Turzi Mundo Brics

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MARIANO TURZI LAS POTENCIAS EMERGENTES C i CLAVES PARA TODOS COLECCIÓN DIRIGIDA POR JOSÉ NUN CAPITAL INTELECTUAL C i COLECCIÓN CLAVES PARA TODOS MUNDO BRICS MARIANO TURZI COLECCIÓN CLAVES PARA TODOS La sigla BRICS alude al club de las naciones emer- gentes líderes que conforman Brasil, Rusia, India, China y, más recientemente, Sudáfrica. El acró- nimo fue acuñado en noviembre de 2001 por Jim O'Neill, jefe del departamento de investigaciones económicas globales de la casa Goldman Sachs, de inversión estadounidense. El objetivo de este libro –escrito por el experto en relaciones inter- nacionales Mariano Turzi– apunta a identificar los mercados que en las próximas décadas ofrecerán a sus clientes tasas de retorno a la inversión por encima del promedio. Se supone que la indus- trialización que tiene lugar en China e India junto a la creciente urbanización de sus poblaciones va a generar una demanda abastecida por la oferta brasileña y rusa de recursos naturales. Según las proyecciones este impulso estructural a la demanda agregada inaugurará un nuevo e imprevisible ciclo económico. Los BRICS demostraron ser mucho más que simples destinos de inversión o centros de producción y consumo para convertirse en nue- vos polos de poder global. MARIANO TURZI Fue becario Fulbright. Es MA en Estudios Estraté- gicos y Ph.D. en Estudios Internacionales de la School of Advanced International Studies (SAIS), Johns Hopkins University (Washington DC). Actual- mente es profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad Torcuato Di Tella (Buenos Aires). ÚLTIMOS TÍTULOS LA SOMBRA DEL NARCOTRÁFICO Una amenaza global Juan Cruz Vazquez LAS PYMES Y EL DESARROLLO Desempeño presente y desafíos futuros Matías Kulfas PRÓXIMOS TÍTULOS UN RADICAL ENTRE LAS CUERDAS Néstor Restivo Horacio Rovelli CONCENTRACIÓN Y EXTRANJERIZACIÓN Pablo Manzanelli Daniel Azpiazu Martín Schorr C i CAPITAL INTELECTUAL CLAVES PARA TODOS DIRIGIDA POR JOSÉ NUN MUNDO BRICS Tapa BRICS.qxp 17/6/11 17:41 Página 1

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MARIANO TURZI

LAS POTENCIAS EMERGENTES

CCii

CLAVES PARA TODOSCOLECCIÓN DIRIGIDA POR JOSÉ NUN

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TELECTUAL

CC ii COLECCIÓN CLAVES PARA TODOS MUNDO BRICS MARIANO TURZI

COLECCIÓNCLAVES PARA TODOS

La sigla BR

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alude al club de las naciones emer-

gentes líderes que conforman B

rasil, Rusia, India,

China y, m

ás recientemente, S

udáfrica. El acró-nim

o fue acuñado en noviembre de 2001 por Jim

O'N

eill, jefe del departamento de investigaciones

económicas globales de la casa G

oldman S

achs,de inversión estadounidense. El objetivo de estelibro –escrito por el experto en relaciones inter-nacionales M

ariano Turzi– apunta a identificar losm

ercados que en las próximas décadas ofrecerán

a sus clientes tasas de retorno a la inversión porencim

a del promedio. S

e supone que la indus-trialización que tiene lugar en C

hina e India juntoa la creciente urbanización de sus poblaciones vaa generar una dem

anda abastecida por la ofertabrasileña y rusa de recursos naturales. S

egún lasproyecciones este im

pulso estructural a la demanda

agregada inaugurará un nuevo e imprevisible ciclo

económico. Los B

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ostraron ser mucho

más que sim

ples destinos de inversión o centrosde producción y consum

o para convertirse en nue-vos polos de poder global.

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gicos y Ph.D. en Estudios Internacionales de la

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ente es profesor de Relaciones Internacionales enla U

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MUNDO BRICS

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MUNDO BRICSLAS POTENCIAS EMERGENTES

CLAVES PARA TODOSCOLECCIÓN DIRIGIDA POR JOSÉ NUN

MARIANO TURZI

CAPITAL INTELECTU

ALC

i

Page 3: Turzi Mundo Brics

Director

José Nun

Coordinación

Cecilia R

odriguezEdición

Luis Gruss

Corrección

Aurora C

hiaramonte

Diagram

aciónVerónica Feinm

annIlustración

Miguel R

epProducción

Norberto N

atale

Derechos exclusivos de la edición en castellano reservados para todo el m

undo: ©

2011, Mariano Turzi

© 2011, C

apital Intelectual

Paraguay 1535 (1061) Buenos A

ires, Argentina

Teléfono: (+54 11) 4872-1300 / Fax: (+

54 11) 4872-1329w

ww

.editorialcapin.com.ar

/ [email protected]

.ar1

ªedición: 3.000 ejemplares

Impreso en A

rtesud, Concepción A

renal, Cap. Fed., en enero de 2011. D

is-tribuye en C

ap. Fed. y GB

A: Vaccaro, Sánchez y C

ía. S.A.

Distribuye en interior: D

.I.S.A. Q

ueda hecho el depósito que prevé la ley 11.723.Im

preso en Argentina. Todos los derechos reservados. N

inguna parte de estapublicación puede ser reproducida sin perm

iso escrito del editor.

Pedidos en Argentina: pedidos@

capin.com.ar

Pedidos desde el exterior: [email protected]

.ar

CAPITAL INTELECTU

ALC

i

ÍNDICE

Introducción9

Capítulo uno

Economía y ascensos

13

Capítulo dos

El sistema internacional

31

Capítulo tres

Contexto m

undial69

Capítulo cuatro

Vuvuzelas en el Bric

77

Capítulo cinco

El futuro85

Bibliografía

91

El autor95

Turzi, Mariano

Mundo B

RIC

S: las potencias em

ergentes1a ed., B

uenos Aires, C

apital Intelectual, 2011.96 p., 20x14 cm

. (Claves para todos, dirigida por José N

un Nº 117)

ISB

N 978-987-614-293-9

1. Política Internacional. I. Título C

DD

327.1

327.1C

DD

Page 4: Turzi Mundo Brics

El BR

IC es el club de las naciones em

ergentes líderes que con-form

an Brasil, R

usia, India y China. El acrónim

o fue acuñado ennoviem

bre de 2001 por Jim O

’Neill, jefe del departam

ento de inves-tigaciones económ

icas globales de la casa de inversión nortea-m

ericana Goldm

an Sachs. El objetivo de esta generalización era

y es identificar los mercados que en las próxim

as décadas ofre-cerán a sus clientes tasas de retorno a la inversión por encim

a delprom

edio. Se supone que la industrialización que tiene lugar en

China e India junto a la creciente urbanización de sus poblaciones

generará una demanda abastecida por la oferta brasileña y rusa

de recursos naturales, en especial de comm

odities y energía. Segúnlas proyecciones este im

pulso estructural a la demanda agregada

global inaugurará un nuevo ciclo económico global.

MU

ND

O B

RIC

S9

INTRODUCCIÓN

Page 5: Turzi Mundo Brics

MU

ND

O B

RIC

S11

Sin em

bargo los BR

ICs dem

ostraron ser mucho m

ás que sim-

ples destinos de inversión o centros de producción y consumo.

Las cuatro naciones coordinan cada vez más sus posiciones diplo-

máticas, convirtiéndose en un bloque con creciente influencia en

el sistema internacional. Los nuevos polos de poder global bus-

can transformar las reglas del orden vigente, reescribir los pro-

cedimientos para la tom

a de decisiones y modificar las estructuras

de los organismos financieros internacionales.

El libro está organizado siguiendo un esquema de razona-

miento que hace foco prim

ero en el sistema y luego en el actor.

En el primer capítulo estudiam

os la reconfiguración del sistema

económico global que se aceleró con el com

ienzo del siglo xxi.Esta transform

ación significó el ascenso de los denominados paí-

ses emergentes, con los B

RIC

s liderando el proceso por su dimen-

sión y escala. La primera sección la dedicam

os a observar las carac-terísticas de la nueva econom

ía global y la dirección de los cambios

en curso. En la segunda sección analizamos el lugar que ocupan

los BR

ICS

en esa estructura. El capítulo dos estudia la estructuradel poder m

undial actual, en la cual existe una creciente distribu-ción y difusión del poder. ¿Q

ué ocurre con el orden internacionalcuando el poder cam

bia de manos? Para responderlo explorare-

mos cuál será el im

pacto del surgimiento de estos nuevos actores

en el sistema. O

bservaremos el com

portamiento del B

RIC

como

un nuevo actor colectivo unificado en la arena internacional. En laprim

era sección analizamos la configuración de las relaciones inter-

nacionales contemporáneas y el estado del (des)orden global

actual. En la segunda dirigimos nuestra atención al B

RIC

como

actor colectivo, prestando especial atención a sus intenciones ycapacidades para m

antener, modificar o subvertir el orden interna-

cional establecido. Siguiendo este esquem

a de análisis dedica-m

os el capitulo tres a las posibles trayectorias que puede adoptar

10M

AR

IAN

O TU

RZI

la interacción entre el BR

IC y el sistem

a internacional. El nivel yla cantidad de conflictos que deba atravesar el m

undo en lospróxim

os años dependerán en gran parte de la manera en que se

desarrolle esta interacción. En el capítulo cuatro presentamos la

novedad de 2011: la incorporación de Sudáfrica al bloque, anun-

ciada a principios de este año. ¿Por qué este país? ¿Por qué ahora?¿C

uál es la lógica? ¿Qué nos dice del B

RIC

? En el quinto capítuloanalizam

os los impactos que estas nuevas dinám

icas tendrán sobrelas relaciones internacionales en los próxim

os años.

CU

AD

RO

1.MA

PA D

EL BR

IC

Page 6: Turzi Mundo Brics

A partir de 2000 el balance de la econom

ía global comenzó a cam

-biar. Ese año los países avanzados representaron el 63%

del PBI

mundial. S

olo los miem

bros del G-7 (A

lemania, C

anadá, EstadosU

nidos, Francia, Italia, Japón y el Reino U

nido) eran responsablesdel 49%

de los bienes y servicios finales producidos por la eco-nom

ía. Pero desde entonces la participación en el producto glo-bal de las econom

ías avanzadas cayó rápidamente. A

l mism

otiem

po los países emergentes com

enzaron a ganar cada vez más

terreno. Al cabo de una década, en 2011, las econom

ías avanza-das habían caído al 52%

global, y los países emergentes habían

incrementado su participación al 47%

; un aumento del 27%

en diezaños. S

egún el consenso de las proyecciones de los organismos

internacionales, la tendencia se mantendrá en las próxim

as déca-das. En algún punto entre 2012 y 2013 las estadísticas de los orga-

MU

ND

O B

RIC

S13

CAPÍTULO UNOECONOMÍA Y ASCENSOS

Page 7: Turzi Mundo Brics

• Los países de desarrollo intermedio, en desarrollo o en vías de desa-

rrollo son los que se conocían como subdesarrollados. Los indicadores

que los colocan en esta categoría son: altos niveles de desempleo, corrup-

ción y desigualdad, bajo ingreso per cápita, elevada deuda externa, depen-dencia tecnológica, económ

ica y comercial. Las econom

ías emergen-

tes, mercados em

ergentes o naciones recientemente industrializadas, son

un subgrupo –más selecto– form

ado solamente por los que se caracte-

rizan por un especial dinamism

o económico. Q

uedan afuera los paísesm

ás pobres, los sumergidos que no logran dar con el desarrollo y el

crecimiento sostenido de países, com

o Afganistán, H

aití, Ruanda, Benín,Som

alia, Etiopía o Myanm

ar.

¿Cuándo com

enzó este el cambio en la econom

ía global?D

urante la década de 1990, la globalización atravesó un períodode fuerte expansión. El derrum

be de la Unión S

oviética habíaelim

inado de la ecuación global la posibilidad de conflagración agran escala, abriendo los sistem

as económicos y políticos de los

países en la órbita comunista y generando un im

perativo neoli-beral de com

ercio e inversión a través de las fronteras. En su per-m

anente búsqueda de reducción de costos, las compañías m

ul-tinacionales aprovecharon la liberalización com

ercial (movim

ientode bienes) y financiera (m

ovimiento de capitales) para globalizar

sus operaciones y a relocalizar su producción hacia los países endesarrollo. El vertiginoso ritm

o de innovación en las tecnologíasde la inform

ación y las comunicaciones dio al proceso una escala

y velocidad sin precedente en la historia. A

ho

ra qu

e ya sabem

os el cu

ánd

o, veam

os có

mo

se pro

-dujo la doble transform

ación en la estructura y en la dinámica de

la economía internacional. M

ayor producción en los países emer-

gentes significó mayores tasas de crecim

iento, más trabajos y

MU

ND

O B

RIC

S15

nismos internacionales estim

an que se revertirá la tendencia: laseconom

ías emergentes constituirían m

ás del 50% del producto

global. Mientras tanto se proyecta una tasa de actividad de 2.5%

anual en las economías avanzadas para 2011 y 2012 y se prevé un

crecimiento de 6.5%

en las economías em

ergentes.N

os encontramos hoy en un m

omento de configuración de una

nueva estructura económica internacional en la que los em

ergen-tes tienen una participación dom

inante en el producto global. Elm

ayor crecimiento económ

ico en las economías de esos países se

desprende de una combinación favorable de saldos dem

ográficospositivos, ventajas com

parativas en abundancia de recursos natu-rales, ventajas com

petitivas en costos de producción –mano de

obra y logística– y grados cada vez más aceptables de estabilidad

macroeconóm

ica. Eso hace que además de la estructura, tam

biénla dinám

ica esté cambiando, ya que las econom

ías emergentes cre-

cen a tasas superiores a las de las economías avanzadas.

DES

AR

RO

LLAD

OS

, EMER

GEN

TES, S

UM

ERG

IDO

SEn la actualidad existen m

últiples categorías económicas internaciona-

les. Tanto organismos internacionales –B

anco Mundial, Fondo M

oneta-rio Internacional, O

rganización para la Cooperación y el D

esarrollo Eco-nóm

icos– como la banca privada internacional –M

organ Stanley C

apitalInvestm

ent(MSCI), D

ow Jones, FTSE– tienen sus m

edidas propias. Perohay una línea divisoria principal com

ún a todas, que separa países desa-rrollados de países en desarrollo.

• Las economías desarrolladas, de altos ingresos o avanzadas, son

aquellas con altos niveles de ingreso per cápita (promedio a lo largo de

diez años), estructuras industriales terciaria (servicios) y cuaternaria (inves-tigación, innovación, alta tecnología) desarrolladas, diversificación de lasexportaciones e integración al sistem

a financiero global.

14M

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RZI

Page 8: Turzi Mundo Brics

ron reservas y construyeron mecanism

os de defensas duranteépocas de bonanza. La consolidación fiscal y la credibilidad m

one-taria llegaban para quedarse.

La prueba que dio más fuerza a la transform

ación de los paísesem

ergentes fue la crisis financiera de 2008. El poder de adaptaciónque dem

ostraron en un mom

ento de caída de la demanda y la pro-

ducción consolidó su preeminencia en el sistem

a económico inter-

nacional. Beneficiada por la m

ayor demanda dom

éstica, posicio-nes fiscales m

ás sólidas y una menor exposición de sus sistem

asfinancieros a los activos tóxicos europeos y norteam

ericanos,larecuperación en el m

undo emergente parece estar m

ás consoli-dada. Por el contrario, las econom

ías del mundo desarrollado care-

cen de una demanda endógena que pueda sostener un crecim

ientode m

agnitud semejante. Los em

ergentes sufrieron menos la crisis,

salieron más rápido de ella y retom

aron el crecimiento con m

ásfuerza. Ya con los efectos de las políticas de estím

ulo desvane-ciéndose se espera una recuperación en dos velocidades y con dosclases de dificultades m

acroeconómicas diferenciadas. El creci-

miento en los países desarrollados es tenue e insuficiente para reac-

tivar el empleo, lo cual significa un

aumento de tensiones internas

de los países de la periferia de la zona del euro como G

recia, Irlanda,España y Portugal. Para los países em

ergentes, los desafíos prin-cipales son las presiones inflacionarias, el recalentam

iento y la apre-ciación de sus m

onedas por la entrada de capitales y los altosprecios de los com

modities que exportan.

EMER

GEN

TES V

IPPara Jim

O´N

eill, dentro del conjunto de las economías em

ergen-tes se destacaban los B

RIC

s. Los cuatro países compartían ciertas

características –geografía, población, tasas de crecimiento– que

los ponían a la vanguardia del grupo emergente. Para la década

MU

ND

O B

RIC

S17

mayores ingresos para las poblaciones locales. Las oportunida-

des se encontraban más en el sector urbano que en el rural, por

lo cual se produjo una transferencia de los recursos humanos de

un sector al otro. En la práctica, implicó el éxodo del cam

po a laciudad. Esta rápida y m

asiva urbanización movilizó m

ás aún losrecursos de las econom

ías emergentes vía proyectos de infraes-

tructura, servicios básicos, energía y transporte. El aumento sos-

tenido del nivel de ingresos más los m

ayores servicios y opor-tunidades derivados de la vida en la ciudad significaron una m

ejoraen las condiciones de vida. Por ejem

plo, solamente en C

hina esosignificó que en treinta años unos 627 m

illones de personas aban-donaran la pobreza; lo cual equivale a unas 57 m

il personas pordía. Los nuevos consum

idores de las clases populares de paísesde enorm

es poblaciones –42% de toda la población m

undial viveen alguno de los B

RIC

– hicieron crecer los mercados internos. S

eprodujo así un desplazam

iento del poder de compra desde los

países avanzados hacia las crecientes clases medias en los paí-

ses emergentes. Las econom

ías emergentes están im

pulsandocada vez m

ás el consumo global. Es por ello que el resultado m

acroes una participación creciente en la dem

anda agregada global.Eso las convierte en los nuevos engranajes de la econom

ía mun-

dial y por eso tienen tasas de crecimiento m

ás altas. Y vuelve a

empezar el ciclo.Pero ello fue posible por el aprendizaje que tuvo lugar en los

mercados em

ergentes luego de las crisis monetarias de la segunda

mitad de la década de 1990. H

asta ese mom

ento parecía que losm

ercados emergentes estaban definidos esencialm

ente por la altadependencia del financiam

iento externo, la inestabilidad de laspolíticas m

acroeconómicas y la convertibilidad incom

pleta de susm

onedas (control de capitales y tratamiento diferenciado de las

inversiones). No m

ás. A partir del nuevo siglo los gobiernos se vol-

vieron más estables y prudentes en el m

anejo fiscal, acumula-

16M

AR

IAN

O TU

RZI

Page 9: Turzi Mundo Brics

GR

ÁFIC

O 1.PA

RTICIPA

CIÓ

N EN

LA EC

ON

OM

ÍA G

LOB

AL D

E LOS

BR

ICS

Fuente: Elaboración propia en base a datos del WEO

del FMI

GRÁ

FICO 2.TA

SAS D

E CRECIMIEN

TO D

EL PBI, MU

ND

O VS. BRIC (2000-2011)

Fuente: Elaboración propia en base a datos del FMI y el B

anco Mundial

MU

ND

O B

RIC

S19

2000-2010, pronosticaba un aumento creciente del peso relativo

de los BRICs en la economía global y proponía reorganizar los foros

internacionales –puntualmente el G

7– para acomodar el nuevo

peso de los representantes de los BR

ICs. En 2003 O

’Neill volvió a

enfatizar el potencial de los cuatro países para convertirse en “unafuerza dom

inante en la generación del crecimiento hacia el año

2050”. Para lograrlo deberían mantenerse los niveles de apertura

económica que estaban atrayendo los flujos com

erciales y finan-cieros. Para sostener la trayectoria ascendente sería necesario tam

-bién consolidar un entorno institucional eficiente respaldado porpolíticas m

acroeconómicas estables; el estudio proyectaba que el

progreso de los BR

ICs m

arcaría de manera “crítica” la evolución

de la nueva estructura económica global.

