SLYL-2007-2

download SLYL-2007-2

of 23

Transcript of SLYL-2007-2

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    1/23

    EL SUEO DEL INFIERNO DEL MARQUS

    GracielaCndano M$tm

    Universidad Nacional Autnoma de Mxico

    AAlanDeyermond

    ...la sciencia non enbota el fierro de la lanca,

    nin faze floxa la espada en la mano del caballero.

    (Santillana,

    Proverbios).

    L

    a obra magna de D ante Alighieri, la clsica

    Divinacommedia

    raducida al

    castellano por Enrique de Villena hacia

    1421*M

    erigi en manantial

    0

    inspiracin de varios clebres poetas peninsulares, como fue el caso de don

    igo Lpez de M endoza, primer marqus de Santillana (1398-1458); y aunque mu

    cho se ha escrito, con sobrada razn, sobre la imperecedera

    vaquerade la Finojosa,

    la

    mora

    de

    Bedmar

    y

    las dems

    Serranillas

    y

    Canciones

    nacidas de la pluma de este

    ricohombre espaol, su poesa alegrica (amatoria, patritica, panegrica o fne

    bre),' sa que devino del eminente maestro florentino y de otros grandes artistas

    italianos, contiene igualmente muy bellos trazos lricos, amn de otros valores que la

    mantienen vigente l nuestros das. Una muestra selecta de su lira con acentos

    alegricos es el

    dezir

    intituladoInfierno

    de los

    enamoradosmuy en la tesitura del

    ' Amatoria:

    Elsueo.Infierno

    de ios enamorados,

    Triunphete

    de

    amor

    (su mal llamada triloga),

    (&mtkdzAmwy^tm Pa trt i

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    2/23

    12

    Signos L iterar ios yLingsticos

    ' " ' " " " ' i . - m m . i - ^ i

    gnero didctico-moral, obra que nos introduce, de la mano de un gua tan noble

    como el Virgilio de la

    D ivino commedia,

    en un averno

    dantesco

    1

    donde sufren los

    que

    han amado hasta las ltimas consecuencias, es decir, aquellos desenfrenados

    que han perecido por amor o en aras de los placeres que depara la pasin. La

    vistan

    de este infierno constituye una terrible advertencia para su protagonista-narrador

    acerca de lo que el destino le reserva si no logra zafarse de las ominosas redes de la

    diosa Venus.

    ln marqus paradjico

    A la luz de lo dicho, cabe la siguiente cuestin: el reputado poeta galante tambin

    escribi en contra del amor mundano? Debemos contestar, en principio,

    s.

    Y tal

    respuesta no entraa necesariamente una contradiccin, pues del mismo modo que

    el elegiaco, el profundamente humano Jorge Manrique no se pudo abstraer a su con

    dicin de caballero y compositor de ciertas versificaciones de corte ms bien popu

    lar, as Santularia, creador de canciones tan lozanas y amorosas como lo convalidan

    las rimas siguientes:

    Bien digo a mi corazn

    que non se quexe,

    mas sirva toda sazn,

    en non se dexe

    de amar e servir a vos,

    a quien adora:

    pues recurdevos, por Dios,

    piedat agora

    (Canc in 3 \9,\\.

    13-20)

    ' Dantesco, opino, ms de forma que de contenido, pero no por ello trivial, sino de raras armonas

    poticas e imaginativas, como veremos.

    3

    Las citas textuales de la obra de Santillana corresponden a la edicin de sus

    Obras completas

    hecha

    por Gmez Moreno y Kerkhof (basada en el manuscrito 2655 de la Biblioteca Universilaria de

    Salamanca), salvo dos que indicoensu oportunidad correspondientes al manuscrito mis antiguo

    de

    El

    sueo,tomado por Garca de Diego en su respectiva edicin:

    Canciones

    ydecires.(A pesar de

    que Gmez yKerkhof.asi como Gareia, se basan esencialmente en el mismo manuscrito, me parece

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    3/23

    El sueo del infierno... Graciela C ndano Fierro 13

    no pudo (o no quiso) desembarazarse de la tendencia doctrinaria antifeminista de

    vituperar concepta I m en te en otra parte de su o br a el "loc o araor

    M

    (de algn

    modo, el amor cortesano), ese sentimiento febril cuyo centro de atencin no era el

    poder, la fortuna o la fama, sino la mujer, encumbrada a niveles de semidiosa,

    Al com ps de la corriente italianizante (que, en su primera olead a, se introdujo en

    la lrica castellana al filo del ltimo tercio del siglo xiv), asi como al influjo de las

    derivaciones de la prosa didctica, de los recursos mitolgicos en boga y de a con

    tradictoria y pendular tendencia proeminista-antifeminista que culmin con la

    satanizacin de l rol de la mujer en el amor profano y el enaltecimiento del exclus ivo

    amor a Dios,

    4

    nuestrolinajudo yrespetadopoeta

    1

    comp uso con innegable destreza

    tcnica algunas obras que, en su conjunto, presentan un planteamiento argumental

    cohere nte con la lnea contraria a la del amor a la dama (m usa, heron a).

    Ensueos y ab ismos

    Sus ms destacadas poesas alegricas amatorias son:

    Msueo y

    el citado

    Infierno

    de losenamorados>

    &

    L&secuencia narrativa conjunta de estos poemas sim ilar a la

    que Gardalohahechode manerams

    estricta,

    aunque sinregularizar ciertosgirosdel lenguaje que

    dificultansucomprensin).Heprocedidode este mododado quelas dosestrofasdeexcepcin refle

    jan

    con

    mayor expresividad y precisin lo

    que deseo destacar y porque aparece en

    tales

    versos Diana

    (con Venus,suprincipal protagonista).

    *Elmarqus

    fre

    estigode esta extrema disposicin duala venerar yanatematizara lasrepresentantes

    del sexofemenino* Efectivamente, frisabaste los 33 arlos cuandoinmolaronen lahogueraa Juana de

    Arc(jn,143)),egregia herona

    que llev a cabo

    chocantes

    hazaas polticasy

    militares

    pues,aunque

    fueron extraordinarias y admirables para las masas tambin fueron inadmisibles para el misgino

    poder religiosoysecular.

    1

    Era don

    Iigo tan gran

    seor desu poca

    que en

    una carta

    que le enva el

    rey

    de

    Granada,

    su

    supuesto

    enemigo, stesedr^e alen estos trminos: "Al cauallero esorcado. al honrrado. al

    fidaJgo,

    al

    conplido et alabado Iigo Lpez de Mendoca, el capitn mayor delatierradeCordouayJan etc."

