Universidad Pontificia de Comillas - Seminario Mayor · Sobre ellas peina un forjado de viguetas de...

Jaime Santa Cruz Astorqui Universidad Pontificia de Comillas – Edificio del Seminario JUN-2006

UNIVERSIDAD PONTIFICIA DE COMILLAS – EDIFICIO DEL SEMINARIO ESTUDIO PATOLÓGICO Y PROPUESTAS DE INTERVENCIÓN

Jaime Santa Cruz Astorqui

JUN-2006


3.3 TRABAJOS DE CONSOLIDACIÓN 3.3.2 ESTADO DE LA EDIFICACIÓN - PATOLOGÍA Aunque la patología estructural de éste edificio singular es compleja y variada, existen varias situaciones de especial relevancia que deberán ser estudiadas en mayor profundidad como consecuencia de su importancia en el comportamiento estructural del edificio, y por ello, su estudio se hará de forma pormenorizada. Todas éstas situaciones (en apartados A D), en mayor o menor medida, comprometen la estabilidad estructural del edificio y por ello serán objeto de un análisis detallado del origen y mecanismos de las lesiones que presentan, como justificación de las intervenciones que se proponen. Finalmente, en los apartados E, F y G, se analizará la patología estructural que, con carácter genérico, se observa en el resto del edificio.

A. El cuerpo central de la fachada sur (fachada del paraninfo). B. Las torres este y oeste de la fachada sur. C. El cuerpo central de la fachada norte (atrio de la iglesia). D. Las esquinas este y oeste de la fachada norte. E. La estructura horizontal:

- Forjados - Escaleras - Bóvedas

F. La cubierta. G. Patología de elementos estructurales sin incidencia destacable en el comportamiento mecánico


A. EL CUERPO CENTRAL DE LA FACHADA SUR (fachada del Paraninfo). Es sin duda la zona mas dañada, y la única que aparentemente presenta una evolución en sus lesiones, como se demuestra en la observación de unos testigos colocados en 1995 en las grietas de planta 3ª, que han abierto y separado aproximadamente 5 mm. A.1 Definición constructiva y estructural. Para entender la hipótesis que aquí se plantea, es necesario previamente explicar las características constructivas de ésta parte de la edificación:

Planta baja y fachada del cuerpo central Sur El cuerpo central se configura mediante una caja de muros de 17,30 x 10,90 m de planta y 18,60 m de altura. Es interesante hacer notar que el espesor de los muros no decrece con la altura, salvo en el cuerpo de la sala sobre el paraninfo, en cuyo suelo es visible un retranqueo de casi 50cm, donde se produce el apoyo del forjado. El muro posterior es continuación del muro de carga interior del resto del edificio. De igual forma, los muros transversales son continuación de los muros laterales de la iglesia. El único muro “exento” es el de fachada, que traba únicamente con los muros transversales. En planta baja, aparecen dos muros perpendiculares a fachada, configurando tres crujías de 5,66 m en las laterales y 5,98 m en la central. Estos muros desaparecen en la planta 1ª. Todos los muros están constituidos por dos hojas, la exterior de mampostería irregular de piedra en los tramos de planta baja, 1ª y 2ª y de fábrica de ladrillo visto en la planta 3ª. La hoja interior se construye de fábrica de ladrillo revestido de yeso. El núcleo se forma probablemente de un relleno de piedra-cascote con mortero de cal y arena. Todos los morteros de unión son bastardos de cal y arena (probablemente de playa, como reflejan las crónicas recopiladas). El ladrillo empleado parece ser de muy baja calidad, como así lo manifiesta la meteorización visible en las zonas afectadas por humedades, y por las crónicas antes reseñadas, que indican una manufactura a pie de obra. Los elementos singulares están todos construidos con fábrica de ladrillo visto, al igual que los contrafuertes de fachada, que como se verá mas adelante (apartado B), es muy posible que sean huecos, de carácter ornamental. En cuanto a la estructura horizontal, el forjado de techo de planta baja está formado por 4 vigas apoyadas en los muros transversales y en los muros interiores (sobre las pilastras de los


arcos). Sobre ellas peina un forjado de viguetas de madera perpendiculares a fachada, con luces de 2,95 m en los tramos intermedios y 0,75 m en los tramos extremos. El forjado de techo de la planta 2ª (techo del paraninfo), está resuelto de forma diáfana con un entramado bastante singular a base de tres familias de vigas de madera: la primera, se forma por dos celosías perpendiculares a fachada y a plomo de los muros interiores de planta baja. Dichas celosías de madera (de 9,95 m de luz), que apoyan en ménsulas de ladrillo, se configuran por dos cordones superiores de compresión (20x10), y dos inferiores de tracción, unidos mediante piezas de madera de pequeña escuadría (7x4) cruzadas a 45º, y fijadas mediante pasadores metálicos, con un canto total de 72 cm. Sobre estas celosías, apoyan cada 1,20 m vigas de madera de 25x12 en luces de 4,40 y 5,58 m. Finalmente, y sobre éstas, apoyan las viguetas de 25x7 cada 50 cm.

Esquema estructural del techo del Paraninfo Detalle del entramado de forjado La estructura de cubierta (techo de planta 3ª) se forma mediante un doble tablero cerámico macizo sobre correas de madera (12x7 cada 33 cm), que apoyan en los muros testeros (prolongación de los muros transversales) y en cuatro cerchas intermedias de singular diseño, tal y como se muestra en la figura siguiente. El caballete, de igual forma que en todo el edificio, se corona por un murete de fábrica revestida con forma almenada, que aunque de carácter decorativo, tiene una especial relevancia dado el gran peso que ejerce sobre la estructura de cubierta.

Esquema de la estructura de cubierta Detalle de la cercha


Vista del apoyo de la cercha

Las cerchas, de doble tirante, se forman de pares sencillo y tirantes dobles, unidos mediante pasadores metálicos, cubriendo una luz de casi 10 m. El apoyo de las cerchas (siguiendo el mismo sistema que en todo el edificio) se resuelve mediante ménsulas de ladrillo recrecidas sobre el muro perimetral. La cubierta a dos aguas (N-S) se abre con un casetón que alberga la maquinaria del reloj. Esta estructura se resuelve mediante dos pares oblicuos de madera apoyados entre las dos cerchas centrales y unas ménsulas de ladrillo idénticas a las de apoyo de las cerchas. A.2 Lesiones apreciadas en el exterior. La fachada de éste cuerpo presenta una clara separación de los muros transversales, separación que se configura en dos grietas casi simétricas (aunque de diferente magnitud) en ambos muros laterales, cuya apertura máxima se encuentra a nivel de cubierta, y disminuye según bajamos de cota, desapareciendo (aparentemente) en el tramo correspondiente a la planta 1ª en el muro oeste, y en el correspondiente a la planta 2ª en el muro este. A partir de éstos puntos, únicamente es visible (y de forma parcial) cierta fisuración coincidente con las juntas de la mampostería, configuración ésta que dificulta mucho su apreciación y valoración.

Planta 3ª del cuerpo central en fachada sur F3: Descenso caballete de cubierta (vista desde el norte)


F1: Grieta en testero Oeste F2: Grieta en testero Este

La posición, magnitud y evolución de dichas grietas, manifiestan una clara separación del muro de fachada sur, pero no un desplazamiento vertical relativo. Por la magnitud de las grietas, podemos deducir que el desplazamiento es mucho mayor en el tramo oeste. También se aprecia claramente un descenso notable en el caballete de la cubierta, llegando incluso a romper la coronación a base de fábrica de ladrillo en la cumbrera. Este descenso indica un cambio en la geometría de las cerchas de cubierta, y por lo tanto, un cambio en su mecanismo estructural, lo que estaría en el origen de la mencionada separación de la fachada. A.3 Lesiones apreciadas en el interior. En cuanto a las grietas/fisuras que se manifiestan en el interior, cabe destacar: Planta 3ª (cámara sobre el paraninfo), la grieta llega a abrirse entre 2 y 5 cm, cubriendo toda la altura de la planta en el muro lateral oeste, en clara relación con la grieta exterior, y en clara evolución. Una serie de testigos (nº 121 en F6) indican que desde 1995 se ha producido una apertura de 5 a 8 mm, por lo que consideramos que sigue en evolución. En el muro este, la separación es mas leve y se manifiesta a través de varias fisuras encadenadas a los huecos de fachada. Estas fisuras parecen estabilizadas, como así lo demuestran los testigos 141 y 142 colocados en 1995 (F5), que no han sufrido rotura.


F4: Sala sobre Paraninfo (P 3ª) Detalle de ménsula

F5: Sala sobre Paraninfo (P 3ª) F6: Sala sobre Paraninfo (P 3ª) También es de suma importancia la observación de los apoyos de las cerchas de cubierta en el muro sur. Estas cerchas, de gran luz (10.50 m), apoyan sobre ménsulas de ladrillo que aparecen muy deterioradas así como las cabezas de apoyo de madera, que sufren un alto grado de pudrición debido a la constante humedad de filtración por cubierta. Este síntoma es muy evidente en la cercha situada mas al oeste, que presenta una intervención anterior a base de una prótesis de acero en su apoyo. Aunque no se ha podido constatar, parece evidente que las uniones par-tirante en el apoyo de las cerchas pueden estar muy deteriorados como consecuencia de la corrosión de los pasadores de unión. Otro dato que avala ésta hipótesis, es la separación que se aprecia entre el forjado de piso (techo de paraninfo) y la fachada, separación que es mas pronunciada a medida que nos acercamos al muro transversal oeste. También se aprecia la inexistente trabazón entre el forjado y el muro de fachada (el apoyo es directo, sin durmiente, en el resalte del muro correspondiente a la reducción de su espesor). Paraninfo (plantas 1ª y 2ª): Es un espacio de doble altura, cuyas paredes aparecen revestidas en su totalidad mediante estucados (planta 1ª) y pinturas sobre lienzo (planta 2ª), con un balconcillo perimetral a media altura (salvo en el tramo de la fachada sur). En el muro


transversal oeste, se aprecian un conjunto de fisuras paralelas inclinadas unos 15º que apuntan al muro sur en su base, en clara correspondencia con la separación de la fachada sur. En el muro transversal este también se aprecian fisuras, pero éstas de menor cuantía.

