamente. Examinaremosen detalle esta alternativa en los prximos captulos. Pero antes debemoscontemplar el tema de las negociaciones como medio para desmantelarlas dictaduras.

    4Patrick Sarsfield O'Hegarty,A History of Ireland Under the Union, 1880-1922 (Una

    Historia de Irlanda Bajo la Unin, 1880-1922) London: Methuen, 1952), pp. 490-491.

    8 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    21/106

    DOSLOSPELIGROSDELASNEGOCIACIONES

    Algunas personas, cuando tienen que enfrentarse a los severosproblemas de combatir una dictadura, se echan para atrs, y caenen una sumisin pasiva (como lo vimos en el Captulo Uno). Otras,como no ven posibilidad alguna de alcanzar la democracia, puedenllegar a la conclusin de que deben buscar un arreglo con ladictadura, con la esperanza de que mediante la "conciliacin", el"compromiso" y las "negociaciones", podrn atraer a algunoselementos positivos y acabar con las brutalidades. Superficialmente,por carencia de opciones ms realistas, esta manera de pensar esatrayente.

    Una pelea seria contra las dictaduras brutales no es unaperspectiva agradable. Por qu hay que recorrer ese camino? Nopueden todos ser razonables y encontrar maneras de hablar, denegociar la forma de terminar gradualmente con la dictadura? Nopueden los demcratas apelar al sentido comn y de humanidad delos dictadores, y convencerlos de que deben reducir su dominio pocoa poco, y quizs finalmente ceder por completo para que se establezcauna democracia?

    A veces se argumenta que la verdad no est toda de un lado.Quin sabe si los demcratas no han comprendido a los dictadores,que acaso obraron con buenas intenciones y en circunstanciasdifciles. Quiz algunos piensen que los dictadores gustosamentese separaran de la difcil situacin que vive el pas, si se les estimularao se les tentara a ello. Podra argumentarse que a los dictadores seles debera ofrecer una solucin por medio de la cual todo el mundosaliera ganando. Los riesgos y dolores de proseguir la lucha podranser innecesariosse puede argumentarsi la oposicin democrtica

    slo desea terminar el conflicto pacficamente por medio denegociaciones (que podran quizs contar con la ayuda de algunosespecialistas o hasta de otro gobierno). No sera eso preferible auna lucha difcil, an cuando fuera una campaa dirigida por lalgica de la accin noviolenta y no la de una guerra militar?

    9

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    22/106

    Ventajas y limitaciones de las negociaciones

    Las negociaciones son un instrumento muy til para resolver algunosconflictos, y no deben desdearse o rechazarse cuando son apropiadas.

    En algunas situaciones, cuando ningn asunto fundamentalest en juego y, por consiguiente, es aceptable el compromiso, lasnegociaciones pueden ser un medio importante para zanjar unconflicto. Una huelga laboral en demanda de mayores salarios es unbuen ejemplo del papel apropiado de las negociaciones en un conflicto:un acuerdo negociado puede conseguir un aumento promediado en-tre las cantidades originalmente propuestas por cada una de las partescontendientes. Los conflictos laborales, con sindicatos legalmenteestablecidos, son, sin embargo, algo muy diferente de los problemasen los cuales estn en juego la existencia permanente de una dictaduracruel o el establecimiento de la libertad poltica.

    Cuando los asuntos por resolver son fundamentales porqueafectan principios religiosos, problemas de la libertad humana o todoel desarrollo futuro de la sociedad, las negociaciones no llevan a unasolucin satisfactoria para ambas partes. En algunos asuntos bsicosno se debe transigir. Slo un cambio en la correlacin de fuerzas afavor de los demcratas puede salvaguardar adecuadamente losasuntos bsicos que estn a discusin. Ese cambio ocurre a travs de

    una lucha, no mediante negociaciones. Esto no quiere decir que lasnegociaciones no deban usarse nunca. El hecho es que talesnegociaciones no son un modo realista de librarse de una frreadictadura cuando no existe una poderosa oposicin democrtica.

    Por supuesto que hay circunstancias en que las negociacionespueden no ser una opcin. Los dictadores firmemente establecidos,que se sienten muy seguros de su posicin, pueden negarse a negociarcon sus opositores democrticos. 0 bien, cuando ya se hayan iniciadolas negociaciones, los negociadores democrticos pueden desaparecer

    y no regresar.

    Rendicin negociada?

    Los individuos o grupos que se oponen a una dictadura y se inclinana las negociaciones, a menudo tienen buenos motivos para hacerlo.En especial, cuando una lucha armada ha continuado durante variosaos contra una dictadura brutal sin una victoria final, es lgico que

    10 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    23/106

    De la Dictadura a la Democracia 11

    todas las personas, sin importar su filiacin poltica, deseen la paz.Es probable que los demcratas estn especialmente dispuestos anegociar cuando los dictadores evidentemente tienen la superioridadmilitar y cuando la destruccin, las vctimas y los perjuicios sufridosentre aqullos ya no pueden soportarse ms. Habr entonces unafuerte tentacin de explorar cualquier otra opcin que pueda rescataral menos algunos de los objetivos de los demcratas, a la vez quepone fin a un ciclo de violencia y contraviolencia.

    La oferta de "paz" mediante negociaciones que un dictador lehaga a la oposicin democrtica por supuesto no es del todo sincera.La violencia podra ser inmediatamente terminada por los propiosdictadores si tan slo stos dejaran de hacer la guerra contra su propiopueblo. Bien podran, por su propia iniciativa y sin ninguna

    negociacin, restaurar el respeto a la dignidad y los derechoshumanos, liberar a los presos polticos, acabar con la tortura y sus-pender las operaciones militares, retirarse del gobierno y hastapedirle excusas al pueblo.

    Cuando la dictadura es fuerte pero existe una resistenciairritante, puede que los dictadores deseen lograr la rendicin de laoposicin bajo la cobertura de "hacer la paz". El llamado a negociarpuede parecer atractivo, pero dentro de la sala de negociaciones acasose esconderan graves peligros.

    Por otra parte, cuando la oposicin es excepcionalmente fuertey la dictadura se encuentra de veras amenazada, los dictadorespueden buscar la negociacin como una manera de salvar lo msposible de su capacidad de control o de sus riquezas. En ningunode estos casos deben los demcratas ayudar a los dictadores a lograrsus metas.

    Los demcratas deben desconfiar de las trampas que losdictadores les pueden tender con pleno conocimiento de causa du-rante un proceso de negociacin. El llamado a negociar, cuando se

    trata de cuestiones fundamentales de las libertades polticas, puedeser un esfuerzo por parte de los dictadores para inducir a losdemcratas a rendirse pacficamente, mientras que la violencia dela dictadura contina. En semejantes conflictos, las negociacionessolamente podrn jugar un papel apropiado al final de una luchadecisiva, en la cual el poder de los dictadores haya sido destruido yestn stos buscando pasaje seguro para llegar a un aeropuertointernacional.

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    24/106

    El poder y la justicia en las negociaciones

    Si esta opinin parece un comentario demasiado spero sobre lasnegociaciones, quiz deba moderarse un poco el romanticismo quese asocia con las mismas. Es necesario saber cul es la dinmica delas negociaciones.

