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El futuro es ahora: “Point-of-care ultrasound”
Moya A. Alejandro1, Sawyers K. Rosemary2, Chavarria P. Alexa2, Sawyers K. Rebeca3
1 Especialista en Medicina de Emergencias, Hospital Dr. R. A Calderón Guardia.
2 Bachiller en Medicina UNIBE.
3 Licenciada en Microbiología y Química Clínica
Correspondencia a: Dr. Alejandro Moya Álvarez [email protected]
Resumen
El Point-of-care Ultrasonography (POCUS) se
define como ultrasonografía al pie de la
cama del paciente, realizada en tiempo real
y que forma parte de la exploración
sistemática realizada por un médico no
especialista en imágenes. En Costa Rica la
introducción del ultrasonido como
herramienta diagnóstica en los servicios de
emergencias se dio entre los años 2002 y
2003. Sin embargo hasta el año 2015 se
ofrece un curso formal de POCUS que
permita la certificación de las destrezas
mínimas necesarias para poder realizar con
propiedad este estudio. Dicho curso es
impartido al personal médico interesado por
la Asociación Costarricense de Médicos
Emergenciólogos (ASOCOME) y avalado por
un ente internacional de renombre conocido
como WINFOCUS (World Interactive
Network Focused Critic Ultrasound). Esta
herramienta se ha incorporado de manera
creciente en el abordaje de múltiples
patologías médicas y quirúrgicas. Las
aplicaciones en el estudio de la disnea, la
evaluación de la función cardíaca, detección
de tromboembolismo pulmonar y trombosis
venosa profunda, evaluación del paciente
con hipotensión indiferenciada, detección
de embarazos tempranos o ectópicos
representan sólo un pequeño porcentaje de
las entidades clínicas que se benefician del
uso del POCUS. También facilita los
procedimientos guiados por ultrasonografía
como toracocentesis, paracentesis,
pericardio- centesis, punción lumbar,
drenaje de abscesos, remoción de cuerpo
extraño, colocación de marcapasos, entre
otros. Esta revisión pretende acercar al
clínico a los conceptos básicos del POCUS,
incentivar sobre la importancia de su
aplicación en la medicina y de su utilidad en
un futuro.
Palabras Claves: Ultrasonido, Point of care
ABSTRACT: The Point-of-care
Ultrasonography (POCUS) has been
incorporated increasingly in addressing
multiple medical and surgical diseases. It is
defined as ultrasonography at the patient
bedside done in real time and is part of the
systematic exploration by a non-specialist
physician in medical images. In Costa Rica,
the introduction of ultrasound in the
emergency services took place between
2002 and 2003. However, until 2015 a
formal course of POCUS is introduced ,this
course has permitted the certification of
minimal skills necessary to perform this
study. This course is addressed to medical
staff and is imparted by Costarrican
Emergency Association authorized by
WINFOCUS (World Interactive Network
Focused Critic Ultrasound). Applications in
the evaluation of dyspnea, assessment of
cardiac function, detection of pulmonary
embolism and deep vein thrombosis,
evaluation of patients with undifferentiated
hypotension, early detection of ectopic
pregnancies, represents a small percentage
of clinical entities that benefit from POCUS
use. It also facilitates ultrasound-guided
procedures such as thoracentesis,
paracentesis, pericardiocentesis, lumbar
puncture, drainage of abscesses, removal of
foreign body, pacemaker insertion, among
others. This Review is intended to transmit
health professionals the current knowledge
of POCUS, the importance of its application
in medicine and the prospect of its
usefulness in the future.
Palabras Claves: Ultrasound, Point of care
Introducción
El Point-of-care ultrasonography (POCUS) ha
sido incorporado de manera significativa en
el manejo de múltiples especialidades
médicas y quirúrgicas (1). Es con mucha
frecuencia empleado por médicos
Emergenciólogos, médicos de cuidados
intensivos, médicos de familia, cirujanos,
entre otros (2).
