Facies (1)

29
CONCEPTO DE FACIES En 1838 Gressly reconoció, definió y dió nombre a las facies estratigráficas. Antes de terminar el siglo XIX el concepto de facies quedó completamente establecido, en base a los trabajos de Mojsisovics, Renevier y Walther, como “el conjunto de características litológicas y Paleontológicas de una roca sedimentaria de las cuales puede deducirse su origen y las condiciones ambientales de su formación”. Las rocas similares o idénticas tienen facies isópicas y las de diferente tipo tienen facies heterópicas. Los cambios de facies deben estudiarse en dirección horizontal así como en dirección vertical, con el fin de reconstruir los cambios ambientales en el espacio y en el tiempo. Varían facies Isocrónicas genéticamente relacionadas constituyen una cinta de facies(Facies Tracts); y cintas de facies genéticamente relacionadas constituyen una familia de facies. Las facies Heterópicas en sucesión vertical constituyen una secuencia de facies(Facies Sequence). Cuando se emplea el término facies para distinguir las secuencias estratigráficas que ocurren en determinado ambientes geográficos u oceanográfico(ej: facies Marinas), o para deducir condiciones tectónicas, pierde su finalidad descriptiva. Se discute el uso no estratigráfico del término facies y se compara además la moderna terminología Americana de facies respecto a la primitiva terminología Europea. Las facies y biofacies tal como se emplean en Ecología difieren ampliamente de los conceptos estratigráficos de facies y biofacies. Las características de una roca actualmente denominada “biofacies” deberian llamarse en estratigrafía “facies Paleontológicas”. Para terminar, se revisa parte de la moderna literatura rusa acerca del concepto de Facies.

Transcript of Facies (1)

Page 1: Facies (1)

CONCEPTO DE FACIES

En 1838 Gressly reconoció, definió y dió nombre a las facies estratigráficas. Antes

de terminar el siglo XIX el concepto de facies quedó completamente establecido, en

base a los trabajos de Mojsisovics, Renevier y Walther, como “el conjunto de

características litológicas y Paleontológicas de una roca sedimentaria de las cuales

puede deducirse su origen y las condiciones ambientales de su formación”. Las

rocas similares o idénticas tienen facies isópicas y las de diferente tipo tienen facies

heterópicas. Los cambios de facies deben estudiarse en dirección horizontal así

como en dirección vertical, con el fin de reconstruir los cambios ambientales en el

espacio y en el tiempo. Varían facies Isocrónicas genéticamente relacionadas

constituyen una cinta de facies(Facies Tracts); y cintas de facies genéticamente

relacionadas constituyen una familia de facies. Las facies Heterópicas en sucesión

vertical constituyen una secuencia de facies(Facies Sequence).

Cuando se emplea el término facies para distinguir las secuencias estratigráficas

que ocurren en determinado ambientes geográficos u oceanográfico(ej: facies

Marinas), o para deducir condiciones tectónicas, pierde su finalidad descriptiva. Se

discute el uso no estratigráfico del término facies y se compara además la moderna

terminología Americana de facies respecto a la primitiva terminología Europea. Las

facies y biofacies tal como se emplean en Ecología difieren ampliamente de los

conceptos estratigráficos de facies y biofacies. Las características de una roca

actualmente denominada “biofacies” deberian llamarse en estratigrafía “facies

Paleontológicas”. Para terminar, se revisa parte de la moderna literatura rusa acerca

del concepto de Facies.

Page 2: Facies (1)

INTRODUCCION

Quizá ningún término geológico ha sido tan ambiguamente empleado para tan

numerosos conceptos diferentes como la voz de facies. Este término hasta hace poco

bien definido y comprensible para todos, carece hoy día de significado a menos que

se emplee con adjetivos o acompañado por prolijas definiciones. en los congresos

geológicos internacionales no se habla mucho tiempo en términos de entendimiento

para todos, si se está discutiendo el concepto de facies(ver discusión entre Frijlinck,

Cuvillier y Sioss, 1953). en un reciente symposium acerca de los problemas de

correlación e interpretación de las facies sedimentarias, 2 de los 6 delegados

evitaron emplear el término facies, y otros 4 lo emplearon de 3 maneras diferentes:

a) Para características físicas o químicas de una roca.

b) Para las condiciones ambientales en las que se formó una roca.

c) Para asociaciones de foraminíferos fósiles o vivientes.

Nuestro trabajo se presenta en apoyo a la discusión entre Wheeler y Mallory(1936),

“para evitar un sistema estratigráfico de clasificación y nomenclatura en el que

cada término tenga un significado diferente para cada persona”. Sin embargo, para

lograr este fin poco benéfico obtendremos dando una nueva definición del término

facies y de los términos estratigráficos relacionados o señalando los conceptos de

preferencia personal. Mucho mejores, para determinan el significado de una voz

científica utilizar dos guías:

a) La definición original dada por el autor que propuso el término.

b) El uso posterior dado por la mayoría de los que han encontrado útil el empleo del

término.

Intentamos demostrar que el concepto de facies se estableció y definió de un modo

preciso en 1838, y que se afianzó y arraigó en la literatura geológica antes de

Page 3: Facies (1)

terminar el siglo XIX; recordamos posteriormente que durante los últimos 20-30

años el término facies ha sido aplicado a numerosos conceptos científicos, no

relacionados al concepto original, ya para los cuales es preferible introducir otros

vocablos.

CONCEPTO DE FACIES EN EUROPA OCCIDENTAL

ORIGEN DEL CONCEPTO DE FACIES: Facies es una palabras latina que significa

cara,figura,apariencia,aspecto,condición. Su significado por tanto no se refiere a

una cosa concreta sino a una idea abstracta. El vocablo fué introducido en

literatura por Nicolas Steno(1660.pp.68-75) para expresar el aspecto total de una

porción de la superficie terrestre durante cierto intervalo de tiempo geológico.

Empleado así el término facies específicamente comprende todos los sedimentos

depositados durante tal lapso así como los periodos y áreas de denudación.

El empleo científico moderno del término facies empieza en el año de 1838 cuando

el geólogo Suizo Gressly publicó la primera parte de sus investigaciones geológicas

acerca de las montañas del Jura cerca de Solothurn, Suiza(3). Este trabajo clásico

ha sido frecuentemente citado pero aparentemente muy poco leído en los últimos

años. Gressly llegó al concepto de facies inductivamente a través de sus estudios

estratigráficos comparativos, en un área caracterizada por los rápidos cambios

laterales y verticales en las características de las unidades litológicas. Partes

importantes de esta definición de facies han sido recientemente traducidas por

Dumbar y Rpdgers(1957,p.136), para que se pueda comprender totalmente el

significado original de este concepto así como su historia subsiguiente es preciso

lecturas más amplias del trabajo de Gressly.

Una traducción de la definición de Gressly(con ligeras modificaciones de la versión

dad por Dumbar y Rodgers)reza como sigue(4).

Page 4: Facies (1)

“En vez de haberme satisfecho con un número dado de secciones verticales... seguí

cada unidad estratigráfica horizontalmente hasta donde fue posible con el fin de

estudiar todos los cambios.”

