STEWARDSHIP March 27 & 28 , 2021 St. John $1,208
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Your donation is welcome online, on the Church website at stritacatholicranger.org or by mail to the church office, or there are baskets as you exit the church. STEWARDSHIP March 27 & 28 , 2021 St. John $1,208.00 St. Rita $1,708.00 St. Francis $877.00 Holy Rosary $293.00 UNA ORACIÓN DE PASCUA Dios bueno y misericordioso, Nuestro más glorioso Creador, Mientras saludamos las señales en la naturaleza que nos rodean: De la primavera que nos regala una vez más en flor, En los cantos de los pájaros que regresan y los campos que pronto serán plantados, Te alabamos por un signo aún mayor de vida nueva: la resurrección de tu Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, que celebramos especialmente en este momento. La tristeza y la desesperación de su muerte han dado paso a la brillante promesa de la inmortalidad. Porque la Resurrección es nuestra garantía de que la justicia triunfará sobre la traición, la Luz vencerá las tinieblas y el amor vencerá a la muerte. Mientras celebramos, también nos atrevemos a pedir tu gracia para que podamos vivir la promesa que se nos ha dado. Imitando la vida de Jesús al llegar a los pobres, los marginados, los más pequeños entre nosotros, Mientras nos esforzamos por ser prójimos de todos los que conocemos, Pedimos sus bendiciones especiales todos los días a nuestro presidente. Trabajando con él, podemos esforzarnos por hacer de este gran país nuestro un faro de esperanza y justicia en un mundo hambriento de paz y, por lo tanto, necesitado de su amor. Te alabamos en esta temporada de Pascua. Cambia nuestras vidas, cambia nuestro corazón para ser mensajeros de la alegría y la esperanza de la Pascua. Hacemos nuestra oración por Jesucristo, nuestro Señor resucitado para siempre. Amén. AN EASTER PRAYER Good and gracious God, Our most glorious Creator, As we greet the signs in nature around us: Of Spring once again regaling us in bloom, In the songs of returning birds and fields soon to be planted, We give you praise for an even greater sign of new life: the resurrection of your Son, Our Lord Jesus Christ, that we especially celebrate at this time. The sadness and despair of his death has given way to the bright promise of immortality. For the Resurrection is our guarantee that justice will triumph over treason, Light will overcome darkness, and love will conquer death. As we celebrate, we also dare to ask for your grace that we may live the promise given to us, By imitating the life of Jesus in reaching out to the poor, the marginalized, the least among us, As we strive to be neighbor to all those we meet, We ask your special blessings each and every day on our President. Working with him may we strive to make this great country of ours a beacon of hope and justice in a world hungry for peace and so in need of your love. We praise you in this Easter season. Change our lives, change our hearts to be messengers of Easter joy and hope. We make our prayer through Jesus Christ, our risen Lord forever. Amen. EASTER Easter is the celebration of Christ's resurrection from the dead. It is celebrated on Sunday, and marks the end of Holy Week, the end of Lent, the last day of the Easter Triduum (Holy Thursday, Good Friday and Easter Sunday), and is the beginning of the Easter season of the liturgical year. As we know from the Gospels, Jesus Christ rose from the dead on the third day following his crucifixion, which would be Sunday. His resurrection marks the triumph of good over evil, sin and death. It is the singular event which proves that those who trust in God and accept Christ will be raised from the dead. Since Easter represents the fulfillment of God's promises to mankind, it is the most important holiday on the Christian calendar. In the Gospels, the precise details of the Easter narrative vary slightly, but none of these variances are critical to the main story. In fact, it is argued that the variances are simply matters of style and not substance. Despite the variances, the key aspects of the Easter story all match. Above all, they agree that the tomb of Christ was indeed empty, which