El desarrollo de la tecnología y su
repercusión en la medicina, sobre todo en el
campo del ultrasonido, dieron un salto a
partir del inicio de los años setenta.
Actualmente se poseen elementos más
portables e incluso dispositivos que caben
en la palma de la mano, diseñados para
complementar el examen físico con
imágenes al pie de la cama del paciente y
realizadas por médicos no radiólogos (3).
Los médicos tratantes, aparte de los
radiólogos y sonografistas certificados, han
incrementado el uso del ultrasonido
focalizado para facilitar el manejo inmediato
tanto de procedimientos guiados por
ultrasonografía como de protocolos
diagnósticos (4). De acuerdo con Morris et
al. (4), recientemente el ultrasonido se ha
convertido en una herramienta muy
empleada en servicios de emergencias,
unidades peri-operatorias, unidades de
agudos y clínicas. Según Moore et al. (5), el
concepto de “ultrasonido estetoscopio”
rápidamente se está convirtiendo en una
realidad palpable.
En nuestro país, la introducción del US en los
servicios de emergencias, se dio entre el
2002 y 2003, a raíz de una donación de la
Junta de Protección Social de San José (JPS).
Desde ahí se impartieron cursos informales
los cuales no contaban con una acreditación
que permitiera utilizarlo con propiedad en
los diferentes posgrados médicos. Es hasta
el año 2012, que la Asociación Costarricense
de Médicos Emergenciólogos (ASOCOME),
trae desde Dinamarca el curso FATE y a
partir de este año (2015), adquiere la
representación para Costa Rica de
WINFOCUS (World Interactive Network
Focused Critic Ultrasound) impartiendo con
éxito los tres primeros cursos dirigidos al
personal médico con interés en este tema.
Debido a lo novedoso del campo en Costa
Rica, existen pocos artículos publicados que
traten esta temática, haciendo de esto una
condición de interés para el profesional de
salud. Esta revisión pretende informar
acerca de los conceptos básicos del POCUS
(point of care ultrasound), así como de la
importancia de su aplicación en la medicina
y la perspectiva de su utilidad en un futuro
para los profesionales de salud.
Discusión
Según Liebmann et al. (6), el US es una forma
segura y efectiva de generar imágenes
mediante la emisión de ondas de sonido, con
el fin de examinar la anatomía interna
humana con propósitos diagnósticos y de
procedimientos”. “El POCUS fue definido
como: ultrasonografía al pie de la cama del
paciente, realizada en tiempo real y que
forma parte de la exploración sistemática
realizada por un médico no especializado en
imágenes” (7). De acuerdo con Bowra et al.
(8), las diferencias con el ultrasonido
convencional son primero, que es realizado
por el médico tratante del paciente quién
interpreta y actúa durante una sola
interacción, el cual tiene un entrenamiento
limitado y dirigido a lograr identificar
solamente ciertas situaciones que le
permitan orientar un diagnóstico
diferencial, bajo ninguna circunstancia
pretende convertirse en un escaneo de
imágenes profundo y detallado como si lo es
el ultrasonido convencional.
Con el POCUS “se busca obtener respuestas
a preguntas bimodales o preguntas de si o
no, que surgen al realizar el examen al pie de
la cama, esto como guía para el diagnóstico,
el abordaje fisiológico o terapias
invasivas”(7). Por lo tanto, “se obtienen
respuestas a las preguntas planteadas de
manera inmediata, sin retraso y sin el riesgo
potencial del traslado del paciente crítico o
inestable a otras áreas del hospital” (4). “Con
el US al pie de la cama los médicos están
equipados con una herramienta que les
permite observar lo que tan solo pueden
inferir por medio de la palpación y
auscultación (9)”. Solomon et al. (10),
mencionan que estudios clínicos han
demostrado que el ultrasonido puede ser
superior al examen físico, ya que permite la
visualización directa de órganos, lo que
puede ser útil para aquellos que imparten
lecciones de anatomía, fisiología, entre
otros. El empleo de esta tecnología como
parte del examen físico transformara el
entrenamiento médico.