“Y así, he llegado a reconocer, en la dimensión horizontal de cada unidad

estratigráfica, modificaciones varias y bien definidas que presentan caracterírticas

constantes respecto a su composición petrográfica así como a los caracteres

Paleontológicos de sus asociaciones de fósiles las cuales están determinadas por

leyes particulares apenas ligeramente variables.”

“En primer lugar, dos aspectos principales caracterizan todo el conjunto de las

modificaciones a las cuales he llamado facies o aspectos de una unidad

estratigráfica: uno de ellos consiste en que a un caracter litológico determinado de

una unidad estratigráfica está relacionada en todo sitio la misma asociación

paleontológica; el otro en que en tal asociación de fósiles los géneros y especies de

otras facies invariablemente excluidos.

“Si ocasionalmente ocurre que ciertos géneros y especies, característicos de

determinadas facies se presentan en otras, por regla general son menos abundantes,

mucho menos desarrollados y menos característicos que en las facies o asociación a

que realmente pertenecen”.

“Gressly señala que dichos cambios de facies están determinados, como diríamos

hoy, por cambios en el ambiente de deposición, tal como se observa en los océanos

actuales”.

Gressly resume sus conclusiones acerca de la naturaleza de los cambios de facies en

5 leyes (1838, PP. 20-23), de las cuales traducidas libremente del original algo

arcaico dirán como sigue:

Primera ley : Cada una de las facies de una unidad estratigráfica tiene

características litológicas y paleontológicas especiales, totalmente diferentes de las

Page 5: Facies (1)

características de las demás facies que se encuentran en el mismo horizonte

geológico.

Segunda ley : Unidades estratigráficas (Stratigraphic units) diferentes, la misma

facies litológicas presenta características paleontológicas análogas, no solo en la

dirección horizontal, si no también cuando se encuentra separada por una facies

diferente en la secuencia estratigráfica vertical.

Esta ley queda mejor redactada del siguiente modo (trad.) “Los fósiles de formas

orgánicas son muy semejantes en las facies análogas aunque aparezcan en

diferentes unidades estratigráficas. Esto condujo a la opinión, de general aceptación

hoy día, de que iguales fósiles pueden ocurrir no solo subdivisiones y grupos de una

unidad estratigráfica, sino también en aquellas unidades que en una sección

geológica vertical, estén separadas por otras unidades muy espesas”.

Tercera ley : Algunas veces entre dos facies diferentes existen limites bruscos en

diferente dirección horizontal, y otras veces pasan de una a la otra a través de

variedades transicionales.

Cuarta ley: La variedad de facies aumenta desde la base hasta el techo en una

columna estratigráfica. Esta ley se refiere evidentemente a las condiciones

predominantes en el área estudiada por Grely y tiene una validez limitada.

Quinta ley: La diversidad de facies puede ser mayor o menor en áreas diferentes.

Grely discute con alguna amplitud que el grado de variabilidad de las facies esta

determinado por el alejamiento respecto de la costa y que es mucho mayor la

variabilidad en el litoral que en las áreas apartadas de él.

Principalmente Gresly (1938, PP 24-25) resume las ventajas del método de las

facies así:

Page 6: Facies (1)

1. Los numerosos detalles paleontológicos que a simple vista parecen carecer de

significado pueden compendiarse en unas pocas leyes sencillas que demuestran la

estrecha relación entre ellos y los aspectos geológicos y litológicos de las rocas.

2. Las propiedades litológicas y geológicas de las rocas sedimentarias pueden

interpretarse con mayor provecho yendo de la descripción mineralógica rutinaria

hasta la interpretación geológica, censando se demuestran sus estrechas relaciones

con la evolución de la vida tal como su manifiesta en las diferentes épocas de la

historia de nuestro planeta.

3. El relieve submarino en los diferentes periodos así como los procesos submarinos

que han afectado a las unidades estratigráficas y a sus facies, pueden determinarse

con gran precisión.

4. Los periodos de elevación de cordilleras pueden determinarse con gran precisión

cuando se reconoce el carácter litoral de las rocas que han sido subsiguientemente

depositadas.

Así, Gressly reconoce cabalmente las consecuencia de los resultados de sus estudios

en las montañas Jura de Solothurn u no vacila en enunciar algunas generalizaciones

más amplias. Es evidente que Gressly restringió el concepto de facies a las rocas

sedimentarias, y que para él la esencia de éste concepto es la interdependencia de

las facies litológicas y paleontológicas; reconoció además los cambios o la identidad

de las facies vertical y horizontalmente.

El geólogo Francés Prevost llegó a ideas muy similares, al parecer

independientemente de Gressly y casi al mismo tiempo. Puede él, por

consiguiente, ser considerado como el cofundador del concepto de facies. El empleó,

sin embargo, una terminología diferente de la empleada por Gressly, y no fueron

sus términos sino los de Gressly los que tuvieron posterior aceptación. Las

conclusiones de Provost fueron esencialmente deductivas. En una asamblea de la

Sociedad Geológica de Francia 1837, Provost señaló que así como hoy pueden

Page 7: Facies (1)

formarse a un mismo tiempo diferentes tipos de sedimentos, también es posible

reconocer diferentes “formaciones” idénticas formadas en “épocas diferentes”. En

un artículo posterior(1845) Prevost contribuyó de un modo importante a las

primeras ideas acerca de los conceptos cronoestratigráficos y litoestratigráficos.

Prevost definió el término Francés terran como una voz aplicada a rocas de

cualquier tipo y origen las cuales fueron formadas durante un mismo intervalo de

tiempo, y formación como un término para rocas que fueron formadas por unas

mismas causa s( o en unas mismas condiciones ambientales). La formación de

Prevost es así idénticas a las facies de Gressly. Cuando Prevost dice un Terrain

consta de diversas formaciones quiere decir, modernamente hablando, que una

unidad cronoestratigráfica puede estar integrada por rocas de diferentes facies.

Es interesante observar que mientras Gressly llegó a sus generalizaciones en base a

observaciones detalladas y cuidadosas, para Prevost el Sincronismo De Las

Formaciones(contemporaneidad de las facies) fué un principio deducido por

razonamiento y observación”. Así, aunque mucho se ha escrito acerca de éstas

prelaciones en éstos últimos años, los conceptos y métodos de estudios que en

ningún modo son modernos.

DESARROLLO POSTERIOR DEL CONCEPTO DE FACIES

El desarrollo del concepto de facies en la literatura geológica durante el siglo XIX

en su mayor parte continuó estrechamente ligado a los principios establecidos por

Gressly y Prevost. Al principio, sin embargo, el pensamiento osciló, desde el

enfático reconocimiento de los fósiles de facies hasta la vuelta a la discusión acerca

del valor cronológico de los fósiles, con el desarrollo resultante del concepto de fósil

de zona o fósil de guía establecido por Oppel en 1856-1858(ver Teichert,1958).