Deformación del techo del Paraninfo Fisuras en muro oeste del Paraninfo En el tramo superior (planta 2ª), no se aprecia fisuración alguna, pues queda oculta por el revestimiento de lienzo pintado. En cuanto al techo de las sala, formado por un artesonado que cubre la estructura de forjado, se aprecia una deformación excesiva que ha llegado incluso a partir los casetones del artesonado (se aprecian reparaciones, por lo que podemos suponer que dichas lesiones son antiguas y parecen no haber evolucionado). Esta deformación también es patente en su parte superior, en el suelo de la planta 3ª, tanto en la curvatura del suelo como en las fisuras de los tabiques transversales (cuyos testigos del año 1995 parecen estar cerrados, y por tanto, la deformación estabilizada). Dada la configuración de la estructura, es posible que las uniones entre las piezas de la celosía hayan fallado (corrosión), disminuyendo drásticamente la rigidez del forjado, suficientemente pequeña de por sí como para haber producido ésta sintomatología. A esto puede haberse sumado el efecto de un posible ataque de xilófagos, que habría reducido notablemente la resistencia a flexión de las piezas. Hay que resaltar que en el muro de fachada sur no se aprecian fisuras de importancia, por lo que podemos presuponer un cierta integridad de éste muro a éste nivel, aunque la profusa decoración de los paramentos, unido a su inaccesibilidad por su altura, hace imposible detectar la totalidad de la fisuración que pueda presentar. En cuanto al forjado de piso, no se aprecian deformaciones, posiblemente debido a las pequeñas luces que se dan en éste nivel. Vestíbulo de planta baja: Este cuerpo es radicalmente distinto del superior desde un punto de vista estructural, puesto que está dividido en tres crujías separadas por muros transversales, unidos y trabados al muro de fachada sur, sirviendo de apoyo a la estructura de piso del paraninfo. Esta configuración proporciona un nivel de rigidez y atado del conjunto radicalmente diferente al encontrado en niveles superiores, lo que explicaría la ausencia de fisuración al exterior. No obstante, y dadas las características del revestimiento interior de los paramentos (revoco esgrafiado), las fisuras son mas legibles, y cabe decir de ellas que forman haces paralelos inclinado 30º, apuntando a la base del muro de fachada. Esta fisuración aparece tanto en los


muros transversales de fachada como en los muro interiores, pero sobre todo en las claves de los arcos de dichos muros, que indican no un fallo del arco, sino un efecto de separación.

Fisuración en muro este del Vestíbulo de planta baja A.4 Formulación de hipótesis. Del análisis de la configuración estructural y constructiva de ésta parte del edificio, y de las lesiones que presenta, cabe deducir que el origen de la separación de la fachada sur respecto del resto del cuerpo del edificio, está en un empuje de cubierta provocado por un fallo estructural en las cerchas, debido a su vez a la suma de varios factores: - La pudrición de los apoyos y oxidación de los pasadores de unión, han convertido a las

cerchas en mecanismos de tal forma que la componente horizontal de las compresiones de los pares pasan directamente al muro y no son anuladas por los tirantes.

- El gran peso que supone el remate del caballete (aprox. 0,40 t/m) y el tablero de cubierta, han supuesto un agravamiento del problema.

En cuanto al mecanismo de la lesión, cabe decir que: La insuficiente resistencia de los muros transversales (totalmente horadados de huecos en la planta bajocubierta), ha supuesto un insuficiente atado del muro de fachada sur ante los empujes, así como la ausencia de muros transversales interiores (salvo en planta baja). En general, la ausencia de elementos estructurales que aseguren un suficiente atado del muro de fachada (muros transversales, forjados, etc), ha propiciado la progresión de la lesión. El desplazamiento superior se traduce en un giro del muro sobre su base, localizando su charnela en la unión con la cimentación. Es interesante hacer notar que el efecto de separación ha provocado una grieta en los muros laterales en su parte alta debido a la falta de atado, pero ha provocado un mapa de fisuras en el tramo de planta baja, lo que significa que en ésta zona existe un fuerte grado de cohesión entre el muro de fachada y los transversales, que ha provocado un “arrastre” hasta casi el fondo del vestíbulo.


Aunque en un principio podría situarse como origen de la lesión un fallo de cimentación, dado que sabemos que se trata de terrenos cársticos con gran probabilidad de bolsas y oquedades, debemos descartar dicho proceso al no manifestarse signos de asientos diferenciales ni giros de cimentación, que mostrarían una sintomatología diferente, aparte de una afectación mas seria a nivel de planta baja. Por otra parte, la cimentación parece ser de calidad como se aprecia en la zona contigua del sótano, y de suficiente base. Sin embargo, cabe dentro de lo probable que el desplazamiento de fachada haya provocado un desplazamiento de la resultante de cargas, llegando a sobrecargar el perímetro exterior de la cimentación, provocando a su vez un inicio de aplastamiento y el consecuente giro de su base. La valoración real de éstas circunstancias solo podrá realizarse a partir de los resultados de un estudio geotécnico completo.

Sección por Paraninfo, indicando fisuras muro oeste


B. LAS TORRES ESTE y OESTE DE LA FACHADA SUR. Este es quizá el análisis mas complejo de las lesiones que presenta el edificio. Las dos torres presentan lesiones aparentemente de las misma características, aunque en muy diferente magnitud. Dada la importancia de las grietas que manifiesta la torre oeste, realizaremos el análisis sobre ella, para posteriormente extrapolar los resultados a su torre gemela. De hecho, la única diferencia constructiva entre ambas torres, es que la de la esquina sur-este se apoya sobre muros de sótano, mientras que la otra lo hace directamente sobre la cimentación. B.1 Descripción constructiva y estructural. Las torres están formadas por la confluencia en esquina de los muros de fachada e interiores de las alas sur y este/oeste del edificio. El frente de la torre se forma de un muro que sobresale del plano de fachada. La caja de muros así constituida, de 92 cm de espesor (constante en toda la altura) y dimensiones 7,26x9,57 m (a ejes) tiene 4 niveles y una altura de 17m. Sobre ésta, se sitúa un quinto nivel (planta 4ª o torreón) cuyos muros de 55cm de espesor están retranqueados 53cm sobre los inferiores. Sus dimensiones son 6,20x8,50m (a ejes) y 6,75m de altura (al arranque de cubierta). Este cuerpo superior no se conecta al resto del edificio a través de ningún muro, quedando totalmente exento, y su apoyo sobre los muros inferiores se realiza a través de una ménsula corrida de ladrillo, perfectamente visible en el techo de la planta 3ª.

Torre Sur Este: Planta sótano Planta baja Planta 1ª

Planta 2ª Planta 3ª Planta torreón (4ª)


Detalle del retranqueo en la base del torreón

Torre Sur Este: Fachada Sur Torre Sur Este: Fachada Este


Los muros están construidos con una doble hoja, al igual que en el resto del edificio. La hoja exterior se forma (salvo en el torreón) de mampostería irregular, y la hoja interior de fábrica de ladrillo revestido, albergando un núcleo probablemente de relleno de cascote y piedra con mortero. Es de suponer que la hoja interior disminuya su espesor con la altura:

Hipótesis de la configuración del muro de fachada

En los niveles de planta baja a planta 3ª, el muro queda rasgado en fachada por amplios huecos abocinados al interior. En dichos muros de fachada, tanto en las esquinas como en sus ejes, aparecen contrafuertes de ladrillo de sección variable (90x70 en PB, 90x56 en P1ª, 90x40 en P2ª y P3ª). A la vista de ciertos datos recogidos en la torre este, y por la falta de traba entre dichos contrafuertes y la mampostería, puede deducirse que son huecos, formados por fábrica de ladrillo de 1 pie de espesor. La razón podría ser de tipo ornamental, pues dado el gran espesor (constante) de los muros, y su mas que suficiente arriostramiento, y al no existir estructuras abovedadas, no parece necesario la utilización de contrafuertes.

Agujero en contrafuerte (torre sur-este) Unión falsa en esquina de contrafuerte (torre sur este) En el cuerpo superior (torreón), existen contrafuertes únicamente en las esquinas, y aquí si parecen necesarios dada la esbeltez del muro y la profusión de huecos. Tales contrafuertes tienen una sección de 72x140cm, y apoyan en ménsula sobre la esquina de los muros inferiores. Este dato es relevante para el posterior análisis de las lesiones que presenta la torre. En cuanto a la estructura horizontal, el esquema se repite en todos los niveles: el forjado, de viguetas de madera de 27x7 cada 50cm, apoya sobre dos vigas intermedias de 45x20. Dichas


vigas apoyan en los muros de fachada oeste y opuesto, directamente en hornacinas practicadas al uso.

Torre SurOeste: Estructura techo PB Detalle del forjado En cuanto a la estructura de cubierta, ésta se soluciona a cuatro aguas mediante cerchas de madera que apoyan en ménsulas de ladrillo. Su diseño es singular, dado que el tirante acomete al par en un punto intermedio y no en el apoyo, lo que introduce un momento flector importante en el par. A esto hay que sumar que en algunas de ellas se constata una insuficiente unión tirante par, lo que provocaría un incorrecto funcionamiento de la cercha.

Cerchas en cubierta de la torre sur oeste Detalle de la unión par y tirante Sobre dichas cerchas, apoyan las correas de madera que soportan el tablero cerámico. Al igual que en el resto del edificio, todas las limas están rematadas por un murete almenado de fábrica de ladrillo revestido.


B.2.a Lesiones apreciadas en el exterior: Torre Oeste. Se aprecian dos tipos de lesiones aparentemente de origen diferente. Por una parte, y dada su magnitud, se aprecian lesiones en forma de fisuras verticales en los frentes de los contrafuertes de esquina, exclusivamente a nivel de planta baja. En el caso de la esquina sur-este, el contrafuerte parece reventado y fue objeto de una intervención en 1995, consistente en el apeo lateral mediante un castillete metálico sujeto al contrafuerte en la sección intermedia y superior del nivel de planta baja. Dichas grietas abren en su punto medio, lo que sumado al abombamiento de sus caras, indican una clara fractura por compresión. La misma sintomatología se aprecia (pero en mucho menor grado) en el contrafuerte de esquina sur oeste (aunque parcialmente visible por la vegetación, parece estabilizada).