Historia
“El US ha sido utilizado por los médicos por
más de medio siglo para ayudar en el
diagnóstico y guía de procedimientos” (5).
De acuerdo con Soni et al. (9), Karl Thedore
Dussik en 1942, medico austriaco, psiquiatra
y neurólogo, fue certificado como el primer
médico en emplear un US primitivo para
visualizar tumores de cerebro y los
ventrículos cerebrales. Los avances en el US
se comenzaron a observar en las décadas
1960 y 1970. Durante la década de 1970-
1980 se dio el desarrollo de transductores
más sofisticados, además del refinamiento
de la imagen. Seguido de esto, esta técnica
de obtención de imágenes novedosa se
empezó a adoptar en otras especialidades
como lo fueron cardiología, obstetricia y
ginecología y el área de emergencias y
medicina crítica, lo que marcó el inicio de
una era del uso de POCUS por otras ramas
de la medicina. A partir de la década de los
90´s ha sido adoptado prácticamente por
todas las especialidades que tienen relación
con el manejo del paciente agudamente
enfermo por lo que la última década ha
traído gran desarrollo significativo en lo que
corresponde a protocolos del POCUS.
Diversos estudios demostraron una
reducción de las complicaciones en
procedimientos comunes como la
colocación de un catéter venoso central, así
como una mejoría en la prontitud y certeza
de los diagnósticos tempranos del paciente
crítico, lo que genera una mejoría
significativa en la morbimortalidad dado por
una toma de decisiones dirigida y temprana.
Esto ha generado un cambio aún más
radical, como lo es el desarrollo desde el año
2000 de dispositivos ultrasonográficos de
mayor portabilidad, mejor resolución de
imagen y mayor capacidad de transporte lo
que ha generado un incremento en su uso
para el abordaje del paciente crítico en
distintos escenarios incluyendo
recientemente el ámbito pre-hospitalario.
Aplicaciones
“Es necesario tener dominio de habilidades
en estas tres áreas: adquisición de imágenes,
interpretación de imágenes e integración de
la interpretación para tomar decisiones
médicas” (11). “En cuanto a aplicaciones
básicas se pueden emplear en diferentes
escenarios de presentación del paciente
crítico como lo son: el paro cardiaco, el
derrame pericárdico y el aneurisma de
aorta” (12). En lo que respecta al trauma
toracoabdominal, Adhikari et al. (13),
mencionan que el US al pie de la cama es una
de las herramientas más poderosas con que
cuentan los médicos de emergencias para
hacer una aproximación diagnóstica más
clara y oportuna. Asimismo, el FAST ha
demostrado una mejoría no solo en el
tiempo para el manejo definitivo, sino
también en una mejora de la mortalidad y el
pronóstico neurológico en pacientes con
lesión penetrante de tórax.
En cuanto al abordaje de un embarazo
temprano, “el POCUS puede ser empleado
para detectar embarazos ectópicos, con una
sensibilidad de 99.3% identificando la
ausencia de un embarazo intrauterino y un
valor predictivo negativo de 99.6%”(13)
convirtiéndose en una herramienta de
utilidad incomparable en una situación de
apremio como la anteriormente
mencionada.
En los últimos años este tipo de estudio
diagnostico también se ha extendido a otras
aplicaciones un poco más avanzadas. Según
Millington et al. (14), el empleo de POCUS
desde una perspectiva cardiaca incluye: la
evaluación de la función sistólica del
ventrículo izquierdo, la función sistólica del
ventrículo derecho, la integridad del
pericardio, el empleo del diámetro de la
vena cava inferior para determinar el estado
hemodinámico del paciente entre otros.