La historia estuvo de acuerdo con las predicciones del eco-nom

ista irlandés. Brasil, R

usia, India y China com

binados aumen-

taron entre 2000 y 2010 su participación en el producto global más

rápidamente que el conjunto de los em

ergentes. De hecho, en el

período 2000-2008, esas naciones fueron responsables del 30%del crecim

iento de la economía global, la m

itad de la contribuciónde las econom

ías emergentes. Los cuatro ya representan un cuarto

del PBI global, en una tendencia que va en aumento. Los BRICs no

solamente crecieron m

ás que el promedio de la econom

ía entre 1990y 2010 (casi 6%

promedio frente al 2.5%

de la economía m

undial)sino que adem

ás mostraron m

ayor resistencia en los mom

entos dela crisis económ

ica de 20081.

18M

AR

IAN

O TU

RZI

1. Recordem

os que los números de los B

RIC

s, al ser el promedio de cuatro países,

disimulan las diferencias que existen entre ellos. Para el año 2009 la tasa de cre-

cimiento china fue de 8.7%

, mientras que R

usia sufrió una caída del 7.9%.

Participación en la economía global

BRIC

China

India

RusiaBrasil

% Economía global (PPP)

70%

13.04%15.03%

16.37%

24.36%

28.78%60%

50%

40%

30%

20%

10%0%

19901995

20002010

2015BRIC

Mundo

9.0

7.0

5.0

3.0

1.0

-1.0

-3.0

20002001

20022003

20042005

20062007

20082009

20102011

Tasas de crecimiento global, prom

edio global vs promedio B

riCs

Page 10: Turzi Mundo Brics

autoidentificación subjetiva. Rusia form

a junto a Europa orientalel m

undo ortodoxo. Brasil pertenece al m

undo latinoamericano,

diferenciado de la civilización occidental. China es la m

atriz y elEstado base de la civilización sínica, al tiem

po que India es el mile-

nario fundamento de la civilización hindú.

Tampoco el BRIC es un grupo basado en la coincidencia de for-

mas de organización de la com

unidad política o unethos

sociopo-lítico com

partido, como en los años de la guerra fría lo fueron el Pacto

de Varsovia (soviético) o la Organización del Tratado del A

tlánticoN

orte (OTA

N). El m

odelo político institucional chino combina la repú-

blica popular de partido único con un Estado unitario. Existe un solocentro de poder político. Las autoridades locales son delegadas. Bra-sil, Rusia e India son repúblicas federales, en las cuales las unidadessubnacionales de la división política del territorio –los veintiséis esta-dos brasileños, los veintiocho estados indios y los ochenta y tres suje-tos rusos– tienen m

ayor autonomía y poder. Esa desconcentración

territorial trae aparejada una participación más directa, y tal vez allí

radique una de las claves por las que son democracias. En cuanto

a las estructuras gubernamentales de representación, Rusia tiene un

sistema sem

ipresidencial que combina presidente y prim

er minis-

tro. En el sistema presidencialista brasileño el poder legislativo y el

poder ejecutivo son independientes y es el voto popular quien loselige por separado. Pero en el sistem

a parlamentario indio, es el

poder legislativo quien elige al primer m

inistro.S

i nos circunscribiésemos a las variables económ

icas –las queoriginalm

ente se habían utilizado para concebir al BR

IC com

o blo-que– veríam

os queno todos los m

iembros han m

ostrado unaespectacular tasa de crecim

iento. Cuando desagregam

os el cre-cim

iento de 5.7% prom

edio del BR

IC durante el período 2000-2010

se pueden observar las divergencias que existen entre sus miem

-bros: 3.7%

Brasil, 5.2%

Rusia, 7.3%

India y 9.9% C

hina. Se ve cla-

ramente que la variación es grande: China ha crecido casi tres veces

MU

ND

O B

RIC

S21

Los BR

ICs com

parten entre sí ciertos factores geográficos –exten-siones territoriales de dim

ensiones continentales ricas en recur-sos naturales– y un perfil dem

ográfico –combinados los cuatro

países alcanzan casi tres mil m

illones de personas de un total glo-bal de siete m

il millones. Pero no está claro cuál es el denom

ina-dor com

ún de esta lista de países que en principio no parece quetengan dem

asiado que ver entre sí. O´N

eill había concebido al cuar-teto m

ás que nada basándose en la prognosis de que el PBI real

de estas economías crecería m

ás rápidamente que el de otras eco-

nomías. ¿Q

ué es lo que convierte a cuatro países como B

rasil,R

usia, India y China en un agrupam

iento unificado? En principio no es la proxim

idad geográfica.La cercanía espacialestá en la base de los procesos de integración com

ercial regional–zonas de libre com

ercio, uniones aduaneras, mercados com

u-nes– ya que pueden esperarse ganancias en eficiencia por especia-lización y reducción de costos por ganancias de escala y coordi-nación logística. Pero los BRICs no son un grupo com

o el Mercosur,

la Unión Europea, A

SEA

N o la U

nión Africana cuya base es la con-

tigüidad de las unidades que lo forman. B

rasil representa el 43%del área sudam

ericana y Rusia es un país transcontinental euro-

asiático. China e India son claram

ente asiáticos, aunque para algu-nos asuntos geoeconóm

icos sea importante distinguir entre el

este asiático chino y el subcontinente indio. Los BR

ICs están dise-

minados a lo largo de tres continentes y solam

ente China tiene

fronteras con dos de sus otros socios emergentes.

Brasil, R

usia, India y China pertenecen a civilizaciones dife-

rentes con raíces culturales propias. Según lo explica Samuel H

un-tington, los elem

entos constitutivos de las civilizaciones sonsangre, lengua, religión y form

a de vida; también los valores, nor-

mas y form

as de pensamiento. Es la especial am

algama entre cos-

movisión, costum

bres o cultura (tanto material com

o inmaterial).

Los BR

ICs no com

parten este grado más am

plio de identidad o

20M

AR

IAN

O TU

RZI

Page 11: Turzi Mundo Brics

Si bien los BRICs son todos países con grandes poblaciones, Rusiano figura entre las cinco naciones con m

ás habitantes. La ON

U estim

aque para 2050 India será el país m

ás habitado del planeta, seguidode China. Brasil habrá caído al puesto ocho y Rusia no estará entrelos diez países m

ás poblados. Es decir que los BRIC no comparten un

similar perfil dem

ográfico. India se encuentra al inicio del ciclo de fer-tilidad declinante pero aún con población en aum

ento. China y Bra-sil exhiben bajas tasas tanto de m

ortalidad como de fertilidad, en una

tendencia hacia la estabilización de su población. Rusia es el que seencuentra en el estadio m

ás avanzado de la transición demográfica,

con números de población declinante y tasas de fertilidad por debajo

del nivel de reemplazo. La fuerza de los BRICs tam

poco parece resi-dir en las proyecciones de aum

ento de su población económicam

enteactiva. La tasa de dependencia –la relación entre población que nogenera ingresos y la población productiva– es una m

edida de dina-m

ismo económ

ico: a medida que la tasa se increm

enta, aumenta la

carga sobre las posibilidades de consumo, ahorro e inversión. D

urantelos próxim

os veinte años, hasta 2030, la ON

U proyecta que la pobla-

ción activa china se incrementará en diez m

illones de personas, unacifra insignificante en un país de una población total de 1400 m

illo-nes. Brasil incorporará veinte m

illones de trabajadores, la mism

a cifraen la que la población activa rusa se contraerá. India sufrirá un cre-cim

iento diez veces superior y deberá acomodar 240 m

illones de nue-vos buscadores de trabajo; un desafío que im

plicaría la creación detreinta m

il nuevos puestos de trabajo por día. Tam

poco los BR

ICs com

parten el mism

o grado de integracióna la econom

ía mundial. S

i tomam

os la medida estándar de aper-

tura comercial de la O

rganización Mundial del C

omercio –expor-

taciones más im

portaciones sobre el producto total– sería difícilpensar en los B

RIC

s como un grupo: C

hina es el más abierto,

con un coeficiente de 58 sobre 100, seguido de Rusia con 51, des-

pués India con 46 y por último B

rasil, con apenas 24, representa

MU

ND

O B

RIC

S23

más rápido que Brasil y casi el doble de rápido que Rusia; al tiem

poque India casi dobla el prom

edio brasileño y supera al ruso porcasi un tercio. Pero las tasas de crecim

iento porcentuales de unaeconom

ía no revelan las grandes divergencias que existen en tér-m

inos absolutos. Para tener una imagen m

ás ajustada de la reali-dad se debe contar el tam

año de las economías. Por ejem

plo, en2010 C

hin

a creció ap

enas p

or en

cima d

el 10% e In

dia casi el

10%. Pero esas tasas sim

ilares se dieron sobre una economía china

que –en paridad de poder adquisitivo– ascendía a casi diez billo-nes de dólares, y una india de cuatro billones. Lo m

ismo pasa

cuando se agrega la población y se divide así el producto: Brasil

tuvo en 2010 una renta por habitante de casi 11 mil dólares y R

usiade casi 16 m

il, aunque el gigante sudamericano haya crecido m

ásdel 7%

y Rusia ni siquiera el 4%

.

EL TAM

O IM

PORTA

PERO

NO

DEFIN

E

Nota: A

un con la escisión de Sudán del S

ur en 2011, Sudán conserva el décim

o puesto ensuperficie con 1.8 m

illones de km2. Fuente: Elaboración propia

22M

AR

IAN

O TU

RZI

PaísPaís

Población(m

illones)%

Superficie(m

illones km2)

%

12345678910

12345678910

ChinaIndiaEEU

UIndonesiaB

rasilPakistánB

angladeshN

igeriaR

usiaJapónB

RIC

Mundo

Rusia

CanadáEEU

UChinaB

rasilAustraliaIndiaArgentinaK

azakhstánSudánB

RIC

Mundo

13381189310235193185164158142127

28626892

179.989.639.598.517.683.282.762.712.538

149

11.56.76.56.45.75.22.21.91.81.726

100.0

19.417.34.53.42.82.72.42.32.11.842

100.0

Page 12: Turzi Mundo Brics

grados a la economía internacional ni tam

poco la de los países quese han especializado en un sector particularm

ente dinámico de la

economía con perspectivas de alto crecim

iento. El denominador

común del agrupam

iento es la escala o el tamaño que le otorga

una cierta combinación de factores geográficos y dem

ográficos.Esta com

binación es la que hace posible un potencial económico

sostenido y de una magnitud por encim

a del promedio.

LOS

NU

EVO

SEl térm

ino “emergentes” surge en las décadas de 1980-1990, para

reemplazar el peyorativo térm

ino subdesarrollados, y en mom

en-tos en que se auguraba una convergencia económ

ica global. Peroel presente m

omento es m

ucho más com

plejo y fragmentario. La

reestructuración de la economía internacional genera una gran

incertidumbre a la hora de pensar de qué lugar vendrá el crecim

iento.Recién después de 2011 podrem

os vislumbrar cóm

o quedó la nuevageografía económ

ica internacional luego de la crisis y de los pro-gram

as de estímulo.

Hay un sentido de urgencia en los circuitos financieros globales

–de Wall S

treet a Davos– por form

ular la tesis de inversión para elm

ediano plazo. Aunque sus innovaciones construyen sobre la m

atrizanalítica de los BRICs, se argum

enta que los cuatro grandes son elayer. H

oy varios nombres de la banca de inversiones com

piten porinstalar el nuevo paradigm

a que ordene los flujos financieros y orientelas carteras de inversión. Esperan tam

bién anotarse un éxito de mar-

keting sintetizando el concepto en un acrónimo que se grabe fácil-

mente en la m

emoria y se convierta en m

arca registrada:• El propio creador de los B

RIC

s identificó en 2007 una nuevaserie de once nuevos países a los que denom

inó los N-11 (next 11

o próximos 11): B

angladesh, Egipto, Indonesia, Irán, México, N

ige-ria, Pakistán, Filipinas, Turquía, Vietnam

y Corea del Sur, este grupo

MU

ND

O B

RIC

S25

casi la mitad de India. Los B

RIC

s tampoco son los países con las

mayores ventajas com

petitivas o los niveles de productividad más

altos. Si observam

os las mediciones del Índice de C

ompetitividad

Global del W

orld Economic Forum

2010-2011 vemos que C

hinaocupa el puesto 27 de un total de 183 países; le siguen India enel puesto 51, B

rasil en el 58 y Rusia en el 63.

Mucho m

enos puede argumentarse a favor de la posición que

ocupa el sector privado dentro de los BRICs. El Banco Mundial tiene

una medición de la facilidad para hacer negocios. El índice D

oingBusiness

evalúa el ambiente que regula la actividad em

presarial.D

e los 183 países que aparecen en el ranking de la edición 2011,C

hina se ubica en el puesto 79. Muy lejos están R

usia, en el puesto123 –luego de U

ganda–, y Brasil, cuatro puestos m

ás abajo queR

usia y apenas encima de Tanzania. India ocupa la posición m

ásbaja de los cuatro –el 134– por debajo de M

alawi e Irán.

Los BR

ICs no son los países que presentan un alto crecim

ientopor reform

as de apertura y liberalización, al estilo de Suiza, S

inga-pur, Irlanda o Taiw

án. De los 183 países presentes en el Índice de

Libertad Económica 2011 del W

all Street Journaly la Heritage Foun-

dation,Brasil ocupa el puesto 113, India el 124, China el 135 y Rusiael 143. El Estado cum

ple un rol decisivo en el desarrollo utilizandoactivam

ente las herramientas de política económ

ica y de promo-

ción industrial. Aun así, los B

RIC

s tienen perfiles productivos dife-rentes y estructuras de com

ercio distintas. Mientras que C

hina seorientó hacia la provisión de m

anufacturas, la economía india tiene

un peso gravitante del sector servicios. Y aunque Brasil y Rusia songrandes exportadores de com

modities, el prim

ero se ha especia-lizado m

ás en minerales y productos agropecuarios, m

ientras queel fuerte del segundo son los productos energéticos.

¿Entonces por qué están juntos los BR

ICs? ¿Tienen algo en

común que justifique su agrupam

iento? La historia que los une noes la de los países que crecen m

ás rápido, ni la de los más inte-

24M

AR

IAN

O TU

RZI

Page 13: Turzi Mundo Brics

BRICs (ladrillos) pero también

cemento”. Es así que propone diver-

sificarse en los CEMEN

T (Countries in Emerging M

arkets Excludedby N

ew Term

inologyo países de econom

ías emergentes excluidos

de la nueva terminología).

SO

PA D

E LETRA

S G

LOB

AL

Fuente: elaboración propia

MU

ND

O B

RIC

S27

es una especie de “mini BRICs”. Son m

ercados de alto crecimiento,

y promisorios destinos de inversión por la especial com

binaciónde factores geográficos, dem

ográficos y económicos.

• Robert W

ard, de la publicación inglesa The Economisty el ex

CEO

del banco HS

BC

Michael G

eoghegan aportaron su agrupa-m

iento CIV

ETS (civeta, un felino africano): C

olombia, Indonesia,

Vietnam

, Egipto, Turquía y Sudáfrica. El foco era el dinam

ismo

económico, la relativa estabilidad política e indicadores dem

o-gráficos favorables (poblaciones jóvenes, grandes y crecientes).

Dos acrónim

os que alcanzaron menor difusión pero que inclu-

yen una lista similar a la anterior son M

AV

INS

(México, A

ustra-lia, V

ietnam, Indonesia, N

igeria y Sudáfrica) y V

ISTA

(Vietnam

,Indonesia, S

udáfrica, Turquía y Argentina)

• El banco español Bilbao Vizcaya A

rgentaria (BB

VA) apuesta

a las “águilas” del crecimiento global. Los EA

GLEs (Em

erging andG

rowth Leading Econom

ies, o economías em

ergentes que lide-ran el crecim

iento global). Son diez principales, que por su m

ayorcontribución al crecim

iento mundial son el B

RIC

más C

orea delS

ur, Indonesia, México, Turquía, Egipto y Taiw

án. Adem

ás, agregaonce econom

ías que se encuentran en el “nido” y que podrían for-m

ar parte de los EAG

LEs en el corto o a mediano plazo: N

igeria,Polonia, Sudáfrica, Tailandia, Colom

bia, Vietnam, Bangladesh M

ala-sia, A

rgentina, Perú y Filipinas.• El banco B

arclays –en flemática circunspección inglesa– res-

tringe su selección a diez economías em

ergentes que están a mitad

de camino de “graduarse” de desarrolladas: B

rasil, Chile, C

hina,C

orea, Israel, Polonia, la República C

heca, Singapur, S

udáfrica yTaiw

án. Un inform

e de investigación de 67 páginas de octubre del2009 los bautizó “M

ercados Emergentes A

vanzados” (AEM

, segúnla sigla en inglés).

• Finalmente, está la sigla anti-siglas. Para Jerom

e Booth, de

Ashm

ore Investments, “si uno quiere levantar una pared necesita

26M

AR

IAN

O TU

RZI

Argentina

Autralia

Bangladesh

Brasil

Chile

China

Colombia

Corea del Sur

Egipto

Filipinas

India

Indonesia

Irán

Israel

Malasia

México

Nigeria

Pakistán

Perú

Polonia

Republica Checa

Rusia

Singapur

Sudáfrica

Tailandia

Taiwán

Turquía

Vietnam

AEMVISTA

MAVIN

SN

idoEAG

LEsÁguilas(EAG

LEs)CIVETS

N-11

BR

IC

Page 14: Turzi Mundo Brics

BR

IC evoca edificación y solidez, com

binando potencial, futuro ygrandeza. Los C

IVETS

son felinos pequeños, pero ágiles y enér-gicos. Esa es la noción a la que se busca asociar a países de altocrecim

iento y potencial no tan grandes como los B

RIC

s. MAV

IN es

alguien diestro y con habilidad, en este caso para navegar conéxito las inciertas aguas del crecim

iento global. Más fácil es per-

cibir el significado de las águilas, que han sido históricamente iden-

tificadas con el poder. El mism

o dispositivo mental puede utilizarse

como m

arca de vergüenza o ignominia. La sigla PIG

S o “cerdos”

(Portugal, Irlanda, Grecia y España) rem

ite a la porqueriza (en estecaso financiera), a la suciedad, la irresponsabilidad y el derro-che. Los V

IRU

S (Venezuela, Irán, R

usia y Siria) son una grotesca

manifestación de pervivencia de reflejos m

aniqueos de la Gue-

rra Fría y de una agenda que busca reeditar un nuevo “eje del mal”.

Así com

o las casas de inversión buscan vender productos finan-cieros, los creadores de estos acrónim

os buscan incentivar res-puestas de política pública. A

los PIGS

solamente un duro ajuste

purgante los saneará y al VIRUS se lo com

bate vacunando al cuerpoque lo lleva para que lo elim

ine.