    (apudRubio176).

    "

    Santillana,

    segnKerkhof,habrainiciado lacomposicinde los nueve grandesthziresalegricosen

    1428 (Santillana,Comedela de>Pongz.Sonetos 28)y dela "triloga" en 1430 (Deyermond. "Las

    alegoras

    del

    amor del marqus

    de

    Santillana" 269). uno o

    tres aos

    despus, respectivamente, de la

    trascendente traduccin de laDivia commedioefectuada porsumentor Vi I lena.

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    4/23

    4

    Signos LiterariosyLingsticos

    de otras obras coetneas, como

    Siervo libre de amor

    de Juan Rodrguez del Pa

    drn puede esquematizarse de esta forma:

    Primeras dos partes, correspondientes a

    El

    sueo '.

    a)El narrador-protagonista vive tranquilo pues est libre de amor, pero...

    h) he aqu que se enamora.

    Contina la parte que est presente tanto en

    Risueo

    como en el

    Infiernode los

    enamorados(fusionados

    los

    dosdezires.esta fraccin virtual estara configurada, de

    hecho, por una interseccin entre sendos pasajes paralelos de las dos obras):

    c)

    El enamorado sufre dolorosamente. Este segmento

    de

    la trama puede subdivi-

    dirse,

    a

    su vez, en

    c 1)

    el protagonista sufre por enamorarse

    y

    c2) el protagonis

    ta desciende a los infiernos.

    ltimas dos partes, ambas del

    Infiernode los ena morados'.

    d)

    El protagonista sana de su mal, y

    e)

    vuelve a su situacin inicial: es ajeno al amor,

    7

    En el descenlace

    de

    esta sucesin de acontecimientos, plena de peripecias figura

    das,

    tiene particular relevancia el amenazante averno al que van a parar todos los

    amantes; en trminos generales esto se debe a que precisamente en l, de manera

    7

    Presumo que Alan Deyermond coincidira can

    la

    secuencia narrativa que aqu

    he

    puntualizado y

    aun

    con la

    interseccin

    que he

    definido. pues aunque

    no

    presenta

    el

    tema

    de

    idntica manera,

    de

    ningn modosecontradicen miinterpretaciny la del. Rste critico especfica que hay otra intriga

    semejante sisubstituimos El sueo porT riunphetedeAmo': aunque elnivel determinacin deesta

    ltima obra es inferior al de la primera (272-273), adems de que no se presenta una concatenacin tan

    difana comoEl

    sueo

    y el

    Infierno;

    dehecho, Santulariausa eldiminituvo

    Triunphete

    en eltitulo

    para expresar su humildad ante obras modelo como los

    Trionfi

    de Petrarca. He encontrado este orden

    lgico independientemente de los indicios que dan Rahland {414-431) y Kerkhof (Santillana.

    Ohras

    completas

    xlvii) en el sentido de que el marqus habra escrito primero el

    Infierno

    y despus

    El sueo

    (que es precisamente el orden en que los editaGarca de Diego |Santillana.('uncionesy decires

    I-93J.

    colocando en

    el

    medio

    al

    Triunphete).

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    5/23

    El sueo del infierno... Graciela Cndano Fierro

    15

    inopinada, consigue el narrador-protagonista liberarse del amor atormentado que lo

    fustigaba.*

    1

    Sigamos a continuacin los seis trazos argumntales recin determinados en

    los poem as, prescindiendo, lo ms posible, de la escenografa mitolgica e histrica

    de la que abusa en ocasiones Santularia;

    9

    as lograremos deleitarnos en las lmpidas

    alas de su poesa y trataremos de comprender su esencia.

    10

    El protag onis ta vive en p az

    A

    mi

    juicio,

    la manifestacin precisa del estado venturoso del narrador es expresada

    por el poeta mediante el soplo de una intensa y grata musa hermana del ingenio

    que inspir las serranillas en estos versos deElsueo:

    En este sueo me vya,

    un da claro e lumbroso,

    en un vergel muy fermoso

    reposar con alegra:"

    el qual jardn me cobra

    con sonbra de olientes flores,

    do cendravan

    12

    ruyseores

    la perfecta meloda.

    (/w/fc>117,estr .VilI) .

    Por cierto. Lapesa seala que el

    Infierno

    d e los

    enamorados

    es la anttesis deE l

    sueo

    (117-125);

    afinando su dicho, yo dira que ambas poesas, vistas por separado, constituyen ms bien una especie

    de quiasmo, ya que hay una doble anttesis cuyos trminos se cruzan: Al narrador en paz-enamorado-

    sufriente se opone el narrador sufriente-desenamorado-en paz.

    v

    O, de acuerdo con la observacin de Jos Amador de los Rios. del "aparato de erudicin de que

    aparece recargada" (122).

    '" Se

    advierte que

    las

    estrotas deEl sueo

    y

    elInfiernotienen la forma regular

    de

    octavas octosilbicas

    " La eminencia de los sueos en la Edad Meda provenia de una tradicin ancestral; no en vano la

    Biblia abunda en ellos. Los haba, como seala Le GofT(460), instigadores premonitorios, revelado

    res.

    El sueo era. en suma, expediente de conocimiento

    y

    "lugar" propicio para el encuentro amoroso.

    ya sea que ste tuviera

    buenos o

    malos resultados. El protagonista

    de

    Razn de amor(

    15Q-153,

    vv.33-

    146),

    obra que se habra escrito en el siglo xm, se encuentra a la mujer ideal durante una supuesta

    situacin de voluptuosa siesta (se despoja de parte de su vestimenta para dormir).

    I?

    (, endravan: aliaban (Santillana.Obras completas 117 n. 63 de Gmez

    y

    Kcrkhof).

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    6/23

    6

    Signos Literarios y Lingsticos

    Hms. vya que sonava

    en un gracioso estormente,"

    non cuidoso, mas plaziente.

    edu Icemente cantava.

    {El sueo 118, estr. IX, vv. 65 -68 ).

    E l p ro tagonis ta se enam ora

    El enamoramiento del desgraciado narrador, auspiciado por la impredecible diosa

    Fortun a, es tratado por el m arqus de un mo do totalmente sim blico, ya que la m ujer

    causante de su ruina no aparece nunca.