Además de dos causas de shock
inexplicables que son difíciles de
diagnosticar al pie de la cama, como lo son
disfunción valvular aguda y falla cardiaca
derecha, POCUS es la herramienta ideal para
diagnosticar estas patologías de alto riesgo
de muerte y realizar diagnóstico diferencial
oportuno y dirigido.
Continuando con las aplicaciones se puede
detectar: depleción de volumen y distensión
venosa yugular. En lo que respecta a la
hipotensión indiferenciada Lakoff et al. (15),
comentan que el empleo del protocolo
RUSH (por sus siglas en ingles ultrasonido
rápido para shock e hipotensión) facilita el
abordaje de un paciente críticamente
enfermo en el servicio de emergencias. De
acuerdo con Volpicelli et al. (16), estos
protocolos consisten en ultrasonidos
orientados a evaluar de manera integral los
siguientes aspectos: sistema cardiaco,
abdominal y venoso, con los que se genera
información contundente para la toma de
decisiones que ya han sido aprobados y
validados. De acuerdo con Lakoff et al. (15),
puede ser resumido en el acrónimo HI-MAP,
por sus siglas en inglés: corazón, vena cava
inferior, espacio de Morrison que se evalúa
por medio del FAST, aorta abdominal y el
componente pulmonar.
En lo que respecta al estudio de la disnea,
Adhikari et al(13),mencionan que la
obtención de una adecuada historia clínica y
un examen físico pueden ser limitados,
incluso cuando se cuenta con una
radiografía de tórax las mismas ,muchas
veces, son de mala calidad y de una
condicionada posibilidad de adecuada
interpretación. La ventaja con POCUS es que
también puede ser utilizado en la
identificación de patología aguda del
sistema pulmonar con lo que el paciente se
puede beneficiar de un diagnóstico más
preciso, el médico puede aplicar un
tratamiento más rápido, además puede ser
repetido para demostrar mejoría de la
enfermedad y por último es libre de
radiación. Se emplea también para hacer
diagnóstico diferencial del dolor torácico.
En cuanto a patología torácica Soni et al.
(17), manifiestan que el US pulmonar puede
detectar de manera precisa y rápidamente
un neumotórax, además de múltiples
estudios han demostrado que la
superioridad del US pulmonar vs la
radiografía de tórax. Tres meta-análisis
reportaron una especificidad cercana al
100%, pero una sensibilidad para US de 79%-
95%, que fue mucho mejor que la radiografía
para detectar neumotórax (40%-52%).
Hyacinthe et al. (18), evidencian que el US de
tórax es el diagnóstico óptimo, al pie de la
cama, tanto para neumotórax como para
hemotórax y contusión pulmonar. Johnson
et al. (19), mencionan que el US ayuda al
diagnóstico de neumotórax y permite a los
médicos emplear terapias que salvan vidas
sin necesidad de realizar estudios de
imágenes adicionales.
Siguiendo con la patología pulmonar, según
Soni et al. (17), en el derrame pleural, el
ultrasonido es más sensible que la
radiografía de tórax para detectar derrames
pleurales de pequeño volumen (100% vs
71%). El drenaje del derrame pleural con
ultrasonido como guía se asocia a un menor
indicio de neumotórax posteriores a
procedimientos y menores costos
hospitalarios.
Con respecto al tromboembolismo
pulmonar, de acuerdo con Nazerian et al.
(20), el POCUS ha sido empleado también
para el abordaje sistemático de la sospecha
del mismo. En este estudio el diagnostico se
realiza por medio de un triple POCUS
(pulmón, corazón y venas de los miembros
inferiores). La sensibilidad y especificidad
corresponden con 90% y 86.2%,
respectivamente. “El triple POCUS es
altamente prometedor, ya que puede ser
realizado al pie de la cama del paciente
brindando imágenes que están
directamente relacionadas con la clínica del
paciente, especialmente si se encuentra
inestable. Asimismo se puede repetir para
saber la evolución clínica del mismo” (21).