MU

ND

O B

RIC

S29

Aunque atractivas, no debem

os sobreestimar la im

portanciaque tienen la m

ayoría de las siglas anteriores. Ninguna surge com

orespuesta a un vacío analítico en las ciencias sociales o com

o unaherram

ienta de aplicación de la teoría de relaciones internaciona-les. En general se trata de piezas de una estrategia de m

arketingde la banca internacional. U

tilizan siglas cortas y acrónimos pega-

dizos para captar la atención de los medios de com

unicación, gene-rar una m

oda y a partir de ella colocar con más facilidad produc-

tos financieros –fondos cotizados (ETFs)–estructurados alrededorde algún nuevo índice. Por eso existe m

uy baja claridad concep-tual: algunos tom

an como base el tam

año de las economías, otros

las tasas de crecimiento reciente y otros utilizan m

arcadores exclu-sivam

ente financieros, con un sesgo hacia las rentas que pue-dan obtenerse de operaciones bursátiles en estos países. D

efini-ciones de desarrollo com

o crecimiento equitativo o sostenible no

suelen ser parte de los indicadores que dan origen a los nuevosagrupam

ientos. Indonesia, Sudáfrica, Turquía y Vietnam

son losque m

ás se repiten, por encima de B

rasil, India y China. Y

Rusia

se encuentra excluida de casi todos los nuevos agrupamientos.

Más allá del aspecto publicitario, esta anarquía de acróni-

mos contiene una dim

ensión simbólica que sirve para com

pren-der m

ejor la manera en que percibim

os el mundo. Pensem

os enestas etiquetas com

o esquemas analíticos para ordenar la reali-

dad “objetiva”, diseñados para interpretar o dar sentido a lo queocurre a nuestro alrededor. Estas construcciones m

entales paraexplicar la realidad internacional contem

poránea no son fatali-dades de la estructura económ

ica. Son andam

iajes intelectualeshistórica y socialm

ente contingentes. Si se arraigan en la opi-

nión colectiva, pasan a formar parte del conjunto de creencias com

-partidas con la que leerem

os la realidad internacional. Estas cla-ves interpretativas actúan com

o anteojeras de la mente: fijan

nuestra percepción y focalizan –restringen– nuestra visión. Así,

28M

AR

IAN

O TU

RZI

Page 15: Turzi Mundo Brics

Com

o ya los mencionam

os, la intencionalidad original de O’ N

eillal crear el acrónim

o BR

ICs fue identificar una oportunidad para

aumentar la exposición de las carteras de inversión de G

oldman

Sachs a las superiores tasas de retorno que ofrecerían los m

er-cados em

ergentes en general y de los BR

ICs en particular. Por eso

la firma utiliza el térm

ino en plural; porque hace referencia a cua-tro países que, siguiendo cada uno su propia senda de crecim

ientoy desarrollo, tienen un peso creciente en la econom

ía mundial.

Com

o el concepto no intentaba darle al grupo entidad o identidadpropias, no se utiliza el singular.

El término B

RIC

escrito sin el plural enfatiza los elementos

comunes e intereses com

partidos que pueden hacer del cuartetoun actor colectivo unificado con capacidad de proyección global.C

omo carecen de esta dim

ensión, los estudios de la casa de inver-

MU

ND

O B

RIC

S31

CAPÍTULO DOSEL SISTEMA INTERNACIONAL

Page 16: Turzi Mundo Brics

LOS

AC

TOR

ESLos Estados son los actores principales en el sistem

a de relacionesinternacionales, aunque no los únicos. La base de la acción esta-tal internacional es, con m

ayor o menor grado de exclusividad, el

poder. Ya sea que un Estado busque aumentar su poder nacional o

simplem

ente pretenda no ser víctima de la im

posición externa porparte de otros, el poder relativo –el propio com

parado con el deotros– es el dato esencial sobre el que basará su conducta inter-nacional. El núm

ero de países que concentra el poder informa los

tipos de interacciones que son posibles entre ellos: poder concen-trado en m

enos manos significa jerarquías m

ás claras, y un poderm

ás distribuido implica m

ayores niveles de incertidumbre y previ-

sibilidad de conducta. Existen tres caracterizaciones básicas del sis-tem

a internacional de acuerdo a cómo se encuentre distribuido el

poder entre los Estados. En el mundo unipolar una sola unidad

domina el sistem

a. En la estructura bipolar, el mundo se divide irre-

conciliablemente entre dos poderes en pugna. El m

ultipolarismo

implica que existen m

uchas entidades, que se relacionan entre síen cam

biantes combinaciones de cooperación y conflicto.

Desde el siglo X

V hasta el siglo X

X, el sistem

a de relacionesinternacionales de los poderes europeos fue m

ultipolar. Las poten-cias buscaban aum

entar su poder a expensas de sus rivales, dis-putándose la conquista de colonias y m

ercados. Com

o esta bús-queda de poder era generalizada y perm

anente, todos se preparabanpara la guerra a través de la carrera arm

amentista y las alianzas

militares. Las relaciones internacionales buscaban m

antener elequilibrio de poder, procurando evitar la dom

inación y prevenir lahegem

onía de cualquiera de los Estados del sistema continental.

Por eso los alineamientos no eran fijos: cuando uno de los Esta-

dos crecía por sobre el conjunto, entonces el resto se reagrupabapara generarle un contrapeso. El ejem

plo más difundido de este

sistema es el C

oncierto Europeo, que tuvo vigencia desde el fin de

MU

ND

O B

RIC

S33

sión no hacen referencia a la posibilidad de que en el futuro losB

RIC

s puedan o deban coordinar su accionar diplomático, ni se

argumenta que vayan a conform

ar un bloque comercial, alianza

política u organización formal. La dim

ensión económica expli-

cada en el capítulo anterior ayuda a comprender las transfor-

maciones de la econom

ía internacional y el aumento de las capa-

cidadesque llevaron al surgim

iento de los BR

ICs. S

in embargo,

el análisis de los cambios en el balance de la econom

ía global afavor de los em

ergentes no es suficiente para contar con un diag-nóstico com

pleto.En este capítulo abordarem

os esa dimensión faltante, la pro-

piamente política. Entendido com

o el entramado de relaciones

de poder que acompañan a esos cam

bios, observaremos al B

RIC

en el plano de la política internacional. Para eso incorporaremos

las herramientas de un análisis desde la ciencia política, que se cen-

tra en el estudio del poder. ¿Qué significa ser poderoso en rela-

ciones internacionales? ¿Cuántos y qué tipo de poderes existen?

¿Hay diferentes recursos de poder? ¿C

ómo se vinculan? ¿En qué

condiciones se logra y cómo se pierde la preem

inencia en el sis-tem

a internacional? La contribución desde la teoría de relacionesinternacionales aparece cuando, ante los cam

bios en flujos comer-

ciales y los diferenciales de crecimiento, se cuestiona acerca del

impacto sobre la distribución del poder y sus posibles im

plicanciaspara la paz y la estabilidad internacionales. ¿C

uáles son las con-secuencias globales del surgim

iento de nuevos polos de poder?¿Q

ué implica el surgim

iento del BR

IC para el orden internacio-

nal? ¿Quieren estos países convertir o destruir el sistem

a interna-cional vigente? ¿N

os encaminam

os hacia una era de crecientesenfrentam

ientos y mayor conflicto? A

gregaremos con esto una

medida de intención a la distribución de capacidades que es nece-

saria si se quiere comprender la viabilidad no ya de los BRICs com

oeconom

ías sino del BR

IC com

o actor en el sistema internacional.

32M

AR

IAN

O TU

RZI

Page 17: Turzi Mundo Brics

dos durante el siglo XX

. La voluntad implica dem

ostrar al resto de las uni-dades del sistem

a las ventajas de unirse al orden que ha establecido paraque no lo perciban com

o injusto e intenten así subvertidlo. Pero en suúltim

a reedición los hegemonistas no perciben el poder norteam

eri-cano com

o imperial sino com

o un servicio global. El hegemón se hace

cargo de la provisión de bienes públicos, desde el mantenim

iento dem

ares abiertos para el libre comercio hasta la contención del com

unismo

o el terrorismo. Y

el resto de los Estados del sistema los disfrutan sin

hacerse cargo de los costos (problema del free rider). Com

o para los rea-listas el sistem

a multipolar es el m

ás estable, el balance de poder es a lavez descripción (lo que va a pasar) y prescripción (lo que debe pasar). Loshegem

onistas hacen este salto teleológico: como la única m

anera de dotaral sistem

a de gobernabilidad y estabilidad es con la suma del poder

global, entonces defienden el sistema unipolar y el rol privilegiado que la

superpotencia ocupa en la cima. N

o diferencian entre los intereses delsistem

a y los particulares del actor en la cima de la pirám

ide. La domi-

nación de Goliat se percibe com

o algo intrínsecamente bueno y preferible

a la ausencia del poder repartido.

Luego de la Primera G

uerra la revolución bolchevique y el esta-blecim

iento de la Unión S

oviética, el sistema m

ultipolar eurocén-trico se desm

orona. La Segunda Guerra es un enfrentam

iento entredos bandos de alianzas: las potencias del Eje (A

lemania, Italia y

Japón) y los Aliados (Francia, Inglaterra, la U

nión Soviética y Esta-

dos Unidos). La lucha se enm

arca en el enfrentamiento contra los

sistemas totalitarios del nazism

o y el fascismo. C

uriosamente, una

vez acabada la guerra, dos de los aliados –Estados Unidos y la U

niónSoviética– juzgaron sus diferencias irreconciliables e instauraron asíun m

undo bipolar. Durante los años de la guerra fría era fácil reco-

nocer que las capacidades estaban distribuidas de acuerdo a dos

MU

ND

O B

RIC

S35

las guerras napoleónicas, en 1815, hasta la Primera G

uerra Mundial

en 1914. Austria, Prusia, el Im

perio Ruso, G

ran Bretaña y Francia

utilizaron su influencia y poder para impedir la hegem

onía de lasdem

ás, individualmente o en bloque. N

os damos cuenta enton-

ces de que el sistema m

ultipolar no simplem

ente es el resultadode la distribución de capacidades sino que es un objetivo explícitoy consciente de política exterior, que se alcanzó m

ediante una activadiplom

acia de balance de poder.

GU

LLIVER

IAN

OS

Y LILIPU

TIENS

ESLos “realistas” de las relaciones internacionales consideran que la esta-bilidad se logra por m

edio de la distribución del poder. Cuando una poten-cia acum

ula demasiado poder se activa un m

ecanismo de balance por

medio de otros actores del sistem

a. Cuando uno se vuelve dem

asiadogrande, el resto de los m

enos poderosos debe atarlo para contenerlo desus excesos, com

o hicieron los liliputienses con Gulliver en la novela de

Swift. Para la teoría de la estabilidad hegem

ónica, por el contrario, la esta-bilidad se alcanza a través de la concentración de poder. La erosión de lasjerarquías lleva a la inestabilidad, ya que intensifica la com

petencia. Suponeque la estabilidad del sistem

a internacional requiere de la existencia deun Estado dom

inante que pueda establecer las reglas de interacción entrelos m

iembros. El hegem

ón debe contar con la capacidad y la voluntad dehacerlas cum

plir. La capacidad estará dada por la combinación de una

economía grande y creciente, el liderazgo en un sector económ

ico otecnológico clave para el crecim

iento y el poder político respaldado porla superioridad m

ilitar para proyectarlo. En este sentido han existido variosepisodios hegem

ónicos a lo largo de la historia: la potencia española deultram

ar en el siglo XV, la dom

inación marítim

a de Portugal durante elsiglo X

VI, la monetaria de H

olanda en el siglo XVII, la británica en los siglos

XVIII y X

IX por su liderazgo en la Revolución Industrial, y los Estados U

ni-

34M

AR

IAN

O TU

RZI

Page 18: Turzi Mundo Brics

tancial. El ex secretario de Estado preveía en 1996 que las rela-ciones entre los Estados en el siglo X

XI volverían a ser com

o eranlas relaciones europeas de los siglos X

VIII y X

IX, y anticipaba el

surgimiento de un sistem

a multipolar con al m

enos seis grandespotencias: Estados U

nidos, Europa, China, Japón, R

usia e India.La noción de que el escenario internacional sería crecientem

entem

ultipolar implicaba que varios Estados con fuerzas com

para-bles o equivalentes deberían cooperar y com

petir a la vez en patro-nes cam

biantes. Las coaliciones de Estados serían no solamente

necesarias sino imprescindibles, ya sea para balancear el poder

o para resolver temas de interés m

utuo. Pero el espíritu de laépoca era otro. S

e creyó que la cooperación con otros Estados noera necesaria para im

plementar políticas de alcance global, ya

que la superpotencia podría actuar por sí sola de manera unilate-

ral. Fue ganando lugar la idea de que la superioridad del poderm

ilitar norteamericano sería la garantía autom

ática de adhesiónde otros países. A

diferencia de los realistas, los neoconserva-dores no creen que el poder repele y confían m

enos en las alian-zas y en la cooperación m

ultilateral que en el ejercicio autónomo

del poder. Con diferentes énfasis, esta caracterización se m

anifes-taba en el uso de térm

inos como “m

omento unipolar”, “prim

acía”del poder norteam

ericano. La facción neoconservadora de ideólogos y de política pública

en las áreas de defensa y política exterior abogó por la utilizacióndel inm

enso diferencial de poder de Estados Unidos para prolon-

gar el mom

ento unipolar e instaurar la era unipolar. Este proyectoestaba basado en cuatro pilares: preservar el orden unipolar, m

an-tener la prim

acía de la fuerza militar en todos los cam

pos, descar-tar el m

ultilateralismo en favor de un ejercicio unilateral del poder

y sostener el recurso al ataque preventivo como m

ecanismo de

defensa anticipada. Los atentados del 11 de septiembre de 2001 die-

ron la oportunidad histórica a los neoconde la A

dministración Bush

MU

ND

O B

RIC

S37

bloques: la esfera soviética y el campo norteam

ericano. El sistema

obligaba al resto de los países a elegir un lado en la nueva disposi-ción estratégica e ideológica global. A

lgunos, como C

hina y losm

iembros del M

ovimiento de Países no A

lineados (G-77), rechaza-

ron el encasillamiento forzoso, reprobaron el conflicto Este-O

estecom

o el principal vector de división en el mundo m

oderno y pos-tularon que las verdaderas líneas de fractura corrían entre N

orte yS

ur. Pero en cuanto a las concentraciones de poder –dos conten-dientes con una capacidad nuclear para destruir varias veces el pla-neta Tierra– el sistem

a seguía siendo claramente bipolar.

Con la caída del muro de Berlín, en 1989, finalizó la G

uerra Fría.Y

con la desaparición de la Unión S

oviética en 1991 ya no fue tanfácil identificar el eje articulador principal del poder en el sistem

a.¿H

abía terminado definitivam

ente la bipolaridad? Parecía evi-dente que sí, ya que para 1992 el gasto m

ilitar de Rusia no era ni el

15% del estadounidense. ¿Volvería entonces el m

ultipolarismo? N

oestaba tan claro. Estados U

nidos había emergido victorioso com

ola única superpotencia. En ausencia de rivales que pudieran balan-cear el poder norteam

ericano se juzgó que el escenario interna-cional era unipolar. D

esde el punto de vista exclusivamente m

ilitarningún Estado o com

binación de Estados era capaz de presentaroposición efectiva al poder de los Estados U

nidos. De acuerdo a los

datos del Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Esto-colm

o (SIPRI), el presupuesto militar norteam

ericano en 1991 ocupóel puesto núm

ero uno en el mundo, totalizando casi 450 m

il millo-

nes de dólares. Esa suma era m

ás grande que los presupuestos con-juntos de los países entre el puesto dos y el quince. Esto quiere decirque el gasto m

ilitar de los Estados Unidos era superior a la sum

a delos de Francia, Inglaterra, A

lemania, Japón, Italia, K

uwait, A

rabiaSaudita, China, Canadá, España, Turquía, Corea del Sur, Israel e India.

Por supuesto estaban los realistas clásicos –como H

enry Kis-

singer– que estimaban que la distribución unipolar era circuns-

36M

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Page 19: Turzi Mundo Brics

MU

ND

O B

RIC

S39

a avanzar su designio transformacional del orden internacional. Esto

fue posible gracias a una combinación de dos prem

isas que dieronlugar a lo que se dio en llam

ar “imperialism

o democrático”. La pri-

mera era la posición dom

inante de los Estados Unidos en la estruc-

tura de poder. Se com

enzaron a utilizar términos com

o “imperio”,

“hegemonía” e “hiperpotencia”. D

espués se reflotó la tradición wil-

soniana de la política exterior norteamericana que cree que Estados

Unidos es un actor m

oral guiado por principios más que por inte-

reses. Esta “fuerza para el bien” proyectaba al mundo los valores

superiores de la democracia y la libertad. El m

undo aprobaría lahegem

onía benévola norteamericana, ya que era parte de la lucha

entre las fuerzas del Bien y el eje del M

al.El principal clivaje para interpretar el m

omento histórico que

atraviesan las relaciones internacionales en las primeras décadas

del siglo XX

I es la dicotomía unipolar-m

ultipolar. Intentando supe-rarla, H

untington presentó una elaboración alternativa que pretendeser superadora de la discusión. N

uestro querido maestro presenta

una descripción más acertada del estado de las relaciones interna-

cionales contemporáneas partiendo de la base de que no se ajusta

plenamente ni al m

odelo unipolar ni al multipolar: “En cam

bio esuna m

ezcla o híbrido de una superpotencia que no es un imperio y

varias grandes potencias. Podría ser llamado un sistem

a uni-multi-

polar. Esto significa dos cosas. Primero, que la única superpoten-

cia tiene poder de veto sobre las acciones de una combinación de

las demás potencias. S

egundo, que la única superpotencia sola-m

ente puede resolver temas internacionales clave con la coopera-

ción de los otros grandes Estados”. El mundo de H

untington es unordenam

iento jerárquico de cuatro niveles: una cima de preem

i-nencia norteam

ericana, un segundo escalón de grandes poderesregionales (en donde explícitam

ente se encuentran los BR

ICs), un

tercer nivel de poderes regionales secundarios (los miem

bros delN

-11 y otros como A

rgentina) y una base compuesta por el resto.

38M

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O TU

RZI

ND

E ESTÁ

EL POD

ER EN

EL MU

ND

O

Fuente: elaboración propia

Durante la últim

a década lo que está ocurriendo es una acentua-ción del segundo y del tercer nivel, que son los com

ponentes que“m

ultipolarizan” el sistema. El reverso necesario de este pro-

ceso es la contracción del componente “uni” del sistem

a de pola-ridades globales. Existe una cantidad lim

itada de cuotas de poderen el sistem

a en cada mom

ento. Entonces, si se acentúa el poderde países com

o los BR

ICs, necesariam

ente esto es a expensasde la suprem

acía del poder norteamericano. Tanto en extensión

–a través de una proyección más decididam

ente global– como en

intensidad –por medio de posturas m

ás contundentes– los acto-res del segundo nivel expandieron sus intereses y capacidadesm

ás allá de lo que la teoría predice que sería su “natural” ámbito

UN

IVERSO

DEL PO

DER

GLO

BAL

ESTADOS

OR

GAN

IZACION

ES GU

BER

NAM

ENTALES IN

TERN

ACION

ALES, REG

ION

ALES,ECO

MICAS Y FU

NCIO

NALES.

OR

GAN

IZACION

ES INTER

NACIO

NALES N

O G

UB

ERN

AMEN

TALES, COM

PAÑÍAS

MU

LTINACIO

NALES, R

EDES CR

IMIN

ALES TRAN

SNACIO

NALES

Superpotencia

BR

ICS, Unión Europea, Irán, Japón

Países medios (N

-11, CIVETS, MAVIN

S)

Países pobres y poco poderosos

Page 20: Turzi Mundo Brics

se incluyen empresas m

ultinacionales, ya sean más hum

anitarias–G

reenpeace, Oxfam

, Médicos sin Fronteras– o crim

inales (gru-pos terroristas, cárteles de la droga y m

afias internacionales), quehan crecido en fuerza y alcance gracias a oportunidades abiertaspor la globalización.