Page 8: Facies (1)

Oppel reconoció que en la mayoría de las asociaciones de fósiles únicamente un

número restringido de especies son útiles para correlaciones estratigráficas. Empleó

a tales especies para caracterizar las zonas paleontológicas. Oppel fué por tanto el

primero que ya hace más de 100 años, estableció la diferencia entre fósiles de

facies(facies fossils)y fósiles de zona o fósiles guía, aunque no expresó estos

conceptos con definiciones precisas.

Los geólogos Franceses, Suizos, Austriacos y Germanos encontraron útil el concepto

de facies hasta el punto que, al menos a partir de 1880, todos los libros de texto

publicados en Alemán o Francés incluían amplias disertaciones del tema: Reumayr

1887, Reyer 1887, Walter 1883, Credner 1902(en las primeras ediciones); Haug

1907, Kayser 1912, Dacqué 1915,Tornquist 1916, Keilhack 1921, Diener 1925,

Salomón 1926, para mencionar unos de los más notables y más ampliamente

empleados hace unas décadas.

contribuciones importantes a las discusiones europeas al respecto, fueron aportadas

por el Austro-Húngaro Kojsisovics, por el suizo Renevier y por el Alemán Walter.

En 1879, cuando Kojsisovics publicó su trabajo clásico acerca de los arrecifes

Triásicos de los Alpes Orientales, adhirió al concepto de facies que estaba

firmemente establecido en el pensamiento geológico contemporáneo(trad).

“De acuerdo con Gressly y Oppel acostumbramos hoy día a aplicar el término facies

a depósitos formados bajo la influencia de condiciones ambientales diferentes”.

Es importante aclarar que el concepto de facies expresa las relaciones mutuas y

generales entre las condiciones ambientales por una parte, y entre los sedimentos y

los sitios de habitación de los organismos por la otra(Mojsisovics von

mojsván,1879,p.599.).

Mojissovics objeta la aplicación del término facies a las rocas formadas en

diferentes provincias geográficas. Enseguida empieza a exponer los principios de lo

Page 9: Facies (1)

que parece ser la primera clasificación ambiental de las rocas sedimentarias(1879

p.5-10). Las rocas sedimentarias pueden clasificarse teniendo en cuenta:

1) El ámbito en el cual fueron depositadas: marino, terrestre.

2) La provincia geográfica de deposición.

3) Las facies.

Las rocas formadas en un mismo medio se denomina isomésicas y las formadas en

diferentes medios heteromésicas; las rocas formadas en una misma cuenca se

llaman isotópicas y las formadas en diferentes cuencas o provincias heterópicas;

las rocas con iguales facies se denominan isópicas y sin importar cual sea su edad

relativa y las diferentes rocas con facies se denominan heterópicas. El logro más

importante aquí es la distinción entre facies isópicas(mismo aspecto) y

heterópicas(diferente aspecto) ; “ de un mismo modo como se forman diferentes

facies en yuxtaposición en una misma área de sedimentación, las facies idénticas

pueden aparecer en diferentes áreas de sedimentación y en tiempos diferentes. Las

primeras se denominan formaciones heterópicas y las últimas isópicas”(pp 6-7).

Esta distinción fué posteriormente adoptada, asociada, sostenida y elaborada por la

mayoría de los geólogos Europeos; volvemos a tratarla más adelante.

Otro aparte importante fué hecho por Renevier(1884) el cual consideró las facies

como la “fisonomía” de una roca y estableció una clasificación de las facies, basada

esencialmente en criterios petrográficos y paleontológicos. Recalcó que “las facies

son los diferentes tipos de formaciones, sedimentarias o análogas, que pueden

originarse simultáneamente en determinado momento del tiempo geológico, tal

como ocurre actualmente”. entre las condiciones que determinan las facies

enumera: ambiente, posición geográfica, composición química y mineralógica,

comunidad vegetales y animales, clima, altitud y profundidad bajo el nivel del mar.

Así, las formaciones litorales pueden presentarse con facies

coralíferas,margosas,gredosas,arenosas o conglomeráticas y así sucesivamente.

Page 10: Facies (1)

Finalmente, Johannes Walther(1893-1894) definió las facies como: “ el conjunto de

todas las características primarias de una rocas sedimentaria” y esta definición fué

adoptada por Haug(1907) y por la mayoría de los geólogos Europeos hasta la

actualidad. Walther desarrolló además el importante concepto Faciesbezirk(cintas

de facies) como un sistema de facies diferentes(heterópicas), pero genéticamente

relacionadas incluyendo además las áreas de erosión de las cuales provienen los

sedimentos de estas facies. Una cinta de facies estás por tanto relacionada con el

concepto original de facies de Steno(1669).

La necesidad de reconocer y estudiar los cambios verticales de facies en adición a

los cambios laterales fué sostenida por Arbenz(1919). En la literatura Germana la

sucesión vertical de facies se denomina Faciesrejhen (ver(Frank,1936;

Spengler,1951), y muchos otros) y en nuestro artículo se denominará secuencia de

facies; es pues un concepto ha mucho tiempo establecido y no un asunto de reciente

argumentación, como por ejemplo: Wheeler y Mallory(1956)parecen creerlo.

El concepto de facies recurrentes es tan familiar al pensamiento Europeo como lo

son las faunas recurrentes para todos los geólogos. La evolución de las facies es el

cambio gradual de ellas en el tiempo, que indican una variación en las condiciones

de sedimentación(ver también Lombar,1952).

En la literatura Europea la abundancia de discusiones sobre el concepto de facies se

continua interrumpidamente hasta los tratados más modernos de Simón(1948),

Bubnoff(1949,1949b), Gignoux(1950,1955), Ruenen(1950), Schindewolf(1950),

fourmarier(1960), Termier y Termier(1952), Fomerol y Fouet(1953),

Brinkmann(1956), y otros. En todos ellos , las facies se define de un modo u otro

como la expresión del conjunto total de características litológicas y paleontológicas

de una roca sedimentaria ; además, distinguen las facies isópicas y heterópicas (ver

por ejemplo, los mapas isópicos de Fourmarier); y se discuten los cambios

horizontales de facies así como la “evolución vertical de las facies”.

Page 11: Facies (1)

Tal como la definen y emplean estos autores, una facie no es una masa de rocas en

sí, sino la expresión de todas las propiedades primarias de ella. Mientras que las

ideas de Gressly, Mojsisovics, Renevier y Walther se desarrollaban en Europa,

apareció también otra tendencia que insistió en la aplicación del término facies a

secuencias y complejos pelogeográficos,tectónicos, o algunos otros procesos

geológicos definidos. A principios de 1888 Reyer hablaba de facies eólicas

batiales,cristalinas,volcánicas,flysh, y muchas otras más, que reflejan ambientes

sedimentarios y no sedimentarios más que características de la roca objetivamente

definidas. Deecke(1913) fué uno de aquellos que sostuvieron tenazmente que el

concepto de facies era estrictamente estratigráfico. Sin embargo, en la terminología

de muchos autores, el término facies fué empleado para denominar situaciones

ambientales generalizadas y algunas veces mal definidas, olvidando que por

definición las facies indica propiedades de la roca a partir de las cuales pueden

inferirse tales ambientes.

