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Mater Clementissima Revista de Ciencias eclesiásticas Nueva época Número 1 - 2016

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Mater ClementissimaRevista de Ciencias eclesiaacutesticas

Nueva eacutepocaNuacutemero 1 - 2016

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PONTIFICIO COLEGIOESPANtildeOL DE SAN JOSEacute

Mater ClementissimaRevista de Ciencias eclesiaacutesticas

Nueva eacutepocaAntildeo 1 - 2016

ROMA

DIRECTOR EDITORJoseacute San Joseacute Prisco

CONSEJO EDITORIAL EDITORIAL BOARDArgimiro Martiacuten BenitoJavier Malo PeacuterezLope Rubio Parrado

CONSULTORES CIENTIacuteFICOS SCIENTIFIC ADVISORSAurelio Garciacutea Maciacuteas Pontificio Ateneo de San Anselmo (Roma)Dario Vitali Universidad Pontificia Gregoriana (Roma)Jacinto Nuacutentildeez Regodoacuten Universidad Pontificia de SalamancaJoseacute Luis Barriocanal Goacutemez Facultad de Teologiacutea del Norte de Espantildea (Burgos)Juan Manuel Cabiedas Tejero Universidad Pontificia de MeacutexicoLuis A Garciacutea Matamoro Universidad Pontificia de SalamancaSalvador Pieacute i Ninot Facultad de Teologiacutea de Cataluntildea Ateneo San PaciagraveSantiago Guijarro Oporto Universidad Pontificia de SalamancaTeodoro Leoacuten Muntildeoz Vicario general de SevillaVicente Caacutercel Ortiacute Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute (Roma)Viacutector Suaacuterez Gondar ITC y Universidad Pontificia de Salamanca

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El Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute en Roma es el editor de Mater Clementissima Revista de Ciencias eclesiaacutesticas

ISSN 2039-1498

El Editor a los efectos previstos en el artiacuteculo 321 paacuterrafo segundo del vigente TRLPI se opone expresamente a que cualquiera de las paacuteginas de esta obra o partes de ella sean utilizadas para la realizacioacuten de resuacutemenes de prensa Cualquier forma de reproduccioacuten distribucioacuten comunicacioacuten puacuteblica o transformacioacuten de esta obra

solo puede ser realizada con la autorizacioacuten de sus titulares salvo excepcioacuten prevista por la ley

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Mater Clementissima 1 (2016)

SUMARIO SUMMARY

PRESENTACIOacuteN 5

ARTIacuteCULOS ARTICLES

Dario Vitali El Siacutenodo de los obispos al servicio de una Iglesia sinodal los sujetos de la sinodalidad a la luz de la eclesiologiacutea del Vaticano IIThe Synod of Bishops at the service of a synodal Church synodality subjects in the light of the ecclesiology of Vatican II Council 7

Juan Manuel CabieDas teJero El hombre es sujeto y persona La relacioacuten entre trascendentalidad y antropologiacutea en Karl RahnerMan is subject and person Karl Rahner on relationship between transcendentality and anthropology 59

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez La definicioacuten de Calcedonia a traveacutes de sus inteacuterpretes contemporaacuteneosThe Chalcedon definition on the point of view of recent scholars 121

ViCente CaacuterCel ortiacute El Colegio Espantildeol de Roma centro de proacutefugos durante la Guerra civil espantildeolaThe Spanish College of Rome refugees center during the Civil war 143

LA VIDA EN EL COLEGIO

Datos estadiacutesticos del curso 2015-2016 195Acontecimientos maacutes destacados 197Tesis y tesinas 201

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Mater Clementissima 1 (2016) 5-6

PRESENTACIOacuteN

La revista Mater Clementissima vio la luz por primera vez en enero de 1913 como Boletiacuten de la laquoAsociacioacuten de Nuestra Sentildeora de la Clemen-ciaraquo que habiacutea sido creada y bendecida por el papa san Piacuteo X el diacutea de san Joseacute del antildeo 1912 como asociacioacuten de alumnos y antiguos alumnos del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma

En su primer nuacutemero de enero de 1913 indica el editorial que aparece laquosin otras pretensiones que las de poder servir de nuevo viacutenculo para es-trechar maacutes la unioacuten fraternal que debe ser cada diacutea maacutes iacutentima entre los antiguos alumnos del Colegio Espantildeol bajo los auspicios de la Santiacutesima Virgen de la Clemencia que tantos favores les dispensoacute desde los antildeos que vivieron en Romaraquo (p 4)

A partir de entonces se convierte en el instrumento de comunicacioacuten de la vida interna del Colegio actividades religiosas culturales y festivas visitas resultados acadeacutemicos de los alumnos y de las noticias que llegan de los antiguos alumnos nombramientos publicaciones y apostolados

La Revista no se publicaraacute entre los antildeos 1936 y 1938 por la situacioacuten que se vivioacute con motivo de la Guerra civil espantildeola Aparece de nuevo en 1939 incluyendo la lista de los superiores y alumnos martirizados durante la persecucioacuten religiosa de esos antildeos

Con motivo de la Beatificacioacuten del Fundador (1987) y de la celebra-cioacuten del primer Centenario del Colegio (1992) se publicaron nuacutemeros extraordinarios

A partir del curso 1994-1995 a la Croacutenica del Colegio se comienzan a antildeadir los textos de las conferencias y homiliacuteas pronunciadas en el centro en fechas sentildealadas asiacute como una amplia comunicacioacuten del contenido de las tesis defendidas durante el curso anterior y los tiacutetulos de los trabajos de licenciatura Con ello se intentaba conseguir que la Revista fuera ins-trumento de caraacutecter maacutes acadeacutemico sin dejar de ser cauce de comunica-cioacuten entre los colegiales pasados y presentes

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presentaCioacuten

Con este nuacutemero de 2016 y tras varios antildeos de edicioacuten solo en for-mato digital la revista Mater Clementissima vuelve a la edicioacuten impresa e inaugura una nueva etapa ahora ademaacutes de Ciencias eclesiaacutesticas El cambio introducido en el tiacutetulo sugiere la orientacioacuten de la publicacioacuten que tendraacute caraacutecter anual y que sin dejar de ser oacutergano de comunicacioacuten entre los colegiales priorizaraacute la difusioacuten de estudios especializados rela-cionados con las Ciencias eclesiaacutesticas

Cuando el 1 de abril de 1892 el Beato Manuel Domingo y Sol fundoacute el Colegio deseaba una verdadera laquorenovacioacuten cientiacutefica y aun disciplinar del clero espantildeolraquo Este curso el Colegio cumpliraacute 125 antildeos desde su fundacioacuten y podemos decir sin temor a equivocarnos que ha cumplido con creces las expectativas del Fundador pues de eacutel han salido ilustres pensadores profesores literatos e investigadores que formando parte de la gran familia del Colegio Espantildeol de San Joseacute han contribuido de ma-nera decisiva en dicha renovacioacuten La revista Mater Clementissima es un foro abierto pensado para ellos un lugar para la difusioacuten del conocimiento y para el debate acadeacutemico

Esperamos que esta iniciativa tenga buena acogida entre los estudiosos y pueda con la ayuda de todos mantenerse en el tiempo con un buen nivel de reflexioacuten El desafiacuteo de seleccionar artiacuteculos mediante el procedimien-to de doble ciego supone la colaboracioacuten de los consultores cientiacuteficos (a quienes desde aquiacute agradecemos su generoso ofrecimiento a colaborar con la Revista) para analizar las propuestas y cuando corresponde pro-poner ajustes a los autores Por parte de los autores se requiere la dispo-sicioacuten para considerar las sugerencias que en definitiva mejoraraacuten su trabajo En otras palabras se trata de establecer un diaacutelogo acadeacutemico que tiene como uacutenica finalidad enriquecer el contenido de lo que se publica

A partir de ahora los lectores seraacuten quienes tengan la palabra sobre el contenido de la Revista y les agradeceremos sus comentarios y sugeren-cias para asegurar la calidad de este proyecto

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Mater Clementissima 1 (2016) 7-57

El Siacutenodo de los obispos al servicio de una Iglesia sinodal los sujetos de la sinodalidad a la luz de la

eclesiologiacutea del Vaticano II

Dario Vitali1

Pontificia Universidad Gregoriana de Roma

resuMen El 17 de octubre de 2015 concluyendo las celebraciones del 50 aniversa-rio del Siacutenodo de los obispos el Papa Francisco pronuncioacute un discurso de amplio alcance sobre laquoLa Iglesia constitutivamente sinodalraquo A partir de ese discurso este documento propone una amplia y articulada discusioacuten sobre la naturaleza y sujetos de la colegialidad Despueacutes de una primera parte (auditus fidei) que busca en el Concilio Vaticano II las bases de la sinodalidad la segunda parte (intellectus fidei) proporciona los criterios para comprender por queacute la sinodalidad es laquouna dimensioacuten constitutiva de la Iglesiaraquo La naturaleza constitutivamente sinodal de la Iglesia se estudia partiendo de las relaciones que se establecen entre los sujetos de la sinoda-lidad ilustrando las condiciones que hacen posible el ejercicio de la sinodalidad en la Iglesia en los diferentes momentos del proceso sinodal En esta perspectiva se pone en evidencia coacutemo la sinodalidad la colegialidad y el primado son teacuterminos conjuntados armoacutenicamente en el horizonte de una concepcioacuten sinodal de la Iglesia

palabras ClaVe Iglesia sinodalidad colegialidad Primado Sensus fidei

abstraCt laquoThe Synod of Bishops at the service of a synodal Church synodality sub-jects in the light of the ecclesiology of Vatican II Councilraquo On October 17 2015 concluding the 50th anniversary of the Synod of Bishops Pope Francis gave a comprehensive speech on laquoSynodal constitutively Churchraquo From that speech this document proposes a wide and articulated discussion of the nature and subject of synodality After a first part (auditus fidei) looking at Vatican II synodality bases the second part (intellectus fidei) provides the criteria to understand why synodality is laquoa constitutive dimension of the Churchraquo The synodal constitutively nature of

1 El profesor Dario Vitali Director del departamento de Teologiacutea Dogmaacutetica de la Uni-versidad Pontificia Gregoriana es tambieacuten el asesor acadeacutemico del Pontificio Colegio Espa-ntildeol de San Joseacute

Dario Vitali

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the Church is studied based on the relationships established between the subjects of synodality illustrating the conditions that make possible the exercise of synodality in the Church at different times of the synodal process In this perspective it becomes evident how synodality collegiality and primacy are terms harmonically connected on the horizon of a synodal conception of the Church

KeyworDs Church Synodality Collegiality Primacy Sensus fidei

El objetivo del presente estudio es indagar laquolos sujetos de la sinodali-dad a la luz de la eclesiologiacutea del Vaticano IIraquo Si se interpretase literal-mente el tiacutetulo se podriacutea considerar la cuestioacuten como no resuelta el Con-cilio Vaticano II no trata ex professo la sinodalidad Las 140 menciones de laquosiacutenodoraquo se refieren siempre al Concilio sin querer nunca entender la sinodalidad como elemento caracterizador de la Iglesia2 La atencioacuten de los Padres Conciliares se dirigiacutea hacia otra cuestioacuten en concreto al tema de la colegialidad y la sinodalidad como proceso relativo al entero Pue-blo de Dios ademaacutes de no formar parte de su horizonte de intereses era desconocida en gran medida La cuestioacuten no debe sorprender demasiado un milenio de ejercicio de autoridad jeraacuterquica inspirado en el modelo de la monarquiacutea y asegurando las prerrogativas papales que culmina con el Concilio Vaticano I habiacutea cancelado el principio de la sinodalidad en la vivencia eclesial y habiacutea oscurecido la conciencia sobre la naturaleza sinodal de la Iglesia

Por otra parte es cierto que la cuestioacuten de la sinodalidad no podiacutea emerger en la Iglesia Catoacutelica si antes no se hubiera resuelto la cuestioacuten de la relacioacuten entre Papa y Colegio que ya surgioacute en el Concilio Vaticano I y que fue expliacutecitamente introducida como tema en el capiacutetulo III de la Lumen gentium Se trata de retomar las cuestiones a nivel de historia y de hermeneacuteutica de los textos conciliares tratando de ver sobre la base y en el respeto de estos una comprensioacuten original de la sinodalidad en-tendida sobre todo como dimensioacuten constitutiva de la Iglesia en la que la celebracioacuten de la asamblea del Siacutenodo de los obispos sea la imagen (logo) ejemplar de un camino sinodal de la Iglesia y en la que todos cada uno seguacuten su propia condicioacuten sean protagonistas

2 Cfr X OCHOA Index verborum cum documentis Concilii Vaticani Secundi Roma 1967 484-485

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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Este escrito se articularaacute en dos partes La primera de caraacutecter maacutes hermeneacuteutico se centraraacute en localizar los teacuterminos de la cuestioacuten en el Concilio Vaticano II es este el momento del audius fidei La segunda de caraacutecter maacutes sistemaacutetico deduciraacute de los teacuterminos precedentemente ex-puestos el perfil de una laquoIglesia constitutivamente sinodalraquo3 articulando a continuacioacuten los elementos de la sinodalidad con el cuadro eclesioloacutegi-co que emergioacute del Concilio Vaticano II este es el momento del intellec-tus fidei Entre liacuteneas se podraacute leer a traveacutes de su desarrollo el escenario dibujado por el Papa Francisco en el discurso pronunciado con ocasioacuten del quincuageacutesimo aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo

1 Auditus fidei

El accidentado recorrido del capiacutetulo III de la Lumen gentium mues-tra lo fatigoso que resulta volver atraacutes sobre todo si estaacuten en juego no los errores a combatir o a corregir sino diferentes visiones de Iglesia Y la visioacuten de Iglesia que llega al Vaticano II es la que ha madurado a lo largo de todo un milenio a partir de la reforma gregoriana y a traveacutes de procesos cada vez maacutes subrayados que van a estructurar en teacutermi-nos profundamente radicalizados el modelo piramidal de Iglesia No es necesario recorrer aquiacute la historia del segundo milenio Pero siacute es perti-nente recordar algunos elementos que han sentildealado la autocomprensioacuten de la Iglesia

11 El punto de partida la reforma gregoriana

En primer lugar estaacute el cisma de Oriente que lleva a la Iglesia a una fractura tan profunda como dolorosa en un frente Bizancio custodio ce-loso de una estructura sinodal de la Iglesia apoyada en la continuacioacuten de las instituciones del primer milenio cristiano que continuacutea con la repeti-cioacuten de su modelo eclesioloacutegico transferido tambieacuten a la tercera Roma en el otro la Ecclesia romana que despueacutes de haber guiado la transicioacuten del Imperio romano al Sacro Imperio Romano se encuentra ahora en una posicioacuten privilegiada en la construccioacuten de una Europa fundada sobre la base de la identidad cristiana

3 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos (17-X-2015)

Dario Vitali

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Constituiriacutea un error sin embargo pensar en un primado paciacuteficamente reconocido y aceptado tanto desde el aacutembito civil como desde el eclesial Las Iglesias locales aun no reivindicando la autocefalia como en Oriente ciertamente se moviacutean con mucha autonomiacutea respecto a un centro fuer-temente debilitado por las intrigas de las familias romanas en lucha por acaparar el solio pontificio Por otro lado en la organizacioacuten de la Iglesia perduraba auacuten la estructura del primer milenio con dioacutecesis sedes metro-politanas y regiones eclesiaacutesticas donde la autoridad papal veniacutea modula-da a escala de los tiacutetulos papales obispo de Roma metropolita del Lacio primado de Italia patriarca de Occidente Maacutes allaacute de la retoacuterica sobre la funcioacuten universal del Papa su influencia efectiva ndashcomo demuestra el cuadro de participantes en los siacutenodos romanosndash se limitaba de facto a las sedes inmediatamente sometidas a la Ecclesia romana

La situacioacuten cambioacute radicalmente con la reforma gregoriana que in-cidioacute en el cuadro institucional de la Iglesia La lucha por moralizar al clero llevoacute al Papado a la confrontacioacuten frontal con el emperador clave y fundamento de aquel sistema de la Iglesia imperial ndashla Reichskirchendash que subordinando el nombramiento de los obispos al placet del rey termina-ba por vincular la jerarquiacutea eclesiaacutestica a la loacutegica del poder laico Seraacute Hildebrando de Soana recieacuten elegido al trono papal como Gregorio VII quien advierta como interferencia inaceptable el sistema de investiduras laicas4 un nudo a cercenar maacutes que a deshacer para garantizar la Libertas Ecclesiae

La victoria del Papado reformador llevaraacute al sucesor de Pedro al veacutertice de la respublica christiana al lugar del emperador que tambieacuten en occi-dente era considerado la cabeza de la cristiandad y que interveniacutea directa-mente en la vida de la Iglesia seguacuten los caacutenones del cesaropapismo

Este hecho tendraacute repercusioacuten sobre la estructura interna de la Iglesia para desarraigar la mezcolanza entre Iglesia y Reino entre los obispos electores y el emperador no bastaba con excomulgar a este uacuteltimo era necesario sustraer a los obispos de la esfera del poder imperial y vincular-

4 Antes de Gregorio VII la accioacuten de los reformadores se centroacute maacutes en luchar contra la simoniacutea para combatirla Pier Damiani ciertamente el reformador maacutes representativo anterior a la eleccioacuten de Gregorio VII no dudoacute en solicitar la intervencioacuten del emperador incluso contra el Papa como demuestra el caso de Gregorio VI El cambio de acento hacia una comprensioacuten maacutes laquopoliacuteticaraquo del problema concentrada en la lucha por las investiduras se impone con la eleccioacuten de Hildebrando de Soana Me permito hacer alusioacuten a una contribucioacuten miacutea D VI-TALI La Chiesa da riformare lrsquoecclesiologia damianea in M TAGLIAFERRI (dir) Pier Damiani Lrsquoeremita il teologo il riformatore (1007-2007) Bologna 2009 197-232

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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les maacutes estrechamente a Roma Encuentra justificacioacuten aquiacute el Dictatus Papae en el cual Gregorio VII afirma que laquoel Papa puede destituir o resta-blecer a los obisposraquo5 y lo puede hacer sin tener que pasar necesariamente por un siacutenodo6 La victoria sobre el imperio iraacute modificando los equili-brios internos de la Iglesia desencadenando un proceso de concentracioacuten de todo poder en las manos del Papa Por esta viacutea se reafirma la idea de que el Obispo de Roma sea cabeza no solo de una Iglesia de antigua fundacioacuten que desempentildea un servicio para la unidad de las Iglesias sino de la Iglesia Universal misma Como fundamento de tal pretensioacuten los teoacutelogos de la reforma desarrollan la tesis de una fundacioacuten divina de la Iglesia de Roma como prueba de superioridad sobre otras Iglesias que solo pueden preciarse de una fundacioacuten apostoacutelica laquoTuacute eres Pedro y sobre esta piedra edificareacute mi Iglesiaraquo (Mt 1618)7

Si el primado sostenido por Gregorio VII ndashquien continuoacute convocan-do los siacutenodos de otontildeo y de cuaresma una demostracioacuten de coacutemo la estructura sinodal estaba profundamente radicada tambieacuten en Romandash fue maacutes ideal que real sin embargo el Dictatus Papae pone las bases para el paso a un poder personal del Papa Este se revelaraacute acabado con Inocen-cio III no por casualidad el primero que recurrioacute establemente al tiacutetulo de vicarius Christi utilizando la tiara siacutembolo de la plenitudo potestatis que laquoreuniacutea tanto los aspectos sacerdotales como los imperiales de su funcioacutenraquo8 Se pueden hallar aquiacute in nuce todos los elementos que es-tructuraraacuten el modelo piramidal de Iglesia el cual encuentra su punto de llegada en el Vaticano I

El paso de la sedes a la sedens de la Iglesia de Roma a su obispo ya proyectado hacia un poder universal de jurisdiccioacuten no se refleja uacuteni-camente en la relacioacuten entre el Papa y los obispos reducidos a funciona-rios del Papa pastor de toda la Iglesia Tambieacuten el pueblo de Dios queda privado de cualquier capacidad activa los presagios de la infalibilidad pasiva de los fieles afirmados despueacutes del Vaticano I ya se encuentran

5 Sentencia n 3 laquoQuod ille solus possit deponere episcopos vel reconciliare Solo eacutel [el Romano Pontiacutefice] puede destituir o readmitir a los obisposraquo

6 Sentencia n 25 laquoQuod absque synodali conventu possit episcopos deponere et recon-ciliare Eacutel puede al margen de una asamblea sinodal destituir o readmitir a los obisposraquo

7 Para la argumentacioacuten cfr PIER DAMIANI Carta 58 ai Cardinali Vescovi in Opere di Pier Damiani I3 cartas (41-67) Roma 2002 110-121

8 A PARAVICINI BAGLIANI Tiara in Diccionario Enciclopeacutedico del Medioevo Ro-ma 1999 1913

Dario Vitali

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en el paso de la Iglesia como comunioacuten de Iglesias del primer milenio a la Iglesia universal del segundo milenio No se trata igual que para los obispos de un efecto deseado sino de una consecuencia de la nueva con-figuracioacuten de la Iglesia en la cual la universitas fidelium se reduce de he-cho a una masa confusa Por maacutes que se continuacutee repitiendo el proverbio de que la totalidad de los bautizados in credendo deficere non potest 9 se inicia en este tiempo el proceso que llevaraacute a traveacutes de un recorrido mar-cado por contrastes y oscilaciones a afirmar en el Concilio Vaticano I la infalibilidad del Papa cuando habla ex cathedra como laquopastor y doctor de todos los cristianosraquo10

12 El punto de llegada El Concilio Vaticano I

El momento maacutes dramaacutetico de tal recorrido lo representa la llegada del conciliarismo frente al escaacutendalo de una Iglesia dividida en dos y posteriormente en tres obediencias la uacutenica autoridad en condiciones de preservar a la Iglesia del error pareciacutea el Concilio en cuanto repre-sentacioacuten tambieacuten visible de la universitas fidelium que precisamente no puede equivocarse en el creer El Papa personifica tal infalibilidad o in-defectibilidad de la universitas fidelium como cabeza de la Iglesia con la condicioacuten de no desviarse de la fe de todos en cuyo caso decaeriacutea ipso facto de su funcioacuten tal como recitaba la teologiacutea del tiempo planteando la hipoacutetesis de la figura del Papa a fide devius o del Papa haereticus11 Como cabeza de la Iglesia eacutel es tambieacuten cabeza del Concilio por ser este en su composicioacuten articulada representacioacuten visible de la Iglesia12 con

9 Dice con conocimiento de causa Congar laquoSi hay una afirmacioacuten constante en los testi-gos de la Tradicioacuten es precisamente que judicium Ecclesiae universalis errare in his quae ad fidem pertinent impossibile estraquo Y M CONGAR Infalibilidad e indefectibilidad Sobre el concepto de laquoinfalibilidadraquo in iquestInfalible Rahner-Congar-Sartori-Ratzinger-Schnackenburg y otros especialistas contra Hans Kuumlng Roma 1971 90

10 CONCILIO VATICANO I Constitucioacuten dogmaacutetica Pastor Aeternus capiacutetulo IV laquoEl magisterio infalible del romano Pontiacuteficeraquo in DZ 3065-3075

11 Baste como ejemplo la querella sobre la pobreza que enfrentoacute a Juan XXII con los franciscanos a raiacutez de la publicacioacuten del laquoDiaacutelogo contra el Papa hereacuteticoraquo de Guillermo de Ockham antes de la muerte del Papa (1334) Para comprender el origen y desarrollo de la doc-trina sobre la infalibilidad cfr B TIERNEY Origins of Papal infallibility 1150-1350 A study of the concepts of infallibility sovereignty and tradition in the Middle Ages Leiden 1972

12 Se entiende en este sentido la participacioacuten en el Concilio con voz activa de los teoacutelogos (las universidades) y de los representantes de las naciones con la idea de una representacioacuten completa de la cristiandad Solo a partir del Concilio de Trento se volveraacute a reservar el derecho al voto uacutenicamente a los obispos abades y superiores generales de las distintas oacuterdenes

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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la tarea de fijar la fe en decretos doctrinales y disciplinares que le corres-ponde al Papa promulgar13

El punto de desacuerdo entre los dos frentes se encuentra en quieacuten tiene la funcioacuten de laquopersonificarraquo a la totalidad de los fieles infalible en el creer si el Concilio o el Papa Ambos tienen motivos para sostener la propia posicioacuten porque maacutes allaacute de las razones de la colisioacuten estaba claro que la infalibilidad reivindicada por el Papa o por el Concilio es siempre la de la Iglesia No es casual que la deriva conciliarista se torne irreversi-ble en el momento en el que llega a declarar que el Concilio es infalible por siacute mismo con independencia de la fe de la Iglesia

En esta situacioacuten de impass se abre camino la idea de laquoun viacutenculo re-ciacuteproco entre el Papa y la Iglesiaraquo14 en razoacuten del cual laquola decisioacuten uacuteltima en cuestiones de fe recae sobre el Papa y sin eacutel no es posible una decisioacuten infalibleraquo15 No obstante unos y otros opinan que no es la infalibilidad del Papa la que garantiza la de la Iglesia sino viceversa laquoel Papa goza de esa infalibilidad de la que el Divino Redentor ha querido dotar a la Iglesiaraquo16 Esto no implica que le venga delegada desde abajo puesto que el Papa expresa la fe de la Iglesia no sobre la base de un consenso sino en cuanto cabeza del cuerpo eclesial al que siempre estaacute conectado y unido vitalmente De aquiacute a excluir un error del Papa en cuanto induciriacutea a error a la Iglesia solo hay un paso17

El Vaticano I constituiraacute el punto de llegada de este agitado proceso uniendo al primado la plenitudo potestatis exige como condicioacuten de la

13 Cfr STh II-II q1 a1014 K SCHATZ Il primato del Papa La sua storia dalle origini ai nostri giorni Brescia

1996 17515 Ibid 17516 Schatz explica este paso mostrando la diferencia entre autores como Antonino di Fi-

renze para el cual laquoes infalible la Iglesia en su conjuntoraquo y por tanto el Papa participa de la infalibilidad de la Iglesia y Cayetano que ni siquiera un siglo maacutes tarde excluye el error del Papa para salvaguardar la fe de la Iglesia cfr K SCHATZ Il primato del Papa 175-176

17 Ninguno de los 15 capiacutetulos del esquema preveacute la cuestioacuten I) Ecclesiam esse corpus Christi mysticum II) Christianam religionem nonnisi in Ecclesia et per Ecclesiam a Chris-ti fundatam excoli posse III) Ecclesiam esse societatem veram perfectam spiritualem et supernaturalem IV) Ecclesiam esse societatem visibilem V) De visibili Ecclesiae unitate VI) Ecclesiam esse societatem ad salutem consequendam omnino necessariam VII) Extra Ecclesiam salvari neminem posse VIII) De Ecclesiae indefectibilitate IX) De Ecclesiae in-fallibilitate X) De Ecclesiae potestate XI) De Romani Pontificis primatu XII) De temporali Sanctae Sedis dominio XIII) De concodia inter Ecclesiam et societatem civilem XIV) De iure et usu potestatis civilis secundum Ecclesiae Catholicae doctrinam XV) De specialibus quibusdam Ecclesiae iuribus in relatione ad societatem civilem cfr Primum schema consti-tutionis de Ecclesia Christi laquoSupremi Pastorisraquo MANSI 51 539A-636A

Dario Vitali

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eficacia y perfeccioacuten de su gobierno la infalibilidad como propiedad que no vincula ni subordina al Papa al consenso de la Iglesia o del cuerpo episcopal Este paso no previsto inicialmente ndashcomo se deduce del sche-ma de Ecclesia Supremi pastoris18ndash surgioacute durante el debate conciliar como punto sin vuelta atraacutes si se queriacutea realmente garantizar la autoridad del Papa frente a cualquier ataque proveniente de fuera o de dentro de la Iglesia Pastor aeternus19 asociaba laquola suprema potestad de magisterioraquo definiendo solemnemente el dogma de la infalibilidad del Pontiacutefice cuan-do habla ex-cathedra

El Romano Pontiacutefice cuando habla ex cathedra esto es cuando en el ejer-cicio de su oficio de pastor y maestro de todos los cristianos en virtud de su suprema autoridad apostoacutelica define que una doctrina de fe o costumbres debe ser sostenida por toda la Iglesia posee por la asistencia divina que le fue prometida en el bienaventurado Pedro aquella infalibilidad de la que el divino Redentor quiso que gozara su Iglesia en la definicioacuten de la doctrina de fe y costumbres Por esto dichas definiciones del Romano Pontiacutefice son irreformables ex sese non autem ex consensu Ecclesiae20

En el debate en el aula sobre la infalibilidad pontificia no faltaron las menciones a las otras dos autoridades ndashla totalidad de los fieles y los Con-ciliosndash infalibles en la interpretacioacuten del depoacutesito revelado21 La minoriacutea aun admitiendo la posibilidad de definir el dogma insistiacutea en que dicha definicioacuten podiacutea comprometer los iura Episcoporum Se comprende en esta liacutenea la afirmacioacuten seguacuten la cual laquola potestad del Sumo Pontiacutefice no conlleva prejuicio alguno a la potestad de jurisdiccioacuten episcopal ordinaria

18 Cfr DZ 3053-3064 los capiacutetulos 1-3 de Pastor Aeternus corresponden a los capiacutetulos IX X y XI del laquoschema de Ecclesiaraquo

19 DZ 307420 Por otro lado hubiese sorprendido lo contrario puesto que los Padres habiacutean sido

formados en la controversia teoloacutegica que habiacutea establecido la doctrina sobre los loci theo-logici interpretativi Despueacutes de la Sagrada Escritura y la Tradicioacuten establecidos como loci theologici constitutivi Melchor Cano indicaba en secuencia la Ecclesia Catholica (esto es la totalidad de los fieles) los Concilia (es decir el corpus Episcoporum) y la Ecclesia Ro-mana (el Papa) como loci theologici interpretativi dotados de infalibilidad cfr MELCHOR CANO De locis theologicis libri duodecim Salamanca 1563 [edicioacuten latino-espantildeola] Ma-drid 2006

21 Para una visioacuten maacutes extensa sobre la cuestioacuten cfr G DEJAIFVE Primato e colle-gialitagrave nel Concilio Vaticano I in Y M CONGAR - B D DUPUY (eds) Lrsquoepiscopato e la Chiesa universale Roma 1965 795-821 H J POTTMEYER Recent Discussion on Prima-cy in relation to Vatican I in W KASPER (ed) Il ministero petrino Cattolici e Ortodossi in dialogo Roma 2004 227-247

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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e inmediata en virtud de la cual los obispos establecidos por el Espiacuteri-tu Santo (cfr Hch 2028) como sucesores de los apoacutestoles en cualidad de verdaderos pastores apacientan y gobiernan el rebantildeo que les ha sido confiadoraquo22 Hasta queacute punto eran fundados los temores de la minoriacutea re-sultoacute evidente en la poleacutemica desencadenada en Alemania por el Canciller Von Bismarck seguacuten el cual la definicioacuten del Vaticano I determinaba la peacuterdida de la jurisdiccioacuten episcopal totalmente absorbida por la papal23 Piacuteo IX24 ndashobligado o convencido es difiacutecil de decirndash confirmoacute la respues-ta de los obispos alemanes seguacuten los cuales laquoigual que el Papado es de institucioacuten divina asiacute mismo lo es tambieacuten el episcopado y tambieacuten eacuteste tiene sus derechos en virtud de tal institucioacuten que el Papa no tiene el de-recho ni el poder de cambiarraquo25

En relacioacuten con la totalidad de los fieles ndashla Ecclesia Catholica seguacuten los loci theologici de Melchor Cano26ndash fue en cambio el cardenal Guidi quien sostuvo en un discurso que impactoacute notablemente en el aula que el Papa define una verdad no laquoarbitrariamente y solo independientemente o al margen de la Iglesiaraquo27 sino sobre la base del sensus fidei de la Iglesia universal del que puede informarse o que puede conocer laquoescuchando la opinioacuten de los obispos que le manifiestan la tradicioacuten de sus Iglesiasraquo28 El hecho de depender de la fe de la Iglesia no subordina al Papa a actuar o pronunciarse bajo consenso de la fe de los fieles El ejercicio del magiste-rio pontificio queda siempre libre como habiacutea demostrado claramente el dogma de la Inmaculada Concepcioacuten definido pocos antildeos antes en virtud de aquella singularis Antistitum ac fidelium conspiratio29 manifestada por los obispos de todo el mundo como respuesta a la consulta lanzada por el mismo Piacuteo IX30

La intervencioacuten del cardenal Guidi consiguioacute que se incluyera en el texto un pasaje en el que se reconoce que en el ejercicio de su magisterio

22 DZ 306123 DH 3112 En este nuacutemero estaacuten recogidas y resumidas las propuestas de la circular de

Von Bismarck que distorsionan las afirmaciones del Vaticano I A estas responden los obispos punto por punto cfr DH 3113-3116

24 PIacuteO IX Carta apostoacutelica Mirabilis illa constantia (4-III-1875) DH 311725 DH 311526 MELCHOR CANO De loci theologici libri duodecim liber IV De Ecclesia Catholica27 MANSI 52 747C para el discurso completo cfr MANSI 52 740A-748A28 Ibid29 PIacuteO IX Bula Ineffabilis Deus (8-XII-1854) Pii IX Acta I1 597-61930 PIacuteO IX Enciacuteclica Ubi primum (2-II-1849) Pii IX Acta I1 162-166

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los Papas hacen uso y recurren a formas de cooperacioacuten laquoseguacuten lo exigi-do por las condiciones de los tiempos y las circunstancias ora convocan-do Concilios ecumeacutenicos ora intentando sondear la opinioacuten de la Iglesia esparcida por la tierra con siacutenodos particulares ora sirvieacutendose de otros medios que la Divina Providencia ponga a su disposicioacutenraquo31 A la consulta recurriraacute tambieacuten Piacuteo XII como medio para verificar la fe de la Iglesia respecto a la definicioacuten de la Asuncioacuten de Mariacutea32 de donde emerge tanto la fe del pueblo cristiano como la funcioacuten del episcopado como testigo y garante del sensus fidei de toda la Iglesia

13 Un nuevo punto de partida El Concilio Vaticano II

A causa de la suspensioacuten sine die del Vaticano I no se pudo concluir el debate relativo al schema constitutionis secundae de Ecclesia33 Mu-chas de las cuestiones contenidas en aquel texto entraron oportunamente revisadas en el schema de Ecclesia entregado a los Padres al final de la primera sesioacuten del Concilio Vaticano II Entre estas cuestiones sobresale la del episcopado incluido a lo largo de los capiacutetulos tercero y cuarto sobre la sacramentalidad del episcopado34 y el ministerio episcopal35

En el tercer capiacutetulo el schema toma distancia con respecto a la teo-logiacutea de la escuela que siguiendo la liacutenea del Concilio de Trento leiacutea el episcopado en clave de la potestas jurisdiccionis36 La discontinuidad se puede constatar en la afirmacioacuten de que laquoel episcopado pertenece sin duda al sacramento del Orden y es el sacerdocio en el grado maacuteximo (praecel-lenti) considerado por los Santos Padres y por la tradicioacuten lituacutergica como

31 DH 306932 Cfr PIacuteO XII Enciacuteclica Deiparae Virginis (1-V-1946) AAS 42 (1950) 782-783 la

definicioacuten dogmaacutetica se encuentra incluida en la constitucioacuten apostoacutelica Munificentissimus Deus (1-XI-1950) AAS 42 (1950) 767-770

33 Schema constitutionis secundae de Ecclesiae laquoTametsi Deusraquo MANSI 53 308A- 317A

34 Schema de Ecclesia Caput III laquoDe Episcopatu ut supremo gradu sacramenti ordinis et de sacerdotioraquo (nn 11-12) Acta Synodalia IIV 23-24

35 Schema de Ecclesia caput IV laquoDe Episcopis residentialibusraquo (nn 13-16) Acta Sy-nodalia IIV 27-34

36 La construccioacuten del discurso se asienta sobre la foacutermula binaria potestas ordinis-po-testas jurisdictionis en la frase de apertura en la que se declara que Cristo laquoha instituido en la Iglesia una auteacutentica potestad de magisterio y gobierno (docendi et gubernandi) que era por su naturaleza unida con un viacutenculo estrecho a la potestad de santificacioacuten otorgada con el sacramento del Ordenraquo Schema de Ecclesia n 11 laquoEpiscopatus ut sacramentumraquo Acta Synodalia IIV 23

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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el sumo sacerdocio el veacutertice del sagrado ministerioraquo37 Siempre haciendo mencioacuten a la tradicioacuten de Oriente y Occidente el schema reitera que laquoel episcopado es verdadera y propiamente el grado supremo del Ordenraquo des-de el momento en el que laquocon la imposicioacuten de las manos y las palabras de consagracioacuten viene conferida la gracia del Espiacuteritu Santoraquo38

El capiacutetulo cuarto desarrolla el tema de los obispos residenciales en cuatro paacuterrafos estrechamente relacionados partiendo de la funcioacuten y dig-nidad de los obispos (n 13) concluye con el Colegio de los obispos (n 16) pasando por distintas aclaraciones sobre su relacioacuten con el Papa (n 14) y con la Iglesia universal (n 15) Toda la argumentacioacuten estaacute vinculada a Cristo mismo el cual ha puesto a los obispos a apacentar la Iglesia de Dios Sobre la base de tal presupuesto el schema afirma que laquolos distintos obis-pos como vicarios y mensajeros de Cristo dirigen como padres y pastores de su rebantildeo las Iglesias a ellos confiadas con potestad episcopal propia ordinaria e inmediata en unidad y bajo la autoridad del Romano Pontiacutefi-ceraquo39 para posteriormente ilustrar con detalle el ministerio de los obispos al servicio de su propia Iglesia

A continuacioacuten el schema explica la relacioacuten entre el primado y el episcopado utilizando la distincioacuten entre potestas ordinis y jurisdictio-nis laquola ordenacioacuten confiere ademaacutes de su funcioacuten santificadora tambieacuten aquella de magisterio y de gobierno que los obispos reciben del gobierno supre mo de la Iglesiaraquo teniendo el Papa laquola preeminencia [principatum] sobre otras potestades ordinarias y una potestad de jurisdiccioacuten inmedia-ta y episcopal en todas y cada una de las Iglesias como tambieacuten sobre todos y cada uno de los obispos de los fieles y pastoresraquo40 El paacuterrafo que se presenta a continuacioacuten ilustra la relacioacuten de cada uno de los obispos con la Iglesia universal un paacuterrafo particularmente elaborado y mejor ar-ticulado de lo que se aproboacute en aula

Dado que todos y cada uno de los obispos son centro y fundamento y prin-cipio de unidad en sus Iglesias particulares desde el momento que y a partir de las cuales formadas a imagen y semejanza de la Iglesia universal existe

37 Ibid38 Ibid39 Schema de Ecclesia n 13 laquoEpiscoporum munus et dignitasraquo Acta Synodalia IIV

25 Ibidem Afirmando la sacramentalidad del episcopado se modifica la relacioacuten con los pres-biacuteteros el n 12 afirma la superioridad de los obispos sobre los presbiacuteteros sosteniendo que estos aun sin tener o estar en el veacutertice del sacerdocio actuacutean sin embargo in persona Christi

40 Schema de Ecclesia n 14 laquoPrimatus et Episcopatusraquo Acta Synodalia IIV 26

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una y uacutenica Iglesia Catoacutelica cuyo centro y fundamento y principio de unidad es el sucesor de Pedro como vicario de Cristo mismo subyace que cada uno representa la propia Iglesia y todos junto con el Papa representan a la Iglesia toda [Ecclesia tota] en el viacutenculo de la paz y del amor 41

El capiacutetulo concluye con un paacuterrafo sobre el Colegio de obispos que constituye el punto de llegada de toda la argumentacioacuten Este Colegio que sucede al Colegio de los Apoacutestoles en el magisterio y en el gobierno pastoral maacutes auacuten en el cual permanece continuamente el Colegio de los Apoacutestoles y por medio del cual se hace manifiesta continuamente la misioacuten de Cristo mismo y su doctrina y sus leyes ha de considerarse sujeto con plena y suprema potestad sobre toda la Iglesia siempre en unidad con su cabeza [una cum capite suo] el Romano Pontiacutefice y nunca sin esta cabeza Sin embargo la potestad de dicho Colegio si bien ordinaria en cuanto a lo relativo al oficio solo puede ser legiacutetimamente ejercitada en modo ex-traordinario con la debida subordinacioacuten al vicario de Cristo en la tierra como y cuando eacutel lo quiera conceder En cuanto a la constitucioacuten de este sacro Colegio son miembros de derecho todos los obispos residenciales que esteacuten en paz con la Sede apostoacutelica y ninguacuten obispo residencial o no puede pertenecer a tal Colegio si no ha sido introducido en eacutel por el sucesor de Cristo vicario de Cristo y cabeza del Colegio o directamente o por taacutecito consenso42

El desarrollo del tema en el capiacutetulo es lineal y ciertamente maacutes claro que el textus prior los dos capiacutetulos relativos al episcopado han sido ampliamente revisados y refundidos en un solo capiacutetulo presentando co-rrecciones al texto que no siempre lo mejoran El schema entregado a los Padres al inicio del segundo periodo conciliar se reduce de hecho a cuatro

41 Schema de Ecclesia n 15 laquoRelatio Episcoporum ad totam Ecclesiamraquo Acta Syno-dalia IIV 26-27 El texto definitivo corrige parcialmente el textus prior que altera insoacute-litamente el schema de Ecclesia De este modo rezaba el textus prior laquoAsiacute como [sicut] el Romano Pontiacutefice como sucesor de Pedro es principio y fundamento visible de la unidad sea de los obispos como de la multitud [de los bautizados] asiacute [ita] cada obispo es principio y centro de la unidad en sus respectivas Iglesias particulares edificadas a imagen de la Iglesia universal en las cuales y a partir de las cuales existe una y uacutenica Iglesia catoacutelica Por lo cual [Qua de causa] cada uno de los obispos representa a su propia Iglesia y contemporaacutenea-mente todos con el Papa a la Iglesia entera [Ecclesia tota] en el viacutenculo de la pazraquo cfr Acta Synodalia III 236 Desapareciendo la estrecha comparacioacuten ndashita-utndash por una indicacioacuten de Pablo VI el texto definitivo resultaba construido sobre la yuxtaposicioacuten entre la funcioacuten del Papa en relacioacuten con la Iglesia Universal y la funcioacuten de los obispos en sus Iglesias Para un comentario maacutes extenso cfr D VITALI Verso la sinodalitagrave 27-34

42 Schema de Ecclesia n 16 laquoCollegium Episcoporumraquo Acta-Synodalia IIV 27

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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capiacutetulos solamente43 el segundo de los cuales se centra en la constitu-cioacuten jeraacuterquica de la Iglesia y particularmente del episcopado44 El hecho de unir dos capiacutetulos de contenido diverso produce un giro o cambio de perspectiva ndashy de loacutegicandash en la comprensioacuten del episcopado

Mientras el punto de partida del schema de Ecclesia era el ministerio episcopal sobre la base del cual se deduciacutea la sacramentalidad del epis-copado en el schema prior todo esto pasa a la cuarta seccioacuten en la que se desarrollan con detalle los tria munera de los obispos La eleccioacuten en el orden de redaccioacuten determina que el tema del Colegio aparezca ex abrup-to detraacutes del paacuterrafo relativo a los presbiacuteteros y los diaacuteconos laquoComo en el Evangelio por voluntad del Sentildeor Pedro y los apoacutestoles constituyen un solo Colegio apostoacutelico de la misma manera el sucesor de Pedro el Ro-mano Pontiacutefice y los obispos sucesores de los apoacutestoles son constituidos en unidad [inter se coniunguntur]raquo45 Privada de la referencia que la remite directamente a la funcioacuten episcopal el tema de la colegialidad se convier-te en una prolongacioacuten de la primera seccioacuten del capiacutetulo centrada en la sucesioacuten apostoacutelica Por esta razoacuten el textus emendatus con maacutes loacutegica desplazaraacute el paacuterrafo sobre los presbiacuteteros y diaacuteconos al final del capiacutetulo ofreciendo un desarrollo consecuente de la materia unida y vuelta a co-nectar directamente de este modo a la doctrina sobre la sacramentalidad del episcopado Se entiende desde esta perspectiva que el texto insista sobre el laquocaraacutecter y la naturaleza colegial del orden episcopalraquo46

43 Pars I Introductio (n 1) caput I De Ecclesiae mysterio (nn 2-10) caput II De constitutione hierarchica Ecclesiae et in specie de episcopatu (nn 11-21) Pars II caput III De Populo Dei et speciatim de laicis (nn 22-27) caput IV De vocatione ad sanctitatem in Ecclesia (nn 28-36) cfr Acta Synodalia III 215-281 La Comisioacuten teoloacutegica examinoacute to-das las animadversiones scriptae relativas a la primera parte del schema de Ecclesia dejando aquellas relacionadas con la segunda parte

44 El capiacutetulo I se articula en 11 paraacutegrafos (nn 11-21) que recogen y ampliacutean los capiacutetulos II y IV del schema precedente La relatio divide el capiacutetulo en dos partes y cuatro secciones En la primera parte (nn11-15) la primera seccioacuten (nn 11-12) funda la doctrina del episcopado en la sucesioacuten apostoacutelica la segunda (nn13-15) trata ex professo la sacra-mentalidad del episcopado En la segunda parte del capiacutetulo laquola tercera seccioacuten (nn 16-17) expone la doctrina del cuerpo o Colegio de los obispos tratando sobre todo la relacioacuten con su cabeza el Romano Pontiacutefice y posteriormente la de los obispos entre siacute y con toda la Iglesiaraquo la cuarta (nn 18-21) describe el ministerio de los obispos ilustrando cada uno de los tria munera docendi santificandi regendi Acta Synodalia III 254

45 Acta Synodalia III 25546 Resulta de gran intereacutes el comentario a la tercera seccioacuten nn 16-17 laquo16 El orden de

los obispos constituye un cuerpo o Colegio particular [aliquod] en el que se aclara ante todo la relacioacuten con su cabeza relacioacuten que se corresponde con la prerrogativa de Pedro sobre el Colegio de los Apoacutestoles Esto es porque el Colegio sin su cabeza no es auteacutentico Aquel

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14 La colegialidad

Los doce paacuterrafos de LG 3 (nn 18-29) claramente diferenciados en dos partes desarrollan la dimensioacuten jeraacuterquica de la Iglesia desde la clave del ministerio episcopal Tras el preaacutembulo (n 18) la primera parte introduce la sacramentalidad del episcopado vinculaacutendola a la sucesioacuten apostoacutelica (nn 19-21) para aclarar despueacutes la cuestioacuten de la colegialidad (nn 22-23) especificando la relacioacuten del Colegio con la cabeza pero tambieacuten con los otros obispos en la loacutegica de la unio collegialis la segunda ofrece una perspectiva nueva del ministerio episcopal a traveacutes del esquema de los tria munera (nn 24-27) y concluye fijando a la luz de la nueva comprensioacuten del ordo episcopalis su relacioacuten con presbiacuteteros y diaacuteconos (nn 28-29)

La cuestioacuten de la colegialidad se desarrolla siguiendo respetuosamente el criterio expuesto en la introduccioacuten donde el Concilio desarrolla la doc-trina relativa a la laquoinstitucioacuten perpetuidad valor sagrado del primado del Romano Pontiacutefice y de su magisterio infalibleraquo en paralelo con la doctrina sobre los obispos como necesario complemento al Vaticano I

El santo siacutenodo [hellip] continuando con el mismo objetivo ha decidido profe-sar puacuteblicamente y explicitar la doctrina sobre los obispos sucesores de los apoacutestoles los cuales junto con el sucesor de Pedro que es vicario de Cristo y cabeza visible de toda la Iglesia gobiernan la casa de Dios viviente47

En otras palabras el texto parte del teacutermino ya doctrinalmente fijado ndashel primado del sucesor de Pedrondash para aclarar casi por contrapunto la doctrina sobre el episcopado El textus emendatus encontroacute oposicioacuten en la discusioacuten en el aula donde el Coetus internationalis patrum puso resis-tencia a ultranza a la doctrina de la colegialidad que poniacutea en cuestioacuten ndasha su parecerndash los principios establecidos en el Vaticano I48 No es cuestioacuten

cuerpo unido a su cabeza debe ser considerado como sujeto de suprema potestad en la Iglesia tal y como se manifiesta en el Evangelio El Espiacuteritu Santo refuerza continuamente la unioacuten y la colaboracioacuten entre primado y episcopado Tal potestad es ejercida de modo extraordinario en el Concilio ecumeacutenico se puede activar otras modalidades de ejercicio con los obispos en sus sedes pero soacutelo a condicioacuten del consentimiento del Sumo Pontiacutefice 17 Los obispos responsables de una Iglesia concreta son el principio de unidad de su rebantildeo y todos juntos con el Papa representan a toda la Iglesia [Ecclesia tota]raquo Acta Synodalia III 254

47 Acta Synodalia IIII 211-21248 No viene al caso aquiacute retomar todo el debate relativo al asunto de la Nota explicativa

praevia ampliamente ilustrado en los comentarios de la Lumen gentium y en textos de his-toria del Concilio Nos interesa sobre todo subrayar los elementos que ayuden a aclarar la cuestioacuten del sinodalidad

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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de retomar aquiacute tal discusioacuten en ocasiones dramaacutetica que empujoacute a Pa-blo VI a vincular la hermeneacuteutica de LG 3 a la Nota explicativa praevia El texto que salioacute del aula aun en la loacutegica del compromiso despueacutes de todo ofrece una doctrina clara que logra un buen equilibrio entre las pre-rrogativas del Papa fijadas en Pastor Aeternus y las del Colegio sobre todo si no se incurre en el error de circunscribir el tema de la colegialidad uacutenicamente a la relacioacuten del Colegio con su cabeza

Ciertamente el nuacutemero 22 ofrece el mayor nuacutemero de elementos uacutetiles para esclarecer la cuestioacuten de la colegialidad

ndashA la par de Pedro y los apoacutestoles el Papa sucesor de Pedro y los obispos sucesores de los apoacutestoles estaacuten conjuntamente reunidos entre ellos en un Colegio

ndashlaquoEl Colegio o cuerpo de los obisposraquo existe siempre con y nunca sin el Papa como su cabeza

ndashAdemaacutes del Papa tambieacuten el Colegio de los obispos es laquosujeto de plena y suprema potestad sobre toda la Iglesiaraquo sin que esto comprometa la potestad plena suprema y universal del sucesor de Pedro sobre toda la Iglesia y su libre ejercicio

ndashTal autoridad no puede ser ejercitada sin el consenso de la cabezandashEl Colegio estando compuesto por muchos expresa la variedad y

la universalidad del Pueblo de Dios en cuanto reunido bajo una uacutenica cabeza expresa la unidad del rebantildeo de Cristo

ndashEn el Colegio los obispos gozan de una potestad para el bien (in bo-num) de sus fieles y tambieacuten para el bien de toda la Iglesia

ndashlaquoLa suprema potestad que este Colegio posee sobre toda la Iglesia es ejercida de modo solemne en el Concilio ecumeacutenicoraquo que es prerrogativa del Papa convocar presidir y confirmar

ndashlaquoLa misma potestad colegial puede ser ejercida por los obispos es-parcidos por el mundo junto con el Papa siempre y cuando la cabeza del Colegio los llame a la accioacuten colegial o al menos apruebe o acepte libremente la accioacuten conjunta de los obispos dispersos de modo que se convierta en un verdadero acto colegialraquo

Las prerrogativas del Colegio sin embargo no se agotan en su rela-cioacuten con la cabeza sino que se desprenden tambieacuten de la relacioacuten de los obispos entre ellos ilustrado en el n 23 sobre la base del viacutenculo con las Iglesias a ellos confiadas de las cuales son laquoprincipio visible y fun-damento de unidadraquo y con la Iglesia universal que existe en y a partir

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de las Iglesias particulares [in quibus et ex quibus] Si es correcto leer el n 23 como continuacioacuten del tema del Colegio ndashtal y como da a entender el incipit del paacuterrafo que habla de laquounioacuten colegial [que] aparece tambieacuten en las mutuas relaciones de los obispos con las Iglesias particulares y con la Iglesia universalraquo49ndash entonces la afirmacioacuten de que laquocada uno de los obispos representa a su propia Iglesia y todos junto con el Papa represen-tan a la Iglesia entera en el viacutenculo de la paz del amor y de la unidadraquo no es geneacuterica sino que remite precisamente a la unioacuten colegial

En otras palabras en el Colegio cada uno de los obispos representa a su propia Iglesia Siempre a partir del Colegio como sujeto de autoridad sobre la Iglesia se incluye la labor de anunciar el Evangelio a todos los hombres que obliga a cada obispo a procurar operarios del Evangelio y las ayudas materiales y espirituales para la misioacuten En el cuadro de la laquoco-llegialis unioraquo se situacutean tambieacuten las Iglesias laquosui iurisraquo (en su grado maacutes alto las Iglesias patriarcales) que laquogozan de una disciplina y costumbre lituacutergicas propias y de un patrimonio teoloacutegico y espiritualraquo y las Confe-rencias episcopales que laquohoy pueden ofrecer una contribucioacuten muacuteltiple y fecunda para que el afecto colegial tenga aplicaciones concretasraquo

Como puede verse todo el tratamiento del tema parte del primado que es el teacutermino conocido a partir del cual se elabora la doctrina de la co-legialidad que es el teacutermino no conocido El texto pone en evidencia las cautelas con las que se elaboroacute el miedo a comprometer las prerrogativas del Papa indujo a continuas precisiones que nunca fueron suficientes para quienes consideraban la doctrina de la colegialidad como un ataque al primado Objetivamente no se podiacutea ir maacutes allaacute de cuanto se afirmoacute pero a pesar de todo se obtuvo un gran resultado

15 Una revolucioacuten copernicana El capiacutetulo sobre el Pueblo de Dios

No deja de sorprender la ausencia de referencias en el capiacutetulo 3 de la Lumen gentium al Pueblo de Dios50 y a su indefectibilidad en la fe Ni siquiera en LG 25 que ilustra ampliamente el munus docendi se hace la

49 Es cuanto sostengo en D VITALI Verso la sinodalitagrave 27-3445-5250 La uacutenica excepcioacuten estaacute en LG 18 que es un texto de enlace introducido despueacutes de la

redaccioacuten del cap 2 sobre el Pueblo de Dios laquoPara apacentar y ampliar cada vez maacutes el Pueblo de Dios Cristo Sentildeor ha instituido en su Iglesia varios ministerios que tienden al bien de todo el cuerpo Dotados de sagrada potestad los ministros estaacuten al servicio de sus hermanos para que todos los que forman parte del Pueblo de Dios y por tanto gozan de verdadera dignidad cristiana tiendan libremente y ordenadamente a lo mismo y alcancen la salvacioacutenraquo

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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miacutenima referencia a tal aspecto El motivo es evidente el silencio se debe sobre todo a la trayectoria de los trabajos en el aula que seguiacutean ndashobvia-mentendash la secuencia de los capiacutetulos del schema de Ecclesia Ahora en el texto entregado a los Padres al inicio del segundo periodo conciliar el capiacutetulo sobre la constitucioacuten jeraacuterquica de la Iglesia precede al que se refiere al Pueblo de Dios en particular a los laicos51 Es como decir que el horizonte sobre el que los Padres conciliares leen las cuestiones es todaviacutea el de la diferencia de funciones tiacutepico de la societas inaequalium en la que los fieles son sujetos subordinados y pasivos llamados como maacuteximo a la colaboracioacuten con la jerarquiacutea No es casualidad que el eacutenfasis de las intervenciones sobre el capiacutetulo 3 recaiga sobre el tema de los laicos que pareciacutea constituir en aquel momento del camino de la Iglesia el punto maacutes novedoso del capiacutetulo sobre todo si se pasaba de la idea de un apostolado de los laicos por concesioacuten de la jerarquiacutea a la de la participacioacuten en la misioacuten misma de la Iglesia en virtud del bautismo52

Al pie del tiacutetulo del capiacutetulo en las Acta Synodalia aparece la ano-tacioacuten de que laquola Comisioacuten de coordinacioacuten de los trabajos conciliares desde hace no mucho tiempo [nuper] ha considerado necesario que el capiacutetulo se dividiese en dos partes de las cuales la primera tratariacutea de populo Dei in genere y configurando el capiacutetulo II del esquema de la constitucioacuten mientras la otra parte se refeririacutea a de laicis in specie cons-tituyendo el cuarto capiacutetuloraquo53 La comisioacuten haciacutea propia la propuesta que hizo el cardenal Suenens54 pidiendo expliacutecitamente que se modificase el orden de los capiacutetulos puesto que muchos temas propuestos en el capiacutetu-

51 Las intervenciones sobre el capiacutetulo II (cfr Acta Synodalia IIII) se extienden a lo largo de nueve congregaciones generales de la 42ordf a la 49ordf del 4 al 16 de octubre de 1963 (aunque la congregacioacuten 43ordf fue dedicada completamente a la revisioacuten del esquema sobre la liturgia) mientras las relativas al capiacutetulo III (cfr Acta Synodalia IIIII) se desarrollan en las congregaciones 50ordf-56ordf del 16 al 25 de octubre

52 No se subrayaraacute nunca suficientemente la incidencia del ensayo de Y CONGAR Jalons pour un theacuteologie du laiumlcat Paris 1954 no soacutelo por el paso de una loacutegica de colabo-racioacuten subordinada de los laicos en la misioacuten de la Iglesia por concesioacuten de la jerarquiacutea a la participacioacuten nativa en virtud del bautismo sino tambieacuten por la clasificacioacuten de la misioacuten de los laicos seguacuten las tres funciones ndashsacerdotal real y profeacuteticandash que seraacuten retomadas amplia-mente en los textos conciliares

53 Acta Synodalia III 25654 La solicitud fue entregada a los Padres el 9 de octubre de 1963 en la 44ordf congrega-

cioacuten general con el debate ya iniciado cfr Acta Synodalia III 324-329 Conviene recordar que la revisioacuten del esquema con la nueva numeracioacuten de los capiacutetulos y la distribucioacuten de la materia tuvo lugar durante la segunda intersesioacuten y que los Padres recibieron en mano el textus emendatus al principio del tercer periodo conciliar

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lo III del schema concerniacutean a todos los bautizados y no solamente a los laicos De ese capiacutetulo fue extrapolado solo el n 24 sobre el sacerdocio universal debidamente enriquecido y articulado en tres paacuterrafos (los ac-tuales nn 10-12)55

Pero esta correccioacuten de perspectiva produjo un cambio impensable en la comprensioacuten de la Iglesia radicada desde haciacutea siglos en el esquema de la societas inaequalium que habiacutea llevado a distinguir en la Iglesia dos cuerpos distintos y en alguacuten modo incluso contrapuestos la Ecclesia do-cens depositaria de todas las funciones y el poder y la Ecclesia discens los fieles puestos en la condicioacuten subordinada de suacutebditos sin ninguna capacidad activa Maacutes que en ideas alternativas la asiacute llamada laquorevolu-cioacuten copernicanaraquo del Concilio consiste en este ajuste de redaccioacuten que rompe la loacutegica del modelo piramidal fundada sobre la diferencia de funciones y de estados de vida para afirmar la radical igualdad de todos los miembros de la Iglesia en virtud de la comuacuten dignidad bautismal Las afirmaciones al fin y al cabo son las mismas y sin embargo su diversa colocacioacuten les confiere un peso diferente

En la secuencia precedente de los capiacutetulos se podiacutean afirmar todas las verdades maacutes hermosas sobre el Pueblo de Dios se podiacutea hablar de la participacioacuten en la misioacuten de la Iglesia por derecho nativo en virtud del bautismo se podiacutea introducir la referencia al sensus fidei y a los carismas de los fieles todo esto teniacutea una relevancia irrisoria por el solo hecho de estar situado despueacutes del capiacutetulo sobre la naturaleza jeraacuterquica de la Igle-sia Aunque sean importantes estos aspectos resultan siempre y de todos modos secundarios adicionales y por lo tanto no tienen la fuerza de incidir sobre un sistema consolidado desde haciacutea siglos sino a traveacutes de la contes-tacioacuten y el enfrentamiento

Por el contrario el hecho de situar los capiacutetulos sobre los estados de vida ndashjerarquiacutea laicos religiososndash detraacutes del relativo al Pueblo de Dios ha determinado una inversioacuten de perspectiva que ha puesto fin al menos sobre el papel al modelo piramidal de Iglesia y a la divisioacuten del cuer-

55 El capiacutetulo fue redactado extrapolando del capiacutetulo III del esquema el n 24 sobre el sacerdocio universal y el sacerdocio ministerial ampliado oportunamente y dividido en tres paacuterrafos ndashlos actuales nn 10-12ndash integrados por los nn 10-12 del capiacutetulo I sobre los crite-rios de pertenencia a la Iglesia ndashlos actuales nn 14-16ndash todo ello encuadrado por un paacuterrafo introductorio sobre el nuevo Pueblo de Dios (n 9) por otro de enlace relativo a la universa-lidad y unidad del Pueblo de Dios (n 13) y uno de cierre sobre la naturaleza misionera de la Iglesia (n 17)

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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po eclesial en dos partes Se evidencia enseguida de hecho la Iglesia como totalidad de los bautizados todos situados sobre un plano de total igualdad en virtud de la comuacuten regeneracioacuten en Cristo De este modo el Pueblo de Dios viene antes que la jerarquiacutea la vida teologal antes que los roles y las funciones la comuacuten dignidad antes de cualquier diferencia en el cuerpo eclesial El ser viene antes que el hacer la gracia antes que las obras los proyectos y los planes pastorales Finalmente el ser hijos de Dios ndashhijos en el Hijo por la regeneracioacuten del Espiacuteritundash es el tiacutetulo maacutes grande de pertenencia a la Iglesia que habilita para la maacutes alta de las vo-caciones la santidad56

La prueba de fuego de esta profunda transformacioacuten eclesioloacutegica es el viacutenculo constitutivo entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial Coherentemente con el estructura del capiacutetulo LG 10 da un giro al orden de los sujetos respecto a la formulacioacuten del schema de Ecclesia tras haber descrito el sacerdocio comuacuten como capacidad del Pueblo santo de Dios en virtud de la regeneracioacuten y de la uncioacuten del Espiacuteritu de laquoofrecerse a siacute mismos como oblacioacuten viviente santa agradable a Diosraquo el texto con-tinuacutea afirmando que laquoel sacerdocio comuacuten de los fieles y el sacerdocio ministerial o jeraacuterquico si bien difieren en su esencia y no tanto en grado estaacuten sin embargo mutuamente ordenados pues el uno y el otro cada uno seguacuten su propio modo participan del uacutenico sacerdocio de Cristoraquo57

El viacutenculo existe en virtud de la participacioacuten en el mismo sacerdocio de Cristo concretado en la complementariedad de sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial complementariedad posible en virtud de una dife-rencia radical ndashlicet essentia e non gradu tantumndash que explica no solo la existencia de dos formas de sacerdocio sino la necesidad del sacerdocio jeraacuterquico ministerial al servicio del sacerdocio comuacuten El sacerdocio mi-nisterial no es el desdoblamiento o la intensificacioacuten del sacerdocio co-muacuten ni este es la forma disminuida del sacerdocio ministerial uno con-siste en la capacidad de ofrecer sacrificios espirituales a Dios y el otro en laquollevar a cabo el sacrificio eucariacutestico in persona Christi y ofrecerlo a Dios en nombre de todo el puebloraquo Dicho con otras palabras el sacerdocio ministerial no puede existir maacutes que en estrecha relacioacuten con el sacerdo-

56 D VITALI Popolo di Dio Asiacutes 2013 130-13157 Sostengo la diferencia de esencia y no (tanto) de grado en D Vitali Sacerdocio

comuacuten y sacerdocio ministerial o jeraacuterquico Relectura de una cuestioacuten controvertida in Rassegna di Teologia 52 (2011) 1 39-60

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cio comuacuten y en la forma de servicio al Pueblo de Dios La relacioacuten con el sacerdocio comuacuten determina su naturaleza funcional y fija los liacutemites revelando la hipertrofia del modelo piramidal de Iglesia que con razoacuten puede llamarse modelo clerical

16 La relacioacuten constitutiva entre el sensus fidei y el magisterio de la Iglesia

La relacioacuten constitutiva entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio minis-terial es basilar para construir un modelo sinodal de Iglesia Lumen gen-tium de hecho fundamenta aquiacute la diversa participacioacuten del Pueblo de Dios y de los ministros en el sacerdocio de Cristo Sacerdote Profeta y Rey En el capiacutetulo III para explicar el ministerio episcopal en el nuevo horizonte de la sacramentalidad el Concilio se ve obligado a abandonar el esquema binario de potestas ordinis potestas jurisdictionis asumiendo en su lugar el esquema de los tria munera (docendi santificandi regen-di)58 claramente vinculados a la ordenacioacuten laquoJunto a la funcioacuten de santifi-car la consagracioacuten episcopal confiere tambieacuten las funciones de ensentildear y gobernar las cuales sin embargo por su naturaleza no pueden ser ejercidas si no es en la comunioacuten jeraacuterquica con la cabeza y con los miembros del Colegioraquo (LG 21) Tambieacuten el capiacutetulo IV asume el mismo esquema ilus-trando ampliamente la participacioacuten de los laicos en la funcioacuten sacerdotal profeacutetica y real de Cristo59

Paradoacutejicamente el capiacutetulo sobre el Pueblo de Dios no asume ple-namente el esquema de la triple participacioacuten en el sacerdocio de Cristo pues una vez formulada la doctrina del sacerdocio comuacuten y aclarada su relacioacuten con el sacerdocio ministerial (LG 10) la constitucioacuten ilustra el ejercicio del sacerdocio comuacuten en los sacramentos con evidente referen-cia a la funcioacuten sacerdotal de Cristo (LG 11) para pasar enseguida a la funcioacuten profeacutetica (LG 12) sin tratar expliacutecitamente la real

Los Padres mismos habiacutean advertido el problema el cardenal Silva Henriacutequez habiacutea pedido ordenar temaacuteticamente el ejercicio del sacerdo-cio comuacuten seguacuten el triple munus de Cristo del que participa el Pueblo de Dios60 como por otro lado se evidenciaba en el n 14 del schema prior

58 LG 25-2759 LG 34-3660 Cfr Acta Synodalia IIIII 407-409 solicitud en nombre de otros 39 obispos

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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donde se deciacutea que los bautizados laquoparticipan en cierto modo [quodam-modo] en la funcioacuten sacerdotal profeacutetica y real de Cristoraquo61 La Comi-sioacuten teoloacutegica no percibioacute la importancia estimando que las tres fun-ciones estaban ya suficientemente tratadas en el texto en los nn 10 y 11 (funcioacuten sacerdotal) en el n 12 (la profeacutetica) y en el n 35 en el capiacutetulo sobre los laicos (la real)62 Maacutes allaacute de las razones que llevaron a la co-misioacuten a hacer esta eleccioacuten la nota confirma la posibilidad de pensar la funcioacuten profeacutetica dentro del cuadro de la participacioacuten en el triple munus de Cristo63

Pero iquestpor queacute insistir tanto en este punto Porque el viacutenculo con el sa-cerdocio comuacuten integra las tres funciones ndashsacerdotal profeacutetica y realndash en la relacioacuten entre las dos formas de participacioacuten en el sacerdocio de Cris-to En otras palabras se establece tambieacuten entre las funciones la misma circularidad que regula la relacioacuten entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial o jeraacuterquico La importancia del asunto se impone de por siacute en referencia sobre todo a la funcioacuten profeacutetica porque bajo esta acepcioacuten el Concilio recupera el sensus fidei del Pueblo de Dios fundamentalmente a causa de una efectiva recuperacioacuten de la dimensioacuten sinodal de la Igle-sia Si se aplica a la funcioacuten profeacutetica el esquema que regula la relacioacuten necesaria entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial tambieacuten el sensus fidei del Pueblo de Dios y el munus docendi de los pastores se situacutean claramente ndashy necesariamentendash en un nexo constitutivo En otras palabras existe una relacioacuten circular entre sensus fidei y magisterio como funciones eclesiales de inteligencia de la fe que abre un amplio horizonte en relacioacuten con el posible ejercicio de un camino sinodal de la Iglesia Este horizonte ya puede intuirse en LG 12

El pueblo santo de Dios participa tambieacuten de la funcioacuten profeacutetica de Cristo difundiendo su testimonio vivo sobre todo con la vida de fe y caridad y ofreciendo a Dios el sacrificio de alabanza que es fruto de unos labios que confiesan su nombre (cf Heb 1315) La totalidad de los fieles que tienen

61 Acta Synodalia III 259 El pasaje fue retirado en la reorganizacioacuten del texto desde el momento en el que el n 24 fue dividido en 3 paraacutegrafos (nn 10-12 de Lumen gentium)

62 Acta Synodalia IIII 19663 Por otra parte es posible percibir la funcioacuten real en la referencia a las virtudes al inicio

del n 11 laquoEl caraacutecter sagrado y orgaacutenicamente estructurado de la comunidad sacerdotal se implanta a traveacutes de los sacramentos y de las virtudesraquo evidentemente ndasho al menos sobre todondash fe esperanza y caridad que remiten a la vida teologal y por lo tanto tambieacuten a su di-mensioacuten real Se puede decir ndashy se deduce de todo el discursondash que LG 11 trata conjuntamente la dimensioacuten sacerdotal y la real de la vida en Cristo

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la uncioacuten del Santo (cfr 1 Jn 220 y 27) no puede equivocarse cuando cree y esta prerrogativa peculiar suya la manifiesta mediante el sentido sobrenatural de la fe de todo el pueblo cuando laquodesde los obispos hasta los uacuteltimos fieles laicosraquo [cfr San Agustiacuten De praed sanct 14 27 PL 44 980] presta su consentimiento universal en las cosas de fe y costumbres Con este sentido de la fe que el Espiacuteritu de verdad suscita y mantiene el Pueblo de Dios se adhiere indefectiblemente laquoa la fe confiada de una vez para siempre a los santosraquo (Jud 3) penetra maacutes profundamente en ella con juicio certero y la aplica cada diacutea maacutes plenamente en la vida

La cita recoge sustancialmente el textus prior aunque sustituye la uni-versitas fidelium por Ecclesia tota como sujeto de indefectibilidad64 De las tres frases la primera introduce el tema de la participacioacuten de todo el Pueblo de Dios en la funcioacuten profeacutetica de Cristo que se manifiesta mediante el sensus fidei y los carismas a traveacutes de los cuales el espiacuteritu laquohace a los fieles capaces y preparados para asumir obras y deberes que sirvan y sean uacutetiles a la renovacioacuten y a la edificacioacuten maacutes amplia de la Iglesiaraquo Las otras dos se refieren de modo maacutes especiacutefico al sensus fi-dei recuperando una doctrina considerablemente enraizada a lo largo de toda la tradicioacuten teoloacutegica y utilizada por el magisterio de la Iglesia para fundamentar la definicioacuten de los dogmas marianos de la Inmaculada Concepcioacuten y de la Asuncioacuten de Mariacutea65

A pesar de algunas voces criacuteticas sobre la doctrina66 que reiteraban la posicioacuten de los manuales de teologiacutea preconciliar sobre la indefecti-

64 Por esta razoacuten se suprimioacute la nota que haciacutea referencia al Concilio Vaticano I que en el cap VIII del esquema constitutionis dogmaticae de Ecclesia Christi puso la indefectibilidad de la Iglesia como fundamento de la infalibilidad del magisterio La formulacioacuten fue solem-ne laquoDeclaramus insuper Christi Ecclesiam sive existentia sive constitutio eius spectetur societatem esse perennem atque indefectibilem nullamque post illam neque pleniorem neque perfectiorem salutis oeconomiam in hoc speculo expectandam esseraquo Mansi 51 542

65 Cfr supra66 Cfr por ejemplo Carli Acta Synodalia III 641 que propone el siguiente texto

laquoEcclesia tota cuius filii veluti liturgicum suae fidei sacrificium sempre Deo offerre (cf Phil 217) tenentur Eiusque virtutes annuntiare qui ipsos de tenebris vocavit in admirabile lumen suum (cf 1Pt 29) in credendo circa fidem et mores indefectibilis est et hanc suam peculiarem proprietatem etiam per supernaturalem sensum figravedei popoli cristiani manifestatraquo En cam-bio el cardenal Ruffini (cfr Acta Synodalia IIII 628) cuestiona la propuesta ironizando laquoQuae ibi scripta inveniuntur aut non sunt vera aut ea non intellego Quid est ndashquaesondash iste supernaturalis sensus fidei universi populi christiani quo omnes docentur infallibiliter a Deo sensus fidei ndashinquamndash a Spiritu veritatis excitatus verbo Dei scripto et tradito sub eius assistentia inhaerens quem magisterium ducit (solummodo) et sustentatraquo A continua-cioacuten defiende la infalibilidad pasiva de la Ecclesia discens que no depende del Espiacuteritu de Dios sino del hecho de que tal sentido manifiesta la doctrina ensentildeada de modo infalible por

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bilitas passiva de la Ecclesia dicens del debate en el aula67 emergioacute un texto medido equilibrado La relatio68 se limita a resumir con breves anotaciones las variantes del texto asegurando no querer introducir ul-teriores antildeadidos en cuanto a que el sentido de la fe es descrito como una facultas totius Ecclesiae en virtud de la cual estaacute en la fe reconocer la revelacioacuten transmitida pudiendo distinguir entre verdadero y falso y a la vez ahondar con mayor profundidad en el significado y aplicarlo con maacutes plenitud a la vida seguacuten el sentido de 1 Tes 213 En la 124ordf congre-gacioacuten general no se registran modi referidos a LG 12 sobre los cuales los Padres debiesen votar y el texto seraacute aprobado sin ulteriores variaciones El Pueblo Santo de Dios volviacutea finalmente a ser una autoridad doctrinal una regula fidei que participa suo peculiare modo en la transmisioacuten de la Revelacioacuten

17 La singularis Antistitum et fidelium conspiratio

La circularidad entre sensus fidei y magisterio que resulta decisiva para articular una praxis sinodal en la Iglesia no solo es una hipoacutetesis vaacutelida bajo la base de LG 12 emerge auacuten con mayor claridad en DV 10 Aunque este paacuterrafo no contenga una referencia expliacutecita a eacutel el sensus fidei se evidencia a traveacutes de la presencia de la foacutermula ndashsingularis An-tistitum et fidelium cospirationdash invocada expliacutecitamente por el magisterio para definir los dogmas marianos y que se convierte en la clave de lectura del dinamismo de transmisioacuten de la Revelacioacuten en la Iglesia

La Tradicioacuten y la Escritura constituyen el depoacutesito sagrado de la palabra de Dios confiado a la Iglesia Fiel a dicho depoacutesito el pueblo cristiano entero unido a sus pastores persevera siempre en la doctrina apostoacutelica y en la unioacuten en la eucaristiacutea y en la oracioacuten (cfr Hch 242) y asiacute se realiza una maravillosa concordia de Pastores y fieles [singularis fiat Antistitum et fidelium conspiratio] en conservar practicar y profesar la fe recibida

el magisterio uacutenico sujeto de la infalibilidad activa en la Iglesia Tambieacuten el cardenal Siri (Acta Synodalia IIIII 279) reafirma que el sensus fidei depende totalmente del magisterio infalible de la Iglesia Maacutes positivas son las intervenciones de Cantero Cuadrado cfr Acta Synodalia IIIII 283-285 Calabria cfr Acta Synodalia IIIII 363-365

67 No fueron pocas las intervenciones en el aula y las animadversiones scriptae signo del intereacutes que despertaba en los Padres la doctrina del sensus fidei Particularmente extensas y relevantes son las intervenciones de mons Cantero Cuadrado (cfr Acta Synodalia IIIII 283-285) y de mons Calabria (cfr Acta Synodalia IIIII 363-365)

68 Acta Synodalia III 189

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Sobre todo hay que subrayar que el texto contiene la misma cita neo-testamentaria (Hch 242-47) a la que recurre LG 10 para fundamentar el sacerdocio comuacuten auacuten maacutes las acciones atribuidas al Pueblo santo de Dios ndashlaquoconservar practicar y profesar la fe recibidaraquondash son muy cercanas a aquellas con las que LG 12 describe el sensus fidei como capacidad del Pueblo de Dios de acoger la Palabra de Dios adherirse de manera indefectible a la fe recibida penetrar en ella con mayor profundidad y aplicarla maacutes plenamente a la vida La intencioacuten del paacuterrafo no es la de esclarecer la funcioacuten del sensus fidei pero siacute la de precisar que la Iglesia es depositaria de la Palabra de Dios (foacutermula inusitada) constituida por Tradicioacuten y Escritura precisamente la conspiratio de los obispos y los fieles confirma el nexo cuanto menos indirecto con esta funcioacuten del Pue-blo de Dios

La cuestioacuten no es de poco relieve pues el paacuterrafo tras un capiacutetulo en-tero ilustrando el dinamismo de la Tradicioacuten concluye restableciendo la relacioacuten de circularidad entre el Pueblo de Dios y sus pastores evocado en el texto y significado por la singularis conspiratio y estableciendo entre otras cosas una especie de precedencia del sensus fidei sobre el ma-gisterio Uacutenicamente al final del capiacutetulo de hecho aparece el munus de laquointerpretar auteacutenticamente la Palabra de Dios escrita y transmitidaraquo confiado laquoal solo magisterio vivo de la Iglesiaraquo en una propuesta que muestra el abandono de aquel modelo de transmisioacuten de la Revelacioacuten regulado por el binomio Ecclesia docens Ecclesia dicens

Aunque no existan afirmaciones expliacutecitas al respecto ni de la Comi-sioacuten teoloacutegica ni de los Padres conciliares se puede entrever en la estruc-tura del capiacutetulo una trama en la cual la relacioacuten de circularidad entre el Pueblo de Dios y el magisterio estaacute pensada para resaltar particularmente al primero en analogiacutea con la laquorevolucioacuten copernicanaraquo de Lumen gen-tium sobre el primado del Pueblo de Dios en relacioacuten con la jerarquiacutea El giro ya se percibe en el capiacutetulo I de Dei Verbum mientras los manuales de teologiacutea sobre la base del Vaticano I concebiacutean la Revelacioacuten como la suma de las verdades en las que creer (la fides quae) con la obvia conse-cuencia de enfatizar la funcioacuten del magisterio infalible de la Iglesia como norma proacutexima de la fe una idea maacutes personalizada de la Revelacioacuten ndashlaquoDios invisible en la riqueza de su amor habla a los hombres como a amigos y dialoga con ellos para invitarles e introducirles en la comunioacuten con Eacutelraquo (DV 2)ndash pone de manifiesto a los interlocutores que Dios mismo ha elegido En primer plano no estaacute tanto quieacuten transmite el mensaje sino

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sus destinatarios o lo que es lo mismo laquolos hombres [que] por medio de Cristo Verbo hecho carne en el Espiacuteritu Santo tienen acceso al Padre y son hechos partiacutecipes de la vida divinaraquo (DV 2)

El mismo esquema interpretativo se repite en el capiacutetulo II respecto a la transmisioacuten de la Revelacioacuten Al inicio del capiacutetulo el lenguaje parece repetir el Vaticano I laquoTodo aquello que habiacutea revelado para la salvacioacuten de todos los pueblos Dios dispuso con toda benevolencia que permane-ciese iacutentegro y fuese transmitido a todas las generacionesraquo (DV 7) No obstante la transmisioacuten de la Revelacioacuten no se refiere a un depositum sino al Evangelio vivo como laquofuente de todo aquello que concierne a la fe y la moralraquo y que la Iglesia recibe mediante la laquopredicacioacuten apostoacutelica expresada de modo especial en los libros inspiradosraquo a esta predicacioacuten le laquoconcierne todo aquello que contribuye a una conducta santa y al in-cremento de la fe del Pueblo de Diosraquo (DV 8) A diferencia del schema de fontibus Revelationis69 que trataba enseguida la funcioacuten del magisterio infalible de la Iglesia Dei Verbum en el cuadro de una concepcioacuten dinaacute-mica de la Tradicioacuten pone de relieve a los destinatarios de la predicacioacuten De hecho el texto afirma que laquola comprensioacuten ndashaunque el latiacuten dice per-ceptiondash tanto de las cosas como de las palabras transmitidas crece ya sea con la contemplacioacuten y el estudio de los creyentes que lo meditan en sus corazones ya sea con la profunda inteligencia de la realidad espiritual que experimentan (DV 8)

Algunos Padres pidieron integrar estos dos factores de inteligencia de la fe que se referiacutean con toda evidencia a los bautizados con laquola predica-cioacuten de aquellos que con la sucesioacuten episcopal han recibido un carisma seguro de verdadraquo (DV 8) Este antildeadido por maacutes que fuese pertinente rompe la loacutegica del discurso construido de acuerdo con el esquema del diaacutelogo entre Dios y su pueblo repetido tambieacuten en el capiacutetulo II la elec-cioacuten de presentar la predicacioacuten como modalidad de transmisioacuten de la Revelacioacuten no se desarrolla al poner de relieve la funcioacuten interpretativa del magisterio sino la del Pueblo de Dios como destinatario del Evan-gelio anunciado De este modo Dios laquoel cual ha hablado en el pasado

69 Cfr Acta Synodalia IIII 14-26 Schema constitutionis dogmaticae de fontibus Re-velationis El schema consta de 5 capiacutetulos I De duplici fonte Revelationis II De Scriptura inspiratione inerrantia et compositione litteraria III De Vetere Testamento IV De Novo Testamento V De Sacra Scriptura in Ecclesia En el capiacutetulo I compuesto de solo seis paacute-rrafos el uacuteltimo trata sobre la funcioacuten del Magisterio descrito como proximae et universalis credendi norma

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dialoga [colloquitur] sin intermediacioacuten con la Esposa de su Hijo predi-lecto y el Espiacuteritu Santo por quien la voz del Evangelio resuena viva en la Iglesia y por ella en el mundo va introduciendo a los creyentes en la verdad plena y hace que la palabra de Cristo habite en ellos abundante-menteraquo (DV 8)

El disentildeo se torna sin embargo niacutetido en la apertura de DV 10 a la luz de la singularis Antistitum et fidelium conspiratio que se refiere evi-dentemente a la relacioacuten de circularidad entre sensus fidei del Pueblo de Dios y munus docendi de los pastores Lo prueba el hecho de que al pie del texto se hace referencia a los textos marianos70 citando en la misma nota una frase de Cipriano sobre la laquoIglesia como Pueblo reunido en torno al sacerdote y rebantildeo que se adhiere a su pastorraquo71 del cual emerge con claridad coacutemo el dinamismo de la Tradicioacuten encuentra continuo alimento en la reciprocidad entre predicacioacuten y vida cristiana Los dos teacuterminos se corresponden si el Pueblo santo de Dios conserva practica y profesa la fe transmitida laquoel magisterio vivo de la Iglesiaraquo laquopiamente escucha san-tamente custodia y fielmente exponeraquo la palabra de Dios si el magisterio laquosirveraquo la Palabra de Dios anunciada en la fuerza del espiacuteritu laquoel Pueblo de Dios acoge no ya la palabra de los hombres sino realmente la Pala-bra de Dios se adhiere indefectiblemente a la fe transmitida a los santos de una vez para siempre (Jud 3) la profundiza con un juicio recto y la aplica cada diacutea maacutes plenamente en la vidaraquo (LG 12)

2 intellectus fidei

La primera parte de esta investigacioacuten justifica la siguiente afirmacioacuten el Vaticano II pone las bases para desarrollar una visioacuten sinodal de la Iglesia Junto a la relacioacuten del Colegio con su cabeza aclarada en LG III el Concilio vincula estrechamente a los pastores con el Pueblo de Dios en cuanto a la transmisioacuten de la Revelacioacuten tanto en el capiacutetulo II de Lumen gentium sobre el Pueblo de Dios como en el capiacutetulo II de Dei Verbum A la luz de estos datos es posible poner en marcha aquel laquocaminar juntos

70 Cfr nota 14 que cita PIacuteO XII Constitucioacuten apostoacutelica Munificentissimus Deus in AAS 42 (1950) 756 en relacioacuten con la expresioacuten de san Cipriano Epiacutestola 668 (CSEL 32733) laquoLa Iglesia es un pueblo unido a su sacerdote y el rebantildeo que permanece fiel al propio pastorraquo

71 En la misma nota 74 se cita la constitucioacuten (cfr AAS 42 [1950] 756) en relacioacuten con la misma expresioacuten de san Cipriano Epiacutestola 668

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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de laicos pastores y Obispo de Romaraquo sentildealada por el Papa Francisco como tarea de la Iglesia de hoy72 Para acoger el desafiacuteo sin aventuras o improbables avances precipitados pero siguiendo con fidelidad el ca-mino histoacuterico de la Iglesia hace falta restablecer en clave sinodal las relaciones entre los sujetos que el Papa reclama en liacutenea de continuidad con las sugerencias ofrecidas por el contenido conciliar

21 Elementos para un desarrollo de una Iglesia sinodal

Una primera indicacioacuten ndashpoco maacutes que una sugerenciandash emerge ya en una particularidad linguumliacutestica que aparece en los documentos conciliares el Vaticano II no habla nunca de sinodalidad sin embargo utiliza amplia-mente el teacutermino synodus para referirse al Concilio73 Se trata de un dato relevante que permite tender un puente entre colegialidad y sinodalidad y comprender en queacute direccioacuten tratar de recuperar el concepto El empleo del teacutermino en efecto alude a la praxis del primer milenio cuando el Concilio ecumeacutenico representaba la catolicidad dado que cada obispo laquopersonificabaraquo a su Iglesia en la asamblea conciliar La idea que estaacute en la base de tal conviccioacuten es expresada con fuerza por Cipriano seguacuten el cual laquoel obispo estaacute en la Iglesia y la Iglesia estaacute en el obisporaquo74 la unidad entre obispo e Iglesia fue tan estrecha que el uno no podiacutea existir sin la otra y viceversa No era casualidad que el siacutembolo y la medida de dicha unidad fuese la Eucaristiacutea celebrada por el obispo en la que la asamblea reunida alrededor de eacutel se reconociacutea en el cuerpo eucariacutestico Por esta razoacuten la ex-communicatio impuesta por el obispo no comportaba uacutenica-mente la exclusioacuten del banquete eucariacutestico sino tambieacuten de la comunioacuten eclesial El empleo de sancta Synodus impulsa a desplazarse al horizonte

72 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos

73 Sin contar con el elevado nuacutemero de recurrencias o repeticiones (cfr X OCHOA Index verborum cum documentis Concilii Vaticani Secundi 484-485) es sorprendente el eacutenfasis que emana del empleo de la foacutermula en ciertos pasajes de particular solemnidad Baste con releer por ejemplo LG 1 laquoLumen gentium cum sit Christus haec Sacrosancta Synodus in Spiritu Sancto congregata omnes homines claritate Eius super faciem Eccle-siae resplendente illuminare vehementer exoptat omni creaturae Evangelium annuntiando (cfr Mc 1615)raquo El empleo enfaacutetico es repetido en muchos otros pasajes cfr por ejemplo LG 18 en referencia a la doctrina del primado y el episcopado laquoSacra Synodus cunctis fi-delibus firmiter credendam rursus proponitraquo LG 21 en relacioacuten con la sacramentalidad del episcopado laquoDocet autem Sancta Synodusraquo

74 CIPRIANO Epistola 66 8 CSEL 3733

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del primer milenio asumiendo como elemento imprescindible la estrecha unidad del Pueblo de Dios con los pastores o maacutes bien de cada portio Populi Dei con su pastor75

iquestPero queacute sentido puede tener esto para una concepcioacuten sinodal de Iglesia y bajo un punto de vista praacutectico para el ejercicio de la sinoda-lidad en la Iglesia Si la premisa es laquocaminar juntosraquo de pueblo y pas-tores el empleo de sancta Synodus no aporta maacutes elementos que sirvan para clarificar el tema Por otro lado como hemos podido comprobar el Vaticano II se centroacute en la colegialidad sin mencionar expliacutecitamente la sinodalidad que queda fuera del horizonte de pensamiento en el que se movioacute el Concilio76 A cincuenta antildeos vista de aquel debate en ocasiones dramaacutetico se evidencia coacutemo los Padres en el aula no pudieron ir maacutes allaacute de un texto de transicioacuten (o de consenso) en el que la funcioacuten petrina se recolocaba en el marco maacutes amplio de la organizacioacuten jeraacuterquica de la Iglesia reafirmando la colegialidad pero dejando en el aire las formas concretas para poder ponerla en praacutectica

El periodo posconciliar ha puesto de relieve toda el esfuerzo y las re-sistencias para encontrar un desarrollo significativo de la colegialidad77 Por otro lado mientras la cuestioacuten quede circunscrita al Colegio y a su cabeza se corre el riesgo de percibir la relacioacuten como competicioacuten entre dos sujetos dotados de plena y suprema potestad sobre la Iglesia

Pero precisamente el Concilio abre la viacutea para poner en marcha la so-lucioacuten con aquel cambio que subyace en la loacutegica de haber introducido el capiacutetulo sobre el Pueblo de Dios antes del de la Jerarquiacutea volviendo a

75 En esta direccioacuten ya se orientaba SC 41 al indicar la praecipua manifestatio Ecclesiae laquoen la participacioacuten plena y activa [el texto dice lsquoplenaria et actuosarsquo] del Pueblo santo de Dios en las mismas celebraciones lituacutergicas sobre todo en la misma Eucaristiacutea en una uacutenica oracioacuten alrededor del uacutenico altar que preside el obispo rodeado de su presbiterio y ministrosraquo

76 Sin embargo la posibilidad de que alguna voz en tal direccioacuten pudiera alzarse en el aula quedoacute anulada con la eleccioacuten de concentrarse en la apertura de tercer periacuteodo en los capiacutetulos VII y VIII del esquema sin permitir que se volviese sobre los capiacutetulos anteriores respecto a los cuales se solicitoacute sencillamente a los Padres pronunciarse con un placet o non placet sobre el textus emendatus cfr Quaesitum circa modum suffragandi schema constitu-tionis de Ecclesia Acta Synodalia IIII 395

77 La prueba de fuego de este cansancio es la distincioacuten difundida despueacutes del Concilio de una doble colegialidad efectiva y afectiva la primera concierne a las formas de ejerci-cio de la colegialidad mientras la segunda subraya la unidad del Colegio Echando un vistazo al desarrollo del magisterio posconciliar despueacutes del Siacutenodo extraordinario del 1985 a veinte antildeos del Concilio Vaticano II se advierte una fuerte insistencia sobre la segunda pasada por el affectus collegialis de los documentos conciliares ndashcfr LG 23 y NEP 2ndash a la colegialidad afectiva ndashcfr sobre todo Communionis notio Apostolos suos y Pastores gregisndash sin llegar a formas concretas y reconocidas de ejercicio efectivo de la colegialidad

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vincular el ministerio en la Iglesia a su funcioacuten de servicio al Pueblo de Dios El punto de anclaje es la relacioacuten constitutiva que LG 10 establece entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial si en el schema de Eccle-sia el tema del sacerdocio universal de los fieles representoacute cuando menos una significativa recuperacioacuten para la eclesiologiacutea catoacutelica despueacutes de cua-tro siglos de silencio la nueva colocacioacuten viene a otorgarle un peso y una funcioacuten de relevancia y profundidad diversas En el cuadro eclesioloacutegico trazado por LG II el sacerdocio de todos los fieles no es ya un sacerdocio metafoacuterico o quoddam sacerdotium paacutelida imitacioacuten del ministerial sino sacerdocio comuacuten78 es decir la condicioacuten de todos los bautizados en vir-tud de la cual la Iglesia entera queda constituida en comunidad sacerdotal que ofrece a Dios sacrificios espirituales Esta forma de participacioacuten en el sacerdocio de Cristo no solo esclarece el agere in persona Christi de los ministros sagrados como forma de servicio dentro de la Iglesia sino que tambieacuten restablece el orden adecuado de las cosas al primar el ser sobre el hacer la vida teologal sobre los roles y funciones el tiacutetulo maacutes grande de pertenencia a la Iglesia la dignidad mayor es la de ser hijos de Dios hijos en el Hijo

Esta revolucioacuten copernicana iquestqueacute consecuencias conlleva respecto a la vida y al gobierno de la Iglesia iquestQueacute posibilidades ofrece para la cons-truccioacuten de una Iglesia constitutivamente sinodal iquestNo la expone maacutes bien al riesgo de desviacuteos democraacuteticos Durante el posconcilio muchos han repetido el slogan de la piraacutemide invertida como si bastase el vuelco especulativo de los esquemas aplicados durante siglos y de las loacutegicas que los habiacutean regulado para implantar la eclesiologiacutea conciliar No se trata de poner arriba a quien antes estuvo abajo de dar el mando a quien antes fue suacutebdito de reemplazar un sistema monaacuterquico por uno democraacutetico sino de situar en el centro de la vida eclesial al Pueblo de Dios sobre todo por parte de la jerarquiacutea79

78 En vez de laquosacerdocio universalraquo muchos Padres propusieron otras foacutermulas como laquosacerdotium spiritualeraquo laquosacerdotium inchoativumraquo laquoquoddam sacerdotiumraquo laquosacerdotium communeraquo laquoDicatur commune ad vitandam ambiguitatemraquo cfr Acta Synodalia IIII 195

79 En esta direccioacuten va la mencioacuten al ministerio jeraacuterquico en particular a la funcioacuten petrina por parte del Papa Francisco en el discurso de conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos que merece la pena reproducir por entero laquoLa si-nodalidad como dimensioacuten constitutiva de la Iglesia nos ofrece el marco interpretativo maacutes adecuado para comprender el mismo ministerio jeraacuterquico Si comprendemos que como dice san Juan Crisoacutestomo lsquoIglesia y Siacutenodo son sinoacutenimosrsquo ndashporque la Iglesia no es otra cosa que el lsquocaminar juntosrsquo de la grey de Dios por los senderos de la historia que sale al encuentro de Cristo el Sentildeorndash entendemos tambieacuten que en su interior nadie puede ser lsquoelevadorsquo por encima

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Aunque no faltase en el pasado el eacutenfasis sobre la dimensioacuten del servi-cio traducida en ejemplos luminosos de pastores que han dedicado toda su vi da al rebantildeo sin embargo el ministerio sacerdotal se concebiacutea a partir de una relacioacuten asimeacutetrica de autoridad-obediencia entre pastores y fieles De es to se deriva una identificacioacuten demasiado estricta de la Iglesia con sus ministros y una separacioacuten del cuerpo eclesial entre Ecclesia docens y Ecclesia discens con excesiva insistencia sobre la inaequalitas de sus miembros80 lo cual ha favorecido el arraigo entre el clero de una imagen condicionada del laquopueblo ignoranteraquo y entre el mismo pueblo de su li-mitacioacuten en la vida eclesial Contra una mentalidad de este tipo ndashdifiacutecil de desarraigar puesto que se ha consolidado durante siglosndash estaacute el asumir que laquoel sacerdocio comuacuten y el sacerdocio ministerial o jeraacuterquico incluso diferentes por esencia y no tanto por grado sin embargo se complementan el uno al otro porque ambos participan cada uno a su manera del uacutenico sacerdocio de Cristoraquo (LG 10)

Esto significa que sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial se ha-llan mu tuamente vinculados asiacute como se hallan vinculadas las funciones que radican en la doble forma de participacioacuten en el sacerdocio de Cristo Una Iglesia sinodal no puede prescindir de la relacioacuten de circularidad entre sensus fidei del Pueblo de Dios y magisterio de la Iglesia Sobre la base de este viacutenculo resulta posible dibujar una trama de relaciones entre los sujetos de la sinodalidad ndashPueblo de Dios Colegio de los obispos Obispo de Romandash que permita pensar no solamente el ordo Synodi y el ejercicio de la sinodalidad sino contemplaacutendolo maacutes de raiacutez en el rostro mismo de una Iglesia sinodal

de los demaacutes Al contrario en la Iglesia es necesario que alguno lsquose abajersquo para ponerse al servicio de los hermanos a lo largo del camino Jesuacutes ha constituido la Iglesia poniendo en su cumbre al Colegio apostoacutelico en el que el apoacutestol Pedro es la lsquorocarsquo (cfr Mt 1618) aquel que debe lsquoconfirmarrsquo a los hermanos en la fe (cfr Lc 2232) Pero en esta Iglesia como en una piraacutemide invertida la cima se encuentra por debajo de la base Por eso quienes ejercen la autoridad se llaman lsquoministrosrsquo porque seguacuten el significado originario de la palabra son los maacutes pequentildeos de todos Cada obispo sirviendo al Pueblo de Dios llega a ser para la porcioacuten de la grey que le ha sido encomendada vicarius Christi vicario de Jesuacutes quien en la Uacuteltima Cena se inclinoacute para lavar los pies de los apoacutestoles (cfr Jn 131-15) Y en un horizonte seme-jante el mismo Sucesor de Pedro es el servus servorum Dei iexclNo lo olvidemos nunca Para los disciacutepulos de Jesuacutes ayer hoy y siempre la uacutenica autoridad es la autoridad del servicio el uacutenico poder es el poder de la cruzraquo

80 Todaviacutea en el schema prior el tiacutetulo del n 23 se presentaba en estos teacuterminos Aequa-litas et inaequalitas membrorum Ecclesiae despueacutes cambiado justamente en el n 32 del tex-tus emendatus en De dignitate laicorum prout sunt membra Populi Dei cfr Acta Synodalia IIII 272

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22 Una Iglesia constitutivamente sinodal

Hablar de una laquoIglesia constitutivamente sinodalraquo puede parecer ex-cesivo inuacutetil y peligroso Excesivo por inuacutetil en cuanto que lo expresado por la sinodalidad viene manifestado maacutes y mejor con communio Exce-sivo por peligroso pues expondriacutea a la Iglesia a una deriva democraacutetica forzando a la jerarquiacutea a una loacutegica de representacioacuten desde abajo En realidad la sinodalidad pone de manifiesto algo que communio no expre-sa directamente el hecho ndashesencial para la Iglesiandash de laquocaminar juntosraquo porque la Iglesia no es otra cosa que ese laquocaminar juntosraquo del Rebantildeo de Dios por las sendas de la historia al encuentro de Cristo Dios como subraya el Papa despueacutes de haber dicho que laquoel camino de la sinodalidad es el camino que Dios espera de la Iglesia del tercer milenioraquo81

El punto de partida para la comprensioacuten de esta perspectiva es de nue-vo el Concilio El horizonte de la sinodalidad es la Iglesia como laquoplebs adunata de unitate Patris et Filii et Spiritus Sanctiraquo (LG 4) el redescu-brimiento de su origen permite comprender el dinamismo de la historia de la salvacioacuten de la que forma parte y las etapas que la llevan a la plena comunioacuten con Dios

Y establecioacute convocar a quienes creen en Cristo en la santa Iglesia que ya fue prefigurada desde el origen del mundo preparada admirablemente en la historia del pueblo de Israel y en la Antigua Alianza constituida en los tiempos definitivos manifestada por la efusioacuten del Espiacuteritu y que se consumaraacute gloriosamente al final de los tiempos Entonces como se lee en los Santos Padres todos los justos desde Adaacuten laquodesde el justo Abel hasta el uacuteltimo elegidoraquo seraacuten congregados en una Iglesia universal en la casa del Padre (LG 2)

La comprensioacuten de la Iglesia de Trinitate lejos de confinarla en una complacencia esteacuteril de los oriacutegenes en un alejamiento de la historia que la situariacutea fuera de la vida de los hombres determina maacutes bien la recupe-racioacuten de su dimensioacuten escatoloacutegica82 poniendo en primer plano la idea de Iglesia como pueblo en camino hacia el Reino Por otra parte si el modelo de la comunioacuten trinitaria al que la Iglesia tiene que conformarse se com-prende mirando atraacutes ndasho hacia arribandash al misterio de Dios su realizacioacuten

81 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

82 Cfr DARIO VITALI Lumen gentium Storia Commento Recezione Roma 2012 126-128

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plena llega caminando hacia delante conscientes de que sobre la tierra se halla laquoel germen y el principioraquo del Reino (LG 5) Lumen gentium insiste sobre este punto la Iglesia laquova peregrinando entre las persecuciones del mundo y los consuelos de Dios anunciando la cruz del Sentildeor hasta que vengaraquo (LG 8) asiacute como al laquopueblo de Israel seguacuten la carne peregrinando por el desierto se le designa ya como Iglesia el nuevo Israel que cami-nando en el tiempo presente busca la ciudad futura y perenne tambieacuten es designado como Iglesia de Cristoraquo (LG 9) laquopero mientras no lleguen los cielos nuevos y la tierra nueva donde habita la justicia (cf 2 Pe 313) la Iglesia peregrina lleva en sus sacramentos e instituciones pertenecientes a este tiempo la imagen de este siglo que pasa y ella misma vive entre las criaturas que gimen con dolores de parto en el presente en espera de la manifestacioacuten de los hijos de Diosraquo (LG 48)

La misma estructura de la constitucioacuten orienta en este sentido la Ec-clesia de Trinitate que se describe en el capiacutetulo I no es otra que el Pueblo de Dios que el capiacutetulo II presenta como laquopueblo mesiaacutenico [que] tiene por cabeza a Cristo [hellip] como condicioacuten la dignidad y la libertad de los hijos de Dios [hellip] por ley el nuevo mandato de amar como el mismo Cristo nos amoacute a nosotros [hellip] como fin el reino de Diosraquo (LG 9) Es como afirmar que la Iglesia si es constitutivamente el Pueblo de Dios en camino tambieacuten es constitutivamente sinodal el rasgo que distingue a este pueblo es el de laquocaminar conjuntamenteraquo todos hacia el Reino de Dios

Pero si la sinodalidad se redujese al caminar juntos entonces la na-turaleza constitutivamente sinodal de la Iglesia seriacutea bien poca cosa en el fondo se reduciriacutea a una variante de la communnio con un mayor eacutenfasis en el aspecto histoacuterico-salviacutefico Existe sin embargo otro as-pecto que emerge con fuerza del propio concilio y que empuja hacia una comprensioacuten sinodal de la Iglesia el Vaticano II ha terminado por fin con un verdadero deacuteficit pneumatoloacutegico despueacutes de siglos de olvido de la presencia y la accioacuten del Espiacuteritu Santo en la Iglesia83 abriendo

83 El motivo de este deacuteficit reside sobre todo en la llamada poleacutemica del Espiacuteritu Santo por parte de grupos y movimientos profeacuteticos de la Baja Edad Media que radicalizaron la tensioacuten entre Iglesia institucional e Iglesia espiritual incluso antes de la Reforma protestante y de su concepcioacuten de la Iglesia invisible Cfr Y CONGAR Credo nello Spirito santo I Rive-lazione ed esperienza dello Spirito parte segunda Brescia 1981 79-193 espec 180-186 Una lectura instructiva en esta perspectiva es H DE LUBAC La posteritagrave spirituale di Gioacchino da Fiore Milaacuten 1984 que hace una relectura de la historia del segundo milenio cristiano en Occidente a la luz de la tercera edad del Espiacuteritu anhelada por Joaquiacuten de Fiore

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gracias a tal recuperacioacuten entre otras cosas a la Ecclesia de Trinitate Aun trataacutendose de un breve resumen LG 4 marca la recuperacioacuten de una eclesiologiacutea pneumatoloacutegica en la que el Espiacuteritu laquoguiacutea la Iglesia a toda la verdad (cf Jn 16 13) la unifica en comunioacuten y ministerio la provee y gobierna con diversos dones jeraacuterquicos y carismaacuteticos y la embellece con sus frutosraquo

La perspectiva seguacuten la cual el Espiacuteritu laquocon la fuerza del Evangelio rejuvenece la Iglesia la renueva incesantemente y la conduce a la unioacuten consumada con su Esposoraquo encaja bien con el dinamismo de la Tradicioacuten descrito en el capiacutetulo II de Dei Verbum en su camino hacia el Reino laquola Iglesia en el decurso de los siglos tiende constantemente a la plenitud de la verdad divina hasta que en ella se cumplan las palabras de Diosraquo (DV 8b) Esto sucede porque laquoel Espiacuteritu Santo por quien la voz del Evangelio resuena viva en la Iglesia y por ella en el mundo va introdu-ciendo a los creyentes en la verdad plena y hace que la palabra de Cristo habite en ellos abundantementeraquo (DV 8c)

Situada entre el ya y el todaviacutea no entre la primera venida de Cristo y la plenitud en la Gloria la Iglesia estaacute llamada a un estado de escucha obediente Lo exige la concepcioacuten misma de la Tradicioacuten laquoque progresa en la Iglesia con la asistencia del Espiacuteritu Santoraquo (DV 8b) mientras que la idea de Revelacioacuten como suma de las verdades del credo impone ante todo la conservacioacuten del depositum fidei la dinaacutemica de diaacutelogo entre Dios y el hombre implica en cambio un proceso continuo de discerni-miento que se da en la escucha de lo que el Espiacuteritu Santo dice a la Igle-sia y consecuentemente mientras la idea de transmisioacuten del depositum fidei llevaba a enfatizar la funcioacuten uacutenica del magisterio la de Tradicioacuten viva llama en el dinamismo de la transmisioacuten a toda la Iglesia y a todos en la Iglesia

Surge aquiacute la parte del sensus fidei del Pueblo santo de Dios Todos en la Iglesia han recibido el Espiacuteritu Santo y laquotodos son instruidos por Diosraquo (Jn 645) laquoEn cuanto a vosotros la uncioacuten que de Eacutel habeacuteis reci-bido permanece en vosotros y no necesitaacuteis que nadie os ensentildee Pero como su uncioacuten os ensentildea acerca de todas las cosas ndashy es verdadera y no mentirosandash seguacuten os ensentildeoacute permaneced en Eacutelraquo (1 Jn 227) En esta precisa direccioacuten va la llamada de DV 8 al dinamismo de la Tradicioacuten ali-mentado por el conocimiento ndashaunque el texto latino dice perceptiondash que emana del estudio y de la contemplacioacuten pero tambieacuten de la experiencia de los creyentes en la que se puede reconocer el sensus fidei del Pueblo

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de Dios84 El cuadro dibujado por DV 8 para el progreso de la Tradicioacuten no vale soacutelo para el desarrollo de la doctrina toda la vida de la Iglesia ndashlaquotodo lo que ella es todo lo que ella creeraquondash entra en este dinamismo eclesial que involucra a todos cada uno seguacuten su propia capacidad y funcioacuten

23 Los momentos del proceso sinodal

En este marco eclesioloacutegico por tanto se basa con toda evidencia la posibilidad de un camino sinodal de la Iglesia en la escucha del Espiacuteritu por parte de todos en la Iglesia Pueblo de Dios y pastores Asiacute se ha ex-presado el Papa Francisco al respecto

Una Iglesia sinodal es una Iglesia de la escucha con la conciencia de que escuchar laquoes maacutes que oiacuterraquo Es una escucha reciacuteproca en la cual cada uno tiene algo que aprender Pueblo fiel Colegio episcopal Obispo de Roma uno en escucha de los otros y todos en escucha del Espiacuteritu Santo el laquoEspiacuteritu de verdadraquo (Jn 1417) para conocer lo que eacutel laquodice a las Iglesias (Ap 27)raquo85

Asume aquiacute toda su relevancia la relacioacuten de circularidad entre el Pueblo de Dios y sus pastores entre el sensus fidei y el magisterio ma-nifestado en los documentos conciliares iquestComo se hace posible esta escucha reciacuteproca del Pueblo de Dios Colegio de los obispos y Obispo de Roma Antes de articular las relaciones entre los sujetos que podriacutean estar condicionadas por relaciones de poder conviene fijar los diversos momentos en que se articula el proceso sinodal la profeciacutea el discerni-miento y la actuacioacuten

En virtud de la primaciacutea de la vida teologal afirmada a partir de LG II el primer momento es el de la profeciacutea que pertenece a todo el Pueblo de Dios por regalo del Espiacuteritu Santo donado a todos en el bautismo El deseo de Moiseacutes laquoiexclOjalaacute fuesen todos profetas en el Pueblo de Dios y quisiese Dios otorgarles el Espiacuterituraquo (Nm 1129) se ha realizado plenamente en la nueva Alianza con el regalo del Espiacuteritu a la Iglesia

84 En esta direccioacuten leiacutean DV 8 tanto Z ALSZEGHY - M FLICK Sviluppo del dogma cattolico Brescia 1967 como A M KOTHGASSER Dogmenenwicklung und die Funktion des Geist-parakleten nach den Aussagen des zweitn vatikanischen Konzils in Salesianum 3 (1969) 379-460 He sostenido la misma posicioacuten en D VITALI Sensus fidelium Una fun-zione ecclesiale di intelligenza della fede Brescia 1993

85 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

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En todos los bautizados desde el primero hasta el uacuteltimo actuacutea la fuerza santificadora del Espiacuteritu que impulsa a evangelizar El Pueblo de Dios es santo por esta uncioacuten que lo hace infalible laquoin credendoraquo (hellip) La presencia del Espiacuteritu otorga a los cristianos una cierta connaturalidad con las realida-des divinas y una sabiduriacutea que les permite captarlas intuitivamente aunque no tengan el instrumental adecuado para expresarlas con precisioacuten86

No se puede dar por sentado que se escucha al Espiacuteritu y se entiende lo que dice a la Iglesia si no se interroga y no se escucha al Pueblo de Dios que participa en la funcioacuten profeacutetica de Cristo este momento no es opcional en cuanto que el sensus fidei del Pueblo de Dios pertenece a una funcioacuten eclesial de inteligencia de la fe irreducible a otra funcioacuten in-cluida la del magisterio mismo87 La tradicioacuten teoloacutegica reconoce el fun-damento de esta funcioacuten de todos los bautizado no solo en 1 Jn 22027 sino tambieacuten en las promesas del Espiacuteritu en el cuarto Evangelio (Jn 1416s26 1526s 167-1112-15) y en uacuteltimo teacutermino en el regalo del Espiacuteritu en Pentecosteacutes que da cumplimiento a la profeciacutea de Joel laquoDe-rramareacute mi espiacuteritu sobre toda carne vuestros hijos e hijas profetizaraacutenraquo (Jl 31-5 retomado en Hch 216-18) Sobre la base de tal conviccioacuten los Padres han podido oponer a los argumentos de los herejes el christiano-rum populorum concordissima fidei conspiratio como afirmacioacuten cierta de la fe de la Iglesia88 El Papa Francisco se situacutea de nuevo en este cauce afirmando que laquoel camino sinodal comienza escuchando al Pueblo que incluso participa en la funcioacuten profeacutetica de Cristo (LG 12) seguacuten un principio preciado para la Iglesia del primer milenio Quod omnes tangit ab omnibus tractari debetraquo89

Pero no hay profeciacutea que no requiera discernimiento y este es el se-gundo momento del proceso sinodal que compete particularmente a los pastores laquoNo apagueacuteis el Espiacuteritu No menosprecieacuteis las profeciacuteas Exa-minadlo todo retened lo buenoraquo (1 Tes 519-21) Vale para esto la regla fijada por LG 12 para los carismas haciendo referencia expliacutecita a la maacutexima paulina laquoel juicio de su autenticidad y de su ejercicio razonable pertenece a quienes tienen la autoridad en la Iglesia a los cuales compete

86 FRANCISCO Exhortacioacuten apostoacutelica Evangelii gaudium (24-XI-2013) 11987 En relacioacuten con esto cfr el reciente documento de la COMISIOacuteN TEOLOacuteGICA

INTERNACIONAL El sensus fidei en la vida de la Iglesia (10-VI-2014) Roma 201588 S AGUSTIacuteN Epistola 194 31 in Opera omnia vol XXIII 29029189 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de

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ante todo no sofocar el Espiacuteritu sino probarlo todo y retener lo que es buenoraquo Estariacutea lejos de la verdad quien piense que el discernimiento consiste en una escucha pasiva de aquello que emerge del momento pro-feacutetico casi como si el magisterio estuviese subordinado a la instancia carismaacutetica el Espiacuteritu que laquoconduce la Iglesia a toda la verdadraquo (Jn 1714 LG 4) es el mismo que suscita la profeciacutea en el Pueblo santo de Dios y que conduce al magisterio a discernir en la vida de la Iglesia la voz del Espiacuteritu y a decidir la direccioacuten del camino eclesial y las condiciones para su aplicacioacuten

No hay por lo tanto contradiccioacuten entre los dos momentos sino com-plementariedad La obligacioacuten de escucha por parte del magisterio se pro-duce de cara a un ejercicio libre de la discrepatio en la que va impliacutecita necesariamente la determinatio la decisioacuten pastoral90 En el desarrollo de esta funcioacuten laquolos obispos actuacutean como auteacutenticos custodios inteacuterpretes y testigos de la fe de toda la Iglesia que deben saber distinguir atentamente de los flujos muchas veces cambiantes de la opinioacuten puacuteblicaraquo91

El tercer momento es el de la realizacioacuten de lo que ha sido decidido por los pastores que compromete a toda la Iglesia en la escucha y en la obediencia a la voz del Espiacuteritu Este momento pertenece a todos seguacuten su propia condicioacuten y funcioacuten en primis a cuantos han sido puestos como laquoprincipio y fundamento de unidadraquo en la Iglesia el obispo en su Iglesia y el Obispo de Roma en la Iglesia universal laquoque es tambieacuten el cuerpo de las Iglesiasraquo (LG 23) Se puede apreciar aquiacute un doble movimiento el de quien tiene autoridad en razoacuten de la cual actuacutea en los distintos ni-veles de la vida eclesial para que se ejecute la decisioacuten tomada y el del Pueblo de Dios sujeto maacutes bien al proceso de recepcioacuten laquomediante el cual un cuerpo eclesial hace verdaderamente suya una determinacioacuten que eacutel mismo no se ha dado reconociendo en la medida promulgada una regla que conviene a su propia vidaraquo92 Este proceso reintroduce la decisioacuten de

90 Retomo para esta explicacioacuten los teacuterminos que la tradicioacuten monaacutestica usa para descri-bir los momentos de la lectio divina junto a la secuencia maacutes conocida lectio-meditatio-con-templatio-oratio-actio existe una segunda que introduce entre el momento de la oratio y el de la actio otros tres momentos la consolatio la discreptio y la determinatio Es evidente que un discernimiento incapaz de asumir responsablemente una decisioacuten es fin en siacute mismo si esto es cierto en el plano personal lo es con mayor razoacuten en el discernimiento eclesial

91 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

92 Y CONGAR La reacuteception comme reacutealiteacute ecclesiologique in Revue de Sciences Philosophiques et Theacuteologiques 56 (1972) 370

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los pastores en el momento profeacutetico del Pueblo de Dios en un fecundo movimiento de circularidad entre los sujetos de la sinodalidad

Profeciacutea discernimiento y actuacioacutenrecepcioacuten son tres momentos con-secutivos con capacidad de darle al camino eclesial un gran dinamismo un movimiento de participacioacuten en el cual toda la Iglesia y todos en la Iglesia estaacuten implicados93 Naturalmente cada momento tiene valor en siacute mismo y puede ser realizado incluso independientemente de los otros es maacutes en situaciones de sufrimiento y prueba en la vida de la Iglesia ha sido necesa-rio ndashy tal vez seraacute necesariondash que esto suceda Pero no deberiacutea tratarse de la norma en la vida ordinaria del camino eclesial deberiacutea valer la unidad dinaacutemica de los tres momentos conscientes de que ninguacuten momento se basta por siacute mismo Cuando esto no suceda la profeciacutea tenderaacute a trans-formarse en desacuerdo el discernimiento en acto de poder la actuacioacuten en imposicioacuten al otro sobre todo cada sujeto tenderaacute a oponerse al otro y todo el proceso se reduciraacute al solo momento de la ejecucioacuten o aplicacioacuten concentrado en las manos de quien tiene poder en la Iglesia

24 El ejercicio de la sinodalidad

La Iglesia constitutivamente sinodal por tanto se funda sobre la cir-cularidad de profeciacutea discernimiento y actuacioacutenrecepcioacuten No se trata de multiplicar las estructuras ni las instituciones sino de hacer funcionar aquellas existentes seguacuten la secuencia de estos tres momentos en los que se articula el proceso sinodal La actual crisis de los organismos de co-munioacuten manifiesta hasta queacute punto este paso no es obvio ni hay que darlo por descontado la llamada insistente a la dimensioacuten solo consultiva de los siacutenodos y consejos de diverso tipo instituidos tras el Vaticano II demues-tra coacutemo la preocupacioacuten del legislador ha estado basada sobre todo en preservar el tramado institucional preexistente ciertamente no pensado seguacuten el principio de participacioacuten

El paso a una Iglesia sinodal implica una auteacutentica conversioacuten la disponibilidad por parte de los pastores de la Iglesia a aceptar que no son depositarios de la verdad ex officio sino el principio de unidad que garantiza el camino compartido de la escucha del Espiacuteritu capaces de llevar a la Iglesia a discernir cuaacutel es la voluntad de Dios para el presente

93 He intentado describir de modo maacutes extenso estos tres momentos en D VITALI Verso la sinodalitagrave 100-106

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Por esta razoacuten deberiacutea ser un elemento claro para quien tenga la potes-tad de activar el proceso sinodal ndashel Papa en la Iglesia Universal y el obispo para su Iglesiandash que su punto de partida obligatorio es siempre la escucha del Pueblo de Dios Tampoco deberiacutea convertirse en un ele-mento impuesto llevado a cabo por alguacuten grupo de expertos o por alguacuten departamento diocesano en lugar y en nombre del Pueblo de Dios94 si el sensus fidei pertenece a la totalidad de los bautizados nadie puede pretender subrogarlo95

La cuestioacuten es doacutende se da la posibilidad efectiva y concreta de escucha al Pueblo de Dios El Papa invirtiendo un esquema auacuten muy radicado en la vivencia eclesial afirma que el primer nivel para el ejercicio de la sino-dalidad se realiza en las Iglesias particulares96 Solo a partir de una portio populi Dei que encarne el Evangelio dentro de los ritmos de la Historia el Pueblo de Dios no se reduce a una masa confusa privada de lugar y medios para manifestar su consenso Una totalidad de bautizados que se identifique con la Iglesia universal queda inevitablemente expuesta a todas las dinaacutemicas que gobiernan y condicionan la opinioacuten puacuteblica Por el con-trario en la Iglesia local puede ponerse en praacutectica la singularis Antistitum et fidelium cospiratio por medio de un estrecho viacutenculo del rebantildeo con su pastor97 Si se asume el dato eclesioloacutegico derivado del Concilio sobre la Iglesia particular como laquoportio populi Dei confiado al cuidado pastoral del obispo con la cooperacioacuten de su presbiterioraquo (CD 11) inmediatamente se identifican tambieacuten los sujetos de la profeciacutea (la portio populi Dei) del dis-cernimiento (el obispo con el presbiterio o si se prefiere el presbiterio con y nunca sin el obispo) y de la actuacioacuten (todos y cada uno de los miembros de la Iglesia particular seguacuten su propia condicioacuten y funcioacuten)

94 En Evangelii Gaudium despueacutes de haber hablado del sensus fidei (EG 119) el Papa afirma laquoEn virtud del bautismo recibido cada uno de los bautizados cualquiera que sea su funcioacuten en la Iglesia y el grado de ilustracioacuten de su fe es un agente evangelizador y seriacutea in-adecuado pensar en un esquema de evangelizacioacuten llevado adelante por actores cualificados donde el resto del pueblo fiel sea soacutelo receptor de sus accionesraquo (EG 120)

95 En el discurso para la conmemoracioacuten del 50ordm Aniversario del Siacutenodo de los obispos dice el Papa laquoEsta es la conviccioacuten que me ha guiado cuando he deseado que el Pueblo de Dios fuera consultado en la preparacioacuten de la doble cita sinodal sobre la familiaraquo

96 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

97 Me refiero a cuanto se ha dicho en DV 10 cfr supra n 17 LG 25 afirma que laquolos obispos son los maestros auteacutenticos o sea los que estaacuten dotados de la autoridad de Cristo que predican al pueblo que les ha sido encomendado la fe que ha de ser creiacuteda y ha de ser aplicada a la vidaraquo

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En su discurso el Papa afirma que este es el medio para dar forma a una Iglesia sinodal a traveacutes da la valorizacioacuten de los organismos de comunioacuten ndashhoy tocados por un evidente cansanciondash como laquoocasioacuten para la escucharaquo del pueblo de Dios El obispo como laquoprincipio y fundamento de unidad de su Iglesiaraquo (LG 23) tiene la potestad de iniciar todo el proceso no soacutelo como accioacuten extraordinaria convocando un siacutenodo diocesano sino como forma habitual de camino eclesial Para activar a este nivel una sinodali-dad efectiva es necesario no obstante reconsiderar las relaciones entre los sujetos de la Iglesia local sobre todo entre el obispo y sus presbiacuteteros que la reflexioacuten teoloacutegica y canoacutenica no ha sustraiacutedo auacuten a una concepcioacuten demasiado extriacutenseca98

El Papa indica asimismo un segundo nivel de ejercicio de la sinodali-dad laquoel de las Provincias y las Regiones eclesiaacutesticas el de los Concilios particulares y muy especialmente el de las Conferencias episcopalesraquo99 En el primer milenio las exigencias de la communio habiacutean llevado a la Iglesia a estructurarse en circunscripciones territoriales a distintos niveles ndashsedes metropolitanas provincias y regiones eclesiaacutesticas patriarcadosndash en el centro de las cuales los metropolitas y los patriarcas ejerciacutean una autoridad efectiva sobre las Iglesias que integraban su jurisdiccioacuten una organizacioacuten que ha favorecido en gran manera el ejercicio de la sinodalidad Tambieacuten en nuestros diacuteas podriacutea retomarse la normativa que regula las Conferencias episcopales laquopara concretar auacuten maacutes a traveacutes de estos organismos las instancias intermedias de la colegialidad quizaacutes integrando y poniendo al diacutea algunos aspectos del antiguo ordenamiento eclesiaacutesticoraquo100

laquoEl uacuteltimo nivel es el de la Iglesia Universal Aquiacute el Siacutenodo de los obispos representando al episcopado catoacutelico se convierte en expresioacuten de la colegialidad episcopal dentro de una Iglesia enteramente sinodalraquo

98 El replanteamiento de la relacioacuten entre episcopado y presbiterado a la luz de las indi-caciones de LG 21 sobre la plenitud del sacramento del orden atribuido a los obispos puede encontrar un justo equilibrio uacutenicamente a traveacutes de una nueva formulacioacuten de la unioacuten entre el obispo y sus presbiacuteteros con el obispo como principio y fundamento de la unidad no solo de su rebantildeo sino tambieacuten de su presbiterio He intentado desarrollar esta idea en D VITALI Sacerdozio vescovo e presbiterio Un contributo teologico in La Rivista del Clero Italiano 885 (2007) 381-396

99 Cita aquiacute el CIC 83 cc 431-459100 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50ordm aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de

los obispos El Papa citando Evangelii Gaudium reitera que laquoen una Iglesia sinodal como ya afirmeacute no es conveniente que el Papa reemplace a los episcopados locales en el discerni-miento de todas las problemaacuteticas que se plantean en sus territorios En este sentido percibo la necesidad de avanzar en una saludable lsquodescentralizacioacutenrsquoraquo

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Se trata de un paso de capital importancia en el discurso del Papa pues a diferencia de una vulgata profusamente difundida atribuye al Siacutenodo de los obispos una funcioacuten colegial propia del Colegio de los obispos No puede comprenderse este traacutensito maacutes que en la perspectiva del texto conciliar seguacuten el cual laquoel cuerpo episcopal que sucede al Colegio de los apoacutestoles en el magisterio y en el reacutegimen pastoral maacutes auacuten en el que perdura continuamente el Cuerpo apostoacutelico junto con su Cabeza el Ro-mano Pontiacutefice y nunca sin esta Cabeza es tambieacuten sujeto de la suprema y plena potestad sobre la Iglesia universalraquo (LG 22)

Por otra parte el hecho de que laquola suprema potestad que tiene este Colegio sobre toda la Iglesia se ejerce de manera solemne en el Concilio ecumeacutenicoraquo (ibid) hace del todo evidente el nexo con la sinodalidad de la que el Concilio es la maacutexima expresioacuten Tampoco tal atribucioacuten de po-testad al Colegio debilita al primado en todo caso lo refuerza pues uacuteni-camente al Papa laquoen virtud de su oficio como Vicario de Cristo y pastor de toda la Iglesiaraquo (ibid) corresponde convocar presidir y confirmar los concilios En esta perspectiva se puede comprender cualquier otro acto sinodal en particular el que se atribuye al Siacutenodo de los obispos en el marco de todo lo que el concilio deciacutea de la potestad colegial que laquopuede ser ejercida por los obispos dispersos por el mundo a una con el Papa con tal que la Cabeza del Colegio los llame a una accioacuten colegial o por lo menos apruebe la accioacuten unida de eacutestos o la acepte libremente para que sea un verdadero acto colegialraquo (ibid)

El momento maacutes evidente y en cierto modo tambieacuten emblemaacutetico fue la firma de los documentos conciliares suscritos por Pablo VI y por los Padres con la siguiente foacutermula que da relevancia al caraacutecter sinodal del acto laquoNos Apostolica a Christo Nobis tradita potestate illa una cum Venerabilibus Patribus in Spiritu Sancto approbamus decernimus et statuimus et quae ita synodaliter statuta sunt ad Dei gloriam promulgari iubemusraquo101

101 La foacutermula se utiliza al final de cada documento aprobado cfr Concilium Oecu-menicum Vaticanum II Constitutiones Decreta Declarationes Cittagrave del Vaticano 1966 Aparece tambieacuten en la carta de clausura del concilio laquoMandamus autem ac praecipimus ut quae synodaliter in Concilio statuta sunt sancte et religiose ab omnibus Christifidelibus serventur ad Dei gloriam ad Sanctae Matris Ecclesiae decus et ad hominum universorum tranquillitatem et pacemraquo Pablo VI Litterae apostolicae quibus SS Concilio oecumenico finis imponatur in Concilium Oecumenicum Vaticanum II Constitutiones Decreta Decla-rationes 1102

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25 Sinodalidad colegialidad primado

El marco plasmado a partir del Vaticano II permite una reflexioacuten so-segada sobre el Siacutenodo de los obispos en vistas de una reforma del Ordo Synodi Maacutes allaacute de los procedimientos la cuestioacuten de mayor relevancia concierne a la naturaleza misma del Siacutenodo Sorprende la institucioacuten del Siacutenodo durante el mismo concilio102 poniendo en evidencia la existencia de signos de un debate sobre la colegialidad que habiacutea interesado viva-mente al aula No asombra por tanto que Pablo VI vinculase fuertemente al ejercicio del primado el nuevo organismo a cuyo auxilio el sucesor de Pedro puede recurrir laquopor el bien de la Iglesia universalraquo

Con el fin de dar a los obispos laquola posibilidad de participar maacutes abierta y eficazmente en Nuestra solicitud por la Iglesia universalraquo dice el Papa laquomotu proprio y en virtud de Nuestra autoridad apostoacutelica erigimos y constituimos en esta ciudad de Roma un consejo estable de obispos para la Iglesia universal sujeto directa e inmediatamente a Nuestra autoridad al que designamos con el nombre propio de Siacutenodo de los obisposraquo103

Se trata de una institucioacuten eclesiaacutestica central que representa a todo el episcopado catoacutelico perpetua por su naturaleza que en cuanto a la estructura desarrolla sus tareas de modo temporal y ocasional104 Tales tareas consisten por la naturaleza misma del Siacutenodo en laquodar informa-ciones y consejosraquo al Papa la potestad deliberativa soacutelo puede serle con-cedida por el Papa laquoal que corresponde en tal caso ratificar la decisioacuten del Siacutenodoraquo105

Apostolica sollicitudo estableciendo esmeradamente la naturaleza y la funcioacuten de este laquoconsejo permanente de sagrados pastoresraquo nunca hace referencia a la colegialidad ni siquiera en el caso de una eventual potestad deliberativa del Siacutenodo106 Este dato es elocuente en cuanto a la intencioacuten

102 La publicacioacuten del motu proprio Apostolica Sollicitudo es del 15 de septiembre de 1965 el diacutea siguiente a la apertura de la cuarta sesioacuten conciliar En el discurso de apertura el Papa preanuncioacute laquola institucioacuten deseada por este concilio de un Siacutenodo de los obispos que compuesto de presuli nombrados en su mayor parte por las conferencias episcopales con Nuestra aprobacioacuten seraacute convocado por el Romano Pontiacutefice seguacuten las necesidades de la Iglesia para su consulta y colaboracioacuten cuando eso le parezca a oportuno por el bien general de la Iglesiaraquo in EV 1 355

103 En el punto III se reitera que laquoel Siacutenodo de los obispos estaacute sometido directa e inme-diatamente a la autoridad del Sumo Pontiacuteficeraquo in EV 2 448

104 Apostolica Sollicitudo I in EV 2 445105 Ibid II in EV 2 447106 Ibid

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del pontiacutefice de instituir un organismo focalizado en la ayuda al primado prescindiendo de los teacuterminos de la Nota explicativa praevia ndashretomada sin embargo praacutecticamente al pie de la letra en el motu propio que en los puntos 3 y 4 incluso con todas las cautelas para la defensa del primado107 preveiacutea la posibilidad de una accioacuten del Colegio cual laquosujeto de supremo y pleno poder sobre la Iglesia universalraquondash

Naturalmente la aclaracioacuten de la Nota en la que se afirma que laquola distincioacuten no es entre el Romano Pontiacutefice y los obispos entendidos de manera colectiva sino entre el Romano Pontiacutefice tomado separadamente y el Romano Pontiacutefice junto con los obisposraquo108 ofrecioacute esta viacutea de esca-pe sin contradecir la afirmacioacuten de LG 22 aprobado por el aula acerca de laquoel orden de los obispos [que] incluso es en unidad con [una cum] su cabeza el Romano Pontiacutefice y nunca sin ella sujeto de plena y suprema autoridad sobre toda la Iglesiaraquo

En realidad las dos formulaciones no son alternativas a condicioacuten de que se entienda la primera como alusioacuten a la naturaleza y la segunda como alusioacuten al ejercicio de la colegialidad dicho de otra manera existen dos sujetos ndashel Papa y el Colegiondash que tienen plena y suprema potestad sobre la Iglesia pero el segundo no puede ejercer su potestad si no es cum Petro y nunca sine Petro cabeza del Colegio No se trata por tanto de dos formas diferenciadas de ejercicio del primado sino del ejercicio diferenciado de dos potestades supremas en el que la segunda no puede activarse maacutes que cum Petro y nunca sine Petro y solo consentiente Capite109

Se podriacutea decir parafraseando el Vaticano II que laquocomo el Papado es de institucioacuten divina del mismo modo lo es el Colegio tambieacuten este tiene sus derechos en virtud de tal institucioacuten que el Papa no tiene ni el derecho ni el poder de cambiarraquo110 Al Papa le corresponde en cambio el derecho y el deber de determinar los modos de ejercicio de la colegia-lidad para que este servicio no falte a la Iglesia se trata de un ulterior aspecto en el ejercicio del primado que emerge con la aclaracioacuten expresa

107 laquoPertenece al juicio del Sumo Pontiacutefice a quien se le ha confiado el cuidado de todo el rebantildeo de Cristo determinar seguacuten las necesidades de la Iglesia que cambian con los tiempos la forma como convenga realizar este cuidado de forma personal o colegiada El Romano Pontiacutefice procede seguacuten su propio cristerio al regular promover o aprobar la actuacioacuten del Colegio con miras al bien de la Iglesiaraquo Nota explicativa praevia punto 3 in EV 1453

108 Nota explicativa praevia punto 4 in EV 1454109 Ibid110 DH 3115

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de la doctrina sobre el Colegio que no puede ser tal sin su cabeza Tam-poco el hecho de que exista un ejercicio personal del primado excluye ni hace superfluo el ejercicio de la colegialidad Papa y Colegio no com-piten sino que estaacuten en una relacioacuten sineacutergica al servicio de la Iglesia cada uno seguacuten su propia funcioacuten Es maacutes la Iglesia es constitutivamente sinodal y activar la colegialidad como modalidad habitual de laquocuidado del rebantildeo de Cristoraquo deberiacutea ser la forma de ejercicio maacutes alta y legiacuteti-ma del primado sin que esto signifique una limitacioacuten o la cesioacuten de una cuota de potestad

La funcioacuten de cabeza del Colegio no solo no perjudica la funcioacuten per-sonal del Papa como laquovicario de Cristo y pastor de la Iglesia Univer-salraquo111 sino que la resalta poniendo en primer plano su ser laquoprincipio y fundamento perpetuo y visible de unidad tanto de los obispos como de la muchedumbre de los fielesraquo112 Por otro lado el hecho de que le corres-ponda al Papa determinar las modalidades de ejercicio de la colegialidad maacutes que un liacutemite impuesto a la potestad del Colegio deberiacutea aparecer como el requisito capaz de encaminar y garantizar el efectivo ejercicio de la colegialidad113

Representado debidamente en su naturaleza el Siacutenodo de los obispos puede constituir el lugar habitual de ejercicio de la colegialidad con la decisioacuten de llamar al episcopado al cuidado pastoral de la Iglesia no como una insercioacuten estable de obispos en el organigrama de la curia romana sino a traveacutes de un acto colegial de discernimiento que sepa in-dicar a la Iglesia la viacutea que hay que recorrer en el camino hacia el Reino de Dios Es esta la tarea maacutes propia de los pastores a quienes se dice laquoexaminadlo todo cuidadosamente y retened lo buenoraquo (1 Tes 519-21) En ese caso laquoel Siacutenodo de los obispos representando al episcopado ca-toacutelico se convierte en expresioacuten de la colegialidad episcopal dentro de una Iglesia del todo sinodal [hellip] Ello manifiesta la collegialitas affectiva

111 Nota explicativa praevia punto 3 in EV 1453112 LG 23 que cita el proemio de Pastor Aeternus in DH 3051113 El Papa especifica en su discurso pronunciado con ocasioacuten del 50ordm aniversario de la

institucioacuten del Siacutenodo laquoEl hecho de que el Siacutenodo actuacutee siempre cum Petro et sub Petro ndashpor tanto no soacutelo cum Petro sino tambieacuten sub Petrondash no es una limitacioacuten de la libertad sino una garantiacutea de la unidad En efecto el Papa es por voluntad del Sentildeor laquoel principio y fundamento perpetuo y visible de unidad tanto de los obispos como de la muchedumbre de fielesraquo Con esto enlaza el concepto de hierarchica communio empleado por el concilio Vaticano II los obispos se unen con el Obispo de Roma por el viacutenculo de la comunioacuten episcopal (cum Petro) y estaacuten al mismo tiempo jeraacuterquicamente subordinados a eacutel como cabeza del Colegio (sub Petro)

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que incluso puede convertirse en algunas circunstancias en lsquoefectivarsquo que une a los obispos entre ellos y con el Papa en la dedicacioacuten al Pueblo de Diosraquo114

Esto puede ocurrir a condicioacuten de que los sujetos del proceso sinodal ndashPueblo de Dios Colegio de los obispos y cabeza del Colegiondash esteacuten estrechamente vinculados y sus funciones se pongan en sinergia fecun-da De este modo todos en la Iglesia encuentran su lugar y desarrollan su cometido el Pueblo de Dios con el reconocimiento de su participa-cioacuten en la funcioacuten profeacutetica de Cristo (LG 12) el Colegio que puede concretar en el siacutenodo laquola solicitud por toda la Iglesiaraquo (LG 23) y el Papa que laquono estaacute por siacute mismo por encima de la Iglesia sino dentro de ella como bautizado entre los bautizados y dentro del Colegio episco-pal como obispo entre los obispos llamado a la vez ndashcomo Sucesor del apoacutestol Pedrondash a guiar a la Iglesia de Roma que preside en la caridad a todas las Iglesiasraquo115

26 El Siacutenodo de los obispos

Seguacuten la actual normativa canoacutenica116 el Siacutenodo de los obispos no se manifiesta como expresioacuten de la colegialidad episcopal al menos por tres motivos la escasa capacidad de representar al Colegio la composicioacuten de la asamblea sinodal y el caraacutecter meramente consultivo Estos motivos se encuentran estrechamente conectados entre siacute y determinan la naturaleza del Siacutenodo se resuelven partiendo de la colegialidad o como ayuda a la funcioacuten de primado del Papa

La legislacioacuten vigente es detallada y minuciosa al fijar las normas relativas a la eleccioacuten de los obispos participantes en el Siacutenodo por parte de las Conferencias episcopales Pero por maacutes que los mecanismos de eleccioacuten esteacuten inspirados en el criterio de proporcionalidad el hecho de que los electos no representen a los otros obispos priva a la asamblea sinodal de la capacidad de expresar el Colegio y sus actos del caraacutecter colegial pues esto podriacutea suceder uacutenicamente si actuase el Colegio en cuanto tal o una parte del mismo que lo representase de manera efectiva

114 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

115 Ibid116 Cfr CIC 83 cc 342-348 y las disposiciones del Ordo Synodi Episcoporum del 29-

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y concreta Pero esto no ha sido nunca expresado ni en Apostolica solle-citudo ni posteriormente117

La dificultad de los obispos electos para representar al Colegio se obstaculiza profundamente con la norma introducida por el Coacutedigo que determina que la asamblea sinodal deba estar compuesta por laquouna mayoriacutea de obisposraquo118 Esta determinacioacuten implica que los actos de tal asamblea no se refieren al Colegio compuesto tan solo de obispos119 Naturalmente no falta quien cree que una asamblea compuesta de una mayor variedad con una cuota significativa de laicos hombres y muje-res representariacutea mejor a la Iglesia Pero maacutes allaacute de las dificultades que hay en fijar los criterios de representatividad del Pueblo de Dios habriacutea que preguntarse en tal caso queacute sentido tendriacutea entonces hablar de Siacutenodo de los obispos Se suele insistir en la normativa vigente sobre el caraacutecter consultivo del Siacutenodo

Huelga decir que si se tratase de una asamblea de obispos capaz de representar efectivamente al Colegio y dado que sus acciones seriacutean ma-nifestacioacuten de un laquosujeto de suprema y plena potestad sobre toda la Igle-siaraquo estas no podriacutean ser meramente consultivas Basta esto para llegar a la conclusioacuten de que el Siacutenodo de los obispos tal como estaacute concebido y como ha desarrollado su actividad en estos uacuteltimos cincuenta antildeos es con toda evidencia un organismo que ayuda al primado y no una expresioacuten del Colegio de los obispos Con esta configuracioacuten la normativa actual es completamente congruente en cuanto que regula la actividad de una asamblea compuesta en su mayoriacutea de obispos convocados laquopara prestar ayuda con su consejo al Romano Pontiacutefice colaborando en la salvaguardia y en el incremento de la fe y las costumbres la observancia y la consolida-

117 A menos que no se entienda en este sentido el empleo repetido del teacutermino raepre-sentansrepresentantes en el Ordo Synodo de 2006 que podriacutea abrir una viacutea a la solucioacuten del problema Se percibe en todo caso la debilidad de la normativa actual con respecto de la praxis maacutes antigua en la que los arzobispos los metropolitas y los patriarcas representaban efectivamente a los obispos con voto a nivel de metroacutepolis provincias y regiones eclesiaacutesti-cas y patriarcados Incluso fueron figuras importantes las de los legados que tuvieron una tarea efectiva de representacioacuten Por esto seriacutea muy uacutetil como dice el Papa reflexionar laquoso-bre las instancias intermedias de la colegialidad quizaacutes integrando y poniendo al diacutea algunos aspectos del antiguo orden eclesiaacutesticoraquo

118 Cfr CIC 83 c 346119 La objecioacuten no es vaacutelida naturalmente si el Siacutenodo de los obispos es un organismo

dirigido uacutenicamente a ayudar al Papa en el ejercicio de su ministerio en ese caso eacutel a su dis-crecioacuten puede establecer no solamente la composicioacuten sino tambieacuten cualquier otro aspecto que configure el organismo

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cioacuten de la disciplina eclesiaacutestica incluyendo el estudio de los problemas relativos a la actividad de la Iglesia en el mundoraquo120 Es oportuno adoptar el criterio de proporcionalidad al convocar a los obispos pero debe re-cordarse que el Papa podriacutea seguacuten su juicio cambiar reglas y criterios incluida la configuracioacuten misma del Siacutenodo hasta la eleccioacuten extrema de suprimirlo trataacutendose de un organismo al servicio del primado y del cual eacutel puede disponer seguacuten elija

Una vez clarificado este punto insistir sobre una mayor colegialidad resultariacutea fuera de lugar aunque el Papa atribuyera ndashsiempre o soacutelo en al-guacuten casondash capacidad deliberativa a la asamblea se tratariacutea de una conce-sioacuten de la potestad del primado y no de un ejercicio de la potestad colegial en sentido estricto la cual precisamente por pertenecer al Colegio no puede ser ni concedida ni revocada sino uacutenicamente regulada121 Muchas expectativas creadas sobre el Siacutenodo han provocado y provocaraacuten pro-fundas desilusiones porque se sostienen sobre la base del malentendido de que se trata de un organismo colegial al que se le otorgan atribuciones que debido a la actual normativa no le pertenecen como queda claro en los mismos caacutenones del Coacutedigo de Derecho Canoacutenico122

No es tanto la norma la que crea el conflicto sino su colocacioacuten el ca-piacutetulo sobre el Siacutenodo de los obispos aparece en la seccioacuten I de la parte II La constitucioacuten jeraacuterquica de la Iglesia La seccioacuten desarrolla la laquosuprema autoridad de la Iglesiaraquo subdividiendo la temaacutetica en dos artiacuteculos el relativo al Romano Pontiacutefice y el que se refiere al Colegio de los obispos Hallamos aquiacute el mismo nudo no resuelto de la Nota explicativa praevia la formulacioacuten en singular si bien por una parte asume al Colegio de los obispos en este aacutembito como laquosujeto de suprema y plena potestad sobre la Iglesia universalraquo123 retomando al pie de la letra LG 22 por otro lado lo aiacutesla completamente encuadrando su ejercicio en la forma solemne del concilio ecumeacutenico124 La composicioacuten iacutentegra de la parte II del Coacutedigo refuerza esta impresioacuten en cuanto que el canon de apertura se limita a repetir que laquoel Romano Pontiacutefice sucesor de Pedro y los obispos suce-

120 CIC 83 c 342121 Lo demuestra el caso del concilio ecumeacutenico que compete al Papa convocar y sus-

pender pero que una vez convocado manifiesta la misma potestad de asamblea de obispos que ejercen su potestad sobre la Iglesia siempre con y nunca sin su cabeza

122 Cfr CIC 83 cc 342-348123 CIC 83 c 336124 CIC 83 cc 337-341

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sores de los Apoacutestoles estaacuten vinculados entre ellosraquo125 sin aclarar que la suprema autoridad de la Iglesia pertenece a dos sujetos diferenciados el Papa y el Colegio de los obispos y sobre todo porque no relaciona el Siacutenodo de los obispos y las Conferencias episcopales con el Colegio en la perspectiva del ejercicio de la colegialidad126

Las razones que han llevado a los Papas a elegir un Siacutenodo de los obis-pos como organismo dirigido a la ayuda del primado son comprensibles el riesgo de comprometer elementos constitutivos de la Iglesia imponiendo un sistema de gobierno inspirado en el modelo de la sociedad civil pudo justificar las cautelas Pero la cuestioacuten es si por temor a debilitar el pri-mado no se avaloacute una configuracioacuten demasiado deacutebil de la colegialidad y en relacioacuten con ella del Siacutenodo de los obispos Tal eleccioacuten acaba por ahogar las enormes potencialidades de un organismo que si se concibiera como expresioacuten adecuada de la colegialidad ofreceriacutea la clave para la rea-lizacioacuten de la tarea de discernimiento eclesial necesario para conformar una Iglesia sinodal Por otra parte precisamente los acontecimientos de estos cincuenta antildeos dominados por una conflictividad que ha probado duramente al cuerpo eclesial poniendo con ello en riesgo la unidad invita a sondear posibilidades de este tipo traduciendo la colegialidad en formas concretas de ejercicio a traveacutes de decisiones compartidas en el discerni-miento cum Petro et sub Petro la asamblea sinodal puede ser el lugar y el instrumento para madurar por fin un camino compartido de Iglesia

27 Conclusioacuten abierta el Siacutenodo para una Iglesia del todo sinodal

Al aclarar las prerrogativas del sucesor de Pedro el Vaticano II insistioacute en el hecho de que la afirmacioacuten del primado no fuese en perjuicio de la laquopotestad ordinaria e inmediata de los obispos en sus dioacutecesisraquo al con-trario laquoesta misma potestad es afirmada reforzada y defendida seguacuten el

125 CIC 83 c 330126 El Siacutenodo aparece en el capiacutetulo II (can 342-348) antes de los organismos cla-

ramente vinculados al primado los cardenales (cap III can 349-359) la curia romana (cap IV can 360-361) los legados del Papa (cap V can 362-367) En teoriacutea podriacutea tratarse de un organismo ligado al Colegio puesto que se menciona justo despueacutes de los caacutenones sobre el Colegio de los obispos pero obstaculiza esta lectura el can 334 seguacuten el cual laquoen el ejercicio de su oficio el Romano Pontiacutefice es asistido por los obispos que pueden cooperar con eacutel de diferentes maneras una de las cuales es el Siacutenodo de los obisposraquo Las Conferencias episcopales aparecen luego nada menos que en el cap IV (can 447-459) de la seccioacuten II sobre las Iglesias particulares y sus agrupaciones imposible establecer cualquier viacutenculo de estas con el Colegio y con el ejercicio de la colegialidad

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dicho de Gregorio Magno lsquoMi honor es el honor de la Iglesia universal Mi honor es el soacutelido vigor de mis hermanos Entonces me siento realmente honrado cuando no es negado el honor debido a cada uno de ellosrsquoraquo127

Si la afirmacioacuten podiacutea parecer retoacuterica en el momento de definir el pri-mado de jurisdiccioacuten sobre la Iglesia universal hoy puede convertirse en profeacutetica si el obispo de Roma asume como tarea propia ndashy como su ho-norndash afirmar reforzar y defender al Colegio de los obispos que el concilio Vaticano II ha definido como laquosujeto de plena y suprema potestad sobre la Iglesiaraquo promoviendo un ejercicio efectivo de la colegialidad en una Igle-sia del todo sinodal Tal eleccioacuten no solo pondriacutea en acto el texto conciliar que hasta hoy ha quedado no resuelto en la sustancia sino que permitiriacutea desarrollar una comprensioacuten de la sinodalidad en liacutenea con el desarrollo de la Tradicioacuten del segundo milenio en Occidente que ha pasado por el proceso de aclaracioacuten respecto a la potestad del sucesor de Pedro llegando a su plena maduracioacuten en el Vaticano I y a la luz de aquel respecto a la potestad del Colegio de los obispos en el Vaticano II

A diferencia de quien ve posible la sinodalidad con independencia de la colegialidad128 estoy persuadido de que una viacutea catoacutelica hacia la sino-dalidad fiel a su propio camino en la historia no puede prescindir de aquel proceso maacutes bien tiene que mantenerlas unidas y establecer con una di-naacutemica de circularidad fecunda primado colegialidad y sinodalidad Esta solucioacuten estaacute en evidente continuidad con el concilio129 el cual ademaacutes de resituar la funcioacuten petrina dentro del Colegio tambieacuten ha insertado el ministerio jeraacuterquico dentro de la vida del Pueblo de Dios poniendo las bases para aquella singularis Antistitum et fidelium conspiratio que es conditio sine qua non de la sinodalidad En la unidad de los tres teacuterminos deberiacutea superarse la idea de cualquier competicioacuten entre Papa y Colegio puesto que los dos estaacuten al servicio del Pueblo de Dios cada uno seguacuten su propia naturaleza y funcioacuten

Tras haber pasado cincuenta antildeos del final del concilio ya no tiene sentido posponer un ejercicio pleno de la colegialidad por miedo a que resulten perjudicadas las prerrogativas del primado que quedan intactas tambieacuten en el marco de una Iglesia sinodal Es tiempo de traducir en mo-

127 CONCILIO VATICANO I Const dogmaacutetica Pastor aeternus cap 3 DH 3061128 Cfr por ejemplo E CORECCO Ontologia della sinodalitagrave in G BORGONOVO -

A CATTANEO (coord) Ius et communio Casale Monferrato 1997 83-84129 Cfr supra sectsect 23-6

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dalidades operativas el hecho de que laquoel Romano Pontiacutefice en el cumpli-miento del oficio de supremo Pastor de la Iglesia siempre estaacute vinculado en la comunioacuten con los otros obispos mejor dicho con toda la Iglesiaraquo130 laquoEl derecho a determinar seguacuten las necesidades de la Iglesia el modo personal o colegial de ejercer tal oficioraquo131 maacutes que una baza en defensa del primado deberiacutea ser entendida como garantiacutea de una activacioacuten efecti-va de la doble modalidad en que se articula el gobierno de la Iglesia Que la eleccioacuten de una modalidad o de otra no esteacute vinculada normativamente sino que dependa de un principio discrecional por el bien de la Iglesia no puede convertir de ninguacuten modo en accesoria la funcioacuten del Colegio que existe statuente Domino132 En otras palabras laquoordenar promover y apro-bar el ejercicio colegial teniendo como objetivo el bien de la Iglesiaraquo133 es una tarea que corresponde en conciencia al Papa quien tiene que rendir cuentas no a los hombres sino a Dios mismo

De este modo eacutel que estaacute por encima ndasho quizaacutes sea mejor decir delan-tendash del Colegio en virtud de la funcioacuten primada con la potestad de activar y de cerrar ndashtambieacuten primero si lo quisierandash la accioacuten colegial puede estar asimismo con y entre los otros obispos dentro del Colegio hermano entre los hermanos obispos en escucha del uacutenico Espiacuteritu sin que esto en ninguacuten modo vaya a perjudicar el primado134

En esta tarea de convocar a los obispos a la accioacuten colegial (cfr LG 22) el Papa puede reconocerle al Siacutenodo de los obispos capacidad colegial configuraacutendolo como expresioacuten adecuada del Colegio de los obispos y no soacutelo como un organismo que asiste al primado En ese caso la asamblea sinodal no deberiacutea estar compuesta en su mayoriacutea de obispos135 sino solo

130 CIC 83 c 333 sect 2131 Ibid132 Se trata de la frase utilizada en LG 22 para fundar sobre la base de la unidad entre

Pedro y los otros apoacutestoles la existencia del Colegio de los apoacutestoles del cual se hace depen-der pari ratione la existencia del Colegio de los obispos basado en la unioacuten entre el Sucesor de Pedro y los otros obispos Manteniendo este paralelismo las mismas argumentaciones usadas para fundar la institucioacuten divina del primado en virtud de la sucesioacuten petrina tambieacuten valen para el Colegio de los obispos sucesores de los apoacutestoles

133 Nota explicativa praevia punto 3 in EV 1 453134 Merece la pena citar de nuevo el discurso del Papa en la conmemoracioacuten del 50ordm ani-

versario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos laquoEstoy convencido de que en una Iglesia sinodal tambieacuten el ejercicio del primado petrino podraacute recibir mayor luz El Papa no estaacute por siacute mismo por encima de la Iglesia sino dentro de ella como bautizado entre los bautizados y dentro del Colegio episcopal como obispo entre los obispos llamado a la vez ndashcomo Sucesor del apoacutestol Pedrondash a guiar a la Iglesia de Roma que preside en la caridad a todas las Iglesiasraquo

135 Cfr CIC 83 c 346

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de obispos No deberiacutea ser difiacutecil encontrar criterios y procedimientos aptos para dar a la asamblea sinodal la capacidad de representar ndashy pre-sentarndash al Colegio criterios que seraacuten tanto maacutes convincentes cuanto maacutes representativa conviertan la asamblea de la Ecclesia tota136

Tampoco seriacutean necesarias grandes alteraciones de la normativa vigen-te para poner en praacutectica esta forma de sinodalidad Todo el camino sinodal se desarrollariacutea siguiendo las condiciones indicadas por el Papa Francis-co para los distintos niveles de ejercicio de la sinodalidad y de hecho ya puestos en marcha en los dos uacuteltimos siacutenodos Bastariacutea con articular el acontecimiento sinodal seguacuten los tres momentos anteriormente descritos la escucha del Pueblo de Dios el discernimiento por parte de la asamblea sinodal y la realizacioacuten por parte del entero cuerpo eclesial

Inicialmente seriacutea necesario formalizar la escucha del Pueblo de Dios como primer momento del Siacutenodo el instrumento de consulta ya usado en el pasado por los Papas para verificar el consensus fidelium respecto a cuestiones doctrinales puede ser el medio maacutes idoacuteneo para implicar activamente a todos los bautizados en el proceso sinodal137 Despueacutes de la parte del Pueblo de Dios viene la de los pastores reunidos en asamblea sinodal y llamados al discernimiento para sentildealar las decisiones necesa-rias que sirvan al camino de la Iglesia

Insisto en reiterar que este es el momento propio de los pastores solo bajo tal condicioacuten es posible pasar de un acto consultivo a uno colegial y solo a condicioacuten de que se deacute tal paso es posible que el discernimiento del

136 En otras palabras se deberiacutea hacer evidente en los actos colegiados aquella corres-pondencia entre communio fidelium communio Ecclesiarum y communio hierarchica que se pone de manifiesto en el Colegio incluso la funcioacuten petrina sale ganando puesto que el Papa se vuelve principio y fundamento visible de la unidad tanto de la communio Episco-porum como de la communio Ecclesiarum y de la communio fidelium tal como se pone de re-lieve en LG 23 Naturalmente siguiendo este enfoque seriacutea necesario replantearse la funcioacuten de los obispos titulares verificando de queacute modo una presencia excesivamente dilatada de estos en el Colegio no solo haga problemaacutetica la capacidad del Colegio mismo para represen-tar a la Iglesia sino que acabe por debilitar el ministerio episcopal fundado en la Tradicioacuten sobre el viacutenculo esponsal del obispo con su Iglesia

137 Es evidente que las formas de consulta deben repensarse y perfeccionarse para sal-vaguardar a los bautizados de los grupos de comunicacioacuten y de presioacuten pero la consulta sigue siendo una oportunidad extraordinaria de participacioacuten en la loacutegica de una corresponsabili-dad que le reconoce al Pueblo de Dios un lugar en el proceso sinodal Por otro lado la uacutenica posibilidad de ir maacutes allaacute de una posicioacuten amorfa de la opinioacuten puacuteblica es una formacioacuten continua de los bautizados en el sensus christianus esta formacioacuten es posible uacutenicamente en una experiencia continua de participacioacuten que encuentra su nuacutecleo maacutes favorable en las estructuras de la Iglesia particular Es como decir que un crecimiento del sensus fidei lleva impliacutecito un camino sinodal de las Iglesias particulares

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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Siacutenodo tenga valor sinodal es decir que sea vinculante para toda la Igle-sia138 En el caso de que las decisiones de la asamblea asumiesen caraacutecter sinodal toda la Iglesia y todos en la Iglesia estariacutean llamados a observar-las y a ponerlas en acto cada uno seguacuten su propia condicioacuten y funcioacuten139 Lo importante es que los tres momentos se distingan debidamente y con maacutergenes de tiempo evitando superposiciones que acabariacutean por originar procesos confusos y decisiones no suficientemente verificadas De este modo seriacutea de veras evidente que laquoen una Iglesia sinodal el Siacutenodo de los obispos es la manifestacioacuten maacutes evidente de un dinamismo de comunioacuten que inspira todas las decisiones eclesialesraquo140

138 Se puede objetar que las proposiciones del Siacutenodo o cualquier otro documento que proceda de este no tienen caraacutecter vinculante y que cualquier accioacuten de este depende de la aprobacioacuten del Papa quien normalmente se reserva la facultad de promulgar una exhortacioacuten postsinodal En su discurso del 50deg aniversario del Siacutenodo el Papa Francisco dice sin embargo que laquoel camino sinodal culmina en la escucha del Obispo de Roma llamado a pronunciarse como Pastor y Doctor de todos los cristianos no partiendo de sus convicciones personales sino como supremo testigo del fides totius Ecclesiae lsquogarante de la obediencia y la conforma-cioacuten de la Iglesia a la voluntad de Dios al evangelio de Cristo y a la Tradicioacuten de la Iglesiarsquoraquo Este es el uacutenico modo de dar valor a los actos del Siacutenodo de los obispos en la normativa vigente Seriacutea diferente si la asamblea sinodal tuviese caraacutecter colegial en dicho caso el Papa podriacutea elegir la misma modalidad de reconocimiento de los documentos conciliares firmando una cum Patribus los decretos sinodales o incluso remitieacutendolo a todos los obispos para que se convierta en acto colegial compartido por todos los miembros del Colegio

139 En el momento de la puesta en praacutectica encuentra su lugar tambieacuten la Curia romana Entre otras cosas en la perspectiva de una Iglesia constitutivamente sinodal la reforma de la Curia de la que tanto se habla podriacutea orientarse en esta direccioacuten reconfiguraacutendose como estructura al servicio de la Iglesia universal Puesto que depende del Papa como principio y fundamento de unidad de la communio fidelium de la communio Ecclesiarum y de la com-munio Episcoporum laquoordenar promover y aprobar el ejercicio colegialraquo (Nota explicativa praevia n 3) la funcioacuten subordinada de la Curia (que es y se mantiene como oacutergano ejecu-tivo) se desarrollariacutea en el servicio a la accioacuten tanto primada como colegial Por otro lado si la verdad y la credibilidad de una eleccioacuten se miden tambieacuten seguacuten la energiacutea que se invierte para ponerla en acto la estructura de servicio a la Iglesia que sea constitutivamente sinodal no puede ser solamente la Secretariacutea del Siacutenodo frente al nuacutemero de congregaciones y consejos delegados al servicio del primado Este gap no puede y no tiene que ser solucionado con la creacioacuten de una estructura paralela a la Curia sino con la reconversioacuten de la Curia romana con debidas cesiones de competencias a organismos no centralizados como estructura al servicio tambieacuten de la sinodalidad En ese caso despueacutes de todos los discursos sobre la re-forma de la Curia un organismo que muchos consideran un problema podriacutea transformarse en recurso y favorecer la afirmacioacuten de una Iglesia sinodal

140 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos

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Mater Clementissima 1 (2016) 59-120

El hombre es sujeto y persona La relacioacuten entre trascendentalidad

y antropologiacutea en Karl Rahner

Juan Manuel CabieDas teJero1

Universidad Pontificia de Meacutexico

resuMen El meacutetodo trascendental que guiacutea el proyecto teoloacutegico de Karl Rahner per-mite seguir proponiendo hoy la revelacioacuten del Dios de Jesucristo como espacio de correspondencia entre la compleja loacutegica de la existencia humana (fenoacutemeno) y su vocacioacuten a la Verdad (fundamento) entre la vida personal del hombre (experiencia subjetiva y realizacioacuten histoacuterica) y la confesioacuten de fe Este artiacuteculo pretende sin-tetizar el modo en que la obra de Karl Rahner confirma que no se puede pensar la salvacioacuten del hombre como pura apetencia del espiacuteritu sino como posibilidad de autotrascendencia teologal en el seno de una naturaleza contingente (corpoacuterea mun-dana libre mortal y capaz de amor)

palabras ClaVe Karl Rahner antropologiacutea trascendental sujeto persona filosofiacutea moderna

abstraCt laquoMan is subject and person Karl Rahner on relationship between trans-cendentality and anthropologyraquo Even today the transcendental Method that gui-des Karl Rahnerrsquos theological Project is able to propose Godrsquos Revelation in Jesus Christ as correspondence between complex logic of human existence (phenomenon) and its vocation to Truth (foundation) between personal life (subjective experience and historical realization) and the confession of Faith This paper draws a sketch of Rahnerrsquos work to confirm that human salvation can not be thought as pure spiritual appentency but as possibility of theological auto-transcendence within contingent nature (corporeal worldly free mortal and capable of love)

KeyworDs Karl Rahner transcendental Anthropology Subjet Person modern Philo-sophy

1 Miembro de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos En 2012 obtuvo el doctorado en Teologiacutea por la Pontificia Universitagrave Gregoriana (Roma) Ha publicado el libro laquoLa persona es criatura amorosa Perspectivas para una antropologiacutea teoloacutegicaraquo Valencia 2013 ademaacutes de varios artiacuteculos en revistas especializadas Actualmente es profesor en la Facultad de Teologiacutea de la Universidad Pontificia de Meacutexico Entre 2008 y 2012 fue vice-rrector del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma

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MArco y propoacutesito

Estimulada fundamentalmente por el neo-kantismo y la fenomenolo-giacutea la filosofiacutea contemporaacutenea ha valorado la necesidad de laquovolver sobre lo trascendental esto es sobre lo a priori considerado en su relacioacuten con la experienciaraquo2 y de indagar por tanto en queacute medida el yo del laquoyo piensoraquo habriacutea de ser considerado no un entendimiento puro sino una primera persona

Lejos de que tengamos que deducir el principio de la posibilidad de la experiencia del hecho indubitable de la conciencia de siacute como lo habiacutean pensado Descartes y los idealistas fichteanos el anaacutelisis trascendental nos obliga a invertir estas posiciones y no admitir la unidad de conciencia maacutes que a tiacutetulo de correlato copernicano de la unidad de la experiencia posible El cogito no se salva maacutes que perdieacutendose en su propia actividad 3

Se salva salvando su circunstancia diriacutea Joseacute Ortega y Gasset 4 para quien desde los inicios de su visioacuten de la razoacuten como razoacuten vital el su-jeto es siempre espectador (yo) inserto en el flujo del paisaje de su vida Espectador desinteresado (trascendente) mas no espectador indiferente que pueda encaramarse a una atalaya que lo ponga a salvo del riesgo in-herente de comprometerse con el mundo que lo solicita laquocon sus taacutecitas fisonomiacuteas de humildad y anheloraquo5 Husserl Scheler Heidegger Ortega etc participan con los necesarios matices de sensibilidad de un mis-mo intereacutes por profundizar en la actividad del pensar que nos constituye mas no como propiedad de un sujeto puramente formal y autoacutenomo sino como expresioacuten de su concreta forma de ser ser en el mundo (temporal encarnado relacionado mortalhellip)

Lejos de ahondar la distancia entre teologiacutea y filosofiacutea esta cualifi-cacioacuten moderna de la instancia subjetiva se revela referente ineludible para restituir a la inteligencia teoloacutegica aquel espacio reflexivo que como contempla ahora la filosofiacutea es el hombre en cuanto ser personal El pen-

2 M DUFRENNE La nocioacuten de laquoa prioriraquo Salamanca - Meacutexico DF 2010 12 El autor recusa en esta obra una concepcioacuten demasiado formal de lo trascendental proponiendo que entre lo singular (constituido) y lo universal (constituyente) no existe oposicioacuten es decir la trascendentalidad del sujeto (conocimiento y voluntad) ha de aprehenderse como factor defini-torio de su naturaleza ya nos refiramos a la misma en su caraacutecter corpoacutereo social o mundano

3 Ibid 29-30 Estas palabras son cita a su vez de J VUILLEMIN Lrsquoheacuteritage kantien et la reacutevolution copernicienne Fichte Cohen Heidegger Paris 1954 186

4 J ORTEGA Y GASSET Meditaciones del Quijote 775 Ibid 65

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samiento moderno insta y provoca el replanteamiento de la fundacioacuten an-tropoloacutegica del saber de Dios El liacutemite de la visioacuten neo-escolaacutestica no residiacutea en la reivindicacioacuten de un conocimiento natural de Dios sino en su modelado como extriacutenseco al saber de la fe La recuperacioacuten de la unidad del fin uacuteltimo del hombre no implica la remocioacuten de aquel conocimien-to sino la restitucioacuten de su cualidad teologal es decir la pregunta por la identidad del hombre como destinatario y por tanto co-protagonista de la accioacuten salviacutefica de Dios en la historia

Una atencioacuten maacutes cuidadosa a la dinaacutemica dialogal de la relevacioacuten (cfr DV 2) al hondo alcance humanizador del dogma de la encarna-cioacuten (cfr GS 22) y al caraacutecter sacramental de la naturaleza y misioacuten de la comunidad de los creyentes (cfr LG 1) ha llevado a la teologiacutea a pro-poner una antropologiacutea teoloacutegica que junto a la irrenunciable solicitud por las exigencias del comprender y querer humano como apertura ilimi-tada al Ser (a priori) preste decidida atencioacuten a la trascendentalidad de los interrogantes fundamentales que emergen de la existencia histoacuterica del hombre (a posteriori) al hacer experiencia de siacute mismo en el seno de lo real circundante La especiacutefica vivencia humana del cuerpo de la rela-cioacuten con el otro o de la muerte y el tiempo entre las experiencias funda-mentales disentildea una meta-antropologiacutea que permite reconocer el hondo arraigo en la historicidad humana de la experiencia religioso-subjetiva de Dios de la dinaacutemica del don de la gracia y sobre todo del misterio de la Encarnacioacuten de Dios en Jesucristo

La influyente teologiacutea trascendental del teoacutelogo alemaacuten Karl Rahner (1904-1984) ndashque hacemos objeto de estas paacuteginasndash nos brinda la oportu-nidad de acercarnos a esta comunidad de ideas que la teologiacutea catoacutelica del siglo XX comparte con la filosofiacutea centroeuropea Tanto a partir ante todo de su teologiacutea de la gracia como de su esbozo de una cristologiacutea existen-cial o laquocristologiacutea de buacutesquedaraquo6 Rahner insta a la antropologiacutea teoloacutegica a integrar una antropologiacutea metafiacutesica de tipo trascendental como espacio que permite esclarecer el viacutenculo entre la apertura constitutiva del hom-bre a Dios y su experiencia subjetiva personal esto es la asuncioacuten de lo que denomina su laquonaturaleza efectivaraquo7 o laquoesencia uacutenica y concretaraquo8 en

6 Cfr K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 345-348 Id Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica 63-66

7 Id Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET (Escritos de Teologiacutea) I 3058 Id Naturaleza y gracia in ET IV 218

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el dinamismo de su reflexividad esencial en cuanto apertura ilimitada al Ser en suma una antropologiacutea que valida lo noeacutetico (universalidad) en la experiencia concreta de una historia de libertad amor y peacuterdida de siacute (sin-gularidad) como principales existenciales de una naturaleza efectivamente abierta a aquella plenitud personal de ser que se auto-comunica efectiva-mente en Cristo como relato de Amor9 Este es el modo en que la antropo-logiacutea teoloacutegica puede evitar la asimilacioacuten reductiva de la fe a su medio trascendental asiacute como profundizar el calado histoacuterico del acontecer de la relacioacuten teologal sin prejuicio de su verdad salviacutefica uacuteltima

Cuando un teoacutelogo como Juan Alfaro cercano a la sensibilidad de Rah-ner delinea el meacutetodo de trabajo que pretende seguir en la uacuteltima obra en que estudia a fondo la mutua implicacioacuten entre la cuestioacuten del hombre y la cuestioacuten de Dios manifiesta su intencioacuten de asumir para su examen una triple determinacioacuten existencial en cuanto se parte de la existencia vivida por el hombre en el acto mismo de existir y de la laquoprecomprensioacutenraquo im-pliacutecita en esta experiencia fenomenoloacutegica en cuanto la descripcioacuten fe-nomeacutenica deja que la realidad se laquomuestreraquo y desvele asiacute las indicaciones y preguntas concretas implicadas en ella trascendental en cuanto busca los presupuestos ontoloacutegicos necesarios para la comprensioacuten de la experiencia manifestada en el fenoacutemeno laquoMeacutetodo trascendentalraquo no quiere decir sino proceder seguacuten las exigencias del comprender humano en su dinamismo de preguntar y buscar siempre ulteriormente La legitimidad de las cues-tiones concretas se justifica por su necesidad de comprender la realidad10

En efecto laquoel horizonte trascendental es en cierto modo un sistema a priori de coordenadas dentro del cual se le sentildeala al objeto temaacutetico el sitio que le hace comprensibleraquo11 En antropologiacutea teoloacutegica por ejemplo per-mite fundar el significado universal del don de la gracia como determina-cioacuten de la ex-centricidad que es propia de la naturaleza humana y no como un antildeadido extriacutenseco a la misma No obstante esta comprensioacuten de la gracia divina queda expuesta a un cierto formalismo si deja de interrogarse a fondo acerca de su relacioacuten con la experiencia efectiva del hombre como responsable de la circunstancia que habita O dicho con rigor teoloacutegico sobre el sentido y consecuencias que tiene laquola historizacioacuten de la natura-

9 Cfr E REGAN Not merely the cognitive subject Rahnerrsquos theological anthropolo-gy in P CONWAY-F RYAN (eds) Karl Rahner Theologian for the Twenty-first Century Oxford-Bern 2010 121-140

10 J ALFARO De la cuestioacuten del hombre a la cuestioacuten de Dios Salamanca 2006 25 11 K RAHNER Sobre la unidad del amor a Dios y el amor al proacutejimo in ET VI 255

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leza humana por la cristologiacutea por la manifestacioacuten de un hombre nuevo frente a la forma primitiva del hombreraquo12 Por ello junto a los contrastados beneficios que aporta el anaacutelisis trascendental a la antropologiacutea teoloacutegica como reconocimiento de que el hombre laquono puede ser nunca subjetiva y ontoloacutegicamente indiferente con relacioacuten a su orientacioacuten sobrenaturalraquo13 tanto la estructura responsorial de la revelacioacuten como el desarrollo cientiacute-fico-cultural del momento presente demandan a la teologiacutea no desatender la esfera maacutes concreta del fenoacutemeno personal humano sus preguntas esen-ciales la experiencia dramaacutetico-vital comuacuten a cada hombre en definitiva esas dimensiones donde se juega baacutesicamente la auto-comprensioacuten del sujeto contemporaacuteneo el significado de la disyuntividad corpoacuterea (mas-culinidad y feminidad) en su estrecha vinculacioacuten con la vida espiritual afectiva o biograacutefica la nativa dimensioacuten relacional de la vida humana y el alcance de significado que ostenta en la constitucioacuten ontoloacutegico-vital del hombre el variado espectro de relaciones interpersonales que este entabla en su historia la pregunta por el discurrir de la propia biografiacutea personal (ante el acontecimiento de la muerte) como dinamismo de auto-realiza-cioacuten (ser) que determina a su vez el modo en que ha de orientarse la praxis vital (deber ser) etc Y todo ello en la conciencia de que la atencioacuten a es-tos caracteres y estructuras antropoloacutegicas que se organizan en torno a la persona como punto focal debe superar la tentacioacuten del puro inventario fenomenoloacutegico y conducir a una mayor explicitacioacuten del horizonte tras-cendente ante el que el hombre realiza su intransferible historia personal como historia con sentido laquoEs preciso todaviacutea elaborar ahondar y traspa-sar metafiacutesicamente ndashsentildeala Emerich Corethndash el rico material sacado a la luz por el desarrollo maacutes reciente del pensamiento introducieacutendolo asiacute en la totalidad de una metafiacutesica cristianaraquo14 En este sentido el concepto per-sona ofrece la posibilidad de una ndashllameacutemoslandash propedeacuteutica fundamental a la antropologiacutea teoloacutegica como develacioacuten en lo concreto de la verdad

12 W PANNENBERG Fundamento cristoloacutegico de una antropologiacutea cristiana in Con-cilium 86 (1973) 413 Es la indagacioacuten sobre el sentido cristoloacutegico de la laquopersoneidadraquo el que deberiacutea servir de guiacutea a la teologiacutea cristiana ndashpor tanto de modo distinto a como lo hicieron el mismo Boecio y despueacutes de eacutel la tradicioacuten siguiendo el cauce de la filosofiacutea griegandash para llegar a saber queacute significa para el hombre ser racional ser libre ser capaz de amor etc laquoen cuanto estaacute destinado en su ser personal a la semejanza con Dios la cual se ha manifestado en la unidad de Dios y el hombre en Jesucristoraquo (Ibid 416)

13 K RAHNER Existencial II in SM (Sacramentum Mundi) III 6714 E CORETH Quehacer de la metafiacutesica in Crisis 21-24 (1959) 18

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antropoloacutegica universal de la apertura trascendental del hombre a Dios que es su origen y destino

La criacutetica ha llegado a identificar en la teologiacutea de Karl Rahner una laquoantropologiacutea excesivamente formal y abstractaraquo15 que sufre de una espe-cie de neutralidad fenomenoloacutegica al estar limitada por su matriz metafiacute-sico-trascendental para una interpretacioacuten maacutes integral de la experiencia humana en su interaccioacuten con el misterio divino iquestRige el meacutetodo tras-cendental una epistemologiacutea antropoloacutegica reductiva respecto del modelo que preside la experiencia de aquellos que creen en Cristo y viven en Eacutel Un disciacutepulo ilustre de Rahner Johann Baptist Metz propone romper el laquocerco maacutegico del trascendentalraquo mediante una dogmaacutetica histoacuterico-vital biograacutefica narrativa testimonialhellip no prevenida ante las contradicciones de la historia preocupada por redefinir la identidad testimonial del sujeto creyente frente al sujeto exaltado del cogito cartesiano y el sujeto humilla-do por la hermeneacuteutica de la sospecha16

No obstante lo ajustado de esta criacutetica dado el riesgo real ndashdel que Rahner era muy conscientendash que implica asumir el meacutetodo trascendental en teologiacutea17 proponemos visitar de nuevo la obra del teoacutelogo alemaacuten para mostrar su apuesta por una subjetividad que ante todo recela de su caraacutecter autaacuterquico y se percibe irrenunciable e iacutentimamente abierta a la trascendencia apertura que ciertamente no logra verificarse por comple-to en la experiencia ordinaria del hombre es decir en aquellas condicio-nes faacutecticas siempre uacutenicas donde ha de dirimir y decidir el sentido de siacute mismo Lo cual no significa que la atencioacuten al sujeto lleve a Karl Rahner a su absolutizacioacuten a imagen de cierto idealismo maacutes bien al contrario el meacutetodo trascendental que aplica revela un existente que no dispone de siacute en modo absoluto sino que es originaria e intriacutensecamente un espiacuteritu

15 J L RUIZ DE LA PENtildeA Espiacuteritu en el mundo La antropologiacutea de Karl Rahner in J DE SAHAGUacuteN (ed) Las antropologiacuteas del siglo XX Salamanca 1976 196

16 Cfr J B METZ La fe en la historia y la sociedad Esbozo de una teologiacutea poliacutetica fundamental para nuestro tiempo Madrid 1979 164-236 Lo cierto es que las exigencias del modelo narrativo han recibido hasta el momento maacutes atencioacuten en aacutembito filosoacutefico que teoloacutegico (cfr C THEOBALD Il cristianesimo come stile Un modo di fare teologia nella postmodernitagrave I Bologna 2009 397-416)

17 Que puede formularse en estos otros interrogantes iquestRecae la teologiacutea trascenden-tal en una metafiacutesica de la presencia entendida como mera radicacioacuten de la revelacioacuten de Dios en su visibilidad en el hombre y el mundo iquestSe deja construir esa teologiacutea a partir del hecho uacutenico de la manifestacioacuten de Dios iquestAcaso a la hora de considerar la revelacioacuten de Dios por siacute mismo no se muestra incapaz de delimitar las regiones respectivas de filosofiacutea (posibilidad) y teologiacutea (historicidad efectividad y sentido)

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finito que existe concretamente en la condicioacuten histoacuterica del ser huma-no18 esto es inserto en virtud de su esencia y no por pura casualidad en el aacutembito del espacio y el tiempo caracterizado por la mutabilidad y la contingencia19 Del mismo modo que no cabe en su sistema un divorcio entre la inefabilidad de Dios y la concrecioacuten de su presencia tampoco cabe empobrecer la autenticidad de la experiencia viva de ser hombre a favor de la verdad de fe La validez universal de esta ha de probarse en el crisol de la experiencia personal finita de la libertad del amor y el sufri-miento de la muerte y la esperanza en el futuro

Estas paacuteginas apuestan por comprender en su contexto sus posibilida-des y sus liacutemites una visioacuten teoloacutegica del hombre que es capaz de acompa-ntildear y contrapesar el desarrollo actual de un humanismo secularista que se pretende uacutenico horizonte de las sociedades occidentales La antropologiacutea de Rahner estaacute llamada a seguir contribuyendo a acreditar la significacioacuten positiva del fenoacutemeno religioso como respetuosa proximidad del misterio personal de Dios al corazoacuten de la existencia humana (razoacuten e historia)20

En efecto la obra de nuestro autor tomada de entre otras posibles es testigo de coacutemo la reciente teologiacutea catoacutelica ha prestado exquisita atencioacuten ndashen su proposicioacuten de la fe al mundo presentendash a la auto-comprensioacuten del hombre que ha generado sobre todo la perspectiva antropoceacutentrica domi-nante en el pensamiento filosoacutefico que va de Descartes a Heidegger 21 En la

18 Cfr K RAHNER Oyente de la palabra 3119 En la estela de Karl Rahner se ubican otros proyectos de la teologiacutea catoacutelica contem-

poraacutenea que tratan de afrontar la aporiacutea en la que se debate la teologiacutea trascendental en torno a la relacioacuten entre experiencia categorial y conocimiento originario a priori En las obras de H Verweyen Th Proumlpper y K Muumlller observa Alberto Anelli desarrollos post-rahnerianos que tratan de modular la trascendentalidad mostrando las contradicciones inscritas respec-tivamente en una razoacuten una libertad o una conciencia sustraiacutedas al sujeto y consideradas como fuerzas autoacutenomas No obstante ndashconcluye Anellindash estos proyectos auacuten permanecen en el plano formal dependientes del moderno principio de autonomiacutea pesa auacuten sobre ellos la dificultad de hacer valer a fondo el insuperable caraacutecter histoacuterico-praacutectico del a priori antropoloacutegico Solo una reflexioacuten antropoloacutegica como la de W Pannenberg habriacutea hecho emerger seguacuten este autor una concepcioacuten heteroacutenoma del sujeto como realidad conformada en la alteridad que constituyen para eacutel la sociedad y la historia Cfr A ANELLI Heidegger e la teologia Brescia 2011 79-83

20 Cfr B BOURGINE Karl Rahner est-il un classique Agrave propos de quelques recher-ches reacutecentes in Revue theacuteologique de Louvain 43 (2012) 79-102

21 Tras diversos avatares la teologiacutea catoacutelica del siglo XX enfrenta decididamente los problemas teoloacutegicos y hermeneacuteuticos que habiacutea puesto a consideracioacuten la llamada laquocrisis modernistaraquo al declarar su insatisfaccioacuten por la mediacioacuten conceptual escolaacutestica del depoacutesito de la fe La discusioacuten en torno a la posibilidad de renovar esa conceptuacioacuten de la revelacioacuten (en la interseccioacuten entre teologiacutea y filosofiacutea fe y razoacuten dogma y vida) conllevaba fundamen-talmente reformular la respuesta teoloacutegica en el punto de partida o sea su concepcioacuten de Dios

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obra de Rahner se mantiene una doble constante que es irrenunciable para la teologiacutea de modo particular para la teologiacutea contemporaacutenea a la hora de proponer hoy la comprensioacuten cristiana del hombre en primer lugar la presentacioacuten de Cristo corazoacuten de la revelacioacuten como Palabra hecha carne en que adquiere plena inteligibilidad toda la realidad creada y de modo particular el hombre como ser en constante distensioacuten entre finitud e infinitud autoconciencia de siacute y realizacioacuten en la historia trascenden-cia e inmanencia Es la perspectiva cristoceacutentrica de la revelacioacuten la que opera como punto focal que sustenta la hermeneacuteutica del Misterio de Dios en siacute y en su relacioacuten con el hombre22 en segundo lugar la interdiscipli-nariedad esto es el diaacutelogo con la imagen de hombre que emana de las ciencias humanas y en particular de la filosofiacutea pues la razoacuten contribuye con su esfuerzo reflexivo y sus categoriacuteas a hacer comprensible al hombre la realidad de Cristo ndashque es Dios humanadondash como plenitud y cima de la humanidad creada (en su estructura esencial y su devenir histoacuterico)

Querer presentar en pocas paacuteginas la aportacioacuten que hace este gigante de la teologiacutea contemporaacutenea a la visioacuten teoloacutegica del hombre plantea una doble dificultad En primer lugar la de enmarcar dicha contribucioacuten en un sistema teoloacutegico que detenta un perfil hermeneacuteutico muy complejo y ecleacutectico y por lo que respecta a su concepcioacuten del hombre el hecho de

y del hombre En el campo antropoloacutegico el reto para la teologiacutea consistiacutea en avanzar sobre una antropologiacutea de impronta platoacutenica considerada laquointelectualistaraquo para poder afrontar y replan-tear de manera nueva (en su integridad) la figura de hombre que auspicia la revelacioacuten como relacioacuten entre espiacuteritu y materia trascendencia e historia pensamiento y vida conocimiento intelectual y experiencia sensible (mundana social histoacuterica) El esfuerzo de la llamada nou-velle theacuteologie por recuperar el diaacutelogo con el pensamiento de la cultura moderna y el contacto con el pensamiento contemporaacuteneo asiacute como el cultivo de las propias fuentes (Escritura Pa-dres Liturgia) obraron la elaboracioacuten de una renovada teologiacutea de la revelacioacuten y antropologiacutea de la fe Los nombres de J Mareacutechal M Blondel y P Rousselot en un primer momento y los maacutes cercanos de R Guardini K Rahner J B Lotz B Lonergan J Alfaro E Corethhellip han propiciado la liberacioacuten del meacutetodo antropoloacutegico-trascendental del subjetivismo kantiano y una nueva relectura del humanum como finitud interrogativa enraizada en Dios y de la vida personal como aacutembito histoacuterico de la accioacuten divina (gracia) que es acogida en ejercicio de libre decisioacuten Cfr una siacutentesis de los aspectos teoloacutegicos y filosoacuteficos de este laquoepisodio paradigmaacute-ticoraquo de la teologiacutea contemporaacutenea en A COZZI La crisi modernista Conflitto insanabile con la modernitagrave o trasformazione culturale del cattolicesimo in G ANGELINI - S MACCHI (eds) La teologia del Novecento Momenti maggiori e questioni aperte Milano 2008 34-92

22 A la luz del misterio central de la revelacioacuten divina ndashla encarnacioacuten de la Persona del Verbondash la atencioacuten a la iacutentima reciprocidad (en orden a la realizacioacuten de la identidad del ser humano) entre su radical dimensioacuten espiritual (pensamiento) y su existencia histoacuterica (ma-nifestacioacuten) no es para el cristianismo un modo facultativo de comprender la humanidad dado que se trata de aquellas coordenadas irrenunciables donde rastrear su hechura divina La encarnacioacuten constituye un dato decisivo de la fe y la dogmaacutetica catoacutelicas

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que esta se encuentra diseminada en sus escritos pues no ha elaborado como tal un ensayo de antropologiacutea formalmente sistematizada Por estas razones nuestro anaacutelisis se limita mediante una lectura sincroacutenica de una seleccioacuten de sus escritos a una presentacioacuten de las grandes tesis antro-poloacutegicas que estaacuten en la base de su investigacioacuten teoloacutegica23 Siguiendo a nuestro autor comenzamos sentildealando el desafiacuteo pastoral presente que constituye la relacioacuten entre antropologiacutea y teologiacutea

1 lA teologiacuteA Ante un reto pAstorAl

El concilio Vaticano II expresoacute con claridad que la comunidad cristiana no sostiene su fe en verdades depositadas en la conciencia creyente de una vez para siempre sino en verdades de fe dinaacutemicas a cuyo significado contribuye un esfuerzo de actualizacioacuten constante En este sentido el ca-

23 Los estudios globales y sectoriales sobre la teologiacutea de Rahner resultan casi inabarca-bles Tanto para una visioacuten de la figura y trayectoria intelectual del autor como para encuadrar en su sistema su propuesta antropoloacutegica hemos acudido a K H NEUFELD Rahner Karl in R LATOURELLE (ed) Diccionario de Teologiacutea fundamental Madrid 1992 1097-1100 K KILBY Karl Rahner in D F FORD - R MUERS (eds) The Modern Theologians An Introduction to Christian Theology since 1918 Massachusetts-Oxford-Victoria 32005 92-105 A BERTULETTI Dio il mistero dellrsquoUnico Brescia 2014 269-276 A BOZZOLO Il mistero-Dio e lo spirito-nel-mondo Esperienza della grazia e decifrazione dellrsquouomo in Karl Rahner in P SEQUERI - S UBBIALI (eds) Nominare Dio invano Orizzonti per la teolo-gia filosofica Milano 2009 219-258 G COLZANI Karl Rahner Dal mistero di Dio la com-prensione dellrsquouomo Milano 2000 M CABADA CASTRO La vivencia previa del Absoluto como presupuesto del acceso teoreacutetico a Dios in A VARGAS-MACHUCA (ed) Teologiacutea y mundo contemporaacuteneo Homenaje a Karl Rahner en su 70 cumpleantildeos Madrid 1975 65-88 A CORDOVILLA Gramaacutetica de la encarnacioacuten Madrid 2004 35-228 Id K Rahner la actualidad de un teoacutelogo in Estudios Eclesiaacutesticos 80 (2005) 233-245 R GIBELLINI La teologiacutea del siglo XX 239-254 A MARGARITTI Svolta antropologica e istanza kerigma-tica in G ANGELINI - S MACCHI (eds) La teologia del novecento Momenti maggiori e questioni aperte Milano 2008 246-296 B FORTE La eternidad en el tiempo Ensayo de antropologiacutea y eacutetica sacramental Salamanca 2000 83-88 A GONZAacuteLEZ MONTES Fun-damentacioacuten de la fe Salamanca 1994 195-220 D HERCSIK Karl Rahner la grazia come centro dellrsquoesistenza umana in La Civiltagrave Cattolica 3683 (2003) 430-443 L BARRETO Experiencia trascendental y experiencia personal en el enfoque metodoloacutegico de Karl Rahner in Salmanticensis 58 (2011) 427-464 G PATTARO La svolta antropologica Bologna 1991 146-160 I PETRIGLIERI Lrsquoavventura della fede Ovvero lrsquointellectus fidei tra ragione e ragioni Roma 2010 153-169 S PIEacute-NINOT La Teologiacutea Fundamental laquoDar razoacuten de la esperanzaraquo (1 Pe 315) Salamanca 42001 130-135 A RAFFELT - H VERWEYEN Karl Rahner Muumlnchen 1997 G SALATIELLO Metodo trascedentale e svolta antropologica in Id (ed) Karl Rahner Percorsi di ricerca Roma 2012 45-83 I SANNA Teologia come esperienza di Dio Brescia 1997 91-133 J I SARANYANA La antropologiacutea trascendental rahneriana in J F SELLEacuteS (ed) Propuestas antropoloacutegicas del siglo XX I Pamplona 2004 307-326 H VORGRIMLER Karl Rahner Experiencia de Dios en su vida y en su pensamien-to Santander 2004 G J ZARAZAGA Dios es comunioacuten Salamanca 2004 21-99

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lificativo laquopastoralraquo deja de hacer referencia exclusiva a la cura de almas para determinar la totalidad de la vida eclesial su actitud ante el mundo y el hombre contemporaacuteneos24 La atencioacuten a laquolos gozos y las esperanzas las tristezas y las angustias de los hombres de nuestro tiemporaquo (GS 1) forma parte de la eficacia del anuncio del Reino Si la comunidad creyente obvia el desarrollo del mundo moderno ndashque ha sustituido un proyecto de sentido en cuyo centro estaba Dios por otro en que Dios queda desplazado por el hombre y la naturaleza bajo el impulso de una eneacutergica y creciente revolu-cioacuten cientiacutefica teacutecnica social y poliacutetica25ndash difiacutecilmente puede dar cuenta de su esencia como comunidad evangelizadora (cfr 1 Cor 916)

El teoacutelogo creyente y guiacutea de creyentes asume la tarea especiacutefica de esclarecer el perenne significado salviacutefico del mensaje evangeacutelico a la luz de la relacioacuten personal que entabla Dios con la experiencia histoacuterica y la autoconciencia del ser humano A partir de esta premisa la obra teoloacutegica de Karl Rahner ha proyectado una mirada renovada sobre la capacidad de trascendencia del yo humano primera y esencial caracteriacutestica que funda la posibilidad y credibilidad de lo que conocemos como laquoexperiencia re-ligiosaraquo esto es la relacioacuten entre yo y Otro no como simple proyeccioacuten de una necesidad subjetiva sino como espera y encuentro entre la libertad del sujeto para auto-trascenderse a siacute mismo hacia su maacutes alta dignidad y el valor intriacutenseco de la realidad libremente encontrada como Otro-de-siacute esto es como determinacioacuten interior y uacuteltima de aquella auto-trascenden-cia personal Se ha reproducido con abundancia el texto en que Rahner vislumbra la necesidad de un cristiano capaz de esa laquoexperienciaraquo de encuentro con Dios como viacutea privilegiada de acceso a la fe Estas son sus conocidas palabras

Solamente para aclarar el sentido de lo que se va diciendo y aun a concien-cia del descreacutedito que la palabra laquomiacutesticaraquo ndashque bien entendida no implica contraposicioacuten alguna con la fe en el Espiacuteritu Santo sino que se identifica con ellandash cabriacutea decir que el cristiano del futuro o seraacute un laquomiacutesticoraquo es decir una persona que ha laquoexperimentadoraquo algo o no seraacute cristiano Porque la espiritualidad del futuro no se apoya ya en una conviccioacuten unaacutenime evi-dente y puacuteblica ni en un ambiente religioso generalizado previos a la expe-riencia y a la decisioacuten personales La educacioacuten religiosa usual hasta ahora podriacutea ser solamente en adelante un adiestramiento muy secundario para la

24 Cfr GS nota al tiacutetulo25 Cfr W PANNENBERG Una historia de la filosofiacutea desde la idea de Dios Teologiacutea

y filosofiacutea Salamanca 2001 149-163

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vida religiosa La mistagogiacutea seraacute la que habraacute de pronunciar la verdadera laquoidea de Diosraquo partiendo de la experiencia aceptada de la referencia esencial del hombre a Dios la experiencia de que la base del hombre es el abismo de que Dios es esencialmente el incomprensible de que su incomprensibi-lidad en lugar de disminuir aumenta en la medida que se le va conociendo mejor y a medida que Dios se acerca a nosotros en su amor en el que se da a siacute mismo de que no podemos concebirlo como un dato determinado en el caacutelculo de nuestra vida sin que automaacuteticamente fallen nuestras cuentas26

El principio de tradicioacuten viene a decir Rahner ha dejado de ser una vigencia cultural presente para pasar al aacutembito de la historia de lo con-cerniente a la memoria del pasado ya no acompantildea el itinerario creyente Sin apoyos externos significativos el creyente estaacute llamado a elaborar con maacutes esfuerzo la propia experiencia de Dios entendida como encuentro personal con el Dios vivo y verdadero Ser un miacutestico significa conocer a Dios desde dentro manteniendo con Eacutel una relacioacuten no siempre paciacutefica pero siacute directa y sincera que incide profundamente en la loacutegica del de-seo humano y que actuacutea como factor de verificacioacuten de la autenticidad y verdad de la propia experiencia religiosa Al radiografiar las coordenadas antropoloacutegico-existenciales en que la teologiacutea y la espiritualidad cristia-nas han de proponerse hoy alerta sobre la necesidad de permanecer vigi-lantes para no reducir la experiencia religiosa cristiana a un humanismo inmanente que hace hincapieacute en valores socio-humanitarios y rebaja el contenido teoloacutegico-dogmaacutetico que caracteriza el nuacutecleo de la fe

Para miacute todo el jesuanismo por muy piadoso que fuera todo el com-promiso a favor de la justicia y del amor en el mundo todo el humanismo que quiera utilizar a Dios para el hombre y que no precipite al hombre en el abismo de Dios seriacutea la religioacuten de un humanismo inconcebiblemente modesto que nos estaacute prohibido por el enorme poder del amor de Dios en el cual Dios mismo sale realmente de siacute Nosotros una de dos o pode-mos quererlo todo a saber Dios mismo en su pura divinidad o bien nos hallamos condenados es decir estamos sepultados dentro de la prisioacuten de nuestra finitud27

La voracidad de la moderna subjetividad y su denodada lucha por la libertad con la pretensioacuten de lograr su definitiva autonomiacutea no ha hecho sino poner al hombre bajo la dictadura de otras servidumbres (pulsiones

26 K RAHNER Espiritualidad antigua y actual in ET VII 25-2627 Id Sobre la inefabilidad de Dios Experiencias de un teoacutelogo catoacutelico 39

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instintivas dinero afaacuten de poderhellip) que han instalado la idolatriacutea en el hondoacuten del alma humana sontildeando poder saciar su hambre de infinito

Entonces dice la palabra de Dios a este excavador de tesoros desen-gantildeado y desesperado muy hondo en los abismos del hombre vive auacuten Dios el Dios vivo real y verdadero no un iacutedolo muerto no una desnuda imagen de nosotros mismos sino Eacutel mismo el Dios vivo el Eterno el Santo El que no solo es en siacute mismo la infinitud sino que quiere donarnos sus inmensidades infinitas28

2 AntropologiacuteA trAscendentAl

La interpretacioacuten de toda la teologiacutea dogmaacutetica como antropologiacutea trascendental implica la reflexioacuten sobre el aspecto trascendental de toda temaacutetica dogmaacutetica y por ello proponerse la cuestioacuten acerca de lo que en referencia a esta se encuentra ya impliacutecito en los contenidos materiales de las laquoestructurasraquo a priori del sujeto teoloacutegico29

21 Orientacioacuten teoloacutegica de la antropologiacutea via trascendentalis

De esta forma describe nuestro autor la impronta metodoloacutegica de un complejo sistema teoloacutegico atento a este presente que se interroga con singular radicalidad por la razonabilidad antropoloacutegica de la fe y por la evidencia del hecho mismo de la revelacioacuten30 Por ello la teologiacutea se muestra iacutentimamente preocupada por mostrarle al hombre contemporaacute-neo caracterizado en su auto-experiencia como laquoindefinible enigma para siacute mismoraquo31 la profunda afinidad ontoloacutegica que exhibe su estructura trascendental y su existencia concreta con la auto-donacioacuten libre y amo-rosa de Dios a la humanidad La revelacioacuten manifiesta que el mundo32 y el

28 Id De la necesidad y don de la oracioacuten 3329 Id Theologie und Anthropologie 45 30 Cfr Ibid 58-61 Sobre este mismo argumento Id Sobre la posibilidad de la fe hoy

in ET V 15-3331 K RAHNER De la necesidad y don de la oracioacuten 31 32 laquoLa criatura desde su maacutes iacutentimo fundamento esencial ndashescribe nuestro teoacutelogo en

la madurez de su pensamientondash ha de entenderse como la posibilidad de ser asumida de convertirse en material para una posible historia de Dios Dios esboza la criatura en su forma creadora en cuanto desde la nada la implanta en su propia realidad distinta de Dios como la gramaacutetica de una posible automanifestacioacuten de Diosraquo (K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 264)

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hombre33 han sido creados en libertad con vistas a la auto-comunicacioacuten amorosa de Dios laquoPor cuanto Dios en el amor a siacute mismo ama libremente como poder que pone lo finito amando comprende a lo finito mismo En este amor tambieacuten lo puesto el efecto de la accioacuten es elevado a la luz del serraquo34 Mostrar en el hombre el efectivo dinamismo de esta elevacioacuten es el motivo seguacuten confesioacuten del mismo Rahner por el que aplica a su teologiacutea el calificativo trascendental

Para que todas las afirmaciones de fe y de la teologiacutea puedan ser realmente responsables hay que preguntarse coacutemo y por queacute el hombre desde su mismo ser y existencia (que es concreta y se halla siempre en consecuen-cia inevitablemente bajo la gracia de la comunicacioacuten de Dios) es siempre sujeto a quien pueden y deben afectar realmente estas afirmaciones35

De este modo postula la necesidad de un nuevo acceso metodoloacutegico a la fe laquono solo en lo que respecta al conocimiento de sus contenidos sino tambieacuten inseparablemente en lo tocante al conocimiento del sujeto y de las condiciones a priori de su conocerraquo36 Es lo que Rahner llama el laquomeacutetodo antropoloacutegico-trascendentalraquo que acompantildearaacute sin cesar su dilatada obra teoloacutegica y constituye el fundamento de lo que denominoacute el giro antropoloacutegico en orden a designar su propuesta de una teologiacutea a partir de una antropologiacutea trascendental laquoEl giro de la teologiacutea hacia un meacutetodo antropoloacutegico-trascendental no es otra cosa que el descubrimien-

33 laquoiquestNo podriacutea decirse con aparente derecho que la esencia del ser personal ndashsu para-doja sin la que no se le puede entender en absolutondash consiste precisamente en estar ordenado por naturaleza a la comunioacuten personal con Dios en el amor y tener que recibir ese mismo amor como libre regaloraquo (K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 307)

34 K RAHNER Oyente de la palabra 13135 Id Fundamentacioacuten de la fe cristiana 31 en estas paacuteginas sintetiza y revisa criacutetica-

mente el autor la presentacioacuten global de su visioacuten de la teologiacutea trascendental en su Curso fundamental sobre la fe Cfr K RAHNER Teologiacutea trascendental in SM VI 610-617 So-bre el teacutermino y su uso en nuestro autor S ARZUBIALDE La experiencia trascendental de Dios en la obra de K Rahner in Estudios Eclesiaacutesticos 80 (2005) 291-314 sobre el teacutermino y su empleo en teologiacutea U PELLEGRINO Transcendental in L PACOMIO et alii (eds) Diccionario teoloacutegico interdisciplinar IV Salamanca 1983 543-555 K Kilby sugiere el uso del teacutermino en Rahner en dos sentidos al menos en el sentido lato de referencia a aquella dimensioacuten del hombre o de su experiencia que le permite ir maacutes allaacute de los objetos finitos y por otro lado para identificar un tipo particular de proyecto de investigacioacuten aquel que somete a examen las condiciones en que es posible el conocimiento de un sujeto especiacutefico en el acto mismo de conocer Cfr K KILBY Karl Rahner Theology and Philosophy New York 2004 32-37

36 G COLZANI Recenti manuali di Antropologia teologica di lingua italiana e tedes-ca in Vivens Homo 3 (1992) 392

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to del nexo existente entre el contenido de los enunciados dogmaacuteticos y la experiencia que hombre hace de siacuteraquo37

En el ensayo Theologie und Anthropologie fruto de una conferencia impartida en 1966 Rahner sintetiza programaacuteticamente los tres reque-rimientos baacutesicos que convergen en su visioacuten de la teologiacutea como an-tropologiacutea trascendental (1) el anaacutelisis de las estructuras cognoscitivas trascendentales o a priori del sujeto personal que en cuanto sujeto teo-loacutegico ha de enfrentar el desafiacuteo de que laquoDios no es un objeto cualquie-ra junto a otros en el campo de la experiencia a posteriori del hombre sino el fundamento originario y el futuro absoluto de toda realidadraquo38 (2) la teologiacutea en cuanto ciencia que capta conceptualmente la honda interaccioacuten entre la historia de la humanidad (libre autorrealizacioacuten del hombre) y la historia de la libre y graciosa autocomunicacioacuten salviacutefica de Dios al hombre39 (3) y las exigencias para la autocomprensioacuten humana procedentes de la filosofiacutea (antropoloacutegica) contemporaacutenea40 que a pesar

37 K RAHNER Theologie und Anthropologie 6138 Ibid 50 Cfr Id Curso fundamental sobre la fe 74-77 Rahner asume para la teo-

logiacutea el desafiacuteo que Kant plantea a la metafiacutesica y a la teoriacutea del conocimiento El propio Kant define como trascendental laquotodo conocimiento que se ocupa no tanto de los objetos cuanto de nuestro modo de conocerlos en cuanto que tal modo ha de ser posible a priori Un sistema de semejantes conceptos se llamariacutea filosofiacutea trascendentalraquo (I KANT Criacutetica de la razoacuten pura A XII Madrid 1984 58)

39 laquoLa relevancia soterioloacutegica de un objeto de la teologiacutea (aspecto irrenunciable de todo objeto teoloacutegico) solamente se hace motivo de interrogacioacuten si pasa a ser tema de la receptividad salviacutefica del hombre hacia dicho objetoraquo (K RAHNER Theologie und Anthro-pologie 52)

40 laquoTanto una filosofiacutea como una teologiacutea actual no puede ni debe dejar de prestar aten-cioacuten a la revolucioacuten antropoloacutegico-trascendental operada por la filosofiacutea de nuestro tiem-po desde Descartes Kant y el idealismo alemaacuten (incluidos sus detractores) hasta la actual fenomenologiacutea filosofiacutea de la existencia y ontologiacutea fundamentalraquo (Ibid 56) Un apunte similar se encuentra en Id laquoFundamentos de la protologiacutea y de la antropologiacutea teoloacutegicaraquo MyS (Mysterium salutis) II 348 Nuestro autor considera la filosofiacutea como una de las prin-cipales fuerzas motrices de una teologiacutea de la revelacioacuten Es principalmente en el contexto de la relacioacuten entre naturaleza y gracia donde Rahner comprende la pregunta por la relacioacuten entre filosofiacutea y teologiacutea Del mismo modo que el hombre a la luz de su apertura radical a la trascendencia se experimenta siempre en su existencia como el ser llamado a (acoger o rechazar) una relacioacuten de comunioacuten con Dios es decir del mismo modo que su naturaleza ha sido creada con vistas a esa comunioacuten divina por la gracia laquolo que llamamos revelacioacuten no es una antildeadidura que se presuponga a la naturaleza espiritual y a su autocomprensioacuten como algo rotundo y que se sobreentiende sino que la naturaleza espiritual misma es la condicioacuten de posibilidad que la revelacioacuten presupone a siacute misma y que establece libremente para poder ser lo que es gracia en cuanto autocomunicacioacuten personal y libre de Dios [hellip] La revelacioacuten presupone por tanto la filosofiacutea diferenciada libre como aacutembito de su propia posibilidad ya que solo al que se entiende a siacute mismo y al que autoacutenomamente dispone sobre siacute puede la autoapertura de Dios en revelacioacuten personal apareceacutersele como un hecho de libre amorraquo

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de sus excesos permite reforzar una concepcioacuten radicalmente cristiana donde laquoel hombre no es un momento dentro de un cosmos constituido de cosas ni estaacute sometido al sistema de coordenadas de conceptos oacutenticos del mismo sino maacutes bien el sujeto de cuya libertad depende el destino de todo el cosmosraquo41

A la luz de estos requerimientos vamos a intentar una siacutentesis de esta antropologiacutea teoloacutegica a partir de la doble viacutea baacutesica mediante la que Rahner trata de afrontar el conocimiento del hombre en cuanto sujeto teoloacutegico (1) la contemplacioacuten del hombre en su capacidad de apertura trascendental ilimitada al Ser de quien procede y a quien se dirige es decir en su apertura a Dios Esta viacutea requiere el examen a fondo de la sub-jetividad (que se interroga por el Ser) y sus estructuras a priori como ho-rizonte en que es posible al hombre laquodejarse aprehender por un misterio siempre presente y que se nos escaparaquo42 (2) la consideracioacuten del hombre como aquel ser cuya naturaleza es apropiada por Dios al encarnarse En Jesucristo el hombre se reconoce como el don maacutes acabado del acto por el que Dios se dona a lo diverso de siacute43 a la luz de Cristo laquoel hombre en su definicioacuten originaria es el otro en el que Dios puede convertirse por su autoenajenacioacuten y el posible hermano de Cristoraquo44 No es factible dar una respuesta plena a la sed infinita del hombre sin atender al significado del hombre Jesuacutes el infinito humanado Dado que uno de los existenciales que definen la esencia y dignidad del hombre es ndashapunta Rahnerndash su calificacioacuten como ser que dice relacioacuten a Dios y a Cristo solo se puede hablar de Dios de un modo definitivo cuando al tratar de ello es decir en plena teologiacutea se trate tambieacuten de antropologiacutea Y solo se puede tratar de antropologiacutea solo se puede dar una respuesta uacuteltima sobre la esencia y la dignidad del hombre si se ha cultivado teologiacutea tratando de Dios y desde el punto de vista de Dios45

(K RAHNER Filosofiacutea y teologiacutea in ET VI 87 cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 262-266) Puede verse una reflexioacuten sobre las condiciones teoloacutegicas en que Rahner funda la interaccioacuten entre filosofiacutea y teologiacutea en M SCHULZ La necesaria mediacioacuten filosoacutefica de la fe y de la teologiacutea seguacuten Karl Rahner in Estudios Eclesiaacutesticos 80 (2005) 325-338

41 K RAHNER Theologie und Anthropologie 56 Cfr A MARAGARITTI Svolta antropologica e istanza kerigmatica 250-253

42 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 7643 Cfr Ibid 26744 K RAHNER Antropologiacutea III in SM I 29545 Id Dignidad y libertad del hombre in ET II 236

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Veamos por tanto queacute significa para Rahner que la antropologiacutea es lugar de la teologiacutea y viceversa maacutes en concreto el modo en que la exis-tencia del hombre se define ante y desde Dios en su entera especificidad de subjetividad personal

22 El hombre se interroga por siacute mismo y por lo otro

En sus dos principales obras filosoacuteficas de fuerte impronta antropo-loacutegica el joven teoacutelogo atiende los caracteres propios de la subjetividad personal del hombre que seraacuten omnipresentes a su extensa obra teoloacutegica Se trata de una investigacioacuten que a modo de diacuteptico se proyecta desde el hombre en su doble condicioacuten de ser que se interroga por siacute mismo y por lo otro y ser que es en siacute mismo interrogante infinito (apertura a la revelacioacuten divina)

Espiacuteritu en el mundo Metafiacutesica del conocimiento finito seguacuten santo Tomaacutes de Aquino (1939) escrito como tesis doctoral en filosofiacutea corres-ponde al examen de esa primera condicioacuten baacutesica del hombre como sub-jetividad cuestionante Y asiacute procurando dilucidar el requerimiento que plantea santo Tomaacutes (laquoutrum intellectus possit actu intelligere per species intelligibiles quas penes se habet non convertendo se ad phantasmataraquo)46 desde la frontera filosoacutefica del siglo XX47 Rahner advierte la posibilidad de concebir la sensibilidad que insta al hombre a preguntar laquocomo ya existente en el mundoraquo48 como aquel espacio en que ganar el horizonte transcendente del interrogar del ente humano el uacutenico capaz de hacer justicia a la irrenunciable condicioacuten ulterior del cognoscente como sujeto y persona es decir como alguien que laquose posee como tal sujeto real sola-

46 Cfr STh I q84 a7 47 Aunque en sus escritos Rahner suele omitir la referencia expliacutecita a sus fuentes estaacute

claro que su obra recibe la influencia de alguna de las diversas revisiones a que es sometida la moderna concepcioacuten de la subjetividad tal y como habiacutea sido planteada de Descartes a Kant como criacutetica al realismo ingenuo dominante en la filosofiacutea cristiana La hermeneacuteutica intrin-secista de la relacioacuten entre natural y sobrenatural que lleva a cabo J Mareacutechal en su lectura de santo Tomaacutes la filosofiacutea de la accioacuten de M Blondel y la reaccioacuten de la filosofiacutea de la existencia (Heidegger) ante la herencia idealista son los principales vectores operantes en la teologiacutea rahneriana Cfr O MUCK La escuela marechaliana de lengua alemana La filosofiacutea trascen-dental como metafiacutesica J B Lotz K Rahner W Brugger E Coreth y otros in E CORETH et alii (ed) Filosofiacutea cristiana en el pensamiento catoacutelico de los siglos XIX y XX II Madrid 1993-1997 549-554 E CORETH Presupposti filosofici della teologia di Karl Rahner in La Civiltagrave Cattolica 3469 (1995) 27-40 A CORDOVILLA laquoLa teologiacutea es pensarraquo La relacioacuten entre teologiacutea y filosofiacutea en Karl Rahner in Estudios Eclesiaacutesticos 79 (2004) 395-412

48 K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 128

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mente en cuanto contraponieacutendose a este mundo se vuelve hacia eacutelraquo49 En su anaacutelisis de la metafiacutesica del conocimiento de santo Tomaacutes Rahner muestra la predisposicioacuten nativa de la subjetividad humana a observar lo singular y concreto (ens) a la luz de lo universal (esse) es decir la apertura a priori del conocimiento humano al ser en toda su amplitud a todo cuanto es El traacutensito de la dimensioacuten sensible a la de los conceptos universales sucede mediante lo que santo Tomaacutes denomina excessus o capacidad propia del intelecto para ir maacutes allaacute del fenoacutemeno hacia el ser en su totalidad A este movimiento del espiacuteritu que permite su abstrac-cioacuten del mundo es al que Rahner denomina anticipacioacuten movimiento del espiacuteritu sobre la totalidad de sus posibles objetos [hellip] que deviene consciente cuando el conocimiento en el mismo acto de aprehensioacuten del objeto singular se experimenta a siacute mismo en su radical movimiento de trascendencia por encima del objeto singular50

Asiacute sintetiza nuestro autor los frutos de su investigacioacuten

El conocimiento humano es de manera inmediata conocimiento receptivo y por tanto sensible Pero es de tal manera sensible que se discierne la verdad del objeto que por siacute mismo se muestra es decir el conocimiento humano es universal y objetivo [hellip] El conocimiento receptivo es como tal sensible y esto quiere decir el cognoscente sensible deviene oacutenticamente lo otro por consiguiente laquoen cuantoraquo sensible no se destaca precisamente de lo conoci-do Y asiacute cuando ha de haber un conocimiento receptivo objetivo este cono-cimiento tiene que ser por una parte (como esencialmente receptiva) sensi-bilidad que deviene ella misma lo recibido y tiene por otra parte que saber un quid universal acerca de lo sensiblemente intuido para poder juzgar de ello como objeto Y por lo mismo tiene que liberar este quid de su manera de ser dado sensiblemente en la que el cognoscente deviene eacutel mismo lo otro51

49 Ibid 13050 Ibid 154 Explican Raffelt y Verweyen laquoEn la medida en que el lsquointelecto agentersquo

lsquoabstraersquo la lsquoimagen intelectivarsquo de la lsquoimagen sensiblersquo podemos entender que en el abstraer aquel vaya maacutes allaacute de lo aferrado en la sensibilidad concreta A esto es a lo que Rahner se refiere mediante un teacutermino central lsquoVorgriffrsquo Tomado a su vez de M Heidegger Tomaacutes em-plea una imagen anaacuteloga lsquoexcessusrsquo superacioacuten Lo que en Heidegger se presenta como una estructura fenomenoloacutegica fundamental del Dasein se encuentra ahora adscrito en Rahner a un anaacutelisis del conocimiento metafiacutesicoraquo (A RAFFELT-H VERWEYEN Karl Rahner 38) La referencia al Vorgriff heideggeriano en Ser y tiempo sect 32 (Madrid 2003 172-177) La edicioacuten espantildeola de Ser y tiempo traduce como manera de entender previa y explica el tra-ductor que al describir el modo en que comprendemos las cosas laquoHeidegger estaacute describiendo aquiacute que el comprender ha abierto ya el mundo como posibilidades Al hacerlo nos da de antemano algo que luego en la interpretacioacuten adquiriraacute cariz particularraquo (p 478)

51 K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 377-378

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La apertura natural del hombre a todo cuanto es ndashconcebida como a priori del intelecto que predispone al cognoscente a ver lo universal en lo singular y concretondash es lo primero seguacuten Rahner en el despertar de nuestra inteligencia Tanto la sensibilidad como el intelecto son para Ra-hner aprioris o condiciones de la estructura oacutentica del sujeto cognoscente que no encubren la realidad sino que contribuyen a descubrirla No po-demos entrar aquiacute en la compleja discusioacuten rahneriana sobre la condicioacuten y el modo en que actuacutean estos aprioris como pre-disposiciones en la ope-racioacuten de desvelar el ser de lo real52 Nos interesa ahora destacar el hecho de que la interrogacioacuten trascendental sobre el acto cognoscitivo humano lleva a Rahner a descubrir al hombre (1) como espiacuteritu (Geist) cuya estructura fundamental es la apertura ilimitada al ser en cuanto capaz de retornar sobre siacute en su aprehensioacuten de lo que es descubrieacutendose en su maacutes iacutentima identidad como ser excesivo ser que manifiesta al Ser53 (2) como espiacuteritu en el mundo (in Welt) esto es como aquel cuya exposicioacuten a lo otro mediante su recepcioacuten sensible (en su propia existencia e historia) es trance necesario y coadyuvante de una genuina vuelta a su interioridad conversio ad phantasma54

Finalmente en el modo en que Rahner culmina Espiacuteritu en el mundo y delinea el paso a Oyente de la palabra manifiesta que esta consideracioacuten de la experiencia humana de la realidad en cuanto salida al mundo y vuel-ta sobre siacute permite afrontar el cuestionamiento uacuteltimo a que se enfrenta el espiacuteritu humano y define su identidad la posibilidad de contacto con una realidad infinita o ser absoluto que sucesivamente puede ser identificado como Dios

Al preguntarnos por el mundo conocido por el hombre el mundo y el mismo hombre cuestionante se tornan problemaacuteticos en su fundamento absoluto en un fundamento que yace maacutes allaacute de los liacutemites transitables por el hombre maacutes allaacute del mundo Y asiacute el derrame sobre el mundo se revela comportado por el apetito uacuteltimo del espiacuteritu con que este codicia el

52 Cfr J-I SARANYANA La antropologiacutea trascendental rahneriana 319-32353 Cfr K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 374-380 En su Curso fundamental sobre la

fe obra de madurez el teoacutelogo alemaacuten vuelve sobre su confesioacuten antropoloacutegica laquoEl hombre es espiacuteritu en tanto llega a siacute mismo en un absoluto estar confiado a siacute mismo y esto porque eacutel estaacute referido siempre a la absolutez de la realidad en general y a su fundamento uno llamado Dios Este retorno a siacute mismo y la referencia a la totalidad absoluta de una realidad posible y a su fundamento uno se condicionan reciacuteprocamenteraquo (K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 221)

54 Cfr K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 386-388

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ser en absoluto y el sumirse en la sensibilidad en el mundo y su destino se revela solamente el devenir del espiacuteritu que aspira al absoluto El hombre es asiacute el peacutendulo medio entre Dios y el mundo entre tiempo y eternidad y esta frontera es el lugar de su determinacioacuten y de su destino55

23 Elhombreesensiacutemismointerroganteinfinito

En Oyente de la palabra Fundamentos para una filosofiacutea de la religioacuten (1941)56 afronta Rahner la contemplacioacuten de la condicioacuten del hombre en cuanto es pregunta en siacute mismo o dicho de otro modo en cuanto se descu-bre a partir de su experiencia trascendental ndashen cada acto de conocimiento y libertadndash como ser capaz para la escucha del Ser capaz del infinitamente Otro al que el espiacuteritu finito reconoce como presencia irrenunciable en su propia realizacioacuten La antropologiacutea trascendental de Espiacuteritu en el mundo contribuye ahora a presentar ndashcomo un laquomomento intriacutensecoraquo57ndash tanto a la filosofiacutea de la religioacuten como a la teologiacutea fundamental una ontologiacutea de la potencialidad dispositiva del hombre no ante un dios abstracto sino ante el Dios que habla (se revela) La apertura del hombre al ser que es especiacutefica del conocimiento humano remite uacuteltimamente al hombre al ens absolutum58 a Dios y a atender la posibilidad de que Dios le hable Oyente de la palabra juega un papel determinante sobre la idea rahneriana de teologiacutea fundamental como superacioacuten laquoidealraquo del extrincesismo de la apologeacutetica neo-escolaacutestica59 Esta considera garantizada la existencia de Dios por la teologiacutea natural laquoyraquo su revelacioacuten sobrenatural por tanto como consecuencia de una demostracioacuten previa De modo que laquola revela-cioacuten de Dios al hombre no pareciacutea ser otra cosa que una comunicacioacuten de

55 Id Espiacuteritu en el mundo 387 Recordemos que el anaacutelisis kantiano de la estructura trascendental del espiacuteritu humano desemboca en la reduccioacuten del Trascedente a un postulado regulativo de la razoacuten praacutectica despojado de contenido real El anaacutelisis de Rahner denuncia pues la insuficiente incisividad de Kant al respecto

56 Puede verse un estudio analiacutetico y criacutetico en G B SALA Uditore della parola di Karl Rahner Unrsquoantropologia metafisica in ordine alla teologia in Rassegna di Teologia 42 (2001) 241-265

57 K RAHNER Oyente de la palabra 22558 Ibid 8759 Para una visioacuten del modo en que evoluciona su concepto de teologiacutea fundamental y

el espacio que ocupa en ella no solo la aptitud del creyente (fides qua) sino el contenido de la fe (fides quae) puede consultarse la siacutentesis de M SECKLER La dimensione fondamentale della teologia di Karl Rahner in I SANNA (ed) Lrsquoereditagrave teologica di Karl Rahner Roma 2005 49-67

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Dios al hombre acerca de algo que eacuteste no sabriacutea todaviacutea de modo que lo que en el hombre ocurriacutea era solo un antildeadirse un nuevo saber a los sabe-res anterioresraquo60 Este proceder no pone en claro por queacute el hombre por siacute mismo estaacute abierto a la revelacioacuten laquoa pesar de serle lsquoen siacutersquo inaccesibleraquo61 La tarea que propone Rahner a la teologiacutea fundamental es la de salvaguar-dar la relacioacuten de la teologiacutea con la metafiacutesica para evitar que la pala-bra de la autocomunicacioacuten divina (fides quae) pierda su significado para su oyente natural (fides qua) Por ello compete a la teologiacutea fundamental una antropologiacutea del hombre como aquel que en su historia abre el oiacutedo a una posible revelacioacuten de Dios [hellip] a esta pieza de la teologiacutea fundamen-tal que nos ha de ocupar aquiacute podemos designarla tambieacuten como ontolo-giacutea de la potentia oboedentialis para la libre revelacioacuten de Dios [hellip] para prestar oiacutedo a un eventual hablar de Dios que si se produce lo hace ndashal menos en un principiondash tambieacuten en el aacutembito de su conocimiento natural es decir mediante experiencia histoacuterica y mediante conceptos y palabras que contribuyen a constituir esta experiencia62

Teniendo esto en cuenta podemos sintetizar el trabajo de Rahner en dos pasos

1 Del anaacutelisis filosoacutefico de la trascendentalidad como capacidad de retorno del sujeto sobre siacute ndashlaquoen contraposicioacuten con esa otra cosa conocida que estaacute lsquofrente a eacutelrsquoraquo63ndash se desprende la proyeccioacuten u orientacioacuten64 de la existencia subjetiva contingente hacia un conocer y querer libre que cuando hablamos del ente que es el hombre solo cabe identificar con una libertad antecedente y creadora (don) que es la propia de Dios y como tal solo cabe explicar analoacutegicamente como loacutegica del amor

El amor es la voluntad iluminada hacia la persona la afirmacioacuten vo-luntaria de este en su singularidad irrepetible e indeducible Pero esta voluntad es la que actuacutea Dios en la posicioacuten de un ente finito Porque con ello se quiere a siacute mismo en su libre poder creador como laquocapacidadraquo del

60 K RAHNER Oyente de la palabra 33 61 Ibid 3462 Ibid 37 Asiacute presenta santo Tomaacutes la potencia obediencial de la criatura considerada

ante Dios laquoEst autem considerandum quod in anima humana sicut in qualibet creatura consideratur duplex potentia passiva una quidem per comparationem ad agens naturale alia vero per comparationem ad agens primum qui potest quamlibet creaturam reducere in actum aliquem altiorem in quem non reducitur per agens naturale et haec consuevit vocari potentia oboedentiae in creaturaraquo (STh III q11 a1)

63 K RAHNER Oyente de la palabra 7564 Cfr Ibid 139

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don del ser en el que eacutel desinteresadamente otorga al otro laquosu posesioacuten del serraquo [hellip] Con ello aparece el amor como la lumbrera del conocimien-to de lo finito y puesto que solo conocemos lo infinito a traveacutes de lo finito aparece tambieacuten como la luz de nuestro conocimiento en general siendo asiacute en uacuteltimo anaacutelisis el conocimiento uacutenicamente la claridad luminosa del amor65

Y asiacute conociendo al absoluto en su cualidad de presencia trascendente libre y amorosa el hombre laquose halla frente a este como frente a una perso-na duentildea de siacute mismaraquo al tiempo que ndashcontinuacutea Rahnerndash el ser absoluto muestra su luminoso rostro personal no porque se lo preste el hombre sino que laquola personalidad de Dios se muestra en el abrirse el ser absoluto ante la trascendencia humana porque este ser aparece en la preguntabi-lidad que todo ser tiene para el hombreraquo66 La concepcioacuten del hombre como oyente ndashque no estaacute referida a una palabra humana sobre Dios sino a la palabra divina sobre el hombre67ndash es posible dado que posee una condicioacuten de posibilidad una potentia oboedentialis o aptitud metafiacutesi-ca respecto a la autocomunicacioacuten de Dios entendida como revelacioacuten universal o trascendental laquoSolo si el ser del ente es de antemano lsquologosrsquo podraacute el Logos hecho carne decir lsquocon palabrasrsquo lo que se halla oculto en las profundidades de la divinidadraquo68

2 En cuanto teoacutelogo Rahner ha de atender igualmente a la positi-vidad (caraacutecter categorial) del hecho revelado y por tanto a la peculiar especificidad humana de la capacidad de trascendencia del espiacuteritu finito como lugar de encuentro con el Dios que puede revelarse es decir a la mundanidad temporalidad materialidad e historicidad del espiacuteritu hu-mano como determinaciones de laquosu apertura hacia el Dios de una posi-ble revelacioacuten libre haciendo de esta apertura precisamente una potentia oboedentialis humana para tal revelacioacutenraquo69

La revelacioacuten trascendental no es digamos una magnitud laquofijaraquo que reposa materialmente en siacute misma [hellip] sino que maacutes bien en esta historia categorial de la revelacioacuten alcanza su verdadera y propia realidad y asiacute ella misma debe entenderse en forma laquotemporalraquo de la misma manera

65 Ibid 130-13166 Ibid 11667 laquoEl hombre en virtud de su esencia espiritual oye siempre y esencialmente una re-

velacioacuten de Diosraquo (Ibid 120)68 Ibid 7169 Ibid 183

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que en teacuterminos muy generales la aprioacuterica estructura trascendental del espiacuteritu humano no se debe en definitiva entender como una magnitud laquofijaraquo [hellip] sino en tal forma que la aprioridad trascendental del espiacuteritu se determina a siacute misma incorporaacutendose a la realidad histoacuterica categorial y asiacute ella misma logra histoacutericamente su realizacioacuten70

En escritos sucesivos nuestro teoacutelogo profundiza su anaacutelisis filosoacutefi-co-teoloacutegico de la esencia humana con referencia expliacutecita a la involucra-cioacuten ndashen su dinaacutemica de apertura al serndash de su iacutendole espacio-temporal como espiacuteritu encarnado y la posibilidad de su libertad como devenir hacia un estadio de realizacioacuten definitivo Asiacute ndashresume J B Metz en su proacutelogo a la edicioacuten refundida de Oyente de la palabra que eacutel presentandash laquola cimentacioacuten de la existencia creyente sobre una palabra de Dios pro-nunciada histoacutericamente no aparece como algo arbitrario y discrecional sino como algo que responde a lo maacutes profundo de la existenciaraquo71 Re-cordemos que la Escritura presenta al hombre por el hecho de ser creado como imagen y semejanza de Dios es decir en una relacioacuten de estrechiacute-sima cercaniacutea con Eacutel Por tanto aunque pertenece al rango de los seres finitos la relacioacuten del hombre con el infinito es constitutiva Con Rahner podemos afirmar ahora que esta apreciacioacuten biacuteblica adquiere todo su re-lieve en el seno de una reflexioacuten racional sobre el ser humano

3 laquoexistenciAl sobrenAturAlraquo e historiA de lA sAlvAcioacuten

31 El laquohacerse hombreraquo del Verbo de Dios

Si el hombre fuese concebido como un ser clausurado sobre siacute (espiacuteritu puro) la encarnacioacuten de Dios es decir la real mediacioacuten entre Dios y el hombre seriacutea difiacutecilmente comprensible e incluso contradictoria Pues o bien Dios dejando de ser tal deberiacutea asimilarse a lo finito o bien deberiacutea ser abatida la laquonecesidad trascendentalraquo72 del hombre y con ella el propio hombre El trascendental como momento esencial de la teologiacutea rahneriana permite explicar la relacioacuten implicativa entre trascendencia e historia

La esencia metafiacutesica de una realidad y su historia por tanto la gra-cia como existencial y la historia de la salvacioacuten y la revelacioacuten no son

70 Ibid 148 (n 3) Cfr Id Historia del mundo e historia de la salvacioacuten in ET V 114-121

71 K RAHNER Oyente de la palabra 1072 Id Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica 26

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magnitudes meramente contrapuestas sino tales que mutuamente se con-dicionan siendo justamente esto lo que debe identificar una teologiacutea tras-cendental De modo que la teologiacutea trascendental no puede ni quiere ser la teologiacutea sino un momento de ella puesto que la teologiacutea (o mejor y de manera maacutes precisa la fe de la que la teologiacutea estudia los momentos reflexivos y la no reflexibilidad uacuteltima) debe enunciar siempre el concreto histoacuterico en su indeducibilidad y al mismo tiempo hacer comprensible coacutemo este concreto de la historia puede concernir efectivamente al hom-bre en su existencia y subjetividad originarias73

El momento trascendental de la teologiacutea considera que en la horizon-talidad de la experiencia trascendental que el sujeto humano tiene de su autorrealizacioacuten (en cuanto ser situado capaz de conocimiento y libertad) habita la verticalidad es decir se da una fundamental apertura a la reve-lacioacuten del Ser absoluto Dios La teologiacutea contempla que en virtud de la voluntad salviacutefica universal de Dios (revelacioacuten trascendental) el hombre despliega esa experiencia de su autorrealizacioacuten bajo el impulso de la gra-cia sobrenatural Dios ha creado libre y amorosamente al hombre como espacio personal de su autodonacioacuten y precisamente por ello no de modo arbitrario ndashcomo indicaba Metzndash sino como dotado de la capacidad real y permanente para que laquopueda dar cabida a este amor que es Dios mismo que lo pueda y lo tenga que recibir a un tiempo como lo que es el milagro eternamente asombroso el regalo inesperado indebidoraquo74 Aunque esa ca-pacidad real y permanente pueda ser identificada como congeniabilidad de la esencia del espiacuteritu humano hacia el Amor que se dona en ninguacuten caso es exigencia de la naturaleza humana sino que se trata en palabras de Rahner de un laquoexistencial sobrenaturalraquo75

El hombre real como interlocutor real de Dios debe poder recibir este amor como lo que necesariamente es un don libre Ello significa que hay que caracterizar de indebido de laquosobrenaturalraquo el mismo existen-cial central permanente de la ordenacioacuten al Dios trinitario de la gracia y de la vida eterna No porque el hombre posea ndashlaquoevidentementeraquondash una

73 Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 11274 Id Sobre la relacioacuten entre la naturaleza y la gracia in ET I 31275 Cfr Id Existenciario Existencial II in SM III 66-68 Es en la filosofiacutea de Heideg-

ger donde tiene su asiento el sentido del teacutermino Existencial se refiere a aquella caracteri-zacioacuten de la existencia del ser que permite comprenderlo en su especificidad de ser-ahiacute que permite por tanto comprender las determinaciones oacutenticas del ente que se comprende a siacute mismo como existencia o hecho de ser frente a las cosas Cfr M HEIDEGGER Ser y tiempo sect 9 Madrid 2003 67-70

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naturaleza fijamente delimitada y en este sentido comparada con ella ndashen cuanto magnitud fija y conocida desde siemprendash la gracia en uacuteltimo teacutermino Dios mismo aparezca como improporcionada con lo cual habriacutea que llamarla sobrenatural Sino porque la tendencia y ordenacioacuten al amor de Dios el existencial sobrenatural solo salva el caraacutecter indebido de la gracia siendo eacutel mismo indebido y en el momento en que lleno de gracia se hace consciente presentaacutendose como sobrenatural es decir como in-debido al hombre real76

Esta concepcioacuten teoloacutegica de la existencia humana como determinacioacuten ontoloacutegico-real operada sobrenaturalmente por la gracia en su naturaleza y llamada por eso sobrenatural (si bien no ausente del orden concreto de la existencia)77 aguarda auacuten el esclarecimiento de su especificidad cristiana la presencia histoacuterico-salviacutefica de Jesucristo es decir de la Palabra en la carne (revelacioacuten categorial) como raiacutez del sentido uacuteltimo que tiene el impulso trascendental del hombre hacia Dios esto es del oyente (antro-pologiacutea) y la relacioacuten de Dios con el mundo (cosmologiacutea)78 La automani-festacioacuten de Dios (revelacioacuten trascendental) en la categorialidad histoacuterica alcanza su plenitud en Jesucristo

Dios ha tomado al hombre con tan absoluta seriedad en la encarnacioacuten del Verbo que el hombre no puede considerar seriamente a Dios sino a Eacutel en cuanto hombre y en Eacutel a la humanidad divinizada Todas las realidades humanas tambieacuten su aspecto natural poseen una efectiva anoacutenima aca-so solo potencial y no obstante verdadera condicioacuten cristiana79

Cristo es la comunicacioacuten laquodefinitiva e insuperableraquo de Dios pues Dios asume en su Verbo la concrecioacuten histoacuterica del hombre Jesuacutes como propia La asume en la persona del Salvador laquoafirmacioacuten concreta en la historiaraquo sin la que lo trascendental no seriacutea real 80 Que la maacutexima realiza-

76 K RAHNER Sobre la relacioacuten entre la naturaleza y la gracia in ET I 31477 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 24578 laquoEn efecto si queremos ser cristianos y no solo metafiacutesicos del oscuro principio

hemos de confesar que la Palabra eterna se ha hecho carne y ha habitado entre nosotrosraquo (K RAHNER La palabra poeacutetica y el cristiano in ET IV 416)

79 Id Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 38780 A partir de una ontologiacutea de lo que llama Rahner laquosiacutembolo realraquo puede acometerse

una explicacioacuten de la humanidad de Cristo no como medio o sentildeal sino como manifestacioacuten propia del Logos como su siacutembolo real en sentido eminente y no como una realidad asumida desde fuera que no dice ni muestra nada de Aquel que la asume Originariamente se entiende por siacutembolo el espacio expresivo que va del ente que conoce al ente por conocerse en cuanto auto-realizacioacuten intriacutenseca en la pluralidad que es propia del ente ya sea finito o absoluto como el Dios Trino Ese espacio expresivo es el realizarse de la unidad de un ente esencial-

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cioacuten del hombre se haya hecho realidad solo puede ser aceptado y creiacutedo a posteriori a partir del acontecimiento histoacuterico-salviacutefico de Jesucristo Ahora bien dada su constitucioacuten es a partir de la reflexioacuten trascendental como el hombre puede aceptar la encarnacioacuten de Dios como libre epifaniacutea que finaliza realmente su desiderium naturale de la visioacuten beatiacutefica en la plenitud de la invitacioacuten que Dios dirige al hombre para compartir su vida divina a partir del mismo momento de su creacioacuten y no como superes-tructura adventicia al ser del hombre81

El movimiento de la creacioacuten apareceriacutea gravitando de antemano hacia ese punto en el que Dios alcanza simultaacuteneamente la suprema cercaniacutea y lejaniacutea frente a lo distinto de eacutel ndashlo creadondash al objetivarse de la manera maacutes radical en su imagen daacutendose en ella en cuanto eacutel mismo de la ma-nera maacutes verdadera y aceptando como lo maacutes radicalmente suyo lo creado por eacutel Dios en tal caso no seriacutea el fundador sin historia de una historia ajena a eacutel sino el ser de cuya propia historia se trata82

Por ello sostiene Rahner que la creacioacuten en general y el hombre en particular han sido llamados a la existencia por el amor de Dios que desea darse a lo otro esperando de eso otro una respuesta libre sostenida por el uacutenico motivo del amor 83 Refirieacutendose a la unidad entre el orden de la crea-cioacuten y el de la redencioacuten escribe laquoEsta unidad se funda uacuteltimamente en la absoluta decisioacuten de Dios ndashinderogable por la libertad de las criaturasndash a favor de su auto-alienacioacuten en el hacerse creatura de su uacutenico Verboraquo84 Dicho del modo concreto en que se despliega la historia de la salvacioacuten el hombre existe (creacioacuten) porque su existencia ha sido pensada y proyecta-da en Cristo (encarnacioacuten)85 En Cristo se da la plenitud de la unidad entre naturaleza y gracia anhelo humano y don de Dios revelacioacuten e historia

mente plural Expresaacutendose se auto-encuentra y posee a siacute mismo Siacutembolo es el modo de autoconocimiento propio del ente Este es el sentido en que Rahner habla del Logos en la vida trinitaria como laquosiacutembolo del Padreraquo (laquosiacutembolo intriacutenseco y sin embargo distinto del simbolizado constituido por este mismo en quien el simbolizado se expresa a siacute mismo y de esta forma se poseeraquo) y de la humanidad de Cristo como automanifestacioacuten del Logos laquode forma que cuando Dios expresaacutendose se aliena a siacute mismo aparece justamente eso que nosotros llamamos la humanidad del Logosraquo (K RAHNER Para una teologiacutea del siacutembolo in ET IV 277 y 280)

81 K RAHNER Problemas actuales de cristologiacutea in ET I 19282 Ibid 17283 K RAHNER Para la teologiacutea de la encarnacioacuten in ET IV 14284 Id Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 38885 Id Curso fundamental sobre la fe 237 Id Historia del mundo e historia de la salva-

cioacuten in ET V 125

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Como se colige de lo dicho hasta aquiacute para comprender a fondo el laquoha-cerse hombreraquo del Verbo misterio esencial y especiacutefico de la fe cristiana86 Rahner adopta en su cristologiacutea esa oacuteptica trascendental del misterio de Cristo que comparte con la metafiacutesica moderna el empentildeo en laquola supera-cioacuten del positivismo metafiacutesico y del conceptualismo caracteriacutestico de la escolaacutestica tardiacutearaquo partiendo de una laquocomprensioacuten del ser como espiacuteritu palabra conciencia inicial y poder entenderlo asiacute dinaacutemicamenteraquo87

Cuando la historia del hombre el acto de su libertad y la culminacioacuten absoluta de ese acto libre no son considerados como sucesos basados en un fundamento en siacute intocado de una naturaleza humana concebida coacute-sico-estaacuteticamente sino vistos como autorrealizacioacuten de una esencia que en tanto lo que ella es alcanza solamente en ellos su realidad propia si la libertad por consiguiente no es vista tanto como una laquopotenciaraquo que se laquotieneraquo sino como la libertad de disposicioacuten que se es para llevar la propia esencia previamente dada en tanto ella misma a su perfeccioacuten el acontecimiento de la encarnacioacuten estaacute entonces unido maacutes estrecha y esencialmente a la perfeccioacuten de la vida humana asumida que cuando la encarnacioacuten es vista como constitucioacuten de un sujeto humano en cuya vida acaece despueacutes solo ulteriormente esto o lo otro88

Se trata en suma de elaborar una laquocristologiacutea ontoloacutegicaraquo esto es que construya sus enunciados y esquemas de comprensioacuten orientados laquohacia la coincidencia original de ser y de concienciaraquo89 y asiacute tratando de remontar la formalidad conceptual de la cristologiacutea claacutesica los pueda hacer maacutes asequibles al hombre contemporaacuteneo Un trabajo que nuestro autor consi-dera plenamente justificado por cuanto se trata de un recurso al que apela la misma Escritura En efecto si como recordaba el Vaticano II tanto el mundo (cosmologiacutea) como la humanidad (antropologiacutea) han sido creados

86 Cfr STh III q2 a2 laquoSi ergo humana natura Verbo Dei non unitur in persona nullo modo ei unitur Et sic totaliter tollitur incarnationis fides quod est subruere totam fidem christianamraquo

87 O GONZAacuteLEZ DE CARDEDAL Fundamentos de cristologiacutea II Madrid 2006 706-707

88 K RAHNER Cuestiones dogmaacuteticas en torno a la piedad pascual in ET IV 160 Per-miacutetasenos hacer de este texto un ejemplo que ilustra los adjetivos con que J B Metz califica la teologiacutea trascendental de Rahner laquoRahner elabora una dogmaacutetica histoacuterico-vital biograacutefica narrativa testimonial pero siempre enfocada como casi ninguna otra teologiacutea a lo objetivo y doctrinalraquo En nuestro caso se trata de la estrecha confrontacioacuten y mutua iluminacioacuten entre libertad del hombre (considerada en su caraacutecter de disposicioacuten de ser) y encarnacioacuten de Dios en cuanto plenificacioacuten de la misma Cfr J B METZ La fe en la historia y la sociedad 233

89 K RAHNER Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica 66

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en orden a un encuentro de plenitud con Cristo no hay por queacute descartar ambos como espacio o gramaacutetica para la comprensioacuten de la encarnacioacuten del Verbo sin que por ello haya de quedar Dios sometido a este ciacuterculo hermeneacuteutico90 Por lo que a la antropologiacutea se refiere Rahner apela en clave ascendente al doble espacio en que ndashseguacuten eacutelndash se declara la identidad personal del hombre (ante y en Cristo) tanto al horizonte de la apertura trascendental del espiacuteritu humano como al significado de otras experien-cias de rango existencial que pueden considerarse declaracioacuten anoacutenima de la revelacioacuten de Dios en Cristo Si bien no puede obviarse que es la experiencia trascendental el fundamento o condicioacuten de posibilidad de toda iniciativa del espiacuteritu del hombre y por tanto constituye el horizonte comprensivo de su existencia histoacuterica o si se prefiere del a posteriori de su vida personal Dediquemos una palabra conclusiva al significado teoloacute-gico de la trascendentalidad para ahondar en el siguiente apartado el de la existencia maacutes inmediata y sus llamadas a la teologiacutea

Rahner recordemos presenta al hombre como aquel ser que es cons-ciente de siacute de su propia finitud y en tal medida como ser que estaacute frente al ser laquoabsolutoraquo Aun sin poder superarla trasciende su propia finitud pues por su constitucioacuten esencial es capaz de anticipar la llamada hacia el absoluto El hombre toma conciencia de su orientacioacuten al absoluto porque es laquosujetoraquo del mismo modo que la invocacioacuten que brota de eacutel hacia el absoluto espera y piensa a este como el laquoSujetoraquo Por eso la perspectiva trascendental declara la identidad del hombre como persona En el encuen-tro con Cristo ndashprincipio y fin de todo lo creadondash el hombre descubre el sentido uacuteltimo de su laquopoder existir en la plena entrega de siacute mismoraquo91 como entrega al Ser en la medida en que en y por Cristo la humanidad se mani-fiesta como prefigurada y creada para la salvacioacuten (para ser naturaleza del propio Dios como incomparable disposicioacuten de siacute) Si como confiesa san Pablo el hombre ha sido creado en Cristo (cfr Rom 829 Col 115 1 Cor 86) entonces es Cristo quien en su encarnacioacuten revela al hombre su mis-terio La definicioacuten cristoloacutegica de la unioacuten hipostaacutetica apela a una aptitud de la naturaleza humana (potentia oboedentialis o potencialidad para la re-cepcioacuten de la autocomunicacioacuten de Dios en la gracia) como capacidad para su asuncioacuten por la persona del Verbo de Dios La encarnacioacuten no estaacute por tanto en funcioacuten del pecado del hombre ndashcomo pudo pensar la interpreta-

90 Cfr Id Jesucristo B in SM IV 5691 Id Para la teologiacutea de la encarnacioacuten in ET IV 137

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cioacuten teoloacutegica claacutesica del disentildeo de Dios a favor del hombrendash sino que la creacioacuten es ya un acto de salvacioacuten La existencia humana acontece en el orden presente de la salvacioacuten esto es se halla sobrenaturalmente elevada por la autocomunicacioacuten divina en la gracia increada que es la potencia del Dios Trino92 La perspectiva trascendental permite a la cristologiacutea laquohacer comprensible la idea del hombre-Dios como punto culminante (buscado por lo menos asintoacutetica e hipoteacuteticamente) del movimiento del espiacuteritu que en una constante superacioacuten de siacute mismo se mueve hacia Diosraquo93 La misma perspectiva trascendental permite a la antropologiacutea advertir que su constitutiva potencialidad como condicioacuten a priori para la laquoautomediacioacuten de Diosraquo tiene su razoacuten de ser en el hombre salido de las manos de Dios como don por medio de su Hijo hecho hombre94

92 Cfr Id Amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 259 El propio teoacutelogo confiesa abiertamente al final de su carrera que por razones no solo teoloacutegicas sino pastorales en su antropologiacutea teoloacutegica laquoel tema de la pecaminosidad del hombre y el perdoacuten de la culpa por pura gracia es en cierto sentido algo secundario en comparacioacuten con el tema de la auto-comunicacioacuten de Diosraquo Y esto no porque el pecado sea una experiencia que no nos afecte radicalmente y nos impida reclamar cualquier derecho ante la gracia de Dios sino porque laquosi vemos lo difiacutecil que llega hoy diacutea a los hombres la justificacioacuten como perdoacuten uacutenicamen-te del pecado si ademaacutes para un teoacutelogo catoacutelico Dios y su promesa de siacute mismo al hombre (como quiera que esta haya de entenderse en concreto) precede ya al pecado y es pura gracia pura maravilla inesperada de Dios quien se entrega derrochaacutendose a siacute mismo y hace que la aventura de tal amor sea su propia historia entonces pienso que puede uno sentir tranquila-mente que la autocomunicacioacuten de Dios a la criatura es un tema maacutes central que el pecado y el perdoacuten de los pecadosraquo (K RAHNER Sobre la inefabilidad de Dios Experiencias de un teoacutelogo catoacutelico 31-32) En otro lugar en liacutenea semejante considera Rahner que tras la en-carnacioacuten de Cristo y su cruz ndashel ahiacute donde Dios se ha decidido a favor del hombre sin dantildear su libertad redimiendo y ennobleciendo su naturaleza hasta hacerla capaz de felicidadndash el cristiano laquopost Christum natum en el fondo debe pensar el mundo de manera optimista del mismo modo que debe (puede) saber que la Palabra de Dios se ha hecho carne en este mun-do para siempre [hellip] No se trata de que dicho optimismo pase por alto la cruz y la muerte sino de que fije su atencioacuten en la compenetracioacuten del Hijo con el destino del mundoraquo (Id Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 389-390) En otro paso de su obra refirieacutendose a la acusacioacuten lanzada contra Teilhard de Chardin de haber atenuado la fuerza del pecado en su visioacuten evolutiva del mundo considera Rahner que sin restar importancia al pecado cabe una concepcioacuten fundamentalmente positiva del mundo en su proceso evolutivo cuando se entiende este rectamente a la luz del poder redentor de la encarnacioacuten laquoEl mundo y su historia estaacuten de antemano sustentados por la voluntad absoluta de Dios de una radical autocomunicacioacuten a ese mundo puesto que en esa autocomunicacioacuten y su punto cumbre la encarnacioacuten el mundo se hace historia de Dios mismo estaacute el pecado si lo hay en el mundo y en la medida en que lo haya abarcado de antemano por la voluntad de remisioacuten y la oferta de autocomunicacioacuten divina seraacute necesariamente puesto que por causa de Cristo no estaacute condicionada por el pecado una oferta de la remisioacuten y de la superacioacuten de la culparaquo (Id La cristologiacutea dentro de una concepcioacuten evolutiva del mundo in ET V 197)

93 Id Teologiacutea trascendental in SM VI 614-615 94 Cuando la laquounioacuten hipostaacuteticaraquo no se piensa bajo la clave del privilegio abstracto

o alteracioacuten del liacutemite humano sino como plena realizacioacuten de la apertura entre Dios y el

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32 Llamadas de la antropologiacutea a la teologiacutea

Ademaacutes de la conciencia de siacute la trascendentalidad del espiacuteritu hu-mano desvela el sentido que poseen otras llamadas (categoriales) de la antropologiacutea a la teologiacutea Se trata de la experiencia humana del amor al tuacute la disposicioacuten ante la muerte y la versioacuten al futuro de la vida del hom-bre en clave de esperanza hacia un destino de plenitud ulterior 95 Todas ellas se situacutean en la oacuterbita de una experiencia de vida que abre un camino a aquella reflexioacuten que puede conducir eventualmente a Dios laquoEstas tres lsquoapelacionesrsquo coinciden en que el hombre en su existencia si eacutel la asume decididamente de suyo desarrolla ya algo asiacute como una lsquocristologiacutea en buacutesquedarsquoraquo96 Rahner observa estrechamente vinculado el sentido y ejer-cicio de cada una de estas apelaciones de la existencia humana a la voca-cioacuten sobrenatural (la primordial genuinidad del fondo personal informado por el laquoPneuma divinoraquo)97 que Dios ha inscrito en cada vida singular convirtieacutendola en uacutenica e insustituible

321 Amor al proacutejimo

Cuando el amor al proacutejimo es considerado en su verdad y capacidad constitutiva de generar una comunidad enteramente nueva entre los hom-bres laquode persona a personaraquo98 cuando no obviamos que en virtud de la historicidad a posteriori del hombre en el acto de la comunicacioacuten amoro-sa con el tuacute personal queda sintetizada reunida y realizada la unidad origi-

hombre entonces es posible recuperar la contemplacioacuten de la vida de Cristo (en su condicioacuten de realidad humana en el mundo y en cuanto tal realidad de Dios) como espacio para un discernimiento maacutes profundo del significado de nuestra propia vida A una teologiacutea de los misterios de la vida de Cristo (los interrogantes y asombros que suscita) confiacutea Rahner la posibilidad de lograr una interpretacioacuten uacuteltima de nuestra vida e historia personal (y cristiana) en todo el arco de su complejidad como esfuerzo de a-propiacioacuten de siacute y ex-sistencia ante el Misterio Cfr K RAHNER Problemas actuales de cristologiacutea in ET I 195-197 Mysterien des Lebens Jesu in LThK2 VII 721-722 Para conocer las fuentes y motivaciones de la teologiacutea contemporaacutenea (con especial atencioacuten a la obra de K Rahner) para la recuperacioacuten de una teologiacutea de los misterios de la vida de Cristo O GONZAacuteLEZ DE CARDEDAL Fun-damentos de cristologiacutea I Madrid 2005 654-660 Tambieacuten A GRILLMEIER Los misterios de la vida de Jesuacutes panorama histoacuterico in MyS III 571-586

95 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 345-348 Id Der eine Jesus Christus und die Universalitaumlt des Heils 279-282 Id Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea siste-maacutetica 63-66 Cfr G PATTARO La svolta antropologica 152-157 I SANNA La visione antropologica di Karl Rahner in Id (ed) Lrsquoereditagrave teologica di Karl Rahner 18-26

96 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 34597 Cfr Id Uumlber die Heilsgeschichtliche bedeutung des einzelnen in der Kirche 43198 Id Consagracioacuten del laico para la cura de almas in ET III 276

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naria de lo que el hombre es en su auto-posesioacuten subjetiva como apertura trascendental al ser y en su libre auto-disposicioacuten hacia la definitividad99 cuando advertimos la complejidad pasional del fenoacutemeno amoroso como realidad que permea la totalidad experimentada y sufrida de la vida per-sonal con don de siacute 100 entonces seriacutea insensato no conceder a este acto fundamental y envolvente de la existencia humana el caraacutecter de patencia del misterio aun antes de profundizar en su orilla teoloacutegica101 Por ello

Si en la descripcioacuten del amor al tuacute se pone de manifiesto que es realmente la realizacioacuten del ser total espiritual y trascendental del hombre entende-remos con mayor facilidad que dicho amor acontezca en el presente orden salviacutefico como caritas que no indica otra cosa que su radicalidad absoluta en cuanto que estaacute abierto a la inmediateidad del Dios que se comunica como gracia102

En la extroversioacuten amorosa de que es capaz el espiacuteritu humano cabe por tanto una experiencia inmediata de Dios103 En efecto la identifica-cioacuten teoloacutegica de la trascendentalidad ilimitada del espiacuteritu humano como potentia oboedentialis para la gracia permite comprender la sobrenatu-ralidad del acto radicalmente libre de amor hacia el tuacute como orientacioacuten inmediata a Dios que se da en el seno de la historia de la salvacioacuten es decir en la figura concreta del otro que para el cristiano representa de modo absoluto Jesucristo

Jesuacutes es el absolutum concretissimum y en consecuencia aquel ante quien el amor alcanza su concrecioacuten e inequivocidad maacutes absolutas aque-lla que el amor busca en razoacuten de su propia esencia pues es un movimien-to no hacia un ideal abstracto sino hacia la singularidad concreta indi-vidual indisoluble y precisamente este amor halla en su tuacute la amplitud absoluta del misterio incomprensible104

Caritas identifica en la Escritura el amor mismo que es Dios quien hace de su encuentro con la criatura ndashimagen y semejanza suyandash un acto supre-

99 Id Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 258-259100 Id De la necesidad y don de la oracioacuten 45101 Cfr Id Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 260 Puede

encontrarse una siacutentesis sobre el sentido que tiene en Rahner el amor al proacutejimo como espacio de Trascendencia en M CABADA CASTRO La vigencia del amor Afectividad hominiza-cioacuten y religiosidad Madrid 1994 378-381

102 K RAHNER Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 261103 Cfr Id Uumlber die Heilsgeschichtliche bedeutung des einzelnen in der Kirche 423104 Id Curso fundamental sobre la fe 362

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mo de amor que se convierte para ella a su vez en mandamiento nuevo El cual no es una mera exigencia moral sino una llamada a concentrar la fuerza vital en aquel que Dios ha querido como morada de su amor la per-sona del otro Cristo mismo ha sido identificado por Dios en el Evangelio como mi amado (cfr Mt 317 175) y Jesuacutes a su vez como fundamento del mandamiento del amor (cfr Jn 1335) en Eacutel Dios mismo se presenta como garantiacutea real de la plenitud que aguarda a pesar de su finitud al amor humano laquoPor eso para Juan la consecuencia de que Dios que es amor (1 Jn 416) nos haya amado no es que nosotros a nuestra vez le amemos a eacutel sino que nos amemos mutuamente (1 Jn 4711)raquo105 En otro lugar se-ntildeala Rahner que el amor inter-humano corre el riesgo de instrumentalizar sus mediaciones (aunque sean personales) en cambio esto no es posible cuando decimos que el otro de la relacioacuten es Dios pues Eacutel no estaacute junto al hombre sino ocupando su centro maacutes iacutentimo laquoEl amor a un hombre por amor de Dios no saca del hombre amado sino que introduce en eacutelraquo106

Si laquosinoacutepticamenteraquo se reclama como ejecucioacuten nuestra un amor que en su desmesura ha de aceptar la desmesura del amor de Dios para con nosotros y que ha de poseer por ello una radicalidad que exige realmente y hasta el final la carencia de reparos habraacute que decir entonces ese amor de veras reclamado es en cuanto tal dado que responde al absoluto amor de Dios un amor que este sustenta esto es que la autocomunicacioacuten de Dios posibilita [hellip] porque Dios estaacute dispuesto a dar lo que ordena [hellip] porque se da ya el amor como posibilidad que ha de ser animada y liberada hacia siacute misma y porque estaacute ahiacute ya en el mundo la voluntad de Dios que otorga su realizacioacuten a esa posibilidad107

La consideracioacuten que hace la tradicioacuten neotestamentaria del hondo significado del amor inter-personal como amor a Dios108 contempla en continuidad la realidad del amor humano como genuina posibilidad de la trascendentalidad de la persona (que laquopara no perderse en la vaciacutea nada necesita un tuacute intramundanoraquo)109 con la absoluta disponibilidad del amor

105 Id Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 253106 Id Consagracioacuten del laico para la cura de almas in ET III 282107 Id El laquomandamientoraquo del amor entre los otros mandamientos in ET V 452-453108 Ya sea como medida expliacutecita por la que el hombre seraacute juzgado en el juicio esca-

toloacutegico de Dios (Mt 2534-46) o como forma definitiva de la existencia cristiana (1 Cor 1231ndash1313)

109 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 207 Id El laquomandamientoraquo del amor entre los otros mandamientos in ET V 450

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que es Dios y se da a conocer en la persona de Cristo Y puesto que la mediacioacuten salviacutefica de la encarnacioacuten de Cristo no tiene un significado so-lamente temporal sino eterno110 la realizacioacuten espiritual de la existencia como demanda de fidelidad absoluta que exhibe la entrega interpersonal amorosa en tanto estaacute llevada por la gracia posee una profundidad abso-luta y un momento que estaacute asumido en la laquovida eternaraquo entre Dios y el hombre Esa vida eterna en definitiva trasciende siempre este encuentro inmediato espacio-temporal corporal y se entiende como insuprimible en la muerte presupuesto solamente que en la concepcioacuten cristiana de la existencia la muerte se interprete y realice como consumacioacuten y no solo como fin en que todo se acaba111

322 Disponibilidad para la muerte

Pasemos al espacio de la experiencia de la muerte Cabe leer de dos modos muy distintos esa declaracioacuten irrevocable de la finitud de la exis-tencia del hombre que es su muerte como pura pasioacuten y fatalidad o como ndashdigaacutemoslo asiacutendash pasioacuten activa teacutermino y consumacioacuten de la vida personal (status viatoris)112 En la medida en que la muerte pone fin a la existencia bioloacutegica del hombre este sufre la muerte la padece sin remedio como laquoladroacuten en la noche despojo y reduccioacuten a la impotencia es justamente finraquo113 No obstante y en cuanto acontecimiento protagonizado por el ser personal no puede pasarse por alto que la muerte no es ajena a la dialeacutec-tica de la vida personal donde ha de vivirse

El hombre es espiacuteritu y materia persona y naturaleza tiene libertad y al mismo tiempo un dinamismo vital independiente del libre albedriacuteo En la esencia misma del hombre hay una verdadera dialeacutectica aneja a esta composicioacuten plural y antiteacutetica de realidades Lo maacutes loacutegico es esperar que esta complejidad se refleje en la muerte [hellip] El acto maacutes trascendental de la vida vivido humanamente implica la uacuteltima decisioacuten personal de la

110 Cfr Id Eterna significacioacuten de la humanidad de Jesuacutes para nuestra relacioacuten con Dios in ET III 55-56

111 Id Curso fundamental sobre la fe 361 112 Cfr Id Sentido teoloacutegico de la muerte 15-35 Id Pasioacuten y ascesis Sobre la fun-

damentacioacuten filosoacutefico-teoloacutegica de la asceacutetica cristiana in ET III 80-93 Cfr las explica-ciones sobre la teologiacutea de la muerte en Rahner J L RUIZ DE LA PENtildeA El hombre y su muerte Antropologiacutea teoloacutegica actual Burgos 1971 217-268 F BRANCATO La questione della morte nella teologia contemporanea Teologia e teologi Firenze 2005 73-80

113 K RAHNER Sentido teoloacutegico de la muerte 45

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vida no por lo que tiene la muerte de acontecimiento pasivo procedente de la vida bioloacutegica sino por la accioacuten libre del alma El teacutermino del hombre como persona espiritual que decide libremente de su propia suerte ha de ser consumacioacuten activa desde dentro situarse activamente en su perfeccioacuten o imperfeccioacuten dar el postrer testimonio que resulta y resume en general toda su propia vida En este caso la muerte lleva consigo la total posesioacuten de siacute mismo por parte de la persona Importa la realizacioacuten definitiva del sentido de siacute mismo y la libre decisioacuten de la realidad personal [hellip] Asiacute la laquopropia muerteraquo desde dentro por la accioacuten de la persona misma es a la par el acontecimiento de la maacutes radical depotenciacioacuten del hombre La muerte es accioacuten y pasioacuten en uno114

Heidegger hace de la muerte ndashentendieacutendola activamentendash clave her-meneacuteutica de comprensioacuten de la existencia en su originalidad y posibi-lidad de recogimiento en siacute laquoLa muerte como fin del Dasein es la po-sibilidad maacutes propia irrespectiva cierta y como tal indeterminada e insuperable del Dasein La muerte como fin del Dasein es en el estar vuelto de este hacia su finraquo115 No obstante apunta Rahner116 Heidegger tan solo llega a identificar a su protagonista como un ser-para-la-muerte en cuanto posibilidad anticipada de un vivir estrechado sin embargo a lo inmediato

Ahora bien iquestpor queacute proclamar el dominio de la muerte sobre la to-talidad de la vida aislando aquella de la real capacidad de apertura tras-cendente y la constante pugna de libertad en que la existencia personal se descubre y construye cabe-siacute y hacia lo otro de siacute como afaacuten sin liacutemites Entre las determinaciones esenciales de la existencia humana Rahner ha privilegiado ndashcomo explicitaremosndash la libertad cualificaacutendola como accioacuten trascendental sobre el proyecto personal esto es como entrega del hombre a siacute mismo que asumiendo en unidad la totalidad de dimensiones de su existencia pretende la total disposicioacuten de siacute laquoLa libertad en su esencia original no es la facultad de hacer o dejar de hacer arbitraria-mente una cosa determinada sino la estructura fundamental por la que el sujeto en su trascendentalidad dispone de siacute mismo en orden a su realiza-

114 Ibid 34-35115 M HEIDEGGER Ser y tiempo sect 52 Madrid 2003 278 Cfr J L RUIZ DE LA

PENtildeA El hombre y su muerte Antropologiacutea teoloacutegica actual 79-90 A NITROLA Trattato di escatologia 2 Pensare la venuta del Signore Cinisello Balsamo 2010 89-91

116 Cfr K RAHNER Pasioacuten y ascesis Sobre la fundamentacioacuten filosoacutefico-teoloacutegica de la asceacutetica cristiana in ET III 89

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cioacuten definitivaraquo117 Asiacute entendida la libertad que es propia de la existencia personal laquono es precisamente la capacidad de revisar siempre de nuevo sino la uacutenica facultad de lo definitivo la facultad del sujeto que mediante esa libertad ha de ser llevado a su situacioacuten definitiva e irrevocableraquo118 Para la antropologiacutea cristiana la muerte se encuadra entre aquellas ac-ciones particulares de la vida en que se ejerce y media esa facultad de lo eterno que es la libertad del hombre laquoLa muerte del hombre se presenta como llegada a su teacutermino de una historia de libertad en la inmediatez del misterio de Dios como plenitud beatiacutefica o como juicioraquo119 Libertad que ante la muerte puede ejercer el hombre como laquolibertad libremente amada [hellip] pues donde hay libre libertad hay amor a la muerte hay valor para morirraquo120 y laquolibertad rendida una libertad que acepta no solo la muerte sino su sentido el sentido de la existenciaraquo121 Contribuyendo asiacute a la re-capitulacioacuten de su historia y a la pregunta por la densidad irrepetibilidad y valor absoluto de quien la padece

La muerte tiene una presencia axioloacutegica en la totalidad de la vida humana El hombre opera su muerte como consumacioacuten por la accioacuten de su vida y asiacute la muerte estaacute presente en esa accioacuten y consiguiente-mente en toda accioacuten libre en que el hombre dispone de la totalidad de su persona122

La decisioacuten libre y responsable adoptada en cada accioacuten vital ndashincluida la muertendash construye el proyecto personal en el tiempo presente donde se rememora lo valioso acumulado a la vez que se anticipa el futuro definitivo del mismo123 El conjunto de tales decisiones va enriqueciendo el nuacutecleo personal humano desde dentro coadyuvando fielmente a la constitucioacuten de la imagen de lo que el hombre quiere llegar a ser Este argumentario an-

117 Id La muerte del cristiano in MyS V 452118 Id Curso fundamental sobre la fe 123 El anaacutelisis completo de la libertad humana

en sus posibilidades y condicionantes Ibid 121-125119 Id Theologische Erwaumlgungen uumlber den Eintritt des Todes 333120 Id Sentido teoloacutegico de la muerte 94121 Ibid 95122 Ibid 49-50 Cfr Id La muerte del cristiano in MyS V 444 Este es el modo crea-

tivo en que Rahner interpreta la afirmacioacuten de Gregorio Magno (prolixitas mortis) laquoTempo-ralis vita aeternae vitae comparata mors est potius dicenda quam vita Ipse enim quotidianus defectus corruptionis quid est aliud quam quaedam prolixitas mortisraquo (GREGORIO MAG-NO Homiliarum in evangelia II 37 1 in PL 76 1275)

123 Entre los existenciales ineludibles del hombre se encuentra su constitucioacuten anam-neacutetica y prognoacutestica Cfr K RAHNER Principios teoloacutegicos de la hermeneacuteutica de las declaraciones escatoloacutegicas in ET IV 382

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tropoloacutegico contribuye a conjurar el peligro de una escatologiacutea cristiana que tratando de laquodesmitologizarraquo en absoluto las afirmaciones escatoloacute-gicas de la Escritura las laquodes-escatologizara de tal forma que todas ellas mentasen solo un suceso acaecido una decisioacuten tomada en el ahora de la existencia del hombre concretoraquo124 quedando asiacute destruido su caraacutecter esencial como sabiduriacutea del futuro en el saber del hombre acerca de siacute y su redencioacuten en Cristo por revelacioacuten divina Este proceder des-escatologi-zariacutea a priori tanto la prerrogativa antropoloacutegica de la apertura absoluta e incondicionada a la palabra de Dios (al hacer de eacutel un ser restringido a su presente sin capacidad de futuro) como la posibilidad reveladora de Dios y su actuacioacuten pro nobis como plenitud del hombre entero y de todo lo que pertenece a su existencia personal (naturaleza y sujeto)125 En realidad la salvacioacuten ofrecida al hombre por Dios y determinada por el acaecer de Cristo ndashmuerto y resucitadondash contiene una comunicacioacuten sobre lo futuro que en palabras de Rahner

acaece justamente en lo que el hombre oye sobre siacute mismo de parte de Dios en tanto la apertura de la verdad de su existencia y viceversa Ambas co-sas en el mismo grado y medida en que esta interpretacioacuten del hombre he-cha por Dios avanza en la historia humana y por eso y de manera no su-perable en Jesucristo en quien Dios se ha dicho como salvacioacuten al hombre definitivamente y de forma que ya no podraacute ser rebasada126

En la humanidad de Cristo el hombre oye hablar a Dios claramente sobre el significado de su propia muerte ya que

la redencioacuten acontecioacute precisamente por el hecho de que la muerte fue aceptada ndashcon fe esperanza y amorndash como manifestacioacuten del pecado como muestra de su vaciedad y opresioacuten como presencia de la eterna tiniebla y del abandono de Dios y se transformoacute en manifestacioacuten de la entrega obe-diente del hombre entero a la incomprensibilidad del Dios santo en medio del extraviacuteo y el alejamiento127

En la presente economiacutea de la salvacioacuten la muerte del hombre deja de ser una contradiccioacuten total de la constitucioacuten humana pues mediante la accioacuten de la gracia ha sido incorporada a la muerte de Cristo laquodonde

124 Ibid 376125 Ibid 378-379126 Ibid 386-387127 K RAHNER La muerte del cristiano in MyS V 461

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el vaciacuteo del hombre se hizo plenitud de Dios cosa que de suyo y origi-nariamente no era La muerte se hizo vidaraquo128 Precisamente este es el sentido que tiene para el justo morir con Cristo como don de gracia El Crucificado ha desvelado la autentica significacioacuten del acto por el cual el hombre asume en libertad el despojamiento que acarrea su muerte no en abstracto por consiguiente pues laquoel autodesprendimiento radical de la muerte es un aspecto de la realizacioacuten de la gracia en cuanto fe esperanza y amorraquo129

323 Esperanza en el futuro

Digamos una palabra final sobre la versioacuten del hombre al futuro como instancia antropoloacutegica para la teologiacutea Una vez maacutes hemos de apuntar que en la caracterizacioacuten cristiana del tiempo histoacuterico como tiempo de salvacioacuten o avance hacia el futuro absoluto ndashlaquoque no es sino otro nombre para lo mentado con la palabra lsquoDiosrsquoraquo130ndash entra de nuevo en juego el ciacuterculo hermeneacuteutico entre antropologiacutea metafiacutesica y teologiacutea Uno de los constitutivos que definen la estructura inmanente del espiacuteritu finito en cuanto espiacuteritu encarnado es el de la temporalidad La esperanza cris-tiana en un futuro absoluto laquoimplica la conviccioacuten de que el hombre vive en el tiempo de manera distinta a como viven las realidades infrahuma-nasraquo131 El hombre no es una cosa limitada a la dimensioacuten temporal del presente Es el sujeto que poseyeacutendose a siacute mismo y disponiendo de siacute en libertad posee su tiempo como totalidad en cuyo presente se condensa lo realmente decisivo de la realizacioacuten de la historia personal como antici-pacioacuten de futuro A esto es a lo que llama Rahner el laquoconsuelo del tiem-poraquo en que laquono perdemos nada sino que ganamos continuamenteraquo132 Esta asuncioacuten intriacutenseca de la temporalidad que es propia del hombre como espiacuteritu encarnado permite su concepcioacuten como espiacuteritu libre o laquoser histoacutericoraquo133 En efecto por su condicioacuten esencialmente encarnada el espiacuteritu del hombre opera en el marco espacio-temporal en el que lo ubica su corporeidad Encarnacioacuten e historicidad se corresponden en el

128 Id Sentido teoloacutegico de la muerte 78129 Id La muerte del cristiano in MyS V 463130 Id Utopiacutea marxista y futuro cristiano del hombre in ET VI 74131 Id Consuelo del tiempo in ET III 154132 Ibid 165133 K RAHNER Oyente de la palabra 176

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hombre Y como venimos mostrando en virtud de su libertad es posible definir al hombre como proyecto es decir no como entidad estaacutetica o fijada de antemano sino como posibilidad de autodevenir hacia un estado de realizacioacuten vital definitivo

Ahora bien para Rahner solo la lectura del mundo y el hombre desde la historia de la salvacioacuten aporta al hombre (al creyente) la certeza de que el suyo es un tiempo absolutamente consolado es decir laquoque no corre hacia el vaciacuteo sino que encuentra el futuro absoluto se mueve incluso en eacutelraquo134 aunque sea en la aparente vulgaridad del cada diacutea135 El cristianis-mo posee un concepto de tiempo que las futurologiacuteas seculares descono-cen En efecto el cristiano cree en un futuro en el que todo aquello que es libremente actuado tendraacute validez eterna en Dios porque el hombre proyecta trascendentalmente su naturaleza a la luz de laquoun futuro absoluto que per definitionem no puede ser ni hecho ni planificado en tanto que le deja venir sobre siacuteraquo136 porque laquolo que el cristianismo llama gracia no es otra cosa que la autocomunicacioacuten de Dios como futuro absoluto en ese estado en que la historia de su llegada y aceptacioacuten dura todaviacutearaquo137 por uacuteltimo porque lo que el cristianismo llama encarnacioacuten del Logos divino en Jesucristo indica de modo preciso que objetivamente en eacutel y para nosotros esa autocomunicacioacuten de Dios en cuanto futuro absoluto del mundo se manifiesta tan histoacutericamente que se hace como dada y como irreversible captable y creiacuteble por la experiencia categorial de la humanidad138

Por ello frente a otros proyectos utoacutepicos el cristianismo contempla al hombre en su dignidad inviolable no sacrificable a ninguna promesa de un futuro fruto de un caacutelculo o planificacioacuten intramundana Es maacutes al trabajo en favor de ese futuro intramundano laquole otorga su uacuteltima radical seriedad en su doctrina de la unidad del amor a Dios y al proacutejimo declara que la positiva relacioacuten para con el hombre es un momento esencial indis-pensable es mediacioacuten irreemplazable para la relacioacuten con Dios futuro absoluto (lsquosalvacioacutenrsquo)raquo139

134 Id Utopiacutea marxista y futuro cristiano del hombre in ET VI 72135 Cfr Id De la necesidad y don de la oracioacuten 57-69136 K RAHNER Utopiacutea marxista y futuro cristiano del hombre in ET VI 73137 Ibid 75138 Ibid139 Ibid 77

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41 Laantropologiacuteafilosoacuteficaimplicadaenlateologiacutea

Ante todo en relacioacuten con los presupuestos para el mensaje revelado del cristianismo hemos de decir sobre el hombre es persona sujeto [hellip] Una relacioacuten personal con Dios una auteacutentica historia dialogiacutestica entre Dios y el hombre la recepcioacuten de la propia salvacioacuten singular y eterna el concepto de una responsabilidad ante Dios y su juiciohellip todas estas afirmaciones del cristianismo ndashindependientemente de que ellas mismas deban interpretarse todaviacutea con mayor precisioacutenndash implican que el hombre es lo que queremos decir aquiacute persona y sujeto140

Es esta una afirmacioacuten que el teoacutelogo hace en su Curso fundamental sobre la fe al plantear una siacutentesis de la globalidad del mensaje cristiano a la luz de una conviccioacuten esencial laquoEste mensaje llama al hombre a situarse ante la verdad real de su esencia ante la verdad en la que eacutel estaacute irreme-diablemente cautivo aunque a la postre este cautiverio sea la anchura in-finita del misterio incomprensible de Diosraquo141 Considerar la antropologiacutea como presupuesto de la escucha e inteleccioacuten de la palabra divina o sea la vigencia mutua entre la estructura esencial del hombre histoacutericamente constituida y el juicio de Dios sobre el hombre expresado en la revelacioacuten (trascendental e histoacuterica) demanda la elaboracioacuten de una antropologiacutea fi-losoacutefica que ha de basar su meacutetodo de trabajo en dos pilares irrenunciables

En primer lugar el conocimiento natural que es requisito del conoci-miento de fe no puede impugnar la auteacutentica metafiacutesica pues ella laquoestaacute dada ineludiblemente con la existencia del hombre [hellip] como reflexioacuten sobre esas implicaciones trascendentales dadas innegablemente que lle-van en siacute su luz y su seguridad y que de modo necesario estaacuten puestas junto con una realizacioacuten libre de la existenciaraquo142 Sin olvidar no obstan-te que dondequiera que el hombre se experimenta a siacute mismo en su tras-cendencia como el que pregunta como el inquietado por esa irradiacioacuten del ser como el expuesto a lo inefable no puede entenderse como sujeto en el sentido de sujeto absoluto sino solamente en el sentido de recepcioacuten del ser y a la postre de la gracia143

140 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 44141 Ibid 43142 K RAHNER Ideologiacutea y cristianismo in ET VI 60143 Id Curso fundamental sobre la fe 53

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Para Karl Rahner ndashcomo veremos maacutes adelantendash al conocimiento de fe contribuye una antropologiacutea de la libertad en la que el hombre como sujeto de esperanza y de promesa laquose concibe a siacute mismo sobre la base de un futuro propio a desarrollar creativamente y no como sujeto que en su misma aprioridad tenga ya conocimiento anticipado de su futuro desde siempreraquo144 Desde este punto de vista afirmar que el hombre es persona significa en primer lugar hablar de eacutel como sujeto indeducible a partir de lo que estaacute a su disposicioacuten laquoel insuprimiblemente anterior y maacutes originarioraquo145 confiado a siacute mismo y capaz de cuestionarlo todo capaz en este sentido de rebasarse mostraacutendose como laquoel ser de hori-zonte infinitoraquo146

En segundo lugar el conocimiento natural que es requisito del co-nocimiento de fe tiene que atender a la historia y la experiencia faacutectica como mediacioacuten insoslayable de las condiciones trascendentales que posibilitan al sujeto su auto-conocimiento (persona) y auto-disposicioacuten (libertad) la interrogacioacuten trascendental no desprecia la experiencia de-limitada en el espacio y el tiempo que el hombre hace de siacute puesto que laquoun disentildeo adecuado del hombre (de lo que es y de lo que debe ser) hecho por una razoacuten aprioriacutestica y racional no es posibleraquo147 Sin su realizacioacuten concreta laquoel concepto de hombre queda lsquovaciacuteorsquo y no tiene plasticidad ni por tanto fuerza histoacutericaraquo148 laquoEl hombre es el espiacuteritu que se expe-rimenta como tal en cuanto no se experimenta como espiacuteritu puroraquo149 sino que en su inevitable ligazoacuten a lo concreto permanece siempre en camino Por esta razoacuten define Rahner la trascendentalidad a que recu-rre en su antropologiacutea como laquoaquella apertura aprioriacutestica del sujeto al ser en general que se da precisamente cuando el hombre cuidando y aprovisionando temiendo y esperando se experimenta como expuesto a la multiplicidad de su mundo cotidianoraquo150 Por consiguiente bajo esta segunda consideracioacuten laquola personalidad del hombre no se puede relegar a una interioridad absoluta Necesita imprescindiblemente un espacio de realizacioacuten que aunque en cierto modo le es lsquoexteriorrsquo (cuerpo tierra

144 Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 100145 Id Curso fundamental sobre la fe 50146 Ibid 51147 Id Dignidad y libertad del hombre in ET II 233148 Ibid 233149 Id Curso fundamental sobre la fe 51150 Ibid 54

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economiacutea signos siacutembolo Estado) es esencialmente indispensable y por eso debe ser configurado de tal modo que permita la autorrealizacioacuten personalraquo151

Solo a partir de este doble horizonte ndashteniendo en cuenta que el hombre uacutenicamente sabe de siacute mismo (meacutetodo trascendental) en sus concretas determinaciones (experiencia histoacuterica) que es don y misioacutenndash puede de-finir la teologiacutea cabalmente al hombre como persona aquel ser en cuya estructura natural ndashconsiderada en el conjunto de sus principios forma-les espiritualidad libertad individualidad corporeidad intersubjetivi-dad mundanidad152ndash se columbra su impronta sobrenatural es decir la gramaacutetica de la autocomunicacioacuten gratuita de Dios al hombre (o existen-cial sobrenatural en cuanto don indebido de gracia) que tambieacuten se reve-la en la entrantildea del espacio y el tiempo y de modo irrepetible y definitivo en Jesucristo La persona se define pues como dialeacutectica entre trascen-dentalidad e historicidad al preguntar a la revelacioacuten cuaacutel es su identidad y destino ante Dios En el ser personal se visibiliza la dialeacutectica que mar-ca la entrantildea del cristianismo laquoen su dedicacioacuten a la historia como real acontecimiento salviacutefico y su naturaleza trascendental en cuanto patencia seguacuten gracia hacia el Dios absolutoraquo153 Veamos con maacutes detalle los pasos que conducen a esta siacutentesis que acabamos de avanzar

42 El hombre unidad de espiacuteritu y materia

Como hemos visto Rahner sigue a santo Tomaacutes en su consideracioacuten de la capacidad humana de ser cabe siacute ndashlaquoreditio completa subiecti in seip-sumraquo154ndash como indicativa de su espiacuteritu en tanto identidad de ser que corresponde al ente humano Y por tanto como indicativa de la distancia entre subjetividad y objetividad Como sujeto espiritual el hombre no estaacute recluido en el horizonte de lo inmediato pues la aprehensioacuten de lo objetivo como ser-cabe-siacute y el libre obrar funcionan en eacutel como dinaacutemica de orientacioacuten ilimitada hacia el ser en general que Rahner denomina anticipacioacuten Y puesto que se habla de una apertura ilimitada en la anti-cipacioacuten se afirma simultaacutenea y atemaacuteticamente laquola existencia de un ente

151 Id Dignidad y libertad del hombre in ET II 235152 Cfr Id Hombre III in SM III 499-502153 Id Ideologiacutea y cristianismo in ET VI 64154 Id Oyente de la palabra 62

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de absoluta lsquoposesioacuten del serrsquo es decir la existencia de Diosraquo155 Dicho esto cabe antildeadir que el hombre es orientacioacuten al absoluto no en abstrac-to sino como espiacuteritu en el mundo como espiacuteritu en la carne Espiacuteritu y materia son laquocomo momentos de un hombre en los que la esencia de este originariamente una se descompone y se despliegaraquo156 La relacioacuten entre espiacuteritu y materia se muestra en el ser humano en su maacutes estrecha unidad A ella llega Rahner desde un doble punto de vista

