El palacio del marqués de Camposagrado en Avilés (Asturias ...El proyecto de ensanche de las casas...

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RESUMEN En este artículo se analiza el proceso constructivo del palacio del marqués de Camposagrado en Avilés a finales del siglo XVII, así como el conflicto motivado por la denuncia de unos vecinos contra la integración de la muralla de la villa en la nueva obra. PALABRAS CLAVE: Marqués de Camposagrado, palacio barroco, muralla de Avilés, Francisco Menéndez Camina. ABSTRACT In this paper the history of the construction of the Baroque extension of the Marquess of Camposagrado palace in Avilés at the end of the 17 th century is analysed, which includes the conflict caused by the denun- ciation of the neighborhood against the absorption of the town defensive wall in the new work. KEYWORDS: Marquess of Camposagrado, Baroque palace, Avilés defensive wall, Francisco Menéndez Camina. * * * * El palacio del marqués de Camposagrado en Avilés (Asturias) y la muralla de la villa a finales del siglo XVII Vidal de la Madrid Álvarez Universidad de Oviedo LIÑO 16. Revista Anual de Historia del Arte. 2010

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  • RESUMENEn este artículo se analiza el proceso constructivo del palacio del marqués de Camposagrado en Avilés a

    finales del siglo XVII, así como el conflicto motivado por la denuncia de unos vecinos contra la integraciónde la muralla de la villa en la nueva obra.

    PALABRAS CLAVE:Marqués de Camposagrado, palacio barroco, muralla de Avilés, Francisco Menéndez Camina.

    ABSTRACTIn this paper the history of the construction of the Baroque extension of the Marquess of Camposagrado

    palace in Avilés at the end of the 17th century is analysed, which includes the conflict caused by the denun-ciation of the neighborhood against the absorption of the town defensive wall in the new work.

    KEYWORDS: Marquess of Camposagrado, Baroque palace, Avilés defensive wall, Francisco Menéndez Camina.

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    El palacio del marqués de Camposagrado en Avilés

    (Asturias) y la muralla de la villa a finales del siglo XVII

    Vidal de la Madrid ÁlvarezUniversidad de Oviedo

    LIÑO 16. Revista Anual de Historia del Arte. 2010

  • El proyecto de ensanche de las casas del marqués de Camposagrado en Avilés

    En 1661 Gutierre Bernaldo de Quirós(†1699) recibió del monarca Felipe IV la con-cesión del marquesado de Camposagrado, aso-ciado al vizcondado previo de las Quintanaspara los herederos del mayorazgo. En estemomento, el joven marqués encabezaba yauno de los linajes más prestigiosos e influyen-tes de Asturias, pues como pariente mayor asu-mía la representación de las cuatro ramas queintegraban la familia de los Bernaldo de Qui-rós: la baronía de Camposagrado, el solar deOlloniego, la casa de Figaredo y el solar deLangreo. La obtención del título supuso, portanto, el reconocimiento de la trascendenciasocial de un clan nobiliario eminente que con-trolaba el gobierno de numerosos concejos einfluía mediante sus votos en las decisiones dela Junta General del Principado.

    Al igual que otras familias relevantes de lanobleza asturiana, los Quirós se habían vistoen la necesidad de abordar un largo proceso deafianzamiento económico, político y social,que evidenciase con claridad su posición privi-legiada en un territorio donde la generaliza-ción de la hidalguía había provocado ciertodesprestigio de esta condición. Semejante pro-ceso pasaba, en primer lugar, por evitar la dis-persión y empobrecimiento de un patrimoniofamiliar basado en las rentas de la tierramediante la fundación de vínculos y mayoraz-gos. De este modo se aseguraba la continuidaddel linaje y se ponían las bases para el acre-centamiento de sus bienes, mediante una ade-cuada estrategia de enlaces matrimoniales que,además de reforzar los compromisos entre losclanes próximos, incorporaba nuevas propie-dades rústicas y un catálogo muy diverso deconstrucciones residenciales.

    El siguiente paso fue asegurar su hegemo-nía política y con este fin adquirieron numero-sas regidurías en los concejos asturianos, queno sólo garantizaban el control de los gobier-nos locales, sino también la influencia en laJunta General del Principado, al estar com-puesta en su mayor parte por regidores perpe-tuos elegidos por los municipios. Los Quirós,por tanto, participaron también de la progresi-va patrimonialización de las instituciones yalcanzaron un lugar muy destacado entre laoligarquía nobiliaria asturiana.

    Semejante ascenso social requería de uninstrumento oficial que lo hiciese patente y elmarquesado vino a colmar estas expectativas.

    No obstante, la progresión política de Bernar-do de Quirós no quedó aquí, sino que fue enaumento y en 1676 recibió el nombramientode presidente de la Real Audiencia de Santa Fey gobernador y capitán general del NuevoReino de Granada. Pese a que en los añosnoventa el marqués percibió importantesremesas de metal precioso procedentes de Perú,el carácter electo de estos cargos y su presen-cia documentada en la región durante la etapaposterior a su nombramiento parecen indicarque nunca llegó a desplazarse a América. Ade-más, Bernardo de Quirós ocupó otros impor-tantes cargos políticos como corregidor de laciudad de Burgos y de la villa de Madrid,miembro del consejo de Hacienda, regidor per-petuo de Oviedo o representante en la JuntaGeneral del Principado1.

    Una vez afianzada su distinguida posiciónsocial resultaba ineludible hacerla patente asus conciudadanos y la mejor manera de evi-denciarla, la más palmaria y tangible, fue lareforma o la reconstrucción de nueva planta,según los casos, de sus viviendas. En esteaspecto, Bernardo de Quirós reprodujo tambiénel comportamiento habitual de las grandesfamilias de la aristocracia asturiana que habí-an convertido sus casas en la encarnación desu imagen pública. Considerada de esta forma,la vivienda nobiliaria adquiría un excepcionalvalor simbólico, pero también conllevabamuchos riesgos, pues los linajes se vieron abo-cados a una espiral de emulación, suntuosidady exhibicionismo, que causó graves quebran-tos en la economía de unas familias perma-nentemente endeudadas, con seculares proble-mas de liquidez y que solían vivir por encimade sus posibilidades.

    En el caso del marqués de Camposagrado,la reforma y ampliación de su casa de Avilés,seguida casi inmediatamente por el intento dereconstruir su vivienda en Oviedo (1698),supuso el inicio de un ambicioso programa de

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    1 Acerca de los cargos políticos del marqués de Campo-sagrado, así como de su influencia en la Junta Generaldel Principado deben consultarse PÉREZ DE RADA, J.:Relación de los poseedores del Castro y Palacio de Pria-ranza del Bierzo de alguno de sus allegados y descen-dencia de ellos, Madrid, Fundación Jaureguízar, 1999,p. 96; MENÉNDEZ, A.: Elite y poder: La Junta Generaldel Principado del Principado de Asturias 1594-1808,Oviedo, IDEA, 1992 y MADRID ÁLVAREZ, Vidal de la,“Arte y mecenazgo indiano en la Asturias del AntiguoRégimen”, en Luis SAZATORNIL RUIZ (ed.), Arte ymecenazgo indiano. Del Cantábrico al Caribe, Gijón,TREA, 2007, pp. 330-333.

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  • modernización de sus principales residenciasen la región, que puede explicarse por la nece-sidad de un cambio de imagen acorde con sunueva posición hegemónica en la sociedadasturiana2.

