Postulado Metodológicos para un Acercamiento a las Tecnologias de Producción de Grabados RuPESTRES
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POSTULADOS METODOLÓGICOS PARA UN ACERCAMIENTO A LAS TECNOLOGÍAS DE
METHODOLOGICAL POSTULATES FOR AN APPROACH TO THE PRODUCTION
Francisco Vergara MURUA
FONDECYT Grant 1080360, CONICYT
Chile
Resumen
Sin duda alguna, durante la última década se han producido notables avances en la compresión de las
tecnologías de producción de arte rupestre. Sin embargo, gran parte de ellas se han centrado o bien en
los procedimientos para la producción de pinturas, o bien en los instrumentos para efectuar las imágenes.
En el presente artículo, por el contrario, presentamos una línea metodológica orientada al análisis del
proceso de producción de grabados rupestres a partir del estudio de los surcos. Esta metodología, que
comenzó a aplicarse a partir de una secuencia de experimentos y analogías desarrolladas por el autor,
ahora se utiliza para definir las características tecnológicas en la producción de grabados rupestres con el
fin de contribuir a la definición de estilos particulares en el norte semiárido de Chile.A través de esta
metodología orientada al análisis e interpretación de los surcos de grabados rupestres, se pretende
entender, por tanto, los procesos tecnológicos implícitos durante la etapa de producción de las figuras.
Como este proceso no ha tenido suficiente discusión en la arqueología y además, es una de las variables
intrínsecas de la forma final, se presenta la aplicación metodológica en un caso de estudio donde la
realidad rupestre se tendía a definir como homogénea, el sitio Los Mellizos, ubicado en el norte
semiárido de Chile.
Palabras Clave: Tecnología, Técnica, Gesto, Corporalidad
Abstract This work aims to propose a methodology for the study of production technology engravings. From the definition of a number
of variables is proposed groove level analysis that defines the attributes of the strokes that originated the petroglyph, allowing
them to tackle a systematic variable slightly studied in this type of material. This research was conducted under the
FONDECYT GRANT Nº 1080360.
PRODUCCIÓN DE GRABADOS RUPESTRES. ENTRE LA CORPORALIDAD,
EL GESTO Y LA TÉCNICA
TECHNIQUES OF ROCK ART ENGRAVINGS. BETWEEN CORPORALITY,
GESTURE AND TECHNIQUE
Francisco Vergara MURUA
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Introducción
Además de existir un aumento por el interés
en investigar el arte rupestre (Artigas 2004,
Artigas y Cabello 2004, Artigas y Jackson
2003-2004, Guerra 2004, Troncoso 1998,
1999, 2001a, 2001b, 2003, 2004, 2005), a partir
de las últimas décadas se ha comenzado a
trabajar de manera contextual. Esta situación,
junto con generar un desarrollo teórico y
metodológico, ha permitido el planteamiento
de nuevos problemas de investigación. Entre
ellos, los aspectos tecnológicos en la
producción de grabados rupestres.
Como lo señalan diversos autores, la
tecnología de producción de arte rupestre es
uno de los niveles intrínsecos de variabilidad
(Bednarik 2001, Troncoso 2001, Valenzuela
2007, Whittaker, Koeman y Taylor 1999). La
mayoría de las veces este problema ha sido
abordado desde los instrumentos (Méndez
2008) o aplicado al caso de las pinturas,
dejando de lado la necesidad de explorar
aquellas variables referidas a la tecnología de
producción de grabados rupestres (Whittaker,
Koeman y Taylor 1999). En efecto, si bien
últimamente se ha generado una enorme
cantidad de conocimiento (Bednarik 2001,
Álvarez et. Al 2001, Méndez 2008), uno de los
problemas más habituales, es que no siempre
los encontramos en los sitios con petroglifos.
Ya sea por procesos teóricos (Bednarik 2001),
post depositacionales o por determinadas
pautas de descarte de los instrumentos. Por
estas razones hemos decidido abordar dicha
problemática a través del estudio y análisis de
los surcos de los petroglifos.
Para esto se realizo una secuencia de
experimentos, con el fin de determinar
unidades de observación que permitieran
definir diferencias en los instrumentos
utilizados, las técnicas aplicadas y los gestos
usados. Una vez definidas las unidades de
observación, estas se aplicaron sobre un sitio
con grabados rupestres con el fin de discutir
las limitaciones y alcances metodológicos de
estas variables. Por último, se presenta un
postulado metodológico capaz de distinguir
diferencias en las tecnologías de producción de
los grabados rupestres.
El arte rupestre y su contexto de
producción
Distintas perspectivas se han utilizado para
interpretar el arte rupestre (Clottes y Lewis-
Williams 2001, Leroi-Gourhan 1980, Patterson
1995, Swarts 1994 y Troncoso 1998). Aunque
cada una con sus matices, todas estas visiones
del arte rupestre sitúan a este fenómeno como
una realidad estática, estudiable a partir del
objeto final, de la acción terminada. Sin
embargo, como lo señala Fiore (1995 y 1996)
el arte rupestre se caracteriza por ser un
producto social que resulta de la interacción de
procesos económicos e ideológicos reflejando
o expresando un proceso de trabajo. Es a
partir de estos trabajos, junto con los aportes
de D´Errico (1992) quien señala el
comportamiento operacional que implica
realizar grabados en soportes pétreos, que se
conceptualiza dentro del arte rupestre una
esfera de producción. Sin embargo, para
ahondar en el proceso de producción de
grabados rupestres, lo primero es utilizar una
definición de arte rupestre que sea capaz, a
nivel teórico y metodológico, de dar cuenta de
la importancia del proceso de producción de
este fenómeno y sus implicancias materiales.
Gallardo (1992) y Valenzuela (2007) nos
señalan que el arte rupestre se define por la
relación entre una forma de modificar el
entorno y una superficie pétrea. Que existe
una relación entre una acción técnica y un
soporte (Gallardo 1992, Valenzuela 2007). Por
otro lado, como se mencionó anteriormente,
Fiore (1995 y 1996) enfatiza en la realidad
social de la cual resulta el arte rupestre,
realidad que se materializa en un proceso de
trabajo que implica una cadena operativa
(Fiore 1995). Sin embargo, ya sea como una
acción técnica o un proceso de trabajo, el
proceso de producción de arte rupestre es un
acto constituyente y constitutivo de
determinadas prácticas sociales (Valenzuela
2007).
Bajo esta lógica, el arte rupestre se define
como cultura material producto de una acción
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cultural sobre un soporte pétreo estático
(Valenzuela 2007), ya que por un lado es la
materialización de un sistema de pensamiento
(Troncoso 2007) y por otro, es la
materialización de una serie de disposiciones o
posibilidades organizadas que responden a un
hecho histórico y social particular (Fiore 1995
y 1996, Valenzuela 2007).
La forma en que estas disposiciones o
posibilidades se materializan es por medio de
la acción social, la cual está conformada por
una cadena de elecciones técnicas. Por lo
tanto, el concepto mediador entre el objeto, el
individuo y las disposiciones o posibilidades es
la tecnología. Sin embargo, para que la
tecnología de lugar a las acciones sociales hay
que entenderla como un conjunto de
comportamientos organizados que involucran
instrumentos, gestos y técnicas, las cuales
tienen una doble función: 1) materializar y
evocar un determinado sistema de
pensamiento (D´Errico 1992, Dietler y
Herbich 1998, Lemonnier 1986, Pfaffenberger
1992, Valenzuela 2007) y 2) satisfacer las
demandas producto del contexto histórico
(Mauss 1936, Fiore 1995 y 1996).