Esta definición se agravó por la influencia del “Traite de Geología” de

Haug(1907).Allí definió Haug las facies correctamente como “ el conjunto de

caracteres litológicos y Paleontológicos que presenta un depósito en un sitio dado”.

También adoptó la división de Mojsisovics de facies heterópicas e isópicas, pero

presento luego una clasificación genética y ambiental de todas las unidades

litoestratigráficas en facies volcánicas, eólicas, marinas, glaciales, neríticas, batiales

y otras. Este tipo de clasificación por supuesto, intenta definir las facies en base a

condiciones ambientales supuestas en vez de reconstruir los ambientes por medio

del estudio de las facies. Strausz, en su importante estudio acerca de las

facies(1928) llamó la atención sobre “el error que frecuentemente se comete al

confundir el estudio de las facies con la paleogeografía”, y Tercier(1939)recopiló

enjundiosos argumentos contra las excesivas generalizaciones de Haug. Sin

embargo, la aplicación del término facies a los ambientes más que a las

características de roca se arraigó en gran parte de la literatura europea. Así, sin ir

más lejos en l955 Moret definió las facies como “la totalidad de condiciones

biológicas y geográficas locales que determinan la naturaleza litológica y el

contenido de asociaciones vegetales y animales de un depósito”.

Page 12: Facies (1)

Aún la más somera revisión de la historia del concepto de facies en la literatura

Europea sería incompleta sino hiciésemos referencia al papel que ha jugado en la

geología Alpina. En ella, las facies fué definida primitivamente en un sentido

amplio para hablar de las características de fajas o cuencas de sedimentación

(Bertrand,1897). La correlación de tan extensas facies llegó a ser importante en la

interpretación de complejas estructuras de los mantos cuando se descubrió que las

secuencias rocosas que originalmente fueron contiguas se hallaban en

superposición vertical por causa de cabalgamientos horizontales. Estas condiciones

fueron analizadas detalladamente por Heim,1921;Bubnoff,1921; y muchos otros.

Rápidamente todo manto fué identificado como una facies distinta, tendencia esta

que objetada por Heristch,1927 y otros. En años más recientes estas relaciones

entre facies y mantos han sido insistentemente recalcadas(ver Cadisch,1953).

Posteriormente se han desarrollado amplias generalizaciones. Así todo el contenido

sedimentario de una provincia Paleogeográfica fué denominado como facies

helvética, penninica y otras. Las columnas sedimentarias levantadas en áreas de

diferente historia tectónica fueron consideradas como representativas de facies

geosinclinales, orogénicas, epicontinentales abisales y otras

(Arbenz,1919;Stille,1924; y muchos otros). Kobayashi(1956) y otros, han llamado

”facies” a ciclos y fases orogénicas. Todos estos conceptos son de gran utilidad para

análisis y síntesis de situaciones paleogeográficas y tectónicas de gran complejidad,

pero tienen que ver muy poco con el concepto original de facies y sería mejor crear

una terminología diferente para ellos.

Tan indiscriminado empleo del término facies en estratigrafía, ha tenido a oscurecer

el concepto hasta el punto de destruir su utilidad como ha observado

Moore(1949,1953).

El término microfacies, propuesto por Cuvillier y Sacals,1951(ver también Cuvillier

y Sacals,1956; Fairbridge,1954), se refiere exclusivamente a las propiedades

litológicas y paleontológicas de las rocas, reconocibles microscópicamente. Este no

Page 13: Facies (1)

es un concepto nuevo, sino un refinamiento del concepto clásico de facies. Es un

término útil que gradualmente gana terreno.

Sonder (1956) hizo la interesante sugerencia de agrupar las características de las

facies teniendo en cuenta si la información que suministra se refiere a la fuente de

los sedimentos o a las condiciones ambientales de sedimentación. En el primer caso

propuso determinar “facies de alimentación” y las últimas “facies de

precipitación”. Las facies de alimentación se manifiestan en la composición de la

roca(arenisca,arcilla,chert,etc.) y las facies de precipitación por la textura de las

rocas(estratificación cruzada,cross-beldding,marcas de oleaje,ripple marks,etc)y

por los constituyentes primarios especialmente fósiles. Sin embargo, la separación

de estos dos grupos de características de las facies no parece muy neta.

USO NO ESTRATIGRAFICO DEL TERMINO FACIES

Respecto a esto es necesario que nos apartemos un poco del tema para explicar el

empleo del término facies en ramas de la geología diferentes de estratigrafía. En

1915 el geólogo Finlandés Escola introdujo el término “facies metamórficas”

(metamorphy facies) para aplicarlo a aquellas rocas que han sido metamorfoseadas

en idénticas condiciones. Explico que había seleccionado dicho termino por

analogía con las facies estratigráficas y que las facies metamórficas no daban

información del estado premetamórfico de las rocas. Algunos años más tarde Escola

(1922) amplio su concepto de facie contrastando los conceptos de fases

metamórficas y de facies ígneas juntándolas en la categoría de “facies minerales”.

Este gran grupo de facies fué subdividido de acuerdo al contenido mineral y a las

características geoquímicas en facies minerales tales como esquisto verde,

anfibolita, diabasa, eclogitas y muchas otras.

A pesar de Becke (1921), Tilley (1924). Grubenman y Niggli (1924), contra la

duplicación de un termino científico previamente establecido en otra rama de la

Page 14: Facies (1)

geología, el concepto de facie metamórfica fué ampliamente aceptado por los

petrógrafos, (Escola, 1939; Mason, 1952; Williams y Gilbert, 1954). Sin embargo

no es satisfactorio que la descripción e interpretación de la historia de un

metasedimento, tengamos que trabajar con dos conceptos de facies totalmente

diferentes.

En 1912 Sander introdujo el concepto de “facies tectónicas” para aquellas rocas

que deben sus características principalmente a movimientos tectónicos, tales como

milonitas, algunas filitas y otras. Este concepto no debe confundirse con la tecto-

facie de Sloss et al que se discute en otro aparte de este articulo.

Reviere (1952) introdujo la expresión “facies granulométricas” como voz

interpretativa de las curvas acumulativas semilogarítmicas que representan el

análisis del tamaño de los granos. La subdivide en “facies lineales” para sedimentos

sin selección y facies parabólicas, logarítmicas e hiperbólicas según la forma de las

curvas granulométricas. El empleo del termino facie para escribir representaciones

estadísticas de una simple propiedad de una roca sedimentaria es inadmisible.

Algunas otras definiciones de facie no estrictamente estratigráfica aparecidas en la

literatura rusa moderna se discutirán más adelante.

CONCEPTO DE FACIES EN INGLATERRA Y NORTEAMERICA

Por razones no muy compresibles el concepto estratigráfico de facies no tuvo

aceptación en los países de habla inglesa hasta hace pocos años. Un examen de los

conocidos de DANA (1980), Charbelin y Salisbury (1904-1906), Pirson y

Schubbert (1915), comprueba la ausencia de cualquier cita del termino facie.