is the most essential fact. Based on direct evidence from the mid-second century, it is believed that Easter was regularly celebrated from the earliest days of the Church. The Easter date is movable and always falls on a Sunday between March 22 and April 25. Easter in the Roman Catholic Church is always on the first Sunday after the first full moon after the spring equinox. Most Catholics attend Easter Vigil at midnight, although the services can be lengthy because many sacraments are performed, such as baptisms and Rite of Christian Initiation for Adults, during the Mass. Sunrise services are gathered before dawn and reflect the arrival of the women at Jesus' tomb early in the morning. The services take place outdoors, often in church yards, cemeteries, or in parks, and are timed so the sun will rise during the course of worship Traditional family activities vary by region. In the United States, children often hunt for Easter eggs, which are often brightly-dyed hard boiled eggs, though they can be plastic eggs filled with candy or small denominations of money. Candy is a traditional gift for Easter as children often break their Lenten fasts with sweets. Adults tend to share bouquets of flowers, greeting cards, and may gather for a family meal. Such celebrations are often secularized and focused on children and family rather than the religious aspect of the holy day. DIVINE MERCY SUNDAY Divine Mercy Sunday is observed on the octave of Easter; this year, the feast will be celebrated April 19. The devotion originated with St. Maria Faustina Kowalska, a Polish nun who kept a diary in the 1930s of Christ’s private revelations, telling her of His message of mercy. She wrote that she first saw a vision of Jesus on Feb. 22, 1931. He had rays of mercy streaming from His heart. Christ told her to have an image painted to represent the vision and to write below it, “Jesus, I trust in you!” St. Faustina died of tuberculosis in 1938 at age 33. St. John Paul II canonized her in 2000 and declared Divine Mercy Sunday a worldwide feast day. Two years later, he granted a plenary indulgence for those who participate in the devotion. St. John Paul II was canonized on the feast of Divine Mercy in 2014. It is still possible to receive the plenary indulgence, even with the cancellation of publicly celebrated Masses. The Vatican decree establishing the indulgence notes a special provision “for those who cannot go to church or the seriously ill.” The decree also states that “all who for a just cause cannot leave their homes” … “may obtain a plenary indulgence on Divine Mercy Sunday.” PASCUA DE RESURRECCIÓN La Pascua es la celebración de la resurrección de Cristo de entre los muertos. Se celebra el domingo, y marca el final de la Semana Santa, el final de la Cuaresma, el último día del Triduo Pascual (Jueves Santo, Viernes Santo y Domingo de Pascua), y es el comienzo del tiempo pascual del año litúrgico. Como sabemos por los Evangelios, Jesucristo resucitó de entre los muertos al tercer día después de su crucifixión, que sería el domingo. Su resurrección marca el triunfo del bien sobre el mal, el pecado y la muerte. Es el evento singular que prueba que aquellos que confían en Dios y aceptan a Cristo serán resucitados de entre los muertos. Dado que la Pascua representa el cumplimiento de las promesas de Dios a la humanidad, es la fiesta más importante del calendario cristiano. En los Evangelios, los detalles precisos de la narrativa de la Pascua varían ligeramente, pero ninguna de estas variaciones es fundamental para la historia principal. De hecho, se argumenta que las variaciones son simplemente cuestiones de estilo y no de fondo. A pesar de las variaciones, todos los aspectos clave de la historia de Pascua coinciden. Sobre todo, coinciden en que la tumba de Cristo estaba vacía, que es el hecho más esencial. Basado en evidencia directa de mediados del siglo II, se cree que la Pascua se celebraba regularmente desde los primeros días de la Iglesia. La fecha de Pascua es móvil y siempre cae en domingo entre el 22 de marzo y el 25 de abril. La Pascua en la Iglesia Católica Romana es siempre el primer domingo después de la primera luna llena después del equinoccio de primavera. La mayoría de los católicos asisten a la Vigilia Pascual a la medianoche, aunque los servicios pueden ser prolongados porque se realizan muchos sacramentos, como los bautismos y el Rito de Iniciación Cristiana para Adultos, durante la Misa. Los servicios al amanecer se reúnen antes del amanecer y reflejan la llegada de las mujeres a Jesús. 