    Una "negociacin" no significa que las dos partes se sientanjuntas, como iguales, y conversan hasta resolver el problema queprodujo el conflicto entre ellas. Es necesario recordar dos verdades.Primera, que en las negociaciones no es la relativa justicia de lospuntos de vista en conflicto y sus objetivos lo que determina elcontenido del acuerdo negociado. Segunda, que el contenido deste lo determinar mayormente la capacidad de poder de cada parte.

    Se deben considerar varias preguntas difciles. Qu puedehacer cada una de las partes despus para conseguir sus objetivos sila otra decide no llegar a un acuerdo en la mesa de negociaciones?Qu puede hacer cada una de las partes, luego de alcanzado elacuerdo, si la otra rompe su palabra y usa la fuerza de la que dis-pone para conquistar sus objetivos a pesar del acuerdo?

    En las negociaciones no se llega a un acuerdo mediante unaevaluacin de lo bueno y lo malo de las cuestiones sobre el tapete.Aunque sobre esto pueda discutirse mucho, los verdaderos

    resultados de las negociaciones se derivan de una evaluacin realistade las situaciones de poder absoluto y relativo de los gruposcontendientes. Qu pueden hacer los demcratas para asegurarsede que un mnimo de sus reclamaciones no sern denegadas? Qupueden hacer los dictadores para mantenerse en control del poder yneutralizar a los demcratas? En otras palabras, si se llega a unacuerdo, lo ms probable es que sea el resultado del estimado quecada parte haga de la capacidad de poder de ambas y, enconsecuencia, calcule cmo podra terminar una lucha abierta entre

    las dos.Debe prestarse atencin a lo que cada parte est dispuesta a

    ceder para llegar a un acuerdo. En negociaciones exitosas hayconcesiones recprocas. Cada parte consigue parte de lo que quierey cede parte de sus objetivos.

    En los casos de dictadura extrema, qu es lo que las fuerzaspro-democrticas van a ceder a los dictadores? Qu objetivos delos dictadores tendrn que aceptar las fuerzas democrticas?Tendrn los demcratas que conceder a los dictadores, (sean stos

    12 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    25/106

    De la Dictadura a la Democracia 13

    un partido poltico o una camarilla militar), un papel permanente,constitucionalmente establecido, en el futuro gobierno? Dndequeda la democracia entonces?

    An pensando que todo salga bien en las negociaciones, hacefalta preguntarse: qu clase de paz saldr de ah? Ser entonces lavida mejor o peor que si los demcratas hubieran empezado ocontinuado la lucha?

    Dictadores "agradables"

    Una variedad de motivos y objetivos subyacen la dominacin de losdictadores: poder, posicin, riqueza, la reestructuracin de lasociedad y ms. Uno debe recordar que ninguno de stos ser

    satisfecho si abandonan sus puestos de control. En caso de negociar,los dictadores tratarn de preservar sus objetivos.

    Cualesquiera que sean las promesas que los dictadores ofrezcanen un acuerdo negociado, uno no debe olvidar que ellos son capacesde prometer cualquier cosa con tal de lograr el sometimiento de lasfuerzas opositoras democrticas, y despus descaradamente violaresos mismos acuerdos.

    Si los demcratas acuerdan parar la resistencia a cambio de unalivio en la represin, van a quedar muy defraudados. Una

    suspensin de la resistencia muy raramente conduce a unadisminucin de la represin. Cuando cesa la presin de la oposicininterna o internacional, los dictadores pueden ejercer la opresin yla violencia an ms brutalmente que antes. El desmoronamientode la resistencia popular a menudo suprime la fuerza que sirve decontrapeso y que ha limitado el control y la brutalidad de ladictadura. Entonces los tiranos pueden avanzar contra los quequieran. "Porque el tirano tiene poder de obrar slo donde se carecede fuerza para resistir", dijo Krishnalal Shridharani.5

    En los conflictos donde cuestiones fundamentales estn enjuego, la resistencia, no las negociaciones, es lo esencial para elcambio. En casi todos los casos, la resistencia debe continuar hastaque los dictadores sean expulsados del poder. El triunfo lo determina

    5Krishnalal Shridharani, War Without Violence: A Study of Gandhi's Method and ItsAccomplishments (Guerra sin Violencia: Un Estudio en los Mtodos de Gandhi ysus Logros), (Nueva York: Harcourt, Brace, 1939, y reimpreso en Nueva York yLondres: Garland Publishing, 1972), p. 260.

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    26/106

    con ms frecuencia, no la negociacin de un arreglo, sino el usoacertado de los mtodos de resistencia ms apropiados y poderososposibles. Estamos convencidosy lo exploraremos en detalle msadelanteque el desafo poltico o la lucha noviolenta es el mtodo

    ms poderoso que pueden emplear los que luchan por la libertad.

    Qu clase de paz?

    Si los dictadores y los demcratas van a dialogar sobre la paz, esnecesario tener ideas claras por los peligros que ello implica. Notodos los que emplean la palabra "paz" quieren la paz con libertad yjusticia. El sometimiento a una cruel opresin y el consentimientopasivo frente a los dictadores desalmados, que han perpetrado

    atrocidades en cientos y miles de personas, no constituye unaverdadera paz. A menudo Hitler llam a la paz, pero lo que queraera el sometimiento a su voluntad. Por lo general, la paz de losdictadores no es sino la de la prisin o la tumba.

    Existen otros peligros. Hay negociadores bien intencionadosque a veces confunden los objetivos de las negociaciones con elproceso de stas. Es ms, los negociadores democrticos o losespecialistas extranjeros aceptados para asistir a los negociadores,pueden, de un solo plumazo, dotar a los dictadores de una

    legitimidad domstica e internacional que previamente se les habanegado a causa de haberse apoderado del estado, las violaciones delos derechos humanos y las brutalidades cometidas. Sin esalegitimidad tan desesperadamente necesitada no pueden losdictadores continuar gobernando indefinidamente. Losrepresentantes de la paz no deben suministrarles esa legitimidad.

    Razones para la esperanza

    Como dijimos antes, los lderes de la oposicin pueden sentirseforzados a negociar si creen que la lucha democrtica carece de todaesperanza. Sin embargo, ese sentimiento de impotencia puedecambiarse. Las dictaduras no son permanentes. Los que viven bajouna dictadura no tienen por qu permanecer siempre dbiles y a losdictadores no es necesario permitirles que sigan siendo poderososindefinidamente. Hace mucho tiempo Aristteles apunt: "Laoligarqua y la tirana son las constituciones que duran menos."...

    14 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    27/106

    6 Aristotle, The Politics, traduccin de T.A.Sinclair (Harmondsworth, Middlesex,Inglaterra; y Baltimore, Maryland: Penguin Books 1976 [1962]). Libro V, captulo12, pp. 231 y 232.

    De la Dictadura a la Democracia 15

    "En ninguna parte han durado mucho tiempo6." Las dictadurasmodernas tambin son vulnerables. Se puede agravar su debilidady desintegrar su poder. (En el Captulo Cuatro examinaremos estasdebilidades con ms detalle).