F1: Fisura en lateral de contrafuerte y muro este

Mapa de fisuras en la fachada sur de la torre SurOeste F2: Fisura en contrafuerte oeste


El otro grupo de fisuras, se refiere a una fisura vertical en la fachada sur de la torre, entre el remate de las pilastrillas derecha e izquierda y la mampostería. Dicha fisura se manifiesta sobre todo en el tramo de las plantas 1ª y 2ª, pero de forma diferente según de que esquina se trate: En la esquina oeste, se observa no tanto una rotura del material, sino mas bien una separación entre el ladrillo de la pilastrilla y la mampostería.

F3: Fisura entre contrafuerte y muro F4: Fisura en esquina Sin embargo, en la esquina este, la fisura se manifiesta en el paño de mampostería, siguiendo el contorno de los huecos de la planta 2ª y 3ª. Cabe señalar que la fachada oeste de la torre no presenta lesiones de interés estructural. B.2.b Lesiones apreciadas en el exterior: Torre Este. Al igual que en la torre oeste, las lesiones mas significativas se manifiestan en la fachada sur, donde se aprecian los dos grupo de fisuras antes mencionados: Por una parte, se observan fisuras verticales en el contrafuerte de la esquina SE, en la unión de ambos contrafuertes. Dicha fisura únicamente aparece en el tramo de planta baja. También se aprecia una fisura de separación equivalente en la esquina SW, pero ciertamente singular, pues no se observa rotura del ladrillo, sino mas bien una ausencia de traba entre las fábricas de los contrafuertes.


F1: Fisura en lesquina de contrafuerte este

Mapa de fisuras en la fachada sur de la torre SurEeste F2: Fisura en contrafuerte oeste En cuanto al otro grupo de fisuras, podemos observar el mismo tipo mencionado en la otra torre, apreciándose una fisura de separación entre el contorno de los huecos de todas las plantas, y la fábrica de mampostería. Esta fisura llega hasta el remate en piñón de la planta 3ª.


F3: Fisura en PB-P1ª F4: Fisura en P2º

En consonancia con ésta lesión, observamos una fisura casi simétrica en el paño de fachada este de la torre, a nivel de planta 2ª, apreciándose un desprendimiento de la imposta decorativa de ladrillo.

F5: Fisura en el testero oeste de la torre Arranque de fisura en esquina torre


Al igual que sucede en la torre oeste, no se aprecian lesiones significativas en el cuerpo superior del torreón. B.3 Lesiones apreciadas en el interior de las dos torres. El estado general observado en el interior de las dos torres es análogo, y no se observan lesiones de interés estructural, salvo en la planta 3ª de la torre SW, en el encuentro del muro este con el muro de fachada del ala sur.

Torre SW: Fisura en muro interior Torre SW: Fisura en muro este, planta 3ª

Sin embargo en el interior de la torre, a nivel de planta baja, no se aprecian fisuras significativas en los paramentos, no observándose ninguna correlación entre el colapso descrito en el contrafuerte sur-este y el estado perfecto de los muros interiores. Se observa también un buen estado del forjado de techo de planta baja, que no manifiesta signos de pudrición, desconchones del revestimiento, ni flechas apreciables. El estado en las plantas superiores es similar, no apreciándose manifestación alguna al interior de las lesiones detectadas en el exterior, salvo las fisuras antes detalladas. En el cuerpo del torreón, no aparecen fisuras de especial significado, lo que junto al buen estado de las cerchas, obliga a pensar que su estado general es bueno (aunque en la torre surEste, no es posible su detección debido al revestimiento de madera que cubre la totalidad de los paramentos). Es importante señalar el perfecto estado (desde un punto de vista estructural) de los muros de sótano bajo la torre sur este, que no presentan fisuración de ninguna clase. Este estado puede observarse en la totalidad del sótano del edificio, lo que sugiere un buen comportamiento del subsuelo y la ausencia de movimientos y deformaciones de las cimentaciones en la mitad este del edificio. B.4 Formulación de hipótesis. La hipótesis mas plausible puede formularse en base a la compresión excéntrica que provoca el gran peso del torreón, apoyado no en el eje del muro inferior, sino en el interior, con una excentricidad entre ejes de 53 cm. El efecto directo (tengamos en cuenta que no existen planos de estructura horizontal que arriostren el momento provocado por tal excentricidad) es el de una sobrecompresión de la cara interior del muro, y una tracción en la cara exterior, dado que la resultante de cargas se sitúa fuera del núcleo central de inercia del muro (tercio central). Las tensiones de tracción no se ven anuladas por el peso propio de la fábrica y forjados (recordemos que es justo en las fachadas sur de las torres donde no apoyan las vigas de forjado).


La consecuencia final es una deformación de pandeo de los muros de fachada (pues los interiores están arriostrados por compresión de los forjados adyacentes) cuya manifestación en el encuentro de esquina es la apertura gradual convexa desde el punto de altura media hasta los extremos superior e inferior. Esto explicaría el primer grupo de fisuras detectado en las esquinas, entre los contrafuertes y los paños intermedios. Aunque ésta hipótesis debería provocar una fisuración horizontal exterior (de tracción vertical) en los muros de fachada, dado que no existe ningún tipo de coacción horizontal a través de los forjados de la torre, la curvatura de deformación puede ser pequeña aunque constante, y por lo tanto, la figuración puede estar muy repartida y no ser visible (seguramente es apreciable como microfisuras en las juntas entre mampuestos).

En las esquinas, el mecanismo planteado está agravado por la gran carga que suponen los contrafuertes de esquina de los torreones, lo que apunta en la misma dirección del mecanismo que explicaría las fisuras observadas. Otro dato que avala ésta hipótesis, es la práctica ausencia de fisuras en el interior de los muros de las torres. En cuanto a las fisuras de compresión observadas en los contrafuertes, hay que partir de las siguientes premisas: - No se observan fallos de cimentación, pues en la torre sur oeste las fisuras no llegan al

zócalo, y en la torre sur este, los muros de sótano aparecen intactos. - La rotura a compresión no puede deberse al peso propio de la fábrica y resto de la

estructura, pues la resultante de las cargas desciende muy próxima al plano interior del muro, y dada la alta rigidez relativa de éste frente a la del contrafuerte, podemos suponer que éste no colabora sustancialmente en el equilibrio de fuerzas verticales. A ello hay que sumar la reducción de sección del contrafuerte, y por tanto, de su peso propio.

- Existe una mas que probable posibilidad de que dichos contrafuertes sean huecos, y mal trabados con la fábrica del muro, lo que los convierte en elementos casi exentos e independientes de la estructura.

Por todo esto, hay que buscar la explicación en el mecanismo de carga excéntrica planteado para el otro grupo de fisuras. Siguiendo la deformación de pandeo de los muros (curvatura convexa al exterior), y sobre la hipótesis planteada de contrafuertes huecos, parece verosímil plantear que las fisuras verticales son producidas por la compresión provocada por la deformación de los muros, que en su apoyo, giran sobre la cimentación, y provocan una deformación de compresión sobre los contrafuertes. Esquema de pandeo del contrafuerte

Esquema de deformación de los muros


De forma complementaria se ha realizado un análisis por elementos finitos del estado tensional de los muros de la torre. A continuación se presentan los gráficos de tensiones verticales en la cara exterior del muro, en los que se aprecian valores altos de tracciones en la coronación, producidos por la carga excéntrica que supone el torreón.

También se observan valores bastante bajos de tensiones en los contrafuertes laterales, hecho que apoya la tesis de que las figuraciones que presentan no parecen proceder de compresión excesiva:

1 Jaime Santa Cruz Astorqui Universidad Pontificia de Comillas – Edificio del Seminario JUN-2006

3.3.2 ESTADO DE LA EDIFICACIÓN - PATOLOGÍA C. CUERPO CENTRAL DE LA FACHADA NORTE (ENTRADA A LA IGLESIA) Este cuerpo, situado a los pies de la iglesia, está formado por las cajas de escalera norte del edificio (plantas baja, 1ª, 2ª y 3ª), y el vestíbulo de acceso a la iglesia (plantas baja, 1ª, 2ª y azotea en 3ª de paso entre escaleras).

Planta baja Planta 1ª

Planta 2ª Planta 3ª

Alzado norte del cuerpo central Sección por atrio


Se observan diversas lesiones estructurales que por su posición y magnitud deben ser analizadas, pues pueden manifestar un fallo estructural. C.1 Descripción constructiva y estructural. Al igual que en el resto del edificio, la totalidad de la estructura vertical la componen muros de doble hoja como se ha descrito en apartados anteriores, con contrafuertes de ladrillo visto (probablemente huecos). Los muros de fachada se abren profusamente con puertas y ventanas.

Morfología de muros y contrafuertes

Unión de contrafuerte al muro En cuanto a la estructura horizontal, encontramos en éste cuerpo varias situaciones diferentes: Escaleras: resueltas mediante doble tramo de bóveda tabicada. Techo de planta baja: forjado de viguetas de madera de pequeña escuadría, bajo el cual se cuelga un artesonado de madera. Las viguetas apoyan entre el muro de fachada y el muro del coro de la iglesia, salvando una luz de 3,45m. Sin embargo, en las esquinas del vestíbulo, se resuelve con bóveda de crucería de ½ punto. Así, los muros de separación entre las esquinas y la sala central del atrio, se abren con arcos de piedra también de ½ punto. Techo de planta 1ª: Se resuelve de forma análoga, salvo que aquí no existen bóvedas, por lo que el esquema de forjado es continuo a lo largo de todo el cuerpo, no existiendo los muros con arco de la planta baja. En los cuerpos laterales de unión del sobreatrio con las escaleras, encontramos huecos de escalera de acceso al nivel superior de las naves laterales de la iglesia (capillas) y al coro.


Techo de planta 2ª: Formado por la azotea de conexión entre escaleras y un faldón inclinado de cubierta. La resolución constructiva de éste plano quebrado, se realiza con unas cerchas de madera apoyadas en ménsulas sobre el muro de fachada, y el muro norte del coro de la iglesia. Sobre dichas cerchas (separadas 2,5m), se apoyan correas que en el tramo horizontal hacen de viguetas de forjado. Sobre ellas, un tablero doble cerámico. Es importante destacar el diseño de las cerchas, cuya unión tirante y par no parece poder absorber la deformación lógica del tirante en su transmisión de tracciones al par.