    1

    '

    1

    Son las fuerzas destructivas de Venus y

    Cupido que lidian contra la defensora del flamante enamorado, la diosa Diana

    quienes dan vida al proceso de seduccin del hroe. Una vez "fav orecido " m ord i

    do, me atrevo a decir por Amor durante el sueo que se va tornando pesadilla, el

    narrador se queja de cmo su inflamado corazn se le quiere salir del pecho;

    15

    Mi Coracn sospechoso

    terresci

    lf l

    de aquella fama,

    e, bien como bulle flama

    con el incendio fogoso,

    andava todo quexoso

    por surtir

    17

    de la clausura.

    11

    Estormente:instrumento.

    M

    Talvez, alerta Ana Beardyconcuerdo con ella, la ausenciadela receptora delossentimientos

    del narrador en elEl sueo(yyoaado: y tambin en elInfierno de los enamorados)indica que el

    poemaes.msque la alegorade unarelacin amorosa,unadiscusin conceptual alegorizada (Beard

    324).

    15

    Beard

    seala,

    asimismo,que elpaisaje ideal{lois amoenus)tradicionalmente constituyeelmbito

    idneo para los amantes, de ah que la perversin de tal paraje por efecto del enamorarse, es poco

    comnyrevela una actitud pesimista frentealamor (319). listo, enmiopinin, es uno delostributos

    que debepagarelmarqus para cumplir cabalmentecon uno delos gustosdela poca.

    16

    TumsQi:

    se aterr (Santularia.

    Obras completas

    120 n. 122).

    17

    Surtir,salir,

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    7/23

    El sueo del infierno... Graciela Cndano Fierro 17

    do lo puso, por mesura

    la mano del Poderoso.

    1

    *

    (Elsueo 120,

    csfcXVI).

    1

    *

    La vacilante razn (el

    gesto,

    el

    logos)

    del que ha sido flechado por una sierva de

    Venus debate contra su propio corazn, el primer bastin del hombre conquistado

    por el Amor

    o,

    en ltima instancia, por la mujer (el

    eras

    que trastorna al

    logos ,

    quien es el anzuelo, la telaraa que embrolla y atrapa

    al

    voluble corazn del caballe

    ro:asi argulle. entonces, la razn:

    "Coracn, t vas temiendo

    los sueos, que no son nada,

    e destruyes tu morada

    20

    por lo que yo non entiendo'

    4

    .

    (Elsueo

    120, estr. XVII, vv. 133-136),-

    1

    Vindose perdido, el protagonista sigue la recomendacin del anciano adivi

    no Tiresias de or el consejo de la casta Diana, nica capaz de contrarrestar "los

    dardos qif Amor enba".

    (El sueo

    125, estr. XXXIV, v. 270). Tras una esforzada

    11

    Considero que el coraron quiere salirse de donde lo puso Dios (el Poderoso), mas no el Dios del

    Amor, como lo interpreta Manuel Duran (Santularia,Poesas completas179 n. 120).

    ''' En d

    Triunphete

    de Amor.Amor sale victorioso en el momento que Venus le ordena a cierta esclava

    disparar una de sus nocivas saetas contra el desdichado:

    una dona muy notable

    embrag un arco espantable,

    e finme tan sin duelo

    que luego cay en el suelo

    de terida inrreparable

    {Obrascompletas: Trimphete 114, estr. XIX. vv, 148-15 2).

    !

    " Tu alvergada,prefiere Garca de D iego (Santillana.

    Canciones

    y decires64).

    ''

    Considero

    que el marqus

    raoinn

    aqu la secular tradicin lileraria del dilogo polmico

    enuc

    dos

    antagonistas simblicos, expresado bsicamente en las formas literarias medievales conocidas como

    debates, disputas y recuestas.

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    8/23

    i 8 SignosLierarios y Lingsticos

    bsqueda, llega ilusionado al paraje donde moran la diosaysus divinas doncellas;

    22

    a partir de ah Santllana aprovechalaocasin para regalarnos,comoafirma Menndez

    Pelayo, "lo ms vivo

    y

    ameno del poem a"

    (120),

    yaque las descripciones del lugar

    y

    sus habitantes alcanzan, efectivamente, los luminosos matices de un fresco

    prerrenacentista:

    ...vi fermosa montera

    23

    de vrgines que ca^avan,

    e los alpes atronavan

    con la su grand bozera;

    e si Equo responda

    a sus discordantes bozes,

    presume, letor, sy gozes,

    qu trabajo sentira.

    {Elsueo

    126, estr. XXXV III),

    Y ms adelante, complacido y abrumado se pregunta:

    Quin los diversos linajes

    de canes bien enseados,

    quin los montes elevados,

    quin los fermosos boscajes,

    quin los vestiglos

    24

    salvajes

    que all vi recontara?,

    ca Homero se faltara

    si sepiera mili lenguajes.

    {El

    sueo

    ill^str.XU).

    i

    n

    El viaje a un lugar extraordinario, dependiendo de unciceroneo consejero, sorprendentes visictudes

    durante el trayecto y llegada a un lugar fabuloso donde se aprende una verdad trascendental, es unacons

    truccin argumenta! que constituye una herencia de Dame

    y,

    segn Gimeno Casalduero (180), utilizada

    a menudo en la Castilla del siglo xv. Prueba de ello son los argumentos de otras poesas amatorias de

    Santllana y aun de lamentaciones fnebres como

    la

    Defimsin de don Enrique de Vtlea.(Recurdese

    tambin, por ejemplo, el hermoso cuento oexemplumdel siglo wwDe lo que comeci am Den de

    Sanctiago con don Ylln,el grant maestro de ToledodeEl Conde Lcanor(Juan Manuel 93-99).

    a

    Montera',conjunto de personas, generalmente a caballo, dedicadas a la caza.

    14

    Vestiglos:bestias.

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    9/23

    El sueo del infierno... Graciela Cndano Fierro N

    No cabe duda que, en estos versos, e) hlito detevena popular ha invadido con

    donosura, gracias al numen del marqus, los sutiles artificiosde la inspiracin corte

    sana, creando novedosas cadencias que otros poetas seguiran muy pronto.

    El protagonista sufre porenam orarse

    25

    Sus ms crueles padecimientos comienzan a partir de la batalla pica que se libra

    entre las abstractas huestes de Diana, su partidaria.

    2

    " y las no menos incorpreas

    facciones de Venus, la acrrima adversaria de su perdida inocencia.