Tecnología de producción. Entre gestos,
técnicas e instrumentos
Esta perspectiva presenta a las técnicas, gestos
e instrumentos no como un producto
secundario de la actividad social, sino más bien
como opciones elegidas, dando cuenta de la
importancia de la vida social, ya que son
formadas en el curso de la práctica. Por lo
tanto, el concepto de tecnología aplicado en
esta investigación hace referencia a la
gestualidad, técnicas e instrumentos utilizados
para grabar figuras. Bajo estos principios es
que se entiende a la tecnología como un
mecanismo culturalmente estructurado
(Lemonnier 1986, Pfaffenberger 1992,
Valenzuela 2007, Whittaker, Koeman y Taylor
1999), donde se interrelacionan tanto los
instrumentos de producción como las formas
particulares de manipular los instrumentos. Al
materializarse esta relación, una tecnología de
producción genera determinados elementos
con propiedades formales particulares (cultura
material que posteriormente observamos
como registro arqueológico) que en el caso de
los petroglifos se traducen en diferentes tipos
de surcos.
La definición de las variables tecnológicas
Considerando la definición de tecnología de
producción manejada en esta investigación y
sus implicancias materiales, se optó por
elaborar una serie de experimentos en los que
fuese posible registrar cada una de las variables
tecnológicas en los surcos de los petroglifos.
Las variables que se consideraron pertinentes
se desprenden de tres niveles: Técnicas,
Instrumentos y Gestualidad.
Técnica: al entender a la técnica como un
conjunto de gestos estructurados de acuerdo a
una racionalidad específica y como la acción
mecánica elegida (Álvarez y Fiore 1995), se
opto por considerar el piqueteo directo e
indirecto, el raspado, las incisiones y las
horadaciones como las técnicas más frecuentes
en la producción de grabados rupestres.
Gestualidad: se refiere a una serie ordenada de
elecciones corporales (Mauss 1936). Al estar
definida como elecciones corporales optamos
por utilizar diferentes angulaciones en relación
a la inclinación del panel (entre 180º y 135º;
entre 135º y 90º; entre 90º y 45º).
Instrumentos: como la herramienta elegida que
media entre la corporalidad, la técnica y el
soporte. Para los experimentos utilizamos
guijarros ovoidales, clastos angulosos y
“grabadores”, los cuales corresponden a
percutores de canto (Méndez 2008).
Experimentos
Los experimentos se llevaron a cabo en un
sector preparado y controlado. Se dispusieron
3 bloques pétreos de granito en unidades de
1mt x 1mt. Los experimentos consistieron en
grabar figuras (círculos y líneas) con
instrumentos de piedra en los paneles de los
bloques.
Se utilizaron 3 tipos de instrumentos (Tabla
N°1) en 3 bloques pétreos (Tabla N°2).
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En cuanto a la fuerza, se realizaron 3
experimentos, uno para cada nivel de fuerza
aplicada, y según los resultados, se opto
realizar el resto de los experimentos con la
fuerza Nº2 ya que presentaba los atributos más
similares a los observados anteriormente en
sitios con grabados rupestres. Es importante
señalar que la fuerza se midió según la
superficie de contacto del instrumento, la
distancia entre el punto de inicio y el soporte, y
el tiempo en que demoró este recorrido.
Resultados de los experimentos
Se realizaron 22 experimentos, de los cuales el
68,1% corresponde a la técnica de piqueteado
y el 31,8% corresponde a la técnica de
raspado.
Tras la observación de los experimentos con
Fuerza N°1, 2 y 3 se pudo determinar que
posterior a la percusión directa o indirecta
sobre un soporte pétreo en un mismo punto
se extrae la corteza original del soporte, la que
representa parte del proceso de producción de
una figura. A esta extracción la hemos
denominado Elemento Pétreo Faltante (EPF).
Estos se caracterizan por ser pequeñas
unidades dentro, adyacente o fuera del surco y
se diferencian de otros por sus atributos
métricos (tienen un volumen particular),
presentan un borde de fractura y tienen una
superficie determinada. Los EPF representan
extracciones del material pétreo superficial del
soporte (corteza original) producto de una
acción cultural (Figura Nº1), donde las
propiedades formales que presentan estas
unidades se relacionan directamente con los
instrumentos, la técnica y gestualidad
aplicadas. Con el fin de obtener el volumen de
cada EPF, se promediaron los resultados
derivados del ancho, largo y profundidad de
cada uno (Gráfico Nº1).
Éstos entregaron resultados sumamente
significativos, ya que se pudieron distinguir
claras diferencias dependiendo la técnica
utilizada, como los instrumentos utilizados
(Tabla Nº3).
Por otro lado, se realizó un ploteo para ver la
relación entre largo y ancho de las dos
técnicas. Como se puede apreciar en el
Gráfico Nº2 la relación que se produce
utilizando la técnica del raspado y la técnica de
piqueteado es claramente diferente.
En cuanto al los bordes de fractura de los
EPF, se pudieron distinguir dos tipos: círculos
irregulares y bordes lineales (Figura Nº2 y 3),
cada uno asociado porcentualmente a distintas
técnicas (Tabla N° 4).
En relación al tipo de superficie que presentan
los EPF, se pudieron distinguir diferencias tras
la aplicación de la técnica de piqueteado
(Figura Nº4), y la técnica de raspado (Figura
Nº5) (Tabla N°5).
En cuanto al volumen según tipos de
instrumentos aplicando la técnica de
piqueteado, es posible observar que los valores
más altos corresponden a la utilización de
guijarros, luego los clastos y finalmente los
grabadores (Gráfico Nº3).
En relación a la angulación del golpe, se pudo
observar que los bordes de fractura de cada
EPF están en directa relación con esta, ya que
los de tipo lineal se asocian con la utilización
de una mayor angulación, no así los de tipo
circular (Tabla N°6).
Discusión de los Resultados
Los experimentos entregaron resultados
bastante significativos, sobre todo para inferir
el tipo de gestualidad, instrumentos y técnicas
utilizadas para grabar figuras en soportes
pétreos. Es así como en este momento de la
investigación es totalmente factible inferir si la
dirección del gesto se baso en movimientos
paralelos a la superficie del soporte (raspado) o
si se baso en movimientos perpendiculares a
éste (piqueteado). Por otro lado, también es
posible inferir el tipo de instrumento
(grabadores, clastos o guijarros) que se utilizó
para llevar a cabo esta práctica. En relación a
la angulación del movimiento frente al
soporte, también es factible inferir si se golpeó
en 90º o en un rango entre 180º y 90º.
Por otro lado, los experimentos demostraron
que el acto de grabar figuras es una acción
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pausada, donde cada unidad de análisis no se
dispone azarosamente en el soporte, sino más
bien son parte de cientos de movimientos
certeros. La importancia de esto radica en que
el resultado final de una figura, sus
propiedades formales de nivel macro y micro,
corresponden a lo que el individuo pretende
lograr. En base a estos enunciados es que se
presenta a continuación un postulado
metodológico para un acercamiento a la
tecnología de producción de grabados
rupestres.