    La historia reciente muestra la vulnerabilidad de las dictaduras,y revela que pueden desmoronarse en un plazo relativamente corto.Se necesitaron diez aos, de 1980 a 1990, para que se viniera abajo ladictadura comunista en Polonia, Alemania Oriental yChecoslovaquia. En 1989 ocurri sto en semanas. En El Salvador yGuatemala, en 1944, la lucha contra los brutales dictadores bienafianzados dur aproximadamente dos semanas en cada lugar. Elpoderoso rgimen militar del Shah de Irn fue socavado en pocosmeses. La dictadura de Marcos en Filipinas cay ante el empuje del

    pueblo en 1986. El gobierno de los Estados Unidos abandonrpidamente al Presidente Marcos cuando la fuerza de la oposicinse hizo patente. El intento de golpe de estado de lnea dura en laURSS en agosto de 1991 fue bloqueado en unos das por el desafopopular. De ah en adelante muchas de las naciones bajo un dominiosemejante, recuperaron su independencia en slo das, semanas omeses.

    Est claro que no es vlida la antigua idea de que los mtodosviolentos obran rpidamente y que los noviolentos requieren mucho

    tiempo. Aunque se requiera mucho tiempo para lograr cambios enla situacin subyacente y en la sociedad, la lucha concreta contra lasdictaduras a veces ocurre con relativa rapidez por medio de la accinnoviolenta.

    Las negociaciones no son la nica alternativa que hay entre unaguerra continua de aniquilacin por una parte y la capitulacin porla otra. Los ejemplos ya citados, as como los apuntados en elCaptulo Uno, ilustran que existe otra opcin para aquellos quequieren tanto la paz como la libertad, y sa es el desafo poltico.

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    28/106

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    29/106

    17

    TRESDEDNDESEDERIVAELPODER?

    Conseguir la libertad con paz, por supuesto que no es tarea fcil. Vaa requerirse para ello una gran destreza estratgica, organizacin yplanificacin. Sobre todo, requiere poder. Los demcratas no puedenesperar derribar la dictadura y establecer la libertad poltica sin lacapacidad de ejercer su propio poder en forma eficaz.

    Pero cmo es posible esto? Qu clase de poder podr laoposicin democrtica movilizar para destruir la dictadura y su vasta

    red militar y policiaca? La respuesta se encuentra en una com-prensin del poder poltico generalmente ignorada. Llegar a esteconocimiento intrnseco no es tarea demasiado difcil. Algunasverdades fundamentales son muy sencillas.

    La fbula del "Amo de los Monos"

    Una parbola china del siglo XIV, atribuida a Liu Ji, por ejemplo,

    destaca muy bien esta interpretacin descuidada acerca del poderpoltico:7

    En el estado feudal de Chu, un viejo viva de tener monosa su servicio. Las gentes lo llamaban "ju gong": el Amo delos Monos.

    Todas las maanas el viejo reuna a todos los monos en supatio y ordenaba al ms viejo que condujera a los dems a

    la montaa a recoger fruta de los rboles y matas. La reglaera que cada mono tena que darle al viejo la dcima parte

    7Esta historieta, originalmente titulada "Rule by Tricks" ("Gobernar por Tretas"), esdel Yu-Li-Zi,de Liu Ji (1311-1375). La traduccin original se public en NonviolentSanctions: News from the Albert Einstein Institution (Sanciones Noviolentas: Noticiasde la Institucin Albert Einstein), (Cambridge, Mass.) Vol. IV, No. 3 (Invierno 1992-1993) p. 3.

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    30/106

    de lo que recogiera. Los que no lo hacan eran brutalmenteazotados. Todos los monos sufran amargamente, perono se atrevan a protestar.

    Un da, un monito les pregunt a los otros; "Fue el viejoquien sembr los rboles y las matas?" Los otros lerespondieron: "No; brotaron solos." El monito les dirigiotra pregunta: "No podemos nosotros coger la fruta sinpermiso del viejo?" Los otros replicaron: "S, todospodemos hacerlo." El monito sigui: "Entonces por qutenemos que depender del viejo? Por qu tenemos queservirlo?"

    Antes que el monito hubiera terminado su discurso todoslos monos de pronto se sintieron iluminados, ydespertaron.

    Esa misma noche, al observar que el viejo se haba quedadodormido, los monos rompieron las barreras del valladodonde se hallaban encerrados, y destruyeron el recinto por

    completo. Tambin se apropiaron de cuanta fruta el viejotena guardada y se la llevaron al bosque, y nunca msvolvieron. Al fin el viejo muri de inanicin.

    Yu-Li-Zi dice: "Algunos hombres en el mundo gobiernana su pueblo mediante tretas y no por principios rectos.No son stos iguales al amo de los monos? La gente nose ha dado cuenta de su embrutecimiento. Apenas se les

    ilumine el conocimiento, las tretas dejarn de funcionar."

    Los recursos que necesita el poder poltico

    El principio es sencillo. Los dictadores requieren la ayuda de losgobernados, sin la cual no pueden ni disponer de las fuentes de poderni conservarlas. Entre las fuentes del poder poltico se encuentranlas siguientes:

    18 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    31/106

    De la Dictadura a la Democracia 19

    La autoridad -la creencia entre la gente de que el rgimen eslegtimo y que tiene el deber moral de obedecerlo;

    Los recursos humanos -la cantidad e importancia de las per-sonas y grupos que obedecen a los gobernantes, cooperancon ellos o los apoyan;

    El conocimiento y las destrezas - los que el rgimen necesitapara llevar a cabo acciones especficas, y que le son sumi-nistrados por las personas y grupos que cooperan con l;

    Los factores intangibles -los factores sicolgicos e ideolgicosque pueden mover a la gente a obedecer y apoyar a losgobernantes;

    Los recursos materiales - hasta qu punto controlan losgobernantes la propiedad o tienen acceso a ella, los recursosnaturales, el sistema econmico y los medios decomunicacin y transporte; y

    Las sanciones - castigos con los que se amenaza, o que seaplican a los desobedientes o a los que no colaboran, paraasegurar su sumisin y cooperacin, necesarias ambas paraque exista el rgimen y para que ponga en prctica suspolticas.

    Todas estas fuentes, sin embargo, dependen de la aceptacindel rgimen, del sometimiento y obediencia de la poblacin al mismo

    y de la cooperacin que le brindan innumerables personas y muchasde las instituciones de la sociedad. Estas fuentes no estngarantizadas.

    Una plena cooperacin, obediencia y apoyo, harn msasequibles los recursos que el poder necesita, y, en consecuencia,fortalecern la capacidad de obrar de cualquier gobierno.

    Por otra parte, el negarles a los agresores y dictadores lacooperacin popular e institucional disminuye y puede anular el

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    32/106

    acceso a las fuentes de poder de las que dependen los gobernantes.Sin acceso a tales recursos, el poder de los gobernantes se debilita, yfinalmente se disuelve.