1 Esclareciendo como ya hemos notado la capacidad cognoscitiva que es propia del espiacuteritu quien si es apertura al ser en general y por tanto a Dios lo es siempre y de modo insoslayable en el encuentro con lo mate-rial que sucede en la sensibilidad157 nuestra experiencia trascendental del mundo es ya explicitud de esa relacioacuten de co-presencia entre materia y es-piacuteritu cuerpo y alma El hombre experimenta su cuerpo como una realidad tan cercana a siacute que puede ser identificado como principio de actuacioacuten del alma en lo diverso o alteridad del alma158 De hecho la afirmacioacuten de que la comunicacioacuten entre materia y espiacuteritu es en el hombre un pro-ceso que sucede en la forma originaria del conocimiento trascendental no pierde su fuerza porque se afirme que lo material no es aprehendido primariamente por medio del espiacuteritu sino por medio de los sentidos del hombre Porque si la sensibilidad estaacute reconocida como realidad material y sin embargo consciente se nos concede entonces en el fondo lo que pretendemos Y ademaacutes el conocimiento sensible no puede ser entendido sino como condicioacuten de la posibilidad del conocimiento espiritual159

De esta percepcioacuten de lo corpoacutereo participa una buena parte de la sen-sibilidad filosoacutefica contemporaacutenea coincidente con la tradicioacuten filosoacutefica y teoloacutegica cristiana claacutesica (que laquoretrotrae la materia en su esencia y en su ser enteros al acto creador de Dios al que llamamos espiacuterituraquo)160 al observar que la materialidad de la existencia humana rebasa el estatus de biologiacutea manteniendo una relacioacuten de especial afinidad con el fondo personal de la vida humana

155 Ibid 86156 Id La cristologiacutea dentro de una concepcioacuten evolutiva del mundo in ET V 173 Cfr

Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 55 K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 304-305

157 Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 69158 Id Para una teologiacutea del siacutembolo in ET IV 289159 Id La unidad de espiacuteritu y materia en la comprensioacuten de la fe cristiana in ET

VI 183160 Ibid 183

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2 Mediante la concepcioacuten de materia y espiacuteritu como parte de una misma historia del mundo cuyo devenir puede interpretarse como movi-miento del espiacuteritu que permite pensar la materia como de y para el espiacute-ritu ndashlaquoespiacuteritu congeladoraquondash161 aun en su esencial diversidad Para evitar farragosas repeticiones no insistimos en estos aspectos pues del primero ya hemos hablado al explicar el mecanismo de la trascendentalidad huma-na y del segundo nos ocuparemos en el capiacutetulo final al poner en diaacutelogo filosofiacutea y teologiacutea de la vida

A la luz de esa dualidad nativa e inexcusable entre espiacuteritu y materia puede iluminarse la magnitud antropoloacutegica de la concepcioacuten tomista del alma como forma del cuerpo Foacutermula en que no cabe dualismo alguno pues en ella se entiende laquocorpus en sentido tomista es decir como mate-ria prima como la vacua potencia real de serraquo162

Si considero el problema desde la perspectiva tomista tengo que afir-mar que lo que yo experimento como la corporeidad del hombre es ya realidad del espiacuteritu diluido en una esfera misteriosa ndashesclarecida solo metafiacutesicamentendash que el filoacutesofo escolaacutestico y tomista llama materia pri-ma El cuerpo es ya espiacuteritu considerado en aquel momento de la autorrea-lizacioacuten en el que la espiritualidad personal se hace presente para poder encontrarse de una forma inmediata y concreta con todo lo que es distinto de siacute misma La corporeidad no es algo sobreantildeadido al espiacuteritu sino que es el ser concreto del espiacuteritu mismo realizado en el espacio y el tiempo La corporeidad humana no es algo que existiriacutea de antemano sino que es la automanifestacioacuten del espiacuteritu dentro del espacio y el tiempo163

Retomando la distincioacuten espiacuteritu-materia continuacutea nuestro autor laquoEl espiacuteritu humano es vere et essentialiter corpus informans para decirlo con las palabras del Concilio de Vienne El alma siendo espiacuteritu se intro-duce de por siacute per se en la materiaraquo164 El cuerpo asiacute entendido no es en el espacio humano una realidad indiferente (Koumlrper) sino que es en cuanto apropiado por el alma (Leib)165 que a su vez sigue siendo irreductible a

161 Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 74162 Id Oyente de la palabra 163163 Id El cuerpo y la salvacioacuten 86164 Id Oyente de la palabra 169 Cfr DH 902165 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 148 La distincioacuten

que hace Rahner entre Leib (cuerpo viviente) y Koumlrper (cuerpo fiacutesico) resulta claacutesica en la moderna antropologiacutea filosoacutefica occidental Cfr el ejemplo paradigmaacutetico de M SCHELER Eacutetica nuevo ensayo de fundamentacioacuten de un personalismo eacutetico Madrid 2001 530-550

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lo material esto es en unidad sustancial Por ello laquoel espiacuteritu humano no es lsquoespiacuteritu purorsquo sino esencialmente lsquoalma-espiacuteritursquo que por su vincula-cioacuten al cuerpo y por consiguiente en virtud de su vinculacioacuten al espacio y al tiempo se hace especiacuteficamente lsquoespiacuteritu humanorsquoraquo166 Aunque laquoempiacute-ricamente se puede encontrar y descubrir al hombre entero no podriacuteamos conocerlo con suficiente acierto y amplitud si no se le entendiera como persona espiritual dotada de individualidad auteacutentica e insustituibleraquo167 Pasos decisivos de la fe demandan este parentesco y mutua trabazoacuten en-tre espiacuteritu y materia la pregunta por el Logos en su entrada en lo finito seguacuten la cristologiacutea168 o la inteligencia del estado de plenitud a que estaacute destinada la materialidad humana seguacuten la escatologiacutea169

43 Persona y naturaleza

En sintoniacutea de sentido con la relacioacuten entre espiacuteritu y materia y con-tribuyendo a la subsiguiente definicioacuten del hombre ndashapenas citadandash co-mo laquopersona espiritualraquo se encuentra la definicioacuten rahneriana de natu-raleza humana

Procedemos a su examen hacieacutendolo en primer lugar bajo el prisma de la distincioacuten entre naturaleza y persona que nuestro teoacutelogo entiende laquoen el sentido de la metafiacutesica moderna seguacuten la filosofiacutea existencialraquo170 Es decir como el iacutendice de finitud que revela la distancia que el hombre ex-perimenta en siacute entre lo que es (don) y lo que desea ser (misioacuten)171 Rahner recuerda que la raiacutez metafiacutesica de la diferencia entre persona y naturaleza

166 K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 218167 Ibid 13168 Cfr K RAHNER La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 56 K RAHNER -

H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 149169 Cfr K RAHNER Sentido teoloacutegico de la muerte 43-52 K RAHNER - H VOR-

GRIMLER Diccionario teoloacutegico 14-15 A propoacutesito del dogma de la resurreccioacuten de la carne afirma en otro lugar nuestro autor laquoEs ist mit diesem Dogma schon gesagt dass der Mensch sein geistiges und auch sein uumlbernatuumlrliches Leben nicht vollziehen kan aus-ser in einer Verleiblichung dieses Vollzuges in der materiellen Wirklichkeit ausser in einer Hinwendung zur Welt in einer Ein-bildung des Geistigen in das Materielleraquo (K RAHNER Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 383)

170 K RAHNER Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 364171 No resulta difiacutecil asociar a esta visioacuten de nuestro teoacutelogo la resonancia de afirmacio-

nes como la de Jaspers laquoLa existencia del hombre no transcurre como los procesos naturales Pues su libertad clama por una direccioacutenraquo (K JASPERS La filosofiacutea desde el punto de vista de la existencia Madrid 91981 56) o Heidegger cuando se refiere al comprender como inter-pretacioacuten es decir en su alcance existencial como poder-ser del Dasein ante el mundo Cfr M HEIDEGGER Ser y tiempo sect 32 Madrid 2003 172-177

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no reside tan solo en la vertical en la distincioacuten entre esencia y existencia sino que es necesario contemplar tambieacuten esa tensioacuten con santo Tomaacutes en su horizontalidad en cuanto ente habitado primitivamente por la dife-rencia real entre la materia y el espiacuteritu dos realidades que poseen un en siacute propio El espiacuteritu es irreductible a la materia en virtud de sus trazos fundamentales (experiencia de autoconciencia y libertad) Pero aunque el acto libre procede del centro personal del hombre y decide sobre todo el sujeto el espiacuteritu no puede manifestarse plenamente en la materia hacien-do de ella reflejo inequiacutevoco de su centro rector172 laquola persona no reasume nunca toda su naturalezaraquo173 pues laquosufre en ese determinarse a siacute misma la oposicioacuten de la naturaleza pre-existente a la libertad y no logra nunca plenamente que todo lo que el hombre es sea realidad y expresioacuten de lo que eacutel entiende por lsquosiacute mismorsquo en el nuacutecleo de su personaraquo174 No obstante para la naturaleza del hombre no cabe otro calificativo que el de personal frente a aquella que es no-personal o infrahumana incapaz de auto-conciencia y auto-disposicioacuten175 Su consistencia o naturaleza se le revela al hombre como impulso de apertura que generado en su intimidad se orienta a la total posesioacuten de siacute en el paso viviente por lo otro

Desde el aacutengulo de la relacioacuten teoloacutegica entre naturaleza y gracia y al hilo del reproche de extrincesismo176 que la teologiacutea contemporaacutenea eleva a la concepcioacuten neo-escolaacutestica de la gracia Rahner elabora una sugestiva distincioacuten para la antropologiacutea teoloacutegica entre esencia concreta y naturaleza En efecto sostener ante la naturaleza humana el caraacutecter in-condicionado e indebido de su ordenacioacuten a la visioacuten divina no niega que esta tiene una importancia determinante para el hombre (pues pertenece a la intentio divina al crearlo) Frente a la oposicioacuten que la teologiacutea neoes-

172 Cfr K RAHNER Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 365173 Ibid 364174 Ibid 370 En esta tensioacuten seguacuten Rahner se alza la comprensioacuten teoloacutegica de la

concupiscencia El hombre que ha recibido de Dios (como gracia) el don de disponer de siacute como insercioacuten completa de su ser en la decisioacuten personal hacia el bien en virtud de la fuerza de gravedad de la naturaleza laquonunca posee de manera total esa interioridad recogida de toda su vida en el acto uacuteltimo de su ser maacutes iacutentimo Y este es el iacutendice de su finitud y pertenencia al mundo de su esencia espiritual-sensibleraquo (Ibid 375)

175 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 474176 K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 300 Id Na-

turaleza y gracia in ET IV 200-203 Conviene recordar que la relacioacuten entre naturaleza y gracia ocupa un lugar destacado en la teologiacutea catoacutelica de la primera mitad del siglo XX Una siacutentesis histoacuterico-criacutetica al respecto K-H MENKE Teologiacutea de la gracia El criterio de ser cristiano Salamanca 2006 199-232

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colaacutestica ha desarrollado entre naturaleza y sobrenatural Rahner propone el concepto de laquoesencia uacutenica y concretaraquo177 o laquonaturaleza efectivaraquo178 del hombre mientras que el teacutermino laquonaturalezaraquo queda reservado al sentido en que la teologiacutea claacutesica habla de naturaleza pura Al calificar la esencia humana con las notas de concrecioacuten y efectividad Rahner reconoce que no solo pertenece a dicha esencia el espiacuteritu en su trascendencia y liber-tad sino muchas maacutes cosas del hombre como esencialmente suyas su mundaneidad su corporeidad su pertenencia a una comunidad de seres semejantes a eacutel [hellip] Y estos laquoexistencialesraquo de su naturaleza concreta ndashde su naturaleza laquohistoacutericaraquondash no son haacutebitos oacutenticos totalmente extramuros de la conciencia sino que se hacen valer en la experiencia del hombre Eacutel no puede separarlos sencilla e inequiacutevocamente mediante una simple re-flexioacuten sobre siacute mismo ndashcon la luz de la razoacuten naturalndash de la espiritualidad natural que es su naturaleza179

Es esta amalgama de muacuteltiples contornos lo que ha de considerarse dotacioacuten de gracia Sin duda es teoloacutegicamente legiacutetimo emplear aquel contra-concepto de naturaleza (pura) entendido como laquorestoraquo180 que que-da tras haberle sido sustraiacuteda a la humanidad su capacidad para la recep-cioacuten de la gracia pues la naturaleza humana (creada) aun abierta a lo sobrenatural no supone su exigencia incondicionada Sin embargo su legitimidad no oculta seguacuten Rahner la dificultad de una delimitacioacuten precisa de una naturaleza asiacute181 El hombre laquotiene de contar con que qui-zaacutes mucho de lo que eacutel experimenta de siacute concretamente y que casi invo-

177 K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 305178 Id Naturaleza y gracia in ET IV 218179 Ibid 218-219180 Cfr K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 315-316 Piacuteo

XII previene en Humani generis frente a los que sostienen que Dios no ha podido crear seres inteligentes sin ordenarlos y llamarlos a la visioacuten beatiacutefica (cfr DH 3891)

181 laquoIl relativo senso-proprio della natura ndashmatiza Balthasar ante la concepcioacuten de Rah-nerndash egrave sufficientemente garantito se essa viene vista come una sfera di senso oggettivamen-te autentica particolare e relativamente autonoma allrsquointerno della creazione generale se viene vista ad esempio come la sfera della lsquoculturarsquo ma anche come la sfera dellrsquoIo-Tu e dellrsquoUomo-Donna una sfera di senso provvisorio non direttamente deducibile dalla grazia ma piuttosto a disposizione della grazia quale suo presupposto senza che per questo si de-bba affermare categoricamente che il contenuto di senso di questa sfera egrave talmente grande e assoluto da bastare anche percheacute Dio venga posto per se stesso nellrsquoesistenzaraquo (HU VON BALTHASAR La teologia di Karl Barth Milano 1985 321) El problema de una natura pura es en realidad un problema del hombre no de Dios por ello propone Balthasar adoptar no el punto de vista de una teologiacutea creatural como hace Rahner sino el de una teologiacutea divina que permite otro aacutengulo de comprensioacuten tanto de la tensioacuten de Adaacuten a Cristo como de aquella otra de la razoacuten creada a la fe de la alianza

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luntariamente estaacute tentado a atribuir a su lsquonaturalezarsquo es ya efectivamente una consecuencia en eacutel de lo que a partir de la teologiacutea tiene que conocer como gracia indebidaraquo182 Rahner prefiere hablar de concrecioacuten y efecti-vidad para sortear la idea de una teoacuterica naturaleza (pura) y presentar al hombre en la diversidad de rostros que posee su identidad efectiva como aquel ser en cuyo centro maacutes iacutentimo se ubica la llamada a la comunioacuten con Dios Asiacute el existencial sobrenatural tiene su lugar en el ser concreto del hombre Y es posible conocer a este como potentia oboedentialis para la vida eterna entendiendo dicha potencia (1) no como mera carencia de contradiccioacuten sino como positiva ordenacioacuten al sobrenatural (2) no parcialmente como suceso noeacutetico sino como espacio concomitante de aquel conocimiento libertad y amor humanos que forman parte de una existencia habilitada para acercarse a aquella plenitud de ser que se ha re-velado como laquoAmor y no como noesis noeseosraquo183 Digamos una palabra sobre ambas perspectivas

Cuanto maacutes se adentra la antropologiacutea metafiacutesica en las dimensiones de la naturaleza especiacuteficamente humana (unidad de alma-cuerpo inter-per-sonalidad conciencia y libertad) tanto maacutes se pone de manifiesto que se trata de una realidad difiacutecilmente identificable como puramente natural en sentido teoloacutegico184 La presentacioacuten metafiacutesica de la persona como ser abierto hacia lo alto en la mediacioacuten de lo concreto no hace sino revelar su caraacutecter creatural es decir de radical donacioacuten y novedad en medio del mundo de modo que ante la posibilidad y realidad de la locucioacuten de su Creador no sabriacutea delimitar en siacute una demarcacioacuten concreta para el reposo del discurso divino Para ser oyente de la Palabra el hombre ha de ser na-turalmente sujeto185 aquel a quien la gracia de la Palabra supone pero tam-

182 K RAHNER Naturaleza y gracia in ET IV 219183 Ibid 223184 Como tambieacuten cabe rechazar una naturaleza pura en sentido filosoacutefico laquoLo que

llamamos filosofiacutea podraacute ser en cierto sentido filosofiacutea lsquopurarsquo ya que no toma ninguacuten conte-nido y ninguna norma materiales de la revelacioacuten seguacuten ministerio socialmente constituida eclesiaacutestica especial y temaacutetica Pero no lo seraacute en el sentido de que la existencia elucidada no temaacuteticamente desde la cual vive y a la que nunca alcanza adecuadamente y que tampo-co puede reemplazar contenga solo elementos que procedan de la esencia natural humana La abisalidad del hombre que de mil maneras es el tema de la filosofiacutea es el abismo que ha abierto la gracia de Dios y que alcanza hasta los abismos divinos precisamente cuando el hombre que filosofa no es capaz de reflexionar exactamente sobre ese hecho de su existencia de distinguir naturaleza y gracia en la realizacioacuten de su existencia espiritualraquo (K RAHNER Filosofiacutea y teologiacutea in ET VI 90)

185 Lo que la razoacuten concentra en el dinamismo ilimitado del espiacuteritu humano y la fe llama designio de Dios en su autocomunicacioacuten al hombre

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bieacuten eleva y ahonda para llevarlo a su plenitud en la participacioacuten de la vida divina Y si esa participacioacuten en la vida divina donde reside la plenitud del ser personal186 representa el uacutenico fin en orden al cual se orienta la esencia uacutenica y concreta de la subjetividad natural y creatural aquella plenitud de vida divino-personal resulta a su vez fundamento y posibilitacioacuten de la vida y ser personal del hombre quien acercaacutendose a Dios en la actualidad de la gracia no disminuye sino que se fortalece y crece como quien ha sido puesto por el Amor en la existencia El hombre no tiene experiencia de siacute mismo maacutes en que en el aacutembito de la amorosa voluntad sobrenatural de Dios si bien no puede decirse que esta sea exigencia de aquella

44 Persona y libertad

Una de las caracteriacutesticas de la esencia natural del hombre en su cua-lidad personal en la que Rahner fija sobre todo su atencioacuten es la libertad En efecto

Libertad es autorrealizacioacuten de la persona en un material finito ante el Dios infinito Es por tanto tambieacuten un dato de la teologiacutea de la antropologiacutea teoloacutegica Sin ella en efecto no se situariacutea el hombre ante Dios como operante y responsable como socio e interlocutor ni podriacutea ser ante Dios sujeto de culpa ni de redencioacuten ofrecida y aceptada187

Desde el punto de vista de la antropologiacutea trascendental el existencial de la libertad encarna a la perfeccioacuten la tensioacuten entre el caraacutecter originario (libertad manantial) y la objetivacioacuten categorial (libertad emanada) que de-termina la autorrealizacioacuten del ser personal en camino hacia su plenitud188 Por ello Rahner muestra en su obra que a la hora de proceder a la carac-terizacioacuten personal del hombre la libertad tiene una importancia decisiva que emerge tanto desde el punto de vista metafiacutesico como teoloacutegico Y asiacute a la luz del hondo significado que posee la tensioacuten naturaleza-espiacuteritu en que se resuelve la existencia humana la libertad no puede ser entendida como mera facultad de elegir entre varias opciones u objetos sino como (1) libertad entitativa189 propia del ser del ente espiritual al conocer y deci-

186 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 553-558187 K RAHNER Dignidad y libertad del hombre in ET II 242188 Id Curso fundamental sobre la fe 57 189 Cfr Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 202 Id Culpa-responsabilidad-castigo

en la visioacuten de la teologiacutea catoacutelica in ET VI 219-220

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dir que una vez maacutes seguacuten la definicioacuten de santo Tomaacutes es capaz de una laquoreditio completa subiecti in seipsumraquo190 y (2) laquoopcioacuten fundamentalraquo191 que modela la vida que media en lo categorial el anuncio de una decisioacuten de caraacutecter total y radical Libertad que no es ajena a las condiciones in-teriores y exteriores en medio de las cuales ha de ejercitarse192 Y aunque sobre esos factores condicionantes no tenga el hombre poder alguno este ndashque se define como empresa (persona) en lo dado (naturaleza)ndash mediante el ejercicio de su libertad se construye desde su maacutes iacutentimo dentro hasta tal punto que puede concluirse que en la accioacuten de su libertad iacutentimamen-te personal laquose trata del hombre mismo y de su posicioacuten respecto a Dios (ambas cosas en unidad indisoluble)raquo193

Por ello y a la luz de la revelacioacuten el teoacutelogo ha de reconocer que laquola verdadera libertad de eleccioacuten [hellip] solo puede verse claramente en el cristianismo porque solo en eacutel es cada uno el ser uacutenico de vigencia eter-na ndashen el amor personal de Dios al hombrendash es aquel que con la maacutes alta responsabilidad personal y por tanto con libertad se debe realizarraquo194 Seguacuten el ordo intentionis de la historia de la salvacioacuten la libertad del hom-bre se despliega en el espacio abierto por la originaria decisioacuten divina de elevar sobrenaturalmente la aptitud trascendental de la criatura (potentia

190 Id Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 363 191 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 203 Id Culpa-responsabilidad-castigo en la

visioacuten de la teologiacutea catoacutelica in ET VI 221192 Cfr Id Teologiacutea del poder in ET IV 455 193 Id Culpa y perdoacuten de la culpa como regioacuten fronteriza entre la teologiacutea y la psico-

terapia in ET II 263-264 Al inscribir la libertad en el seno de la loacutegica autotrascendente de la accioacuten humana que se funda en el dinamismo de autotrascendencia de la espiritualidad del hombre Blondel advierte que la libertad no es ajena al conflicto que se da en la volicioacuten humana entre laquola voluntad que quiere quod procedit ex voluntate y la voluntad querida quod voluntatis objectum fitraquo Aunque la libre decisioacuten se actuacutea en la mutua dependencia de cuerpo y alma a la que parece rigurosamente sujeta la accioacuten humana en realidad la accioacuten querida es principio de una accioacuten que quiere ser cada vez maacutes libre por cuanto laquola accioacuten hace parti-cipar al organismo material de la intencioacuten que la animaraquo y asiacute garantiza su sinceridad como movimiento de progresiva liberacioacuten que tiende a un fin del que se nutre fin del que no se puede excluir la apertura al orden divino del mundo que se presenta como determinacioacuten de la libertad hacia la plenificacioacuten de su dinamismo interior esto es como libertad para la Liber-tad Dios laquoEn la accioacuten voluntaria se opera un secreto maridaje entre la voluntad humana y la voluntad divina Ser llamado a la vida de la razoacuten y de la libertad significa participar en la libre necesidad de Dios que no puede menos de quererse a siacute mismo Nosotros tampoco podemos menos de querernos a nosotros mismos el ser que recibimos como propiedad nuestra es de tal naturaleza que es imposible no aceptarloraquo Rechazaacutendolo el hombre desmentiriacutea y cancelariacutea su aspiracioacuten a los bienes eternos Las citas se han tomado de M BLONDEL La Accioacuten Ensayo de una criacutetica de la vida y de una ciencia de la praacutectica Madrid 2006 167225418

194 K RAHNER La libertad en la Iglesia in ET II 95

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oboedentialis) hacia la visioacuten de Dios como su fin uacuteltimo195 A esta orien-tacioacuten permanente del espiacuteritu finito a la Trascendencia es a lo que llama Rahner como venimos diciendo existencial sobrenatural El dinamismo del espiacuteritu humano se alimenta de lo que en teologiacutea se denomina gracia es decir aquella presencia de Dios en el hombre (y el mundo) que aunque no sea exigible por eacutel196 penetra iacutentimamente en eacutel como determinacioacuten real de su concrecioacuten existencial e histoacuterica es fruto de la obra redentora de Jesucristo y la obra santificadora del Espiacuteritu197

Dicho esto es posible hablar de la libertad humana como toma de postura ante Dios incluso allaacute donde no haya sido reconocida su revela-cioacuten histoacuterica En Dios percibe la libertad personal su uacuteltimo de-doacutende y hacia-doacutende198 y por tanto la imposibilidad de rehuir una respuesta ya sea positiva o negativa a la demanda inscrita por la Trascendencia en el santuario de su intimidad La libertad creada ha sido hondamente herida por el pecado y la muerte mas no abandonada por Dios a su suerte pues en su Hijo ha dado noticia de esa decisioacuten irrevocable definitiva de libertad a la libertad [hellip] Esa libertad que es Cristo y que Cristo otorga se la apropia el hombre al someterse obedientemente a su llamada (Gal 513) en la fe (y en su perceptibilidad que es el bautismo) al acontecimiento que abre la caacutercel del mundo la encarnacioacuten muerte y resurreccioacuten del Hijo199

En su esencia por tanto la libertad cristiana estaacute estructurada esca-toloacutegicamente200 ya realmente iniciada alliacute donde el hombre espera de forma activa junto con toda la creacioacuten su liberacioacuten definitiva como participacioacuten en laquola gloriosa libertad de los hijos de Diosraquo (Rom 821) donde debe desembocar nuestra libertad liberada por obra de Cristo Dado que el uacuteltimo sentido de la revelacioacuten en Jesucristo es la manifestacioacuten de la doxa Theou mediante la llamada que saca a los hombres de este mundo

195 Id Sobre el concepto escolaacutestico de gracia increada in ET I 336 Id Curso fun-damental sobre la fe 102-103

196 Si se quiere respetar su iacutendole gratuita ha de concederse que no seriacutea teoacutericamente ilegiacutetimo pensar al hombre sin la gracia como natura pura Cfr K RAHNER Sobre la rela-cioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 315-316 Id Naturaleza y gracia in ET IV 221-223 Id Sobre el concepto de misterio en la teologiacutea catoacutelica in ET IV 60

197 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 387-389198 K RAHNER Oyente de la palabra 191 Id Dignidad y libertad del hombre in ET

II 242 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 196-200 Id Naturaleza y gracia in ET IV 216 Id Libertad III in SM IV 314 Id Hombre III in SM III 497

199 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 213200 K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 389

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y los introduce en la vida de Dios [hellip] Dios se enfrenta inmediatamente al hombre con una exigencia y una llamada que arranca al hombre de su oacuterbita natural que transcurriacutea dentro del horizonte del mundo201

Es asiacute como queda impresa en la identidad y destino del hombre una marca de trascendencia que solo puede sobrepujar la tentacioacuten de au-to-clausura de lo finito en la abierta y sincera aceptacioacuten existencial del maacuteximo exponente de laquola redondez en que el mundo deseariacutea descan-sarraquo202 la muerte Cuando el hombre afronta pasivamente su muerte como exposicioacuten a la incidencia amenazante y destructiva de un suceso exterior solo cabe ante ella impotencia y extrantildeeza En cambio cuando el pade-cimiento mortal que se cierne irremediablemente sobre el ser y vivir del hombre no se resuelve en la pura de-potenciacioacuten fiacutesica (koumlrper) sino que se integra en la experiencia personal viviente como transformacioacuten de lo que es ndashmetafiacutesica y existencialmente (personalmente)ndash entorno propio (leib) laquoconduce a una problematicidad uacuteltima que no puede ser resuelta por el hombre lsquode tejas abajorsquo Pues persona significa existencia es decir autoafirmacioacuten validez uacuteltima eternidadraquo203

5 resultAdo

A la conclusioacuten de esta invocacioacuten del sentido en que Rahner desentra-ntildea el papel teoloacutegico de la experiencia trascendental podemos subrayar su estrecha vinculacioacuten a dos hechos decisivos de la historia de la salva-cioacuten la creacioacuten y la encarnacioacuten

51 Entre creacioacuten y encarnacioacuten

Partiendo de la concepcioacuten del Dios creador y humanado como Misterio absoluto hacia el que el hombre espiacuteritu finito se encuentra iacutentimamente abierto a partir de su dinamismo trascendental (como sujeto cognoscente y libre) concluye Rahner que la experiencia que hace el hombre de su remisioacuten a Dios no procede de fuera de eacutel sino que tiene su originaria raiacutez en dicho dinamismo trascendental Desde el punto de vista estricta-

201 K RAHNER Pasioacuten y ascesis Sobre la fundamentacioacuten filosoacutefico-teoloacutegica de la asceacutetica cristiana in ET III 89 Cfr E J JUSTO Libertad liberadora Para una nueva formulacioacuten de la cristologiacutea y la soteriologiacutea Salamanca 2013

202 Ibid 90203 Ibid 84

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mente teoloacutegico Rahner situacutea el arranque de la relacioacuten Dios-hombre en el espacio de la creacioacuten como aacutembito iacutentimamente transido por la gracia como campo de interaccioacuten entre inmanencia y trascendencia El misterio de la creacioacuten radica precisamente en el poder de accioacuten especiacutefico de la divinidad laquopara constituir por siacute mismo y mediante el propio acto en cuanto tal algo que siendo radicalmente dependiente ndashpor ser totalmente constituidondash tenga tambieacuten ndashal ser constituido por el Dios uno y uacutenicondash una independencia real una realidad y verdad propia incluso ante el Dios que lo constituyeraquo204 La trascendentalidad del espiacuteritu finito se percibe como comparecencia constitutiva de ese Misterio que seguacuten Rahner se da a conocer como el de-doacutende y hacia-doacutende que marca el origen y meta de esa dinaacutemica ontoloacutegica del espiacuteritu finito El hombre que no olvida que su esencia concreta ndashen su naturaleza especiacutefica de espiritualidad en-carnadandash es apertura ilimitada (y como tal in-definible) no reniega de la posibilidad de llegar a ser hombre en sentido pleno

Pero si esto es asiacute ndashantildeade el teoacutelogondash para entender de modo radical lo que realmente somos es preciso comprender que existimos porque Dios se quiso hombre Esto significa que nosotros somos ndashporque eacutel asiacute nos ha queridondash seres en los que Dios en cuanto hombre se encuentra a siacute mismo al amarnos205

Visto asiacute la encarnacioacuten no es sino la asuncioacuten por parte del Verbo ndashen su relacioacuten eterna con el Padrendash de la naturaleza del hombre en su cuali-dad fundamental de apertura ilimitada al Ser En la apropiacioacuten divina de esa potencia obediencial del ser humano la naturaleza de este alcanza la plena consecucioacuten de su referibilidad divina (participada por Dios como autodonacioacuten trascendental en gracia) y en consecuencia la encarnacioacuten es el caso sumo de la realizacioacuten de la esencia del ser humano en el acon-tecimiento que la dogmaacutetica define como unioacuten hipostaacutetica y es al mismo tiempo portador absoluto de la salvacioacuten en la concrecioacuten de la historia de Jesuacutes muerto y resucitado el Hijo del Padre206

Podemos decir por tanto que el misterio que la fe cristiana confiesa se funda baacutesicamente en el hecho de que la misma realidad absoluta de Dios (naturalmente comprendida como personal amorosa y agraciante) no solo se puede contraponer creativamente a lo que es diverso de siacute sino que

204 K RAHNER Problemas actuales de cristologiacutea in ET I 170205 Ibid 190206 Cfr K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 259

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desea confrontarse y comunicarse con ello Desde el punto de vista de la criatura podemos decir asimismo que el misterio consiste en el hecho de que es realmente en el sentido radical sentildealado capax infiniti 207

Esta visioacuten filosoacutefico-teoloacutegica es la que imprime coherencia y unidad a la concepcioacuten rahneriana del hombre como persona En siacutentesis la con-sideracioacuten racional del hombre como realidad naturalmente habitada ndashen su capacidad trascendente de ser siacute-mismondash por una presencia sobrena-turalmente constitutiva o misterio (innominado pero dicente208) a cuya luz todas sus dimensiones esenciales e histoacuterico-operativas adquieren un significado convergente y se presentan como aquella compleja unidad en camino que identifica lo que llamamos laquopersonaraquo Por eso Rahner matiza el uso del concepto laquonaturalezaraquo humana en antropologiacutea teoloacutegica po-nieacutendolo en relacioacuten directa y no inversa con la accioacuten creadora de Dios pues Dios ha querido originariamente al hombre en una laquorelacioacuten viviente e inmediataraquo consigo209 El hombre para el teoacutelogo alemaacuten es trascen-dencia pero tambieacuten historia Es espiacuteritu encarnado donde ndashseguacuten lo ya apuntadondash se hace plenamente visible la dinaacutemica autotrascendente de la materia como participacioacuten en la densidad de ser del espiacuteritu Por ello seriacutea contradictorio presentar contemporaacuteneamente la persona ndasha la luz de lo que somos y el mundo en que vivimosndash como horizonte de apertura infini-ta y laquonaturalezaraquo si entendemos esta como sustancia clausurada o estrato independiente y no compenetrado con el don libre de Dios que Rahner lla-ma existencial sobrenatural Aunque el don del amor divino sea indebido al hombre para poder asiacute recibirlo y reconocerlo en su absoluta gratuidad el hombre real en su esencia concreta el interlocutor real de Dios en la uacutenica economiacutea de la salvacioacuten no es de hecho nunca una naturaleza pura sino una naturaleza conformada como sentido en cuanto apertura o tras-cendencia ilimitada En resumen podemos decir que Rahner despliega en el fondo de la existencia humana una interpretacioacuten del conocido axioma de la teologiacutea tomista gratia supponit naturam eamque perficit 210 La ex-

207 Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 120208 Cfr Id Oyente de la palabra 230209 Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 43 210 Cfr STh I q1 a8 ad 2 laquoCum enim gratia non tollat naturam sed perficiatraquo STh

I q2 a2 ad 1 laquoSic enim fides praesupponit cognitionem naturalem sicut gratia naturamraquo Cfr J RATZINGER Dogma und Verkuumlndigung Muumlnchen-Freiburg 1973 161-181 sobre la aplicacioacuten de este axioma al caso de Cristo J ALFARO Cristologiacutea y antropologiacutea Madrid 1973 363-364 (n 32)

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periencia de la Trascendencia implicada en toda realizacioacuten de la libertad humana que es el fundamento o condicioacuten de posibilidad de toda inicia-tiva del espiacuteritu del hombre constituye el horizonte de sentido de nuestra existencia histoacuterica o si se prefiere de nuestra vida maacutes cotidiana211

52 Entre trascendentalidad e historia

Asiacute queda formulado el marco sinteacutetico dentro del cual Rahner con-templa al hombre como persona

Ser persona significa asiacute autoposesioacuten de un sujeto como tal en una refe-rencia sabedora y libre al todo Esta referencia es la condicioacuten de posibili-dad y el horizonte previo para que el hombre en su experiencia particular empiacuterica y en sus ciencias particulares pueda comportarse consigo como unidad y totalidad [hellip] Por tanto decir que laquoel hombre es persona y suje-toraquo significa en primer lugar el hombre es el indeducible el que no puede producirse adecuadamente desde otros elementos disponibles eacutel es el que estaacute ya siempre confiado a siacute mismo212

Rahner es plenamente consciente de que laquoel hombre como ser perso-nal que trasciende y estaacute dotado de libertad es tambieacuten a una con ello un ser mundano temporal histoacutericoraquo213 laquoEstoy convencido ndashleemos en otro

211 Queda asiacute enunciada una de las grandes aportaciones de la teologiacutea contemporaacute-nea la integracioacuten entre antropologiacutea cristologiacutea y soteriologiacutea La teologiacutea reformada lo ha hecho en clave dialeacutectica como muestra la postura de uno de sus maacuteximos exponentes el teoacutelogo suizo Karl Barth La reafirmacioacuten en el cristocentrismo de Lutero lleva a Barth a considerar que en rigor Dios solo nos es cognoscible y accesible en Cristo de modo que de su Encarnacioacuten no se sigue que nuestra humanidad asediada por el pecado en su esencia e historicidad sea posibilidad previa de la accioacuten y revelacioacuten de Dios Entre otros exponentes catoacutelicos Karl Rahner ha mostrado que cabe sin embargo una lectura no dialeacutectica de la relacioacuten entre Dios y el hombre al contemplar la existencia y la historia humanas como rea-lidades originariamente correlacionadas con Dios en libertad Reconocer este hecho ni anula la novedad salviacutefica del acontecimiento de Cristo ni aminora los efectos del pecado que oscu-rece en el hombre la memoria de la Alianza irrevocable sellada por Dios con eacutel Proponemos dos textos que dan cuenta del contraste entre ambas lecturas Comentando el texto paulino de Rm 819-20 sentildeala Barth laquoSi supieacuteramos de Dios otra cosa que el gemir de lo creado y nuestro propio gemir si supieacuteramos de Jesucristo otra cosa que su condicioacuten de crucificado si supieacuteramos del Espiacuteritu Santo otra cosa que su condicioacuten de espiacuteritu de aquel que resucita a Jesuacutes de los muertos si se rompiera el incoacutegnito en que la salvacioacuten vino viene y vendraacute a nosotros eso no seriacutea la salvacioacutenraquo (K BARTH Carta a los romanos Madrid 1998 381) Por su parte Rahner afirma laquoCristo es hombre del modo maacutes radical y su humanidad es la maacutes autoacutenoma y libre no aunque sino porque es la asumida constituida en tanto automani-festacioacuten de Diosraquo (K RAHNER Para la teologiacutea de la encarnacioacuten in ET IV 145)

212 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 49-50213 Ibid 60

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lugarndash de que la transcendentalidad no es una ocupacioacuten del hombre al margen de la historia sino que se vive y realiza en libertad en la historia concreta y en una libertad determinadaraquo214 Auacuten en otro escrito habla de la corporeidad humana mediante la que el hombre se comunica con el mundo como laquoalteridad del espiacuterituraquo No ajena por tanto a ese laquoestar-se-dado-a-siacute-mismo en el espiacuterituraquo que laquosucede en la historia interna y externa de cada hombre y de la humanidad en la obra del pensamiento y en la obra externa existente cabe siacute individual y colectivamenteraquo215 Expresado de otro modo no es posible un volver sobre siacute mismo por la reflexioacuten si no es un salir hacia la realidad corpoacuterea dentro de la cual el espiacuteritu vuelve sobre siacute mismo en cuanto que se exterioriza y se forma a siacute mismo Y aquiacute es donde se da la posibilidad de una verdadera libertad personal Esta corporeidad concebida como presencia en el espacio y el tiempo del espiacuteritu mismo es ciertamente un continuo encontrarse a siacute mismo en un auteacutentico otro216

Aunque no pretendamos profundizar el alcance de la criacutetica sobre el posible caraacutecter abstracto de la antropologiacutea teoloacutegica de Rahner siacute podemos hacer dos observaciones al respecto En primer lugar cabe aceptar la postura de Rahner como una legiacutetima opcioacuten metoacutedica que pone en acto ndasha la luz del paradigma antropoceacutentrico de la filosofiacutea tras los sistemas de Kant y Heideggerndash el hecho de que la laquoteologiacutea implica una antropologiacutea filosoacuteficaraquo en concreto aquella que permite atisbar que el entrelazarse de la fe y la razoacuten la llamada de Dios y la escucha del

214 K RAHNER Gnade als Mitte menschlichen Existenz Ein Gespraumlch mit und uumlber Karl Rahner aus Anlass seines 70 Geburtstages 14

215 Tomamos las citas de K RAHNER La cristologiacutea dentro de una concepcioacuten evo-lutiva del mundo in ET V 181-182 Tambieacuten Id La unidad de espiacuteritu y materia en la comprensioacuten de la fe cristiana in ET VI 184

216 Id El cuerpo y la salvacioacuten 87 Tras sentildealar las precisiones que Tomaacutes de Aquino y Ricardo de San Viacutector suman a la definicioacuten formal-ontoloacutegica que reciben de Boecio la enciclopedia teoloacutegica que edita el propio Rahner y su grupo de colaboradores se apoya en los caracteres que proponen Tomaacutes y Ricardo para formular una definicioacuten actual de persona cuyas notas forman parte del patrimonio de la antropologiacutea trascendental que Rahner pro-pone como base renovadora de la teologiacutea dogmaacutetica contemporaacutenea laquoPersona no significa aquiacute la lsquoesenciarsquo la lsquonaturalezarsquo sino el acto siempre singular total e indiviso inmediato e insustituible la realidad la existencia de una naturaleza espiritual Esta realidad es el he-cho de poseerse a siacute mismo y por tanto de tener en siacute su propio fin es la forma de realidad que presenta la libertad de un ser espiritual en la que se funda su intangible dignidad Es evidente que este concepto preferentemente formal de persona adquiere su contenido por la lsquonaturalezarsquo del ser espiritual en cuestioacuten y por el grado de realidad que adquiere su libertad en lo referente a la posibilidad de tomar posesioacuten de la propia naturalezaraquo (M MUumlLLER - A HALDER Persona in SM V 445)

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hombre tiene su asiento no solo en la pregunta moral sino en la existen-cial-ontoloacutegica217 Al concebir el ser como palabra (Dios) y oyente (hom-bre) Rahner aboga por el paso desde una metafiacutesica que presenta el ser a la luz de la laquocosaraquo218 hasta una metafiacutesica que contempla la continuidad entre ser y conciencia En palabras de Metz al explicar queacute significa en Rahner laquoteologiacutea trascendentalraquo

Ha rescatado laquoel sujetoraquo del peacutetreo objetivismo escolaacutestico en que la teo-logiacutea de escuela estaba por doquier encerrada El laquosujetoraquo no es una pura determinacioacuten refleja que puede a su vez ser objetivada arbitrariamente Designa al hombre en su historia experimentada que no puede identificarse ni comunicarse a siacute misma sin elementos narrativos En este sentido Ra-hner ha elevado la biografiacutea religiosa a tema objetivo de la dogmaacutetica219

Con otras palabras aboga por una meta-antropologiacutea220 que ndashme-diando entre realismo e idealismondash permita concebir teoloacutegicamente la relacioacuten entre antropo-centrismo y teo-centrismo (revelacioacuten)221 En se-gundo lugar no parece justo desde el punto de vista cientiacutefico pedirle al teoacutelogo el pleno esclarecimiento de todas y cada una de las posibles pers-pectivas en las problemaacuteticas que afronta en este caso todos los vectores implicados en su visioacuten del hombre El propio Rahner reconoce ante la criacutetica de que la trascendentalidad ha oscurecido en su pensamiento sobre el hombre la historicidad y la inter-personalidad222 que cuando se trata

217 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 42-43218 Cfr K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 319219 J B METZ La fe en la historia y la sociedad Esbozo de una teologiacutea poliacutetica fun-

damental para nuestro tiempo 232220 Cfr A CORDOVILLA Gramaacutetica de la encarnacioacuten 431-432221 Cfr K RAHNER Theologie und Anthropologie 43222 A partir de la perspectiva de la antropologiacutea trascendental de Karl Rahner A Dar-

lap ha puesto de manifiesto con mayor claridad la implicacioacuten reciacuteproca entre experiencia trascendental a priori y experiencia espacio-temporal a posteriori Darlap muestra que el laquoauteacutentico acontecimiento de la salvacioacutenraquo es tal cuando reclama toda la vida del hombre daacutendole una orientacioacuten definitiva Aunque el acontecer salviacutefico coincide con una comuni-cacioacuten gratuita (eficaz) a priori que Dios hace de siacute en el seno de la experiencia trascendental del hombre en Jesucristo la historia de Dios acontece en un diaacutelogo auteacutentico con el hombre cuya decisioacuten libre asumida en la dinaacutemica de la unioacuten hipostaacutetica no es una mera reaccioacuten externa a una historia divina sino que ha entrado a formar parte de las determinaciones de la historia de la salvacioacuten en cuanto historia de Dios En Jesucristo la historia de la salvacioacuten reclama toda la vida del hombre ndashsu espacio su tiempo sus relacionesndash y representa para eacutel la posibilidad de un encuentro con Dios como tuacute concreto que es tambieacuten respuesta novedosa y espontaacutenea irreducible a la experiencia trascendental Una teologiacutea de la gracia seguacuten la historia de la salvacioacuten no deberiacutea dejar de considerar lo que el tuacute humano en toda la am-

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de la persona del hombre o de Dios es necesario que lo trascendental sea laquoprecisado en siacute mismo de manera exacta e iacutentegra mediante la confron-tacioacuten con una antropologiacutea o una teologiacutea que sea sobre todo plena y concretaraquo223 En fin el teoacutelogo debe ser consciente de que la teologiacutea ha de construirse con empentildeo interdisciplinar tarea que hoy resulta extre-madamente exigente224

La teologiacutea ndashpor cuanto el hombre forma parte de su objeto como des-tinatario de la revelacioacutenndash comparte con la antropologiacutea filosoacutefica con-temporaacutenea el gran reto de asumir en su proposicioacuten una imagen lo maacutes ar ticu lada posible del ser humano (impulso trascendente y mediacioacuten histoacuterica)

Ahora bien se trata de una tarea que la teologiacutea afronta a la luz de la revelacioacuten co mo acontecimiento de identidad y diferencia entre lo que Dios es en siacute (Trinidad inmanente) y lo que Dios es para nosotros (Tri-nidad econoacutemica) La irrupcioacuten libre y gratuita de Dios en la historia no tiene su asiento original en la trascendentalidad humana sino maacutes bien en la insondable dinaacutemica interna de su infinito ser cabe-siacute personal ndashfunda-mento y sentido de todo lo creadondash que es pluralidad y unidad donacioacuten de siacute y comunioacuten laquoEl Dios uno se comunica como expresioacuten absoluta de siacute mismo y como don absoluto del amorraquo225 Es Dios quien revela en su autocomunicacioacuten histoacuterico-salviacutefica el modo en que da cumplimiento a su designio de laquoallegar al hombre su futuro definitivoraquo226 que no es otro que la salvacioacuten o felicidad plena de aquel a quien ha creado (y por ende

plitud fenomeacutenica de su experiencia a posteriori aporta a la experiencia trascendental laquoLa experiencia trascendental ndashescribe Darlapndash exige que el hombre permanezca en ella pero es de tal condicioacuten que el hombre no puede desligar simplemente lo restante de su vida de esa relacioacuten con Dios De aquiacute se sigue necesariamente que la relacioacuten trascendental sobrenatural con Dios ndashsolo determinada al parecer por la graciandash pide por siacute misma una transformacioacuten y actualizacioacuten categorial porque solo por este medio puede ejercer una fuerza modeladora sobre todo el resto de la vida humana Esta relacioacuten tiene que darse en la zona en que acontece la vida humana si no se quiere despreciar esa vida como algo sin importancia en el orden de la salvacioacuten Pero si la experiencia trascendental debe actuar asiacute en la vida concreta porque solo asiacute llega a su plena y propia esencia y solo asiacute puede introducir al hombre entero en la salvacioacuten entonces ella misma estaacute interesada en ser traducida rectamente a categorialidadraquo (A DARLAP Teologiacutea fundamental de la historia de la salvacioacuten in MyS I 159)

223 K RAHNER Gnade als Mitte menschlichen Existenz Ein Gespraumlch mit und uumlber Karl Rahner aus Anlass seines 70 Geburtstages 14

224 Cfr Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 82-87225 Id El Dios Trino como principio y fundamento trascedente de la historia de la sal-

vacioacuten in MyS II 286226 Id Iglesia y parusiacutea de Cristo in ET VI 314

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del conjunto de todo lo creado) mediante la comunioacuten con Eacutel en Jesucris-to laquoEn el Cristo que es hombre en libertad y obediencia porque Dios puede aparecer en lo finito como el que es y quiere ser en libertad frente a nosotrosraquo227 Sin dejar de ser Eacutel entra libremente en nuestra historia para hacernos partiacutecipes en nuestra propia intimidad vital laquotrayeacutendola toda en amorraquo228 de su vida y su gloria El propio espiacuteritu de la revelacioacuten comenta Congar pone ante nosotros el hecho de que laquono hay teologiacutea para el hombre sin antropologiacutea para Diosraquo229 El propoacutesito confeso de la reflexioacuten rahneriana es trazar el mapa de la antropologiacutea para Dios contenido en la auto-comunicacioacuten que Dios ha hecho de siacute al hombre hablar de los misterios de Dios de modo que una aprehensioacuten profunda de lo que son en siacute permita una explicacioacuten viva (actual) de lo que son para nosotros

227 Ibid 317 Comenta G Colzani que laquonella misura in cui lrsquoutilizzo della analitica trascendentale rimane saldamente ancorato alla realtagrave storica di Gesugrave la teologia di Rahner risulta stimolante da una parte lrsquouomo appare segnato da una capacitagrave di oltrepassamento di seacute da una apertura allrsquoAssoluto nella quale soltanto nonostante la sua finitezza coglie il suo compimento e dallrsquoaltra coglie nella grazia questo compimento e la rilegge in termini perso-nali vedendola piugrave che come dottrina come lrsquoesperienza umana fatta oggetto della autoco-municazione di Dio Trino dellrsquoatto fondamentale di Dio verso il non-divinoraquo (G COLZANI Recenti manuali di Antropologia teologica di lingua italiana e tedesca 406)

228 Reconstruyendo el discernimiento ignaciano sobre la experiencia trascendente de Dios en el alma humana y el significado que reviste para la reflexioacuten teoloacutegica Rahner mues-tra que el presentarse de Dios en el sujeto constituye una evidencia originaria que ilumina la conciencia y se erige como fundamento sobre el que reposa cualquier certeza y verificacioacuten a posteriori de la fe y la razoacuten Considerando la afirmacioacuten ignaciana de los Ejercicios sobre la relacioacuten entre Dios y el alma (laquoporque es proprio del Criador entrar salir hazer mocioacuten en ella trayeacutendola toda en amor de la su divina majestadraquo n 330) encuentra Rahner un refe-rente fundamental que inspira el esfuerzo teoacuterico de su teologiacutea trascendental como riguroso intento de pensar el don de la originaria percepcioacuten espiritual de todo hombre La consolacioacuten sin causa precedente ndashde la que habla Ignaciondash nada tiene que ver con una experiencia apofaacute-tica de la misteriosa presencia de Dios en el hombre sino con laquodie gemeinte Objektlosigkeit ist die reine Offenheit fuumlr Gott die namenlose gegenstandslose Erfarung der Liebe von dem uumlber alles Einzelne Augebbare und Unterscheidbare erhabenen Gott von Gott als Gott Es is nicht mehr lsquoirgendein Objektrsquo gegeben sondern das Gezogensein der ganzen Person mit dem Grund ihres Daseins in die Liebe uumlber jedes bestimmte abgrenzbare Objekt hinaus in die Unendlichkeit Gottes als Gottes selbst als der divina majestad trayeacutendola toda en amor de la su divina majestad [hellip] Das lsquoVorausgehenrsquo ist nur in dem Sinn gemeint in der die schlichte Erfassung eines Objektes der existentiellen Stellungnahme der ganzen Person (toda) zu ihm lsquovorausgehtrsquo wie schon gezeigt wurde Das sin causa sagt also Gott als er selber allein inso-fern er nicht in einem bestimmten Gedanken gegenstaumlnlicher Art rein begrifflich gegeben ist insofern er nicht gewissermassen lsquovertretenrsquo oder verbunden ist mit einer andern wenn auch religioumls gewichtigen Wirklichkeitraquo (K RAHNER Die Logik der existentiellen Erkenntnis bei Ignatius von Loyola 118)

229 Y CONGAR Cristo en la economiacutea salviacutefica y en nuestros tratados dogmaacuteticos in Concilium 11 (1966) 24

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Al referir la experiencia subjetiva que funda el espacio en que recibe el hombre la consolacioacuten divina seguacuten san Ignacio repite Rahner la idea que preside su obra la mediacioacuten del conocimiento de Dios en la experiencia personal-subjetiva cuyo contenido sin embargo no puede afirmarse al margen de la singularidad irrepetible del sujeto histoacuterico

El sujeto de la experiencia vital no tiene en modo alguno el caraacutecter de un mero laquosujeto trascendentalraquo en una abstraccioacuten metafiacutesica se trata esencialmente (puesto que estaacuten mutuamente comprometidos libertad y amor) de un yo concreto en su maacutes iacutentimo fundamento en cuanto suje-to irrepetible responsable y libre El punto de partida subjetivo es por consiguiente inequiacutevoco se trata de la capacidad de trascendencia de un sujeto concreto en cuya accioacuten y compromiso subjetivo se halla el hom-bre concreto en su libertad singularidad e historia Solo que este hom bre concreto estaacute abierto a la infinitud del mismo Dios hace experiencia de su propia pura anticipacioacuten hasta la ilimitacioacuten espiritual-sobrenatural de su fin230

Una antropologiacutea metafiacutesica ndashes decir aquella que contempla la impli-cacioacuten del hombre (naturaleza concreta y efectiva) en la dinaacutemica de su reflexividad esencial (persona)ndash ayuda a la antropologiacutea teoloacutegica seguacuten hemos comprobado a profundizar el hondo calado histoacuterico-salviacutefico de sus principales tesis (creacioacuten gracia y redencioacuten) sin perjuicio de su ver-dad uacuteltima231 La intencionalidad teoloacutegica de este programa rebasa por tanto el hecho de que la presentacioacuten del hombre como unidad-dualidad de naturaleza y persona resulta maacutes verosiacutemil ante la actual ciencia bio-loacutegica que el dualismo escolaacutestico y sobre todo que el cartesiano Es la revelacioacuten la que contiene la imagen de un interlocutor humano conside-rado en su integridad Por ello a esta teologiacutea (para el hombre) solo puede corresponder una antropologiacutea (para Dios) que conjure laquoel gran peligro que existe en pensar sobre el hombre con un esquema de representacioacuten que es adecuado a las lsquocosasrsquo pero no al hombre mismo pues aquellas nunca quedan afectadas verdadera y definitivamente en su lsquoesenciarsquo y por su propio lsquoobrarrsquoraquo232 Rahner ha conjurado este riesgo defendiendo la integracioacuten en el acto de conocimiento y libertad especiacuteficos del hombre

230 K RAHNER Die Logik der existentiellen Erkenntnis bei Ignatius von Loyola 128-129

231 Cfr K RAHNER - K LEHMANN Kerigma y dogma in MyS I2 771-775232 K RAHNER Hombre in SM III 496

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de todo el espectro de su espontaneidad natural o vital que a pesar de lo que pueda parecer tiene su raiacutez y contribuye a la sinceridad antropoloacutegi-ca de ese acontecer de la persona que es el ser-cabe-siacute La antropologiacutea metafiacutesica invocada por Rahner muestra la posibilidad de integrar el acto natural espontaacuteneo en el nuacutecleo de la experiencia personal hasta el punto de que laquofinalmente este acto deja de ser resistencia saldo insoluble de la naturaleza contra la persona para convertirse en el elemento interno que hace posible la profundidad y la energiacutea de dominio total que la decisioacuten personal poseeraquo233 En su Ensayo de esquema para una dogmaacutetica ndashela-borado originalmente en colaboracioacuten con Balthasarndash Rahner despliega el que seriacutea un organigrama ideal en orden a una comprensioacuten teoloacutegica de la naturaleza personal del hombre En un estudio tal no cabriacutea solo la consideracioacuten de la persona desde el punto de vista de su interioridad sino tambieacuten en su exterioridad corporeidad dualidad sexual temporalidad finita etc Hasta cabriacutea considerar una teologiacutea de las situaciones y acon-tecimientos humanos de las edades de la vida del trabajo y la cultura incluso del ver oiacuter el hablar el callar el reiacuter el llorar234

Es a la luz de estas indicaciones de principio como ha de leerse en Rahner el papel de aquellas apelaciones mayores de la antropologiacutea a la teologiacutea el amor la muerte y el futuro A pesar de que estas experiencias de iacutendole categorial tengan en su obra menor relieve que la trascenden-talidad del acto del conocimiento y la voluntad no por ello restringe nuestro teoacutelogo ndashfiel a su planteamiento antropoloacutegico-metafiacutesicondash su capacidad en cuanto mediacioacuten a posteriori para poner al hombre frente a siacute y frente al mundo en su originaria constitucioacuten como mundo-consigo y espacio de trascendencia laquoEl lsquoinstantersquo histoacuterico en el que vivimos hoyraquo reconoce Rahner al hablar del amor ha renovado mediante algu-nas palabras originales la invocacioacuten de la experiencia de Dios laquodesde la totalidad de la experiencia de la realidad y del sujetoraquo235 Unas liacuteneas antes de esta afirmacioacuten sentildeala que ante Dios no puede comparecer sino el hombre entero

Al considerar al hombre un ser abierto a la totalidad esa entereza suya ante Dios que reclama Karl Rahner se muestra receptiva a una ex-plicacioacuten maacutes detallada acerca de por queacute el acto de amar especialmente

233 Id Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 369234 Id Ensayo de esquema para una dogmaacutetica in ET I 39235 Id Sobre la unidad del amor a Dios y el amor al proacutejimo in ET VI 266

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cuando se despliega en la auteacutentica e incondicional aceptacioacuten de siacute hasta el final se convierte en verdadero espacio de revelacioacuten que ha de ocupar su legiacutetimo lugar a la hora de explicar ndashhoy236ndash la concurrencia de pasado (creacioacuten) presente (gracia) y futuro (gloria) en la relacioacuten que mantiene Dios con el hombre

obras De Karl rahner eMpleaDas

Curso fundamental sobre la fe Introduccioacuten al concepto de cristianismo Barce-lona 41989 (Grundkurs des Glaubens Freiburg 1977)

De la necesidad y don de la oracioacuten Bilbao 32004 (Von der Not und dem Segen des Gebetes Innsbruck 1949)

Die Logik der existentiellen Erkenntnis bei Ignatius von Loyola in Id Das dynamische in der Kirche Freiburg 1958 74-148

Die theologische Dimension der Frage nach dem Menschen in Id Schriften zur Theologie XII Einsiedeln-Benziger 1975 387-406

Der eine Jesus Christus und die Universalitaumlt des Heils in Id Schriften zur Theologie XII Zuumlrich 1975 251-282

El cuerpo y la salvacioacuten in M HORKHEIMER et alii (eds) El cuerpo y la salvacioacuten Salamanca 1975 71-91 (Der Leib in der Heilsordnung in M HORKHEIMER et alii (eds) Der Leib und das Heil Mainz 1967 29-44)

236 En este laquohoyraquo queda apenas insinuado por nuestra parte el caraacutecter pastoral de una teologiacutea construida en plena conciencia de la situacioacuten de dificultad para el reconocimiento y aceptacioacuten de Dios que atraviesa la humanidad contemporaacutenea Cabe recordar que Rahner inicia su tarea docente en la facultad de teologiacutea de Innsbruck donde se estaba elaborando un programa de teologiacutea de la predicacioacuten o teologiacutea kerigmaacutetica que perseguiacutea liberar al cristia-nismo de inercias y reproponer el caraacutecter salviacutefico de la verdad de fe el kerigma primitivo en definitiva Cfr R GIBELLINI La teologiacutea del siglo XX 227-233 Ante el fenoacutemeno de la increencia y su rechazo frontal de las demostraciones teoacutericas de Dios estas laquosolo pueden tener eficacia en unioacuten con una llamada mistagoacutegica hacia aquella experiencia religiosa de la trascendencia que se da inevitablemente en la vivencia concreta de lo eacutetico en general de la responsabilidad por una configuracioacuten activa por el futuro y sobre todo de un amor real y auteacutenticamente personal al proacutejimoraquo (R RAHNER Ateiacutesmo in SM I 467) La palabra clave aquiacute para este modelo de teologiacutea en cuanto reflexioacuten del creyente es laquomistagogiacutearaquo Entendida en su sentido tradicional como iniciacioacuten a los misterios de la fe donde el predo-minante no es el discurso loacutegico sino el evocativo esto es el que desvela la vida de gracia en la vida del hombre el misterio de Dios en el misterio humano Un discurso que ha de prestar atencioacuten a todos aquellos praeambula fidei que ayudan al hombre a confesar en la escucha de sus palabras temporales (capacidad poeacutetica y simboacutelica) y la vivencia de sus experiencias existenciales (amor muerte alegriacutea etc) la Palabra No es Dios quien existe para nosotros sino que somos nosotros quienes existimos por y para Dios Cfr K RAHNER La palabra poeacutetica y el cristiano in ET IV 411-422 Id La miacutestica ignaciana de la alegriacutea del mundo in ET III 289-305 Id Sacerdote y poeta in ET III 307-328

el hoMbre es suJeto y persona

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El Dios Trino como principio y fundamento trascendente de la historia de la salvacioacuten en J FEINER - M LOumlHRER (eds) Mysterim Salutis II Madrid 19713 269-338 (Der dreifaltige Gott als transzendenter Urgrund der Heils-geschichte in Mysterium Salutis II Einsiedeln 1967 317-401)

El futuro de la teologiacutea in H VORGRIMMLER - R VANDERGUCHT (eds) La teologiacutea en el siglo XX Disciplinas teoloacutegicas dogma moral pastoral III Madrid 1974 458-475 (Uumlber die zukuumlnftigen Wege der Theologie in H VORGRIMMLER - R VANDERGUCHT [eds] Bilanz der Theologie im 20 Jahrhundert III Freiburg 1970 530-551)

Escritos de Teologiacutea I-VI Madrid 22000-2007Espiacuteritu en el mundo Metafiacutesica del conocimiento finito seguacuten Santo Tomaacutes

de Aquino Barcelona 1963 (Geist in Welt Zur Metaphisik der endlichen Erkenntnis bei Thomas von Aquin Muumlnchen 1957)

Fundamentacioacuten de la fe cristiana in Razoacuten y fe 199 (1979) 28-37Fundamentos de la protologiacutea y de la antropologiacutea teoloacutegica in J FEINER - M

LOumlHRER (eds) Mysterim Salutis II Madrid 1971 341-353 (Allgemeine Grundlegung der Protologie und theologischen Anthropologie in Myste-rium Salutis II Einsiedeln 1967 406-420)

Gnade als Mitte menschlichen Existenz Ein Gespraumlch mit und uumlber Karl Rah-ner aus Anlass seines 70 Geburtstages in Id Saumlmtliche Werke Band 25 Erneuerung des Ordenslebens Zeugnis fuumlr Kirche und Welt Freiburg-Ba-sel-Wien 2008 3-32

Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit in Id Saumlmtliche Werke Band 19 Selbstvollzug der Kirche Ekklesiologische Grund-legung praktischer Theologie Freiburg 1995 374-394

La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica in K RAHNER - P OVERHAGE El problema de la hominizacioacuten Sobre el origen bioloacutegico del hombre Barce-lona 1973 19-84 (Die Hominisation als theologische Frage in K RAH NER - P OVERHAGE Das Problem der Hominisation Freiburg 1965 13-90)

La muerte del cristiano in J FEINER - M LOumlHRER (eds) Mysterim Salutis V Madrid 1971 439-466 (Das christliche Sterben in Mysterium Salutis V Ein-siedeln 1967 463-492)

Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica in K RAHNER - W THUumlSING Cristologiacutea Estudio teoloacutegico y exegeacutetico Madrid 1975 21-80 (Grundlinien einer systematischen Christologie in K RAHNER - W THUuml-SING Christologie systematisch und exegetisch Freiburg 1972 15-78)

Oyente de la palabra Fundamentos para una filosofiacutea de la religioacuten Barcelona 1967 (Houmlrer des Wortes Muumlnchen 1963)

Philosophie und Philosophieren in der Theologie in Id Schriften zur Theolo-gie VIII Einsiedeln 1967 66-87

Juan Manuel CabieDas teJero

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Selbsterfahrung und Gotteserfahrung in Id Schriften zur Theologie X Zuumlrich 1972 133-144

Sentido teoloacutegico de la muerte Barcelona 1965 (Zur Theologie des Todes Frei-burg 1958)

Sobre la inefabilidad de Dios Experiencias de un teoacutelogo catoacutelico Barcelona 2005 (Von der Unbegreiflichkeit Gottes Freiburg 2004)

Theologie und Anthropologie in Id Schriften zur Theologie VIII Einsiedeln- Benziger 1967 43-65

Theologische Erwaumlgungen uumlber den Eintritt des Todes in Id Schriften zur Theologie IX Einsiedeln 1970 323-335

Uumlber die Heilsgeschichtliche bedeutung des einzelnen in der Kirche in Id Saumlmtliche Werke Band 10 Kirche in den Herausforderungen der Zeit Stu-dien zur Ekklesiologie und zur kirchlichen Existenz Freiburg-Basel-Wien 2003 421-446

Uumlberlegungen zur Methode der Theologie in Id Schriften zur Theologie IX Ein siedeln 1970 79-126

RAHNER K - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico Barcelona 1966 (Klei-nes theologisches Woumlrterbuch Freiburg-Basel-Wien 1965)

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Mater Clementissima 1 (2016) 121-142

La definicioacuten de Calcedonia a traveacutes de sus inteacuterpretes contemporaacuteneos

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez1

Facultat de Teologia de CatalunyaAteneu Universitari Sant Paciagrave

resuMen Investigar la cristologiacutea de la definicioacuten de Calcedonia atendiendo a la oacutep-tica de sus estudiosos actuales (A de Halleux A Grillmeier R Price) permite un acercamiento nuevo a esta cuestioacuten contribuye a dar una respuesta a las criacuteticas contemporaacuteneas a Calcedonia y ofrece una ayuda para el trabajo de los teoacutelogos maacutes allaacute de los toacutepicos y de una lectura restringida de las fuentes

palabras ClaVe Cristologiacutea Calcedonia Halleux Grillmeier Price

abstraCt laquoThe Chalcedon definition on the point of view of recent scholarsraquo Resear-ching Christology of Chalcedon definition focusing on the point of view of recent scholars (A de Halleux A Grillmeier R Price) allows a new approach to this issue contributes to an answer to contemporary criticism of Chalcedon and offers an aid to the work of the theologians beyond clicheacutes and narrow approaches to the sources

Key worDs Christology Chalcedon Halleux Grillmeier Price

1 introduccioacuten lA iMportAnciA de cAlcedoniA y lA necesi-dAd de unA AproxiMAcioacuten ActuAl

El cuarto concilio ecumeacutenico se celebroacute durante el otontildeo del antildeo 451 en Calcedonia en la orilla del Boacutesforo frente a Constantinopla bajo la atenta vigilancia de los emperadores Marciano y Pulqueria Fue la con-

1 Sacerdote de la dioacutecesis de Barcelona Fue alumno del Colegio entre 2010 y 2014 periodo en el que realizoacute estudios de licenciatura y doctorado en Teologiacutea dogmaacutetica en la Pon-tificia Universidad Gregoriana En diciembre de 2015 defendioacute la tesis doctoral titulada laquoLa cristologiacutea de Calcedonia y la obra de Andreacute de Halleux complementada y confrontada con las aportaciones de Alois Grillmeier y Richard Priceraquo Actualmente es profesor en la Facultad de Teologiacutea de Cataluntildea (Barcelona Espantildea)

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

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clusioacuten parcial de una sucesioacuten de acontecimientos que habiacutea tenido su origen inmediato en la poleacutemica suscitada por el monje Eutiques que habiacutea llevado a confrontaciones e incluso a la celebracioacuten dos antildeos antes de un laquoconcilioraquo en Eacutefeso denominado por el papa Leoacuten Magno como laquoLatrocinio de Eacutefesoraquo

Esta poleacutemica se situacutea en un marco maacutes amplio dentro de la controver-sia cristoloacutegica que habiacutea estallado el 428 con el laquoescaacutendalo ecumeacutenicoraquo provocado por Nestorio ante el cual habiacutea reaccionado celosamente Cirilo de Alejandriacutea y que habiacutea conducido al agitado concilio de Eacutefeso (431) seguido de la reconciliacioacuten del 433 en torno a la Foacutermula de la Unioacuten2

En la quinta sesioacuten de Calcedonia (22 de octubre de 452) se aproboacute una definicioacuten de fe (horos) salvando la feacuterrea oposicioacuten de los padres a redactar un nuevo texto dogmaacutetico3 gracias a las presiones de la comisioacuten imperial y del mismo emperador

En la definicioacuten finalmente aprobada laquose ensentildea a confesarraquo a laquouno solo y el mismoraquo Cristo laquo(re)conocido en dos naturalezasraquo laquosin confusioacuten sin cambio sin separacioacuten y sin divisioacutenraquo de manera que laquolas propiedades de cada una de las naturalezas concurren en una sola persona y en una sola hipoacutestasisraquo Seguidamente adjuntamos el texto de la definicioacuten4

Siguiendo pues a los Santos Padres todos a una voz ensentildeamos que ha de confesarse [ὁμολογεῖν hellip ἐκδιδάσ-κομεν] a uno solo y el mismo Hijo nuestro Sentildeor Jesucristo el mismo perfecto en la divinidad y el mismo perfecto en la humanidad Dios verdaderamente y el mismo verdaderamente hombre de alma racio-nal y de cuerpo consustancial con el Padre en cuanto a la divinidad y el mismo consustancial con nosotros en cuanto a la humanidad semejante en todo a nosotros menos en el pecado [Heb 4 15]

2 Para un acercamiento baacutesico a Calcedonia cfr A DE HALLEUX Le Concile de Chal-ceacutedoine Para un relato de los acontecimientos del Concilio cfr R PRICE The Council of Chalcedon a Narrative Para un acercamiento maacutes amplio a Calcedonia cfr P T CAMELOT Eacutephegravese et Chalceacutedoine R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon

3 Esta oposicioacuten era tan fuerte porque en Eacutefeso el 22 de julio de 431 el concilio reunido en torno a Cirilo habiacutea decretado que a nadie era liacutecito presentar otra foacutermula de fe o escribirla o componerla fuera de la definida por los santos padres reunidos con el Espiacuteritu Santo en Ni-cea (DH 265 ACO I 1 7 105ss) En la quinta sesioacuten de Calcedonia se presenta inicialmente un borrador de definicioacuten (no conservado) que es rechazado exigieacutendose su enmienda para cumplir las condiciones de la comisioacuten imperial y concordar con la carta dogmaacutetica de Leoacuten (Tomus ad Flavianum) El texto corregido es aprobado al final de esta sesioacuten

4 Debe tenerse en cuenta que al texto de la definicioacuten le precede un amplio prefacio que incluye los siacutembolos de Nicea y Constantinopla y le sigue un anatematismo final

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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engendrado del Padre antes de los siglos en cuanto a la divinidad y el mis-mo en los uacuteltimos diacuteas por nosotros y por nuestra salvacioacuten (engendrado) de Mariacutea Virgen madre de Dios en cuanto a la humanidaduno solo y el mismo Cristo Hijo Sentildeor unigeacutenitohellip hellip que se ha de reconocer en dos naturalezas sin confusioacuten sin cambio sin divisioacuten sin separacioacuten [ἕνα καὶ τὸν αὐτὸν Χριστόν υἱόν κύ ριον μονογενή ἐν δύο φύσεσιν ἀσυγχύτως ἀτρέπτως ἀδιαιρέτως ἀχωρίσ τως γνωριζόμενον] en modo alguno borrada la diferencia de naturalezas por causa de la unioacuten sino conservando maacutes bien cada naturaleza su propiedad y concurrien-do en una sola persona y en una sola hipoacutestasis [τῆς ἰδιότητος ἑκατέρας φύσεως καὶ εἰς ἓν πρόσωπον καὶ μίαν ὑπόστασιν συντρεχούσης] no parti-do o dividido en dos personas sino uno solo y el mismo Hijo unigeacutenito Dios Verbo Sentildeor Jesucristocomo de antiguo acerca de Eacutel nos ensentildearon los profetas y el mismo Jesu-cristo y nos lo ha trasmitido el Siacutembolo de los Padres5

Esta definicioacuten es sin lugar a dudas un punto crucial en el desarrollo de la cristologiacutea de todos los tiempos de Oriente y de Occidente Ahora bien el concilio suscitoacute muy pronto fuertes poleacutemicas que condujeron a grandes conflictos doctrinales eclesiales y poliacuteticos los cuales a su vez llevaron a la celebracioacuten de los concilios de Constantinopla II (553) y III (681) y a la separacioacuten de las Iglesias de Egipto Siria y Armenia que lamentablemente auacuten hoy perdura

El cuarto concilio ha sido objeto de numerosas investigaciones espe-cialmente a partir de su 1500 aniversario celebrado en 19516 Asimismo ha sido el centro de intensas poleacutemicas dentro de la criacutetica reciente a la cristologiacutea laquoclaacutesicaraquo en especial durante la segunda mitad del siglo XX 7

5 La definicioacuten de Calcedonia se halla en E Schwartz (ed) Acta Conciliorum Oecume-nicorum II 1 2 129s correspondiente al acta de la quinta sesioacuten n 34c Tambieacuten se halla en G Alberigo y otros (eds) Conciliorum Oecumenicorum Decreta 86s y en DH 301 El texto en espantildeol presentado sigue con algunas modificaciones DH 301 Noacutetese que el texto de la definicioacuten no corresponde exactamente con el imaginario de que Calcedonia define a Jesucristo como una persona en dos naturalezas

6 El mismo Papa redactoacute una enciacuteclica al respecto cfr PIacuteO XII Sempiternus Rex Chris-tus De entre los estudios surgidos destacamos P T CAMELOT Theacuteologies grecques et theacuteologie latine agrave Chalceacutedoine (1951) H M DIEPEN LrsquoAssumptus Homo agrave Chalcedoine (1951) F X MURPHY The dogmatic definition at Chalcedon (1951) P M J NICOLAS La doctrine christologique de S Leacuteon le Grand (1951) y especialmente A GRILLMEIER - H BACHT Das Konzil von Chalkedon (1951-1954) monumental obra colectiva en tres voluacutemenes preparada por los jesuitas alemanes de Sankt Georgen

7 La reaccioacuten criacutetica a Calcedonia se inicioacute con K RAHNER Chalkedon ndashEnde oder Anfang (1954) trabajo que fue publicado despueacutes con otro tiacutetulo dentro de sus Escritos de

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

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Es preciso aclarar que a diferencia de otros siacutenodos de la antiguumledad del concilio de Calcedonia conservamos abundante documentacioacuten in-cluyendo las actas de las sesiones editadas por iniciativa de la autoridad imperial de modo que contamos con una fuente primaria de valor inesti-mable que debe ser acogida con espiacuteritu criacutetico8

Al elaborar una reflexioacuten teoloacutegica sobre el cuarto concilio urge una aproximacioacuten continuamente renovada a la cristologiacutea de la definicioacuten teniendo en cuenta que Calcedonia es un acontecimiento eclesial cele-brado hace casi dieciseacuteis siglos siendo el concilio maacutes concurrido de la Iglesia primitiva y tan poleacutemico en su momento que dividioacute a las Iglesias No han dejado de aparecer trabajos que analizan la cristologiacutea de la defi-nicioacuten calcedonense9

Teologiacutea Id Problemas actuales de cristologiacutea en espantildeol En los antildeos siguientes se dio una fuerte poleacutemica con respecto a la cristologiacutea del cuarto concilio recogida en B SESBOUumlEacute Le proceacutes contemporain de Chalceacutedoine (1976) En la cristologiacutea espantildeola al respecto destacan dos artiacuteculos de los antildeos setenta J I GONZAacuteLEZ FAUS Las foacutermulas de la dogmaacutetica cris-toloacutegica (1971) y O GONZAacuteLEZ DE CARDEDAL Calcedonia y los problemas fundamen-tales de la cristologiacutea actual (1979) Trabajos maacutes recientes al respecto son J A RIESTRA Il dibattito sul valore (2001) L F LADARIA La recente interpretazione della definizione di Calcedonia (2003) y G URIacuteBARRI Leyendo el Concilio de Calcedonia (2008)

8 La edicioacuten criacutetica de las actas de Calcedonia se encuentra en E SCHWARTZ Acta Conciliorum Oecumenicorum concretamente en su tomo II (el I corresponde a Eacutefeso) que consta a su vez de seis voluacutemenes publicados entre 1932 y 1938 Para una visioacuten criacutetica de estas actas cfr R PRICE Truth omissions and fiction in the Acts of Chalcedon quien maacutes allaacute de algunas omisiones y escasa ficcioacuten les concede un notable componente de verdad Existe una versioacuten francesa parcial en A J FESTUGIEgraveRE Eacutephegravese et Chalceacutedoine (1982) donde se recogen las dos primeras sesiones e Id Actes de Chalceacutedoine (1983) donde se recogen las siguientes cuatro sesiones correspondientes a la definicioacuten de la fe Maacutes recien-temente se ha publicado una versioacuten inglesa completa en R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon (2005 22007)

9 De entre los numerosos estudios recientes sobre la definicioacuten calcedonense sobresale A DE HALLEUX La deacutefinition christologique (1976) que recoge ademaacutes las aportaciones de los principales estudios anteriores a partir de 1945 una exposicioacuten sinteacutetica de caraacutecter menos teacutecnico se halla en Id Le Concile de Chalceacutedoine 12-15 (1993) El citado trabajo de 1976 fue integrado en A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 753-764 (1979) Las aporta-ciones de A de Halleux asiacute como las consideraciones de A Grillmeier han sido recogidas por la que fue principal colaboradora del segundo en T HAINTHALER A short analysis of the definition (2006) En su edicioacuten de las actas el profesor R Price se esfuerza por ofrecer claves para el anaacutelisis de la definicioacuten R PRICE - M GADDIS The Acts of Chalcedon 1 68-71 e Id The Acts of Chalcedon 2 183-191 (2005) Cfr tambieacuten H DROBNER Fonti teologiche e analisi 42-58 (ponencia para un congreso de 2001) interesante por su clari-ficadora propuesta de estructura basada en las observaciones de A de Halleux y porque tiene en cuenta las posibles fuentes latinas de la definicioacuten Siempre es uacutetil por su claridad y caraacutecter didaacutectico P T CAMELOT Eacutephegravese et Chalceacutedoine 138-150 (1962) Ademaacutes son destacables por las mismas razones B SESBOUumlEacute Jeacutesus-Christ dans la tradition 109-119 (1982) y B SESBOUumlEacute - J WOLINSKI Histoire des dogmes I 407-412 (1995) seccioacuten re-

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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Proponemos que toda aproximacioacuten actual a la cristologiacutea de Calce-donia debe hacerse de la mano de laquointeacuterpretesraquo adecuados esto es de estudiosos de la Iglesia primitiva patroacutelogos e historiadores que ejercen de mediadores Esto permite que el teoacutelogo sabiamente pueda descar-gar en ellos parte de su responsabilidad10 Por tanto es crucial el papel de estos laquointeacuterpretesraquo en el itinerario hacia Calcedonia y debe decidirse cuidadosamente cuaacuteles elegir

Asiacute sin dejar de lado la cristologiacutea calcedonense como objeto priorita-rio es preciso prestar atencioacuten a los estudiosos que lo han tratado vistos como laquointeacuterpretesraquo y como imprescindibles laquocompantildeeros de caminoraquo del teoacutelogo De este modo se plantea un acercamiento de una forma renovada a la cuestioacuten de la cristologiacutea de Calcedonia a traveacutes de la mirada de sus estudiosos actuales

2 tres inteacuterpretes ActuAles de cAlcedoniA

21 Andreacute de Halleux principal inteacuterprete contemporaacuteneo de Cal-cedonia

Al entrar en contacto con los trabajos recientes sobre el cuarto concilio emerge enseguida la figura del franciscano belga Andreacute de Halleux (1929-1994) Se trata de un autor apenas conocido para el gran puacuteblico pero citado por casi todos los que han escrito sobre Calcedonia despueacutes de eacutel

A de Halleux fue un eminente patroacutelogo y filoacutelogo de la Universi-dad de Lovaina que dedicoacute su obra y su vida al estudio de la antiguumledad cristiana y al ecumenismo buscando poner la patrologiacutea al servicio de la unidad de las Iglesias11

A juicio de los principales estudiosos12 A de Halleux es el autor del anaacutelisis maacutes minucioso de la definicioacuten calcedonense publicado (1976)

dactada por Sesbouumleacute en la que recoge sus trabajos anteriores Asimismo resultan de intereacutes B STUDER Dios salvador en los Padres 315-322 R A NORRIS Chalcedon Revisited y S COAKLEY What Does Chalcedon Solve and What Does it Not

10 Como indica A de Halleux precisamente un destacado estudioso reciente del cuarto concilio cfr A DE HALLEUX Pourquoi les Eacuteglises ont-elles besoin aujourdrsquohui drsquoune theacuteologie patristique 512

11 Esto se refleja en el tiacutetulo del volumen que recoge sus principales trabajos A DE HALLEUX Patrologie et œcumeacutenisme

12 Por ejemplo cfr T HAINTHALER A Short Analysis of the Definition 317 R PRI-CE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 73 R PRICE The Council of Chalcedon a Narrative 81

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

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hasta hoy13 cuya importancia no ha disminuido cuarenta antildeos despueacutes de su aparicioacuten y maacutes de veinte despueacutes de la muerte de su autor sobrevenida en un momento de intenso trabajo intelectual precisamente en relacioacuten con la controversia cristoloacutegica Este autor ha publicado otros trabajos de gran intereacutes en torno a la cristologiacutea patriacutestica y Calcedonia14

Es preciso antildeadir que la toma de contacto con el itinerario intelectual y vital de Halleux supone una gran ayuda para comprender la importancia de su aportacioacuten asiacute como un estiacutemulo para afrontar las grandes divisio-nes que se produjeron en el pasado y que auacuten perduran15 Formado en la reconocida escuela histoacuterico-criacutetica lovanista e inicialmente experto en estudios siriacuteacos se convirtioacute en un reconocido patroacutelogo y en un activo experto en cuestiones ecumeacutenicas Gracias a su formacioacuten Halleux presta una atencioacuten preferente a las fuentes primarias que domina como muy pocos A la vez tambieacuten a causa de esta formacioacuten evita por principio preconcepciones y juicios de valor con respecto a los temas estudiados incluyendo Calcedonia Asimismo estaacute convencido de que la tarea prin-cipal del patroacutelogo es contribuir a la unidad de las Iglesias

Su obra compuesta sobre todo por artiacuteculos dispersos trata muchos elementos del pasado que abocaron a la divisioacuten de las Iglesias o que son causa de controversias teoloacutegicas entre ellas (la teologiacutea trinitaria la procesioacuten del Espiacuteritu Santo los sacramentos la controversia en torno al palamismo)16

13 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique publicado en 1976 fue recogido posteriormente en el volumen recopilatorio Patrologie et œcumeacutenisme

14 Por su visioacuten sinteacutetica destaca especialmente su entrada correspondiente a Calce-donia en la Enciclopeacutedie Maronite A DE HALLEUX Le Concile de Chalceacutedoine Id Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne Tambieacuten son de intereacutes sus estudios sobre el canon 28 del concilio Id Le vingt-huitiegraveme canon de Chalceacutedoine Id Le deacutecret chalceacutedonien sur les preacuterogatives de la Nouvelle Rome En relacioacuten con la controversia cristoloacutegica destacan A DE HALLEUX Nestorius histoire et doctrine Id Cyrill von Alexandrien Id Le dyophy-sisme christologique de Cyrille Id La premiegravere session Id Les douze chapitres cyrilliens Id Lrsquoaccord christologique de 433

15 Para una aproximacioacuten a este itinerario cfr sobre todo A DE HALLEUX Une vie consacreacutee y tambieacuten Id Pourquoi les Eacuteglises ont-elles besoin aujourdrsquohui drsquoune theacuteologie patristique Id Patrologie et œcumeacutenisme introduccioacuten asimismo son de gran intereacutes algunas de las necroloacutegicas escritas en su memoria como J M SEVRIN Andreacute de Halleux (1929-1994) J RYCKMANS - L VAN ROMPAY Andreacute de Halleux

16 Junto con el concilio de Calcedonia estos son los temas de su volumen recopilatorio cfr A DE HALLEUX Patrologie et œcumeacutenisme

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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22 Alois Grillmeier y Richard Price como complemento y marco de Andreacute de Halleux

Ademaacutes de Andreacute de Halleux se ha elegido otros dos autores de entre los estudiosos contemporaacuteneos del cuarto concilio Alois Grillmeier y Richard Price Su obra contribuye a situar las aportaciones de Halleux dentro de un marco maacutes completo tanto en el tiempo como en el enfoque asiacute como a complementarlas en la buacutesqueda de una comprensioacuten actual de la cristologiacutea de Calcedonia

El primero de estos autores el jesuita alemaacuten Alois Grillmeier (1910-1998) fue un famoso historiador del dogma y uno de los mayores exper-tos en cristologiacutea patriacutestica del siglo XX Fue creado cardenal por Juan Pa blo II Destaca por haber sido el editor de una monumental coleccioacuten de estudios publicados en torno al 1500 aniversario de Calcedonia (Das Konzil von Chalkedon)17 asiacute como por su opus magnum Jesus der Chris-tus im Glauben der Kirche18 asiacute como otros trabajos19 Contribuye al estu-dio de Calcedonia especialmente con elementos que ayudan a interpretar la definicioacuten dentro del contexto de la historia de los dogmas y de las criacuteticas contemporaacuteneas a la cristologiacutea patriacutestica

El segundo autor escogido es el sacerdote ingleacutes Richard Price (1947) historiador y teoacutelogo dedicado uacuteltimamente a los concilios primitivos que ha editado una versioacuten inglesa de las actas de Calcedonia amplia-mente anotada y comentada20 en la que recoge las aportaciones recientes

17 Cfr A GRILLMEIER - H BACHT Das Konzil von Chalkedon (1951-1954) Ade-maacutes de editor es autor de dos importantes trabajos A GRILLMEIER Die theologische und sprachliche Vorbereitung y Vorbereitung des Mittelalters

18 Se trata de una obra auacuten inconclusa La edicioacuten alemana maacutes reciente A GRILL-MEIER - T HAINTHALER Jesus der Christus im Glauben der Kirche consta de momento de cinco voluacutemenes actualmente su publicacioacuten corre a cargo de su asistente T Hainthaler Existe traduccioacuten espantildeola tan soacutelo del primer volumen A GRILLMEIER Cristo en la Tra-dicioacuten Cristiana que abarca desde el Nuevo Testamento al Concilio de Calcedonia siguiendo la uacuteltima edicioacuten alemana

19 Cfr sus voluacutemenes recopilatorios A GRILLMEIER Mit ihm und in ihm (1975 21978) A GRILLMEIER - T HAINTHALER Fragmente zur Christologie (1997) Este uacutel-timo contiene una detallada bibliografiacutea del cardenal Grillmeier Destacan trabajos como A GRILLMEIER Piscatorie - Aristotelice Id Kerygma Reflexion und Dogma Id Vom Sym-bolum zur Summa Id Das Kerygma von Chalzedon Id Hellenisierung - Judaisierung des Christentums Id Moderne Hermeneutik altkirchliche Christologie

20 Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I-III (2005) Tam-bieacuten ha publicado las actas de Constantinopla II y del siacutenodo lateranense del 649 R PRICE The Acts of the Council of Constantinople of 553 (2009) R PRICE - P BOOTH - C CU-BITT The Acts of the Lateran Synod of 649 (2014)

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

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en torno a la cuestioacuten y aporta criterios de interpretacioacuten Asimismo ha publicado otros trabajos sobre los concilios primitivos21 Contribuye al tema de nuestro intereacutes especialmente desde la perspectiva de la historia de la Iglesia y ofrece ademaacutes una panoraacutemica que incluye los estudios maacutes recientes

23 Planteamiento del trabajo con los inteacuterpretes

Asiacute a traveacutes de A de Halleux y los otros dos estudiosos citados cuya obra incluye asimismo referencias a muchos otros se puede formar una panoraacutemica general de las aportaciones de los estudios recientes sobre Calcedonia en Occidente que engloba los distintos aacutembitos linguumliacutesticos y culturales que estos recogen y que nos permite realizar una aproximacioacuten actual significativa De este modo se pretende ofrecer elementos para presentar la cristologiacutea de Calcedonia desde una perspectiva renovada Es preciso antildeadir que no hay praacutecticamente estudios sobre A de Halleux A Grillmeier y R Price22

Para exponer las contribuciones los tres autores citados con respecto a la cristologiacutea Calcedonia se eligen tres ejes temaacuteticos como referencia que corresponden con los elementos clave en relacioacuten con nuestra temaacute-tica23 Estos tres ejes son

1 El proceso de redaccioacuten y las fuentes de la definicioacuten calcedonense 2 La influencia en el concilio de Calcedonia de Cirilo de Alejandriacutea y

Leoacuten Magno3 La interpretacioacuten de la definicioacuten misma y la importancia de los

teacuterminos clave presentes en esta

21 Cfr R PRICE - M WHITBY Chalcedon in Context (2009 22011) Dentro de este vo-lumen le corresponden The Council of Chalcedon a Narrative Truth omissions and fiction in the Acts of Chalcedon The Second Council of Constantinople (553) and the Malleable Past

22 Esto sucede en primer lugar con el principal autor de referencia A de Halleux a pesar de ser auacuten hoy un estudioso de obligada cita en los estudios sobre las temaacuteticas sobre las que trabajoacute Tambieacuten sucede con respecto a A Grillmeier aunque parezca sorprendente por ser un autor de referencia y ampliamente reconocido traducido y citado esta situacioacuten es especialmente notoria en lengua espantildeola como lamenta J A MARTIacuteNEZ CAMINO Jesuacutes de Nazaret el Cristo en la fe de la Iglesia Maacutes comprensible es el desconocimiento de la obra de R Price por ser mucho maacutes reciente pero de quien se puede prever que seraacute un autor muy influyente en el futuro gracias a su edicioacuten de las actas

23 Estos tres puntos se han escogido a partir de la lectura de los recientes estudios sobre la cristologiacutea de Calcedonia que ha permitido identificar estos elementos clave

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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3 eleMentos pArA unA AproxiMAcioacuten renovAdA A cAlcedoniA

Seguidamente se ofrecen las principales aportaciones de estos tres autores con respecto a los tres ejes presentados

31 Redaccioacutenyfuentesdeladefinicioacuten

Como ya se ha indicado A de Halleux ha realizado la propuesta maacutes significativa hasta la fecha por lo que respecta a la estructura y las posibles fuentes de la definicioacuten calcedonense En su anaacutelisis pone en juego su formacioacuten como filoacutelogo y patroacutelogo que le lleva a afrontar el texto desde las perspectivas linguumliacutestica histoacuterica y teoloacutegica y a ponerlo en relacioacuten con sus posibles fuentes tomando en consideracioacuten preferentemente la documentacioacuten presente en las actas24

Destaca su afirmacioacuten del horos como un texto estructurado y redactado orgaacutenicamente en el que se insertan algunas modificaciones que corres-ponderiacutean a enmiendas exigidas en la sesioacuten quinta25 Descarta por tanto la idea de la definicioacuten como un laquomosaicoraquo de citas y propone la existencia de un verdadero laquoautorraquo para el texto y no un mero compilador 26

Por lo que se refiere a las fuentes de la definicioacuten destaca el papel de la Foacutermula de la Unioacuten del 433 (especialmente con respecto a la primera parte de la definicioacuten) que seriacutea leiacuteda en Calcedonia a traveacutes de la carta Laetentur caeli de Cirilo a Juan de Antioquiacutea En esta carta el alejandri-no hace suya la profesioacuten laquoantioquenaraquo de la Foacutermula de Unioacuten aunque ofrece su propia interpretacioacuten de esta27 De las cartas de Cirilo junto con la citada a Juan A de Halleux destaca tambieacuten la importancia de la

24 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique consta de cuatro partes una introduccioacuten (que incluye premisas de meacutetodo como considerar el texto como un todo y centrarse en la informacioacuten de las actas evitando reconstrucciones forenses) una recensioacuten de los trabajos previos al suyo (especialmente los dedicados al estudio de las fuentes) una propuesta propia con respecto a la definicioacuten (estructura estudio de las fuentes elementos de interpretacioacuten) y una conclusioacuten final

25 Para eacutel basaacutendose en la consideracioacuten de su propio anaacutelisis estructural las enmiendas de uacuteltima hora seriacutean los cuatro famosos adverbios y el inciso sobre la propiedad y la persona que se habriacutean hecho sobre un formulario vinculado a Basilio de Seleucia que ya contendriacutea la foacutermula difisita reconocido en dos naturalezas

26 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 156ss27 Cfr Id La deacutefinition christologique 14155 Esta afirmacioacuten aparece como una con-

clusioacuten de su recensioacuten a los autores anteriores a eacutel En su carta a Juan Cirilo reinterpreta los dos laquoperfectoraquo de la Foacutermula de Unioacuten perfecto Dios y perfecto hombre son glosados como perfecto en la divinidad y perfecto en la humanidad evitando el riesgo de afirmar dos sujetos en Cristo La definicioacuten calcedonense recogeraacute este desplazamiento terminoloacutegico

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segunda a Nestorio a la vez que rechaza como fuente directa la tercera carta a Nestorio con los anatematismos28

Asimismo por lo que respecta a la fuente del elemento central de la de-finicioacuten su laquofoacutermula difisitaraquo (laquoreconocido en dos naturalezasraquo) Hal leux resalta la importancia de la profesioacuten del metropolita Basilio de Seleucia pronunciada en el siacutenodo constantinopolitano del 448 que condenoacute a Euti-ques y en la que Basilio afirma expliacutecitamente basarse en Cirilo29

32 Cirilo y Leoacuten en Calcedonia

Por lo que respecta a la influencia de Cirilo y Leoacuten en el cuarto con-cilio los estudiosos occidentales recientes con A de Halleux como ex-ponente destacado han afirmado cada vez maacutes la importancia del ale-jandrino en Calcedonia hasta hablar de una laquofidelidad ciriliana baacutesicaraquo del concilio30 a la vez que se ha ido reduciendo la valoracioacuten del papel directo de Leoacuten Magno

La mayoriacutea de los estudiosos modernos propone que entre los padres de Calcedonia predominaba lo que R Price denomina laquocirilianismo mo-deradoraquo como postura teoloacutegica que dentro de una fidelidad baacutesica a Cirilo y la consiguiente afirmacioacuten clara de la unidad en Cristo permitiriacutea ademaacutes una aceptacioacuten del difisismo31

Ahora bien A de Halleux y otros estudiosos denuncian malenten-didos y ambiguumledades en torno a los textos y la doctrina de Cirilo ya en el tiempo del concilio e incluso desde la controversia con Nestorio

28 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 155165 Id Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 448ss

29 Cfr Id La deacutefinition christologique donde en muacuteltiples pasajes expone la importan-cia de Basilio Los primeros en destacar el papel de Basilio habiacutean sido R V Sellers (1953) y T-J Šagi-Bunić (1965) A de Halleux afirma que el conjunto de la definicioacuten que eacutel consi-dera como un texto orgaacutenico se hallariacutea bajo la influencia de Basilio incluidas algunas de las modificaciones Maacutes adelante G Martzelos (Der Vater der dyophysitischen Formel) insistiraacute en la autoriacutea basiliana de la claacuteusula difisita aunque su propuesta seraacute valorada criacuteticamente por A de Halleux (Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne)

30 Cfr A DE HALLEUX Une vie consacreacutee 4631 El cirilianismo moderado se basariacutea en la segunda carta a Nestorio y la Laetentur

caeli a Juan de Antioquiacutea tomando distancias de la tercera carta a Nestorio y de los anate-matismos y evitando expresiones marcadamente teopasquitas se habriacutea convertido en la teologiacutea dominante del Oriente griego Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 62ss A de Halleux se refiere a la diversidad de interpretaciones que ofreciacutea el legado de Cirilo entre otros en Cyrill von Alexandrien 147 y Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 468s

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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iniciada el 42832 Ademaacutes el mismo Halleux denuncia la debilidad de la Unioacuten del 433 tanto en la foacutermula dogmaacutetica resultante como en su inter-pretacioacuten por las partes enfrentadas La deficiente resolucioacuten del conflicto efesino a traveacutes de una unioacuten superficial y ambigua conduciraacute a una pron-ta reaparicioacuten de las hostilidades que desembocaraacuten en la celebracioacuten de Calcedonia y el posterior drama33 La trayectoria literaria de A de Halleux muestra que un punto absolutamente determinante es cuaacutel es la adecua-da interpretacioacuten de la cristologiacutea de Cirilo no solo en vida sino en los antildeos siguientes a su muerte (dagger 444) y en particular por lo que respecta al cuarto Concilio Este tema es tradicionalmente una dificultad para los que buscan aproximarse a la controversia cristoloacutegica34

Por lo que respecta a Leoacuten Magno como se ha indicado los estudios recientes le otorgan un papel limitado en Calcedonia aunque a traveacutes de sus legados y de los comisarios imperiales su influencia habriacutea sido decisiva en la quinta sesioacuten del Concilio impulsando la redaccioacuten de una foacutermula inequiacutevocamente difisita De hecho A de Halleux muestra en su anaacutelisis de la definicioacuten que el papel del Tomus como fuente de la definicioacuten seriacutea de hecho secundario35 Este mismo autor afirma que si el Tomus fue recibido en el concilio fue porque los padres reconocieron que concordaba con Cirilo36 y situaacutendolo en el uacuteltimo lugar de una laquoje-rarquiacutea descendenteraquo de documentos El uacutenico pasaje de la definicioacuten que habriacutea sido tomado del Tomus habriacutea sido modificado para situarlo en concordancia con Cirilo en lo que A de Halleux denomina laquocirilia-nizacioacuten estiliacutesticaraquo37

32 Cfr por ejemplo A DE HALLEUX Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 469 Tam-bieacuten A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 679ss donde se propone que en Calcedonia se habriacutean seleccionado los escritos de Cirilo para evitar todo extremismo en la formulacioacuten

33 Cfr A DE HALLEUX Lrsquoaccord christologique de 43334 Cfr por ejemplo Id Le dyophysisme christologique de Cyrille R A NORRIS

Christological Models in Cyril of Alexandria 35 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique tanto en la recensioacuten de los

estudios anteriores como en la propuesta del mismo Halleux 36 En la segunda sesioacuten conciliar seguacuten la numeracioacuten latina y en una reunioacuten posterior

(pero anterior a la sesioacuten cuarta) se discute acerca del Tomus y su compatibilidad con Cirilo37 Esta jerarquiacutea descendente de la documentacioacuten calcedonense situacutea en su punto maacutes

alto al siacutembolo niceno seguido del constantinopolitano las cartas de Cirilo (la segunda a Nestorio y la Laetentur caeli a Juan) y finalmente el Tomus de Leoacuten La ortodoxia de cada documento se mediriacutea por su fidelidad a los precedentes cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 163 Id La reacuteception du symbole œcumeacutenique 41ss Halleux pone de mani-fiesto coacutemo la cita del Tomus de Leoacuten es modificada y fusionada orgaacutenicamente con otra cita de Cirilo junto con la adicioacuten del laquouna hipoacutestasisraquo (que tambieacuten se remonta a Cirilo)

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Es preciso aproximarnos a Calcedonia desde esta oacuteptica de mayoriacutea laquocirilianaraquo y no a traveacutes del Tomus o de Leoacuten mismo vistos como criterio interpretativo de la definicioacuten lo que era la postura habitual en Occidente hasta tiempos recientes Al respecto A de Halleux matiza que Calcedo-nia no habriacutea sido una derrota de Leoacuten sobre Cirilo sino una derrota a un monofisismo extremo e intolerante38

33 Interpretacioacuten y terminologiacutea

Los estudios recientes contribuyen a desvelar claves para interpre-tar la definicioacuten de Calcedonia dentro de su contexto textual teoloacutegico y cultural asiacute como a una revalorizacioacuten de cara a la reflexioacuten cristoloacute-gica actual

331 Calcedonia vinculada al Siacutembolo

Una aportacioacuten destacada de estos estudios es la iacutentima unioacuten de la definicioacuten calcedonense con el Siacutembolo de la fe39 sobre todo teniendo en cuenta el prefacio del horos casi siempre olvidado de manera que la defi-nicioacuten se presenta a siacute misma como auteacutentica interpretacioacuten del Siacutembolo de la fe nicena e incluso como una explicitacioacuten de su contenido40

En esta liacutenea avanzan aunque con matices diferentes los tres auto res tratados Andreacute de Halleux muestra la vinculacioacuten de Calcedonia con el siacutembolo en el plano maacutes textual y teoloacutegico tratando la recepcioacuten del siacutembolo a traveacutes del tiempo41 Alois Grillmeier y Richard Price afrontan esta cuestioacuten desde una perspectiva maacutes histoacuterica remitiendo especial-mente a las intervenciones recopiladas en el Codex Encyclius que recoge una gran laquoencuestaraquo del 457-458 realizada por el emperador Leoacuten I y

38 Cfr A DE HALLEUX Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 471s39 Teacutengase en cuenta que se tata del Siacutembolo niceno el Siacutembolo constantinopolitano ha-

biacutea permanecido desconocido hasta Calcedonia y precisamente reaparecioacute en las discusiones conciliares sobre la redaccioacuten de una foacutermula cristoloacutegica

40 Cfr por ejemplo A DE HALLEUX La reacuteception du symbole œcumeacutenique e Id Le Concile de Chalceacutedoine se refieren al prefacio y a la vinculacioacuten entre la definicioacuten y el Siacutembolo

41 Recueacuterdese que el Siacutembolo ocupa el primer lugar de la jerarquiacutea descendente de los lugares teoloacutegicos para la definicioacuten calcedonense La definicioacuten aparece como una interpre-tacioacuten de la fe nicena fiel como lo habiacutea sido Constantinopla I y en liacutenea con los testimonios individuales de la tradicioacuten inteacuterpretes ortodoxos del Credo esto es Cirilo y Leoacuten Cfr A DE HALLEUX La reacuteception du symbole œcumeacutenique 42-46

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que resulta de gran ayuda para acercarse a la comprensioacuten de Calcedonia en el momento42

Esta relacioacuten con el Siacutembolo permite insertar la definicioacuten del cuarto concilio en la gran tradicioacuten de la Iglesia sin desvincularla de la historia de la salvacioacuten del valor de la soteriologiacutea de toda la teologiacutea trinitaria o del papel del Espiacuteritu Santo43

332 Afirmacioacuten baacutesica de la unidad en Cristo

Los estudios recientes han mostrado que en Calcedonia si bien se afir-ma la dualidad de naturalezas en Jesucristo es prioritaria la afirmacioacuten de la unidad Por un lado se ha presentado la definicioacuten del cuarto concilio dentro de una fidelidad baacutesica a Cirilo44 como una expresioacuten del laquociri-lianismo moderadoraquo45 de manera que la afirmacioacuten de la unidad se halla siempre presente Por otro lado la estructura de la definicioacuten tal como es puesta de manifiesto por A de Halleux revela el texto como una afirma-cioacuten fundamental de la unidad de Cristo de modo inequiacutevoco en la cual se inserta la dualidad de naturalezas fruto de la Encarnacioacuten46 dualidad que no es una mera equiparacioacuten

42 Grillmeier se refiere al Codex en numerosos trabajos y destaca que gran parte de los obispos habiacutean interpretado Calcedonia en un sentido kerigmaacutetico (como pescadores no como filoacutesofos aristoteacutelicos) dando prioridad al Credo del cual la definicioacuten seriacutea una inter-pretatio Cfr A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 765-768 Id Jesus der Christus 21 221-266 entre muchos otros Grillmeier afirma con contundencia la estrecha dependencia de la definicioacuten respecto del siacutembolo y su consecuente valor soterioloacutegico cfr Id Jesus der Christus 21 5238ss Id Wir glauben an den einen Herrn especialmente 52-59 Por su par-te R Price trata tambieacuten la vinculacioacuten de Calcedonia con el Siacutembolo y coacutemo esto se muestra en el prefacio de la definicioacuten y en las respuestas contenidas en el Codex Encyclius dentro de una comprensioacuten de un ideal sacramental y de comunioacuten cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 56-59

43 Precisamente estas son criacuteticas que se le han hecho con frecuencia a la misma defi-nicioacuten

44 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique muestra esta fidelidad a lo largo de todo el artiacuteculo tanto por lo que respecta a las fuentes directas (cartas de Cirilo a Nestorio y a Juan) como a la teologiacutea de Basilio de Seleucia (de quien dependeriacutea el conjunto de la definicioacuten y quien se declara fiel a Cirilo) o a la redaccioacuten de la definicioacuten (en la que la uacutenica cita del Tomus de Leoacuten habriacutea sido cirilianizada)

45 Este cirilianismo moderado recordemos dentro de una afirmacioacuten clara de la unidad de Cristo reconoce la dualidad de naturalezas Es visto por Price entre otros como predo-minante en el momento Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 62-65

46 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique a partir de su anaacutelisis de la estructura de la definicioacuten muestra que la afirmacioacuten de la unidad es baacutesica hallaacutendose al inicio al final y a la mitad

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Asimismo la afirmacioacuten de la distincioacuten real de estas naturalezas no desgaja la unidad como apuntan los cuatro famosos adverbios (laquosin con-fusioacuten sin cambio sin separacioacuten sin divisioacutenraquo)47 La condicioacuten negativa de los adverbios indica que no buscan dar cuenta racional del misterio de la unioacuten cristoloacutegica sino solo garantizarlo ante las herejiacuteas de la confu-sioacuten de naturalezas y de la divisioacuten de la persona48

333 Realismo del difisismo calcedonense

Por lo que respecta a la foacutermula difisita (laquoreconocido en dos naturale-zasraquo) teniendo en cuenta la consideracioacuten del laquocirilianismo moderadoraquo predominante en Calcedonia A de Halleux ha defendido con fuerza que la definicioacuten calcedonense debe ser entendida en liacutenea con una distincioacuten real de las naturalezas en Cristo y no como una distincioacuten puramente no-cional (en la sola theoria) frente a otras posturas recientes Esta defensa del realismo del difisismo calcedonense es especialmente eneacutergica en sus uacuteltimos escritos49

334 El impulso a la terminologiacutea teoloacutegica

Calcedonia supone sin duda un paso adelante en la clarificacioacuten ter-minoloacutegica de la cristologiacutea distinguiendo por un lado la laquonaturale-zaraquo (physis) de la laquopersonaraquo (prosocircpon-hipoacutestasis) y situando ademaacutes prosocircpon junto a hipoacutestasis (ἐν δύο φύσεσιν frente a εἰς ἓν πρόσωπον

47 Es necesario precisar que para autores como A de Halleux estos cuatro adverbios que han dado tanto juego en la reflexioacuten teoloacutegica tendriacutean un papel secundario en la defini-cioacuten trataacutendose de hecho de un antildeadido que buscariacutea satisfacer las exigencias de los comi-sarios imperiales Seguacuten Halleux los adverbios rompen la estructura gramatical de la defi-nicioacuten y no queda claro a quieacuten se refieren si a laquodos naturalezasraquo a laquoreconocidoraquo o a laquouno solo y el mismoraquo Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 162 Id Le Concile de Chalceacutedoine 14 La mayoriacutea de los estudiosos coinciden en considerarlos un lugar comuacuten a los diversos partidos cfr ademaacutes del mismo A de Halleux entre otros T HAINTHALER A short analysis of the definition 323

48 A DE HALLEUX Le Concile de Chalceacutedoine 1449 La afirmacioacuten inequiacutevoca del realismo del difisismo de la definicioacuten calcedonense se

ve influida especialmente por los acuerdos entre ortodoxos y ortodoxos orientales de 1989 y 1990 de los cuales surgen dos declaraciones conjuntas que interpretan la dualidad cristoloacute-gica en liacutenea con la doctrina ciriliana de la distincioacuten de las naturalezas en Cristo por la mera theoria Cfr A DE HALLEUX Actualiteacute du neacuteochalceacutedonisme Id Orthodoxes orientaux en dialogue Id Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne donde critica la postura de G Martzelos quien habiacutea participado en los citados diaacutelogos ecumeacutenicos Esta postura de Halleux se ve reflejada en su obra Le Concile de Chalceacutedoine 16

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καὶ μίαν ὑπόστασιν) A primera vista Calcedonia da en la terminologiacutea teoloacutegica el paso que los padres Capadocios y Constantinopla I habiacutean dado en el campo trinitario50

Es preciso notar con Halleux la laquoimprecisioacutenraquo que rodea a la identifica-cioacuten de cuaacutel es la laquouacutenica hipoacutestasisraquo (μία ὑπόστασις) calcedonense51 Esta laquouna hipoacutestasisraquo es precisamente un elemento antildeadido al laquouna personaraquo leonino (el una persona latino habiacutea sido traducido como ἓν πρόσωπον) para subrayar la unidad en lo que podriacutea ser una enmienda de uacuteltima hora como indica Halleux52 Ciertamente la definicioacuten no afirma (pero tampo-co niega) que el laquouna hipoacutestasisraquo corresponda a la hipoacutestasis del Logos53 Esto no obsta para que otros autores como Price afirmen que esta uacutenica hipoacutestasis en la definicioacuten puede identificarse con el Logos eterno54

Esta cuestioacuten terminoloacutegica precisamente por no haber sido clarificada en Calcedonia (el concilio no pretendiacutea tanto definir los teacuterminos como de-fender la fe) requeriraacute grandes esfuerzos en la teologiacutea bizantina posterior al cuarto concilio tal como sentildealan los estudiosos actuales55

50 Cfr entre otros Ibid 14s51 En la definicioacuten no se explicita que Cristo sea una hipoacutestasis ni que esta hipoacutestasis

deba ser concebida como una laquopersonaraquo (en el sentido filosoacutefico moderno) ni que esta perso-na sea laquoDios Verboraquo Lo que se afirma es que la uacutenica hipoacutestasis se encuentra en el teacutermino de la concurrencia de la especificidad de cada naturaleza Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 167

52 En su anaacutelisis A de Halleux (La deacutefinition christologique 167s) identifica el pasaje de la definicioacuten donde se situacutea laquohipoacutestasisraquo junto prosocircpon (en modo alguno borrada la diferencia de naturalezas por causa de la unioacuten sino conservando cada naturaleza su pro-piedad y concurriendo en una sola persona [prosocircpon] y en una sola hipoacutestasis) como una modificacioacuten posiblemente de uacuteltima hora realizada sobre un formulario previo Considera que el teacutermino laquohipoacutestasisraquo habriacutea jugado un papel secundario en las discusiones conciliares y habriacutea sido antildeadido al laquopersonaraquo latino del Tomus de Leoacuten Magno (que se habiacutea traducido al griego como prosocircpon con riesgo de ser interpretado en sentido nestoriano) como una precisioacuten secundaria para reforzar la afirmacioacuten de la unidad fundamental En la p 168 glosa este pasaje de un modo interesante laquoDans le Christ les deux natures la diviniteacute et lrsquohumani-teacute conservent leur diffeacuterence speacutecifique bien que celle-ci se rejoigne en celui qui est un seul et le mecircme non seulement dans sa manifestation exteacuterieure (prosopon) mais aussi dans son ecirctre profond (hypostasis)raquo

53 Esta precisioacuten siacute apareceraacute en los anatematismos del II concilio de Constantinopla del 553

54 Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon 70 55 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 170 R PRICE - M GADDIS

The Acts of the Council of Chalcedon 71 Grillmeier (Jesus der Christus 1 762s) afirma que los padres de Calcedonia no fueron conscientes de la importancia de su decisioacuten ni sospecha-ron lo que iba a significar para las futuras generaciones de teoacutelogos afirma asimismo que aunque los conceptos de hipoacutestasis y persona siguen sin precisar el sentido del dogma de Calcedonia estaacute muy claro los padres habriacutean querido significar que a pesar de la diferencia

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34 Elementos de respuesta a las principales criacuteticas a Calcedonia

Los estudios contemporaacuteneos permiten responder desde una perspec-tiva renovada a las criacuteticas maacutes habituales de la teologiacutea contra Calcedo-nia56 La criacutetica contra Calcedonia y los otros concilios primitivos de haber laquohelenizadoraquo el mensaje cristiano ha sido constante desde los tiempos de Adolf von Harnack Los autores estudiados en especial Grillmeier han mostrado que Calcedonia no supone una laquohelenizacioacuten del cristianismoraquo (Hellenisierung des Christentums) Por el contrario propone que la de-finicioacuten calcedonense seriacutea en realidad una auteacutentica laquodeshelenizacioacutenraquo (Enthellenisierung) que buscariacutea salvaguardar la fe biacuteblica en Jesucristo frente a las amenazas del momento57 Si se usaron teacuterminos griegos en la definicioacuten no fue porque la fe se sometiera a una determinada filosofiacutea sino porque con ellos se buscaba poner un determinado laquomarco conceptual helenistaraquo al servicio de la expresioacuten de la fe que era la prioridad58

En los estudios recientes se ha revalorizado el contenido kerigmaacutetico de la definicioacuten y se ha evidenciado que la terminologiacutea teacutecnica usada en ella se hallariacutea al servicio de la fe aunque provenga del mundo heleniacutestico59

real entre las naturalezas de la divinidad y la humanidad Cristo es uno una sola persona o hipoacutestasis este enunciado puede hacerse sin necesidad de definir exactamente el contenido metafiacutesico de los conceptos pues no es misioacuten de los concilios ensentildear metafiacutesica sino servir al anuncio de la Iglesia que tiene por contenido la revelacioacuten de Dios en Cristo y en el Espiacuteritu El mismo A Grillmeier (Das Kerygma von Chalzedon) hace notar que si bien el contenido del dogma de la Encarnacioacuten estaba claro en Calcedonia podriacutea expresarse mediante conceptos auacuten no suficientemente precisados terminoloacutegicamente

56 Estas criacuteticas como ya se ha indicado se hallan sistematizadas criacuteticamente en G URIacuteBARRI Leyendo el Concilio de Calcedonia quien recoge tambieacuten las aportaciones de B SESBOUumlEacute Le proceacutes contemporain de Chalceacutedoine En resumen seriacutean las siguien-tes Calcedonia empleariacutea un lenguaje conceptual inadecuado seguiriacutea un esquema dualista este esquema pondriacutea en tela de juicio la unidad de Cristo Calcedonia estariacutea preso de una cristologiacutea desde arriba Calcedonia propondriacutea un Cristo desprovisto de auteacutentica perso-nalidad humana desconoceriacutea la dimensioacuten histoacuterica de la vida de Cristo prescindiriacutea del Espiacuteritu no presenta diferencias significativas en el modo de estar la divinidad en la keacutenosis y en la exaltacioacuten

57 La helenizacioacuten seriacutea en este caso la simbiosis fiacutesica entre la divinidad y la carne Grillmeier trata de la helenizacioacuten del cristianismo en numerosos trabajos por ejemplo Mo-derne Hermeneutik altkirchliche Christologie 544s J A Riestra (Il dibattito sul valore 107s) considera que gracias a los trabajos de Grillmeier hoy no puede sostenerse que Cal-cedonia haya helenizado el cristianismo

58 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 169s Al respecto tambieacuten de-fiende la definicioacuten de Calcedonia frente a las acusaciones de helenizacioacuten (Le Concile de Chalceacutedoine 16 ss)

59 Cfr Id La deacutefinition christologique 157 y 169s Id Le Concile de Chalceacutedoine 12-17 Estructuralmente divide la definicioacuten de Calcedonia en dos partes una kerigmaacutetica

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recordando que lo que estaba en juego no era una cuestioacuten acadeacutemica sino eclesial la unidad sacramental60 Asimismo el poner de manifiesto la afirmacioacuten inequiacutevoca de la unidad de Cristo por parte de la definicioacuten contribuye a responder a los que acusan a la definicioacuten de dualismo

Como ya se ha indicado la vinculacioacuten de la foacutermula con el Siacutembolo permite responder en cierto modo a los que acusan a Calcedonia de olvi-dar las dimensiones trinitaria soterioloacutegica y pneumatoloacutegica asiacute como la dimensioacuten histoacuterica de la vida de Cristo

Ademaacutes los trabajos recientes tambieacuten han permitido poner de mani-fiesto la afirmacioacuten de la verdadera humanidad de Cristo El mismo Grill-meier ha apuntado que la cristologiacutea del cuarto concilio entendida de ma-nera adecuada continuacutea siendo fructiacutefera teoloacutegicamente como un punto de relacioacuten entre las cristologiacuteas descendente y ascendente asiacute como una apropiada recuperacioacuten del valor del elemento humano y de la historicidad de Jesucristo una cristologiacutea calcedonense llevada a sus uacuteltimas conse-cuencias hace posible la siacutentesis entre el Jesuacutes de la historia y el Cristo de la fe61 Calcedonia se inserta dentro del dinamismo de la Iglesia primitiva que pone en relacioacuten kerigma reflexioacuten teoloacutegica y dogma eclesial62 y podriacutea tomarse como base para una antropologiacutea cristiana63

Es interesante sentildealar que Grillmeier considera que la tensioacuten real-mente existente entre el kerigma de la Iglesia por un lado y la reflexioacuten y la evolucioacuten doctrinal por el otro se resuelve sin rupturas en una uacutenica laquohistoria de la feraquo En esta historia no habriacutea saltos o quiebras sino un desarrollo armoacutenico que podriacutea considerarse como una verdadera incul-turacioacuten teoloacutegica de la fe64

a modo de confesioacuten de fe y otra teoloacutegica con un lenguaje teacutecnico Grillmeier (Jesus der Christus 1 765-768 entre otros muchos pasajes) tambieacuten ha afirmado el valor kerigmaacutetico fundamental de la definicioacuten

60 Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of Chalcedon 1 5861 Cfr A GRILLMEIER Moderne Hermeneutik altkirchliche Christologie 543-545

Id Jesus Christus in Palaumlstina 26s Tambieacuten Id Jesus der Christus 1 765ss62 Metodoloacutegicamente Grillmeier afirma la interrelacioacuten entre kerigma reflexioacuten teo-

loacutegica y dogma (confesiones de fe foacutermulas dogmaacuteticas) pero siempre afirmando la priori-dad del kerigma y de la fe viva de la Iglesia Cfr especialmente A GRILLMEIER Kerygma Reflexion und Dogma Id Piscatorie-Aristotelice 283 Id Nicaea und Chalcedon 44-46 Id Zur Dogmen- und Konzilsgeschichte 221-220

63 Cfr Id Nicaea und Chalcedon 75ss 64 Cfr J A MARTIacuteNEZ CAMINO Jesuacutes de Nazaret el Cristo en la fe de la Iglesia

441 citando a A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 VIII

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4 conclusioacuten

Junto con Andreacute de Halleux maestro de las fuentes y principal guiacutea hacia el pasado Alois Grillmeier ha contribuido a situar el concilio de Calcedonia dentro de una historia de los dogmas como laquohistoria de feraquo que a su vez ha sido laquonarradoraquo por Richard Price

Investigar la cristologiacutea calcedonense no solo desde el punto de vista del concilio en siacute sino atendiendo a la oacuteptica de sus estudiosos posibilita un acercamiento nuevo a esta cuestioacuten que a su vez permite replantear las criacuteticas contemporaacuteneas a Calcedonia y ofrecer una ayuda para el trabajo de los teoacutelogos maacutes allaacute de los toacutepicos y de una lectura parcial de las fuentes

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Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

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ndashVom Symbolum zur Summa Zum theologiegeschichtlichen Verhaumlltnis von Pa-tristik und Scholastik in Kirche und Uumlberlieferung in Id Mit ihm und in ihm Freiburg-Basel-Wien 1975 585-636

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143

Mater Clementissima 1 (2016) 143-191

El Colegio Espantildeol de Roma centro de proacutefugos durante la Guerra civil espantildeola

ViCente CaacuterCel ortiacute1

Pontificio Colegio Espantildeol

resuMen Durante la Guerra civil el Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma se convirtioacute en Centro de acogida y atencioacuten para centenares de sacerdotes reli-giosos y seglares que consiguieron salir de Espantildea huyendo de los horrores del conflicto armado y de la sangrienta persecucioacuten religiosa desencadenada en la zona republicana Responsable de este Centro fue don Carmelo Blay Agente de Preces del Colegio a quien el papa Piacuteo XI encomendoacute dicha tarea El presente artiacuteculo recupera para la memoria histoacuterica la personalidad de este desconocido sacerdote valenciano y Operario diocesano asiacute como la intensa actividad que desarrolloacute en favor de los numerosos proacutefugos espantildeoles llegados a la Ciudad Eterna desde el verano de 1936

palabras ClaVe Persecucioacuten Guerra civil proacutefugos Colegio Espantildeol de Roma

abstraCt laquoThe Spanish College of Rome refugees center during the Civil warraquo Du-ring the Spanish Civil War the Pontifical Spanish College of San Joseacute in Rome beca-me the center for the reception and care of the hundreds of priests religious and lay people who escaped from Spain fleeing from the horrors of armed conflict and bloody religious persecution unleashed in the Republican zone Responsible for this Center was Don Carmelo Blay the procurator of the College to whom Pope Pius XI entrus-ted this task The present article recovers for the historical memory the personality of this unknown Valencian and diocesan labourer priest as well as the intense activity that developed in favor of the numerous Spanish fugitives arrived at the Eternal City from the summer of 1936

KeyworDs Persecution Civil War refugees Spanish College of Rome

1 Mons Vicente Caacutercel Ortiacute (Manises 1940) autor de numerosas y reconocidas obras es historiador y sacerdote diocesano de Valencia especialista en historia contemporaacutenea de la Iglesia en Espantildea y vicario para los sacerdotes valencianos en Roma

ViCente CaacuterCel ortiacute

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1 perfil biograacutefico de don cArMelo blAy

Nacido en Liria (Valencia) el 9 de julio de 1874 Carmelo Blay Palo-mar cursoacute los estudios eclesiaacutesticos en el Seminario conciliar central de Valencia como alumno del Colegio de Vocaciones eclesiaacutesticas de San Joseacute fundado por el beato Manuel Domingo y Sol2 y dirigido por la Her-mandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos Celebroacute su primera misa en la iglesia arciprestal de Liria el 17 de junio de 1897 pues habiacutea sido ordenado sacerdote el diacutea 12 del mismo mes Ese mismo antildeo ingresoacute en la mencionada Hermandad

Cuando contaba 25 antildeos fue enviado a tierras mejicanas y en el oto-ntildeo de 1899 tomoacute posesioacuten de sus nuevos ministerios de vicerrector y de profe sor del seminario de Chilapa en el que estuvo trabajando durante el curso 1899-1900 Alliacute conocioacute personalmente al presidente de la Repuacutebli-ca mejicana el general Porfirio Diacuteaz esta amistad se iriacutea estrechando al correr de los antildeos En el antildeo acadeacutemico 1900-1901 pasoacute con los mismos ministerios a Cuernavaca donde ejercioacute la ensentildeanza hasta terminar el curso 1903-1904 Cuernavaca era una reciente dioacutecesis erigida en 23 de

2 Conocido popularmente como Moseacuten Sol el beato Manuel Domingo y Sol (Tortosa Tarragona 1 de abril de 1836 - 25 de enero de 1909) fue el penuacuteltimo de doce hijos En 1851 ingresoacute en el Seminario de Tortosa siendo ordenado sacerdote el 9 de julio de 1860 Despueacutes comenzoacute a ocuparse de los pobres de la dioacutecesis de Tortosa dedicaacutendose fundamentalmen-te a la predicacioacuten hasta que el nuevo obispo Benito Vilamitjana lo envioacute al Seminario conciliar central de Valencia para que consiguiera el doctorado en teologiacutea tambieacuten obtuvo el bachillerato en artes por la universidad de Barcelona y posteriormente se hizo cargo de la ensentildeanza de la religioacuten en el Instituto de Tortosa Ejercioacute gran influjo entre los joacutevenes logrando organizar la Juventud Catoacutelica ndashuna especie de Accioacuten Catoacutelicandash y tambieacuten fundoacute la Congregacioacuten mariana y la revista El congregante de san Luis que dirigioacute durante quince antildeos Promovioacute ademaacutes la peregrinacioacuten nacional a Roma de los congregantes marianos Su encuentro con el joven Ramoacuten Valero que queriacutea ser sacerdote pero careciacutea de medios econoacutemicos le impulsoacute a fundar la que seriacutea su obra principal la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos del Sagrado Corazoacuten de Jesuacutes dedicada a promover las vocaciones eclesiaacutesticas a traveacutes de los llamados Colegios de San Joseacute el primero de los cuales fue fundado en Tortosa el 12 de octubre de 1879 Cuatro antildeos maacutes tarde fundoacute formalmente la Hermandad que veniacutea funcionando como grupo desde enero de 1883 El 2 de enero de 1885 en el colegio de San Joseacute de Tortosa se reunioacute el primer grupo de operarios para emitir la primera promesa de consagracioacuten a la nueva obra Gracias al impulso personal de moseacuten Sol y a la invitacioacuten de algunos obispos comenzaron a surgir en muchas dioacutecesis espantildeolas y portuguesas los colegios de vocaciones eclesiaacutesticas de forma que en 1888 se abrioacute el de Murcia en 1889 el de Orihuela y en los antildeos sucesivos los de Plasencia Burgos y Roma Este uacuteltimo destacoacute sobre todas sus fundaciones y fue erigido el 1 de abril de 1892 con el apoyo inicial del cardenal valenciano Benito Sanz y Foreacutes arzobispo de Sevilla quien apoyoacute a moseacuten Sol ante el cardenal Rampolla secretario de Estado y el sustituto de la Secretariacutea de Estado monsentildeor Della Chiesa futuro papa Benedicto XV El 25 de octubre de 1893 Leoacuten XIII cedioacute el Palacio Altemps para sede del Colegio Espantildeol de San Joseacute en Roma gesto

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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junio de 1891 que abarcaba todo el Estado de Morelos El seminario contaba con 30 alumnos internos y se acababa de confiar su direccioacuten a los Operarios diocesanos

En el antildeo 1904 fue enviado a la ciudad de Meacutejico como encargado del Templo Nacional Expiatorio de San Felipe recayente en la ceacutentrica calle Madero en las cercaniacuteas del Zoacutecalo donde se levantan la catedral y el palacio presidencial Comenzoacute asiacute una nueva faceta de su vida y ma-nifestoacute unas cualidades hasta entonces ineacuteditas sus dotes diplomaacuteticas Responsable del templo oficial del Gobierno mejicano donde se celebra-ban las ceremonias y actos religiosos de caraacutecter nacional se relacionoacute con personalidades poliacuteticas del paiacutes de la cancilleriacutea espantildeola y otras embajadas en especial las de habla hispana En este templo permanecioacute hasta 1909

Requerido por los superiores para trasladarse a Roma llegoacute al Ponti-ficio Colegio Espantildeol cuando terminaba como administrador del mismo y agente de preces ante el Vaticano otro sacerdote valenciano tambieacuten oriundo de Liria Luis Mariacutea Albert 3 nombrado rector del Colegio Blay

que fue agradecido al Pontiacutefice por los obispos espantildeoles en un mensaje colectivo firmado en Valencia con motivo de la celebracioacuten alliacute del primer congreso eucariacutestico nacional Moseacuten Sol fue beatificado el 29 de marzo de 1987 Entre sus escritos descatan las Plaacuteticas a los Operarios (ed Lope Rubio Siacutegueme Salamanca 2002) que recogen las charlas que dirigiacutea anualmente a los operarios durante los ejercicios espirituales y que aprovechaba para revisar la marcha de las tareas de la Hermandad estudiaba proyectos e impartiacutea instrucciones El archivo de la Hermandad custodia todos sus manuscritos divididos en tres grandes aparta-dos predicacioacuten cartas y varios Bibliografiacutea A TORRES SAacuteNCHEZ Vida del siervo de Dios don Manuel Domingo y Sol apoacutestol de las vocaciones fundador de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos del Corazoacuten de Jesuacutes Tortosa 1934 F MARTIacuteN HER-NAacuteNDEZ - L RU BIO PARRADO Moseacuten Sol Vida de Manuel Domingo y Sol fundador de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos Siacutegueme Salamanca 1978 estas dos obras son las maacutes completas y rigurosas en datos histoacutericos porque las de J DE ANDREacuteS HERNANSANZ Moseacuten Sol Barcelona 1970 y la de J Mordf JAVIERRE Reportaje a Moseacuten Sol Un hombre bueno y audaz Madrid 1987 publicada con motivo de la beatificacioacuten son de tono periodiacutestico y divulgativo Cf tambieacuten L RUBIO PARRADO - J DE ANDREacuteS HER-NANSANZ - F MAR TIacuteN HERNAacuteNDEZ Sacerdotes Operarios Diocesanos Aproximacioacuten a su historia Siacutegueme Salamanca 1996 y J DE ANDREacuteS HERNANSANZ Cien antildeos de historia Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute Roma 1992

3 Luis Mariacutea Albert realizoacute sus estudios en el Seminario central de Valencia como alum-no interno del Colegio de San Joseacute para Vocaciones eclesiaacutesticas El 22 de diciembre de 1888 ya quiso ingresar en la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos aunque se oponiacutean sus padres pobres y ancianos que lo necesitaban pero insistioacute hasta conseguirlo Prestoacute ayu-da en el Colegio de Orihuela y tambieacuten en el de Murcia Luego pasoacute al de Valencia Ingresoacute en la Hermandad en septiembre de 1890 Recibioacute la ordenacioacuten sacerdotal en 1892 cele-brando su primera misa en Valencia el 4 de octubre de ese antildeo Permanecioacute en el Colegio de Valencia hasta 1894 en que fue destinado al Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma adonde

ViCente CaacuterCel ortiacute

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le sucedioacute en ambos ministerios desde el 26 de octubre de 1909 Durante 1915 viajoacute a Pariacutes para atender espiritualmente al presidente mejicano Porfirio Diacuteaz gravemente enfermo de quien habiacutea sido amigo y con-sejero y a quien ayudoacute a morir cristianamente Acompantildeoacute al cardenal Benlloch arzobispo de Burgos en su embajada espiritual del antildeo 1923 a Hispanoameacuterica que tanto sirvioacute para estrechar los viacutenculos de aquellos paiacuteses con Espantildea

Durante tres deacutecadas don Carmelo no soacutelo fue procurador general de la Hermandad de Sacerdotes Operarios y administrador del Colegio Espantildeol sino el sacerdote maacutes popular de Roma consultor guiacutea y amigo de cuantos en Espantildea o en Hispanoameacuterica teniacutean algo que resolver en la Curia romana Como Agente de preces4 fue la persona que despachaba

llegoacute con Moseacuten Sol el diacutea 30 de octubre para encargarse de la administracioacuten del colegio y de la agencia de preces hasta 1909 en que fue nombrado rector del mismo Desde 1911 a 1914 convivioacute en el Colegio con el beato maacutertir Juan Ventura Solsona tambieacuten valenciano El antildeo 1914 fue destinado como rector al seminario de Barcelona donde estuvo hasta 1916 dejando muy buen recuerdo de su gestioacuten En 1916 pasoacute como director al Colegio de San Joseacute de Valencia y en 1921 fue nombrado rector del Seminario de Salamanca donde enfer-moacute muy gravemente el 3 de abril de 1925 El 9 de junio pudo viajar a Liria para reponerse lo que consiguioacute muy lentamente En octubre de 1926 fue destinado como director al Colegio de Valencia y el 17 de marzo de 1927 se ofrecioacute para ir de nuevo al Colegio de Roma como administrador porque el que ejerciacutea dicho ministerio habiacutea entrado en la cartuja de Florencia Pero no se le dio este cargo porque superaba sus fuerzas mermadas debido a su enfermedad En 1928 pidioacute a la Santa Sede dispensa del voto indefini do de pertenencia a la Hermandad para poder residir en su pueblo natal de Liria pero siempre continuoacute en estrechas relaciones con los directores generales por lo que se le puede considerar de hecho operario diocesano hasta el fin Reducido desde entonces a atender a su quebrantada salud en su retiro de Liria Alliacute le sorprendioacute la persecucioacuten religiosa y fue martirizado en Paterna en cuyo cementerio fueron depositados sus despojos que el diacutea 10 de diciembre de 1939 recibieron cristiana sepultura en el de Liria (cfr mi Diccionario de Sacerdotes diocesanos espantildeoles del siglo XX Madrid 2006 92)

4 La Agencia de preces de Espantildea en Roma era una institucioacuten del Estado creada a fi-nales del siglo XVIII que dependiacutea de la Embajada cerca de la Santa Sede y a traveacutes de ella tramitaban los espantildeoles (obispos eclesiaacutesticos y laicos) todos los asuntos que requeriacutean la intervencioacuten del Papa o de los organismos vaticanos En 1908 a raiacutez de la reforma de la Curia romana se dejoacute libertad a los fieles para usar libremente el agente o expedicionero que fuese de su confianza Lentamente la Agencia de preces estatal fue perdiendo la intensa actividad que hasta entonces habiacutea tenido y por ello en 1926 el embajador en Roma y agente real conde de Vintildeaza confioacute la Agencia real de preces al rector del Colegio Espantildeol Este a su vez encomendoacute dicha funcioacuten a un sacerdote de los Operarios Diocesanos del Colegio y por este motivo el primer agente fue don Carmelo Desde ese momento los obispos espantildeoles se sirvieron de la Agencia para la expedicioacuten de preces que afectaban a sus dioacutecesis Tras el Con-cilio Vaticano II y despueacutes de la consiguiente reforma de la Curia romana y descentralizacioacuten de facultades la Agencia de preces quedoacute muy reducida y casi vaciada de contenido si bien se mantuvo figura juriacutedica hasta 2016 Actualmente es el rector del Colegio quien gestiona en la Curia romana los asuntos que un tiempo fueron encomendados a la Agencia

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mil asuntos de las dioacutecesis en el Vaticano obteniacutea audiencias pontificias y bendiciones apostoacutelicas acomodaba peregrinaciones organizaba visitas a las basiacutelicas etc En el ejercicio de este ministerio puso siempre a con-tribucioacuten su incansable voluntad e influencia en los ambientes vaticanos y romanos para logar el mejor eacutexito en el servicio de los obispos quienes con confianza ilimitada le encomendaron la tramitacioacuten de los asuntos maacutes delicados Y esta labor fue tan extensa y tan fecunda que su persona estuvo unida a todos los problemas religiosos que en la Ciudad Eterna tuvieron relacioacuten con Espantildea

La palabra agencia podriacutea parecerle a alguno sinoacutenimo de traacutemite burocraacutetico ya que no es muy distinto el cometido de la misma Pero con las preces y los rescriptos iban unidas en aquellos tiempos una multitud de cuestiones de gran intereacutes para las dioacutecesis puesto que se trataba con frecuencia de problemas complejos que necesitaban urgente solucioacuten y que afectaban a las relaciones entre las dioacutecesis y la Santa Sede A todo procuroacute atender don Carmelo y para todo cuando motivos superiores no lo impediacutean encontraba una respuesta satisfactoria Mas no siempre era faacutecil resolver sin complicaciones algunos asuntos Entonces empe-zaba para don Carmelo un nuevo esfuerzo visitaba al cardenal prefecto de la Congregacioacuten o al secretario de la misma estudiaba el problema y lo daba tambieacuten a estudiar a personas competentes y de su confianza redactaba una pro-memoria y a veces los votos o pareceres que le pediacutean los dicasterios todo para buscar la solucioacuten maacutes conveniente Y a esta al final llegaba

Don Carmelo no llevoacute solamente los asuntos eclesiaacutesticos de casi todas las dioacutecesis espantildeolas sino que fue tambieacuten agente oficial de preces de la Embajada de Espantildea ante la Santa Sede Este campo de su actividad que exigiacutea exquisito tacto y delicadeza fue cultivado por eacutel uniendo sus dos grandes amores la Iglesia y Espantildea En los momentos difiacuteciles en las situaciones maacutes o menos complicadas la acertada actuacioacuten de don Car-melo vino muchas veces a despejar el horizonte con completa satisfac-cioacuten de los embajadores que vieron en su persona un haacutebil y capacitado colaborador para promover los intereses religiosos de Espantildea

De toda la Curia romana ninguacuten dicasterio estimoacute tanto la labor de don Carmelo como la Secretariacutea de Estado Puede decirse que praacutecticamente era el minutante para la lengua espantildeola pues durante muchos antildeos se le encomendaron la redaccioacuten de cartas telegramas documentos varios y las traducciones de muchos textos

ViCente CaacuterCel ortiacute

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Dedicoacute particular atencioacuten a los peregrinos que llegaron a Roma con motivo del Antildeo Santo Extraordinario de 1933 Y al antildeo siguiente acom-pantildeoacute a los miembros de la Juventud de Accioacuten Catoacutelica de Espantildea tanto en su visita a Roma como a la Ciudad del Vaticano prodigando afec-tuosas atenciones a los peregrinos y facilitando audiencias y accesos a monumentos histoacutericos y centros oficiales La revista Signo oacutergano de los Joacutevenes de Accioacuten Catoacutelica teniacutea en eacutel el medio seguro de obtener informacioacuten graacutefica o literaria sobre el Vaticano en cualquier momento y en muchas ocasiones puso su contribucioacuten personal al servicio de este semanario

Pero fue durante los azarosos antildeos de la Guerra civil espantildeola cuando tuvo que desplegar toda su actividad Digna de todo encomio fue su ac-tuacioacuten como delegado de Piacuteo XI para prestar atencioacuten a los sacerdotes religiosos y catoacutelicos espantildeoles que tuvieron que refugiarse en Italia du-rante el trienio 1936-1939

Ante las dificultades econoacutemicas que sufrioacute el Colegio Espantildeol a cau-sa de la guerra don Carmelo escribioacute al general Goacutemez-Jordana presi-dente de Junta Teacutecnica del Estado Espantildeol solicitando la ayuda corres-pondiente (documento 1 en el apeacutendice de este artiacuteculo)

Tambieacuten informoacute al cardenal Pacelli sobre las opiniones de las esferas gubernativas que lamentaban respetuosamente el modo como la Santa Sede trataba al Gobierno Nacional desde que comenzoacute el movimiento militar y que eran contrarias a la actitud separatista del clero vasco sobre la piedad e intensa religiosidad personal del general Franco y sobre la formacioacuten religiosa de los falangistas (documento 3)

Fue considerado el sacerdote espantildeol que sirvioacute a todos con una cari-dad exquisita Fue sacerdote piadoso diplomaacutetico haacutebil y fideliacutesimo a los sumos pontiacutefices Piacuteo XI lo llamaba il nostro interprete porque cuando teniacutea que dirigir la palabra a los peregrinos de lengua espantildeola Blay esta-ba muy cerca del Papa y repetiacutea en castellano lo que el pontiacutefice deciacutea en italiano Piacuteo XII a quien tratoacute mucho cuando trabajaba como secretario de Estado le confioacute algunos asuntos muy delicados Pero tambieacuten le tocoacute sufrir mucho y saborear contrariedades fuertes aunque jamaacutes se defendioacute ni quiso que lo defendieran

Don Carmelo Blay fallecioacute en Roma en el Palacio Altemps antigua sede del Colegio Espantildeol de San Joseacute el 2 de marzo de 1941 y fue en-terrado en el panteoacuten propiedad de la Obra Piacutea en el cementerio romano del Campo Verano

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La revista del Colegio nuestra Mater Clementissima le dedicoacute la si-guiente croacutenica

Don Carmelo Con estas dos sencillas y breves palabras que tantas cosas queriacutean decir de respeto de estimacioacuten de confianza y carintildeo era generalmente designado aqueacutel cuya reciente muerte tantos corazones lloraron y cuya bendeci-da memoria en tantas almas agradecidas seraacute eterna

laquoNuestro Don Carmeloraquo deciacutea de eacutel su santidad Piacuteo XI Y don laquoDon Carme-loraquo preguntaba con frecuencia el santo padre Piacuteo XII En las altas y en las bajas esferas de Roma en Espantildea y en la Ameacuterica espantildeola llegoacute a ser populariacutesimo y querido merced a los muchos y abnegados servicios que a su paso por ellas fue prodiga y continuamente prestando Por eso la noticia de su fallecimiento dada a conocer por la radio y por la prensa ha despertado por doquier ecos de profundo y si sincero dolor y su entierro y sus funerales han alcanzado el grado de una verdadera apoteosis de carintildeosa adhesioacuten a su personalidad y de reconocimiento plebiscitario de sus altas virtudes y merecimientos

Un libro y bien extenso seriacutea apenas suficiente para su biografiacutea ardua em-presa la nuestra al pretender bosquejar una semblanza suya para dejar registrada su figura en las paacuteginas de Mater Clementissima

Pero ademaacutes de los que pudieacuteramos llamar sus ministerios oficiales iquestquieacuten puede enumerar los que hubo de desempentildear al margen de ellos y simultaacutenea-mente durante sus treinta antildeos de permanencia en la capital del orbe catoacutelico Asombra pensar la suma enorme de energiacuteas que derrochoacute el bondadosiacutesimo e infatigable D Carmelo en su perenne afaacuten de servir a cuantos acudiacutean a eacutel con sus cuitas sus pretensiones sus consultas sus confidencias y con problemas de la maacutes diversa iacutendole

En las altas esferas del Vaticano en las Embajadas en las Congregaciones en las Exposiciones de tipo internacional en los Conventos de Religiosas es-pantildeolas sobre todo en las horas criacuteticas del establecimiento de las mismas en Roma en el confesonario ‒que tambieacuten este apostolado ejercioacute‒ y fuera de eacutel en cartas en la sala de visitas del Colegio en su modesto despacho por las calleshellip siempre donquiera fue prodigando el tesoro de sus consejos de sus palabras de aliento de sus intervenciones bienhechoras sin escatimar tiempo ni esfuerzo alguno

Fue leal noble y desinteresado servidor de los papas de cardenales de nun-cios de priacutencipes de embajadores de prelados de sacerdotes y religiosos de eclesiaacutesticos y seglares de altos y bajoshellip Y de todos ellos merecioacute la constante confianza el acendrado afecto las maacutes sinceras demostraciones de gratitud

iquestCuaacutel fue el secreto de esta universalidad y perennidad de simpatiacuteas y adhe-siones En primer teacutermino su espiacuteritu netamente sacerdotal En los maacutes varia-dos ambientes mostroacutese siempre D Carmelo antes que nada sacerdote en sus palabras en su porte modesto y recogido en su espiacuteritu y en toda su conducta

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Era el fruto de su sincera piedad sencilla pero soacutelida Apenas los negocios de fuera dejaacutebanle libre retiraacutebase en su cuarto escondiacutease en eacutel y se entregaba placenteramente al cultivo de la vida oculta y silenciosa No apeteciacutea nada No gozaba sino con la soledad de su despacho Sus devociones Sus visitas al San-tiacutesimo Retraiacutease ndashsi no se veiacutea forzado a asistir por deber de obligada cortesiacutea o por caritativa condescendenciandash de toda fiesta y holgorio por honesto que fuera Y con todo a cada hora a cada momento veiacutease precisado a sacrificar su amor a la soledad para recibir visitas Eacutel haciacutea pocas No le quedaba por antildeadidura tiempo para hacerlas Ni aun lo teniacutea casi para comer llegaba por lo general tarde al refectorio Y despachando en pocos minutos su moacutedica refec-cioacuten auacuten terminaba antes que la comunidad Era sobriacutesimo en todo Otras dotes suyas fueron la discrecioacuten en no decir sino lo que conveniacutea iexclQueacute difiacutecil arte el de saber escuchar y callar Era fideliacutesimo en guardar los secretos que le eran confiados Jamaacutes daba muestras de extrantildearse ni se espantaba de nada Su sem-blante permaneciacutea siempre inalterable aunque teniacutea muy sensible corazoacuten No ambicionaba nada y gozaba con dar cuanto teniacutea Y no daba sus cosas solo daba tambieacuten su tiempo y su persona Y lo daba sonriendo Sonriendo siempre Su espiacuteritu de abnegacioacuten de interior mortificacioacuten fue maravilloso

Ya se deja entender que no habiacutea de faltarle a eacutel tambieacuten la comuacuten suerte de las almas elevadas la gloria del dolor de la contradiccioacuten del sacrificio Y iexclqueacute cruces tan pesadas tuvo que llevar con frecuencia sobre su corazoacuten Precauciones amargas asuntos engorrosos impertinencias incomprensiones interpretaciones aviesas de su conducta o de sus miras acusaciones injustas censuras menosprecios ingratitudes deslealtades desengantildeoshellip Abundantiacutesi-ma cosecha recogioacute de todo ello a lo largo de sus actuaciones Jamaacutes perdioacute la paz Jamaacutes se descomponiacutea Encogiaacutese de hombros y callaba Sabiacutea bien que los uacutenicos anhelos de su corazoacuten eran los de servir callada humilde pero imperteacute-rritamente a Dios y a Espantildea

En momentos criacuteticos de apasionadas campantildeas cargadas de santildeudas y ma-liciosas intenciones contra eacutel ni se preocupaba de defenderse ni queriacutea que se le defendiera O dejaba todo en manos de Dios y seguiacutea su camino

Como quien por tan altas y tan santas causas trabajaba no le preocupaban ni apeteciacutea humanas compensaciones y recompensas Con todo no le fueron esca-timadas Repetidos testimonios de honor y de gratitud le otorgoacute la Santa Sede Varias son las condecoraciones y diplomas con que le significoacute su complacencia por los servicios que le prestara declaraacutendole de esa forma hijo benemeacuterito de la Iglesia

Varias repuacuteblicas de la Ameacuterica espantildeola le condecoraron tambieacuten a su paso por ellas acompantildeando como secretario al Emmo Sr cardenal Benlloch en la visita que este hizo a ellas en 1923 como Embajador espiritual de Espantildea

Como premio a los extraordinarios servicios prestados a Espantildea al terminarse el glorioso Movimiento Nacional proprio motu el Generaliacutesimo Franco le dio la

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Gran Cruz de Isabel la Catoacutelica Sin contar otros muchos que no trascendieron al puacuteblico sus afanes y su iacutemproba labor como representante y agente de Piacuteo XI en favor de los proacutefugos espantildeoles en Roma eran maacutes que suficientes para tener bien merecido tan extraordinario galardoacuten Un libro podriacutea formarse ndashque resultariacutea una apologiacutea de D Carmelondash con soacutelo extractar y ordenar una pequentildea porcioacuten siquiera de los miles de documentos y cartas que se conservan en su copioso e interesante archivo concernientes a esta materia

Pero en lo humano y espiritual a un tiempo mismo la principal recompensa que Dios quiso depararle sobre la tierra la tuvo D Carmelo en las continuas demostraciones de intereacutes de adhesioacuten y de carintildeo que sus innumerables amigos le prodigaron durante el antildeo de su postrera enfermedad

Desde el Sumo Pontiacutefice que con frecuencia solicitaba informes de su salud y cardenales nuncios embajadores prelados de la Curia que le visitaban hasta humildes religiosas que se acercaban a saber del curso de su enfermedad ha sido un no interrumpido desfile de toda suerte de personas anhelosas de testimoniarle su carintildeosa simpatiacutea y su profunda estimacioacuten Por otra parte ha disfrutado de tal copia de cuidados y asistencias de todo geacutenero que cuando en momentos de pasajera impaciencia se le haciacutea parar mientes en semejante cuacutemulo de laquomi-nosraquo y agasajos se conmoviacutea hasta derramar laacutegrimas y bendeciacutea al Sentildeor confesaacutendose inmerecedor de tanto bien Su uacutenico sufrimiento ha sido en estos largos doce meses el no poder trabajar y moverse

Al cabo todos los recursos y prevenciones de la ciencia resultaron inuacutetiles Quince diacuteas antes de su muerte una ligera bronquitis le puso en grave peligro El diacutea 2 de marzo a la una y cuarto de la tarde declaraban los Drs Rochi y Tomassi-ni luego de la segunda consulta que celebraron que la gravedad inminente habiacutea desaparecido y le autorizaron para tomar ya alguacuten alimento A las dos y cuarto cuando se disponiacutea a hacerlo quiso bajarse del lecho y el pequentildeo esfuerzo que hubo de hacer le produjo un repentino colapso Al aviso del enfermero los Su-periores que se hallaban en la Rectoral corrieron apresurados y como ya estaban siempre preparados para un lance parecido llegaron a tiempo de absolverle y darle la Extremauncioacuten La noche anterior que fue la del saacutebado habiacutea confe-sado como de ordinario con el P Pazos Sch P y en la mantildeana del domingo como todos los diacuteas habiacutea comulgado

Expuesto el cadaacutever en la capilla de San Carlos dieacuteronle piadosa y constante vela los Superiores y alumnos maacutes las innumerables personas que fueron desfi-lando para rendirle este uacuteltimo homenaje

Los Emmos Srs cardenales Tedeschini Pizzardo y Caccia Dominioni ora-ron ante su cadaacutever Otros imposibilitados por enfermedad o por hallarse ausen-tes de Roma lamentaron el no poderlo hacer

Su santidad Piacuteo XII sobre haber dado el peacutesame por conducto de su secre-tario particular que primero telefoneoacute y despueacutes vino a expresarlo de palabra envioacute al Rector del Colegio el paternal y encomiaacutestico telegrama que publi-

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camos en otro lugar de la revista El Embajador de Espantildea Sr Yanguas y los miembros de la Embajada y del Consulado fueron de los primeros en acudir al Colegio y ofrecerse para todo Consideraban la muerte de D Carmelo como peacuterdida de familia

El diacutea 4 despueacutes de haber celebrado el Rector la misa en la capilla de San Carlos a las ocho de la mantildeana fue depositado en la caja mortuoria y proce-sionalmente conducido hasta el carro fuacutenebre que lo trasladoacute acompantildeado por algunos Superiores y alumnos a la Iglesia Nacional de Montserrat don de por concesioacuten del Sr Embajador se celebraron luego a las diez las solem nes hon-ras fuacutenebres5

2 proacutefugos espAntildeoles en roMA

Los alumnos del Colegio Espantildeol que no teniacutean vacaciones en Espa-ntildea al terminar el curso 1935-1936 marcharon al Seminario de verano de Chiavari cerca de la ciudad de Geacutenova donde soliacutean transcurrir los me-ses estivales acogidos generosamente por el obispo de aquella dioacutecesis como en antildeos anteriores El de Chiavari estaba considerado el Seminario de verano de los espantildeoles pero aquel verano no fue como los anterio-res puesto que el 18 de julio estalloacute la Guerra civil e inmediatamente comenzoacute la tragedia de los numerosos proacutefugos que pudieron escapar de los horrores de la contienda y de la persecucioacuten religiosa y lograron establecerse en Italia

Mientras los colegiales estaban en Chiavari llegoacute a aquel lugar el obis-po de Cartagena Miguel de los Santos Diacuteaz Goacutemara antiguo alumno del Colegio que se presentoacute junto con su familiar vestidos ambos de paisa-no Cuando regresaron del veraneo los colegiales encontraron en Roma una nube de sacerdotes religiosos religiosas algunos seminaristas y mu-chos seglares fugitivos que huiacutean de la implacable persecucioacuten religiosa que estaba azotando aquellas primeras semanas el territorio republicano y que arrojariacutean en tres antildeos un total de 6832 eclesiaacutesticos martirizados 4184 pertenecientes al clero secular incluidos doce obispos un adminis-trador apostoacutelico y seminaristas 2365 religiosos y 283 religiosas

A mediados de agosto ya habiacutean llegado a Roma 167 sacerdotes y como el nuacutemero aumentaba diacutea por diacutea Piacuteo XI instituyoacute en el Colegio Espantildeol un Comiteacute para la asistencia de los proacutefugos y confioacute la direccioacuten

5 Mater Clementissima 1941 202-215

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del mismo a don Carmelo quien el 22 de agosto comunicoacute a monsentildeor Tardini sustituto de la Secretariacutea de Estado que la ayuda habiacutea sido orga-nizada seguacuten los deseos del Papa

Come di parola ho avuto lrsquoonore di far sapere allrsquoE V Rvma oramai lrsquoaiuto ai sacerdoti spagnuoli che hanno dovuto lasciare la loro disgraziata patria egrave organizzato drsquoaccordo ai desideri espressi dal Santo Padre

Finora i sacerdoti arrivati in questa Alma Cittagrave sono 52 distribuiti nei luo-ghi seguenti Pont Collegio Spagnuolo Pont Collegio Pio Latino Americano Collegio Leoniano Figli di Maria Immacolata al Mascherone Fatebenefratelli allrsquoIsola Tiverina Domenicani Spagnuoli a via Condotti Istituto Orientale Car-melitani dellrsquoAntica Osservanza in via Sforza Pallavicini

Tra i profughi si trova SE Mons Felice Bilbao Vescovo di Tortosa presen-temente presso le Suore Ospitaliere del S Cuore a Viterbo SE Mons Giovanni Perellograve Vescovo di Vich col suo Segretario che hanno preso alloggio nella casa dei Religiosi dei SS Cuori in Roma via del Curato giaccheacute SE appartiene a detta Congregazione SE Mons Michele DiazVescovo di Cartagena col suo Segretario ospiti del Pontificio Collegio Spagnuolo in villeggiatura a Chiavari e colagrave egrave stato trasferito un Sudiacono del Seminario di Barcellona

Di questi profughi uno si egrave recato a Milano ed un altro a Viena AustriaPer alloggiare altri sacerdoti che certamente verranno Mons Guidetti Ca-

marlengo dellrsquoOpera laquoCento Pretiraquo ha messo a disposizione del Comitato fino a cento posti nella sede della stessa Opera in condizioni di favore

Grazie al paterno interessamento del Santo Padre ed alla fraterna caritagrave del Clero Romano da qualche giorno si egrave incominciato a confezionare gli abiti ec-clesiastici per tutti in seguito a quanto fu decisso (sic) nellrsquoadunanza della Pia Unione di S Paolo del Clero Romano che innanzi tutto fossero fatte le vesti per i medesimi Speriamo che in breve tempo saranno vestiti da sacerdote Si provede (sic) anche a SE Mons Vescovo di Vich tutto il vestiario

Si provvederagrave anche per gli indumenti necessari di biancheria cappello scar-pe etc in maniera che della benevolenza del Santo Padre e per merito del Clero Romano protranno (sic) trovare un vero sollievo questi buoni sacerdoti spag-nuoli che sentono in questi momenti la grande consolazione di vedersi vicini al Padre Buono e non sanno come ringraziare il Signore di tanta caritagrave

Ieri sono stati loro consegnati i Breviari che la munificenza del Santo Padre ha fatto loro pervenire Questrsquoatto di sovrana delicata bontagrave egrave stato di sommo conforto ai profughi che in mezzo alle loro pene non potevano recitare lrsquoUffizio Divino Ora merceacute il felice delicato pensiero dellrsquoAugusto Pontefice si sentono piugrave sacerdoti percheacute potranno adempiere questo soave e consolante obbligo della recita del Breviario

Si egrave provveduto pure per gli abiti di 12 Religiose della Compagnia di Santa Teresa di Gesugrave che sono arrivate in questa Cittagrave in pietosissime condizioni

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Nutrono tutti vivissimo desiderio di poter offrire personalmente a Sua Santitagrave i loro piugrave sentiti ringraziamenti per tanta bontagrave e manifestare una volta di piugrave i sentimenti di profonda adesione alla Sua Augusta Persona e provare la grande consolazione dellrsquoApostolica Benedizione cosigrave necessaria in questi tristi mo-menti per la cara patria cosigrave probata e per loro stessi

Coi sensi della mia sincera stima mi professo dellrsquoEV Revma affmo ser-vitore

Sac Carmelo Blay6

Iacutemprobo fue el trabajo encomendado a don Carmelo y muy poco agra-decido por algunos sacerdotes si bien a todos los tratoacute de forma exquisita buscaacutendoles alojamiento e intenciones de misas facilitaacutendoles cuanto ne-cesitaban en lo referido a ropas alimentos breviarios y libros asiacute como organizaacutendoles conferencias de Accioacuten Catoacutelica visitas a iglesias y mo-numentos Procuroacute que algunos recibieran alguna ayuda econoacutemica y que otros desarrollaran actividades ministeriales atendioacute a la asistencia de los enfermos y pensoacute incluso en los maacutes miacutenimos detalles hasta que todos abandonaron Roma

Sin embargo el Papa queriacutea que estos sacerdotes regresaran a Espantildea para trabajar en la zona nacional liberada de la persecucioacuten para cubrir las numerosiacutesimas bajas de los sacerdotes maacutertires Esta determinacioacuten pontificia sentoacute muy mal a algunos sacerdotes disgusto que se explica por lo mucho que habiacutean sufrido Blay obedecioacute al Papa pero los maacutes exal-tados le culparon sin recordar lo mucho que le debiacutean agradecer y hasta le cantaron una copla que deciacutea laquoDe Espantildea nos han echado la CNT y la FAI y en Roma nos ha abatido Monsentildeor Carmelo Blayraquo

En la intensa correspondencia epistolar que mantuvo con los mon-sentildeores Tardini y Montini conservada en el Archivo Secreto Vaticano constan mil detalles de sus preocupaciones por atender del mejor modo posible a los proacutefugos espantildeoles que fueron un total de 226 4 obispos 202 sacerdotes diocesanos 10 religiosos escolapios 8 seminaristas y 2 laicos de Accioacuten Catoacutelica7

Asimismo se interesoacute por la suerte de maacutes de 700 religiosas pertene-cientes a congregaciones que teniacutean sus casas generalicias en Roma y se

6 Archivo Secreto Vaticano (ASV) Segr Stato Guerra Spagnola 2 Fasc 4 n 7 ff 3-57 Elenco dei Vescovi Sacerdoti Religiosi Seminaristi e Laici di AC profughi dalla

Spagna accolti dal Comitato eretto dalla Santa Sede presso il Pontificio Collegio Spagnuolo per il soccorso dei medesimi (ASV Segr Stato Guerra Spagnola 1 Fasc 1 ff 1-6)

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esforzoacute para que todas ellas fueran acogidas en sus respectivas comuni-dades En una carta dirigida a monsentildeor Tardini el 19 de septiembre de 1936 le dijo

Eccellenza ReverendissimaDi nuovo mi credo in dovere di inviare allrsquoE V Revma una piccola notizia

circa i nostri cari profughi spagnoliCome sa lrsquoultima domenica sono arrivate alcune centinaia di suore profughe

della Spagna senza preaviso Subito fu stabilito che quelle Suore che avevano casa della loro Congregazione in Roma alloggiassero presso le consorelle per le altre ed anche per quelle che pur avendo casa della propria Congreazione in questa Cittagrave non potevano essere ricevute dalle loro consorelle si provide alla loro sistemazione presso diversi Istituti Religiosi femminili e debbo riconoscere che la caritagrave delle religiose sovvraabbondograve al bisogno giaccheacute non si arrivograve ad occupare tutti i posti offerti Si egrave incominciata pure la distribuzione tra le medes-ime del munifico dono di zucchero e caffeacute che novamente si degnato il S Padre di largire per i profughi

Son sicuro saragrave gradito per S Santitagrave di conoscere come il Clero Romano con fraterna caritagrave verso i sacerdoti profughi ha assecondato il Suo Paterno interessa-mento per i medesimi e cosigrave mi pregio comunicarLe che fino a questo momento il Clero Romano ha contribuito con Lire 13823 altre persone diverse residenti fuori Roma le quali riservano i loro nomi hanno versato per questo benefico scopo complessivanente Lire 1261

Con distinti ossequi mi professo dellrsquoEV Rvma affmo Servitore

Sac Carmelo Blay8

De la atencioacuten a los numerosos seglares proacutefugos se ocupoacute el con-sulado de Espantildea en Roma Y de los religiosos sus respectivas casas generalicias

La tarea encomendada a don Carmelo terminoacute al final de la guerra Pero eacutel quiso completar el trabajo durante unos meses maacutes fue el 16 de febrero de 1940 cuando envioacute la uacuteltima carta que se conserva sobre este asunto dirigida a monsentildeor Montini en la que le daba cuenta detallada de la actividad del Comiteacute creado por Piacuteo XI a favor de los sacerdotes proacutefugos y de los gastos hechos a lo largo de tres antildeos

En este sentido resulta impresionante el contenido de un voluminoso sobre que lleva este tiacutetulo Conti del Comitato pel soccorso dei profu-

8 ASV Segr Stato Guerra Spagnola 2 Fasc2 n 1 f 12

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ghi spagnuoli creato dalla Santa Sede presso il Pontificio Collegio Spa-gnuolo 1936-1939 (ff 2ss) En eacutel se resumen tanto los ingresos como los gastos Todo ello acompantildeado de las respectivas facturas comprobantes de los gastos hechos

La citada carta a Montini deciacutea

Eccellenza Reverendissima ho il piacere di far giungere allrsquoEccellenza Vostra Reverendissima tutto lrsquoin-

cartamento di quanto si riferisce allrsquoassistenza ai sacerdoti religiosi e religiose che per la rivoluzione della Spagna arrivarono a Roma e furono accolti dalla paterna bontagrave ed inesaurible caritagrave del Santo Padre

Fra i documenti troveragrave lrsquoEccellenza Vostra la lista completa dei sacerdoti e delle religiose che arrivati in Roma furono assistiti in tutto vel in parte dalla benignitagrave del Santo Padre che come risulta da conti spese piugrave di lire duecen-tomila oltre ai molti generi alimentari zucchero caffegrave carne etc che con grande caritagrave ha fatto pervenire e mettere a disposizione del Comitato da Lui medesimo voluto in questo Pontificio Collegio Spagnollo per lrsquoassistenza ai cari profughi

Nei fogli uniti si puograve vedere non solo il conto generale ma pure le spese fatte per tutti e ciascuno dei profughi con altre notizie utili per far conoscere la caritagrave del Santo Padre Pio XII di venerata e santa memoria in un momento cosigrave doloroso per la nostra cara Spagna

In questa occasione La prego di voler umiliare ai piedi dellrsquoAugusto Pontefice gloriosamente regnante i sentimenti della mia profonda venerazione ed implo-rare per me una speciale Benedizione Apostolica mentre con devoto ossequio mi professo dellrsquoEccellenza Vostra Reverendissima devotissimo servitore

Sac Carmelo Blay9

riassunto speCifiCatiVo Drsquointroiti eD spese

Munifico dono del Santo Padre 15856385Offerta del Clero Romano 3712960Offerta dei Sacerdorti profughi spagnoli 465895Offerenti diversi 131830Totale introiti 20176070

9 ASV Segr Stato Guerra Spagnola 1 Fasc 4 ff 30-30v

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SpeseBreviari 12368Esercizi spirituali 3540Manuali di Azione Cattolica 27000Sottane greche pantaloni etc 4157195Scarpe 630700Biancheria 736540Maglieria 835355Cappelli 300000Abiti per religiose 147100Vitto ed alloggio pei sacerdoti 7833800Vitto ed alloggio per le religiose 1505000Viaggi rimpatrio religiose e sacerdoti 2002220Tram Udienza Castelgandolfo 180000Medicine seminaristi ed alcune suore 12900Libri di testi pei seminaristi 30890Altre spese pei seminaristi 101690Opuscolo iquestQueacute ha hechohellip 70000Spese varie 57Toatel spese 20167070

Indice numerico dei diversi capi consegnati ai sacerdoti profughi spagnuoli

Breviari 192Manuali di Azione Cattolcia 60Sottane 165Greche 175Pantaloni 91Scarpe 150 pajaColletti 963Camicie 225Mutande 208Maglie 271Mutande maglia 52Gilet e Pull Ower 21Calze e pedali 407 pajaCappelli 173Fazzoletti 354Altri capi 35Totale dei capi 3532

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3 discurso de piacuteo xi A los proacutefugos espAntildeoles10

Para denunciar al mundo la persecucioacuten religiosa en la Espantildea republi-cana pensoacute Piacuteo XI dirigir una carta a su secretario de Estado el cardenal Pacelli en la que como padre de creyentes y tambieacuten de los redimidos por Cristo manifestariacutea su profundo dolor por la tragedia de Espantildea pidiendo que cesara el derramamiento de sangre entre hermanos y que en todo el mundo se rezara para acabar con la guerra fratricida por ser muy desga-rrador ver lo que estaba ocurriendo en una nacioacuten de honda tradicioacuten ca-toacutelica Despueacutes la Secretariacutea de Estado redactoacute un artiacuteculo que publicariacutea LrsquoOsservatore Romano a final de agosto pero fue suspendido porque el Papa decidioacute preparar un discurso dirigido a los proacutefugos espantildeoles que iban llegando a Roma Por esta razoacuten tampoco se publicoacute la proyectada carta pontifica dirigida a Pacelli que quedoacute en simple borrador aunque en un apunte de Pacelli estaacuten indicados con precisioacuten los temas esenciales que tratariacutea insistiendo en que debiacutea cesar cuanto antes una guerra que llevaba ya demasiado tiempo ensangrentando el territorio aunque habiacutea pasado poco maacutes de un mes desde el comienzo de la revolucioacuten Informa-dor directo de las cosas de Espantildea en el Vaticano era en aquellos momen-tos el agente de preces del Pontificio Colegio Espantildeol don Carmelo Blay a quien el mismo Papa pidioacute noticias sobre los obispos espantildeoles que iban llegando a Roma por aquellas fechas

El papa tomoacute esta iniciativa despueacutes de pensarlo mucho y de valorar las diversas opciones que debiacutea adoptar frente a la situacioacuten espantildeola ya que desde primeros de agosto se preguntoacute que podiacutea hacer la Santa Sede ante la gravedad de los hechos ademaacutes de protestar eneacutergicamente ante el gobierno republicano

A medida que llegaban noticias al Vaticano sobre la magnitud de la tragedia tanto por la prensa como por relatos de testigos presenciales que habiacutean conseguido escapar a tiempo se planteoacute la oportunidad de con-ceder una audiencia a 500 proacutefugos espantildeoles que tuvo lugar el lunes 14 de septiembre de 1936 en Castelgandolfo Guiaban el grupo los obispos de

10 El discurso del Papa fue escuchado por radio por los alumnos del Colegio Espantildeol desde el Seminario de verano de Chiavari En versioacuten original italiana y en traduccioacuten cas-tellana fue publicado en LrsquoOsservatore Romano del 14-15 de septiembre de 1936 pero en Espantildea fue censurado tanto por los republicanos como por los nacionales Tambieacuten lo publicoacute censurado A Montero Moreno en su laquoHistoria de la persecucioacuten religiosaraquo (BAC Madrid 1960 741-742) Lo he publicado iacutentegro en el volumen IV de mi obra laquoLa Segunda Repuacutebli-ca y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticanoraquo BAC Madrid 2016 768-776

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Urgel Justino Guitart de Cartagena Miguel de los Santos Diacuteaz Goacutemara de Tortosa Feacutelix Bilbao y de Vich Juan Perelloacute El cardenal Pacelli los presentoacute al Papa pronunciando un amplio discurso Y don Carmelo tradujo de memoria como soliacutea hacer sin perder coma la importante alocucioacuten que el Papa dirigioacute a los proacutefugos espantildeoles

Esta fue la primera intervencioacuten puacuteblica de Piacuteo XI acerca de la dramaacute-tica situacioacuten espantildeola y en ella habloacute del heroiacutesmo de laquonuestros maacuter-tiresraquo en teacuterminos muy claros laquoPersonas sagradas cosas e instituciones sagradas tesoros inestimables de civilizacioacuten y de arte objetos preciosiacute-simos reliquias santiacutesimas obispos y sacerdotes viacutergenes consagradas seglares de toda clase y condicioacuten venerables ancianos joacutevenes en la flor de la vida y el mismo sagrado y solemne silencio de los sepulcros todo ha sido asaltado arruinado destruido con los modos maacutes villanos y baacuterbaros con el desenfreno maacutes libertino jamaacutes visto de fuerzas sal-vajes y crueles que pueden creerse imposibles no digamos a la dignidad humana sino hasta la misma naturaleza humana aun la maacutes miserable y la caiacuteda en lo maacutes bajoraquo

Condenoacute tambieacuten el Papa en teacuterminos contundentes la matanza entre hermanos laquoLa guerra civil la guerra entre los hijos del mismo paiacutes del mismo pueblo de la misma madre patria iexclDios miacuteo La guerra es siempre cosa tan tremenda e inhumanahellip iquestqueacute decir cuando la guerra es entre her-manos iquestqueacute podraacute decirse de las matanzas entre hermanos que todaviacutea continuamente se anuncianraquo

En tercer lugar habloacute de las ensentildeanzas de la guerra para Europa y el mundo entero laquoazorado enmarantildeado trastornado por la propaganda subversiva y particularmente a Europa ya tan profundamente perturbada y tan fuertemente sacudida para este mundo los tristes hechos de Espa-ntildea dicen y predicen una vez maacutes hasta queacute extremos estaacuten amenazadas las bases mismas de todo orden de toda civilizacioacuten y de toda culturaraquo Por uacuteltimo se refirioacute a los otros llamaacutendoles asiacute laquoiquestQueacute decir de todos aquellos otros que tambieacuten son y permanecen siendo hijos Nuestros no obstante que en las personas y en las cosas que Nos son maacutes queridas y maacutes sagradas con actos y meacutetodos extremamente odiosos y cruelmente persecutorios y aun en Nuestra misma persona cuanto la distancia lo consentiacutea con expresiones y actitudes sumamente ofensivas Nos han tratado no como hijos a un Padre sino como enemigos a un enemigo par-ticularmente odiado Tenemoshellip que amarles con un amor particular de compasioacuten y de misericordia amarles y no pudiendo hacer otra cosa orar

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por elloshellip orar para que esteacuten con Nos cuando dentro de poco ndashtenemos plena confianza en Dios benditondash el arco iris de la paz brillaraacute en el her-moso cielo de Espantildea trayendo el alegre anuncio a todo vuestro grande y magniacutefico paiacutesraquo

Los diarios republicanos de Madrid comentaron la noticia difundida por las agencias que deciacutea escuetamente que laquoel discurso del Papa no ha revestido ninguacuten caraacutecter poliacutetico Se trata de un llamamiento cristiano en favor de la paz dirigido a Espantildea entera y en el que no se mencio-na ninguna doctrina poliacutetica El Papa se limitoacute a poner en guardia a su auditorio contra las fuerzas subversivas que solo pueden desarrollarse luchando contra la Iglesiaraquo Esta uacuteltima frase fue suficiente para que al-gunos perioacutedicos destacaran en titulares su ancestral anticlericalismo laquoHa bloacute el Sumo Pontiacutefice en favor de la paz pero olvidoacute condenar a los obispos que bendicen las armas mortiacuteferas y esconden tesoros fabulosos y a los falsos cristianos que utilizan soldados mahometanos para asesinar espantildeolesraquo (La Libertad) laquoHa hablado el Papa y no ha condenado los criacute-menes de sus hijos de Espantildea pero los previene contra las fuerzas subver-sivasraquo (El Socialista) laquoEn el discurso del Papa estaacute ausente el verdadero espiacuteritu cristianoraquo (La Libertad)

Cuando Piacuteo XI pronuncioacute este discurso no se habiacutean cumplido todaviacutea dos meses desde el comienzo de la revolucioacuten y las viacutectimas eclesiaacutesti-cas de la persecucioacuten religiosa se aproximaban a los 3400 Durante los uacuteltimos diacuteas del mes de julio el nuacutemero de viacutectimas del clero ascendioacute a 861 y soacutelo el diacutea de Santiago patroacuten de Espantildea 25 de julio fueron mar-tirizados 95 miembros del clero secular En agosto se alcanzoacute la cifra maacutes elevada con un total de 2077 asesinatos que corresponden a una media de 70 al diacutea entre los cuales hay que incluir a diez obispos

iquestPor queacute no gustoacute a laquounosraquo ni a laquootrosraquo este discurso A los unos (los nacionales) porque les parecieron excesivas las palabras de amor compasioacuten y misericordia hacia los otros (los rojos) Y a estos por la denuncia que el Papa hizo de la cruel persecucioacuten religiosa que habiacutean desencadenado y de la destruccioacuten que habiacutean hecho en apenas dos meses de conflicto de todo lo humano y lo divino

La extensa alocucioacuten pontificia del 14 de septiembre redactada de su puntildeo y letra por Piacuteo XI y leiacuteda por eacutel con voz emocionada es un texto fundamental para la historia de la persecucioacuten religiosa espantildeola pues en ella se refiere por primera vez a las viacutectimas como maacutertires

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4 proacutefugos ilustres

He dicho anteriormente que uno de los primeros proacutefugos acogidos en el Colegio Espantildeol fue el obispo de Cartagena que llegoacute a Chiavari el 14 de agosto de 1936 Eacutel mismo relatoacute en esta extensa carta dirigida a Pacelli los horrores de la persecucioacuten religiosa en su dioacutecesis y coacutemo consiguioacute salvar la vida y llegar a Italia

Chiavari 21 de agosto de 1936JHS Pontificio Colegio Espantildeol de San JoseacutePalazzo Altemps Roma

Emmo y Rvmo Sr Cardenal Secretario de EstadoCiudad del Vaticano

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo SentildeorEl diacutea 22 del pasado julio (mantildeana hace un mes) hallaacutendome en mi pala-

cio episcopal de Murcia ciudad donde tiene su residencia oficial el Obispo de Cartagena se me presentaron pistola en mano tres enviados del Frente Popu-lar intimaacutendome abandonara el palacio para instalar ellos en el mismo la Casa del Pueblo antildeadiendo que veniacutean a avisaacutermelo por orden del Comiteacute a fin de que no me opusiera y no hubiera derramamiento de sangre Pediacute algunas horas de tiempo paras arreglar mi equipaje y por fin me concedieron hasta la tarde inmediatamente ayudado por algunos profesores del Seminario que se comu-nica con palacio y que hice venir enseguida empezamos todos a poner a salvo algunos documentos dinero y ropas pero apenas habiacutea pasado media hora se presentaron las turbas a la puerta acompantildeadas de algunos guardias de asalto o sea de policiacutea gubernativa mientras el Gobernador civil me avisaba por teleacute-fono para que me pusiera en salvo Inmediatamente el vicerrector del Seminario me pasoacute a su habitacioacuten donde me puse traje de paisano y eacutel me llevoacute al Asilo de las Hermanitas de los Pobres en las afueras de Murcia donde estuve 15 diacuteas oculto pero habieacutendose sabido por varios el lugar de mi retiro incluso por los revolucionarios pues los comunistas en una de sus reuniones trataron ya de ve-nir a cogerme me fui al Asilo de las Madres Oblatas donde pareciacutea podriacutea estar mejor protegido ya que por recibir ellas joacutevenes descarriadas algunas enviadas por la misma autoridad gubernativa y por habeacuterseles dado por los mismos diri-gentes del movimiento revolucionario plenas seguridades de que seriacutea aquella casa respetada nos parecioacute lugar muy apropiado pero resultoacute que por haber vis-to entrar algunos en traje de paisano en la casa quizaacutes ya antes de ir yo la policiacutea recibioacute una confidencia sin duda de alguacuten vecino o vecina izquierdista de que en aquella casa habiacutea reuniones de fascistas (cosa enteramente falsa pues sola-mente fueron el capellaacuten del Convento a celebrar la santa misa y mi capellaacuten y el

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vicerrector del Seminario a prepararme mi estancia y luego mi capellaacuten a estar conmigo) lo cierto es que a las 3 de la tarde del segundo diacutea de mi refugio alliacute se presentaron numerosos policiacuteas cercaron unos toda la casa y otros penetraron dentro y la registraron durante dos horas y media recorrieacutendola toda excepto la habitacioacuten donde tras de una puerta estaacutebamos mi capellaacuten y yo escondidos Quedamos asiacute milagrosamente en salvo pero la prudencia y la amenaza que hicieron de volver a hacer nuevos registros alliacute me obligaron a buscar nuevo refugio primero en casa de una piadosa sentildeora despueacutes en casa de otra mientras mi capellaacuten habiacutea salido de Murcia buscando el modo como trasladarnos los dos a Italia pues pensamos venirnos a este amado Colegio Espantildeol del cual ambos hemos sido alumnos

Tras muchos trabajos logroacute mi capellaacuten (y si todo lo que antecede Emmo y Rvmo Sentildeor va dicho dentro de la maacutes estricta confidencia y reserva lo que sigue lo consigno bajo el maacutes rogado secreto) logroacute mi capellaacuten digo ponerse al habla con el coacutensul alemaacuten en Alicante el cual nos hizo la gran caridad de ponerse al habla con el comandante de un acorazado alemaacuten surto en aquel puer-to y con el capitaacuten de un vapor comercial que iba a venir a Geacutenova Y una vez admitidos nosotros por ellos avisado por teleacutegrafo seguacuten clave prevista entre nosotros saliacute de Murcia en tren acompantildeado de un buen seglar llevando yo un salvoconducto dado por los Comiteacutes revolucionarios a nombre distinto del miacuteo y asiacute disfrazado con nombre supuesto y traje seglar hube de esperar dos horas en la estacioacuten del ferrocarril de la propia capital de mi Dioacutecesis sin que gracias a Dios la poca gente que por alliacute habiacutea me reconociera vine en el tren en tercera clase entre obreros todos ellos respirando anhelo del triunfo del gobierno de Ma-drid me visaron los milicianos el salvoconducto registraron despueacutes mi maleta al llegar a Alicante (a prevencioacuten nada eclesiaacutestico traiacutea ni aun el breviario) fui con el seglar que me acompantildeaba a un hotel donde di mi nombre supuesto de acuerdo con el salvoconducto que llevaba luego vino la policiacutea a examinar dicho salvoconducto y gracias al Sentildeor que tan palpablemente me guardaba en-controacute todo en regla Al diacutea siguiente fui al coacutensul alemaacuten y supe que mi capellaacuten ya habiacutea sido llevado la tarde anterior al acorazado vestido de marinero Des-pueacutes de recorrer algunos sitios para despistar fui por fin llevado al consulado alemaacuten donde dejando mi traje de paisano (que un alemaacuten me entregoacute despueacutes) me vestiacute con un uniforme de capitaacuten de barco alemaacuten y ya entre otros oficiales de la nave de guerra acorazada embarqueacute en la chalupa o gasolinera de la mis-ma saliendo asiacute de Alicante sin que ninguna autoridad espantildeola me viera estuve sumamente agasajado por toda la oficialidad y singularmente por el comandante del acorazado toda la tarde en este a las ocho de la noche salioacute del puerto de Alicante el barco mercante que veniacutea a Geacutenova y siguiendo eacutel su marcha des-pacio me hicieron bajar a miacute y mi capellaacuten a la chalupa o gasolinera de la nave de guerra y fuimos al encuentro del barco mercante pero con gran prudencia en vez de ir directos a eacutel nos condujeron hacia alta mar y pasamos del lado de

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estribor donde iacutebamos al de babor de la nueva nave por delante de ella a oscuras nuestra chalupa y mientras todos los pasajeros se hallaban a estribor mirando el acorazado maacutes auacuten veniacutea un soldado de la nave de guerra en el trasporte que iacutebamos a tomar y se pasoacute eacutel a la chalupa a la vez que nosotros ganaacutebamos el barco mercante que eacutel dejaba asiacute quedaba mejor justificado el acercamiento de la chalupa al barco en marcha Trasportados asiacute a la nave mercante sumamente atendidos por el capitaacuten y oficiales de ella aunque obligado yo a permanecer en mi camarote para que ninguacuten pasajero me viera pues deseaban no se supiera coacutemo veniacutea yo a Italia para evitarse compromisos con Madrid por fin llegamos felizmente a Geacutenova y una vez que desembarcaron todos los pasajeros salimos nosotros entre la tripulacioacuten del barco como si fueacuteramos de ella y fueron tan amables que nos trajeron hasta las mismas puertas de este Seminario de Chia-vari ya que por haber salido asiacute de Espantildea no traemos ninguacuten pasaporte pues soacutelo el pedirlo a las autoridades espantildeolas dependientes donde estaacutebamos del gobierno de Madrid hubiera sido motivo de prendernos

Estoy pues aquiacute Emmo y Rvmo Sentildeor gracias a la Divina Providencia que asiacute se ha dignado salvarme La Dioacutecesis quedoacute encomendada a un Vicario general con facultades de nombrar otro o proveer como creyera oportuno dentro del Derecho si eacutel se veiacutea en peligro Desde el 23 de julio estaacuten cerradas todas las iglesias de la Dioacutecesis por orden de la autoridad de Madrid Han quemado muchas imaacutegenes e incendiado algunos templos y conventos pero la mayor parte los conservan para Casas del Pueblo El palacio episcopal ha quedado en poder de ellos con todas sus oficinas y archivos sabemos han violentado las dos cajas fuertes que habiacutea y publicaron nota de haber llevado en depoacutesito al Banco de Espantildea valores y objetos de arte no nos han querido decir cuaacuteles ni cuaacutento Desde luego valores seraacuten unas trescientas mil pesetas que habiacutea en una caja lo demaacutes estaacute todo en salvo gracias a Dios de modo que econoacutemicamente las Fundaciones diocesanas no han sufrido mucho pero ademaacutes de esos valores que cogieron quedoacute en palacio toda la documentacioacuten de los archivos y de las mesas de trabajo de las oficinas y todos los muebles etc etc del mismo y los particulares miacuteos con mi ropa y utensilios de casa ya que en la escasa media hora que tuvimos de tiempo no fue posible sacar apenas nada Posteriormente hicimos las oportunas gestiones incluso a veces con peligro para mi capellaacuten para sacar algo de lo que quedoacute pero fue todo infructuoso Ignoramos queacute suer-te habraacute corrido todo incluso ornamentos pontificales y biblioteca miacutea desde luego sabemos que han destrozado las imaacutegenes del Seminario y que los libros de su biblioteca estaban tirados en uno de sus patios

Ha quedado pues Eminentiacutesimo Sentildeor la Catedral cerrada con intencioacuten han dicho de convertirla en museo para fomento de turismo el Palacio epis-copal y el Seminario mayor adjunto son ahora casa u oficinas de las diversas entidades revolucionarias (UGT CNT FAI etc etc) las casas religiosas de ensentildeanza con todo su mueblaje en manos del Gobierno para ensentildeanza laica

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los monasterios de religiosas (lanzadas todas ellas a la calle y viviendo donde cada una ha encontrado familia suya o amigas buenas) convertidos en cuarteles de milicias rojas y saqueados todos el clero oculto y sin poder ejercer su sagrado ministerio si no es en casas particulares y con temor de represalias ya que los desgraciados revolucionarios odian los actos del culto y sobre todo no quieren se celebre en ninguacuten sitio ni casa la santa misa el Seminario menor del cual igualmente se han apoderado lo han convertido creo en hospital de sangre como tambieacuten han convertido en hospitales algunos colegios religiosos En toda la extensa Dioacutecesis de Cartagena hay muchos hombres y mujeres que no iban a misa ni teniacutean de cristianos sino el bautismo y matrimonio y el cuidado de llamar a uacuteltima hora de su vida al sacerdote por esto ahora alliacute ante la promesa que les han hecho de repartirles lo de los ricos ha prendido el comunismo y son muchos los defensores del Gobierno de Madrid aunque quedan tambieacuten muchos buenos catoacutelicos pero se hallan bajo el yugo de las milicias armadas por el Gobierno

He aquiacute Eminentiacutesimo Sentildeor lo que he creiacutedo un deber poner en cono-cimiento de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima a la vez que le participo en-contrarme en este tan amado Colegio Espantildeol actualmente de vacaciones en Chiavari a donde he venido para poner en salvo mi persona ya que todo era de temer por haber quedado defraudadas las turbas asaltantes de mi palacio al no encontrarme en eacutel por haberme escapado por la puerta posterior del Seminario no serme posible ejercer personalmente alliacute el gobierno de la Dioacutecesis en estas circunstancias por tener que estar oculto y sin apenas poder comunicar con nadie como se vio por la denuncia que motivoacute el registro del cual tan providen-cialmente me salveacute

Aquiacute estoy Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor siempre a disposicioacuten de la Santa Sede y a las gratas oacuterdenes de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima

Aprovecho esta ocasioacuten para reiterarme de Vuestra Eminencia Reverendiacutesi-ma h s s q b s s P

+ Miguel de los Santos Obispo de Cartagena11

El obispo Diacuteaz Goacutemara residioacute en el Colegio Espantildeol hasta que en junio de 1937 pudo regresar a Espantildea

Otro ilustre proacutefugo fue el obispo de Tortosa Feacutelix Bilbao Ugarriza que se refugioacute en la casa laquoVilla Rosaraquo de las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazoacuten de Jesuacutes en la ciudad de Viterbo al norte de Roma el

11 La II Repuacuteblica y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticano vol IV Documentos de los antildeos 1935 y 1936 BAC Madrid 2016 710-714

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4 de agosto de 1936 Desde alliacute mantuvo correspondencia con don Car-melo y el 13 de agosto describioacute su salida de Espantildea tras el 18 de julio de 1936 y su llegada a Italia

Villa Rosa - Sanatorium - Viterbo 13 agosto 1936Rvdo Don Carmelo BlayPontificio Colegio Espantildeol Roma

Cariacutesimo Don Carmelo

Aunque resulte un poco humillante para miacute pero me parece que el Sentildeor no me ha encontrado maduro para confesor de la fe que envuelto en la no igualada borrasca tan por sus pasos me ha conducido a este oasis de bienestar y de paz

Estaba en el Balneario de Cardoacute Del 18 al 21 de julio aislamiento rumores El 22 se vieron amenazas y peligros y asiacute con alguna angustia tres diacuteas En la noche del 25 11 y 12 de la noche soy conducido a Tortosa por unos cuantos laquobuenos revolucionariosraquo que nos condujeron al Capellaacuten Rev Calderoacute y a miacute desde luego de paisano y con lo puesto El Sr Alcalde me recibioacute atento (a las 3 madrugada y mirando por mi seguridad) en buenos autos y con distinguida es-colta me condujo a Tarragona Yo contento porque penseacute alliacute ponerme al habla con el Emo Metropolitano Al Revdo Calderoacute lo dejeacute en Tortosa

El Sr Comisario de Tarragona me dice que el Emo Cardenal tuvo que huir con los suyos el 22 Como tampoco podiacutea garantizar mi seguridad me envioacute a Barcelona donde quedeacute de hecho detenido en la Conserjeriacutea de Gobernacioacuten a las 9 de la mantildeana del domingo

Grande sorpresa y alegriacutea al encontrarme en una habitacioacuten enfrentada a la miacutea y a la que teniacutea libre acceso al Emo Cardenal y Revdo Viladrich tambieacuten de paisano y en tal facha el simpaacutetico don Juan [Viladrich] que pareciacutea el pro-totipo del perfecto trincheraire

Despueacutes de las efusiones y saludos me contaron su odisea verdaderamente seria y como maacutes antiguos me enteraron del reacutegimen de vida en aquel laquopalacioraquo

Cinco diacuteas les acompantildeeacute que tuvieron alguacuten alivio en ciertas atenciones con el Emo aunque no muy sobradas Varios diacuteas pudo recibir visitas de sus sobrinos que le trajeron ropa medicinas etc Tambieacuten le visitoacute como medico (acompantildea-do de un hijo suyo muy simpaacutetico) el famoso Dr Carochan12 que formaba parte del Gobierno de la Generalidad como Conseller de Sanidad Junto a nuestras habitaciones habiacutea otra en que dormiacutea otro Sr Consejero el Sr Mestre y este tuvo tambieacuten la atencioacuten de saludarle alguna vez

Como el Emo habiacutea conseguido comunicar con Secretariacutea de Estado de SS su situacioacuten valieacutendose del coacutensul de Italia y haciendo ver su condicioacuten de

12 Manuel Carochan profesor de la Universidad de Barcelona

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ciudadano vaticano las negociaciones seguiacutean su camino Tratoacute de incluirme en ellas pero no pareciacutea faacutecil

Por esto el jueves 30 a las 9 de la noche fue grande nuestra sorpresa cuando avisaron de que nos preparaacuteramos para marchar todos tres Y en efecto a las 10 y 12 embarcamos en el laquoFirenzeraquo buque almirante de la escuadra italiana entre atenciones y carintildeo de sus simpaacuteticos marinos El diacutea de S Ignacio tuvimos el consuelo de celebrar despueacutes de largos diacuteas de laquolaicosraquo

El viernes al anochecer trasbordamos al crucero laquoM Attendoloraquo que el saacuteba-do a las 5 de la tarde nos dejaba en Spezzia y dos horas despueacutes descansaacutebamos con los hijos de San Bruno (Farneta)

Es decir yo no descanseacute porque el clima luccense13 me era hostil El 5 a Roma y despueacutes a este precioso y sano rincoacuten Que el Sentildeor que aquiacute me ha traiacutedo como en palmas me ayude a darle gracias y corresponder a sus designios

Las noticias que se reciben de Madrid y Cataluntildea cada diacutea maacutes tristes La paacutegina de fusilamientos en masa de 109 seminaristas de Tarragona en el cemen-terio de Leacuterida es espantosa Le abrazahellip

+ Feacutelix obispo de Tortosa14

El tercero de los obispos proacutefugos en Roma fue el de Vich Juan Pe-relloacute que envioacute a Pacelli el 23 de agosto un escrito en el que expuso un juicio sinteacutetico sobre la revolucioacuten espantildeola y sobre la persecucioacuten de la Iglesia15 Este obispo residioacute desde el 21 de agosto en la casa de los religiosos de los Sagrados Corazones congregacioacuten a la que perteneciacutea situada en Via del Curato muy proacutexima al puente de Castel SantrsquoAngelo El 5 de marzo de 1937 pudo regresar a su tierra natal de Mallorca

El cuarto fue el obispo de Urgel Justino Guitart que residioacute habitual-mente en la Casa de los jesuitas de San Remo si bien hizo algunos viajes a Roma y vivioacute en el Colegio Espantildeol

La mayoriacutea de los sacerdotes procediacutea de las dioacutecesis catalanas salvo dos de Orihuela y Astorga Los que no tuvieron cabida en el Colegio Espa-ntildeol fueron acogidos en gran parte en el hospicio romano de laquoCento Pretiraquo situado en el Lungotevere frente al Ponte Sisto mientras que algunos se instalaron individualmente en las casas y colegios indicados en la carta de don Carmelo a Tardini anteriormente citada

13 Se refiere a la ciudad de Lucca cerca de la cual estaacute la cartuja de Farneta14 La II Repuacuteblica y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticano vol IV Documentos

de los antildeos 1935 y 1936 686-68715 Ibid 718-724

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5 don cArMelo blAy y el cArdenAl vidAl y bArrAquer

El maacutes ilustre de los proacutefugos espantildeoles en Italia fue el arzobispo de Tarragona cardenal Francisco Vidal y Barraquer16 que residioacute en la Car-tuja de Farneta durante los antildeos de la guerra tan soacutelo acudioacute a Roma en febrero de 1939 para participar en el coacutenclave tras la muerte de Piacuteo XI el 10 de febrero de 1939 Hablo de eacutel en estas paacuteginas por la relacioacuten que tuvo don Carmelo Asiacute en el documento 2 que se recoge en el apeacuten-dice don Carmelo aporta algunas noticias sobre la situacioacuten espantildeola y la actitud del Gobierno nacional contra el obispo Muacutegica y el cardenal Vidal mientras que en el documento 4 informa detalladamente sobre las gestiones que realizoacute por encargo expreso del cardenal Pacelli para con-seguir que el cardenal Vidal renunciase al gobierno de la archidioacutecesis de Tarragona

Al estallar la revolucioacuten de 1936 Vidal conocioacute personalmente los horrores de la perse cucioacuten republicana de la que fue viacutectima soacutelo en sus primeros diacuteas El 21 de julio de 1936 salioacute de su palacio arzobispal y fue trasladado a Poblet donde fue detenido dos diacuteas maacutes tarde por elementos de la FAI (Federacioacuten Anarquista Ibeacuterica) y encarcelado en Montblanch quedando encerrado laquoen un calabozo sin maacutes muebles que dos jergones de paja y unos trozos de mantaraquo consiguioacute salvarse gracias a la inter-vencioacuten de las autoridades de la Generalitat y el 30 de julio se embarcoacute en Barcelona hacia Italia acogido con todos los honores en el crucero de la marina italiana Fiume despueacutes se establecioacute en la cartuja de Farneta cerca de Lucca de riguroso incoacutegnito

Hubiera sido su deseo al salir de Espantildea dirigirse a la Ciudad Eterna para presentarse seguidamente al Romano Pontiacutefice pero en atencioacuten a cir-cunstancias especiales que exigiacutean que permaneciera por una temporada ignorado en Espantildea su paradero se le pidioacute que eligiera una casa religiosa donde pudiera hacer vida retirada para evitar que la prensa se ocupase de su huida de Espantildea Por la buena amistad que le uniacutea a los monjes decidioacute establecerse en dicha Cartuja de riguroso incoacutegnito recibiendo toda la correspondencia bajo sobre exterior a nombre del P Prior

Antes de embarcarse para Italia el cardenal hizo lo posible por liberar a su obispo auxiliar el beato Manuel Borraacutes Ferreacute pero todos sus esfuer-

16 Sobre su biografiacutea remito a la que le he dedicado en el laquoDiccionario Biograacutefico Es-pantildeolraquo vol XLIX Real Academia de la Historia Madrid 2013 890-894

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zos resultaron vanos el obispo siguioacute detenido en Montblanch y fue fusi-lado el 12 de agosto aun cuando le dijeron al cardenal que nada contra eacutel existiacutea y que su detencioacuten era para la seguridad personal del mismo De la muerte del auxiliar tuvo noticia el cardenal diacuteas maacutes tarde y supo que ha-biacutea sido asesinado por anarquistas los cuales se ensantildearon baacuterbaramente en su cadaacutever quemaacutendolo

Vidal envioacute al cardenal Pacelli secretario de Estado una relacioacuten de-tallada sobre su salida de la Espantildea republicana En ella describioacute su detencioacuten y liberacioacuten y dio noticias sobre otros obispos de la provincia eclesiaacutestica tarraconense a la vez que se fue laquorecobrando poco a poco en la medida que es posible ante el cuacutemulo de horrores sabidos de agobios y penas de incertidumbres e interrogantes que a uno le asaltan en cada momento sobre tantas y tantas cosas cariacutesimas y particularmente sobre la suerte de nuestra estimada Patria y de los intereses sagrados de la Iglesia en la mismaraquo

Pacelli acusoacute recibo de sus cartas le expresoacute el dolor por los peligros que habiacutea pasado y por los inauditos desoacuterdenes de Espantildea y le dijo que al Papa le pareciacutea oportuno que permaneciera en incoacutegnito en la Cartuja de Lucca Tambieacuten manifestoacute su preocupacioacuten por los otros obispos de los que no se teniacutean noticias en Roma y comentoacute la admirable conducta de los joacutevenes de Accioacuten Catoacutelica laquodiezmados por la barbarie roja en medio de continuos peligros y sufrimientos que no desdeciacutean de los maacutertires de los primeros sigloraquo

Desde Lucca siguioacute Vidal los avatares de la Guerra civil y de la per-secucioacuten religiosa en la zona republicana preocupado por la suerte de sus familiares y de los sacerdotes encarcelados y perseguidos e intensi-ficoacute sus gestiones para conseguir la liberacioacuten de muchos de ellos o para mejorar su situacioacuten ayudaacutendoles econoacutemicamente en la medida de sus posibilidades

El 1 de septiembre de 1936 Piacuteo XI invitoacute personalmente al cardenal Vi-dal para que asistiera a la audiencia prevista para el 14 de septiembre pero al diacutea siguiente 2 de septiembre Vidal escribioacute a Pacelli manifestando sus reservas sobre la oportunidad de dicha audiencia y diciendo

Temo asimismo y se lo digo a Vuestra Eminencia Revma confidencial y fraternalmente que parecido resultado pudiera producir una clamorosa reunioacuten de obispos y sacerdotes en el Vaticano ‒veo se ocupa de ello la prensa con co-mentarios divergentes‒ con eneacutergicas protestas cual merecen las barbaridades realizadas Por ello seriacutea conveniente que antes de dicha reunioacuten se procurase

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salvar todo lo que fuese posible en cuanto a personas y cosas Siempre y a priori apruebo y sigo los preceptos y orientaciones del Santo Padre a Quien amo y venero con el afecto filial maacutes acendrado pero entiendo que ello no debe ser obs-taacuteculo para que exponga en conciencia mi opinioacuten a mis Superiores sin perjuicio de rendir mi criterio y acatar luego la suprema decisioacuten cualquiera que ella sea Es ciertamente muy doloroso y subleva el alma noble generosa y recta el dejar sin puacuteblica protesta tantos sacrilegios y pecados tantos asesinatos y atrocidades tantas destrucciones y devastaciones pero al igual que Jesucristo y los primi-tivos maacutertires conviene tener una gran prudencia y paciencia por los que no reflexionan por los que estaacuten ciegos por los que exacerbados y ofuscados por la pasioacuten y el deseo de venganza no saben lo que hacen y llegan al extremo de beber la sangre de los Ministros del Sentildeor y de los buenos catoacutelicos despueacutes de haber saciado su odio martirizando horriblemente a sus viacutectimas Crea Eminencia Reverendiacutesima que al conocer todo esto hubiera preferido no haber practicado gestioacuten alguna para salvarme del naufragio y dar mi vida que poco puede rendir ya por Dios por la Iglesia y por la Patria estariacutea ya sin duda en el cielo No se me oculta que una puacuteblica protesta alentariacutea a los buenos y tal vez moveriacutea maacutes y maacutes a prestar su apoyo moral y aun material a los catoacutelicos de todo el mundo pero y si Dios en sus elevados designios permite el triunfo de los enemigos iquestno seriacutea ello un mayor obstaacuteculo para que los sacerdotes pudieran entrar de nuevo en Espantildea y trabajar por la conversioacuten de nuestros paisanos quienes aunque pervertidos y malos no por ello dejan de ser nuestros hermanos Ha llegado a mis oiacutedos que algunos elementos tendenciosos que siempre han sido partida-rios de la poliacutetica catastroacutefica entre ellos sacerdotes y religiosos trabajan desde Roma para que se tengan reuniones de tonos violentos a fin de comprometer a la Santa Sede hacia determinados bandos de entre los que actualmente luchan unidos contra el anarquismo y el comunismo Me consta asimismo que en ciertas casas donde se hospedan sacerdotes refugiados en lugar de emplearse el tiempo en la oracioacuten en ocupaciones uacutetiles etc se gasta en criticar a la Jerarquiacutea y en ahondar las perniciosas divisiones entre los catoacutelicos como si no fuera bastante dura la leccioacuten recibida y asaz amargos los escarmientos sufridosraquo

No debioacute gustarle al Papa esta respuesta del arzobispo de Tarragona porque al diacutea siguiente le retiroacute la invitacioacuten ya cursada y le pidioacute a Pacelli que le escribiera una carta muy delicada dicieacutendole de parte del Papa que no era oportuno que de momento saliera de Lucca

Il Santo Padre ha deciso di ricevere il 14 settembre cm in particolare Udien-za i Vescovi gli ecclesiastici i religiosi le religiose e laici che sfuggiti agli orro-ri della persecuzione in Spagna sono attualmente in Roma LrsquoAugusto Pontefice sarebbe ben lieto di vedere alla Sua sovrana presenza tra questi figli tribolati in primo luogo lrsquoEminenza Vostra Reverendissima ma data la speciale delicatez-

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za delle presenti condizioni ed anche la di Lei personale situazione Sua Santitaacute non ritiene opportuno che VE lasci per ora la sua attuale dimora Il Santo Padre assicurando che ciograve nonostante in quella circostanza avragrave in modo tutto parti-colare presente al Suo spirito lrsquoEV per farLa participe della Sua piuacute affettuosa Benedizione non vuol tuttavia mancare fino da ora di benedirLa di tutto cuore invocando sopra di Lei i celesti conforti

Vidal respondioacute el 11 de septiembre 1936

Me honro en acusar recibo a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima de la vene-rada carta de 9 de los corrientes comunicaacutendome que el Santo Padre ha decidido recibir en Audiencia a los prelados eclesiaacutesticos y seglares proacutefugos de Espantildea que se encuentran en Roma Y toda vez que por las circunstancias que Vuestra Eminencia Revma indica no estima oportuno el Santo Padre que por ahora deje yo mi actual residencia que ni por un momento he abandonado lo cual me priva de la grandiacutesima satisfaccioacuten de unirme corporalmente a mis queridos hermanos perseguidos y confortar mi aacutenimo con las paternales palabras del Santo Padre he de rogar a Vuestra Eminencia Revma que se sirva expresar al Augusto Pontiacutefice que en tan memorable acto estareacute presente en espiacuteritu muy unido a Sus inten-ciones con deseos de sufrir maacutes por Jesucristo y por la Iglesia y que Le quedo reconocidiacutesimo por Su voluntad de hacerme partiacutecipe en dicha circunstancia de Su amorosa Bendicioacuten Paternal de la cual es ya prenda muy estimada la que con tanto afecto se ha dignado anticiparme por conducto de Vuestra Eminencia Revma En estos momentos de tan dura prueba por todos conceptos es siempre de gran consuelo y lenitivo saberse muy cerca y especialmente unido al corazoacuten de nuestro venerado Padre comuacuten

Pacelli explicoacute a Vidal las razones por las cuales el Papa hizo este discurso17

A propoacutesito de las relaciones del cardenal Vidal con Franco hay que decir ante todo que aquel ha sido presentado siempre como un eneacutergico opositor al general Se fundamenta este juicio en su negativa a firmar la carta escrita colectivamente por el Episcopado el 1 de julio de 1937 Sin embargo su cartas ineacuteditas que yo mismo he publicado recientemen-te18 desmienten por completo esta opinioacuten por cuanto nos presentan a

17 Los textos citados pueden verse en La II Repuacuteblica y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticano vol IV Documentos de los antildeos 1935 y 1936 768-769 nota 553

18 Epistolario Vidal-Pacelli-Pizzardo-Montini y apuntes de la Secretariacutea de Estado (1936-1939) in Analecta Sacra Tarraconensia 89 (2015) 267-1014

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un cardenal Vidal no solo abiertamente favorable a la persona del general Franco a quien demostroacute por escrito admiracioacuten y simpatiacutea sino tambieacuten sus deseos de que ganara la guerra y llegara a gobernar Espantildea Todo esto puede sorprendernos a estas alturas cuando se llevan maacutes de setenta antildeos exaltando el antifranquismo del arzobispo de Tarragona presentaacutendolo como un firme bastioacuten frente al Reacutegimen que Franco alumbroacute y mitifican-do un tanto exageradamente su figura en este sentido Asiacute lo evidencia esta carta del 21 de febrero de 1937

Poniendo en praacutectica los sabios consejos de Vuestra Eminencia he intentado hacer llegar reservadamente y de palabra al general Franco el testimonio de mi felicitacioacuten y simpatiacutea y mis sinceros votos por el eacutexito de la buena causa No seacute si el Emmo Sr cardenal Gomaacute a quien hice el encargo habraacute tenido ya ocasioacuten de cumplirlo Pero si a Vuestra Eminencia le pareciera conveniente u oportuna una manifestacioacuten maacutes clara y expliacutecita estoy dispuesto a ello Yo de momento por la razones indicadas en la presente y en mis anteriores que tienen auacuten todo su valor no me inclino a avanzar maacutes a no ser que Vuestra Eminencia fuese de otro parecer en cuyo caso mucho le agradeceriacutea se sirviera manifestaacutermelo Deseo vivamente que triunfe Franco pero aun cuando vaya obteniendo ventajas no se ve muy clara la actitud de ciertas grandes potencias que pueden influir decisiva-mente en la terminacioacuten de la guerra y en la forma de acabarla19

Pacelli se limitoacute a responderle que el Papa consideraba superflua una nueva manifestacioacuten maacutes clara y expliacutecita de simpatiacutea a Franco20 Pero no contento con esta respuesta siete meses maacutes tarde Vidal volvioacute a pre-guntarle a Pacelli

Si en vista de las presentes circunstancias estima oportuno que yo haga algu-na manifestacioacuten maacutes expliacutecita de simpatiacutea al general Franco en carta confiden-cial Como subsisten las mismas razones que anteriormente o sea el temor de represalias la falta de reserva la mayor dificultad que posiblemente ello impor-tariacutea para trabajar a favor de los sacerdotes y religiosos el tener toda la Dioacutecesis y Provincia Eclesiaacutestica bajo el dominio de los rojos y haber hecho ya llegar verbalmente conforme me insinuoacute Vuestra Eminencia con tanta discrecioacuten al Generaliacutesimo la expresioacuten de mis sentimientos no he creiacutedo oportuno adelantar un paso Quedo no obstante gustosamente a disposicioacuten de la Santa Sede cuyas sabias instrucciones seguireacute literalmente21

19 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Farneta 21 febrero 1937 in Epistolario 409-41620 Carta nordm 84237 de Pacelli a Vidal 13 marzo 1937 in Ibid 429-43121 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Lucca 14 septiembre 1937 in Ibid 555-558

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Pacelli le dijo que por parte de la Secretariacutea de Estado no existiacutea difi-cultad alguna para que conociendo su prudencia hiciera lo que estimara maacutes oportuno22 El arzobispo de Tarragona no ocultoacute laquolas simpatiacuteas que me han merecido los propoacutesitos y la recta intencioacuten del general Franco y la forma en que se las he manifestado ya verbalmente ya por tercera per-sona atenieacutendome a altiacutesimos consejos ya uacuteltimamente mediante carta que le dirigiacuteraquo23

Seguacuten el cardenal Vidal laquoun exagerado nacionalismo ha ofuscado a los vascos y no se comprenden las razones con que hombres de temple catoacutelico innegable hayan podido justificar su alianza con los comunistas y anarco-sindicalistas enemigos jurados de nuestra Religioacutenraquo24

Llama poderosamente la atencioacuten tras la lectura de estas cartas que la personalidad del cardenal Vidal y Barraquer aparezca muy diversa de como se la ha presentado habitualmente Y cabe preguntarse coacutemo ha sido posible construir un laquomitoraquo sin fundamento alguno en la realidad histoacuterica Vidal no soacutelo no fue antifranquista sino un sincero admirador de Franco y de su causa Por ello no ocultoacute laquolas simpatiacuteas que me han me-recido los propoacutesitos y la recta intencioacuten del general Francoraquo25 Al mismo tiempo atacoacute con mucha energiacutea a socialistas y comunistas porque laquono seriacutea viable hoy en Espantildea despueacutes de la presente guerra un gobierno en el que participaran socialistas y sus afines pues impediriacutean la soacutelida y ver-dadera reconstitucioacuten de Espantildea el castigo de los instigadores y autores de tantos y tan horrendos criacutemenes contra todo lo maacutes santo y sagrado y preparariacutean el terreno para una nueva revolucioacuten marxistaraquo26

Sus escritos nos permiten sacar estas conclusiones documentadas que no son opiniones o ilaciones personales sino testimonios escritos Scrip-ta manent Ante textos tan expliacutecitos y elocuentes cae por su peso la falsa imagen que se nos ha venido dando del cardenal Vidal en sus relaciones con Franco hasta el extremo de poder afirmar que no soacutelo fue entusias-ta defensor del general y de la laquocausaraquo que habiacutea emprendido porque creiacutea sinceramente en su rectitud de intencioacuten por el bien de Espantildea sino que ademaacutes atacoacute duramente a los comunistas socialistas y anarquistas

22 Carta n 432537 de Pacelli a Vidal del 6 noviembre 1937 in Ibid 598-59923 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Farneta 31 marzo 1938 in Ibid 71024 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Farneta 21 febrero 1937 in Ibid 411-41225 Ibid 71026 Ibid

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consideraacutendolos un mal para Espantildea Y auacuten maacutes sorprende que Vidal se declarara admirador de Mussolini consideraacutendolo laquofigura de gran pres-tigio personalraquo

Un antildeo antes del final de la guerra el Gobierno republicano invitoacute a Vidal para que regresara a Tarragona donde seriacutea recibido con todos los honores debidos a su dignidad El ministro Irujo le formuloacute esta invitacioacuten el 11 de febrero de 1938 de parte del Presidente del Gobierno Juan Ne-griacuten y del ministro de Estado Joseacute Giral laquogarantizaacutendole el respeto y la asistencia debidos a la dignidad de su persona y a los prestigios y jerarquiacutea de su cargo y jurisdiccioacutenraquo

Irujo le hizo esta invitacioacuten laquocomo vasco y como catoacutelicohellip signifi-cando la esperanza de diacuteas mejores para la Iglesia para la Repuacuteblica y para Cataluntildearaquo La prensa dio la noticia de haberse hecho la invitacioacuten antildeadiendo que el Cardenal no habiacutea contestado

El Cardenal pidioacute como condicioacuten previa para regresar a su dioacutecesis una reparacioacuten puacuteblica y sincera de los ultrajes infligidos a la Iglesia y a sus ministros gesto que nunca hicieron los republicanos por ello no aceptoacute la invitacioacuten y explicoacute sus razones en carta dirigida a Irujo

iquestCoacutemo puedo yo dignamente aceptar tal invitacioacuten cuando en las caacuterceles continuacutean sacerdotes y religiosos muy celosos y tambieacuten seglares detenidos y condenados como me informan por haber practicado actos de su ministerio o de caridad y beneficencia sin haberse entrometido en lo maacutes miacutenimo en partidos poliacuteticos de conformidad a las normas que les habiacutean dadohellip Los fieles todos y en particular los sacerdotes y religiosos saben perfectamente los asesinatos de que fueron viacutectimas muchos de sus hermanos los incendios y profanaciones de templos y cosas sagradas la incautacioacuten por el Estado de todos los bienes eclesiaacutesticos y no les consta que hasta el presente la Iglesia haya recibido de parte del Gobierno reparacioacuten alguna ni siquiera una excusa o protesta27

Particularmente molestos estuvieron los Nacionales con el cardenal Vidal al que tachaban de desarrollar actividad catalanista desde Italia La campantildea promovida contra eacutel por algunos elementos extremistas era cosa ya vieja pero se le acusaba en particular de no haber firmado la Carta colectiva del Episcopado del viaje de su vicario general Salvador Rial a Roma y Pariacutes y de sus supuestas relaciones con el presidente del Gobierno Vasco Aguirre

27 Carta de Vidal a Irujo Certosa di Farneta 30 abril 1938 in Ibid 755

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Este asunto nunca quiso tratarlo el delegado pontificio Mons Anto-niutti con las autoridades nacionales porque era particularmente delica-do pero habiacutea recibido una nota verbal del ministro de Asuntos Exteriores en la que se atribuiacutean al Cardenal gestiones en favor del Gobierno Repu-blicano que habriacutea hecho de acuerdo con los vascos en Barcelona y por consiguiente contra los intereses de la Espantildea nacional El subsecretario del Ministerio de Asuntos Exteriores le habiacutea dicho al delegado pontifi-cio laquoiquestPor queacute el cardenal se olvida de que le han asesinado a su obispo auxiliar a centenares de sacerdotes y a miles de files y han destruido todas las iglesiasraquo y le entregoacute una Nota verbal28

Precedentemente el Gobierno Nacional habiacutea protestado contra la ac-titud de algunos eclesiaacutesticos en el extranjero entre ellos el vasco Onain-diacutea los citados Carreras Trens y otros Antoniutti habiacutea dado amplias noticias sobre los asuntos de Cataluntildea y en particular sobre los intentos de restablecer el culto pero no se explicaba los contactos del cardenal Verdier arzobispo de Pariacutes con el ministro republicano Irujo y con repre-sentantes vascos y catalanes para normalizar la situacioacuten religiosa Habloacute tambieacuten de la impresioacuten negativa que tanto Franco como sus ministros teniacutean del cardenal Vidal al que no dejaron que regresase a Tarragona para ponerse libremente al frente de su archidioacutecesis antes de que llegasen a ella los nacionales

El cardenal Pacelli informoacute sobre este asunto al nuncio en Francia Valeri y tambieacuten al cardenal Vidal quien respondioacute a Pacelli el 31 de marzo de 1938 desde la Cartuja de Farneta mediante una extensa carta confidencial en la que tras agradecerle el enviacuteo de la mencionada Nota verbal del Ministerio de Asuntos Exteriores expuso ampliamente su ac-titud al respecto

En la mencionada carta el cardenal Vidal habloacute expliacutecitamente sobre laquolas simpatiacuteas que me han merecido los propoacutesitos y recta intencioacuten del general Franco y la forma en que se las he manifestado ya verbalmente y por tercera persona atenieacutendome a altiacutesimos consejos ya uacuteltimamente mediante carta que le dirigiacute que las poquiacutesimas veces que he tenido co-municacioacuten con alguna persona del Gobierno de Barcelona ha sido para pedir el indulto o la liberacioacuten de condenados y presosraquo Y defendioacute al doctor Carreras aduciendo como argumento el hecho de que le laquohabloacute

28 Despacho Nordm 28838 de Antoniutti a Pacelli San Sebastiaacuten 9 marzo 1938 in AAEESS Spagna 896 fasc 299 ff 47-48v

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muy elogiosamente del general Franco en favor del cual se mostroacute muy decidido y de las liacuteneas generales de un libro que preparaba en defensa de la actuacioacuten de la Iglesia durante el periodo de la Repuacuteblica y de la del citado Generalraquo29

Desde que el encargado de negocios de la Espantildea Nacional en el Va-ticano Pablo Churruca se entrevistoacute con Pacelli por primera vez quedoacute planteado el laquocaso Vidalraquo y ya entonces le expuso la necesidad de que fuera estudiada una solucioacuten satisfactoria para el Gobierno Nacional so-bre la futura situacioacuten del Cardenal y tambieacuten del obispo Muacutegica que se habiacutean negado a firmar la Carta colectiva A los ojos del Gobierno Nacio-nal no era necesario exhibir otros argumentos para pedir que el Cardenal no volviera jamaacutes a Tarragona que los que eacutel mismo habiacutea proporcionado y probaban su falta de identificacioacuten con los ideales poliacuteticos del Gobier-no Nacional30

El domingo 29 de enero de 1939 el embajador Yanguas fue recibido por el cardenal Pacelli En la conversacioacuten que mantuvieron el emba-jador le habloacute principalmente de la situacioacuten del cardenal Vidal Le dijo de forma categoacuterica que el Gobierno no podiacutea admitir ni que el Cardenal regresara a Tarragona ni que la administrase por medio de un delegado suyo Pacelli respondioacute que esta medida era muy grave en primer lugar porque se trataba de un arzobispo y priacutencipe de la Iglesia al que se le queriacutea impedir el ejercicio de su jurisdiccioacuten y en segundo lugar por la mala impresioacuten que esto produciriacutea en la opinioacuten puacuteblica mundial La respuesta del embajador fue que el Gobierno no temiacutea a la opinioacuten puacuteblica porque los hechos que justificaban plenamente su medida estaacuten muy documentados Por otra parte lo justificoacute diciendo que tambieacuten el cardenal Segura se habiacutea visto obligado a renunciar a su archidioacutecesis Pacelli respondioacute argumentando que aquello habiacutea sido llevado a cabo por un Gobierno hostil a la Iglesia mientras que ahora el Gobierno Na-cional se proclamaba catoacutelico El embajador replicoacute que la renuncia de Segura se hizo con intervencioacuten de la Santa Sede a lo que Pacelli respon-dioacute que Segura regresoacute a Toledo con el pleno consentimiento de la Santa Sede pero que fue expulsado despueacutes por el Gobierno republicano por la fuerza y soacutelo entonces la Santa Sede se vio obligada a proveer a la ad-

29 Epistolario 707-70930 Veacutease Apunte de la Secretariacutea de Estado del 9 de octubre de 1937 in AAEESS Spag-

na 908 fasc 316 f 33

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ministracioacuten de la dioacutecesis En cambio en aquel momento un Gobierno catoacutelico impediacutea el ejercicio de la jurisdiccioacuten y el regreso de un cardenal arzobispo a su sede Pacelli anotoacute en su apunte que no habiacutea resultado posible convencer al embajador porque habiacutea recibido instrucciones pe-rentorias de su Gobierno Por ello laquono me ha quedado maacutes remedio que renovar al embajador la expresioacuten de la extrema gravedad de semejante peticioacuten y que la cosa seriacutea estudiada para llegar posiblemente a una so-lucioacuten satisfactoriaraquo31

El mieacutercoles 8 de febrero de 1939 Yanguas se entrevistoacute nuevamente con Pacelli y despueacutes de haberle narrado algunos episodios de los horro-res cometidos por los republicanos en Cataluntildea le habloacute otra vez de la cuestioacuten del cardenal de Tarragona Pacelli le repitioacute cuanto ya le habiacutea dicho anteriormente que la Santa Sede no podriacutea consentir que le fuera impedida la jurisdiccioacuten eclesiaacutestica a un arzobispo y priacutencipe de la Igle-sia sin alguacuten motivo canoacutenico y defendioacute la conducta de Vidal valieacuten-dose del pro-memoria que le habiacutea hecho llegar el canoacutenigo Viladrich El embajador respondioacute diciendo laquoEn cualquier caso no hay esperanza alguna de que el Cardenal pueda regresar y si por hipoacutetesis el Gobierno le permitiese el regreso la opinioacuten puacuteblica no lo tolerariacutea y la dioacutecesis quedariacutea sin gobiernoraquo32

Don Carmelo por encargo de Pacelli visitoacute a Vidal en la Cartuja de Farneta y le refirioacute todo lo dicho anteriormente El Cardenal pidioacute que se hiciera un expediente o proceso para que pudiera defenderse porque se trataba de su buen nombre y dignidad porque ademaacutes se veriacutea que en todo este tiempo cuanto eacutel habiacutea hecho por la Espantildea Nacional primero haciendo que su sobrino mayor saliera de la Espantildea roja y se presentara enseguida para alistarse entre las tropas de Franco que ademaacutes a cuantos joacutevenes se le habiacutean presentado para pedirle consejo les habiacutea dicho que deberiacutean marcharse enseguida para luchar en favor de los nacionales que en su misma casa y familia se habiacutea hecho todo lo posible para defender y ayudar a los sacerdotes y religiosas durante los antildeos de revolucioacuten y de persecucioacuten que si eacutel mismo habiacutea estado fuera de Espantildea durante ese tiempo habiacutea sido exclusivamente porque asiacute podiacutea trabajar desde fuera en favor de los sacerdotes de su dioacutecesis que estaban sufriendo en las caacuterceles y en grave peligro de ser asesinados que por esto mismo y por

31 AAEESS Stati Ecclesiastici posiz 340b fasc 364 f 13232 Ibid f 133

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no hacer dantildeo a la Espantildea Nacional no se habiacutea marchado a Francia a pesar de las varias invitaciones que le habiacutean hecho en este sentido que por estas mismas consideraciones nunca quiso tampoco acceder a las indicaciones recibidas para que volviera a su dioacutecesis de Tarragona con la promesa de que le dejariacutean en libertad para actuar Por todo esto creiacutea que si Franco hubiera sabido cuanto eacutel habiacutea hecho podriacutea cambiar de parecer en este asunto

Blay le indicoacute que no se trataba de una cuestioacuten de estricto derecho sino de una situacioacuten de hecho que desgraciadamente de momento le impediacutea actuar por siacute o por delegados suyos en favor de su dioacutecesis por una imposicioacuten del Gobierno que no cederiacutea faacutecilmente

Vidal pidioacute que la Santa Sede defendiera sus derechos para el libre ejercicio de su jurisdiccioacuten cosa que ya hemos visto Pacelli hizo Pero por el momento con la mayor pena habiacutea que considerar que dada la actitud tomada por el Gobierno Nacional no se veiacutea otra solucioacuten que el nombramiento de un Administrador apostoacutelico ad nutum Sanctae Sedis Vidal declaroacute laquoque desde luego si el Santo Padre por el contrario piensa que dada la actual situacioacuten de las cosas no hay otro modo de resolverla que con el nombramiento de un Administrador apostoacutelico eacutel dispuesto siempre como hijo sumiso estaacute preparado a aceptar la menor indicacioacuten del Vicario de Jesucristoraquo33

La muerte de Piacuteo XI el 10 de febrero de 1939 supuso una paralizacioacuten de la ofensiva del Gobierno contra el cardenal Vidal si bien la Santa Sede tratoacute de defenderlo hasta donde pudo al mismo tiempo que el nuncio Cicognani presionoacute con el objetivo de que el purpurado regresara a la sede tarraconense Sin embargo de nada sirvieron esas presiones Por esta razoacuten el nuevo papa Piacuteo XII (elegido el 2 de marzo de 1939) tuvo que afrontar personalmente el caso despueacutes de un intercambio de cartas con Franco que llevaron tambieacuten a un nuevo fracaso porque el general no cedioacute El nuevo Papa defendioacute al Cardenal y le mantuvo el tiacutetulo de arzobispo de Tarragona

Vidal y Barraquer murioacute en la Cartuja de la Valsainte (Suiza) el 13 de septiembre de 1943

33 Carta de Blay a Pacelli Roma 5 febrero 1939 Veacutease en el documento 4 del apeacutendice

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APEacuteNDICEcuAtro iMportAntes docuMentos de don cArMelo blAy

DoCuMento 1 Carta de Blay al general Goacutemez-Jordana

Sobre las dificultades econoacutemicas del Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma34

Burgos 19 agosto 1937

Excelentiacutesimo SentildeorGeneral Goacutemez JordanaPresidente de la Junta Teacutecnica del Estado

Excelentiacutesimo Sentildeor

El infrascripto en nombre y representacioacuten del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma despueacutes de haber hablado con el Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sr Cardenal Primado de Espantildea Patrono del mismo Colegio a Vuestra Excelencia expone

Que atendidas las circunstancias del glorioso movimiento que para bien de la amadiacutesima Espantildea se ha producido el Colegio Espantildeol de Roma se encuentra en condiciones difiacuteciles para continuar su importante obra educadora para la formacioacuten de los sacerdotes que han de trabajar en provecho de las almas y de la misma patria espantildeola Estas dificultades provienen especialmente porque las fundaciones de las becas en favor de los joacutevenes estudiantes radican en las diversas curias diocesanas espantildeolas

Por esto seriacutea de desear se encontrara alguacuten modo o manera de que pudiera ob-tenerse que las rentas de dichas fundaciones fueran remitidas a la administracioacuten del Colegio para que este pudiera continuar su objeto con la brillantez provecho y honor como para gloria de Espantildea lo ha hecho hasta el presente

Dadas las prudentes y previsoras disposiciones que el Gobierno Nacional para bien de la patria ha dado y por lo tanto la dificultad para la salida del dinero espantildeol podriacutea resolverse esta dificultad puesto que se trata de dinero para ali-mentos de joacutevenes espantildeoles que se educan en Roma para despueacutes trabajar para bien de la Iglesia espantildeola pudiera obtenerse que la administracioacuten del Colegio

34 ASV Arch Nunz Madrid 971 ff 362-362v copia mecanografiada

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entregara al Estado Espantildeol las pesetas de que pudiera disponer como renta de las fundaciones de la becas y que el mismo Estado por conducto de la Embajada de Espantildea en Italia pudiera dar la correspondiente cantidad en moneda italiana sin necesidad de la salida de nuestra divisa espantildeola del territorio nacional

Con la esperanza de que Vuestra Excelencia con su elevado criterio podraacute interesarse cerca del glorioso Caudillo que para la grandeza de la patria ha suscitado el Sentildeor en medio de nosotros para que no se interrumpa la vida de una institucioacuten tan benemeacuterita de la Iglesia espantildeola aprovecho la ocasioacuten para agradecerle sus bondades quedando de Vuestra Excelencia afectiacutesimo seguro servidor

Carmelo Blay

[PS] La suma de liras que se necesitariacutea seriacutea de unas 25000 (veinticin-co mil) mensuales aproximadamente El Colegio podriacutea recibir dicha cantidad contra las pesetas correspondientes bien fuera por conducto de la Embajada de Espantildea en Italia o bien por otro conducto que la Junta Teacutecnica del Estado creyera conveniente

DoCuMento CoMpleMentario

Carta de Blay a la Comisioacuten de Cambios35

Burgos (Seminario de San Joseacute)

21 de agosto de 1937A la Comisioacuten de Cambios - Burgos

El que suscribe en nombre y representacioacuten del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma despueacutes de hablar sobre este asunto con el Eminentiacutesimo y Reverendiacute-simo sentildeor cardenal Gomaacute y Tomaacutes Arzobispo de Toledo Primado de Espantildea Patrono del mismo Colegio expone

1ordm Que en Roma existe desde hace cerca de 50 antildeos el Pontificio Colegio Espantildeol destinado a la formacioacuten de los joacutevenes maacutes escogidos de las diferentes dioacutecesis de Espantildea que enviados allaacute por sus propios obispos se preparan para el ministerio de las almas en aquel Centro del catolicismo con grande provecho para los mismos joacutevenes y utilidad de las dioacutecesis espantildeolas como lo prueba el gran nuacutemero de obispos salidos de dicho centro y que hoy gobiernan no pocas dioacutecesis de Espantildea

35 ASV Arch Nunz Madrid 971 ff 363-363v copia mecanografiada

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2ordm Que en un centro de tanta importancia para la educacioacuten eclesiaacutestica y donde existen quizaacute maacutes de sesenta colegios internacionales como el nuestro de que se trata pertenecientes a otras tantas naciones es consolador poder decir sin que sea vanagloria ni presuncioacuten por nuestra parte que gracias al Sor y al esfuerzo y trabajo de los alumnos el Colegio Espantildeol ocupa uno de los prime-ros lugares por no decir el primero tanto en la formacioacuten espiritual y piadosa como por la intelectual y cientiacutefica de los mismos siendo el Colegio tenido en grande estima y consideracioacuten de las autoridades eclesiaacutesticas y cientiacuteficas de la ciudad de Roma

3ordm Que las fundaciones de las becas para el sostenimiento de estos colegia-les espantildeoles en Roma radican en las cajas de las diferentes dioacutecesis de Espa-ntildea las cuales seguacuten las condiciones de las mismas fundaciones han de enviar a la administracioacuten del Colegio las rentas de las mismas Por lo tanto el Cole-gio vive exclusivamente de dichas rentas sin que tenga otros ingresos para su manutencioacuten

4ordm Desde el principio del glorioso movimiento salvador de la patria y dadas las sabias y prudentes disposiciones del Gobierno Nacional el Colegio no ha recibido las rentas de las fundaciones por las dificultades de la salida del dinero espantildeol

5ordm Como se trata de dinero para la sustentacioacuten de los joacutevenes espantildeoles que se educan en Roma como queda indicado con tanto provecho y bien de la Iglesia espantildeola se deseariacutea poder obtener que la administracioacuten del Colegio pu-diera recibir a traveacutes de la Comisioacuten de Cambios la divisas necesarias Para esto la misma administracioacuten del Colegio podriacutea entregar aquiacute las pesetas y recibir en Roma las liras correspondientes

6ordm La suma de liras que se necesitariacutea seriacutea de unas 25000 (veinticinco mil) mensuales aproximadamente El Colegio podriacutea recibir dicha cantidad contra las pesetas correspondientes bien fuera por conducto de la Embajada de Es-pantildea en Italia o bien por otro conducto que la Comisioacuten de Cambios creyera conveniente

7ordm Confiando que esa Comisioacuten de Cambios con su elevado criterio podraacute interesarse por este importante asunto del Pontificio Colegio Espantildeol en Roma que de otra manera tendriacutea que interrumpir su beneacutefica y benemeacuterita obra cerca del glorioso Caudillo que para bien y grandeza de Espantildea el Sentildeor ha suscitado en medio de nosotros obra por otra parte de tanto honor para la Iglesia espantildeola y para la misma patria aprovecho la ocasioacuten para ofrecerme affmo ss

Carmelo Blay

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DoCuMento 2 Carta de Blay a Pacelli

Comunica algunas noticias sobre la situacioacuten espantildeola y la actitud del Gobierno Nacional contra el obispo Muacutegica y el cardenal Vidal 36

Burgos 23 agosto 1937

Pontificio Colegio Espantildeol de San JoseacutePalazzo Altemps - Roma 11Eminentiacutesimo y ReverendiacutesimoSentildeor cardenal Eugenio PacelliSecretario de Estado de Su Santidad

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor

Con la mayor veneracioacuten y profundo respeto me dirijo a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima para ofrecerle mis maacutes respetuosos obsequios desde esta amadiacute-sima Espantildea donde llegueacute hace unos diacuteas

No puede imaginar Vuestra Eminencia Reverendiacutesima la gratiacutesima impre-sioacuten que se recibe al llegar a este paiacutes y recorrer algunos pueblos y ciudades de la Espantildea Nacional por el orden maravilloso que reina en todas partes de tal manera que no se nota se encuentre esta parte de Espantildea en una guerra que tantos dantildeos y males ha causado Es realmente admirable cuanto puede observarse

He podido visitar en San Sebastiaacuten a algunas de las autoridades de aquella ciudad encontrando en todos la mejor buena disposicioacuten y respeto para cuanto se refiere a las cosas de la Religioacuten y de la Yglesia (sic) Es muy grande el fervor y la piedad de las autoridades y del pueblo que se manifiesta en todos los actos del culto Precisamente en estos diacuteas con motivo de la festividad de la Asuncioacuten de la Virgen Santiacutesima han sido muy grandes estas manifestaciones de piedad en todos los pueblos especialmente en San Sebastiaacuten Bilbao y aquiacute en Burgos que son las poblaciones que he visto hasta ahora se han hecho grandes fiestas en honor de la Santiacutesima Virgen tomando parte todas las autoridades con grande ejemplo de los fieles que han llenado las iglesias con numerosas y fervorosas comuniones generales No dudo de que S E Mons Antoniutti habraacute quedado edificado por cuanto ha visto en Bilbao el diacutea de la Virgen Santiacutesima

36 AAEESS Spagna 892 fasc 278 ff 15-18 original mecanografiada

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En esta ciudad de Burgos he podido tener el honor de visitar a algunos de los miembros de la Junta Teacutecnica del Estado (Gobierno Nacional) y en todos he podido observar las mejores disposiciones para cuanto se refiere a la Religioacuten y a la Yglesia El Presidente de la Junta Teacutecnica general Goacutemez Jordana me ha hecho magniacutefica impresioacuten por su equanimidad (sic) y prudencia por su piedad y devocioacuten a la Santa Sede manifestando en la conversacioacuten grande respeto y diciendo que aunque en Espantildea se lamentaba la actitud que se ha tenido con respecto al Gobierno del Generaliacutesimo Franco y a la misma Espantildea Nacional se comprende que la Santa Sede debe haber tenido sus razones y motivos para esta actitud Por otro lado ven con gusto el paso dado por la Santa Sede que confiacutean sea el principio de otros maacutes importantes

No debo dejar de manifestar a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima que en general se oyen respetuosos lamentos de la actitud de la Santa Sede creyendo que no ha comprendido bien el principio y origen de esta guerra que no ha tenido otros motivos que religiosos y patrioacuteticos es decir para salvar la Religioacuten y la Patria Una y otra estaban al borde del abismo en este querido paiacutes de tradicioacuten eminentemente catoacutelica Es consolador el oiacuter aneacutecdotas y casos de muchiacutesimos que han abandonado todo cuanto teniacutean familia hijos hacienda etc para com-batir a los enemigos de la Religioacuten Por esto dicen no se comprende la prudente conducta del Vaticano Es lo primero que todos dicen al hablar de Roma

No he tenido todaviacutea el honor de poder ver al Generaliacutesimo Franco pero confiacuteo puedo tenerlo uno de estos diacuteas porque el general Jordana presidente de la Junta Teacutecnica me dijo que eacutel mismo se encargariacutea de obtener la audiencia para miacute aunque es difiacutecil porque con motivo del movimiento contra Santander estaba el Generaliacutesimo ocupado en el frente de batalla

Una de las cuestiones maacutes espinosas y graves que sin duda se ha de presentar y se ha presentado es la del clero y aun del prelado de Vitoria Es muy general la idea de que es imposible pueda regresar a la dioacutecesis Es muy grande la reaccioacuten contra dicho prelado al que con razoacuten o sin ella consideran y tratan como uno de los mayores culpables de cuanto ha sucedido en Vizcaya Ya VER tendraacute noticias maacutes autorizadas que las miacuteas sobre cuanto ha pasado y pasa todaviacutea con parte del clero de Vizcaya y la grandiacutesima prevencioacuten que hay contra los que olvidaacutendose de su misioacuten de paz han sido causa de tanta ruina y desolacioacuten Seguramente que muchos sacerdotes y religiosos tendraacuten que salir del territorio de la dioacutecesis Al prelado le seraacute muy difiacutecil poder volver a la misma Ademaacutes su misioacuten pastoral no seriacutea provechosa por lo mal dispuestos que estaacuten en ge-neral contra eacutel

Tambieacuten para el diacutea de mantildeana puede ocurrir algo parecido con el Emo y Rvmo Cardenal Arzobispo de Tarragona Hay en esta Espantildea Nacional una gran prevencioacuten contra este Emo Prelado Precisamente en la misma Oficina de la frontera espantildeola mientras se despachaba la documentacioacuten hablando ama-blemente con los jefes encargados de dicha Oficina incidentalmente salioacute en la

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conversacioacuten el nombre del cardenal Vidal y Barraquer y enseguida uno de los alliacute presentes dijo laquoSuponemos que dicho sentildeor no vendraacute por Espantildearaquo y al contestarle que seguramente por ahora no creiacutea que viniera el mismo que habiacutea hablado dijo laquoSuponemos que ni ahora ni tampoco despueacutesraquo

Es tanto lo que Espantildea ha sufrido Eminentiacutesimo Sentildeor por estas divisio-nes de Vizcaya y de Cataluntildea que ahora se siente una muy grande reaccioacuten para acabar con todo esto y fortificar la unidad de la patria Ciertamente que si despueacutes de la sangre derramada despueacutes de tantas y tan in numerables viacutectimas inocentes como esta tragedia ha causado en la queridiacutesima Espantildea tuvieacuteramos que continuar con tantas luchas de pequentildeas regiones y divisiones intestinas no se hubiera obtenido gran cosa con tanto sacrificio Por esto se siente en todas partes y en todos tan grande reaccioacuten a cuanto signifique divisioacuten y partidismos dentro de la patria espantildeola

Como sin duda uno de los factores principales en estas divisiones ha sido el clero que olvidaacutendose de su misioacuten de paz y de amor ha trabajado por dividir y separar a los de las dos regiones del resto de Espantildea por esto la reaccioacuten viene contra el clero y los prelados que consideran en cierto modo culpables de no haber impedido que el clero hiciera tales campantildeas contra la unidad de la patria

Es una providencia el que ahora los hombres que estaacuten al frente de los nego-cios de la Espantildea Nacional sean en general de convicciones netamente catoacuteli-cas desde el Generaliacutesimo Franco hasta el Presidente de la Junta Teacutecnica del Estado y los mismos miembros de la dicha Junta Esto hace concebir esperanzas de que cuanto se refiere a la Religioacuten y a la Yglesia ha de encontrar en los mismos las mayores facilidades

Pudiera haber alguacuten temor en las masas en los diferentes grupos que forman la Falange Tradicionalista y de las JONS De los tradicionalistas hay que tener la seguridad de que estaacuten completamente con la Yglesia y que con grande entusias-mo han tomado las armas para defender a la Religioacuten De los que pudiera tenerse alguna prevencioacuten es de los Falangistas en cuyo grupo pueden haberse infiltrado elementos de pocas convicciones catoacutelicas pero tambieacuten entre los falangistas hay elementos de sentimientos verdaderamente cristianos en su mayor parte por pertenecer a familias sumamente cristianas Es de esperar que llegado el momento estos mismos comprenderaacuten que es necesario trabajar dentro de los sentimientos y conforme a las doctrinas de la Yglesia para el mayor bien de la sociedad y del pueblo

Aprovecho esta ocasioacuten para renovarle los sentimientos de mi profunda ve-neracioacuten mientras besando devotamente la Sagrada puacuterpura me profeso de Vues-tra Eminencia Reverendiacutesima devotiacutesimo servidor

Sac Carmelo Blay

ViCente CaacuterCel ortiacute

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DoCuMento 3 Carta de Blay a Pacelli

Informa sobre las opiniones de las esferas gubernativas que lamentan respetuosamente la manera como la Santa Sede ha tratado al Gobierno Nacional desde que comenzoacute el movimiento militar y son contrarias a la actitud separatista del clero vasco sobre la piedad e intensa religiosi-dad personal del general Franco y sobre la formacioacuten religiosa de los falangistas37

Biarritz 20 septiembre 1937

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo SentildeorCardenal Eugenio PacelliSecretario de Estado de Su SantidadCiudad del Vaticano

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor

Pensaba yo encontrarme para estas fechas en Roma pero una pequentildea indis-posicioacuten me ha hecho retrasar mi regreso por esto me permito escribir a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima despueacutes de haber estado en Salamanca y en algunos otros lugares de la Espantildea Nacional y ponerme en contacto con los miembros del Gabinete Diplomaacutetico del Jefe del Estado Espantildeol y con personas que estaacuten y viven muy cerca del mismo Jefe del Estado

Como deciacutea a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima todos lamentan respetuo-samente del modo como la Santa Sede ha tratado al Gobierno Nacional desde que comenzoacute el movimiento salvador de Espantildea No comprenden dicen la incomprensioacuten de dicho movimiento que en primer lugar teniacutea por objeto de-fender a la Religioacuten y a la Yglesia de la barbarie marxista y comunista Por esto ahora se ha recibido con grande satisfaccioacuten en todos los sectores de la Espantildea Nacional la paternal bondad del Santo Padre al nombrar como Encargado de Negocios de la Santa Sede a SE Mons Antoniutti

Lo que les ha preocupado no poco es cuanto seguacuten ellos ha hecho la Santa Sede por los rojos-separatistas vascos que tanto dantildeo han hecho a la misma Re-

37 AAEESS Spagna 896 fasc 297 ff 42-44 original mecanografiada

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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ligioacuten en su paiacutes antes tan catoacutelico y respetuoso con la Yglesia A este respecto consideraban la venida de Mons Antoniutti con el pretexto de atender a los nintildeos vacos maacutes bien como para proteger a los mismos vascos en el momento en que han de rendir cuentas a la justicia espantildeola por los desastres causados a su propio paiacutes y a toda Espantildea como si se temiera que los tribunales espantildeoles se excedieran en su misioacuten de ejercer la justicia Por esto creen que tuvo prisa en ir a Bilbao instalaacutendose alliacute como en su propia sede

En cuanto a la situacioacuten de los elementos religiosos que tanto dantildeo han causa-do durante esta guerra es decir de los religiosos de varias Oacuterdenes y Congrega-ciones religiosas que olvidando su misioacuten de paz y de la propia santificacioacuten se han dedicado por espiacuteritu de partido a predicar la guerra de exterminio parece que muy poco o nada han cambiado Seriacutea conveniente que en los conventos de Vizcaya se proveyera para que fueran tenidos por religiosos que no hubieran hecho poliacutetica separatista y a ser posible que no fueran oriundos de dicha regioacuten trasladando a otras partes de Espantildea o bien a Misiones a los que maacutes se han distinguido por su actuacioacuten separatista Seguramente que una de las causas de cuanto ha ocurrido en Vizcaya con los religiosos y aun con los de vida maacutes aus-tera como Carmelitas Pasionistas Capuchinos y no pocos Jesuitas fue debido a la formacioacuten de Provincias religiosas exclusivamente dentro de la misma regioacuten sin contacto alguno con las casas de otras regiones Asiacute ha resultado que en todas estas casas y Provincias los elementos que han formado las comunidades eran en su mayor parte separatistas Precisamente me deciacutea un religioso carmelita que ahora ocupa un puesto en el gobierno de la Orden en el Corso drsquoItalia en Roma38 que eacutel consideraba que entre los religiosos de su Orden de la Provincia de Vizcaya por lo menos el 90 eran nacionalistas es decir de ideas separatis-tas Quizaacutes los superiores mayores de las diferentes Oacuterdenes religiosas tienen no poca responsabilidad de cuanto ha sucedido porque no han comprendido o no han podido poner remedio oportunamente a tantos males como han causado los que abandonando el mundo para buscar su propia santificacioacuten y la santificacioacuten de las almas han perdido el tiempo haciendo poliacutetica de odios y de divisioacuten entre los mismos fieles

Al recorrer los pueblos destrozados de Vizcaya y preguntar a los sencillos aldeanos por queacute se habiacutean unido a los enemigos de la Religioacuten es triste oiacuter decir que los sacerdotes y religiosos les habiacutean dicho que esto era lo mejor y por esto habiacutean obedecido iexclQueacute dolor

En general los sacerdotes de la dioacutecesis de Vitoria de ideas separatistas no han cambiado nada Parece que estaacuten envenenados con dichas ideas y no es extrantildeo que el Gobierno Nacional esteacute preocupado por esto Era de absoluta necesidad el nombramiento de un Administrador apostoacutelico como lo ha hecho

38 Se refiere al P Silverio de Santa Teresa OCD

ViCente CaacuterCel ortiacute

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el Santo Padre en la persona del Obispo auxiliar de Valencia para que cesando la interinidad en que viviacutea dicha dioacutecesis se pudiera trabajar en tantos problemas difiacuteciles y complicados Dicho nombramiento ha sido muy bien recibido por todos y aun por el Gobierno Nacional que ve el paternal intereacutes del Santo Padre por esta querida Espantildea

El nombramiento del Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo sentildeor cardenal Segura para la importantiacutesima dioacutecesis de Sevilla ha causado profunda emocioacuten y entu-siasmo en los catoacutelicos espantildeoles y en las esferas del Gobierno porque con esto ven una nueva muestra de amor del Papa a Espantildea y sobre todo la reparacioacuten de un gran desacato cometido por el gobierno revolucionario contra el que enton-ces ocupaba la Sede primada de Toledo39

He tenido ocasioacuten como indico a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima de te-ner contacto con personas que estaacuten muy cerca del Jefe del Estado y viven con eacutel mismo Dichas personas han hablado con grande elogio y entusiasmo del mismo Jefe del Estado especialmente en cuanto se refiere su piedad y respeto a la Yglesia de su equanimidad (sic) en tratar y conocer los maacutes difiacuteciles asuntos De su piedad me deciacutea el capellaacuten del Cuartel general40 que vive en la propia casa y como de familia con el Generaliacutesimo basta decir que ni un solo diacutea se retira a descansar sin antes haber rezado en familia el Santo Rosario aunque esto sea a las cuatro o cinco de la madrugada al regresar de alguna visita a los frentes de batalla Lo mismo que el querer tener en el Cuartel general la santa misa todos los diacuteas

39 En plena Guerra Civil Segura tras haber presidido el funeral del arzobispo de Se-villa cardenal Ilundaacutein fallecido el 10 de agosto de1937 manifestoacute tanto a Piacuteo XI como al cardenal Pacelli deseos de regresar a Espantildea desde su destierro en Roma pues consideroacute llegado el momento propicio para regresar a una sede metropolitana espantildeola de prestigio y de tradicioacuten cardenalicia como era Sevilla y asiacute lo dijo al cardenal Pacelli en carta escrita desde Olaz de Loyola (Guipuacutezcoa) el 17 de agosto de 1937 en respuesta a otra suya en la que le comentaba que el Papa estaba dispuesto a nombrarle para una dioacutecesis espantildeola laquoarri-vato il momento per la vacanza della sede convenienteraquo A peticioacuten de Pacelli el delegado apostoacutelico en la Espantildea nacional Hildebrando Antoniutti dijo que el ambiente es favorable el regreso del cardenal Lo mismo pensaba Gomaacute que veiacutea en este nombramiento una so-lucioacuten excelente a la situacioacuten del cardenal (cfr mi artiacuteculo laquoNombramientos episcopales en Espantildea y estado de algunas dioacutecesis catalanas durante la Guerra Civil [1936-1939]raquo in Analecta Sacra Tarraconensia 88 [2014] 597-933)

40 Joseacute Mariacutea Bulart Ferraacutendiz (San Andreacutes de Palomar Barcelona 1900 - Madrid 1981) hizo los estudios en el seminario de Barcelona y fue ordenado sacerdote en mayo de 1925 Era secretario particular del obispo de Salamanca Enrique Pla y Deniel cuando el 4 de octubre de 1936 pasoacute al servicio de Franco al cederle el obispo el palacio episcopal como sede del Cuar-tel general que convirtioacute durante casi toda la guerra en su puesto de mando Fue su confesor hasta su muerte y capellaacuten de la Casa Civil y le atendioacute a eacutel a toda su familia y a las personas maacutes allegadas en las funciones y ceremonias religiosas Tambieacuten fue responsable de la cura pastoral del palacio del Pardo Se incardinoacute en la archidioacutecesis de Madrid en 1957 y desem-pentildeoacute en ella los ministerios de rector de la Iglesia del Buen Suceso desde 1942 y paacuterroco de la parroquia del Corpus Christi de 1953 a 1981 (Cf mi Diccionario de Sacerdotes diocesanos espantildeoles del siglo XX BAC Madrid 2006 265)

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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Al decir yo hace unos diacuteas al Jefe del Gabinete Diplomaacutetico sentildeor Sangroacute-niz que seguramente el enviado especial del Santo Padre para el asunto de los nintildeos vascos podriacutea informar muy bien de cuanto sucede en la Espantildea Nacional me deciacutea que nuestros prelados tambieacuten habraacuten informado y que bien podiacutean atender en el Vaticano a dichas informaciones Con este motivo me deciacutea que sin duda el objeto de enviar a Espantildea a Mons Antoniutti deberiacutea haber sido otro por parte de la Santa Sede como queda indicado maacutes arriba en esta carta por-que solo para esto no era ne cesario puesto que el Gobierno Nacional se estaba ocupando de dichos nintildeos y sobre todo estaba dispuesto a recibirles y asistirles apenas llegaran a Espantildea como atiende y asiste a los pueblos y ciudades que van ocupando las fuerzas nacionales donde quiera que llegan estas por conducto de la Intendencia Militar como lo prueba lo que se hizo en Bilbao y lo que uacuteltima-mente se ha hecho en Santander y como se hace con los numerosos evadidos de la zona roja que diariamente vienen a la Espantildea Nacional buscando la paz y la tranquilidad que en la misma se respira

Indudablemente que una de las mayores preocupaciones del movimiento nacional es lo que pueda resucitar de la Falange Espantildeola mejor dicho de los falangistas A este propoacutesito me deciacutea el sentildeor Serrano Suacutentildeer cuntildeado del Gene-raliacutesimo y que vive con eacutel mismo y seguacuten me indican atiende mucho a sus con-sejos que se desea vivamente organizar y ya de esto se ocupan con el Cardenal primado y con el obispo auxiliar de Toledo [Gregorio Modrego] la asistencia religiosa en las organizaciones falangistas de tal manera que en todas puedan encontrar los miembros dicha asistencia religiosa algo parecido como se ha hecho en Italia para los balilas y avanguardistas41 etc Es cierto que este es un problema importantiacutesimo

Suplicando dispense la molestia de este escrito beso con todo respeto la Sagrada puacuterpura quedando de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima devotiacutesimo servidor

Sac Carmelo Blay

41 Los laquobalillasraquo eran nintildeos entre 8 y 14 antildeos y los avanguarditas eran joacutevenes entre 14 y 18 Se trataban de dos subestructuras de la Opera Nazionale Balilla organizacioacuten juvenil de la Italia fascista que funcionoacute como adicioacuten a la educacioacuten escolar entre 1926 y 1937 antildeo en el que fue fusionada con la Gioventugrave Italiana del Littorio una seccioacuten juvenil del Partido Nacional Fascista

ViCente CaacuterCel ortiacute

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DoCuMento 4 Carta de Blay a Pacelli

Informa sobre las gestiones hechas personalmente para conseguir que el cardenal Vidal renuncie al gobierno de la archidioacutecesis de Tarragona42

Roma 5 febrero 1939

Pontificio Colegio Espantildeol de San JoseacutePalazzo AltempsRoma - 11

A Su Eminencia Reverendiacutesimael Sentildeor Cardenal Eugenio PacelliSecretario de Estado de Su SantidadCiudad del Vaticano

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor

Cumpliendo con la mayor buena voluntad las indicaciones de Vuestra Emi-nencia Reverendiacutesima le escribo el resultado de la misioacuten que amablemente quiso encargarme ante el Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo sentildeor cardenal Vidal y Barraquer arzobispo de Tarragona Procurareacute hacerlo con la mayor fidelidad

El encargo aunque honroso para miacute era al mismo tiempo muy penoso por la persona y por el asunto de que se trata

Apenas llegado a la Cartuja de Farneta residencia del citado Emo y Revmo Sr Cardenal expuse con el mayor cuidado posible la misioacuten que me llevaba dicieacutendole cuanto VE Rvma me habiacutea encargado por indicacioacuten del Santo Padre esto es

1ordm Cuanto el Sentildeor Embajador de Espantildea en nombre del Gobierno Nacio-nal le habiacutea propuesto acerca de que el Gobierno estaba resuelto a no permitir que volviera el sentildeor cardenal Vidal y Barraquer arzobispo de Tarragona a Es-pantildea y por lo tanto a su dioacutecesis y no soacutelo esto sino que tampoco permitiriacutean que gobernase aquel arzobispado ninguno que fuera nombrado por el mismo y que estuviera a las ordenes suyas Que dada esta situacioacuten de hecho para atender a las necesidades de las almas especialmente en estos primeros tiempos

42 AAEESS Spagna 949 fasc 352 ff 47-50 original mecanografiada

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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cuando seraacute necesario organizarlo todo para la restauracioacuten de tanta ruina el Santo Padre pensariacutea poderlo hacer por medio de un Administrador apostoacutelico que podriacutea nombrarse ad nutum Sanctae Sedis

2ordm Le hice presente cuanto Vuestra Eminencia Reverendiacutesima habiacutea mani-festado al propio Sr Embajador indicaacutendole que se trataba de una cosa muy gra-ve porque no era soacutelo el impedir el libre ejercicio de su jurisdiccioacuten a un obispo cualquiera sino a un obispo priacutencipe de la Yglesia (sic) Que ademaacutes que esta actitud del Gobierno Nacional de Espantildea causariacutea grande admiracioacuten en todo el mundo catoacutelico en desprestigio de la misma Espantildea

3ordm Al ejemplo puesto por el Sr Embajador acerca de los precedentes de la expulsioacuten del Emo y Rvmo Sr cardenal Segura se le habiacutea hecho presente por Vuestra Eminencia que el caso era muy diferente al actual porque en el del cardenal Segura cuando salioacute la primera vez de Espantildea al hacerle la menor in-dicacioacuten de parte de la Santa Sede de que volviera a su dioacutecesis lo hizo ensegui-da siendo expulsado entonces manu militari por el Gobierno de la Repuacuteblica es decir por un Gobierno enemigo de la Yglesia y perseguidor de todo lo que significaba algo de Religioacuten etc Pero ahora se trata de la actuacioacuten contra un Cardenal no ya por un Gobierno enemigo de la Yglesia sino por un Gobierno catoacutelico formado por catoacutelicos y que luchan por hacer volver a Espantildea a sus tradiciones catoacutelicas de siempre

Hice presente al mismo sentildeor cardenal Vidal y Barraquer que el Emo y Re-vdmo Sr cardenal Secretario de Estado de Su Santidad como era natural habiacutea hecho todo lo posible para hacer ver al Sr Embajador la gravedad de la actitud adoptada en este asunto por el Gobierno El embajador insistioacute en que esta era decisioacuten definitiva del Gobierno Que teniacutean en sus manos copias de alguacuten documento comprometedor para el cardenal Vidal por alguna concomitancia con los separatistas vascos aun antes de producirse el movimiento nacional contra el Gobierno de la Repuacuteblica y que naturalmente estariacutean dispuestos si fuera necesario para defender su actitud a la publicacioacuten de dicho documento o documentos

El sentildeor cardenal Vidal escuchoacute todas estas manifestaciones diciendo que desde luego eacutel deseariacutea que se hiciera un expediente o proceso para que pudiera defenderse porque se trata de su buen nombre y dignidad porque ademaacutes se veriacutea que en todo este tiempo cuanto eacutel ha hecho por la Espantildea Nacional pri-mero haciendo que su sobrino mayor saliera de la Espantildea roja y se presentara enseguida para alistarse entre las tropas del Generaliacutesimo Franco que ademaacutes a cuantos joacutevenes se le han presentado para pedirle consejo les ha dicho deberiacutean marcharse enseguida para luchar en favor de los nacionales que en su misma casa y familia se ha hecho todo lo posible para defender y ayudar a los sacerdotes y religiosas durante estos antildeos de revolucioacuten y de persecucioacuten que si eacutel mismo ha estado fuera de Espantildea durante este tiempo ha sido exclusivamente porque asiacute

ViCente CaacuterCel ortiacute

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podriacutea trabajar desde fuera en favor de los sacerdotes de su dioacutecesis que estaban sufriendo en las caacuterceles y en grave peligro de ser asesinados que por esto mis-mo y por no hacer dantildeo a la Espantildea Nacional no se habiacutea marchado a Francia a pesar de las varias invitaciones que le habiacutean hecho en este sentido que por estas mismas consideraciones nunca quiso tampoco acceder a las indicaciones recibidas para que volviera a su dioacutecesis de Tarragona con la promesa de que le dejariacutean en libertad para actuar Por todo esto creiacutea que si el Generaliacutesimo Franco supiera cuanto eacutel ha hecho podriacutea cambiar de parecer en este asunto

Me permitiacute indicarle que pensara que aquiacute no se trata de una cuestioacuten de estricto derecho sino de una situacioacuten de hecho que desgraciadamente de mo-mento le impide actuar por siacute o por delegados suyos en favor de las almas de su dioacutecesis por una imposicioacuten del Gobierno que no cederaacute faacutecilmente

Eacutel cree seguacuten me dijo que la Santa Sede deberiacutea dar la batalla para defender sus derechos para el libre ejercicio de su jurisdiccioacuten Puede tener la seguridad le contesteacute como me lo habiacutea indicado el mismo Sr cardenal Secretario de Es-tado de que este ha manifestado todo cuanto creiacutea necesario al Sentildeor Embajador para defender los derechos del Cardenal Arzobispo en el ejercicio de la libre jurisdiccioacuten en su dioacutecesis Por lo tanto por el momento con la mayor pena hay que considerar que dada la actitud tomada por el Gobierno Nacional no se veiacutea otra solucioacuten que la indicada del nombramiento de un Administrador apostoacutelico ad nutum Sanctae Sedis Creo le dije que con toda probabilidad se pensariacutea en persona investida de caraacutecter episcopal y de la misma Provincia Eclesiaacutestica si es posible

A pesar de insistir mucho en sus ideas de que se haga un expediente o proceso para que eacutel pudiera exponer todo lo que creyera conveniente para su defensa terminoacute la conversacioacuten diciendo que desde luego si el Santo Padre por el contrario piensa que dada la actual situacioacuten de las cosas no hay otro modo de resolverla que con el nombramiento de un Administrador apostoacutelico eacutel dispues-to siempre como hijo sumiso estaacute preparado a aceptar la menor indicacioacuten del Vicario de Jesucristo

Naturalmente insistiacutea podriacutea ser nombrado alguno de los que eacutel ya tiene alliacute como vicarios generales o alguna otra persona que fuera grata al mismo A la primera parte le dije que difiacutecilmente podriacutea ser nombrado en caso alguno de los ya nombrados por eacutel porque precisamente una de las cosas impuestas por el Gobierno es que no sea ninguno como delegado del mismo Carde nal Arzobispo

Luego ya en la conversacioacuten me habloacute de la situacioacuten suya en caso de nom-bramiento de un Administrador apostoacutelico porque aun quedando con el tiacutetulo de Arzobispo de Tarragona le quedariacutea solamente el tiacutetulo pero no la jurisdiccioacuten Por esto deciacutea que eacutel quedariacutea en una situacioacuten poco airosa y como recluido en la Cartuja Que pensaba no debiacutea quedar alliacute maacutes tiempo y que tampoco su situacioacuten econoacutemica estaba en condiciones de poder seguir en esta situacioacuten Es cosa le dije que podriacutea tratarse en un segundo teacutermino con la Santa Sede

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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Terminamos la entrevista indicaacutendome que yo hiciera saber todo esto a Vues-tra Eminencia Reverendiacutesima y que eacutel escribiriacutea directamente al mismo Sr car-denal Secretario de Estado

Al tener el honor de comunicar cuanto queda dicho aprovecho la ocasioacuten para manifestar mi profunda veneracioacuten mientras besando devotamente la Sagrada puacuterpura quedo de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima devotiacutesimo servidor

Sac Carmelo Blay

LA VIDA EN EL COLEGIO

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DATOS ESTADIacuteSTICOS DEL CURSO 2015-2016

Han formado parte de la comunidad del Colegio un total de 63 colegia-les distribuidos del siguiente modo

Seminaristas SacerdotesNuevos 2 24Licenciatura 2 39Doctorado 0 21Otros (Maacutester) 0 1Subtotales 2 61

El total de las dioacutecesis presentes es de 34 y naciones 5 distribuidas de la siguiente manera

Albacete 1 Oviedo 1Almeriacutea 1 Pamplona y Tudela 1Arzobispado Castrense 1 San Francisco Campeche (Meacutexico) 1Astorga 2 San Sebastiaacuten 1Burgos 1 Santiago de Chile (Chile) 1Cartagena 3 Segorbe-Castelloacuten 1Ciudad Real 2 Sevilla 7Coacuterdoba 3 Siguumlenza - Guadalajara 1Coria - Caacuteceres 1 Solsona 1El Callao (Peruacute) 1 Tenerife 2Madrid 1 Toledo 6Maacutelaga 2 Tui - Vigo 1Maacutelaga-Soataacute (Colombia) 1 Urgell 1Meacuterida - Badajoz 1 Valencia 7Ndola (Zambia) 2 Valladolid 1Orihuela - Alicante 2 Villa Mariacutea 1Ourense 1 Zaragoza 3

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la ViDa en el Colegio

En cuanto a las diferentes especialidades (23 en total) la distribucioacuten es la siguiente

Bienes Culturales 1 Sagrada Escritura 9Estudios Orientales 1 Sagrada Liturgia 3Derecho Canoacutenico 7 Sociologiacutea 1Doctrina Social 1 Filosofiacutea 4Teologiacutea Biacuteblica 3 Historia de la Iglesia 2Teologiacutea Dogmaacutetica 11 Matrimonio y Familia 3Teologiacutea Espiritual 4 Misionologiacutea 1Formacioacuten Sacerdotal 2 Muacutesica Sacra 1Teologiacutea Fundamental 1 Pastoral Juvenil 2Teologiacutea Moral 1 Patriacutestica 2Teologiacutea Pastoral 2 Sacramentaria 1

En cuanto a los centros de estudio (14) la distribucioacuten es la siguiente

Istituto Patristico laquoAugustinianumraquo 2Pontificia Facoltagrave Teologica laquoTeresianumraquo 1Pontificia Universitagrave della Santa Croce 3Pontificia Universitagrave Gregoriana 26Pontificia Universitagrave Lateranense 8Pontificia Universitagrave Santo Tommaso DrsquoAquino 1Pontificio Ateneo di SantrsquoAnselmo 4Pontificio Istituto Biblico 9Pontificio Istituto di Musica Sacra 1Pontificio Istituto Giovanni Paolo II 3Pontificio Istituto Orientale 1Universidad de Navarra 1Universidad de Valencia 1Universitagrave Pontificia Salesiana 2

Han salido del Colegio un total de 14 alumnos 9 concluyendo la for-macioacuten (1 doctor 7 licenciados 1 maacutester) y 4 sin concluirla (doctorandos que no defendieron la tesis) La variacioacuten numeacuterica de los uacuteltimos 5 antildeos ha oscilado entre los valores miacutenimo 57 y maacuteximo 90

Durante el curso fue ordenado presbiacutetero (en el mes de mayo) un diaacute-cono de la dioacutecesis de Orense

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2

ACONTECIMIENTOS MAacuteS DESTACADOS

El curso 2015-2016 ha comenzado con un equipo de direccioacuten parcial-mente renovado compuesto por el Rector Joseacute San Joseacute Prisco (nombra-do el 8 de abril de 2015 despueacutes de que el anterior Rector Mons Aacutengel Javier Peacuterez Pueyo fuera nombrado obispo de Barbastro) el Ecoacutenomo D Javier Malo Peacuterez que asumioacute tambieacuten las tareas de Vicerrector el Director espiritual D Argimiro Martiacuten Benito y el confesor y encargado del archivo D Lope Rubio Parrado

Colaboran directamente con el equipo de direccioacuten el profesor de la Universidad Pontificia Gregoriana Dario Vitali que ejerce la tarea de Di-rector de estudios y el Agente de Preces Santiago Luis de Vega Alonso Reside en el Colegio como Vicario para los sacerdotes valencianos en Roma D Vicente Caacutercel Ortiacute

Una de las novedades importantes del curso ha sido la creacioacuten de la Fundacioacuten Mater Clementissima para recaudar fondos con los que ayudar al sostenimiento del Colegio El martes 17 de noviembre aprovechando la visita del Rector y del Vicerrector a la Asamblea plenaria de la Con-ferencia Episcopal Espantildeola para informar sobre la marcha del Colegio se procedioacute a la constitucioacuten del Consejo de la Fundacioacuten notarialmente y posteriormente se registroacute en el Registro de entidades religiosas del Ministerio de Justicia de Espantildea La intencioacuten es invitar primeramente a todos los ex colegiales a que se inscriban en la asociacioacuten de antiguos alumnos y colaboren con la fundacioacuten

La otra novedad es la nueva imagen institucional Para ello se optoacute por adoptar un nuevo logotipo maacutes actualizado y faacutecilmente reconocible con la fachada del Colegio y la cruz de la capilla El color magenta es el que da unidad con el logo de la Conferencia Episcopal Espantildeola

El 2 de marzo se lanzoacute la nueva paacutegina Web La presentacioacuten oficial corrioacute a cargo de Ricardo Rossi representante de OPI (empresa italiana

la ViDa en el Colegio

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de servicios a entidades religiosas que ha sido la encargada del desarrollo del proyecto) A dicha presentacioacuten asistieron ademaacutes de los colegiales 5 periodistas espantildeoles de medios catoacutelicos de Roma (Zenit Radio Vatica-na Aciprensa Rome Reports) La nueva Web es muy completa y contiene informacioacuten actualizada sobre la vida del Colegio ademaacutes de acceso a varios servicios gratuitos Su direccioacuten wwwcolegioespanolorg

El curso se inicioacute el 1 de septiembre para los colegiales nuevos y el 1 de octubre para el resto La inauguracioacuten oficial fue el 9 de octubre con un encuentro de los colegiales con el equipo formativo en la sala de conferencias la misa de inauguracioacuten que presidioacute el Rector y la cena fraterna

Unos diacuteas antes (el 4 de octubre) habiacutea comenzado el Siacutenodo sobre la familia El 8 de diciembre iniciamos con toda la Iglesia el Antildeo jubilar de la Misericordia desde el que se orientaron la mayor parte de las acti-vidades del Colegio

Del 18 al 24 de enero volvioacute a celebrarse en las instalaciones del Cole-gio el II Curso de directores espirituales organizado por la Conferencia Episcopal Espantildeola Asimismo del 28 de marzo al 29 de abril tuvo lugar el XXIX Curso de actualizacioacuten sacerdotal

celebrAciones especiAles

El domingo 8 de noviembre celebramos la Fiesta de la dedicacioacuten de la capilla de San Joseacute familiarmente conocida como laquoFiesta del Reser-vadoraquo en su 50 aniversario A las 1200 comenzoacute la Eucaristiacutea solemne presidida por Mons Piero Marini Presidente del Pontificio Consejo para los Congresos eucariacutesticos acompantildeado por Mons Ignacio Carrasco de Paula Presidente de la Pontificia Academia para la Vida A las 1330 tuvi-mos la comida y a partir de las 1600 adoracioacuten al Santiacutesimo por turnos con diversos momentos preparados por los colegiales hasta las 2000 hora en la que con las Viacutesperas solemnes presididas por el Rector se concluyoacute la fiesta

Con motivo del Antildeo jubilar de la Misericordia los diacuteas 4 y 5 de marzo nos unimos a la celebracioacuten de las laquo24 horas para el Sentildeorraquo convocadas por el Papa para ese fin de semana En el Colegio se organizoacute un acto eucariacutestico de adoracioacuten nocturna que duroacute desde las 2200 horas del viernes hasta las 1000 horas del saacutebado con turnos que fueron cubiertos por los colegiales

aConteCiMientos Maacutes DestaCaDos

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El viernes 11 de marzo tuvimos una celebracioacuten penitencial como pre-paracioacuten a la peregrinacioacuten a la Puerta Santa que tendriacutea lugar el domingo 13 de marzo Ese diacutea a las 730 am tuvimos la celebracioacuten de la santa misa en la capilla de los huacutengaros en la cripta de la basiacutelica de San Pedro Luego hicimos el recorrido desde el Castel SantrsquoAngelo hasta la Puerta Santa y terminamos con el rezo del credo en el altar de la Basiacutelica

El viernes 3 de junio asistimos en la basiacutelica de San Pablo Extramuros al retiro dado por el papa Francisco con motivo del Jubileo de los sacer-dotes y al diacutea siguiente participamos en la misa jubilar con el Papa en la plaza de San Pedro

conferenciAs

Han sido diversas las conferencias tenidas en el Colegio durante el curso intentando abordar siempre temas de actualidad que son uacutetiles para una maacutes completa formacioacuten de los sacerdotes

Conferencia-coloquio sobre la Instruccioacuten pastoral aprobada en la CV Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Espantildeola titulada laquoIgle-sia servidora de los pobresraquo a cargo de Mons D Juan Joseacute Omella Obis-po de Calahorra y la Calzada-Logrontildeo Presidente de la Comisioacuten episco-pal de Pastoral Social (28 de octubre)

Mesa redonda al concluir el Siacutenodo de la familia Invitamos a dos profe-sores que estuvieron presentes como especialistas en el aula sinodal Joseacute Granados Vicepresidente del Instituto Juan Pablo II en Roma y miembro de los Disciacutepulos de los Corazones de Jesuacutes y Mariacutea (DCJM) y Manuel Arroba Conde claretiano y decano de la Facultad de Derecho Canoacutenico de la Universidad Pontificia Lateranense Ambos ofrecieron una visioacuten com-plementaria de lo acontecido en el aula y su opinioacuten sobre lo que podriacutea ser la proacutexima exhortacioacuten apostoacutelica del Papa (23 de noviembre)

Conferencia laquoDescubriendo a Santa Mariacutea de Guadaluperaquo a cargo del sacerdote mexicano Roberto Figueroa especialista en el tema (24 de febrero)

Conferencia de la presidente de la JOC internacional la francesa Ame-lie Peyrard que realizoacute una presentacioacuten de la misioacuten en el mundo actual de la Juventud Obrera Cristiana (16 de marzo)

Conferencia sobre laquoEl Islam en el momento presenteraquo impartida por el misionero P Diego Sarrioacute Cucarella Mafr secretario de estudios del Pontificio Istituto di Studi Arabi e drsquoIslamistica (12 de abril)

la ViDa en el Colegio

200

presentAciones de libros

Presentacioacuten de la nueva edicioacuten del leccionario de la misa a cargo de Manuel Fanjul Garciacutea Director general de Publicaciones de la CEE (mieacutercoles 2 de diciembre)

Presentacioacuten del libro de la BAC titulado laquoLoado seas mi Sentildeorraquo co-mentario a la enciacuteclica Laudato Sirsquo del papa Francisco Intervinieron el Presidente del Pontificio Consejo para el Diaacutelogo interreligioso cardenal Jean-Louis Tauran el Subdirector general de la FAO Daniel Gusftanson Mons Fernando Chica Arellano editor de la obra y observador permanen-te de la Santa Sede ante la FAO IFAD PAM y Carlos Granados Director de la BAC Asistieron al acto el cardenal Santos Abril el cardenal Stella el arzobispo secretario del Pontificio Consejo para la Cultura varios rectores de Colegios y profesores de universidades romanas el embajador de Espa-ntildea ante la Santa Sede y los de Colombia y Paraguay (martes 23 de febrero)

otrAs ActividAdes

Con motivo de la Fiesta del Reservado el saacutebado 7 de noviembre intervino el Colegio el Coro de la dioacutecesis de Roma dirigido por Mons Marco Frisina Asistieron al concierto maacutes de trescientas personas que abarrotaron la Capilla del Colegio El magniacutefico programa aunoacute oracioacuten y catequesis tomando como referencia la eucaristiacutea El director del Coro presentoacute cada pieza de forma didaacutectica A continuacioacuten se sirvioacute una ce-na-bufeacute a todos los presentes

Del martes 19 al martes 26 de abril tuvimos la laquoExposicioacuten del libro religiosoraquo de la mano en esta ocasioacuten de Ediciones Siacutegueme El objetivo era conocer la importancia de las editoriales catoacutelicas y el servicio que prestan en la difusioacuten de la cultura cristiana y de la fe de la Iglesia en el mundo de hoy La inauguracioacuten corrioacute a cargo del director de la Editorial D Eduardo Ayuso Santos quien fuera tambieacuten vicerrector de este Cole-gio y que habloacute laquoDel amor a los libros y el deseo de Diosraquo La exposicioacuten se celebroacute paralelamente en el Colegio Mexicano

A propuesta de los alumnos se convocaron dos reuniones sobre el tema de la exhortacioacuten del Papa Francisco Amoris Laetitia Se tratoacute de un deba-te interdisciplinar preparado por los propios colegiales Se realizaron dos encuentros (11 y 25 de mayo) con la intervencioacuten en la mesa de varios ponentes y una gran afluencia de colegiales

201

3

TESIS Y TESINAS

tesis doctorAles

A lo largo del curso 2015-2016 se han defendido dos tesis recibiendo ambas la maacutexima calificacioacuten

El martes 20 de octubre se celebroacute la defensa de la Tesis doctoral en Teologiacutea dogmaacutetica de sacerdote de Barcelona Juan Ramoacuten Laparra Mar-tiacutenez dirigida por el profesor Norman Tanner y titulada laquoLa cristologiacutea de Calcedonia y la obra de Andreacute de Halleux complementada y confrontada con las aportaciones de Alois Grillmeier y Richard Priceraquo

El jueves 16 de junio tuvo lugar la defensa de la Tesis doctoral en De-recho canoacutenico del sacerdote de la dioacutecesis de Toledo Fernando Palacios en la Universidad Pontificia de la Santa Cruz titulada laquoEl Romano Pontiacute-fice y la liturgia estudio histoacuterico-juriacutedico del ejercicio y desarrollo de la potestad del Papa en materia lituacutergicaraquo El director era el espantildeol Antonio Saacutenchez Gil

tesinAs de licenciAturA

Mikel Aranguren Zubialqui laquoEl discernimiento seguacuten san Ignacio de Lo-yola luz para la espiritualidad sacerdotalraquo

Aacutengel Carnicero Carrera laquoComunioacuten trinitaria y comunioacuten interpersonal a la luz de la obra de Mons Luis F Ladaria SJraquo

Guillermo Cesaacutereo Contiacuten Ayloacuten laquoJesucristo pan de vida eterna simbo-lismo cristoloacutegico y sentido eucariacutestico del panis uite en el pensamien-to de Agustiacuten de Hiponaraquo

Juan Pablo Domiacutenguez Teba laquoAlonso Marcos de Llanes y Arguumlelles Arzobispo de Sevilla en tiempos de la Ilustracioacuten (1783-1795)raquo

David Flores Flores laquoMariacutea coronacioacuten de la obra salviacutefica de la Trini-dad a partir de las aportaciones del Vaticano II y autores selectosraquo

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la ViDa en el Colegio

Eduardo Lorenzo Garciacutea laquoVocacionalizar la Pastoral juvenil Liacuteneas guiacutea para realizar un proyecto de Pastoral juvenil-vocacional en la Dioacutecesis de Orihuela-Alicanteraquo

Jesuacutes Navarro Ortiz laquoEl culto a Santiago el Mayor en Espantildea Oriacutegenes y tradicionesraquo

Hilary Kauseni Ndeke laquoFor he too is a Son of Abraham A redaction-Cri-tical Study of Lk 191-10raquo

Daniel Pellicer Monteagudo laquoLa prueba de la exclusioacuten temporal de la ordinatio ad bonum prolisraquo

Job Prieto Arana laquoEl primer ritual peruano de 1607 Rituale seu Manuale Peruanum de Fray Luis Jeroacutenimo de Oreacuteraquo

Joseacute Manuel Rodriacuteguez Morano laquoLa veneracioacuten de los Santos del Anti-guo Testamento en el Martyrologium Romanum del 2004raquo

Ismael Rojo Peacuterez laquoLa eparquiacutea fuera del territorio patriarcalraquo

La revista Mater Clementissimadel Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute en Romase terminoacute de imprimir el 8 de diciembre de 2016

fiesta de la Inmaculada Concepcioacuten de la Virgen Mariacutea

205

INDICACIONES PARA LOS AUTORES

A norMAs generAles de publicAcioacuten

Dado que la revista Mater Clementissima es un oacutergano de difusioacuten de la investigacioacuten realizada en el Colegio uacutenicamente podraacuten publicar en ella co-legiales o formadores tanto presentes como pasados de este mismo Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma

La extensioacuten de los originales seraacute habitualmente de un miacutenimo de veinte folios DIN-A4 a doble espacio y de un maacuteximo de cuarenta

Los originales se enviaraacuten al correo electroacutenico de la redaccioacuten de la revista cuya direccioacuten es la siguiente

revistacollegiospagnoloorg

El enviacuteo deberaacute hacerse antes del 31 de diciembre del antildeo anterior al de su publicacioacuten indicando direccioacuten postal y electroacutenica del autor institucioacuten donde presta sus servicios y cargo o funcioacuten acadeacutemica que desempentildea

Los originales se presentaraacuten soacutelo en espantildeol Cada original deberaacute venir acompantildeado de un breve resumen en espantildeol e ingleacutes asiacute como de una relacioacuten de palabras claves igualmente en ambos idiomas

El Consejo de Redaccioacuten seleccionaraacute los artiacuteculos para cada nuacutemero una vez recibidos los informes de calidad realizados por dos de los consultores cien-tiacuteficos Esos informes se realizan sobre los originales anoacutenimos y su resultado positivo negativo o condicionado seraacute comunicado debidamente a los autores

Aquellos originales que no se atengan a las normas de citacioacuten y a las reglas de estilo de la revista seraacuten devueltos para su correccioacuten

206

inDiCaCiones para los autores

b norMAs de citAcioacuten

1 Libro normalC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma Roma 2016 100-120

2 Actas de CongresosC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma in Actas del Congreso Interna-cional (Roma 1-2 enero de 2016) vol I Roma 2016 100-120

3 Libro con varios voluacutemenesC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma vol 1 Roma 2016 100-120

4 Libro con varias edicionesC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma 2 ed Roma 2016 100-120

5 Libro de varios autores con texto uacutenico comuacuten a todosC MARTIacuteN - E GARCIacuteA - E ALONSO El Colegio Espantildeol de Roma Roma 2016 100-120

6 Libro dentro de una coleccioacutenC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma [Ciencias eclesiaacutesticas 23] Roma 2016 100-120

7 Parte de un libro de varios autores cada uno con su texto propioC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol in E GARCIacuteA (ed) Los Colegios roma-nos Roma 2016 100-120

8 Voz de diccionario o enciclopediaC MARTIacuteN Colegial in Diccionario de los Colegios vol 2 Roma 2016

100 col 738-784

9 Artiacuteculo en revistasC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma in Estudios Eclesiaacutesticos (EE) 12342 (1998) 100-120

10 Las citas biacuteblicasSeguacuten la Biblia de La Casa de la Biblia

11 Los dos Coacutedigos de Derecho CanoacutenicoCIC 17 c 120 CIC 83 cc 120-123

12 Concilio Vaticano IIUtilizar las siglas comunes seguidas del nuacutemero del documento LG 22

13 Documentos electroacutenicosC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma [en liacutenea] html [ref de 30 marzo 2016] Disponible en httpwwwcolegioorghome

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inDiCaCiones para los autores

c norMAs de estilo

1 FuenteLos originales se presentaraacuten en formato electroacutenico (preferiblemente Word)

utilizando el tipo laquoTimes New Romanraquo en tamantildeo 12 puntos No se utilizaraacuten negritas (bold) ni subrayados Se utilizaraacute la letra cursiva cuando en el texto se empleen teacuterminos o frases en lengua extranjera o en latiacuten

2 PaacuterrafosLos paacuterrafos apareceraacuten justificados y con un interlineado sencillo La prime-

ra liacutenea de cada paacuterrafo apareceraacute sangrada asiacute como la primera liacutenea de cada nota a pie de paacutegina

3 EstructuraLa estructura del trabajo podraacute admitir un maacuteximo de cuatro niveles Las

llamadas a pie de paacutegina se haraacuten en el texto mediante referencias en nuacutemeros araacutebigos en superiacutendice Se utilizaraacute para su composicioacuten un formato de laquoTimes New Romanraquo en tamantildeo 10 e interlineado sencillo

Cuando se repite la cita por segunda vez consecutiva se utilizaraacute Ibid Cuando son segunda vez en varias obras distintas se consignaraacuten despueacutes del nombre del autor las primeras palabras de la obra citada anteriormente

Id (Idem laquoDel mismo autorraquo) se emplearaacute para citar el autor al que se ha hecho referencia inmediatamente antes

LocCit (laquoen el lugar citadoraquo) se usaraacute para enumerar en la misma paacutegina una obra citada anteriormente habiendo otras referencias diferentes intercaladas

Vid (Vide) se usaraacute para una cita ya referenciada con el fin de evitar la re-peticioacuten

Passim (laquoaquiacute y alliacuteraquo en varias partes o pasajes) se usaraacute cuando sea imposi-ble mencionar todas las paacuteginas de las que se extraen las ideas de un autor

Apud (laquocitado porraquo una cita de cita) se utilizaraacute cuando se cite un documento no consultado directamente sino citado por otro autor