'tumba temprano en la mañana. Los servicios se llevan a cabo al aire libre, a menudo en patios de iglesias, cementerios o parques, y están programados para que salga el sol durante el curso del culto. Las actividades familiares tradicionales varían según la región. En los Estados Unidos, los niños suelen buscar huevos de Pascua, que a menudo son huevos duros teñidos de colores brillantes, aunque pueden ser huevos de plástico llenos de dulces o pequeñas denominaciones de dinero. Los dulces son un regalo tradicional para la Pascua, ya que los niños a menudo rompen sus ayunos de Cuaresma con dulces. Los adultos tienden a compartir ramos de flores, tarjetas de felicitación y pueden reunirse para una comida familiar. Estas celebraciones a menudo se secularizan y se centran en los niños y la familia más que en el aspecto religioso del día santo. DOMINGO DE LA DIVINA MISERICORDIA El Domingo de la Divina Misericordia se observa en la octava de Pascua; este año, la fiesta se celebrará el 19 de abril. La devoción se originó con Santa María Faustina Kowalska, una monja polaca que llevó un diario en la década de 1930 de las revelaciones privadas de Cristo, contándole su mensaje de misericordia. Ella escribió que vio por primera vez una visión de Jesús el 22 de febrero de 1931. Tenía rayos de misericordia brotando de su corazón. Cristo le dijo que pintara una imagen para representar la visión y que escribiera debajo de ella: "¡Jesús, confío en ti!" Santa Faustina murió de tuberculosis en 1938 a la edad de 33 años. San Juan Pablo II la canonizó en 2000 y declaró el Domingo de la Divina Misericordia como una fiesta mundial. Dos años después, otorgó una indulgencia plenaria para quienes participen en la devoción. San Juan Pablo II fue canonizado en la fiesta de la Divina Misericordia en 2014. Todavía es posible recibir la indulgencia plenaria, incluso con la cancelación de las misas celebradas públicamente. El decreto del Vaticano que establece la indulgencia señala una disposición especial "para aquellos que no pueden ir a la iglesia o los enfermos graves". El decreto también establece que "todos los que por una causa justa no pueden salir de sus hogares" ... "pueden obtener una indulgencia plenaria el domingo de la Divina Misericordia". Mis queridos feligreses, ¡Jesús ha resucitado! ¡Aleluya! En el gozo de estas palabras, les deseo a todos una feliz y feliz Pascua de Resurrección. En estos días de Pascua, nos alegramos de que Jesús, que es para nosotros la Luz del Mundo, resucitara de entre los muertos. En su resurrección, encontramos nuestra esperanza y nuestro gozo. Esta celebración está en el corazón de nuestra fe cristiana. Cuando abrimos nuestro corazón a la maravilla de este mensaje, caminamos con Jesús, compartiendo su vida y su paz. Su mensaje es de esperanza para todos. Ha pasado más de un año desde que comenzó la pandemia. Este último año no ha sido un momento para avanzar. En cambio, ha sido una época de bloqueos, restricciones, incertidumbre, cancelaciones, decepciones, enfermedad y muerte. A pesar de esto, la Iglesia de Nuestra Señora del Santo Rosario, la Iglesia de San Bonifacio, la Iglesia de San Juan, la Iglesia de Santa Rita y las iglesias de San Francisco Javier siguen siendo lugares donde la fe vive e incluso florece. Hoy, durante esta temporada de Pascua, seguimos luchando, pero hay un nuevo sentido de esperanza con las vacunas que ahora se distribuyen. Quizás no haya nada tan esperanzador y significativo en nuestras celebraciones de fe como la Misa de la Vigilia Pascual cuando el nuevo Cirio Pascual es traído a la iglesia oscurecida. La luz simple se mantiene alta y brilla intensamente en la oscuridad como un recordatorio de que Jesús es la luz del mundo. La iglesia se vuelve radiante y hay un signo de esperanza que proviene