    Naturalmente, los dictadores son sensibles a las acciones o ideasque amenazan su capacidad de obrar como les d la gana. Por lotanto, ellos estn dispuestos a amenazar y castigar a quienes losdesobedezcan, les hagan huelgas o dejen de cooperar con ellos. Noobstante, aqu no acaba el cuento. Ni la represin ni cuantasbrutalidades se cometan siempre resultan en la recuperacin delgrado de sumisin y cooperacin que el rgimen necesita parafuncionar.

    Si, a pesar de la represin, se pueden restringir o recortar du-rante un tiempo suficiente los recursos de los que depende el poder,los resultados pueden ser la incertidumbre y la confusin dentro dela dictadura. Es probable que sobrevenga entonces un notabledebilitamiento de su poder. Con el tiempo, el quitarle los recursosal poder producir la parlisis y la impotencia del rgimen y, encasos muy severos, su desintegracin. El poder de los dictadores seira muriendo, lenta o rpidamente, de inanicin poltica.

    Por lo tanto, el grado de libertad o tirana que existe bajo

    cualquier gobierno es en gran medida un reflejo de la relativadeterminacin de los sbditos de ser libres , y de la voluntad ycapacidad de stos de ofrecer resistencia a los esfuerzos que elgobierno haga por esclavizarlos.

    Contradiciendo la opinin popular, an las dictadurastotalitarias dependen de la poblacin y las sociedades que gobiernan.Como apunt el politlogo Karl W. Deutsch en 1953:

    El poder totalitario es fuerte slo si no tiene que ejercersecon mucha frecuencia. Si el poder totalitario tiene queimponerse sobre toda la poblacin y en todo momento,no es probable que se mantenga vigoroso por muchotiempo. Como los regmenes totalitarios requieren mspoder que cualquier otro tipo de gobierno pararelacionarse con sus gobernados, tienen una necesidadmayor de que los hbitos de sumisin estn ms amplia y

    20 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    33/106

    De la Dictadura a la Democracia 21

    firmemente extendidos entre su pueblo. Ms an, tienen,en caso de necesidad, que poder contar con el apoyo activode porciones significativas de la poblacin.8

    John Austin, el terico ingls del siglo XIX, describi la situacinde una dictadura que se enfrentara a un pueblo descontento. Aus-tin argumentaba que si la mayora de la poblacin estaba decidida adestruir al gobierno, y se hallaba dispuesta a soportar la represinque le impusiera por ello, entonces el poder del gobierno, incluyendoaquellos que lo apoyaban, no podra preservar al odiado rgimen,inclusive si recibiera ayuda del extranjero. No se podra someter denuevo al pueblo desafiante a la obediencia y la sumisin

    permanentes, conclua Austin.9Mucho antes, Nicols Maquiavelo haba explicado que el

    princpe "... que tiene a todo el pueblo por su enemigo, nunca puedeestar seguro, y mientras mayor sea su crueldad, mas dbil se irvolviendo su rgimen".10

    La aplicacin poltica de estos principios la demostraron en laprctica los hericos noruegos que resistieron la ocupacin nazi, y,como se mencion en el Captulo Uno, los valientes polacos,

    alemanes, checos, eslovacos y muchos ms que resistieron la agresincomunista y su dictadura, y que finalmente contribuyeron a producirel desmoronamiento del rgimen comunista en Europa. Este, porsupuesto, no es un fenmeno nuevo. Los casos de resistencianoviolenta se remontan por lo menos hasta el ao 494 a. de C., cuandolos plebeyos les negaron su cooperacin a sus amos, los patriciosromanos.11Los pueblos en Asia, Africa, las Amricas, Australasia y

    8Karl W. Deutsch, "Cracks in the Monolith" ("Grietas en el Monolito"), en la edicin

    de Carl J. Friedrich de Totalitarianism(El Totalitarismo), (Cambridge, Mass: HarvardUniversity Press, 1954), pp. 313-314.9John Austin, Lectures on Jurisprudence or the Philosophy of Positive Law(Conferenciassobre Jurisprudencia o Filosofa del Derecho Positivo), (5ta. edicin, revisada yeditada por Robert Campbell, vol 2, Londres: John Murray, 1911 (1861 ) Vol 1 P 296.10Niccolo Machiavelli "The Discourses of the First Ten Books of Livy"("Comentariosa las Dcadas de Tito Livio"), en The Discourses of Niccolo Machiavelli (Los Comentariosde Niccolo Machiavelli), (Londres: Routledge y Kegan Paul, 1950), Vol 1, p 254.11Ver Gene Sharp, The Politics of Nonviolent Action(La Poltica de la Accin Noviolenta),(Boston: Porter Sargent, 1973), p 75 Y aqu y all se encontrarn otros ejemploshistricos.

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    34/106

    las islas del Pacfico, as como en Europa han empleado la luchanoviolenta en distintos momentos.

    Tres de los factores ms importantes para determinar hasta qu

    grado estar o no controlado el poder del gobierno, son: 1) el deseorelativo por parte de la poblacin de imponerle limites al poder delgobierno; 2) lafuerzarelativa de las organizaciones e institucionesindependientes para quitarle colectivamente los recursos quenecesita el poder; y 3) la relativa capacidadpor parte de la poblacinde negarle su consentimiento y apoyo.

    Centros de poder democrtico

    Una de las caractersticas de la sociedad democrtica es que existeuna multitud de grupos e instituciones nogubernamentales. Ellasincluyen, por ejemplo, la familia, las organizaciones religiosas, lasasociaciones culturales, clubes deportivos, instituciones econmicas,sindicatos, instituciones estudiantiles, partidos polticos, pueblitos,asociaciones de colonos, clubes de jardinera, organizaciones dederechos humanos, grupos musicales, sociedades literarias y otras.Estos cuerpos son importantes porque establecen sus propios

    objetivos y tambin porque ayudan a satisfacer las necesidades dela sociedad.Adems, estos cuerpos tienen un gran significado poltico.

    Suministran las bases grupales e institucionales para que la gentepueda ejercer su influencia en la sociedad y resistir la de otros gruposo del gobierno cuando stos claramente se inmiscuyan injustamenteen sus intereses, actividades y propsitos. Los individuos aisladosque no son miembros de estos grupos, por lo general se hallanincapacitados para producir un impacto significativo en la sociedad,mucho menos en el gobiemo, y ciertamente no en una dictadura.

    Por lo tanto, si la autonoma y libertad de tales cuerpos puedeser suprimida por los dictadores, la poblacin quedar relativamenteindefensa. Adems, si estas instituciones pueden ser controladasdictatorialmente por el poder central, o sustituidas por otras bajocontrol de aqul, podrn ser utilizadas para controlar tanto a losmiembros individuales de stas como a las reas correspondientesde la sociedad.

    22 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    35/106

    De la Dictadura a la Democracia 23

    No obstante, si la autonoma y libertad de estas institucionesciviles independientes (fuera del control gubernamental) se puedenmantener o recuperar, stas sern de suma importancia para la

    aplicacin del desafo poltico. El rasgo comn en los ejemploscitados, donde las dictaduras han sido desintegradas o debilitadas,ha sido la valiente aplicacin masiva del desafo poltico por lapoblacin y sus instituciones.

