Caracterización de dos fincas de la Vereda Chiniata (Anolaima - Cundinamarca) con enfoque integral...

26
1 CARACTERIZACIÓN DE DOS FINCAS DE LA VEREDEA CHINIATA (ANOLAIMA - CUNDINAMARCA) CON ENFOQUE INTEGRAL Y DE DESARROLLO RURAL SUSTENTABLE CHARACTERIZATION OF TWO FARMS OF THE CHINIATA MUNICIPAL RURAL SETTLEMENT (ANOLAIMA - CUNDINAMARCA) WITH INTEGRAL AND SUSTENTABLE RURAL DEVELOPMENT APPROACH Luis Felipe Toro Beleño 1 y José Isidro Vargas Pinto 2 Resumen La caracterización de las unidades productivas rurales y de los territorios de los que hacen parte, es un proceso multidimensional que idealmente debe contar con la participación de las comunidades para que sea integral y cercano a la realidad. En ese tipo de análisis, los componentes económicos, socio-culturales y ambientales son aspectos fundamentales a evaluar que arrojan indicadores que permiten dilucidar respecto de la sostenibilidad y sustentabilidad de las unidades y los territorios. Por medio de la investigación cualitativa y la recolección de datos de tales balances, se realizó un trabajo en dos comunidades productivas del municipio de Anolaima (Cundinamarca), y con esos resultados se analizaron particularidades de esos sistemas productivos, sus relaciones socio-económicas y ambientales con el territorio al que pertenecen. Abstract Characterization of rural production units and territories that are part, is a multidimensional process that ideally should involve the communities to be comprehensive and close to reality. In such an analysis, the economic components, socio-cultural and environmental are fundamental to assess that shed indicators to elucidate about the sustainability and sustainability of the units and the territories aspects. Through qualitative research and data collection of such balances, work in two productive communities in the municipality of Anolaima (Cundinamarca) was performed, and those results particularities of these production systems are analyzed, their socio-economic and environmental relations the territory to which they belong. Palabras clave: Sustentabilidad, desarrollo rural, territorio, cuenca, estudios de caso, investigación cualitativa, investigación acción participativa. Key words: Sustainability, rural development, territory, basin, case studies, qualitative research, participative action research. 1 Ingeniero Agrónomo. Estudiante de Maestría en Ciencias Agrarias Desarrollo Empresarial Agropecuario. Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá. [email protected] 2 Ingeniero Agrónomo. Estudiante de Maestría en Ciencias Agrarias Desarrollo Empresarial Agropecuario. Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá. [email protected]

Transcript of Caracterización de dos fincas de la Vereda Chiniata (Anolaima - Cundinamarca) con enfoque integral...

1

CARACTERIZACIÓN DE DOS FINCAS DE LA VEREDEA CHINIATA (ANOLAIMA -

CUNDINAMARCA) CON ENFOQUE INTEGRAL Y DE DESARROLLO RURAL

SUSTENTABLE

CHARACTERIZATION OF TWO FARMS OF THE CHINIATA MUNICIPAL RURAL SETTLEMENT

(ANOLAIMA - CUNDINAMARCA) WITH INTEGRAL AND SUSTENTABLE RURAL DEVELOPMENT

APPROACH

Luis Felipe Toro Beleño1 y José Isidro Vargas Pinto

2

Resumen

La caracterización de las unidades productivas rurales y de los territorios de los que hacen parte,

es un proceso multidimensional que idealmente debe contar con la participación de las

comunidades para que sea integral y cercano a la realidad. En ese tipo de análisis, los

componentes económicos, socio-culturales y ambientales son aspectos fundamentales a evaluar

que arrojan indicadores que permiten dilucidar respecto de la sostenibilidad y sustentabilidad de

las unidades y los territorios. Por medio de la investigación cualitativa y la recolección de datos

de tales balances, se realizó un trabajo en dos comunidades productivas del municipio de

Anolaima (Cundinamarca), y con esos resultados se analizaron particularidades de esos sistemas

productivos, sus relaciones socio-económicas y ambientales con el territorio al que pertenecen.

Abstract

Characterization of rural production units and territories that are part, is a multidimensional

process that ideally should involve the communities to be comprehensive and close to reality. In

such an analysis, the economic components, socio-cultural and environmental are fundamental to

assess that shed indicators to elucidate about the sustainability and sustainability of the units and

the territories aspects. Through qualitative research and data collection of such balances, work in

two productive communities in the municipality of Anolaima (Cundinamarca) was performed,

and those results particularities of these production systems are analyzed, their socio-economic

and environmental relations the territory to which they belong.

Palabras clave: Sustentabilidad, desarrollo rural, territorio, cuenca, estudios de caso,

investigación cualitativa, investigación acción participativa.

Key words: Sustainability, rural development, territory, basin, case studies, qualitative research,

participative action research.

1 Ingeniero Agrónomo. Estudiante de Maestría en Ciencias Agrarias – Desarrollo Empresarial Agropecuario. Universidad Nacional de

Colombia, Sede Bogotá. [email protected]

2 Ingeniero Agrónomo. Estudiante de Maestría en Ciencias Agrarias – Desarrollo Empresarial Agropecuario. Universidad Nacional de

Colombia, Sede Bogotá. [email protected]

2

INTRODUCCIÓN

Los procesos de planificación municipales y territoriales como instrumentos guía de los procesos

de desarrollo rural son las herramientas más prácticas con las que se cuenta en cada región para,

no solo conocer sus características (geográficos, ambientales, sociales, culturales, económicas,

etc.), sino también para planear su conservación y uso eficiente y así lograr un mejor bienestar de

sus habitantes, generando incluso excedentes que se pueden comercializar y obtener algunos

bienes y servicios que no se producen en el territorio. No obstante, estos planes se realizan

constantemente con enfoques que se escapan a la realidad de los territorios andinos, y con

metodologías de poca participación ciudadana y sin perspectiva integral. Razón por la cual

resultan en planes desintegrados, alejados de la realidad, sin información al detalle, y sobre todo,

sin acciones efectivas que permitan el desarrollo rural integral y sustentable. Tal como sostienen

Fals Borda y Mora (2004), las condiciones vitales del país tropical colombiano –así amazónico

como andino- son únicas y diversas y por lo mismo inducen y exigen explicaciones propias,

manejos técnicos e instituciones eficaces según paradigmas endógenos, alternativos y abiertos.

Sin la generación de esas explicaciones y paradigmas propios no podremos abordar la

complejidad que los territorios rurales representan, ni lanzar teorías sobre el cómo la

implementación de lo planeado puede contribuir al desarrollo y a la reducción de la pobreza en

las poblaciones que los habitan.

En América Latina se están desarrollando nuevos paradigmas de desarrollo rural y formas de

abordar y caracterizar a los territorios y las unidades productivas con enfoque sistémico. Trabajos

como los de Sepúlveda et al. (2003), Forero (1999), Fals Borda y Mora (2004), Carvajal et al.

(2005) y Ospina (2003) nos ofrecen herramientas para el estudio y la caracterización integral de

los territorios rurales, así como la planificación para el desarrollo sustentable de los mismos.

También nos dan algunos avances para lograr que estos procesos tengan un alto componente de

participación comunitaria. Por mencionar algunos de esos avances se encuentran los trabajos en

economía campesina de Forero (1999) en donde se aborda la complejidad de estas comunidades y

algunas maneras de valorar el aporte de estas al desarrollo del país. Fals Borda es pionero en las

metodología de investigación-acción en donde además de estudiar las comunidades se ejecutan

acciones que surgen de una importante participación de las mismas. En los trabajos de Ospina

(2003) se lograron identificar bastantes variables sobre las cuales se puede valorar o diagnosticar

el estado y la evolución de una región o territorio, un avance relevante para el presente trabajo.