Mater ClementissimaRevista de Ciencias eclesiaacutesticas

Nueva eacutepocaNuacutemero 1 - 2016

Nuacutem

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Page 2: Mater Clementissima · 2019. 11. 19. · KeyworDs: Church, Synodality, Collegiality, Primacy, Sensus fidei. El objetivo del presente estudio es indagar «los sujetos de la sinodali

PONTIFICIO COLEGIOESPANtildeOL DE SAN JOSEacute

Mater ClementissimaRevista de Ciencias eclesiaacutesticas

Nueva eacutepocaAntildeo 1 - 2016

ROMA

DIRECTOR EDITORJoseacute San Joseacute Prisco

CONSEJO EDITORIAL EDITORIAL BOARDArgimiro Martiacuten BenitoJavier Malo PeacuterezLope Rubio Parrado

CONSULTORES CIENTIacuteFICOS SCIENTIFIC ADVISORSAurelio Garciacutea Maciacuteas Pontificio Ateneo de San Anselmo (Roma)Dario Vitali Universidad Pontificia Gregoriana (Roma)Jacinto Nuacutentildeez Regodoacuten Universidad Pontificia de SalamancaJoseacute Luis Barriocanal Goacutemez Facultad de Teologiacutea del Norte de Espantildea (Burgos)Juan Manuel Cabiedas Tejero Universidad Pontificia de MeacutexicoLuis A Garciacutea Matamoro Universidad Pontificia de SalamancaSalvador Pieacute i Ninot Facultad de Teologiacutea de Cataluntildea Ateneo San PaciagraveSantiago Guijarro Oporto Universidad Pontificia de SalamancaTeodoro Leoacuten Muntildeoz Vicario general de SevillaVicente Caacutercel Ortiacute Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute (Roma)Viacutector Suaacuterez Gondar ITC y Universidad Pontificia de Salamanca

DIRECCIOacuteN-REDACCIOacuteN Y ADMINISTRACIOacuteN-SUSCRIPCIONES EDITORSHIP AND EDITORIAL STAFF ADMINISTRATION AND SUSCRIPTIONS

e-mail revistacollegiospagnoloorgDireccioacuten Via di Torre Rossa 2 - 00165 ROMA (Italia)Teleacutefono +39 06665971 - Fax +39 0666597724

El Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute en Roma es el editor de Mater Clementissima Revista de Ciencias eclesiaacutesticas

ISSN 2039-1498

El Editor a los efectos previstos en el artiacuteculo 321 paacuterrafo segundo del vigente TRLPI se opone expresamente a que cualquiera de las paacuteginas de esta obra o partes de ella sean utilizadas para la realizacioacuten de resuacutemenes de prensa Cualquier forma de reproduccioacuten distribucioacuten comunicacioacuten puacuteblica o transformacioacuten de esta obra

solo puede ser realizada con la autorizacioacuten de sus titulares salvo excepcioacuten prevista por la ley

3

Mater Clementissima 1 (2016)

SUMARIO SUMMARY

PRESENTACIOacuteN 5

ARTIacuteCULOS ARTICLES

Dario Vitali El Siacutenodo de los obispos al servicio de una Iglesia sinodal los sujetos de la sinodalidad a la luz de la eclesiologiacutea del Vaticano IIThe Synod of Bishops at the service of a synodal Church synodality subjects in the light of the ecclesiology of Vatican II Council 7

Juan Manuel CabieDas teJero El hombre es sujeto y persona La relacioacuten entre trascendentalidad y antropologiacutea en Karl RahnerMan is subject and person Karl Rahner on relationship between transcendentality and anthropology 59

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez La definicioacuten de Calcedonia a traveacutes de sus inteacuterpretes contemporaacuteneosThe Chalcedon definition on the point of view of recent scholars 121

ViCente CaacuterCel ortiacute El Colegio Espantildeol de Roma centro de proacutefugos durante la Guerra civil espantildeolaThe Spanish College of Rome refugees center during the Civil war 143

LA VIDA EN EL COLEGIO

Datos estadiacutesticos del curso 2015-2016 195Acontecimientos maacutes destacados 197Tesis y tesinas 201

5

Mater Clementissima 1 (2016) 5-6

PRESENTACIOacuteN

La revista Mater Clementissima vio la luz por primera vez en enero de 1913 como Boletiacuten de la laquoAsociacioacuten de Nuestra Sentildeora de la Clemen-ciaraquo que habiacutea sido creada y bendecida por el papa san Piacuteo X el diacutea de san Joseacute del antildeo 1912 como asociacioacuten de alumnos y antiguos alumnos del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma

En su primer nuacutemero de enero de 1913 indica el editorial que aparece laquosin otras pretensiones que las de poder servir de nuevo viacutenculo para es-trechar maacutes la unioacuten fraternal que debe ser cada diacutea maacutes iacutentima entre los antiguos alumnos del Colegio Espantildeol bajo los auspicios de la Santiacutesima Virgen de la Clemencia que tantos favores les dispensoacute desde los antildeos que vivieron en Romaraquo (p 4)

A partir de entonces se convierte en el instrumento de comunicacioacuten de la vida interna del Colegio actividades religiosas culturales y festivas visitas resultados acadeacutemicos de los alumnos y de las noticias que llegan de los antiguos alumnos nombramientos publicaciones y apostolados

La Revista no se publicaraacute entre los antildeos 1936 y 1938 por la situacioacuten que se vivioacute con motivo de la Guerra civil espantildeola Aparece de nuevo en 1939 incluyendo la lista de los superiores y alumnos martirizados durante la persecucioacuten religiosa de esos antildeos

Con motivo de la Beatificacioacuten del Fundador (1987) y de la celebra-cioacuten del primer Centenario del Colegio (1992) se publicaron nuacutemeros extraordinarios

A partir del curso 1994-1995 a la Croacutenica del Colegio se comienzan a antildeadir los textos de las conferencias y homiliacuteas pronunciadas en el centro en fechas sentildealadas asiacute como una amplia comunicacioacuten del contenido de las tesis defendidas durante el curso anterior y los tiacutetulos de los trabajos de licenciatura Con ello se intentaba conseguir que la Revista fuera ins-trumento de caraacutecter maacutes acadeacutemico sin dejar de ser cauce de comunica-cioacuten entre los colegiales pasados y presentes

6

presentaCioacuten

Con este nuacutemero de 2016 y tras varios antildeos de edicioacuten solo en for-mato digital la revista Mater Clementissima vuelve a la edicioacuten impresa e inaugura una nueva etapa ahora ademaacutes de Ciencias eclesiaacutesticas El cambio introducido en el tiacutetulo sugiere la orientacioacuten de la publicacioacuten que tendraacute caraacutecter anual y que sin dejar de ser oacutergano de comunicacioacuten entre los colegiales priorizaraacute la difusioacuten de estudios especializados rela-cionados con las Ciencias eclesiaacutesticas

Cuando el 1 de abril de 1892 el Beato Manuel Domingo y Sol fundoacute el Colegio deseaba una verdadera laquorenovacioacuten cientiacutefica y aun disciplinar del clero espantildeolraquo Este curso el Colegio cumpliraacute 125 antildeos desde su fundacioacuten y podemos decir sin temor a equivocarnos que ha cumplido con creces las expectativas del Fundador pues de eacutel han salido ilustres pensadores profesores literatos e investigadores que formando parte de la gran familia del Colegio Espantildeol de San Joseacute han contribuido de ma-nera decisiva en dicha renovacioacuten La revista Mater Clementissima es un foro abierto pensado para ellos un lugar para la difusioacuten del conocimiento y para el debate acadeacutemico

Esperamos que esta iniciativa tenga buena acogida entre los estudiosos y pueda con la ayuda de todos mantenerse en el tiempo con un buen nivel de reflexioacuten El desafiacuteo de seleccionar artiacuteculos mediante el procedimien-to de doble ciego supone la colaboracioacuten de los consultores cientiacuteficos (a quienes desde aquiacute agradecemos su generoso ofrecimiento a colaborar con la Revista) para analizar las propuestas y cuando corresponde pro-poner ajustes a los autores Por parte de los autores se requiere la dispo-sicioacuten para considerar las sugerencias que en definitiva mejoraraacuten su trabajo En otras palabras se trata de establecer un diaacutelogo acadeacutemico que tiene como uacutenica finalidad enriquecer el contenido de lo que se publica

A partir de ahora los lectores seraacuten quienes tengan la palabra sobre el contenido de la Revista y les agradeceremos sus comentarios y sugeren-cias para asegurar la calidad de este proyecto

7

Mater Clementissima 1 (2016) 7-57

El Siacutenodo de los obispos al servicio de una Iglesia sinodal los sujetos de la sinodalidad a la luz de la

eclesiologiacutea del Vaticano II

Dario Vitali1

Pontificia Universidad Gregoriana de Roma

resuMen El 17 de octubre de 2015 concluyendo las celebraciones del 50 aniversa-rio del Siacutenodo de los obispos el Papa Francisco pronuncioacute un discurso de amplio alcance sobre laquoLa Iglesia constitutivamente sinodalraquo A partir de ese discurso este documento propone una amplia y articulada discusioacuten sobre la naturaleza y sujetos de la colegialidad Despueacutes de una primera parte (auditus fidei) que busca en el Concilio Vaticano II las bases de la sinodalidad la segunda parte (intellectus fidei) proporciona los criterios para comprender por queacute la sinodalidad es laquouna dimensioacuten constitutiva de la Iglesiaraquo La naturaleza constitutivamente sinodal de la Iglesia se estudia partiendo de las relaciones que se establecen entre los sujetos de la sinoda-lidad ilustrando las condiciones que hacen posible el ejercicio de la sinodalidad en la Iglesia en los diferentes momentos del proceso sinodal En esta perspectiva se pone en evidencia coacutemo la sinodalidad la colegialidad y el primado son teacuterminos conjuntados armoacutenicamente en el horizonte de una concepcioacuten sinodal de la Iglesia

palabras ClaVe Iglesia sinodalidad colegialidad Primado Sensus fidei

abstraCt laquoThe Synod of Bishops at the service of a synodal Church synodality sub-jects in the light of the ecclesiology of Vatican II Councilraquo On October 17 2015 concluding the 50th anniversary of the Synod of Bishops Pope Francis gave a comprehensive speech on laquoSynodal constitutively Churchraquo From that speech this document proposes a wide and articulated discussion of the nature and subject of synodality After a first part (auditus fidei) looking at Vatican II synodality bases the second part (intellectus fidei) provides the criteria to understand why synodality is laquoa constitutive dimension of the Churchraquo The synodal constitutively nature of

1 El profesor Dario Vitali Director del departamento de Teologiacutea Dogmaacutetica de la Uni-versidad Pontificia Gregoriana es tambieacuten el asesor acadeacutemico del Pontificio Colegio Espa-ntildeol de San Joseacute

Dario Vitali

8

the Church is studied based on the relationships established between the subjects of synodality illustrating the conditions that make possible the exercise of synodality in the Church at different times of the synodal process In this perspective it becomes evident how synodality collegiality and primacy are terms harmonically connected on the horizon of a synodal conception of the Church

KeyworDs Church Synodality Collegiality Primacy Sensus fidei

El objetivo del presente estudio es indagar laquolos sujetos de la sinodali-dad a la luz de la eclesiologiacutea del Vaticano IIraquo Si se interpretase literal-mente el tiacutetulo se podriacutea considerar la cuestioacuten como no resuelta el Con-cilio Vaticano II no trata ex professo la sinodalidad Las 140 menciones de laquosiacutenodoraquo se refieren siempre al Concilio sin querer nunca entender la sinodalidad como elemento caracterizador de la Iglesia2 La atencioacuten de los Padres Conciliares se dirigiacutea hacia otra cuestioacuten en concreto al tema de la colegialidad y la sinodalidad como proceso relativo al entero Pue-blo de Dios ademaacutes de no formar parte de su horizonte de intereses era desconocida en gran medida La cuestioacuten no debe sorprender demasiado un milenio de ejercicio de autoridad jeraacuterquica inspirado en el modelo de la monarquiacutea y asegurando las prerrogativas papales que culmina con el Concilio Vaticano I habiacutea cancelado el principio de la sinodalidad en la vivencia eclesial y habiacutea oscurecido la conciencia sobre la naturaleza sinodal de la Iglesia

Por otra parte es cierto que la cuestioacuten de la sinodalidad no podiacutea emerger en la Iglesia Catoacutelica si antes no se hubiera resuelto la cuestioacuten de la relacioacuten entre Papa y Colegio que ya surgioacute en el Concilio Vaticano I y que fue expliacutecitamente introducida como tema en el capiacutetulo III de la Lumen gentium Se trata de retomar las cuestiones a nivel de historia y de hermeneacuteutica de los textos conciliares tratando de ver sobre la base y en el respeto de estos una comprensioacuten original de la sinodalidad en-tendida sobre todo como dimensioacuten constitutiva de la Iglesia en la que la celebracioacuten de la asamblea del Siacutenodo de los obispos sea la imagen (logo) ejemplar de un camino sinodal de la Iglesia y en la que todos cada uno seguacuten su propia condicioacuten sean protagonistas

2 Cfr X OCHOA Index verborum cum documentis Concilii Vaticani Secundi Roma 1967 484-485

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

9

Este escrito se articularaacute en dos partes La primera de caraacutecter maacutes hermeneacuteutico se centraraacute en localizar los teacuterminos de la cuestioacuten en el Concilio Vaticano II es este el momento del audius fidei La segunda de caraacutecter maacutes sistemaacutetico deduciraacute de los teacuterminos precedentemente ex-puestos el perfil de una laquoIglesia constitutivamente sinodalraquo3 articulando a continuacioacuten los elementos de la sinodalidad con el cuadro eclesioloacutegi-co que emergioacute del Concilio Vaticano II este es el momento del intellec-tus fidei Entre liacuteneas se podraacute leer a traveacutes de su desarrollo el escenario dibujado por el Papa Francisco en el discurso pronunciado con ocasioacuten del quincuageacutesimo aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo

1 Auditus fidei

El accidentado recorrido del capiacutetulo III de la Lumen gentium mues-tra lo fatigoso que resulta volver atraacutes sobre todo si estaacuten en juego no los errores a combatir o a corregir sino diferentes visiones de Iglesia Y la visioacuten de Iglesia que llega al Vaticano II es la que ha madurado a lo largo de todo un milenio a partir de la reforma gregoriana y a traveacutes de procesos cada vez maacutes subrayados que van a estructurar en teacutermi-nos profundamente radicalizados el modelo piramidal de Iglesia No es necesario recorrer aquiacute la historia del segundo milenio Pero siacute es perti-nente recordar algunos elementos que han sentildealado la autocomprensioacuten de la Iglesia

11 El punto de partida la reforma gregoriana

En primer lugar estaacute el cisma de Oriente que lleva a la Iglesia a una fractura tan profunda como dolorosa en un frente Bizancio custodio ce-loso de una estructura sinodal de la Iglesia apoyada en la continuacioacuten de las instituciones del primer milenio cristiano que continuacutea con la repeti-cioacuten de su modelo eclesioloacutegico transferido tambieacuten a la tercera Roma en el otro la Ecclesia romana que despueacutes de haber guiado la transicioacuten del Imperio romano al Sacro Imperio Romano se encuentra ahora en una posicioacuten privilegiada en la construccioacuten de una Europa fundada sobre la base de la identidad cristiana

3 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos (17-X-2015)

Dario Vitali

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Constituiriacutea un error sin embargo pensar en un primado paciacuteficamente reconocido y aceptado tanto desde el aacutembito civil como desde el eclesial Las Iglesias locales aun no reivindicando la autocefalia como en Oriente ciertamente se moviacutean con mucha autonomiacutea respecto a un centro fuer-temente debilitado por las intrigas de las familias romanas en lucha por acaparar el solio pontificio Por otro lado en la organizacioacuten de la Iglesia perduraba auacuten la estructura del primer milenio con dioacutecesis sedes metro-politanas y regiones eclesiaacutesticas donde la autoridad papal veniacutea modula-da a escala de los tiacutetulos papales obispo de Roma metropolita del Lacio primado de Italia patriarca de Occidente Maacutes allaacute de la retoacuterica sobre la funcioacuten universal del Papa su influencia efectiva ndashcomo demuestra el cuadro de participantes en los siacutenodos romanosndash se limitaba de facto a las sedes inmediatamente sometidas a la Ecclesia romana

La situacioacuten cambioacute radicalmente con la reforma gregoriana que in-cidioacute en el cuadro institucional de la Iglesia La lucha por moralizar al clero llevoacute al Papado a la confrontacioacuten frontal con el emperador clave y fundamento de aquel sistema de la Iglesia imperial ndashla Reichskirchendash que subordinando el nombramiento de los obispos al placet del rey termina-ba por vincular la jerarquiacutea eclesiaacutestica a la loacutegica del poder laico Seraacute Hildebrando de Soana recieacuten elegido al trono papal como Gregorio VII quien advierta como interferencia inaceptable el sistema de investiduras laicas4 un nudo a cercenar maacutes que a deshacer para garantizar la Libertas Ecclesiae

La victoria del Papado reformador llevaraacute al sucesor de Pedro al veacutertice de la respublica christiana al lugar del emperador que tambieacuten en occi-dente era considerado la cabeza de la cristiandad y que interveniacutea directa-mente en la vida de la Iglesia seguacuten los caacutenones del cesaropapismo

Este hecho tendraacute repercusioacuten sobre la estructura interna de la Iglesia para desarraigar la mezcolanza entre Iglesia y Reino entre los obispos electores y el emperador no bastaba con excomulgar a este uacuteltimo era necesario sustraer a los obispos de la esfera del poder imperial y vincular-

4 Antes de Gregorio VII la accioacuten de los reformadores se centroacute maacutes en luchar contra la simoniacutea para combatirla Pier Damiani ciertamente el reformador maacutes representativo anterior a la eleccioacuten de Gregorio VII no dudoacute en solicitar la intervencioacuten del emperador incluso contra el Papa como demuestra el caso de Gregorio VI El cambio de acento hacia una comprensioacuten maacutes laquopoliacuteticaraquo del problema concentrada en la lucha por las investiduras se impone con la eleccioacuten de Hildebrando de Soana Me permito hacer alusioacuten a una contribucioacuten miacutea D VI-TALI La Chiesa da riformare lrsquoecclesiologia damianea in M TAGLIAFERRI (dir) Pier Damiani Lrsquoeremita il teologo il riformatore (1007-2007) Bologna 2009 197-232

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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les maacutes estrechamente a Roma Encuentra justificacioacuten aquiacute el Dictatus Papae en el cual Gregorio VII afirma que laquoel Papa puede destituir o resta-blecer a los obisposraquo5 y lo puede hacer sin tener que pasar necesariamente por un siacutenodo6 La victoria sobre el imperio iraacute modificando los equili-brios internos de la Iglesia desencadenando un proceso de concentracioacuten de todo poder en las manos del Papa Por esta viacutea se reafirma la idea de que el Obispo de Roma sea cabeza no solo de una Iglesia de antigua fundacioacuten que desempentildea un servicio para la unidad de las Iglesias sino de la Iglesia Universal misma Como fundamento de tal pretensioacuten los teoacutelogos de la reforma desarrollan la tesis de una fundacioacuten divina de la Iglesia de Roma como prueba de superioridad sobre otras Iglesias que solo pueden preciarse de una fundacioacuten apostoacutelica laquoTuacute eres Pedro y sobre esta piedra edificareacute mi Iglesiaraquo (Mt 1618)7

Si el primado sostenido por Gregorio VII ndashquien continuoacute convocan-do los siacutenodos de otontildeo y de cuaresma una demostracioacuten de coacutemo la estructura sinodal estaba profundamente radicada tambieacuten en Romandash fue maacutes ideal que real sin embargo el Dictatus Papae pone las bases para el paso a un poder personal del Papa Este se revelaraacute acabado con Inocen-cio III no por casualidad el primero que recurrioacute establemente al tiacutetulo de vicarius Christi utilizando la tiara siacutembolo de la plenitudo potestatis que laquoreuniacutea tanto los aspectos sacerdotales como los imperiales de su funcioacutenraquo8 Se pueden hallar aquiacute in nuce todos los elementos que es-tructuraraacuten el modelo piramidal de Iglesia el cual encuentra su punto de llegada en el Vaticano I

El paso de la sedes a la sedens de la Iglesia de Roma a su obispo ya proyectado hacia un poder universal de jurisdiccioacuten no se refleja uacuteni-camente en la relacioacuten entre el Papa y los obispos reducidos a funciona-rios del Papa pastor de toda la Iglesia Tambieacuten el pueblo de Dios queda privado de cualquier capacidad activa los presagios de la infalibilidad pasiva de los fieles afirmados despueacutes del Vaticano I ya se encuentran

5 Sentencia n 3 laquoQuod ille solus possit deponere episcopos vel reconciliare Solo eacutel [el Romano Pontiacutefice] puede destituir o readmitir a los obisposraquo

6 Sentencia n 25 laquoQuod absque synodali conventu possit episcopos deponere et recon-ciliare Eacutel puede al margen de una asamblea sinodal destituir o readmitir a los obisposraquo

7 Para la argumentacioacuten cfr PIER DAMIANI Carta 58 ai Cardinali Vescovi in Opere di Pier Damiani I3 cartas (41-67) Roma 2002 110-121

8 A PARAVICINI BAGLIANI Tiara in Diccionario Enciclopeacutedico del Medioevo Ro-ma 1999 1913

Dario Vitali

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en el paso de la Iglesia como comunioacuten de Iglesias del primer milenio a la Iglesia universal del segundo milenio No se trata igual que para los obispos de un efecto deseado sino de una consecuencia de la nueva con-figuracioacuten de la Iglesia en la cual la universitas fidelium se reduce de he-cho a una masa confusa Por maacutes que se continuacutee repitiendo el proverbio de que la totalidad de los bautizados in credendo deficere non potest 9 se inicia en este tiempo el proceso que llevaraacute a traveacutes de un recorrido mar-cado por contrastes y oscilaciones a afirmar en el Concilio Vaticano I la infalibilidad del Papa cuando habla ex cathedra como laquopastor y doctor de todos los cristianosraquo10

12 El punto de llegada El Concilio Vaticano I

El momento maacutes dramaacutetico de tal recorrido lo representa la llegada del conciliarismo frente al escaacutendalo de una Iglesia dividida en dos y posteriormente en tres obediencias la uacutenica autoridad en condiciones de preservar a la Iglesia del error pareciacutea el Concilio en cuanto repre-sentacioacuten tambieacuten visible de la universitas fidelium que precisamente no puede equivocarse en el creer El Papa personifica tal infalibilidad o in-defectibilidad de la universitas fidelium como cabeza de la Iglesia con la condicioacuten de no desviarse de la fe de todos en cuyo caso decaeriacutea ipso facto de su funcioacuten tal como recitaba la teologiacutea del tiempo planteando la hipoacutetesis de la figura del Papa a fide devius o del Papa haereticus11 Como cabeza de la Iglesia eacutel es tambieacuten cabeza del Concilio por ser este en su composicioacuten articulada representacioacuten visible de la Iglesia12 con

9 Dice con conocimiento de causa Congar laquoSi hay una afirmacioacuten constante en los testi-gos de la Tradicioacuten es precisamente que judicium Ecclesiae universalis errare in his quae ad fidem pertinent impossibile estraquo Y M CONGAR Infalibilidad e indefectibilidad Sobre el concepto de laquoinfalibilidadraquo in iquestInfalible Rahner-Congar-Sartori-Ratzinger-Schnackenburg y otros especialistas contra Hans Kuumlng Roma 1971 90

10 CONCILIO VATICANO I Constitucioacuten dogmaacutetica Pastor Aeternus capiacutetulo IV laquoEl magisterio infalible del romano Pontiacuteficeraquo in DZ 3065-3075

11 Baste como ejemplo la querella sobre la pobreza que enfrentoacute a Juan XXII con los franciscanos a raiacutez de la publicacioacuten del laquoDiaacutelogo contra el Papa hereacuteticoraquo de Guillermo de Ockham antes de la muerte del Papa (1334) Para comprender el origen y desarrollo de la doc-trina sobre la infalibilidad cfr B TIERNEY Origins of Papal infallibility 1150-1350 A study of the concepts of infallibility sovereignty and tradition in the Middle Ages Leiden 1972

12 Se entiende en este sentido la participacioacuten en el Concilio con voz activa de los teoacutelogos (las universidades) y de los representantes de las naciones con la idea de una representacioacuten completa de la cristiandad Solo a partir del Concilio de Trento se volveraacute a reservar el derecho al voto uacutenicamente a los obispos abades y superiores generales de las distintas oacuterdenes

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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la tarea de fijar la fe en decretos doctrinales y disciplinares que le corres-ponde al Papa promulgar13

El punto de desacuerdo entre los dos frentes se encuentra en quieacuten tiene la funcioacuten de laquopersonificarraquo a la totalidad de los fieles infalible en el creer si el Concilio o el Papa Ambos tienen motivos para sostener la propia posicioacuten porque maacutes allaacute de las razones de la colisioacuten estaba claro que la infalibilidad reivindicada por el Papa o por el Concilio es siempre la de la Iglesia No es casual que la deriva conciliarista se torne irreversi-ble en el momento en el que llega a declarar que el Concilio es infalible por siacute mismo con independencia de la fe de la Iglesia

En esta situacioacuten de impass se abre camino la idea de laquoun viacutenculo re-ciacuteproco entre el Papa y la Iglesiaraquo14 en razoacuten del cual laquola decisioacuten uacuteltima en cuestiones de fe recae sobre el Papa y sin eacutel no es posible una decisioacuten infalibleraquo15 No obstante unos y otros opinan que no es la infalibilidad del Papa la que garantiza la de la Iglesia sino viceversa laquoel Papa goza de esa infalibilidad de la que el Divino Redentor ha querido dotar a la Iglesiaraquo16 Esto no implica que le venga delegada desde abajo puesto que el Papa expresa la fe de la Iglesia no sobre la base de un consenso sino en cuanto cabeza del cuerpo eclesial al que siempre estaacute conectado y unido vitalmente De aquiacute a excluir un error del Papa en cuanto induciriacutea a error a la Iglesia solo hay un paso17

El Vaticano I constituiraacute el punto de llegada de este agitado proceso uniendo al primado la plenitudo potestatis exige como condicioacuten de la

13 Cfr STh II-II q1 a1014 K SCHATZ Il primato del Papa La sua storia dalle origini ai nostri giorni Brescia

1996 17515 Ibid 17516 Schatz explica este paso mostrando la diferencia entre autores como Antonino di Fi-

renze para el cual laquoes infalible la Iglesia en su conjuntoraquo y por tanto el Papa participa de la infalibilidad de la Iglesia y Cayetano que ni siquiera un siglo maacutes tarde excluye el error del Papa para salvaguardar la fe de la Iglesia cfr K SCHATZ Il primato del Papa 175-176

17 Ninguno de los 15 capiacutetulos del esquema preveacute la cuestioacuten I) Ecclesiam esse corpus Christi mysticum II) Christianam religionem nonnisi in Ecclesia et per Ecclesiam a Chris-ti fundatam excoli posse III) Ecclesiam esse societatem veram perfectam spiritualem et supernaturalem IV) Ecclesiam esse societatem visibilem V) De visibili Ecclesiae unitate VI) Ecclesiam esse societatem ad salutem consequendam omnino necessariam VII) Extra Ecclesiam salvari neminem posse VIII) De Ecclesiae indefectibilitate IX) De Ecclesiae in-fallibilitate X) De Ecclesiae potestate XI) De Romani Pontificis primatu XII) De temporali Sanctae Sedis dominio XIII) De concodia inter Ecclesiam et societatem civilem XIV) De iure et usu potestatis civilis secundum Ecclesiae Catholicae doctrinam XV) De specialibus quibusdam Ecclesiae iuribus in relatione ad societatem civilem cfr Primum schema consti-tutionis de Ecclesia Christi laquoSupremi Pastorisraquo MANSI 51 539A-636A

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eficacia y perfeccioacuten de su gobierno la infalibilidad como propiedad que no vincula ni subordina al Papa al consenso de la Iglesia o del cuerpo episcopal Este paso no previsto inicialmente ndashcomo se deduce del sche-ma de Ecclesia Supremi pastoris18ndash surgioacute durante el debate conciliar como punto sin vuelta atraacutes si se queriacutea realmente garantizar la autoridad del Papa frente a cualquier ataque proveniente de fuera o de dentro de la Iglesia Pastor aeternus19 asociaba laquola suprema potestad de magisterioraquo definiendo solemnemente el dogma de la infalibilidad del Pontiacutefice cuan-do habla ex-cathedra

El Romano Pontiacutefice cuando habla ex cathedra esto es cuando en el ejer-cicio de su oficio de pastor y maestro de todos los cristianos en virtud de su suprema autoridad apostoacutelica define que una doctrina de fe o costumbres debe ser sostenida por toda la Iglesia posee por la asistencia divina que le fue prometida en el bienaventurado Pedro aquella infalibilidad de la que el divino Redentor quiso que gozara su Iglesia en la definicioacuten de la doctrina de fe y costumbres Por esto dichas definiciones del Romano Pontiacutefice son irreformables ex sese non autem ex consensu Ecclesiae20

En el debate en el aula sobre la infalibilidad pontificia no faltaron las menciones a las otras dos autoridades ndashla totalidad de los fieles y los Con-ciliosndash infalibles en la interpretacioacuten del depoacutesito revelado21 La minoriacutea aun admitiendo la posibilidad de definir el dogma insistiacutea en que dicha definicioacuten podiacutea comprometer los iura Episcoporum Se comprende en esta liacutenea la afirmacioacuten seguacuten la cual laquola potestad del Sumo Pontiacutefice no conlleva prejuicio alguno a la potestad de jurisdiccioacuten episcopal ordinaria

18 Cfr DZ 3053-3064 los capiacutetulos 1-3 de Pastor Aeternus corresponden a los capiacutetulos IX X y XI del laquoschema de Ecclesiaraquo

19 DZ 307420 Por otro lado hubiese sorprendido lo contrario puesto que los Padres habiacutean sido

formados en la controversia teoloacutegica que habiacutea establecido la doctrina sobre los loci theo-logici interpretativi Despueacutes de la Sagrada Escritura y la Tradicioacuten establecidos como loci theologici constitutivi Melchor Cano indicaba en secuencia la Ecclesia Catholica (esto es la totalidad de los fieles) los Concilia (es decir el corpus Episcoporum) y la Ecclesia Ro-mana (el Papa) como loci theologici interpretativi dotados de infalibilidad cfr MELCHOR CANO De locis theologicis libri duodecim Salamanca 1563 [edicioacuten latino-espantildeola] Ma-drid 2006

21 Para una visioacuten maacutes extensa sobre la cuestioacuten cfr G DEJAIFVE Primato e colle-gialitagrave nel Concilio Vaticano I in Y M CONGAR - B D DUPUY (eds) Lrsquoepiscopato e la Chiesa universale Roma 1965 795-821 H J POTTMEYER Recent Discussion on Prima-cy in relation to Vatican I in W KASPER (ed) Il ministero petrino Cattolici e Ortodossi in dialogo Roma 2004 227-247

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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e inmediata en virtud de la cual los obispos establecidos por el Espiacuteri-tu Santo (cfr Hch 2028) como sucesores de los apoacutestoles en cualidad de verdaderos pastores apacientan y gobiernan el rebantildeo que les ha sido confiadoraquo22 Hasta queacute punto eran fundados los temores de la minoriacutea re-sultoacute evidente en la poleacutemica desencadenada en Alemania por el Canciller Von Bismarck seguacuten el cual la definicioacuten del Vaticano I determinaba la peacuterdida de la jurisdiccioacuten episcopal totalmente absorbida por la papal23 Piacuteo IX24 ndashobligado o convencido es difiacutecil de decirndash confirmoacute la respues-ta de los obispos alemanes seguacuten los cuales laquoigual que el Papado es de institucioacuten divina asiacute mismo lo es tambieacuten el episcopado y tambieacuten eacuteste tiene sus derechos en virtud de tal institucioacuten que el Papa no tiene el de-recho ni el poder de cambiarraquo25

En relacioacuten con la totalidad de los fieles ndashla Ecclesia Catholica seguacuten los loci theologici de Melchor Cano26ndash fue en cambio el cardenal Guidi quien sostuvo en un discurso que impactoacute notablemente en el aula que el Papa define una verdad no laquoarbitrariamente y solo independientemente o al margen de la Iglesiaraquo27 sino sobre la base del sensus fidei de la Iglesia universal del que puede informarse o que puede conocer laquoescuchando la opinioacuten de los obispos que le manifiestan la tradicioacuten de sus Iglesiasraquo28 El hecho de depender de la fe de la Iglesia no subordina al Papa a actuar o pronunciarse bajo consenso de la fe de los fieles El ejercicio del magiste-rio pontificio queda siempre libre como habiacutea demostrado claramente el dogma de la Inmaculada Concepcioacuten definido pocos antildeos antes en virtud de aquella singularis Antistitum ac fidelium conspiratio29 manifestada por los obispos de todo el mundo como respuesta a la consulta lanzada por el mismo Piacuteo IX30

La intervencioacuten del cardenal Guidi consiguioacute que se incluyera en el texto un pasaje en el que se reconoce que en el ejercicio de su magisterio

22 DZ 306123 DH 3112 En este nuacutemero estaacuten recogidas y resumidas las propuestas de la circular de

Von Bismarck que distorsionan las afirmaciones del Vaticano I A estas responden los obispos punto por punto cfr DH 3113-3116

24 PIacuteO IX Carta apostoacutelica Mirabilis illa constantia (4-III-1875) DH 311725 DH 311526 MELCHOR CANO De loci theologici libri duodecim liber IV De Ecclesia Catholica27 MANSI 52 747C para el discurso completo cfr MANSI 52 740A-748A28 Ibid29 PIacuteO IX Bula Ineffabilis Deus (8-XII-1854) Pii IX Acta I1 597-61930 PIacuteO IX Enciacuteclica Ubi primum (2-II-1849) Pii IX Acta I1 162-166

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los Papas hacen uso y recurren a formas de cooperacioacuten laquoseguacuten lo exigi-do por las condiciones de los tiempos y las circunstancias ora convocan-do Concilios ecumeacutenicos ora intentando sondear la opinioacuten de la Iglesia esparcida por la tierra con siacutenodos particulares ora sirvieacutendose de otros medios que la Divina Providencia ponga a su disposicioacutenraquo31 A la consulta recurriraacute tambieacuten Piacuteo XII como medio para verificar la fe de la Iglesia respecto a la definicioacuten de la Asuncioacuten de Mariacutea32 de donde emerge tanto la fe del pueblo cristiano como la funcioacuten del episcopado como testigo y garante del sensus fidei de toda la Iglesia

13 Un nuevo punto de partida El Concilio Vaticano II

A causa de la suspensioacuten sine die del Vaticano I no se pudo concluir el debate relativo al schema constitutionis secundae de Ecclesia33 Mu-chas de las cuestiones contenidas en aquel texto entraron oportunamente revisadas en el schema de Ecclesia entregado a los Padres al final de la primera sesioacuten del Concilio Vaticano II Entre estas cuestiones sobresale la del episcopado incluido a lo largo de los capiacutetulos tercero y cuarto sobre la sacramentalidad del episcopado34 y el ministerio episcopal35

En el tercer capiacutetulo el schema toma distancia con respecto a la teo-logiacutea de la escuela que siguiendo la liacutenea del Concilio de Trento leiacutea el episcopado en clave de la potestas jurisdiccionis36 La discontinuidad se puede constatar en la afirmacioacuten de que laquoel episcopado pertenece sin duda al sacramento del Orden y es el sacerdocio en el grado maacuteximo (praecel-lenti) considerado por los Santos Padres y por la tradicioacuten lituacutergica como

31 DH 306932 Cfr PIacuteO XII Enciacuteclica Deiparae Virginis (1-V-1946) AAS 42 (1950) 782-783 la

definicioacuten dogmaacutetica se encuentra incluida en la constitucioacuten apostoacutelica Munificentissimus Deus (1-XI-1950) AAS 42 (1950) 767-770

33 Schema constitutionis secundae de Ecclesiae laquoTametsi Deusraquo MANSI 53 308A- 317A

34 Schema de Ecclesia Caput III laquoDe Episcopatu ut supremo gradu sacramenti ordinis et de sacerdotioraquo (nn 11-12) Acta Synodalia IIV 23-24

35 Schema de Ecclesia caput IV laquoDe Episcopis residentialibusraquo (nn 13-16) Acta Sy-nodalia IIV 27-34

36 La construccioacuten del discurso se asienta sobre la foacutermula binaria potestas ordinis-po-testas jurisdictionis en la frase de apertura en la que se declara que Cristo laquoha instituido en la Iglesia una auteacutentica potestad de magisterio y gobierno (docendi et gubernandi) que era por su naturaleza unida con un viacutenculo estrecho a la potestad de santificacioacuten otorgada con el sacramento del Ordenraquo Schema de Ecclesia n 11 laquoEpiscopatus ut sacramentumraquo Acta Synodalia IIV 23

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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el sumo sacerdocio el veacutertice del sagrado ministerioraquo37 Siempre haciendo mencioacuten a la tradicioacuten de Oriente y Occidente el schema reitera que laquoel episcopado es verdadera y propiamente el grado supremo del Ordenraquo des-de el momento en el que laquocon la imposicioacuten de las manos y las palabras de consagracioacuten viene conferida la gracia del Espiacuteritu Santoraquo38

El capiacutetulo cuarto desarrolla el tema de los obispos residenciales en cuatro paacuterrafos estrechamente relacionados partiendo de la funcioacuten y dig-nidad de los obispos (n 13) concluye con el Colegio de los obispos (n 16) pasando por distintas aclaraciones sobre su relacioacuten con el Papa (n 14) y con la Iglesia universal (n 15) Toda la argumentacioacuten estaacute vinculada a Cristo mismo el cual ha puesto a los obispos a apacentar la Iglesia de Dios Sobre la base de tal presupuesto el schema afirma que laquolos distintos obis-pos como vicarios y mensajeros de Cristo dirigen como padres y pastores de su rebantildeo las Iglesias a ellos confiadas con potestad episcopal propia ordinaria e inmediata en unidad y bajo la autoridad del Romano Pontiacutefi-ceraquo39 para posteriormente ilustrar con detalle el ministerio de los obispos al servicio de su propia Iglesia

A continuacioacuten el schema explica la relacioacuten entre el primado y el episcopado utilizando la distincioacuten entre potestas ordinis y jurisdictio-nis laquola ordenacioacuten confiere ademaacutes de su funcioacuten santificadora tambieacuten aquella de magisterio y de gobierno que los obispos reciben del gobierno supre mo de la Iglesiaraquo teniendo el Papa laquola preeminencia [principatum] sobre otras potestades ordinarias y una potestad de jurisdiccioacuten inmedia-ta y episcopal en todas y cada una de las Iglesias como tambieacuten sobre todos y cada uno de los obispos de los fieles y pastoresraquo40 El paacuterrafo que se presenta a continuacioacuten ilustra la relacioacuten de cada uno de los obispos con la Iglesia universal un paacuterrafo particularmente elaborado y mejor ar-ticulado de lo que se aproboacute en aula

Dado que todos y cada uno de los obispos son centro y fundamento y prin-cipio de unidad en sus Iglesias particulares desde el momento que y a partir de las cuales formadas a imagen y semejanza de la Iglesia universal existe

37 Ibid38 Ibid39 Schema de Ecclesia n 13 laquoEpiscoporum munus et dignitasraquo Acta Synodalia IIV

25 Ibidem Afirmando la sacramentalidad del episcopado se modifica la relacioacuten con los pres-biacuteteros el n 12 afirma la superioridad de los obispos sobre los presbiacuteteros sosteniendo que estos aun sin tener o estar en el veacutertice del sacerdocio actuacutean sin embargo in persona Christi

40 Schema de Ecclesia n 14 laquoPrimatus et Episcopatusraquo Acta Synodalia IIV 26

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una y uacutenica Iglesia Catoacutelica cuyo centro y fundamento y principio de unidad es el sucesor de Pedro como vicario de Cristo mismo subyace que cada uno representa la propia Iglesia y todos junto con el Papa representan a la Iglesia toda [Ecclesia tota] en el viacutenculo de la paz y del amor 41

El capiacutetulo concluye con un paacuterrafo sobre el Colegio de obispos que constituye el punto de llegada de toda la argumentacioacuten Este Colegio que sucede al Colegio de los Apoacutestoles en el magisterio y en el gobierno pastoral maacutes auacuten en el cual permanece continuamente el Colegio de los Apoacutestoles y por medio del cual se hace manifiesta continuamente la misioacuten de Cristo mismo y su doctrina y sus leyes ha de considerarse sujeto con plena y suprema potestad sobre toda la Iglesia siempre en unidad con su cabeza [una cum capite suo] el Romano Pontiacutefice y nunca sin esta cabeza Sin embargo la potestad de dicho Colegio si bien ordinaria en cuanto a lo relativo al oficio solo puede ser legiacutetimamente ejercitada en modo ex-traordinario con la debida subordinacioacuten al vicario de Cristo en la tierra como y cuando eacutel lo quiera conceder En cuanto a la constitucioacuten de este sacro Colegio son miembros de derecho todos los obispos residenciales que esteacuten en paz con la Sede apostoacutelica y ninguacuten obispo residencial o no puede pertenecer a tal Colegio si no ha sido introducido en eacutel por el sucesor de Cristo vicario de Cristo y cabeza del Colegio o directamente o por taacutecito consenso42

El desarrollo del tema en el capiacutetulo es lineal y ciertamente maacutes claro que el textus prior los dos capiacutetulos relativos al episcopado han sido ampliamente revisados y refundidos en un solo capiacutetulo presentando co-rrecciones al texto que no siempre lo mejoran El schema entregado a los Padres al inicio del segundo periodo conciliar se reduce de hecho a cuatro

41 Schema de Ecclesia n 15 laquoRelatio Episcoporum ad totam Ecclesiamraquo Acta Syno-dalia IIV 26-27 El texto definitivo corrige parcialmente el textus prior que altera insoacute-litamente el schema de Ecclesia De este modo rezaba el textus prior laquoAsiacute como [sicut] el Romano Pontiacutefice como sucesor de Pedro es principio y fundamento visible de la unidad sea de los obispos como de la multitud [de los bautizados] asiacute [ita] cada obispo es principio y centro de la unidad en sus respectivas Iglesias particulares edificadas a imagen de la Iglesia universal en las cuales y a partir de las cuales existe una y uacutenica Iglesia catoacutelica Por lo cual [Qua de causa] cada uno de los obispos representa a su propia Iglesia y contemporaacutenea-mente todos con el Papa a la Iglesia entera [Ecclesia tota] en el viacutenculo de la pazraquo cfr Acta Synodalia III 236 Desapareciendo la estrecha comparacioacuten ndashita-utndash por una indicacioacuten de Pablo VI el texto definitivo resultaba construido sobre la yuxtaposicioacuten entre la funcioacuten del Papa en relacioacuten con la Iglesia Universal y la funcioacuten de los obispos en sus Iglesias Para un comentario maacutes extenso cfr D VITALI Verso la sinodalitagrave 27-34

42 Schema de Ecclesia n 16 laquoCollegium Episcoporumraquo Acta-Synodalia IIV 27

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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capiacutetulos solamente43 el segundo de los cuales se centra en la constitu-cioacuten jeraacuterquica de la Iglesia y particularmente del episcopado44 El hecho de unir dos capiacutetulos de contenido diverso produce un giro o cambio de perspectiva ndashy de loacutegicandash en la comprensioacuten del episcopado

Mientras el punto de partida del schema de Ecclesia era el ministerio episcopal sobre la base del cual se deduciacutea la sacramentalidad del epis-copado en el schema prior todo esto pasa a la cuarta seccioacuten en la que se desarrollan con detalle los tria munera de los obispos La eleccioacuten en el orden de redaccioacuten determina que el tema del Colegio aparezca ex abrup-to detraacutes del paacuterrafo relativo a los presbiacuteteros y los diaacuteconos laquoComo en el Evangelio por voluntad del Sentildeor Pedro y los apoacutestoles constituyen un solo Colegio apostoacutelico de la misma manera el sucesor de Pedro el Ro-mano Pontiacutefice y los obispos sucesores de los apoacutestoles son constituidos en unidad [inter se coniunguntur]raquo45 Privada de la referencia que la remite directamente a la funcioacuten episcopal el tema de la colegialidad se convier-te en una prolongacioacuten de la primera seccioacuten del capiacutetulo centrada en la sucesioacuten apostoacutelica Por esta razoacuten el textus emendatus con maacutes loacutegica desplazaraacute el paacuterrafo sobre los presbiacuteteros y diaacuteconos al final del capiacutetulo ofreciendo un desarrollo consecuente de la materia unida y vuelta a co-nectar directamente de este modo a la doctrina sobre la sacramentalidad del episcopado Se entiende desde esta perspectiva que el texto insista sobre el laquocaraacutecter y la naturaleza colegial del orden episcopalraquo46

43 Pars I Introductio (n 1) caput I De Ecclesiae mysterio (nn 2-10) caput II De constitutione hierarchica Ecclesiae et in specie de episcopatu (nn 11-21) Pars II caput III De Populo Dei et speciatim de laicis (nn 22-27) caput IV De vocatione ad sanctitatem in Ecclesia (nn 28-36) cfr Acta Synodalia III 215-281 La Comisioacuten teoloacutegica examinoacute to-das las animadversiones scriptae relativas a la primera parte del schema de Ecclesia dejando aquellas relacionadas con la segunda parte

44 El capiacutetulo I se articula en 11 paraacutegrafos (nn 11-21) que recogen y ampliacutean los capiacutetulos II y IV del schema precedente La relatio divide el capiacutetulo en dos partes y cuatro secciones En la primera parte (nn11-15) la primera seccioacuten (nn 11-12) funda la doctrina del episcopado en la sucesioacuten apostoacutelica la segunda (nn13-15) trata ex professo la sacra-mentalidad del episcopado En la segunda parte del capiacutetulo laquola tercera seccioacuten (nn 16-17) expone la doctrina del cuerpo o Colegio de los obispos tratando sobre todo la relacioacuten con su cabeza el Romano Pontiacutefice y posteriormente la de los obispos entre siacute y con toda la Iglesiaraquo la cuarta (nn 18-21) describe el ministerio de los obispos ilustrando cada uno de los tria munera docendi santificandi regendi Acta Synodalia III 254

45 Acta Synodalia III 25546 Resulta de gran intereacutes el comentario a la tercera seccioacuten nn 16-17 laquo16 El orden de

los obispos constituye un cuerpo o Colegio particular [aliquod] en el que se aclara ante todo la relacioacuten con su cabeza relacioacuten que se corresponde con la prerrogativa de Pedro sobre el Colegio de los Apoacutestoles Esto es porque el Colegio sin su cabeza no es auteacutentico Aquel

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14 La colegialidad

Los doce paacuterrafos de LG 3 (nn 18-29) claramente diferenciados en dos partes desarrollan la dimensioacuten jeraacuterquica de la Iglesia desde la clave del ministerio episcopal Tras el preaacutembulo (n 18) la primera parte introduce la sacramentalidad del episcopado vinculaacutendola a la sucesioacuten apostoacutelica (nn 19-21) para aclarar despueacutes la cuestioacuten de la colegialidad (nn 22-23) especificando la relacioacuten del Colegio con la cabeza pero tambieacuten con los otros obispos en la loacutegica de la unio collegialis la segunda ofrece una perspectiva nueva del ministerio episcopal a traveacutes del esquema de los tria munera (nn 24-27) y concluye fijando a la luz de la nueva comprensioacuten del ordo episcopalis su relacioacuten con presbiacuteteros y diaacuteconos (nn 28-29)

La cuestioacuten de la colegialidad se desarrolla siguiendo respetuosamente el criterio expuesto en la introduccioacuten donde el Concilio desarrolla la doc-trina relativa a la laquoinstitucioacuten perpetuidad valor sagrado del primado del Romano Pontiacutefice y de su magisterio infalibleraquo en paralelo con la doctrina sobre los obispos como necesario complemento al Vaticano I

El santo siacutenodo [hellip] continuando con el mismo objetivo ha decidido profe-sar puacuteblicamente y explicitar la doctrina sobre los obispos sucesores de los apoacutestoles los cuales junto con el sucesor de Pedro que es vicario de Cristo y cabeza visible de toda la Iglesia gobiernan la casa de Dios viviente47

En otras palabras el texto parte del teacutermino ya doctrinalmente fijado ndashel primado del sucesor de Pedrondash para aclarar casi por contrapunto la doctrina sobre el episcopado El textus emendatus encontroacute oposicioacuten en la discusioacuten en el aula donde el Coetus internationalis patrum puso resis-tencia a ultranza a la doctrina de la colegialidad que poniacutea en cuestioacuten ndasha su parecerndash los principios establecidos en el Vaticano I48 No es cuestioacuten

cuerpo unido a su cabeza debe ser considerado como sujeto de suprema potestad en la Iglesia tal y como se manifiesta en el Evangelio El Espiacuteritu Santo refuerza continuamente la unioacuten y la colaboracioacuten entre primado y episcopado Tal potestad es ejercida de modo extraordinario en el Concilio ecumeacutenico se puede activar otras modalidades de ejercicio con los obispos en sus sedes pero soacutelo a condicioacuten del consentimiento del Sumo Pontiacutefice 17 Los obispos responsables de una Iglesia concreta son el principio de unidad de su rebantildeo y todos juntos con el Papa representan a toda la Iglesia [Ecclesia tota]raquo Acta Synodalia III 254

47 Acta Synodalia IIII 211-21248 No viene al caso aquiacute retomar todo el debate relativo al asunto de la Nota explicativa

praevia ampliamente ilustrado en los comentarios de la Lumen gentium y en textos de his-toria del Concilio Nos interesa sobre todo subrayar los elementos que ayuden a aclarar la cuestioacuten del sinodalidad

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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de retomar aquiacute tal discusioacuten en ocasiones dramaacutetica que empujoacute a Pa-blo VI a vincular la hermeneacuteutica de LG 3 a la Nota explicativa praevia El texto que salioacute del aula aun en la loacutegica del compromiso despueacutes de todo ofrece una doctrina clara que logra un buen equilibrio entre las pre-rrogativas del Papa fijadas en Pastor Aeternus y las del Colegio sobre todo si no se incurre en el error de circunscribir el tema de la colegialidad uacutenicamente a la relacioacuten del Colegio con su cabeza

Ciertamente el nuacutemero 22 ofrece el mayor nuacutemero de elementos uacutetiles para esclarecer la cuestioacuten de la colegialidad

ndashA la par de Pedro y los apoacutestoles el Papa sucesor de Pedro y los obispos sucesores de los apoacutestoles estaacuten conjuntamente reunidos entre ellos en un Colegio

ndashlaquoEl Colegio o cuerpo de los obisposraquo existe siempre con y nunca sin el Papa como su cabeza

ndashAdemaacutes del Papa tambieacuten el Colegio de los obispos es laquosujeto de plena y suprema potestad sobre toda la Iglesiaraquo sin que esto comprometa la potestad plena suprema y universal del sucesor de Pedro sobre toda la Iglesia y su libre ejercicio

ndashTal autoridad no puede ser ejercitada sin el consenso de la cabezandashEl Colegio estando compuesto por muchos expresa la variedad y

la universalidad del Pueblo de Dios en cuanto reunido bajo una uacutenica cabeza expresa la unidad del rebantildeo de Cristo

ndashEn el Colegio los obispos gozan de una potestad para el bien (in bo-num) de sus fieles y tambieacuten para el bien de toda la Iglesia

ndashlaquoLa suprema potestad que este Colegio posee sobre toda la Iglesia es ejercida de modo solemne en el Concilio ecumeacutenicoraquo que es prerrogativa del Papa convocar presidir y confirmar

ndashlaquoLa misma potestad colegial puede ser ejercida por los obispos es-parcidos por el mundo junto con el Papa siempre y cuando la cabeza del Colegio los llame a la accioacuten colegial o al menos apruebe o acepte libremente la accioacuten conjunta de los obispos dispersos de modo que se convierta en un verdadero acto colegialraquo

Las prerrogativas del Colegio sin embargo no se agotan en su rela-cioacuten con la cabeza sino que se desprenden tambieacuten de la relacioacuten de los obispos entre ellos ilustrado en el n 23 sobre la base del viacutenculo con las Iglesias a ellos confiadas de las cuales son laquoprincipio visible y fun-damento de unidadraquo y con la Iglesia universal que existe en y a partir

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de las Iglesias particulares [in quibus et ex quibus] Si es correcto leer el n 23 como continuacioacuten del tema del Colegio ndashtal y como da a entender el incipit del paacuterrafo que habla de laquounioacuten colegial [que] aparece tambieacuten en las mutuas relaciones de los obispos con las Iglesias particulares y con la Iglesia universalraquo49ndash entonces la afirmacioacuten de que laquocada uno de los obispos representa a su propia Iglesia y todos junto con el Papa represen-tan a la Iglesia entera en el viacutenculo de la paz del amor y de la unidadraquo no es geneacuterica sino que remite precisamente a la unioacuten colegial

En otras palabras en el Colegio cada uno de los obispos representa a su propia Iglesia Siempre a partir del Colegio como sujeto de autoridad sobre la Iglesia se incluye la labor de anunciar el Evangelio a todos los hombres que obliga a cada obispo a procurar operarios del Evangelio y las ayudas materiales y espirituales para la misioacuten En el cuadro de la laquoco-llegialis unioraquo se situacutean tambieacuten las Iglesias laquosui iurisraquo (en su grado maacutes alto las Iglesias patriarcales) que laquogozan de una disciplina y costumbre lituacutergicas propias y de un patrimonio teoloacutegico y espiritualraquo y las Confe-rencias episcopales que laquohoy pueden ofrecer una contribucioacuten muacuteltiple y fecunda para que el afecto colegial tenga aplicaciones concretasraquo

Como puede verse todo el tratamiento del tema parte del primado que es el teacutermino conocido a partir del cual se elabora la doctrina de la co-legialidad que es el teacutermino no conocido El texto pone en evidencia las cautelas con las que se elaboroacute el miedo a comprometer las prerrogativas del Papa indujo a continuas precisiones que nunca fueron suficientes para quienes consideraban la doctrina de la colegialidad como un ataque al primado Objetivamente no se podiacutea ir maacutes allaacute de cuanto se afirmoacute pero a pesar de todo se obtuvo un gran resultado

15 Una revolucioacuten copernicana El capiacutetulo sobre el Pueblo de Dios

No deja de sorprender la ausencia de referencias en el capiacutetulo 3 de la Lumen gentium al Pueblo de Dios50 y a su indefectibilidad en la fe Ni siquiera en LG 25 que ilustra ampliamente el munus docendi se hace la

49 Es cuanto sostengo en D VITALI Verso la sinodalitagrave 27-3445-5250 La uacutenica excepcioacuten estaacute en LG 18 que es un texto de enlace introducido despueacutes de la

redaccioacuten del cap 2 sobre el Pueblo de Dios laquoPara apacentar y ampliar cada vez maacutes el Pueblo de Dios Cristo Sentildeor ha instituido en su Iglesia varios ministerios que tienden al bien de todo el cuerpo Dotados de sagrada potestad los ministros estaacuten al servicio de sus hermanos para que todos los que forman parte del Pueblo de Dios y por tanto gozan de verdadera dignidad cristiana tiendan libremente y ordenadamente a lo mismo y alcancen la salvacioacutenraquo

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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miacutenima referencia a tal aspecto El motivo es evidente el silencio se debe sobre todo a la trayectoria de los trabajos en el aula que seguiacutean ndashobvia-mentendash la secuencia de los capiacutetulos del schema de Ecclesia Ahora en el texto entregado a los Padres al inicio del segundo periodo conciliar el capiacutetulo sobre la constitucioacuten jeraacuterquica de la Iglesia precede al que se refiere al Pueblo de Dios en particular a los laicos51 Es como decir que el horizonte sobre el que los Padres conciliares leen las cuestiones es todaviacutea el de la diferencia de funciones tiacutepico de la societas inaequalium en la que los fieles son sujetos subordinados y pasivos llamados como maacuteximo a la colaboracioacuten con la jerarquiacutea No es casualidad que el eacutenfasis de las intervenciones sobre el capiacutetulo 3 recaiga sobre el tema de los laicos que pareciacutea constituir en aquel momento del camino de la Iglesia el punto maacutes novedoso del capiacutetulo sobre todo si se pasaba de la idea de un apostolado de los laicos por concesioacuten de la jerarquiacutea a la de la participacioacuten en la misioacuten misma de la Iglesia en virtud del bautismo52

Al pie del tiacutetulo del capiacutetulo en las Acta Synodalia aparece la ano-tacioacuten de que laquola Comisioacuten de coordinacioacuten de los trabajos conciliares desde hace no mucho tiempo [nuper] ha considerado necesario que el capiacutetulo se dividiese en dos partes de las cuales la primera tratariacutea de populo Dei in genere y configurando el capiacutetulo II del esquema de la constitucioacuten mientras la otra parte se refeririacutea a de laicis in specie cons-tituyendo el cuarto capiacutetuloraquo53 La comisioacuten haciacutea propia la propuesta que hizo el cardenal Suenens54 pidiendo expliacutecitamente que se modificase el orden de los capiacutetulos puesto que muchos temas propuestos en el capiacutetu-

51 Las intervenciones sobre el capiacutetulo II (cfr Acta Synodalia IIII) se extienden a lo largo de nueve congregaciones generales de la 42ordf a la 49ordf del 4 al 16 de octubre de 1963 (aunque la congregacioacuten 43ordf fue dedicada completamente a la revisioacuten del esquema sobre la liturgia) mientras las relativas al capiacutetulo III (cfr Acta Synodalia IIIII) se desarrollan en las congregaciones 50ordf-56ordf del 16 al 25 de octubre

52 No se subrayaraacute nunca suficientemente la incidencia del ensayo de Y CONGAR Jalons pour un theacuteologie du laiumlcat Paris 1954 no soacutelo por el paso de una loacutegica de colabo-racioacuten subordinada de los laicos en la misioacuten de la Iglesia por concesioacuten de la jerarquiacutea a la participacioacuten nativa en virtud del bautismo sino tambieacuten por la clasificacioacuten de la misioacuten de los laicos seguacuten las tres funciones ndashsacerdotal real y profeacuteticandash que seraacuten retomadas amplia-mente en los textos conciliares

53 Acta Synodalia III 25654 La solicitud fue entregada a los Padres el 9 de octubre de 1963 en la 44ordf congrega-

cioacuten general con el debate ya iniciado cfr Acta Synodalia III 324-329 Conviene recordar que la revisioacuten del esquema con la nueva numeracioacuten de los capiacutetulos y la distribucioacuten de la materia tuvo lugar durante la segunda intersesioacuten y que los Padres recibieron en mano el textus emendatus al principio del tercer periodo conciliar

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lo III del schema concerniacutean a todos los bautizados y no solamente a los laicos De ese capiacutetulo fue extrapolado solo el n 24 sobre el sacerdocio universal debidamente enriquecido y articulado en tres paacuterrafos (los ac-tuales nn 10-12)55

Pero esta correccioacuten de perspectiva produjo un cambio impensable en la comprensioacuten de la Iglesia radicada desde haciacutea siglos en el esquema de la societas inaequalium que habiacutea llevado a distinguir en la Iglesia dos cuerpos distintos y en alguacuten modo incluso contrapuestos la Ecclesia do-cens depositaria de todas las funciones y el poder y la Ecclesia discens los fieles puestos en la condicioacuten subordinada de suacutebditos sin ninguna capacidad activa Maacutes que en ideas alternativas la asiacute llamada laquorevolu-cioacuten copernicanaraquo del Concilio consiste en este ajuste de redaccioacuten que rompe la loacutegica del modelo piramidal fundada sobre la diferencia de funciones y de estados de vida para afirmar la radical igualdad de todos los miembros de la Iglesia en virtud de la comuacuten dignidad bautismal Las afirmaciones al fin y al cabo son las mismas y sin embargo su diversa colocacioacuten les confiere un peso diferente

En la secuencia precedente de los capiacutetulos se podiacutean afirmar todas las verdades maacutes hermosas sobre el Pueblo de Dios se podiacutea hablar de la participacioacuten en la misioacuten de la Iglesia por derecho nativo en virtud del bautismo se podiacutea introducir la referencia al sensus fidei y a los carismas de los fieles todo esto teniacutea una relevancia irrisoria por el solo hecho de estar situado despueacutes del capiacutetulo sobre la naturaleza jeraacuterquica de la Igle-sia Aunque sean importantes estos aspectos resultan siempre y de todos modos secundarios adicionales y por lo tanto no tienen la fuerza de incidir sobre un sistema consolidado desde haciacutea siglos sino a traveacutes de la contes-tacioacuten y el enfrentamiento

Por el contrario el hecho de situar los capiacutetulos sobre los estados de vida ndashjerarquiacutea laicos religiososndash detraacutes del relativo al Pueblo de Dios ha determinado una inversioacuten de perspectiva que ha puesto fin al menos sobre el papel al modelo piramidal de Iglesia y a la divisioacuten del cuer-

55 El capiacutetulo fue redactado extrapolando del capiacutetulo III del esquema el n 24 sobre el sacerdocio universal y el sacerdocio ministerial ampliado oportunamente y dividido en tres paacuterrafos ndashlos actuales nn 10-12ndash integrados por los nn 10-12 del capiacutetulo I sobre los crite-rios de pertenencia a la Iglesia ndashlos actuales nn 14-16ndash todo ello encuadrado por un paacuterrafo introductorio sobre el nuevo Pueblo de Dios (n 9) por otro de enlace relativo a la universa-lidad y unidad del Pueblo de Dios (n 13) y uno de cierre sobre la naturaleza misionera de la Iglesia (n 17)

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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po eclesial en dos partes Se evidencia enseguida de hecho la Iglesia como totalidad de los bautizados todos situados sobre un plano de total igualdad en virtud de la comuacuten regeneracioacuten en Cristo De este modo el Pueblo de Dios viene antes que la jerarquiacutea la vida teologal antes que los roles y las funciones la comuacuten dignidad antes de cualquier diferencia en el cuerpo eclesial El ser viene antes que el hacer la gracia antes que las obras los proyectos y los planes pastorales Finalmente el ser hijos de Dios ndashhijos en el Hijo por la regeneracioacuten del Espiacuteritundash es el tiacutetulo maacutes grande de pertenencia a la Iglesia que habilita para la maacutes alta de las vo-caciones la santidad56

La prueba de fuego de esta profunda transformacioacuten eclesioloacutegica es el viacutenculo constitutivo entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial Coherentemente con el estructura del capiacutetulo LG 10 da un giro al orden de los sujetos respecto a la formulacioacuten del schema de Ecclesia tras haber descrito el sacerdocio comuacuten como capacidad del Pueblo santo de Dios en virtud de la regeneracioacuten y de la uncioacuten del Espiacuteritu de laquoofrecerse a siacute mismos como oblacioacuten viviente santa agradable a Diosraquo el texto con-tinuacutea afirmando que laquoel sacerdocio comuacuten de los fieles y el sacerdocio ministerial o jeraacuterquico si bien difieren en su esencia y no tanto en grado estaacuten sin embargo mutuamente ordenados pues el uno y el otro cada uno seguacuten su propio modo participan del uacutenico sacerdocio de Cristoraquo57

El viacutenculo existe en virtud de la participacioacuten en el mismo sacerdocio de Cristo concretado en la complementariedad de sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial complementariedad posible en virtud de una dife-rencia radical ndashlicet essentia e non gradu tantumndash que explica no solo la existencia de dos formas de sacerdocio sino la necesidad del sacerdocio jeraacuterquico ministerial al servicio del sacerdocio comuacuten El sacerdocio mi-nisterial no es el desdoblamiento o la intensificacioacuten del sacerdocio co-muacuten ni este es la forma disminuida del sacerdocio ministerial uno con-siste en la capacidad de ofrecer sacrificios espirituales a Dios y el otro en laquollevar a cabo el sacrificio eucariacutestico in persona Christi y ofrecerlo a Dios en nombre de todo el puebloraquo Dicho con otras palabras el sacerdocio ministerial no puede existir maacutes que en estrecha relacioacuten con el sacerdo-

56 D VITALI Popolo di Dio Asiacutes 2013 130-13157 Sostengo la diferencia de esencia y no (tanto) de grado en D Vitali Sacerdocio

comuacuten y sacerdocio ministerial o jeraacuterquico Relectura de una cuestioacuten controvertida in Rassegna di Teologia 52 (2011) 1 39-60

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cio comuacuten y en la forma de servicio al Pueblo de Dios La relacioacuten con el sacerdocio comuacuten determina su naturaleza funcional y fija los liacutemites revelando la hipertrofia del modelo piramidal de Iglesia que con razoacuten puede llamarse modelo clerical

16 La relacioacuten constitutiva entre el sensus fidei y el magisterio de la Iglesia

La relacioacuten constitutiva entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio minis-terial es basilar para construir un modelo sinodal de Iglesia Lumen gen-tium de hecho fundamenta aquiacute la diversa participacioacuten del Pueblo de Dios y de los ministros en el sacerdocio de Cristo Sacerdote Profeta y Rey En el capiacutetulo III para explicar el ministerio episcopal en el nuevo horizonte de la sacramentalidad el Concilio se ve obligado a abandonar el esquema binario de potestas ordinis potestas jurisdictionis asumiendo en su lugar el esquema de los tria munera (docendi santificandi regen-di)58 claramente vinculados a la ordenacioacuten laquoJunto a la funcioacuten de santifi-car la consagracioacuten episcopal confiere tambieacuten las funciones de ensentildear y gobernar las cuales sin embargo por su naturaleza no pueden ser ejercidas si no es en la comunioacuten jeraacuterquica con la cabeza y con los miembros del Colegioraquo (LG 21) Tambieacuten el capiacutetulo IV asume el mismo esquema ilus-trando ampliamente la participacioacuten de los laicos en la funcioacuten sacerdotal profeacutetica y real de Cristo59

Paradoacutejicamente el capiacutetulo sobre el Pueblo de Dios no asume ple-namente el esquema de la triple participacioacuten en el sacerdocio de Cristo pues una vez formulada la doctrina del sacerdocio comuacuten y aclarada su relacioacuten con el sacerdocio ministerial (LG 10) la constitucioacuten ilustra el ejercicio del sacerdocio comuacuten en los sacramentos con evidente referen-cia a la funcioacuten sacerdotal de Cristo (LG 11) para pasar enseguida a la funcioacuten profeacutetica (LG 12) sin tratar expliacutecitamente la real

Los Padres mismos habiacutean advertido el problema el cardenal Silva Henriacutequez habiacutea pedido ordenar temaacuteticamente el ejercicio del sacerdo-cio comuacuten seguacuten el triple munus de Cristo del que participa el Pueblo de Dios60 como por otro lado se evidenciaba en el n 14 del schema prior

58 LG 25-2759 LG 34-3660 Cfr Acta Synodalia IIIII 407-409 solicitud en nombre de otros 39 obispos

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donde se deciacutea que los bautizados laquoparticipan en cierto modo [quodam-modo] en la funcioacuten sacerdotal profeacutetica y real de Cristoraquo61 La Comi-sioacuten teoloacutegica no percibioacute la importancia estimando que las tres fun-ciones estaban ya suficientemente tratadas en el texto en los nn 10 y 11 (funcioacuten sacerdotal) en el n 12 (la profeacutetica) y en el n 35 en el capiacutetulo sobre los laicos (la real)62 Maacutes allaacute de las razones que llevaron a la co-misioacuten a hacer esta eleccioacuten la nota confirma la posibilidad de pensar la funcioacuten profeacutetica dentro del cuadro de la participacioacuten en el triple munus de Cristo63

Pero iquestpor queacute insistir tanto en este punto Porque el viacutenculo con el sa-cerdocio comuacuten integra las tres funciones ndashsacerdotal profeacutetica y realndash en la relacioacuten entre las dos formas de participacioacuten en el sacerdocio de Cris-to En otras palabras se establece tambieacuten entre las funciones la misma circularidad que regula la relacioacuten entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial o jeraacuterquico La importancia del asunto se impone de por siacute en referencia sobre todo a la funcioacuten profeacutetica porque bajo esta acepcioacuten el Concilio recupera el sensus fidei del Pueblo de Dios fundamentalmente a causa de una efectiva recuperacioacuten de la dimensioacuten sinodal de la Igle-sia Si se aplica a la funcioacuten profeacutetica el esquema que regula la relacioacuten necesaria entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial tambieacuten el sensus fidei del Pueblo de Dios y el munus docendi de los pastores se situacutean claramente ndashy necesariamentendash en un nexo constitutivo En otras palabras existe una relacioacuten circular entre sensus fidei y magisterio como funciones eclesiales de inteligencia de la fe que abre un amplio horizonte en relacioacuten con el posible ejercicio de un camino sinodal de la Iglesia Este horizonte ya puede intuirse en LG 12

El pueblo santo de Dios participa tambieacuten de la funcioacuten profeacutetica de Cristo difundiendo su testimonio vivo sobre todo con la vida de fe y caridad y ofreciendo a Dios el sacrificio de alabanza que es fruto de unos labios que confiesan su nombre (cf Heb 1315) La totalidad de los fieles que tienen

61 Acta Synodalia III 259 El pasaje fue retirado en la reorganizacioacuten del texto desde el momento en el que el n 24 fue dividido en 3 paraacutegrafos (nn 10-12 de Lumen gentium)

62 Acta Synodalia IIII 19663 Por otra parte es posible percibir la funcioacuten real en la referencia a las virtudes al inicio

del n 11 laquoEl caraacutecter sagrado y orgaacutenicamente estructurado de la comunidad sacerdotal se implanta a traveacutes de los sacramentos y de las virtudesraquo evidentemente ndasho al menos sobre todondash fe esperanza y caridad que remiten a la vida teologal y por lo tanto tambieacuten a su di-mensioacuten real Se puede decir ndashy se deduce de todo el discursondash que LG 11 trata conjuntamente la dimensioacuten sacerdotal y la real de la vida en Cristo

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la uncioacuten del Santo (cfr 1 Jn 220 y 27) no puede equivocarse cuando cree y esta prerrogativa peculiar suya la manifiesta mediante el sentido sobrenatural de la fe de todo el pueblo cuando laquodesde los obispos hasta los uacuteltimos fieles laicosraquo [cfr San Agustiacuten De praed sanct 14 27 PL 44 980] presta su consentimiento universal en las cosas de fe y costumbres Con este sentido de la fe que el Espiacuteritu de verdad suscita y mantiene el Pueblo de Dios se adhiere indefectiblemente laquoa la fe confiada de una vez para siempre a los santosraquo (Jud 3) penetra maacutes profundamente en ella con juicio certero y la aplica cada diacutea maacutes plenamente en la vida

La cita recoge sustancialmente el textus prior aunque sustituye la uni-versitas fidelium por Ecclesia tota como sujeto de indefectibilidad64 De las tres frases la primera introduce el tema de la participacioacuten de todo el Pueblo de Dios en la funcioacuten profeacutetica de Cristo que se manifiesta mediante el sensus fidei y los carismas a traveacutes de los cuales el espiacuteritu laquohace a los fieles capaces y preparados para asumir obras y deberes que sirvan y sean uacutetiles a la renovacioacuten y a la edificacioacuten maacutes amplia de la Iglesiaraquo Las otras dos se refieren de modo maacutes especiacutefico al sensus fi-dei recuperando una doctrina considerablemente enraizada a lo largo de toda la tradicioacuten teoloacutegica y utilizada por el magisterio de la Iglesia para fundamentar la definicioacuten de los dogmas marianos de la Inmaculada Concepcioacuten y de la Asuncioacuten de Mariacutea65

A pesar de algunas voces criacuteticas sobre la doctrina66 que reiteraban la posicioacuten de los manuales de teologiacutea preconciliar sobre la indefecti-

64 Por esta razoacuten se suprimioacute la nota que haciacutea referencia al Concilio Vaticano I que en el cap VIII del esquema constitutionis dogmaticae de Ecclesia Christi puso la indefectibilidad de la Iglesia como fundamento de la infalibilidad del magisterio La formulacioacuten fue solem-ne laquoDeclaramus insuper Christi Ecclesiam sive existentia sive constitutio eius spectetur societatem esse perennem atque indefectibilem nullamque post illam neque pleniorem neque perfectiorem salutis oeconomiam in hoc speculo expectandam esseraquo Mansi 51 542

65 Cfr supra66 Cfr por ejemplo Carli Acta Synodalia III 641 que propone el siguiente texto

laquoEcclesia tota cuius filii veluti liturgicum suae fidei sacrificium sempre Deo offerre (cf Phil 217) tenentur Eiusque virtutes annuntiare qui ipsos de tenebris vocavit in admirabile lumen suum (cf 1Pt 29) in credendo circa fidem et mores indefectibilis est et hanc suam peculiarem proprietatem etiam per supernaturalem sensum figravedei popoli cristiani manifestatraquo En cam-bio el cardenal Ruffini (cfr Acta Synodalia IIII 628) cuestiona la propuesta ironizando laquoQuae ibi scripta inveniuntur aut non sunt vera aut ea non intellego Quid est ndashquaesondash iste supernaturalis sensus fidei universi populi christiani quo omnes docentur infallibiliter a Deo sensus fidei ndashinquamndash a Spiritu veritatis excitatus verbo Dei scripto et tradito sub eius assistentia inhaerens quem magisterium ducit (solummodo) et sustentatraquo A continua-cioacuten defiende la infalibilidad pasiva de la Ecclesia discens que no depende del Espiacuteritu de Dios sino del hecho de que tal sentido manifiesta la doctrina ensentildeada de modo infalible por

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bilitas passiva de la Ecclesia dicens del debate en el aula67 emergioacute un texto medido equilibrado La relatio68 se limita a resumir con breves anotaciones las variantes del texto asegurando no querer introducir ul-teriores antildeadidos en cuanto a que el sentido de la fe es descrito como una facultas totius Ecclesiae en virtud de la cual estaacute en la fe reconocer la revelacioacuten transmitida pudiendo distinguir entre verdadero y falso y a la vez ahondar con mayor profundidad en el significado y aplicarlo con maacutes plenitud a la vida seguacuten el sentido de 1 Tes 213 En la 124ordf congre-gacioacuten general no se registran modi referidos a LG 12 sobre los cuales los Padres debiesen votar y el texto seraacute aprobado sin ulteriores variaciones El Pueblo Santo de Dios volviacutea finalmente a ser una autoridad doctrinal una regula fidei que participa suo peculiare modo en la transmisioacuten de la Revelacioacuten

17 La singularis Antistitum et fidelium conspiratio

La circularidad entre sensus fidei y magisterio que resulta decisiva para articular una praxis sinodal en la Iglesia no solo es una hipoacutetesis vaacutelida bajo la base de LG 12 emerge auacuten con mayor claridad en DV 10 Aunque este paacuterrafo no contenga una referencia expliacutecita a eacutel el sensus fidei se evidencia a traveacutes de la presencia de la foacutermula ndashsingularis An-tistitum et fidelium cospirationdash invocada expliacutecitamente por el magisterio para definir los dogmas marianos y que se convierte en la clave de lectura del dinamismo de transmisioacuten de la Revelacioacuten en la Iglesia

La Tradicioacuten y la Escritura constituyen el depoacutesito sagrado de la palabra de Dios confiado a la Iglesia Fiel a dicho depoacutesito el pueblo cristiano entero unido a sus pastores persevera siempre en la doctrina apostoacutelica y en la unioacuten en la eucaristiacutea y en la oracioacuten (cfr Hch 242) y asiacute se realiza una maravillosa concordia de Pastores y fieles [singularis fiat Antistitum et fidelium conspiratio] en conservar practicar y profesar la fe recibida

el magisterio uacutenico sujeto de la infalibilidad activa en la Iglesia Tambieacuten el cardenal Siri (Acta Synodalia IIIII 279) reafirma que el sensus fidei depende totalmente del magisterio infalible de la Iglesia Maacutes positivas son las intervenciones de Cantero Cuadrado cfr Acta Synodalia IIIII 283-285 Calabria cfr Acta Synodalia IIIII 363-365

67 No fueron pocas las intervenciones en el aula y las animadversiones scriptae signo del intereacutes que despertaba en los Padres la doctrina del sensus fidei Particularmente extensas y relevantes son las intervenciones de mons Cantero Cuadrado (cfr Acta Synodalia IIIII 283-285) y de mons Calabria (cfr Acta Synodalia IIIII 363-365)

68 Acta Synodalia III 189

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Sobre todo hay que subrayar que el texto contiene la misma cita neo-testamentaria (Hch 242-47) a la que recurre LG 10 para fundamentar el sacerdocio comuacuten auacuten maacutes las acciones atribuidas al Pueblo santo de Dios ndashlaquoconservar practicar y profesar la fe recibidaraquondash son muy cercanas a aquellas con las que LG 12 describe el sensus fidei como capacidad del Pueblo de Dios de acoger la Palabra de Dios adherirse de manera indefectible a la fe recibida penetrar en ella con mayor profundidad y aplicarla maacutes plenamente a la vida La intencioacuten del paacuterrafo no es la de esclarecer la funcioacuten del sensus fidei pero siacute la de precisar que la Iglesia es depositaria de la Palabra de Dios (foacutermula inusitada) constituida por Tradicioacuten y Escritura precisamente la conspiratio de los obispos y los fieles confirma el nexo cuanto menos indirecto con esta funcioacuten del Pue-blo de Dios

La cuestioacuten no es de poco relieve pues el paacuterrafo tras un capiacutetulo en-tero ilustrando el dinamismo de la Tradicioacuten concluye restableciendo la relacioacuten de circularidad entre el Pueblo de Dios y sus pastores evocado en el texto y significado por la singularis conspiratio y estableciendo entre otras cosas una especie de precedencia del sensus fidei sobre el ma-gisterio Uacutenicamente al final del capiacutetulo de hecho aparece el munus de laquointerpretar auteacutenticamente la Palabra de Dios escrita y transmitidaraquo confiado laquoal solo magisterio vivo de la Iglesiaraquo en una propuesta que muestra el abandono de aquel modelo de transmisioacuten de la Revelacioacuten regulado por el binomio Ecclesia docens Ecclesia dicens

Aunque no existan afirmaciones expliacutecitas al respecto ni de la Comi-sioacuten teoloacutegica ni de los Padres conciliares se puede entrever en la estruc-tura del capiacutetulo una trama en la cual la relacioacuten de circularidad entre el Pueblo de Dios y el magisterio estaacute pensada para resaltar particularmente al primero en analogiacutea con la laquorevolucioacuten copernicanaraquo de Lumen gen-tium sobre el primado del Pueblo de Dios en relacioacuten con la jerarquiacutea El giro ya se percibe en el capiacutetulo I de Dei Verbum mientras los manuales de teologiacutea sobre la base del Vaticano I concebiacutean la Revelacioacuten como la suma de las verdades en las que creer (la fides quae) con la obvia conse-cuencia de enfatizar la funcioacuten del magisterio infalible de la Iglesia como norma proacutexima de la fe una idea maacutes personalizada de la Revelacioacuten ndashlaquoDios invisible en la riqueza de su amor habla a los hombres como a amigos y dialoga con ellos para invitarles e introducirles en la comunioacuten con Eacutelraquo (DV 2)ndash pone de manifiesto a los interlocutores que Dios mismo ha elegido En primer plano no estaacute tanto quieacuten transmite el mensaje sino

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sus destinatarios o lo que es lo mismo laquolos hombres [que] por medio de Cristo Verbo hecho carne en el Espiacuteritu Santo tienen acceso al Padre y son hechos partiacutecipes de la vida divinaraquo (DV 2)

El mismo esquema interpretativo se repite en el capiacutetulo II respecto a la transmisioacuten de la Revelacioacuten Al inicio del capiacutetulo el lenguaje parece repetir el Vaticano I laquoTodo aquello que habiacutea revelado para la salvacioacuten de todos los pueblos Dios dispuso con toda benevolencia que permane-ciese iacutentegro y fuese transmitido a todas las generacionesraquo (DV 7) No obstante la transmisioacuten de la Revelacioacuten no se refiere a un depositum sino al Evangelio vivo como laquofuente de todo aquello que concierne a la fe y la moralraquo y que la Iglesia recibe mediante la laquopredicacioacuten apostoacutelica expresada de modo especial en los libros inspiradosraquo a esta predicacioacuten le laquoconcierne todo aquello que contribuye a una conducta santa y al in-cremento de la fe del Pueblo de Diosraquo (DV 8) A diferencia del schema de fontibus Revelationis69 que trataba enseguida la funcioacuten del magisterio infalible de la Iglesia Dei Verbum en el cuadro de una concepcioacuten dinaacute-mica de la Tradicioacuten pone de relieve a los destinatarios de la predicacioacuten De hecho el texto afirma que laquola comprensioacuten ndashaunque el latiacuten dice per-ceptiondash tanto de las cosas como de las palabras transmitidas crece ya sea con la contemplacioacuten y el estudio de los creyentes que lo meditan en sus corazones ya sea con la profunda inteligencia de la realidad espiritual que experimentan (DV 8)

Algunos Padres pidieron integrar estos dos factores de inteligencia de la fe que se referiacutean con toda evidencia a los bautizados con laquola predica-cioacuten de aquellos que con la sucesioacuten episcopal han recibido un carisma seguro de verdadraquo (DV 8) Este antildeadido por maacutes que fuese pertinente rompe la loacutegica del discurso construido de acuerdo con el esquema del diaacutelogo entre Dios y su pueblo repetido tambieacuten en el capiacutetulo II la elec-cioacuten de presentar la predicacioacuten como modalidad de transmisioacuten de la Revelacioacuten no se desarrolla al poner de relieve la funcioacuten interpretativa del magisterio sino la del Pueblo de Dios como destinatario del Evan-gelio anunciado De este modo Dios laquoel cual ha hablado en el pasado

69 Cfr Acta Synodalia IIII 14-26 Schema constitutionis dogmaticae de fontibus Re-velationis El schema consta de 5 capiacutetulos I De duplici fonte Revelationis II De Scriptura inspiratione inerrantia et compositione litteraria III De Vetere Testamento IV De Novo Testamento V De Sacra Scriptura in Ecclesia En el capiacutetulo I compuesto de solo seis paacute-rrafos el uacuteltimo trata sobre la funcioacuten del Magisterio descrito como proximae et universalis credendi norma

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dialoga [colloquitur] sin intermediacioacuten con la Esposa de su Hijo predi-lecto y el Espiacuteritu Santo por quien la voz del Evangelio resuena viva en la Iglesia y por ella en el mundo va introduciendo a los creyentes en la verdad plena y hace que la palabra de Cristo habite en ellos abundante-menteraquo (DV 8)

El disentildeo se torna sin embargo niacutetido en la apertura de DV 10 a la luz de la singularis Antistitum et fidelium conspiratio que se refiere evi-dentemente a la relacioacuten de circularidad entre sensus fidei del Pueblo de Dios y munus docendi de los pastores Lo prueba el hecho de que al pie del texto se hace referencia a los textos marianos70 citando en la misma nota una frase de Cipriano sobre la laquoIglesia como Pueblo reunido en torno al sacerdote y rebantildeo que se adhiere a su pastorraquo71 del cual emerge con claridad coacutemo el dinamismo de la Tradicioacuten encuentra continuo alimento en la reciprocidad entre predicacioacuten y vida cristiana Los dos teacuterminos se corresponden si el Pueblo santo de Dios conserva practica y profesa la fe transmitida laquoel magisterio vivo de la Iglesiaraquo laquopiamente escucha san-tamente custodia y fielmente exponeraquo la palabra de Dios si el magisterio laquosirveraquo la Palabra de Dios anunciada en la fuerza del espiacuteritu laquoel Pueblo de Dios acoge no ya la palabra de los hombres sino realmente la Pala-bra de Dios se adhiere indefectiblemente a la fe transmitida a los santos de una vez para siempre (Jud 3) la profundiza con un juicio recto y la aplica cada diacutea maacutes plenamente en la vidaraquo (LG 12)

2 intellectus fidei

La primera parte de esta investigacioacuten justifica la siguiente afirmacioacuten el Vaticano II pone las bases para desarrollar una visioacuten sinodal de la Iglesia Junto a la relacioacuten del Colegio con su cabeza aclarada en LG III el Concilio vincula estrechamente a los pastores con el Pueblo de Dios en cuanto a la transmisioacuten de la Revelacioacuten tanto en el capiacutetulo II de Lumen gentium sobre el Pueblo de Dios como en el capiacutetulo II de Dei Verbum A la luz de estos datos es posible poner en marcha aquel laquocaminar juntos

70 Cfr nota 14 que cita PIacuteO XII Constitucioacuten apostoacutelica Munificentissimus Deus in AAS 42 (1950) 756 en relacioacuten con la expresioacuten de san Cipriano Epiacutestola 668 (CSEL 32733) laquoLa Iglesia es un pueblo unido a su sacerdote y el rebantildeo que permanece fiel al propio pastorraquo

71 En la misma nota 74 se cita la constitucioacuten (cfr AAS 42 [1950] 756) en relacioacuten con la misma expresioacuten de san Cipriano Epiacutestola 668

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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de laicos pastores y Obispo de Romaraquo sentildealada por el Papa Francisco como tarea de la Iglesia de hoy72 Para acoger el desafiacuteo sin aventuras o improbables avances precipitados pero siguiendo con fidelidad el ca-mino histoacuterico de la Iglesia hace falta restablecer en clave sinodal las relaciones entre los sujetos que el Papa reclama en liacutenea de continuidad con las sugerencias ofrecidas por el contenido conciliar

21 Elementos para un desarrollo de una Iglesia sinodal

Una primera indicacioacuten ndashpoco maacutes que una sugerenciandash emerge ya en una particularidad linguumliacutestica que aparece en los documentos conciliares el Vaticano II no habla nunca de sinodalidad sin embargo utiliza amplia-mente el teacutermino synodus para referirse al Concilio73 Se trata de un dato relevante que permite tender un puente entre colegialidad y sinodalidad y comprender en queacute direccioacuten tratar de recuperar el concepto El empleo del teacutermino en efecto alude a la praxis del primer milenio cuando el Concilio ecumeacutenico representaba la catolicidad dado que cada obispo laquopersonificabaraquo a su Iglesia en la asamblea conciliar La idea que estaacute en la base de tal conviccioacuten es expresada con fuerza por Cipriano seguacuten el cual laquoel obispo estaacute en la Iglesia y la Iglesia estaacute en el obisporaquo74 la unidad entre obispo e Iglesia fue tan estrecha que el uno no podiacutea existir sin la otra y viceversa No era casualidad que el siacutembolo y la medida de dicha unidad fuese la Eucaristiacutea celebrada por el obispo en la que la asamblea reunida alrededor de eacutel se reconociacutea en el cuerpo eucariacutestico Por esta razoacuten la ex-communicatio impuesta por el obispo no comportaba uacutenica-mente la exclusioacuten del banquete eucariacutestico sino tambieacuten de la comunioacuten eclesial El empleo de sancta Synodus impulsa a desplazarse al horizonte

72 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos

73 Sin contar con el elevado nuacutemero de recurrencias o repeticiones (cfr X OCHOA Index verborum cum documentis Concilii Vaticani Secundi 484-485) es sorprendente el eacutenfasis que emana del empleo de la foacutermula en ciertos pasajes de particular solemnidad Baste con releer por ejemplo LG 1 laquoLumen gentium cum sit Christus haec Sacrosancta Synodus in Spiritu Sancto congregata omnes homines claritate Eius super faciem Eccle-siae resplendente illuminare vehementer exoptat omni creaturae Evangelium annuntiando (cfr Mc 1615)raquo El empleo enfaacutetico es repetido en muchos otros pasajes cfr por ejemplo LG 18 en referencia a la doctrina del primado y el episcopado laquoSacra Synodus cunctis fi-delibus firmiter credendam rursus proponitraquo LG 21 en relacioacuten con la sacramentalidad del episcopado laquoDocet autem Sancta Synodusraquo

74 CIPRIANO Epistola 66 8 CSEL 3733

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del primer milenio asumiendo como elemento imprescindible la estrecha unidad del Pueblo de Dios con los pastores o maacutes bien de cada portio Populi Dei con su pastor75

iquestPero queacute sentido puede tener esto para una concepcioacuten sinodal de Iglesia y bajo un punto de vista praacutectico para el ejercicio de la sinoda-lidad en la Iglesia Si la premisa es laquocaminar juntosraquo de pueblo y pas-tores el empleo de sancta Synodus no aporta maacutes elementos que sirvan para clarificar el tema Por otro lado como hemos podido comprobar el Vaticano II se centroacute en la colegialidad sin mencionar expliacutecitamente la sinodalidad que queda fuera del horizonte de pensamiento en el que se movioacute el Concilio76 A cincuenta antildeos vista de aquel debate en ocasiones dramaacutetico se evidencia coacutemo los Padres en el aula no pudieron ir maacutes allaacute de un texto de transicioacuten (o de consenso) en el que la funcioacuten petrina se recolocaba en el marco maacutes amplio de la organizacioacuten jeraacuterquica de la Iglesia reafirmando la colegialidad pero dejando en el aire las formas concretas para poder ponerla en praacutectica

El periodo posconciliar ha puesto de relieve toda el esfuerzo y las re-sistencias para encontrar un desarrollo significativo de la colegialidad77 Por otro lado mientras la cuestioacuten quede circunscrita al Colegio y a su cabeza se corre el riesgo de percibir la relacioacuten como competicioacuten entre dos sujetos dotados de plena y suprema potestad sobre la Iglesia

Pero precisamente el Concilio abre la viacutea para poner en marcha la so-lucioacuten con aquel cambio que subyace en la loacutegica de haber introducido el capiacutetulo sobre el Pueblo de Dios antes del de la Jerarquiacutea volviendo a

75 En esta direccioacuten ya se orientaba SC 41 al indicar la praecipua manifestatio Ecclesiae laquoen la participacioacuten plena y activa [el texto dice lsquoplenaria et actuosarsquo] del Pueblo santo de Dios en las mismas celebraciones lituacutergicas sobre todo en la misma Eucaristiacutea en una uacutenica oracioacuten alrededor del uacutenico altar que preside el obispo rodeado de su presbiterio y ministrosraquo

76 Sin embargo la posibilidad de que alguna voz en tal direccioacuten pudiera alzarse en el aula quedoacute anulada con la eleccioacuten de concentrarse en la apertura de tercer periacuteodo en los capiacutetulos VII y VIII del esquema sin permitir que se volviese sobre los capiacutetulos anteriores respecto a los cuales se solicitoacute sencillamente a los Padres pronunciarse con un placet o non placet sobre el textus emendatus cfr Quaesitum circa modum suffragandi schema constitu-tionis de Ecclesia Acta Synodalia IIII 395

77 La prueba de fuego de este cansancio es la distincioacuten difundida despueacutes del Concilio de una doble colegialidad efectiva y afectiva la primera concierne a las formas de ejerci-cio de la colegialidad mientras la segunda subraya la unidad del Colegio Echando un vistazo al desarrollo del magisterio posconciliar despueacutes del Siacutenodo extraordinario del 1985 a veinte antildeos del Concilio Vaticano II se advierte una fuerte insistencia sobre la segunda pasada por el affectus collegialis de los documentos conciliares ndashcfr LG 23 y NEP 2ndash a la colegialidad afectiva ndashcfr sobre todo Communionis notio Apostolos suos y Pastores gregisndash sin llegar a formas concretas y reconocidas de ejercicio efectivo de la colegialidad

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vincular el ministerio en la Iglesia a su funcioacuten de servicio al Pueblo de Dios El punto de anclaje es la relacioacuten constitutiva que LG 10 establece entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial si en el schema de Eccle-sia el tema del sacerdocio universal de los fieles representoacute cuando menos una significativa recuperacioacuten para la eclesiologiacutea catoacutelica despueacutes de cua-tro siglos de silencio la nueva colocacioacuten viene a otorgarle un peso y una funcioacuten de relevancia y profundidad diversas En el cuadro eclesioloacutegico trazado por LG II el sacerdocio de todos los fieles no es ya un sacerdocio metafoacuterico o quoddam sacerdotium paacutelida imitacioacuten del ministerial sino sacerdocio comuacuten78 es decir la condicioacuten de todos los bautizados en vir-tud de la cual la Iglesia entera queda constituida en comunidad sacerdotal que ofrece a Dios sacrificios espirituales Esta forma de participacioacuten en el sacerdocio de Cristo no solo esclarece el agere in persona Christi de los ministros sagrados como forma de servicio dentro de la Iglesia sino que tambieacuten restablece el orden adecuado de las cosas al primar el ser sobre el hacer la vida teologal sobre los roles y funciones el tiacutetulo maacutes grande de pertenencia a la Iglesia la dignidad mayor es la de ser hijos de Dios hijos en el Hijo

Esta revolucioacuten copernicana iquestqueacute consecuencias conlleva respecto a la vida y al gobierno de la Iglesia iquestQueacute posibilidades ofrece para la cons-truccioacuten de una Iglesia constitutivamente sinodal iquestNo la expone maacutes bien al riesgo de desviacuteos democraacuteticos Durante el posconcilio muchos han repetido el slogan de la piraacutemide invertida como si bastase el vuelco especulativo de los esquemas aplicados durante siglos y de las loacutegicas que los habiacutean regulado para implantar la eclesiologiacutea conciliar No se trata de poner arriba a quien antes estuvo abajo de dar el mando a quien antes fue suacutebdito de reemplazar un sistema monaacuterquico por uno democraacutetico sino de situar en el centro de la vida eclesial al Pueblo de Dios sobre todo por parte de la jerarquiacutea79

78 En vez de laquosacerdocio universalraquo muchos Padres propusieron otras foacutermulas como laquosacerdotium spiritualeraquo laquosacerdotium inchoativumraquo laquoquoddam sacerdotiumraquo laquosacerdotium communeraquo laquoDicatur commune ad vitandam ambiguitatemraquo cfr Acta Synodalia IIII 195

79 En esta direccioacuten va la mencioacuten al ministerio jeraacuterquico en particular a la funcioacuten petrina por parte del Papa Francisco en el discurso de conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos que merece la pena reproducir por entero laquoLa si-nodalidad como dimensioacuten constitutiva de la Iglesia nos ofrece el marco interpretativo maacutes adecuado para comprender el mismo ministerio jeraacuterquico Si comprendemos que como dice san Juan Crisoacutestomo lsquoIglesia y Siacutenodo son sinoacutenimosrsquo ndashporque la Iglesia no es otra cosa que el lsquocaminar juntosrsquo de la grey de Dios por los senderos de la historia que sale al encuentro de Cristo el Sentildeorndash entendemos tambieacuten que en su interior nadie puede ser lsquoelevadorsquo por encima

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Aunque no faltase en el pasado el eacutenfasis sobre la dimensioacuten del servi-cio traducida en ejemplos luminosos de pastores que han dedicado toda su vi da al rebantildeo sin embargo el ministerio sacerdotal se concebiacutea a partir de una relacioacuten asimeacutetrica de autoridad-obediencia entre pastores y fieles De es to se deriva una identificacioacuten demasiado estricta de la Iglesia con sus ministros y una separacioacuten del cuerpo eclesial entre Ecclesia docens y Ecclesia discens con excesiva insistencia sobre la inaequalitas de sus miembros80 lo cual ha favorecido el arraigo entre el clero de una imagen condicionada del laquopueblo ignoranteraquo y entre el mismo pueblo de su li-mitacioacuten en la vida eclesial Contra una mentalidad de este tipo ndashdifiacutecil de desarraigar puesto que se ha consolidado durante siglosndash estaacute el asumir que laquoel sacerdocio comuacuten y el sacerdocio ministerial o jeraacuterquico incluso diferentes por esencia y no tanto por grado sin embargo se complementan el uno al otro porque ambos participan cada uno a su manera del uacutenico sacerdocio de Cristoraquo (LG 10)

Esto significa que sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial se ha-llan mu tuamente vinculados asiacute como se hallan vinculadas las funciones que radican en la doble forma de participacioacuten en el sacerdocio de Cristo Una Iglesia sinodal no puede prescindir de la relacioacuten de circularidad entre sensus fidei del Pueblo de Dios y magisterio de la Iglesia Sobre la base de este viacutenculo resulta posible dibujar una trama de relaciones entre los sujetos de la sinodalidad ndashPueblo de Dios Colegio de los obispos Obispo de Romandash que permita pensar no solamente el ordo Synodi y el ejercicio de la sinodalidad sino contemplaacutendolo maacutes de raiacutez en el rostro mismo de una Iglesia sinodal

de los demaacutes Al contrario en la Iglesia es necesario que alguno lsquose abajersquo para ponerse al servicio de los hermanos a lo largo del camino Jesuacutes ha constituido la Iglesia poniendo en su cumbre al Colegio apostoacutelico en el que el apoacutestol Pedro es la lsquorocarsquo (cfr Mt 1618) aquel que debe lsquoconfirmarrsquo a los hermanos en la fe (cfr Lc 2232) Pero en esta Iglesia como en una piraacutemide invertida la cima se encuentra por debajo de la base Por eso quienes ejercen la autoridad se llaman lsquoministrosrsquo porque seguacuten el significado originario de la palabra son los maacutes pequentildeos de todos Cada obispo sirviendo al Pueblo de Dios llega a ser para la porcioacuten de la grey que le ha sido encomendada vicarius Christi vicario de Jesuacutes quien en la Uacuteltima Cena se inclinoacute para lavar los pies de los apoacutestoles (cfr Jn 131-15) Y en un horizonte seme-jante el mismo Sucesor de Pedro es el servus servorum Dei iexclNo lo olvidemos nunca Para los disciacutepulos de Jesuacutes ayer hoy y siempre la uacutenica autoridad es la autoridad del servicio el uacutenico poder es el poder de la cruzraquo

80 Todaviacutea en el schema prior el tiacutetulo del n 23 se presentaba en estos teacuterminos Aequa-litas et inaequalitas membrorum Ecclesiae despueacutes cambiado justamente en el n 32 del tex-tus emendatus en De dignitate laicorum prout sunt membra Populi Dei cfr Acta Synodalia IIII 272

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22 Una Iglesia constitutivamente sinodal

Hablar de una laquoIglesia constitutivamente sinodalraquo puede parecer ex-cesivo inuacutetil y peligroso Excesivo por inuacutetil en cuanto que lo expresado por la sinodalidad viene manifestado maacutes y mejor con communio Exce-sivo por peligroso pues expondriacutea a la Iglesia a una deriva democraacutetica forzando a la jerarquiacutea a una loacutegica de representacioacuten desde abajo En realidad la sinodalidad pone de manifiesto algo que communio no expre-sa directamente el hecho ndashesencial para la Iglesiandash de laquocaminar juntosraquo porque la Iglesia no es otra cosa que ese laquocaminar juntosraquo del Rebantildeo de Dios por las sendas de la historia al encuentro de Cristo Dios como subraya el Papa despueacutes de haber dicho que laquoel camino de la sinodalidad es el camino que Dios espera de la Iglesia del tercer milenioraquo81

El punto de partida para la comprensioacuten de esta perspectiva es de nue-vo el Concilio El horizonte de la sinodalidad es la Iglesia como laquoplebs adunata de unitate Patris et Filii et Spiritus Sanctiraquo (LG 4) el redescu-brimiento de su origen permite comprender el dinamismo de la historia de la salvacioacuten de la que forma parte y las etapas que la llevan a la plena comunioacuten con Dios

Y establecioacute convocar a quienes creen en Cristo en la santa Iglesia que ya fue prefigurada desde el origen del mundo preparada admirablemente en la historia del pueblo de Israel y en la Antigua Alianza constituida en los tiempos definitivos manifestada por la efusioacuten del Espiacuteritu y que se consumaraacute gloriosamente al final de los tiempos Entonces como se lee en los Santos Padres todos los justos desde Adaacuten laquodesde el justo Abel hasta el uacuteltimo elegidoraquo seraacuten congregados en una Iglesia universal en la casa del Padre (LG 2)

La comprensioacuten de la Iglesia de Trinitate lejos de confinarla en una complacencia esteacuteril de los oriacutegenes en un alejamiento de la historia que la situariacutea fuera de la vida de los hombres determina maacutes bien la recupe-racioacuten de su dimensioacuten escatoloacutegica82 poniendo en primer plano la idea de Iglesia como pueblo en camino hacia el Reino Por otra parte si el modelo de la comunioacuten trinitaria al que la Iglesia tiene que conformarse se com-prende mirando atraacutes ndasho hacia arribandash al misterio de Dios su realizacioacuten

81 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

82 Cfr DARIO VITALI Lumen gentium Storia Commento Recezione Roma 2012 126-128

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plena llega caminando hacia delante conscientes de que sobre la tierra se halla laquoel germen y el principioraquo del Reino (LG 5) Lumen gentium insiste sobre este punto la Iglesia laquova peregrinando entre las persecuciones del mundo y los consuelos de Dios anunciando la cruz del Sentildeor hasta que vengaraquo (LG 8) asiacute como al laquopueblo de Israel seguacuten la carne peregrinando por el desierto se le designa ya como Iglesia el nuevo Israel que cami-nando en el tiempo presente busca la ciudad futura y perenne tambieacuten es designado como Iglesia de Cristoraquo (LG 9) laquopero mientras no lleguen los cielos nuevos y la tierra nueva donde habita la justicia (cf 2 Pe 313) la Iglesia peregrina lleva en sus sacramentos e instituciones pertenecientes a este tiempo la imagen de este siglo que pasa y ella misma vive entre las criaturas que gimen con dolores de parto en el presente en espera de la manifestacioacuten de los hijos de Diosraquo (LG 48)

La misma estructura de la constitucioacuten orienta en este sentido la Ec-clesia de Trinitate que se describe en el capiacutetulo I no es otra que el Pueblo de Dios que el capiacutetulo II presenta como laquopueblo mesiaacutenico [que] tiene por cabeza a Cristo [hellip] como condicioacuten la dignidad y la libertad de los hijos de Dios [hellip] por ley el nuevo mandato de amar como el mismo Cristo nos amoacute a nosotros [hellip] como fin el reino de Diosraquo (LG 9) Es como afirmar que la Iglesia si es constitutivamente el Pueblo de Dios en camino tambieacuten es constitutivamente sinodal el rasgo que distingue a este pueblo es el de laquocaminar conjuntamenteraquo todos hacia el Reino de Dios

Pero si la sinodalidad se redujese al caminar juntos entonces la na-turaleza constitutivamente sinodal de la Iglesia seriacutea bien poca cosa en el fondo se reduciriacutea a una variante de la communnio con un mayor eacutenfasis en el aspecto histoacuterico-salviacutefico Existe sin embargo otro as-pecto que emerge con fuerza del propio concilio y que empuja hacia una comprensioacuten sinodal de la Iglesia el Vaticano II ha terminado por fin con un verdadero deacuteficit pneumatoloacutegico despueacutes de siglos de olvido de la presencia y la accioacuten del Espiacuteritu Santo en la Iglesia83 abriendo

83 El motivo de este deacuteficit reside sobre todo en la llamada poleacutemica del Espiacuteritu Santo por parte de grupos y movimientos profeacuteticos de la Baja Edad Media que radicalizaron la tensioacuten entre Iglesia institucional e Iglesia espiritual incluso antes de la Reforma protestante y de su concepcioacuten de la Iglesia invisible Cfr Y CONGAR Credo nello Spirito santo I Rive-lazione ed esperienza dello Spirito parte segunda Brescia 1981 79-193 espec 180-186 Una lectura instructiva en esta perspectiva es H DE LUBAC La posteritagrave spirituale di Gioacchino da Fiore Milaacuten 1984 que hace una relectura de la historia del segundo milenio cristiano en Occidente a la luz de la tercera edad del Espiacuteritu anhelada por Joaquiacuten de Fiore

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gracias a tal recuperacioacuten entre otras cosas a la Ecclesia de Trinitate Aun trataacutendose de un breve resumen LG 4 marca la recuperacioacuten de una eclesiologiacutea pneumatoloacutegica en la que el Espiacuteritu laquoguiacutea la Iglesia a toda la verdad (cf Jn 16 13) la unifica en comunioacuten y ministerio la provee y gobierna con diversos dones jeraacuterquicos y carismaacuteticos y la embellece con sus frutosraquo

La perspectiva seguacuten la cual el Espiacuteritu laquocon la fuerza del Evangelio rejuvenece la Iglesia la renueva incesantemente y la conduce a la unioacuten consumada con su Esposoraquo encaja bien con el dinamismo de la Tradicioacuten descrito en el capiacutetulo II de Dei Verbum en su camino hacia el Reino laquola Iglesia en el decurso de los siglos tiende constantemente a la plenitud de la verdad divina hasta que en ella se cumplan las palabras de Diosraquo (DV 8b) Esto sucede porque laquoel Espiacuteritu Santo por quien la voz del Evangelio resuena viva en la Iglesia y por ella en el mundo va introdu-ciendo a los creyentes en la verdad plena y hace que la palabra de Cristo habite en ellos abundantementeraquo (DV 8c)

Situada entre el ya y el todaviacutea no entre la primera venida de Cristo y la plenitud en la Gloria la Iglesia estaacute llamada a un estado de escucha obediente Lo exige la concepcioacuten misma de la Tradicioacuten laquoque progresa en la Iglesia con la asistencia del Espiacuteritu Santoraquo (DV 8b) mientras que la idea de Revelacioacuten como suma de las verdades del credo impone ante todo la conservacioacuten del depositum fidei la dinaacutemica de diaacutelogo entre Dios y el hombre implica en cambio un proceso continuo de discerni-miento que se da en la escucha de lo que el Espiacuteritu Santo dice a la Igle-sia y consecuentemente mientras la idea de transmisioacuten del depositum fidei llevaba a enfatizar la funcioacuten uacutenica del magisterio la de Tradicioacuten viva llama en el dinamismo de la transmisioacuten a toda la Iglesia y a todos en la Iglesia

Surge aquiacute la parte del sensus fidei del Pueblo santo de Dios Todos en la Iglesia han recibido el Espiacuteritu Santo y laquotodos son instruidos por Diosraquo (Jn 645) laquoEn cuanto a vosotros la uncioacuten que de Eacutel habeacuteis reci-bido permanece en vosotros y no necesitaacuteis que nadie os ensentildee Pero como su uncioacuten os ensentildea acerca de todas las cosas ndashy es verdadera y no mentirosandash seguacuten os ensentildeoacute permaneced en Eacutelraquo (1 Jn 227) En esta precisa direccioacuten va la llamada de DV 8 al dinamismo de la Tradicioacuten ali-mentado por el conocimiento ndashaunque el texto latino dice perceptiondash que emana del estudio y de la contemplacioacuten pero tambieacuten de la experiencia de los creyentes en la que se puede reconocer el sensus fidei del Pueblo

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de Dios84 El cuadro dibujado por DV 8 para el progreso de la Tradicioacuten no vale soacutelo para el desarrollo de la doctrina toda la vida de la Iglesia ndashlaquotodo lo que ella es todo lo que ella creeraquondash entra en este dinamismo eclesial que involucra a todos cada uno seguacuten su propia capacidad y funcioacuten

23 Los momentos del proceso sinodal

En este marco eclesioloacutegico por tanto se basa con toda evidencia la posibilidad de un camino sinodal de la Iglesia en la escucha del Espiacuteritu por parte de todos en la Iglesia Pueblo de Dios y pastores Asiacute se ha ex-presado el Papa Francisco al respecto

Una Iglesia sinodal es una Iglesia de la escucha con la conciencia de que escuchar laquoes maacutes que oiacuterraquo Es una escucha reciacuteproca en la cual cada uno tiene algo que aprender Pueblo fiel Colegio episcopal Obispo de Roma uno en escucha de los otros y todos en escucha del Espiacuteritu Santo el laquoEspiacuteritu de verdadraquo (Jn 1417) para conocer lo que eacutel laquodice a las Iglesias (Ap 27)raquo85

Asume aquiacute toda su relevancia la relacioacuten de circularidad entre el Pueblo de Dios y sus pastores entre el sensus fidei y el magisterio ma-nifestado en los documentos conciliares iquestComo se hace posible esta escucha reciacuteproca del Pueblo de Dios Colegio de los obispos y Obispo de Roma Antes de articular las relaciones entre los sujetos que podriacutean estar condicionadas por relaciones de poder conviene fijar los diversos momentos en que se articula el proceso sinodal la profeciacutea el discerni-miento y la actuacioacuten

En virtud de la primaciacutea de la vida teologal afirmada a partir de LG II el primer momento es el de la profeciacutea que pertenece a todo el Pueblo de Dios por regalo del Espiacuteritu Santo donado a todos en el bautismo El deseo de Moiseacutes laquoiexclOjalaacute fuesen todos profetas en el Pueblo de Dios y quisiese Dios otorgarles el Espiacuterituraquo (Nm 1129) se ha realizado plenamente en la nueva Alianza con el regalo del Espiacuteritu a la Iglesia

84 En esta direccioacuten leiacutean DV 8 tanto Z ALSZEGHY - M FLICK Sviluppo del dogma cattolico Brescia 1967 como A M KOTHGASSER Dogmenenwicklung und die Funktion des Geist-parakleten nach den Aussagen des zweitn vatikanischen Konzils in Salesianum 3 (1969) 379-460 He sostenido la misma posicioacuten en D VITALI Sensus fidelium Una fun-zione ecclesiale di intelligenza della fede Brescia 1993

85 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

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En todos los bautizados desde el primero hasta el uacuteltimo actuacutea la fuerza santificadora del Espiacuteritu que impulsa a evangelizar El Pueblo de Dios es santo por esta uncioacuten que lo hace infalible laquoin credendoraquo (hellip) La presencia del Espiacuteritu otorga a los cristianos una cierta connaturalidad con las realida-des divinas y una sabiduriacutea que les permite captarlas intuitivamente aunque no tengan el instrumental adecuado para expresarlas con precisioacuten86

No se puede dar por sentado que se escucha al Espiacuteritu y se entiende lo que dice a la Iglesia si no se interroga y no se escucha al Pueblo de Dios que participa en la funcioacuten profeacutetica de Cristo este momento no es opcional en cuanto que el sensus fidei del Pueblo de Dios pertenece a una funcioacuten eclesial de inteligencia de la fe irreducible a otra funcioacuten in-cluida la del magisterio mismo87 La tradicioacuten teoloacutegica reconoce el fun-damento de esta funcioacuten de todos los bautizado no solo en 1 Jn 22027 sino tambieacuten en las promesas del Espiacuteritu en el cuarto Evangelio (Jn 1416s26 1526s 167-1112-15) y en uacuteltimo teacutermino en el regalo del Espiacuteritu en Pentecosteacutes que da cumplimiento a la profeciacutea de Joel laquoDe-rramareacute mi espiacuteritu sobre toda carne vuestros hijos e hijas profetizaraacutenraquo (Jl 31-5 retomado en Hch 216-18) Sobre la base de tal conviccioacuten los Padres han podido oponer a los argumentos de los herejes el christiano-rum populorum concordissima fidei conspiratio como afirmacioacuten cierta de la fe de la Iglesia88 El Papa Francisco se situacutea de nuevo en este cauce afirmando que laquoel camino sinodal comienza escuchando al Pueblo que incluso participa en la funcioacuten profeacutetica de Cristo (LG 12) seguacuten un principio preciado para la Iglesia del primer milenio Quod omnes tangit ab omnibus tractari debetraquo89

Pero no hay profeciacutea que no requiera discernimiento y este es el se-gundo momento del proceso sinodal que compete particularmente a los pastores laquoNo apagueacuteis el Espiacuteritu No menosprecieacuteis las profeciacuteas Exa-minadlo todo retened lo buenoraquo (1 Tes 519-21) Vale para esto la regla fijada por LG 12 para los carismas haciendo referencia expliacutecita a la maacutexima paulina laquoel juicio de su autenticidad y de su ejercicio razonable pertenece a quienes tienen la autoridad en la Iglesia a los cuales compete

86 FRANCISCO Exhortacioacuten apostoacutelica Evangelii gaudium (24-XI-2013) 11987 En relacioacuten con esto cfr el reciente documento de la COMISIOacuteN TEOLOacuteGICA

INTERNACIONAL El sensus fidei en la vida de la Iglesia (10-VI-2014) Roma 201588 S AGUSTIacuteN Epistola 194 31 in Opera omnia vol XXIII 29029189 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de

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ante todo no sofocar el Espiacuteritu sino probarlo todo y retener lo que es buenoraquo Estariacutea lejos de la verdad quien piense que el discernimiento consiste en una escucha pasiva de aquello que emerge del momento pro-feacutetico casi como si el magisterio estuviese subordinado a la instancia carismaacutetica el Espiacuteritu que laquoconduce la Iglesia a toda la verdadraquo (Jn 1714 LG 4) es el mismo que suscita la profeciacutea en el Pueblo santo de Dios y que conduce al magisterio a discernir en la vida de la Iglesia la voz del Espiacuteritu y a decidir la direccioacuten del camino eclesial y las condiciones para su aplicacioacuten

No hay por lo tanto contradiccioacuten entre los dos momentos sino com-plementariedad La obligacioacuten de escucha por parte del magisterio se pro-duce de cara a un ejercicio libre de la discrepatio en la que va impliacutecita necesariamente la determinatio la decisioacuten pastoral90 En el desarrollo de esta funcioacuten laquolos obispos actuacutean como auteacutenticos custodios inteacuterpretes y testigos de la fe de toda la Iglesia que deben saber distinguir atentamente de los flujos muchas veces cambiantes de la opinioacuten puacuteblicaraquo91

El tercer momento es el de la realizacioacuten de lo que ha sido decidido por los pastores que compromete a toda la Iglesia en la escucha y en la obediencia a la voz del Espiacuteritu Este momento pertenece a todos seguacuten su propia condicioacuten y funcioacuten en primis a cuantos han sido puestos como laquoprincipio y fundamento de unidadraquo en la Iglesia el obispo en su Iglesia y el Obispo de Roma en la Iglesia universal laquoque es tambieacuten el cuerpo de las Iglesiasraquo (LG 23) Se puede apreciar aquiacute un doble movimiento el de quien tiene autoridad en razoacuten de la cual actuacutea en los distintos ni-veles de la vida eclesial para que se ejecute la decisioacuten tomada y el del Pueblo de Dios sujeto maacutes bien al proceso de recepcioacuten laquomediante el cual un cuerpo eclesial hace verdaderamente suya una determinacioacuten que eacutel mismo no se ha dado reconociendo en la medida promulgada una regla que conviene a su propia vidaraquo92 Este proceso reintroduce la decisioacuten de

90 Retomo para esta explicacioacuten los teacuterminos que la tradicioacuten monaacutestica usa para descri-bir los momentos de la lectio divina junto a la secuencia maacutes conocida lectio-meditatio-con-templatio-oratio-actio existe una segunda que introduce entre el momento de la oratio y el de la actio otros tres momentos la consolatio la discreptio y la determinatio Es evidente que un discernimiento incapaz de asumir responsablemente una decisioacuten es fin en siacute mismo si esto es cierto en el plano personal lo es con mayor razoacuten en el discernimiento eclesial

91 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

92 Y CONGAR La reacuteception comme reacutealiteacute ecclesiologique in Revue de Sciences Philosophiques et Theacuteologiques 56 (1972) 370

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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los pastores en el momento profeacutetico del Pueblo de Dios en un fecundo movimiento de circularidad entre los sujetos de la sinodalidad

Profeciacutea discernimiento y actuacioacutenrecepcioacuten son tres momentos con-secutivos con capacidad de darle al camino eclesial un gran dinamismo un movimiento de participacioacuten en el cual toda la Iglesia y todos en la Iglesia estaacuten implicados93 Naturalmente cada momento tiene valor en siacute mismo y puede ser realizado incluso independientemente de los otros es maacutes en situaciones de sufrimiento y prueba en la vida de la Iglesia ha sido necesa-rio ndashy tal vez seraacute necesariondash que esto suceda Pero no deberiacutea tratarse de la norma en la vida ordinaria del camino eclesial deberiacutea valer la unidad dinaacutemica de los tres momentos conscientes de que ninguacuten momento se basta por siacute mismo Cuando esto no suceda la profeciacutea tenderaacute a trans-formarse en desacuerdo el discernimiento en acto de poder la actuacioacuten en imposicioacuten al otro sobre todo cada sujeto tenderaacute a oponerse al otro y todo el proceso se reduciraacute al solo momento de la ejecucioacuten o aplicacioacuten concentrado en las manos de quien tiene poder en la Iglesia

24 El ejercicio de la sinodalidad

La Iglesia constitutivamente sinodal por tanto se funda sobre la cir-cularidad de profeciacutea discernimiento y actuacioacutenrecepcioacuten No se trata de multiplicar las estructuras ni las instituciones sino de hacer funcionar aquellas existentes seguacuten la secuencia de estos tres momentos en los que se articula el proceso sinodal La actual crisis de los organismos de co-munioacuten manifiesta hasta queacute punto este paso no es obvio ni hay que darlo por descontado la llamada insistente a la dimensioacuten solo consultiva de los siacutenodos y consejos de diverso tipo instituidos tras el Vaticano II demues-tra coacutemo la preocupacioacuten del legislador ha estado basada sobre todo en preservar el tramado institucional preexistente ciertamente no pensado seguacuten el principio de participacioacuten

El paso a una Iglesia sinodal implica una auteacutentica conversioacuten la disponibilidad por parte de los pastores de la Iglesia a aceptar que no son depositarios de la verdad ex officio sino el principio de unidad que garantiza el camino compartido de la escucha del Espiacuteritu capaces de llevar a la Iglesia a discernir cuaacutel es la voluntad de Dios para el presente

93 He intentado describir de modo maacutes extenso estos tres momentos en D VITALI Verso la sinodalitagrave 100-106

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Por esta razoacuten deberiacutea ser un elemento claro para quien tenga la potes-tad de activar el proceso sinodal ndashel Papa en la Iglesia Universal y el obispo para su Iglesiandash que su punto de partida obligatorio es siempre la escucha del Pueblo de Dios Tampoco deberiacutea convertirse en un ele-mento impuesto llevado a cabo por alguacuten grupo de expertos o por alguacuten departamento diocesano en lugar y en nombre del Pueblo de Dios94 si el sensus fidei pertenece a la totalidad de los bautizados nadie puede pretender subrogarlo95

La cuestioacuten es doacutende se da la posibilidad efectiva y concreta de escucha al Pueblo de Dios El Papa invirtiendo un esquema auacuten muy radicado en la vivencia eclesial afirma que el primer nivel para el ejercicio de la sino-dalidad se realiza en las Iglesias particulares96 Solo a partir de una portio populi Dei que encarne el Evangelio dentro de los ritmos de la Historia el Pueblo de Dios no se reduce a una masa confusa privada de lugar y medios para manifestar su consenso Una totalidad de bautizados que se identifique con la Iglesia universal queda inevitablemente expuesta a todas las dinaacutemicas que gobiernan y condicionan la opinioacuten puacuteblica Por el con-trario en la Iglesia local puede ponerse en praacutectica la singularis Antistitum et fidelium cospiratio por medio de un estrecho viacutenculo del rebantildeo con su pastor97 Si se asume el dato eclesioloacutegico derivado del Concilio sobre la Iglesia particular como laquoportio populi Dei confiado al cuidado pastoral del obispo con la cooperacioacuten de su presbiterioraquo (CD 11) inmediatamente se identifican tambieacuten los sujetos de la profeciacutea (la portio populi Dei) del dis-cernimiento (el obispo con el presbiterio o si se prefiere el presbiterio con y nunca sin el obispo) y de la actuacioacuten (todos y cada uno de los miembros de la Iglesia particular seguacuten su propia condicioacuten y funcioacuten)

94 En Evangelii Gaudium despueacutes de haber hablado del sensus fidei (EG 119) el Papa afirma laquoEn virtud del bautismo recibido cada uno de los bautizados cualquiera que sea su funcioacuten en la Iglesia y el grado de ilustracioacuten de su fe es un agente evangelizador y seriacutea in-adecuado pensar en un esquema de evangelizacioacuten llevado adelante por actores cualificados donde el resto del pueblo fiel sea soacutelo receptor de sus accionesraquo (EG 120)

95 En el discurso para la conmemoracioacuten del 50ordm Aniversario del Siacutenodo de los obispos dice el Papa laquoEsta es la conviccioacuten que me ha guiado cuando he deseado que el Pueblo de Dios fuera consultado en la preparacioacuten de la doble cita sinodal sobre la familiaraquo

96 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

97 Me refiero a cuanto se ha dicho en DV 10 cfr supra n 17 LG 25 afirma que laquolos obispos son los maestros auteacutenticos o sea los que estaacuten dotados de la autoridad de Cristo que predican al pueblo que les ha sido encomendado la fe que ha de ser creiacuteda y ha de ser aplicada a la vidaraquo

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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En su discurso el Papa afirma que este es el medio para dar forma a una Iglesia sinodal a traveacutes da la valorizacioacuten de los organismos de comunioacuten ndashhoy tocados por un evidente cansanciondash como laquoocasioacuten para la escucharaquo del pueblo de Dios El obispo como laquoprincipio y fundamento de unidad de su Iglesiaraquo (LG 23) tiene la potestad de iniciar todo el proceso no soacutelo como accioacuten extraordinaria convocando un siacutenodo diocesano sino como forma habitual de camino eclesial Para activar a este nivel una sinodali-dad efectiva es necesario no obstante reconsiderar las relaciones entre los sujetos de la Iglesia local sobre todo entre el obispo y sus presbiacuteteros que la reflexioacuten teoloacutegica y canoacutenica no ha sustraiacutedo auacuten a una concepcioacuten demasiado extriacutenseca98

El Papa indica asimismo un segundo nivel de ejercicio de la sinodali-dad laquoel de las Provincias y las Regiones eclesiaacutesticas el de los Concilios particulares y muy especialmente el de las Conferencias episcopalesraquo99 En el primer milenio las exigencias de la communio habiacutean llevado a la Iglesia a estructurarse en circunscripciones territoriales a distintos niveles ndashsedes metropolitanas provincias y regiones eclesiaacutesticas patriarcadosndash en el centro de las cuales los metropolitas y los patriarcas ejerciacutean una autoridad efectiva sobre las Iglesias que integraban su jurisdiccioacuten una organizacioacuten que ha favorecido en gran manera el ejercicio de la sinodalidad Tambieacuten en nuestros diacuteas podriacutea retomarse la normativa que regula las Conferencias episcopales laquopara concretar auacuten maacutes a traveacutes de estos organismos las instancias intermedias de la colegialidad quizaacutes integrando y poniendo al diacutea algunos aspectos del antiguo ordenamiento eclesiaacutesticoraquo100

laquoEl uacuteltimo nivel es el de la Iglesia Universal Aquiacute el Siacutenodo de los obispos representando al episcopado catoacutelico se convierte en expresioacuten de la colegialidad episcopal dentro de una Iglesia enteramente sinodalraquo

98 El replanteamiento de la relacioacuten entre episcopado y presbiterado a la luz de las indi-caciones de LG 21 sobre la plenitud del sacramento del orden atribuido a los obispos puede encontrar un justo equilibrio uacutenicamente a traveacutes de una nueva formulacioacuten de la unioacuten entre el obispo y sus presbiacuteteros con el obispo como principio y fundamento de la unidad no solo de su rebantildeo sino tambieacuten de su presbiterio He intentado desarrollar esta idea en D VITALI Sacerdozio vescovo e presbiterio Un contributo teologico in La Rivista del Clero Italiano 885 (2007) 381-396

99 Cita aquiacute el CIC 83 cc 431-459100 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50ordm aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de

los obispos El Papa citando Evangelii Gaudium reitera que laquoen una Iglesia sinodal como ya afirmeacute no es conveniente que el Papa reemplace a los episcopados locales en el discerni-miento de todas las problemaacuteticas que se plantean en sus territorios En este sentido percibo la necesidad de avanzar en una saludable lsquodescentralizacioacutenrsquoraquo

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Se trata de un paso de capital importancia en el discurso del Papa pues a diferencia de una vulgata profusamente difundida atribuye al Siacutenodo de los obispos una funcioacuten colegial propia del Colegio de los obispos No puede comprenderse este traacutensito maacutes que en la perspectiva del texto conciliar seguacuten el cual laquoel cuerpo episcopal que sucede al Colegio de los apoacutestoles en el magisterio y en el reacutegimen pastoral maacutes auacuten en el que perdura continuamente el Cuerpo apostoacutelico junto con su Cabeza el Ro-mano Pontiacutefice y nunca sin esta Cabeza es tambieacuten sujeto de la suprema y plena potestad sobre la Iglesia universalraquo (LG 22)

Por otra parte el hecho de que laquola suprema potestad que tiene este Colegio sobre toda la Iglesia se ejerce de manera solemne en el Concilio ecumeacutenicoraquo (ibid) hace del todo evidente el nexo con la sinodalidad de la que el Concilio es la maacutexima expresioacuten Tampoco tal atribucioacuten de po-testad al Colegio debilita al primado en todo caso lo refuerza pues uacuteni-camente al Papa laquoen virtud de su oficio como Vicario de Cristo y pastor de toda la Iglesiaraquo (ibid) corresponde convocar presidir y confirmar los concilios En esta perspectiva se puede comprender cualquier otro acto sinodal en particular el que se atribuye al Siacutenodo de los obispos en el marco de todo lo que el concilio deciacutea de la potestad colegial que laquopuede ser ejercida por los obispos dispersos por el mundo a una con el Papa con tal que la Cabeza del Colegio los llame a una accioacuten colegial o por lo menos apruebe la accioacuten unida de eacutestos o la acepte libremente para que sea un verdadero acto colegialraquo (ibid)

El momento maacutes evidente y en cierto modo tambieacuten emblemaacutetico fue la firma de los documentos conciliares suscritos por Pablo VI y por los Padres con la siguiente foacutermula que da relevancia al caraacutecter sinodal del acto laquoNos Apostolica a Christo Nobis tradita potestate illa una cum Venerabilibus Patribus in Spiritu Sancto approbamus decernimus et statuimus et quae ita synodaliter statuta sunt ad Dei gloriam promulgari iubemusraquo101

101 La foacutermula se utiliza al final de cada documento aprobado cfr Concilium Oecu-menicum Vaticanum II Constitutiones Decreta Declarationes Cittagrave del Vaticano 1966 Aparece tambieacuten en la carta de clausura del concilio laquoMandamus autem ac praecipimus ut quae synodaliter in Concilio statuta sunt sancte et religiose ab omnibus Christifidelibus serventur ad Dei gloriam ad Sanctae Matris Ecclesiae decus et ad hominum universorum tranquillitatem et pacemraquo Pablo VI Litterae apostolicae quibus SS Concilio oecumenico finis imponatur in Concilium Oecumenicum Vaticanum II Constitutiones Decreta Decla-rationes 1102

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25 Sinodalidad colegialidad primado

El marco plasmado a partir del Vaticano II permite una reflexioacuten so-segada sobre el Siacutenodo de los obispos en vistas de una reforma del Ordo Synodi Maacutes allaacute de los procedimientos la cuestioacuten de mayor relevancia concierne a la naturaleza misma del Siacutenodo Sorprende la institucioacuten del Siacutenodo durante el mismo concilio102 poniendo en evidencia la existencia de signos de un debate sobre la colegialidad que habiacutea interesado viva-mente al aula No asombra por tanto que Pablo VI vinculase fuertemente al ejercicio del primado el nuevo organismo a cuyo auxilio el sucesor de Pedro puede recurrir laquopor el bien de la Iglesia universalraquo

Con el fin de dar a los obispos laquola posibilidad de participar maacutes abierta y eficazmente en Nuestra solicitud por la Iglesia universalraquo dice el Papa laquomotu proprio y en virtud de Nuestra autoridad apostoacutelica erigimos y constituimos en esta ciudad de Roma un consejo estable de obispos para la Iglesia universal sujeto directa e inmediatamente a Nuestra autoridad al que designamos con el nombre propio de Siacutenodo de los obisposraquo103

Se trata de una institucioacuten eclesiaacutestica central que representa a todo el episcopado catoacutelico perpetua por su naturaleza que en cuanto a la estructura desarrolla sus tareas de modo temporal y ocasional104 Tales tareas consisten por la naturaleza misma del Siacutenodo en laquodar informa-ciones y consejosraquo al Papa la potestad deliberativa soacutelo puede serle con-cedida por el Papa laquoal que corresponde en tal caso ratificar la decisioacuten del Siacutenodoraquo105

Apostolica sollicitudo estableciendo esmeradamente la naturaleza y la funcioacuten de este laquoconsejo permanente de sagrados pastoresraquo nunca hace referencia a la colegialidad ni siquiera en el caso de una eventual potestad deliberativa del Siacutenodo106 Este dato es elocuente en cuanto a la intencioacuten

102 La publicacioacuten del motu proprio Apostolica Sollicitudo es del 15 de septiembre de 1965 el diacutea siguiente a la apertura de la cuarta sesioacuten conciliar En el discurso de apertura el Papa preanuncioacute laquola institucioacuten deseada por este concilio de un Siacutenodo de los obispos que compuesto de presuli nombrados en su mayor parte por las conferencias episcopales con Nuestra aprobacioacuten seraacute convocado por el Romano Pontiacutefice seguacuten las necesidades de la Iglesia para su consulta y colaboracioacuten cuando eso le parezca a oportuno por el bien general de la Iglesiaraquo in EV 1 355

103 En el punto III se reitera que laquoel Siacutenodo de los obispos estaacute sometido directa e inme-diatamente a la autoridad del Sumo Pontiacuteficeraquo in EV 2 448

104 Apostolica Sollicitudo I in EV 2 445105 Ibid II in EV 2 447106 Ibid

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del pontiacutefice de instituir un organismo focalizado en la ayuda al primado prescindiendo de los teacuterminos de la Nota explicativa praevia ndashretomada sin embargo praacutecticamente al pie de la letra en el motu propio que en los puntos 3 y 4 incluso con todas las cautelas para la defensa del primado107 preveiacutea la posibilidad de una accioacuten del Colegio cual laquosujeto de supremo y pleno poder sobre la Iglesia universalraquondash

Naturalmente la aclaracioacuten de la Nota en la que se afirma que laquola distincioacuten no es entre el Romano Pontiacutefice y los obispos entendidos de manera colectiva sino entre el Romano Pontiacutefice tomado separadamente y el Romano Pontiacutefice junto con los obisposraquo108 ofrecioacute esta viacutea de esca-pe sin contradecir la afirmacioacuten de LG 22 aprobado por el aula acerca de laquoel orden de los obispos [que] incluso es en unidad con [una cum] su cabeza el Romano Pontiacutefice y nunca sin ella sujeto de plena y suprema autoridad sobre toda la Iglesiaraquo

En realidad las dos formulaciones no son alternativas a condicioacuten de que se entienda la primera como alusioacuten a la naturaleza y la segunda como alusioacuten al ejercicio de la colegialidad dicho de otra manera existen dos sujetos ndashel Papa y el Colegiondash que tienen plena y suprema potestad sobre la Iglesia pero el segundo no puede ejercer su potestad si no es cum Petro y nunca sine Petro cabeza del Colegio No se trata por tanto de dos formas diferenciadas de ejercicio del primado sino del ejercicio diferenciado de dos potestades supremas en el que la segunda no puede activarse maacutes que cum Petro y nunca sine Petro y solo consentiente Capite109

Se podriacutea decir parafraseando el Vaticano II que laquocomo el Papado es de institucioacuten divina del mismo modo lo es el Colegio tambieacuten este tiene sus derechos en virtud de tal institucioacuten que el Papa no tiene ni el derecho ni el poder de cambiarraquo110 Al Papa le corresponde en cambio el derecho y el deber de determinar los modos de ejercicio de la colegia-lidad para que este servicio no falte a la Iglesia se trata de un ulterior aspecto en el ejercicio del primado que emerge con la aclaracioacuten expresa

107 laquoPertenece al juicio del Sumo Pontiacutefice a quien se le ha confiado el cuidado de todo el rebantildeo de Cristo determinar seguacuten las necesidades de la Iglesia que cambian con los tiempos la forma como convenga realizar este cuidado de forma personal o colegiada El Romano Pontiacutefice procede seguacuten su propio cristerio al regular promover o aprobar la actuacioacuten del Colegio con miras al bien de la Iglesiaraquo Nota explicativa praevia punto 3 in EV 1453

108 Nota explicativa praevia punto 4 in EV 1454109 Ibid110 DH 3115

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de la doctrina sobre el Colegio que no puede ser tal sin su cabeza Tam-poco el hecho de que exista un ejercicio personal del primado excluye ni hace superfluo el ejercicio de la colegialidad Papa y Colegio no com-piten sino que estaacuten en una relacioacuten sineacutergica al servicio de la Iglesia cada uno seguacuten su propia funcioacuten Es maacutes la Iglesia es constitutivamente sinodal y activar la colegialidad como modalidad habitual de laquocuidado del rebantildeo de Cristoraquo deberiacutea ser la forma de ejercicio maacutes alta y legiacuteti-ma del primado sin que esto signifique una limitacioacuten o la cesioacuten de una cuota de potestad

La funcioacuten de cabeza del Colegio no solo no perjudica la funcioacuten per-sonal del Papa como laquovicario de Cristo y pastor de la Iglesia Univer-salraquo111 sino que la resalta poniendo en primer plano su ser laquoprincipio y fundamento perpetuo y visible de unidad tanto de los obispos como de la muchedumbre de los fielesraquo112 Por otro lado el hecho de que le corres-ponda al Papa determinar las modalidades de ejercicio de la colegialidad maacutes que un liacutemite impuesto a la potestad del Colegio deberiacutea aparecer como el requisito capaz de encaminar y garantizar el efectivo ejercicio de la colegialidad113

Representado debidamente en su naturaleza el Siacutenodo de los obispos puede constituir el lugar habitual de ejercicio de la colegialidad con la decisioacuten de llamar al episcopado al cuidado pastoral de la Iglesia no como una insercioacuten estable de obispos en el organigrama de la curia romana sino a traveacutes de un acto colegial de discernimiento que sepa in-dicar a la Iglesia la viacutea que hay que recorrer en el camino hacia el Reino de Dios Es esta la tarea maacutes propia de los pastores a quienes se dice laquoexaminadlo todo cuidadosamente y retened lo buenoraquo (1 Tes 519-21) En ese caso laquoel Siacutenodo de los obispos representando al episcopado ca-toacutelico se convierte en expresioacuten de la colegialidad episcopal dentro de una Iglesia del todo sinodal [hellip] Ello manifiesta la collegialitas affectiva

111 Nota explicativa praevia punto 3 in EV 1453112 LG 23 que cita el proemio de Pastor Aeternus in DH 3051113 El Papa especifica en su discurso pronunciado con ocasioacuten del 50ordm aniversario de la

institucioacuten del Siacutenodo laquoEl hecho de que el Siacutenodo actuacutee siempre cum Petro et sub Petro ndashpor tanto no soacutelo cum Petro sino tambieacuten sub Petrondash no es una limitacioacuten de la libertad sino una garantiacutea de la unidad En efecto el Papa es por voluntad del Sentildeor laquoel principio y fundamento perpetuo y visible de unidad tanto de los obispos como de la muchedumbre de fielesraquo Con esto enlaza el concepto de hierarchica communio empleado por el concilio Vaticano II los obispos se unen con el Obispo de Roma por el viacutenculo de la comunioacuten episcopal (cum Petro) y estaacuten al mismo tiempo jeraacuterquicamente subordinados a eacutel como cabeza del Colegio (sub Petro)

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que incluso puede convertirse en algunas circunstancias en lsquoefectivarsquo que une a los obispos entre ellos y con el Papa en la dedicacioacuten al Pueblo de Diosraquo114

Esto puede ocurrir a condicioacuten de que los sujetos del proceso sinodal ndashPueblo de Dios Colegio de los obispos y cabeza del Colegiondash esteacuten estrechamente vinculados y sus funciones se pongan en sinergia fecun-da De este modo todos en la Iglesia encuentran su lugar y desarrollan su cometido el Pueblo de Dios con el reconocimiento de su participa-cioacuten en la funcioacuten profeacutetica de Cristo (LG 12) el Colegio que puede concretar en el siacutenodo laquola solicitud por toda la Iglesiaraquo (LG 23) y el Papa que laquono estaacute por siacute mismo por encima de la Iglesia sino dentro de ella como bautizado entre los bautizados y dentro del Colegio episco-pal como obispo entre los obispos llamado a la vez ndashcomo Sucesor del apoacutestol Pedrondash a guiar a la Iglesia de Roma que preside en la caridad a todas las Iglesiasraquo115

26 El Siacutenodo de los obispos

Seguacuten la actual normativa canoacutenica116 el Siacutenodo de los obispos no se manifiesta como expresioacuten de la colegialidad episcopal al menos por tres motivos la escasa capacidad de representar al Colegio la composicioacuten de la asamblea sinodal y el caraacutecter meramente consultivo Estos motivos se encuentran estrechamente conectados entre siacute y determinan la naturaleza del Siacutenodo se resuelven partiendo de la colegialidad o como ayuda a la funcioacuten de primado del Papa

La legislacioacuten vigente es detallada y minuciosa al fijar las normas relativas a la eleccioacuten de los obispos participantes en el Siacutenodo por parte de las Conferencias episcopales Pero por maacutes que los mecanismos de eleccioacuten esteacuten inspirados en el criterio de proporcionalidad el hecho de que los electos no representen a los otros obispos priva a la asamblea sinodal de la capacidad de expresar el Colegio y sus actos del caraacutecter colegial pues esto podriacutea suceder uacutenicamente si actuase el Colegio en cuanto tal o una parte del mismo que lo representase de manera efectiva

114 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

115 Ibid116 Cfr CIC 83 cc 342-348 y las disposiciones del Ordo Synodi Episcoporum del 29-

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y concreta Pero esto no ha sido nunca expresado ni en Apostolica solle-citudo ni posteriormente117

La dificultad de los obispos electos para representar al Colegio se obstaculiza profundamente con la norma introducida por el Coacutedigo que determina que la asamblea sinodal deba estar compuesta por laquouna mayoriacutea de obisposraquo118 Esta determinacioacuten implica que los actos de tal asamblea no se refieren al Colegio compuesto tan solo de obispos119 Naturalmente no falta quien cree que una asamblea compuesta de una mayor variedad con una cuota significativa de laicos hombres y muje-res representariacutea mejor a la Iglesia Pero maacutes allaacute de las dificultades que hay en fijar los criterios de representatividad del Pueblo de Dios habriacutea que preguntarse en tal caso queacute sentido tendriacutea entonces hablar de Siacutenodo de los obispos Se suele insistir en la normativa vigente sobre el caraacutecter consultivo del Siacutenodo

Huelga decir que si se tratase de una asamblea de obispos capaz de representar efectivamente al Colegio y dado que sus acciones seriacutean ma-nifestacioacuten de un laquosujeto de suprema y plena potestad sobre toda la Igle-siaraquo estas no podriacutean ser meramente consultivas Basta esto para llegar a la conclusioacuten de que el Siacutenodo de los obispos tal como estaacute concebido y como ha desarrollado su actividad en estos uacuteltimos cincuenta antildeos es con toda evidencia un organismo que ayuda al primado y no una expresioacuten del Colegio de los obispos Con esta configuracioacuten la normativa actual es completamente congruente en cuanto que regula la actividad de una asamblea compuesta en su mayoriacutea de obispos convocados laquopara prestar ayuda con su consejo al Romano Pontiacutefice colaborando en la salvaguardia y en el incremento de la fe y las costumbres la observancia y la consolida-

117 A menos que no se entienda en este sentido el empleo repetido del teacutermino raepre-sentansrepresentantes en el Ordo Synodo de 2006 que podriacutea abrir una viacutea a la solucioacuten del problema Se percibe en todo caso la debilidad de la normativa actual con respecto de la praxis maacutes antigua en la que los arzobispos los metropolitas y los patriarcas representaban efectivamente a los obispos con voto a nivel de metroacutepolis provincias y regiones eclesiaacutesti-cas y patriarcados Incluso fueron figuras importantes las de los legados que tuvieron una tarea efectiva de representacioacuten Por esto seriacutea muy uacutetil como dice el Papa reflexionar laquoso-bre las instancias intermedias de la colegialidad quizaacutes integrando y poniendo al diacutea algunos aspectos del antiguo orden eclesiaacutesticoraquo

118 Cfr CIC 83 c 346119 La objecioacuten no es vaacutelida naturalmente si el Siacutenodo de los obispos es un organismo

dirigido uacutenicamente a ayudar al Papa en el ejercicio de su ministerio en ese caso eacutel a su dis-crecioacuten puede establecer no solamente la composicioacuten sino tambieacuten cualquier otro aspecto que configure el organismo

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cioacuten de la disciplina eclesiaacutestica incluyendo el estudio de los problemas relativos a la actividad de la Iglesia en el mundoraquo120 Es oportuno adoptar el criterio de proporcionalidad al convocar a los obispos pero debe re-cordarse que el Papa podriacutea seguacuten su juicio cambiar reglas y criterios incluida la configuracioacuten misma del Siacutenodo hasta la eleccioacuten extrema de suprimirlo trataacutendose de un organismo al servicio del primado y del cual eacutel puede disponer seguacuten elija

Una vez clarificado este punto insistir sobre una mayor colegialidad resultariacutea fuera de lugar aunque el Papa atribuyera ndashsiempre o soacutelo en al-guacuten casondash capacidad deliberativa a la asamblea se tratariacutea de una conce-sioacuten de la potestad del primado y no de un ejercicio de la potestad colegial en sentido estricto la cual precisamente por pertenecer al Colegio no puede ser ni concedida ni revocada sino uacutenicamente regulada121 Muchas expectativas creadas sobre el Siacutenodo han provocado y provocaraacuten pro-fundas desilusiones porque se sostienen sobre la base del malentendido de que se trata de un organismo colegial al que se le otorgan atribuciones que debido a la actual normativa no le pertenecen como queda claro en los mismos caacutenones del Coacutedigo de Derecho Canoacutenico122

No es tanto la norma la que crea el conflicto sino su colocacioacuten el ca-piacutetulo sobre el Siacutenodo de los obispos aparece en la seccioacuten I de la parte II La constitucioacuten jeraacuterquica de la Iglesia La seccioacuten desarrolla la laquosuprema autoridad de la Iglesiaraquo subdividiendo la temaacutetica en dos artiacuteculos el relativo al Romano Pontiacutefice y el que se refiere al Colegio de los obispos Hallamos aquiacute el mismo nudo no resuelto de la Nota explicativa praevia la formulacioacuten en singular si bien por una parte asume al Colegio de los obispos en este aacutembito como laquosujeto de suprema y plena potestad sobre la Iglesia universalraquo123 retomando al pie de la letra LG 22 por otro lado lo aiacutesla completamente encuadrando su ejercicio en la forma solemne del concilio ecumeacutenico124 La composicioacuten iacutentegra de la parte II del Coacutedigo refuerza esta impresioacuten en cuanto que el canon de apertura se limita a repetir que laquoel Romano Pontiacutefice sucesor de Pedro y los obispos suce-

120 CIC 83 c 342121 Lo demuestra el caso del concilio ecumeacutenico que compete al Papa convocar y sus-

pender pero que una vez convocado manifiesta la misma potestad de asamblea de obispos que ejercen su potestad sobre la Iglesia siempre con y nunca sin su cabeza

122 Cfr CIC 83 cc 342-348123 CIC 83 c 336124 CIC 83 cc 337-341

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sores de los Apoacutestoles estaacuten vinculados entre ellosraquo125 sin aclarar que la suprema autoridad de la Iglesia pertenece a dos sujetos diferenciados el Papa y el Colegio de los obispos y sobre todo porque no relaciona el Siacutenodo de los obispos y las Conferencias episcopales con el Colegio en la perspectiva del ejercicio de la colegialidad126

Las razones que han llevado a los Papas a elegir un Siacutenodo de los obis-pos como organismo dirigido a la ayuda del primado son comprensibles el riesgo de comprometer elementos constitutivos de la Iglesia imponiendo un sistema de gobierno inspirado en el modelo de la sociedad civil pudo justificar las cautelas Pero la cuestioacuten es si por temor a debilitar el pri-mado no se avaloacute una configuracioacuten demasiado deacutebil de la colegialidad y en relacioacuten con ella del Siacutenodo de los obispos Tal eleccioacuten acaba por ahogar las enormes potencialidades de un organismo que si se concibiera como expresioacuten adecuada de la colegialidad ofreceriacutea la clave para la rea-lizacioacuten de la tarea de discernimiento eclesial necesario para conformar una Iglesia sinodal Por otra parte precisamente los acontecimientos de estos cincuenta antildeos dominados por una conflictividad que ha probado duramente al cuerpo eclesial poniendo con ello en riesgo la unidad invita a sondear posibilidades de este tipo traduciendo la colegialidad en formas concretas de ejercicio a traveacutes de decisiones compartidas en el discerni-miento cum Petro et sub Petro la asamblea sinodal puede ser el lugar y el instrumento para madurar por fin un camino compartido de Iglesia

27 Conclusioacuten abierta el Siacutenodo para una Iglesia del todo sinodal

Al aclarar las prerrogativas del sucesor de Pedro el Vaticano II insistioacute en el hecho de que la afirmacioacuten del primado no fuese en perjuicio de la laquopotestad ordinaria e inmediata de los obispos en sus dioacutecesisraquo al con-trario laquoesta misma potestad es afirmada reforzada y defendida seguacuten el

125 CIC 83 c 330126 El Siacutenodo aparece en el capiacutetulo II (can 342-348) antes de los organismos cla-

ramente vinculados al primado los cardenales (cap III can 349-359) la curia romana (cap IV can 360-361) los legados del Papa (cap V can 362-367) En teoriacutea podriacutea tratarse de un organismo ligado al Colegio puesto que se menciona justo despueacutes de los caacutenones sobre el Colegio de los obispos pero obstaculiza esta lectura el can 334 seguacuten el cual laquoen el ejercicio de su oficio el Romano Pontiacutefice es asistido por los obispos que pueden cooperar con eacutel de diferentes maneras una de las cuales es el Siacutenodo de los obisposraquo Las Conferencias episcopales aparecen luego nada menos que en el cap IV (can 447-459) de la seccioacuten II sobre las Iglesias particulares y sus agrupaciones imposible establecer cualquier viacutenculo de estas con el Colegio y con el ejercicio de la colegialidad

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dicho de Gregorio Magno lsquoMi honor es el honor de la Iglesia universal Mi honor es el soacutelido vigor de mis hermanos Entonces me siento realmente honrado cuando no es negado el honor debido a cada uno de ellosrsquoraquo127

Si la afirmacioacuten podiacutea parecer retoacuterica en el momento de definir el pri-mado de jurisdiccioacuten sobre la Iglesia universal hoy puede convertirse en profeacutetica si el obispo de Roma asume como tarea propia ndashy como su ho-norndash afirmar reforzar y defender al Colegio de los obispos que el concilio Vaticano II ha definido como laquosujeto de plena y suprema potestad sobre la Iglesiaraquo promoviendo un ejercicio efectivo de la colegialidad en una Igle-sia del todo sinodal Tal eleccioacuten no solo pondriacutea en acto el texto conciliar que hasta hoy ha quedado no resuelto en la sustancia sino que permitiriacutea desarrollar una comprensioacuten de la sinodalidad en liacutenea con el desarrollo de la Tradicioacuten del segundo milenio en Occidente que ha pasado por el proceso de aclaracioacuten respecto a la potestad del sucesor de Pedro llegando a su plena maduracioacuten en el Vaticano I y a la luz de aquel respecto a la potestad del Colegio de los obispos en el Vaticano II

A diferencia de quien ve posible la sinodalidad con independencia de la colegialidad128 estoy persuadido de que una viacutea catoacutelica hacia la sino-dalidad fiel a su propio camino en la historia no puede prescindir de aquel proceso maacutes bien tiene que mantenerlas unidas y establecer con una di-naacutemica de circularidad fecunda primado colegialidad y sinodalidad Esta solucioacuten estaacute en evidente continuidad con el concilio129 el cual ademaacutes de resituar la funcioacuten petrina dentro del Colegio tambieacuten ha insertado el ministerio jeraacuterquico dentro de la vida del Pueblo de Dios poniendo las bases para aquella singularis Antistitum et fidelium conspiratio que es conditio sine qua non de la sinodalidad En la unidad de los tres teacuterminos deberiacutea superarse la idea de cualquier competicioacuten entre Papa y Colegio puesto que los dos estaacuten al servicio del Pueblo de Dios cada uno seguacuten su propia naturaleza y funcioacuten

Tras haber pasado cincuenta antildeos del final del concilio ya no tiene sentido posponer un ejercicio pleno de la colegialidad por miedo a que resulten perjudicadas las prerrogativas del primado que quedan intactas tambieacuten en el marco de una Iglesia sinodal Es tiempo de traducir en mo-

127 CONCILIO VATICANO I Const dogmaacutetica Pastor aeternus cap 3 DH 3061128 Cfr por ejemplo E CORECCO Ontologia della sinodalitagrave in G BORGONOVO -

A CATTANEO (coord) Ius et communio Casale Monferrato 1997 83-84129 Cfr supra sectsect 23-6

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dalidades operativas el hecho de que laquoel Romano Pontiacutefice en el cumpli-miento del oficio de supremo Pastor de la Iglesia siempre estaacute vinculado en la comunioacuten con los otros obispos mejor dicho con toda la Iglesiaraquo130 laquoEl derecho a determinar seguacuten las necesidades de la Iglesia el modo personal o colegial de ejercer tal oficioraquo131 maacutes que una baza en defensa del primado deberiacutea ser entendida como garantiacutea de una activacioacuten efecti-va de la doble modalidad en que se articula el gobierno de la Iglesia Que la eleccioacuten de una modalidad o de otra no esteacute vinculada normativamente sino que dependa de un principio discrecional por el bien de la Iglesia no puede convertir de ninguacuten modo en accesoria la funcioacuten del Colegio que existe statuente Domino132 En otras palabras laquoordenar promover y apro-bar el ejercicio colegial teniendo como objetivo el bien de la Iglesiaraquo133 es una tarea que corresponde en conciencia al Papa quien tiene que rendir cuentas no a los hombres sino a Dios mismo

De este modo eacutel que estaacute por encima ndasho quizaacutes sea mejor decir delan-tendash del Colegio en virtud de la funcioacuten primada con la potestad de activar y de cerrar ndashtambieacuten primero si lo quisierandash la accioacuten colegial puede estar asimismo con y entre los otros obispos dentro del Colegio hermano entre los hermanos obispos en escucha del uacutenico Espiacuteritu sin que esto en ninguacuten modo vaya a perjudicar el primado134

En esta tarea de convocar a los obispos a la accioacuten colegial (cfr LG 22) el Papa puede reconocerle al Siacutenodo de los obispos capacidad colegial configuraacutendolo como expresioacuten adecuada del Colegio de los obispos y no soacutelo como un organismo que asiste al primado En ese caso la asamblea sinodal no deberiacutea estar compuesta en su mayoriacutea de obispos135 sino solo

130 CIC 83 c 333 sect 2131 Ibid132 Se trata de la frase utilizada en LG 22 para fundar sobre la base de la unidad entre

Pedro y los otros apoacutestoles la existencia del Colegio de los apoacutestoles del cual se hace depen-der pari ratione la existencia del Colegio de los obispos basado en la unioacuten entre el Sucesor de Pedro y los otros obispos Manteniendo este paralelismo las mismas argumentaciones usadas para fundar la institucioacuten divina del primado en virtud de la sucesioacuten petrina tambieacuten valen para el Colegio de los obispos sucesores de los apoacutestoles

133 Nota explicativa praevia punto 3 in EV 1 453134 Merece la pena citar de nuevo el discurso del Papa en la conmemoracioacuten del 50ordm ani-

versario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos laquoEstoy convencido de que en una Iglesia sinodal tambieacuten el ejercicio del primado petrino podraacute recibir mayor luz El Papa no estaacute por siacute mismo por encima de la Iglesia sino dentro de ella como bautizado entre los bautizados y dentro del Colegio episcopal como obispo entre los obispos llamado a la vez ndashcomo Sucesor del apoacutestol Pedrondash a guiar a la Iglesia de Roma que preside en la caridad a todas las Iglesiasraquo

135 Cfr CIC 83 c 346

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de obispos No deberiacutea ser difiacutecil encontrar criterios y procedimientos aptos para dar a la asamblea sinodal la capacidad de representar ndashy pre-sentarndash al Colegio criterios que seraacuten tanto maacutes convincentes cuanto maacutes representativa conviertan la asamblea de la Ecclesia tota136

Tampoco seriacutean necesarias grandes alteraciones de la normativa vigen-te para poner en praacutectica esta forma de sinodalidad Todo el camino sinodal se desarrollariacutea siguiendo las condiciones indicadas por el Papa Francis-co para los distintos niveles de ejercicio de la sinodalidad y de hecho ya puestos en marcha en los dos uacuteltimos siacutenodos Bastariacutea con articular el acontecimiento sinodal seguacuten los tres momentos anteriormente descritos la escucha del Pueblo de Dios el discernimiento por parte de la asamblea sinodal y la realizacioacuten por parte del entero cuerpo eclesial

Inicialmente seriacutea necesario formalizar la escucha del Pueblo de Dios como primer momento del Siacutenodo el instrumento de consulta ya usado en el pasado por los Papas para verificar el consensus fidelium respecto a cuestiones doctrinales puede ser el medio maacutes idoacuteneo para implicar activamente a todos los bautizados en el proceso sinodal137 Despueacutes de la parte del Pueblo de Dios viene la de los pastores reunidos en asamblea sinodal y llamados al discernimiento para sentildealar las decisiones necesa-rias que sirvan al camino de la Iglesia

Insisto en reiterar que este es el momento propio de los pastores solo bajo tal condicioacuten es posible pasar de un acto consultivo a uno colegial y solo a condicioacuten de que se deacute tal paso es posible que el discernimiento del

136 En otras palabras se deberiacutea hacer evidente en los actos colegiados aquella corres-pondencia entre communio fidelium communio Ecclesiarum y communio hierarchica que se pone de manifiesto en el Colegio incluso la funcioacuten petrina sale ganando puesto que el Papa se vuelve principio y fundamento visible de la unidad tanto de la communio Episco-porum como de la communio Ecclesiarum y de la communio fidelium tal como se pone de re-lieve en LG 23 Naturalmente siguiendo este enfoque seriacutea necesario replantearse la funcioacuten de los obispos titulares verificando de queacute modo una presencia excesivamente dilatada de estos en el Colegio no solo haga problemaacutetica la capacidad del Colegio mismo para represen-tar a la Iglesia sino que acabe por debilitar el ministerio episcopal fundado en la Tradicioacuten sobre el viacutenculo esponsal del obispo con su Iglesia

137 Es evidente que las formas de consulta deben repensarse y perfeccionarse para sal-vaguardar a los bautizados de los grupos de comunicacioacuten y de presioacuten pero la consulta sigue siendo una oportunidad extraordinaria de participacioacuten en la loacutegica de una corresponsabili-dad que le reconoce al Pueblo de Dios un lugar en el proceso sinodal Por otro lado la uacutenica posibilidad de ir maacutes allaacute de una posicioacuten amorfa de la opinioacuten puacuteblica es una formacioacuten continua de los bautizados en el sensus christianus esta formacioacuten es posible uacutenicamente en una experiencia continua de participacioacuten que encuentra su nuacutecleo maacutes favorable en las estructuras de la Iglesia particular Es como decir que un crecimiento del sensus fidei lleva impliacutecito un camino sinodal de las Iglesias particulares

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Siacutenodo tenga valor sinodal es decir que sea vinculante para toda la Igle-sia138 En el caso de que las decisiones de la asamblea asumiesen caraacutecter sinodal toda la Iglesia y todos en la Iglesia estariacutean llamados a observar-las y a ponerlas en acto cada uno seguacuten su propia condicioacuten y funcioacuten139 Lo importante es que los tres momentos se distingan debidamente y con maacutergenes de tiempo evitando superposiciones que acabariacutean por originar procesos confusos y decisiones no suficientemente verificadas De este modo seriacutea de veras evidente que laquoen una Iglesia sinodal el Siacutenodo de los obispos es la manifestacioacuten maacutes evidente de un dinamismo de comunioacuten que inspira todas las decisiones eclesialesraquo140

138 Se puede objetar que las proposiciones del Siacutenodo o cualquier otro documento que proceda de este no tienen caraacutecter vinculante y que cualquier accioacuten de este depende de la aprobacioacuten del Papa quien normalmente se reserva la facultad de promulgar una exhortacioacuten postsinodal En su discurso del 50deg aniversario del Siacutenodo el Papa Francisco dice sin embargo que laquoel camino sinodal culmina en la escucha del Obispo de Roma llamado a pronunciarse como Pastor y Doctor de todos los cristianos no partiendo de sus convicciones personales sino como supremo testigo del fides totius Ecclesiae lsquogarante de la obediencia y la conforma-cioacuten de la Iglesia a la voluntad de Dios al evangelio de Cristo y a la Tradicioacuten de la Iglesiarsquoraquo Este es el uacutenico modo de dar valor a los actos del Siacutenodo de los obispos en la normativa vigente Seriacutea diferente si la asamblea sinodal tuviese caraacutecter colegial en dicho caso el Papa podriacutea elegir la misma modalidad de reconocimiento de los documentos conciliares firmando una cum Patribus los decretos sinodales o incluso remitieacutendolo a todos los obispos para que se convierta en acto colegial compartido por todos los miembros del Colegio

139 En el momento de la puesta en praacutectica encuentra su lugar tambieacuten la Curia romana Entre otras cosas en la perspectiva de una Iglesia constitutivamente sinodal la reforma de la Curia de la que tanto se habla podriacutea orientarse en esta direccioacuten reconfiguraacutendose como estructura al servicio de la Iglesia universal Puesto que depende del Papa como principio y fundamento de unidad de la communio fidelium de la communio Ecclesiarum y de la com-munio Episcoporum laquoordenar promover y aprobar el ejercicio colegialraquo (Nota explicativa praevia n 3) la funcioacuten subordinada de la Curia (que es y se mantiene como oacutergano ejecu-tivo) se desarrollariacutea en el servicio a la accioacuten tanto primada como colegial Por otro lado si la verdad y la credibilidad de una eleccioacuten se miden tambieacuten seguacuten la energiacutea que se invierte para ponerla en acto la estructura de servicio a la Iglesia que sea constitutivamente sinodal no puede ser solamente la Secretariacutea del Siacutenodo frente al nuacutemero de congregaciones y consejos delegados al servicio del primado Este gap no puede y no tiene que ser solucionado con la creacioacuten de una estructura paralela a la Curia sino con la reconversioacuten de la Curia romana con debidas cesiones de competencias a organismos no centralizados como estructura al servicio tambieacuten de la sinodalidad En ese caso despueacutes de todos los discursos sobre la re-forma de la Curia un organismo que muchos consideran un problema podriacutea transformarse en recurso y favorecer la afirmacioacuten de una Iglesia sinodal

140 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos

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Mater Clementissima 1 (2016) 59-120

El hombre es sujeto y persona La relacioacuten entre trascendentalidad

y antropologiacutea en Karl Rahner

Juan Manuel CabieDas teJero1

Universidad Pontificia de Meacutexico

resuMen El meacutetodo trascendental que guiacutea el proyecto teoloacutegico de Karl Rahner per-mite seguir proponiendo hoy la revelacioacuten del Dios de Jesucristo como espacio de correspondencia entre la compleja loacutegica de la existencia humana (fenoacutemeno) y su vocacioacuten a la Verdad (fundamento) entre la vida personal del hombre (experiencia subjetiva y realizacioacuten histoacuterica) y la confesioacuten de fe Este artiacuteculo pretende sin-tetizar el modo en que la obra de Karl Rahner confirma que no se puede pensar la salvacioacuten del hombre como pura apetencia del espiacuteritu sino como posibilidad de autotrascendencia teologal en el seno de una naturaleza contingente (corpoacuterea mun-dana libre mortal y capaz de amor)

palabras ClaVe Karl Rahner antropologiacutea trascendental sujeto persona filosofiacutea moderna

abstraCt laquoMan is subject and person Karl Rahner on relationship between trans-cendentality and anthropologyraquo Even today the transcendental Method that gui-des Karl Rahnerrsquos theological Project is able to propose Godrsquos Revelation in Jesus Christ as correspondence between complex logic of human existence (phenomenon) and its vocation to Truth (foundation) between personal life (subjective experience and historical realization) and the confession of Faith This paper draws a sketch of Rahnerrsquos work to confirm that human salvation can not be thought as pure spiritual appentency but as possibility of theological auto-transcendence within contingent nature (corporeal worldly free mortal and capable of love)

KeyworDs Karl Rahner transcendental Anthropology Subjet Person modern Philo-sophy

1 Miembro de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos En 2012 obtuvo el doctorado en Teologiacutea por la Pontificia Universitagrave Gregoriana (Roma) Ha publicado el libro laquoLa persona es criatura amorosa Perspectivas para una antropologiacutea teoloacutegicaraquo Valencia 2013 ademaacutes de varios artiacuteculos en revistas especializadas Actualmente es profesor en la Facultad de Teologiacutea de la Universidad Pontificia de Meacutexico Entre 2008 y 2012 fue vice-rrector del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma

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MArco y propoacutesito

Estimulada fundamentalmente por el neo-kantismo y la fenomenolo-giacutea la filosofiacutea contemporaacutenea ha valorado la necesidad de laquovolver sobre lo trascendental esto es sobre lo a priori considerado en su relacioacuten con la experienciaraquo2 y de indagar por tanto en queacute medida el yo del laquoyo piensoraquo habriacutea de ser considerado no un entendimiento puro sino una primera persona

Lejos de que tengamos que deducir el principio de la posibilidad de la experiencia del hecho indubitable de la conciencia de siacute como lo habiacutean pensado Descartes y los idealistas fichteanos el anaacutelisis trascendental nos obliga a invertir estas posiciones y no admitir la unidad de conciencia maacutes que a tiacutetulo de correlato copernicano de la unidad de la experiencia posible El cogito no se salva maacutes que perdieacutendose en su propia actividad 3

Se salva salvando su circunstancia diriacutea Joseacute Ortega y Gasset 4 para quien desde los inicios de su visioacuten de la razoacuten como razoacuten vital el su-jeto es siempre espectador (yo) inserto en el flujo del paisaje de su vida Espectador desinteresado (trascendente) mas no espectador indiferente que pueda encaramarse a una atalaya que lo ponga a salvo del riesgo in-herente de comprometerse con el mundo que lo solicita laquocon sus taacutecitas fisonomiacuteas de humildad y anheloraquo5 Husserl Scheler Heidegger Ortega etc participan con los necesarios matices de sensibilidad de un mis-mo intereacutes por profundizar en la actividad del pensar que nos constituye mas no como propiedad de un sujeto puramente formal y autoacutenomo sino como expresioacuten de su concreta forma de ser ser en el mundo (temporal encarnado relacionado mortalhellip)

Lejos de ahondar la distancia entre teologiacutea y filosofiacutea esta cualifi-cacioacuten moderna de la instancia subjetiva se revela referente ineludible para restituir a la inteligencia teoloacutegica aquel espacio reflexivo que como contempla ahora la filosofiacutea es el hombre en cuanto ser personal El pen-

2 M DUFRENNE La nocioacuten de laquoa prioriraquo Salamanca - Meacutexico DF 2010 12 El autor recusa en esta obra una concepcioacuten demasiado formal de lo trascendental proponiendo que entre lo singular (constituido) y lo universal (constituyente) no existe oposicioacuten es decir la trascendentalidad del sujeto (conocimiento y voluntad) ha de aprehenderse como factor defini-torio de su naturaleza ya nos refiramos a la misma en su caraacutecter corpoacutereo social o mundano

3 Ibid 29-30 Estas palabras son cita a su vez de J VUILLEMIN Lrsquoheacuteritage kantien et la reacutevolution copernicienne Fichte Cohen Heidegger Paris 1954 186

4 J ORTEGA Y GASSET Meditaciones del Quijote 775 Ibid 65

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samiento moderno insta y provoca el replanteamiento de la fundacioacuten an-tropoloacutegica del saber de Dios El liacutemite de la visioacuten neo-escolaacutestica no residiacutea en la reivindicacioacuten de un conocimiento natural de Dios sino en su modelado como extriacutenseco al saber de la fe La recuperacioacuten de la unidad del fin uacuteltimo del hombre no implica la remocioacuten de aquel conocimien-to sino la restitucioacuten de su cualidad teologal es decir la pregunta por la identidad del hombre como destinatario y por tanto co-protagonista de la accioacuten salviacutefica de Dios en la historia

Una atencioacuten maacutes cuidadosa a la dinaacutemica dialogal de la relevacioacuten (cfr DV 2) al hondo alcance humanizador del dogma de la encarna-cioacuten (cfr GS 22) y al caraacutecter sacramental de la naturaleza y misioacuten de la comunidad de los creyentes (cfr LG 1) ha llevado a la teologiacutea a pro-poner una antropologiacutea teoloacutegica que junto a la irrenunciable solicitud por las exigencias del comprender y querer humano como apertura ilimi-tada al Ser (a priori) preste decidida atencioacuten a la trascendentalidad de los interrogantes fundamentales que emergen de la existencia histoacuterica del hombre (a posteriori) al hacer experiencia de siacute mismo en el seno de lo real circundante La especiacutefica vivencia humana del cuerpo de la rela-cioacuten con el otro o de la muerte y el tiempo entre las experiencias funda-mentales disentildea una meta-antropologiacutea que permite reconocer el hondo arraigo en la historicidad humana de la experiencia religioso-subjetiva de Dios de la dinaacutemica del don de la gracia y sobre todo del misterio de la Encarnacioacuten de Dios en Jesucristo

La influyente teologiacutea trascendental del teoacutelogo alemaacuten Karl Rahner (1904-1984) ndashque hacemos objeto de estas paacuteginasndash nos brinda la oportu-nidad de acercarnos a esta comunidad de ideas que la teologiacutea catoacutelica del siglo XX comparte con la filosofiacutea centroeuropea Tanto a partir ante todo de su teologiacutea de la gracia como de su esbozo de una cristologiacutea existen-cial o laquocristologiacutea de buacutesquedaraquo6 Rahner insta a la antropologiacutea teoloacutegica a integrar una antropologiacutea metafiacutesica de tipo trascendental como espacio que permite esclarecer el viacutenculo entre la apertura constitutiva del hom-bre a Dios y su experiencia subjetiva personal esto es la asuncioacuten de lo que denomina su laquonaturaleza efectivaraquo7 o laquoesencia uacutenica y concretaraquo8 en

6 Cfr K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 345-348 Id Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica 63-66

7 Id Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET (Escritos de Teologiacutea) I 3058 Id Naturaleza y gracia in ET IV 218

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el dinamismo de su reflexividad esencial en cuanto apertura ilimitada al Ser en suma una antropologiacutea que valida lo noeacutetico (universalidad) en la experiencia concreta de una historia de libertad amor y peacuterdida de siacute (sin-gularidad) como principales existenciales de una naturaleza efectivamente abierta a aquella plenitud personal de ser que se auto-comunica efectiva-mente en Cristo como relato de Amor9 Este es el modo en que la antropo-logiacutea teoloacutegica puede evitar la asimilacioacuten reductiva de la fe a su medio trascendental asiacute como profundizar el calado histoacuterico del acontecer de la relacioacuten teologal sin prejuicio de su verdad salviacutefica uacuteltima

Cuando un teoacutelogo como Juan Alfaro cercano a la sensibilidad de Rah-ner delinea el meacutetodo de trabajo que pretende seguir en la uacuteltima obra en que estudia a fondo la mutua implicacioacuten entre la cuestioacuten del hombre y la cuestioacuten de Dios manifiesta su intencioacuten de asumir para su examen una triple determinacioacuten existencial en cuanto se parte de la existencia vivida por el hombre en el acto mismo de existir y de la laquoprecomprensioacutenraquo im-pliacutecita en esta experiencia fenomenoloacutegica en cuanto la descripcioacuten fe-nomeacutenica deja que la realidad se laquomuestreraquo y desvele asiacute las indicaciones y preguntas concretas implicadas en ella trascendental en cuanto busca los presupuestos ontoloacutegicos necesarios para la comprensioacuten de la experiencia manifestada en el fenoacutemeno laquoMeacutetodo trascendentalraquo no quiere decir sino proceder seguacuten las exigencias del comprender humano en su dinamismo de preguntar y buscar siempre ulteriormente La legitimidad de las cues-tiones concretas se justifica por su necesidad de comprender la realidad10

En efecto laquoel horizonte trascendental es en cierto modo un sistema a priori de coordenadas dentro del cual se le sentildeala al objeto temaacutetico el sitio que le hace comprensibleraquo11 En antropologiacutea teoloacutegica por ejemplo per-mite fundar el significado universal del don de la gracia como determina-cioacuten de la ex-centricidad que es propia de la naturaleza humana y no como un antildeadido extriacutenseco a la misma No obstante esta comprensioacuten de la gracia divina queda expuesta a un cierto formalismo si deja de interrogarse a fondo acerca de su relacioacuten con la experiencia efectiva del hombre como responsable de la circunstancia que habita O dicho con rigor teoloacutegico sobre el sentido y consecuencias que tiene laquola historizacioacuten de la natura-

9 Cfr E REGAN Not merely the cognitive subject Rahnerrsquos theological anthropolo-gy in P CONWAY-F RYAN (eds) Karl Rahner Theologian for the Twenty-first Century Oxford-Bern 2010 121-140

10 J ALFARO De la cuestioacuten del hombre a la cuestioacuten de Dios Salamanca 2006 25 11 K RAHNER Sobre la unidad del amor a Dios y el amor al proacutejimo in ET VI 255

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leza humana por la cristologiacutea por la manifestacioacuten de un hombre nuevo frente a la forma primitiva del hombreraquo12 Por ello junto a los contrastados beneficios que aporta el anaacutelisis trascendental a la antropologiacutea teoloacutegica como reconocimiento de que el hombre laquono puede ser nunca subjetiva y ontoloacutegicamente indiferente con relacioacuten a su orientacioacuten sobrenaturalraquo13 tanto la estructura responsorial de la revelacioacuten como el desarrollo cientiacute-fico-cultural del momento presente demandan a la teologiacutea no desatender la esfera maacutes concreta del fenoacutemeno personal humano sus preguntas esen-ciales la experiencia dramaacutetico-vital comuacuten a cada hombre en definitiva esas dimensiones donde se juega baacutesicamente la auto-comprensioacuten del sujeto contemporaacuteneo el significado de la disyuntividad corpoacuterea (mas-culinidad y feminidad) en su estrecha vinculacioacuten con la vida espiritual afectiva o biograacutefica la nativa dimensioacuten relacional de la vida humana y el alcance de significado que ostenta en la constitucioacuten ontoloacutegico-vital del hombre el variado espectro de relaciones interpersonales que este entabla en su historia la pregunta por el discurrir de la propia biografiacutea personal (ante el acontecimiento de la muerte) como dinamismo de auto-realiza-cioacuten (ser) que determina a su vez el modo en que ha de orientarse la praxis vital (deber ser) etc Y todo ello en la conciencia de que la atencioacuten a es-tos caracteres y estructuras antropoloacutegicas que se organizan en torno a la persona como punto focal debe superar la tentacioacuten del puro inventario fenomenoloacutegico y conducir a una mayor explicitacioacuten del horizonte tras-cendente ante el que el hombre realiza su intransferible historia personal como historia con sentido laquoEs preciso todaviacutea elaborar ahondar y traspa-sar metafiacutesicamente ndashsentildeala Emerich Corethndash el rico material sacado a la luz por el desarrollo maacutes reciente del pensamiento introducieacutendolo asiacute en la totalidad de una metafiacutesica cristianaraquo14 En este sentido el concepto per-sona ofrece la posibilidad de una ndashllameacutemoslandash propedeacuteutica fundamental a la antropologiacutea teoloacutegica como develacioacuten en lo concreto de la verdad

12 W PANNENBERG Fundamento cristoloacutegico de una antropologiacutea cristiana in Con-cilium 86 (1973) 413 Es la indagacioacuten sobre el sentido cristoloacutegico de la laquopersoneidadraquo el que deberiacutea servir de guiacutea a la teologiacutea cristiana ndashpor tanto de modo distinto a como lo hicieron el mismo Boecio y despueacutes de eacutel la tradicioacuten siguiendo el cauce de la filosofiacutea griegandash para llegar a saber queacute significa para el hombre ser racional ser libre ser capaz de amor etc laquoen cuanto estaacute destinado en su ser personal a la semejanza con Dios la cual se ha manifestado en la unidad de Dios y el hombre en Jesucristoraquo (Ibid 416)

13 K RAHNER Existencial II in SM (Sacramentum Mundi) III 6714 E CORETH Quehacer de la metafiacutesica in Crisis 21-24 (1959) 18

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antropoloacutegica universal de la apertura trascendental del hombre a Dios que es su origen y destino

La criacutetica ha llegado a identificar en la teologiacutea de Karl Rahner una laquoantropologiacutea excesivamente formal y abstractaraquo15 que sufre de una espe-cie de neutralidad fenomenoloacutegica al estar limitada por su matriz metafiacute-sico-trascendental para una interpretacioacuten maacutes integral de la experiencia humana en su interaccioacuten con el misterio divino iquestRige el meacutetodo tras-cendental una epistemologiacutea antropoloacutegica reductiva respecto del modelo que preside la experiencia de aquellos que creen en Cristo y viven en Eacutel Un disciacutepulo ilustre de Rahner Johann Baptist Metz propone romper el laquocerco maacutegico del trascendentalraquo mediante una dogmaacutetica histoacuterico-vital biograacutefica narrativa testimonialhellip no prevenida ante las contradicciones de la historia preocupada por redefinir la identidad testimonial del sujeto creyente frente al sujeto exaltado del cogito cartesiano y el sujeto humilla-do por la hermeneacuteutica de la sospecha16

No obstante lo ajustado de esta criacutetica dado el riesgo real ndashdel que Rahner era muy conscientendash que implica asumir el meacutetodo trascendental en teologiacutea17 proponemos visitar de nuevo la obra del teoacutelogo alemaacuten para mostrar su apuesta por una subjetividad que ante todo recela de su caraacutecter autaacuterquico y se percibe irrenunciable e iacutentimamente abierta a la trascendencia apertura que ciertamente no logra verificarse por comple-to en la experiencia ordinaria del hombre es decir en aquellas condicio-nes faacutecticas siempre uacutenicas donde ha de dirimir y decidir el sentido de siacute mismo Lo cual no significa que la atencioacuten al sujeto lleve a Karl Rahner a su absolutizacioacuten a imagen de cierto idealismo maacutes bien al contrario el meacutetodo trascendental que aplica revela un existente que no dispone de siacute en modo absoluto sino que es originaria e intriacutensecamente un espiacuteritu

15 J L RUIZ DE LA PENtildeA Espiacuteritu en el mundo La antropologiacutea de Karl Rahner in J DE SAHAGUacuteN (ed) Las antropologiacuteas del siglo XX Salamanca 1976 196

16 Cfr J B METZ La fe en la historia y la sociedad Esbozo de una teologiacutea poliacutetica fundamental para nuestro tiempo Madrid 1979 164-236 Lo cierto es que las exigencias del modelo narrativo han recibido hasta el momento maacutes atencioacuten en aacutembito filosoacutefico que teoloacutegico (cfr C THEOBALD Il cristianesimo come stile Un modo di fare teologia nella postmodernitagrave I Bologna 2009 397-416)

17 Que puede formularse en estos otros interrogantes iquestRecae la teologiacutea trascenden-tal en una metafiacutesica de la presencia entendida como mera radicacioacuten de la revelacioacuten de Dios en su visibilidad en el hombre y el mundo iquestSe deja construir esa teologiacutea a partir del hecho uacutenico de la manifestacioacuten de Dios iquestAcaso a la hora de considerar la revelacioacuten de Dios por siacute mismo no se muestra incapaz de delimitar las regiones respectivas de filosofiacutea (posibilidad) y teologiacutea (historicidad efectividad y sentido)

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finito que existe concretamente en la condicioacuten histoacuterica del ser huma-no18 esto es inserto en virtud de su esencia y no por pura casualidad en el aacutembito del espacio y el tiempo caracterizado por la mutabilidad y la contingencia19 Del mismo modo que no cabe en su sistema un divorcio entre la inefabilidad de Dios y la concrecioacuten de su presencia tampoco cabe empobrecer la autenticidad de la experiencia viva de ser hombre a favor de la verdad de fe La validez universal de esta ha de probarse en el crisol de la experiencia personal finita de la libertad del amor y el sufri-miento de la muerte y la esperanza en el futuro

Estas paacuteginas apuestan por comprender en su contexto sus posibilida-des y sus liacutemites una visioacuten teoloacutegica del hombre que es capaz de acompa-ntildear y contrapesar el desarrollo actual de un humanismo secularista que se pretende uacutenico horizonte de las sociedades occidentales La antropologiacutea de Rahner estaacute llamada a seguir contribuyendo a acreditar la significacioacuten positiva del fenoacutemeno religioso como respetuosa proximidad del misterio personal de Dios al corazoacuten de la existencia humana (razoacuten e historia)20

En efecto la obra de nuestro autor tomada de entre otras posibles es testigo de coacutemo la reciente teologiacutea catoacutelica ha prestado exquisita atencioacuten ndashen su proposicioacuten de la fe al mundo presentendash a la auto-comprensioacuten del hombre que ha generado sobre todo la perspectiva antropoceacutentrica domi-nante en el pensamiento filosoacutefico que va de Descartes a Heidegger 21 En la

18 Cfr K RAHNER Oyente de la palabra 3119 En la estela de Karl Rahner se ubican otros proyectos de la teologiacutea catoacutelica contem-

poraacutenea que tratan de afrontar la aporiacutea en la que se debate la teologiacutea trascendental en torno a la relacioacuten entre experiencia categorial y conocimiento originario a priori En las obras de H Verweyen Th Proumlpper y K Muumlller observa Alberto Anelli desarrollos post-rahnerianos que tratan de modular la trascendentalidad mostrando las contradicciones inscritas respec-tivamente en una razoacuten una libertad o una conciencia sustraiacutedas al sujeto y consideradas como fuerzas autoacutenomas No obstante ndashconcluye Anellindash estos proyectos auacuten permanecen en el plano formal dependientes del moderno principio de autonomiacutea pesa auacuten sobre ellos la dificultad de hacer valer a fondo el insuperable caraacutecter histoacuterico-praacutectico del a priori antropoloacutegico Solo una reflexioacuten antropoloacutegica como la de W Pannenberg habriacutea hecho emerger seguacuten este autor una concepcioacuten heteroacutenoma del sujeto como realidad conformada en la alteridad que constituyen para eacutel la sociedad y la historia Cfr A ANELLI Heidegger e la teologia Brescia 2011 79-83

20 Cfr B BOURGINE Karl Rahner est-il un classique Agrave propos de quelques recher-ches reacutecentes in Revue theacuteologique de Louvain 43 (2012) 79-102

21 Tras diversos avatares la teologiacutea catoacutelica del siglo XX enfrenta decididamente los problemas teoloacutegicos y hermeneacuteuticos que habiacutea puesto a consideracioacuten la llamada laquocrisis modernistaraquo al declarar su insatisfaccioacuten por la mediacioacuten conceptual escolaacutestica del depoacutesito de la fe La discusioacuten en torno a la posibilidad de renovar esa conceptuacioacuten de la revelacioacuten (en la interseccioacuten entre teologiacutea y filosofiacutea fe y razoacuten dogma y vida) conllevaba fundamen-talmente reformular la respuesta teoloacutegica en el punto de partida o sea su concepcioacuten de Dios

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obra de Rahner se mantiene una doble constante que es irrenunciable para la teologiacutea de modo particular para la teologiacutea contemporaacutenea a la hora de proponer hoy la comprensioacuten cristiana del hombre en primer lugar la presentacioacuten de Cristo corazoacuten de la revelacioacuten como Palabra hecha carne en que adquiere plena inteligibilidad toda la realidad creada y de modo particular el hombre como ser en constante distensioacuten entre finitud e infinitud autoconciencia de siacute y realizacioacuten en la historia trascenden-cia e inmanencia Es la perspectiva cristoceacutentrica de la revelacioacuten la que opera como punto focal que sustenta la hermeneacuteutica del Misterio de Dios en siacute y en su relacioacuten con el hombre22 en segundo lugar la interdiscipli-nariedad esto es el diaacutelogo con la imagen de hombre que emana de las ciencias humanas y en particular de la filosofiacutea pues la razoacuten contribuye con su esfuerzo reflexivo y sus categoriacuteas a hacer comprensible al hombre la realidad de Cristo ndashque es Dios humanadondash como plenitud y cima de la humanidad creada (en su estructura esencial y su devenir histoacuterico)

Querer presentar en pocas paacuteginas la aportacioacuten que hace este gigante de la teologiacutea contemporaacutenea a la visioacuten teoloacutegica del hombre plantea una doble dificultad En primer lugar la de enmarcar dicha contribucioacuten en un sistema teoloacutegico que detenta un perfil hermeneacuteutico muy complejo y ecleacutectico y por lo que respecta a su concepcioacuten del hombre el hecho de

y del hombre En el campo antropoloacutegico el reto para la teologiacutea consistiacutea en avanzar sobre una antropologiacutea de impronta platoacutenica considerada laquointelectualistaraquo para poder afrontar y replan-tear de manera nueva (en su integridad) la figura de hombre que auspicia la revelacioacuten como relacioacuten entre espiacuteritu y materia trascendencia e historia pensamiento y vida conocimiento intelectual y experiencia sensible (mundana social histoacuterica) El esfuerzo de la llamada nou-velle theacuteologie por recuperar el diaacutelogo con el pensamiento de la cultura moderna y el contacto con el pensamiento contemporaacuteneo asiacute como el cultivo de las propias fuentes (Escritura Pa-dres Liturgia) obraron la elaboracioacuten de una renovada teologiacutea de la revelacioacuten y antropologiacutea de la fe Los nombres de J Mareacutechal M Blondel y P Rousselot en un primer momento y los maacutes cercanos de R Guardini K Rahner J B Lotz B Lonergan J Alfaro E Corethhellip han propiciado la liberacioacuten del meacutetodo antropoloacutegico-trascendental del subjetivismo kantiano y una nueva relectura del humanum como finitud interrogativa enraizada en Dios y de la vida personal como aacutembito histoacuterico de la accioacuten divina (gracia) que es acogida en ejercicio de libre decisioacuten Cfr una siacutentesis de los aspectos teoloacutegicos y filosoacuteficos de este laquoepisodio paradigmaacute-ticoraquo de la teologiacutea contemporaacutenea en A COZZI La crisi modernista Conflitto insanabile con la modernitagrave o trasformazione culturale del cattolicesimo in G ANGELINI - S MACCHI (eds) La teologia del Novecento Momenti maggiori e questioni aperte Milano 2008 34-92

22 A la luz del misterio central de la revelacioacuten divina ndashla encarnacioacuten de la Persona del Verbondash la atencioacuten a la iacutentima reciprocidad (en orden a la realizacioacuten de la identidad del ser humano) entre su radical dimensioacuten espiritual (pensamiento) y su existencia histoacuterica (ma-nifestacioacuten) no es para el cristianismo un modo facultativo de comprender la humanidad dado que se trata de aquellas coordenadas irrenunciables donde rastrear su hechura divina La encarnacioacuten constituye un dato decisivo de la fe y la dogmaacutetica catoacutelicas

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que esta se encuentra diseminada en sus escritos pues no ha elaborado como tal un ensayo de antropologiacutea formalmente sistematizada Por estas razones nuestro anaacutelisis se limita mediante una lectura sincroacutenica de una seleccioacuten de sus escritos a una presentacioacuten de las grandes tesis antro-poloacutegicas que estaacuten en la base de su investigacioacuten teoloacutegica23 Siguiendo a nuestro autor comenzamos sentildealando el desafiacuteo pastoral presente que constituye la relacioacuten entre antropologiacutea y teologiacutea

1 lA teologiacuteA Ante un reto pAstorAl

El concilio Vaticano II expresoacute con claridad que la comunidad cristiana no sostiene su fe en verdades depositadas en la conciencia creyente de una vez para siempre sino en verdades de fe dinaacutemicas a cuyo significado contribuye un esfuerzo de actualizacioacuten constante En este sentido el ca-

23 Los estudios globales y sectoriales sobre la teologiacutea de Rahner resultan casi inabarca-bles Tanto para una visioacuten de la figura y trayectoria intelectual del autor como para encuadrar en su sistema su propuesta antropoloacutegica hemos acudido a K H NEUFELD Rahner Karl in R LATOURELLE (ed) Diccionario de Teologiacutea fundamental Madrid 1992 1097-1100 K KILBY Karl Rahner in D F FORD - R MUERS (eds) The Modern Theologians An Introduction to Christian Theology since 1918 Massachusetts-Oxford-Victoria 32005 92-105 A BERTULETTI Dio il mistero dellrsquoUnico Brescia 2014 269-276 A BOZZOLO Il mistero-Dio e lo spirito-nel-mondo Esperienza della grazia e decifrazione dellrsquouomo in Karl Rahner in P SEQUERI - S UBBIALI (eds) Nominare Dio invano Orizzonti per la teolo-gia filosofica Milano 2009 219-258 G COLZANI Karl Rahner Dal mistero di Dio la com-prensione dellrsquouomo Milano 2000 M CABADA CASTRO La vivencia previa del Absoluto como presupuesto del acceso teoreacutetico a Dios in A VARGAS-MACHUCA (ed) Teologiacutea y mundo contemporaacuteneo Homenaje a Karl Rahner en su 70 cumpleantildeos Madrid 1975 65-88 A CORDOVILLA Gramaacutetica de la encarnacioacuten Madrid 2004 35-228 Id K Rahner la actualidad de un teoacutelogo in Estudios Eclesiaacutesticos 80 (2005) 233-245 R GIBELLINI La teologiacutea del siglo XX 239-254 A MARGARITTI Svolta antropologica e istanza kerigma-tica in G ANGELINI - S MACCHI (eds) La teologia del novecento Momenti maggiori e questioni aperte Milano 2008 246-296 B FORTE La eternidad en el tiempo Ensayo de antropologiacutea y eacutetica sacramental Salamanca 2000 83-88 A GONZAacuteLEZ MONTES Fun-damentacioacuten de la fe Salamanca 1994 195-220 D HERCSIK Karl Rahner la grazia come centro dellrsquoesistenza umana in La Civiltagrave Cattolica 3683 (2003) 430-443 L BARRETO Experiencia trascendental y experiencia personal en el enfoque metodoloacutegico de Karl Rahner in Salmanticensis 58 (2011) 427-464 G PATTARO La svolta antropologica Bologna 1991 146-160 I PETRIGLIERI Lrsquoavventura della fede Ovvero lrsquointellectus fidei tra ragione e ragioni Roma 2010 153-169 S PIEacute-NINOT La Teologiacutea Fundamental laquoDar razoacuten de la esperanzaraquo (1 Pe 315) Salamanca 42001 130-135 A RAFFELT - H VERWEYEN Karl Rahner Muumlnchen 1997 G SALATIELLO Metodo trascedentale e svolta antropologica in Id (ed) Karl Rahner Percorsi di ricerca Roma 2012 45-83 I SANNA Teologia come esperienza di Dio Brescia 1997 91-133 J I SARANYANA La antropologiacutea trascendental rahneriana in J F SELLEacuteS (ed) Propuestas antropoloacutegicas del siglo XX I Pamplona 2004 307-326 H VORGRIMLER Karl Rahner Experiencia de Dios en su vida y en su pensamien-to Santander 2004 G J ZARAZAGA Dios es comunioacuten Salamanca 2004 21-99

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lificativo laquopastoralraquo deja de hacer referencia exclusiva a la cura de almas para determinar la totalidad de la vida eclesial su actitud ante el mundo y el hombre contemporaacuteneos24 La atencioacuten a laquolos gozos y las esperanzas las tristezas y las angustias de los hombres de nuestro tiemporaquo (GS 1) forma parte de la eficacia del anuncio del Reino Si la comunidad creyente obvia el desarrollo del mundo moderno ndashque ha sustituido un proyecto de sentido en cuyo centro estaba Dios por otro en que Dios queda desplazado por el hombre y la naturaleza bajo el impulso de una eneacutergica y creciente revolu-cioacuten cientiacutefica teacutecnica social y poliacutetica25ndash difiacutecilmente puede dar cuenta de su esencia como comunidad evangelizadora (cfr 1 Cor 916)

El teoacutelogo creyente y guiacutea de creyentes asume la tarea especiacutefica de esclarecer el perenne significado salviacutefico del mensaje evangeacutelico a la luz de la relacioacuten personal que entabla Dios con la experiencia histoacuterica y la autoconciencia del ser humano A partir de esta premisa la obra teoloacutegica de Karl Rahner ha proyectado una mirada renovada sobre la capacidad de trascendencia del yo humano primera y esencial caracteriacutestica que funda la posibilidad y credibilidad de lo que conocemos como laquoexperiencia re-ligiosaraquo esto es la relacioacuten entre yo y Otro no como simple proyeccioacuten de una necesidad subjetiva sino como espera y encuentro entre la libertad del sujeto para auto-trascenderse a siacute mismo hacia su maacutes alta dignidad y el valor intriacutenseco de la realidad libremente encontrada como Otro-de-siacute esto es como determinacioacuten interior y uacuteltima de aquella auto-trascenden-cia personal Se ha reproducido con abundancia el texto en que Rahner vislumbra la necesidad de un cristiano capaz de esa laquoexperienciaraquo de encuentro con Dios como viacutea privilegiada de acceso a la fe Estas son sus conocidas palabras

Solamente para aclarar el sentido de lo que se va diciendo y aun a concien-cia del descreacutedito que la palabra laquomiacutesticaraquo ndashque bien entendida no implica contraposicioacuten alguna con la fe en el Espiacuteritu Santo sino que se identifica con ellandash cabriacutea decir que el cristiano del futuro o seraacute un laquomiacutesticoraquo es decir una persona que ha laquoexperimentadoraquo algo o no seraacute cristiano Porque la espiritualidad del futuro no se apoya ya en una conviccioacuten unaacutenime evi-dente y puacuteblica ni en un ambiente religioso generalizado previos a la expe-riencia y a la decisioacuten personales La educacioacuten religiosa usual hasta ahora podriacutea ser solamente en adelante un adiestramiento muy secundario para la

24 Cfr GS nota al tiacutetulo25 Cfr W PANNENBERG Una historia de la filosofiacutea desde la idea de Dios Teologiacutea

y filosofiacutea Salamanca 2001 149-163

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vida religiosa La mistagogiacutea seraacute la que habraacute de pronunciar la verdadera laquoidea de Diosraquo partiendo de la experiencia aceptada de la referencia esencial del hombre a Dios la experiencia de que la base del hombre es el abismo de que Dios es esencialmente el incomprensible de que su incomprensibi-lidad en lugar de disminuir aumenta en la medida que se le va conociendo mejor y a medida que Dios se acerca a nosotros en su amor en el que se da a siacute mismo de que no podemos concebirlo como un dato determinado en el caacutelculo de nuestra vida sin que automaacuteticamente fallen nuestras cuentas26

El principio de tradicioacuten viene a decir Rahner ha dejado de ser una vigencia cultural presente para pasar al aacutembito de la historia de lo con-cerniente a la memoria del pasado ya no acompantildea el itinerario creyente Sin apoyos externos significativos el creyente estaacute llamado a elaborar con maacutes esfuerzo la propia experiencia de Dios entendida como encuentro personal con el Dios vivo y verdadero Ser un miacutestico significa conocer a Dios desde dentro manteniendo con Eacutel una relacioacuten no siempre paciacutefica pero siacute directa y sincera que incide profundamente en la loacutegica del de-seo humano y que actuacutea como factor de verificacioacuten de la autenticidad y verdad de la propia experiencia religiosa Al radiografiar las coordenadas antropoloacutegico-existenciales en que la teologiacutea y la espiritualidad cristia-nas han de proponerse hoy alerta sobre la necesidad de permanecer vigi-lantes para no reducir la experiencia religiosa cristiana a un humanismo inmanente que hace hincapieacute en valores socio-humanitarios y rebaja el contenido teoloacutegico-dogmaacutetico que caracteriza el nuacutecleo de la fe

Para miacute todo el jesuanismo por muy piadoso que fuera todo el com-promiso a favor de la justicia y del amor en el mundo todo el humanismo que quiera utilizar a Dios para el hombre y que no precipite al hombre en el abismo de Dios seriacutea la religioacuten de un humanismo inconcebiblemente modesto que nos estaacute prohibido por el enorme poder del amor de Dios en el cual Dios mismo sale realmente de siacute Nosotros una de dos o pode-mos quererlo todo a saber Dios mismo en su pura divinidad o bien nos hallamos condenados es decir estamos sepultados dentro de la prisioacuten de nuestra finitud27

La voracidad de la moderna subjetividad y su denodada lucha por la libertad con la pretensioacuten de lograr su definitiva autonomiacutea no ha hecho sino poner al hombre bajo la dictadura de otras servidumbres (pulsiones

26 K RAHNER Espiritualidad antigua y actual in ET VII 25-2627 Id Sobre la inefabilidad de Dios Experiencias de un teoacutelogo catoacutelico 39

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instintivas dinero afaacuten de poderhellip) que han instalado la idolatriacutea en el hondoacuten del alma humana sontildeando poder saciar su hambre de infinito

Entonces dice la palabra de Dios a este excavador de tesoros desen-gantildeado y desesperado muy hondo en los abismos del hombre vive auacuten Dios el Dios vivo real y verdadero no un iacutedolo muerto no una desnuda imagen de nosotros mismos sino Eacutel mismo el Dios vivo el Eterno el Santo El que no solo es en siacute mismo la infinitud sino que quiere donarnos sus inmensidades infinitas28

2 AntropologiacuteA trAscendentAl

La interpretacioacuten de toda la teologiacutea dogmaacutetica como antropologiacutea trascendental implica la reflexioacuten sobre el aspecto trascendental de toda temaacutetica dogmaacutetica y por ello proponerse la cuestioacuten acerca de lo que en referencia a esta se encuentra ya impliacutecito en los contenidos materiales de las laquoestructurasraquo a priori del sujeto teoloacutegico29

21 Orientacioacuten teoloacutegica de la antropologiacutea via trascendentalis

De esta forma describe nuestro autor la impronta metodoloacutegica de un complejo sistema teoloacutegico atento a este presente que se interroga con singular radicalidad por la razonabilidad antropoloacutegica de la fe y por la evidencia del hecho mismo de la revelacioacuten30 Por ello la teologiacutea se muestra iacutentimamente preocupada por mostrarle al hombre contemporaacute-neo caracterizado en su auto-experiencia como laquoindefinible enigma para siacute mismoraquo31 la profunda afinidad ontoloacutegica que exhibe su estructura trascendental y su existencia concreta con la auto-donacioacuten libre y amo-rosa de Dios a la humanidad La revelacioacuten manifiesta que el mundo32 y el

28 Id De la necesidad y don de la oracioacuten 3329 Id Theologie und Anthropologie 45 30 Cfr Ibid 58-61 Sobre este mismo argumento Id Sobre la posibilidad de la fe hoy

in ET V 15-3331 K RAHNER De la necesidad y don de la oracioacuten 31 32 laquoLa criatura desde su maacutes iacutentimo fundamento esencial ndashescribe nuestro teoacutelogo en

la madurez de su pensamientondash ha de entenderse como la posibilidad de ser asumida de convertirse en material para una posible historia de Dios Dios esboza la criatura en su forma creadora en cuanto desde la nada la implanta en su propia realidad distinta de Dios como la gramaacutetica de una posible automanifestacioacuten de Diosraquo (K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 264)

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hombre33 han sido creados en libertad con vistas a la auto-comunicacioacuten amorosa de Dios laquoPor cuanto Dios en el amor a siacute mismo ama libremente como poder que pone lo finito amando comprende a lo finito mismo En este amor tambieacuten lo puesto el efecto de la accioacuten es elevado a la luz del serraquo34 Mostrar en el hombre el efectivo dinamismo de esta elevacioacuten es el motivo seguacuten confesioacuten del mismo Rahner por el que aplica a su teologiacutea el calificativo trascendental

Para que todas las afirmaciones de fe y de la teologiacutea puedan ser realmente responsables hay que preguntarse coacutemo y por queacute el hombre desde su mismo ser y existencia (que es concreta y se halla siempre en consecuen-cia inevitablemente bajo la gracia de la comunicacioacuten de Dios) es siempre sujeto a quien pueden y deben afectar realmente estas afirmaciones35

De este modo postula la necesidad de un nuevo acceso metodoloacutegico a la fe laquono solo en lo que respecta al conocimiento de sus contenidos sino tambieacuten inseparablemente en lo tocante al conocimiento del sujeto y de las condiciones a priori de su conocerraquo36 Es lo que Rahner llama el laquomeacutetodo antropoloacutegico-trascendentalraquo que acompantildearaacute sin cesar su dilatada obra teoloacutegica y constituye el fundamento de lo que denominoacute el giro antropoloacutegico en orden a designar su propuesta de una teologiacutea a partir de una antropologiacutea trascendental laquoEl giro de la teologiacutea hacia un meacutetodo antropoloacutegico-trascendental no es otra cosa que el descubrimien-

33 laquoiquestNo podriacutea decirse con aparente derecho que la esencia del ser personal ndashsu para-doja sin la que no se le puede entender en absolutondash consiste precisamente en estar ordenado por naturaleza a la comunioacuten personal con Dios en el amor y tener que recibir ese mismo amor como libre regaloraquo (K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 307)

34 K RAHNER Oyente de la palabra 13135 Id Fundamentacioacuten de la fe cristiana 31 en estas paacuteginas sintetiza y revisa criacutetica-

mente el autor la presentacioacuten global de su visioacuten de la teologiacutea trascendental en su Curso fundamental sobre la fe Cfr K RAHNER Teologiacutea trascendental in SM VI 610-617 So-bre el teacutermino y su uso en nuestro autor S ARZUBIALDE La experiencia trascendental de Dios en la obra de K Rahner in Estudios Eclesiaacutesticos 80 (2005) 291-314 sobre el teacutermino y su empleo en teologiacutea U PELLEGRINO Transcendental in L PACOMIO et alii (eds) Diccionario teoloacutegico interdisciplinar IV Salamanca 1983 543-555 K Kilby sugiere el uso del teacutermino en Rahner en dos sentidos al menos en el sentido lato de referencia a aquella dimensioacuten del hombre o de su experiencia que le permite ir maacutes allaacute de los objetos finitos y por otro lado para identificar un tipo particular de proyecto de investigacioacuten aquel que somete a examen las condiciones en que es posible el conocimiento de un sujeto especiacutefico en el acto mismo de conocer Cfr K KILBY Karl Rahner Theology and Philosophy New York 2004 32-37

36 G COLZANI Recenti manuali di Antropologia teologica di lingua italiana e tedes-ca in Vivens Homo 3 (1992) 392

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to del nexo existente entre el contenido de los enunciados dogmaacuteticos y la experiencia que hombre hace de siacuteraquo37

En el ensayo Theologie und Anthropologie fruto de una conferencia impartida en 1966 Rahner sintetiza programaacuteticamente los tres reque-rimientos baacutesicos que convergen en su visioacuten de la teologiacutea como an-tropologiacutea trascendental (1) el anaacutelisis de las estructuras cognoscitivas trascendentales o a priori del sujeto personal que en cuanto sujeto teo-loacutegico ha de enfrentar el desafiacuteo de que laquoDios no es un objeto cualquie-ra junto a otros en el campo de la experiencia a posteriori del hombre sino el fundamento originario y el futuro absoluto de toda realidadraquo38 (2) la teologiacutea en cuanto ciencia que capta conceptualmente la honda interaccioacuten entre la historia de la humanidad (libre autorrealizacioacuten del hombre) y la historia de la libre y graciosa autocomunicacioacuten salviacutefica de Dios al hombre39 (3) y las exigencias para la autocomprensioacuten humana procedentes de la filosofiacutea (antropoloacutegica) contemporaacutenea40 que a pesar

37 K RAHNER Theologie und Anthropologie 6138 Ibid 50 Cfr Id Curso fundamental sobre la fe 74-77 Rahner asume para la teo-

logiacutea el desafiacuteo que Kant plantea a la metafiacutesica y a la teoriacutea del conocimiento El propio Kant define como trascendental laquotodo conocimiento que se ocupa no tanto de los objetos cuanto de nuestro modo de conocerlos en cuanto que tal modo ha de ser posible a priori Un sistema de semejantes conceptos se llamariacutea filosofiacutea trascendentalraquo (I KANT Criacutetica de la razoacuten pura A XII Madrid 1984 58)

39 laquoLa relevancia soterioloacutegica de un objeto de la teologiacutea (aspecto irrenunciable de todo objeto teoloacutegico) solamente se hace motivo de interrogacioacuten si pasa a ser tema de la receptividad salviacutefica del hombre hacia dicho objetoraquo (K RAHNER Theologie und Anthro-pologie 52)

40 laquoTanto una filosofiacutea como una teologiacutea actual no puede ni debe dejar de prestar aten-cioacuten a la revolucioacuten antropoloacutegico-trascendental operada por la filosofiacutea de nuestro tiem-po desde Descartes Kant y el idealismo alemaacuten (incluidos sus detractores) hasta la actual fenomenologiacutea filosofiacutea de la existencia y ontologiacutea fundamentalraquo (Ibid 56) Un apunte similar se encuentra en Id laquoFundamentos de la protologiacutea y de la antropologiacutea teoloacutegicaraquo MyS (Mysterium salutis) II 348 Nuestro autor considera la filosofiacutea como una de las prin-cipales fuerzas motrices de una teologiacutea de la revelacioacuten Es principalmente en el contexto de la relacioacuten entre naturaleza y gracia donde Rahner comprende la pregunta por la relacioacuten entre filosofiacutea y teologiacutea Del mismo modo que el hombre a la luz de su apertura radical a la trascendencia se experimenta siempre en su existencia como el ser llamado a (acoger o rechazar) una relacioacuten de comunioacuten con Dios es decir del mismo modo que su naturaleza ha sido creada con vistas a esa comunioacuten divina por la gracia laquolo que llamamos revelacioacuten no es una antildeadidura que se presuponga a la naturaleza espiritual y a su autocomprensioacuten como algo rotundo y que se sobreentiende sino que la naturaleza espiritual misma es la condicioacuten de posibilidad que la revelacioacuten presupone a siacute misma y que establece libremente para poder ser lo que es gracia en cuanto autocomunicacioacuten personal y libre de Dios [hellip] La revelacioacuten presupone por tanto la filosofiacutea diferenciada libre como aacutembito de su propia posibilidad ya que solo al que se entiende a siacute mismo y al que autoacutenomamente dispone sobre siacute puede la autoapertura de Dios en revelacioacuten personal apareceacutersele como un hecho de libre amorraquo

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de sus excesos permite reforzar una concepcioacuten radicalmente cristiana donde laquoel hombre no es un momento dentro de un cosmos constituido de cosas ni estaacute sometido al sistema de coordenadas de conceptos oacutenticos del mismo sino maacutes bien el sujeto de cuya libertad depende el destino de todo el cosmosraquo41

A la luz de estos requerimientos vamos a intentar una siacutentesis de esta antropologiacutea teoloacutegica a partir de la doble viacutea baacutesica mediante la que Rahner trata de afrontar el conocimiento del hombre en cuanto sujeto teoloacutegico (1) la contemplacioacuten del hombre en su capacidad de apertura trascendental ilimitada al Ser de quien procede y a quien se dirige es decir en su apertura a Dios Esta viacutea requiere el examen a fondo de la sub-jetividad (que se interroga por el Ser) y sus estructuras a priori como ho-rizonte en que es posible al hombre laquodejarse aprehender por un misterio siempre presente y que se nos escaparaquo42 (2) la consideracioacuten del hombre como aquel ser cuya naturaleza es apropiada por Dios al encarnarse En Jesucristo el hombre se reconoce como el don maacutes acabado del acto por el que Dios se dona a lo diverso de siacute43 a la luz de Cristo laquoel hombre en su definicioacuten originaria es el otro en el que Dios puede convertirse por su autoenajenacioacuten y el posible hermano de Cristoraquo44 No es factible dar una respuesta plena a la sed infinita del hombre sin atender al significado del hombre Jesuacutes el infinito humanado Dado que uno de los existenciales que definen la esencia y dignidad del hombre es ndashapunta Rahnerndash su calificacioacuten como ser que dice relacioacuten a Dios y a Cristo solo se puede hablar de Dios de un modo definitivo cuando al tratar de ello es decir en plena teologiacutea se trate tambieacuten de antropologiacutea Y solo se puede tratar de antropologiacutea solo se puede dar una respuesta uacuteltima sobre la esencia y la dignidad del hombre si se ha cultivado teologiacutea tratando de Dios y desde el punto de vista de Dios45

(K RAHNER Filosofiacutea y teologiacutea in ET VI 87 cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 262-266) Puede verse una reflexioacuten sobre las condiciones teoloacutegicas en que Rahner funda la interaccioacuten entre filosofiacutea y teologiacutea en M SCHULZ La necesaria mediacioacuten filosoacutefica de la fe y de la teologiacutea seguacuten Karl Rahner in Estudios Eclesiaacutesticos 80 (2005) 325-338

41 K RAHNER Theologie und Anthropologie 56 Cfr A MARAGARITTI Svolta antropologica e istanza kerigmatica 250-253

42 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 7643 Cfr Ibid 26744 K RAHNER Antropologiacutea III in SM I 29545 Id Dignidad y libertad del hombre in ET II 236

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Veamos por tanto queacute significa para Rahner que la antropologiacutea es lugar de la teologiacutea y viceversa maacutes en concreto el modo en que la exis-tencia del hombre se define ante y desde Dios en su entera especificidad de subjetividad personal

22 El hombre se interroga por siacute mismo y por lo otro

En sus dos principales obras filosoacuteficas de fuerte impronta antropo-loacutegica el joven teoacutelogo atiende los caracteres propios de la subjetividad personal del hombre que seraacuten omnipresentes a su extensa obra teoloacutegica Se trata de una investigacioacuten que a modo de diacuteptico se proyecta desde el hombre en su doble condicioacuten de ser que se interroga por siacute mismo y por lo otro y ser que es en siacute mismo interrogante infinito (apertura a la revelacioacuten divina)

Espiacuteritu en el mundo Metafiacutesica del conocimiento finito seguacuten santo Tomaacutes de Aquino (1939) escrito como tesis doctoral en filosofiacutea corres-ponde al examen de esa primera condicioacuten baacutesica del hombre como sub-jetividad cuestionante Y asiacute procurando dilucidar el requerimiento que plantea santo Tomaacutes (laquoutrum intellectus possit actu intelligere per species intelligibiles quas penes se habet non convertendo se ad phantasmataraquo)46 desde la frontera filosoacutefica del siglo XX47 Rahner advierte la posibilidad de concebir la sensibilidad que insta al hombre a preguntar laquocomo ya existente en el mundoraquo48 como aquel espacio en que ganar el horizonte transcendente del interrogar del ente humano el uacutenico capaz de hacer justicia a la irrenunciable condicioacuten ulterior del cognoscente como sujeto y persona es decir como alguien que laquose posee como tal sujeto real sola-

46 Cfr STh I q84 a7 47 Aunque en sus escritos Rahner suele omitir la referencia expliacutecita a sus fuentes estaacute

claro que su obra recibe la influencia de alguna de las diversas revisiones a que es sometida la moderna concepcioacuten de la subjetividad tal y como habiacutea sido planteada de Descartes a Kant como criacutetica al realismo ingenuo dominante en la filosofiacutea cristiana La hermeneacuteutica intrin-secista de la relacioacuten entre natural y sobrenatural que lleva a cabo J Mareacutechal en su lectura de santo Tomaacutes la filosofiacutea de la accioacuten de M Blondel y la reaccioacuten de la filosofiacutea de la existencia (Heidegger) ante la herencia idealista son los principales vectores operantes en la teologiacutea rahneriana Cfr O MUCK La escuela marechaliana de lengua alemana La filosofiacutea trascen-dental como metafiacutesica J B Lotz K Rahner W Brugger E Coreth y otros in E CORETH et alii (ed) Filosofiacutea cristiana en el pensamiento catoacutelico de los siglos XIX y XX II Madrid 1993-1997 549-554 E CORETH Presupposti filosofici della teologia di Karl Rahner in La Civiltagrave Cattolica 3469 (1995) 27-40 A CORDOVILLA laquoLa teologiacutea es pensarraquo La relacioacuten entre teologiacutea y filosofiacutea en Karl Rahner in Estudios Eclesiaacutesticos 79 (2004) 395-412

48 K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 128

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mente en cuanto contraponieacutendose a este mundo se vuelve hacia eacutelraquo49 En su anaacutelisis de la metafiacutesica del conocimiento de santo Tomaacutes Rahner muestra la predisposicioacuten nativa de la subjetividad humana a observar lo singular y concreto (ens) a la luz de lo universal (esse) es decir la apertura a priori del conocimiento humano al ser en toda su amplitud a todo cuanto es El traacutensito de la dimensioacuten sensible a la de los conceptos universales sucede mediante lo que santo Tomaacutes denomina excessus o capacidad propia del intelecto para ir maacutes allaacute del fenoacutemeno hacia el ser en su totalidad A este movimiento del espiacuteritu que permite su abstrac-cioacuten del mundo es al que Rahner denomina anticipacioacuten movimiento del espiacuteritu sobre la totalidad de sus posibles objetos [hellip] que deviene consciente cuando el conocimiento en el mismo acto de aprehensioacuten del objeto singular se experimenta a siacute mismo en su radical movimiento de trascendencia por encima del objeto singular50

Asiacute sintetiza nuestro autor los frutos de su investigacioacuten

El conocimiento humano es de manera inmediata conocimiento receptivo y por tanto sensible Pero es de tal manera sensible que se discierne la verdad del objeto que por siacute mismo se muestra es decir el conocimiento humano es universal y objetivo [hellip] El conocimiento receptivo es como tal sensible y esto quiere decir el cognoscente sensible deviene oacutenticamente lo otro por consiguiente laquoen cuantoraquo sensible no se destaca precisamente de lo conoci-do Y asiacute cuando ha de haber un conocimiento receptivo objetivo este cono-cimiento tiene que ser por una parte (como esencialmente receptiva) sensi-bilidad que deviene ella misma lo recibido y tiene por otra parte que saber un quid universal acerca de lo sensiblemente intuido para poder juzgar de ello como objeto Y por lo mismo tiene que liberar este quid de su manera de ser dado sensiblemente en la que el cognoscente deviene eacutel mismo lo otro51

49 Ibid 13050 Ibid 154 Explican Raffelt y Verweyen laquoEn la medida en que el lsquointelecto agentersquo

lsquoabstraersquo la lsquoimagen intelectivarsquo de la lsquoimagen sensiblersquo podemos entender que en el abstraer aquel vaya maacutes allaacute de lo aferrado en la sensibilidad concreta A esto es a lo que Rahner se refiere mediante un teacutermino central lsquoVorgriffrsquo Tomado a su vez de M Heidegger Tomaacutes em-plea una imagen anaacuteloga lsquoexcessusrsquo superacioacuten Lo que en Heidegger se presenta como una estructura fenomenoloacutegica fundamental del Dasein se encuentra ahora adscrito en Rahner a un anaacutelisis del conocimiento metafiacutesicoraquo (A RAFFELT-H VERWEYEN Karl Rahner 38) La referencia al Vorgriff heideggeriano en Ser y tiempo sect 32 (Madrid 2003 172-177) La edicioacuten espantildeola de Ser y tiempo traduce como manera de entender previa y explica el tra-ductor que al describir el modo en que comprendemos las cosas laquoHeidegger estaacute describiendo aquiacute que el comprender ha abierto ya el mundo como posibilidades Al hacerlo nos da de antemano algo que luego en la interpretacioacuten adquiriraacute cariz particularraquo (p 478)

51 K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 377-378

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La apertura natural del hombre a todo cuanto es ndashconcebida como a priori del intelecto que predispone al cognoscente a ver lo universal en lo singular y concretondash es lo primero seguacuten Rahner en el despertar de nuestra inteligencia Tanto la sensibilidad como el intelecto son para Ra-hner aprioris o condiciones de la estructura oacutentica del sujeto cognoscente que no encubren la realidad sino que contribuyen a descubrirla No po-demos entrar aquiacute en la compleja discusioacuten rahneriana sobre la condicioacuten y el modo en que actuacutean estos aprioris como pre-disposiciones en la ope-racioacuten de desvelar el ser de lo real52 Nos interesa ahora destacar el hecho de que la interrogacioacuten trascendental sobre el acto cognoscitivo humano lleva a Rahner a descubrir al hombre (1) como espiacuteritu (Geist) cuya estructura fundamental es la apertura ilimitada al ser en cuanto capaz de retornar sobre siacute en su aprehensioacuten de lo que es descubrieacutendose en su maacutes iacutentima identidad como ser excesivo ser que manifiesta al Ser53 (2) como espiacuteritu en el mundo (in Welt) esto es como aquel cuya exposicioacuten a lo otro mediante su recepcioacuten sensible (en su propia existencia e historia) es trance necesario y coadyuvante de una genuina vuelta a su interioridad conversio ad phantasma54

Finalmente en el modo en que Rahner culmina Espiacuteritu en el mundo y delinea el paso a Oyente de la palabra manifiesta que esta consideracioacuten de la experiencia humana de la realidad en cuanto salida al mundo y vuel-ta sobre siacute permite afrontar el cuestionamiento uacuteltimo a que se enfrenta el espiacuteritu humano y define su identidad la posibilidad de contacto con una realidad infinita o ser absoluto que sucesivamente puede ser identificado como Dios

Al preguntarnos por el mundo conocido por el hombre el mundo y el mismo hombre cuestionante se tornan problemaacuteticos en su fundamento absoluto en un fundamento que yace maacutes allaacute de los liacutemites transitables por el hombre maacutes allaacute del mundo Y asiacute el derrame sobre el mundo se revela comportado por el apetito uacuteltimo del espiacuteritu con que este codicia el

52 Cfr J-I SARANYANA La antropologiacutea trascendental rahneriana 319-32353 Cfr K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 374-380 En su Curso fundamental sobre la

fe obra de madurez el teoacutelogo alemaacuten vuelve sobre su confesioacuten antropoloacutegica laquoEl hombre es espiacuteritu en tanto llega a siacute mismo en un absoluto estar confiado a siacute mismo y esto porque eacutel estaacute referido siempre a la absolutez de la realidad en general y a su fundamento uno llamado Dios Este retorno a siacute mismo y la referencia a la totalidad absoluta de una realidad posible y a su fundamento uno se condicionan reciacuteprocamenteraquo (K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 221)

54 Cfr K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 386-388

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ser en absoluto y el sumirse en la sensibilidad en el mundo y su destino se revela solamente el devenir del espiacuteritu que aspira al absoluto El hombre es asiacute el peacutendulo medio entre Dios y el mundo entre tiempo y eternidad y esta frontera es el lugar de su determinacioacuten y de su destino55

23 Elhombreesensiacutemismointerroganteinfinito

En Oyente de la palabra Fundamentos para una filosofiacutea de la religioacuten (1941)56 afronta Rahner la contemplacioacuten de la condicioacuten del hombre en cuanto es pregunta en siacute mismo o dicho de otro modo en cuanto se descu-bre a partir de su experiencia trascendental ndashen cada acto de conocimiento y libertadndash como ser capaz para la escucha del Ser capaz del infinitamente Otro al que el espiacuteritu finito reconoce como presencia irrenunciable en su propia realizacioacuten La antropologiacutea trascendental de Espiacuteritu en el mundo contribuye ahora a presentar ndashcomo un laquomomento intriacutensecoraquo57ndash tanto a la filosofiacutea de la religioacuten como a la teologiacutea fundamental una ontologiacutea de la potencialidad dispositiva del hombre no ante un dios abstracto sino ante el Dios que habla (se revela) La apertura del hombre al ser que es especiacutefica del conocimiento humano remite uacuteltimamente al hombre al ens absolutum58 a Dios y a atender la posibilidad de que Dios le hable Oyente de la palabra juega un papel determinante sobre la idea rahneriana de teologiacutea fundamental como superacioacuten laquoidealraquo del extrincesismo de la apologeacutetica neo-escolaacutestica59 Esta considera garantizada la existencia de Dios por la teologiacutea natural laquoyraquo su revelacioacuten sobrenatural por tanto como consecuencia de una demostracioacuten previa De modo que laquola revela-cioacuten de Dios al hombre no pareciacutea ser otra cosa que una comunicacioacuten de

55 Id Espiacuteritu en el mundo 387 Recordemos que el anaacutelisis kantiano de la estructura trascendental del espiacuteritu humano desemboca en la reduccioacuten del Trascedente a un postulado regulativo de la razoacuten praacutectica despojado de contenido real El anaacutelisis de Rahner denuncia pues la insuficiente incisividad de Kant al respecto

56 Puede verse un estudio analiacutetico y criacutetico en G B SALA Uditore della parola di Karl Rahner Unrsquoantropologia metafisica in ordine alla teologia in Rassegna di Teologia 42 (2001) 241-265

57 K RAHNER Oyente de la palabra 22558 Ibid 8759 Para una visioacuten del modo en que evoluciona su concepto de teologiacutea fundamental y

el espacio que ocupa en ella no solo la aptitud del creyente (fides qua) sino el contenido de la fe (fides quae) puede consultarse la siacutentesis de M SECKLER La dimensione fondamentale della teologia di Karl Rahner in I SANNA (ed) Lrsquoereditagrave teologica di Karl Rahner Roma 2005 49-67

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Dios al hombre acerca de algo que eacuteste no sabriacutea todaviacutea de modo que lo que en el hombre ocurriacutea era solo un antildeadirse un nuevo saber a los sabe-res anterioresraquo60 Este proceder no pone en claro por queacute el hombre por siacute mismo estaacute abierto a la revelacioacuten laquoa pesar de serle lsquoen siacutersquo inaccesibleraquo61 La tarea que propone Rahner a la teologiacutea fundamental es la de salvaguar-dar la relacioacuten de la teologiacutea con la metafiacutesica para evitar que la pala-bra de la autocomunicacioacuten divina (fides quae) pierda su significado para su oyente natural (fides qua) Por ello compete a la teologiacutea fundamental una antropologiacutea del hombre como aquel que en su historia abre el oiacutedo a una posible revelacioacuten de Dios [hellip] a esta pieza de la teologiacutea fundamen-tal que nos ha de ocupar aquiacute podemos designarla tambieacuten como ontolo-giacutea de la potentia oboedentialis para la libre revelacioacuten de Dios [hellip] para prestar oiacutedo a un eventual hablar de Dios que si se produce lo hace ndashal menos en un principiondash tambieacuten en el aacutembito de su conocimiento natural es decir mediante experiencia histoacuterica y mediante conceptos y palabras que contribuyen a constituir esta experiencia62

Teniendo esto en cuenta podemos sintetizar el trabajo de Rahner en dos pasos

1 Del anaacutelisis filosoacutefico de la trascendentalidad como capacidad de retorno del sujeto sobre siacute ndashlaquoen contraposicioacuten con esa otra cosa conocida que estaacute lsquofrente a eacutelrsquoraquo63ndash se desprende la proyeccioacuten u orientacioacuten64 de la existencia subjetiva contingente hacia un conocer y querer libre que cuando hablamos del ente que es el hombre solo cabe identificar con una libertad antecedente y creadora (don) que es la propia de Dios y como tal solo cabe explicar analoacutegicamente como loacutegica del amor

El amor es la voluntad iluminada hacia la persona la afirmacioacuten vo-luntaria de este en su singularidad irrepetible e indeducible Pero esta voluntad es la que actuacutea Dios en la posicioacuten de un ente finito Porque con ello se quiere a siacute mismo en su libre poder creador como laquocapacidadraquo del

60 K RAHNER Oyente de la palabra 33 61 Ibid 3462 Ibid 37 Asiacute presenta santo Tomaacutes la potencia obediencial de la criatura considerada

ante Dios laquoEst autem considerandum quod in anima humana sicut in qualibet creatura consideratur duplex potentia passiva una quidem per comparationem ad agens naturale alia vero per comparationem ad agens primum qui potest quamlibet creaturam reducere in actum aliquem altiorem in quem non reducitur per agens naturale et haec consuevit vocari potentia oboedentiae in creaturaraquo (STh III q11 a1)

63 K RAHNER Oyente de la palabra 7564 Cfr Ibid 139

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don del ser en el que eacutel desinteresadamente otorga al otro laquosu posesioacuten del serraquo [hellip] Con ello aparece el amor como la lumbrera del conocimien-to de lo finito y puesto que solo conocemos lo infinito a traveacutes de lo finito aparece tambieacuten como la luz de nuestro conocimiento en general siendo asiacute en uacuteltimo anaacutelisis el conocimiento uacutenicamente la claridad luminosa del amor65

Y asiacute conociendo al absoluto en su cualidad de presencia trascendente libre y amorosa el hombre laquose halla frente a este como frente a una perso-na duentildea de siacute mismaraquo al tiempo que ndashcontinuacutea Rahnerndash el ser absoluto muestra su luminoso rostro personal no porque se lo preste el hombre sino que laquola personalidad de Dios se muestra en el abrirse el ser absoluto ante la trascendencia humana porque este ser aparece en la preguntabi-lidad que todo ser tiene para el hombreraquo66 La concepcioacuten del hombre como oyente ndashque no estaacute referida a una palabra humana sobre Dios sino a la palabra divina sobre el hombre67ndash es posible dado que posee una condicioacuten de posibilidad una potentia oboedentialis o aptitud metafiacutesi-ca respecto a la autocomunicacioacuten de Dios entendida como revelacioacuten universal o trascendental laquoSolo si el ser del ente es de antemano lsquologosrsquo podraacute el Logos hecho carne decir lsquocon palabrasrsquo lo que se halla oculto en las profundidades de la divinidadraquo68

2 En cuanto teoacutelogo Rahner ha de atender igualmente a la positi-vidad (caraacutecter categorial) del hecho revelado y por tanto a la peculiar especificidad humana de la capacidad de trascendencia del espiacuteritu finito como lugar de encuentro con el Dios que puede revelarse es decir a la mundanidad temporalidad materialidad e historicidad del espiacuteritu hu-mano como determinaciones de laquosu apertura hacia el Dios de una posi-ble revelacioacuten libre haciendo de esta apertura precisamente una potentia oboedentialis humana para tal revelacioacutenraquo69

La revelacioacuten trascendental no es digamos una magnitud laquofijaraquo que reposa materialmente en siacute misma [hellip] sino que maacutes bien en esta historia categorial de la revelacioacuten alcanza su verdadera y propia realidad y asiacute ella misma debe entenderse en forma laquotemporalraquo de la misma manera

65 Ibid 130-13166 Ibid 11667 laquoEl hombre en virtud de su esencia espiritual oye siempre y esencialmente una re-

velacioacuten de Diosraquo (Ibid 120)68 Ibid 7169 Ibid 183

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que en teacuterminos muy generales la aprioacuterica estructura trascendental del espiacuteritu humano no se debe en definitiva entender como una magnitud laquofijaraquo [hellip] sino en tal forma que la aprioridad trascendental del espiacuteritu se determina a siacute misma incorporaacutendose a la realidad histoacuterica categorial y asiacute ella misma logra histoacutericamente su realizacioacuten70

En escritos sucesivos nuestro teoacutelogo profundiza su anaacutelisis filosoacutefi-co-teoloacutegico de la esencia humana con referencia expliacutecita a la involucra-cioacuten ndashen su dinaacutemica de apertura al serndash de su iacutendole espacio-temporal como espiacuteritu encarnado y la posibilidad de su libertad como devenir hacia un estadio de realizacioacuten definitivo Asiacute ndashresume J B Metz en su proacutelogo a la edicioacuten refundida de Oyente de la palabra que eacutel presentandash laquola cimentacioacuten de la existencia creyente sobre una palabra de Dios pro-nunciada histoacutericamente no aparece como algo arbitrario y discrecional sino como algo que responde a lo maacutes profundo de la existenciaraquo71 Re-cordemos que la Escritura presenta al hombre por el hecho de ser creado como imagen y semejanza de Dios es decir en una relacioacuten de estrechiacute-sima cercaniacutea con Eacutel Por tanto aunque pertenece al rango de los seres finitos la relacioacuten del hombre con el infinito es constitutiva Con Rahner podemos afirmar ahora que esta apreciacioacuten biacuteblica adquiere todo su re-lieve en el seno de una reflexioacuten racional sobre el ser humano

3 laquoexistenciAl sobrenAturAlraquo e historiA de lA sAlvAcioacuten

31 El laquohacerse hombreraquo del Verbo de Dios

Si el hombre fuese concebido como un ser clausurado sobre siacute (espiacuteritu puro) la encarnacioacuten de Dios es decir la real mediacioacuten entre Dios y el hombre seriacutea difiacutecilmente comprensible e incluso contradictoria Pues o bien Dios dejando de ser tal deberiacutea asimilarse a lo finito o bien deberiacutea ser abatida la laquonecesidad trascendentalraquo72 del hombre y con ella el propio hombre El trascendental como momento esencial de la teologiacutea rahneriana permite explicar la relacioacuten implicativa entre trascendencia e historia

La esencia metafiacutesica de una realidad y su historia por tanto la gra-cia como existencial y la historia de la salvacioacuten y la revelacioacuten no son

70 Ibid 148 (n 3) Cfr Id Historia del mundo e historia de la salvacioacuten in ET V 114-121

71 K RAHNER Oyente de la palabra 1072 Id Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica 26

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magnitudes meramente contrapuestas sino tales que mutuamente se con-dicionan siendo justamente esto lo que debe identificar una teologiacutea tras-cendental De modo que la teologiacutea trascendental no puede ni quiere ser la teologiacutea sino un momento de ella puesto que la teologiacutea (o mejor y de manera maacutes precisa la fe de la que la teologiacutea estudia los momentos reflexivos y la no reflexibilidad uacuteltima) debe enunciar siempre el concreto histoacuterico en su indeducibilidad y al mismo tiempo hacer comprensible coacutemo este concreto de la historia puede concernir efectivamente al hom-bre en su existencia y subjetividad originarias73

El momento trascendental de la teologiacutea considera que en la horizon-talidad de la experiencia trascendental que el sujeto humano tiene de su autorrealizacioacuten (en cuanto ser situado capaz de conocimiento y libertad) habita la verticalidad es decir se da una fundamental apertura a la reve-lacioacuten del Ser absoluto Dios La teologiacutea contempla que en virtud de la voluntad salviacutefica universal de Dios (revelacioacuten trascendental) el hombre despliega esa experiencia de su autorrealizacioacuten bajo el impulso de la gra-cia sobrenatural Dios ha creado libre y amorosamente al hombre como espacio personal de su autodonacioacuten y precisamente por ello no de modo arbitrario ndashcomo indicaba Metzndash sino como dotado de la capacidad real y permanente para que laquopueda dar cabida a este amor que es Dios mismo que lo pueda y lo tenga que recibir a un tiempo como lo que es el milagro eternamente asombroso el regalo inesperado indebidoraquo74 Aunque esa ca-pacidad real y permanente pueda ser identificada como congeniabilidad de la esencia del espiacuteritu humano hacia el Amor que se dona en ninguacuten caso es exigencia de la naturaleza humana sino que se trata en palabras de Rahner de un laquoexistencial sobrenaturalraquo75

El hombre real como interlocutor real de Dios debe poder recibir este amor como lo que necesariamente es un don libre Ello significa que hay que caracterizar de indebido de laquosobrenaturalraquo el mismo existen-cial central permanente de la ordenacioacuten al Dios trinitario de la gracia y de la vida eterna No porque el hombre posea ndashlaquoevidentementeraquondash una

73 Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 11274 Id Sobre la relacioacuten entre la naturaleza y la gracia in ET I 31275 Cfr Id Existenciario Existencial II in SM III 66-68 Es en la filosofiacutea de Heideg-

ger donde tiene su asiento el sentido del teacutermino Existencial se refiere a aquella caracteri-zacioacuten de la existencia del ser que permite comprenderlo en su especificidad de ser-ahiacute que permite por tanto comprender las determinaciones oacutenticas del ente que se comprende a siacute mismo como existencia o hecho de ser frente a las cosas Cfr M HEIDEGGER Ser y tiempo sect 9 Madrid 2003 67-70

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naturaleza fijamente delimitada y en este sentido comparada con ella ndashen cuanto magnitud fija y conocida desde siemprendash la gracia en uacuteltimo teacutermino Dios mismo aparezca como improporcionada con lo cual habriacutea que llamarla sobrenatural Sino porque la tendencia y ordenacioacuten al amor de Dios el existencial sobrenatural solo salva el caraacutecter indebido de la gracia siendo eacutel mismo indebido y en el momento en que lleno de gracia se hace consciente presentaacutendose como sobrenatural es decir como in-debido al hombre real76

Esta concepcioacuten teoloacutegica de la existencia humana como determinacioacuten ontoloacutegico-real operada sobrenaturalmente por la gracia en su naturaleza y llamada por eso sobrenatural (si bien no ausente del orden concreto de la existencia)77 aguarda auacuten el esclarecimiento de su especificidad cristiana la presencia histoacuterico-salviacutefica de Jesucristo es decir de la Palabra en la carne (revelacioacuten categorial) como raiacutez del sentido uacuteltimo que tiene el impulso trascendental del hombre hacia Dios esto es del oyente (antro-pologiacutea) y la relacioacuten de Dios con el mundo (cosmologiacutea)78 La automani-festacioacuten de Dios (revelacioacuten trascendental) en la categorialidad histoacuterica alcanza su plenitud en Jesucristo

Dios ha tomado al hombre con tan absoluta seriedad en la encarnacioacuten del Verbo que el hombre no puede considerar seriamente a Dios sino a Eacutel en cuanto hombre y en Eacutel a la humanidad divinizada Todas las realidades humanas tambieacuten su aspecto natural poseen una efectiva anoacutenima aca-so solo potencial y no obstante verdadera condicioacuten cristiana79

Cristo es la comunicacioacuten laquodefinitiva e insuperableraquo de Dios pues Dios asume en su Verbo la concrecioacuten histoacuterica del hombre Jesuacutes como propia La asume en la persona del Salvador laquoafirmacioacuten concreta en la historiaraquo sin la que lo trascendental no seriacutea real 80 Que la maacutexima realiza-

76 K RAHNER Sobre la relacioacuten entre la naturaleza y la gracia in ET I 31477 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 24578 laquoEn efecto si queremos ser cristianos y no solo metafiacutesicos del oscuro principio

hemos de confesar que la Palabra eterna se ha hecho carne y ha habitado entre nosotrosraquo (K RAHNER La palabra poeacutetica y el cristiano in ET IV 416)

79 Id Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 38780 A partir de una ontologiacutea de lo que llama Rahner laquosiacutembolo realraquo puede acometerse

una explicacioacuten de la humanidad de Cristo no como medio o sentildeal sino como manifestacioacuten propia del Logos como su siacutembolo real en sentido eminente y no como una realidad asumida desde fuera que no dice ni muestra nada de Aquel que la asume Originariamente se entiende por siacutembolo el espacio expresivo que va del ente que conoce al ente por conocerse en cuanto auto-realizacioacuten intriacutenseca en la pluralidad que es propia del ente ya sea finito o absoluto como el Dios Trino Ese espacio expresivo es el realizarse de la unidad de un ente esencial-

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cioacuten del hombre se haya hecho realidad solo puede ser aceptado y creiacutedo a posteriori a partir del acontecimiento histoacuterico-salviacutefico de Jesucristo Ahora bien dada su constitucioacuten es a partir de la reflexioacuten trascendental como el hombre puede aceptar la encarnacioacuten de Dios como libre epifaniacutea que finaliza realmente su desiderium naturale de la visioacuten beatiacutefica en la plenitud de la invitacioacuten que Dios dirige al hombre para compartir su vida divina a partir del mismo momento de su creacioacuten y no como superes-tructura adventicia al ser del hombre81

El movimiento de la creacioacuten apareceriacutea gravitando de antemano hacia ese punto en el que Dios alcanza simultaacuteneamente la suprema cercaniacutea y lejaniacutea frente a lo distinto de eacutel ndashlo creadondash al objetivarse de la manera maacutes radical en su imagen daacutendose en ella en cuanto eacutel mismo de la ma-nera maacutes verdadera y aceptando como lo maacutes radicalmente suyo lo creado por eacutel Dios en tal caso no seriacutea el fundador sin historia de una historia ajena a eacutel sino el ser de cuya propia historia se trata82

Por ello sostiene Rahner que la creacioacuten en general y el hombre en particular han sido llamados a la existencia por el amor de Dios que desea darse a lo otro esperando de eso otro una respuesta libre sostenida por el uacutenico motivo del amor 83 Refirieacutendose a la unidad entre el orden de la crea-cioacuten y el de la redencioacuten escribe laquoEsta unidad se funda uacuteltimamente en la absoluta decisioacuten de Dios ndashinderogable por la libertad de las criaturasndash a favor de su auto-alienacioacuten en el hacerse creatura de su uacutenico Verboraquo84 Dicho del modo concreto en que se despliega la historia de la salvacioacuten el hombre existe (creacioacuten) porque su existencia ha sido pensada y proyecta-da en Cristo (encarnacioacuten)85 En Cristo se da la plenitud de la unidad entre naturaleza y gracia anhelo humano y don de Dios revelacioacuten e historia

mente plural Expresaacutendose se auto-encuentra y posee a siacute mismo Siacutembolo es el modo de autoconocimiento propio del ente Este es el sentido en que Rahner habla del Logos en la vida trinitaria como laquosiacutembolo del Padreraquo (laquosiacutembolo intriacutenseco y sin embargo distinto del simbolizado constituido por este mismo en quien el simbolizado se expresa a siacute mismo y de esta forma se poseeraquo) y de la humanidad de Cristo como automanifestacioacuten del Logos laquode forma que cuando Dios expresaacutendose se aliena a siacute mismo aparece justamente eso que nosotros llamamos la humanidad del Logosraquo (K RAHNER Para una teologiacutea del siacutembolo in ET IV 277 y 280)

81 K RAHNER Problemas actuales de cristologiacutea in ET I 19282 Ibid 17283 K RAHNER Para la teologiacutea de la encarnacioacuten in ET IV 14284 Id Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 38885 Id Curso fundamental sobre la fe 237 Id Historia del mundo e historia de la salva-

cioacuten in ET V 125

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Como se colige de lo dicho hasta aquiacute para comprender a fondo el laquoha-cerse hombreraquo del Verbo misterio esencial y especiacutefico de la fe cristiana86 Rahner adopta en su cristologiacutea esa oacuteptica trascendental del misterio de Cristo que comparte con la metafiacutesica moderna el empentildeo en laquola supera-cioacuten del positivismo metafiacutesico y del conceptualismo caracteriacutestico de la escolaacutestica tardiacutearaquo partiendo de una laquocomprensioacuten del ser como espiacuteritu palabra conciencia inicial y poder entenderlo asiacute dinaacutemicamenteraquo87

Cuando la historia del hombre el acto de su libertad y la culminacioacuten absoluta de ese acto libre no son considerados como sucesos basados en un fundamento en siacute intocado de una naturaleza humana concebida coacute-sico-estaacuteticamente sino vistos como autorrealizacioacuten de una esencia que en tanto lo que ella es alcanza solamente en ellos su realidad propia si la libertad por consiguiente no es vista tanto como una laquopotenciaraquo que se laquotieneraquo sino como la libertad de disposicioacuten que se es para llevar la propia esencia previamente dada en tanto ella misma a su perfeccioacuten el acontecimiento de la encarnacioacuten estaacute entonces unido maacutes estrecha y esencialmente a la perfeccioacuten de la vida humana asumida que cuando la encarnacioacuten es vista como constitucioacuten de un sujeto humano en cuya vida acaece despueacutes solo ulteriormente esto o lo otro88

Se trata en suma de elaborar una laquocristologiacutea ontoloacutegicaraquo esto es que construya sus enunciados y esquemas de comprensioacuten orientados laquohacia la coincidencia original de ser y de concienciaraquo89 y asiacute tratando de remontar la formalidad conceptual de la cristologiacutea claacutesica los pueda hacer maacutes asequibles al hombre contemporaacuteneo Un trabajo que nuestro autor consi-dera plenamente justificado por cuanto se trata de un recurso al que apela la misma Escritura En efecto si como recordaba el Vaticano II tanto el mundo (cosmologiacutea) como la humanidad (antropologiacutea) han sido creados

86 Cfr STh III q2 a2 laquoSi ergo humana natura Verbo Dei non unitur in persona nullo modo ei unitur Et sic totaliter tollitur incarnationis fides quod est subruere totam fidem christianamraquo

87 O GONZAacuteLEZ DE CARDEDAL Fundamentos de cristologiacutea II Madrid 2006 706-707

88 K RAHNER Cuestiones dogmaacuteticas en torno a la piedad pascual in ET IV 160 Per-miacutetasenos hacer de este texto un ejemplo que ilustra los adjetivos con que J B Metz califica la teologiacutea trascendental de Rahner laquoRahner elabora una dogmaacutetica histoacuterico-vital biograacutefica narrativa testimonial pero siempre enfocada como casi ninguna otra teologiacutea a lo objetivo y doctrinalraquo En nuestro caso se trata de la estrecha confrontacioacuten y mutua iluminacioacuten entre libertad del hombre (considerada en su caraacutecter de disposicioacuten de ser) y encarnacioacuten de Dios en cuanto plenificacioacuten de la misma Cfr J B METZ La fe en la historia y la sociedad 233

89 K RAHNER Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica 66

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en orden a un encuentro de plenitud con Cristo no hay por queacute descartar ambos como espacio o gramaacutetica para la comprensioacuten de la encarnacioacuten del Verbo sin que por ello haya de quedar Dios sometido a este ciacuterculo hermeneacuteutico90 Por lo que a la antropologiacutea se refiere Rahner apela en clave ascendente al doble espacio en que ndashseguacuten eacutelndash se declara la identidad personal del hombre (ante y en Cristo) tanto al horizonte de la apertura trascendental del espiacuteritu humano como al significado de otras experien-cias de rango existencial que pueden considerarse declaracioacuten anoacutenima de la revelacioacuten de Dios en Cristo Si bien no puede obviarse que es la experiencia trascendental el fundamento o condicioacuten de posibilidad de toda iniciativa del espiacuteritu del hombre y por tanto constituye el horizonte comprensivo de su existencia histoacuterica o si se prefiere del a posteriori de su vida personal Dediquemos una palabra conclusiva al significado teoloacute-gico de la trascendentalidad para ahondar en el siguiente apartado el de la existencia maacutes inmediata y sus llamadas a la teologiacutea

Rahner recordemos presenta al hombre como aquel ser que es cons-ciente de siacute de su propia finitud y en tal medida como ser que estaacute frente al ser laquoabsolutoraquo Aun sin poder superarla trasciende su propia finitud pues por su constitucioacuten esencial es capaz de anticipar la llamada hacia el absoluto El hombre toma conciencia de su orientacioacuten al absoluto porque es laquosujetoraquo del mismo modo que la invocacioacuten que brota de eacutel hacia el absoluto espera y piensa a este como el laquoSujetoraquo Por eso la perspectiva trascendental declara la identidad del hombre como persona En el encuen-tro con Cristo ndashprincipio y fin de todo lo creadondash el hombre descubre el sentido uacuteltimo de su laquopoder existir en la plena entrega de siacute mismoraquo91 como entrega al Ser en la medida en que en y por Cristo la humanidad se mani-fiesta como prefigurada y creada para la salvacioacuten (para ser naturaleza del propio Dios como incomparable disposicioacuten de siacute) Si como confiesa san Pablo el hombre ha sido creado en Cristo (cfr Rom 829 Col 115 1 Cor 86) entonces es Cristo quien en su encarnacioacuten revela al hombre su mis-terio La definicioacuten cristoloacutegica de la unioacuten hipostaacutetica apela a una aptitud de la naturaleza humana (potentia oboedentialis o potencialidad para la re-cepcioacuten de la autocomunicacioacuten de Dios en la gracia) como capacidad para su asuncioacuten por la persona del Verbo de Dios La encarnacioacuten no estaacute por tanto en funcioacuten del pecado del hombre ndashcomo pudo pensar la interpreta-

90 Cfr Id Jesucristo B in SM IV 5691 Id Para la teologiacutea de la encarnacioacuten in ET IV 137

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cioacuten teoloacutegica claacutesica del disentildeo de Dios a favor del hombrendash sino que la creacioacuten es ya un acto de salvacioacuten La existencia humana acontece en el orden presente de la salvacioacuten esto es se halla sobrenaturalmente elevada por la autocomunicacioacuten divina en la gracia increada que es la potencia del Dios Trino92 La perspectiva trascendental permite a la cristologiacutea laquohacer comprensible la idea del hombre-Dios como punto culminante (buscado por lo menos asintoacutetica e hipoteacuteticamente) del movimiento del espiacuteritu que en una constante superacioacuten de siacute mismo se mueve hacia Diosraquo93 La misma perspectiva trascendental permite a la antropologiacutea advertir que su constitutiva potencialidad como condicioacuten a priori para la laquoautomediacioacuten de Diosraquo tiene su razoacuten de ser en el hombre salido de las manos de Dios como don por medio de su Hijo hecho hombre94

92 Cfr Id Amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 259 El propio teoacutelogo confiesa abiertamente al final de su carrera que por razones no solo teoloacutegicas sino pastorales en su antropologiacutea teoloacutegica laquoel tema de la pecaminosidad del hombre y el perdoacuten de la culpa por pura gracia es en cierto sentido algo secundario en comparacioacuten con el tema de la auto-comunicacioacuten de Diosraquo Y esto no porque el pecado sea una experiencia que no nos afecte radicalmente y nos impida reclamar cualquier derecho ante la gracia de Dios sino porque laquosi vemos lo difiacutecil que llega hoy diacutea a los hombres la justificacioacuten como perdoacuten uacutenicamen-te del pecado si ademaacutes para un teoacutelogo catoacutelico Dios y su promesa de siacute mismo al hombre (como quiera que esta haya de entenderse en concreto) precede ya al pecado y es pura gracia pura maravilla inesperada de Dios quien se entrega derrochaacutendose a siacute mismo y hace que la aventura de tal amor sea su propia historia entonces pienso que puede uno sentir tranquila-mente que la autocomunicacioacuten de Dios a la criatura es un tema maacutes central que el pecado y el perdoacuten de los pecadosraquo (K RAHNER Sobre la inefabilidad de Dios Experiencias de un teoacutelogo catoacutelico 31-32) En otro lugar en liacutenea semejante considera Rahner que tras la en-carnacioacuten de Cristo y su cruz ndashel ahiacute donde Dios se ha decidido a favor del hombre sin dantildear su libertad redimiendo y ennobleciendo su naturaleza hasta hacerla capaz de felicidadndash el cristiano laquopost Christum natum en el fondo debe pensar el mundo de manera optimista del mismo modo que debe (puede) saber que la Palabra de Dios se ha hecho carne en este mun-do para siempre [hellip] No se trata de que dicho optimismo pase por alto la cruz y la muerte sino de que fije su atencioacuten en la compenetracioacuten del Hijo con el destino del mundoraquo (Id Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 389-390) En otro paso de su obra refirieacutendose a la acusacioacuten lanzada contra Teilhard de Chardin de haber atenuado la fuerza del pecado en su visioacuten evolutiva del mundo considera Rahner que sin restar importancia al pecado cabe una concepcioacuten fundamentalmente positiva del mundo en su proceso evolutivo cuando se entiende este rectamente a la luz del poder redentor de la encarnacioacuten laquoEl mundo y su historia estaacuten de antemano sustentados por la voluntad absoluta de Dios de una radical autocomunicacioacuten a ese mundo puesto que en esa autocomunicacioacuten y su punto cumbre la encarnacioacuten el mundo se hace historia de Dios mismo estaacute el pecado si lo hay en el mundo y en la medida en que lo haya abarcado de antemano por la voluntad de remisioacuten y la oferta de autocomunicacioacuten divina seraacute necesariamente puesto que por causa de Cristo no estaacute condicionada por el pecado una oferta de la remisioacuten y de la superacioacuten de la culparaquo (Id La cristologiacutea dentro de una concepcioacuten evolutiva del mundo in ET V 197)

93 Id Teologiacutea trascendental in SM VI 614-615 94 Cuando la laquounioacuten hipostaacuteticaraquo no se piensa bajo la clave del privilegio abstracto

o alteracioacuten del liacutemite humano sino como plena realizacioacuten de la apertura entre Dios y el

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32 Llamadas de la antropologiacutea a la teologiacutea

Ademaacutes de la conciencia de siacute la trascendentalidad del espiacuteritu hu-mano desvela el sentido que poseen otras llamadas (categoriales) de la antropologiacutea a la teologiacutea Se trata de la experiencia humana del amor al tuacute la disposicioacuten ante la muerte y la versioacuten al futuro de la vida del hom-bre en clave de esperanza hacia un destino de plenitud ulterior 95 Todas ellas se situacutean en la oacuterbita de una experiencia de vida que abre un camino a aquella reflexioacuten que puede conducir eventualmente a Dios laquoEstas tres lsquoapelacionesrsquo coinciden en que el hombre en su existencia si eacutel la asume decididamente de suyo desarrolla ya algo asiacute como una lsquocristologiacutea en buacutesquedarsquoraquo96 Rahner observa estrechamente vinculado el sentido y ejer-cicio de cada una de estas apelaciones de la existencia humana a la voca-cioacuten sobrenatural (la primordial genuinidad del fondo personal informado por el laquoPneuma divinoraquo)97 que Dios ha inscrito en cada vida singular convirtieacutendola en uacutenica e insustituible

321 Amor al proacutejimo

Cuando el amor al proacutejimo es considerado en su verdad y capacidad constitutiva de generar una comunidad enteramente nueva entre los hom-bres laquode persona a personaraquo98 cuando no obviamos que en virtud de la historicidad a posteriori del hombre en el acto de la comunicacioacuten amoro-sa con el tuacute personal queda sintetizada reunida y realizada la unidad origi-

hombre entonces es posible recuperar la contemplacioacuten de la vida de Cristo (en su condicioacuten de realidad humana en el mundo y en cuanto tal realidad de Dios) como espacio para un discernimiento maacutes profundo del significado de nuestra propia vida A una teologiacutea de los misterios de la vida de Cristo (los interrogantes y asombros que suscita) confiacutea Rahner la posibilidad de lograr una interpretacioacuten uacuteltima de nuestra vida e historia personal (y cristiana) en todo el arco de su complejidad como esfuerzo de a-propiacioacuten de siacute y ex-sistencia ante el Misterio Cfr K RAHNER Problemas actuales de cristologiacutea in ET I 195-197 Mysterien des Lebens Jesu in LThK2 VII 721-722 Para conocer las fuentes y motivaciones de la teologiacutea contemporaacutenea (con especial atencioacuten a la obra de K Rahner) para la recuperacioacuten de una teologiacutea de los misterios de la vida de Cristo O GONZAacuteLEZ DE CARDEDAL Fun-damentos de cristologiacutea I Madrid 2005 654-660 Tambieacuten A GRILLMEIER Los misterios de la vida de Jesuacutes panorama histoacuterico in MyS III 571-586

95 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 345-348 Id Der eine Jesus Christus und die Universalitaumlt des Heils 279-282 Id Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea siste-maacutetica 63-66 Cfr G PATTARO La svolta antropologica 152-157 I SANNA La visione antropologica di Karl Rahner in Id (ed) Lrsquoereditagrave teologica di Karl Rahner 18-26

96 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 34597 Cfr Id Uumlber die Heilsgeschichtliche bedeutung des einzelnen in der Kirche 43198 Id Consagracioacuten del laico para la cura de almas in ET III 276

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naria de lo que el hombre es en su auto-posesioacuten subjetiva como apertura trascendental al ser y en su libre auto-disposicioacuten hacia la definitividad99 cuando advertimos la complejidad pasional del fenoacutemeno amoroso como realidad que permea la totalidad experimentada y sufrida de la vida per-sonal con don de siacute 100 entonces seriacutea insensato no conceder a este acto fundamental y envolvente de la existencia humana el caraacutecter de patencia del misterio aun antes de profundizar en su orilla teoloacutegica101 Por ello

Si en la descripcioacuten del amor al tuacute se pone de manifiesto que es realmente la realizacioacuten del ser total espiritual y trascendental del hombre entende-remos con mayor facilidad que dicho amor acontezca en el presente orden salviacutefico como caritas que no indica otra cosa que su radicalidad absoluta en cuanto que estaacute abierto a la inmediateidad del Dios que se comunica como gracia102

En la extroversioacuten amorosa de que es capaz el espiacuteritu humano cabe por tanto una experiencia inmediata de Dios103 En efecto la identifica-cioacuten teoloacutegica de la trascendentalidad ilimitada del espiacuteritu humano como potentia oboedentialis para la gracia permite comprender la sobrenatu-ralidad del acto radicalmente libre de amor hacia el tuacute como orientacioacuten inmediata a Dios que se da en el seno de la historia de la salvacioacuten es decir en la figura concreta del otro que para el cristiano representa de modo absoluto Jesucristo

Jesuacutes es el absolutum concretissimum y en consecuencia aquel ante quien el amor alcanza su concrecioacuten e inequivocidad maacutes absolutas aque-lla que el amor busca en razoacuten de su propia esencia pues es un movimien-to no hacia un ideal abstracto sino hacia la singularidad concreta indi-vidual indisoluble y precisamente este amor halla en su tuacute la amplitud absoluta del misterio incomprensible104

Caritas identifica en la Escritura el amor mismo que es Dios quien hace de su encuentro con la criatura ndashimagen y semejanza suyandash un acto supre-

99 Id Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 258-259100 Id De la necesidad y don de la oracioacuten 45101 Cfr Id Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 260 Puede

encontrarse una siacutentesis sobre el sentido que tiene en Rahner el amor al proacutejimo como espacio de Trascendencia en M CABADA CASTRO La vigencia del amor Afectividad hominiza-cioacuten y religiosidad Madrid 1994 378-381

102 K RAHNER Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 261103 Cfr Id Uumlber die Heilsgeschichtliche bedeutung des einzelnen in der Kirche 423104 Id Curso fundamental sobre la fe 362

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mo de amor que se convierte para ella a su vez en mandamiento nuevo El cual no es una mera exigencia moral sino una llamada a concentrar la fuerza vital en aquel que Dios ha querido como morada de su amor la per-sona del otro Cristo mismo ha sido identificado por Dios en el Evangelio como mi amado (cfr Mt 317 175) y Jesuacutes a su vez como fundamento del mandamiento del amor (cfr Jn 1335) en Eacutel Dios mismo se presenta como garantiacutea real de la plenitud que aguarda a pesar de su finitud al amor humano laquoPor eso para Juan la consecuencia de que Dios que es amor (1 Jn 416) nos haya amado no es que nosotros a nuestra vez le amemos a eacutel sino que nos amemos mutuamente (1 Jn 4711)raquo105 En otro lugar se-ntildeala Rahner que el amor inter-humano corre el riesgo de instrumentalizar sus mediaciones (aunque sean personales) en cambio esto no es posible cuando decimos que el otro de la relacioacuten es Dios pues Eacutel no estaacute junto al hombre sino ocupando su centro maacutes iacutentimo laquoEl amor a un hombre por amor de Dios no saca del hombre amado sino que introduce en eacutelraquo106

Si laquosinoacutepticamenteraquo se reclama como ejecucioacuten nuestra un amor que en su desmesura ha de aceptar la desmesura del amor de Dios para con nosotros y que ha de poseer por ello una radicalidad que exige realmente y hasta el final la carencia de reparos habraacute que decir entonces ese amor de veras reclamado es en cuanto tal dado que responde al absoluto amor de Dios un amor que este sustenta esto es que la autocomunicacioacuten de Dios posibilita [hellip] porque Dios estaacute dispuesto a dar lo que ordena [hellip] porque se da ya el amor como posibilidad que ha de ser animada y liberada hacia siacute misma y porque estaacute ahiacute ya en el mundo la voluntad de Dios que otorga su realizacioacuten a esa posibilidad107

La consideracioacuten que hace la tradicioacuten neotestamentaria del hondo significado del amor inter-personal como amor a Dios108 contempla en continuidad la realidad del amor humano como genuina posibilidad de la trascendentalidad de la persona (que laquopara no perderse en la vaciacutea nada necesita un tuacute intramundanoraquo)109 con la absoluta disponibilidad del amor

105 Id Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 253106 Id Consagracioacuten del laico para la cura de almas in ET III 282107 Id El laquomandamientoraquo del amor entre los otros mandamientos in ET V 452-453108 Ya sea como medida expliacutecita por la que el hombre seraacute juzgado en el juicio esca-

toloacutegico de Dios (Mt 2534-46) o como forma definitiva de la existencia cristiana (1 Cor 1231ndash1313)

109 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 207 Id El laquomandamientoraquo del amor entre los otros mandamientos in ET V 450

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que es Dios y se da a conocer en la persona de Cristo Y puesto que la mediacioacuten salviacutefica de la encarnacioacuten de Cristo no tiene un significado so-lamente temporal sino eterno110 la realizacioacuten espiritual de la existencia como demanda de fidelidad absoluta que exhibe la entrega interpersonal amorosa en tanto estaacute llevada por la gracia posee una profundidad abso-luta y un momento que estaacute asumido en la laquovida eternaraquo entre Dios y el hombre Esa vida eterna en definitiva trasciende siempre este encuentro inmediato espacio-temporal corporal y se entiende como insuprimible en la muerte presupuesto solamente que en la concepcioacuten cristiana de la existencia la muerte se interprete y realice como consumacioacuten y no solo como fin en que todo se acaba111

322 Disponibilidad para la muerte

Pasemos al espacio de la experiencia de la muerte Cabe leer de dos modos muy distintos esa declaracioacuten irrevocable de la finitud de la exis-tencia del hombre que es su muerte como pura pasioacuten y fatalidad o como ndashdigaacutemoslo asiacutendash pasioacuten activa teacutermino y consumacioacuten de la vida personal (status viatoris)112 En la medida en que la muerte pone fin a la existencia bioloacutegica del hombre este sufre la muerte la padece sin remedio como laquoladroacuten en la noche despojo y reduccioacuten a la impotencia es justamente finraquo113 No obstante y en cuanto acontecimiento protagonizado por el ser personal no puede pasarse por alto que la muerte no es ajena a la dialeacutec-tica de la vida personal donde ha de vivirse

El hombre es espiacuteritu y materia persona y naturaleza tiene libertad y al mismo tiempo un dinamismo vital independiente del libre albedriacuteo En la esencia misma del hombre hay una verdadera dialeacutectica aneja a esta composicioacuten plural y antiteacutetica de realidades Lo maacutes loacutegico es esperar que esta complejidad se refleje en la muerte [hellip] El acto maacutes trascendental de la vida vivido humanamente implica la uacuteltima decisioacuten personal de la

110 Cfr Id Eterna significacioacuten de la humanidad de Jesuacutes para nuestra relacioacuten con Dios in ET III 55-56

111 Id Curso fundamental sobre la fe 361 112 Cfr Id Sentido teoloacutegico de la muerte 15-35 Id Pasioacuten y ascesis Sobre la fun-

damentacioacuten filosoacutefico-teoloacutegica de la asceacutetica cristiana in ET III 80-93 Cfr las explica-ciones sobre la teologiacutea de la muerte en Rahner J L RUIZ DE LA PENtildeA El hombre y su muerte Antropologiacutea teoloacutegica actual Burgos 1971 217-268 F BRANCATO La questione della morte nella teologia contemporanea Teologia e teologi Firenze 2005 73-80

113 K RAHNER Sentido teoloacutegico de la muerte 45

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vida no por lo que tiene la muerte de acontecimiento pasivo procedente de la vida bioloacutegica sino por la accioacuten libre del alma El teacutermino del hombre como persona espiritual que decide libremente de su propia suerte ha de ser consumacioacuten activa desde dentro situarse activamente en su perfeccioacuten o imperfeccioacuten dar el postrer testimonio que resulta y resume en general toda su propia vida En este caso la muerte lleva consigo la total posesioacuten de siacute mismo por parte de la persona Importa la realizacioacuten definitiva del sentido de siacute mismo y la libre decisioacuten de la realidad personal [hellip] Asiacute la laquopropia muerteraquo desde dentro por la accioacuten de la persona misma es a la par el acontecimiento de la maacutes radical depotenciacioacuten del hombre La muerte es accioacuten y pasioacuten en uno114

Heidegger hace de la muerte ndashentendieacutendola activamentendash clave her-meneacuteutica de comprensioacuten de la existencia en su originalidad y posibi-lidad de recogimiento en siacute laquoLa muerte como fin del Dasein es la po-sibilidad maacutes propia irrespectiva cierta y como tal indeterminada e insuperable del Dasein La muerte como fin del Dasein es en el estar vuelto de este hacia su finraquo115 No obstante apunta Rahner116 Heidegger tan solo llega a identificar a su protagonista como un ser-para-la-muerte en cuanto posibilidad anticipada de un vivir estrechado sin embargo a lo inmediato

Ahora bien iquestpor queacute proclamar el dominio de la muerte sobre la to-talidad de la vida aislando aquella de la real capacidad de apertura tras-cendente y la constante pugna de libertad en que la existencia personal se descubre y construye cabe-siacute y hacia lo otro de siacute como afaacuten sin liacutemites Entre las determinaciones esenciales de la existencia humana Rahner ha privilegiado ndashcomo explicitaremosndash la libertad cualificaacutendola como accioacuten trascendental sobre el proyecto personal esto es como entrega del hombre a siacute mismo que asumiendo en unidad la totalidad de dimensiones de su existencia pretende la total disposicioacuten de siacute laquoLa libertad en su esencia original no es la facultad de hacer o dejar de hacer arbitraria-mente una cosa determinada sino la estructura fundamental por la que el sujeto en su trascendentalidad dispone de siacute mismo en orden a su realiza-

114 Ibid 34-35115 M HEIDEGGER Ser y tiempo sect 52 Madrid 2003 278 Cfr J L RUIZ DE LA

PENtildeA El hombre y su muerte Antropologiacutea teoloacutegica actual 79-90 A NITROLA Trattato di escatologia 2 Pensare la venuta del Signore Cinisello Balsamo 2010 89-91

116 Cfr K RAHNER Pasioacuten y ascesis Sobre la fundamentacioacuten filosoacutefico-teoloacutegica de la asceacutetica cristiana in ET III 89

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cioacuten definitivaraquo117 Asiacute entendida la libertad que es propia de la existencia personal laquono es precisamente la capacidad de revisar siempre de nuevo sino la uacutenica facultad de lo definitivo la facultad del sujeto que mediante esa libertad ha de ser llevado a su situacioacuten definitiva e irrevocableraquo118 Para la antropologiacutea cristiana la muerte se encuadra entre aquellas ac-ciones particulares de la vida en que se ejerce y media esa facultad de lo eterno que es la libertad del hombre laquoLa muerte del hombre se presenta como llegada a su teacutermino de una historia de libertad en la inmediatez del misterio de Dios como plenitud beatiacutefica o como juicioraquo119 Libertad que ante la muerte puede ejercer el hombre como laquolibertad libremente amada [hellip] pues donde hay libre libertad hay amor a la muerte hay valor para morirraquo120 y laquolibertad rendida una libertad que acepta no solo la muerte sino su sentido el sentido de la existenciaraquo121 Contribuyendo asiacute a la re-capitulacioacuten de su historia y a la pregunta por la densidad irrepetibilidad y valor absoluto de quien la padece

La muerte tiene una presencia axioloacutegica en la totalidad de la vida humana El hombre opera su muerte como consumacioacuten por la accioacuten de su vida y asiacute la muerte estaacute presente en esa accioacuten y consiguiente-mente en toda accioacuten libre en que el hombre dispone de la totalidad de su persona122

La decisioacuten libre y responsable adoptada en cada accioacuten vital ndashincluida la muertendash construye el proyecto personal en el tiempo presente donde se rememora lo valioso acumulado a la vez que se anticipa el futuro definitivo del mismo123 El conjunto de tales decisiones va enriqueciendo el nuacutecleo personal humano desde dentro coadyuvando fielmente a la constitucioacuten de la imagen de lo que el hombre quiere llegar a ser Este argumentario an-

117 Id La muerte del cristiano in MyS V 452118 Id Curso fundamental sobre la fe 123 El anaacutelisis completo de la libertad humana

en sus posibilidades y condicionantes Ibid 121-125119 Id Theologische Erwaumlgungen uumlber den Eintritt des Todes 333120 Id Sentido teoloacutegico de la muerte 94121 Ibid 95122 Ibid 49-50 Cfr Id La muerte del cristiano in MyS V 444 Este es el modo crea-

tivo en que Rahner interpreta la afirmacioacuten de Gregorio Magno (prolixitas mortis) laquoTempo-ralis vita aeternae vitae comparata mors est potius dicenda quam vita Ipse enim quotidianus defectus corruptionis quid est aliud quam quaedam prolixitas mortisraquo (GREGORIO MAG-NO Homiliarum in evangelia II 37 1 in PL 76 1275)

123 Entre los existenciales ineludibles del hombre se encuentra su constitucioacuten anam-neacutetica y prognoacutestica Cfr K RAHNER Principios teoloacutegicos de la hermeneacuteutica de las declaraciones escatoloacutegicas in ET IV 382

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tropoloacutegico contribuye a conjurar el peligro de una escatologiacutea cristiana que tratando de laquodesmitologizarraquo en absoluto las afirmaciones escatoloacute-gicas de la Escritura las laquodes-escatologizara de tal forma que todas ellas mentasen solo un suceso acaecido una decisioacuten tomada en el ahora de la existencia del hombre concretoraquo124 quedando asiacute destruido su caraacutecter esencial como sabiduriacutea del futuro en el saber del hombre acerca de siacute y su redencioacuten en Cristo por revelacioacuten divina Este proceder des-escatologi-zariacutea a priori tanto la prerrogativa antropoloacutegica de la apertura absoluta e incondicionada a la palabra de Dios (al hacer de eacutel un ser restringido a su presente sin capacidad de futuro) como la posibilidad reveladora de Dios y su actuacioacuten pro nobis como plenitud del hombre entero y de todo lo que pertenece a su existencia personal (naturaleza y sujeto)125 En realidad la salvacioacuten ofrecida al hombre por Dios y determinada por el acaecer de Cristo ndashmuerto y resucitadondash contiene una comunicacioacuten sobre lo futuro que en palabras de Rahner

acaece justamente en lo que el hombre oye sobre siacute mismo de parte de Dios en tanto la apertura de la verdad de su existencia y viceversa Ambas co-sas en el mismo grado y medida en que esta interpretacioacuten del hombre he-cha por Dios avanza en la historia humana y por eso y de manera no su-perable en Jesucristo en quien Dios se ha dicho como salvacioacuten al hombre definitivamente y de forma que ya no podraacute ser rebasada126

En la humanidad de Cristo el hombre oye hablar a Dios claramente sobre el significado de su propia muerte ya que

la redencioacuten acontecioacute precisamente por el hecho de que la muerte fue aceptada ndashcon fe esperanza y amorndash como manifestacioacuten del pecado como muestra de su vaciedad y opresioacuten como presencia de la eterna tiniebla y del abandono de Dios y se transformoacute en manifestacioacuten de la entrega obe-diente del hombre entero a la incomprensibilidad del Dios santo en medio del extraviacuteo y el alejamiento127

En la presente economiacutea de la salvacioacuten la muerte del hombre deja de ser una contradiccioacuten total de la constitucioacuten humana pues mediante la accioacuten de la gracia ha sido incorporada a la muerte de Cristo laquodonde

124 Ibid 376125 Ibid 378-379126 Ibid 386-387127 K RAHNER La muerte del cristiano in MyS V 461

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el vaciacuteo del hombre se hizo plenitud de Dios cosa que de suyo y origi-nariamente no era La muerte se hizo vidaraquo128 Precisamente este es el sentido que tiene para el justo morir con Cristo como don de gracia El Crucificado ha desvelado la autentica significacioacuten del acto por el cual el hombre asume en libertad el despojamiento que acarrea su muerte no en abstracto por consiguiente pues laquoel autodesprendimiento radical de la muerte es un aspecto de la realizacioacuten de la gracia en cuanto fe esperanza y amorraquo129

323 Esperanza en el futuro

Digamos una palabra final sobre la versioacuten del hombre al futuro como instancia antropoloacutegica para la teologiacutea Una vez maacutes hemos de apuntar que en la caracterizacioacuten cristiana del tiempo histoacuterico como tiempo de salvacioacuten o avance hacia el futuro absoluto ndashlaquoque no es sino otro nombre para lo mentado con la palabra lsquoDiosrsquoraquo130ndash entra de nuevo en juego el ciacuterculo hermeneacuteutico entre antropologiacutea metafiacutesica y teologiacutea Uno de los constitutivos que definen la estructura inmanente del espiacuteritu finito en cuanto espiacuteritu encarnado es el de la temporalidad La esperanza cris-tiana en un futuro absoluto laquoimplica la conviccioacuten de que el hombre vive en el tiempo de manera distinta a como viven las realidades infrahuma-nasraquo131 El hombre no es una cosa limitada a la dimensioacuten temporal del presente Es el sujeto que poseyeacutendose a siacute mismo y disponiendo de siacute en libertad posee su tiempo como totalidad en cuyo presente se condensa lo realmente decisivo de la realizacioacuten de la historia personal como antici-pacioacuten de futuro A esto es a lo que llama Rahner el laquoconsuelo del tiem-poraquo en que laquono perdemos nada sino que ganamos continuamenteraquo132 Esta asuncioacuten intriacutenseca de la temporalidad que es propia del hombre como espiacuteritu encarnado permite su concepcioacuten como espiacuteritu libre o laquoser histoacutericoraquo133 En efecto por su condicioacuten esencialmente encarnada el espiacuteritu del hombre opera en el marco espacio-temporal en el que lo ubica su corporeidad Encarnacioacuten e historicidad se corresponden en el

128 Id Sentido teoloacutegico de la muerte 78129 Id La muerte del cristiano in MyS V 463130 Id Utopiacutea marxista y futuro cristiano del hombre in ET VI 74131 Id Consuelo del tiempo in ET III 154132 Ibid 165133 K RAHNER Oyente de la palabra 176

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hombre Y como venimos mostrando en virtud de su libertad es posible definir al hombre como proyecto es decir no como entidad estaacutetica o fijada de antemano sino como posibilidad de autodevenir hacia un estado de realizacioacuten vital definitivo

Ahora bien para Rahner solo la lectura del mundo y el hombre desde la historia de la salvacioacuten aporta al hombre (al creyente) la certeza de que el suyo es un tiempo absolutamente consolado es decir laquoque no corre hacia el vaciacuteo sino que encuentra el futuro absoluto se mueve incluso en eacutelraquo134 aunque sea en la aparente vulgaridad del cada diacutea135 El cristianis-mo posee un concepto de tiempo que las futurologiacuteas seculares descono-cen En efecto el cristiano cree en un futuro en el que todo aquello que es libremente actuado tendraacute validez eterna en Dios porque el hombre proyecta trascendentalmente su naturaleza a la luz de laquoun futuro absoluto que per definitionem no puede ser ni hecho ni planificado en tanto que le deja venir sobre siacuteraquo136 porque laquolo que el cristianismo llama gracia no es otra cosa que la autocomunicacioacuten de Dios como futuro absoluto en ese estado en que la historia de su llegada y aceptacioacuten dura todaviacutearaquo137 por uacuteltimo porque lo que el cristianismo llama encarnacioacuten del Logos divino en Jesucristo indica de modo preciso que objetivamente en eacutel y para nosotros esa autocomunicacioacuten de Dios en cuanto futuro absoluto del mundo se manifiesta tan histoacutericamente que se hace como dada y como irreversible captable y creiacuteble por la experiencia categorial de la humanidad138

Por ello frente a otros proyectos utoacutepicos el cristianismo contempla al hombre en su dignidad inviolable no sacrificable a ninguna promesa de un futuro fruto de un caacutelculo o planificacioacuten intramundana Es maacutes al trabajo en favor de ese futuro intramundano laquole otorga su uacuteltima radical seriedad en su doctrina de la unidad del amor a Dios y al proacutejimo declara que la positiva relacioacuten para con el hombre es un momento esencial indis-pensable es mediacioacuten irreemplazable para la relacioacuten con Dios futuro absoluto (lsquosalvacioacutenrsquo)raquo139

134 Id Utopiacutea marxista y futuro cristiano del hombre in ET VI 72135 Cfr Id De la necesidad y don de la oracioacuten 57-69136 K RAHNER Utopiacutea marxista y futuro cristiano del hombre in ET VI 73137 Ibid 75138 Ibid139 Ibid 77

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4 el hoMbre es personA

41 Laantropologiacuteafilosoacuteficaimplicadaenlateologiacutea

Ante todo en relacioacuten con los presupuestos para el mensaje revelado del cristianismo hemos de decir sobre el hombre es persona sujeto [hellip] Una relacioacuten personal con Dios una auteacutentica historia dialogiacutestica entre Dios y el hombre la recepcioacuten de la propia salvacioacuten singular y eterna el concepto de una responsabilidad ante Dios y su juiciohellip todas estas afirmaciones del cristianismo ndashindependientemente de que ellas mismas deban interpretarse todaviacutea con mayor precisioacutenndash implican que el hombre es lo que queremos decir aquiacute persona y sujeto140

Es esta una afirmacioacuten que el teoacutelogo hace en su Curso fundamental sobre la fe al plantear una siacutentesis de la globalidad del mensaje cristiano a la luz de una conviccioacuten esencial laquoEste mensaje llama al hombre a situarse ante la verdad real de su esencia ante la verdad en la que eacutel estaacute irreme-diablemente cautivo aunque a la postre este cautiverio sea la anchura in-finita del misterio incomprensible de Diosraquo141 Considerar la antropologiacutea como presupuesto de la escucha e inteleccioacuten de la palabra divina o sea la vigencia mutua entre la estructura esencial del hombre histoacutericamente constituida y el juicio de Dios sobre el hombre expresado en la revelacioacuten (trascendental e histoacuterica) demanda la elaboracioacuten de una antropologiacutea fi-losoacutefica que ha de basar su meacutetodo de trabajo en dos pilares irrenunciables

En primer lugar el conocimiento natural que es requisito del conoci-miento de fe no puede impugnar la auteacutentica metafiacutesica pues ella laquoestaacute dada ineludiblemente con la existencia del hombre [hellip] como reflexioacuten sobre esas implicaciones trascendentales dadas innegablemente que lle-van en siacute su luz y su seguridad y que de modo necesario estaacuten puestas junto con una realizacioacuten libre de la existenciaraquo142 Sin olvidar no obstan-te que dondequiera que el hombre se experimenta a siacute mismo en su tras-cendencia como el que pregunta como el inquietado por esa irradiacioacuten del ser como el expuesto a lo inefable no puede entenderse como sujeto en el sentido de sujeto absoluto sino solamente en el sentido de recepcioacuten del ser y a la postre de la gracia143

140 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 44141 Ibid 43142 K RAHNER Ideologiacutea y cristianismo in ET VI 60143 Id Curso fundamental sobre la fe 53

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Para Karl Rahner ndashcomo veremos maacutes adelantendash al conocimiento de fe contribuye una antropologiacutea de la libertad en la que el hombre como sujeto de esperanza y de promesa laquose concibe a siacute mismo sobre la base de un futuro propio a desarrollar creativamente y no como sujeto que en su misma aprioridad tenga ya conocimiento anticipado de su futuro desde siempreraquo144 Desde este punto de vista afirmar que el hombre es persona significa en primer lugar hablar de eacutel como sujeto indeducible a partir de lo que estaacute a su disposicioacuten laquoel insuprimiblemente anterior y maacutes originarioraquo145 confiado a siacute mismo y capaz de cuestionarlo todo capaz en este sentido de rebasarse mostraacutendose como laquoel ser de hori-zonte infinitoraquo146

En segundo lugar el conocimiento natural que es requisito del co-nocimiento de fe tiene que atender a la historia y la experiencia faacutectica como mediacioacuten insoslayable de las condiciones trascendentales que posibilitan al sujeto su auto-conocimiento (persona) y auto-disposicioacuten (libertad) la interrogacioacuten trascendental no desprecia la experiencia de-limitada en el espacio y el tiempo que el hombre hace de siacute puesto que laquoun disentildeo adecuado del hombre (de lo que es y de lo que debe ser) hecho por una razoacuten aprioriacutestica y racional no es posibleraquo147 Sin su realizacioacuten concreta laquoel concepto de hombre queda lsquovaciacuteorsquo y no tiene plasticidad ni por tanto fuerza histoacutericaraquo148 laquoEl hombre es el espiacuteritu que se expe-rimenta como tal en cuanto no se experimenta como espiacuteritu puroraquo149 sino que en su inevitable ligazoacuten a lo concreto permanece siempre en camino Por esta razoacuten define Rahner la trascendentalidad a que recu-rre en su antropologiacutea como laquoaquella apertura aprioriacutestica del sujeto al ser en general que se da precisamente cuando el hombre cuidando y aprovisionando temiendo y esperando se experimenta como expuesto a la multiplicidad de su mundo cotidianoraquo150 Por consiguiente bajo esta segunda consideracioacuten laquola personalidad del hombre no se puede relegar a una interioridad absoluta Necesita imprescindiblemente un espacio de realizacioacuten que aunque en cierto modo le es lsquoexteriorrsquo (cuerpo tierra

144 Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 100145 Id Curso fundamental sobre la fe 50146 Ibid 51147 Id Dignidad y libertad del hombre in ET II 233148 Ibid 233149 Id Curso fundamental sobre la fe 51150 Ibid 54

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economiacutea signos siacutembolo Estado) es esencialmente indispensable y por eso debe ser configurado de tal modo que permita la autorrealizacioacuten personalraquo151

Solo a partir de este doble horizonte ndashteniendo en cuenta que el hombre uacutenicamente sabe de siacute mismo (meacutetodo trascendental) en sus concretas determinaciones (experiencia histoacuterica) que es don y misioacutenndash puede de-finir la teologiacutea cabalmente al hombre como persona aquel ser en cuya estructura natural ndashconsiderada en el conjunto de sus principios forma-les espiritualidad libertad individualidad corporeidad intersubjetivi-dad mundanidad152ndash se columbra su impronta sobrenatural es decir la gramaacutetica de la autocomunicacioacuten gratuita de Dios al hombre (o existen-cial sobrenatural en cuanto don indebido de gracia) que tambieacuten se reve-la en la entrantildea del espacio y el tiempo y de modo irrepetible y definitivo en Jesucristo La persona se define pues como dialeacutectica entre trascen-dentalidad e historicidad al preguntar a la revelacioacuten cuaacutel es su identidad y destino ante Dios En el ser personal se visibiliza la dialeacutectica que mar-ca la entrantildea del cristianismo laquoen su dedicacioacuten a la historia como real acontecimiento salviacutefico y su naturaleza trascendental en cuanto patencia seguacuten gracia hacia el Dios absolutoraquo153 Veamos con maacutes detalle los pasos que conducen a esta siacutentesis que acabamos de avanzar

42 El hombre unidad de espiacuteritu y materia

Como hemos visto Rahner sigue a santo Tomaacutes en su consideracioacuten de la capacidad humana de ser cabe siacute ndashlaquoreditio completa subiecti in seip-sumraquo154ndash como indicativa de su espiacuteritu en tanto identidad de ser que corresponde al ente humano Y por tanto como indicativa de la distancia entre subjetividad y objetividad Como sujeto espiritual el hombre no estaacute recluido en el horizonte de lo inmediato pues la aprehensioacuten de lo objetivo como ser-cabe-siacute y el libre obrar funcionan en eacutel como dinaacutemica de orientacioacuten ilimitada hacia el ser en general que Rahner denomina anticipacioacuten Y puesto que se habla de una apertura ilimitada en la anti-cipacioacuten se afirma simultaacutenea y atemaacuteticamente laquola existencia de un ente

151 Id Dignidad y libertad del hombre in ET II 235152 Cfr Id Hombre III in SM III 499-502153 Id Ideologiacutea y cristianismo in ET VI 64154 Id Oyente de la palabra 62

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de absoluta lsquoposesioacuten del serrsquo es decir la existencia de Diosraquo155 Dicho esto cabe antildeadir que el hombre es orientacioacuten al absoluto no en abstrac-to sino como espiacuteritu en el mundo como espiacuteritu en la carne Espiacuteritu y materia son laquocomo momentos de un hombre en los que la esencia de este originariamente una se descompone y se despliegaraquo156 La relacioacuten entre espiacuteritu y materia se muestra en el ser humano en su maacutes estrecha unidad A ella llega Rahner desde un doble punto de vista