    27

    Antes de la

    debacle. Santularia pinta los prolegmenos de la lucha de la siguiente manera:

    Ya sonavan los clarones,

    e las trompetas bastardas,

    charamas e bombardas

    facan distintos sones:

    las baladas e canciones

    e rondeles que fazan.

    apenas los entendan

    los turbados coracones

    (/sueno

    131,

    estr. LIV).

    y ya en el fragor del combate se lee:

    Pero Diana feria

    con tanta furia e rigor,

    que faza grand pavor

    a todo orneq ue

    \o

    va,

    a

    Tengoaesta pane comolams sobresaliente de las cinco establecidas.

    u

    lis

    intersame observar que

    la

    virginidad

    de

    Ja perfecta Diana

    ysu

    aversin

    al

    placer derivado

    del

    amor sexual,son atributos propiosdelas damas cantadas por el amor profeminista.

    " Pelean, verbigracia, las representaciones de

    la

    perfecta Fermosura,

    la

    Destreza,

    la

    Pereza,

    el I

    nten-

    dimiento (elYnpedimenlo. en laedicin deGarca deDiego [El sueo 86,eslr, LIX. v.470]).la

    Noble/a.

    el

    Buen Donaire y

    la

    Juventud.

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    10/23

    20

    Siptos

    Literarios

    y

    Lingsticos

    e daa va e non temia

    los adversarios crele>,

    e buscava los tropeles

    e en ms saa se encenda,

    {Canciones y decires: Elsueo90,

    estr. LX

    V III)."

    El espritu guerrero que subyace en las estrofas relativas a las operaciones blicas

    (de la LVI hasta la LXX) revelan que el marqus conoca por experiencia propia la

    bravura

    y

    el bramido caractersticos de los choques militares cuerpo

    a

    cuerpo.

    29

    Mas,

    oh desventura!, en la cruenta guerra que entablan los carnales campeones adictos al

    amor mundano contra los proslitos ascetas del buen Amor del amor a Dios

    Diana es derrotada despus de una serie de feroces altibajos; triunfa, esta vez, la

    pasin amorosa. El narrador declara con afliccin:

    ...e por tal modo firieron

    e con saa tan ardida.

    que Diana fue vencida

    e las mis hazes

    30

    ronpieron.

    (Cancionesydecires:El

    sueo

    92,

    estr,

    LXX, w. 557-560).

    Esto significa para el protagonista hundirse, inerme, en la garganta obscura del

    dolor amoroso:

    De mortal golpe llagado

    en el pecho e mal ferido,

    en el campo amortecido

    yo finqu desamparado:''

    ^ ^

    :R

    Como se haba advertido, esta estrofa -- v la que si g u e - son las nicas que no se han tomad o de la

    edicin de Gmez y Kerkhof (Santillana, O bras completas).

    '"' A propsito, Fernando del Pulgar refiere que don Iigo Lpez de Mend oza: 'fu capitn principal

    en muchas batallas que ouo con cristianos e con moros, donde fue vencedor e vencido. |t'ueron|

    batallas muy heridas c sangrientas" (39).

    l

    "Hazes."ejrcitos en orden de batalla: latinismo, deocies*(Santularia. Poesas completas: El sueo

    2 0n . 553 de Duran).

    51

    Su am paro. Diana, ha caido.

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    11/23

    El sueo del infierno... Graciela Cndano Fierro

    2

    e prestamente robado

    yo fui, commo Proserpina*

    e de Cupido e Ciprina

    32

    a pensamiento entregado.

    (/eol35,estr .LXVII) ,

    Del cual soy apressionado

    en grandsimas cadenas,

    do padezco tales penas

    que ya non vivo, cuytado.

    (El sueo

    93,

    estr.

    Finida).

    La secuencia de esta historia prosigue, como he sealado, en el Infierno de los

    enamorados

    (la obra del m arqus que ms ascendencia ejerci sobre los poetas del

    siglo xv y posteriores). Estimo que la clave de esta conexin argumental la brinda el

    propio Santillana cuando declara el narrador deE l sueo, despus de haber sido

    herido mortalmente por Cupido y Venus: "e prestamente robado / yo fui, como

    Proserpina"." Al respecto, recuerdo la composicin mitolgica de R ubens,

    El rapto

    de

    P roserpina,que luce gallarda en el M useo del Prado. En este gran cuadro se ve al

    moreno y nervudo dios de las regiones infernales arrebatando a la mrbida hija de

    Ceres de la compaa de sus hermanas, la bella Diana y la arrogante Minerva. Es

    decir, Proserpina es conducida hacia el reino de las tinieblas para saciar la pasin (el

    eras)

    que le profesa su to Plutn quien es apoyado en el secuestro por graciosos

    amorcillos. mientras la castidad y la sabidura (el

    logos),

    iA

    sus habituales cmpli

    ces,quedan atrs para siempre.

    15

    Amor e infierno son, pues, dos fenmenos sucesi-

    12

    Ciprina:Venus, por habrsele consagrado la isla de Chipre (Santillana. Canciones y decires; El

    sueo93 n. 575 de Garda de Diego).

    '

    3

    Robado, como veremos, por la mala Fortuna.

    M

    De acuerdo con Ruhens. Minerva slo logra retener

    a

    Plutn por el homh ro un instante, antes de que

    desaparezca con su media hermana, la futura diosa de los infiernos.

    t

    Diversas tradiciones nos presentan a Proserpina recogiendo llores en compaa de las ninfas, inme

    diatamente antes de su rapto. Pero recuerdo una versin referente a Persfone su smil griegoen

    la que ella se encuentra comiendo un grano de granada cuando la secuestra Hades (Plutn para los

    romanos). Si consideramos que la granada es un emblema

    de

    la fecundidad, de lo ertico,

    y

    el acto de

    comerla smbolo de la cada en la carnalidad (es, ni ms ni menos, entre los granados

    en

    flor donde se

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    12/23

    H Signos Literarios y Lingsticos

    vos.

    36

    El artista flamenco recre de manera genial, casi dos siglos despus del naci

    miento delInfierno de los enamorados, la aventura de nuestra Proserpina. iluminan

    do para mi, hoy, el erudito paralelismo del poeta castellano.

    El protagon ista desciende a los infiernos

    El poema aleg rico alusivo com ienza con la pena amorosa del narrador, cuya des via

    cin del buen Amor se traduce desde los primeros versos enunvagar onrico, extra

    viad o y doliente, fuera de su voluntad, a travs de un dantesco b osque de e levadism os

    rboles y pleno de fieras espantosas las pasiones al que lo ha llevado la divini

    dad mitolgica que presida los sucesos de la vida:

    La Fortuna que non cessa,

    siguiendo el curso fadado,*

    7

    en una montaa espessa

    separada de poblado,

    me lev, como robado,

    fuera de mi podero;

    (Infierno 138-139, estr.1,vv.1-6 .