Estructura de cubierta en techo de planta 2ª (zona sobre atrio) Detalle de unión par tirante Cubierta en escaleras: resuelta a dos aguas mediante 3 cerchas apoyadas en los muros de la caja de escalera, a través de ménsulas de ladrillo. Sobre las cerchas, correas de madera y doble tablero cerámico.

Estructura de cubierta en caja de escalera NorOeste El punto de interés lo forma las limas (resueltas mediante pares inclinados) de encuentro con la cubierta de los dormitorios del ala norte en planta 3ª, cuyo caballete es bastante mas alto, por lo que dichas limas no coinciden en el mismo punto. Al igual que en el resto del edificio, tanto las limatesas como los caballetes se rematan con un murete almenado de fábrica de ladrillo. En el caso del remate de la cubierta de los dormitorios, aparece además un hastial almenado, a plomo con el caballete de la cubierta de la escalera (y apoyado en él) y resuelto con fábrica de ladrillo, lo que supone un gran peso sobre dicha cubierta.


Encuentro de cubiertas del ala norte y caja de escalera

C.2 Lesiones observadas: Básicamente, las lesiones de importancia estructural se encuentran localizadas en los muros de las cajas de escalera y en el techo del atrio de la iglesia. Por ello, dividiremos las lesiones encontradas por zonas:

- Caja de escalera NorEste - Caja de escalera NorOeste - Atrio de la iglesia.

Caja de escalera NorEste: En el exterior, únicamente se observan dos fisuras claramente en consonancia, situadas en el muro de unión con el atrio: La primera de ellas, a nivel de planta baja, indica una clara separación entre el contrafuerte de esquina y el resto de la fachada. La fisura parece que sigue la unión de fábricas, al no parecer éstas trabadas salvo cada ciertas hiladas, donde la fisura cambia de dirección rompiendo el ladrillo (que forma la llave de traba). A nivel de planta 3ª, sobre la azotea del atrio, se observa en el mismo muro una grieta vertical de cierta inclinación, de origen incierto.

Fisura en contrafuerte (PB en muro de escalera) Grieta en fachada del muro de escalera (planta 3ª)


Esta misma fisura puede observarse en el interior de dicho muro, a nivel de planta 3ª. Se observan unos testigos colocados en 1995, que parecen intactos.

Grieta interior del muro de escalera (planta 3ª) Pudrición apoyo de cercha en cubierta En cuanto al estado de la cubierta de la caja de escalera, puede observarse una clara pudrición de la cabeza de los pares, que ha llegado a producir un desprendimiento del revestimiento de yeso. Por último, cabe destacar el mal estado de las bóvedas tabicadas de las escaleras, en claro riesgo de colapso, por lo que se recomienda su apeo inmediato.

Rotura de bóveda tabicada en escalera norte Detalle de refuerzo en tablero de escalera Caja de escalera NorOeste: El exterior de ésta zona presenta multitud de fisuras significativas. En primer lugar, se observa en el remate frontal de la cubierta una fisura que parte del eje en el vértice superior, y desciende por la unión de la pilastrilla adosada al contrafuerte hasta la planta 2ª (F2). Esta fisura no es apreciable en la planta 1ª, pero se observa claramente en la misma posición (F1) en toda la planta baja (aquí recorre el paño de mampostería entre la pilastrilla y el hueco de fachada).


Escalera NorOeste: Lesiones en fachada norte F1: Escalera NorOeste - Fachada norte, planta baja

F2: Remate fachada escalera NorOeste F3: Remate en testero Oeste de caja de escalera


Por otra parte, en el tramo corto de fachada oeste de la caja de escalera, y casi en posición simétrica de las fisuras anteriores, se observa una fisura vertical (F3) que parte de la cornisa superior, y desciende hasta la planta 1ª, no apreciándose en la PB. En el contrafuerte de ésta esquina del edificio, flanqueado por éstos dos grupos de fisuras, se observa también, a nivel de planta baja, una fisura vertical de separación en el ladrillo (F5), de características muy similares a las encontradas en las torres de la fachada sur. Por último, en el contrafuerte izquierdo de la caja de escalera (F4), se observa una fisura vertical en planta baja, situada en el eje del paño del contrafuerte, también muy parecida a las encontradas en las torres.

F4: Grieta en contrafuerte izqdo escalera NorOeste F5: Grieta en contrafuerte drcho escalera NorOeste

Al igual que sucede con la escalera noreste, aquí las bóvedas tabicadas también se encuentran en muy mal estado. Atrio de la iglesia: En la fachada no se observan lesiones estructurales de interés, sin embargo, en el interior del vestíbulo de planta baja, podemos apreciar multitud de fisuras trazadas en los paramentos y bóvedas de techo, marcadas claramente en el esgrafiado (no así en el techo del cuerpo central, que es de artesonado de madera). Las lesiones mas marcadas se sitúan en la bóveda oeste del atrio y en el muro de separación con la escalera noroeste, aunque en el extremo opuesto se aprecian (en mucho menor medida) los mismos síntomas. Las fisuras detectadas en la bóveda son paralelas al la fachada, atravesando la bóveda en varios puntos, de lado a lado.


Las fisuras visibles en el muro, aparentemente en consonancia con las de la bóveda, son paralelas e inclinadas 30-45º, apuntando a la base de la fachada (cimentación).

Fisuración en muro occidental del atrio Fisuración de la bóveda sobre la esquina oeste del atrio

En los niveles superiores de la zona del atrio (plantas 1ª y 2ª), no se observan lesiones significativas de carácter estructural. C.3 Formulación de hipótesis. Dado que las cerchas de la cubierta en las cajas de escalera, debido a su posición, no parece probable que hayan causado empujes que hayan originado las fisuras observadas.

Sin embargo, puede existir una relación entre todas ellas: La fisuración encontrada en las bóvedas y muros del atrio, parecen indicar un descenso en la cimentación de la esquina de la iglesia. Esta hipótesis es razonable, pues el muro de los pies de la iglesia está sometido a cargas mucho mayores que los muros del atrio, lo que podría haber originado un asiento diferencial entre sus cimentaciones. Este fenómeno explicaría las fisuras en la fachada de los muros de escalera, tanto en forma como en posición. Dado que los testigos indican una estabilización de las fisuras, parece lógico pensar en que el asiento se ha estabilizado. Sin embargo, no se han detectado fisuraciones en los muros de sótano correspondientes a la iglesia, ni tampoco en los muros superiores de la misma, lo que puede apoyar la tesis de asiento diferencial por deficiente diseño de la cimentación, en contra de un fallo local del subsuelo. Puede existir otro fenómeno diferente, que de alguna forma ha ayudado al proceso de separación iglesia – muro de fachada: se trata del mal diseño de las cerchas de cubierta en la zona central

(sobre todo sus uniones), cuyos tirantes no pueden recoger los esfuerzos de los pares. Esto sumado a su geometría excesivamente tendida (mayores empujes laterales), puede haber provocado un empuje lateral en toda la coronación del muro de fachada central, efecto que

Mecanismos de fisuración


agravaría las consecuencias descritas del asiento diferencial. Esta hipótesis es fácilmente comprobable en la deformación observada en los nudos de las mencionadas cerchas:

Cercha deformada Separación par-tirante Separación entre pares (caballete) En cualquier caso, se tata de una patología compleja que habrá que investigar a fondo con datos provenientes de catas y de un estudio geotécnico.


D. ESQUINAS ESTE y OESTE DE LA FACHADA NORTE. Las esquinas del edificio se forman por la mera confluencia del ala norte con las alas este y oeste, de forma prácticamente simétrica. Sin embargo, se produce un resalte en la fachada de aproximadamente 50cm, por lo que los muros de fachada de los cuerpos de esquina no están alineados con los del resto del edificio.

Esquina NorEste: Planta baja Esquina NorEste: Planta 3ª

Esquina NorEste: Fachada este Esquina NorEste: Fachada Norte


D.1 Definición constructiva y estructural. Los muros, de espesores 92cm en fachada y 76cm en los interiores, están construidos al igual que en el resto del edificio de doble hoja (ladrillo + mampostería) con relleno interior, formando una caja rectangular de dimensiones 7,45x9,33 (EWxNS, a ejes de muro), y 4 plantas. Al igual que en las torres, también aquí es de suponer que los contrafuertes son ornamentales, de sección hueca. En cuanto a la estructura horizontal, esta se resuelve de forma análoga a la de las torres de la fachada sur. Esto es, forjados de madera peinando en dirección NS, y apoyados en dos vigas intermedias, también de madera, empotradas en los muros. La cubierta de la planta 3ª, se resuelve a dos aguas rematando en hastial a la fachada norte, como prolongación directa de la cubierta de las alas este y oeste que concurren en la esquina. Dado que la crujía del ala norte es mas amplia que las de las alas este y oeste, su caballete queda mas elevado, solucionándose ésta circunstancia mediante un hastial almenado de fábrica de ladrillo revestido sobre el caballete inferior.

La estructura de cubierta es pues a base de 2 cerchas de madera intermedias (en línea con las vigas de forjado) que soportan las correas y el tablero cerámico característico de éste edificio. El encuentro con la cubierta del ala norte se resuelve mediante pares inclinados de madera apoyados desde el caballete a los muros (en ménsula de ladrillo), siguiendo la línea de las limahoyas. Esquema estructural cubierta esquina NorEste

Aunque no disponemos de datos sobre la morfología de dichas cerchas, es de suponer el mismo diseño que el encontrado en las torres de la fachada sur. Finalmente, hay que hacer notar el alto índice de huecos que se observa en las fachadas de éstos cuerpos de esquina. D.2 Lesiones observadas en fachada. Aunque las lesiones encontradas en las dos esquinas son similares y de las mismas características, se describen a continuación las fisuras en cada zona por separado: Esquina NorOeste: En su fachada oeste, a pesar del gran deterioro del ladrillo y revestimientos, no se aprecian fisuras significativas, salvo quizá una fisura vertical discontinua entre los huecos y el contrafuerte de esquina (F1).