Geikie (1903) hablo de una “facies de restos orgánicos”, pero pensaba en las facies

ecológica animal y no hizo en efecto ninguna separación entre fósiles de facies y

fósiles guía. H. S. Williams se destaca como la única figura que 1985 discute las

facies como “Composición o condición particular de una formación en una región

Page 15: Facies (1)

dada”. Con estas bases distingue una facies arcillosa o calcárea de una facies

arenosa en el grumo Hamilton en el estado de New York.

Para todos los fines prácticos, sin embargo como han señalado Dumbar y Roger

(1957), la introducción del concepto de facie en la literatura americana ocurrió con

Grabau (1913-1920). También este fué inconsecuente en la aplicación del

concepto de facies y nunca lo empleo para resolver problemas estratigráficos. en

1913 empleo el termino facies para diferentes tipos de depósitos de costa o de litoral

pero no distinguió claramente entre facies sedimentarias y faunísticas. Así, en las

“facies de acantilados rocosos” incluyo los taludes submarinos formado por la

erosión de escarpes pero no menciona las faunas, y bajo el termino “Facies

orgánicas” cito la fauna y la flora, pero dijo poco acerca de los sedimentos.

Singularmente, no empleo el concepto de facies en la discusión de depósitos

batiales, abisales, o cualesquiera otros. En 1920 comparo los fósiles de guía y los

fósiles de facies pero no discutió o definió las facies como tal.

Así, el concepto de facies lentamente fue ganando terreno. Fenton y Fenton (1930)

enunciaron que el termino “facies es generalmente empleado en los artículos de los

geólogos europeos” y dieron un breve resumen de las ideas de Gressly y Haug sobre

el asunto. En 1931, Stockdale reconoció la importancia de estudiar los cambios

laterales de facies en el misisipiense del sur de Indiana, para la interpretación

estratigráfica correcta de dichas rocas, pero no alcanzan a establecer un cuadro de

afinidades entre las facies y su desarrollo. En una conferencia dictada en 1933,

Kindle (1934) discutió el papel de las facies en la paleontología estratigráfica. Dio

una excelente revisión del concepto de facies geológica, pero paso por alto la

literatura europea y no distinguió claramente entre facies ecológicas, estratigráfica

y conceptos cronoestratigráficos y bioestratigráficos.

El primer trabajo de importancia estratigráfica que aplico el análisis de las facies y

troto el concepto de facies fue el de Gaster (1934). A este siguió un articulo

igualmente importante de Mckee (1938) y algunos años más tarde la discusión del

concepto de facies empezó a incluirse en los textos (Schuchert y Dumbar, 1941).

Page 16: Facies (1)

Por otra parte en dos de los más instructivos y profundos estudios sobre las facies en

este tiempo (Elias 1937; Payne, 1942) no se empleo el termino aunque su aplicación

habría sido muy adecuada. Moore (1941) fue de los primeros en señalar el

concepto de facies como un punto importante para una mayor aplicación en la

estratigrafía de Norte América.

En Inglaterra un reconocimiento más general del concepto de facies viene

únicamente desde Jones (1938) y Hatch, Rastall y Black (1938). Jones reconoció

importancia del estudio de las facies en su análisis del geosinclinal paleozoico de

gran Bretaña y siguió la clasificación ambiental de Haug.

En Australia el concepto de facies fue útilmente aplicado para explicar el

complicado esquema litológico y bioestratigrafico en el devoniano superior. David

y Browne (1950) en su documental ”Geology of the commonwelt of Australia” se

refiere extensivamente a las facies en estudios comparativos de formaciones

isocronas y secuencias del continente Australiano.

Weller (1958) publico recientemente una revisión total, acompañada por una

exhaustiva bibliografía, de las facies en la literatura de los Estados Unidos desde

1930.

El énfasis en la siguiente y breve discusión del pensamiento americano reciente más

común en la literatura, por tanto, se hará sobre la interpretación de terminología

americana en términos de los conceptos primitivamente establecidos en Europa.

Caster (1934) reconoció que fajas de facies similares o iguales pueden extenderse

oblicuamente a través de algunos intervalos definidos de tiempo y pueden ser

divididas en, o asignable a varias divisiones cronoestratigráficas. Para una faja

continua y homogénea de facies propuso la voz “maganafacies”, para sus

proporciones cronoestratigráficamente definidas propuso el término “parvafacies”.

Es claro, teniendo en cuenta la anterior discusión del concepto de facies en Europa

Page 17: Facies (1)

que una magnafacie es una unidad litoestratigráfica (sedimentary rock unit) con

facies isópicas pero heterocronas y que las parvafacies son elementos isocronos y

heterópicos de una cinta de facies (fig. 1).

En 1938, Kleinpell empleó el concepto de facies para provincias geográfico -

climáticas en análisis sobre foraminíferos (facies tropical, templada, boreal) así

como para indicar zonación en profundidad (litoral, nerítica, batial, abisal). En

resumen Kleinpell equipara este tipo de facies ambientales con las facies ecológicas,

concepto que discutiremos más adelante.

En el desarrollo del concepto estratigráfico de facies en América dos artículos de

McKee (1938, 1935) fueron importantes puntos de apoyo en este difícil asunto. En

su estudio de estratigrafía del Permiano del Grand Canyon, McKee (1938) dió

énfasis a las variaciones laterales de facies y construyó ambientes en base a los

análisis cuidadosos de facies en unidades litoestratigráficas individualmente. En el

estudio del Cambriano en el Grad Canyon el mismo autor ((1945) diferencia más

firme y cuidadosamente entre unidades litoestratigráficas (formaciones y

miembros) y sus facies empleando este último término para denominar diferentes

aspectos litológicos de las rocas, independientemente de si estos fueron encontrados

en una misma unidad litológica o en diferentes, por ejemplo, reconoció las facies

calizas con Girvanella en diferentes miembros de la caliza Muav.

En 1949 la publicación de tres trabajos estimuló la discusión sobre la facies que aún

estaba muy incipiente; (1) “Sedimentary Rocks” de Pettijonh, el primer libro

americano que dedica un espacio considerable a las facies, (2) La memoria de la

Sociedad Americana de Geología “Sedimentary Facies in Geology History”

(Longwell, 1949), con contribuciones de Moore, Sloss, Krumberin, Dapples y otros,

y (3) un importante artículo de Lowman sobre las facies en la Costa del Golfo

siguiendo a Haug, Lowman al principio define las facies como “Un término

descriptivo de rocas que comprende tanto los componentes biológicos como los

mineralógicos”, y así emplea el término a través de su artículo exclusivamente para

conceptos ambientales definidos: continental, litoral, nerítico, batial.

Page 18: Facies (1)

Pettijohn (1949) revisó parte de la literatura Europea sobre las facies y empleó el

término en un sentido más amplio, esencialmente ambiental, e introdujo e y discutió

la facies geosinclinales, epicontinental ((Poreland), orogénica, por orogénica,

euxínica, salina y otras. (pp. 611-Ebd. 1957).