En cuanto a la Trombosis Venosa Profunda
(TVP), de acuerdo con Zitek et al. (22),
diversos estudios han demostrado que al
comparar el US vs la venografía, tanto la
sensibilidad como la especificidad del
ultrasonido son mayores a un 90% y pueden
aproximarse a un 100% en ambos casos. El
US es la primera opción en términos de
imagen para el diagnóstico de TVP, por lo
que realizar un US al pie de la cama no
solamente es una técnica rápida y sencilla
sino que también es una opción altamente
confiable. Asimismo “el empleo de POCUS
para TVP se está convirtiendo rápidamente
en un instrumento común y relevante
debido a su disponibilidad y factibilidad para
obtener imágenes que por lo general
pertenecían al departamento de radiología”
(23).
En cuanto a las vías urinarias el mismo se
emplea para valoración de enfermedades
de la vejiga y el volumen de llenado de la
misma. En lo que respecta a hidronefrosis
Soni et al. (17), mencionan que estudios en
médicos con entrenamiento limitado en US
renal, tuvieron una sensibilidad de 72% a
87% y una especificidad de 73% a 82% en
pacientes con cólico renal.
En la patología ocular, de acuerdo con
Adhikari et al. (13), se pueden beneficiar del
POCUS, aquellos que tienen molestias,
presencia de hipertensión intracraneal (la
vaina del nervio óptico mayor a 5mm). El
clínico se empodera ya que obtiene
respuestas más rápidas y esto corresponde
con un diagnostico precoz y apropiado. Por
último también se usa para: dolor testicular,
ruptura de tendones, abscesos vasculares
periféricos y derrame articular.
En cuanto a los procedimientos en los que el
POCUS se emplea como guía con el fin de
disminuir las posibles complicaciones
asociadas a la punción, de acuerdo a
Adhikari et al. (13), se encuentran:
toracocentesis, paracentesis, pericardiocen-
tesis, punción lumbar, drenaje de abscesos
cutáneos y periamigdalinos, remoción de
cuerpo extraño, cateterización de vejiga
pediátrica, aspiración articular, colocación
de marcapasos, anestesia regional y
confirmación de entubación endotraqueal.
Existen, a su vez, reportes de casos
interesantes e inusuales en los que se resalta
la relevancia del uso del POCUS: entre ellos
cabe destacar el mega uréter en un adulto
reportado por Mackenzie et al. (24). Kumar
et al. (25), reportaron una piomiositis que
corresponde con una enfermedad rara de
planos profundos del musculo esquelético.
Asimismo, Minardi et al. (26), mencionan
una endocarditis asociada a un marcapasos,
complicación rara de ventrículo derecho.
Áreas de la medicina en las que se emplea
En lo que respecta al campo de la cirugía, de
acuerdo con Mollenkopf et al. (7), tanto
cirujanos de trauma, como también
vasculares, gastrointestinales, oncológicos,
etc.; han demostrado que el ultrasonido al
pie de la cama y transoperatorio son
efectivos para la toma de decisiones, el inicio
de tratamiento, el monitoreo y la conducta
durante procedimientos quirúrgicos. “En
cuanto a los procedimientos se pueden
mencionar colocación de catéteres de vía
central o paracentesis y para propósitos
diagnósticos: hemoperitoneo y abscesos”
(27). Todsen et al. (1), refieren que la
ultrasonografía para el manejo de los
diferentes escenarios quirúrgicos es
importante, ya que no se requiere de la
disponibilidad y atención de los radiólogos
las 24 hrs lo que rara vez sucede. En el
campo de la anestesia, Johnson et al. (19)
demostraron la utilidad de la
ecocardiografía transtorácica lo que permite
a los clínicos de manera rápida y no invasiva
responder preguntas acerca de las funciones
cardiacas y posibles condiciones patológicas.