La agenda de los Estados se vuelve más diversa en sus tem

asy m

ás compleja en sus interacciones; por ejem

plo, las relacionesentre dos Estados ya no están determ

inadas solo por el poder rela-tivo de cada uno sino que existe un profuso m

arco de acuerdosy organism

os internacionales que fijan normas y reglan la con-

ducta. El sistema incorpora rasgos de “no polaridad”, a partir de

los cuales lo que ocurre dentro de Estados tiene crecientes con-secuencias para las relaciones interestatales. La creciente m

utuainterpenetración genera un nivel de interacción “interm

éstico”,que vincula tem

as y actores internacionales con internos o domés-

ticos. Temas com

o contaminación am

biental, estabilidad mone-

taria, inmigración, tráfico de drogas, de arm

as y de personasson m

uy difíciles de manejar sin la cooperación y coordinación de

múltiples actores a diferentes niveles.

El mism

o proceso que redistribuye poder entre Estados tam-

bién lo hace entre Estados y otras unidades cualitativamente dife-

rentes. ¿Cómo es posible que hayan surgido actores con peso inter-

nacional por fuera de los Estados? Es posible porque los Estadosya no tienen el m

onopolio del poder en la arena internacional.¿C

ómo lo perdieron? Prim

ero, desde mediados de la década de

1940 las armas nucleares produjeron un cam

bio fundamental en

la estructura de la política interestatal: la fuerza militar se hizo m

áspeligrosa y m

enos útil. El instrumento m

ilitar ya no podía ser laexclusiva ultim

a ratiosobre la cual basar la política exterior, puesto

que su aplicación no era siempre posible o conveniente. Poder ya

no equivalía solamente a fuerza. S

egundo, con la disminución

de la capacidad de hacer uso de la fuerza, el poder militar se hizo

MU

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RIC

S41

de actuación regional. El poder se ha redistribuido, y esa redistri-bución ha perm

itido el ascenso de los BR

ICs. La entronización

mism

a del bloque como instancia de decisión gravitante en los

asuntos globales evidencia directamente la m

agnitud que hacobrado el com

ponente “multi” del sistem

a a partir del surgimiento

de estos nuevos grandes polos de poder.R

ecapitulando: un dato distintivo del sistema internacional

actual es la redistribución de cuotas de poder desde la superpo-tencia a potencias m

edias, desde la cima del sistem

a hacia la base.En ese proceso de redistribución, los B

RIC

s fueron los principalesfavorecidos. Pero esa no es toda la historia. El sistem

a en el queactúa el B

RIC

está ciertamente m

arcado por cambios cuantitativos

–de cantidad y magnitud– en las polaridades globales. Pero en el

mundo “pos-am

ericano”, el poder se encuentra también m

ás dis-perso. ¿Q

ué quiere decir esto? Que ciertos actores del sistem

a pue-den llegar a convertirse en polos de poder sin necesariam

ente per-tenecer al grupo de las concentraciones de capacidad principalesdel sistem

a. En este entramado de interdependencia com

plejalos Estados son aún los actores dom

inantes de la política mundial.

Sin em

bargo no constituyen unidades coherentes. Están atravesa-dos internam

ente por múltiples intereses y contradicciones, grupos

sociales en pugna y hasta rivalidades burocráticas. En el m

undo de hoy existe una creciente cantidad de actoresno estatales que participan activam

ente en la formación de la polí-

tica mundial restringiendo la capacidad de decisión y ocupando

los ámbitos de actuación que antes correspondían con exclusivi-

dad a los Estados- nación. Por “encima”, los Estados enfrentan las

limitaciones im

puestas por instituciones supranacionales (ON

U,

FMI, B

anco Mundial), organism

os regionales (UE, O

EA, A

SEA

N,

MER

CO

SU

R) y funcionales (O

MS

, OPEP, A

IE). Por “debajo” seencuentran las organizaciones no gubernam

entales y las corpo-raciones, con sus vinculaciones transnacionales. En este universo

40M

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Page 21: Turzi Mundo Brics

cionantes sistémicos afectan a B

rasil, Rusia, India y C

hina indivi-dualm

ente y al BR

IC com

o bloque. Para entender completam

entecuál es el potencial del grupo com

o nueva fuerza colectiva inter-nacional debem

os examinar tanto al bloque com

o a los miem

brosque lo sostienen. Y

para ambos casos debem

os focalizarnos tantoen las intenciones (qué es lo que quiere cada uno de los paísesm

iembros y el B

RIC

colectivamente) com

o en las capacidadesde cada cual, es decir, con qué recursos cuentan para lograrlo.

Com

encemos por los países. ¿Q

ué llevó a las políticas exte-riores brasileña, rusa, india y china a la conclusión de que im

pul-sar, m

antener y hasta ampliar un bloque com

o el BR

IC servía a sus

intereses diplomáticos? La tendencia del sistem

a hacia la multi-

plicación de polos de poder provee un incentivo para que los cua-tro países puedan de m

anera independiente o coordinada incre-m

entar su poder y representatividad internacional. ¿Por qué sedecidió hacerlo en bloque? ¿Cóm

o es que tanto en Brasilia, Moscú,

Nueva D

elhi y Pekín se percibió que el BR

IC sería una plataform

aútil de proyección internacional? ¿Q

ué estrategia diplomática y

recursos gubernamentales nacionales dedican al B

RIC

?

1. China

Hay una notable diferencia entre China y el resto del bloque. Com

oha argum

entado David R

othkopf, “sin China el B

RIC

es BR

I, unqueso blando y sin dem

asiado gusto”. Las condiciones objetivaseconóm

icas, financieras, políticas y militares del país asiático con

respecto a sus socios del bloque sustentan en gran medida esta

hipótesis. La economía china es dos veces y m

edia mayor que la

india y cuatro veces el tamaño de la brasileña y la rusa. A

un com-

binando a los tres socios la economía china es m

ayor. Las tasasde crecim

iento chinas son muy superiores, y tanto sus exporta-

ciones como su nivel de reservas son m

ás del doble que la suma

del resto del bloque, sin contar los flujos de inversión extranjera

MU

ND

O B

RIC

S43

42M

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menos fungible. H

asta ese mom

ento, había existido una rígida ybien definida jerarquía funcional (tem

as o ámbitos) de la política

internacional. La “alta política” de la seguridad militar dom

inabaa la “baja política” de los asuntos económ

icos y sociales. A par-

tir de la década de 1970 el poder se hizo más com

plejo y desa-gregado, y las diferentes áreas en las que se puede tener poderestán vinculadas pero no subordinadas; se puede ocupar unaim

portante posición internacional en el ámbito económ

ico sinnecesariam

ente ser una potencia militar.

CA

MB

IOS

EN EL PO

DER

Fuente: elaboración propia

UN

BLO

QU

E, CU

ATRO

AC

TOR

ESYa hem

os analizado la estructura del sistema internacional y hem

osexplicado tam

bién las principales dinámicas que están transfor-

mando la naturaleza del poder global. A

hora bien, estos condi-

DIFUSIÓN(D

esde los estados hacia actores de otra naturaleza)

DISTRIBUCIÓN(D

esde la superpotencia hacia los estados de segundo y tercer nivel)

INTERDEPENDENCIA(M

ás interacciones, de mayor velocidad

y con mayor im

pacto)

COMPLEJIZACIÓN

(Más tem

as en la agenda, más actores involucrados,

más canales de influencia)

PODERINTERNACIONAL

Page 22: Turzi Mundo Brics

otros Estados y se pasa a formar parte integral del sistem

a inter-nacional de norm

as que regulan la interacción estatal. Es en estostérm

inos que los Estados Unidos vienen alentando la integración

de China al sistem

a como un “actor responsable en la com

unidadinternacional”. En el contexto poscrisis, un bloque com

o el BR

ICha perm

itido a China presentarse no com

o un contendiente por elliderazgo global sino com

o el actor principal del mundo em

er-gente, que por capacidades m

ateriales lidera de todos modos.

2. Brasil

Cuando se inventó la sigla B

RIC

, The Economistobjetó la perte-

nencia de Brasil. C

onsideraba al país sudamericano “un país con

una tasa de crecimiento tan exigua com

o sus mallas de baño, presa

de cualquier crisis financiera que hubiese por ahí, con inestabili-dad política crónica y cuya infinita capacidad para despilfarrar susevidentes posibilidades es tan legendaria com

o su talento para elfútbol y los carnavales, no parece cuadrar junto a esos titanes enascenso”. U

nos años más tarde, la m

isma publicación observaba

que “en ciertos sentidos, Brasil supera a los otros B

RIC

. A dife-

rencia de China, es una dem

ocracia. A diferencia de la India, no

tiene insurgentes, conflictos religiosos ni vecinos hostiles. Adiferencia de R

usia, no exporta solo petróleo y armas y trata a los

inversores extranjeros con respeto”. Junto con Rusia, Brasil es de los socios m

enores en el BRIC, porsu m

enor relevancia internacional. Paradójicamente –o tal vez, por

ello– el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva ha sido de los que

más ha utilizado la plataform

a del BR

IC para hacer sentir sus críti-

cas al sistema internacional. Es por eso que un plano coyuntural aún

no sabemos cuánto del afanoso internacionalism

o brasileño de losúltim

os años es consecuencia del alto perfil internacional del exm

andatario. Durante el m

andato de su sucesora Dilm

a Rousseff se

tendrá una idea más clara de si la participación activa de B

rasil en

MU

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O B

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S45

directa interna y externas. En un sentido muy cierto la historia del

ascenso del BR

IC es principalm

ente la historia del ascenso chino. S

i China tiene tanto poder por sí sola, ¿por qué decide unirse

a otros que podrían diluir su poder en un ámbito de decisión? A

pesar de la asimetría existentes dentro del bloque, el interés chino

por el jinzhuan siguo(cuatro ladrillos de oro), tiene un com

ponentetáctico, que podría ser –com

o lo anotó la influyente publicacióninglesa The Econom

ist– “esconder sus demandas nacionales detrás

de una fachada multilateral”. La frase está cargada de un escrúpulo

que no compartim

os pero la observación tiene un contenido cierto. El objetivo central de la política exterior china desde los años

70 ha sido mantener un orden internacional pacífico y estable que

asegure las condiciones para un crecimiento sostenido. El B

RIC

está en perfecta sintonía con esos objetivos, ya que contribuye areducir los tem

ores que despierta su rápido ascenso. Cuando una

nación acumula poder económ

ico en tiempo breve, inm

ediata-m

ente surge entre los demás Estados del sistem

a la pregunta sobrecóm

o se traducirá ese nuevo poder económico en seguridad m

ili-tar. La incertidum

bre sobre posibles reflejos expansionistas o inten-tos de dom

inación despierta nerviosismo, especialm

ente entresus vecinos. Participar en foros m

ultilaterales aumenta la legiti-

midad del actor con diferencial de poder, ya que los dem

ás pue-den conocer las intenciones del fuerte y tranquilizar sus propiasaprensiones. A

sí se desincentiva la formación de coaliciones con

el objeto de balancearlo. Mejorar las relaciones con R

usia e Indiano solam

ente ayuda a prevenir que se articulen en una alianzaanti-C

hina, sino que además contrarresta los esfuerzos de otros

poderes para atraer a una o a ambas hacia un eventual encierro

estratégico con fines de contención. Tales enfrentamientos for-

zarían a China a desviar recursos del proceso de m

odernización ypodrían encerrarla en una com

petencia desastrosa como la que

acabó con la Unión S

oviética. Se evitan costosas disputas con

44M

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Page 23: Turzi Mundo Brics

El Estado indio es más un Estado-civilización que un Estado-nación.

Este carácter ha marcado el objetivo de política exterior india, que

busca el reconocimiento de su status com

o poder regional en elsur de A

sia y como pilar del orden global. El giro estratégico de

India comenzó en la década de 1980 y 1990, con la creciente doble

apertura política y económica. H

asta ese entonces, India cargabaaún con el cam

ino del swadeshio la autosuficiencia. Ese protec-

cionismo rem

anente ha determinado que la integración al circuito

global comercial de la India haya avanzado de m

anera más lenta.

Sin embargo, ha crecido sostenidam

ente, acelerándose de manera

drástica en la última década. S

e proyecta que en menos de una

década, la relación bilateral comercial entre C

hina e India será lam

ás grande el mundo.

No obstante, a diferencia de C

hina, India no ha logrado aúnestabilizar su entorno geopolítico m

ás inmediato. Las históricas

tensiones sectarias entre la mayoría hindú y la m

inoría musulm

anaalim

entan un conflicto permanente con Pakistán. En concreto, está

el disputado territorio de Cachem

ira y la violencia terrorista, como

demostraron los atentados de M

umbai del 2008. Las visiones de

los oficiales del ejército son mucho m

ás desesperantes que la desus pares en las fuerzas navales; los prim

eros se ven rodeados porEstados fallidos (Pakistán, A

fganistán, Nepal, B

urma, B

angladesh)que ponen en peligro su seguridad nacional y son una am

enazalatente en caso de catástrofe hum

anitaria. La geopolítica de ultra-m

ar sí se ha estabilizado con mayor éxito; la plataform

a de pro-yección de poder de la m

arina india es amplia, extendiéndose hasta

el canal de Mozam

bique. En lo estrictam

ente diplomático existen objetivos centrales de

la política exterior india a los que el BR

IC favorece. U

no, la defensadel consenso y el m

ultilateralismo para la resolución de las cues-

tiones internacionales; con excepción de las disputas territorialesque son estrictam

ente bilaterales. Dos, la autonom

ía estratégica

MU

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O B

RIC

S47

el BR

IC fue un factor coyuntural o si tendrá la continuidad con que

Itamaraty ha sabido m

antener el rumbo internacional del país.

En

un

nivel m

ás estructu

ral, el agru

pam

iento

perm

ite alpaís sudam

ericano proyectarse más allá de la región y aparecer

como una potencia verdaderam

ente global. Por ejemplo, B

rasilha utilizado la insignia B

RIC

porque juzga que es funcional tam-

bién a su objetivo de obtener un asiento permanente en el C

on-sejo de S

eguridad de la ON

U. Esto repercute positivam

ente ensus relaciones con el resto de S

udamérica y frente a los Estados

Unidos. Estos dos frentes han sido cruciales para la política exte-

rior brasileña, y estabilizarlos una condición necesaria para con-siderar una plataform

a de acción más global. La estrategia B

RIC

se encuentra en perfecta sintonía con los dos ejes principalesde la diplom

acia brasileña. El primero es el las relaciones sim

é-tricas con sus “pares” de A

mérica del S

ur; el segundo, el de lasrelaciones asim

étricas con los Estados centrales del sistema inter-

nacional. En este sentido, Brasil siem

pre buscó superar su debi-lidad relativa a través de una alianza escrita con W

ashington y delavance del m

ultilateralismo com

o herramienta para elevar su sta-

tus de jugador global. Estos son los fundamentos conceptuales

de una política exterior nacional en la cual debe entenderse laestrategia B

RIC

. El bloque potencia el comprom

iso regional deB

rasil (presentándolo como la voz sudam

ericana en el mundo)

y profundiza la multilateralidad del sistem

a (ampliando el poder

de decisión de Brasil en ám

bitos globales), sin comprom

eter suasociación sui generis

con los Estados Unidos.

3. IndiaLa identidad internacional de la India en su período posindepen-dentista fue m

arcada por el no alineamiento en la confrontación

bipolar, una política que se tornaba necesaria para lograr interna-m

ente el consenso necesario para mantener unida a la nación.

46M

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Page 24: Turzi Mundo Brics

internacional se había terminado. D

el lado occidental, ni la OTA

Nni la U

nión Europea parecían saber si integrar o aislar a Rusia.

Sin espacio que ocupar ni dirección estratégica en el nuevo esce-

nario internacional quedó a merced de intereses particulares de oli-

garcas y empresas extranjeras. A

tal punto llegó esta desorienta-ción estratégica que en 1998 el m

inistro de Relaciones Exteriores

Andrei Kozyrev pidió al ex presidente norteam

ericano Richard Nixon

consejo para definir los intereses nacionales rusos.El giro interno com

enzó con la llegada de Vladim

ir Putin alpoder en 1999. S

u campaña, rem

iniscente de la Santa M

adreR

usia, apuntaba a restaurar la dignidad luego de una décadade corrupción, despojos y hum

illaciones. La diktatura zakona(dictadura de la ley) apuntaba a fortalecer al Estado com

o el ejedel nuevo m

odelo político, económico y social ruso. En el cam

podiplom

ático, el nuevo ministro Yevgeny Prim

akov –otro ex KG

B–

rechazó la subordinación a Occidente con un estilo pragm

áticoy prudente; el estilo silencioso y efectivo de un oficial de inteligencia.A

sí llevó a cabo un cambio de paradigm

a en los conceptos, obje-tivos, estrategias y m

étodos de trabajo de la diplomacia rusa. S

econsolidaron los principales lineam

ientos de la política exteriorque fue ratificada por el presidente D

imitry M

edvedev en el Con-

cepto de Política Exterior de la Federación Rusa

vigente desdejunio de 2008. El Estado es el locus

de la acción internacional. Enese m

undo de Estados, las motivaciones son el poder y la segu-

ridad más que los principios o el crecim

iento económico. La com

-petencia es un juego de sum

a cero, por lo cual el balance de poderes inevitable. Las acciones diplom

áticas rusas son evaluadas enfunción de cóm

o impactan su capacidad de presión sobre el sis-

tema internacional que com

anda Estados Unidos. C

oncentrarpoder es un objetivo clave para M

oscú, ya que es condición parael “m

undo policéntrico” que se pregona en todos los documen-

tos oficiales.

MU

ND

O B

RIC

S49

o independencia; una herencia indudable de la tradición de no ali-neam

iento pero también una precondición para garantizar el desa-

rrollo de una política exterior independiente. En el siglo XX

I, sinem

bargo, ya no significa que la India “no está con nadie” sino más

bien “libertad para escoger un socio u otro”; esto se vuelve espe-cialm

ente importante en un m

omento en el que A

sia adquierem

ayor peso. La postura india apunta a encontrar su lugar en elescenario regional en transición. Las dim

ensiones económica y

de seguridad se entrecruzan, marcadas por interacción entre la

emergencia china y la respuesta norteam

ericana. Este realinea-m

iento en el orden de seguridad asiático incluye a países como

Indonesia, Japón, Corea del S

ur, Vietnam y Tailandia. Tres, dotar

a la política exterior y la acción externa de un componente desa-

rrollista. Esto responde a la estrategia de superar los propiosobstáculos internos –desigualdades de ingreso, disparidades geo-gráficas, ineficiencias institucionales, insuficiencias de infraes-tructura– que retienen a India en la pobreza podrían hacer de lapotencia em

ergente un Potemkin sum

ergido.