de la luz de Cristo. El anuncio de la Resurrección resuena con fuerza en nuestro corazón una vez más: “Alégrate el coro de los ángeles; regocíjate en la tierra inundada con tan gran esplendor; la luz del Rey eterno ha conquistado las tinieblas del mundo ”.Pero, ¿cómo podemos regocijarnos en estos tiempos de pandemia en los que nos vemos obligados a encerrarnos? ¿Cómo clamar al mundo nuestro gozo por la victoria de nuestro Redentor? ¿Cómo podemos apoyar a quienes vienen a nuestras comunidades? ¿Cómo devolver la esperanza a quienes la han perdido? San Vicente Pallotti nos enseña a dirigir nuestra mirada al amor que Dios tiene por cada uno de nosotros y a “corresponder a su amor infinito manifestado en los Misterios de la Redención procurando de manera práctica y efectiva la más perfecta imitación de la Vida de tu divino Hijo Jesús Revivir hoy el misterio de la redención nos lleva al Evangelio de Jesucristo y su mensaje de paz y justicia. Esta es la mejor respuesta que como cristianos podemos ofrecer a los hombres y mujeres de nuestro tiempo. Como nos recuerda el Papa Francisco “en un contexto de gran incertidumbre sobre el mañana, recordándonos la palabra dirigida por Dios a su Siervo:“ No temas, porque yo te he redimido ”(Is 43,1), ofrecemos con nuestro la caridad es una palabra de confianza, y hacemos sentir al otro que Dios lo ama como a un hijo ”. (Mensaje general palotino) ¿Esta Pascua es una señal y un llamado de lo que estamos llamados a hacer a medida que avanzamos en esta pandemia? ¿No estamos llamados a ser signos de esperanza mientras reconstruimos nuestras comunidades luego de la destrucción causada por el virus corona el año pasado? De hecho, estamos a las puertas de una experiencia única de renovación de la iglesia. Las lecciones que hemos aprendido durante el año pasado deben jugar un papel en esta renovación, especialmente cuán importante, hermosa y valiosa es realmente nuestra fe; cuán vitales son los sacramentos para nosotros; cuán esperanzada es la Palabra de Dios para nosotros. ¿No es nuestra tarea reconstruir, renovar, anunciar, salir y ser esa luz simbolizada en la Vigilia Pascual? ¡Ser la Iglesia pospandémica! Recordándote con gratitud en el altar y deseándote la paz y la alegría del Señor Resucitado, “Este es el día que hizo el Señor, regocijémonos y alegrémonos. Aleluya" "¡Te deseo sol, buenos momentos y una muy feliz Pascua!"
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Your donation is welcome online, on the Church
website at stritacatholicranger.org or
by mail to the church office, or there are baskets as you
exit the church.
STEWARDSHIP
March 27 & 28 , 2021
St. John $1,208.00
St. Rita $1,708.00
St. Francis $877.00
Holy Rosary $293.00
UNA ORACIÓN DE PASCUA Dios bueno y misericordioso, Nuestro más glorioso Creador, Mientras saludamos las señales en la naturaleza que nos rodean: De la primavera que nos regala una vez más en flor, En los cantos de los pájaros que regresan y los campos que pronto serán plantados, Te alabamos por un signo aún mayor de vida nueva: la resurrección de tu Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, que celebramos especialmente en este momento. La tristeza y la desesperación de su muerte han dado paso a la brillante promesa de la inmortalidad. Porque la Resurrección es nuestra garantía de que la justicia triunfará sobre la traición, la Luz vencerá las tinieblas y el amor vencerá a la muerte. Mientras celebramos, también nos atrevemos a pedir tu gracia para que podamos vivir la promesa que se nos ha dado. Imitando la vida de Jesús al llegar a los pobres, los marginados, los más pequeños entre nosotros, Mientras nos esforzamos por ser prójimos de todos los que conocemos, Pedimos sus bendiciones especiales todos los días a nuestro presidente. Trabajando con él, podemos esforzarnos por hacer de este gran país nuestro un faro de esperanza y justicia en un mundo hambriento de paz y, por lo tanto, necesitado de su amor. Te alabamos en esta temporada de Pascua. Cambia nuestras vidas, cambia nuestro corazón para ser mensajeros de la alegría y la esperanza de la Pascua. Hacemos nuestra oración por Jesucristo, nuestro Señor resucitado para siempre. Amén.