    Gutierre Bernardo de Quirós había recibidoel patrimonio de los Alas Carreño a través desu madre, Eulalia de las Alas, y habitaba en lavivienda que esta familia poseía en Avilés arri-mada al lienzo septentrional de la muralla. Afinales del siglo XVII, en el momento de ini-ciarse la reforma del conjunto, la vieja casa delos Alas era ya el resultado de varios impulsosedificatorios. La construcción más antiguahabía sido una casa bajomedieval erigida entorno al siglo XIV y próxima a la cerca, peroseparada de ella. Estaba asociada a una torrede cronología probablemente algo anterior,que se corresponde con la que hoy ocupa laesquina suroccidental del palacio. A finales delsiglo XV o ya en el siglo XVI tuvo lugar la pri-mera gran ampliación de la vivienda. En estemomento se rehizo la fachada meridional, quese encontraba algo retrasada respecto a laactual, y se fabricó en ella un arco de mediopunto de amplio dovelaje, hoy conservado tansólo parcialmente, que constituiría la nuevaentrada de la casa. Además, se reconstruyerontambién los muros de la torre y la vivienda seexpandió por su flanco septentrional hastaalcanzar la muralla, absorbiendo el camino deronda y erigiendo sobre la cerca la nuevafachada de la vivienda3.

    Este sería, a grandes rasgos, el aspecto quepresentaría la vivienda cuando Gutierre Ber-nardo de Quirós abordó su reconstrucción y

    ensanche en el último tercio del siglo XVII. Supropósito sería, sin duda, lograr un edificiomás cómodo y moderno, dotado de los espa-cios y el desahogo que requería la activa socia-bilidad de la época, pero también aspiraría aerigir un casa dotada de la ambición y suntuo-sidad inherentes a su privilegiada posiciónsocial.

    La escasez de documentos y la penuriainformativa de los conservados no han permi-tido hasta el momento efectuar una asignaciónindudable de autoría, ni tampoco aclarar si lasreformas fueron el resultado de un plan gene-ral preconcebido o la mera adición de proyec-tos parciales. La aparición del arquitecto Fran-cisco Menéndez Camina el Viejo o mayor endías (c.1629-c.1694) en uno de los contratos, elreconocimiento de su estilo en el diseño de lafachada meridional, su vinculación profesionalcon los maestros documentados en esta obra yla confianza demostrada por el marqués enotros encargos de su patrocinio aconsejan atri-buir a este artífice la responsabilidad principalen la concepción de las reformas4. En contrade la hipótesis del tracista único, ya fueseMenéndez Camina u otro maestro, podríaargumentarse la diversidad de diseño que seaprecia entre la exuberancia de la fachadameridional y la severidad de la septentrional.Sin embargo, la diferente concepción de ambasfachadas encuentra su explicación en la distin-ta funcionalidad que asume cada una de ellas.Así, la meridional se pensó como un suntuosobalcón abierto hacia la ciudad, mientras que laseptentrional tan sólo aspiraba a convertirseen un sencillo mirador hacia la ría, dependien-te del carácter defensivo que exigía su ubica-ción ante la cerca y menos interesada por el

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    2 Ya hace tiempo que el profesor Ramallo vinculó elreconocimiento social del linaje con la iniciativa dereconstrucción de sus viviendas en Avilés y Oviedo enel estudio Germán RAMALLO ASENSIO, “Las casasurbanas de la familia Camposagrado”, en II Simposiosobre el P. Feijoo y su siglo, II, Oviedo, Centro de Estu-dios del siglo XVIII, 1983, pp. 575-592. Para el caso delpalacio del marqués de Camposagrado en Oviedo debeconsultarse Vidal de la MADRID ÁLVAREZ, Pedro Anto-nio Menéndez. Un arquitecto entre el Barroco y la Ilus-tración, Avilés, Azucel, 1997, pp. 34-62.

    3 El proceso constructivo desde los orígenes bajomedie-vales de la casa hasta la reforma barroca ha sido ana-lizado por Otilia Requejo, Rosalía Pérez y SantiagoCalleja, quienes, con motivo de la rehabilitación deledificio en el año 2004, pudieron documentar arqueo-lógicamente las diversas fases constructivas e identifi-car los huecos y restos de lienzos ocultos bajo las car-gas de los muros; véase Otilia REQUEJO, Rosalía PÉREZy Santiago CALLEJA, “Arqueología e Historia” enAA.VV., Palacio de Camposagrado de Avilés, F.C.C.,2007, pp. 17-92.

    4 Germán Ramallo atribuyó la factura de la fachadameridional a Francisco Ménendez Camina argumentan-do la escasa entidad de los maestros contratantes de laobra frente a la relevancia que ya había alcanzado elarquitecto avilesino para esas fechas; véase GermánRAMALLO ASENSIO, La arquitectura civil asturiana(Época Moderna), Salinas, Ayalga, 1978, pp. 134-136 .Poco después, este mismo autor caracterizó como“decorativismo barroco” el estilo de los MenéndezCamina en su estudio “El decorativismo en la arquitec-tura barroca asturiana. Los Menéndez Camina”, en AA.VV., I Semana del Patrimonio Artístico Asturiano,Gijón, Caja de Ahorros de Asturias, 1979, pp. 83-103.Por mi parte, he proporcionado una aproximación a laobra de ambos artífices en Vidal de la MADRID ÁLVA-REZ, “El obispo fray Simón García Pedrejón y la capi-lla de Santa Eulalia de Mérida en la catedral de Oviedo(1690-1696). Nuevas aportaciones”, Liño, 14, Oviedo,2008, p. 47.

  • asombro ciudadano. Por último, la proximidadcronológica de los proyectos, que se van suce-diendo sin apenas solución de continuidad,delata también la presumible existencia de unplan único, probablemente ideado por el pro-pio Menéndez Camina, que habría sido ejecu-tado en fases sucesivas.

    Sea como fuere, no hay duda de que lasintenciones del promotor al iniciar la reformaeran transformar la vieja y ensimismada resi-dencia medieval en una gran casa barrocaabierta a la villa y a su entorno portuario. Lanueva fábrica se organizaría así alrededor deun patio central que no ha llegado hasta nos-otros, pero que tal vez ofreciese la misma for-mulación porticada que se aprecia en otrasviviendas contemporáneas. Precisamente, laprimera intervención documentada de estareforma fue la construcción de una escaleramonumental de piedra labrada de Bustiello quecomunicase el patio con los corredores de laplanta superior. El contrato fue suscrito porFrancisco Menéndez Camina el Viejo el 27 demarzo de 1685 y al mismo tiempo estaba obli-gado también a realizar diversas obras meno-res (paredes, puertas y ventanas) que adviertenacerca de la profunda transformación que

    estaba experimentando el espacio interior de lacasa5.

    Desconocemos si la factura de esta escale-ra, que aún se conserva en buen estado, sehabía visto precedida de la reconstrucción delpatio, pero parece razonable pensar que lostrabajos pudieron iniciarse por esta zona delconjunto. De cualquier manera, lo cierto es quetras la escalera pétrea siguió el ensanche delflanco septentrional (1686) que derivó en unlargo e incómodo conflicto con la administra-ción a causa de la absorción de esta zona de lamuralla y el avance de la casa más allá de lacerca.

    La superación de la muralla y la denuncia de los vecinos

    Prosiguiendo los trabajos de ensanche desu casa de Avilés, en 1686 el marqués de Cam-

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    5 RAMALLO ASENSIO, Germán, La arquitectura civilasturiana, p. 134. La trascripción de este documento hasido publicada en Otilia REQUEJO, Rosalía PÉREZ ySantiago CALLEJA, “Arqueología e Historia”, p. 90.

    2. Fachada septentrional del palacio del marqués de Camposagrado de Avilés en la actualidad.

  • posagrado agregó un cuarto nuevo al flancoseptentrional de la misma avanzando más alláde la muralla de la villa6. Esta pieza, cuyasobras se extendieron hasta el año 1690, gene-ró una nueva fachada por delante de la líneade la antigua cerca, cuyo muro se mantuvo sin

    apenas alteraciones en el espacio interior de lavivienda.