1 Esclareciendo como ya hemos notado la capacidad cognoscitiva que es propia del espiacuteritu quien si es apertura al ser en general y por tanto a Dios lo es siempre y de modo insoslayable en el encuentro con lo mate-rial que sucede en la sensibilidad157 nuestra experiencia trascendental del mundo es ya explicitud de esa relacioacuten de co-presencia entre materia y es-piacuteritu cuerpo y alma El hombre experimenta su cuerpo como una realidad tan cercana a siacute que puede ser identificado como principio de actuacioacuten del alma en lo diverso o alteridad del alma158 De hecho la afirmacioacuten de que la comunicacioacuten entre materia y espiacuteritu es en el hombre un pro-ceso que sucede en la forma originaria del conocimiento trascendental no pierde su fuerza porque se afirme que lo material no es aprehendido primariamente por medio del espiacuteritu sino por medio de los sentidos del hombre Porque si la sensibilidad estaacute reconocida como realidad material y sin embargo consciente se nos concede entonces en el fondo lo que pretendemos Y ademaacutes el conocimiento sensible no puede ser entendido sino como condicioacuten de la posibilidad del conocimiento espiritual159

De esta percepcioacuten de lo corpoacutereo participa una buena parte de la sen-sibilidad filosoacutefica contemporaacutenea coincidente con la tradicioacuten filosoacutefica y teoloacutegica cristiana claacutesica (que laquoretrotrae la materia en su esencia y en su ser enteros al acto creador de Dios al que llamamos espiacuterituraquo)160 al observar que la materialidad de la existencia humana rebasa el estatus de biologiacutea manteniendo una relacioacuten de especial afinidad con el fondo personal de la vida humana

155 Ibid 86156 Id La cristologiacutea dentro de una concepcioacuten evolutiva del mundo in ET V 173 Cfr

Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 55 K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 304-305

157 Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 69158 Id Para una teologiacutea del siacutembolo in ET IV 289159 Id La unidad de espiacuteritu y materia en la comprensioacuten de la fe cristiana in ET

VI 183160 Ibid 183

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2 Mediante la concepcioacuten de materia y espiacuteritu como parte de una misma historia del mundo cuyo devenir puede interpretarse como movi-miento del espiacuteritu que permite pensar la materia como de y para el espiacute-ritu ndashlaquoespiacuteritu congeladoraquondash161 aun en su esencial diversidad Para evitar farragosas repeticiones no insistimos en estos aspectos pues del primero ya hemos hablado al explicar el mecanismo de la trascendentalidad huma-na y del segundo nos ocuparemos en el capiacutetulo final al poner en diaacutelogo filosofiacutea y teologiacutea de la vida

A la luz de esa dualidad nativa e inexcusable entre espiacuteritu y materia puede iluminarse la magnitud antropoloacutegica de la concepcioacuten tomista del alma como forma del cuerpo Foacutermula en que no cabe dualismo alguno pues en ella se entiende laquocorpus en sentido tomista es decir como mate-ria prima como la vacua potencia real de serraquo162

Si considero el problema desde la perspectiva tomista tengo que afir-mar que lo que yo experimento como la corporeidad del hombre es ya realidad del espiacuteritu diluido en una esfera misteriosa ndashesclarecida solo metafiacutesicamentendash que el filoacutesofo escolaacutestico y tomista llama materia pri-ma El cuerpo es ya espiacuteritu considerado en aquel momento de la autorrea-lizacioacuten en el que la espiritualidad personal se hace presente para poder encontrarse de una forma inmediata y concreta con todo lo que es distinto de siacute misma La corporeidad no es algo sobreantildeadido al espiacuteritu sino que es el ser concreto del espiacuteritu mismo realizado en el espacio y el tiempo La corporeidad humana no es algo que existiriacutea de antemano sino que es la automanifestacioacuten del espiacuteritu dentro del espacio y el tiempo163

Retomando la distincioacuten espiacuteritu-materia continuacutea nuestro autor laquoEl espiacuteritu humano es vere et essentialiter corpus informans para decirlo con las palabras del Concilio de Vienne El alma siendo espiacuteritu se intro-duce de por siacute per se en la materiaraquo164 El cuerpo asiacute entendido no es en el espacio humano una realidad indiferente (Koumlrper) sino que es en cuanto apropiado por el alma (Leib)165 que a su vez sigue siendo irreductible a

161 Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 74162 Id Oyente de la palabra 163163 Id El cuerpo y la salvacioacuten 86164 Id Oyente de la palabra 169 Cfr DH 902165 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 148 La distincioacuten

que hace Rahner entre Leib (cuerpo viviente) y Koumlrper (cuerpo fiacutesico) resulta claacutesica en la moderna antropologiacutea filosoacutefica occidental Cfr el ejemplo paradigmaacutetico de M SCHELER Eacutetica nuevo ensayo de fundamentacioacuten de un personalismo eacutetico Madrid 2001 530-550

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lo material esto es en unidad sustancial Por ello laquoel espiacuteritu humano no es lsquoespiacuteritu purorsquo sino esencialmente lsquoalma-espiacuteritursquo que por su vincula-cioacuten al cuerpo y por consiguiente en virtud de su vinculacioacuten al espacio y al tiempo se hace especiacuteficamente lsquoespiacuteritu humanorsquoraquo166 Aunque laquoempiacute-ricamente se puede encontrar y descubrir al hombre entero no podriacuteamos conocerlo con suficiente acierto y amplitud si no se le entendiera como persona espiritual dotada de individualidad auteacutentica e insustituibleraquo167 Pasos decisivos de la fe demandan este parentesco y mutua trabazoacuten en-tre espiacuteritu y materia la pregunta por el Logos en su entrada en lo finito seguacuten la cristologiacutea168 o la inteligencia del estado de plenitud a que estaacute destinada la materialidad humana seguacuten la escatologiacutea169

43 Persona y naturaleza

En sintoniacutea de sentido con la relacioacuten entre espiacuteritu y materia y con-tribuyendo a la subsiguiente definicioacuten del hombre ndashapenas citadandash co-mo laquopersona espiritualraquo se encuentra la definicioacuten rahneriana de natu-raleza humana

Procedemos a su examen hacieacutendolo en primer lugar bajo el prisma de la distincioacuten entre naturaleza y persona que nuestro teoacutelogo entiende laquoen el sentido de la metafiacutesica moderna seguacuten la filosofiacutea existencialraquo170 Es decir como el iacutendice de finitud que revela la distancia que el hombre ex-perimenta en siacute entre lo que es (don) y lo que desea ser (misioacuten)171 Rahner recuerda que la raiacutez metafiacutesica de la diferencia entre persona y naturaleza

166 K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 218167 Ibid 13168 Cfr K RAHNER La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 56 K RAHNER -

H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 149169 Cfr K RAHNER Sentido teoloacutegico de la muerte 43-52 K RAHNER - H VOR-

GRIMLER Diccionario teoloacutegico 14-15 A propoacutesito del dogma de la resurreccioacuten de la carne afirma en otro lugar nuestro autor laquoEs ist mit diesem Dogma schon gesagt dass der Mensch sein geistiges und auch sein uumlbernatuumlrliches Leben nicht vollziehen kan aus-ser in einer Verleiblichung dieses Vollzuges in der materiellen Wirklichkeit ausser in einer Hinwendung zur Welt in einer Ein-bildung des Geistigen in das Materielleraquo (K RAHNER Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 383)

170 K RAHNER Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 364171 No resulta difiacutecil asociar a esta visioacuten de nuestro teoacutelogo la resonancia de afirmacio-

nes como la de Jaspers laquoLa existencia del hombre no transcurre como los procesos naturales Pues su libertad clama por una direccioacutenraquo (K JASPERS La filosofiacutea desde el punto de vista de la existencia Madrid 91981 56) o Heidegger cuando se refiere al comprender como inter-pretacioacuten es decir en su alcance existencial como poder-ser del Dasein ante el mundo Cfr M HEIDEGGER Ser y tiempo sect 32 Madrid 2003 172-177

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no reside tan solo en la vertical en la distincioacuten entre esencia y existencia sino que es necesario contemplar tambieacuten esa tensioacuten con santo Tomaacutes en su horizontalidad en cuanto ente habitado primitivamente por la dife-rencia real entre la materia y el espiacuteritu dos realidades que poseen un en siacute propio El espiacuteritu es irreductible a la materia en virtud de sus trazos fundamentales (experiencia de autoconciencia y libertad) Pero aunque el acto libre procede del centro personal del hombre y decide sobre todo el sujeto el espiacuteritu no puede manifestarse plenamente en la materia hacien-do de ella reflejo inequiacutevoco de su centro rector172 laquola persona no reasume nunca toda su naturalezaraquo173 pues laquosufre en ese determinarse a siacute misma la oposicioacuten de la naturaleza pre-existente a la libertad y no logra nunca plenamente que todo lo que el hombre es sea realidad y expresioacuten de lo que eacutel entiende por lsquosiacute mismorsquo en el nuacutecleo de su personaraquo174 No obstante para la naturaleza del hombre no cabe otro calificativo que el de personal frente a aquella que es no-personal o infrahumana incapaz de auto-conciencia y auto-disposicioacuten175 Su consistencia o naturaleza se le revela al hombre como impulso de apertura que generado en su intimidad se orienta a la total posesioacuten de siacute en el paso viviente por lo otro

Desde el aacutengulo de la relacioacuten teoloacutegica entre naturaleza y gracia y al hilo del reproche de extrincesismo176 que la teologiacutea contemporaacutenea eleva a la concepcioacuten neo-escolaacutestica de la gracia Rahner elabora una sugestiva distincioacuten para la antropologiacutea teoloacutegica entre esencia concreta y naturaleza En efecto sostener ante la naturaleza humana el caraacutecter in-condicionado e indebido de su ordenacioacuten a la visioacuten divina no niega que esta tiene una importancia determinante para el hombre (pues pertenece a la intentio divina al crearlo) Frente a la oposicioacuten que la teologiacutea neoes-

172 Cfr K RAHNER Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 365173 Ibid 364174 Ibid 370 En esta tensioacuten seguacuten Rahner se alza la comprensioacuten teoloacutegica de la

concupiscencia El hombre que ha recibido de Dios (como gracia) el don de disponer de siacute como insercioacuten completa de su ser en la decisioacuten personal hacia el bien en virtud de la fuerza de gravedad de la naturaleza laquonunca posee de manera total esa interioridad recogida de toda su vida en el acto uacuteltimo de su ser maacutes iacutentimo Y este es el iacutendice de su finitud y pertenencia al mundo de su esencia espiritual-sensibleraquo (Ibid 375)

175 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 474176 K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 300 Id Na-

turaleza y gracia in ET IV 200-203 Conviene recordar que la relacioacuten entre naturaleza y gracia ocupa un lugar destacado en la teologiacutea catoacutelica de la primera mitad del siglo XX Una siacutentesis histoacuterico-criacutetica al respecto K-H MENKE Teologiacutea de la gracia El criterio de ser cristiano Salamanca 2006 199-232

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colaacutestica ha desarrollado entre naturaleza y sobrenatural Rahner propone el concepto de laquoesencia uacutenica y concretaraquo177 o laquonaturaleza efectivaraquo178 del hombre mientras que el teacutermino laquonaturalezaraquo queda reservado al sentido en que la teologiacutea claacutesica habla de naturaleza pura Al calificar la esencia humana con las notas de concrecioacuten y efectividad Rahner reconoce que no solo pertenece a dicha esencia el espiacuteritu en su trascendencia y liber-tad sino muchas maacutes cosas del hombre como esencialmente suyas su mundaneidad su corporeidad su pertenencia a una comunidad de seres semejantes a eacutel [hellip] Y estos laquoexistencialesraquo de su naturaleza concreta ndashde su naturaleza laquohistoacutericaraquondash no son haacutebitos oacutenticos totalmente extramuros de la conciencia sino que se hacen valer en la experiencia del hombre Eacutel no puede separarlos sencilla e inequiacutevocamente mediante una simple re-flexioacuten sobre siacute mismo ndashcon la luz de la razoacuten naturalndash de la espiritualidad natural que es su naturaleza179

Es esta amalgama de muacuteltiples contornos lo que ha de considerarse dotacioacuten de gracia Sin duda es teoloacutegicamente legiacutetimo emplear aquel contra-concepto de naturaleza (pura) entendido como laquorestoraquo180 que que-da tras haberle sido sustraiacuteda a la humanidad su capacidad para la recep-cioacuten de la gracia pues la naturaleza humana (creada) aun abierta a lo sobrenatural no supone su exigencia incondicionada Sin embargo su legitimidad no oculta seguacuten Rahner la dificultad de una delimitacioacuten precisa de una naturaleza asiacute181 El hombre laquotiene de contar con que qui-zaacutes mucho de lo que eacutel experimenta de siacute concretamente y que casi invo-

177 K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 305178 Id Naturaleza y gracia in ET IV 218179 Ibid 218-219180 Cfr K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 315-316 Piacuteo

XII previene en Humani generis frente a los que sostienen que Dios no ha podido crear seres inteligentes sin ordenarlos y llamarlos a la visioacuten beatiacutefica (cfr DH 3891)

181 laquoIl relativo senso-proprio della natura ndashmatiza Balthasar ante la concepcioacuten de Rah-nerndash egrave sufficientemente garantito se essa viene vista come una sfera di senso oggettivamen-te autentica particolare e relativamente autonoma allrsquointerno della creazione generale se viene vista ad esempio come la sfera della lsquoculturarsquo ma anche come la sfera dellrsquoIo-Tu e dellrsquoUomo-Donna una sfera di senso provvisorio non direttamente deducibile dalla grazia ma piuttosto a disposizione della grazia quale suo presupposto senza che per questo si de-bba affermare categoricamente che il contenuto di senso di questa sfera egrave talmente grande e assoluto da bastare anche percheacute Dio venga posto per se stesso nellrsquoesistenzaraquo (HU VON BALTHASAR La teologia di Karl Barth Milano 1985 321) El problema de una natura pura es en realidad un problema del hombre no de Dios por ello propone Balthasar adoptar no el punto de vista de una teologiacutea creatural como hace Rahner sino el de una teologiacutea divina que permite otro aacutengulo de comprensioacuten tanto de la tensioacuten de Adaacuten a Cristo como de aquella otra de la razoacuten creada a la fe de la alianza

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luntariamente estaacute tentado a atribuir a su lsquonaturalezarsquo es ya efectivamente una consecuencia en eacutel de lo que a partir de la teologiacutea tiene que conocer como gracia indebidaraquo182 Rahner prefiere hablar de concrecioacuten y efecti-vidad para sortear la idea de una teoacuterica naturaleza (pura) y presentar al hombre en la diversidad de rostros que posee su identidad efectiva como aquel ser en cuyo centro maacutes iacutentimo se ubica la llamada a la comunioacuten con Dios Asiacute el existencial sobrenatural tiene su lugar en el ser concreto del hombre Y es posible conocer a este como potentia oboedentialis para la vida eterna entendiendo dicha potencia (1) no como mera carencia de contradiccioacuten sino como positiva ordenacioacuten al sobrenatural (2) no parcialmente como suceso noeacutetico sino como espacio concomitante de aquel conocimiento libertad y amor humanos que forman parte de una existencia habilitada para acercarse a aquella plenitud de ser que se ha re-velado como laquoAmor y no como noesis noeseosraquo183 Digamos una palabra sobre ambas perspectivas

Cuanto maacutes se adentra la antropologiacutea metafiacutesica en las dimensiones de la naturaleza especiacuteficamente humana (unidad de alma-cuerpo inter-per-sonalidad conciencia y libertad) tanto maacutes se pone de manifiesto que se trata de una realidad difiacutecilmente identificable como puramente natural en sentido teoloacutegico184 La presentacioacuten metafiacutesica de la persona como ser abierto hacia lo alto en la mediacioacuten de lo concreto no hace sino revelar su caraacutecter creatural es decir de radical donacioacuten y novedad en medio del mundo de modo que ante la posibilidad y realidad de la locucioacuten de su Creador no sabriacutea delimitar en siacute una demarcacioacuten concreta para el reposo del discurso divino Para ser oyente de la Palabra el hombre ha de ser na-turalmente sujeto185 aquel a quien la gracia de la Palabra supone pero tam-

182 K RAHNER Naturaleza y gracia in ET IV 219183 Ibid 223184 Como tambieacuten cabe rechazar una naturaleza pura en sentido filosoacutefico laquoLo que

llamamos filosofiacutea podraacute ser en cierto sentido filosofiacutea lsquopurarsquo ya que no toma ninguacuten conte-nido y ninguna norma materiales de la revelacioacuten seguacuten ministerio socialmente constituida eclesiaacutestica especial y temaacutetica Pero no lo seraacute en el sentido de que la existencia elucidada no temaacuteticamente desde la cual vive y a la que nunca alcanza adecuadamente y que tampo-co puede reemplazar contenga solo elementos que procedan de la esencia natural humana La abisalidad del hombre que de mil maneras es el tema de la filosofiacutea es el abismo que ha abierto la gracia de Dios y que alcanza hasta los abismos divinos precisamente cuando el hombre que filosofa no es capaz de reflexionar exactamente sobre ese hecho de su existencia de distinguir naturaleza y gracia en la realizacioacuten de su existencia espiritualraquo (K RAHNER Filosofiacutea y teologiacutea in ET VI 90)

185 Lo que la razoacuten concentra en el dinamismo ilimitado del espiacuteritu humano y la fe llama designio de Dios en su autocomunicacioacuten al hombre

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bieacuten eleva y ahonda para llevarlo a su plenitud en la participacioacuten de la vida divina Y si esa participacioacuten en la vida divina donde reside la plenitud del ser personal186 representa el uacutenico fin en orden al cual se orienta la esencia uacutenica y concreta de la subjetividad natural y creatural aquella plenitud de vida divino-personal resulta a su vez fundamento y posibilitacioacuten de la vida y ser personal del hombre quien acercaacutendose a Dios en la actualidad de la gracia no disminuye sino que se fortalece y crece como quien ha sido puesto por el Amor en la existencia El hombre no tiene experiencia de siacute mismo maacutes en que en el aacutembito de la amorosa voluntad sobrenatural de Dios si bien no puede decirse que esta sea exigencia de aquella

44 Persona y libertad

Una de las caracteriacutesticas de la esencia natural del hombre en su cua-lidad personal en la que Rahner fija sobre todo su atencioacuten es la libertad En efecto

Libertad es autorrealizacioacuten de la persona en un material finito ante el Dios infinito Es por tanto tambieacuten un dato de la teologiacutea de la antropologiacutea teoloacutegica Sin ella en efecto no se situariacutea el hombre ante Dios como operante y responsable como socio e interlocutor ni podriacutea ser ante Dios sujeto de culpa ni de redencioacuten ofrecida y aceptada187

Desde el punto de vista de la antropologiacutea trascendental el existencial de la libertad encarna a la perfeccioacuten la tensioacuten entre el caraacutecter originario (libertad manantial) y la objetivacioacuten categorial (libertad emanada) que de-termina la autorrealizacioacuten del ser personal en camino hacia su plenitud188 Por ello Rahner muestra en su obra que a la hora de proceder a la carac-terizacioacuten personal del hombre la libertad tiene una importancia decisiva que emerge tanto desde el punto de vista metafiacutesico como teoloacutegico Y asiacute a la luz del hondo significado que posee la tensioacuten naturaleza-espiacuteritu en que se resuelve la existencia humana la libertad no puede ser entendida como mera facultad de elegir entre varias opciones u objetos sino como (1) libertad entitativa189 propia del ser del ente espiritual al conocer y deci-

186 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 553-558187 K RAHNER Dignidad y libertad del hombre in ET II 242188 Id Curso fundamental sobre la fe 57 189 Cfr Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 202 Id Culpa-responsabilidad-castigo

en la visioacuten de la teologiacutea catoacutelica in ET VI 219-220

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dir que una vez maacutes seguacuten la definicioacuten de santo Tomaacutes es capaz de una laquoreditio completa subiecti in seipsumraquo190 y (2) laquoopcioacuten fundamentalraquo191 que modela la vida que media en lo categorial el anuncio de una decisioacuten de caraacutecter total y radical Libertad que no es ajena a las condiciones in-teriores y exteriores en medio de las cuales ha de ejercitarse192 Y aunque sobre esos factores condicionantes no tenga el hombre poder alguno este ndashque se define como empresa (persona) en lo dado (naturaleza)ndash mediante el ejercicio de su libertad se construye desde su maacutes iacutentimo dentro hasta tal punto que puede concluirse que en la accioacuten de su libertad iacutentimamen-te personal laquose trata del hombre mismo y de su posicioacuten respecto a Dios (ambas cosas en unidad indisoluble)raquo193

Por ello y a la luz de la revelacioacuten el teoacutelogo ha de reconocer que laquola verdadera libertad de eleccioacuten [hellip] solo puede verse claramente en el cristianismo porque solo en eacutel es cada uno el ser uacutenico de vigencia eter-na ndashen el amor personal de Dios al hombrendash es aquel que con la maacutes alta responsabilidad personal y por tanto con libertad se debe realizarraquo194 Seguacuten el ordo intentionis de la historia de la salvacioacuten la libertad del hom-bre se despliega en el espacio abierto por la originaria decisioacuten divina de elevar sobrenaturalmente la aptitud trascendental de la criatura (potentia

190 Id Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 363 191 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 203 Id Culpa-responsabilidad-castigo en la

visioacuten de la teologiacutea catoacutelica in ET VI 221192 Cfr Id Teologiacutea del poder in ET IV 455 193 Id Culpa y perdoacuten de la culpa como regioacuten fronteriza entre la teologiacutea y la psico-

terapia in ET II 263-264 Al inscribir la libertad en el seno de la loacutegica autotrascendente de la accioacuten humana que se funda en el dinamismo de autotrascendencia de la espiritualidad del hombre Blondel advierte que la libertad no es ajena al conflicto que se da en la volicioacuten humana entre laquola voluntad que quiere quod procedit ex voluntate y la voluntad querida quod voluntatis objectum fitraquo Aunque la libre decisioacuten se actuacutea en la mutua dependencia de cuerpo y alma a la que parece rigurosamente sujeta la accioacuten humana en realidad la accioacuten querida es principio de una accioacuten que quiere ser cada vez maacutes libre por cuanto laquola accioacuten hace parti-cipar al organismo material de la intencioacuten que la animaraquo y asiacute garantiza su sinceridad como movimiento de progresiva liberacioacuten que tiende a un fin del que se nutre fin del que no se puede excluir la apertura al orden divino del mundo que se presenta como determinacioacuten de la libertad hacia la plenificacioacuten de su dinamismo interior esto es como libertad para la Liber-tad Dios laquoEn la accioacuten voluntaria se opera un secreto maridaje entre la voluntad humana y la voluntad divina Ser llamado a la vida de la razoacuten y de la libertad significa participar en la libre necesidad de Dios que no puede menos de quererse a siacute mismo Nosotros tampoco podemos menos de querernos a nosotros mismos el ser que recibimos como propiedad nuestra es de tal naturaleza que es imposible no aceptarloraquo Rechazaacutendolo el hombre desmentiriacutea y cancelariacutea su aspiracioacuten a los bienes eternos Las citas se han tomado de M BLONDEL La Accioacuten Ensayo de una criacutetica de la vida y de una ciencia de la praacutectica Madrid 2006 167225418

194 K RAHNER La libertad en la Iglesia in ET II 95

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oboedentialis) hacia la visioacuten de Dios como su fin uacuteltimo195 A esta orien-tacioacuten permanente del espiacuteritu finito a la Trascendencia es a lo que llama Rahner como venimos diciendo existencial sobrenatural El dinamismo del espiacuteritu humano se alimenta de lo que en teologiacutea se denomina gracia es decir aquella presencia de Dios en el hombre (y el mundo) que aunque no sea exigible por eacutel196 penetra iacutentimamente en eacutel como determinacioacuten real de su concrecioacuten existencial e histoacuterica es fruto de la obra redentora de Jesucristo y la obra santificadora del Espiacuteritu197

Dicho esto es posible hablar de la libertad humana como toma de postura ante Dios incluso allaacute donde no haya sido reconocida su revela-cioacuten histoacuterica En Dios percibe la libertad personal su uacuteltimo de-doacutende y hacia-doacutende198 y por tanto la imposibilidad de rehuir una respuesta ya sea positiva o negativa a la demanda inscrita por la Trascendencia en el santuario de su intimidad La libertad creada ha sido hondamente herida por el pecado y la muerte mas no abandonada por Dios a su suerte pues en su Hijo ha dado noticia de esa decisioacuten irrevocable definitiva de libertad a la libertad [hellip] Esa libertad que es Cristo y que Cristo otorga se la apropia el hombre al someterse obedientemente a su llamada (Gal 513) en la fe (y en su perceptibilidad que es el bautismo) al acontecimiento que abre la caacutercel del mundo la encarnacioacuten muerte y resurreccioacuten del Hijo199

En su esencia por tanto la libertad cristiana estaacute estructurada esca-toloacutegicamente200 ya realmente iniciada alliacute donde el hombre espera de forma activa junto con toda la creacioacuten su liberacioacuten definitiva como participacioacuten en laquola gloriosa libertad de los hijos de Diosraquo (Rom 821) donde debe desembocar nuestra libertad liberada por obra de Cristo Dado que el uacuteltimo sentido de la revelacioacuten en Jesucristo es la manifestacioacuten de la doxa Theou mediante la llamada que saca a los hombres de este mundo

195 Id Sobre el concepto escolaacutestico de gracia increada in ET I 336 Id Curso fun-damental sobre la fe 102-103

196 Si se quiere respetar su iacutendole gratuita ha de concederse que no seriacutea teoacutericamente ilegiacutetimo pensar al hombre sin la gracia como natura pura Cfr K RAHNER Sobre la rela-cioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 315-316 Id Naturaleza y gracia in ET IV 221-223 Id Sobre el concepto de misterio en la teologiacutea catoacutelica in ET IV 60

197 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 387-389198 K RAHNER Oyente de la palabra 191 Id Dignidad y libertad del hombre in ET

II 242 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 196-200 Id Naturaleza y gracia in ET IV 216 Id Libertad III in SM IV 314 Id Hombre III in SM III 497

199 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 213200 K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 389

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y los introduce en la vida de Dios [hellip] Dios se enfrenta inmediatamente al hombre con una exigencia y una llamada que arranca al hombre de su oacuterbita natural que transcurriacutea dentro del horizonte del mundo201

Es asiacute como queda impresa en la identidad y destino del hombre una marca de trascendencia que solo puede sobrepujar la tentacioacuten de au-to-clausura de lo finito en la abierta y sincera aceptacioacuten existencial del maacuteximo exponente de laquola redondez en que el mundo deseariacutea descan-sarraquo202 la muerte Cuando el hombre afronta pasivamente su muerte como exposicioacuten a la incidencia amenazante y destructiva de un suceso exterior solo cabe ante ella impotencia y extrantildeeza En cambio cuando el pade-cimiento mortal que se cierne irremediablemente sobre el ser y vivir del hombre no se resuelve en la pura de-potenciacioacuten fiacutesica (koumlrper) sino que se integra en la experiencia personal viviente como transformacioacuten de lo que es ndashmetafiacutesica y existencialmente (personalmente)ndash entorno propio (leib) laquoconduce a una problematicidad uacuteltima que no puede ser resuelta por el hombre lsquode tejas abajorsquo Pues persona significa existencia es decir autoafirmacioacuten validez uacuteltima eternidadraquo203

5 resultAdo

A la conclusioacuten de esta invocacioacuten del sentido en que Rahner desentra-ntildea el papel teoloacutegico de la experiencia trascendental podemos subrayar su estrecha vinculacioacuten a dos hechos decisivos de la historia de la salva-cioacuten la creacioacuten y la encarnacioacuten

51 Entre creacioacuten y encarnacioacuten

Partiendo de la concepcioacuten del Dios creador y humanado como Misterio absoluto hacia el que el hombre espiacuteritu finito se encuentra iacutentimamente abierto a partir de su dinamismo trascendental (como sujeto cognoscente y libre) concluye Rahner que la experiencia que hace el hombre de su remisioacuten a Dios no procede de fuera de eacutel sino que tiene su originaria raiacutez en dicho dinamismo trascendental Desde el punto de vista estricta-

201 K RAHNER Pasioacuten y ascesis Sobre la fundamentacioacuten filosoacutefico-teoloacutegica de la asceacutetica cristiana in ET III 89 Cfr E J JUSTO Libertad liberadora Para una nueva formulacioacuten de la cristologiacutea y la soteriologiacutea Salamanca 2013

202 Ibid 90203 Ibid 84

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mente teoloacutegico Rahner situacutea el arranque de la relacioacuten Dios-hombre en el espacio de la creacioacuten como aacutembito iacutentimamente transido por la gracia como campo de interaccioacuten entre inmanencia y trascendencia El misterio de la creacioacuten radica precisamente en el poder de accioacuten especiacutefico de la divinidad laquopara constituir por siacute mismo y mediante el propio acto en cuanto tal algo que siendo radicalmente dependiente ndashpor ser totalmente constituidondash tenga tambieacuten ndashal ser constituido por el Dios uno y uacutenicondash una independencia real una realidad y verdad propia incluso ante el Dios que lo constituyeraquo204 La trascendentalidad del espiacuteritu finito se percibe como comparecencia constitutiva de ese Misterio que seguacuten Rahner se da a conocer como el de-doacutende y hacia-doacutende que marca el origen y meta de esa dinaacutemica ontoloacutegica del espiacuteritu finito El hombre que no olvida que su esencia concreta ndashen su naturaleza especiacutefica de espiritualidad en-carnadandash es apertura ilimitada (y como tal in-definible) no reniega de la posibilidad de llegar a ser hombre en sentido pleno

Pero si esto es asiacute ndashantildeade el teoacutelogondash para entender de modo radical lo que realmente somos es preciso comprender que existimos porque Dios se quiso hombre Esto significa que nosotros somos ndashporque eacutel asiacute nos ha queridondash seres en los que Dios en cuanto hombre se encuentra a siacute mismo al amarnos205

Visto asiacute la encarnacioacuten no es sino la asuncioacuten por parte del Verbo ndashen su relacioacuten eterna con el Padrendash de la naturaleza del hombre en su cuali-dad fundamental de apertura ilimitada al Ser En la apropiacioacuten divina de esa potencia obediencial del ser humano la naturaleza de este alcanza la plena consecucioacuten de su referibilidad divina (participada por Dios como autodonacioacuten trascendental en gracia) y en consecuencia la encarnacioacuten es el caso sumo de la realizacioacuten de la esencia del ser humano en el acon-tecimiento que la dogmaacutetica define como unioacuten hipostaacutetica y es al mismo tiempo portador absoluto de la salvacioacuten en la concrecioacuten de la historia de Jesuacutes muerto y resucitado el Hijo del Padre206

Podemos decir por tanto que el misterio que la fe cristiana confiesa se funda baacutesicamente en el hecho de que la misma realidad absoluta de Dios (naturalmente comprendida como personal amorosa y agraciante) no solo se puede contraponer creativamente a lo que es diverso de siacute sino que

204 K RAHNER Problemas actuales de cristologiacutea in ET I 170205 Ibid 190206 Cfr K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 259

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desea confrontarse y comunicarse con ello Desde el punto de vista de la criatura podemos decir asimismo que el misterio consiste en el hecho de que es realmente en el sentido radical sentildealado capax infiniti 207

Esta visioacuten filosoacutefico-teoloacutegica es la que imprime coherencia y unidad a la concepcioacuten rahneriana del hombre como persona En siacutentesis la con-sideracioacuten racional del hombre como realidad naturalmente habitada ndashen su capacidad trascendente de ser siacute-mismondash por una presencia sobrena-turalmente constitutiva o misterio (innominado pero dicente208) a cuya luz todas sus dimensiones esenciales e histoacuterico-operativas adquieren un significado convergente y se presentan como aquella compleja unidad en camino que identifica lo que llamamos laquopersonaraquo Por eso Rahner matiza el uso del concepto laquonaturalezaraquo humana en antropologiacutea teoloacutegica po-nieacutendolo en relacioacuten directa y no inversa con la accioacuten creadora de Dios pues Dios ha querido originariamente al hombre en una laquorelacioacuten viviente e inmediataraquo consigo209 El hombre para el teoacutelogo alemaacuten es trascen-dencia pero tambieacuten historia Es espiacuteritu encarnado donde ndashseguacuten lo ya apuntadondash se hace plenamente visible la dinaacutemica autotrascendente de la materia como participacioacuten en la densidad de ser del espiacuteritu Por ello seriacutea contradictorio presentar contemporaacuteneamente la persona ndasha la luz de lo que somos y el mundo en que vivimosndash como horizonte de apertura infini-ta y laquonaturalezaraquo si entendemos esta como sustancia clausurada o estrato independiente y no compenetrado con el don libre de Dios que Rahner lla-ma existencial sobrenatural Aunque el don del amor divino sea indebido al hombre para poder asiacute recibirlo y reconocerlo en su absoluta gratuidad el hombre real en su esencia concreta el interlocutor real de Dios en la uacutenica economiacutea de la salvacioacuten no es de hecho nunca una naturaleza pura sino una naturaleza conformada como sentido en cuanto apertura o tras-cendencia ilimitada En resumen podemos decir que Rahner despliega en el fondo de la existencia humana una interpretacioacuten del conocido axioma de la teologiacutea tomista gratia supponit naturam eamque perficit 210 La ex-

207 Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 120208 Cfr Id Oyente de la palabra 230209 Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 43 210 Cfr STh I q1 a8 ad 2 laquoCum enim gratia non tollat naturam sed perficiatraquo STh

I q2 a2 ad 1 laquoSic enim fides praesupponit cognitionem naturalem sicut gratia naturamraquo Cfr J RATZINGER Dogma und Verkuumlndigung Muumlnchen-Freiburg 1973 161-181 sobre la aplicacioacuten de este axioma al caso de Cristo J ALFARO Cristologiacutea y antropologiacutea Madrid 1973 363-364 (n 32)

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periencia de la Trascendencia implicada en toda realizacioacuten de la libertad humana que es el fundamento o condicioacuten de posibilidad de toda inicia-tiva del espiacuteritu del hombre constituye el horizonte de sentido de nuestra existencia histoacuterica o si se prefiere de nuestra vida maacutes cotidiana211

52 Entre trascendentalidad e historia

Asiacute queda formulado el marco sinteacutetico dentro del cual Rahner con-templa al hombre como persona

Ser persona significa asiacute autoposesioacuten de un sujeto como tal en una refe-rencia sabedora y libre al todo Esta referencia es la condicioacuten de posibili-dad y el horizonte previo para que el hombre en su experiencia particular empiacuterica y en sus ciencias particulares pueda comportarse consigo como unidad y totalidad [hellip] Por tanto decir que laquoel hombre es persona y suje-toraquo significa en primer lugar el hombre es el indeducible el que no puede producirse adecuadamente desde otros elementos disponibles eacutel es el que estaacute ya siempre confiado a siacute mismo212

Rahner es plenamente consciente de que laquoel hombre como ser perso-nal que trasciende y estaacute dotado de libertad es tambieacuten a una con ello un ser mundano temporal histoacutericoraquo213 laquoEstoy convencido ndashleemos en otro

211 Queda asiacute enunciada una de las grandes aportaciones de la teologiacutea contemporaacute-nea la integracioacuten entre antropologiacutea cristologiacutea y soteriologiacutea La teologiacutea reformada lo ha hecho en clave dialeacutectica como muestra la postura de uno de sus maacuteximos exponentes el teoacutelogo suizo Karl Barth La reafirmacioacuten en el cristocentrismo de Lutero lleva a Barth a considerar que en rigor Dios solo nos es cognoscible y accesible en Cristo de modo que de su Encarnacioacuten no se sigue que nuestra humanidad asediada por el pecado en su esencia e historicidad sea posibilidad previa de la accioacuten y revelacioacuten de Dios Entre otros exponentes catoacutelicos Karl Rahner ha mostrado que cabe sin embargo una lectura no dialeacutectica de la relacioacuten entre Dios y el hombre al contemplar la existencia y la historia humanas como rea-lidades originariamente correlacionadas con Dios en libertad Reconocer este hecho ni anula la novedad salviacutefica del acontecimiento de Cristo ni aminora los efectos del pecado que oscu-rece en el hombre la memoria de la Alianza irrevocable sellada por Dios con eacutel Proponemos dos textos que dan cuenta del contraste entre ambas lecturas Comentando el texto paulino de Rm 819-20 sentildeala Barth laquoSi supieacuteramos de Dios otra cosa que el gemir de lo creado y nuestro propio gemir si supieacuteramos de Jesucristo otra cosa que su condicioacuten de crucificado si supieacuteramos del Espiacuteritu Santo otra cosa que su condicioacuten de espiacuteritu de aquel que resucita a Jesuacutes de los muertos si se rompiera el incoacutegnito en que la salvacioacuten vino viene y vendraacute a nosotros eso no seriacutea la salvacioacutenraquo (K BARTH Carta a los romanos Madrid 1998 381) Por su parte Rahner afirma laquoCristo es hombre del modo maacutes radical y su humanidad es la maacutes autoacutenoma y libre no aunque sino porque es la asumida constituida en tanto automani-festacioacuten de Diosraquo (K RAHNER Para la teologiacutea de la encarnacioacuten in ET IV 145)

212 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 49-50213 Ibid 60

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lugarndash de que la transcendentalidad no es una ocupacioacuten del hombre al margen de la historia sino que se vive y realiza en libertad en la historia concreta y en una libertad determinadaraquo214 Auacuten en otro escrito habla de la corporeidad humana mediante la que el hombre se comunica con el mundo como laquoalteridad del espiacuterituraquo No ajena por tanto a ese laquoestar-se-dado-a-siacute-mismo en el espiacuterituraquo que laquosucede en la historia interna y externa de cada hombre y de la humanidad en la obra del pensamiento y en la obra externa existente cabe siacute individual y colectivamenteraquo215 Expresado de otro modo no es posible un volver sobre siacute mismo por la reflexioacuten si no es un salir hacia la realidad corpoacuterea dentro de la cual el espiacuteritu vuelve sobre siacute mismo en cuanto que se exterioriza y se forma a siacute mismo Y aquiacute es donde se da la posibilidad de una verdadera libertad personal Esta corporeidad concebida como presencia en el espacio y el tiempo del espiacuteritu mismo es ciertamente un continuo encontrarse a siacute mismo en un auteacutentico otro216

Aunque no pretendamos profundizar el alcance de la criacutetica sobre el posible caraacutecter abstracto de la antropologiacutea teoloacutegica de Rahner siacute podemos hacer dos observaciones al respecto En primer lugar cabe aceptar la postura de Rahner como una legiacutetima opcioacuten metoacutedica que pone en acto ndasha la luz del paradigma antropoceacutentrico de la filosofiacutea tras los sistemas de Kant y Heideggerndash el hecho de que la laquoteologiacutea implica una antropologiacutea filosoacuteficaraquo en concreto aquella que permite atisbar que el entrelazarse de la fe y la razoacuten la llamada de Dios y la escucha del

214 K RAHNER Gnade als Mitte menschlichen Existenz Ein Gespraumlch mit und uumlber Karl Rahner aus Anlass seines 70 Geburtstages 14

215 Tomamos las citas de K RAHNER La cristologiacutea dentro de una concepcioacuten evo-lutiva del mundo in ET V 181-182 Tambieacuten Id La unidad de espiacuteritu y materia en la comprensioacuten de la fe cristiana in ET VI 184

216 Id El cuerpo y la salvacioacuten 87 Tras sentildealar las precisiones que Tomaacutes de Aquino y Ricardo de San Viacutector suman a la definicioacuten formal-ontoloacutegica que reciben de Boecio la enciclopedia teoloacutegica que edita el propio Rahner y su grupo de colaboradores se apoya en los caracteres que proponen Tomaacutes y Ricardo para formular una definicioacuten actual de persona cuyas notas forman parte del patrimonio de la antropologiacutea trascendental que Rahner pro-pone como base renovadora de la teologiacutea dogmaacutetica contemporaacutenea laquoPersona no significa aquiacute la lsquoesenciarsquo la lsquonaturalezarsquo sino el acto siempre singular total e indiviso inmediato e insustituible la realidad la existencia de una naturaleza espiritual Esta realidad es el he-cho de poseerse a siacute mismo y por tanto de tener en siacute su propio fin es la forma de realidad que presenta la libertad de un ser espiritual en la que se funda su intangible dignidad Es evidente que este concepto preferentemente formal de persona adquiere su contenido por la lsquonaturalezarsquo del ser espiritual en cuestioacuten y por el grado de realidad que adquiere su libertad en lo referente a la posibilidad de tomar posesioacuten de la propia naturalezaraquo (M MUumlLLER - A HALDER Persona in SM V 445)

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hombre tiene su asiento no solo en la pregunta moral sino en la existen-cial-ontoloacutegica217 Al concebir el ser como palabra (Dios) y oyente (hom-bre) Rahner aboga por el paso desde una metafiacutesica que presenta el ser a la luz de la laquocosaraquo218 hasta una metafiacutesica que contempla la continuidad entre ser y conciencia En palabras de Metz al explicar queacute significa en Rahner laquoteologiacutea trascendentalraquo

Ha rescatado laquoel sujetoraquo del peacutetreo objetivismo escolaacutestico en que la teo-logiacutea de escuela estaba por doquier encerrada El laquosujetoraquo no es una pura determinacioacuten refleja que puede a su vez ser objetivada arbitrariamente Designa al hombre en su historia experimentada que no puede identificarse ni comunicarse a siacute misma sin elementos narrativos En este sentido Ra-hner ha elevado la biografiacutea religiosa a tema objetivo de la dogmaacutetica219

Con otras palabras aboga por una meta-antropologiacutea220 que ndashme-diando entre realismo e idealismondash permita concebir teoloacutegicamente la relacioacuten entre antropo-centrismo y teo-centrismo (revelacioacuten)221 En se-gundo lugar no parece justo desde el punto de vista cientiacutefico pedirle al teoacutelogo el pleno esclarecimiento de todas y cada una de las posibles pers-pectivas en las problemaacuteticas que afronta en este caso todos los vectores implicados en su visioacuten del hombre El propio Rahner reconoce ante la criacutetica de que la trascendentalidad ha oscurecido en su pensamiento sobre el hombre la historicidad y la inter-personalidad222 que cuando se trata

217 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 42-43218 Cfr K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 319219 J B METZ La fe en la historia y la sociedad Esbozo de una teologiacutea poliacutetica fun-

damental para nuestro tiempo 232220 Cfr A CORDOVILLA Gramaacutetica de la encarnacioacuten 431-432221 Cfr K RAHNER Theologie und Anthropologie 43222 A partir de la perspectiva de la antropologiacutea trascendental de Karl Rahner A Dar-

lap ha puesto de manifiesto con mayor claridad la implicacioacuten reciacuteproca entre experiencia trascendental a priori y experiencia espacio-temporal a posteriori Darlap muestra que el laquoauteacutentico acontecimiento de la salvacioacutenraquo es tal cuando reclama toda la vida del hombre daacutendole una orientacioacuten definitiva Aunque el acontecer salviacutefico coincide con una comuni-cacioacuten gratuita (eficaz) a priori que Dios hace de siacute en el seno de la experiencia trascendental del hombre en Jesucristo la historia de Dios acontece en un diaacutelogo auteacutentico con el hombre cuya decisioacuten libre asumida en la dinaacutemica de la unioacuten hipostaacutetica no es una mera reaccioacuten externa a una historia divina sino que ha entrado a formar parte de las determinaciones de la historia de la salvacioacuten en cuanto historia de Dios En Jesucristo la historia de la salvacioacuten reclama toda la vida del hombre ndashsu espacio su tiempo sus relacionesndash y representa para eacutel la posibilidad de un encuentro con Dios como tuacute concreto que es tambieacuten respuesta novedosa y espontaacutenea irreducible a la experiencia trascendental Una teologiacutea de la gracia seguacuten la historia de la salvacioacuten no deberiacutea dejar de considerar lo que el tuacute humano en toda la am-

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de la persona del hombre o de Dios es necesario que lo trascendental sea laquoprecisado en siacute mismo de manera exacta e iacutentegra mediante la confron-tacioacuten con una antropologiacutea o una teologiacutea que sea sobre todo plena y concretaraquo223 En fin el teoacutelogo debe ser consciente de que la teologiacutea ha de construirse con empentildeo interdisciplinar tarea que hoy resulta extre-madamente exigente224

La teologiacutea ndashpor cuanto el hombre forma parte de su objeto como des-tinatario de la revelacioacutenndash comparte con la antropologiacutea filosoacutefica con-temporaacutenea el gran reto de asumir en su proposicioacuten una imagen lo maacutes ar ticu lada posible del ser humano (impulso trascendente y mediacioacuten histoacuterica)

Ahora bien se trata de una tarea que la teologiacutea afronta a la luz de la revelacioacuten co mo acontecimiento de identidad y diferencia entre lo que Dios es en siacute (Trinidad inmanente) y lo que Dios es para nosotros (Tri-nidad econoacutemica) La irrupcioacuten libre y gratuita de Dios en la historia no tiene su asiento original en la trascendentalidad humana sino maacutes bien en la insondable dinaacutemica interna de su infinito ser cabe-siacute personal ndashfunda-mento y sentido de todo lo creadondash que es pluralidad y unidad donacioacuten de siacute y comunioacuten laquoEl Dios uno se comunica como expresioacuten absoluta de siacute mismo y como don absoluto del amorraquo225 Es Dios quien revela en su autocomunicacioacuten histoacuterico-salviacutefica el modo en que da cumplimiento a su designio de laquoallegar al hombre su futuro definitivoraquo226 que no es otro que la salvacioacuten o felicidad plena de aquel a quien ha creado (y por ende

plitud fenomeacutenica de su experiencia a posteriori aporta a la experiencia trascendental laquoLa experiencia trascendental ndashescribe Darlapndash exige que el hombre permanezca en ella pero es de tal condicioacuten que el hombre no puede desligar simplemente lo restante de su vida de esa relacioacuten con Dios De aquiacute se sigue necesariamente que la relacioacuten trascendental sobrenatural con Dios ndashsolo determinada al parecer por la graciandash pide por siacute misma una transformacioacuten y actualizacioacuten categorial porque solo por este medio puede ejercer una fuerza modeladora sobre todo el resto de la vida humana Esta relacioacuten tiene que darse en la zona en que acontece la vida humana si no se quiere despreciar esa vida como algo sin importancia en el orden de la salvacioacuten Pero si la experiencia trascendental debe actuar asiacute en la vida concreta porque solo asiacute llega a su plena y propia esencia y solo asiacute puede introducir al hombre entero en la salvacioacuten entonces ella misma estaacute interesada en ser traducida rectamente a categorialidadraquo (A DARLAP Teologiacutea fundamental de la historia de la salvacioacuten in MyS I 159)

223 K RAHNER Gnade als Mitte menschlichen Existenz Ein Gespraumlch mit und uumlber Karl Rahner aus Anlass seines 70 Geburtstages 14

224 Cfr Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 82-87225 Id El Dios Trino como principio y fundamento trascedente de la historia de la sal-

vacioacuten in MyS II 286226 Id Iglesia y parusiacutea de Cristo in ET VI 314

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del conjunto de todo lo creado) mediante la comunioacuten con Eacutel en Jesucris-to laquoEn el Cristo que es hombre en libertad y obediencia porque Dios puede aparecer en lo finito como el que es y quiere ser en libertad frente a nosotrosraquo227 Sin dejar de ser Eacutel entra libremente en nuestra historia para hacernos partiacutecipes en nuestra propia intimidad vital laquotrayeacutendola toda en amorraquo228 de su vida y su gloria El propio espiacuteritu de la revelacioacuten comenta Congar pone ante nosotros el hecho de que laquono hay teologiacutea para el hombre sin antropologiacutea para Diosraquo229 El propoacutesito confeso de la reflexioacuten rahneriana es trazar el mapa de la antropologiacutea para Dios contenido en la auto-comunicacioacuten que Dios ha hecho de siacute al hombre hablar de los misterios de Dios de modo que una aprehensioacuten profunda de lo que son en siacute permita una explicacioacuten viva (actual) de lo que son para nosotros

227 Ibid 317 Comenta G Colzani que laquonella misura in cui lrsquoutilizzo della analitica trascendentale rimane saldamente ancorato alla realtagrave storica di Gesugrave la teologia di Rahner risulta stimolante da una parte lrsquouomo appare segnato da una capacitagrave di oltrepassamento di seacute da una apertura allrsquoAssoluto nella quale soltanto nonostante la sua finitezza coglie il suo compimento e dallrsquoaltra coglie nella grazia questo compimento e la rilegge in termini perso-nali vedendola piugrave che come dottrina come lrsquoesperienza umana fatta oggetto della autoco-municazione di Dio Trino dellrsquoatto fondamentale di Dio verso il non-divinoraquo (G COLZANI Recenti manuali di Antropologia teologica di lingua italiana e tedesca 406)

228 Reconstruyendo el discernimiento ignaciano sobre la experiencia trascendente de Dios en el alma humana y el significado que reviste para la reflexioacuten teoloacutegica Rahner mues-tra que el presentarse de Dios en el sujeto constituye una evidencia originaria que ilumina la conciencia y se erige como fundamento sobre el que reposa cualquier certeza y verificacioacuten a posteriori de la fe y la razoacuten Considerando la afirmacioacuten ignaciana de los Ejercicios sobre la relacioacuten entre Dios y el alma (laquoporque es proprio del Criador entrar salir hazer mocioacuten en ella trayeacutendola toda en amor de la su divina majestadraquo n 330) encuentra Rahner un refe-rente fundamental que inspira el esfuerzo teoacuterico de su teologiacutea trascendental como riguroso intento de pensar el don de la originaria percepcioacuten espiritual de todo hombre La consolacioacuten sin causa precedente ndashde la que habla Ignaciondash nada tiene que ver con una experiencia apofaacute-tica de la misteriosa presencia de Dios en el hombre sino con laquodie gemeinte Objektlosigkeit ist die reine Offenheit fuumlr Gott die namenlose gegenstandslose Erfarung der Liebe von dem uumlber alles Einzelne Augebbare und Unterscheidbare erhabenen Gott von Gott als Gott Es is nicht mehr lsquoirgendein Objektrsquo gegeben sondern das Gezogensein der ganzen Person mit dem Grund ihres Daseins in die Liebe uumlber jedes bestimmte abgrenzbare Objekt hinaus in die Unendlichkeit Gottes als Gottes selbst als der divina majestad trayeacutendola toda en amor de la su divina majestad [hellip] Das lsquoVorausgehenrsquo ist nur in dem Sinn gemeint in der die schlichte Erfassung eines Objektes der existentiellen Stellungnahme der ganzen Person (toda) zu ihm lsquovorausgehtrsquo wie schon gezeigt wurde Das sin causa sagt also Gott als er selber allein inso-fern er nicht in einem bestimmten Gedanken gegenstaumlnlicher Art rein begrifflich gegeben ist insofern er nicht gewissermassen lsquovertretenrsquo oder verbunden ist mit einer andern wenn auch religioumls gewichtigen Wirklichkeitraquo (K RAHNER Die Logik der existentiellen Erkenntnis bei Ignatius von Loyola 118)

229 Y CONGAR Cristo en la economiacutea salviacutefica y en nuestros tratados dogmaacuteticos in Concilium 11 (1966) 24

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Al referir la experiencia subjetiva que funda el espacio en que recibe el hombre la consolacioacuten divina seguacuten san Ignacio repite Rahner la idea que preside su obra la mediacioacuten del conocimiento de Dios en la experiencia personal-subjetiva cuyo contenido sin embargo no puede afirmarse al margen de la singularidad irrepetible del sujeto histoacuterico

El sujeto de la experiencia vital no tiene en modo alguno el caraacutecter de un mero laquosujeto trascendentalraquo en una abstraccioacuten metafiacutesica se trata esencialmente (puesto que estaacuten mutuamente comprometidos libertad y amor) de un yo concreto en su maacutes iacutentimo fundamento en cuanto suje-to irrepetible responsable y libre El punto de partida subjetivo es por consiguiente inequiacutevoco se trata de la capacidad de trascendencia de un sujeto concreto en cuya accioacuten y compromiso subjetivo se halla el hom-bre concreto en su libertad singularidad e historia Solo que este hom bre concreto estaacute abierto a la infinitud del mismo Dios hace experiencia de su propia pura anticipacioacuten hasta la ilimitacioacuten espiritual-sobrenatural de su fin230

Una antropologiacutea metafiacutesica ndashes decir aquella que contempla la impli-cacioacuten del hombre (naturaleza concreta y efectiva) en la dinaacutemica de su reflexividad esencial (persona)ndash ayuda a la antropologiacutea teoloacutegica seguacuten hemos comprobado a profundizar el hondo calado histoacuterico-salviacutefico de sus principales tesis (creacioacuten gracia y redencioacuten) sin perjuicio de su ver-dad uacuteltima231 La intencionalidad teoloacutegica de este programa rebasa por tanto el hecho de que la presentacioacuten del hombre como unidad-dualidad de naturaleza y persona resulta maacutes verosiacutemil ante la actual ciencia bio-loacutegica que el dualismo escolaacutestico y sobre todo que el cartesiano Es la revelacioacuten la que contiene la imagen de un interlocutor humano conside-rado en su integridad Por ello a esta teologiacutea (para el hombre) solo puede corresponder una antropologiacutea (para Dios) que conjure laquoel gran peligro que existe en pensar sobre el hombre con un esquema de representacioacuten que es adecuado a las lsquocosasrsquo pero no al hombre mismo pues aquellas nunca quedan afectadas verdadera y definitivamente en su lsquoesenciarsquo y por su propio lsquoobrarrsquoraquo232 Rahner ha conjurado este riesgo defendiendo la integracioacuten en el acto de conocimiento y libertad especiacuteficos del hombre

230 K RAHNER Die Logik der existentiellen Erkenntnis bei Ignatius von Loyola 128-129

231 Cfr K RAHNER - K LEHMANN Kerigma y dogma in MyS I2 771-775232 K RAHNER Hombre in SM III 496

el hoMbre es suJeto y persona

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de todo el espectro de su espontaneidad natural o vital que a pesar de lo que pueda parecer tiene su raiacutez y contribuye a la sinceridad antropoloacutegi-ca de ese acontecer de la persona que es el ser-cabe-siacute La antropologiacutea metafiacutesica invocada por Rahner muestra la posibilidad de integrar el acto natural espontaacuteneo en el nuacutecleo de la experiencia personal hasta el punto de que laquofinalmente este acto deja de ser resistencia saldo insoluble de la naturaleza contra la persona para convertirse en el elemento interno que hace posible la profundidad y la energiacutea de dominio total que la decisioacuten personal poseeraquo233 En su Ensayo de esquema para una dogmaacutetica ndashela-borado originalmente en colaboracioacuten con Balthasarndash Rahner despliega el que seriacutea un organigrama ideal en orden a una comprensioacuten teoloacutegica de la naturaleza personal del hombre En un estudio tal no cabriacutea solo la consideracioacuten de la persona desde el punto de vista de su interioridad sino tambieacuten en su exterioridad corporeidad dualidad sexual temporalidad finita etc Hasta cabriacutea considerar una teologiacutea de las situaciones y acon-tecimientos humanos de las edades de la vida del trabajo y la cultura incluso del ver oiacuter el hablar el callar el reiacuter el llorar234

Es a la luz de estas indicaciones de principio como ha de leerse en Rahner el papel de aquellas apelaciones mayores de la antropologiacutea a la teologiacutea el amor la muerte y el futuro A pesar de que estas experiencias de iacutendole categorial tengan en su obra menor relieve que la trascenden-talidad del acto del conocimiento y la voluntad no por ello restringe nuestro teoacutelogo ndashfiel a su planteamiento antropoloacutegico-metafiacutesicondash su capacidad en cuanto mediacioacuten a posteriori para poner al hombre frente a siacute y frente al mundo en su originaria constitucioacuten como mundo-consigo y espacio de trascendencia laquoEl lsquoinstantersquo histoacuterico en el que vivimos hoyraquo reconoce Rahner al hablar del amor ha renovado mediante algu-nas palabras originales la invocacioacuten de la experiencia de Dios laquodesde la totalidad de la experiencia de la realidad y del sujetoraquo235 Unas liacuteneas antes de esta afirmacioacuten sentildeala que ante Dios no puede comparecer sino el hombre entero

Al considerar al hombre un ser abierto a la totalidad esa entereza suya ante Dios que reclama Karl Rahner se muestra receptiva a una ex-plicacioacuten maacutes detallada acerca de por queacute el acto de amar especialmente

233 Id Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 369234 Id Ensayo de esquema para una dogmaacutetica in ET I 39235 Id Sobre la unidad del amor a Dios y el amor al proacutejimo in ET VI 266

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cuando se despliega en la auteacutentica e incondicional aceptacioacuten de siacute hasta el final se convierte en verdadero espacio de revelacioacuten que ha de ocupar su legiacutetimo lugar a la hora de explicar ndashhoy236ndash la concurrencia de pasado (creacioacuten) presente (gracia) y futuro (gloria) en la relacioacuten que mantiene Dios con el hombre

obras De Karl rahner eMpleaDas

Curso fundamental sobre la fe Introduccioacuten al concepto de cristianismo Barce-lona 41989 (Grundkurs des Glaubens Freiburg 1977)

De la necesidad y don de la oracioacuten Bilbao 32004 (Von der Not und dem Segen des Gebetes Innsbruck 1949)

Die Logik der existentiellen Erkenntnis bei Ignatius von Loyola in Id Das dynamische in der Kirche Freiburg 1958 74-148

Die theologische Dimension der Frage nach dem Menschen in Id Schriften zur Theologie XII Einsiedeln-Benziger 1975 387-406

Der eine Jesus Christus und die Universalitaumlt des Heils in Id Schriften zur Theologie XII Zuumlrich 1975 251-282

El cuerpo y la salvacioacuten in M HORKHEIMER et alii (eds) El cuerpo y la salvacioacuten Salamanca 1975 71-91 (Der Leib in der Heilsordnung in M HORKHEIMER et alii (eds) Der Leib und das Heil Mainz 1967 29-44)

236 En este laquohoyraquo queda apenas insinuado por nuestra parte el caraacutecter pastoral de una teologiacutea construida en plena conciencia de la situacioacuten de dificultad para el reconocimiento y aceptacioacuten de Dios que atraviesa la humanidad contemporaacutenea Cabe recordar que Rahner inicia su tarea docente en la facultad de teologiacutea de Innsbruck donde se estaba elaborando un programa de teologiacutea de la predicacioacuten o teologiacutea kerigmaacutetica que perseguiacutea liberar al cristia-nismo de inercias y reproponer el caraacutecter salviacutefico de la verdad de fe el kerigma primitivo en definitiva Cfr R GIBELLINI La teologiacutea del siglo XX 227-233 Ante el fenoacutemeno de la increencia y su rechazo frontal de las demostraciones teoacutericas de Dios estas laquosolo pueden tener eficacia en unioacuten con una llamada mistagoacutegica hacia aquella experiencia religiosa de la trascendencia que se da inevitablemente en la vivencia concreta de lo eacutetico en general de la responsabilidad por una configuracioacuten activa por el futuro y sobre todo de un amor real y auteacutenticamente personal al proacutejimoraquo (R RAHNER Ateiacutesmo in SM I 467) La palabra clave aquiacute para este modelo de teologiacutea en cuanto reflexioacuten del creyente es laquomistagogiacutearaquo Entendida en su sentido tradicional como iniciacioacuten a los misterios de la fe donde el predo-minante no es el discurso loacutegico sino el evocativo esto es el que desvela la vida de gracia en la vida del hombre el misterio de Dios en el misterio humano Un discurso que ha de prestar atencioacuten a todos aquellos praeambula fidei que ayudan al hombre a confesar en la escucha de sus palabras temporales (capacidad poeacutetica y simboacutelica) y la vivencia de sus experiencias existenciales (amor muerte alegriacutea etc) la Palabra No es Dios quien existe para nosotros sino que somos nosotros quienes existimos por y para Dios Cfr K RAHNER La palabra poeacutetica y el cristiano in ET IV 411-422 Id La miacutestica ignaciana de la alegriacutea del mundo in ET III 289-305 Id Sacerdote y poeta in ET III 307-328

el hoMbre es suJeto y persona

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El Dios Trino como principio y fundamento trascendente de la historia de la salvacioacuten en J FEINER - M LOumlHRER (eds) Mysterim Salutis II Madrid 19713 269-338 (Der dreifaltige Gott als transzendenter Urgrund der Heils-geschichte in Mysterium Salutis II Einsiedeln 1967 317-401)

El futuro de la teologiacutea in H VORGRIMMLER - R VANDERGUCHT (eds) La teologiacutea en el siglo XX Disciplinas teoloacutegicas dogma moral pastoral III Madrid 1974 458-475 (Uumlber die zukuumlnftigen Wege der Theologie in H VORGRIMMLER - R VANDERGUCHT [eds] Bilanz der Theologie im 20 Jahrhundert III Freiburg 1970 530-551)

Escritos de Teologiacutea I-VI Madrid 22000-2007Espiacuteritu en el mundo Metafiacutesica del conocimiento finito seguacuten Santo Tomaacutes

de Aquino Barcelona 1963 (Geist in Welt Zur Metaphisik der endlichen Erkenntnis bei Thomas von Aquin Muumlnchen 1957)

Fundamentacioacuten de la fe cristiana in Razoacuten y fe 199 (1979) 28-37Fundamentos de la protologiacutea y de la antropologiacutea teoloacutegica in J FEINER - M

LOumlHRER (eds) Mysterim Salutis II Madrid 1971 341-353 (Allgemeine Grundlegung der Protologie und theologischen Anthropologie in Myste-rium Salutis II Einsiedeln 1967 406-420)

Gnade als Mitte menschlichen Existenz Ein Gespraumlch mit und uumlber Karl Rah-ner aus Anlass seines 70 Geburtstages in Id Saumlmtliche Werke Band 25 Erneuerung des Ordenslebens Zeugnis fuumlr Kirche und Welt Freiburg-Ba-sel-Wien 2008 3-32

Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit in Id Saumlmtliche Werke Band 19 Selbstvollzug der Kirche Ekklesiologische Grund-legung praktischer Theologie Freiburg 1995 374-394

La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica in K RAHNER - P OVERHAGE El problema de la hominizacioacuten Sobre el origen bioloacutegico del hombre Barce-lona 1973 19-84 (Die Hominisation als theologische Frage in K RAH NER - P OVERHAGE Das Problem der Hominisation Freiburg 1965 13-90)

La muerte del cristiano in J FEINER - M LOumlHRER (eds) Mysterim Salutis V Madrid 1971 439-466 (Das christliche Sterben in Mysterium Salutis V Ein-siedeln 1967 463-492)

Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica in K RAHNER - W THUumlSING Cristologiacutea Estudio teoloacutegico y exegeacutetico Madrid 1975 21-80 (Grundlinien einer systematischen Christologie in K RAHNER - W THUuml-SING Christologie systematisch und exegetisch Freiburg 1972 15-78)

Oyente de la palabra Fundamentos para una filosofiacutea de la religioacuten Barcelona 1967 (Houmlrer des Wortes Muumlnchen 1963)

Philosophie und Philosophieren in der Theologie in Id Schriften zur Theolo-gie VIII Einsiedeln 1967 66-87

Juan Manuel CabieDas teJero

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Selbsterfahrung und Gotteserfahrung in Id Schriften zur Theologie X Zuumlrich 1972 133-144

Sentido teoloacutegico de la muerte Barcelona 1965 (Zur Theologie des Todes Frei-burg 1958)

Sobre la inefabilidad de Dios Experiencias de un teoacutelogo catoacutelico Barcelona 2005 (Von der Unbegreiflichkeit Gottes Freiburg 2004)

Theologie und Anthropologie in Id Schriften zur Theologie VIII Einsiedeln- Benziger 1967 43-65

Theologische Erwaumlgungen uumlber den Eintritt des Todes in Id Schriften zur Theologie IX Einsiedeln 1970 323-335

Uumlber die Heilsgeschichtliche bedeutung des einzelnen in der Kirche in Id Saumlmtliche Werke Band 10 Kirche in den Herausforderungen der Zeit Stu-dien zur Ekklesiologie und zur kirchlichen Existenz Freiburg-Basel-Wien 2003 421-446

Uumlberlegungen zur Methode der Theologie in Id Schriften zur Theologie IX Ein siedeln 1970 79-126

RAHNER K - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico Barcelona 1966 (Klei-nes theologisches Woumlrterbuch Freiburg-Basel-Wien 1965)

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Mater Clementissima 1 (2016) 121-142

La definicioacuten de Calcedonia a traveacutes de sus inteacuterpretes contemporaacuteneos

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez1

Facultat de Teologia de CatalunyaAteneu Universitari Sant Paciagrave

resuMen Investigar la cristologiacutea de la definicioacuten de Calcedonia atendiendo a la oacutep-tica de sus estudiosos actuales (A de Halleux A Grillmeier R Price) permite un acercamiento nuevo a esta cuestioacuten contribuye a dar una respuesta a las criacuteticas contemporaacuteneas a Calcedonia y ofrece una ayuda para el trabajo de los teoacutelogos maacutes allaacute de los toacutepicos y de una lectura restringida de las fuentes

palabras ClaVe Cristologiacutea Calcedonia Halleux Grillmeier Price

abstraCt laquoThe Chalcedon definition on the point of view of recent scholarsraquo Resear-ching Christology of Chalcedon definition focusing on the point of view of recent scholars (A de Halleux A Grillmeier R Price) allows a new approach to this issue contributes to an answer to contemporary criticism of Chalcedon and offers an aid to the work of the theologians beyond clicheacutes and narrow approaches to the sources

Key worDs Christology Chalcedon Halleux Grillmeier Price

1 introduccioacuten lA iMportAnciA de cAlcedoniA y lA necesi-dAd de unA AproxiMAcioacuten ActuAl

El cuarto concilio ecumeacutenico se celebroacute durante el otontildeo del antildeo 451 en Calcedonia en la orilla del Boacutesforo frente a Constantinopla bajo la atenta vigilancia de los emperadores Marciano y Pulqueria Fue la con-

1 Sacerdote de la dioacutecesis de Barcelona Fue alumno del Colegio entre 2010 y 2014 periodo en el que realizoacute estudios de licenciatura y doctorado en Teologiacutea dogmaacutetica en la Pon-tificia Universidad Gregoriana En diciembre de 2015 defendioacute la tesis doctoral titulada laquoLa cristologiacutea de Calcedonia y la obra de Andreacute de Halleux complementada y confrontada con las aportaciones de Alois Grillmeier y Richard Priceraquo Actualmente es profesor en la Facultad de Teologiacutea de Cataluntildea (Barcelona Espantildea)

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

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clusioacuten parcial de una sucesioacuten de acontecimientos que habiacutea tenido su origen inmediato en la poleacutemica suscitada por el monje Eutiques que habiacutea llevado a confrontaciones e incluso a la celebracioacuten dos antildeos antes de un laquoconcilioraquo en Eacutefeso denominado por el papa Leoacuten Magno como laquoLatrocinio de Eacutefesoraquo

Esta poleacutemica se situacutea en un marco maacutes amplio dentro de la controver-sia cristoloacutegica que habiacutea estallado el 428 con el laquoescaacutendalo ecumeacutenicoraquo provocado por Nestorio ante el cual habiacutea reaccionado celosamente Cirilo de Alejandriacutea y que habiacutea conducido al agitado concilio de Eacutefeso (431) seguido de la reconciliacioacuten del 433 en torno a la Foacutermula de la Unioacuten2

En la quinta sesioacuten de Calcedonia (22 de octubre de 452) se aproboacute una definicioacuten de fe (horos) salvando la feacuterrea oposicioacuten de los padres a redactar un nuevo texto dogmaacutetico3 gracias a las presiones de la comisioacuten imperial y del mismo emperador

En la definicioacuten finalmente aprobada laquose ensentildea a confesarraquo a laquouno solo y el mismoraquo Cristo laquo(re)conocido en dos naturalezasraquo laquosin confusioacuten sin cambio sin separacioacuten y sin divisioacutenraquo de manera que laquolas propiedades de cada una de las naturalezas concurren en una sola persona y en una sola hipoacutestasisraquo Seguidamente adjuntamos el texto de la definicioacuten4

Siguiendo pues a los Santos Padres todos a una voz ensentildeamos que ha de confesarse [ὁμολογεῖν hellip ἐκδιδάσ-κομεν] a uno solo y el mismo Hijo nuestro Sentildeor Jesucristo el mismo perfecto en la divinidad y el mismo perfecto en la humanidad Dios verdaderamente y el mismo verdaderamente hombre de alma racio-nal y de cuerpo consustancial con el Padre en cuanto a la divinidad y el mismo consustancial con nosotros en cuanto a la humanidad semejante en todo a nosotros menos en el pecado [Heb 4 15]

2 Para un acercamiento baacutesico a Calcedonia cfr A DE HALLEUX Le Concile de Chal-ceacutedoine Para un relato de los acontecimientos del Concilio cfr R PRICE The Council of Chalcedon a Narrative Para un acercamiento maacutes amplio a Calcedonia cfr P T CAMELOT Eacutephegravese et Chalceacutedoine R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon

3 Esta oposicioacuten era tan fuerte porque en Eacutefeso el 22 de julio de 431 el concilio reunido en torno a Cirilo habiacutea decretado que a nadie era liacutecito presentar otra foacutermula de fe o escribirla o componerla fuera de la definida por los santos padres reunidos con el Espiacuteritu Santo en Ni-cea (DH 265 ACO I 1 7 105ss) En la quinta sesioacuten de Calcedonia se presenta inicialmente un borrador de definicioacuten (no conservado) que es rechazado exigieacutendose su enmienda para cumplir las condiciones de la comisioacuten imperial y concordar con la carta dogmaacutetica de Leoacuten (Tomus ad Flavianum) El texto corregido es aprobado al final de esta sesioacuten

4 Debe tenerse en cuenta que al texto de la definicioacuten le precede un amplio prefacio que incluye los siacutembolos de Nicea y Constantinopla y le sigue un anatematismo final

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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engendrado del Padre antes de los siglos en cuanto a la divinidad y el mis-mo en los uacuteltimos diacuteas por nosotros y por nuestra salvacioacuten (engendrado) de Mariacutea Virgen madre de Dios en cuanto a la humanidaduno solo y el mismo Cristo Hijo Sentildeor unigeacutenitohellip hellip que se ha de reconocer en dos naturalezas sin confusioacuten sin cambio sin divisioacuten sin separacioacuten [ἕνα καὶ τὸν αὐτὸν Χριστόν υἱόν κύ ριον μονογενή ἐν δύο φύσεσιν ἀσυγχύτως ἀτρέπτως ἀδιαιρέτως ἀχωρίσ τως γνωριζόμενον] en modo alguno borrada la diferencia de naturalezas por causa de la unioacuten sino conservando maacutes bien cada naturaleza su propiedad y concurrien-do en una sola persona y en una sola hipoacutestasis [τῆς ἰδιότητος ἑκατέρας φύσεως καὶ εἰς ἓν πρόσωπον καὶ μίαν ὑπόστασιν συντρεχούσης] no parti-do o dividido en dos personas sino uno solo y el mismo Hijo unigeacutenito Dios Verbo Sentildeor Jesucristocomo de antiguo acerca de Eacutel nos ensentildearon los profetas y el mismo Jesu-cristo y nos lo ha trasmitido el Siacutembolo de los Padres5

Esta definicioacuten es sin lugar a dudas un punto crucial en el desarrollo de la cristologiacutea de todos los tiempos de Oriente y de Occidente Ahora bien el concilio suscitoacute muy pronto fuertes poleacutemicas que condujeron a grandes conflictos doctrinales eclesiales y poliacuteticos los cuales a su vez llevaron a la celebracioacuten de los concilios de Constantinopla II (553) y III (681) y a la separacioacuten de las Iglesias de Egipto Siria y Armenia que lamentablemente auacuten hoy perdura

El cuarto concilio ha sido objeto de numerosas investigaciones espe-cialmente a partir de su 1500 aniversario celebrado en 19516 Asimismo ha sido el centro de intensas poleacutemicas dentro de la criacutetica reciente a la cristologiacutea laquoclaacutesicaraquo en especial durante la segunda mitad del siglo XX 7

5 La definicioacuten de Calcedonia se halla en E Schwartz (ed) Acta Conciliorum Oecume-nicorum II 1 2 129s correspondiente al acta de la quinta sesioacuten n 34c Tambieacuten se halla en G Alberigo y otros (eds) Conciliorum Oecumenicorum Decreta 86s y en DH 301 El texto en espantildeol presentado sigue con algunas modificaciones DH 301 Noacutetese que el texto de la definicioacuten no corresponde exactamente con el imaginario de que Calcedonia define a Jesucristo como una persona en dos naturalezas

6 El mismo Papa redactoacute una enciacuteclica al respecto cfr PIacuteO XII Sempiternus Rex Chris-tus De entre los estudios surgidos destacamos P T CAMELOT Theacuteologies grecques et theacuteologie latine agrave Chalceacutedoine (1951) H M DIEPEN LrsquoAssumptus Homo agrave Chalcedoine (1951) F X MURPHY The dogmatic definition at Chalcedon (1951) P M J NICOLAS La doctrine christologique de S Leacuteon le Grand (1951) y especialmente A GRILLMEIER - H BACHT Das Konzil von Chalkedon (1951-1954) monumental obra colectiva en tres voluacutemenes preparada por los jesuitas alemanes de Sankt Georgen

7 La reaccioacuten criacutetica a Calcedonia se inicioacute con K RAHNER Chalkedon ndashEnde oder Anfang (1954) trabajo que fue publicado despueacutes con otro tiacutetulo dentro de sus Escritos de

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

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Es preciso aclarar que a diferencia de otros siacutenodos de la antiguumledad del concilio de Calcedonia conservamos abundante documentacioacuten in-cluyendo las actas de las sesiones editadas por iniciativa de la autoridad imperial de modo que contamos con una fuente primaria de valor inesti-mable que debe ser acogida con espiacuteritu criacutetico8

Al elaborar una reflexioacuten teoloacutegica sobre el cuarto concilio urge una aproximacioacuten continuamente renovada a la cristologiacutea de la definicioacuten teniendo en cuenta que Calcedonia es un acontecimiento eclesial cele-brado hace casi dieciseacuteis siglos siendo el concilio maacutes concurrido de la Iglesia primitiva y tan poleacutemico en su momento que dividioacute a las Iglesias No han dejado de aparecer trabajos que analizan la cristologiacutea de la defi-nicioacuten calcedonense9

Teologiacutea Id Problemas actuales de cristologiacutea en espantildeol En los antildeos siguientes se dio una fuerte poleacutemica con respecto a la cristologiacutea del cuarto concilio recogida en B SESBOUumlEacute Le proceacutes contemporain de Chalceacutedoine (1976) En la cristologiacutea espantildeola al respecto destacan dos artiacuteculos de los antildeos setenta J I GONZAacuteLEZ FAUS Las foacutermulas de la dogmaacutetica cris-toloacutegica (1971) y O GONZAacuteLEZ DE CARDEDAL Calcedonia y los problemas fundamen-tales de la cristologiacutea actual (1979) Trabajos maacutes recientes al respecto son J A RIESTRA Il dibattito sul valore (2001) L F LADARIA La recente interpretazione della definizione di Calcedonia (2003) y G URIacuteBARRI Leyendo el Concilio de Calcedonia (2008)

8 La edicioacuten criacutetica de las actas de Calcedonia se encuentra en E SCHWARTZ Acta Conciliorum Oecumenicorum concretamente en su tomo II (el I corresponde a Eacutefeso) que consta a su vez de seis voluacutemenes publicados entre 1932 y 1938 Para una visioacuten criacutetica de estas actas cfr R PRICE Truth omissions and fiction in the Acts of Chalcedon quien maacutes allaacute de algunas omisiones y escasa ficcioacuten les concede un notable componente de verdad Existe una versioacuten francesa parcial en A J FESTUGIEgraveRE Eacutephegravese et Chalceacutedoine (1982) donde se recogen las dos primeras sesiones e Id Actes de Chalceacutedoine (1983) donde se recogen las siguientes cuatro sesiones correspondientes a la definicioacuten de la fe Maacutes recien-temente se ha publicado una versioacuten inglesa completa en R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon (2005 22007)

9 De entre los numerosos estudios recientes sobre la definicioacuten calcedonense sobresale A DE HALLEUX La deacutefinition christologique (1976) que recoge ademaacutes las aportaciones de los principales estudios anteriores a partir de 1945 una exposicioacuten sinteacutetica de caraacutecter menos teacutecnico se halla en Id Le Concile de Chalceacutedoine 12-15 (1993) El citado trabajo de 1976 fue integrado en A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 753-764 (1979) Las aporta-ciones de A de Halleux asiacute como las consideraciones de A Grillmeier han sido recogidas por la que fue principal colaboradora del segundo en T HAINTHALER A short analysis of the definition (2006) En su edicioacuten de las actas el profesor R Price se esfuerza por ofrecer claves para el anaacutelisis de la definicioacuten R PRICE - M GADDIS The Acts of Chalcedon 1 68-71 e Id The Acts of Chalcedon 2 183-191 (2005) Cfr tambieacuten H DROBNER Fonti teologiche e analisi 42-58 (ponencia para un congreso de 2001) interesante por su clari-ficadora propuesta de estructura basada en las observaciones de A de Halleux y porque tiene en cuenta las posibles fuentes latinas de la definicioacuten Siempre es uacutetil por su claridad y caraacutecter didaacutectico P T CAMELOT Eacutephegravese et Chalceacutedoine 138-150 (1962) Ademaacutes son destacables por las mismas razones B SESBOUumlEacute Jeacutesus-Christ dans la tradition 109-119 (1982) y B SESBOUumlEacute - J WOLINSKI Histoire des dogmes I 407-412 (1995) seccioacuten re-

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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Proponemos que toda aproximacioacuten actual a la cristologiacutea de Calce-donia debe hacerse de la mano de laquointeacuterpretesraquo adecuados esto es de estudiosos de la Iglesia primitiva patroacutelogos e historiadores que ejercen de mediadores Esto permite que el teoacutelogo sabiamente pueda descar-gar en ellos parte de su responsabilidad10 Por tanto es crucial el papel de estos laquointeacuterpretesraquo en el itinerario hacia Calcedonia y debe decidirse cuidadosamente cuaacuteles elegir

Asiacute sin dejar de lado la cristologiacutea calcedonense como objeto priorita-rio es preciso prestar atencioacuten a los estudiosos que lo han tratado vistos como laquointeacuterpretesraquo y como imprescindibles laquocompantildeeros de caminoraquo del teoacutelogo De este modo se plantea un acercamiento de una forma renovada a la cuestioacuten de la cristologiacutea de Calcedonia a traveacutes de la mirada de sus estudiosos actuales

2 tres inteacuterpretes ActuAles de cAlcedoniA

21 Andreacute de Halleux principal inteacuterprete contemporaacuteneo de Cal-cedonia

Al entrar en contacto con los trabajos recientes sobre el cuarto concilio emerge enseguida la figura del franciscano belga Andreacute de Halleux (1929-1994) Se trata de un autor apenas conocido para el gran puacuteblico pero citado por casi todos los que han escrito sobre Calcedonia despueacutes de eacutel

A de Halleux fue un eminente patroacutelogo y filoacutelogo de la Universi-dad de Lovaina que dedicoacute su obra y su vida al estudio de la antiguumledad cristiana y al ecumenismo buscando poner la patrologiacutea al servicio de la unidad de las Iglesias11

A juicio de los principales estudiosos12 A de Halleux es el autor del anaacutelisis maacutes minucioso de la definicioacuten calcedonense publicado (1976)

dactada por Sesbouumleacute en la que recoge sus trabajos anteriores Asimismo resultan de intereacutes B STUDER Dios salvador en los Padres 315-322 R A NORRIS Chalcedon Revisited y S COAKLEY What Does Chalcedon Solve and What Does it Not

10 Como indica A de Halleux precisamente un destacado estudioso reciente del cuarto concilio cfr A DE HALLEUX Pourquoi les Eacuteglises ont-elles besoin aujourdrsquohui drsquoune theacuteologie patristique 512

11 Esto se refleja en el tiacutetulo del volumen que recoge sus principales trabajos A DE HALLEUX Patrologie et œcumeacutenisme

12 Por ejemplo cfr T HAINTHALER A Short Analysis of the Definition 317 R PRI-CE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 73 R PRICE The Council of Chalcedon a Narrative 81

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hasta hoy13 cuya importancia no ha disminuido cuarenta antildeos despueacutes de su aparicioacuten y maacutes de veinte despueacutes de la muerte de su autor sobrevenida en un momento de intenso trabajo intelectual precisamente en relacioacuten con la controversia cristoloacutegica Este autor ha publicado otros trabajos de gran intereacutes en torno a la cristologiacutea patriacutestica y Calcedonia14

Es preciso antildeadir que la toma de contacto con el itinerario intelectual y vital de Halleux supone una gran ayuda para comprender la importancia de su aportacioacuten asiacute como un estiacutemulo para afrontar las grandes divisio-nes que se produjeron en el pasado y que auacuten perduran15 Formado en la reconocida escuela histoacuterico-criacutetica lovanista e inicialmente experto en estudios siriacuteacos se convirtioacute en un reconocido patroacutelogo y en un activo experto en cuestiones ecumeacutenicas Gracias a su formacioacuten Halleux presta una atencioacuten preferente a las fuentes primarias que domina como muy pocos A la vez tambieacuten a causa de esta formacioacuten evita por principio preconcepciones y juicios de valor con respecto a los temas estudiados incluyendo Calcedonia Asimismo estaacute convencido de que la tarea prin-cipal del patroacutelogo es contribuir a la unidad de las Iglesias

Su obra compuesta sobre todo por artiacuteculos dispersos trata muchos elementos del pasado que abocaron a la divisioacuten de las Iglesias o que son causa de controversias teoloacutegicas entre ellas (la teologiacutea trinitaria la procesioacuten del Espiacuteritu Santo los sacramentos la controversia en torno al palamismo)16

13 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique publicado en 1976 fue recogido posteriormente en el volumen recopilatorio Patrologie et œcumeacutenisme

14 Por su visioacuten sinteacutetica destaca especialmente su entrada correspondiente a Calce-donia en la Enciclopeacutedie Maronite A DE HALLEUX Le Concile de Chalceacutedoine Id Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne Tambieacuten son de intereacutes sus estudios sobre el canon 28 del concilio Id Le vingt-huitiegraveme canon de Chalceacutedoine Id Le deacutecret chalceacutedonien sur les preacuterogatives de la Nouvelle Rome En relacioacuten con la controversia cristoloacutegica destacan A DE HALLEUX Nestorius histoire et doctrine Id Cyrill von Alexandrien Id Le dyophy-sisme christologique de Cyrille Id La premiegravere session Id Les douze chapitres cyrilliens Id Lrsquoaccord christologique de 433

15 Para una aproximacioacuten a este itinerario cfr sobre todo A DE HALLEUX Une vie consacreacutee y tambieacuten Id Pourquoi les Eacuteglises ont-elles besoin aujourdrsquohui drsquoune theacuteologie patristique Id Patrologie et œcumeacutenisme introduccioacuten asimismo son de gran intereacutes algunas de las necroloacutegicas escritas en su memoria como J M SEVRIN Andreacute de Halleux (1929-1994) J RYCKMANS - L VAN ROMPAY Andreacute de Halleux

16 Junto con el concilio de Calcedonia estos son los temas de su volumen recopilatorio cfr A DE HALLEUX Patrologie et œcumeacutenisme

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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22 Alois Grillmeier y Richard Price como complemento y marco de Andreacute de Halleux

Ademaacutes de Andreacute de Halleux se ha elegido otros dos autores de entre los estudiosos contemporaacuteneos del cuarto concilio Alois Grillmeier y Richard Price Su obra contribuye a situar las aportaciones de Halleux dentro de un marco maacutes completo tanto en el tiempo como en el enfoque asiacute como a complementarlas en la buacutesqueda de una comprensioacuten actual de la cristologiacutea de Calcedonia

El primero de estos autores el jesuita alemaacuten Alois Grillmeier (1910-1998) fue un famoso historiador del dogma y uno de los mayores exper-tos en cristologiacutea patriacutestica del siglo XX Fue creado cardenal por Juan Pa blo II Destaca por haber sido el editor de una monumental coleccioacuten de estudios publicados en torno al 1500 aniversario de Calcedonia (Das Konzil von Chalkedon)17 asiacute como por su opus magnum Jesus der Chris-tus im Glauben der Kirche18 asiacute como otros trabajos19 Contribuye al estu-dio de Calcedonia especialmente con elementos que ayudan a interpretar la definicioacuten dentro del contexto de la historia de los dogmas y de las criacuteticas contemporaacuteneas a la cristologiacutea patriacutestica

El segundo autor escogido es el sacerdote ingleacutes Richard Price (1947) historiador y teoacutelogo dedicado uacuteltimamente a los concilios primitivos que ha editado una versioacuten inglesa de las actas de Calcedonia amplia-mente anotada y comentada20 en la que recoge las aportaciones recientes

17 Cfr A GRILLMEIER - H BACHT Das Konzil von Chalkedon (1951-1954) Ade-maacutes de editor es autor de dos importantes trabajos A GRILLMEIER Die theologische und sprachliche Vorbereitung y Vorbereitung des Mittelalters

18 Se trata de una obra auacuten inconclusa La edicioacuten alemana maacutes reciente A GRILL-MEIER - T HAINTHALER Jesus der Christus im Glauben der Kirche consta de momento de cinco voluacutemenes actualmente su publicacioacuten corre a cargo de su asistente T Hainthaler Existe traduccioacuten espantildeola tan soacutelo del primer volumen A GRILLMEIER Cristo en la Tra-dicioacuten Cristiana que abarca desde el Nuevo Testamento al Concilio de Calcedonia siguiendo la uacuteltima edicioacuten alemana

19 Cfr sus voluacutemenes recopilatorios A GRILLMEIER Mit ihm und in ihm (1975 21978) A GRILLMEIER - T HAINTHALER Fragmente zur Christologie (1997) Este uacutel-timo contiene una detallada bibliografiacutea del cardenal Grillmeier Destacan trabajos como A GRILLMEIER Piscatorie - Aristotelice Id Kerygma Reflexion und Dogma Id Vom Sym-bolum zur Summa Id Das Kerygma von Chalzedon Id Hellenisierung - Judaisierung des Christentums Id Moderne Hermeneutik altkirchliche Christologie

20 Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I-III (2005) Tam-bieacuten ha publicado las actas de Constantinopla II y del siacutenodo lateranense del 649 R PRICE The Acts of the Council of Constantinople of 553 (2009) R PRICE - P BOOTH - C CU-BITT The Acts of the Lateran Synod of 649 (2014)

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en torno a la cuestioacuten y aporta criterios de interpretacioacuten Asimismo ha publicado otros trabajos sobre los concilios primitivos21 Contribuye al tema de nuestro intereacutes especialmente desde la perspectiva de la historia de la Iglesia y ofrece ademaacutes una panoraacutemica que incluye los estudios maacutes recientes

23 Planteamiento del trabajo con los inteacuterpretes

Asiacute a traveacutes de A de Halleux y los otros dos estudiosos citados cuya obra incluye asimismo referencias a muchos otros se puede formar una panoraacutemica general de las aportaciones de los estudios recientes sobre Calcedonia en Occidente que engloba los distintos aacutembitos linguumliacutesticos y culturales que estos recogen y que nos permite realizar una aproximacioacuten actual significativa De este modo se pretende ofrecer elementos para presentar la cristologiacutea de Calcedonia desde una perspectiva renovada Es preciso antildeadir que no hay praacutecticamente estudios sobre A de Halleux A Grillmeier y R Price22

Para exponer las contribuciones los tres autores citados con respecto a la cristologiacutea Calcedonia se eligen tres ejes temaacuteticos como referencia que corresponden con los elementos clave en relacioacuten con nuestra temaacute-tica23 Estos tres ejes son

1 El proceso de redaccioacuten y las fuentes de la definicioacuten calcedonense 2 La influencia en el concilio de Calcedonia de Cirilo de Alejandriacutea y

Leoacuten Magno3 La interpretacioacuten de la definicioacuten misma y la importancia de los

teacuterminos clave presentes en esta

21 Cfr R PRICE - M WHITBY Chalcedon in Context (2009 22011) Dentro de este vo-lumen le corresponden The Council of Chalcedon a Narrative Truth omissions and fiction in the Acts of Chalcedon The Second Council of Constantinople (553) and the Malleable Past

22 Esto sucede en primer lugar con el principal autor de referencia A de Halleux a pesar de ser auacuten hoy un estudioso de obligada cita en los estudios sobre las temaacuteticas sobre las que trabajoacute Tambieacuten sucede con respecto a A Grillmeier aunque parezca sorprendente por ser un autor de referencia y ampliamente reconocido traducido y citado esta situacioacuten es especialmente notoria en lengua espantildeola como lamenta J A MARTIacuteNEZ CAMINO Jesuacutes de Nazaret el Cristo en la fe de la Iglesia Maacutes comprensible es el desconocimiento de la obra de R Price por ser mucho maacutes reciente pero de quien se puede prever que seraacute un autor muy influyente en el futuro gracias a su edicioacuten de las actas

23 Estos tres puntos se han escogido a partir de la lectura de los recientes estudios sobre la cristologiacutea de Calcedonia que ha permitido identificar estos elementos clave

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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3 eleMentos pArA unA AproxiMAcioacuten renovAdA A cAlcedoniA

Seguidamente se ofrecen las principales aportaciones de estos tres autores con respecto a los tres ejes presentados

31 Redaccioacutenyfuentesdeladefinicioacuten

Como ya se ha indicado A de Halleux ha realizado la propuesta maacutes significativa hasta la fecha por lo que respecta a la estructura y las posibles fuentes de la definicioacuten calcedonense En su anaacutelisis pone en juego su formacioacuten como filoacutelogo y patroacutelogo que le lleva a afrontar el texto desde las perspectivas linguumliacutestica histoacuterica y teoloacutegica y a ponerlo en relacioacuten con sus posibles fuentes tomando en consideracioacuten preferentemente la documentacioacuten presente en las actas24

Destaca su afirmacioacuten del horos como un texto estructurado y redactado orgaacutenicamente en el que se insertan algunas modificaciones que corres-ponderiacutean a enmiendas exigidas en la sesioacuten quinta25 Descarta por tanto la idea de la definicioacuten como un laquomosaicoraquo de citas y propone la existencia de un verdadero laquoautorraquo para el texto y no un mero compilador 26

Por lo que se refiere a las fuentes de la definicioacuten destaca el papel de la Foacutermula de la Unioacuten del 433 (especialmente con respecto a la primera parte de la definicioacuten) que seriacutea leiacuteda en Calcedonia a traveacutes de la carta Laetentur caeli de Cirilo a Juan de Antioquiacutea En esta carta el alejandri-no hace suya la profesioacuten laquoantioquenaraquo de la Foacutermula de Unioacuten aunque ofrece su propia interpretacioacuten de esta27 De las cartas de Cirilo junto con la citada a Juan A de Halleux destaca tambieacuten la importancia de la

24 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique consta de cuatro partes una introduccioacuten (que incluye premisas de meacutetodo como considerar el texto como un todo y centrarse en la informacioacuten de las actas evitando reconstrucciones forenses) una recensioacuten de los trabajos previos al suyo (especialmente los dedicados al estudio de las fuentes) una propuesta propia con respecto a la definicioacuten (estructura estudio de las fuentes elementos de interpretacioacuten) y una conclusioacuten final

25 Para eacutel basaacutendose en la consideracioacuten de su propio anaacutelisis estructural las enmiendas de uacuteltima hora seriacutean los cuatro famosos adverbios y el inciso sobre la propiedad y la persona que se habriacutean hecho sobre un formulario vinculado a Basilio de Seleucia que ya contendriacutea la foacutermula difisita reconocido en dos naturalezas

26 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 156ss27 Cfr Id La deacutefinition christologique 14155 Esta afirmacioacuten aparece como una con-

clusioacuten de su recensioacuten a los autores anteriores a eacutel En su carta a Juan Cirilo reinterpreta los dos laquoperfectoraquo de la Foacutermula de Unioacuten perfecto Dios y perfecto hombre son glosados como perfecto en la divinidad y perfecto en la humanidad evitando el riesgo de afirmar dos sujetos en Cristo La definicioacuten calcedonense recogeraacute este desplazamiento terminoloacutegico

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segunda a Nestorio a la vez que rechaza como fuente directa la tercera carta a Nestorio con los anatematismos28

Asimismo por lo que respecta a la fuente del elemento central de la de-finicioacuten su laquofoacutermula difisitaraquo (laquoreconocido en dos naturalezasraquo) Hal leux resalta la importancia de la profesioacuten del metropolita Basilio de Seleucia pronunciada en el siacutenodo constantinopolitano del 448 que condenoacute a Euti-ques y en la que Basilio afirma expliacutecitamente basarse en Cirilo29

32 Cirilo y Leoacuten en Calcedonia

Por lo que respecta a la influencia de Cirilo y Leoacuten en el cuarto con-cilio los estudiosos occidentales recientes con A de Halleux como ex-ponente destacado han afirmado cada vez maacutes la importancia del ale-jandrino en Calcedonia hasta hablar de una laquofidelidad ciriliana baacutesicaraquo del concilio30 a la vez que se ha ido reduciendo la valoracioacuten del papel directo de Leoacuten Magno

La mayoriacutea de los estudiosos modernos propone que entre los padres de Calcedonia predominaba lo que R Price denomina laquocirilianismo mo-deradoraquo como postura teoloacutegica que dentro de una fidelidad baacutesica a Cirilo y la consiguiente afirmacioacuten clara de la unidad en Cristo permitiriacutea ademaacutes una aceptacioacuten del difisismo31

Ahora bien A de Halleux y otros estudiosos denuncian malenten-didos y ambiguumledades en torno a los textos y la doctrina de Cirilo ya en el tiempo del concilio e incluso desde la controversia con Nestorio

28 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 155165 Id Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 448ss

29 Cfr Id La deacutefinition christologique donde en muacuteltiples pasajes expone la importan-cia de Basilio Los primeros en destacar el papel de Basilio habiacutean sido R V Sellers (1953) y T-J Šagi-Bunić (1965) A de Halleux afirma que el conjunto de la definicioacuten que eacutel consi-dera como un texto orgaacutenico se hallariacutea bajo la influencia de Basilio incluidas algunas de las modificaciones Maacutes adelante G Martzelos (Der Vater der dyophysitischen Formel) insistiraacute en la autoriacutea basiliana de la claacuteusula difisita aunque su propuesta seraacute valorada criacuteticamente por A de Halleux (Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne)

30 Cfr A DE HALLEUX Une vie consacreacutee 4631 El cirilianismo moderado se basariacutea en la segunda carta a Nestorio y la Laetentur

caeli a Juan de Antioquiacutea tomando distancias de la tercera carta a Nestorio y de los anate-matismos y evitando expresiones marcadamente teopasquitas se habriacutea convertido en la teologiacutea dominante del Oriente griego Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 62ss A de Halleux se refiere a la diversidad de interpretaciones que ofreciacutea el legado de Cirilo entre otros en Cyrill von Alexandrien 147 y Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 468s

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iniciada el 42832 Ademaacutes el mismo Halleux denuncia la debilidad de la Unioacuten del 433 tanto en la foacutermula dogmaacutetica resultante como en su inter-pretacioacuten por las partes enfrentadas La deficiente resolucioacuten del conflicto efesino a traveacutes de una unioacuten superficial y ambigua conduciraacute a una pron-ta reaparicioacuten de las hostilidades que desembocaraacuten en la celebracioacuten de Calcedonia y el posterior drama33 La trayectoria literaria de A de Halleux muestra que un punto absolutamente determinante es cuaacutel es la adecua-da interpretacioacuten de la cristologiacutea de Cirilo no solo en vida sino en los antildeos siguientes a su muerte (dagger 444) y en particular por lo que respecta al cuarto Concilio Este tema es tradicionalmente una dificultad para los que buscan aproximarse a la controversia cristoloacutegica34

Por lo que respecta a Leoacuten Magno como se ha indicado los estudios recientes le otorgan un papel limitado en Calcedonia aunque a traveacutes de sus legados y de los comisarios imperiales su influencia habriacutea sido decisiva en la quinta sesioacuten del Concilio impulsando la redaccioacuten de una foacutermula inequiacutevocamente difisita De hecho A de Halleux muestra en su anaacutelisis de la definicioacuten que el papel del Tomus como fuente de la definicioacuten seriacutea de hecho secundario35 Este mismo autor afirma que si el Tomus fue recibido en el concilio fue porque los padres reconocieron que concordaba con Cirilo36 y situaacutendolo en el uacuteltimo lugar de una laquoje-rarquiacutea descendenteraquo de documentos El uacutenico pasaje de la definicioacuten que habriacutea sido tomado del Tomus habriacutea sido modificado para situarlo en concordancia con Cirilo en lo que A de Halleux denomina laquocirilia-nizacioacuten estiliacutesticaraquo37

32 Cfr por ejemplo A DE HALLEUX Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 469 Tam-bieacuten A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 679ss donde se propone que en Calcedonia se habriacutean seleccionado los escritos de Cirilo para evitar todo extremismo en la formulacioacuten

33 Cfr A DE HALLEUX Lrsquoaccord christologique de 43334 Cfr por ejemplo Id Le dyophysisme christologique de Cyrille R A NORRIS

Christological Models in Cyril of Alexandria 35 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique tanto en la recensioacuten de los

estudios anteriores como en la propuesta del mismo Halleux 36 En la segunda sesioacuten conciliar seguacuten la numeracioacuten latina y en una reunioacuten posterior

(pero anterior a la sesioacuten cuarta) se discute acerca del Tomus y su compatibilidad con Cirilo37 Esta jerarquiacutea descendente de la documentacioacuten calcedonense situacutea en su punto maacutes

alto al siacutembolo niceno seguido del constantinopolitano las cartas de Cirilo (la segunda a Nestorio y la Laetentur caeli a Juan) y finalmente el Tomus de Leoacuten La ortodoxia de cada documento se mediriacutea por su fidelidad a los precedentes cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 163 Id La reacuteception du symbole œcumeacutenique 41ss Halleux pone de mani-fiesto coacutemo la cita del Tomus de Leoacuten es modificada y fusionada orgaacutenicamente con otra cita de Cirilo junto con la adicioacuten del laquouna hipoacutestasisraquo (que tambieacuten se remonta a Cirilo)

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Es preciso aproximarnos a Calcedonia desde esta oacuteptica de mayoriacutea laquocirilianaraquo y no a traveacutes del Tomus o de Leoacuten mismo vistos como criterio interpretativo de la definicioacuten lo que era la postura habitual en Occidente hasta tiempos recientes Al respecto A de Halleux matiza que Calcedo-nia no habriacutea sido una derrota de Leoacuten sobre Cirilo sino una derrota a un monofisismo extremo e intolerante38

33 Interpretacioacuten y terminologiacutea

Los estudios recientes contribuyen a desvelar claves para interpre-tar la definicioacuten de Calcedonia dentro de su contexto textual teoloacutegico y cultural asiacute como a una revalorizacioacuten de cara a la reflexioacuten cristoloacute-gica actual

331 Calcedonia vinculada al Siacutembolo

Una aportacioacuten destacada de estos estudios es la iacutentima unioacuten de la definicioacuten calcedonense con el Siacutembolo de la fe39 sobre todo teniendo en cuenta el prefacio del horos casi siempre olvidado de manera que la defi-nicioacuten se presenta a siacute misma como auteacutentica interpretacioacuten del Siacutembolo de la fe nicena e incluso como una explicitacioacuten de su contenido40

En esta liacutenea avanzan aunque con matices diferentes los tres auto res tratados Andreacute de Halleux muestra la vinculacioacuten de Calcedonia con el siacutembolo en el plano maacutes textual y teoloacutegico tratando la recepcioacuten del siacutembolo a traveacutes del tiempo41 Alois Grillmeier y Richard Price afrontan esta cuestioacuten desde una perspectiva maacutes histoacuterica remitiendo especial-mente a las intervenciones recopiladas en el Codex Encyclius que recoge una gran laquoencuestaraquo del 457-458 realizada por el emperador Leoacuten I y

38 Cfr A DE HALLEUX Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 471s39 Teacutengase en cuenta que se tata del Siacutembolo niceno el Siacutembolo constantinopolitano ha-

biacutea permanecido desconocido hasta Calcedonia y precisamente reaparecioacute en las discusiones conciliares sobre la redaccioacuten de una foacutermula cristoloacutegica

40 Cfr por ejemplo A DE HALLEUX La reacuteception du symbole œcumeacutenique e Id Le Concile de Chalceacutedoine se refieren al prefacio y a la vinculacioacuten entre la definicioacuten y el Siacutembolo

41 Recueacuterdese que el Siacutembolo ocupa el primer lugar de la jerarquiacutea descendente de los lugares teoloacutegicos para la definicioacuten calcedonense La definicioacuten aparece como una interpre-tacioacuten de la fe nicena fiel como lo habiacutea sido Constantinopla I y en liacutenea con los testimonios individuales de la tradicioacuten inteacuterpretes ortodoxos del Credo esto es Cirilo y Leoacuten Cfr A DE HALLEUX La reacuteception du symbole œcumeacutenique 42-46

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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que resulta de gran ayuda para acercarse a la comprensioacuten de Calcedonia en el momento42

Esta relacioacuten con el Siacutembolo permite insertar la definicioacuten del cuarto concilio en la gran tradicioacuten de la Iglesia sin desvincularla de la historia de la salvacioacuten del valor de la soteriologiacutea de toda la teologiacutea trinitaria o del papel del Espiacuteritu Santo43

332 Afirmacioacuten baacutesica de la unidad en Cristo

Los estudios recientes han mostrado que en Calcedonia si bien se afir-ma la dualidad de naturalezas en Jesucristo es prioritaria la afirmacioacuten de la unidad Por un lado se ha presentado la definicioacuten del cuarto concilio dentro de una fidelidad baacutesica a Cirilo44 como una expresioacuten del laquociri-lianismo moderadoraquo45 de manera que la afirmacioacuten de la unidad se halla siempre presente Por otro lado la estructura de la definicioacuten tal como es puesta de manifiesto por A de Halleux revela el texto como una afirma-cioacuten fundamental de la unidad de Cristo de modo inequiacutevoco en la cual se inserta la dualidad de naturalezas fruto de la Encarnacioacuten46 dualidad que no es una mera equiparacioacuten

42 Grillmeier se refiere al Codex en numerosos trabajos y destaca que gran parte de los obispos habiacutean interpretado Calcedonia en un sentido kerigmaacutetico (como pescadores no como filoacutesofos aristoteacutelicos) dando prioridad al Credo del cual la definicioacuten seriacutea una inter-pretatio Cfr A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 765-768 Id Jesus der Christus 21 221-266 entre muchos otros Grillmeier afirma con contundencia la estrecha dependencia de la definicioacuten respecto del siacutembolo y su consecuente valor soterioloacutegico cfr Id Jesus der Christus 21 5238ss Id Wir glauben an den einen Herrn especialmente 52-59 Por su par-te R Price trata tambieacuten la vinculacioacuten de Calcedonia con el Siacutembolo y coacutemo esto se muestra en el prefacio de la definicioacuten y en las respuestas contenidas en el Codex Encyclius dentro de una comprensioacuten de un ideal sacramental y de comunioacuten cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 56-59

43 Precisamente estas son criacuteticas que se le han hecho con frecuencia a la misma defi-nicioacuten

44 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique muestra esta fidelidad a lo largo de todo el artiacuteculo tanto por lo que respecta a las fuentes directas (cartas de Cirilo a Nestorio y a Juan) como a la teologiacutea de Basilio de Seleucia (de quien dependeriacutea el conjunto de la definicioacuten y quien se declara fiel a Cirilo) o a la redaccioacuten de la definicioacuten (en la que la uacutenica cita del Tomus de Leoacuten habriacutea sido cirilianizada)

45 Este cirilianismo moderado recordemos dentro de una afirmacioacuten clara de la unidad de Cristo reconoce la dualidad de naturalezas Es visto por Price entre otros como predo-minante en el momento Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 62-65

46 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique a partir de su anaacutelisis de la estructura de la definicioacuten muestra que la afirmacioacuten de la unidad es baacutesica hallaacutendose al inicio al final y a la mitad

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Asimismo la afirmacioacuten de la distincioacuten real de estas naturalezas no desgaja la unidad como apuntan los cuatro famosos adverbios (laquosin con-fusioacuten sin cambio sin separacioacuten sin divisioacutenraquo)47 La condicioacuten negativa de los adverbios indica que no buscan dar cuenta racional del misterio de la unioacuten cristoloacutegica sino solo garantizarlo ante las herejiacuteas de la confu-sioacuten de naturalezas y de la divisioacuten de la persona48

333 Realismo del difisismo calcedonense

Por lo que respecta a la foacutermula difisita (laquoreconocido en dos naturale-zasraquo) teniendo en cuenta la consideracioacuten del laquocirilianismo moderadoraquo predominante en Calcedonia A de Halleux ha defendido con fuerza que la definicioacuten calcedonense debe ser entendida en liacutenea con una distincioacuten real de las naturalezas en Cristo y no como una distincioacuten puramente no-cional (en la sola theoria) frente a otras posturas recientes Esta defensa del realismo del difisismo calcedonense es especialmente eneacutergica en sus uacuteltimos escritos49

334 El impulso a la terminologiacutea teoloacutegica

Calcedonia supone sin duda un paso adelante en la clarificacioacuten ter-minoloacutegica de la cristologiacutea distinguiendo por un lado la laquonaturale-zaraquo (physis) de la laquopersonaraquo (prosocircpon-hipoacutestasis) y situando ademaacutes prosocircpon junto a hipoacutestasis (ἐν δύο φύσεσιν frente a εἰς ἓν πρόσωπον

47 Es necesario precisar que para autores como A de Halleux estos cuatro adverbios que han dado tanto juego en la reflexioacuten teoloacutegica tendriacutean un papel secundario en la defini-cioacuten trataacutendose de hecho de un antildeadido que buscariacutea satisfacer las exigencias de los comi-sarios imperiales Seguacuten Halleux los adverbios rompen la estructura gramatical de la defi-nicioacuten y no queda claro a quieacuten se refieren si a laquodos naturalezasraquo a laquoreconocidoraquo o a laquouno solo y el mismoraquo Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 162 Id Le Concile de Chalceacutedoine 14 La mayoriacutea de los estudiosos coinciden en considerarlos un lugar comuacuten a los diversos partidos cfr ademaacutes del mismo A de Halleux entre otros T HAINTHALER A short analysis of the definition 323

48 A DE HALLEUX Le Concile de Chalceacutedoine 1449 La afirmacioacuten inequiacutevoca del realismo del difisismo de la definicioacuten calcedonense se

ve influida especialmente por los acuerdos entre ortodoxos y ortodoxos orientales de 1989 y 1990 de los cuales surgen dos declaraciones conjuntas que interpretan la dualidad cristoloacute-gica en liacutenea con la doctrina ciriliana de la distincioacuten de las naturalezas en Cristo por la mera theoria Cfr A DE HALLEUX Actualiteacute du neacuteochalceacutedonisme Id Orthodoxes orientaux en dialogue Id Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne donde critica la postura de G Martzelos quien habiacutea participado en los citados diaacutelogos ecumeacutenicos Esta postura de Halleux se ve reflejada en su obra Le Concile de Chalceacutedoine 16

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καὶ μίαν ὑπόστασιν) A primera vista Calcedonia da en la terminologiacutea teoloacutegica el paso que los padres Capadocios y Constantinopla I habiacutean dado en el campo trinitario50

Es preciso notar con Halleux la laquoimprecisioacutenraquo que rodea a la identifica-cioacuten de cuaacutel es la laquouacutenica hipoacutestasisraquo (μία ὑπόστασις) calcedonense51 Esta laquouna hipoacutestasisraquo es precisamente un elemento antildeadido al laquouna personaraquo leonino (el una persona latino habiacutea sido traducido como ἓν πρόσωπον) para subrayar la unidad en lo que podriacutea ser una enmienda de uacuteltima hora como indica Halleux52 Ciertamente la definicioacuten no afirma (pero tampo-co niega) que el laquouna hipoacutestasisraquo corresponda a la hipoacutestasis del Logos53 Esto no obsta para que otros autores como Price afirmen que esta uacutenica hipoacutestasis en la definicioacuten puede identificarse con el Logos eterno54

Esta cuestioacuten terminoloacutegica precisamente por no haber sido clarificada en Calcedonia (el concilio no pretendiacutea tanto definir los teacuterminos como de-fender la fe) requeriraacute grandes esfuerzos en la teologiacutea bizantina posterior al cuarto concilio tal como sentildealan los estudiosos actuales55

50 Cfr entre otros Ibid 14s51 En la definicioacuten no se explicita que Cristo sea una hipoacutestasis ni que esta hipoacutestasis

deba ser concebida como una laquopersonaraquo (en el sentido filosoacutefico moderno) ni que esta perso-na sea laquoDios Verboraquo Lo que se afirma es que la uacutenica hipoacutestasis se encuentra en el teacutermino de la concurrencia de la especificidad de cada naturaleza Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 167

52 En su anaacutelisis A de Halleux (La deacutefinition christologique 167s) identifica el pasaje de la definicioacuten donde se situacutea laquohipoacutestasisraquo junto prosocircpon (en modo alguno borrada la diferencia de naturalezas por causa de la unioacuten sino conservando cada naturaleza su pro-piedad y concurriendo en una sola persona [prosocircpon] y en una sola hipoacutestasis) como una modificacioacuten posiblemente de uacuteltima hora realizada sobre un formulario previo Considera que el teacutermino laquohipoacutestasisraquo habriacutea jugado un papel secundario en las discusiones conciliares y habriacutea sido antildeadido al laquopersonaraquo latino del Tomus de Leoacuten Magno (que se habiacutea traducido al griego como prosocircpon con riesgo de ser interpretado en sentido nestoriano) como una precisioacuten secundaria para reforzar la afirmacioacuten de la unidad fundamental En la p 168 glosa este pasaje de un modo interesante laquoDans le Christ les deux natures la diviniteacute et lrsquohumani-teacute conservent leur diffeacuterence speacutecifique bien que celle-ci se rejoigne en celui qui est un seul et le mecircme non seulement dans sa manifestation exteacuterieure (prosopon) mais aussi dans son ecirctre profond (hypostasis)raquo

53 Esta precisioacuten siacute apareceraacute en los anatematismos del II concilio de Constantinopla del 553

54 Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon 70 55 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 170 R PRICE - M GADDIS

The Acts of the Council of Chalcedon 71 Grillmeier (Jesus der Christus 1 762s) afirma que los padres de Calcedonia no fueron conscientes de la importancia de su decisioacuten ni sospecha-ron lo que iba a significar para las futuras generaciones de teoacutelogos afirma asimismo que aunque los conceptos de hipoacutestasis y persona siguen sin precisar el sentido del dogma de Calcedonia estaacute muy claro los padres habriacutean querido significar que a pesar de la diferencia

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

136

34 Elementos de respuesta a las principales criacuteticas a Calcedonia

Los estudios contemporaacuteneos permiten responder desde una perspec-tiva renovada a las criacuteticas maacutes habituales de la teologiacutea contra Calcedo-nia56 La criacutetica contra Calcedonia y los otros concilios primitivos de haber laquohelenizadoraquo el mensaje cristiano ha sido constante desde los tiempos de Adolf von Harnack Los autores estudiados en especial Grillmeier han mostrado que Calcedonia no supone una laquohelenizacioacuten del cristianismoraquo (Hellenisierung des Christentums) Por el contrario propone que la de-finicioacuten calcedonense seriacutea en realidad una auteacutentica laquodeshelenizacioacutenraquo (Enthellenisierung) que buscariacutea salvaguardar la fe biacuteblica en Jesucristo frente a las amenazas del momento57 Si se usaron teacuterminos griegos en la definicioacuten no fue porque la fe se sometiera a una determinada filosofiacutea sino porque con ellos se buscaba poner un determinado laquomarco conceptual helenistaraquo al servicio de la expresioacuten de la fe que era la prioridad58

En los estudios recientes se ha revalorizado el contenido kerigmaacutetico de la definicioacuten y se ha evidenciado que la terminologiacutea teacutecnica usada en ella se hallariacutea al servicio de la fe aunque provenga del mundo heleniacutestico59

real entre las naturalezas de la divinidad y la humanidad Cristo es uno una sola persona o hipoacutestasis este enunciado puede hacerse sin necesidad de definir exactamente el contenido metafiacutesico de los conceptos pues no es misioacuten de los concilios ensentildear metafiacutesica sino servir al anuncio de la Iglesia que tiene por contenido la revelacioacuten de Dios en Cristo y en el Espiacuteritu El mismo A Grillmeier (Das Kerygma von Chalzedon) hace notar que si bien el contenido del dogma de la Encarnacioacuten estaba claro en Calcedonia podriacutea expresarse mediante conceptos auacuten no suficientemente precisados terminoloacutegicamente

56 Estas criacuteticas como ya se ha indicado se hallan sistematizadas criacuteticamente en G URIacuteBARRI Leyendo el Concilio de Calcedonia quien recoge tambieacuten las aportaciones de B SESBOUumlEacute Le proceacutes contemporain de Chalceacutedoine En resumen seriacutean las siguien-tes Calcedonia empleariacutea un lenguaje conceptual inadecuado seguiriacutea un esquema dualista este esquema pondriacutea en tela de juicio la unidad de Cristo Calcedonia estariacutea preso de una cristologiacutea desde arriba Calcedonia propondriacutea un Cristo desprovisto de auteacutentica perso-nalidad humana desconoceriacutea la dimensioacuten histoacuterica de la vida de Cristo prescindiriacutea del Espiacuteritu no presenta diferencias significativas en el modo de estar la divinidad en la keacutenosis y en la exaltacioacuten

57 La helenizacioacuten seriacutea en este caso la simbiosis fiacutesica entre la divinidad y la carne Grillmeier trata de la helenizacioacuten del cristianismo en numerosos trabajos por ejemplo Mo-derne Hermeneutik altkirchliche Christologie 544s J A Riestra (Il dibattito sul valore 107s) considera que gracias a los trabajos de Grillmeier hoy no puede sostenerse que Cal-cedonia haya helenizado el cristianismo

58 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 169s Al respecto tambieacuten de-fiende la definicioacuten de Calcedonia frente a las acusaciones de helenizacioacuten (Le Concile de Chalceacutedoine 16 ss)

59 Cfr Id La deacutefinition christologique 157 y 169s Id Le Concile de Chalceacutedoine 12-17 Estructuralmente divide la definicioacuten de Calcedonia en dos partes una kerigmaacutetica

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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recordando que lo que estaba en juego no era una cuestioacuten acadeacutemica sino eclesial la unidad sacramental60 Asimismo el poner de manifiesto la afirmacioacuten inequiacutevoca de la unidad de Cristo por parte de la definicioacuten contribuye a responder a los que acusan a la definicioacuten de dualismo

Como ya se ha indicado la vinculacioacuten de la foacutermula con el Siacutembolo permite responder en cierto modo a los que acusan a Calcedonia de olvi-dar las dimensiones trinitaria soterioloacutegica y pneumatoloacutegica asiacute como la dimensioacuten histoacuterica de la vida de Cristo

Ademaacutes los trabajos recientes tambieacuten han permitido poner de mani-fiesto la afirmacioacuten de la verdadera humanidad de Cristo El mismo Grill-meier ha apuntado que la cristologiacutea del cuarto concilio entendida de ma-nera adecuada continuacutea siendo fructiacutefera teoloacutegicamente como un punto de relacioacuten entre las cristologiacuteas descendente y ascendente asiacute como una apropiada recuperacioacuten del valor del elemento humano y de la historicidad de Jesucristo una cristologiacutea calcedonense llevada a sus uacuteltimas conse-cuencias hace posible la siacutentesis entre el Jesuacutes de la historia y el Cristo de la fe61 Calcedonia se inserta dentro del dinamismo de la Iglesia primitiva que pone en relacioacuten kerigma reflexioacuten teoloacutegica y dogma eclesial62 y podriacutea tomarse como base para una antropologiacutea cristiana63

Es interesante sentildealar que Grillmeier considera que la tensioacuten real-mente existente entre el kerigma de la Iglesia por un lado y la reflexioacuten y la evolucioacuten doctrinal por el otro se resuelve sin rupturas en una uacutenica laquohistoria de la feraquo En esta historia no habriacutea saltos o quiebras sino un desarrollo armoacutenico que podriacutea considerarse como una verdadera incul-turacioacuten teoloacutegica de la fe64

a modo de confesioacuten de fe y otra teoloacutegica con un lenguaje teacutecnico Grillmeier (Jesus der Christus 1 765-768 entre otros muchos pasajes) tambieacuten ha afirmado el valor kerigmaacutetico fundamental de la definicioacuten

60 Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of Chalcedon 1 5861 Cfr A GRILLMEIER Moderne Hermeneutik altkirchliche Christologie 543-545

Id Jesus Christus in Palaumlstina 26s Tambieacuten Id Jesus der Christus 1 765ss62 Metodoloacutegicamente Grillmeier afirma la interrelacioacuten entre kerigma reflexioacuten teo-

loacutegica y dogma (confesiones de fe foacutermulas dogmaacuteticas) pero siempre afirmando la priori-dad del kerigma y de la fe viva de la Iglesia Cfr especialmente A GRILLMEIER Kerygma Reflexion und Dogma Id Piscatorie-Aristotelice 283 Id Nicaea und Chalcedon 44-46 Id Zur Dogmen- und Konzilsgeschichte 221-220

63 Cfr Id Nicaea und Chalcedon 75ss 64 Cfr J A MARTIacuteNEZ CAMINO Jesuacutes de Nazaret el Cristo en la fe de la Iglesia

441 citando a A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 VIII

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

138

4 conclusioacuten

Junto con Andreacute de Halleux maestro de las fuentes y principal guiacutea hacia el pasado Alois Grillmeier ha contribuido a situar el concilio de Calcedonia dentro de una historia de los dogmas como laquohistoria de feraquo que a su vez ha sido laquonarradoraquo por Richard Price

Investigar la cristologiacutea calcedonense no solo desde el punto de vista del concilio en siacute sino atendiendo a la oacuteptica de sus estudiosos posibilita un acercamiento nuevo a esta cuestioacuten que a su vez permite replantear las criacuteticas contemporaacuteneas a Calcedonia y ofrecer una ayuda para el trabajo de los teoacutelogos maacutes allaacute de los toacutepicos y de una lectura parcial de las fuentes

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El Colegio Espantildeol de Roma centro de proacutefugos durante la Guerra civil espantildeola

ViCente CaacuterCel ortiacute1

Pontificio Colegio Espantildeol

resuMen Durante la Guerra civil el Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma se convirtioacute en Centro de acogida y atencioacuten para centenares de sacerdotes reli-giosos y seglares que consiguieron salir de Espantildea huyendo de los horrores del conflicto armado y de la sangrienta persecucioacuten religiosa desencadenada en la zona republicana Responsable de este Centro fue don Carmelo Blay Agente de Preces del Colegio a quien el papa Piacuteo XI encomendoacute dicha tarea El presente artiacuteculo recupera para la memoria histoacuterica la personalidad de este desconocido sacerdote valenciano y Operario diocesano asiacute como la intensa actividad que desarrolloacute en favor de los numerosos proacutefugos espantildeoles llegados a la Ciudad Eterna desde el verano de 1936

palabras ClaVe Persecucioacuten Guerra civil proacutefugos Colegio Espantildeol de Roma

abstraCt laquoThe Spanish College of Rome refugees center during the Civil warraquo Du-ring the Spanish Civil War the Pontifical Spanish College of San Joseacute in Rome beca-me the center for the reception and care of the hundreds of priests religious and lay people who escaped from Spain fleeing from the horrors of armed conflict and bloody religious persecution unleashed in the Republican zone Responsible for this Center was Don Carmelo Blay the procurator of the College to whom Pope Pius XI entrus-ted this task The present article recovers for the historical memory the personality of this unknown Valencian and diocesan labourer priest as well as the intense activity that developed in favor of the numerous Spanish fugitives arrived at the Eternal City from the summer of 1936

KeyworDs Persecution Civil War refugees Spanish College of Rome

1 Mons Vicente Caacutercel Ortiacute (Manises 1940) autor de numerosas y reconocidas obras es historiador y sacerdote diocesano de Valencia especialista en historia contemporaacutenea de la Iglesia en Espantildea y vicario para los sacerdotes valencianos en Roma

ViCente CaacuterCel ortiacute

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1 perfil biograacutefico de don cArMelo blAy

Nacido en Liria (Valencia) el 9 de julio de 1874 Carmelo Blay Palo-mar cursoacute los estudios eclesiaacutesticos en el Seminario conciliar central de Valencia como alumno del Colegio de Vocaciones eclesiaacutesticas de San Joseacute fundado por el beato Manuel Domingo y Sol2 y dirigido por la Her-mandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos Celebroacute su primera misa en la iglesia arciprestal de Liria el 17 de junio de 1897 pues habiacutea sido ordenado sacerdote el diacutea 12 del mismo mes Ese mismo antildeo ingresoacute en la mencionada Hermandad

Cuando contaba 25 antildeos fue enviado a tierras mejicanas y en el oto-ntildeo de 1899 tomoacute posesioacuten de sus nuevos ministerios de vicerrector y de profe sor del seminario de Chilapa en el que estuvo trabajando durante el curso 1899-1900 Alliacute conocioacute personalmente al presidente de la Repuacutebli-ca mejicana el general Porfirio Diacuteaz esta amistad se iriacutea estrechando al correr de los antildeos En el antildeo acadeacutemico 1900-1901 pasoacute con los mismos ministerios a Cuernavaca donde ejercioacute la ensentildeanza hasta terminar el curso 1903-1904 Cuernavaca era una reciente dioacutecesis erigida en 23 de

2 Conocido popularmente como Moseacuten Sol el beato Manuel Domingo y Sol (Tortosa Tarragona 1 de abril de 1836 - 25 de enero de 1909) fue el penuacuteltimo de doce hijos En 1851 ingresoacute en el Seminario de Tortosa siendo ordenado sacerdote el 9 de julio de 1860 Despueacutes comenzoacute a ocuparse de los pobres de la dioacutecesis de Tortosa dedicaacutendose fundamentalmen-te a la predicacioacuten hasta que el nuevo obispo Benito Vilamitjana lo envioacute al Seminario conciliar central de Valencia para que consiguiera el doctorado en teologiacutea tambieacuten obtuvo el bachillerato en artes por la universidad de Barcelona y posteriormente se hizo cargo de la ensentildeanza de la religioacuten en el Instituto de Tortosa Ejercioacute gran influjo entre los joacutevenes logrando organizar la Juventud Catoacutelica ndashuna especie de Accioacuten Catoacutelicandash y tambieacuten fundoacute la Congregacioacuten mariana y la revista El congregante de san Luis que dirigioacute durante quince antildeos Promovioacute ademaacutes la peregrinacioacuten nacional a Roma de los congregantes marianos Su encuentro con el joven Ramoacuten Valero que queriacutea ser sacerdote pero careciacutea de medios econoacutemicos le impulsoacute a fundar la que seriacutea su obra principal la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos del Sagrado Corazoacuten de Jesuacutes dedicada a promover las vocaciones eclesiaacutesticas a traveacutes de los llamados Colegios de San Joseacute el primero de los cuales fue fundado en Tortosa el 12 de octubre de 1879 Cuatro antildeos maacutes tarde fundoacute formalmente la Hermandad que veniacutea funcionando como grupo desde enero de 1883 El 2 de enero de 1885 en el colegio de San Joseacute de Tortosa se reunioacute el primer grupo de operarios para emitir la primera promesa de consagracioacuten a la nueva obra Gracias al impulso personal de moseacuten Sol y a la invitacioacuten de algunos obispos comenzaron a surgir en muchas dioacutecesis espantildeolas y portuguesas los colegios de vocaciones eclesiaacutesticas de forma que en 1888 se abrioacute el de Murcia en 1889 el de Orihuela y en los antildeos sucesivos los de Plasencia Burgos y Roma Este uacuteltimo destacoacute sobre todas sus fundaciones y fue erigido el 1 de abril de 1892 con el apoyo inicial del cardenal valenciano Benito Sanz y Foreacutes arzobispo de Sevilla quien apoyoacute a moseacuten Sol ante el cardenal Rampolla secretario de Estado y el sustituto de la Secretariacutea de Estado monsentildeor Della Chiesa futuro papa Benedicto XV El 25 de octubre de 1893 Leoacuten XIII cedioacute el Palacio Altemps para sede del Colegio Espantildeol de San Joseacute en Roma gesto

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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junio de 1891 que abarcaba todo el Estado de Morelos El seminario contaba con 30 alumnos internos y se acababa de confiar su direccioacuten a los Operarios diocesanos

En el antildeo 1904 fue enviado a la ciudad de Meacutejico como encargado del Templo Nacional Expiatorio de San Felipe recayente en la ceacutentrica calle Madero en las cercaniacuteas del Zoacutecalo donde se levantan la catedral y el palacio presidencial Comenzoacute asiacute una nueva faceta de su vida y ma-nifestoacute unas cualidades hasta entonces ineacuteditas sus dotes diplomaacuteticas Responsable del templo oficial del Gobierno mejicano donde se celebra-ban las ceremonias y actos religiosos de caraacutecter nacional se relacionoacute con personalidades poliacuteticas del paiacutes de la cancilleriacutea espantildeola y otras embajadas en especial las de habla hispana En este templo permanecioacute hasta 1909

Requerido por los superiores para trasladarse a Roma llegoacute al Ponti-ficio Colegio Espantildeol cuando terminaba como administrador del mismo y agente de preces ante el Vaticano otro sacerdote valenciano tambieacuten oriundo de Liria Luis Mariacutea Albert 3 nombrado rector del Colegio Blay

que fue agradecido al Pontiacutefice por los obispos espantildeoles en un mensaje colectivo firmado en Valencia con motivo de la celebracioacuten alliacute del primer congreso eucariacutestico nacional Moseacuten Sol fue beatificado el 29 de marzo de 1987 Entre sus escritos descatan las Plaacuteticas a los Operarios (ed Lope Rubio Siacutegueme Salamanca 2002) que recogen las charlas que dirigiacutea anualmente a los operarios durante los ejercicios espirituales y que aprovechaba para revisar la marcha de las tareas de la Hermandad estudiaba proyectos e impartiacutea instrucciones El archivo de la Hermandad custodia todos sus manuscritos divididos en tres grandes aparta-dos predicacioacuten cartas y varios Bibliografiacutea A TORRES SAacuteNCHEZ Vida del siervo de Dios don Manuel Domingo y Sol apoacutestol de las vocaciones fundador de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos del Corazoacuten de Jesuacutes Tortosa 1934 F MARTIacuteN HER-NAacuteNDEZ - L RU BIO PARRADO Moseacuten Sol Vida de Manuel Domingo y Sol fundador de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos Siacutegueme Salamanca 1978 estas dos obras son las maacutes completas y rigurosas en datos histoacutericos porque las de J DE ANDREacuteS HERNANSANZ Moseacuten Sol Barcelona 1970 y la de J Mordf JAVIERRE Reportaje a Moseacuten Sol Un hombre bueno y audaz Madrid 1987 publicada con motivo de la beatificacioacuten son de tono periodiacutestico y divulgativo Cf tambieacuten L RUBIO PARRADO - J DE ANDREacuteS HER-NANSANZ - F MAR TIacuteN HERNAacuteNDEZ Sacerdotes Operarios Diocesanos Aproximacioacuten a su historia Siacutegueme Salamanca 1996 y J DE ANDREacuteS HERNANSANZ Cien antildeos de historia Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute Roma 1992

3 Luis Mariacutea Albert realizoacute sus estudios en el Seminario central de Valencia como alum-no interno del Colegio de San Joseacute para Vocaciones eclesiaacutesticas El 22 de diciembre de 1888 ya quiso ingresar en la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos aunque se oponiacutean sus padres pobres y ancianos que lo necesitaban pero insistioacute hasta conseguirlo Prestoacute ayu-da en el Colegio de Orihuela y tambieacuten en el de Murcia Luego pasoacute al de Valencia Ingresoacute en la Hermandad en septiembre de 1890 Recibioacute la ordenacioacuten sacerdotal en 1892 cele-brando su primera misa en Valencia el 4 de octubre de ese antildeo Permanecioacute en el Colegio de Valencia hasta 1894 en que fue destinado al Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma adonde

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le sucedioacute en ambos ministerios desde el 26 de octubre de 1909 Durante 1915 viajoacute a Pariacutes para atender espiritualmente al presidente mejicano Porfirio Diacuteaz gravemente enfermo de quien habiacutea sido amigo y con-sejero y a quien ayudoacute a morir cristianamente Acompantildeoacute al cardenal Benlloch arzobispo de Burgos en su embajada espiritual del antildeo 1923 a Hispanoameacuterica que tanto sirvioacute para estrechar los viacutenculos de aquellos paiacuteses con Espantildea

Durante tres deacutecadas don Carmelo no soacutelo fue procurador general de la Hermandad de Sacerdotes Operarios y administrador del Colegio Espantildeol sino el sacerdote maacutes popular de Roma consultor guiacutea y amigo de cuantos en Espantildea o en Hispanoameacuterica teniacutean algo que resolver en la Curia romana Como Agente de preces4 fue la persona que despachaba

llegoacute con Moseacuten Sol el diacutea 30 de octubre para encargarse de la administracioacuten del colegio y de la agencia de preces hasta 1909 en que fue nombrado rector del mismo Desde 1911 a 1914 convivioacute en el Colegio con el beato maacutertir Juan Ventura Solsona tambieacuten valenciano El antildeo 1914 fue destinado como rector al seminario de Barcelona donde estuvo hasta 1916 dejando muy buen recuerdo de su gestioacuten En 1916 pasoacute como director al Colegio de San Joseacute de Valencia y en 1921 fue nombrado rector del Seminario de Salamanca donde enfer-moacute muy gravemente el 3 de abril de 1925 El 9 de junio pudo viajar a Liria para reponerse lo que consiguioacute muy lentamente En octubre de 1926 fue destinado como director al Colegio de Valencia y el 17 de marzo de 1927 se ofrecioacute para ir de nuevo al Colegio de Roma como administrador porque el que ejerciacutea dicho ministerio habiacutea entrado en la cartuja de Florencia Pero no se le dio este cargo porque superaba sus fuerzas mermadas debido a su enfermedad En 1928 pidioacute a la Santa Sede dispensa del voto indefini do de pertenencia a la Hermandad para poder residir en su pueblo natal de Liria pero siempre continuoacute en estrechas relaciones con los directores generales por lo que se le puede considerar de hecho operario diocesano hasta el fin Reducido desde entonces a atender a su quebrantada salud en su retiro de Liria Alliacute le sorprendioacute la persecucioacuten religiosa y fue martirizado en Paterna en cuyo cementerio fueron depositados sus despojos que el diacutea 10 de diciembre de 1939 recibieron cristiana sepultura en el de Liria (cfr mi Diccionario de Sacerdotes diocesanos espantildeoles del siglo XX Madrid 2006 92)

4 La Agencia de preces de Espantildea en Roma era una institucioacuten del Estado creada a fi-nales del siglo XVIII que dependiacutea de la Embajada cerca de la Santa Sede y a traveacutes de ella tramitaban los espantildeoles (obispos eclesiaacutesticos y laicos) todos los asuntos que requeriacutean la intervencioacuten del Papa o de los organismos vaticanos En 1908 a raiacutez de la reforma de la Curia romana se dejoacute libertad a los fieles para usar libremente el agente o expedicionero que fuese de su confianza Lentamente la Agencia de preces estatal fue perdiendo la intensa actividad que hasta entonces habiacutea tenido y por ello en 1926 el embajador en Roma y agente real conde de Vintildeaza confioacute la Agencia real de preces al rector del Colegio Espantildeol Este a su vez encomendoacute dicha funcioacuten a un sacerdote de los Operarios Diocesanos del Colegio y por este motivo el primer agente fue don Carmelo Desde ese momento los obispos espantildeoles se sirvieron de la Agencia para la expedicioacuten de preces que afectaban a sus dioacutecesis Tras el Con-cilio Vaticano II y despueacutes de la consiguiente reforma de la Curia romana y descentralizacioacuten de facultades la Agencia de preces quedoacute muy reducida y casi vaciada de contenido si bien se mantuvo figura juriacutedica hasta 2016 Actualmente es el rector del Colegio quien gestiona en la Curia romana los asuntos que un tiempo fueron encomendados a la Agencia

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mil asuntos de las dioacutecesis en el Vaticano obteniacutea audiencias pontificias y bendiciones apostoacutelicas acomodaba peregrinaciones organizaba visitas a las basiacutelicas etc En el ejercicio de este ministerio puso siempre a con-tribucioacuten su incansable voluntad e influencia en los ambientes vaticanos y romanos para logar el mejor eacutexito en el servicio de los obispos quienes con confianza ilimitada le encomendaron la tramitacioacuten de los asuntos maacutes delicados Y esta labor fue tan extensa y tan fecunda que su persona estuvo unida a todos los problemas religiosos que en la Ciudad Eterna tuvieron relacioacuten con Espantildea

La palabra agencia podriacutea parecerle a alguno sinoacutenimo de traacutemite burocraacutetico ya que no es muy distinto el cometido de la misma Pero con las preces y los rescriptos iban unidas en aquellos tiempos una multitud de cuestiones de gran intereacutes para las dioacutecesis puesto que se trataba con frecuencia de problemas complejos que necesitaban urgente solucioacuten y que afectaban a las relaciones entre las dioacutecesis y la Santa Sede A todo procuroacute atender don Carmelo y para todo cuando motivos superiores no lo impediacutean encontraba una respuesta satisfactoria Mas no siempre era faacutecil resolver sin complicaciones algunos asuntos Entonces empe-zaba para don Carmelo un nuevo esfuerzo visitaba al cardenal prefecto de la Congregacioacuten o al secretario de la misma estudiaba el problema y lo daba tambieacuten a estudiar a personas competentes y de su confianza redactaba una pro-memoria y a veces los votos o pareceres que le pediacutean los dicasterios todo para buscar la solucioacuten maacutes conveniente Y a esta al final llegaba

Don Carmelo no llevoacute solamente los asuntos eclesiaacutesticos de casi todas las dioacutecesis espantildeolas sino que fue tambieacuten agente oficial de preces de la Embajada de Espantildea ante la Santa Sede Este campo de su actividad que exigiacutea exquisito tacto y delicadeza fue cultivado por eacutel uniendo sus dos grandes amores la Iglesia y Espantildea En los momentos difiacuteciles en las situaciones maacutes o menos complicadas la acertada actuacioacuten de don Car-melo vino muchas veces a despejar el horizonte con completa satisfac-cioacuten de los embajadores que vieron en su persona un haacutebil y capacitado colaborador para promover los intereses religiosos de Espantildea

De toda la Curia romana ninguacuten dicasterio estimoacute tanto la labor de don Carmelo como la Secretariacutea de Estado Puede decirse que praacutecticamente era el minutante para la lengua espantildeola pues durante muchos antildeos se le encomendaron la redaccioacuten de cartas telegramas documentos varios y las traducciones de muchos textos

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Dedicoacute particular atencioacuten a los peregrinos que llegaron a Roma con motivo del Antildeo Santo Extraordinario de 1933 Y al antildeo siguiente acom-pantildeoacute a los miembros de la Juventud de Accioacuten Catoacutelica de Espantildea tanto en su visita a Roma como a la Ciudad del Vaticano prodigando afec-tuosas atenciones a los peregrinos y facilitando audiencias y accesos a monumentos histoacutericos y centros oficiales La revista Signo oacutergano de los Joacutevenes de Accioacuten Catoacutelica teniacutea en eacutel el medio seguro de obtener informacioacuten graacutefica o literaria sobre el Vaticano en cualquier momento y en muchas ocasiones puso su contribucioacuten personal al servicio de este semanario

Pero fue durante los azarosos antildeos de la Guerra civil espantildeola cuando tuvo que desplegar toda su actividad Digna de todo encomio fue su ac-tuacioacuten como delegado de Piacuteo XI para prestar atencioacuten a los sacerdotes religiosos y catoacutelicos espantildeoles que tuvieron que refugiarse en Italia du-rante el trienio 1936-1939

Ante las dificultades econoacutemicas que sufrioacute el Colegio Espantildeol a cau-sa de la guerra don Carmelo escribioacute al general Goacutemez-Jordana presi-dente de Junta Teacutecnica del Estado Espantildeol solicitando la ayuda corres-pondiente (documento 1 en el apeacutendice de este artiacuteculo)

Tambieacuten informoacute al cardenal Pacelli sobre las opiniones de las esferas gubernativas que lamentaban respetuosamente el modo como la Santa Sede trataba al Gobierno Nacional desde que comenzoacute el movimiento militar y que eran contrarias a la actitud separatista del clero vasco sobre la piedad e intensa religiosidad personal del general Franco y sobre la formacioacuten religiosa de los falangistas (documento 3)

Fue considerado el sacerdote espantildeol que sirvioacute a todos con una cari-dad exquisita Fue sacerdote piadoso diplomaacutetico haacutebil y fideliacutesimo a los sumos pontiacutefices Piacuteo XI lo llamaba il nostro interprete porque cuando teniacutea que dirigir la palabra a los peregrinos de lengua espantildeola Blay esta-ba muy cerca del Papa y repetiacutea en castellano lo que el pontiacutefice deciacutea en italiano Piacuteo XII a quien tratoacute mucho cuando trabajaba como secretario de Estado le confioacute algunos asuntos muy delicados Pero tambieacuten le tocoacute sufrir mucho y saborear contrariedades fuertes aunque jamaacutes se defendioacute ni quiso que lo defendieran

Don Carmelo Blay fallecioacute en Roma en el Palacio Altemps antigua sede del Colegio Espantildeol de San Joseacute el 2 de marzo de 1941 y fue en-terrado en el panteoacuten propiedad de la Obra Piacutea en el cementerio romano del Campo Verano

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La revista del Colegio nuestra Mater Clementissima le dedicoacute la si-guiente croacutenica

Don Carmelo Con estas dos sencillas y breves palabras que tantas cosas queriacutean decir de respeto de estimacioacuten de confianza y carintildeo era generalmente designado aqueacutel cuya reciente muerte tantos corazones lloraron y cuya bendeci-da memoria en tantas almas agradecidas seraacute eterna

laquoNuestro Don Carmeloraquo deciacutea de eacutel su santidad Piacuteo XI Y don laquoDon Carme-loraquo preguntaba con frecuencia el santo padre Piacuteo XII En las altas y en las bajas esferas de Roma en Espantildea y en la Ameacuterica espantildeola llegoacute a ser populariacutesimo y querido merced a los muchos y abnegados servicios que a su paso por ellas fue prodiga y continuamente prestando Por eso la noticia de su fallecimiento dada a conocer por la radio y por la prensa ha despertado por doquier ecos de profundo y si sincero dolor y su entierro y sus funerales han alcanzado el grado de una verdadera apoteosis de carintildeosa adhesioacuten a su personalidad y de reconocimiento plebiscitario de sus altas virtudes y merecimientos

Un libro y bien extenso seriacutea apenas suficiente para su biografiacutea ardua em-presa la nuestra al pretender bosquejar una semblanza suya para dejar registrada su figura en las paacuteginas de Mater Clementissima

Pero ademaacutes de los que pudieacuteramos llamar sus ministerios oficiales iquestquieacuten puede enumerar los que hubo de desempentildear al margen de ellos y simultaacutenea-mente durante sus treinta antildeos de permanencia en la capital del orbe catoacutelico Asombra pensar la suma enorme de energiacuteas que derrochoacute el bondadosiacutesimo e infatigable D Carmelo en su perenne afaacuten de servir a cuantos acudiacutean a eacutel con sus cuitas sus pretensiones sus consultas sus confidencias y con problemas de la maacutes diversa iacutendole

En las altas esferas del Vaticano en las Embajadas en las Congregaciones en las Exposiciones de tipo internacional en los Conventos de Religiosas es-pantildeolas sobre todo en las horas criacuteticas del establecimiento de las mismas en Roma en el confesonario ‒que tambieacuten este apostolado ejercioacute‒ y fuera de eacutel en cartas en la sala de visitas del Colegio en su modesto despacho por las calleshellip siempre donquiera fue prodigando el tesoro de sus consejos de sus palabras de aliento de sus intervenciones bienhechoras sin escatimar tiempo ni esfuerzo alguno

Fue leal noble y desinteresado servidor de los papas de cardenales de nun-cios de priacutencipes de embajadores de prelados de sacerdotes y religiosos de eclesiaacutesticos y seglares de altos y bajoshellip Y de todos ellos merecioacute la constante confianza el acendrado afecto las maacutes sinceras demostraciones de gratitud

iquestCuaacutel fue el secreto de esta universalidad y perennidad de simpatiacuteas y adhe-siones En primer teacutermino su espiacuteritu netamente sacerdotal En los maacutes varia-dos ambientes mostroacutese siempre D Carmelo antes que nada sacerdote en sus palabras en su porte modesto y recogido en su espiacuteritu y en toda su conducta

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Era el fruto de su sincera piedad sencilla pero soacutelida Apenas los negocios de fuera dejaacutebanle libre retiraacutebase en su cuarto escondiacutease en eacutel y se entregaba placenteramente al cultivo de la vida oculta y silenciosa No apeteciacutea nada No gozaba sino con la soledad de su despacho Sus devociones Sus visitas al San-tiacutesimo Retraiacutease ndashsi no se veiacutea forzado a asistir por deber de obligada cortesiacutea o por caritativa condescendenciandash de toda fiesta y holgorio por honesto que fuera Y con todo a cada hora a cada momento veiacutease precisado a sacrificar su amor a la soledad para recibir visitas Eacutel haciacutea pocas No le quedaba por antildeadidura tiempo para hacerlas Ni aun lo teniacutea casi para comer llegaba por lo general tarde al refectorio Y despachando en pocos minutos su moacutedica refec-cioacuten auacuten terminaba antes que la comunidad Era sobriacutesimo en todo Otras dotes suyas fueron la discrecioacuten en no decir sino lo que conveniacutea iexclQueacute difiacutecil arte el de saber escuchar y callar Era fideliacutesimo en guardar los secretos que le eran confiados Jamaacutes daba muestras de extrantildearse ni se espantaba de nada Su sem-blante permaneciacutea siempre inalterable aunque teniacutea muy sensible corazoacuten No ambicionaba nada y gozaba con dar cuanto teniacutea Y no daba sus cosas solo daba tambieacuten su tiempo y su persona Y lo daba sonriendo Sonriendo siempre Su espiacuteritu de abnegacioacuten de interior mortificacioacuten fue maravilloso

Ya se deja entender que no habiacutea de faltarle a eacutel tambieacuten la comuacuten suerte de las almas elevadas la gloria del dolor de la contradiccioacuten del sacrificio Y iexclqueacute cruces tan pesadas tuvo que llevar con frecuencia sobre su corazoacuten Precauciones amargas asuntos engorrosos impertinencias incomprensiones interpretaciones aviesas de su conducta o de sus miras acusaciones injustas censuras menosprecios ingratitudes deslealtades desengantildeoshellip Abundantiacutesi-ma cosecha recogioacute de todo ello a lo largo de sus actuaciones Jamaacutes perdioacute la paz Jamaacutes se descomponiacutea Encogiaacutese de hombros y callaba Sabiacutea bien que los uacutenicos anhelos de su corazoacuten eran los de servir callada humilde pero imperteacute-rritamente a Dios y a Espantildea

En momentos criacuteticos de apasionadas campantildeas cargadas de santildeudas y ma-liciosas intenciones contra eacutel ni se preocupaba de defenderse ni queriacutea que se le defendiera O dejaba todo en manos de Dios y seguiacutea su camino

Como quien por tan altas y tan santas causas trabajaba no le preocupaban ni apeteciacutea humanas compensaciones y recompensas Con todo no le fueron esca-timadas Repetidos testimonios de honor y de gratitud le otorgoacute la Santa Sede Varias son las condecoraciones y diplomas con que le significoacute su complacencia por los servicios que le prestara declaraacutendole de esa forma hijo benemeacuterito de la Iglesia

Varias repuacuteblicas de la Ameacuterica espantildeola le condecoraron tambieacuten a su paso por ellas acompantildeando como secretario al Emmo Sr cardenal Benlloch en la visita que este hizo a ellas en 1923 como Embajador espiritual de Espantildea

Como premio a los extraordinarios servicios prestados a Espantildea al terminarse el glorioso Movimiento Nacional proprio motu el Generaliacutesimo Franco le dio la

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Gran Cruz de Isabel la Catoacutelica Sin contar otros muchos que no trascendieron al puacuteblico sus afanes y su iacutemproba labor como representante y agente de Piacuteo XI en favor de los proacutefugos espantildeoles en Roma eran maacutes que suficientes para tener bien merecido tan extraordinario galardoacuten Un libro podriacutea formarse ndashque resultariacutea una apologiacutea de D Carmelondash con soacutelo extractar y ordenar una pequentildea porcioacuten siquiera de los miles de documentos y cartas que se conservan en su copioso e interesante archivo concernientes a esta materia

Pero en lo humano y espiritual a un tiempo mismo la principal recompensa que Dios quiso depararle sobre la tierra la tuvo D Carmelo en las continuas demostraciones de intereacutes de adhesioacuten y de carintildeo que sus innumerables amigos le prodigaron durante el antildeo de su postrera enfermedad

Desde el Sumo Pontiacutefice que con frecuencia solicitaba informes de su salud y cardenales nuncios embajadores prelados de la Curia que le visitaban hasta humildes religiosas que se acercaban a saber del curso de su enfermedad ha sido un no interrumpido desfile de toda suerte de personas anhelosas de testimoniarle su carintildeosa simpatiacutea y su profunda estimacioacuten Por otra parte ha disfrutado de tal copia de cuidados y asistencias de todo geacutenero que cuando en momentos de pasajera impaciencia se le haciacutea parar mientes en semejante cuacutemulo de laquomi-nosraquo y agasajos se conmoviacutea hasta derramar laacutegrimas y bendeciacutea al Sentildeor confesaacutendose inmerecedor de tanto bien Su uacutenico sufrimiento ha sido en estos largos doce meses el no poder trabajar y moverse

Al cabo todos los recursos y prevenciones de la ciencia resultaron inuacutetiles Quince diacuteas antes de su muerte una ligera bronquitis le puso en grave peligro El diacutea 2 de marzo a la una y cuarto de la tarde declaraban los Drs Rochi y Tomassi-ni luego de la segunda consulta que celebraron que la gravedad inminente habiacutea desaparecido y le autorizaron para tomar ya alguacuten alimento A las dos y cuarto cuando se disponiacutea a hacerlo quiso bajarse del lecho y el pequentildeo esfuerzo que hubo de hacer le produjo un repentino colapso Al aviso del enfermero los Su-periores que se hallaban en la Rectoral corrieron apresurados y como ya estaban siempre preparados para un lance parecido llegaron a tiempo de absolverle y darle la Extremauncioacuten La noche anterior que fue la del saacutebado habiacutea confe-sado como de ordinario con el P Pazos Sch P y en la mantildeana del domingo como todos los diacuteas habiacutea comulgado

Expuesto el cadaacutever en la capilla de San Carlos dieacuteronle piadosa y constante vela los Superiores y alumnos maacutes las innumerables personas que fueron desfi-lando para rendirle este uacuteltimo homenaje

Los Emmos Srs cardenales Tedeschini Pizzardo y Caccia Dominioni ora-ron ante su cadaacutever Otros imposibilitados por enfermedad o por hallarse ausen-tes de Roma lamentaron el no poderlo hacer

Su santidad Piacuteo XII sobre haber dado el peacutesame por conducto de su secre-tario particular que primero telefoneoacute y despueacutes vino a expresarlo de palabra envioacute al Rector del Colegio el paternal y encomiaacutestico telegrama que publi-

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camos en otro lugar de la revista El Embajador de Espantildea Sr Yanguas y los miembros de la Embajada y del Consulado fueron de los primeros en acudir al Colegio y ofrecerse para todo Consideraban la muerte de D Carmelo como peacuterdida de familia

El diacutea 4 despueacutes de haber celebrado el Rector la misa en la capilla de San Carlos a las ocho de la mantildeana fue depositado en la caja mortuoria y proce-sionalmente conducido hasta el carro fuacutenebre que lo trasladoacute acompantildeado por algunos Superiores y alumnos a la Iglesia Nacional de Montserrat don de por concesioacuten del Sr Embajador se celebraron luego a las diez las solem nes hon-ras fuacutenebres5

2 proacutefugos espAntildeoles en roMA

Los alumnos del Colegio Espantildeol que no teniacutean vacaciones en Espa-ntildea al terminar el curso 1935-1936 marcharon al Seminario de verano de Chiavari cerca de la ciudad de Geacutenova donde soliacutean transcurrir los me-ses estivales acogidos generosamente por el obispo de aquella dioacutecesis como en antildeos anteriores El de Chiavari estaba considerado el Seminario de verano de los espantildeoles pero aquel verano no fue como los anterio-res puesto que el 18 de julio estalloacute la Guerra civil e inmediatamente comenzoacute la tragedia de los numerosos proacutefugos que pudieron escapar de los horrores de la contienda y de la persecucioacuten religiosa y lograron establecerse en Italia

Mientras los colegiales estaban en Chiavari llegoacute a aquel lugar el obis-po de Cartagena Miguel de los Santos Diacuteaz Goacutemara antiguo alumno del Colegio que se presentoacute junto con su familiar vestidos ambos de paisa-no Cuando regresaron del veraneo los colegiales encontraron en Roma una nube de sacerdotes religiosos religiosas algunos seminaristas y mu-chos seglares fugitivos que huiacutean de la implacable persecucioacuten religiosa que estaba azotando aquellas primeras semanas el territorio republicano y que arrojariacutean en tres antildeos un total de 6832 eclesiaacutesticos martirizados 4184 pertenecientes al clero secular incluidos doce obispos un adminis-trador apostoacutelico y seminaristas 2365 religiosos y 283 religiosas

A mediados de agosto ya habiacutean llegado a Roma 167 sacerdotes y como el nuacutemero aumentaba diacutea por diacutea Piacuteo XI instituyoacute en el Colegio Espantildeol un Comiteacute para la asistencia de los proacutefugos y confioacute la direccioacuten

5 Mater Clementissima 1941 202-215

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del mismo a don Carmelo quien el 22 de agosto comunicoacute a monsentildeor Tardini sustituto de la Secretariacutea de Estado que la ayuda habiacutea sido orga-nizada seguacuten los deseos del Papa

Come di parola ho avuto lrsquoonore di far sapere allrsquoE V Rvma oramai lrsquoaiuto ai sacerdoti spagnuoli che hanno dovuto lasciare la loro disgraziata patria egrave organizzato drsquoaccordo ai desideri espressi dal Santo Padre

Finora i sacerdoti arrivati in questa Alma Cittagrave sono 52 distribuiti nei luo-ghi seguenti Pont Collegio Spagnuolo Pont Collegio Pio Latino Americano Collegio Leoniano Figli di Maria Immacolata al Mascherone Fatebenefratelli allrsquoIsola Tiverina Domenicani Spagnuoli a via Condotti Istituto Orientale Car-melitani dellrsquoAntica Osservanza in via Sforza Pallavicini

Tra i profughi si trova SE Mons Felice Bilbao Vescovo di Tortosa presen-temente presso le Suore Ospitaliere del S Cuore a Viterbo SE Mons Giovanni Perellograve Vescovo di Vich col suo Segretario che hanno preso alloggio nella casa dei Religiosi dei SS Cuori in Roma via del Curato giaccheacute SE appartiene a detta Congregazione SE Mons Michele DiazVescovo di Cartagena col suo Segretario ospiti del Pontificio Collegio Spagnuolo in villeggiatura a Chiavari e colagrave egrave stato trasferito un Sudiacono del Seminario di Barcellona

Di questi profughi uno si egrave recato a Milano ed un altro a Viena AustriaPer alloggiare altri sacerdoti che certamente verranno Mons Guidetti Ca-

marlengo dellrsquoOpera laquoCento Pretiraquo ha messo a disposizione del Comitato fino a cento posti nella sede della stessa Opera in condizioni di favore

Grazie al paterno interessamento del Santo Padre ed alla fraterna caritagrave del Clero Romano da qualche giorno si egrave incominciato a confezionare gli abiti ec-clesiastici per tutti in seguito a quanto fu decisso (sic) nellrsquoadunanza della Pia Unione di S Paolo del Clero Romano che innanzi tutto fossero fatte le vesti per i medesimi Speriamo che in breve tempo saranno vestiti da sacerdote Si provede (sic) anche a SE Mons Vescovo di Vich tutto il vestiario

Si provvederagrave anche per gli indumenti necessari di biancheria cappello scar-pe etc in maniera che della benevolenza del Santo Padre e per merito del Clero Romano protranno (sic) trovare un vero sollievo questi buoni sacerdoti spag-nuoli che sentono in questi momenti la grande consolazione di vedersi vicini al Padre Buono e non sanno come ringraziare il Signore di tanta caritagrave

Ieri sono stati loro consegnati i Breviari che la munificenza del Santo Padre ha fatto loro pervenire Questrsquoatto di sovrana delicata bontagrave egrave stato di sommo conforto ai profughi che in mezzo alle loro pene non potevano recitare lrsquoUffizio Divino Ora merceacute il felice delicato pensiero dellrsquoAugusto Pontefice si sentono piugrave sacerdoti percheacute potranno adempiere questo soave e consolante obbligo della recita del Breviario

Si egrave provveduto pure per gli abiti di 12 Religiose della Compagnia di Santa Teresa di Gesugrave che sono arrivate in questa Cittagrave in pietosissime condizioni

ViCente CaacuterCel ortiacute

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Nutrono tutti vivissimo desiderio di poter offrire personalmente a Sua Santitagrave i loro piugrave sentiti ringraziamenti per tanta bontagrave e manifestare una volta di piugrave i sentimenti di profonda adesione alla Sua Augusta Persona e provare la grande consolazione dellrsquoApostolica Benedizione cosigrave necessaria in questi tristi mo-menti per la cara patria cosigrave probata e per loro stessi

Coi sensi della mia sincera stima mi professo dellrsquoEV Revma affmo ser-vitore

Sac Carmelo Blay6

Iacutemprobo fue el trabajo encomendado a don Carmelo y muy poco agra-decido por algunos sacerdotes si bien a todos los tratoacute de forma exquisita buscaacutendoles alojamiento e intenciones de misas facilitaacutendoles cuanto ne-cesitaban en lo referido a ropas alimentos breviarios y libros asiacute como organizaacutendoles conferencias de Accioacuten Catoacutelica visitas a iglesias y mo-numentos Procuroacute que algunos recibieran alguna ayuda econoacutemica y que otros desarrollaran actividades ministeriales atendioacute a la asistencia de los enfermos y pensoacute incluso en los maacutes miacutenimos detalles hasta que todos abandonaron Roma

Sin embargo el Papa queriacutea que estos sacerdotes regresaran a Espantildea para trabajar en la zona nacional liberada de la persecucioacuten para cubrir las numerosiacutesimas bajas de los sacerdotes maacutertires Esta determinacioacuten pontificia sentoacute muy mal a algunos sacerdotes disgusto que se explica por lo mucho que habiacutean sufrido Blay obedecioacute al Papa pero los maacutes exal-tados le culparon sin recordar lo mucho que le debiacutean agradecer y hasta le cantaron una copla que deciacutea laquoDe Espantildea nos han echado la CNT y la FAI y en Roma nos ha abatido Monsentildeor Carmelo Blayraquo

En la intensa correspondencia epistolar que mantuvo con los mon-sentildeores Tardini y Montini conservada en el Archivo Secreto Vaticano constan mil detalles de sus preocupaciones por atender del mejor modo posible a los proacutefugos espantildeoles que fueron un total de 226 4 obispos 202 sacerdotes diocesanos 10 religiosos escolapios 8 seminaristas y 2 laicos de Accioacuten Catoacutelica7

Asimismo se interesoacute por la suerte de maacutes de 700 religiosas pertene-cientes a congregaciones que teniacutean sus casas generalicias en Roma y se

6 Archivo Secreto Vaticano (ASV) Segr Stato Guerra Spagnola 2 Fasc 4 n 7 ff 3-57 Elenco dei Vescovi Sacerdoti Religiosi Seminaristi e Laici di AC profughi dalla

Spagna accolti dal Comitato eretto dalla Santa Sede presso il Pontificio Collegio Spagnuolo per il soccorso dei medesimi (ASV Segr Stato Guerra Spagnola 1 Fasc 1 ff 1-6)

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esforzoacute para que todas ellas fueran acogidas en sus respectivas comuni-dades En una carta dirigida a monsentildeor Tardini el 19 de septiembre de 1936 le dijo

Eccellenza ReverendissimaDi nuovo mi credo in dovere di inviare allrsquoE V Revma una piccola notizia

circa i nostri cari profughi spagnoliCome sa lrsquoultima domenica sono arrivate alcune centinaia di suore profughe

della Spagna senza preaviso Subito fu stabilito che quelle Suore che avevano casa della loro Congregazione in Roma alloggiassero presso le consorelle per le altre ed anche per quelle che pur avendo casa della propria Congreazione in questa Cittagrave non potevano essere ricevute dalle loro consorelle si provide alla loro sistemazione presso diversi Istituti Religiosi femminili e debbo riconoscere che la caritagrave delle religiose sovvraabbondograve al bisogno giaccheacute non si arrivograve ad occupare tutti i posti offerti Si egrave incominciata pure la distribuzione tra le medes-ime del munifico dono di zucchero e caffeacute che novamente si degnato il S Padre di largire per i profughi

Son sicuro saragrave gradito per S Santitagrave di conoscere come il Clero Romano con fraterna caritagrave verso i sacerdoti profughi ha assecondato il Suo Paterno interessa-mento per i medesimi e cosigrave mi pregio comunicarLe che fino a questo momento il Clero Romano ha contribuito con Lire 13823 altre persone diverse residenti fuori Roma le quali riservano i loro nomi hanno versato per questo benefico scopo complessivanente Lire 1261

Con distinti ossequi mi professo dellrsquoEV Rvma affmo Servitore

Sac Carmelo Blay8

De la atencioacuten a los numerosos seglares proacutefugos se ocupoacute el con-sulado de Espantildea en Roma Y de los religiosos sus respectivas casas generalicias

La tarea encomendada a don Carmelo terminoacute al final de la guerra Pero eacutel quiso completar el trabajo durante unos meses maacutes fue el 16 de febrero de 1940 cuando envioacute la uacuteltima carta que se conserva sobre este asunto dirigida a monsentildeor Montini en la que le daba cuenta detallada de la actividad del Comiteacute creado por Piacuteo XI a favor de los sacerdotes proacutefugos y de los gastos hechos a lo largo de tres antildeos

En este sentido resulta impresionante el contenido de un voluminoso sobre que lleva este tiacutetulo Conti del Comitato pel soccorso dei profu-

8 ASV Segr Stato Guerra Spagnola 2 Fasc2 n 1 f 12

ViCente CaacuterCel ortiacute

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ghi spagnuoli creato dalla Santa Sede presso il Pontificio Collegio Spa-gnuolo 1936-1939 (ff 2ss) En eacutel se resumen tanto los ingresos como los gastos Todo ello acompantildeado de las respectivas facturas comprobantes de los gastos hechos

La citada carta a Montini deciacutea

Eccellenza Reverendissima ho il piacere di far giungere allrsquoEccellenza Vostra Reverendissima tutto lrsquoin-

cartamento di quanto si riferisce allrsquoassistenza ai sacerdoti religiosi e religiose che per la rivoluzione della Spagna arrivarono a Roma e furono accolti dalla paterna bontagrave ed inesaurible caritagrave del Santo Padre

Fra i documenti troveragrave lrsquoEccellenza Vostra la lista completa dei sacerdoti e delle religiose che arrivati in Roma furono assistiti in tutto vel in parte dalla benignitagrave del Santo Padre che come risulta da conti spese piugrave di lire duecen-tomila oltre ai molti generi alimentari zucchero caffegrave carne etc che con grande caritagrave ha fatto pervenire e mettere a disposizione del Comitato da Lui medesimo voluto in questo Pontificio Collegio Spagnollo per lrsquoassistenza ai cari profughi

Nei fogli uniti si puograve vedere non solo il conto generale ma pure le spese fatte per tutti e ciascuno dei profughi con altre notizie utili per far conoscere la caritagrave del Santo Padre Pio XII di venerata e santa memoria in un momento cosigrave doloroso per la nostra cara Spagna

In questa occasione La prego di voler umiliare ai piedi dellrsquoAugusto Pontefice gloriosamente regnante i sentimenti della mia profonda venerazione ed implo-rare per me una speciale Benedizione Apostolica mentre con devoto ossequio mi professo dellrsquoEccellenza Vostra Reverendissima devotissimo servitore

Sac Carmelo Blay9

riassunto speCifiCatiVo Drsquointroiti eD spese

Munifico dono del Santo Padre 15856385Offerta del Clero Romano 3712960Offerta dei Sacerdorti profughi spagnoli 465895Offerenti diversi 131830Totale introiti 20176070

9 ASV Segr Stato Guerra Spagnola 1 Fasc 4 ff 30-30v

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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SpeseBreviari 12368Esercizi spirituali 3540Manuali di Azione Cattolica 27000Sottane greche pantaloni etc 4157195Scarpe 630700Biancheria 736540Maglieria 835355Cappelli 300000Abiti per religiose 147100Vitto ed alloggio pei sacerdoti 7833800Vitto ed alloggio per le religiose 1505000Viaggi rimpatrio religiose e sacerdoti 2002220Tram Udienza Castelgandolfo 180000Medicine seminaristi ed alcune suore 12900Libri di testi pei seminaristi 30890Altre spese pei seminaristi 101690Opuscolo iquestQueacute ha hechohellip 70000Spese varie 57Toatel spese 20167070

Indice numerico dei diversi capi consegnati ai sacerdoti profughi spagnuoli

Breviari 192Manuali di Azione Cattolcia 60Sottane 165Greche 175Pantaloni 91Scarpe 150 pajaColletti 963Camicie 225Mutande 208Maglie 271Mutande maglia 52Gilet e Pull Ower 21Calze e pedali 407 pajaCappelli 173Fazzoletti 354Altri capi 35Totale dei capi 3532

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3 discurso de piacuteo xi A los proacutefugos espAntildeoles10

Para denunciar al mundo la persecucioacuten religiosa en la Espantildea republi-cana pensoacute Piacuteo XI dirigir una carta a su secretario de Estado el cardenal Pacelli en la que como padre de creyentes y tambieacuten de los redimidos por Cristo manifestariacutea su profundo dolor por la tragedia de Espantildea pidiendo que cesara el derramamiento de sangre entre hermanos y que en todo el mundo se rezara para acabar con la guerra fratricida por ser muy desga-rrador ver lo que estaba ocurriendo en una nacioacuten de honda tradicioacuten ca-toacutelica Despueacutes la Secretariacutea de Estado redactoacute un artiacuteculo que publicariacutea LrsquoOsservatore Romano a final de agosto pero fue suspendido porque el Papa decidioacute preparar un discurso dirigido a los proacutefugos espantildeoles que iban llegando a Roma Por esta razoacuten tampoco se publicoacute la proyectada carta pontifica dirigida a Pacelli que quedoacute en simple borrador aunque en un apunte de Pacelli estaacuten indicados con precisioacuten los temas esenciales que tratariacutea insistiendo en que debiacutea cesar cuanto antes una guerra que llevaba ya demasiado tiempo ensangrentando el territorio aunque habiacutea pasado poco maacutes de un mes desde el comienzo de la revolucioacuten Informa-dor directo de las cosas de Espantildea en el Vaticano era en aquellos momen-tos el agente de preces del Pontificio Colegio Espantildeol don Carmelo Blay a quien el mismo Papa pidioacute noticias sobre los obispos espantildeoles que iban llegando a Roma por aquellas fechas

El papa tomoacute esta iniciativa despueacutes de pensarlo mucho y de valorar las diversas opciones que debiacutea adoptar frente a la situacioacuten espantildeola ya que desde primeros de agosto se preguntoacute que podiacutea hacer la Santa Sede ante la gravedad de los hechos ademaacutes de protestar eneacutergicamente ante el gobierno republicano

A medida que llegaban noticias al Vaticano sobre la magnitud de la tragedia tanto por la prensa como por relatos de testigos presenciales que habiacutean conseguido escapar a tiempo se planteoacute la oportunidad de con-ceder una audiencia a 500 proacutefugos espantildeoles que tuvo lugar el lunes 14 de septiembre de 1936 en Castelgandolfo Guiaban el grupo los obispos de

10 El discurso del Papa fue escuchado por radio por los alumnos del Colegio Espantildeol desde el Seminario de verano de Chiavari En versioacuten original italiana y en traduccioacuten cas-tellana fue publicado en LrsquoOsservatore Romano del 14-15 de septiembre de 1936 pero en Espantildea fue censurado tanto por los republicanos como por los nacionales Tambieacuten lo publicoacute censurado A Montero Moreno en su laquoHistoria de la persecucioacuten religiosaraquo (BAC Madrid 1960 741-742) Lo he publicado iacutentegro en el volumen IV de mi obra laquoLa Segunda Repuacutebli-ca y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticanoraquo BAC Madrid 2016 768-776

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Urgel Justino Guitart de Cartagena Miguel de los Santos Diacuteaz Goacutemara de Tortosa Feacutelix Bilbao y de Vich Juan Perelloacute El cardenal Pacelli los presentoacute al Papa pronunciando un amplio discurso Y don Carmelo tradujo de memoria como soliacutea hacer sin perder coma la importante alocucioacuten que el Papa dirigioacute a los proacutefugos espantildeoles

Esta fue la primera intervencioacuten puacuteblica de Piacuteo XI acerca de la dramaacute-tica situacioacuten espantildeola y en ella habloacute del heroiacutesmo de laquonuestros maacuter-tiresraquo en teacuterminos muy claros laquoPersonas sagradas cosas e instituciones sagradas tesoros inestimables de civilizacioacuten y de arte objetos preciosiacute-simos reliquias santiacutesimas obispos y sacerdotes viacutergenes consagradas seglares de toda clase y condicioacuten venerables ancianos joacutevenes en la flor de la vida y el mismo sagrado y solemne silencio de los sepulcros todo ha sido asaltado arruinado destruido con los modos maacutes villanos y baacuterbaros con el desenfreno maacutes libertino jamaacutes visto de fuerzas sal-vajes y crueles que pueden creerse imposibles no digamos a la dignidad humana sino hasta la misma naturaleza humana aun la maacutes miserable y la caiacuteda en lo maacutes bajoraquo

Condenoacute tambieacuten el Papa en teacuterminos contundentes la matanza entre hermanos laquoLa guerra civil la guerra entre los hijos del mismo paiacutes del mismo pueblo de la misma madre patria iexclDios miacuteo La guerra es siempre cosa tan tremenda e inhumanahellip iquestqueacute decir cuando la guerra es entre her-manos iquestqueacute podraacute decirse de las matanzas entre hermanos que todaviacutea continuamente se anuncianraquo

En tercer lugar habloacute de las ensentildeanzas de la guerra para Europa y el mundo entero laquoazorado enmarantildeado trastornado por la propaganda subversiva y particularmente a Europa ya tan profundamente perturbada y tan fuertemente sacudida para este mundo los tristes hechos de Espa-ntildea dicen y predicen una vez maacutes hasta queacute extremos estaacuten amenazadas las bases mismas de todo orden de toda civilizacioacuten y de toda culturaraquo Por uacuteltimo se refirioacute a los otros llamaacutendoles asiacute laquoiquestQueacute decir de todos aquellos otros que tambieacuten son y permanecen siendo hijos Nuestros no obstante que en las personas y en las cosas que Nos son maacutes queridas y maacutes sagradas con actos y meacutetodos extremamente odiosos y cruelmente persecutorios y aun en Nuestra misma persona cuanto la distancia lo consentiacutea con expresiones y actitudes sumamente ofensivas Nos han tratado no como hijos a un Padre sino como enemigos a un enemigo par-ticularmente odiado Tenemoshellip que amarles con un amor particular de compasioacuten y de misericordia amarles y no pudiendo hacer otra cosa orar

ViCente CaacuterCel ortiacute

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por elloshellip orar para que esteacuten con Nos cuando dentro de poco ndashtenemos plena confianza en Dios benditondash el arco iris de la paz brillaraacute en el her-moso cielo de Espantildea trayendo el alegre anuncio a todo vuestro grande y magniacutefico paiacutesraquo

Los diarios republicanos de Madrid comentaron la noticia difundida por las agencias que deciacutea escuetamente que laquoel discurso del Papa no ha revestido ninguacuten caraacutecter poliacutetico Se trata de un llamamiento cristiano en favor de la paz dirigido a Espantildea entera y en el que no se mencio-na ninguna doctrina poliacutetica El Papa se limitoacute a poner en guardia a su auditorio contra las fuerzas subversivas que solo pueden desarrollarse luchando contra la Iglesiaraquo Esta uacuteltima frase fue suficiente para que al-gunos perioacutedicos destacaran en titulares su ancestral anticlericalismo laquoHa bloacute el Sumo Pontiacutefice en favor de la paz pero olvidoacute condenar a los obispos que bendicen las armas mortiacuteferas y esconden tesoros fabulosos y a los falsos cristianos que utilizan soldados mahometanos para asesinar espantildeolesraquo (La Libertad) laquoHa hablado el Papa y no ha condenado los criacute-menes de sus hijos de Espantildea pero los previene contra las fuerzas subver-sivasraquo (El Socialista) laquoEn el discurso del Papa estaacute ausente el verdadero espiacuteritu cristianoraquo (La Libertad)

Cuando Piacuteo XI pronuncioacute este discurso no se habiacutean cumplido todaviacutea dos meses desde el comienzo de la revolucioacuten y las viacutectimas eclesiaacutesti-cas de la persecucioacuten religiosa se aproximaban a los 3400 Durante los uacuteltimos diacuteas del mes de julio el nuacutemero de viacutectimas del clero ascendioacute a 861 y soacutelo el diacutea de Santiago patroacuten de Espantildea 25 de julio fueron mar-tirizados 95 miembros del clero secular En agosto se alcanzoacute la cifra maacutes elevada con un total de 2077 asesinatos que corresponden a una media de 70 al diacutea entre los cuales hay que incluir a diez obispos

iquestPor queacute no gustoacute a laquounosraquo ni a laquootrosraquo este discurso A los unos (los nacionales) porque les parecieron excesivas las palabras de amor compasioacuten y misericordia hacia los otros (los rojos) Y a estos por la denuncia que el Papa hizo de la cruel persecucioacuten religiosa que habiacutean desencadenado y de la destruccioacuten que habiacutean hecho en apenas dos meses de conflicto de todo lo humano y lo divino

La extensa alocucioacuten pontificia del 14 de septiembre redactada de su puntildeo y letra por Piacuteo XI y leiacuteda por eacutel con voz emocionada es un texto fundamental para la historia de la persecucioacuten religiosa espantildeola pues en ella se refiere por primera vez a las viacutectimas como maacutertires

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4 proacutefugos ilustres

He dicho anteriormente que uno de los primeros proacutefugos acogidos en el Colegio Espantildeol fue el obispo de Cartagena que llegoacute a Chiavari el 14 de agosto de 1936 Eacutel mismo relatoacute en esta extensa carta dirigida a Pacelli los horrores de la persecucioacuten religiosa en su dioacutecesis y coacutemo consiguioacute salvar la vida y llegar a Italia

Chiavari 21 de agosto de 1936JHS Pontificio Colegio Espantildeol de San JoseacutePalazzo Altemps Roma

Emmo y Rvmo Sr Cardenal Secretario de EstadoCiudad del Vaticano

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo SentildeorEl diacutea 22 del pasado julio (mantildeana hace un mes) hallaacutendome en mi pala-

cio episcopal de Murcia ciudad donde tiene su residencia oficial el Obispo de Cartagena se me presentaron pistola en mano tres enviados del Frente Popu-lar intimaacutendome abandonara el palacio para instalar ellos en el mismo la Casa del Pueblo antildeadiendo que veniacutean a avisaacutermelo por orden del Comiteacute a fin de que no me opusiera y no hubiera derramamiento de sangre Pediacute algunas horas de tiempo paras arreglar mi equipaje y por fin me concedieron hasta la tarde inmediatamente ayudado por algunos profesores del Seminario que se comu-nica con palacio y que hice venir enseguida empezamos todos a poner a salvo algunos documentos dinero y ropas pero apenas habiacutea pasado media hora se presentaron las turbas a la puerta acompantildeadas de algunos guardias de asalto o sea de policiacutea gubernativa mientras el Gobernador civil me avisaba por teleacute-fono para que me pusiera en salvo Inmediatamente el vicerrector del Seminario me pasoacute a su habitacioacuten donde me puse traje de paisano y eacutel me llevoacute al Asilo de las Hermanitas de los Pobres en las afueras de Murcia donde estuve 15 diacuteas oculto pero habieacutendose sabido por varios el lugar de mi retiro incluso por los revolucionarios pues los comunistas en una de sus reuniones trataron ya de ve-nir a cogerme me fui al Asilo de las Madres Oblatas donde pareciacutea podriacutea estar mejor protegido ya que por recibir ellas joacutevenes descarriadas algunas enviadas por la misma autoridad gubernativa y por habeacuterseles dado por los mismos diri-gentes del movimiento revolucionario plenas seguridades de que seriacutea aquella casa respetada nos parecioacute lugar muy apropiado pero resultoacute que por haber vis-to entrar algunos en traje de paisano en la casa quizaacutes ya antes de ir yo la policiacutea recibioacute una confidencia sin duda de alguacuten vecino o vecina izquierdista de que en aquella casa habiacutea reuniones de fascistas (cosa enteramente falsa pues sola-mente fueron el capellaacuten del Convento a celebrar la santa misa y mi capellaacuten y el

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vicerrector del Seminario a prepararme mi estancia y luego mi capellaacuten a estar conmigo) lo cierto es que a las 3 de la tarde del segundo diacutea de mi refugio alliacute se presentaron numerosos policiacuteas cercaron unos toda la casa y otros penetraron dentro y la registraron durante dos horas y media recorrieacutendola toda excepto la habitacioacuten donde tras de una puerta estaacutebamos mi capellaacuten y yo escondidos Quedamos asiacute milagrosamente en salvo pero la prudencia y la amenaza que hicieron de volver a hacer nuevos registros alliacute me obligaron a buscar nuevo refugio primero en casa de una piadosa sentildeora despueacutes en casa de otra mientras mi capellaacuten habiacutea salido de Murcia buscando el modo como trasladarnos los dos a Italia pues pensamos venirnos a este amado Colegio Espantildeol del cual ambos hemos sido alumnos

Tras muchos trabajos logroacute mi capellaacuten (y si todo lo que antecede Emmo y Rvmo Sentildeor va dicho dentro de la maacutes estricta confidencia y reserva lo que sigue lo consigno bajo el maacutes rogado secreto) logroacute mi capellaacuten digo ponerse al habla con el coacutensul alemaacuten en Alicante el cual nos hizo la gran caridad de ponerse al habla con el comandante de un acorazado alemaacuten surto en aquel puer-to y con el capitaacuten de un vapor comercial que iba a venir a Geacutenova Y una vez admitidos nosotros por ellos avisado por teleacutegrafo seguacuten clave prevista entre nosotros saliacute de Murcia en tren acompantildeado de un buen seglar llevando yo un salvoconducto dado por los Comiteacutes revolucionarios a nombre distinto del miacuteo y asiacute disfrazado con nombre supuesto y traje seglar hube de esperar dos horas en la estacioacuten del ferrocarril de la propia capital de mi Dioacutecesis sin que gracias a Dios la poca gente que por alliacute habiacutea me reconociera vine en el tren en tercera clase entre obreros todos ellos respirando anhelo del triunfo del gobierno de Ma-drid me visaron los milicianos el salvoconducto registraron despueacutes mi maleta al llegar a Alicante (a prevencioacuten nada eclesiaacutestico traiacutea ni aun el breviario) fui con el seglar que me acompantildeaba a un hotel donde di mi nombre supuesto de acuerdo con el salvoconducto que llevaba luego vino la policiacutea a examinar dicho salvoconducto y gracias al Sentildeor que tan palpablemente me guardaba en-controacute todo en regla Al diacutea siguiente fui al coacutensul alemaacuten y supe que mi capellaacuten ya habiacutea sido llevado la tarde anterior al acorazado vestido de marinero Des-pueacutes de recorrer algunos sitios para despistar fui por fin llevado al consulado alemaacuten donde dejando mi traje de paisano (que un alemaacuten me entregoacute despueacutes) me vestiacute con un uniforme de capitaacuten de barco alemaacuten y ya entre otros oficiales de la nave de guerra acorazada embarqueacute en la chalupa o gasolinera de la mis-ma saliendo asiacute de Alicante sin que ninguna autoridad espantildeola me viera estuve sumamente agasajado por toda la oficialidad y singularmente por el comandante del acorazado toda la tarde en este a las ocho de la noche salioacute del puerto de Alicante el barco mercante que veniacutea a Geacutenova y siguiendo eacutel su marcha des-pacio me hicieron bajar a miacute y mi capellaacuten a la chalupa o gasolinera de la nave de guerra y fuimos al encuentro del barco mercante pero con gran prudencia en vez de ir directos a eacutel nos condujeron hacia alta mar y pasamos del lado de

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estribor donde iacutebamos al de babor de la nueva nave por delante de ella a oscuras nuestra chalupa y mientras todos los pasajeros se hallaban a estribor mirando el acorazado maacutes auacuten veniacutea un soldado de la nave de guerra en el trasporte que iacutebamos a tomar y se pasoacute eacutel a la chalupa a la vez que nosotros ganaacutebamos el barco mercante que eacutel dejaba asiacute quedaba mejor justificado el acercamiento de la chalupa al barco en marcha Trasportados asiacute a la nave mercante sumamente atendidos por el capitaacuten y oficiales de ella aunque obligado yo a permanecer en mi camarote para que ninguacuten pasajero me viera pues deseaban no se supiera coacutemo veniacutea yo a Italia para evitarse compromisos con Madrid por fin llegamos felizmente a Geacutenova y una vez que desembarcaron todos los pasajeros salimos nosotros entre la tripulacioacuten del barco como si fueacuteramos de ella y fueron tan amables que nos trajeron hasta las mismas puertas de este Seminario de Chia-vari ya que por haber salido asiacute de Espantildea no traemos ninguacuten pasaporte pues soacutelo el pedirlo a las autoridades espantildeolas dependientes donde estaacutebamos del gobierno de Madrid hubiera sido motivo de prendernos

Estoy pues aquiacute Emmo y Rvmo Sentildeor gracias a la Divina Providencia que asiacute se ha dignado salvarme La Dioacutecesis quedoacute encomendada a un Vicario general con facultades de nombrar otro o proveer como creyera oportuno dentro del Derecho si eacutel se veiacutea en peligro Desde el 23 de julio estaacuten cerradas todas las iglesias de la Dioacutecesis por orden de la autoridad de Madrid Han quemado muchas imaacutegenes e incendiado algunos templos y conventos pero la mayor parte los conservan para Casas del Pueblo El palacio episcopal ha quedado en poder de ellos con todas sus oficinas y archivos sabemos han violentado las dos cajas fuertes que habiacutea y publicaron nota de haber llevado en depoacutesito al Banco de Espantildea valores y objetos de arte no nos han querido decir cuaacuteles ni cuaacutento Desde luego valores seraacuten unas trescientas mil pesetas que habiacutea en una caja lo demaacutes estaacute todo en salvo gracias a Dios de modo que econoacutemicamente las Fundaciones diocesanas no han sufrido mucho pero ademaacutes de esos valores que cogieron quedoacute en palacio toda la documentacioacuten de los archivos y de las mesas de trabajo de las oficinas y todos los muebles etc etc del mismo y los particulares miacuteos con mi ropa y utensilios de casa ya que en la escasa media hora que tuvimos de tiempo no fue posible sacar apenas nada Posteriormente hicimos las oportunas gestiones incluso a veces con peligro para mi capellaacuten para sacar algo de lo que quedoacute pero fue todo infructuoso Ignoramos queacute suer-te habraacute corrido todo incluso ornamentos pontificales y biblioteca miacutea desde luego sabemos que han destrozado las imaacutegenes del Seminario y que los libros de su biblioteca estaban tirados en uno de sus patios

Ha quedado pues Eminentiacutesimo Sentildeor la Catedral cerrada con intencioacuten han dicho de convertirla en museo para fomento de turismo el Palacio epis-copal y el Seminario mayor adjunto son ahora casa u oficinas de las diversas entidades revolucionarias (UGT CNT FAI etc etc) las casas religiosas de ensentildeanza con todo su mueblaje en manos del Gobierno para ensentildeanza laica

ViCente CaacuterCel ortiacute

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los monasterios de religiosas (lanzadas todas ellas a la calle y viviendo donde cada una ha encontrado familia suya o amigas buenas) convertidos en cuarteles de milicias rojas y saqueados todos el clero oculto y sin poder ejercer su sagrado ministerio si no es en casas particulares y con temor de represalias ya que los desgraciados revolucionarios odian los actos del culto y sobre todo no quieren se celebre en ninguacuten sitio ni casa la santa misa el Seminario menor del cual igualmente se han apoderado lo han convertido creo en hospital de sangre como tambieacuten han convertido en hospitales algunos colegios religiosos En toda la extensa Dioacutecesis de Cartagena hay muchos hombres y mujeres que no iban a misa ni teniacutean de cristianos sino el bautismo y matrimonio y el cuidado de llamar a uacuteltima hora de su vida al sacerdote por esto ahora alliacute ante la promesa que les han hecho de repartirles lo de los ricos ha prendido el comunismo y son muchos los defensores del Gobierno de Madrid aunque quedan tambieacuten muchos buenos catoacutelicos pero se hallan bajo el yugo de las milicias armadas por el Gobierno

He aquiacute Eminentiacutesimo Sentildeor lo que he creiacutedo un deber poner en cono-cimiento de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima a la vez que le participo en-contrarme en este tan amado Colegio Espantildeol actualmente de vacaciones en Chiavari a donde he venido para poner en salvo mi persona ya que todo era de temer por haber quedado defraudadas las turbas asaltantes de mi palacio al no encontrarme en eacutel por haberme escapado por la puerta posterior del Seminario no serme posible ejercer personalmente alliacute el gobierno de la Dioacutecesis en estas circunstancias por tener que estar oculto y sin apenas poder comunicar con nadie como se vio por la denuncia que motivoacute el registro del cual tan providen-cialmente me salveacute

Aquiacute estoy Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor siempre a disposicioacuten de la Santa Sede y a las gratas oacuterdenes de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima

Aprovecho esta ocasioacuten para reiterarme de Vuestra Eminencia Reverendiacutesi-ma h s s q b s s P

+ Miguel de los Santos Obispo de Cartagena11

El obispo Diacuteaz Goacutemara residioacute en el Colegio Espantildeol hasta que en junio de 1937 pudo regresar a Espantildea

Otro ilustre proacutefugo fue el obispo de Tortosa Feacutelix Bilbao Ugarriza que se refugioacute en la casa laquoVilla Rosaraquo de las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazoacuten de Jesuacutes en la ciudad de Viterbo al norte de Roma el

11 La II Repuacuteblica y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticano vol IV Documentos de los antildeos 1935 y 1936 BAC Madrid 2016 710-714

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4 de agosto de 1936 Desde alliacute mantuvo correspondencia con don Car-melo y el 13 de agosto describioacute su salida de Espantildea tras el 18 de julio de 1936 y su llegada a Italia

Villa Rosa - Sanatorium - Viterbo 13 agosto 1936Rvdo Don Carmelo BlayPontificio Colegio Espantildeol Roma

Cariacutesimo Don Carmelo

Aunque resulte un poco humillante para miacute pero me parece que el Sentildeor no me ha encontrado maduro para confesor de la fe que envuelto en la no igualada borrasca tan por sus pasos me ha conducido a este oasis de bienestar y de paz

Estaba en el Balneario de Cardoacute Del 18 al 21 de julio aislamiento rumores El 22 se vieron amenazas y peligros y asiacute con alguna angustia tres diacuteas En la noche del 25 11 y 12 de la noche soy conducido a Tortosa por unos cuantos laquobuenos revolucionariosraquo que nos condujeron al Capellaacuten Rev Calderoacute y a miacute desde luego de paisano y con lo puesto El Sr Alcalde me recibioacute atento (a las 3 madrugada y mirando por mi seguridad) en buenos autos y con distinguida es-colta me condujo a Tarragona Yo contento porque penseacute alliacute ponerme al habla con el Emo Metropolitano Al Revdo Calderoacute lo dejeacute en Tortosa

El Sr Comisario de Tarragona me dice que el Emo Cardenal tuvo que huir con los suyos el 22 Como tampoco podiacutea garantizar mi seguridad me envioacute a Barcelona donde quedeacute de hecho detenido en la Conserjeriacutea de Gobernacioacuten a las 9 de la mantildeana del domingo

Grande sorpresa y alegriacutea al encontrarme en una habitacioacuten enfrentada a la miacutea y a la que teniacutea libre acceso al Emo Cardenal y Revdo Viladrich tambieacuten de paisano y en tal facha el simpaacutetico don Juan [Viladrich] que pareciacutea el pro-totipo del perfecto trincheraire

Despueacutes de las efusiones y saludos me contaron su odisea verdaderamente seria y como maacutes antiguos me enteraron del reacutegimen de vida en aquel laquopalacioraquo

Cinco diacuteas les acompantildeeacute que tuvieron alguacuten alivio en ciertas atenciones con el Emo aunque no muy sobradas Varios diacuteas pudo recibir visitas de sus sobrinos que le trajeron ropa medicinas etc Tambieacuten le visitoacute como medico (acompantildea-do de un hijo suyo muy simpaacutetico) el famoso Dr Carochan12 que formaba parte del Gobierno de la Generalidad como Conseller de Sanidad Junto a nuestras habitaciones habiacutea otra en que dormiacutea otro Sr Consejero el Sr Mestre y este tuvo tambieacuten la atencioacuten de saludarle alguna vez

Como el Emo habiacutea conseguido comunicar con Secretariacutea de Estado de SS su situacioacuten valieacutendose del coacutensul de Italia y haciendo ver su condicioacuten de

12 Manuel Carochan profesor de la Universidad de Barcelona

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ciudadano vaticano las negociaciones seguiacutean su camino Tratoacute de incluirme en ellas pero no pareciacutea faacutecil

Por esto el jueves 30 a las 9 de la noche fue grande nuestra sorpresa cuando avisaron de que nos preparaacuteramos para marchar todos tres Y en efecto a las 10 y 12 embarcamos en el laquoFirenzeraquo buque almirante de la escuadra italiana entre atenciones y carintildeo de sus simpaacuteticos marinos El diacutea de S Ignacio tuvimos el consuelo de celebrar despueacutes de largos diacuteas de laquolaicosraquo

El viernes al anochecer trasbordamos al crucero laquoM Attendoloraquo que el saacuteba-do a las 5 de la tarde nos dejaba en Spezzia y dos horas despueacutes descansaacutebamos con los hijos de San Bruno (Farneta)

Es decir yo no descanseacute porque el clima luccense13 me era hostil El 5 a Roma y despueacutes a este precioso y sano rincoacuten Que el Sentildeor que aquiacute me ha traiacutedo como en palmas me ayude a darle gracias y corresponder a sus designios

Las noticias que se reciben de Madrid y Cataluntildea cada diacutea maacutes tristes La paacutegina de fusilamientos en masa de 109 seminaristas de Tarragona en el cemen-terio de Leacuterida es espantosa Le abrazahellip

+ Feacutelix obispo de Tortosa14

El tercero de los obispos proacutefugos en Roma fue el de Vich Juan Pe-relloacute que envioacute a Pacelli el 23 de agosto un escrito en el que expuso un juicio sinteacutetico sobre la revolucioacuten espantildeola y sobre la persecucioacuten de la Iglesia15 Este obispo residioacute desde el 21 de agosto en la casa de los religiosos de los Sagrados Corazones congregacioacuten a la que perteneciacutea situada en Via del Curato muy proacutexima al puente de Castel SantrsquoAngelo El 5 de marzo de 1937 pudo regresar a su tierra natal de Mallorca

El cuarto fue el obispo de Urgel Justino Guitart que residioacute habitual-mente en la Casa de los jesuitas de San Remo si bien hizo algunos viajes a Roma y vivioacute en el Colegio Espantildeol

La mayoriacutea de los sacerdotes procediacutea de las dioacutecesis catalanas salvo dos de Orihuela y Astorga Los que no tuvieron cabida en el Colegio Espa-ntildeol fueron acogidos en gran parte en el hospicio romano de laquoCento Pretiraquo situado en el Lungotevere frente al Ponte Sisto mientras que algunos se instalaron individualmente en las casas y colegios indicados en la carta de don Carmelo a Tardini anteriormente citada

13 Se refiere a la ciudad de Lucca cerca de la cual estaacute la cartuja de Farneta14 La II Repuacuteblica y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticano vol IV Documentos

de los antildeos 1935 y 1936 686-68715 Ibid 718-724

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5 don cArMelo blAy y el cArdenAl vidAl y bArrAquer

El maacutes ilustre de los proacutefugos espantildeoles en Italia fue el arzobispo de Tarragona cardenal Francisco Vidal y Barraquer16 que residioacute en la Car-tuja de Farneta durante los antildeos de la guerra tan soacutelo acudioacute a Roma en febrero de 1939 para participar en el coacutenclave tras la muerte de Piacuteo XI el 10 de febrero de 1939 Hablo de eacutel en estas paacuteginas por la relacioacuten que tuvo don Carmelo Asiacute en el documento 2 que se recoge en el apeacuten-dice don Carmelo aporta algunas noticias sobre la situacioacuten espantildeola y la actitud del Gobierno nacional contra el obispo Muacutegica y el cardenal Vidal mientras que en el documento 4 informa detalladamente sobre las gestiones que realizoacute por encargo expreso del cardenal Pacelli para con-seguir que el cardenal Vidal renunciase al gobierno de la archidioacutecesis de Tarragona

Al estallar la revolucioacuten de 1936 Vidal conocioacute personalmente los horrores de la perse cucioacuten republicana de la que fue viacutectima soacutelo en sus primeros diacuteas El 21 de julio de 1936 salioacute de su palacio arzobispal y fue trasladado a Poblet donde fue detenido dos diacuteas maacutes tarde por elementos de la FAI (Federacioacuten Anarquista Ibeacuterica) y encarcelado en Montblanch quedando encerrado laquoen un calabozo sin maacutes muebles que dos jergones de paja y unos trozos de mantaraquo consiguioacute salvarse gracias a la inter-vencioacuten de las autoridades de la Generalitat y el 30 de julio se embarcoacute en Barcelona hacia Italia acogido con todos los honores en el crucero de la marina italiana Fiume despueacutes se establecioacute en la cartuja de Farneta cerca de Lucca de riguroso incoacutegnito

Hubiera sido su deseo al salir de Espantildea dirigirse a la Ciudad Eterna para presentarse seguidamente al Romano Pontiacutefice pero en atencioacuten a cir-cunstancias especiales que exigiacutean que permaneciera por una temporada ignorado en Espantildea su paradero se le pidioacute que eligiera una casa religiosa donde pudiera hacer vida retirada para evitar que la prensa se ocupase de su huida de Espantildea Por la buena amistad que le uniacutea a los monjes decidioacute establecerse en dicha Cartuja de riguroso incoacutegnito recibiendo toda la correspondencia bajo sobre exterior a nombre del P Prior

Antes de embarcarse para Italia el cardenal hizo lo posible por liberar a su obispo auxiliar el beato Manuel Borraacutes Ferreacute pero todos sus esfuer-

16 Sobre su biografiacutea remito a la que le he dedicado en el laquoDiccionario Biograacutefico Es-pantildeolraquo vol XLIX Real Academia de la Historia Madrid 2013 890-894

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zos resultaron vanos el obispo siguioacute detenido en Montblanch y fue fusi-lado el 12 de agosto aun cuando le dijeron al cardenal que nada contra eacutel existiacutea y que su detencioacuten era para la seguridad personal del mismo De la muerte del auxiliar tuvo noticia el cardenal diacuteas maacutes tarde y supo que ha-biacutea sido asesinado por anarquistas los cuales se ensantildearon baacuterbaramente en su cadaacutever quemaacutendolo

Vidal envioacute al cardenal Pacelli secretario de Estado una relacioacuten de-tallada sobre su salida de la Espantildea republicana En ella describioacute su detencioacuten y liberacioacuten y dio noticias sobre otros obispos de la provincia eclesiaacutestica tarraconense a la vez que se fue laquorecobrando poco a poco en la medida que es posible ante el cuacutemulo de horrores sabidos de agobios y penas de incertidumbres e interrogantes que a uno le asaltan en cada momento sobre tantas y tantas cosas cariacutesimas y particularmente sobre la suerte de nuestra estimada Patria y de los intereses sagrados de la Iglesia en la mismaraquo

Pacelli acusoacute recibo de sus cartas le expresoacute el dolor por los peligros que habiacutea pasado y por los inauditos desoacuterdenes de Espantildea y le dijo que al Papa le pareciacutea oportuno que permaneciera en incoacutegnito en la Cartuja de Lucca Tambieacuten manifestoacute su preocupacioacuten por los otros obispos de los que no se teniacutean noticias en Roma y comentoacute la admirable conducta de los joacutevenes de Accioacuten Catoacutelica laquodiezmados por la barbarie roja en medio de continuos peligros y sufrimientos que no desdeciacutean de los maacutertires de los primeros sigloraquo

Desde Lucca siguioacute Vidal los avatares de la Guerra civil y de la per-secucioacuten religiosa en la zona republicana preocupado por la suerte de sus familiares y de los sacerdotes encarcelados y perseguidos e intensi-ficoacute sus gestiones para conseguir la liberacioacuten de muchos de ellos o para mejorar su situacioacuten ayudaacutendoles econoacutemicamente en la medida de sus posibilidades

El 1 de septiembre de 1936 Piacuteo XI invitoacute personalmente al cardenal Vi-dal para que asistiera a la audiencia prevista para el 14 de septiembre pero al diacutea siguiente 2 de septiembre Vidal escribioacute a Pacelli manifestando sus reservas sobre la oportunidad de dicha audiencia y diciendo

Temo asimismo y se lo digo a Vuestra Eminencia Revma confidencial y fraternalmente que parecido resultado pudiera producir una clamorosa reunioacuten de obispos y sacerdotes en el Vaticano ‒veo se ocupa de ello la prensa con co-mentarios divergentes‒ con eneacutergicas protestas cual merecen las barbaridades realizadas Por ello seriacutea conveniente que antes de dicha reunioacuten se procurase

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salvar todo lo que fuese posible en cuanto a personas y cosas Siempre y a priori apruebo y sigo los preceptos y orientaciones del Santo Padre a Quien amo y venero con el afecto filial maacutes acendrado pero entiendo que ello no debe ser obs-taacuteculo para que exponga en conciencia mi opinioacuten a mis Superiores sin perjuicio de rendir mi criterio y acatar luego la suprema decisioacuten cualquiera que ella sea Es ciertamente muy doloroso y subleva el alma noble generosa y recta el dejar sin puacuteblica protesta tantos sacrilegios y pecados tantos asesinatos y atrocidades tantas destrucciones y devastaciones pero al igual que Jesucristo y los primi-tivos maacutertires conviene tener una gran prudencia y paciencia por los que no reflexionan por los que estaacuten ciegos por los que exacerbados y ofuscados por la pasioacuten y el deseo de venganza no saben lo que hacen y llegan al extremo de beber la sangre de los Ministros del Sentildeor y de los buenos catoacutelicos despueacutes de haber saciado su odio martirizando horriblemente a sus viacutectimas Crea Eminencia Reverendiacutesima que al conocer todo esto hubiera preferido no haber practicado gestioacuten alguna para salvarme del naufragio y dar mi vida que poco puede rendir ya por Dios por la Iglesia y por la Patria estariacutea ya sin duda en el cielo No se me oculta que una puacuteblica protesta alentariacutea a los buenos y tal vez moveriacutea maacutes y maacutes a prestar su apoyo moral y aun material a los catoacutelicos de todo el mundo pero y si Dios en sus elevados designios permite el triunfo de los enemigos iquestno seriacutea ello un mayor obstaacuteculo para que los sacerdotes pudieran entrar de nuevo en Espantildea y trabajar por la conversioacuten de nuestros paisanos quienes aunque pervertidos y malos no por ello dejan de ser nuestros hermanos Ha llegado a mis oiacutedos que algunos elementos tendenciosos que siempre han sido partida-rios de la poliacutetica catastroacutefica entre ellos sacerdotes y religiosos trabajan desde Roma para que se tengan reuniones de tonos violentos a fin de comprometer a la Santa Sede hacia determinados bandos de entre los que actualmente luchan unidos contra el anarquismo y el comunismo Me consta asimismo que en ciertas casas donde se hospedan sacerdotes refugiados en lugar de emplearse el tiempo en la oracioacuten en ocupaciones uacutetiles etc se gasta en criticar a la Jerarquiacutea y en ahondar las perniciosas divisiones entre los catoacutelicos como si no fuera bastante dura la leccioacuten recibida y asaz amargos los escarmientos sufridosraquo

No debioacute gustarle al Papa esta respuesta del arzobispo de Tarragona porque al diacutea siguiente le retiroacute la invitacioacuten ya cursada y le pidioacute a Pacelli que le escribiera una carta muy delicada dicieacutendole de parte del Papa que no era oportuno que de momento saliera de Lucca

Il Santo Padre ha deciso di ricevere il 14 settembre cm in particolare Udien-za i Vescovi gli ecclesiastici i religiosi le religiose e laici che sfuggiti agli orro-ri della persecuzione in Spagna sono attualmente in Roma LrsquoAugusto Pontefice sarebbe ben lieto di vedere alla Sua sovrana presenza tra questi figli tribolati in primo luogo lrsquoEminenza Vostra Reverendissima ma data la speciale delicatez-

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za delle presenti condizioni ed anche la di Lei personale situazione Sua Santitaacute non ritiene opportuno che VE lasci per ora la sua attuale dimora Il Santo Padre assicurando che ciograve nonostante in quella circostanza avragrave in modo tutto parti-colare presente al Suo spirito lrsquoEV per farLa participe della Sua piuacute affettuosa Benedizione non vuol tuttavia mancare fino da ora di benedirLa di tutto cuore invocando sopra di Lei i celesti conforti

Vidal respondioacute el 11 de septiembre 1936

Me honro en acusar recibo a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima de la vene-rada carta de 9 de los corrientes comunicaacutendome que el Santo Padre ha decidido recibir en Audiencia a los prelados eclesiaacutesticos y seglares proacutefugos de Espantildea que se encuentran en Roma Y toda vez que por las circunstancias que Vuestra Eminencia Revma indica no estima oportuno el Santo Padre que por ahora deje yo mi actual residencia que ni por un momento he abandonado lo cual me priva de la grandiacutesima satisfaccioacuten de unirme corporalmente a mis queridos hermanos perseguidos y confortar mi aacutenimo con las paternales palabras del Santo Padre he de rogar a Vuestra Eminencia Revma que se sirva expresar al Augusto Pontiacutefice que en tan memorable acto estareacute presente en espiacuteritu muy unido a Sus inten-ciones con deseos de sufrir maacutes por Jesucristo y por la Iglesia y que Le quedo reconocidiacutesimo por Su voluntad de hacerme partiacutecipe en dicha circunstancia de Su amorosa Bendicioacuten Paternal de la cual es ya prenda muy estimada la que con tanto afecto se ha dignado anticiparme por conducto de Vuestra Eminencia Revma En estos momentos de tan dura prueba por todos conceptos es siempre de gran consuelo y lenitivo saberse muy cerca y especialmente unido al corazoacuten de nuestro venerado Padre comuacuten

Pacelli explicoacute a Vidal las razones por las cuales el Papa hizo este discurso17

A propoacutesito de las relaciones del cardenal Vidal con Franco hay que decir ante todo que aquel ha sido presentado siempre como un eneacutergico opositor al general Se fundamenta este juicio en su negativa a firmar la carta escrita colectivamente por el Episcopado el 1 de julio de 1937 Sin embargo su cartas ineacuteditas que yo mismo he publicado recientemen-te18 desmienten por completo esta opinioacuten por cuanto nos presentan a

17 Los textos citados pueden verse en La II Repuacuteblica y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticano vol IV Documentos de los antildeos 1935 y 1936 768-769 nota 553

18 Epistolario Vidal-Pacelli-Pizzardo-Montini y apuntes de la Secretariacutea de Estado (1936-1939) in Analecta Sacra Tarraconensia 89 (2015) 267-1014

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un cardenal Vidal no solo abiertamente favorable a la persona del general Franco a quien demostroacute por escrito admiracioacuten y simpatiacutea sino tambieacuten sus deseos de que ganara la guerra y llegara a gobernar Espantildea Todo esto puede sorprendernos a estas alturas cuando se llevan maacutes de setenta antildeos exaltando el antifranquismo del arzobispo de Tarragona presentaacutendolo como un firme bastioacuten frente al Reacutegimen que Franco alumbroacute y mitifican-do un tanto exageradamente su figura en este sentido Asiacute lo evidencia esta carta del 21 de febrero de 1937

Poniendo en praacutectica los sabios consejos de Vuestra Eminencia he intentado hacer llegar reservadamente y de palabra al general Franco el testimonio de mi felicitacioacuten y simpatiacutea y mis sinceros votos por el eacutexito de la buena causa No seacute si el Emmo Sr cardenal Gomaacute a quien hice el encargo habraacute tenido ya ocasioacuten de cumplirlo Pero si a Vuestra Eminencia le pareciera conveniente u oportuna una manifestacioacuten maacutes clara y expliacutecita estoy dispuesto a ello Yo de momento por la razones indicadas en la presente y en mis anteriores que tienen auacuten todo su valor no me inclino a avanzar maacutes a no ser que Vuestra Eminencia fuese de otro parecer en cuyo caso mucho le agradeceriacutea se sirviera manifestaacutermelo Deseo vivamente que triunfe Franco pero aun cuando vaya obteniendo ventajas no se ve muy clara la actitud de ciertas grandes potencias que pueden influir decisiva-mente en la terminacioacuten de la guerra y en la forma de acabarla19

Pacelli se limitoacute a responderle que el Papa consideraba superflua una nueva manifestacioacuten maacutes clara y expliacutecita de simpatiacutea a Franco20 Pero no contento con esta respuesta siete meses maacutes tarde Vidal volvioacute a pre-guntarle a Pacelli

Si en vista de las presentes circunstancias estima oportuno que yo haga algu-na manifestacioacuten maacutes expliacutecita de simpatiacutea al general Franco en carta confiden-cial Como subsisten las mismas razones que anteriormente o sea el temor de represalias la falta de reserva la mayor dificultad que posiblemente ello impor-tariacutea para trabajar a favor de los sacerdotes y religiosos el tener toda la Dioacutecesis y Provincia Eclesiaacutestica bajo el dominio de los rojos y haber hecho ya llegar verbalmente conforme me insinuoacute Vuestra Eminencia con tanta discrecioacuten al Generaliacutesimo la expresioacuten de mis sentimientos no he creiacutedo oportuno adelantar un paso Quedo no obstante gustosamente a disposicioacuten de la Santa Sede cuyas sabias instrucciones seguireacute literalmente21

19 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Farneta 21 febrero 1937 in Epistolario 409-41620 Carta nordm 84237 de Pacelli a Vidal 13 marzo 1937 in Ibid 429-43121 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Lucca 14 septiembre 1937 in Ibid 555-558

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Pacelli le dijo que por parte de la Secretariacutea de Estado no existiacutea difi-cultad alguna para que conociendo su prudencia hiciera lo que estimara maacutes oportuno22 El arzobispo de Tarragona no ocultoacute laquolas simpatiacuteas que me han merecido los propoacutesitos y la recta intencioacuten del general Franco y la forma en que se las he manifestado ya verbalmente ya por tercera per-sona atenieacutendome a altiacutesimos consejos ya uacuteltimamente mediante carta que le dirigiacuteraquo23

Seguacuten el cardenal Vidal laquoun exagerado nacionalismo ha ofuscado a los vascos y no se comprenden las razones con que hombres de temple catoacutelico innegable hayan podido justificar su alianza con los comunistas y anarco-sindicalistas enemigos jurados de nuestra Religioacutenraquo24

Llama poderosamente la atencioacuten tras la lectura de estas cartas que la personalidad del cardenal Vidal y Barraquer aparezca muy diversa de como se la ha presentado habitualmente Y cabe preguntarse coacutemo ha sido posible construir un laquomitoraquo sin fundamento alguno en la realidad histoacuterica Vidal no soacutelo no fue antifranquista sino un sincero admirador de Franco y de su causa Por ello no ocultoacute laquolas simpatiacuteas que me han me-recido los propoacutesitos y la recta intencioacuten del general Francoraquo25 Al mismo tiempo atacoacute con mucha energiacutea a socialistas y comunistas porque laquono seriacutea viable hoy en Espantildea despueacutes de la presente guerra un gobierno en el que participaran socialistas y sus afines pues impediriacutean la soacutelida y ver-dadera reconstitucioacuten de Espantildea el castigo de los instigadores y autores de tantos y tan horrendos criacutemenes contra todo lo maacutes santo y sagrado y preparariacutean el terreno para una nueva revolucioacuten marxistaraquo26

Sus escritos nos permiten sacar estas conclusiones documentadas que no son opiniones o ilaciones personales sino testimonios escritos Scrip-ta manent Ante textos tan expliacutecitos y elocuentes cae por su peso la falsa imagen que se nos ha venido dando del cardenal Vidal en sus relaciones con Franco hasta el extremo de poder afirmar que no soacutelo fue entusias-ta defensor del general y de la laquocausaraquo que habiacutea emprendido porque creiacutea sinceramente en su rectitud de intencioacuten por el bien de Espantildea sino que ademaacutes atacoacute duramente a los comunistas socialistas y anarquistas

22 Carta n 432537 de Pacelli a Vidal del 6 noviembre 1937 in Ibid 598-59923 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Farneta 31 marzo 1938 in Ibid 71024 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Farneta 21 febrero 1937 in Ibid 411-41225 Ibid 71026 Ibid

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consideraacutendolos un mal para Espantildea Y auacuten maacutes sorprende que Vidal se declarara admirador de Mussolini consideraacutendolo laquofigura de gran pres-tigio personalraquo

Un antildeo antes del final de la guerra el Gobierno republicano invitoacute a Vidal para que regresara a Tarragona donde seriacutea recibido con todos los honores debidos a su dignidad El ministro Irujo le formuloacute esta invitacioacuten el 11 de febrero de 1938 de parte del Presidente del Gobierno Juan Ne-griacuten y del ministro de Estado Joseacute Giral laquogarantizaacutendole el respeto y la asistencia debidos a la dignidad de su persona y a los prestigios y jerarquiacutea de su cargo y jurisdiccioacutenraquo

Irujo le hizo esta invitacioacuten laquocomo vasco y como catoacutelicohellip signifi-cando la esperanza de diacuteas mejores para la Iglesia para la Repuacuteblica y para Cataluntildearaquo La prensa dio la noticia de haberse hecho la invitacioacuten antildeadiendo que el Cardenal no habiacutea contestado

El Cardenal pidioacute como condicioacuten previa para regresar a su dioacutecesis una reparacioacuten puacuteblica y sincera de los ultrajes infligidos a la Iglesia y a sus ministros gesto que nunca hicieron los republicanos por ello no aceptoacute la invitacioacuten y explicoacute sus razones en carta dirigida a Irujo

iquestCoacutemo puedo yo dignamente aceptar tal invitacioacuten cuando en las caacuterceles continuacutean sacerdotes y religiosos muy celosos y tambieacuten seglares detenidos y condenados como me informan por haber practicado actos de su ministerio o de caridad y beneficencia sin haberse entrometido en lo maacutes miacutenimo en partidos poliacuteticos de conformidad a las normas que les habiacutean dadohellip Los fieles todos y en particular los sacerdotes y religiosos saben perfectamente los asesinatos de que fueron viacutectimas muchos de sus hermanos los incendios y profanaciones de templos y cosas sagradas la incautacioacuten por el Estado de todos los bienes eclesiaacutesticos y no les consta que hasta el presente la Iglesia haya recibido de parte del Gobierno reparacioacuten alguna ni siquiera una excusa o protesta27

Particularmente molestos estuvieron los Nacionales con el cardenal Vidal al que tachaban de desarrollar actividad catalanista desde Italia La campantildea promovida contra eacutel por algunos elementos extremistas era cosa ya vieja pero se le acusaba en particular de no haber firmado la Carta colectiva del Episcopado del viaje de su vicario general Salvador Rial a Roma y Pariacutes y de sus supuestas relaciones con el presidente del Gobierno Vasco Aguirre

27 Carta de Vidal a Irujo Certosa di Farneta 30 abril 1938 in Ibid 755

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Este asunto nunca quiso tratarlo el delegado pontificio Mons Anto-niutti con las autoridades nacionales porque era particularmente delica-do pero habiacutea recibido una nota verbal del ministro de Asuntos Exteriores en la que se atribuiacutean al Cardenal gestiones en favor del Gobierno Repu-blicano que habriacutea hecho de acuerdo con los vascos en Barcelona y por consiguiente contra los intereses de la Espantildea nacional El subsecretario del Ministerio de Asuntos Exteriores le habiacutea dicho al delegado pontifi-cio laquoiquestPor queacute el cardenal se olvida de que le han asesinado a su obispo auxiliar a centenares de sacerdotes y a miles de files y han destruido todas las iglesiasraquo y le entregoacute una Nota verbal28

Precedentemente el Gobierno Nacional habiacutea protestado contra la ac-titud de algunos eclesiaacutesticos en el extranjero entre ellos el vasco Onain-diacutea los citados Carreras Trens y otros Antoniutti habiacutea dado amplias noticias sobre los asuntos de Cataluntildea y en particular sobre los intentos de restablecer el culto pero no se explicaba los contactos del cardenal Verdier arzobispo de Pariacutes con el ministro republicano Irujo y con repre-sentantes vascos y catalanes para normalizar la situacioacuten religiosa Habloacute tambieacuten de la impresioacuten negativa que tanto Franco como sus ministros teniacutean del cardenal Vidal al que no dejaron que regresase a Tarragona para ponerse libremente al frente de su archidioacutecesis antes de que llegasen a ella los nacionales

El cardenal Pacelli informoacute sobre este asunto al nuncio en Francia Valeri y tambieacuten al cardenal Vidal quien respondioacute a Pacelli el 31 de marzo de 1938 desde la Cartuja de Farneta mediante una extensa carta confidencial en la que tras agradecerle el enviacuteo de la mencionada Nota verbal del Ministerio de Asuntos Exteriores expuso ampliamente su ac-titud al respecto

En la mencionada carta el cardenal Vidal habloacute expliacutecitamente sobre laquolas simpatiacuteas que me han merecido los propoacutesitos y recta intencioacuten del general Franco y la forma en que se las he manifestado ya verbalmente y por tercera persona atenieacutendome a altiacutesimos consejos ya uacuteltimamente mediante carta que le dirigiacute que las poquiacutesimas veces que he tenido co-municacioacuten con alguna persona del Gobierno de Barcelona ha sido para pedir el indulto o la liberacioacuten de condenados y presosraquo Y defendioacute al doctor Carreras aduciendo como argumento el hecho de que le laquohabloacute

28 Despacho Nordm 28838 de Antoniutti a Pacelli San Sebastiaacuten 9 marzo 1938 in AAEESS Spagna 896 fasc 299 ff 47-48v

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muy elogiosamente del general Franco en favor del cual se mostroacute muy decidido y de las liacuteneas generales de un libro que preparaba en defensa de la actuacioacuten de la Iglesia durante el periodo de la Repuacuteblica y de la del citado Generalraquo29

Desde que el encargado de negocios de la Espantildea Nacional en el Va-ticano Pablo Churruca se entrevistoacute con Pacelli por primera vez quedoacute planteado el laquocaso Vidalraquo y ya entonces le expuso la necesidad de que fuera estudiada una solucioacuten satisfactoria para el Gobierno Nacional so-bre la futura situacioacuten del Cardenal y tambieacuten del obispo Muacutegica que se habiacutean negado a firmar la Carta colectiva A los ojos del Gobierno Nacio-nal no era necesario exhibir otros argumentos para pedir que el Cardenal no volviera jamaacutes a Tarragona que los que eacutel mismo habiacutea proporcionado y probaban su falta de identificacioacuten con los ideales poliacuteticos del Gobier-no Nacional30

El domingo 29 de enero de 1939 el embajador Yanguas fue recibido por el cardenal Pacelli En la conversacioacuten que mantuvieron el emba-jador le habloacute principalmente de la situacioacuten del cardenal Vidal Le dijo de forma categoacuterica que el Gobierno no podiacutea admitir ni que el Cardenal regresara a Tarragona ni que la administrase por medio de un delegado suyo Pacelli respondioacute que esta medida era muy grave en primer lugar porque se trataba de un arzobispo y priacutencipe de la Iglesia al que se le queriacutea impedir el ejercicio de su jurisdiccioacuten y en segundo lugar por la mala impresioacuten que esto produciriacutea en la opinioacuten puacuteblica mundial La respuesta del embajador fue que el Gobierno no temiacutea a la opinioacuten puacuteblica porque los hechos que justificaban plenamente su medida estaacuten muy documentados Por otra parte lo justificoacute diciendo que tambieacuten el cardenal Segura se habiacutea visto obligado a renunciar a su archidioacutecesis Pacelli respondioacute argumentando que aquello habiacutea sido llevado a cabo por un Gobierno hostil a la Iglesia mientras que ahora el Gobierno Na-cional se proclamaba catoacutelico El embajador replicoacute que la renuncia de Segura se hizo con intervencioacuten de la Santa Sede a lo que Pacelli respon-dioacute que Segura regresoacute a Toledo con el pleno consentimiento de la Santa Sede pero que fue expulsado despueacutes por el Gobierno republicano por la fuerza y soacutelo entonces la Santa Sede se vio obligada a proveer a la ad-

29 Epistolario 707-70930 Veacutease Apunte de la Secretariacutea de Estado del 9 de octubre de 1937 in AAEESS Spag-

na 908 fasc 316 f 33

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ministracioacuten de la dioacutecesis En cambio en aquel momento un Gobierno catoacutelico impediacutea el ejercicio de la jurisdiccioacuten y el regreso de un cardenal arzobispo a su sede Pacelli anotoacute en su apunte que no habiacutea resultado posible convencer al embajador porque habiacutea recibido instrucciones pe-rentorias de su Gobierno Por ello laquono me ha quedado maacutes remedio que renovar al embajador la expresioacuten de la extrema gravedad de semejante peticioacuten y que la cosa seriacutea estudiada para llegar posiblemente a una so-lucioacuten satisfactoriaraquo31

El mieacutercoles 8 de febrero de 1939 Yanguas se entrevistoacute nuevamente con Pacelli y despueacutes de haberle narrado algunos episodios de los horro-res cometidos por los republicanos en Cataluntildea le habloacute otra vez de la cuestioacuten del cardenal de Tarragona Pacelli le repitioacute cuanto ya le habiacutea dicho anteriormente que la Santa Sede no podriacutea consentir que le fuera impedida la jurisdiccioacuten eclesiaacutestica a un arzobispo y priacutencipe de la Igle-sia sin alguacuten motivo canoacutenico y defendioacute la conducta de Vidal valieacuten-dose del pro-memoria que le habiacutea hecho llegar el canoacutenigo Viladrich El embajador respondioacute diciendo laquoEn cualquier caso no hay esperanza alguna de que el Cardenal pueda regresar y si por hipoacutetesis el Gobierno le permitiese el regreso la opinioacuten puacuteblica no lo tolerariacutea y la dioacutecesis quedariacutea sin gobiernoraquo32

Don Carmelo por encargo de Pacelli visitoacute a Vidal en la Cartuja de Farneta y le refirioacute todo lo dicho anteriormente El Cardenal pidioacute que se hiciera un expediente o proceso para que pudiera defenderse porque se trataba de su buen nombre y dignidad porque ademaacutes se veriacutea que en todo este tiempo cuanto eacutel habiacutea hecho por la Espantildea Nacional primero haciendo que su sobrino mayor saliera de la Espantildea roja y se presentara enseguida para alistarse entre las tropas de Franco que ademaacutes a cuantos joacutevenes se le habiacutean presentado para pedirle consejo les habiacutea dicho que deberiacutean marcharse enseguida para luchar en favor de los nacionales que en su misma casa y familia se habiacutea hecho todo lo posible para defender y ayudar a los sacerdotes y religiosas durante los antildeos de revolucioacuten y de persecucioacuten que si eacutel mismo habiacutea estado fuera de Espantildea durante ese tiempo habiacutea sido exclusivamente porque asiacute podiacutea trabajar desde fuera en favor de los sacerdotes de su dioacutecesis que estaban sufriendo en las caacuterceles y en grave peligro de ser asesinados que por esto mismo y por

31 AAEESS Stati Ecclesiastici posiz 340b fasc 364 f 13232 Ibid f 133

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no hacer dantildeo a la Espantildea Nacional no se habiacutea marchado a Francia a pesar de las varias invitaciones que le habiacutean hecho en este sentido que por estas mismas consideraciones nunca quiso tampoco acceder a las indicaciones recibidas para que volviera a su dioacutecesis de Tarragona con la promesa de que le dejariacutean en libertad para actuar Por todo esto creiacutea que si Franco hubiera sabido cuanto eacutel habiacutea hecho podriacutea cambiar de parecer en este asunto

Blay le indicoacute que no se trataba de una cuestioacuten de estricto derecho sino de una situacioacuten de hecho que desgraciadamente de momento le impediacutea actuar por siacute o por delegados suyos en favor de su dioacutecesis por una imposicioacuten del Gobierno que no cederiacutea faacutecilmente

Vidal pidioacute que la Santa Sede defendiera sus derechos para el libre ejercicio de su jurisdiccioacuten cosa que ya hemos visto Pacelli hizo Pero por el momento con la mayor pena habiacutea que considerar que dada la actitud tomada por el Gobierno Nacional no se veiacutea otra solucioacuten que el nombramiento de un Administrador apostoacutelico ad nutum Sanctae Sedis Vidal declaroacute laquoque desde luego si el Santo Padre por el contrario piensa que dada la actual situacioacuten de las cosas no hay otro modo de resolverla que con el nombramiento de un Administrador apostoacutelico eacutel dispuesto siempre como hijo sumiso estaacute preparado a aceptar la menor indicacioacuten del Vicario de Jesucristoraquo33

La muerte de Piacuteo XI el 10 de febrero de 1939 supuso una paralizacioacuten de la ofensiva del Gobierno contra el cardenal Vidal si bien la Santa Sede tratoacute de defenderlo hasta donde pudo al mismo tiempo que el nuncio Cicognani presionoacute con el objetivo de que el purpurado regresara a la sede tarraconense Sin embargo de nada sirvieron esas presiones Por esta razoacuten el nuevo papa Piacuteo XII (elegido el 2 de marzo de 1939) tuvo que afrontar personalmente el caso despueacutes de un intercambio de cartas con Franco que llevaron tambieacuten a un nuevo fracaso porque el general no cedioacute El nuevo Papa defendioacute al Cardenal y le mantuvo el tiacutetulo de arzobispo de Tarragona

Vidal y Barraquer murioacute en la Cartuja de la Valsainte (Suiza) el 13 de septiembre de 1943

33 Carta de Blay a Pacelli Roma 5 febrero 1939 Veacutease en el documento 4 del apeacutendice

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APEacuteNDICEcuAtro iMportAntes docuMentos de don cArMelo blAy

DoCuMento 1 Carta de Blay al general Goacutemez-Jordana

Sobre las dificultades econoacutemicas del Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma34

Burgos 19 agosto 1937

Excelentiacutesimo SentildeorGeneral Goacutemez JordanaPresidente de la Junta Teacutecnica del Estado

Excelentiacutesimo Sentildeor

El infrascripto en nombre y representacioacuten del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma despueacutes de haber hablado con el Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sr Cardenal Primado de Espantildea Patrono del mismo Colegio a Vuestra Excelencia expone

Que atendidas las circunstancias del glorioso movimiento que para bien de la amadiacutesima Espantildea se ha producido el Colegio Espantildeol de Roma se encuentra en condiciones difiacuteciles para continuar su importante obra educadora para la formacioacuten de los sacerdotes que han de trabajar en provecho de las almas y de la misma patria espantildeola Estas dificultades provienen especialmente porque las fundaciones de las becas en favor de los joacutevenes estudiantes radican en las diversas curias diocesanas espantildeolas

Por esto seriacutea de desear se encontrara alguacuten modo o manera de que pudiera ob-tenerse que las rentas de dichas fundaciones fueran remitidas a la administracioacuten del Colegio para que este pudiera continuar su objeto con la brillantez provecho y honor como para gloria de Espantildea lo ha hecho hasta el presente

Dadas las prudentes y previsoras disposiciones que el Gobierno Nacional para bien de la patria ha dado y por lo tanto la dificultad para la salida del dinero espantildeol podriacutea resolverse esta dificultad puesto que se trata de dinero para ali-mentos de joacutevenes espantildeoles que se educan en Roma para despueacutes trabajar para bien de la Iglesia espantildeola pudiera obtenerse que la administracioacuten del Colegio

34 ASV Arch Nunz Madrid 971 ff 362-362v copia mecanografiada

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entregara al Estado Espantildeol las pesetas de que pudiera disponer como renta de las fundaciones de la becas y que el mismo Estado por conducto de la Embajada de Espantildea en Italia pudiera dar la correspondiente cantidad en moneda italiana sin necesidad de la salida de nuestra divisa espantildeola del territorio nacional

Con la esperanza de que Vuestra Excelencia con su elevado criterio podraacute interesarse cerca del glorioso Caudillo que para la grandeza de la patria ha suscitado el Sentildeor en medio de nosotros para que no se interrumpa la vida de una institucioacuten tan benemeacuterita de la Iglesia espantildeola aprovecho la ocasioacuten para agradecerle sus bondades quedando de Vuestra Excelencia afectiacutesimo seguro servidor

Carmelo Blay

[PS] La suma de liras que se necesitariacutea seriacutea de unas 25000 (veinticin-co mil) mensuales aproximadamente El Colegio podriacutea recibir dicha cantidad contra las pesetas correspondientes bien fuera por conducto de la Embajada de Espantildea en Italia o bien por otro conducto que la Junta Teacutecnica del Estado creyera conveniente

DoCuMento CoMpleMentario

Carta de Blay a la Comisioacuten de Cambios35

Burgos (Seminario de San Joseacute)

21 de agosto de 1937A la Comisioacuten de Cambios - Burgos

El que suscribe en nombre y representacioacuten del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma despueacutes de hablar sobre este asunto con el Eminentiacutesimo y Reverendiacute-simo sentildeor cardenal Gomaacute y Tomaacutes Arzobispo de Toledo Primado de Espantildea Patrono del mismo Colegio expone

1ordm Que en Roma existe desde hace cerca de 50 antildeos el Pontificio Colegio Espantildeol destinado a la formacioacuten de los joacutevenes maacutes escogidos de las diferentes dioacutecesis de Espantildea que enviados allaacute por sus propios obispos se preparan para el ministerio de las almas en aquel Centro del catolicismo con grande provecho para los mismos joacutevenes y utilidad de las dioacutecesis espantildeolas como lo prueba el gran nuacutemero de obispos salidos de dicho centro y que hoy gobiernan no pocas dioacutecesis de Espantildea

35 ASV Arch Nunz Madrid 971 ff 363-363v copia mecanografiada

ViCente CaacuterCel ortiacute

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2ordm Que en un centro de tanta importancia para la educacioacuten eclesiaacutestica y donde existen quizaacute maacutes de sesenta colegios internacionales como el nuestro de que se trata pertenecientes a otras tantas naciones es consolador poder decir sin que sea vanagloria ni presuncioacuten por nuestra parte que gracias al Sor y al esfuerzo y trabajo de los alumnos el Colegio Espantildeol ocupa uno de los prime-ros lugares por no decir el primero tanto en la formacioacuten espiritual y piadosa como por la intelectual y cientiacutefica de los mismos siendo el Colegio tenido en grande estima y consideracioacuten de las autoridades eclesiaacutesticas y cientiacuteficas de la ciudad de Roma

3ordm Que las fundaciones de las becas para el sostenimiento de estos colegia-les espantildeoles en Roma radican en las cajas de las diferentes dioacutecesis de Espa-ntildea las cuales seguacuten las condiciones de las mismas fundaciones han de enviar a la administracioacuten del Colegio las rentas de las mismas Por lo tanto el Cole-gio vive exclusivamente de dichas rentas sin que tenga otros ingresos para su manutencioacuten

4ordm Desde el principio del glorioso movimiento salvador de la patria y dadas las sabias y prudentes disposiciones del Gobierno Nacional el Colegio no ha recibido las rentas de las fundaciones por las dificultades de la salida del dinero espantildeol

5ordm Como se trata de dinero para la sustentacioacuten de los joacutevenes espantildeoles que se educan en Roma como queda indicado con tanto provecho y bien de la Iglesia espantildeola se deseariacutea poder obtener que la administracioacuten del Colegio pu-diera recibir a traveacutes de la Comisioacuten de Cambios la divisas necesarias Para esto la misma administracioacuten del Colegio podriacutea entregar aquiacute las pesetas y recibir en Roma las liras correspondientes

6ordm La suma de liras que se necesitariacutea seriacutea de unas 25000 (veinticinco mil) mensuales aproximadamente El Colegio podriacutea recibir dicha cantidad contra las pesetas correspondientes bien fuera por conducto de la Embajada de Es-pantildea en Italia o bien por otro conducto que la Comisioacuten de Cambios creyera conveniente

7ordm Confiando que esa Comisioacuten de Cambios con su elevado criterio podraacute interesarse por este importante asunto del Pontificio Colegio Espantildeol en Roma que de otra manera tendriacutea que interrumpir su beneacutefica y benemeacuterita obra cerca del glorioso Caudillo que para bien y grandeza de Espantildea el Sentildeor ha suscitado en medio de nosotros obra por otra parte de tanto honor para la Iglesia espantildeola y para la misma patria aprovecho la ocasioacuten para ofrecerme affmo ss

Carmelo Blay

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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DoCuMento 2 Carta de Blay a Pacelli

Comunica algunas noticias sobre la situacioacuten espantildeola y la actitud del Gobierno Nacional contra el obispo Muacutegica y el cardenal Vidal 36

Burgos 23 agosto 1937

Pontificio Colegio Espantildeol de San JoseacutePalazzo Altemps - Roma 11Eminentiacutesimo y ReverendiacutesimoSentildeor cardenal Eugenio PacelliSecretario de Estado de Su Santidad

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor

Con la mayor veneracioacuten y profundo respeto me dirijo a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima para ofrecerle mis maacutes respetuosos obsequios desde esta amadiacute-sima Espantildea donde llegueacute hace unos diacuteas

No puede imaginar Vuestra Eminencia Reverendiacutesima la gratiacutesima impre-sioacuten que se recibe al llegar a este paiacutes y recorrer algunos pueblos y ciudades de la Espantildea Nacional por el orden maravilloso que reina en todas partes de tal manera que no se nota se encuentre esta parte de Espantildea en una guerra que tantos dantildeos y males ha causado Es realmente admirable cuanto puede observarse

He podido visitar en San Sebastiaacuten a algunas de las autoridades de aquella ciudad encontrando en todos la mejor buena disposicioacuten y respeto para cuanto se refiere a las cosas de la Religioacuten y de la Yglesia (sic) Es muy grande el fervor y la piedad de las autoridades y del pueblo que se manifiesta en todos los actos del culto Precisamente en estos diacuteas con motivo de la festividad de la Asuncioacuten de la Virgen Santiacutesima han sido muy grandes estas manifestaciones de piedad en todos los pueblos especialmente en San Sebastiaacuten Bilbao y aquiacute en Burgos que son las poblaciones que he visto hasta ahora se han hecho grandes fiestas en honor de la Santiacutesima Virgen tomando parte todas las autoridades con grande ejemplo de los fieles que han llenado las iglesias con numerosas y fervorosas comuniones generales No dudo de que S E Mons Antoniutti habraacute quedado edificado por cuanto ha visto en Bilbao el diacutea de la Virgen Santiacutesima

36 AAEESS Spagna 892 fasc 278 ff 15-18 original mecanografiada

ViCente CaacuterCel ortiacute

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En esta ciudad de Burgos he podido tener el honor de visitar a algunos de los miembros de la Junta Teacutecnica del Estado (Gobierno Nacional) y en todos he podido observar las mejores disposiciones para cuanto se refiere a la Religioacuten y a la Yglesia El Presidente de la Junta Teacutecnica general Goacutemez Jordana me ha hecho magniacutefica impresioacuten por su equanimidad (sic) y prudencia por su piedad y devocioacuten a la Santa Sede manifestando en la conversacioacuten grande respeto y diciendo que aunque en Espantildea se lamentaba la actitud que se ha tenido con respecto al Gobierno del Generaliacutesimo Franco y a la misma Espantildea Nacional se comprende que la Santa Sede debe haber tenido sus razones y motivos para esta actitud Por otro lado ven con gusto el paso dado por la Santa Sede que confiacutean sea el principio de otros maacutes importantes

No debo dejar de manifestar a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima que en general se oyen respetuosos lamentos de la actitud de la Santa Sede creyendo que no ha comprendido bien el principio y origen de esta guerra que no ha tenido otros motivos que religiosos y patrioacuteticos es decir para salvar la Religioacuten y la Patria Una y otra estaban al borde del abismo en este querido paiacutes de tradicioacuten eminentemente catoacutelica Es consolador el oiacuter aneacutecdotas y casos de muchiacutesimos que han abandonado todo cuanto teniacutean familia hijos hacienda etc para com-batir a los enemigos de la Religioacuten Por esto dicen no se comprende la prudente conducta del Vaticano Es lo primero que todos dicen al hablar de Roma

No he tenido todaviacutea el honor de poder ver al Generaliacutesimo Franco pero confiacuteo puedo tenerlo uno de estos diacuteas porque el general Jordana presidente de la Junta Teacutecnica me dijo que eacutel mismo se encargariacutea de obtener la audiencia para miacute aunque es difiacutecil porque con motivo del movimiento contra Santander estaba el Generaliacutesimo ocupado en el frente de batalla

Una de las cuestiones maacutes espinosas y graves que sin duda se ha de presentar y se ha presentado es la del clero y aun del prelado de Vitoria Es muy general la idea de que es imposible pueda regresar a la dioacutecesis Es muy grande la reaccioacuten contra dicho prelado al que con razoacuten o sin ella consideran y tratan como uno de los mayores culpables de cuanto ha sucedido en Vizcaya Ya VER tendraacute noticias maacutes autorizadas que las miacuteas sobre cuanto ha pasado y pasa todaviacutea con parte del clero de Vizcaya y la grandiacutesima prevencioacuten que hay contra los que olvidaacutendose de su misioacuten de paz han sido causa de tanta ruina y desolacioacuten Seguramente que muchos sacerdotes y religiosos tendraacuten que salir del territorio de la dioacutecesis Al prelado le seraacute muy difiacutecil poder volver a la misma Ademaacutes su misioacuten pastoral no seriacutea provechosa por lo mal dispuestos que estaacuten en ge-neral contra eacutel

Tambieacuten para el diacutea de mantildeana puede ocurrir algo parecido con el Emo y Rvmo Cardenal Arzobispo de Tarragona Hay en esta Espantildea Nacional una gran prevencioacuten contra este Emo Prelado Precisamente en la misma Oficina de la frontera espantildeola mientras se despachaba la documentacioacuten hablando ama-blemente con los jefes encargados de dicha Oficina incidentalmente salioacute en la

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conversacioacuten el nombre del cardenal Vidal y Barraquer y enseguida uno de los alliacute presentes dijo laquoSuponemos que dicho sentildeor no vendraacute por Espantildearaquo y al contestarle que seguramente por ahora no creiacutea que viniera el mismo que habiacutea hablado dijo laquoSuponemos que ni ahora ni tampoco despueacutesraquo

Es tanto lo que Espantildea ha sufrido Eminentiacutesimo Sentildeor por estas divisio-nes de Vizcaya y de Cataluntildea que ahora se siente una muy grande reaccioacuten para acabar con todo esto y fortificar la unidad de la patria Ciertamente que si despueacutes de la sangre derramada despueacutes de tantas y tan in numerables viacutectimas inocentes como esta tragedia ha causado en la queridiacutesima Espantildea tuvieacuteramos que continuar con tantas luchas de pequentildeas regiones y divisiones intestinas no se hubiera obtenido gran cosa con tanto sacrificio Por esto se siente en todas partes y en todos tan grande reaccioacuten a cuanto signifique divisioacuten y partidismos dentro de la patria espantildeola

Como sin duda uno de los factores principales en estas divisiones ha sido el clero que olvidaacutendose de su misioacuten de paz y de amor ha trabajado por dividir y separar a los de las dos regiones del resto de Espantildea por esto la reaccioacuten viene contra el clero y los prelados que consideran en cierto modo culpables de no haber impedido que el clero hiciera tales campantildeas contra la unidad de la patria

Es una providencia el que ahora los hombres que estaacuten al frente de los nego-cios de la Espantildea Nacional sean en general de convicciones netamente catoacuteli-cas desde el Generaliacutesimo Franco hasta el Presidente de la Junta Teacutecnica del Estado y los mismos miembros de la dicha Junta Esto hace concebir esperanzas de que cuanto se refiere a la Religioacuten y a la Yglesia ha de encontrar en los mismos las mayores facilidades

Pudiera haber alguacuten temor en las masas en los diferentes grupos que forman la Falange Tradicionalista y de las JONS De los tradicionalistas hay que tener la seguridad de que estaacuten completamente con la Yglesia y que con grande entusias-mo han tomado las armas para defender a la Religioacuten De los que pudiera tenerse alguna prevencioacuten es de los Falangistas en cuyo grupo pueden haberse infiltrado elementos de pocas convicciones catoacutelicas pero tambieacuten entre los falangistas hay elementos de sentimientos verdaderamente cristianos en su mayor parte por pertenecer a familias sumamente cristianas Es de esperar que llegado el momento estos mismos comprenderaacuten que es necesario trabajar dentro de los sentimientos y conforme a las doctrinas de la Yglesia para el mayor bien de la sociedad y del pueblo

Aprovecho esta ocasioacuten para renovarle los sentimientos de mi profunda ve-neracioacuten mientras besando devotamente la Sagrada puacuterpura me profeso de Vues-tra Eminencia Reverendiacutesima devotiacutesimo servidor

Sac Carmelo Blay

ViCente CaacuterCel ortiacute

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DoCuMento 3 Carta de Blay a Pacelli

Informa sobre las opiniones de las esferas gubernativas que lamentan respetuosamente la manera como la Santa Sede ha tratado al Gobierno Nacional desde que comenzoacute el movimiento militar y son contrarias a la actitud separatista del clero vasco sobre la piedad e intensa religiosi-dad personal del general Franco y sobre la formacioacuten religiosa de los falangistas37

Biarritz 20 septiembre 1937

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo SentildeorCardenal Eugenio PacelliSecretario de Estado de Su SantidadCiudad del Vaticano

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor

Pensaba yo encontrarme para estas fechas en Roma pero una pequentildea indis-posicioacuten me ha hecho retrasar mi regreso por esto me permito escribir a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima despueacutes de haber estado en Salamanca y en algunos otros lugares de la Espantildea Nacional y ponerme en contacto con los miembros del Gabinete Diplomaacutetico del Jefe del Estado Espantildeol y con personas que estaacuten y viven muy cerca del mismo Jefe del Estado

Como deciacutea a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima todos lamentan respetuo-samente del modo como la Santa Sede ha tratado al Gobierno Nacional desde que comenzoacute el movimiento salvador de Espantildea No comprenden dicen la incomprensioacuten de dicho movimiento que en primer lugar teniacutea por objeto de-fender a la Religioacuten y a la Yglesia de la barbarie marxista y comunista Por esto ahora se ha recibido con grande satisfaccioacuten en todos los sectores de la Espantildea Nacional la paternal bondad del Santo Padre al nombrar como Encargado de Negocios de la Santa Sede a SE Mons Antoniutti

Lo que les ha preocupado no poco es cuanto seguacuten ellos ha hecho la Santa Sede por los rojos-separatistas vascos que tanto dantildeo han hecho a la misma Re-

37 AAEESS Spagna 896 fasc 297 ff 42-44 original mecanografiada

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ligioacuten en su paiacutes antes tan catoacutelico y respetuoso con la Yglesia A este respecto consideraban la venida de Mons Antoniutti con el pretexto de atender a los nintildeos vacos maacutes bien como para proteger a los mismos vascos en el momento en que han de rendir cuentas a la justicia espantildeola por los desastres causados a su propio paiacutes y a toda Espantildea como si se temiera que los tribunales espantildeoles se excedieran en su misioacuten de ejercer la justicia Por esto creen que tuvo prisa en ir a Bilbao instalaacutendose alliacute como en su propia sede

En cuanto a la situacioacuten de los elementos religiosos que tanto dantildeo han causa-do durante esta guerra es decir de los religiosos de varias Oacuterdenes y Congrega-ciones religiosas que olvidando su misioacuten de paz y de la propia santificacioacuten se han dedicado por espiacuteritu de partido a predicar la guerra de exterminio parece que muy poco o nada han cambiado Seriacutea conveniente que en los conventos de Vizcaya se proveyera para que fueran tenidos por religiosos que no hubieran hecho poliacutetica separatista y a ser posible que no fueran oriundos de dicha regioacuten trasladando a otras partes de Espantildea o bien a Misiones a los que maacutes se han distinguido por su actuacioacuten separatista Seguramente que una de las causas de cuanto ha ocurrido en Vizcaya con los religiosos y aun con los de vida maacutes aus-tera como Carmelitas Pasionistas Capuchinos y no pocos Jesuitas fue debido a la formacioacuten de Provincias religiosas exclusivamente dentro de la misma regioacuten sin contacto alguno con las casas de otras regiones Asiacute ha resultado que en todas estas casas y Provincias los elementos que han formado las comunidades eran en su mayor parte separatistas Precisamente me deciacutea un religioso carmelita que ahora ocupa un puesto en el gobierno de la Orden en el Corso drsquoItalia en Roma38 que eacutel consideraba que entre los religiosos de su Orden de la Provincia de Vizcaya por lo menos el 90 eran nacionalistas es decir de ideas separatis-tas Quizaacutes los superiores mayores de las diferentes Oacuterdenes religiosas tienen no poca responsabilidad de cuanto ha sucedido porque no han comprendido o no han podido poner remedio oportunamente a tantos males como han causado los que abandonando el mundo para buscar su propia santificacioacuten y la santificacioacuten de las almas han perdido el tiempo haciendo poliacutetica de odios y de divisioacuten entre los mismos fieles

Al recorrer los pueblos destrozados de Vizcaya y preguntar a los sencillos aldeanos por queacute se habiacutean unido a los enemigos de la Religioacuten es triste oiacuter decir que los sacerdotes y religiosos les habiacutean dicho que esto era lo mejor y por esto habiacutean obedecido iexclQueacute dolor

En general los sacerdotes de la dioacutecesis de Vitoria de ideas separatistas no han cambiado nada Parece que estaacuten envenenados con dichas ideas y no es extrantildeo que el Gobierno Nacional esteacute preocupado por esto Era de absoluta necesidad el nombramiento de un Administrador apostoacutelico como lo ha hecho

38 Se refiere al P Silverio de Santa Teresa OCD

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el Santo Padre en la persona del Obispo auxiliar de Valencia para que cesando la interinidad en que viviacutea dicha dioacutecesis se pudiera trabajar en tantos problemas difiacuteciles y complicados Dicho nombramiento ha sido muy bien recibido por todos y aun por el Gobierno Nacional que ve el paternal intereacutes del Santo Padre por esta querida Espantildea

El nombramiento del Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo sentildeor cardenal Segura para la importantiacutesima dioacutecesis de Sevilla ha causado profunda emocioacuten y entu-siasmo en los catoacutelicos espantildeoles y en las esferas del Gobierno porque con esto ven una nueva muestra de amor del Papa a Espantildea y sobre todo la reparacioacuten de un gran desacato cometido por el gobierno revolucionario contra el que enton-ces ocupaba la Sede primada de Toledo39

He tenido ocasioacuten como indico a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima de te-ner contacto con personas que estaacuten muy cerca del Jefe del Estado y viven con eacutel mismo Dichas personas han hablado con grande elogio y entusiasmo del mismo Jefe del Estado especialmente en cuanto se refiere su piedad y respeto a la Yglesia de su equanimidad (sic) en tratar y conocer los maacutes difiacuteciles asuntos De su piedad me deciacutea el capellaacuten del Cuartel general40 que vive en la propia casa y como de familia con el Generaliacutesimo basta decir que ni un solo diacutea se retira a descansar sin antes haber rezado en familia el Santo Rosario aunque esto sea a las cuatro o cinco de la madrugada al regresar de alguna visita a los frentes de batalla Lo mismo que el querer tener en el Cuartel general la santa misa todos los diacuteas

39 En plena Guerra Civil Segura tras haber presidido el funeral del arzobispo de Se-villa cardenal Ilundaacutein fallecido el 10 de agosto de1937 manifestoacute tanto a Piacuteo XI como al cardenal Pacelli deseos de regresar a Espantildea desde su destierro en Roma pues consideroacute llegado el momento propicio para regresar a una sede metropolitana espantildeola de prestigio y de tradicioacuten cardenalicia como era Sevilla y asiacute lo dijo al cardenal Pacelli en carta escrita desde Olaz de Loyola (Guipuacutezcoa) el 17 de agosto de 1937 en respuesta a otra suya en la que le comentaba que el Papa estaba dispuesto a nombrarle para una dioacutecesis espantildeola laquoarri-vato il momento per la vacanza della sede convenienteraquo A peticioacuten de Pacelli el delegado apostoacutelico en la Espantildea nacional Hildebrando Antoniutti dijo que el ambiente es favorable el regreso del cardenal Lo mismo pensaba Gomaacute que veiacutea en este nombramiento una so-lucioacuten excelente a la situacioacuten del cardenal (cfr mi artiacuteculo laquoNombramientos episcopales en Espantildea y estado de algunas dioacutecesis catalanas durante la Guerra Civil [1936-1939]raquo in Analecta Sacra Tarraconensia 88 [2014] 597-933)

40 Joseacute Mariacutea Bulart Ferraacutendiz (San Andreacutes de Palomar Barcelona 1900 - Madrid 1981) hizo los estudios en el seminario de Barcelona y fue ordenado sacerdote en mayo de 1925 Era secretario particular del obispo de Salamanca Enrique Pla y Deniel cuando el 4 de octubre de 1936 pasoacute al servicio de Franco al cederle el obispo el palacio episcopal como sede del Cuar-tel general que convirtioacute durante casi toda la guerra en su puesto de mando Fue su confesor hasta su muerte y capellaacuten de la Casa Civil y le atendioacute a eacutel a toda su familia y a las personas maacutes allegadas en las funciones y ceremonias religiosas Tambieacuten fue responsable de la cura pastoral del palacio del Pardo Se incardinoacute en la archidioacutecesis de Madrid en 1957 y desem-pentildeoacute en ella los ministerios de rector de la Iglesia del Buen Suceso desde 1942 y paacuterroco de la parroquia del Corpus Christi de 1953 a 1981 (Cf mi Diccionario de Sacerdotes diocesanos espantildeoles del siglo XX BAC Madrid 2006 265)

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Al decir yo hace unos diacuteas al Jefe del Gabinete Diplomaacutetico sentildeor Sangroacute-niz que seguramente el enviado especial del Santo Padre para el asunto de los nintildeos vascos podriacutea informar muy bien de cuanto sucede en la Espantildea Nacional me deciacutea que nuestros prelados tambieacuten habraacuten informado y que bien podiacutean atender en el Vaticano a dichas informaciones Con este motivo me deciacutea que sin duda el objeto de enviar a Espantildea a Mons Antoniutti deberiacutea haber sido otro por parte de la Santa Sede como queda indicado maacutes arriba en esta carta por-que solo para esto no era ne cesario puesto que el Gobierno Nacional se estaba ocupando de dichos nintildeos y sobre todo estaba dispuesto a recibirles y asistirles apenas llegaran a Espantildea como atiende y asiste a los pueblos y ciudades que van ocupando las fuerzas nacionales donde quiera que llegan estas por conducto de la Intendencia Militar como lo prueba lo que se hizo en Bilbao y lo que uacuteltima-mente se ha hecho en Santander y como se hace con los numerosos evadidos de la zona roja que diariamente vienen a la Espantildea Nacional buscando la paz y la tranquilidad que en la misma se respira

Indudablemente que una de las mayores preocupaciones del movimiento nacional es lo que pueda resucitar de la Falange Espantildeola mejor dicho de los falangistas A este propoacutesito me deciacutea el sentildeor Serrano Suacutentildeer cuntildeado del Gene-raliacutesimo y que vive con eacutel mismo y seguacuten me indican atiende mucho a sus con-sejos que se desea vivamente organizar y ya de esto se ocupan con el Cardenal primado y con el obispo auxiliar de Toledo [Gregorio Modrego] la asistencia religiosa en las organizaciones falangistas de tal manera que en todas puedan encontrar los miembros dicha asistencia religiosa algo parecido como se ha hecho en Italia para los balilas y avanguardistas41 etc Es cierto que este es un problema importantiacutesimo

Suplicando dispense la molestia de este escrito beso con todo respeto la Sagrada puacuterpura quedando de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima devotiacutesimo servidor

Sac Carmelo Blay

41 Los laquobalillasraquo eran nintildeos entre 8 y 14 antildeos y los avanguarditas eran joacutevenes entre 14 y 18 Se trataban de dos subestructuras de la Opera Nazionale Balilla organizacioacuten juvenil de la Italia fascista que funcionoacute como adicioacuten a la educacioacuten escolar entre 1926 y 1937 antildeo en el que fue fusionada con la Gioventugrave Italiana del Littorio una seccioacuten juvenil del Partido Nacional Fascista

ViCente CaacuterCel ortiacute

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DoCuMento 4 Carta de Blay a Pacelli

Informa sobre las gestiones hechas personalmente para conseguir que el cardenal Vidal renuncie al gobierno de la archidioacutecesis de Tarragona42

Roma 5 febrero 1939

Pontificio Colegio Espantildeol de San JoseacutePalazzo AltempsRoma - 11

A Su Eminencia Reverendiacutesimael Sentildeor Cardenal Eugenio PacelliSecretario de Estado de Su SantidadCiudad del Vaticano

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor

Cumpliendo con la mayor buena voluntad las indicaciones de Vuestra Emi-nencia Reverendiacutesima le escribo el resultado de la misioacuten que amablemente quiso encargarme ante el Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo sentildeor cardenal Vidal y Barraquer arzobispo de Tarragona Procurareacute hacerlo con la mayor fidelidad

El encargo aunque honroso para miacute era al mismo tiempo muy penoso por la persona y por el asunto de que se trata

Apenas llegado a la Cartuja de Farneta residencia del citado Emo y Revmo Sr Cardenal expuse con el mayor cuidado posible la misioacuten que me llevaba dicieacutendole cuanto VE Rvma me habiacutea encargado por indicacioacuten del Santo Padre esto es

1ordm Cuanto el Sentildeor Embajador de Espantildea en nombre del Gobierno Nacio-nal le habiacutea propuesto acerca de que el Gobierno estaba resuelto a no permitir que volviera el sentildeor cardenal Vidal y Barraquer arzobispo de Tarragona a Es-pantildea y por lo tanto a su dioacutecesis y no soacutelo esto sino que tampoco permitiriacutean que gobernase aquel arzobispado ninguno que fuera nombrado por el mismo y que estuviera a las ordenes suyas Que dada esta situacioacuten de hecho para atender a las necesidades de las almas especialmente en estos primeros tiempos

42 AAEESS Spagna 949 fasc 352 ff 47-50 original mecanografiada

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cuando seraacute necesario organizarlo todo para la restauracioacuten de tanta ruina el Santo Padre pensariacutea poderlo hacer por medio de un Administrador apostoacutelico que podriacutea nombrarse ad nutum Sanctae Sedis

2ordm Le hice presente cuanto Vuestra Eminencia Reverendiacutesima habiacutea mani-festado al propio Sr Embajador indicaacutendole que se trataba de una cosa muy gra-ve porque no era soacutelo el impedir el libre ejercicio de su jurisdiccioacuten a un obispo cualquiera sino a un obispo priacutencipe de la Yglesia (sic) Que ademaacutes que esta actitud del Gobierno Nacional de Espantildea causariacutea grande admiracioacuten en todo el mundo catoacutelico en desprestigio de la misma Espantildea

3ordm Al ejemplo puesto por el Sr Embajador acerca de los precedentes de la expulsioacuten del Emo y Rvmo Sr cardenal Segura se le habiacutea hecho presente por Vuestra Eminencia que el caso era muy diferente al actual porque en el del cardenal Segura cuando salioacute la primera vez de Espantildea al hacerle la menor in-dicacioacuten de parte de la Santa Sede de que volviera a su dioacutecesis lo hizo ensegui-da siendo expulsado entonces manu militari por el Gobierno de la Repuacuteblica es decir por un Gobierno enemigo de la Yglesia y perseguidor de todo lo que significaba algo de Religioacuten etc Pero ahora se trata de la actuacioacuten contra un Cardenal no ya por un Gobierno enemigo de la Yglesia sino por un Gobierno catoacutelico formado por catoacutelicos y que luchan por hacer volver a Espantildea a sus tradiciones catoacutelicas de siempre

Hice presente al mismo sentildeor cardenal Vidal y Barraquer que el Emo y Re-vdmo Sr cardenal Secretario de Estado de Su Santidad como era natural habiacutea hecho todo lo posible para hacer ver al Sr Embajador la gravedad de la actitud adoptada en este asunto por el Gobierno El embajador insistioacute en que esta era decisioacuten definitiva del Gobierno Que teniacutean en sus manos copias de alguacuten documento comprometedor para el cardenal Vidal por alguna concomitancia con los separatistas vascos aun antes de producirse el movimiento nacional contra el Gobierno de la Repuacuteblica y que naturalmente estariacutean dispuestos si fuera necesario para defender su actitud a la publicacioacuten de dicho documento o documentos

El sentildeor cardenal Vidal escuchoacute todas estas manifestaciones diciendo que desde luego eacutel deseariacutea que se hiciera un expediente o proceso para que pudiera defenderse porque se trata de su buen nombre y dignidad porque ademaacutes se veriacutea que en todo este tiempo cuanto eacutel ha hecho por la Espantildea Nacional pri-mero haciendo que su sobrino mayor saliera de la Espantildea roja y se presentara enseguida para alistarse entre las tropas del Generaliacutesimo Franco que ademaacutes a cuantos joacutevenes se le han presentado para pedirle consejo les ha dicho deberiacutean marcharse enseguida para luchar en favor de los nacionales que en su misma casa y familia se ha hecho todo lo posible para defender y ayudar a los sacerdotes y religiosas durante estos antildeos de revolucioacuten y de persecucioacuten que si eacutel mismo ha estado fuera de Espantildea durante este tiempo ha sido exclusivamente porque asiacute

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podriacutea trabajar desde fuera en favor de los sacerdotes de su dioacutecesis que estaban sufriendo en las caacuterceles y en grave peligro de ser asesinados que por esto mis-mo y por no hacer dantildeo a la Espantildea Nacional no se habiacutea marchado a Francia a pesar de las varias invitaciones que le habiacutean hecho en este sentido que por estas mismas consideraciones nunca quiso tampoco acceder a las indicaciones recibidas para que volviera a su dioacutecesis de Tarragona con la promesa de que le dejariacutean en libertad para actuar Por todo esto creiacutea que si el Generaliacutesimo Franco supiera cuanto eacutel ha hecho podriacutea cambiar de parecer en este asunto

Me permitiacute indicarle que pensara que aquiacute no se trata de una cuestioacuten de estricto derecho sino de una situacioacuten de hecho que desgraciadamente de mo-mento le impide actuar por siacute o por delegados suyos en favor de las almas de su dioacutecesis por una imposicioacuten del Gobierno que no cederaacute faacutecilmente

Eacutel cree seguacuten me dijo que la Santa Sede deberiacutea dar la batalla para defender sus derechos para el libre ejercicio de su jurisdiccioacuten Puede tener la seguridad le contesteacute como me lo habiacutea indicado el mismo Sr cardenal Secretario de Es-tado de que este ha manifestado todo cuanto creiacutea necesario al Sentildeor Embajador para defender los derechos del Cardenal Arzobispo en el ejercicio de la libre jurisdiccioacuten en su dioacutecesis Por lo tanto por el momento con la mayor pena hay que considerar que dada la actitud tomada por el Gobierno Nacional no se veiacutea otra solucioacuten que la indicada del nombramiento de un Administrador apostoacutelico ad nutum Sanctae Sedis Creo le dije que con toda probabilidad se pensariacutea en persona investida de caraacutecter episcopal y de la misma Provincia Eclesiaacutestica si es posible

A pesar de insistir mucho en sus ideas de que se haga un expediente o proceso para que eacutel pudiera exponer todo lo que creyera conveniente para su defensa terminoacute la conversacioacuten diciendo que desde luego si el Santo Padre por el contrario piensa que dada la actual situacioacuten de las cosas no hay otro modo de resolverla que con el nombramiento de un Administrador apostoacutelico eacutel dispues-to siempre como hijo sumiso estaacute preparado a aceptar la menor indicacioacuten del Vicario de Jesucristo

Naturalmente insistiacutea podriacutea ser nombrado alguno de los que eacutel ya tiene alliacute como vicarios generales o alguna otra persona que fuera grata al mismo A la primera parte le dije que difiacutecilmente podriacutea ser nombrado en caso alguno de los ya nombrados por eacutel porque precisamente una de las cosas impuestas por el Gobierno es que no sea ninguno como delegado del mismo Carde nal Arzobispo

Luego ya en la conversacioacuten me habloacute de la situacioacuten suya en caso de nom-bramiento de un Administrador apostoacutelico porque aun quedando con el tiacutetulo de Arzobispo de Tarragona le quedariacutea solamente el tiacutetulo pero no la jurisdiccioacuten Por esto deciacutea que eacutel quedariacutea en una situacioacuten poco airosa y como recluido en la Cartuja Que pensaba no debiacutea quedar alliacute maacutes tiempo y que tampoco su situacioacuten econoacutemica estaba en condiciones de poder seguir en esta situacioacuten Es cosa le dije que podriacutea tratarse en un segundo teacutermino con la Santa Sede

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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Terminamos la entrevista indicaacutendome que yo hiciera saber todo esto a Vues-tra Eminencia Reverendiacutesima y que eacutel escribiriacutea directamente al mismo Sr car-denal Secretario de Estado

Al tener el honor de comunicar cuanto queda dicho aprovecho la ocasioacuten para manifestar mi profunda veneracioacuten mientras besando devotamente la Sagrada puacuterpura quedo de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima devotiacutesimo servidor

Sac Carmelo Blay

LA VIDA EN EL COLEGIO

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1

DATOS ESTADIacuteSTICOS DEL CURSO 2015-2016

Han formado parte de la comunidad del Colegio un total de 63 colegia-les distribuidos del siguiente modo

Seminaristas SacerdotesNuevos 2 24Licenciatura 2 39Doctorado 0 21Otros (Maacutester) 0 1Subtotales 2 61

El total de las dioacutecesis presentes es de 34 y naciones 5 distribuidas de la siguiente manera

Albacete 1 Oviedo 1Almeriacutea 1 Pamplona y Tudela 1Arzobispado Castrense 1 San Francisco Campeche (Meacutexico) 1Astorga 2 San Sebastiaacuten 1Burgos 1 Santiago de Chile (Chile) 1Cartagena 3 Segorbe-Castelloacuten 1Ciudad Real 2 Sevilla 7Coacuterdoba 3 Siguumlenza - Guadalajara 1Coria - Caacuteceres 1 Solsona 1El Callao (Peruacute) 1 Tenerife 2Madrid 1 Toledo 6Maacutelaga 2 Tui - Vigo 1Maacutelaga-Soataacute (Colombia) 1 Urgell 1Meacuterida - Badajoz 1 Valencia 7Ndola (Zambia) 2 Valladolid 1Orihuela - Alicante 2 Villa Mariacutea 1Ourense 1 Zaragoza 3

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la ViDa en el Colegio

En cuanto a las diferentes especialidades (23 en total) la distribucioacuten es la siguiente

Bienes Culturales 1 Sagrada Escritura 9Estudios Orientales 1 Sagrada Liturgia 3Derecho Canoacutenico 7 Sociologiacutea 1Doctrina Social 1 Filosofiacutea 4Teologiacutea Biacuteblica 3 Historia de la Iglesia 2Teologiacutea Dogmaacutetica 11 Matrimonio y Familia 3Teologiacutea Espiritual 4 Misionologiacutea 1Formacioacuten Sacerdotal 2 Muacutesica Sacra 1Teologiacutea Fundamental 1 Pastoral Juvenil 2Teologiacutea Moral 1 Patriacutestica 2Teologiacutea Pastoral 2 Sacramentaria 1

En cuanto a los centros de estudio (14) la distribucioacuten es la siguiente

Istituto Patristico laquoAugustinianumraquo 2Pontificia Facoltagrave Teologica laquoTeresianumraquo 1Pontificia Universitagrave della Santa Croce 3Pontificia Universitagrave Gregoriana 26Pontificia Universitagrave Lateranense 8Pontificia Universitagrave Santo Tommaso DrsquoAquino 1Pontificio Ateneo di SantrsquoAnselmo 4Pontificio Istituto Biblico 9Pontificio Istituto di Musica Sacra 1Pontificio Istituto Giovanni Paolo II 3Pontificio Istituto Orientale 1Universidad de Navarra 1Universidad de Valencia 1Universitagrave Pontificia Salesiana 2

Han salido del Colegio un total de 14 alumnos 9 concluyendo la for-macioacuten (1 doctor 7 licenciados 1 maacutester) y 4 sin concluirla (doctorandos que no defendieron la tesis) La variacioacuten numeacuterica de los uacuteltimos 5 antildeos ha oscilado entre los valores miacutenimo 57 y maacuteximo 90

Durante el curso fue ordenado presbiacutetero (en el mes de mayo) un diaacute-cono de la dioacutecesis de Orense

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2

ACONTECIMIENTOS MAacuteS DESTACADOS

El curso 2015-2016 ha comenzado con un equipo de direccioacuten parcial-mente renovado compuesto por el Rector Joseacute San Joseacute Prisco (nombra-do el 8 de abril de 2015 despueacutes de que el anterior Rector Mons Aacutengel Javier Peacuterez Pueyo fuera nombrado obispo de Barbastro) el Ecoacutenomo D Javier Malo Peacuterez que asumioacute tambieacuten las tareas de Vicerrector el Director espiritual D Argimiro Martiacuten Benito y el confesor y encargado del archivo D Lope Rubio Parrado

Colaboran directamente con el equipo de direccioacuten el profesor de la Universidad Pontificia Gregoriana Dario Vitali que ejerce la tarea de Di-rector de estudios y el Agente de Preces Santiago Luis de Vega Alonso Reside en el Colegio como Vicario para los sacerdotes valencianos en Roma D Vicente Caacutercel Ortiacute

Una de las novedades importantes del curso ha sido la creacioacuten de la Fundacioacuten Mater Clementissima para recaudar fondos con los que ayudar al sostenimiento del Colegio El martes 17 de noviembre aprovechando la visita del Rector y del Vicerrector a la Asamblea plenaria de la Con-ferencia Episcopal Espantildeola para informar sobre la marcha del Colegio se procedioacute a la constitucioacuten del Consejo de la Fundacioacuten notarialmente y posteriormente se registroacute en el Registro de entidades religiosas del Ministerio de Justicia de Espantildea La intencioacuten es invitar primeramente a todos los ex colegiales a que se inscriban en la asociacioacuten de antiguos alumnos y colaboren con la fundacioacuten

La otra novedad es la nueva imagen institucional Para ello se optoacute por adoptar un nuevo logotipo maacutes actualizado y faacutecilmente reconocible con la fachada del Colegio y la cruz de la capilla El color magenta es el que da unidad con el logo de la Conferencia Episcopal Espantildeola

El 2 de marzo se lanzoacute la nueva paacutegina Web La presentacioacuten oficial corrioacute a cargo de Ricardo Rossi representante de OPI (empresa italiana

la ViDa en el Colegio

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de servicios a entidades religiosas que ha sido la encargada del desarrollo del proyecto) A dicha presentacioacuten asistieron ademaacutes de los colegiales 5 periodistas espantildeoles de medios catoacutelicos de Roma (Zenit Radio Vatica-na Aciprensa Rome Reports) La nueva Web es muy completa y contiene informacioacuten actualizada sobre la vida del Colegio ademaacutes de acceso a varios servicios gratuitos Su direccioacuten wwwcolegioespanolorg

El curso se inicioacute el 1 de septiembre para los colegiales nuevos y el 1 de octubre para el resto La inauguracioacuten oficial fue el 9 de octubre con un encuentro de los colegiales con el equipo formativo en la sala de conferencias la misa de inauguracioacuten que presidioacute el Rector y la cena fraterna

Unos diacuteas antes (el 4 de octubre) habiacutea comenzado el Siacutenodo sobre la familia El 8 de diciembre iniciamos con toda la Iglesia el Antildeo jubilar de la Misericordia desde el que se orientaron la mayor parte de las acti-vidades del Colegio

Del 18 al 24 de enero volvioacute a celebrarse en las instalaciones del Cole-gio el II Curso de directores espirituales organizado por la Conferencia Episcopal Espantildeola Asimismo del 28 de marzo al 29 de abril tuvo lugar el XXIX Curso de actualizacioacuten sacerdotal

celebrAciones especiAles

El domingo 8 de noviembre celebramos la Fiesta de la dedicacioacuten de la capilla de San Joseacute familiarmente conocida como laquoFiesta del Reser-vadoraquo en su 50 aniversario A las 1200 comenzoacute la Eucaristiacutea solemne presidida por Mons Piero Marini Presidente del Pontificio Consejo para los Congresos eucariacutesticos acompantildeado por Mons Ignacio Carrasco de Paula Presidente de la Pontificia Academia para la Vida A las 1330 tuvi-mos la comida y a partir de las 1600 adoracioacuten al Santiacutesimo por turnos con diversos momentos preparados por los colegiales hasta las 2000 hora en la que con las Viacutesperas solemnes presididas por el Rector se concluyoacute la fiesta

Con motivo del Antildeo jubilar de la Misericordia los diacuteas 4 y 5 de marzo nos unimos a la celebracioacuten de las laquo24 horas para el Sentildeorraquo convocadas por el Papa para ese fin de semana En el Colegio se organizoacute un acto eucariacutestico de adoracioacuten nocturna que duroacute desde las 2200 horas del viernes hasta las 1000 horas del saacutebado con turnos que fueron cubiertos por los colegiales

aConteCiMientos Maacutes DestaCaDos

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El viernes 11 de marzo tuvimos una celebracioacuten penitencial como pre-paracioacuten a la peregrinacioacuten a la Puerta Santa que tendriacutea lugar el domingo 13 de marzo Ese diacutea a las 730 am tuvimos la celebracioacuten de la santa misa en la capilla de los huacutengaros en la cripta de la basiacutelica de San Pedro Luego hicimos el recorrido desde el Castel SantrsquoAngelo hasta la Puerta Santa y terminamos con el rezo del credo en el altar de la Basiacutelica

El viernes 3 de junio asistimos en la basiacutelica de San Pablo Extramuros al retiro dado por el papa Francisco con motivo del Jubileo de los sacer-dotes y al diacutea siguiente participamos en la misa jubilar con el Papa en la plaza de San Pedro

conferenciAs

Han sido diversas las conferencias tenidas en el Colegio durante el curso intentando abordar siempre temas de actualidad que son uacutetiles para una maacutes completa formacioacuten de los sacerdotes

Conferencia-coloquio sobre la Instruccioacuten pastoral aprobada en la CV Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Espantildeola titulada laquoIgle-sia servidora de los pobresraquo a cargo de Mons D Juan Joseacute Omella Obis-po de Calahorra y la Calzada-Logrontildeo Presidente de la Comisioacuten episco-pal de Pastoral Social (28 de octubre)

Mesa redonda al concluir el Siacutenodo de la familia Invitamos a dos profe-sores que estuvieron presentes como especialistas en el aula sinodal Joseacute Granados Vicepresidente del Instituto Juan Pablo II en Roma y miembro de los Disciacutepulos de los Corazones de Jesuacutes y Mariacutea (DCJM) y Manuel Arroba Conde claretiano y decano de la Facultad de Derecho Canoacutenico de la Universidad Pontificia Lateranense Ambos ofrecieron una visioacuten com-plementaria de lo acontecido en el aula y su opinioacuten sobre lo que podriacutea ser la proacutexima exhortacioacuten apostoacutelica del Papa (23 de noviembre)

Conferencia laquoDescubriendo a Santa Mariacutea de Guadaluperaquo a cargo del sacerdote mexicano Roberto Figueroa especialista en el tema (24 de febrero)

Conferencia de la presidente de la JOC internacional la francesa Ame-lie Peyrard que realizoacute una presentacioacuten de la misioacuten en el mundo actual de la Juventud Obrera Cristiana (16 de marzo)

Conferencia sobre laquoEl Islam en el momento presenteraquo impartida por el misionero P Diego Sarrioacute Cucarella Mafr secretario de estudios del Pontificio Istituto di Studi Arabi e drsquoIslamistica (12 de abril)

la ViDa en el Colegio

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presentAciones de libros

Presentacioacuten de la nueva edicioacuten del leccionario de la misa a cargo de Manuel Fanjul Garciacutea Director general de Publicaciones de la CEE (mieacutercoles 2 de diciembre)

Presentacioacuten del libro de la BAC titulado laquoLoado seas mi Sentildeorraquo co-mentario a la enciacuteclica Laudato Sirsquo del papa Francisco Intervinieron el Presidente del Pontificio Consejo para el Diaacutelogo interreligioso cardenal Jean-Louis Tauran el Subdirector general de la FAO Daniel Gusftanson Mons Fernando Chica Arellano editor de la obra y observador permanen-te de la Santa Sede ante la FAO IFAD PAM y Carlos Granados Director de la BAC Asistieron al acto el cardenal Santos Abril el cardenal Stella el arzobispo secretario del Pontificio Consejo para la Cultura varios rectores de Colegios y profesores de universidades romanas el embajador de Espa-ntildea ante la Santa Sede y los de Colombia y Paraguay (martes 23 de febrero)

otrAs ActividAdes

Con motivo de la Fiesta del Reservado el saacutebado 7 de noviembre intervino el Colegio el Coro de la dioacutecesis de Roma dirigido por Mons Marco Frisina Asistieron al concierto maacutes de trescientas personas que abarrotaron la Capilla del Colegio El magniacutefico programa aunoacute oracioacuten y catequesis tomando como referencia la eucaristiacutea El director del Coro presentoacute cada pieza de forma didaacutectica A continuacioacuten se sirvioacute una ce-na-bufeacute a todos los presentes

Del martes 19 al martes 26 de abril tuvimos la laquoExposicioacuten del libro religiosoraquo de la mano en esta ocasioacuten de Ediciones Siacutegueme El objetivo era conocer la importancia de las editoriales catoacutelicas y el servicio que prestan en la difusioacuten de la cultura cristiana y de la fe de la Iglesia en el mundo de hoy La inauguracioacuten corrioacute a cargo del director de la Editorial D Eduardo Ayuso Santos quien fuera tambieacuten vicerrector de este Cole-gio y que habloacute laquoDel amor a los libros y el deseo de Diosraquo La exposicioacuten se celebroacute paralelamente en el Colegio Mexicano

A propuesta de los alumnos se convocaron dos reuniones sobre el tema de la exhortacioacuten del Papa Francisco Amoris Laetitia Se tratoacute de un deba-te interdisciplinar preparado por los propios colegiales Se realizaron dos encuentros (11 y 25 de mayo) con la intervencioacuten en la mesa de varios ponentes y una gran afluencia de colegiales

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3

TESIS Y TESINAS

tesis doctorAles

A lo largo del curso 2015-2016 se han defendido dos tesis recibiendo ambas la maacutexima calificacioacuten

El martes 20 de octubre se celebroacute la defensa de la Tesis doctoral en Teologiacutea dogmaacutetica de sacerdote de Barcelona Juan Ramoacuten Laparra Mar-tiacutenez dirigida por el profesor Norman Tanner y titulada laquoLa cristologiacutea de Calcedonia y la obra de Andreacute de Halleux complementada y confrontada con las aportaciones de Alois Grillmeier y Richard Priceraquo

El jueves 16 de junio tuvo lugar la defensa de la Tesis doctoral en De-recho canoacutenico del sacerdote de la dioacutecesis de Toledo Fernando Palacios en la Universidad Pontificia de la Santa Cruz titulada laquoEl Romano Pontiacute-fice y la liturgia estudio histoacuterico-juriacutedico del ejercicio y desarrollo de la potestad del Papa en materia lituacutergicaraquo El director era el espantildeol Antonio Saacutenchez Gil

tesinAs de licenciAturA

Mikel Aranguren Zubialqui laquoEl discernimiento seguacuten san Ignacio de Lo-yola luz para la espiritualidad sacerdotalraquo

Aacutengel Carnicero Carrera laquoComunioacuten trinitaria y comunioacuten interpersonal a la luz de la obra de Mons Luis F Ladaria SJraquo

Guillermo Cesaacutereo Contiacuten Ayloacuten laquoJesucristo pan de vida eterna simbo-lismo cristoloacutegico y sentido eucariacutestico del panis uite en el pensamien-to de Agustiacuten de Hiponaraquo

Juan Pablo Domiacutenguez Teba laquoAlonso Marcos de Llanes y Arguumlelles Arzobispo de Sevilla en tiempos de la Ilustracioacuten (1783-1795)raquo

David Flores Flores laquoMariacutea coronacioacuten de la obra salviacutefica de la Trini-dad a partir de las aportaciones del Vaticano II y autores selectosraquo

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la ViDa en el Colegio

Eduardo Lorenzo Garciacutea laquoVocacionalizar la Pastoral juvenil Liacuteneas guiacutea para realizar un proyecto de Pastoral juvenil-vocacional en la Dioacutecesis de Orihuela-Alicanteraquo

Jesuacutes Navarro Ortiz laquoEl culto a Santiago el Mayor en Espantildea Oriacutegenes y tradicionesraquo

Hilary Kauseni Ndeke laquoFor he too is a Son of Abraham A redaction-Cri-tical Study of Lk 191-10raquo

Daniel Pellicer Monteagudo laquoLa prueba de la exclusioacuten temporal de la ordinatio ad bonum prolisraquo

Job Prieto Arana laquoEl primer ritual peruano de 1607 Rituale seu Manuale Peruanum de Fray Luis Jeroacutenimo de Oreacuteraquo

Joseacute Manuel Rodriacuteguez Morano laquoLa veneracioacuten de los Santos del Anti-guo Testamento en el Martyrologium Romanum del 2004raquo

Ismael Rojo Peacuterez laquoLa eparquiacutea fuera del territorio patriarcalraquo

La revista Mater Clementissimadel Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute en Romase terminoacute de imprimir el 8 de diciembre de 2016

fiesta de la Inmaculada Concepcioacuten de la Virgen Mariacutea

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INDICACIONES PARA LOS AUTORES

A norMAs generAles de publicAcioacuten

Dado que la revista Mater Clementissima es un oacutergano de difusioacuten de la investigacioacuten realizada en el Colegio uacutenicamente podraacuten publicar en ella co-legiales o formadores tanto presentes como pasados de este mismo Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma

La extensioacuten de los originales seraacute habitualmente de un miacutenimo de veinte folios DIN-A4 a doble espacio y de un maacuteximo de cuarenta

Los originales se enviaraacuten al correo electroacutenico de la redaccioacuten de la revista cuya direccioacuten es la siguiente

revistacollegiospagnoloorg

El enviacuteo deberaacute hacerse antes del 31 de diciembre del antildeo anterior al de su publicacioacuten indicando direccioacuten postal y electroacutenica del autor institucioacuten donde presta sus servicios y cargo o funcioacuten acadeacutemica que desempentildea

Los originales se presentaraacuten soacutelo en espantildeol Cada original deberaacute venir acompantildeado de un breve resumen en espantildeol e ingleacutes asiacute como de una relacioacuten de palabras claves igualmente en ambos idiomas

El Consejo de Redaccioacuten seleccionaraacute los artiacuteculos para cada nuacutemero una vez recibidos los informes de calidad realizados por dos de los consultores cien-tiacuteficos Esos informes se realizan sobre los originales anoacutenimos y su resultado positivo negativo o condicionado seraacute comunicado debidamente a los autores

Aquellos originales que no se atengan a las normas de citacioacuten y a las reglas de estilo de la revista seraacuten devueltos para su correccioacuten

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inDiCaCiones para los autores

b norMAs de citAcioacuten

1 Libro normalC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma Roma 2016 100-120

2 Actas de CongresosC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma in Actas del Congreso Interna-cional (Roma 1-2 enero de 2016) vol I Roma 2016 100-120

3 Libro con varios voluacutemenesC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma vol 1 Roma 2016 100-120

4 Libro con varias edicionesC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma 2 ed Roma 2016 100-120

5 Libro de varios autores con texto uacutenico comuacuten a todosC MARTIacuteN - E GARCIacuteA - E ALONSO El Colegio Espantildeol de Roma Roma 2016 100-120

6 Libro dentro de una coleccioacutenC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma [Ciencias eclesiaacutesticas 23] Roma 2016 100-120

7 Parte de un libro de varios autores cada uno con su texto propioC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol in E GARCIacuteA (ed) Los Colegios roma-nos Roma 2016 100-120

8 Voz de diccionario o enciclopediaC MARTIacuteN Colegial in Diccionario de los Colegios vol 2 Roma 2016

100 col 738-784

9 Artiacuteculo en revistasC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma in Estudios Eclesiaacutesticos (EE) 12342 (1998) 100-120

10 Las citas biacuteblicasSeguacuten la Biblia de La Casa de la Biblia

11 Los dos Coacutedigos de Derecho CanoacutenicoCIC 17 c 120 CIC 83 cc 120-123

12 Concilio Vaticano IIUtilizar las siglas comunes seguidas del nuacutemero del documento LG 22

13 Documentos electroacutenicosC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma [en liacutenea] html [ref de 30 marzo 2016] Disponible en httpwwwcolegioorghome

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inDiCaCiones para los autores

c norMAs de estilo

1 FuenteLos originales se presentaraacuten en formato electroacutenico (preferiblemente Word)

utilizando el tipo laquoTimes New Romanraquo en tamantildeo 12 puntos No se utilizaraacuten negritas (bold) ni subrayados Se utilizaraacute la letra cursiva cuando en el texto se empleen teacuterminos o frases en lengua extranjera o en latiacuten

2 PaacuterrafosLos paacuterrafos apareceraacuten justificados y con un interlineado sencillo La prime-

ra liacutenea de cada paacuterrafo apareceraacute sangrada asiacute como la primera liacutenea de cada nota a pie de paacutegina

3 EstructuraLa estructura del trabajo podraacute admitir un maacuteximo de cuatro niveles Las

llamadas a pie de paacutegina se haraacuten en el texto mediante referencias en nuacutemeros araacutebigos en superiacutendice Se utilizaraacute para su composicioacuten un formato de laquoTimes New Romanraquo en tamantildeo 10 e interlineado sencillo

Cuando se repite la cita por segunda vez consecutiva se utilizaraacute Ibid Cuando son segunda vez en varias obras distintas se consignaraacuten despueacutes del nombre del autor las primeras palabras de la obra citada anteriormente

Id (Idem laquoDel mismo autorraquo) se emplearaacute para citar el autor al que se ha hecho referencia inmediatamente antes

LocCit (laquoen el lugar citadoraquo) se usaraacute para enumerar en la misma paacutegina una obra citada anteriormente habiendo otras referencias diferentes intercaladas

Vid (Vide) se usaraacute para una cita ya referenciada con el fin de evitar la re-peticioacuten

Passim (laquoaquiacute y alliacuteraquo en varias partes o pasajes) se usaraacute cuando sea imposi-ble mencionar todas las paacuteginas de las que se extraen las ideas de un autor

Apud (laquocitado porraquo una cita de cita) se utilizaraacute cuando se cite un documento no consultado directamente sino citado por otro autor