    Como hemos afirmado, estos centros de poder sirven de basesinstitucionales desde las cuales la poblacin puede ejercer presin oresistir los controles dictatoriales. En el futuro, sern una baseestructural indispensable para una sociedad libre. El crecimientocontinuado y la independencia de las mismas, por consiguiente, esa menudo el requisito previo para el triunfo de una lucha deliberacin.

    Si la dictadura ha tenido xito en destruir o controlar los cuerposindependientes de la sociedad, ser importante para los que ofrezcanresistencia, crear nuevos grupos sociales e institucionesindependientes, o tratar de recuperar el control de los cuerpossociales supervivientes o de los parcialmente controlados. Durantela revolucin hngara de 1956-57, apareci una multitud de "concejos

    de democracia directa", que llegaron a juntarse inclusive paraestablecer durante varias semanas todo un sistema federal deinstituciones y gobierno. En Polonia, durante las postrimeras de1980, los trabajadores mantuvieron sindicatos ilegales de Solidaridady, en algunos casos, tomaron el control de los sindicatos oficialesdominados por los comunistas. Algunos de estos procesosinstitucionales pueden tener consecuencias polticas muyimportantes.

    Por supuesto, nada de esto significa que sea fcil debilitar odestruir una dictadura, ni que cualquier intento de hacerlo tendrxito. Desde luego no quiere decir que la lucha estar libre devctimas, porque los que todava estn sirviendo a la dictadura vana contraatacar en un esfuerzo por obligar a la poblacin a regresar ala cooperacin y la obediencia.

    Sin embago, esta nueva percepcin del poder significa, que la

    desintegracin deliberada de una dictadura s es posible.Las dictaduras,

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    36/106

    en particular, tienen caractersticas especficas que las hacenvulnerables al desafo poltico diestramente implementado.Examinemos con ms detalle estas caractersticas.

    24 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    37/106

    25

    CUATROLASDICTADURASTIENENPUNTOSDBILES

    Por lo general las dictaduras parecen invulnerables. Las agenciasde inteligencia, la polica, las fuerzas militares, las prisiones, los cam-pos de concentracin y los pelotones de fusilamiento, estncontrolados por unos pocos con mucho poder. Las finanzas de unpas, sus recursos naturales y su capacidad de produccin a menudoson saqueados por los dictadores y usados para apoyar la voluntadde los dictadores.

    En comparacin, los fuerzas democrticas con frecuencia

    aparecen como extremadamente dbiles, ineficaces e impotentes. Lapercepcin de la invulnerabilidad frente a la impotencia hace pocoprobable una oposicin efectiva.

    Sin embargo, esto no agota el tema.

    Identificando el taln de Aquiles

    Un mito de la Grecia clsica ilustra bien la vulnerabilidad de lo

    supuestamente invulnerable. A Aquiles, el guerrero, ningn golpepoda daarlo, y ninguna espada penetrar su piel. Cuando era unrecin nacido, se supone que su madre lo haba sumergido en lasaguas del mgico ro Estigio, y por eso su cuerpo estaba protegidocontra todos los peligros. Haba, sin embargo, un problema. Comoel nio haba sido sostenido por el taln para que no fuese arrastradopor la corriente, el agua mgica no haba cubierto esa pequeaporcin de su cuerpo. Cuando Aquiles se hizo un hombre, les pareca

    a todos que era invulnerable frente a las armas enemigas. Pero en labatalla de Troya un soldado enemigo, instruido por alguien queconoca la debilidad de aqul, logr clavarle una flecha en el talndesprotegido, en el nico lugar donde poda ser herido. La heridafue fatal. Todava hoy la frase "el taln de Aquiles" se refiere a laparte vulnerable de una persona, un plan o una institucin donde sise le ataca, no est protegida.

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    38/106

    26 Gene Sharp

    El mismo principio se aplica a los dictadores ms desalmados.Ellos tambin pueden ser vencidos, pero ms rpidamente y con uncosto menor si sus debilidades pueden identificarse y se concentra

    en ellas el ataque.Puntos dbiles de las dictaduras

    Entre los puntos dbiles de las dictaduras estn los siguientes:

    1. Se les puede restringir o negar la cooperacin de muchaspersonas, grupos e instituciones que necesitan para hacerfuncionar el sistema.

    2. Los requisitos y efectos de las polticas anteriores delrgimen, de cierta manera limitan su capacidad presentepara adoptar y ejecutar polticas contrarias.

    3. El sistema puede convertirse en rutinario en cuanto a sumodo de obrar y ser menos apto para ajustarse rpidamentea situaciones nuevas.

    4. El personal y los recursos ya destinados para las tareashabituales no estarn fcilmente disponibles para nuevasnecesidades.

    5. Los subordinados, temerosos de no complacer a sussuperiores, pueden no proporcionar todos los detalles de lainformacin que los dictadores necesitan para tomar

    decisiones.

    6. La ideologa puede erosionarse; los mitos y smbolos delsistema pueden perder su solidez.

    7. Si hay una fuerte ideologa que influye en la visin de larealidad, una adhesin firme a la misma puede ser causa dedesatencin de las condiciones y necesidades reales.

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    39/106

    De la Dictadura a la Democracia 27

    8. El deterioro de la competitividad y eficiencia de la burocracia,o los excesivos controles y regulaciones, pueden volverineficaces las polticas y operaciones del sistema.

    9. Los conflictos institucionales internos y las rivalidades yhostilidades personales pueden daar, o an interrumpir,las operaciones de la dictadura.

    10. Los intelectuales y los estudiantes pueden impacientarsepor las condiciones o restricciones o el enfoque doctrinario yla represin.

    11. El pblico en general puede, con el tiempo, volverse apticoy hasta hostil al rgimen.

    12. Las diferencias regionales, de clase o nacionales puedenagudizarse.

    13. La jerarqua del poder de una dictadura es siempre, hastacierto punto, inestable y a veces lo es extremadamente; los

    individuos no permanecen inmutables en sus posiciones yrangos, sino que pueden elevarse o caer a otros niveles, o serseparados por completo y sustituidos por un personal nuevo.

    14. Sectores de la polica o de las fuerzas militares pueden actuarpara lograr sus propios objetivos, an cuando esto sea con-tra la voluntad de los dictadores en el poder, y llegar hasta elgolpe de estado.

    15. Si la dictadura es nueva, necesita tiempo para afianzarsebien.

    16. Como en una dictadura muy pocos toman muchasdecisiones, es probable que ocurran errores de juicio, depoltica o de accin.

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    40/106

    17. Si el gobierno est buscando evitar estos peligros, ydescentraliza los controles y la toma de decisiones, su con-trol de los puntos clave para el poder puede deteriorarse an

    ms.Atacando las debilidades de la dictadura

    Conociendo semejantes debilidades intrnsecas, la oposicindemocrtica puede buscar cmo agravar esos "talones de Aquiles"deliberadamente, a fin de alterar el sistema drsticamente o biendesintegrarlo.