    El nuevo frente norte de la casa, dispuestooriginalmente hacia la ría y el puerto de lavilla, ocupa toda la amplitud de la vivienda enesta zona. Se extiende entre un cubo de la

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    6 Fue el propio marqués quien determinó la cronologíade esta ampliación cuando, a finales de 1690, declaróque había agregado “por la parte del zierzo un quartode aumento de bibienda que labró y acabó el año deochenta y seis en el qual dio principio a la galería”. Este

    3. Tramo de muralla y arco practicado sobre la misma para garantizar la conexión con el adarve en la esquina noroccidental del palacio delmarqués de Camposagrado de Avilés. El cubo se edificó sobre otro anterior perteneciente a la cerca.

    dato figura entre la documentación generada tras ladenuncia anónima de las obras de la galería por algu-nos vecinos de la villa. Véase Archivo General deSimancas (en adelante A.G.S.), GYM, leg. 2854, foliossueltos.

  • muralla situado en su esquina noroccidental,que fue remozado para integrarlo en la obra, yotro cubo realizado en este momento y, portanto, sin relación con la cerca, que fue ideadotan sólo para equilibrar la estructura en el ladoopuesto. Entre ambos, la fachada se organizaen tres niveles. El inferior mantuvo en su con-cepción inicial la naturaleza defensiva caracte-rística de la muralla dispuesta tras él y sematerializó como un muro sólido y cerrado tansólo practicado mediante saeteras y con unapuerta en su centro para comunicar la casa con

    el puente de Sabugo. A su vez, el primer pisoes una vistosa galería de diez arcos rebajadosapoyados sobre columnas toscanas, que abri-gaba un enlosado concebido como paseoconectado con el adarve de la muralla. Paraello, se abrieron en los flancos de la fachadasendos arcos que comunicaban con el paso deronda y permitían la circulación en caso denecesidad. Por último, el segundo piso adoptatambién una formulación muy abierta median-te una sucesión de balcones dispuestos aplomo con las arcadas de la planta inferior. A

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    4. Arco practicado sobre la muralla para facilitar la comunicación con el adarve en la esquina nororiental del palacio del marqués de Cam-posagrado de Avilés.

  • ambos lados de la fachada el marqués esculpiólos escudos de su linaje, rematados ya por lacorona del marquesado, que consagraban ladiscutible apropiación del espacio exterior a lacerca.

    Como puede apreciarse, semejante estruc-tura ensanchaba con generosidad los límites dela casa de los Alas en esta zona, pero el avan-ce sobre la muralla y el carácter abierto de lagalería despertaron los recelos de algunos avi-lesinos que lo interpretaron como un peligropara las defensas de la ciudad y decidierondenunciar al marqués ante el monarca. Estadenuncia es un texto anónimo, que tambiéncarece de fecha, aunque si atendemos a ladocumentación generada a partir de él puededatarse entre los meses de junio o julio de1690. Los responsables del escrito comienzansu exposición justificando el anonimato “portemor de la persona de quien se habla”7 aquien se atribuye un poder extraordinario en elPrincipado. Consideran que los cargos de alfé-rez mayor y alguacil mayor del Principado, asícomo el de alférez mayor y alcalde ordinariode la villa de Avilés proporcionaban al mar-qués una gran influencia, llegando incluso asuponerlo “la persona de más posible autori-dad” de la región.

    Además, este dominio se incrementaba enAvilés por “la circunstanzia de tener toda lamayor parte de el ayuntamiento de dicha villa asu disposizión por ser suyos muchos de los ofi-zios que obtienen algunos regidores y los demásparientes y amigos suyos”. En efecto, la adqui-sición sistemática de regidurías que practicaronlos grandes linajes del Principado a lo largo dela Edad Moderna como estrategia de afianza-miento político y social derivó hacia una pro-funda oligarquización de las instituciones loca-les, pues acabaron en manos de las familias máspoderosas, que colocaban en los cargos a susparientes o a los integrantes de sus clanes máspróximos. Sin duda alguna, el marqués de Cam-posagrado ejercería esta influencia en Avilés y,en consecuencia, tampoco extraña la cercanía eintimidad con el sargento mayor de la villa quelos denunciantes señalan como otro de losmotivos que disuadirían a los vecinos delenfrentamiento cara a cara.

    Pese a ello, un grupo de ciudadanos ampa-rados en el anonimato denunciaron las obras

    que el marqués estaba haciendo sobre la cercapor carecer de licencia real. En su opinión, estostrabajos arrasaban una parte sustancial de lasmurallas de la villa y la dejaban indefensa encaso de ataque. Tengamos en cuenta que, enaquellos momentos, Avilés se encontraba total-mente cercada por una muralla cuyo perímetro,unos 800 metros, aún puede recorrerse sin difi-cultad. Esta cerca encerraba una superficie deunas cuatro hectáreas y media y estaba practi-cada por cinco accesos principales, coincidentescon las calles más importantes de la villa: lapuerta del mar, la puerta del postigo o de laCámara, la puerta de Cimadevilla o del reloj, lapuerta de la Ferrería y la puerta de los Pilares.Sus orígenes están poco claros, pero sabemosque ya existía en el siglo XII y que fue recons-truida y reparada periódicamente8.

    Para mostrar con mayor claridad el dañocausado a la muralla por las obras del mar-qués, los vecinos acompañaron su escrito conun plano que ahora presentamos9. Este dibujoreproduce la planta y el alzado de un tramo dela cerca de la villa que iba desde la puerta delmar, que comunicaba la población con el puer-to y el arrabal de Sabugo, y el cubo más pró-ximo a la esquina occidental de la casa de losAlas. El diseño carece de firma pero revelacierta destreza para el trazado arquitectónico,lo cual apunta a que su autor pudo haber sidoun profesional de la construcción. Además, seacompaña de una nota explicativa donde seaclara el significado de los números que apa-recen en el dibujo. Esta nota es como sigue:

    “La distribución de el disinio presentte escomo se sigue.

    Los números 13 y 14 señalan el grueso quetiene la muralla en su planta, que ba circun-dando la villa, según ba demonstrado en todoel grueso señalado en dichos números y consus cubos rredondos rrepartidos a trechos endicha muralla, según señalan los números 8 enel fundamento = número 2 es el ancho y sitiodonde está la puerta de el mar, que es por

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    7 El texto completo de la denuncia figura en A.G.S.,GYM, leg. 2854, folios sueltos.

    8 Puede consultarse un análisis de la muralla de Avilésasí como una reconstrucción fiable de su trazado enOtilia REQUEJO, Rosalía PÉREZ y Santiago CALLEJA,“Arqueología e Historia”, pp. 30-35. Deben consultarsetambién Alejandro GARCÍA ÁLVAREZ-BUSTO y Alfon-so FANJUL PERAZA, “Revisión histórico-arqueológicade la Muralla de Avilés (Asturias)”, Arqueología y terri-torio medieval, 12, Jaen, 2005, pp. 69-90, y JustoUREÑA Y HEVIA, Avilés y sus calles, Avilés, Azucel,1995.

    9 A.G.S., MPD, 61, 016. Se trata de un dibujo a tinta sobrepapel cuyas dimensiones son 31 x 61 cm.

  • donde se sale al cay, al arrabal de Sabugo, yotras partes, y la más principal que tiene dichavilla = número 3 y número 4 son los arcos quese hicieron en nuebo añadido para igualar conel anden de la muralla en lo alto = número 9 ynúmero 10 es el enlosado que se hizo en lo altopara paseo con la nueba fábrica = Desde elnúmero 11 hasta el mismo número es la parezque se hiço nuebamente y se sacó a hacia lacalçada y puente que pasa para dicho arrabalde Sabugo como se señala en los números 16y 17 y 18 = número 5 señala la puerta que sehiço en lo nuebamente añadido = El lienço deparez de los números 14 y 15 es el que tiene lacasa al pabimento de la muralla con sus puer-tas como está demonstrado.

    AlçadoEs de los números 19 hasta los 23 según

    están demonstrados de mampostería real consu almenaje, según se demuestra en el alçadopresente y sus cubos = los arcos demostradosen dicho alçado es la galería nuebamentefabricada, la qual se plantó sobre la parez nue-bamente añadida, y en la parte que estándemonstradas las basas en dicha parez queestán sobre el lienço de el número 1110.”