Mater ClementissimaRevista de Ciencias eclesiaacutesticas

Nueva eacutepocaNuacutemero 1 - 2016

Nuacutem

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Mat

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Page 3: Mater Clementissima · 2019. 11. 19. · KeyworDs: Church, Synodality, Collegiality, Primacy, Sensus fidei. El objetivo del presente estudio es indagar «los sujetos de la sinodali

DIRECTOR EDITORJoseacute San Joseacute Prisco

CONSEJO EDITORIAL EDITORIAL BOARDArgimiro Martiacuten BenitoJavier Malo PeacuterezLope Rubio Parrado

CONSULTORES CIENTIacuteFICOS SCIENTIFIC ADVISORSAurelio Garciacutea Maciacuteas Pontificio Ateneo de San Anselmo (Roma)Dario Vitali Universidad Pontificia Gregoriana (Roma)Jacinto Nuacutentildeez Regodoacuten Universidad Pontificia de SalamancaJoseacute Luis Barriocanal Goacutemez Facultad de Teologiacutea del Norte de Espantildea (Burgos)Juan Manuel Cabiedas Tejero Universidad Pontificia de MeacutexicoLuis A Garciacutea Matamoro Universidad Pontificia de SalamancaSalvador Pieacute i Ninot Facultad de Teologiacutea de Cataluntildea Ateneo San PaciagraveSantiago Guijarro Oporto Universidad Pontificia de SalamancaTeodoro Leoacuten Muntildeoz Vicario general de SevillaVicente Caacutercel Ortiacute Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute (Roma)Viacutector Suaacuterez Gondar ITC y Universidad Pontificia de Salamanca

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El Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute en Roma es el editor de Mater Clementissima Revista de Ciencias eclesiaacutesticas

ISSN 2039-1498

El Editor a los efectos previstos en el artiacuteculo 321 paacuterrafo segundo del vigente TRLPI se opone expresamente a que cualquiera de las paacuteginas de esta obra o partes de ella sean utilizadas para la realizacioacuten de resuacutemenes de prensa Cualquier forma de reproduccioacuten distribucioacuten comunicacioacuten puacuteblica o transformacioacuten de esta obra

solo puede ser realizada con la autorizacioacuten de sus titulares salvo excepcioacuten prevista por la ley

3

Mater Clementissima 1 (2016)

SUMARIO SUMMARY

PRESENTACIOacuteN 5

ARTIacuteCULOS ARTICLES

Dario Vitali El Siacutenodo de los obispos al servicio de una Iglesia sinodal los sujetos de la sinodalidad a la luz de la eclesiologiacutea del Vaticano IIThe Synod of Bishops at the service of a synodal Church synodality subjects in the light of the ecclesiology of Vatican II Council 7

Juan Manuel CabieDas teJero El hombre es sujeto y persona La relacioacuten entre trascendentalidad y antropologiacutea en Karl RahnerMan is subject and person Karl Rahner on relationship between transcendentality and anthropology 59

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez La definicioacuten de Calcedonia a traveacutes de sus inteacuterpretes contemporaacuteneosThe Chalcedon definition on the point of view of recent scholars 121

ViCente CaacuterCel ortiacute El Colegio Espantildeol de Roma centro de proacutefugos durante la Guerra civil espantildeolaThe Spanish College of Rome refugees center during the Civil war 143

LA VIDA EN EL COLEGIO

Datos estadiacutesticos del curso 2015-2016 195Acontecimientos maacutes destacados 197Tesis y tesinas 201

5

Mater Clementissima 1 (2016) 5-6

PRESENTACIOacuteN

La revista Mater Clementissima vio la luz por primera vez en enero de 1913 como Boletiacuten de la laquoAsociacioacuten de Nuestra Sentildeora de la Clemen-ciaraquo que habiacutea sido creada y bendecida por el papa san Piacuteo X el diacutea de san Joseacute del antildeo 1912 como asociacioacuten de alumnos y antiguos alumnos del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma

En su primer nuacutemero de enero de 1913 indica el editorial que aparece laquosin otras pretensiones que las de poder servir de nuevo viacutenculo para es-trechar maacutes la unioacuten fraternal que debe ser cada diacutea maacutes iacutentima entre los antiguos alumnos del Colegio Espantildeol bajo los auspicios de la Santiacutesima Virgen de la Clemencia que tantos favores les dispensoacute desde los antildeos que vivieron en Romaraquo (p 4)

A partir de entonces se convierte en el instrumento de comunicacioacuten de la vida interna del Colegio actividades religiosas culturales y festivas visitas resultados acadeacutemicos de los alumnos y de las noticias que llegan de los antiguos alumnos nombramientos publicaciones y apostolados

La Revista no se publicaraacute entre los antildeos 1936 y 1938 por la situacioacuten que se vivioacute con motivo de la Guerra civil espantildeola Aparece de nuevo en 1939 incluyendo la lista de los superiores y alumnos martirizados durante la persecucioacuten religiosa de esos antildeos

Con motivo de la Beatificacioacuten del Fundador (1987) y de la celebra-cioacuten del primer Centenario del Colegio (1992) se publicaron nuacutemeros extraordinarios

A partir del curso 1994-1995 a la Croacutenica del Colegio se comienzan a antildeadir los textos de las conferencias y homiliacuteas pronunciadas en el centro en fechas sentildealadas asiacute como una amplia comunicacioacuten del contenido de las tesis defendidas durante el curso anterior y los tiacutetulos de los trabajos de licenciatura Con ello se intentaba conseguir que la Revista fuera ins-trumento de caraacutecter maacutes acadeacutemico sin dejar de ser cauce de comunica-cioacuten entre los colegiales pasados y presentes

6

presentaCioacuten

Con este nuacutemero de 2016 y tras varios antildeos de edicioacuten solo en for-mato digital la revista Mater Clementissima vuelve a la edicioacuten impresa e inaugura una nueva etapa ahora ademaacutes de Ciencias eclesiaacutesticas El cambio introducido en el tiacutetulo sugiere la orientacioacuten de la publicacioacuten que tendraacute caraacutecter anual y que sin dejar de ser oacutergano de comunicacioacuten entre los colegiales priorizaraacute la difusioacuten de estudios especializados rela-cionados con las Ciencias eclesiaacutesticas

Cuando el 1 de abril de 1892 el Beato Manuel Domingo y Sol fundoacute el Colegio deseaba una verdadera laquorenovacioacuten cientiacutefica y aun disciplinar del clero espantildeolraquo Este curso el Colegio cumpliraacute 125 antildeos desde su fundacioacuten y podemos decir sin temor a equivocarnos que ha cumplido con creces las expectativas del Fundador pues de eacutel han salido ilustres pensadores profesores literatos e investigadores que formando parte de la gran familia del Colegio Espantildeol de San Joseacute han contribuido de ma-nera decisiva en dicha renovacioacuten La revista Mater Clementissima es un foro abierto pensado para ellos un lugar para la difusioacuten del conocimiento y para el debate acadeacutemico

Esperamos que esta iniciativa tenga buena acogida entre los estudiosos y pueda con la ayuda de todos mantenerse en el tiempo con un buen nivel de reflexioacuten El desafiacuteo de seleccionar artiacuteculos mediante el procedimien-to de doble ciego supone la colaboracioacuten de los consultores cientiacuteficos (a quienes desde aquiacute agradecemos su generoso ofrecimiento a colaborar con la Revista) para analizar las propuestas y cuando corresponde pro-poner ajustes a los autores Por parte de los autores se requiere la dispo-sicioacuten para considerar las sugerencias que en definitiva mejoraraacuten su trabajo En otras palabras se trata de establecer un diaacutelogo acadeacutemico que tiene como uacutenica finalidad enriquecer el contenido de lo que se publica

A partir de ahora los lectores seraacuten quienes tengan la palabra sobre el contenido de la Revista y les agradeceremos sus comentarios y sugeren-cias para asegurar la calidad de este proyecto

7

Mater Clementissima 1 (2016) 7-57

El Siacutenodo de los obispos al servicio de una Iglesia sinodal los sujetos de la sinodalidad a la luz de la

eclesiologiacutea del Vaticano II

Dario Vitali1

Pontificia Universidad Gregoriana de Roma

resuMen El 17 de octubre de 2015 concluyendo las celebraciones del 50 aniversa-rio del Siacutenodo de los obispos el Papa Francisco pronuncioacute un discurso de amplio alcance sobre laquoLa Iglesia constitutivamente sinodalraquo A partir de ese discurso este documento propone una amplia y articulada discusioacuten sobre la naturaleza y sujetos de la colegialidad Despueacutes de una primera parte (auditus fidei) que busca en el Concilio Vaticano II las bases de la sinodalidad la segunda parte (intellectus fidei) proporciona los criterios para comprender por queacute la sinodalidad es laquouna dimensioacuten constitutiva de la Iglesiaraquo La naturaleza constitutivamente sinodal de la Iglesia se estudia partiendo de las relaciones que se establecen entre los sujetos de la sinoda-lidad ilustrando las condiciones que hacen posible el ejercicio de la sinodalidad en la Iglesia en los diferentes momentos del proceso sinodal En esta perspectiva se pone en evidencia coacutemo la sinodalidad la colegialidad y el primado son teacuterminos conjuntados armoacutenicamente en el horizonte de una concepcioacuten sinodal de la Iglesia

palabras ClaVe Iglesia sinodalidad colegialidad Primado Sensus fidei

abstraCt laquoThe Synod of Bishops at the service of a synodal Church synodality sub-jects in the light of the ecclesiology of Vatican II Councilraquo On October 17 2015 concluding the 50th anniversary of the Synod of Bishops Pope Francis gave a comprehensive speech on laquoSynodal constitutively Churchraquo From that speech this document proposes a wide and articulated discussion of the nature and subject of synodality After a first part (auditus fidei) looking at Vatican II synodality bases the second part (intellectus fidei) provides the criteria to understand why synodality is laquoa constitutive dimension of the Churchraquo The synodal constitutively nature of

1 El profesor Dario Vitali Director del departamento de Teologiacutea Dogmaacutetica de la Uni-versidad Pontificia Gregoriana es tambieacuten el asesor acadeacutemico del Pontificio Colegio Espa-ntildeol de San Joseacute

Dario Vitali

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the Church is studied based on the relationships established between the subjects of synodality illustrating the conditions that make possible the exercise of synodality in the Church at different times of the synodal process In this perspective it becomes evident how synodality collegiality and primacy are terms harmonically connected on the horizon of a synodal conception of the Church

KeyworDs Church Synodality Collegiality Primacy Sensus fidei

El objetivo del presente estudio es indagar laquolos sujetos de la sinodali-dad a la luz de la eclesiologiacutea del Vaticano IIraquo Si se interpretase literal-mente el tiacutetulo se podriacutea considerar la cuestioacuten como no resuelta el Con-cilio Vaticano II no trata ex professo la sinodalidad Las 140 menciones de laquosiacutenodoraquo se refieren siempre al Concilio sin querer nunca entender la sinodalidad como elemento caracterizador de la Iglesia2 La atencioacuten de los Padres Conciliares se dirigiacutea hacia otra cuestioacuten en concreto al tema de la colegialidad y la sinodalidad como proceso relativo al entero Pue-blo de Dios ademaacutes de no formar parte de su horizonte de intereses era desconocida en gran medida La cuestioacuten no debe sorprender demasiado un milenio de ejercicio de autoridad jeraacuterquica inspirado en el modelo de la monarquiacutea y asegurando las prerrogativas papales que culmina con el Concilio Vaticano I habiacutea cancelado el principio de la sinodalidad en la vivencia eclesial y habiacutea oscurecido la conciencia sobre la naturaleza sinodal de la Iglesia

Por otra parte es cierto que la cuestioacuten de la sinodalidad no podiacutea emerger en la Iglesia Catoacutelica si antes no se hubiera resuelto la cuestioacuten de la relacioacuten entre Papa y Colegio que ya surgioacute en el Concilio Vaticano I y que fue expliacutecitamente introducida como tema en el capiacutetulo III de la Lumen gentium Se trata de retomar las cuestiones a nivel de historia y de hermeneacuteutica de los textos conciliares tratando de ver sobre la base y en el respeto de estos una comprensioacuten original de la sinodalidad en-tendida sobre todo como dimensioacuten constitutiva de la Iglesia en la que la celebracioacuten de la asamblea del Siacutenodo de los obispos sea la imagen (logo) ejemplar de un camino sinodal de la Iglesia y en la que todos cada uno seguacuten su propia condicioacuten sean protagonistas

2 Cfr X OCHOA Index verborum cum documentis Concilii Vaticani Secundi Roma 1967 484-485

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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Este escrito se articularaacute en dos partes La primera de caraacutecter maacutes hermeneacuteutico se centraraacute en localizar los teacuterminos de la cuestioacuten en el Concilio Vaticano II es este el momento del audius fidei La segunda de caraacutecter maacutes sistemaacutetico deduciraacute de los teacuterminos precedentemente ex-puestos el perfil de una laquoIglesia constitutivamente sinodalraquo3 articulando a continuacioacuten los elementos de la sinodalidad con el cuadro eclesioloacutegi-co que emergioacute del Concilio Vaticano II este es el momento del intellec-tus fidei Entre liacuteneas se podraacute leer a traveacutes de su desarrollo el escenario dibujado por el Papa Francisco en el discurso pronunciado con ocasioacuten del quincuageacutesimo aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo

1 Auditus fidei

El accidentado recorrido del capiacutetulo III de la Lumen gentium mues-tra lo fatigoso que resulta volver atraacutes sobre todo si estaacuten en juego no los errores a combatir o a corregir sino diferentes visiones de Iglesia Y la visioacuten de Iglesia que llega al Vaticano II es la que ha madurado a lo largo de todo un milenio a partir de la reforma gregoriana y a traveacutes de procesos cada vez maacutes subrayados que van a estructurar en teacutermi-nos profundamente radicalizados el modelo piramidal de Iglesia No es necesario recorrer aquiacute la historia del segundo milenio Pero siacute es perti-nente recordar algunos elementos que han sentildealado la autocomprensioacuten de la Iglesia

11 El punto de partida la reforma gregoriana

En primer lugar estaacute el cisma de Oriente que lleva a la Iglesia a una fractura tan profunda como dolorosa en un frente Bizancio custodio ce-loso de una estructura sinodal de la Iglesia apoyada en la continuacioacuten de las instituciones del primer milenio cristiano que continuacutea con la repeti-cioacuten de su modelo eclesioloacutegico transferido tambieacuten a la tercera Roma en el otro la Ecclesia romana que despueacutes de haber guiado la transicioacuten del Imperio romano al Sacro Imperio Romano se encuentra ahora en una posicioacuten privilegiada en la construccioacuten de una Europa fundada sobre la base de la identidad cristiana

3 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos (17-X-2015)

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Constituiriacutea un error sin embargo pensar en un primado paciacuteficamente reconocido y aceptado tanto desde el aacutembito civil como desde el eclesial Las Iglesias locales aun no reivindicando la autocefalia como en Oriente ciertamente se moviacutean con mucha autonomiacutea respecto a un centro fuer-temente debilitado por las intrigas de las familias romanas en lucha por acaparar el solio pontificio Por otro lado en la organizacioacuten de la Iglesia perduraba auacuten la estructura del primer milenio con dioacutecesis sedes metro-politanas y regiones eclesiaacutesticas donde la autoridad papal veniacutea modula-da a escala de los tiacutetulos papales obispo de Roma metropolita del Lacio primado de Italia patriarca de Occidente Maacutes allaacute de la retoacuterica sobre la funcioacuten universal del Papa su influencia efectiva ndashcomo demuestra el cuadro de participantes en los siacutenodos romanosndash se limitaba de facto a las sedes inmediatamente sometidas a la Ecclesia romana

La situacioacuten cambioacute radicalmente con la reforma gregoriana que in-cidioacute en el cuadro institucional de la Iglesia La lucha por moralizar al clero llevoacute al Papado a la confrontacioacuten frontal con el emperador clave y fundamento de aquel sistema de la Iglesia imperial ndashla Reichskirchendash que subordinando el nombramiento de los obispos al placet del rey termina-ba por vincular la jerarquiacutea eclesiaacutestica a la loacutegica del poder laico Seraacute Hildebrando de Soana recieacuten elegido al trono papal como Gregorio VII quien advierta como interferencia inaceptable el sistema de investiduras laicas4 un nudo a cercenar maacutes que a deshacer para garantizar la Libertas Ecclesiae

La victoria del Papado reformador llevaraacute al sucesor de Pedro al veacutertice de la respublica christiana al lugar del emperador que tambieacuten en occi-dente era considerado la cabeza de la cristiandad y que interveniacutea directa-mente en la vida de la Iglesia seguacuten los caacutenones del cesaropapismo

Este hecho tendraacute repercusioacuten sobre la estructura interna de la Iglesia para desarraigar la mezcolanza entre Iglesia y Reino entre los obispos electores y el emperador no bastaba con excomulgar a este uacuteltimo era necesario sustraer a los obispos de la esfera del poder imperial y vincular-

4 Antes de Gregorio VII la accioacuten de los reformadores se centroacute maacutes en luchar contra la simoniacutea para combatirla Pier Damiani ciertamente el reformador maacutes representativo anterior a la eleccioacuten de Gregorio VII no dudoacute en solicitar la intervencioacuten del emperador incluso contra el Papa como demuestra el caso de Gregorio VI El cambio de acento hacia una comprensioacuten maacutes laquopoliacuteticaraquo del problema concentrada en la lucha por las investiduras se impone con la eleccioacuten de Hildebrando de Soana Me permito hacer alusioacuten a una contribucioacuten miacutea D VI-TALI La Chiesa da riformare lrsquoecclesiologia damianea in M TAGLIAFERRI (dir) Pier Damiani Lrsquoeremita il teologo il riformatore (1007-2007) Bologna 2009 197-232

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les maacutes estrechamente a Roma Encuentra justificacioacuten aquiacute el Dictatus Papae en el cual Gregorio VII afirma que laquoel Papa puede destituir o resta-blecer a los obisposraquo5 y lo puede hacer sin tener que pasar necesariamente por un siacutenodo6 La victoria sobre el imperio iraacute modificando los equili-brios internos de la Iglesia desencadenando un proceso de concentracioacuten de todo poder en las manos del Papa Por esta viacutea se reafirma la idea de que el Obispo de Roma sea cabeza no solo de una Iglesia de antigua fundacioacuten que desempentildea un servicio para la unidad de las Iglesias sino de la Iglesia Universal misma Como fundamento de tal pretensioacuten los teoacutelogos de la reforma desarrollan la tesis de una fundacioacuten divina de la Iglesia de Roma como prueba de superioridad sobre otras Iglesias que solo pueden preciarse de una fundacioacuten apostoacutelica laquoTuacute eres Pedro y sobre esta piedra edificareacute mi Iglesiaraquo (Mt 1618)7

Si el primado sostenido por Gregorio VII ndashquien continuoacute convocan-do los siacutenodos de otontildeo y de cuaresma una demostracioacuten de coacutemo la estructura sinodal estaba profundamente radicada tambieacuten en Romandash fue maacutes ideal que real sin embargo el Dictatus Papae pone las bases para el paso a un poder personal del Papa Este se revelaraacute acabado con Inocen-cio III no por casualidad el primero que recurrioacute establemente al tiacutetulo de vicarius Christi utilizando la tiara siacutembolo de la plenitudo potestatis que laquoreuniacutea tanto los aspectos sacerdotales como los imperiales de su funcioacutenraquo8 Se pueden hallar aquiacute in nuce todos los elementos que es-tructuraraacuten el modelo piramidal de Iglesia el cual encuentra su punto de llegada en el Vaticano I

El paso de la sedes a la sedens de la Iglesia de Roma a su obispo ya proyectado hacia un poder universal de jurisdiccioacuten no se refleja uacuteni-camente en la relacioacuten entre el Papa y los obispos reducidos a funciona-rios del Papa pastor de toda la Iglesia Tambieacuten el pueblo de Dios queda privado de cualquier capacidad activa los presagios de la infalibilidad pasiva de los fieles afirmados despueacutes del Vaticano I ya se encuentran

5 Sentencia n 3 laquoQuod ille solus possit deponere episcopos vel reconciliare Solo eacutel [el Romano Pontiacutefice] puede destituir o readmitir a los obisposraquo

6 Sentencia n 25 laquoQuod absque synodali conventu possit episcopos deponere et recon-ciliare Eacutel puede al margen de una asamblea sinodal destituir o readmitir a los obisposraquo

7 Para la argumentacioacuten cfr PIER DAMIANI Carta 58 ai Cardinali Vescovi in Opere di Pier Damiani I3 cartas (41-67) Roma 2002 110-121

8 A PARAVICINI BAGLIANI Tiara in Diccionario Enciclopeacutedico del Medioevo Ro-ma 1999 1913

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en el paso de la Iglesia como comunioacuten de Iglesias del primer milenio a la Iglesia universal del segundo milenio No se trata igual que para los obispos de un efecto deseado sino de una consecuencia de la nueva con-figuracioacuten de la Iglesia en la cual la universitas fidelium se reduce de he-cho a una masa confusa Por maacutes que se continuacutee repitiendo el proverbio de que la totalidad de los bautizados in credendo deficere non potest 9 se inicia en este tiempo el proceso que llevaraacute a traveacutes de un recorrido mar-cado por contrastes y oscilaciones a afirmar en el Concilio Vaticano I la infalibilidad del Papa cuando habla ex cathedra como laquopastor y doctor de todos los cristianosraquo10

12 El punto de llegada El Concilio Vaticano I

El momento maacutes dramaacutetico de tal recorrido lo representa la llegada del conciliarismo frente al escaacutendalo de una Iglesia dividida en dos y posteriormente en tres obediencias la uacutenica autoridad en condiciones de preservar a la Iglesia del error pareciacutea el Concilio en cuanto repre-sentacioacuten tambieacuten visible de la universitas fidelium que precisamente no puede equivocarse en el creer El Papa personifica tal infalibilidad o in-defectibilidad de la universitas fidelium como cabeza de la Iglesia con la condicioacuten de no desviarse de la fe de todos en cuyo caso decaeriacutea ipso facto de su funcioacuten tal como recitaba la teologiacutea del tiempo planteando la hipoacutetesis de la figura del Papa a fide devius o del Papa haereticus11 Como cabeza de la Iglesia eacutel es tambieacuten cabeza del Concilio por ser este en su composicioacuten articulada representacioacuten visible de la Iglesia12 con

9 Dice con conocimiento de causa Congar laquoSi hay una afirmacioacuten constante en los testi-gos de la Tradicioacuten es precisamente que judicium Ecclesiae universalis errare in his quae ad fidem pertinent impossibile estraquo Y M CONGAR Infalibilidad e indefectibilidad Sobre el concepto de laquoinfalibilidadraquo in iquestInfalible Rahner-Congar-Sartori-Ratzinger-Schnackenburg y otros especialistas contra Hans Kuumlng Roma 1971 90

10 CONCILIO VATICANO I Constitucioacuten dogmaacutetica Pastor Aeternus capiacutetulo IV laquoEl magisterio infalible del romano Pontiacuteficeraquo in DZ 3065-3075

11 Baste como ejemplo la querella sobre la pobreza que enfrentoacute a Juan XXII con los franciscanos a raiacutez de la publicacioacuten del laquoDiaacutelogo contra el Papa hereacuteticoraquo de Guillermo de Ockham antes de la muerte del Papa (1334) Para comprender el origen y desarrollo de la doc-trina sobre la infalibilidad cfr B TIERNEY Origins of Papal infallibility 1150-1350 A study of the concepts of infallibility sovereignty and tradition in the Middle Ages Leiden 1972

12 Se entiende en este sentido la participacioacuten en el Concilio con voz activa de los teoacutelogos (las universidades) y de los representantes de las naciones con la idea de una representacioacuten completa de la cristiandad Solo a partir del Concilio de Trento se volveraacute a reservar el derecho al voto uacutenicamente a los obispos abades y superiores generales de las distintas oacuterdenes

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la tarea de fijar la fe en decretos doctrinales y disciplinares que le corres-ponde al Papa promulgar13

El punto de desacuerdo entre los dos frentes se encuentra en quieacuten tiene la funcioacuten de laquopersonificarraquo a la totalidad de los fieles infalible en el creer si el Concilio o el Papa Ambos tienen motivos para sostener la propia posicioacuten porque maacutes allaacute de las razones de la colisioacuten estaba claro que la infalibilidad reivindicada por el Papa o por el Concilio es siempre la de la Iglesia No es casual que la deriva conciliarista se torne irreversi-ble en el momento en el que llega a declarar que el Concilio es infalible por siacute mismo con independencia de la fe de la Iglesia

En esta situacioacuten de impass se abre camino la idea de laquoun viacutenculo re-ciacuteproco entre el Papa y la Iglesiaraquo14 en razoacuten del cual laquola decisioacuten uacuteltima en cuestiones de fe recae sobre el Papa y sin eacutel no es posible una decisioacuten infalibleraquo15 No obstante unos y otros opinan que no es la infalibilidad del Papa la que garantiza la de la Iglesia sino viceversa laquoel Papa goza de esa infalibilidad de la que el Divino Redentor ha querido dotar a la Iglesiaraquo16 Esto no implica que le venga delegada desde abajo puesto que el Papa expresa la fe de la Iglesia no sobre la base de un consenso sino en cuanto cabeza del cuerpo eclesial al que siempre estaacute conectado y unido vitalmente De aquiacute a excluir un error del Papa en cuanto induciriacutea a error a la Iglesia solo hay un paso17

El Vaticano I constituiraacute el punto de llegada de este agitado proceso uniendo al primado la plenitudo potestatis exige como condicioacuten de la

13 Cfr STh II-II q1 a1014 K SCHATZ Il primato del Papa La sua storia dalle origini ai nostri giorni Brescia

1996 17515 Ibid 17516 Schatz explica este paso mostrando la diferencia entre autores como Antonino di Fi-

renze para el cual laquoes infalible la Iglesia en su conjuntoraquo y por tanto el Papa participa de la infalibilidad de la Iglesia y Cayetano que ni siquiera un siglo maacutes tarde excluye el error del Papa para salvaguardar la fe de la Iglesia cfr K SCHATZ Il primato del Papa 175-176

17 Ninguno de los 15 capiacutetulos del esquema preveacute la cuestioacuten I) Ecclesiam esse corpus Christi mysticum II) Christianam religionem nonnisi in Ecclesia et per Ecclesiam a Chris-ti fundatam excoli posse III) Ecclesiam esse societatem veram perfectam spiritualem et supernaturalem IV) Ecclesiam esse societatem visibilem V) De visibili Ecclesiae unitate VI) Ecclesiam esse societatem ad salutem consequendam omnino necessariam VII) Extra Ecclesiam salvari neminem posse VIII) De Ecclesiae indefectibilitate IX) De Ecclesiae in-fallibilitate X) De Ecclesiae potestate XI) De Romani Pontificis primatu XII) De temporali Sanctae Sedis dominio XIII) De concodia inter Ecclesiam et societatem civilem XIV) De iure et usu potestatis civilis secundum Ecclesiae Catholicae doctrinam XV) De specialibus quibusdam Ecclesiae iuribus in relatione ad societatem civilem cfr Primum schema consti-tutionis de Ecclesia Christi laquoSupremi Pastorisraquo MANSI 51 539A-636A

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eficacia y perfeccioacuten de su gobierno la infalibilidad como propiedad que no vincula ni subordina al Papa al consenso de la Iglesia o del cuerpo episcopal Este paso no previsto inicialmente ndashcomo se deduce del sche-ma de Ecclesia Supremi pastoris18ndash surgioacute durante el debate conciliar como punto sin vuelta atraacutes si se queriacutea realmente garantizar la autoridad del Papa frente a cualquier ataque proveniente de fuera o de dentro de la Iglesia Pastor aeternus19 asociaba laquola suprema potestad de magisterioraquo definiendo solemnemente el dogma de la infalibilidad del Pontiacutefice cuan-do habla ex-cathedra

El Romano Pontiacutefice cuando habla ex cathedra esto es cuando en el ejer-cicio de su oficio de pastor y maestro de todos los cristianos en virtud de su suprema autoridad apostoacutelica define que una doctrina de fe o costumbres debe ser sostenida por toda la Iglesia posee por la asistencia divina que le fue prometida en el bienaventurado Pedro aquella infalibilidad de la que el divino Redentor quiso que gozara su Iglesia en la definicioacuten de la doctrina de fe y costumbres Por esto dichas definiciones del Romano Pontiacutefice son irreformables ex sese non autem ex consensu Ecclesiae20

En el debate en el aula sobre la infalibilidad pontificia no faltaron las menciones a las otras dos autoridades ndashla totalidad de los fieles y los Con-ciliosndash infalibles en la interpretacioacuten del depoacutesito revelado21 La minoriacutea aun admitiendo la posibilidad de definir el dogma insistiacutea en que dicha definicioacuten podiacutea comprometer los iura Episcoporum Se comprende en esta liacutenea la afirmacioacuten seguacuten la cual laquola potestad del Sumo Pontiacutefice no conlleva prejuicio alguno a la potestad de jurisdiccioacuten episcopal ordinaria

18 Cfr DZ 3053-3064 los capiacutetulos 1-3 de Pastor Aeternus corresponden a los capiacutetulos IX X y XI del laquoschema de Ecclesiaraquo

19 DZ 307420 Por otro lado hubiese sorprendido lo contrario puesto que los Padres habiacutean sido

formados en la controversia teoloacutegica que habiacutea establecido la doctrina sobre los loci theo-logici interpretativi Despueacutes de la Sagrada Escritura y la Tradicioacuten establecidos como loci theologici constitutivi Melchor Cano indicaba en secuencia la Ecclesia Catholica (esto es la totalidad de los fieles) los Concilia (es decir el corpus Episcoporum) y la Ecclesia Ro-mana (el Papa) como loci theologici interpretativi dotados de infalibilidad cfr MELCHOR CANO De locis theologicis libri duodecim Salamanca 1563 [edicioacuten latino-espantildeola] Ma-drid 2006

21 Para una visioacuten maacutes extensa sobre la cuestioacuten cfr G DEJAIFVE Primato e colle-gialitagrave nel Concilio Vaticano I in Y M CONGAR - B D DUPUY (eds) Lrsquoepiscopato e la Chiesa universale Roma 1965 795-821 H J POTTMEYER Recent Discussion on Prima-cy in relation to Vatican I in W KASPER (ed) Il ministero petrino Cattolici e Ortodossi in dialogo Roma 2004 227-247

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e inmediata en virtud de la cual los obispos establecidos por el Espiacuteri-tu Santo (cfr Hch 2028) como sucesores de los apoacutestoles en cualidad de verdaderos pastores apacientan y gobiernan el rebantildeo que les ha sido confiadoraquo22 Hasta queacute punto eran fundados los temores de la minoriacutea re-sultoacute evidente en la poleacutemica desencadenada en Alemania por el Canciller Von Bismarck seguacuten el cual la definicioacuten del Vaticano I determinaba la peacuterdida de la jurisdiccioacuten episcopal totalmente absorbida por la papal23 Piacuteo IX24 ndashobligado o convencido es difiacutecil de decirndash confirmoacute la respues-ta de los obispos alemanes seguacuten los cuales laquoigual que el Papado es de institucioacuten divina asiacute mismo lo es tambieacuten el episcopado y tambieacuten eacuteste tiene sus derechos en virtud de tal institucioacuten que el Papa no tiene el de-recho ni el poder de cambiarraquo25

En relacioacuten con la totalidad de los fieles ndashla Ecclesia Catholica seguacuten los loci theologici de Melchor Cano26ndash fue en cambio el cardenal Guidi quien sostuvo en un discurso que impactoacute notablemente en el aula que el Papa define una verdad no laquoarbitrariamente y solo independientemente o al margen de la Iglesiaraquo27 sino sobre la base del sensus fidei de la Iglesia universal del que puede informarse o que puede conocer laquoescuchando la opinioacuten de los obispos que le manifiestan la tradicioacuten de sus Iglesiasraquo28 El hecho de depender de la fe de la Iglesia no subordina al Papa a actuar o pronunciarse bajo consenso de la fe de los fieles El ejercicio del magiste-rio pontificio queda siempre libre como habiacutea demostrado claramente el dogma de la Inmaculada Concepcioacuten definido pocos antildeos antes en virtud de aquella singularis Antistitum ac fidelium conspiratio29 manifestada por los obispos de todo el mundo como respuesta a la consulta lanzada por el mismo Piacuteo IX30

La intervencioacuten del cardenal Guidi consiguioacute que se incluyera en el texto un pasaje en el que se reconoce que en el ejercicio de su magisterio

22 DZ 306123 DH 3112 En este nuacutemero estaacuten recogidas y resumidas las propuestas de la circular de

Von Bismarck que distorsionan las afirmaciones del Vaticano I A estas responden los obispos punto por punto cfr DH 3113-3116

24 PIacuteO IX Carta apostoacutelica Mirabilis illa constantia (4-III-1875) DH 311725 DH 311526 MELCHOR CANO De loci theologici libri duodecim liber IV De Ecclesia Catholica27 MANSI 52 747C para el discurso completo cfr MANSI 52 740A-748A28 Ibid29 PIacuteO IX Bula Ineffabilis Deus (8-XII-1854) Pii IX Acta I1 597-61930 PIacuteO IX Enciacuteclica Ubi primum (2-II-1849) Pii IX Acta I1 162-166

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los Papas hacen uso y recurren a formas de cooperacioacuten laquoseguacuten lo exigi-do por las condiciones de los tiempos y las circunstancias ora convocan-do Concilios ecumeacutenicos ora intentando sondear la opinioacuten de la Iglesia esparcida por la tierra con siacutenodos particulares ora sirvieacutendose de otros medios que la Divina Providencia ponga a su disposicioacutenraquo31 A la consulta recurriraacute tambieacuten Piacuteo XII como medio para verificar la fe de la Iglesia respecto a la definicioacuten de la Asuncioacuten de Mariacutea32 de donde emerge tanto la fe del pueblo cristiano como la funcioacuten del episcopado como testigo y garante del sensus fidei de toda la Iglesia

13 Un nuevo punto de partida El Concilio Vaticano II

A causa de la suspensioacuten sine die del Vaticano I no se pudo concluir el debate relativo al schema constitutionis secundae de Ecclesia33 Mu-chas de las cuestiones contenidas en aquel texto entraron oportunamente revisadas en el schema de Ecclesia entregado a los Padres al final de la primera sesioacuten del Concilio Vaticano II Entre estas cuestiones sobresale la del episcopado incluido a lo largo de los capiacutetulos tercero y cuarto sobre la sacramentalidad del episcopado34 y el ministerio episcopal35

En el tercer capiacutetulo el schema toma distancia con respecto a la teo-logiacutea de la escuela que siguiendo la liacutenea del Concilio de Trento leiacutea el episcopado en clave de la potestas jurisdiccionis36 La discontinuidad se puede constatar en la afirmacioacuten de que laquoel episcopado pertenece sin duda al sacramento del Orden y es el sacerdocio en el grado maacuteximo (praecel-lenti) considerado por los Santos Padres y por la tradicioacuten lituacutergica como

31 DH 306932 Cfr PIacuteO XII Enciacuteclica Deiparae Virginis (1-V-1946) AAS 42 (1950) 782-783 la

definicioacuten dogmaacutetica se encuentra incluida en la constitucioacuten apostoacutelica Munificentissimus Deus (1-XI-1950) AAS 42 (1950) 767-770

33 Schema constitutionis secundae de Ecclesiae laquoTametsi Deusraquo MANSI 53 308A- 317A

34 Schema de Ecclesia Caput III laquoDe Episcopatu ut supremo gradu sacramenti ordinis et de sacerdotioraquo (nn 11-12) Acta Synodalia IIV 23-24

35 Schema de Ecclesia caput IV laquoDe Episcopis residentialibusraquo (nn 13-16) Acta Sy-nodalia IIV 27-34

36 La construccioacuten del discurso se asienta sobre la foacutermula binaria potestas ordinis-po-testas jurisdictionis en la frase de apertura en la que se declara que Cristo laquoha instituido en la Iglesia una auteacutentica potestad de magisterio y gobierno (docendi et gubernandi) que era por su naturaleza unida con un viacutenculo estrecho a la potestad de santificacioacuten otorgada con el sacramento del Ordenraquo Schema de Ecclesia n 11 laquoEpiscopatus ut sacramentumraquo Acta Synodalia IIV 23

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el sumo sacerdocio el veacutertice del sagrado ministerioraquo37 Siempre haciendo mencioacuten a la tradicioacuten de Oriente y Occidente el schema reitera que laquoel episcopado es verdadera y propiamente el grado supremo del Ordenraquo des-de el momento en el que laquocon la imposicioacuten de las manos y las palabras de consagracioacuten viene conferida la gracia del Espiacuteritu Santoraquo38

El capiacutetulo cuarto desarrolla el tema de los obispos residenciales en cuatro paacuterrafos estrechamente relacionados partiendo de la funcioacuten y dig-nidad de los obispos (n 13) concluye con el Colegio de los obispos (n 16) pasando por distintas aclaraciones sobre su relacioacuten con el Papa (n 14) y con la Iglesia universal (n 15) Toda la argumentacioacuten estaacute vinculada a Cristo mismo el cual ha puesto a los obispos a apacentar la Iglesia de Dios Sobre la base de tal presupuesto el schema afirma que laquolos distintos obis-pos como vicarios y mensajeros de Cristo dirigen como padres y pastores de su rebantildeo las Iglesias a ellos confiadas con potestad episcopal propia ordinaria e inmediata en unidad y bajo la autoridad del Romano Pontiacutefi-ceraquo39 para posteriormente ilustrar con detalle el ministerio de los obispos al servicio de su propia Iglesia

A continuacioacuten el schema explica la relacioacuten entre el primado y el episcopado utilizando la distincioacuten entre potestas ordinis y jurisdictio-nis laquola ordenacioacuten confiere ademaacutes de su funcioacuten santificadora tambieacuten aquella de magisterio y de gobierno que los obispos reciben del gobierno supre mo de la Iglesiaraquo teniendo el Papa laquola preeminencia [principatum] sobre otras potestades ordinarias y una potestad de jurisdiccioacuten inmedia-ta y episcopal en todas y cada una de las Iglesias como tambieacuten sobre todos y cada uno de los obispos de los fieles y pastoresraquo40 El paacuterrafo que se presenta a continuacioacuten ilustra la relacioacuten de cada uno de los obispos con la Iglesia universal un paacuterrafo particularmente elaborado y mejor ar-ticulado de lo que se aproboacute en aula

Dado que todos y cada uno de los obispos son centro y fundamento y prin-cipio de unidad en sus Iglesias particulares desde el momento que y a partir de las cuales formadas a imagen y semejanza de la Iglesia universal existe

37 Ibid38 Ibid39 Schema de Ecclesia n 13 laquoEpiscoporum munus et dignitasraquo Acta Synodalia IIV

25 Ibidem Afirmando la sacramentalidad del episcopado se modifica la relacioacuten con los pres-biacuteteros el n 12 afirma la superioridad de los obispos sobre los presbiacuteteros sosteniendo que estos aun sin tener o estar en el veacutertice del sacerdocio actuacutean sin embargo in persona Christi

40 Schema de Ecclesia n 14 laquoPrimatus et Episcopatusraquo Acta Synodalia IIV 26

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una y uacutenica Iglesia Catoacutelica cuyo centro y fundamento y principio de unidad es el sucesor de Pedro como vicario de Cristo mismo subyace que cada uno representa la propia Iglesia y todos junto con el Papa representan a la Iglesia toda [Ecclesia tota] en el viacutenculo de la paz y del amor 41

El capiacutetulo concluye con un paacuterrafo sobre el Colegio de obispos que constituye el punto de llegada de toda la argumentacioacuten Este Colegio que sucede al Colegio de los Apoacutestoles en el magisterio y en el gobierno pastoral maacutes auacuten en el cual permanece continuamente el Colegio de los Apoacutestoles y por medio del cual se hace manifiesta continuamente la misioacuten de Cristo mismo y su doctrina y sus leyes ha de considerarse sujeto con plena y suprema potestad sobre toda la Iglesia siempre en unidad con su cabeza [una cum capite suo] el Romano Pontiacutefice y nunca sin esta cabeza Sin embargo la potestad de dicho Colegio si bien ordinaria en cuanto a lo relativo al oficio solo puede ser legiacutetimamente ejercitada en modo ex-traordinario con la debida subordinacioacuten al vicario de Cristo en la tierra como y cuando eacutel lo quiera conceder En cuanto a la constitucioacuten de este sacro Colegio son miembros de derecho todos los obispos residenciales que esteacuten en paz con la Sede apostoacutelica y ninguacuten obispo residencial o no puede pertenecer a tal Colegio si no ha sido introducido en eacutel por el sucesor de Cristo vicario de Cristo y cabeza del Colegio o directamente o por taacutecito consenso42

El desarrollo del tema en el capiacutetulo es lineal y ciertamente maacutes claro que el textus prior los dos capiacutetulos relativos al episcopado han sido ampliamente revisados y refundidos en un solo capiacutetulo presentando co-rrecciones al texto que no siempre lo mejoran El schema entregado a los Padres al inicio del segundo periodo conciliar se reduce de hecho a cuatro

41 Schema de Ecclesia n 15 laquoRelatio Episcoporum ad totam Ecclesiamraquo Acta Syno-dalia IIV 26-27 El texto definitivo corrige parcialmente el textus prior que altera insoacute-litamente el schema de Ecclesia De este modo rezaba el textus prior laquoAsiacute como [sicut] el Romano Pontiacutefice como sucesor de Pedro es principio y fundamento visible de la unidad sea de los obispos como de la multitud [de los bautizados] asiacute [ita] cada obispo es principio y centro de la unidad en sus respectivas Iglesias particulares edificadas a imagen de la Iglesia universal en las cuales y a partir de las cuales existe una y uacutenica Iglesia catoacutelica Por lo cual [Qua de causa] cada uno de los obispos representa a su propia Iglesia y contemporaacutenea-mente todos con el Papa a la Iglesia entera [Ecclesia tota] en el viacutenculo de la pazraquo cfr Acta Synodalia III 236 Desapareciendo la estrecha comparacioacuten ndashita-utndash por una indicacioacuten de Pablo VI el texto definitivo resultaba construido sobre la yuxtaposicioacuten entre la funcioacuten del Papa en relacioacuten con la Iglesia Universal y la funcioacuten de los obispos en sus Iglesias Para un comentario maacutes extenso cfr D VITALI Verso la sinodalitagrave 27-34

42 Schema de Ecclesia n 16 laquoCollegium Episcoporumraquo Acta-Synodalia IIV 27

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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capiacutetulos solamente43 el segundo de los cuales se centra en la constitu-cioacuten jeraacuterquica de la Iglesia y particularmente del episcopado44 El hecho de unir dos capiacutetulos de contenido diverso produce un giro o cambio de perspectiva ndashy de loacutegicandash en la comprensioacuten del episcopado

Mientras el punto de partida del schema de Ecclesia era el ministerio episcopal sobre la base del cual se deduciacutea la sacramentalidad del epis-copado en el schema prior todo esto pasa a la cuarta seccioacuten en la que se desarrollan con detalle los tria munera de los obispos La eleccioacuten en el orden de redaccioacuten determina que el tema del Colegio aparezca ex abrup-to detraacutes del paacuterrafo relativo a los presbiacuteteros y los diaacuteconos laquoComo en el Evangelio por voluntad del Sentildeor Pedro y los apoacutestoles constituyen un solo Colegio apostoacutelico de la misma manera el sucesor de Pedro el Ro-mano Pontiacutefice y los obispos sucesores de los apoacutestoles son constituidos en unidad [inter se coniunguntur]raquo45 Privada de la referencia que la remite directamente a la funcioacuten episcopal el tema de la colegialidad se convier-te en una prolongacioacuten de la primera seccioacuten del capiacutetulo centrada en la sucesioacuten apostoacutelica Por esta razoacuten el textus emendatus con maacutes loacutegica desplazaraacute el paacuterrafo sobre los presbiacuteteros y diaacuteconos al final del capiacutetulo ofreciendo un desarrollo consecuente de la materia unida y vuelta a co-nectar directamente de este modo a la doctrina sobre la sacramentalidad del episcopado Se entiende desde esta perspectiva que el texto insista sobre el laquocaraacutecter y la naturaleza colegial del orden episcopalraquo46

43 Pars I Introductio (n 1) caput I De Ecclesiae mysterio (nn 2-10) caput II De constitutione hierarchica Ecclesiae et in specie de episcopatu (nn 11-21) Pars II caput III De Populo Dei et speciatim de laicis (nn 22-27) caput IV De vocatione ad sanctitatem in Ecclesia (nn 28-36) cfr Acta Synodalia III 215-281 La Comisioacuten teoloacutegica examinoacute to-das las animadversiones scriptae relativas a la primera parte del schema de Ecclesia dejando aquellas relacionadas con la segunda parte

44 El capiacutetulo I se articula en 11 paraacutegrafos (nn 11-21) que recogen y ampliacutean los capiacutetulos II y IV del schema precedente La relatio divide el capiacutetulo en dos partes y cuatro secciones En la primera parte (nn11-15) la primera seccioacuten (nn 11-12) funda la doctrina del episcopado en la sucesioacuten apostoacutelica la segunda (nn13-15) trata ex professo la sacra-mentalidad del episcopado En la segunda parte del capiacutetulo laquola tercera seccioacuten (nn 16-17) expone la doctrina del cuerpo o Colegio de los obispos tratando sobre todo la relacioacuten con su cabeza el Romano Pontiacutefice y posteriormente la de los obispos entre siacute y con toda la Iglesiaraquo la cuarta (nn 18-21) describe el ministerio de los obispos ilustrando cada uno de los tria munera docendi santificandi regendi Acta Synodalia III 254

45 Acta Synodalia III 25546 Resulta de gran intereacutes el comentario a la tercera seccioacuten nn 16-17 laquo16 El orden de

los obispos constituye un cuerpo o Colegio particular [aliquod] en el que se aclara ante todo la relacioacuten con su cabeza relacioacuten que se corresponde con la prerrogativa de Pedro sobre el Colegio de los Apoacutestoles Esto es porque el Colegio sin su cabeza no es auteacutentico Aquel

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14 La colegialidad

Los doce paacuterrafos de LG 3 (nn 18-29) claramente diferenciados en dos partes desarrollan la dimensioacuten jeraacuterquica de la Iglesia desde la clave del ministerio episcopal Tras el preaacutembulo (n 18) la primera parte introduce la sacramentalidad del episcopado vinculaacutendola a la sucesioacuten apostoacutelica (nn 19-21) para aclarar despueacutes la cuestioacuten de la colegialidad (nn 22-23) especificando la relacioacuten del Colegio con la cabeza pero tambieacuten con los otros obispos en la loacutegica de la unio collegialis la segunda ofrece una perspectiva nueva del ministerio episcopal a traveacutes del esquema de los tria munera (nn 24-27) y concluye fijando a la luz de la nueva comprensioacuten del ordo episcopalis su relacioacuten con presbiacuteteros y diaacuteconos (nn 28-29)

La cuestioacuten de la colegialidad se desarrolla siguiendo respetuosamente el criterio expuesto en la introduccioacuten donde el Concilio desarrolla la doc-trina relativa a la laquoinstitucioacuten perpetuidad valor sagrado del primado del Romano Pontiacutefice y de su magisterio infalibleraquo en paralelo con la doctrina sobre los obispos como necesario complemento al Vaticano I

El santo siacutenodo [hellip] continuando con el mismo objetivo ha decidido profe-sar puacuteblicamente y explicitar la doctrina sobre los obispos sucesores de los apoacutestoles los cuales junto con el sucesor de Pedro que es vicario de Cristo y cabeza visible de toda la Iglesia gobiernan la casa de Dios viviente47

En otras palabras el texto parte del teacutermino ya doctrinalmente fijado ndashel primado del sucesor de Pedrondash para aclarar casi por contrapunto la doctrina sobre el episcopado El textus emendatus encontroacute oposicioacuten en la discusioacuten en el aula donde el Coetus internationalis patrum puso resis-tencia a ultranza a la doctrina de la colegialidad que poniacutea en cuestioacuten ndasha su parecerndash los principios establecidos en el Vaticano I48 No es cuestioacuten

cuerpo unido a su cabeza debe ser considerado como sujeto de suprema potestad en la Iglesia tal y como se manifiesta en el Evangelio El Espiacuteritu Santo refuerza continuamente la unioacuten y la colaboracioacuten entre primado y episcopado Tal potestad es ejercida de modo extraordinario en el Concilio ecumeacutenico se puede activar otras modalidades de ejercicio con los obispos en sus sedes pero soacutelo a condicioacuten del consentimiento del Sumo Pontiacutefice 17 Los obispos responsables de una Iglesia concreta son el principio de unidad de su rebantildeo y todos juntos con el Papa representan a toda la Iglesia [Ecclesia tota]raquo Acta Synodalia III 254

47 Acta Synodalia IIII 211-21248 No viene al caso aquiacute retomar todo el debate relativo al asunto de la Nota explicativa

praevia ampliamente ilustrado en los comentarios de la Lumen gentium y en textos de his-toria del Concilio Nos interesa sobre todo subrayar los elementos que ayuden a aclarar la cuestioacuten del sinodalidad

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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de retomar aquiacute tal discusioacuten en ocasiones dramaacutetica que empujoacute a Pa-blo VI a vincular la hermeneacuteutica de LG 3 a la Nota explicativa praevia El texto que salioacute del aula aun en la loacutegica del compromiso despueacutes de todo ofrece una doctrina clara que logra un buen equilibrio entre las pre-rrogativas del Papa fijadas en Pastor Aeternus y las del Colegio sobre todo si no se incurre en el error de circunscribir el tema de la colegialidad uacutenicamente a la relacioacuten del Colegio con su cabeza

Ciertamente el nuacutemero 22 ofrece el mayor nuacutemero de elementos uacutetiles para esclarecer la cuestioacuten de la colegialidad

ndashA la par de Pedro y los apoacutestoles el Papa sucesor de Pedro y los obispos sucesores de los apoacutestoles estaacuten conjuntamente reunidos entre ellos en un Colegio

ndashlaquoEl Colegio o cuerpo de los obisposraquo existe siempre con y nunca sin el Papa como su cabeza

ndashAdemaacutes del Papa tambieacuten el Colegio de los obispos es laquosujeto de plena y suprema potestad sobre toda la Iglesiaraquo sin que esto comprometa la potestad plena suprema y universal del sucesor de Pedro sobre toda la Iglesia y su libre ejercicio

ndashTal autoridad no puede ser ejercitada sin el consenso de la cabezandashEl Colegio estando compuesto por muchos expresa la variedad y

la universalidad del Pueblo de Dios en cuanto reunido bajo una uacutenica cabeza expresa la unidad del rebantildeo de Cristo

ndashEn el Colegio los obispos gozan de una potestad para el bien (in bo-num) de sus fieles y tambieacuten para el bien de toda la Iglesia

ndashlaquoLa suprema potestad que este Colegio posee sobre toda la Iglesia es ejercida de modo solemne en el Concilio ecumeacutenicoraquo que es prerrogativa del Papa convocar presidir y confirmar

ndashlaquoLa misma potestad colegial puede ser ejercida por los obispos es-parcidos por el mundo junto con el Papa siempre y cuando la cabeza del Colegio los llame a la accioacuten colegial o al menos apruebe o acepte libremente la accioacuten conjunta de los obispos dispersos de modo que se convierta en un verdadero acto colegialraquo

Las prerrogativas del Colegio sin embargo no se agotan en su rela-cioacuten con la cabeza sino que se desprenden tambieacuten de la relacioacuten de los obispos entre ellos ilustrado en el n 23 sobre la base del viacutenculo con las Iglesias a ellos confiadas de las cuales son laquoprincipio visible y fun-damento de unidadraquo y con la Iglesia universal que existe en y a partir

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de las Iglesias particulares [in quibus et ex quibus] Si es correcto leer el n 23 como continuacioacuten del tema del Colegio ndashtal y como da a entender el incipit del paacuterrafo que habla de laquounioacuten colegial [que] aparece tambieacuten en las mutuas relaciones de los obispos con las Iglesias particulares y con la Iglesia universalraquo49ndash entonces la afirmacioacuten de que laquocada uno de los obispos representa a su propia Iglesia y todos junto con el Papa represen-tan a la Iglesia entera en el viacutenculo de la paz del amor y de la unidadraquo no es geneacuterica sino que remite precisamente a la unioacuten colegial

En otras palabras en el Colegio cada uno de los obispos representa a su propia Iglesia Siempre a partir del Colegio como sujeto de autoridad sobre la Iglesia se incluye la labor de anunciar el Evangelio a todos los hombres que obliga a cada obispo a procurar operarios del Evangelio y las ayudas materiales y espirituales para la misioacuten En el cuadro de la laquoco-llegialis unioraquo se situacutean tambieacuten las Iglesias laquosui iurisraquo (en su grado maacutes alto las Iglesias patriarcales) que laquogozan de una disciplina y costumbre lituacutergicas propias y de un patrimonio teoloacutegico y espiritualraquo y las Confe-rencias episcopales que laquohoy pueden ofrecer una contribucioacuten muacuteltiple y fecunda para que el afecto colegial tenga aplicaciones concretasraquo

Como puede verse todo el tratamiento del tema parte del primado que es el teacutermino conocido a partir del cual se elabora la doctrina de la co-legialidad que es el teacutermino no conocido El texto pone en evidencia las cautelas con las que se elaboroacute el miedo a comprometer las prerrogativas del Papa indujo a continuas precisiones que nunca fueron suficientes para quienes consideraban la doctrina de la colegialidad como un ataque al primado Objetivamente no se podiacutea ir maacutes allaacute de cuanto se afirmoacute pero a pesar de todo se obtuvo un gran resultado

15 Una revolucioacuten copernicana El capiacutetulo sobre el Pueblo de Dios

No deja de sorprender la ausencia de referencias en el capiacutetulo 3 de la Lumen gentium al Pueblo de Dios50 y a su indefectibilidad en la fe Ni siquiera en LG 25 que ilustra ampliamente el munus docendi se hace la

49 Es cuanto sostengo en D VITALI Verso la sinodalitagrave 27-3445-5250 La uacutenica excepcioacuten estaacute en LG 18 que es un texto de enlace introducido despueacutes de la

redaccioacuten del cap 2 sobre el Pueblo de Dios laquoPara apacentar y ampliar cada vez maacutes el Pueblo de Dios Cristo Sentildeor ha instituido en su Iglesia varios ministerios que tienden al bien de todo el cuerpo Dotados de sagrada potestad los ministros estaacuten al servicio de sus hermanos para que todos los que forman parte del Pueblo de Dios y por tanto gozan de verdadera dignidad cristiana tiendan libremente y ordenadamente a lo mismo y alcancen la salvacioacutenraquo

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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miacutenima referencia a tal aspecto El motivo es evidente el silencio se debe sobre todo a la trayectoria de los trabajos en el aula que seguiacutean ndashobvia-mentendash la secuencia de los capiacutetulos del schema de Ecclesia Ahora en el texto entregado a los Padres al inicio del segundo periodo conciliar el capiacutetulo sobre la constitucioacuten jeraacuterquica de la Iglesia precede al que se refiere al Pueblo de Dios en particular a los laicos51 Es como decir que el horizonte sobre el que los Padres conciliares leen las cuestiones es todaviacutea el de la diferencia de funciones tiacutepico de la societas inaequalium en la que los fieles son sujetos subordinados y pasivos llamados como maacuteximo a la colaboracioacuten con la jerarquiacutea No es casualidad que el eacutenfasis de las intervenciones sobre el capiacutetulo 3 recaiga sobre el tema de los laicos que pareciacutea constituir en aquel momento del camino de la Iglesia el punto maacutes novedoso del capiacutetulo sobre todo si se pasaba de la idea de un apostolado de los laicos por concesioacuten de la jerarquiacutea a la de la participacioacuten en la misioacuten misma de la Iglesia en virtud del bautismo52

Al pie del tiacutetulo del capiacutetulo en las Acta Synodalia aparece la ano-tacioacuten de que laquola Comisioacuten de coordinacioacuten de los trabajos conciliares desde hace no mucho tiempo [nuper] ha considerado necesario que el capiacutetulo se dividiese en dos partes de las cuales la primera tratariacutea de populo Dei in genere y configurando el capiacutetulo II del esquema de la constitucioacuten mientras la otra parte se refeririacutea a de laicis in specie cons-tituyendo el cuarto capiacutetuloraquo53 La comisioacuten haciacutea propia la propuesta que hizo el cardenal Suenens54 pidiendo expliacutecitamente que se modificase el orden de los capiacutetulos puesto que muchos temas propuestos en el capiacutetu-

51 Las intervenciones sobre el capiacutetulo II (cfr Acta Synodalia IIII) se extienden a lo largo de nueve congregaciones generales de la 42ordf a la 49ordf del 4 al 16 de octubre de 1963 (aunque la congregacioacuten 43ordf fue dedicada completamente a la revisioacuten del esquema sobre la liturgia) mientras las relativas al capiacutetulo III (cfr Acta Synodalia IIIII) se desarrollan en las congregaciones 50ordf-56ordf del 16 al 25 de octubre

52 No se subrayaraacute nunca suficientemente la incidencia del ensayo de Y CONGAR Jalons pour un theacuteologie du laiumlcat Paris 1954 no soacutelo por el paso de una loacutegica de colabo-racioacuten subordinada de los laicos en la misioacuten de la Iglesia por concesioacuten de la jerarquiacutea a la participacioacuten nativa en virtud del bautismo sino tambieacuten por la clasificacioacuten de la misioacuten de los laicos seguacuten las tres funciones ndashsacerdotal real y profeacuteticandash que seraacuten retomadas amplia-mente en los textos conciliares

53 Acta Synodalia III 25654 La solicitud fue entregada a los Padres el 9 de octubre de 1963 en la 44ordf congrega-

cioacuten general con el debate ya iniciado cfr Acta Synodalia III 324-329 Conviene recordar que la revisioacuten del esquema con la nueva numeracioacuten de los capiacutetulos y la distribucioacuten de la materia tuvo lugar durante la segunda intersesioacuten y que los Padres recibieron en mano el textus emendatus al principio del tercer periodo conciliar

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lo III del schema concerniacutean a todos los bautizados y no solamente a los laicos De ese capiacutetulo fue extrapolado solo el n 24 sobre el sacerdocio universal debidamente enriquecido y articulado en tres paacuterrafos (los ac-tuales nn 10-12)55

Pero esta correccioacuten de perspectiva produjo un cambio impensable en la comprensioacuten de la Iglesia radicada desde haciacutea siglos en el esquema de la societas inaequalium que habiacutea llevado a distinguir en la Iglesia dos cuerpos distintos y en alguacuten modo incluso contrapuestos la Ecclesia do-cens depositaria de todas las funciones y el poder y la Ecclesia discens los fieles puestos en la condicioacuten subordinada de suacutebditos sin ninguna capacidad activa Maacutes que en ideas alternativas la asiacute llamada laquorevolu-cioacuten copernicanaraquo del Concilio consiste en este ajuste de redaccioacuten que rompe la loacutegica del modelo piramidal fundada sobre la diferencia de funciones y de estados de vida para afirmar la radical igualdad de todos los miembros de la Iglesia en virtud de la comuacuten dignidad bautismal Las afirmaciones al fin y al cabo son las mismas y sin embargo su diversa colocacioacuten les confiere un peso diferente

En la secuencia precedente de los capiacutetulos se podiacutean afirmar todas las verdades maacutes hermosas sobre el Pueblo de Dios se podiacutea hablar de la participacioacuten en la misioacuten de la Iglesia por derecho nativo en virtud del bautismo se podiacutea introducir la referencia al sensus fidei y a los carismas de los fieles todo esto teniacutea una relevancia irrisoria por el solo hecho de estar situado despueacutes del capiacutetulo sobre la naturaleza jeraacuterquica de la Igle-sia Aunque sean importantes estos aspectos resultan siempre y de todos modos secundarios adicionales y por lo tanto no tienen la fuerza de incidir sobre un sistema consolidado desde haciacutea siglos sino a traveacutes de la contes-tacioacuten y el enfrentamiento

Por el contrario el hecho de situar los capiacutetulos sobre los estados de vida ndashjerarquiacutea laicos religiososndash detraacutes del relativo al Pueblo de Dios ha determinado una inversioacuten de perspectiva que ha puesto fin al menos sobre el papel al modelo piramidal de Iglesia y a la divisioacuten del cuer-

55 El capiacutetulo fue redactado extrapolando del capiacutetulo III del esquema el n 24 sobre el sacerdocio universal y el sacerdocio ministerial ampliado oportunamente y dividido en tres paacuterrafos ndashlos actuales nn 10-12ndash integrados por los nn 10-12 del capiacutetulo I sobre los crite-rios de pertenencia a la Iglesia ndashlos actuales nn 14-16ndash todo ello encuadrado por un paacuterrafo introductorio sobre el nuevo Pueblo de Dios (n 9) por otro de enlace relativo a la universa-lidad y unidad del Pueblo de Dios (n 13) y uno de cierre sobre la naturaleza misionera de la Iglesia (n 17)

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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po eclesial en dos partes Se evidencia enseguida de hecho la Iglesia como totalidad de los bautizados todos situados sobre un plano de total igualdad en virtud de la comuacuten regeneracioacuten en Cristo De este modo el Pueblo de Dios viene antes que la jerarquiacutea la vida teologal antes que los roles y las funciones la comuacuten dignidad antes de cualquier diferencia en el cuerpo eclesial El ser viene antes que el hacer la gracia antes que las obras los proyectos y los planes pastorales Finalmente el ser hijos de Dios ndashhijos en el Hijo por la regeneracioacuten del Espiacuteritundash es el tiacutetulo maacutes grande de pertenencia a la Iglesia que habilita para la maacutes alta de las vo-caciones la santidad56

La prueba de fuego de esta profunda transformacioacuten eclesioloacutegica es el viacutenculo constitutivo entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial Coherentemente con el estructura del capiacutetulo LG 10 da un giro al orden de los sujetos respecto a la formulacioacuten del schema de Ecclesia tras haber descrito el sacerdocio comuacuten como capacidad del Pueblo santo de Dios en virtud de la regeneracioacuten y de la uncioacuten del Espiacuteritu de laquoofrecerse a siacute mismos como oblacioacuten viviente santa agradable a Diosraquo el texto con-tinuacutea afirmando que laquoel sacerdocio comuacuten de los fieles y el sacerdocio ministerial o jeraacuterquico si bien difieren en su esencia y no tanto en grado estaacuten sin embargo mutuamente ordenados pues el uno y el otro cada uno seguacuten su propio modo participan del uacutenico sacerdocio de Cristoraquo57

El viacutenculo existe en virtud de la participacioacuten en el mismo sacerdocio de Cristo concretado en la complementariedad de sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial complementariedad posible en virtud de una dife-rencia radical ndashlicet essentia e non gradu tantumndash que explica no solo la existencia de dos formas de sacerdocio sino la necesidad del sacerdocio jeraacuterquico ministerial al servicio del sacerdocio comuacuten El sacerdocio mi-nisterial no es el desdoblamiento o la intensificacioacuten del sacerdocio co-muacuten ni este es la forma disminuida del sacerdocio ministerial uno con-siste en la capacidad de ofrecer sacrificios espirituales a Dios y el otro en laquollevar a cabo el sacrificio eucariacutestico in persona Christi y ofrecerlo a Dios en nombre de todo el puebloraquo Dicho con otras palabras el sacerdocio ministerial no puede existir maacutes que en estrecha relacioacuten con el sacerdo-

56 D VITALI Popolo di Dio Asiacutes 2013 130-13157 Sostengo la diferencia de esencia y no (tanto) de grado en D Vitali Sacerdocio

comuacuten y sacerdocio ministerial o jeraacuterquico Relectura de una cuestioacuten controvertida in Rassegna di Teologia 52 (2011) 1 39-60

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cio comuacuten y en la forma de servicio al Pueblo de Dios La relacioacuten con el sacerdocio comuacuten determina su naturaleza funcional y fija los liacutemites revelando la hipertrofia del modelo piramidal de Iglesia que con razoacuten puede llamarse modelo clerical

16 La relacioacuten constitutiva entre el sensus fidei y el magisterio de la Iglesia

La relacioacuten constitutiva entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio minis-terial es basilar para construir un modelo sinodal de Iglesia Lumen gen-tium de hecho fundamenta aquiacute la diversa participacioacuten del Pueblo de Dios y de los ministros en el sacerdocio de Cristo Sacerdote Profeta y Rey En el capiacutetulo III para explicar el ministerio episcopal en el nuevo horizonte de la sacramentalidad el Concilio se ve obligado a abandonar el esquema binario de potestas ordinis potestas jurisdictionis asumiendo en su lugar el esquema de los tria munera (docendi santificandi regen-di)58 claramente vinculados a la ordenacioacuten laquoJunto a la funcioacuten de santifi-car la consagracioacuten episcopal confiere tambieacuten las funciones de ensentildear y gobernar las cuales sin embargo por su naturaleza no pueden ser ejercidas si no es en la comunioacuten jeraacuterquica con la cabeza y con los miembros del Colegioraquo (LG 21) Tambieacuten el capiacutetulo IV asume el mismo esquema ilus-trando ampliamente la participacioacuten de los laicos en la funcioacuten sacerdotal profeacutetica y real de Cristo59

Paradoacutejicamente el capiacutetulo sobre el Pueblo de Dios no asume ple-namente el esquema de la triple participacioacuten en el sacerdocio de Cristo pues una vez formulada la doctrina del sacerdocio comuacuten y aclarada su relacioacuten con el sacerdocio ministerial (LG 10) la constitucioacuten ilustra el ejercicio del sacerdocio comuacuten en los sacramentos con evidente referen-cia a la funcioacuten sacerdotal de Cristo (LG 11) para pasar enseguida a la funcioacuten profeacutetica (LG 12) sin tratar expliacutecitamente la real

Los Padres mismos habiacutean advertido el problema el cardenal Silva Henriacutequez habiacutea pedido ordenar temaacuteticamente el ejercicio del sacerdo-cio comuacuten seguacuten el triple munus de Cristo del que participa el Pueblo de Dios60 como por otro lado se evidenciaba en el n 14 del schema prior

58 LG 25-2759 LG 34-3660 Cfr Acta Synodalia IIIII 407-409 solicitud en nombre de otros 39 obispos

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donde se deciacutea que los bautizados laquoparticipan en cierto modo [quodam-modo] en la funcioacuten sacerdotal profeacutetica y real de Cristoraquo61 La Comi-sioacuten teoloacutegica no percibioacute la importancia estimando que las tres fun-ciones estaban ya suficientemente tratadas en el texto en los nn 10 y 11 (funcioacuten sacerdotal) en el n 12 (la profeacutetica) y en el n 35 en el capiacutetulo sobre los laicos (la real)62 Maacutes allaacute de las razones que llevaron a la co-misioacuten a hacer esta eleccioacuten la nota confirma la posibilidad de pensar la funcioacuten profeacutetica dentro del cuadro de la participacioacuten en el triple munus de Cristo63

Pero iquestpor queacute insistir tanto en este punto Porque el viacutenculo con el sa-cerdocio comuacuten integra las tres funciones ndashsacerdotal profeacutetica y realndash en la relacioacuten entre las dos formas de participacioacuten en el sacerdocio de Cris-to En otras palabras se establece tambieacuten entre las funciones la misma circularidad que regula la relacioacuten entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial o jeraacuterquico La importancia del asunto se impone de por siacute en referencia sobre todo a la funcioacuten profeacutetica porque bajo esta acepcioacuten el Concilio recupera el sensus fidei del Pueblo de Dios fundamentalmente a causa de una efectiva recuperacioacuten de la dimensioacuten sinodal de la Igle-sia Si se aplica a la funcioacuten profeacutetica el esquema que regula la relacioacuten necesaria entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial tambieacuten el sensus fidei del Pueblo de Dios y el munus docendi de los pastores se situacutean claramente ndashy necesariamentendash en un nexo constitutivo En otras palabras existe una relacioacuten circular entre sensus fidei y magisterio como funciones eclesiales de inteligencia de la fe que abre un amplio horizonte en relacioacuten con el posible ejercicio de un camino sinodal de la Iglesia Este horizonte ya puede intuirse en LG 12

El pueblo santo de Dios participa tambieacuten de la funcioacuten profeacutetica de Cristo difundiendo su testimonio vivo sobre todo con la vida de fe y caridad y ofreciendo a Dios el sacrificio de alabanza que es fruto de unos labios que confiesan su nombre (cf Heb 1315) La totalidad de los fieles que tienen

61 Acta Synodalia III 259 El pasaje fue retirado en la reorganizacioacuten del texto desde el momento en el que el n 24 fue dividido en 3 paraacutegrafos (nn 10-12 de Lumen gentium)

62 Acta Synodalia IIII 19663 Por otra parte es posible percibir la funcioacuten real en la referencia a las virtudes al inicio

del n 11 laquoEl caraacutecter sagrado y orgaacutenicamente estructurado de la comunidad sacerdotal se implanta a traveacutes de los sacramentos y de las virtudesraquo evidentemente ndasho al menos sobre todondash fe esperanza y caridad que remiten a la vida teologal y por lo tanto tambieacuten a su di-mensioacuten real Se puede decir ndashy se deduce de todo el discursondash que LG 11 trata conjuntamente la dimensioacuten sacerdotal y la real de la vida en Cristo

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la uncioacuten del Santo (cfr 1 Jn 220 y 27) no puede equivocarse cuando cree y esta prerrogativa peculiar suya la manifiesta mediante el sentido sobrenatural de la fe de todo el pueblo cuando laquodesde los obispos hasta los uacuteltimos fieles laicosraquo [cfr San Agustiacuten De praed sanct 14 27 PL 44 980] presta su consentimiento universal en las cosas de fe y costumbres Con este sentido de la fe que el Espiacuteritu de verdad suscita y mantiene el Pueblo de Dios se adhiere indefectiblemente laquoa la fe confiada de una vez para siempre a los santosraquo (Jud 3) penetra maacutes profundamente en ella con juicio certero y la aplica cada diacutea maacutes plenamente en la vida

La cita recoge sustancialmente el textus prior aunque sustituye la uni-versitas fidelium por Ecclesia tota como sujeto de indefectibilidad64 De las tres frases la primera introduce el tema de la participacioacuten de todo el Pueblo de Dios en la funcioacuten profeacutetica de Cristo que se manifiesta mediante el sensus fidei y los carismas a traveacutes de los cuales el espiacuteritu laquohace a los fieles capaces y preparados para asumir obras y deberes que sirvan y sean uacutetiles a la renovacioacuten y a la edificacioacuten maacutes amplia de la Iglesiaraquo Las otras dos se refieren de modo maacutes especiacutefico al sensus fi-dei recuperando una doctrina considerablemente enraizada a lo largo de toda la tradicioacuten teoloacutegica y utilizada por el magisterio de la Iglesia para fundamentar la definicioacuten de los dogmas marianos de la Inmaculada Concepcioacuten y de la Asuncioacuten de Mariacutea65

A pesar de algunas voces criacuteticas sobre la doctrina66 que reiteraban la posicioacuten de los manuales de teologiacutea preconciliar sobre la indefecti-

64 Por esta razoacuten se suprimioacute la nota que haciacutea referencia al Concilio Vaticano I que en el cap VIII del esquema constitutionis dogmaticae de Ecclesia Christi puso la indefectibilidad de la Iglesia como fundamento de la infalibilidad del magisterio La formulacioacuten fue solem-ne laquoDeclaramus insuper Christi Ecclesiam sive existentia sive constitutio eius spectetur societatem esse perennem atque indefectibilem nullamque post illam neque pleniorem neque perfectiorem salutis oeconomiam in hoc speculo expectandam esseraquo Mansi 51 542

65 Cfr supra66 Cfr por ejemplo Carli Acta Synodalia III 641 que propone el siguiente texto

laquoEcclesia tota cuius filii veluti liturgicum suae fidei sacrificium sempre Deo offerre (cf Phil 217) tenentur Eiusque virtutes annuntiare qui ipsos de tenebris vocavit in admirabile lumen suum (cf 1Pt 29) in credendo circa fidem et mores indefectibilis est et hanc suam peculiarem proprietatem etiam per supernaturalem sensum figravedei popoli cristiani manifestatraquo En cam-bio el cardenal Ruffini (cfr Acta Synodalia IIII 628) cuestiona la propuesta ironizando laquoQuae ibi scripta inveniuntur aut non sunt vera aut ea non intellego Quid est ndashquaesondash iste supernaturalis sensus fidei universi populi christiani quo omnes docentur infallibiliter a Deo sensus fidei ndashinquamndash a Spiritu veritatis excitatus verbo Dei scripto et tradito sub eius assistentia inhaerens quem magisterium ducit (solummodo) et sustentatraquo A continua-cioacuten defiende la infalibilidad pasiva de la Ecclesia discens que no depende del Espiacuteritu de Dios sino del hecho de que tal sentido manifiesta la doctrina ensentildeada de modo infalible por

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bilitas passiva de la Ecclesia dicens del debate en el aula67 emergioacute un texto medido equilibrado La relatio68 se limita a resumir con breves anotaciones las variantes del texto asegurando no querer introducir ul-teriores antildeadidos en cuanto a que el sentido de la fe es descrito como una facultas totius Ecclesiae en virtud de la cual estaacute en la fe reconocer la revelacioacuten transmitida pudiendo distinguir entre verdadero y falso y a la vez ahondar con mayor profundidad en el significado y aplicarlo con maacutes plenitud a la vida seguacuten el sentido de 1 Tes 213 En la 124ordf congre-gacioacuten general no se registran modi referidos a LG 12 sobre los cuales los Padres debiesen votar y el texto seraacute aprobado sin ulteriores variaciones El Pueblo Santo de Dios volviacutea finalmente a ser una autoridad doctrinal una regula fidei que participa suo peculiare modo en la transmisioacuten de la Revelacioacuten

17 La singularis Antistitum et fidelium conspiratio

La circularidad entre sensus fidei y magisterio que resulta decisiva para articular una praxis sinodal en la Iglesia no solo es una hipoacutetesis vaacutelida bajo la base de LG 12 emerge auacuten con mayor claridad en DV 10 Aunque este paacuterrafo no contenga una referencia expliacutecita a eacutel el sensus fidei se evidencia a traveacutes de la presencia de la foacutermula ndashsingularis An-tistitum et fidelium cospirationdash invocada expliacutecitamente por el magisterio para definir los dogmas marianos y que se convierte en la clave de lectura del dinamismo de transmisioacuten de la Revelacioacuten en la Iglesia

La Tradicioacuten y la Escritura constituyen el depoacutesito sagrado de la palabra de Dios confiado a la Iglesia Fiel a dicho depoacutesito el pueblo cristiano entero unido a sus pastores persevera siempre en la doctrina apostoacutelica y en la unioacuten en la eucaristiacutea y en la oracioacuten (cfr Hch 242) y asiacute se realiza una maravillosa concordia de Pastores y fieles [singularis fiat Antistitum et fidelium conspiratio] en conservar practicar y profesar la fe recibida

el magisterio uacutenico sujeto de la infalibilidad activa en la Iglesia Tambieacuten el cardenal Siri (Acta Synodalia IIIII 279) reafirma que el sensus fidei depende totalmente del magisterio infalible de la Iglesia Maacutes positivas son las intervenciones de Cantero Cuadrado cfr Acta Synodalia IIIII 283-285 Calabria cfr Acta Synodalia IIIII 363-365

67 No fueron pocas las intervenciones en el aula y las animadversiones scriptae signo del intereacutes que despertaba en los Padres la doctrina del sensus fidei Particularmente extensas y relevantes son las intervenciones de mons Cantero Cuadrado (cfr Acta Synodalia IIIII 283-285) y de mons Calabria (cfr Acta Synodalia IIIII 363-365)

68 Acta Synodalia III 189

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Sobre todo hay que subrayar que el texto contiene la misma cita neo-testamentaria (Hch 242-47) a la que recurre LG 10 para fundamentar el sacerdocio comuacuten auacuten maacutes las acciones atribuidas al Pueblo santo de Dios ndashlaquoconservar practicar y profesar la fe recibidaraquondash son muy cercanas a aquellas con las que LG 12 describe el sensus fidei como capacidad del Pueblo de Dios de acoger la Palabra de Dios adherirse de manera indefectible a la fe recibida penetrar en ella con mayor profundidad y aplicarla maacutes plenamente a la vida La intencioacuten del paacuterrafo no es la de esclarecer la funcioacuten del sensus fidei pero siacute la de precisar que la Iglesia es depositaria de la Palabra de Dios (foacutermula inusitada) constituida por Tradicioacuten y Escritura precisamente la conspiratio de los obispos y los fieles confirma el nexo cuanto menos indirecto con esta funcioacuten del Pue-blo de Dios

La cuestioacuten no es de poco relieve pues el paacuterrafo tras un capiacutetulo en-tero ilustrando el dinamismo de la Tradicioacuten concluye restableciendo la relacioacuten de circularidad entre el Pueblo de Dios y sus pastores evocado en el texto y significado por la singularis conspiratio y estableciendo entre otras cosas una especie de precedencia del sensus fidei sobre el ma-gisterio Uacutenicamente al final del capiacutetulo de hecho aparece el munus de laquointerpretar auteacutenticamente la Palabra de Dios escrita y transmitidaraquo confiado laquoal solo magisterio vivo de la Iglesiaraquo en una propuesta que muestra el abandono de aquel modelo de transmisioacuten de la Revelacioacuten regulado por el binomio Ecclesia docens Ecclesia dicens

Aunque no existan afirmaciones expliacutecitas al respecto ni de la Comi-sioacuten teoloacutegica ni de los Padres conciliares se puede entrever en la estruc-tura del capiacutetulo una trama en la cual la relacioacuten de circularidad entre el Pueblo de Dios y el magisterio estaacute pensada para resaltar particularmente al primero en analogiacutea con la laquorevolucioacuten copernicanaraquo de Lumen gen-tium sobre el primado del Pueblo de Dios en relacioacuten con la jerarquiacutea El giro ya se percibe en el capiacutetulo I de Dei Verbum mientras los manuales de teologiacutea sobre la base del Vaticano I concebiacutean la Revelacioacuten como la suma de las verdades en las que creer (la fides quae) con la obvia conse-cuencia de enfatizar la funcioacuten del magisterio infalible de la Iglesia como norma proacutexima de la fe una idea maacutes personalizada de la Revelacioacuten ndashlaquoDios invisible en la riqueza de su amor habla a los hombres como a amigos y dialoga con ellos para invitarles e introducirles en la comunioacuten con Eacutelraquo (DV 2)ndash pone de manifiesto a los interlocutores que Dios mismo ha elegido En primer plano no estaacute tanto quieacuten transmite el mensaje sino

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sus destinatarios o lo que es lo mismo laquolos hombres [que] por medio de Cristo Verbo hecho carne en el Espiacuteritu Santo tienen acceso al Padre y son hechos partiacutecipes de la vida divinaraquo (DV 2)

El mismo esquema interpretativo se repite en el capiacutetulo II respecto a la transmisioacuten de la Revelacioacuten Al inicio del capiacutetulo el lenguaje parece repetir el Vaticano I laquoTodo aquello que habiacutea revelado para la salvacioacuten de todos los pueblos Dios dispuso con toda benevolencia que permane-ciese iacutentegro y fuese transmitido a todas las generacionesraquo (DV 7) No obstante la transmisioacuten de la Revelacioacuten no se refiere a un depositum sino al Evangelio vivo como laquofuente de todo aquello que concierne a la fe y la moralraquo y que la Iglesia recibe mediante la laquopredicacioacuten apostoacutelica expresada de modo especial en los libros inspiradosraquo a esta predicacioacuten le laquoconcierne todo aquello que contribuye a una conducta santa y al in-cremento de la fe del Pueblo de Diosraquo (DV 8) A diferencia del schema de fontibus Revelationis69 que trataba enseguida la funcioacuten del magisterio infalible de la Iglesia Dei Verbum en el cuadro de una concepcioacuten dinaacute-mica de la Tradicioacuten pone de relieve a los destinatarios de la predicacioacuten De hecho el texto afirma que laquola comprensioacuten ndashaunque el latiacuten dice per-ceptiondash tanto de las cosas como de las palabras transmitidas crece ya sea con la contemplacioacuten y el estudio de los creyentes que lo meditan en sus corazones ya sea con la profunda inteligencia de la realidad espiritual que experimentan (DV 8)

Algunos Padres pidieron integrar estos dos factores de inteligencia de la fe que se referiacutean con toda evidencia a los bautizados con laquola predica-cioacuten de aquellos que con la sucesioacuten episcopal han recibido un carisma seguro de verdadraquo (DV 8) Este antildeadido por maacutes que fuese pertinente rompe la loacutegica del discurso construido de acuerdo con el esquema del diaacutelogo entre Dios y su pueblo repetido tambieacuten en el capiacutetulo II la elec-cioacuten de presentar la predicacioacuten como modalidad de transmisioacuten de la Revelacioacuten no se desarrolla al poner de relieve la funcioacuten interpretativa del magisterio sino la del Pueblo de Dios como destinatario del Evan-gelio anunciado De este modo Dios laquoel cual ha hablado en el pasado

69 Cfr Acta Synodalia IIII 14-26 Schema constitutionis dogmaticae de fontibus Re-velationis El schema consta de 5 capiacutetulos I De duplici fonte Revelationis II De Scriptura inspiratione inerrantia et compositione litteraria III De Vetere Testamento IV De Novo Testamento V De Sacra Scriptura in Ecclesia En el capiacutetulo I compuesto de solo seis paacute-rrafos el uacuteltimo trata sobre la funcioacuten del Magisterio descrito como proximae et universalis credendi norma

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dialoga [colloquitur] sin intermediacioacuten con la Esposa de su Hijo predi-lecto y el Espiacuteritu Santo por quien la voz del Evangelio resuena viva en la Iglesia y por ella en el mundo va introduciendo a los creyentes en la verdad plena y hace que la palabra de Cristo habite en ellos abundante-menteraquo (DV 8)

El disentildeo se torna sin embargo niacutetido en la apertura de DV 10 a la luz de la singularis Antistitum et fidelium conspiratio que se refiere evi-dentemente a la relacioacuten de circularidad entre sensus fidei del Pueblo de Dios y munus docendi de los pastores Lo prueba el hecho de que al pie del texto se hace referencia a los textos marianos70 citando en la misma nota una frase de Cipriano sobre la laquoIglesia como Pueblo reunido en torno al sacerdote y rebantildeo que se adhiere a su pastorraquo71 del cual emerge con claridad coacutemo el dinamismo de la Tradicioacuten encuentra continuo alimento en la reciprocidad entre predicacioacuten y vida cristiana Los dos teacuterminos se corresponden si el Pueblo santo de Dios conserva practica y profesa la fe transmitida laquoel magisterio vivo de la Iglesiaraquo laquopiamente escucha san-tamente custodia y fielmente exponeraquo la palabra de Dios si el magisterio laquosirveraquo la Palabra de Dios anunciada en la fuerza del espiacuteritu laquoel Pueblo de Dios acoge no ya la palabra de los hombres sino realmente la Pala-bra de Dios se adhiere indefectiblemente a la fe transmitida a los santos de una vez para siempre (Jud 3) la profundiza con un juicio recto y la aplica cada diacutea maacutes plenamente en la vidaraquo (LG 12)

2 intellectus fidei

La primera parte de esta investigacioacuten justifica la siguiente afirmacioacuten el Vaticano II pone las bases para desarrollar una visioacuten sinodal de la Iglesia Junto a la relacioacuten del Colegio con su cabeza aclarada en LG III el Concilio vincula estrechamente a los pastores con el Pueblo de Dios en cuanto a la transmisioacuten de la Revelacioacuten tanto en el capiacutetulo II de Lumen gentium sobre el Pueblo de Dios como en el capiacutetulo II de Dei Verbum A la luz de estos datos es posible poner en marcha aquel laquocaminar juntos

70 Cfr nota 14 que cita PIacuteO XII Constitucioacuten apostoacutelica Munificentissimus Deus in AAS 42 (1950) 756 en relacioacuten con la expresioacuten de san Cipriano Epiacutestola 668 (CSEL 32733) laquoLa Iglesia es un pueblo unido a su sacerdote y el rebantildeo que permanece fiel al propio pastorraquo

71 En la misma nota 74 se cita la constitucioacuten (cfr AAS 42 [1950] 756) en relacioacuten con la misma expresioacuten de san Cipriano Epiacutestola 668

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de laicos pastores y Obispo de Romaraquo sentildealada por el Papa Francisco como tarea de la Iglesia de hoy72 Para acoger el desafiacuteo sin aventuras o improbables avances precipitados pero siguiendo con fidelidad el ca-mino histoacuterico de la Iglesia hace falta restablecer en clave sinodal las relaciones entre los sujetos que el Papa reclama en liacutenea de continuidad con las sugerencias ofrecidas por el contenido conciliar

21 Elementos para un desarrollo de una Iglesia sinodal

Una primera indicacioacuten ndashpoco maacutes que una sugerenciandash emerge ya en una particularidad linguumliacutestica que aparece en los documentos conciliares el Vaticano II no habla nunca de sinodalidad sin embargo utiliza amplia-mente el teacutermino synodus para referirse al Concilio73 Se trata de un dato relevante que permite tender un puente entre colegialidad y sinodalidad y comprender en queacute direccioacuten tratar de recuperar el concepto El empleo del teacutermino en efecto alude a la praxis del primer milenio cuando el Concilio ecumeacutenico representaba la catolicidad dado que cada obispo laquopersonificabaraquo a su Iglesia en la asamblea conciliar La idea que estaacute en la base de tal conviccioacuten es expresada con fuerza por Cipriano seguacuten el cual laquoel obispo estaacute en la Iglesia y la Iglesia estaacute en el obisporaquo74 la unidad entre obispo e Iglesia fue tan estrecha que el uno no podiacutea existir sin la otra y viceversa No era casualidad que el siacutembolo y la medida de dicha unidad fuese la Eucaristiacutea celebrada por el obispo en la que la asamblea reunida alrededor de eacutel se reconociacutea en el cuerpo eucariacutestico Por esta razoacuten la ex-communicatio impuesta por el obispo no comportaba uacutenica-mente la exclusioacuten del banquete eucariacutestico sino tambieacuten de la comunioacuten eclesial El empleo de sancta Synodus impulsa a desplazarse al horizonte

72 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos

73 Sin contar con el elevado nuacutemero de recurrencias o repeticiones (cfr X OCHOA Index verborum cum documentis Concilii Vaticani Secundi 484-485) es sorprendente el eacutenfasis que emana del empleo de la foacutermula en ciertos pasajes de particular solemnidad Baste con releer por ejemplo LG 1 laquoLumen gentium cum sit Christus haec Sacrosancta Synodus in Spiritu Sancto congregata omnes homines claritate Eius super faciem Eccle-siae resplendente illuminare vehementer exoptat omni creaturae Evangelium annuntiando (cfr Mc 1615)raquo El empleo enfaacutetico es repetido en muchos otros pasajes cfr por ejemplo LG 18 en referencia a la doctrina del primado y el episcopado laquoSacra Synodus cunctis fi-delibus firmiter credendam rursus proponitraquo LG 21 en relacioacuten con la sacramentalidad del episcopado laquoDocet autem Sancta Synodusraquo

74 CIPRIANO Epistola 66 8 CSEL 3733

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del primer milenio asumiendo como elemento imprescindible la estrecha unidad del Pueblo de Dios con los pastores o maacutes bien de cada portio Populi Dei con su pastor75

iquestPero queacute sentido puede tener esto para una concepcioacuten sinodal de Iglesia y bajo un punto de vista praacutectico para el ejercicio de la sinoda-lidad en la Iglesia Si la premisa es laquocaminar juntosraquo de pueblo y pas-tores el empleo de sancta Synodus no aporta maacutes elementos que sirvan para clarificar el tema Por otro lado como hemos podido comprobar el Vaticano II se centroacute en la colegialidad sin mencionar expliacutecitamente la sinodalidad que queda fuera del horizonte de pensamiento en el que se movioacute el Concilio76 A cincuenta antildeos vista de aquel debate en ocasiones dramaacutetico se evidencia coacutemo los Padres en el aula no pudieron ir maacutes allaacute de un texto de transicioacuten (o de consenso) en el que la funcioacuten petrina se recolocaba en el marco maacutes amplio de la organizacioacuten jeraacuterquica de la Iglesia reafirmando la colegialidad pero dejando en el aire las formas concretas para poder ponerla en praacutectica

El periodo posconciliar ha puesto de relieve toda el esfuerzo y las re-sistencias para encontrar un desarrollo significativo de la colegialidad77 Por otro lado mientras la cuestioacuten quede circunscrita al Colegio y a su cabeza se corre el riesgo de percibir la relacioacuten como competicioacuten entre dos sujetos dotados de plena y suprema potestad sobre la Iglesia

Pero precisamente el Concilio abre la viacutea para poner en marcha la so-lucioacuten con aquel cambio que subyace en la loacutegica de haber introducido el capiacutetulo sobre el Pueblo de Dios antes del de la Jerarquiacutea volviendo a

75 En esta direccioacuten ya se orientaba SC 41 al indicar la praecipua manifestatio Ecclesiae laquoen la participacioacuten plena y activa [el texto dice lsquoplenaria et actuosarsquo] del Pueblo santo de Dios en las mismas celebraciones lituacutergicas sobre todo en la misma Eucaristiacutea en una uacutenica oracioacuten alrededor del uacutenico altar que preside el obispo rodeado de su presbiterio y ministrosraquo

76 Sin embargo la posibilidad de que alguna voz en tal direccioacuten pudiera alzarse en el aula quedoacute anulada con la eleccioacuten de concentrarse en la apertura de tercer periacuteodo en los capiacutetulos VII y VIII del esquema sin permitir que se volviese sobre los capiacutetulos anteriores respecto a los cuales se solicitoacute sencillamente a los Padres pronunciarse con un placet o non placet sobre el textus emendatus cfr Quaesitum circa modum suffragandi schema constitu-tionis de Ecclesia Acta Synodalia IIII 395

77 La prueba de fuego de este cansancio es la distincioacuten difundida despueacutes del Concilio de una doble colegialidad efectiva y afectiva la primera concierne a las formas de ejerci-cio de la colegialidad mientras la segunda subraya la unidad del Colegio Echando un vistazo al desarrollo del magisterio posconciliar despueacutes del Siacutenodo extraordinario del 1985 a veinte antildeos del Concilio Vaticano II se advierte una fuerte insistencia sobre la segunda pasada por el affectus collegialis de los documentos conciliares ndashcfr LG 23 y NEP 2ndash a la colegialidad afectiva ndashcfr sobre todo Communionis notio Apostolos suos y Pastores gregisndash sin llegar a formas concretas y reconocidas de ejercicio efectivo de la colegialidad

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vincular el ministerio en la Iglesia a su funcioacuten de servicio al Pueblo de Dios El punto de anclaje es la relacioacuten constitutiva que LG 10 establece entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial si en el schema de Eccle-sia el tema del sacerdocio universal de los fieles representoacute cuando menos una significativa recuperacioacuten para la eclesiologiacutea catoacutelica despueacutes de cua-tro siglos de silencio la nueva colocacioacuten viene a otorgarle un peso y una funcioacuten de relevancia y profundidad diversas En el cuadro eclesioloacutegico trazado por LG II el sacerdocio de todos los fieles no es ya un sacerdocio metafoacuterico o quoddam sacerdotium paacutelida imitacioacuten del ministerial sino sacerdocio comuacuten78 es decir la condicioacuten de todos los bautizados en vir-tud de la cual la Iglesia entera queda constituida en comunidad sacerdotal que ofrece a Dios sacrificios espirituales Esta forma de participacioacuten en el sacerdocio de Cristo no solo esclarece el agere in persona Christi de los ministros sagrados como forma de servicio dentro de la Iglesia sino que tambieacuten restablece el orden adecuado de las cosas al primar el ser sobre el hacer la vida teologal sobre los roles y funciones el tiacutetulo maacutes grande de pertenencia a la Iglesia la dignidad mayor es la de ser hijos de Dios hijos en el Hijo

Esta revolucioacuten copernicana iquestqueacute consecuencias conlleva respecto a la vida y al gobierno de la Iglesia iquestQueacute posibilidades ofrece para la cons-truccioacuten de una Iglesia constitutivamente sinodal iquestNo la expone maacutes bien al riesgo de desviacuteos democraacuteticos Durante el posconcilio muchos han repetido el slogan de la piraacutemide invertida como si bastase el vuelco especulativo de los esquemas aplicados durante siglos y de las loacutegicas que los habiacutean regulado para implantar la eclesiologiacutea conciliar No se trata de poner arriba a quien antes estuvo abajo de dar el mando a quien antes fue suacutebdito de reemplazar un sistema monaacuterquico por uno democraacutetico sino de situar en el centro de la vida eclesial al Pueblo de Dios sobre todo por parte de la jerarquiacutea79

78 En vez de laquosacerdocio universalraquo muchos Padres propusieron otras foacutermulas como laquosacerdotium spiritualeraquo laquosacerdotium inchoativumraquo laquoquoddam sacerdotiumraquo laquosacerdotium communeraquo laquoDicatur commune ad vitandam ambiguitatemraquo cfr Acta Synodalia IIII 195

79 En esta direccioacuten va la mencioacuten al ministerio jeraacuterquico en particular a la funcioacuten petrina por parte del Papa Francisco en el discurso de conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos que merece la pena reproducir por entero laquoLa si-nodalidad como dimensioacuten constitutiva de la Iglesia nos ofrece el marco interpretativo maacutes adecuado para comprender el mismo ministerio jeraacuterquico Si comprendemos que como dice san Juan Crisoacutestomo lsquoIglesia y Siacutenodo son sinoacutenimosrsquo ndashporque la Iglesia no es otra cosa que el lsquocaminar juntosrsquo de la grey de Dios por los senderos de la historia que sale al encuentro de Cristo el Sentildeorndash entendemos tambieacuten que en su interior nadie puede ser lsquoelevadorsquo por encima

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Aunque no faltase en el pasado el eacutenfasis sobre la dimensioacuten del servi-cio traducida en ejemplos luminosos de pastores que han dedicado toda su vi da al rebantildeo sin embargo el ministerio sacerdotal se concebiacutea a partir de una relacioacuten asimeacutetrica de autoridad-obediencia entre pastores y fieles De es to se deriva una identificacioacuten demasiado estricta de la Iglesia con sus ministros y una separacioacuten del cuerpo eclesial entre Ecclesia docens y Ecclesia discens con excesiva insistencia sobre la inaequalitas de sus miembros80 lo cual ha favorecido el arraigo entre el clero de una imagen condicionada del laquopueblo ignoranteraquo y entre el mismo pueblo de su li-mitacioacuten en la vida eclesial Contra una mentalidad de este tipo ndashdifiacutecil de desarraigar puesto que se ha consolidado durante siglosndash estaacute el asumir que laquoel sacerdocio comuacuten y el sacerdocio ministerial o jeraacuterquico incluso diferentes por esencia y no tanto por grado sin embargo se complementan el uno al otro porque ambos participan cada uno a su manera del uacutenico sacerdocio de Cristoraquo (LG 10)

Esto significa que sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial se ha-llan mu tuamente vinculados asiacute como se hallan vinculadas las funciones que radican en la doble forma de participacioacuten en el sacerdocio de Cristo Una Iglesia sinodal no puede prescindir de la relacioacuten de circularidad entre sensus fidei del Pueblo de Dios y magisterio de la Iglesia Sobre la base de este viacutenculo resulta posible dibujar una trama de relaciones entre los sujetos de la sinodalidad ndashPueblo de Dios Colegio de los obispos Obispo de Romandash que permita pensar no solamente el ordo Synodi y el ejercicio de la sinodalidad sino contemplaacutendolo maacutes de raiacutez en el rostro mismo de una Iglesia sinodal

de los demaacutes Al contrario en la Iglesia es necesario que alguno lsquose abajersquo para ponerse al servicio de los hermanos a lo largo del camino Jesuacutes ha constituido la Iglesia poniendo en su cumbre al Colegio apostoacutelico en el que el apoacutestol Pedro es la lsquorocarsquo (cfr Mt 1618) aquel que debe lsquoconfirmarrsquo a los hermanos en la fe (cfr Lc 2232) Pero en esta Iglesia como en una piraacutemide invertida la cima se encuentra por debajo de la base Por eso quienes ejercen la autoridad se llaman lsquoministrosrsquo porque seguacuten el significado originario de la palabra son los maacutes pequentildeos de todos Cada obispo sirviendo al Pueblo de Dios llega a ser para la porcioacuten de la grey que le ha sido encomendada vicarius Christi vicario de Jesuacutes quien en la Uacuteltima Cena se inclinoacute para lavar los pies de los apoacutestoles (cfr Jn 131-15) Y en un horizonte seme-jante el mismo Sucesor de Pedro es el servus servorum Dei iexclNo lo olvidemos nunca Para los disciacutepulos de Jesuacutes ayer hoy y siempre la uacutenica autoridad es la autoridad del servicio el uacutenico poder es el poder de la cruzraquo

80 Todaviacutea en el schema prior el tiacutetulo del n 23 se presentaba en estos teacuterminos Aequa-litas et inaequalitas membrorum Ecclesiae despueacutes cambiado justamente en el n 32 del tex-tus emendatus en De dignitate laicorum prout sunt membra Populi Dei cfr Acta Synodalia IIII 272

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22 Una Iglesia constitutivamente sinodal

Hablar de una laquoIglesia constitutivamente sinodalraquo puede parecer ex-cesivo inuacutetil y peligroso Excesivo por inuacutetil en cuanto que lo expresado por la sinodalidad viene manifestado maacutes y mejor con communio Exce-sivo por peligroso pues expondriacutea a la Iglesia a una deriva democraacutetica forzando a la jerarquiacutea a una loacutegica de representacioacuten desde abajo En realidad la sinodalidad pone de manifiesto algo que communio no expre-sa directamente el hecho ndashesencial para la Iglesiandash de laquocaminar juntosraquo porque la Iglesia no es otra cosa que ese laquocaminar juntosraquo del Rebantildeo de Dios por las sendas de la historia al encuentro de Cristo Dios como subraya el Papa despueacutes de haber dicho que laquoel camino de la sinodalidad es el camino que Dios espera de la Iglesia del tercer milenioraquo81

El punto de partida para la comprensioacuten de esta perspectiva es de nue-vo el Concilio El horizonte de la sinodalidad es la Iglesia como laquoplebs adunata de unitate Patris et Filii et Spiritus Sanctiraquo (LG 4) el redescu-brimiento de su origen permite comprender el dinamismo de la historia de la salvacioacuten de la que forma parte y las etapas que la llevan a la plena comunioacuten con Dios

Y establecioacute convocar a quienes creen en Cristo en la santa Iglesia que ya fue prefigurada desde el origen del mundo preparada admirablemente en la historia del pueblo de Israel y en la Antigua Alianza constituida en los tiempos definitivos manifestada por la efusioacuten del Espiacuteritu y que se consumaraacute gloriosamente al final de los tiempos Entonces como se lee en los Santos Padres todos los justos desde Adaacuten laquodesde el justo Abel hasta el uacuteltimo elegidoraquo seraacuten congregados en una Iglesia universal en la casa del Padre (LG 2)

La comprensioacuten de la Iglesia de Trinitate lejos de confinarla en una complacencia esteacuteril de los oriacutegenes en un alejamiento de la historia que la situariacutea fuera de la vida de los hombres determina maacutes bien la recupe-racioacuten de su dimensioacuten escatoloacutegica82 poniendo en primer plano la idea de Iglesia como pueblo en camino hacia el Reino Por otra parte si el modelo de la comunioacuten trinitaria al que la Iglesia tiene que conformarse se com-prende mirando atraacutes ndasho hacia arribandash al misterio de Dios su realizacioacuten

81 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

82 Cfr DARIO VITALI Lumen gentium Storia Commento Recezione Roma 2012 126-128

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plena llega caminando hacia delante conscientes de que sobre la tierra se halla laquoel germen y el principioraquo del Reino (LG 5) Lumen gentium insiste sobre este punto la Iglesia laquova peregrinando entre las persecuciones del mundo y los consuelos de Dios anunciando la cruz del Sentildeor hasta que vengaraquo (LG 8) asiacute como al laquopueblo de Israel seguacuten la carne peregrinando por el desierto se le designa ya como Iglesia el nuevo Israel que cami-nando en el tiempo presente busca la ciudad futura y perenne tambieacuten es designado como Iglesia de Cristoraquo (LG 9) laquopero mientras no lleguen los cielos nuevos y la tierra nueva donde habita la justicia (cf 2 Pe 313) la Iglesia peregrina lleva en sus sacramentos e instituciones pertenecientes a este tiempo la imagen de este siglo que pasa y ella misma vive entre las criaturas que gimen con dolores de parto en el presente en espera de la manifestacioacuten de los hijos de Diosraquo (LG 48)

La misma estructura de la constitucioacuten orienta en este sentido la Ec-clesia de Trinitate que se describe en el capiacutetulo I no es otra que el Pueblo de Dios que el capiacutetulo II presenta como laquopueblo mesiaacutenico [que] tiene por cabeza a Cristo [hellip] como condicioacuten la dignidad y la libertad de los hijos de Dios [hellip] por ley el nuevo mandato de amar como el mismo Cristo nos amoacute a nosotros [hellip] como fin el reino de Diosraquo (LG 9) Es como afirmar que la Iglesia si es constitutivamente el Pueblo de Dios en camino tambieacuten es constitutivamente sinodal el rasgo que distingue a este pueblo es el de laquocaminar conjuntamenteraquo todos hacia el Reino de Dios

Pero si la sinodalidad se redujese al caminar juntos entonces la na-turaleza constitutivamente sinodal de la Iglesia seriacutea bien poca cosa en el fondo se reduciriacutea a una variante de la communnio con un mayor eacutenfasis en el aspecto histoacuterico-salviacutefico Existe sin embargo otro as-pecto que emerge con fuerza del propio concilio y que empuja hacia una comprensioacuten sinodal de la Iglesia el Vaticano II ha terminado por fin con un verdadero deacuteficit pneumatoloacutegico despueacutes de siglos de olvido de la presencia y la accioacuten del Espiacuteritu Santo en la Iglesia83 abriendo

83 El motivo de este deacuteficit reside sobre todo en la llamada poleacutemica del Espiacuteritu Santo por parte de grupos y movimientos profeacuteticos de la Baja Edad Media que radicalizaron la tensioacuten entre Iglesia institucional e Iglesia espiritual incluso antes de la Reforma protestante y de su concepcioacuten de la Iglesia invisible Cfr Y CONGAR Credo nello Spirito santo I Rive-lazione ed esperienza dello Spirito parte segunda Brescia 1981 79-193 espec 180-186 Una lectura instructiva en esta perspectiva es H DE LUBAC La posteritagrave spirituale di Gioacchino da Fiore Milaacuten 1984 que hace una relectura de la historia del segundo milenio cristiano en Occidente a la luz de la tercera edad del Espiacuteritu anhelada por Joaquiacuten de Fiore

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gracias a tal recuperacioacuten entre otras cosas a la Ecclesia de Trinitate Aun trataacutendose de un breve resumen LG 4 marca la recuperacioacuten de una eclesiologiacutea pneumatoloacutegica en la que el Espiacuteritu laquoguiacutea la Iglesia a toda la verdad (cf Jn 16 13) la unifica en comunioacuten y ministerio la provee y gobierna con diversos dones jeraacuterquicos y carismaacuteticos y la embellece con sus frutosraquo

La perspectiva seguacuten la cual el Espiacuteritu laquocon la fuerza del Evangelio rejuvenece la Iglesia la renueva incesantemente y la conduce a la unioacuten consumada con su Esposoraquo encaja bien con el dinamismo de la Tradicioacuten descrito en el capiacutetulo II de Dei Verbum en su camino hacia el Reino laquola Iglesia en el decurso de los siglos tiende constantemente a la plenitud de la verdad divina hasta que en ella se cumplan las palabras de Diosraquo (DV 8b) Esto sucede porque laquoel Espiacuteritu Santo por quien la voz del Evangelio resuena viva en la Iglesia y por ella en el mundo va introdu-ciendo a los creyentes en la verdad plena y hace que la palabra de Cristo habite en ellos abundantementeraquo (DV 8c)

Situada entre el ya y el todaviacutea no entre la primera venida de Cristo y la plenitud en la Gloria la Iglesia estaacute llamada a un estado de escucha obediente Lo exige la concepcioacuten misma de la Tradicioacuten laquoque progresa en la Iglesia con la asistencia del Espiacuteritu Santoraquo (DV 8b) mientras que la idea de Revelacioacuten como suma de las verdades del credo impone ante todo la conservacioacuten del depositum fidei la dinaacutemica de diaacutelogo entre Dios y el hombre implica en cambio un proceso continuo de discerni-miento que se da en la escucha de lo que el Espiacuteritu Santo dice a la Igle-sia y consecuentemente mientras la idea de transmisioacuten del depositum fidei llevaba a enfatizar la funcioacuten uacutenica del magisterio la de Tradicioacuten viva llama en el dinamismo de la transmisioacuten a toda la Iglesia y a todos en la Iglesia

Surge aquiacute la parte del sensus fidei del Pueblo santo de Dios Todos en la Iglesia han recibido el Espiacuteritu Santo y laquotodos son instruidos por Diosraquo (Jn 645) laquoEn cuanto a vosotros la uncioacuten que de Eacutel habeacuteis reci-bido permanece en vosotros y no necesitaacuteis que nadie os ensentildee Pero como su uncioacuten os ensentildea acerca de todas las cosas ndashy es verdadera y no mentirosandash seguacuten os ensentildeoacute permaneced en Eacutelraquo (1 Jn 227) En esta precisa direccioacuten va la llamada de DV 8 al dinamismo de la Tradicioacuten ali-mentado por el conocimiento ndashaunque el texto latino dice perceptiondash que emana del estudio y de la contemplacioacuten pero tambieacuten de la experiencia de los creyentes en la que se puede reconocer el sensus fidei del Pueblo

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de Dios84 El cuadro dibujado por DV 8 para el progreso de la Tradicioacuten no vale soacutelo para el desarrollo de la doctrina toda la vida de la Iglesia ndashlaquotodo lo que ella es todo lo que ella creeraquondash entra en este dinamismo eclesial que involucra a todos cada uno seguacuten su propia capacidad y funcioacuten

23 Los momentos del proceso sinodal

En este marco eclesioloacutegico por tanto se basa con toda evidencia la posibilidad de un camino sinodal de la Iglesia en la escucha del Espiacuteritu por parte de todos en la Iglesia Pueblo de Dios y pastores Asiacute se ha ex-presado el Papa Francisco al respecto

Una Iglesia sinodal es una Iglesia de la escucha con la conciencia de que escuchar laquoes maacutes que oiacuterraquo Es una escucha reciacuteproca en la cual cada uno tiene algo que aprender Pueblo fiel Colegio episcopal Obispo de Roma uno en escucha de los otros y todos en escucha del Espiacuteritu Santo el laquoEspiacuteritu de verdadraquo (Jn 1417) para conocer lo que eacutel laquodice a las Iglesias (Ap 27)raquo85

Asume aquiacute toda su relevancia la relacioacuten de circularidad entre el Pueblo de Dios y sus pastores entre el sensus fidei y el magisterio ma-nifestado en los documentos conciliares iquestComo se hace posible esta escucha reciacuteproca del Pueblo de Dios Colegio de los obispos y Obispo de Roma Antes de articular las relaciones entre los sujetos que podriacutean estar condicionadas por relaciones de poder conviene fijar los diversos momentos en que se articula el proceso sinodal la profeciacutea el discerni-miento y la actuacioacuten

En virtud de la primaciacutea de la vida teologal afirmada a partir de LG II el primer momento es el de la profeciacutea que pertenece a todo el Pueblo de Dios por regalo del Espiacuteritu Santo donado a todos en el bautismo El deseo de Moiseacutes laquoiexclOjalaacute fuesen todos profetas en el Pueblo de Dios y quisiese Dios otorgarles el Espiacuterituraquo (Nm 1129) se ha realizado plenamente en la nueva Alianza con el regalo del Espiacuteritu a la Iglesia

84 En esta direccioacuten leiacutean DV 8 tanto Z ALSZEGHY - M FLICK Sviluppo del dogma cattolico Brescia 1967 como A M KOTHGASSER Dogmenenwicklung und die Funktion des Geist-parakleten nach den Aussagen des zweitn vatikanischen Konzils in Salesianum 3 (1969) 379-460 He sostenido la misma posicioacuten en D VITALI Sensus fidelium Una fun-zione ecclesiale di intelligenza della fede Brescia 1993

85 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

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En todos los bautizados desde el primero hasta el uacuteltimo actuacutea la fuerza santificadora del Espiacuteritu que impulsa a evangelizar El Pueblo de Dios es santo por esta uncioacuten que lo hace infalible laquoin credendoraquo (hellip) La presencia del Espiacuteritu otorga a los cristianos una cierta connaturalidad con las realida-des divinas y una sabiduriacutea que les permite captarlas intuitivamente aunque no tengan el instrumental adecuado para expresarlas con precisioacuten86

No se puede dar por sentado que se escucha al Espiacuteritu y se entiende lo que dice a la Iglesia si no se interroga y no se escucha al Pueblo de Dios que participa en la funcioacuten profeacutetica de Cristo este momento no es opcional en cuanto que el sensus fidei del Pueblo de Dios pertenece a una funcioacuten eclesial de inteligencia de la fe irreducible a otra funcioacuten in-cluida la del magisterio mismo87 La tradicioacuten teoloacutegica reconoce el fun-damento de esta funcioacuten de todos los bautizado no solo en 1 Jn 22027 sino tambieacuten en las promesas del Espiacuteritu en el cuarto Evangelio (Jn 1416s26 1526s 167-1112-15) y en uacuteltimo teacutermino en el regalo del Espiacuteritu en Pentecosteacutes que da cumplimiento a la profeciacutea de Joel laquoDe-rramareacute mi espiacuteritu sobre toda carne vuestros hijos e hijas profetizaraacutenraquo (Jl 31-5 retomado en Hch 216-18) Sobre la base de tal conviccioacuten los Padres han podido oponer a los argumentos de los herejes el christiano-rum populorum concordissima fidei conspiratio como afirmacioacuten cierta de la fe de la Iglesia88 El Papa Francisco se situacutea de nuevo en este cauce afirmando que laquoel camino sinodal comienza escuchando al Pueblo que incluso participa en la funcioacuten profeacutetica de Cristo (LG 12) seguacuten un principio preciado para la Iglesia del primer milenio Quod omnes tangit ab omnibus tractari debetraquo89

Pero no hay profeciacutea que no requiera discernimiento y este es el se-gundo momento del proceso sinodal que compete particularmente a los pastores laquoNo apagueacuteis el Espiacuteritu No menosprecieacuteis las profeciacuteas Exa-minadlo todo retened lo buenoraquo (1 Tes 519-21) Vale para esto la regla fijada por LG 12 para los carismas haciendo referencia expliacutecita a la maacutexima paulina laquoel juicio de su autenticidad y de su ejercicio razonable pertenece a quienes tienen la autoridad en la Iglesia a los cuales compete

86 FRANCISCO Exhortacioacuten apostoacutelica Evangelii gaudium (24-XI-2013) 11987 En relacioacuten con esto cfr el reciente documento de la COMISIOacuteN TEOLOacuteGICA

INTERNACIONAL El sensus fidei en la vida de la Iglesia (10-VI-2014) Roma 201588 S AGUSTIacuteN Epistola 194 31 in Opera omnia vol XXIII 29029189 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de

los obispos

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ante todo no sofocar el Espiacuteritu sino probarlo todo y retener lo que es buenoraquo Estariacutea lejos de la verdad quien piense que el discernimiento consiste en una escucha pasiva de aquello que emerge del momento pro-feacutetico casi como si el magisterio estuviese subordinado a la instancia carismaacutetica el Espiacuteritu que laquoconduce la Iglesia a toda la verdadraquo (Jn 1714 LG 4) es el mismo que suscita la profeciacutea en el Pueblo santo de Dios y que conduce al magisterio a discernir en la vida de la Iglesia la voz del Espiacuteritu y a decidir la direccioacuten del camino eclesial y las condiciones para su aplicacioacuten

No hay por lo tanto contradiccioacuten entre los dos momentos sino com-plementariedad La obligacioacuten de escucha por parte del magisterio se pro-duce de cara a un ejercicio libre de la discrepatio en la que va impliacutecita necesariamente la determinatio la decisioacuten pastoral90 En el desarrollo de esta funcioacuten laquolos obispos actuacutean como auteacutenticos custodios inteacuterpretes y testigos de la fe de toda la Iglesia que deben saber distinguir atentamente de los flujos muchas veces cambiantes de la opinioacuten puacuteblicaraquo91

El tercer momento es el de la realizacioacuten de lo que ha sido decidido por los pastores que compromete a toda la Iglesia en la escucha y en la obediencia a la voz del Espiacuteritu Este momento pertenece a todos seguacuten su propia condicioacuten y funcioacuten en primis a cuantos han sido puestos como laquoprincipio y fundamento de unidadraquo en la Iglesia el obispo en su Iglesia y el Obispo de Roma en la Iglesia universal laquoque es tambieacuten el cuerpo de las Iglesiasraquo (LG 23) Se puede apreciar aquiacute un doble movimiento el de quien tiene autoridad en razoacuten de la cual actuacutea en los distintos ni-veles de la vida eclesial para que se ejecute la decisioacuten tomada y el del Pueblo de Dios sujeto maacutes bien al proceso de recepcioacuten laquomediante el cual un cuerpo eclesial hace verdaderamente suya una determinacioacuten que eacutel mismo no se ha dado reconociendo en la medida promulgada una regla que conviene a su propia vidaraquo92 Este proceso reintroduce la decisioacuten de

90 Retomo para esta explicacioacuten los teacuterminos que la tradicioacuten monaacutestica usa para descri-bir los momentos de la lectio divina junto a la secuencia maacutes conocida lectio-meditatio-con-templatio-oratio-actio existe una segunda que introduce entre el momento de la oratio y el de la actio otros tres momentos la consolatio la discreptio y la determinatio Es evidente que un discernimiento incapaz de asumir responsablemente una decisioacuten es fin en siacute mismo si esto es cierto en el plano personal lo es con mayor razoacuten en el discernimiento eclesial

91 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

92 Y CONGAR La reacuteception comme reacutealiteacute ecclesiologique in Revue de Sciences Philosophiques et Theacuteologiques 56 (1972) 370

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los pastores en el momento profeacutetico del Pueblo de Dios en un fecundo movimiento de circularidad entre los sujetos de la sinodalidad

Profeciacutea discernimiento y actuacioacutenrecepcioacuten son tres momentos con-secutivos con capacidad de darle al camino eclesial un gran dinamismo un movimiento de participacioacuten en el cual toda la Iglesia y todos en la Iglesia estaacuten implicados93 Naturalmente cada momento tiene valor en siacute mismo y puede ser realizado incluso independientemente de los otros es maacutes en situaciones de sufrimiento y prueba en la vida de la Iglesia ha sido necesa-rio ndashy tal vez seraacute necesariondash que esto suceda Pero no deberiacutea tratarse de la norma en la vida ordinaria del camino eclesial deberiacutea valer la unidad dinaacutemica de los tres momentos conscientes de que ninguacuten momento se basta por siacute mismo Cuando esto no suceda la profeciacutea tenderaacute a trans-formarse en desacuerdo el discernimiento en acto de poder la actuacioacuten en imposicioacuten al otro sobre todo cada sujeto tenderaacute a oponerse al otro y todo el proceso se reduciraacute al solo momento de la ejecucioacuten o aplicacioacuten concentrado en las manos de quien tiene poder en la Iglesia

24 El ejercicio de la sinodalidad

La Iglesia constitutivamente sinodal por tanto se funda sobre la cir-cularidad de profeciacutea discernimiento y actuacioacutenrecepcioacuten No se trata de multiplicar las estructuras ni las instituciones sino de hacer funcionar aquellas existentes seguacuten la secuencia de estos tres momentos en los que se articula el proceso sinodal La actual crisis de los organismos de co-munioacuten manifiesta hasta queacute punto este paso no es obvio ni hay que darlo por descontado la llamada insistente a la dimensioacuten solo consultiva de los siacutenodos y consejos de diverso tipo instituidos tras el Vaticano II demues-tra coacutemo la preocupacioacuten del legislador ha estado basada sobre todo en preservar el tramado institucional preexistente ciertamente no pensado seguacuten el principio de participacioacuten

El paso a una Iglesia sinodal implica una auteacutentica conversioacuten la disponibilidad por parte de los pastores de la Iglesia a aceptar que no son depositarios de la verdad ex officio sino el principio de unidad que garantiza el camino compartido de la escucha del Espiacuteritu capaces de llevar a la Iglesia a discernir cuaacutel es la voluntad de Dios para el presente

93 He intentado describir de modo maacutes extenso estos tres momentos en D VITALI Verso la sinodalitagrave 100-106

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Por esta razoacuten deberiacutea ser un elemento claro para quien tenga la potes-tad de activar el proceso sinodal ndashel Papa en la Iglesia Universal y el obispo para su Iglesiandash que su punto de partida obligatorio es siempre la escucha del Pueblo de Dios Tampoco deberiacutea convertirse en un ele-mento impuesto llevado a cabo por alguacuten grupo de expertos o por alguacuten departamento diocesano en lugar y en nombre del Pueblo de Dios94 si el sensus fidei pertenece a la totalidad de los bautizados nadie puede pretender subrogarlo95

La cuestioacuten es doacutende se da la posibilidad efectiva y concreta de escucha al Pueblo de Dios El Papa invirtiendo un esquema auacuten muy radicado en la vivencia eclesial afirma que el primer nivel para el ejercicio de la sino-dalidad se realiza en las Iglesias particulares96 Solo a partir de una portio populi Dei que encarne el Evangelio dentro de los ritmos de la Historia el Pueblo de Dios no se reduce a una masa confusa privada de lugar y medios para manifestar su consenso Una totalidad de bautizados que se identifique con la Iglesia universal queda inevitablemente expuesta a todas las dinaacutemicas que gobiernan y condicionan la opinioacuten puacuteblica Por el con-trario en la Iglesia local puede ponerse en praacutectica la singularis Antistitum et fidelium cospiratio por medio de un estrecho viacutenculo del rebantildeo con su pastor97 Si se asume el dato eclesioloacutegico derivado del Concilio sobre la Iglesia particular como laquoportio populi Dei confiado al cuidado pastoral del obispo con la cooperacioacuten de su presbiterioraquo (CD 11) inmediatamente se identifican tambieacuten los sujetos de la profeciacutea (la portio populi Dei) del dis-cernimiento (el obispo con el presbiterio o si se prefiere el presbiterio con y nunca sin el obispo) y de la actuacioacuten (todos y cada uno de los miembros de la Iglesia particular seguacuten su propia condicioacuten y funcioacuten)

94 En Evangelii Gaudium despueacutes de haber hablado del sensus fidei (EG 119) el Papa afirma laquoEn virtud del bautismo recibido cada uno de los bautizados cualquiera que sea su funcioacuten en la Iglesia y el grado de ilustracioacuten de su fe es un agente evangelizador y seriacutea in-adecuado pensar en un esquema de evangelizacioacuten llevado adelante por actores cualificados donde el resto del pueblo fiel sea soacutelo receptor de sus accionesraquo (EG 120)

95 En el discurso para la conmemoracioacuten del 50ordm Aniversario del Siacutenodo de los obispos dice el Papa laquoEsta es la conviccioacuten que me ha guiado cuando he deseado que el Pueblo de Dios fuera consultado en la preparacioacuten de la doble cita sinodal sobre la familiaraquo

96 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

97 Me refiero a cuanto se ha dicho en DV 10 cfr supra n 17 LG 25 afirma que laquolos obispos son los maestros auteacutenticos o sea los que estaacuten dotados de la autoridad de Cristo que predican al pueblo que les ha sido encomendado la fe que ha de ser creiacuteda y ha de ser aplicada a la vidaraquo

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En su discurso el Papa afirma que este es el medio para dar forma a una Iglesia sinodal a traveacutes da la valorizacioacuten de los organismos de comunioacuten ndashhoy tocados por un evidente cansanciondash como laquoocasioacuten para la escucharaquo del pueblo de Dios El obispo como laquoprincipio y fundamento de unidad de su Iglesiaraquo (LG 23) tiene la potestad de iniciar todo el proceso no soacutelo como accioacuten extraordinaria convocando un siacutenodo diocesano sino como forma habitual de camino eclesial Para activar a este nivel una sinodali-dad efectiva es necesario no obstante reconsiderar las relaciones entre los sujetos de la Iglesia local sobre todo entre el obispo y sus presbiacuteteros que la reflexioacuten teoloacutegica y canoacutenica no ha sustraiacutedo auacuten a una concepcioacuten demasiado extriacutenseca98

El Papa indica asimismo un segundo nivel de ejercicio de la sinodali-dad laquoel de las Provincias y las Regiones eclesiaacutesticas el de los Concilios particulares y muy especialmente el de las Conferencias episcopalesraquo99 En el primer milenio las exigencias de la communio habiacutean llevado a la Iglesia a estructurarse en circunscripciones territoriales a distintos niveles ndashsedes metropolitanas provincias y regiones eclesiaacutesticas patriarcadosndash en el centro de las cuales los metropolitas y los patriarcas ejerciacutean una autoridad efectiva sobre las Iglesias que integraban su jurisdiccioacuten una organizacioacuten que ha favorecido en gran manera el ejercicio de la sinodalidad Tambieacuten en nuestros diacuteas podriacutea retomarse la normativa que regula las Conferencias episcopales laquopara concretar auacuten maacutes a traveacutes de estos organismos las instancias intermedias de la colegialidad quizaacutes integrando y poniendo al diacutea algunos aspectos del antiguo ordenamiento eclesiaacutesticoraquo100

laquoEl uacuteltimo nivel es el de la Iglesia Universal Aquiacute el Siacutenodo de los obispos representando al episcopado catoacutelico se convierte en expresioacuten de la colegialidad episcopal dentro de una Iglesia enteramente sinodalraquo

98 El replanteamiento de la relacioacuten entre episcopado y presbiterado a la luz de las indi-caciones de LG 21 sobre la plenitud del sacramento del orden atribuido a los obispos puede encontrar un justo equilibrio uacutenicamente a traveacutes de una nueva formulacioacuten de la unioacuten entre el obispo y sus presbiacuteteros con el obispo como principio y fundamento de la unidad no solo de su rebantildeo sino tambieacuten de su presbiterio He intentado desarrollar esta idea en D VITALI Sacerdozio vescovo e presbiterio Un contributo teologico in La Rivista del Clero Italiano 885 (2007) 381-396

99 Cita aquiacute el CIC 83 cc 431-459100 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50ordm aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de

los obispos El Papa citando Evangelii Gaudium reitera que laquoen una Iglesia sinodal como ya afirmeacute no es conveniente que el Papa reemplace a los episcopados locales en el discerni-miento de todas las problemaacuteticas que se plantean en sus territorios En este sentido percibo la necesidad de avanzar en una saludable lsquodescentralizacioacutenrsquoraquo

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Se trata de un paso de capital importancia en el discurso del Papa pues a diferencia de una vulgata profusamente difundida atribuye al Siacutenodo de los obispos una funcioacuten colegial propia del Colegio de los obispos No puede comprenderse este traacutensito maacutes que en la perspectiva del texto conciliar seguacuten el cual laquoel cuerpo episcopal que sucede al Colegio de los apoacutestoles en el magisterio y en el reacutegimen pastoral maacutes auacuten en el que perdura continuamente el Cuerpo apostoacutelico junto con su Cabeza el Ro-mano Pontiacutefice y nunca sin esta Cabeza es tambieacuten sujeto de la suprema y plena potestad sobre la Iglesia universalraquo (LG 22)

Por otra parte el hecho de que laquola suprema potestad que tiene este Colegio sobre toda la Iglesia se ejerce de manera solemne en el Concilio ecumeacutenicoraquo (ibid) hace del todo evidente el nexo con la sinodalidad de la que el Concilio es la maacutexima expresioacuten Tampoco tal atribucioacuten de po-testad al Colegio debilita al primado en todo caso lo refuerza pues uacuteni-camente al Papa laquoen virtud de su oficio como Vicario de Cristo y pastor de toda la Iglesiaraquo (ibid) corresponde convocar presidir y confirmar los concilios En esta perspectiva se puede comprender cualquier otro acto sinodal en particular el que se atribuye al Siacutenodo de los obispos en el marco de todo lo que el concilio deciacutea de la potestad colegial que laquopuede ser ejercida por los obispos dispersos por el mundo a una con el Papa con tal que la Cabeza del Colegio los llame a una accioacuten colegial o por lo menos apruebe la accioacuten unida de eacutestos o la acepte libremente para que sea un verdadero acto colegialraquo (ibid)

El momento maacutes evidente y en cierto modo tambieacuten emblemaacutetico fue la firma de los documentos conciliares suscritos por Pablo VI y por los Padres con la siguiente foacutermula que da relevancia al caraacutecter sinodal del acto laquoNos Apostolica a Christo Nobis tradita potestate illa una cum Venerabilibus Patribus in Spiritu Sancto approbamus decernimus et statuimus et quae ita synodaliter statuta sunt ad Dei gloriam promulgari iubemusraquo101

101 La foacutermula se utiliza al final de cada documento aprobado cfr Concilium Oecu-menicum Vaticanum II Constitutiones Decreta Declarationes Cittagrave del Vaticano 1966 Aparece tambieacuten en la carta de clausura del concilio laquoMandamus autem ac praecipimus ut quae synodaliter in Concilio statuta sunt sancte et religiose ab omnibus Christifidelibus serventur ad Dei gloriam ad Sanctae Matris Ecclesiae decus et ad hominum universorum tranquillitatem et pacemraquo Pablo VI Litterae apostolicae quibus SS Concilio oecumenico finis imponatur in Concilium Oecumenicum Vaticanum II Constitutiones Decreta Decla-rationes 1102

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25 Sinodalidad colegialidad primado

El marco plasmado a partir del Vaticano II permite una reflexioacuten so-segada sobre el Siacutenodo de los obispos en vistas de una reforma del Ordo Synodi Maacutes allaacute de los procedimientos la cuestioacuten de mayor relevancia concierne a la naturaleza misma del Siacutenodo Sorprende la institucioacuten del Siacutenodo durante el mismo concilio102 poniendo en evidencia la existencia de signos de un debate sobre la colegialidad que habiacutea interesado viva-mente al aula No asombra por tanto que Pablo VI vinculase fuertemente al ejercicio del primado el nuevo organismo a cuyo auxilio el sucesor de Pedro puede recurrir laquopor el bien de la Iglesia universalraquo

Con el fin de dar a los obispos laquola posibilidad de participar maacutes abierta y eficazmente en Nuestra solicitud por la Iglesia universalraquo dice el Papa laquomotu proprio y en virtud de Nuestra autoridad apostoacutelica erigimos y constituimos en esta ciudad de Roma un consejo estable de obispos para la Iglesia universal sujeto directa e inmediatamente a Nuestra autoridad al que designamos con el nombre propio de Siacutenodo de los obisposraquo103

Se trata de una institucioacuten eclesiaacutestica central que representa a todo el episcopado catoacutelico perpetua por su naturaleza que en cuanto a la estructura desarrolla sus tareas de modo temporal y ocasional104 Tales tareas consisten por la naturaleza misma del Siacutenodo en laquodar informa-ciones y consejosraquo al Papa la potestad deliberativa soacutelo puede serle con-cedida por el Papa laquoal que corresponde en tal caso ratificar la decisioacuten del Siacutenodoraquo105

Apostolica sollicitudo estableciendo esmeradamente la naturaleza y la funcioacuten de este laquoconsejo permanente de sagrados pastoresraquo nunca hace referencia a la colegialidad ni siquiera en el caso de una eventual potestad deliberativa del Siacutenodo106 Este dato es elocuente en cuanto a la intencioacuten

102 La publicacioacuten del motu proprio Apostolica Sollicitudo es del 15 de septiembre de 1965 el diacutea siguiente a la apertura de la cuarta sesioacuten conciliar En el discurso de apertura el Papa preanuncioacute laquola institucioacuten deseada por este concilio de un Siacutenodo de los obispos que compuesto de presuli nombrados en su mayor parte por las conferencias episcopales con Nuestra aprobacioacuten seraacute convocado por el Romano Pontiacutefice seguacuten las necesidades de la Iglesia para su consulta y colaboracioacuten cuando eso le parezca a oportuno por el bien general de la Iglesiaraquo in EV 1 355

103 En el punto III se reitera que laquoel Siacutenodo de los obispos estaacute sometido directa e inme-diatamente a la autoridad del Sumo Pontiacuteficeraquo in EV 2 448

104 Apostolica Sollicitudo I in EV 2 445105 Ibid II in EV 2 447106 Ibid

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del pontiacutefice de instituir un organismo focalizado en la ayuda al primado prescindiendo de los teacuterminos de la Nota explicativa praevia ndashretomada sin embargo praacutecticamente al pie de la letra en el motu propio que en los puntos 3 y 4 incluso con todas las cautelas para la defensa del primado107 preveiacutea la posibilidad de una accioacuten del Colegio cual laquosujeto de supremo y pleno poder sobre la Iglesia universalraquondash

Naturalmente la aclaracioacuten de la Nota en la que se afirma que laquola distincioacuten no es entre el Romano Pontiacutefice y los obispos entendidos de manera colectiva sino entre el Romano Pontiacutefice tomado separadamente y el Romano Pontiacutefice junto con los obisposraquo108 ofrecioacute esta viacutea de esca-pe sin contradecir la afirmacioacuten de LG 22 aprobado por el aula acerca de laquoel orden de los obispos [que] incluso es en unidad con [una cum] su cabeza el Romano Pontiacutefice y nunca sin ella sujeto de plena y suprema autoridad sobre toda la Iglesiaraquo

En realidad las dos formulaciones no son alternativas a condicioacuten de que se entienda la primera como alusioacuten a la naturaleza y la segunda como alusioacuten al ejercicio de la colegialidad dicho de otra manera existen dos sujetos ndashel Papa y el Colegiondash que tienen plena y suprema potestad sobre la Iglesia pero el segundo no puede ejercer su potestad si no es cum Petro y nunca sine Petro cabeza del Colegio No se trata por tanto de dos formas diferenciadas de ejercicio del primado sino del ejercicio diferenciado de dos potestades supremas en el que la segunda no puede activarse maacutes que cum Petro y nunca sine Petro y solo consentiente Capite109

Se podriacutea decir parafraseando el Vaticano II que laquocomo el Papado es de institucioacuten divina del mismo modo lo es el Colegio tambieacuten este tiene sus derechos en virtud de tal institucioacuten que el Papa no tiene ni el derecho ni el poder de cambiarraquo110 Al Papa le corresponde en cambio el derecho y el deber de determinar los modos de ejercicio de la colegia-lidad para que este servicio no falte a la Iglesia se trata de un ulterior aspecto en el ejercicio del primado que emerge con la aclaracioacuten expresa

107 laquoPertenece al juicio del Sumo Pontiacutefice a quien se le ha confiado el cuidado de todo el rebantildeo de Cristo determinar seguacuten las necesidades de la Iglesia que cambian con los tiempos la forma como convenga realizar este cuidado de forma personal o colegiada El Romano Pontiacutefice procede seguacuten su propio cristerio al regular promover o aprobar la actuacioacuten del Colegio con miras al bien de la Iglesiaraquo Nota explicativa praevia punto 3 in EV 1453

108 Nota explicativa praevia punto 4 in EV 1454109 Ibid110 DH 3115

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de la doctrina sobre el Colegio que no puede ser tal sin su cabeza Tam-poco el hecho de que exista un ejercicio personal del primado excluye ni hace superfluo el ejercicio de la colegialidad Papa y Colegio no com-piten sino que estaacuten en una relacioacuten sineacutergica al servicio de la Iglesia cada uno seguacuten su propia funcioacuten Es maacutes la Iglesia es constitutivamente sinodal y activar la colegialidad como modalidad habitual de laquocuidado del rebantildeo de Cristoraquo deberiacutea ser la forma de ejercicio maacutes alta y legiacuteti-ma del primado sin que esto signifique una limitacioacuten o la cesioacuten de una cuota de potestad

La funcioacuten de cabeza del Colegio no solo no perjudica la funcioacuten per-sonal del Papa como laquovicario de Cristo y pastor de la Iglesia Univer-salraquo111 sino que la resalta poniendo en primer plano su ser laquoprincipio y fundamento perpetuo y visible de unidad tanto de los obispos como de la muchedumbre de los fielesraquo112 Por otro lado el hecho de que le corres-ponda al Papa determinar las modalidades de ejercicio de la colegialidad maacutes que un liacutemite impuesto a la potestad del Colegio deberiacutea aparecer como el requisito capaz de encaminar y garantizar el efectivo ejercicio de la colegialidad113

Representado debidamente en su naturaleza el Siacutenodo de los obispos puede constituir el lugar habitual de ejercicio de la colegialidad con la decisioacuten de llamar al episcopado al cuidado pastoral de la Iglesia no como una insercioacuten estable de obispos en el organigrama de la curia romana sino a traveacutes de un acto colegial de discernimiento que sepa in-dicar a la Iglesia la viacutea que hay que recorrer en el camino hacia el Reino de Dios Es esta la tarea maacutes propia de los pastores a quienes se dice laquoexaminadlo todo cuidadosamente y retened lo buenoraquo (1 Tes 519-21) En ese caso laquoel Siacutenodo de los obispos representando al episcopado ca-toacutelico se convierte en expresioacuten de la colegialidad episcopal dentro de una Iglesia del todo sinodal [hellip] Ello manifiesta la collegialitas affectiva

111 Nota explicativa praevia punto 3 in EV 1453112 LG 23 que cita el proemio de Pastor Aeternus in DH 3051113 El Papa especifica en su discurso pronunciado con ocasioacuten del 50ordm aniversario de la

institucioacuten del Siacutenodo laquoEl hecho de que el Siacutenodo actuacutee siempre cum Petro et sub Petro ndashpor tanto no soacutelo cum Petro sino tambieacuten sub Petrondash no es una limitacioacuten de la libertad sino una garantiacutea de la unidad En efecto el Papa es por voluntad del Sentildeor laquoel principio y fundamento perpetuo y visible de unidad tanto de los obispos como de la muchedumbre de fielesraquo Con esto enlaza el concepto de hierarchica communio empleado por el concilio Vaticano II los obispos se unen con el Obispo de Roma por el viacutenculo de la comunioacuten episcopal (cum Petro) y estaacuten al mismo tiempo jeraacuterquicamente subordinados a eacutel como cabeza del Colegio (sub Petro)

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que incluso puede convertirse en algunas circunstancias en lsquoefectivarsquo que une a los obispos entre ellos y con el Papa en la dedicacioacuten al Pueblo de Diosraquo114

Esto puede ocurrir a condicioacuten de que los sujetos del proceso sinodal ndashPueblo de Dios Colegio de los obispos y cabeza del Colegiondash esteacuten estrechamente vinculados y sus funciones se pongan en sinergia fecun-da De este modo todos en la Iglesia encuentran su lugar y desarrollan su cometido el Pueblo de Dios con el reconocimiento de su participa-cioacuten en la funcioacuten profeacutetica de Cristo (LG 12) el Colegio que puede concretar en el siacutenodo laquola solicitud por toda la Iglesiaraquo (LG 23) y el Papa que laquono estaacute por siacute mismo por encima de la Iglesia sino dentro de ella como bautizado entre los bautizados y dentro del Colegio episco-pal como obispo entre los obispos llamado a la vez ndashcomo Sucesor del apoacutestol Pedrondash a guiar a la Iglesia de Roma que preside en la caridad a todas las Iglesiasraquo115

26 El Siacutenodo de los obispos

Seguacuten la actual normativa canoacutenica116 el Siacutenodo de los obispos no se manifiesta como expresioacuten de la colegialidad episcopal al menos por tres motivos la escasa capacidad de representar al Colegio la composicioacuten de la asamblea sinodal y el caraacutecter meramente consultivo Estos motivos se encuentran estrechamente conectados entre siacute y determinan la naturaleza del Siacutenodo se resuelven partiendo de la colegialidad o como ayuda a la funcioacuten de primado del Papa

La legislacioacuten vigente es detallada y minuciosa al fijar las normas relativas a la eleccioacuten de los obispos participantes en el Siacutenodo por parte de las Conferencias episcopales Pero por maacutes que los mecanismos de eleccioacuten esteacuten inspirados en el criterio de proporcionalidad el hecho de que los electos no representen a los otros obispos priva a la asamblea sinodal de la capacidad de expresar el Colegio y sus actos del caraacutecter colegial pues esto podriacutea suceder uacutenicamente si actuase el Colegio en cuanto tal o una parte del mismo que lo representase de manera efectiva

114 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

115 Ibid116 Cfr CIC 83 cc 342-348 y las disposiciones del Ordo Synodi Episcoporum del 29-

IX-2006

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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y concreta Pero esto no ha sido nunca expresado ni en Apostolica solle-citudo ni posteriormente117

La dificultad de los obispos electos para representar al Colegio se obstaculiza profundamente con la norma introducida por el Coacutedigo que determina que la asamblea sinodal deba estar compuesta por laquouna mayoriacutea de obisposraquo118 Esta determinacioacuten implica que los actos de tal asamblea no se refieren al Colegio compuesto tan solo de obispos119 Naturalmente no falta quien cree que una asamblea compuesta de una mayor variedad con una cuota significativa de laicos hombres y muje-res representariacutea mejor a la Iglesia Pero maacutes allaacute de las dificultades que hay en fijar los criterios de representatividad del Pueblo de Dios habriacutea que preguntarse en tal caso queacute sentido tendriacutea entonces hablar de Siacutenodo de los obispos Se suele insistir en la normativa vigente sobre el caraacutecter consultivo del Siacutenodo

Huelga decir que si se tratase de una asamblea de obispos capaz de representar efectivamente al Colegio y dado que sus acciones seriacutean ma-nifestacioacuten de un laquosujeto de suprema y plena potestad sobre toda la Igle-siaraquo estas no podriacutean ser meramente consultivas Basta esto para llegar a la conclusioacuten de que el Siacutenodo de los obispos tal como estaacute concebido y como ha desarrollado su actividad en estos uacuteltimos cincuenta antildeos es con toda evidencia un organismo que ayuda al primado y no una expresioacuten del Colegio de los obispos Con esta configuracioacuten la normativa actual es completamente congruente en cuanto que regula la actividad de una asamblea compuesta en su mayoriacutea de obispos convocados laquopara prestar ayuda con su consejo al Romano Pontiacutefice colaborando en la salvaguardia y en el incremento de la fe y las costumbres la observancia y la consolida-

117 A menos que no se entienda en este sentido el empleo repetido del teacutermino raepre-sentansrepresentantes en el Ordo Synodo de 2006 que podriacutea abrir una viacutea a la solucioacuten del problema Se percibe en todo caso la debilidad de la normativa actual con respecto de la praxis maacutes antigua en la que los arzobispos los metropolitas y los patriarcas representaban efectivamente a los obispos con voto a nivel de metroacutepolis provincias y regiones eclesiaacutesti-cas y patriarcados Incluso fueron figuras importantes las de los legados que tuvieron una tarea efectiva de representacioacuten Por esto seriacutea muy uacutetil como dice el Papa reflexionar laquoso-bre las instancias intermedias de la colegialidad quizaacutes integrando y poniendo al diacutea algunos aspectos del antiguo orden eclesiaacutesticoraquo

118 Cfr CIC 83 c 346119 La objecioacuten no es vaacutelida naturalmente si el Siacutenodo de los obispos es un organismo

dirigido uacutenicamente a ayudar al Papa en el ejercicio de su ministerio en ese caso eacutel a su dis-crecioacuten puede establecer no solamente la composicioacuten sino tambieacuten cualquier otro aspecto que configure el organismo

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cioacuten de la disciplina eclesiaacutestica incluyendo el estudio de los problemas relativos a la actividad de la Iglesia en el mundoraquo120 Es oportuno adoptar el criterio de proporcionalidad al convocar a los obispos pero debe re-cordarse que el Papa podriacutea seguacuten su juicio cambiar reglas y criterios incluida la configuracioacuten misma del Siacutenodo hasta la eleccioacuten extrema de suprimirlo trataacutendose de un organismo al servicio del primado y del cual eacutel puede disponer seguacuten elija

Una vez clarificado este punto insistir sobre una mayor colegialidad resultariacutea fuera de lugar aunque el Papa atribuyera ndashsiempre o soacutelo en al-guacuten casondash capacidad deliberativa a la asamblea se tratariacutea de una conce-sioacuten de la potestad del primado y no de un ejercicio de la potestad colegial en sentido estricto la cual precisamente por pertenecer al Colegio no puede ser ni concedida ni revocada sino uacutenicamente regulada121 Muchas expectativas creadas sobre el Siacutenodo han provocado y provocaraacuten pro-fundas desilusiones porque se sostienen sobre la base del malentendido de que se trata de un organismo colegial al que se le otorgan atribuciones que debido a la actual normativa no le pertenecen como queda claro en los mismos caacutenones del Coacutedigo de Derecho Canoacutenico122

No es tanto la norma la que crea el conflicto sino su colocacioacuten el ca-piacutetulo sobre el Siacutenodo de los obispos aparece en la seccioacuten I de la parte II La constitucioacuten jeraacuterquica de la Iglesia La seccioacuten desarrolla la laquosuprema autoridad de la Iglesiaraquo subdividiendo la temaacutetica en dos artiacuteculos el relativo al Romano Pontiacutefice y el que se refiere al Colegio de los obispos Hallamos aquiacute el mismo nudo no resuelto de la Nota explicativa praevia la formulacioacuten en singular si bien por una parte asume al Colegio de los obispos en este aacutembito como laquosujeto de suprema y plena potestad sobre la Iglesia universalraquo123 retomando al pie de la letra LG 22 por otro lado lo aiacutesla completamente encuadrando su ejercicio en la forma solemne del concilio ecumeacutenico124 La composicioacuten iacutentegra de la parte II del Coacutedigo refuerza esta impresioacuten en cuanto que el canon de apertura se limita a repetir que laquoel Romano Pontiacutefice sucesor de Pedro y los obispos suce-

120 CIC 83 c 342121 Lo demuestra el caso del concilio ecumeacutenico que compete al Papa convocar y sus-

pender pero que una vez convocado manifiesta la misma potestad de asamblea de obispos que ejercen su potestad sobre la Iglesia siempre con y nunca sin su cabeza

122 Cfr CIC 83 cc 342-348123 CIC 83 c 336124 CIC 83 cc 337-341

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sores de los Apoacutestoles estaacuten vinculados entre ellosraquo125 sin aclarar que la suprema autoridad de la Iglesia pertenece a dos sujetos diferenciados el Papa y el Colegio de los obispos y sobre todo porque no relaciona el Siacutenodo de los obispos y las Conferencias episcopales con el Colegio en la perspectiva del ejercicio de la colegialidad126

Las razones que han llevado a los Papas a elegir un Siacutenodo de los obis-pos como organismo dirigido a la ayuda del primado son comprensibles el riesgo de comprometer elementos constitutivos de la Iglesia imponiendo un sistema de gobierno inspirado en el modelo de la sociedad civil pudo justificar las cautelas Pero la cuestioacuten es si por temor a debilitar el pri-mado no se avaloacute una configuracioacuten demasiado deacutebil de la colegialidad y en relacioacuten con ella del Siacutenodo de los obispos Tal eleccioacuten acaba por ahogar las enormes potencialidades de un organismo que si se concibiera como expresioacuten adecuada de la colegialidad ofreceriacutea la clave para la rea-lizacioacuten de la tarea de discernimiento eclesial necesario para conformar una Iglesia sinodal Por otra parte precisamente los acontecimientos de estos cincuenta antildeos dominados por una conflictividad que ha probado duramente al cuerpo eclesial poniendo con ello en riesgo la unidad invita a sondear posibilidades de este tipo traduciendo la colegialidad en formas concretas de ejercicio a traveacutes de decisiones compartidas en el discerni-miento cum Petro et sub Petro la asamblea sinodal puede ser el lugar y el instrumento para madurar por fin un camino compartido de Iglesia

27 Conclusioacuten abierta el Siacutenodo para una Iglesia del todo sinodal

Al aclarar las prerrogativas del sucesor de Pedro el Vaticano II insistioacute en el hecho de que la afirmacioacuten del primado no fuese en perjuicio de la laquopotestad ordinaria e inmediata de los obispos en sus dioacutecesisraquo al con-trario laquoesta misma potestad es afirmada reforzada y defendida seguacuten el

125 CIC 83 c 330126 El Siacutenodo aparece en el capiacutetulo II (can 342-348) antes de los organismos cla-

ramente vinculados al primado los cardenales (cap III can 349-359) la curia romana (cap IV can 360-361) los legados del Papa (cap V can 362-367) En teoriacutea podriacutea tratarse de un organismo ligado al Colegio puesto que se menciona justo despueacutes de los caacutenones sobre el Colegio de los obispos pero obstaculiza esta lectura el can 334 seguacuten el cual laquoen el ejercicio de su oficio el Romano Pontiacutefice es asistido por los obispos que pueden cooperar con eacutel de diferentes maneras una de las cuales es el Siacutenodo de los obisposraquo Las Conferencias episcopales aparecen luego nada menos que en el cap IV (can 447-459) de la seccioacuten II sobre las Iglesias particulares y sus agrupaciones imposible establecer cualquier viacutenculo de estas con el Colegio y con el ejercicio de la colegialidad

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dicho de Gregorio Magno lsquoMi honor es el honor de la Iglesia universal Mi honor es el soacutelido vigor de mis hermanos Entonces me siento realmente honrado cuando no es negado el honor debido a cada uno de ellosrsquoraquo127

Si la afirmacioacuten podiacutea parecer retoacuterica en el momento de definir el pri-mado de jurisdiccioacuten sobre la Iglesia universal hoy puede convertirse en profeacutetica si el obispo de Roma asume como tarea propia ndashy como su ho-norndash afirmar reforzar y defender al Colegio de los obispos que el concilio Vaticano II ha definido como laquosujeto de plena y suprema potestad sobre la Iglesiaraquo promoviendo un ejercicio efectivo de la colegialidad en una Igle-sia del todo sinodal Tal eleccioacuten no solo pondriacutea en acto el texto conciliar que hasta hoy ha quedado no resuelto en la sustancia sino que permitiriacutea desarrollar una comprensioacuten de la sinodalidad en liacutenea con el desarrollo de la Tradicioacuten del segundo milenio en Occidente que ha pasado por el proceso de aclaracioacuten respecto a la potestad del sucesor de Pedro llegando a su plena maduracioacuten en el Vaticano I y a la luz de aquel respecto a la potestad del Colegio de los obispos en el Vaticano II

A diferencia de quien ve posible la sinodalidad con independencia de la colegialidad128 estoy persuadido de que una viacutea catoacutelica hacia la sino-dalidad fiel a su propio camino en la historia no puede prescindir de aquel proceso maacutes bien tiene que mantenerlas unidas y establecer con una di-naacutemica de circularidad fecunda primado colegialidad y sinodalidad Esta solucioacuten estaacute en evidente continuidad con el concilio129 el cual ademaacutes de resituar la funcioacuten petrina dentro del Colegio tambieacuten ha insertado el ministerio jeraacuterquico dentro de la vida del Pueblo de Dios poniendo las bases para aquella singularis Antistitum et fidelium conspiratio que es conditio sine qua non de la sinodalidad En la unidad de los tres teacuterminos deberiacutea superarse la idea de cualquier competicioacuten entre Papa y Colegio puesto que los dos estaacuten al servicio del Pueblo de Dios cada uno seguacuten su propia naturaleza y funcioacuten

Tras haber pasado cincuenta antildeos del final del concilio ya no tiene sentido posponer un ejercicio pleno de la colegialidad por miedo a que resulten perjudicadas las prerrogativas del primado que quedan intactas tambieacuten en el marco de una Iglesia sinodal Es tiempo de traducir en mo-

127 CONCILIO VATICANO I Const dogmaacutetica Pastor aeternus cap 3 DH 3061128 Cfr por ejemplo E CORECCO Ontologia della sinodalitagrave in G BORGONOVO -

A CATTANEO (coord) Ius et communio Casale Monferrato 1997 83-84129 Cfr supra sectsect 23-6

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dalidades operativas el hecho de que laquoel Romano Pontiacutefice en el cumpli-miento del oficio de supremo Pastor de la Iglesia siempre estaacute vinculado en la comunioacuten con los otros obispos mejor dicho con toda la Iglesiaraquo130 laquoEl derecho a determinar seguacuten las necesidades de la Iglesia el modo personal o colegial de ejercer tal oficioraquo131 maacutes que una baza en defensa del primado deberiacutea ser entendida como garantiacutea de una activacioacuten efecti-va de la doble modalidad en que se articula el gobierno de la Iglesia Que la eleccioacuten de una modalidad o de otra no esteacute vinculada normativamente sino que dependa de un principio discrecional por el bien de la Iglesia no puede convertir de ninguacuten modo en accesoria la funcioacuten del Colegio que existe statuente Domino132 En otras palabras laquoordenar promover y apro-bar el ejercicio colegial teniendo como objetivo el bien de la Iglesiaraquo133 es una tarea que corresponde en conciencia al Papa quien tiene que rendir cuentas no a los hombres sino a Dios mismo

De este modo eacutel que estaacute por encima ndasho quizaacutes sea mejor decir delan-tendash del Colegio en virtud de la funcioacuten primada con la potestad de activar y de cerrar ndashtambieacuten primero si lo quisierandash la accioacuten colegial puede estar asimismo con y entre los otros obispos dentro del Colegio hermano entre los hermanos obispos en escucha del uacutenico Espiacuteritu sin que esto en ninguacuten modo vaya a perjudicar el primado134

En esta tarea de convocar a los obispos a la accioacuten colegial (cfr LG 22) el Papa puede reconocerle al Siacutenodo de los obispos capacidad colegial configuraacutendolo como expresioacuten adecuada del Colegio de los obispos y no soacutelo como un organismo que asiste al primado En ese caso la asamblea sinodal no deberiacutea estar compuesta en su mayoriacutea de obispos135 sino solo

130 CIC 83 c 333 sect 2131 Ibid132 Se trata de la frase utilizada en LG 22 para fundar sobre la base de la unidad entre

Pedro y los otros apoacutestoles la existencia del Colegio de los apoacutestoles del cual se hace depen-der pari ratione la existencia del Colegio de los obispos basado en la unioacuten entre el Sucesor de Pedro y los otros obispos Manteniendo este paralelismo las mismas argumentaciones usadas para fundar la institucioacuten divina del primado en virtud de la sucesioacuten petrina tambieacuten valen para el Colegio de los obispos sucesores de los apoacutestoles

133 Nota explicativa praevia punto 3 in EV 1 453134 Merece la pena citar de nuevo el discurso del Papa en la conmemoracioacuten del 50ordm ani-

versario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos laquoEstoy convencido de que en una Iglesia sinodal tambieacuten el ejercicio del primado petrino podraacute recibir mayor luz El Papa no estaacute por siacute mismo por encima de la Iglesia sino dentro de ella como bautizado entre los bautizados y dentro del Colegio episcopal como obispo entre los obispos llamado a la vez ndashcomo Sucesor del apoacutestol Pedrondash a guiar a la Iglesia de Roma que preside en la caridad a todas las Iglesiasraquo

135 Cfr CIC 83 c 346

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de obispos No deberiacutea ser difiacutecil encontrar criterios y procedimientos aptos para dar a la asamblea sinodal la capacidad de representar ndashy pre-sentarndash al Colegio criterios que seraacuten tanto maacutes convincentes cuanto maacutes representativa conviertan la asamblea de la Ecclesia tota136

Tampoco seriacutean necesarias grandes alteraciones de la normativa vigen-te para poner en praacutectica esta forma de sinodalidad Todo el camino sinodal se desarrollariacutea siguiendo las condiciones indicadas por el Papa Francis-co para los distintos niveles de ejercicio de la sinodalidad y de hecho ya puestos en marcha en los dos uacuteltimos siacutenodos Bastariacutea con articular el acontecimiento sinodal seguacuten los tres momentos anteriormente descritos la escucha del Pueblo de Dios el discernimiento por parte de la asamblea sinodal y la realizacioacuten por parte del entero cuerpo eclesial

Inicialmente seriacutea necesario formalizar la escucha del Pueblo de Dios como primer momento del Siacutenodo el instrumento de consulta ya usado en el pasado por los Papas para verificar el consensus fidelium respecto a cuestiones doctrinales puede ser el medio maacutes idoacuteneo para implicar activamente a todos los bautizados en el proceso sinodal137 Despueacutes de la parte del Pueblo de Dios viene la de los pastores reunidos en asamblea sinodal y llamados al discernimiento para sentildealar las decisiones necesa-rias que sirvan al camino de la Iglesia

Insisto en reiterar que este es el momento propio de los pastores solo bajo tal condicioacuten es posible pasar de un acto consultivo a uno colegial y solo a condicioacuten de que se deacute tal paso es posible que el discernimiento del

136 En otras palabras se deberiacutea hacer evidente en los actos colegiados aquella corres-pondencia entre communio fidelium communio Ecclesiarum y communio hierarchica que se pone de manifiesto en el Colegio incluso la funcioacuten petrina sale ganando puesto que el Papa se vuelve principio y fundamento visible de la unidad tanto de la communio Episco-porum como de la communio Ecclesiarum y de la communio fidelium tal como se pone de re-lieve en LG 23 Naturalmente siguiendo este enfoque seriacutea necesario replantearse la funcioacuten de los obispos titulares verificando de queacute modo una presencia excesivamente dilatada de estos en el Colegio no solo haga problemaacutetica la capacidad del Colegio mismo para represen-tar a la Iglesia sino que acabe por debilitar el ministerio episcopal fundado en la Tradicioacuten sobre el viacutenculo esponsal del obispo con su Iglesia

137 Es evidente que las formas de consulta deben repensarse y perfeccionarse para sal-vaguardar a los bautizados de los grupos de comunicacioacuten y de presioacuten pero la consulta sigue siendo una oportunidad extraordinaria de participacioacuten en la loacutegica de una corresponsabili-dad que le reconoce al Pueblo de Dios un lugar en el proceso sinodal Por otro lado la uacutenica posibilidad de ir maacutes allaacute de una posicioacuten amorfa de la opinioacuten puacuteblica es una formacioacuten continua de los bautizados en el sensus christianus esta formacioacuten es posible uacutenicamente en una experiencia continua de participacioacuten que encuentra su nuacutecleo maacutes favorable en las estructuras de la Iglesia particular Es como decir que un crecimiento del sensus fidei lleva impliacutecito un camino sinodal de las Iglesias particulares

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Siacutenodo tenga valor sinodal es decir que sea vinculante para toda la Igle-sia138 En el caso de que las decisiones de la asamblea asumiesen caraacutecter sinodal toda la Iglesia y todos en la Iglesia estariacutean llamados a observar-las y a ponerlas en acto cada uno seguacuten su propia condicioacuten y funcioacuten139 Lo importante es que los tres momentos se distingan debidamente y con maacutergenes de tiempo evitando superposiciones que acabariacutean por originar procesos confusos y decisiones no suficientemente verificadas De este modo seriacutea de veras evidente que laquoen una Iglesia sinodal el Siacutenodo de los obispos es la manifestacioacuten maacutes evidente de un dinamismo de comunioacuten que inspira todas las decisiones eclesialesraquo140

138 Se puede objetar que las proposiciones del Siacutenodo o cualquier otro documento que proceda de este no tienen caraacutecter vinculante y que cualquier accioacuten de este depende de la aprobacioacuten del Papa quien normalmente se reserva la facultad de promulgar una exhortacioacuten postsinodal En su discurso del 50deg aniversario del Siacutenodo el Papa Francisco dice sin embargo que laquoel camino sinodal culmina en la escucha del Obispo de Roma llamado a pronunciarse como Pastor y Doctor de todos los cristianos no partiendo de sus convicciones personales sino como supremo testigo del fides totius Ecclesiae lsquogarante de la obediencia y la conforma-cioacuten de la Iglesia a la voluntad de Dios al evangelio de Cristo y a la Tradicioacuten de la Iglesiarsquoraquo Este es el uacutenico modo de dar valor a los actos del Siacutenodo de los obispos en la normativa vigente Seriacutea diferente si la asamblea sinodal tuviese caraacutecter colegial en dicho caso el Papa podriacutea elegir la misma modalidad de reconocimiento de los documentos conciliares firmando una cum Patribus los decretos sinodales o incluso remitieacutendolo a todos los obispos para que se convierta en acto colegial compartido por todos los miembros del Colegio

139 En el momento de la puesta en praacutectica encuentra su lugar tambieacuten la Curia romana Entre otras cosas en la perspectiva de una Iglesia constitutivamente sinodal la reforma de la Curia de la que tanto se habla podriacutea orientarse en esta direccioacuten reconfiguraacutendose como estructura al servicio de la Iglesia universal Puesto que depende del Papa como principio y fundamento de unidad de la communio fidelium de la communio Ecclesiarum y de la com-munio Episcoporum laquoordenar promover y aprobar el ejercicio colegialraquo (Nota explicativa praevia n 3) la funcioacuten subordinada de la Curia (que es y se mantiene como oacutergano ejecu-tivo) se desarrollariacutea en el servicio a la accioacuten tanto primada como colegial Por otro lado si la verdad y la credibilidad de una eleccioacuten se miden tambieacuten seguacuten la energiacutea que se invierte para ponerla en acto la estructura de servicio a la Iglesia que sea constitutivamente sinodal no puede ser solamente la Secretariacutea del Siacutenodo frente al nuacutemero de congregaciones y consejos delegados al servicio del primado Este gap no puede y no tiene que ser solucionado con la creacioacuten de una estructura paralela a la Curia sino con la reconversioacuten de la Curia romana con debidas cesiones de competencias a organismos no centralizados como estructura al servicio tambieacuten de la sinodalidad En ese caso despueacutes de todos los discursos sobre la re-forma de la Curia un organismo que muchos consideran un problema podriacutea transformarse en recurso y favorecer la afirmacioacuten de una Iglesia sinodal

140 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos

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Mater Clementissima 1 (2016) 59-120

El hombre es sujeto y persona La relacioacuten entre trascendentalidad

y antropologiacutea en Karl Rahner

Juan Manuel CabieDas teJero1

Universidad Pontificia de Meacutexico

resuMen El meacutetodo trascendental que guiacutea el proyecto teoloacutegico de Karl Rahner per-mite seguir proponiendo hoy la revelacioacuten del Dios de Jesucristo como espacio de correspondencia entre la compleja loacutegica de la existencia humana (fenoacutemeno) y su vocacioacuten a la Verdad (fundamento) entre la vida personal del hombre (experiencia subjetiva y realizacioacuten histoacuterica) y la confesioacuten de fe Este artiacuteculo pretende sin-tetizar el modo en que la obra de Karl Rahner confirma que no se puede pensar la salvacioacuten del hombre como pura apetencia del espiacuteritu sino como posibilidad de autotrascendencia teologal en el seno de una naturaleza contingente (corpoacuterea mun-dana libre mortal y capaz de amor)

palabras ClaVe Karl Rahner antropologiacutea trascendental sujeto persona filosofiacutea moderna

abstraCt laquoMan is subject and person Karl Rahner on relationship between trans-cendentality and anthropologyraquo Even today the transcendental Method that gui-des Karl Rahnerrsquos theological Project is able to propose Godrsquos Revelation in Jesus Christ as correspondence between complex logic of human existence (phenomenon) and its vocation to Truth (foundation) between personal life (subjective experience and historical realization) and the confession of Faith This paper draws a sketch of Rahnerrsquos work to confirm that human salvation can not be thought as pure spiritual appentency but as possibility of theological auto-transcendence within contingent nature (corporeal worldly free mortal and capable of love)

KeyworDs Karl Rahner transcendental Anthropology Subjet Person modern Philo-sophy

1 Miembro de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos En 2012 obtuvo el doctorado en Teologiacutea por la Pontificia Universitagrave Gregoriana (Roma) Ha publicado el libro laquoLa persona es criatura amorosa Perspectivas para una antropologiacutea teoloacutegicaraquo Valencia 2013 ademaacutes de varios artiacuteculos en revistas especializadas Actualmente es profesor en la Facultad de Teologiacutea de la Universidad Pontificia de Meacutexico Entre 2008 y 2012 fue vice-rrector del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma

Juan Manuel CabieDas teJero

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MArco y propoacutesito

Estimulada fundamentalmente por el neo-kantismo y la fenomenolo-giacutea la filosofiacutea contemporaacutenea ha valorado la necesidad de laquovolver sobre lo trascendental esto es sobre lo a priori considerado en su relacioacuten con la experienciaraquo2 y de indagar por tanto en queacute medida el yo del laquoyo piensoraquo habriacutea de ser considerado no un entendimiento puro sino una primera persona

Lejos de que tengamos que deducir el principio de la posibilidad de la experiencia del hecho indubitable de la conciencia de siacute como lo habiacutean pensado Descartes y los idealistas fichteanos el anaacutelisis trascendental nos obliga a invertir estas posiciones y no admitir la unidad de conciencia maacutes que a tiacutetulo de correlato copernicano de la unidad de la experiencia posible El cogito no se salva maacutes que perdieacutendose en su propia actividad 3

Se salva salvando su circunstancia diriacutea Joseacute Ortega y Gasset 4 para quien desde los inicios de su visioacuten de la razoacuten como razoacuten vital el su-jeto es siempre espectador (yo) inserto en el flujo del paisaje de su vida Espectador desinteresado (trascendente) mas no espectador indiferente que pueda encaramarse a una atalaya que lo ponga a salvo del riesgo in-herente de comprometerse con el mundo que lo solicita laquocon sus taacutecitas fisonomiacuteas de humildad y anheloraquo5 Husserl Scheler Heidegger Ortega etc participan con los necesarios matices de sensibilidad de un mis-mo intereacutes por profundizar en la actividad del pensar que nos constituye mas no como propiedad de un sujeto puramente formal y autoacutenomo sino como expresioacuten de su concreta forma de ser ser en el mundo (temporal encarnado relacionado mortalhellip)

Lejos de ahondar la distancia entre teologiacutea y filosofiacutea esta cualifi-cacioacuten moderna de la instancia subjetiva se revela referente ineludible para restituir a la inteligencia teoloacutegica aquel espacio reflexivo que como contempla ahora la filosofiacutea es el hombre en cuanto ser personal El pen-

2 M DUFRENNE La nocioacuten de laquoa prioriraquo Salamanca - Meacutexico DF 2010 12 El autor recusa en esta obra una concepcioacuten demasiado formal de lo trascendental proponiendo que entre lo singular (constituido) y lo universal (constituyente) no existe oposicioacuten es decir la trascendentalidad del sujeto (conocimiento y voluntad) ha de aprehenderse como factor defini-torio de su naturaleza ya nos refiramos a la misma en su caraacutecter corpoacutereo social o mundano

3 Ibid 29-30 Estas palabras son cita a su vez de J VUILLEMIN Lrsquoheacuteritage kantien et la reacutevolution copernicienne Fichte Cohen Heidegger Paris 1954 186

4 J ORTEGA Y GASSET Meditaciones del Quijote 775 Ibid 65

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samiento moderno insta y provoca el replanteamiento de la fundacioacuten an-tropoloacutegica del saber de Dios El liacutemite de la visioacuten neo-escolaacutestica no residiacutea en la reivindicacioacuten de un conocimiento natural de Dios sino en su modelado como extriacutenseco al saber de la fe La recuperacioacuten de la unidad del fin uacuteltimo del hombre no implica la remocioacuten de aquel conocimien-to sino la restitucioacuten de su cualidad teologal es decir la pregunta por la identidad del hombre como destinatario y por tanto co-protagonista de la accioacuten salviacutefica de Dios en la historia

Una atencioacuten maacutes cuidadosa a la dinaacutemica dialogal de la relevacioacuten (cfr DV 2) al hondo alcance humanizador del dogma de la encarna-cioacuten (cfr GS 22) y al caraacutecter sacramental de la naturaleza y misioacuten de la comunidad de los creyentes (cfr LG 1) ha llevado a la teologiacutea a pro-poner una antropologiacutea teoloacutegica que junto a la irrenunciable solicitud por las exigencias del comprender y querer humano como apertura ilimi-tada al Ser (a priori) preste decidida atencioacuten a la trascendentalidad de los interrogantes fundamentales que emergen de la existencia histoacuterica del hombre (a posteriori) al hacer experiencia de siacute mismo en el seno de lo real circundante La especiacutefica vivencia humana del cuerpo de la rela-cioacuten con el otro o de la muerte y el tiempo entre las experiencias funda-mentales disentildea una meta-antropologiacutea que permite reconocer el hondo arraigo en la historicidad humana de la experiencia religioso-subjetiva de Dios de la dinaacutemica del don de la gracia y sobre todo del misterio de la Encarnacioacuten de Dios en Jesucristo

La influyente teologiacutea trascendental del teoacutelogo alemaacuten Karl Rahner (1904-1984) ndashque hacemos objeto de estas paacuteginasndash nos brinda la oportu-nidad de acercarnos a esta comunidad de ideas que la teologiacutea catoacutelica del siglo XX comparte con la filosofiacutea centroeuropea Tanto a partir ante todo de su teologiacutea de la gracia como de su esbozo de una cristologiacutea existen-cial o laquocristologiacutea de buacutesquedaraquo6 Rahner insta a la antropologiacutea teoloacutegica a integrar una antropologiacutea metafiacutesica de tipo trascendental como espacio que permite esclarecer el viacutenculo entre la apertura constitutiva del hom-bre a Dios y su experiencia subjetiva personal esto es la asuncioacuten de lo que denomina su laquonaturaleza efectivaraquo7 o laquoesencia uacutenica y concretaraquo8 en

6 Cfr K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 345-348 Id Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica 63-66

7 Id Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET (Escritos de Teologiacutea) I 3058 Id Naturaleza y gracia in ET IV 218

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el dinamismo de su reflexividad esencial en cuanto apertura ilimitada al Ser en suma una antropologiacutea que valida lo noeacutetico (universalidad) en la experiencia concreta de una historia de libertad amor y peacuterdida de siacute (sin-gularidad) como principales existenciales de una naturaleza efectivamente abierta a aquella plenitud personal de ser que se auto-comunica efectiva-mente en Cristo como relato de Amor9 Este es el modo en que la antropo-logiacutea teoloacutegica puede evitar la asimilacioacuten reductiva de la fe a su medio trascendental asiacute como profundizar el calado histoacuterico del acontecer de la relacioacuten teologal sin prejuicio de su verdad salviacutefica uacuteltima

Cuando un teoacutelogo como Juan Alfaro cercano a la sensibilidad de Rah-ner delinea el meacutetodo de trabajo que pretende seguir en la uacuteltima obra en que estudia a fondo la mutua implicacioacuten entre la cuestioacuten del hombre y la cuestioacuten de Dios manifiesta su intencioacuten de asumir para su examen una triple determinacioacuten existencial en cuanto se parte de la existencia vivida por el hombre en el acto mismo de existir y de la laquoprecomprensioacutenraquo im-pliacutecita en esta experiencia fenomenoloacutegica en cuanto la descripcioacuten fe-nomeacutenica deja que la realidad se laquomuestreraquo y desvele asiacute las indicaciones y preguntas concretas implicadas en ella trascendental en cuanto busca los presupuestos ontoloacutegicos necesarios para la comprensioacuten de la experiencia manifestada en el fenoacutemeno laquoMeacutetodo trascendentalraquo no quiere decir sino proceder seguacuten las exigencias del comprender humano en su dinamismo de preguntar y buscar siempre ulteriormente La legitimidad de las cues-tiones concretas se justifica por su necesidad de comprender la realidad10

En efecto laquoel horizonte trascendental es en cierto modo un sistema a priori de coordenadas dentro del cual se le sentildeala al objeto temaacutetico el sitio que le hace comprensibleraquo11 En antropologiacutea teoloacutegica por ejemplo per-mite fundar el significado universal del don de la gracia como determina-cioacuten de la ex-centricidad que es propia de la naturaleza humana y no como un antildeadido extriacutenseco a la misma No obstante esta comprensioacuten de la gracia divina queda expuesta a un cierto formalismo si deja de interrogarse a fondo acerca de su relacioacuten con la experiencia efectiva del hombre como responsable de la circunstancia que habita O dicho con rigor teoloacutegico sobre el sentido y consecuencias que tiene laquola historizacioacuten de la natura-

9 Cfr E REGAN Not merely the cognitive subject Rahnerrsquos theological anthropolo-gy in P CONWAY-F RYAN (eds) Karl Rahner Theologian for the Twenty-first Century Oxford-Bern 2010 121-140

10 J ALFARO De la cuestioacuten del hombre a la cuestioacuten de Dios Salamanca 2006 25 11 K RAHNER Sobre la unidad del amor a Dios y el amor al proacutejimo in ET VI 255

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leza humana por la cristologiacutea por la manifestacioacuten de un hombre nuevo frente a la forma primitiva del hombreraquo12 Por ello junto a los contrastados beneficios que aporta el anaacutelisis trascendental a la antropologiacutea teoloacutegica como reconocimiento de que el hombre laquono puede ser nunca subjetiva y ontoloacutegicamente indiferente con relacioacuten a su orientacioacuten sobrenaturalraquo13 tanto la estructura responsorial de la revelacioacuten como el desarrollo cientiacute-fico-cultural del momento presente demandan a la teologiacutea no desatender la esfera maacutes concreta del fenoacutemeno personal humano sus preguntas esen-ciales la experiencia dramaacutetico-vital comuacuten a cada hombre en definitiva esas dimensiones donde se juega baacutesicamente la auto-comprensioacuten del sujeto contemporaacuteneo el significado de la disyuntividad corpoacuterea (mas-culinidad y feminidad) en su estrecha vinculacioacuten con la vida espiritual afectiva o biograacutefica la nativa dimensioacuten relacional de la vida humana y el alcance de significado que ostenta en la constitucioacuten ontoloacutegico-vital del hombre el variado espectro de relaciones interpersonales que este entabla en su historia la pregunta por el discurrir de la propia biografiacutea personal (ante el acontecimiento de la muerte) como dinamismo de auto-realiza-cioacuten (ser) que determina a su vez el modo en que ha de orientarse la praxis vital (deber ser) etc Y todo ello en la conciencia de que la atencioacuten a es-tos caracteres y estructuras antropoloacutegicas que se organizan en torno a la persona como punto focal debe superar la tentacioacuten del puro inventario fenomenoloacutegico y conducir a una mayor explicitacioacuten del horizonte tras-cendente ante el que el hombre realiza su intransferible historia personal como historia con sentido laquoEs preciso todaviacutea elaborar ahondar y traspa-sar metafiacutesicamente ndashsentildeala Emerich Corethndash el rico material sacado a la luz por el desarrollo maacutes reciente del pensamiento introducieacutendolo asiacute en la totalidad de una metafiacutesica cristianaraquo14 En este sentido el concepto per-sona ofrece la posibilidad de una ndashllameacutemoslandash propedeacuteutica fundamental a la antropologiacutea teoloacutegica como develacioacuten en lo concreto de la verdad

12 W PANNENBERG Fundamento cristoloacutegico de una antropologiacutea cristiana in Con-cilium 86 (1973) 413 Es la indagacioacuten sobre el sentido cristoloacutegico de la laquopersoneidadraquo el que deberiacutea servir de guiacutea a la teologiacutea cristiana ndashpor tanto de modo distinto a como lo hicieron el mismo Boecio y despueacutes de eacutel la tradicioacuten siguiendo el cauce de la filosofiacutea griegandash para llegar a saber queacute significa para el hombre ser racional ser libre ser capaz de amor etc laquoen cuanto estaacute destinado en su ser personal a la semejanza con Dios la cual se ha manifestado en la unidad de Dios y el hombre en Jesucristoraquo (Ibid 416)

13 K RAHNER Existencial II in SM (Sacramentum Mundi) III 6714 E CORETH Quehacer de la metafiacutesica in Crisis 21-24 (1959) 18

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antropoloacutegica universal de la apertura trascendental del hombre a Dios que es su origen y destino

La criacutetica ha llegado a identificar en la teologiacutea de Karl Rahner una laquoantropologiacutea excesivamente formal y abstractaraquo15 que sufre de una espe-cie de neutralidad fenomenoloacutegica al estar limitada por su matriz metafiacute-sico-trascendental para una interpretacioacuten maacutes integral de la experiencia humana en su interaccioacuten con el misterio divino iquestRige el meacutetodo tras-cendental una epistemologiacutea antropoloacutegica reductiva respecto del modelo que preside la experiencia de aquellos que creen en Cristo y viven en Eacutel Un disciacutepulo ilustre de Rahner Johann Baptist Metz propone romper el laquocerco maacutegico del trascendentalraquo mediante una dogmaacutetica histoacuterico-vital biograacutefica narrativa testimonialhellip no prevenida ante las contradicciones de la historia preocupada por redefinir la identidad testimonial del sujeto creyente frente al sujeto exaltado del cogito cartesiano y el sujeto humilla-do por la hermeneacuteutica de la sospecha16

No obstante lo ajustado de esta criacutetica dado el riesgo real ndashdel que Rahner era muy conscientendash que implica asumir el meacutetodo trascendental en teologiacutea17 proponemos visitar de nuevo la obra del teoacutelogo alemaacuten para mostrar su apuesta por una subjetividad que ante todo recela de su caraacutecter autaacuterquico y se percibe irrenunciable e iacutentimamente abierta a la trascendencia apertura que ciertamente no logra verificarse por comple-to en la experiencia ordinaria del hombre es decir en aquellas condicio-nes faacutecticas siempre uacutenicas donde ha de dirimir y decidir el sentido de siacute mismo Lo cual no significa que la atencioacuten al sujeto lleve a Karl Rahner a su absolutizacioacuten a imagen de cierto idealismo maacutes bien al contrario el meacutetodo trascendental que aplica revela un existente que no dispone de siacute en modo absoluto sino que es originaria e intriacutensecamente un espiacuteritu

15 J L RUIZ DE LA PENtildeA Espiacuteritu en el mundo La antropologiacutea de Karl Rahner in J DE SAHAGUacuteN (ed) Las antropologiacuteas del siglo XX Salamanca 1976 196

16 Cfr J B METZ La fe en la historia y la sociedad Esbozo de una teologiacutea poliacutetica fundamental para nuestro tiempo Madrid 1979 164-236 Lo cierto es que las exigencias del modelo narrativo han recibido hasta el momento maacutes atencioacuten en aacutembito filosoacutefico que teoloacutegico (cfr C THEOBALD Il cristianesimo come stile Un modo di fare teologia nella postmodernitagrave I Bologna 2009 397-416)

17 Que puede formularse en estos otros interrogantes iquestRecae la teologiacutea trascenden-tal en una metafiacutesica de la presencia entendida como mera radicacioacuten de la revelacioacuten de Dios en su visibilidad en el hombre y el mundo iquestSe deja construir esa teologiacutea a partir del hecho uacutenico de la manifestacioacuten de Dios iquestAcaso a la hora de considerar la revelacioacuten de Dios por siacute mismo no se muestra incapaz de delimitar las regiones respectivas de filosofiacutea (posibilidad) y teologiacutea (historicidad efectividad y sentido)

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finito que existe concretamente en la condicioacuten histoacuterica del ser huma-no18 esto es inserto en virtud de su esencia y no por pura casualidad en el aacutembito del espacio y el tiempo caracterizado por la mutabilidad y la contingencia19 Del mismo modo que no cabe en su sistema un divorcio entre la inefabilidad de Dios y la concrecioacuten de su presencia tampoco cabe empobrecer la autenticidad de la experiencia viva de ser hombre a favor de la verdad de fe La validez universal de esta ha de probarse en el crisol de la experiencia personal finita de la libertad del amor y el sufri-miento de la muerte y la esperanza en el futuro

Estas paacuteginas apuestan por comprender en su contexto sus posibilida-des y sus liacutemites una visioacuten teoloacutegica del hombre que es capaz de acompa-ntildear y contrapesar el desarrollo actual de un humanismo secularista que se pretende uacutenico horizonte de las sociedades occidentales La antropologiacutea de Rahner estaacute llamada a seguir contribuyendo a acreditar la significacioacuten positiva del fenoacutemeno religioso como respetuosa proximidad del misterio personal de Dios al corazoacuten de la existencia humana (razoacuten e historia)20

En efecto la obra de nuestro autor tomada de entre otras posibles es testigo de coacutemo la reciente teologiacutea catoacutelica ha prestado exquisita atencioacuten ndashen su proposicioacuten de la fe al mundo presentendash a la auto-comprensioacuten del hombre que ha generado sobre todo la perspectiva antropoceacutentrica domi-nante en el pensamiento filosoacutefico que va de Descartes a Heidegger 21 En la

18 Cfr K RAHNER Oyente de la palabra 3119 En la estela de Karl Rahner se ubican otros proyectos de la teologiacutea catoacutelica contem-

poraacutenea que tratan de afrontar la aporiacutea en la que se debate la teologiacutea trascendental en torno a la relacioacuten entre experiencia categorial y conocimiento originario a priori En las obras de H Verweyen Th Proumlpper y K Muumlller observa Alberto Anelli desarrollos post-rahnerianos que tratan de modular la trascendentalidad mostrando las contradicciones inscritas respec-tivamente en una razoacuten una libertad o una conciencia sustraiacutedas al sujeto y consideradas como fuerzas autoacutenomas No obstante ndashconcluye Anellindash estos proyectos auacuten permanecen en el plano formal dependientes del moderno principio de autonomiacutea pesa auacuten sobre ellos la dificultad de hacer valer a fondo el insuperable caraacutecter histoacuterico-praacutectico del a priori antropoloacutegico Solo una reflexioacuten antropoloacutegica como la de W Pannenberg habriacutea hecho emerger seguacuten este autor una concepcioacuten heteroacutenoma del sujeto como realidad conformada en la alteridad que constituyen para eacutel la sociedad y la historia Cfr A ANELLI Heidegger e la teologia Brescia 2011 79-83

20 Cfr B BOURGINE Karl Rahner est-il un classique Agrave propos de quelques recher-ches reacutecentes in Revue theacuteologique de Louvain 43 (2012) 79-102

21 Tras diversos avatares la teologiacutea catoacutelica del siglo XX enfrenta decididamente los problemas teoloacutegicos y hermeneacuteuticos que habiacutea puesto a consideracioacuten la llamada laquocrisis modernistaraquo al declarar su insatisfaccioacuten por la mediacioacuten conceptual escolaacutestica del depoacutesito de la fe La discusioacuten en torno a la posibilidad de renovar esa conceptuacioacuten de la revelacioacuten (en la interseccioacuten entre teologiacutea y filosofiacutea fe y razoacuten dogma y vida) conllevaba fundamen-talmente reformular la respuesta teoloacutegica en el punto de partida o sea su concepcioacuten de Dios

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obra de Rahner se mantiene una doble constante que es irrenunciable para la teologiacutea de modo particular para la teologiacutea contemporaacutenea a la hora de proponer hoy la comprensioacuten cristiana del hombre en primer lugar la presentacioacuten de Cristo corazoacuten de la revelacioacuten como Palabra hecha carne en que adquiere plena inteligibilidad toda la realidad creada y de modo particular el hombre como ser en constante distensioacuten entre finitud e infinitud autoconciencia de siacute y realizacioacuten en la historia trascenden-cia e inmanencia Es la perspectiva cristoceacutentrica de la revelacioacuten la que opera como punto focal que sustenta la hermeneacuteutica del Misterio de Dios en siacute y en su relacioacuten con el hombre22 en segundo lugar la interdiscipli-nariedad esto es el diaacutelogo con la imagen de hombre que emana de las ciencias humanas y en particular de la filosofiacutea pues la razoacuten contribuye con su esfuerzo reflexivo y sus categoriacuteas a hacer comprensible al hombre la realidad de Cristo ndashque es Dios humanadondash como plenitud y cima de la humanidad creada (en su estructura esencial y su devenir histoacuterico)

Querer presentar en pocas paacuteginas la aportacioacuten que hace este gigante de la teologiacutea contemporaacutenea a la visioacuten teoloacutegica del hombre plantea una doble dificultad En primer lugar la de enmarcar dicha contribucioacuten en un sistema teoloacutegico que detenta un perfil hermeneacuteutico muy complejo y ecleacutectico y por lo que respecta a su concepcioacuten del hombre el hecho de

y del hombre En el campo antropoloacutegico el reto para la teologiacutea consistiacutea en avanzar sobre una antropologiacutea de impronta platoacutenica considerada laquointelectualistaraquo para poder afrontar y replan-tear de manera nueva (en su integridad) la figura de hombre que auspicia la revelacioacuten como relacioacuten entre espiacuteritu y materia trascendencia e historia pensamiento y vida conocimiento intelectual y experiencia sensible (mundana social histoacuterica) El esfuerzo de la llamada nou-velle theacuteologie por recuperar el diaacutelogo con el pensamiento de la cultura moderna y el contacto con el pensamiento contemporaacuteneo asiacute como el cultivo de las propias fuentes (Escritura Pa-dres Liturgia) obraron la elaboracioacuten de una renovada teologiacutea de la revelacioacuten y antropologiacutea de la fe Los nombres de J Mareacutechal M Blondel y P Rousselot en un primer momento y los maacutes cercanos de R Guardini K Rahner J B Lotz B Lonergan J Alfaro E Corethhellip han propiciado la liberacioacuten del meacutetodo antropoloacutegico-trascendental del subjetivismo kantiano y una nueva relectura del humanum como finitud interrogativa enraizada en Dios y de la vida personal como aacutembito histoacuterico de la accioacuten divina (gracia) que es acogida en ejercicio de libre decisioacuten Cfr una siacutentesis de los aspectos teoloacutegicos y filosoacuteficos de este laquoepisodio paradigmaacute-ticoraquo de la teologiacutea contemporaacutenea en A COZZI La crisi modernista Conflitto insanabile con la modernitagrave o trasformazione culturale del cattolicesimo in G ANGELINI - S MACCHI (eds) La teologia del Novecento Momenti maggiori e questioni aperte Milano 2008 34-92

22 A la luz del misterio central de la revelacioacuten divina ndashla encarnacioacuten de la Persona del Verbondash la atencioacuten a la iacutentima reciprocidad (en orden a la realizacioacuten de la identidad del ser humano) entre su radical dimensioacuten espiritual (pensamiento) y su existencia histoacuterica (ma-nifestacioacuten) no es para el cristianismo un modo facultativo de comprender la humanidad dado que se trata de aquellas coordenadas irrenunciables donde rastrear su hechura divina La encarnacioacuten constituye un dato decisivo de la fe y la dogmaacutetica catoacutelicas

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que esta se encuentra diseminada en sus escritos pues no ha elaborado como tal un ensayo de antropologiacutea formalmente sistematizada Por estas razones nuestro anaacutelisis se limita mediante una lectura sincroacutenica de una seleccioacuten de sus escritos a una presentacioacuten de las grandes tesis antro-poloacutegicas que estaacuten en la base de su investigacioacuten teoloacutegica23 Siguiendo a nuestro autor comenzamos sentildealando el desafiacuteo pastoral presente que constituye la relacioacuten entre antropologiacutea y teologiacutea

1 lA teologiacuteA Ante un reto pAstorAl

El concilio Vaticano II expresoacute con claridad que la comunidad cristiana no sostiene su fe en verdades depositadas en la conciencia creyente de una vez para siempre sino en verdades de fe dinaacutemicas a cuyo significado contribuye un esfuerzo de actualizacioacuten constante En este sentido el ca-

23 Los estudios globales y sectoriales sobre la teologiacutea de Rahner resultan casi inabarca-bles Tanto para una visioacuten de la figura y trayectoria intelectual del autor como para encuadrar en su sistema su propuesta antropoloacutegica hemos acudido a K H NEUFELD Rahner Karl in R LATOURELLE (ed) Diccionario de Teologiacutea fundamental Madrid 1992 1097-1100 K KILBY Karl Rahner in D F FORD - R MUERS (eds) The Modern Theologians An Introduction to Christian Theology since 1918 Massachusetts-Oxford-Victoria 32005 92-105 A BERTULETTI Dio il mistero dellrsquoUnico Brescia 2014 269-276 A BOZZOLO Il mistero-Dio e lo spirito-nel-mondo Esperienza della grazia e decifrazione dellrsquouomo in Karl Rahner in P SEQUERI - S UBBIALI (eds) Nominare Dio invano Orizzonti per la teolo-gia filosofica Milano 2009 219-258 G COLZANI Karl Rahner Dal mistero di Dio la com-prensione dellrsquouomo Milano 2000 M CABADA CASTRO La vivencia previa del Absoluto como presupuesto del acceso teoreacutetico a Dios in A VARGAS-MACHUCA (ed) Teologiacutea y mundo contemporaacuteneo Homenaje a Karl Rahner en su 70 cumpleantildeos Madrid 1975 65-88 A CORDOVILLA Gramaacutetica de la encarnacioacuten Madrid 2004 35-228 Id K Rahner la actualidad de un teoacutelogo in Estudios Eclesiaacutesticos 80 (2005) 233-245 R GIBELLINI La teologiacutea del siglo XX 239-254 A MARGARITTI Svolta antropologica e istanza kerigma-tica in G ANGELINI - S MACCHI (eds) La teologia del novecento Momenti maggiori e questioni aperte Milano 2008 246-296 B FORTE La eternidad en el tiempo Ensayo de antropologiacutea y eacutetica sacramental Salamanca 2000 83-88 A GONZAacuteLEZ MONTES Fun-damentacioacuten de la fe Salamanca 1994 195-220 D HERCSIK Karl Rahner la grazia come centro dellrsquoesistenza umana in La Civiltagrave Cattolica 3683 (2003) 430-443 L BARRETO Experiencia trascendental y experiencia personal en el enfoque metodoloacutegico de Karl Rahner in Salmanticensis 58 (2011) 427-464 G PATTARO La svolta antropologica Bologna 1991 146-160 I PETRIGLIERI Lrsquoavventura della fede Ovvero lrsquointellectus fidei tra ragione e ragioni Roma 2010 153-169 S PIEacute-NINOT La Teologiacutea Fundamental laquoDar razoacuten de la esperanzaraquo (1 Pe 315) Salamanca 42001 130-135 A RAFFELT - H VERWEYEN Karl Rahner Muumlnchen 1997 G SALATIELLO Metodo trascedentale e svolta antropologica in Id (ed) Karl Rahner Percorsi di ricerca Roma 2012 45-83 I SANNA Teologia come esperienza di Dio Brescia 1997 91-133 J I SARANYANA La antropologiacutea trascendental rahneriana in J F SELLEacuteS (ed) Propuestas antropoloacutegicas del siglo XX I Pamplona 2004 307-326 H VORGRIMLER Karl Rahner Experiencia de Dios en su vida y en su pensamien-to Santander 2004 G J ZARAZAGA Dios es comunioacuten Salamanca 2004 21-99

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lificativo laquopastoralraquo deja de hacer referencia exclusiva a la cura de almas para determinar la totalidad de la vida eclesial su actitud ante el mundo y el hombre contemporaacuteneos24 La atencioacuten a laquolos gozos y las esperanzas las tristezas y las angustias de los hombres de nuestro tiemporaquo (GS 1) forma parte de la eficacia del anuncio del Reino Si la comunidad creyente obvia el desarrollo del mundo moderno ndashque ha sustituido un proyecto de sentido en cuyo centro estaba Dios por otro en que Dios queda desplazado por el hombre y la naturaleza bajo el impulso de una eneacutergica y creciente revolu-cioacuten cientiacutefica teacutecnica social y poliacutetica25ndash difiacutecilmente puede dar cuenta de su esencia como comunidad evangelizadora (cfr 1 Cor 916)

El teoacutelogo creyente y guiacutea de creyentes asume la tarea especiacutefica de esclarecer el perenne significado salviacutefico del mensaje evangeacutelico a la luz de la relacioacuten personal que entabla Dios con la experiencia histoacuterica y la autoconciencia del ser humano A partir de esta premisa la obra teoloacutegica de Karl Rahner ha proyectado una mirada renovada sobre la capacidad de trascendencia del yo humano primera y esencial caracteriacutestica que funda la posibilidad y credibilidad de lo que conocemos como laquoexperiencia re-ligiosaraquo esto es la relacioacuten entre yo y Otro no como simple proyeccioacuten de una necesidad subjetiva sino como espera y encuentro entre la libertad del sujeto para auto-trascenderse a siacute mismo hacia su maacutes alta dignidad y el valor intriacutenseco de la realidad libremente encontrada como Otro-de-siacute esto es como determinacioacuten interior y uacuteltima de aquella auto-trascenden-cia personal Se ha reproducido con abundancia el texto en que Rahner vislumbra la necesidad de un cristiano capaz de esa laquoexperienciaraquo de encuentro con Dios como viacutea privilegiada de acceso a la fe Estas son sus conocidas palabras

Solamente para aclarar el sentido de lo que se va diciendo y aun a concien-cia del descreacutedito que la palabra laquomiacutesticaraquo ndashque bien entendida no implica contraposicioacuten alguna con la fe en el Espiacuteritu Santo sino que se identifica con ellandash cabriacutea decir que el cristiano del futuro o seraacute un laquomiacutesticoraquo es decir una persona que ha laquoexperimentadoraquo algo o no seraacute cristiano Porque la espiritualidad del futuro no se apoya ya en una conviccioacuten unaacutenime evi-dente y puacuteblica ni en un ambiente religioso generalizado previos a la expe-riencia y a la decisioacuten personales La educacioacuten religiosa usual hasta ahora podriacutea ser solamente en adelante un adiestramiento muy secundario para la

24 Cfr GS nota al tiacutetulo25 Cfr W PANNENBERG Una historia de la filosofiacutea desde la idea de Dios Teologiacutea

y filosofiacutea Salamanca 2001 149-163

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vida religiosa La mistagogiacutea seraacute la que habraacute de pronunciar la verdadera laquoidea de Diosraquo partiendo de la experiencia aceptada de la referencia esencial del hombre a Dios la experiencia de que la base del hombre es el abismo de que Dios es esencialmente el incomprensible de que su incomprensibi-lidad en lugar de disminuir aumenta en la medida que se le va conociendo mejor y a medida que Dios se acerca a nosotros en su amor en el que se da a siacute mismo de que no podemos concebirlo como un dato determinado en el caacutelculo de nuestra vida sin que automaacuteticamente fallen nuestras cuentas26

El principio de tradicioacuten viene a decir Rahner ha dejado de ser una vigencia cultural presente para pasar al aacutembito de la historia de lo con-cerniente a la memoria del pasado ya no acompantildea el itinerario creyente Sin apoyos externos significativos el creyente estaacute llamado a elaborar con maacutes esfuerzo la propia experiencia de Dios entendida como encuentro personal con el Dios vivo y verdadero Ser un miacutestico significa conocer a Dios desde dentro manteniendo con Eacutel una relacioacuten no siempre paciacutefica pero siacute directa y sincera que incide profundamente en la loacutegica del de-seo humano y que actuacutea como factor de verificacioacuten de la autenticidad y verdad de la propia experiencia religiosa Al radiografiar las coordenadas antropoloacutegico-existenciales en que la teologiacutea y la espiritualidad cristia-nas han de proponerse hoy alerta sobre la necesidad de permanecer vigi-lantes para no reducir la experiencia religiosa cristiana a un humanismo inmanente que hace hincapieacute en valores socio-humanitarios y rebaja el contenido teoloacutegico-dogmaacutetico que caracteriza el nuacutecleo de la fe

Para miacute todo el jesuanismo por muy piadoso que fuera todo el com-promiso a favor de la justicia y del amor en el mundo todo el humanismo que quiera utilizar a Dios para el hombre y que no precipite al hombre en el abismo de Dios seriacutea la religioacuten de un humanismo inconcebiblemente modesto que nos estaacute prohibido por el enorme poder del amor de Dios en el cual Dios mismo sale realmente de siacute Nosotros una de dos o pode-mos quererlo todo a saber Dios mismo en su pura divinidad o bien nos hallamos condenados es decir estamos sepultados dentro de la prisioacuten de nuestra finitud27

La voracidad de la moderna subjetividad y su denodada lucha por la libertad con la pretensioacuten de lograr su definitiva autonomiacutea no ha hecho sino poner al hombre bajo la dictadura de otras servidumbres (pulsiones

26 K RAHNER Espiritualidad antigua y actual in ET VII 25-2627 Id Sobre la inefabilidad de Dios Experiencias de un teoacutelogo catoacutelico 39

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instintivas dinero afaacuten de poderhellip) que han instalado la idolatriacutea en el hondoacuten del alma humana sontildeando poder saciar su hambre de infinito

Entonces dice la palabra de Dios a este excavador de tesoros desen-gantildeado y desesperado muy hondo en los abismos del hombre vive auacuten Dios el Dios vivo real y verdadero no un iacutedolo muerto no una desnuda imagen de nosotros mismos sino Eacutel mismo el Dios vivo el Eterno el Santo El que no solo es en siacute mismo la infinitud sino que quiere donarnos sus inmensidades infinitas28

2 AntropologiacuteA trAscendentAl

La interpretacioacuten de toda la teologiacutea dogmaacutetica como antropologiacutea trascendental implica la reflexioacuten sobre el aspecto trascendental de toda temaacutetica dogmaacutetica y por ello proponerse la cuestioacuten acerca de lo que en referencia a esta se encuentra ya impliacutecito en los contenidos materiales de las laquoestructurasraquo a priori del sujeto teoloacutegico29

21 Orientacioacuten teoloacutegica de la antropologiacutea via trascendentalis

De esta forma describe nuestro autor la impronta metodoloacutegica de un complejo sistema teoloacutegico atento a este presente que se interroga con singular radicalidad por la razonabilidad antropoloacutegica de la fe y por la evidencia del hecho mismo de la revelacioacuten30 Por ello la teologiacutea se muestra iacutentimamente preocupada por mostrarle al hombre contemporaacute-neo caracterizado en su auto-experiencia como laquoindefinible enigma para siacute mismoraquo31 la profunda afinidad ontoloacutegica que exhibe su estructura trascendental y su existencia concreta con la auto-donacioacuten libre y amo-rosa de Dios a la humanidad La revelacioacuten manifiesta que el mundo32 y el

28 Id De la necesidad y don de la oracioacuten 3329 Id Theologie und Anthropologie 45 30 Cfr Ibid 58-61 Sobre este mismo argumento Id Sobre la posibilidad de la fe hoy

in ET V 15-3331 K RAHNER De la necesidad y don de la oracioacuten 31 32 laquoLa criatura desde su maacutes iacutentimo fundamento esencial ndashescribe nuestro teoacutelogo en

la madurez de su pensamientondash ha de entenderse como la posibilidad de ser asumida de convertirse en material para una posible historia de Dios Dios esboza la criatura en su forma creadora en cuanto desde la nada la implanta en su propia realidad distinta de Dios como la gramaacutetica de una posible automanifestacioacuten de Diosraquo (K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 264)

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hombre33 han sido creados en libertad con vistas a la auto-comunicacioacuten amorosa de Dios laquoPor cuanto Dios en el amor a siacute mismo ama libremente como poder que pone lo finito amando comprende a lo finito mismo En este amor tambieacuten lo puesto el efecto de la accioacuten es elevado a la luz del serraquo34 Mostrar en el hombre el efectivo dinamismo de esta elevacioacuten es el motivo seguacuten confesioacuten del mismo Rahner por el que aplica a su teologiacutea el calificativo trascendental

Para que todas las afirmaciones de fe y de la teologiacutea puedan ser realmente responsables hay que preguntarse coacutemo y por queacute el hombre desde su mismo ser y existencia (que es concreta y se halla siempre en consecuen-cia inevitablemente bajo la gracia de la comunicacioacuten de Dios) es siempre sujeto a quien pueden y deben afectar realmente estas afirmaciones35

De este modo postula la necesidad de un nuevo acceso metodoloacutegico a la fe laquono solo en lo que respecta al conocimiento de sus contenidos sino tambieacuten inseparablemente en lo tocante al conocimiento del sujeto y de las condiciones a priori de su conocerraquo36 Es lo que Rahner llama el laquomeacutetodo antropoloacutegico-trascendentalraquo que acompantildearaacute sin cesar su dilatada obra teoloacutegica y constituye el fundamento de lo que denominoacute el giro antropoloacutegico en orden a designar su propuesta de una teologiacutea a partir de una antropologiacutea trascendental laquoEl giro de la teologiacutea hacia un meacutetodo antropoloacutegico-trascendental no es otra cosa que el descubrimien-

33 laquoiquestNo podriacutea decirse con aparente derecho que la esencia del ser personal ndashsu para-doja sin la que no se le puede entender en absolutondash consiste precisamente en estar ordenado por naturaleza a la comunioacuten personal con Dios en el amor y tener que recibir ese mismo amor como libre regaloraquo (K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 307)

34 K RAHNER Oyente de la palabra 13135 Id Fundamentacioacuten de la fe cristiana 31 en estas paacuteginas sintetiza y revisa criacutetica-

mente el autor la presentacioacuten global de su visioacuten de la teologiacutea trascendental en su Curso fundamental sobre la fe Cfr K RAHNER Teologiacutea trascendental in SM VI 610-617 So-bre el teacutermino y su uso en nuestro autor S ARZUBIALDE La experiencia trascendental de Dios en la obra de K Rahner in Estudios Eclesiaacutesticos 80 (2005) 291-314 sobre el teacutermino y su empleo en teologiacutea U PELLEGRINO Transcendental in L PACOMIO et alii (eds) Diccionario teoloacutegico interdisciplinar IV Salamanca 1983 543-555 K Kilby sugiere el uso del teacutermino en Rahner en dos sentidos al menos en el sentido lato de referencia a aquella dimensioacuten del hombre o de su experiencia que le permite ir maacutes allaacute de los objetos finitos y por otro lado para identificar un tipo particular de proyecto de investigacioacuten aquel que somete a examen las condiciones en que es posible el conocimiento de un sujeto especiacutefico en el acto mismo de conocer Cfr K KILBY Karl Rahner Theology and Philosophy New York 2004 32-37

36 G COLZANI Recenti manuali di Antropologia teologica di lingua italiana e tedes-ca in Vivens Homo 3 (1992) 392

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to del nexo existente entre el contenido de los enunciados dogmaacuteticos y la experiencia que hombre hace de siacuteraquo37

En el ensayo Theologie und Anthropologie fruto de una conferencia impartida en 1966 Rahner sintetiza programaacuteticamente los tres reque-rimientos baacutesicos que convergen en su visioacuten de la teologiacutea como an-tropologiacutea trascendental (1) el anaacutelisis de las estructuras cognoscitivas trascendentales o a priori del sujeto personal que en cuanto sujeto teo-loacutegico ha de enfrentar el desafiacuteo de que laquoDios no es un objeto cualquie-ra junto a otros en el campo de la experiencia a posteriori del hombre sino el fundamento originario y el futuro absoluto de toda realidadraquo38 (2) la teologiacutea en cuanto ciencia que capta conceptualmente la honda interaccioacuten entre la historia de la humanidad (libre autorrealizacioacuten del hombre) y la historia de la libre y graciosa autocomunicacioacuten salviacutefica de Dios al hombre39 (3) y las exigencias para la autocomprensioacuten humana procedentes de la filosofiacutea (antropoloacutegica) contemporaacutenea40 que a pesar

37 K RAHNER Theologie und Anthropologie 6138 Ibid 50 Cfr Id Curso fundamental sobre la fe 74-77 Rahner asume para la teo-

logiacutea el desafiacuteo que Kant plantea a la metafiacutesica y a la teoriacutea del conocimiento El propio Kant define como trascendental laquotodo conocimiento que se ocupa no tanto de los objetos cuanto de nuestro modo de conocerlos en cuanto que tal modo ha de ser posible a priori Un sistema de semejantes conceptos se llamariacutea filosofiacutea trascendentalraquo (I KANT Criacutetica de la razoacuten pura A XII Madrid 1984 58)

39 laquoLa relevancia soterioloacutegica de un objeto de la teologiacutea (aspecto irrenunciable de todo objeto teoloacutegico) solamente se hace motivo de interrogacioacuten si pasa a ser tema de la receptividad salviacutefica del hombre hacia dicho objetoraquo (K RAHNER Theologie und Anthro-pologie 52)

40 laquoTanto una filosofiacutea como una teologiacutea actual no puede ni debe dejar de prestar aten-cioacuten a la revolucioacuten antropoloacutegico-trascendental operada por la filosofiacutea de nuestro tiem-po desde Descartes Kant y el idealismo alemaacuten (incluidos sus detractores) hasta la actual fenomenologiacutea filosofiacutea de la existencia y ontologiacutea fundamentalraquo (Ibid 56) Un apunte similar se encuentra en Id laquoFundamentos de la protologiacutea y de la antropologiacutea teoloacutegicaraquo MyS (Mysterium salutis) II 348 Nuestro autor considera la filosofiacutea como una de las prin-cipales fuerzas motrices de una teologiacutea de la revelacioacuten Es principalmente en el contexto de la relacioacuten entre naturaleza y gracia donde Rahner comprende la pregunta por la relacioacuten entre filosofiacutea y teologiacutea Del mismo modo que el hombre a la luz de su apertura radical a la trascendencia se experimenta siempre en su existencia como el ser llamado a (acoger o rechazar) una relacioacuten de comunioacuten con Dios es decir del mismo modo que su naturaleza ha sido creada con vistas a esa comunioacuten divina por la gracia laquolo que llamamos revelacioacuten no es una antildeadidura que se presuponga a la naturaleza espiritual y a su autocomprensioacuten como algo rotundo y que se sobreentiende sino que la naturaleza espiritual misma es la condicioacuten de posibilidad que la revelacioacuten presupone a siacute misma y que establece libremente para poder ser lo que es gracia en cuanto autocomunicacioacuten personal y libre de Dios [hellip] La revelacioacuten presupone por tanto la filosofiacutea diferenciada libre como aacutembito de su propia posibilidad ya que solo al que se entiende a siacute mismo y al que autoacutenomamente dispone sobre siacute puede la autoapertura de Dios en revelacioacuten personal apareceacutersele como un hecho de libre amorraquo

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de sus excesos permite reforzar una concepcioacuten radicalmente cristiana donde laquoel hombre no es un momento dentro de un cosmos constituido de cosas ni estaacute sometido al sistema de coordenadas de conceptos oacutenticos del mismo sino maacutes bien el sujeto de cuya libertad depende el destino de todo el cosmosraquo41

A la luz de estos requerimientos vamos a intentar una siacutentesis de esta antropologiacutea teoloacutegica a partir de la doble viacutea baacutesica mediante la que Rahner trata de afrontar el conocimiento del hombre en cuanto sujeto teoloacutegico (1) la contemplacioacuten del hombre en su capacidad de apertura trascendental ilimitada al Ser de quien procede y a quien se dirige es decir en su apertura a Dios Esta viacutea requiere el examen a fondo de la sub-jetividad (que se interroga por el Ser) y sus estructuras a priori como ho-rizonte en que es posible al hombre laquodejarse aprehender por un misterio siempre presente y que se nos escaparaquo42 (2) la consideracioacuten del hombre como aquel ser cuya naturaleza es apropiada por Dios al encarnarse En Jesucristo el hombre se reconoce como el don maacutes acabado del acto por el que Dios se dona a lo diverso de siacute43 a la luz de Cristo laquoel hombre en su definicioacuten originaria es el otro en el que Dios puede convertirse por su autoenajenacioacuten y el posible hermano de Cristoraquo44 No es factible dar una respuesta plena a la sed infinita del hombre sin atender al significado del hombre Jesuacutes el infinito humanado Dado que uno de los existenciales que definen la esencia y dignidad del hombre es ndashapunta Rahnerndash su calificacioacuten como ser que dice relacioacuten a Dios y a Cristo solo se puede hablar de Dios de un modo definitivo cuando al tratar de ello es decir en plena teologiacutea se trate tambieacuten de antropologiacutea Y solo se puede tratar de antropologiacutea solo se puede dar una respuesta uacuteltima sobre la esencia y la dignidad del hombre si se ha cultivado teologiacutea tratando de Dios y desde el punto de vista de Dios45

(K RAHNER Filosofiacutea y teologiacutea in ET VI 87 cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 262-266) Puede verse una reflexioacuten sobre las condiciones teoloacutegicas en que Rahner funda la interaccioacuten entre filosofiacutea y teologiacutea en M SCHULZ La necesaria mediacioacuten filosoacutefica de la fe y de la teologiacutea seguacuten Karl Rahner in Estudios Eclesiaacutesticos 80 (2005) 325-338

41 K RAHNER Theologie und Anthropologie 56 Cfr A MARAGARITTI Svolta antropologica e istanza kerigmatica 250-253

42 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 7643 Cfr Ibid 26744 K RAHNER Antropologiacutea III in SM I 29545 Id Dignidad y libertad del hombre in ET II 236

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Veamos por tanto queacute significa para Rahner que la antropologiacutea es lugar de la teologiacutea y viceversa maacutes en concreto el modo en que la exis-tencia del hombre se define ante y desde Dios en su entera especificidad de subjetividad personal

22 El hombre se interroga por siacute mismo y por lo otro

En sus dos principales obras filosoacuteficas de fuerte impronta antropo-loacutegica el joven teoacutelogo atiende los caracteres propios de la subjetividad personal del hombre que seraacuten omnipresentes a su extensa obra teoloacutegica Se trata de una investigacioacuten que a modo de diacuteptico se proyecta desde el hombre en su doble condicioacuten de ser que se interroga por siacute mismo y por lo otro y ser que es en siacute mismo interrogante infinito (apertura a la revelacioacuten divina)

Espiacuteritu en el mundo Metafiacutesica del conocimiento finito seguacuten santo Tomaacutes de Aquino (1939) escrito como tesis doctoral en filosofiacutea corres-ponde al examen de esa primera condicioacuten baacutesica del hombre como sub-jetividad cuestionante Y asiacute procurando dilucidar el requerimiento que plantea santo Tomaacutes (laquoutrum intellectus possit actu intelligere per species intelligibiles quas penes se habet non convertendo se ad phantasmataraquo)46 desde la frontera filosoacutefica del siglo XX47 Rahner advierte la posibilidad de concebir la sensibilidad que insta al hombre a preguntar laquocomo ya existente en el mundoraquo48 como aquel espacio en que ganar el horizonte transcendente del interrogar del ente humano el uacutenico capaz de hacer justicia a la irrenunciable condicioacuten ulterior del cognoscente como sujeto y persona es decir como alguien que laquose posee como tal sujeto real sola-

46 Cfr STh I q84 a7 47 Aunque en sus escritos Rahner suele omitir la referencia expliacutecita a sus fuentes estaacute

claro que su obra recibe la influencia de alguna de las diversas revisiones a que es sometida la moderna concepcioacuten de la subjetividad tal y como habiacutea sido planteada de Descartes a Kant como criacutetica al realismo ingenuo dominante en la filosofiacutea cristiana La hermeneacuteutica intrin-secista de la relacioacuten entre natural y sobrenatural que lleva a cabo J Mareacutechal en su lectura de santo Tomaacutes la filosofiacutea de la accioacuten de M Blondel y la reaccioacuten de la filosofiacutea de la existencia (Heidegger) ante la herencia idealista son los principales vectores operantes en la teologiacutea rahneriana Cfr O MUCK La escuela marechaliana de lengua alemana La filosofiacutea trascen-dental como metafiacutesica J B Lotz K Rahner W Brugger E Coreth y otros in E CORETH et alii (ed) Filosofiacutea cristiana en el pensamiento catoacutelico de los siglos XIX y XX II Madrid 1993-1997 549-554 E CORETH Presupposti filosofici della teologia di Karl Rahner in La Civiltagrave Cattolica 3469 (1995) 27-40 A CORDOVILLA laquoLa teologiacutea es pensarraquo La relacioacuten entre teologiacutea y filosofiacutea en Karl Rahner in Estudios Eclesiaacutesticos 79 (2004) 395-412

48 K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 128

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mente en cuanto contraponieacutendose a este mundo se vuelve hacia eacutelraquo49 En su anaacutelisis de la metafiacutesica del conocimiento de santo Tomaacutes Rahner muestra la predisposicioacuten nativa de la subjetividad humana a observar lo singular y concreto (ens) a la luz de lo universal (esse) es decir la apertura a priori del conocimiento humano al ser en toda su amplitud a todo cuanto es El traacutensito de la dimensioacuten sensible a la de los conceptos universales sucede mediante lo que santo Tomaacutes denomina excessus o capacidad propia del intelecto para ir maacutes allaacute del fenoacutemeno hacia el ser en su totalidad A este movimiento del espiacuteritu que permite su abstrac-cioacuten del mundo es al que Rahner denomina anticipacioacuten movimiento del espiacuteritu sobre la totalidad de sus posibles objetos [hellip] que deviene consciente cuando el conocimiento en el mismo acto de aprehensioacuten del objeto singular se experimenta a siacute mismo en su radical movimiento de trascendencia por encima del objeto singular50

Asiacute sintetiza nuestro autor los frutos de su investigacioacuten

El conocimiento humano es de manera inmediata conocimiento receptivo y por tanto sensible Pero es de tal manera sensible que se discierne la verdad del objeto que por siacute mismo se muestra es decir el conocimiento humano es universal y objetivo [hellip] El conocimiento receptivo es como tal sensible y esto quiere decir el cognoscente sensible deviene oacutenticamente lo otro por consiguiente laquoen cuantoraquo sensible no se destaca precisamente de lo conoci-do Y asiacute cuando ha de haber un conocimiento receptivo objetivo este cono-cimiento tiene que ser por una parte (como esencialmente receptiva) sensi-bilidad que deviene ella misma lo recibido y tiene por otra parte que saber un quid universal acerca de lo sensiblemente intuido para poder juzgar de ello como objeto Y por lo mismo tiene que liberar este quid de su manera de ser dado sensiblemente en la que el cognoscente deviene eacutel mismo lo otro51

49 Ibid 13050 Ibid 154 Explican Raffelt y Verweyen laquoEn la medida en que el lsquointelecto agentersquo

lsquoabstraersquo la lsquoimagen intelectivarsquo de la lsquoimagen sensiblersquo podemos entender que en el abstraer aquel vaya maacutes allaacute de lo aferrado en la sensibilidad concreta A esto es a lo que Rahner se refiere mediante un teacutermino central lsquoVorgriffrsquo Tomado a su vez de M Heidegger Tomaacutes em-plea una imagen anaacuteloga lsquoexcessusrsquo superacioacuten Lo que en Heidegger se presenta como una estructura fenomenoloacutegica fundamental del Dasein se encuentra ahora adscrito en Rahner a un anaacutelisis del conocimiento metafiacutesicoraquo (A RAFFELT-H VERWEYEN Karl Rahner 38) La referencia al Vorgriff heideggeriano en Ser y tiempo sect 32 (Madrid 2003 172-177) La edicioacuten espantildeola de Ser y tiempo traduce como manera de entender previa y explica el tra-ductor que al describir el modo en que comprendemos las cosas laquoHeidegger estaacute describiendo aquiacute que el comprender ha abierto ya el mundo como posibilidades Al hacerlo nos da de antemano algo que luego en la interpretacioacuten adquiriraacute cariz particularraquo (p 478)

51 K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 377-378

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La apertura natural del hombre a todo cuanto es ndashconcebida como a priori del intelecto que predispone al cognoscente a ver lo universal en lo singular y concretondash es lo primero seguacuten Rahner en el despertar de nuestra inteligencia Tanto la sensibilidad como el intelecto son para Ra-hner aprioris o condiciones de la estructura oacutentica del sujeto cognoscente que no encubren la realidad sino que contribuyen a descubrirla No po-demos entrar aquiacute en la compleja discusioacuten rahneriana sobre la condicioacuten y el modo en que actuacutean estos aprioris como pre-disposiciones en la ope-racioacuten de desvelar el ser de lo real52 Nos interesa ahora destacar el hecho de que la interrogacioacuten trascendental sobre el acto cognoscitivo humano lleva a Rahner a descubrir al hombre (1) como espiacuteritu (Geist) cuya estructura fundamental es la apertura ilimitada al ser en cuanto capaz de retornar sobre siacute en su aprehensioacuten de lo que es descubrieacutendose en su maacutes iacutentima identidad como ser excesivo ser que manifiesta al Ser53 (2) como espiacuteritu en el mundo (in Welt) esto es como aquel cuya exposicioacuten a lo otro mediante su recepcioacuten sensible (en su propia existencia e historia) es trance necesario y coadyuvante de una genuina vuelta a su interioridad conversio ad phantasma54

Finalmente en el modo en que Rahner culmina Espiacuteritu en el mundo y delinea el paso a Oyente de la palabra manifiesta que esta consideracioacuten de la experiencia humana de la realidad en cuanto salida al mundo y vuel-ta sobre siacute permite afrontar el cuestionamiento uacuteltimo a que se enfrenta el espiacuteritu humano y define su identidad la posibilidad de contacto con una realidad infinita o ser absoluto que sucesivamente puede ser identificado como Dios

Al preguntarnos por el mundo conocido por el hombre el mundo y el mismo hombre cuestionante se tornan problemaacuteticos en su fundamento absoluto en un fundamento que yace maacutes allaacute de los liacutemites transitables por el hombre maacutes allaacute del mundo Y asiacute el derrame sobre el mundo se revela comportado por el apetito uacuteltimo del espiacuteritu con que este codicia el

52 Cfr J-I SARANYANA La antropologiacutea trascendental rahneriana 319-32353 Cfr K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 374-380 En su Curso fundamental sobre la

fe obra de madurez el teoacutelogo alemaacuten vuelve sobre su confesioacuten antropoloacutegica laquoEl hombre es espiacuteritu en tanto llega a siacute mismo en un absoluto estar confiado a siacute mismo y esto porque eacutel estaacute referido siempre a la absolutez de la realidad en general y a su fundamento uno llamado Dios Este retorno a siacute mismo y la referencia a la totalidad absoluta de una realidad posible y a su fundamento uno se condicionan reciacuteprocamenteraquo (K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 221)

54 Cfr K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 386-388

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ser en absoluto y el sumirse en la sensibilidad en el mundo y su destino se revela solamente el devenir del espiacuteritu que aspira al absoluto El hombre es asiacute el peacutendulo medio entre Dios y el mundo entre tiempo y eternidad y esta frontera es el lugar de su determinacioacuten y de su destino55

23 Elhombreesensiacutemismointerroganteinfinito

En Oyente de la palabra Fundamentos para una filosofiacutea de la religioacuten (1941)56 afronta Rahner la contemplacioacuten de la condicioacuten del hombre en cuanto es pregunta en siacute mismo o dicho de otro modo en cuanto se descu-bre a partir de su experiencia trascendental ndashen cada acto de conocimiento y libertadndash como ser capaz para la escucha del Ser capaz del infinitamente Otro al que el espiacuteritu finito reconoce como presencia irrenunciable en su propia realizacioacuten La antropologiacutea trascendental de Espiacuteritu en el mundo contribuye ahora a presentar ndashcomo un laquomomento intriacutensecoraquo57ndash tanto a la filosofiacutea de la religioacuten como a la teologiacutea fundamental una ontologiacutea de la potencialidad dispositiva del hombre no ante un dios abstracto sino ante el Dios que habla (se revela) La apertura del hombre al ser que es especiacutefica del conocimiento humano remite uacuteltimamente al hombre al ens absolutum58 a Dios y a atender la posibilidad de que Dios le hable Oyente de la palabra juega un papel determinante sobre la idea rahneriana de teologiacutea fundamental como superacioacuten laquoidealraquo del extrincesismo de la apologeacutetica neo-escolaacutestica59 Esta considera garantizada la existencia de Dios por la teologiacutea natural laquoyraquo su revelacioacuten sobrenatural por tanto como consecuencia de una demostracioacuten previa De modo que laquola revela-cioacuten de Dios al hombre no pareciacutea ser otra cosa que una comunicacioacuten de

55 Id Espiacuteritu en el mundo 387 Recordemos que el anaacutelisis kantiano de la estructura trascendental del espiacuteritu humano desemboca en la reduccioacuten del Trascedente a un postulado regulativo de la razoacuten praacutectica despojado de contenido real El anaacutelisis de Rahner denuncia pues la insuficiente incisividad de Kant al respecto

56 Puede verse un estudio analiacutetico y criacutetico en G B SALA Uditore della parola di Karl Rahner Unrsquoantropologia metafisica in ordine alla teologia in Rassegna di Teologia 42 (2001) 241-265

57 K RAHNER Oyente de la palabra 22558 Ibid 8759 Para una visioacuten del modo en que evoluciona su concepto de teologiacutea fundamental y

el espacio que ocupa en ella no solo la aptitud del creyente (fides qua) sino el contenido de la fe (fides quae) puede consultarse la siacutentesis de M SECKLER La dimensione fondamentale della teologia di Karl Rahner in I SANNA (ed) Lrsquoereditagrave teologica di Karl Rahner Roma 2005 49-67

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Dios al hombre acerca de algo que eacuteste no sabriacutea todaviacutea de modo que lo que en el hombre ocurriacutea era solo un antildeadirse un nuevo saber a los sabe-res anterioresraquo60 Este proceder no pone en claro por queacute el hombre por siacute mismo estaacute abierto a la revelacioacuten laquoa pesar de serle lsquoen siacutersquo inaccesibleraquo61 La tarea que propone Rahner a la teologiacutea fundamental es la de salvaguar-dar la relacioacuten de la teologiacutea con la metafiacutesica para evitar que la pala-bra de la autocomunicacioacuten divina (fides quae) pierda su significado para su oyente natural (fides qua) Por ello compete a la teologiacutea fundamental una antropologiacutea del hombre como aquel que en su historia abre el oiacutedo a una posible revelacioacuten de Dios [hellip] a esta pieza de la teologiacutea fundamen-tal que nos ha de ocupar aquiacute podemos designarla tambieacuten como ontolo-giacutea de la potentia oboedentialis para la libre revelacioacuten de Dios [hellip] para prestar oiacutedo a un eventual hablar de Dios que si se produce lo hace ndashal menos en un principiondash tambieacuten en el aacutembito de su conocimiento natural es decir mediante experiencia histoacuterica y mediante conceptos y palabras que contribuyen a constituir esta experiencia62

Teniendo esto en cuenta podemos sintetizar el trabajo de Rahner en dos pasos

1 Del anaacutelisis filosoacutefico de la trascendentalidad como capacidad de retorno del sujeto sobre siacute ndashlaquoen contraposicioacuten con esa otra cosa conocida que estaacute lsquofrente a eacutelrsquoraquo63ndash se desprende la proyeccioacuten u orientacioacuten64 de la existencia subjetiva contingente hacia un conocer y querer libre que cuando hablamos del ente que es el hombre solo cabe identificar con una libertad antecedente y creadora (don) que es la propia de Dios y como tal solo cabe explicar analoacutegicamente como loacutegica del amor

El amor es la voluntad iluminada hacia la persona la afirmacioacuten vo-luntaria de este en su singularidad irrepetible e indeducible Pero esta voluntad es la que actuacutea Dios en la posicioacuten de un ente finito Porque con ello se quiere a siacute mismo en su libre poder creador como laquocapacidadraquo del

60 K RAHNER Oyente de la palabra 33 61 Ibid 3462 Ibid 37 Asiacute presenta santo Tomaacutes la potencia obediencial de la criatura considerada

ante Dios laquoEst autem considerandum quod in anima humana sicut in qualibet creatura consideratur duplex potentia passiva una quidem per comparationem ad agens naturale alia vero per comparationem ad agens primum qui potest quamlibet creaturam reducere in actum aliquem altiorem in quem non reducitur per agens naturale et haec consuevit vocari potentia oboedentiae in creaturaraquo (STh III q11 a1)

63 K RAHNER Oyente de la palabra 7564 Cfr Ibid 139

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don del ser en el que eacutel desinteresadamente otorga al otro laquosu posesioacuten del serraquo [hellip] Con ello aparece el amor como la lumbrera del conocimien-to de lo finito y puesto que solo conocemos lo infinito a traveacutes de lo finito aparece tambieacuten como la luz de nuestro conocimiento en general siendo asiacute en uacuteltimo anaacutelisis el conocimiento uacutenicamente la claridad luminosa del amor65

Y asiacute conociendo al absoluto en su cualidad de presencia trascendente libre y amorosa el hombre laquose halla frente a este como frente a una perso-na duentildea de siacute mismaraquo al tiempo que ndashcontinuacutea Rahnerndash el ser absoluto muestra su luminoso rostro personal no porque se lo preste el hombre sino que laquola personalidad de Dios se muestra en el abrirse el ser absoluto ante la trascendencia humana porque este ser aparece en la preguntabi-lidad que todo ser tiene para el hombreraquo66 La concepcioacuten del hombre como oyente ndashque no estaacute referida a una palabra humana sobre Dios sino a la palabra divina sobre el hombre67ndash es posible dado que posee una condicioacuten de posibilidad una potentia oboedentialis o aptitud metafiacutesi-ca respecto a la autocomunicacioacuten de Dios entendida como revelacioacuten universal o trascendental laquoSolo si el ser del ente es de antemano lsquologosrsquo podraacute el Logos hecho carne decir lsquocon palabrasrsquo lo que se halla oculto en las profundidades de la divinidadraquo68

2 En cuanto teoacutelogo Rahner ha de atender igualmente a la positi-vidad (caraacutecter categorial) del hecho revelado y por tanto a la peculiar especificidad humana de la capacidad de trascendencia del espiacuteritu finito como lugar de encuentro con el Dios que puede revelarse es decir a la mundanidad temporalidad materialidad e historicidad del espiacuteritu hu-mano como determinaciones de laquosu apertura hacia el Dios de una posi-ble revelacioacuten libre haciendo de esta apertura precisamente una potentia oboedentialis humana para tal revelacioacutenraquo69

La revelacioacuten trascendental no es digamos una magnitud laquofijaraquo que reposa materialmente en siacute misma [hellip] sino que maacutes bien en esta historia categorial de la revelacioacuten alcanza su verdadera y propia realidad y asiacute ella misma debe entenderse en forma laquotemporalraquo de la misma manera

65 Ibid 130-13166 Ibid 11667 laquoEl hombre en virtud de su esencia espiritual oye siempre y esencialmente una re-

velacioacuten de Diosraquo (Ibid 120)68 Ibid 7169 Ibid 183

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que en teacuterminos muy generales la aprioacuterica estructura trascendental del espiacuteritu humano no se debe en definitiva entender como una magnitud laquofijaraquo [hellip] sino en tal forma que la aprioridad trascendental del espiacuteritu se determina a siacute misma incorporaacutendose a la realidad histoacuterica categorial y asiacute ella misma logra histoacutericamente su realizacioacuten70

En escritos sucesivos nuestro teoacutelogo profundiza su anaacutelisis filosoacutefi-co-teoloacutegico de la esencia humana con referencia expliacutecita a la involucra-cioacuten ndashen su dinaacutemica de apertura al serndash de su iacutendole espacio-temporal como espiacuteritu encarnado y la posibilidad de su libertad como devenir hacia un estadio de realizacioacuten definitivo Asiacute ndashresume J B Metz en su proacutelogo a la edicioacuten refundida de Oyente de la palabra que eacutel presentandash laquola cimentacioacuten de la existencia creyente sobre una palabra de Dios pro-nunciada histoacutericamente no aparece como algo arbitrario y discrecional sino como algo que responde a lo maacutes profundo de la existenciaraquo71 Re-cordemos que la Escritura presenta al hombre por el hecho de ser creado como imagen y semejanza de Dios es decir en una relacioacuten de estrechiacute-sima cercaniacutea con Eacutel Por tanto aunque pertenece al rango de los seres finitos la relacioacuten del hombre con el infinito es constitutiva Con Rahner podemos afirmar ahora que esta apreciacioacuten biacuteblica adquiere todo su re-lieve en el seno de una reflexioacuten racional sobre el ser humano

3 laquoexistenciAl sobrenAturAlraquo e historiA de lA sAlvAcioacuten

31 El laquohacerse hombreraquo del Verbo de Dios

Si el hombre fuese concebido como un ser clausurado sobre siacute (espiacuteritu puro) la encarnacioacuten de Dios es decir la real mediacioacuten entre Dios y el hombre seriacutea difiacutecilmente comprensible e incluso contradictoria Pues o bien Dios dejando de ser tal deberiacutea asimilarse a lo finito o bien deberiacutea ser abatida la laquonecesidad trascendentalraquo72 del hombre y con ella el propio hombre El trascendental como momento esencial de la teologiacutea rahneriana permite explicar la relacioacuten implicativa entre trascendencia e historia

La esencia metafiacutesica de una realidad y su historia por tanto la gra-cia como existencial y la historia de la salvacioacuten y la revelacioacuten no son

70 Ibid 148 (n 3) Cfr Id Historia del mundo e historia de la salvacioacuten in ET V 114-121

71 K RAHNER Oyente de la palabra 1072 Id Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica 26

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magnitudes meramente contrapuestas sino tales que mutuamente se con-dicionan siendo justamente esto lo que debe identificar una teologiacutea tras-cendental De modo que la teologiacutea trascendental no puede ni quiere ser la teologiacutea sino un momento de ella puesto que la teologiacutea (o mejor y de manera maacutes precisa la fe de la que la teologiacutea estudia los momentos reflexivos y la no reflexibilidad uacuteltima) debe enunciar siempre el concreto histoacuterico en su indeducibilidad y al mismo tiempo hacer comprensible coacutemo este concreto de la historia puede concernir efectivamente al hom-bre en su existencia y subjetividad originarias73

El momento trascendental de la teologiacutea considera que en la horizon-talidad de la experiencia trascendental que el sujeto humano tiene de su autorrealizacioacuten (en cuanto ser situado capaz de conocimiento y libertad) habita la verticalidad es decir se da una fundamental apertura a la reve-lacioacuten del Ser absoluto Dios La teologiacutea contempla que en virtud de la voluntad salviacutefica universal de Dios (revelacioacuten trascendental) el hombre despliega esa experiencia de su autorrealizacioacuten bajo el impulso de la gra-cia sobrenatural Dios ha creado libre y amorosamente al hombre como espacio personal de su autodonacioacuten y precisamente por ello no de modo arbitrario ndashcomo indicaba Metzndash sino como dotado de la capacidad real y permanente para que laquopueda dar cabida a este amor que es Dios mismo que lo pueda y lo tenga que recibir a un tiempo como lo que es el milagro eternamente asombroso el regalo inesperado indebidoraquo74 Aunque esa ca-pacidad real y permanente pueda ser identificada como congeniabilidad de la esencia del espiacuteritu humano hacia el Amor que se dona en ninguacuten caso es exigencia de la naturaleza humana sino que se trata en palabras de Rahner de un laquoexistencial sobrenaturalraquo75

El hombre real como interlocutor real de Dios debe poder recibir este amor como lo que necesariamente es un don libre Ello significa que hay que caracterizar de indebido de laquosobrenaturalraquo el mismo existen-cial central permanente de la ordenacioacuten al Dios trinitario de la gracia y de la vida eterna No porque el hombre posea ndashlaquoevidentementeraquondash una

73 Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 11274 Id Sobre la relacioacuten entre la naturaleza y la gracia in ET I 31275 Cfr Id Existenciario Existencial II in SM III 66-68 Es en la filosofiacutea de Heideg-

ger donde tiene su asiento el sentido del teacutermino Existencial se refiere a aquella caracteri-zacioacuten de la existencia del ser que permite comprenderlo en su especificidad de ser-ahiacute que permite por tanto comprender las determinaciones oacutenticas del ente que se comprende a siacute mismo como existencia o hecho de ser frente a las cosas Cfr M HEIDEGGER Ser y tiempo sect 9 Madrid 2003 67-70

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naturaleza fijamente delimitada y en este sentido comparada con ella ndashen cuanto magnitud fija y conocida desde siemprendash la gracia en uacuteltimo teacutermino Dios mismo aparezca como improporcionada con lo cual habriacutea que llamarla sobrenatural Sino porque la tendencia y ordenacioacuten al amor de Dios el existencial sobrenatural solo salva el caraacutecter indebido de la gracia siendo eacutel mismo indebido y en el momento en que lleno de gracia se hace consciente presentaacutendose como sobrenatural es decir como in-debido al hombre real76

Esta concepcioacuten teoloacutegica de la existencia humana como determinacioacuten ontoloacutegico-real operada sobrenaturalmente por la gracia en su naturaleza y llamada por eso sobrenatural (si bien no ausente del orden concreto de la existencia)77 aguarda auacuten el esclarecimiento de su especificidad cristiana la presencia histoacuterico-salviacutefica de Jesucristo es decir de la Palabra en la carne (revelacioacuten categorial) como raiacutez del sentido uacuteltimo que tiene el impulso trascendental del hombre hacia Dios esto es del oyente (antro-pologiacutea) y la relacioacuten de Dios con el mundo (cosmologiacutea)78 La automani-festacioacuten de Dios (revelacioacuten trascendental) en la categorialidad histoacuterica alcanza su plenitud en Jesucristo

Dios ha tomado al hombre con tan absoluta seriedad en la encarnacioacuten del Verbo que el hombre no puede considerar seriamente a Dios sino a Eacutel en cuanto hombre y en Eacutel a la humanidad divinizada Todas las realidades humanas tambieacuten su aspecto natural poseen una efectiva anoacutenima aca-so solo potencial y no obstante verdadera condicioacuten cristiana79

Cristo es la comunicacioacuten laquodefinitiva e insuperableraquo de Dios pues Dios asume en su Verbo la concrecioacuten histoacuterica del hombre Jesuacutes como propia La asume en la persona del Salvador laquoafirmacioacuten concreta en la historiaraquo sin la que lo trascendental no seriacutea real 80 Que la maacutexima realiza-

76 K RAHNER Sobre la relacioacuten entre la naturaleza y la gracia in ET I 31477 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 24578 laquoEn efecto si queremos ser cristianos y no solo metafiacutesicos del oscuro principio

hemos de confesar que la Palabra eterna se ha hecho carne y ha habitado entre nosotrosraquo (K RAHNER La palabra poeacutetica y el cristiano in ET IV 416)

79 Id Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 38780 A partir de una ontologiacutea de lo que llama Rahner laquosiacutembolo realraquo puede acometerse

una explicacioacuten de la humanidad de Cristo no como medio o sentildeal sino como manifestacioacuten propia del Logos como su siacutembolo real en sentido eminente y no como una realidad asumida desde fuera que no dice ni muestra nada de Aquel que la asume Originariamente se entiende por siacutembolo el espacio expresivo que va del ente que conoce al ente por conocerse en cuanto auto-realizacioacuten intriacutenseca en la pluralidad que es propia del ente ya sea finito o absoluto como el Dios Trino Ese espacio expresivo es el realizarse de la unidad de un ente esencial-

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cioacuten del hombre se haya hecho realidad solo puede ser aceptado y creiacutedo a posteriori a partir del acontecimiento histoacuterico-salviacutefico de Jesucristo Ahora bien dada su constitucioacuten es a partir de la reflexioacuten trascendental como el hombre puede aceptar la encarnacioacuten de Dios como libre epifaniacutea que finaliza realmente su desiderium naturale de la visioacuten beatiacutefica en la plenitud de la invitacioacuten que Dios dirige al hombre para compartir su vida divina a partir del mismo momento de su creacioacuten y no como superes-tructura adventicia al ser del hombre81

El movimiento de la creacioacuten apareceriacutea gravitando de antemano hacia ese punto en el que Dios alcanza simultaacuteneamente la suprema cercaniacutea y lejaniacutea frente a lo distinto de eacutel ndashlo creadondash al objetivarse de la manera maacutes radical en su imagen daacutendose en ella en cuanto eacutel mismo de la ma-nera maacutes verdadera y aceptando como lo maacutes radicalmente suyo lo creado por eacutel Dios en tal caso no seriacutea el fundador sin historia de una historia ajena a eacutel sino el ser de cuya propia historia se trata82

Por ello sostiene Rahner que la creacioacuten en general y el hombre en particular han sido llamados a la existencia por el amor de Dios que desea darse a lo otro esperando de eso otro una respuesta libre sostenida por el uacutenico motivo del amor 83 Refirieacutendose a la unidad entre el orden de la crea-cioacuten y el de la redencioacuten escribe laquoEsta unidad se funda uacuteltimamente en la absoluta decisioacuten de Dios ndashinderogable por la libertad de las criaturasndash a favor de su auto-alienacioacuten en el hacerse creatura de su uacutenico Verboraquo84 Dicho del modo concreto en que se despliega la historia de la salvacioacuten el hombre existe (creacioacuten) porque su existencia ha sido pensada y proyecta-da en Cristo (encarnacioacuten)85 En Cristo se da la plenitud de la unidad entre naturaleza y gracia anhelo humano y don de Dios revelacioacuten e historia

mente plural Expresaacutendose se auto-encuentra y posee a siacute mismo Siacutembolo es el modo de autoconocimiento propio del ente Este es el sentido en que Rahner habla del Logos en la vida trinitaria como laquosiacutembolo del Padreraquo (laquosiacutembolo intriacutenseco y sin embargo distinto del simbolizado constituido por este mismo en quien el simbolizado se expresa a siacute mismo y de esta forma se poseeraquo) y de la humanidad de Cristo como automanifestacioacuten del Logos laquode forma que cuando Dios expresaacutendose se aliena a siacute mismo aparece justamente eso que nosotros llamamos la humanidad del Logosraquo (K RAHNER Para una teologiacutea del siacutembolo in ET IV 277 y 280)

81 K RAHNER Problemas actuales de cristologiacutea in ET I 19282 Ibid 17283 K RAHNER Para la teologiacutea de la encarnacioacuten in ET IV 14284 Id Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 38885 Id Curso fundamental sobre la fe 237 Id Historia del mundo e historia de la salva-

cioacuten in ET V 125

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Como se colige de lo dicho hasta aquiacute para comprender a fondo el laquoha-cerse hombreraquo del Verbo misterio esencial y especiacutefico de la fe cristiana86 Rahner adopta en su cristologiacutea esa oacuteptica trascendental del misterio de Cristo que comparte con la metafiacutesica moderna el empentildeo en laquola supera-cioacuten del positivismo metafiacutesico y del conceptualismo caracteriacutestico de la escolaacutestica tardiacutearaquo partiendo de una laquocomprensioacuten del ser como espiacuteritu palabra conciencia inicial y poder entenderlo asiacute dinaacutemicamenteraquo87

Cuando la historia del hombre el acto de su libertad y la culminacioacuten absoluta de ese acto libre no son considerados como sucesos basados en un fundamento en siacute intocado de una naturaleza humana concebida coacute-sico-estaacuteticamente sino vistos como autorrealizacioacuten de una esencia que en tanto lo que ella es alcanza solamente en ellos su realidad propia si la libertad por consiguiente no es vista tanto como una laquopotenciaraquo que se laquotieneraquo sino como la libertad de disposicioacuten que se es para llevar la propia esencia previamente dada en tanto ella misma a su perfeccioacuten el acontecimiento de la encarnacioacuten estaacute entonces unido maacutes estrecha y esencialmente a la perfeccioacuten de la vida humana asumida que cuando la encarnacioacuten es vista como constitucioacuten de un sujeto humano en cuya vida acaece despueacutes solo ulteriormente esto o lo otro88

Se trata en suma de elaborar una laquocristologiacutea ontoloacutegicaraquo esto es que construya sus enunciados y esquemas de comprensioacuten orientados laquohacia la coincidencia original de ser y de concienciaraquo89 y asiacute tratando de remontar la formalidad conceptual de la cristologiacutea claacutesica los pueda hacer maacutes asequibles al hombre contemporaacuteneo Un trabajo que nuestro autor consi-dera plenamente justificado por cuanto se trata de un recurso al que apela la misma Escritura En efecto si como recordaba el Vaticano II tanto el mundo (cosmologiacutea) como la humanidad (antropologiacutea) han sido creados

86 Cfr STh III q2 a2 laquoSi ergo humana natura Verbo Dei non unitur in persona nullo modo ei unitur Et sic totaliter tollitur incarnationis fides quod est subruere totam fidem christianamraquo

87 O GONZAacuteLEZ DE CARDEDAL Fundamentos de cristologiacutea II Madrid 2006 706-707

88 K RAHNER Cuestiones dogmaacuteticas en torno a la piedad pascual in ET IV 160 Per-miacutetasenos hacer de este texto un ejemplo que ilustra los adjetivos con que J B Metz califica la teologiacutea trascendental de Rahner laquoRahner elabora una dogmaacutetica histoacuterico-vital biograacutefica narrativa testimonial pero siempre enfocada como casi ninguna otra teologiacutea a lo objetivo y doctrinalraquo En nuestro caso se trata de la estrecha confrontacioacuten y mutua iluminacioacuten entre libertad del hombre (considerada en su caraacutecter de disposicioacuten de ser) y encarnacioacuten de Dios en cuanto plenificacioacuten de la misma Cfr J B METZ La fe en la historia y la sociedad 233

89 K RAHNER Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica 66

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en orden a un encuentro de plenitud con Cristo no hay por queacute descartar ambos como espacio o gramaacutetica para la comprensioacuten de la encarnacioacuten del Verbo sin que por ello haya de quedar Dios sometido a este ciacuterculo hermeneacuteutico90 Por lo que a la antropologiacutea se refiere Rahner apela en clave ascendente al doble espacio en que ndashseguacuten eacutelndash se declara la identidad personal del hombre (ante y en Cristo) tanto al horizonte de la apertura trascendental del espiacuteritu humano como al significado de otras experien-cias de rango existencial que pueden considerarse declaracioacuten anoacutenima de la revelacioacuten de Dios en Cristo Si bien no puede obviarse que es la experiencia trascendental el fundamento o condicioacuten de posibilidad de toda iniciativa del espiacuteritu del hombre y por tanto constituye el horizonte comprensivo de su existencia histoacuterica o si se prefiere del a posteriori de su vida personal Dediquemos una palabra conclusiva al significado teoloacute-gico de la trascendentalidad para ahondar en el siguiente apartado el de la existencia maacutes inmediata y sus llamadas a la teologiacutea

Rahner recordemos presenta al hombre como aquel ser que es cons-ciente de siacute de su propia finitud y en tal medida como ser que estaacute frente al ser laquoabsolutoraquo Aun sin poder superarla trasciende su propia finitud pues por su constitucioacuten esencial es capaz de anticipar la llamada hacia el absoluto El hombre toma conciencia de su orientacioacuten al absoluto porque es laquosujetoraquo del mismo modo que la invocacioacuten que brota de eacutel hacia el absoluto espera y piensa a este como el laquoSujetoraquo Por eso la perspectiva trascendental declara la identidad del hombre como persona En el encuen-tro con Cristo ndashprincipio y fin de todo lo creadondash el hombre descubre el sentido uacuteltimo de su laquopoder existir en la plena entrega de siacute mismoraquo91 como entrega al Ser en la medida en que en y por Cristo la humanidad se mani-fiesta como prefigurada y creada para la salvacioacuten (para ser naturaleza del propio Dios como incomparable disposicioacuten de siacute) Si como confiesa san Pablo el hombre ha sido creado en Cristo (cfr Rom 829 Col 115 1 Cor 86) entonces es Cristo quien en su encarnacioacuten revela al hombre su mis-terio La definicioacuten cristoloacutegica de la unioacuten hipostaacutetica apela a una aptitud de la naturaleza humana (potentia oboedentialis o potencialidad para la re-cepcioacuten de la autocomunicacioacuten de Dios en la gracia) como capacidad para su asuncioacuten por la persona del Verbo de Dios La encarnacioacuten no estaacute por tanto en funcioacuten del pecado del hombre ndashcomo pudo pensar la interpreta-

90 Cfr Id Jesucristo B in SM IV 5691 Id Para la teologiacutea de la encarnacioacuten in ET IV 137

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cioacuten teoloacutegica claacutesica del disentildeo de Dios a favor del hombrendash sino que la creacioacuten es ya un acto de salvacioacuten La existencia humana acontece en el orden presente de la salvacioacuten esto es se halla sobrenaturalmente elevada por la autocomunicacioacuten divina en la gracia increada que es la potencia del Dios Trino92 La perspectiva trascendental permite a la cristologiacutea laquohacer comprensible la idea del hombre-Dios como punto culminante (buscado por lo menos asintoacutetica e hipoteacuteticamente) del movimiento del espiacuteritu que en una constante superacioacuten de siacute mismo se mueve hacia Diosraquo93 La misma perspectiva trascendental permite a la antropologiacutea advertir que su constitutiva potencialidad como condicioacuten a priori para la laquoautomediacioacuten de Diosraquo tiene su razoacuten de ser en el hombre salido de las manos de Dios como don por medio de su Hijo hecho hombre94

92 Cfr Id Amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 259 El propio teoacutelogo confiesa abiertamente al final de su carrera que por razones no solo teoloacutegicas sino pastorales en su antropologiacutea teoloacutegica laquoel tema de la pecaminosidad del hombre y el perdoacuten de la culpa por pura gracia es en cierto sentido algo secundario en comparacioacuten con el tema de la auto-comunicacioacuten de Diosraquo Y esto no porque el pecado sea una experiencia que no nos afecte radicalmente y nos impida reclamar cualquier derecho ante la gracia de Dios sino porque laquosi vemos lo difiacutecil que llega hoy diacutea a los hombres la justificacioacuten como perdoacuten uacutenicamen-te del pecado si ademaacutes para un teoacutelogo catoacutelico Dios y su promesa de siacute mismo al hombre (como quiera que esta haya de entenderse en concreto) precede ya al pecado y es pura gracia pura maravilla inesperada de Dios quien se entrega derrochaacutendose a siacute mismo y hace que la aventura de tal amor sea su propia historia entonces pienso que puede uno sentir tranquila-mente que la autocomunicacioacuten de Dios a la criatura es un tema maacutes central que el pecado y el perdoacuten de los pecadosraquo (K RAHNER Sobre la inefabilidad de Dios Experiencias de un teoacutelogo catoacutelico 31-32) En otro lugar en liacutenea semejante considera Rahner que tras la en-carnacioacuten de Cristo y su cruz ndashel ahiacute donde Dios se ha decidido a favor del hombre sin dantildear su libertad redimiendo y ennobleciendo su naturaleza hasta hacerla capaz de felicidadndash el cristiano laquopost Christum natum en el fondo debe pensar el mundo de manera optimista del mismo modo que debe (puede) saber que la Palabra de Dios se ha hecho carne en este mun-do para siempre [hellip] No se trata de que dicho optimismo pase por alto la cruz y la muerte sino de que fije su atencioacuten en la compenetracioacuten del Hijo con el destino del mundoraquo (Id Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 389-390) En otro paso de su obra refirieacutendose a la acusacioacuten lanzada contra Teilhard de Chardin de haber atenuado la fuerza del pecado en su visioacuten evolutiva del mundo considera Rahner que sin restar importancia al pecado cabe una concepcioacuten fundamentalmente positiva del mundo en su proceso evolutivo cuando se entiende este rectamente a la luz del poder redentor de la encarnacioacuten laquoEl mundo y su historia estaacuten de antemano sustentados por la voluntad absoluta de Dios de una radical autocomunicacioacuten a ese mundo puesto que en esa autocomunicacioacuten y su punto cumbre la encarnacioacuten el mundo se hace historia de Dios mismo estaacute el pecado si lo hay en el mundo y en la medida en que lo haya abarcado de antemano por la voluntad de remisioacuten y la oferta de autocomunicacioacuten divina seraacute necesariamente puesto que por causa de Cristo no estaacute condicionada por el pecado una oferta de la remisioacuten y de la superacioacuten de la culparaquo (Id La cristologiacutea dentro de una concepcioacuten evolutiva del mundo in ET V 197)

93 Id Teologiacutea trascendental in SM VI 614-615 94 Cuando la laquounioacuten hipostaacuteticaraquo no se piensa bajo la clave del privilegio abstracto

o alteracioacuten del liacutemite humano sino como plena realizacioacuten de la apertura entre Dios y el

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32 Llamadas de la antropologiacutea a la teologiacutea

Ademaacutes de la conciencia de siacute la trascendentalidad del espiacuteritu hu-mano desvela el sentido que poseen otras llamadas (categoriales) de la antropologiacutea a la teologiacutea Se trata de la experiencia humana del amor al tuacute la disposicioacuten ante la muerte y la versioacuten al futuro de la vida del hom-bre en clave de esperanza hacia un destino de plenitud ulterior 95 Todas ellas se situacutean en la oacuterbita de una experiencia de vida que abre un camino a aquella reflexioacuten que puede conducir eventualmente a Dios laquoEstas tres lsquoapelacionesrsquo coinciden en que el hombre en su existencia si eacutel la asume decididamente de suyo desarrolla ya algo asiacute como una lsquocristologiacutea en buacutesquedarsquoraquo96 Rahner observa estrechamente vinculado el sentido y ejer-cicio de cada una de estas apelaciones de la existencia humana a la voca-cioacuten sobrenatural (la primordial genuinidad del fondo personal informado por el laquoPneuma divinoraquo)97 que Dios ha inscrito en cada vida singular convirtieacutendola en uacutenica e insustituible

321 Amor al proacutejimo

Cuando el amor al proacutejimo es considerado en su verdad y capacidad constitutiva de generar una comunidad enteramente nueva entre los hom-bres laquode persona a personaraquo98 cuando no obviamos que en virtud de la historicidad a posteriori del hombre en el acto de la comunicacioacuten amoro-sa con el tuacute personal queda sintetizada reunida y realizada la unidad origi-

hombre entonces es posible recuperar la contemplacioacuten de la vida de Cristo (en su condicioacuten de realidad humana en el mundo y en cuanto tal realidad de Dios) como espacio para un discernimiento maacutes profundo del significado de nuestra propia vida A una teologiacutea de los misterios de la vida de Cristo (los interrogantes y asombros que suscita) confiacutea Rahner la posibilidad de lograr una interpretacioacuten uacuteltima de nuestra vida e historia personal (y cristiana) en todo el arco de su complejidad como esfuerzo de a-propiacioacuten de siacute y ex-sistencia ante el Misterio Cfr K RAHNER Problemas actuales de cristologiacutea in ET I 195-197 Mysterien des Lebens Jesu in LThK2 VII 721-722 Para conocer las fuentes y motivaciones de la teologiacutea contemporaacutenea (con especial atencioacuten a la obra de K Rahner) para la recuperacioacuten de una teologiacutea de los misterios de la vida de Cristo O GONZAacuteLEZ DE CARDEDAL Fun-damentos de cristologiacutea I Madrid 2005 654-660 Tambieacuten A GRILLMEIER Los misterios de la vida de Jesuacutes panorama histoacuterico in MyS III 571-586

95 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 345-348 Id Der eine Jesus Christus und die Universalitaumlt des Heils 279-282 Id Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea siste-maacutetica 63-66 Cfr G PATTARO La svolta antropologica 152-157 I SANNA La visione antropologica di Karl Rahner in Id (ed) Lrsquoereditagrave teologica di Karl Rahner 18-26

96 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 34597 Cfr Id Uumlber die Heilsgeschichtliche bedeutung des einzelnen in der Kirche 43198 Id Consagracioacuten del laico para la cura de almas in ET III 276

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naria de lo que el hombre es en su auto-posesioacuten subjetiva como apertura trascendental al ser y en su libre auto-disposicioacuten hacia la definitividad99 cuando advertimos la complejidad pasional del fenoacutemeno amoroso como realidad que permea la totalidad experimentada y sufrida de la vida per-sonal con don de siacute 100 entonces seriacutea insensato no conceder a este acto fundamental y envolvente de la existencia humana el caraacutecter de patencia del misterio aun antes de profundizar en su orilla teoloacutegica101 Por ello

Si en la descripcioacuten del amor al tuacute se pone de manifiesto que es realmente la realizacioacuten del ser total espiritual y trascendental del hombre entende-remos con mayor facilidad que dicho amor acontezca en el presente orden salviacutefico como caritas que no indica otra cosa que su radicalidad absoluta en cuanto que estaacute abierto a la inmediateidad del Dios que se comunica como gracia102

En la extroversioacuten amorosa de que es capaz el espiacuteritu humano cabe por tanto una experiencia inmediata de Dios103 En efecto la identifica-cioacuten teoloacutegica de la trascendentalidad ilimitada del espiacuteritu humano como potentia oboedentialis para la gracia permite comprender la sobrenatu-ralidad del acto radicalmente libre de amor hacia el tuacute como orientacioacuten inmediata a Dios que se da en el seno de la historia de la salvacioacuten es decir en la figura concreta del otro que para el cristiano representa de modo absoluto Jesucristo

Jesuacutes es el absolutum concretissimum y en consecuencia aquel ante quien el amor alcanza su concrecioacuten e inequivocidad maacutes absolutas aque-lla que el amor busca en razoacuten de su propia esencia pues es un movimien-to no hacia un ideal abstracto sino hacia la singularidad concreta indi-vidual indisoluble y precisamente este amor halla en su tuacute la amplitud absoluta del misterio incomprensible104

Caritas identifica en la Escritura el amor mismo que es Dios quien hace de su encuentro con la criatura ndashimagen y semejanza suyandash un acto supre-

99 Id Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 258-259100 Id De la necesidad y don de la oracioacuten 45101 Cfr Id Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 260 Puede

encontrarse una siacutentesis sobre el sentido que tiene en Rahner el amor al proacutejimo como espacio de Trascendencia en M CABADA CASTRO La vigencia del amor Afectividad hominiza-cioacuten y religiosidad Madrid 1994 378-381

102 K RAHNER Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 261103 Cfr Id Uumlber die Heilsgeschichtliche bedeutung des einzelnen in der Kirche 423104 Id Curso fundamental sobre la fe 362

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mo de amor que se convierte para ella a su vez en mandamiento nuevo El cual no es una mera exigencia moral sino una llamada a concentrar la fuerza vital en aquel que Dios ha querido como morada de su amor la per-sona del otro Cristo mismo ha sido identificado por Dios en el Evangelio como mi amado (cfr Mt 317 175) y Jesuacutes a su vez como fundamento del mandamiento del amor (cfr Jn 1335) en Eacutel Dios mismo se presenta como garantiacutea real de la plenitud que aguarda a pesar de su finitud al amor humano laquoPor eso para Juan la consecuencia de que Dios que es amor (1 Jn 416) nos haya amado no es que nosotros a nuestra vez le amemos a eacutel sino que nos amemos mutuamente (1 Jn 4711)raquo105 En otro lugar se-ntildeala Rahner que el amor inter-humano corre el riesgo de instrumentalizar sus mediaciones (aunque sean personales) en cambio esto no es posible cuando decimos que el otro de la relacioacuten es Dios pues Eacutel no estaacute junto al hombre sino ocupando su centro maacutes iacutentimo laquoEl amor a un hombre por amor de Dios no saca del hombre amado sino que introduce en eacutelraquo106

Si laquosinoacutepticamenteraquo se reclama como ejecucioacuten nuestra un amor que en su desmesura ha de aceptar la desmesura del amor de Dios para con nosotros y que ha de poseer por ello una radicalidad que exige realmente y hasta el final la carencia de reparos habraacute que decir entonces ese amor de veras reclamado es en cuanto tal dado que responde al absoluto amor de Dios un amor que este sustenta esto es que la autocomunicacioacuten de Dios posibilita [hellip] porque Dios estaacute dispuesto a dar lo que ordena [hellip] porque se da ya el amor como posibilidad que ha de ser animada y liberada hacia siacute misma y porque estaacute ahiacute ya en el mundo la voluntad de Dios que otorga su realizacioacuten a esa posibilidad107

La consideracioacuten que hace la tradicioacuten neotestamentaria del hondo significado del amor inter-personal como amor a Dios108 contempla en continuidad la realidad del amor humano como genuina posibilidad de la trascendentalidad de la persona (que laquopara no perderse en la vaciacutea nada necesita un tuacute intramundanoraquo)109 con la absoluta disponibilidad del amor

105 Id Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 253106 Id Consagracioacuten del laico para la cura de almas in ET III 282107 Id El laquomandamientoraquo del amor entre los otros mandamientos in ET V 452-453108 Ya sea como medida expliacutecita por la que el hombre seraacute juzgado en el juicio esca-

toloacutegico de Dios (Mt 2534-46) o como forma definitiva de la existencia cristiana (1 Cor 1231ndash1313)

109 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 207 Id El laquomandamientoraquo del amor entre los otros mandamientos in ET V 450

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que es Dios y se da a conocer en la persona de Cristo Y puesto que la mediacioacuten salviacutefica de la encarnacioacuten de Cristo no tiene un significado so-lamente temporal sino eterno110 la realizacioacuten espiritual de la existencia como demanda de fidelidad absoluta que exhibe la entrega interpersonal amorosa en tanto estaacute llevada por la gracia posee una profundidad abso-luta y un momento que estaacute asumido en la laquovida eternaraquo entre Dios y el hombre Esa vida eterna en definitiva trasciende siempre este encuentro inmediato espacio-temporal corporal y se entiende como insuprimible en la muerte presupuesto solamente que en la concepcioacuten cristiana de la existencia la muerte se interprete y realice como consumacioacuten y no solo como fin en que todo se acaba111

322 Disponibilidad para la muerte

Pasemos al espacio de la experiencia de la muerte Cabe leer de dos modos muy distintos esa declaracioacuten irrevocable de la finitud de la exis-tencia del hombre que es su muerte como pura pasioacuten y fatalidad o como ndashdigaacutemoslo asiacutendash pasioacuten activa teacutermino y consumacioacuten de la vida personal (status viatoris)112 En la medida en que la muerte pone fin a la existencia bioloacutegica del hombre este sufre la muerte la padece sin remedio como laquoladroacuten en la noche despojo y reduccioacuten a la impotencia es justamente finraquo113 No obstante y en cuanto acontecimiento protagonizado por el ser personal no puede pasarse por alto que la muerte no es ajena a la dialeacutec-tica de la vida personal donde ha de vivirse

El hombre es espiacuteritu y materia persona y naturaleza tiene libertad y al mismo tiempo un dinamismo vital independiente del libre albedriacuteo En la esencia misma del hombre hay una verdadera dialeacutectica aneja a esta composicioacuten plural y antiteacutetica de realidades Lo maacutes loacutegico es esperar que esta complejidad se refleje en la muerte [hellip] El acto maacutes trascendental de la vida vivido humanamente implica la uacuteltima decisioacuten personal de la

110 Cfr Id Eterna significacioacuten de la humanidad de Jesuacutes para nuestra relacioacuten con Dios in ET III 55-56

111 Id Curso fundamental sobre la fe 361 112 Cfr Id Sentido teoloacutegico de la muerte 15-35 Id Pasioacuten y ascesis Sobre la fun-

damentacioacuten filosoacutefico-teoloacutegica de la asceacutetica cristiana in ET III 80-93 Cfr las explica-ciones sobre la teologiacutea de la muerte en Rahner J L RUIZ DE LA PENtildeA El hombre y su muerte Antropologiacutea teoloacutegica actual Burgos 1971 217-268 F BRANCATO La questione della morte nella teologia contemporanea Teologia e teologi Firenze 2005 73-80

113 K RAHNER Sentido teoloacutegico de la muerte 45

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vida no por lo que tiene la muerte de acontecimiento pasivo procedente de la vida bioloacutegica sino por la accioacuten libre del alma El teacutermino del hombre como persona espiritual que decide libremente de su propia suerte ha de ser consumacioacuten activa desde dentro situarse activamente en su perfeccioacuten o imperfeccioacuten dar el postrer testimonio que resulta y resume en general toda su propia vida En este caso la muerte lleva consigo la total posesioacuten de siacute mismo por parte de la persona Importa la realizacioacuten definitiva del sentido de siacute mismo y la libre decisioacuten de la realidad personal [hellip] Asiacute la laquopropia muerteraquo desde dentro por la accioacuten de la persona misma es a la par el acontecimiento de la maacutes radical depotenciacioacuten del hombre La muerte es accioacuten y pasioacuten en uno114

Heidegger hace de la muerte ndashentendieacutendola activamentendash clave her-meneacuteutica de comprensioacuten de la existencia en su originalidad y posibi-lidad de recogimiento en siacute laquoLa muerte como fin del Dasein es la po-sibilidad maacutes propia irrespectiva cierta y como tal indeterminada e insuperable del Dasein La muerte como fin del Dasein es en el estar vuelto de este hacia su finraquo115 No obstante apunta Rahner116 Heidegger tan solo llega a identificar a su protagonista como un ser-para-la-muerte en cuanto posibilidad anticipada de un vivir estrechado sin embargo a lo inmediato

Ahora bien iquestpor queacute proclamar el dominio de la muerte sobre la to-talidad de la vida aislando aquella de la real capacidad de apertura tras-cendente y la constante pugna de libertad en que la existencia personal se descubre y construye cabe-siacute y hacia lo otro de siacute como afaacuten sin liacutemites Entre las determinaciones esenciales de la existencia humana Rahner ha privilegiado ndashcomo explicitaremosndash la libertad cualificaacutendola como accioacuten trascendental sobre el proyecto personal esto es como entrega del hombre a siacute mismo que asumiendo en unidad la totalidad de dimensiones de su existencia pretende la total disposicioacuten de siacute laquoLa libertad en su esencia original no es la facultad de hacer o dejar de hacer arbitraria-mente una cosa determinada sino la estructura fundamental por la que el sujeto en su trascendentalidad dispone de siacute mismo en orden a su realiza-

114 Ibid 34-35115 M HEIDEGGER Ser y tiempo sect 52 Madrid 2003 278 Cfr J L RUIZ DE LA

PENtildeA El hombre y su muerte Antropologiacutea teoloacutegica actual 79-90 A NITROLA Trattato di escatologia 2 Pensare la venuta del Signore Cinisello Balsamo 2010 89-91

116 Cfr K RAHNER Pasioacuten y ascesis Sobre la fundamentacioacuten filosoacutefico-teoloacutegica de la asceacutetica cristiana in ET III 89

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cioacuten definitivaraquo117 Asiacute entendida la libertad que es propia de la existencia personal laquono es precisamente la capacidad de revisar siempre de nuevo sino la uacutenica facultad de lo definitivo la facultad del sujeto que mediante esa libertad ha de ser llevado a su situacioacuten definitiva e irrevocableraquo118 Para la antropologiacutea cristiana la muerte se encuadra entre aquellas ac-ciones particulares de la vida en que se ejerce y media esa facultad de lo eterno que es la libertad del hombre laquoLa muerte del hombre se presenta como llegada a su teacutermino de una historia de libertad en la inmediatez del misterio de Dios como plenitud beatiacutefica o como juicioraquo119 Libertad que ante la muerte puede ejercer el hombre como laquolibertad libremente amada [hellip] pues donde hay libre libertad hay amor a la muerte hay valor para morirraquo120 y laquolibertad rendida una libertad que acepta no solo la muerte sino su sentido el sentido de la existenciaraquo121 Contribuyendo asiacute a la re-capitulacioacuten de su historia y a la pregunta por la densidad irrepetibilidad y valor absoluto de quien la padece

La muerte tiene una presencia axioloacutegica en la totalidad de la vida humana El hombre opera su muerte como consumacioacuten por la accioacuten de su vida y asiacute la muerte estaacute presente en esa accioacuten y consiguiente-mente en toda accioacuten libre en que el hombre dispone de la totalidad de su persona122

La decisioacuten libre y responsable adoptada en cada accioacuten vital ndashincluida la muertendash construye el proyecto personal en el tiempo presente donde se rememora lo valioso acumulado a la vez que se anticipa el futuro definitivo del mismo123 El conjunto de tales decisiones va enriqueciendo el nuacutecleo personal humano desde dentro coadyuvando fielmente a la constitucioacuten de la imagen de lo que el hombre quiere llegar a ser Este argumentario an-

117 Id La muerte del cristiano in MyS V 452118 Id Curso fundamental sobre la fe 123 El anaacutelisis completo de la libertad humana

en sus posibilidades y condicionantes Ibid 121-125119 Id Theologische Erwaumlgungen uumlber den Eintritt des Todes 333120 Id Sentido teoloacutegico de la muerte 94121 Ibid 95122 Ibid 49-50 Cfr Id La muerte del cristiano in MyS V 444 Este es el modo crea-

tivo en que Rahner interpreta la afirmacioacuten de Gregorio Magno (prolixitas mortis) laquoTempo-ralis vita aeternae vitae comparata mors est potius dicenda quam vita Ipse enim quotidianus defectus corruptionis quid est aliud quam quaedam prolixitas mortisraquo (GREGORIO MAG-NO Homiliarum in evangelia II 37 1 in PL 76 1275)

123 Entre los existenciales ineludibles del hombre se encuentra su constitucioacuten anam-neacutetica y prognoacutestica Cfr K RAHNER Principios teoloacutegicos de la hermeneacuteutica de las declaraciones escatoloacutegicas in ET IV 382

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tropoloacutegico contribuye a conjurar el peligro de una escatologiacutea cristiana que tratando de laquodesmitologizarraquo en absoluto las afirmaciones escatoloacute-gicas de la Escritura las laquodes-escatologizara de tal forma que todas ellas mentasen solo un suceso acaecido una decisioacuten tomada en el ahora de la existencia del hombre concretoraquo124 quedando asiacute destruido su caraacutecter esencial como sabiduriacutea del futuro en el saber del hombre acerca de siacute y su redencioacuten en Cristo por revelacioacuten divina Este proceder des-escatologi-zariacutea a priori tanto la prerrogativa antropoloacutegica de la apertura absoluta e incondicionada a la palabra de Dios (al hacer de eacutel un ser restringido a su presente sin capacidad de futuro) como la posibilidad reveladora de Dios y su actuacioacuten pro nobis como plenitud del hombre entero y de todo lo que pertenece a su existencia personal (naturaleza y sujeto)125 En realidad la salvacioacuten ofrecida al hombre por Dios y determinada por el acaecer de Cristo ndashmuerto y resucitadondash contiene una comunicacioacuten sobre lo futuro que en palabras de Rahner

acaece justamente en lo que el hombre oye sobre siacute mismo de parte de Dios en tanto la apertura de la verdad de su existencia y viceversa Ambas co-sas en el mismo grado y medida en que esta interpretacioacuten del hombre he-cha por Dios avanza en la historia humana y por eso y de manera no su-perable en Jesucristo en quien Dios se ha dicho como salvacioacuten al hombre definitivamente y de forma que ya no podraacute ser rebasada126

En la humanidad de Cristo el hombre oye hablar a Dios claramente sobre el significado de su propia muerte ya que

la redencioacuten acontecioacute precisamente por el hecho de que la muerte fue aceptada ndashcon fe esperanza y amorndash como manifestacioacuten del pecado como muestra de su vaciedad y opresioacuten como presencia de la eterna tiniebla y del abandono de Dios y se transformoacute en manifestacioacuten de la entrega obe-diente del hombre entero a la incomprensibilidad del Dios santo en medio del extraviacuteo y el alejamiento127

En la presente economiacutea de la salvacioacuten la muerte del hombre deja de ser una contradiccioacuten total de la constitucioacuten humana pues mediante la accioacuten de la gracia ha sido incorporada a la muerte de Cristo laquodonde

124 Ibid 376125 Ibid 378-379126 Ibid 386-387127 K RAHNER La muerte del cristiano in MyS V 461

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el vaciacuteo del hombre se hizo plenitud de Dios cosa que de suyo y origi-nariamente no era La muerte se hizo vidaraquo128 Precisamente este es el sentido que tiene para el justo morir con Cristo como don de gracia El Crucificado ha desvelado la autentica significacioacuten del acto por el cual el hombre asume en libertad el despojamiento que acarrea su muerte no en abstracto por consiguiente pues laquoel autodesprendimiento radical de la muerte es un aspecto de la realizacioacuten de la gracia en cuanto fe esperanza y amorraquo129

323 Esperanza en el futuro

Digamos una palabra final sobre la versioacuten del hombre al futuro como instancia antropoloacutegica para la teologiacutea Una vez maacutes hemos de apuntar que en la caracterizacioacuten cristiana del tiempo histoacuterico como tiempo de salvacioacuten o avance hacia el futuro absoluto ndashlaquoque no es sino otro nombre para lo mentado con la palabra lsquoDiosrsquoraquo130ndash entra de nuevo en juego el ciacuterculo hermeneacuteutico entre antropologiacutea metafiacutesica y teologiacutea Uno de los constitutivos que definen la estructura inmanente del espiacuteritu finito en cuanto espiacuteritu encarnado es el de la temporalidad La esperanza cris-tiana en un futuro absoluto laquoimplica la conviccioacuten de que el hombre vive en el tiempo de manera distinta a como viven las realidades infrahuma-nasraquo131 El hombre no es una cosa limitada a la dimensioacuten temporal del presente Es el sujeto que poseyeacutendose a siacute mismo y disponiendo de siacute en libertad posee su tiempo como totalidad en cuyo presente se condensa lo realmente decisivo de la realizacioacuten de la historia personal como antici-pacioacuten de futuro A esto es a lo que llama Rahner el laquoconsuelo del tiem-poraquo en que laquono perdemos nada sino que ganamos continuamenteraquo132 Esta asuncioacuten intriacutenseca de la temporalidad que es propia del hombre como espiacuteritu encarnado permite su concepcioacuten como espiacuteritu libre o laquoser histoacutericoraquo133 En efecto por su condicioacuten esencialmente encarnada el espiacuteritu del hombre opera en el marco espacio-temporal en el que lo ubica su corporeidad Encarnacioacuten e historicidad se corresponden en el

128 Id Sentido teoloacutegico de la muerte 78129 Id La muerte del cristiano in MyS V 463130 Id Utopiacutea marxista y futuro cristiano del hombre in ET VI 74131 Id Consuelo del tiempo in ET III 154132 Ibid 165133 K RAHNER Oyente de la palabra 176

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hombre Y como venimos mostrando en virtud de su libertad es posible definir al hombre como proyecto es decir no como entidad estaacutetica o fijada de antemano sino como posibilidad de autodevenir hacia un estado de realizacioacuten vital definitivo

Ahora bien para Rahner solo la lectura del mundo y el hombre desde la historia de la salvacioacuten aporta al hombre (al creyente) la certeza de que el suyo es un tiempo absolutamente consolado es decir laquoque no corre hacia el vaciacuteo sino que encuentra el futuro absoluto se mueve incluso en eacutelraquo134 aunque sea en la aparente vulgaridad del cada diacutea135 El cristianis-mo posee un concepto de tiempo que las futurologiacuteas seculares descono-cen En efecto el cristiano cree en un futuro en el que todo aquello que es libremente actuado tendraacute validez eterna en Dios porque el hombre proyecta trascendentalmente su naturaleza a la luz de laquoun futuro absoluto que per definitionem no puede ser ni hecho ni planificado en tanto que le deja venir sobre siacuteraquo136 porque laquolo que el cristianismo llama gracia no es otra cosa que la autocomunicacioacuten de Dios como futuro absoluto en ese estado en que la historia de su llegada y aceptacioacuten dura todaviacutearaquo137 por uacuteltimo porque lo que el cristianismo llama encarnacioacuten del Logos divino en Jesucristo indica de modo preciso que objetivamente en eacutel y para nosotros esa autocomunicacioacuten de Dios en cuanto futuro absoluto del mundo se manifiesta tan histoacutericamente que se hace como dada y como irreversible captable y creiacuteble por la experiencia categorial de la humanidad138

Por ello frente a otros proyectos utoacutepicos el cristianismo contempla al hombre en su dignidad inviolable no sacrificable a ninguna promesa de un futuro fruto de un caacutelculo o planificacioacuten intramundana Es maacutes al trabajo en favor de ese futuro intramundano laquole otorga su uacuteltima radical seriedad en su doctrina de la unidad del amor a Dios y al proacutejimo declara que la positiva relacioacuten para con el hombre es un momento esencial indis-pensable es mediacioacuten irreemplazable para la relacioacuten con Dios futuro absoluto (lsquosalvacioacutenrsquo)raquo139

134 Id Utopiacutea marxista y futuro cristiano del hombre in ET VI 72135 Cfr Id De la necesidad y don de la oracioacuten 57-69136 K RAHNER Utopiacutea marxista y futuro cristiano del hombre in ET VI 73137 Ibid 75138 Ibid139 Ibid 77

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41 Laantropologiacuteafilosoacuteficaimplicadaenlateologiacutea

Ante todo en relacioacuten con los presupuestos para el mensaje revelado del cristianismo hemos de decir sobre el hombre es persona sujeto [hellip] Una relacioacuten personal con Dios una auteacutentica historia dialogiacutestica entre Dios y el hombre la recepcioacuten de la propia salvacioacuten singular y eterna el concepto de una responsabilidad ante Dios y su juiciohellip todas estas afirmaciones del cristianismo ndashindependientemente de que ellas mismas deban interpretarse todaviacutea con mayor precisioacutenndash implican que el hombre es lo que queremos decir aquiacute persona y sujeto140

Es esta una afirmacioacuten que el teoacutelogo hace en su Curso fundamental sobre la fe al plantear una siacutentesis de la globalidad del mensaje cristiano a la luz de una conviccioacuten esencial laquoEste mensaje llama al hombre a situarse ante la verdad real de su esencia ante la verdad en la que eacutel estaacute irreme-diablemente cautivo aunque a la postre este cautiverio sea la anchura in-finita del misterio incomprensible de Diosraquo141 Considerar la antropologiacutea como presupuesto de la escucha e inteleccioacuten de la palabra divina o sea la vigencia mutua entre la estructura esencial del hombre histoacutericamente constituida y el juicio de Dios sobre el hombre expresado en la revelacioacuten (trascendental e histoacuterica) demanda la elaboracioacuten de una antropologiacutea fi-losoacutefica que ha de basar su meacutetodo de trabajo en dos pilares irrenunciables

En primer lugar el conocimiento natural que es requisito del conoci-miento de fe no puede impugnar la auteacutentica metafiacutesica pues ella laquoestaacute dada ineludiblemente con la existencia del hombre [hellip] como reflexioacuten sobre esas implicaciones trascendentales dadas innegablemente que lle-van en siacute su luz y su seguridad y que de modo necesario estaacuten puestas junto con una realizacioacuten libre de la existenciaraquo142 Sin olvidar no obstan-te que dondequiera que el hombre se experimenta a siacute mismo en su tras-cendencia como el que pregunta como el inquietado por esa irradiacioacuten del ser como el expuesto a lo inefable no puede entenderse como sujeto en el sentido de sujeto absoluto sino solamente en el sentido de recepcioacuten del ser y a la postre de la gracia143

140 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 44141 Ibid 43142 K RAHNER Ideologiacutea y cristianismo in ET VI 60143 Id Curso fundamental sobre la fe 53

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Para Karl Rahner ndashcomo veremos maacutes adelantendash al conocimiento de fe contribuye una antropologiacutea de la libertad en la que el hombre como sujeto de esperanza y de promesa laquose concibe a siacute mismo sobre la base de un futuro propio a desarrollar creativamente y no como sujeto que en su misma aprioridad tenga ya conocimiento anticipado de su futuro desde siempreraquo144 Desde este punto de vista afirmar que el hombre es persona significa en primer lugar hablar de eacutel como sujeto indeducible a partir de lo que estaacute a su disposicioacuten laquoel insuprimiblemente anterior y maacutes originarioraquo145 confiado a siacute mismo y capaz de cuestionarlo todo capaz en este sentido de rebasarse mostraacutendose como laquoel ser de hori-zonte infinitoraquo146

En segundo lugar el conocimiento natural que es requisito del co-nocimiento de fe tiene que atender a la historia y la experiencia faacutectica como mediacioacuten insoslayable de las condiciones trascendentales que posibilitan al sujeto su auto-conocimiento (persona) y auto-disposicioacuten (libertad) la interrogacioacuten trascendental no desprecia la experiencia de-limitada en el espacio y el tiempo que el hombre hace de siacute puesto que laquoun disentildeo adecuado del hombre (de lo que es y de lo que debe ser) hecho por una razoacuten aprioriacutestica y racional no es posibleraquo147 Sin su realizacioacuten concreta laquoel concepto de hombre queda lsquovaciacuteorsquo y no tiene plasticidad ni por tanto fuerza histoacutericaraquo148 laquoEl hombre es el espiacuteritu que se expe-rimenta como tal en cuanto no se experimenta como espiacuteritu puroraquo149 sino que en su inevitable ligazoacuten a lo concreto permanece siempre en camino Por esta razoacuten define Rahner la trascendentalidad a que recu-rre en su antropologiacutea como laquoaquella apertura aprioriacutestica del sujeto al ser en general que se da precisamente cuando el hombre cuidando y aprovisionando temiendo y esperando se experimenta como expuesto a la multiplicidad de su mundo cotidianoraquo150 Por consiguiente bajo esta segunda consideracioacuten laquola personalidad del hombre no se puede relegar a una interioridad absoluta Necesita imprescindiblemente un espacio de realizacioacuten que aunque en cierto modo le es lsquoexteriorrsquo (cuerpo tierra

144 Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 100145 Id Curso fundamental sobre la fe 50146 Ibid 51147 Id Dignidad y libertad del hombre in ET II 233148 Ibid 233149 Id Curso fundamental sobre la fe 51150 Ibid 54

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economiacutea signos siacutembolo Estado) es esencialmente indispensable y por eso debe ser configurado de tal modo que permita la autorrealizacioacuten personalraquo151

Solo a partir de este doble horizonte ndashteniendo en cuenta que el hombre uacutenicamente sabe de siacute mismo (meacutetodo trascendental) en sus concretas determinaciones (experiencia histoacuterica) que es don y misioacutenndash puede de-finir la teologiacutea cabalmente al hombre como persona aquel ser en cuya estructura natural ndashconsiderada en el conjunto de sus principios forma-les espiritualidad libertad individualidad corporeidad intersubjetivi-dad mundanidad152ndash se columbra su impronta sobrenatural es decir la gramaacutetica de la autocomunicacioacuten gratuita de Dios al hombre (o existen-cial sobrenatural en cuanto don indebido de gracia) que tambieacuten se reve-la en la entrantildea del espacio y el tiempo y de modo irrepetible y definitivo en Jesucristo La persona se define pues como dialeacutectica entre trascen-dentalidad e historicidad al preguntar a la revelacioacuten cuaacutel es su identidad y destino ante Dios En el ser personal se visibiliza la dialeacutectica que mar-ca la entrantildea del cristianismo laquoen su dedicacioacuten a la historia como real acontecimiento salviacutefico y su naturaleza trascendental en cuanto patencia seguacuten gracia hacia el Dios absolutoraquo153 Veamos con maacutes detalle los pasos que conducen a esta siacutentesis que acabamos de avanzar

42 El hombre unidad de espiacuteritu y materia

Como hemos visto Rahner sigue a santo Tomaacutes en su consideracioacuten de la capacidad humana de ser cabe siacute ndashlaquoreditio completa subiecti in seip-sumraquo154ndash como indicativa de su espiacuteritu en tanto identidad de ser que corresponde al ente humano Y por tanto como indicativa de la distancia entre subjetividad y objetividad Como sujeto espiritual el hombre no estaacute recluido en el horizonte de lo inmediato pues la aprehensioacuten de lo objetivo como ser-cabe-siacute y el libre obrar funcionan en eacutel como dinaacutemica de orientacioacuten ilimitada hacia el ser en general que Rahner denomina anticipacioacuten Y puesto que se habla de una apertura ilimitada en la anti-cipacioacuten se afirma simultaacutenea y atemaacuteticamente laquola existencia de un ente

151 Id Dignidad y libertad del hombre in ET II 235152 Cfr Id Hombre III in SM III 499-502153 Id Ideologiacutea y cristianismo in ET VI 64154 Id Oyente de la palabra 62

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de absoluta lsquoposesioacuten del serrsquo es decir la existencia de Diosraquo155 Dicho esto cabe antildeadir que el hombre es orientacioacuten al absoluto no en abstrac-to sino como espiacuteritu en el mundo como espiacuteritu en la carne Espiacuteritu y materia son laquocomo momentos de un hombre en los que la esencia de este originariamente una se descompone y se despliegaraquo156 La relacioacuten entre espiacuteritu y materia se muestra en el ser humano en su maacutes estrecha unidad A ella llega Rahner desde un doble punto de vista