4. Rusia

Rusia no se ha integrado cóm

odamente al orden internacional de

la posguerra fría. La combinación de un colapso económ

ico severoy una rápida apertura –glasnosty perestroika– creó un desastrosovacío institucional. La “terapia de shock” de Jeffrey S

achs –esta-bilización, disciplina m

onetaria y austeridad fiscal– significó enor-m

es costos para el ruso promedio. El ciclotím

ico ciclo que se diofue uno en el que R

usia concedía en la esperanza de poder formar

parte de Occidente, éste, al percibir debilidad, presionaba aún m

ásy R

usia respondía de manera confrontativa cuando sus aspira-

ciones se veían frustradas.D

errotada por la competencia bipolar y destruida por la ola neo-

liberal, el consenso era que la historia de Rusia como un gran poder

48M

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Page 25: Turzi Mundo Brics

MU

ND

O B

RIC

S51

En el mundo m

ultipolar y no polar, el Estado debe ser puestoal servicio del crecim

iento económico. En la nueva m

atriz, el desa-rrollo de la econom

ía rusa va necesariamente de la m

ano con elengrandecim

iento del Estado, instrumento director del proceso

y defensor de los intereses nacionales. El nuevo accionar inter-nacional ruso es pragm

ático y expresamente no ideológico. C

om-

bina una visión de realpolitikque busca m

antener las esferas deinfluencia en su “O

ccidente cercano” con el avance de los inte-reses económ

icos rusos en el mundo; en especial de los grandes

conglomerados estatales com

o Gazprom

(hidrocarburos), Roso-

borenxport (armas) o R

osatom (energía nuclear). U

n Estado fuertees garantía de una política exterior independiente y autónom

a,tanto de intereses internos com

o de la injerencia externa.Paradójicam

ente, la visión de geopolítica dura llevó a Rusia

a abrazar el BR

IC. R

usia es diferente al resto de sus socios: es unEstado intrínsecam

ente conservador, en tanto busca preservar elstatu quo

del orden internacional. Rusia ofrece al B

RIC

la inape-lable condición de G

ran Poder que le otorga su superioridad nuclear,y a cam

bio puede mostrarse no com

o una potencia declinante sinocom

o parte del concierto de vibrantes economías em

ergentes ypoderes ascendentes. El bloque es una instancia clave para recu-perar respeto internacional y para avanzar una agenda que buscam

ás abiertamente socavar si no el sistem

a, al menos la posición

que Estados Unidos ocupa en él.

El BR

IC es solo una de las m

anifestaciones de las estrategiasde política exterior brasileña, rusa, india y china para estabilizar elescenario global por m

edio de la generación de ámbitos m

ultilate-rales. Pero no es la única, aunque sí la única instancia en donde inte-ractúan solam

ente los cuatro. El aumento del m

ultipolarismo ha

generado un diferencial de poder a favor de estos cuatro países conel que antes no contaban. Los países del BRIC buscan cristalizar estarealidad, institucionalizándola en m

ayor multilateralism

o.

50M

AR

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O TU

RZI

CO

MPLEJO

ENTR

AM

AD

O

Fuente: The Economist, abril 2010

Si bien todos los m

iembros del B

RIC

tienen razones e intere-ses estratégicos para form

ar parte del bloque es innegable quetam

bién existen factores de tensión entre ellos. Las dos principa-les fuentes de potencial fractura son las rivalidades geopolíticas yla com

petencia económica. En cuanto a la prim

era de las dimen-

siones, los conflictos se encuentran sobre todo entre los RIC –Rusia,India y C

hina–, ya que en el espacio que los tres ocupan conver-gen com

petitivamente las dem

andas del crecimiento individual

con la geografía compartida.

Existen múltiples conflictos territoriales en agua y tierra. India

y China se disputan los territorios de A

ksai Chin, el valle de S

haks-

BRIC Conexiones

Organizaciones

y sus integrantes

Argentina

Australia

Gran B

retaña

Canadá

Francia

Unión Europea

Alemania

Italia

México

Turquía

Arabia Saudita

Estados Unidos

Kazajistán

Kirguistán

Tayikistán

Uzbekistan

Indonesia

Japón

Corea del Sur

Brunéi

Camboya

Laos

Malasia

Myanm

ar

Filipinas

Singapur

Tailandia

Vietnam

Organización de Cooperación de Shangai

Sudáfrica

Brasil

IndiaChina

Rusia

G20BRICs

BASICs

ANSA + 3

IBSA

Page 26: Turzi Mundo Brics

disputas bilaterales comerciales y de com

petencia por tercerosm

ercados. El bloque se encuentra atravesado por una serie dedivergencias que im

pactan sobre los intereses comunes, afectan

los incentivos y el alcance de la cooperación y menoscaban, poten-

cialmente, una m

ayor cohesión del bloque.

EVO

LUC

IÓN

DEL B

LOQ

UE

Hem

os visto que en las políticas exteriores de los miem

bros delB

RIC

hay intereses y opciones estratégicas que son congruentescon la form

ación de un bloque como el B

RIC

. Pero la oportunidadpara el ascenso del B

RIC

es una circunstancia; hacer uso de ellauna decisión. ¿C

ómo fue la evolución del bloque? Luego de reci-

bir creciente atención mediática, el térm

ino BR

IC se com

enzó a uti-lizar cada vez m

ás como un punto de referencia para analizar la

realidad internacional, a medida que la reconfiguración económ

icaglobal se evidenciaba y los em

ergentes surgían de manera cada

vez más clara. S

i lo pensamos por un m

omento, la propia etiqueta

BR

IC (ladrillo) evoca las ideas de cam

bio ascendente, magnitud

2

y futuro. Se había logrado capturar con éxito el zeitgeistde rees-

tructuración global. Los diplomáticos y form

uladores de políticaexterior en las cancillerías tom

aron nota de ello y pasaron a ana-lizarlo com

o un instrumento m

ás para avanzar sus agendas pro-pias de cam

bio de la realidad internacional. En la reunión anual del G

-8 en Gleneagles, Escocia, en el año

2005, se invitó a participar a las principales potencias económicas

emergentes: B

rasil, China, India, M

éxico y Sudáfrica. A

sí, se esta-

MU

ND

O B

RIC

S53

gam y el sur de Tibet o A

runachal Pradesh. China y R

usia solu-cionaron su disputa por las islas B

olshoi Ussuriysky o H

eixiazirecién en 2008. A

esto se suman los lugares de relevancia geoe-

conómica y una creciente necesidad tanto de C

hina como de India

por asegurar el flujo sostenido de importaciones para m

antenerel crecim

iento, lo que necesariamente im

plicará una mayor com

-petencia por recursos naturales. Ya existen hoy disputas por terri-torios ricos en esos insum

os estratégicos, en Asia o en terceras

regiones. India y China compiten por influencia en Irán, en un intento

por asegurarse el suministro de gas natural y pugnan por atraer

con proyectos de infraestructura a Burm

a, fuente de madera, dia-

mantes, uranio y m

etales estratégicos. El vertiginoso crecim

iento chino sumado a la baja densidad

demográfica rusa en la parte oriental de su territorio hacen pen-

sar a Moscú en las perspectivas a largo plazo de su integridad terri-

torial, en especial la zona de Siberia. D

el mism

o modo, en India se

preocupan por el aumento de las capacidades de la arm

ada china,lo cual podría disparar una dinám

ica de rivalidad entre grandespoderes por el control del océano Índico. La com

petencia por elcontrol de las rutas m

arítimas com

erciales está llevando a China

a impulsar planes de construcción de una arm

ada de aguas azu-les y a India a reforzar su control del G

olfo de Bengala y del M

arA

rábigo. Mientras el crecim

iento ha llevado a India a expandirseen un eje este-oeste, el desarrollo chino lo ha im

pulsado a exten-der su propia área de influencia hacia el sur. C

hina está constru-yendo o rem

odelando los puertos de Gw

adar (Pakistán) Chitta-

gong (Bangladesh), Kyauk Phyu (Burma) y Colom

bo y Ham

bantotaen S

ri Lanka, junto a ayuda económica y m

ilitar. Por razones obvias, B

rasil se encuentra al margen de este tipo

de conflictos. Sin em

bargo, hay otros múltiples factores de pugna

entre los miem

bros del bloque: desde los efectos nocivos que tieneel valor del yuan sobre las exportaciones del resto del B

RIC

, hasta

52M

AR

IAN

O TU

RZI

2. Las ilustraciones que aparecieron en los medios cuando surgió el B

RIC

lo ejem-

plifica: el elefante (India), panda o dragón (China) y oso (R

usia). Si bien B

rasil noes asociado unánim

emente a algún anim

al es una nación que evoca directamente

esta noción de tamaño o extensión (O

mais grande do m

undo).

Page 27: Turzi Mundo Brics

ron el hecho de haberse mantenido relativam

ente indemnes a las

consecuencias más desastrosas de la crisis de 2008-2009. El lan-

zamiento form

al como organización dem

ostró que la coordina-ción entre ellos era posible. En un m

omento en que se clam

abapor gobernabilidad y liderazgo, el B

RIC

se ganó el respeto inter-nacional. El contraste con la falta de supervisión y control en elsector financiero que revelaron las econom

ías avanzadas acentuóaún m

ás el soft powerdel B

RIC

. La visibilidad reforzaría las dem

andas por una nueva arqui-tectura de las instituciones financieras internacionales y por laconstrucción de un nuevo orden financiero global poscrisis. S

einstaló la necesidad de diversificar el sistem

a internacional de divi-sas, buscando reem

plazar al dólar por las monedas locales en el

comercio bilateral. Para el BRIC la crisis norteam

ericana –en un contexto en el queel dólar es la m

oneda de reserva global– constituía una amenaza

potencial seria. La liquidez internacional en este contexto dependede la em

isión monetaria de la R

eserva Federal. Con Estados U

ni-dos en recesión, la vuelta al crecim

iento sería vía el estímulo, que

es lo mism

o que la expansión de la emisión m

onetaria; esa expan-sión deprecia el valor de la m

oneda. Los cuatro países del bloquetem

ían que Estados Unidos exportara inflación al resto del m

undopara salir de la crisis, licuando el valor de las reservas de dólaresen sus propios bancos centrales. Pidieron am

pliar el monto y exten-

der la composición de los D

EG (D

erechos Especiales de Giro), los

activos de reserva a disposición de los miem

bros del FMI.

En la segunda cumbre del B

RIC

en 2010 en Brasilia, el obje-

tivo fue principalmente fortalecer los lazos entre los m

iembros,

darle más densidad internacional al bloque por m

edio del forta-lecim

iento de los lazos comerciales y la inversión extranjera

directa. Reconociendo que existe una m

ultiplicidad de interac-ciones y canales, adem

ás de los puramente estatales, se incluyó

MU

ND

O B

RIC

S55

bleció lo que se conocería como el G

-8+5. Los progresivos encuen-tros entre autoridades en diferentes cum

bres internacionales die-ron lugar a una creciente coordinación de posiciones, en su m

ayo-ría restringidas a la m

odificación del sistema de representación en

los organismos financieros internacionales y a m

edidas de polí-tica m

onetaria con efecto sobre la estabilidad financiera global. Lacrisis económ

ica del 2008 galvanizó a las naciones emergentes en

la noción de que solamente a través del consenso y la coordina-

ción de políticas macro sería posible restablecer la senda de cre-

cimiento. Y

para el BR

IC, específicam

ente, actuó como catalizador

para pasar del agrupamiento basado en la coincidencia

de facto-res a la explotación deliberada de la convergencia

de intereses.A

brió una ventana de oportunidad para avanzar una agendam

ás amplia de cooperación tendiente a una m

ayor “democrati-

zación de las relaciones internacionales”.En la cum

bre del G-8 de H

okkaido, Japón, los BR

ICs acorda-

ron celebrar la primera reunión del bloque al año siguiente. En

junio de 2009, en la ciudad rusa de Ekaterinburgo se celebró el pri-m

er el primer encuentro de jefes de Estado del B

RIC

, en paraleloa la cum

bre de la Organización de C

ooperación de Shanghai.

Los presidentes Luiz Inacio Lula da Silva de B

rasil, el ruso Dim

itriM

edvedev, Hu Jintao de C

hina y el primer m

inistro indio, Man-

mohan Singh lograron acordar las bases para un m

ecanismo efec-

tivo y duradero de diálogo y concertación internacional con pers-pectivas de largo plazo. En esta prim

era cumbre el principal objetivo

era de imagen: presentarse com

o una alternativa a los centros dedecisión tradicionales, dem

ostrar unidad y ganar credibilidad inter-nacional poniendo en funcionam

iento un mecanism

o de interacciónentre los cuatro socios. A

l ser el primer encuentro de los m

andata-rios se buscaba un m

arco inaugural para dar curso al BR

IC m

ásque definir claram

ente un curso de acción. A la reputación que los

cuatro países tenían ganada por el crecimiento sostenido sum

a-

54M

AR

IAN

O TU

RZI

Page 28: Turzi Mundo Brics

Estados que apunta a destruir el orden internacional vigente? De los

comunicados de las reuniones se desprende que la agenda avan-

zada por el BR

IC puede ser agrupada en tres grandes categorías:

• La reforma de los poderes de voto en el FM

I y en el Banco

Mundial. Esto com

prende la redistribución del sistema de parti-

cipación –votos y mem

brecía del Foro de Estabilidad Financiera–y una reasignación de las cuotas, m

edidas en DEG

3. • M

ayor y mejor regulación y supervisión del sistem

a mone-

tario internacional teniendo como objetivo últim

o un eventualreem

plazo del dólar como la m

oneda de reserva global. • R

eforma del C

onsejo de Seguridad de las N

aciones Unidas.

El primer grupo de dem

andas no puede calificarse como anti-

sistema. N

o solamente han sido respaldadas por las propias bases

institucionales del sistema com

o las Naciones U

nidas4sino que

son francamente im

perativas si se quiere preservar el sistema fun-

cion

and

o. La p

osició

n d

el BR

IC fo

rtalece el sistema, ya q

ue

busca ampliar su legitim

idad reflejando mejor la realidad del peso

relativo de las unidades que lo componen. Por ejem

plo, aunquela econom

ía china representa más del doble que las econom

íascom

binadas de Holanda y B

élgica cuenta con una cuota en el FMI

que es menor a la de am

bas economías europeas com

binadas. Es cierto que el bloque de potencias em

ergentes ha utilizadotácticas de presión para avanzar los cam

bios que pretende. En lacum

bre del G-20 de Pittsburgh de abril de 2009, los cuatro socios

del BR

IC dejaron en claro que no proveerían fondos para recapi-

talizar el Banco M

undial y el FMI de no reform

arse el sistema de

MU

ND

O B

RIC

S57

a representantes del sector privado, empresarios, banqueros,

cooperativas y bancos de desarrollo estatal para explorar opor-tunidades de negocios. C

hina y Brasil firm

aron acuerdos en mate-

ria de comercio y energía, tales com

o la construcción de unaplanta de acero entre la china W

uhan Iron and Steel y el grupo

brasileño EBX, en el estado de Río de Janeiro, o el desarrollo estra-

tégico conjunto entre las petroleras estatales Sinopec y Petro-

bras. La reunión se redujo luego de que el presidente chino Hu

Jintao debiera retornar imprevistam

ente a China por un devas-

tador terremoto en la provincia de Q

inghan. La declaración final conjunta reiteraba la dem

anda por lareform

a de los organismos financieros internacionales de Ekate-

rinburgo y resaltó la necesidad de transformaciones en la gober-

nanza global. Se declaró abiertam

ente el apoyo a un orden mun-

dial multipolar, equitativo y dem

ocrático basado en el derechointernacional, la igualdad, el respeto m

utuo, la cooperación, laacción coordinada y las decisiones colectivas de todos los países.Q

uedó claramente definida la im

portancia que para el bloque tieneavanzar decididam

ente y sin demora sobre transform

aciones ins-titucionales que aseguren la gobernabilidad global, advirtiendoque la postergación indefinida solam

ente agrava el riesgo de ero-sión de su autoridad. El com

unicado expresa, en particular, uncom

promiso con la diplom

acia multilateral que reserve para las

Naciones U

nidas un papel central en el tratamiento de los desa-

fíos y amenazas globales. S

e reafirma la necesidad de una am

pliareform

a de la ON

U –puntualm

ente el Consejo de S

eguridad– paratornarla m

ás efectiva, eficiente y representativa. Señala la im

por-tancia que le atribuyen al status de India y B

rasil en los asuntosinternacionales y se apoyan sus aspiraciones a desem

peñar unpapel m

ás relevante en la ON

U.

¿Qué quiere entonces el B

RIC

? ¿Cuál es la naturaleza y exten-

sión de sus intenciones y demandas? ¿Estam

os ante una alianza de

56M

AR

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RZI

3. Véase http://w

ww

.imf.org/external/np/exr/facts/quotas.htm

para una versióndetallada de las reform

as en curso.4. V

éase el Reporte de la C

omisión de Expertos de la A

samblea G

eneral de laO

NU

sobre Reform

a Financiera: http://ww

w.un.org/ga/econcrisissum

mit/docs/

FinalReport_C

oE.pdf

Page 29: Turzi Mundo Brics

enfrentamientos que escalaría progresivam

ente. Aunque el gober-

nador del Banco Popular de C

hina Zhou Xiaochuan haya llam

adola atención de todos cuando en m

arzo de 2009 planteó abierta-m

ente la necesidad de “crear una moneda de reserva internacional

que no estuviese conectada a una nación individual y pudiera per-m

anecer estable en el largo plazo”, el BR

IC no tiene incentivo

alguno para que la moneda norteam

ericana pierda valor. Un des-

censo abrupto del dólar tendría un efecto devastador en los casitres billones de dólares que C

hina tiene acumulados, haciendo

temblar toda la estructura económ

ica global. Los sucesivos pro-gram

as de relajación monetaria –quantitative Ealing– son los que

han generado una presión inflacionaria de mediano plazo sobre

el dólar. Las acciones del BR

IC buscan de hecho evitar la depre-

ciación acelerada de la divisa norteamericana. La advertencia de

Zhou fue menos destinada al hundim

iento de la moneda nortea-

mericana que a alertar sobre el m

antenimiento de su valor. N

ueva-m

ente el BRIC buscó la reforma dentro de un m

arco de estabilidaddel sistem

a y no su subversión. A

diferencia de las demandas del grupo uno y dos, el B

RIC

notiene m

uy claro qué es lo que quiere hacer con el sistema de N

acio-nes U

nidas. En lo específico, han demandado un cam

bio en laco

mp

osició

n d

e los m

iemb

ros d

el Co

nsejo

de S

egu

ridad

. El

Consejo está conform

ado por quince naciones, de las cuales cincoson m

iembros perm

anentes (Estados Unidos, Francia, Reino U

nido,C

hina y Rusia) y diez son tem

porales. Los miem

bros no perma-

nentes son electos cada dos años como representantes regiona-

les, al tiempo que la presidencia del Consejo se rota m

ensualmente

de manera alfabética. C

uriosamente, los cuatro B

RIC

s estarán enla presidencia del C

onsejo durante 2011. U

na de las propuestas del equipo de expertos comisionado

por el Secretario General Kofi A

nnan fue aumentar a seis el núm

erode m

iembros perm

anentes. Los países que han hecho las deman-

MU

ND

O B

RIC

S59

asignación de votos y las cuotas de los países emergentes. B

ra-sil fue especialm

ente directo al respecto y China retuvo 40 m

ilm

illones de dólares hasta obtener una respuesta favorable. Aun-

que sí se aceptó ampliar el m

onto, su composición no se alteró.

En septiembre de 2009, el Fondo M

onetario aceptó incrementar

el volumen de 21.400 m

illones a 204.000 millones. Pero en su

última revisión quinquenal de noviem

bre de 2010, los DEG

siguenestando form

ados por el dólar norteamericano (41.9%

), el euro(37.4%

), la libra esterlina (11.3%) y el yen japonés (9.4%

). Clara-

mente, hay una m

ayor inflexibilidad en los medios em

pleadospor el B

RIC

para avanzar los cambios. Pero eso no quiere decir

que los cambios que se persiguen sean m

ás revolucionarios. Lasm

odificaciones buscan la inclusión de más m

iembros en el sis-

tema de B

retton Woods m

ás que su destrucción o descarte. Lacondicionalidad com

o medio de coacción en el ám

bito del FMI

no debería parecernos signo de ataque al sistema sino m

ás biende adopción de la práctica usual.