Dadas las problemáticas planteadas y las herramientas metodológicas ofrecidas por anteriores

investigaciones en el tema del desarrollo rural, se planteó el presente trabajo con el fin de realizar

un diagnóstico participativo e integral de dos fincas pertenecientes a la cuenca hidrográfica de la

Vereda Chiniata (Anolaima – Cundinamarca), con miras al planteamiento de estrategias de

desarrollo rural sustentable. Como objetivos alrededor de este propósito general, se tuvo el de

hacer los balances socioculturales, de trabajo, ambientales y económicos de las unidades

productivas para encontrar potencialidades o limitaciones para el desarrollo del territorio, y

también se planteó una metodología que permitiera hacer cartografía social participativa de tales

fincas, sus recursos, actividades, riesgos y oportunidades.

3

MARCO REFERENCIAL

El contexto del problema que existe en las zonas rurales gira alrededor de dos cosas

principalmente: el bienestar humano y el desarrollo sustentable. Son concepto que a veces

parecen excluyentes en cuanto a que a través de gran parte de la historia el bienestar humano

siempre ha desencadenado impactos negativos en el planeta que van en contravía de lo que podría

llamarse un desarrollo sustentable. El Banco Mundial (2009) manifiesta que tres de cada cuatro

personas pobres en los países en desarrollo viven en zonas rurales (2.100 millones subsisten con

menos de US$2 al día y 880millones con menos de US$1 al día) y la mayoría depende de la

agricultura para su subsistencia. La concentración de la riqueza es cada vez más notable. Los

efectos de las economías extractivas y la incipiente aplicación de legislaciones del uso eficiente y

consiente de los recursos naturales han provocado profundos desequilibrios representados en un

irreversible cambio climático mundial que se está afectando los ciclos biológicos de los seres

vivos en la tierra, y a largo plazo amenaza con fenómenos globales de desaparición de especies,

catástrofes, entre otros.

Ante este panorama, y la importancia que los medios rurales de subsistencia, especialmente la

agricultura, tienen para el alivio de la pobreza y la implementación de estrategias para amortiguar

los efectos del cambio climático, se está trabajando alrededor del mundo en nuevas formas de ver

y utilizar los recursos rurales de manera sostenible y sustentable. El cambio de paradigma no ha

sido fácil, pero los avances científicos ya están arrojando resultados con nuevos enfoques y

perspectivas esperanzadoras.

Los paradigmas y concepciones

Al igual que los agricultores, los investigadores también debemos replantear aquello que se

quiere decir con mejoras en la agricultura y el desarrollo de rural. El lenguaje del reduccionismo

y positivismo no aborda el fenómeno complejo y dinámico asociado con la búsqueda de prácticas

sostenibles (Bawden, 1991). El pensamiento sistémico surgido desde Bertalanffy ha contribuido a

una nueva forma de ver los fenómenos del mundo, sus componentes y cómo estos se

interrelacionan formando causalidades directas, indirectas y reciprocas que actúan como un todo

que cambia y evoluciona para adaptarse a su entorno. La participación activa de personas en las

zonas rurales, trabajando juntos para explorar sistémicamente y mejorar las situaciones

problemáticas complejas, de tal manera que se conduzca a su emancipación y el desarrollo de

mejoras en la calidad de las relaciones fundamentales entre ellos y sus entornos, es el ideal al que

aspira el paradigma del desarrollo sistémico mediante la agricultura.

Los territorios y los sistemas productivos rurales: Valorización integral como primer paso

para la planificación de su desarrollo sustentable

Los territorios son espacios de construcción social sin límites definidos y con características

únicas que exigen estrategias multidimensionales para su desarrollo (Gallardo, 2010). Es nuevo

enfoque describe el espacio rural como un continuo e irrepetible conjunto de relaciones sociales,

ambientales, culturales y económicas, tanto al interior de él, como con los asentamientos urbanos.

Esta visión de nueva ruralidad también entiende que lo rural no es algo exclusivamente asociado

4

a la agricultura, sino también reconoce bienes y servicios ambientales y externalidades positivas

de los sistemas agropecuarios (Echeverri y Ribero, 2002).

En los altos andinos, los sistemas productivos aún tienen una alta participación de la economía

campesina, la cual también requiere una breve revisión de su significado. Y antes de hablar de

economía campesina es importante abordar, al menos de manera superficial, el significado del

término ‘campesino’, ya que de ello surgen elementos para elaborar una definición económica de

esta categoría socioeconómica. Domínguez (1993) define el campesinado como un complejo

interactivo entre naturaleza, trabajo y sociedad, considerándolo un modo de vida más que un

típico modo de producción marxista. Ellis (1988) considera a los campesinos como hogares

agrícolas, con acceso a sus medios de subsistencia por medio de la tierra, utilizan principalmente

mano de obra familiar en la producción agraria, siempre están dentro de un sistema económico

más grande, pero que fundamentalmente se caracterizan por su parcial articulación con los

mercados que tienden a funcionar con un alto grado de imperfección. Términos como

‘tradicional’, ‘subsistencia’ y ‘pequeño’ son frecuentemente asociados a la definición de

economía campesina. Shanin (1974) dice que la explotación campesina forma una pequeña

unidad de producción-consumo que encuentra su principal sustento en la agricultura y es

sostenida principalmente por el trabajo familiar.

La economía campesina no tiene un concepto único y prevalente, es una denominación que

cambia y evoluciona al tiempo que lo hace el modo de vida que representa. Además de

diferencias temporales en la naturaleza de este modo de producción, también hay diferencias

regionales que dependen de factores como la importancia de la clase de propiedad, el grado de

integración del campesino con los mercados económicos, la prevalencia o ausencia de la

propiedad privada de la tierra y los animales, o el tipo de producción – si, por ejemplo, está

basado en la producción de ganado o en cultivos (Roberts, 1990).

Estas perspectivas de lo rural ofrecen retos por su complejidad, en cómo darle valor y explorar las

características propias que posee. En la Tabla 1 se nos ofrece una forma de analizar los diferentes

componentes de los territorios y las unidades productivas (unidades fundamentales de los

territorios).

5

Tabla 1. Valorización multifuncional de la agricultura y los ecosistemas Dimensión

evaluativa

Subsistema Magnitudes Evaluación Descriptores

del estado del

subsistema

Conexión entre

subsistemas

Ecológica Ecosistemas Ecológicas:

Biomasa,

energía,

biodiversidad,

rareza,

información,

tiempo,

persistencia, etc.

Eficiencia y

relaciones entre

las magnitudes

mencionadas

Estabilidad,

integralidad

(resilencia,

capacidad de

recuperación),

valor de

conservación,

patrimonio

cultural

Situado en la

base. Frágil,

Actuando a

escala temporal

larga. No es tan

dinámico en

comparación al

subsistema 2 y 3

Productiva Sistemas de

producción Físicas y

tecnológicas:

Energía,

materiales,

cosecha, trabajo,

etc.

Rendimientos,

productividad,

etc.

Sostenibilidad,

coherencia

ecológica,

mantenimiento

de los recursos

Posición

intermedia. Un

uso sensato crea

y mantiene los

recursos.

Dinamismo

medio

Económica Sistema

económico

convencional

Monetarias:

Dinero

Rentabilidad,

relación B/C

(ganancias)

Viabilidad

económica

Dominante. Muy

dinámico. Alta

capacidad de

control y

desestabilización.