    El plano refleja con nitidez el alcance de lareforma, describe el estado de la muralla y evi-dencia que la obra se encontraba ya en unaestado muy avanzado y probablemente próxi-mo a su conclusión. Con la salvedad de loshuecos practicados en el muro inferior de lacasa y de la desaparición de los tramos demuralla que flanquean el edificio, su estado essemejante al actual.

    La denuncia siguió su curso y fue exami-nada en el mes de agosto de 1690 en el Con-sejo de Guerra. No obstante, con anterioridad aeste proceso y con unas motivaciones e inten-ciones aún no aclaradas, el primero de julio de1690 el escribano real José de la Peña Saravialevantó acta del estado de las obras con moti-vo de su estancia en el Principado ocupado en“cossas pertenecientes a el serbizio de sumajestad”11. Se trata de una mera descripcióndel estado de la fábrica en ese momento, peropone el acento en la demolición del antepechoy almenaje de la muralla, que, en su opinión,contrasta con la buena conservación del restode la cerca12.

    Poco después, el gobernador Gutierre Lassode la Vega recibió la real cédula de S.M. de 30de agosto de 1690, donde se le reclamabainformación de carácter secreto o reservadoacerca de la obra que había sido denunciada.El gobernador presentó su informe con fechade 23 de septiembre de 1690 disculpándose delretraso por la distancia que separaba Oviedo dela villa de Avilés. En su memorial confirma laejecución de los trabajos, insiste en la posiciónprivilegiada del marqués y, tal vez por esteúltimo aspecto, evita formular cualquier tipode juicio respecto del daño que la ampliaciónde la casa pudiera causar a las defensas de laciudad13.

    Algunas semanas más tarde, el marquésrecibió una real orden con fecha de 4 denoviembre de 1690 donde se admitían las tesisde los denunciantes (merma de las defensas ycarencia de licencia, especialmente) y se orde-naba el cese de los trabajos. Gutierre Bernardode Quirós se vio entonces en la necesidad deresponder a estas acusaciones y, a finales deese mismo mes de noviembre, expuso sus razo-nes en un largo memorial dirigido al monar-ca14. Toda la argumentación del marqués resi-día en dos aspectos fundamentales: los benefi-cios para la defensa de la villa y la frecuenciade este tipo de actuaciones en las poblacionesasturianas. En cuanto a lo primero, estimabaque la galería preservaba la muralla de la ero-sión y, además, consideraba que el nuevo murodispuesto ante la cerca también la protegería,pues la libraría del embate del mar con lamarea alta. Además, en su opinión, la galería

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    10 A.G.S., GYM, leg. 2854, folios sueltos.11 Ibídem.12 “he bistto ocularmentte una obra que estta fabricando

    el señor Marqués de Campo Sagrado inmediata a las

    cassas Principales que tiene en dicha villa la qual nazedesde frente a el puente que passa a el arrabal de ssa-bugo de dicha villa y brazo de mar de ella en que ayuna puerta de piedra labrada que ssale azia dicha puen-te y ssuben sus paredes astta ygualar con el pissado dedicha muralla: y desde allí arriba sube con colunas yarcos con demostración de aber de lebantar mas = y porla dicha muralla assí el gruesso que ella tiene como elbueco que ay desde ella a la pared referida y el grues-so de ella menos lo que ocupa dichas colunas todo estaenlossado de piedra labrada dejando dispossizión deuna galería de mas de ziento y beynte pies de largo yveynte de ancho por la cual ay diferentes puertas yventanas que salen de la cassa de dicho señor Marquésy según lo que sse reconoze de dicha fábrica para eje-cutarla fue nezessario demoler todo el antepecho yalmenaje que tenía dicha muralla, la qual en lo restan-te la tiene en toda ella exzetto lo que ocupa dicha fábri-ca y arcos”, ibídem.

    13 “no puedo hazer juicio, por no aver hallado medio queme lo dé a entender dejándolo a la alta y siempre azer-tada consideración de V.M.”; Ibídem.

    14 Ibídem.

  • también contribuía decisivamente a la defensade la plaza, pues, en caso de conflicto, amplia-ba el espacio disponible tanto para la ubica-ción de los vecinos, como para la colocaciónde la artillería15.

    Por otro lado, Camposagrado apreciaba queen el ensanche de su vivienda se había limita-do a actuar de igual forma que se estabahaciendo en el resto de las poblaciones cerca-das del Principado, donde los vecinos ocupa-ban la muralla siempre que garantizasen ellibre paso para la defensa en caso de ataque.De este modo justificaba que algunas autorida-des relevantes de la región, como miembros delos consejos de estado y de guerra, el corregi-dor o el sargento mayor de la villa, que habí-an conocido los trabajos a lo largo de los cincoaños que duró el proceso, contemplasen estaobra como algo natural y no cuestionasen suejecución. Igualmente, tampoco creía necesa-rio obtener licencia alguna, pues en Oviedo sehabían realizado fábricas similares “teniéndolaatajada el vezino que quiere” y nunca se habíapuesto embargo a las mismas.

    Efectivamente, en Oviedo pueden rastrearsediversos testimonios de ocupación de la mura-lla por particulares en la Edad Moderna, aun-que resulta de especial interés para este caso lalicencia otorgada por el ayuntamiento de laciudad a favor del colegio y seminario de SanJosé en el año 1674. A petición del arcedianode Villaviciosa se permitió al colegio no sóloarrimar su paredón a la muralla que sale alPostigo, sino también cerrar la cerca porambas partes, con la única exigencia de poneruna puerta con su cerradura correspondienteen cada uno de los paredones16. También enotras localidades más pequeñas se actuó deforma similar y tenemos un buen ejemplo en lacasa de Valdecarzana de Grado, erigida en sumayor parte en la Edad Moderna, cuyo lienzo

    septentrional se encuentra edificado sobre lamuralla medieval17.

    En cuanto a Avilés, el propio marquésencargó a cuatro escribanos un reconocimien-to de la cerca de la villa con el fin de que hicie-sen una relación de las construcciones arrima-das a la muralla o edificadas sobre ella parajustificar de este modo su propio proceder18. Lainspección tuvo lugar el 23 de noviembre de1690 y su informe, que describe con detalletodos y cada uno de los elementos vinculadosa la cerca, constituye un testimonio deextraordinaria importancia para el conoci-miento del estado de la muralla en estos años.En dicho memorial se anotan varios tramos dela cerca cubiertos mediante estructuras apoya-das sobre pilares o columnas que sustituían alas almenas. Además, también parece relativa-mente frecuente arrimar las casas a la murallao construir directamente sobre ella. Acerca delas propiedades del marqués, se anota que,además de sus residencia principal en la villa,poseía también una casa pegada a la torre delreloj, donde aún hoy figura el escudo de losAlas. Esta vivienda tenía puerta a la muralla yle servía de balcón y mirador a la plaza. Encuanto al ensanche septentrional de su vivien-da principal se informa que fue edificado sobresuelo de su propiedad, que la obra había sidoconcluida ese mismo mes y que el enlosadobajo la galería serviría como recreo y paseopúblico para los vecinos de la villa porquehabía franqueado el paso desde la muralla pormedio de sendos arcos en los flancos de lanueva construcción19. Por último, el reconoci-

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    15 En este punto, el marqués de Camposagrado llegaincluso a cuestionar la necesidad de insistir en la defen-sa de un puerto que ya entonces evidenciaba tan gra-ves problemas de circulación que podrían disuadir a unhipotético agresor, pues “no es de los abiertos, sino elmás zerrado por estar la barra a una legua de distanciay en costa braba donde el menor nabichuelo de comer-cio no puede entrar sin que salga barco a buscarle nillegar al muelle sin dos mareas por el poco fondo de laría en los quales de baçia mar se llega en seco portiera”; ibídem.

    16 VILLA GONZÁLEZ-RÍO, María Palmira, Catálogo-inven-tario del Archivo Municipal de la ciudad de Oviedo,tomo II, segunda parte, Oviedo, Ayuntamiento de Ovie-do, 1987, p. 816.

