14º Entrenamiento Invisible. Autor: Jerónimo Bravo

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LA IMPORTANCIA DEL ENTRENAMIENTO INVISIBLE HACE NO MUCHOS AÑOS SE COMENZÓ A HABLAR EN EL ENTRENAMIENTO DE ALTO RENDIMIENTO DEPORTIVO DE UN NUEVO CONCEPTO QUE COMPLEMENTABA EL TRABAJO ORDINARIO QUE REALIZABAN LOS ATLETAS DE ELITE. ESE NUEVO CONCEPTO ERA EL DENOMINADO “ENTRENAMIENTO INVISIBLE”. Texto: Jerónimo Bravo. Licenciado en Educación Física y Psicopedagogía y entrenador de atletismo, tanto de corredores populares como profesionales. RUNNING ENTRENAMIENTO 18 18_21_entre_invi.indd 2 19/05/09 13:53

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LaimportanciadeLentrenamientoinvisibLeHace no mucHos años se comenzó a Hablar en el entrenamiento de alto rendimiento deportivo de un nuevo concepto que complementaba el trabajo ordinario que realizaban los atletas de elite. ese nuevo concepto era el denominado “entrenamiento invisible”.

Texto: Jerónimo Bravo. Licenciado en EducaciónFísica y Psicopedagogía y entrenador de atletismo,tanto de corredores populares como profesionales.

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uizá pueda sonar un poco extraño, confuso o místico el concepto de “invisible”, pero con él se hace referencia simplemente a aquello que no es tangible dentro

del marco estricto del entrenamiento de campo pero que colabora, difi culta , ralentiza o impide que el esfuerzo desempeñado en ese entrenamiento -medible en distancia y tiempo- termine por dar los frutos que buscamos en el día a día.Este entrenamiento consistía en un compendio de muchos aspectos a cuidar, pero, generalizando, vendría a englobar nuestra forma de vivir, recuperar y descansar al margen de los entrenamientos pautados que el entrenador nos marca. Es decir, el entrenamiento global, total y correctamente desempeñado no solo signifi caría traducir en la pista de atletismo los tiempos y distancias que marca nuestro plan, sino que implicaría además una serie de cuidados, formas y modos de vivir que nos permitan asimilar, recuperar, regenerar y acometer la sesión de entrenamiento realizadas y las que hemos de realizar.Según este planteamiento, el entrenamiento es una secuencia acumulada, y no unidades independientes; así, un entrenamiento se complementará y tendrá sentido en relación con los posteriores y los anteriores, y con todos los cuidados que nos dedicamos entre uno y otro. La realidad es que la falta de “conciencia” de la importancia de todos estos aspectos en nuestro modo de vivir diario es algo común a muchos atletas de toda condición o nivel. Pero es sin duda uno de los factores diferenciadores tanto en el rendimiento que exhibamos como en nuestros progresos.Centrándonos en el caso de un runner popular (en el que su vida no puede ni debe girar en torno a sus entrenamientos y carreras), si es cierto que, simplemente, con un poquito más de criterio y sentido común en los hábitos cotidianos de vida, podría mejorar de manera notable sus resultados atléticos. Así, existen diversos aspectos que suelen ser descuidados por todo tipo de corredor por los benefi cios, a priori intangibles, que proporcionan. Algunos de estos aspectos claves son:

Una dieta correcta No solo comer nuestras raciones de hidratos de carbono, en forma principalmente de pasta, nos indica el camino correcto para tener el mayor aporte de nutrientes necesario para el organismo. Una dieta lo más completa posible repercutirá en disfrutar, por una parte, de todos y cada una de las posibles vitaminas,

proteínas o aportes que nuestro cuerpo pueda precisar, y por otro lado ayudará a complementar las exigencias que podamos necesitar en las otras facetas de nuestra vida. No olvidemos que no somos corredores profesionales y que debemos cubrir otras esferas de nuestra vida donde la importancia de una dieta equilibrada y completa cobrará aún mayor importancia.