Postulados metodológicos para un
acercamiento a las tecnologías de
producción de grabados rupestres.
Estrategias de Campo previas al análisis de muestras:
Selección de la población: el número total
de figuras según la temática en un sitio junto
con el tipo de trazo del surco que presenten se
considerará como la población total de
estudio. De esta población total se realizará un
muestreo estratificado aleatorio. La
estratificación se realizará en base a la temática
de representación, por lo tanto, se estratificará
según motivos antropomorfos, zoomorfos y
geométricos.
Elementos pétreos faltantes (EPF): se
considera como la muestra de la población.
Éstos se definen por ser pequeñas unidades
dentro, adyacente o fuera del surco
distinguibles de otras por sus atributos
métricos y por su borde de fractura.
Representan extracciones del material pétreo
superficial del soporte, productos de una
acción cultural, donde las propiedades
formales que presentan estas unidades se
relacionan directamente con la técnica y
gestualidad aplicadas.
Muestra: con el número total de tipos de
representaciones presentes en un sitio y el
número total de atributos técnicos
macroscópicos que presenten se establecerán
subconjuntos llamados población. A cada
figura seleccionada se le analizarán cuatro
EPF, abordando los distintos sectores de la
figura. Para esto cada figurea se dividirá a
partir de dos ejes perpendiculares (Figura
Nº6).
Estrategias de campo post selección de muestras:
Considerando la definición de tecnología de
producción manejada en esta investigación y
sus implicancias materiales, se optó por
elaborar una ficha de registro en la que fuese
posible registrar cada una de las variables
tecnológicas en terreno. Cada ficha contempla
las siguientes variables:
1) Técnica: al entender a la técnica como un
conjunto de gestos estructurados de acuerdo a
una racionalidad específica, los cuales
conllevan a la materialización de una acción
(surcos de los petroglifos), se esperaría que
racionalidades distintas generen materialidades
diferentes. Bajo esta lógica, se decidió describir
la técnica según la acción mecánica y según el
tipo de trazo que presentaban las figuras. Para
el primer caso, se considero piqueteo y
raspado. Para el segundo caso, las
características macro formales, esto es: trazo
lineal continuo, trazo lineal discontinuo, trazo
areal o alguna combinación entre ellos.
Por otro lado, es necesario describir el largo y
ancho de la figura, el ancho máximo y mínimo
del surco y finalmente, si dentro del surco se
encontraban restos de la corteza original del
soporte pétreo. Una vez caracterizadas las
propiedades macro, se procedió a definir las
propiedades micro-formales del surco:
2) Elementos pétreos faltantes (EPF): son unidades
que se generan producto de la combinación de
una técnica específica con determinados
instrumentos y con una serie de golpes
certeros. Estas unidades pueden ser
observadas ya que presentan las siguientes
características: a) un borde de fractura, b) un
volumen determinado, c) una superficie
determinada y d) son parte constitutiva del
surco.
2a) Bordes de fractura: es la unidad formal que
delimita a los elementos pétreos faltantes en su
parte superior. La forma de éstos depende
directamente del tipo de técnica aplicada sobre
el soporte pétreo, del tipo de instrumento
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utilizado y de la angulación del golpe en
relación a la inclinación del panel. Se pueden
reconocer dos grandes conjuntos: bordes de
fractura de tipo circular/ovoidal y bordes de
fractura de tipo lineal/rectangular. El primero
de ellos responde a un gesto específico
(piqueteos perpendiculares a la inclinación del
panel), y el segundo grupo a una gestualidad
diferente (incisión y raspado o una angulación
entre 180º y 110º en relación a la inclinación
del panel). En el caso de los raspados, los
bordes de fractura tienden a agruparse, sin
permitir una clara asignación formal.
2b) Volumen: es la propiedad formal
cuantitativa de cada elemento pétreo faltante y
se define en base a su profundidad, largo y
ancho. Ya que la geometría más similar a los
EPF es el cilindro se optó por obtener el
volumen multiplicando la profundidad por el
radio al cuadrado por π (V=π*r²*h). El
volumen de cada EPF depende directamente
del tipo de técnica e instrumento aplicados
sobre el soporte junto con la intensidad y
reiteración de estos.
2c) Superficie: es la parte inferior de un EPF y a
su vez, es la corteza pétrea expuesta posterior
a la aplicación de una técnica específica. Ya
que depende directamente de la aplicación de
una técnica específica, cada superficie va a
presentar características particulares a los
gestos e instrumentos utilizados. Hemos
reconocido dos grupos de superficies micro-
rugosas (las cuales responden a la aplicación de
piqueteos con instrumentos de superficies de
contacto cóncavas y angulares) y superficies
lisas-rayadas (las cuales responden a la
aplicación de incisiones y raspados con
instrumentos de superficies cóncavas y
angulares).
En cuanto a la técnica se consideran:
Piqueteado, raspado, inciso, técnica mixta y
pintura.
En cuanto a la angulación del golpe se
considera: entre 180º y 135º; 135º y 90º; 90º y
45º
Estrategias de análisis
Análisis formal de los grabados rupestres:
Corresponde a la aplicación de métodos
formales orientados al reconocimiento de los
principios productivos de los grabados
rupestres.
-Obtener el volumen promedio de cada EPF.
-Obtener una cuenta y promedio de los tipos
de bordes de fractura.
Análisis Gestual:
- Determinar la técnica de producción de los
grabados (Piqueteado, raspado, inciso, mixto,
pintura).
-Caracterizar el tipo de trazados presentes en
las figuras.
- Determinar el rango la angulación del golpe.
Análisis contextual: corresponde a la
aplicación de métodos formales orientados a
relacionar distintas variables.
-Establecer una correlación entre tipos de
representaciones y tecnologías de producción.
-Establecer una relación entre tecnologías de
producción y estilos.
Aplicación de los postulados
metodológicos. El caso de Los Mellizos,
Valle de Illapel, Norte Chico de Chile.
El sitio Los Mellizos
El sitio Los Mellizos se ubica en la cuenca
superior del Rio Illapel, Valle del Choapa,
sector meridional del Norte Chico de Chile
(Figura N°7). Es el sitio con mayor
concentración de motivos rupestres de la zona
y mayor cantidad de bloques con petroglifos.
Tradicionalmente el arte rupestre de la zona se
adscribe al complejo cultural El Molle, y se
caracteriza según el Estilo Limari. Sin
embargo, como lo demuestran diversos
autores (Rodríguez et. al 1998, Pavlovic 2004 y
Sanhueza et. al 2004), el área donde se ubica el
sitio
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Los Mellizos se caracteriza por ser una zona de
inter-digitación cultural, situación que se ve
reflejada en diferentes elementos de la cultura
material y por otro lado, el área tiene diversas
ocupaciones a nivel cronológico (desde al
menos el año 0 hasta el año 1470dc). Por esta
razón se realizaron los análisis en este sitio, ya
que al ser un área con diversas ocupaciones
culturales, se espera que una investigación
detallada de la tecnología de producción de
grabados rupestres pueda dilucidar esta
situación en esta materialidad.