    18

    consumanlos amores enelCantar de loscantares;vid.Colombi71

    j ,

    entoncesesah.en Proscrpina-

    Persfone la rica fuente de los Misterios de Eleusis. donde a mi parecer se redondea con gran

    acierto

    la agudeza del

    cultivado

    marqus de equiparar al

    flechado protagonista

    masculino de su

    poema

    con un sermticofemeninoque ha puestoalgode suparte para hundirse enlosinfiernos: enamorarse,

    dejarse llevar por la sensualidad, incurrirenun estado voluptuoso (o engullirse una roja granada!).

    Asimismo,comoseala Grimal (456), Proserpina fueensu origen una divinidad agrariaquepresidia

    la germinacin,

    lo

    cual puedo vincular a nociones como la gestacin, la concepcin, es decir, lo que

    provocalaunin delossexos.

    ^Conesto creohaber demostradolatesisdeque.desdeel punto devistade lainventio,aElsueole

    gue elInfierno, Bajoesteenfoqueno estan importante discernirculdelosdospoemasse escribi

    primero.

    " Curso fadado:destino (Santillana*Cancnesy decires1 n.2 deGarcadeDiego)

    n

    RecurdesequeDante da inicio asuobra diciendo:

    Nel me7zo del cammin di nostra vita

    mi ritrovai perunaselva oscura

    che lairUta vt era smamta

    (extraviada)

    {Canto Pnmo

    3.

    vv. 1-3).

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    13/23

    El sueo del infierno... Graciela Cndano Fierro

    23

    w

    . ..como nave conbatida

    de los adversarios vyentos,

    que dubda de su partida

    por los muchos movimientos,

    era con mis pensamientos,

    que yo mesmo no s ent a

    qul camino seguira

    de menos contrastamientos.

    39

    (Infierno 138-139, estr. VIH)/

    0

    En semejante trance irrumpe ante su presencia un jabal monstruoso (conocido

    smbolo de la lujuria [Deyermond 271]), mayor que un toro,

    41

    del cual lo salva

    Hiplito, smbolo de la castidad (es aeste leal hijo de Teseo a quien los dioses J

    otorgaron un "siglo deleytable"(Infierno 145, estr. XXX II, v. 255) com o g alardn

    Comprense

    ahora estos versos

    deDante

    con el

    comienzo

    de

    El infierno de los enamorados

    y con

    los

    prolegmenos de laDeftinsin de don Enrique deMena;

    ...mevi todo solo alpede vncollado

    selvticoespesso,lexanoa poblado,

    agresto, desiertoe tanespantable...

    {Obrascompletas;Defunsin 157.estr, IV,

    VV

    28-30),

    Lainfluenciade Dante enelmarqus esobvia.

    19

    Conirastamientos;dificultades.

    #

    En estasituacin,elprotagonistadeEl sueobien hubierapodido desahogarsecomoRodrigoCota

    (poeta toledano

    contemporneo

    de los Reyes

    Catlicos);

    "...a d

    estauas,

    mi sentido? /

    dime,

    cmo te

    dorm ister (ap/Colomb

    234),

    41

    En el universo cristiano del caballero Santularia, tal engendra ("el puerco de Calidonia", dice el

    marqusInfierno9,estr.XIV])podra asociarse tambinconel diablo,cuya descripcinmonstruo

    sa msusual clsica,hace delunserdegran tamao, de aspecto fuerteypavoroso, negro 1..]. Su

    cuerpoes Lodopeludo..."(Acosta75-76). Para comprenderlahorripilanciade!puercodeCalidnno

    hayqueolvidar,entrelasfabulosas bestias hbridas,a aquellas en (as que sudesfiguracinesacentua

    da porposeerla cabeza o los colmillos de unjabal,como es el caso delcencoraindio odel

    ypotame

    egipcio(Malaxecheverrfa176 y190).Por su parte Jacques LeGoffratificando lo aciago deeste tipo

    de bruto refiere cmo Isolda suea que sostiene en su regazo la cabeza ensangrentada de un gran

    jabal, en virtudde locualconoceque novolveravera suamigo.

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    14/23

    24 SignosLiterarios y lingsticos

    pir haberse rehusado

    a que

    Cupido

    lo

    encadenara). En este episodio gana su primera

    batalla la pureza.

    42

    A pesar de este triunfo parcial, el torturado hroe prosigue su

    azaroso derrotero guiado por el honesto Hiplito, quien lo conduce haca un "cSt-

    JJ

    espantoso" cercado por un foso flamgero y humeante. Ante la sobrecogedora

    fortaleza, su preceptor le previene:

    M

    E toda vil covarda

    conviene que desechemos,

    e yo ser vuestra gua

    fasta tanto que lleguemos

    al lugar, do fallaremos

    la desconsolada gente,

    que su desseo

    43

    ferviente

    los puso en tales estremos",

    (Infierno \4Z,m.Xlm

    Y

    sigue el narrador:

    Entramos por la barrera

    del alccar bien murado.

    fasta la puerta primera,

    a do yo vy entallado

    un ttulo bien obrado

    de letras, que concluya:

    41

    Aqu SuntHlana cae en una contradiccin que no apunta ninguno de los estudiosos que tuve a

    mano de su obra. Si bien el marqus acierta en la eleccin del casto Hiplito, menospreciado!' de

    Afrodita, como consejeroysalvador de un hombre devoradopor elamor mundano, es incoherente que

    el narrador del

    Infierno

    (el mismo, en principio, que el de

    El sueFw)

    deba enfrentarse con una bestia

    solidaria con Artemisa-Diana(recordemoselpapel questajuega enEtsyeiQ),puesesprecisamente

    ella quien envaun granjabal a Calidn (Calidonia) con el fin de vengar et desaire que le infringi el

    rej

    1

    io;guienolvidlos altares dela divina cazadora duranteunasofrendas a la sdiosesdel Olimpo

    0vidio 21O .ll);yesm isincon griiente an que latemiblealimaasead e s t w d a p ^ servi

    dor y favorito de la diosa cazadora(vidGrima! 272-273).

    **

    &esseo;pasin amorosa.

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    15/23

    El sueo del infierno... Graciela Cndano Fierro

    25

    "El que por Venus se gua

    venga penar su pecado".

    44

    (Infierno \ 49,

    estr.XLVfl).