eL descanso Nuevamente volvemos a incidir en nuestro no profesionalismo en esto del running, pero ello no tiene por qué impedir que tratemos de recuperarnos de los esfuerzos de la carrera de la mejor manera posible. De hecho, existen bastante opiniones de expertos que afi rman que la parte más importante del entrenamiento es el descanso. La importancia del descanso es evidente para el corredor, pero ¿cómo mejorar este aspecto? Por ejemplo dando cierta fl exibilidad a nuestro plan de entrenamiento, tratando de encajar las sesiones más exigentes que tengamos previsto realizar en los días más relajados de nuestra agenda. No quiero decir con esto que un día que tengamos una complicada agenda laboral, académica, personal o familiar tengamos que prescindir de un entrenamiento exigente si así lo tenemos marcado. Lo que quiero decir es que si ese día estamos especialmente cansados es mejor que lo pospongamos a otro en que tengamos nuestra agenda un poco más relajada, no porque no pueda ser acometido exitosamente, sino porque como dijimos anteriormente es muy importante tratar de ver cada día de nuestro entrenamiento dentro del marco global de todo el plan que nos hemos trazado. Si, pese a todo, nos empeñamos en sacar adelante ese entrenamiento exigente, posiblemente nos producirá una cantidad excesiva de fatiga, que se irá acumulando poco a poco en nuestro organismo hasta llevarnos a un agotamiento crónico o, peor aún, a algún otro tipo de lesión. Otro aspecto importante es tratar de no plantear esas sesiones exigentes si tenemos previsto trasnochar ese día o si lo hemos hecho la noche anterior. ¡Ojo! no se trata de renunciar a salir, al contrario, debe formar parte de nuestra vida si es que nos gusta esa actividad, sino simplemente, disfrutaremos más de nuestras dos afi ciones (el running y la vida nocturna) si practicamos ambas con una diferencia en el tiempo que nos permita disfrutar y recuperar al máximo cada una de ellas.

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Las aYUdas eXtrasEstá demasiado extendida la idea de la importancia de tomar algún tipo de vitaminas o ayuda ergogénica por recomendación de un compañero o amigo, pero muy poco extendida si la prescripción sobre qué tomar viene de parte de un médico especialista como consecuencia de un estudio detallado sobre nuestras necesidades. Este estudio debería tener en cuenta aspectos como:

Qué actividad física llevamos a cabo, con qué intensidad, momento del entrenamiento y años de práctica.

Qué actividad profesional llevamos a cabo al margen de correr, ya que no será lo mismo el tiempo libre y la situación de cansancio que tendrá un ofi cinista que un obrero, o que un estudiante respecto a un comercial.

Cual es nuestra situación física a nivel de valores hematológicos en ese momento.

Cuáles van a ser nuestros requerimientos físicos a medio y largo plazo, teniendo en cuenta nuestros objetivos como corredores.

Cuáles son las particularidades de nuestro organismo a la hora de la asimilación de esos aportes “extra”.

En muchas ocasiones esas vitaminas o nutrientes extras que estamos tomando no solo no nos van a aportar ningún tipo de ayuda sino que, incluso, serán contraproducentes. Esto puede ocurrir porque nuestro organismo no asimile bien estos productos o porque estas ayudas están contraindicadas para la mejora en el rendimiento de la especialidad deportiva que practicamos. En estos casos, será una perdida de tiempo y dinero completamente evitable, siendo mucho más provechoso elegir el camino correcto, cuidándonos un poco más de lo que lo hacíamos antes. Además será preciso un relativo seguimiento médico que nos de esas pautas correctas actualizadas ya que, tanto por efectos del entrenamiento como por los cambios que nuestro cuerpo experimenta con el tiempo, este tendrá o puede tener necesidades diferentes a las que hemos tenido en épocas anteriores y tendremos en épocas futuras. Idealmente deberíamos hacernos dos chequeos al año y una analítica cada mes y medio en momentos de entrenamiento intenso o periodos de gran presión física o psíquica en el trabajo. Esto debería ser más que sufi ciente para tratar de tener todo en unos índices que no nos lleven a una bajada de rendimiento físico, personal o laboral a la que no encontraremos explicaciones aparentes puesto que nada habrá cambiado en nuestra agenda diaria. Simplemente, el proceso de acumulación de fatiga tiene un máximo de absorción y cuando se sobrepasa revienta este recipiente que somos nosotros sin apenas apreciarlo más que por un proceso de agotamiento progresivo.