Muestra
La muestra de estudio se obtuvo con una
estratificación aleatoria en base a la temática de
representación (geométricos, antropomorfos,
zoomorfos y máscaras). De un total de 690
figuras distribuidas en 160 bloques pétreos, se
analizaron 126 figuras distribuidas en 55
bloques pétreos (Tabla Nº7).
De cada figura se observaron 4 EPF, cada uno
dispuesto en los vértices de ésta misma
(superior, inferior, izquierda y derecha),
generando 504 muestras de surcos de
petroglifos.
Resultados
A partir del registro de 126 petroglifos en el
sitio Los Mellizos se lograron identificar 5
tipos de trazos: 1) lineal continuo, 2) lineal
discontinuo, 3) lineal continuo y areal, 4) lineal
discontinuo y areal y 5) pictografías (Gráfico
nº4).
En cuanto a la presencia o ausencia de corteza
dentro del surco, la mayoría de las figuras
presentaban corteza (121 casos, equivalentes al
96,03%).
En relación a los bordes de fractura de los
EPF fue posible identificar tres tipos: tipos
circulares de forma irregular, tipos lineales de
forma irregular y tipos rectangulares de forma
irregular (Tabla Nº8).
En relación al tipo de superficie que
presentaban los EPF fue posible distinguir
dos tipos: superficies micro rugosas y del tipo
lisas/rayadas. Sin embargo, existen una serie
de motivos que combinan los distintos tipos
de superficie (Tabla Nº8), pudiéndose
distinguir tres tipos de combinaciones: a)
rugosas, b) lisas/rayadas y c) rugosas y
lisas/rayadas.
En cuanto a los volumenes promediados de
cada figura se optó por agrupar variaciones de
1 mm³ . Bajo este criterio se formaron 6
grupos de variación (Gráfico Nº5).
En relación a la variación del ancho del surco,
se forman 5 grupos de 0,9 cm (Gráfico Nº6).
En relación a los anchos máximos y mínimos
de cada surco presente en las figuras fue
posible distinguir 5 grupos (para los primeros)
(Gráfico Nº7) y 2 grupos (para los últimos) de
variación (Gráfico Nº8).
Una vez definidos los grupos de variación para
cada variable tecnológica, fue posible agrupar
los distintos tipos de trazados, bordes de
fractura, tipos de superficie de cada EPF, el
promedio de los volúmenes de cada uno de
éstos, las variaciones del ancho de cada
petroglifo junto con los anchos máximos y
mínimos de cada surco. Bajo estos criterios es
posible observar que de todas las figuras
analizadas, se forman 5 grupos tecnológicos.
Grupo Nº1
Compuesto por motivos antropomorfos,
esquemáticos, zoomorfos y máscaras.
Se caracteriza por presentar solo trazos de
formas lineales y continuos.
Este grupo se subdivide en 5 subgrupos
(Tabla Nº9).
Subgrupo A: motivos que no dejan corteza
pétrea en el surco. En cuanto a la variación del
ancho del surco, estos motivos varían desde
0,3 cm hasta los 1,2 cm. En relación a los
anchos máximos del surco de estos motivos,
ninguno supera los 2 cm y ninguno es menor a
1 cm. En relación a los anchos mínimos que
presentan los surcos de cada motivo de este
grupo, el 50% no supera los 0,9 cm y el otro
50% va desde 1 cm hasta los 1,3 cm. Por
último, los volúmenes mínimos alcanzan los
1,43 mm³ y el más alto los 3,23 mm³. Este
grupo se compone por 4 motivos geométricos.
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Subgrupo B: es el grupo que presenta mayor
diversidad interna. Los motivos dejan corteza
pétrea en el surco. En cuanto a la variación del
ancho del surco, estos van desde 0,5 cm hasta
los 1,5 cm. En relación a los anchos máximos
del surco de estos motivos, el 86,2 % no
supera los 1,9 cm y del 13, 79 % restante solo
un cazo alcanza los 2,6 cm. En relación a los
anchos mínimos que presentan los surcos de
cada motivo de este grupo, existen 22 casos en
que los valores giran entre 0,3 cm y 0,9 cm. De
los siguientes 7 casos, solo dos alcanzan 1,3
cm, mientras el resto no supera los 1,2 cm. A
diferencia del grupo anterior, los volúmenes
varían desde el grupo Nº1 hasta el grupo Nº6
(solo un caso). Este grupo se compone por 29
motivos. 18 motivos esquemáticos, 1
antropomorfo, 2 máscaras y 8 zoomorfos.
Subgrupo C: este grupo se caracteriza por
motivos que dejan corteza pétrea en el surco.
En cuanto a la variación del ancho del surco,
presenta mayores valores que los dos grupos
anteriores, los cuales van desde 1,65 cm hasta
los 1,95 cm y solo un caso alcanza los 2,2 cm.
En cuanto a los anchos máximos del surco,
todos los motivos se agrupan entre los 2 cm y
los 2,9 cm. En relación a los anchos mínimos
que presentan los surcos de cada motivo de
este grupo, 10 se agrupan entre los 0,4 cm y
los 0,8 cm y solo un caso tiene un valor de 1,2
cm. En relación a los volúmenes de cada
motivo, los valores van desde los 0,87 mm³
hasta los 2,86 mm³. Este grupo se compone
por 11 motivos. 4 motivos esquemáticos, 3
antropomorfo, y 4 zoomorfos.
Subgrupo D: dentro de este grupo todos los
motivos presentan corteza dentro del surco.
En cuanto a la variación del ancho del surco,
los valores van desde los 2 cm hasta los 3,1 cm
(un caso). En cuanto a los anchos máximos del
surco, los valores van desde los 2,4 cm hasta
los 3,6 cm (solo un caso). En relación a los
anchos mínimos, todos los motivos se agrupan
en el grupo Nº 1, con valores mínimos de 0,2
cm y valores máximos de 0,7 cm. En relación a
los volúmenes de cada motivo, los valores van
desde los 1,16 mm³ hasta los 2,44 mm³.
Dentro de este grupo se encuentran 9 motivos,
de los cuales 5 son zoomorfos y 4 son
antropomorfos.
Subgrupo E: solo un motivo antropomorfo
aislado. Este presenta la mayor variación del
ancho del surco (4,2 cm) y el ancho máximo
de todos los motivos (4,6 cm). Sin embargo,
comparte el ancho mínimo del surco (0,4 cm)
y el volumen (1,65 mm³) con el resto de los
grupos.
Grupo Nº2
Compuesto por motivos antropomorfos,
esquemáticos, zoomorfos y máscaras.
Se caracteriza por presentar solo trazos de
formas lineales discontinuos y todos los
motivos presentan corteza dentro del surco
(Tabla Nº10). Este grupo se subdivide en 6
grupos.
Subgrupo F: en cuanto a la variación del ancho
del surco, estos motivos varían desde 0,5 cm
hasta los 1,5 cm (un caso). En relación a los
anchos máximos del surco de estos motivos,
los valores van desde 0,59 cm hasta 1,8 cm. En
cuanto a los anchos mínimos que presentan
los surcos de este grupo, todos se agrupan en
el grupo Nº1, con valores mínimos de 0,3 cm
y valores máximos de 0,9 cm. Los volúmenes
mínimos alcanzan los 0,8 mm³ y el más alto
los 3,01 mm³. Este grupo se compone por 7
motivos, de los cuales 4 son geométricos, 1 es
una máscara y 2 zoomorfos.