Lesiones en esquina NorOeste, fachada

norte F1: Fisuras en remates de cubierta de fachada oeste

F2: Fisuras en remate de cubierta de fachada norte F3: Fisuración junto a contrafuerte derecho (PB y P1ª) fach Norte

Sin embargo, en su fachada norte se aprecia mas claramente una fisura simétrica a la anterior, que va desde la parte superior de la planta baja hasta la planta 1ª (F3), para volver a aparecer (con mucha mayor presencia) en el hastial de remate (F2). Esta fisura discurre bien entre el paño de mampostería y el recercado de ladrillo de las ventanas, o bien entre dicho paño y la pilastrilla de ladrillo adosada al contrafuerte de la esquina.


Esquina NorEste: Se aprecian sendas fisuras en los remates de cubierta, de forma casi simétrica a los lados del contrafuerte de la esquina NE (F2 y F3), de recorrido vertical, siguiendo la unión entre el recercado de ventana y la pilastrilla del contrafuerte. Ninguna de éstas fisuras parece evolucionar mas debajo de la planta 2ª. El punto de máxima apertura parece ser el hastial de cubierta. También encontramos una fisura muy similar en posición, forma y características en la esquina del resalte de la fachada norte (F1).

Esquina NorEste: lesiones en fachada norte F1: grieta en fachada norte, junto contrafuerte derecho

F2: Grieta en fachada este, junto contrafuerte de esquina F3: Figuración en fachada norte, junto a esquina


En cualquier caso, tanto en la esquina este como en la oeste, las fisuras son muy parecidas y parecen relacionarse siempre con la cubierta, en su encuentro con la fachada norte de las esquinas. Todas éstas fisuras no parecen revestir gravedad. D.3 Lesiones observadas en el interior. Los paramentos interiores en las plantas baja a tercera, no presentan lesiones significativas que pudieran relacionarse con las fisuras encontradas en el exterior. Sin embargo, es importante señalar el posible mal estado de la estructura de cubierta, debido a pudriciones, cuyo máximo exponente encontramos en una de las limas de la cubierta de la esquina NorOeste, que se manifiesta al exterior a través de un claro hundimiento del caballete de cubierta:

Hundimiento del caballete de cubierta y pudrición de un par de cubierta en la esquina NorOeste (limahoya de encuentro ala oeste con ala norte)

D.4 Formulación de hipótesis. En cuanto al grupo de fisuras detectadas en la parte superior de las fachadas, y dado el posible mal estado de la estructura de cubierta, y de los grandes pesos que soporta (tablero cerámico y remates almenados), parece lógico pensar que la fisuración descrita sea consecuencia de empujes horizontales de dicha estructura en las esquinas del edificio, donde se sitúan las piezas de mayor longitud (limas), al fallar la acción de los tirantes. En cuanto a la fisura observada en la fachada norte de la esquina oeste, a nivel de planta 1ª, puede ser debida al pandeo del muro norte, aunque dicha lesión no se manifiesta al interior, por lo que podría tratarse de un fallo local del contrafuerte, que no ha afectado al muro estructural.


E. LA ESTRUCTURA HORIZONTAL E.1 FORJADOS E.1.1 Definición constructiva. La totalidad de los forjados del edificio están construidos en madera, salvo excepciones que se comentarán mas adelante. Excepto en los cuerpos antes estudiados (torres, esquina y cuerpos centrales sur y norte), todas las alas del edificio mantienen idéntica solución constructiva, a base de vigas perpendiculares a fachada (a veces empotradas en el muro y a veces apoyadas en ménsulas de ladrillo) de escuadría 45x20 que soportan viguetas paralelas a fachada, normalmente de escuadrías 27x7 , separaciones de 50cm y luces aproximadamente de 3,20m.

Detalle de forjado tipo Forjado de suelo biblioteca (sótano)

Distintos tipos de forjados Sin embargo, en los forjados de los corredores del claustro del patio Este, y debido a una menor crujía, la disposición es de viguetas apoyadas directamente entre los muros de fachada e interior (sin vigas). En el techo del ala NorOeste de la planta baja, encontramos una intervención antigua donde se aprecian refuerzos consistentes en perfiles IPN-600 bajo las vigas de madera. El espacio de unión entre IPN y madera, indica la existencia anterior de grandes flechas, lo que motivó sin duda su refuerzo. Es un hecho a tener en cuenta sobre el estado generalizado del resto de forjados en éste ala, pues aquí las luces de vigas (7,90m) son mayores que en el resto del


edificio. De echo, las únicas intervenciones que se han realizado en los forjados, han sido todas en éste ala.

Refuerzo de forjado en techo de ala NW (P. Baja) Por último (y debido seguramente a una excesiva deformación sumada a una mas que probable pudrición), en el techo del ala NorEste del sótano, encontramos que el forjado original ha sido sustituido por un forjado de hormigón armado, sobre vigas perpendiculares a fachada con un soporte intermedio. Se encuentra en perfecto estado y seguramente podrá mantenerse sin intervención alguna (a falta de una deseable prueba de carga). Sin embargo, la gran diferencia que marcará el tipo de actuación a proyectar, es el revestimiento inferior de tales forjados. Mientras que en las plantas superiores los forjados se revisten con yeso (normalmente sobre un entramado de tablillas clavadas a las piezas de madera), en la planta baja existe todo un muestrario de artesonados de madera y madera-yeso, que obviamente habrá que mantener y restaurar, lo que dificultará el proceso de refuerzo y/o sustitución. También encontramos, de forma puntual, artesonados en las plantas superiores en la Sala del Paraninfo, el pasillo principal, en la caja de la escalera principal y en la Capilla.

Detalle de viga decorativa en forjado de techo de Aula Magna (P.B.) En cuanto a los pisos en contacto con el terreno, están resueltos con solera en todo el sótano y en los corredores de los claustros. Sin embargo, en el resto parece que puedan estar solucionados con forjados sanitarios.


Situación de techos en planta baja y primera con artesonados sujetos a protección:

1 Vestíbulo central 2 Vestíbulos laterales 3 Pasillo principal en P-B


4 y 13 escalera principal 5 Biblioteca 6 Sacristía

7 Bajocoro 8 Atrio central 10 Techo del Paraninfo

10 Balcón del Paraninfo 11 Capilla 12 Pasillo ppal en P-1ª E.1.2 Lesiones observadas. Un alto porcentaje de los forjados presenta claras evidencias de daños irreversibles. Dichas lesiones pueden resumirse en:

• Pudriciones parciales de jácenas y viguetas, en las zonas de apoyo en muros (ménsulas), y sobre todo en elementos cercanos a fachadas o bajo azoteas de los claustros, donde las condiciones de humedad han propiciado dicha lesión. Muchas de las humedades registradas, se deben a roturas de bajantes y se manifiestan en el deterioro y desprendimiento del falso techo:


Humedades en techo de corredores de claustro, en planta baja

Humedades en techo de corredores de claustro, en planta 1ª (bajo azoteas)

• Deformaciones residuales excesivas, propias de la madera, pero sobre todo

provocadas por las pequeñas escuadrías utilizadas en las vigas. Este fenómeno se detecta sobre todo en los forjados de mayor luz, situados en las crujías exteriores, y es fundamentalmente debido a la deformación de las vigas. Se observa que las viguetas no presentan flechas excesivas.

Fisuración en tabique de planta baja por deformación del forjado de piso Deformación excesiva del forjado


Fisuración en tabiques de planta primera por deformación del forjado de piso

• En algunos casos, ataques de insectos xilófagos (sobre todo en zonas de

bajocubierta). De echo, existe un ataque generalizado (y visible) de carcoma en la práctica totalidad del mobiliario y revestimientos de madera del edificio, lo que hace suponer que la estructura también está afectada al mismo nivel, aunque ello no se haya podido constatar.

Ataque de carcoma en un par de cubierta Humedades y eflorescencias en solera de planta baja Las soleras de sótano presentan un buen estado generalizado, salvo problemas de humedades. Sin embargo, las soleras en planta baja, evidencian fuertes síntomas de buzamiento, con una fuerte expansión. E.1.3 Conclusiones. De todo ello se deduce que los forjados no presentan las condiciones mínimas tanto desde un punto de vista estructural como de su durabilidad, aunque el problema es mucho mas grave en las vigas principales que en las viguetas. Por ello, habrá que sustituir (en algún caso reforzar) toda la estructura horizontal del edificio, estudiando de forma aislada el refuerzo/sustitución de aquellos forjados bajo los cuales existan artesonados cuya especial relevancia artística obliguen a su conservación y restauración.


E.2 ESCALERAS Están solucionadas con bóveda de ladrillo a la catalana en dos y tres tramos. El estado de algunas de ellas es lamentable y se insiste en el riesgo inminente de colapso parcial en algunos tramos (escalera fachada norte), por lo que se aconseja su apeo inmediato. Dado su escaso interés arquitectónico, parece obvio que se proceda a su demolición y sustitución por escaleras nuevas, manteniendo quizá la cerrajería de las barandillas. El sistema propuesto es el de zancas de acero laminado. Sin embargo, la escalera principal (del vestíbulo de planta baja al Paraninfo) es muy singular y destacada, por lo que es obligada su restauración. Esta escalera, construida en sillería de piedra, presenta un buen estado general (tanto material como estructural) salvo en uno de los arcos de apoyo del corredor superior, que ha sufrido un descuelgue de una dovela, por lo que habría que realizar un apeo previo y reparación del problema mediante cosido y sellado con mortero epoxi.

Dovela descolgada en escalera principal Hueco de escalera en torre del reloj Puntualmente, cabe destacar el mal estado de los tramos superiores de la escalera de la torre del reloj, que deberían ser apeados de forma previa a su rehabilitación. Las escaleras de las torres de la iglesia, muestran un buen estado general de conservación, salvo quizá en su parte superior.


Escalera de la torre oeste de la iglesia E.3 BÓVEDAS La estructura de techo está resuelta mediante bóvedas de ladrillo en diversas zonas del edificio (las situadas en el atrio ya han sido objeto de una análisis mas detallado):

• Techos de la nave central de la iglesia: Salvo por graves problemas de humedades de filtración que han afectado a las pinturas (frescos), a nivel estructural las bóvedas presentan un buen estado sin fisuras aparentes. En la observación del espacio del bajocubierta, tampoco aparecen signos de fisuración de las bóvedas.