    17 REQUEJO PAGÉS, Otilia, “Excavaciones arqueológicasen el palacio de Miranda-Valdecarzana (Grado) 1992-1993”, en AA.VV., Excavaciones arqueológicas en Astu-rias 1991-1994, Oviedo, Consejería de Educación, Cul-tura y Deportes del Principado de Asturias, 1995, pp.318-321. Véase también Vidal de la MADRID ÁLVAREZ,“El palacio de Miranda-Valdecarzana y la capilla deNuestra Señora de los Dolores de Grado”, Liño, 11,Oviedo, 2005, pp. 103-125.

    18 A.G.S., GYM, leg. 2854, folios sueltos.19 “astas casas pego dicho señor marqués otro quarto en

    suelos suyos para mas aumento de bibienda y antedichos sus poços y muralla sobre que esta su casa a sucosta y en territorio suyo sacó un paredón de contra-muralla por el largo de toda su casa y a la punta dondeacaba la esquina del cuarto nuevo hizo otro cubo comolos demás que tiene la çerca de la villa en distançia dediez a doçe pies de la muralla y paso sobre este paredónla barbacana y antepecho con sus asientos y de la mura-lla vieja a su contramuralla hizo un enlosado como eldel cimenterio de la parrochia y de cada esquina de elcubo a las des sus casas hiço en dada una su arco almodo que los que ban referidos en la de don Gregorio

  • miento resolvía que la muralla se encontrabaperfectamente practicable en todo su perímetropues “qualquier persona puede andar toda ladicha muralla por cima de hella alrededor acavallo sin peligro alguno”.

    No obstante, este esfuerzo documental ape-nas surtió efectos, pues el proceso continuó enel Consejo de Guerra pese a los intentos delmarqués por liberarse del embargo y poderconcluir su casa, que se encontraba descubier-ta y expuesta a las inclemencias del tiempo20.Además, sus rivales políticos aprovecharon esteasunto para erosionar su autoridad en el Prin-cipado y en la diputación de 16 de agosto de1691 Antonio Solís Carbajal denunció laampliación de su casa en Avilés por haber arra-sado la muralla, con el riesgo que ello suponíapara la defensa de la plaza, por haber colocadosus escudos sobre la cerca, lo cual podría inter-pretarse como una apropiación ilícita, y porquedesconfiaba de que mantuviese siempre francoel paso a la galería, obstaculizando así la forti-ficación de la plaza21. También el conde de

    Canalejas y adelantado de la Florida, GabrielMenéndez de Porras y Avilés, presentó deman-da contra Camposagrado para que paralizaselos trabajos que estaba haciendo sobre la mura-lla y eliminase sus armas de la misma22. En estaocasión, el de Canalejas tal vez obrase molestopor el embargo que Bernaldo de Quirós habíapuesto en el mes de julio de 1691, en su propionombre y en el de la villa, a la ampliación quedeseaba hacer en sus casas principales de lacalle de la Ferrería, a causa de que obstaculiza-ba el tránsito por la vía23.

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    El palacio del marqués de Camposagrado en Avilés (Asturias)y la muralla de la villa a finales del siglo XVII

    de Llano y sobre su enlosado que serbio y sirbe de recreoy paseo público a todos los vecinos desta dicha villa ydejando franco y libre el paso de la muralla sobre laslosas de su propio paredón puso unas colunas de piedray unos arcos de lo mismo y sobre hellas sus puertas ben-tanas de piedra labrada y sobre estos arcos echo susviguetas desde la pared antigua de sus casas a la nuebaque fabrico para salir a las puertas y bentanas de ellas yotras viguetas sobre estas”, ibídem.

    20 El 27 de junio de 1761 el marqués de Camposagradootorgó un poder para tramitar la liberación del embar-go impuesto por la real orden. Archivo Histórico deAsturias (en adelante, A.H.A.), ante Manuel GonzálezColloto, protocolos notariales de Oviedo, caja 7667, s/f.

    21 “Don Antonio Solís Carvajal regidor de esta ciudad yvecino de la villa de Avilés diciendo que en ella estabafabricando el señor marqués de Camposagrado unagalería a las espaldas de su casa la cual fundaba sobreun lienzo de pared igual a la frente de dicha casa queestaba inmediata a las murallas de dicha villa y al nivelde la tierra y puente que iba al arrabal de Sabugo teníaabierto una puerta de piedra labrada y […] muralla dela cual había arrasado los antepechos y almenas y entodo lo que alcanzaba la dicha obra tenía hecho unenlosado de piedra de más de cien pies de largo y consuficiente anchura a la parte foral unas arcadas sobrecolumnas y en la parte que se unía con dicha su casados arcos de piedra labrada y en el segundo suelo unagalería con ventanaje hacia la parte del mar y a loslados dos cubos el uno que le hacía desde abajo y elotro que fundaba sobre el que tenía dicha muralla y quehabía puesto en la superior de ellos sus armas y siendoasí que dicha villa era de las primeras de este Principa-do y la que únicamente se hallaba con sus murallasenteras y bien reparadas para los acosos que podíanofrecerse y que se hallaba en ella dicho señor marquéscon el oficio de alférez mayor capitán de milicias y

    otros tres oficios de regimiento en personas que losejercían de su orden íntimo amigo del sargento mayorde aquel partido se podía recelar impidiese el paso pordicha muralla poniendo puertas a los arcos que teníaejecutado y pretendiese llevar a dicho enlosado la arti-llería de dicha villa”, A,H.A., Sección Diputación Pro-vincial, Libro de Actas de la Junta General del Princi-pado y Diputaciones (1686-1692), 84, Diputación de16 de agosto de 1691, ff. 325vº-327 (citado en Vidal dela MADRID ÁLVAREZ, “El palacio de Miranda-Valde-carzana”, p. 116).

    22 El conde de Canalejas aparece implicado como denun-ciante en el pleito de embargo contra la obra de Cam-posagrado en la escritura de fianza de demoler que esteotorgó el 23 de febrero de 1692 (A.H.A., ante Franciscola Puerta Rivera, protocolos notariales de Oviedo, caja7574, ff. 134-135). También en la escritura de poderotorgada por el marqués de Camposagrado el 5 de abrilde 1692 (A.H.A., ante Francisco la Puerta Rivera, pro-tocolos notariales de Oviedo, caja 7574, f. 16).

    23 El 16 de julio de 1691 el marqués de Camposagradootorgó una carta de poder para seguir un pleito deembargo en la Real Chancillería de Valladolid contra elconde de Canalejas para que suspendiese la ampliaciónde sus casas principales en la calle de la Ferrería deAvilés porque, además de quitar las vistas para las fies-tas de carreras públicas que se celebraban en dicha vía,“ocupa más de siete pies de la dicha calle haciendoesquina de escuadría lo que hera codo y está tan dere-cha a la dicha puerta [se refiere a la puerta de la mura-lla que comunicaba con la plaza pública] que los pasa-xeros de a pie y de a cavallo siendo dicha calle el cami-no real que pasa desde bizcaya a Galiçia tropieçan enla dicha esquina con riesgo en la obscuridad de sus per-sonas y cavallerías”, A.H.A., ante Pedro Menéndez Val-dés, protocolos notariales de Avilés, caja 155, f. 155. Enel ayuntamiento de 10 de septiembre de 1693 Campo-sagrado comunicó a los regidores que la sentencia delpleito contra Canalejas establecía que debía pagar loque pareciese justo según canon por la ocupación de lacalle (Archivo Municipal de Avilés, en adelante A.M.A.,Libro de Acuerdos Municipales, 22, ff. 40vº-41). Encuanto a las fiestas y carreras que se celebraban en lacalle de la Ferrería, ya David Arias anota que la víasolía cubrirse de arena para celebrar, entre otras, lacompetición de la sortija, con el palenque situado en lasinmediaciones de la iglesia parroquial (David ARIASGARCÍA, Historia General de Avilés y su concejo, Avi-lés, 1973, pp. 117-118). Véase también Juan Carlos dela MADRID, Avilés. Una historia de mil años, Azucel,Avilés, 1999.