Cultural Sistema cultural Patrimonio:

Arquitectura,

manufacturas y

artesanías,

infraestructuras,

conocimientos,

paisaje, cultura,

etc.

Originalidad y

rareza

Valor

patrimonial

Básico. Frágil.

Resultado de la

integración del

subsistema 1 y 2.

Afectado por 3 y

5.

Social Sistema social Desarrollo

humano:

Integración

social, salud,

educación,

formación,

cultura, etc.

Índices de

desarrollo

humano y social

Equidad,

distribución del

bienestar y la

riqueza

Posición

intermedia entre

subsistemas 2 y

3. Afectado por

la degradación de

1 y 4 y las

disfunciones de

3.

Fuente: Gómez (2007)

Metodologías para valorar integralmente los territorios y sistemas que lo componen

En primer lugar, las exigencias del medio y los nuevos paradigmas requieren de la participación

comunitaria en cualquier proceso de caracterización y planificación de los territorios. En este

campo, se rescata la investigación cualitativa y demás aportes realizados por las ciencias sociales

y la antropología.

La investigación cualitativa: Es el procedimiento metodológico que utiliza palabras, textos,

discursos, dibujos, gráficos e imágenes para comprender la vida social por medio de significados

6

y desde una perspectiva holística, pues se trata de entender el conjunto de cualidades

interrelacionadas que caracterizan a un determinado fenómeno. La investigación cualitativa tiene

como punto central comprender la intención del acto social. Esto es, la estructura de

motivaciones que tienen los sujetos, la meta que persiguen, el propósito que orienta su conducta,

los valores, sentimientos, creencias que los dirigen hacia un fin determinado (Mejía, 2004). Para

esto cuenta con distintas ramas y herramientas que la caracterizan como son la IAP y la

investigación etnográfica o etnografía.

La investigación participativa busca reconocer el conocimiento popular y sistematizarlo para

facilitar la participación real de la población en la programación y ejecución de las acciones que

competen al desarrollo (De Shuter y Yopo, 1982). La participación puede entenderse como un

involucramiento real de la población, en donde es ella quien toma la iniciativa con la menor

intervención externa. Es llegar a decidir y tomar el control de las propias acciones. Permite pasar

de una pasividad completa a un control del propio proceso y ser actor protagonista del

autodesarrollo (Geilfus, 1996).

Las herramientas de la investigación participativa están fundamentadas en el diálogo que debe

respetar un principio fundamental: Todos los participantes deben ser considerados como fuente

de información y decisión para analizar los problemas y contribuir a soluciones a través de

acciones de desarrollo (Geilfus, 1996). Esto significa que no es poder del investigador entrar a

marcar diferencias entre la población y mucho menos llegar a cualquier tipo de exclusión.

Investigación-Acción-Participativa IAP: Es una forma de desarrollar la investigación y una

metodología de intervención social. En ella la población participa activamente con el 16

investigador y los técnicos en el análisis de la realidad y en las acciones concretas para

modificarla (Mejía, 2004). El análisis de la realidad y la generación de estrategias se realizan in

situ y con ayuda de la comunidad intervenida lo que le da a los resultados un valor muy

importante. El proceso en sí comprende varias etapas:

• Preparación: Se elige la comunidad o población de trabajo casi siempre de acuerdo a la

demanda que se haga de la investigación. Además, se definen los objetivos y alcances del

proyecto.

• Trabajo de campo: Corresponde a la producción de datos mediante las entrevistas, grupos de

discusión y observación participante a partir de propuestas de trabajo planteada inicialmente. Esta

etapa finaliza presentando y discutiendo el informe de campo con la población (Mejía, 2004).

• Análisis de datos: Se procesan los datos, se reducen y elaboran categorías para al final hacer

conclusiones a partir de ellas con participación de la población.

• Presentación de resultados: En la IAP son discutidos amplia y profundamente entre el

investigador y la comunidad. El objetivo es devolver el resultado al grupo a través de aportes o

propuestas para solucionar problemas o situaciones negativas detectadas de tal forma que no se

afecten las situaciones positivas.

Etnografía: La investigación etnográfica consiste en la «descripción o reconstrucción analítica de

escenarios y grupos culturales intactos», se encuentran muy integrados y forman una unidad,

realizados mediante el trabajo de campo sobre el terreno y la utilización para la producción de

datos, principalmente, de la observación participante. La etnografía entiende la investigación

7

como una exploración de la naturaleza de los fenómenos sociales, antes que proceder a probar

hipótesis y teorías sobre los mismos (Mejía, 2004).

Geilfus (1996) también platea otras herramientas prácticas como lo son los diálogos semi-

estructurados, los mapas comunitarios, los mapas de cuenca, entre otros más que pueden ser

usados para recolectar información y hacer una caracterización integral de los territorios y las

unidades básicas (fincas, cuencas, etc.) que lo componen.

Balances socio-culturales, económicos y ambientales de los sistemas que componen los

territorios

Según Apollin y Eberhart (1999), el objetivo principal del diagnóstico agrario es identificar los

distintos elementos (agroecológicos, técnicos, socio-económicos, etc.) que condicionan las

elecciones de los productores de una región y en consecuencia la evolución de sus sistemas de

producción. El análisis de un sistema de producción de una finca campesina, deberá contener:

● La estructura del sistema de producción: mano de obra familiar, capital, tierra y agua de riego.

● Las condiciones del entorno agroecológico y socio económico, y sus influencias sobre el

sistema de producción.

● La racionalidad económica del productor y su familia, determinada por los dos elementos

anteriores.

● Los sistemas de cultivo y de crianza y su funcionamiento.

● El destino de la producción (autoconsumo y venta), el efecto de la estrategia sobre los flujos de

caja, sobre la gestión de la mano de obra y sobre los procesos de capitalización.

Entre estos diferentes elementos constituyentes del esquema, se establecen relaciones que

expresan la lógica de funcionamiento del sistema de producción representado. Dufumier, citado

por Allopin y Eberhart (1999), afirma "Los estudios previos a las elaboraciones de proyectos no

deberían limitarse, como ocurre todavía a menudo, al inventario de las restricciones agro-

ecológicas y de las potencialidades del mercado”. Deberían tener también como objetivos:

● Hacer el inventario de la sabiduría campesina y de las innovaciones introducidas en los últimos

períodos.

● Identificar los grandes tipos de sistemas de producción practicados, evidenciando los lazos que

existen entre los diferentes sistemas de cultivo y de ganadería: utilización de los residuos de las

cosechas, aportes de estiércol, apisonamiento de los suelos por los animales, transferencias de

fertilidad...

● Comprender a qué razonamientos socioeconómicos responde cada uno de los grandes sistemas

de producción identificados: - asegurar la autosubsistencia, - dispersar los riesgos, - elevar al

máximo los ingresos por hectárea, - remunerar lo mejor posible la mano de obra familiar, -

aumentar el índice de ganancias. Es el análisis histórico el que permite conseguirlo, poniendo en

evidencia la evolución de las técnicas agrícolas a la vista de la evolución de los intereses en

juego, y relacionando, a cada instante, los hechos técnicos con las relaciones sociales. El

comportamiento del campesinado y las transformaciones técnicas se analizan tomando en cuenta

- los medios de producción disponibles, - los niveles de productividad alcanzados, - los riesgos

del mercado, - la importancia de las deducciones (impuestos, renta territorial...), - las

posibilidades diferenciales de acumulación, etc.