Estado de las bóvedas de la nave central de la iglesia


• Techo de las torres de la iglesia. Aparentemente en buen estado.

Vista inferior de la bóveda de la torre oeste de la iglesia

• Techos de sótano en ala este y corredores bajo claustros de PB: No presentan

ningún signo de lesiones de tipo estructural, por lo que parecen aptas para su reutilización. No obstante, se desconoce si el piso superior apoya sobre un relleno en el trasdós de la bóveda (ésta es muy rebajada) o por el contrario, existe un forjado de madera independiente.

• Techo de pasillo de comunicación en planta 2ª, junto a Paraninfo: Construido con

una bóveda muy rebajada, presenta un excelente estado. Sobre éste pasillo, a través de dos arcos fajones, descansan los muros laterales de la torre del reloj, cuyo estado deducimos bueno dada la ausencia de fisuras en los muros inferiores.


F. LA CUBIERTA F.1 Definición constructiva.

Tipos diferentes de cubiertas

Salvo en las zonas ya estudiadas en apartados anteriores (cuerpos centrales norte y sur, Paraninfo y torres), el resto del edificio mantiene esquema de cubierta semejantes en planta 3ª: En la crujía exterior (zonas 1 y 2), se resuelve mediante cerchas de madera cada 2,20m aproximadamente, apoyadas en los muros de fachada a través de ménsulas de ladrillo, con la única diferencia de la luz que cubren dichas cerchas (6,00m en las crujías menores -1-, y 7,90m en las mayores -2- del ala norte). Sobre los pares de las cerchas, apoyan correas de 12x8, que sirven de soporte al tablero doble cerámico bajo teja. Se aprecia una viga o hilera de caballete de gran escuadría, posiblemente para soportar el gran peso que supone el remate superior almenado. El diseño de las cerchas es bastante singular, pues el tirante (doble de 30x7) se une al par no en el apoyo, sino en un punto intermedio, mediante pasadores metálicos. La gran escuadría del tirante, junto al potente jabalcón perfectamente unido al tirante, nos induce a pensar en que parte del peso del remate superior se transmite por flexión del tirante a los pares.


Alzado de la cercha tipo en la estructura de tejado en planta 3ª

Las buhardillas de los huecos de iluminación, se resuelven mediante muretes laterales a ambos lados del hueco (y en línea con las cerchas), que se cubren con una bóveda tabicada rebajada. Sobre la bóveda, apoyan unos pequeños palomeros de ladrillo, que sirven de soporte a un segundo tablero cerámico ya con la forma de los dos faldones a dos aguas de la buhardilla. El espacio existente entre la buhardilla y el faldón de cubierta, se resuelve mediante una hilera de madera y pequeñas correas.

Estructura de tejado en planta 3ª


Detalle de las buhardillas De forma singular, la cubierta en las cajas de las escaleras de las alas este y oeste (zona 3), se resuelve mediante correas horizontales (de igual escuadría a las de las alas) directamente apoyadas en los muros piñones perpendiculares a fachada. Sobre éstas, el mismo esquema de tablero cerámico ya descrito. En cuanto a las azoteas que cubren los corredores de los claustros, están construidas previsiblemente a la catalana, sobre forjados de madera de las mismas características que en el resto del edificio. F.2 Lesiones observadas. La estructura de cubierta, presenta en un gran porcentaje evidencias de lesiones (pudriciones) debidas mayoritariamente a humedades por filtración directa (fallos de impermeabilización y drenajes inservibles o anegados). El estado generalizado es malo, tanto en las zonas en las que es evidente el deterioro (desprendimientos del falso techo y desconchones del revestimiento) como en zonas que interiormente parecen estables, pero que en su exterior manifiestan deformaciones excesivas en sus faldones. El signo de deterioro mas evidente es la pudrición de los apoyos de las cerchas en las ménsulas de ladrillo, y el derrumbe de gran parte de las bóvedas de las buhardillas.

Pudrición del apoyo de las cerchas Colapso de las buhardillas Otro detalle de interés es la observación de los faldones desde el exterior, que presentan grandes deformaciones debidas al deterioro y falta de resistencia de las correas. Sin embargo,


las líneas de caballete parecen (en general, salvo casos aislados) estables, de lo que se deduce un comportamiento bueno de las cerchas, hipótesis que queda avalada por el echo de no observar fisuraciones en la cara interior de los muros de fachada, que estaría provocadas por empujes de las cerchas dañadas.

Fisuración en tabiques de planta 3ª por deformación excesiva de las cerchas de cubierta No obstante, las lesiones no afectan a la totalidad de las piezas que constituyen las cerchas. Esto nos induce a plantear la posibilidad de la recuperación parcial de las mismas, dado su interés, rigidez y buen diseño. Cubierta de la iglesia: de su observación desde el espacio de bajocubierta, se deduce un buen estado general y un buen diseño de la estructura. Únicamente se detectan problemas puntuales de entrada de agua por el faldón, que ha llegado a provocar la pudrición de la madera en algunos puntos (foto derecha):

Vistas de la estructura del tejado de la nave central de la iglesia

Por último, en cuanto a las azoteas de la planta 2ª (sobre los corredores de los claustros), cabe destacar la profusión de filtraciones de agua debidas a un mal drenaje e impermeabilización, pero sobre todo, a un inexistente mantenimiento que ha inutilizado la totalidad de los puntos de desagüe al patio (las humedades provocadas en el techo inferior se muestran en el apartado de forjados).


G. PATOLOGÍA DE ELEMENTOS ESTRUCTURALES SIN INCIDENCIA DESTACABLE EN SU COMPORTAMIENTO MECÁNICO A pesar del buen estado generalizado (desde un punto de vista estructural) de los muros de carga del edificio, lo mas evidente es el grave deterioro que sufre el ladrillo visto expuesto al exterior, así como los diversos revestimientos decorativos del mismo:

• Manchas y eflorescencias debidas a la migración de sales (procesos de filtración y capilaridad). Sucede sobre todo en los zócalos de los cuerpos de planta baja en los que no existe sótano, y son mas evidentes en los muros interiores, donde no se ha producido un lavado por lluvia. También están presentes en muros bajo las azoteas de los claustros y en zonas de bajantes (de forma muy generalizada).

• Meteorización y disolución del ladrillo en muros de fachada (hay que resaltar el buen

comportamiento del mortero de las juntas), debido la alta concentración salina del viento dominante (norte) y a la alta pluviometría, junto a problemas de humedad por capilaridad en tramos inferiores. Es quizá el problema de mas difícil solución, tanto debido a su extensión como a la dificultad y coste de las técnicas empleadas en dichas reparaciones. No olvidemos que la singular fábrica de ladrillo de las fachadas, es el elemento mas significativo de ésta arquitectura, y por tanto, el mas comprometido en su restauración.

Meteorización del ladrillo (fachada patio oeste) Eflorescencias (fachada oeste, junto pasarela) • Meteorización y exfoliación de la piedra en mamposterías al exterior, debido a las

mismas causas. Se trata de una lesión superficial, y bastante localizada, aunque sería necesario obtener datos concretos del nivel de afección.

En cualquier caso, éstas lesiones no revisten importancia y por lo tanto se tratarán desde un punto de vista de su restauración, en una fase posterior a la consolidación y reforma estructural del edificio, y siguiendo siempre criterios de:

• Restitución del aspecto original (en la medida de lo posible) • Aplicación de técnicas que permitan una protección activa ante la agresión

ambiental (tanto aérea como del subsuelo), sobre todo en zócalos y fachadas a nor - noroeste.


3.3 TRABAJOS DE CONSOLIDACIÓN 3.3.5 CIMENTACIÓN Y ESTRUCTURA PORTANTE CIMENTACIÓN Tal y como se afirmó en el estudio patológico del edificio, no parece (a falta de obtener mas datos de catas y sondeos) que sea necesaria la intervención en la cimentación, pues la práctica totalidad de las lesiones estructurales pueden tener su origen en un mal funcionamiento de la superestructura. Sin embargo, existen dos situaciones en las que se propone intervenir sobre la cimentación del edificio:

Cimentación de los nuevos soportes en las torres de la fachada sur.

Posible recalce en los muros de la iglesia.

Cimentación soportes torres. En el primer caso, y con el objeto de no sobrecargar los muros de las torres (esto se explica con mas detalle en el siguiente capítulo), se incorpora una estructura vertical nueva e independiente a base de soportes de acero, que se cimentarán en zapatas de H.A. y enanos de H.A. hasta alcanzar la cota de solera. Con el objeto de centrar la zapata en el eje del soporte (y evitar excentricidades), se hace necesario zapear la cimentación existente. Sin embargo, y como alternativa, podrán construirse zapatas excéntricas (que no invadan la cimentación existente) y atarlas entre sí mediante vigas centradoras. De forma complementaria, y para unificar asientos en la medida de lo posible, se propone la conexión entre la cimentación existente y las nuevas zapatas mediante conectores de acero embebidos en mortero de resina.