    En este lance Santularia evoca la inscripcin que lee Dante sobre la puerta de los

    infiernos: "Per me si va nella citt dolente..." (Dante

    CantoTerzo

    I, 20). que en la

    excelente traduccin de Cayetano Rosell dira, completa:

    Por m se llega a la ciudad del llanto;

    por m a los reinos de la eterna pena

    y a los que sufren inmortal quebranto.

    Dict mi Autor su fallo justiciero

    y me cre con su poder divino,

    su supremo Saber y Amor primero,

    y como no hay en m fin ni mudanza,

    nada fue an tes que yo, sino lo eterno...

    Renunciad para siempre a la esperanza.

    (pud

    Salinas 30-31).

    Baste esto

    como

    muestra para comprender un hecho evidente: a pesar

    de

    las simi

    litudes formales, el infierno de Santillana es muy otro que el de Dante. El del bardo

    italiano es un averno universal y hondamente cristiano. En l (y en toda la obra), no

    obstante la sistemtica yuxtaposicin de personajes mitolgicos

    y

    bblicos, antiguos

    y medievales, se proclama la fe cristiana como la nica verdadera,

    y

    se menciona con

    veneracin el bautismo, su puerta

    de

    entrada: no falta Dios, Juez Supremo

    y

    Salvador

    ltimo de almas, ni los virtuosos patriarcas del Antiguo Testamento, a quienes el

    Todopoderoso otorg la bienaventuranza (Dante

    Canto Quarto

    1,29-30 .

    El lugar de

    condenacin concebido por don Iigo Lpez de M endoza, quien no en vano vivi el

    crucial trnsito de la Edad Media al Renacimiento, es, en cambio, particular, ms

    ntimo slo abarca, en todocaso,el crculo infernal descrito

    en

    el Canto Q uinto de

    Tras ese prtico se encuentra una humanidad enve nenada: la de los desgraciados amantes.

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    16/23

    26

    Signos Hiranos y Lingsticos

    l Miia eomm edict*f y es ms pagano que cristiano, pues, aunque se invoca a

    Dios estando en l, los grandes hechos del relato: la llegada a la zona donde se en

    cuentran los abismos infernales, la entrada del hroe a stos y su escape, son pro pi

    ciad os respectivam ente por seres mitolgicos com o la diosa Fortun a, Hiplito'

    16

    y un

    sugerido Zeus

    47

    este ltimo, al menos en trminos anal gicos. El infierno de D ante

    es la morada eterna de inmensas m uchedumbres de condenados poreljuici o de Dios ,

    y les est vedada su visin; el del ma rqus parece ser una posesin exclusiva del dios

    Am or, don de sufren a perpetuidad, en tan reducido espacio, algun os personajes em i

    nentemente mticos como Hrcu les, la danaide Hipermestra, Atalanta o los amantes

    Leandro y Hero.

    48

    Hay profunda amargura y sublimidad en el taciturno Dante, pro

    du cto la primera , quiz, de su desventu rada vida, y la segu nda, a ciencia cierta, de su

    gen io. El aristocrtico Santillana, hombre "com pletoyarmnico'

    1

    ,juzg a Lapesa

    {apiui

    Lpez Estrada 538). rebosa, ms que de la substancia trgica de Dante, de cierto

    sentimentalismo melanclico; sus reprobas criaturas no provocan el terror ni el re

    cnd ito mov imiento del espritu que nos hace compasivos hacia el mal de otro s, sino

    ms bien una curiosa simpata y cierto desasosiego irremediable. Veamos:

    * El infierno es descrito por Dante en 32 Cantos (con un total demsde lo correspondiente a 500

    estrofas de ocho renglones cada una), en tanto que el del marqus cabe en slo veinte estrofs. SI

    narrador santllanesco. verbigracia, confiesa no haber visto, en este averno menor, a Minos cuya

    lcn el del tlarentinoesasignarsu lugar a losinnumerables pecadoresenel vastsimo subterr

    neodecrculos infernales.

    '' * Virgilio, personaje histrico profana es tratado

    por Dante

    como un cautivo del Limbo, es decir*

    comoaquellosque nopecaronperoqiue,porhabervivido antes delcristianismo,noadoraronaDios

    crao deban(Dante,mtoQutri&Mv,39).

    **l

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    17/23

    El sueo del infierno... Graciela Cndano Fierro

    27

    E con la pena del fuego

    tristemente lamentavan,

    pero que tornavan luego

    e muy manso razonavan;

    e por ver de qu tractavan,

    mi paso me fui llegando

    a dos, que vi razonando.

    que nuestra lengua fablavan.

    Las quales, desque me vieron

    e sintieron mis pisadas,

    una a otra se bolvieron

    bien commo maravilladas:

    "O nimas affanadas!",

    yo les dixe, "que en Espaa

    nascistes, si no m'engaa

    la fabla, o fuystes criadas,

    dezidme de qu materia

    tratades, despus del lloro

    en este limbo e miseria.

    do Amor tizo su thesoro?

    Assimesmo vos imploro

    que sepa yo d nacistes

    e cmm o o por qu venistes

    en el miserable coro".

    E bien commo la serena'

    19

    quando plae a la marina.

    comenc su cantilena

    la un nima mesquina.

    diziendo: "Persona digna,

    Serena;

    sirena.

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    18/23

    28

    Signas Literarios}' Lingsticos

    que por el fuego passaste,

    escucha, pues preguntaste,

    si piedad algo t'enclina.

    La mayor cuyta que haver

    puede ningn amador

    es memorarse del plazer

    en el tienpo del dolor;-

    0

    e ya sea que el ardor

    del fuego nos atormenta.

    mayor pena nos augmenta

    esta tristeza e langor.

    51

    E sabe que nos tractamos

    de los bienes que perdimos

    e del gozo que passamos,

    mientra en el mundo bivimos,

    fasta tanto que venimos

    arder en aquesta llama,

    do no se curan de fama

    ni de las glorias que hovimos.

    E sy por ventura quieres

    saber por qu soy penado,

    plzeme, porque sy fueres

    al tu siglo trasportado,

    digas que fui condenado

    1,1

    Naturalmente, aqu Sanlillana prcticamente traduce lo que en la

    Divina vommedia

    Francesca de

    Rmini dice a Dante: "Nessun maggior dolore / che ricordarsi del tempo felice / nclla miseria" (Dante,

    Canto Qu into

    42, vv. 121-123),

    y

    lo pone en boca de Maclasun renombrado seductor espaol

    muerto en el siglo xiv por entonar canciones de amor de manera comprometida (Santillana,

    Poesas

    completas

    226 n. 511 de Duran

    i

    "

    Langor

    languidez.