  • Por fin, el 23 de febrero de 1692 Camposa-grado otorgó una fianza de demoler que le per-mitía continuar las obras de su casa, pese a nohaberse resuelto aún el pleito de embargo24. Apartir de este momento, el marqués cubrió lazona de la vivienda que tenía desprotegida ycontrató la edificación de la nueva fachadameridional. Este lienzo, cuyo diseño se atribuyesin objeciones al maestro avilesino FranciscoMenéndez Camina, fue ejecutado entre los años1693 y 1696 y avanza unos metros sobre lalínea del muro renacentista que limitaba lavivienda hasta ese momento, materializandotambién un sensible incremento espacial en estazona25. Es una fachada recargada y exuberanteen la decoración, pero ajustada a un orden queimpone su ritmo y su jerarquía en la colocaciónde los recursos ornamentales y alcanza suauténtico objetivo, orgulloso y exhibicionista,con la omnipresencia de los motivos heráldicosdel linaje. Pese a la existencia de un pie forza-do en el contrato de obra que obligaba a repro-ducir en las puertas y ventanas el mismo almo-hadillado que exhibía la casa de Pedro Valdés enGijón, trazada en 1564 por el arquitecto y escul-tor florentino Juan Bautista Portigiani26, toda laobra revela el gusto decorativo, caprichoso yarbitrario de Menéndez Camina.

    Entre los recursos más característicos y ori-ginales de la composición destacan los “floronescalados” de los entrepaños, que el profesorRamallo interpretó como un “trasunto de laspinturas de tapices y colgaduras” que se petrifi-carían por temor a la climatología adversa27. Noobstante, teniendo en cuenta que hemos docu-

    mentado la llegada de remesas de metal precio-so destinadas al marqués y procedentes de Lima(1692), así como la existencia de varias piezasamericanas que reproducen asuntos semejantes,creo que es posible sugerir otra vía de inspira-ción para estos motivos. En efecto, la temáticavegetal de florones y rosáceas de hojas carnosasaparece en varios frontales de plata conservadosen la península. Además, estas piezas suelenestar formadas por varias planchas decorativasde forma rectangular o cuadrada que se vanencajando sobre un armazón de madera y suejecución, habitualmente muy plana, tiende acubrir toda la superficie del recuadro, al igualque sucede en los motivos esculpidos en lafachada. En la colegiata de Santillana del Mar(1686), tenemos un ejemplo muy cercano dona-do por el primer marqués de Altamira, perootros como el de Villarrasa (Huelva), realizadohacia 1673, o, especialmente, el de Budia (Gua-dalajara), datado en torno al año 1700, mues-tran una temática ciertamente próxima. EnAsturias no se han conservado frontales de altarde esta época, pero otras piezas, como el cama-rín de la Virgen del Rosario de Lamuño, realiza-do con anterioridad a 1712, reproducen asuntossimilares28. Creemos posible, por tanto, que latemática de florones calados esculpidos en lafachada meridional de Camposagrado pudieraestar inspirada en los motivos ornamentales dealguna pieza de plata de procedencia americanaque no haya llegado hasta nosotros.

    Las reformas posteriores

    Una vez culminada la reforma, el conjuntosufrió intervenciones de distinto alcance desde

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    24 A.H.A., ante Francisco la Puerta Rivera, protocolosnotariales de Oviedo, caja 7574, ff. 134-135.

    25 Sobre esta fachada debe consultarse el revelador análi-sis del profesor Ramallo Asensio en su publicaciónsobre la arquitectura civil asturiana (Germán RAMA-LLO ASENSIO, La arquitectura civil asturiana, pp. 134-136). La trascripción del contrato de obra, suscrito el 28de enero de 1693 con los maestros Agustín Martínez,Domingo de Festas e Isidoro Martínez, ha sido publica-da en Otilia REQUEJO, Rosalía PÉREZ y SantiagoCALLEJA, “Arqueología e Historia”, pp. 90-91.

    26 La casa edificada por Juan de Valdés en Gijón es una obraclasicista de inspiración serliana que supuso un auténticohito en la arquitectura civil asturiana de esta época. Sobreeste edificio deben consultarse Laura Sanpedro Redondo,“Sobre la autoría del Palacio de los Valdés en Gijón: deJuan de Cerecedo, el viejo, a Juan Bautista Portigiani”, DeArte, 4, León, 2005, pp. 55-62 y Vidal de la MADRIDÁLVAREZ, “Arte y mecenazgo indiano en la Asturias delAntiguo Régimen”, pp. 322-326.

    27 RAMALLO ASENSIO, Germán, La arquitectura civilasturiana, p. 139.

    28 Sobre estas piezas de plata pueden consultarse los estu-dios de Cristina ESTERAS MARTÍN, “Platería mexicanaen la parroquia de Budia (Guadalajara)”, Miscelánea deArte, Madrid, Instituto Diego Velázquez, 1982, pp. 211-215 y, de la misma autora, “Plata labrada mexicana enEspaña. Del Renacimiento al Neoclasicismo”, en MªLuisa SABAU GARCÍA, México en el mundo de lascolecciones de Arte. Nueva España, 2, México, 1994,pp. 63-69; Mª del Carmen HEREDICA MORENO, Merce-des ORBES SIVATTE y Asunción ORBES SIVATTE, Artehispanoamericano en Navarra, Pamplona, 1992, pp.183-185; Yayoi KAWAMURA KAWAMURA, Arte de laplatería en Asturias. Periodo barroco, RIDEA, Oviedo,1994, pp. 143-144; Javier GÓMEZ MARTÍNEZ, “Laépoca heroica de los Sánchez de Tagle. La forja de unmayorazgo indiano”, en Luis SAZATORNIL RUIZ (ed.),Arte y mecenazgo indiano, pp. 290-293. Deseo agrade-cer a mi compañera la profesora doña Yayoi Kawamu-ra sus valiosas orientaciones sobre este asunto.

  • los primeros años del siglo XVIII. Con anterio-ridad a 1723, Mauricio Haedo, maestro trasme-rano que había trabajado para Camposagradoen la obra del convento de la Merced de Avi-lés, realizó diversos reparos de escasa entidaden la casa del marqués29. Algunos años mástarde, en 1774, el maestro de cantería localPedro Solís, contrató la reparación del enlosa-do de la galería de la casa de Camposagradocon arreglo a unas condiciones de autor des-conocido, aunque en el mismo documentoaparece el arquitecto Francisco Pruneda Cañal(1739-1813) como responsable del proyecto dela casa y molino que deseaba hacer el marquésa la entrada de la villa30. El trabajo de Solísconsistió tan sólo en levantar y reponer elenlosado sustituyendo las losas quebradas y enreparar los conductos que corrían bajo él desdeel patio. Creemos que en este momento ya sehabrían cerrado los intercolumnios con elantepecho y asiento de piedra corrido que lagalería conservó hasta la última rehabilitación

    del conjunto, pero no se hace mención a ellosen la documentación.

    Tras el derribo de las murallas de la villa(1818-1821) el edificio quedó aislado y losarcos abiertos en los flancos de la galería parafacilitar la comunicación con el adarve perdie-ron su función, por lo que fueron cegados31.Desconocemos en qué momento tuvo lugar ladestrucción del patio, pero ya en el siglo XXtuvo lugar la intervención que supuso la elimi-nación de la mayor parte del tramo de murallaque se conservaba en el interior de la casa. Así,en el mes de octubre de 1943, el propietario dela casa, Eladio Fernández Carreño, solicitóautorización municipal para ejecutar unasobras de reforma en su interior, que albergabaunos almacenes de ferretería, arregladas alproyecto redactado por el arquitecto JulioGalán con fecha de 27 de abril de 1942. Ade-más de eliminar numerosas paredes y tabiquesy de proceder a una completa reordenación delinterior con el objeto de crear espacios despe-

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    El palacio del marqués de Camposagrado en Avilés (Asturias)y la muralla de la villa a finales del siglo XVII

    29 A.H.A., ante Baltasar Carreño Bernardo, protocolosnotariales de Avilés, caja 188, ff. 42-43.

    30 A.H.A., ante Juan García, protocolos notariales de Avi-lés, caja 290, s/f.

    31 En 1823 el apoderado del marqués solicitó autorizaciónal municipio para cerrar los accesos a la muralla desdela galería; véase Otilia REQUEJO, Rosalía PÉREZ y San-tiago CALLEJA, “Arqueología e Historia”, p.77.