Recalce de muros de la iglesia. Dado que es posible un cierto asiento diferencial entre los muros de la iglesia (mucho mas sobrecargados) y los muros adyacentes (ver patología del cuerpo central de la fachada norte), parece conveniente su recalce, con el objeto de aumentar la superficie de cimentación y reducir así los asientos. ESTRUCTURA PORTANTE Los muros del edificio presentan en general un buen estado, salvo una serie de fisuras ya detalladas en el estudio patológico, y el desplome de la fachada del paraninfo. Ambos casos se estudian a continuación: Fachada sur del paraninfo Dado que existe un mas que probable riesgo de la evolución del desplome de la fachada, es obligado en primer término asegurar y estabilizar dicho muro, para poder proceder luego a su reparación y atado definitivo. Para ello, y dada la altura del muro y su desplome hacia el exterior, se propone un sistema de estabilización mediante andamio lastrado en el exterior (sistema Superslim o Soldier). El sistema propuesto es fiable y ofrece dos importantes ventajas frente al atirantado por el interior:

No causa daños a los revestimientos y decoraciones interiores. Permite una operatividad plena en el espacio interior, cuya estructura ha de ser

rehabilitada antes de retirar el apeo. Las fijaciones del estabilizador de fachada al muro se realizarán mediante perforaciones pasantes realizadas en las pilastrillas de ladrillo revocado (de fácil reposición), a través de un perfil UPN vertical en ambas caras que reparta los empujes. De ésta forma, se minimizan los desperfectos causados en los paramentos interiores (por otra parte inevitables):

Detalle en planta de la conexión del andamio de apeo al muro de fachada (Paraninfo en planta 2ª)


En paralelo, y para anular el empuje activo que los pares de cubierta realizan sobre el muro, se hace necesario atirantar las cerchas o bien reforzar la unión par-tirante. Esta medida aunque de carácter auxiliar, permitirá trabajar con seguridad al anular el motivo del vuelco del muro, sin necesidad de proceder a la sustitución de la cubierta (que podrá realizarse en una fase posterior). Una vez estabilizado el muro y anulado el problema de origen, se procederá al cosido de las grietas producidas en los muros transversales. Esta operación no será necesaria en el nivel de planta baja, dado que la multifisuración provocada debe tratarse mediante otros sistemas. REPARACIÓN Y COSIDO DE GRIETAS Y FISURAS En todos los casos descritos de fisuración en muros de carga (prácticamente todos son en muros de fachada) y para asegurar su continuidad estructural, actuaremos en dos frentes: - Por un lado, el cosido desde el interior mediante barras embebidas (previa roza) a modo de

grapas y posterior relleno de la grieta mediante morteros especiales sin retracción. El problema estriba en que los paramentos interiores del paraninfo poseen revestimientos decorados que necesariamente habrá que alterar de forma puntual para la ejecución del grapado. El cosido desde el exterior es también recomendable, pero ello implicará la necesaria restitución de los ladrillos o mampuestos afectados.

- Por otro, y en fases posteriores, los nuevos forjados se conectarán al muro para zunchar el

mismo a diferentes niveles, lo que absorberá por tracción cualquier desplazamiento que se produzca en los mismos.

Detalle de conexión de los nuevos forjados a los muros Detalle de cosido en ladrillo


3.3 TRABAJOS DE CONSOLIDACIÓN 3.3.6 FORJADOS Y COMUNICACIONES VERTICALES En la rehabilitación de los forjados, se proponen dos técnicas: La sustitución, para aquellos forjados de madera en mal estado o con insuficiente rigidez y resistencia, que no soportan artesonados y por lo tanto es factible dicha operación. El refuerzo, en aquellos forjados con artesonados, en los que es prioritario su conservación mediante intervenciones lo menos traumáticas posibles. Así, éste apartado lo dividiremos en los siguientes puntos:

A. CUERPO CENTRAL DE LA FACHADA SUR (PARANINFO) A.1 Forjado de techo de planta baja A.2 Forjado de techo del Paraninfo A.3 Forjado de techo de planta 3ª (suelo de bajocubierta)

B. TORRES ESTE y OESTE DE LA FACHADA SUR

B.1 Forjados de techos de plantas baja, 1ª y 2ª B.2 Forjado de techo de planta 3ª (suelo de torreón)

C. ESQUINAS DE LA FACHADA NORTE D. RESTO DE FORJADOS DEL EDIFICIO E. TECHOS ABOVEDADOS F. SOLERAS

A. CUERPO CENTRAL DE LA FACHADA SUR A.1 Forjado de techo de planta baja. El forjado de techo de planta baja no parece estar en mal estado ni presentar deformaciones excesivas, por lo que se propone un sistema de refuerzo ejecutado por su cara superior, sin la necesidad de apeo previo, y sin la utilización de hormigones. Este sistema garantizaría la preservación del artesonado que cubre su cara inferior.

Esquema en sección del estado actual del forjado


Dado que el artesonado cuelga de las vigas principales, a través de un entramado de madera independiente colgado de las mismas, se propone la sustitución de las viguetas y el refuerzo de las vigas. Para ello, se procederá en primer término a desmontar desde el nivel superior las viguetas y el entarimado. Posteriormente, se reforzarán las vigas mediante perfiles UPN a ambos lados, unidas con pasadores roscados y angulares de apoyo en la viga de madera. En paralelo, se fijará a todo el perímetro un perfil UPN (mediante dados de hormigón). Sobre éste y sobre el refuerzo de viga, se apoyarán viguetas cada 60cm de perfil “C” de chapa conformada en frío. Finalmente, sobre éstas, se fijará un tablero estructural de fibra orientada, como base para el solado del suelo de paraninfo:

Esquema en planta del sistema de refuerzo

Detalles del sistema de refuerzo de forjado


Detalle del sistema de refuerzo del techo de planta baja

A.2 Forjado de techo del paraninfo Apuntalamiento: Dada la falta de seguridad que se desprende de la deformación de éste forjado, se hace preciso apuntalarlo de forma previa a su intervención. Con el objetivo de no atravesar con el apeo los artesonados de planta baja, se propone apear desde la cabeza de los muros interiores, a nivel de suelo de paraninfo, sin mas que descubrir el entarimado de suelo y recibir un durmiente de acero al muro mediante un mortero de nivelación y posteriores anclajes químicos (lo que anularía posibles tracciones detectadas en la parte superior de los arcos de planta baja). Se puede asegurar que dichos muros interiores tienen capacidad portante suficiente para asumir las cargas del apeo superior. Debido a la gran altura del apeo, habrá que utilizar perfiles tipo Soldier o Slim, debidamente arriostrados. Dichos puntales soportarán una estructura horizontal auxiliar sobre la que apoyará todo el entramado del forjado. Sustitución del forjado: El artesonado inferior está fijado tanto a las vigas celosía como a las vigas que apoyan entre éstas (pero no a las viguetas bajo el piso). Esto impide la sustitución completa del forjado sin desmontar el artesonado, por lo que sería necesario un refuerzo para conservar intacto dicho artesonado. Sin embargo, se hace especial hincapié en el gran deterioro de la estructura, cuyas grandes deformaciones han provocado un efecto de inestabilidad en el artesonado (es apreciable una considerable curvatura y multitud de fisuras), efecto que no se corregiría con un mero refuerzo.


Por ello, la mejor opción es desmontar dicho artesonado para su restauración en taller (a pie de obra), y proceder a una sustitución completa del forjado. Esto nos permite arriostrar los muros perimetrales con el de fachada (en vuelco) mediante una estructura mas fiable y resistente. Finalmente, se procedería al montaje del artesonado ya restaurado. El nuevo forjado que se propone, mantiene el mismo esquema que el existente, pero construido con chapa colaborante apoyada en vigas de acero laminado:

Esquema e planta de la solución adoptada y axonométrica de la estructura


A.3 Forjado de techo de planta3ª. Este forjado está constituido en el nivel de tirantes de las cerchas de cubierta, y se forma de viguetas apoyadas entre los tirantes. Presenta un estado relativamente bueno (seguro), por lo que se propone su sustitución una vez que el techo de paraninfo haya sido intervenido, y permita trabajar sobre él con suficiente seguridad. Esta fase se realizará una vez desmontada la cubierta (de la que forma parte), y una vez ejecutado servirá como tirante natural de la futura cubierta. El sistema que se propone es el mismo que el detallado para la sustitución de los forjados en las crujías exteriores del edificio, a base de forjado de chapa colaborante sobre vigas de acero laminado perfil IPE (en éste caso del tipo alveolado) perpendiculares a fachada. Dichas vigas, apoyadas en los muros, servirán de apoyo al forjado, y como tirantes de las cerchas nuevas de cubierta. Por ello, su cálculo deberá tomar en cuenta que forman parte de una estructura triangulada, y por lo tanto, no trabajarán como piezas a flexión apoyadas entre muros, lo que reducirá considerablemente la inercia necesaria, y en consecuencia, su canto. Se practica en un extremo, mediante perfiles embrochalados a las vigas, un hueco para la escalera de acceso desde la planta 3ª.

Esquema en planta de la estructura de forjado de techo de planta 3ª en el Paraninfo

(en el capítulo de intervenciones en cubiertas, se aportan mas detalles del sistema)


B. TORRES ESTE y OESTE DE LA FACHADA SUR Aunque el apeo de seguridad que aparece en la torre SW parece indicar una situación de riesgo de su estructura, ha quedado claro que las grietas objeto de tal apeo no comprometen en absoluto la estabilidad de la torre, por lo que se puede acometer una intervención a nivel estructural sin necesidad de medidas previas de consolidación. B.1 Forjados de techos de planta baja, 1ª y 2ª. En primer lugar, y con el objeto de anular el efecto que ha provocado la supuesta deformación de pandeo, es necesario dotar a la torre, en cada nivel, de una plano horizontal (diafragma) resistente que arriostre y ate los muros ante giros y desplazamientos horizontales. Tales diafragmas pueden constituirse mediante forjados de hormigón armado convenientemente anclados en su perímetro a los muros, pero apoyados en una estructura independiente adosada al muro existente, con el objeto de no sobrecargar la cara interior del mismo.

Esquema en planta del forjado (techos pltas. PB, 1ª y 2ª)

Posible eliminación de las mochetas mediante la inclusión parcial de los soportes en el muro


Detalle de anclaje de forjado a los muros perimetrales

Los forjados se construirán a base de chapa colaborante apoyado en vigas de acero transversales , las cuales apoyarán en un bastidor perimetral también de vigas IPE, éstas apoyadas en los soportes, que serán de acero laminado y situados en las esquinas y puntos medios de los muros NS de la torre B.2 Forjado de techo de planta 3ª (suelo de torreón). La estructura vertical de plantas inferiores, servirá en éste caso para transferir la carga del torreón (o un porcentaje de ella) directamente a la cimentación, y liberar así al muro del efecto que supuestamente ha provocado las lesiones. Para ello, se construirá un anillo de hormigón armado solidario con la ménsula de ladrillo que soporta los muros del torreón. Dicho anillo apoyará en los nuevos soportes antes detallados. En el forjado del torreón (techo de planta 3ª), las vigas principales apoyarán en la viga-zuncho de H.A. adosada a la ménsula del torreón. El resto del forjado seguirá el mismo esquema planteado para los niveles inferiores, con la salvedad de que las luces son menores, debido al retranqueo entre muros:

Detalle de ménsula bajo el torreón: Estado actual y refuerzo con nuevo forjado y viga de H.A. perimetral


Con el objeto de valorar el comportamiento tensional de los muros de la torre, se ha realizado un análisis por elementos finitos. Los gráficos a continuación muestran las tensiones verticales en la cara exterior del muro en dos supuestos: el estado actual y el estado reformado, con el arriostramiento provocado por los forjados y la descarga de forjados y parte del torreón proporcionada por la nueva estructura:

Estado actual: Tensiones verticales en cara exterior del muro


Estado rehabilitado: Tensiones verticales en cara exterior del muro

Se observa claramente que la intervención propuesta provoca tanto un descenso de las solicitaciones (sobre todo las de la parte alta provocadas por la excentricidad de la carga del torreón) como un estado mas homogéneo de las mismas. En definitiva, se anulan las tensiones excesivas que podrían suponer el origen de las lesiones que presenta la torre, y se consigue un comportamiento mas admisible de la estructura.