Una innovación se inició con Moore (1949, 1953) que definió la facie sedimentaria

como “cualquier porción de unidad litoestratigráfica dada, en la que los caracteres

físicos - orgánicos se diferencian significativamente de los correspondientes en otra

parte o partes”. Esta definición fue adoptada como base de trabajo por Sloos,

Krumbein* y en posteriores publicaciones de estos y otros autores, numerosísimos

para citarlos aquí. “Las facies” en este sentido son miembros de las facies

heterópicas de una unidad estratigráfica o de una cinta de facies. Algunas veces

tales facies representará una parvafacies en el sentido de Caster.

Mientras Moore, Sloos, Krumbein, y otros restringieron el empleo de las facies a

variaciones laterales de las rocas, Mckee (1949) encontró útil estudiar “las facies de

litología pero de una misma edad” así como la “facie de litología similar pero

edades diferentes”. Las primeras son sencillamente facies heterópicas y las últimas

isópicas. En 1957, Moore admitió el empleo de las facies para “tipos particulares de

depósitos sedimentarios.... que a grandes rasgos corresponden a ciertos tipo de

ambiente” es decir, para las facies isópicas tal como las denominó Mojsisovics.

Los conceptos Undatema (Undathem), clinotema (clinothem), y fondotema

(fondothem) de Rich (1951 b) claramente son cintas de facies como se definió en un

aparte posterior, porque dichos términos indican asociaciones de rocas con facies

genéticamente relacionadas. Así, un undatema está constituido por sedimentos

acumulados en el “ambiente undoso” (ambiente caracterizado por aguas agitadas

por olas y corrientes); rocas características de este tipo son: Conglomerado,

arenisca, limolita de grano grueso, caliza detrítica, oolita y coquinita. El mismo

Rich (1951 a) parece que restringió el empleo del término facies para conclusiones

GEORGE
|
Page 19: Facies (1)

comparativas con las facies biológicas y caracterizó diferentes partes de una unda

como ambientes Clino y Fondo.

“La Tectofacies” que definida por Sloos et al. (1949) como un grupo de estratos

con características tectónicas diferentes de las características de los estratos

lateralmente equivalentes. Las objeciones a este concepto fueron hechas por

Nabmolz (1951) y por Moore (1953). El término en sí mismo es un tanto cercano

al de “facies tectónicas” de Sander (1912) el cual ya fue discutido.

Dos términos que han tenido gran aceptación en estos últimos años son “Litofacies”

y “Biofacies”. Tal como los emplean y entienden muchos autores la “litofacies

estratigráfica” abarca los aspectos mineralógicos y petrográficos de una roca

sedimentaria así como ciertas propiedades masivas de la misma, mientras que la

“biofacies estratigráficas” engloban sus características paleontológicas. Este último

término necesita una discusión más crítica que se dará en el próximo capítulo.

El término litofacies parece haber sido introducido por el geólogo ruso Eberzin

(1940: fide Makevich, 1957). De las citas utilizadas no se claramente cuando y por

quién fue introducido dicho término en América. Poco después de 1945 apareció

en publicaciones y fue empleada en el sentido arriba mencionado. Fue por

supuesto, una nueva voz para un nuevo concepto, ya definido por Gressly.

Moore (1949) ha hecho notar con apreciable justificación que, etimológicamente

considerado el termino litofacie significa facie de una roca y es un sinónimo exacto

de facie, por que la raíz lito tal como se aplica en las rocas sedimentarias

comprende necesariamente a los constituyentes orgánicos de tal roca, si se

presentan, tanto como a los inorgánicos. En toros términos los restos fósiles forman

parte de la roca. Esto esta en acuerdo con las ideas de Greesly que considero las

propiedades petrográficas y paleontológicas de una roca como partes inseparables

de las facies. No obstante, para fines analíticos la separación del estudio de las

propiedades mineralógicas petrográficas y del contenido fosilifero es casi siempre

conveniente para establecer las afinidades entre sedimentos y biota en el tiempo de

Page 20: Facies (1)

formación del sedimento. El termino fisiofacie propuesto por Moore para los

elementos estrictamente inorgánicos del registro de un ambiente sedimentario

tienen mérito considerable.

El “litotopo” de Wells (1947) es por definición original un registro rocoso del

ambiente. Los litotopos son, por lo tanto, unidades litológicas con litofacies idéntica

o isópica, Wells subdivide los litotopos en facies basándose en asociaciones de

fósiles. Sus facies son, por consiguiente, comparable con las biofacies de otros

autores. Krumben y Slooss (1951) Weeler y Mallory (1956) han redefinido sin

justificación, el litotopo como un área de sedimentación uniforme reduciendo así el

concepto a dos dimensiones. Para los fines de diferenciación vertical de una unidad

estratigráfica Krumben y Sloos sugieren el reconocimiento del litotopo y biotopo

sucesivos en vez de facies. Puesto que los biotopos de los fósiles raramente se

pueden reconocer y los litotopos deben definirse en términos de facies el

reconocimiento de cambios verticales de facies se desprende lógicamente.

Los términos litostroma y lisotoma propuestos por Wheller y Kallory (1954-1956)

se aplican a unidades litológicas que pueden definirse en términos de facies. El

litostroma ha sido definido como “Manto estratigráfico que está ya constituido por

una o más capas con carácter litológico esencialmente uniforme o uniforme

heterogéneo”.

Es difícil colegir como difiere tal manto de una formación o de un miembro en el

sentido litoestratigráfico de un litotopo como lo definió Wells (1947). Su facies es

isópica e isocrona.

Una litosoma, de acuerdo a Wheller y Mallory es una unidad estratigráfica descrita

“vertico-lateralmente”. No puedo estar de acuerdo con estos autores respecto a que

tales unidades difieren en su noción de unidades tomadas aisladamente en sentido

vertical o lateral El litosoma es esencialmente idéntico con la magnafacies de

Caster. Ambas son masas de rocas con facies isópicas y heterócronas (fig. 1).

Page 21: Facies (1)

La “asociación consanguínea” de Pettijohn (1957) fué definido como “un grupo

natural de rocas sedimentarias relacionadas entre sí genéticamente”. Es un

concepto útil que, sin embargo como ya lo anotó Fairbrigde (1918) no debería ser

equiparada directamente con la “facies” como tal. Mejor una asociación

consanguínea podría definirse como un grupo de rocas cuya facies indica que ellas

están relacionadas entre sí en su origen. Las asociaciones consanguíneas combinan

así los caracteres de las sucesiones de facies y de las cintas de facies o de las familias

de facies.

Recientemente, Adams y Weaver (1958) introdujeron el concepto de “facies

geoquímica o facies elemental”, con particular mención a la relación Th/U en las

rocas sedimentarias. Así ellos distinguen tres facies principales como facies de alta

relación Th/U, baja e intermedia. Este concepto de facies geoquímica aplicado a

características de la roca determinables con exactitud sirve como ayuda en los

análisis de ambientes. Se refiere a un aspecto de la “litofacies” como se entiende

generalmente y es, de este modo, lógico y preciso en su significado. Adams y

Weaver, no obstante, no hablan del concepto de “facies geoquímica” tal como lo

desarrollaron Pustalov y Teodorovich. Por razón del uso previo del termino “facies

geoquímica” en un sentido algo diferente y para evitar equivocaciones, parece

preferible utilizar como subtítulo el término alternante de Adams y Weaver “facies

elementales” para la constitución elemental y relaciones de las rocas sedimentarias.