    La conclusin es obvia. A pesar de la apariencia de fuerza,

    todas las dictaduras tienen sus debilidades, sus ineficiencias internas,sus rivalidades personales, sus funcionamientos institucionalesdefectuosos y sus conflictos entre organizaciones y departamentos.Estas debilidades, con el tiempo, tienden a hacer al rgimen menosefectivo y ms vulnerable a los cambios de condiciones y a laresistencia deliberada. No todo lo que el rgimen se proponga lo vaa lograr, al menos completamente. A veces, por ejemplo, an lasrdenes directas de Hitler quedaron sin ejecutarse porque los que

    estaban por debajo de l en la jerarqua se abstenan de llevarlas acabo. El rgimen dictatorial puede a veces desbaratarse rpidamente,como ya hemos observado.

    Esto no quiere decir que las dictaduras se pueden destruir sinriesgos ni vctimas. Cualquier curso de accin posible para lograr laliberacin incurrir en riesgos y sufrimiento potencial, y tomartiempo para poder ponerse en marcha. Y, por supuesto, ningnmedio de accin puede asegurar el triunfo rpido en cada situacin.

    Sin embargo, los tipos de lucha que tienen como objetivo lasdebilidades identificables de la dictadura, tienen ms posibilidadde xito que aqullos en que se busca combatir la dictadura all dondea todas luces sta es ms fuerte. La pregunta es: cmo ha deconducirse esta lucha?

    28 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    41/106

    29

    CINCOEJERCIENDOELPODER

    En el Captulo Uno advertimos que la resistencia armada contra lasdictaduras no las afecta donde son ms dbiles sino ms bien dondeson ms fuertes. Al escoger competir en el campo de las fuerzasmilitares, el suministro de armamentos, la tecnologa armamentistay dems, los movimientos de resistencia tienden a situarse dondeestn en clara desventaja. Las dictaduras casi siempre podrndesplazar recursos superiores en esas reas. Hemos subrayadotambin el peligro de confiar en los poderes extranjeros para la

    salvacin. En el Captulo Dos examinamos los problemas queconlleva confiar en las negociaciones como un modo de quitarse lasdictaduras de encima.

    Cules son los medios disponibles que ofrecern a la resistenciademocrtica una clara ventaja y que lograrn agravar las debilidadesidentificadas de las dictaduras? Qu tcnica de accin va aaprovechar la teora del poder poltico que discutimos en el CaptuloTres? La alternativa a escoger es el desafo poltico.

    El desafo poltico tiene las siguientes caractersticas:

    No acepta que los resultados sean decididos por los mediosde lucha escogidos por la dictadura.

    Es difcil para el rgimen combatirlo.

    Puede agravar extraordinariamente las debilidades de la

    dictadura y negarle acceso a sus fuentes de poder.

    Puede dispersarse ampliamente en cuanto a la accin, perotambin puede concentrarse en un objetivo especfico.

    Conduce a errores de juicio y de accin por parte de losdictadores.

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    42/106

    Puede utilizar a la poblacin como un todo, y a los grupos einstituciones de la sociedad en la lucha y acabar con eldominio brutal de unos pocos.

    Sirve para acrecentar la distribucin del poder efectivo en lasociedad, haciendo que el establecimiento y mantenimientode una sociedad democrtica sea ms viable.

    La dinmica de la lucha noviolenta

    Como sucede con la capacidad militar, el desafo poltico se puedeemplear con una variedad de propsitos, que van desde esforzarse

    por influir en los opositores para que hagan cosas diferentes, crearcondiciones para la solucin pacfica de un conflicto, hastadesintegrar el rgimen de los adversarios. Pero la dinmica deldesafo poltico es muy diferente a la de la violencia. Aunque ambastcnicas son herramientas para luchar, lo hacen por medios muydistintos, y con distintas consecuencias. Los modos y resultados deun conflicto violento son bien conocidos. Las armas fsicas se usanpara intimidar, herir, matar y destruir.

    La lucha noviolenta es una tcnica mucho ms variada ycompleja que la violencia. A diferencia de sta, es una lucha queemplea armas polticas, econmicas, sociales y sicolgicas, aplicadaspor la poblacin y las instituciones de la sociedad. A estas armas seles ha conocido bajo diversos nombres, como protestas, huelgas,desobediencia o nocooperacin, boicot, descontento y poder popu-lar. Como advertimos antes, todos los gobiernos pueden gobernarmientras, por medio de la cooperacin, sumisin y obediencia de la

    poblacin y de las instituciones de la sociedad, reciban el constanterefuerzo de las fuentes de poder que necesitan. El desafo poltico, adiferencia de la violencia, es el instrumento idneo para negarleacceso al rgimen a esas fuentes de poder.

    Las armas y la disciplina noviolentas

    El error comn de las campaas improvisadas de desafo poltico,es la dependencia o confianza en uno o dos procedimientos, tales

    30 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    43/106

    De la Dictadura a la Democracia 31

    como las huelgas y las manifestaciones. De hecho, existe unamultitud de procedimientos que les permiten a los estrategas de laresistencia tanto concentrar como dispersar la resistencia, segn haga

    falta.Se han podido identificar hasta cerca de doscientos mtodosde accin noviolenta y, por supuesto, hay muchos ms. Estosprocedimientos se clasifican en tres grandes categoras: protesta ypersuasin, nocooperacin e intervencin. Los mtodos noviolentosde protesta y persuasin son mayormente manifestacionessimblicas, que incluyen desfiles, marchas y vigilias (54 mtodos).La nocooperacin se divide en tres sub-categoras: a) denocooperacin social (16 mtodos), b) de nocooperacin econmica:el boicot inclusive (26 mtodos) y huelgas (23 mtodos), y c) denocooperacin poltica (38 mtodos). La intervencin noviolenta,mediante procedimientos sicolgicos, sociales, econmicos opolticos tales como el ayuno, la ocupacin noviolenta y el gobiernoparalelo (41 mtodos), es el ltimo grupo. Una lista de 198 de estosmtodos se incluye en el apndice de esta publicacin.

    Es probable que a cualquier rgimen ilegtimo le cause gravesproblemas el uso de un nmero considerable de estos mtodos

    cuidadosamente escogidos, aplicados persistentemente y en granescala, fundidos en el contexto de una sabia estrategia y de tcticasapropiadas, por civiles adiestrados. Esto es aplicable a todas lasdictaduras.

    Los procedimientos de la lucha noviolenta pueden enfocardirectamente los asuntos ms inmediatos, lo cual no es posible conlos medios militares. Por ejemplo, ya que el problema que presentauna dictadura es esencialmente poltico, sera muy importante aplicar

    las formas polticas de la lucha noviolenta. Esto incluira la negacinde la legitimidad a los dictadores y la nocooperacin con su rgimen.La nocooperacin sera tambin aplicada contra algunas polticasespecficas. A veces el obstaculizar el trabajo o el demorarlo puederealizarse en silencio, o an secretamente, mientras que otras veces,la franca desobediencia o las desafiantes manifestaciones pblicas ylas huelgas, pueden ser vistas por todos.