8

● Señalar cuáles son, en el marco de cada una de esas lógicas, los puntos de bloqueo y los cuellos

de botella a los que deben enfrentarse los productores: - picos de intensidad en el trabajo, -

escasez financiera, - subempleo de material, - dificultades de almacenamiento, - descenso de la

fertilidad, - imposibilidad de ahorrar. Sólo así se pueden concebir y proponer soluciones o

experimentaciones adecuadas para cada uno de los tipos de productores que se desea alentar. Esas

soluciones pueden ser de orden técnico (variedades seleccionadas, prácticas anti-erosivas) o

económico (nuevos procedimientos de comercialización, distribución de créditos, reforma

agraria). Por otro lado, muy a menudo, es imposible promover nuevas técnicas sin acompañarlas

de medidas económicas."

La caracterización agroforestal propuesta por Nair (1985) citado por Ospina Ante (2006), plantea

tres niveles de caracterización agroforestal: región o subregión, finca o territorio comunitario y

tecnología agroforestal. Cada nivel debe ser analizado a partir de cuatro criterios de

caracterización, los cuales son complementarios: socioeconómico, estructural, ecológico y

funcional.

- El criterio socioeconómico se refiere a los aspectos sociales, culturales y económicos.

- El criterio estructural se refiere a las características físicas de mayor duración y

permanencia.

- El criterio ecológico se refiere a aspectos de conservación y/o deterioro de la naturaleza

(ecosistemas, agua, suelo, otros).

- El criterio funcional se refiere a los productos y servicios generados.

METODOLOGÍA

La metodología usada en la presente investigación es principalmente descriptiva con

componentes cualitativos y cuantitativos. Se basó en la interacción con comunidades rurales del

municipio de Anolaima, en la cual se usaron herramientas de investigación cualitativa y se

utilizaron los métodos de diagnóstico económico, ambiental y socio-cultural revisados en el

marco referencial del presente trabajo.

Área de estudio

El municipio de Anolaima, está localizado en el departamento de Cundinamarca, a 4o

45´40´´ de

latitud Norte y 74o 27´ 54´´ de latitud Oeste. Limita al norte con Guayabal de Siquima y Alban, al

oriente con Facatativa y Zipacón, al sur con Cachipay y por el occidente con Quipile y Bituima.

Su temperatura oscila entre 180C y 22

0C. Su precipitación promedio es de 1500 mm y la

humedad relativa es de 70% a 80%. Se encuentra a 1657 msnm Hace parte de la cuenca del río

Bogotá y tiene áreas en las subcuencas de los ríos Contador, Curi y Bahamon.

Figura 1. Localización Municipio de Anolaima

9

Fuente: http://www.rupestreweb.info/anolaima

Las unidades de producción agrícola, utilizadas para este estudio, se encuentran localizadas en la

Vereda Chiniata, caserío Corralejas de la inspección y vereda catastral de Reventones, en la parte

norte del municipio. Pertenece a la microcuenca Chiniata y la subcuenca del río Contador. La

cartografía de las unidades productivas se hizo utilizando inicialmente un GPS marca Garmin®

Oregon-550, y el programa Compe GPS LAND V.4.3. Con el croquis de las fincas y la

participación de los dueños de las fincas, se realizó un trazo de los subsistemas, riesgos y

recursos del sistema.

En tres visitas al área de estudio, entrevistas semi-estructuradas e investigación-acción-

participativa, se recolectaron los datos necesarios para realizar los balances económicos,

ambientales y socio-culturales de cada una de las unidades estudiadas.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

El Trapecio y El Portal, son las dos unidades agropecuarias objeto de este trabajo; están

localizadas en el Departamento de Cundinamarca, Municipio de Anolaima, Vereda Chiniata,

inspección Reventones, caserío Corralejas a nueve kilómetros de la cabecera municipal. El

municipio de Anolaima pertenece a la Cuenca del Río Bogotá, subcuenca del Río Contador y se

encuentran a una distancia aproximada de 55 Km de Bogotá. La vereda está destinada a manejo

integrado del suelo según uso del suelo en el POT 2001. El caserío Corralejas cuenta con escuela

de primaria, energía eléctrica, servicio de recolección de basuras (1 vez a la semana), acueducto

cuyo servicio en invierno es constante y en verano dependiendo de la intensidad puede

restringirse a solo 4 horas diarias de suministro. No posee alcantarillado (está en planes). Estos

servicios son extensivos a las fincas. El colegio de bachillerato y la iglesia más cercana se

encuentran a 3,5 kilometros en la inspección Reventones. La Unidad Agrícola Familiar (UAF)

para la zona debe tener un tamaño de 8 ha., pero se encontró en la unidades medidas, tamaños

mucho menor. Incluso, como se verá en cada unidad objeto del estudio, son menores a 2 ha.

Los datos consolidados en las hasta ahora tres visitas, son como siguen. Sin embargo, debe

aclararse la dificultad de obtener buena parte de ellos, por la falta de registros y el olvido.

10

1. Unidad productiva El Trapecio

- Propietaria: María Cristina Castro. Por herencia paterna y en la sucesión le correspondió

este predio, con tradición en la familia de 35 años. Ella es propietaria desde hace 4 años.

- Lotes: El trapecio. Aparece con inconvenientes en el tema de áreas, atribuido a lo poco

confiable de las mediciones, en el momento que el predio fue adquirido por el papá.

- Subsistemas de la finca (Véase mapa 1):

Tabla 2. Balance estructural de la unidad productiva El Trapecio

Subsistema Área ocupada Usos

Construcciones 305 m2 Vivienda, beneficio del café,

acopio de productos.

Agroforestería: Café, plátano,

naranja y forestales

7701 m2 Autoconsumo, comercio

mantenimiento de sombrío,

humedad.

Pastos 290 m2 Pastoreo de ganado bovino

Reserva forestal (guadua) 105 m2 Fuente de madera para

construcciones de la finca

Área agrícola Plátano-

Guayaba

250 m2 Autoconsumo, comercio.

Naciente de agua 40 m2 Ninguno

Área Total 8691 m2

Fuente: Propia

- Recursos hídricos. Agua obtenida del acueducto del caserío.

- Instituciones. Además de la participación de las instituciones de índole administrativa, en

esta unidad productiva hay injerencia pero muy poca de la Federación Nacional de

cafeteros con sus diversos programas. Esto último debido a discrepancias entre los

requerimientos por parte de la federación y la capacidad económica de la propietaria que

le impide acogerse a algunos programas, cómo renovación de toda el área. Esto le ha

costado no acceder a ciertos beneficios, como el subsidio de renovación, por no hacerlo

en número mayor a 500 plantas cada vez.

- Instalaciones: Vivienda antigua y vivienda en construcción para reemplazo, por

adjudicación de programa debido a daño por ola invernal en 2007. Pequeño beneficiadero

de café. Pozo séptico también en construcción.

- A.s.n.m: Entre 1665 m y 1732 m la parte más alta, con pendiente de 24,2%.

Balance productivo

Tabla 3. Balance productivo de la unidad El Trapecio

Subsistema

productivo

Unidad Cantidad producida

(año)

Destino de uso

Café Kg·ha-1

375 2’100.000

Naranja Bulto 10 10.000

Plátano Kg·ha-1

220 20.000

11

Forestales Árboles 1 Autoconsumo

Potrero Pastoreada 2 20.000

Pecuario N.A. - -

Actividades no

agrícola - Servicios

N.A. - -

Fuente: Adaptada de Allopin y Eberhart (1999). Datos propios.

La producción de café, refleja el regular estado de la plantación. En muestreo realizado, se

encontró que el número de plantas de café es alrededor de 3.000. De estas sólo 500 plantas, se

renovaron en 2009 (aún no están en producción). Las otras 2500 son plantas de hasta 19 años,

según comentarios de Luis Manuel García, la persona que nos ha acompañado en los recorridos y

vecino de Doña Ma Cristina Castro-propietaria.