AN EASTER PRAYER Good and gracious God, Our most glorious Creator, As we greet the signs in nature around us: Of Spring once again regaling us in bloom, In the songs of returning birds and fields soon to be planted, We give you praise for an even greater sign of new life: the resurrection of your Son, Our Lord Jesus Christ, that we especially celebrate at this time. The sadness and despair of his death has given way to the bright promise of immortality. For the Resurrection is our guarantee that justice will triumph over treason, Light will overcome darkness, and love will conquer death. As we celebrate, we also dare to ask for your grace that we may live the promise given to us, By imitating the life of Jesus in reaching out to the poor, the marginalized, the least among us, As we strive to be neighbor to all those we meet, We ask your special blessings each and every day on our President. Working with him may we strive to make this great country of ours a beacon of hope and justice in a world hungry for peace and so in need of your love. We praise you in this Easter season. Change our lives, change our hearts to be messengers of Easter joy and hope. We make our prayer through Jesus Christ, our risen Lord forever. Amen.
EASTER Easter is the celebration of Christ's resurrection from the dead. It is celebrated on Sunday, and marks the end of Holy Week, the end of Lent, the last day of the Easter Triduum (Holy Thursday, Good Friday and Easter Sunday), and is the beginning of the Easter season of the liturgical year. As we know from the Gospels, Jesus Christ rose from the dead on the third day following his crucifixion, which would be Sunday. His resurrection marks the triumph of good over evil, sin and death. It is the singular event which proves that those who trust in God and accept Christ will be raised from the dead. Since Easter represents the fulfillment of God's promises to mankind, it is the most important holiday on the Christian calendar. In the Gospels, the precise details of the Easter narrative vary slightly, but none of these variances are critical to the main story. In fact, it is argued that the variances are simply matters of style and not substance. Despite the variances, the key aspects of the Easter story all match. Above all, they agree that the tomb of Christ was indeed empty, which is the most essential fact. Based on direct evidence from the mid-second century, it is believed that Easter was regularly celebrated from the earliest days of the Church. The Easter date is movable and always falls on a Sunday between March 22 and April 25. Easter in the Roman Catholic Church is always on the first Sunday after the first full moon after the spring equinox. Most Catholics attend Easter Vigil at midnight, although the services can be lengthy because many sacraments are performed, such as baptisms and Rite of Christian Initiation for Adults, during the Mass. Sunrise services are gathered before dawn and reflect the arrival of the women at Jesus' tomb early in the morning. The services take place outdoors, often in church yards, cemeteries, or in parks, and are timed so the sun will rise during the course of worship Traditional family activities vary by region. In the United States, children often hunt for Easter eggs, which are often brightly-dyed hard boiled eggs, though they can be plastic eggs filled with candy or small denominations of money. Candy is a traditional gift for Easter as children often break their Lenten fasts with sweets. Adults tend to share bouquets of flowers, greeting cards, and may gather for a family meal. Such celebrations are often secularized and focused on children and family rather than the religious aspect of the holy day.
DIVINE MERCY SUNDAY Divine Mercy Sunday is observed on the octave of Easter; this year, the feast will be celebrated April 19. The devotion originated with St. Maria Faustina Kowalska, a Polish nun who kept a diary in the 1930s of Christ’s private revelations, telling her of His message of mercy. She wrote that she first saw a vision of Jesus on Feb. 22, 1931. He had rays of mercy streaming from His heart. Christ told her to have an image painted to represent the vision and to write below it, “Jesus, I trust in you!” St. Faustina died of tuberculosis in 1938 at age 33. St. John Paul II canonized her in 2000 and declared Divine Mercy Sunday a worldwide feast day. Two years later, he granted a plenary indulgence for those who participate in the devotion. St. John Paul II was canonized on the feast of Divine Mercy in 2014. It is still possible to receive the plenary indulgence, even with the cancellation of publicly celebrated Masses. The Vatican decree establishing the indulgence notes a special provision “for those who cannot go to church or the seriously ill.” The decree also states that “all who for a just cause cannot leave their homes” … “may obtain a plenary indulgence on Divine Mercy Sunday.”