CONCEPTO DE FACIES BIOFACIES EN ESTRATIGRAFIA Y EN ECOLOGIA

El término facies es empleado tanto en la ecología animal como la vegetal. en

ecología vegetal la facies ha sido definida como “The develomental united of

associes characterized... by the grouping of dominants” (Weaver y Clements, 1939).

Puesto que el estratígrafo casi nunca trata con las plantas en su hábitat original

(biocenosis de la flora). Las posibilidades de equívocos o conflictos que surgen a

causa del uso de facies por los ecólogos son pequeños.

Page 22: Facies (1)

Los casos de facies en la ecología animal y de facies en la ecología marina, sin

embargo son diferentes. Ambos están estrechamente relacionados, pero se refieren

a un asunto totalmente diferente del de la facies estratigráfica. Por ejemplo, la

expresión “facies arenosa” en estratigrafía significa una unidad litológica que

puede ser arenisca o alguna otra roca sedimentaria con un importante componente

arenisco. Una “facies arenosa” en ecología marina por otra parte, es una asociación

de animales o de plantas o de ambos, los cuales viven sobre un fondo marino

arenosos. la discusión siguiente se limita al concepto de facies en ecología, con

énfasis sobre la ecología animal.

Pheleger (1954) casi al mismo tiempo estudió la microfauna en el área de la

albufera del Mississipi y al cual dividió en cuatro biofacies y geográficas: Golfo hre,

albufera y marisma siendo aplicador estos términos para asociaciones

características de foraminíferos. Evidentemente, la biofacies de Phleger es

totalmente diferente de la de Imbrie. Discutiendo la aplicación geológica de este

estudio Pheleger reconoce que debe esperarse cambios en las biofacies original

debidos a influencias geológicas. De esto podemos deducir que la “biofacies”

estratigráfica que finalmente ocupara el sitio del mississipian sound, se podrá

esperar que variara respecto de la biofacies ecológica original y que habrá

certidumbre de que podamos reconstruir esta ultima a través del estudio analítico

de la primera.

La diferencia entre los tipos de “biofacies” es tan evidente que necesita poca

explicación. Una biofacies estratigráfica esta determinada por fósiles que en las

condiciones mas ideales pueden representar parte de la “biofacies” ecológica

original, pero que con mayor frecuencia no representa esta ultima. Una “biofacies

ecológica”, por otra parte, abarca muchos elementos que no pueden fosilizar y que

por esta razón nunca pueden participar de una biofacies estratigráfica, además, los

restos orgánicos de dos o más “biofacies” ecológicas pueden ser enterrados en un

mismo lugar y así construir una “biofacies estratigráfica” que guarda poca o

ninguna semejanza con cualquiera de las biofacies ecológicas originales.

Page 23: Facies (1)

La duplicidad en el empleo del término biofacies podría ilustrarse con base a

publicaciones adicionales en estratigrafía y en ecología marina. Abrand (1927)

parece haber sido el primero en llamar la atención a esta indeseable situación,

aunque el termino biofacies mismo aparentemente no era aun conocido por él.

Algunas veces la expresión “facies fauníticas”, se emplea como en Ladd et al.

(1957), para una biofacies ecológica. En tal trabajo términos como facies arrecifal

o inter-arrecifal tienen un significado que no concuerdan con el sentido que estos

términos tiene en estratigrafía, por que los autores emplean “facies arrecifales” para

comunidades animales que ocupan intervalos del fondo del mar situados entre los

bancos de ostras.

Puesto que el concepto ecológico de biofacies esta más íntimamente ligado al

significado literal de la palabra que el concepto estratigráfico correspondiente, el

uso de tal termino debería restringirse a ecología marina independiente de posibles

conflictos de prioridad. Las biofacies están representadas por o son subdivisiones de

las biocenosis. Puesto que no puede existir verdadera biocenosis fósil, sería

aconsejable en los estudios estratigráficos volver al empleo de la facies

paleontológica, un concepto sin ambigüedades y bien definido desde el siglo XIX y

principios del siglo XX.

Cuando se analizan facies paleontológicas es conveniente y lógico distinguir

comunidades fósiles y asociaciones de fósiles. Las primeras reuniones de fósiles

ecológicamente relacionados entre si; las ultimas pueden constar totalmente de

fósiles no relacionadas ecológicamente, o pueden ser de composición mixta.

Debería recordarse también que no todos los fósiles que componen una facies

paleontológica son fósiles de facies, reservándose este ultimo termino para los fósiles

que están restringidos a facies definidas y así, pueden ser indicadores de ciertos

ambientes.

CONCEPTO DE FACIES EN LA UNION SOVIETICA

Page 24: Facies (1)

Las constantes discusiones del concepto de facies entre los geólogos soviéticos

durante los últimos 25 años han producido muchos conceptos nuevos, de los cuales

únicamente algunos pueden revisarse en este trabajo. Pocos de ellos han tenido

acogida en la literatura geológica de Europa Occidental y Norte América. El

siguiente resumen es breve e incompleto. Para una discusión completa el lector es

remitido a Markevich (1957).

Hasta ahora en general los autores rusos habían adherido al concepto de facies tal

como era empleado por la mayoría de los geólogos europeos. La siguiente cita de

un texto escrito por el notable geólogo Borisyak puede tomarse como típica: “por

facies entendemos los caracteres físicos de un área o de un estrato dados de la

superficie terrestre cuando se encuentra en unión con una asociación definida de

animales o plantas”. Las facies fue definida tanto atendiendo a las condiciones

físicas a la fauna y a flora.

En 1933, Pustalov propuso el concepto de facies geoquímicas: que definió como

“Una porción de la superficie terrestre a lo largo de la cual existe unas mismas

condiciones físico químicas y geoquímicas de acumulación y formación de rocas

sedimentarias”. El concepto fue desarrollado posteriormente por Teodorovich

(1947) y por Pustalov (1954) mismo que distinguió los siguientes tipos de facies

geoquímicas.

1. Facies sulfurosa (fuertemente reductora).

2. Facies siderítica (reductora).

3. Facies leptoclorítica (levemente reductora).

4. Facies glauconítica (neutral).

5. Facies oxidante (exceso de oxígeno).

6. Facies ultraoxidante (sedimentos con pirolusita).

Evidentemente, en el lenguaje de la mayoría de los geólogos estas facies representan

diversos ambientes caracterizados por la presencia de reacciones químicas en el

medio de sedimentación.

Page 25: Facies (1)

1. Origofacies: Facies del medio original de sedimentación.

2. Lapidofacies: Facies del medio diagenético.

3. Densofacies: Facies del medio metamórfico.

4. Eksedofacies: Facies del medio de alteración.

La densofacies de Vasoevich es idéntica a las facies metamórfica de Eskola. la

lapidofacies y la eksedofacies están excluidas del concepto de facies por definición

original y la origofacies es la misma facies de la mayoría de los autores occidentales.