Las naranjas, en su gran mayoría se pierden el suelo, debido a su bajo precio ($1.000/bulto) en el

caserío y llevarlas a la cabecera municipal implica un costoso flete. También, su uso en la finca

es reemplazado por los refrescos en bolsa por su fácil preparación. Los plátanos, si se usan en

buena medida en autoconsumo, aunque eventualmente también por medio de trueque sirve para

adquirir otros productos como auyama. Al igual que las naranjas, su comercialización es poca por

el bajo precio ($1000/racimo) ó el flete.

Balance de operaciones

La economía familiar, se completa con trabajo fuera de la finca por parte de la madre, y así suplir

las necesidades del grupo familiar. Hasta hace un año laboró en una panadería en La Inspección

Reventones, pero el tiempo de ocupación la obligaba a contratar todas las labores de la finca,

además y mucho más importante era que mantenía a sus hijos de 11 y 13 años hoy, solos y

expuestos a situaciones no deseables.

Tabla 4. Mano de obra en la unidad El Trapecio

Actividad Mano de obra

familiar

(Jornales/año)

Mano de obra

contratada

(Jornales/año)

Costo actual de

Jornal diario

($)

Total

($)

Preparación y

Siembras

7 15.000 105.000

Desyerbes 30

Abonadas 15

Cosecha 90

Fuente: Adaptado de Goic Boroevic y Leporati (2010). Datos propios.

En el año 2010 solo ha contratado 7 jornales para el pago de la siembra de 30 plantas de plátano.

Los otros jornales corresponden al trabajo de ella y de los dos hijos menores. Por el balance de la

mano de obra y las labores ejecutadas, el trabajo de los dos menores en un día, corresponde a un

(1) jornal.

Tabla 5. Balance mano de obra en el 2010 para la unidad El Trapecio

12

Mano de obra Cantidad

(Jornal)

%

Familiar 135 95

Contratada 7 5

Total 142 100

Fuente: Propia

El 95% de la mano de obra utilizada en la unidad productiva, es de tipo familiar y el resto es

mano de obra contratada. Esta característica es la que, en términos financieros, aumenta la

viabilidad de las unidades productivas campesinas, aunque técnicamente indica muy poca

capacidad de producir excedentes para contratar y/o invertir mano de obra externa.

Balance económico

Tabla 6. Ingresos y egresos agropecuarios y no agropecuarios de la unidad El Trapecio

Variable Café Naranja Plátano Trueque

QV productos vendidos (Kg) 375 400 220 0

QA productos autoconsumidos (kg) 0 400 550 550

PP precio al productor ($) 2’100.000 10.000 30.000 0

PC precio al consumidor ($) 0 10.000 50.000 50.000

CD costos domésticos ($) 2’025.000

CM costos monetarios ($) 105.000

JE jornales extraprediales 0

INAH ingresos no agropecuarios ($) 1’500.000

RP rentas pagadas 0

RR rentas recibidas 0

Ingresos del hogar ($) 3’530.000

JD jornal diario 135

Fuente: Adaptado de Forero (1999) y datos de campo

Algunos productos autoconsumidos, no están determinados en esta tabla por la dificultad de

obtener datos y se refiere a la materia orgánica derivada del beneficio del café y de la hojarasca

de la finca total. Los costos del café, sólo se refieren al mantenimiento y cosecha 2010; no tiene

en cuenta los costos de establecimiento por tener ya varios años y no afecta el flujo de caja de

2010. Los INAH son producto del trabajo en panaderías o labores eventuales en casas u otras.

Tabla 7. Balance económico de la unidad El Trapecio

Variable Valor ($)

IAB Ingreso agropecuario bruto

IAB = (∑QVi x PPi) + (∑QAi x PCi)

2’140.000

13

EFP Excedente familiar de producción

EFP = IAB – CM

2’035.000

EF Excedente familiar

EF = IAB – CM – RP + RR

2’035.000

RNDTD Remuneración neta diaria del trabajo doméstico

RNDTD = EF/JD

15.075

RTDTD Renumeración técnica diaria del trabajo doméstico

RTDTD = EFP/JD

15.075

EPP Excedente de producción o margen sobre costos

EPP = IAB – CM – CD

10.000

EP Excedente del productor

EP = IAB – CM – CD – RP

10.000

IH Ingreso del hogar

IH = EF + RR + JE + INAH

3’535.000

Fuente: Adaptado de Forero (1999) y datos de campo

En la Tabla 7 se observa un excedente familiar alto respecto al ingreso agropecuario bruto,

producto del gran porcentaje de uso de mano de obra familiar utilizada y a la explotación

extensiva que hace del predio con cero uso de insumos externos que no impacta en los costos.

Aún así, los ingresos no alcanzan para la manutención del grupo familiar y debe completarse el

ingreso con trabajo fuera de la finca. El ingreso sólo llega al 58% del salario mínimo en

Colombia y si se tiene en cuenta las prestaciones sociales del salario mínimo entonces

corresponde aproximadamente a 38%. Una economía del hogar de subsistencia.

Balance socio-cultural

Tabla 8. Edad de los integrantes del grupo familiar en la unidad El Trapecio

Hombres Mujeres Edad (años) Edad jefe de

hogar

Nivel medio

de escolaridad

- 1 43 43 Bachiller

2 - 11 y 13 - Séptimo

Fuente: Propia

El grupo familiar está compuesto por la madre (cabeza de familia) y dos hijos menores. Otro hijo,

hace 4 años migró a Bogotá por oportunidades de trabajo y hace poco consiguió mujer. El nivel

educativo es en promedio de 8 años. El conocimiento en el manejo de la finca, se ha adquirido

desde edad temprana, en el caso de la madre y también de sus hijos. Así mismo, madre e hijos

son los que realizan las labores en la finca, excepto cuando las obligaciones del colegio lo

impiden en el caso de los hijos ó cuando se está realizando trabajo para terceros (mucha parte del

tiempo para ajustar la economía familiar) en el caso de la madre. El origen del grupo familiar es

de la misma zona. Hay otro hijo que migró hace cuatro años a la capital del país, y que ya no

genera ningún tipo de ingresos a la unidad familiar. Se benefician del colegio más cercano en el

14

Corregimiento de Reventones, y no usan ningún mecanismo de participación política además de

las votaciones para alcaldes, gobernadores y presidentes.

Balance ambiental

Tabla 9. Balance ambiental de la unidad El Trapecio

Variable Impacto

Positivo Negativo Observación

Procesos erosivos X No se observa

Compactación X No se observa

Acidez X Normal – helechos

Aguas residuales X Pozo en construcción

Desechos contaminantes X Se observo algo en el campo

Biodiversidad X Cultivos y forestales

Reciclaje de nutrientes X Hojarasca y desechos orgánicos

Uso de agroquímicos X No aplican

Ganadería intensiva X No hay

Extracción de agua de ríos y

subterráneas

X No se hace

Prácticas de conservación X La biodiversidad y el no uso de

agroquímicos

Fuente: Propia

La distribución y clase de comunidades vegetales encontradas en la unidad El Trapecio son de

poca intervención humana, concordando con los resultados de Carvajal et al. (2005) en los que el

subsistema de conservación de las unidades estudiadas contenía relictos de selva, guaduales y

barbechos, que contribuyen con la protección del recurso hídrico.

La diversidad de plantas, con alta presencia de forestales con buena cobertura en el dosel; la

asociación de café con plátano, cítricos y ornamentales; la no práctica de aplicación de

agroquímicos y en general el uso extensivo que hace de la finca, brinda un balance positivo a la

hora de considerar un balance ambiental. No obstante, el efecto de las aguas residuales es

negativo, pero se está trabajando en la construcción de pozo séptico para revertir tal situación.