PASCUA DE RESURRECCIÓN La Pascua es la celebración de la resurrección de Cristo de entre los muertos. Se celebra el domingo, y marca el final de la Semana Santa, el final de la Cuaresma, el último día del Triduo Pascual (Jueves Santo, Viernes Santo y Domingo de Pascua), y es el comienzo del tiempo pascual del año litúrgico. Como sabemos por los Evangelios, Jesucristo resucitó de entre los muertos al tercer día después de su crucifixión, que sería el domingo. Su resurrección marca el triunfo del bien sobre el mal, el pecado y la muerte. Es el evento singular que prueba que aquellos que confían en Dios y aceptan a Cristo serán resucitados de entre los muertos. Dado que la Pascua representa el cumplimiento de las promesas de Dios a la humanidad, es la fiesta más importante del calendario cristiano. En los Evangelios, los detalles precisos de la narrativa de la Pascua varían ligeramente, pero ninguna de estas variaciones es fundamental para la historia principal. De hecho, se argumenta que las variaciones son simplemente cuestiones de estilo y no de fondo. A pesar de las variaciones, todos los aspectos clave de la historia de Pascua coinciden. Sobre todo, coinciden en que la tumba de Cristo estaba vacía, que es el hecho más esencial. Basado en evidencia directa de mediados del siglo II, se cree que la Pascua se celebraba regularmente desde los primeros días de la Iglesia. La fecha de Pascua es móvil y siempre cae en domingo entre el 22 de marzo y el 25 de abril. La Pascua en la Iglesia Católica Romana es siempre el primer domingo después de la primera luna llena después del equinoccio de primavera. La mayoría de los católicos asisten a la Vigilia Pascual a la medianoche, aunque los servicios pueden ser prolongados porque se realizan muchos sacramentos, como los bautismos y el Rito de Iniciación Cristiana para Adultos, durante la Misa. Los servicios al amanecer se reúnen antes del amanecer y reflejan la llegada de las mujeres a Jesús. 'tumba temprano en la mañana. Los servicios se llevan a cabo al aire libre, a menudo en patios de iglesias, cementerios o parques, y están programados para que salga el sol durante el curso del culto. Las actividades familiares tradicionales varían según la región. En los Estados Unidos, los niños suelen buscar huevos de Pascua, que a menudo son huevos duros teñidos de colores brillantes, aunque pueden ser huevos de plástico llenos de dulces o pequeñas denominaciones de dinero. Los dulces son un regalo tradicional para la Pascua, ya que los niños a menudo rompen sus ayunos de Cuaresma con dulces. Los adultos tienden a compartir ramos de flores, tarjetas de felicitación y pueden reunirse para una comida familiar. Estas celebraciones a menudo se secularizan y se centran en los niños y la familia más que en el aspecto religioso del día santo.
DOMINGO DE LA DIVINA MISERICORDIA El Domingo de la Divina Misericordia se observa en la octava de Pascua; este año, la fiesta se celebrará el 19 de abril. La devoción se originó con Santa María Faustina Kowalska, una monja polaca que llevó un diario en la década de 1930 de las revelaciones privadas de Cristo, contándole su mensaje de misericordia. Ella escribió que vio por primera vez una visión de Jesús el 22 de febrero de 1931. Tenía rayos de misericordia brotando de su corazón. Cristo le dijo que pintara una imagen para representar la visión y que escribiera debajo de ella: "¡Jesús, confío en ti!" Santa Faustina murió de tuberculosis en 1938 a la edad de 33 años. San Juan Pablo II la canonizó en 2000 y declaró el Domingo de la Divina Misericordia como una fiesta mundial. Dos años después, otorgó una indulgencia plenaria para quienes participen en la devoción. San Juan Pablo II fue canonizado en la fiesta de la Divina Misericordia en 2014. Todavía es posible recibir la indulgencia plenaria, incluso con la cancelación de las misas celebradas públicamente. El decreto del Vaticano que establece la indulgencia señala una disposición especial "para aquellos que no pueden ir a la iglesia o los enfermos graves". El decreto también establece que "todos los que por una causa justa no pueden salir de sus hogares" ... "pueden obtener una indulgencia plenaria el domingo de la Divina Misericordia".