    5. Fotografía que acompañaba al expediente de reformas de la fachada septentrional del palacio del marqués de Camposagrado de Avilés ini-ciado en 1949.

  • jados para el comercio, se planteaba tambiénrebajar la muralla hasta dejarla con un espesorde 1,10 metros para poder instalar en la plan-ta baja un salón de ventas. Tras esta reforma,el tramo de muralla integrado en el antiguopalacio fue reducido a la mínima expresión32.

    Poco tiempo después, el 23 de febrero de1949, el propietario solicitó autorización paranuevas reformas. En este caso deseaba abrir laplanta baja mediante arcadas sobre pilarespara habilitar escaparates con destino a expo-ner sus productos. Semejante proyecto desper-tó los recelos del arquitecto municipal queentendía que no se ajustaba a la conservaciónde los edificios monumentales propuesta en elproyecto de decreto ya redactado por LuisMenéndez Pidal y se entendió que este, en sucalidad de arquitecto conservador de monu-

    mentos de la 1ª zona, debía examinar la peti-ción. Al parecer, esta exigencia disuadió alpropietario, quien en el mes de junio de 1950cursó una nueva solicitud para que se le auto-rizase a abrir dos huecos en el muro de la plan-ta baja, que se unirían a los dos ya existentes.El 17 de junio de ese año la Dirección Generalde Bellas Artes autorizó las obras con la únicaexigencia de acomodarse a lo que dispusiera elarquitecto conservador de zona. Por fin, elarquitecto hizo un informe favorable siempreque se cuidase la ordenación de los huecos y serealizasen como puertas y no como escapara-tes. La Dirección General comunicó su informeel 19 de enero de 195433.

    Tras su rehabilitación en el año 2004 el edi-ficio se convirtió en la sede de la Escuela Supe-rior de Arte del Principado.

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    32 A.M.A., caja 15, papeles sueltos.

    33 Ibídem. Véase también Otilia REQUEJO, Rosalía PÉREZy Santiago CALLEJA, “Arqueología e Historia”, pp. 82-84.

  • Apéndice documental

    1690, noviembre, 23. Avilés.Reconocimiento del estado de la muralla de Avi-

    lés y de las casas y construcciones adosadas a ellarealizado por cuatro escribanos de la villa a peticióndel marqués de Camposagrado.

    A.G.S., GYM, leg. 2854, folios sueltos.

    “Petizión.El lizenciado don Gregorio de Valdés Jendín

    administrador de la rentas de el señor Marqués deCampo Sagrado cuias son las cassas de las Alas ysus anejos en esta villa de Avilés capitán y Alférezmayor de ella, en virtud de el poder que tengo de suseñoría; ante vuestra merced como alcalde ordina-rio en ella y sargento maior que es de esta dichavilla y su partido: Digo que al derecho de dichoseñor Marqués conviene que vuestra merced se sirbacon asistenzia de algunos escribanos públicos de elnúmero de esta villa recorrer la muralla de ella yreconozerla para ber si en todo el passo que se rodeapor enzima de la dicha muralla ay alguna cossa queimpida dicho passo u algún edifizio que la ofenda,y de los que se hallaren arimados a ella así por laparte de afuera como por la de dentro mande darzertificaziones auttenticas ynterponiendo para ellosu autoridad y decretto judicial que estoi preste depagarles sus derechos y que se me entreguen, por-que conbiene assi al servizio de Su Magestad , Diosle guarde, y en que recivire merzed con justizia quepido costa

    Gregorio de Valdés Jendín

    DecrettoFernando de Ynclán Valdés – Gabriel Alonso de

    Obero – Juan García Solís – Martín Fernández Villade rey cifuentes – y el presente escribano escribanospúblicos del número de esta villa de avilés asistancon su merced al reconocimiento de la muralla yedefizio que se pide y certifiquen de los edifiziosque por la parte de adentro y por la de afuera pegancon la dicha muralla y los que estubieren fabricadossobre hella lo qual hagan con asistencia de su mer-ced lo mando el señor capitán don Francisco Sán-chez Valdés sarxento mayor de esta dicha villa y supartido y alcalde ordinario en ella este año por elRey nuestro señor en ella a veynte y tres días delmes de nobienbre de mil y seiscientos y nobentaaños.

    Francisco Sánchez Valdés Ante mí Pedro Menéndez Valdés

    En la dicha villa el día mes y año contenidos enel decreto de esta otra parte yo escribano notifiqué

    dicho decreto y auto a Juan García Solís Coterón,Fernando de Ynclán Valdés y Martín FernándezVilla de Rey Cifuentes escribanos del número deesta villa en sus personas que digeron están presen-tes de que doy fee.

    Valdés Y luego yncontinenti dicho día mes y año con-

    tenidos en el decreto de esta otra parte su merced dedicho señor sarxento mayor y alcalde ordinario conasistencia de nosotros los escribanos públicos delnúmero de esta villa nombrados en dicho decrettode atrás en compañía de dicho señor sarxentomayor empeçamos la diligencia que el pedimientode atrás contiene por el ciminterio y cabildo de laparrochia de la yglessia de San Nicolás de esta villael qual está todo terraplenado por la frontera delmar con la muralla desta dicha villa y por algunaspartes enlosado y cubierto todo el largo que coge ladicha yglesia de teja y madera desde la puerta quesale de esta dicha villa para el arrabal de Sabugoasta llegar a las casas antiguas del ayuntamientodesta villa haviendo en este transito sobre la dichamuralla fabricado unos pilares a trechos en lugar dealmenas y en otras unas colunas de piedra quecubren la dicha muralla y tienen por el tejado quela cubre la mitad con parapeto y asientos y la otramitad sin hellos = y acavado el cabildo de dichayglessia se sigue por la parte de adentro las dichascasas viejas que fueron del ayuntamiento las qualesansimismo su pared esta pegada desde el cimiento ala dicha muralla ocupando sobre hello como cosa deun pie de ancho de dicha pared y las goteras de sutejado caen medio a medio de la pared de dichasmurallas; y acavadas dichas casas se sigue unaguerta de árboles frutales que es del Marqués deCampo Sagrado y esta llega oy asta topar con otracasa baja que también es de dicho Marqués y sirbede uno de los Alfolíes en que se echa el sal que seconsume en dicha villa cuya guerta y cassa porsobre dicha muralla tiene su cerca de parez por laparte de adentro y en la misma forma que la dichadel ayuntamiento sin teja alguna por lo que mira ala guerta y por el otro lado hacia la parte de afueralas almenas de la muralla y el paso libre por elmedio y assí llega asta la otra puerta que sale a lapuente de los pilares que está sobre la rría por dondese pasa al concejo de Goçon, y acavada dicha puer-ta se sigue otra cassa en que oy bibe Domingo Díazferramentero que en la misma forma llega a la dichamuralla y ocupa de hella otro pie, y pasado dichacasa se sigue otra guerta de Don Fernando de lasAlas Pumariño vecino y rejidor de esta villa y trasde hella otra guerta de don Bernardo de Estrada quedicen oy la goça don Pedro Suárez Solís vecino yrejidor de esta dicha villa y estas guertas les sirbe decerca la misma muralla y sobre hella no ay lebanta-

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    El palacio del marqués de Camposagrado en Avilés (Asturias)y la muralla de la villa a finales del siglo XVII