1 Esclareciendo como ya hemos notado la capacidad cognoscitiva que es propia del espiacuteritu quien si es apertura al ser en general y por tanto a Dios lo es siempre y de modo insoslayable en el encuentro con lo mate-rial que sucede en la sensibilidad157 nuestra experiencia trascendental del mundo es ya explicitud de esa relacioacuten de co-presencia entre materia y es-piacuteritu cuerpo y alma El hombre experimenta su cuerpo como una realidad tan cercana a siacute que puede ser identificado como principio de actuacioacuten del alma en lo diverso o alteridad del alma158 De hecho la afirmacioacuten de que la comunicacioacuten entre materia y espiacuteritu es en el hombre un pro-ceso que sucede en la forma originaria del conocimiento trascendental no pierde su fuerza porque se afirme que lo material no es aprehendido primariamente por medio del espiacuteritu sino por medio de los sentidos del hombre Porque si la sensibilidad estaacute reconocida como realidad material y sin embargo consciente se nos concede entonces en el fondo lo que pretendemos Y ademaacutes el conocimiento sensible no puede ser entendido sino como condicioacuten de la posibilidad del conocimiento espiritual159

De esta percepcioacuten de lo corpoacutereo participa una buena parte de la sen-sibilidad filosoacutefica contemporaacutenea coincidente con la tradicioacuten filosoacutefica y teoloacutegica cristiana claacutesica (que laquoretrotrae la materia en su esencia y en su ser enteros al acto creador de Dios al que llamamos espiacuterituraquo)160 al observar que la materialidad de la existencia humana rebasa el estatus de biologiacutea manteniendo una relacioacuten de especial afinidad con el fondo personal de la vida humana

155 Ibid 86156 Id La cristologiacutea dentro de una concepcioacuten evolutiva del mundo in ET V 173 Cfr

Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 55 K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 304-305

157 Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 69158 Id Para una teologiacutea del siacutembolo in ET IV 289159 Id La unidad de espiacuteritu y materia en la comprensioacuten de la fe cristiana in ET

VI 183160 Ibid 183

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2 Mediante la concepcioacuten de materia y espiacuteritu como parte de una misma historia del mundo cuyo devenir puede interpretarse como movi-miento del espiacuteritu que permite pensar la materia como de y para el espiacute-ritu ndashlaquoespiacuteritu congeladoraquondash161 aun en su esencial diversidad Para evitar farragosas repeticiones no insistimos en estos aspectos pues del primero ya hemos hablado al explicar el mecanismo de la trascendentalidad huma-na y del segundo nos ocuparemos en el capiacutetulo final al poner en diaacutelogo filosofiacutea y teologiacutea de la vida

A la luz de esa dualidad nativa e inexcusable entre espiacuteritu y materia puede iluminarse la magnitud antropoloacutegica de la concepcioacuten tomista del alma como forma del cuerpo Foacutermula en que no cabe dualismo alguno pues en ella se entiende laquocorpus en sentido tomista es decir como mate-ria prima como la vacua potencia real de serraquo162

Si considero el problema desde la perspectiva tomista tengo que afir-mar que lo que yo experimento como la corporeidad del hombre es ya realidad del espiacuteritu diluido en una esfera misteriosa ndashesclarecida solo metafiacutesicamentendash que el filoacutesofo escolaacutestico y tomista llama materia pri-ma El cuerpo es ya espiacuteritu considerado en aquel momento de la autorrea-lizacioacuten en el que la espiritualidad personal se hace presente para poder encontrarse de una forma inmediata y concreta con todo lo que es distinto de siacute misma La corporeidad no es algo sobreantildeadido al espiacuteritu sino que es el ser concreto del espiacuteritu mismo realizado en el espacio y el tiempo La corporeidad humana no es algo que existiriacutea de antemano sino que es la automanifestacioacuten del espiacuteritu dentro del espacio y el tiempo163

Retomando la distincioacuten espiacuteritu-materia continuacutea nuestro autor laquoEl espiacuteritu humano es vere et essentialiter corpus informans para decirlo con las palabras del Concilio de Vienne El alma siendo espiacuteritu se intro-duce de por siacute per se en la materiaraquo164 El cuerpo asiacute entendido no es en el espacio humano una realidad indiferente (Koumlrper) sino que es en cuanto apropiado por el alma (Leib)165 que a su vez sigue siendo irreductible a

161 Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 74162 Id Oyente de la palabra 163163 Id El cuerpo y la salvacioacuten 86164 Id Oyente de la palabra 169 Cfr DH 902165 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 148 La distincioacuten

que hace Rahner entre Leib (cuerpo viviente) y Koumlrper (cuerpo fiacutesico) resulta claacutesica en la moderna antropologiacutea filosoacutefica occidental Cfr el ejemplo paradigmaacutetico de M SCHELER Eacutetica nuevo ensayo de fundamentacioacuten de un personalismo eacutetico Madrid 2001 530-550

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lo material esto es en unidad sustancial Por ello laquoel espiacuteritu humano no es lsquoespiacuteritu purorsquo sino esencialmente lsquoalma-espiacuteritursquo que por su vincula-cioacuten al cuerpo y por consiguiente en virtud de su vinculacioacuten al espacio y al tiempo se hace especiacuteficamente lsquoespiacuteritu humanorsquoraquo166 Aunque laquoempiacute-ricamente se puede encontrar y descubrir al hombre entero no podriacuteamos conocerlo con suficiente acierto y amplitud si no se le entendiera como persona espiritual dotada de individualidad auteacutentica e insustituibleraquo167 Pasos decisivos de la fe demandan este parentesco y mutua trabazoacuten en-tre espiacuteritu y materia la pregunta por el Logos en su entrada en lo finito seguacuten la cristologiacutea168 o la inteligencia del estado de plenitud a que estaacute destinada la materialidad humana seguacuten la escatologiacutea169

43 Persona y naturaleza

En sintoniacutea de sentido con la relacioacuten entre espiacuteritu y materia y con-tribuyendo a la subsiguiente definicioacuten del hombre ndashapenas citadandash co-mo laquopersona espiritualraquo se encuentra la definicioacuten rahneriana de natu-raleza humana

Procedemos a su examen hacieacutendolo en primer lugar bajo el prisma de la distincioacuten entre naturaleza y persona que nuestro teoacutelogo entiende laquoen el sentido de la metafiacutesica moderna seguacuten la filosofiacutea existencialraquo170 Es decir como el iacutendice de finitud que revela la distancia que el hombre ex-perimenta en siacute entre lo que es (don) y lo que desea ser (misioacuten)171 Rahner recuerda que la raiacutez metafiacutesica de la diferencia entre persona y naturaleza

166 K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 218167 Ibid 13168 Cfr K RAHNER La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 56 K RAHNER -

H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 149169 Cfr K RAHNER Sentido teoloacutegico de la muerte 43-52 K RAHNER - H VOR-

GRIMLER Diccionario teoloacutegico 14-15 A propoacutesito del dogma de la resurreccioacuten de la carne afirma en otro lugar nuestro autor laquoEs ist mit diesem Dogma schon gesagt dass der Mensch sein geistiges und auch sein uumlbernatuumlrliches Leben nicht vollziehen kan aus-ser in einer Verleiblichung dieses Vollzuges in der materiellen Wirklichkeit ausser in einer Hinwendung zur Welt in einer Ein-bildung des Geistigen in das Materielleraquo (K RAHNER Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 383)

170 K RAHNER Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 364171 No resulta difiacutecil asociar a esta visioacuten de nuestro teoacutelogo la resonancia de afirmacio-

nes como la de Jaspers laquoLa existencia del hombre no transcurre como los procesos naturales Pues su libertad clama por una direccioacutenraquo (K JASPERS La filosofiacutea desde el punto de vista de la existencia Madrid 91981 56) o Heidegger cuando se refiere al comprender como inter-pretacioacuten es decir en su alcance existencial como poder-ser del Dasein ante el mundo Cfr M HEIDEGGER Ser y tiempo sect 32 Madrid 2003 172-177

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no reside tan solo en la vertical en la distincioacuten entre esencia y existencia sino que es necesario contemplar tambieacuten esa tensioacuten con santo Tomaacutes en su horizontalidad en cuanto ente habitado primitivamente por la dife-rencia real entre la materia y el espiacuteritu dos realidades que poseen un en siacute propio El espiacuteritu es irreductible a la materia en virtud de sus trazos fundamentales (experiencia de autoconciencia y libertad) Pero aunque el acto libre procede del centro personal del hombre y decide sobre todo el sujeto el espiacuteritu no puede manifestarse plenamente en la materia hacien-do de ella reflejo inequiacutevoco de su centro rector172 laquola persona no reasume nunca toda su naturalezaraquo173 pues laquosufre en ese determinarse a siacute misma la oposicioacuten de la naturaleza pre-existente a la libertad y no logra nunca plenamente que todo lo que el hombre es sea realidad y expresioacuten de lo que eacutel entiende por lsquosiacute mismorsquo en el nuacutecleo de su personaraquo174 No obstante para la naturaleza del hombre no cabe otro calificativo que el de personal frente a aquella que es no-personal o infrahumana incapaz de auto-conciencia y auto-disposicioacuten175 Su consistencia o naturaleza se le revela al hombre como impulso de apertura que generado en su intimidad se orienta a la total posesioacuten de siacute en el paso viviente por lo otro

Desde el aacutengulo de la relacioacuten teoloacutegica entre naturaleza y gracia y al hilo del reproche de extrincesismo176 que la teologiacutea contemporaacutenea eleva a la concepcioacuten neo-escolaacutestica de la gracia Rahner elabora una sugestiva distincioacuten para la antropologiacutea teoloacutegica entre esencia concreta y naturaleza En efecto sostener ante la naturaleza humana el caraacutecter in-condicionado e indebido de su ordenacioacuten a la visioacuten divina no niega que esta tiene una importancia determinante para el hombre (pues pertenece a la intentio divina al crearlo) Frente a la oposicioacuten que la teologiacutea neoes-

172 Cfr K RAHNER Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 365173 Ibid 364174 Ibid 370 En esta tensioacuten seguacuten Rahner se alza la comprensioacuten teoloacutegica de la

concupiscencia El hombre que ha recibido de Dios (como gracia) el don de disponer de siacute como insercioacuten completa de su ser en la decisioacuten personal hacia el bien en virtud de la fuerza de gravedad de la naturaleza laquonunca posee de manera total esa interioridad recogida de toda su vida en el acto uacuteltimo de su ser maacutes iacutentimo Y este es el iacutendice de su finitud y pertenencia al mundo de su esencia espiritual-sensibleraquo (Ibid 375)

175 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 474176 K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 300 Id Na-

turaleza y gracia in ET IV 200-203 Conviene recordar que la relacioacuten entre naturaleza y gracia ocupa un lugar destacado en la teologiacutea catoacutelica de la primera mitad del siglo XX Una siacutentesis histoacuterico-criacutetica al respecto K-H MENKE Teologiacutea de la gracia El criterio de ser cristiano Salamanca 2006 199-232

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colaacutestica ha desarrollado entre naturaleza y sobrenatural Rahner propone el concepto de laquoesencia uacutenica y concretaraquo177 o laquonaturaleza efectivaraquo178 del hombre mientras que el teacutermino laquonaturalezaraquo queda reservado al sentido en que la teologiacutea claacutesica habla de naturaleza pura Al calificar la esencia humana con las notas de concrecioacuten y efectividad Rahner reconoce que no solo pertenece a dicha esencia el espiacuteritu en su trascendencia y liber-tad sino muchas maacutes cosas del hombre como esencialmente suyas su mundaneidad su corporeidad su pertenencia a una comunidad de seres semejantes a eacutel [hellip] Y estos laquoexistencialesraquo de su naturaleza concreta ndashde su naturaleza laquohistoacutericaraquondash no son haacutebitos oacutenticos totalmente extramuros de la conciencia sino que se hacen valer en la experiencia del hombre Eacutel no puede separarlos sencilla e inequiacutevocamente mediante una simple re-flexioacuten sobre siacute mismo ndashcon la luz de la razoacuten naturalndash de la espiritualidad natural que es su naturaleza179

Es esta amalgama de muacuteltiples contornos lo que ha de considerarse dotacioacuten de gracia Sin duda es teoloacutegicamente legiacutetimo emplear aquel contra-concepto de naturaleza (pura) entendido como laquorestoraquo180 que que-da tras haberle sido sustraiacuteda a la humanidad su capacidad para la recep-cioacuten de la gracia pues la naturaleza humana (creada) aun abierta a lo sobrenatural no supone su exigencia incondicionada Sin embargo su legitimidad no oculta seguacuten Rahner la dificultad de una delimitacioacuten precisa de una naturaleza asiacute181 El hombre laquotiene de contar con que qui-zaacutes mucho de lo que eacutel experimenta de siacute concretamente y que casi invo-

177 K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 305178 Id Naturaleza y gracia in ET IV 218179 Ibid 218-219180 Cfr K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 315-316 Piacuteo

XII previene en Humani generis frente a los que sostienen que Dios no ha podido crear seres inteligentes sin ordenarlos y llamarlos a la visioacuten beatiacutefica (cfr DH 3891)

181 laquoIl relativo senso-proprio della natura ndashmatiza Balthasar ante la concepcioacuten de Rah-nerndash egrave sufficientemente garantito se essa viene vista come una sfera di senso oggettivamen-te autentica particolare e relativamente autonoma allrsquointerno della creazione generale se viene vista ad esempio come la sfera della lsquoculturarsquo ma anche come la sfera dellrsquoIo-Tu e dellrsquoUomo-Donna una sfera di senso provvisorio non direttamente deducibile dalla grazia ma piuttosto a disposizione della grazia quale suo presupposto senza che per questo si de-bba affermare categoricamente che il contenuto di senso di questa sfera egrave talmente grande e assoluto da bastare anche percheacute Dio venga posto per se stesso nellrsquoesistenzaraquo (HU VON BALTHASAR La teologia di Karl Barth Milano 1985 321) El problema de una natura pura es en realidad un problema del hombre no de Dios por ello propone Balthasar adoptar no el punto de vista de una teologiacutea creatural como hace Rahner sino el de una teologiacutea divina que permite otro aacutengulo de comprensioacuten tanto de la tensioacuten de Adaacuten a Cristo como de aquella otra de la razoacuten creada a la fe de la alianza

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luntariamente estaacute tentado a atribuir a su lsquonaturalezarsquo es ya efectivamente una consecuencia en eacutel de lo que a partir de la teologiacutea tiene que conocer como gracia indebidaraquo182 Rahner prefiere hablar de concrecioacuten y efecti-vidad para sortear la idea de una teoacuterica naturaleza (pura) y presentar al hombre en la diversidad de rostros que posee su identidad efectiva como aquel ser en cuyo centro maacutes iacutentimo se ubica la llamada a la comunioacuten con Dios Asiacute el existencial sobrenatural tiene su lugar en el ser concreto del hombre Y es posible conocer a este como potentia oboedentialis para la vida eterna entendiendo dicha potencia (1) no como mera carencia de contradiccioacuten sino como positiva ordenacioacuten al sobrenatural (2) no parcialmente como suceso noeacutetico sino como espacio concomitante de aquel conocimiento libertad y amor humanos que forman parte de una existencia habilitada para acercarse a aquella plenitud de ser que se ha re-velado como laquoAmor y no como noesis noeseosraquo183 Digamos una palabra sobre ambas perspectivas

Cuanto maacutes se adentra la antropologiacutea metafiacutesica en las dimensiones de la naturaleza especiacuteficamente humana (unidad de alma-cuerpo inter-per-sonalidad conciencia y libertad) tanto maacutes se pone de manifiesto que se trata de una realidad difiacutecilmente identificable como puramente natural en sentido teoloacutegico184 La presentacioacuten metafiacutesica de la persona como ser abierto hacia lo alto en la mediacioacuten de lo concreto no hace sino revelar su caraacutecter creatural es decir de radical donacioacuten y novedad en medio del mundo de modo que ante la posibilidad y realidad de la locucioacuten de su Creador no sabriacutea delimitar en siacute una demarcacioacuten concreta para el reposo del discurso divino Para ser oyente de la Palabra el hombre ha de ser na-turalmente sujeto185 aquel a quien la gracia de la Palabra supone pero tam-

182 K RAHNER Naturaleza y gracia in ET IV 219183 Ibid 223184 Como tambieacuten cabe rechazar una naturaleza pura en sentido filosoacutefico laquoLo que

llamamos filosofiacutea podraacute ser en cierto sentido filosofiacutea lsquopurarsquo ya que no toma ninguacuten conte-nido y ninguna norma materiales de la revelacioacuten seguacuten ministerio socialmente constituida eclesiaacutestica especial y temaacutetica Pero no lo seraacute en el sentido de que la existencia elucidada no temaacuteticamente desde la cual vive y a la que nunca alcanza adecuadamente y que tampo-co puede reemplazar contenga solo elementos que procedan de la esencia natural humana La abisalidad del hombre que de mil maneras es el tema de la filosofiacutea es el abismo que ha abierto la gracia de Dios y que alcanza hasta los abismos divinos precisamente cuando el hombre que filosofa no es capaz de reflexionar exactamente sobre ese hecho de su existencia de distinguir naturaleza y gracia en la realizacioacuten de su existencia espiritualraquo (K RAHNER Filosofiacutea y teologiacutea in ET VI 90)

185 Lo que la razoacuten concentra en el dinamismo ilimitado del espiacuteritu humano y la fe llama designio de Dios en su autocomunicacioacuten al hombre

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bieacuten eleva y ahonda para llevarlo a su plenitud en la participacioacuten de la vida divina Y si esa participacioacuten en la vida divina donde reside la plenitud del ser personal186 representa el uacutenico fin en orden al cual se orienta la esencia uacutenica y concreta de la subjetividad natural y creatural aquella plenitud de vida divino-personal resulta a su vez fundamento y posibilitacioacuten de la vida y ser personal del hombre quien acercaacutendose a Dios en la actualidad de la gracia no disminuye sino que se fortalece y crece como quien ha sido puesto por el Amor en la existencia El hombre no tiene experiencia de siacute mismo maacutes en que en el aacutembito de la amorosa voluntad sobrenatural de Dios si bien no puede decirse que esta sea exigencia de aquella

44 Persona y libertad

Una de las caracteriacutesticas de la esencia natural del hombre en su cua-lidad personal en la que Rahner fija sobre todo su atencioacuten es la libertad En efecto

Libertad es autorrealizacioacuten de la persona en un material finito ante el Dios infinito Es por tanto tambieacuten un dato de la teologiacutea de la antropologiacutea teoloacutegica Sin ella en efecto no se situariacutea el hombre ante Dios como operante y responsable como socio e interlocutor ni podriacutea ser ante Dios sujeto de culpa ni de redencioacuten ofrecida y aceptada187

Desde el punto de vista de la antropologiacutea trascendental el existencial de la libertad encarna a la perfeccioacuten la tensioacuten entre el caraacutecter originario (libertad manantial) y la objetivacioacuten categorial (libertad emanada) que de-termina la autorrealizacioacuten del ser personal en camino hacia su plenitud188 Por ello Rahner muestra en su obra que a la hora de proceder a la carac-terizacioacuten personal del hombre la libertad tiene una importancia decisiva que emerge tanto desde el punto de vista metafiacutesico como teoloacutegico Y asiacute a la luz del hondo significado que posee la tensioacuten naturaleza-espiacuteritu en que se resuelve la existencia humana la libertad no puede ser entendida como mera facultad de elegir entre varias opciones u objetos sino como (1) libertad entitativa189 propia del ser del ente espiritual al conocer y deci-

186 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 553-558187 K RAHNER Dignidad y libertad del hombre in ET II 242188 Id Curso fundamental sobre la fe 57 189 Cfr Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 202 Id Culpa-responsabilidad-castigo

en la visioacuten de la teologiacutea catoacutelica in ET VI 219-220

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dir que una vez maacutes seguacuten la definicioacuten de santo Tomaacutes es capaz de una laquoreditio completa subiecti in seipsumraquo190 y (2) laquoopcioacuten fundamentalraquo191 que modela la vida que media en lo categorial el anuncio de una decisioacuten de caraacutecter total y radical Libertad que no es ajena a las condiciones in-teriores y exteriores en medio de las cuales ha de ejercitarse192 Y aunque sobre esos factores condicionantes no tenga el hombre poder alguno este ndashque se define como empresa (persona) en lo dado (naturaleza)ndash mediante el ejercicio de su libertad se construye desde su maacutes iacutentimo dentro hasta tal punto que puede concluirse que en la accioacuten de su libertad iacutentimamen-te personal laquose trata del hombre mismo y de su posicioacuten respecto a Dios (ambas cosas en unidad indisoluble)raquo193

Por ello y a la luz de la revelacioacuten el teoacutelogo ha de reconocer que laquola verdadera libertad de eleccioacuten [hellip] solo puede verse claramente en el cristianismo porque solo en eacutel es cada uno el ser uacutenico de vigencia eter-na ndashen el amor personal de Dios al hombrendash es aquel que con la maacutes alta responsabilidad personal y por tanto con libertad se debe realizarraquo194 Seguacuten el ordo intentionis de la historia de la salvacioacuten la libertad del hom-bre se despliega en el espacio abierto por la originaria decisioacuten divina de elevar sobrenaturalmente la aptitud trascendental de la criatura (potentia

190 Id Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 363 191 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 203 Id Culpa-responsabilidad-castigo en la

visioacuten de la teologiacutea catoacutelica in ET VI 221192 Cfr Id Teologiacutea del poder in ET IV 455 193 Id Culpa y perdoacuten de la culpa como regioacuten fronteriza entre la teologiacutea y la psico-

terapia in ET II 263-264 Al inscribir la libertad en el seno de la loacutegica autotrascendente de la accioacuten humana que se funda en el dinamismo de autotrascendencia de la espiritualidad del hombre Blondel advierte que la libertad no es ajena al conflicto que se da en la volicioacuten humana entre laquola voluntad que quiere quod procedit ex voluntate y la voluntad querida quod voluntatis objectum fitraquo Aunque la libre decisioacuten se actuacutea en la mutua dependencia de cuerpo y alma a la que parece rigurosamente sujeta la accioacuten humana en realidad la accioacuten querida es principio de una accioacuten que quiere ser cada vez maacutes libre por cuanto laquola accioacuten hace parti-cipar al organismo material de la intencioacuten que la animaraquo y asiacute garantiza su sinceridad como movimiento de progresiva liberacioacuten que tiende a un fin del que se nutre fin del que no se puede excluir la apertura al orden divino del mundo que se presenta como determinacioacuten de la libertad hacia la plenificacioacuten de su dinamismo interior esto es como libertad para la Liber-tad Dios laquoEn la accioacuten voluntaria se opera un secreto maridaje entre la voluntad humana y la voluntad divina Ser llamado a la vida de la razoacuten y de la libertad significa participar en la libre necesidad de Dios que no puede menos de quererse a siacute mismo Nosotros tampoco podemos menos de querernos a nosotros mismos el ser que recibimos como propiedad nuestra es de tal naturaleza que es imposible no aceptarloraquo Rechazaacutendolo el hombre desmentiriacutea y cancelariacutea su aspiracioacuten a los bienes eternos Las citas se han tomado de M BLONDEL La Accioacuten Ensayo de una criacutetica de la vida y de una ciencia de la praacutectica Madrid 2006 167225418

194 K RAHNER La libertad en la Iglesia in ET II 95

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oboedentialis) hacia la visioacuten de Dios como su fin uacuteltimo195 A esta orien-tacioacuten permanente del espiacuteritu finito a la Trascendencia es a lo que llama Rahner como venimos diciendo existencial sobrenatural El dinamismo del espiacuteritu humano se alimenta de lo que en teologiacutea se denomina gracia es decir aquella presencia de Dios en el hombre (y el mundo) que aunque no sea exigible por eacutel196 penetra iacutentimamente en eacutel como determinacioacuten real de su concrecioacuten existencial e histoacuterica es fruto de la obra redentora de Jesucristo y la obra santificadora del Espiacuteritu197

Dicho esto es posible hablar de la libertad humana como toma de postura ante Dios incluso allaacute donde no haya sido reconocida su revela-cioacuten histoacuterica En Dios percibe la libertad personal su uacuteltimo de-doacutende y hacia-doacutende198 y por tanto la imposibilidad de rehuir una respuesta ya sea positiva o negativa a la demanda inscrita por la Trascendencia en el santuario de su intimidad La libertad creada ha sido hondamente herida por el pecado y la muerte mas no abandonada por Dios a su suerte pues en su Hijo ha dado noticia de esa decisioacuten irrevocable definitiva de libertad a la libertad [hellip] Esa libertad que es Cristo y que Cristo otorga se la apropia el hombre al someterse obedientemente a su llamada (Gal 513) en la fe (y en su perceptibilidad que es el bautismo) al acontecimiento que abre la caacutercel del mundo la encarnacioacuten muerte y resurreccioacuten del Hijo199

En su esencia por tanto la libertad cristiana estaacute estructurada esca-toloacutegicamente200 ya realmente iniciada alliacute donde el hombre espera de forma activa junto con toda la creacioacuten su liberacioacuten definitiva como participacioacuten en laquola gloriosa libertad de los hijos de Diosraquo (Rom 821) donde debe desembocar nuestra libertad liberada por obra de Cristo Dado que el uacuteltimo sentido de la revelacioacuten en Jesucristo es la manifestacioacuten de la doxa Theou mediante la llamada que saca a los hombres de este mundo

195 Id Sobre el concepto escolaacutestico de gracia increada in ET I 336 Id Curso fun-damental sobre la fe 102-103

196 Si se quiere respetar su iacutendole gratuita ha de concederse que no seriacutea teoacutericamente ilegiacutetimo pensar al hombre sin la gracia como natura pura Cfr K RAHNER Sobre la rela-cioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 315-316 Id Naturaleza y gracia in ET IV 221-223 Id Sobre el concepto de misterio en la teologiacutea catoacutelica in ET IV 60

197 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 387-389198 K RAHNER Oyente de la palabra 191 Id Dignidad y libertad del hombre in ET

II 242 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 196-200 Id Naturaleza y gracia in ET IV 216 Id Libertad III in SM IV 314 Id Hombre III in SM III 497

199 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 213200 K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 389

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y los introduce en la vida de Dios [hellip] Dios se enfrenta inmediatamente al hombre con una exigencia y una llamada que arranca al hombre de su oacuterbita natural que transcurriacutea dentro del horizonte del mundo201

Es asiacute como queda impresa en la identidad y destino del hombre una marca de trascendencia que solo puede sobrepujar la tentacioacuten de au-to-clausura de lo finito en la abierta y sincera aceptacioacuten existencial del maacuteximo exponente de laquola redondez en que el mundo deseariacutea descan-sarraquo202 la muerte Cuando el hombre afronta pasivamente su muerte como exposicioacuten a la incidencia amenazante y destructiva de un suceso exterior solo cabe ante ella impotencia y extrantildeeza En cambio cuando el pade-cimiento mortal que se cierne irremediablemente sobre el ser y vivir del hombre no se resuelve en la pura de-potenciacioacuten fiacutesica (koumlrper) sino que se integra en la experiencia personal viviente como transformacioacuten de lo que es ndashmetafiacutesica y existencialmente (personalmente)ndash entorno propio (leib) laquoconduce a una problematicidad uacuteltima que no puede ser resuelta por el hombre lsquode tejas abajorsquo Pues persona significa existencia es decir autoafirmacioacuten validez uacuteltima eternidadraquo203

5 resultAdo

A la conclusioacuten de esta invocacioacuten del sentido en que Rahner desentra-ntildea el papel teoloacutegico de la experiencia trascendental podemos subrayar su estrecha vinculacioacuten a dos hechos decisivos de la historia de la salva-cioacuten la creacioacuten y la encarnacioacuten

51 Entre creacioacuten y encarnacioacuten

Partiendo de la concepcioacuten del Dios creador y humanado como Misterio absoluto hacia el que el hombre espiacuteritu finito se encuentra iacutentimamente abierto a partir de su dinamismo trascendental (como sujeto cognoscente y libre) concluye Rahner que la experiencia que hace el hombre de su remisioacuten a Dios no procede de fuera de eacutel sino que tiene su originaria raiacutez en dicho dinamismo trascendental Desde el punto de vista estricta-

201 K RAHNER Pasioacuten y ascesis Sobre la fundamentacioacuten filosoacutefico-teoloacutegica de la asceacutetica cristiana in ET III 89 Cfr E J JUSTO Libertad liberadora Para una nueva formulacioacuten de la cristologiacutea y la soteriologiacutea Salamanca 2013

202 Ibid 90203 Ibid 84

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mente teoloacutegico Rahner situacutea el arranque de la relacioacuten Dios-hombre en el espacio de la creacioacuten como aacutembito iacutentimamente transido por la gracia como campo de interaccioacuten entre inmanencia y trascendencia El misterio de la creacioacuten radica precisamente en el poder de accioacuten especiacutefico de la divinidad laquopara constituir por siacute mismo y mediante el propio acto en cuanto tal algo que siendo radicalmente dependiente ndashpor ser totalmente constituidondash tenga tambieacuten ndashal ser constituido por el Dios uno y uacutenicondash una independencia real una realidad y verdad propia incluso ante el Dios que lo constituyeraquo204 La trascendentalidad del espiacuteritu finito se percibe como comparecencia constitutiva de ese Misterio que seguacuten Rahner se da a conocer como el de-doacutende y hacia-doacutende que marca el origen y meta de esa dinaacutemica ontoloacutegica del espiacuteritu finito El hombre que no olvida que su esencia concreta ndashen su naturaleza especiacutefica de espiritualidad en-carnadandash es apertura ilimitada (y como tal in-definible) no reniega de la posibilidad de llegar a ser hombre en sentido pleno

Pero si esto es asiacute ndashantildeade el teoacutelogondash para entender de modo radical lo que realmente somos es preciso comprender que existimos porque Dios se quiso hombre Esto significa que nosotros somos ndashporque eacutel asiacute nos ha queridondash seres en los que Dios en cuanto hombre se encuentra a siacute mismo al amarnos205

Visto asiacute la encarnacioacuten no es sino la asuncioacuten por parte del Verbo ndashen su relacioacuten eterna con el Padrendash de la naturaleza del hombre en su cuali-dad fundamental de apertura ilimitada al Ser En la apropiacioacuten divina de esa potencia obediencial del ser humano la naturaleza de este alcanza la plena consecucioacuten de su referibilidad divina (participada por Dios como autodonacioacuten trascendental en gracia) y en consecuencia la encarnacioacuten es el caso sumo de la realizacioacuten de la esencia del ser humano en el acon-tecimiento que la dogmaacutetica define como unioacuten hipostaacutetica y es al mismo tiempo portador absoluto de la salvacioacuten en la concrecioacuten de la historia de Jesuacutes muerto y resucitado el Hijo del Padre206

Podemos decir por tanto que el misterio que la fe cristiana confiesa se funda baacutesicamente en el hecho de que la misma realidad absoluta de Dios (naturalmente comprendida como personal amorosa y agraciante) no solo se puede contraponer creativamente a lo que es diverso de siacute sino que

204 K RAHNER Problemas actuales de cristologiacutea in ET I 170205 Ibid 190206 Cfr K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 259

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desea confrontarse y comunicarse con ello Desde el punto de vista de la criatura podemos decir asimismo que el misterio consiste en el hecho de que es realmente en el sentido radical sentildealado capax infiniti 207

Esta visioacuten filosoacutefico-teoloacutegica es la que imprime coherencia y unidad a la concepcioacuten rahneriana del hombre como persona En siacutentesis la con-sideracioacuten racional del hombre como realidad naturalmente habitada ndashen su capacidad trascendente de ser siacute-mismondash por una presencia sobrena-turalmente constitutiva o misterio (innominado pero dicente208) a cuya luz todas sus dimensiones esenciales e histoacuterico-operativas adquieren un significado convergente y se presentan como aquella compleja unidad en camino que identifica lo que llamamos laquopersonaraquo Por eso Rahner matiza el uso del concepto laquonaturalezaraquo humana en antropologiacutea teoloacutegica po-nieacutendolo en relacioacuten directa y no inversa con la accioacuten creadora de Dios pues Dios ha querido originariamente al hombre en una laquorelacioacuten viviente e inmediataraquo consigo209 El hombre para el teoacutelogo alemaacuten es trascen-dencia pero tambieacuten historia Es espiacuteritu encarnado donde ndashseguacuten lo ya apuntadondash se hace plenamente visible la dinaacutemica autotrascendente de la materia como participacioacuten en la densidad de ser del espiacuteritu Por ello seriacutea contradictorio presentar contemporaacuteneamente la persona ndasha la luz de lo que somos y el mundo en que vivimosndash como horizonte de apertura infini-ta y laquonaturalezaraquo si entendemos esta como sustancia clausurada o estrato independiente y no compenetrado con el don libre de Dios que Rahner lla-ma existencial sobrenatural Aunque el don del amor divino sea indebido al hombre para poder asiacute recibirlo y reconocerlo en su absoluta gratuidad el hombre real en su esencia concreta el interlocutor real de Dios en la uacutenica economiacutea de la salvacioacuten no es de hecho nunca una naturaleza pura sino una naturaleza conformada como sentido en cuanto apertura o tras-cendencia ilimitada En resumen podemos decir que Rahner despliega en el fondo de la existencia humana una interpretacioacuten del conocido axioma de la teologiacutea tomista gratia supponit naturam eamque perficit 210 La ex-

207 Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 120208 Cfr Id Oyente de la palabra 230209 Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 43 210 Cfr STh I q1 a8 ad 2 laquoCum enim gratia non tollat naturam sed perficiatraquo STh

I q2 a2 ad 1 laquoSic enim fides praesupponit cognitionem naturalem sicut gratia naturamraquo Cfr J RATZINGER Dogma und Verkuumlndigung Muumlnchen-Freiburg 1973 161-181 sobre la aplicacioacuten de este axioma al caso de Cristo J ALFARO Cristologiacutea y antropologiacutea Madrid 1973 363-364 (n 32)

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periencia de la Trascendencia implicada en toda realizacioacuten de la libertad humana que es el fundamento o condicioacuten de posibilidad de toda inicia-tiva del espiacuteritu del hombre constituye el horizonte de sentido de nuestra existencia histoacuterica o si se prefiere de nuestra vida maacutes cotidiana211

52 Entre trascendentalidad e historia

Asiacute queda formulado el marco sinteacutetico dentro del cual Rahner con-templa al hombre como persona

Ser persona significa asiacute autoposesioacuten de un sujeto como tal en una refe-rencia sabedora y libre al todo Esta referencia es la condicioacuten de posibili-dad y el horizonte previo para que el hombre en su experiencia particular empiacuterica y en sus ciencias particulares pueda comportarse consigo como unidad y totalidad [hellip] Por tanto decir que laquoel hombre es persona y suje-toraquo significa en primer lugar el hombre es el indeducible el que no puede producirse adecuadamente desde otros elementos disponibles eacutel es el que estaacute ya siempre confiado a siacute mismo212

Rahner es plenamente consciente de que laquoel hombre como ser perso-nal que trasciende y estaacute dotado de libertad es tambieacuten a una con ello un ser mundano temporal histoacutericoraquo213 laquoEstoy convencido ndashleemos en otro

211 Queda asiacute enunciada una de las grandes aportaciones de la teologiacutea contemporaacute-nea la integracioacuten entre antropologiacutea cristologiacutea y soteriologiacutea La teologiacutea reformada lo ha hecho en clave dialeacutectica como muestra la postura de uno de sus maacuteximos exponentes el teoacutelogo suizo Karl Barth La reafirmacioacuten en el cristocentrismo de Lutero lleva a Barth a considerar que en rigor Dios solo nos es cognoscible y accesible en Cristo de modo que de su Encarnacioacuten no se sigue que nuestra humanidad asediada por el pecado en su esencia e historicidad sea posibilidad previa de la accioacuten y revelacioacuten de Dios Entre otros exponentes catoacutelicos Karl Rahner ha mostrado que cabe sin embargo una lectura no dialeacutectica de la relacioacuten entre Dios y el hombre al contemplar la existencia y la historia humanas como rea-lidades originariamente correlacionadas con Dios en libertad Reconocer este hecho ni anula la novedad salviacutefica del acontecimiento de Cristo ni aminora los efectos del pecado que oscu-rece en el hombre la memoria de la Alianza irrevocable sellada por Dios con eacutel Proponemos dos textos que dan cuenta del contraste entre ambas lecturas Comentando el texto paulino de Rm 819-20 sentildeala Barth laquoSi supieacuteramos de Dios otra cosa que el gemir de lo creado y nuestro propio gemir si supieacuteramos de Jesucristo otra cosa que su condicioacuten de crucificado si supieacuteramos del Espiacuteritu Santo otra cosa que su condicioacuten de espiacuteritu de aquel que resucita a Jesuacutes de los muertos si se rompiera el incoacutegnito en que la salvacioacuten vino viene y vendraacute a nosotros eso no seriacutea la salvacioacutenraquo (K BARTH Carta a los romanos Madrid 1998 381) Por su parte Rahner afirma laquoCristo es hombre del modo maacutes radical y su humanidad es la maacutes autoacutenoma y libre no aunque sino porque es la asumida constituida en tanto automani-festacioacuten de Diosraquo (K RAHNER Para la teologiacutea de la encarnacioacuten in ET IV 145)

212 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 49-50213 Ibid 60

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lugarndash de que la transcendentalidad no es una ocupacioacuten del hombre al margen de la historia sino que se vive y realiza en libertad en la historia concreta y en una libertad determinadaraquo214 Auacuten en otro escrito habla de la corporeidad humana mediante la que el hombre se comunica con el mundo como laquoalteridad del espiacuterituraquo No ajena por tanto a ese laquoestar-se-dado-a-siacute-mismo en el espiacuterituraquo que laquosucede en la historia interna y externa de cada hombre y de la humanidad en la obra del pensamiento y en la obra externa existente cabe siacute individual y colectivamenteraquo215 Expresado de otro modo no es posible un volver sobre siacute mismo por la reflexioacuten si no es un salir hacia la realidad corpoacuterea dentro de la cual el espiacuteritu vuelve sobre siacute mismo en cuanto que se exterioriza y se forma a siacute mismo Y aquiacute es donde se da la posibilidad de una verdadera libertad personal Esta corporeidad concebida como presencia en el espacio y el tiempo del espiacuteritu mismo es ciertamente un continuo encontrarse a siacute mismo en un auteacutentico otro216

Aunque no pretendamos profundizar el alcance de la criacutetica sobre el posible caraacutecter abstracto de la antropologiacutea teoloacutegica de Rahner siacute podemos hacer dos observaciones al respecto En primer lugar cabe aceptar la postura de Rahner como una legiacutetima opcioacuten metoacutedica que pone en acto ndasha la luz del paradigma antropoceacutentrico de la filosofiacutea tras los sistemas de Kant y Heideggerndash el hecho de que la laquoteologiacutea implica una antropologiacutea filosoacuteficaraquo en concreto aquella que permite atisbar que el entrelazarse de la fe y la razoacuten la llamada de Dios y la escucha del

214 K RAHNER Gnade als Mitte menschlichen Existenz Ein Gespraumlch mit und uumlber Karl Rahner aus Anlass seines 70 Geburtstages 14

215 Tomamos las citas de K RAHNER La cristologiacutea dentro de una concepcioacuten evo-lutiva del mundo in ET V 181-182 Tambieacuten Id La unidad de espiacuteritu y materia en la comprensioacuten de la fe cristiana in ET VI 184

216 Id El cuerpo y la salvacioacuten 87 Tras sentildealar las precisiones que Tomaacutes de Aquino y Ricardo de San Viacutector suman a la definicioacuten formal-ontoloacutegica que reciben de Boecio la enciclopedia teoloacutegica que edita el propio Rahner y su grupo de colaboradores se apoya en los caracteres que proponen Tomaacutes y Ricardo para formular una definicioacuten actual de persona cuyas notas forman parte del patrimonio de la antropologiacutea trascendental que Rahner pro-pone como base renovadora de la teologiacutea dogmaacutetica contemporaacutenea laquoPersona no significa aquiacute la lsquoesenciarsquo la lsquonaturalezarsquo sino el acto siempre singular total e indiviso inmediato e insustituible la realidad la existencia de una naturaleza espiritual Esta realidad es el he-cho de poseerse a siacute mismo y por tanto de tener en siacute su propio fin es la forma de realidad que presenta la libertad de un ser espiritual en la que se funda su intangible dignidad Es evidente que este concepto preferentemente formal de persona adquiere su contenido por la lsquonaturalezarsquo del ser espiritual en cuestioacuten y por el grado de realidad que adquiere su libertad en lo referente a la posibilidad de tomar posesioacuten de la propia naturalezaraquo (M MUumlLLER - A HALDER Persona in SM V 445)

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hombre tiene su asiento no solo en la pregunta moral sino en la existen-cial-ontoloacutegica217 Al concebir el ser como palabra (Dios) y oyente (hom-bre) Rahner aboga por el paso desde una metafiacutesica que presenta el ser a la luz de la laquocosaraquo218 hasta una metafiacutesica que contempla la continuidad entre ser y conciencia En palabras de Metz al explicar queacute significa en Rahner laquoteologiacutea trascendentalraquo

Ha rescatado laquoel sujetoraquo del peacutetreo objetivismo escolaacutestico en que la teo-logiacutea de escuela estaba por doquier encerrada El laquosujetoraquo no es una pura determinacioacuten refleja que puede a su vez ser objetivada arbitrariamente Designa al hombre en su historia experimentada que no puede identificarse ni comunicarse a siacute misma sin elementos narrativos En este sentido Ra-hner ha elevado la biografiacutea religiosa a tema objetivo de la dogmaacutetica219

Con otras palabras aboga por una meta-antropologiacutea220 que ndashme-diando entre realismo e idealismondash permita concebir teoloacutegicamente la relacioacuten entre antropo-centrismo y teo-centrismo (revelacioacuten)221 En se-gundo lugar no parece justo desde el punto de vista cientiacutefico pedirle al teoacutelogo el pleno esclarecimiento de todas y cada una de las posibles pers-pectivas en las problemaacuteticas que afronta en este caso todos los vectores implicados en su visioacuten del hombre El propio Rahner reconoce ante la criacutetica de que la trascendentalidad ha oscurecido en su pensamiento sobre el hombre la historicidad y la inter-personalidad222 que cuando se trata

217 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 42-43218 Cfr K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 319219 J B METZ La fe en la historia y la sociedad Esbozo de una teologiacutea poliacutetica fun-

damental para nuestro tiempo 232220 Cfr A CORDOVILLA Gramaacutetica de la encarnacioacuten 431-432221 Cfr K RAHNER Theologie und Anthropologie 43222 A partir de la perspectiva de la antropologiacutea trascendental de Karl Rahner A Dar-

lap ha puesto de manifiesto con mayor claridad la implicacioacuten reciacuteproca entre experiencia trascendental a priori y experiencia espacio-temporal a posteriori Darlap muestra que el laquoauteacutentico acontecimiento de la salvacioacutenraquo es tal cuando reclama toda la vida del hombre daacutendole una orientacioacuten definitiva Aunque el acontecer salviacutefico coincide con una comuni-cacioacuten gratuita (eficaz) a priori que Dios hace de siacute en el seno de la experiencia trascendental del hombre en Jesucristo la historia de Dios acontece en un diaacutelogo auteacutentico con el hombre cuya decisioacuten libre asumida en la dinaacutemica de la unioacuten hipostaacutetica no es una mera reaccioacuten externa a una historia divina sino que ha entrado a formar parte de las determinaciones de la historia de la salvacioacuten en cuanto historia de Dios En Jesucristo la historia de la salvacioacuten reclama toda la vida del hombre ndashsu espacio su tiempo sus relacionesndash y representa para eacutel la posibilidad de un encuentro con Dios como tuacute concreto que es tambieacuten respuesta novedosa y espontaacutenea irreducible a la experiencia trascendental Una teologiacutea de la gracia seguacuten la historia de la salvacioacuten no deberiacutea dejar de considerar lo que el tuacute humano en toda la am-

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de la persona del hombre o de Dios es necesario que lo trascendental sea laquoprecisado en siacute mismo de manera exacta e iacutentegra mediante la confron-tacioacuten con una antropologiacutea o una teologiacutea que sea sobre todo plena y concretaraquo223 En fin el teoacutelogo debe ser consciente de que la teologiacutea ha de construirse con empentildeo interdisciplinar tarea que hoy resulta extre-madamente exigente224

La teologiacutea ndashpor cuanto el hombre forma parte de su objeto como des-tinatario de la revelacioacutenndash comparte con la antropologiacutea filosoacutefica con-temporaacutenea el gran reto de asumir en su proposicioacuten una imagen lo maacutes ar ticu lada posible del ser humano (impulso trascendente y mediacioacuten histoacuterica)

Ahora bien se trata de una tarea que la teologiacutea afronta a la luz de la revelacioacuten co mo acontecimiento de identidad y diferencia entre lo que Dios es en siacute (Trinidad inmanente) y lo que Dios es para nosotros (Tri-nidad econoacutemica) La irrupcioacuten libre y gratuita de Dios en la historia no tiene su asiento original en la trascendentalidad humana sino maacutes bien en la insondable dinaacutemica interna de su infinito ser cabe-siacute personal ndashfunda-mento y sentido de todo lo creadondash que es pluralidad y unidad donacioacuten de siacute y comunioacuten laquoEl Dios uno se comunica como expresioacuten absoluta de siacute mismo y como don absoluto del amorraquo225 Es Dios quien revela en su autocomunicacioacuten histoacuterico-salviacutefica el modo en que da cumplimiento a su designio de laquoallegar al hombre su futuro definitivoraquo226 que no es otro que la salvacioacuten o felicidad plena de aquel a quien ha creado (y por ende

plitud fenomeacutenica de su experiencia a posteriori aporta a la experiencia trascendental laquoLa experiencia trascendental ndashescribe Darlapndash exige que el hombre permanezca en ella pero es de tal condicioacuten que el hombre no puede desligar simplemente lo restante de su vida de esa relacioacuten con Dios De aquiacute se sigue necesariamente que la relacioacuten trascendental sobrenatural con Dios ndashsolo determinada al parecer por la graciandash pide por siacute misma una transformacioacuten y actualizacioacuten categorial porque solo por este medio puede ejercer una fuerza modeladora sobre todo el resto de la vida humana Esta relacioacuten tiene que darse en la zona en que acontece la vida humana si no se quiere despreciar esa vida como algo sin importancia en el orden de la salvacioacuten Pero si la experiencia trascendental debe actuar asiacute en la vida concreta porque solo asiacute llega a su plena y propia esencia y solo asiacute puede introducir al hombre entero en la salvacioacuten entonces ella misma estaacute interesada en ser traducida rectamente a categorialidadraquo (A DARLAP Teologiacutea fundamental de la historia de la salvacioacuten in MyS I 159)

223 K RAHNER Gnade als Mitte menschlichen Existenz Ein Gespraumlch mit und uumlber Karl Rahner aus Anlass seines 70 Geburtstages 14

224 Cfr Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 82-87225 Id El Dios Trino como principio y fundamento trascedente de la historia de la sal-

vacioacuten in MyS II 286226 Id Iglesia y parusiacutea de Cristo in ET VI 314

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del conjunto de todo lo creado) mediante la comunioacuten con Eacutel en Jesucris-to laquoEn el Cristo que es hombre en libertad y obediencia porque Dios puede aparecer en lo finito como el que es y quiere ser en libertad frente a nosotrosraquo227 Sin dejar de ser Eacutel entra libremente en nuestra historia para hacernos partiacutecipes en nuestra propia intimidad vital laquotrayeacutendola toda en amorraquo228 de su vida y su gloria El propio espiacuteritu de la revelacioacuten comenta Congar pone ante nosotros el hecho de que laquono hay teologiacutea para el hombre sin antropologiacutea para Diosraquo229 El propoacutesito confeso de la reflexioacuten rahneriana es trazar el mapa de la antropologiacutea para Dios contenido en la auto-comunicacioacuten que Dios ha hecho de siacute al hombre hablar de los misterios de Dios de modo que una aprehensioacuten profunda de lo que son en siacute permita una explicacioacuten viva (actual) de lo que son para nosotros

227 Ibid 317 Comenta G Colzani que laquonella misura in cui lrsquoutilizzo della analitica trascendentale rimane saldamente ancorato alla realtagrave storica di Gesugrave la teologia di Rahner risulta stimolante da una parte lrsquouomo appare segnato da una capacitagrave di oltrepassamento di seacute da una apertura allrsquoAssoluto nella quale soltanto nonostante la sua finitezza coglie il suo compimento e dallrsquoaltra coglie nella grazia questo compimento e la rilegge in termini perso-nali vedendola piugrave che come dottrina come lrsquoesperienza umana fatta oggetto della autoco-municazione di Dio Trino dellrsquoatto fondamentale di Dio verso il non-divinoraquo (G COLZANI Recenti manuali di Antropologia teologica di lingua italiana e tedesca 406)

228 Reconstruyendo el discernimiento ignaciano sobre la experiencia trascendente de Dios en el alma humana y el significado que reviste para la reflexioacuten teoloacutegica Rahner mues-tra que el presentarse de Dios en el sujeto constituye una evidencia originaria que ilumina la conciencia y se erige como fundamento sobre el que reposa cualquier certeza y verificacioacuten a posteriori de la fe y la razoacuten Considerando la afirmacioacuten ignaciana de los Ejercicios sobre la relacioacuten entre Dios y el alma (laquoporque es proprio del Criador entrar salir hazer mocioacuten en ella trayeacutendola toda en amor de la su divina majestadraquo n 330) encuentra Rahner un refe-rente fundamental que inspira el esfuerzo teoacuterico de su teologiacutea trascendental como riguroso intento de pensar el don de la originaria percepcioacuten espiritual de todo hombre La consolacioacuten sin causa precedente ndashde la que habla Ignaciondash nada tiene que ver con una experiencia apofaacute-tica de la misteriosa presencia de Dios en el hombre sino con laquodie gemeinte Objektlosigkeit ist die reine Offenheit fuumlr Gott die namenlose gegenstandslose Erfarung der Liebe von dem uumlber alles Einzelne Augebbare und Unterscheidbare erhabenen Gott von Gott als Gott Es is nicht mehr lsquoirgendein Objektrsquo gegeben sondern das Gezogensein der ganzen Person mit dem Grund ihres Daseins in die Liebe uumlber jedes bestimmte abgrenzbare Objekt hinaus in die Unendlichkeit Gottes als Gottes selbst als der divina majestad trayeacutendola toda en amor de la su divina majestad [hellip] Das lsquoVorausgehenrsquo ist nur in dem Sinn gemeint in der die schlichte Erfassung eines Objektes der existentiellen Stellungnahme der ganzen Person (toda) zu ihm lsquovorausgehtrsquo wie schon gezeigt wurde Das sin causa sagt also Gott als er selber allein inso-fern er nicht in einem bestimmten Gedanken gegenstaumlnlicher Art rein begrifflich gegeben ist insofern er nicht gewissermassen lsquovertretenrsquo oder verbunden ist mit einer andern wenn auch religioumls gewichtigen Wirklichkeitraquo (K RAHNER Die Logik der existentiellen Erkenntnis bei Ignatius von Loyola 118)

229 Y CONGAR Cristo en la economiacutea salviacutefica y en nuestros tratados dogmaacuteticos in Concilium 11 (1966) 24

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Al referir la experiencia subjetiva que funda el espacio en que recibe el hombre la consolacioacuten divina seguacuten san Ignacio repite Rahner la idea que preside su obra la mediacioacuten del conocimiento de Dios en la experiencia personal-subjetiva cuyo contenido sin embargo no puede afirmarse al margen de la singularidad irrepetible del sujeto histoacuterico

El sujeto de la experiencia vital no tiene en modo alguno el caraacutecter de un mero laquosujeto trascendentalraquo en una abstraccioacuten metafiacutesica se trata esencialmente (puesto que estaacuten mutuamente comprometidos libertad y amor) de un yo concreto en su maacutes iacutentimo fundamento en cuanto suje-to irrepetible responsable y libre El punto de partida subjetivo es por consiguiente inequiacutevoco se trata de la capacidad de trascendencia de un sujeto concreto en cuya accioacuten y compromiso subjetivo se halla el hom-bre concreto en su libertad singularidad e historia Solo que este hom bre concreto estaacute abierto a la infinitud del mismo Dios hace experiencia de su propia pura anticipacioacuten hasta la ilimitacioacuten espiritual-sobrenatural de su fin230

Una antropologiacutea metafiacutesica ndashes decir aquella que contempla la impli-cacioacuten del hombre (naturaleza concreta y efectiva) en la dinaacutemica de su reflexividad esencial (persona)ndash ayuda a la antropologiacutea teoloacutegica seguacuten hemos comprobado a profundizar el hondo calado histoacuterico-salviacutefico de sus principales tesis (creacioacuten gracia y redencioacuten) sin perjuicio de su ver-dad uacuteltima231 La intencionalidad teoloacutegica de este programa rebasa por tanto el hecho de que la presentacioacuten del hombre como unidad-dualidad de naturaleza y persona resulta maacutes verosiacutemil ante la actual ciencia bio-loacutegica que el dualismo escolaacutestico y sobre todo que el cartesiano Es la revelacioacuten la que contiene la imagen de un interlocutor humano conside-rado en su integridad Por ello a esta teologiacutea (para el hombre) solo puede corresponder una antropologiacutea (para Dios) que conjure laquoel gran peligro que existe en pensar sobre el hombre con un esquema de representacioacuten que es adecuado a las lsquocosasrsquo pero no al hombre mismo pues aquellas nunca quedan afectadas verdadera y definitivamente en su lsquoesenciarsquo y por su propio lsquoobrarrsquoraquo232 Rahner ha conjurado este riesgo defendiendo la integracioacuten en el acto de conocimiento y libertad especiacuteficos del hombre

230 K RAHNER Die Logik der existentiellen Erkenntnis bei Ignatius von Loyola 128-129

231 Cfr K RAHNER - K LEHMANN Kerigma y dogma in MyS I2 771-775232 K RAHNER Hombre in SM III 496

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de todo el espectro de su espontaneidad natural o vital que a pesar de lo que pueda parecer tiene su raiacutez y contribuye a la sinceridad antropoloacutegi-ca de ese acontecer de la persona que es el ser-cabe-siacute La antropologiacutea metafiacutesica invocada por Rahner muestra la posibilidad de integrar el acto natural espontaacuteneo en el nuacutecleo de la experiencia personal hasta el punto de que laquofinalmente este acto deja de ser resistencia saldo insoluble de la naturaleza contra la persona para convertirse en el elemento interno que hace posible la profundidad y la energiacutea de dominio total que la decisioacuten personal poseeraquo233 En su Ensayo de esquema para una dogmaacutetica ndashela-borado originalmente en colaboracioacuten con Balthasarndash Rahner despliega el que seriacutea un organigrama ideal en orden a una comprensioacuten teoloacutegica de la naturaleza personal del hombre En un estudio tal no cabriacutea solo la consideracioacuten de la persona desde el punto de vista de su interioridad sino tambieacuten en su exterioridad corporeidad dualidad sexual temporalidad finita etc Hasta cabriacutea considerar una teologiacutea de las situaciones y acon-tecimientos humanos de las edades de la vida del trabajo y la cultura incluso del ver oiacuter el hablar el callar el reiacuter el llorar234

Es a la luz de estas indicaciones de principio como ha de leerse en Rahner el papel de aquellas apelaciones mayores de la antropologiacutea a la teologiacutea el amor la muerte y el futuro A pesar de que estas experiencias de iacutendole categorial tengan en su obra menor relieve que la trascenden-talidad del acto del conocimiento y la voluntad no por ello restringe nuestro teoacutelogo ndashfiel a su planteamiento antropoloacutegico-metafiacutesicondash su capacidad en cuanto mediacioacuten a posteriori para poner al hombre frente a siacute y frente al mundo en su originaria constitucioacuten como mundo-consigo y espacio de trascendencia laquoEl lsquoinstantersquo histoacuterico en el que vivimos hoyraquo reconoce Rahner al hablar del amor ha renovado mediante algu-nas palabras originales la invocacioacuten de la experiencia de Dios laquodesde la totalidad de la experiencia de la realidad y del sujetoraquo235 Unas liacuteneas antes de esta afirmacioacuten sentildeala que ante Dios no puede comparecer sino el hombre entero

Al considerar al hombre un ser abierto a la totalidad esa entereza suya ante Dios que reclama Karl Rahner se muestra receptiva a una ex-plicacioacuten maacutes detallada acerca de por queacute el acto de amar especialmente

233 Id Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 369234 Id Ensayo de esquema para una dogmaacutetica in ET I 39235 Id Sobre la unidad del amor a Dios y el amor al proacutejimo in ET VI 266

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cuando se despliega en la auteacutentica e incondicional aceptacioacuten de siacute hasta el final se convierte en verdadero espacio de revelacioacuten que ha de ocupar su legiacutetimo lugar a la hora de explicar ndashhoy236ndash la concurrencia de pasado (creacioacuten) presente (gracia) y futuro (gloria) en la relacioacuten que mantiene Dios con el hombre

obras De Karl rahner eMpleaDas

Curso fundamental sobre la fe Introduccioacuten al concepto de cristianismo Barce-lona 41989 (Grundkurs des Glaubens Freiburg 1977)

De la necesidad y don de la oracioacuten Bilbao 32004 (Von der Not und dem Segen des Gebetes Innsbruck 1949)

Die Logik der existentiellen Erkenntnis bei Ignatius von Loyola in Id Das dynamische in der Kirche Freiburg 1958 74-148

Die theologische Dimension der Frage nach dem Menschen in Id Schriften zur Theologie XII Einsiedeln-Benziger 1975 387-406

Der eine Jesus Christus und die Universalitaumlt des Heils in Id Schriften zur Theologie XII Zuumlrich 1975 251-282

El cuerpo y la salvacioacuten in M HORKHEIMER et alii (eds) El cuerpo y la salvacioacuten Salamanca 1975 71-91 (Der Leib in der Heilsordnung in M HORKHEIMER et alii (eds) Der Leib und das Heil Mainz 1967 29-44)

236 En este laquohoyraquo queda apenas insinuado por nuestra parte el caraacutecter pastoral de una teologiacutea construida en plena conciencia de la situacioacuten de dificultad para el reconocimiento y aceptacioacuten de Dios que atraviesa la humanidad contemporaacutenea Cabe recordar que Rahner inicia su tarea docente en la facultad de teologiacutea de Innsbruck donde se estaba elaborando un programa de teologiacutea de la predicacioacuten o teologiacutea kerigmaacutetica que perseguiacutea liberar al cristia-nismo de inercias y reproponer el caraacutecter salviacutefico de la verdad de fe el kerigma primitivo en definitiva Cfr R GIBELLINI La teologiacutea del siglo XX 227-233 Ante el fenoacutemeno de la increencia y su rechazo frontal de las demostraciones teoacutericas de Dios estas laquosolo pueden tener eficacia en unioacuten con una llamada mistagoacutegica hacia aquella experiencia religiosa de la trascendencia que se da inevitablemente en la vivencia concreta de lo eacutetico en general de la responsabilidad por una configuracioacuten activa por el futuro y sobre todo de un amor real y auteacutenticamente personal al proacutejimoraquo (R RAHNER Ateiacutesmo in SM I 467) La palabra clave aquiacute para este modelo de teologiacutea en cuanto reflexioacuten del creyente es laquomistagogiacutearaquo Entendida en su sentido tradicional como iniciacioacuten a los misterios de la fe donde el predo-minante no es el discurso loacutegico sino el evocativo esto es el que desvela la vida de gracia en la vida del hombre el misterio de Dios en el misterio humano Un discurso que ha de prestar atencioacuten a todos aquellos praeambula fidei que ayudan al hombre a confesar en la escucha de sus palabras temporales (capacidad poeacutetica y simboacutelica) y la vivencia de sus experiencias existenciales (amor muerte alegriacutea etc) la Palabra No es Dios quien existe para nosotros sino que somos nosotros quienes existimos por y para Dios Cfr K RAHNER La palabra poeacutetica y el cristiano in ET IV 411-422 Id La miacutestica ignaciana de la alegriacutea del mundo in ET III 289-305 Id Sacerdote y poeta in ET III 307-328

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El Dios Trino como principio y fundamento trascendente de la historia de la salvacioacuten en J FEINER - M LOumlHRER (eds) Mysterim Salutis II Madrid 19713 269-338 (Der dreifaltige Gott als transzendenter Urgrund der Heils-geschichte in Mysterium Salutis II Einsiedeln 1967 317-401)

El futuro de la teologiacutea in H VORGRIMMLER - R VANDERGUCHT (eds) La teologiacutea en el siglo XX Disciplinas teoloacutegicas dogma moral pastoral III Madrid 1974 458-475 (Uumlber die zukuumlnftigen Wege der Theologie in H VORGRIMMLER - R VANDERGUCHT [eds] Bilanz der Theologie im 20 Jahrhundert III Freiburg 1970 530-551)

Escritos de Teologiacutea I-VI Madrid 22000-2007Espiacuteritu en el mundo Metafiacutesica del conocimiento finito seguacuten Santo Tomaacutes

de Aquino Barcelona 1963 (Geist in Welt Zur Metaphisik der endlichen Erkenntnis bei Thomas von Aquin Muumlnchen 1957)

Fundamentacioacuten de la fe cristiana in Razoacuten y fe 199 (1979) 28-37Fundamentos de la protologiacutea y de la antropologiacutea teoloacutegica in J FEINER - M

LOumlHRER (eds) Mysterim Salutis II Madrid 1971 341-353 (Allgemeine Grundlegung der Protologie und theologischen Anthropologie in Myste-rium Salutis II Einsiedeln 1967 406-420)

Gnade als Mitte menschlichen Existenz Ein Gespraumlch mit und uumlber Karl Rah-ner aus Anlass seines 70 Geburtstages in Id Saumlmtliche Werke Band 25 Erneuerung des Ordenslebens Zeugnis fuumlr Kirche und Welt Freiburg-Ba-sel-Wien 2008 3-32

Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit in Id Saumlmtliche Werke Band 19 Selbstvollzug der Kirche Ekklesiologische Grund-legung praktischer Theologie Freiburg 1995 374-394

La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica in K RAHNER - P OVERHAGE El problema de la hominizacioacuten Sobre el origen bioloacutegico del hombre Barce-lona 1973 19-84 (Die Hominisation als theologische Frage in K RAH NER - P OVERHAGE Das Problem der Hominisation Freiburg 1965 13-90)

La muerte del cristiano in J FEINER - M LOumlHRER (eds) Mysterim Salutis V Madrid 1971 439-466 (Das christliche Sterben in Mysterium Salutis V Ein-siedeln 1967 463-492)

Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica in K RAHNER - W THUumlSING Cristologiacutea Estudio teoloacutegico y exegeacutetico Madrid 1975 21-80 (Grundlinien einer systematischen Christologie in K RAHNER - W THUuml-SING Christologie systematisch und exegetisch Freiburg 1972 15-78)

Oyente de la palabra Fundamentos para una filosofiacutea de la religioacuten Barcelona 1967 (Houmlrer des Wortes Muumlnchen 1963)

Philosophie und Philosophieren in der Theologie in Id Schriften zur Theolo-gie VIII Einsiedeln 1967 66-87

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Selbsterfahrung und Gotteserfahrung in Id Schriften zur Theologie X Zuumlrich 1972 133-144

Sentido teoloacutegico de la muerte Barcelona 1965 (Zur Theologie des Todes Frei-burg 1958)

Sobre la inefabilidad de Dios Experiencias de un teoacutelogo catoacutelico Barcelona 2005 (Von der Unbegreiflichkeit Gottes Freiburg 2004)

Theologie und Anthropologie in Id Schriften zur Theologie VIII Einsiedeln- Benziger 1967 43-65

Theologische Erwaumlgungen uumlber den Eintritt des Todes in Id Schriften zur Theologie IX Einsiedeln 1970 323-335

Uumlber die Heilsgeschichtliche bedeutung des einzelnen in der Kirche in Id Saumlmtliche Werke Band 10 Kirche in den Herausforderungen der Zeit Stu-dien zur Ekklesiologie und zur kirchlichen Existenz Freiburg-Basel-Wien 2003 421-446

Uumlberlegungen zur Methode der Theologie in Id Schriften zur Theologie IX Ein siedeln 1970 79-126

RAHNER K - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico Barcelona 1966 (Klei-nes theologisches Woumlrterbuch Freiburg-Basel-Wien 1965)

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Mater Clementissima 1 (2016) 121-142

La definicioacuten de Calcedonia a traveacutes de sus inteacuterpretes contemporaacuteneos

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez1

Facultat de Teologia de CatalunyaAteneu Universitari Sant Paciagrave

resuMen Investigar la cristologiacutea de la definicioacuten de Calcedonia atendiendo a la oacutep-tica de sus estudiosos actuales (A de Halleux A Grillmeier R Price) permite un acercamiento nuevo a esta cuestioacuten contribuye a dar una respuesta a las criacuteticas contemporaacuteneas a Calcedonia y ofrece una ayuda para el trabajo de los teoacutelogos maacutes allaacute de los toacutepicos y de una lectura restringida de las fuentes

palabras ClaVe Cristologiacutea Calcedonia Halleux Grillmeier Price

abstraCt laquoThe Chalcedon definition on the point of view of recent scholarsraquo Resear-ching Christology of Chalcedon definition focusing on the point of view of recent scholars (A de Halleux A Grillmeier R Price) allows a new approach to this issue contributes to an answer to contemporary criticism of Chalcedon and offers an aid to the work of the theologians beyond clicheacutes and narrow approaches to the sources

Key worDs Christology Chalcedon Halleux Grillmeier Price

1 introduccioacuten lA iMportAnciA de cAlcedoniA y lA necesi-dAd de unA AproxiMAcioacuten ActuAl

El cuarto concilio ecumeacutenico se celebroacute durante el otontildeo del antildeo 451 en Calcedonia en la orilla del Boacutesforo frente a Constantinopla bajo la atenta vigilancia de los emperadores Marciano y Pulqueria Fue la con-

1 Sacerdote de la dioacutecesis de Barcelona Fue alumno del Colegio entre 2010 y 2014 periodo en el que realizoacute estudios de licenciatura y doctorado en Teologiacutea dogmaacutetica en la Pon-tificia Universidad Gregoriana En diciembre de 2015 defendioacute la tesis doctoral titulada laquoLa cristologiacutea de Calcedonia y la obra de Andreacute de Halleux complementada y confrontada con las aportaciones de Alois Grillmeier y Richard Priceraquo Actualmente es profesor en la Facultad de Teologiacutea de Cataluntildea (Barcelona Espantildea)

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

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clusioacuten parcial de una sucesioacuten de acontecimientos que habiacutea tenido su origen inmediato en la poleacutemica suscitada por el monje Eutiques que habiacutea llevado a confrontaciones e incluso a la celebracioacuten dos antildeos antes de un laquoconcilioraquo en Eacutefeso denominado por el papa Leoacuten Magno como laquoLatrocinio de Eacutefesoraquo

Esta poleacutemica se situacutea en un marco maacutes amplio dentro de la controver-sia cristoloacutegica que habiacutea estallado el 428 con el laquoescaacutendalo ecumeacutenicoraquo provocado por Nestorio ante el cual habiacutea reaccionado celosamente Cirilo de Alejandriacutea y que habiacutea conducido al agitado concilio de Eacutefeso (431) seguido de la reconciliacioacuten del 433 en torno a la Foacutermula de la Unioacuten2

En la quinta sesioacuten de Calcedonia (22 de octubre de 452) se aproboacute una definicioacuten de fe (horos) salvando la feacuterrea oposicioacuten de los padres a redactar un nuevo texto dogmaacutetico3 gracias a las presiones de la comisioacuten imperial y del mismo emperador

En la definicioacuten finalmente aprobada laquose ensentildea a confesarraquo a laquouno solo y el mismoraquo Cristo laquo(re)conocido en dos naturalezasraquo laquosin confusioacuten sin cambio sin separacioacuten y sin divisioacutenraquo de manera que laquolas propiedades de cada una de las naturalezas concurren en una sola persona y en una sola hipoacutestasisraquo Seguidamente adjuntamos el texto de la definicioacuten4

Siguiendo pues a los Santos Padres todos a una voz ensentildeamos que ha de confesarse [ὁμολογεῖν hellip ἐκδιδάσ-κομεν] a uno solo y el mismo Hijo nuestro Sentildeor Jesucristo el mismo perfecto en la divinidad y el mismo perfecto en la humanidad Dios verdaderamente y el mismo verdaderamente hombre de alma racio-nal y de cuerpo consustancial con el Padre en cuanto a la divinidad y el mismo consustancial con nosotros en cuanto a la humanidad semejante en todo a nosotros menos en el pecado [Heb 4 15]

2 Para un acercamiento baacutesico a Calcedonia cfr A DE HALLEUX Le Concile de Chal-ceacutedoine Para un relato de los acontecimientos del Concilio cfr R PRICE The Council of Chalcedon a Narrative Para un acercamiento maacutes amplio a Calcedonia cfr P T CAMELOT Eacutephegravese et Chalceacutedoine R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon

3 Esta oposicioacuten era tan fuerte porque en Eacutefeso el 22 de julio de 431 el concilio reunido en torno a Cirilo habiacutea decretado que a nadie era liacutecito presentar otra foacutermula de fe o escribirla o componerla fuera de la definida por los santos padres reunidos con el Espiacuteritu Santo en Ni-cea (DH 265 ACO I 1 7 105ss) En la quinta sesioacuten de Calcedonia se presenta inicialmente un borrador de definicioacuten (no conservado) que es rechazado exigieacutendose su enmienda para cumplir las condiciones de la comisioacuten imperial y concordar con la carta dogmaacutetica de Leoacuten (Tomus ad Flavianum) El texto corregido es aprobado al final de esta sesioacuten

4 Debe tenerse en cuenta que al texto de la definicioacuten le precede un amplio prefacio que incluye los siacutembolos de Nicea y Constantinopla y le sigue un anatematismo final

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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engendrado del Padre antes de los siglos en cuanto a la divinidad y el mis-mo en los uacuteltimos diacuteas por nosotros y por nuestra salvacioacuten (engendrado) de Mariacutea Virgen madre de Dios en cuanto a la humanidaduno solo y el mismo Cristo Hijo Sentildeor unigeacutenitohellip hellip que se ha de reconocer en dos naturalezas sin confusioacuten sin cambio sin divisioacuten sin separacioacuten [ἕνα καὶ τὸν αὐτὸν Χριστόν υἱόν κύ ριον μονογενή ἐν δύο φύσεσιν ἀσυγχύτως ἀτρέπτως ἀδιαιρέτως ἀχωρίσ τως γνωριζόμενον] en modo alguno borrada la diferencia de naturalezas por causa de la unioacuten sino conservando maacutes bien cada naturaleza su propiedad y concurrien-do en una sola persona y en una sola hipoacutestasis [τῆς ἰδιότητος ἑκατέρας φύσεως καὶ εἰς ἓν πρόσωπον καὶ μίαν ὑπόστασιν συντρεχούσης] no parti-do o dividido en dos personas sino uno solo y el mismo Hijo unigeacutenito Dios Verbo Sentildeor Jesucristocomo de antiguo acerca de Eacutel nos ensentildearon los profetas y el mismo Jesu-cristo y nos lo ha trasmitido el Siacutembolo de los Padres5

Esta definicioacuten es sin lugar a dudas un punto crucial en el desarrollo de la cristologiacutea de todos los tiempos de Oriente y de Occidente Ahora bien el concilio suscitoacute muy pronto fuertes poleacutemicas que condujeron a grandes conflictos doctrinales eclesiales y poliacuteticos los cuales a su vez llevaron a la celebracioacuten de los concilios de Constantinopla II (553) y III (681) y a la separacioacuten de las Iglesias de Egipto Siria y Armenia que lamentablemente auacuten hoy perdura

El cuarto concilio ha sido objeto de numerosas investigaciones espe-cialmente a partir de su 1500 aniversario celebrado en 19516 Asimismo ha sido el centro de intensas poleacutemicas dentro de la criacutetica reciente a la cristologiacutea laquoclaacutesicaraquo en especial durante la segunda mitad del siglo XX 7

5 La definicioacuten de Calcedonia se halla en E Schwartz (ed) Acta Conciliorum Oecume-nicorum II 1 2 129s correspondiente al acta de la quinta sesioacuten n 34c Tambieacuten se halla en G Alberigo y otros (eds) Conciliorum Oecumenicorum Decreta 86s y en DH 301 El texto en espantildeol presentado sigue con algunas modificaciones DH 301 Noacutetese que el texto de la definicioacuten no corresponde exactamente con el imaginario de que Calcedonia define a Jesucristo como una persona en dos naturalezas

6 El mismo Papa redactoacute una enciacuteclica al respecto cfr PIacuteO XII Sempiternus Rex Chris-tus De entre los estudios surgidos destacamos P T CAMELOT Theacuteologies grecques et theacuteologie latine agrave Chalceacutedoine (1951) H M DIEPEN LrsquoAssumptus Homo agrave Chalcedoine (1951) F X MURPHY The dogmatic definition at Chalcedon (1951) P M J NICOLAS La doctrine christologique de S Leacuteon le Grand (1951) y especialmente A GRILLMEIER - H BACHT Das Konzil von Chalkedon (1951-1954) monumental obra colectiva en tres voluacutemenes preparada por los jesuitas alemanes de Sankt Georgen

7 La reaccioacuten criacutetica a Calcedonia se inicioacute con K RAHNER Chalkedon ndashEnde oder Anfang (1954) trabajo que fue publicado despueacutes con otro tiacutetulo dentro de sus Escritos de

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Es preciso aclarar que a diferencia de otros siacutenodos de la antiguumledad del concilio de Calcedonia conservamos abundante documentacioacuten in-cluyendo las actas de las sesiones editadas por iniciativa de la autoridad imperial de modo que contamos con una fuente primaria de valor inesti-mable que debe ser acogida con espiacuteritu criacutetico8

Al elaborar una reflexioacuten teoloacutegica sobre el cuarto concilio urge una aproximacioacuten continuamente renovada a la cristologiacutea de la definicioacuten teniendo en cuenta que Calcedonia es un acontecimiento eclesial cele-brado hace casi dieciseacuteis siglos siendo el concilio maacutes concurrido de la Iglesia primitiva y tan poleacutemico en su momento que dividioacute a las Iglesias No han dejado de aparecer trabajos que analizan la cristologiacutea de la defi-nicioacuten calcedonense9

Teologiacutea Id Problemas actuales de cristologiacutea en espantildeol En los antildeos siguientes se dio una fuerte poleacutemica con respecto a la cristologiacutea del cuarto concilio recogida en B SESBOUumlEacute Le proceacutes contemporain de Chalceacutedoine (1976) En la cristologiacutea espantildeola al respecto destacan dos artiacuteculos de los antildeos setenta J I GONZAacuteLEZ FAUS Las foacutermulas de la dogmaacutetica cris-toloacutegica (1971) y O GONZAacuteLEZ DE CARDEDAL Calcedonia y los problemas fundamen-tales de la cristologiacutea actual (1979) Trabajos maacutes recientes al respecto son J A RIESTRA Il dibattito sul valore (2001) L F LADARIA La recente interpretazione della definizione di Calcedonia (2003) y G URIacuteBARRI Leyendo el Concilio de Calcedonia (2008)

8 La edicioacuten criacutetica de las actas de Calcedonia se encuentra en E SCHWARTZ Acta Conciliorum Oecumenicorum concretamente en su tomo II (el I corresponde a Eacutefeso) que consta a su vez de seis voluacutemenes publicados entre 1932 y 1938 Para una visioacuten criacutetica de estas actas cfr R PRICE Truth omissions and fiction in the Acts of Chalcedon quien maacutes allaacute de algunas omisiones y escasa ficcioacuten les concede un notable componente de verdad Existe una versioacuten francesa parcial en A J FESTUGIEgraveRE Eacutephegravese et Chalceacutedoine (1982) donde se recogen las dos primeras sesiones e Id Actes de Chalceacutedoine (1983) donde se recogen las siguientes cuatro sesiones correspondientes a la definicioacuten de la fe Maacutes recien-temente se ha publicado una versioacuten inglesa completa en R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon (2005 22007)

9 De entre los numerosos estudios recientes sobre la definicioacuten calcedonense sobresale A DE HALLEUX La deacutefinition christologique (1976) que recoge ademaacutes las aportaciones de los principales estudios anteriores a partir de 1945 una exposicioacuten sinteacutetica de caraacutecter menos teacutecnico se halla en Id Le Concile de Chalceacutedoine 12-15 (1993) El citado trabajo de 1976 fue integrado en A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 753-764 (1979) Las aporta-ciones de A de Halleux asiacute como las consideraciones de A Grillmeier han sido recogidas por la que fue principal colaboradora del segundo en T HAINTHALER A short analysis of the definition (2006) En su edicioacuten de las actas el profesor R Price se esfuerza por ofrecer claves para el anaacutelisis de la definicioacuten R PRICE - M GADDIS The Acts of Chalcedon 1 68-71 e Id The Acts of Chalcedon 2 183-191 (2005) Cfr tambieacuten H DROBNER Fonti teologiche e analisi 42-58 (ponencia para un congreso de 2001) interesante por su clari-ficadora propuesta de estructura basada en las observaciones de A de Halleux y porque tiene en cuenta las posibles fuentes latinas de la definicioacuten Siempre es uacutetil por su claridad y caraacutecter didaacutectico P T CAMELOT Eacutephegravese et Chalceacutedoine 138-150 (1962) Ademaacutes son destacables por las mismas razones B SESBOUumlEacute Jeacutesus-Christ dans la tradition 109-119 (1982) y B SESBOUumlEacute - J WOLINSKI Histoire des dogmes I 407-412 (1995) seccioacuten re-

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Proponemos que toda aproximacioacuten actual a la cristologiacutea de Calce-donia debe hacerse de la mano de laquointeacuterpretesraquo adecuados esto es de estudiosos de la Iglesia primitiva patroacutelogos e historiadores que ejercen de mediadores Esto permite que el teoacutelogo sabiamente pueda descar-gar en ellos parte de su responsabilidad10 Por tanto es crucial el papel de estos laquointeacuterpretesraquo en el itinerario hacia Calcedonia y debe decidirse cuidadosamente cuaacuteles elegir

Asiacute sin dejar de lado la cristologiacutea calcedonense como objeto priorita-rio es preciso prestar atencioacuten a los estudiosos que lo han tratado vistos como laquointeacuterpretesraquo y como imprescindibles laquocompantildeeros de caminoraquo del teoacutelogo De este modo se plantea un acercamiento de una forma renovada a la cuestioacuten de la cristologiacutea de Calcedonia a traveacutes de la mirada de sus estudiosos actuales

2 tres inteacuterpretes ActuAles de cAlcedoniA

21 Andreacute de Halleux principal inteacuterprete contemporaacuteneo de Cal-cedonia

Al entrar en contacto con los trabajos recientes sobre el cuarto concilio emerge enseguida la figura del franciscano belga Andreacute de Halleux (1929-1994) Se trata de un autor apenas conocido para el gran puacuteblico pero citado por casi todos los que han escrito sobre Calcedonia despueacutes de eacutel

A de Halleux fue un eminente patroacutelogo y filoacutelogo de la Universi-dad de Lovaina que dedicoacute su obra y su vida al estudio de la antiguumledad cristiana y al ecumenismo buscando poner la patrologiacutea al servicio de la unidad de las Iglesias11

A juicio de los principales estudiosos12 A de Halleux es el autor del anaacutelisis maacutes minucioso de la definicioacuten calcedonense publicado (1976)

dactada por Sesbouumleacute en la que recoge sus trabajos anteriores Asimismo resultan de intereacutes B STUDER Dios salvador en los Padres 315-322 R A NORRIS Chalcedon Revisited y S COAKLEY What Does Chalcedon Solve and What Does it Not

10 Como indica A de Halleux precisamente un destacado estudioso reciente del cuarto concilio cfr A DE HALLEUX Pourquoi les Eacuteglises ont-elles besoin aujourdrsquohui drsquoune theacuteologie patristique 512

11 Esto se refleja en el tiacutetulo del volumen que recoge sus principales trabajos A DE HALLEUX Patrologie et œcumeacutenisme

12 Por ejemplo cfr T HAINTHALER A Short Analysis of the Definition 317 R PRI-CE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 73 R PRICE The Council of Chalcedon a Narrative 81

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hasta hoy13 cuya importancia no ha disminuido cuarenta antildeos despueacutes de su aparicioacuten y maacutes de veinte despueacutes de la muerte de su autor sobrevenida en un momento de intenso trabajo intelectual precisamente en relacioacuten con la controversia cristoloacutegica Este autor ha publicado otros trabajos de gran intereacutes en torno a la cristologiacutea patriacutestica y Calcedonia14

Es preciso antildeadir que la toma de contacto con el itinerario intelectual y vital de Halleux supone una gran ayuda para comprender la importancia de su aportacioacuten asiacute como un estiacutemulo para afrontar las grandes divisio-nes que se produjeron en el pasado y que auacuten perduran15 Formado en la reconocida escuela histoacuterico-criacutetica lovanista e inicialmente experto en estudios siriacuteacos se convirtioacute en un reconocido patroacutelogo y en un activo experto en cuestiones ecumeacutenicas Gracias a su formacioacuten Halleux presta una atencioacuten preferente a las fuentes primarias que domina como muy pocos A la vez tambieacuten a causa de esta formacioacuten evita por principio preconcepciones y juicios de valor con respecto a los temas estudiados incluyendo Calcedonia Asimismo estaacute convencido de que la tarea prin-cipal del patroacutelogo es contribuir a la unidad de las Iglesias

Su obra compuesta sobre todo por artiacuteculos dispersos trata muchos elementos del pasado que abocaron a la divisioacuten de las Iglesias o que son causa de controversias teoloacutegicas entre ellas (la teologiacutea trinitaria la procesioacuten del Espiacuteritu Santo los sacramentos la controversia en torno al palamismo)16

13 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique publicado en 1976 fue recogido posteriormente en el volumen recopilatorio Patrologie et œcumeacutenisme

14 Por su visioacuten sinteacutetica destaca especialmente su entrada correspondiente a Calce-donia en la Enciclopeacutedie Maronite A DE HALLEUX Le Concile de Chalceacutedoine Id Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne Tambieacuten son de intereacutes sus estudios sobre el canon 28 del concilio Id Le vingt-huitiegraveme canon de Chalceacutedoine Id Le deacutecret chalceacutedonien sur les preacuterogatives de la Nouvelle Rome En relacioacuten con la controversia cristoloacutegica destacan A DE HALLEUX Nestorius histoire et doctrine Id Cyrill von Alexandrien Id Le dyophy-sisme christologique de Cyrille Id La premiegravere session Id Les douze chapitres cyrilliens Id Lrsquoaccord christologique de 433

15 Para una aproximacioacuten a este itinerario cfr sobre todo A DE HALLEUX Une vie consacreacutee y tambieacuten Id Pourquoi les Eacuteglises ont-elles besoin aujourdrsquohui drsquoune theacuteologie patristique Id Patrologie et œcumeacutenisme introduccioacuten asimismo son de gran intereacutes algunas de las necroloacutegicas escritas en su memoria como J M SEVRIN Andreacute de Halleux (1929-1994) J RYCKMANS - L VAN ROMPAY Andreacute de Halleux

16 Junto con el concilio de Calcedonia estos son los temas de su volumen recopilatorio cfr A DE HALLEUX Patrologie et œcumeacutenisme

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22 Alois Grillmeier y Richard Price como complemento y marco de Andreacute de Halleux

Ademaacutes de Andreacute de Halleux se ha elegido otros dos autores de entre los estudiosos contemporaacuteneos del cuarto concilio Alois Grillmeier y Richard Price Su obra contribuye a situar las aportaciones de Halleux dentro de un marco maacutes completo tanto en el tiempo como en el enfoque asiacute como a complementarlas en la buacutesqueda de una comprensioacuten actual de la cristologiacutea de Calcedonia

El primero de estos autores el jesuita alemaacuten Alois Grillmeier (1910-1998) fue un famoso historiador del dogma y uno de los mayores exper-tos en cristologiacutea patriacutestica del siglo XX Fue creado cardenal por Juan Pa blo II Destaca por haber sido el editor de una monumental coleccioacuten de estudios publicados en torno al 1500 aniversario de Calcedonia (Das Konzil von Chalkedon)17 asiacute como por su opus magnum Jesus der Chris-tus im Glauben der Kirche18 asiacute como otros trabajos19 Contribuye al estu-dio de Calcedonia especialmente con elementos que ayudan a interpretar la definicioacuten dentro del contexto de la historia de los dogmas y de las criacuteticas contemporaacuteneas a la cristologiacutea patriacutestica

El segundo autor escogido es el sacerdote ingleacutes Richard Price (1947) historiador y teoacutelogo dedicado uacuteltimamente a los concilios primitivos que ha editado una versioacuten inglesa de las actas de Calcedonia amplia-mente anotada y comentada20 en la que recoge las aportaciones recientes

17 Cfr A GRILLMEIER - H BACHT Das Konzil von Chalkedon (1951-1954) Ade-maacutes de editor es autor de dos importantes trabajos A GRILLMEIER Die theologische und sprachliche Vorbereitung y Vorbereitung des Mittelalters

18 Se trata de una obra auacuten inconclusa La edicioacuten alemana maacutes reciente A GRILL-MEIER - T HAINTHALER Jesus der Christus im Glauben der Kirche consta de momento de cinco voluacutemenes actualmente su publicacioacuten corre a cargo de su asistente T Hainthaler Existe traduccioacuten espantildeola tan soacutelo del primer volumen A GRILLMEIER Cristo en la Tra-dicioacuten Cristiana que abarca desde el Nuevo Testamento al Concilio de Calcedonia siguiendo la uacuteltima edicioacuten alemana

19 Cfr sus voluacutemenes recopilatorios A GRILLMEIER Mit ihm und in ihm (1975 21978) A GRILLMEIER - T HAINTHALER Fragmente zur Christologie (1997) Este uacutel-timo contiene una detallada bibliografiacutea del cardenal Grillmeier Destacan trabajos como A GRILLMEIER Piscatorie - Aristotelice Id Kerygma Reflexion und Dogma Id Vom Sym-bolum zur Summa Id Das Kerygma von Chalzedon Id Hellenisierung - Judaisierung des Christentums Id Moderne Hermeneutik altkirchliche Christologie

20 Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I-III (2005) Tam-bieacuten ha publicado las actas de Constantinopla II y del siacutenodo lateranense del 649 R PRICE The Acts of the Council of Constantinople of 553 (2009) R PRICE - P BOOTH - C CU-BITT The Acts of the Lateran Synod of 649 (2014)

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en torno a la cuestioacuten y aporta criterios de interpretacioacuten Asimismo ha publicado otros trabajos sobre los concilios primitivos21 Contribuye al tema de nuestro intereacutes especialmente desde la perspectiva de la historia de la Iglesia y ofrece ademaacutes una panoraacutemica que incluye los estudios maacutes recientes

23 Planteamiento del trabajo con los inteacuterpretes

Asiacute a traveacutes de A de Halleux y los otros dos estudiosos citados cuya obra incluye asimismo referencias a muchos otros se puede formar una panoraacutemica general de las aportaciones de los estudios recientes sobre Calcedonia en Occidente que engloba los distintos aacutembitos linguumliacutesticos y culturales que estos recogen y que nos permite realizar una aproximacioacuten actual significativa De este modo se pretende ofrecer elementos para presentar la cristologiacutea de Calcedonia desde una perspectiva renovada Es preciso antildeadir que no hay praacutecticamente estudios sobre A de Halleux A Grillmeier y R Price22

Para exponer las contribuciones los tres autores citados con respecto a la cristologiacutea Calcedonia se eligen tres ejes temaacuteticos como referencia que corresponden con los elementos clave en relacioacuten con nuestra temaacute-tica23 Estos tres ejes son

1 El proceso de redaccioacuten y las fuentes de la definicioacuten calcedonense 2 La influencia en el concilio de Calcedonia de Cirilo de Alejandriacutea y

Leoacuten Magno3 La interpretacioacuten de la definicioacuten misma y la importancia de los

teacuterminos clave presentes en esta

21 Cfr R PRICE - M WHITBY Chalcedon in Context (2009 22011) Dentro de este vo-lumen le corresponden The Council of Chalcedon a Narrative Truth omissions and fiction in the Acts of Chalcedon The Second Council of Constantinople (553) and the Malleable Past

22 Esto sucede en primer lugar con el principal autor de referencia A de Halleux a pesar de ser auacuten hoy un estudioso de obligada cita en los estudios sobre las temaacuteticas sobre las que trabajoacute Tambieacuten sucede con respecto a A Grillmeier aunque parezca sorprendente por ser un autor de referencia y ampliamente reconocido traducido y citado esta situacioacuten es especialmente notoria en lengua espantildeola como lamenta J A MARTIacuteNEZ CAMINO Jesuacutes de Nazaret el Cristo en la fe de la Iglesia Maacutes comprensible es el desconocimiento de la obra de R Price por ser mucho maacutes reciente pero de quien se puede prever que seraacute un autor muy influyente en el futuro gracias a su edicioacuten de las actas

23 Estos tres puntos se han escogido a partir de la lectura de los recientes estudios sobre la cristologiacutea de Calcedonia que ha permitido identificar estos elementos clave

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3 eleMentos pArA unA AproxiMAcioacuten renovAdA A cAlcedoniA

Seguidamente se ofrecen las principales aportaciones de estos tres autores con respecto a los tres ejes presentados

31 Redaccioacutenyfuentesdeladefinicioacuten

Como ya se ha indicado A de Halleux ha realizado la propuesta maacutes significativa hasta la fecha por lo que respecta a la estructura y las posibles fuentes de la definicioacuten calcedonense En su anaacutelisis pone en juego su formacioacuten como filoacutelogo y patroacutelogo que le lleva a afrontar el texto desde las perspectivas linguumliacutestica histoacuterica y teoloacutegica y a ponerlo en relacioacuten con sus posibles fuentes tomando en consideracioacuten preferentemente la documentacioacuten presente en las actas24

Destaca su afirmacioacuten del horos como un texto estructurado y redactado orgaacutenicamente en el que se insertan algunas modificaciones que corres-ponderiacutean a enmiendas exigidas en la sesioacuten quinta25 Descarta por tanto la idea de la definicioacuten como un laquomosaicoraquo de citas y propone la existencia de un verdadero laquoautorraquo para el texto y no un mero compilador 26

Por lo que se refiere a las fuentes de la definicioacuten destaca el papel de la Foacutermula de la Unioacuten del 433 (especialmente con respecto a la primera parte de la definicioacuten) que seriacutea leiacuteda en Calcedonia a traveacutes de la carta Laetentur caeli de Cirilo a Juan de Antioquiacutea En esta carta el alejandri-no hace suya la profesioacuten laquoantioquenaraquo de la Foacutermula de Unioacuten aunque ofrece su propia interpretacioacuten de esta27 De las cartas de Cirilo junto con la citada a Juan A de Halleux destaca tambieacuten la importancia de la

24 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique consta de cuatro partes una introduccioacuten (que incluye premisas de meacutetodo como considerar el texto como un todo y centrarse en la informacioacuten de las actas evitando reconstrucciones forenses) una recensioacuten de los trabajos previos al suyo (especialmente los dedicados al estudio de las fuentes) una propuesta propia con respecto a la definicioacuten (estructura estudio de las fuentes elementos de interpretacioacuten) y una conclusioacuten final

25 Para eacutel basaacutendose en la consideracioacuten de su propio anaacutelisis estructural las enmiendas de uacuteltima hora seriacutean los cuatro famosos adverbios y el inciso sobre la propiedad y la persona que se habriacutean hecho sobre un formulario vinculado a Basilio de Seleucia que ya contendriacutea la foacutermula difisita reconocido en dos naturalezas

26 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 156ss27 Cfr Id La deacutefinition christologique 14155 Esta afirmacioacuten aparece como una con-

clusioacuten de su recensioacuten a los autores anteriores a eacutel En su carta a Juan Cirilo reinterpreta los dos laquoperfectoraquo de la Foacutermula de Unioacuten perfecto Dios y perfecto hombre son glosados como perfecto en la divinidad y perfecto en la humanidad evitando el riesgo de afirmar dos sujetos en Cristo La definicioacuten calcedonense recogeraacute este desplazamiento terminoloacutegico

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segunda a Nestorio a la vez que rechaza como fuente directa la tercera carta a Nestorio con los anatematismos28

Asimismo por lo que respecta a la fuente del elemento central de la de-finicioacuten su laquofoacutermula difisitaraquo (laquoreconocido en dos naturalezasraquo) Hal leux resalta la importancia de la profesioacuten del metropolita Basilio de Seleucia pronunciada en el siacutenodo constantinopolitano del 448 que condenoacute a Euti-ques y en la que Basilio afirma expliacutecitamente basarse en Cirilo29

32 Cirilo y Leoacuten en Calcedonia

Por lo que respecta a la influencia de Cirilo y Leoacuten en el cuarto con-cilio los estudiosos occidentales recientes con A de Halleux como ex-ponente destacado han afirmado cada vez maacutes la importancia del ale-jandrino en Calcedonia hasta hablar de una laquofidelidad ciriliana baacutesicaraquo del concilio30 a la vez que se ha ido reduciendo la valoracioacuten del papel directo de Leoacuten Magno

La mayoriacutea de los estudiosos modernos propone que entre los padres de Calcedonia predominaba lo que R Price denomina laquocirilianismo mo-deradoraquo como postura teoloacutegica que dentro de una fidelidad baacutesica a Cirilo y la consiguiente afirmacioacuten clara de la unidad en Cristo permitiriacutea ademaacutes una aceptacioacuten del difisismo31

Ahora bien A de Halleux y otros estudiosos denuncian malenten-didos y ambiguumledades en torno a los textos y la doctrina de Cirilo ya en el tiempo del concilio e incluso desde la controversia con Nestorio

28 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 155165 Id Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 448ss

29 Cfr Id La deacutefinition christologique donde en muacuteltiples pasajes expone la importan-cia de Basilio Los primeros en destacar el papel de Basilio habiacutean sido R V Sellers (1953) y T-J Šagi-Bunić (1965) A de Halleux afirma que el conjunto de la definicioacuten que eacutel consi-dera como un texto orgaacutenico se hallariacutea bajo la influencia de Basilio incluidas algunas de las modificaciones Maacutes adelante G Martzelos (Der Vater der dyophysitischen Formel) insistiraacute en la autoriacutea basiliana de la claacuteusula difisita aunque su propuesta seraacute valorada criacuteticamente por A de Halleux (Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne)

30 Cfr A DE HALLEUX Une vie consacreacutee 4631 El cirilianismo moderado se basariacutea en la segunda carta a Nestorio y la Laetentur

caeli a Juan de Antioquiacutea tomando distancias de la tercera carta a Nestorio y de los anate-matismos y evitando expresiones marcadamente teopasquitas se habriacutea convertido en la teologiacutea dominante del Oriente griego Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 62ss A de Halleux se refiere a la diversidad de interpretaciones que ofreciacutea el legado de Cirilo entre otros en Cyrill von Alexandrien 147 y Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 468s

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iniciada el 42832 Ademaacutes el mismo Halleux denuncia la debilidad de la Unioacuten del 433 tanto en la foacutermula dogmaacutetica resultante como en su inter-pretacioacuten por las partes enfrentadas La deficiente resolucioacuten del conflicto efesino a traveacutes de una unioacuten superficial y ambigua conduciraacute a una pron-ta reaparicioacuten de las hostilidades que desembocaraacuten en la celebracioacuten de Calcedonia y el posterior drama33 La trayectoria literaria de A de Halleux muestra que un punto absolutamente determinante es cuaacutel es la adecua-da interpretacioacuten de la cristologiacutea de Cirilo no solo en vida sino en los antildeos siguientes a su muerte (dagger 444) y en particular por lo que respecta al cuarto Concilio Este tema es tradicionalmente una dificultad para los que buscan aproximarse a la controversia cristoloacutegica34

Por lo que respecta a Leoacuten Magno como se ha indicado los estudios recientes le otorgan un papel limitado en Calcedonia aunque a traveacutes de sus legados y de los comisarios imperiales su influencia habriacutea sido decisiva en la quinta sesioacuten del Concilio impulsando la redaccioacuten de una foacutermula inequiacutevocamente difisita De hecho A de Halleux muestra en su anaacutelisis de la definicioacuten que el papel del Tomus como fuente de la definicioacuten seriacutea de hecho secundario35 Este mismo autor afirma que si el Tomus fue recibido en el concilio fue porque los padres reconocieron que concordaba con Cirilo36 y situaacutendolo en el uacuteltimo lugar de una laquoje-rarquiacutea descendenteraquo de documentos El uacutenico pasaje de la definicioacuten que habriacutea sido tomado del Tomus habriacutea sido modificado para situarlo en concordancia con Cirilo en lo que A de Halleux denomina laquocirilia-nizacioacuten estiliacutesticaraquo37

32 Cfr por ejemplo A DE HALLEUX Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 469 Tam-bieacuten A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 679ss donde se propone que en Calcedonia se habriacutean seleccionado los escritos de Cirilo para evitar todo extremismo en la formulacioacuten

33 Cfr A DE HALLEUX Lrsquoaccord christologique de 43334 Cfr por ejemplo Id Le dyophysisme christologique de Cyrille R A NORRIS

Christological Models in Cyril of Alexandria 35 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique tanto en la recensioacuten de los

estudios anteriores como en la propuesta del mismo Halleux 36 En la segunda sesioacuten conciliar seguacuten la numeracioacuten latina y en una reunioacuten posterior

(pero anterior a la sesioacuten cuarta) se discute acerca del Tomus y su compatibilidad con Cirilo37 Esta jerarquiacutea descendente de la documentacioacuten calcedonense situacutea en su punto maacutes

alto al siacutembolo niceno seguido del constantinopolitano las cartas de Cirilo (la segunda a Nestorio y la Laetentur caeli a Juan) y finalmente el Tomus de Leoacuten La ortodoxia de cada documento se mediriacutea por su fidelidad a los precedentes cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 163 Id La reacuteception du symbole œcumeacutenique 41ss Halleux pone de mani-fiesto coacutemo la cita del Tomus de Leoacuten es modificada y fusionada orgaacutenicamente con otra cita de Cirilo junto con la adicioacuten del laquouna hipoacutestasisraquo (que tambieacuten se remonta a Cirilo)

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Es preciso aproximarnos a Calcedonia desde esta oacuteptica de mayoriacutea laquocirilianaraquo y no a traveacutes del Tomus o de Leoacuten mismo vistos como criterio interpretativo de la definicioacuten lo que era la postura habitual en Occidente hasta tiempos recientes Al respecto A de Halleux matiza que Calcedo-nia no habriacutea sido una derrota de Leoacuten sobre Cirilo sino una derrota a un monofisismo extremo e intolerante38

33 Interpretacioacuten y terminologiacutea

Los estudios recientes contribuyen a desvelar claves para interpre-tar la definicioacuten de Calcedonia dentro de su contexto textual teoloacutegico y cultural asiacute como a una revalorizacioacuten de cara a la reflexioacuten cristoloacute-gica actual

331 Calcedonia vinculada al Siacutembolo

Una aportacioacuten destacada de estos estudios es la iacutentima unioacuten de la definicioacuten calcedonense con el Siacutembolo de la fe39 sobre todo teniendo en cuenta el prefacio del horos casi siempre olvidado de manera que la defi-nicioacuten se presenta a siacute misma como auteacutentica interpretacioacuten del Siacutembolo de la fe nicena e incluso como una explicitacioacuten de su contenido40

En esta liacutenea avanzan aunque con matices diferentes los tres auto res tratados Andreacute de Halleux muestra la vinculacioacuten de Calcedonia con el siacutembolo en el plano maacutes textual y teoloacutegico tratando la recepcioacuten del siacutembolo a traveacutes del tiempo41 Alois Grillmeier y Richard Price afrontan esta cuestioacuten desde una perspectiva maacutes histoacuterica remitiendo especial-mente a las intervenciones recopiladas en el Codex Encyclius que recoge una gran laquoencuestaraquo del 457-458 realizada por el emperador Leoacuten I y

38 Cfr A DE HALLEUX Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 471s39 Teacutengase en cuenta que se tata del Siacutembolo niceno el Siacutembolo constantinopolitano ha-

biacutea permanecido desconocido hasta Calcedonia y precisamente reaparecioacute en las discusiones conciliares sobre la redaccioacuten de una foacutermula cristoloacutegica

40 Cfr por ejemplo A DE HALLEUX La reacuteception du symbole œcumeacutenique e Id Le Concile de Chalceacutedoine se refieren al prefacio y a la vinculacioacuten entre la definicioacuten y el Siacutembolo

41 Recueacuterdese que el Siacutembolo ocupa el primer lugar de la jerarquiacutea descendente de los lugares teoloacutegicos para la definicioacuten calcedonense La definicioacuten aparece como una interpre-tacioacuten de la fe nicena fiel como lo habiacutea sido Constantinopla I y en liacutenea con los testimonios individuales de la tradicioacuten inteacuterpretes ortodoxos del Credo esto es Cirilo y Leoacuten Cfr A DE HALLEUX La reacuteception du symbole œcumeacutenique 42-46

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que resulta de gran ayuda para acercarse a la comprensioacuten de Calcedonia en el momento42

Esta relacioacuten con el Siacutembolo permite insertar la definicioacuten del cuarto concilio en la gran tradicioacuten de la Iglesia sin desvincularla de la historia de la salvacioacuten del valor de la soteriologiacutea de toda la teologiacutea trinitaria o del papel del Espiacuteritu Santo43

332 Afirmacioacuten baacutesica de la unidad en Cristo

Los estudios recientes han mostrado que en Calcedonia si bien se afir-ma la dualidad de naturalezas en Jesucristo es prioritaria la afirmacioacuten de la unidad Por un lado se ha presentado la definicioacuten del cuarto concilio dentro de una fidelidad baacutesica a Cirilo44 como una expresioacuten del laquociri-lianismo moderadoraquo45 de manera que la afirmacioacuten de la unidad se halla siempre presente Por otro lado la estructura de la definicioacuten tal como es puesta de manifiesto por A de Halleux revela el texto como una afirma-cioacuten fundamental de la unidad de Cristo de modo inequiacutevoco en la cual se inserta la dualidad de naturalezas fruto de la Encarnacioacuten46 dualidad que no es una mera equiparacioacuten

42 Grillmeier se refiere al Codex en numerosos trabajos y destaca que gran parte de los obispos habiacutean interpretado Calcedonia en un sentido kerigmaacutetico (como pescadores no como filoacutesofos aristoteacutelicos) dando prioridad al Credo del cual la definicioacuten seriacutea una inter-pretatio Cfr A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 765-768 Id Jesus der Christus 21 221-266 entre muchos otros Grillmeier afirma con contundencia la estrecha dependencia de la definicioacuten respecto del siacutembolo y su consecuente valor soterioloacutegico cfr Id Jesus der Christus 21 5238ss Id Wir glauben an den einen Herrn especialmente 52-59 Por su par-te R Price trata tambieacuten la vinculacioacuten de Calcedonia con el Siacutembolo y coacutemo esto se muestra en el prefacio de la definicioacuten y en las respuestas contenidas en el Codex Encyclius dentro de una comprensioacuten de un ideal sacramental y de comunioacuten cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 56-59

43 Precisamente estas son criacuteticas que se le han hecho con frecuencia a la misma defi-nicioacuten

44 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique muestra esta fidelidad a lo largo de todo el artiacuteculo tanto por lo que respecta a las fuentes directas (cartas de Cirilo a Nestorio y a Juan) como a la teologiacutea de Basilio de Seleucia (de quien dependeriacutea el conjunto de la definicioacuten y quien se declara fiel a Cirilo) o a la redaccioacuten de la definicioacuten (en la que la uacutenica cita del Tomus de Leoacuten habriacutea sido cirilianizada)

45 Este cirilianismo moderado recordemos dentro de una afirmacioacuten clara de la unidad de Cristo reconoce la dualidad de naturalezas Es visto por Price entre otros como predo-minante en el momento Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 62-65

46 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique a partir de su anaacutelisis de la estructura de la definicioacuten muestra que la afirmacioacuten de la unidad es baacutesica hallaacutendose al inicio al final y a la mitad

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Asimismo la afirmacioacuten de la distincioacuten real de estas naturalezas no desgaja la unidad como apuntan los cuatro famosos adverbios (laquosin con-fusioacuten sin cambio sin separacioacuten sin divisioacutenraquo)47 La condicioacuten negativa de los adverbios indica que no buscan dar cuenta racional del misterio de la unioacuten cristoloacutegica sino solo garantizarlo ante las herejiacuteas de la confu-sioacuten de naturalezas y de la divisioacuten de la persona48

333 Realismo del difisismo calcedonense

Por lo que respecta a la foacutermula difisita (laquoreconocido en dos naturale-zasraquo) teniendo en cuenta la consideracioacuten del laquocirilianismo moderadoraquo predominante en Calcedonia A de Halleux ha defendido con fuerza que la definicioacuten calcedonense debe ser entendida en liacutenea con una distincioacuten real de las naturalezas en Cristo y no como una distincioacuten puramente no-cional (en la sola theoria) frente a otras posturas recientes Esta defensa del realismo del difisismo calcedonense es especialmente eneacutergica en sus uacuteltimos escritos49

334 El impulso a la terminologiacutea teoloacutegica

Calcedonia supone sin duda un paso adelante en la clarificacioacuten ter-minoloacutegica de la cristologiacutea distinguiendo por un lado la laquonaturale-zaraquo (physis) de la laquopersonaraquo (prosocircpon-hipoacutestasis) y situando ademaacutes prosocircpon junto a hipoacutestasis (ἐν δύο φύσεσιν frente a εἰς ἓν πρόσωπον

47 Es necesario precisar que para autores como A de Halleux estos cuatro adverbios que han dado tanto juego en la reflexioacuten teoloacutegica tendriacutean un papel secundario en la defini-cioacuten trataacutendose de hecho de un antildeadido que buscariacutea satisfacer las exigencias de los comi-sarios imperiales Seguacuten Halleux los adverbios rompen la estructura gramatical de la defi-nicioacuten y no queda claro a quieacuten se refieren si a laquodos naturalezasraquo a laquoreconocidoraquo o a laquouno solo y el mismoraquo Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 162 Id Le Concile de Chalceacutedoine 14 La mayoriacutea de los estudiosos coinciden en considerarlos un lugar comuacuten a los diversos partidos cfr ademaacutes del mismo A de Halleux entre otros T HAINTHALER A short analysis of the definition 323

48 A DE HALLEUX Le Concile de Chalceacutedoine 1449 La afirmacioacuten inequiacutevoca del realismo del difisismo de la definicioacuten calcedonense se

ve influida especialmente por los acuerdos entre ortodoxos y ortodoxos orientales de 1989 y 1990 de los cuales surgen dos declaraciones conjuntas que interpretan la dualidad cristoloacute-gica en liacutenea con la doctrina ciriliana de la distincioacuten de las naturalezas en Cristo por la mera theoria Cfr A DE HALLEUX Actualiteacute du neacuteochalceacutedonisme Id Orthodoxes orientaux en dialogue Id Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne donde critica la postura de G Martzelos quien habiacutea participado en los citados diaacutelogos ecumeacutenicos Esta postura de Halleux se ve reflejada en su obra Le Concile de Chalceacutedoine 16

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καὶ μίαν ὑπόστασιν) A primera vista Calcedonia da en la terminologiacutea teoloacutegica el paso que los padres Capadocios y Constantinopla I habiacutean dado en el campo trinitario50

Es preciso notar con Halleux la laquoimprecisioacutenraquo que rodea a la identifica-cioacuten de cuaacutel es la laquouacutenica hipoacutestasisraquo (μία ὑπόστασις) calcedonense51 Esta laquouna hipoacutestasisraquo es precisamente un elemento antildeadido al laquouna personaraquo leonino (el una persona latino habiacutea sido traducido como ἓν πρόσωπον) para subrayar la unidad en lo que podriacutea ser una enmienda de uacuteltima hora como indica Halleux52 Ciertamente la definicioacuten no afirma (pero tampo-co niega) que el laquouna hipoacutestasisraquo corresponda a la hipoacutestasis del Logos53 Esto no obsta para que otros autores como Price afirmen que esta uacutenica hipoacutestasis en la definicioacuten puede identificarse con el Logos eterno54

Esta cuestioacuten terminoloacutegica precisamente por no haber sido clarificada en Calcedonia (el concilio no pretendiacutea tanto definir los teacuterminos como de-fender la fe) requeriraacute grandes esfuerzos en la teologiacutea bizantina posterior al cuarto concilio tal como sentildealan los estudiosos actuales55

50 Cfr entre otros Ibid 14s51 En la definicioacuten no se explicita que Cristo sea una hipoacutestasis ni que esta hipoacutestasis

deba ser concebida como una laquopersonaraquo (en el sentido filosoacutefico moderno) ni que esta perso-na sea laquoDios Verboraquo Lo que se afirma es que la uacutenica hipoacutestasis se encuentra en el teacutermino de la concurrencia de la especificidad de cada naturaleza Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 167

52 En su anaacutelisis A de Halleux (La deacutefinition christologique 167s) identifica el pasaje de la definicioacuten donde se situacutea laquohipoacutestasisraquo junto prosocircpon (en modo alguno borrada la diferencia de naturalezas por causa de la unioacuten sino conservando cada naturaleza su pro-piedad y concurriendo en una sola persona [prosocircpon] y en una sola hipoacutestasis) como una modificacioacuten posiblemente de uacuteltima hora realizada sobre un formulario previo Considera que el teacutermino laquohipoacutestasisraquo habriacutea jugado un papel secundario en las discusiones conciliares y habriacutea sido antildeadido al laquopersonaraquo latino del Tomus de Leoacuten Magno (que se habiacutea traducido al griego como prosocircpon con riesgo de ser interpretado en sentido nestoriano) como una precisioacuten secundaria para reforzar la afirmacioacuten de la unidad fundamental En la p 168 glosa este pasaje de un modo interesante laquoDans le Christ les deux natures la diviniteacute et lrsquohumani-teacute conservent leur diffeacuterence speacutecifique bien que celle-ci se rejoigne en celui qui est un seul et le mecircme non seulement dans sa manifestation exteacuterieure (prosopon) mais aussi dans son ecirctre profond (hypostasis)raquo

53 Esta precisioacuten siacute apareceraacute en los anatematismos del II concilio de Constantinopla del 553

54 Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon 70 55 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 170 R PRICE - M GADDIS

The Acts of the Council of Chalcedon 71 Grillmeier (Jesus der Christus 1 762s) afirma que los padres de Calcedonia no fueron conscientes de la importancia de su decisioacuten ni sospecha-ron lo que iba a significar para las futuras generaciones de teoacutelogos afirma asimismo que aunque los conceptos de hipoacutestasis y persona siguen sin precisar el sentido del dogma de Calcedonia estaacute muy claro los padres habriacutean querido significar que a pesar de la diferencia

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34 Elementos de respuesta a las principales criacuteticas a Calcedonia

Los estudios contemporaacuteneos permiten responder desde una perspec-tiva renovada a las criacuteticas maacutes habituales de la teologiacutea contra Calcedo-nia56 La criacutetica contra Calcedonia y los otros concilios primitivos de haber laquohelenizadoraquo el mensaje cristiano ha sido constante desde los tiempos de Adolf von Harnack Los autores estudiados en especial Grillmeier han mostrado que Calcedonia no supone una laquohelenizacioacuten del cristianismoraquo (Hellenisierung des Christentums) Por el contrario propone que la de-finicioacuten calcedonense seriacutea en realidad una auteacutentica laquodeshelenizacioacutenraquo (Enthellenisierung) que buscariacutea salvaguardar la fe biacuteblica en Jesucristo frente a las amenazas del momento57 Si se usaron teacuterminos griegos en la definicioacuten no fue porque la fe se sometiera a una determinada filosofiacutea sino porque con ellos se buscaba poner un determinado laquomarco conceptual helenistaraquo al servicio de la expresioacuten de la fe que era la prioridad58

En los estudios recientes se ha revalorizado el contenido kerigmaacutetico de la definicioacuten y se ha evidenciado que la terminologiacutea teacutecnica usada en ella se hallariacutea al servicio de la fe aunque provenga del mundo heleniacutestico59

real entre las naturalezas de la divinidad y la humanidad Cristo es uno una sola persona o hipoacutestasis este enunciado puede hacerse sin necesidad de definir exactamente el contenido metafiacutesico de los conceptos pues no es misioacuten de los concilios ensentildear metafiacutesica sino servir al anuncio de la Iglesia que tiene por contenido la revelacioacuten de Dios en Cristo y en el Espiacuteritu El mismo A Grillmeier (Das Kerygma von Chalzedon) hace notar que si bien el contenido del dogma de la Encarnacioacuten estaba claro en Calcedonia podriacutea expresarse mediante conceptos auacuten no suficientemente precisados terminoloacutegicamente

56 Estas criacuteticas como ya se ha indicado se hallan sistematizadas criacuteticamente en G URIacuteBARRI Leyendo el Concilio de Calcedonia quien recoge tambieacuten las aportaciones de B SESBOUumlEacute Le proceacutes contemporain de Chalceacutedoine En resumen seriacutean las siguien-tes Calcedonia empleariacutea un lenguaje conceptual inadecuado seguiriacutea un esquema dualista este esquema pondriacutea en tela de juicio la unidad de Cristo Calcedonia estariacutea preso de una cristologiacutea desde arriba Calcedonia propondriacutea un Cristo desprovisto de auteacutentica perso-nalidad humana desconoceriacutea la dimensioacuten histoacuterica de la vida de Cristo prescindiriacutea del Espiacuteritu no presenta diferencias significativas en el modo de estar la divinidad en la keacutenosis y en la exaltacioacuten

57 La helenizacioacuten seriacutea en este caso la simbiosis fiacutesica entre la divinidad y la carne Grillmeier trata de la helenizacioacuten del cristianismo en numerosos trabajos por ejemplo Mo-derne Hermeneutik altkirchliche Christologie 544s J A Riestra (Il dibattito sul valore 107s) considera que gracias a los trabajos de Grillmeier hoy no puede sostenerse que Cal-cedonia haya helenizado el cristianismo

58 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 169s Al respecto tambieacuten de-fiende la definicioacuten de Calcedonia frente a las acusaciones de helenizacioacuten (Le Concile de Chalceacutedoine 16 ss)

59 Cfr Id La deacutefinition christologique 157 y 169s Id Le Concile de Chalceacutedoine 12-17 Estructuralmente divide la definicioacuten de Calcedonia en dos partes una kerigmaacutetica

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recordando que lo que estaba en juego no era una cuestioacuten acadeacutemica sino eclesial la unidad sacramental60 Asimismo el poner de manifiesto la afirmacioacuten inequiacutevoca de la unidad de Cristo por parte de la definicioacuten contribuye a responder a los que acusan a la definicioacuten de dualismo

Como ya se ha indicado la vinculacioacuten de la foacutermula con el Siacutembolo permite responder en cierto modo a los que acusan a Calcedonia de olvi-dar las dimensiones trinitaria soterioloacutegica y pneumatoloacutegica asiacute como la dimensioacuten histoacuterica de la vida de Cristo

Ademaacutes los trabajos recientes tambieacuten han permitido poner de mani-fiesto la afirmacioacuten de la verdadera humanidad de Cristo El mismo Grill-meier ha apuntado que la cristologiacutea del cuarto concilio entendida de ma-nera adecuada continuacutea siendo fructiacutefera teoloacutegicamente como un punto de relacioacuten entre las cristologiacuteas descendente y ascendente asiacute como una apropiada recuperacioacuten del valor del elemento humano y de la historicidad de Jesucristo una cristologiacutea calcedonense llevada a sus uacuteltimas conse-cuencias hace posible la siacutentesis entre el Jesuacutes de la historia y el Cristo de la fe61 Calcedonia se inserta dentro del dinamismo de la Iglesia primitiva que pone en relacioacuten kerigma reflexioacuten teoloacutegica y dogma eclesial62 y podriacutea tomarse como base para una antropologiacutea cristiana63

Es interesante sentildealar que Grillmeier considera que la tensioacuten real-mente existente entre el kerigma de la Iglesia por un lado y la reflexioacuten y la evolucioacuten doctrinal por el otro se resuelve sin rupturas en una uacutenica laquohistoria de la feraquo En esta historia no habriacutea saltos o quiebras sino un desarrollo armoacutenico que podriacutea considerarse como una verdadera incul-turacioacuten teoloacutegica de la fe64

a modo de confesioacuten de fe y otra teoloacutegica con un lenguaje teacutecnico Grillmeier (Jesus der Christus 1 765-768 entre otros muchos pasajes) tambieacuten ha afirmado el valor kerigmaacutetico fundamental de la definicioacuten

60 Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of Chalcedon 1 5861 Cfr A GRILLMEIER Moderne Hermeneutik altkirchliche Christologie 543-545

Id Jesus Christus in Palaumlstina 26s Tambieacuten Id Jesus der Christus 1 765ss62 Metodoloacutegicamente Grillmeier afirma la interrelacioacuten entre kerigma reflexioacuten teo-

loacutegica y dogma (confesiones de fe foacutermulas dogmaacuteticas) pero siempre afirmando la priori-dad del kerigma y de la fe viva de la Iglesia Cfr especialmente A GRILLMEIER Kerygma Reflexion und Dogma Id Piscatorie-Aristotelice 283 Id Nicaea und Chalcedon 44-46 Id Zur Dogmen- und Konzilsgeschichte 221-220

63 Cfr Id Nicaea und Chalcedon 75ss 64 Cfr J A MARTIacuteNEZ CAMINO Jesuacutes de Nazaret el Cristo en la fe de la Iglesia

441 citando a A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 VIII

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4 conclusioacuten

Junto con Andreacute de Halleux maestro de las fuentes y principal guiacutea hacia el pasado Alois Grillmeier ha contribuido a situar el concilio de Calcedonia dentro de una historia de los dogmas como laquohistoria de feraquo que a su vez ha sido laquonarradoraquo por Richard Price

Investigar la cristologiacutea calcedonense no solo desde el punto de vista del concilio en siacute sino atendiendo a la oacuteptica de sus estudiosos posibilita un acercamiento nuevo a esta cuestioacuten que a su vez permite replantear las criacuteticas contemporaacuteneas a Calcedonia y ofrecer una ayuda para el trabajo de los teoacutelogos maacutes allaacute de los toacutepicos y de una lectura parcial de las fuentes

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ndashThe Council of Chalcedon (451) a Narrative in R PRICE - M WHITBY (eds) Chalcedon in Context Church Councils 400-700 Liverpool 2009 70-91

ndashThe Second Council of Constantinople (553) and the Malleable Past in R PRICE - M WHITBY (eds) Chalcedon in Context Church Councils (400-700) Liverpool 2009 117-132

ndashTruth omissions and fiction in the Acts of Chalcedon in R PRICE - M WHITBY (ed) Chalcedon in Context Church Councils (400-700) Liver-pool 2009 92-106

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PRICE R - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon Liverpool 2005ndashThe Acts of the Council of Chalcedon 1 General introduction documents be-

fore the Council Session I Liverpool 2005ndashThe Acts of the Council of Chalcedon 2 Sessions II-X Session on Carosus and

Dorotheus Session on Photius and Eustathius Session on Domnus Liver-pool 2005

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Mater Clementissima 1 (2016) 143-191

El Colegio Espantildeol de Roma centro de proacutefugos durante la Guerra civil espantildeola

ViCente CaacuterCel ortiacute1

Pontificio Colegio Espantildeol

resuMen Durante la Guerra civil el Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma se convirtioacute en Centro de acogida y atencioacuten para centenares de sacerdotes reli-giosos y seglares que consiguieron salir de Espantildea huyendo de los horrores del conflicto armado y de la sangrienta persecucioacuten religiosa desencadenada en la zona republicana Responsable de este Centro fue don Carmelo Blay Agente de Preces del Colegio a quien el papa Piacuteo XI encomendoacute dicha tarea El presente artiacuteculo recupera para la memoria histoacuterica la personalidad de este desconocido sacerdote valenciano y Operario diocesano asiacute como la intensa actividad que desarrolloacute en favor de los numerosos proacutefugos espantildeoles llegados a la Ciudad Eterna desde el verano de 1936

palabras ClaVe Persecucioacuten Guerra civil proacutefugos Colegio Espantildeol de Roma

abstraCt laquoThe Spanish College of Rome refugees center during the Civil warraquo Du-ring the Spanish Civil War the Pontifical Spanish College of San Joseacute in Rome beca-me the center for the reception and care of the hundreds of priests religious and lay people who escaped from Spain fleeing from the horrors of armed conflict and bloody religious persecution unleashed in the Republican zone Responsible for this Center was Don Carmelo Blay the procurator of the College to whom Pope Pius XI entrus-ted this task The present article recovers for the historical memory the personality of this unknown Valencian and diocesan labourer priest as well as the intense activity that developed in favor of the numerous Spanish fugitives arrived at the Eternal City from the summer of 1936

KeyworDs Persecution Civil War refugees Spanish College of Rome

1 Mons Vicente Caacutercel Ortiacute (Manises 1940) autor de numerosas y reconocidas obras es historiador y sacerdote diocesano de Valencia especialista en historia contemporaacutenea de la Iglesia en Espantildea y vicario para los sacerdotes valencianos en Roma

ViCente CaacuterCel ortiacute

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1 perfil biograacutefico de don cArMelo blAy

Nacido en Liria (Valencia) el 9 de julio de 1874 Carmelo Blay Palo-mar cursoacute los estudios eclesiaacutesticos en el Seminario conciliar central de Valencia como alumno del Colegio de Vocaciones eclesiaacutesticas de San Joseacute fundado por el beato Manuel Domingo y Sol2 y dirigido por la Her-mandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos Celebroacute su primera misa en la iglesia arciprestal de Liria el 17 de junio de 1897 pues habiacutea sido ordenado sacerdote el diacutea 12 del mismo mes Ese mismo antildeo ingresoacute en la mencionada Hermandad

Cuando contaba 25 antildeos fue enviado a tierras mejicanas y en el oto-ntildeo de 1899 tomoacute posesioacuten de sus nuevos ministerios de vicerrector y de profe sor del seminario de Chilapa en el que estuvo trabajando durante el curso 1899-1900 Alliacute conocioacute personalmente al presidente de la Repuacutebli-ca mejicana el general Porfirio Diacuteaz esta amistad se iriacutea estrechando al correr de los antildeos En el antildeo acadeacutemico 1900-1901 pasoacute con los mismos ministerios a Cuernavaca donde ejercioacute la ensentildeanza hasta terminar el curso 1903-1904 Cuernavaca era una reciente dioacutecesis erigida en 23 de

2 Conocido popularmente como Moseacuten Sol el beato Manuel Domingo y Sol (Tortosa Tarragona 1 de abril de 1836 - 25 de enero de 1909) fue el penuacuteltimo de doce hijos En 1851 ingresoacute en el Seminario de Tortosa siendo ordenado sacerdote el 9 de julio de 1860 Despueacutes comenzoacute a ocuparse de los pobres de la dioacutecesis de Tortosa dedicaacutendose fundamentalmen-te a la predicacioacuten hasta que el nuevo obispo Benito Vilamitjana lo envioacute al Seminario conciliar central de Valencia para que consiguiera el doctorado en teologiacutea tambieacuten obtuvo el bachillerato en artes por la universidad de Barcelona y posteriormente se hizo cargo de la ensentildeanza de la religioacuten en el Instituto de Tortosa Ejercioacute gran influjo entre los joacutevenes logrando organizar la Juventud Catoacutelica ndashuna especie de Accioacuten Catoacutelicandash y tambieacuten fundoacute la Congregacioacuten mariana y la revista El congregante de san Luis que dirigioacute durante quince antildeos Promovioacute ademaacutes la peregrinacioacuten nacional a Roma de los congregantes marianos Su encuentro con el joven Ramoacuten Valero que queriacutea ser sacerdote pero careciacutea de medios econoacutemicos le impulsoacute a fundar la que seriacutea su obra principal la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos del Sagrado Corazoacuten de Jesuacutes dedicada a promover las vocaciones eclesiaacutesticas a traveacutes de los llamados Colegios de San Joseacute el primero de los cuales fue fundado en Tortosa el 12 de octubre de 1879 Cuatro antildeos maacutes tarde fundoacute formalmente la Hermandad que veniacutea funcionando como grupo desde enero de 1883 El 2 de enero de 1885 en el colegio de San Joseacute de Tortosa se reunioacute el primer grupo de operarios para emitir la primera promesa de consagracioacuten a la nueva obra Gracias al impulso personal de moseacuten Sol y a la invitacioacuten de algunos obispos comenzaron a surgir en muchas dioacutecesis espantildeolas y portuguesas los colegios de vocaciones eclesiaacutesticas de forma que en 1888 se abrioacute el de Murcia en 1889 el de Orihuela y en los antildeos sucesivos los de Plasencia Burgos y Roma Este uacuteltimo destacoacute sobre todas sus fundaciones y fue erigido el 1 de abril de 1892 con el apoyo inicial del cardenal valenciano Benito Sanz y Foreacutes arzobispo de Sevilla quien apoyoacute a moseacuten Sol ante el cardenal Rampolla secretario de Estado y el sustituto de la Secretariacutea de Estado monsentildeor Della Chiesa futuro papa Benedicto XV El 25 de octubre de 1893 Leoacuten XIII cedioacute el Palacio Altemps para sede del Colegio Espantildeol de San Joseacute en Roma gesto

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junio de 1891 que abarcaba todo el Estado de Morelos El seminario contaba con 30 alumnos internos y se acababa de confiar su direccioacuten a los Operarios diocesanos

En el antildeo 1904 fue enviado a la ciudad de Meacutejico como encargado del Templo Nacional Expiatorio de San Felipe recayente en la ceacutentrica calle Madero en las cercaniacuteas del Zoacutecalo donde se levantan la catedral y el palacio presidencial Comenzoacute asiacute una nueva faceta de su vida y ma-nifestoacute unas cualidades hasta entonces ineacuteditas sus dotes diplomaacuteticas Responsable del templo oficial del Gobierno mejicano donde se celebra-ban las ceremonias y actos religiosos de caraacutecter nacional se relacionoacute con personalidades poliacuteticas del paiacutes de la cancilleriacutea espantildeola y otras embajadas en especial las de habla hispana En este templo permanecioacute hasta 1909

Requerido por los superiores para trasladarse a Roma llegoacute al Ponti-ficio Colegio Espantildeol cuando terminaba como administrador del mismo y agente de preces ante el Vaticano otro sacerdote valenciano tambieacuten oriundo de Liria Luis Mariacutea Albert 3 nombrado rector del Colegio Blay

que fue agradecido al Pontiacutefice por los obispos espantildeoles en un mensaje colectivo firmado en Valencia con motivo de la celebracioacuten alliacute del primer congreso eucariacutestico nacional Moseacuten Sol fue beatificado el 29 de marzo de 1987 Entre sus escritos descatan las Plaacuteticas a los Operarios (ed Lope Rubio Siacutegueme Salamanca 2002) que recogen las charlas que dirigiacutea anualmente a los operarios durante los ejercicios espirituales y que aprovechaba para revisar la marcha de las tareas de la Hermandad estudiaba proyectos e impartiacutea instrucciones El archivo de la Hermandad custodia todos sus manuscritos divididos en tres grandes aparta-dos predicacioacuten cartas y varios Bibliografiacutea A TORRES SAacuteNCHEZ Vida del siervo de Dios don Manuel Domingo y Sol apoacutestol de las vocaciones fundador de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos del Corazoacuten de Jesuacutes Tortosa 1934 F MARTIacuteN HER-NAacuteNDEZ - L RU BIO PARRADO Moseacuten Sol Vida de Manuel Domingo y Sol fundador de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos Siacutegueme Salamanca 1978 estas dos obras son las maacutes completas y rigurosas en datos histoacutericos porque las de J DE ANDREacuteS HERNANSANZ Moseacuten Sol Barcelona 1970 y la de J Mordf JAVIERRE Reportaje a Moseacuten Sol Un hombre bueno y audaz Madrid 1987 publicada con motivo de la beatificacioacuten son de tono periodiacutestico y divulgativo Cf tambieacuten L RUBIO PARRADO - J DE ANDREacuteS HER-NANSANZ - F MAR TIacuteN HERNAacuteNDEZ Sacerdotes Operarios Diocesanos Aproximacioacuten a su historia Siacutegueme Salamanca 1996 y J DE ANDREacuteS HERNANSANZ Cien antildeos de historia Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute Roma 1992

3 Luis Mariacutea Albert realizoacute sus estudios en el Seminario central de Valencia como alum-no interno del Colegio de San Joseacute para Vocaciones eclesiaacutesticas El 22 de diciembre de 1888 ya quiso ingresar en la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos aunque se oponiacutean sus padres pobres y ancianos que lo necesitaban pero insistioacute hasta conseguirlo Prestoacute ayu-da en el Colegio de Orihuela y tambieacuten en el de Murcia Luego pasoacute al de Valencia Ingresoacute en la Hermandad en septiembre de 1890 Recibioacute la ordenacioacuten sacerdotal en 1892 cele-brando su primera misa en Valencia el 4 de octubre de ese antildeo Permanecioacute en el Colegio de Valencia hasta 1894 en que fue destinado al Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma adonde

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le sucedioacute en ambos ministerios desde el 26 de octubre de 1909 Durante 1915 viajoacute a Pariacutes para atender espiritualmente al presidente mejicano Porfirio Diacuteaz gravemente enfermo de quien habiacutea sido amigo y con-sejero y a quien ayudoacute a morir cristianamente Acompantildeoacute al cardenal Benlloch arzobispo de Burgos en su embajada espiritual del antildeo 1923 a Hispanoameacuterica que tanto sirvioacute para estrechar los viacutenculos de aquellos paiacuteses con Espantildea

Durante tres deacutecadas don Carmelo no soacutelo fue procurador general de la Hermandad de Sacerdotes Operarios y administrador del Colegio Espantildeol sino el sacerdote maacutes popular de Roma consultor guiacutea y amigo de cuantos en Espantildea o en Hispanoameacuterica teniacutean algo que resolver en la Curia romana Como Agente de preces4 fue la persona que despachaba

llegoacute con Moseacuten Sol el diacutea 30 de octubre para encargarse de la administracioacuten del colegio y de la agencia de preces hasta 1909 en que fue nombrado rector del mismo Desde 1911 a 1914 convivioacute en el Colegio con el beato maacutertir Juan Ventura Solsona tambieacuten valenciano El antildeo 1914 fue destinado como rector al seminario de Barcelona donde estuvo hasta 1916 dejando muy buen recuerdo de su gestioacuten En 1916 pasoacute como director al Colegio de San Joseacute de Valencia y en 1921 fue nombrado rector del Seminario de Salamanca donde enfer-moacute muy gravemente el 3 de abril de 1925 El 9 de junio pudo viajar a Liria para reponerse lo que consiguioacute muy lentamente En octubre de 1926 fue destinado como director al Colegio de Valencia y el 17 de marzo de 1927 se ofrecioacute para ir de nuevo al Colegio de Roma como administrador porque el que ejerciacutea dicho ministerio habiacutea entrado en la cartuja de Florencia Pero no se le dio este cargo porque superaba sus fuerzas mermadas debido a su enfermedad En 1928 pidioacute a la Santa Sede dispensa del voto indefini do de pertenencia a la Hermandad para poder residir en su pueblo natal de Liria pero siempre continuoacute en estrechas relaciones con los directores generales por lo que se le puede considerar de hecho operario diocesano hasta el fin Reducido desde entonces a atender a su quebrantada salud en su retiro de Liria Alliacute le sorprendioacute la persecucioacuten religiosa y fue martirizado en Paterna en cuyo cementerio fueron depositados sus despojos que el diacutea 10 de diciembre de 1939 recibieron cristiana sepultura en el de Liria (cfr mi Diccionario de Sacerdotes diocesanos espantildeoles del siglo XX Madrid 2006 92)

4 La Agencia de preces de Espantildea en Roma era una institucioacuten del Estado creada a fi-nales del siglo XVIII que dependiacutea de la Embajada cerca de la Santa Sede y a traveacutes de ella tramitaban los espantildeoles (obispos eclesiaacutesticos y laicos) todos los asuntos que requeriacutean la intervencioacuten del Papa o de los organismos vaticanos En 1908 a raiacutez de la reforma de la Curia romana se dejoacute libertad a los fieles para usar libremente el agente o expedicionero que fuese de su confianza Lentamente la Agencia de preces estatal fue perdiendo la intensa actividad que hasta entonces habiacutea tenido y por ello en 1926 el embajador en Roma y agente real conde de Vintildeaza confioacute la Agencia real de preces al rector del Colegio Espantildeol Este a su vez encomendoacute dicha funcioacuten a un sacerdote de los Operarios Diocesanos del Colegio y por este motivo el primer agente fue don Carmelo Desde ese momento los obispos espantildeoles se sirvieron de la Agencia para la expedicioacuten de preces que afectaban a sus dioacutecesis Tras el Con-cilio Vaticano II y despueacutes de la consiguiente reforma de la Curia romana y descentralizacioacuten de facultades la Agencia de preces quedoacute muy reducida y casi vaciada de contenido si bien se mantuvo figura juriacutedica hasta 2016 Actualmente es el rector del Colegio quien gestiona en la Curia romana los asuntos que un tiempo fueron encomendados a la Agencia

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mil asuntos de las dioacutecesis en el Vaticano obteniacutea audiencias pontificias y bendiciones apostoacutelicas acomodaba peregrinaciones organizaba visitas a las basiacutelicas etc En el ejercicio de este ministerio puso siempre a con-tribucioacuten su incansable voluntad e influencia en los ambientes vaticanos y romanos para logar el mejor eacutexito en el servicio de los obispos quienes con confianza ilimitada le encomendaron la tramitacioacuten de los asuntos maacutes delicados Y esta labor fue tan extensa y tan fecunda que su persona estuvo unida a todos los problemas religiosos que en la Ciudad Eterna tuvieron relacioacuten con Espantildea

La palabra agencia podriacutea parecerle a alguno sinoacutenimo de traacutemite burocraacutetico ya que no es muy distinto el cometido de la misma Pero con las preces y los rescriptos iban unidas en aquellos tiempos una multitud de cuestiones de gran intereacutes para las dioacutecesis puesto que se trataba con frecuencia de problemas complejos que necesitaban urgente solucioacuten y que afectaban a las relaciones entre las dioacutecesis y la Santa Sede A todo procuroacute atender don Carmelo y para todo cuando motivos superiores no lo impediacutean encontraba una respuesta satisfactoria Mas no siempre era faacutecil resolver sin complicaciones algunos asuntos Entonces empe-zaba para don Carmelo un nuevo esfuerzo visitaba al cardenal prefecto de la Congregacioacuten o al secretario de la misma estudiaba el problema y lo daba tambieacuten a estudiar a personas competentes y de su confianza redactaba una pro-memoria y a veces los votos o pareceres que le pediacutean los dicasterios todo para buscar la solucioacuten maacutes conveniente Y a esta al final llegaba

Don Carmelo no llevoacute solamente los asuntos eclesiaacutesticos de casi todas las dioacutecesis espantildeolas sino que fue tambieacuten agente oficial de preces de la Embajada de Espantildea ante la Santa Sede Este campo de su actividad que exigiacutea exquisito tacto y delicadeza fue cultivado por eacutel uniendo sus dos grandes amores la Iglesia y Espantildea En los momentos difiacuteciles en las situaciones maacutes o menos complicadas la acertada actuacioacuten de don Car-melo vino muchas veces a despejar el horizonte con completa satisfac-cioacuten de los embajadores que vieron en su persona un haacutebil y capacitado colaborador para promover los intereses religiosos de Espantildea

De toda la Curia romana ninguacuten dicasterio estimoacute tanto la labor de don Carmelo como la Secretariacutea de Estado Puede decirse que praacutecticamente era el minutante para la lengua espantildeola pues durante muchos antildeos se le encomendaron la redaccioacuten de cartas telegramas documentos varios y las traducciones de muchos textos

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Dedicoacute particular atencioacuten a los peregrinos que llegaron a Roma con motivo del Antildeo Santo Extraordinario de 1933 Y al antildeo siguiente acom-pantildeoacute a los miembros de la Juventud de Accioacuten Catoacutelica de Espantildea tanto en su visita a Roma como a la Ciudad del Vaticano prodigando afec-tuosas atenciones a los peregrinos y facilitando audiencias y accesos a monumentos histoacutericos y centros oficiales La revista Signo oacutergano de los Joacutevenes de Accioacuten Catoacutelica teniacutea en eacutel el medio seguro de obtener informacioacuten graacutefica o literaria sobre el Vaticano en cualquier momento y en muchas ocasiones puso su contribucioacuten personal al servicio de este semanario

Pero fue durante los azarosos antildeos de la Guerra civil espantildeola cuando tuvo que desplegar toda su actividad Digna de todo encomio fue su ac-tuacioacuten como delegado de Piacuteo XI para prestar atencioacuten a los sacerdotes religiosos y catoacutelicos espantildeoles que tuvieron que refugiarse en Italia du-rante el trienio 1936-1939

Ante las dificultades econoacutemicas que sufrioacute el Colegio Espantildeol a cau-sa de la guerra don Carmelo escribioacute al general Goacutemez-Jordana presi-dente de Junta Teacutecnica del Estado Espantildeol solicitando la ayuda corres-pondiente (documento 1 en el apeacutendice de este artiacuteculo)

Tambieacuten informoacute al cardenal Pacelli sobre las opiniones de las esferas gubernativas que lamentaban respetuosamente el modo como la Santa Sede trataba al Gobierno Nacional desde que comenzoacute el movimiento militar y que eran contrarias a la actitud separatista del clero vasco sobre la piedad e intensa religiosidad personal del general Franco y sobre la formacioacuten religiosa de los falangistas (documento 3)

Fue considerado el sacerdote espantildeol que sirvioacute a todos con una cari-dad exquisita Fue sacerdote piadoso diplomaacutetico haacutebil y fideliacutesimo a los sumos pontiacutefices Piacuteo XI lo llamaba il nostro interprete porque cuando teniacutea que dirigir la palabra a los peregrinos de lengua espantildeola Blay esta-ba muy cerca del Papa y repetiacutea en castellano lo que el pontiacutefice deciacutea en italiano Piacuteo XII a quien tratoacute mucho cuando trabajaba como secretario de Estado le confioacute algunos asuntos muy delicados Pero tambieacuten le tocoacute sufrir mucho y saborear contrariedades fuertes aunque jamaacutes se defendioacute ni quiso que lo defendieran

Don Carmelo Blay fallecioacute en Roma en el Palacio Altemps antigua sede del Colegio Espantildeol de San Joseacute el 2 de marzo de 1941 y fue en-terrado en el panteoacuten propiedad de la Obra Piacutea en el cementerio romano del Campo Verano

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La revista del Colegio nuestra Mater Clementissima le dedicoacute la si-guiente croacutenica

Don Carmelo Con estas dos sencillas y breves palabras que tantas cosas queriacutean decir de respeto de estimacioacuten de confianza y carintildeo era generalmente designado aqueacutel cuya reciente muerte tantos corazones lloraron y cuya bendeci-da memoria en tantas almas agradecidas seraacute eterna

laquoNuestro Don Carmeloraquo deciacutea de eacutel su santidad Piacuteo XI Y don laquoDon Carme-loraquo preguntaba con frecuencia el santo padre Piacuteo XII En las altas y en las bajas esferas de Roma en Espantildea y en la Ameacuterica espantildeola llegoacute a ser populariacutesimo y querido merced a los muchos y abnegados servicios que a su paso por ellas fue prodiga y continuamente prestando Por eso la noticia de su fallecimiento dada a conocer por la radio y por la prensa ha despertado por doquier ecos de profundo y si sincero dolor y su entierro y sus funerales han alcanzado el grado de una verdadera apoteosis de carintildeosa adhesioacuten a su personalidad y de reconocimiento plebiscitario de sus altas virtudes y merecimientos

Un libro y bien extenso seriacutea apenas suficiente para su biografiacutea ardua em-presa la nuestra al pretender bosquejar una semblanza suya para dejar registrada su figura en las paacuteginas de Mater Clementissima

Pero ademaacutes de los que pudieacuteramos llamar sus ministerios oficiales iquestquieacuten puede enumerar los que hubo de desempentildear al margen de ellos y simultaacutenea-mente durante sus treinta antildeos de permanencia en la capital del orbe catoacutelico Asombra pensar la suma enorme de energiacuteas que derrochoacute el bondadosiacutesimo e infatigable D Carmelo en su perenne afaacuten de servir a cuantos acudiacutean a eacutel con sus cuitas sus pretensiones sus consultas sus confidencias y con problemas de la maacutes diversa iacutendole

En las altas esferas del Vaticano en las Embajadas en las Congregaciones en las Exposiciones de tipo internacional en los Conventos de Religiosas es-pantildeolas sobre todo en las horas criacuteticas del establecimiento de las mismas en Roma en el confesonario ‒que tambieacuten este apostolado ejercioacute‒ y fuera de eacutel en cartas en la sala de visitas del Colegio en su modesto despacho por las calleshellip siempre donquiera fue prodigando el tesoro de sus consejos de sus palabras de aliento de sus intervenciones bienhechoras sin escatimar tiempo ni esfuerzo alguno

Fue leal noble y desinteresado servidor de los papas de cardenales de nun-cios de priacutencipes de embajadores de prelados de sacerdotes y religiosos de eclesiaacutesticos y seglares de altos y bajoshellip Y de todos ellos merecioacute la constante confianza el acendrado afecto las maacutes sinceras demostraciones de gratitud

iquestCuaacutel fue el secreto de esta universalidad y perennidad de simpatiacuteas y adhe-siones En primer teacutermino su espiacuteritu netamente sacerdotal En los maacutes varia-dos ambientes mostroacutese siempre D Carmelo antes que nada sacerdote en sus palabras en su porte modesto y recogido en su espiacuteritu y en toda su conducta

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Era el fruto de su sincera piedad sencilla pero soacutelida Apenas los negocios de fuera dejaacutebanle libre retiraacutebase en su cuarto escondiacutease en eacutel y se entregaba placenteramente al cultivo de la vida oculta y silenciosa No apeteciacutea nada No gozaba sino con la soledad de su despacho Sus devociones Sus visitas al San-tiacutesimo Retraiacutease ndashsi no se veiacutea forzado a asistir por deber de obligada cortesiacutea o por caritativa condescendenciandash de toda fiesta y holgorio por honesto que fuera Y con todo a cada hora a cada momento veiacutease precisado a sacrificar su amor a la soledad para recibir visitas Eacutel haciacutea pocas No le quedaba por antildeadidura tiempo para hacerlas Ni aun lo teniacutea casi para comer llegaba por lo general tarde al refectorio Y despachando en pocos minutos su moacutedica refec-cioacuten auacuten terminaba antes que la comunidad Era sobriacutesimo en todo Otras dotes suyas fueron la discrecioacuten en no decir sino lo que conveniacutea iexclQueacute difiacutecil arte el de saber escuchar y callar Era fideliacutesimo en guardar los secretos que le eran confiados Jamaacutes daba muestras de extrantildearse ni se espantaba de nada Su sem-blante permaneciacutea siempre inalterable aunque teniacutea muy sensible corazoacuten No ambicionaba nada y gozaba con dar cuanto teniacutea Y no daba sus cosas solo daba tambieacuten su tiempo y su persona Y lo daba sonriendo Sonriendo siempre Su espiacuteritu de abnegacioacuten de interior mortificacioacuten fue maravilloso

Ya se deja entender que no habiacutea de faltarle a eacutel tambieacuten la comuacuten suerte de las almas elevadas la gloria del dolor de la contradiccioacuten del sacrificio Y iexclqueacute cruces tan pesadas tuvo que llevar con frecuencia sobre su corazoacuten Precauciones amargas asuntos engorrosos impertinencias incomprensiones interpretaciones aviesas de su conducta o de sus miras acusaciones injustas censuras menosprecios ingratitudes deslealtades desengantildeoshellip Abundantiacutesi-ma cosecha recogioacute de todo ello a lo largo de sus actuaciones Jamaacutes perdioacute la paz Jamaacutes se descomponiacutea Encogiaacutese de hombros y callaba Sabiacutea bien que los uacutenicos anhelos de su corazoacuten eran los de servir callada humilde pero imperteacute-rritamente a Dios y a Espantildea

En momentos criacuteticos de apasionadas campantildeas cargadas de santildeudas y ma-liciosas intenciones contra eacutel ni se preocupaba de defenderse ni queriacutea que se le defendiera O dejaba todo en manos de Dios y seguiacutea su camino

Como quien por tan altas y tan santas causas trabajaba no le preocupaban ni apeteciacutea humanas compensaciones y recompensas Con todo no le fueron esca-timadas Repetidos testimonios de honor y de gratitud le otorgoacute la Santa Sede Varias son las condecoraciones y diplomas con que le significoacute su complacencia por los servicios que le prestara declaraacutendole de esa forma hijo benemeacuterito de la Iglesia

Varias repuacuteblicas de la Ameacuterica espantildeola le condecoraron tambieacuten a su paso por ellas acompantildeando como secretario al Emmo Sr cardenal Benlloch en la visita que este hizo a ellas en 1923 como Embajador espiritual de Espantildea

Como premio a los extraordinarios servicios prestados a Espantildea al terminarse el glorioso Movimiento Nacional proprio motu el Generaliacutesimo Franco le dio la

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Gran Cruz de Isabel la Catoacutelica Sin contar otros muchos que no trascendieron al puacuteblico sus afanes y su iacutemproba labor como representante y agente de Piacuteo XI en favor de los proacutefugos espantildeoles en Roma eran maacutes que suficientes para tener bien merecido tan extraordinario galardoacuten Un libro podriacutea formarse ndashque resultariacutea una apologiacutea de D Carmelondash con soacutelo extractar y ordenar una pequentildea porcioacuten siquiera de los miles de documentos y cartas que se conservan en su copioso e interesante archivo concernientes a esta materia

Pero en lo humano y espiritual a un tiempo mismo la principal recompensa que Dios quiso depararle sobre la tierra la tuvo D Carmelo en las continuas demostraciones de intereacutes de adhesioacuten y de carintildeo que sus innumerables amigos le prodigaron durante el antildeo de su postrera enfermedad

Desde el Sumo Pontiacutefice que con frecuencia solicitaba informes de su salud y cardenales nuncios embajadores prelados de la Curia que le visitaban hasta humildes religiosas que se acercaban a saber del curso de su enfermedad ha sido un no interrumpido desfile de toda suerte de personas anhelosas de testimoniarle su carintildeosa simpatiacutea y su profunda estimacioacuten Por otra parte ha disfrutado de tal copia de cuidados y asistencias de todo geacutenero que cuando en momentos de pasajera impaciencia se le haciacutea parar mientes en semejante cuacutemulo de laquomi-nosraquo y agasajos se conmoviacutea hasta derramar laacutegrimas y bendeciacutea al Sentildeor confesaacutendose inmerecedor de tanto bien Su uacutenico sufrimiento ha sido en estos largos doce meses el no poder trabajar y moverse

Al cabo todos los recursos y prevenciones de la ciencia resultaron inuacutetiles Quince diacuteas antes de su muerte una ligera bronquitis le puso en grave peligro El diacutea 2 de marzo a la una y cuarto de la tarde declaraban los Drs Rochi y Tomassi-ni luego de la segunda consulta que celebraron que la gravedad inminente habiacutea desaparecido y le autorizaron para tomar ya alguacuten alimento A las dos y cuarto cuando se disponiacutea a hacerlo quiso bajarse del lecho y el pequentildeo esfuerzo que hubo de hacer le produjo un repentino colapso Al aviso del enfermero los Su-periores que se hallaban en la Rectoral corrieron apresurados y como ya estaban siempre preparados para un lance parecido llegaron a tiempo de absolverle y darle la Extremauncioacuten La noche anterior que fue la del saacutebado habiacutea confe-sado como de ordinario con el P Pazos Sch P y en la mantildeana del domingo como todos los diacuteas habiacutea comulgado

Expuesto el cadaacutever en la capilla de San Carlos dieacuteronle piadosa y constante vela los Superiores y alumnos maacutes las innumerables personas que fueron desfi-lando para rendirle este uacuteltimo homenaje

Los Emmos Srs cardenales Tedeschini Pizzardo y Caccia Dominioni ora-ron ante su cadaacutever Otros imposibilitados por enfermedad o por hallarse ausen-tes de Roma lamentaron el no poderlo hacer

Su santidad Piacuteo XII sobre haber dado el peacutesame por conducto de su secre-tario particular que primero telefoneoacute y despueacutes vino a expresarlo de palabra envioacute al Rector del Colegio el paternal y encomiaacutestico telegrama que publi-

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camos en otro lugar de la revista El Embajador de Espantildea Sr Yanguas y los miembros de la Embajada y del Consulado fueron de los primeros en acudir al Colegio y ofrecerse para todo Consideraban la muerte de D Carmelo como peacuterdida de familia

El diacutea 4 despueacutes de haber celebrado el Rector la misa en la capilla de San Carlos a las ocho de la mantildeana fue depositado en la caja mortuoria y proce-sionalmente conducido hasta el carro fuacutenebre que lo trasladoacute acompantildeado por algunos Superiores y alumnos a la Iglesia Nacional de Montserrat don de por concesioacuten del Sr Embajador se celebraron luego a las diez las solem nes hon-ras fuacutenebres5

2 proacutefugos espAntildeoles en roMA

Los alumnos del Colegio Espantildeol que no teniacutean vacaciones en Espa-ntildea al terminar el curso 1935-1936 marcharon al Seminario de verano de Chiavari cerca de la ciudad de Geacutenova donde soliacutean transcurrir los me-ses estivales acogidos generosamente por el obispo de aquella dioacutecesis como en antildeos anteriores El de Chiavari estaba considerado el Seminario de verano de los espantildeoles pero aquel verano no fue como los anterio-res puesto que el 18 de julio estalloacute la Guerra civil e inmediatamente comenzoacute la tragedia de los numerosos proacutefugos que pudieron escapar de los horrores de la contienda y de la persecucioacuten religiosa y lograron establecerse en Italia

Mientras los colegiales estaban en Chiavari llegoacute a aquel lugar el obis-po de Cartagena Miguel de los Santos Diacuteaz Goacutemara antiguo alumno del Colegio que se presentoacute junto con su familiar vestidos ambos de paisa-no Cuando regresaron del veraneo los colegiales encontraron en Roma una nube de sacerdotes religiosos religiosas algunos seminaristas y mu-chos seglares fugitivos que huiacutean de la implacable persecucioacuten religiosa que estaba azotando aquellas primeras semanas el territorio republicano y que arrojariacutean en tres antildeos un total de 6832 eclesiaacutesticos martirizados 4184 pertenecientes al clero secular incluidos doce obispos un adminis-trador apostoacutelico y seminaristas 2365 religiosos y 283 religiosas

A mediados de agosto ya habiacutean llegado a Roma 167 sacerdotes y como el nuacutemero aumentaba diacutea por diacutea Piacuteo XI instituyoacute en el Colegio Espantildeol un Comiteacute para la asistencia de los proacutefugos y confioacute la direccioacuten

5 Mater Clementissima 1941 202-215

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del mismo a don Carmelo quien el 22 de agosto comunicoacute a monsentildeor Tardini sustituto de la Secretariacutea de Estado que la ayuda habiacutea sido orga-nizada seguacuten los deseos del Papa

Come di parola ho avuto lrsquoonore di far sapere allrsquoE V Rvma oramai lrsquoaiuto ai sacerdoti spagnuoli che hanno dovuto lasciare la loro disgraziata patria egrave organizzato drsquoaccordo ai desideri espressi dal Santo Padre

Finora i sacerdoti arrivati in questa Alma Cittagrave sono 52 distribuiti nei luo-ghi seguenti Pont Collegio Spagnuolo Pont Collegio Pio Latino Americano Collegio Leoniano Figli di Maria Immacolata al Mascherone Fatebenefratelli allrsquoIsola Tiverina Domenicani Spagnuoli a via Condotti Istituto Orientale Car-melitani dellrsquoAntica Osservanza in via Sforza Pallavicini

Tra i profughi si trova SE Mons Felice Bilbao Vescovo di Tortosa presen-temente presso le Suore Ospitaliere del S Cuore a Viterbo SE Mons Giovanni Perellograve Vescovo di Vich col suo Segretario che hanno preso alloggio nella casa dei Religiosi dei SS Cuori in Roma via del Curato giaccheacute SE appartiene a detta Congregazione SE Mons Michele DiazVescovo di Cartagena col suo Segretario ospiti del Pontificio Collegio Spagnuolo in villeggiatura a Chiavari e colagrave egrave stato trasferito un Sudiacono del Seminario di Barcellona

Di questi profughi uno si egrave recato a Milano ed un altro a Viena AustriaPer alloggiare altri sacerdoti che certamente verranno Mons Guidetti Ca-

marlengo dellrsquoOpera laquoCento Pretiraquo ha messo a disposizione del Comitato fino a cento posti nella sede della stessa Opera in condizioni di favore

Grazie al paterno interessamento del Santo Padre ed alla fraterna caritagrave del Clero Romano da qualche giorno si egrave incominciato a confezionare gli abiti ec-clesiastici per tutti in seguito a quanto fu decisso (sic) nellrsquoadunanza della Pia Unione di S Paolo del Clero Romano che innanzi tutto fossero fatte le vesti per i medesimi Speriamo che in breve tempo saranno vestiti da sacerdote Si provede (sic) anche a SE Mons Vescovo di Vich tutto il vestiario

Si provvederagrave anche per gli indumenti necessari di biancheria cappello scar-pe etc in maniera che della benevolenza del Santo Padre e per merito del Clero Romano protranno (sic) trovare un vero sollievo questi buoni sacerdoti spag-nuoli che sentono in questi momenti la grande consolazione di vedersi vicini al Padre Buono e non sanno come ringraziare il Signore di tanta caritagrave

Ieri sono stati loro consegnati i Breviari che la munificenza del Santo Padre ha fatto loro pervenire Questrsquoatto di sovrana delicata bontagrave egrave stato di sommo conforto ai profughi che in mezzo alle loro pene non potevano recitare lrsquoUffizio Divino Ora merceacute il felice delicato pensiero dellrsquoAugusto Pontefice si sentono piugrave sacerdoti percheacute potranno adempiere questo soave e consolante obbligo della recita del Breviario

Si egrave provveduto pure per gli abiti di 12 Religiose della Compagnia di Santa Teresa di Gesugrave che sono arrivate in questa Cittagrave in pietosissime condizioni

ViCente CaacuterCel ortiacute

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Nutrono tutti vivissimo desiderio di poter offrire personalmente a Sua Santitagrave i loro piugrave sentiti ringraziamenti per tanta bontagrave e manifestare una volta di piugrave i sentimenti di profonda adesione alla Sua Augusta Persona e provare la grande consolazione dellrsquoApostolica Benedizione cosigrave necessaria in questi tristi mo-menti per la cara patria cosigrave probata e per loro stessi

Coi sensi della mia sincera stima mi professo dellrsquoEV Revma affmo ser-vitore

Sac Carmelo Blay6

Iacutemprobo fue el trabajo encomendado a don Carmelo y muy poco agra-decido por algunos sacerdotes si bien a todos los tratoacute de forma exquisita buscaacutendoles alojamiento e intenciones de misas facilitaacutendoles cuanto ne-cesitaban en lo referido a ropas alimentos breviarios y libros asiacute como organizaacutendoles conferencias de Accioacuten Catoacutelica visitas a iglesias y mo-numentos Procuroacute que algunos recibieran alguna ayuda econoacutemica y que otros desarrollaran actividades ministeriales atendioacute a la asistencia de los enfermos y pensoacute incluso en los maacutes miacutenimos detalles hasta que todos abandonaron Roma

Sin embargo el Papa queriacutea que estos sacerdotes regresaran a Espantildea para trabajar en la zona nacional liberada de la persecucioacuten para cubrir las numerosiacutesimas bajas de los sacerdotes maacutertires Esta determinacioacuten pontificia sentoacute muy mal a algunos sacerdotes disgusto que se explica por lo mucho que habiacutean sufrido Blay obedecioacute al Papa pero los maacutes exal-tados le culparon sin recordar lo mucho que le debiacutean agradecer y hasta le cantaron una copla que deciacutea laquoDe Espantildea nos han echado la CNT y la FAI y en Roma nos ha abatido Monsentildeor Carmelo Blayraquo

En la intensa correspondencia epistolar que mantuvo con los mon-sentildeores Tardini y Montini conservada en el Archivo Secreto Vaticano constan mil detalles de sus preocupaciones por atender del mejor modo posible a los proacutefugos espantildeoles que fueron un total de 226 4 obispos 202 sacerdotes diocesanos 10 religiosos escolapios 8 seminaristas y 2 laicos de Accioacuten Catoacutelica7

Asimismo se interesoacute por la suerte de maacutes de 700 religiosas pertene-cientes a congregaciones que teniacutean sus casas generalicias en Roma y se

6 Archivo Secreto Vaticano (ASV) Segr Stato Guerra Spagnola 2 Fasc 4 n 7 ff 3-57 Elenco dei Vescovi Sacerdoti Religiosi Seminaristi e Laici di AC profughi dalla

Spagna accolti dal Comitato eretto dalla Santa Sede presso il Pontificio Collegio Spagnuolo per il soccorso dei medesimi (ASV Segr Stato Guerra Spagnola 1 Fasc 1 ff 1-6)

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esforzoacute para que todas ellas fueran acogidas en sus respectivas comuni-dades En una carta dirigida a monsentildeor Tardini el 19 de septiembre de 1936 le dijo

Eccellenza ReverendissimaDi nuovo mi credo in dovere di inviare allrsquoE V Revma una piccola notizia

circa i nostri cari profughi spagnoliCome sa lrsquoultima domenica sono arrivate alcune centinaia di suore profughe

della Spagna senza preaviso Subito fu stabilito che quelle Suore che avevano casa della loro Congregazione in Roma alloggiassero presso le consorelle per le altre ed anche per quelle che pur avendo casa della propria Congreazione in questa Cittagrave non potevano essere ricevute dalle loro consorelle si provide alla loro sistemazione presso diversi Istituti Religiosi femminili e debbo riconoscere che la caritagrave delle religiose sovvraabbondograve al bisogno giaccheacute non si arrivograve ad occupare tutti i posti offerti Si egrave incominciata pure la distribuzione tra le medes-ime del munifico dono di zucchero e caffeacute che novamente si degnato il S Padre di largire per i profughi

Son sicuro saragrave gradito per S Santitagrave di conoscere come il Clero Romano con fraterna caritagrave verso i sacerdoti profughi ha assecondato il Suo Paterno interessa-mento per i medesimi e cosigrave mi pregio comunicarLe che fino a questo momento il Clero Romano ha contribuito con Lire 13823 altre persone diverse residenti fuori Roma le quali riservano i loro nomi hanno versato per questo benefico scopo complessivanente Lire 1261

Con distinti ossequi mi professo dellrsquoEV Rvma affmo Servitore

Sac Carmelo Blay8

De la atencioacuten a los numerosos seglares proacutefugos se ocupoacute el con-sulado de Espantildea en Roma Y de los religiosos sus respectivas casas generalicias

La tarea encomendada a don Carmelo terminoacute al final de la guerra Pero eacutel quiso completar el trabajo durante unos meses maacutes fue el 16 de febrero de 1940 cuando envioacute la uacuteltima carta que se conserva sobre este asunto dirigida a monsentildeor Montini en la que le daba cuenta detallada de la actividad del Comiteacute creado por Piacuteo XI a favor de los sacerdotes proacutefugos y de los gastos hechos a lo largo de tres antildeos

En este sentido resulta impresionante el contenido de un voluminoso sobre que lleva este tiacutetulo Conti del Comitato pel soccorso dei profu-

8 ASV Segr Stato Guerra Spagnola 2 Fasc2 n 1 f 12

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ghi spagnuoli creato dalla Santa Sede presso il Pontificio Collegio Spa-gnuolo 1936-1939 (ff 2ss) En eacutel se resumen tanto los ingresos como los gastos Todo ello acompantildeado de las respectivas facturas comprobantes de los gastos hechos

La citada carta a Montini deciacutea

Eccellenza Reverendissima ho il piacere di far giungere allrsquoEccellenza Vostra Reverendissima tutto lrsquoin-

cartamento di quanto si riferisce allrsquoassistenza ai sacerdoti religiosi e religiose che per la rivoluzione della Spagna arrivarono a Roma e furono accolti dalla paterna bontagrave ed inesaurible caritagrave del Santo Padre

Fra i documenti troveragrave lrsquoEccellenza Vostra la lista completa dei sacerdoti e delle religiose che arrivati in Roma furono assistiti in tutto vel in parte dalla benignitagrave del Santo Padre che come risulta da conti spese piugrave di lire duecen-tomila oltre ai molti generi alimentari zucchero caffegrave carne etc che con grande caritagrave ha fatto pervenire e mettere a disposizione del Comitato da Lui medesimo voluto in questo Pontificio Collegio Spagnollo per lrsquoassistenza ai cari profughi

Nei fogli uniti si puograve vedere non solo il conto generale ma pure le spese fatte per tutti e ciascuno dei profughi con altre notizie utili per far conoscere la caritagrave del Santo Padre Pio XII di venerata e santa memoria in un momento cosigrave doloroso per la nostra cara Spagna

In questa occasione La prego di voler umiliare ai piedi dellrsquoAugusto Pontefice gloriosamente regnante i sentimenti della mia profonda venerazione ed implo-rare per me una speciale Benedizione Apostolica mentre con devoto ossequio mi professo dellrsquoEccellenza Vostra Reverendissima devotissimo servitore

Sac Carmelo Blay9

riassunto speCifiCatiVo Drsquointroiti eD spese

Munifico dono del Santo Padre 15856385Offerta del Clero Romano 3712960Offerta dei Sacerdorti profughi spagnoli 465895Offerenti diversi 131830Totale introiti 20176070

9 ASV Segr Stato Guerra Spagnola 1 Fasc 4 ff 30-30v

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SpeseBreviari 12368Esercizi spirituali 3540Manuali di Azione Cattolica 27000Sottane greche pantaloni etc 4157195Scarpe 630700Biancheria 736540Maglieria 835355Cappelli 300000Abiti per religiose 147100Vitto ed alloggio pei sacerdoti 7833800Vitto ed alloggio per le religiose 1505000Viaggi rimpatrio religiose e sacerdoti 2002220Tram Udienza Castelgandolfo 180000Medicine seminaristi ed alcune suore 12900Libri di testi pei seminaristi 30890Altre spese pei seminaristi 101690Opuscolo iquestQueacute ha hechohellip 70000Spese varie 57Toatel spese 20167070

Indice numerico dei diversi capi consegnati ai sacerdoti profughi spagnuoli

Breviari 192Manuali di Azione Cattolcia 60Sottane 165Greche 175Pantaloni 91Scarpe 150 pajaColletti 963Camicie 225Mutande 208Maglie 271Mutande maglia 52Gilet e Pull Ower 21Calze e pedali 407 pajaCappelli 173Fazzoletti 354Altri capi 35Totale dei capi 3532

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3 discurso de piacuteo xi A los proacutefugos espAntildeoles10

Para denunciar al mundo la persecucioacuten religiosa en la Espantildea republi-cana pensoacute Piacuteo XI dirigir una carta a su secretario de Estado el cardenal Pacelli en la que como padre de creyentes y tambieacuten de los redimidos por Cristo manifestariacutea su profundo dolor por la tragedia de Espantildea pidiendo que cesara el derramamiento de sangre entre hermanos y que en todo el mundo se rezara para acabar con la guerra fratricida por ser muy desga-rrador ver lo que estaba ocurriendo en una nacioacuten de honda tradicioacuten ca-toacutelica Despueacutes la Secretariacutea de Estado redactoacute un artiacuteculo que publicariacutea LrsquoOsservatore Romano a final de agosto pero fue suspendido porque el Papa decidioacute preparar un discurso dirigido a los proacutefugos espantildeoles que iban llegando a Roma Por esta razoacuten tampoco se publicoacute la proyectada carta pontifica dirigida a Pacelli que quedoacute en simple borrador aunque en un apunte de Pacelli estaacuten indicados con precisioacuten los temas esenciales que tratariacutea insistiendo en que debiacutea cesar cuanto antes una guerra que llevaba ya demasiado tiempo ensangrentando el territorio aunque habiacutea pasado poco maacutes de un mes desde el comienzo de la revolucioacuten Informa-dor directo de las cosas de Espantildea en el Vaticano era en aquellos momen-tos el agente de preces del Pontificio Colegio Espantildeol don Carmelo Blay a quien el mismo Papa pidioacute noticias sobre los obispos espantildeoles que iban llegando a Roma por aquellas fechas

El papa tomoacute esta iniciativa despueacutes de pensarlo mucho y de valorar las diversas opciones que debiacutea adoptar frente a la situacioacuten espantildeola ya que desde primeros de agosto se preguntoacute que podiacutea hacer la Santa Sede ante la gravedad de los hechos ademaacutes de protestar eneacutergicamente ante el gobierno republicano

A medida que llegaban noticias al Vaticano sobre la magnitud de la tragedia tanto por la prensa como por relatos de testigos presenciales que habiacutean conseguido escapar a tiempo se planteoacute la oportunidad de con-ceder una audiencia a 500 proacutefugos espantildeoles que tuvo lugar el lunes 14 de septiembre de 1936 en Castelgandolfo Guiaban el grupo los obispos de

10 El discurso del Papa fue escuchado por radio por los alumnos del Colegio Espantildeol desde el Seminario de verano de Chiavari En versioacuten original italiana y en traduccioacuten cas-tellana fue publicado en LrsquoOsservatore Romano del 14-15 de septiembre de 1936 pero en Espantildea fue censurado tanto por los republicanos como por los nacionales Tambieacuten lo publicoacute censurado A Montero Moreno en su laquoHistoria de la persecucioacuten religiosaraquo (BAC Madrid 1960 741-742) Lo he publicado iacutentegro en el volumen IV de mi obra laquoLa Segunda Repuacutebli-ca y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticanoraquo BAC Madrid 2016 768-776

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Urgel Justino Guitart de Cartagena Miguel de los Santos Diacuteaz Goacutemara de Tortosa Feacutelix Bilbao y de Vich Juan Perelloacute El cardenal Pacelli los presentoacute al Papa pronunciando un amplio discurso Y don Carmelo tradujo de memoria como soliacutea hacer sin perder coma la importante alocucioacuten que el Papa dirigioacute a los proacutefugos espantildeoles

Esta fue la primera intervencioacuten puacuteblica de Piacuteo XI acerca de la dramaacute-tica situacioacuten espantildeola y en ella habloacute del heroiacutesmo de laquonuestros maacuter-tiresraquo en teacuterminos muy claros laquoPersonas sagradas cosas e instituciones sagradas tesoros inestimables de civilizacioacuten y de arte objetos preciosiacute-simos reliquias santiacutesimas obispos y sacerdotes viacutergenes consagradas seglares de toda clase y condicioacuten venerables ancianos joacutevenes en la flor de la vida y el mismo sagrado y solemne silencio de los sepulcros todo ha sido asaltado arruinado destruido con los modos maacutes villanos y baacuterbaros con el desenfreno maacutes libertino jamaacutes visto de fuerzas sal-vajes y crueles que pueden creerse imposibles no digamos a la dignidad humana sino hasta la misma naturaleza humana aun la maacutes miserable y la caiacuteda en lo maacutes bajoraquo

Condenoacute tambieacuten el Papa en teacuterminos contundentes la matanza entre hermanos laquoLa guerra civil la guerra entre los hijos del mismo paiacutes del mismo pueblo de la misma madre patria iexclDios miacuteo La guerra es siempre cosa tan tremenda e inhumanahellip iquestqueacute decir cuando la guerra es entre her-manos iquestqueacute podraacute decirse de las matanzas entre hermanos que todaviacutea continuamente se anuncianraquo

En tercer lugar habloacute de las ensentildeanzas de la guerra para Europa y el mundo entero laquoazorado enmarantildeado trastornado por la propaganda subversiva y particularmente a Europa ya tan profundamente perturbada y tan fuertemente sacudida para este mundo los tristes hechos de Espa-ntildea dicen y predicen una vez maacutes hasta queacute extremos estaacuten amenazadas las bases mismas de todo orden de toda civilizacioacuten y de toda culturaraquo Por uacuteltimo se refirioacute a los otros llamaacutendoles asiacute laquoiquestQueacute decir de todos aquellos otros que tambieacuten son y permanecen siendo hijos Nuestros no obstante que en las personas y en las cosas que Nos son maacutes queridas y maacutes sagradas con actos y meacutetodos extremamente odiosos y cruelmente persecutorios y aun en Nuestra misma persona cuanto la distancia lo consentiacutea con expresiones y actitudes sumamente ofensivas Nos han tratado no como hijos a un Padre sino como enemigos a un enemigo par-ticularmente odiado Tenemoshellip que amarles con un amor particular de compasioacuten y de misericordia amarles y no pudiendo hacer otra cosa orar

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por elloshellip orar para que esteacuten con Nos cuando dentro de poco ndashtenemos plena confianza en Dios benditondash el arco iris de la paz brillaraacute en el her-moso cielo de Espantildea trayendo el alegre anuncio a todo vuestro grande y magniacutefico paiacutesraquo

Los diarios republicanos de Madrid comentaron la noticia difundida por las agencias que deciacutea escuetamente que laquoel discurso del Papa no ha revestido ninguacuten caraacutecter poliacutetico Se trata de un llamamiento cristiano en favor de la paz dirigido a Espantildea entera y en el que no se mencio-na ninguna doctrina poliacutetica El Papa se limitoacute a poner en guardia a su auditorio contra las fuerzas subversivas que solo pueden desarrollarse luchando contra la Iglesiaraquo Esta uacuteltima frase fue suficiente para que al-gunos perioacutedicos destacaran en titulares su ancestral anticlericalismo laquoHa bloacute el Sumo Pontiacutefice en favor de la paz pero olvidoacute condenar a los obispos que bendicen las armas mortiacuteferas y esconden tesoros fabulosos y a los falsos cristianos que utilizan soldados mahometanos para asesinar espantildeolesraquo (La Libertad) laquoHa hablado el Papa y no ha condenado los criacute-menes de sus hijos de Espantildea pero los previene contra las fuerzas subver-sivasraquo (El Socialista) laquoEn el discurso del Papa estaacute ausente el verdadero espiacuteritu cristianoraquo (La Libertad)

Cuando Piacuteo XI pronuncioacute este discurso no se habiacutean cumplido todaviacutea dos meses desde el comienzo de la revolucioacuten y las viacutectimas eclesiaacutesti-cas de la persecucioacuten religiosa se aproximaban a los 3400 Durante los uacuteltimos diacuteas del mes de julio el nuacutemero de viacutectimas del clero ascendioacute a 861 y soacutelo el diacutea de Santiago patroacuten de Espantildea 25 de julio fueron mar-tirizados 95 miembros del clero secular En agosto se alcanzoacute la cifra maacutes elevada con un total de 2077 asesinatos que corresponden a una media de 70 al diacutea entre los cuales hay que incluir a diez obispos

iquestPor queacute no gustoacute a laquounosraquo ni a laquootrosraquo este discurso A los unos (los nacionales) porque les parecieron excesivas las palabras de amor compasioacuten y misericordia hacia los otros (los rojos) Y a estos por la denuncia que el Papa hizo de la cruel persecucioacuten religiosa que habiacutean desencadenado y de la destruccioacuten que habiacutean hecho en apenas dos meses de conflicto de todo lo humano y lo divino

La extensa alocucioacuten pontificia del 14 de septiembre redactada de su puntildeo y letra por Piacuteo XI y leiacuteda por eacutel con voz emocionada es un texto fundamental para la historia de la persecucioacuten religiosa espantildeola pues en ella se refiere por primera vez a las viacutectimas como maacutertires

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4 proacutefugos ilustres

He dicho anteriormente que uno de los primeros proacutefugos acogidos en el Colegio Espantildeol fue el obispo de Cartagena que llegoacute a Chiavari el 14 de agosto de 1936 Eacutel mismo relatoacute en esta extensa carta dirigida a Pacelli los horrores de la persecucioacuten religiosa en su dioacutecesis y coacutemo consiguioacute salvar la vida y llegar a Italia

Chiavari 21 de agosto de 1936JHS Pontificio Colegio Espantildeol de San JoseacutePalazzo Altemps Roma

Emmo y Rvmo Sr Cardenal Secretario de EstadoCiudad del Vaticano

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo SentildeorEl diacutea 22 del pasado julio (mantildeana hace un mes) hallaacutendome en mi pala-

cio episcopal de Murcia ciudad donde tiene su residencia oficial el Obispo de Cartagena se me presentaron pistola en mano tres enviados del Frente Popu-lar intimaacutendome abandonara el palacio para instalar ellos en el mismo la Casa del Pueblo antildeadiendo que veniacutean a avisaacutermelo por orden del Comiteacute a fin de que no me opusiera y no hubiera derramamiento de sangre Pediacute algunas horas de tiempo paras arreglar mi equipaje y por fin me concedieron hasta la tarde inmediatamente ayudado por algunos profesores del Seminario que se comu-nica con palacio y que hice venir enseguida empezamos todos a poner a salvo algunos documentos dinero y ropas pero apenas habiacutea pasado media hora se presentaron las turbas a la puerta acompantildeadas de algunos guardias de asalto o sea de policiacutea gubernativa mientras el Gobernador civil me avisaba por teleacute-fono para que me pusiera en salvo Inmediatamente el vicerrector del Seminario me pasoacute a su habitacioacuten donde me puse traje de paisano y eacutel me llevoacute al Asilo de las Hermanitas de los Pobres en las afueras de Murcia donde estuve 15 diacuteas oculto pero habieacutendose sabido por varios el lugar de mi retiro incluso por los revolucionarios pues los comunistas en una de sus reuniones trataron ya de ve-nir a cogerme me fui al Asilo de las Madres Oblatas donde pareciacutea podriacutea estar mejor protegido ya que por recibir ellas joacutevenes descarriadas algunas enviadas por la misma autoridad gubernativa y por habeacuterseles dado por los mismos diri-gentes del movimiento revolucionario plenas seguridades de que seriacutea aquella casa respetada nos parecioacute lugar muy apropiado pero resultoacute que por haber vis-to entrar algunos en traje de paisano en la casa quizaacutes ya antes de ir yo la policiacutea recibioacute una confidencia sin duda de alguacuten vecino o vecina izquierdista de que en aquella casa habiacutea reuniones de fascistas (cosa enteramente falsa pues sola-mente fueron el capellaacuten del Convento a celebrar la santa misa y mi capellaacuten y el

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vicerrector del Seminario a prepararme mi estancia y luego mi capellaacuten a estar conmigo) lo cierto es que a las 3 de la tarde del segundo diacutea de mi refugio alliacute se presentaron numerosos policiacuteas cercaron unos toda la casa y otros penetraron dentro y la registraron durante dos horas y media recorrieacutendola toda excepto la habitacioacuten donde tras de una puerta estaacutebamos mi capellaacuten y yo escondidos Quedamos asiacute milagrosamente en salvo pero la prudencia y la amenaza que hicieron de volver a hacer nuevos registros alliacute me obligaron a buscar nuevo refugio primero en casa de una piadosa sentildeora despueacutes en casa de otra mientras mi capellaacuten habiacutea salido de Murcia buscando el modo como trasladarnos los dos a Italia pues pensamos venirnos a este amado Colegio Espantildeol del cual ambos hemos sido alumnos

Tras muchos trabajos logroacute mi capellaacuten (y si todo lo que antecede Emmo y Rvmo Sentildeor va dicho dentro de la maacutes estricta confidencia y reserva lo que sigue lo consigno bajo el maacutes rogado secreto) logroacute mi capellaacuten digo ponerse al habla con el coacutensul alemaacuten en Alicante el cual nos hizo la gran caridad de ponerse al habla con el comandante de un acorazado alemaacuten surto en aquel puer-to y con el capitaacuten de un vapor comercial que iba a venir a Geacutenova Y una vez admitidos nosotros por ellos avisado por teleacutegrafo seguacuten clave prevista entre nosotros saliacute de Murcia en tren acompantildeado de un buen seglar llevando yo un salvoconducto dado por los Comiteacutes revolucionarios a nombre distinto del miacuteo y asiacute disfrazado con nombre supuesto y traje seglar hube de esperar dos horas en la estacioacuten del ferrocarril de la propia capital de mi Dioacutecesis sin que gracias a Dios la poca gente que por alliacute habiacutea me reconociera vine en el tren en tercera clase entre obreros todos ellos respirando anhelo del triunfo del gobierno de Ma-drid me visaron los milicianos el salvoconducto registraron despueacutes mi maleta al llegar a Alicante (a prevencioacuten nada eclesiaacutestico traiacutea ni aun el breviario) fui con el seglar que me acompantildeaba a un hotel donde di mi nombre supuesto de acuerdo con el salvoconducto que llevaba luego vino la policiacutea a examinar dicho salvoconducto y gracias al Sentildeor que tan palpablemente me guardaba en-controacute todo en regla Al diacutea siguiente fui al coacutensul alemaacuten y supe que mi capellaacuten ya habiacutea sido llevado la tarde anterior al acorazado vestido de marinero Des-pueacutes de recorrer algunos sitios para despistar fui por fin llevado al consulado alemaacuten donde dejando mi traje de paisano (que un alemaacuten me entregoacute despueacutes) me vestiacute con un uniforme de capitaacuten de barco alemaacuten y ya entre otros oficiales de la nave de guerra acorazada embarqueacute en la chalupa o gasolinera de la mis-ma saliendo asiacute de Alicante sin que ninguna autoridad espantildeola me viera estuve sumamente agasajado por toda la oficialidad y singularmente por el comandante del acorazado toda la tarde en este a las ocho de la noche salioacute del puerto de Alicante el barco mercante que veniacutea a Geacutenova y siguiendo eacutel su marcha des-pacio me hicieron bajar a miacute y mi capellaacuten a la chalupa o gasolinera de la nave de guerra y fuimos al encuentro del barco mercante pero con gran prudencia en vez de ir directos a eacutel nos condujeron hacia alta mar y pasamos del lado de

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estribor donde iacutebamos al de babor de la nueva nave por delante de ella a oscuras nuestra chalupa y mientras todos los pasajeros se hallaban a estribor mirando el acorazado maacutes auacuten veniacutea un soldado de la nave de guerra en el trasporte que iacutebamos a tomar y se pasoacute eacutel a la chalupa a la vez que nosotros ganaacutebamos el barco mercante que eacutel dejaba asiacute quedaba mejor justificado el acercamiento de la chalupa al barco en marcha Trasportados asiacute a la nave mercante sumamente atendidos por el capitaacuten y oficiales de ella aunque obligado yo a permanecer en mi camarote para que ninguacuten pasajero me viera pues deseaban no se supiera coacutemo veniacutea yo a Italia para evitarse compromisos con Madrid por fin llegamos felizmente a Geacutenova y una vez que desembarcaron todos los pasajeros salimos nosotros entre la tripulacioacuten del barco como si fueacuteramos de ella y fueron tan amables que nos trajeron hasta las mismas puertas de este Seminario de Chia-vari ya que por haber salido asiacute de Espantildea no traemos ninguacuten pasaporte pues soacutelo el pedirlo a las autoridades espantildeolas dependientes donde estaacutebamos del gobierno de Madrid hubiera sido motivo de prendernos

Estoy pues aquiacute Emmo y Rvmo Sentildeor gracias a la Divina Providencia que asiacute se ha dignado salvarme La Dioacutecesis quedoacute encomendada a un Vicario general con facultades de nombrar otro o proveer como creyera oportuno dentro del Derecho si eacutel se veiacutea en peligro Desde el 23 de julio estaacuten cerradas todas las iglesias de la Dioacutecesis por orden de la autoridad de Madrid Han quemado muchas imaacutegenes e incendiado algunos templos y conventos pero la mayor parte los conservan para Casas del Pueblo El palacio episcopal ha quedado en poder de ellos con todas sus oficinas y archivos sabemos han violentado las dos cajas fuertes que habiacutea y publicaron nota de haber llevado en depoacutesito al Banco de Espantildea valores y objetos de arte no nos han querido decir cuaacuteles ni cuaacutento Desde luego valores seraacuten unas trescientas mil pesetas que habiacutea en una caja lo demaacutes estaacute todo en salvo gracias a Dios de modo que econoacutemicamente las Fundaciones diocesanas no han sufrido mucho pero ademaacutes de esos valores que cogieron quedoacute en palacio toda la documentacioacuten de los archivos y de las mesas de trabajo de las oficinas y todos los muebles etc etc del mismo y los particulares miacuteos con mi ropa y utensilios de casa ya que en la escasa media hora que tuvimos de tiempo no fue posible sacar apenas nada Posteriormente hicimos las oportunas gestiones incluso a veces con peligro para mi capellaacuten para sacar algo de lo que quedoacute pero fue todo infructuoso Ignoramos queacute suer-te habraacute corrido todo incluso ornamentos pontificales y biblioteca miacutea desde luego sabemos que han destrozado las imaacutegenes del Seminario y que los libros de su biblioteca estaban tirados en uno de sus patios

Ha quedado pues Eminentiacutesimo Sentildeor la Catedral cerrada con intencioacuten han dicho de convertirla en museo para fomento de turismo el Palacio epis-copal y el Seminario mayor adjunto son ahora casa u oficinas de las diversas entidades revolucionarias (UGT CNT FAI etc etc) las casas religiosas de ensentildeanza con todo su mueblaje en manos del Gobierno para ensentildeanza laica

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los monasterios de religiosas (lanzadas todas ellas a la calle y viviendo donde cada una ha encontrado familia suya o amigas buenas) convertidos en cuarteles de milicias rojas y saqueados todos el clero oculto y sin poder ejercer su sagrado ministerio si no es en casas particulares y con temor de represalias ya que los desgraciados revolucionarios odian los actos del culto y sobre todo no quieren se celebre en ninguacuten sitio ni casa la santa misa el Seminario menor del cual igualmente se han apoderado lo han convertido creo en hospital de sangre como tambieacuten han convertido en hospitales algunos colegios religiosos En toda la extensa Dioacutecesis de Cartagena hay muchos hombres y mujeres que no iban a misa ni teniacutean de cristianos sino el bautismo y matrimonio y el cuidado de llamar a uacuteltima hora de su vida al sacerdote por esto ahora alliacute ante la promesa que les han hecho de repartirles lo de los ricos ha prendido el comunismo y son muchos los defensores del Gobierno de Madrid aunque quedan tambieacuten muchos buenos catoacutelicos pero se hallan bajo el yugo de las milicias armadas por el Gobierno

He aquiacute Eminentiacutesimo Sentildeor lo que he creiacutedo un deber poner en cono-cimiento de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima a la vez que le participo en-contrarme en este tan amado Colegio Espantildeol actualmente de vacaciones en Chiavari a donde he venido para poner en salvo mi persona ya que todo era de temer por haber quedado defraudadas las turbas asaltantes de mi palacio al no encontrarme en eacutel por haberme escapado por la puerta posterior del Seminario no serme posible ejercer personalmente alliacute el gobierno de la Dioacutecesis en estas circunstancias por tener que estar oculto y sin apenas poder comunicar con nadie como se vio por la denuncia que motivoacute el registro del cual tan providen-cialmente me salveacute

Aquiacute estoy Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor siempre a disposicioacuten de la Santa Sede y a las gratas oacuterdenes de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima

Aprovecho esta ocasioacuten para reiterarme de Vuestra Eminencia Reverendiacutesi-ma h s s q b s s P

+ Miguel de los Santos Obispo de Cartagena11

El obispo Diacuteaz Goacutemara residioacute en el Colegio Espantildeol hasta que en junio de 1937 pudo regresar a Espantildea

Otro ilustre proacutefugo fue el obispo de Tortosa Feacutelix Bilbao Ugarriza que se refugioacute en la casa laquoVilla Rosaraquo de las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazoacuten de Jesuacutes en la ciudad de Viterbo al norte de Roma el

11 La II Repuacuteblica y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticano vol IV Documentos de los antildeos 1935 y 1936 BAC Madrid 2016 710-714

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4 de agosto de 1936 Desde alliacute mantuvo correspondencia con don Car-melo y el 13 de agosto describioacute su salida de Espantildea tras el 18 de julio de 1936 y su llegada a Italia

Villa Rosa - Sanatorium - Viterbo 13 agosto 1936Rvdo Don Carmelo BlayPontificio Colegio Espantildeol Roma

Cariacutesimo Don Carmelo

Aunque resulte un poco humillante para miacute pero me parece que el Sentildeor no me ha encontrado maduro para confesor de la fe que envuelto en la no igualada borrasca tan por sus pasos me ha conducido a este oasis de bienestar y de paz

Estaba en el Balneario de Cardoacute Del 18 al 21 de julio aislamiento rumores El 22 se vieron amenazas y peligros y asiacute con alguna angustia tres diacuteas En la noche del 25 11 y 12 de la noche soy conducido a Tortosa por unos cuantos laquobuenos revolucionariosraquo que nos condujeron al Capellaacuten Rev Calderoacute y a miacute desde luego de paisano y con lo puesto El Sr Alcalde me recibioacute atento (a las 3 madrugada y mirando por mi seguridad) en buenos autos y con distinguida es-colta me condujo a Tarragona Yo contento porque penseacute alliacute ponerme al habla con el Emo Metropolitano Al Revdo Calderoacute lo dejeacute en Tortosa

El Sr Comisario de Tarragona me dice que el Emo Cardenal tuvo que huir con los suyos el 22 Como tampoco podiacutea garantizar mi seguridad me envioacute a Barcelona donde quedeacute de hecho detenido en la Conserjeriacutea de Gobernacioacuten a las 9 de la mantildeana del domingo

Grande sorpresa y alegriacutea al encontrarme en una habitacioacuten enfrentada a la miacutea y a la que teniacutea libre acceso al Emo Cardenal y Revdo Viladrich tambieacuten de paisano y en tal facha el simpaacutetico don Juan [Viladrich] que pareciacutea el pro-totipo del perfecto trincheraire

Despueacutes de las efusiones y saludos me contaron su odisea verdaderamente seria y como maacutes antiguos me enteraron del reacutegimen de vida en aquel laquopalacioraquo

Cinco diacuteas les acompantildeeacute que tuvieron alguacuten alivio en ciertas atenciones con el Emo aunque no muy sobradas Varios diacuteas pudo recibir visitas de sus sobrinos que le trajeron ropa medicinas etc Tambieacuten le visitoacute como medico (acompantildea-do de un hijo suyo muy simpaacutetico) el famoso Dr Carochan12 que formaba parte del Gobierno de la Generalidad como Conseller de Sanidad Junto a nuestras habitaciones habiacutea otra en que dormiacutea otro Sr Consejero el Sr Mestre y este tuvo tambieacuten la atencioacuten de saludarle alguna vez

Como el Emo habiacutea conseguido comunicar con Secretariacutea de Estado de SS su situacioacuten valieacutendose del coacutensul de Italia y haciendo ver su condicioacuten de

12 Manuel Carochan profesor de la Universidad de Barcelona

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ciudadano vaticano las negociaciones seguiacutean su camino Tratoacute de incluirme en ellas pero no pareciacutea faacutecil

Por esto el jueves 30 a las 9 de la noche fue grande nuestra sorpresa cuando avisaron de que nos preparaacuteramos para marchar todos tres Y en efecto a las 10 y 12 embarcamos en el laquoFirenzeraquo buque almirante de la escuadra italiana entre atenciones y carintildeo de sus simpaacuteticos marinos El diacutea de S Ignacio tuvimos el consuelo de celebrar despueacutes de largos diacuteas de laquolaicosraquo

El viernes al anochecer trasbordamos al crucero laquoM Attendoloraquo que el saacuteba-do a las 5 de la tarde nos dejaba en Spezzia y dos horas despueacutes descansaacutebamos con los hijos de San Bruno (Farneta)

Es decir yo no descanseacute porque el clima luccense13 me era hostil El 5 a Roma y despueacutes a este precioso y sano rincoacuten Que el Sentildeor que aquiacute me ha traiacutedo como en palmas me ayude a darle gracias y corresponder a sus designios

Las noticias que se reciben de Madrid y Cataluntildea cada diacutea maacutes tristes La paacutegina de fusilamientos en masa de 109 seminaristas de Tarragona en el cemen-terio de Leacuterida es espantosa Le abrazahellip

+ Feacutelix obispo de Tortosa14

El tercero de los obispos proacutefugos en Roma fue el de Vich Juan Pe-relloacute que envioacute a Pacelli el 23 de agosto un escrito en el que expuso un juicio sinteacutetico sobre la revolucioacuten espantildeola y sobre la persecucioacuten de la Iglesia15 Este obispo residioacute desde el 21 de agosto en la casa de los religiosos de los Sagrados Corazones congregacioacuten a la que perteneciacutea situada en Via del Curato muy proacutexima al puente de Castel SantrsquoAngelo El 5 de marzo de 1937 pudo regresar a su tierra natal de Mallorca

El cuarto fue el obispo de Urgel Justino Guitart que residioacute habitual-mente en la Casa de los jesuitas de San Remo si bien hizo algunos viajes a Roma y vivioacute en el Colegio Espantildeol

La mayoriacutea de los sacerdotes procediacutea de las dioacutecesis catalanas salvo dos de Orihuela y Astorga Los que no tuvieron cabida en el Colegio Espa-ntildeol fueron acogidos en gran parte en el hospicio romano de laquoCento Pretiraquo situado en el Lungotevere frente al Ponte Sisto mientras que algunos se instalaron individualmente en las casas y colegios indicados en la carta de don Carmelo a Tardini anteriormente citada

13 Se refiere a la ciudad de Lucca cerca de la cual estaacute la cartuja de Farneta14 La II Repuacuteblica y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticano vol IV Documentos

de los antildeos 1935 y 1936 686-68715 Ibid 718-724

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5 don cArMelo blAy y el cArdenAl vidAl y bArrAquer

El maacutes ilustre de los proacutefugos espantildeoles en Italia fue el arzobispo de Tarragona cardenal Francisco Vidal y Barraquer16 que residioacute en la Car-tuja de Farneta durante los antildeos de la guerra tan soacutelo acudioacute a Roma en febrero de 1939 para participar en el coacutenclave tras la muerte de Piacuteo XI el 10 de febrero de 1939 Hablo de eacutel en estas paacuteginas por la relacioacuten que tuvo don Carmelo Asiacute en el documento 2 que se recoge en el apeacuten-dice don Carmelo aporta algunas noticias sobre la situacioacuten espantildeola y la actitud del Gobierno nacional contra el obispo Muacutegica y el cardenal Vidal mientras que en el documento 4 informa detalladamente sobre las gestiones que realizoacute por encargo expreso del cardenal Pacelli para con-seguir que el cardenal Vidal renunciase al gobierno de la archidioacutecesis de Tarragona

Al estallar la revolucioacuten de 1936 Vidal conocioacute personalmente los horrores de la perse cucioacuten republicana de la que fue viacutectima soacutelo en sus primeros diacuteas El 21 de julio de 1936 salioacute de su palacio arzobispal y fue trasladado a Poblet donde fue detenido dos diacuteas maacutes tarde por elementos de la FAI (Federacioacuten Anarquista Ibeacuterica) y encarcelado en Montblanch quedando encerrado laquoen un calabozo sin maacutes muebles que dos jergones de paja y unos trozos de mantaraquo consiguioacute salvarse gracias a la inter-vencioacuten de las autoridades de la Generalitat y el 30 de julio se embarcoacute en Barcelona hacia Italia acogido con todos los honores en el crucero de la marina italiana Fiume despueacutes se establecioacute en la cartuja de Farneta cerca de Lucca de riguroso incoacutegnito

Hubiera sido su deseo al salir de Espantildea dirigirse a la Ciudad Eterna para presentarse seguidamente al Romano Pontiacutefice pero en atencioacuten a cir-cunstancias especiales que exigiacutean que permaneciera por una temporada ignorado en Espantildea su paradero se le pidioacute que eligiera una casa religiosa donde pudiera hacer vida retirada para evitar que la prensa se ocupase de su huida de Espantildea Por la buena amistad que le uniacutea a los monjes decidioacute establecerse en dicha Cartuja de riguroso incoacutegnito recibiendo toda la correspondencia bajo sobre exterior a nombre del P Prior

Antes de embarcarse para Italia el cardenal hizo lo posible por liberar a su obispo auxiliar el beato Manuel Borraacutes Ferreacute pero todos sus esfuer-

16 Sobre su biografiacutea remito a la que le he dedicado en el laquoDiccionario Biograacutefico Es-pantildeolraquo vol XLIX Real Academia de la Historia Madrid 2013 890-894

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zos resultaron vanos el obispo siguioacute detenido en Montblanch y fue fusi-lado el 12 de agosto aun cuando le dijeron al cardenal que nada contra eacutel existiacutea y que su detencioacuten era para la seguridad personal del mismo De la muerte del auxiliar tuvo noticia el cardenal diacuteas maacutes tarde y supo que ha-biacutea sido asesinado por anarquistas los cuales se ensantildearon baacuterbaramente en su cadaacutever quemaacutendolo

Vidal envioacute al cardenal Pacelli secretario de Estado una relacioacuten de-tallada sobre su salida de la Espantildea republicana En ella describioacute su detencioacuten y liberacioacuten y dio noticias sobre otros obispos de la provincia eclesiaacutestica tarraconense a la vez que se fue laquorecobrando poco a poco en la medida que es posible ante el cuacutemulo de horrores sabidos de agobios y penas de incertidumbres e interrogantes que a uno le asaltan en cada momento sobre tantas y tantas cosas cariacutesimas y particularmente sobre la suerte de nuestra estimada Patria y de los intereses sagrados de la Iglesia en la mismaraquo

Pacelli acusoacute recibo de sus cartas le expresoacute el dolor por los peligros que habiacutea pasado y por los inauditos desoacuterdenes de Espantildea y le dijo que al Papa le pareciacutea oportuno que permaneciera en incoacutegnito en la Cartuja de Lucca Tambieacuten manifestoacute su preocupacioacuten por los otros obispos de los que no se teniacutean noticias en Roma y comentoacute la admirable conducta de los joacutevenes de Accioacuten Catoacutelica laquodiezmados por la barbarie roja en medio de continuos peligros y sufrimientos que no desdeciacutean de los maacutertires de los primeros sigloraquo

Desde Lucca siguioacute Vidal los avatares de la Guerra civil y de la per-secucioacuten religiosa en la zona republicana preocupado por la suerte de sus familiares y de los sacerdotes encarcelados y perseguidos e intensi-ficoacute sus gestiones para conseguir la liberacioacuten de muchos de ellos o para mejorar su situacioacuten ayudaacutendoles econoacutemicamente en la medida de sus posibilidades

El 1 de septiembre de 1936 Piacuteo XI invitoacute personalmente al cardenal Vi-dal para que asistiera a la audiencia prevista para el 14 de septiembre pero al diacutea siguiente 2 de septiembre Vidal escribioacute a Pacelli manifestando sus reservas sobre la oportunidad de dicha audiencia y diciendo

Temo asimismo y se lo digo a Vuestra Eminencia Revma confidencial y fraternalmente que parecido resultado pudiera producir una clamorosa reunioacuten de obispos y sacerdotes en el Vaticano ‒veo se ocupa de ello la prensa con co-mentarios divergentes‒ con eneacutergicas protestas cual merecen las barbaridades realizadas Por ello seriacutea conveniente que antes de dicha reunioacuten se procurase

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salvar todo lo que fuese posible en cuanto a personas y cosas Siempre y a priori apruebo y sigo los preceptos y orientaciones del Santo Padre a Quien amo y venero con el afecto filial maacutes acendrado pero entiendo que ello no debe ser obs-taacuteculo para que exponga en conciencia mi opinioacuten a mis Superiores sin perjuicio de rendir mi criterio y acatar luego la suprema decisioacuten cualquiera que ella sea Es ciertamente muy doloroso y subleva el alma noble generosa y recta el dejar sin puacuteblica protesta tantos sacrilegios y pecados tantos asesinatos y atrocidades tantas destrucciones y devastaciones pero al igual que Jesucristo y los primi-tivos maacutertires conviene tener una gran prudencia y paciencia por los que no reflexionan por los que estaacuten ciegos por los que exacerbados y ofuscados por la pasioacuten y el deseo de venganza no saben lo que hacen y llegan al extremo de beber la sangre de los Ministros del Sentildeor y de los buenos catoacutelicos despueacutes de haber saciado su odio martirizando horriblemente a sus viacutectimas Crea Eminencia Reverendiacutesima que al conocer todo esto hubiera preferido no haber practicado gestioacuten alguna para salvarme del naufragio y dar mi vida que poco puede rendir ya por Dios por la Iglesia y por la Patria estariacutea ya sin duda en el cielo No se me oculta que una puacuteblica protesta alentariacutea a los buenos y tal vez moveriacutea maacutes y maacutes a prestar su apoyo moral y aun material a los catoacutelicos de todo el mundo pero y si Dios en sus elevados designios permite el triunfo de los enemigos iquestno seriacutea ello un mayor obstaacuteculo para que los sacerdotes pudieran entrar de nuevo en Espantildea y trabajar por la conversioacuten de nuestros paisanos quienes aunque pervertidos y malos no por ello dejan de ser nuestros hermanos Ha llegado a mis oiacutedos que algunos elementos tendenciosos que siempre han sido partida-rios de la poliacutetica catastroacutefica entre ellos sacerdotes y religiosos trabajan desde Roma para que se tengan reuniones de tonos violentos a fin de comprometer a la Santa Sede hacia determinados bandos de entre los que actualmente luchan unidos contra el anarquismo y el comunismo Me consta asimismo que en ciertas casas donde se hospedan sacerdotes refugiados en lugar de emplearse el tiempo en la oracioacuten en ocupaciones uacutetiles etc se gasta en criticar a la Jerarquiacutea y en ahondar las perniciosas divisiones entre los catoacutelicos como si no fuera bastante dura la leccioacuten recibida y asaz amargos los escarmientos sufridosraquo

No debioacute gustarle al Papa esta respuesta del arzobispo de Tarragona porque al diacutea siguiente le retiroacute la invitacioacuten ya cursada y le pidioacute a Pacelli que le escribiera una carta muy delicada dicieacutendole de parte del Papa que no era oportuno que de momento saliera de Lucca

Il Santo Padre ha deciso di ricevere il 14 settembre cm in particolare Udien-za i Vescovi gli ecclesiastici i religiosi le religiose e laici che sfuggiti agli orro-ri della persecuzione in Spagna sono attualmente in Roma LrsquoAugusto Pontefice sarebbe ben lieto di vedere alla Sua sovrana presenza tra questi figli tribolati in primo luogo lrsquoEminenza Vostra Reverendissima ma data la speciale delicatez-

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za delle presenti condizioni ed anche la di Lei personale situazione Sua Santitaacute non ritiene opportuno che VE lasci per ora la sua attuale dimora Il Santo Padre assicurando che ciograve nonostante in quella circostanza avragrave in modo tutto parti-colare presente al Suo spirito lrsquoEV per farLa participe della Sua piuacute affettuosa Benedizione non vuol tuttavia mancare fino da ora di benedirLa di tutto cuore invocando sopra di Lei i celesti conforti

Vidal respondioacute el 11 de septiembre 1936

Me honro en acusar recibo a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima de la vene-rada carta de 9 de los corrientes comunicaacutendome que el Santo Padre ha decidido recibir en Audiencia a los prelados eclesiaacutesticos y seglares proacutefugos de Espantildea que se encuentran en Roma Y toda vez que por las circunstancias que Vuestra Eminencia Revma indica no estima oportuno el Santo Padre que por ahora deje yo mi actual residencia que ni por un momento he abandonado lo cual me priva de la grandiacutesima satisfaccioacuten de unirme corporalmente a mis queridos hermanos perseguidos y confortar mi aacutenimo con las paternales palabras del Santo Padre he de rogar a Vuestra Eminencia Revma que se sirva expresar al Augusto Pontiacutefice que en tan memorable acto estareacute presente en espiacuteritu muy unido a Sus inten-ciones con deseos de sufrir maacutes por Jesucristo y por la Iglesia y que Le quedo reconocidiacutesimo por Su voluntad de hacerme partiacutecipe en dicha circunstancia de Su amorosa Bendicioacuten Paternal de la cual es ya prenda muy estimada la que con tanto afecto se ha dignado anticiparme por conducto de Vuestra Eminencia Revma En estos momentos de tan dura prueba por todos conceptos es siempre de gran consuelo y lenitivo saberse muy cerca y especialmente unido al corazoacuten de nuestro venerado Padre comuacuten

Pacelli explicoacute a Vidal las razones por las cuales el Papa hizo este discurso17

A propoacutesito de las relaciones del cardenal Vidal con Franco hay que decir ante todo que aquel ha sido presentado siempre como un eneacutergico opositor al general Se fundamenta este juicio en su negativa a firmar la carta escrita colectivamente por el Episcopado el 1 de julio de 1937 Sin embargo su cartas ineacuteditas que yo mismo he publicado recientemen-te18 desmienten por completo esta opinioacuten por cuanto nos presentan a

17 Los textos citados pueden verse en La II Repuacuteblica y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticano vol IV Documentos de los antildeos 1935 y 1936 768-769 nota 553

18 Epistolario Vidal-Pacelli-Pizzardo-Montini y apuntes de la Secretariacutea de Estado (1936-1939) in Analecta Sacra Tarraconensia 89 (2015) 267-1014

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un cardenal Vidal no solo abiertamente favorable a la persona del general Franco a quien demostroacute por escrito admiracioacuten y simpatiacutea sino tambieacuten sus deseos de que ganara la guerra y llegara a gobernar Espantildea Todo esto puede sorprendernos a estas alturas cuando se llevan maacutes de setenta antildeos exaltando el antifranquismo del arzobispo de Tarragona presentaacutendolo como un firme bastioacuten frente al Reacutegimen que Franco alumbroacute y mitifican-do un tanto exageradamente su figura en este sentido Asiacute lo evidencia esta carta del 21 de febrero de 1937

Poniendo en praacutectica los sabios consejos de Vuestra Eminencia he intentado hacer llegar reservadamente y de palabra al general Franco el testimonio de mi felicitacioacuten y simpatiacutea y mis sinceros votos por el eacutexito de la buena causa No seacute si el Emmo Sr cardenal Gomaacute a quien hice el encargo habraacute tenido ya ocasioacuten de cumplirlo Pero si a Vuestra Eminencia le pareciera conveniente u oportuna una manifestacioacuten maacutes clara y expliacutecita estoy dispuesto a ello Yo de momento por la razones indicadas en la presente y en mis anteriores que tienen auacuten todo su valor no me inclino a avanzar maacutes a no ser que Vuestra Eminencia fuese de otro parecer en cuyo caso mucho le agradeceriacutea se sirviera manifestaacutermelo Deseo vivamente que triunfe Franco pero aun cuando vaya obteniendo ventajas no se ve muy clara la actitud de ciertas grandes potencias que pueden influir decisiva-mente en la terminacioacuten de la guerra y en la forma de acabarla19

Pacelli se limitoacute a responderle que el Papa consideraba superflua una nueva manifestacioacuten maacutes clara y expliacutecita de simpatiacutea a Franco20 Pero no contento con esta respuesta siete meses maacutes tarde Vidal volvioacute a pre-guntarle a Pacelli

Si en vista de las presentes circunstancias estima oportuno que yo haga algu-na manifestacioacuten maacutes expliacutecita de simpatiacutea al general Franco en carta confiden-cial Como subsisten las mismas razones que anteriormente o sea el temor de represalias la falta de reserva la mayor dificultad que posiblemente ello impor-tariacutea para trabajar a favor de los sacerdotes y religiosos el tener toda la Dioacutecesis y Provincia Eclesiaacutestica bajo el dominio de los rojos y haber hecho ya llegar verbalmente conforme me insinuoacute Vuestra Eminencia con tanta discrecioacuten al Generaliacutesimo la expresioacuten de mis sentimientos no he creiacutedo oportuno adelantar un paso Quedo no obstante gustosamente a disposicioacuten de la Santa Sede cuyas sabias instrucciones seguireacute literalmente21

19 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Farneta 21 febrero 1937 in Epistolario 409-41620 Carta nordm 84237 de Pacelli a Vidal 13 marzo 1937 in Ibid 429-43121 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Lucca 14 septiembre 1937 in Ibid 555-558

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Pacelli le dijo que por parte de la Secretariacutea de Estado no existiacutea difi-cultad alguna para que conociendo su prudencia hiciera lo que estimara maacutes oportuno22 El arzobispo de Tarragona no ocultoacute laquolas simpatiacuteas que me han merecido los propoacutesitos y la recta intencioacuten del general Franco y la forma en que se las he manifestado ya verbalmente ya por tercera per-sona atenieacutendome a altiacutesimos consejos ya uacuteltimamente mediante carta que le dirigiacuteraquo23

Seguacuten el cardenal Vidal laquoun exagerado nacionalismo ha ofuscado a los vascos y no se comprenden las razones con que hombres de temple catoacutelico innegable hayan podido justificar su alianza con los comunistas y anarco-sindicalistas enemigos jurados de nuestra Religioacutenraquo24

Llama poderosamente la atencioacuten tras la lectura de estas cartas que la personalidad del cardenal Vidal y Barraquer aparezca muy diversa de como se la ha presentado habitualmente Y cabe preguntarse coacutemo ha sido posible construir un laquomitoraquo sin fundamento alguno en la realidad histoacuterica Vidal no soacutelo no fue antifranquista sino un sincero admirador de Franco y de su causa Por ello no ocultoacute laquolas simpatiacuteas que me han me-recido los propoacutesitos y la recta intencioacuten del general Francoraquo25 Al mismo tiempo atacoacute con mucha energiacutea a socialistas y comunistas porque laquono seriacutea viable hoy en Espantildea despueacutes de la presente guerra un gobierno en el que participaran socialistas y sus afines pues impediriacutean la soacutelida y ver-dadera reconstitucioacuten de Espantildea el castigo de los instigadores y autores de tantos y tan horrendos criacutemenes contra todo lo maacutes santo y sagrado y preparariacutean el terreno para una nueva revolucioacuten marxistaraquo26

Sus escritos nos permiten sacar estas conclusiones documentadas que no son opiniones o ilaciones personales sino testimonios escritos Scrip-ta manent Ante textos tan expliacutecitos y elocuentes cae por su peso la falsa imagen que se nos ha venido dando del cardenal Vidal en sus relaciones con Franco hasta el extremo de poder afirmar que no soacutelo fue entusias-ta defensor del general y de la laquocausaraquo que habiacutea emprendido porque creiacutea sinceramente en su rectitud de intencioacuten por el bien de Espantildea sino que ademaacutes atacoacute duramente a los comunistas socialistas y anarquistas

22 Carta n 432537 de Pacelli a Vidal del 6 noviembre 1937 in Ibid 598-59923 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Farneta 31 marzo 1938 in Ibid 71024 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Farneta 21 febrero 1937 in Ibid 411-41225 Ibid 71026 Ibid

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consideraacutendolos un mal para Espantildea Y auacuten maacutes sorprende que Vidal se declarara admirador de Mussolini consideraacutendolo laquofigura de gran pres-tigio personalraquo

Un antildeo antes del final de la guerra el Gobierno republicano invitoacute a Vidal para que regresara a Tarragona donde seriacutea recibido con todos los honores debidos a su dignidad El ministro Irujo le formuloacute esta invitacioacuten el 11 de febrero de 1938 de parte del Presidente del Gobierno Juan Ne-griacuten y del ministro de Estado Joseacute Giral laquogarantizaacutendole el respeto y la asistencia debidos a la dignidad de su persona y a los prestigios y jerarquiacutea de su cargo y jurisdiccioacutenraquo

Irujo le hizo esta invitacioacuten laquocomo vasco y como catoacutelicohellip signifi-cando la esperanza de diacuteas mejores para la Iglesia para la Repuacuteblica y para Cataluntildearaquo La prensa dio la noticia de haberse hecho la invitacioacuten antildeadiendo que el Cardenal no habiacutea contestado

El Cardenal pidioacute como condicioacuten previa para regresar a su dioacutecesis una reparacioacuten puacuteblica y sincera de los ultrajes infligidos a la Iglesia y a sus ministros gesto que nunca hicieron los republicanos por ello no aceptoacute la invitacioacuten y explicoacute sus razones en carta dirigida a Irujo

iquestCoacutemo puedo yo dignamente aceptar tal invitacioacuten cuando en las caacuterceles continuacutean sacerdotes y religiosos muy celosos y tambieacuten seglares detenidos y condenados como me informan por haber practicado actos de su ministerio o de caridad y beneficencia sin haberse entrometido en lo maacutes miacutenimo en partidos poliacuteticos de conformidad a las normas que les habiacutean dadohellip Los fieles todos y en particular los sacerdotes y religiosos saben perfectamente los asesinatos de que fueron viacutectimas muchos de sus hermanos los incendios y profanaciones de templos y cosas sagradas la incautacioacuten por el Estado de todos los bienes eclesiaacutesticos y no les consta que hasta el presente la Iglesia haya recibido de parte del Gobierno reparacioacuten alguna ni siquiera una excusa o protesta27

Particularmente molestos estuvieron los Nacionales con el cardenal Vidal al que tachaban de desarrollar actividad catalanista desde Italia La campantildea promovida contra eacutel por algunos elementos extremistas era cosa ya vieja pero se le acusaba en particular de no haber firmado la Carta colectiva del Episcopado del viaje de su vicario general Salvador Rial a Roma y Pariacutes y de sus supuestas relaciones con el presidente del Gobierno Vasco Aguirre

27 Carta de Vidal a Irujo Certosa di Farneta 30 abril 1938 in Ibid 755

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Este asunto nunca quiso tratarlo el delegado pontificio Mons Anto-niutti con las autoridades nacionales porque era particularmente delica-do pero habiacutea recibido una nota verbal del ministro de Asuntos Exteriores en la que se atribuiacutean al Cardenal gestiones en favor del Gobierno Repu-blicano que habriacutea hecho de acuerdo con los vascos en Barcelona y por consiguiente contra los intereses de la Espantildea nacional El subsecretario del Ministerio de Asuntos Exteriores le habiacutea dicho al delegado pontifi-cio laquoiquestPor queacute el cardenal se olvida de que le han asesinado a su obispo auxiliar a centenares de sacerdotes y a miles de files y han destruido todas las iglesiasraquo y le entregoacute una Nota verbal28

Precedentemente el Gobierno Nacional habiacutea protestado contra la ac-titud de algunos eclesiaacutesticos en el extranjero entre ellos el vasco Onain-diacutea los citados Carreras Trens y otros Antoniutti habiacutea dado amplias noticias sobre los asuntos de Cataluntildea y en particular sobre los intentos de restablecer el culto pero no se explicaba los contactos del cardenal Verdier arzobispo de Pariacutes con el ministro republicano Irujo y con repre-sentantes vascos y catalanes para normalizar la situacioacuten religiosa Habloacute tambieacuten de la impresioacuten negativa que tanto Franco como sus ministros teniacutean del cardenal Vidal al que no dejaron que regresase a Tarragona para ponerse libremente al frente de su archidioacutecesis antes de que llegasen a ella los nacionales

El cardenal Pacelli informoacute sobre este asunto al nuncio en Francia Valeri y tambieacuten al cardenal Vidal quien respondioacute a Pacelli el 31 de marzo de 1938 desde la Cartuja de Farneta mediante una extensa carta confidencial en la que tras agradecerle el enviacuteo de la mencionada Nota verbal del Ministerio de Asuntos Exteriores expuso ampliamente su ac-titud al respecto

En la mencionada carta el cardenal Vidal habloacute expliacutecitamente sobre laquolas simpatiacuteas que me han merecido los propoacutesitos y recta intencioacuten del general Franco y la forma en que se las he manifestado ya verbalmente y por tercera persona atenieacutendome a altiacutesimos consejos ya uacuteltimamente mediante carta que le dirigiacute que las poquiacutesimas veces que he tenido co-municacioacuten con alguna persona del Gobierno de Barcelona ha sido para pedir el indulto o la liberacioacuten de condenados y presosraquo Y defendioacute al doctor Carreras aduciendo como argumento el hecho de que le laquohabloacute

28 Despacho Nordm 28838 de Antoniutti a Pacelli San Sebastiaacuten 9 marzo 1938 in AAEESS Spagna 896 fasc 299 ff 47-48v

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muy elogiosamente del general Franco en favor del cual se mostroacute muy decidido y de las liacuteneas generales de un libro que preparaba en defensa de la actuacioacuten de la Iglesia durante el periodo de la Repuacuteblica y de la del citado Generalraquo29

Desde que el encargado de negocios de la Espantildea Nacional en el Va-ticano Pablo Churruca se entrevistoacute con Pacelli por primera vez quedoacute planteado el laquocaso Vidalraquo y ya entonces le expuso la necesidad de que fuera estudiada una solucioacuten satisfactoria para el Gobierno Nacional so-bre la futura situacioacuten del Cardenal y tambieacuten del obispo Muacutegica que se habiacutean negado a firmar la Carta colectiva A los ojos del Gobierno Nacio-nal no era necesario exhibir otros argumentos para pedir que el Cardenal no volviera jamaacutes a Tarragona que los que eacutel mismo habiacutea proporcionado y probaban su falta de identificacioacuten con los ideales poliacuteticos del Gobier-no Nacional30

El domingo 29 de enero de 1939 el embajador Yanguas fue recibido por el cardenal Pacelli En la conversacioacuten que mantuvieron el emba-jador le habloacute principalmente de la situacioacuten del cardenal Vidal Le dijo de forma categoacuterica que el Gobierno no podiacutea admitir ni que el Cardenal regresara a Tarragona ni que la administrase por medio de un delegado suyo Pacelli respondioacute que esta medida era muy grave en primer lugar porque se trataba de un arzobispo y priacutencipe de la Iglesia al que se le queriacutea impedir el ejercicio de su jurisdiccioacuten y en segundo lugar por la mala impresioacuten que esto produciriacutea en la opinioacuten puacuteblica mundial La respuesta del embajador fue que el Gobierno no temiacutea a la opinioacuten puacuteblica porque los hechos que justificaban plenamente su medida estaacuten muy documentados Por otra parte lo justificoacute diciendo que tambieacuten el cardenal Segura se habiacutea visto obligado a renunciar a su archidioacutecesis Pacelli respondioacute argumentando que aquello habiacutea sido llevado a cabo por un Gobierno hostil a la Iglesia mientras que ahora el Gobierno Na-cional se proclamaba catoacutelico El embajador replicoacute que la renuncia de Segura se hizo con intervencioacuten de la Santa Sede a lo que Pacelli respon-dioacute que Segura regresoacute a Toledo con el pleno consentimiento de la Santa Sede pero que fue expulsado despueacutes por el Gobierno republicano por la fuerza y soacutelo entonces la Santa Sede se vio obligada a proveer a la ad-

29 Epistolario 707-70930 Veacutease Apunte de la Secretariacutea de Estado del 9 de octubre de 1937 in AAEESS Spag-

na 908 fasc 316 f 33

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ministracioacuten de la dioacutecesis En cambio en aquel momento un Gobierno catoacutelico impediacutea el ejercicio de la jurisdiccioacuten y el regreso de un cardenal arzobispo a su sede Pacelli anotoacute en su apunte que no habiacutea resultado posible convencer al embajador porque habiacutea recibido instrucciones pe-rentorias de su Gobierno Por ello laquono me ha quedado maacutes remedio que renovar al embajador la expresioacuten de la extrema gravedad de semejante peticioacuten y que la cosa seriacutea estudiada para llegar posiblemente a una so-lucioacuten satisfactoriaraquo31

El mieacutercoles 8 de febrero de 1939 Yanguas se entrevistoacute nuevamente con Pacelli y despueacutes de haberle narrado algunos episodios de los horro-res cometidos por los republicanos en Cataluntildea le habloacute otra vez de la cuestioacuten del cardenal de Tarragona Pacelli le repitioacute cuanto ya le habiacutea dicho anteriormente que la Santa Sede no podriacutea consentir que le fuera impedida la jurisdiccioacuten eclesiaacutestica a un arzobispo y priacutencipe de la Igle-sia sin alguacuten motivo canoacutenico y defendioacute la conducta de Vidal valieacuten-dose del pro-memoria que le habiacutea hecho llegar el canoacutenigo Viladrich El embajador respondioacute diciendo laquoEn cualquier caso no hay esperanza alguna de que el Cardenal pueda regresar y si por hipoacutetesis el Gobierno le permitiese el regreso la opinioacuten puacuteblica no lo tolerariacutea y la dioacutecesis quedariacutea sin gobiernoraquo32

Don Carmelo por encargo de Pacelli visitoacute a Vidal en la Cartuja de Farneta y le refirioacute todo lo dicho anteriormente El Cardenal pidioacute que se hiciera un expediente o proceso para que pudiera defenderse porque se trataba de su buen nombre y dignidad porque ademaacutes se veriacutea que en todo este tiempo cuanto eacutel habiacutea hecho por la Espantildea Nacional primero haciendo que su sobrino mayor saliera de la Espantildea roja y se presentara enseguida para alistarse entre las tropas de Franco que ademaacutes a cuantos joacutevenes se le habiacutean presentado para pedirle consejo les habiacutea dicho que deberiacutean marcharse enseguida para luchar en favor de los nacionales que en su misma casa y familia se habiacutea hecho todo lo posible para defender y ayudar a los sacerdotes y religiosas durante los antildeos de revolucioacuten y de persecucioacuten que si eacutel mismo habiacutea estado fuera de Espantildea durante ese tiempo habiacutea sido exclusivamente porque asiacute podiacutea trabajar desde fuera en favor de los sacerdotes de su dioacutecesis que estaban sufriendo en las caacuterceles y en grave peligro de ser asesinados que por esto mismo y por

31 AAEESS Stati Ecclesiastici posiz 340b fasc 364 f 13232 Ibid f 133

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no hacer dantildeo a la Espantildea Nacional no se habiacutea marchado a Francia a pesar de las varias invitaciones que le habiacutean hecho en este sentido que por estas mismas consideraciones nunca quiso tampoco acceder a las indicaciones recibidas para que volviera a su dioacutecesis de Tarragona con la promesa de que le dejariacutean en libertad para actuar Por todo esto creiacutea que si Franco hubiera sabido cuanto eacutel habiacutea hecho podriacutea cambiar de parecer en este asunto

Blay le indicoacute que no se trataba de una cuestioacuten de estricto derecho sino de una situacioacuten de hecho que desgraciadamente de momento le impediacutea actuar por siacute o por delegados suyos en favor de su dioacutecesis por una imposicioacuten del Gobierno que no cederiacutea faacutecilmente

Vidal pidioacute que la Santa Sede defendiera sus derechos para el libre ejercicio de su jurisdiccioacuten cosa que ya hemos visto Pacelli hizo Pero por el momento con la mayor pena habiacutea que considerar que dada la actitud tomada por el Gobierno Nacional no se veiacutea otra solucioacuten que el nombramiento de un Administrador apostoacutelico ad nutum Sanctae Sedis Vidal declaroacute laquoque desde luego si el Santo Padre por el contrario piensa que dada la actual situacioacuten de las cosas no hay otro modo de resolverla que con el nombramiento de un Administrador apostoacutelico eacutel dispuesto siempre como hijo sumiso estaacute preparado a aceptar la menor indicacioacuten del Vicario de Jesucristoraquo33

La muerte de Piacuteo XI el 10 de febrero de 1939 supuso una paralizacioacuten de la ofensiva del Gobierno contra el cardenal Vidal si bien la Santa Sede tratoacute de defenderlo hasta donde pudo al mismo tiempo que el nuncio Cicognani presionoacute con el objetivo de que el purpurado regresara a la sede tarraconense Sin embargo de nada sirvieron esas presiones Por esta razoacuten el nuevo papa Piacuteo XII (elegido el 2 de marzo de 1939) tuvo que afrontar personalmente el caso despueacutes de un intercambio de cartas con Franco que llevaron tambieacuten a un nuevo fracaso porque el general no cedioacute El nuevo Papa defendioacute al Cardenal y le mantuvo el tiacutetulo de arzobispo de Tarragona

Vidal y Barraquer murioacute en la Cartuja de la Valsainte (Suiza) el 13 de septiembre de 1943

33 Carta de Blay a Pacelli Roma 5 febrero 1939 Veacutease en el documento 4 del apeacutendice

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APEacuteNDICEcuAtro iMportAntes docuMentos de don cArMelo blAy

DoCuMento 1 Carta de Blay al general Goacutemez-Jordana

Sobre las dificultades econoacutemicas del Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma34

Burgos 19 agosto 1937

Excelentiacutesimo SentildeorGeneral Goacutemez JordanaPresidente de la Junta Teacutecnica del Estado

Excelentiacutesimo Sentildeor

El infrascripto en nombre y representacioacuten del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma despueacutes de haber hablado con el Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sr Cardenal Primado de Espantildea Patrono del mismo Colegio a Vuestra Excelencia expone

Que atendidas las circunstancias del glorioso movimiento que para bien de la amadiacutesima Espantildea se ha producido el Colegio Espantildeol de Roma se encuentra en condiciones difiacuteciles para continuar su importante obra educadora para la formacioacuten de los sacerdotes que han de trabajar en provecho de las almas y de la misma patria espantildeola Estas dificultades provienen especialmente porque las fundaciones de las becas en favor de los joacutevenes estudiantes radican en las diversas curias diocesanas espantildeolas

Por esto seriacutea de desear se encontrara alguacuten modo o manera de que pudiera ob-tenerse que las rentas de dichas fundaciones fueran remitidas a la administracioacuten del Colegio para que este pudiera continuar su objeto con la brillantez provecho y honor como para gloria de Espantildea lo ha hecho hasta el presente

Dadas las prudentes y previsoras disposiciones que el Gobierno Nacional para bien de la patria ha dado y por lo tanto la dificultad para la salida del dinero espantildeol podriacutea resolverse esta dificultad puesto que se trata de dinero para ali-mentos de joacutevenes espantildeoles que se educan en Roma para despueacutes trabajar para bien de la Iglesia espantildeola pudiera obtenerse que la administracioacuten del Colegio

34 ASV Arch Nunz Madrid 971 ff 362-362v copia mecanografiada

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entregara al Estado Espantildeol las pesetas de que pudiera disponer como renta de las fundaciones de la becas y que el mismo Estado por conducto de la Embajada de Espantildea en Italia pudiera dar la correspondiente cantidad en moneda italiana sin necesidad de la salida de nuestra divisa espantildeola del territorio nacional

Con la esperanza de que Vuestra Excelencia con su elevado criterio podraacute interesarse cerca del glorioso Caudillo que para la grandeza de la patria ha suscitado el Sentildeor en medio de nosotros para que no se interrumpa la vida de una institucioacuten tan benemeacuterita de la Iglesia espantildeola aprovecho la ocasioacuten para agradecerle sus bondades quedando de Vuestra Excelencia afectiacutesimo seguro servidor

Carmelo Blay

[PS] La suma de liras que se necesitariacutea seriacutea de unas 25000 (veinticin-co mil) mensuales aproximadamente El Colegio podriacutea recibir dicha cantidad contra las pesetas correspondientes bien fuera por conducto de la Embajada de Espantildea en Italia o bien por otro conducto que la Junta Teacutecnica del Estado creyera conveniente

DoCuMento CoMpleMentario

Carta de Blay a la Comisioacuten de Cambios35

Burgos (Seminario de San Joseacute)

21 de agosto de 1937A la Comisioacuten de Cambios - Burgos

El que suscribe en nombre y representacioacuten del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma despueacutes de hablar sobre este asunto con el Eminentiacutesimo y Reverendiacute-simo sentildeor cardenal Gomaacute y Tomaacutes Arzobispo de Toledo Primado de Espantildea Patrono del mismo Colegio expone

1ordm Que en Roma existe desde hace cerca de 50 antildeos el Pontificio Colegio Espantildeol destinado a la formacioacuten de los joacutevenes maacutes escogidos de las diferentes dioacutecesis de Espantildea que enviados allaacute por sus propios obispos se preparan para el ministerio de las almas en aquel Centro del catolicismo con grande provecho para los mismos joacutevenes y utilidad de las dioacutecesis espantildeolas como lo prueba el gran nuacutemero de obispos salidos de dicho centro y que hoy gobiernan no pocas dioacutecesis de Espantildea

35 ASV Arch Nunz Madrid 971 ff 363-363v copia mecanografiada

ViCente CaacuterCel ortiacute

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2ordm Que en un centro de tanta importancia para la educacioacuten eclesiaacutestica y donde existen quizaacute maacutes de sesenta colegios internacionales como el nuestro de que se trata pertenecientes a otras tantas naciones es consolador poder decir sin que sea vanagloria ni presuncioacuten por nuestra parte que gracias al Sor y al esfuerzo y trabajo de los alumnos el Colegio Espantildeol ocupa uno de los prime-ros lugares por no decir el primero tanto en la formacioacuten espiritual y piadosa como por la intelectual y cientiacutefica de los mismos siendo el Colegio tenido en grande estima y consideracioacuten de las autoridades eclesiaacutesticas y cientiacuteficas de la ciudad de Roma

3ordm Que las fundaciones de las becas para el sostenimiento de estos colegia-les espantildeoles en Roma radican en las cajas de las diferentes dioacutecesis de Espa-ntildea las cuales seguacuten las condiciones de las mismas fundaciones han de enviar a la administracioacuten del Colegio las rentas de las mismas Por lo tanto el Cole-gio vive exclusivamente de dichas rentas sin que tenga otros ingresos para su manutencioacuten

4ordm Desde el principio del glorioso movimiento salvador de la patria y dadas las sabias y prudentes disposiciones del Gobierno Nacional el Colegio no ha recibido las rentas de las fundaciones por las dificultades de la salida del dinero espantildeol

5ordm Como se trata de dinero para la sustentacioacuten de los joacutevenes espantildeoles que se educan en Roma como queda indicado con tanto provecho y bien de la Iglesia espantildeola se deseariacutea poder obtener que la administracioacuten del Colegio pu-diera recibir a traveacutes de la Comisioacuten de Cambios la divisas necesarias Para esto la misma administracioacuten del Colegio podriacutea entregar aquiacute las pesetas y recibir en Roma las liras correspondientes

6ordm La suma de liras que se necesitariacutea seriacutea de unas 25000 (veinticinco mil) mensuales aproximadamente El Colegio podriacutea recibir dicha cantidad contra las pesetas correspondientes bien fuera por conducto de la Embajada de Es-pantildea en Italia o bien por otro conducto que la Comisioacuten de Cambios creyera conveniente

7ordm Confiando que esa Comisioacuten de Cambios con su elevado criterio podraacute interesarse por este importante asunto del Pontificio Colegio Espantildeol en Roma que de otra manera tendriacutea que interrumpir su beneacutefica y benemeacuterita obra cerca del glorioso Caudillo que para bien y grandeza de Espantildea el Sentildeor ha suscitado en medio de nosotros obra por otra parte de tanto honor para la Iglesia espantildeola y para la misma patria aprovecho la ocasioacuten para ofrecerme affmo ss

Carmelo Blay

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DoCuMento 2 Carta de Blay a Pacelli

Comunica algunas noticias sobre la situacioacuten espantildeola y la actitud del Gobierno Nacional contra el obispo Muacutegica y el cardenal Vidal 36

Burgos 23 agosto 1937

Pontificio Colegio Espantildeol de San JoseacutePalazzo Altemps - Roma 11Eminentiacutesimo y ReverendiacutesimoSentildeor cardenal Eugenio PacelliSecretario de Estado de Su Santidad

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor

Con la mayor veneracioacuten y profundo respeto me dirijo a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima para ofrecerle mis maacutes respetuosos obsequios desde esta amadiacute-sima Espantildea donde llegueacute hace unos diacuteas

No puede imaginar Vuestra Eminencia Reverendiacutesima la gratiacutesima impre-sioacuten que se recibe al llegar a este paiacutes y recorrer algunos pueblos y ciudades de la Espantildea Nacional por el orden maravilloso que reina en todas partes de tal manera que no se nota se encuentre esta parte de Espantildea en una guerra que tantos dantildeos y males ha causado Es realmente admirable cuanto puede observarse

He podido visitar en San Sebastiaacuten a algunas de las autoridades de aquella ciudad encontrando en todos la mejor buena disposicioacuten y respeto para cuanto se refiere a las cosas de la Religioacuten y de la Yglesia (sic) Es muy grande el fervor y la piedad de las autoridades y del pueblo que se manifiesta en todos los actos del culto Precisamente en estos diacuteas con motivo de la festividad de la Asuncioacuten de la Virgen Santiacutesima han sido muy grandes estas manifestaciones de piedad en todos los pueblos especialmente en San Sebastiaacuten Bilbao y aquiacute en Burgos que son las poblaciones que he visto hasta ahora se han hecho grandes fiestas en honor de la Santiacutesima Virgen tomando parte todas las autoridades con grande ejemplo de los fieles que han llenado las iglesias con numerosas y fervorosas comuniones generales No dudo de que S E Mons Antoniutti habraacute quedado edificado por cuanto ha visto en Bilbao el diacutea de la Virgen Santiacutesima

36 AAEESS Spagna 892 fasc 278 ff 15-18 original mecanografiada

ViCente CaacuterCel ortiacute

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En esta ciudad de Burgos he podido tener el honor de visitar a algunos de los miembros de la Junta Teacutecnica del Estado (Gobierno Nacional) y en todos he podido observar las mejores disposiciones para cuanto se refiere a la Religioacuten y a la Yglesia El Presidente de la Junta Teacutecnica general Goacutemez Jordana me ha hecho magniacutefica impresioacuten por su equanimidad (sic) y prudencia por su piedad y devocioacuten a la Santa Sede manifestando en la conversacioacuten grande respeto y diciendo que aunque en Espantildea se lamentaba la actitud que se ha tenido con respecto al Gobierno del Generaliacutesimo Franco y a la misma Espantildea Nacional se comprende que la Santa Sede debe haber tenido sus razones y motivos para esta actitud Por otro lado ven con gusto el paso dado por la Santa Sede que confiacutean sea el principio de otros maacutes importantes

No debo dejar de manifestar a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima que en general se oyen respetuosos lamentos de la actitud de la Santa Sede creyendo que no ha comprendido bien el principio y origen de esta guerra que no ha tenido otros motivos que religiosos y patrioacuteticos es decir para salvar la Religioacuten y la Patria Una y otra estaban al borde del abismo en este querido paiacutes de tradicioacuten eminentemente catoacutelica Es consolador el oiacuter aneacutecdotas y casos de muchiacutesimos que han abandonado todo cuanto teniacutean familia hijos hacienda etc para com-batir a los enemigos de la Religioacuten Por esto dicen no se comprende la prudente conducta del Vaticano Es lo primero que todos dicen al hablar de Roma

No he tenido todaviacutea el honor de poder ver al Generaliacutesimo Franco pero confiacuteo puedo tenerlo uno de estos diacuteas porque el general Jordana presidente de la Junta Teacutecnica me dijo que eacutel mismo se encargariacutea de obtener la audiencia para miacute aunque es difiacutecil porque con motivo del movimiento contra Santander estaba el Generaliacutesimo ocupado en el frente de batalla

Una de las cuestiones maacutes espinosas y graves que sin duda se ha de presentar y se ha presentado es la del clero y aun del prelado de Vitoria Es muy general la idea de que es imposible pueda regresar a la dioacutecesis Es muy grande la reaccioacuten contra dicho prelado al que con razoacuten o sin ella consideran y tratan como uno de los mayores culpables de cuanto ha sucedido en Vizcaya Ya VER tendraacute noticias maacutes autorizadas que las miacuteas sobre cuanto ha pasado y pasa todaviacutea con parte del clero de Vizcaya y la grandiacutesima prevencioacuten que hay contra los que olvidaacutendose de su misioacuten de paz han sido causa de tanta ruina y desolacioacuten Seguramente que muchos sacerdotes y religiosos tendraacuten que salir del territorio de la dioacutecesis Al prelado le seraacute muy difiacutecil poder volver a la misma Ademaacutes su misioacuten pastoral no seriacutea provechosa por lo mal dispuestos que estaacuten en ge-neral contra eacutel

Tambieacuten para el diacutea de mantildeana puede ocurrir algo parecido con el Emo y Rvmo Cardenal Arzobispo de Tarragona Hay en esta Espantildea Nacional una gran prevencioacuten contra este Emo Prelado Precisamente en la misma Oficina de la frontera espantildeola mientras se despachaba la documentacioacuten hablando ama-blemente con los jefes encargados de dicha Oficina incidentalmente salioacute en la

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conversacioacuten el nombre del cardenal Vidal y Barraquer y enseguida uno de los alliacute presentes dijo laquoSuponemos que dicho sentildeor no vendraacute por Espantildearaquo y al contestarle que seguramente por ahora no creiacutea que viniera el mismo que habiacutea hablado dijo laquoSuponemos que ni ahora ni tampoco despueacutesraquo

Es tanto lo que Espantildea ha sufrido Eminentiacutesimo Sentildeor por estas divisio-nes de Vizcaya y de Cataluntildea que ahora se siente una muy grande reaccioacuten para acabar con todo esto y fortificar la unidad de la patria Ciertamente que si despueacutes de la sangre derramada despueacutes de tantas y tan in numerables viacutectimas inocentes como esta tragedia ha causado en la queridiacutesima Espantildea tuvieacuteramos que continuar con tantas luchas de pequentildeas regiones y divisiones intestinas no se hubiera obtenido gran cosa con tanto sacrificio Por esto se siente en todas partes y en todos tan grande reaccioacuten a cuanto signifique divisioacuten y partidismos dentro de la patria espantildeola

Como sin duda uno de los factores principales en estas divisiones ha sido el clero que olvidaacutendose de su misioacuten de paz y de amor ha trabajado por dividir y separar a los de las dos regiones del resto de Espantildea por esto la reaccioacuten viene contra el clero y los prelados que consideran en cierto modo culpables de no haber impedido que el clero hiciera tales campantildeas contra la unidad de la patria

Es una providencia el que ahora los hombres que estaacuten al frente de los nego-cios de la Espantildea Nacional sean en general de convicciones netamente catoacuteli-cas desde el Generaliacutesimo Franco hasta el Presidente de la Junta Teacutecnica del Estado y los mismos miembros de la dicha Junta Esto hace concebir esperanzas de que cuanto se refiere a la Religioacuten y a la Yglesia ha de encontrar en los mismos las mayores facilidades

Pudiera haber alguacuten temor en las masas en los diferentes grupos que forman la Falange Tradicionalista y de las JONS De los tradicionalistas hay que tener la seguridad de que estaacuten completamente con la Yglesia y que con grande entusias-mo han tomado las armas para defender a la Religioacuten De los que pudiera tenerse alguna prevencioacuten es de los Falangistas en cuyo grupo pueden haberse infiltrado elementos de pocas convicciones catoacutelicas pero tambieacuten entre los falangistas hay elementos de sentimientos verdaderamente cristianos en su mayor parte por pertenecer a familias sumamente cristianas Es de esperar que llegado el momento estos mismos comprenderaacuten que es necesario trabajar dentro de los sentimientos y conforme a las doctrinas de la Yglesia para el mayor bien de la sociedad y del pueblo

Aprovecho esta ocasioacuten para renovarle los sentimientos de mi profunda ve-neracioacuten mientras besando devotamente la Sagrada puacuterpura me profeso de Vues-tra Eminencia Reverendiacutesima devotiacutesimo servidor

Sac Carmelo Blay

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DoCuMento 3 Carta de Blay a Pacelli

Informa sobre las opiniones de las esferas gubernativas que lamentan respetuosamente la manera como la Santa Sede ha tratado al Gobierno Nacional desde que comenzoacute el movimiento militar y son contrarias a la actitud separatista del clero vasco sobre la piedad e intensa religiosi-dad personal del general Franco y sobre la formacioacuten religiosa de los falangistas37

Biarritz 20 septiembre 1937

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo SentildeorCardenal Eugenio PacelliSecretario de Estado de Su SantidadCiudad del Vaticano

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor

Pensaba yo encontrarme para estas fechas en Roma pero una pequentildea indis-posicioacuten me ha hecho retrasar mi regreso por esto me permito escribir a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima despueacutes de haber estado en Salamanca y en algunos otros lugares de la Espantildea Nacional y ponerme en contacto con los miembros del Gabinete Diplomaacutetico del Jefe del Estado Espantildeol y con personas que estaacuten y viven muy cerca del mismo Jefe del Estado

Como deciacutea a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima todos lamentan respetuo-samente del modo como la Santa Sede ha tratado al Gobierno Nacional desde que comenzoacute el movimiento salvador de Espantildea No comprenden dicen la incomprensioacuten de dicho movimiento que en primer lugar teniacutea por objeto de-fender a la Religioacuten y a la Yglesia de la barbarie marxista y comunista Por esto ahora se ha recibido con grande satisfaccioacuten en todos los sectores de la Espantildea Nacional la paternal bondad del Santo Padre al nombrar como Encargado de Negocios de la Santa Sede a SE Mons Antoniutti

Lo que les ha preocupado no poco es cuanto seguacuten ellos ha hecho la Santa Sede por los rojos-separatistas vascos que tanto dantildeo han hecho a la misma Re-

37 AAEESS Spagna 896 fasc 297 ff 42-44 original mecanografiada

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ligioacuten en su paiacutes antes tan catoacutelico y respetuoso con la Yglesia A este respecto consideraban la venida de Mons Antoniutti con el pretexto de atender a los nintildeos vacos maacutes bien como para proteger a los mismos vascos en el momento en que han de rendir cuentas a la justicia espantildeola por los desastres causados a su propio paiacutes y a toda Espantildea como si se temiera que los tribunales espantildeoles se excedieran en su misioacuten de ejercer la justicia Por esto creen que tuvo prisa en ir a Bilbao instalaacutendose alliacute como en su propia sede

En cuanto a la situacioacuten de los elementos religiosos que tanto dantildeo han causa-do durante esta guerra es decir de los religiosos de varias Oacuterdenes y Congrega-ciones religiosas que olvidando su misioacuten de paz y de la propia santificacioacuten se han dedicado por espiacuteritu de partido a predicar la guerra de exterminio parece que muy poco o nada han cambiado Seriacutea conveniente que en los conventos de Vizcaya se proveyera para que fueran tenidos por religiosos que no hubieran hecho poliacutetica separatista y a ser posible que no fueran oriundos de dicha regioacuten trasladando a otras partes de Espantildea o bien a Misiones a los que maacutes se han distinguido por su actuacioacuten separatista Seguramente que una de las causas de cuanto ha ocurrido en Vizcaya con los religiosos y aun con los de vida maacutes aus-tera como Carmelitas Pasionistas Capuchinos y no pocos Jesuitas fue debido a la formacioacuten de Provincias religiosas exclusivamente dentro de la misma regioacuten sin contacto alguno con las casas de otras regiones Asiacute ha resultado que en todas estas casas y Provincias los elementos que han formado las comunidades eran en su mayor parte separatistas Precisamente me deciacutea un religioso carmelita que ahora ocupa un puesto en el gobierno de la Orden en el Corso drsquoItalia en Roma38 que eacutel consideraba que entre los religiosos de su Orden de la Provincia de Vizcaya por lo menos el 90 eran nacionalistas es decir de ideas separatis-tas Quizaacutes los superiores mayores de las diferentes Oacuterdenes religiosas tienen no poca responsabilidad de cuanto ha sucedido porque no han comprendido o no han podido poner remedio oportunamente a tantos males como han causado los que abandonando el mundo para buscar su propia santificacioacuten y la santificacioacuten de las almas han perdido el tiempo haciendo poliacutetica de odios y de divisioacuten entre los mismos fieles

Al recorrer los pueblos destrozados de Vizcaya y preguntar a los sencillos aldeanos por queacute se habiacutean unido a los enemigos de la Religioacuten es triste oiacuter decir que los sacerdotes y religiosos les habiacutean dicho que esto era lo mejor y por esto habiacutean obedecido iexclQueacute dolor

En general los sacerdotes de la dioacutecesis de Vitoria de ideas separatistas no han cambiado nada Parece que estaacuten envenenados con dichas ideas y no es extrantildeo que el Gobierno Nacional esteacute preocupado por esto Era de absoluta necesidad el nombramiento de un Administrador apostoacutelico como lo ha hecho

38 Se refiere al P Silverio de Santa Teresa OCD

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el Santo Padre en la persona del Obispo auxiliar de Valencia para que cesando la interinidad en que viviacutea dicha dioacutecesis se pudiera trabajar en tantos problemas difiacuteciles y complicados Dicho nombramiento ha sido muy bien recibido por todos y aun por el Gobierno Nacional que ve el paternal intereacutes del Santo Padre por esta querida Espantildea

El nombramiento del Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo sentildeor cardenal Segura para la importantiacutesima dioacutecesis de Sevilla ha causado profunda emocioacuten y entu-siasmo en los catoacutelicos espantildeoles y en las esferas del Gobierno porque con esto ven una nueva muestra de amor del Papa a Espantildea y sobre todo la reparacioacuten de un gran desacato cometido por el gobierno revolucionario contra el que enton-ces ocupaba la Sede primada de Toledo39

He tenido ocasioacuten como indico a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima de te-ner contacto con personas que estaacuten muy cerca del Jefe del Estado y viven con eacutel mismo Dichas personas han hablado con grande elogio y entusiasmo del mismo Jefe del Estado especialmente en cuanto se refiere su piedad y respeto a la Yglesia de su equanimidad (sic) en tratar y conocer los maacutes difiacuteciles asuntos De su piedad me deciacutea el capellaacuten del Cuartel general40 que vive en la propia casa y como de familia con el Generaliacutesimo basta decir que ni un solo diacutea se retira a descansar sin antes haber rezado en familia el Santo Rosario aunque esto sea a las cuatro o cinco de la madrugada al regresar de alguna visita a los frentes de batalla Lo mismo que el querer tener en el Cuartel general la santa misa todos los diacuteas

39 En plena Guerra Civil Segura tras haber presidido el funeral del arzobispo de Se-villa cardenal Ilundaacutein fallecido el 10 de agosto de1937 manifestoacute tanto a Piacuteo XI como al cardenal Pacelli deseos de regresar a Espantildea desde su destierro en Roma pues consideroacute llegado el momento propicio para regresar a una sede metropolitana espantildeola de prestigio y de tradicioacuten cardenalicia como era Sevilla y asiacute lo dijo al cardenal Pacelli en carta escrita desde Olaz de Loyola (Guipuacutezcoa) el 17 de agosto de 1937 en respuesta a otra suya en la que le comentaba que el Papa estaba dispuesto a nombrarle para una dioacutecesis espantildeola laquoarri-vato il momento per la vacanza della sede convenienteraquo A peticioacuten de Pacelli el delegado apostoacutelico en la Espantildea nacional Hildebrando Antoniutti dijo que el ambiente es favorable el regreso del cardenal Lo mismo pensaba Gomaacute que veiacutea en este nombramiento una so-lucioacuten excelente a la situacioacuten del cardenal (cfr mi artiacuteculo laquoNombramientos episcopales en Espantildea y estado de algunas dioacutecesis catalanas durante la Guerra Civil [1936-1939]raquo in Analecta Sacra Tarraconensia 88 [2014] 597-933)

40 Joseacute Mariacutea Bulart Ferraacutendiz (San Andreacutes de Palomar Barcelona 1900 - Madrid 1981) hizo los estudios en el seminario de Barcelona y fue ordenado sacerdote en mayo de 1925 Era secretario particular del obispo de Salamanca Enrique Pla y Deniel cuando el 4 de octubre de 1936 pasoacute al servicio de Franco al cederle el obispo el palacio episcopal como sede del Cuar-tel general que convirtioacute durante casi toda la guerra en su puesto de mando Fue su confesor hasta su muerte y capellaacuten de la Casa Civil y le atendioacute a eacutel a toda su familia y a las personas maacutes allegadas en las funciones y ceremonias religiosas Tambieacuten fue responsable de la cura pastoral del palacio del Pardo Se incardinoacute en la archidioacutecesis de Madrid en 1957 y desem-pentildeoacute en ella los ministerios de rector de la Iglesia del Buen Suceso desde 1942 y paacuterroco de la parroquia del Corpus Christi de 1953 a 1981 (Cf mi Diccionario de Sacerdotes diocesanos espantildeoles del siglo XX BAC Madrid 2006 265)

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Al decir yo hace unos diacuteas al Jefe del Gabinete Diplomaacutetico sentildeor Sangroacute-niz que seguramente el enviado especial del Santo Padre para el asunto de los nintildeos vascos podriacutea informar muy bien de cuanto sucede en la Espantildea Nacional me deciacutea que nuestros prelados tambieacuten habraacuten informado y que bien podiacutean atender en el Vaticano a dichas informaciones Con este motivo me deciacutea que sin duda el objeto de enviar a Espantildea a Mons Antoniutti deberiacutea haber sido otro por parte de la Santa Sede como queda indicado maacutes arriba en esta carta por-que solo para esto no era ne cesario puesto que el Gobierno Nacional se estaba ocupando de dichos nintildeos y sobre todo estaba dispuesto a recibirles y asistirles apenas llegaran a Espantildea como atiende y asiste a los pueblos y ciudades que van ocupando las fuerzas nacionales donde quiera que llegan estas por conducto de la Intendencia Militar como lo prueba lo que se hizo en Bilbao y lo que uacuteltima-mente se ha hecho en Santander y como se hace con los numerosos evadidos de la zona roja que diariamente vienen a la Espantildea Nacional buscando la paz y la tranquilidad que en la misma se respira

Indudablemente que una de las mayores preocupaciones del movimiento nacional es lo que pueda resucitar de la Falange Espantildeola mejor dicho de los falangistas A este propoacutesito me deciacutea el sentildeor Serrano Suacutentildeer cuntildeado del Gene-raliacutesimo y que vive con eacutel mismo y seguacuten me indican atiende mucho a sus con-sejos que se desea vivamente organizar y ya de esto se ocupan con el Cardenal primado y con el obispo auxiliar de Toledo [Gregorio Modrego] la asistencia religiosa en las organizaciones falangistas de tal manera que en todas puedan encontrar los miembros dicha asistencia religiosa algo parecido como se ha hecho en Italia para los balilas y avanguardistas41 etc Es cierto que este es un problema importantiacutesimo

Suplicando dispense la molestia de este escrito beso con todo respeto la Sagrada puacuterpura quedando de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima devotiacutesimo servidor

Sac Carmelo Blay

41 Los laquobalillasraquo eran nintildeos entre 8 y 14 antildeos y los avanguarditas eran joacutevenes entre 14 y 18 Se trataban de dos subestructuras de la Opera Nazionale Balilla organizacioacuten juvenil de la Italia fascista que funcionoacute como adicioacuten a la educacioacuten escolar entre 1926 y 1937 antildeo en el que fue fusionada con la Gioventugrave Italiana del Littorio una seccioacuten juvenil del Partido Nacional Fascista

ViCente CaacuterCel ortiacute

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DoCuMento 4 Carta de Blay a Pacelli

Informa sobre las gestiones hechas personalmente para conseguir que el cardenal Vidal renuncie al gobierno de la archidioacutecesis de Tarragona42

Roma 5 febrero 1939

Pontificio Colegio Espantildeol de San JoseacutePalazzo AltempsRoma - 11

A Su Eminencia Reverendiacutesimael Sentildeor Cardenal Eugenio PacelliSecretario de Estado de Su SantidadCiudad del Vaticano

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor

Cumpliendo con la mayor buena voluntad las indicaciones de Vuestra Emi-nencia Reverendiacutesima le escribo el resultado de la misioacuten que amablemente quiso encargarme ante el Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo sentildeor cardenal Vidal y Barraquer arzobispo de Tarragona Procurareacute hacerlo con la mayor fidelidad

El encargo aunque honroso para miacute era al mismo tiempo muy penoso por la persona y por el asunto de que se trata

Apenas llegado a la Cartuja de Farneta residencia del citado Emo y Revmo Sr Cardenal expuse con el mayor cuidado posible la misioacuten que me llevaba dicieacutendole cuanto VE Rvma me habiacutea encargado por indicacioacuten del Santo Padre esto es

1ordm Cuanto el Sentildeor Embajador de Espantildea en nombre del Gobierno Nacio-nal le habiacutea propuesto acerca de que el Gobierno estaba resuelto a no permitir que volviera el sentildeor cardenal Vidal y Barraquer arzobispo de Tarragona a Es-pantildea y por lo tanto a su dioacutecesis y no soacutelo esto sino que tampoco permitiriacutean que gobernase aquel arzobispado ninguno que fuera nombrado por el mismo y que estuviera a las ordenes suyas Que dada esta situacioacuten de hecho para atender a las necesidades de las almas especialmente en estos primeros tiempos

42 AAEESS Spagna 949 fasc 352 ff 47-50 original mecanografiada

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cuando seraacute necesario organizarlo todo para la restauracioacuten de tanta ruina el Santo Padre pensariacutea poderlo hacer por medio de un Administrador apostoacutelico que podriacutea nombrarse ad nutum Sanctae Sedis

2ordm Le hice presente cuanto Vuestra Eminencia Reverendiacutesima habiacutea mani-festado al propio Sr Embajador indicaacutendole que se trataba de una cosa muy gra-ve porque no era soacutelo el impedir el libre ejercicio de su jurisdiccioacuten a un obispo cualquiera sino a un obispo priacutencipe de la Yglesia (sic) Que ademaacutes que esta actitud del Gobierno Nacional de Espantildea causariacutea grande admiracioacuten en todo el mundo catoacutelico en desprestigio de la misma Espantildea

3ordm Al ejemplo puesto por el Sr Embajador acerca de los precedentes de la expulsioacuten del Emo y Rvmo Sr cardenal Segura se le habiacutea hecho presente por Vuestra Eminencia que el caso era muy diferente al actual porque en el del cardenal Segura cuando salioacute la primera vez de Espantildea al hacerle la menor in-dicacioacuten de parte de la Santa Sede de que volviera a su dioacutecesis lo hizo ensegui-da siendo expulsado entonces manu militari por el Gobierno de la Repuacuteblica es decir por un Gobierno enemigo de la Yglesia y perseguidor de todo lo que significaba algo de Religioacuten etc Pero ahora se trata de la actuacioacuten contra un Cardenal no ya por un Gobierno enemigo de la Yglesia sino por un Gobierno catoacutelico formado por catoacutelicos y que luchan por hacer volver a Espantildea a sus tradiciones catoacutelicas de siempre

Hice presente al mismo sentildeor cardenal Vidal y Barraquer que el Emo y Re-vdmo Sr cardenal Secretario de Estado de Su Santidad como era natural habiacutea hecho todo lo posible para hacer ver al Sr Embajador la gravedad de la actitud adoptada en este asunto por el Gobierno El embajador insistioacute en que esta era decisioacuten definitiva del Gobierno Que teniacutean en sus manos copias de alguacuten documento comprometedor para el cardenal Vidal por alguna concomitancia con los separatistas vascos aun antes de producirse el movimiento nacional contra el Gobierno de la Repuacuteblica y que naturalmente estariacutean dispuestos si fuera necesario para defender su actitud a la publicacioacuten de dicho documento o documentos

El sentildeor cardenal Vidal escuchoacute todas estas manifestaciones diciendo que desde luego eacutel deseariacutea que se hiciera un expediente o proceso para que pudiera defenderse porque se trata de su buen nombre y dignidad porque ademaacutes se veriacutea que en todo este tiempo cuanto eacutel ha hecho por la Espantildea Nacional pri-mero haciendo que su sobrino mayor saliera de la Espantildea roja y se presentara enseguida para alistarse entre las tropas del Generaliacutesimo Franco que ademaacutes a cuantos joacutevenes se le han presentado para pedirle consejo les ha dicho deberiacutean marcharse enseguida para luchar en favor de los nacionales que en su misma casa y familia se ha hecho todo lo posible para defender y ayudar a los sacerdotes y religiosas durante estos antildeos de revolucioacuten y de persecucioacuten que si eacutel mismo ha estado fuera de Espantildea durante este tiempo ha sido exclusivamente porque asiacute

ViCente CaacuterCel ortiacute

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podriacutea trabajar desde fuera en favor de los sacerdotes de su dioacutecesis que estaban sufriendo en las caacuterceles y en grave peligro de ser asesinados que por esto mis-mo y por no hacer dantildeo a la Espantildea Nacional no se habiacutea marchado a Francia a pesar de las varias invitaciones que le habiacutean hecho en este sentido que por estas mismas consideraciones nunca quiso tampoco acceder a las indicaciones recibidas para que volviera a su dioacutecesis de Tarragona con la promesa de que le dejariacutean en libertad para actuar Por todo esto creiacutea que si el Generaliacutesimo Franco supiera cuanto eacutel ha hecho podriacutea cambiar de parecer en este asunto

Me permitiacute indicarle que pensara que aquiacute no se trata de una cuestioacuten de estricto derecho sino de una situacioacuten de hecho que desgraciadamente de mo-mento le impide actuar por siacute o por delegados suyos en favor de las almas de su dioacutecesis por una imposicioacuten del Gobierno que no cederaacute faacutecilmente

Eacutel cree seguacuten me dijo que la Santa Sede deberiacutea dar la batalla para defender sus derechos para el libre ejercicio de su jurisdiccioacuten Puede tener la seguridad le contesteacute como me lo habiacutea indicado el mismo Sr cardenal Secretario de Es-tado de que este ha manifestado todo cuanto creiacutea necesario al Sentildeor Embajador para defender los derechos del Cardenal Arzobispo en el ejercicio de la libre jurisdiccioacuten en su dioacutecesis Por lo tanto por el momento con la mayor pena hay que considerar que dada la actitud tomada por el Gobierno Nacional no se veiacutea otra solucioacuten que la indicada del nombramiento de un Administrador apostoacutelico ad nutum Sanctae Sedis Creo le dije que con toda probabilidad se pensariacutea en persona investida de caraacutecter episcopal y de la misma Provincia Eclesiaacutestica si es posible

A pesar de insistir mucho en sus ideas de que se haga un expediente o proceso para que eacutel pudiera exponer todo lo que creyera conveniente para su defensa terminoacute la conversacioacuten diciendo que desde luego si el Santo Padre por el contrario piensa que dada la actual situacioacuten de las cosas no hay otro modo de resolverla que con el nombramiento de un Administrador apostoacutelico eacutel dispues-to siempre como hijo sumiso estaacute preparado a aceptar la menor indicacioacuten del Vicario de Jesucristo

Naturalmente insistiacutea podriacutea ser nombrado alguno de los que eacutel ya tiene alliacute como vicarios generales o alguna otra persona que fuera grata al mismo A la primera parte le dije que difiacutecilmente podriacutea ser nombrado en caso alguno de los ya nombrados por eacutel porque precisamente una de las cosas impuestas por el Gobierno es que no sea ninguno como delegado del mismo Carde nal Arzobispo

Luego ya en la conversacioacuten me habloacute de la situacioacuten suya en caso de nom-bramiento de un Administrador apostoacutelico porque aun quedando con el tiacutetulo de Arzobispo de Tarragona le quedariacutea solamente el tiacutetulo pero no la jurisdiccioacuten Por esto deciacutea que eacutel quedariacutea en una situacioacuten poco airosa y como recluido en la Cartuja Que pensaba no debiacutea quedar alliacute maacutes tiempo y que tampoco su situacioacuten econoacutemica estaba en condiciones de poder seguir en esta situacioacuten Es cosa le dije que podriacutea tratarse en un segundo teacutermino con la Santa Sede

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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Terminamos la entrevista indicaacutendome que yo hiciera saber todo esto a Vues-tra Eminencia Reverendiacutesima y que eacutel escribiriacutea directamente al mismo Sr car-denal Secretario de Estado

Al tener el honor de comunicar cuanto queda dicho aprovecho la ocasioacuten para manifestar mi profunda veneracioacuten mientras besando devotamente la Sagrada puacuterpura quedo de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima devotiacutesimo servidor

Sac Carmelo Blay

LA VIDA EN EL COLEGIO

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DATOS ESTADIacuteSTICOS DEL CURSO 2015-2016

Han formado parte de la comunidad del Colegio un total de 63 colegia-les distribuidos del siguiente modo

Seminaristas SacerdotesNuevos 2 24Licenciatura 2 39Doctorado 0 21Otros (Maacutester) 0 1Subtotales 2 61

El total de las dioacutecesis presentes es de 34 y naciones 5 distribuidas de la siguiente manera

Albacete 1 Oviedo 1Almeriacutea 1 Pamplona y Tudela 1Arzobispado Castrense 1 San Francisco Campeche (Meacutexico) 1Astorga 2 San Sebastiaacuten 1Burgos 1 Santiago de Chile (Chile) 1Cartagena 3 Segorbe-Castelloacuten 1Ciudad Real 2 Sevilla 7Coacuterdoba 3 Siguumlenza - Guadalajara 1Coria - Caacuteceres 1 Solsona 1El Callao (Peruacute) 1 Tenerife 2Madrid 1 Toledo 6Maacutelaga 2 Tui - Vigo 1Maacutelaga-Soataacute (Colombia) 1 Urgell 1Meacuterida - Badajoz 1 Valencia 7Ndola (Zambia) 2 Valladolid 1Orihuela - Alicante 2 Villa Mariacutea 1Ourense 1 Zaragoza 3

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la ViDa en el Colegio

En cuanto a las diferentes especialidades (23 en total) la distribucioacuten es la siguiente

Bienes Culturales 1 Sagrada Escritura 9Estudios Orientales 1 Sagrada Liturgia 3Derecho Canoacutenico 7 Sociologiacutea 1Doctrina Social 1 Filosofiacutea 4Teologiacutea Biacuteblica 3 Historia de la Iglesia 2Teologiacutea Dogmaacutetica 11 Matrimonio y Familia 3Teologiacutea Espiritual 4 Misionologiacutea 1Formacioacuten Sacerdotal 2 Muacutesica Sacra 1Teologiacutea Fundamental 1 Pastoral Juvenil 2Teologiacutea Moral 1 Patriacutestica 2Teologiacutea Pastoral 2 Sacramentaria 1

En cuanto a los centros de estudio (14) la distribucioacuten es la siguiente

Istituto Patristico laquoAugustinianumraquo 2Pontificia Facoltagrave Teologica laquoTeresianumraquo 1Pontificia Universitagrave della Santa Croce 3Pontificia Universitagrave Gregoriana 26Pontificia Universitagrave Lateranense 8Pontificia Universitagrave Santo Tommaso DrsquoAquino 1Pontificio Ateneo di SantrsquoAnselmo 4Pontificio Istituto Biblico 9Pontificio Istituto di Musica Sacra 1Pontificio Istituto Giovanni Paolo II 3Pontificio Istituto Orientale 1Universidad de Navarra 1Universidad de Valencia 1Universitagrave Pontificia Salesiana 2

Han salido del Colegio un total de 14 alumnos 9 concluyendo la for-macioacuten (1 doctor 7 licenciados 1 maacutester) y 4 sin concluirla (doctorandos que no defendieron la tesis) La variacioacuten numeacuterica de los uacuteltimos 5 antildeos ha oscilado entre los valores miacutenimo 57 y maacuteximo 90

Durante el curso fue ordenado presbiacutetero (en el mes de mayo) un diaacute-cono de la dioacutecesis de Orense

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2

ACONTECIMIENTOS MAacuteS DESTACADOS

El curso 2015-2016 ha comenzado con un equipo de direccioacuten parcial-mente renovado compuesto por el Rector Joseacute San Joseacute Prisco (nombra-do el 8 de abril de 2015 despueacutes de que el anterior Rector Mons Aacutengel Javier Peacuterez Pueyo fuera nombrado obispo de Barbastro) el Ecoacutenomo D Javier Malo Peacuterez que asumioacute tambieacuten las tareas de Vicerrector el Director espiritual D Argimiro Martiacuten Benito y el confesor y encargado del archivo D Lope Rubio Parrado

Colaboran directamente con el equipo de direccioacuten el profesor de la Universidad Pontificia Gregoriana Dario Vitali que ejerce la tarea de Di-rector de estudios y el Agente de Preces Santiago Luis de Vega Alonso Reside en el Colegio como Vicario para los sacerdotes valencianos en Roma D Vicente Caacutercel Ortiacute

Una de las novedades importantes del curso ha sido la creacioacuten de la Fundacioacuten Mater Clementissima para recaudar fondos con los que ayudar al sostenimiento del Colegio El martes 17 de noviembre aprovechando la visita del Rector y del Vicerrector a la Asamblea plenaria de la Con-ferencia Episcopal Espantildeola para informar sobre la marcha del Colegio se procedioacute a la constitucioacuten del Consejo de la Fundacioacuten notarialmente y posteriormente se registroacute en el Registro de entidades religiosas del Ministerio de Justicia de Espantildea La intencioacuten es invitar primeramente a todos los ex colegiales a que se inscriban en la asociacioacuten de antiguos alumnos y colaboren con la fundacioacuten

La otra novedad es la nueva imagen institucional Para ello se optoacute por adoptar un nuevo logotipo maacutes actualizado y faacutecilmente reconocible con la fachada del Colegio y la cruz de la capilla El color magenta es el que da unidad con el logo de la Conferencia Episcopal Espantildeola

El 2 de marzo se lanzoacute la nueva paacutegina Web La presentacioacuten oficial corrioacute a cargo de Ricardo Rossi representante de OPI (empresa italiana

la ViDa en el Colegio

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de servicios a entidades religiosas que ha sido la encargada del desarrollo del proyecto) A dicha presentacioacuten asistieron ademaacutes de los colegiales 5 periodistas espantildeoles de medios catoacutelicos de Roma (Zenit Radio Vatica-na Aciprensa Rome Reports) La nueva Web es muy completa y contiene informacioacuten actualizada sobre la vida del Colegio ademaacutes de acceso a varios servicios gratuitos Su direccioacuten wwwcolegioespanolorg

El curso se inicioacute el 1 de septiembre para los colegiales nuevos y el 1 de octubre para el resto La inauguracioacuten oficial fue el 9 de octubre con un encuentro de los colegiales con el equipo formativo en la sala de conferencias la misa de inauguracioacuten que presidioacute el Rector y la cena fraterna

Unos diacuteas antes (el 4 de octubre) habiacutea comenzado el Siacutenodo sobre la familia El 8 de diciembre iniciamos con toda la Iglesia el Antildeo jubilar de la Misericordia desde el que se orientaron la mayor parte de las acti-vidades del Colegio

Del 18 al 24 de enero volvioacute a celebrarse en las instalaciones del Cole-gio el II Curso de directores espirituales organizado por la Conferencia Episcopal Espantildeola Asimismo del 28 de marzo al 29 de abril tuvo lugar el XXIX Curso de actualizacioacuten sacerdotal

celebrAciones especiAles

El domingo 8 de noviembre celebramos la Fiesta de la dedicacioacuten de la capilla de San Joseacute familiarmente conocida como laquoFiesta del Reser-vadoraquo en su 50 aniversario A las 1200 comenzoacute la Eucaristiacutea solemne presidida por Mons Piero Marini Presidente del Pontificio Consejo para los Congresos eucariacutesticos acompantildeado por Mons Ignacio Carrasco de Paula Presidente de la Pontificia Academia para la Vida A las 1330 tuvi-mos la comida y a partir de las 1600 adoracioacuten al Santiacutesimo por turnos con diversos momentos preparados por los colegiales hasta las 2000 hora en la que con las Viacutesperas solemnes presididas por el Rector se concluyoacute la fiesta

Con motivo del Antildeo jubilar de la Misericordia los diacuteas 4 y 5 de marzo nos unimos a la celebracioacuten de las laquo24 horas para el Sentildeorraquo convocadas por el Papa para ese fin de semana En el Colegio se organizoacute un acto eucariacutestico de adoracioacuten nocturna que duroacute desde las 2200 horas del viernes hasta las 1000 horas del saacutebado con turnos que fueron cubiertos por los colegiales

aConteCiMientos Maacutes DestaCaDos

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El viernes 11 de marzo tuvimos una celebracioacuten penitencial como pre-paracioacuten a la peregrinacioacuten a la Puerta Santa que tendriacutea lugar el domingo 13 de marzo Ese diacutea a las 730 am tuvimos la celebracioacuten de la santa misa en la capilla de los huacutengaros en la cripta de la basiacutelica de San Pedro Luego hicimos el recorrido desde el Castel SantrsquoAngelo hasta la Puerta Santa y terminamos con el rezo del credo en el altar de la Basiacutelica

El viernes 3 de junio asistimos en la basiacutelica de San Pablo Extramuros al retiro dado por el papa Francisco con motivo del Jubileo de los sacer-dotes y al diacutea siguiente participamos en la misa jubilar con el Papa en la plaza de San Pedro

conferenciAs

Han sido diversas las conferencias tenidas en el Colegio durante el curso intentando abordar siempre temas de actualidad que son uacutetiles para una maacutes completa formacioacuten de los sacerdotes

Conferencia-coloquio sobre la Instruccioacuten pastoral aprobada en la CV Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Espantildeola titulada laquoIgle-sia servidora de los pobresraquo a cargo de Mons D Juan Joseacute Omella Obis-po de Calahorra y la Calzada-Logrontildeo Presidente de la Comisioacuten episco-pal de Pastoral Social (28 de octubre)

Mesa redonda al concluir el Siacutenodo de la familia Invitamos a dos profe-sores que estuvieron presentes como especialistas en el aula sinodal Joseacute Granados Vicepresidente del Instituto Juan Pablo II en Roma y miembro de los Disciacutepulos de los Corazones de Jesuacutes y Mariacutea (DCJM) y Manuel Arroba Conde claretiano y decano de la Facultad de Derecho Canoacutenico de la Universidad Pontificia Lateranense Ambos ofrecieron una visioacuten com-plementaria de lo acontecido en el aula y su opinioacuten sobre lo que podriacutea ser la proacutexima exhortacioacuten apostoacutelica del Papa (23 de noviembre)

Conferencia laquoDescubriendo a Santa Mariacutea de Guadaluperaquo a cargo del sacerdote mexicano Roberto Figueroa especialista en el tema (24 de febrero)

Conferencia de la presidente de la JOC internacional la francesa Ame-lie Peyrard que realizoacute una presentacioacuten de la misioacuten en el mundo actual de la Juventud Obrera Cristiana (16 de marzo)

Conferencia sobre laquoEl Islam en el momento presenteraquo impartida por el misionero P Diego Sarrioacute Cucarella Mafr secretario de estudios del Pontificio Istituto di Studi Arabi e drsquoIslamistica (12 de abril)

la ViDa en el Colegio

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presentAciones de libros

Presentacioacuten de la nueva edicioacuten del leccionario de la misa a cargo de Manuel Fanjul Garciacutea Director general de Publicaciones de la CEE (mieacutercoles 2 de diciembre)

Presentacioacuten del libro de la BAC titulado laquoLoado seas mi Sentildeorraquo co-mentario a la enciacuteclica Laudato Sirsquo del papa Francisco Intervinieron el Presidente del Pontificio Consejo para el Diaacutelogo interreligioso cardenal Jean-Louis Tauran el Subdirector general de la FAO Daniel Gusftanson Mons Fernando Chica Arellano editor de la obra y observador permanen-te de la Santa Sede ante la FAO IFAD PAM y Carlos Granados Director de la BAC Asistieron al acto el cardenal Santos Abril el cardenal Stella el arzobispo secretario del Pontificio Consejo para la Cultura varios rectores de Colegios y profesores de universidades romanas el embajador de Espa-ntildea ante la Santa Sede y los de Colombia y Paraguay (martes 23 de febrero)

otrAs ActividAdes

Con motivo de la Fiesta del Reservado el saacutebado 7 de noviembre intervino el Colegio el Coro de la dioacutecesis de Roma dirigido por Mons Marco Frisina Asistieron al concierto maacutes de trescientas personas que abarrotaron la Capilla del Colegio El magniacutefico programa aunoacute oracioacuten y catequesis tomando como referencia la eucaristiacutea El director del Coro presentoacute cada pieza de forma didaacutectica A continuacioacuten se sirvioacute una ce-na-bufeacute a todos los presentes

Del martes 19 al martes 26 de abril tuvimos la laquoExposicioacuten del libro religiosoraquo de la mano en esta ocasioacuten de Ediciones Siacutegueme El objetivo era conocer la importancia de las editoriales catoacutelicas y el servicio que prestan en la difusioacuten de la cultura cristiana y de la fe de la Iglesia en el mundo de hoy La inauguracioacuten corrioacute a cargo del director de la Editorial D Eduardo Ayuso Santos quien fuera tambieacuten vicerrector de este Cole-gio y que habloacute laquoDel amor a los libros y el deseo de Diosraquo La exposicioacuten se celebroacute paralelamente en el Colegio Mexicano

A propuesta de los alumnos se convocaron dos reuniones sobre el tema de la exhortacioacuten del Papa Francisco Amoris Laetitia Se tratoacute de un deba-te interdisciplinar preparado por los propios colegiales Se realizaron dos encuentros (11 y 25 de mayo) con la intervencioacuten en la mesa de varios ponentes y una gran afluencia de colegiales

201

3

TESIS Y TESINAS

tesis doctorAles

A lo largo del curso 2015-2016 se han defendido dos tesis recibiendo ambas la maacutexima calificacioacuten

El martes 20 de octubre se celebroacute la defensa de la Tesis doctoral en Teologiacutea dogmaacutetica de sacerdote de Barcelona Juan Ramoacuten Laparra Mar-tiacutenez dirigida por el profesor Norman Tanner y titulada laquoLa cristologiacutea de Calcedonia y la obra de Andreacute de Halleux complementada y confrontada con las aportaciones de Alois Grillmeier y Richard Priceraquo

El jueves 16 de junio tuvo lugar la defensa de la Tesis doctoral en De-recho canoacutenico del sacerdote de la dioacutecesis de Toledo Fernando Palacios en la Universidad Pontificia de la Santa Cruz titulada laquoEl Romano Pontiacute-fice y la liturgia estudio histoacuterico-juriacutedico del ejercicio y desarrollo de la potestad del Papa en materia lituacutergicaraquo El director era el espantildeol Antonio Saacutenchez Gil

tesinAs de licenciAturA

Mikel Aranguren Zubialqui laquoEl discernimiento seguacuten san Ignacio de Lo-yola luz para la espiritualidad sacerdotalraquo

Aacutengel Carnicero Carrera laquoComunioacuten trinitaria y comunioacuten interpersonal a la luz de la obra de Mons Luis F Ladaria SJraquo

Guillermo Cesaacutereo Contiacuten Ayloacuten laquoJesucristo pan de vida eterna simbo-lismo cristoloacutegico y sentido eucariacutestico del panis uite en el pensamien-to de Agustiacuten de Hiponaraquo

Juan Pablo Domiacutenguez Teba laquoAlonso Marcos de Llanes y Arguumlelles Arzobispo de Sevilla en tiempos de la Ilustracioacuten (1783-1795)raquo

David Flores Flores laquoMariacutea coronacioacuten de la obra salviacutefica de la Trini-dad a partir de las aportaciones del Vaticano II y autores selectosraquo

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la ViDa en el Colegio

Eduardo Lorenzo Garciacutea laquoVocacionalizar la Pastoral juvenil Liacuteneas guiacutea para realizar un proyecto de Pastoral juvenil-vocacional en la Dioacutecesis de Orihuela-Alicanteraquo

Jesuacutes Navarro Ortiz laquoEl culto a Santiago el Mayor en Espantildea Oriacutegenes y tradicionesraquo

Hilary Kauseni Ndeke laquoFor he too is a Son of Abraham A redaction-Cri-tical Study of Lk 191-10raquo

Daniel Pellicer Monteagudo laquoLa prueba de la exclusioacuten temporal de la ordinatio ad bonum prolisraquo

Job Prieto Arana laquoEl primer ritual peruano de 1607 Rituale seu Manuale Peruanum de Fray Luis Jeroacutenimo de Oreacuteraquo

Joseacute Manuel Rodriacuteguez Morano laquoLa veneracioacuten de los Santos del Anti-guo Testamento en el Martyrologium Romanum del 2004raquo

Ismael Rojo Peacuterez laquoLa eparquiacutea fuera del territorio patriarcalraquo

La revista Mater Clementissimadel Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute en Romase terminoacute de imprimir el 8 de diciembre de 2016

fiesta de la Inmaculada Concepcioacuten de la Virgen Mariacutea

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INDICACIONES PARA LOS AUTORES

A norMAs generAles de publicAcioacuten

Dado que la revista Mater Clementissima es un oacutergano de difusioacuten de la investigacioacuten realizada en el Colegio uacutenicamente podraacuten publicar en ella co-legiales o formadores tanto presentes como pasados de este mismo Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma

La extensioacuten de los originales seraacute habitualmente de un miacutenimo de veinte folios DIN-A4 a doble espacio y de un maacuteximo de cuarenta

Los originales se enviaraacuten al correo electroacutenico de la redaccioacuten de la revista cuya direccioacuten es la siguiente

revistacollegiospagnoloorg

El enviacuteo deberaacute hacerse antes del 31 de diciembre del antildeo anterior al de su publicacioacuten indicando direccioacuten postal y electroacutenica del autor institucioacuten donde presta sus servicios y cargo o funcioacuten acadeacutemica que desempentildea

Los originales se presentaraacuten soacutelo en espantildeol Cada original deberaacute venir acompantildeado de un breve resumen en espantildeol e ingleacutes asiacute como de una relacioacuten de palabras claves igualmente en ambos idiomas

El Consejo de Redaccioacuten seleccionaraacute los artiacuteculos para cada nuacutemero una vez recibidos los informes de calidad realizados por dos de los consultores cien-tiacuteficos Esos informes se realizan sobre los originales anoacutenimos y su resultado positivo negativo o condicionado seraacute comunicado debidamente a los autores

Aquellos originales que no se atengan a las normas de citacioacuten y a las reglas de estilo de la revista seraacuten devueltos para su correccioacuten

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inDiCaCiones para los autores

b norMAs de citAcioacuten

1 Libro normalC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma Roma 2016 100-120

2 Actas de CongresosC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma in Actas del Congreso Interna-cional (Roma 1-2 enero de 2016) vol I Roma 2016 100-120

3 Libro con varios voluacutemenesC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma vol 1 Roma 2016 100-120

4 Libro con varias edicionesC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma 2 ed Roma 2016 100-120

5 Libro de varios autores con texto uacutenico comuacuten a todosC MARTIacuteN - E GARCIacuteA - E ALONSO El Colegio Espantildeol de Roma Roma 2016 100-120

6 Libro dentro de una coleccioacutenC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma [Ciencias eclesiaacutesticas 23] Roma 2016 100-120

7 Parte de un libro de varios autores cada uno con su texto propioC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol in E GARCIacuteA (ed) Los Colegios roma-nos Roma 2016 100-120

8 Voz de diccionario o enciclopediaC MARTIacuteN Colegial in Diccionario de los Colegios vol 2 Roma 2016

100 col 738-784

9 Artiacuteculo en revistasC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma in Estudios Eclesiaacutesticos (EE) 12342 (1998) 100-120

10 Las citas biacuteblicasSeguacuten la Biblia de La Casa de la Biblia

11 Los dos Coacutedigos de Derecho CanoacutenicoCIC 17 c 120 CIC 83 cc 120-123

12 Concilio Vaticano IIUtilizar las siglas comunes seguidas del nuacutemero del documento LG 22

13 Documentos electroacutenicosC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma [en liacutenea] html [ref de 30 marzo 2016] Disponible en httpwwwcolegioorghome

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inDiCaCiones para los autores

c norMAs de estilo

1 FuenteLos originales se presentaraacuten en formato electroacutenico (preferiblemente Word)

utilizando el tipo laquoTimes New Romanraquo en tamantildeo 12 puntos No se utilizaraacuten negritas (bold) ni subrayados Se utilizaraacute la letra cursiva cuando en el texto se empleen teacuterminos o frases en lengua extranjera o en latiacuten

2 PaacuterrafosLos paacuterrafos apareceraacuten justificados y con un interlineado sencillo La prime-

ra liacutenea de cada paacuterrafo apareceraacute sangrada asiacute como la primera liacutenea de cada nota a pie de paacutegina

3 EstructuraLa estructura del trabajo podraacute admitir un maacuteximo de cuatro niveles Las

llamadas a pie de paacutegina se haraacuten en el texto mediante referencias en nuacutemeros araacutebigos en superiacutendice Se utilizaraacute para su composicioacuten un formato de laquoTimes New Romanraquo en tamantildeo 10 e interlineado sencillo

Cuando se repite la cita por segunda vez consecutiva se utilizaraacute Ibid Cuando son segunda vez en varias obras distintas se consignaraacuten despueacutes del nombre del autor las primeras palabras de la obra citada anteriormente

Id (Idem laquoDel mismo autorraquo) se emplearaacute para citar el autor al que se ha hecho referencia inmediatamente antes

LocCit (laquoen el lugar citadoraquo) se usaraacute para enumerar en la misma paacutegina una obra citada anteriormente habiendo otras referencias diferentes intercaladas

Vid (Vide) se usaraacute para una cita ya referenciada con el fin de evitar la re-peticioacuten