No es la dem

anda de actualización y reforma del B

RIC

la quepone en peligro la continuidad del sistem

a sino la falta de ade-cuación del sistem

a a la realidad global actual. Esto cobra unam

ayor relevancia cuando se abre el análisis y se consideran otraserie de m

edidas que el BR

IC podría haber adoptado y eligió no

hacerlo. El bloque cuenta con reservas internacionales que exce-den los 3 m

il millones de dólares. Esto representa un tercio del

total mundial. D

e haber buscado socavar las instituciones finan-cieras de un sistem

a internacional que objetivamente los sub repre-

senta, el BR

IC podría haber apartado solam

ente un sexto de susreservas internacionales y haber form

ado un fondo con capitali-zación equivalente a la del FM

I. El segundo conjunto de dem

andas –las monetarias– fueron

interpretadas en gran medida com

o un ataque contra el poderfinanciero estadounidense; com

o el primer asalto en una serie de

58M

AR

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O TU

RZI

Page 30: Turzi Mundo Brics

la inclusión de diez nuevos miem

bros no permanentes y agru-

pados por regiones5. El proceso de am

pliación del Consejo se

encuentra actualmente sin resolución a la vista, por lo que pode-

mos anticipar una presión creciente de aquí en adelante por parte

de miem

bros del BR

IC.

La manera en que el bloque ha abordado la reform

a del órganode la O

NU

responsable por el mantenim

iento de la paz y la segu-ridad es ilustrativa de los lím

ites del BR

IC. Prim

ero, atestigua quelas com

petencias de poder que atraviesan al grupo pueden entor-pecer la acción colectiva. A

un si todos los miem

bros comparten

que un cambio es preferible al statu quo, los intereses estatales

se miden en térm

inos de ganancias relativas y no solo por lasganancias absolutas. S

egundo, da cuenta de que es más fácil

para el BR

IC presentar una agenda negativa basada en la crí-

tica de la situación actual. Hasta el m

omento, la agenda de cam

-bio del B

RIC

se compone m

ás que nada de los elementos que no

se quieren del presente orden internacional. Esto constituye unm

ultilateralismo de m

ínima o defensivo, para restringir el unila-

teralismo, lo cual no es suficiente para sentenciar que el B

RIC

persigue una alternativa al sistema, un m

ultilateralismo exclu-

yente o actitudes ofensivas hacia las bases constitutivas del ordeninternacional. Tam

poco es suficiente para considerar que los BR

ICserán la fuerza principal que llevará a cabo una reconfiguraciónde ese orden. N

o hay todavía por parte del bloque una alterna-tiva coherente de reform

a ni una propuesta congruente detrásde la cual encolum

nar al bloque entero o a otros miem

bros de lacom

unidad internacional

MU

ND

O B

RIC

S61

das más fuertes para los asientos perm

anentes son Japón, Ale-

mania, India y B

rasil. Japón y Alem

ania ocupan el segundo y ter-cer lugar en la lista de contribuyentes de fondos a la O

NU

. Brasil

e India son dos de los países que más tropas aportan a las m

isio-nes de paz, con m

ás de dos mil efectivos en el caso de B

rasil y casinueve m

il en el de India. Rusia es el menos proclive a que se am

plíeel C

onsejo, ya que más m

iembros im

plican una dilución de supoder de decisión. C

hina también es m

iembro perm

anente; peroestim

a que las pérdidas que podría sufrir por la reducción de ladiscrecionalidad de sus decisiones en el seno del C

onsejo –porejem

plo, en el bloqueo a sanciones de regímenes com

o el de Om

aral B

ashir en Sudán– están m

ás que compensadas por la ganancia

de un miem

bro adicional limitando la discrecionalidad de las poten-

cias de Occidente. Las rivalidades geopolíticas entre C

hina e India–en especial el apoyo chino a Pakistán– hacen que la aplicaciónindia sea un tem

a que genera fuertes debates en Pekín. Pero a lavez es preferido antes que el escenario en que el asiento perm

a-nente lo ocupe Japón.

En septiembre de 2004, los cuatro candidatos publicaron una

declaración conjunta pidiendo ser aceptados en calidad de miem

-bros perm

anentes junto a un Estado africano. La declaración fueap

oyad

a pú

blicam

ente p

or Fran

cia y el Rein

o U

nid

o. E

n el

mom

ento se especuló que el quinto asiento podría ser para Nige-

ria, Sudáfrica o un representante de la Liga Á

rabe. Aunque exista

un amplio consenso entre los 192 países que integran la organi-

zación a favor de una mayor representación de los países en desa-

rrollo, no todos consideran que la manera es la am

pliación de lacantidad de m

iembros perm

anentes y no permanentes del C

on-sejo de S

eguridad. Existe una propuesta alternativa a la del G-4

(Alem

ania, Brasil, India y Japón). El M

ovimiento U

nidos para elC

onsenso, integrado por países como España, Italia, Pakistán y

México busca establecer un acuerdo “por consenso” que estipule

60M

AR

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O TU

RZI

5. Seis para Á

frica, cinco para Asia, cuatro para Latinoam

érica y el Caribe, dos para

Europa Oriental y tres para Europa O

ccidental.

Page 31: Turzi Mundo Brics

en el que han surgido. Existen diferentes grados y combinaciones

de una u otra postura para diferentes ámbitos del sistem

a. El punto clave es qué poderes revisionistas

buscan reempla-

zar el sistema; y ello anticipa crecientes niveles de conflicto y

tensión que pueden escalar hasta el enfrentamiento arm

ado. Peroel B

RIC

parece ser más bien un poder de tipo reform

ista. Acepta

las bases del sistema vigente, no las cuestiona. Esto quiere decir

que el bloque no ha buscado un cambio de sistem

a sino un cam-

bio del sistema. B

rasil, Rusia, India y C

hina buscan llevar a cabotransform

aciones dentro de los parámetros de la estructura inter-

nacional, no revoluciones que buscan destruir esos parámetros y

reemplazarlos por otros nuevos.

Con la evidencia de que disponem

os podemos concluir que

el BRIC es un bloque esencialmente satisfecho con el sistem

a inter-nacional y con una agenda de cam

bio gradual y pacífico. ¿Peroqué puede pasar de aquí en adelante? ¿Tal vez sus dem

andas sonde reform

a y no de rebelión porque aún no cuenta con suficientesrecursos, pero a m

edida que el tiempo avance, el bloque irá cre-

ciendo y poco a poco se irá desafectando cada vez más del sis-

tema hasta dejar de ser una parte interesada en el m

antenimiento

del mism

o? Para responder a estos interrogantes existen dos m

edidasque podem

os presentar como respuesta. La prim

era es el grado desostenim

iento de las instituciones internacionales y la segundalos niveles de gasto m

ilitar. Un rechazo del sistem

a debería obser-varse en un desestim

ación creciente por las instituciones que lo sus-tentan. O

al menos en m

ayor desatención hacia las organizacio-nes que sustentan un orden internacional que se percibe injusto oajeno. Pero nada de eso se verifica. En los últim

os diez años, conel balance económ

ico a favor de los emergentes y con el increm

entocategórico del poder global del BRIC, las contribuciones de los m

iem-

bros del grupo al sistema de N

aciones Unidas no solam

ente no des-

MU

ND

O B

RIC

S63

REV

ISIO

NIS

TAS

Y C

ON

SERV

AD

OR

ES

Existen actores dentro del sistema internacional con la capacidad para

determinar las reglas del juego. Puede ser un concierto de poderes –com

ola Europa del siglo X

IX– o una superpotencia –com

o Estados Unidos

durante la segunda mitad del siglo X

X. A

ellos se agregan algunos acto-res m

enores, que sin haber tomado parte en la constitución de las norm

asque regulan la conducta internacional las aceptan de buen grado porquelas juzgan funcionales a sus intereses. Estos son las potencias conserva-doras o actores pro statu quo, que aceptan la distribución de poder y elorden jerárquico.Pero tam

bién puede ocurrir que un Estado se encuentre insatisfecho conel ordenam

iento y busque reemplazarlo; a éste se lo denom

ina Estadoanti-sistem

a o revisionista. Ejemplos históricos de Estados revisionistas

son Alem

ania bajo Adolf H

itler, la China de Mao Zedong y la Italia fascista.

El revisionismo es el resultado de una situación en la que el poder de

un actor crece por encima del lugar que ocupa en la jerarquía o por incom

-patibilidades existenciales de tipo ideológico.Los Estados revisionistas buscan una transición de poder, que puede im

pli-car un reem

plazo de los líderes del sistema o la alteración de la estruc-

tura mism

a del liderazgo. Este último caso requiere m

odificar las reglasconstitutivas y regulativas del sistem

a, alterando la distribución de poderque toda estructura institución m

antiene. El campo pro statu quo

buscarádefenderlas; y si la contradicción se agudiza, entonces se deberá resolvera través de una guerra hegem

ónica.

¿Existen razones para preocuparse del nuevo poder interna-cional que han acum

ulado Brasil, R

usia, India y China? El inte-

rrogante central que plantea todo nuevo poder global o grupode potencias em

ergentes es si aceptarán o rechazarán el sistema

62M

AR

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O TU

RZI

Page 32: Turzi Mundo Brics

ello se compensa cuando consideram

os que el aumento del gasto

militar no es solam

ente aumento en arm

amento sino tam

bién enpersonal y adm

inistración. Incluso si nos circunscribimos solam

enteal gasto en arm

amento hay que considerar que la m

ayor propor-ción es en m

odernización. Esto incluye renovación de sistemas obso-

letos, mayor gasto en investigación y desarrollo, y los m

ayores cos-tos de sistem

as de defensa más tecnológicam

ente intensivos. Utilizar

los porcentajes con respecto a los productos también sirve para dar

cuenta de las intenciones, ya que los presupuestos revelan el ordende prioridades y preferencias nacionales en el m

omento de la asig-

nación de recursos limitados.

GA

STO

MILITA

R, B

RIC

y US

A / 1998-2008

Fuente:Elaboración propia en base a datos de SIPR

I Military Expenditure D

atabase.

Objetivam

ente podría pensarse que el BR

IC cuenta con las

capacidadespara que pueda sostener

un desafío sistémico. S

inem

bargo, por tratarse de un actor colectivo, hay que desagregar

MU

ND

O B

RIC

S65

cendieron sino que aumentaron. A

medida que crecen los países

del BRIC participan cada vez más –no m

enos– en el entramado ins-

titucional que regla y regula las relaciones interestatales.

CO

NTR

IBU

CIO

NES

AN

UA

LES A

LA O

NU

Fuente: elaboración propia en base a datos del UN

Regular Budget Scale of Assesm

ents, UN

Secretariat, 2001 y 2010.

En cuanto al personal involucrado en operaciones de paz de laO

NU

, casi todos los BRICs incrementaron su participación entre 2001

y 2011. Brasil pasó de 100 efectivos a 2263, India es el tercer país enel m

undo que más personal contribuye y China m

ultiplicó por catorceel núm

ero de efectivos que envía a este tipo de intervenciones. Elúnico que redujo su participación fue R

usia, en más de un tercio.

Asim

ismo se puede observar que los porcentajes del producto bruto

que cada uno de los BR

ICs dedica al gasto m

ilitar han descendidoo no han aum

entado significativamente durante la década 1998-

2008. Podría objetarse que dados los crecientes productos losgastos en térm

inos absolutos sí son mayores. Pero creem

os que

64M

AR

IAN

O TU

RZI

Dólares

$ 70.000.000

$ 60.000.000

$ 50.000.000

$ 40.000.000

$ 30.000.000

$ 20.000.000

$ 10.000.000

$ 0

Brasil

47.6%

2000-2001 2010-2011

Rusia

172.9%India

218.3%China

323.1%

% del PBI

5

4.54

3.53

2.52

1.51

0.50

USA

Rusia

India

China

Brasil

1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

Page 33: Turzi Mundo Brics

nes internas del mism

o se agudizarían, dificultando la coordina-ción necesaria para lograr su objetivo de m

áxima. A

umentaría el

potencial del sistema para explotar las divisiones en el interior del

bloque y para cooptar a uno o a varios de sus miem

bros, neutra-lizando en últim

a instancia la amenaza.

MU

ND

O B

RIC

S67

las intencionesde sus m

iembros para encontrar evidencia de que

el BR

IC quiera

hacerlo. En el capítulo anterior revisamos los

objetivos de política exterior de Brasil, R

usia, India y China por

separado y del BR

IC en conjunto para concluir que no hay prueba

que así lo sugiera. Los BR

ICs deben su m

ayor capacidad de pro-yección global a espacios abiertos por el propio sistem

a. Ello cons-tituye un incentivo estructural para los cuatro m

iembros del blo-

que por mantener un sistem

a del cual se están beneficiando. Pero supongam

os que las intenciones cambien y que el B

RIC

quisiera destruir el orden; en este caso no sería tan fácil mantener

la unidad del bloque. La propia cohesión del BR

IC fue inducida por

la reacción común al unilateralism

o norteamericano. La única

manera en que puede concebirse un bloque tan heterogéneo es

como reacción a una descom

unal concentración del poder en elsistem

a internacional. El abuso de un actor de su posición en elsistem

a alteró los cálculos de costo/beneficio de mantenim

ientodel statu quo, galvanizando a los B

RIC

s en una agenda de cambio.

Aun si las intenciones fueran revisionistas y si se superara el

dilema de acción colectiva m

onumental de la coordinación de

acciones, quedaría todavía pendiente el tema de las capacidades.

Aunque lo quisiera, el análisis de los factores y la unión y desu-

nión que existen entre cada uno de los miem

bros del bloque revelaque el B

RIC

no podría lanzar un desafío real y efectivo al sistema

internacional. Ceteris paribus, si se desvaneciera el unilateralismo,

se disiparían con él parte de los incentivos a la cooperación delbloque: en ausencia de la posibilidad de una reacción hegem

ónicacada uno de los B

RIC

s –en especial los RIC

s por razones geopolí-ticas– se focalizaría m

ás en el poder relativo vis-à-viscon los otros

tres miem

bros. Así, en el supuesto escenario de que los socios del

BR

IC lograran am

asar suficientes capacidades nacionales como

para combinarlas en una alianza antisistém

ica, los costos para elbloque crecerían de m

anera geométrica. Las rivalidades y tensio-

66M

AR

IAN

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RZI

Page 34: Turzi Mundo Brics

Desde una perspectiva puram

ente económica, los B

RIC

s tienensentido por su escala, que los posiciona óptim

amente para apro-

vechar los beneficios de la reconfiguración del dinamism

o eco-nóm

ico global a favor de los mercados em

ergentes. Pero vistosdesde la ciencia política –que incorpora la dim

ensión del poder–un bloque com

o el BR

IC cobra una nueva significación. Ese atri-

buto particular que comparten los cuatro países –la escala– tiene

una relación directa con el poder relativo de las unidades en el sis-tem

a internacional interestatal. El tamaño de una econom

ía ofreceuna m

edida para anticipar la transformación de esas capacidades

en poder nacional. Cuando hay cam

bios en el poder nacional,entonces las jerarquías internacionales quedan desactualizadas;si no se reacom

oda la distancia entre poder real y status interna-cional se generarán tensiones crecientes y dem

andas cada vez

MU

ND

O B

RIC

S69

CAPÍTULO TRESCONTEXTO MUNDIAL

Page 35: Turzi Mundo Brics

se pierden en Washington se ganan en N

ueva Delhi, M

oscú, Bra-

silia y Pekín. Hay un vínculo directo entre m

ayor poder y mayor

ambición, que se deriva de la suposición de que el objetivo pri-

mero –y últim

o– de los Estados es la acumulación de poder. M

ásaun, la variante ofensiva del realism

o supone que los Estados noestarán nunca satisfechos con la cuota de poder que poseen, cual-quiera sea la m

agnitud de esa cuota. Si la única m

anera de ase-gurar la seguridad propia es la perm

anente maxim

ización delpoder, entonces el crecim

iento de las capacidades nacionales deuna de las unidades del sistem

a significa el principio de un cicloque llevará a una expansión de los intereses y las dem

andas deesa m

isma unidad sobre el resto. Pero este m

arco conceptual tieneseveras lim

itaciones. Primero, supone que hay una constante his-

tórica inmutable e inescapable; segundo, deriva autom

áticamente

intenciones de capacidades olvidando que el resultado finaltam

bién depende de la respuesta del sistema. S

i la respuesta delos poderes defensores del statu quo

se endurece, entonces lasdem

andas de los ascendentes se radicalizarán y se acabará en unjuego de sum

a cero que se resuelve con una guerra. Pero ¿cuálesson las condiciones invariables que dictan que necesariam

entedeba ser así?

Pensemos por un segundo en las opciones estilizadas que

tiene ante sí el BR

IC com

o la potencia emergente: rechazar o acep-

tar el orden internacional. Para el sistema, su opción es acom

odaral B

RIC

o enfrentarlo. Tenemos que hacer aquí una aclaración:

cuando hablamos de sistem

a, nos referimos principalm

ente a lapotencia principal –Estados U

nidos– y las alianzas que pueda gene-rar para defender el statu quo. Q

ué tipo de alianzas, qué tipo dedefensa y qué calidad del statu quo son aspectos contingentes,que no se pueden prever de antem

ano y que serán modificados

en el juego de la interacción. Así planteado, se configurarían cua-

tro posibles caminos de interacción:

MU

ND

O B

RIC

S71

más intensas de cam

bio del orden internacional. Utilizando los

datos más recientes del índice com

puesto de capacidades mate-

riales nacionales (CIN

C) 6, el panoram

a de distribución global delpoder para los B

RIC

s y la superpotencia es el siguiente:

CA

PAC

IDA

DES

BR

IC y U

SA

(2000-2007)

Fuente: elaboración propia en base a National M

aterial Capabilities D

ata (v4.0; 2010), Corre-

lates of War Project .

Para la teoría realista de relaciones internacionales, dinámi-

cas como las del gráfico anterior son alarm

antes. Esta perspec-tiva se focaliza en la presencia de ganancias y pérdidas relativas(trade offs) dentro interior del sistem

a: las cuotas de poder que

70M

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RZI

2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007

20%

15%

10%5%0%

China, 20%

USA, 14%

India, 7%

Rusia, 4%

Brasil, 2%

6. El índice se compone de seis indicadores, que m

iden: la producción de hierro yacero, los gastos m

ilitares, el tamaño del personal m

ilitar, el consumo energético,

la población total y la población urbana.

Page 36: Turzi Mundo Brics

impugnar el sistem

a, lo que hace menos probable la radicalización,

modera el balance de poder y da una estabilidad general al sistem

a.La com

binación actual entre estructura de intereses y distribu-ción de poder determ

ina que el BR

IC se m

ueva en la dimensión

inferior, en la que acepta las bases constitutivas del sistema esta-

blecido por la superpotencia. Con una fuerte asim

etría a su favor,el actor unipolar retiene todavía la superioridad m

ilitar. Es poreso que una agenda de reform

a profunda puede ser leída como

una provocación o un reto al sistema. D

esde Washington no se dis-

tingue la diferencia entre un ataque al sistema y un ataque a la posi-

ción de los Estados Unidos en ese sistem

a. La academia y la polí-

tica exterior estadounidenses no conciben la supervivencia delsistem

a sin la posición dominante de la “nación indispensable”.