    Por otra parte, si la dictadura es vulnerable a las presiones

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    44/106

    econmicas, o si muchos de los agravios del pueblo son econmicos,entonces la accin econmica, como el boicot o las huelgas, puedeser el procedimiento apropiado para la resistencia. Los esfuerzos

    del dictador por explotar el sistema econmico puedencontrarrestarse mediante huelgas generales limitadas, demoras enel ritmo del trabajo o por la negacin de ayuda (o desaparicin) departe de los expertos. El uso selectivo de diversos tipos de huelgaspuede enfocar puntos clave en el proceso manufacturero, en eltransporte, en el suministro de materias primas y en la distribucinde productos.

    Algunas tcticas de la lucha noviolenta requieren que la genterealice actos que no estn relacionados con su vida normal, talescomo volantear, manejar una imprenta clandestina, ponerse enhuelga de hambre o sentarse a media calle. Salvo en situacionesmuy extremas, para algunas personas estas acciones pueden serdifciles de llevar a cabo.

    Por el contrario, otros mtodos de lucha noviolenta, requierenque la gente contine llevando su vida normal aunque con algunasdiferencias. Por ejemplo, pueden ir a trabajar en vez de ponerse enhuelga, pero una vez all, deliberadamente trabajar ms lentamente

    o con menos eficacia que siempre. Conscientemente se puedencometer "errores" con ms frecuencia. A veces, uno puede estar"enfermo" o "impedido" de trabajar, o simplemente se puede negara trabajar. Uno puede asistir a una ceremonia religiosa cuando talacto no slo expresa las convicciones religiosas sino las polticas. Sepuede proteger a los nios de la propaganda de los atacantesmediante la instruccin en casa o en clases ilegales. Uno puedenegarse a pertenecer a cierta organizacin "recomendada", o

    impuesta a la cual uno antes no hubiera escogido pertenecerlibremente. La semejanza de tal tipo de accin con las actividadesacostumbradas de las gentes, y el grado limitado de desviacin dela vida normal, pueden hacer que la participacin en la lucha deliberacin nacional sea mucho ms fcil para mucha gente.

    Como la lgica de la lucha noviolenta difiere en muchosaspectos de la accin violenta, hasta una violencia limitada seracontraproducente durante una campaa de desafo poltico, porque

    32 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    45/106

    De la Dictadura a la Democracia 33

    desviara la lucha hacia un campo donde los dictadores tienen unaventaja abrumadora (la contienda armada). La disciplina noviolentaes clave para el xito, y debe persistirse en ella a pesar de las

    provocaciones y brutalidades de los dictadores y sus agentes.El mantener la disciplina noviolenta contra los adversariosviolentos facilita el trabajo de los cuatro mecanismos de cambio dela lucha noviolenta (de lo que trataremos ms adelante). La disciplinanoviolenta es tambin extremadamente importante en el proceso deljiu-jitsu poltico. En ste, la pura brutalidad del rgimen contra losactivistas claramente noviolentos rebota polticamente contra laposicin del dictador, causando disensin en sus propias filas, yfomentando el apoyo a los de la resistencia de parte de la poblacinen general, de los que generalmente defienden al rgimen y deterceras personas.

    Sin embargo, en algunos casos una violencia limitada contrala dictadura puede ser inevitable. La frustracin y el odio contra elrgimen pueden explotar violentamente. O bien, ciertos grupospueden no estar deseosos de abandonar el uso de medios violentosan cuando reconozcan el importante papel de la lucha noviolenta.En estos casos no es necesario abandonar el desafo poltico. Sin

    embargo, ser necesario separar la accin violenta lo ms posible dela accin noviolenta. Esto ha de hacerse en trminos geogrficos, desectores de la poblacin, de tiempo y de problemas. De otro modo,la violencia puede tener efectos desastrosos sobre el uso del desafopoltico, el cual potencialmente, es mucho ms poderoso y eficaz.

    La historia indica que an cuando se espera que haya vctimas,tanto muertos como heridos, en el desafio poltico las habr ennmero mucho menor que las que se produciran en la contienda

    armada. Es ms, este tipo de lucha no contribuye al ciclo intermi-nable de matazn y brutalidad.La lucha noviolenta requiere una prdida del miedo y un mayor

    control sobre s mismo, por una parte, y tiende a producir este efectofrente al gobierno y su represin brutal. Esa prdida del miedo, o elcontrol sobre s mismo, es un elemento clave para destruir el poderque los dictadores tienen sobre la poblacin en general.

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    46/106

    Franqueza, clandestinidad y comportamiento intachable

    La clandestinidad, el engao y la conspiracin subterrnea le

    plantean problemas muy graves a un movimiento que emplee laaccin noviolenta. A menudo, es prcticamente imposible impedirque los agentes de la polica o de la inteligencia se enteren de lasintenciones y los planes. Desde la perspectiva del movimiento, elclandestinaje no slo tiene sus races en el miedo sino que contribuyea aumentarlo. Esto reblandece el espritu de la resistencia y reduceel nmero de personas que podran participar en una accinespecfica. Tambin puede contribuir a que dentro del movimiento,haya sospechas y acusaciones, a menudo injustificadas, acerca de

    quien podra ser un informante o un agente de los contrarios. Elsecreto tambin puede afectar la habilidad de un movimiento parapersistir en la prctica de la noviolencia. Al contrario, la franquezaen cuanto a planes e intenciones contribuir a dar la imagen de queel movimiento de resistencia es en extremo poderoso. El problema,por supuesto, es ms complejo de lo que esto sugiere, y hay aspectossignificativos de las actividades de la resistencia que van a requerirel secreto. Los entendidos tanto en la dinmica de la lucha noviolenta

    como en los medios de vigilancia de la dictadura en la situacinespecfica necesitarn una evaluacin bien documentada.

    La edicin, impresin y distribucin de publicacionesclandestinas, las trasmisiones ilegales por radio desde dentro delpas y la inteligencia recogida sobre las operaciones de la dictadura,estn entre las clases limitadas de actividades especiales querequieren un alto grado de sigilo.

    En todas las etapas del conflicto es necesario mantener un

    comportamiento intachable en la accin noviolenta. Factores comoel no tener miedo y el mantener la disciplina noviolenta deben estarsiempre presentes. Es importante tener en cuenta que va a necesitarseun gran nmero de gente para efectuar grandes cambios. Esacantidad de participantes confiables slo se puede obtenermanteniendo el ms alto nivel de comportamiento.

    34 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    47/106

    De la Dictadura a la Democracia 35

    Cambios en las relaciones de poder

    Los estrategas necesitan recordar que el conflicto donde se aplica el

    desafo poltico es un campo de lucha siempre cambiante, con uncontinuo juego de ataques y contraataques. Nada es esttico. Lasrelaciones de poder, tanto absolutas como relativas, estn sujetas acambios rpidos y constantes. Esto es posible porque los que trabajanen la resistencia continan tenazmente en su actividad noviolenta apesar de la represin.

    En este tipo de situacin de conflicto, las respectivas variacionesde poder en los bandos contendientes, tienden a ser ms extremasque en los conflictos violentos, y tienen una gama ms variada deconsecuencias significativas en lo poltico. Debido a esas variaciones,las acciones especficas de los de la resistencia, por lo general, tienenconsecuencias que van ms all del lugar o el momento en queocurren. Estos efectos tendrn repercusiones que fortalecern odebilitarn a un grupo u otro.