Passim (laquoaquiacute y alliacuteraquo en varias partes o pasajes) se usaraacute cuando sea imposi-ble mencionar todas las paacuteginas de las que se extraen las ideas de un autor

Apud (laquocitado porraquo una cita de cita) se utilizaraacute cuando se cite un documento no consultado directamente sino citado por otro autor

Mater ClementissimaRevista de Ciencias eclesiaacutesticas

Nueva eacutepocaNuacutemero 1 - 2016

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Page 4: Mater Clementissima · 2019. 11. 19. · KeyworDs: Church, Synodality, Collegiality, Primacy, Sensus fidei. El objetivo del presente estudio es indagar «los sujetos de la sinodali

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Mater Clementissima 1 (2016)

SUMARIO SUMMARY

PRESENTACIOacuteN 5

ARTIacuteCULOS ARTICLES

Dario Vitali El Siacutenodo de los obispos al servicio de una Iglesia sinodal los sujetos de la sinodalidad a la luz de la eclesiologiacutea del Vaticano IIThe Synod of Bishops at the service of a synodal Church synodality subjects in the light of the ecclesiology of Vatican II Council 7

Juan Manuel CabieDas teJero El hombre es sujeto y persona La relacioacuten entre trascendentalidad y antropologiacutea en Karl RahnerMan is subject and person Karl Rahner on relationship between transcendentality and anthropology 59

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez La definicioacuten de Calcedonia a traveacutes de sus inteacuterpretes contemporaacuteneosThe Chalcedon definition on the point of view of recent scholars 121

ViCente CaacuterCel ortiacute El Colegio Espantildeol de Roma centro de proacutefugos durante la Guerra civil espantildeolaThe Spanish College of Rome refugees center during the Civil war 143

LA VIDA EN EL COLEGIO

Datos estadiacutesticos del curso 2015-2016 195Acontecimientos maacutes destacados 197Tesis y tesinas 201

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Mater Clementissima 1 (2016) 5-6

PRESENTACIOacuteN

La revista Mater Clementissima vio la luz por primera vez en enero de 1913 como Boletiacuten de la laquoAsociacioacuten de Nuestra Sentildeora de la Clemen-ciaraquo que habiacutea sido creada y bendecida por el papa san Piacuteo X el diacutea de san Joseacute del antildeo 1912 como asociacioacuten de alumnos y antiguos alumnos del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma

En su primer nuacutemero de enero de 1913 indica el editorial que aparece laquosin otras pretensiones que las de poder servir de nuevo viacutenculo para es-trechar maacutes la unioacuten fraternal que debe ser cada diacutea maacutes iacutentima entre los antiguos alumnos del Colegio Espantildeol bajo los auspicios de la Santiacutesima Virgen de la Clemencia que tantos favores les dispensoacute desde los antildeos que vivieron en Romaraquo (p 4)

A partir de entonces se convierte en el instrumento de comunicacioacuten de la vida interna del Colegio actividades religiosas culturales y festivas visitas resultados acadeacutemicos de los alumnos y de las noticias que llegan de los antiguos alumnos nombramientos publicaciones y apostolados

La Revista no se publicaraacute entre los antildeos 1936 y 1938 por la situacioacuten que se vivioacute con motivo de la Guerra civil espantildeola Aparece de nuevo en 1939 incluyendo la lista de los superiores y alumnos martirizados durante la persecucioacuten religiosa de esos antildeos

Con motivo de la Beatificacioacuten del Fundador (1987) y de la celebra-cioacuten del primer Centenario del Colegio (1992) se publicaron nuacutemeros extraordinarios

A partir del curso 1994-1995 a la Croacutenica del Colegio se comienzan a antildeadir los textos de las conferencias y homiliacuteas pronunciadas en el centro en fechas sentildealadas asiacute como una amplia comunicacioacuten del contenido de las tesis defendidas durante el curso anterior y los tiacutetulos de los trabajos de licenciatura Con ello se intentaba conseguir que la Revista fuera ins-trumento de caraacutecter maacutes acadeacutemico sin dejar de ser cauce de comunica-cioacuten entre los colegiales pasados y presentes

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presentaCioacuten

Con este nuacutemero de 2016 y tras varios antildeos de edicioacuten solo en for-mato digital la revista Mater Clementissima vuelve a la edicioacuten impresa e inaugura una nueva etapa ahora ademaacutes de Ciencias eclesiaacutesticas El cambio introducido en el tiacutetulo sugiere la orientacioacuten de la publicacioacuten que tendraacute caraacutecter anual y que sin dejar de ser oacutergano de comunicacioacuten entre los colegiales priorizaraacute la difusioacuten de estudios especializados rela-cionados con las Ciencias eclesiaacutesticas

Cuando el 1 de abril de 1892 el Beato Manuel Domingo y Sol fundoacute el Colegio deseaba una verdadera laquorenovacioacuten cientiacutefica y aun disciplinar del clero espantildeolraquo Este curso el Colegio cumpliraacute 125 antildeos desde su fundacioacuten y podemos decir sin temor a equivocarnos que ha cumplido con creces las expectativas del Fundador pues de eacutel han salido ilustres pensadores profesores literatos e investigadores que formando parte de la gran familia del Colegio Espantildeol de San Joseacute han contribuido de ma-nera decisiva en dicha renovacioacuten La revista Mater Clementissima es un foro abierto pensado para ellos un lugar para la difusioacuten del conocimiento y para el debate acadeacutemico

Esperamos que esta iniciativa tenga buena acogida entre los estudiosos y pueda con la ayuda de todos mantenerse en el tiempo con un buen nivel de reflexioacuten El desafiacuteo de seleccionar artiacuteculos mediante el procedimien-to de doble ciego supone la colaboracioacuten de los consultores cientiacuteficos (a quienes desde aquiacute agradecemos su generoso ofrecimiento a colaborar con la Revista) para analizar las propuestas y cuando corresponde pro-poner ajustes a los autores Por parte de los autores se requiere la dispo-sicioacuten para considerar las sugerencias que en definitiva mejoraraacuten su trabajo En otras palabras se trata de establecer un diaacutelogo acadeacutemico que tiene como uacutenica finalidad enriquecer el contenido de lo que se publica

A partir de ahora los lectores seraacuten quienes tengan la palabra sobre el contenido de la Revista y les agradeceremos sus comentarios y sugeren-cias para asegurar la calidad de este proyecto

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Mater Clementissima 1 (2016) 7-57

El Siacutenodo de los obispos al servicio de una Iglesia sinodal los sujetos de la sinodalidad a la luz de la

eclesiologiacutea del Vaticano II

Dario Vitali1

Pontificia Universidad Gregoriana de Roma

resuMen El 17 de octubre de 2015 concluyendo las celebraciones del 50 aniversa-rio del Siacutenodo de los obispos el Papa Francisco pronuncioacute un discurso de amplio alcance sobre laquoLa Iglesia constitutivamente sinodalraquo A partir de ese discurso este documento propone una amplia y articulada discusioacuten sobre la naturaleza y sujetos de la colegialidad Despueacutes de una primera parte (auditus fidei) que busca en el Concilio Vaticano II las bases de la sinodalidad la segunda parte (intellectus fidei) proporciona los criterios para comprender por queacute la sinodalidad es laquouna dimensioacuten constitutiva de la Iglesiaraquo La naturaleza constitutivamente sinodal de la Iglesia se estudia partiendo de las relaciones que se establecen entre los sujetos de la sinoda-lidad ilustrando las condiciones que hacen posible el ejercicio de la sinodalidad en la Iglesia en los diferentes momentos del proceso sinodal En esta perspectiva se pone en evidencia coacutemo la sinodalidad la colegialidad y el primado son teacuterminos conjuntados armoacutenicamente en el horizonte de una concepcioacuten sinodal de la Iglesia

palabras ClaVe Iglesia sinodalidad colegialidad Primado Sensus fidei

abstraCt laquoThe Synod of Bishops at the service of a synodal Church synodality sub-jects in the light of the ecclesiology of Vatican II Councilraquo On October 17 2015 concluding the 50th anniversary of the Synod of Bishops Pope Francis gave a comprehensive speech on laquoSynodal constitutively Churchraquo From that speech this document proposes a wide and articulated discussion of the nature and subject of synodality After a first part (auditus fidei) looking at Vatican II synodality bases the second part (intellectus fidei) provides the criteria to understand why synodality is laquoa constitutive dimension of the Churchraquo The synodal constitutively nature of

1 El profesor Dario Vitali Director del departamento de Teologiacutea Dogmaacutetica de la Uni-versidad Pontificia Gregoriana es tambieacuten el asesor acadeacutemico del Pontificio Colegio Espa-ntildeol de San Joseacute

Dario Vitali

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the Church is studied based on the relationships established between the subjects of synodality illustrating the conditions that make possible the exercise of synodality in the Church at different times of the synodal process In this perspective it becomes evident how synodality collegiality and primacy are terms harmonically connected on the horizon of a synodal conception of the Church

KeyworDs Church Synodality Collegiality Primacy Sensus fidei

El objetivo del presente estudio es indagar laquolos sujetos de la sinodali-dad a la luz de la eclesiologiacutea del Vaticano IIraquo Si se interpretase literal-mente el tiacutetulo se podriacutea considerar la cuestioacuten como no resuelta el Con-cilio Vaticano II no trata ex professo la sinodalidad Las 140 menciones de laquosiacutenodoraquo se refieren siempre al Concilio sin querer nunca entender la sinodalidad como elemento caracterizador de la Iglesia2 La atencioacuten de los Padres Conciliares se dirigiacutea hacia otra cuestioacuten en concreto al tema de la colegialidad y la sinodalidad como proceso relativo al entero Pue-blo de Dios ademaacutes de no formar parte de su horizonte de intereses era desconocida en gran medida La cuestioacuten no debe sorprender demasiado un milenio de ejercicio de autoridad jeraacuterquica inspirado en el modelo de la monarquiacutea y asegurando las prerrogativas papales que culmina con el Concilio Vaticano I habiacutea cancelado el principio de la sinodalidad en la vivencia eclesial y habiacutea oscurecido la conciencia sobre la naturaleza sinodal de la Iglesia

Por otra parte es cierto que la cuestioacuten de la sinodalidad no podiacutea emerger en la Iglesia Catoacutelica si antes no se hubiera resuelto la cuestioacuten de la relacioacuten entre Papa y Colegio que ya surgioacute en el Concilio Vaticano I y que fue expliacutecitamente introducida como tema en el capiacutetulo III de la Lumen gentium Se trata de retomar las cuestiones a nivel de historia y de hermeneacuteutica de los textos conciliares tratando de ver sobre la base y en el respeto de estos una comprensioacuten original de la sinodalidad en-tendida sobre todo como dimensioacuten constitutiva de la Iglesia en la que la celebracioacuten de la asamblea del Siacutenodo de los obispos sea la imagen (logo) ejemplar de un camino sinodal de la Iglesia y en la que todos cada uno seguacuten su propia condicioacuten sean protagonistas

2 Cfr X OCHOA Index verborum cum documentis Concilii Vaticani Secundi Roma 1967 484-485

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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Este escrito se articularaacute en dos partes La primera de caraacutecter maacutes hermeneacuteutico se centraraacute en localizar los teacuterminos de la cuestioacuten en el Concilio Vaticano II es este el momento del audius fidei La segunda de caraacutecter maacutes sistemaacutetico deduciraacute de los teacuterminos precedentemente ex-puestos el perfil de una laquoIglesia constitutivamente sinodalraquo3 articulando a continuacioacuten los elementos de la sinodalidad con el cuadro eclesioloacutegi-co que emergioacute del Concilio Vaticano II este es el momento del intellec-tus fidei Entre liacuteneas se podraacute leer a traveacutes de su desarrollo el escenario dibujado por el Papa Francisco en el discurso pronunciado con ocasioacuten del quincuageacutesimo aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo

1 Auditus fidei

El accidentado recorrido del capiacutetulo III de la Lumen gentium mues-tra lo fatigoso que resulta volver atraacutes sobre todo si estaacuten en juego no los errores a combatir o a corregir sino diferentes visiones de Iglesia Y la visioacuten de Iglesia que llega al Vaticano II es la que ha madurado a lo largo de todo un milenio a partir de la reforma gregoriana y a traveacutes de procesos cada vez maacutes subrayados que van a estructurar en teacutermi-nos profundamente radicalizados el modelo piramidal de Iglesia No es necesario recorrer aquiacute la historia del segundo milenio Pero siacute es perti-nente recordar algunos elementos que han sentildealado la autocomprensioacuten de la Iglesia

11 El punto de partida la reforma gregoriana

En primer lugar estaacute el cisma de Oriente que lleva a la Iglesia a una fractura tan profunda como dolorosa en un frente Bizancio custodio ce-loso de una estructura sinodal de la Iglesia apoyada en la continuacioacuten de las instituciones del primer milenio cristiano que continuacutea con la repeti-cioacuten de su modelo eclesioloacutegico transferido tambieacuten a la tercera Roma en el otro la Ecclesia romana que despueacutes de haber guiado la transicioacuten del Imperio romano al Sacro Imperio Romano se encuentra ahora en una posicioacuten privilegiada en la construccioacuten de una Europa fundada sobre la base de la identidad cristiana

3 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos (17-X-2015)

Dario Vitali

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Constituiriacutea un error sin embargo pensar en un primado paciacuteficamente reconocido y aceptado tanto desde el aacutembito civil como desde el eclesial Las Iglesias locales aun no reivindicando la autocefalia como en Oriente ciertamente se moviacutean con mucha autonomiacutea respecto a un centro fuer-temente debilitado por las intrigas de las familias romanas en lucha por acaparar el solio pontificio Por otro lado en la organizacioacuten de la Iglesia perduraba auacuten la estructura del primer milenio con dioacutecesis sedes metro-politanas y regiones eclesiaacutesticas donde la autoridad papal veniacutea modula-da a escala de los tiacutetulos papales obispo de Roma metropolita del Lacio primado de Italia patriarca de Occidente Maacutes allaacute de la retoacuterica sobre la funcioacuten universal del Papa su influencia efectiva ndashcomo demuestra el cuadro de participantes en los siacutenodos romanosndash se limitaba de facto a las sedes inmediatamente sometidas a la Ecclesia romana

La situacioacuten cambioacute radicalmente con la reforma gregoriana que in-cidioacute en el cuadro institucional de la Iglesia La lucha por moralizar al clero llevoacute al Papado a la confrontacioacuten frontal con el emperador clave y fundamento de aquel sistema de la Iglesia imperial ndashla Reichskirchendash que subordinando el nombramiento de los obispos al placet del rey termina-ba por vincular la jerarquiacutea eclesiaacutestica a la loacutegica del poder laico Seraacute Hildebrando de Soana recieacuten elegido al trono papal como Gregorio VII quien advierta como interferencia inaceptable el sistema de investiduras laicas4 un nudo a cercenar maacutes que a deshacer para garantizar la Libertas Ecclesiae

La victoria del Papado reformador llevaraacute al sucesor de Pedro al veacutertice de la respublica christiana al lugar del emperador que tambieacuten en occi-dente era considerado la cabeza de la cristiandad y que interveniacutea directa-mente en la vida de la Iglesia seguacuten los caacutenones del cesaropapismo

Este hecho tendraacute repercusioacuten sobre la estructura interna de la Iglesia para desarraigar la mezcolanza entre Iglesia y Reino entre los obispos electores y el emperador no bastaba con excomulgar a este uacuteltimo era necesario sustraer a los obispos de la esfera del poder imperial y vincular-

4 Antes de Gregorio VII la accioacuten de los reformadores se centroacute maacutes en luchar contra la simoniacutea para combatirla Pier Damiani ciertamente el reformador maacutes representativo anterior a la eleccioacuten de Gregorio VII no dudoacute en solicitar la intervencioacuten del emperador incluso contra el Papa como demuestra el caso de Gregorio VI El cambio de acento hacia una comprensioacuten maacutes laquopoliacuteticaraquo del problema concentrada en la lucha por las investiduras se impone con la eleccioacuten de Hildebrando de Soana Me permito hacer alusioacuten a una contribucioacuten miacutea D VI-TALI La Chiesa da riformare lrsquoecclesiologia damianea in M TAGLIAFERRI (dir) Pier Damiani Lrsquoeremita il teologo il riformatore (1007-2007) Bologna 2009 197-232

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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les maacutes estrechamente a Roma Encuentra justificacioacuten aquiacute el Dictatus Papae en el cual Gregorio VII afirma que laquoel Papa puede destituir o resta-blecer a los obisposraquo5 y lo puede hacer sin tener que pasar necesariamente por un siacutenodo6 La victoria sobre el imperio iraacute modificando los equili-brios internos de la Iglesia desencadenando un proceso de concentracioacuten de todo poder en las manos del Papa Por esta viacutea se reafirma la idea de que el Obispo de Roma sea cabeza no solo de una Iglesia de antigua fundacioacuten que desempentildea un servicio para la unidad de las Iglesias sino de la Iglesia Universal misma Como fundamento de tal pretensioacuten los teoacutelogos de la reforma desarrollan la tesis de una fundacioacuten divina de la Iglesia de Roma como prueba de superioridad sobre otras Iglesias que solo pueden preciarse de una fundacioacuten apostoacutelica laquoTuacute eres Pedro y sobre esta piedra edificareacute mi Iglesiaraquo (Mt 1618)7

Si el primado sostenido por Gregorio VII ndashquien continuoacute convocan-do los siacutenodos de otontildeo y de cuaresma una demostracioacuten de coacutemo la estructura sinodal estaba profundamente radicada tambieacuten en Romandash fue maacutes ideal que real sin embargo el Dictatus Papae pone las bases para el paso a un poder personal del Papa Este se revelaraacute acabado con Inocen-cio III no por casualidad el primero que recurrioacute establemente al tiacutetulo de vicarius Christi utilizando la tiara siacutembolo de la plenitudo potestatis que laquoreuniacutea tanto los aspectos sacerdotales como los imperiales de su funcioacutenraquo8 Se pueden hallar aquiacute in nuce todos los elementos que es-tructuraraacuten el modelo piramidal de Iglesia el cual encuentra su punto de llegada en el Vaticano I

El paso de la sedes a la sedens de la Iglesia de Roma a su obispo ya proyectado hacia un poder universal de jurisdiccioacuten no se refleja uacuteni-camente en la relacioacuten entre el Papa y los obispos reducidos a funciona-rios del Papa pastor de toda la Iglesia Tambieacuten el pueblo de Dios queda privado de cualquier capacidad activa los presagios de la infalibilidad pasiva de los fieles afirmados despueacutes del Vaticano I ya se encuentran

5 Sentencia n 3 laquoQuod ille solus possit deponere episcopos vel reconciliare Solo eacutel [el Romano Pontiacutefice] puede destituir o readmitir a los obisposraquo

6 Sentencia n 25 laquoQuod absque synodali conventu possit episcopos deponere et recon-ciliare Eacutel puede al margen de una asamblea sinodal destituir o readmitir a los obisposraquo

7 Para la argumentacioacuten cfr PIER DAMIANI Carta 58 ai Cardinali Vescovi in Opere di Pier Damiani I3 cartas (41-67) Roma 2002 110-121

8 A PARAVICINI BAGLIANI Tiara in Diccionario Enciclopeacutedico del Medioevo Ro-ma 1999 1913

Dario Vitali

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en el paso de la Iglesia como comunioacuten de Iglesias del primer milenio a la Iglesia universal del segundo milenio No se trata igual que para los obispos de un efecto deseado sino de una consecuencia de la nueva con-figuracioacuten de la Iglesia en la cual la universitas fidelium se reduce de he-cho a una masa confusa Por maacutes que se continuacutee repitiendo el proverbio de que la totalidad de los bautizados in credendo deficere non potest 9 se inicia en este tiempo el proceso que llevaraacute a traveacutes de un recorrido mar-cado por contrastes y oscilaciones a afirmar en el Concilio Vaticano I la infalibilidad del Papa cuando habla ex cathedra como laquopastor y doctor de todos los cristianosraquo10

12 El punto de llegada El Concilio Vaticano I

El momento maacutes dramaacutetico de tal recorrido lo representa la llegada del conciliarismo frente al escaacutendalo de una Iglesia dividida en dos y posteriormente en tres obediencias la uacutenica autoridad en condiciones de preservar a la Iglesia del error pareciacutea el Concilio en cuanto repre-sentacioacuten tambieacuten visible de la universitas fidelium que precisamente no puede equivocarse en el creer El Papa personifica tal infalibilidad o in-defectibilidad de la universitas fidelium como cabeza de la Iglesia con la condicioacuten de no desviarse de la fe de todos en cuyo caso decaeriacutea ipso facto de su funcioacuten tal como recitaba la teologiacutea del tiempo planteando la hipoacutetesis de la figura del Papa a fide devius o del Papa haereticus11 Como cabeza de la Iglesia eacutel es tambieacuten cabeza del Concilio por ser este en su composicioacuten articulada representacioacuten visible de la Iglesia12 con

9 Dice con conocimiento de causa Congar laquoSi hay una afirmacioacuten constante en los testi-gos de la Tradicioacuten es precisamente que judicium Ecclesiae universalis errare in his quae ad fidem pertinent impossibile estraquo Y M CONGAR Infalibilidad e indefectibilidad Sobre el concepto de laquoinfalibilidadraquo in iquestInfalible Rahner-Congar-Sartori-Ratzinger-Schnackenburg y otros especialistas contra Hans Kuumlng Roma 1971 90

10 CONCILIO VATICANO I Constitucioacuten dogmaacutetica Pastor Aeternus capiacutetulo IV laquoEl magisterio infalible del romano Pontiacuteficeraquo in DZ 3065-3075

11 Baste como ejemplo la querella sobre la pobreza que enfrentoacute a Juan XXII con los franciscanos a raiacutez de la publicacioacuten del laquoDiaacutelogo contra el Papa hereacuteticoraquo de Guillermo de Ockham antes de la muerte del Papa (1334) Para comprender el origen y desarrollo de la doc-trina sobre la infalibilidad cfr B TIERNEY Origins of Papal infallibility 1150-1350 A study of the concepts of infallibility sovereignty and tradition in the Middle Ages Leiden 1972

12 Se entiende en este sentido la participacioacuten en el Concilio con voz activa de los teoacutelogos (las universidades) y de los representantes de las naciones con la idea de una representacioacuten completa de la cristiandad Solo a partir del Concilio de Trento se volveraacute a reservar el derecho al voto uacutenicamente a los obispos abades y superiores generales de las distintas oacuterdenes

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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la tarea de fijar la fe en decretos doctrinales y disciplinares que le corres-ponde al Papa promulgar13

El punto de desacuerdo entre los dos frentes se encuentra en quieacuten tiene la funcioacuten de laquopersonificarraquo a la totalidad de los fieles infalible en el creer si el Concilio o el Papa Ambos tienen motivos para sostener la propia posicioacuten porque maacutes allaacute de las razones de la colisioacuten estaba claro que la infalibilidad reivindicada por el Papa o por el Concilio es siempre la de la Iglesia No es casual que la deriva conciliarista se torne irreversi-ble en el momento en el que llega a declarar que el Concilio es infalible por siacute mismo con independencia de la fe de la Iglesia

En esta situacioacuten de impass se abre camino la idea de laquoun viacutenculo re-ciacuteproco entre el Papa y la Iglesiaraquo14 en razoacuten del cual laquola decisioacuten uacuteltima en cuestiones de fe recae sobre el Papa y sin eacutel no es posible una decisioacuten infalibleraquo15 No obstante unos y otros opinan que no es la infalibilidad del Papa la que garantiza la de la Iglesia sino viceversa laquoel Papa goza de esa infalibilidad de la que el Divino Redentor ha querido dotar a la Iglesiaraquo16 Esto no implica que le venga delegada desde abajo puesto que el Papa expresa la fe de la Iglesia no sobre la base de un consenso sino en cuanto cabeza del cuerpo eclesial al que siempre estaacute conectado y unido vitalmente De aquiacute a excluir un error del Papa en cuanto induciriacutea a error a la Iglesia solo hay un paso17

El Vaticano I constituiraacute el punto de llegada de este agitado proceso uniendo al primado la plenitudo potestatis exige como condicioacuten de la

13 Cfr STh II-II q1 a1014 K SCHATZ Il primato del Papa La sua storia dalle origini ai nostri giorni Brescia

1996 17515 Ibid 17516 Schatz explica este paso mostrando la diferencia entre autores como Antonino di Fi-

renze para el cual laquoes infalible la Iglesia en su conjuntoraquo y por tanto el Papa participa de la infalibilidad de la Iglesia y Cayetano que ni siquiera un siglo maacutes tarde excluye el error del Papa para salvaguardar la fe de la Iglesia cfr K SCHATZ Il primato del Papa 175-176

17 Ninguno de los 15 capiacutetulos del esquema preveacute la cuestioacuten I) Ecclesiam esse corpus Christi mysticum II) Christianam religionem nonnisi in Ecclesia et per Ecclesiam a Chris-ti fundatam excoli posse III) Ecclesiam esse societatem veram perfectam spiritualem et supernaturalem IV) Ecclesiam esse societatem visibilem V) De visibili Ecclesiae unitate VI) Ecclesiam esse societatem ad salutem consequendam omnino necessariam VII) Extra Ecclesiam salvari neminem posse VIII) De Ecclesiae indefectibilitate IX) De Ecclesiae in-fallibilitate X) De Ecclesiae potestate XI) De Romani Pontificis primatu XII) De temporali Sanctae Sedis dominio XIII) De concodia inter Ecclesiam et societatem civilem XIV) De iure et usu potestatis civilis secundum Ecclesiae Catholicae doctrinam XV) De specialibus quibusdam Ecclesiae iuribus in relatione ad societatem civilem cfr Primum schema consti-tutionis de Ecclesia Christi laquoSupremi Pastorisraquo MANSI 51 539A-636A

Dario Vitali

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eficacia y perfeccioacuten de su gobierno la infalibilidad como propiedad que no vincula ni subordina al Papa al consenso de la Iglesia o del cuerpo episcopal Este paso no previsto inicialmente ndashcomo se deduce del sche-ma de Ecclesia Supremi pastoris18ndash surgioacute durante el debate conciliar como punto sin vuelta atraacutes si se queriacutea realmente garantizar la autoridad del Papa frente a cualquier ataque proveniente de fuera o de dentro de la Iglesia Pastor aeternus19 asociaba laquola suprema potestad de magisterioraquo definiendo solemnemente el dogma de la infalibilidad del Pontiacutefice cuan-do habla ex-cathedra

El Romano Pontiacutefice cuando habla ex cathedra esto es cuando en el ejer-cicio de su oficio de pastor y maestro de todos los cristianos en virtud de su suprema autoridad apostoacutelica define que una doctrina de fe o costumbres debe ser sostenida por toda la Iglesia posee por la asistencia divina que le fue prometida en el bienaventurado Pedro aquella infalibilidad de la que el divino Redentor quiso que gozara su Iglesia en la definicioacuten de la doctrina de fe y costumbres Por esto dichas definiciones del Romano Pontiacutefice son irreformables ex sese non autem ex consensu Ecclesiae20

En el debate en el aula sobre la infalibilidad pontificia no faltaron las menciones a las otras dos autoridades ndashla totalidad de los fieles y los Con-ciliosndash infalibles en la interpretacioacuten del depoacutesito revelado21 La minoriacutea aun admitiendo la posibilidad de definir el dogma insistiacutea en que dicha definicioacuten podiacutea comprometer los iura Episcoporum Se comprende en esta liacutenea la afirmacioacuten seguacuten la cual laquola potestad del Sumo Pontiacutefice no conlleva prejuicio alguno a la potestad de jurisdiccioacuten episcopal ordinaria

18 Cfr DZ 3053-3064 los capiacutetulos 1-3 de Pastor Aeternus corresponden a los capiacutetulos IX X y XI del laquoschema de Ecclesiaraquo

19 DZ 307420 Por otro lado hubiese sorprendido lo contrario puesto que los Padres habiacutean sido

formados en la controversia teoloacutegica que habiacutea establecido la doctrina sobre los loci theo-logici interpretativi Despueacutes de la Sagrada Escritura y la Tradicioacuten establecidos como loci theologici constitutivi Melchor Cano indicaba en secuencia la Ecclesia Catholica (esto es la totalidad de los fieles) los Concilia (es decir el corpus Episcoporum) y la Ecclesia Ro-mana (el Papa) como loci theologici interpretativi dotados de infalibilidad cfr MELCHOR CANO De locis theologicis libri duodecim Salamanca 1563 [edicioacuten latino-espantildeola] Ma-drid 2006

21 Para una visioacuten maacutes extensa sobre la cuestioacuten cfr G DEJAIFVE Primato e colle-gialitagrave nel Concilio Vaticano I in Y M CONGAR - B D DUPUY (eds) Lrsquoepiscopato e la Chiesa universale Roma 1965 795-821 H J POTTMEYER Recent Discussion on Prima-cy in relation to Vatican I in W KASPER (ed) Il ministero petrino Cattolici e Ortodossi in dialogo Roma 2004 227-247

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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e inmediata en virtud de la cual los obispos establecidos por el Espiacuteri-tu Santo (cfr Hch 2028) como sucesores de los apoacutestoles en cualidad de verdaderos pastores apacientan y gobiernan el rebantildeo que les ha sido confiadoraquo22 Hasta queacute punto eran fundados los temores de la minoriacutea re-sultoacute evidente en la poleacutemica desencadenada en Alemania por el Canciller Von Bismarck seguacuten el cual la definicioacuten del Vaticano I determinaba la peacuterdida de la jurisdiccioacuten episcopal totalmente absorbida por la papal23 Piacuteo IX24 ndashobligado o convencido es difiacutecil de decirndash confirmoacute la respues-ta de los obispos alemanes seguacuten los cuales laquoigual que el Papado es de institucioacuten divina asiacute mismo lo es tambieacuten el episcopado y tambieacuten eacuteste tiene sus derechos en virtud de tal institucioacuten que el Papa no tiene el de-recho ni el poder de cambiarraquo25

En relacioacuten con la totalidad de los fieles ndashla Ecclesia Catholica seguacuten los loci theologici de Melchor Cano26ndash fue en cambio el cardenal Guidi quien sostuvo en un discurso que impactoacute notablemente en el aula que el Papa define una verdad no laquoarbitrariamente y solo independientemente o al margen de la Iglesiaraquo27 sino sobre la base del sensus fidei de la Iglesia universal del que puede informarse o que puede conocer laquoescuchando la opinioacuten de los obispos que le manifiestan la tradicioacuten de sus Iglesiasraquo28 El hecho de depender de la fe de la Iglesia no subordina al Papa a actuar o pronunciarse bajo consenso de la fe de los fieles El ejercicio del magiste-rio pontificio queda siempre libre como habiacutea demostrado claramente el dogma de la Inmaculada Concepcioacuten definido pocos antildeos antes en virtud de aquella singularis Antistitum ac fidelium conspiratio29 manifestada por los obispos de todo el mundo como respuesta a la consulta lanzada por el mismo Piacuteo IX30

La intervencioacuten del cardenal Guidi consiguioacute que se incluyera en el texto un pasaje en el que se reconoce que en el ejercicio de su magisterio

22 DZ 306123 DH 3112 En este nuacutemero estaacuten recogidas y resumidas las propuestas de la circular de

Von Bismarck que distorsionan las afirmaciones del Vaticano I A estas responden los obispos punto por punto cfr DH 3113-3116

24 PIacuteO IX Carta apostoacutelica Mirabilis illa constantia (4-III-1875) DH 311725 DH 311526 MELCHOR CANO De loci theologici libri duodecim liber IV De Ecclesia Catholica27 MANSI 52 747C para el discurso completo cfr MANSI 52 740A-748A28 Ibid29 PIacuteO IX Bula Ineffabilis Deus (8-XII-1854) Pii IX Acta I1 597-61930 PIacuteO IX Enciacuteclica Ubi primum (2-II-1849) Pii IX Acta I1 162-166

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los Papas hacen uso y recurren a formas de cooperacioacuten laquoseguacuten lo exigi-do por las condiciones de los tiempos y las circunstancias ora convocan-do Concilios ecumeacutenicos ora intentando sondear la opinioacuten de la Iglesia esparcida por la tierra con siacutenodos particulares ora sirvieacutendose de otros medios que la Divina Providencia ponga a su disposicioacutenraquo31 A la consulta recurriraacute tambieacuten Piacuteo XII como medio para verificar la fe de la Iglesia respecto a la definicioacuten de la Asuncioacuten de Mariacutea32 de donde emerge tanto la fe del pueblo cristiano como la funcioacuten del episcopado como testigo y garante del sensus fidei de toda la Iglesia

13 Un nuevo punto de partida El Concilio Vaticano II

A causa de la suspensioacuten sine die del Vaticano I no se pudo concluir el debate relativo al schema constitutionis secundae de Ecclesia33 Mu-chas de las cuestiones contenidas en aquel texto entraron oportunamente revisadas en el schema de Ecclesia entregado a los Padres al final de la primera sesioacuten del Concilio Vaticano II Entre estas cuestiones sobresale la del episcopado incluido a lo largo de los capiacutetulos tercero y cuarto sobre la sacramentalidad del episcopado34 y el ministerio episcopal35

En el tercer capiacutetulo el schema toma distancia con respecto a la teo-logiacutea de la escuela que siguiendo la liacutenea del Concilio de Trento leiacutea el episcopado en clave de la potestas jurisdiccionis36 La discontinuidad se puede constatar en la afirmacioacuten de que laquoel episcopado pertenece sin duda al sacramento del Orden y es el sacerdocio en el grado maacuteximo (praecel-lenti) considerado por los Santos Padres y por la tradicioacuten lituacutergica como

31 DH 306932 Cfr PIacuteO XII Enciacuteclica Deiparae Virginis (1-V-1946) AAS 42 (1950) 782-783 la

definicioacuten dogmaacutetica se encuentra incluida en la constitucioacuten apostoacutelica Munificentissimus Deus (1-XI-1950) AAS 42 (1950) 767-770

33 Schema constitutionis secundae de Ecclesiae laquoTametsi Deusraquo MANSI 53 308A- 317A

34 Schema de Ecclesia Caput III laquoDe Episcopatu ut supremo gradu sacramenti ordinis et de sacerdotioraquo (nn 11-12) Acta Synodalia IIV 23-24

35 Schema de Ecclesia caput IV laquoDe Episcopis residentialibusraquo (nn 13-16) Acta Sy-nodalia IIV 27-34

36 La construccioacuten del discurso se asienta sobre la foacutermula binaria potestas ordinis-po-testas jurisdictionis en la frase de apertura en la que se declara que Cristo laquoha instituido en la Iglesia una auteacutentica potestad de magisterio y gobierno (docendi et gubernandi) que era por su naturaleza unida con un viacutenculo estrecho a la potestad de santificacioacuten otorgada con el sacramento del Ordenraquo Schema de Ecclesia n 11 laquoEpiscopatus ut sacramentumraquo Acta Synodalia IIV 23

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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el sumo sacerdocio el veacutertice del sagrado ministerioraquo37 Siempre haciendo mencioacuten a la tradicioacuten de Oriente y Occidente el schema reitera que laquoel episcopado es verdadera y propiamente el grado supremo del Ordenraquo des-de el momento en el que laquocon la imposicioacuten de las manos y las palabras de consagracioacuten viene conferida la gracia del Espiacuteritu Santoraquo38

El capiacutetulo cuarto desarrolla el tema de los obispos residenciales en cuatro paacuterrafos estrechamente relacionados partiendo de la funcioacuten y dig-nidad de los obispos (n 13) concluye con el Colegio de los obispos (n 16) pasando por distintas aclaraciones sobre su relacioacuten con el Papa (n 14) y con la Iglesia universal (n 15) Toda la argumentacioacuten estaacute vinculada a Cristo mismo el cual ha puesto a los obispos a apacentar la Iglesia de Dios Sobre la base de tal presupuesto el schema afirma que laquolos distintos obis-pos como vicarios y mensajeros de Cristo dirigen como padres y pastores de su rebantildeo las Iglesias a ellos confiadas con potestad episcopal propia ordinaria e inmediata en unidad y bajo la autoridad del Romano Pontiacutefi-ceraquo39 para posteriormente ilustrar con detalle el ministerio de los obispos al servicio de su propia Iglesia

A continuacioacuten el schema explica la relacioacuten entre el primado y el episcopado utilizando la distincioacuten entre potestas ordinis y jurisdictio-nis laquola ordenacioacuten confiere ademaacutes de su funcioacuten santificadora tambieacuten aquella de magisterio y de gobierno que los obispos reciben del gobierno supre mo de la Iglesiaraquo teniendo el Papa laquola preeminencia [principatum] sobre otras potestades ordinarias y una potestad de jurisdiccioacuten inmedia-ta y episcopal en todas y cada una de las Iglesias como tambieacuten sobre todos y cada uno de los obispos de los fieles y pastoresraquo40 El paacuterrafo que se presenta a continuacioacuten ilustra la relacioacuten de cada uno de los obispos con la Iglesia universal un paacuterrafo particularmente elaborado y mejor ar-ticulado de lo que se aproboacute en aula

Dado que todos y cada uno de los obispos son centro y fundamento y prin-cipio de unidad en sus Iglesias particulares desde el momento que y a partir de las cuales formadas a imagen y semejanza de la Iglesia universal existe

37 Ibid38 Ibid39 Schema de Ecclesia n 13 laquoEpiscoporum munus et dignitasraquo Acta Synodalia IIV

25 Ibidem Afirmando la sacramentalidad del episcopado se modifica la relacioacuten con los pres-biacuteteros el n 12 afirma la superioridad de los obispos sobre los presbiacuteteros sosteniendo que estos aun sin tener o estar en el veacutertice del sacerdocio actuacutean sin embargo in persona Christi

40 Schema de Ecclesia n 14 laquoPrimatus et Episcopatusraquo Acta Synodalia IIV 26

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una y uacutenica Iglesia Catoacutelica cuyo centro y fundamento y principio de unidad es el sucesor de Pedro como vicario de Cristo mismo subyace que cada uno representa la propia Iglesia y todos junto con el Papa representan a la Iglesia toda [Ecclesia tota] en el viacutenculo de la paz y del amor 41

El capiacutetulo concluye con un paacuterrafo sobre el Colegio de obispos que constituye el punto de llegada de toda la argumentacioacuten Este Colegio que sucede al Colegio de los Apoacutestoles en el magisterio y en el gobierno pastoral maacutes auacuten en el cual permanece continuamente el Colegio de los Apoacutestoles y por medio del cual se hace manifiesta continuamente la misioacuten de Cristo mismo y su doctrina y sus leyes ha de considerarse sujeto con plena y suprema potestad sobre toda la Iglesia siempre en unidad con su cabeza [una cum capite suo] el Romano Pontiacutefice y nunca sin esta cabeza Sin embargo la potestad de dicho Colegio si bien ordinaria en cuanto a lo relativo al oficio solo puede ser legiacutetimamente ejercitada en modo ex-traordinario con la debida subordinacioacuten al vicario de Cristo en la tierra como y cuando eacutel lo quiera conceder En cuanto a la constitucioacuten de este sacro Colegio son miembros de derecho todos los obispos residenciales que esteacuten en paz con la Sede apostoacutelica y ninguacuten obispo residencial o no puede pertenecer a tal Colegio si no ha sido introducido en eacutel por el sucesor de Cristo vicario de Cristo y cabeza del Colegio o directamente o por taacutecito consenso42

El desarrollo del tema en el capiacutetulo es lineal y ciertamente maacutes claro que el textus prior los dos capiacutetulos relativos al episcopado han sido ampliamente revisados y refundidos en un solo capiacutetulo presentando co-rrecciones al texto que no siempre lo mejoran El schema entregado a los Padres al inicio del segundo periodo conciliar se reduce de hecho a cuatro

41 Schema de Ecclesia n 15 laquoRelatio Episcoporum ad totam Ecclesiamraquo Acta Syno-dalia IIV 26-27 El texto definitivo corrige parcialmente el textus prior que altera insoacute-litamente el schema de Ecclesia De este modo rezaba el textus prior laquoAsiacute como [sicut] el Romano Pontiacutefice como sucesor de Pedro es principio y fundamento visible de la unidad sea de los obispos como de la multitud [de los bautizados] asiacute [ita] cada obispo es principio y centro de la unidad en sus respectivas Iglesias particulares edificadas a imagen de la Iglesia universal en las cuales y a partir de las cuales existe una y uacutenica Iglesia catoacutelica Por lo cual [Qua de causa] cada uno de los obispos representa a su propia Iglesia y contemporaacutenea-mente todos con el Papa a la Iglesia entera [Ecclesia tota] en el viacutenculo de la pazraquo cfr Acta Synodalia III 236 Desapareciendo la estrecha comparacioacuten ndashita-utndash por una indicacioacuten de Pablo VI el texto definitivo resultaba construido sobre la yuxtaposicioacuten entre la funcioacuten del Papa en relacioacuten con la Iglesia Universal y la funcioacuten de los obispos en sus Iglesias Para un comentario maacutes extenso cfr D VITALI Verso la sinodalitagrave 27-34

42 Schema de Ecclesia n 16 laquoCollegium Episcoporumraquo Acta-Synodalia IIV 27

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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capiacutetulos solamente43 el segundo de los cuales se centra en la constitu-cioacuten jeraacuterquica de la Iglesia y particularmente del episcopado44 El hecho de unir dos capiacutetulos de contenido diverso produce un giro o cambio de perspectiva ndashy de loacutegicandash en la comprensioacuten del episcopado

Mientras el punto de partida del schema de Ecclesia era el ministerio episcopal sobre la base del cual se deduciacutea la sacramentalidad del epis-copado en el schema prior todo esto pasa a la cuarta seccioacuten en la que se desarrollan con detalle los tria munera de los obispos La eleccioacuten en el orden de redaccioacuten determina que el tema del Colegio aparezca ex abrup-to detraacutes del paacuterrafo relativo a los presbiacuteteros y los diaacuteconos laquoComo en el Evangelio por voluntad del Sentildeor Pedro y los apoacutestoles constituyen un solo Colegio apostoacutelico de la misma manera el sucesor de Pedro el Ro-mano Pontiacutefice y los obispos sucesores de los apoacutestoles son constituidos en unidad [inter se coniunguntur]raquo45 Privada de la referencia que la remite directamente a la funcioacuten episcopal el tema de la colegialidad se convier-te en una prolongacioacuten de la primera seccioacuten del capiacutetulo centrada en la sucesioacuten apostoacutelica Por esta razoacuten el textus emendatus con maacutes loacutegica desplazaraacute el paacuterrafo sobre los presbiacuteteros y diaacuteconos al final del capiacutetulo ofreciendo un desarrollo consecuente de la materia unida y vuelta a co-nectar directamente de este modo a la doctrina sobre la sacramentalidad del episcopado Se entiende desde esta perspectiva que el texto insista sobre el laquocaraacutecter y la naturaleza colegial del orden episcopalraquo46

43 Pars I Introductio (n 1) caput I De Ecclesiae mysterio (nn 2-10) caput II De constitutione hierarchica Ecclesiae et in specie de episcopatu (nn 11-21) Pars II caput III De Populo Dei et speciatim de laicis (nn 22-27) caput IV De vocatione ad sanctitatem in Ecclesia (nn 28-36) cfr Acta Synodalia III 215-281 La Comisioacuten teoloacutegica examinoacute to-das las animadversiones scriptae relativas a la primera parte del schema de Ecclesia dejando aquellas relacionadas con la segunda parte

44 El capiacutetulo I se articula en 11 paraacutegrafos (nn 11-21) que recogen y ampliacutean los capiacutetulos II y IV del schema precedente La relatio divide el capiacutetulo en dos partes y cuatro secciones En la primera parte (nn11-15) la primera seccioacuten (nn 11-12) funda la doctrina del episcopado en la sucesioacuten apostoacutelica la segunda (nn13-15) trata ex professo la sacra-mentalidad del episcopado En la segunda parte del capiacutetulo laquola tercera seccioacuten (nn 16-17) expone la doctrina del cuerpo o Colegio de los obispos tratando sobre todo la relacioacuten con su cabeza el Romano Pontiacutefice y posteriormente la de los obispos entre siacute y con toda la Iglesiaraquo la cuarta (nn 18-21) describe el ministerio de los obispos ilustrando cada uno de los tria munera docendi santificandi regendi Acta Synodalia III 254

45 Acta Synodalia III 25546 Resulta de gran intereacutes el comentario a la tercera seccioacuten nn 16-17 laquo16 El orden de

los obispos constituye un cuerpo o Colegio particular [aliquod] en el que se aclara ante todo la relacioacuten con su cabeza relacioacuten que se corresponde con la prerrogativa de Pedro sobre el Colegio de los Apoacutestoles Esto es porque el Colegio sin su cabeza no es auteacutentico Aquel

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14 La colegialidad

Los doce paacuterrafos de LG 3 (nn 18-29) claramente diferenciados en dos partes desarrollan la dimensioacuten jeraacuterquica de la Iglesia desde la clave del ministerio episcopal Tras el preaacutembulo (n 18) la primera parte introduce la sacramentalidad del episcopado vinculaacutendola a la sucesioacuten apostoacutelica (nn 19-21) para aclarar despueacutes la cuestioacuten de la colegialidad (nn 22-23) especificando la relacioacuten del Colegio con la cabeza pero tambieacuten con los otros obispos en la loacutegica de la unio collegialis la segunda ofrece una perspectiva nueva del ministerio episcopal a traveacutes del esquema de los tria munera (nn 24-27) y concluye fijando a la luz de la nueva comprensioacuten del ordo episcopalis su relacioacuten con presbiacuteteros y diaacuteconos (nn 28-29)

La cuestioacuten de la colegialidad se desarrolla siguiendo respetuosamente el criterio expuesto en la introduccioacuten donde el Concilio desarrolla la doc-trina relativa a la laquoinstitucioacuten perpetuidad valor sagrado del primado del Romano Pontiacutefice y de su magisterio infalibleraquo en paralelo con la doctrina sobre los obispos como necesario complemento al Vaticano I

El santo siacutenodo [hellip] continuando con el mismo objetivo ha decidido profe-sar puacuteblicamente y explicitar la doctrina sobre los obispos sucesores de los apoacutestoles los cuales junto con el sucesor de Pedro que es vicario de Cristo y cabeza visible de toda la Iglesia gobiernan la casa de Dios viviente47

En otras palabras el texto parte del teacutermino ya doctrinalmente fijado ndashel primado del sucesor de Pedrondash para aclarar casi por contrapunto la doctrina sobre el episcopado El textus emendatus encontroacute oposicioacuten en la discusioacuten en el aula donde el Coetus internationalis patrum puso resis-tencia a ultranza a la doctrina de la colegialidad que poniacutea en cuestioacuten ndasha su parecerndash los principios establecidos en el Vaticano I48 No es cuestioacuten

cuerpo unido a su cabeza debe ser considerado como sujeto de suprema potestad en la Iglesia tal y como se manifiesta en el Evangelio El Espiacuteritu Santo refuerza continuamente la unioacuten y la colaboracioacuten entre primado y episcopado Tal potestad es ejercida de modo extraordinario en el Concilio ecumeacutenico se puede activar otras modalidades de ejercicio con los obispos en sus sedes pero soacutelo a condicioacuten del consentimiento del Sumo Pontiacutefice 17 Los obispos responsables de una Iglesia concreta son el principio de unidad de su rebantildeo y todos juntos con el Papa representan a toda la Iglesia [Ecclesia tota]raquo Acta Synodalia III 254

47 Acta Synodalia IIII 211-21248 No viene al caso aquiacute retomar todo el debate relativo al asunto de la Nota explicativa

praevia ampliamente ilustrado en los comentarios de la Lumen gentium y en textos de his-toria del Concilio Nos interesa sobre todo subrayar los elementos que ayuden a aclarar la cuestioacuten del sinodalidad

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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de retomar aquiacute tal discusioacuten en ocasiones dramaacutetica que empujoacute a Pa-blo VI a vincular la hermeneacuteutica de LG 3 a la Nota explicativa praevia El texto que salioacute del aula aun en la loacutegica del compromiso despueacutes de todo ofrece una doctrina clara que logra un buen equilibrio entre las pre-rrogativas del Papa fijadas en Pastor Aeternus y las del Colegio sobre todo si no se incurre en el error de circunscribir el tema de la colegialidad uacutenicamente a la relacioacuten del Colegio con su cabeza

Ciertamente el nuacutemero 22 ofrece el mayor nuacutemero de elementos uacutetiles para esclarecer la cuestioacuten de la colegialidad

ndashA la par de Pedro y los apoacutestoles el Papa sucesor de Pedro y los obispos sucesores de los apoacutestoles estaacuten conjuntamente reunidos entre ellos en un Colegio

ndashlaquoEl Colegio o cuerpo de los obisposraquo existe siempre con y nunca sin el Papa como su cabeza

ndashAdemaacutes del Papa tambieacuten el Colegio de los obispos es laquosujeto de plena y suprema potestad sobre toda la Iglesiaraquo sin que esto comprometa la potestad plena suprema y universal del sucesor de Pedro sobre toda la Iglesia y su libre ejercicio

ndashTal autoridad no puede ser ejercitada sin el consenso de la cabezandashEl Colegio estando compuesto por muchos expresa la variedad y

la universalidad del Pueblo de Dios en cuanto reunido bajo una uacutenica cabeza expresa la unidad del rebantildeo de Cristo

ndashEn el Colegio los obispos gozan de una potestad para el bien (in bo-num) de sus fieles y tambieacuten para el bien de toda la Iglesia

ndashlaquoLa suprema potestad que este Colegio posee sobre toda la Iglesia es ejercida de modo solemne en el Concilio ecumeacutenicoraquo que es prerrogativa del Papa convocar presidir y confirmar

ndashlaquoLa misma potestad colegial puede ser ejercida por los obispos es-parcidos por el mundo junto con el Papa siempre y cuando la cabeza del Colegio los llame a la accioacuten colegial o al menos apruebe o acepte libremente la accioacuten conjunta de los obispos dispersos de modo que se convierta en un verdadero acto colegialraquo

Las prerrogativas del Colegio sin embargo no se agotan en su rela-cioacuten con la cabeza sino que se desprenden tambieacuten de la relacioacuten de los obispos entre ellos ilustrado en el n 23 sobre la base del viacutenculo con las Iglesias a ellos confiadas de las cuales son laquoprincipio visible y fun-damento de unidadraquo y con la Iglesia universal que existe en y a partir

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de las Iglesias particulares [in quibus et ex quibus] Si es correcto leer el n 23 como continuacioacuten del tema del Colegio ndashtal y como da a entender el incipit del paacuterrafo que habla de laquounioacuten colegial [que] aparece tambieacuten en las mutuas relaciones de los obispos con las Iglesias particulares y con la Iglesia universalraquo49ndash entonces la afirmacioacuten de que laquocada uno de los obispos representa a su propia Iglesia y todos junto con el Papa represen-tan a la Iglesia entera en el viacutenculo de la paz del amor y de la unidadraquo no es geneacuterica sino que remite precisamente a la unioacuten colegial

En otras palabras en el Colegio cada uno de los obispos representa a su propia Iglesia Siempre a partir del Colegio como sujeto de autoridad sobre la Iglesia se incluye la labor de anunciar el Evangelio a todos los hombres que obliga a cada obispo a procurar operarios del Evangelio y las ayudas materiales y espirituales para la misioacuten En el cuadro de la laquoco-llegialis unioraquo se situacutean tambieacuten las Iglesias laquosui iurisraquo (en su grado maacutes alto las Iglesias patriarcales) que laquogozan de una disciplina y costumbre lituacutergicas propias y de un patrimonio teoloacutegico y espiritualraquo y las Confe-rencias episcopales que laquohoy pueden ofrecer una contribucioacuten muacuteltiple y fecunda para que el afecto colegial tenga aplicaciones concretasraquo

Como puede verse todo el tratamiento del tema parte del primado que es el teacutermino conocido a partir del cual se elabora la doctrina de la co-legialidad que es el teacutermino no conocido El texto pone en evidencia las cautelas con las que se elaboroacute el miedo a comprometer las prerrogativas del Papa indujo a continuas precisiones que nunca fueron suficientes para quienes consideraban la doctrina de la colegialidad como un ataque al primado Objetivamente no se podiacutea ir maacutes allaacute de cuanto se afirmoacute pero a pesar de todo se obtuvo un gran resultado

15 Una revolucioacuten copernicana El capiacutetulo sobre el Pueblo de Dios

No deja de sorprender la ausencia de referencias en el capiacutetulo 3 de la Lumen gentium al Pueblo de Dios50 y a su indefectibilidad en la fe Ni siquiera en LG 25 que ilustra ampliamente el munus docendi se hace la

49 Es cuanto sostengo en D VITALI Verso la sinodalitagrave 27-3445-5250 La uacutenica excepcioacuten estaacute en LG 18 que es un texto de enlace introducido despueacutes de la

redaccioacuten del cap 2 sobre el Pueblo de Dios laquoPara apacentar y ampliar cada vez maacutes el Pueblo de Dios Cristo Sentildeor ha instituido en su Iglesia varios ministerios que tienden al bien de todo el cuerpo Dotados de sagrada potestad los ministros estaacuten al servicio de sus hermanos para que todos los que forman parte del Pueblo de Dios y por tanto gozan de verdadera dignidad cristiana tiendan libremente y ordenadamente a lo mismo y alcancen la salvacioacutenraquo

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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miacutenima referencia a tal aspecto El motivo es evidente el silencio se debe sobre todo a la trayectoria de los trabajos en el aula que seguiacutean ndashobvia-mentendash la secuencia de los capiacutetulos del schema de Ecclesia Ahora en el texto entregado a los Padres al inicio del segundo periodo conciliar el capiacutetulo sobre la constitucioacuten jeraacuterquica de la Iglesia precede al que se refiere al Pueblo de Dios en particular a los laicos51 Es como decir que el horizonte sobre el que los Padres conciliares leen las cuestiones es todaviacutea el de la diferencia de funciones tiacutepico de la societas inaequalium en la que los fieles son sujetos subordinados y pasivos llamados como maacuteximo a la colaboracioacuten con la jerarquiacutea No es casualidad que el eacutenfasis de las intervenciones sobre el capiacutetulo 3 recaiga sobre el tema de los laicos que pareciacutea constituir en aquel momento del camino de la Iglesia el punto maacutes novedoso del capiacutetulo sobre todo si se pasaba de la idea de un apostolado de los laicos por concesioacuten de la jerarquiacutea a la de la participacioacuten en la misioacuten misma de la Iglesia en virtud del bautismo52

Al pie del tiacutetulo del capiacutetulo en las Acta Synodalia aparece la ano-tacioacuten de que laquola Comisioacuten de coordinacioacuten de los trabajos conciliares desde hace no mucho tiempo [nuper] ha considerado necesario que el capiacutetulo se dividiese en dos partes de las cuales la primera tratariacutea de populo Dei in genere y configurando el capiacutetulo II del esquema de la constitucioacuten mientras la otra parte se refeririacutea a de laicis in specie cons-tituyendo el cuarto capiacutetuloraquo53 La comisioacuten haciacutea propia la propuesta que hizo el cardenal Suenens54 pidiendo expliacutecitamente que se modificase el orden de los capiacutetulos puesto que muchos temas propuestos en el capiacutetu-

51 Las intervenciones sobre el capiacutetulo II (cfr Acta Synodalia IIII) se extienden a lo largo de nueve congregaciones generales de la 42ordf a la 49ordf del 4 al 16 de octubre de 1963 (aunque la congregacioacuten 43ordf fue dedicada completamente a la revisioacuten del esquema sobre la liturgia) mientras las relativas al capiacutetulo III (cfr Acta Synodalia IIIII) se desarrollan en las congregaciones 50ordf-56ordf del 16 al 25 de octubre

52 No se subrayaraacute nunca suficientemente la incidencia del ensayo de Y CONGAR Jalons pour un theacuteologie du laiumlcat Paris 1954 no soacutelo por el paso de una loacutegica de colabo-racioacuten subordinada de los laicos en la misioacuten de la Iglesia por concesioacuten de la jerarquiacutea a la participacioacuten nativa en virtud del bautismo sino tambieacuten por la clasificacioacuten de la misioacuten de los laicos seguacuten las tres funciones ndashsacerdotal real y profeacuteticandash que seraacuten retomadas amplia-mente en los textos conciliares

53 Acta Synodalia III 25654 La solicitud fue entregada a los Padres el 9 de octubre de 1963 en la 44ordf congrega-

cioacuten general con el debate ya iniciado cfr Acta Synodalia III 324-329 Conviene recordar que la revisioacuten del esquema con la nueva numeracioacuten de los capiacutetulos y la distribucioacuten de la materia tuvo lugar durante la segunda intersesioacuten y que los Padres recibieron en mano el textus emendatus al principio del tercer periodo conciliar

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lo III del schema concerniacutean a todos los bautizados y no solamente a los laicos De ese capiacutetulo fue extrapolado solo el n 24 sobre el sacerdocio universal debidamente enriquecido y articulado en tres paacuterrafos (los ac-tuales nn 10-12)55

Pero esta correccioacuten de perspectiva produjo un cambio impensable en la comprensioacuten de la Iglesia radicada desde haciacutea siglos en el esquema de la societas inaequalium que habiacutea llevado a distinguir en la Iglesia dos cuerpos distintos y en alguacuten modo incluso contrapuestos la Ecclesia do-cens depositaria de todas las funciones y el poder y la Ecclesia discens los fieles puestos en la condicioacuten subordinada de suacutebditos sin ninguna capacidad activa Maacutes que en ideas alternativas la asiacute llamada laquorevolu-cioacuten copernicanaraquo del Concilio consiste en este ajuste de redaccioacuten que rompe la loacutegica del modelo piramidal fundada sobre la diferencia de funciones y de estados de vida para afirmar la radical igualdad de todos los miembros de la Iglesia en virtud de la comuacuten dignidad bautismal Las afirmaciones al fin y al cabo son las mismas y sin embargo su diversa colocacioacuten les confiere un peso diferente

En la secuencia precedente de los capiacutetulos se podiacutean afirmar todas las verdades maacutes hermosas sobre el Pueblo de Dios se podiacutea hablar de la participacioacuten en la misioacuten de la Iglesia por derecho nativo en virtud del bautismo se podiacutea introducir la referencia al sensus fidei y a los carismas de los fieles todo esto teniacutea una relevancia irrisoria por el solo hecho de estar situado despueacutes del capiacutetulo sobre la naturaleza jeraacuterquica de la Igle-sia Aunque sean importantes estos aspectos resultan siempre y de todos modos secundarios adicionales y por lo tanto no tienen la fuerza de incidir sobre un sistema consolidado desde haciacutea siglos sino a traveacutes de la contes-tacioacuten y el enfrentamiento

Por el contrario el hecho de situar los capiacutetulos sobre los estados de vida ndashjerarquiacutea laicos religiososndash detraacutes del relativo al Pueblo de Dios ha determinado una inversioacuten de perspectiva que ha puesto fin al menos sobre el papel al modelo piramidal de Iglesia y a la divisioacuten del cuer-

55 El capiacutetulo fue redactado extrapolando del capiacutetulo III del esquema el n 24 sobre el sacerdocio universal y el sacerdocio ministerial ampliado oportunamente y dividido en tres paacuterrafos ndashlos actuales nn 10-12ndash integrados por los nn 10-12 del capiacutetulo I sobre los crite-rios de pertenencia a la Iglesia ndashlos actuales nn 14-16ndash todo ello encuadrado por un paacuterrafo introductorio sobre el nuevo Pueblo de Dios (n 9) por otro de enlace relativo a la universa-lidad y unidad del Pueblo de Dios (n 13) y uno de cierre sobre la naturaleza misionera de la Iglesia (n 17)

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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po eclesial en dos partes Se evidencia enseguida de hecho la Iglesia como totalidad de los bautizados todos situados sobre un plano de total igualdad en virtud de la comuacuten regeneracioacuten en Cristo De este modo el Pueblo de Dios viene antes que la jerarquiacutea la vida teologal antes que los roles y las funciones la comuacuten dignidad antes de cualquier diferencia en el cuerpo eclesial El ser viene antes que el hacer la gracia antes que las obras los proyectos y los planes pastorales Finalmente el ser hijos de Dios ndashhijos en el Hijo por la regeneracioacuten del Espiacuteritundash es el tiacutetulo maacutes grande de pertenencia a la Iglesia que habilita para la maacutes alta de las vo-caciones la santidad56

La prueba de fuego de esta profunda transformacioacuten eclesioloacutegica es el viacutenculo constitutivo entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial Coherentemente con el estructura del capiacutetulo LG 10 da un giro al orden de los sujetos respecto a la formulacioacuten del schema de Ecclesia tras haber descrito el sacerdocio comuacuten como capacidad del Pueblo santo de Dios en virtud de la regeneracioacuten y de la uncioacuten del Espiacuteritu de laquoofrecerse a siacute mismos como oblacioacuten viviente santa agradable a Diosraquo el texto con-tinuacutea afirmando que laquoel sacerdocio comuacuten de los fieles y el sacerdocio ministerial o jeraacuterquico si bien difieren en su esencia y no tanto en grado estaacuten sin embargo mutuamente ordenados pues el uno y el otro cada uno seguacuten su propio modo participan del uacutenico sacerdocio de Cristoraquo57

El viacutenculo existe en virtud de la participacioacuten en el mismo sacerdocio de Cristo concretado en la complementariedad de sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial complementariedad posible en virtud de una dife-rencia radical ndashlicet essentia e non gradu tantumndash que explica no solo la existencia de dos formas de sacerdocio sino la necesidad del sacerdocio jeraacuterquico ministerial al servicio del sacerdocio comuacuten El sacerdocio mi-nisterial no es el desdoblamiento o la intensificacioacuten del sacerdocio co-muacuten ni este es la forma disminuida del sacerdocio ministerial uno con-siste en la capacidad de ofrecer sacrificios espirituales a Dios y el otro en laquollevar a cabo el sacrificio eucariacutestico in persona Christi y ofrecerlo a Dios en nombre de todo el puebloraquo Dicho con otras palabras el sacerdocio ministerial no puede existir maacutes que en estrecha relacioacuten con el sacerdo-

56 D VITALI Popolo di Dio Asiacutes 2013 130-13157 Sostengo la diferencia de esencia y no (tanto) de grado en D Vitali Sacerdocio

comuacuten y sacerdocio ministerial o jeraacuterquico Relectura de una cuestioacuten controvertida in Rassegna di Teologia 52 (2011) 1 39-60

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cio comuacuten y en la forma de servicio al Pueblo de Dios La relacioacuten con el sacerdocio comuacuten determina su naturaleza funcional y fija los liacutemites revelando la hipertrofia del modelo piramidal de Iglesia que con razoacuten puede llamarse modelo clerical

16 La relacioacuten constitutiva entre el sensus fidei y el magisterio de la Iglesia

La relacioacuten constitutiva entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio minis-terial es basilar para construir un modelo sinodal de Iglesia Lumen gen-tium de hecho fundamenta aquiacute la diversa participacioacuten del Pueblo de Dios y de los ministros en el sacerdocio de Cristo Sacerdote Profeta y Rey En el capiacutetulo III para explicar el ministerio episcopal en el nuevo horizonte de la sacramentalidad el Concilio se ve obligado a abandonar el esquema binario de potestas ordinis potestas jurisdictionis asumiendo en su lugar el esquema de los tria munera (docendi santificandi regen-di)58 claramente vinculados a la ordenacioacuten laquoJunto a la funcioacuten de santifi-car la consagracioacuten episcopal confiere tambieacuten las funciones de ensentildear y gobernar las cuales sin embargo por su naturaleza no pueden ser ejercidas si no es en la comunioacuten jeraacuterquica con la cabeza y con los miembros del Colegioraquo (LG 21) Tambieacuten el capiacutetulo IV asume el mismo esquema ilus-trando ampliamente la participacioacuten de los laicos en la funcioacuten sacerdotal profeacutetica y real de Cristo59

Paradoacutejicamente el capiacutetulo sobre el Pueblo de Dios no asume ple-namente el esquema de la triple participacioacuten en el sacerdocio de Cristo pues una vez formulada la doctrina del sacerdocio comuacuten y aclarada su relacioacuten con el sacerdocio ministerial (LG 10) la constitucioacuten ilustra el ejercicio del sacerdocio comuacuten en los sacramentos con evidente referen-cia a la funcioacuten sacerdotal de Cristo (LG 11) para pasar enseguida a la funcioacuten profeacutetica (LG 12) sin tratar expliacutecitamente la real

Los Padres mismos habiacutean advertido el problema el cardenal Silva Henriacutequez habiacutea pedido ordenar temaacuteticamente el ejercicio del sacerdo-cio comuacuten seguacuten el triple munus de Cristo del que participa el Pueblo de Dios60 como por otro lado se evidenciaba en el n 14 del schema prior

58 LG 25-2759 LG 34-3660 Cfr Acta Synodalia IIIII 407-409 solicitud en nombre de otros 39 obispos

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donde se deciacutea que los bautizados laquoparticipan en cierto modo [quodam-modo] en la funcioacuten sacerdotal profeacutetica y real de Cristoraquo61 La Comi-sioacuten teoloacutegica no percibioacute la importancia estimando que las tres fun-ciones estaban ya suficientemente tratadas en el texto en los nn 10 y 11 (funcioacuten sacerdotal) en el n 12 (la profeacutetica) y en el n 35 en el capiacutetulo sobre los laicos (la real)62 Maacutes allaacute de las razones que llevaron a la co-misioacuten a hacer esta eleccioacuten la nota confirma la posibilidad de pensar la funcioacuten profeacutetica dentro del cuadro de la participacioacuten en el triple munus de Cristo63

Pero iquestpor queacute insistir tanto en este punto Porque el viacutenculo con el sa-cerdocio comuacuten integra las tres funciones ndashsacerdotal profeacutetica y realndash en la relacioacuten entre las dos formas de participacioacuten en el sacerdocio de Cris-to En otras palabras se establece tambieacuten entre las funciones la misma circularidad que regula la relacioacuten entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial o jeraacuterquico La importancia del asunto se impone de por siacute en referencia sobre todo a la funcioacuten profeacutetica porque bajo esta acepcioacuten el Concilio recupera el sensus fidei del Pueblo de Dios fundamentalmente a causa de una efectiva recuperacioacuten de la dimensioacuten sinodal de la Igle-sia Si se aplica a la funcioacuten profeacutetica el esquema que regula la relacioacuten necesaria entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial tambieacuten el sensus fidei del Pueblo de Dios y el munus docendi de los pastores se situacutean claramente ndashy necesariamentendash en un nexo constitutivo En otras palabras existe una relacioacuten circular entre sensus fidei y magisterio como funciones eclesiales de inteligencia de la fe que abre un amplio horizonte en relacioacuten con el posible ejercicio de un camino sinodal de la Iglesia Este horizonte ya puede intuirse en LG 12

El pueblo santo de Dios participa tambieacuten de la funcioacuten profeacutetica de Cristo difundiendo su testimonio vivo sobre todo con la vida de fe y caridad y ofreciendo a Dios el sacrificio de alabanza que es fruto de unos labios que confiesan su nombre (cf Heb 1315) La totalidad de los fieles que tienen

61 Acta Synodalia III 259 El pasaje fue retirado en la reorganizacioacuten del texto desde el momento en el que el n 24 fue dividido en 3 paraacutegrafos (nn 10-12 de Lumen gentium)

62 Acta Synodalia IIII 19663 Por otra parte es posible percibir la funcioacuten real en la referencia a las virtudes al inicio

del n 11 laquoEl caraacutecter sagrado y orgaacutenicamente estructurado de la comunidad sacerdotal se implanta a traveacutes de los sacramentos y de las virtudesraquo evidentemente ndasho al menos sobre todondash fe esperanza y caridad que remiten a la vida teologal y por lo tanto tambieacuten a su di-mensioacuten real Se puede decir ndashy se deduce de todo el discursondash que LG 11 trata conjuntamente la dimensioacuten sacerdotal y la real de la vida en Cristo

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la uncioacuten del Santo (cfr 1 Jn 220 y 27) no puede equivocarse cuando cree y esta prerrogativa peculiar suya la manifiesta mediante el sentido sobrenatural de la fe de todo el pueblo cuando laquodesde los obispos hasta los uacuteltimos fieles laicosraquo [cfr San Agustiacuten De praed sanct 14 27 PL 44 980] presta su consentimiento universal en las cosas de fe y costumbres Con este sentido de la fe que el Espiacuteritu de verdad suscita y mantiene el Pueblo de Dios se adhiere indefectiblemente laquoa la fe confiada de una vez para siempre a los santosraquo (Jud 3) penetra maacutes profundamente en ella con juicio certero y la aplica cada diacutea maacutes plenamente en la vida

La cita recoge sustancialmente el textus prior aunque sustituye la uni-versitas fidelium por Ecclesia tota como sujeto de indefectibilidad64 De las tres frases la primera introduce el tema de la participacioacuten de todo el Pueblo de Dios en la funcioacuten profeacutetica de Cristo que se manifiesta mediante el sensus fidei y los carismas a traveacutes de los cuales el espiacuteritu laquohace a los fieles capaces y preparados para asumir obras y deberes que sirvan y sean uacutetiles a la renovacioacuten y a la edificacioacuten maacutes amplia de la Iglesiaraquo Las otras dos se refieren de modo maacutes especiacutefico al sensus fi-dei recuperando una doctrina considerablemente enraizada a lo largo de toda la tradicioacuten teoloacutegica y utilizada por el magisterio de la Iglesia para fundamentar la definicioacuten de los dogmas marianos de la Inmaculada Concepcioacuten y de la Asuncioacuten de Mariacutea65

A pesar de algunas voces criacuteticas sobre la doctrina66 que reiteraban la posicioacuten de los manuales de teologiacutea preconciliar sobre la indefecti-

64 Por esta razoacuten se suprimioacute la nota que haciacutea referencia al Concilio Vaticano I que en el cap VIII del esquema constitutionis dogmaticae de Ecclesia Christi puso la indefectibilidad de la Iglesia como fundamento de la infalibilidad del magisterio La formulacioacuten fue solem-ne laquoDeclaramus insuper Christi Ecclesiam sive existentia sive constitutio eius spectetur societatem esse perennem atque indefectibilem nullamque post illam neque pleniorem neque perfectiorem salutis oeconomiam in hoc speculo expectandam esseraquo Mansi 51 542

65 Cfr supra66 Cfr por ejemplo Carli Acta Synodalia III 641 que propone el siguiente texto

laquoEcclesia tota cuius filii veluti liturgicum suae fidei sacrificium sempre Deo offerre (cf Phil 217) tenentur Eiusque virtutes annuntiare qui ipsos de tenebris vocavit in admirabile lumen suum (cf 1Pt 29) in credendo circa fidem et mores indefectibilis est et hanc suam peculiarem proprietatem etiam per supernaturalem sensum figravedei popoli cristiani manifestatraquo En cam-bio el cardenal Ruffini (cfr Acta Synodalia IIII 628) cuestiona la propuesta ironizando laquoQuae ibi scripta inveniuntur aut non sunt vera aut ea non intellego Quid est ndashquaesondash iste supernaturalis sensus fidei universi populi christiani quo omnes docentur infallibiliter a Deo sensus fidei ndashinquamndash a Spiritu veritatis excitatus verbo Dei scripto et tradito sub eius assistentia inhaerens quem magisterium ducit (solummodo) et sustentatraquo A continua-cioacuten defiende la infalibilidad pasiva de la Ecclesia discens que no depende del Espiacuteritu de Dios sino del hecho de que tal sentido manifiesta la doctrina ensentildeada de modo infalible por

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bilitas passiva de la Ecclesia dicens del debate en el aula67 emergioacute un texto medido equilibrado La relatio68 se limita a resumir con breves anotaciones las variantes del texto asegurando no querer introducir ul-teriores antildeadidos en cuanto a que el sentido de la fe es descrito como una facultas totius Ecclesiae en virtud de la cual estaacute en la fe reconocer la revelacioacuten transmitida pudiendo distinguir entre verdadero y falso y a la vez ahondar con mayor profundidad en el significado y aplicarlo con maacutes plenitud a la vida seguacuten el sentido de 1 Tes 213 En la 124ordf congre-gacioacuten general no se registran modi referidos a LG 12 sobre los cuales los Padres debiesen votar y el texto seraacute aprobado sin ulteriores variaciones El Pueblo Santo de Dios volviacutea finalmente a ser una autoridad doctrinal una regula fidei que participa suo peculiare modo en la transmisioacuten de la Revelacioacuten

17 La singularis Antistitum et fidelium conspiratio

La circularidad entre sensus fidei y magisterio que resulta decisiva para articular una praxis sinodal en la Iglesia no solo es una hipoacutetesis vaacutelida bajo la base de LG 12 emerge auacuten con mayor claridad en DV 10 Aunque este paacuterrafo no contenga una referencia expliacutecita a eacutel el sensus fidei se evidencia a traveacutes de la presencia de la foacutermula ndashsingularis An-tistitum et fidelium cospirationdash invocada expliacutecitamente por el magisterio para definir los dogmas marianos y que se convierte en la clave de lectura del dinamismo de transmisioacuten de la Revelacioacuten en la Iglesia

La Tradicioacuten y la Escritura constituyen el depoacutesito sagrado de la palabra de Dios confiado a la Iglesia Fiel a dicho depoacutesito el pueblo cristiano entero unido a sus pastores persevera siempre en la doctrina apostoacutelica y en la unioacuten en la eucaristiacutea y en la oracioacuten (cfr Hch 242) y asiacute se realiza una maravillosa concordia de Pastores y fieles [singularis fiat Antistitum et fidelium conspiratio] en conservar practicar y profesar la fe recibida

el magisterio uacutenico sujeto de la infalibilidad activa en la Iglesia Tambieacuten el cardenal Siri (Acta Synodalia IIIII 279) reafirma que el sensus fidei depende totalmente del magisterio infalible de la Iglesia Maacutes positivas son las intervenciones de Cantero Cuadrado cfr Acta Synodalia IIIII 283-285 Calabria cfr Acta Synodalia IIIII 363-365

67 No fueron pocas las intervenciones en el aula y las animadversiones scriptae signo del intereacutes que despertaba en los Padres la doctrina del sensus fidei Particularmente extensas y relevantes son las intervenciones de mons Cantero Cuadrado (cfr Acta Synodalia IIIII 283-285) y de mons Calabria (cfr Acta Synodalia IIIII 363-365)

68 Acta Synodalia III 189

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Sobre todo hay que subrayar que el texto contiene la misma cita neo-testamentaria (Hch 242-47) a la que recurre LG 10 para fundamentar el sacerdocio comuacuten auacuten maacutes las acciones atribuidas al Pueblo santo de Dios ndashlaquoconservar practicar y profesar la fe recibidaraquondash son muy cercanas a aquellas con las que LG 12 describe el sensus fidei como capacidad del Pueblo de Dios de acoger la Palabra de Dios adherirse de manera indefectible a la fe recibida penetrar en ella con mayor profundidad y aplicarla maacutes plenamente a la vida La intencioacuten del paacuterrafo no es la de esclarecer la funcioacuten del sensus fidei pero siacute la de precisar que la Iglesia es depositaria de la Palabra de Dios (foacutermula inusitada) constituida por Tradicioacuten y Escritura precisamente la conspiratio de los obispos y los fieles confirma el nexo cuanto menos indirecto con esta funcioacuten del Pue-blo de Dios

La cuestioacuten no es de poco relieve pues el paacuterrafo tras un capiacutetulo en-tero ilustrando el dinamismo de la Tradicioacuten concluye restableciendo la relacioacuten de circularidad entre el Pueblo de Dios y sus pastores evocado en el texto y significado por la singularis conspiratio y estableciendo entre otras cosas una especie de precedencia del sensus fidei sobre el ma-gisterio Uacutenicamente al final del capiacutetulo de hecho aparece el munus de laquointerpretar auteacutenticamente la Palabra de Dios escrita y transmitidaraquo confiado laquoal solo magisterio vivo de la Iglesiaraquo en una propuesta que muestra el abandono de aquel modelo de transmisioacuten de la Revelacioacuten regulado por el binomio Ecclesia docens Ecclesia dicens

Aunque no existan afirmaciones expliacutecitas al respecto ni de la Comi-sioacuten teoloacutegica ni de los Padres conciliares se puede entrever en la estruc-tura del capiacutetulo una trama en la cual la relacioacuten de circularidad entre el Pueblo de Dios y el magisterio estaacute pensada para resaltar particularmente al primero en analogiacutea con la laquorevolucioacuten copernicanaraquo de Lumen gen-tium sobre el primado del Pueblo de Dios en relacioacuten con la jerarquiacutea El giro ya se percibe en el capiacutetulo I de Dei Verbum mientras los manuales de teologiacutea sobre la base del Vaticano I concebiacutean la Revelacioacuten como la suma de las verdades en las que creer (la fides quae) con la obvia conse-cuencia de enfatizar la funcioacuten del magisterio infalible de la Iglesia como norma proacutexima de la fe una idea maacutes personalizada de la Revelacioacuten ndashlaquoDios invisible en la riqueza de su amor habla a los hombres como a amigos y dialoga con ellos para invitarles e introducirles en la comunioacuten con Eacutelraquo (DV 2)ndash pone de manifiesto a los interlocutores que Dios mismo ha elegido En primer plano no estaacute tanto quieacuten transmite el mensaje sino

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sus destinatarios o lo que es lo mismo laquolos hombres [que] por medio de Cristo Verbo hecho carne en el Espiacuteritu Santo tienen acceso al Padre y son hechos partiacutecipes de la vida divinaraquo (DV 2)

El mismo esquema interpretativo se repite en el capiacutetulo II respecto a la transmisioacuten de la Revelacioacuten Al inicio del capiacutetulo el lenguaje parece repetir el Vaticano I laquoTodo aquello que habiacutea revelado para la salvacioacuten de todos los pueblos Dios dispuso con toda benevolencia que permane-ciese iacutentegro y fuese transmitido a todas las generacionesraquo (DV 7) No obstante la transmisioacuten de la Revelacioacuten no se refiere a un depositum sino al Evangelio vivo como laquofuente de todo aquello que concierne a la fe y la moralraquo y que la Iglesia recibe mediante la laquopredicacioacuten apostoacutelica expresada de modo especial en los libros inspiradosraquo a esta predicacioacuten le laquoconcierne todo aquello que contribuye a una conducta santa y al in-cremento de la fe del Pueblo de Diosraquo (DV 8) A diferencia del schema de fontibus Revelationis69 que trataba enseguida la funcioacuten del magisterio infalible de la Iglesia Dei Verbum en el cuadro de una concepcioacuten dinaacute-mica de la Tradicioacuten pone de relieve a los destinatarios de la predicacioacuten De hecho el texto afirma que laquola comprensioacuten ndashaunque el latiacuten dice per-ceptiondash tanto de las cosas como de las palabras transmitidas crece ya sea con la contemplacioacuten y el estudio de los creyentes que lo meditan en sus corazones ya sea con la profunda inteligencia de la realidad espiritual que experimentan (DV 8)

Algunos Padres pidieron integrar estos dos factores de inteligencia de la fe que se referiacutean con toda evidencia a los bautizados con laquola predica-cioacuten de aquellos que con la sucesioacuten episcopal han recibido un carisma seguro de verdadraquo (DV 8) Este antildeadido por maacutes que fuese pertinente rompe la loacutegica del discurso construido de acuerdo con el esquema del diaacutelogo entre Dios y su pueblo repetido tambieacuten en el capiacutetulo II la elec-cioacuten de presentar la predicacioacuten como modalidad de transmisioacuten de la Revelacioacuten no se desarrolla al poner de relieve la funcioacuten interpretativa del magisterio sino la del Pueblo de Dios como destinatario del Evan-gelio anunciado De este modo Dios laquoel cual ha hablado en el pasado

69 Cfr Acta Synodalia IIII 14-26 Schema constitutionis dogmaticae de fontibus Re-velationis El schema consta de 5 capiacutetulos I De duplici fonte Revelationis II De Scriptura inspiratione inerrantia et compositione litteraria III De Vetere Testamento IV De Novo Testamento V De Sacra Scriptura in Ecclesia En el capiacutetulo I compuesto de solo seis paacute-rrafos el uacuteltimo trata sobre la funcioacuten del Magisterio descrito como proximae et universalis credendi norma

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dialoga [colloquitur] sin intermediacioacuten con la Esposa de su Hijo predi-lecto y el Espiacuteritu Santo por quien la voz del Evangelio resuena viva en la Iglesia y por ella en el mundo va introduciendo a los creyentes en la verdad plena y hace que la palabra de Cristo habite en ellos abundante-menteraquo (DV 8)

El disentildeo se torna sin embargo niacutetido en la apertura de DV 10 a la luz de la singularis Antistitum et fidelium conspiratio que se refiere evi-dentemente a la relacioacuten de circularidad entre sensus fidei del Pueblo de Dios y munus docendi de los pastores Lo prueba el hecho de que al pie del texto se hace referencia a los textos marianos70 citando en la misma nota una frase de Cipriano sobre la laquoIglesia como Pueblo reunido en torno al sacerdote y rebantildeo que se adhiere a su pastorraquo71 del cual emerge con claridad coacutemo el dinamismo de la Tradicioacuten encuentra continuo alimento en la reciprocidad entre predicacioacuten y vida cristiana Los dos teacuterminos se corresponden si el Pueblo santo de Dios conserva practica y profesa la fe transmitida laquoel magisterio vivo de la Iglesiaraquo laquopiamente escucha san-tamente custodia y fielmente exponeraquo la palabra de Dios si el magisterio laquosirveraquo la Palabra de Dios anunciada en la fuerza del espiacuteritu laquoel Pueblo de Dios acoge no ya la palabra de los hombres sino realmente la Pala-bra de Dios se adhiere indefectiblemente a la fe transmitida a los santos de una vez para siempre (Jud 3) la profundiza con un juicio recto y la aplica cada diacutea maacutes plenamente en la vidaraquo (LG 12)

2 intellectus fidei

La primera parte de esta investigacioacuten justifica la siguiente afirmacioacuten el Vaticano II pone las bases para desarrollar una visioacuten sinodal de la Iglesia Junto a la relacioacuten del Colegio con su cabeza aclarada en LG III el Concilio vincula estrechamente a los pastores con el Pueblo de Dios en cuanto a la transmisioacuten de la Revelacioacuten tanto en el capiacutetulo II de Lumen gentium sobre el Pueblo de Dios como en el capiacutetulo II de Dei Verbum A la luz de estos datos es posible poner en marcha aquel laquocaminar juntos

70 Cfr nota 14 que cita PIacuteO XII Constitucioacuten apostoacutelica Munificentissimus Deus in AAS 42 (1950) 756 en relacioacuten con la expresioacuten de san Cipriano Epiacutestola 668 (CSEL 32733) laquoLa Iglesia es un pueblo unido a su sacerdote y el rebantildeo que permanece fiel al propio pastorraquo

71 En la misma nota 74 se cita la constitucioacuten (cfr AAS 42 [1950] 756) en relacioacuten con la misma expresioacuten de san Cipriano Epiacutestola 668

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de laicos pastores y Obispo de Romaraquo sentildealada por el Papa Francisco como tarea de la Iglesia de hoy72 Para acoger el desafiacuteo sin aventuras o improbables avances precipitados pero siguiendo con fidelidad el ca-mino histoacuterico de la Iglesia hace falta restablecer en clave sinodal las relaciones entre los sujetos que el Papa reclama en liacutenea de continuidad con las sugerencias ofrecidas por el contenido conciliar

21 Elementos para un desarrollo de una Iglesia sinodal

Una primera indicacioacuten ndashpoco maacutes que una sugerenciandash emerge ya en una particularidad linguumliacutestica que aparece en los documentos conciliares el Vaticano II no habla nunca de sinodalidad sin embargo utiliza amplia-mente el teacutermino synodus para referirse al Concilio73 Se trata de un dato relevante que permite tender un puente entre colegialidad y sinodalidad y comprender en queacute direccioacuten tratar de recuperar el concepto El empleo del teacutermino en efecto alude a la praxis del primer milenio cuando el Concilio ecumeacutenico representaba la catolicidad dado que cada obispo laquopersonificabaraquo a su Iglesia en la asamblea conciliar La idea que estaacute en la base de tal conviccioacuten es expresada con fuerza por Cipriano seguacuten el cual laquoel obispo estaacute en la Iglesia y la Iglesia estaacute en el obisporaquo74 la unidad entre obispo e Iglesia fue tan estrecha que el uno no podiacutea existir sin la otra y viceversa No era casualidad que el siacutembolo y la medida de dicha unidad fuese la Eucaristiacutea celebrada por el obispo en la que la asamblea reunida alrededor de eacutel se reconociacutea en el cuerpo eucariacutestico Por esta razoacuten la ex-communicatio impuesta por el obispo no comportaba uacutenica-mente la exclusioacuten del banquete eucariacutestico sino tambieacuten de la comunioacuten eclesial El empleo de sancta Synodus impulsa a desplazarse al horizonte

72 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos

73 Sin contar con el elevado nuacutemero de recurrencias o repeticiones (cfr X OCHOA Index verborum cum documentis Concilii Vaticani Secundi 484-485) es sorprendente el eacutenfasis que emana del empleo de la foacutermula en ciertos pasajes de particular solemnidad Baste con releer por ejemplo LG 1 laquoLumen gentium cum sit Christus haec Sacrosancta Synodus in Spiritu Sancto congregata omnes homines claritate Eius super faciem Eccle-siae resplendente illuminare vehementer exoptat omni creaturae Evangelium annuntiando (cfr Mc 1615)raquo El empleo enfaacutetico es repetido en muchos otros pasajes cfr por ejemplo LG 18 en referencia a la doctrina del primado y el episcopado laquoSacra Synodus cunctis fi-delibus firmiter credendam rursus proponitraquo LG 21 en relacioacuten con la sacramentalidad del episcopado laquoDocet autem Sancta Synodusraquo

74 CIPRIANO Epistola 66 8 CSEL 3733

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del primer milenio asumiendo como elemento imprescindible la estrecha unidad del Pueblo de Dios con los pastores o maacutes bien de cada portio Populi Dei con su pastor75

iquestPero queacute sentido puede tener esto para una concepcioacuten sinodal de Iglesia y bajo un punto de vista praacutectico para el ejercicio de la sinoda-lidad en la Iglesia Si la premisa es laquocaminar juntosraquo de pueblo y pas-tores el empleo de sancta Synodus no aporta maacutes elementos que sirvan para clarificar el tema Por otro lado como hemos podido comprobar el Vaticano II se centroacute en la colegialidad sin mencionar expliacutecitamente la sinodalidad que queda fuera del horizonte de pensamiento en el que se movioacute el Concilio76 A cincuenta antildeos vista de aquel debate en ocasiones dramaacutetico se evidencia coacutemo los Padres en el aula no pudieron ir maacutes allaacute de un texto de transicioacuten (o de consenso) en el que la funcioacuten petrina se recolocaba en el marco maacutes amplio de la organizacioacuten jeraacuterquica de la Iglesia reafirmando la colegialidad pero dejando en el aire las formas concretas para poder ponerla en praacutectica

El periodo posconciliar ha puesto de relieve toda el esfuerzo y las re-sistencias para encontrar un desarrollo significativo de la colegialidad77 Por otro lado mientras la cuestioacuten quede circunscrita al Colegio y a su cabeza se corre el riesgo de percibir la relacioacuten como competicioacuten entre dos sujetos dotados de plena y suprema potestad sobre la Iglesia

Pero precisamente el Concilio abre la viacutea para poner en marcha la so-lucioacuten con aquel cambio que subyace en la loacutegica de haber introducido el capiacutetulo sobre el Pueblo de Dios antes del de la Jerarquiacutea volviendo a

75 En esta direccioacuten ya se orientaba SC 41 al indicar la praecipua manifestatio Ecclesiae laquoen la participacioacuten plena y activa [el texto dice lsquoplenaria et actuosarsquo] del Pueblo santo de Dios en las mismas celebraciones lituacutergicas sobre todo en la misma Eucaristiacutea en una uacutenica oracioacuten alrededor del uacutenico altar que preside el obispo rodeado de su presbiterio y ministrosraquo

76 Sin embargo la posibilidad de que alguna voz en tal direccioacuten pudiera alzarse en el aula quedoacute anulada con la eleccioacuten de concentrarse en la apertura de tercer periacuteodo en los capiacutetulos VII y VIII del esquema sin permitir que se volviese sobre los capiacutetulos anteriores respecto a los cuales se solicitoacute sencillamente a los Padres pronunciarse con un placet o non placet sobre el textus emendatus cfr Quaesitum circa modum suffragandi schema constitu-tionis de Ecclesia Acta Synodalia IIII 395

77 La prueba de fuego de este cansancio es la distincioacuten difundida despueacutes del Concilio de una doble colegialidad efectiva y afectiva la primera concierne a las formas de ejerci-cio de la colegialidad mientras la segunda subraya la unidad del Colegio Echando un vistazo al desarrollo del magisterio posconciliar despueacutes del Siacutenodo extraordinario del 1985 a veinte antildeos del Concilio Vaticano II se advierte una fuerte insistencia sobre la segunda pasada por el affectus collegialis de los documentos conciliares ndashcfr LG 23 y NEP 2ndash a la colegialidad afectiva ndashcfr sobre todo Communionis notio Apostolos suos y Pastores gregisndash sin llegar a formas concretas y reconocidas de ejercicio efectivo de la colegialidad

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vincular el ministerio en la Iglesia a su funcioacuten de servicio al Pueblo de Dios El punto de anclaje es la relacioacuten constitutiva que LG 10 establece entre sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial si en el schema de Eccle-sia el tema del sacerdocio universal de los fieles representoacute cuando menos una significativa recuperacioacuten para la eclesiologiacutea catoacutelica despueacutes de cua-tro siglos de silencio la nueva colocacioacuten viene a otorgarle un peso y una funcioacuten de relevancia y profundidad diversas En el cuadro eclesioloacutegico trazado por LG II el sacerdocio de todos los fieles no es ya un sacerdocio metafoacuterico o quoddam sacerdotium paacutelida imitacioacuten del ministerial sino sacerdocio comuacuten78 es decir la condicioacuten de todos los bautizados en vir-tud de la cual la Iglesia entera queda constituida en comunidad sacerdotal que ofrece a Dios sacrificios espirituales Esta forma de participacioacuten en el sacerdocio de Cristo no solo esclarece el agere in persona Christi de los ministros sagrados como forma de servicio dentro de la Iglesia sino que tambieacuten restablece el orden adecuado de las cosas al primar el ser sobre el hacer la vida teologal sobre los roles y funciones el tiacutetulo maacutes grande de pertenencia a la Iglesia la dignidad mayor es la de ser hijos de Dios hijos en el Hijo

Esta revolucioacuten copernicana iquestqueacute consecuencias conlleva respecto a la vida y al gobierno de la Iglesia iquestQueacute posibilidades ofrece para la cons-truccioacuten de una Iglesia constitutivamente sinodal iquestNo la expone maacutes bien al riesgo de desviacuteos democraacuteticos Durante el posconcilio muchos han repetido el slogan de la piraacutemide invertida como si bastase el vuelco especulativo de los esquemas aplicados durante siglos y de las loacutegicas que los habiacutean regulado para implantar la eclesiologiacutea conciliar No se trata de poner arriba a quien antes estuvo abajo de dar el mando a quien antes fue suacutebdito de reemplazar un sistema monaacuterquico por uno democraacutetico sino de situar en el centro de la vida eclesial al Pueblo de Dios sobre todo por parte de la jerarquiacutea79

78 En vez de laquosacerdocio universalraquo muchos Padres propusieron otras foacutermulas como laquosacerdotium spiritualeraquo laquosacerdotium inchoativumraquo laquoquoddam sacerdotiumraquo laquosacerdotium communeraquo laquoDicatur commune ad vitandam ambiguitatemraquo cfr Acta Synodalia IIII 195

79 En esta direccioacuten va la mencioacuten al ministerio jeraacuterquico en particular a la funcioacuten petrina por parte del Papa Francisco en el discurso de conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos que merece la pena reproducir por entero laquoLa si-nodalidad como dimensioacuten constitutiva de la Iglesia nos ofrece el marco interpretativo maacutes adecuado para comprender el mismo ministerio jeraacuterquico Si comprendemos que como dice san Juan Crisoacutestomo lsquoIglesia y Siacutenodo son sinoacutenimosrsquo ndashporque la Iglesia no es otra cosa que el lsquocaminar juntosrsquo de la grey de Dios por los senderos de la historia que sale al encuentro de Cristo el Sentildeorndash entendemos tambieacuten que en su interior nadie puede ser lsquoelevadorsquo por encima

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Aunque no faltase en el pasado el eacutenfasis sobre la dimensioacuten del servi-cio traducida en ejemplos luminosos de pastores que han dedicado toda su vi da al rebantildeo sin embargo el ministerio sacerdotal se concebiacutea a partir de una relacioacuten asimeacutetrica de autoridad-obediencia entre pastores y fieles De es to se deriva una identificacioacuten demasiado estricta de la Iglesia con sus ministros y una separacioacuten del cuerpo eclesial entre Ecclesia docens y Ecclesia discens con excesiva insistencia sobre la inaequalitas de sus miembros80 lo cual ha favorecido el arraigo entre el clero de una imagen condicionada del laquopueblo ignoranteraquo y entre el mismo pueblo de su li-mitacioacuten en la vida eclesial Contra una mentalidad de este tipo ndashdifiacutecil de desarraigar puesto que se ha consolidado durante siglosndash estaacute el asumir que laquoel sacerdocio comuacuten y el sacerdocio ministerial o jeraacuterquico incluso diferentes por esencia y no tanto por grado sin embargo se complementan el uno al otro porque ambos participan cada uno a su manera del uacutenico sacerdocio de Cristoraquo (LG 10)

Esto significa que sacerdocio comuacuten y sacerdocio ministerial se ha-llan mu tuamente vinculados asiacute como se hallan vinculadas las funciones que radican en la doble forma de participacioacuten en el sacerdocio de Cristo Una Iglesia sinodal no puede prescindir de la relacioacuten de circularidad entre sensus fidei del Pueblo de Dios y magisterio de la Iglesia Sobre la base de este viacutenculo resulta posible dibujar una trama de relaciones entre los sujetos de la sinodalidad ndashPueblo de Dios Colegio de los obispos Obispo de Romandash que permita pensar no solamente el ordo Synodi y el ejercicio de la sinodalidad sino contemplaacutendolo maacutes de raiacutez en el rostro mismo de una Iglesia sinodal

de los demaacutes Al contrario en la Iglesia es necesario que alguno lsquose abajersquo para ponerse al servicio de los hermanos a lo largo del camino Jesuacutes ha constituido la Iglesia poniendo en su cumbre al Colegio apostoacutelico en el que el apoacutestol Pedro es la lsquorocarsquo (cfr Mt 1618) aquel que debe lsquoconfirmarrsquo a los hermanos en la fe (cfr Lc 2232) Pero en esta Iglesia como en una piraacutemide invertida la cima se encuentra por debajo de la base Por eso quienes ejercen la autoridad se llaman lsquoministrosrsquo porque seguacuten el significado originario de la palabra son los maacutes pequentildeos de todos Cada obispo sirviendo al Pueblo de Dios llega a ser para la porcioacuten de la grey que le ha sido encomendada vicarius Christi vicario de Jesuacutes quien en la Uacuteltima Cena se inclinoacute para lavar los pies de los apoacutestoles (cfr Jn 131-15) Y en un horizonte seme-jante el mismo Sucesor de Pedro es el servus servorum Dei iexclNo lo olvidemos nunca Para los disciacutepulos de Jesuacutes ayer hoy y siempre la uacutenica autoridad es la autoridad del servicio el uacutenico poder es el poder de la cruzraquo

80 Todaviacutea en el schema prior el tiacutetulo del n 23 se presentaba en estos teacuterminos Aequa-litas et inaequalitas membrorum Ecclesiae despueacutes cambiado justamente en el n 32 del tex-tus emendatus en De dignitate laicorum prout sunt membra Populi Dei cfr Acta Synodalia IIII 272

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22 Una Iglesia constitutivamente sinodal

Hablar de una laquoIglesia constitutivamente sinodalraquo puede parecer ex-cesivo inuacutetil y peligroso Excesivo por inuacutetil en cuanto que lo expresado por la sinodalidad viene manifestado maacutes y mejor con communio Exce-sivo por peligroso pues expondriacutea a la Iglesia a una deriva democraacutetica forzando a la jerarquiacutea a una loacutegica de representacioacuten desde abajo En realidad la sinodalidad pone de manifiesto algo que communio no expre-sa directamente el hecho ndashesencial para la Iglesiandash de laquocaminar juntosraquo porque la Iglesia no es otra cosa que ese laquocaminar juntosraquo del Rebantildeo de Dios por las sendas de la historia al encuentro de Cristo Dios como subraya el Papa despueacutes de haber dicho que laquoel camino de la sinodalidad es el camino que Dios espera de la Iglesia del tercer milenioraquo81

El punto de partida para la comprensioacuten de esta perspectiva es de nue-vo el Concilio El horizonte de la sinodalidad es la Iglesia como laquoplebs adunata de unitate Patris et Filii et Spiritus Sanctiraquo (LG 4) el redescu-brimiento de su origen permite comprender el dinamismo de la historia de la salvacioacuten de la que forma parte y las etapas que la llevan a la plena comunioacuten con Dios

Y establecioacute convocar a quienes creen en Cristo en la santa Iglesia que ya fue prefigurada desde el origen del mundo preparada admirablemente en la historia del pueblo de Israel y en la Antigua Alianza constituida en los tiempos definitivos manifestada por la efusioacuten del Espiacuteritu y que se consumaraacute gloriosamente al final de los tiempos Entonces como se lee en los Santos Padres todos los justos desde Adaacuten laquodesde el justo Abel hasta el uacuteltimo elegidoraquo seraacuten congregados en una Iglesia universal en la casa del Padre (LG 2)

La comprensioacuten de la Iglesia de Trinitate lejos de confinarla en una complacencia esteacuteril de los oriacutegenes en un alejamiento de la historia que la situariacutea fuera de la vida de los hombres determina maacutes bien la recupe-racioacuten de su dimensioacuten escatoloacutegica82 poniendo en primer plano la idea de Iglesia como pueblo en camino hacia el Reino Por otra parte si el modelo de la comunioacuten trinitaria al que la Iglesia tiene que conformarse se com-prende mirando atraacutes ndasho hacia arribandash al misterio de Dios su realizacioacuten

81 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

82 Cfr DARIO VITALI Lumen gentium Storia Commento Recezione Roma 2012 126-128

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plena llega caminando hacia delante conscientes de que sobre la tierra se halla laquoel germen y el principioraquo del Reino (LG 5) Lumen gentium insiste sobre este punto la Iglesia laquova peregrinando entre las persecuciones del mundo y los consuelos de Dios anunciando la cruz del Sentildeor hasta que vengaraquo (LG 8) asiacute como al laquopueblo de Israel seguacuten la carne peregrinando por el desierto se le designa ya como Iglesia el nuevo Israel que cami-nando en el tiempo presente busca la ciudad futura y perenne tambieacuten es designado como Iglesia de Cristoraquo (LG 9) laquopero mientras no lleguen los cielos nuevos y la tierra nueva donde habita la justicia (cf 2 Pe 313) la Iglesia peregrina lleva en sus sacramentos e instituciones pertenecientes a este tiempo la imagen de este siglo que pasa y ella misma vive entre las criaturas que gimen con dolores de parto en el presente en espera de la manifestacioacuten de los hijos de Diosraquo (LG 48)

La misma estructura de la constitucioacuten orienta en este sentido la Ec-clesia de Trinitate que se describe en el capiacutetulo I no es otra que el Pueblo de Dios que el capiacutetulo II presenta como laquopueblo mesiaacutenico [que] tiene por cabeza a Cristo [hellip] como condicioacuten la dignidad y la libertad de los hijos de Dios [hellip] por ley el nuevo mandato de amar como el mismo Cristo nos amoacute a nosotros [hellip] como fin el reino de Diosraquo (LG 9) Es como afirmar que la Iglesia si es constitutivamente el Pueblo de Dios en camino tambieacuten es constitutivamente sinodal el rasgo que distingue a este pueblo es el de laquocaminar conjuntamenteraquo todos hacia el Reino de Dios

Pero si la sinodalidad se redujese al caminar juntos entonces la na-turaleza constitutivamente sinodal de la Iglesia seriacutea bien poca cosa en el fondo se reduciriacutea a una variante de la communnio con un mayor eacutenfasis en el aspecto histoacuterico-salviacutefico Existe sin embargo otro as-pecto que emerge con fuerza del propio concilio y que empuja hacia una comprensioacuten sinodal de la Iglesia el Vaticano II ha terminado por fin con un verdadero deacuteficit pneumatoloacutegico despueacutes de siglos de olvido de la presencia y la accioacuten del Espiacuteritu Santo en la Iglesia83 abriendo

83 El motivo de este deacuteficit reside sobre todo en la llamada poleacutemica del Espiacuteritu Santo por parte de grupos y movimientos profeacuteticos de la Baja Edad Media que radicalizaron la tensioacuten entre Iglesia institucional e Iglesia espiritual incluso antes de la Reforma protestante y de su concepcioacuten de la Iglesia invisible Cfr Y CONGAR Credo nello Spirito santo I Rive-lazione ed esperienza dello Spirito parte segunda Brescia 1981 79-193 espec 180-186 Una lectura instructiva en esta perspectiva es H DE LUBAC La posteritagrave spirituale di Gioacchino da Fiore Milaacuten 1984 que hace una relectura de la historia del segundo milenio cristiano en Occidente a la luz de la tercera edad del Espiacuteritu anhelada por Joaquiacuten de Fiore

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gracias a tal recuperacioacuten entre otras cosas a la Ecclesia de Trinitate Aun trataacutendose de un breve resumen LG 4 marca la recuperacioacuten de una eclesiologiacutea pneumatoloacutegica en la que el Espiacuteritu laquoguiacutea la Iglesia a toda la verdad (cf Jn 16 13) la unifica en comunioacuten y ministerio la provee y gobierna con diversos dones jeraacuterquicos y carismaacuteticos y la embellece con sus frutosraquo

La perspectiva seguacuten la cual el Espiacuteritu laquocon la fuerza del Evangelio rejuvenece la Iglesia la renueva incesantemente y la conduce a la unioacuten consumada con su Esposoraquo encaja bien con el dinamismo de la Tradicioacuten descrito en el capiacutetulo II de Dei Verbum en su camino hacia el Reino laquola Iglesia en el decurso de los siglos tiende constantemente a la plenitud de la verdad divina hasta que en ella se cumplan las palabras de Diosraquo (DV 8b) Esto sucede porque laquoel Espiacuteritu Santo por quien la voz del Evangelio resuena viva en la Iglesia y por ella en el mundo va introdu-ciendo a los creyentes en la verdad plena y hace que la palabra de Cristo habite en ellos abundantementeraquo (DV 8c)

Situada entre el ya y el todaviacutea no entre la primera venida de Cristo y la plenitud en la Gloria la Iglesia estaacute llamada a un estado de escucha obediente Lo exige la concepcioacuten misma de la Tradicioacuten laquoque progresa en la Iglesia con la asistencia del Espiacuteritu Santoraquo (DV 8b) mientras que la idea de Revelacioacuten como suma de las verdades del credo impone ante todo la conservacioacuten del depositum fidei la dinaacutemica de diaacutelogo entre Dios y el hombre implica en cambio un proceso continuo de discerni-miento que se da en la escucha de lo que el Espiacuteritu Santo dice a la Igle-sia y consecuentemente mientras la idea de transmisioacuten del depositum fidei llevaba a enfatizar la funcioacuten uacutenica del magisterio la de Tradicioacuten viva llama en el dinamismo de la transmisioacuten a toda la Iglesia y a todos en la Iglesia

Surge aquiacute la parte del sensus fidei del Pueblo santo de Dios Todos en la Iglesia han recibido el Espiacuteritu Santo y laquotodos son instruidos por Diosraquo (Jn 645) laquoEn cuanto a vosotros la uncioacuten que de Eacutel habeacuteis reci-bido permanece en vosotros y no necesitaacuteis que nadie os ensentildee Pero como su uncioacuten os ensentildea acerca de todas las cosas ndashy es verdadera y no mentirosandash seguacuten os ensentildeoacute permaneced en Eacutelraquo (1 Jn 227) En esta precisa direccioacuten va la llamada de DV 8 al dinamismo de la Tradicioacuten ali-mentado por el conocimiento ndashaunque el texto latino dice perceptiondash que emana del estudio y de la contemplacioacuten pero tambieacuten de la experiencia de los creyentes en la que se puede reconocer el sensus fidei del Pueblo

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de Dios84 El cuadro dibujado por DV 8 para el progreso de la Tradicioacuten no vale soacutelo para el desarrollo de la doctrina toda la vida de la Iglesia ndashlaquotodo lo que ella es todo lo que ella creeraquondash entra en este dinamismo eclesial que involucra a todos cada uno seguacuten su propia capacidad y funcioacuten

23 Los momentos del proceso sinodal

En este marco eclesioloacutegico por tanto se basa con toda evidencia la posibilidad de un camino sinodal de la Iglesia en la escucha del Espiacuteritu por parte de todos en la Iglesia Pueblo de Dios y pastores Asiacute se ha ex-presado el Papa Francisco al respecto

Una Iglesia sinodal es una Iglesia de la escucha con la conciencia de que escuchar laquoes maacutes que oiacuterraquo Es una escucha reciacuteproca en la cual cada uno tiene algo que aprender Pueblo fiel Colegio episcopal Obispo de Roma uno en escucha de los otros y todos en escucha del Espiacuteritu Santo el laquoEspiacuteritu de verdadraquo (Jn 1417) para conocer lo que eacutel laquodice a las Iglesias (Ap 27)raquo85

Asume aquiacute toda su relevancia la relacioacuten de circularidad entre el Pueblo de Dios y sus pastores entre el sensus fidei y el magisterio ma-nifestado en los documentos conciliares iquestComo se hace posible esta escucha reciacuteproca del Pueblo de Dios Colegio de los obispos y Obispo de Roma Antes de articular las relaciones entre los sujetos que podriacutean estar condicionadas por relaciones de poder conviene fijar los diversos momentos en que se articula el proceso sinodal la profeciacutea el discerni-miento y la actuacioacuten

En virtud de la primaciacutea de la vida teologal afirmada a partir de LG II el primer momento es el de la profeciacutea que pertenece a todo el Pueblo de Dios por regalo del Espiacuteritu Santo donado a todos en el bautismo El deseo de Moiseacutes laquoiexclOjalaacute fuesen todos profetas en el Pueblo de Dios y quisiese Dios otorgarles el Espiacuterituraquo (Nm 1129) se ha realizado plenamente en la nueva Alianza con el regalo del Espiacuteritu a la Iglesia

84 En esta direccioacuten leiacutean DV 8 tanto Z ALSZEGHY - M FLICK Sviluppo del dogma cattolico Brescia 1967 como A M KOTHGASSER Dogmenenwicklung und die Funktion des Geist-parakleten nach den Aussagen des zweitn vatikanischen Konzils in Salesianum 3 (1969) 379-460 He sostenido la misma posicioacuten en D VITALI Sensus fidelium Una fun-zione ecclesiale di intelligenza della fede Brescia 1993

85 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

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En todos los bautizados desde el primero hasta el uacuteltimo actuacutea la fuerza santificadora del Espiacuteritu que impulsa a evangelizar El Pueblo de Dios es santo por esta uncioacuten que lo hace infalible laquoin credendoraquo (hellip) La presencia del Espiacuteritu otorga a los cristianos una cierta connaturalidad con las realida-des divinas y una sabiduriacutea que les permite captarlas intuitivamente aunque no tengan el instrumental adecuado para expresarlas con precisioacuten86

No se puede dar por sentado que se escucha al Espiacuteritu y se entiende lo que dice a la Iglesia si no se interroga y no se escucha al Pueblo de Dios que participa en la funcioacuten profeacutetica de Cristo este momento no es opcional en cuanto que el sensus fidei del Pueblo de Dios pertenece a una funcioacuten eclesial de inteligencia de la fe irreducible a otra funcioacuten in-cluida la del magisterio mismo87 La tradicioacuten teoloacutegica reconoce el fun-damento de esta funcioacuten de todos los bautizado no solo en 1 Jn 22027 sino tambieacuten en las promesas del Espiacuteritu en el cuarto Evangelio (Jn 1416s26 1526s 167-1112-15) y en uacuteltimo teacutermino en el regalo del Espiacuteritu en Pentecosteacutes que da cumplimiento a la profeciacutea de Joel laquoDe-rramareacute mi espiacuteritu sobre toda carne vuestros hijos e hijas profetizaraacutenraquo (Jl 31-5 retomado en Hch 216-18) Sobre la base de tal conviccioacuten los Padres han podido oponer a los argumentos de los herejes el christiano-rum populorum concordissima fidei conspiratio como afirmacioacuten cierta de la fe de la Iglesia88 El Papa Francisco se situacutea de nuevo en este cauce afirmando que laquoel camino sinodal comienza escuchando al Pueblo que incluso participa en la funcioacuten profeacutetica de Cristo (LG 12) seguacuten un principio preciado para la Iglesia del primer milenio Quod omnes tangit ab omnibus tractari debetraquo89

Pero no hay profeciacutea que no requiera discernimiento y este es el se-gundo momento del proceso sinodal que compete particularmente a los pastores laquoNo apagueacuteis el Espiacuteritu No menosprecieacuteis las profeciacuteas Exa-minadlo todo retened lo buenoraquo (1 Tes 519-21) Vale para esto la regla fijada por LG 12 para los carismas haciendo referencia expliacutecita a la maacutexima paulina laquoel juicio de su autenticidad y de su ejercicio razonable pertenece a quienes tienen la autoridad en la Iglesia a los cuales compete

86 FRANCISCO Exhortacioacuten apostoacutelica Evangelii gaudium (24-XI-2013) 11987 En relacioacuten con esto cfr el reciente documento de la COMISIOacuteN TEOLOacuteGICA

INTERNACIONAL El sensus fidei en la vida de la Iglesia (10-VI-2014) Roma 201588 S AGUSTIacuteN Epistola 194 31 in Opera omnia vol XXIII 29029189 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de

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ante todo no sofocar el Espiacuteritu sino probarlo todo y retener lo que es buenoraquo Estariacutea lejos de la verdad quien piense que el discernimiento consiste en una escucha pasiva de aquello que emerge del momento pro-feacutetico casi como si el magisterio estuviese subordinado a la instancia carismaacutetica el Espiacuteritu que laquoconduce la Iglesia a toda la verdadraquo (Jn 1714 LG 4) es el mismo que suscita la profeciacutea en el Pueblo santo de Dios y que conduce al magisterio a discernir en la vida de la Iglesia la voz del Espiacuteritu y a decidir la direccioacuten del camino eclesial y las condiciones para su aplicacioacuten

No hay por lo tanto contradiccioacuten entre los dos momentos sino com-plementariedad La obligacioacuten de escucha por parte del magisterio se pro-duce de cara a un ejercicio libre de la discrepatio en la que va impliacutecita necesariamente la determinatio la decisioacuten pastoral90 En el desarrollo de esta funcioacuten laquolos obispos actuacutean como auteacutenticos custodios inteacuterpretes y testigos de la fe de toda la Iglesia que deben saber distinguir atentamente de los flujos muchas veces cambiantes de la opinioacuten puacuteblicaraquo91

El tercer momento es el de la realizacioacuten de lo que ha sido decidido por los pastores que compromete a toda la Iglesia en la escucha y en la obediencia a la voz del Espiacuteritu Este momento pertenece a todos seguacuten su propia condicioacuten y funcioacuten en primis a cuantos han sido puestos como laquoprincipio y fundamento de unidadraquo en la Iglesia el obispo en su Iglesia y el Obispo de Roma en la Iglesia universal laquoque es tambieacuten el cuerpo de las Iglesiasraquo (LG 23) Se puede apreciar aquiacute un doble movimiento el de quien tiene autoridad en razoacuten de la cual actuacutea en los distintos ni-veles de la vida eclesial para que se ejecute la decisioacuten tomada y el del Pueblo de Dios sujeto maacutes bien al proceso de recepcioacuten laquomediante el cual un cuerpo eclesial hace verdaderamente suya una determinacioacuten que eacutel mismo no se ha dado reconociendo en la medida promulgada una regla que conviene a su propia vidaraquo92 Este proceso reintroduce la decisioacuten de

90 Retomo para esta explicacioacuten los teacuterminos que la tradicioacuten monaacutestica usa para descri-bir los momentos de la lectio divina junto a la secuencia maacutes conocida lectio-meditatio-con-templatio-oratio-actio existe una segunda que introduce entre el momento de la oratio y el de la actio otros tres momentos la consolatio la discreptio y la determinatio Es evidente que un discernimiento incapaz de asumir responsablemente una decisioacuten es fin en siacute mismo si esto es cierto en el plano personal lo es con mayor razoacuten en el discernimiento eclesial

91 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

92 Y CONGAR La reacuteception comme reacutealiteacute ecclesiologique in Revue de Sciences Philosophiques et Theacuteologiques 56 (1972) 370

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los pastores en el momento profeacutetico del Pueblo de Dios en un fecundo movimiento de circularidad entre los sujetos de la sinodalidad

Profeciacutea discernimiento y actuacioacutenrecepcioacuten son tres momentos con-secutivos con capacidad de darle al camino eclesial un gran dinamismo un movimiento de participacioacuten en el cual toda la Iglesia y todos en la Iglesia estaacuten implicados93 Naturalmente cada momento tiene valor en siacute mismo y puede ser realizado incluso independientemente de los otros es maacutes en situaciones de sufrimiento y prueba en la vida de la Iglesia ha sido necesa-rio ndashy tal vez seraacute necesariondash que esto suceda Pero no deberiacutea tratarse de la norma en la vida ordinaria del camino eclesial deberiacutea valer la unidad dinaacutemica de los tres momentos conscientes de que ninguacuten momento se basta por siacute mismo Cuando esto no suceda la profeciacutea tenderaacute a trans-formarse en desacuerdo el discernimiento en acto de poder la actuacioacuten en imposicioacuten al otro sobre todo cada sujeto tenderaacute a oponerse al otro y todo el proceso se reduciraacute al solo momento de la ejecucioacuten o aplicacioacuten concentrado en las manos de quien tiene poder en la Iglesia

24 El ejercicio de la sinodalidad

La Iglesia constitutivamente sinodal por tanto se funda sobre la cir-cularidad de profeciacutea discernimiento y actuacioacutenrecepcioacuten No se trata de multiplicar las estructuras ni las instituciones sino de hacer funcionar aquellas existentes seguacuten la secuencia de estos tres momentos en los que se articula el proceso sinodal La actual crisis de los organismos de co-munioacuten manifiesta hasta queacute punto este paso no es obvio ni hay que darlo por descontado la llamada insistente a la dimensioacuten solo consultiva de los siacutenodos y consejos de diverso tipo instituidos tras el Vaticano II demues-tra coacutemo la preocupacioacuten del legislador ha estado basada sobre todo en preservar el tramado institucional preexistente ciertamente no pensado seguacuten el principio de participacioacuten

El paso a una Iglesia sinodal implica una auteacutentica conversioacuten la disponibilidad por parte de los pastores de la Iglesia a aceptar que no son depositarios de la verdad ex officio sino el principio de unidad que garantiza el camino compartido de la escucha del Espiacuteritu capaces de llevar a la Iglesia a discernir cuaacutel es la voluntad de Dios para el presente

93 He intentado describir de modo maacutes extenso estos tres momentos en D VITALI Verso la sinodalitagrave 100-106

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Por esta razoacuten deberiacutea ser un elemento claro para quien tenga la potes-tad de activar el proceso sinodal ndashel Papa en la Iglesia Universal y el obispo para su Iglesiandash que su punto de partida obligatorio es siempre la escucha del Pueblo de Dios Tampoco deberiacutea convertirse en un ele-mento impuesto llevado a cabo por alguacuten grupo de expertos o por alguacuten departamento diocesano en lugar y en nombre del Pueblo de Dios94 si el sensus fidei pertenece a la totalidad de los bautizados nadie puede pretender subrogarlo95

La cuestioacuten es doacutende se da la posibilidad efectiva y concreta de escucha al Pueblo de Dios El Papa invirtiendo un esquema auacuten muy radicado en la vivencia eclesial afirma que el primer nivel para el ejercicio de la sino-dalidad se realiza en las Iglesias particulares96 Solo a partir de una portio populi Dei que encarne el Evangelio dentro de los ritmos de la Historia el Pueblo de Dios no se reduce a una masa confusa privada de lugar y medios para manifestar su consenso Una totalidad de bautizados que se identifique con la Iglesia universal queda inevitablemente expuesta a todas las dinaacutemicas que gobiernan y condicionan la opinioacuten puacuteblica Por el con-trario en la Iglesia local puede ponerse en praacutectica la singularis Antistitum et fidelium cospiratio por medio de un estrecho viacutenculo del rebantildeo con su pastor97 Si se asume el dato eclesioloacutegico derivado del Concilio sobre la Iglesia particular como laquoportio populi Dei confiado al cuidado pastoral del obispo con la cooperacioacuten de su presbiterioraquo (CD 11) inmediatamente se identifican tambieacuten los sujetos de la profeciacutea (la portio populi Dei) del dis-cernimiento (el obispo con el presbiterio o si se prefiere el presbiterio con y nunca sin el obispo) y de la actuacioacuten (todos y cada uno de los miembros de la Iglesia particular seguacuten su propia condicioacuten y funcioacuten)

94 En Evangelii Gaudium despueacutes de haber hablado del sensus fidei (EG 119) el Papa afirma laquoEn virtud del bautismo recibido cada uno de los bautizados cualquiera que sea su funcioacuten en la Iglesia y el grado de ilustracioacuten de su fe es un agente evangelizador y seriacutea in-adecuado pensar en un esquema de evangelizacioacuten llevado adelante por actores cualificados donde el resto del pueblo fiel sea soacutelo receptor de sus accionesraquo (EG 120)

95 En el discurso para la conmemoracioacuten del 50ordm Aniversario del Siacutenodo de los obispos dice el Papa laquoEsta es la conviccioacuten que me ha guiado cuando he deseado que el Pueblo de Dios fuera consultado en la preparacioacuten de la doble cita sinodal sobre la familiaraquo

96 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

97 Me refiero a cuanto se ha dicho en DV 10 cfr supra n 17 LG 25 afirma que laquolos obispos son los maestros auteacutenticos o sea los que estaacuten dotados de la autoridad de Cristo que predican al pueblo que les ha sido encomendado la fe que ha de ser creiacuteda y ha de ser aplicada a la vidaraquo

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En su discurso el Papa afirma que este es el medio para dar forma a una Iglesia sinodal a traveacutes da la valorizacioacuten de los organismos de comunioacuten ndashhoy tocados por un evidente cansanciondash como laquoocasioacuten para la escucharaquo del pueblo de Dios El obispo como laquoprincipio y fundamento de unidad de su Iglesiaraquo (LG 23) tiene la potestad de iniciar todo el proceso no soacutelo como accioacuten extraordinaria convocando un siacutenodo diocesano sino como forma habitual de camino eclesial Para activar a este nivel una sinodali-dad efectiva es necesario no obstante reconsiderar las relaciones entre los sujetos de la Iglesia local sobre todo entre el obispo y sus presbiacuteteros que la reflexioacuten teoloacutegica y canoacutenica no ha sustraiacutedo auacuten a una concepcioacuten demasiado extriacutenseca98

El Papa indica asimismo un segundo nivel de ejercicio de la sinodali-dad laquoel de las Provincias y las Regiones eclesiaacutesticas el de los Concilios particulares y muy especialmente el de las Conferencias episcopalesraquo99 En el primer milenio las exigencias de la communio habiacutean llevado a la Iglesia a estructurarse en circunscripciones territoriales a distintos niveles ndashsedes metropolitanas provincias y regiones eclesiaacutesticas patriarcadosndash en el centro de las cuales los metropolitas y los patriarcas ejerciacutean una autoridad efectiva sobre las Iglesias que integraban su jurisdiccioacuten una organizacioacuten que ha favorecido en gran manera el ejercicio de la sinodalidad Tambieacuten en nuestros diacuteas podriacutea retomarse la normativa que regula las Conferencias episcopales laquopara concretar auacuten maacutes a traveacutes de estos organismos las instancias intermedias de la colegialidad quizaacutes integrando y poniendo al diacutea algunos aspectos del antiguo ordenamiento eclesiaacutesticoraquo100

laquoEl uacuteltimo nivel es el de la Iglesia Universal Aquiacute el Siacutenodo de los obispos representando al episcopado catoacutelico se convierte en expresioacuten de la colegialidad episcopal dentro de una Iglesia enteramente sinodalraquo

98 El replanteamiento de la relacioacuten entre episcopado y presbiterado a la luz de las indi-caciones de LG 21 sobre la plenitud del sacramento del orden atribuido a los obispos puede encontrar un justo equilibrio uacutenicamente a traveacutes de una nueva formulacioacuten de la unioacuten entre el obispo y sus presbiacuteteros con el obispo como principio y fundamento de la unidad no solo de su rebantildeo sino tambieacuten de su presbiterio He intentado desarrollar esta idea en D VITALI Sacerdozio vescovo e presbiterio Un contributo teologico in La Rivista del Clero Italiano 885 (2007) 381-396

99 Cita aquiacute el CIC 83 cc 431-459100 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50ordm aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de

los obispos El Papa citando Evangelii Gaudium reitera que laquoen una Iglesia sinodal como ya afirmeacute no es conveniente que el Papa reemplace a los episcopados locales en el discerni-miento de todas las problemaacuteticas que se plantean en sus territorios En este sentido percibo la necesidad de avanzar en una saludable lsquodescentralizacioacutenrsquoraquo

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Se trata de un paso de capital importancia en el discurso del Papa pues a diferencia de una vulgata profusamente difundida atribuye al Siacutenodo de los obispos una funcioacuten colegial propia del Colegio de los obispos No puede comprenderse este traacutensito maacutes que en la perspectiva del texto conciliar seguacuten el cual laquoel cuerpo episcopal que sucede al Colegio de los apoacutestoles en el magisterio y en el reacutegimen pastoral maacutes auacuten en el que perdura continuamente el Cuerpo apostoacutelico junto con su Cabeza el Ro-mano Pontiacutefice y nunca sin esta Cabeza es tambieacuten sujeto de la suprema y plena potestad sobre la Iglesia universalraquo (LG 22)

Por otra parte el hecho de que laquola suprema potestad que tiene este Colegio sobre toda la Iglesia se ejerce de manera solemne en el Concilio ecumeacutenicoraquo (ibid) hace del todo evidente el nexo con la sinodalidad de la que el Concilio es la maacutexima expresioacuten Tampoco tal atribucioacuten de po-testad al Colegio debilita al primado en todo caso lo refuerza pues uacuteni-camente al Papa laquoen virtud de su oficio como Vicario de Cristo y pastor de toda la Iglesiaraquo (ibid) corresponde convocar presidir y confirmar los concilios En esta perspectiva se puede comprender cualquier otro acto sinodal en particular el que se atribuye al Siacutenodo de los obispos en el marco de todo lo que el concilio deciacutea de la potestad colegial que laquopuede ser ejercida por los obispos dispersos por el mundo a una con el Papa con tal que la Cabeza del Colegio los llame a una accioacuten colegial o por lo menos apruebe la accioacuten unida de eacutestos o la acepte libremente para que sea un verdadero acto colegialraquo (ibid)

El momento maacutes evidente y en cierto modo tambieacuten emblemaacutetico fue la firma de los documentos conciliares suscritos por Pablo VI y por los Padres con la siguiente foacutermula que da relevancia al caraacutecter sinodal del acto laquoNos Apostolica a Christo Nobis tradita potestate illa una cum Venerabilibus Patribus in Spiritu Sancto approbamus decernimus et statuimus et quae ita synodaliter statuta sunt ad Dei gloriam promulgari iubemusraquo101

101 La foacutermula se utiliza al final de cada documento aprobado cfr Concilium Oecu-menicum Vaticanum II Constitutiones Decreta Declarationes Cittagrave del Vaticano 1966 Aparece tambieacuten en la carta de clausura del concilio laquoMandamus autem ac praecipimus ut quae synodaliter in Concilio statuta sunt sancte et religiose ab omnibus Christifidelibus serventur ad Dei gloriam ad Sanctae Matris Ecclesiae decus et ad hominum universorum tranquillitatem et pacemraquo Pablo VI Litterae apostolicae quibus SS Concilio oecumenico finis imponatur in Concilium Oecumenicum Vaticanum II Constitutiones Decreta Decla-rationes 1102

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25 Sinodalidad colegialidad primado

El marco plasmado a partir del Vaticano II permite una reflexioacuten so-segada sobre el Siacutenodo de los obispos en vistas de una reforma del Ordo Synodi Maacutes allaacute de los procedimientos la cuestioacuten de mayor relevancia concierne a la naturaleza misma del Siacutenodo Sorprende la institucioacuten del Siacutenodo durante el mismo concilio102 poniendo en evidencia la existencia de signos de un debate sobre la colegialidad que habiacutea interesado viva-mente al aula No asombra por tanto que Pablo VI vinculase fuertemente al ejercicio del primado el nuevo organismo a cuyo auxilio el sucesor de Pedro puede recurrir laquopor el bien de la Iglesia universalraquo

Con el fin de dar a los obispos laquola posibilidad de participar maacutes abierta y eficazmente en Nuestra solicitud por la Iglesia universalraquo dice el Papa laquomotu proprio y en virtud de Nuestra autoridad apostoacutelica erigimos y constituimos en esta ciudad de Roma un consejo estable de obispos para la Iglesia universal sujeto directa e inmediatamente a Nuestra autoridad al que designamos con el nombre propio de Siacutenodo de los obisposraquo103

Se trata de una institucioacuten eclesiaacutestica central que representa a todo el episcopado catoacutelico perpetua por su naturaleza que en cuanto a la estructura desarrolla sus tareas de modo temporal y ocasional104 Tales tareas consisten por la naturaleza misma del Siacutenodo en laquodar informa-ciones y consejosraquo al Papa la potestad deliberativa soacutelo puede serle con-cedida por el Papa laquoal que corresponde en tal caso ratificar la decisioacuten del Siacutenodoraquo105

Apostolica sollicitudo estableciendo esmeradamente la naturaleza y la funcioacuten de este laquoconsejo permanente de sagrados pastoresraquo nunca hace referencia a la colegialidad ni siquiera en el caso de una eventual potestad deliberativa del Siacutenodo106 Este dato es elocuente en cuanto a la intencioacuten

102 La publicacioacuten del motu proprio Apostolica Sollicitudo es del 15 de septiembre de 1965 el diacutea siguiente a la apertura de la cuarta sesioacuten conciliar En el discurso de apertura el Papa preanuncioacute laquola institucioacuten deseada por este concilio de un Siacutenodo de los obispos que compuesto de presuli nombrados en su mayor parte por las conferencias episcopales con Nuestra aprobacioacuten seraacute convocado por el Romano Pontiacutefice seguacuten las necesidades de la Iglesia para su consulta y colaboracioacuten cuando eso le parezca a oportuno por el bien general de la Iglesiaraquo in EV 1 355

103 En el punto III se reitera que laquoel Siacutenodo de los obispos estaacute sometido directa e inme-diatamente a la autoridad del Sumo Pontiacuteficeraquo in EV 2 448

104 Apostolica Sollicitudo I in EV 2 445105 Ibid II in EV 2 447106 Ibid

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del pontiacutefice de instituir un organismo focalizado en la ayuda al primado prescindiendo de los teacuterminos de la Nota explicativa praevia ndashretomada sin embargo praacutecticamente al pie de la letra en el motu propio que en los puntos 3 y 4 incluso con todas las cautelas para la defensa del primado107 preveiacutea la posibilidad de una accioacuten del Colegio cual laquosujeto de supremo y pleno poder sobre la Iglesia universalraquondash

Naturalmente la aclaracioacuten de la Nota en la que se afirma que laquola distincioacuten no es entre el Romano Pontiacutefice y los obispos entendidos de manera colectiva sino entre el Romano Pontiacutefice tomado separadamente y el Romano Pontiacutefice junto con los obisposraquo108 ofrecioacute esta viacutea de esca-pe sin contradecir la afirmacioacuten de LG 22 aprobado por el aula acerca de laquoel orden de los obispos [que] incluso es en unidad con [una cum] su cabeza el Romano Pontiacutefice y nunca sin ella sujeto de plena y suprema autoridad sobre toda la Iglesiaraquo

En realidad las dos formulaciones no son alternativas a condicioacuten de que se entienda la primera como alusioacuten a la naturaleza y la segunda como alusioacuten al ejercicio de la colegialidad dicho de otra manera existen dos sujetos ndashel Papa y el Colegiondash que tienen plena y suprema potestad sobre la Iglesia pero el segundo no puede ejercer su potestad si no es cum Petro y nunca sine Petro cabeza del Colegio No se trata por tanto de dos formas diferenciadas de ejercicio del primado sino del ejercicio diferenciado de dos potestades supremas en el que la segunda no puede activarse maacutes que cum Petro y nunca sine Petro y solo consentiente Capite109

Se podriacutea decir parafraseando el Vaticano II que laquocomo el Papado es de institucioacuten divina del mismo modo lo es el Colegio tambieacuten este tiene sus derechos en virtud de tal institucioacuten que el Papa no tiene ni el derecho ni el poder de cambiarraquo110 Al Papa le corresponde en cambio el derecho y el deber de determinar los modos de ejercicio de la colegia-lidad para que este servicio no falte a la Iglesia se trata de un ulterior aspecto en el ejercicio del primado que emerge con la aclaracioacuten expresa

107 laquoPertenece al juicio del Sumo Pontiacutefice a quien se le ha confiado el cuidado de todo el rebantildeo de Cristo determinar seguacuten las necesidades de la Iglesia que cambian con los tiempos la forma como convenga realizar este cuidado de forma personal o colegiada El Romano Pontiacutefice procede seguacuten su propio cristerio al regular promover o aprobar la actuacioacuten del Colegio con miras al bien de la Iglesiaraquo Nota explicativa praevia punto 3 in EV 1453

108 Nota explicativa praevia punto 4 in EV 1454109 Ibid110 DH 3115

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de la doctrina sobre el Colegio que no puede ser tal sin su cabeza Tam-poco el hecho de que exista un ejercicio personal del primado excluye ni hace superfluo el ejercicio de la colegialidad Papa y Colegio no com-piten sino que estaacuten en una relacioacuten sineacutergica al servicio de la Iglesia cada uno seguacuten su propia funcioacuten Es maacutes la Iglesia es constitutivamente sinodal y activar la colegialidad como modalidad habitual de laquocuidado del rebantildeo de Cristoraquo deberiacutea ser la forma de ejercicio maacutes alta y legiacuteti-ma del primado sin que esto signifique una limitacioacuten o la cesioacuten de una cuota de potestad

La funcioacuten de cabeza del Colegio no solo no perjudica la funcioacuten per-sonal del Papa como laquovicario de Cristo y pastor de la Iglesia Univer-salraquo111 sino que la resalta poniendo en primer plano su ser laquoprincipio y fundamento perpetuo y visible de unidad tanto de los obispos como de la muchedumbre de los fielesraquo112 Por otro lado el hecho de que le corres-ponda al Papa determinar las modalidades de ejercicio de la colegialidad maacutes que un liacutemite impuesto a la potestad del Colegio deberiacutea aparecer como el requisito capaz de encaminar y garantizar el efectivo ejercicio de la colegialidad113

Representado debidamente en su naturaleza el Siacutenodo de los obispos puede constituir el lugar habitual de ejercicio de la colegialidad con la decisioacuten de llamar al episcopado al cuidado pastoral de la Iglesia no como una insercioacuten estable de obispos en el organigrama de la curia romana sino a traveacutes de un acto colegial de discernimiento que sepa in-dicar a la Iglesia la viacutea que hay que recorrer en el camino hacia el Reino de Dios Es esta la tarea maacutes propia de los pastores a quienes se dice laquoexaminadlo todo cuidadosamente y retened lo buenoraquo (1 Tes 519-21) En ese caso laquoel Siacutenodo de los obispos representando al episcopado ca-toacutelico se convierte en expresioacuten de la colegialidad episcopal dentro de una Iglesia del todo sinodal [hellip] Ello manifiesta la collegialitas affectiva

111 Nota explicativa praevia punto 3 in EV 1453112 LG 23 que cita el proemio de Pastor Aeternus in DH 3051113 El Papa especifica en su discurso pronunciado con ocasioacuten del 50ordm aniversario de la

institucioacuten del Siacutenodo laquoEl hecho de que el Siacutenodo actuacutee siempre cum Petro et sub Petro ndashpor tanto no soacutelo cum Petro sino tambieacuten sub Petrondash no es una limitacioacuten de la libertad sino una garantiacutea de la unidad En efecto el Papa es por voluntad del Sentildeor laquoel principio y fundamento perpetuo y visible de unidad tanto de los obispos como de la muchedumbre de fielesraquo Con esto enlaza el concepto de hierarchica communio empleado por el concilio Vaticano II los obispos se unen con el Obispo de Roma por el viacutenculo de la comunioacuten episcopal (cum Petro) y estaacuten al mismo tiempo jeraacuterquicamente subordinados a eacutel como cabeza del Colegio (sub Petro)

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que incluso puede convertirse en algunas circunstancias en lsquoefectivarsquo que une a los obispos entre ellos y con el Papa en la dedicacioacuten al Pueblo de Diosraquo114

Esto puede ocurrir a condicioacuten de que los sujetos del proceso sinodal ndashPueblo de Dios Colegio de los obispos y cabeza del Colegiondash esteacuten estrechamente vinculados y sus funciones se pongan en sinergia fecun-da De este modo todos en la Iglesia encuentran su lugar y desarrollan su cometido el Pueblo de Dios con el reconocimiento de su participa-cioacuten en la funcioacuten profeacutetica de Cristo (LG 12) el Colegio que puede concretar en el siacutenodo laquola solicitud por toda la Iglesiaraquo (LG 23) y el Papa que laquono estaacute por siacute mismo por encima de la Iglesia sino dentro de ella como bautizado entre los bautizados y dentro del Colegio episco-pal como obispo entre los obispos llamado a la vez ndashcomo Sucesor del apoacutestol Pedrondash a guiar a la Iglesia de Roma que preside en la caridad a todas las Iglesiasraquo115

26 El Siacutenodo de los obispos

Seguacuten la actual normativa canoacutenica116 el Siacutenodo de los obispos no se manifiesta como expresioacuten de la colegialidad episcopal al menos por tres motivos la escasa capacidad de representar al Colegio la composicioacuten de la asamblea sinodal y el caraacutecter meramente consultivo Estos motivos se encuentran estrechamente conectados entre siacute y determinan la naturaleza del Siacutenodo se resuelven partiendo de la colegialidad o como ayuda a la funcioacuten de primado del Papa

La legislacioacuten vigente es detallada y minuciosa al fijar las normas relativas a la eleccioacuten de los obispos participantes en el Siacutenodo por parte de las Conferencias episcopales Pero por maacutes que los mecanismos de eleccioacuten esteacuten inspirados en el criterio de proporcionalidad el hecho de que los electos no representen a los otros obispos priva a la asamblea sinodal de la capacidad de expresar el Colegio y sus actos del caraacutecter colegial pues esto podriacutea suceder uacutenicamente si actuase el Colegio en cuanto tal o una parte del mismo que lo representase de manera efectiva

114 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos

115 Ibid116 Cfr CIC 83 cc 342-348 y las disposiciones del Ordo Synodi Episcoporum del 29-

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y concreta Pero esto no ha sido nunca expresado ni en Apostolica solle-citudo ni posteriormente117

La dificultad de los obispos electos para representar al Colegio se obstaculiza profundamente con la norma introducida por el Coacutedigo que determina que la asamblea sinodal deba estar compuesta por laquouna mayoriacutea de obisposraquo118 Esta determinacioacuten implica que los actos de tal asamblea no se refieren al Colegio compuesto tan solo de obispos119 Naturalmente no falta quien cree que una asamblea compuesta de una mayor variedad con una cuota significativa de laicos hombres y muje-res representariacutea mejor a la Iglesia Pero maacutes allaacute de las dificultades que hay en fijar los criterios de representatividad del Pueblo de Dios habriacutea que preguntarse en tal caso queacute sentido tendriacutea entonces hablar de Siacutenodo de los obispos Se suele insistir en la normativa vigente sobre el caraacutecter consultivo del Siacutenodo

Huelga decir que si se tratase de una asamblea de obispos capaz de representar efectivamente al Colegio y dado que sus acciones seriacutean ma-nifestacioacuten de un laquosujeto de suprema y plena potestad sobre toda la Igle-siaraquo estas no podriacutean ser meramente consultivas Basta esto para llegar a la conclusioacuten de que el Siacutenodo de los obispos tal como estaacute concebido y como ha desarrollado su actividad en estos uacuteltimos cincuenta antildeos es con toda evidencia un organismo que ayuda al primado y no una expresioacuten del Colegio de los obispos Con esta configuracioacuten la normativa actual es completamente congruente en cuanto que regula la actividad de una asamblea compuesta en su mayoriacutea de obispos convocados laquopara prestar ayuda con su consejo al Romano Pontiacutefice colaborando en la salvaguardia y en el incremento de la fe y las costumbres la observancia y la consolida-

117 A menos que no se entienda en este sentido el empleo repetido del teacutermino raepre-sentansrepresentantes en el Ordo Synodo de 2006 que podriacutea abrir una viacutea a la solucioacuten del problema Se percibe en todo caso la debilidad de la normativa actual con respecto de la praxis maacutes antigua en la que los arzobispos los metropolitas y los patriarcas representaban efectivamente a los obispos con voto a nivel de metroacutepolis provincias y regiones eclesiaacutesti-cas y patriarcados Incluso fueron figuras importantes las de los legados que tuvieron una tarea efectiva de representacioacuten Por esto seriacutea muy uacutetil como dice el Papa reflexionar laquoso-bre las instancias intermedias de la colegialidad quizaacutes integrando y poniendo al diacutea algunos aspectos del antiguo orden eclesiaacutesticoraquo

118 Cfr CIC 83 c 346119 La objecioacuten no es vaacutelida naturalmente si el Siacutenodo de los obispos es un organismo

dirigido uacutenicamente a ayudar al Papa en el ejercicio de su ministerio en ese caso eacutel a su dis-crecioacuten puede establecer no solamente la composicioacuten sino tambieacuten cualquier otro aspecto que configure el organismo

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cioacuten de la disciplina eclesiaacutestica incluyendo el estudio de los problemas relativos a la actividad de la Iglesia en el mundoraquo120 Es oportuno adoptar el criterio de proporcionalidad al convocar a los obispos pero debe re-cordarse que el Papa podriacutea seguacuten su juicio cambiar reglas y criterios incluida la configuracioacuten misma del Siacutenodo hasta la eleccioacuten extrema de suprimirlo trataacutendose de un organismo al servicio del primado y del cual eacutel puede disponer seguacuten elija

Una vez clarificado este punto insistir sobre una mayor colegialidad resultariacutea fuera de lugar aunque el Papa atribuyera ndashsiempre o soacutelo en al-guacuten casondash capacidad deliberativa a la asamblea se tratariacutea de una conce-sioacuten de la potestad del primado y no de un ejercicio de la potestad colegial en sentido estricto la cual precisamente por pertenecer al Colegio no puede ser ni concedida ni revocada sino uacutenicamente regulada121 Muchas expectativas creadas sobre el Siacutenodo han provocado y provocaraacuten pro-fundas desilusiones porque se sostienen sobre la base del malentendido de que se trata de un organismo colegial al que se le otorgan atribuciones que debido a la actual normativa no le pertenecen como queda claro en los mismos caacutenones del Coacutedigo de Derecho Canoacutenico122

No es tanto la norma la que crea el conflicto sino su colocacioacuten el ca-piacutetulo sobre el Siacutenodo de los obispos aparece en la seccioacuten I de la parte II La constitucioacuten jeraacuterquica de la Iglesia La seccioacuten desarrolla la laquosuprema autoridad de la Iglesiaraquo subdividiendo la temaacutetica en dos artiacuteculos el relativo al Romano Pontiacutefice y el que se refiere al Colegio de los obispos Hallamos aquiacute el mismo nudo no resuelto de la Nota explicativa praevia la formulacioacuten en singular si bien por una parte asume al Colegio de los obispos en este aacutembito como laquosujeto de suprema y plena potestad sobre la Iglesia universalraquo123 retomando al pie de la letra LG 22 por otro lado lo aiacutesla completamente encuadrando su ejercicio en la forma solemne del concilio ecumeacutenico124 La composicioacuten iacutentegra de la parte II del Coacutedigo refuerza esta impresioacuten en cuanto que el canon de apertura se limita a repetir que laquoel Romano Pontiacutefice sucesor de Pedro y los obispos suce-

120 CIC 83 c 342121 Lo demuestra el caso del concilio ecumeacutenico que compete al Papa convocar y sus-

pender pero que una vez convocado manifiesta la misma potestad de asamblea de obispos que ejercen su potestad sobre la Iglesia siempre con y nunca sin su cabeza

122 Cfr CIC 83 cc 342-348123 CIC 83 c 336124 CIC 83 cc 337-341

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sores de los Apoacutestoles estaacuten vinculados entre ellosraquo125 sin aclarar que la suprema autoridad de la Iglesia pertenece a dos sujetos diferenciados el Papa y el Colegio de los obispos y sobre todo porque no relaciona el Siacutenodo de los obispos y las Conferencias episcopales con el Colegio en la perspectiva del ejercicio de la colegialidad126

Las razones que han llevado a los Papas a elegir un Siacutenodo de los obis-pos como organismo dirigido a la ayuda del primado son comprensibles el riesgo de comprometer elementos constitutivos de la Iglesia imponiendo un sistema de gobierno inspirado en el modelo de la sociedad civil pudo justificar las cautelas Pero la cuestioacuten es si por temor a debilitar el pri-mado no se avaloacute una configuracioacuten demasiado deacutebil de la colegialidad y en relacioacuten con ella del Siacutenodo de los obispos Tal eleccioacuten acaba por ahogar las enormes potencialidades de un organismo que si se concibiera como expresioacuten adecuada de la colegialidad ofreceriacutea la clave para la rea-lizacioacuten de la tarea de discernimiento eclesial necesario para conformar una Iglesia sinodal Por otra parte precisamente los acontecimientos de estos cincuenta antildeos dominados por una conflictividad que ha probado duramente al cuerpo eclesial poniendo con ello en riesgo la unidad invita a sondear posibilidades de este tipo traduciendo la colegialidad en formas concretas de ejercicio a traveacutes de decisiones compartidas en el discerni-miento cum Petro et sub Petro la asamblea sinodal puede ser el lugar y el instrumento para madurar por fin un camino compartido de Iglesia

27 Conclusioacuten abierta el Siacutenodo para una Iglesia del todo sinodal

Al aclarar las prerrogativas del sucesor de Pedro el Vaticano II insistioacute en el hecho de que la afirmacioacuten del primado no fuese en perjuicio de la laquopotestad ordinaria e inmediata de los obispos en sus dioacutecesisraquo al con-trario laquoesta misma potestad es afirmada reforzada y defendida seguacuten el

125 CIC 83 c 330126 El Siacutenodo aparece en el capiacutetulo II (can 342-348) antes de los organismos cla-

ramente vinculados al primado los cardenales (cap III can 349-359) la curia romana (cap IV can 360-361) los legados del Papa (cap V can 362-367) En teoriacutea podriacutea tratarse de un organismo ligado al Colegio puesto que se menciona justo despueacutes de los caacutenones sobre el Colegio de los obispos pero obstaculiza esta lectura el can 334 seguacuten el cual laquoen el ejercicio de su oficio el Romano Pontiacutefice es asistido por los obispos que pueden cooperar con eacutel de diferentes maneras una de las cuales es el Siacutenodo de los obisposraquo Las Conferencias episcopales aparecen luego nada menos que en el cap IV (can 447-459) de la seccioacuten II sobre las Iglesias particulares y sus agrupaciones imposible establecer cualquier viacutenculo de estas con el Colegio y con el ejercicio de la colegialidad

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dicho de Gregorio Magno lsquoMi honor es el honor de la Iglesia universal Mi honor es el soacutelido vigor de mis hermanos Entonces me siento realmente honrado cuando no es negado el honor debido a cada uno de ellosrsquoraquo127

Si la afirmacioacuten podiacutea parecer retoacuterica en el momento de definir el pri-mado de jurisdiccioacuten sobre la Iglesia universal hoy puede convertirse en profeacutetica si el obispo de Roma asume como tarea propia ndashy como su ho-norndash afirmar reforzar y defender al Colegio de los obispos que el concilio Vaticano II ha definido como laquosujeto de plena y suprema potestad sobre la Iglesiaraquo promoviendo un ejercicio efectivo de la colegialidad en una Igle-sia del todo sinodal Tal eleccioacuten no solo pondriacutea en acto el texto conciliar que hasta hoy ha quedado no resuelto en la sustancia sino que permitiriacutea desarrollar una comprensioacuten de la sinodalidad en liacutenea con el desarrollo de la Tradicioacuten del segundo milenio en Occidente que ha pasado por el proceso de aclaracioacuten respecto a la potestad del sucesor de Pedro llegando a su plena maduracioacuten en el Vaticano I y a la luz de aquel respecto a la potestad del Colegio de los obispos en el Vaticano II

A diferencia de quien ve posible la sinodalidad con independencia de la colegialidad128 estoy persuadido de que una viacutea catoacutelica hacia la sino-dalidad fiel a su propio camino en la historia no puede prescindir de aquel proceso maacutes bien tiene que mantenerlas unidas y establecer con una di-naacutemica de circularidad fecunda primado colegialidad y sinodalidad Esta solucioacuten estaacute en evidente continuidad con el concilio129 el cual ademaacutes de resituar la funcioacuten petrina dentro del Colegio tambieacuten ha insertado el ministerio jeraacuterquico dentro de la vida del Pueblo de Dios poniendo las bases para aquella singularis Antistitum et fidelium conspiratio que es conditio sine qua non de la sinodalidad En la unidad de los tres teacuterminos deberiacutea superarse la idea de cualquier competicioacuten entre Papa y Colegio puesto que los dos estaacuten al servicio del Pueblo de Dios cada uno seguacuten su propia naturaleza y funcioacuten

Tras haber pasado cincuenta antildeos del final del concilio ya no tiene sentido posponer un ejercicio pleno de la colegialidad por miedo a que resulten perjudicadas las prerrogativas del primado que quedan intactas tambieacuten en el marco de una Iglesia sinodal Es tiempo de traducir en mo-

127 CONCILIO VATICANO I Const dogmaacutetica Pastor aeternus cap 3 DH 3061128 Cfr por ejemplo E CORECCO Ontologia della sinodalitagrave in G BORGONOVO -

A CATTANEO (coord) Ius et communio Casale Monferrato 1997 83-84129 Cfr supra sectsect 23-6

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dalidades operativas el hecho de que laquoel Romano Pontiacutefice en el cumpli-miento del oficio de supremo Pastor de la Iglesia siempre estaacute vinculado en la comunioacuten con los otros obispos mejor dicho con toda la Iglesiaraquo130 laquoEl derecho a determinar seguacuten las necesidades de la Iglesia el modo personal o colegial de ejercer tal oficioraquo131 maacutes que una baza en defensa del primado deberiacutea ser entendida como garantiacutea de una activacioacuten efecti-va de la doble modalidad en que se articula el gobierno de la Iglesia Que la eleccioacuten de una modalidad o de otra no esteacute vinculada normativamente sino que dependa de un principio discrecional por el bien de la Iglesia no puede convertir de ninguacuten modo en accesoria la funcioacuten del Colegio que existe statuente Domino132 En otras palabras laquoordenar promover y apro-bar el ejercicio colegial teniendo como objetivo el bien de la Iglesiaraquo133 es una tarea que corresponde en conciencia al Papa quien tiene que rendir cuentas no a los hombres sino a Dios mismo

De este modo eacutel que estaacute por encima ndasho quizaacutes sea mejor decir delan-tendash del Colegio en virtud de la funcioacuten primada con la potestad de activar y de cerrar ndashtambieacuten primero si lo quisierandash la accioacuten colegial puede estar asimismo con y entre los otros obispos dentro del Colegio hermano entre los hermanos obispos en escucha del uacutenico Espiacuteritu sin que esto en ninguacuten modo vaya a perjudicar el primado134

En esta tarea de convocar a los obispos a la accioacuten colegial (cfr LG 22) el Papa puede reconocerle al Siacutenodo de los obispos capacidad colegial configuraacutendolo como expresioacuten adecuada del Colegio de los obispos y no soacutelo como un organismo que asiste al primado En ese caso la asamblea sinodal no deberiacutea estar compuesta en su mayoriacutea de obispos135 sino solo

130 CIC 83 c 333 sect 2131 Ibid132 Se trata de la frase utilizada en LG 22 para fundar sobre la base de la unidad entre

Pedro y los otros apoacutestoles la existencia del Colegio de los apoacutestoles del cual se hace depen-der pari ratione la existencia del Colegio de los obispos basado en la unioacuten entre el Sucesor de Pedro y los otros obispos Manteniendo este paralelismo las mismas argumentaciones usadas para fundar la institucioacuten divina del primado en virtud de la sucesioacuten petrina tambieacuten valen para el Colegio de los obispos sucesores de los apoacutestoles

133 Nota explicativa praevia punto 3 in EV 1 453134 Merece la pena citar de nuevo el discurso del Papa en la conmemoracioacuten del 50ordm ani-

versario de la institucioacuten del Siacutenodo de los obispos laquoEstoy convencido de que en una Iglesia sinodal tambieacuten el ejercicio del primado petrino podraacute recibir mayor luz El Papa no estaacute por siacute mismo por encima de la Iglesia sino dentro de ella como bautizado entre los bautizados y dentro del Colegio episcopal como obispo entre los obispos llamado a la vez ndashcomo Sucesor del apoacutestol Pedrondash a guiar a la Iglesia de Roma que preside en la caridad a todas las Iglesiasraquo

135 Cfr CIC 83 c 346

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de obispos No deberiacutea ser difiacutecil encontrar criterios y procedimientos aptos para dar a la asamblea sinodal la capacidad de representar ndashy pre-sentarndash al Colegio criterios que seraacuten tanto maacutes convincentes cuanto maacutes representativa conviertan la asamblea de la Ecclesia tota136

Tampoco seriacutean necesarias grandes alteraciones de la normativa vigen-te para poner en praacutectica esta forma de sinodalidad Todo el camino sinodal se desarrollariacutea siguiendo las condiciones indicadas por el Papa Francis-co para los distintos niveles de ejercicio de la sinodalidad y de hecho ya puestos en marcha en los dos uacuteltimos siacutenodos Bastariacutea con articular el acontecimiento sinodal seguacuten los tres momentos anteriormente descritos la escucha del Pueblo de Dios el discernimiento por parte de la asamblea sinodal y la realizacioacuten por parte del entero cuerpo eclesial

Inicialmente seriacutea necesario formalizar la escucha del Pueblo de Dios como primer momento del Siacutenodo el instrumento de consulta ya usado en el pasado por los Papas para verificar el consensus fidelium respecto a cuestiones doctrinales puede ser el medio maacutes idoacuteneo para implicar activamente a todos los bautizados en el proceso sinodal137 Despueacutes de la parte del Pueblo de Dios viene la de los pastores reunidos en asamblea sinodal y llamados al discernimiento para sentildealar las decisiones necesa-rias que sirvan al camino de la Iglesia

Insisto en reiterar que este es el momento propio de los pastores solo bajo tal condicioacuten es posible pasar de un acto consultivo a uno colegial y solo a condicioacuten de que se deacute tal paso es posible que el discernimiento del

136 En otras palabras se deberiacutea hacer evidente en los actos colegiados aquella corres-pondencia entre communio fidelium communio Ecclesiarum y communio hierarchica que se pone de manifiesto en el Colegio incluso la funcioacuten petrina sale ganando puesto que el Papa se vuelve principio y fundamento visible de la unidad tanto de la communio Episco-porum como de la communio Ecclesiarum y de la communio fidelium tal como se pone de re-lieve en LG 23 Naturalmente siguiendo este enfoque seriacutea necesario replantearse la funcioacuten de los obispos titulares verificando de queacute modo una presencia excesivamente dilatada de estos en el Colegio no solo haga problemaacutetica la capacidad del Colegio mismo para represen-tar a la Iglesia sino que acabe por debilitar el ministerio episcopal fundado en la Tradicioacuten sobre el viacutenculo esponsal del obispo con su Iglesia

137 Es evidente que las formas de consulta deben repensarse y perfeccionarse para sal-vaguardar a los bautizados de los grupos de comunicacioacuten y de presioacuten pero la consulta sigue siendo una oportunidad extraordinaria de participacioacuten en la loacutegica de una corresponsabili-dad que le reconoce al Pueblo de Dios un lugar en el proceso sinodal Por otro lado la uacutenica posibilidad de ir maacutes allaacute de una posicioacuten amorfa de la opinioacuten puacuteblica es una formacioacuten continua de los bautizados en el sensus christianus esta formacioacuten es posible uacutenicamente en una experiencia continua de participacioacuten que encuentra su nuacutecleo maacutes favorable en las estructuras de la Iglesia particular Es como decir que un crecimiento del sensus fidei lleva impliacutecito un camino sinodal de las Iglesias particulares

el siacutenoDo De los obispos al serViCio De una iglesia sinoDal

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Siacutenodo tenga valor sinodal es decir que sea vinculante para toda la Igle-sia138 En el caso de que las decisiones de la asamblea asumiesen caraacutecter sinodal toda la Iglesia y todos en la Iglesia estariacutean llamados a observar-las y a ponerlas en acto cada uno seguacuten su propia condicioacuten y funcioacuten139 Lo importante es que los tres momentos se distingan debidamente y con maacutergenes de tiempo evitando superposiciones que acabariacutean por originar procesos confusos y decisiones no suficientemente verificadas De este modo seriacutea de veras evidente que laquoen una Iglesia sinodal el Siacutenodo de los obispos es la manifestacioacuten maacutes evidente de un dinamismo de comunioacuten que inspira todas las decisiones eclesialesraquo140

138 Se puede objetar que las proposiciones del Siacutenodo o cualquier otro documento que proceda de este no tienen caraacutecter vinculante y que cualquier accioacuten de este depende de la aprobacioacuten del Papa quien normalmente se reserva la facultad de promulgar una exhortacioacuten postsinodal En su discurso del 50deg aniversario del Siacutenodo el Papa Francisco dice sin embargo que laquoel camino sinodal culmina en la escucha del Obispo de Roma llamado a pronunciarse como Pastor y Doctor de todos los cristianos no partiendo de sus convicciones personales sino como supremo testigo del fides totius Ecclesiae lsquogarante de la obediencia y la conforma-cioacuten de la Iglesia a la voluntad de Dios al evangelio de Cristo y a la Tradicioacuten de la Iglesiarsquoraquo Este es el uacutenico modo de dar valor a los actos del Siacutenodo de los obispos en la normativa vigente Seriacutea diferente si la asamblea sinodal tuviese caraacutecter colegial en dicho caso el Papa podriacutea elegir la misma modalidad de reconocimiento de los documentos conciliares firmando una cum Patribus los decretos sinodales o incluso remitieacutendolo a todos los obispos para que se convierta en acto colegial compartido por todos los miembros del Colegio

139 En el momento de la puesta en praacutectica encuentra su lugar tambieacuten la Curia romana Entre otras cosas en la perspectiva de una Iglesia constitutivamente sinodal la reforma de la Curia de la que tanto se habla podriacutea orientarse en esta direccioacuten reconfiguraacutendose como estructura al servicio de la Iglesia universal Puesto que depende del Papa como principio y fundamento de unidad de la communio fidelium de la communio Ecclesiarum y de la com-munio Episcoporum laquoordenar promover y aprobar el ejercicio colegialraquo (Nota explicativa praevia n 3) la funcioacuten subordinada de la Curia (que es y se mantiene como oacutergano ejecu-tivo) se desarrollariacutea en el servicio a la accioacuten tanto primada como colegial Por otro lado si la verdad y la credibilidad de una eleccioacuten se miden tambieacuten seguacuten la energiacutea que se invierte para ponerla en acto la estructura de servicio a la Iglesia que sea constitutivamente sinodal no puede ser solamente la Secretariacutea del Siacutenodo frente al nuacutemero de congregaciones y consejos delegados al servicio del primado Este gap no puede y no tiene que ser solucionado con la creacioacuten de una estructura paralela a la Curia sino con la reconversioacuten de la Curia romana con debidas cesiones de competencias a organismos no centralizados como estructura al servicio tambieacuten de la sinodalidad En ese caso despueacutes de todos los discursos sobre la re-forma de la Curia un organismo que muchos consideran un problema podriacutea transformarse en recurso y favorecer la afirmacioacuten de una Iglesia sinodal

140 FRANCISCO Conmemoracioacuten del 50deg aniversario de la institucioacuten del Siacutenodo de los Obispos

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Mater Clementissima 1 (2016) 59-120

El hombre es sujeto y persona La relacioacuten entre trascendentalidad

y antropologiacutea en Karl Rahner

Juan Manuel CabieDas teJero1

Universidad Pontificia de Meacutexico

resuMen El meacutetodo trascendental que guiacutea el proyecto teoloacutegico de Karl Rahner per-mite seguir proponiendo hoy la revelacioacuten del Dios de Jesucristo como espacio de correspondencia entre la compleja loacutegica de la existencia humana (fenoacutemeno) y su vocacioacuten a la Verdad (fundamento) entre la vida personal del hombre (experiencia subjetiva y realizacioacuten histoacuterica) y la confesioacuten de fe Este artiacuteculo pretende sin-tetizar el modo en que la obra de Karl Rahner confirma que no se puede pensar la salvacioacuten del hombre como pura apetencia del espiacuteritu sino como posibilidad de autotrascendencia teologal en el seno de una naturaleza contingente (corpoacuterea mun-dana libre mortal y capaz de amor)

palabras ClaVe Karl Rahner antropologiacutea trascendental sujeto persona filosofiacutea moderna

abstraCt laquoMan is subject and person Karl Rahner on relationship between trans-cendentality and anthropologyraquo Even today the transcendental Method that gui-des Karl Rahnerrsquos theological Project is able to propose Godrsquos Revelation in Jesus Christ as correspondence between complex logic of human existence (phenomenon) and its vocation to Truth (foundation) between personal life (subjective experience and historical realization) and the confession of Faith This paper draws a sketch of Rahnerrsquos work to confirm that human salvation can not be thought as pure spiritual appentency but as possibility of theological auto-transcendence within contingent nature (corporeal worldly free mortal and capable of love)

KeyworDs Karl Rahner transcendental Anthropology Subjet Person modern Philo-sophy

1 Miembro de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos En 2012 obtuvo el doctorado en Teologiacutea por la Pontificia Universitagrave Gregoriana (Roma) Ha publicado el libro laquoLa persona es criatura amorosa Perspectivas para una antropologiacutea teoloacutegicaraquo Valencia 2013 ademaacutes de varios artiacuteculos en revistas especializadas Actualmente es profesor en la Facultad de Teologiacutea de la Universidad Pontificia de Meacutexico Entre 2008 y 2012 fue vice-rrector del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma

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MArco y propoacutesito

Estimulada fundamentalmente por el neo-kantismo y la fenomenolo-giacutea la filosofiacutea contemporaacutenea ha valorado la necesidad de laquovolver sobre lo trascendental esto es sobre lo a priori considerado en su relacioacuten con la experienciaraquo2 y de indagar por tanto en queacute medida el yo del laquoyo piensoraquo habriacutea de ser considerado no un entendimiento puro sino una primera persona

Lejos de que tengamos que deducir el principio de la posibilidad de la experiencia del hecho indubitable de la conciencia de siacute como lo habiacutean pensado Descartes y los idealistas fichteanos el anaacutelisis trascendental nos obliga a invertir estas posiciones y no admitir la unidad de conciencia maacutes que a tiacutetulo de correlato copernicano de la unidad de la experiencia posible El cogito no se salva maacutes que perdieacutendose en su propia actividad 3

Se salva salvando su circunstancia diriacutea Joseacute Ortega y Gasset 4 para quien desde los inicios de su visioacuten de la razoacuten como razoacuten vital el su-jeto es siempre espectador (yo) inserto en el flujo del paisaje de su vida Espectador desinteresado (trascendente) mas no espectador indiferente que pueda encaramarse a una atalaya que lo ponga a salvo del riesgo in-herente de comprometerse con el mundo que lo solicita laquocon sus taacutecitas fisonomiacuteas de humildad y anheloraquo5 Husserl Scheler Heidegger Ortega etc participan con los necesarios matices de sensibilidad de un mis-mo intereacutes por profundizar en la actividad del pensar que nos constituye mas no como propiedad de un sujeto puramente formal y autoacutenomo sino como expresioacuten de su concreta forma de ser ser en el mundo (temporal encarnado relacionado mortalhellip)

Lejos de ahondar la distancia entre teologiacutea y filosofiacutea esta cualifi-cacioacuten moderna de la instancia subjetiva se revela referente ineludible para restituir a la inteligencia teoloacutegica aquel espacio reflexivo que como contempla ahora la filosofiacutea es el hombre en cuanto ser personal El pen-

2 M DUFRENNE La nocioacuten de laquoa prioriraquo Salamanca - Meacutexico DF 2010 12 El autor recusa en esta obra una concepcioacuten demasiado formal de lo trascendental proponiendo que entre lo singular (constituido) y lo universal (constituyente) no existe oposicioacuten es decir la trascendentalidad del sujeto (conocimiento y voluntad) ha de aprehenderse como factor defini-torio de su naturaleza ya nos refiramos a la misma en su caraacutecter corpoacutereo social o mundano

3 Ibid 29-30 Estas palabras son cita a su vez de J VUILLEMIN Lrsquoheacuteritage kantien et la reacutevolution copernicienne Fichte Cohen Heidegger Paris 1954 186

4 J ORTEGA Y GASSET Meditaciones del Quijote 775 Ibid 65

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samiento moderno insta y provoca el replanteamiento de la fundacioacuten an-tropoloacutegica del saber de Dios El liacutemite de la visioacuten neo-escolaacutestica no residiacutea en la reivindicacioacuten de un conocimiento natural de Dios sino en su modelado como extriacutenseco al saber de la fe La recuperacioacuten de la unidad del fin uacuteltimo del hombre no implica la remocioacuten de aquel conocimien-to sino la restitucioacuten de su cualidad teologal es decir la pregunta por la identidad del hombre como destinatario y por tanto co-protagonista de la accioacuten salviacutefica de Dios en la historia

Una atencioacuten maacutes cuidadosa a la dinaacutemica dialogal de la relevacioacuten (cfr DV 2) al hondo alcance humanizador del dogma de la encarna-cioacuten (cfr GS 22) y al caraacutecter sacramental de la naturaleza y misioacuten de la comunidad de los creyentes (cfr LG 1) ha llevado a la teologiacutea a pro-poner una antropologiacutea teoloacutegica que junto a la irrenunciable solicitud por las exigencias del comprender y querer humano como apertura ilimi-tada al Ser (a priori) preste decidida atencioacuten a la trascendentalidad de los interrogantes fundamentales que emergen de la existencia histoacuterica del hombre (a posteriori) al hacer experiencia de siacute mismo en el seno de lo real circundante La especiacutefica vivencia humana del cuerpo de la rela-cioacuten con el otro o de la muerte y el tiempo entre las experiencias funda-mentales disentildea una meta-antropologiacutea que permite reconocer el hondo arraigo en la historicidad humana de la experiencia religioso-subjetiva de Dios de la dinaacutemica del don de la gracia y sobre todo del misterio de la Encarnacioacuten de Dios en Jesucristo

La influyente teologiacutea trascendental del teoacutelogo alemaacuten Karl Rahner (1904-1984) ndashque hacemos objeto de estas paacuteginasndash nos brinda la oportu-nidad de acercarnos a esta comunidad de ideas que la teologiacutea catoacutelica del siglo XX comparte con la filosofiacutea centroeuropea Tanto a partir ante todo de su teologiacutea de la gracia como de su esbozo de una cristologiacutea existen-cial o laquocristologiacutea de buacutesquedaraquo6 Rahner insta a la antropologiacutea teoloacutegica a integrar una antropologiacutea metafiacutesica de tipo trascendental como espacio que permite esclarecer el viacutenculo entre la apertura constitutiva del hom-bre a Dios y su experiencia subjetiva personal esto es la asuncioacuten de lo que denomina su laquonaturaleza efectivaraquo7 o laquoesencia uacutenica y concretaraquo8 en

6 Cfr K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 345-348 Id Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica 63-66

7 Id Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET (Escritos de Teologiacutea) I 3058 Id Naturaleza y gracia in ET IV 218

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el dinamismo de su reflexividad esencial en cuanto apertura ilimitada al Ser en suma una antropologiacutea que valida lo noeacutetico (universalidad) en la experiencia concreta de una historia de libertad amor y peacuterdida de siacute (sin-gularidad) como principales existenciales de una naturaleza efectivamente abierta a aquella plenitud personal de ser que se auto-comunica efectiva-mente en Cristo como relato de Amor9 Este es el modo en que la antropo-logiacutea teoloacutegica puede evitar la asimilacioacuten reductiva de la fe a su medio trascendental asiacute como profundizar el calado histoacuterico del acontecer de la relacioacuten teologal sin prejuicio de su verdad salviacutefica uacuteltima

Cuando un teoacutelogo como Juan Alfaro cercano a la sensibilidad de Rah-ner delinea el meacutetodo de trabajo que pretende seguir en la uacuteltima obra en que estudia a fondo la mutua implicacioacuten entre la cuestioacuten del hombre y la cuestioacuten de Dios manifiesta su intencioacuten de asumir para su examen una triple determinacioacuten existencial en cuanto se parte de la existencia vivida por el hombre en el acto mismo de existir y de la laquoprecomprensioacutenraquo im-pliacutecita en esta experiencia fenomenoloacutegica en cuanto la descripcioacuten fe-nomeacutenica deja que la realidad se laquomuestreraquo y desvele asiacute las indicaciones y preguntas concretas implicadas en ella trascendental en cuanto busca los presupuestos ontoloacutegicos necesarios para la comprensioacuten de la experiencia manifestada en el fenoacutemeno laquoMeacutetodo trascendentalraquo no quiere decir sino proceder seguacuten las exigencias del comprender humano en su dinamismo de preguntar y buscar siempre ulteriormente La legitimidad de las cues-tiones concretas se justifica por su necesidad de comprender la realidad10

En efecto laquoel horizonte trascendental es en cierto modo un sistema a priori de coordenadas dentro del cual se le sentildeala al objeto temaacutetico el sitio que le hace comprensibleraquo11 En antropologiacutea teoloacutegica por ejemplo per-mite fundar el significado universal del don de la gracia como determina-cioacuten de la ex-centricidad que es propia de la naturaleza humana y no como un antildeadido extriacutenseco a la misma No obstante esta comprensioacuten de la gracia divina queda expuesta a un cierto formalismo si deja de interrogarse a fondo acerca de su relacioacuten con la experiencia efectiva del hombre como responsable de la circunstancia que habita O dicho con rigor teoloacutegico sobre el sentido y consecuencias que tiene laquola historizacioacuten de la natura-

9 Cfr E REGAN Not merely the cognitive subject Rahnerrsquos theological anthropolo-gy in P CONWAY-F RYAN (eds) Karl Rahner Theologian for the Twenty-first Century Oxford-Bern 2010 121-140

10 J ALFARO De la cuestioacuten del hombre a la cuestioacuten de Dios Salamanca 2006 25 11 K RAHNER Sobre la unidad del amor a Dios y el amor al proacutejimo in ET VI 255

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leza humana por la cristologiacutea por la manifestacioacuten de un hombre nuevo frente a la forma primitiva del hombreraquo12 Por ello junto a los contrastados beneficios que aporta el anaacutelisis trascendental a la antropologiacutea teoloacutegica como reconocimiento de que el hombre laquono puede ser nunca subjetiva y ontoloacutegicamente indiferente con relacioacuten a su orientacioacuten sobrenaturalraquo13 tanto la estructura responsorial de la revelacioacuten como el desarrollo cientiacute-fico-cultural del momento presente demandan a la teologiacutea no desatender la esfera maacutes concreta del fenoacutemeno personal humano sus preguntas esen-ciales la experiencia dramaacutetico-vital comuacuten a cada hombre en definitiva esas dimensiones donde se juega baacutesicamente la auto-comprensioacuten del sujeto contemporaacuteneo el significado de la disyuntividad corpoacuterea (mas-culinidad y feminidad) en su estrecha vinculacioacuten con la vida espiritual afectiva o biograacutefica la nativa dimensioacuten relacional de la vida humana y el alcance de significado que ostenta en la constitucioacuten ontoloacutegico-vital del hombre el variado espectro de relaciones interpersonales que este entabla en su historia la pregunta por el discurrir de la propia biografiacutea personal (ante el acontecimiento de la muerte) como dinamismo de auto-realiza-cioacuten (ser) que determina a su vez el modo en que ha de orientarse la praxis vital (deber ser) etc Y todo ello en la conciencia de que la atencioacuten a es-tos caracteres y estructuras antropoloacutegicas que se organizan en torno a la persona como punto focal debe superar la tentacioacuten del puro inventario fenomenoloacutegico y conducir a una mayor explicitacioacuten del horizonte tras-cendente ante el que el hombre realiza su intransferible historia personal como historia con sentido laquoEs preciso todaviacutea elaborar ahondar y traspa-sar metafiacutesicamente ndashsentildeala Emerich Corethndash el rico material sacado a la luz por el desarrollo maacutes reciente del pensamiento introducieacutendolo asiacute en la totalidad de una metafiacutesica cristianaraquo14 En este sentido el concepto per-sona ofrece la posibilidad de una ndashllameacutemoslandash propedeacuteutica fundamental a la antropologiacutea teoloacutegica como develacioacuten en lo concreto de la verdad

12 W PANNENBERG Fundamento cristoloacutegico de una antropologiacutea cristiana in Con-cilium 86 (1973) 413 Es la indagacioacuten sobre el sentido cristoloacutegico de la laquopersoneidadraquo el que deberiacutea servir de guiacutea a la teologiacutea cristiana ndashpor tanto de modo distinto a como lo hicieron el mismo Boecio y despueacutes de eacutel la tradicioacuten siguiendo el cauce de la filosofiacutea griegandash para llegar a saber queacute significa para el hombre ser racional ser libre ser capaz de amor etc laquoen cuanto estaacute destinado en su ser personal a la semejanza con Dios la cual se ha manifestado en la unidad de Dios y el hombre en Jesucristoraquo (Ibid 416)

13 K RAHNER Existencial II in SM (Sacramentum Mundi) III 6714 E CORETH Quehacer de la metafiacutesica in Crisis 21-24 (1959) 18

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antropoloacutegica universal de la apertura trascendental del hombre a Dios que es su origen y destino

La criacutetica ha llegado a identificar en la teologiacutea de Karl Rahner una laquoantropologiacutea excesivamente formal y abstractaraquo15 que sufre de una espe-cie de neutralidad fenomenoloacutegica al estar limitada por su matriz metafiacute-sico-trascendental para una interpretacioacuten maacutes integral de la experiencia humana en su interaccioacuten con el misterio divino iquestRige el meacutetodo tras-cendental una epistemologiacutea antropoloacutegica reductiva respecto del modelo que preside la experiencia de aquellos que creen en Cristo y viven en Eacutel Un disciacutepulo ilustre de Rahner Johann Baptist Metz propone romper el laquocerco maacutegico del trascendentalraquo mediante una dogmaacutetica histoacuterico-vital biograacutefica narrativa testimonialhellip no prevenida ante las contradicciones de la historia preocupada por redefinir la identidad testimonial del sujeto creyente frente al sujeto exaltado del cogito cartesiano y el sujeto humilla-do por la hermeneacuteutica de la sospecha16

No obstante lo ajustado de esta criacutetica dado el riesgo real ndashdel que Rahner era muy conscientendash que implica asumir el meacutetodo trascendental en teologiacutea17 proponemos visitar de nuevo la obra del teoacutelogo alemaacuten para mostrar su apuesta por una subjetividad que ante todo recela de su caraacutecter autaacuterquico y se percibe irrenunciable e iacutentimamente abierta a la trascendencia apertura que ciertamente no logra verificarse por comple-to en la experiencia ordinaria del hombre es decir en aquellas condicio-nes faacutecticas siempre uacutenicas donde ha de dirimir y decidir el sentido de siacute mismo Lo cual no significa que la atencioacuten al sujeto lleve a Karl Rahner a su absolutizacioacuten a imagen de cierto idealismo maacutes bien al contrario el meacutetodo trascendental que aplica revela un existente que no dispone de siacute en modo absoluto sino que es originaria e intriacutensecamente un espiacuteritu

15 J L RUIZ DE LA PENtildeA Espiacuteritu en el mundo La antropologiacutea de Karl Rahner in J DE SAHAGUacuteN (ed) Las antropologiacuteas del siglo XX Salamanca 1976 196

16 Cfr J B METZ La fe en la historia y la sociedad Esbozo de una teologiacutea poliacutetica fundamental para nuestro tiempo Madrid 1979 164-236 Lo cierto es que las exigencias del modelo narrativo han recibido hasta el momento maacutes atencioacuten en aacutembito filosoacutefico que teoloacutegico (cfr C THEOBALD Il cristianesimo come stile Un modo di fare teologia nella postmodernitagrave I Bologna 2009 397-416)

17 Que puede formularse en estos otros interrogantes iquestRecae la teologiacutea trascenden-tal en una metafiacutesica de la presencia entendida como mera radicacioacuten de la revelacioacuten de Dios en su visibilidad en el hombre y el mundo iquestSe deja construir esa teologiacutea a partir del hecho uacutenico de la manifestacioacuten de Dios iquestAcaso a la hora de considerar la revelacioacuten de Dios por siacute mismo no se muestra incapaz de delimitar las regiones respectivas de filosofiacutea (posibilidad) y teologiacutea (historicidad efectividad y sentido)

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finito que existe concretamente en la condicioacuten histoacuterica del ser huma-no18 esto es inserto en virtud de su esencia y no por pura casualidad en el aacutembito del espacio y el tiempo caracterizado por la mutabilidad y la contingencia19 Del mismo modo que no cabe en su sistema un divorcio entre la inefabilidad de Dios y la concrecioacuten de su presencia tampoco cabe empobrecer la autenticidad de la experiencia viva de ser hombre a favor de la verdad de fe La validez universal de esta ha de probarse en el crisol de la experiencia personal finita de la libertad del amor y el sufri-miento de la muerte y la esperanza en el futuro

Estas paacuteginas apuestan por comprender en su contexto sus posibilida-des y sus liacutemites una visioacuten teoloacutegica del hombre que es capaz de acompa-ntildear y contrapesar el desarrollo actual de un humanismo secularista que se pretende uacutenico horizonte de las sociedades occidentales La antropologiacutea de Rahner estaacute llamada a seguir contribuyendo a acreditar la significacioacuten positiva del fenoacutemeno religioso como respetuosa proximidad del misterio personal de Dios al corazoacuten de la existencia humana (razoacuten e historia)20

En efecto la obra de nuestro autor tomada de entre otras posibles es testigo de coacutemo la reciente teologiacutea catoacutelica ha prestado exquisita atencioacuten ndashen su proposicioacuten de la fe al mundo presentendash a la auto-comprensioacuten del hombre que ha generado sobre todo la perspectiva antropoceacutentrica domi-nante en el pensamiento filosoacutefico que va de Descartes a Heidegger 21 En la

18 Cfr K RAHNER Oyente de la palabra 3119 En la estela de Karl Rahner se ubican otros proyectos de la teologiacutea catoacutelica contem-

poraacutenea que tratan de afrontar la aporiacutea en la que se debate la teologiacutea trascendental en torno a la relacioacuten entre experiencia categorial y conocimiento originario a priori En las obras de H Verweyen Th Proumlpper y K Muumlller observa Alberto Anelli desarrollos post-rahnerianos que tratan de modular la trascendentalidad mostrando las contradicciones inscritas respec-tivamente en una razoacuten una libertad o una conciencia sustraiacutedas al sujeto y consideradas como fuerzas autoacutenomas No obstante ndashconcluye Anellindash estos proyectos auacuten permanecen en el plano formal dependientes del moderno principio de autonomiacutea pesa auacuten sobre ellos la dificultad de hacer valer a fondo el insuperable caraacutecter histoacuterico-praacutectico del a priori antropoloacutegico Solo una reflexioacuten antropoloacutegica como la de W Pannenberg habriacutea hecho emerger seguacuten este autor una concepcioacuten heteroacutenoma del sujeto como realidad conformada en la alteridad que constituyen para eacutel la sociedad y la historia Cfr A ANELLI Heidegger e la teologia Brescia 2011 79-83

20 Cfr B BOURGINE Karl Rahner est-il un classique Agrave propos de quelques recher-ches reacutecentes in Revue theacuteologique de Louvain 43 (2012) 79-102

21 Tras diversos avatares la teologiacutea catoacutelica del siglo XX enfrenta decididamente los problemas teoloacutegicos y hermeneacuteuticos que habiacutea puesto a consideracioacuten la llamada laquocrisis modernistaraquo al declarar su insatisfaccioacuten por la mediacioacuten conceptual escolaacutestica del depoacutesito de la fe La discusioacuten en torno a la posibilidad de renovar esa conceptuacioacuten de la revelacioacuten (en la interseccioacuten entre teologiacutea y filosofiacutea fe y razoacuten dogma y vida) conllevaba fundamen-talmente reformular la respuesta teoloacutegica en el punto de partida o sea su concepcioacuten de Dios

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obra de Rahner se mantiene una doble constante que es irrenunciable para la teologiacutea de modo particular para la teologiacutea contemporaacutenea a la hora de proponer hoy la comprensioacuten cristiana del hombre en primer lugar la presentacioacuten de Cristo corazoacuten de la revelacioacuten como Palabra hecha carne en que adquiere plena inteligibilidad toda la realidad creada y de modo particular el hombre como ser en constante distensioacuten entre finitud e infinitud autoconciencia de siacute y realizacioacuten en la historia trascenden-cia e inmanencia Es la perspectiva cristoceacutentrica de la revelacioacuten la que opera como punto focal que sustenta la hermeneacuteutica del Misterio de Dios en siacute y en su relacioacuten con el hombre22 en segundo lugar la interdiscipli-nariedad esto es el diaacutelogo con la imagen de hombre que emana de las ciencias humanas y en particular de la filosofiacutea pues la razoacuten contribuye con su esfuerzo reflexivo y sus categoriacuteas a hacer comprensible al hombre la realidad de Cristo ndashque es Dios humanadondash como plenitud y cima de la humanidad creada (en su estructura esencial y su devenir histoacuterico)

Querer presentar en pocas paacuteginas la aportacioacuten que hace este gigante de la teologiacutea contemporaacutenea a la visioacuten teoloacutegica del hombre plantea una doble dificultad En primer lugar la de enmarcar dicha contribucioacuten en un sistema teoloacutegico que detenta un perfil hermeneacuteutico muy complejo y ecleacutectico y por lo que respecta a su concepcioacuten del hombre el hecho de

y del hombre En el campo antropoloacutegico el reto para la teologiacutea consistiacutea en avanzar sobre una antropologiacutea de impronta platoacutenica considerada laquointelectualistaraquo para poder afrontar y replan-tear de manera nueva (en su integridad) la figura de hombre que auspicia la revelacioacuten como relacioacuten entre espiacuteritu y materia trascendencia e historia pensamiento y vida conocimiento intelectual y experiencia sensible (mundana social histoacuterica) El esfuerzo de la llamada nou-velle theacuteologie por recuperar el diaacutelogo con el pensamiento de la cultura moderna y el contacto con el pensamiento contemporaacuteneo asiacute como el cultivo de las propias fuentes (Escritura Pa-dres Liturgia) obraron la elaboracioacuten de una renovada teologiacutea de la revelacioacuten y antropologiacutea de la fe Los nombres de J Mareacutechal M Blondel y P Rousselot en un primer momento y los maacutes cercanos de R Guardini K Rahner J B Lotz B Lonergan J Alfaro E Corethhellip han propiciado la liberacioacuten del meacutetodo antropoloacutegico-trascendental del subjetivismo kantiano y una nueva relectura del humanum como finitud interrogativa enraizada en Dios y de la vida personal como aacutembito histoacuterico de la accioacuten divina (gracia) que es acogida en ejercicio de libre decisioacuten Cfr una siacutentesis de los aspectos teoloacutegicos y filosoacuteficos de este laquoepisodio paradigmaacute-ticoraquo de la teologiacutea contemporaacutenea en A COZZI La crisi modernista Conflitto insanabile con la modernitagrave o trasformazione culturale del cattolicesimo in G ANGELINI - S MACCHI (eds) La teologia del Novecento Momenti maggiori e questioni aperte Milano 2008 34-92

22 A la luz del misterio central de la revelacioacuten divina ndashla encarnacioacuten de la Persona del Verbondash la atencioacuten a la iacutentima reciprocidad (en orden a la realizacioacuten de la identidad del ser humano) entre su radical dimensioacuten espiritual (pensamiento) y su existencia histoacuterica (ma-nifestacioacuten) no es para el cristianismo un modo facultativo de comprender la humanidad dado que se trata de aquellas coordenadas irrenunciables donde rastrear su hechura divina La encarnacioacuten constituye un dato decisivo de la fe y la dogmaacutetica catoacutelicas

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que esta se encuentra diseminada en sus escritos pues no ha elaborado como tal un ensayo de antropologiacutea formalmente sistematizada Por estas razones nuestro anaacutelisis se limita mediante una lectura sincroacutenica de una seleccioacuten de sus escritos a una presentacioacuten de las grandes tesis antro-poloacutegicas que estaacuten en la base de su investigacioacuten teoloacutegica23 Siguiendo a nuestro autor comenzamos sentildealando el desafiacuteo pastoral presente que constituye la relacioacuten entre antropologiacutea y teologiacutea

1 lA teologiacuteA Ante un reto pAstorAl

El concilio Vaticano II expresoacute con claridad que la comunidad cristiana no sostiene su fe en verdades depositadas en la conciencia creyente de una vez para siempre sino en verdades de fe dinaacutemicas a cuyo significado contribuye un esfuerzo de actualizacioacuten constante En este sentido el ca-

23 Los estudios globales y sectoriales sobre la teologiacutea de Rahner resultan casi inabarca-bles Tanto para una visioacuten de la figura y trayectoria intelectual del autor como para encuadrar en su sistema su propuesta antropoloacutegica hemos acudido a K H NEUFELD Rahner Karl in R LATOURELLE (ed) Diccionario de Teologiacutea fundamental Madrid 1992 1097-1100 K KILBY Karl Rahner in D F FORD - R MUERS (eds) The Modern Theologians An Introduction to Christian Theology since 1918 Massachusetts-Oxford-Victoria 32005 92-105 A BERTULETTI Dio il mistero dellrsquoUnico Brescia 2014 269-276 A BOZZOLO Il mistero-Dio e lo spirito-nel-mondo Esperienza della grazia e decifrazione dellrsquouomo in Karl Rahner in P SEQUERI - S UBBIALI (eds) Nominare Dio invano Orizzonti per la teolo-gia filosofica Milano 2009 219-258 G COLZANI Karl Rahner Dal mistero di Dio la com-prensione dellrsquouomo Milano 2000 M CABADA CASTRO La vivencia previa del Absoluto como presupuesto del acceso teoreacutetico a Dios in A VARGAS-MACHUCA (ed) Teologiacutea y mundo contemporaacuteneo Homenaje a Karl Rahner en su 70 cumpleantildeos Madrid 1975 65-88 A CORDOVILLA Gramaacutetica de la encarnacioacuten Madrid 2004 35-228 Id K Rahner la actualidad de un teoacutelogo in Estudios Eclesiaacutesticos 80 (2005) 233-245 R GIBELLINI La teologiacutea del siglo XX 239-254 A MARGARITTI Svolta antropologica e istanza kerigma-tica in G ANGELINI - S MACCHI (eds) La teologia del novecento Momenti maggiori e questioni aperte Milano 2008 246-296 B FORTE La eternidad en el tiempo Ensayo de antropologiacutea y eacutetica sacramental Salamanca 2000 83-88 A GONZAacuteLEZ MONTES Fun-damentacioacuten de la fe Salamanca 1994 195-220 D HERCSIK Karl Rahner la grazia come centro dellrsquoesistenza umana in La Civiltagrave Cattolica 3683 (2003) 430-443 L BARRETO Experiencia trascendental y experiencia personal en el enfoque metodoloacutegico de Karl Rahner in Salmanticensis 58 (2011) 427-464 G PATTARO La svolta antropologica Bologna 1991 146-160 I PETRIGLIERI Lrsquoavventura della fede Ovvero lrsquointellectus fidei tra ragione e ragioni Roma 2010 153-169 S PIEacute-NINOT La Teologiacutea Fundamental laquoDar razoacuten de la esperanzaraquo (1 Pe 315) Salamanca 42001 130-135 A RAFFELT - H VERWEYEN Karl Rahner Muumlnchen 1997 G SALATIELLO Metodo trascedentale e svolta antropologica in Id (ed) Karl Rahner Percorsi di ricerca Roma 2012 45-83 I SANNA Teologia come esperienza di Dio Brescia 1997 91-133 J I SARANYANA La antropologiacutea trascendental rahneriana in J F SELLEacuteS (ed) Propuestas antropoloacutegicas del siglo XX I Pamplona 2004 307-326 H VORGRIMLER Karl Rahner Experiencia de Dios en su vida y en su pensamien-to Santander 2004 G J ZARAZAGA Dios es comunioacuten Salamanca 2004 21-99

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lificativo laquopastoralraquo deja de hacer referencia exclusiva a la cura de almas para determinar la totalidad de la vida eclesial su actitud ante el mundo y el hombre contemporaacuteneos24 La atencioacuten a laquolos gozos y las esperanzas las tristezas y las angustias de los hombres de nuestro tiemporaquo (GS 1) forma parte de la eficacia del anuncio del Reino Si la comunidad creyente obvia el desarrollo del mundo moderno ndashque ha sustituido un proyecto de sentido en cuyo centro estaba Dios por otro en que Dios queda desplazado por el hombre y la naturaleza bajo el impulso de una eneacutergica y creciente revolu-cioacuten cientiacutefica teacutecnica social y poliacutetica25ndash difiacutecilmente puede dar cuenta de su esencia como comunidad evangelizadora (cfr 1 Cor 916)

El teoacutelogo creyente y guiacutea de creyentes asume la tarea especiacutefica de esclarecer el perenne significado salviacutefico del mensaje evangeacutelico a la luz de la relacioacuten personal que entabla Dios con la experiencia histoacuterica y la autoconciencia del ser humano A partir de esta premisa la obra teoloacutegica de Karl Rahner ha proyectado una mirada renovada sobre la capacidad de trascendencia del yo humano primera y esencial caracteriacutestica que funda la posibilidad y credibilidad de lo que conocemos como laquoexperiencia re-ligiosaraquo esto es la relacioacuten entre yo y Otro no como simple proyeccioacuten de una necesidad subjetiva sino como espera y encuentro entre la libertad del sujeto para auto-trascenderse a siacute mismo hacia su maacutes alta dignidad y el valor intriacutenseco de la realidad libremente encontrada como Otro-de-siacute esto es como determinacioacuten interior y uacuteltima de aquella auto-trascenden-cia personal Se ha reproducido con abundancia el texto en que Rahner vislumbra la necesidad de un cristiano capaz de esa laquoexperienciaraquo de encuentro con Dios como viacutea privilegiada de acceso a la fe Estas son sus conocidas palabras

Solamente para aclarar el sentido de lo que se va diciendo y aun a concien-cia del descreacutedito que la palabra laquomiacutesticaraquo ndashque bien entendida no implica contraposicioacuten alguna con la fe en el Espiacuteritu Santo sino que se identifica con ellandash cabriacutea decir que el cristiano del futuro o seraacute un laquomiacutesticoraquo es decir una persona que ha laquoexperimentadoraquo algo o no seraacute cristiano Porque la espiritualidad del futuro no se apoya ya en una conviccioacuten unaacutenime evi-dente y puacuteblica ni en un ambiente religioso generalizado previos a la expe-riencia y a la decisioacuten personales La educacioacuten religiosa usual hasta ahora podriacutea ser solamente en adelante un adiestramiento muy secundario para la

24 Cfr GS nota al tiacutetulo25 Cfr W PANNENBERG Una historia de la filosofiacutea desde la idea de Dios Teologiacutea

y filosofiacutea Salamanca 2001 149-163

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vida religiosa La mistagogiacutea seraacute la que habraacute de pronunciar la verdadera laquoidea de Diosraquo partiendo de la experiencia aceptada de la referencia esencial del hombre a Dios la experiencia de que la base del hombre es el abismo de que Dios es esencialmente el incomprensible de que su incomprensibi-lidad en lugar de disminuir aumenta en la medida que se le va conociendo mejor y a medida que Dios se acerca a nosotros en su amor en el que se da a siacute mismo de que no podemos concebirlo como un dato determinado en el caacutelculo de nuestra vida sin que automaacuteticamente fallen nuestras cuentas26

El principio de tradicioacuten viene a decir Rahner ha dejado de ser una vigencia cultural presente para pasar al aacutembito de la historia de lo con-cerniente a la memoria del pasado ya no acompantildea el itinerario creyente Sin apoyos externos significativos el creyente estaacute llamado a elaborar con maacutes esfuerzo la propia experiencia de Dios entendida como encuentro personal con el Dios vivo y verdadero Ser un miacutestico significa conocer a Dios desde dentro manteniendo con Eacutel una relacioacuten no siempre paciacutefica pero siacute directa y sincera que incide profundamente en la loacutegica del de-seo humano y que actuacutea como factor de verificacioacuten de la autenticidad y verdad de la propia experiencia religiosa Al radiografiar las coordenadas antropoloacutegico-existenciales en que la teologiacutea y la espiritualidad cristia-nas han de proponerse hoy alerta sobre la necesidad de permanecer vigi-lantes para no reducir la experiencia religiosa cristiana a un humanismo inmanente que hace hincapieacute en valores socio-humanitarios y rebaja el contenido teoloacutegico-dogmaacutetico que caracteriza el nuacutecleo de la fe

Para miacute todo el jesuanismo por muy piadoso que fuera todo el com-promiso a favor de la justicia y del amor en el mundo todo el humanismo que quiera utilizar a Dios para el hombre y que no precipite al hombre en el abismo de Dios seriacutea la religioacuten de un humanismo inconcebiblemente modesto que nos estaacute prohibido por el enorme poder del amor de Dios en el cual Dios mismo sale realmente de siacute Nosotros una de dos o pode-mos quererlo todo a saber Dios mismo en su pura divinidad o bien nos hallamos condenados es decir estamos sepultados dentro de la prisioacuten de nuestra finitud27

La voracidad de la moderna subjetividad y su denodada lucha por la libertad con la pretensioacuten de lograr su definitiva autonomiacutea no ha hecho sino poner al hombre bajo la dictadura de otras servidumbres (pulsiones

26 K RAHNER Espiritualidad antigua y actual in ET VII 25-2627 Id Sobre la inefabilidad de Dios Experiencias de un teoacutelogo catoacutelico 39

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instintivas dinero afaacuten de poderhellip) que han instalado la idolatriacutea en el hondoacuten del alma humana sontildeando poder saciar su hambre de infinito

Entonces dice la palabra de Dios a este excavador de tesoros desen-gantildeado y desesperado muy hondo en los abismos del hombre vive auacuten Dios el Dios vivo real y verdadero no un iacutedolo muerto no una desnuda imagen de nosotros mismos sino Eacutel mismo el Dios vivo el Eterno el Santo El que no solo es en siacute mismo la infinitud sino que quiere donarnos sus inmensidades infinitas28

2 AntropologiacuteA trAscendentAl

La interpretacioacuten de toda la teologiacutea dogmaacutetica como antropologiacutea trascendental implica la reflexioacuten sobre el aspecto trascendental de toda temaacutetica dogmaacutetica y por ello proponerse la cuestioacuten acerca de lo que en referencia a esta se encuentra ya impliacutecito en los contenidos materiales de las laquoestructurasraquo a priori del sujeto teoloacutegico29

21 Orientacioacuten teoloacutegica de la antropologiacutea via trascendentalis

De esta forma describe nuestro autor la impronta metodoloacutegica de un complejo sistema teoloacutegico atento a este presente que se interroga con singular radicalidad por la razonabilidad antropoloacutegica de la fe y por la evidencia del hecho mismo de la revelacioacuten30 Por ello la teologiacutea se muestra iacutentimamente preocupada por mostrarle al hombre contemporaacute-neo caracterizado en su auto-experiencia como laquoindefinible enigma para siacute mismoraquo31 la profunda afinidad ontoloacutegica que exhibe su estructura trascendental y su existencia concreta con la auto-donacioacuten libre y amo-rosa de Dios a la humanidad La revelacioacuten manifiesta que el mundo32 y el

28 Id De la necesidad y don de la oracioacuten 3329 Id Theologie und Anthropologie 45 30 Cfr Ibid 58-61 Sobre este mismo argumento Id Sobre la posibilidad de la fe hoy

in ET V 15-3331 K RAHNER De la necesidad y don de la oracioacuten 31 32 laquoLa criatura desde su maacutes iacutentimo fundamento esencial ndashescribe nuestro teoacutelogo en

la madurez de su pensamientondash ha de entenderse como la posibilidad de ser asumida de convertirse en material para una posible historia de Dios Dios esboza la criatura en su forma creadora en cuanto desde la nada la implanta en su propia realidad distinta de Dios como la gramaacutetica de una posible automanifestacioacuten de Diosraquo (K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 264)

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hombre33 han sido creados en libertad con vistas a la auto-comunicacioacuten amorosa de Dios laquoPor cuanto Dios en el amor a siacute mismo ama libremente como poder que pone lo finito amando comprende a lo finito mismo En este amor tambieacuten lo puesto el efecto de la accioacuten es elevado a la luz del serraquo34 Mostrar en el hombre el efectivo dinamismo de esta elevacioacuten es el motivo seguacuten confesioacuten del mismo Rahner por el que aplica a su teologiacutea el calificativo trascendental

Para que todas las afirmaciones de fe y de la teologiacutea puedan ser realmente responsables hay que preguntarse coacutemo y por queacute el hombre desde su mismo ser y existencia (que es concreta y se halla siempre en consecuen-cia inevitablemente bajo la gracia de la comunicacioacuten de Dios) es siempre sujeto a quien pueden y deben afectar realmente estas afirmaciones35

De este modo postula la necesidad de un nuevo acceso metodoloacutegico a la fe laquono solo en lo que respecta al conocimiento de sus contenidos sino tambieacuten inseparablemente en lo tocante al conocimiento del sujeto y de las condiciones a priori de su conocerraquo36 Es lo que Rahner llama el laquomeacutetodo antropoloacutegico-trascendentalraquo que acompantildearaacute sin cesar su dilatada obra teoloacutegica y constituye el fundamento de lo que denominoacute el giro antropoloacutegico en orden a designar su propuesta de una teologiacutea a partir de una antropologiacutea trascendental laquoEl giro de la teologiacutea hacia un meacutetodo antropoloacutegico-trascendental no es otra cosa que el descubrimien-

33 laquoiquestNo podriacutea decirse con aparente derecho que la esencia del ser personal ndashsu para-doja sin la que no se le puede entender en absolutondash consiste precisamente en estar ordenado por naturaleza a la comunioacuten personal con Dios en el amor y tener que recibir ese mismo amor como libre regaloraquo (K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 307)

34 K RAHNER Oyente de la palabra 13135 Id Fundamentacioacuten de la fe cristiana 31 en estas paacuteginas sintetiza y revisa criacutetica-

mente el autor la presentacioacuten global de su visioacuten de la teologiacutea trascendental en su Curso fundamental sobre la fe Cfr K RAHNER Teologiacutea trascendental in SM VI 610-617 So-bre el teacutermino y su uso en nuestro autor S ARZUBIALDE La experiencia trascendental de Dios en la obra de K Rahner in Estudios Eclesiaacutesticos 80 (2005) 291-314 sobre el teacutermino y su empleo en teologiacutea U PELLEGRINO Transcendental in L PACOMIO et alii (eds) Diccionario teoloacutegico interdisciplinar IV Salamanca 1983 543-555 K Kilby sugiere el uso del teacutermino en Rahner en dos sentidos al menos en el sentido lato de referencia a aquella dimensioacuten del hombre o de su experiencia que le permite ir maacutes allaacute de los objetos finitos y por otro lado para identificar un tipo particular de proyecto de investigacioacuten aquel que somete a examen las condiciones en que es posible el conocimiento de un sujeto especiacutefico en el acto mismo de conocer Cfr K KILBY Karl Rahner Theology and Philosophy New York 2004 32-37

36 G COLZANI Recenti manuali di Antropologia teologica di lingua italiana e tedes-ca in Vivens Homo 3 (1992) 392

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to del nexo existente entre el contenido de los enunciados dogmaacuteticos y la experiencia que hombre hace de siacuteraquo37

En el ensayo Theologie und Anthropologie fruto de una conferencia impartida en 1966 Rahner sintetiza programaacuteticamente los tres reque-rimientos baacutesicos que convergen en su visioacuten de la teologiacutea como an-tropologiacutea trascendental (1) el anaacutelisis de las estructuras cognoscitivas trascendentales o a priori del sujeto personal que en cuanto sujeto teo-loacutegico ha de enfrentar el desafiacuteo de que laquoDios no es un objeto cualquie-ra junto a otros en el campo de la experiencia a posteriori del hombre sino el fundamento originario y el futuro absoluto de toda realidadraquo38 (2) la teologiacutea en cuanto ciencia que capta conceptualmente la honda interaccioacuten entre la historia de la humanidad (libre autorrealizacioacuten del hombre) y la historia de la libre y graciosa autocomunicacioacuten salviacutefica de Dios al hombre39 (3) y las exigencias para la autocomprensioacuten humana procedentes de la filosofiacutea (antropoloacutegica) contemporaacutenea40 que a pesar

37 K RAHNER Theologie und Anthropologie 6138 Ibid 50 Cfr Id Curso fundamental sobre la fe 74-77 Rahner asume para la teo-

logiacutea el desafiacuteo que Kant plantea a la metafiacutesica y a la teoriacutea del conocimiento El propio Kant define como trascendental laquotodo conocimiento que se ocupa no tanto de los objetos cuanto de nuestro modo de conocerlos en cuanto que tal modo ha de ser posible a priori Un sistema de semejantes conceptos se llamariacutea filosofiacutea trascendentalraquo (I KANT Criacutetica de la razoacuten pura A XII Madrid 1984 58)

39 laquoLa relevancia soterioloacutegica de un objeto de la teologiacutea (aspecto irrenunciable de todo objeto teoloacutegico) solamente se hace motivo de interrogacioacuten si pasa a ser tema de la receptividad salviacutefica del hombre hacia dicho objetoraquo (K RAHNER Theologie und Anthro-pologie 52)

40 laquoTanto una filosofiacutea como una teologiacutea actual no puede ni debe dejar de prestar aten-cioacuten a la revolucioacuten antropoloacutegico-trascendental operada por la filosofiacutea de nuestro tiem-po desde Descartes Kant y el idealismo alemaacuten (incluidos sus detractores) hasta la actual fenomenologiacutea filosofiacutea de la existencia y ontologiacutea fundamentalraquo (Ibid 56) Un apunte similar se encuentra en Id laquoFundamentos de la protologiacutea y de la antropologiacutea teoloacutegicaraquo MyS (Mysterium salutis) II 348 Nuestro autor considera la filosofiacutea como una de las prin-cipales fuerzas motrices de una teologiacutea de la revelacioacuten Es principalmente en el contexto de la relacioacuten entre naturaleza y gracia donde Rahner comprende la pregunta por la relacioacuten entre filosofiacutea y teologiacutea Del mismo modo que el hombre a la luz de su apertura radical a la trascendencia se experimenta siempre en su existencia como el ser llamado a (acoger o rechazar) una relacioacuten de comunioacuten con Dios es decir del mismo modo que su naturaleza ha sido creada con vistas a esa comunioacuten divina por la gracia laquolo que llamamos revelacioacuten no es una antildeadidura que se presuponga a la naturaleza espiritual y a su autocomprensioacuten como algo rotundo y que se sobreentiende sino que la naturaleza espiritual misma es la condicioacuten de posibilidad que la revelacioacuten presupone a siacute misma y que establece libremente para poder ser lo que es gracia en cuanto autocomunicacioacuten personal y libre de Dios [hellip] La revelacioacuten presupone por tanto la filosofiacutea diferenciada libre como aacutembito de su propia posibilidad ya que solo al que se entiende a siacute mismo y al que autoacutenomamente dispone sobre siacute puede la autoapertura de Dios en revelacioacuten personal apareceacutersele como un hecho de libre amorraquo

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de sus excesos permite reforzar una concepcioacuten radicalmente cristiana donde laquoel hombre no es un momento dentro de un cosmos constituido de cosas ni estaacute sometido al sistema de coordenadas de conceptos oacutenticos del mismo sino maacutes bien el sujeto de cuya libertad depende el destino de todo el cosmosraquo41

A la luz de estos requerimientos vamos a intentar una siacutentesis de esta antropologiacutea teoloacutegica a partir de la doble viacutea baacutesica mediante la que Rahner trata de afrontar el conocimiento del hombre en cuanto sujeto teoloacutegico (1) la contemplacioacuten del hombre en su capacidad de apertura trascendental ilimitada al Ser de quien procede y a quien se dirige es decir en su apertura a Dios Esta viacutea requiere el examen a fondo de la sub-jetividad (que se interroga por el Ser) y sus estructuras a priori como ho-rizonte en que es posible al hombre laquodejarse aprehender por un misterio siempre presente y que se nos escaparaquo42 (2) la consideracioacuten del hombre como aquel ser cuya naturaleza es apropiada por Dios al encarnarse En Jesucristo el hombre se reconoce como el don maacutes acabado del acto por el que Dios se dona a lo diverso de siacute43 a la luz de Cristo laquoel hombre en su definicioacuten originaria es el otro en el que Dios puede convertirse por su autoenajenacioacuten y el posible hermano de Cristoraquo44 No es factible dar una respuesta plena a la sed infinita del hombre sin atender al significado del hombre Jesuacutes el infinito humanado Dado que uno de los existenciales que definen la esencia y dignidad del hombre es ndashapunta Rahnerndash su calificacioacuten como ser que dice relacioacuten a Dios y a Cristo solo se puede hablar de Dios de un modo definitivo cuando al tratar de ello es decir en plena teologiacutea se trate tambieacuten de antropologiacutea Y solo se puede tratar de antropologiacutea solo se puede dar una respuesta uacuteltima sobre la esencia y la dignidad del hombre si se ha cultivado teologiacutea tratando de Dios y desde el punto de vista de Dios45

(K RAHNER Filosofiacutea y teologiacutea in ET VI 87 cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 262-266) Puede verse una reflexioacuten sobre las condiciones teoloacutegicas en que Rahner funda la interaccioacuten entre filosofiacutea y teologiacutea en M SCHULZ La necesaria mediacioacuten filosoacutefica de la fe y de la teologiacutea seguacuten Karl Rahner in Estudios Eclesiaacutesticos 80 (2005) 325-338

41 K RAHNER Theologie und Anthropologie 56 Cfr A MARAGARITTI Svolta antropologica e istanza kerigmatica 250-253

42 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 7643 Cfr Ibid 26744 K RAHNER Antropologiacutea III in SM I 29545 Id Dignidad y libertad del hombre in ET II 236

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Veamos por tanto queacute significa para Rahner que la antropologiacutea es lugar de la teologiacutea y viceversa maacutes en concreto el modo en que la exis-tencia del hombre se define ante y desde Dios en su entera especificidad de subjetividad personal

22 El hombre se interroga por siacute mismo y por lo otro

En sus dos principales obras filosoacuteficas de fuerte impronta antropo-loacutegica el joven teoacutelogo atiende los caracteres propios de la subjetividad personal del hombre que seraacuten omnipresentes a su extensa obra teoloacutegica Se trata de una investigacioacuten que a modo de diacuteptico se proyecta desde el hombre en su doble condicioacuten de ser que se interroga por siacute mismo y por lo otro y ser que es en siacute mismo interrogante infinito (apertura a la revelacioacuten divina)

Espiacuteritu en el mundo Metafiacutesica del conocimiento finito seguacuten santo Tomaacutes de Aquino (1939) escrito como tesis doctoral en filosofiacutea corres-ponde al examen de esa primera condicioacuten baacutesica del hombre como sub-jetividad cuestionante Y asiacute procurando dilucidar el requerimiento que plantea santo Tomaacutes (laquoutrum intellectus possit actu intelligere per species intelligibiles quas penes se habet non convertendo se ad phantasmataraquo)46 desde la frontera filosoacutefica del siglo XX47 Rahner advierte la posibilidad de concebir la sensibilidad que insta al hombre a preguntar laquocomo ya existente en el mundoraquo48 como aquel espacio en que ganar el horizonte transcendente del interrogar del ente humano el uacutenico capaz de hacer justicia a la irrenunciable condicioacuten ulterior del cognoscente como sujeto y persona es decir como alguien que laquose posee como tal sujeto real sola-

46 Cfr STh I q84 a7 47 Aunque en sus escritos Rahner suele omitir la referencia expliacutecita a sus fuentes estaacute

claro que su obra recibe la influencia de alguna de las diversas revisiones a que es sometida la moderna concepcioacuten de la subjetividad tal y como habiacutea sido planteada de Descartes a Kant como criacutetica al realismo ingenuo dominante en la filosofiacutea cristiana La hermeneacuteutica intrin-secista de la relacioacuten entre natural y sobrenatural que lleva a cabo J Mareacutechal en su lectura de santo Tomaacutes la filosofiacutea de la accioacuten de M Blondel y la reaccioacuten de la filosofiacutea de la existencia (Heidegger) ante la herencia idealista son los principales vectores operantes en la teologiacutea rahneriana Cfr O MUCK La escuela marechaliana de lengua alemana La filosofiacutea trascen-dental como metafiacutesica J B Lotz K Rahner W Brugger E Coreth y otros in E CORETH et alii (ed) Filosofiacutea cristiana en el pensamiento catoacutelico de los siglos XIX y XX II Madrid 1993-1997 549-554 E CORETH Presupposti filosofici della teologia di Karl Rahner in La Civiltagrave Cattolica 3469 (1995) 27-40 A CORDOVILLA laquoLa teologiacutea es pensarraquo La relacioacuten entre teologiacutea y filosofiacutea en Karl Rahner in Estudios Eclesiaacutesticos 79 (2004) 395-412

48 K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 128

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mente en cuanto contraponieacutendose a este mundo se vuelve hacia eacutelraquo49 En su anaacutelisis de la metafiacutesica del conocimiento de santo Tomaacutes Rahner muestra la predisposicioacuten nativa de la subjetividad humana a observar lo singular y concreto (ens) a la luz de lo universal (esse) es decir la apertura a priori del conocimiento humano al ser en toda su amplitud a todo cuanto es El traacutensito de la dimensioacuten sensible a la de los conceptos universales sucede mediante lo que santo Tomaacutes denomina excessus o capacidad propia del intelecto para ir maacutes allaacute del fenoacutemeno hacia el ser en su totalidad A este movimiento del espiacuteritu que permite su abstrac-cioacuten del mundo es al que Rahner denomina anticipacioacuten movimiento del espiacuteritu sobre la totalidad de sus posibles objetos [hellip] que deviene consciente cuando el conocimiento en el mismo acto de aprehensioacuten del objeto singular se experimenta a siacute mismo en su radical movimiento de trascendencia por encima del objeto singular50

Asiacute sintetiza nuestro autor los frutos de su investigacioacuten

El conocimiento humano es de manera inmediata conocimiento receptivo y por tanto sensible Pero es de tal manera sensible que se discierne la verdad del objeto que por siacute mismo se muestra es decir el conocimiento humano es universal y objetivo [hellip] El conocimiento receptivo es como tal sensible y esto quiere decir el cognoscente sensible deviene oacutenticamente lo otro por consiguiente laquoen cuantoraquo sensible no se destaca precisamente de lo conoci-do Y asiacute cuando ha de haber un conocimiento receptivo objetivo este cono-cimiento tiene que ser por una parte (como esencialmente receptiva) sensi-bilidad que deviene ella misma lo recibido y tiene por otra parte que saber un quid universal acerca de lo sensiblemente intuido para poder juzgar de ello como objeto Y por lo mismo tiene que liberar este quid de su manera de ser dado sensiblemente en la que el cognoscente deviene eacutel mismo lo otro51

49 Ibid 13050 Ibid 154 Explican Raffelt y Verweyen laquoEn la medida en que el lsquointelecto agentersquo

lsquoabstraersquo la lsquoimagen intelectivarsquo de la lsquoimagen sensiblersquo podemos entender que en el abstraer aquel vaya maacutes allaacute de lo aferrado en la sensibilidad concreta A esto es a lo que Rahner se refiere mediante un teacutermino central lsquoVorgriffrsquo Tomado a su vez de M Heidegger Tomaacutes em-plea una imagen anaacuteloga lsquoexcessusrsquo superacioacuten Lo que en Heidegger se presenta como una estructura fenomenoloacutegica fundamental del Dasein se encuentra ahora adscrito en Rahner a un anaacutelisis del conocimiento metafiacutesicoraquo (A RAFFELT-H VERWEYEN Karl Rahner 38) La referencia al Vorgriff heideggeriano en Ser y tiempo sect 32 (Madrid 2003 172-177) La edicioacuten espantildeola de Ser y tiempo traduce como manera de entender previa y explica el tra-ductor que al describir el modo en que comprendemos las cosas laquoHeidegger estaacute describiendo aquiacute que el comprender ha abierto ya el mundo como posibilidades Al hacerlo nos da de antemano algo que luego en la interpretacioacuten adquiriraacute cariz particularraquo (p 478)

51 K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 377-378

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La apertura natural del hombre a todo cuanto es ndashconcebida como a priori del intelecto que predispone al cognoscente a ver lo universal en lo singular y concretondash es lo primero seguacuten Rahner en el despertar de nuestra inteligencia Tanto la sensibilidad como el intelecto son para Ra-hner aprioris o condiciones de la estructura oacutentica del sujeto cognoscente que no encubren la realidad sino que contribuyen a descubrirla No po-demos entrar aquiacute en la compleja discusioacuten rahneriana sobre la condicioacuten y el modo en que actuacutean estos aprioris como pre-disposiciones en la ope-racioacuten de desvelar el ser de lo real52 Nos interesa ahora destacar el hecho de que la interrogacioacuten trascendental sobre el acto cognoscitivo humano lleva a Rahner a descubrir al hombre (1) como espiacuteritu (Geist) cuya estructura fundamental es la apertura ilimitada al ser en cuanto capaz de retornar sobre siacute en su aprehensioacuten de lo que es descubrieacutendose en su maacutes iacutentima identidad como ser excesivo ser que manifiesta al Ser53 (2) como espiacuteritu en el mundo (in Welt) esto es como aquel cuya exposicioacuten a lo otro mediante su recepcioacuten sensible (en su propia existencia e historia) es trance necesario y coadyuvante de una genuina vuelta a su interioridad conversio ad phantasma54

Finalmente en el modo en que Rahner culmina Espiacuteritu en el mundo y delinea el paso a Oyente de la palabra manifiesta que esta consideracioacuten de la experiencia humana de la realidad en cuanto salida al mundo y vuel-ta sobre siacute permite afrontar el cuestionamiento uacuteltimo a que se enfrenta el espiacuteritu humano y define su identidad la posibilidad de contacto con una realidad infinita o ser absoluto que sucesivamente puede ser identificado como Dios

Al preguntarnos por el mundo conocido por el hombre el mundo y el mismo hombre cuestionante se tornan problemaacuteticos en su fundamento absoluto en un fundamento que yace maacutes allaacute de los liacutemites transitables por el hombre maacutes allaacute del mundo Y asiacute el derrame sobre el mundo se revela comportado por el apetito uacuteltimo del espiacuteritu con que este codicia el

52 Cfr J-I SARANYANA La antropologiacutea trascendental rahneriana 319-32353 Cfr K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 374-380 En su Curso fundamental sobre la

fe obra de madurez el teoacutelogo alemaacuten vuelve sobre su confesioacuten antropoloacutegica laquoEl hombre es espiacuteritu en tanto llega a siacute mismo en un absoluto estar confiado a siacute mismo y esto porque eacutel estaacute referido siempre a la absolutez de la realidad en general y a su fundamento uno llamado Dios Este retorno a siacute mismo y la referencia a la totalidad absoluta de una realidad posible y a su fundamento uno se condicionan reciacuteprocamenteraquo (K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 221)

54 Cfr K RAHNER Espiacuteritu en el mundo 386-388

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ser en absoluto y el sumirse en la sensibilidad en el mundo y su destino se revela solamente el devenir del espiacuteritu que aspira al absoluto El hombre es asiacute el peacutendulo medio entre Dios y el mundo entre tiempo y eternidad y esta frontera es el lugar de su determinacioacuten y de su destino55

23 Elhombreesensiacutemismointerroganteinfinito

En Oyente de la palabra Fundamentos para una filosofiacutea de la religioacuten (1941)56 afronta Rahner la contemplacioacuten de la condicioacuten del hombre en cuanto es pregunta en siacute mismo o dicho de otro modo en cuanto se descu-bre a partir de su experiencia trascendental ndashen cada acto de conocimiento y libertadndash como ser capaz para la escucha del Ser capaz del infinitamente Otro al que el espiacuteritu finito reconoce como presencia irrenunciable en su propia realizacioacuten La antropologiacutea trascendental de Espiacuteritu en el mundo contribuye ahora a presentar ndashcomo un laquomomento intriacutensecoraquo57ndash tanto a la filosofiacutea de la religioacuten como a la teologiacutea fundamental una ontologiacutea de la potencialidad dispositiva del hombre no ante un dios abstracto sino ante el Dios que habla (se revela) La apertura del hombre al ser que es especiacutefica del conocimiento humano remite uacuteltimamente al hombre al ens absolutum58 a Dios y a atender la posibilidad de que Dios le hable Oyente de la palabra juega un papel determinante sobre la idea rahneriana de teologiacutea fundamental como superacioacuten laquoidealraquo del extrincesismo de la apologeacutetica neo-escolaacutestica59 Esta considera garantizada la existencia de Dios por la teologiacutea natural laquoyraquo su revelacioacuten sobrenatural por tanto como consecuencia de una demostracioacuten previa De modo que laquola revela-cioacuten de Dios al hombre no pareciacutea ser otra cosa que una comunicacioacuten de

55 Id Espiacuteritu en el mundo 387 Recordemos que el anaacutelisis kantiano de la estructura trascendental del espiacuteritu humano desemboca en la reduccioacuten del Trascedente a un postulado regulativo de la razoacuten praacutectica despojado de contenido real El anaacutelisis de Rahner denuncia pues la insuficiente incisividad de Kant al respecto

56 Puede verse un estudio analiacutetico y criacutetico en G B SALA Uditore della parola di Karl Rahner Unrsquoantropologia metafisica in ordine alla teologia in Rassegna di Teologia 42 (2001) 241-265

57 K RAHNER Oyente de la palabra 22558 Ibid 8759 Para una visioacuten del modo en que evoluciona su concepto de teologiacutea fundamental y

el espacio que ocupa en ella no solo la aptitud del creyente (fides qua) sino el contenido de la fe (fides quae) puede consultarse la siacutentesis de M SECKLER La dimensione fondamentale della teologia di Karl Rahner in I SANNA (ed) Lrsquoereditagrave teologica di Karl Rahner Roma 2005 49-67

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Dios al hombre acerca de algo que eacuteste no sabriacutea todaviacutea de modo que lo que en el hombre ocurriacutea era solo un antildeadirse un nuevo saber a los sabe-res anterioresraquo60 Este proceder no pone en claro por queacute el hombre por siacute mismo estaacute abierto a la revelacioacuten laquoa pesar de serle lsquoen siacutersquo inaccesibleraquo61 La tarea que propone Rahner a la teologiacutea fundamental es la de salvaguar-dar la relacioacuten de la teologiacutea con la metafiacutesica para evitar que la pala-bra de la autocomunicacioacuten divina (fides quae) pierda su significado para su oyente natural (fides qua) Por ello compete a la teologiacutea fundamental una antropologiacutea del hombre como aquel que en su historia abre el oiacutedo a una posible revelacioacuten de Dios [hellip] a esta pieza de la teologiacutea fundamen-tal que nos ha de ocupar aquiacute podemos designarla tambieacuten como ontolo-giacutea de la potentia oboedentialis para la libre revelacioacuten de Dios [hellip] para prestar oiacutedo a un eventual hablar de Dios que si se produce lo hace ndashal menos en un principiondash tambieacuten en el aacutembito de su conocimiento natural es decir mediante experiencia histoacuterica y mediante conceptos y palabras que contribuyen a constituir esta experiencia62

Teniendo esto en cuenta podemos sintetizar el trabajo de Rahner en dos pasos

1 Del anaacutelisis filosoacutefico de la trascendentalidad como capacidad de retorno del sujeto sobre siacute ndashlaquoen contraposicioacuten con esa otra cosa conocida que estaacute lsquofrente a eacutelrsquoraquo63ndash se desprende la proyeccioacuten u orientacioacuten64 de la existencia subjetiva contingente hacia un conocer y querer libre que cuando hablamos del ente que es el hombre solo cabe identificar con una libertad antecedente y creadora (don) que es la propia de Dios y como tal solo cabe explicar analoacutegicamente como loacutegica del amor

El amor es la voluntad iluminada hacia la persona la afirmacioacuten vo-luntaria de este en su singularidad irrepetible e indeducible Pero esta voluntad es la que actuacutea Dios en la posicioacuten de un ente finito Porque con ello se quiere a siacute mismo en su libre poder creador como laquocapacidadraquo del

60 K RAHNER Oyente de la palabra 33 61 Ibid 3462 Ibid 37 Asiacute presenta santo Tomaacutes la potencia obediencial de la criatura considerada

ante Dios laquoEst autem considerandum quod in anima humana sicut in qualibet creatura consideratur duplex potentia passiva una quidem per comparationem ad agens naturale alia vero per comparationem ad agens primum qui potest quamlibet creaturam reducere in actum aliquem altiorem in quem non reducitur per agens naturale et haec consuevit vocari potentia oboedentiae in creaturaraquo (STh III q11 a1)

63 K RAHNER Oyente de la palabra 7564 Cfr Ibid 139

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don del ser en el que eacutel desinteresadamente otorga al otro laquosu posesioacuten del serraquo [hellip] Con ello aparece el amor como la lumbrera del conocimien-to de lo finito y puesto que solo conocemos lo infinito a traveacutes de lo finito aparece tambieacuten como la luz de nuestro conocimiento en general siendo asiacute en uacuteltimo anaacutelisis el conocimiento uacutenicamente la claridad luminosa del amor65

Y asiacute conociendo al absoluto en su cualidad de presencia trascendente libre y amorosa el hombre laquose halla frente a este como frente a una perso-na duentildea de siacute mismaraquo al tiempo que ndashcontinuacutea Rahnerndash el ser absoluto muestra su luminoso rostro personal no porque se lo preste el hombre sino que laquola personalidad de Dios se muestra en el abrirse el ser absoluto ante la trascendencia humana porque este ser aparece en la preguntabi-lidad que todo ser tiene para el hombreraquo66 La concepcioacuten del hombre como oyente ndashque no estaacute referida a una palabra humana sobre Dios sino a la palabra divina sobre el hombre67ndash es posible dado que posee una condicioacuten de posibilidad una potentia oboedentialis o aptitud metafiacutesi-ca respecto a la autocomunicacioacuten de Dios entendida como revelacioacuten universal o trascendental laquoSolo si el ser del ente es de antemano lsquologosrsquo podraacute el Logos hecho carne decir lsquocon palabrasrsquo lo que se halla oculto en las profundidades de la divinidadraquo68

2 En cuanto teoacutelogo Rahner ha de atender igualmente a la positi-vidad (caraacutecter categorial) del hecho revelado y por tanto a la peculiar especificidad humana de la capacidad de trascendencia del espiacuteritu finito como lugar de encuentro con el Dios que puede revelarse es decir a la mundanidad temporalidad materialidad e historicidad del espiacuteritu hu-mano como determinaciones de laquosu apertura hacia el Dios de una posi-ble revelacioacuten libre haciendo de esta apertura precisamente una potentia oboedentialis humana para tal revelacioacutenraquo69

La revelacioacuten trascendental no es digamos una magnitud laquofijaraquo que reposa materialmente en siacute misma [hellip] sino que maacutes bien en esta historia categorial de la revelacioacuten alcanza su verdadera y propia realidad y asiacute ella misma debe entenderse en forma laquotemporalraquo de la misma manera

65 Ibid 130-13166 Ibid 11667 laquoEl hombre en virtud de su esencia espiritual oye siempre y esencialmente una re-

velacioacuten de Diosraquo (Ibid 120)68 Ibid 7169 Ibid 183

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que en teacuterminos muy generales la aprioacuterica estructura trascendental del espiacuteritu humano no se debe en definitiva entender como una magnitud laquofijaraquo [hellip] sino en tal forma que la aprioridad trascendental del espiacuteritu se determina a siacute misma incorporaacutendose a la realidad histoacuterica categorial y asiacute ella misma logra histoacutericamente su realizacioacuten70

En escritos sucesivos nuestro teoacutelogo profundiza su anaacutelisis filosoacutefi-co-teoloacutegico de la esencia humana con referencia expliacutecita a la involucra-cioacuten ndashen su dinaacutemica de apertura al serndash de su iacutendole espacio-temporal como espiacuteritu encarnado y la posibilidad de su libertad como devenir hacia un estadio de realizacioacuten definitivo Asiacute ndashresume J B Metz en su proacutelogo a la edicioacuten refundida de Oyente de la palabra que eacutel presentandash laquola cimentacioacuten de la existencia creyente sobre una palabra de Dios pro-nunciada histoacutericamente no aparece como algo arbitrario y discrecional sino como algo que responde a lo maacutes profundo de la existenciaraquo71 Re-cordemos que la Escritura presenta al hombre por el hecho de ser creado como imagen y semejanza de Dios es decir en una relacioacuten de estrechiacute-sima cercaniacutea con Eacutel Por tanto aunque pertenece al rango de los seres finitos la relacioacuten del hombre con el infinito es constitutiva Con Rahner podemos afirmar ahora que esta apreciacioacuten biacuteblica adquiere todo su re-lieve en el seno de una reflexioacuten racional sobre el ser humano

3 laquoexistenciAl sobrenAturAlraquo e historiA de lA sAlvAcioacuten

31 El laquohacerse hombreraquo del Verbo de Dios

Si el hombre fuese concebido como un ser clausurado sobre siacute (espiacuteritu puro) la encarnacioacuten de Dios es decir la real mediacioacuten entre Dios y el hombre seriacutea difiacutecilmente comprensible e incluso contradictoria Pues o bien Dios dejando de ser tal deberiacutea asimilarse a lo finito o bien deberiacutea ser abatida la laquonecesidad trascendentalraquo72 del hombre y con ella el propio hombre El trascendental como momento esencial de la teologiacutea rahneriana permite explicar la relacioacuten implicativa entre trascendencia e historia

La esencia metafiacutesica de una realidad y su historia por tanto la gra-cia como existencial y la historia de la salvacioacuten y la revelacioacuten no son

70 Ibid 148 (n 3) Cfr Id Historia del mundo e historia de la salvacioacuten in ET V 114-121

71 K RAHNER Oyente de la palabra 1072 Id Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica 26

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magnitudes meramente contrapuestas sino tales que mutuamente se con-dicionan siendo justamente esto lo que debe identificar una teologiacutea tras-cendental De modo que la teologiacutea trascendental no puede ni quiere ser la teologiacutea sino un momento de ella puesto que la teologiacutea (o mejor y de manera maacutes precisa la fe de la que la teologiacutea estudia los momentos reflexivos y la no reflexibilidad uacuteltima) debe enunciar siempre el concreto histoacuterico en su indeducibilidad y al mismo tiempo hacer comprensible coacutemo este concreto de la historia puede concernir efectivamente al hom-bre en su existencia y subjetividad originarias73

El momento trascendental de la teologiacutea considera que en la horizon-talidad de la experiencia trascendental que el sujeto humano tiene de su autorrealizacioacuten (en cuanto ser situado capaz de conocimiento y libertad) habita la verticalidad es decir se da una fundamental apertura a la reve-lacioacuten del Ser absoluto Dios La teologiacutea contempla que en virtud de la voluntad salviacutefica universal de Dios (revelacioacuten trascendental) el hombre despliega esa experiencia de su autorrealizacioacuten bajo el impulso de la gra-cia sobrenatural Dios ha creado libre y amorosamente al hombre como espacio personal de su autodonacioacuten y precisamente por ello no de modo arbitrario ndashcomo indicaba Metzndash sino como dotado de la capacidad real y permanente para que laquopueda dar cabida a este amor que es Dios mismo que lo pueda y lo tenga que recibir a un tiempo como lo que es el milagro eternamente asombroso el regalo inesperado indebidoraquo74 Aunque esa ca-pacidad real y permanente pueda ser identificada como congeniabilidad de la esencia del espiacuteritu humano hacia el Amor que se dona en ninguacuten caso es exigencia de la naturaleza humana sino que se trata en palabras de Rahner de un laquoexistencial sobrenaturalraquo75

El hombre real como interlocutor real de Dios debe poder recibir este amor como lo que necesariamente es un don libre Ello significa que hay que caracterizar de indebido de laquosobrenaturalraquo el mismo existen-cial central permanente de la ordenacioacuten al Dios trinitario de la gracia y de la vida eterna No porque el hombre posea ndashlaquoevidentementeraquondash una

73 Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 11274 Id Sobre la relacioacuten entre la naturaleza y la gracia in ET I 31275 Cfr Id Existenciario Existencial II in SM III 66-68 Es en la filosofiacutea de Heideg-

ger donde tiene su asiento el sentido del teacutermino Existencial se refiere a aquella caracteri-zacioacuten de la existencia del ser que permite comprenderlo en su especificidad de ser-ahiacute que permite por tanto comprender las determinaciones oacutenticas del ente que se comprende a siacute mismo como existencia o hecho de ser frente a las cosas Cfr M HEIDEGGER Ser y tiempo sect 9 Madrid 2003 67-70

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naturaleza fijamente delimitada y en este sentido comparada con ella ndashen cuanto magnitud fija y conocida desde siemprendash la gracia en uacuteltimo teacutermino Dios mismo aparezca como improporcionada con lo cual habriacutea que llamarla sobrenatural Sino porque la tendencia y ordenacioacuten al amor de Dios el existencial sobrenatural solo salva el caraacutecter indebido de la gracia siendo eacutel mismo indebido y en el momento en que lleno de gracia se hace consciente presentaacutendose como sobrenatural es decir como in-debido al hombre real76

Esta concepcioacuten teoloacutegica de la existencia humana como determinacioacuten ontoloacutegico-real operada sobrenaturalmente por la gracia en su naturaleza y llamada por eso sobrenatural (si bien no ausente del orden concreto de la existencia)77 aguarda auacuten el esclarecimiento de su especificidad cristiana la presencia histoacuterico-salviacutefica de Jesucristo es decir de la Palabra en la carne (revelacioacuten categorial) como raiacutez del sentido uacuteltimo que tiene el impulso trascendental del hombre hacia Dios esto es del oyente (antro-pologiacutea) y la relacioacuten de Dios con el mundo (cosmologiacutea)78 La automani-festacioacuten de Dios (revelacioacuten trascendental) en la categorialidad histoacuterica alcanza su plenitud en Jesucristo

Dios ha tomado al hombre con tan absoluta seriedad en la encarnacioacuten del Verbo que el hombre no puede considerar seriamente a Dios sino a Eacutel en cuanto hombre y en Eacutel a la humanidad divinizada Todas las realidades humanas tambieacuten su aspecto natural poseen una efectiva anoacutenima aca-so solo potencial y no obstante verdadera condicioacuten cristiana79

Cristo es la comunicacioacuten laquodefinitiva e insuperableraquo de Dios pues Dios asume en su Verbo la concrecioacuten histoacuterica del hombre Jesuacutes como propia La asume en la persona del Salvador laquoafirmacioacuten concreta en la historiaraquo sin la que lo trascendental no seriacutea real 80 Que la maacutexima realiza-

76 K RAHNER Sobre la relacioacuten entre la naturaleza y la gracia in ET I 31477 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 24578 laquoEn efecto si queremos ser cristianos y no solo metafiacutesicos del oscuro principio

hemos de confesar que la Palabra eterna se ha hecho carne y ha habitado entre nosotrosraquo (K RAHNER La palabra poeacutetica y el cristiano in ET IV 416)

79 Id Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 38780 A partir de una ontologiacutea de lo que llama Rahner laquosiacutembolo realraquo puede acometerse

una explicacioacuten de la humanidad de Cristo no como medio o sentildeal sino como manifestacioacuten propia del Logos como su siacutembolo real en sentido eminente y no como una realidad asumida desde fuera que no dice ni muestra nada de Aquel que la asume Originariamente se entiende por siacutembolo el espacio expresivo que va del ente que conoce al ente por conocerse en cuanto auto-realizacioacuten intriacutenseca en la pluralidad que es propia del ente ya sea finito o absoluto como el Dios Trino Ese espacio expresivo es el realizarse de la unidad de un ente esencial-

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cioacuten del hombre se haya hecho realidad solo puede ser aceptado y creiacutedo a posteriori a partir del acontecimiento histoacuterico-salviacutefico de Jesucristo Ahora bien dada su constitucioacuten es a partir de la reflexioacuten trascendental como el hombre puede aceptar la encarnacioacuten de Dios como libre epifaniacutea que finaliza realmente su desiderium naturale de la visioacuten beatiacutefica en la plenitud de la invitacioacuten que Dios dirige al hombre para compartir su vida divina a partir del mismo momento de su creacioacuten y no como superes-tructura adventicia al ser del hombre81

El movimiento de la creacioacuten apareceriacutea gravitando de antemano hacia ese punto en el que Dios alcanza simultaacuteneamente la suprema cercaniacutea y lejaniacutea frente a lo distinto de eacutel ndashlo creadondash al objetivarse de la manera maacutes radical en su imagen daacutendose en ella en cuanto eacutel mismo de la ma-nera maacutes verdadera y aceptando como lo maacutes radicalmente suyo lo creado por eacutel Dios en tal caso no seriacutea el fundador sin historia de una historia ajena a eacutel sino el ser de cuya propia historia se trata82

Por ello sostiene Rahner que la creacioacuten en general y el hombre en particular han sido llamados a la existencia por el amor de Dios que desea darse a lo otro esperando de eso otro una respuesta libre sostenida por el uacutenico motivo del amor 83 Refirieacutendose a la unidad entre el orden de la crea-cioacuten y el de la redencioacuten escribe laquoEsta unidad se funda uacuteltimamente en la absoluta decisioacuten de Dios ndashinderogable por la libertad de las criaturasndash a favor de su auto-alienacioacuten en el hacerse creatura de su uacutenico Verboraquo84 Dicho del modo concreto en que se despliega la historia de la salvacioacuten el hombre existe (creacioacuten) porque su existencia ha sido pensada y proyecta-da en Cristo (encarnacioacuten)85 En Cristo se da la plenitud de la unidad entre naturaleza y gracia anhelo humano y don de Dios revelacioacuten e historia

mente plural Expresaacutendose se auto-encuentra y posee a siacute mismo Siacutembolo es el modo de autoconocimiento propio del ente Este es el sentido en que Rahner habla del Logos en la vida trinitaria como laquosiacutembolo del Padreraquo (laquosiacutembolo intriacutenseco y sin embargo distinto del simbolizado constituido por este mismo en quien el simbolizado se expresa a siacute mismo y de esta forma se poseeraquo) y de la humanidad de Cristo como automanifestacioacuten del Logos laquode forma que cuando Dios expresaacutendose se aliena a siacute mismo aparece justamente eso que nosotros llamamos la humanidad del Logosraquo (K RAHNER Para una teologiacutea del siacutembolo in ET IV 277 y 280)

81 K RAHNER Problemas actuales de cristologiacutea in ET I 19282 Ibid 17283 K RAHNER Para la teologiacutea de la encarnacioacuten in ET IV 14284 Id Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 38885 Id Curso fundamental sobre la fe 237 Id Historia del mundo e historia de la salva-

cioacuten in ET V 125

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Como se colige de lo dicho hasta aquiacute para comprender a fondo el laquoha-cerse hombreraquo del Verbo misterio esencial y especiacutefico de la fe cristiana86 Rahner adopta en su cristologiacutea esa oacuteptica trascendental del misterio de Cristo que comparte con la metafiacutesica moderna el empentildeo en laquola supera-cioacuten del positivismo metafiacutesico y del conceptualismo caracteriacutestico de la escolaacutestica tardiacutearaquo partiendo de una laquocomprensioacuten del ser como espiacuteritu palabra conciencia inicial y poder entenderlo asiacute dinaacutemicamenteraquo87

Cuando la historia del hombre el acto de su libertad y la culminacioacuten absoluta de ese acto libre no son considerados como sucesos basados en un fundamento en siacute intocado de una naturaleza humana concebida coacute-sico-estaacuteticamente sino vistos como autorrealizacioacuten de una esencia que en tanto lo que ella es alcanza solamente en ellos su realidad propia si la libertad por consiguiente no es vista tanto como una laquopotenciaraquo que se laquotieneraquo sino como la libertad de disposicioacuten que se es para llevar la propia esencia previamente dada en tanto ella misma a su perfeccioacuten el acontecimiento de la encarnacioacuten estaacute entonces unido maacutes estrecha y esencialmente a la perfeccioacuten de la vida humana asumida que cuando la encarnacioacuten es vista como constitucioacuten de un sujeto humano en cuya vida acaece despueacutes solo ulteriormente esto o lo otro88

Se trata en suma de elaborar una laquocristologiacutea ontoloacutegicaraquo esto es que construya sus enunciados y esquemas de comprensioacuten orientados laquohacia la coincidencia original de ser y de concienciaraquo89 y asiacute tratando de remontar la formalidad conceptual de la cristologiacutea claacutesica los pueda hacer maacutes asequibles al hombre contemporaacuteneo Un trabajo que nuestro autor consi-dera plenamente justificado por cuanto se trata de un recurso al que apela la misma Escritura En efecto si como recordaba el Vaticano II tanto el mundo (cosmologiacutea) como la humanidad (antropologiacutea) han sido creados

86 Cfr STh III q2 a2 laquoSi ergo humana natura Verbo Dei non unitur in persona nullo modo ei unitur Et sic totaliter tollitur incarnationis fides quod est subruere totam fidem christianamraquo

87 O GONZAacuteLEZ DE CARDEDAL Fundamentos de cristologiacutea II Madrid 2006 706-707

88 K RAHNER Cuestiones dogmaacuteticas en torno a la piedad pascual in ET IV 160 Per-miacutetasenos hacer de este texto un ejemplo que ilustra los adjetivos con que J B Metz califica la teologiacutea trascendental de Rahner laquoRahner elabora una dogmaacutetica histoacuterico-vital biograacutefica narrativa testimonial pero siempre enfocada como casi ninguna otra teologiacutea a lo objetivo y doctrinalraquo En nuestro caso se trata de la estrecha confrontacioacuten y mutua iluminacioacuten entre libertad del hombre (considerada en su caraacutecter de disposicioacuten de ser) y encarnacioacuten de Dios en cuanto plenificacioacuten de la misma Cfr J B METZ La fe en la historia y la sociedad 233

89 K RAHNER Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica 66

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en orden a un encuentro de plenitud con Cristo no hay por queacute descartar ambos como espacio o gramaacutetica para la comprensioacuten de la encarnacioacuten del Verbo sin que por ello haya de quedar Dios sometido a este ciacuterculo hermeneacuteutico90 Por lo que a la antropologiacutea se refiere Rahner apela en clave ascendente al doble espacio en que ndashseguacuten eacutelndash se declara la identidad personal del hombre (ante y en Cristo) tanto al horizonte de la apertura trascendental del espiacuteritu humano como al significado de otras experien-cias de rango existencial que pueden considerarse declaracioacuten anoacutenima de la revelacioacuten de Dios en Cristo Si bien no puede obviarse que es la experiencia trascendental el fundamento o condicioacuten de posibilidad de toda iniciativa del espiacuteritu del hombre y por tanto constituye el horizonte comprensivo de su existencia histoacuterica o si se prefiere del a posteriori de su vida personal Dediquemos una palabra conclusiva al significado teoloacute-gico de la trascendentalidad para ahondar en el siguiente apartado el de la existencia maacutes inmediata y sus llamadas a la teologiacutea

Rahner recordemos presenta al hombre como aquel ser que es cons-ciente de siacute de su propia finitud y en tal medida como ser que estaacute frente al ser laquoabsolutoraquo Aun sin poder superarla trasciende su propia finitud pues por su constitucioacuten esencial es capaz de anticipar la llamada hacia el absoluto El hombre toma conciencia de su orientacioacuten al absoluto porque es laquosujetoraquo del mismo modo que la invocacioacuten que brota de eacutel hacia el absoluto espera y piensa a este como el laquoSujetoraquo Por eso la perspectiva trascendental declara la identidad del hombre como persona En el encuen-tro con Cristo ndashprincipio y fin de todo lo creadondash el hombre descubre el sentido uacuteltimo de su laquopoder existir en la plena entrega de siacute mismoraquo91 como entrega al Ser en la medida en que en y por Cristo la humanidad se mani-fiesta como prefigurada y creada para la salvacioacuten (para ser naturaleza del propio Dios como incomparable disposicioacuten de siacute) Si como confiesa san Pablo el hombre ha sido creado en Cristo (cfr Rom 829 Col 115 1 Cor 86) entonces es Cristo quien en su encarnacioacuten revela al hombre su mis-terio La definicioacuten cristoloacutegica de la unioacuten hipostaacutetica apela a una aptitud de la naturaleza humana (potentia oboedentialis o potencialidad para la re-cepcioacuten de la autocomunicacioacuten de Dios en la gracia) como capacidad para su asuncioacuten por la persona del Verbo de Dios La encarnacioacuten no estaacute por tanto en funcioacuten del pecado del hombre ndashcomo pudo pensar la interpreta-

90 Cfr Id Jesucristo B in SM IV 5691 Id Para la teologiacutea de la encarnacioacuten in ET IV 137

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cioacuten teoloacutegica claacutesica del disentildeo de Dios a favor del hombrendash sino que la creacioacuten es ya un acto de salvacioacuten La existencia humana acontece en el orden presente de la salvacioacuten esto es se halla sobrenaturalmente elevada por la autocomunicacioacuten divina en la gracia increada que es la potencia del Dios Trino92 La perspectiva trascendental permite a la cristologiacutea laquohacer comprensible la idea del hombre-Dios como punto culminante (buscado por lo menos asintoacutetica e hipoteacuteticamente) del movimiento del espiacuteritu que en una constante superacioacuten de siacute mismo se mueve hacia Diosraquo93 La misma perspectiva trascendental permite a la antropologiacutea advertir que su constitutiva potencialidad como condicioacuten a priori para la laquoautomediacioacuten de Diosraquo tiene su razoacuten de ser en el hombre salido de las manos de Dios como don por medio de su Hijo hecho hombre94

92 Cfr Id Amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 259 El propio teoacutelogo confiesa abiertamente al final de su carrera que por razones no solo teoloacutegicas sino pastorales en su antropologiacutea teoloacutegica laquoel tema de la pecaminosidad del hombre y el perdoacuten de la culpa por pura gracia es en cierto sentido algo secundario en comparacioacuten con el tema de la auto-comunicacioacuten de Diosraquo Y esto no porque el pecado sea una experiencia que no nos afecte radicalmente y nos impida reclamar cualquier derecho ante la gracia de Dios sino porque laquosi vemos lo difiacutecil que llega hoy diacutea a los hombres la justificacioacuten como perdoacuten uacutenicamen-te del pecado si ademaacutes para un teoacutelogo catoacutelico Dios y su promesa de siacute mismo al hombre (como quiera que esta haya de entenderse en concreto) precede ya al pecado y es pura gracia pura maravilla inesperada de Dios quien se entrega derrochaacutendose a siacute mismo y hace que la aventura de tal amor sea su propia historia entonces pienso que puede uno sentir tranquila-mente que la autocomunicacioacuten de Dios a la criatura es un tema maacutes central que el pecado y el perdoacuten de los pecadosraquo (K RAHNER Sobre la inefabilidad de Dios Experiencias de un teoacutelogo catoacutelico 31-32) En otro lugar en liacutenea semejante considera Rahner que tras la en-carnacioacuten de Cristo y su cruz ndashel ahiacute donde Dios se ha decidido a favor del hombre sin dantildear su libertad redimiendo y ennobleciendo su naturaleza hasta hacerla capaz de felicidadndash el cristiano laquopost Christum natum en el fondo debe pensar el mundo de manera optimista del mismo modo que debe (puede) saber que la Palabra de Dios se ha hecho carne en este mun-do para siempre [hellip] No se trata de que dicho optimismo pase por alto la cruz y la muerte sino de que fije su atencioacuten en la compenetracioacuten del Hijo con el destino del mundoraquo (Id Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 389-390) En otro paso de su obra refirieacutendose a la acusacioacuten lanzada contra Teilhard de Chardin de haber atenuado la fuerza del pecado en su visioacuten evolutiva del mundo considera Rahner que sin restar importancia al pecado cabe una concepcioacuten fundamentalmente positiva del mundo en su proceso evolutivo cuando se entiende este rectamente a la luz del poder redentor de la encarnacioacuten laquoEl mundo y su historia estaacuten de antemano sustentados por la voluntad absoluta de Dios de una radical autocomunicacioacuten a ese mundo puesto que en esa autocomunicacioacuten y su punto cumbre la encarnacioacuten el mundo se hace historia de Dios mismo estaacute el pecado si lo hay en el mundo y en la medida en que lo haya abarcado de antemano por la voluntad de remisioacuten y la oferta de autocomunicacioacuten divina seraacute necesariamente puesto que por causa de Cristo no estaacute condicionada por el pecado una oferta de la remisioacuten y de la superacioacuten de la culparaquo (Id La cristologiacutea dentro de una concepcioacuten evolutiva del mundo in ET V 197)

93 Id Teologiacutea trascendental in SM VI 614-615 94 Cuando la laquounioacuten hipostaacuteticaraquo no se piensa bajo la clave del privilegio abstracto

o alteracioacuten del liacutemite humano sino como plena realizacioacuten de la apertura entre Dios y el

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32 Llamadas de la antropologiacutea a la teologiacutea

Ademaacutes de la conciencia de siacute la trascendentalidad del espiacuteritu hu-mano desvela el sentido que poseen otras llamadas (categoriales) de la antropologiacutea a la teologiacutea Se trata de la experiencia humana del amor al tuacute la disposicioacuten ante la muerte y la versioacuten al futuro de la vida del hom-bre en clave de esperanza hacia un destino de plenitud ulterior 95 Todas ellas se situacutean en la oacuterbita de una experiencia de vida que abre un camino a aquella reflexioacuten que puede conducir eventualmente a Dios laquoEstas tres lsquoapelacionesrsquo coinciden en que el hombre en su existencia si eacutel la asume decididamente de suyo desarrolla ya algo asiacute como una lsquocristologiacutea en buacutesquedarsquoraquo96 Rahner observa estrechamente vinculado el sentido y ejer-cicio de cada una de estas apelaciones de la existencia humana a la voca-cioacuten sobrenatural (la primordial genuinidad del fondo personal informado por el laquoPneuma divinoraquo)97 que Dios ha inscrito en cada vida singular convirtieacutendola en uacutenica e insustituible

321 Amor al proacutejimo

Cuando el amor al proacutejimo es considerado en su verdad y capacidad constitutiva de generar una comunidad enteramente nueva entre los hom-bres laquode persona a personaraquo98 cuando no obviamos que en virtud de la historicidad a posteriori del hombre en el acto de la comunicacioacuten amoro-sa con el tuacute personal queda sintetizada reunida y realizada la unidad origi-

hombre entonces es posible recuperar la contemplacioacuten de la vida de Cristo (en su condicioacuten de realidad humana en el mundo y en cuanto tal realidad de Dios) como espacio para un discernimiento maacutes profundo del significado de nuestra propia vida A una teologiacutea de los misterios de la vida de Cristo (los interrogantes y asombros que suscita) confiacutea Rahner la posibilidad de lograr una interpretacioacuten uacuteltima de nuestra vida e historia personal (y cristiana) en todo el arco de su complejidad como esfuerzo de a-propiacioacuten de siacute y ex-sistencia ante el Misterio Cfr K RAHNER Problemas actuales de cristologiacutea in ET I 195-197 Mysterien des Lebens Jesu in LThK2 VII 721-722 Para conocer las fuentes y motivaciones de la teologiacutea contemporaacutenea (con especial atencioacuten a la obra de K Rahner) para la recuperacioacuten de una teologiacutea de los misterios de la vida de Cristo O GONZAacuteLEZ DE CARDEDAL Fun-damentos de cristologiacutea I Madrid 2005 654-660 Tambieacuten A GRILLMEIER Los misterios de la vida de Jesuacutes panorama histoacuterico in MyS III 571-586

95 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 345-348 Id Der eine Jesus Christus und die Universalitaumlt des Heils 279-282 Id Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea siste-maacutetica 63-66 Cfr G PATTARO La svolta antropologica 152-157 I SANNA La visione antropologica di Karl Rahner in Id (ed) Lrsquoereditagrave teologica di Karl Rahner 18-26

96 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 34597 Cfr Id Uumlber die Heilsgeschichtliche bedeutung des einzelnen in der Kirche 43198 Id Consagracioacuten del laico para la cura de almas in ET III 276

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naria de lo que el hombre es en su auto-posesioacuten subjetiva como apertura trascendental al ser y en su libre auto-disposicioacuten hacia la definitividad99 cuando advertimos la complejidad pasional del fenoacutemeno amoroso como realidad que permea la totalidad experimentada y sufrida de la vida per-sonal con don de siacute 100 entonces seriacutea insensato no conceder a este acto fundamental y envolvente de la existencia humana el caraacutecter de patencia del misterio aun antes de profundizar en su orilla teoloacutegica101 Por ello

Si en la descripcioacuten del amor al tuacute se pone de manifiesto que es realmente la realizacioacuten del ser total espiritual y trascendental del hombre entende-remos con mayor facilidad que dicho amor acontezca en el presente orden salviacutefico como caritas que no indica otra cosa que su radicalidad absoluta en cuanto que estaacute abierto a la inmediateidad del Dios que se comunica como gracia102

En la extroversioacuten amorosa de que es capaz el espiacuteritu humano cabe por tanto una experiencia inmediata de Dios103 En efecto la identifica-cioacuten teoloacutegica de la trascendentalidad ilimitada del espiacuteritu humano como potentia oboedentialis para la gracia permite comprender la sobrenatu-ralidad del acto radicalmente libre de amor hacia el tuacute como orientacioacuten inmediata a Dios que se da en el seno de la historia de la salvacioacuten es decir en la figura concreta del otro que para el cristiano representa de modo absoluto Jesucristo

Jesuacutes es el absolutum concretissimum y en consecuencia aquel ante quien el amor alcanza su concrecioacuten e inequivocidad maacutes absolutas aque-lla que el amor busca en razoacuten de su propia esencia pues es un movimien-to no hacia un ideal abstracto sino hacia la singularidad concreta indi-vidual indisoluble y precisamente este amor halla en su tuacute la amplitud absoluta del misterio incomprensible104

Caritas identifica en la Escritura el amor mismo que es Dios quien hace de su encuentro con la criatura ndashimagen y semejanza suyandash un acto supre-

99 Id Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 258-259100 Id De la necesidad y don de la oracioacuten 45101 Cfr Id Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 260 Puede

encontrarse una siacutentesis sobre el sentido que tiene en Rahner el amor al proacutejimo como espacio de Trascendencia en M CABADA CASTRO La vigencia del amor Afectividad hominiza-cioacuten y religiosidad Madrid 1994 378-381

102 K RAHNER Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 261103 Cfr Id Uumlber die Heilsgeschichtliche bedeutung des einzelnen in der Kirche 423104 Id Curso fundamental sobre la fe 362

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mo de amor que se convierte para ella a su vez en mandamiento nuevo El cual no es una mera exigencia moral sino una llamada a concentrar la fuerza vital en aquel que Dios ha querido como morada de su amor la per-sona del otro Cristo mismo ha sido identificado por Dios en el Evangelio como mi amado (cfr Mt 317 175) y Jesuacutes a su vez como fundamento del mandamiento del amor (cfr Jn 1335) en Eacutel Dios mismo se presenta como garantiacutea real de la plenitud que aguarda a pesar de su finitud al amor humano laquoPor eso para Juan la consecuencia de que Dios que es amor (1 Jn 416) nos haya amado no es que nosotros a nuestra vez le amemos a eacutel sino que nos amemos mutuamente (1 Jn 4711)raquo105 En otro lugar se-ntildeala Rahner que el amor inter-humano corre el riesgo de instrumentalizar sus mediaciones (aunque sean personales) en cambio esto no es posible cuando decimos que el otro de la relacioacuten es Dios pues Eacutel no estaacute junto al hombre sino ocupando su centro maacutes iacutentimo laquoEl amor a un hombre por amor de Dios no saca del hombre amado sino que introduce en eacutelraquo106

Si laquosinoacutepticamenteraquo se reclama como ejecucioacuten nuestra un amor que en su desmesura ha de aceptar la desmesura del amor de Dios para con nosotros y que ha de poseer por ello una radicalidad que exige realmente y hasta el final la carencia de reparos habraacute que decir entonces ese amor de veras reclamado es en cuanto tal dado que responde al absoluto amor de Dios un amor que este sustenta esto es que la autocomunicacioacuten de Dios posibilita [hellip] porque Dios estaacute dispuesto a dar lo que ordena [hellip] porque se da ya el amor como posibilidad que ha de ser animada y liberada hacia siacute misma y porque estaacute ahiacute ya en el mundo la voluntad de Dios que otorga su realizacioacuten a esa posibilidad107

La consideracioacuten que hace la tradicioacuten neotestamentaria del hondo significado del amor inter-personal como amor a Dios108 contempla en continuidad la realidad del amor humano como genuina posibilidad de la trascendentalidad de la persona (que laquopara no perderse en la vaciacutea nada necesita un tuacute intramundanoraquo)109 con la absoluta disponibilidad del amor

105 Id Sobre la unidad del amor a Dios y amor al proacutejimo in ET VI 253106 Id Consagracioacuten del laico para la cura de almas in ET III 282107 Id El laquomandamientoraquo del amor entre los otros mandamientos in ET V 452-453108 Ya sea como medida expliacutecita por la que el hombre seraacute juzgado en el juicio esca-

toloacutegico de Dios (Mt 2534-46) o como forma definitiva de la existencia cristiana (1 Cor 1231ndash1313)

109 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 207 Id El laquomandamientoraquo del amor entre los otros mandamientos in ET V 450

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que es Dios y se da a conocer en la persona de Cristo Y puesto que la mediacioacuten salviacutefica de la encarnacioacuten de Cristo no tiene un significado so-lamente temporal sino eterno110 la realizacioacuten espiritual de la existencia como demanda de fidelidad absoluta que exhibe la entrega interpersonal amorosa en tanto estaacute llevada por la gracia posee una profundidad abso-luta y un momento que estaacute asumido en la laquovida eternaraquo entre Dios y el hombre Esa vida eterna en definitiva trasciende siempre este encuentro inmediato espacio-temporal corporal y se entiende como insuprimible en la muerte presupuesto solamente que en la concepcioacuten cristiana de la existencia la muerte se interprete y realice como consumacioacuten y no solo como fin en que todo se acaba111

322 Disponibilidad para la muerte

Pasemos al espacio de la experiencia de la muerte Cabe leer de dos modos muy distintos esa declaracioacuten irrevocable de la finitud de la exis-tencia del hombre que es su muerte como pura pasioacuten y fatalidad o como ndashdigaacutemoslo asiacutendash pasioacuten activa teacutermino y consumacioacuten de la vida personal (status viatoris)112 En la medida en que la muerte pone fin a la existencia bioloacutegica del hombre este sufre la muerte la padece sin remedio como laquoladroacuten en la noche despojo y reduccioacuten a la impotencia es justamente finraquo113 No obstante y en cuanto acontecimiento protagonizado por el ser personal no puede pasarse por alto que la muerte no es ajena a la dialeacutec-tica de la vida personal donde ha de vivirse

El hombre es espiacuteritu y materia persona y naturaleza tiene libertad y al mismo tiempo un dinamismo vital independiente del libre albedriacuteo En la esencia misma del hombre hay una verdadera dialeacutectica aneja a esta composicioacuten plural y antiteacutetica de realidades Lo maacutes loacutegico es esperar que esta complejidad se refleje en la muerte [hellip] El acto maacutes trascendental de la vida vivido humanamente implica la uacuteltima decisioacuten personal de la

110 Cfr Id Eterna significacioacuten de la humanidad de Jesuacutes para nuestra relacioacuten con Dios in ET III 55-56

111 Id Curso fundamental sobre la fe 361 112 Cfr Id Sentido teoloacutegico de la muerte 15-35 Id Pasioacuten y ascesis Sobre la fun-

damentacioacuten filosoacutefico-teoloacutegica de la asceacutetica cristiana in ET III 80-93 Cfr las explica-ciones sobre la teologiacutea de la muerte en Rahner J L RUIZ DE LA PENtildeA El hombre y su muerte Antropologiacutea teoloacutegica actual Burgos 1971 217-268 F BRANCATO La questione della morte nella teologia contemporanea Teologia e teologi Firenze 2005 73-80

113 K RAHNER Sentido teoloacutegico de la muerte 45

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vida no por lo que tiene la muerte de acontecimiento pasivo procedente de la vida bioloacutegica sino por la accioacuten libre del alma El teacutermino del hombre como persona espiritual que decide libremente de su propia suerte ha de ser consumacioacuten activa desde dentro situarse activamente en su perfeccioacuten o imperfeccioacuten dar el postrer testimonio que resulta y resume en general toda su propia vida En este caso la muerte lleva consigo la total posesioacuten de siacute mismo por parte de la persona Importa la realizacioacuten definitiva del sentido de siacute mismo y la libre decisioacuten de la realidad personal [hellip] Asiacute la laquopropia muerteraquo desde dentro por la accioacuten de la persona misma es a la par el acontecimiento de la maacutes radical depotenciacioacuten del hombre La muerte es accioacuten y pasioacuten en uno114

Heidegger hace de la muerte ndashentendieacutendola activamentendash clave her-meneacuteutica de comprensioacuten de la existencia en su originalidad y posibi-lidad de recogimiento en siacute laquoLa muerte como fin del Dasein es la po-sibilidad maacutes propia irrespectiva cierta y como tal indeterminada e insuperable del Dasein La muerte como fin del Dasein es en el estar vuelto de este hacia su finraquo115 No obstante apunta Rahner116 Heidegger tan solo llega a identificar a su protagonista como un ser-para-la-muerte en cuanto posibilidad anticipada de un vivir estrechado sin embargo a lo inmediato

Ahora bien iquestpor queacute proclamar el dominio de la muerte sobre la to-talidad de la vida aislando aquella de la real capacidad de apertura tras-cendente y la constante pugna de libertad en que la existencia personal se descubre y construye cabe-siacute y hacia lo otro de siacute como afaacuten sin liacutemites Entre las determinaciones esenciales de la existencia humana Rahner ha privilegiado ndashcomo explicitaremosndash la libertad cualificaacutendola como accioacuten trascendental sobre el proyecto personal esto es como entrega del hombre a siacute mismo que asumiendo en unidad la totalidad de dimensiones de su existencia pretende la total disposicioacuten de siacute laquoLa libertad en su esencia original no es la facultad de hacer o dejar de hacer arbitraria-mente una cosa determinada sino la estructura fundamental por la que el sujeto en su trascendentalidad dispone de siacute mismo en orden a su realiza-

114 Ibid 34-35115 M HEIDEGGER Ser y tiempo sect 52 Madrid 2003 278 Cfr J L RUIZ DE LA

PENtildeA El hombre y su muerte Antropologiacutea teoloacutegica actual 79-90 A NITROLA Trattato di escatologia 2 Pensare la venuta del Signore Cinisello Balsamo 2010 89-91

116 Cfr K RAHNER Pasioacuten y ascesis Sobre la fundamentacioacuten filosoacutefico-teoloacutegica de la asceacutetica cristiana in ET III 89

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cioacuten definitivaraquo117 Asiacute entendida la libertad que es propia de la existencia personal laquono es precisamente la capacidad de revisar siempre de nuevo sino la uacutenica facultad de lo definitivo la facultad del sujeto que mediante esa libertad ha de ser llevado a su situacioacuten definitiva e irrevocableraquo118 Para la antropologiacutea cristiana la muerte se encuadra entre aquellas ac-ciones particulares de la vida en que se ejerce y media esa facultad de lo eterno que es la libertad del hombre laquoLa muerte del hombre se presenta como llegada a su teacutermino de una historia de libertad en la inmediatez del misterio de Dios como plenitud beatiacutefica o como juicioraquo119 Libertad que ante la muerte puede ejercer el hombre como laquolibertad libremente amada [hellip] pues donde hay libre libertad hay amor a la muerte hay valor para morirraquo120 y laquolibertad rendida una libertad que acepta no solo la muerte sino su sentido el sentido de la existenciaraquo121 Contribuyendo asiacute a la re-capitulacioacuten de su historia y a la pregunta por la densidad irrepetibilidad y valor absoluto de quien la padece

La muerte tiene una presencia axioloacutegica en la totalidad de la vida humana El hombre opera su muerte como consumacioacuten por la accioacuten de su vida y asiacute la muerte estaacute presente en esa accioacuten y consiguiente-mente en toda accioacuten libre en que el hombre dispone de la totalidad de su persona122

La decisioacuten libre y responsable adoptada en cada accioacuten vital ndashincluida la muertendash construye el proyecto personal en el tiempo presente donde se rememora lo valioso acumulado a la vez que se anticipa el futuro definitivo del mismo123 El conjunto de tales decisiones va enriqueciendo el nuacutecleo personal humano desde dentro coadyuvando fielmente a la constitucioacuten de la imagen de lo que el hombre quiere llegar a ser Este argumentario an-

117 Id La muerte del cristiano in MyS V 452118 Id Curso fundamental sobre la fe 123 El anaacutelisis completo de la libertad humana

en sus posibilidades y condicionantes Ibid 121-125119 Id Theologische Erwaumlgungen uumlber den Eintritt des Todes 333120 Id Sentido teoloacutegico de la muerte 94121 Ibid 95122 Ibid 49-50 Cfr Id La muerte del cristiano in MyS V 444 Este es el modo crea-

tivo en que Rahner interpreta la afirmacioacuten de Gregorio Magno (prolixitas mortis) laquoTempo-ralis vita aeternae vitae comparata mors est potius dicenda quam vita Ipse enim quotidianus defectus corruptionis quid est aliud quam quaedam prolixitas mortisraquo (GREGORIO MAG-NO Homiliarum in evangelia II 37 1 in PL 76 1275)

123 Entre los existenciales ineludibles del hombre se encuentra su constitucioacuten anam-neacutetica y prognoacutestica Cfr K RAHNER Principios teoloacutegicos de la hermeneacuteutica de las declaraciones escatoloacutegicas in ET IV 382

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tropoloacutegico contribuye a conjurar el peligro de una escatologiacutea cristiana que tratando de laquodesmitologizarraquo en absoluto las afirmaciones escatoloacute-gicas de la Escritura las laquodes-escatologizara de tal forma que todas ellas mentasen solo un suceso acaecido una decisioacuten tomada en el ahora de la existencia del hombre concretoraquo124 quedando asiacute destruido su caraacutecter esencial como sabiduriacutea del futuro en el saber del hombre acerca de siacute y su redencioacuten en Cristo por revelacioacuten divina Este proceder des-escatologi-zariacutea a priori tanto la prerrogativa antropoloacutegica de la apertura absoluta e incondicionada a la palabra de Dios (al hacer de eacutel un ser restringido a su presente sin capacidad de futuro) como la posibilidad reveladora de Dios y su actuacioacuten pro nobis como plenitud del hombre entero y de todo lo que pertenece a su existencia personal (naturaleza y sujeto)125 En realidad la salvacioacuten ofrecida al hombre por Dios y determinada por el acaecer de Cristo ndashmuerto y resucitadondash contiene una comunicacioacuten sobre lo futuro que en palabras de Rahner

acaece justamente en lo que el hombre oye sobre siacute mismo de parte de Dios en tanto la apertura de la verdad de su existencia y viceversa Ambas co-sas en el mismo grado y medida en que esta interpretacioacuten del hombre he-cha por Dios avanza en la historia humana y por eso y de manera no su-perable en Jesucristo en quien Dios se ha dicho como salvacioacuten al hombre definitivamente y de forma que ya no podraacute ser rebasada126

En la humanidad de Cristo el hombre oye hablar a Dios claramente sobre el significado de su propia muerte ya que

la redencioacuten acontecioacute precisamente por el hecho de que la muerte fue aceptada ndashcon fe esperanza y amorndash como manifestacioacuten del pecado como muestra de su vaciedad y opresioacuten como presencia de la eterna tiniebla y del abandono de Dios y se transformoacute en manifestacioacuten de la entrega obe-diente del hombre entero a la incomprensibilidad del Dios santo en medio del extraviacuteo y el alejamiento127

En la presente economiacutea de la salvacioacuten la muerte del hombre deja de ser una contradiccioacuten total de la constitucioacuten humana pues mediante la accioacuten de la gracia ha sido incorporada a la muerte de Cristo laquodonde

124 Ibid 376125 Ibid 378-379126 Ibid 386-387127 K RAHNER La muerte del cristiano in MyS V 461

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el vaciacuteo del hombre se hizo plenitud de Dios cosa que de suyo y origi-nariamente no era La muerte se hizo vidaraquo128 Precisamente este es el sentido que tiene para el justo morir con Cristo como don de gracia El Crucificado ha desvelado la autentica significacioacuten del acto por el cual el hombre asume en libertad el despojamiento que acarrea su muerte no en abstracto por consiguiente pues laquoel autodesprendimiento radical de la muerte es un aspecto de la realizacioacuten de la gracia en cuanto fe esperanza y amorraquo129

323 Esperanza en el futuro

Digamos una palabra final sobre la versioacuten del hombre al futuro como instancia antropoloacutegica para la teologiacutea Una vez maacutes hemos de apuntar que en la caracterizacioacuten cristiana del tiempo histoacuterico como tiempo de salvacioacuten o avance hacia el futuro absoluto ndashlaquoque no es sino otro nombre para lo mentado con la palabra lsquoDiosrsquoraquo130ndash entra de nuevo en juego el ciacuterculo hermeneacuteutico entre antropologiacutea metafiacutesica y teologiacutea Uno de los constitutivos que definen la estructura inmanente del espiacuteritu finito en cuanto espiacuteritu encarnado es el de la temporalidad La esperanza cris-tiana en un futuro absoluto laquoimplica la conviccioacuten de que el hombre vive en el tiempo de manera distinta a como viven las realidades infrahuma-nasraquo131 El hombre no es una cosa limitada a la dimensioacuten temporal del presente Es el sujeto que poseyeacutendose a siacute mismo y disponiendo de siacute en libertad posee su tiempo como totalidad en cuyo presente se condensa lo realmente decisivo de la realizacioacuten de la historia personal como antici-pacioacuten de futuro A esto es a lo que llama Rahner el laquoconsuelo del tiem-poraquo en que laquono perdemos nada sino que ganamos continuamenteraquo132 Esta asuncioacuten intriacutenseca de la temporalidad que es propia del hombre como espiacuteritu encarnado permite su concepcioacuten como espiacuteritu libre o laquoser histoacutericoraquo133 En efecto por su condicioacuten esencialmente encarnada el espiacuteritu del hombre opera en el marco espacio-temporal en el que lo ubica su corporeidad Encarnacioacuten e historicidad se corresponden en el

128 Id Sentido teoloacutegico de la muerte 78129 Id La muerte del cristiano in MyS V 463130 Id Utopiacutea marxista y futuro cristiano del hombre in ET VI 74131 Id Consuelo del tiempo in ET III 154132 Ibid 165133 K RAHNER Oyente de la palabra 176

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hombre Y como venimos mostrando en virtud de su libertad es posible definir al hombre como proyecto es decir no como entidad estaacutetica o fijada de antemano sino como posibilidad de autodevenir hacia un estado de realizacioacuten vital definitivo

Ahora bien para Rahner solo la lectura del mundo y el hombre desde la historia de la salvacioacuten aporta al hombre (al creyente) la certeza de que el suyo es un tiempo absolutamente consolado es decir laquoque no corre hacia el vaciacuteo sino que encuentra el futuro absoluto se mueve incluso en eacutelraquo134 aunque sea en la aparente vulgaridad del cada diacutea135 El cristianis-mo posee un concepto de tiempo que las futurologiacuteas seculares descono-cen En efecto el cristiano cree en un futuro en el que todo aquello que es libremente actuado tendraacute validez eterna en Dios porque el hombre proyecta trascendentalmente su naturaleza a la luz de laquoun futuro absoluto que per definitionem no puede ser ni hecho ni planificado en tanto que le deja venir sobre siacuteraquo136 porque laquolo que el cristianismo llama gracia no es otra cosa que la autocomunicacioacuten de Dios como futuro absoluto en ese estado en que la historia de su llegada y aceptacioacuten dura todaviacutearaquo137 por uacuteltimo porque lo que el cristianismo llama encarnacioacuten del Logos divino en Jesucristo indica de modo preciso que objetivamente en eacutel y para nosotros esa autocomunicacioacuten de Dios en cuanto futuro absoluto del mundo se manifiesta tan histoacutericamente que se hace como dada y como irreversible captable y creiacuteble por la experiencia categorial de la humanidad138

Por ello frente a otros proyectos utoacutepicos el cristianismo contempla al hombre en su dignidad inviolable no sacrificable a ninguna promesa de un futuro fruto de un caacutelculo o planificacioacuten intramundana Es maacutes al trabajo en favor de ese futuro intramundano laquole otorga su uacuteltima radical seriedad en su doctrina de la unidad del amor a Dios y al proacutejimo declara que la positiva relacioacuten para con el hombre es un momento esencial indis-pensable es mediacioacuten irreemplazable para la relacioacuten con Dios futuro absoluto (lsquosalvacioacutenrsquo)raquo139

134 Id Utopiacutea marxista y futuro cristiano del hombre in ET VI 72135 Cfr Id De la necesidad y don de la oracioacuten 57-69136 K RAHNER Utopiacutea marxista y futuro cristiano del hombre in ET VI 73137 Ibid 75138 Ibid139 Ibid 77

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41 Laantropologiacuteafilosoacuteficaimplicadaenlateologiacutea

Ante todo en relacioacuten con los presupuestos para el mensaje revelado del cristianismo hemos de decir sobre el hombre es persona sujeto [hellip] Una relacioacuten personal con Dios una auteacutentica historia dialogiacutestica entre Dios y el hombre la recepcioacuten de la propia salvacioacuten singular y eterna el concepto de una responsabilidad ante Dios y su juiciohellip todas estas afirmaciones del cristianismo ndashindependientemente de que ellas mismas deban interpretarse todaviacutea con mayor precisioacutenndash implican que el hombre es lo que queremos decir aquiacute persona y sujeto140

Es esta una afirmacioacuten que el teoacutelogo hace en su Curso fundamental sobre la fe al plantear una siacutentesis de la globalidad del mensaje cristiano a la luz de una conviccioacuten esencial laquoEste mensaje llama al hombre a situarse ante la verdad real de su esencia ante la verdad en la que eacutel estaacute irreme-diablemente cautivo aunque a la postre este cautiverio sea la anchura in-finita del misterio incomprensible de Diosraquo141 Considerar la antropologiacutea como presupuesto de la escucha e inteleccioacuten de la palabra divina o sea la vigencia mutua entre la estructura esencial del hombre histoacutericamente constituida y el juicio de Dios sobre el hombre expresado en la revelacioacuten (trascendental e histoacuterica) demanda la elaboracioacuten de una antropologiacutea fi-losoacutefica que ha de basar su meacutetodo de trabajo en dos pilares irrenunciables

En primer lugar el conocimiento natural que es requisito del conoci-miento de fe no puede impugnar la auteacutentica metafiacutesica pues ella laquoestaacute dada ineludiblemente con la existencia del hombre [hellip] como reflexioacuten sobre esas implicaciones trascendentales dadas innegablemente que lle-van en siacute su luz y su seguridad y que de modo necesario estaacuten puestas junto con una realizacioacuten libre de la existenciaraquo142 Sin olvidar no obstan-te que dondequiera que el hombre se experimenta a siacute mismo en su tras-cendencia como el que pregunta como el inquietado por esa irradiacioacuten del ser como el expuesto a lo inefable no puede entenderse como sujeto en el sentido de sujeto absoluto sino solamente en el sentido de recepcioacuten del ser y a la postre de la gracia143

140 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 44141 Ibid 43142 K RAHNER Ideologiacutea y cristianismo in ET VI 60143 Id Curso fundamental sobre la fe 53

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Para Karl Rahner ndashcomo veremos maacutes adelantendash al conocimiento de fe contribuye una antropologiacutea de la libertad en la que el hombre como sujeto de esperanza y de promesa laquose concibe a siacute mismo sobre la base de un futuro propio a desarrollar creativamente y no como sujeto que en su misma aprioridad tenga ya conocimiento anticipado de su futuro desde siempreraquo144 Desde este punto de vista afirmar que el hombre es persona significa en primer lugar hablar de eacutel como sujeto indeducible a partir de lo que estaacute a su disposicioacuten laquoel insuprimiblemente anterior y maacutes originarioraquo145 confiado a siacute mismo y capaz de cuestionarlo todo capaz en este sentido de rebasarse mostraacutendose como laquoel ser de hori-zonte infinitoraquo146

En segundo lugar el conocimiento natural que es requisito del co-nocimiento de fe tiene que atender a la historia y la experiencia faacutectica como mediacioacuten insoslayable de las condiciones trascendentales que posibilitan al sujeto su auto-conocimiento (persona) y auto-disposicioacuten (libertad) la interrogacioacuten trascendental no desprecia la experiencia de-limitada en el espacio y el tiempo que el hombre hace de siacute puesto que laquoun disentildeo adecuado del hombre (de lo que es y de lo que debe ser) hecho por una razoacuten aprioriacutestica y racional no es posibleraquo147 Sin su realizacioacuten concreta laquoel concepto de hombre queda lsquovaciacuteorsquo y no tiene plasticidad ni por tanto fuerza histoacutericaraquo148 laquoEl hombre es el espiacuteritu que se expe-rimenta como tal en cuanto no se experimenta como espiacuteritu puroraquo149 sino que en su inevitable ligazoacuten a lo concreto permanece siempre en camino Por esta razoacuten define Rahner la trascendentalidad a que recu-rre en su antropologiacutea como laquoaquella apertura aprioriacutestica del sujeto al ser en general que se da precisamente cuando el hombre cuidando y aprovisionando temiendo y esperando se experimenta como expuesto a la multiplicidad de su mundo cotidianoraquo150 Por consiguiente bajo esta segunda consideracioacuten laquola personalidad del hombre no se puede relegar a una interioridad absoluta Necesita imprescindiblemente un espacio de realizacioacuten que aunque en cierto modo le es lsquoexteriorrsquo (cuerpo tierra

144 Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 100145 Id Curso fundamental sobre la fe 50146 Ibid 51147 Id Dignidad y libertad del hombre in ET II 233148 Ibid 233149 Id Curso fundamental sobre la fe 51150 Ibid 54

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economiacutea signos siacutembolo Estado) es esencialmente indispensable y por eso debe ser configurado de tal modo que permita la autorrealizacioacuten personalraquo151

Solo a partir de este doble horizonte ndashteniendo en cuenta que el hombre uacutenicamente sabe de siacute mismo (meacutetodo trascendental) en sus concretas determinaciones (experiencia histoacuterica) que es don y misioacutenndash puede de-finir la teologiacutea cabalmente al hombre como persona aquel ser en cuya estructura natural ndashconsiderada en el conjunto de sus principios forma-les espiritualidad libertad individualidad corporeidad intersubjetivi-dad mundanidad152ndash se columbra su impronta sobrenatural es decir la gramaacutetica de la autocomunicacioacuten gratuita de Dios al hombre (o existen-cial sobrenatural en cuanto don indebido de gracia) que tambieacuten se reve-la en la entrantildea del espacio y el tiempo y de modo irrepetible y definitivo en Jesucristo La persona se define pues como dialeacutectica entre trascen-dentalidad e historicidad al preguntar a la revelacioacuten cuaacutel es su identidad y destino ante Dios En el ser personal se visibiliza la dialeacutectica que mar-ca la entrantildea del cristianismo laquoen su dedicacioacuten a la historia como real acontecimiento salviacutefico y su naturaleza trascendental en cuanto patencia seguacuten gracia hacia el Dios absolutoraquo153 Veamos con maacutes detalle los pasos que conducen a esta siacutentesis que acabamos de avanzar

42 El hombre unidad de espiacuteritu y materia

Como hemos visto Rahner sigue a santo Tomaacutes en su consideracioacuten de la capacidad humana de ser cabe siacute ndashlaquoreditio completa subiecti in seip-sumraquo154ndash como indicativa de su espiacuteritu en tanto identidad de ser que corresponde al ente humano Y por tanto como indicativa de la distancia entre subjetividad y objetividad Como sujeto espiritual el hombre no estaacute recluido en el horizonte de lo inmediato pues la aprehensioacuten de lo objetivo como ser-cabe-siacute y el libre obrar funcionan en eacutel como dinaacutemica de orientacioacuten ilimitada hacia el ser en general que Rahner denomina anticipacioacuten Y puesto que se habla de una apertura ilimitada en la anti-cipacioacuten se afirma simultaacutenea y atemaacuteticamente laquola existencia de un ente

151 Id Dignidad y libertad del hombre in ET II 235152 Cfr Id Hombre III in SM III 499-502153 Id Ideologiacutea y cristianismo in ET VI 64154 Id Oyente de la palabra 62

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de absoluta lsquoposesioacuten del serrsquo es decir la existencia de Diosraquo155 Dicho esto cabe antildeadir que el hombre es orientacioacuten al absoluto no en abstrac-to sino como espiacuteritu en el mundo como espiacuteritu en la carne Espiacuteritu y materia son laquocomo momentos de un hombre en los que la esencia de este originariamente una se descompone y se despliegaraquo156 La relacioacuten entre espiacuteritu y materia se muestra en el ser humano en su maacutes estrecha unidad A ella llega Rahner desde un doble punto de vista

1 Esclareciendo como ya hemos notado la capacidad cognoscitiva que es propia del espiacuteritu quien si es apertura al ser en general y por tanto a Dios lo es siempre y de modo insoslayable en el encuentro con lo mate-rial que sucede en la sensibilidad157 nuestra experiencia trascendental del mundo es ya explicitud de esa relacioacuten de co-presencia entre materia y es-piacuteritu cuerpo y alma El hombre experimenta su cuerpo como una realidad tan cercana a siacute que puede ser identificado como principio de actuacioacuten del alma en lo diverso o alteridad del alma158 De hecho la afirmacioacuten de que la comunicacioacuten entre materia y espiacuteritu es en el hombre un pro-ceso que sucede en la forma originaria del conocimiento trascendental no pierde su fuerza porque se afirme que lo material no es aprehendido primariamente por medio del espiacuteritu sino por medio de los sentidos del hombre Porque si la sensibilidad estaacute reconocida como realidad material y sin embargo consciente se nos concede entonces en el fondo lo que pretendemos Y ademaacutes el conocimiento sensible no puede ser entendido sino como condicioacuten de la posibilidad del conocimiento espiritual159

De esta percepcioacuten de lo corpoacutereo participa una buena parte de la sen-sibilidad filosoacutefica contemporaacutenea coincidente con la tradicioacuten filosoacutefica y teoloacutegica cristiana claacutesica (que laquoretrotrae la materia en su esencia y en su ser enteros al acto creador de Dios al que llamamos espiacuterituraquo)160 al observar que la materialidad de la existencia humana rebasa el estatus de biologiacutea manteniendo una relacioacuten de especial afinidad con el fondo personal de la vida humana

155 Ibid 86156 Id La cristologiacutea dentro de una concepcioacuten evolutiva del mundo in ET V 173 Cfr

Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 55 K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 304-305