El anclaje de la capa de compresión se realizará siguiendo el mismo esquema que en el resto del edificio, mediante barras introducidas en la fábrica. Las perforaciones se rellenarán con mortero sin retracción. C. ESQUINAS DE LA FACHADA NORTE A la vista de los problemas detallados en el estudio patológico, se propone la sustitución de los forjados (o bien su refuerzo), siguiendo el mismo esquema constructivo propuesto en el apartado siguiente. En éste caso, las vigas de acero apoyarán en los muros en las mismas posiciones de las existentes de madera. Por último, se propone la construcción de un forjado bajocubierta (a nivel de los tirantes de la actuales cerchas) que permita dos funciones:

Servir de base a la nueva cubierta (en ésta zona) a base de palomeros de acero ligeros (ver intervención en cubierta)

Atar convenientemente todo el perímetro de los muros, y reducir así fisuraciones.


D. RESTO DE FORJADOS DEL EDIFICIO Una vez estudiados los casos especiales y aquellos en los que es preciso reforzar la estructura en vez de recurrir a su sustitución, a continuación se detalla el sistema genérico que se propone para la sustitución del resto de los forjados del edificio. La gran ventaja que aporta la sustitución, frente a un relativo mayor coste, es la de aportar un atado horizontal completo a nivel de los forjados, lo que sin duda aportará una mayor solidez del conjunto del edificio, y homogeneizará el comportamiento de los muros de carga. En el gráfico siguiente se muestra una zonificación con los diferentes tipos de intervenciones propuestas;

Esquema en sección del nuevo forjado en las alas del edificio


El sistema que se propone sigue el esquema estructural existente, de tal forma que en las crujías grandes se utilizarán vigas apoyadas en los muros, como soporte del nuevo forjado, que será de chapa colaborante. En las crujías mas estrechas (corredores del patio este), se apoyarán los forjados de chapa directamente en los muros, sin vigas transversales. Las vigas metálicas apoyarán en los muros en cajeados practicados al efecto de situar la carga lo mas cerca posible del eje de la sección útil del muro, y no crear por tanto, sobrecompresiones en la cara interior. El perímetro de los forjados quedará anclado a los muros mediante el mismo sistema planteado en otras zonas.

Detalle de la conexión del borde lateral de forjado al muro

Detalles de apoyo y conexión del forjado a los muros existentes


Aunque se ha propuesto una sustitución global de todos los forjados, es bastante probable que algunos de ellos presente un suficiente buen estado como para que sea viable su refuerzo. En éstos casos (que habrá que comprobar in situ), se propone un refuerzo activo de las vigas, que son las mas afectadas, mediante la colaboración de perfiles de acero conectados a las mismas. Sin embargo, las viguetas de forjado, debido a sus pequeñas luces, pueden ser reforzadas mediante la incorporación de una capa de compresión de hormigón armado y aligerado con arcilla expandida, utilizando un tablero fenólico o bien chapa de nervometal como encofrado. Para lograr la total colaboración entre hormigón y vigueta, se dispondrán conectores en las cabezas de las mismas.

Detalle de refuerzo alternativo E. TECHOS ABOVEDADOS. Únicamente en el atrio de la iglesia, existe una zona donde las bóvedas presentan claros síntomas de rotura y es necesario intervenir sobre ellas. El sistema mas eficaz, una vez desmontado el suelo superior, es el gunitado con hormigón aligerado con arcilla expandida, sobre un mallazo electrosoldado previamente anclado mediante resinas en el trasdós de la bóveda.

Se propone también el refuerzo en el arranque, mediante un anillo de hormigón armado, anclado mediante varillas al muro perimetral, que zunchará todo el arranque de la bóveda, impidiendo cualquier anomalia. Esta solución podría adoptarse en los techos del sótano (también abovedados), de constatarse algún tipo de lesión.


F. SOLERAS Como ya se describió en el capítulo de patología, existen dos situaciones diferentes a considerar en lo que se refiere al estado de las soleras del edificio. Por un lado, las soleras del sótano presentan un buen estado salvo las humedades características. Por otro, las soleras de los corredores de los patios, además de humedades, presentan abombamientos y roturas. En ambos casos, se propone levantar dichas soleras para posibilitar la construcción de galerías perimetrales de alojo de las conducciones principales y nueva red de saneamiento, así como para instalar una red de drenaje que palie el problema detectado en los muros de fachada a patio (y en las propias soleras). El sistema propuesto es del tipo “iglú”, formado a base de casetones plásticos modulares que apoyan directamente en el terreno, y que sirven de encofrado perdido para un relleno de hormigón con mallazo. Queda asegurado así, el perfecto aislamiento entre el hormigón y el terreno.


3.3 TRABAJOS DE CONSOLIDACIÓN 3.3.7 CUBIERTAS Para el estudio de la rehabilitación de las cubiertas, hay que considerar los siguientes factores: El estado general de la estructura es bueno, salvo zonas concretas en las que el fallo

estructural parece ser el origen de la mayoría de las lesiones de fachada registradas. La sustitución de los tableros cerámicos existentes parece inevitable, dado su considerable

peso e inadecuación a las funciones de aislamiento e impermeabilización. La posibilidad de la sustitución (o por lo menos la de desmontar la cubierta para la

reparación parcial de las cerchas dañadas), supone una ventaja importante en el contexto de la organización de la obra, al proporcionar la posibilidad de operar con grúa en la rehabilitación de la estructura de forjados.

Por esto, se plantea actuar de forma diferente en las distintas zonas a considerar, que son:

A. Cubiertas sobre dormitorios (alas intermedias del edificio) B. Cubierta sobre el Paraninfo C. Cubierta sobre los cuerpos de esquina de la fachada norte

D. Resto de las cubiertas A. CUBIERTAS SOBRE DORMITORIOS Se propone la sustitución total de la estructura de cubierta, manteniendo su geometría y materiales de estructura (quizá se podría plantear la recuperación de las tejas, dada su buena calidad y estado). Se ha constatado que existen numerosas cerchas en éstas alas cuyo estado es bueno y de buena construcción, aquejándose unicamente de pudriciones parciales en los pares a nievl de los apoyaos. Sin embargo, el tablero cerámico deberá ser sustituido por otro mas ligero tipo sándwich, que cumpla los requisitos de aislamiento térmico y acústico exigibles en éste tipo de edificación. De igual forma, se propone sustituir el remate almenado de la cumbrera, por un sistema mas ligero a base de un bastidor metálico con una malla sobre la que gunitar un mortero para obtener idéntica geometría a la existente. Aunque desde el punto de vista funcional, la estructura existente (debidamente reparada) es perfectamente viable (con las debidas “adaptaciones”), quizá el argumento mas sólido que avala su sustitución es el excesivo coste de reparación, consolidación y refuerzo de la estructura actual, a lo que hay que sumar la dificultad que añade a la propia organización del resto de la obra el hecho de mantener dicha cubierta (circulación de materiales, hormigonados, etc)


esquema en alzado de rehabilitación de cubierta

Detalle de sección por caballete Detalle de refuerzo en apoyo de cercha

B. CUBIERTA DEL PARANINFO Una vez realizado el nuevo forjado del techo del Paraninfo, se procederá a la sustitución del forjado del techo de la planta 3ª, y en paralelo, a la sustitución de la cubierta existente, claramente dañada y origen del conjunto de lesiones observadas en el Paraninfo. Las vigas principales de dicho forjado (como ya se explicó en el capítulo anterior), constituyen los tirantes de las nuevas cerchas de cubierta, manteniendo así el esquema estructural existente. Toda la perfilaría de pares se realizará en perfil conformado en frío tipo C o I. Finalmente, sobre los pares de cubierta se colocarán correas de perfil de chapa conformada, sobre las cuales se fijará el conjunto de tablero y tejas, cuyo detalle es idéntico al propuesto


para la rehabilitación del resto de las cubiertas del edificio que se detalló en el apartado anterior.

Esquema en planta y sección de la estructura de cubierta del Paraninfo C. CUBIERTA SOBRE LOS CUERPOS DE ESQUINA DE LA FACHADA NORTE Dado que se ha propuesto (capítulo anterior) la construcción de un forjado en el techo de bajocubierta de éstas zonas (posible utilización como zona de instalaciones), y como la cubierta presenta un mal estado, se propone su sustitución por una estructura ligera de perfiles de chapa conformada apoyados en dicho forjado a modo de palomeros. Sobre los pares se fijarán correas de chapa tipo “omega”, que servirán de base para tablero y tejas, siguiendo el mismo esquema que se explicó en el primero punto.


Esquema en planta y sección de la cubierta D. RESTO DE LAS CUBIERTAS El resto de las cubiertas, podrán mantenerse con las necesarias reparaciones que afectarán a los siguientes puntos: Refuerzo de los apoyos en muros (normalmente afectados de pudriciones) Atirantado de las cerchas mediante acero postensado, anclado a los refuerzos de apoyos. Reparación puntual de las piezas dañadas por pudrición o ataques xilófagos mediante

pletinas de acero o perfiles en ambas caras). Sustitución de las correas por perfiles de chapa conformada en frío (con secciones tipo C u

omega en función de las luces). Sustitución del tablero cerámico siguiendo idéntico sistema al explicado anteriormente. Sustitución del remate almenado de la cumbrera, siguiendo idéntico sistema al ya explicado.

Universidad Pontificia de Comillas - Seminario Mayor · Sobre ellas peina un forjado de viguetas de...

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