De los balances económicos sacados anteriormente se puede corroborar lo dicho en las

definiciones de economía campesina en la que el uso intensivo de mano de obra familiar le

permite al hogar mantener una sostenibilidad económica en sus sistemas productivos. Esto se

comprueba al ver el excedente de producción (EPP) que monetariamente es equivalente a un

salario mínimo mensual, y el excedente de producción que es mucho menor a este. Es decir, que

sin la participación de la mano de obra familiar, el sistema sería insostenible económicamente, ya

que no quedarían mayores márgenes de ganancia de los productos comercializados.

15

Al igual que en las investigaciones de Arias et al. (2007), se evidenció en esta investigación que

es evidente una búsqueda de alternativas para mejorar el ingreso de los predios, ya que la mayoría

de ellos combinan actividades agrícolas con las no agrícolas, debido a que el empleo y el ingreso

rural no agrícola son importantes para hogares individuos.

2. Unidad productiva El Portal

- Propietario: José Gregorio Susa. Tiene una tradición en el predio de 13 años. Fue

adquirido a partir de la venta de una panadería y casa en Bogotá. Hace unos dos años y

debido a una deuda que había adquirido, debió vender la mitad del área. La casa de

habitación, se encuentra sobre la carretera que atraviesa El caserío Corralejas y que

conduce de Bogotá a Cambao. Además, acondicionó la parte delantera como tienda y

panadería desde hace 2 años.

- Cultivos: café bajo sombra de plátano y forestales, cítricos, guayaba, balú, caña y varios

cultivos pancoger. También se encuentra bore y malanga. Áreas cerca a reservorios en

guadua.

- Subsistemas de la finca (Véase mapa 2):

Tabla 10. Balance estructural de la unidad El Portal

Subsistema Área ocupada Usos

Construcciones 350 m2 Vivienda, beneficio del café,

acopio de productos,

compostera, corrales, tienda.

Agroforestería: Café, plátano,

naranja y forestales

7.500 m2 Autoconsumo, comercio

mantenimiento de sombrío,

humedad.

Pastos – 2 cabras 500 m2 Pastoreo de ganado caprino

Reserva forestal (guadua) 100 m2 Fuente de madera para

construcciones de la finca

Cultivos pancoger 3.650 m2 Autoconsumo, comercio.

Área Total 12.100 m2

Fuente: Propia

- Animales: gallinas (40) y conejos (7). 20 gallinas y los conejos, están ubicados en el patio

de la vivienda; mientras las otras gallinas en libre pastoreo.

- Recursos hídricos: Acueducto comunitario y al igual que en el trapecio, hay suministro

constante en invierno, pero en el verano hay racionamiento que depende de la intensidad

de este.

- Instituciones: Hay influencia en la zona de las unidades administrativas municipales y de

la Federación Nacional de Cafeteros con sus diversos programas, la Fundación Natura por

el proceso de certificación e inspectores internos (de la misma comunidad) dentro de este

mismo proceso y quienes no reciben remuneración.

- Instalaciones: Vivienda, compostera, tienda y panadería, beneficiadora de café, corrales

de gallinas y conejos, pozo séptico. Tiene previsto un cultivo de tomate bajo techo

16

(plástico) de 150 m2, para lo que está a la espera de un recurso a partir del programa AIS

del ministerio de agricultura

- Área: total 12.000 m2. 60% en cafés bajo sombra, frutales y forestales. 30% en cultivos

pancoger incluyendo caña, 10% en pasto para cabras y los 350 m2 de construcciones.

- A.s.n.m: Entre 1700 m y 1740 m con pendiente de 20%.

Balance productivo

Tabla 11. Balance productivo El Portal

Sistema productivo Unidad Cantidad

producida/año

Destino de uso

Café Kg·ha-1

500 Mercado

Naranja Bultos 30 Autoconsumo y

mercado

Plátano Kg·ha-1

440 Autoconsumo y

mercado

Forestales Árboles 1 Autoconsumo

Potrero Pastoreada Constante Autoconsumo

Caña Kg·ha-1

250 Trueque – panela

Cabras Animal 2 Leche para el

autoconsumo

Conejos Animal 4 Autoconsumo

Actividades no

agrícola - Servicios

N.A. - -

Fuente: Adaptada de Allopin y Eberhart (1999). Datos propios.

El cultivo de café, está representado en aproximadamente 3.000 plantas, de las cuales 600 son de

dos años, 2000 de tres años y 400 más viejas y que va a renovar. Así, la plantación tan joven,

limita su producción. Espera que para 2011 ya alcance un nivel mucho mayor. La naranja y el

plátano, son utilizados en autoconsumo y algo entrega a una persona que trae a Bogotá a

mercados campesinos. Otras especies en el huerto y pancoger, no genera caja, pero la evita, ya

que son utilizados para autoconsumo.

Balance de operaciones

Tabla 12. Mano de obra utilizada en El Portal

Actividad Mano de obra

familiar

(Jornales/año)

Mano de obra

contratada

(Jornales/año)

Costo actual de

Jornal diario

Total

Siembras 20 5 $15.000 $75.000

Desyerbes 30

Abonadas 15

Cosecha 120

Fuente: Adaptado de Goic Boroevic y Leporati (2010). Datos propios.

17

La mano de obra familiar, comprende la de su esposa, la propia y recientemente la del yerno y la

hija menor. La finca demanda una buena cantidad de mano de obra, debido a la integralidad de la

finca con animales, productos para el mercado y pancoger en producción constante, que exige

labores casi todos los días. La mano de obra familiar se reparte entre la finca, la panadería los

fines de semana, la tienda, restaurante eventualmente y trabajo en otras fincas por parte del jefe

de hogar y del yerno.

Tabla 13. Balance de mano de obra El Portal

Mano de obra Cantidad %

Familiar 185 97

Contratada 5 3

Total 190 100

Fuente: Propia

El gran porcentaje de la mano de obra familiar, es producto de que los cuatro adultos ejecutan

labores en ella en forma constante. El jefe de hogar se reparte entre la panadería, otras fincas y la

finca propia a la cuál dedica entre 3 y 4 días a la semana. La mano de obra contratada, se requiere

sobre todo cuando está renovando ó cosechando café, por el poco tiempo para dichas labores.

Balance económico

Una vez realizados los diagnósticos productivos y de operaciones se realizó el balance financiero

de la unidad productivo como se observa en la Tabla 14.

Tabla 14: Ingresos y egresos agropecuarios y no agropecuarios de la Unidad El Portal

Variable Café Naranja Plátano Trueque Huerta y

pancoger

QV productos vendidos

(Kg)

500 1.200 440

QA productos

autoconsumidos (Kg)

0 1.200 330 20 100

PP precio al productor ($) 2’880.000 120.000 160.000 0

PC precio al consumidor ($) 0 80.000 120.000 80.000 200.000

CD costos domésticos ($) 3’275.000

CM costos monetarios ($) 150.000

JE jornales extraprediales 840.000

INAH ingresos no

agropecuarios ($)

2’400.000

RP rentas pagadas ($) 0

RR rentas recibidas ($) 0

Ingresos del hogar ($) 6’400.000

JD jornal diario 185

18

Fuente: Adaptado de Forero (1999) y los datos de campo.