157 Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 69158 Id Para una teologiacutea del siacutembolo in ET IV 289159 Id La unidad de espiacuteritu y materia en la comprensioacuten de la fe cristiana in ET

VI 183160 Ibid 183

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2 Mediante la concepcioacuten de materia y espiacuteritu como parte de una misma historia del mundo cuyo devenir puede interpretarse como movi-miento del espiacuteritu que permite pensar la materia como de y para el espiacute-ritu ndashlaquoespiacuteritu congeladoraquondash161 aun en su esencial diversidad Para evitar farragosas repeticiones no insistimos en estos aspectos pues del primero ya hemos hablado al explicar el mecanismo de la trascendentalidad huma-na y del segundo nos ocuparemos en el capiacutetulo final al poner en diaacutelogo filosofiacutea y teologiacutea de la vida

A la luz de esa dualidad nativa e inexcusable entre espiacuteritu y materia puede iluminarse la magnitud antropoloacutegica de la concepcioacuten tomista del alma como forma del cuerpo Foacutermula en que no cabe dualismo alguno pues en ella se entiende laquocorpus en sentido tomista es decir como mate-ria prima como la vacua potencia real de serraquo162

Si considero el problema desde la perspectiva tomista tengo que afir-mar que lo que yo experimento como la corporeidad del hombre es ya realidad del espiacuteritu diluido en una esfera misteriosa ndashesclarecida solo metafiacutesicamentendash que el filoacutesofo escolaacutestico y tomista llama materia pri-ma El cuerpo es ya espiacuteritu considerado en aquel momento de la autorrea-lizacioacuten en el que la espiritualidad personal se hace presente para poder encontrarse de una forma inmediata y concreta con todo lo que es distinto de siacute misma La corporeidad no es algo sobreantildeadido al espiacuteritu sino que es el ser concreto del espiacuteritu mismo realizado en el espacio y el tiempo La corporeidad humana no es algo que existiriacutea de antemano sino que es la automanifestacioacuten del espiacuteritu dentro del espacio y el tiempo163

Retomando la distincioacuten espiacuteritu-materia continuacutea nuestro autor laquoEl espiacuteritu humano es vere et essentialiter corpus informans para decirlo con las palabras del Concilio de Vienne El alma siendo espiacuteritu se intro-duce de por siacute per se en la materiaraquo164 El cuerpo asiacute entendido no es en el espacio humano una realidad indiferente (Koumlrper) sino que es en cuanto apropiado por el alma (Leib)165 que a su vez sigue siendo irreductible a

161 Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 74162 Id Oyente de la palabra 163163 Id El cuerpo y la salvacioacuten 86164 Id Oyente de la palabra 169 Cfr DH 902165 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 148 La distincioacuten

que hace Rahner entre Leib (cuerpo viviente) y Koumlrper (cuerpo fiacutesico) resulta claacutesica en la moderna antropologiacutea filosoacutefica occidental Cfr el ejemplo paradigmaacutetico de M SCHELER Eacutetica nuevo ensayo de fundamentacioacuten de un personalismo eacutetico Madrid 2001 530-550

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lo material esto es en unidad sustancial Por ello laquoel espiacuteritu humano no es lsquoespiacuteritu purorsquo sino esencialmente lsquoalma-espiacuteritursquo que por su vincula-cioacuten al cuerpo y por consiguiente en virtud de su vinculacioacuten al espacio y al tiempo se hace especiacuteficamente lsquoespiacuteritu humanorsquoraquo166 Aunque laquoempiacute-ricamente se puede encontrar y descubrir al hombre entero no podriacuteamos conocerlo con suficiente acierto y amplitud si no se le entendiera como persona espiritual dotada de individualidad auteacutentica e insustituibleraquo167 Pasos decisivos de la fe demandan este parentesco y mutua trabazoacuten en-tre espiacuteritu y materia la pregunta por el Logos en su entrada en lo finito seguacuten la cristologiacutea168 o la inteligencia del estado de plenitud a que estaacute destinada la materialidad humana seguacuten la escatologiacutea169

43 Persona y naturaleza

En sintoniacutea de sentido con la relacioacuten entre espiacuteritu y materia y con-tribuyendo a la subsiguiente definicioacuten del hombre ndashapenas citadandash co-mo laquopersona espiritualraquo se encuentra la definicioacuten rahneriana de natu-raleza humana

Procedemos a su examen hacieacutendolo en primer lugar bajo el prisma de la distincioacuten entre naturaleza y persona que nuestro teoacutelogo entiende laquoen el sentido de la metafiacutesica moderna seguacuten la filosofiacutea existencialraquo170 Es decir como el iacutendice de finitud que revela la distancia que el hombre ex-perimenta en siacute entre lo que es (don) y lo que desea ser (misioacuten)171 Rahner recuerda que la raiacutez metafiacutesica de la diferencia entre persona y naturaleza

166 K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 218167 Ibid 13168 Cfr K RAHNER La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 56 K RAHNER -

H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 149169 Cfr K RAHNER Sentido teoloacutegico de la muerte 43-52 K RAHNER - H VOR-

GRIMLER Diccionario teoloacutegico 14-15 A propoacutesito del dogma de la resurreccioacuten de la carne afirma en otro lugar nuestro autor laquoEs ist mit diesem Dogma schon gesagt dass der Mensch sein geistiges und auch sein uumlbernatuumlrliches Leben nicht vollziehen kan aus-ser in einer Verleiblichung dieses Vollzuges in der materiellen Wirklichkeit ausser in einer Hinwendung zur Welt in einer Ein-bildung des Geistigen in das Materielleraquo (K RAHNER Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit 383)

170 K RAHNER Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 364171 No resulta difiacutecil asociar a esta visioacuten de nuestro teoacutelogo la resonancia de afirmacio-

nes como la de Jaspers laquoLa existencia del hombre no transcurre como los procesos naturales Pues su libertad clama por una direccioacutenraquo (K JASPERS La filosofiacutea desde el punto de vista de la existencia Madrid 91981 56) o Heidegger cuando se refiere al comprender como inter-pretacioacuten es decir en su alcance existencial como poder-ser del Dasein ante el mundo Cfr M HEIDEGGER Ser y tiempo sect 32 Madrid 2003 172-177

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no reside tan solo en la vertical en la distincioacuten entre esencia y existencia sino que es necesario contemplar tambieacuten esa tensioacuten con santo Tomaacutes en su horizontalidad en cuanto ente habitado primitivamente por la dife-rencia real entre la materia y el espiacuteritu dos realidades que poseen un en siacute propio El espiacuteritu es irreductible a la materia en virtud de sus trazos fundamentales (experiencia de autoconciencia y libertad) Pero aunque el acto libre procede del centro personal del hombre y decide sobre todo el sujeto el espiacuteritu no puede manifestarse plenamente en la materia hacien-do de ella reflejo inequiacutevoco de su centro rector172 laquola persona no reasume nunca toda su naturalezaraquo173 pues laquosufre en ese determinarse a siacute misma la oposicioacuten de la naturaleza pre-existente a la libertad y no logra nunca plenamente que todo lo que el hombre es sea realidad y expresioacuten de lo que eacutel entiende por lsquosiacute mismorsquo en el nuacutecleo de su personaraquo174 No obstante para la naturaleza del hombre no cabe otro calificativo que el de personal frente a aquella que es no-personal o infrahumana incapaz de auto-conciencia y auto-disposicioacuten175 Su consistencia o naturaleza se le revela al hombre como impulso de apertura que generado en su intimidad se orienta a la total posesioacuten de siacute en el paso viviente por lo otro

Desde el aacutengulo de la relacioacuten teoloacutegica entre naturaleza y gracia y al hilo del reproche de extrincesismo176 que la teologiacutea contemporaacutenea eleva a la concepcioacuten neo-escolaacutestica de la gracia Rahner elabora una sugestiva distincioacuten para la antropologiacutea teoloacutegica entre esencia concreta y naturaleza En efecto sostener ante la naturaleza humana el caraacutecter in-condicionado e indebido de su ordenacioacuten a la visioacuten divina no niega que esta tiene una importancia determinante para el hombre (pues pertenece a la intentio divina al crearlo) Frente a la oposicioacuten que la teologiacutea neoes-

172 Cfr K RAHNER Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 365173 Ibid 364174 Ibid 370 En esta tensioacuten seguacuten Rahner se alza la comprensioacuten teoloacutegica de la

concupiscencia El hombre que ha recibido de Dios (como gracia) el don de disponer de siacute como insercioacuten completa de su ser en la decisioacuten personal hacia el bien en virtud de la fuerza de gravedad de la naturaleza laquonunca posee de manera total esa interioridad recogida de toda su vida en el acto uacuteltimo de su ser maacutes iacutentimo Y este es el iacutendice de su finitud y pertenencia al mundo de su esencia espiritual-sensibleraquo (Ibid 375)

175 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 474176 K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 300 Id Na-

turaleza y gracia in ET IV 200-203 Conviene recordar que la relacioacuten entre naturaleza y gracia ocupa un lugar destacado en la teologiacutea catoacutelica de la primera mitad del siglo XX Una siacutentesis histoacuterico-criacutetica al respecto K-H MENKE Teologiacutea de la gracia El criterio de ser cristiano Salamanca 2006 199-232

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colaacutestica ha desarrollado entre naturaleza y sobrenatural Rahner propone el concepto de laquoesencia uacutenica y concretaraquo177 o laquonaturaleza efectivaraquo178 del hombre mientras que el teacutermino laquonaturalezaraquo queda reservado al sentido en que la teologiacutea claacutesica habla de naturaleza pura Al calificar la esencia humana con las notas de concrecioacuten y efectividad Rahner reconoce que no solo pertenece a dicha esencia el espiacuteritu en su trascendencia y liber-tad sino muchas maacutes cosas del hombre como esencialmente suyas su mundaneidad su corporeidad su pertenencia a una comunidad de seres semejantes a eacutel [hellip] Y estos laquoexistencialesraquo de su naturaleza concreta ndashde su naturaleza laquohistoacutericaraquondash no son haacutebitos oacutenticos totalmente extramuros de la conciencia sino que se hacen valer en la experiencia del hombre Eacutel no puede separarlos sencilla e inequiacutevocamente mediante una simple re-flexioacuten sobre siacute mismo ndashcon la luz de la razoacuten naturalndash de la espiritualidad natural que es su naturaleza179

Es esta amalgama de muacuteltiples contornos lo que ha de considerarse dotacioacuten de gracia Sin duda es teoloacutegicamente legiacutetimo emplear aquel contra-concepto de naturaleza (pura) entendido como laquorestoraquo180 que que-da tras haberle sido sustraiacuteda a la humanidad su capacidad para la recep-cioacuten de la gracia pues la naturaleza humana (creada) aun abierta a lo sobrenatural no supone su exigencia incondicionada Sin embargo su legitimidad no oculta seguacuten Rahner la dificultad de una delimitacioacuten precisa de una naturaleza asiacute181 El hombre laquotiene de contar con que qui-zaacutes mucho de lo que eacutel experimenta de siacute concretamente y que casi invo-

177 K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 305178 Id Naturaleza y gracia in ET IV 218179 Ibid 218-219180 Cfr K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 315-316 Piacuteo

XII previene en Humani generis frente a los que sostienen que Dios no ha podido crear seres inteligentes sin ordenarlos y llamarlos a la visioacuten beatiacutefica (cfr DH 3891)

181 laquoIl relativo senso-proprio della natura ndashmatiza Balthasar ante la concepcioacuten de Rah-nerndash egrave sufficientemente garantito se essa viene vista come una sfera di senso oggettivamen-te autentica particolare e relativamente autonoma allrsquointerno della creazione generale se viene vista ad esempio come la sfera della lsquoculturarsquo ma anche come la sfera dellrsquoIo-Tu e dellrsquoUomo-Donna una sfera di senso provvisorio non direttamente deducibile dalla grazia ma piuttosto a disposizione della grazia quale suo presupposto senza che per questo si de-bba affermare categoricamente che il contenuto di senso di questa sfera egrave talmente grande e assoluto da bastare anche percheacute Dio venga posto per se stesso nellrsquoesistenzaraquo (HU VON BALTHASAR La teologia di Karl Barth Milano 1985 321) El problema de una natura pura es en realidad un problema del hombre no de Dios por ello propone Balthasar adoptar no el punto de vista de una teologiacutea creatural como hace Rahner sino el de una teologiacutea divina que permite otro aacutengulo de comprensioacuten tanto de la tensioacuten de Adaacuten a Cristo como de aquella otra de la razoacuten creada a la fe de la alianza

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luntariamente estaacute tentado a atribuir a su lsquonaturalezarsquo es ya efectivamente una consecuencia en eacutel de lo que a partir de la teologiacutea tiene que conocer como gracia indebidaraquo182 Rahner prefiere hablar de concrecioacuten y efecti-vidad para sortear la idea de una teoacuterica naturaleza (pura) y presentar al hombre en la diversidad de rostros que posee su identidad efectiva como aquel ser en cuyo centro maacutes iacutentimo se ubica la llamada a la comunioacuten con Dios Asiacute el existencial sobrenatural tiene su lugar en el ser concreto del hombre Y es posible conocer a este como potentia oboedentialis para la vida eterna entendiendo dicha potencia (1) no como mera carencia de contradiccioacuten sino como positiva ordenacioacuten al sobrenatural (2) no parcialmente como suceso noeacutetico sino como espacio concomitante de aquel conocimiento libertad y amor humanos que forman parte de una existencia habilitada para acercarse a aquella plenitud de ser que se ha re-velado como laquoAmor y no como noesis noeseosraquo183 Digamos una palabra sobre ambas perspectivas

Cuanto maacutes se adentra la antropologiacutea metafiacutesica en las dimensiones de la naturaleza especiacuteficamente humana (unidad de alma-cuerpo inter-per-sonalidad conciencia y libertad) tanto maacutes se pone de manifiesto que se trata de una realidad difiacutecilmente identificable como puramente natural en sentido teoloacutegico184 La presentacioacuten metafiacutesica de la persona como ser abierto hacia lo alto en la mediacioacuten de lo concreto no hace sino revelar su caraacutecter creatural es decir de radical donacioacuten y novedad en medio del mundo de modo que ante la posibilidad y realidad de la locucioacuten de su Creador no sabriacutea delimitar en siacute una demarcacioacuten concreta para el reposo del discurso divino Para ser oyente de la Palabra el hombre ha de ser na-turalmente sujeto185 aquel a quien la gracia de la Palabra supone pero tam-

182 K RAHNER Naturaleza y gracia in ET IV 219183 Ibid 223184 Como tambieacuten cabe rechazar una naturaleza pura en sentido filosoacutefico laquoLo que

llamamos filosofiacutea podraacute ser en cierto sentido filosofiacutea lsquopurarsquo ya que no toma ninguacuten conte-nido y ninguna norma materiales de la revelacioacuten seguacuten ministerio socialmente constituida eclesiaacutestica especial y temaacutetica Pero no lo seraacute en el sentido de que la existencia elucidada no temaacuteticamente desde la cual vive y a la que nunca alcanza adecuadamente y que tampo-co puede reemplazar contenga solo elementos que procedan de la esencia natural humana La abisalidad del hombre que de mil maneras es el tema de la filosofiacutea es el abismo que ha abierto la gracia de Dios y que alcanza hasta los abismos divinos precisamente cuando el hombre que filosofa no es capaz de reflexionar exactamente sobre ese hecho de su existencia de distinguir naturaleza y gracia en la realizacioacuten de su existencia espiritualraquo (K RAHNER Filosofiacutea y teologiacutea in ET VI 90)

185 Lo que la razoacuten concentra en el dinamismo ilimitado del espiacuteritu humano y la fe llama designio de Dios en su autocomunicacioacuten al hombre

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bieacuten eleva y ahonda para llevarlo a su plenitud en la participacioacuten de la vida divina Y si esa participacioacuten en la vida divina donde reside la plenitud del ser personal186 representa el uacutenico fin en orden al cual se orienta la esencia uacutenica y concreta de la subjetividad natural y creatural aquella plenitud de vida divino-personal resulta a su vez fundamento y posibilitacioacuten de la vida y ser personal del hombre quien acercaacutendose a Dios en la actualidad de la gracia no disminuye sino que se fortalece y crece como quien ha sido puesto por el Amor en la existencia El hombre no tiene experiencia de siacute mismo maacutes en que en el aacutembito de la amorosa voluntad sobrenatural de Dios si bien no puede decirse que esta sea exigencia de aquella

44 Persona y libertad

Una de las caracteriacutesticas de la esencia natural del hombre en su cua-lidad personal en la que Rahner fija sobre todo su atencioacuten es la libertad En efecto

Libertad es autorrealizacioacuten de la persona en un material finito ante el Dios infinito Es por tanto tambieacuten un dato de la teologiacutea de la antropologiacutea teoloacutegica Sin ella en efecto no se situariacutea el hombre ante Dios como operante y responsable como socio e interlocutor ni podriacutea ser ante Dios sujeto de culpa ni de redencioacuten ofrecida y aceptada187

Desde el punto de vista de la antropologiacutea trascendental el existencial de la libertad encarna a la perfeccioacuten la tensioacuten entre el caraacutecter originario (libertad manantial) y la objetivacioacuten categorial (libertad emanada) que de-termina la autorrealizacioacuten del ser personal en camino hacia su plenitud188 Por ello Rahner muestra en su obra que a la hora de proceder a la carac-terizacioacuten personal del hombre la libertad tiene una importancia decisiva que emerge tanto desde el punto de vista metafiacutesico como teoloacutegico Y asiacute a la luz del hondo significado que posee la tensioacuten naturaleza-espiacuteritu en que se resuelve la existencia humana la libertad no puede ser entendida como mera facultad de elegir entre varias opciones u objetos sino como (1) libertad entitativa189 propia del ser del ente espiritual al conocer y deci-

186 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 553-558187 K RAHNER Dignidad y libertad del hombre in ET II 242188 Id Curso fundamental sobre la fe 57 189 Cfr Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 202 Id Culpa-responsabilidad-castigo

en la visioacuten de la teologiacutea catoacutelica in ET VI 219-220

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dir que una vez maacutes seguacuten la definicioacuten de santo Tomaacutes es capaz de una laquoreditio completa subiecti in seipsumraquo190 y (2) laquoopcioacuten fundamentalraquo191 que modela la vida que media en lo categorial el anuncio de una decisioacuten de caraacutecter total y radical Libertad que no es ajena a las condiciones in-teriores y exteriores en medio de las cuales ha de ejercitarse192 Y aunque sobre esos factores condicionantes no tenga el hombre poder alguno este ndashque se define como empresa (persona) en lo dado (naturaleza)ndash mediante el ejercicio de su libertad se construye desde su maacutes iacutentimo dentro hasta tal punto que puede concluirse que en la accioacuten de su libertad iacutentimamen-te personal laquose trata del hombre mismo y de su posicioacuten respecto a Dios (ambas cosas en unidad indisoluble)raquo193

Por ello y a la luz de la revelacioacuten el teoacutelogo ha de reconocer que laquola verdadera libertad de eleccioacuten [hellip] solo puede verse claramente en el cristianismo porque solo en eacutel es cada uno el ser uacutenico de vigencia eter-na ndashen el amor personal de Dios al hombrendash es aquel que con la maacutes alta responsabilidad personal y por tanto con libertad se debe realizarraquo194 Seguacuten el ordo intentionis de la historia de la salvacioacuten la libertad del hom-bre se despliega en el espacio abierto por la originaria decisioacuten divina de elevar sobrenaturalmente la aptitud trascendental de la criatura (potentia

190 Id Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 363 191 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 203 Id Culpa-responsabilidad-castigo en la

visioacuten de la teologiacutea catoacutelica in ET VI 221192 Cfr Id Teologiacutea del poder in ET IV 455 193 Id Culpa y perdoacuten de la culpa como regioacuten fronteriza entre la teologiacutea y la psico-

terapia in ET II 263-264 Al inscribir la libertad en el seno de la loacutegica autotrascendente de la accioacuten humana que se funda en el dinamismo de autotrascendencia de la espiritualidad del hombre Blondel advierte que la libertad no es ajena al conflicto que se da en la volicioacuten humana entre laquola voluntad que quiere quod procedit ex voluntate y la voluntad querida quod voluntatis objectum fitraquo Aunque la libre decisioacuten se actuacutea en la mutua dependencia de cuerpo y alma a la que parece rigurosamente sujeta la accioacuten humana en realidad la accioacuten querida es principio de una accioacuten que quiere ser cada vez maacutes libre por cuanto laquola accioacuten hace parti-cipar al organismo material de la intencioacuten que la animaraquo y asiacute garantiza su sinceridad como movimiento de progresiva liberacioacuten que tiende a un fin del que se nutre fin del que no se puede excluir la apertura al orden divino del mundo que se presenta como determinacioacuten de la libertad hacia la plenificacioacuten de su dinamismo interior esto es como libertad para la Liber-tad Dios laquoEn la accioacuten voluntaria se opera un secreto maridaje entre la voluntad humana y la voluntad divina Ser llamado a la vida de la razoacuten y de la libertad significa participar en la libre necesidad de Dios que no puede menos de quererse a siacute mismo Nosotros tampoco podemos menos de querernos a nosotros mismos el ser que recibimos como propiedad nuestra es de tal naturaleza que es imposible no aceptarloraquo Rechazaacutendolo el hombre desmentiriacutea y cancelariacutea su aspiracioacuten a los bienes eternos Las citas se han tomado de M BLONDEL La Accioacuten Ensayo de una criacutetica de la vida y de una ciencia de la praacutectica Madrid 2006 167225418

194 K RAHNER La libertad en la Iglesia in ET II 95

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oboedentialis) hacia la visioacuten de Dios como su fin uacuteltimo195 A esta orien-tacioacuten permanente del espiacuteritu finito a la Trascendencia es a lo que llama Rahner como venimos diciendo existencial sobrenatural El dinamismo del espiacuteritu humano se alimenta de lo que en teologiacutea se denomina gracia es decir aquella presencia de Dios en el hombre (y el mundo) que aunque no sea exigible por eacutel196 penetra iacutentimamente en eacutel como determinacioacuten real de su concrecioacuten existencial e histoacuterica es fruto de la obra redentora de Jesucristo y la obra santificadora del Espiacuteritu197

Dicho esto es posible hablar de la libertad humana como toma de postura ante Dios incluso allaacute donde no haya sido reconocida su revela-cioacuten histoacuterica En Dios percibe la libertad personal su uacuteltimo de-doacutende y hacia-doacutende198 y por tanto la imposibilidad de rehuir una respuesta ya sea positiva o negativa a la demanda inscrita por la Trascendencia en el santuario de su intimidad La libertad creada ha sido hondamente herida por el pecado y la muerte mas no abandonada por Dios a su suerte pues en su Hijo ha dado noticia de esa decisioacuten irrevocable definitiva de libertad a la libertad [hellip] Esa libertad que es Cristo y que Cristo otorga se la apropia el hombre al someterse obedientemente a su llamada (Gal 513) en la fe (y en su perceptibilidad que es el bautismo) al acontecimiento que abre la caacutercel del mundo la encarnacioacuten muerte y resurreccioacuten del Hijo199

En su esencia por tanto la libertad cristiana estaacute estructurada esca-toloacutegicamente200 ya realmente iniciada alliacute donde el hombre espera de forma activa junto con toda la creacioacuten su liberacioacuten definitiva como participacioacuten en laquola gloriosa libertad de los hijos de Diosraquo (Rom 821) donde debe desembocar nuestra libertad liberada por obra de Cristo Dado que el uacuteltimo sentido de la revelacioacuten en Jesucristo es la manifestacioacuten de la doxa Theou mediante la llamada que saca a los hombres de este mundo

195 Id Sobre el concepto escolaacutestico de gracia increada in ET I 336 Id Curso fun-damental sobre la fe 102-103

196 Si se quiere respetar su iacutendole gratuita ha de concederse que no seriacutea teoacutericamente ilegiacutetimo pensar al hombre sin la gracia como natura pura Cfr K RAHNER Sobre la rela-cioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 315-316 Id Naturaleza y gracia in ET IV 221-223 Id Sobre el concepto de misterio en la teologiacutea catoacutelica in ET IV 60

197 Cfr K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 387-389198 K RAHNER Oyente de la palabra 191 Id Dignidad y libertad del hombre in ET

II 242 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 196-200 Id Naturaleza y gracia in ET IV 216 Id Libertad III in SM IV 314 Id Hombre III in SM III 497

199 Id Teologiacutea de la libertad in ET VI 213200 K RAHNER - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico 389

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y los introduce en la vida de Dios [hellip] Dios se enfrenta inmediatamente al hombre con una exigencia y una llamada que arranca al hombre de su oacuterbita natural que transcurriacutea dentro del horizonte del mundo201

Es asiacute como queda impresa en la identidad y destino del hombre una marca de trascendencia que solo puede sobrepujar la tentacioacuten de au-to-clausura de lo finito en la abierta y sincera aceptacioacuten existencial del maacuteximo exponente de laquola redondez en que el mundo deseariacutea descan-sarraquo202 la muerte Cuando el hombre afronta pasivamente su muerte como exposicioacuten a la incidencia amenazante y destructiva de un suceso exterior solo cabe ante ella impotencia y extrantildeeza En cambio cuando el pade-cimiento mortal que se cierne irremediablemente sobre el ser y vivir del hombre no se resuelve en la pura de-potenciacioacuten fiacutesica (koumlrper) sino que se integra en la experiencia personal viviente como transformacioacuten de lo que es ndashmetafiacutesica y existencialmente (personalmente)ndash entorno propio (leib) laquoconduce a una problematicidad uacuteltima que no puede ser resuelta por el hombre lsquode tejas abajorsquo Pues persona significa existencia es decir autoafirmacioacuten validez uacuteltima eternidadraquo203

5 resultAdo

A la conclusioacuten de esta invocacioacuten del sentido en que Rahner desentra-ntildea el papel teoloacutegico de la experiencia trascendental podemos subrayar su estrecha vinculacioacuten a dos hechos decisivos de la historia de la salva-cioacuten la creacioacuten y la encarnacioacuten

51 Entre creacioacuten y encarnacioacuten

Partiendo de la concepcioacuten del Dios creador y humanado como Misterio absoluto hacia el que el hombre espiacuteritu finito se encuentra iacutentimamente abierto a partir de su dinamismo trascendental (como sujeto cognoscente y libre) concluye Rahner que la experiencia que hace el hombre de su remisioacuten a Dios no procede de fuera de eacutel sino que tiene su originaria raiacutez en dicho dinamismo trascendental Desde el punto de vista estricta-

201 K RAHNER Pasioacuten y ascesis Sobre la fundamentacioacuten filosoacutefico-teoloacutegica de la asceacutetica cristiana in ET III 89 Cfr E J JUSTO Libertad liberadora Para una nueva formulacioacuten de la cristologiacutea y la soteriologiacutea Salamanca 2013

202 Ibid 90203 Ibid 84

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mente teoloacutegico Rahner situacutea el arranque de la relacioacuten Dios-hombre en el espacio de la creacioacuten como aacutembito iacutentimamente transido por la gracia como campo de interaccioacuten entre inmanencia y trascendencia El misterio de la creacioacuten radica precisamente en el poder de accioacuten especiacutefico de la divinidad laquopara constituir por siacute mismo y mediante el propio acto en cuanto tal algo que siendo radicalmente dependiente ndashpor ser totalmente constituidondash tenga tambieacuten ndashal ser constituido por el Dios uno y uacutenicondash una independencia real una realidad y verdad propia incluso ante el Dios que lo constituyeraquo204 La trascendentalidad del espiacuteritu finito se percibe como comparecencia constitutiva de ese Misterio que seguacuten Rahner se da a conocer como el de-doacutende y hacia-doacutende que marca el origen y meta de esa dinaacutemica ontoloacutegica del espiacuteritu finito El hombre que no olvida que su esencia concreta ndashen su naturaleza especiacutefica de espiritualidad en-carnadandash es apertura ilimitada (y como tal in-definible) no reniega de la posibilidad de llegar a ser hombre en sentido pleno

Pero si esto es asiacute ndashantildeade el teoacutelogondash para entender de modo radical lo que realmente somos es preciso comprender que existimos porque Dios se quiso hombre Esto significa que nosotros somos ndashporque eacutel asiacute nos ha queridondash seres en los que Dios en cuanto hombre se encuentra a siacute mismo al amarnos205

Visto asiacute la encarnacioacuten no es sino la asuncioacuten por parte del Verbo ndashen su relacioacuten eterna con el Padrendash de la naturaleza del hombre en su cuali-dad fundamental de apertura ilimitada al Ser En la apropiacioacuten divina de esa potencia obediencial del ser humano la naturaleza de este alcanza la plena consecucioacuten de su referibilidad divina (participada por Dios como autodonacioacuten trascendental en gracia) y en consecuencia la encarnacioacuten es el caso sumo de la realizacioacuten de la esencia del ser humano en el acon-tecimiento que la dogmaacutetica define como unioacuten hipostaacutetica y es al mismo tiempo portador absoluto de la salvacioacuten en la concrecioacuten de la historia de Jesuacutes muerto y resucitado el Hijo del Padre206

Podemos decir por tanto que el misterio que la fe cristiana confiesa se funda baacutesicamente en el hecho de que la misma realidad absoluta de Dios (naturalmente comprendida como personal amorosa y agraciante) no solo se puede contraponer creativamente a lo que es diverso de siacute sino que

204 K RAHNER Problemas actuales de cristologiacutea in ET I 170205 Ibid 190206 Cfr K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 259

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desea confrontarse y comunicarse con ello Desde el punto de vista de la criatura podemos decir asimismo que el misterio consiste en el hecho de que es realmente en el sentido radical sentildealado capax infiniti 207

Esta visioacuten filosoacutefico-teoloacutegica es la que imprime coherencia y unidad a la concepcioacuten rahneriana del hombre como persona En siacutentesis la con-sideracioacuten racional del hombre como realidad naturalmente habitada ndashen su capacidad trascendente de ser siacute-mismondash por una presencia sobrena-turalmente constitutiva o misterio (innominado pero dicente208) a cuya luz todas sus dimensiones esenciales e histoacuterico-operativas adquieren un significado convergente y se presentan como aquella compleja unidad en camino que identifica lo que llamamos laquopersonaraquo Por eso Rahner matiza el uso del concepto laquonaturalezaraquo humana en antropologiacutea teoloacutegica po-nieacutendolo en relacioacuten directa y no inversa con la accioacuten creadora de Dios pues Dios ha querido originariamente al hombre en una laquorelacioacuten viviente e inmediataraquo consigo209 El hombre para el teoacutelogo alemaacuten es trascen-dencia pero tambieacuten historia Es espiacuteritu encarnado donde ndashseguacuten lo ya apuntadondash se hace plenamente visible la dinaacutemica autotrascendente de la materia como participacioacuten en la densidad de ser del espiacuteritu Por ello seriacutea contradictorio presentar contemporaacuteneamente la persona ndasha la luz de lo que somos y el mundo en que vivimosndash como horizonte de apertura infini-ta y laquonaturalezaraquo si entendemos esta como sustancia clausurada o estrato independiente y no compenetrado con el don libre de Dios que Rahner lla-ma existencial sobrenatural Aunque el don del amor divino sea indebido al hombre para poder asiacute recibirlo y reconocerlo en su absoluta gratuidad el hombre real en su esencia concreta el interlocutor real de Dios en la uacutenica economiacutea de la salvacioacuten no es de hecho nunca una naturaleza pura sino una naturaleza conformada como sentido en cuanto apertura o tras-cendencia ilimitada En resumen podemos decir que Rahner despliega en el fondo de la existencia humana una interpretacioacuten del conocido axioma de la teologiacutea tomista gratia supponit naturam eamque perficit 210 La ex-

207 Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 120208 Cfr Id Oyente de la palabra 230209 Id La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica 43 210 Cfr STh I q1 a8 ad 2 laquoCum enim gratia non tollat naturam sed perficiatraquo STh

I q2 a2 ad 1 laquoSic enim fides praesupponit cognitionem naturalem sicut gratia naturamraquo Cfr J RATZINGER Dogma und Verkuumlndigung Muumlnchen-Freiburg 1973 161-181 sobre la aplicacioacuten de este axioma al caso de Cristo J ALFARO Cristologiacutea y antropologiacutea Madrid 1973 363-364 (n 32)

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periencia de la Trascendencia implicada en toda realizacioacuten de la libertad humana que es el fundamento o condicioacuten de posibilidad de toda inicia-tiva del espiacuteritu del hombre constituye el horizonte de sentido de nuestra existencia histoacuterica o si se prefiere de nuestra vida maacutes cotidiana211

52 Entre trascendentalidad e historia

Asiacute queda formulado el marco sinteacutetico dentro del cual Rahner con-templa al hombre como persona

Ser persona significa asiacute autoposesioacuten de un sujeto como tal en una refe-rencia sabedora y libre al todo Esta referencia es la condicioacuten de posibili-dad y el horizonte previo para que el hombre en su experiencia particular empiacuterica y en sus ciencias particulares pueda comportarse consigo como unidad y totalidad [hellip] Por tanto decir que laquoel hombre es persona y suje-toraquo significa en primer lugar el hombre es el indeducible el que no puede producirse adecuadamente desde otros elementos disponibles eacutel es el que estaacute ya siempre confiado a siacute mismo212

Rahner es plenamente consciente de que laquoel hombre como ser perso-nal que trasciende y estaacute dotado de libertad es tambieacuten a una con ello un ser mundano temporal histoacutericoraquo213 laquoEstoy convencido ndashleemos en otro

211 Queda asiacute enunciada una de las grandes aportaciones de la teologiacutea contemporaacute-nea la integracioacuten entre antropologiacutea cristologiacutea y soteriologiacutea La teologiacutea reformada lo ha hecho en clave dialeacutectica como muestra la postura de uno de sus maacuteximos exponentes el teoacutelogo suizo Karl Barth La reafirmacioacuten en el cristocentrismo de Lutero lleva a Barth a considerar que en rigor Dios solo nos es cognoscible y accesible en Cristo de modo que de su Encarnacioacuten no se sigue que nuestra humanidad asediada por el pecado en su esencia e historicidad sea posibilidad previa de la accioacuten y revelacioacuten de Dios Entre otros exponentes catoacutelicos Karl Rahner ha mostrado que cabe sin embargo una lectura no dialeacutectica de la relacioacuten entre Dios y el hombre al contemplar la existencia y la historia humanas como rea-lidades originariamente correlacionadas con Dios en libertad Reconocer este hecho ni anula la novedad salviacutefica del acontecimiento de Cristo ni aminora los efectos del pecado que oscu-rece en el hombre la memoria de la Alianza irrevocable sellada por Dios con eacutel Proponemos dos textos que dan cuenta del contraste entre ambas lecturas Comentando el texto paulino de Rm 819-20 sentildeala Barth laquoSi supieacuteramos de Dios otra cosa que el gemir de lo creado y nuestro propio gemir si supieacuteramos de Jesucristo otra cosa que su condicioacuten de crucificado si supieacuteramos del Espiacuteritu Santo otra cosa que su condicioacuten de espiacuteritu de aquel que resucita a Jesuacutes de los muertos si se rompiera el incoacutegnito en que la salvacioacuten vino viene y vendraacute a nosotros eso no seriacutea la salvacioacutenraquo (K BARTH Carta a los romanos Madrid 1998 381) Por su parte Rahner afirma laquoCristo es hombre del modo maacutes radical y su humanidad es la maacutes autoacutenoma y libre no aunque sino porque es la asumida constituida en tanto automani-festacioacuten de Diosraquo (K RAHNER Para la teologiacutea de la encarnacioacuten in ET IV 145)

212 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 49-50213 Ibid 60

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lugarndash de que la transcendentalidad no es una ocupacioacuten del hombre al margen de la historia sino que se vive y realiza en libertad en la historia concreta y en una libertad determinadaraquo214 Auacuten en otro escrito habla de la corporeidad humana mediante la que el hombre se comunica con el mundo como laquoalteridad del espiacuterituraquo No ajena por tanto a ese laquoestar-se-dado-a-siacute-mismo en el espiacuterituraquo que laquosucede en la historia interna y externa de cada hombre y de la humanidad en la obra del pensamiento y en la obra externa existente cabe siacute individual y colectivamenteraquo215 Expresado de otro modo no es posible un volver sobre siacute mismo por la reflexioacuten si no es un salir hacia la realidad corpoacuterea dentro de la cual el espiacuteritu vuelve sobre siacute mismo en cuanto que se exterioriza y se forma a siacute mismo Y aquiacute es donde se da la posibilidad de una verdadera libertad personal Esta corporeidad concebida como presencia en el espacio y el tiempo del espiacuteritu mismo es ciertamente un continuo encontrarse a siacute mismo en un auteacutentico otro216

Aunque no pretendamos profundizar el alcance de la criacutetica sobre el posible caraacutecter abstracto de la antropologiacutea teoloacutegica de Rahner siacute podemos hacer dos observaciones al respecto En primer lugar cabe aceptar la postura de Rahner como una legiacutetima opcioacuten metoacutedica que pone en acto ndasha la luz del paradigma antropoceacutentrico de la filosofiacutea tras los sistemas de Kant y Heideggerndash el hecho de que la laquoteologiacutea implica una antropologiacutea filosoacuteficaraquo en concreto aquella que permite atisbar que el entrelazarse de la fe y la razoacuten la llamada de Dios y la escucha del

214 K RAHNER Gnade als Mitte menschlichen Existenz Ein Gespraumlch mit und uumlber Karl Rahner aus Anlass seines 70 Geburtstages 14

215 Tomamos las citas de K RAHNER La cristologiacutea dentro de una concepcioacuten evo-lutiva del mundo in ET V 181-182 Tambieacuten Id La unidad de espiacuteritu y materia en la comprensioacuten de la fe cristiana in ET VI 184

216 Id El cuerpo y la salvacioacuten 87 Tras sentildealar las precisiones que Tomaacutes de Aquino y Ricardo de San Viacutector suman a la definicioacuten formal-ontoloacutegica que reciben de Boecio la enciclopedia teoloacutegica que edita el propio Rahner y su grupo de colaboradores se apoya en los caracteres que proponen Tomaacutes y Ricardo para formular una definicioacuten actual de persona cuyas notas forman parte del patrimonio de la antropologiacutea trascendental que Rahner pro-pone como base renovadora de la teologiacutea dogmaacutetica contemporaacutenea laquoPersona no significa aquiacute la lsquoesenciarsquo la lsquonaturalezarsquo sino el acto siempre singular total e indiviso inmediato e insustituible la realidad la existencia de una naturaleza espiritual Esta realidad es el he-cho de poseerse a siacute mismo y por tanto de tener en siacute su propio fin es la forma de realidad que presenta la libertad de un ser espiritual en la que se funda su intangible dignidad Es evidente que este concepto preferentemente formal de persona adquiere su contenido por la lsquonaturalezarsquo del ser espiritual en cuestioacuten y por el grado de realidad que adquiere su libertad en lo referente a la posibilidad de tomar posesioacuten de la propia naturalezaraquo (M MUumlLLER - A HALDER Persona in SM V 445)

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hombre tiene su asiento no solo en la pregunta moral sino en la existen-cial-ontoloacutegica217 Al concebir el ser como palabra (Dios) y oyente (hom-bre) Rahner aboga por el paso desde una metafiacutesica que presenta el ser a la luz de la laquocosaraquo218 hasta una metafiacutesica que contempla la continuidad entre ser y conciencia En palabras de Metz al explicar queacute significa en Rahner laquoteologiacutea trascendentalraquo

Ha rescatado laquoel sujetoraquo del peacutetreo objetivismo escolaacutestico en que la teo-logiacutea de escuela estaba por doquier encerrada El laquosujetoraquo no es una pura determinacioacuten refleja que puede a su vez ser objetivada arbitrariamente Designa al hombre en su historia experimentada que no puede identificarse ni comunicarse a siacute misma sin elementos narrativos En este sentido Ra-hner ha elevado la biografiacutea religiosa a tema objetivo de la dogmaacutetica219

Con otras palabras aboga por una meta-antropologiacutea220 que ndashme-diando entre realismo e idealismondash permita concebir teoloacutegicamente la relacioacuten entre antropo-centrismo y teo-centrismo (revelacioacuten)221 En se-gundo lugar no parece justo desde el punto de vista cientiacutefico pedirle al teoacutelogo el pleno esclarecimiento de todas y cada una de las posibles pers-pectivas en las problemaacuteticas que afronta en este caso todos los vectores implicados en su visioacuten del hombre El propio Rahner reconoce ante la criacutetica de que la trascendentalidad ha oscurecido en su pensamiento sobre el hombre la historicidad y la inter-personalidad222 que cuando se trata

217 K RAHNER Curso fundamental sobre la fe 42-43218 Cfr K RAHNER Sobre la relacioacuten entre naturaleza y gracia in ET I 319219 J B METZ La fe en la historia y la sociedad Esbozo de una teologiacutea poliacutetica fun-

damental para nuestro tiempo 232220 Cfr A CORDOVILLA Gramaacutetica de la encarnacioacuten 431-432221 Cfr K RAHNER Theologie und Anthropologie 43222 A partir de la perspectiva de la antropologiacutea trascendental de Karl Rahner A Dar-

lap ha puesto de manifiesto con mayor claridad la implicacioacuten reciacuteproca entre experiencia trascendental a priori y experiencia espacio-temporal a posteriori Darlap muestra que el laquoauteacutentico acontecimiento de la salvacioacutenraquo es tal cuando reclama toda la vida del hombre daacutendole una orientacioacuten definitiva Aunque el acontecer salviacutefico coincide con una comuni-cacioacuten gratuita (eficaz) a priori que Dios hace de siacute en el seno de la experiencia trascendental del hombre en Jesucristo la historia de Dios acontece en un diaacutelogo auteacutentico con el hombre cuya decisioacuten libre asumida en la dinaacutemica de la unioacuten hipostaacutetica no es una mera reaccioacuten externa a una historia divina sino que ha entrado a formar parte de las determinaciones de la historia de la salvacioacuten en cuanto historia de Dios En Jesucristo la historia de la salvacioacuten reclama toda la vida del hombre ndashsu espacio su tiempo sus relacionesndash y representa para eacutel la posibilidad de un encuentro con Dios como tuacute concreto que es tambieacuten respuesta novedosa y espontaacutenea irreducible a la experiencia trascendental Una teologiacutea de la gracia seguacuten la historia de la salvacioacuten no deberiacutea dejar de considerar lo que el tuacute humano en toda la am-

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de la persona del hombre o de Dios es necesario que lo trascendental sea laquoprecisado en siacute mismo de manera exacta e iacutentegra mediante la confron-tacioacuten con una antropologiacutea o una teologiacutea que sea sobre todo plena y concretaraquo223 En fin el teoacutelogo debe ser consciente de que la teologiacutea ha de construirse con empentildeo interdisciplinar tarea que hoy resulta extre-madamente exigente224

La teologiacutea ndashpor cuanto el hombre forma parte de su objeto como des-tinatario de la revelacioacutenndash comparte con la antropologiacutea filosoacutefica con-temporaacutenea el gran reto de asumir en su proposicioacuten una imagen lo maacutes ar ticu lada posible del ser humano (impulso trascendente y mediacioacuten histoacuterica)

Ahora bien se trata de una tarea que la teologiacutea afronta a la luz de la revelacioacuten co mo acontecimiento de identidad y diferencia entre lo que Dios es en siacute (Trinidad inmanente) y lo que Dios es para nosotros (Tri-nidad econoacutemica) La irrupcioacuten libre y gratuita de Dios en la historia no tiene su asiento original en la trascendentalidad humana sino maacutes bien en la insondable dinaacutemica interna de su infinito ser cabe-siacute personal ndashfunda-mento y sentido de todo lo creadondash que es pluralidad y unidad donacioacuten de siacute y comunioacuten laquoEl Dios uno se comunica como expresioacuten absoluta de siacute mismo y como don absoluto del amorraquo225 Es Dios quien revela en su autocomunicacioacuten histoacuterico-salviacutefica el modo en que da cumplimiento a su designio de laquoallegar al hombre su futuro definitivoraquo226 que no es otro que la salvacioacuten o felicidad plena de aquel a quien ha creado (y por ende

plitud fenomeacutenica de su experiencia a posteriori aporta a la experiencia trascendental laquoLa experiencia trascendental ndashescribe Darlapndash exige que el hombre permanezca en ella pero es de tal condicioacuten que el hombre no puede desligar simplemente lo restante de su vida de esa relacioacuten con Dios De aquiacute se sigue necesariamente que la relacioacuten trascendental sobrenatural con Dios ndashsolo determinada al parecer por la graciandash pide por siacute misma una transformacioacuten y actualizacioacuten categorial porque solo por este medio puede ejercer una fuerza modeladora sobre todo el resto de la vida humana Esta relacioacuten tiene que darse en la zona en que acontece la vida humana si no se quiere despreciar esa vida como algo sin importancia en el orden de la salvacioacuten Pero si la experiencia trascendental debe actuar asiacute en la vida concreta porque solo asiacute llega a su plena y propia esencia y solo asiacute puede introducir al hombre entero en la salvacioacuten entonces ella misma estaacute interesada en ser traducida rectamente a categorialidadraquo (A DARLAP Teologiacutea fundamental de la historia de la salvacioacuten in MyS I 159)

223 K RAHNER Gnade als Mitte menschlichen Existenz Ein Gespraumlch mit und uumlber Karl Rahner aus Anlass seines 70 Geburtstages 14

224 Cfr Id Uumlberlegungen zur Methode der Theologie 82-87225 Id El Dios Trino como principio y fundamento trascedente de la historia de la sal-

vacioacuten in MyS II 286226 Id Iglesia y parusiacutea de Cristo in ET VI 314

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del conjunto de todo lo creado) mediante la comunioacuten con Eacutel en Jesucris-to laquoEn el Cristo que es hombre en libertad y obediencia porque Dios puede aparecer en lo finito como el que es y quiere ser en libertad frente a nosotrosraquo227 Sin dejar de ser Eacutel entra libremente en nuestra historia para hacernos partiacutecipes en nuestra propia intimidad vital laquotrayeacutendola toda en amorraquo228 de su vida y su gloria El propio espiacuteritu de la revelacioacuten comenta Congar pone ante nosotros el hecho de que laquono hay teologiacutea para el hombre sin antropologiacutea para Diosraquo229 El propoacutesito confeso de la reflexioacuten rahneriana es trazar el mapa de la antropologiacutea para Dios contenido en la auto-comunicacioacuten que Dios ha hecho de siacute al hombre hablar de los misterios de Dios de modo que una aprehensioacuten profunda de lo que son en siacute permita una explicacioacuten viva (actual) de lo que son para nosotros

227 Ibid 317 Comenta G Colzani que laquonella misura in cui lrsquoutilizzo della analitica trascendentale rimane saldamente ancorato alla realtagrave storica di Gesugrave la teologia di Rahner risulta stimolante da una parte lrsquouomo appare segnato da una capacitagrave di oltrepassamento di seacute da una apertura allrsquoAssoluto nella quale soltanto nonostante la sua finitezza coglie il suo compimento e dallrsquoaltra coglie nella grazia questo compimento e la rilegge in termini perso-nali vedendola piugrave che come dottrina come lrsquoesperienza umana fatta oggetto della autoco-municazione di Dio Trino dellrsquoatto fondamentale di Dio verso il non-divinoraquo (G COLZANI Recenti manuali di Antropologia teologica di lingua italiana e tedesca 406)

228 Reconstruyendo el discernimiento ignaciano sobre la experiencia trascendente de Dios en el alma humana y el significado que reviste para la reflexioacuten teoloacutegica Rahner mues-tra que el presentarse de Dios en el sujeto constituye una evidencia originaria que ilumina la conciencia y se erige como fundamento sobre el que reposa cualquier certeza y verificacioacuten a posteriori de la fe y la razoacuten Considerando la afirmacioacuten ignaciana de los Ejercicios sobre la relacioacuten entre Dios y el alma (laquoporque es proprio del Criador entrar salir hazer mocioacuten en ella trayeacutendola toda en amor de la su divina majestadraquo n 330) encuentra Rahner un refe-rente fundamental que inspira el esfuerzo teoacuterico de su teologiacutea trascendental como riguroso intento de pensar el don de la originaria percepcioacuten espiritual de todo hombre La consolacioacuten sin causa precedente ndashde la que habla Ignaciondash nada tiene que ver con una experiencia apofaacute-tica de la misteriosa presencia de Dios en el hombre sino con laquodie gemeinte Objektlosigkeit ist die reine Offenheit fuumlr Gott die namenlose gegenstandslose Erfarung der Liebe von dem uumlber alles Einzelne Augebbare und Unterscheidbare erhabenen Gott von Gott als Gott Es is nicht mehr lsquoirgendein Objektrsquo gegeben sondern das Gezogensein der ganzen Person mit dem Grund ihres Daseins in die Liebe uumlber jedes bestimmte abgrenzbare Objekt hinaus in die Unendlichkeit Gottes als Gottes selbst als der divina majestad trayeacutendola toda en amor de la su divina majestad [hellip] Das lsquoVorausgehenrsquo ist nur in dem Sinn gemeint in der die schlichte Erfassung eines Objektes der existentiellen Stellungnahme der ganzen Person (toda) zu ihm lsquovorausgehtrsquo wie schon gezeigt wurde Das sin causa sagt also Gott als er selber allein inso-fern er nicht in einem bestimmten Gedanken gegenstaumlnlicher Art rein begrifflich gegeben ist insofern er nicht gewissermassen lsquovertretenrsquo oder verbunden ist mit einer andern wenn auch religioumls gewichtigen Wirklichkeitraquo (K RAHNER Die Logik der existentiellen Erkenntnis bei Ignatius von Loyola 118)

229 Y CONGAR Cristo en la economiacutea salviacutefica y en nuestros tratados dogmaacuteticos in Concilium 11 (1966) 24

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Al referir la experiencia subjetiva que funda el espacio en que recibe el hombre la consolacioacuten divina seguacuten san Ignacio repite Rahner la idea que preside su obra la mediacioacuten del conocimiento de Dios en la experiencia personal-subjetiva cuyo contenido sin embargo no puede afirmarse al margen de la singularidad irrepetible del sujeto histoacuterico

El sujeto de la experiencia vital no tiene en modo alguno el caraacutecter de un mero laquosujeto trascendentalraquo en una abstraccioacuten metafiacutesica se trata esencialmente (puesto que estaacuten mutuamente comprometidos libertad y amor) de un yo concreto en su maacutes iacutentimo fundamento en cuanto suje-to irrepetible responsable y libre El punto de partida subjetivo es por consiguiente inequiacutevoco se trata de la capacidad de trascendencia de un sujeto concreto en cuya accioacuten y compromiso subjetivo se halla el hom-bre concreto en su libertad singularidad e historia Solo que este hom bre concreto estaacute abierto a la infinitud del mismo Dios hace experiencia de su propia pura anticipacioacuten hasta la ilimitacioacuten espiritual-sobrenatural de su fin230

Una antropologiacutea metafiacutesica ndashes decir aquella que contempla la impli-cacioacuten del hombre (naturaleza concreta y efectiva) en la dinaacutemica de su reflexividad esencial (persona)ndash ayuda a la antropologiacutea teoloacutegica seguacuten hemos comprobado a profundizar el hondo calado histoacuterico-salviacutefico de sus principales tesis (creacioacuten gracia y redencioacuten) sin perjuicio de su ver-dad uacuteltima231 La intencionalidad teoloacutegica de este programa rebasa por tanto el hecho de que la presentacioacuten del hombre como unidad-dualidad de naturaleza y persona resulta maacutes verosiacutemil ante la actual ciencia bio-loacutegica que el dualismo escolaacutestico y sobre todo que el cartesiano Es la revelacioacuten la que contiene la imagen de un interlocutor humano conside-rado en su integridad Por ello a esta teologiacutea (para el hombre) solo puede corresponder una antropologiacutea (para Dios) que conjure laquoel gran peligro que existe en pensar sobre el hombre con un esquema de representacioacuten que es adecuado a las lsquocosasrsquo pero no al hombre mismo pues aquellas nunca quedan afectadas verdadera y definitivamente en su lsquoesenciarsquo y por su propio lsquoobrarrsquoraquo232 Rahner ha conjurado este riesgo defendiendo la integracioacuten en el acto de conocimiento y libertad especiacuteficos del hombre

230 K RAHNER Die Logik der existentiellen Erkenntnis bei Ignatius von Loyola 128-129

231 Cfr K RAHNER - K LEHMANN Kerigma y dogma in MyS I2 771-775232 K RAHNER Hombre in SM III 496

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de todo el espectro de su espontaneidad natural o vital que a pesar de lo que pueda parecer tiene su raiacutez y contribuye a la sinceridad antropoloacutegi-ca de ese acontecer de la persona que es el ser-cabe-siacute La antropologiacutea metafiacutesica invocada por Rahner muestra la posibilidad de integrar el acto natural espontaacuteneo en el nuacutecleo de la experiencia personal hasta el punto de que laquofinalmente este acto deja de ser resistencia saldo insoluble de la naturaleza contra la persona para convertirse en el elemento interno que hace posible la profundidad y la energiacutea de dominio total que la decisioacuten personal poseeraquo233 En su Ensayo de esquema para una dogmaacutetica ndashela-borado originalmente en colaboracioacuten con Balthasarndash Rahner despliega el que seriacutea un organigrama ideal en orden a una comprensioacuten teoloacutegica de la naturaleza personal del hombre En un estudio tal no cabriacutea solo la consideracioacuten de la persona desde el punto de vista de su interioridad sino tambieacuten en su exterioridad corporeidad dualidad sexual temporalidad finita etc Hasta cabriacutea considerar una teologiacutea de las situaciones y acon-tecimientos humanos de las edades de la vida del trabajo y la cultura incluso del ver oiacuter el hablar el callar el reiacuter el llorar234

Es a la luz de estas indicaciones de principio como ha de leerse en Rahner el papel de aquellas apelaciones mayores de la antropologiacutea a la teologiacutea el amor la muerte y el futuro A pesar de que estas experiencias de iacutendole categorial tengan en su obra menor relieve que la trascenden-talidad del acto del conocimiento y la voluntad no por ello restringe nuestro teoacutelogo ndashfiel a su planteamiento antropoloacutegico-metafiacutesicondash su capacidad en cuanto mediacioacuten a posteriori para poner al hombre frente a siacute y frente al mundo en su originaria constitucioacuten como mundo-consigo y espacio de trascendencia laquoEl lsquoinstantersquo histoacuterico en el que vivimos hoyraquo reconoce Rahner al hablar del amor ha renovado mediante algu-nas palabras originales la invocacioacuten de la experiencia de Dios laquodesde la totalidad de la experiencia de la realidad y del sujetoraquo235 Unas liacuteneas antes de esta afirmacioacuten sentildeala que ante Dios no puede comparecer sino el hombre entero

Al considerar al hombre un ser abierto a la totalidad esa entereza suya ante Dios que reclama Karl Rahner se muestra receptiva a una ex-plicacioacuten maacutes detallada acerca de por queacute el acto de amar especialmente

233 Id Sobre el concepto teoloacutegico de concupiscencia in ET I 369234 Id Ensayo de esquema para una dogmaacutetica in ET I 39235 Id Sobre la unidad del amor a Dios y el amor al proacutejimo in ET VI 266

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cuando se despliega en la auteacutentica e incondicional aceptacioacuten de siacute hasta el final se convierte en verdadero espacio de revelacioacuten que ha de ocupar su legiacutetimo lugar a la hora de explicar ndashhoy236ndash la concurrencia de pasado (creacioacuten) presente (gracia) y futuro (gloria) en la relacioacuten que mantiene Dios con el hombre

obras De Karl rahner eMpleaDas

Curso fundamental sobre la fe Introduccioacuten al concepto de cristianismo Barce-lona 41989 (Grundkurs des Glaubens Freiburg 1977)

De la necesidad y don de la oracioacuten Bilbao 32004 (Von der Not und dem Segen des Gebetes Innsbruck 1949)

Die Logik der existentiellen Erkenntnis bei Ignatius von Loyola in Id Das dynamische in der Kirche Freiburg 1958 74-148

Die theologische Dimension der Frage nach dem Menschen in Id Schriften zur Theologie XII Einsiedeln-Benziger 1975 387-406

Der eine Jesus Christus und die Universalitaumlt des Heils in Id Schriften zur Theologie XII Zuumlrich 1975 251-282

El cuerpo y la salvacioacuten in M HORKHEIMER et alii (eds) El cuerpo y la salvacioacuten Salamanca 1975 71-91 (Der Leib in der Heilsordnung in M HORKHEIMER et alii (eds) Der Leib und das Heil Mainz 1967 29-44)

236 En este laquohoyraquo queda apenas insinuado por nuestra parte el caraacutecter pastoral de una teologiacutea construida en plena conciencia de la situacioacuten de dificultad para el reconocimiento y aceptacioacuten de Dios que atraviesa la humanidad contemporaacutenea Cabe recordar que Rahner inicia su tarea docente en la facultad de teologiacutea de Innsbruck donde se estaba elaborando un programa de teologiacutea de la predicacioacuten o teologiacutea kerigmaacutetica que perseguiacutea liberar al cristia-nismo de inercias y reproponer el caraacutecter salviacutefico de la verdad de fe el kerigma primitivo en definitiva Cfr R GIBELLINI La teologiacutea del siglo XX 227-233 Ante el fenoacutemeno de la increencia y su rechazo frontal de las demostraciones teoacutericas de Dios estas laquosolo pueden tener eficacia en unioacuten con una llamada mistagoacutegica hacia aquella experiencia religiosa de la trascendencia que se da inevitablemente en la vivencia concreta de lo eacutetico en general de la responsabilidad por una configuracioacuten activa por el futuro y sobre todo de un amor real y auteacutenticamente personal al proacutejimoraquo (R RAHNER Ateiacutesmo in SM I 467) La palabra clave aquiacute para este modelo de teologiacutea en cuanto reflexioacuten del creyente es laquomistagogiacutearaquo Entendida en su sentido tradicional como iniciacioacuten a los misterios de la fe donde el predo-minante no es el discurso loacutegico sino el evocativo esto es el que desvela la vida de gracia en la vida del hombre el misterio de Dios en el misterio humano Un discurso que ha de prestar atencioacuten a todos aquellos praeambula fidei que ayudan al hombre a confesar en la escucha de sus palabras temporales (capacidad poeacutetica y simboacutelica) y la vivencia de sus experiencias existenciales (amor muerte alegriacutea etc) la Palabra No es Dios quien existe para nosotros sino que somos nosotros quienes existimos por y para Dios Cfr K RAHNER La palabra poeacutetica y el cristiano in ET IV 411-422 Id La miacutestica ignaciana de la alegriacutea del mundo in ET III 289-305 Id Sacerdote y poeta in ET III 307-328

el hoMbre es suJeto y persona

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El Dios Trino como principio y fundamento trascendente de la historia de la salvacioacuten en J FEINER - M LOumlHRER (eds) Mysterim Salutis II Madrid 19713 269-338 (Der dreifaltige Gott als transzendenter Urgrund der Heils-geschichte in Mysterium Salutis II Einsiedeln 1967 317-401)

El futuro de la teologiacutea in H VORGRIMMLER - R VANDERGUCHT (eds) La teologiacutea en el siglo XX Disciplinas teoloacutegicas dogma moral pastoral III Madrid 1974 458-475 (Uumlber die zukuumlnftigen Wege der Theologie in H VORGRIMMLER - R VANDERGUCHT [eds] Bilanz der Theologie im 20 Jahrhundert III Freiburg 1970 530-551)

Escritos de Teologiacutea I-VI Madrid 22000-2007Espiacuteritu en el mundo Metafiacutesica del conocimiento finito seguacuten Santo Tomaacutes

de Aquino Barcelona 1963 (Geist in Welt Zur Metaphisik der endlichen Erkenntnis bei Thomas von Aquin Muumlnchen 1957)

Fundamentacioacuten de la fe cristiana in Razoacuten y fe 199 (1979) 28-37Fundamentos de la protologiacutea y de la antropologiacutea teoloacutegica in J FEINER - M

LOumlHRER (eds) Mysterim Salutis II Madrid 1971 341-353 (Allgemeine Grundlegung der Protologie und theologischen Anthropologie in Myste-rium Salutis II Einsiedeln 1967 406-420)

Gnade als Mitte menschlichen Existenz Ein Gespraumlch mit und uumlber Karl Rah-ner aus Anlass seines 70 Geburtstages in Id Saumlmtliche Werke Band 25 Erneuerung des Ordenslebens Zeugnis fuumlr Kirche und Welt Freiburg-Ba-sel-Wien 2008 3-32

Grundsaumltzliches zur Einheit von Schoumlpfung ndashund Erloumlsungwirklichkeit in Id Saumlmtliche Werke Band 19 Selbstvollzug der Kirche Ekklesiologische Grund-legung praktischer Theologie Freiburg 1995 374-394

La hominizacioacuten en cuanto cuestioacuten teoloacutegica in K RAHNER - P OVERHAGE El problema de la hominizacioacuten Sobre el origen bioloacutegico del hombre Barce-lona 1973 19-84 (Die Hominisation als theologische Frage in K RAH NER - P OVERHAGE Das Problem der Hominisation Freiburg 1965 13-90)

La muerte del cristiano in J FEINER - M LOumlHRER (eds) Mysterim Salutis V Madrid 1971 439-466 (Das christliche Sterben in Mysterium Salutis V Ein-siedeln 1967 463-492)

Liacuteneas fundamentales de una cristologiacutea sistemaacutetica in K RAHNER - W THUumlSING Cristologiacutea Estudio teoloacutegico y exegeacutetico Madrid 1975 21-80 (Grundlinien einer systematischen Christologie in K RAHNER - W THUuml-SING Christologie systematisch und exegetisch Freiburg 1972 15-78)

Oyente de la palabra Fundamentos para una filosofiacutea de la religioacuten Barcelona 1967 (Houmlrer des Wortes Muumlnchen 1963)

Philosophie und Philosophieren in der Theologie in Id Schriften zur Theolo-gie VIII Einsiedeln 1967 66-87

Juan Manuel CabieDas teJero

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Selbsterfahrung und Gotteserfahrung in Id Schriften zur Theologie X Zuumlrich 1972 133-144

Sentido teoloacutegico de la muerte Barcelona 1965 (Zur Theologie des Todes Frei-burg 1958)

Sobre la inefabilidad de Dios Experiencias de un teoacutelogo catoacutelico Barcelona 2005 (Von der Unbegreiflichkeit Gottes Freiburg 2004)

Theologie und Anthropologie in Id Schriften zur Theologie VIII Einsiedeln- Benziger 1967 43-65

Theologische Erwaumlgungen uumlber den Eintritt des Todes in Id Schriften zur Theologie IX Einsiedeln 1970 323-335

Uumlber die Heilsgeschichtliche bedeutung des einzelnen in der Kirche in Id Saumlmtliche Werke Band 10 Kirche in den Herausforderungen der Zeit Stu-dien zur Ekklesiologie und zur kirchlichen Existenz Freiburg-Basel-Wien 2003 421-446

Uumlberlegungen zur Methode der Theologie in Id Schriften zur Theologie IX Ein siedeln 1970 79-126

RAHNER K - H VORGRIMLER Diccionario teoloacutegico Barcelona 1966 (Klei-nes theologisches Woumlrterbuch Freiburg-Basel-Wien 1965)

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Mater Clementissima 1 (2016) 121-142

La definicioacuten de Calcedonia a traveacutes de sus inteacuterpretes contemporaacuteneos

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez1

Facultat de Teologia de CatalunyaAteneu Universitari Sant Paciagrave

resuMen Investigar la cristologiacutea de la definicioacuten de Calcedonia atendiendo a la oacutep-tica de sus estudiosos actuales (A de Halleux A Grillmeier R Price) permite un acercamiento nuevo a esta cuestioacuten contribuye a dar una respuesta a las criacuteticas contemporaacuteneas a Calcedonia y ofrece una ayuda para el trabajo de los teoacutelogos maacutes allaacute de los toacutepicos y de una lectura restringida de las fuentes

palabras ClaVe Cristologiacutea Calcedonia Halleux Grillmeier Price

abstraCt laquoThe Chalcedon definition on the point of view of recent scholarsraquo Resear-ching Christology of Chalcedon definition focusing on the point of view of recent scholars (A de Halleux A Grillmeier R Price) allows a new approach to this issue contributes to an answer to contemporary criticism of Chalcedon and offers an aid to the work of the theologians beyond clicheacutes and narrow approaches to the sources

Key worDs Christology Chalcedon Halleux Grillmeier Price

1 introduccioacuten lA iMportAnciA de cAlcedoniA y lA necesi-dAd de unA AproxiMAcioacuten ActuAl

El cuarto concilio ecumeacutenico se celebroacute durante el otontildeo del antildeo 451 en Calcedonia en la orilla del Boacutesforo frente a Constantinopla bajo la atenta vigilancia de los emperadores Marciano y Pulqueria Fue la con-

1 Sacerdote de la dioacutecesis de Barcelona Fue alumno del Colegio entre 2010 y 2014 periodo en el que realizoacute estudios de licenciatura y doctorado en Teologiacutea dogmaacutetica en la Pon-tificia Universidad Gregoriana En diciembre de 2015 defendioacute la tesis doctoral titulada laquoLa cristologiacutea de Calcedonia y la obra de Andreacute de Halleux complementada y confrontada con las aportaciones de Alois Grillmeier y Richard Priceraquo Actualmente es profesor en la Facultad de Teologiacutea de Cataluntildea (Barcelona Espantildea)

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

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clusioacuten parcial de una sucesioacuten de acontecimientos que habiacutea tenido su origen inmediato en la poleacutemica suscitada por el monje Eutiques que habiacutea llevado a confrontaciones e incluso a la celebracioacuten dos antildeos antes de un laquoconcilioraquo en Eacutefeso denominado por el papa Leoacuten Magno como laquoLatrocinio de Eacutefesoraquo

Esta poleacutemica se situacutea en un marco maacutes amplio dentro de la controver-sia cristoloacutegica que habiacutea estallado el 428 con el laquoescaacutendalo ecumeacutenicoraquo provocado por Nestorio ante el cual habiacutea reaccionado celosamente Cirilo de Alejandriacutea y que habiacutea conducido al agitado concilio de Eacutefeso (431) seguido de la reconciliacioacuten del 433 en torno a la Foacutermula de la Unioacuten2

En la quinta sesioacuten de Calcedonia (22 de octubre de 452) se aproboacute una definicioacuten de fe (horos) salvando la feacuterrea oposicioacuten de los padres a redactar un nuevo texto dogmaacutetico3 gracias a las presiones de la comisioacuten imperial y del mismo emperador

En la definicioacuten finalmente aprobada laquose ensentildea a confesarraquo a laquouno solo y el mismoraquo Cristo laquo(re)conocido en dos naturalezasraquo laquosin confusioacuten sin cambio sin separacioacuten y sin divisioacutenraquo de manera que laquolas propiedades de cada una de las naturalezas concurren en una sola persona y en una sola hipoacutestasisraquo Seguidamente adjuntamos el texto de la definicioacuten4

Siguiendo pues a los Santos Padres todos a una voz ensentildeamos que ha de confesarse [ὁμολογεῖν hellip ἐκδιδάσ-κομεν] a uno solo y el mismo Hijo nuestro Sentildeor Jesucristo el mismo perfecto en la divinidad y el mismo perfecto en la humanidad Dios verdaderamente y el mismo verdaderamente hombre de alma racio-nal y de cuerpo consustancial con el Padre en cuanto a la divinidad y el mismo consustancial con nosotros en cuanto a la humanidad semejante en todo a nosotros menos en el pecado [Heb 4 15]

2 Para un acercamiento baacutesico a Calcedonia cfr A DE HALLEUX Le Concile de Chal-ceacutedoine Para un relato de los acontecimientos del Concilio cfr R PRICE The Council of Chalcedon a Narrative Para un acercamiento maacutes amplio a Calcedonia cfr P T CAMELOT Eacutephegravese et Chalceacutedoine R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon

3 Esta oposicioacuten era tan fuerte porque en Eacutefeso el 22 de julio de 431 el concilio reunido en torno a Cirilo habiacutea decretado que a nadie era liacutecito presentar otra foacutermula de fe o escribirla o componerla fuera de la definida por los santos padres reunidos con el Espiacuteritu Santo en Ni-cea (DH 265 ACO I 1 7 105ss) En la quinta sesioacuten de Calcedonia se presenta inicialmente un borrador de definicioacuten (no conservado) que es rechazado exigieacutendose su enmienda para cumplir las condiciones de la comisioacuten imperial y concordar con la carta dogmaacutetica de Leoacuten (Tomus ad Flavianum) El texto corregido es aprobado al final de esta sesioacuten

4 Debe tenerse en cuenta que al texto de la definicioacuten le precede un amplio prefacio que incluye los siacutembolos de Nicea y Constantinopla y le sigue un anatematismo final

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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engendrado del Padre antes de los siglos en cuanto a la divinidad y el mis-mo en los uacuteltimos diacuteas por nosotros y por nuestra salvacioacuten (engendrado) de Mariacutea Virgen madre de Dios en cuanto a la humanidaduno solo y el mismo Cristo Hijo Sentildeor unigeacutenitohellip hellip que se ha de reconocer en dos naturalezas sin confusioacuten sin cambio sin divisioacuten sin separacioacuten [ἕνα καὶ τὸν αὐτὸν Χριστόν υἱόν κύ ριον μονογενή ἐν δύο φύσεσιν ἀσυγχύτως ἀτρέπτως ἀδιαιρέτως ἀχωρίσ τως γνωριζόμενον] en modo alguno borrada la diferencia de naturalezas por causa de la unioacuten sino conservando maacutes bien cada naturaleza su propiedad y concurrien-do en una sola persona y en una sola hipoacutestasis [τῆς ἰδιότητος ἑκατέρας φύσεως καὶ εἰς ἓν πρόσωπον καὶ μίαν ὑπόστασιν συντρεχούσης] no parti-do o dividido en dos personas sino uno solo y el mismo Hijo unigeacutenito Dios Verbo Sentildeor Jesucristocomo de antiguo acerca de Eacutel nos ensentildearon los profetas y el mismo Jesu-cristo y nos lo ha trasmitido el Siacutembolo de los Padres5

Esta definicioacuten es sin lugar a dudas un punto crucial en el desarrollo de la cristologiacutea de todos los tiempos de Oriente y de Occidente Ahora bien el concilio suscitoacute muy pronto fuertes poleacutemicas que condujeron a grandes conflictos doctrinales eclesiales y poliacuteticos los cuales a su vez llevaron a la celebracioacuten de los concilios de Constantinopla II (553) y III (681) y a la separacioacuten de las Iglesias de Egipto Siria y Armenia que lamentablemente auacuten hoy perdura

El cuarto concilio ha sido objeto de numerosas investigaciones espe-cialmente a partir de su 1500 aniversario celebrado en 19516 Asimismo ha sido el centro de intensas poleacutemicas dentro de la criacutetica reciente a la cristologiacutea laquoclaacutesicaraquo en especial durante la segunda mitad del siglo XX 7

5 La definicioacuten de Calcedonia se halla en E Schwartz (ed) Acta Conciliorum Oecume-nicorum II 1 2 129s correspondiente al acta de la quinta sesioacuten n 34c Tambieacuten se halla en G Alberigo y otros (eds) Conciliorum Oecumenicorum Decreta 86s y en DH 301 El texto en espantildeol presentado sigue con algunas modificaciones DH 301 Noacutetese que el texto de la definicioacuten no corresponde exactamente con el imaginario de que Calcedonia define a Jesucristo como una persona en dos naturalezas

6 El mismo Papa redactoacute una enciacuteclica al respecto cfr PIacuteO XII Sempiternus Rex Chris-tus De entre los estudios surgidos destacamos P T CAMELOT Theacuteologies grecques et theacuteologie latine agrave Chalceacutedoine (1951) H M DIEPEN LrsquoAssumptus Homo agrave Chalcedoine (1951) F X MURPHY The dogmatic definition at Chalcedon (1951) P M J NICOLAS La doctrine christologique de S Leacuteon le Grand (1951) y especialmente A GRILLMEIER - H BACHT Das Konzil von Chalkedon (1951-1954) monumental obra colectiva en tres voluacutemenes preparada por los jesuitas alemanes de Sankt Georgen

7 La reaccioacuten criacutetica a Calcedonia se inicioacute con K RAHNER Chalkedon ndashEnde oder Anfang (1954) trabajo que fue publicado despueacutes con otro tiacutetulo dentro de sus Escritos de

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

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Es preciso aclarar que a diferencia de otros siacutenodos de la antiguumledad del concilio de Calcedonia conservamos abundante documentacioacuten in-cluyendo las actas de las sesiones editadas por iniciativa de la autoridad imperial de modo que contamos con una fuente primaria de valor inesti-mable que debe ser acogida con espiacuteritu criacutetico8

Al elaborar una reflexioacuten teoloacutegica sobre el cuarto concilio urge una aproximacioacuten continuamente renovada a la cristologiacutea de la definicioacuten teniendo en cuenta que Calcedonia es un acontecimiento eclesial cele-brado hace casi dieciseacuteis siglos siendo el concilio maacutes concurrido de la Iglesia primitiva y tan poleacutemico en su momento que dividioacute a las Iglesias No han dejado de aparecer trabajos que analizan la cristologiacutea de la defi-nicioacuten calcedonense9

Teologiacutea Id Problemas actuales de cristologiacutea en espantildeol En los antildeos siguientes se dio una fuerte poleacutemica con respecto a la cristologiacutea del cuarto concilio recogida en B SESBOUumlEacute Le proceacutes contemporain de Chalceacutedoine (1976) En la cristologiacutea espantildeola al respecto destacan dos artiacuteculos de los antildeos setenta J I GONZAacuteLEZ FAUS Las foacutermulas de la dogmaacutetica cris-toloacutegica (1971) y O GONZAacuteLEZ DE CARDEDAL Calcedonia y los problemas fundamen-tales de la cristologiacutea actual (1979) Trabajos maacutes recientes al respecto son J A RIESTRA Il dibattito sul valore (2001) L F LADARIA La recente interpretazione della definizione di Calcedonia (2003) y G URIacuteBARRI Leyendo el Concilio de Calcedonia (2008)

8 La edicioacuten criacutetica de las actas de Calcedonia se encuentra en E SCHWARTZ Acta Conciliorum Oecumenicorum concretamente en su tomo II (el I corresponde a Eacutefeso) que consta a su vez de seis voluacutemenes publicados entre 1932 y 1938 Para una visioacuten criacutetica de estas actas cfr R PRICE Truth omissions and fiction in the Acts of Chalcedon quien maacutes allaacute de algunas omisiones y escasa ficcioacuten les concede un notable componente de verdad Existe una versioacuten francesa parcial en A J FESTUGIEgraveRE Eacutephegravese et Chalceacutedoine (1982) donde se recogen las dos primeras sesiones e Id Actes de Chalceacutedoine (1983) donde se recogen las siguientes cuatro sesiones correspondientes a la definicioacuten de la fe Maacutes recien-temente se ha publicado una versioacuten inglesa completa en R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon (2005 22007)

9 De entre los numerosos estudios recientes sobre la definicioacuten calcedonense sobresale A DE HALLEUX La deacutefinition christologique (1976) que recoge ademaacutes las aportaciones de los principales estudios anteriores a partir de 1945 una exposicioacuten sinteacutetica de caraacutecter menos teacutecnico se halla en Id Le Concile de Chalceacutedoine 12-15 (1993) El citado trabajo de 1976 fue integrado en A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 753-764 (1979) Las aporta-ciones de A de Halleux asiacute como las consideraciones de A Grillmeier han sido recogidas por la que fue principal colaboradora del segundo en T HAINTHALER A short analysis of the definition (2006) En su edicioacuten de las actas el profesor R Price se esfuerza por ofrecer claves para el anaacutelisis de la definicioacuten R PRICE - M GADDIS The Acts of Chalcedon 1 68-71 e Id The Acts of Chalcedon 2 183-191 (2005) Cfr tambieacuten H DROBNER Fonti teologiche e analisi 42-58 (ponencia para un congreso de 2001) interesante por su clari-ficadora propuesta de estructura basada en las observaciones de A de Halleux y porque tiene en cuenta las posibles fuentes latinas de la definicioacuten Siempre es uacutetil por su claridad y caraacutecter didaacutectico P T CAMELOT Eacutephegravese et Chalceacutedoine 138-150 (1962) Ademaacutes son destacables por las mismas razones B SESBOUumlEacute Jeacutesus-Christ dans la tradition 109-119 (1982) y B SESBOUumlEacute - J WOLINSKI Histoire des dogmes I 407-412 (1995) seccioacuten re-

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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Proponemos que toda aproximacioacuten actual a la cristologiacutea de Calce-donia debe hacerse de la mano de laquointeacuterpretesraquo adecuados esto es de estudiosos de la Iglesia primitiva patroacutelogos e historiadores que ejercen de mediadores Esto permite que el teoacutelogo sabiamente pueda descar-gar en ellos parte de su responsabilidad10 Por tanto es crucial el papel de estos laquointeacuterpretesraquo en el itinerario hacia Calcedonia y debe decidirse cuidadosamente cuaacuteles elegir

Asiacute sin dejar de lado la cristologiacutea calcedonense como objeto priorita-rio es preciso prestar atencioacuten a los estudiosos que lo han tratado vistos como laquointeacuterpretesraquo y como imprescindibles laquocompantildeeros de caminoraquo del teoacutelogo De este modo se plantea un acercamiento de una forma renovada a la cuestioacuten de la cristologiacutea de Calcedonia a traveacutes de la mirada de sus estudiosos actuales

2 tres inteacuterpretes ActuAles de cAlcedoniA

21 Andreacute de Halleux principal inteacuterprete contemporaacuteneo de Cal-cedonia

Al entrar en contacto con los trabajos recientes sobre el cuarto concilio emerge enseguida la figura del franciscano belga Andreacute de Halleux (1929-1994) Se trata de un autor apenas conocido para el gran puacuteblico pero citado por casi todos los que han escrito sobre Calcedonia despueacutes de eacutel

A de Halleux fue un eminente patroacutelogo y filoacutelogo de la Universi-dad de Lovaina que dedicoacute su obra y su vida al estudio de la antiguumledad cristiana y al ecumenismo buscando poner la patrologiacutea al servicio de la unidad de las Iglesias11

A juicio de los principales estudiosos12 A de Halleux es el autor del anaacutelisis maacutes minucioso de la definicioacuten calcedonense publicado (1976)

dactada por Sesbouumleacute en la que recoge sus trabajos anteriores Asimismo resultan de intereacutes B STUDER Dios salvador en los Padres 315-322 R A NORRIS Chalcedon Revisited y S COAKLEY What Does Chalcedon Solve and What Does it Not

10 Como indica A de Halleux precisamente un destacado estudioso reciente del cuarto concilio cfr A DE HALLEUX Pourquoi les Eacuteglises ont-elles besoin aujourdrsquohui drsquoune theacuteologie patristique 512

11 Esto se refleja en el tiacutetulo del volumen que recoge sus principales trabajos A DE HALLEUX Patrologie et œcumeacutenisme

12 Por ejemplo cfr T HAINTHALER A Short Analysis of the Definition 317 R PRI-CE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 73 R PRICE The Council of Chalcedon a Narrative 81

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

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hasta hoy13 cuya importancia no ha disminuido cuarenta antildeos despueacutes de su aparicioacuten y maacutes de veinte despueacutes de la muerte de su autor sobrevenida en un momento de intenso trabajo intelectual precisamente en relacioacuten con la controversia cristoloacutegica Este autor ha publicado otros trabajos de gran intereacutes en torno a la cristologiacutea patriacutestica y Calcedonia14

Es preciso antildeadir que la toma de contacto con el itinerario intelectual y vital de Halleux supone una gran ayuda para comprender la importancia de su aportacioacuten asiacute como un estiacutemulo para afrontar las grandes divisio-nes que se produjeron en el pasado y que auacuten perduran15 Formado en la reconocida escuela histoacuterico-criacutetica lovanista e inicialmente experto en estudios siriacuteacos se convirtioacute en un reconocido patroacutelogo y en un activo experto en cuestiones ecumeacutenicas Gracias a su formacioacuten Halleux presta una atencioacuten preferente a las fuentes primarias que domina como muy pocos A la vez tambieacuten a causa de esta formacioacuten evita por principio preconcepciones y juicios de valor con respecto a los temas estudiados incluyendo Calcedonia Asimismo estaacute convencido de que la tarea prin-cipal del patroacutelogo es contribuir a la unidad de las Iglesias

Su obra compuesta sobre todo por artiacuteculos dispersos trata muchos elementos del pasado que abocaron a la divisioacuten de las Iglesias o que son causa de controversias teoloacutegicas entre ellas (la teologiacutea trinitaria la procesioacuten del Espiacuteritu Santo los sacramentos la controversia en torno al palamismo)16

13 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique publicado en 1976 fue recogido posteriormente en el volumen recopilatorio Patrologie et œcumeacutenisme

14 Por su visioacuten sinteacutetica destaca especialmente su entrada correspondiente a Calce-donia en la Enciclopeacutedie Maronite A DE HALLEUX Le Concile de Chalceacutedoine Id Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne Tambieacuten son de intereacutes sus estudios sobre el canon 28 del concilio Id Le vingt-huitiegraveme canon de Chalceacutedoine Id Le deacutecret chalceacutedonien sur les preacuterogatives de la Nouvelle Rome En relacioacuten con la controversia cristoloacutegica destacan A DE HALLEUX Nestorius histoire et doctrine Id Cyrill von Alexandrien Id Le dyophy-sisme christologique de Cyrille Id La premiegravere session Id Les douze chapitres cyrilliens Id Lrsquoaccord christologique de 433

15 Para una aproximacioacuten a este itinerario cfr sobre todo A DE HALLEUX Une vie consacreacutee y tambieacuten Id Pourquoi les Eacuteglises ont-elles besoin aujourdrsquohui drsquoune theacuteologie patristique Id Patrologie et œcumeacutenisme introduccioacuten asimismo son de gran intereacutes algunas de las necroloacutegicas escritas en su memoria como J M SEVRIN Andreacute de Halleux (1929-1994) J RYCKMANS - L VAN ROMPAY Andreacute de Halleux

16 Junto con el concilio de Calcedonia estos son los temas de su volumen recopilatorio cfr A DE HALLEUX Patrologie et œcumeacutenisme

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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22 Alois Grillmeier y Richard Price como complemento y marco de Andreacute de Halleux

Ademaacutes de Andreacute de Halleux se ha elegido otros dos autores de entre los estudiosos contemporaacuteneos del cuarto concilio Alois Grillmeier y Richard Price Su obra contribuye a situar las aportaciones de Halleux dentro de un marco maacutes completo tanto en el tiempo como en el enfoque asiacute como a complementarlas en la buacutesqueda de una comprensioacuten actual de la cristologiacutea de Calcedonia

El primero de estos autores el jesuita alemaacuten Alois Grillmeier (1910-1998) fue un famoso historiador del dogma y uno de los mayores exper-tos en cristologiacutea patriacutestica del siglo XX Fue creado cardenal por Juan Pa blo II Destaca por haber sido el editor de una monumental coleccioacuten de estudios publicados en torno al 1500 aniversario de Calcedonia (Das Konzil von Chalkedon)17 asiacute como por su opus magnum Jesus der Chris-tus im Glauben der Kirche18 asiacute como otros trabajos19 Contribuye al estu-dio de Calcedonia especialmente con elementos que ayudan a interpretar la definicioacuten dentro del contexto de la historia de los dogmas y de las criacuteticas contemporaacuteneas a la cristologiacutea patriacutestica

El segundo autor escogido es el sacerdote ingleacutes Richard Price (1947) historiador y teoacutelogo dedicado uacuteltimamente a los concilios primitivos que ha editado una versioacuten inglesa de las actas de Calcedonia amplia-mente anotada y comentada20 en la que recoge las aportaciones recientes

17 Cfr A GRILLMEIER - H BACHT Das Konzil von Chalkedon (1951-1954) Ade-maacutes de editor es autor de dos importantes trabajos A GRILLMEIER Die theologische und sprachliche Vorbereitung y Vorbereitung des Mittelalters

18 Se trata de una obra auacuten inconclusa La edicioacuten alemana maacutes reciente A GRILL-MEIER - T HAINTHALER Jesus der Christus im Glauben der Kirche consta de momento de cinco voluacutemenes actualmente su publicacioacuten corre a cargo de su asistente T Hainthaler Existe traduccioacuten espantildeola tan soacutelo del primer volumen A GRILLMEIER Cristo en la Tra-dicioacuten Cristiana que abarca desde el Nuevo Testamento al Concilio de Calcedonia siguiendo la uacuteltima edicioacuten alemana

19 Cfr sus voluacutemenes recopilatorios A GRILLMEIER Mit ihm und in ihm (1975 21978) A GRILLMEIER - T HAINTHALER Fragmente zur Christologie (1997) Este uacutel-timo contiene una detallada bibliografiacutea del cardenal Grillmeier Destacan trabajos como A GRILLMEIER Piscatorie - Aristotelice Id Kerygma Reflexion und Dogma Id Vom Sym-bolum zur Summa Id Das Kerygma von Chalzedon Id Hellenisierung - Judaisierung des Christentums Id Moderne Hermeneutik altkirchliche Christologie

20 Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I-III (2005) Tam-bieacuten ha publicado las actas de Constantinopla II y del siacutenodo lateranense del 649 R PRICE The Acts of the Council of Constantinople of 553 (2009) R PRICE - P BOOTH - C CU-BITT The Acts of the Lateran Synod of 649 (2014)

Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

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en torno a la cuestioacuten y aporta criterios de interpretacioacuten Asimismo ha publicado otros trabajos sobre los concilios primitivos21 Contribuye al tema de nuestro intereacutes especialmente desde la perspectiva de la historia de la Iglesia y ofrece ademaacutes una panoraacutemica que incluye los estudios maacutes recientes

23 Planteamiento del trabajo con los inteacuterpretes

Asiacute a traveacutes de A de Halleux y los otros dos estudiosos citados cuya obra incluye asimismo referencias a muchos otros se puede formar una panoraacutemica general de las aportaciones de los estudios recientes sobre Calcedonia en Occidente que engloba los distintos aacutembitos linguumliacutesticos y culturales que estos recogen y que nos permite realizar una aproximacioacuten actual significativa De este modo se pretende ofrecer elementos para presentar la cristologiacutea de Calcedonia desde una perspectiva renovada Es preciso antildeadir que no hay praacutecticamente estudios sobre A de Halleux A Grillmeier y R Price22

Para exponer las contribuciones los tres autores citados con respecto a la cristologiacutea Calcedonia se eligen tres ejes temaacuteticos como referencia que corresponden con los elementos clave en relacioacuten con nuestra temaacute-tica23 Estos tres ejes son

1 El proceso de redaccioacuten y las fuentes de la definicioacuten calcedonense 2 La influencia en el concilio de Calcedonia de Cirilo de Alejandriacutea y

Leoacuten Magno3 La interpretacioacuten de la definicioacuten misma y la importancia de los

teacuterminos clave presentes en esta

21 Cfr R PRICE - M WHITBY Chalcedon in Context (2009 22011) Dentro de este vo-lumen le corresponden The Council of Chalcedon a Narrative Truth omissions and fiction in the Acts of Chalcedon The Second Council of Constantinople (553) and the Malleable Past

22 Esto sucede en primer lugar con el principal autor de referencia A de Halleux a pesar de ser auacuten hoy un estudioso de obligada cita en los estudios sobre las temaacuteticas sobre las que trabajoacute Tambieacuten sucede con respecto a A Grillmeier aunque parezca sorprendente por ser un autor de referencia y ampliamente reconocido traducido y citado esta situacioacuten es especialmente notoria en lengua espantildeola como lamenta J A MARTIacuteNEZ CAMINO Jesuacutes de Nazaret el Cristo en la fe de la Iglesia Maacutes comprensible es el desconocimiento de la obra de R Price por ser mucho maacutes reciente pero de quien se puede prever que seraacute un autor muy influyente en el futuro gracias a su edicioacuten de las actas

23 Estos tres puntos se han escogido a partir de la lectura de los recientes estudios sobre la cristologiacutea de Calcedonia que ha permitido identificar estos elementos clave

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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3 eleMentos pArA unA AproxiMAcioacuten renovAdA A cAlcedoniA

Seguidamente se ofrecen las principales aportaciones de estos tres autores con respecto a los tres ejes presentados

31 Redaccioacutenyfuentesdeladefinicioacuten

Como ya se ha indicado A de Halleux ha realizado la propuesta maacutes significativa hasta la fecha por lo que respecta a la estructura y las posibles fuentes de la definicioacuten calcedonense En su anaacutelisis pone en juego su formacioacuten como filoacutelogo y patroacutelogo que le lleva a afrontar el texto desde las perspectivas linguumliacutestica histoacuterica y teoloacutegica y a ponerlo en relacioacuten con sus posibles fuentes tomando en consideracioacuten preferentemente la documentacioacuten presente en las actas24

Destaca su afirmacioacuten del horos como un texto estructurado y redactado orgaacutenicamente en el que se insertan algunas modificaciones que corres-ponderiacutean a enmiendas exigidas en la sesioacuten quinta25 Descarta por tanto la idea de la definicioacuten como un laquomosaicoraquo de citas y propone la existencia de un verdadero laquoautorraquo para el texto y no un mero compilador 26

Por lo que se refiere a las fuentes de la definicioacuten destaca el papel de la Foacutermula de la Unioacuten del 433 (especialmente con respecto a la primera parte de la definicioacuten) que seriacutea leiacuteda en Calcedonia a traveacutes de la carta Laetentur caeli de Cirilo a Juan de Antioquiacutea En esta carta el alejandri-no hace suya la profesioacuten laquoantioquenaraquo de la Foacutermula de Unioacuten aunque ofrece su propia interpretacioacuten de esta27 De las cartas de Cirilo junto con la citada a Juan A de Halleux destaca tambieacuten la importancia de la

24 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique consta de cuatro partes una introduccioacuten (que incluye premisas de meacutetodo como considerar el texto como un todo y centrarse en la informacioacuten de las actas evitando reconstrucciones forenses) una recensioacuten de los trabajos previos al suyo (especialmente los dedicados al estudio de las fuentes) una propuesta propia con respecto a la definicioacuten (estructura estudio de las fuentes elementos de interpretacioacuten) y una conclusioacuten final

25 Para eacutel basaacutendose en la consideracioacuten de su propio anaacutelisis estructural las enmiendas de uacuteltima hora seriacutean los cuatro famosos adverbios y el inciso sobre la propiedad y la persona que se habriacutean hecho sobre un formulario vinculado a Basilio de Seleucia que ya contendriacutea la foacutermula difisita reconocido en dos naturalezas

26 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 156ss27 Cfr Id La deacutefinition christologique 14155 Esta afirmacioacuten aparece como una con-

clusioacuten de su recensioacuten a los autores anteriores a eacutel En su carta a Juan Cirilo reinterpreta los dos laquoperfectoraquo de la Foacutermula de Unioacuten perfecto Dios y perfecto hombre son glosados como perfecto en la divinidad y perfecto en la humanidad evitando el riesgo de afirmar dos sujetos en Cristo La definicioacuten calcedonense recogeraacute este desplazamiento terminoloacutegico

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segunda a Nestorio a la vez que rechaza como fuente directa la tercera carta a Nestorio con los anatematismos28

Asimismo por lo que respecta a la fuente del elemento central de la de-finicioacuten su laquofoacutermula difisitaraquo (laquoreconocido en dos naturalezasraquo) Hal leux resalta la importancia de la profesioacuten del metropolita Basilio de Seleucia pronunciada en el siacutenodo constantinopolitano del 448 que condenoacute a Euti-ques y en la que Basilio afirma expliacutecitamente basarse en Cirilo29

32 Cirilo y Leoacuten en Calcedonia

Por lo que respecta a la influencia de Cirilo y Leoacuten en el cuarto con-cilio los estudiosos occidentales recientes con A de Halleux como ex-ponente destacado han afirmado cada vez maacutes la importancia del ale-jandrino en Calcedonia hasta hablar de una laquofidelidad ciriliana baacutesicaraquo del concilio30 a la vez que se ha ido reduciendo la valoracioacuten del papel directo de Leoacuten Magno

La mayoriacutea de los estudiosos modernos propone que entre los padres de Calcedonia predominaba lo que R Price denomina laquocirilianismo mo-deradoraquo como postura teoloacutegica que dentro de una fidelidad baacutesica a Cirilo y la consiguiente afirmacioacuten clara de la unidad en Cristo permitiriacutea ademaacutes una aceptacioacuten del difisismo31

Ahora bien A de Halleux y otros estudiosos denuncian malenten-didos y ambiguumledades en torno a los textos y la doctrina de Cirilo ya en el tiempo del concilio e incluso desde la controversia con Nestorio

28 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 155165 Id Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 448ss

29 Cfr Id La deacutefinition christologique donde en muacuteltiples pasajes expone la importan-cia de Basilio Los primeros en destacar el papel de Basilio habiacutean sido R V Sellers (1953) y T-J Šagi-Bunić (1965) A de Halleux afirma que el conjunto de la definicioacuten que eacutel consi-dera como un texto orgaacutenico se hallariacutea bajo la influencia de Basilio incluidas algunas de las modificaciones Maacutes adelante G Martzelos (Der Vater der dyophysitischen Formel) insistiraacute en la autoriacutea basiliana de la claacuteusula difisita aunque su propuesta seraacute valorada criacuteticamente por A de Halleux (Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne)

30 Cfr A DE HALLEUX Une vie consacreacutee 4631 El cirilianismo moderado se basariacutea en la segunda carta a Nestorio y la Laetentur

caeli a Juan de Antioquiacutea tomando distancias de la tercera carta a Nestorio y de los anate-matismos y evitando expresiones marcadamente teopasquitas se habriacutea convertido en la teologiacutea dominante del Oriente griego Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 62ss A de Halleux se refiere a la diversidad de interpretaciones que ofreciacutea el legado de Cirilo entre otros en Cyrill von Alexandrien 147 y Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 468s

la DefiniCioacuten De CalCeDonia

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iniciada el 42832 Ademaacutes el mismo Halleux denuncia la debilidad de la Unioacuten del 433 tanto en la foacutermula dogmaacutetica resultante como en su inter-pretacioacuten por las partes enfrentadas La deficiente resolucioacuten del conflicto efesino a traveacutes de una unioacuten superficial y ambigua conduciraacute a una pron-ta reaparicioacuten de las hostilidades que desembocaraacuten en la celebracioacuten de Calcedonia y el posterior drama33 La trayectoria literaria de A de Halleux muestra que un punto absolutamente determinante es cuaacutel es la adecua-da interpretacioacuten de la cristologiacutea de Cirilo no solo en vida sino en los antildeos siguientes a su muerte (dagger 444) y en particular por lo que respecta al cuarto Concilio Este tema es tradicionalmente una dificultad para los que buscan aproximarse a la controversia cristoloacutegica34

Por lo que respecta a Leoacuten Magno como se ha indicado los estudios recientes le otorgan un papel limitado en Calcedonia aunque a traveacutes de sus legados y de los comisarios imperiales su influencia habriacutea sido decisiva en la quinta sesioacuten del Concilio impulsando la redaccioacuten de una foacutermula inequiacutevocamente difisita De hecho A de Halleux muestra en su anaacutelisis de la definicioacuten que el papel del Tomus como fuente de la definicioacuten seriacutea de hecho secundario35 Este mismo autor afirma que si el Tomus fue recibido en el concilio fue porque los padres reconocieron que concordaba con Cirilo36 y situaacutendolo en el uacuteltimo lugar de una laquoje-rarquiacutea descendenteraquo de documentos El uacutenico pasaje de la definicioacuten que habriacutea sido tomado del Tomus habriacutea sido modificado para situarlo en concordancia con Cirilo en lo que A de Halleux denomina laquocirilia-nizacioacuten estiliacutesticaraquo37

32 Cfr por ejemplo A DE HALLEUX Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 469 Tam-bieacuten A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 679ss donde se propone que en Calcedonia se habriacutean seleccionado los escritos de Cirilo para evitar todo extremismo en la formulacioacuten

33 Cfr A DE HALLEUX Lrsquoaccord christologique de 43334 Cfr por ejemplo Id Le dyophysisme christologique de Cyrille R A NORRIS

Christological Models in Cyril of Alexandria 35 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique tanto en la recensioacuten de los

estudios anteriores como en la propuesta del mismo Halleux 36 En la segunda sesioacuten conciliar seguacuten la numeracioacuten latina y en una reunioacuten posterior

(pero anterior a la sesioacuten cuarta) se discute acerca del Tomus y su compatibilidad con Cirilo37 Esta jerarquiacutea descendente de la documentacioacuten calcedonense situacutea en su punto maacutes

alto al siacutembolo niceno seguido del constantinopolitano las cartas de Cirilo (la segunda a Nestorio y la Laetentur caeli a Juan) y finalmente el Tomus de Leoacuten La ortodoxia de cada documento se mediriacutea por su fidelidad a los precedentes cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 163 Id La reacuteception du symbole œcumeacutenique 41ss Halleux pone de mani-fiesto coacutemo la cita del Tomus de Leoacuten es modificada y fusionada orgaacutenicamente con otra cita de Cirilo junto con la adicioacuten del laquouna hipoacutestasisraquo (que tambieacuten se remonta a Cirilo)

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Es preciso aproximarnos a Calcedonia desde esta oacuteptica de mayoriacutea laquocirilianaraquo y no a traveacutes del Tomus o de Leoacuten mismo vistos como criterio interpretativo de la definicioacuten lo que era la postura habitual en Occidente hasta tiempos recientes Al respecto A de Halleux matiza que Calcedo-nia no habriacutea sido una derrota de Leoacuten sobre Cirilo sino una derrota a un monofisismo extremo e intolerante38

33 Interpretacioacuten y terminologiacutea

Los estudios recientes contribuyen a desvelar claves para interpre-tar la definicioacuten de Calcedonia dentro de su contexto textual teoloacutegico y cultural asiacute como a una revalorizacioacuten de cara a la reflexioacuten cristoloacute-gica actual

331 Calcedonia vinculada al Siacutembolo

Una aportacioacuten destacada de estos estudios es la iacutentima unioacuten de la definicioacuten calcedonense con el Siacutembolo de la fe39 sobre todo teniendo en cuenta el prefacio del horos casi siempre olvidado de manera que la defi-nicioacuten se presenta a siacute misma como auteacutentica interpretacioacuten del Siacutembolo de la fe nicena e incluso como una explicitacioacuten de su contenido40

En esta liacutenea avanzan aunque con matices diferentes los tres auto res tratados Andreacute de Halleux muestra la vinculacioacuten de Calcedonia con el siacutembolo en el plano maacutes textual y teoloacutegico tratando la recepcioacuten del siacutembolo a traveacutes del tiempo41 Alois Grillmeier y Richard Price afrontan esta cuestioacuten desde una perspectiva maacutes histoacuterica remitiendo especial-mente a las intervenciones recopiladas en el Codex Encyclius que recoge una gran laquoencuestaraquo del 457-458 realizada por el emperador Leoacuten I y

38 Cfr A DE HALLEUX Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne 471s39 Teacutengase en cuenta que se tata del Siacutembolo niceno el Siacutembolo constantinopolitano ha-

biacutea permanecido desconocido hasta Calcedonia y precisamente reaparecioacute en las discusiones conciliares sobre la redaccioacuten de una foacutermula cristoloacutegica

40 Cfr por ejemplo A DE HALLEUX La reacuteception du symbole œcumeacutenique e Id Le Concile de Chalceacutedoine se refieren al prefacio y a la vinculacioacuten entre la definicioacuten y el Siacutembolo

41 Recueacuterdese que el Siacutembolo ocupa el primer lugar de la jerarquiacutea descendente de los lugares teoloacutegicos para la definicioacuten calcedonense La definicioacuten aparece como una interpre-tacioacuten de la fe nicena fiel como lo habiacutea sido Constantinopla I y en liacutenea con los testimonios individuales de la tradicioacuten inteacuterpretes ortodoxos del Credo esto es Cirilo y Leoacuten Cfr A DE HALLEUX La reacuteception du symbole œcumeacutenique 42-46

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que resulta de gran ayuda para acercarse a la comprensioacuten de Calcedonia en el momento42

Esta relacioacuten con el Siacutembolo permite insertar la definicioacuten del cuarto concilio en la gran tradicioacuten de la Iglesia sin desvincularla de la historia de la salvacioacuten del valor de la soteriologiacutea de toda la teologiacutea trinitaria o del papel del Espiacuteritu Santo43

332 Afirmacioacuten baacutesica de la unidad en Cristo

Los estudios recientes han mostrado que en Calcedonia si bien se afir-ma la dualidad de naturalezas en Jesucristo es prioritaria la afirmacioacuten de la unidad Por un lado se ha presentado la definicioacuten del cuarto concilio dentro de una fidelidad baacutesica a Cirilo44 como una expresioacuten del laquociri-lianismo moderadoraquo45 de manera que la afirmacioacuten de la unidad se halla siempre presente Por otro lado la estructura de la definicioacuten tal como es puesta de manifiesto por A de Halleux revela el texto como una afirma-cioacuten fundamental de la unidad de Cristo de modo inequiacutevoco en la cual se inserta la dualidad de naturalezas fruto de la Encarnacioacuten46 dualidad que no es una mera equiparacioacuten

42 Grillmeier se refiere al Codex en numerosos trabajos y destaca que gran parte de los obispos habiacutean interpretado Calcedonia en un sentido kerigmaacutetico (como pescadores no como filoacutesofos aristoteacutelicos) dando prioridad al Credo del cual la definicioacuten seriacutea una inter-pretatio Cfr A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 765-768 Id Jesus der Christus 21 221-266 entre muchos otros Grillmeier afirma con contundencia la estrecha dependencia de la definicioacuten respecto del siacutembolo y su consecuente valor soterioloacutegico cfr Id Jesus der Christus 21 5238ss Id Wir glauben an den einen Herrn especialmente 52-59 Por su par-te R Price trata tambieacuten la vinculacioacuten de Calcedonia con el Siacutembolo y coacutemo esto se muestra en el prefacio de la definicioacuten y en las respuestas contenidas en el Codex Encyclius dentro de una comprensioacuten de un ideal sacramental y de comunioacuten cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 56-59

43 Precisamente estas son criacuteticas que se le han hecho con frecuencia a la misma defi-nicioacuten

44 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique muestra esta fidelidad a lo largo de todo el artiacuteculo tanto por lo que respecta a las fuentes directas (cartas de Cirilo a Nestorio y a Juan) como a la teologiacutea de Basilio de Seleucia (de quien dependeriacutea el conjunto de la definicioacuten y quien se declara fiel a Cirilo) o a la redaccioacuten de la definicioacuten (en la que la uacutenica cita del Tomus de Leoacuten habriacutea sido cirilianizada)

45 Este cirilianismo moderado recordemos dentro de una afirmacioacuten clara de la unidad de Cristo reconoce la dualidad de naturalezas Es visto por Price entre otros como predo-minante en el momento Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon I 62-65

46 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique a partir de su anaacutelisis de la estructura de la definicioacuten muestra que la afirmacioacuten de la unidad es baacutesica hallaacutendose al inicio al final y a la mitad

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Asimismo la afirmacioacuten de la distincioacuten real de estas naturalezas no desgaja la unidad como apuntan los cuatro famosos adverbios (laquosin con-fusioacuten sin cambio sin separacioacuten sin divisioacutenraquo)47 La condicioacuten negativa de los adverbios indica que no buscan dar cuenta racional del misterio de la unioacuten cristoloacutegica sino solo garantizarlo ante las herejiacuteas de la confu-sioacuten de naturalezas y de la divisioacuten de la persona48

333 Realismo del difisismo calcedonense

Por lo que respecta a la foacutermula difisita (laquoreconocido en dos naturale-zasraquo) teniendo en cuenta la consideracioacuten del laquocirilianismo moderadoraquo predominante en Calcedonia A de Halleux ha defendido con fuerza que la definicioacuten calcedonense debe ser entendida en liacutenea con una distincioacuten real de las naturalezas en Cristo y no como una distincioacuten puramente no-cional (en la sola theoria) frente a otras posturas recientes Esta defensa del realismo del difisismo calcedonense es especialmente eneacutergica en sus uacuteltimos escritos49

334 El impulso a la terminologiacutea teoloacutegica

Calcedonia supone sin duda un paso adelante en la clarificacioacuten ter-minoloacutegica de la cristologiacutea distinguiendo por un lado la laquonaturale-zaraquo (physis) de la laquopersonaraquo (prosocircpon-hipoacutestasis) y situando ademaacutes prosocircpon junto a hipoacutestasis (ἐν δύο φύσεσιν frente a εἰς ἓν πρόσωπον

47 Es necesario precisar que para autores como A de Halleux estos cuatro adverbios que han dado tanto juego en la reflexioacuten teoloacutegica tendriacutean un papel secundario en la defini-cioacuten trataacutendose de hecho de un antildeadido que buscariacutea satisfacer las exigencias de los comi-sarios imperiales Seguacuten Halleux los adverbios rompen la estructura gramatical de la defi-nicioacuten y no queda claro a quieacuten se refieren si a laquodos naturalezasraquo a laquoreconocidoraquo o a laquouno solo y el mismoraquo Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 162 Id Le Concile de Chalceacutedoine 14 La mayoriacutea de los estudiosos coinciden en considerarlos un lugar comuacuten a los diversos partidos cfr ademaacutes del mismo A de Halleux entre otros T HAINTHALER A short analysis of the definition 323

48 A DE HALLEUX Le Concile de Chalceacutedoine 1449 La afirmacioacuten inequiacutevoca del realismo del difisismo de la definicioacuten calcedonense se

ve influida especialmente por los acuerdos entre ortodoxos y ortodoxos orientales de 1989 y 1990 de los cuales surgen dos declaraciones conjuntas que interpretan la dualidad cristoloacute-gica en liacutenea con la doctrina ciriliana de la distincioacuten de las naturalezas en Cristo por la mera theoria Cfr A DE HALLEUX Actualiteacute du neacuteochalceacutedonisme Id Orthodoxes orientaux en dialogue Id Agrave propos drsquoune lecture cyrillienne donde critica la postura de G Martzelos quien habiacutea participado en los citados diaacutelogos ecumeacutenicos Esta postura de Halleux se ve reflejada en su obra Le Concile de Chalceacutedoine 16

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καὶ μίαν ὑπόστασιν) A primera vista Calcedonia da en la terminologiacutea teoloacutegica el paso que los padres Capadocios y Constantinopla I habiacutean dado en el campo trinitario50

Es preciso notar con Halleux la laquoimprecisioacutenraquo que rodea a la identifica-cioacuten de cuaacutel es la laquouacutenica hipoacutestasisraquo (μία ὑπόστασις) calcedonense51 Esta laquouna hipoacutestasisraquo es precisamente un elemento antildeadido al laquouna personaraquo leonino (el una persona latino habiacutea sido traducido como ἓν πρόσωπον) para subrayar la unidad en lo que podriacutea ser una enmienda de uacuteltima hora como indica Halleux52 Ciertamente la definicioacuten no afirma (pero tampo-co niega) que el laquouna hipoacutestasisraquo corresponda a la hipoacutestasis del Logos53 Esto no obsta para que otros autores como Price afirmen que esta uacutenica hipoacutestasis en la definicioacuten puede identificarse con el Logos eterno54

Esta cuestioacuten terminoloacutegica precisamente por no haber sido clarificada en Calcedonia (el concilio no pretendiacutea tanto definir los teacuterminos como de-fender la fe) requeriraacute grandes esfuerzos en la teologiacutea bizantina posterior al cuarto concilio tal como sentildealan los estudiosos actuales55

50 Cfr entre otros Ibid 14s51 En la definicioacuten no se explicita que Cristo sea una hipoacutestasis ni que esta hipoacutestasis

deba ser concebida como una laquopersonaraquo (en el sentido filosoacutefico moderno) ni que esta perso-na sea laquoDios Verboraquo Lo que se afirma es que la uacutenica hipoacutestasis se encuentra en el teacutermino de la concurrencia de la especificidad de cada naturaleza Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 167

52 En su anaacutelisis A de Halleux (La deacutefinition christologique 167s) identifica el pasaje de la definicioacuten donde se situacutea laquohipoacutestasisraquo junto prosocircpon (en modo alguno borrada la diferencia de naturalezas por causa de la unioacuten sino conservando cada naturaleza su pro-piedad y concurriendo en una sola persona [prosocircpon] y en una sola hipoacutestasis) como una modificacioacuten posiblemente de uacuteltima hora realizada sobre un formulario previo Considera que el teacutermino laquohipoacutestasisraquo habriacutea jugado un papel secundario en las discusiones conciliares y habriacutea sido antildeadido al laquopersonaraquo latino del Tomus de Leoacuten Magno (que se habiacutea traducido al griego como prosocircpon con riesgo de ser interpretado en sentido nestoriano) como una precisioacuten secundaria para reforzar la afirmacioacuten de la unidad fundamental En la p 168 glosa este pasaje de un modo interesante laquoDans le Christ les deux natures la diviniteacute et lrsquohumani-teacute conservent leur diffeacuterence speacutecifique bien que celle-ci se rejoigne en celui qui est un seul et le mecircme non seulement dans sa manifestation exteacuterieure (prosopon) mais aussi dans son ecirctre profond (hypostasis)raquo

53 Esta precisioacuten siacute apareceraacute en los anatematismos del II concilio de Constantinopla del 553

54 Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of the Council of Chalcedon 70 55 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 170 R PRICE - M GADDIS

The Acts of the Council of Chalcedon 71 Grillmeier (Jesus der Christus 1 762s) afirma que los padres de Calcedonia no fueron conscientes de la importancia de su decisioacuten ni sospecha-ron lo que iba a significar para las futuras generaciones de teoacutelogos afirma asimismo que aunque los conceptos de hipoacutestasis y persona siguen sin precisar el sentido del dogma de Calcedonia estaacute muy claro los padres habriacutean querido significar que a pesar de la diferencia

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34 Elementos de respuesta a las principales criacuteticas a Calcedonia

Los estudios contemporaacuteneos permiten responder desde una perspec-tiva renovada a las criacuteticas maacutes habituales de la teologiacutea contra Calcedo-nia56 La criacutetica contra Calcedonia y los otros concilios primitivos de haber laquohelenizadoraquo el mensaje cristiano ha sido constante desde los tiempos de Adolf von Harnack Los autores estudiados en especial Grillmeier han mostrado que Calcedonia no supone una laquohelenizacioacuten del cristianismoraquo (Hellenisierung des Christentums) Por el contrario propone que la de-finicioacuten calcedonense seriacutea en realidad una auteacutentica laquodeshelenizacioacutenraquo (Enthellenisierung) que buscariacutea salvaguardar la fe biacuteblica en Jesucristo frente a las amenazas del momento57 Si se usaron teacuterminos griegos en la definicioacuten no fue porque la fe se sometiera a una determinada filosofiacutea sino porque con ellos se buscaba poner un determinado laquomarco conceptual helenistaraquo al servicio de la expresioacuten de la fe que era la prioridad58

En los estudios recientes se ha revalorizado el contenido kerigmaacutetico de la definicioacuten y se ha evidenciado que la terminologiacutea teacutecnica usada en ella se hallariacutea al servicio de la fe aunque provenga del mundo heleniacutestico59

real entre las naturalezas de la divinidad y la humanidad Cristo es uno una sola persona o hipoacutestasis este enunciado puede hacerse sin necesidad de definir exactamente el contenido metafiacutesico de los conceptos pues no es misioacuten de los concilios ensentildear metafiacutesica sino servir al anuncio de la Iglesia que tiene por contenido la revelacioacuten de Dios en Cristo y en el Espiacuteritu El mismo A Grillmeier (Das Kerygma von Chalzedon) hace notar que si bien el contenido del dogma de la Encarnacioacuten estaba claro en Calcedonia podriacutea expresarse mediante conceptos auacuten no suficientemente precisados terminoloacutegicamente

56 Estas criacuteticas como ya se ha indicado se hallan sistematizadas criacuteticamente en G URIacuteBARRI Leyendo el Concilio de Calcedonia quien recoge tambieacuten las aportaciones de B SESBOUumlEacute Le proceacutes contemporain de Chalceacutedoine En resumen seriacutean las siguien-tes Calcedonia empleariacutea un lenguaje conceptual inadecuado seguiriacutea un esquema dualista este esquema pondriacutea en tela de juicio la unidad de Cristo Calcedonia estariacutea preso de una cristologiacutea desde arriba Calcedonia propondriacutea un Cristo desprovisto de auteacutentica perso-nalidad humana desconoceriacutea la dimensioacuten histoacuterica de la vida de Cristo prescindiriacutea del Espiacuteritu no presenta diferencias significativas en el modo de estar la divinidad en la keacutenosis y en la exaltacioacuten

57 La helenizacioacuten seriacutea en este caso la simbiosis fiacutesica entre la divinidad y la carne Grillmeier trata de la helenizacioacuten del cristianismo en numerosos trabajos por ejemplo Mo-derne Hermeneutik altkirchliche Christologie 544s J A Riestra (Il dibattito sul valore 107s) considera que gracias a los trabajos de Grillmeier hoy no puede sostenerse que Cal-cedonia haya helenizado el cristianismo

58 Cfr A DE HALLEUX La deacutefinition christologique 169s Al respecto tambieacuten de-fiende la definicioacuten de Calcedonia frente a las acusaciones de helenizacioacuten (Le Concile de Chalceacutedoine 16 ss)

59 Cfr Id La deacutefinition christologique 157 y 169s Id Le Concile de Chalceacutedoine 12-17 Estructuralmente divide la definicioacuten de Calcedonia en dos partes una kerigmaacutetica

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recordando que lo que estaba en juego no era una cuestioacuten acadeacutemica sino eclesial la unidad sacramental60 Asimismo el poner de manifiesto la afirmacioacuten inequiacutevoca de la unidad de Cristo por parte de la definicioacuten contribuye a responder a los que acusan a la definicioacuten de dualismo

Como ya se ha indicado la vinculacioacuten de la foacutermula con el Siacutembolo permite responder en cierto modo a los que acusan a Calcedonia de olvi-dar las dimensiones trinitaria soterioloacutegica y pneumatoloacutegica asiacute como la dimensioacuten histoacuterica de la vida de Cristo

Ademaacutes los trabajos recientes tambieacuten han permitido poner de mani-fiesto la afirmacioacuten de la verdadera humanidad de Cristo El mismo Grill-meier ha apuntado que la cristologiacutea del cuarto concilio entendida de ma-nera adecuada continuacutea siendo fructiacutefera teoloacutegicamente como un punto de relacioacuten entre las cristologiacuteas descendente y ascendente asiacute como una apropiada recuperacioacuten del valor del elemento humano y de la historicidad de Jesucristo una cristologiacutea calcedonense llevada a sus uacuteltimas conse-cuencias hace posible la siacutentesis entre el Jesuacutes de la historia y el Cristo de la fe61 Calcedonia se inserta dentro del dinamismo de la Iglesia primitiva que pone en relacioacuten kerigma reflexioacuten teoloacutegica y dogma eclesial62 y podriacutea tomarse como base para una antropologiacutea cristiana63

Es interesante sentildealar que Grillmeier considera que la tensioacuten real-mente existente entre el kerigma de la Iglesia por un lado y la reflexioacuten y la evolucioacuten doctrinal por el otro se resuelve sin rupturas en una uacutenica laquohistoria de la feraquo En esta historia no habriacutea saltos o quiebras sino un desarrollo armoacutenico que podriacutea considerarse como una verdadera incul-turacioacuten teoloacutegica de la fe64

a modo de confesioacuten de fe y otra teoloacutegica con un lenguaje teacutecnico Grillmeier (Jesus der Christus 1 765-768 entre otros muchos pasajes) tambieacuten ha afirmado el valor kerigmaacutetico fundamental de la definicioacuten

60 Cfr R PRICE - M GADDIS The Acts of Chalcedon 1 5861 Cfr A GRILLMEIER Moderne Hermeneutik altkirchliche Christologie 543-545

Id Jesus Christus in Palaumlstina 26s Tambieacuten Id Jesus der Christus 1 765ss62 Metodoloacutegicamente Grillmeier afirma la interrelacioacuten entre kerigma reflexioacuten teo-

loacutegica y dogma (confesiones de fe foacutermulas dogmaacuteticas) pero siempre afirmando la priori-dad del kerigma y de la fe viva de la Iglesia Cfr especialmente A GRILLMEIER Kerygma Reflexion und Dogma Id Piscatorie-Aristotelice 283 Id Nicaea und Chalcedon 44-46 Id Zur Dogmen- und Konzilsgeschichte 221-220

63 Cfr Id Nicaea und Chalcedon 75ss 64 Cfr J A MARTIacuteNEZ CAMINO Jesuacutes de Nazaret el Cristo en la fe de la Iglesia

441 citando a A GRILLMEIER Jesus der Christus 1 VIII

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4 conclusioacuten

Junto con Andreacute de Halleux maestro de las fuentes y principal guiacutea hacia el pasado Alois Grillmeier ha contribuido a situar el concilio de Calcedonia dentro de una historia de los dogmas como laquohistoria de feraquo que a su vez ha sido laquonarradoraquo por Richard Price

Investigar la cristologiacutea calcedonense no solo desde el punto de vista del concilio en siacute sino atendiendo a la oacuteptica de sus estudiosos posibilita un acercamiento nuevo a esta cuestioacuten que a su vez permite replantear las criacuteticas contemporaacuteneas a Calcedonia y ofrecer una ayuda para el trabajo de los teoacutelogos maacutes allaacute de los toacutepicos y de una lectura parcial de las fuentes

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Juan raMoacuten laparra Martiacutenez

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ndashVom Symbolum zur Summa Zum theologiegeschichtlichen Verhaumlltnis von Pa-tristik und Scholastik in Kirche und Uumlberlieferung in Id Mit ihm und in ihm Freiburg-Basel-Wien 1975 585-636

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143

Mater Clementissima 1 (2016) 143-191

El Colegio Espantildeol de Roma centro de proacutefugos durante la Guerra civil espantildeola

ViCente CaacuterCel ortiacute1

Pontificio Colegio Espantildeol

resuMen Durante la Guerra civil el Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma se convirtioacute en Centro de acogida y atencioacuten para centenares de sacerdotes reli-giosos y seglares que consiguieron salir de Espantildea huyendo de los horrores del conflicto armado y de la sangrienta persecucioacuten religiosa desencadenada en la zona republicana Responsable de este Centro fue don Carmelo Blay Agente de Preces del Colegio a quien el papa Piacuteo XI encomendoacute dicha tarea El presente artiacuteculo recupera para la memoria histoacuterica la personalidad de este desconocido sacerdote valenciano y Operario diocesano asiacute como la intensa actividad que desarrolloacute en favor de los numerosos proacutefugos espantildeoles llegados a la Ciudad Eterna desde el verano de 1936

palabras ClaVe Persecucioacuten Guerra civil proacutefugos Colegio Espantildeol de Roma

abstraCt laquoThe Spanish College of Rome refugees center during the Civil warraquo Du-ring the Spanish Civil War the Pontifical Spanish College of San Joseacute in Rome beca-me the center for the reception and care of the hundreds of priests religious and lay people who escaped from Spain fleeing from the horrors of armed conflict and bloody religious persecution unleashed in the Republican zone Responsible for this Center was Don Carmelo Blay the procurator of the College to whom Pope Pius XI entrus-ted this task The present article recovers for the historical memory the personality of this unknown Valencian and diocesan labourer priest as well as the intense activity that developed in favor of the numerous Spanish fugitives arrived at the Eternal City from the summer of 1936

KeyworDs Persecution Civil War refugees Spanish College of Rome

1 Mons Vicente Caacutercel Ortiacute (Manises 1940) autor de numerosas y reconocidas obras es historiador y sacerdote diocesano de Valencia especialista en historia contemporaacutenea de la Iglesia en Espantildea y vicario para los sacerdotes valencianos en Roma

ViCente CaacuterCel ortiacute

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1 perfil biograacutefico de don cArMelo blAy

Nacido en Liria (Valencia) el 9 de julio de 1874 Carmelo Blay Palo-mar cursoacute los estudios eclesiaacutesticos en el Seminario conciliar central de Valencia como alumno del Colegio de Vocaciones eclesiaacutesticas de San Joseacute fundado por el beato Manuel Domingo y Sol2 y dirigido por la Her-mandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos Celebroacute su primera misa en la iglesia arciprestal de Liria el 17 de junio de 1897 pues habiacutea sido ordenado sacerdote el diacutea 12 del mismo mes Ese mismo antildeo ingresoacute en la mencionada Hermandad

Cuando contaba 25 antildeos fue enviado a tierras mejicanas y en el oto-ntildeo de 1899 tomoacute posesioacuten de sus nuevos ministerios de vicerrector y de profe sor del seminario de Chilapa en el que estuvo trabajando durante el curso 1899-1900 Alliacute conocioacute personalmente al presidente de la Repuacutebli-ca mejicana el general Porfirio Diacuteaz esta amistad se iriacutea estrechando al correr de los antildeos En el antildeo acadeacutemico 1900-1901 pasoacute con los mismos ministerios a Cuernavaca donde ejercioacute la ensentildeanza hasta terminar el curso 1903-1904 Cuernavaca era una reciente dioacutecesis erigida en 23 de

2 Conocido popularmente como Moseacuten Sol el beato Manuel Domingo y Sol (Tortosa Tarragona 1 de abril de 1836 - 25 de enero de 1909) fue el penuacuteltimo de doce hijos En 1851 ingresoacute en el Seminario de Tortosa siendo ordenado sacerdote el 9 de julio de 1860 Despueacutes comenzoacute a ocuparse de los pobres de la dioacutecesis de Tortosa dedicaacutendose fundamentalmen-te a la predicacioacuten hasta que el nuevo obispo Benito Vilamitjana lo envioacute al Seminario conciliar central de Valencia para que consiguiera el doctorado en teologiacutea tambieacuten obtuvo el bachillerato en artes por la universidad de Barcelona y posteriormente se hizo cargo de la ensentildeanza de la religioacuten en el Instituto de Tortosa Ejercioacute gran influjo entre los joacutevenes logrando organizar la Juventud Catoacutelica ndashuna especie de Accioacuten Catoacutelicandash y tambieacuten fundoacute la Congregacioacuten mariana y la revista El congregante de san Luis que dirigioacute durante quince antildeos Promovioacute ademaacutes la peregrinacioacuten nacional a Roma de los congregantes marianos Su encuentro con el joven Ramoacuten Valero que queriacutea ser sacerdote pero careciacutea de medios econoacutemicos le impulsoacute a fundar la que seriacutea su obra principal la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos del Sagrado Corazoacuten de Jesuacutes dedicada a promover las vocaciones eclesiaacutesticas a traveacutes de los llamados Colegios de San Joseacute el primero de los cuales fue fundado en Tortosa el 12 de octubre de 1879 Cuatro antildeos maacutes tarde fundoacute formalmente la Hermandad que veniacutea funcionando como grupo desde enero de 1883 El 2 de enero de 1885 en el colegio de San Joseacute de Tortosa se reunioacute el primer grupo de operarios para emitir la primera promesa de consagracioacuten a la nueva obra Gracias al impulso personal de moseacuten Sol y a la invitacioacuten de algunos obispos comenzaron a surgir en muchas dioacutecesis espantildeolas y portuguesas los colegios de vocaciones eclesiaacutesticas de forma que en 1888 se abrioacute el de Murcia en 1889 el de Orihuela y en los antildeos sucesivos los de Plasencia Burgos y Roma Este uacuteltimo destacoacute sobre todas sus fundaciones y fue erigido el 1 de abril de 1892 con el apoyo inicial del cardenal valenciano Benito Sanz y Foreacutes arzobispo de Sevilla quien apoyoacute a moseacuten Sol ante el cardenal Rampolla secretario de Estado y el sustituto de la Secretariacutea de Estado monsentildeor Della Chiesa futuro papa Benedicto XV El 25 de octubre de 1893 Leoacuten XIII cedioacute el Palacio Altemps para sede del Colegio Espantildeol de San Joseacute en Roma gesto

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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junio de 1891 que abarcaba todo el Estado de Morelos El seminario contaba con 30 alumnos internos y se acababa de confiar su direccioacuten a los Operarios diocesanos

En el antildeo 1904 fue enviado a la ciudad de Meacutejico como encargado del Templo Nacional Expiatorio de San Felipe recayente en la ceacutentrica calle Madero en las cercaniacuteas del Zoacutecalo donde se levantan la catedral y el palacio presidencial Comenzoacute asiacute una nueva faceta de su vida y ma-nifestoacute unas cualidades hasta entonces ineacuteditas sus dotes diplomaacuteticas Responsable del templo oficial del Gobierno mejicano donde se celebra-ban las ceremonias y actos religiosos de caraacutecter nacional se relacionoacute con personalidades poliacuteticas del paiacutes de la cancilleriacutea espantildeola y otras embajadas en especial las de habla hispana En este templo permanecioacute hasta 1909

Requerido por los superiores para trasladarse a Roma llegoacute al Ponti-ficio Colegio Espantildeol cuando terminaba como administrador del mismo y agente de preces ante el Vaticano otro sacerdote valenciano tambieacuten oriundo de Liria Luis Mariacutea Albert 3 nombrado rector del Colegio Blay

que fue agradecido al Pontiacutefice por los obispos espantildeoles en un mensaje colectivo firmado en Valencia con motivo de la celebracioacuten alliacute del primer congreso eucariacutestico nacional Moseacuten Sol fue beatificado el 29 de marzo de 1987 Entre sus escritos descatan las Plaacuteticas a los Operarios (ed Lope Rubio Siacutegueme Salamanca 2002) que recogen las charlas que dirigiacutea anualmente a los operarios durante los ejercicios espirituales y que aprovechaba para revisar la marcha de las tareas de la Hermandad estudiaba proyectos e impartiacutea instrucciones El archivo de la Hermandad custodia todos sus manuscritos divididos en tres grandes aparta-dos predicacioacuten cartas y varios Bibliografiacutea A TORRES SAacuteNCHEZ Vida del siervo de Dios don Manuel Domingo y Sol apoacutestol de las vocaciones fundador de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos del Corazoacuten de Jesuacutes Tortosa 1934 F MARTIacuteN HER-NAacuteNDEZ - L RU BIO PARRADO Moseacuten Sol Vida de Manuel Domingo y Sol fundador de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos Siacutegueme Salamanca 1978 estas dos obras son las maacutes completas y rigurosas en datos histoacutericos porque las de J DE ANDREacuteS HERNANSANZ Moseacuten Sol Barcelona 1970 y la de J Mordf JAVIERRE Reportaje a Moseacuten Sol Un hombre bueno y audaz Madrid 1987 publicada con motivo de la beatificacioacuten son de tono periodiacutestico y divulgativo Cf tambieacuten L RUBIO PARRADO - J DE ANDREacuteS HER-NANSANZ - F MAR TIacuteN HERNAacuteNDEZ Sacerdotes Operarios Diocesanos Aproximacioacuten a su historia Siacutegueme Salamanca 1996 y J DE ANDREacuteS HERNANSANZ Cien antildeos de historia Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute Roma 1992

3 Luis Mariacutea Albert realizoacute sus estudios en el Seminario central de Valencia como alum-no interno del Colegio de San Joseacute para Vocaciones eclesiaacutesticas El 22 de diciembre de 1888 ya quiso ingresar en la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos aunque se oponiacutean sus padres pobres y ancianos que lo necesitaban pero insistioacute hasta conseguirlo Prestoacute ayu-da en el Colegio de Orihuela y tambieacuten en el de Murcia Luego pasoacute al de Valencia Ingresoacute en la Hermandad en septiembre de 1890 Recibioacute la ordenacioacuten sacerdotal en 1892 cele-brando su primera misa en Valencia el 4 de octubre de ese antildeo Permanecioacute en el Colegio de Valencia hasta 1894 en que fue destinado al Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma adonde

ViCente CaacuterCel ortiacute

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le sucedioacute en ambos ministerios desde el 26 de octubre de 1909 Durante 1915 viajoacute a Pariacutes para atender espiritualmente al presidente mejicano Porfirio Diacuteaz gravemente enfermo de quien habiacutea sido amigo y con-sejero y a quien ayudoacute a morir cristianamente Acompantildeoacute al cardenal Benlloch arzobispo de Burgos en su embajada espiritual del antildeo 1923 a Hispanoameacuterica que tanto sirvioacute para estrechar los viacutenculos de aquellos paiacuteses con Espantildea

Durante tres deacutecadas don Carmelo no soacutelo fue procurador general de la Hermandad de Sacerdotes Operarios y administrador del Colegio Espantildeol sino el sacerdote maacutes popular de Roma consultor guiacutea y amigo de cuantos en Espantildea o en Hispanoameacuterica teniacutean algo que resolver en la Curia romana Como Agente de preces4 fue la persona que despachaba

llegoacute con Moseacuten Sol el diacutea 30 de octubre para encargarse de la administracioacuten del colegio y de la agencia de preces hasta 1909 en que fue nombrado rector del mismo Desde 1911 a 1914 convivioacute en el Colegio con el beato maacutertir Juan Ventura Solsona tambieacuten valenciano El antildeo 1914 fue destinado como rector al seminario de Barcelona donde estuvo hasta 1916 dejando muy buen recuerdo de su gestioacuten En 1916 pasoacute como director al Colegio de San Joseacute de Valencia y en 1921 fue nombrado rector del Seminario de Salamanca donde enfer-moacute muy gravemente el 3 de abril de 1925 El 9 de junio pudo viajar a Liria para reponerse lo que consiguioacute muy lentamente En octubre de 1926 fue destinado como director al Colegio de Valencia y el 17 de marzo de 1927 se ofrecioacute para ir de nuevo al Colegio de Roma como administrador porque el que ejerciacutea dicho ministerio habiacutea entrado en la cartuja de Florencia Pero no se le dio este cargo porque superaba sus fuerzas mermadas debido a su enfermedad En 1928 pidioacute a la Santa Sede dispensa del voto indefini do de pertenencia a la Hermandad para poder residir en su pueblo natal de Liria pero siempre continuoacute en estrechas relaciones con los directores generales por lo que se le puede considerar de hecho operario diocesano hasta el fin Reducido desde entonces a atender a su quebrantada salud en su retiro de Liria Alliacute le sorprendioacute la persecucioacuten religiosa y fue martirizado en Paterna en cuyo cementerio fueron depositados sus despojos que el diacutea 10 de diciembre de 1939 recibieron cristiana sepultura en el de Liria (cfr mi Diccionario de Sacerdotes diocesanos espantildeoles del siglo XX Madrid 2006 92)

4 La Agencia de preces de Espantildea en Roma era una institucioacuten del Estado creada a fi-nales del siglo XVIII que dependiacutea de la Embajada cerca de la Santa Sede y a traveacutes de ella tramitaban los espantildeoles (obispos eclesiaacutesticos y laicos) todos los asuntos que requeriacutean la intervencioacuten del Papa o de los organismos vaticanos En 1908 a raiacutez de la reforma de la Curia romana se dejoacute libertad a los fieles para usar libremente el agente o expedicionero que fuese de su confianza Lentamente la Agencia de preces estatal fue perdiendo la intensa actividad que hasta entonces habiacutea tenido y por ello en 1926 el embajador en Roma y agente real conde de Vintildeaza confioacute la Agencia real de preces al rector del Colegio Espantildeol Este a su vez encomendoacute dicha funcioacuten a un sacerdote de los Operarios Diocesanos del Colegio y por este motivo el primer agente fue don Carmelo Desde ese momento los obispos espantildeoles se sirvieron de la Agencia para la expedicioacuten de preces que afectaban a sus dioacutecesis Tras el Con-cilio Vaticano II y despueacutes de la consiguiente reforma de la Curia romana y descentralizacioacuten de facultades la Agencia de preces quedoacute muy reducida y casi vaciada de contenido si bien se mantuvo figura juriacutedica hasta 2016 Actualmente es el rector del Colegio quien gestiona en la Curia romana los asuntos que un tiempo fueron encomendados a la Agencia

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mil asuntos de las dioacutecesis en el Vaticano obteniacutea audiencias pontificias y bendiciones apostoacutelicas acomodaba peregrinaciones organizaba visitas a las basiacutelicas etc En el ejercicio de este ministerio puso siempre a con-tribucioacuten su incansable voluntad e influencia en los ambientes vaticanos y romanos para logar el mejor eacutexito en el servicio de los obispos quienes con confianza ilimitada le encomendaron la tramitacioacuten de los asuntos maacutes delicados Y esta labor fue tan extensa y tan fecunda que su persona estuvo unida a todos los problemas religiosos que en la Ciudad Eterna tuvieron relacioacuten con Espantildea

La palabra agencia podriacutea parecerle a alguno sinoacutenimo de traacutemite burocraacutetico ya que no es muy distinto el cometido de la misma Pero con las preces y los rescriptos iban unidas en aquellos tiempos una multitud de cuestiones de gran intereacutes para las dioacutecesis puesto que se trataba con frecuencia de problemas complejos que necesitaban urgente solucioacuten y que afectaban a las relaciones entre las dioacutecesis y la Santa Sede A todo procuroacute atender don Carmelo y para todo cuando motivos superiores no lo impediacutean encontraba una respuesta satisfactoria Mas no siempre era faacutecil resolver sin complicaciones algunos asuntos Entonces empe-zaba para don Carmelo un nuevo esfuerzo visitaba al cardenal prefecto de la Congregacioacuten o al secretario de la misma estudiaba el problema y lo daba tambieacuten a estudiar a personas competentes y de su confianza redactaba una pro-memoria y a veces los votos o pareceres que le pediacutean los dicasterios todo para buscar la solucioacuten maacutes conveniente Y a esta al final llegaba

Don Carmelo no llevoacute solamente los asuntos eclesiaacutesticos de casi todas las dioacutecesis espantildeolas sino que fue tambieacuten agente oficial de preces de la Embajada de Espantildea ante la Santa Sede Este campo de su actividad que exigiacutea exquisito tacto y delicadeza fue cultivado por eacutel uniendo sus dos grandes amores la Iglesia y Espantildea En los momentos difiacuteciles en las situaciones maacutes o menos complicadas la acertada actuacioacuten de don Car-melo vino muchas veces a despejar el horizonte con completa satisfac-cioacuten de los embajadores que vieron en su persona un haacutebil y capacitado colaborador para promover los intereses religiosos de Espantildea

De toda la Curia romana ninguacuten dicasterio estimoacute tanto la labor de don Carmelo como la Secretariacutea de Estado Puede decirse que praacutecticamente era el minutante para la lengua espantildeola pues durante muchos antildeos se le encomendaron la redaccioacuten de cartas telegramas documentos varios y las traducciones de muchos textos

ViCente CaacuterCel ortiacute

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Dedicoacute particular atencioacuten a los peregrinos que llegaron a Roma con motivo del Antildeo Santo Extraordinario de 1933 Y al antildeo siguiente acom-pantildeoacute a los miembros de la Juventud de Accioacuten Catoacutelica de Espantildea tanto en su visita a Roma como a la Ciudad del Vaticano prodigando afec-tuosas atenciones a los peregrinos y facilitando audiencias y accesos a monumentos histoacutericos y centros oficiales La revista Signo oacutergano de los Joacutevenes de Accioacuten Catoacutelica teniacutea en eacutel el medio seguro de obtener informacioacuten graacutefica o literaria sobre el Vaticano en cualquier momento y en muchas ocasiones puso su contribucioacuten personal al servicio de este semanario

Pero fue durante los azarosos antildeos de la Guerra civil espantildeola cuando tuvo que desplegar toda su actividad Digna de todo encomio fue su ac-tuacioacuten como delegado de Piacuteo XI para prestar atencioacuten a los sacerdotes religiosos y catoacutelicos espantildeoles que tuvieron que refugiarse en Italia du-rante el trienio 1936-1939

Ante las dificultades econoacutemicas que sufrioacute el Colegio Espantildeol a cau-sa de la guerra don Carmelo escribioacute al general Goacutemez-Jordana presi-dente de Junta Teacutecnica del Estado Espantildeol solicitando la ayuda corres-pondiente (documento 1 en el apeacutendice de este artiacuteculo)

Tambieacuten informoacute al cardenal Pacelli sobre las opiniones de las esferas gubernativas que lamentaban respetuosamente el modo como la Santa Sede trataba al Gobierno Nacional desde que comenzoacute el movimiento militar y que eran contrarias a la actitud separatista del clero vasco sobre la piedad e intensa religiosidad personal del general Franco y sobre la formacioacuten religiosa de los falangistas (documento 3)

Fue considerado el sacerdote espantildeol que sirvioacute a todos con una cari-dad exquisita Fue sacerdote piadoso diplomaacutetico haacutebil y fideliacutesimo a los sumos pontiacutefices Piacuteo XI lo llamaba il nostro interprete porque cuando teniacutea que dirigir la palabra a los peregrinos de lengua espantildeola Blay esta-ba muy cerca del Papa y repetiacutea en castellano lo que el pontiacutefice deciacutea en italiano Piacuteo XII a quien tratoacute mucho cuando trabajaba como secretario de Estado le confioacute algunos asuntos muy delicados Pero tambieacuten le tocoacute sufrir mucho y saborear contrariedades fuertes aunque jamaacutes se defendioacute ni quiso que lo defendieran

Don Carmelo Blay fallecioacute en Roma en el Palacio Altemps antigua sede del Colegio Espantildeol de San Joseacute el 2 de marzo de 1941 y fue en-terrado en el panteoacuten propiedad de la Obra Piacutea en el cementerio romano del Campo Verano

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La revista del Colegio nuestra Mater Clementissima le dedicoacute la si-guiente croacutenica

Don Carmelo Con estas dos sencillas y breves palabras que tantas cosas queriacutean decir de respeto de estimacioacuten de confianza y carintildeo era generalmente designado aqueacutel cuya reciente muerte tantos corazones lloraron y cuya bendeci-da memoria en tantas almas agradecidas seraacute eterna

laquoNuestro Don Carmeloraquo deciacutea de eacutel su santidad Piacuteo XI Y don laquoDon Carme-loraquo preguntaba con frecuencia el santo padre Piacuteo XII En las altas y en las bajas esferas de Roma en Espantildea y en la Ameacuterica espantildeola llegoacute a ser populariacutesimo y querido merced a los muchos y abnegados servicios que a su paso por ellas fue prodiga y continuamente prestando Por eso la noticia de su fallecimiento dada a conocer por la radio y por la prensa ha despertado por doquier ecos de profundo y si sincero dolor y su entierro y sus funerales han alcanzado el grado de una verdadera apoteosis de carintildeosa adhesioacuten a su personalidad y de reconocimiento plebiscitario de sus altas virtudes y merecimientos

Un libro y bien extenso seriacutea apenas suficiente para su biografiacutea ardua em-presa la nuestra al pretender bosquejar una semblanza suya para dejar registrada su figura en las paacuteginas de Mater Clementissima

Pero ademaacutes de los que pudieacuteramos llamar sus ministerios oficiales iquestquieacuten puede enumerar los que hubo de desempentildear al margen de ellos y simultaacutenea-mente durante sus treinta antildeos de permanencia en la capital del orbe catoacutelico Asombra pensar la suma enorme de energiacuteas que derrochoacute el bondadosiacutesimo e infatigable D Carmelo en su perenne afaacuten de servir a cuantos acudiacutean a eacutel con sus cuitas sus pretensiones sus consultas sus confidencias y con problemas de la maacutes diversa iacutendole

En las altas esferas del Vaticano en las Embajadas en las Congregaciones en las Exposiciones de tipo internacional en los Conventos de Religiosas es-pantildeolas sobre todo en las horas criacuteticas del establecimiento de las mismas en Roma en el confesonario ‒que tambieacuten este apostolado ejercioacute‒ y fuera de eacutel en cartas en la sala de visitas del Colegio en su modesto despacho por las calleshellip siempre donquiera fue prodigando el tesoro de sus consejos de sus palabras de aliento de sus intervenciones bienhechoras sin escatimar tiempo ni esfuerzo alguno

Fue leal noble y desinteresado servidor de los papas de cardenales de nun-cios de priacutencipes de embajadores de prelados de sacerdotes y religiosos de eclesiaacutesticos y seglares de altos y bajoshellip Y de todos ellos merecioacute la constante confianza el acendrado afecto las maacutes sinceras demostraciones de gratitud

iquestCuaacutel fue el secreto de esta universalidad y perennidad de simpatiacuteas y adhe-siones En primer teacutermino su espiacuteritu netamente sacerdotal En los maacutes varia-dos ambientes mostroacutese siempre D Carmelo antes que nada sacerdote en sus palabras en su porte modesto y recogido en su espiacuteritu y en toda su conducta

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Era el fruto de su sincera piedad sencilla pero soacutelida Apenas los negocios de fuera dejaacutebanle libre retiraacutebase en su cuarto escondiacutease en eacutel y se entregaba placenteramente al cultivo de la vida oculta y silenciosa No apeteciacutea nada No gozaba sino con la soledad de su despacho Sus devociones Sus visitas al San-tiacutesimo Retraiacutease ndashsi no se veiacutea forzado a asistir por deber de obligada cortesiacutea o por caritativa condescendenciandash de toda fiesta y holgorio por honesto que fuera Y con todo a cada hora a cada momento veiacutease precisado a sacrificar su amor a la soledad para recibir visitas Eacutel haciacutea pocas No le quedaba por antildeadidura tiempo para hacerlas Ni aun lo teniacutea casi para comer llegaba por lo general tarde al refectorio Y despachando en pocos minutos su moacutedica refec-cioacuten auacuten terminaba antes que la comunidad Era sobriacutesimo en todo Otras dotes suyas fueron la discrecioacuten en no decir sino lo que conveniacutea iexclQueacute difiacutecil arte el de saber escuchar y callar Era fideliacutesimo en guardar los secretos que le eran confiados Jamaacutes daba muestras de extrantildearse ni se espantaba de nada Su sem-blante permaneciacutea siempre inalterable aunque teniacutea muy sensible corazoacuten No ambicionaba nada y gozaba con dar cuanto teniacutea Y no daba sus cosas solo daba tambieacuten su tiempo y su persona Y lo daba sonriendo Sonriendo siempre Su espiacuteritu de abnegacioacuten de interior mortificacioacuten fue maravilloso

Ya se deja entender que no habiacutea de faltarle a eacutel tambieacuten la comuacuten suerte de las almas elevadas la gloria del dolor de la contradiccioacuten del sacrificio Y iexclqueacute cruces tan pesadas tuvo que llevar con frecuencia sobre su corazoacuten Precauciones amargas asuntos engorrosos impertinencias incomprensiones interpretaciones aviesas de su conducta o de sus miras acusaciones injustas censuras menosprecios ingratitudes deslealtades desengantildeoshellip Abundantiacutesi-ma cosecha recogioacute de todo ello a lo largo de sus actuaciones Jamaacutes perdioacute la paz Jamaacutes se descomponiacutea Encogiaacutese de hombros y callaba Sabiacutea bien que los uacutenicos anhelos de su corazoacuten eran los de servir callada humilde pero imperteacute-rritamente a Dios y a Espantildea

En momentos criacuteticos de apasionadas campantildeas cargadas de santildeudas y ma-liciosas intenciones contra eacutel ni se preocupaba de defenderse ni queriacutea que se le defendiera O dejaba todo en manos de Dios y seguiacutea su camino

Como quien por tan altas y tan santas causas trabajaba no le preocupaban ni apeteciacutea humanas compensaciones y recompensas Con todo no le fueron esca-timadas Repetidos testimonios de honor y de gratitud le otorgoacute la Santa Sede Varias son las condecoraciones y diplomas con que le significoacute su complacencia por los servicios que le prestara declaraacutendole de esa forma hijo benemeacuterito de la Iglesia

Varias repuacuteblicas de la Ameacuterica espantildeola le condecoraron tambieacuten a su paso por ellas acompantildeando como secretario al Emmo Sr cardenal Benlloch en la visita que este hizo a ellas en 1923 como Embajador espiritual de Espantildea

Como premio a los extraordinarios servicios prestados a Espantildea al terminarse el glorioso Movimiento Nacional proprio motu el Generaliacutesimo Franco le dio la

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Gran Cruz de Isabel la Catoacutelica Sin contar otros muchos que no trascendieron al puacuteblico sus afanes y su iacutemproba labor como representante y agente de Piacuteo XI en favor de los proacutefugos espantildeoles en Roma eran maacutes que suficientes para tener bien merecido tan extraordinario galardoacuten Un libro podriacutea formarse ndashque resultariacutea una apologiacutea de D Carmelondash con soacutelo extractar y ordenar una pequentildea porcioacuten siquiera de los miles de documentos y cartas que se conservan en su copioso e interesante archivo concernientes a esta materia

Pero en lo humano y espiritual a un tiempo mismo la principal recompensa que Dios quiso depararle sobre la tierra la tuvo D Carmelo en las continuas demostraciones de intereacutes de adhesioacuten y de carintildeo que sus innumerables amigos le prodigaron durante el antildeo de su postrera enfermedad

Desde el Sumo Pontiacutefice que con frecuencia solicitaba informes de su salud y cardenales nuncios embajadores prelados de la Curia que le visitaban hasta humildes religiosas que se acercaban a saber del curso de su enfermedad ha sido un no interrumpido desfile de toda suerte de personas anhelosas de testimoniarle su carintildeosa simpatiacutea y su profunda estimacioacuten Por otra parte ha disfrutado de tal copia de cuidados y asistencias de todo geacutenero que cuando en momentos de pasajera impaciencia se le haciacutea parar mientes en semejante cuacutemulo de laquomi-nosraquo y agasajos se conmoviacutea hasta derramar laacutegrimas y bendeciacutea al Sentildeor confesaacutendose inmerecedor de tanto bien Su uacutenico sufrimiento ha sido en estos largos doce meses el no poder trabajar y moverse

Al cabo todos los recursos y prevenciones de la ciencia resultaron inuacutetiles Quince diacuteas antes de su muerte una ligera bronquitis le puso en grave peligro El diacutea 2 de marzo a la una y cuarto de la tarde declaraban los Drs Rochi y Tomassi-ni luego de la segunda consulta que celebraron que la gravedad inminente habiacutea desaparecido y le autorizaron para tomar ya alguacuten alimento A las dos y cuarto cuando se disponiacutea a hacerlo quiso bajarse del lecho y el pequentildeo esfuerzo que hubo de hacer le produjo un repentino colapso Al aviso del enfermero los Su-periores que se hallaban en la Rectoral corrieron apresurados y como ya estaban siempre preparados para un lance parecido llegaron a tiempo de absolverle y darle la Extremauncioacuten La noche anterior que fue la del saacutebado habiacutea confe-sado como de ordinario con el P Pazos Sch P y en la mantildeana del domingo como todos los diacuteas habiacutea comulgado

Expuesto el cadaacutever en la capilla de San Carlos dieacuteronle piadosa y constante vela los Superiores y alumnos maacutes las innumerables personas que fueron desfi-lando para rendirle este uacuteltimo homenaje

Los Emmos Srs cardenales Tedeschini Pizzardo y Caccia Dominioni ora-ron ante su cadaacutever Otros imposibilitados por enfermedad o por hallarse ausen-tes de Roma lamentaron el no poderlo hacer

Su santidad Piacuteo XII sobre haber dado el peacutesame por conducto de su secre-tario particular que primero telefoneoacute y despueacutes vino a expresarlo de palabra envioacute al Rector del Colegio el paternal y encomiaacutestico telegrama que publi-

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camos en otro lugar de la revista El Embajador de Espantildea Sr Yanguas y los miembros de la Embajada y del Consulado fueron de los primeros en acudir al Colegio y ofrecerse para todo Consideraban la muerte de D Carmelo como peacuterdida de familia

El diacutea 4 despueacutes de haber celebrado el Rector la misa en la capilla de San Carlos a las ocho de la mantildeana fue depositado en la caja mortuoria y proce-sionalmente conducido hasta el carro fuacutenebre que lo trasladoacute acompantildeado por algunos Superiores y alumnos a la Iglesia Nacional de Montserrat don de por concesioacuten del Sr Embajador se celebraron luego a las diez las solem nes hon-ras fuacutenebres5

2 proacutefugos espAntildeoles en roMA

Los alumnos del Colegio Espantildeol que no teniacutean vacaciones en Espa-ntildea al terminar el curso 1935-1936 marcharon al Seminario de verano de Chiavari cerca de la ciudad de Geacutenova donde soliacutean transcurrir los me-ses estivales acogidos generosamente por el obispo de aquella dioacutecesis como en antildeos anteriores El de Chiavari estaba considerado el Seminario de verano de los espantildeoles pero aquel verano no fue como los anterio-res puesto que el 18 de julio estalloacute la Guerra civil e inmediatamente comenzoacute la tragedia de los numerosos proacutefugos que pudieron escapar de los horrores de la contienda y de la persecucioacuten religiosa y lograron establecerse en Italia

Mientras los colegiales estaban en Chiavari llegoacute a aquel lugar el obis-po de Cartagena Miguel de los Santos Diacuteaz Goacutemara antiguo alumno del Colegio que se presentoacute junto con su familiar vestidos ambos de paisa-no Cuando regresaron del veraneo los colegiales encontraron en Roma una nube de sacerdotes religiosos religiosas algunos seminaristas y mu-chos seglares fugitivos que huiacutean de la implacable persecucioacuten religiosa que estaba azotando aquellas primeras semanas el territorio republicano y que arrojariacutean en tres antildeos un total de 6832 eclesiaacutesticos martirizados 4184 pertenecientes al clero secular incluidos doce obispos un adminis-trador apostoacutelico y seminaristas 2365 religiosos y 283 religiosas

A mediados de agosto ya habiacutean llegado a Roma 167 sacerdotes y como el nuacutemero aumentaba diacutea por diacutea Piacuteo XI instituyoacute en el Colegio Espantildeol un Comiteacute para la asistencia de los proacutefugos y confioacute la direccioacuten

5 Mater Clementissima 1941 202-215

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del mismo a don Carmelo quien el 22 de agosto comunicoacute a monsentildeor Tardini sustituto de la Secretariacutea de Estado que la ayuda habiacutea sido orga-nizada seguacuten los deseos del Papa

Come di parola ho avuto lrsquoonore di far sapere allrsquoE V Rvma oramai lrsquoaiuto ai sacerdoti spagnuoli che hanno dovuto lasciare la loro disgraziata patria egrave organizzato drsquoaccordo ai desideri espressi dal Santo Padre

Finora i sacerdoti arrivati in questa Alma Cittagrave sono 52 distribuiti nei luo-ghi seguenti Pont Collegio Spagnuolo Pont Collegio Pio Latino Americano Collegio Leoniano Figli di Maria Immacolata al Mascherone Fatebenefratelli allrsquoIsola Tiverina Domenicani Spagnuoli a via Condotti Istituto Orientale Car-melitani dellrsquoAntica Osservanza in via Sforza Pallavicini

Tra i profughi si trova SE Mons Felice Bilbao Vescovo di Tortosa presen-temente presso le Suore Ospitaliere del S Cuore a Viterbo SE Mons Giovanni Perellograve Vescovo di Vich col suo Segretario che hanno preso alloggio nella casa dei Religiosi dei SS Cuori in Roma via del Curato giaccheacute SE appartiene a detta Congregazione SE Mons Michele DiazVescovo di Cartagena col suo Segretario ospiti del Pontificio Collegio Spagnuolo in villeggiatura a Chiavari e colagrave egrave stato trasferito un Sudiacono del Seminario di Barcellona

Di questi profughi uno si egrave recato a Milano ed un altro a Viena AustriaPer alloggiare altri sacerdoti che certamente verranno Mons Guidetti Ca-

marlengo dellrsquoOpera laquoCento Pretiraquo ha messo a disposizione del Comitato fino a cento posti nella sede della stessa Opera in condizioni di favore

Grazie al paterno interessamento del Santo Padre ed alla fraterna caritagrave del Clero Romano da qualche giorno si egrave incominciato a confezionare gli abiti ec-clesiastici per tutti in seguito a quanto fu decisso (sic) nellrsquoadunanza della Pia Unione di S Paolo del Clero Romano che innanzi tutto fossero fatte le vesti per i medesimi Speriamo che in breve tempo saranno vestiti da sacerdote Si provede (sic) anche a SE Mons Vescovo di Vich tutto il vestiario

Si provvederagrave anche per gli indumenti necessari di biancheria cappello scar-pe etc in maniera che della benevolenza del Santo Padre e per merito del Clero Romano protranno (sic) trovare un vero sollievo questi buoni sacerdoti spag-nuoli che sentono in questi momenti la grande consolazione di vedersi vicini al Padre Buono e non sanno come ringraziare il Signore di tanta caritagrave

Ieri sono stati loro consegnati i Breviari che la munificenza del Santo Padre ha fatto loro pervenire Questrsquoatto di sovrana delicata bontagrave egrave stato di sommo conforto ai profughi che in mezzo alle loro pene non potevano recitare lrsquoUffizio Divino Ora merceacute il felice delicato pensiero dellrsquoAugusto Pontefice si sentono piugrave sacerdoti percheacute potranno adempiere questo soave e consolante obbligo della recita del Breviario

Si egrave provveduto pure per gli abiti di 12 Religiose della Compagnia di Santa Teresa di Gesugrave che sono arrivate in questa Cittagrave in pietosissime condizioni

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Nutrono tutti vivissimo desiderio di poter offrire personalmente a Sua Santitagrave i loro piugrave sentiti ringraziamenti per tanta bontagrave e manifestare una volta di piugrave i sentimenti di profonda adesione alla Sua Augusta Persona e provare la grande consolazione dellrsquoApostolica Benedizione cosigrave necessaria in questi tristi mo-menti per la cara patria cosigrave probata e per loro stessi

Coi sensi della mia sincera stima mi professo dellrsquoEV Revma affmo ser-vitore

Sac Carmelo Blay6

Iacutemprobo fue el trabajo encomendado a don Carmelo y muy poco agra-decido por algunos sacerdotes si bien a todos los tratoacute de forma exquisita buscaacutendoles alojamiento e intenciones de misas facilitaacutendoles cuanto ne-cesitaban en lo referido a ropas alimentos breviarios y libros asiacute como organizaacutendoles conferencias de Accioacuten Catoacutelica visitas a iglesias y mo-numentos Procuroacute que algunos recibieran alguna ayuda econoacutemica y que otros desarrollaran actividades ministeriales atendioacute a la asistencia de los enfermos y pensoacute incluso en los maacutes miacutenimos detalles hasta que todos abandonaron Roma

Sin embargo el Papa queriacutea que estos sacerdotes regresaran a Espantildea para trabajar en la zona nacional liberada de la persecucioacuten para cubrir las numerosiacutesimas bajas de los sacerdotes maacutertires Esta determinacioacuten pontificia sentoacute muy mal a algunos sacerdotes disgusto que se explica por lo mucho que habiacutean sufrido Blay obedecioacute al Papa pero los maacutes exal-tados le culparon sin recordar lo mucho que le debiacutean agradecer y hasta le cantaron una copla que deciacutea laquoDe Espantildea nos han echado la CNT y la FAI y en Roma nos ha abatido Monsentildeor Carmelo Blayraquo

En la intensa correspondencia epistolar que mantuvo con los mon-sentildeores Tardini y Montini conservada en el Archivo Secreto Vaticano constan mil detalles de sus preocupaciones por atender del mejor modo posible a los proacutefugos espantildeoles que fueron un total de 226 4 obispos 202 sacerdotes diocesanos 10 religiosos escolapios 8 seminaristas y 2 laicos de Accioacuten Catoacutelica7

Asimismo se interesoacute por la suerte de maacutes de 700 religiosas pertene-cientes a congregaciones que teniacutean sus casas generalicias en Roma y se

6 Archivo Secreto Vaticano (ASV) Segr Stato Guerra Spagnola 2 Fasc 4 n 7 ff 3-57 Elenco dei Vescovi Sacerdoti Religiosi Seminaristi e Laici di AC profughi dalla

Spagna accolti dal Comitato eretto dalla Santa Sede presso il Pontificio Collegio Spagnuolo per il soccorso dei medesimi (ASV Segr Stato Guerra Spagnola 1 Fasc 1 ff 1-6)

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esforzoacute para que todas ellas fueran acogidas en sus respectivas comuni-dades En una carta dirigida a monsentildeor Tardini el 19 de septiembre de 1936 le dijo

Eccellenza ReverendissimaDi nuovo mi credo in dovere di inviare allrsquoE V Revma una piccola notizia

circa i nostri cari profughi spagnoliCome sa lrsquoultima domenica sono arrivate alcune centinaia di suore profughe

della Spagna senza preaviso Subito fu stabilito che quelle Suore che avevano casa della loro Congregazione in Roma alloggiassero presso le consorelle per le altre ed anche per quelle che pur avendo casa della propria Congreazione in questa Cittagrave non potevano essere ricevute dalle loro consorelle si provide alla loro sistemazione presso diversi Istituti Religiosi femminili e debbo riconoscere che la caritagrave delle religiose sovvraabbondograve al bisogno giaccheacute non si arrivograve ad occupare tutti i posti offerti Si egrave incominciata pure la distribuzione tra le medes-ime del munifico dono di zucchero e caffeacute che novamente si degnato il S Padre di largire per i profughi

Son sicuro saragrave gradito per S Santitagrave di conoscere come il Clero Romano con fraterna caritagrave verso i sacerdoti profughi ha assecondato il Suo Paterno interessa-mento per i medesimi e cosigrave mi pregio comunicarLe che fino a questo momento il Clero Romano ha contribuito con Lire 13823 altre persone diverse residenti fuori Roma le quali riservano i loro nomi hanno versato per questo benefico scopo complessivanente Lire 1261

Con distinti ossequi mi professo dellrsquoEV Rvma affmo Servitore

Sac Carmelo Blay8

De la atencioacuten a los numerosos seglares proacutefugos se ocupoacute el con-sulado de Espantildea en Roma Y de los religiosos sus respectivas casas generalicias

La tarea encomendada a don Carmelo terminoacute al final de la guerra Pero eacutel quiso completar el trabajo durante unos meses maacutes fue el 16 de febrero de 1940 cuando envioacute la uacuteltima carta que se conserva sobre este asunto dirigida a monsentildeor Montini en la que le daba cuenta detallada de la actividad del Comiteacute creado por Piacuteo XI a favor de los sacerdotes proacutefugos y de los gastos hechos a lo largo de tres antildeos

En este sentido resulta impresionante el contenido de un voluminoso sobre que lleva este tiacutetulo Conti del Comitato pel soccorso dei profu-

8 ASV Segr Stato Guerra Spagnola 2 Fasc2 n 1 f 12

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ghi spagnuoli creato dalla Santa Sede presso il Pontificio Collegio Spa-gnuolo 1936-1939 (ff 2ss) En eacutel se resumen tanto los ingresos como los gastos Todo ello acompantildeado de las respectivas facturas comprobantes de los gastos hechos

La citada carta a Montini deciacutea

Eccellenza Reverendissima ho il piacere di far giungere allrsquoEccellenza Vostra Reverendissima tutto lrsquoin-

cartamento di quanto si riferisce allrsquoassistenza ai sacerdoti religiosi e religiose che per la rivoluzione della Spagna arrivarono a Roma e furono accolti dalla paterna bontagrave ed inesaurible caritagrave del Santo Padre

Fra i documenti troveragrave lrsquoEccellenza Vostra la lista completa dei sacerdoti e delle religiose che arrivati in Roma furono assistiti in tutto vel in parte dalla benignitagrave del Santo Padre che come risulta da conti spese piugrave di lire duecen-tomila oltre ai molti generi alimentari zucchero caffegrave carne etc che con grande caritagrave ha fatto pervenire e mettere a disposizione del Comitato da Lui medesimo voluto in questo Pontificio Collegio Spagnollo per lrsquoassistenza ai cari profughi

Nei fogli uniti si puograve vedere non solo il conto generale ma pure le spese fatte per tutti e ciascuno dei profughi con altre notizie utili per far conoscere la caritagrave del Santo Padre Pio XII di venerata e santa memoria in un momento cosigrave doloroso per la nostra cara Spagna

In questa occasione La prego di voler umiliare ai piedi dellrsquoAugusto Pontefice gloriosamente regnante i sentimenti della mia profonda venerazione ed implo-rare per me una speciale Benedizione Apostolica mentre con devoto ossequio mi professo dellrsquoEccellenza Vostra Reverendissima devotissimo servitore

Sac Carmelo Blay9

riassunto speCifiCatiVo Drsquointroiti eD spese

Munifico dono del Santo Padre 15856385Offerta del Clero Romano 3712960Offerta dei Sacerdorti profughi spagnoli 465895Offerenti diversi 131830Totale introiti 20176070

9 ASV Segr Stato Guerra Spagnola 1 Fasc 4 ff 30-30v

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SpeseBreviari 12368Esercizi spirituali 3540Manuali di Azione Cattolica 27000Sottane greche pantaloni etc 4157195Scarpe 630700Biancheria 736540Maglieria 835355Cappelli 300000Abiti per religiose 147100Vitto ed alloggio pei sacerdoti 7833800Vitto ed alloggio per le religiose 1505000Viaggi rimpatrio religiose e sacerdoti 2002220Tram Udienza Castelgandolfo 180000Medicine seminaristi ed alcune suore 12900Libri di testi pei seminaristi 30890Altre spese pei seminaristi 101690Opuscolo iquestQueacute ha hechohellip 70000Spese varie 57Toatel spese 20167070

Indice numerico dei diversi capi consegnati ai sacerdoti profughi spagnuoli

Breviari 192Manuali di Azione Cattolcia 60Sottane 165Greche 175Pantaloni 91Scarpe 150 pajaColletti 963Camicie 225Mutande 208Maglie 271Mutande maglia 52Gilet e Pull Ower 21Calze e pedali 407 pajaCappelli 173Fazzoletti 354Altri capi 35Totale dei capi 3532

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3 discurso de piacuteo xi A los proacutefugos espAntildeoles10

Para denunciar al mundo la persecucioacuten religiosa en la Espantildea republi-cana pensoacute Piacuteo XI dirigir una carta a su secretario de Estado el cardenal Pacelli en la que como padre de creyentes y tambieacuten de los redimidos por Cristo manifestariacutea su profundo dolor por la tragedia de Espantildea pidiendo que cesara el derramamiento de sangre entre hermanos y que en todo el mundo se rezara para acabar con la guerra fratricida por ser muy desga-rrador ver lo que estaba ocurriendo en una nacioacuten de honda tradicioacuten ca-toacutelica Despueacutes la Secretariacutea de Estado redactoacute un artiacuteculo que publicariacutea LrsquoOsservatore Romano a final de agosto pero fue suspendido porque el Papa decidioacute preparar un discurso dirigido a los proacutefugos espantildeoles que iban llegando a Roma Por esta razoacuten tampoco se publicoacute la proyectada carta pontifica dirigida a Pacelli que quedoacute en simple borrador aunque en un apunte de Pacelli estaacuten indicados con precisioacuten los temas esenciales que tratariacutea insistiendo en que debiacutea cesar cuanto antes una guerra que llevaba ya demasiado tiempo ensangrentando el territorio aunque habiacutea pasado poco maacutes de un mes desde el comienzo de la revolucioacuten Informa-dor directo de las cosas de Espantildea en el Vaticano era en aquellos momen-tos el agente de preces del Pontificio Colegio Espantildeol don Carmelo Blay a quien el mismo Papa pidioacute noticias sobre los obispos espantildeoles que iban llegando a Roma por aquellas fechas

El papa tomoacute esta iniciativa despueacutes de pensarlo mucho y de valorar las diversas opciones que debiacutea adoptar frente a la situacioacuten espantildeola ya que desde primeros de agosto se preguntoacute que podiacutea hacer la Santa Sede ante la gravedad de los hechos ademaacutes de protestar eneacutergicamente ante el gobierno republicano

A medida que llegaban noticias al Vaticano sobre la magnitud de la tragedia tanto por la prensa como por relatos de testigos presenciales que habiacutean conseguido escapar a tiempo se planteoacute la oportunidad de con-ceder una audiencia a 500 proacutefugos espantildeoles que tuvo lugar el lunes 14 de septiembre de 1936 en Castelgandolfo Guiaban el grupo los obispos de

10 El discurso del Papa fue escuchado por radio por los alumnos del Colegio Espantildeol desde el Seminario de verano de Chiavari En versioacuten original italiana y en traduccioacuten cas-tellana fue publicado en LrsquoOsservatore Romano del 14-15 de septiembre de 1936 pero en Espantildea fue censurado tanto por los republicanos como por los nacionales Tambieacuten lo publicoacute censurado A Montero Moreno en su laquoHistoria de la persecucioacuten religiosaraquo (BAC Madrid 1960 741-742) Lo he publicado iacutentegro en el volumen IV de mi obra laquoLa Segunda Repuacutebli-ca y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticanoraquo BAC Madrid 2016 768-776

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Urgel Justino Guitart de Cartagena Miguel de los Santos Diacuteaz Goacutemara de Tortosa Feacutelix Bilbao y de Vich Juan Perelloacute El cardenal Pacelli los presentoacute al Papa pronunciando un amplio discurso Y don Carmelo tradujo de memoria como soliacutea hacer sin perder coma la importante alocucioacuten que el Papa dirigioacute a los proacutefugos espantildeoles

Esta fue la primera intervencioacuten puacuteblica de Piacuteo XI acerca de la dramaacute-tica situacioacuten espantildeola y en ella habloacute del heroiacutesmo de laquonuestros maacuter-tiresraquo en teacuterminos muy claros laquoPersonas sagradas cosas e instituciones sagradas tesoros inestimables de civilizacioacuten y de arte objetos preciosiacute-simos reliquias santiacutesimas obispos y sacerdotes viacutergenes consagradas seglares de toda clase y condicioacuten venerables ancianos joacutevenes en la flor de la vida y el mismo sagrado y solemne silencio de los sepulcros todo ha sido asaltado arruinado destruido con los modos maacutes villanos y baacuterbaros con el desenfreno maacutes libertino jamaacutes visto de fuerzas sal-vajes y crueles que pueden creerse imposibles no digamos a la dignidad humana sino hasta la misma naturaleza humana aun la maacutes miserable y la caiacuteda en lo maacutes bajoraquo

Condenoacute tambieacuten el Papa en teacuterminos contundentes la matanza entre hermanos laquoLa guerra civil la guerra entre los hijos del mismo paiacutes del mismo pueblo de la misma madre patria iexclDios miacuteo La guerra es siempre cosa tan tremenda e inhumanahellip iquestqueacute decir cuando la guerra es entre her-manos iquestqueacute podraacute decirse de las matanzas entre hermanos que todaviacutea continuamente se anuncianraquo

En tercer lugar habloacute de las ensentildeanzas de la guerra para Europa y el mundo entero laquoazorado enmarantildeado trastornado por la propaganda subversiva y particularmente a Europa ya tan profundamente perturbada y tan fuertemente sacudida para este mundo los tristes hechos de Espa-ntildea dicen y predicen una vez maacutes hasta queacute extremos estaacuten amenazadas las bases mismas de todo orden de toda civilizacioacuten y de toda culturaraquo Por uacuteltimo se refirioacute a los otros llamaacutendoles asiacute laquoiquestQueacute decir de todos aquellos otros que tambieacuten son y permanecen siendo hijos Nuestros no obstante que en las personas y en las cosas que Nos son maacutes queridas y maacutes sagradas con actos y meacutetodos extremamente odiosos y cruelmente persecutorios y aun en Nuestra misma persona cuanto la distancia lo consentiacutea con expresiones y actitudes sumamente ofensivas Nos han tratado no como hijos a un Padre sino como enemigos a un enemigo par-ticularmente odiado Tenemoshellip que amarles con un amor particular de compasioacuten y de misericordia amarles y no pudiendo hacer otra cosa orar

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por elloshellip orar para que esteacuten con Nos cuando dentro de poco ndashtenemos plena confianza en Dios benditondash el arco iris de la paz brillaraacute en el her-moso cielo de Espantildea trayendo el alegre anuncio a todo vuestro grande y magniacutefico paiacutesraquo

Los diarios republicanos de Madrid comentaron la noticia difundida por las agencias que deciacutea escuetamente que laquoel discurso del Papa no ha revestido ninguacuten caraacutecter poliacutetico Se trata de un llamamiento cristiano en favor de la paz dirigido a Espantildea entera y en el que no se mencio-na ninguna doctrina poliacutetica El Papa se limitoacute a poner en guardia a su auditorio contra las fuerzas subversivas que solo pueden desarrollarse luchando contra la Iglesiaraquo Esta uacuteltima frase fue suficiente para que al-gunos perioacutedicos destacaran en titulares su ancestral anticlericalismo laquoHa bloacute el Sumo Pontiacutefice en favor de la paz pero olvidoacute condenar a los obispos que bendicen las armas mortiacuteferas y esconden tesoros fabulosos y a los falsos cristianos que utilizan soldados mahometanos para asesinar espantildeolesraquo (La Libertad) laquoHa hablado el Papa y no ha condenado los criacute-menes de sus hijos de Espantildea pero los previene contra las fuerzas subver-sivasraquo (El Socialista) laquoEn el discurso del Papa estaacute ausente el verdadero espiacuteritu cristianoraquo (La Libertad)

Cuando Piacuteo XI pronuncioacute este discurso no se habiacutean cumplido todaviacutea dos meses desde el comienzo de la revolucioacuten y las viacutectimas eclesiaacutesti-cas de la persecucioacuten religiosa se aproximaban a los 3400 Durante los uacuteltimos diacuteas del mes de julio el nuacutemero de viacutectimas del clero ascendioacute a 861 y soacutelo el diacutea de Santiago patroacuten de Espantildea 25 de julio fueron mar-tirizados 95 miembros del clero secular En agosto se alcanzoacute la cifra maacutes elevada con un total de 2077 asesinatos que corresponden a una media de 70 al diacutea entre los cuales hay que incluir a diez obispos

iquestPor queacute no gustoacute a laquounosraquo ni a laquootrosraquo este discurso A los unos (los nacionales) porque les parecieron excesivas las palabras de amor compasioacuten y misericordia hacia los otros (los rojos) Y a estos por la denuncia que el Papa hizo de la cruel persecucioacuten religiosa que habiacutean desencadenado y de la destruccioacuten que habiacutean hecho en apenas dos meses de conflicto de todo lo humano y lo divino

La extensa alocucioacuten pontificia del 14 de septiembre redactada de su puntildeo y letra por Piacuteo XI y leiacuteda por eacutel con voz emocionada es un texto fundamental para la historia de la persecucioacuten religiosa espantildeola pues en ella se refiere por primera vez a las viacutectimas como maacutertires

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4 proacutefugos ilustres

He dicho anteriormente que uno de los primeros proacutefugos acogidos en el Colegio Espantildeol fue el obispo de Cartagena que llegoacute a Chiavari el 14 de agosto de 1936 Eacutel mismo relatoacute en esta extensa carta dirigida a Pacelli los horrores de la persecucioacuten religiosa en su dioacutecesis y coacutemo consiguioacute salvar la vida y llegar a Italia

Chiavari 21 de agosto de 1936JHS Pontificio Colegio Espantildeol de San JoseacutePalazzo Altemps Roma

Emmo y Rvmo Sr Cardenal Secretario de EstadoCiudad del Vaticano

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo SentildeorEl diacutea 22 del pasado julio (mantildeana hace un mes) hallaacutendome en mi pala-

cio episcopal de Murcia ciudad donde tiene su residencia oficial el Obispo de Cartagena se me presentaron pistola en mano tres enviados del Frente Popu-lar intimaacutendome abandonara el palacio para instalar ellos en el mismo la Casa del Pueblo antildeadiendo que veniacutean a avisaacutermelo por orden del Comiteacute a fin de que no me opusiera y no hubiera derramamiento de sangre Pediacute algunas horas de tiempo paras arreglar mi equipaje y por fin me concedieron hasta la tarde inmediatamente ayudado por algunos profesores del Seminario que se comu-nica con palacio y que hice venir enseguida empezamos todos a poner a salvo algunos documentos dinero y ropas pero apenas habiacutea pasado media hora se presentaron las turbas a la puerta acompantildeadas de algunos guardias de asalto o sea de policiacutea gubernativa mientras el Gobernador civil me avisaba por teleacute-fono para que me pusiera en salvo Inmediatamente el vicerrector del Seminario me pasoacute a su habitacioacuten donde me puse traje de paisano y eacutel me llevoacute al Asilo de las Hermanitas de los Pobres en las afueras de Murcia donde estuve 15 diacuteas oculto pero habieacutendose sabido por varios el lugar de mi retiro incluso por los revolucionarios pues los comunistas en una de sus reuniones trataron ya de ve-nir a cogerme me fui al Asilo de las Madres Oblatas donde pareciacutea podriacutea estar mejor protegido ya que por recibir ellas joacutevenes descarriadas algunas enviadas por la misma autoridad gubernativa y por habeacuterseles dado por los mismos diri-gentes del movimiento revolucionario plenas seguridades de que seriacutea aquella casa respetada nos parecioacute lugar muy apropiado pero resultoacute que por haber vis-to entrar algunos en traje de paisano en la casa quizaacutes ya antes de ir yo la policiacutea recibioacute una confidencia sin duda de alguacuten vecino o vecina izquierdista de que en aquella casa habiacutea reuniones de fascistas (cosa enteramente falsa pues sola-mente fueron el capellaacuten del Convento a celebrar la santa misa y mi capellaacuten y el

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vicerrector del Seminario a prepararme mi estancia y luego mi capellaacuten a estar conmigo) lo cierto es que a las 3 de la tarde del segundo diacutea de mi refugio alliacute se presentaron numerosos policiacuteas cercaron unos toda la casa y otros penetraron dentro y la registraron durante dos horas y media recorrieacutendola toda excepto la habitacioacuten donde tras de una puerta estaacutebamos mi capellaacuten y yo escondidos Quedamos asiacute milagrosamente en salvo pero la prudencia y la amenaza que hicieron de volver a hacer nuevos registros alliacute me obligaron a buscar nuevo refugio primero en casa de una piadosa sentildeora despueacutes en casa de otra mientras mi capellaacuten habiacutea salido de Murcia buscando el modo como trasladarnos los dos a Italia pues pensamos venirnos a este amado Colegio Espantildeol del cual ambos hemos sido alumnos

Tras muchos trabajos logroacute mi capellaacuten (y si todo lo que antecede Emmo y Rvmo Sentildeor va dicho dentro de la maacutes estricta confidencia y reserva lo que sigue lo consigno bajo el maacutes rogado secreto) logroacute mi capellaacuten digo ponerse al habla con el coacutensul alemaacuten en Alicante el cual nos hizo la gran caridad de ponerse al habla con el comandante de un acorazado alemaacuten surto en aquel puer-to y con el capitaacuten de un vapor comercial que iba a venir a Geacutenova Y una vez admitidos nosotros por ellos avisado por teleacutegrafo seguacuten clave prevista entre nosotros saliacute de Murcia en tren acompantildeado de un buen seglar llevando yo un salvoconducto dado por los Comiteacutes revolucionarios a nombre distinto del miacuteo y asiacute disfrazado con nombre supuesto y traje seglar hube de esperar dos horas en la estacioacuten del ferrocarril de la propia capital de mi Dioacutecesis sin que gracias a Dios la poca gente que por alliacute habiacutea me reconociera vine en el tren en tercera clase entre obreros todos ellos respirando anhelo del triunfo del gobierno de Ma-drid me visaron los milicianos el salvoconducto registraron despueacutes mi maleta al llegar a Alicante (a prevencioacuten nada eclesiaacutestico traiacutea ni aun el breviario) fui con el seglar que me acompantildeaba a un hotel donde di mi nombre supuesto de acuerdo con el salvoconducto que llevaba luego vino la policiacutea a examinar dicho salvoconducto y gracias al Sentildeor que tan palpablemente me guardaba en-controacute todo en regla Al diacutea siguiente fui al coacutensul alemaacuten y supe que mi capellaacuten ya habiacutea sido llevado la tarde anterior al acorazado vestido de marinero Des-pueacutes de recorrer algunos sitios para despistar fui por fin llevado al consulado alemaacuten donde dejando mi traje de paisano (que un alemaacuten me entregoacute despueacutes) me vestiacute con un uniforme de capitaacuten de barco alemaacuten y ya entre otros oficiales de la nave de guerra acorazada embarqueacute en la chalupa o gasolinera de la mis-ma saliendo asiacute de Alicante sin que ninguna autoridad espantildeola me viera estuve sumamente agasajado por toda la oficialidad y singularmente por el comandante del acorazado toda la tarde en este a las ocho de la noche salioacute del puerto de Alicante el barco mercante que veniacutea a Geacutenova y siguiendo eacutel su marcha des-pacio me hicieron bajar a miacute y mi capellaacuten a la chalupa o gasolinera de la nave de guerra y fuimos al encuentro del barco mercante pero con gran prudencia en vez de ir directos a eacutel nos condujeron hacia alta mar y pasamos del lado de

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estribor donde iacutebamos al de babor de la nueva nave por delante de ella a oscuras nuestra chalupa y mientras todos los pasajeros se hallaban a estribor mirando el acorazado maacutes auacuten veniacutea un soldado de la nave de guerra en el trasporte que iacutebamos a tomar y se pasoacute eacutel a la chalupa a la vez que nosotros ganaacutebamos el barco mercante que eacutel dejaba asiacute quedaba mejor justificado el acercamiento de la chalupa al barco en marcha Trasportados asiacute a la nave mercante sumamente atendidos por el capitaacuten y oficiales de ella aunque obligado yo a permanecer en mi camarote para que ninguacuten pasajero me viera pues deseaban no se supiera coacutemo veniacutea yo a Italia para evitarse compromisos con Madrid por fin llegamos felizmente a Geacutenova y una vez que desembarcaron todos los pasajeros salimos nosotros entre la tripulacioacuten del barco como si fueacuteramos de ella y fueron tan amables que nos trajeron hasta las mismas puertas de este Seminario de Chia-vari ya que por haber salido asiacute de Espantildea no traemos ninguacuten pasaporte pues soacutelo el pedirlo a las autoridades espantildeolas dependientes donde estaacutebamos del gobierno de Madrid hubiera sido motivo de prendernos

Estoy pues aquiacute Emmo y Rvmo Sentildeor gracias a la Divina Providencia que asiacute se ha dignado salvarme La Dioacutecesis quedoacute encomendada a un Vicario general con facultades de nombrar otro o proveer como creyera oportuno dentro del Derecho si eacutel se veiacutea en peligro Desde el 23 de julio estaacuten cerradas todas las iglesias de la Dioacutecesis por orden de la autoridad de Madrid Han quemado muchas imaacutegenes e incendiado algunos templos y conventos pero la mayor parte los conservan para Casas del Pueblo El palacio episcopal ha quedado en poder de ellos con todas sus oficinas y archivos sabemos han violentado las dos cajas fuertes que habiacutea y publicaron nota de haber llevado en depoacutesito al Banco de Espantildea valores y objetos de arte no nos han querido decir cuaacuteles ni cuaacutento Desde luego valores seraacuten unas trescientas mil pesetas que habiacutea en una caja lo demaacutes estaacute todo en salvo gracias a Dios de modo que econoacutemicamente las Fundaciones diocesanas no han sufrido mucho pero ademaacutes de esos valores que cogieron quedoacute en palacio toda la documentacioacuten de los archivos y de las mesas de trabajo de las oficinas y todos los muebles etc etc del mismo y los particulares miacuteos con mi ropa y utensilios de casa ya que en la escasa media hora que tuvimos de tiempo no fue posible sacar apenas nada Posteriormente hicimos las oportunas gestiones incluso a veces con peligro para mi capellaacuten para sacar algo de lo que quedoacute pero fue todo infructuoso Ignoramos queacute suer-te habraacute corrido todo incluso ornamentos pontificales y biblioteca miacutea desde luego sabemos que han destrozado las imaacutegenes del Seminario y que los libros de su biblioteca estaban tirados en uno de sus patios

Ha quedado pues Eminentiacutesimo Sentildeor la Catedral cerrada con intencioacuten han dicho de convertirla en museo para fomento de turismo el Palacio epis-copal y el Seminario mayor adjunto son ahora casa u oficinas de las diversas entidades revolucionarias (UGT CNT FAI etc etc) las casas religiosas de ensentildeanza con todo su mueblaje en manos del Gobierno para ensentildeanza laica

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los monasterios de religiosas (lanzadas todas ellas a la calle y viviendo donde cada una ha encontrado familia suya o amigas buenas) convertidos en cuarteles de milicias rojas y saqueados todos el clero oculto y sin poder ejercer su sagrado ministerio si no es en casas particulares y con temor de represalias ya que los desgraciados revolucionarios odian los actos del culto y sobre todo no quieren se celebre en ninguacuten sitio ni casa la santa misa el Seminario menor del cual igualmente se han apoderado lo han convertido creo en hospital de sangre como tambieacuten han convertido en hospitales algunos colegios religiosos En toda la extensa Dioacutecesis de Cartagena hay muchos hombres y mujeres que no iban a misa ni teniacutean de cristianos sino el bautismo y matrimonio y el cuidado de llamar a uacuteltima hora de su vida al sacerdote por esto ahora alliacute ante la promesa que les han hecho de repartirles lo de los ricos ha prendido el comunismo y son muchos los defensores del Gobierno de Madrid aunque quedan tambieacuten muchos buenos catoacutelicos pero se hallan bajo el yugo de las milicias armadas por el Gobierno

He aquiacute Eminentiacutesimo Sentildeor lo que he creiacutedo un deber poner en cono-cimiento de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima a la vez que le participo en-contrarme en este tan amado Colegio Espantildeol actualmente de vacaciones en Chiavari a donde he venido para poner en salvo mi persona ya que todo era de temer por haber quedado defraudadas las turbas asaltantes de mi palacio al no encontrarme en eacutel por haberme escapado por la puerta posterior del Seminario no serme posible ejercer personalmente alliacute el gobierno de la Dioacutecesis en estas circunstancias por tener que estar oculto y sin apenas poder comunicar con nadie como se vio por la denuncia que motivoacute el registro del cual tan providen-cialmente me salveacute

Aquiacute estoy Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor siempre a disposicioacuten de la Santa Sede y a las gratas oacuterdenes de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima

Aprovecho esta ocasioacuten para reiterarme de Vuestra Eminencia Reverendiacutesi-ma h s s q b s s P

+ Miguel de los Santos Obispo de Cartagena11

El obispo Diacuteaz Goacutemara residioacute en el Colegio Espantildeol hasta que en junio de 1937 pudo regresar a Espantildea

Otro ilustre proacutefugo fue el obispo de Tortosa Feacutelix Bilbao Ugarriza que se refugioacute en la casa laquoVilla Rosaraquo de las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazoacuten de Jesuacutes en la ciudad de Viterbo al norte de Roma el

11 La II Repuacuteblica y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticano vol IV Documentos de los antildeos 1935 y 1936 BAC Madrid 2016 710-714

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4 de agosto de 1936 Desde alliacute mantuvo correspondencia con don Car-melo y el 13 de agosto describioacute su salida de Espantildea tras el 18 de julio de 1936 y su llegada a Italia

Villa Rosa - Sanatorium - Viterbo 13 agosto 1936Rvdo Don Carmelo BlayPontificio Colegio Espantildeol Roma

Cariacutesimo Don Carmelo

Aunque resulte un poco humillante para miacute pero me parece que el Sentildeor no me ha encontrado maduro para confesor de la fe que envuelto en la no igualada borrasca tan por sus pasos me ha conducido a este oasis de bienestar y de paz

Estaba en el Balneario de Cardoacute Del 18 al 21 de julio aislamiento rumores El 22 se vieron amenazas y peligros y asiacute con alguna angustia tres diacuteas En la noche del 25 11 y 12 de la noche soy conducido a Tortosa por unos cuantos laquobuenos revolucionariosraquo que nos condujeron al Capellaacuten Rev Calderoacute y a miacute desde luego de paisano y con lo puesto El Sr Alcalde me recibioacute atento (a las 3 madrugada y mirando por mi seguridad) en buenos autos y con distinguida es-colta me condujo a Tarragona Yo contento porque penseacute alliacute ponerme al habla con el Emo Metropolitano Al Revdo Calderoacute lo dejeacute en Tortosa

El Sr Comisario de Tarragona me dice que el Emo Cardenal tuvo que huir con los suyos el 22 Como tampoco podiacutea garantizar mi seguridad me envioacute a Barcelona donde quedeacute de hecho detenido en la Conserjeriacutea de Gobernacioacuten a las 9 de la mantildeana del domingo

Grande sorpresa y alegriacutea al encontrarme en una habitacioacuten enfrentada a la miacutea y a la que teniacutea libre acceso al Emo Cardenal y Revdo Viladrich tambieacuten de paisano y en tal facha el simpaacutetico don Juan [Viladrich] que pareciacutea el pro-totipo del perfecto trincheraire

Despueacutes de las efusiones y saludos me contaron su odisea verdaderamente seria y como maacutes antiguos me enteraron del reacutegimen de vida en aquel laquopalacioraquo

Cinco diacuteas les acompantildeeacute que tuvieron alguacuten alivio en ciertas atenciones con el Emo aunque no muy sobradas Varios diacuteas pudo recibir visitas de sus sobrinos que le trajeron ropa medicinas etc Tambieacuten le visitoacute como medico (acompantildea-do de un hijo suyo muy simpaacutetico) el famoso Dr Carochan12 que formaba parte del Gobierno de la Generalidad como Conseller de Sanidad Junto a nuestras habitaciones habiacutea otra en que dormiacutea otro Sr Consejero el Sr Mestre y este tuvo tambieacuten la atencioacuten de saludarle alguna vez

Como el Emo habiacutea conseguido comunicar con Secretariacutea de Estado de SS su situacioacuten valieacutendose del coacutensul de Italia y haciendo ver su condicioacuten de

12 Manuel Carochan profesor de la Universidad de Barcelona

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ciudadano vaticano las negociaciones seguiacutean su camino Tratoacute de incluirme en ellas pero no pareciacutea faacutecil

Por esto el jueves 30 a las 9 de la noche fue grande nuestra sorpresa cuando avisaron de que nos preparaacuteramos para marchar todos tres Y en efecto a las 10 y 12 embarcamos en el laquoFirenzeraquo buque almirante de la escuadra italiana entre atenciones y carintildeo de sus simpaacuteticos marinos El diacutea de S Ignacio tuvimos el consuelo de celebrar despueacutes de largos diacuteas de laquolaicosraquo

El viernes al anochecer trasbordamos al crucero laquoM Attendoloraquo que el saacuteba-do a las 5 de la tarde nos dejaba en Spezzia y dos horas despueacutes descansaacutebamos con los hijos de San Bruno (Farneta)

Es decir yo no descanseacute porque el clima luccense13 me era hostil El 5 a Roma y despueacutes a este precioso y sano rincoacuten Que el Sentildeor que aquiacute me ha traiacutedo como en palmas me ayude a darle gracias y corresponder a sus designios

Las noticias que se reciben de Madrid y Cataluntildea cada diacutea maacutes tristes La paacutegina de fusilamientos en masa de 109 seminaristas de Tarragona en el cemen-terio de Leacuterida es espantosa Le abrazahellip

+ Feacutelix obispo de Tortosa14

El tercero de los obispos proacutefugos en Roma fue el de Vich Juan Pe-relloacute que envioacute a Pacelli el 23 de agosto un escrito en el que expuso un juicio sinteacutetico sobre la revolucioacuten espantildeola y sobre la persecucioacuten de la Iglesia15 Este obispo residioacute desde el 21 de agosto en la casa de los religiosos de los Sagrados Corazones congregacioacuten a la que perteneciacutea situada en Via del Curato muy proacutexima al puente de Castel SantrsquoAngelo El 5 de marzo de 1937 pudo regresar a su tierra natal de Mallorca

El cuarto fue el obispo de Urgel Justino Guitart que residioacute habitual-mente en la Casa de los jesuitas de San Remo si bien hizo algunos viajes a Roma y vivioacute en el Colegio Espantildeol

La mayoriacutea de los sacerdotes procediacutea de las dioacutecesis catalanas salvo dos de Orihuela y Astorga Los que no tuvieron cabida en el Colegio Espa-ntildeol fueron acogidos en gran parte en el hospicio romano de laquoCento Pretiraquo situado en el Lungotevere frente al Ponte Sisto mientras que algunos se instalaron individualmente en las casas y colegios indicados en la carta de don Carmelo a Tardini anteriormente citada

13 Se refiere a la ciudad de Lucca cerca de la cual estaacute la cartuja de Farneta14 La II Repuacuteblica y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticano vol IV Documentos

de los antildeos 1935 y 1936 686-68715 Ibid 718-724

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5 don cArMelo blAy y el cArdenAl vidAl y bArrAquer

El maacutes ilustre de los proacutefugos espantildeoles en Italia fue el arzobispo de Tarragona cardenal Francisco Vidal y Barraquer16 que residioacute en la Car-tuja de Farneta durante los antildeos de la guerra tan soacutelo acudioacute a Roma en febrero de 1939 para participar en el coacutenclave tras la muerte de Piacuteo XI el 10 de febrero de 1939 Hablo de eacutel en estas paacuteginas por la relacioacuten que tuvo don Carmelo Asiacute en el documento 2 que se recoge en el apeacuten-dice don Carmelo aporta algunas noticias sobre la situacioacuten espantildeola y la actitud del Gobierno nacional contra el obispo Muacutegica y el cardenal Vidal mientras que en el documento 4 informa detalladamente sobre las gestiones que realizoacute por encargo expreso del cardenal Pacelli para con-seguir que el cardenal Vidal renunciase al gobierno de la archidioacutecesis de Tarragona

Al estallar la revolucioacuten de 1936 Vidal conocioacute personalmente los horrores de la perse cucioacuten republicana de la que fue viacutectima soacutelo en sus primeros diacuteas El 21 de julio de 1936 salioacute de su palacio arzobispal y fue trasladado a Poblet donde fue detenido dos diacuteas maacutes tarde por elementos de la FAI (Federacioacuten Anarquista Ibeacuterica) y encarcelado en Montblanch quedando encerrado laquoen un calabozo sin maacutes muebles que dos jergones de paja y unos trozos de mantaraquo consiguioacute salvarse gracias a la inter-vencioacuten de las autoridades de la Generalitat y el 30 de julio se embarcoacute en Barcelona hacia Italia acogido con todos los honores en el crucero de la marina italiana Fiume despueacutes se establecioacute en la cartuja de Farneta cerca de Lucca de riguroso incoacutegnito

Hubiera sido su deseo al salir de Espantildea dirigirse a la Ciudad Eterna para presentarse seguidamente al Romano Pontiacutefice pero en atencioacuten a cir-cunstancias especiales que exigiacutean que permaneciera por una temporada ignorado en Espantildea su paradero se le pidioacute que eligiera una casa religiosa donde pudiera hacer vida retirada para evitar que la prensa se ocupase de su huida de Espantildea Por la buena amistad que le uniacutea a los monjes decidioacute establecerse en dicha Cartuja de riguroso incoacutegnito recibiendo toda la correspondencia bajo sobre exterior a nombre del P Prior

Antes de embarcarse para Italia el cardenal hizo lo posible por liberar a su obispo auxiliar el beato Manuel Borraacutes Ferreacute pero todos sus esfuer-

16 Sobre su biografiacutea remito a la que le he dedicado en el laquoDiccionario Biograacutefico Es-pantildeolraquo vol XLIX Real Academia de la Historia Madrid 2013 890-894

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zos resultaron vanos el obispo siguioacute detenido en Montblanch y fue fusi-lado el 12 de agosto aun cuando le dijeron al cardenal que nada contra eacutel existiacutea y que su detencioacuten era para la seguridad personal del mismo De la muerte del auxiliar tuvo noticia el cardenal diacuteas maacutes tarde y supo que ha-biacutea sido asesinado por anarquistas los cuales se ensantildearon baacuterbaramente en su cadaacutever quemaacutendolo

Vidal envioacute al cardenal Pacelli secretario de Estado una relacioacuten de-tallada sobre su salida de la Espantildea republicana En ella describioacute su detencioacuten y liberacioacuten y dio noticias sobre otros obispos de la provincia eclesiaacutestica tarraconense a la vez que se fue laquorecobrando poco a poco en la medida que es posible ante el cuacutemulo de horrores sabidos de agobios y penas de incertidumbres e interrogantes que a uno le asaltan en cada momento sobre tantas y tantas cosas cariacutesimas y particularmente sobre la suerte de nuestra estimada Patria y de los intereses sagrados de la Iglesia en la mismaraquo

Pacelli acusoacute recibo de sus cartas le expresoacute el dolor por los peligros que habiacutea pasado y por los inauditos desoacuterdenes de Espantildea y le dijo que al Papa le pareciacutea oportuno que permaneciera en incoacutegnito en la Cartuja de Lucca Tambieacuten manifestoacute su preocupacioacuten por los otros obispos de los que no se teniacutean noticias en Roma y comentoacute la admirable conducta de los joacutevenes de Accioacuten Catoacutelica laquodiezmados por la barbarie roja en medio de continuos peligros y sufrimientos que no desdeciacutean de los maacutertires de los primeros sigloraquo

Desde Lucca siguioacute Vidal los avatares de la Guerra civil y de la per-secucioacuten religiosa en la zona republicana preocupado por la suerte de sus familiares y de los sacerdotes encarcelados y perseguidos e intensi-ficoacute sus gestiones para conseguir la liberacioacuten de muchos de ellos o para mejorar su situacioacuten ayudaacutendoles econoacutemicamente en la medida de sus posibilidades

El 1 de septiembre de 1936 Piacuteo XI invitoacute personalmente al cardenal Vi-dal para que asistiera a la audiencia prevista para el 14 de septiembre pero al diacutea siguiente 2 de septiembre Vidal escribioacute a Pacelli manifestando sus reservas sobre la oportunidad de dicha audiencia y diciendo

Temo asimismo y se lo digo a Vuestra Eminencia Revma confidencial y fraternalmente que parecido resultado pudiera producir una clamorosa reunioacuten de obispos y sacerdotes en el Vaticano ‒veo se ocupa de ello la prensa con co-mentarios divergentes‒ con eneacutergicas protestas cual merecen las barbaridades realizadas Por ello seriacutea conveniente que antes de dicha reunioacuten se procurase

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salvar todo lo que fuese posible en cuanto a personas y cosas Siempre y a priori apruebo y sigo los preceptos y orientaciones del Santo Padre a Quien amo y venero con el afecto filial maacutes acendrado pero entiendo que ello no debe ser obs-taacuteculo para que exponga en conciencia mi opinioacuten a mis Superiores sin perjuicio de rendir mi criterio y acatar luego la suprema decisioacuten cualquiera que ella sea Es ciertamente muy doloroso y subleva el alma noble generosa y recta el dejar sin puacuteblica protesta tantos sacrilegios y pecados tantos asesinatos y atrocidades tantas destrucciones y devastaciones pero al igual que Jesucristo y los primi-tivos maacutertires conviene tener una gran prudencia y paciencia por los que no reflexionan por los que estaacuten ciegos por los que exacerbados y ofuscados por la pasioacuten y el deseo de venganza no saben lo que hacen y llegan al extremo de beber la sangre de los Ministros del Sentildeor y de los buenos catoacutelicos despueacutes de haber saciado su odio martirizando horriblemente a sus viacutectimas Crea Eminencia Reverendiacutesima que al conocer todo esto hubiera preferido no haber practicado gestioacuten alguna para salvarme del naufragio y dar mi vida que poco puede rendir ya por Dios por la Iglesia y por la Patria estariacutea ya sin duda en el cielo No se me oculta que una puacuteblica protesta alentariacutea a los buenos y tal vez moveriacutea maacutes y maacutes a prestar su apoyo moral y aun material a los catoacutelicos de todo el mundo pero y si Dios en sus elevados designios permite el triunfo de los enemigos iquestno seriacutea ello un mayor obstaacuteculo para que los sacerdotes pudieran entrar de nuevo en Espantildea y trabajar por la conversioacuten de nuestros paisanos quienes aunque pervertidos y malos no por ello dejan de ser nuestros hermanos Ha llegado a mis oiacutedos que algunos elementos tendenciosos que siempre han sido partida-rios de la poliacutetica catastroacutefica entre ellos sacerdotes y religiosos trabajan desde Roma para que se tengan reuniones de tonos violentos a fin de comprometer a la Santa Sede hacia determinados bandos de entre los que actualmente luchan unidos contra el anarquismo y el comunismo Me consta asimismo que en ciertas casas donde se hospedan sacerdotes refugiados en lugar de emplearse el tiempo en la oracioacuten en ocupaciones uacutetiles etc se gasta en criticar a la Jerarquiacutea y en ahondar las perniciosas divisiones entre los catoacutelicos como si no fuera bastante dura la leccioacuten recibida y asaz amargos los escarmientos sufridosraquo

No debioacute gustarle al Papa esta respuesta del arzobispo de Tarragona porque al diacutea siguiente le retiroacute la invitacioacuten ya cursada y le pidioacute a Pacelli que le escribiera una carta muy delicada dicieacutendole de parte del Papa que no era oportuno que de momento saliera de Lucca

Il Santo Padre ha deciso di ricevere il 14 settembre cm in particolare Udien-za i Vescovi gli ecclesiastici i religiosi le religiose e laici che sfuggiti agli orro-ri della persecuzione in Spagna sono attualmente in Roma LrsquoAugusto Pontefice sarebbe ben lieto di vedere alla Sua sovrana presenza tra questi figli tribolati in primo luogo lrsquoEminenza Vostra Reverendissima ma data la speciale delicatez-

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za delle presenti condizioni ed anche la di Lei personale situazione Sua Santitaacute non ritiene opportuno che VE lasci per ora la sua attuale dimora Il Santo Padre assicurando che ciograve nonostante in quella circostanza avragrave in modo tutto parti-colare presente al Suo spirito lrsquoEV per farLa participe della Sua piuacute affettuosa Benedizione non vuol tuttavia mancare fino da ora di benedirLa di tutto cuore invocando sopra di Lei i celesti conforti

Vidal respondioacute el 11 de septiembre 1936

Me honro en acusar recibo a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima de la vene-rada carta de 9 de los corrientes comunicaacutendome que el Santo Padre ha decidido recibir en Audiencia a los prelados eclesiaacutesticos y seglares proacutefugos de Espantildea que se encuentran en Roma Y toda vez que por las circunstancias que Vuestra Eminencia Revma indica no estima oportuno el Santo Padre que por ahora deje yo mi actual residencia que ni por un momento he abandonado lo cual me priva de la grandiacutesima satisfaccioacuten de unirme corporalmente a mis queridos hermanos perseguidos y confortar mi aacutenimo con las paternales palabras del Santo Padre he de rogar a Vuestra Eminencia Revma que se sirva expresar al Augusto Pontiacutefice que en tan memorable acto estareacute presente en espiacuteritu muy unido a Sus inten-ciones con deseos de sufrir maacutes por Jesucristo y por la Iglesia y que Le quedo reconocidiacutesimo por Su voluntad de hacerme partiacutecipe en dicha circunstancia de Su amorosa Bendicioacuten Paternal de la cual es ya prenda muy estimada la que con tanto afecto se ha dignado anticiparme por conducto de Vuestra Eminencia Revma En estos momentos de tan dura prueba por todos conceptos es siempre de gran consuelo y lenitivo saberse muy cerca y especialmente unido al corazoacuten de nuestro venerado Padre comuacuten

Pacelli explicoacute a Vidal las razones por las cuales el Papa hizo este discurso17

A propoacutesito de las relaciones del cardenal Vidal con Franco hay que decir ante todo que aquel ha sido presentado siempre como un eneacutergico opositor al general Se fundamenta este juicio en su negativa a firmar la carta escrita colectivamente por el Episcopado el 1 de julio de 1937 Sin embargo su cartas ineacuteditas que yo mismo he publicado recientemen-te18 desmienten por completo esta opinioacuten por cuanto nos presentan a

17 Los textos citados pueden verse en La II Repuacuteblica y la Guerra Civil en el Archivo Secreto Vaticano vol IV Documentos de los antildeos 1935 y 1936 768-769 nota 553

18 Epistolario Vidal-Pacelli-Pizzardo-Montini y apuntes de la Secretariacutea de Estado (1936-1939) in Analecta Sacra Tarraconensia 89 (2015) 267-1014

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un cardenal Vidal no solo abiertamente favorable a la persona del general Franco a quien demostroacute por escrito admiracioacuten y simpatiacutea sino tambieacuten sus deseos de que ganara la guerra y llegara a gobernar Espantildea Todo esto puede sorprendernos a estas alturas cuando se llevan maacutes de setenta antildeos exaltando el antifranquismo del arzobispo de Tarragona presentaacutendolo como un firme bastioacuten frente al Reacutegimen que Franco alumbroacute y mitifican-do un tanto exageradamente su figura en este sentido Asiacute lo evidencia esta carta del 21 de febrero de 1937

Poniendo en praacutectica los sabios consejos de Vuestra Eminencia he intentado hacer llegar reservadamente y de palabra al general Franco el testimonio de mi felicitacioacuten y simpatiacutea y mis sinceros votos por el eacutexito de la buena causa No seacute si el Emmo Sr cardenal Gomaacute a quien hice el encargo habraacute tenido ya ocasioacuten de cumplirlo Pero si a Vuestra Eminencia le pareciera conveniente u oportuna una manifestacioacuten maacutes clara y expliacutecita estoy dispuesto a ello Yo de momento por la razones indicadas en la presente y en mis anteriores que tienen auacuten todo su valor no me inclino a avanzar maacutes a no ser que Vuestra Eminencia fuese de otro parecer en cuyo caso mucho le agradeceriacutea se sirviera manifestaacutermelo Deseo vivamente que triunfe Franco pero aun cuando vaya obteniendo ventajas no se ve muy clara la actitud de ciertas grandes potencias que pueden influir decisiva-mente en la terminacioacuten de la guerra y en la forma de acabarla19

Pacelli se limitoacute a responderle que el Papa consideraba superflua una nueva manifestacioacuten maacutes clara y expliacutecita de simpatiacutea a Franco20 Pero no contento con esta respuesta siete meses maacutes tarde Vidal volvioacute a pre-guntarle a Pacelli

Si en vista de las presentes circunstancias estima oportuno que yo haga algu-na manifestacioacuten maacutes expliacutecita de simpatiacutea al general Franco en carta confiden-cial Como subsisten las mismas razones que anteriormente o sea el temor de represalias la falta de reserva la mayor dificultad que posiblemente ello impor-tariacutea para trabajar a favor de los sacerdotes y religiosos el tener toda la Dioacutecesis y Provincia Eclesiaacutestica bajo el dominio de los rojos y haber hecho ya llegar verbalmente conforme me insinuoacute Vuestra Eminencia con tanta discrecioacuten al Generaliacutesimo la expresioacuten de mis sentimientos no he creiacutedo oportuno adelantar un paso Quedo no obstante gustosamente a disposicioacuten de la Santa Sede cuyas sabias instrucciones seguireacute literalmente21

19 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Farneta 21 febrero 1937 in Epistolario 409-41620 Carta nordm 84237 de Pacelli a Vidal 13 marzo 1937 in Ibid 429-43121 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Lucca 14 septiembre 1937 in Ibid 555-558

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Pacelli le dijo que por parte de la Secretariacutea de Estado no existiacutea difi-cultad alguna para que conociendo su prudencia hiciera lo que estimara maacutes oportuno22 El arzobispo de Tarragona no ocultoacute laquolas simpatiacuteas que me han merecido los propoacutesitos y la recta intencioacuten del general Franco y la forma en que se las he manifestado ya verbalmente ya por tercera per-sona atenieacutendome a altiacutesimos consejos ya uacuteltimamente mediante carta que le dirigiacuteraquo23

Seguacuten el cardenal Vidal laquoun exagerado nacionalismo ha ofuscado a los vascos y no se comprenden las razones con que hombres de temple catoacutelico innegable hayan podido justificar su alianza con los comunistas y anarco-sindicalistas enemigos jurados de nuestra Religioacutenraquo24

Llama poderosamente la atencioacuten tras la lectura de estas cartas que la personalidad del cardenal Vidal y Barraquer aparezca muy diversa de como se la ha presentado habitualmente Y cabe preguntarse coacutemo ha sido posible construir un laquomitoraquo sin fundamento alguno en la realidad histoacuterica Vidal no soacutelo no fue antifranquista sino un sincero admirador de Franco y de su causa Por ello no ocultoacute laquolas simpatiacuteas que me han me-recido los propoacutesitos y la recta intencioacuten del general Francoraquo25 Al mismo tiempo atacoacute con mucha energiacutea a socialistas y comunistas porque laquono seriacutea viable hoy en Espantildea despueacutes de la presente guerra un gobierno en el que participaran socialistas y sus afines pues impediriacutean la soacutelida y ver-dadera reconstitucioacuten de Espantildea el castigo de los instigadores y autores de tantos y tan horrendos criacutemenes contra todo lo maacutes santo y sagrado y preparariacutean el terreno para una nueva revolucioacuten marxistaraquo26

Sus escritos nos permiten sacar estas conclusiones documentadas que no son opiniones o ilaciones personales sino testimonios escritos Scrip-ta manent Ante textos tan expliacutecitos y elocuentes cae por su peso la falsa imagen que se nos ha venido dando del cardenal Vidal en sus relaciones con Franco hasta el extremo de poder afirmar que no soacutelo fue entusias-ta defensor del general y de la laquocausaraquo que habiacutea emprendido porque creiacutea sinceramente en su rectitud de intencioacuten por el bien de Espantildea sino que ademaacutes atacoacute duramente a los comunistas socialistas y anarquistas

22 Carta n 432537 de Pacelli a Vidal del 6 noviembre 1937 in Ibid 598-59923 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Farneta 31 marzo 1938 in Ibid 71024 Carta de Vidal a Pacelli Certosa di Farneta 21 febrero 1937 in Ibid 411-41225 Ibid 71026 Ibid

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consideraacutendolos un mal para Espantildea Y auacuten maacutes sorprende que Vidal se declarara admirador de Mussolini consideraacutendolo laquofigura de gran pres-tigio personalraquo

Un antildeo antes del final de la guerra el Gobierno republicano invitoacute a Vidal para que regresara a Tarragona donde seriacutea recibido con todos los honores debidos a su dignidad El ministro Irujo le formuloacute esta invitacioacuten el 11 de febrero de 1938 de parte del Presidente del Gobierno Juan Ne-griacuten y del ministro de Estado Joseacute Giral laquogarantizaacutendole el respeto y la asistencia debidos a la dignidad de su persona y a los prestigios y jerarquiacutea de su cargo y jurisdiccioacutenraquo

Irujo le hizo esta invitacioacuten laquocomo vasco y como catoacutelicohellip signifi-cando la esperanza de diacuteas mejores para la Iglesia para la Repuacuteblica y para Cataluntildearaquo La prensa dio la noticia de haberse hecho la invitacioacuten antildeadiendo que el Cardenal no habiacutea contestado

El Cardenal pidioacute como condicioacuten previa para regresar a su dioacutecesis una reparacioacuten puacuteblica y sincera de los ultrajes infligidos a la Iglesia y a sus ministros gesto que nunca hicieron los republicanos por ello no aceptoacute la invitacioacuten y explicoacute sus razones en carta dirigida a Irujo

iquestCoacutemo puedo yo dignamente aceptar tal invitacioacuten cuando en las caacuterceles continuacutean sacerdotes y religiosos muy celosos y tambieacuten seglares detenidos y condenados como me informan por haber practicado actos de su ministerio o de caridad y beneficencia sin haberse entrometido en lo maacutes miacutenimo en partidos poliacuteticos de conformidad a las normas que les habiacutean dadohellip Los fieles todos y en particular los sacerdotes y religiosos saben perfectamente los asesinatos de que fueron viacutectimas muchos de sus hermanos los incendios y profanaciones de templos y cosas sagradas la incautacioacuten por el Estado de todos los bienes eclesiaacutesticos y no les consta que hasta el presente la Iglesia haya recibido de parte del Gobierno reparacioacuten alguna ni siquiera una excusa o protesta27

Particularmente molestos estuvieron los Nacionales con el cardenal Vidal al que tachaban de desarrollar actividad catalanista desde Italia La campantildea promovida contra eacutel por algunos elementos extremistas era cosa ya vieja pero se le acusaba en particular de no haber firmado la Carta colectiva del Episcopado del viaje de su vicario general Salvador Rial a Roma y Pariacutes y de sus supuestas relaciones con el presidente del Gobierno Vasco Aguirre

27 Carta de Vidal a Irujo Certosa di Farneta 30 abril 1938 in Ibid 755

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Este asunto nunca quiso tratarlo el delegado pontificio Mons Anto-niutti con las autoridades nacionales porque era particularmente delica-do pero habiacutea recibido una nota verbal del ministro de Asuntos Exteriores en la que se atribuiacutean al Cardenal gestiones en favor del Gobierno Repu-blicano que habriacutea hecho de acuerdo con los vascos en Barcelona y por consiguiente contra los intereses de la Espantildea nacional El subsecretario del Ministerio de Asuntos Exteriores le habiacutea dicho al delegado pontifi-cio laquoiquestPor queacute el cardenal se olvida de que le han asesinado a su obispo auxiliar a centenares de sacerdotes y a miles de files y han destruido todas las iglesiasraquo y le entregoacute una Nota verbal28

Precedentemente el Gobierno Nacional habiacutea protestado contra la ac-titud de algunos eclesiaacutesticos en el extranjero entre ellos el vasco Onain-diacutea los citados Carreras Trens y otros Antoniutti habiacutea dado amplias noticias sobre los asuntos de Cataluntildea y en particular sobre los intentos de restablecer el culto pero no se explicaba los contactos del cardenal Verdier arzobispo de Pariacutes con el ministro republicano Irujo y con repre-sentantes vascos y catalanes para normalizar la situacioacuten religiosa Habloacute tambieacuten de la impresioacuten negativa que tanto Franco como sus ministros teniacutean del cardenal Vidal al que no dejaron que regresase a Tarragona para ponerse libremente al frente de su archidioacutecesis antes de que llegasen a ella los nacionales

El cardenal Pacelli informoacute sobre este asunto al nuncio en Francia Valeri y tambieacuten al cardenal Vidal quien respondioacute a Pacelli el 31 de marzo de 1938 desde la Cartuja de Farneta mediante una extensa carta confidencial en la que tras agradecerle el enviacuteo de la mencionada Nota verbal del Ministerio de Asuntos Exteriores expuso ampliamente su ac-titud al respecto

En la mencionada carta el cardenal Vidal habloacute expliacutecitamente sobre laquolas simpatiacuteas que me han merecido los propoacutesitos y recta intencioacuten del general Franco y la forma en que se las he manifestado ya verbalmente y por tercera persona atenieacutendome a altiacutesimos consejos ya uacuteltimamente mediante carta que le dirigiacute que las poquiacutesimas veces que he tenido co-municacioacuten con alguna persona del Gobierno de Barcelona ha sido para pedir el indulto o la liberacioacuten de condenados y presosraquo Y defendioacute al doctor Carreras aduciendo como argumento el hecho de que le laquohabloacute

28 Despacho Nordm 28838 de Antoniutti a Pacelli San Sebastiaacuten 9 marzo 1938 in AAEESS Spagna 896 fasc 299 ff 47-48v

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muy elogiosamente del general Franco en favor del cual se mostroacute muy decidido y de las liacuteneas generales de un libro que preparaba en defensa de la actuacioacuten de la Iglesia durante el periodo de la Repuacuteblica y de la del citado Generalraquo29

Desde que el encargado de negocios de la Espantildea Nacional en el Va-ticano Pablo Churruca se entrevistoacute con Pacelli por primera vez quedoacute planteado el laquocaso Vidalraquo y ya entonces le expuso la necesidad de que fuera estudiada una solucioacuten satisfactoria para el Gobierno Nacional so-bre la futura situacioacuten del Cardenal y tambieacuten del obispo Muacutegica que se habiacutean negado a firmar la Carta colectiva A los ojos del Gobierno Nacio-nal no era necesario exhibir otros argumentos para pedir que el Cardenal no volviera jamaacutes a Tarragona que los que eacutel mismo habiacutea proporcionado y probaban su falta de identificacioacuten con los ideales poliacuteticos del Gobier-no Nacional30

El domingo 29 de enero de 1939 el embajador Yanguas fue recibido por el cardenal Pacelli En la conversacioacuten que mantuvieron el emba-jador le habloacute principalmente de la situacioacuten del cardenal Vidal Le dijo de forma categoacuterica que el Gobierno no podiacutea admitir ni que el Cardenal regresara a Tarragona ni que la administrase por medio de un delegado suyo Pacelli respondioacute que esta medida era muy grave en primer lugar porque se trataba de un arzobispo y priacutencipe de la Iglesia al que se le queriacutea impedir el ejercicio de su jurisdiccioacuten y en segundo lugar por la mala impresioacuten que esto produciriacutea en la opinioacuten puacuteblica mundial La respuesta del embajador fue que el Gobierno no temiacutea a la opinioacuten puacuteblica porque los hechos que justificaban plenamente su medida estaacuten muy documentados Por otra parte lo justificoacute diciendo que tambieacuten el cardenal Segura se habiacutea visto obligado a renunciar a su archidioacutecesis Pacelli respondioacute argumentando que aquello habiacutea sido llevado a cabo por un Gobierno hostil a la Iglesia mientras que ahora el Gobierno Na-cional se proclamaba catoacutelico El embajador replicoacute que la renuncia de Segura se hizo con intervencioacuten de la Santa Sede a lo que Pacelli respon-dioacute que Segura regresoacute a Toledo con el pleno consentimiento de la Santa Sede pero que fue expulsado despueacutes por el Gobierno republicano por la fuerza y soacutelo entonces la Santa Sede se vio obligada a proveer a la ad-

29 Epistolario 707-70930 Veacutease Apunte de la Secretariacutea de Estado del 9 de octubre de 1937 in AAEESS Spag-

na 908 fasc 316 f 33

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ministracioacuten de la dioacutecesis En cambio en aquel momento un Gobierno catoacutelico impediacutea el ejercicio de la jurisdiccioacuten y el regreso de un cardenal arzobispo a su sede Pacelli anotoacute en su apunte que no habiacutea resultado posible convencer al embajador porque habiacutea recibido instrucciones pe-rentorias de su Gobierno Por ello laquono me ha quedado maacutes remedio que renovar al embajador la expresioacuten de la extrema gravedad de semejante peticioacuten y que la cosa seriacutea estudiada para llegar posiblemente a una so-lucioacuten satisfactoriaraquo31

El mieacutercoles 8 de febrero de 1939 Yanguas se entrevistoacute nuevamente con Pacelli y despueacutes de haberle narrado algunos episodios de los horro-res cometidos por los republicanos en Cataluntildea le habloacute otra vez de la cuestioacuten del cardenal de Tarragona Pacelli le repitioacute cuanto ya le habiacutea dicho anteriormente que la Santa Sede no podriacutea consentir que le fuera impedida la jurisdiccioacuten eclesiaacutestica a un arzobispo y priacutencipe de la Igle-sia sin alguacuten motivo canoacutenico y defendioacute la conducta de Vidal valieacuten-dose del pro-memoria que le habiacutea hecho llegar el canoacutenigo Viladrich El embajador respondioacute diciendo laquoEn cualquier caso no hay esperanza alguna de que el Cardenal pueda regresar y si por hipoacutetesis el Gobierno le permitiese el regreso la opinioacuten puacuteblica no lo tolerariacutea y la dioacutecesis quedariacutea sin gobiernoraquo32

Don Carmelo por encargo de Pacelli visitoacute a Vidal en la Cartuja de Farneta y le refirioacute todo lo dicho anteriormente El Cardenal pidioacute que se hiciera un expediente o proceso para que pudiera defenderse porque se trataba de su buen nombre y dignidad porque ademaacutes se veriacutea que en todo este tiempo cuanto eacutel habiacutea hecho por la Espantildea Nacional primero haciendo que su sobrino mayor saliera de la Espantildea roja y se presentara enseguida para alistarse entre las tropas de Franco que ademaacutes a cuantos joacutevenes se le habiacutean presentado para pedirle consejo les habiacutea dicho que deberiacutean marcharse enseguida para luchar en favor de los nacionales que en su misma casa y familia se habiacutea hecho todo lo posible para defender y ayudar a los sacerdotes y religiosas durante los antildeos de revolucioacuten y de persecucioacuten que si eacutel mismo habiacutea estado fuera de Espantildea durante ese tiempo habiacutea sido exclusivamente porque asiacute podiacutea trabajar desde fuera en favor de los sacerdotes de su dioacutecesis que estaban sufriendo en las caacuterceles y en grave peligro de ser asesinados que por esto mismo y por

31 AAEESS Stati Ecclesiastici posiz 340b fasc 364 f 13232 Ibid f 133

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no hacer dantildeo a la Espantildea Nacional no se habiacutea marchado a Francia a pesar de las varias invitaciones que le habiacutean hecho en este sentido que por estas mismas consideraciones nunca quiso tampoco acceder a las indicaciones recibidas para que volviera a su dioacutecesis de Tarragona con la promesa de que le dejariacutean en libertad para actuar Por todo esto creiacutea que si Franco hubiera sabido cuanto eacutel habiacutea hecho podriacutea cambiar de parecer en este asunto

Blay le indicoacute que no se trataba de una cuestioacuten de estricto derecho sino de una situacioacuten de hecho que desgraciadamente de momento le impediacutea actuar por siacute o por delegados suyos en favor de su dioacutecesis por una imposicioacuten del Gobierno que no cederiacutea faacutecilmente

Vidal pidioacute que la Santa Sede defendiera sus derechos para el libre ejercicio de su jurisdiccioacuten cosa que ya hemos visto Pacelli hizo Pero por el momento con la mayor pena habiacutea que considerar que dada la actitud tomada por el Gobierno Nacional no se veiacutea otra solucioacuten que el nombramiento de un Administrador apostoacutelico ad nutum Sanctae Sedis Vidal declaroacute laquoque desde luego si el Santo Padre por el contrario piensa que dada la actual situacioacuten de las cosas no hay otro modo de resolverla que con el nombramiento de un Administrador apostoacutelico eacutel dispuesto siempre como hijo sumiso estaacute preparado a aceptar la menor indicacioacuten del Vicario de Jesucristoraquo33

La muerte de Piacuteo XI el 10 de febrero de 1939 supuso una paralizacioacuten de la ofensiva del Gobierno contra el cardenal Vidal si bien la Santa Sede tratoacute de defenderlo hasta donde pudo al mismo tiempo que el nuncio Cicognani presionoacute con el objetivo de que el purpurado regresara a la sede tarraconense Sin embargo de nada sirvieron esas presiones Por esta razoacuten el nuevo papa Piacuteo XII (elegido el 2 de marzo de 1939) tuvo que afrontar personalmente el caso despueacutes de un intercambio de cartas con Franco que llevaron tambieacuten a un nuevo fracaso porque el general no cedioacute El nuevo Papa defendioacute al Cardenal y le mantuvo el tiacutetulo de arzobispo de Tarragona

Vidal y Barraquer murioacute en la Cartuja de la Valsainte (Suiza) el 13 de septiembre de 1943

33 Carta de Blay a Pacelli Roma 5 febrero 1939 Veacutease en el documento 4 del apeacutendice

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APEacuteNDICEcuAtro iMportAntes docuMentos de don cArMelo blAy

DoCuMento 1 Carta de Blay al general Goacutemez-Jordana

Sobre las dificultades econoacutemicas del Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma34

Burgos 19 agosto 1937

Excelentiacutesimo SentildeorGeneral Goacutemez JordanaPresidente de la Junta Teacutecnica del Estado

Excelentiacutesimo Sentildeor

El infrascripto en nombre y representacioacuten del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma despueacutes de haber hablado con el Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sr Cardenal Primado de Espantildea Patrono del mismo Colegio a Vuestra Excelencia expone

Que atendidas las circunstancias del glorioso movimiento que para bien de la amadiacutesima Espantildea se ha producido el Colegio Espantildeol de Roma se encuentra en condiciones difiacuteciles para continuar su importante obra educadora para la formacioacuten de los sacerdotes que han de trabajar en provecho de las almas y de la misma patria espantildeola Estas dificultades provienen especialmente porque las fundaciones de las becas en favor de los joacutevenes estudiantes radican en las diversas curias diocesanas espantildeolas

Por esto seriacutea de desear se encontrara alguacuten modo o manera de que pudiera ob-tenerse que las rentas de dichas fundaciones fueran remitidas a la administracioacuten del Colegio para que este pudiera continuar su objeto con la brillantez provecho y honor como para gloria de Espantildea lo ha hecho hasta el presente

Dadas las prudentes y previsoras disposiciones que el Gobierno Nacional para bien de la patria ha dado y por lo tanto la dificultad para la salida del dinero espantildeol podriacutea resolverse esta dificultad puesto que se trata de dinero para ali-mentos de joacutevenes espantildeoles que se educan en Roma para despueacutes trabajar para bien de la Iglesia espantildeola pudiera obtenerse que la administracioacuten del Colegio

34 ASV Arch Nunz Madrid 971 ff 362-362v copia mecanografiada

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entregara al Estado Espantildeol las pesetas de que pudiera disponer como renta de las fundaciones de la becas y que el mismo Estado por conducto de la Embajada de Espantildea en Italia pudiera dar la correspondiente cantidad en moneda italiana sin necesidad de la salida de nuestra divisa espantildeola del territorio nacional

Con la esperanza de que Vuestra Excelencia con su elevado criterio podraacute interesarse cerca del glorioso Caudillo que para la grandeza de la patria ha suscitado el Sentildeor en medio de nosotros para que no se interrumpa la vida de una institucioacuten tan benemeacuterita de la Iglesia espantildeola aprovecho la ocasioacuten para agradecerle sus bondades quedando de Vuestra Excelencia afectiacutesimo seguro servidor

Carmelo Blay

[PS] La suma de liras que se necesitariacutea seriacutea de unas 25000 (veinticin-co mil) mensuales aproximadamente El Colegio podriacutea recibir dicha cantidad contra las pesetas correspondientes bien fuera por conducto de la Embajada de Espantildea en Italia o bien por otro conducto que la Junta Teacutecnica del Estado creyera conveniente

DoCuMento CoMpleMentario

Carta de Blay a la Comisioacuten de Cambios35

Burgos (Seminario de San Joseacute)

21 de agosto de 1937A la Comisioacuten de Cambios - Burgos

El que suscribe en nombre y representacioacuten del Pontificio Colegio Espantildeol de Roma despueacutes de hablar sobre este asunto con el Eminentiacutesimo y Reverendiacute-simo sentildeor cardenal Gomaacute y Tomaacutes Arzobispo de Toledo Primado de Espantildea Patrono del mismo Colegio expone

1ordm Que en Roma existe desde hace cerca de 50 antildeos el Pontificio Colegio Espantildeol destinado a la formacioacuten de los joacutevenes maacutes escogidos de las diferentes dioacutecesis de Espantildea que enviados allaacute por sus propios obispos se preparan para el ministerio de las almas en aquel Centro del catolicismo con grande provecho para los mismos joacutevenes y utilidad de las dioacutecesis espantildeolas como lo prueba el gran nuacutemero de obispos salidos de dicho centro y que hoy gobiernan no pocas dioacutecesis de Espantildea

35 ASV Arch Nunz Madrid 971 ff 363-363v copia mecanografiada

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2ordm Que en un centro de tanta importancia para la educacioacuten eclesiaacutestica y donde existen quizaacute maacutes de sesenta colegios internacionales como el nuestro de que se trata pertenecientes a otras tantas naciones es consolador poder decir sin que sea vanagloria ni presuncioacuten por nuestra parte que gracias al Sor y al esfuerzo y trabajo de los alumnos el Colegio Espantildeol ocupa uno de los prime-ros lugares por no decir el primero tanto en la formacioacuten espiritual y piadosa como por la intelectual y cientiacutefica de los mismos siendo el Colegio tenido en grande estima y consideracioacuten de las autoridades eclesiaacutesticas y cientiacuteficas de la ciudad de Roma

3ordm Que las fundaciones de las becas para el sostenimiento de estos colegia-les espantildeoles en Roma radican en las cajas de las diferentes dioacutecesis de Espa-ntildea las cuales seguacuten las condiciones de las mismas fundaciones han de enviar a la administracioacuten del Colegio las rentas de las mismas Por lo tanto el Cole-gio vive exclusivamente de dichas rentas sin que tenga otros ingresos para su manutencioacuten

4ordm Desde el principio del glorioso movimiento salvador de la patria y dadas las sabias y prudentes disposiciones del Gobierno Nacional el Colegio no ha recibido las rentas de las fundaciones por las dificultades de la salida del dinero espantildeol

5ordm Como se trata de dinero para la sustentacioacuten de los joacutevenes espantildeoles que se educan en Roma como queda indicado con tanto provecho y bien de la Iglesia espantildeola se deseariacutea poder obtener que la administracioacuten del Colegio pu-diera recibir a traveacutes de la Comisioacuten de Cambios la divisas necesarias Para esto la misma administracioacuten del Colegio podriacutea entregar aquiacute las pesetas y recibir en Roma las liras correspondientes

6ordm La suma de liras que se necesitariacutea seriacutea de unas 25000 (veinticinco mil) mensuales aproximadamente El Colegio podriacutea recibir dicha cantidad contra las pesetas correspondientes bien fuera por conducto de la Embajada de Es-pantildea en Italia o bien por otro conducto que la Comisioacuten de Cambios creyera conveniente

7ordm Confiando que esa Comisioacuten de Cambios con su elevado criterio podraacute interesarse por este importante asunto del Pontificio Colegio Espantildeol en Roma que de otra manera tendriacutea que interrumpir su beneacutefica y benemeacuterita obra cerca del glorioso Caudillo que para bien y grandeza de Espantildea el Sentildeor ha suscitado en medio de nosotros obra por otra parte de tanto honor para la Iglesia espantildeola y para la misma patria aprovecho la ocasioacuten para ofrecerme affmo ss

Carmelo Blay

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DoCuMento 2 Carta de Blay a Pacelli

Comunica algunas noticias sobre la situacioacuten espantildeola y la actitud del Gobierno Nacional contra el obispo Muacutegica y el cardenal Vidal 36

Burgos 23 agosto 1937

Pontificio Colegio Espantildeol de San JoseacutePalazzo Altemps - Roma 11Eminentiacutesimo y ReverendiacutesimoSentildeor cardenal Eugenio PacelliSecretario de Estado de Su Santidad

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor

Con la mayor veneracioacuten y profundo respeto me dirijo a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima para ofrecerle mis maacutes respetuosos obsequios desde esta amadiacute-sima Espantildea donde llegueacute hace unos diacuteas

No puede imaginar Vuestra Eminencia Reverendiacutesima la gratiacutesima impre-sioacuten que se recibe al llegar a este paiacutes y recorrer algunos pueblos y ciudades de la Espantildea Nacional por el orden maravilloso que reina en todas partes de tal manera que no se nota se encuentre esta parte de Espantildea en una guerra que tantos dantildeos y males ha causado Es realmente admirable cuanto puede observarse

He podido visitar en San Sebastiaacuten a algunas de las autoridades de aquella ciudad encontrando en todos la mejor buena disposicioacuten y respeto para cuanto se refiere a las cosas de la Religioacuten y de la Yglesia (sic) Es muy grande el fervor y la piedad de las autoridades y del pueblo que se manifiesta en todos los actos del culto Precisamente en estos diacuteas con motivo de la festividad de la Asuncioacuten de la Virgen Santiacutesima han sido muy grandes estas manifestaciones de piedad en todos los pueblos especialmente en San Sebastiaacuten Bilbao y aquiacute en Burgos que son las poblaciones que he visto hasta ahora se han hecho grandes fiestas en honor de la Santiacutesima Virgen tomando parte todas las autoridades con grande ejemplo de los fieles que han llenado las iglesias con numerosas y fervorosas comuniones generales No dudo de que S E Mons Antoniutti habraacute quedado edificado por cuanto ha visto en Bilbao el diacutea de la Virgen Santiacutesima

36 AAEESS Spagna 892 fasc 278 ff 15-18 original mecanografiada

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En esta ciudad de Burgos he podido tener el honor de visitar a algunos de los miembros de la Junta Teacutecnica del Estado (Gobierno Nacional) y en todos he podido observar las mejores disposiciones para cuanto se refiere a la Religioacuten y a la Yglesia El Presidente de la Junta Teacutecnica general Goacutemez Jordana me ha hecho magniacutefica impresioacuten por su equanimidad (sic) y prudencia por su piedad y devocioacuten a la Santa Sede manifestando en la conversacioacuten grande respeto y diciendo que aunque en Espantildea se lamentaba la actitud que se ha tenido con respecto al Gobierno del Generaliacutesimo Franco y a la misma Espantildea Nacional se comprende que la Santa Sede debe haber tenido sus razones y motivos para esta actitud Por otro lado ven con gusto el paso dado por la Santa Sede que confiacutean sea el principio de otros maacutes importantes

No debo dejar de manifestar a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima que en general se oyen respetuosos lamentos de la actitud de la Santa Sede creyendo que no ha comprendido bien el principio y origen de esta guerra que no ha tenido otros motivos que religiosos y patrioacuteticos es decir para salvar la Religioacuten y la Patria Una y otra estaban al borde del abismo en este querido paiacutes de tradicioacuten eminentemente catoacutelica Es consolador el oiacuter aneacutecdotas y casos de muchiacutesimos que han abandonado todo cuanto teniacutean familia hijos hacienda etc para com-batir a los enemigos de la Religioacuten Por esto dicen no se comprende la prudente conducta del Vaticano Es lo primero que todos dicen al hablar de Roma

No he tenido todaviacutea el honor de poder ver al Generaliacutesimo Franco pero confiacuteo puedo tenerlo uno de estos diacuteas porque el general Jordana presidente de la Junta Teacutecnica me dijo que eacutel mismo se encargariacutea de obtener la audiencia para miacute aunque es difiacutecil porque con motivo del movimiento contra Santander estaba el Generaliacutesimo ocupado en el frente de batalla

Una de las cuestiones maacutes espinosas y graves que sin duda se ha de presentar y se ha presentado es la del clero y aun del prelado de Vitoria Es muy general la idea de que es imposible pueda regresar a la dioacutecesis Es muy grande la reaccioacuten contra dicho prelado al que con razoacuten o sin ella consideran y tratan como uno de los mayores culpables de cuanto ha sucedido en Vizcaya Ya VER tendraacute noticias maacutes autorizadas que las miacuteas sobre cuanto ha pasado y pasa todaviacutea con parte del clero de Vizcaya y la grandiacutesima prevencioacuten que hay contra los que olvidaacutendose de su misioacuten de paz han sido causa de tanta ruina y desolacioacuten Seguramente que muchos sacerdotes y religiosos tendraacuten que salir del territorio de la dioacutecesis Al prelado le seraacute muy difiacutecil poder volver a la misma Ademaacutes su misioacuten pastoral no seriacutea provechosa por lo mal dispuestos que estaacuten en ge-neral contra eacutel

Tambieacuten para el diacutea de mantildeana puede ocurrir algo parecido con el Emo y Rvmo Cardenal Arzobispo de Tarragona Hay en esta Espantildea Nacional una gran prevencioacuten contra este Emo Prelado Precisamente en la misma Oficina de la frontera espantildeola mientras se despachaba la documentacioacuten hablando ama-blemente con los jefes encargados de dicha Oficina incidentalmente salioacute en la

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conversacioacuten el nombre del cardenal Vidal y Barraquer y enseguida uno de los alliacute presentes dijo laquoSuponemos que dicho sentildeor no vendraacute por Espantildearaquo y al contestarle que seguramente por ahora no creiacutea que viniera el mismo que habiacutea hablado dijo laquoSuponemos que ni ahora ni tampoco despueacutesraquo

Es tanto lo que Espantildea ha sufrido Eminentiacutesimo Sentildeor por estas divisio-nes de Vizcaya y de Cataluntildea que ahora se siente una muy grande reaccioacuten para acabar con todo esto y fortificar la unidad de la patria Ciertamente que si despueacutes de la sangre derramada despueacutes de tantas y tan in numerables viacutectimas inocentes como esta tragedia ha causado en la queridiacutesima Espantildea tuvieacuteramos que continuar con tantas luchas de pequentildeas regiones y divisiones intestinas no se hubiera obtenido gran cosa con tanto sacrificio Por esto se siente en todas partes y en todos tan grande reaccioacuten a cuanto signifique divisioacuten y partidismos dentro de la patria espantildeola

Como sin duda uno de los factores principales en estas divisiones ha sido el clero que olvidaacutendose de su misioacuten de paz y de amor ha trabajado por dividir y separar a los de las dos regiones del resto de Espantildea por esto la reaccioacuten viene contra el clero y los prelados que consideran en cierto modo culpables de no haber impedido que el clero hiciera tales campantildeas contra la unidad de la patria

Es una providencia el que ahora los hombres que estaacuten al frente de los nego-cios de la Espantildea Nacional sean en general de convicciones netamente catoacuteli-cas desde el Generaliacutesimo Franco hasta el Presidente de la Junta Teacutecnica del Estado y los mismos miembros de la dicha Junta Esto hace concebir esperanzas de que cuanto se refiere a la Religioacuten y a la Yglesia ha de encontrar en los mismos las mayores facilidades

Pudiera haber alguacuten temor en las masas en los diferentes grupos que forman la Falange Tradicionalista y de las JONS De los tradicionalistas hay que tener la seguridad de que estaacuten completamente con la Yglesia y que con grande entusias-mo han tomado las armas para defender a la Religioacuten De los que pudiera tenerse alguna prevencioacuten es de los Falangistas en cuyo grupo pueden haberse infiltrado elementos de pocas convicciones catoacutelicas pero tambieacuten entre los falangistas hay elementos de sentimientos verdaderamente cristianos en su mayor parte por pertenecer a familias sumamente cristianas Es de esperar que llegado el momento estos mismos comprenderaacuten que es necesario trabajar dentro de los sentimientos y conforme a las doctrinas de la Yglesia para el mayor bien de la sociedad y del pueblo

Aprovecho esta ocasioacuten para renovarle los sentimientos de mi profunda ve-neracioacuten mientras besando devotamente la Sagrada puacuterpura me profeso de Vues-tra Eminencia Reverendiacutesima devotiacutesimo servidor

Sac Carmelo Blay

ViCente CaacuterCel ortiacute

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DoCuMento 3 Carta de Blay a Pacelli

Informa sobre las opiniones de las esferas gubernativas que lamentan respetuosamente la manera como la Santa Sede ha tratado al Gobierno Nacional desde que comenzoacute el movimiento militar y son contrarias a la actitud separatista del clero vasco sobre la piedad e intensa religiosi-dad personal del general Franco y sobre la formacioacuten religiosa de los falangistas37

Biarritz 20 septiembre 1937

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo SentildeorCardenal Eugenio PacelliSecretario de Estado de Su SantidadCiudad del Vaticano

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor

Pensaba yo encontrarme para estas fechas en Roma pero una pequentildea indis-posicioacuten me ha hecho retrasar mi regreso por esto me permito escribir a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima despueacutes de haber estado en Salamanca y en algunos otros lugares de la Espantildea Nacional y ponerme en contacto con los miembros del Gabinete Diplomaacutetico del Jefe del Estado Espantildeol y con personas que estaacuten y viven muy cerca del mismo Jefe del Estado

Como deciacutea a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima todos lamentan respetuo-samente del modo como la Santa Sede ha tratado al Gobierno Nacional desde que comenzoacute el movimiento salvador de Espantildea No comprenden dicen la incomprensioacuten de dicho movimiento que en primer lugar teniacutea por objeto de-fender a la Religioacuten y a la Yglesia de la barbarie marxista y comunista Por esto ahora se ha recibido con grande satisfaccioacuten en todos los sectores de la Espantildea Nacional la paternal bondad del Santo Padre al nombrar como Encargado de Negocios de la Santa Sede a SE Mons Antoniutti

Lo que les ha preocupado no poco es cuanto seguacuten ellos ha hecho la Santa Sede por los rojos-separatistas vascos que tanto dantildeo han hecho a la misma Re-

37 AAEESS Spagna 896 fasc 297 ff 42-44 original mecanografiada

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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ligioacuten en su paiacutes antes tan catoacutelico y respetuoso con la Yglesia A este respecto consideraban la venida de Mons Antoniutti con el pretexto de atender a los nintildeos vacos maacutes bien como para proteger a los mismos vascos en el momento en que han de rendir cuentas a la justicia espantildeola por los desastres causados a su propio paiacutes y a toda Espantildea como si se temiera que los tribunales espantildeoles se excedieran en su misioacuten de ejercer la justicia Por esto creen que tuvo prisa en ir a Bilbao instalaacutendose alliacute como en su propia sede

En cuanto a la situacioacuten de los elementos religiosos que tanto dantildeo han causa-do durante esta guerra es decir de los religiosos de varias Oacuterdenes y Congrega-ciones religiosas que olvidando su misioacuten de paz y de la propia santificacioacuten se han dedicado por espiacuteritu de partido a predicar la guerra de exterminio parece que muy poco o nada han cambiado Seriacutea conveniente que en los conventos de Vizcaya se proveyera para que fueran tenidos por religiosos que no hubieran hecho poliacutetica separatista y a ser posible que no fueran oriundos de dicha regioacuten trasladando a otras partes de Espantildea o bien a Misiones a los que maacutes se han distinguido por su actuacioacuten separatista Seguramente que una de las causas de cuanto ha ocurrido en Vizcaya con los religiosos y aun con los de vida maacutes aus-tera como Carmelitas Pasionistas Capuchinos y no pocos Jesuitas fue debido a la formacioacuten de Provincias religiosas exclusivamente dentro de la misma regioacuten sin contacto alguno con las casas de otras regiones Asiacute ha resultado que en todas estas casas y Provincias los elementos que han formado las comunidades eran en su mayor parte separatistas Precisamente me deciacutea un religioso carmelita que ahora ocupa un puesto en el gobierno de la Orden en el Corso drsquoItalia en Roma38 que eacutel consideraba que entre los religiosos de su Orden de la Provincia de Vizcaya por lo menos el 90 eran nacionalistas es decir de ideas separatis-tas Quizaacutes los superiores mayores de las diferentes Oacuterdenes religiosas tienen no poca responsabilidad de cuanto ha sucedido porque no han comprendido o no han podido poner remedio oportunamente a tantos males como han causado los que abandonando el mundo para buscar su propia santificacioacuten y la santificacioacuten de las almas han perdido el tiempo haciendo poliacutetica de odios y de divisioacuten entre los mismos fieles

Al recorrer los pueblos destrozados de Vizcaya y preguntar a los sencillos aldeanos por queacute se habiacutean unido a los enemigos de la Religioacuten es triste oiacuter decir que los sacerdotes y religiosos les habiacutean dicho que esto era lo mejor y por esto habiacutean obedecido iexclQueacute dolor

En general los sacerdotes de la dioacutecesis de Vitoria de ideas separatistas no han cambiado nada Parece que estaacuten envenenados con dichas ideas y no es extrantildeo que el Gobierno Nacional esteacute preocupado por esto Era de absoluta necesidad el nombramiento de un Administrador apostoacutelico como lo ha hecho

38 Se refiere al P Silverio de Santa Teresa OCD

ViCente CaacuterCel ortiacute

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el Santo Padre en la persona del Obispo auxiliar de Valencia para que cesando la interinidad en que viviacutea dicha dioacutecesis se pudiera trabajar en tantos problemas difiacuteciles y complicados Dicho nombramiento ha sido muy bien recibido por todos y aun por el Gobierno Nacional que ve el paternal intereacutes del Santo Padre por esta querida Espantildea

El nombramiento del Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo sentildeor cardenal Segura para la importantiacutesima dioacutecesis de Sevilla ha causado profunda emocioacuten y entu-siasmo en los catoacutelicos espantildeoles y en las esferas del Gobierno porque con esto ven una nueva muestra de amor del Papa a Espantildea y sobre todo la reparacioacuten de un gran desacato cometido por el gobierno revolucionario contra el que enton-ces ocupaba la Sede primada de Toledo39

He tenido ocasioacuten como indico a Vuestra Eminencia Reverendiacutesima de te-ner contacto con personas que estaacuten muy cerca del Jefe del Estado y viven con eacutel mismo Dichas personas han hablado con grande elogio y entusiasmo del mismo Jefe del Estado especialmente en cuanto se refiere su piedad y respeto a la Yglesia de su equanimidad (sic) en tratar y conocer los maacutes difiacuteciles asuntos De su piedad me deciacutea el capellaacuten del Cuartel general40 que vive en la propia casa y como de familia con el Generaliacutesimo basta decir que ni un solo diacutea se retira a descansar sin antes haber rezado en familia el Santo Rosario aunque esto sea a las cuatro o cinco de la madrugada al regresar de alguna visita a los frentes de batalla Lo mismo que el querer tener en el Cuartel general la santa misa todos los diacuteas

39 En plena Guerra Civil Segura tras haber presidido el funeral del arzobispo de Se-villa cardenal Ilundaacutein fallecido el 10 de agosto de1937 manifestoacute tanto a Piacuteo XI como al cardenal Pacelli deseos de regresar a Espantildea desde su destierro en Roma pues consideroacute llegado el momento propicio para regresar a una sede metropolitana espantildeola de prestigio y de tradicioacuten cardenalicia como era Sevilla y asiacute lo dijo al cardenal Pacelli en carta escrita desde Olaz de Loyola (Guipuacutezcoa) el 17 de agosto de 1937 en respuesta a otra suya en la que le comentaba que el Papa estaba dispuesto a nombrarle para una dioacutecesis espantildeola laquoarri-vato il momento per la vacanza della sede convenienteraquo A peticioacuten de Pacelli el delegado apostoacutelico en la Espantildea nacional Hildebrando Antoniutti dijo que el ambiente es favorable el regreso del cardenal Lo mismo pensaba Gomaacute que veiacutea en este nombramiento una so-lucioacuten excelente a la situacioacuten del cardenal (cfr mi artiacuteculo laquoNombramientos episcopales en Espantildea y estado de algunas dioacutecesis catalanas durante la Guerra Civil [1936-1939]raquo in Analecta Sacra Tarraconensia 88 [2014] 597-933)

40 Joseacute Mariacutea Bulart Ferraacutendiz (San Andreacutes de Palomar Barcelona 1900 - Madrid 1981) hizo los estudios en el seminario de Barcelona y fue ordenado sacerdote en mayo de 1925 Era secretario particular del obispo de Salamanca Enrique Pla y Deniel cuando el 4 de octubre de 1936 pasoacute al servicio de Franco al cederle el obispo el palacio episcopal como sede del Cuar-tel general que convirtioacute durante casi toda la guerra en su puesto de mando Fue su confesor hasta su muerte y capellaacuten de la Casa Civil y le atendioacute a eacutel a toda su familia y a las personas maacutes allegadas en las funciones y ceremonias religiosas Tambieacuten fue responsable de la cura pastoral del palacio del Pardo Se incardinoacute en la archidioacutecesis de Madrid en 1957 y desem-pentildeoacute en ella los ministerios de rector de la Iglesia del Buen Suceso desde 1942 y paacuterroco de la parroquia del Corpus Christi de 1953 a 1981 (Cf mi Diccionario de Sacerdotes diocesanos espantildeoles del siglo XX BAC Madrid 2006 265)

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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Al decir yo hace unos diacuteas al Jefe del Gabinete Diplomaacutetico sentildeor Sangroacute-niz que seguramente el enviado especial del Santo Padre para el asunto de los nintildeos vascos podriacutea informar muy bien de cuanto sucede en la Espantildea Nacional me deciacutea que nuestros prelados tambieacuten habraacuten informado y que bien podiacutean atender en el Vaticano a dichas informaciones Con este motivo me deciacutea que sin duda el objeto de enviar a Espantildea a Mons Antoniutti deberiacutea haber sido otro por parte de la Santa Sede como queda indicado maacutes arriba en esta carta por-que solo para esto no era ne cesario puesto que el Gobierno Nacional se estaba ocupando de dichos nintildeos y sobre todo estaba dispuesto a recibirles y asistirles apenas llegaran a Espantildea como atiende y asiste a los pueblos y ciudades que van ocupando las fuerzas nacionales donde quiera que llegan estas por conducto de la Intendencia Militar como lo prueba lo que se hizo en Bilbao y lo que uacuteltima-mente se ha hecho en Santander y como se hace con los numerosos evadidos de la zona roja que diariamente vienen a la Espantildea Nacional buscando la paz y la tranquilidad que en la misma se respira

Indudablemente que una de las mayores preocupaciones del movimiento nacional es lo que pueda resucitar de la Falange Espantildeola mejor dicho de los falangistas A este propoacutesito me deciacutea el sentildeor Serrano Suacutentildeer cuntildeado del Gene-raliacutesimo y que vive con eacutel mismo y seguacuten me indican atiende mucho a sus con-sejos que se desea vivamente organizar y ya de esto se ocupan con el Cardenal primado y con el obispo auxiliar de Toledo [Gregorio Modrego] la asistencia religiosa en las organizaciones falangistas de tal manera que en todas puedan encontrar los miembros dicha asistencia religiosa algo parecido como se ha hecho en Italia para los balilas y avanguardistas41 etc Es cierto que este es un problema importantiacutesimo

Suplicando dispense la molestia de este escrito beso con todo respeto la Sagrada puacuterpura quedando de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima devotiacutesimo servidor

Sac Carmelo Blay

41 Los laquobalillasraquo eran nintildeos entre 8 y 14 antildeos y los avanguarditas eran joacutevenes entre 14 y 18 Se trataban de dos subestructuras de la Opera Nazionale Balilla organizacioacuten juvenil de la Italia fascista que funcionoacute como adicioacuten a la educacioacuten escolar entre 1926 y 1937 antildeo en el que fue fusionada con la Gioventugrave Italiana del Littorio una seccioacuten juvenil del Partido Nacional Fascista

ViCente CaacuterCel ortiacute

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DoCuMento 4 Carta de Blay a Pacelli

Informa sobre las gestiones hechas personalmente para conseguir que el cardenal Vidal renuncie al gobierno de la archidioacutecesis de Tarragona42

Roma 5 febrero 1939

Pontificio Colegio Espantildeol de San JoseacutePalazzo AltempsRoma - 11

A Su Eminencia Reverendiacutesimael Sentildeor Cardenal Eugenio PacelliSecretario de Estado de Su SantidadCiudad del Vaticano

Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo Sentildeor

Cumpliendo con la mayor buena voluntad las indicaciones de Vuestra Emi-nencia Reverendiacutesima le escribo el resultado de la misioacuten que amablemente quiso encargarme ante el Eminentiacutesimo y Reverendiacutesimo sentildeor cardenal Vidal y Barraquer arzobispo de Tarragona Procurareacute hacerlo con la mayor fidelidad

El encargo aunque honroso para miacute era al mismo tiempo muy penoso por la persona y por el asunto de que se trata

Apenas llegado a la Cartuja de Farneta residencia del citado Emo y Revmo Sr Cardenal expuse con el mayor cuidado posible la misioacuten que me llevaba dicieacutendole cuanto VE Rvma me habiacutea encargado por indicacioacuten del Santo Padre esto es

1ordm Cuanto el Sentildeor Embajador de Espantildea en nombre del Gobierno Nacio-nal le habiacutea propuesto acerca de que el Gobierno estaba resuelto a no permitir que volviera el sentildeor cardenal Vidal y Barraquer arzobispo de Tarragona a Es-pantildea y por lo tanto a su dioacutecesis y no soacutelo esto sino que tampoco permitiriacutean que gobernase aquel arzobispado ninguno que fuera nombrado por el mismo y que estuviera a las ordenes suyas Que dada esta situacioacuten de hecho para atender a las necesidades de las almas especialmente en estos primeros tiempos

42 AAEESS Spagna 949 fasc 352 ff 47-50 original mecanografiada

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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cuando seraacute necesario organizarlo todo para la restauracioacuten de tanta ruina el Santo Padre pensariacutea poderlo hacer por medio de un Administrador apostoacutelico que podriacutea nombrarse ad nutum Sanctae Sedis

2ordm Le hice presente cuanto Vuestra Eminencia Reverendiacutesima habiacutea mani-festado al propio Sr Embajador indicaacutendole que se trataba de una cosa muy gra-ve porque no era soacutelo el impedir el libre ejercicio de su jurisdiccioacuten a un obispo cualquiera sino a un obispo priacutencipe de la Yglesia (sic) Que ademaacutes que esta actitud del Gobierno Nacional de Espantildea causariacutea grande admiracioacuten en todo el mundo catoacutelico en desprestigio de la misma Espantildea

3ordm Al ejemplo puesto por el Sr Embajador acerca de los precedentes de la expulsioacuten del Emo y Rvmo Sr cardenal Segura se le habiacutea hecho presente por Vuestra Eminencia que el caso era muy diferente al actual porque en el del cardenal Segura cuando salioacute la primera vez de Espantildea al hacerle la menor in-dicacioacuten de parte de la Santa Sede de que volviera a su dioacutecesis lo hizo ensegui-da siendo expulsado entonces manu militari por el Gobierno de la Repuacuteblica es decir por un Gobierno enemigo de la Yglesia y perseguidor de todo lo que significaba algo de Religioacuten etc Pero ahora se trata de la actuacioacuten contra un Cardenal no ya por un Gobierno enemigo de la Yglesia sino por un Gobierno catoacutelico formado por catoacutelicos y que luchan por hacer volver a Espantildea a sus tradiciones catoacutelicas de siempre

Hice presente al mismo sentildeor cardenal Vidal y Barraquer que el Emo y Re-vdmo Sr cardenal Secretario de Estado de Su Santidad como era natural habiacutea hecho todo lo posible para hacer ver al Sr Embajador la gravedad de la actitud adoptada en este asunto por el Gobierno El embajador insistioacute en que esta era decisioacuten definitiva del Gobierno Que teniacutean en sus manos copias de alguacuten documento comprometedor para el cardenal Vidal por alguna concomitancia con los separatistas vascos aun antes de producirse el movimiento nacional contra el Gobierno de la Repuacuteblica y que naturalmente estariacutean dispuestos si fuera necesario para defender su actitud a la publicacioacuten de dicho documento o documentos

El sentildeor cardenal Vidal escuchoacute todas estas manifestaciones diciendo que desde luego eacutel deseariacutea que se hiciera un expediente o proceso para que pudiera defenderse porque se trata de su buen nombre y dignidad porque ademaacutes se veriacutea que en todo este tiempo cuanto eacutel ha hecho por la Espantildea Nacional pri-mero haciendo que su sobrino mayor saliera de la Espantildea roja y se presentara enseguida para alistarse entre las tropas del Generaliacutesimo Franco que ademaacutes a cuantos joacutevenes se le han presentado para pedirle consejo les ha dicho deberiacutean marcharse enseguida para luchar en favor de los nacionales que en su misma casa y familia se ha hecho todo lo posible para defender y ayudar a los sacerdotes y religiosas durante estos antildeos de revolucioacuten y de persecucioacuten que si eacutel mismo ha estado fuera de Espantildea durante este tiempo ha sido exclusivamente porque asiacute

ViCente CaacuterCel ortiacute

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podriacutea trabajar desde fuera en favor de los sacerdotes de su dioacutecesis que estaban sufriendo en las caacuterceles y en grave peligro de ser asesinados que por esto mis-mo y por no hacer dantildeo a la Espantildea Nacional no se habiacutea marchado a Francia a pesar de las varias invitaciones que le habiacutean hecho en este sentido que por estas mismas consideraciones nunca quiso tampoco acceder a las indicaciones recibidas para que volviera a su dioacutecesis de Tarragona con la promesa de que le dejariacutean en libertad para actuar Por todo esto creiacutea que si el Generaliacutesimo Franco supiera cuanto eacutel ha hecho podriacutea cambiar de parecer en este asunto

Me permitiacute indicarle que pensara que aquiacute no se trata de una cuestioacuten de estricto derecho sino de una situacioacuten de hecho que desgraciadamente de mo-mento le impide actuar por siacute o por delegados suyos en favor de las almas de su dioacutecesis por una imposicioacuten del Gobierno que no cederaacute faacutecilmente

Eacutel cree seguacuten me dijo que la Santa Sede deberiacutea dar la batalla para defender sus derechos para el libre ejercicio de su jurisdiccioacuten Puede tener la seguridad le contesteacute como me lo habiacutea indicado el mismo Sr cardenal Secretario de Es-tado de que este ha manifestado todo cuanto creiacutea necesario al Sentildeor Embajador para defender los derechos del Cardenal Arzobispo en el ejercicio de la libre jurisdiccioacuten en su dioacutecesis Por lo tanto por el momento con la mayor pena hay que considerar que dada la actitud tomada por el Gobierno Nacional no se veiacutea otra solucioacuten que la indicada del nombramiento de un Administrador apostoacutelico ad nutum Sanctae Sedis Creo le dije que con toda probabilidad se pensariacutea en persona investida de caraacutecter episcopal y de la misma Provincia Eclesiaacutestica si es posible

A pesar de insistir mucho en sus ideas de que se haga un expediente o proceso para que eacutel pudiera exponer todo lo que creyera conveniente para su defensa terminoacute la conversacioacuten diciendo que desde luego si el Santo Padre por el contrario piensa que dada la actual situacioacuten de las cosas no hay otro modo de resolverla que con el nombramiento de un Administrador apostoacutelico eacutel dispues-to siempre como hijo sumiso estaacute preparado a aceptar la menor indicacioacuten del Vicario de Jesucristo

Naturalmente insistiacutea podriacutea ser nombrado alguno de los que eacutel ya tiene alliacute como vicarios generales o alguna otra persona que fuera grata al mismo A la primera parte le dije que difiacutecilmente podriacutea ser nombrado en caso alguno de los ya nombrados por eacutel porque precisamente una de las cosas impuestas por el Gobierno es que no sea ninguno como delegado del mismo Carde nal Arzobispo

Luego ya en la conversacioacuten me habloacute de la situacioacuten suya en caso de nom-bramiento de un Administrador apostoacutelico porque aun quedando con el tiacutetulo de Arzobispo de Tarragona le quedariacutea solamente el tiacutetulo pero no la jurisdiccioacuten Por esto deciacutea que eacutel quedariacutea en una situacioacuten poco airosa y como recluido en la Cartuja Que pensaba no debiacutea quedar alliacute maacutes tiempo y que tampoco su situacioacuten econoacutemica estaba en condiciones de poder seguir en esta situacioacuten Es cosa le dije que podriacutea tratarse en un segundo teacutermino con la Santa Sede

el Colegio espantildeol Durante la guerra CiVil

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Terminamos la entrevista indicaacutendome que yo hiciera saber todo esto a Vues-tra Eminencia Reverendiacutesima y que eacutel escribiriacutea directamente al mismo Sr car-denal Secretario de Estado

Al tener el honor de comunicar cuanto queda dicho aprovecho la ocasioacuten para manifestar mi profunda veneracioacuten mientras besando devotamente la Sagrada puacuterpura quedo de Vuestra Eminencia Reverendiacutesima devotiacutesimo servidor

Sac Carmelo Blay

LA VIDA EN EL COLEGIO

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DATOS ESTADIacuteSTICOS DEL CURSO 2015-2016

Han formado parte de la comunidad del Colegio un total de 63 colegia-les distribuidos del siguiente modo

Seminaristas SacerdotesNuevos 2 24Licenciatura 2 39Doctorado 0 21Otros (Maacutester) 0 1Subtotales 2 61

El total de las dioacutecesis presentes es de 34 y naciones 5 distribuidas de la siguiente manera

Albacete 1 Oviedo 1Almeriacutea 1 Pamplona y Tudela 1Arzobispado Castrense 1 San Francisco Campeche (Meacutexico) 1Astorga 2 San Sebastiaacuten 1Burgos 1 Santiago de Chile (Chile) 1Cartagena 3 Segorbe-Castelloacuten 1Ciudad Real 2 Sevilla 7Coacuterdoba 3 Siguumlenza - Guadalajara 1Coria - Caacuteceres 1 Solsona 1El Callao (Peruacute) 1 Tenerife 2Madrid 1 Toledo 6Maacutelaga 2 Tui - Vigo 1Maacutelaga-Soataacute (Colombia) 1 Urgell 1Meacuterida - Badajoz 1 Valencia 7Ndola (Zambia) 2 Valladolid 1Orihuela - Alicante 2 Villa Mariacutea 1Ourense 1 Zaragoza 3

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la ViDa en el Colegio

En cuanto a las diferentes especialidades (23 en total) la distribucioacuten es la siguiente

Bienes Culturales 1 Sagrada Escritura 9Estudios Orientales 1 Sagrada Liturgia 3Derecho Canoacutenico 7 Sociologiacutea 1Doctrina Social 1 Filosofiacutea 4Teologiacutea Biacuteblica 3 Historia de la Iglesia 2Teologiacutea Dogmaacutetica 11 Matrimonio y Familia 3Teologiacutea Espiritual 4 Misionologiacutea 1Formacioacuten Sacerdotal 2 Muacutesica Sacra 1Teologiacutea Fundamental 1 Pastoral Juvenil 2Teologiacutea Moral 1 Patriacutestica 2Teologiacutea Pastoral 2 Sacramentaria 1

En cuanto a los centros de estudio (14) la distribucioacuten es la siguiente

Istituto Patristico laquoAugustinianumraquo 2Pontificia Facoltagrave Teologica laquoTeresianumraquo 1Pontificia Universitagrave della Santa Croce 3Pontificia Universitagrave Gregoriana 26Pontificia Universitagrave Lateranense 8Pontificia Universitagrave Santo Tommaso DrsquoAquino 1Pontificio Ateneo di SantrsquoAnselmo 4Pontificio Istituto Biblico 9Pontificio Istituto di Musica Sacra 1Pontificio Istituto Giovanni Paolo II 3Pontificio Istituto Orientale 1Universidad de Navarra 1Universidad de Valencia 1Universitagrave Pontificia Salesiana 2

Han salido del Colegio un total de 14 alumnos 9 concluyendo la for-macioacuten (1 doctor 7 licenciados 1 maacutester) y 4 sin concluirla (doctorandos que no defendieron la tesis) La variacioacuten numeacuterica de los uacuteltimos 5 antildeos ha oscilado entre los valores miacutenimo 57 y maacuteximo 90

Durante el curso fue ordenado presbiacutetero (en el mes de mayo) un diaacute-cono de la dioacutecesis de Orense

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2

ACONTECIMIENTOS MAacuteS DESTACADOS

El curso 2015-2016 ha comenzado con un equipo de direccioacuten parcial-mente renovado compuesto por el Rector Joseacute San Joseacute Prisco (nombra-do el 8 de abril de 2015 despueacutes de que el anterior Rector Mons Aacutengel Javier Peacuterez Pueyo fuera nombrado obispo de Barbastro) el Ecoacutenomo D Javier Malo Peacuterez que asumioacute tambieacuten las tareas de Vicerrector el Director espiritual D Argimiro Martiacuten Benito y el confesor y encargado del archivo D Lope Rubio Parrado

Colaboran directamente con el equipo de direccioacuten el profesor de la Universidad Pontificia Gregoriana Dario Vitali que ejerce la tarea de Di-rector de estudios y el Agente de Preces Santiago Luis de Vega Alonso Reside en el Colegio como Vicario para los sacerdotes valencianos en Roma D Vicente Caacutercel Ortiacute

Una de las novedades importantes del curso ha sido la creacioacuten de la Fundacioacuten Mater Clementissima para recaudar fondos con los que ayudar al sostenimiento del Colegio El martes 17 de noviembre aprovechando la visita del Rector y del Vicerrector a la Asamblea plenaria de la Con-ferencia Episcopal Espantildeola para informar sobre la marcha del Colegio se procedioacute a la constitucioacuten del Consejo de la Fundacioacuten notarialmente y posteriormente se registroacute en el Registro de entidades religiosas del Ministerio de Justicia de Espantildea La intencioacuten es invitar primeramente a todos los ex colegiales a que se inscriban en la asociacioacuten de antiguos alumnos y colaboren con la fundacioacuten

La otra novedad es la nueva imagen institucional Para ello se optoacute por adoptar un nuevo logotipo maacutes actualizado y faacutecilmente reconocible con la fachada del Colegio y la cruz de la capilla El color magenta es el que da unidad con el logo de la Conferencia Episcopal Espantildeola

El 2 de marzo se lanzoacute la nueva paacutegina Web La presentacioacuten oficial corrioacute a cargo de Ricardo Rossi representante de OPI (empresa italiana

la ViDa en el Colegio

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de servicios a entidades religiosas que ha sido la encargada del desarrollo del proyecto) A dicha presentacioacuten asistieron ademaacutes de los colegiales 5 periodistas espantildeoles de medios catoacutelicos de Roma (Zenit Radio Vatica-na Aciprensa Rome Reports) La nueva Web es muy completa y contiene informacioacuten actualizada sobre la vida del Colegio ademaacutes de acceso a varios servicios gratuitos Su direccioacuten wwwcolegioespanolorg

El curso se inicioacute el 1 de septiembre para los colegiales nuevos y el 1 de octubre para el resto La inauguracioacuten oficial fue el 9 de octubre con un encuentro de los colegiales con el equipo formativo en la sala de conferencias la misa de inauguracioacuten que presidioacute el Rector y la cena fraterna

Unos diacuteas antes (el 4 de octubre) habiacutea comenzado el Siacutenodo sobre la familia El 8 de diciembre iniciamos con toda la Iglesia el Antildeo jubilar de la Misericordia desde el que se orientaron la mayor parte de las acti-vidades del Colegio

Del 18 al 24 de enero volvioacute a celebrarse en las instalaciones del Cole-gio el II Curso de directores espirituales organizado por la Conferencia Episcopal Espantildeola Asimismo del 28 de marzo al 29 de abril tuvo lugar el XXIX Curso de actualizacioacuten sacerdotal

celebrAciones especiAles

El domingo 8 de noviembre celebramos la Fiesta de la dedicacioacuten de la capilla de San Joseacute familiarmente conocida como laquoFiesta del Reser-vadoraquo en su 50 aniversario A las 1200 comenzoacute la Eucaristiacutea solemne presidida por Mons Piero Marini Presidente del Pontificio Consejo para los Congresos eucariacutesticos acompantildeado por Mons Ignacio Carrasco de Paula Presidente de la Pontificia Academia para la Vida A las 1330 tuvi-mos la comida y a partir de las 1600 adoracioacuten al Santiacutesimo por turnos con diversos momentos preparados por los colegiales hasta las 2000 hora en la que con las Viacutesperas solemnes presididas por el Rector se concluyoacute la fiesta

Con motivo del Antildeo jubilar de la Misericordia los diacuteas 4 y 5 de marzo nos unimos a la celebracioacuten de las laquo24 horas para el Sentildeorraquo convocadas por el Papa para ese fin de semana En el Colegio se organizoacute un acto eucariacutestico de adoracioacuten nocturna que duroacute desde las 2200 horas del viernes hasta las 1000 horas del saacutebado con turnos que fueron cubiertos por los colegiales

aConteCiMientos Maacutes DestaCaDos

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El viernes 11 de marzo tuvimos una celebracioacuten penitencial como pre-paracioacuten a la peregrinacioacuten a la Puerta Santa que tendriacutea lugar el domingo 13 de marzo Ese diacutea a las 730 am tuvimos la celebracioacuten de la santa misa en la capilla de los huacutengaros en la cripta de la basiacutelica de San Pedro Luego hicimos el recorrido desde el Castel SantrsquoAngelo hasta la Puerta Santa y terminamos con el rezo del credo en el altar de la Basiacutelica

El viernes 3 de junio asistimos en la basiacutelica de San Pablo Extramuros al retiro dado por el papa Francisco con motivo del Jubileo de los sacer-dotes y al diacutea siguiente participamos en la misa jubilar con el Papa en la plaza de San Pedro

conferenciAs

Han sido diversas las conferencias tenidas en el Colegio durante el curso intentando abordar siempre temas de actualidad que son uacutetiles para una maacutes completa formacioacuten de los sacerdotes

Conferencia-coloquio sobre la Instruccioacuten pastoral aprobada en la CV Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Espantildeola titulada laquoIgle-sia servidora de los pobresraquo a cargo de Mons D Juan Joseacute Omella Obis-po de Calahorra y la Calzada-Logrontildeo Presidente de la Comisioacuten episco-pal de Pastoral Social (28 de octubre)

Mesa redonda al concluir el Siacutenodo de la familia Invitamos a dos profe-sores que estuvieron presentes como especialistas en el aula sinodal Joseacute Granados Vicepresidente del Instituto Juan Pablo II en Roma y miembro de los Disciacutepulos de los Corazones de Jesuacutes y Mariacutea (DCJM) y Manuel Arroba Conde claretiano y decano de la Facultad de Derecho Canoacutenico de la Universidad Pontificia Lateranense Ambos ofrecieron una visioacuten com-plementaria de lo acontecido en el aula y su opinioacuten sobre lo que podriacutea ser la proacutexima exhortacioacuten apostoacutelica del Papa (23 de noviembre)

Conferencia laquoDescubriendo a Santa Mariacutea de Guadaluperaquo a cargo del sacerdote mexicano Roberto Figueroa especialista en el tema (24 de febrero)

Conferencia de la presidente de la JOC internacional la francesa Ame-lie Peyrard que realizoacute una presentacioacuten de la misioacuten en el mundo actual de la Juventud Obrera Cristiana (16 de marzo)

Conferencia sobre laquoEl Islam en el momento presenteraquo impartida por el misionero P Diego Sarrioacute Cucarella Mafr secretario de estudios del Pontificio Istituto di Studi Arabi e drsquoIslamistica (12 de abril)

la ViDa en el Colegio

200

presentAciones de libros

Presentacioacuten de la nueva edicioacuten del leccionario de la misa a cargo de Manuel Fanjul Garciacutea Director general de Publicaciones de la CEE (mieacutercoles 2 de diciembre)

Presentacioacuten del libro de la BAC titulado laquoLoado seas mi Sentildeorraquo co-mentario a la enciacuteclica Laudato Sirsquo del papa Francisco Intervinieron el Presidente del Pontificio Consejo para el Diaacutelogo interreligioso cardenal Jean-Louis Tauran el Subdirector general de la FAO Daniel Gusftanson Mons Fernando Chica Arellano editor de la obra y observador permanen-te de la Santa Sede ante la FAO IFAD PAM y Carlos Granados Director de la BAC Asistieron al acto el cardenal Santos Abril el cardenal Stella el arzobispo secretario del Pontificio Consejo para la Cultura varios rectores de Colegios y profesores de universidades romanas el embajador de Espa-ntildea ante la Santa Sede y los de Colombia y Paraguay (martes 23 de febrero)

otrAs ActividAdes

Con motivo de la Fiesta del Reservado el saacutebado 7 de noviembre intervino el Colegio el Coro de la dioacutecesis de Roma dirigido por Mons Marco Frisina Asistieron al concierto maacutes de trescientas personas que abarrotaron la Capilla del Colegio El magniacutefico programa aunoacute oracioacuten y catequesis tomando como referencia la eucaristiacutea El director del Coro presentoacute cada pieza de forma didaacutectica A continuacioacuten se sirvioacute una ce-na-bufeacute a todos los presentes

Del martes 19 al martes 26 de abril tuvimos la laquoExposicioacuten del libro religiosoraquo de la mano en esta ocasioacuten de Ediciones Siacutegueme El objetivo era conocer la importancia de las editoriales catoacutelicas y el servicio que prestan en la difusioacuten de la cultura cristiana y de la fe de la Iglesia en el mundo de hoy La inauguracioacuten corrioacute a cargo del director de la Editorial D Eduardo Ayuso Santos quien fuera tambieacuten vicerrector de este Cole-gio y que habloacute laquoDel amor a los libros y el deseo de Diosraquo La exposicioacuten se celebroacute paralelamente en el Colegio Mexicano

A propuesta de los alumnos se convocaron dos reuniones sobre el tema de la exhortacioacuten del Papa Francisco Amoris Laetitia Se tratoacute de un deba-te interdisciplinar preparado por los propios colegiales Se realizaron dos encuentros (11 y 25 de mayo) con la intervencioacuten en la mesa de varios ponentes y una gran afluencia de colegiales

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TESIS Y TESINAS

tesis doctorAles

A lo largo del curso 2015-2016 se han defendido dos tesis recibiendo ambas la maacutexima calificacioacuten

El martes 20 de octubre se celebroacute la defensa de la Tesis doctoral en Teologiacutea dogmaacutetica de sacerdote de Barcelona Juan Ramoacuten Laparra Mar-tiacutenez dirigida por el profesor Norman Tanner y titulada laquoLa cristologiacutea de Calcedonia y la obra de Andreacute de Halleux complementada y confrontada con las aportaciones de Alois Grillmeier y Richard Priceraquo

El jueves 16 de junio tuvo lugar la defensa de la Tesis doctoral en De-recho canoacutenico del sacerdote de la dioacutecesis de Toledo Fernando Palacios en la Universidad Pontificia de la Santa Cruz titulada laquoEl Romano Pontiacute-fice y la liturgia estudio histoacuterico-juriacutedico del ejercicio y desarrollo de la potestad del Papa en materia lituacutergicaraquo El director era el espantildeol Antonio Saacutenchez Gil

tesinAs de licenciAturA

Mikel Aranguren Zubialqui laquoEl discernimiento seguacuten san Ignacio de Lo-yola luz para la espiritualidad sacerdotalraquo

Aacutengel Carnicero Carrera laquoComunioacuten trinitaria y comunioacuten interpersonal a la luz de la obra de Mons Luis F Ladaria SJraquo

Guillermo Cesaacutereo Contiacuten Ayloacuten laquoJesucristo pan de vida eterna simbo-lismo cristoloacutegico y sentido eucariacutestico del panis uite en el pensamien-to de Agustiacuten de Hiponaraquo

Juan Pablo Domiacutenguez Teba laquoAlonso Marcos de Llanes y Arguumlelles Arzobispo de Sevilla en tiempos de la Ilustracioacuten (1783-1795)raquo

David Flores Flores laquoMariacutea coronacioacuten de la obra salviacutefica de la Trini-dad a partir de las aportaciones del Vaticano II y autores selectosraquo

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la ViDa en el Colegio

Eduardo Lorenzo Garciacutea laquoVocacionalizar la Pastoral juvenil Liacuteneas guiacutea para realizar un proyecto de Pastoral juvenil-vocacional en la Dioacutecesis de Orihuela-Alicanteraquo

Jesuacutes Navarro Ortiz laquoEl culto a Santiago el Mayor en Espantildea Oriacutegenes y tradicionesraquo

Hilary Kauseni Ndeke laquoFor he too is a Son of Abraham A redaction-Cri-tical Study of Lk 191-10raquo

Daniel Pellicer Monteagudo laquoLa prueba de la exclusioacuten temporal de la ordinatio ad bonum prolisraquo

Job Prieto Arana laquoEl primer ritual peruano de 1607 Rituale seu Manuale Peruanum de Fray Luis Jeroacutenimo de Oreacuteraquo

Joseacute Manuel Rodriacuteguez Morano laquoLa veneracioacuten de los Santos del Anti-guo Testamento en el Martyrologium Romanum del 2004raquo

Ismael Rojo Peacuterez laquoLa eparquiacutea fuera del territorio patriarcalraquo

La revista Mater Clementissimadel Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute en Romase terminoacute de imprimir el 8 de diciembre de 2016

fiesta de la Inmaculada Concepcioacuten de la Virgen Mariacutea

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INDICACIONES PARA LOS AUTORES

A norMAs generAles de publicAcioacuten

Dado que la revista Mater Clementissima es un oacutergano de difusioacuten de la investigacioacuten realizada en el Colegio uacutenicamente podraacuten publicar en ella co-legiales o formadores tanto presentes como pasados de este mismo Pontificio Colegio Espantildeol de San Joseacute de Roma

La extensioacuten de los originales seraacute habitualmente de un miacutenimo de veinte folios DIN-A4 a doble espacio y de un maacuteximo de cuarenta

Los originales se enviaraacuten al correo electroacutenico de la redaccioacuten de la revista cuya direccioacuten es la siguiente

revistacollegiospagnoloorg

El enviacuteo deberaacute hacerse antes del 31 de diciembre del antildeo anterior al de su publicacioacuten indicando direccioacuten postal y electroacutenica del autor institucioacuten donde presta sus servicios y cargo o funcioacuten acadeacutemica que desempentildea

Los originales se presentaraacuten soacutelo en espantildeol Cada original deberaacute venir acompantildeado de un breve resumen en espantildeol e ingleacutes asiacute como de una relacioacuten de palabras claves igualmente en ambos idiomas

El Consejo de Redaccioacuten seleccionaraacute los artiacuteculos para cada nuacutemero una vez recibidos los informes de calidad realizados por dos de los consultores cien-tiacuteficos Esos informes se realizan sobre los originales anoacutenimos y su resultado positivo negativo o condicionado seraacute comunicado debidamente a los autores

Aquellos originales que no se atengan a las normas de citacioacuten y a las reglas de estilo de la revista seraacuten devueltos para su correccioacuten

206

inDiCaCiones para los autores

b norMAs de citAcioacuten

1 Libro normalC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma Roma 2016 100-120

2 Actas de CongresosC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma in Actas del Congreso Interna-cional (Roma 1-2 enero de 2016) vol I Roma 2016 100-120

3 Libro con varios voluacutemenesC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma vol 1 Roma 2016 100-120

4 Libro con varias edicionesC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma 2 ed Roma 2016 100-120

5 Libro de varios autores con texto uacutenico comuacuten a todosC MARTIacuteN - E GARCIacuteA - E ALONSO El Colegio Espantildeol de Roma Roma 2016 100-120

6 Libro dentro de una coleccioacutenC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma [Ciencias eclesiaacutesticas 23] Roma 2016 100-120

7 Parte de un libro de varios autores cada uno con su texto propioC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol in E GARCIacuteA (ed) Los Colegios roma-nos Roma 2016 100-120

8 Voz de diccionario o enciclopediaC MARTIacuteN Colegial in Diccionario de los Colegios vol 2 Roma 2016

100 col 738-784

9 Artiacuteculo en revistasC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma in Estudios Eclesiaacutesticos (EE) 12342 (1998) 100-120

10 Las citas biacuteblicasSeguacuten la Biblia de La Casa de la Biblia

11 Los dos Coacutedigos de Derecho CanoacutenicoCIC 17 c 120 CIC 83 cc 120-123

12 Concilio Vaticano IIUtilizar las siglas comunes seguidas del nuacutemero del documento LG 22

13 Documentos electroacutenicosC MARTIacuteN El Colegio Espantildeol de Roma [en liacutenea] html [ref de 30 marzo 2016] Disponible en httpwwwcolegioorghome

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inDiCaCiones para los autores

c norMAs de estilo

1 FuenteLos originales se presentaraacuten en formato electroacutenico (preferiblemente Word)

utilizando el tipo laquoTimes New Romanraquo en tamantildeo 12 puntos No se utilizaraacuten negritas (bold) ni subrayados Se utilizaraacute la letra cursiva cuando en el texto se empleen teacuterminos o frases en lengua extranjera o en latiacuten

2 PaacuterrafosLos paacuterrafos apareceraacuten justificados y con un interlineado sencillo La prime-

ra liacutenea de cada paacuterrafo apareceraacute sangrada asiacute como la primera liacutenea de cada nota a pie de paacutegina

3 EstructuraLa estructura del trabajo podraacute admitir un maacuteximo de cuatro niveles Las

llamadas a pie de paacutegina se haraacuten en el texto mediante referencias en nuacutemeros araacutebigos en superiacutendice Se utilizaraacute para su composicioacuten un formato de laquoTimes New Romanraquo en tamantildeo 10 e interlineado sencillo

Cuando se repite la cita por segunda vez consecutiva se utilizaraacute Ibid Cuando son segunda vez en varias obras distintas se consignaraacuten despueacutes del nombre del autor las primeras palabras de la obra citada anteriormente

Id (Idem laquoDel mismo autorraquo) se emplearaacute para citar el autor al que se ha hecho referencia inmediatamente antes

LocCit (laquoen el lugar citadoraquo) se usaraacute para enumerar en la misma paacutegina una obra citada anteriormente habiendo otras referencias diferentes intercaladas

Vid (Vide) se usaraacute para una cita ya referenciada con el fin de evitar la re-peticioacuten

Passim (laquoaquiacute y alliacuteraquo en varias partes o pasajes) se usaraacute cuando sea imposi-ble mencionar todas las paacuteginas de las que se extraen las ideas de un autor

Apud (laquocitado porraquo una cita de cita) se utilizaraacute cuando se cite un documento no consultado directamente sino citado por otro autor

Mater ClementissimaRevista de Ciencias eclesiaacutesticas

Nueva eacutepocaNuacutemero 1 - 2016

Nuacutem

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Mat

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