POCUS y su uso en emergencias
“En el caso de Estados Unidos es la
especialidad que más tiempo lo ha
empleado” (11), asimismo en nuestro país.
Liebmann et al. (6), mencionan que los
médicos Emergenciólogos diariamente se
confrontan con pacientes críticamente
enfermos con quejas inespecíficas y en los
que se necesitan tomar decisiones
diagnosticas tiempo-sensitivas para
desarrollar intervenciones terapéuticas
basadas en poca información. Henneberry et
al. (12), mencionan que los médicos de
emergencias deberían poseer un
entrenamiento apropiado en imágenes e
interpretación de estas, conocer sus
indicaciones y las limitaciones de POCUS.
“Los pacientes reportan una mayor
satisfacción con su Emergenciólogos, los
exámenes diagnósticos realizados, y el trato
en el departamento de emergencias
empleando POCUS” (2). Por ejemplo, en el
caso de desastres naturales o causados por
el hombre, Sajed (28) menciona que el
POCUS realizado por los primeros clínicos
que atienden el suceso es ideal, ya que es
rápido y constituye una herramienta
portable con una variedad de aplicaciones,
tanto en el diagnóstico de lesiones toraco-
abdominales como en la coordinación del
triaje del paciente. También se ha descrito
su uso “en ataques terroristas y eventos
militares masivos” (28).
En el caso de pediatría de acuerdo a Bélard
et al. (29), es particularmente atractivo ya
que no hay exposición de los niños a
radiación y no requieren sedación. Por
ejemplo, el uso del US en las
manifestaciones extrapulmonares de
tuberculosis en niños, ha demostrado gran
valor. Se evidencia según Gallagher et al.
(30), que los pediatras en emergencias
utilizan POCUS de manera creciente en su
práctica. Y los usos que se le dan
corresponden con los mismos que los
adultos, tan solo que hay patologías
características pediátricas: “abscesos,
fracturas craneales, patología abdominal:
estenosis pilórica, apendicitis,
intususcepción, entre otros” (31).En el caso
del uso en cuidados intensivos neonatales
para intubación endotraqueal en neonatos,
el estudio de Sethi et al. (32), encontró que
puede ser una herramienta potencialmente
beneficiosa en este contexto.
En el caso de medicina interna Dulohery et
al. (33), mencionan que los clínicos pueden
realizar procedimientos como
toracocentesis, paracentesis y colocación de
catéter venoso central. POCUS se puede
convertir en una herramienta diagnóstica
muy importante para médicos internistas.
En lo que respecta al uso de POCUS en la
unidad de cuidados intensivos de adultos, el
estudio de Oks et al. (34), demostró que el
empleo de POCUS por intensivistas se asoció
a una reducción, tanto en estudios de
imágenes radiográficas y no radiográficas,
realizadas por radiólogos y cardiólogos en la
unidad de cuidados intensivos (UCI).
Asimismo Rincón et al. (35), mencionan que
promocionar la adquisición de habilidades
por parte del médico de cuidados intensivos
es benéfico para el paciente críticamente
enfermo, ya que se agiliza la toma de
decisiones.
Beneficios
Según Arienti et al.(36), los dispositivos
POCUS tienen la ventaja de caber en la
palma de la mano, o en los bolsillos y están
disponibles para integrarse al examen físico,
tienen mejor resolución y pantallas más
grandes, proveen un poder diagnostico
superior. Además Lamprecht et al. (37)
refieren que son dispositivos menos
costosos, móviles que permiten ser
utilizados al pie de la cama sin necesidad de
trasladar al paciente, no invasivos, con
resultado inmediato y son replicables.
Además que permite la comparación y con
hallazgos previos y hay clara evidencia de
que con entrenamiento puede ser exitoso.
Desventajas
Todsen et al. (1), mencionan que la cantidad
de entrenamiento necesaria para obtener
suficiente competencia puede variar
considerablemente entre individuos.