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    19/23

    El sueo del infierno... Graciela Cndano Fierro

    29

    por seguir d

    1

    Amor sus vas;

    e finalmente Macias

    en Espaa fuy llamado".

    52

    (Infierno

    35-39. estrs. LVIII-LXIV).

    Estas octavas desprovistas de seres diablicos,'

    1

    tan distantes delos,con frecuen

    cia, excelsos tercetos de la

    Divina

    comm edia: tan lejanas de la pintura que James

    Joyce hace

    de

    uno de tantos infiernos catlicos: " ...es una angosta, obscura

    y

    meftica

    mazmorra, mansin de los demonios y las almas condenadas" (135), no tuvieron la

    intencin, de seguro, de ser trgicas, diablicas o hediondas.

    5

    '' La alegora de que la

    estructura est arropada, como dijera nuestro recordado Luis Rius, por: "esa gracia

    verbal de que [el marqus] estaba tan bien dotado*' (45): con ella huye del posible

    conceptualismo o la severidad del tono en que hubiera podido incurrir de dejarse

    llevar por la ilusin de crear otra inmortal epopeya de los muertos o de ser otra "Voz

    de los Siglos del Silencio'

    1

    (Thomas 16).

    5S

    Este

    clarovarnde C astilla

    se conoca a

    s mismo y dominaba el arte potica y su tcnica, circunstancia, esta ltima, que le

    permita transitar sin mayores cuitas por los senderos de lo grave y doctrinal a lo

    galante y fugaz; componer y esto lo destaca Lpez Estrada (537-538) tanto

    obras didcticas de envergadura, como anotar un sencillo refrn. Fue natural en l,

    por tanto, establecer un equilibrio en su obra. De ah que su infierno sea un castillo

    artstico,

    irreal

    (donde las llamas no abrasan a sus visitantes: "...ca non es flama

    que m ante./com oqu ierque lo paresca..."[Infierno I48,estr. XLV, vv. 353-354] ), sin

    duda abultado en referencias fabulosas

    y

    a veces ameno, pero, sobre todo, revestido

    " Los titanes apasionados de la litadano faltan en ninguno de ambos bratros, contemplados ms

    como personajes legendarios emanados de la historia que

    como

    miembros de la mitologa grecolatina.

    '

    3

    A

    diferenciade.por ejemplo, el Minos dantesco, ese rey de Creta (que bien pudiera estar confinado

    en el infierno slo por habrsele adjudicado la invencin de la pederasta (Grimal 359]) metamorfo-

    seado en un horrible demonio que rechina los dientes

    y

    posee una largusima cola que se enrolla en el

    cuerpo (Dante,Canto Quinto35-36. vv. 4-17)

    **

    Berceo,

    antes que

    Dante, pinta

    al

    infierno "comounpozo diablado"(185).y tan lbrego que el alma

    "...serie en tiniebra como emparedada" (63).

    " As fue llamado Dante por Carlyle (o. ms exactamente, "l.a voz de diez siglos de silencio"

    [apud

    Curtius54l |).

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    20/23

    30

    Signosliterarios yLingsticos

    en suficientes pasajes de una "muy fermosa cobertura"(Obras

    comp letas:

    Proemio

    439)*

    como Santillana define a la poesa, salpicado de bellas armonas y ca-

    EI protagonista se desenamora

    Espantado

    al contemplar las penas de M acias, el visitante del infierno de los enamo

    rados se asusta an ms al descubrir que slo est rodeado por las nimas de los reos

    del Amor: el providencial Hiplito se ha esfumado de su lado. En mi opinin, este

    suceso (para algunos crticos un enigma) bien puede tener la siguiente explicacin;

    desde el momento en que ha desaparecido del impar averno su hermoso

    cicerone

    ^ja pieza clave que le ha permitido al narrador deambular por fantasiosos cami

    nos, se ha roto la espesa magia del ensueo y el narrador debe despertar." Su

    expulsin del infernal lugar simboliza el alivio de su mal:

    E bien como Ganimedes

    al eje lo fue rrebatado

    del guila que leedes,

    5

    "

    segund vos es demostrado,

    de tal guisa fuy robado

    que no sope de mi parte.

    ni por qul razn nin arte

    me vi, de preso, librado.

    (Infierno

    40-41,estr. LXVIII).

    De este modo, mientras que en la

    Divina commedia

    la devocin a una mujer

    termina purificando el alma del poeta y ste salvndose por ella, con ella, en El

    *Efl

    l segundo captulo de

    esta

    obra se

    encuentra

    el primer elogio de

    la poesa

    hecha en

    Espaa.

    -" Cuando el

    narrador

    de

    Razn de amor(153.vv.

    142-146) ve alejarse a su

    amada,

    desea adormecerse

    nuevamente

    para huir de su quebranto y

    seguir soando, amando. Dormir, aqu,

    es

    tambin sinnimo

    de

    experienciaamorosa,aunque positiva,

    '" Por ser el ms hermoso de los mortales, Ganimedes fue raptado por

    Zeus

    metamorfoseado en

    guila,segn una versiny

    llevado al Olimpo (Graves

    140),

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    21/23

    El sueo del infierno... Graciela Cndano Fierro 31

    sueo y

    el

    Infiernode lo senamorados

    el poeta se redime al liberarse de su incgnita

    amada renunciando a su pasin. En Dante la mujer es un tangible ngel del paraso;

    en Santillana es un ser simblico, sinnimo de perdicin.

    El protagonista renuncia al amor...

    y

    vuelve a la paz

    El desenamorado ha vivido una experiencia paralela a la de Ganimedes

    5

    -

    1

    (que a su

    vez constituye la antitesis de Proserpina, su otro smil: aqul asciende al cielo; ella

    cae al infierno), as que slo hasta entonces, merece vivir como Hiplito: en un

    mundo

    deleytable.

    Por ello la ltima estrofa constituye una m oraleja que manifies

    ta la prudencia, fortaleza y cordura que ha adquirido el narrador gracias a la expe

    riencia vivida durante sus speras visiones y al auxilio que le brindaron los que

    jam s probaron los placeres de la pasin: Diana e Hiplito, los nicos capaces de

    batir al Amor.

    As que lo procesado

    de todo amor me desparte;

    nin s tal que no se aparte

    si non es loco provado.

    {InfiernoAlisto. Fin),

    Se ha cerrado, al fin, el anunciado crculo aleccionador, ejemplarizante; paz-ena-

    moramiento-dolor-desenamoramiento-paz.