Grupo G: es el grupo que presenta mayor
número de casos. Los motivos dejan corteza
pétrea en el surco. En cuanto a la variación del
ancho del surco, todos los motivos se agrupan
en el grupo Nº4, con valores desde los 1 cm
hasta los 1,5 cm. En relación a los anchos
máximos del surco de estos motivos, el valor
mínimo es de 1,1 cm y el máximo de 2,1 cm.
En relación a los anchos mínimos que
presentan los surcos de cada motivo de este
grupo, todos pertenecen al grupo Nº1 con
valores entre los 0,2 cm y los 0,9 cm. Los
volúmenes varían desde el grupo Nº1 hasta el
grupo Nº4. Este grupo se compone por 25
motivos. 12 motivos esquemáticos, 4
antropomorfos, 2 máscaras y 7 zoomorfos
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597
Grupo H: este grupo se caracteriza porque
todos sus motivos pertenecen al mismo grupo
de variación del ancho del surco (Grupo Nº5).
En cuanto a los anchos máximos del surco,
solo dos casos no superan los 1,9 cm y el
resto contiene valores que van desde los 2 cm
hasta los 2,6 cm. En relación a los anchos
mínimos todos los motivos pertenecen al
grupo Nº1, con valores mínimos de 0,2 cm y
máximos de 0,7 cm. En relación a los
volúmenes de cada motivo, los valores van
desde los 0,96 mm³ hasta los 4,06 mm³ (un
solo caso). Este grupo se compone por 14
motivos, de los cuales 3 son antropomorfos, 1
es máscara, 2 son zoomorfos y por último, 8
son motivos esquemáticos.
Grupo I: al igual que el grupo anterior, todos
los motivos presentan corteza dentro del
surco. La variación del ancho del surco es
bastante homogénea ya que solo fluctúa
dentro del grupo Nº6. En relación a los
anchos máximos del surco, los motivos varían
entre los 2,2 cm y los 2,8 cm. En relación a los
anchos mínimos, todos los motivos se agrupan
en el grupo Nº 1, con valores mínimos de 0,2
cm y valores máximos de 0,5 cm. Los
volúmenes de este grupo se caracterizan por
presentar mayor diversidad que los grupos
anteriores, haciéndose presentes los grupos Nº
1, 2, 3 y 5. Este grupo se compone de 8
motivos, de los cuales solo 1 es esquemático, 3
son zoomorfos y 4 son antropomorfos. En
este grupo no se presentan máscaras.
Grupo J: todos los motivos presentan corteza
entre el surco. La variación del ancho del surco
se enmarca en los grupos Nº 7 y 8,
presentando valores entre los 2,7 cm y los 3,1
cm. En relación a los máximos valores
alcanzados por el ancho del surco estos
fluctúan entre los 3,1 cm y los 3,6 cm. El
ancho mínimo de estos motivos se caracteriza
por no disminuir de los 0,2 cm y no superar
los 0,5 cm. En cuanto a los volúmenes de de
del surco de estos motivos, los promedios
fluctúan entre los 0,88 mm³ y los 2,26 mm³.
Este grupo se compone de 6 motivos, de los
cuales todos son antropomorfos.
Por último, existe un caso aislado, un motivo
antropomorfo, que presenta la mayor
variación del ancho del surco, alcanzando los
4,4 cm. Por otro lado, también presenta el
ancho máximo de todos los motivos,
alcanzando los 4,7 cm. En cuanto al ancho
mínimo de este motivo, el valor es de 0,3 cm.
Presenta un volumen de 1,36 mm³.
Grupo Nº3
Compuesto por motivos antropomorfos,
esquemáticos, zoomorfos.
Se caracteriza por presentar solo trazos de
formas lineales continuos combinados con
trazos areales y todos los motivos presentan
corteza dentro del surco exceptuando un caso
(Tabla Nº11). En cuanto a la variación del
ancho del surco, estos motivos varían desde
0,6 cm hasta los 1,7 cm. En relación a los
anchos máximos del surco de estos motivos,
los valores van desde 1 cm hasta 2,3 cm. En
cuanto a los anchos mínimos que presentan
los surcos de este grupo, todos se agrupan en
el grupo Nº1, con valores mínimos de 0,4 cm
y valores máximos de 0,8 cm. Los volúmenes
fluctúan entre 1,57 mm³ y 2,71 mm³. Este
grupo se compone por 5 motivos, de los
cuales 2 son esquemáticos, 2 son
antropomorfos y 1 es zoomorfo.
Grupo Nº4
Compuesto por motivos esquemáticos y
zoomorfos.
Se caracteriza por presentar solo trazos de
formas lineales discontinuos combinados con
trazos areales y todos los motivos presentan
corteza dentro del surco (Tabla Nº12). En
cuanto a la variación del ancho del surco, estos
motivos varían desde 1 cm hasta los 2,3 cm.
En relación a los anchos máximos del surco de
estos motivos, los valores van desde los 1,8 cm
hasta 2,8 cm. En cuanto a los anchos mínimos
que presentan los surcos de este grupo, todos
se agrupan en el grupo Nº1, con valores
mínimos de 0,1 cm y valores máximos de 0,9
cm. Los volúmenes fluctúan entre 1,32 mm³ y
2,45 mm³. Este grupo se compone por 5
ENTRE LA CORPORALIDAD, EL GESTO Y LA TÉCNICA
Francisco Vergara MURUA
598
motivos, de los cuales 2 son esquemáticos, 3
son zoomorfos.
Grupo Nº5
Compuesto por un motivo antropomorfo. Se
caracteriza por presentar solo trazos de formas
lineales con agregación de pigmentos de color
rojo (Tabla Nº13).En cuanto a la variación del
ancho del surco, este motivo varía 1,1 cm. En
relación al ancho máximo del surco de este
motivo, el valor alcanza los 1,7 cm,
insertándose en el grupo Nº2. En cuanto al
ancho mínimo que presentan el surco de este
motivo, el valor es de 0,6 cm. Por último, el
volumen es de 2,34 mm³, perteneciendo al
grupo Nº3.
Discusión de los Resultados
Sobre la Aplicación de los Postulados Metodológicos en
el sitio Los Mellizos
La caracterización de las diferentes variables
tecnológicas del arte rupestre nos ha
posibilitado discriminar al menos cinco
tecnologías de producción distintas. Cada
grupo correspondería a diferentes
racionalidades frente a una práctica en común.
Sin embargo, cada tecnología de producción,
con sus respectivos gestos y técnicas, ha
demostrado que contiene diferentes niveles de
variabilidad. Un primer nivel, representado por
aspectos macro como el tipo de trazo y la
presencia o ausencia de corteza dentro del
surco, ha sido el que permite discriminar entre
grandes grupos tecnológicos. Estos grupos, a
nivel interno y a medida que el análisis se hace
mas exhaustivo van demostrando una mayor
variabilidad. Bajo estos criterios, es posible
determinar que el volumen promedio de cada
figura para cada grupo no es un elemento
diagnóstico por si solo, sino más bien debe ir
anexado a otro conjunto de variables, tales
como los anchos máximos y mínimos del
surco. Sin embargo, aspectos como la
variación entre el ancho máximo del surco y el
ancho mínimo del surco de cada motivo han
permitido generar grupos más definidos y con
menor variabilidad.