Fisioterapia, podoLoGia Y osteopatÍaCasi todos los runners han pasado en alguna ocasión por las manos de un masajista. Bien es cierto que esto ocurre en muchas ocasiones cuando ya no nos ha quedado más remedio y nuestras piernas son un par de bloques de hormigón armado, los cuales no hay manera que masajista alguno pueda domar en una sola sesión. Esta práctica es positiva, ya que un buen masaje disminuirá nuestra tensión muscular, pesadez y fatiga, algo que obviamente nos benefi ciará en gran medida a la hora de correr.Pero, en ocasiones, no solo tendremos problemas de “chapa y pintura” sino que además habrá otro tipo de problemas “estructurales” que se refl ejarán en pesadez muscular y disminuirán con un buen masaje. Estos problemas precisarán de otro tipo de trabajo de rehabilitación más profundo, y será ahí donde el papel del fi sioterapeuta o del osteópata se vuelva

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protagonista. ¿Como? Imaginemos unas molestias en la parte posterior del muslo, los isquiotibiales. Si se nos tratará localmente donde se refl eja el problema, se paliará pero no se solucionará. Quizá el problema sea de una rotación de la cadera o la pelvis, o una sobrecarga en la espalda, donde no sentiremos a priori ninguna molestia pero donde realmente puede ser el origen de todo.Con el paso del tiempo y los kilómetros nuestro cuerpo va sufriendo pequeños desajustes que pueden provocar desarreglos estructurales que ejerzan cambios biomecánicos. Estos pueden variar ejes, apoyos o posiciones que repercutan en nuestra musculatura y creen tensiones o sobrecargas. Será entonces cuando, mediante trabajo de fi sioterapia u osteopatía, sea necesario recolocar cada cosa en su lugar, al igual que por ejemplo el paralelo de un coche. Entonces sentiremos como, trabajando sobre áreas de nuestro cuerpo donde no habíamos sentido problema alguno, mejorarán otras zonas.Recuerdo un problema de rodilla que tuve hace algunos años. Me dolía, acudía al masajista, me paliaba localmente el dolor pero volvía al poco tiempo; en defi nitiva, me volvía loco. Decidí acudir entonces a un fi sio/osteopata, quien me solucionó el problema “colocándome” mis vísceras en su lugar mediante manipulaciones externas. Parece que todo era consecuencia del estrés, y desde entonces nunca más se supo de ese dolor. Jamás habría asociado ese dolor a esas circunstancias; pensaba que podrían ser la superfi cies donde entrenábamos, el calzado, o incluso podría haber echado la culpa a nuestro entrenador.

otros cUidadosOtro aspecto que no solemos tener en cuenta pero que puede resultar trascendente

en muchas lesiones musculares son los problemas en nuestra dentadura. Tener caries o una mala colocación de piezas dentales puede afectar y ser causa de problemas y lesiones musculares que solo se verán solucionadas mediante la visita a un odontólogo que nos cuide y repare las piezas dañadas. No hay que olvidar que estas piezas pueden ser foco de infección que nos estén afectando a otros niveles

También es frecuente entre muchos corredores el uso de plantillas de corrección de pisada. Se suele acudir a estos profesionales recomendados por compañeros o amigos que nos venden en sus servicios la panacea para la solución a todos nuestros problemas. Habrá casos en que así sea, pero son solo aquellos corredores que realmente los precisen quienes aprovechen sus servicios. En el caso de los runners que no necesitan estas plantillas, utilizarlas sólo puede ocasionar que aparezcan sobrecargas en las rodillas, tobillos, cadera, espalda… En este caso no entenderán por qué aparecen estas molestias, que por supuesto no asociarán a sus maravillosas plantillas. Tengamos cuidado, pues, a qué recurrimos para cuidarnos, haciéndolo solo a lo que realmente necesitamos, puesto que nuestras buenas intenciones nos pueden llevar a errores que no consideraremos como tal.

Existen muchos factores que pueden beneficiar o perjudicar a un corredor en su práctica deportiva. Muchos de ellos son difícilmente tangibles porque no se trata de hacer algo concreto, sino más bien de no hacer algo incorrecto o de hacer algo que habitualmente hacíamos de un modo diferente. Son todos estos pequeños matices, hablando al nivel de un runner popular, los que pueden condicionar nuestro “rendimiento” deportivo de un modo importante pero sin que apreciemos en ese proceso las causas que lo provocan.Por ello, será importante que tratemos de analizar en qué aspectos podemos mejorar pero sin dejar fuera de ese análisis todas las áreas que forman nuestra esfera personal. Así, mediante ese análisis más global posiblemente encontraremos sentido, causa y efecto a muchas de las circunstancias que nos acontezcan. No olvidemos que somos runners completos (corredores, trabajadores, padres, amigos, parejas) y que nuestra vida es mucho más que correr. Todo ello nos complementa, enriquece e interacciona entre sí día a día.

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