  • do nada y por la parte de afuera están pegadas a ladicha muralla unas tiñerías o pelames en que loszapateros curten los cueros y el matadero y en lamisma forma ay otras ocho casas, las seis altas yolas otras dos bajas de vecinos particulares destadicha villa que pegan con dicha muralla y a ellas sesigue en la misma forma las carnicerías desta dichavilla y desta manera llega asta la torre o castillo dela plaça en que ay otra puerta que entra par la calleque llaman de la ferrería de cuyo castillo es caste-llano el conde de Canalejas, el qual desde su casaque tiene en dicha calle fabricó un pasadiço sobredos arcos de piedra labrada que […] la calle que badesde la ferrería a la renueba y por sobre hella llegaa la dicha muralla la qual por sobre la dicha puertatiene sobre sí otros pilares de pared que cubren ladicha muralla que está cubierta de teja y madera pordonde se pasa a dicha torre o castillo cuyo pasadi-ço y cobertizo fue fabrica de dicho señor Conde deCanalejas y desde dicho pasadiço se siguen las casasde ayuntamiento nuebas que la villa fabrico ocu-pando con la pared otro pie de la muralla y la ocu-pan por todo el largo de la plaza adonde sale lafachada y puerta principal de hella con arcos y tien-das de avajo y su puerta principal y otra puerta quesale a la mesma muralla como la del pasadiço, ydesde el dicho pasadiço asta llegar a la puerta quepor dicha muralla entra a la calle de la rúa nuebaestán los dichos pilares de piedra que con su cober-tijo de madera y teja cubre la dicha muralla que-dando el passo por el medio franco y libre. Acaba-da la dicha puerta se ssigue la torre en que está elrelox desta dicha villa y pegado a ella en la mismaforma otra casa del dicho señor Marqués que lesirbe de balcón y mirador a la plaza con otra puer-ta a la muralla cuyas paredes de torre y cassa estánen la misma forma que las referidas y a esta cassase ssiguen otras por la parte de afuera de foros dediferentes personas que les dio la villa arrimadas ala dicha muralla que son de diferentes vecinos yparticulares altas y bajas que llegan asta la puertaque sale a la puerta de afuera de la fuente de lacámara que ba al barrio de Cabruñana y por la partede adentro desde la dicha torre del relox otra çerade casas que hellas y sus guertas llegan asta la dichamuralla por la calle de la rúa nueba en que tienensus çercas lebantadas sobre la mesma muralla y consus puertas que salen a ella como son las de donFrancisco Valdés Bango y la de don Antonio deYnclán: y otra guerta del conbento de las monjas deSan Bernardo con otra çerca arrimada y lebantadasobre la muralla en la misma forma asta la dichapuerta que sale a Cabruñana. Y desde dicha puertapor la parte de afuera se sigue un braço de agua quesube por aquesta parte de la dicha ría y por la partede adentro otra çera de casas de diferentes personas

    que todas arriman y tienen sus paredes sobre ladicha muralla y las mas de hellas su puerta a ellaasta llegar a la casa de herederos de don Gregoriode Llanos la qual además de ttener por la parte deadentro su pared y puerta en la muralla sobre hellapor la parte de afuera tiene sus pilares de piedra ysu suelo pisado por sobre la misma muralla y estecubierto de teja y madera como los otros con dosarcos de piedra a las esquinas de su casa a la mura-lla por donde queda cubierta de las aguas y libre yfranco el paso de la dicha muralla, y cubiertas tam-bién prosiguen otras casas asta llegar a la guertaaneja a la casa en que bibe el medico desta villacuya propiedad es del conbento de las mongas destadicha villa y luego se siguen otras guertas y casasde diferentes vecinos y las de Marcos Martínez enta-llador y Domingo Fernández ferramentero y otra enla que al presente vive Agustín Martínez canteroque también tiene su puerta a la muralla y la ocu-pan en la misma forma con su lienço de pared = yluego se sigue otra guerta de dicho señor Marquésde Campo Sagrado que se pega con sus casas prin-cipales de su morada y a la esquina de hellas y dedicha guerta por la parte de afuera esta uno de loscubos antiguos que tiene la muralla y esta pegadoal braço de dicha ría en estas casas que llaman delas Alas en que suele bibir el dicho señor Marquésde Campo Sagrado siempre tubo y tiene toda lapared de su largo pegada y sobre la dicha murallados puertas antiguas que salen a la dicha muralla yen los suelos primeros y segundos de hella sus ven-tanas y por todo su frente no hubo almenas sinoantepecho en la misma muralla con sus assientos depiedra en la forma de los del ciminterio de la parro-chia cuya cassa cae sobre la muralla y braço de ríay puente que por ella pasa al arrabal de Sabugodesta dicha villa en cuyo braço de ría tubo y tieneun molino de Ançeñas suyo propio y en los pozosdeste braço de ría ninguno pesca sin licencia deldueño de dicha casa de las Alas = astas casas pegodicho señor marqués otro quarto en suelos suyospara mas aumento de bibienda y ante dichos suspoços y muralla sobre que esta su casa a su costa yen territorio suyo sacó un paredón de contramura-lla por el largo de toda su casa y a la punta dondeacaba la esquina del cuarto nuevo hizo otro cubocomo los demás que tiene la çerca de la villa en dis-tançia de diez a doçe pies de la muralla y paso sobreeste paredón la barbacana y antepecho con susasientos y de la muralla vieja a su contramurallahizo un enlosado como el del cimenterio de laparrochia y de cada esquina de el cubo a las des suscasas hiço en dada una su arco al modo que los queban referidos en la de don Gregorio de Llano y sobresu enlosado que serbio y sirbe de recreo y paseopúblico a todos los vecinos desta dicha villa y

    VIDAL DE LA MADRID ÁLVAREZ

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  • dejando franco y libre el paso de la muralla sobre laslosas de su propio paredón puso unas colunas de pie-dra y unos arcos de lo mismo y sobre hellas sus puer-tas bentanas de piedra labrada y sobre estos arcosecho sus viguetas desde la pared antigua de sus casasa la nueba que fabrico para salir a las puertas y ben-tanas de ellas y otras viguetas sobre estas en lamisma forma que las de don Gregorio de Llano sobreque armó el cobertizo de teja y madera que tienedejando cubierta la muralla como lo está el de lasdemás casas referidas cuya fábrica quedó acavada decantería y cubierta de teja y madera en los honce delcorriente haviendo casi cinco años que la començosin que su merced de dicho sarxento mayor y alcaldey nosotros los escribanos ayamos oydo queja algunade esta fabrica antes bien la tenemos por de utilidady conveniencia pública por que el paredón resiste elgolpe del agua de la rría que por otras partes ofendela muralla y esta cubierta para que las aguas de lostejados no la calen y tiene paseo público mas que-dando el lugar en mejor puliçia y la muralla conaquella plataforma para lo que se ofrezca y fuera

    muy ymportante a su defensa y al serbicio de SuMagestad que Dios guarde que a su imitación losvecinos hiciesen lo mismo. Y a las dichas casassiguen las del dicho don Fernando de las Alas Puma-riño en que vive con dos puertas que salen a la mura-lla en la misma forma que las otras y otra puerta dehellas que llega asta la puerta del mar que esta juntoal portico y cimenterio de dicha parrochia = Y al pre-sente está la muralla de suerte que qualquier personapuede andar toda la dicha muralla por cima de hellaalrededor a cavallo sin peligro alguno y para queconste y a continuación de pedimento y más diligen-cias en su virtud echas mandó su merced de dichoseñor alcalde poner esta que certificamos en lo quepodemos y en fee de hello los signamos y firmamoscomo acostumbramos dicho día mes y año dichos.

    En testimonio de verdadFrancisco Sánchez ValdésFernando de Ynclán ValdésJuan González Solís CoterónMartín Fernández Villa de rey CifuentesPedro Menéndez Valdés”.

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    El palacio del marqués de Camposagrado en Avilés (Asturias)y la muralla de la villa a finales del siglo XVII