    Adems, el grupo noviolento puede, por sus acciones, influirsobre el aumento o disminucin de la fuerza relativa del grupocontrario, en un grado mucho mayor del que ocurre en los conflictos

    militares. Por ejemplo, la resistencia noviolenta, disciplinada yvaliente, frente a la brutalidad de los dictadores puede producirdesazn, descontento o desconfianza, y, en situaciones extremas,hasta el amotinamiento entre los propios soldados y el personal alservicio de la dictadura. Esta resistencia tambin puede dar lugar aque aumente la condena internacional de la dictadura. Adems, elempleo del desafo poltico disciplinado, persistente y bienadiestrado, puede hacer que ms y ms gente, que normalmente

    apoyara tcitamente a los dictadores o que por lo generalpermaneceran neutrales en el conflicto, participe en la resistencia.

    Cuatro mecanismos de cambio

    La lucha noviolenta produce cambios de cuatro maneras. El primermecanismo es el que se considerara menos probable, aunque as haocurrido. Cuando los miembros del grupo contrario se conmueven

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    48/106

    emocionalmente por los sufrimientos que la represin ha infligidoen los valientes activistas de la resistencia, o racionalmente sepersuaden de que la causa de los de la resistencia es justa, llegan a

    aceptar los objetivos de los de la resistencia. A este mecanismo se lellama conversin. Aunque se dan casos de conversin en la luchanoviolenta, son raros, y en la mayor parte de los conflictos esto noocurre de manera alguna, o por lo menos en escala significativa.

    Con mucha ms frecuencia la lucha noviolenta obra cambiandola situacin del conflicto y de la sociedad, de modo que el adversariosimplemente no puede hacer lo que le viene en gana. Es este cambioel que produce los otros tres mecanismos: la acomodacin, la coercinnoviolenta y la desintegracin. Cul de stos ocurra depender delgrado en que las relaciones de poder, absolutas o relativas, hayancambiado a favor de los demcratas.

    Si las cuestiones a debatir no son fundamentales, las exigenciasde la oposicin en una campaa limitada no se consideranamenazantes, y la confrontacin de fuerzas ha alterado las relacionesde poder en alguna medida, el conflicto inmediato puede terminarpor medio de un arreglo al que se llegue cediendo cada parte algo,contemporizando. A este mecanismo se le llama acomodacin. Por

    ejemplo, muchas huelgas se resuelven de esta manera, ambas partesconsiguen algunos de sus objetivos, pero ninguna obtiene todo loque quera. El gobierno puede percibir que un arreglo semejantetrae algunos beneficios positivos, tales como disminuir la tensin,dar una impresin de "equidad", mejorar la imagen internacionaldel rgimen. Es importante, por lo tanto, que se tenga gran cuidadoal seleccionar los puntos por los cuales el arreglo por acomodacinresulte aceptable. La lucha por derribar la dictadura no es uno de

    sos.La lucha noviolenta puede ser mucho ms poderosa de lo queindican los mecanismos de conversin o acomodacin. Lanocooperacin masiva y el desafo pueden cambiar la situacinpoltica o social, especialmente las relaciones de poder, de tal maneraque los dictadores pierden la capacidad de controlar los procesoseconmicos, sociales y polticos del gobierno y la sociedad. Lasfuerzas militares del adversario pueden volverse tan poco confiables

    36 Gene Sharp

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    49/106

    que ya simplemente no obedezcan las rdenes de reprimir a los dela resistencia. Aunque los dirigentes del gobierno permanezcan ensus posiciones y sigan firmes en cuanto a sus objetivos originales,

    han perdido la capacidad de actuar con efectividad. A esto se lellama coercin noviolenta.En algunas situaciones extremas, las condiciones que ha

    producido la coercin noviolenta van an mas lejos. La dirigenciaadversaria, de hecho, pierde toda su capacidad de actuar, y se vieneabajo toda su estructura de poder. La autoconduccin, lanocooperacin y el desafo de los de la resistencia se hacen tan per-fectos que sus adversarios ahora carecen hasta del simulacro de con-trol sobre ellos. La burocracia del adversario se niega a obedecer asu propia dirigencia. Las tropas de los adversarios y su polica seamotinan. Los simpatizantes y colaboradores del poder adversorepudian a sus antiguos dirigentes y les niegan derecho alguno amandar. A partir de esto, la antigua obediencia y colaboracindesaparecen. El cuarto mecanismo de cambio, la desintegracindelsistema del adversario, es tan completo que ste no tiene siquierapoder suficiente para rendirse. El rgimen se ha desintegrado.

    Al planificar las estrategias para la liberacin, estos cuatro

    mecanismos deben tenerse en cuenta. Algunas veces operan porcasualidad. Sin embargo, la seleccin de uno o ms de stos como elmecanismo de cambio escogido para que obre en el conflicto, harposible que se formulen estrategias especficas que se refuercenmutuamente. La seleccin de uno o ms mecanismos depender denumerosos factores, inclusive del poder absoluto y relativo de losgrupos contendientes y de las actitudes y objetivos del gruponoviolento.

    Efectos democratizadores del desafo poltico

    En contraste con los efectos centralizantes de las sanciones violentas,el empleo de las tcnicas de la lucha noviolenta contribuye ademocratizar la sociedad de varias maneras.

    Una parte del efecto democratizador es negativo. Esto es, encontraste con los medios armados, esta tcnica no suministra un

    De la Dictadura a la Democracia 37

  • 5/19/2018 De la dictadura a la democracia.pdf

    50/106

    instrumento para la represin bajo el mando de una lite gobernante,que pueda volverse contra la poblacin para establecer y manteneruna dictadura. Los lderes de un movimiento de desafo poltico

    pueden influir en o presionar a sus seguidores, pero no pueden niencarcelarlos ni ajusticiarlos si disienten o escogen otros lderes.La otra parte del efecto democratizador es positiva. Esto quiere

    decir que la lucha noviolenta le da a la poblacin armas para laresistencia, que podrn usar para defender sus libertades tanto con-tra los dictadores que existen como contra los que puedan existir. Acontinuacin, mencionamos varios de los efectos democratizadorespositivos que tiene la lucha noviolenta:

    La experiencia de aplicar la lucha noviolenta puede hacerque la poblacin confe ms en s misma, en cuanto a desafiarlas amenazas del rgimen y la capacidad de ste para larepresin violenta.

    La lucha noviolenta entrega las armas de la nocooperacin yel desafo, mediante las cuales la poblacin puede resistirsea los controles no democrticos que imponga sobre ella

    cualquier grupo dictatorial.

    La lucha noviolenta se puede usar para defender la prcticade las libertades democrticas, tales como la de expresin, laprensa libre, las organizaciones independientes y el derechoa reunirse enfrentndose a controles represivos.

    La lucha noviolenta contribuye en forma importante a la

    supervivencia, renacimiento y fortalecimiento de los grupose instituciones independientes de la sociedad comomencionamos antes. Estas son importantes par