Como el subsistema del café está recién sembrado, aún no alcanza una producción alta. Sin

embargo en los costos, no se considera el establecimiento por no afectar el flujo de caja en 2010,

según el jefe de hogar. Los productos de huerta y pancoger (fríjol, arveja, guatila, arracacha,

malanga, yuca, bore, chachafruto y tomate de mesa), son en su mayoría de autoconsumo y según

el jefe de hogar es difícil cuantificar su valor. Los INAH ya tienen descontados los costos y

entonces se refiere a ingresos netos. En la anterior tabla, se consideran algunos costos sin ser muy

precisos de abono orgánico y semillas por $500.000/año, que son obtenidos de la finca; pero

existe dificultad en la obtención de los datos. Los jornales del jefe de hogar en otras fincas,

alcanzan a unos de 3 - 4 cada mes.

Tabla 15: Balance económico de la Unidad El Portal

Variable Valor ($)

IAB Ingreso agropecuario bruto

IAB = (∑QVi x PPi) + (∑QAi x PCi)

3’640.000

EFP Excedente familiar de producción

EFP = IAB – CM

3’490.000

EF Excedente familiar

EF = IAB – CM – RP + RR

3’490.000

RNDTD Remuneración neta diaria del trabajo doméstico

RNDTD = EF/JD

18.368

RTDTD Remuneración técnica diaria del trabajo doméstico

RTDTD = EFP/JD

18.368

EPP Excedente de producción o margen sobre costos

EPP = IAB – CM – CD

-265.000

EP Excedente del productor

EP = IAB – CM – CD – RP

-265.000

IH Ingreso del hogar

IH = EF + RR + JE + INAH

6’730.000

Fuente: Adaptado de Forero (1999) y datos de campo.

En esta unidad productiva, el ingreso del hogar (IH) supera el salario mínimo, debido a la

intensidad de uso aunque sustentable de la unidad productiva, combinada con las labores

extraprediales y los ingresos no agropecuarios; además que es una unidad mayor que El trapecio.

También, su CM, por el poco uso de mano de obra contratada y el casi nulo uso de insumos

externos. Así mismo, el ingreso del hogar es superior al salario mínimo, pero hay que tener en

cuenta que hoy hacen parte de este grupo familiar dos familias.

Balance socio-cultural:

Tabla 16. Edades del grupo familiar

19

Hombres Mujeres Edad (años) Edad jefe de

hogar

Nivel medio

de escolaridad

2 - 27 y 60 60 Bachiller

- 3 6

22 y 55

-

-

Primero

Bachiller

Fuente: Propia

El origen del grupo familiar es el departamento de Boyacá, municipio de Ventaquemada. El jefe

del grupo estuvo en Viota, San Juan de Río Seco y Bogotá. Hace 13 años, adquirió la finca El

Portal y se radicaron en la zona. La hija, el yerno y la nieta, apenas este año los acompañan. Hay

otra hija, enfermera, que vive desde hace 6 años en España. Se benefician de la escuela el caserío

Corralejas. El jefe del hogar y su esposa tienen SISBEN, no usan ningún mecanismo de

participación política además de las votaciones para alcaldes, gobernadores y presidentes.

Balance ambiental.

El balance ambiental, al igual que en la unidad productiva El Trapecio, se realizó

cualitativamente, ante la falta de datos y la dificultad en este trabajo de hacer mediciones

cuantitativas.

Tabla 17. Balance ambiental de la Unidad El Portal.

Variable Impacto

Positivo Negativo Observación

Procesos erosivos X No se observa

Compactación X No se observa

Acidez X Normal – helechos

Aguas residuales X Pozo en construcción

Desechos contaminantes X No se observaron

Biodiversidad X Cultivos y forestales

Reciclaje de nutrientes X Hojarasca y desechos orgánicos

Uso de agroquímicos X No aplican. Excepto 2 bultos de úrea

en 2010

Ganadería intensiva X No hay

Extracción de agua de ríos y

subterráneas

X No se hace

Prácticas de conservación X La biodiversidad y el no uso de

agroquímicos

Fuente: Propia

El análisis es similar al de la unidad El Trapecio, en cuanto a alta presencia de forestales con

buena cobertura en el dosel; asociación de café con plátano, cítricos y ornamentales y la práctica

20

de no aplicación de agroquímicos, Existen algunas diferencias relacionadas con la mayor

biodiversidad de plantas, la presencia de animales para explotación de autoconsumo y la

existencia de pozo séptico. En general hay un uso intensivo de la finca pero con criterios de

sustentabilidad que brinda un balance positivo a la hora de considerar un balance ambiental.

Las estrategias productivas de la finca generaron ingresos por ventas fueron variadas incluyendo

la comercialización de café en su totalidad, y una pequeña parte de la producción de plátano,

banano y cítricos. En menor proporción se encontraron cultivos como arveja, caña, frijol, yuca y

tomate. Estos resultado concuerdan con los encontrados por Carvajal et al. (2005).

El portal generó ingresos adicionales por la venta de cigarrillos, yogurt, gaseosa, cerveza,

almojábanas, pan, chips y otros productos misceláneos, que de igual manera concuerdan con lo

hallado por Carvajal et al. (2005).

CONCLUSIONES

1. Las unidades evaluadas de 0.87 ha y 1.21 ha, poseen áreas menores a 8 ha. que son las

consideradas para la Unidad Agrícola Familiar de la zona.

2. La unidad productiva El trapecio, es una explotación extensiva con una plantación de café

en estado regular, cuya propietaria no cuenta con capacidad económica para cambiar

drásticamente el manejo de su finca o hacer cambio tecnológico alguno.

3. En ambas unidades, la mano de obra familiar corresponde a la casi totalidad de la mano

de obra utilizada en la unidad agropecuaria. Este criterio de uso en el recurso humano,

posibilita la sostenibilidad económica de la unidad familiar campesina.

4. La mano de obra familiar, al no exigir flujo de caja, es la que posibilita que el ingreso

familiar en ambos casos, sea excedentario. Sin embargo, no se le suele valorar al

momento de hacer análisis y balances económicos de los sistemas productivos.

5. La unidad El Portal, hace un uso más intensivo del predio, con mucha mayor

biodiversidad, con mejor manejo y con mayores ingresos por área. En gran parte, la

idiosincrasia de la unidad familiar, con tendencia al trabajo y al autosostenimiento, es la

responsable de esta característica en la finca.

6. Don José Gregorio Susa, propietario del Portal, hace una buena combinación de la

explotación agropecuaria, la panadería, la tienda y labores extraprediales. De esta manera,

su unidad familiar encuentra un equilibrio económico y socio-cultural que termina en un

buen nivel de bienestar en la misma.

7. El esquema productivo de autosostenimiento basado en la multifuncionalidad agrícola, y

en el bajo uso de tecnologías de mecanización, control de enfermedades y para la

fertilización, mantiene el sistema finca casi inalterado en el tiempo en cuanto a la parte

ambiental.

21

RECOMENDACIONES

Las unidades productivas campesinas son espacios en los que sus habitantes deben

conjugar diferentes actividades, agropecuarias y no agropecuarias, para lograr un ingreso

económico con el que puedan alcanzar un nivel de vida digno y un bienestar general. No

obstante, deben tenerse en cuenta diagnósticos integrales previos que conduzcan a

revalorizar los recursos con los que cuentan esas comunidades, combinando todos estos

conocimientos en forma de estrategias que sean viables desde el punto de vista

económico, social y ambiental.

La caracterización de los dos sistemas estudiados permitió elaborar el plan de acción

mostrado en el Anexo 3.