Aptitudes insuficientes pueden conllevar a
conclusiones diagnosticas erróneas que
pueden poner en peligro la atención al
paciente. Por lo tanto, es necesario un
manejo competente a la hora de realizar
ultrasonidos por medio de los clínicos. De
acuerdo con Solomon et al. (10), el
entrenamiento requerido para ejercer un US
competente no es trivial.
Shokoohi et al. (38), han sugerido que tanto
el explorador como los geles de transmisión,
son vectores potenciales de S.aureus, tanto
meticilino sensibles como resistentes. La
literatura en este tópico es no concluyente y
los rangos de SAMR varían, sin embargo la
expansión de SAMR por medio de US es
improbable.
Por otra parte, Stolz et al. (39), manifiestan
que surge la oportunidad de un incremento
en las demandas relacionadas con esta
nueva práctica. Una mal praxis en el
departamento de emergencias puede
deberse a la falla de no realizar
adecuadamente el estudio
ultrasonográficos, falla en interpretar el US y
por ende tener un diagnostico fallido. En su
investigación se reportaron 5 casos con falla
diagnostica al realizar el US. “El riesgo de un
mal diagnostico se ve en aquellas personas
que tienen poca experiencia” (10).
Utilidad estudiantes de medicina, residentes
y médicos:
Según Geria et al. (40), existe un movimiento
que busca integrar el ultrasonido dentro de
las escuelas de medicina y que ha estado
ganando fuerza en los últimos años. Esto
porque el US provee una ventana dinámica
al cuerpo humano que permite a los
estudiantes incrementar su conocimiento
acerca de la anatomía y fisiología de manera
dramática. Webb et al. (41), mencionan que
diversas escuelas de medicina han
incorporado el empleo del US en su plan de
estudios, sin asumir que sus estudiantes
aprendan las habilidades sobre la marcha.
Andersen et al. (42), determinaron que
estudiantes de medicina con un
entrenamiento mínimo fueron capaces de
emplear un dispositivo de bolsillo de
imágenes como suplemento del examen
físico y adquirieron exitosamente imágenes
aceptables de órganos, con esto lo que se
obtiene es un uso más amplio del US y una
manera más pronta de obtener un
diagnóstico. Mjølstad et al. (43), evidencian
que en el caso de residentes, el uso de
dispositivos portátiles para US, previo a un
periodo de entrenamiento, ha demostrado
una mejora en el diagnostico
intrahospitalario y el cuido del paciente.
“Mientras que las contribuciones de
generaciones pasadas ayudaron a establecer
la utilidad del ultrasonido como una
herramienta valiosa, la siguiente generación
avanzará en este campo estudiando como el
POCUS puede ser incorporado en algoritmos
de manejo de los pacientes, su impacto,
costo-efectividad y la satisfacción del
paciente. Asimismo las nuevas generaciones
de médicos estarán más acostumbrados al
empleo de POCUS y sus aplicaciones, lo
consideraran parte de la rutina en sus
encuentros clínicos” (9). “Los futuros
médicos serán entrenados para emplear
esta tecnología como una extensión de sus
sentidos, así como muchas generaciones lo
hicieron con el estetoscopio” (10).
Conclusiones
El US ha generado un incremento en las
capacidades de los clínicos para
diagnosticar, intervenir y tratar a sus
pacientes. Con este avance en la medicina se
ha logrado disminuir la morbi-mortalidad,
así como el aumento de la eficiencia de los
clínicos.
A modo de recomendación, sería de gran
utilidad implementar en los programas de
estudio de las escuelas de medicina
costarricenses, el empleo del US, por las
ventajas que esto conlleva en su proceso de
aprendizaje. Asimismo, se debe proponer la
capacitación sistemática de los clínicos en el
manejo del POCUS con el fin de aplicar este
conocimiento innovador a las diferentes
necesidades del paciente agudamente
enfermo.
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