Por otro lado, es importante señalar que los
alcances de esta investigación solo se limitan a
definir distintas tecnologías de producción de
los motivos. En otras palabras, solo
caracterizan un aspecto del estilo, no dando
cuenta del conjunto de normas de sintaxis
entre los motivos dentro de un panel, ni de los
soportes a utilizar y su localización espacial.
Otra limitante se relaciona con los aspectos
cronológicos de cada tecnología de
producción, ya que cualquier alcance temporal
va a tender a ser relativo y va a depender de
varios niveles de contrastación. No obstante,
los resultados nos señalan diferentes
racionalidades de producción de las figuras, lo
que se cruza con lo que Pavlovic ( 2004) y
otros autores (Rodríguez et. al 1998, Sanhueza
et. al 2004 y Troncoso 2001), han señalado
para el área de estudio. Por esta razón,
pensamos que la asignación de estos
petroglifos a un mismo estilo (Ballereau y
Niemeyer 1998) no corresponde con la
realidad material de esta manifestación. De
hecho, los resultados de los análisis
tecnológicos nos permiten plantear al menos
dos situaciones:
1) Que el arte rupestre presente en el sitio
Los Mellizos no corresponde a solo
una unidad estilística como lo había
planteado Ballereau y Niemeyer (1998),
ya que es posible observar diferentes
racionalidades de producción.
2) Que las diferentes racionalidades de
producción observadas en los niveles
tecnológicos se corresponden con las
diferentes ocupaciones que distintos
autores (Rodríguez et. al 1998,
Pavlovic 2004, Sanhueza et. al 2004,
Troncoso 2001) han definido para el
área. Bajo estos postulados, la
producción de un sitio de arte rupestre
no sería un acto sincrónico, sino más
bien existirían producciones desde el
Periodo Arcaico Tardío (Artigas y
Jackson 2003-2004) hasta el periodo en
que el sector presenta ocupaciones de
tipo Incaico (Troncoso 2004). Este
postulado implica que existe una
práctica que perdura por más de mil
años, pero que cada sociedad le
entrega un sello distintivo.
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599
En relación a los bordes de fractura de cada
motivo, es posible observar (Tabla Nº7 y 8)
que en un mismo motivo pueden existir
diversos tipos, señalando que existe una cierta
variación en la angulación del golpe sobre una
misma figura. Esta situación podría ser el
resultado de dos acciones distintas:
1) Que durante el proceso de producción
de una figura se utilizaron diferentes
angulaciones de golpe, pero por parte
de un mismo autor.
2) Los diferentes bordes de fractura
corresponden a diferentes
angulaciones de golpes y a diferentes
individuos. De ser así, parte de la
práctica de producción de figuras seria
retomar figuras anteriores sin la
intención de anular los elementos
existentes.
Por otro lado, dentro de los motivos que
presentan un trazo lineal continuo y presentan
corteza dentro del surco, es posible observar
una cierta homogeneidad en relación a los
bordes de fractura y tipos de superficie, ya que
el 81,8% de los motivos tiene un borde
circular irregular y el 97,8% de estos presenta
una superficie rugosa (solo existe 1 caso con
superficie tipo lisa/rayada).
Dentro de los motivos que presentan un trazo
lineal continuo y no presentan corteza dentro
del surco, es posible observar homogeneidad
en relación a los bordes de fractura y tipos de
superficie, ya que el 75% de los motivos tiene
un borde circular irregular, de los cuales todos
presentan una superficie rugosa. En relación al
borde rectangular irregular, este tiene una
representación del 25%, todos con superficie
del tipo rugosa (TablaNº9).
De los motivos que presentan un trazo lineal
discontinuo todos presentan corteza en el
surco. También es posible encontrar
homogeneidad ya que el 82,4% de los motivos
tiene un borde de fractura del tipo circular y
presenta una superficie del tipo rugosa. Solo 1
caso de motivos con borde circular presenta
una superficie del tipo lisa/rayada (1,7%). En
relación a los bordes rectangulares irregulares
(14%) todos presentan una superficie rugosa.
Solo 1 caso presenta un borde de fractura del
tipo lineal irregular, el cual tiene una superficie
lisa/rayada (TablaNº4).
En relación a los motivos que presentan un
trazado lineal continuo y areal, el 100% de
estos presenta corteza en el surco, bordes del
tipo circular irregular y superficies del tipo
rugosa (TablaNº9).
En cuanto a los motivos que presentan un
trazado lineal discontinuo y areal, el 100%
presenta corteza en el surco. Por otro lado, el
85,7%, presenta un borde del tipo circular
irregular y de estos el 100% una superficie del
tipo rugosa. Solo un caso (14,2%), presenta un
borde del tipo rectangular (TablaNº9).
En relación a los cinco grupos definidos, el
grupo Nº2 es el que se ve mayormente
representado en el sitio Los Mellizos, ya que
presenta 62 motivos distribuidos en todos sus
subgrupos. Por otro lado, este grupo se
caracteriza por representar mayormente
motivos esquemáticos (25), luego 18 motivos
antropomorfos (superando el número de
antropomorfos de todos los grupos) luego
motivos zoomorfos (15) y por último, las
máscaras (4),superando también en número al
resto de los grupos.
El siguiente grupo que tiene una alta
representación en el sitio, es el grupo Nº1, ya
que contiene 53 motivos, de los cuales 26 son
del tipo esquemático. A diferencia del grupo
anterior, en éste los motivos zoomorfos (17)
superan a las representaciones antropomorfas
(8) y a las máscaras (2), permitiendo establecer
una relación entre una tecnología de
producción particular y una orientación a
representar determinados tipos de temáticas,
en este caso los animales. Los tres grupos
restantes (grupo Nº3, 4 y 5) son los que menos
representación tienen en el sitio, además de no
presentar motivos de máscaras. Por otro lado,
es importante destacar que el grupo Nº5 es el
único que se caracteriza por agregar pigmentos
de color a los surcos realizados sobre el
soporte pétreo.
ENTRE LA CORPORALIDAD, EL GESTO Y LA TÉCNICA
Francisco Vergara MURUA
600
En relación a la temática existen dos motivos
que escapan a la generalidad del sitio. Uno es
un motivo zoomorfo, serpentiforme, del tipo
aguada (Soporte 57 panel a figura) que se
inserta en el sub grupo B del grupo Nº2,
compartiendo sus características tecnológicas
con otros seis motivos zoomorfos. El otro
motivo es un antropomorfo tipo Santa
Mariano (Soporte 50 panel a figura 5), el cual
comparte sus características tecnológicas con
otros dos motivos antropomorfos más, ya que
se inserta en el sub grupo D, del grupo Nº2.
Estos datos son bastante significativos ya que
presentan a determinados elementos foráneos
(Noroeste Argentino) reproducidos con
tecnologías de producción local, o más bien,
comunes a todo el resto de los motivos en el
sitio.