Para el BR

IC, la asim

etría de poder obliga a cotejar los bene-ficios de avanzar una reform

a con las probabilidades de desper-tar una reacción hegem

ónica o un reflejo unilateralista por partede los sectores duros de los actores pro statu quo. U

na represaliade este tipo podría no solo im

pedir el cambio sino deteriorar la

situación hasta un equilibrio inferior al inicial. El BR

IC se despla-

zaría hacia el cuadrante de rechazo, volviéndose un poder revi-sionista. D

e contar con las capacidades optaría por el rechazodel sistem

a (1). Aquí es donde se agudizan las contradicciones y

se polariza la interacción. Para los realistas, el cuadrante (4) es unailusión m

omentánea, ya que la experiencia histórica dem

uestraque los poderes em

ergentes en algún mom

ento se encontraráninsatisfechos y aum

entarán sus demandas hasta el punto de plan-

tear un desafío sistémico. Para los liberales com

o Ikeneberry, elorden internacional actual está anclado en la doble libertad polí-tica de la dem

ocracia y económica del m

ercado. Posee una “den-sidad institucional” que hace al sistem

a accesible y expansivo, concapacidad para generar crecim

iento e integrar a múltiples “accio-

nistas” (stakeholders). Con bajos costos de entrada, altos costos

MU

ND

O B

RIC

S73

Fuente: Elaboración propia

La capitulación (2) se daría en caso de que el sistema se entre-

gara irremisiblem

ente a una derrota de sus principios fundamen-

tales, ante una arrolladora alternativa excluyente. La contención (3)tendría lugar en el caso de que la potencia em

ergente aceptara loslím

ites que le impone el sistem

a pero sin estar completam

ente inte-grada. Sigue siendo revisionista en sus intenciones y políticas, perono cuenta con el suficiente poder efectivo para desplazarse al cua-drante de la radicalización (1) y presentar un desafío al sistem

a. En este m

omento, estam

os en el escenario (4) en donde lasdem

andas del BR

IC no son im

pugnatorias del sistema –aceptar el

sistema no im

pide empujar por su reform

a–, y éste parece estarrespondiendo con relativa flexibilidad para integrar las nuevas rea-lidades. La teoría indica que un sistem

a internacional puede per-durar “m

ás allá de la hegemonía” si está basado en instituciones

abiertas e integradoras. Este sistema institucional perm

ite evitarlos excesos de los actores poderosos. El orden que el actor m

áspoderoso ha construido m

itiga las enormes asim

etrías existentesentre sus partes. S

e establece un comprom

iso mutuo por el cual

el hegemón lim

ita el ejercicio de su poder y los Estados secunda-rios participan en el sistem

a internacional, legitimándolo. Estos

mecanism

os de cooperación mutuam

ente beneficiosa reducen elriesgo tanto de dom

inación como de exclusión de los Estados m

eno-res. A

su vez, los Estados menores ven reducida la m

otivación para

72M

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RZI

Page 37: Turzi Mundo Brics

el incentivo del BRIC a rechazar esa “tercerización forzada” aumenta.

Mientras Estados U

nidos continúe suministrando bienes públicos

globales, el cálculo costo-beneficio del BR

IC sobre el sistem

a sem

antendrá positivo. Pero si Washington perdiese la capacidad de

proveer esos bienes públicos o intentara imponer “m

ales públi-cos” (una devaluación del dólar directa o encubierta vía la presiónpor la apreciación de otras m

onedas), entonces la reacción del BRICcom

enzaría a cambiar.

El cuadro interactivo entre actor y sistema intenta dem

ostrarque los resultados no se encuentran destinados de antem

ano sinoque son contingentes a decisiones, errores de cálculo, cam

bios detrayectoria e im

previstos. Esta descripción más acertada de una

realidad internacional compleja no es solam

ente una mejor guía

para la política pública, sino que debería constituir un imperativo

de acción. De fallar la integración y desplazarnos hacia el cuadro

de radicalización, las consecuencias globales serían catastróficas.Tom

emos com

o ejemplo la acción conjunta del B

RIC

en la reforma

de los sistemas financiero y m

onetario internacionales. Puedentenerse dos interpretaciones opuestas. U

na perspectiva más ins-

pirada en el realismo verá el inicio de un ciclo que ha com

en-zado con la transform

ación del aumento de las capacidades del

BR

IC en aum

ento de sus demandas. D

e manera teleológica, anti-

cipará que en el futuro esas demandas aum

entarán en alcance eintensidad hasta el punto de llegar a un inescapable conflicto desum

a cero entre el sistema y un B

RIC

crecientemente revisionista.

Pero esto no se basa en la evidencia con la que contamos hasta el

mom

ento sino en la aceptación de teorías preexistentes. Aun-

que no podemos negar la fuerza de factores y presiones estructu-

rales tampoco podem

os renunciar al impacto de la acción hum

anaen la superación de las condiciones. B

enjamin D

israeli tenía razónen que el hom

bre no es hijo de las circunstancias sino que lascircunstancias son hijas del hom

bre.

MU

ND

O B

RIC

S75

de salida y la posibilidad de obtener pingües beneficios partici-pando, el sistem

a genera incentivos estructurales hacia la mode-

ración de las demandas y la conservación del statu quo.

¿En qué radica el peligro de desplazamiento hacia el cuadrante

(1)? Principalmente en el juego entre los com

ponentes uni y multi

polares del sistema. Específicam

ente, en el riesgo de que la ven-taja m

aterial con la que cuenta el actor preeminente se convierta

en “explotación del sistema”. Esto ocurre si la superpotencia, en

vez de utilizar su insuperable diferencial de poder para sostener elsistem

a, lo utiliza para coaccionar a otros Estados a que lleven elpeso de las responsabilidades internacionales. C

omo dice R

obertG

ilpin, “típicamente a través de instituciones que restringen a los

Estados subordinados mientras que el hegem

ón explota y escapaa las reglas”. El sistem

a no estaría integrando sino enfrentando,a través la “explotación” (free riding) de las reglas. El B

RIC

enton-ces se vería forzado a desplazarse hacia el rechazo, acabando–com

o en un dilema del prisionero– en el cuadrante (1).

Un ejem

plo de esta conducta es el uso del dólar como m

onedade reserva internacional. Estados U

nidos puede “escapar” a lasreglas del sistem

a monetario internacional porque éste tiene com

obase la divisa norteam

ericana. Adem

ás de ser la moneda de refe-

rencia para intercambios com

erciales y financieros con cual-quier otro país, el resto del m

undo acepta el dólar para pagar impor-

taciones e invertir sus capitales. La “explotación” radica en quepuede exportar su deuda, su inflación y su déficit al resto delm

undo. El resto del mundo lo acepta a través del ahorro interna-

cional volcado a la compra de bonos del Tesoro, el uso extendido

del dólar en intercambios y la confianza en que es seguro com

ovalor de reserva. Pero la fuente de la confianza no es la que puedeleerse en el reverso de los billetes, sino que es fiduciaria del podernorteam

ericano para conducir efectivamente el sistem

a. A m

edidaque se fortalecen los com

ponentes de multipolaridad del sistem

a,

74M

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Page 38: Turzi Mundo Brics

El aumento de la reputación

de los países del BR

IC los ha llevado

a un reclamo por una m

ayor representacióninternacional. A

partirde esta dem

anda común B

rasil, Rusia, India y C

hina aumentaron

la coordinación de sus posiciones. Esto se manifiesta de m

aneraesp

ecialmen

te eviden

te en fo

ros co

mo

el G-20, en

do

nd

e lacoordinación tiene com

o objetivo final aumentar el poder de nego-

ciación vis-à-viscon las naciones desarrolladas. El BRIC ha logrado

erigirse simbólicam

ente en el comité ejecutivo de las naciones

emergentes. Es en este m

arco que en febrero de 2011 se anuncióla incorporación de Sudáfrica al BRIC, que en adelante pasará a lla-m

arse BR

ICS

. El Ministro de A

suntos Exteriores de China, Yang

Jiechi, ya había cursado la invitación a la ministra de Relaciones Inter-

nacionales y Cooperación de S

udáfrica Maite N

koana-Mashabane

en diciembre de 2010. A

l mism

o tiempo que se escriben estas líneas

MU

ND

O B

RIC

S77

En conclusión, ¿lo que ocurrió en el ámbito financiero inter-

nacional, luego de la crisis de 2008, fue el comienzo de una radi-

calización de las demandas del BRIC que term

inarán en un rechazosistém

ico? No. Lo que ocurrió fue un cam

bio de poder relativoentre los dirigentes del sistem

a. El aumento del poder y capaci-

dad de presión del BR

IC, sum

ado ala acogida flexible del sistem

a,llevó a una dem

anda no por el reemplazo

sino por la reforma

deciertos aspectos del sistem

a. Inclusive desde el punto de vista deun defensor del sistem

a, esos aspectos merecían reform

a. No sola-

mente no se ajustaban a la realidad global sino que adem

ás habíansido consecuencia de la explotación del sistem

a que la unipolari-dad había perm

itido imponer a un actor sobre el resto. N

o fue elB

RIC

intentando arrebatar la posición dominante a los Estados

Unidos sino intentando lim

itar los excesos que el sistema perm

i-tió com

eter a la superpotencia. El BR

IC no se com

portó como un

enemigo desafiante del sistem

a sino más bien com

o un accionistainteresado en el m

antenimiento del bienestar del m

ismo.

76M

AR

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RZI

CAPÍTULO CUATROVUVUZELAS EN EL BRIC

Page 39: Turzi Mundo Brics

Goldm

an Sachs mide en su puntuación de entorno de crecim

iento(G

ES, en su sigla en inglés), Sudáfrica ocupa el puesto 108. El Pano-ram

a Económico M

undial(World Econom

ic Outlook - W

EO) del FM

Ide abril de 2011, estim

a el producto bruto interno sudafricano en357 m

il millones de dólares. Tanto la econom

ía de Rusia como la de

India son cuatro veces más grandes. El producto bruto brasileño

supera los dos trillones de dólares y la economía de China ya ronda

los seis trillones. La economía asiática es dieciséis veces el tam

añode la sudafricana. En el ranking del organism

o que ordena los paí-ses por el tam

año de su economía, S

udáfrica ocupa el puestoveintinueve; m

ientras que el BRIC más pequeño se encuentra en el

puesto once. Sudáfrica no pertenecería por esta escala a los

BR

ICs. A

demás, es superado por otros candidatos dentro de los

emergentes, com

o Corea del S

ur y México (con alrededor de m

ilm

illones en los puestos catorce y quince) o Turquía e Indonesia (conalrededor de setecientos m

il millones en los puestos diecisiete y die-

ciocho). En cuanto a extensión geográfica y a población, Sudáfricaocupa los puestos veinticinco en el m

undo. Argentina, Irán y Perú

están entre los candidatos del mundo em

ergente que la superan porgeografía; m

ientras que por población –como m

edida de futuroconsum

o, ahorro y mano de obra– Sudáfrica es superada por Pakis-

tán, Bangladesh, Filipinas, Tailandia Vietnam

y varios otros. En elpropio continente africano existen países m

ás grandes (Sudán,

Argelia, R

epública Dem

ocrática del Congo, Libia, C

had, Níger,

Angola y M

ali) o con mayor población (N

igeria, Egipto, Etiopía yR

epública Dem

ocrática del Congo).

Pero la motivación de los cuatro socios originales del B

RIC

conrespecto al ingreso de S

udáfrica es claramente política. Las ganan-

cias mutuas son m

ás fácilmente observables en el cam

po políticoque en el plano económ

ico. Sudáfrica amplía la representación regio-

nal del bloque, incorporando la presencia africana. En este sentidoS

udáfrica actúa en el BR

IC com

o puerta de entrada al continente

MU

ND

O B

RIC

S79

78M

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RZI

(el 14 de abril), en la tercera reunión del grupo en la ciudad de Sanya,en la isla de H

ainan, China, tiene lugar el ingreso formal.

Las cuatro preguntas que nos haremos en esta sección son:

a) ¿Cuáles fueron las intenciones del bloque para incorporar a

Sudáfrica?; b) ¿Por qué la nación africana decidió buscar la per-

tenencia? y c) ¿Qué consecuencias tiene para el bloque y para el

resto del mundo pasar de B

RIC

a BR

ICS

?

EL MA

PA D

EL BR

ICS

En el plano estrictamente económ

ico, el ingreso de Sudáfrica

no tiene demasiado sentido. La dim

ensión de la economía sudafri-

cana es muy m

enor en comparación a la de los BRICs, tanto en tér-

minos de población, de producto bruto interno y de participación en

el comercio m

undial. El propio creador del acrónimo B

RIC

se pro-nunció reacio a aceptarlo. O

´Neill nota que de los 181 países que

Page 40: Turzi Mundo Brics

metales. Si se agrega su potencial para desarrollo agrícola y sus ten-

dencias demográficas favorables, Á

frica cobra una relevancia cadavez m

ayor en la estrategia de proyección económica internacional

de India, China y B

rasil. Solam

ente China tiene a su cargo m

ás dequinientos proyectos de infraestructura en países africanos y ha ofre-cido diez m

il millones de dólares en créditos preferenciales para finan-

ciar proyectos de infraestructura en la región en el período 2010-2012.A

poyada por la diplomacia, la estrategia económ

ica del BR

ICen Á

frica tiene además un com

ponente de desarrollo. Se pretende

MU

ND

O B

RIC

S81

entero. Si es considerada com

o una unidad, África tiene un poten-

cial económico que es com

parable al de Brasil o al de R

usia. Para2050 el producto com

binado de las economías africanas podría supe-

rar el billón de dólares. Pero los 53 países (54 a partir de mediados

de 2011 con Sudán del S

ur) son extremadam

ente diversos. Distin-

tas culturas, múltiples etnias, econom

ías diversas, estructuras degobierno diferentes y perfiles dem

ográficos divergentes hacen queconsiderar a Á

frica como una unidad sea realm

ente un disparate.Cuando se conoció el ingreso de Sudáfrica al BRIC, la representantede la diplom

acia sudafricana explicó que su país no hablará solopor su nación sino por Á

frica en su conjunto. Pero la historia delas relaciones del país con sus vecinos y sus propios intereses geo-políticos hacen dudar sobre el nivel de representatividad real quepuede tener S

udáfrica para con el resto del continente.Brasil, India y China esperan que el nuevo socio ayude a fom

en-tar sus lazos económ

icos con África y colabore en la apertura de m

er-cados. El ingreso de S

udáfrica fue una doble apuesta por ganarinfluencia en el m

undo no desarrollado en general y en África en par-

ticular. Medido com

o porcentaje del producto, el comercio con Á

fricarepresenta el 2.6 para India, el 2.3 para China, el 1.7 Brasil y apenasel 0.5 para Rusia. Los países del continente negro son proveedoresde recursos energéticos, m

inerales estratégicos esenciales y mer-

cados futuros para compañías chinas, indias y brasileñas. Siete nacio-

nes africanas –Angola, Benín, República D

emocrática del Congo, D

ji-bouti, G

uinea Bissau, Mauritania y Togo– tienen niveles de com

erciocon el B

RIC

que superan el 30% del PB

I. El comercio del B

RIC

con África creció m

ás rápido que el promedio del com

ercio globalentre 2001 y 2010. A

l igual que China, Brasil e India fueron tradicio-nalm

ente receptores de ayuda al desarrollo, pero rápidamente se

están convirtiendo en donantes, trabajando en sus propios proyec-tos e iniciativas hacia países en vías de desarrollo; en especial losafricanos, que ocupan una posición destacada en la provisión de

80M

AR

IAN

O TU

RZI

Fuente: Creative Comm

ons

TAM

O R

ELATIVO

DE Á

FRIC

A

Page 41: Turzi Mundo Brics

a BR

ICS

es un claro movim

iento para ganar legitimidad y pre-

sentarse como representante del m

undo en desarrollo frente alos países ricos.

Se espera que el poder blanco fructifique en los esfuerzos de

reforma de las organizaciones del sistem

a internacional, en parti-cular del C

onsejo de Seguridad de N

aciones Unidas. El B

RIC

S es

un bloque más fuerte políticam

ente y por tanto más efectivo a la

hora de buscar equilibrar y democratizar el orden internacional.

Esto se observa claramente en la reform

a del Consejo de S

eguri-dad de la O

NU

. La entrada de Sudáfrica perm

ite sumar volunta-

des dentro de la Asam

blea General de las N

aciones Unidas. Recor-

demos que una reform

a debe ser aprobada por los dos tercios dela A

samblea G

eneral, lo cual equivale a 128 votos. ¿Por qué S

udáfrica quiso ser un BR

IC? El ingreso llega luego

de un activo lobby por parte del presidente sudafricano JacobZum

a, quien en el último año ha visitado todos los B

RIC

s gestio-nando el ingreso de su país. Ya notam

os anteriormente cóm

o Chinaencontraba en el B

RIC

una manera de legitim

arse, presentándosecom

o la hermana m

ayor de los emergentes m

ás que la potenciaretadora ascendente. Para S

udáfrica –así como para B

rasil, Rusia e

India– provee “status por asociación”, dando mayor representa-

tividad a sus reclamos. S

udáfrica, por su parte, adquiere mayor

protagonismo y prestigio; especialm

ente en sus relaciones regio-nales. A

demás, espera que la etiqueta B

RIC

S haga al país m

ásatractivo com

o destino de inversión extranjera directa.D

emos un paso atrás y veam

os la entrada de Sudáfrica al BRICdentro del contexto de la política exterior sudafricana. H

istórica-m

ente, Sudáfrica tuvo una posición dominante sobre el continente

africano, que se derivaba de la superioridad económica, m

ilitar ypoblacional. D

esde las primeras elecciones dem

ocráticas por sufra-gio universal y el advenim

iento de la democracia m

ultirracial en1994, gobierna el C

ongreso Nacional A

fricano (CN

A). La expe-

MU

ND

O B

RIC

S83

avanzar sobre la cooperación Sur-S

ur, que a partir de las nuevasrealidades económ

icas globales busca lograr un cambio en las

reglas de juego del comercio internacional. En este sentido, la

matriz de asociación es la del foro de diálogo IB

SA

. Sudáfrica, B

ra-sil e India lo crearon en 2003 com

o una nueva alianza Sur-S

ur paraprom

over la cooperación trilateral y ganar peso en las negocia-ciones m

ultilaterales internacionales. Se busca converger en

una estrategia para influir en los foros internacionales con un pers-pectiva com

ún propia de los representantes del mundo en desa-

rrollo. No solam

ente en las posturas sino en la capacidad de ins-talar tem

as como energías renovables, reglas del com

ercio mundial

y lucha contra el sida. Las tres mayores dem

ocracias del Sur, India,

Brasil y S

udáfrica tienen un papel destacado en sus respectivasregiones y cuentan con una creciente influencia internacional quepretenden utilizar para prom

over un nuevo vector para la cons-trucción de coaliciones m

ultilaterales. El B

RIC

agrega una “S” porque pretende sum

ar poder blando(soft pow

er) en su

acción

con

jun

ta con

otro

s países m

eno

sfavorecidos en los principales foros internacionales. C

hina –el pro-m

otor de la incorporación sudafricana– imagina que el B

RIC

S será

más efectivo a la hora de prom

over medidas en distintas áreas,

desde proteccionismo agrícola y cam

bio climático hasta la reform

ade los organism

os internacionales. La incorporación de Sudáfrica

apunta a influir en la agenda internacional sin cuestionar la basedel sistem

a. La estrategia de política exterior del BR

ICS

se basaen am

pliar el multilateralism

o existente. El cambio que se persi-

gue no es la reversión de la globalización, la subversión de la dis-tribución del poder o la destrucción del sistem

a, más bien se trabaja

por el aumento de la coordinación de posiciones y la am

plia-ción de la cooperación com

o incentivos para atraer a otros. Lanueva diplom

acia BRICS fusiona coordinación (política) entre paísesdel S

ur con la cooperación (económica) S

ur-Sur. El paso de B

RIC

82M

AR

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RZI

Page 42: Turzi Mundo Brics

Tenemos un sistem

a internacional en transición. En su dimensión

económica existe un cam

bio en el balance de la economía glo-

bal a favor de los países emergentes que hace posible que el

crecimiento se haya desplazado principalm

ente hacia países como

Brasil, R

usia, India, China y S

udáfrica. El aumento de esas capa-

cidades nacionales tiene el impacto político de una m

ayor distri-bución del poder en el sistem

a. En este sentido, el orden interna-cional está en un m

omento de alta fluidez, en el cual conviven

componentes de un unipolarism

o remanente y un m

ultipolarismo

emergente. En este sistem

a uni-multipolar las potencias m

ediascom

o las que forman el B

RIC

S buscan su lugar en cuanto a poder

y representatividad. La prim

era y más central de las cuestiones que se desprenden

de este diagnóstico es si la transmisión del poder lleva irrem

e-

MU

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S85

riencia en la oposición del CN

A le generó una red de lazos de soli-

daridad con movim

ientos de liberación, lo cual reforzó su creen-cia en la efectividad del m

ultilateralismo. La experiencia organi-

zacion

al del C

NA

es clave, ya qu

e viene m

arcand

o el d

iseño

institucional de la diplomacia sudafricana desde hace casi dos

décadas en la construcción del régimen pos-apartheid. D

urante lapresidencia de Thabo M

beki, Sudáfrica experimentó un crecim

ientoeconóm

ico promedio del 3.5%

. Aunque no suene tan im

presio-nante com

o las tasas de crecimiento de C

hina o India, es más de

doble del promedio de crecim

iento que Sudáfrica había experi-

mentado en la década anterior. Fue suficiente para recuperar la

confianza en la posición del país como líder natural del continente.