Markevich (1950) habla de facies geológicas que define como “cierto volumen de

capas sedimentarias caracterizadas por complejos semejantes análogos de

características paleontológicas, petrográficas y físico químicas, que dan una idea de

las condiciones tectónicas, físico químicas, bióticas y geográficas de formación del

sedimento”. La facies geológicas se convierte en un conjunto de facies:

Facies geoquímica.

Facies litológica.

Facies de carbonatos.

Facies faunística.

Facies florística.

Facies petrolífera.

Facies carbonosa.

De estas categorías, las facies litológica, faunística, florística parecen caer en el

verdadero concepto de facies estratigráficas. Las otras categorías reflejan ambientes

claramente delimitados que deben corregirse de las observaciones de las facies

litológica y paleontológica, o, si lo tomamos literalmente, las facies con carbonatos,

las petrolíferas y con carbones son categorías especiales de las facies litológica.

CONCLUSIONES

Page 26: Facies (1)

La discusión precedente puede resumirse como sigue:

1. El concepto de facies en estratigrafía que descansa sobre los principios

enunciados por Prevost y Oppel, quedo firmemente establecido en el pensamiento

general europeo antes de terminar el siglo XIX.

2. Por su desarrollo el término facies debería lógicamente restringirse a rocas

sedimentarias (6). Dicha voz expresa un concepto estratigráfico.

3. La facies es la suma total de todas las características primarias de una roca

sedimentaria, de las cuales puede deducirse una sustracción. No es, por tanto, una

clase particular de roca sino algo que tiene la roca.

4. Los cambios secundarios, incluyendo aquellos introducidos por meteorización y

metamorfismo no son parte de las facies estratigráfica. Por ejemplo, el término

facies dolomíticas debería es cuanto fuese posible, reservarse para dolomitas

reconocidas con primarias o penecontemporaneas. Las facies metamórfica, “ígnea y

mineral de Eskola y otros y la lapidofacies, eksedofacies de Vassoevich por su

significado con diferentes y no están relacionadas con las facies estratigráficas.

5. Las facies disímiles se denominan heterópicas y las facies idénticas o muy

similares se llaman isópicas.

6. Las cintas de facies están constituidas por sistemas de facies heteropicas

isócronas genéticamente interconectadas. Varias cintas de facies pueden agruparse

en la familia de facies y varias familias de facies en una serie de facies, cada una de

estas categorías caracterizan asociaciones de facies que son indicadoras de

ambientes progresivamente más extensos y más variados.

7. Las facies isópicas pueden reconocerse en sucesiones estratigráficas separadas

verticalmente en un área de sedimentación o cuenca. Por ejemplo, se reconocen

Page 27: Facies (1)

facies isópicas recurrentes en los ciclotemas de la región continental del centro de

E.E.U.U.

8. El reconocimiento de cambios verticales de facies o secuencias de facies, es tan

importante como el cambio lateral de facies. De un mismo modo como los cambios

laterales de facies dan información acerca de la diversidad de condiciones

ambientales cuevas en una misma cuenca de sedimentación, la observación de

cambios verticales de facies es fundamental para el estudio de los cambios en las

condiciones ambientales del tiempo. Considerándose que a la estratigrafía atañe el

estudio de las sucesiones de eventos geológicos, el concepto de secuencia de facies es

importante. Rechazar el concepto de cambio vertical de facies es ilógico puesto que

toda unidad estratigráfica tiene una dirección vertical y representa un intervalo de

tiempo. Donde una facies endenta lateralmente con otra facies ocurre una

superposición vertical de facies. Sería impracticable establecer generalizaciones

arbitrarias para determinar cuando un cambio de facies sesa de su lateral.

9. La facies debería usarse como un término estrictamente descriptivo para

referirse a las características litológicas y (o) paleontológicas de una roca

sedimentaria. La interpretación ambiental es el fin último de los estudios de facies.

Al ambiente produce las facies. Las interpretaciones pueden estar sujetas a cambios;

las facies que indica un ambiente litoral para un observador puede sugerir un

ambiente continental (eólico) para otro. De aquí que términos tales como facies

litoral no tienen sentido o al menos son ambiguos.

10. El empleo del término facies para sucesiones estratigráficas generalizadas

establecidas en fajas palogeográficamente o tectónicamente definidas tales como

facies transgresiva, regresiva, geosinclinal, litoral neritica, batial, abisal, Ouachita,

Appalachiana y muchas otras es inexacta. Puesto que sería ilógico esperar que tal

uso sea abolido de la noche a la mañana es necesario comprender que, cuando se

emplea en este sentido, el concepto pierde utilidad como instrumento analítico. La

facies es este sentido, llega a ser un término nebulosos para toda clase de situaciones

Page 28: Facies (1)

paleograficas y geotectonicas vagamente definidas, con el cual los autores pueden

aplicar el concepto a preferencias teóricas.

11. La facies ecológica es conceptualmente diferente de la facies estratigráfica. La

primera puede carecer de sedimentos, la última de restos orgánicos. Dichas

“facies” no son comparables.

12. La “Biofacies” como se usa hoy día en estratigrafía es conceptualmente

diferente de la biofacies en ecología, especialmente en ecología marina. La

“biofacies” estratigráficas puede no representar y no estar relacionada con

cualquier biofacies ecológica particular preexistente. El uso del termino biofacies

debería restringirse a ecología y los caracteres llamados hay así en estratigrafía

deberían denominarse facies paleontológicas.

Tres maneras de considerar la relación entre las facies:

I Vertical lateral.

II Lateral.

III Vertical.

I A1+A2+A3+A4+A5= Facies isópicas heterocronas (“magnafacies”

“litosoma”).

II A3+B3+C3+D3= Cinta de facies isócronas heterópicas (cada elemento

: parvafacies).

III Sección columna a - a´ secuencia de facies compuesta por

[A5+(B5,B4) + (C4,C3) + D3] facies heterocronas heterópicas.

FIG. 1: Secuencia generalizada de las rocas formadas en condiciones de

transgresión. Las líneas oblicuas son los límites de las facies, las líneas

horizontales corresponden a planos que indican tiempos diferentes. Las

facies iguales se indican por letras romanas; los depósitos cronológicamente

equivalentes por números.

Page 29: Facies (1)

5) Dumbar y Rodgers tradujeron la voz Francesa Terrain como “formación”

aunque dan como término alternante “unidad estratigráfica” realmente, un terrain

en francés puede estar compuesto por varias formaciones en el sentido Americano.

6) Stainforth (1958) sugirió recientemente que tratasen las rocas sedimentarias

como “continuas en cuatro dimensiones”. Esto es obviamente una aplicación

errónea de un término tomado de la física teórica. Las rocas sedimentarias son

cuerpos cuyas propiedades pueden registrarse en un sistema de coordenadas

cartesianas, son cuerpos finitos no continuos bien sea tetra o tri-dimensionalmente.