Conclusiones
Las variables observadas en el proceso de
experimentación que resultaron ser más
representativas de las tecnologías de
producción de las figuras, son la técnica
empleada y el instrumento utilizado, a
diferencia de la angulación del golpe, la cual
muestra amplias similitudes entre los 180º y
99º. En relación a las variables de los EPF,
tanto la profundidad, el largo, el ancho, los
bordes de fractura y el tipo de superficie de
éstas, resultaron ser claves al minuto de inferir
tanto la gestualidad como la técnica empleada
al minuto de grabar figuras en soportes
pétreos.
Por otro lado, uno de los resultados cruciales
para la investigación, es que pudimos notar
que la producción de una figura en un soporte
pétreo, independiente de cuales sean los
instrumentos, gestos y técnicas empleadas, es
una acción pausada. A nivel material, esto se
traduce en dos puntos:
1) que la mayoría de los EPF que se
observan en el soporte pétreo guardan
relación con gestos certeros y no tanto
con factores de error.
2) Esta situación también se traduce en
que no solo debemos observar los
EPF, sino que también los restos de
corteza pétrea original que han
quedado dentro del surco de los
petroglifos.
Otro aspecto significativo, es la imposibilidad
de identificar niveles de experticia a partir del
análisis de los EPF. De hecho, la única
experiencia en relación a los petroglifos de la
persona que realizó los grabados, era la de
análisis y registro de estos. Sin embargo, los
petroglifos realizados en el proceso de
experimentación son bastante semejantes a los
de los sitios de arte rupestre. Esto implica que
los individuos que realizaron los petroglifos no
necesariamente han realizado petroglifos con
anterioridad. Sin embargo, la experticia se
podría observar en el nivel macro de los
petroglifos. Esto se materializaría en la
variación que se produce en el ancho máximo
y mínimo del surco.
Es importante señalar que cada tecnología de
producción de arte rupestre conlleva una serie
de aspectos tangibles, capaces de ser
observados, los cuales nos señalan una
racionalidad específica de acuerdo a una
práctica en común. Estas diferentes
racionalidades generan sutiles diferencias
tecnológicas, las que a partir de este estudio
comienzan a ser exploradas y caracterizadas.
No obstante, es importante seguir
desarrollando este tipo de estudios para así
poder contrastar diferentes metodologías, y en
diferentes soportes.
Por otro lado, pudimos observar que llas
variables analizadas representan distintas
escalas:
1) El tipo de trazo, la presencia o
ausencia de corteza, el tipo de
superficie de cada EPF y los aspectos
figurativos representarían una escala a
nivel grupal.
2) El volumen, la variación del ancho del
surco y los bordes de fractura de cada
EPF representarían variaciones a nivel
de individuo.
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601
Otro aspecto importante, es que esta
metodología nos ha permitido observar que en
un sitio de grabados rupestres además de
existir diversidad en cuanto a las normativas
que regulan la sintaxis de los diseños, su
emplazamiento y el uso de bloques, existe una
gran diversidad en cuanto a la corporalidad, las
técnicas y gestos utilizados. De hecho más allá
de las diferencias que se podrían producir en
los diseños por aspectos cronológicos, dentro
de un grupo tecnológico existe variabilidad.
Esta funciona a dos escalas: en una primera
instancia funciona a nivel de grupo, esto es al
nivel del saber-hacer. Probablemente las
normativas de producción se han incorporado
en los individuos por medio de la observación
repetida del acto de grabar figuras, generando
ciertos tipos de figuras en el imaginario
colectivo de un grupo particular. Por otro
lado, dentro del imaginario colectivo se ha
establecido una secuencia estructurada de
acciones, esto es: una serie ordenada de gestos
y acciones consecutivas que se materializan en
el producto final.
Sin embargo, la secuencia estructurada de
acciones, gestos y técnicas no es restrictiva. En
este sentido, queremos señalar que existe por
parte de los individuos, una interpretación de
la cadena. Es por esto que encontramos una
alta variabilidad en los volúmenes de los
surcos.
Por último, la aplicación de la metodología nos
ha permitido observar que los grabados
rupestres son producto de una secuencia
pausada y certera de gestos y técnicas con
determinados instrumentos. Con esto
queremos dar importancia a que cada EPF,
más que resultar de errores, son la
materialización de esta secuencia.
Figure Nº1. Digitalización de un elemento pétreo faltante. En el dibujo es posible observar el borde de
fractura
ENTRE LA CORPORALIDAD, EL GESTO Y LA TÉCNICA
Francisco Vergara MURUA
602
Figure Nº2. Borde de fractura, círculo irregular.
Figure Nº3. Borde de fractura, lineal.
Figure Nº4. Superfície micro rugosa
Figure Nº5. Superfície lisa/rayada.
Figure Nº6. Los cuadros muestran los elementos pétreos faltantes.
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603
Figure Nº7. Área de estudio.
Tables
Type of Instrument N° of Instruments Used Percentage N° of experiments in which were used:
Ovoid pebbles 10 45,4 % Force N°1, 2 y 3. E N°1,2,3,4,5,6,7,8,10,11
Engravers 6 27,3 % E N° 9,15,16,17,18,19
Angular clasts 6 27,3 % E N° 20,21,22,23,24,25
TOTAL 22 100 % 25
Table Nº1.Presenta el tipo y numero de instrumentos utilizados, su representación porcentual y los experimentos en que fueron utilizados.
N° Block
Width (cm)
Height (cm)
Length (cm)
Inclination of the panel
Mineral composition
N° Experiments carried out Total
number of Experiments
1 23 25 49 10° Quartz,
Feldspars , Biotite
Force N°1,2 y 3. E N°1 4
2 27 22 44 22° Quartz,
Feldspars , Biotite
E N°2,3,4,5,6,15,16,17,18,19,20,21,22,23,24
Y 25 16
3 20 23 25 55° Quartz,
Feldspars , Biotite
E N°7,8,9,10 y 11 5
Table Nº2. Especifica las características métricas del soporte, la inclinación de los paneles, la composición mineral y los experimentos que se realizaron
TECHNIQUE INSTRUMENT MEAN VOLUME (MM³) PECKING PEBBLE 2,22
ENGRAVER 0,70
CLAST 1,93
SCRAPING PEBBLE 2,04
ENGRAVER 3,05
CLAST 2,63
Table Nº3. Resultados de los volúmenes obtenidos tras la aplicación de distintas técnicas con diferentes instrumentos.
ENTRE LA CORPORALIDAD, EL GESTO Y LA TÉCNICA
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604
TECHNIQUE FRACTURED EDGES %
Pecking Irregular circle 50
Scraping Lineal 100
Table Nº4. Tipos de bordes de fractura de los EPF generados a partir de la utilización de distintas técnicas.
TYPE OF SURFACE TECHNIQUE INSTRUMENT
ROUGH MICRO PECKING ANGULAR CLAST/ENGRAVERS/ PEBBLES
SMOOTH/STRIPED SCRAPING CLAST ANGULAR/ ENGRAVERES
POLISHED SCRAPING PEBBLES
Table Nº5. Tipos de superficies según la técnica e instrumentos utilizados.
ANGULATION TECHNIQUE FRACTURED EDGE PERCENTAGE
180º-135º PECKING LINEAL 25%
135º-90º PECKING CIRCULAR 100%
Table Nº6. Tipos de bordes de fractura de los EPF según la angulación del golpe.