    6

    '

    w

    Segn otra versin, Ganimedes es robado por Eo, la Aurora (Garibay 109),

    o

    sea, especulo que

    el

    protagonista de

    El sueo-Infierno

    es dirigido hacia

    el

    principio, hacia los primeros tiempos de una

    nueva vida promisoria, ajena al amor.

    **Aqu concluye la interpretacin que he dado a la desaparicin de Hiplito del infierno.

    f,t

    No comparto ia apreciacin de Gmez y Kerkhof de que en elInfiernono cabe extraer una leccin

    moral (Santillana, Obras completasxlvii),

    y

    menos si se analiza estedezirjunto conEl sueocomo

    una unidad.

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    22/23

    32

    SiguasLiterariosyLingsticos

    Penetrar con el marqus en el infierno de los enamorados ha significado, en esta hora

    a seis siglos de su nacimiento, rememorar "la virtud singular y casi divina

    1

    '

    (Pulgar 44) de este preclaro y afamado varn.

    Obras citadas

    Acosta, Vladmir.

    La

    humanidad

    prodigiosa.El imaginario antropolgico medie

    val.

    T. I. Caracas: Monte Avila-Latinoamericana-CDC H-Universidad Central de

    Venezuela. 1996.

    Alighieri, Dante.

    La Divina comm edia.

    Rif. da Giuseppe Vandelli. Milano: Ulrico

    Hoepli, 1979.

    Amador de los Ros. Jos.Historia critica dea literatura

    espaola.

    T. VI. Madrid:

    Gredos, 1969.

    Beard. Ana. " /

    sueo

    del marqus de Santillana: gneros

    y

    realidad". A. Gonzlez.

    L von der Walde

    y

    C. Company,

    eds.Palabra

    e imagen

    en la Edad

    Media

    (Actas

    de las IV Jornadas Medievales).Publicaciones deM edieval a 10. Mxico: Uni

    versidad Nacional Autnoma de Mxico, 1995. 317-325.

    Berceo, Gonzalo de .

    Milagros de N uestra Seora.

    Ed. Antonio G. Solalinde. Clsi

    cos Castellanos. Madrid: Espasa-Calpe, 1972.

    Colomb de Ferraresi, Alicia.

    De amor y poesa en la Espaamedieval.Prlogo a

    Juan Ruiz,Mxico: El Colegio de Mxico, 1976.

    Curtius, Ernst Robert.

    LiteraturaeuropeayEdad MediaLatina.

    Lengua y Estudios

    Literarios. Mxico: Fondo de Cultura Econmica, 1975.

    Deyermond, A lan, ed.

    Edad M edia (Primer Suplemento).T.

    1/1 de

    H istoria y crtica

    de laliteratura-espao la.Dir. de Francisco Rico. Barcelona: Critica, 1991.

    Daz-Plaja. Guillermo.

    Introducan a l

    estudio

    del

    romanticismo

    espaol.

    Coleccin

    Austral. Madrid: Espasa-Calpe, 1967.

    Garibay. ngel Mara.Mitologa

    griega.

    Dioses

    y hroes.

    Mxico: Porra, 1980.

    Gimeno Casalduero, Joaqun.

    E structura ydiseo enlaliteraturacastellana medie

    val.

    Madrid: Jos Porra Turanzas, 1975.

    Graves, Robert.

    Los mitos griegos,

    T. 1. Mxico: Alianza, 1989.

  • 7/25/2019 SLYL-2007-2

    23/23

    El sueo del infierno,.. Graciela Cndano Fierro 33

    Grim al, Pierre.

    Diccionariodemitologagriega y romana,Pref.

    de Charles Picard.

    Barcelona: Paids. 1979.

    Joyce, James.

    E l artista adolescente

    (Retrato).

    Buenos Aires: Espasa-Calpe, 1938.

    Juan Manuel.

    El CondeLucanor.

    Ed, Jos Manuel Blecua. Clsicos Castalia. Ma

    drid: Castalia, 1971.

    Lapesa, Rafael.

    L a obra literaria delmarqusde Santillana.

    M adrid: nsula, 1957.

    LeGoff,Jacques.La civilizacindelOccidentemedieval,

    Barcelona; Deslino, 1969.

    Malaxecheverra, Ignacio, ed..

    Bestiariomedieval.

    Seleccin de Lecturas Medieva

    les 18. Madrid: Smela, 1989.

    Menndez Pelayo, Marcelino.

    Antologa de poetas lricos castellanos III.

    Buenos

    Aires:

    Espasa-Calpe, 1952.

    Ovidio,

    Las metamorfosis.

    Ed. Vicente Lpez Soto. Barcelona: Bruguera, 1972.

    Pulgar, Femando

    del.Claros varonesde

    Castilla.

    Ed. J. Domnguez

    Bordona.

    Clsi

    cos Castellanos. Madrid: Espasa-Calpe, 1954.

    Razn deamor, con losdenuestosdel agua y el

    vino.

    Antigua poesa espaola lrica

    y na rrativa.

    Ed. Manuel Alvar. "Sepan cuantos...". Mxico: Porra, 1970.

    Rohland de Langbehn, Regula. "El problema de texto y problemas constructivos en

    algunos poemas de Santillana: la

    Visin,

    Infiernode los enamorados^ El

    sueo .

    Filologa

    17-18 (1976-1977) [1979]:

    414-431.

    Rius, Luis.

    Los grandes tex tos de la literatura espaola hasta 1700.

    Mxico: Pormaca,

    1966.

    Rubio Garca, Luis, ed.Documentossobre elmarqusde Santillana.Murcia: Uni

    versidad de Murcia, 1983.

    Santillana, Marqus

    de.

    Cancionesy decires.Ed. de Garca de Diego. Clsicos Cas

    tellanos. Madrid: Espasa-Calpe, 1968.

    .

    Comedelade Ponca. Sonetos.

    Ed. de Maxim P.A.M.

    Kerkhof.

    Madrid:

    Ctedra, 1986.

    ,

    O bras completas.

    Ed. de ngel Gmez Moreno y Maximilian P.A.M.

    Kerkhof.

    Barcelona: Planeta-Autores Hispnicos, 1988,

    .Poesas

    com pletas,

    I.Ed. de Manuel Duran. Clsicos Castalia. Madrid:

    Castalia, 1975.

    Thom as, Henry

    y

    Daa Lee Thomas.

    Grandes poetas,

    Buenos

    Aires:

    Juventud, 1947.