Mis queridos feligreses, ¡Jesús ha resucitado! ¡Aleluya! En el gozo de estas palabras, les deseo a todos una feliz y feliz Pascua de Resurrección. En estos días de Pascua, nos alegramos de que Jesús, que es para nosotros la Luz del Mundo, resucitara de entre los muertos. En su resurrección, encontramos nuestra esperanza y nuestro gozo. Esta celebración está en el corazón de nuestra fe cristiana. Cuando abrimos nuestro corazón a la maravilla de este mensaje, caminamos con Jesús, compartiendo su vida y su paz. Su mensaje es de esperanza para todos. Ha pasado más de un año desde que comenzó la pandemia. Este último año no ha sido un momento para avanzar. En cambio, ha sido una época de bloqueos, restricciones, incertidumbre, cancelaciones, decepciones, enfermedad y muerte. A pesar de esto, la Iglesia de Nuestra Señora del Santo Rosario, la Iglesia de San Bonifacio, la Iglesia de San Juan, la Iglesia de Santa Rita y las iglesias de San Francisco Javier siguen siendo lugares donde la fe vive e incluso florece. Hoy, durante esta temporada de Pascua, seguimos luchando, pero hay un nuevo sentido de esperanza con las vacunas que ahora se distribuyen. Quizás no haya nada tan esperanzador y significativo en nuestras celebraciones de fe como la Misa de la Vigilia Pascual cuando el nuevo Cirio Pascual es traído a la iglesia oscurecida. La luz simple se mantiene alta y brilla intensamente en la oscuridad como un recordatorio de que Jesús es la luz del mundo. La iglesia se vuelve radiante y hay un signo de esperanza que proviene de la luz de Cristo. El anuncio de la Resurrección resuena con fuerza en nuestro corazón una vez más: “Alégrate el coro de los ángeles; regocíjate en la tierra inundada con tan gran esplendor; la luz del Rey eterno ha conquistado las tinieblas del mundo ”.Pero, ¿cómo podemos regocijarnos en estos tiempos de pandemia en los que nos vemos obligados a encerrarnos? ¿Cómo clamar al mundo nuestro gozo por la victoria de nuestro Redentor? ¿Cómo podemos apoyar a quienes vienen a nuestras comunidades? ¿Cómo devolver la esperanza a quienes la han perdido? San Vicente Pallotti nos enseña a dirigir nuestra mirada al amor que Dios tiene por cada uno de nosotros y a “corresponder a su amor infinito manifestado en los Misterios de la Redención procurando de manera práctica y efectiva la más perfecta imitación de la Vida de tu divino Hijo Jesús Revivir hoy el misterio de la redención nos lleva al Evangelio de Jesucristo y su mensaje de paz y justicia. Esta es la mejor respuesta que como cristianos podemos ofrecer a los hombres y mujeres de nuestro tiempo. Como nos recuerda el Papa Francisco “en un contexto de gran incertidumbre sobre el mañana, recordándonos la palabra dirigida por Dios a su Siervo:“ No temas, porque yo te he redimido ”(Is 43,1), ofrecemos con nuestro la caridad es una palabra de confianza, y hacemos sentir al otro que Dios lo ama como a un hijo ”. (Mensaje general palotino) ¿Esta Pascua es una señal y un llamado de lo que estamos llamados a hacer a medida que avanzamos en esta pandemia? ¿No estamos llamados a ser signos de esperanza mientras reconstruimos nuestras comunidades luego de la destrucción causada por el virus corona el año pasado? De hecho, estamos a las puertas de una experiencia única de renovación de la iglesia. Las lecciones que hemos aprendido durante el año pasado deben jugar un papel en esta renovación, especialmente cuán importante, hermosa y valiosa es realmente nuestra fe; cuán vitales son los sacramentos para nosotros; cuán esperanzada es la Palabra de Dios para nosotros. ¿No es nuestra tarea reconstruir, renovar, anunciar, salir y ser esa luz simbolizada en la Vigilia Pascual? ¡Ser la Iglesia pospandémica! Recordándote con gratitud en el altar y deseándote la paz y la alegría del Señor Resucitado, “Este es el día que hizo el Señor, regocijémonos y alegrémonos. Aleluya" "¡Te deseo sol, buenos momentos y una muy feliz Pascua!"