En el campo diplom

ático, la reafirmación cultural se m

anifestócon una regeneración del africanism

o. Reafirm

ar la “africanidad”y fom

entar la unidad panafricana permitirían al país presentarse

como el interlocutor reconocido de los intereses africanos. Es para

fortalecerse en la doble dinámica regional-global que S

udáfricabuscó el ingreso al B

RIC

. Un B

RIC

S le perm

ite legitimar su status

de líder continental frente a los países africanos que lo resistan. Através del “m

ultilateralismo del S

ur”, Sudáfrica propone aceptar

las reglas internacionales existentes y hacer uso de ellas para laprom

oción de una distribución de poder más equitativa y repre-

sentativa. Si los países del continente aceptan su liderazgo, su posi-ción regional fortalecida retroalim

entará su aval para tener unavoz en las discusiones globales. A

sociarse con países como India,

China y B

rasil le permite a S

udáfrica un círculo virtuoso en el que:aum

enta sus lazos comerciales, potencia su crecim

iento, se con-solida com

o el poder económico en la región, aum

enta su legiti-m

idad política interna y puede extender así su proyección diplo-m

ática y status internacional.

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CAPÍTULO CINCOEL FUTURO

Page 43: Turzi Mundo Brics

Aunque los poderes m

ás cerradamente pro statu quo, y hasta

en ocasiones los propios miem

bros del BR

ICS

, no quieran acep-tarlo, el bloque ya es parte del sistem

a internacional. Reconocer

esta realidad implica que el sistem

a se flexibilice. No se trata de

optar entre un sistema u otro, sino de acom

odar una nueva repre-sentatividad sistém

ica que esté más en sintonía con las nuevas

realidades de poder de sus miem

bros. Por otra parte, es im

perativo que Brasil, R

usia, India, China

y Sudáfrica, com

o bloque y como actores independientes, tam

-bién se adecuen a la nueva realidad. H

ay hoy una batalla por el“alm

a de los BR

ICS

s”. Cada uno de los cinco países se debate

internamente entre dos tendencias. La prim

era busca aceptar,encajar y com

prometerse activam

ente con el orden internacio-nal liberal globalizado y sus instituciones. Estas incluyen las orga-nizaciones com

o el Fondo Monetario Internacional y el B

ancoM

undial, pero también las m

ás esenciales como el libre com

er-cio, la dem

ocracia y el mercado. La segunda espera construir un

espacio de autonomía y diferenciación creciente, sin tem

or acuestionar un espectro cada vez m

ás amplio de cuestiones, desde

los mecanism

os de asignación de cuotas hasta los límites entre

Estado y mercado.

Los BRICSs deben comprender que m

ayor poder en el sistema

implica tam

bién una mayor responsabilidad en su m

antenimiento.

La forma de obtener una m

ayor representatividad es a través dela aceptación de un rol m

ás amplio y constructivo. En la práctica,

ello implica hacerse cargo de ciertos costos de m

antenimiento del

sistema, colaborando en la provisión de bienes públicos globales

más que lim

itándose a demandar solam

ente la modificación de

los aspectos del sistema que no convienen a sus intereses nacio-

nales. El escenario de mayor riesgo para la gobernabilidad global

es quedar a medio cam

ino entre un bloque de emergentes con

poderes crecientes, pero que no acepta mayores responsabilida-

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RIC

S87

diablemente a un cuestionam

iento radical de las bases funda-m

entales del orden internacional vigente, con el consecuenteaum

ento de las tensiones y de las probabilidades de enfrenta-m

iento. Creem

os que esto no es así. El aumento de capacidades

del BR

IC ha sido acom

pañado de una creciente aceptacióndel sis-

tema: ninguno de los posibles proxy de rechazo del sistem

a haaum

entado, mientras que sí lo hicieron las m

étricas que miden la

aceptación del mism

o. Es decir, no solamente no hay evidencia de

que el BR

IC quiera rechazar el sistem

a sino que hay evidencia deque –pudiendo– no ha querido hacerlo. Tal es así que cuando elsistem

a comenzó a fallar, el B

RIC

avanzó una agenda de cambio

para fortalecerlo. Hace m

ás para acabar con el sistema la ausen-

cia de supervisión financiera estadounidense y la negativa de lospaíses europeos a profundizar las reform

as de las instituciones deB

retton Woods que las dem

andas del BR

IC de aum

entar la repre-sentación de los países em

ergentes. El B

RIC

S ha encontrado un punto de unión com

ún alrededorde la causa de la redistribución del poder y del aum

ento de larepresentatividad de sus m

iembros en el sistem

a; puntualmente,

minim

izar el componente unipolar del sistem

a para evitar la acciónunilateral y profundizar el m

ultilateralismo para consolidar el com

-ponente m

ultipolar. Para Brasil, R

usia, China, India y S

udáfrica, elB

RIC

S se revela com

o un instrumento apropiado para lograr obje-

tivos estratégicos individuales pero compartidos: profundizar el

multipolarism

o y crecer en influencia, a la vez global y regional.A

unque cada uno lo entiende, aplica y persigue de manera parti-

cular, todos juzgan que el multipolarism

o es la distribución depoder m

ás apropiada a sus objetivos e intereses estratégicos nacio-nales. Los países m

iembros constituyeron y am

pliaron el BR

ICS

para convertir las condiciones objetivas de la distribución de poder–m

ás multipolar– en un orden m

ás favorable a los intereses decada uno de ellos –m

ás multilateral.

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Page 44: Turzi Mundo Brics

ble antes para el observador. El resultado es que con las interac-ciones entre los elem

entos surgen propiedades nuevas –denomi-

nadas propiedades emergentes– que no estaban presentes antes

de la interacción y que no pueden explicarse a partir de las pro-piedades de los elem

entos aislados. Esto es al revés de lo que ocu-rre en los sistem

as lineales, en los cuales para cualquier valor dela variable se utiliza la m

isma regla. Las partes que form

an el sis-tem

a lineal interactúan unas con otras siempre de la m

isma m

anera.Los sistem

as naturales formados por seres vivos son no lineales.

El sistema internacional es un sistem

a social adaptativo com-

plejo. Com

plejo por estar conformado por m

últiples elementos

interconectados, y adaptativo por tener la capacidad de cambiar

y aprender de la experiencia. Las conductas colectivas a estenivel de agregación sim

plemente no pueden predecirse de m

aneralineal. C

uando un sistema así recibe un shock –com

o una redistri-bución de los polos de poder– es im

posible de anticipar la magni-

tud del cambio o el resultado final. La lógica de (auto) organización

interna no permite saber de antem

ano si será una modificación

marginal o una transform

ación total. En este universo, hacer pre-dicciones sirve tanto com

o silbar en la oscuridad para espantar elpropio m

iedo. La teoría basada en la experiencia histórica es enel m

ejor de los casos subjetiva e inadecuada. En el peor, no buscaclarificar la realidad por m

edio del análisis sino servir de sustratointelectual para avanzar una agenda de poder.

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des globales, y una potencia sobreextendida y con capacidadesm

ateriales decrecientes para cumplir con esos com

promisos.

La duración y la trayectoria del bloque dependerán de la capa-cidad de los socios del B

RIC

S para articular de m

anera cohe-rente y efectiva tres aspectos de acción internacional: coordina-ción, decisión y representación. C

oordinación de posiciones entresus m

iembros para el m

antenimiento de la unión del bloque a

pesar de las divergencias de intereses; decisión para influir en ladiscusión internacional y generar resultados concretos; y repre-sentación de intereses m

ayores a los propios y de países más allá

de los miem

bros del bloque. Q

ueda abierto el interrogante de si el BR

ICS

será el formato

organizacional a través del cual se dará curso a la reconfiguracióninternacional que se abrió luego de la crisis de 2008. Existe una granoferta de ám

bitos de acción multilateral, una “geom

etría variable”de asaciones y una superposición de vínculos regionales e interna-cionales. En este sentido, otros espacios de acción com

o el G-20 se

revelan a otras naciones emergentes com

o un foro más represen-

tativo o un ámbito de acción concertada m

ás institucionalizado.En conclusión, ¿podem

os anticipar cómo serán las relaciones

internacionales en los próximos años? Podem

os sí identificar ten-dencias en la econom

ía global y en la distribución del poder. Ypodem

os también establecer que la sum

a de estas tendenciasapunta hacia una reconfiguración del sistem

a. Pero no podemos

creer que la identificación de las dinámicas principales del sistem

ainternacional autorice a predecir un resultado “final” al proceso,creyendo im

posible que surjan factores imprevistos que la revier-

tan. El sistema internacional es terreno especialm

ente fecundopara la aparición de estos “cisnes negros”, eventos altam

enteim

probables pero con gran impacto.

Los sistemas com

plejos están compuestos por diversas partes

interconectadas cuyos vínculos crean información adicional no visi-

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Mariano Turzi fue becario Fulbright. Es M

A en Estudios Estraté-

gicos y Ph.D. en Estudios Internacionales de la School of A

dvancedInternational S

tudies (SA

IS), Johns H

opkins University (W

ashing-ton D

C). A

ctualmente es profesor de R

elaciones Internacionalesen la U

niversidad Torcuato Di Tella (B

uenos Aires) y en el Instituto

del Servicio Exterior de la N

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EL AUTOR

Page 48: Turzi Mundo Brics

CRÓNICASDEL AGUANTE PABLO ALABARCES •

CRÍTICA DE LA CONSTITUCIÓNROBERTO GARGARELLA •

LA HISTORIA DESBOCADA (I) JOSÉ PABLO FEINMANN

POLÍTICA, POLICÍA Y DELITO MARCELO SAIN •LA HISTORIA DESBOCADA (II) JOSÉ PABLO FEINMANN •

CLIENTELISMO POLÍTICOJAVIER AUYERO •

LA HERENCIA

SOCIAL DEL AJUSTE SUSANA TORRADO •POLICÍAS Y LADRONES ALBERTO BINDER •

¿ECONOMISTAS O ASTRÓLOGOS?ALFREDO ZAIAT •LOS PARTIDOS POLÍTICOS

JUAN ABAL MEDINA (H) •EL FIN DEL DESEMPLEO ENRIQUE MARTÍNEZ •

LOS ÚLTIMOS CUARENTA AÑOS DANIEL MUCHNIK •RICOS FLACOS Y GORDOS POBRES

PATRICIA AGUIRRE •LA DENSIDAD NACIONAL ALDO FERRER •

COALICIONES POLÍTICAS TORCUATO DI TELLA •LOS PIBES CHORROS

DANIEL MÍGUEZ •LA BRECHA

URBANAMARISTELLA SVAMPA •CRISIS Y REFORMA ECONÓMICA H. VALLE / M. MARCÓ DEL PONT •

LOS ARGENTINOS Y SUS INTELECTUALESMEMPO GIARDINELLILA

RELIGIOSIDAD POPULAR PABLO SEMÁN •EL PERONISMO DE LOS ‘70 (I)RODOLFO H. TERRAGNO •

EL PERONISMO DE LOS ‘70 (II) RODOLFO H. TERRAGNO

MODELO NACIONAL INDUSTRIAL MARTÍN SCHORR •ROSAS, ESTANCIERO JORGE DANIEL GELMAN •

LAS PRIVATIZADAS (I) DANIEL AZPIAZU •LAS PRIVATIZADAS (II)

DANIEL AZPIAZU •EL RODRIGAZO, 30 AÑOS DESPUÉS

N. RESTIVO / R. DELLATORRE •PARA QUÉ SIRVE LA TECNOLOGÍA

RICARDO A. FERRARO •LA BURGUESÍA

TERRATENIENTEROY HORA •EDUCACIÓN POPULAR HOY JUAN CARLOS TEDESCO •

EL REPARTO DE LA TORTAJAVIER LINDENBOIM •HISTORIA DE LA DEUDAJULIO

SEVARES •EL DILEMA MERCOSUR (I)JORGE CARRERA •

EL DILEMA MERCOSUR (II)JORGE CARRERA •POLÍTICA EXTERIOR ARGENTINAM. RAPOPORT / C. SPIGUEL

EL CAMPO ARGENTINO M. LATTUADA / G. NEIMAN •LOS DESAFÍOS DEL DESARROLLO

E. HECKER / M. KULFAS •AUGE Y CAÍDA DEL ANARQUISMO

JUAN SURIANO

PUEBLO Y POLÍTICAHILDA SABATO •

CAMPO E INDUSTRIA ALDO FERRER •EMPRESAS RECUPERADAS

J. REBÓN / I. SAAVEDRA •QUÉ ES AL QAEDA PEDRO

BRIEGER •DIEZ TEORÍAS QUE CONMOVIERON AL MUNDO (I)L. MOLEDO / E. MAGNANI •

LA NATURALEZA Y NOSOTROS CARLOS REBORATTI DIEZ TEORÍAS QUE

CONMOVIERON AL MUNDO (II)L. MOLEDO / E. MAGNANI •EL PROBLEMA CARCELARIO RAÚL SALINAS •

EL CIUDADANO SHERIFFDARÍO KOSOVSKY •LA REVOLUCIÓN

DE EVO MORALESP. STEFANONI / H. DO ALTO •

LOS ENIGMAS DE IRÁNLUCIANO ZACCARA •

EL NACIONALISMO DE DERECHADANIEL LVOVICH •

2010, ¿ODISEA

ENERGÉTICA?RICARDO DE DICCO •LA GUERRA SILENCIOSASILVINA RAMÍREZ •

GOBERNAR EL IMPERIOOSCAR OSZLAK QUE SE VAYAN TODOSINÉS M. POUSADELA

CINE Y DICTADURAJUDITH GOCIOL / HERNÁN INVERNIZZI •

EL CAFÉ DE LOS CIENTÍFICOSLEONARDO MOLEDO / MARTÍN DE AMBROSIO •

LAS TECNOLOGÍAS EN

ARGENTINACARLOS EDUARDO SOLIVÉREZ •CHINA SE AVECINASERGIO CESARIN •

INTERNET Y LUCHA POLÍTICAS. MARTÍNEZ / A. MAROTIAS L. MAROTIAS / G. MOVIA

CHACAREROS PAMPEANOSJUAN MANUEL PALACIO •

EL FENÓMENO RELIGIOSOSILVIA MONTENEGRO / JUAN M. RENOLD •

LA ECONOMÍA SOCIALMARIO ELGUE

ARTE Y CREACIÓNM

ARTA ZÁTONYI •LA CIENCIA ES NEGOCIO

RICARDO A. FERRARO / SONIA BUMBAK •

MALVINAS, CAPÍTULO FINAL (I)FABIÁN BOSOER

MALVINAS, CAPÍTULO FINAL (II)FABIÁN BOSOER •QUIÉN CUSTODIA A LOS CUSTODIOSMARTÍN MEDINA HACIA UN NUEVO MODELO INDUSTRIAL BERNARDO KOSACOFF

EL COSTO DE LA DEMOCRACIACHRISTIAN GRUENBERG •LA MARCA DE LA GORRA MARIANA GALVANI •

KATRINA, EL IMPERIO AL DESNUDOHINDE POMERANIEC •

LA

JUSTICIA PENAL ILEANA ARDUINO •EL CAFÉ DE LOS CIENTÍFICOS (II)MARTÍN DE AMBROSIO •

NEOLIBERALISMO Y DESENDEUDAMIENTO MARIELA BEMBI / PABLO

NEMIÑA •PARA LEER EL FACUNDO

OSCAR TERÁN •¡CUÁNTO TRABAJO MUJER! LAURA PAUTASSI •

RIESGO PAÍSRICARDO ARONSKIND COMBATES POR LA MEMORIA

FEDERICO LORENZ •¿TIENEN DERECHOS LAS MUJERES?MIRTA ZAIDA LOBATO •

SOBRE EL GENOCIDIO MARTÍN LOZADA •LAS GUERRAS DEL AGUA (I) ELSA BRUZZONE

VENEZUELA Y LA REVOLUCIÓN TELMA LUZZANI •LAS GUERRAS DEL AGUA (II) ELSA BRUZZONE •

LAVAR LOS PLATOS LEONARDO MOLEDO/IGNACIO JAWTUSCHENKO •

NO TE COMERÁS A TU PRÓJIMO RAÚL A. ALZOGARAY • QUÉ ES EL DESARROLLO LOCAL FABIO QUETGLAS •QUÉ ES EL LIBRE COMERCIO JAVIER ECHAIDE / LUCIANA

GHIOTTO •CIENCIA PARA LEER EN BICICLETA ESTEBAN MAGNANI •

MERCOCIUDADES, RED DE INTEGRACIÓN LEONARDO GRANATO / NAHUEL ODDONE •MÚSICA Y

DICTADURA L. SANTOS / A. PETRUCCELLI / P. MORGADE •O CAMINHO DAS PEDRAS VICENTE PALERMO / RAFAEL MANTOVANI •

BATIENDO LA JUSTA VICENTE PALERMO

RAFAEL MANTOVANI •EL FIN DE LA ERA BUSH MARCELO CANTELMI •

PERONISMO Y DICTADURA DANIEL AZPIAZU / MARTÍN SCHORR •CIENCIA PARA LEER EN BICICLETA

(II) ESTEBAN MAGNANI • EL EJEMPLO AYMARA EN BOLIVIA ENZO GIRARDI • EL FIN DE LA CONVERTIBILIDAD LORENA COBE • ESCRITOS URGENTES (I) JUAN GELMAN •

ESCRITOS URGENTES (II) JUAN GELMAN •CHICOS QUE TRABAJAN VÍCTOR CHEBEZ •

LA INFANCIA ABUSADA MARCOS MAYER• EL DESAFÍO DE LA REGIONALIZACIÓN

P. FARAH L. GRANATO / N. ODDONE •EL CONFLICTO PALESTINO-ISRAELÍ PEDRO BRIEGER •

DE LA CIUDAD A LA NACIÓN JOSÉ CARLOS CHIARAMONTE / NORA SOUTO

EL PAÍS DEL PRIMER CENTENARIO FERNANDO J. DEVOTO •PARAGUAY EN SU LABERINTO MARIANA C. FASSI •

EL MITO AGRARIO FEDERICO BERNAL •LA RUTA

DE LOS PIQUETEROS A. DINERSTEIN / D. CONTARTESE / M. DELEDICQUE •FEDERACIÓN AGRARIA HOY LAUTARO LISSIN •

LA SOMBRA DEL NARCOTRÁFICO

JUAN CRUZ VAZQUEZ •LAS PYMES Y EL DESARROLLO MATÍAS KULFAS

Escríbanos ainfo@

capin.com.ar

CLAVES PARA TODOS.2004

.2005.2006

.2007.2008

.2009.2010

.2011