TO
PIC
A
AN
TH
RO
PO
MO
RP
HIC
32 20 61,5%
MA
SK
S
6 5 66,6%
SC
HE
MA
TIC
S
54 25 10%
ZO
OM
OR
PH
IC
34 19 40%
FIGURE
NUMBER
NUMBER OF MEDIA
% IN RELATION TO THE TOTAL OF THE SITE
Table Nº7. Caracterización de la muestra de estudio.
Circular Edge Circular and Rectangular
Edge
Circular and Lineal Edge
Circular, Rectangular and Lineal Edge
TOTAL
Rough Type 92 29 2 122
Smooth/Striped Type
2 2
Rough-Smooth/Striped Type
2 2
TOTAL 94 29 2 2 126
Table Nº8. Tipos de superficie y Bordes de fractura por motivos.
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605
Group Nº1 Type of motifs Nº of Motifs Type of trace
Width Variation of the groove (cm)
Maximum Width (cm)
Minimum Width (cm)
Minimum and maximum Volume (mm³)
Subgroup A SCHEMATICS 4
Continuous infilled trace without cortex in the groove
0,3-1,2 1-2 0,9-1,3 1,43-3,23
Subgroup B SCHEMATICS 18 Continuous infilled trace with cortex in the groove
0,5-1,5 1,9-2,6 0,3-1,3 0,56-5,63 ANTHROPOMORPHIC 1
ZOOMORPHIC 8
MASKs 2
Subgroup C SCHEMATICS 4 Continuous infilled trace with cortex in the groove
1,65-2,2 2-2,9 0,4-1,2 0,87-2,86 ANTHROPOMORPHIC 3
ZOOMORPHIC 4
Subgroup D ANTHROPOMORPHIC 4 Continuous infilled trace with cortex in the groove
2-3,1 2,4-3,6 0,2-0,7 1,16-2,44 ZOOMORPHIC 5
Subgroup E ANTHROPOMORPHIC 1 Continuous infilled trace with cortex in the groove
4,2 4,6 0,4 1,65
Table Nº9. Características de cada subgrupo del Grupo Nº1.
Group nº2 Type of motif Nº of motif Type of trace
Width variation of the groove (cm)
Maximum width (cm)
Minimum width (cm)
Minimum and maximum volume (mm³)
Subgroup A
SCHEMATIC 4 Discontinuous infilled trace with cortex in the groove
0,5-1,5 0,59-1,8 0,3-0,9 0,8-3,01 ZOOMORPHIC 2
MASKS 1
Subgroup B SCHEMATIC 12 Discontinuous infilled trace with cortex in the groove
1-1,5 1,1-2,1 0,2-0,9 0,26-3,44 ANTHROPOMORPHIC 4
ZOOMORPHIC 7
MASKS 2
Subgroup C SCHEMATIC 8 Discontinuous infilled trace with cortex in the groove
1,9-2,6 0,2-0,7 0,96-4,06 ANTHROPOMORPHIC 3
ZOOMORPHIC 2
MASKS 1
Subgroup D SCHEMATIC 1 Discontinuous infilled trace with cortex in the groove
2-2,4 2,2-2,8 0,2-0,5
0,63-4,01 ANTHROPOMORPHIC 4
ZOOMORPHIC 3
Subgroup E ANTHROPOMORPHIC 6
Discontinuous infilled trace with cortex in the groove
2,71-3,1 3,1-3,6 0,2-0,5 0,88-2,26
Subgroup F ANTHROPOMORPHIC 1
Discontinuous infilled trace with cortex in the groove
4,4 4,7 0,3 1,36
Table Nº10. Características de cada subgrupo del Grupo Nº2.
ENTRE LA CORPORALIDAD, EL GESTO Y LA TÉCNICA
Francisco Vergara MURUA
606
Group nº3 Type of motifs Nº of Motifs Type oftrace
Variación width of the groove (cm)
Maximum Width (cm)
Minimum Widths (cm)
Maximum and minimum volume (mm³)
ANTHROPOMORPHIC 2 Continuous infilled trace with cortex in the groove
0,6-1,7 1-2,3 0,4-0,8 1,57-2,71 ZOOMORPHIC 1
SCHEMATIC 2
Table Nº11. Características de cada subgrupo del Grupo Nº3.
Group nº4 Type of motif Nº of Motifs Type of trace
Width variation of the groove (cm)
Maximum width (cm)
Minimum width (cm)
Minimum and maximum volume (mm³)
ZOOMORPHIC 3 Continuous infilled and areal with cortex in the groove
1-2,3 1,8-2,8 0,1-0,9 1,32-2,45 SCHEMATIC 2
Table Nº12. Características de cada subgrupo del Grupo Nº4.
Group nº5 Type of motif Nº of motif Type of trace
Width variation of the groove (cm)
Maximum width (cm)
Minimum width (cm)
Minimum and maximum volume (mm³)
ANTHROPOMORPHIC 1 Pictogram 1,1 1,7 0,6 2,34
Table Nº13. Características de cada subgrupo del Grupo Nº5.
Graphics
Promedio Volumen
0
5
10
15
20
25
30
35
40
45
50
ca.1
35º.
p
ca.1
80º.
p
ca.9
0º.
p
g.1
35º.
p
g.1
35º.
p
g.1
35º.
p
g.1
80º.
p
g.1
80º.
p
g.1
80º.
p
g.9
0º.
p
g.9
0º.
p
g.9
0º.
p
g.9
0º.
p
g.9
0º.
p
g.9
0º.
p
gra
.135º.
p
gra
.180º.
p
gra
.90º.
p
ca.1
35º.
r
ca.1
80º.
r
ca.9
0º.
r
g.1
80º.
r
gra
.135º.
r
gra
.180º.
r
gra
.90º.
r
P P P P P P P P P P P P P P P P P P R R R R R R R
Instrumento, Ángulo y Técnica
Mil
ímetr
os
Serie1
Graphic Nº1. Resultados de promedios de volumen según distintas técnicas.
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Graphic Nº2. Ploteo del largo y ancho de las unidades de análisis. En verde se representa la técnica de raspado. En rojo se representa la técnica de piqueteado.
Graphic Nº3. Promedios según Tipo de Instrumento.
Graphic Nº4. Cuenta de los
diferentes tipos de trazos.
E4
E5
E6E7
E10E11
E15E16E17
E20E21
E22
E8
E9
E18E19
E23E24E25
-20 -16 -12 -8 -4 0 4 8
Ancho
-6,4
-4,8
-3,2
-1,6
0
1,6
3,2
4,8
Larg
o
Volumen Promedio por Instrumento
0
1
2
3
4
5
1 2 3 4 5 6
Unidad de Análisis
Mil
ímetr
os C
úb
ico
s
Promedio Volumen
por Unidad Guijarros
Promedio Volumen
por Unidad
Grabadores
Promedio Volumen
por Unidad Clastos
ENTRE LA CORPORALIDAD, EL GESTO Y LA TÉCNICA
Francisco Vergara MURUA
608
Graphic Nº5. Promedio de los volúmenes de cada motivo.
Graphic Nº6. Número de casos por cada grupo de variación del surco
Graphic Nº7. Número de casos por cada grupo de anchos máximos.
Graphic Nº8. Número de casos por
cada grupo de anchos minimos.
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