22

ANEXOS

MAPA 1. Finca El Trapecio

Fuente: Propia

El Portal

23

MAPA 2. Finca El Portal

Fuente: Propia

24

ANEXO 3. Plan de acción para la unidades productivas El Trapecio y El Portal

I II III IV V

Incrementar el ingreso

neto

Obtener un sa lario

mensual

equiva lente a l

mínimo legal

vigente por grupo

fami l iar

Vinculación labora l externa

Divers i ficación de las

actividades que generan

ingresos monetarios a la

unidad fami l iar

Búsqueda de

a l ternativas de

empleo

externas .

Asociación para

lograr una mayor

participación en

los mercados

campes inos y en

otros que sean

a l ternativas de

comercia l i zación

.

Ingreso mensual

Aprovechar los recursos

fís icos y biológicos con que

cuenta la unidad

productiva s in deteriorar el

ba lance ambienta l actual

Incremento del

20% en la biomasa

fesca extra ída a l

cabo de dos años .

Mantener

ina l terado el

actual ba lance

ambienta l pos i tivo

Renovación de cafeta l

conservando el actual s i s tema

agroforesta l .

Divers i ficación productiva

hacia la explotación pecuaria y

la agricul tura protegida

(tomate en invernadero)

Siembra de

nuevos

cafeteros

Compra y cria de

especies

menores

Construcción y

operación de

invernadero

para tomate de

mesa

Biomasa fresca

extra ida a l año

Alteración del ba lance

ambienta l

Conservar las relaciones

socioambienta les que

impactan pos i tivamente

en la sostenibi l idad de las

unidades productivas y los

terri torios que estas

conforman

Mantener las

prácticas actuales

de producción que

vienen de la

sabiduria

tradicional y que

tienen enfoque de

conservación y bajo

impacto ambienta l

Continuar con las prácticas de

producción, conservación y uso

de plantas medicina les .

Reemplazar las prácticas

agronómicas de impacto

ambienta l negativo por unas

que no lo tengan o que

produzcan uno menor.

Inventariar las

actuales

prácticas de

producción y

demás que

tengan enfoque

de conservación

o bajo impacto

ambienta l .

Controlar que

las actividades

de la finca estén

sujetas a las

prácticas

amigables con

el medio

ambiente.

Inventario de prácticas

de producción

tradicionales con

enfoque de

conservación y bajo

impacto ambienta l .

Objetivos Metas Estrategias IndicadoresActividadesCronograma (semestre)

25

BIBLIOGRAFÍA

Apollin, Frédéric y Eberhart, Christophe. 1999. Análisis y diagnóstico de los sistemas de

producción en el medio rural. Guía metodológica.

http://www.asocam.org/biblioteca/R0108_completo.pdf Revisado en noviembre 4 de 2010.

Arias, C. et al. 2007. Evaluación de los ingresos, empleo, diversidad y captura de carbono en

algunas fincas de la Cuenca del Rio de La Vieja. Scientia et Technica 13(34). Universidad

Pedagógica y tecnológica de Pereira.

Banco Mundial. 2009. Informe sobre el desarrollo mundial 2008: Agricultura para el desarrollo.

Washington. Mundi-Prensa y Mayol Ediciones. 320 p.

Bawden, R. 1991. System thinking and practice in the agricultura (en línea). Journal Dairy

Science, 74. En: http://www.bases.unal.edu.co. Conculta: 30 de octubre de 2010.

CAR. 2001. Mapa Uso de suelo rural. En: http://www.car.gov.co/index.php?idcategoria=2361

Revisado en octubre 9 de 2010.

Carvajal, V. et al. 2005. Evaluación de las estrategias productivas de algunos sistemas

campesinos en un área del municipio de Alcalá, valle del cauca. Scientia Et Technica, XI(28), pp.

217-222.

Castro, María Cristina. 2010. Comunicación personal. Propietaria finca El Trapecio

De Shuter, A. y B. Yopo. 1982. Desarrollo y perspectiva de la investigación participativa. 27 p.

En: Vejarano, G. La investigación participativa en América Latina. Antología. CREFAL,

México. 341 p.

Domínguez, R. 1993. Caracterizando al campesinado y la economía campesina: Pluriactividad y

dependencia del mercado como nuevos atributos de la “campesinidad” (En línea). Agr. y Soc.

(66). En: http://www.mapa.es/ministerio/pags/biblioteca/revistas/pdf_ays/a066_04.pdf, consulta:

abril de 2010.

Echeverri, R. y M. Ribero. (2002). Nueva ruralidad: Visión del territorio en América Latina y el

Caribe. IICA.

Ellis, F. 1988. Peasant economics: Farm households and agrarian development. Cambridge

University Press. Gran Bretaña.

Fals Borda, O. & Mora, L. E. 2004. La superación del Eurocentrismo. Enriquecimiento del saber

sistémico y endógeno sobre nuestro contexto tropical. Revista Polis, 2 (7). Extraído el 20 de

octubre de 2010 desde: http://redalyc.uaemex.mx

Forero, J. 1999. Economía y sociedad rural en los andes colombianos. Primera Edición. Pontificia

Universidad Javeriana-Jevegraf, Bogotá D.C.

Gallardo, R. 2010. Evolución conceptual y política del desarrollo rural en Europa. Memorias del

Primer Coloquio Internacional de Desarrollo Rural con Enfoque Territorial. Bogotá.

El Trapecio

26

Geilfus, F. 1996. Ochenta herramientas para el desarrollo participativo. Diagnóstico,

Planificación, Monitoreo y Evaluación. Proyecto regional IICA – Holanda / Laderas. Publicado

por el IICA. El Salvador. 208 p.

Goic Boroevic, P. y M. Leporati. Sin año. Caracterización Socioeconómica de la Agricultura

Familiar Campesina Chilena de Zonas Semi-Áridas Participante del Mercado de Aguas: Un

Estudio de Caso en el Valle Transversal de la Provincia del Limarí, IV Región, Chile. En

http://www.rimisp.org/ifsa/php/simposio/documentos/247.pdf Revisado en noviembre de 2010.

Gómez, A. (2007). Componentes del valor del paisaje mediterráneo y el flujo de servicios en los

ecosistemas (en línea). Ecosistemas, 26(3), 96-106. En: http://redalyc.uaemex.mx/. Consulta: 18

de octubre de 2010.

Gómez, J. A. Picazo y E. Martínez. 2008. Agricultura, desarrollo rural y sostenibilidad

medioambiental (en línea). CIRIEC, (61), 103-126. En: http://redalyc.uaemex.mx/. Consulta: 18

de octubre de 2010.

Mejía, J. 2004. Sobre la investigación cualitativa. Nuevos conceptos y campos de desarrollo.

Revista Investigaciones Sociales. Año VIII (13). Lima, Perú. pp. 277-299.

Municipio de Anolaima. Sin año. En: http://anolaima-

cundinamarca.gov.co/nuestromunicipio.shtml?apc=m-s1--&m=f Revisado en septiembre de

2010.

Ospina Ante, A. 2006. Agroforestería: Aportes conceptuales, metodológicos y prácticos para el

estudio agroforestal. Serie Agroforestería. El Bando Creativo. Santiago de Cali, Valle del Cauca,

Colombia. 28-40.

Roberts, B. R. 1990. Peasant and proletarians (en línea). Annu. Rev. Social 16(1). En:

http://www.bases.unal.edu.co:2109/login.aspx?direct=true&db=bth&AN=9101282657&site=eho

st-live; consulta: mayo de 2010.

Sepúlveda, S., A. Rodríguez, R. Echeverri y M. Portilla. 2003. El enfoque territorial del

desarrollo rural. San José de Costa Rica, IICA.

Shanin, T. 1973. Naturaleza y lógica de la economía campesina. Editorial Anagrama. Barcelona,

España. 85 p.

Susa, José Gregorio. 2010. Comunicación personal. Propietario de la finca El Portal.