DISPENSACIÓN DE PRODUCTOS

FARMACÉUTICOS. U.D. 12

HOMEOPATÍA.

¿QUÉ ESTUDIAREMOS EN ESTA U.D.?

Las bases de la homeopatía.Elaboración de medicamentos homeopáticos.Tipos de medicamentos homeopáticos.Tratamientos homeopáticos en medicina

humana y veterinaria.Condiciones de dispensación de medicamentos

homeopáticos.

1. ¿QUÉ ES LA HOMEOPATÍA?.

La homeopatía es un método terapéutico alternativo y complementario de la medicina tradicional que surge por las observaciones y experimentos del médico aleman Samuel Hahnemann (1755-1843).

La homeopatía es un método terapéutico que se basa en tres principios fundamentales: La ley de la similitud. Ley de la infinitesimalidad. Individualización.

Ley de la similitud.

“Lo semejante cura a lo semejante” (ya anunciada por Hipócrates). En la homeopatía una alteración de la salud se trata con la misma sustancia que la provoca.

Para sanar a una persona bastará con identificar sus síntomas y buscar en la lista qué sustancias produce esos mismos síntomas en una persona sana. Esta sustancia sanará a la persona enferma.

Ley de la infinitesimalidad.

Consiste en dar al enfermo dosis bajas o infinitesimales de la sustancia que, a dosis altas y a sujetos sanos, les provoca síntomas semejantes o parecidos a los del enfermo.

Una vez identificada la sustancia adecuada, se debe establecer qué dilución se debe hacer para la persona enferma a quien va destinada. En principio, cuánto más profunda es la enfermedad, más débil es la vitalidad de la persona y más baja debe ser la dosis.

Individualización.

Hahnemann observó que las enfermedades no se desarrollan de la misma forma en personas distintas, sino que se manifiestan en función de las características individuales de cada persona.

En líneas generales puede decirse que un homeópata no cura la enfermedad sino que cura a cada persona enferma, enmarcando los trastornos en la historia clínica y personal.

“No hay enfermedades sino personas enfermas”.En la medicina homeópática, el objetivo es conseguir la

curación global del paciente mediante la estimulación del proceso de curación natural propio de cada persona.

2. MEDICAMENTO HOMEOPÁTICO.

Según la Ley 29/2006, de 26 de julio, “se considera medicamento homeopático, de uso humano o veterinario, el obtenido a partir de sustancias denominadas cepas homeopáticas con arreglo a un procedimiento de fabricación homeopático, descrito en la Farmacopea Europea o en la Real Farmacopea Española. Un medicamento homeopático podrá contener uno o varios principios activos”.

Los medicamentos homeopáticos de uso humano deben indicar en su etiquetado su naturaleza homeopática. Dentro de ellos se diferencian:

Medicamentos homeopáticos con indicación terapéutica aprobada.

Son aquellos comercializados para combatir una enfermedad o síndrome concreto.

Su autorización, registro, normas de etiquetado y prospecto, si lo tienen, deben ser regulados como cualquier otro medicamento humano o veterinario.

Están constituidos generalmente por varias cepas, se utilizan con frecuencia para patologías como: gripe, tos, dolor de garganta, etc., y llevan un nombre comercial.

Estos son los que podremos recomendar o aconsejar si el paciente quiere recurrir a la homeopatía (al igual que ocurre con los EFP).

Ejemplos: oscillococcinum (Boiron), homeovox (Boiron), arnica crema (Boiron), Traumel (Phynter)…

Medicamentos homeopáticos sin indicación terapéutica aprobada.

Siguen una reglamentación específica. Deben incluir en el etiquetado, y en su caso en el prospecto, “Medicamento homeopático, sin indicaciones terapéuticas aprobadas” y han de cumplir las siguientes condiciones:

• Que su vía de administración sea oral o externa.• Ausencia de indicación terapéutica particular (en la etiqueta

o en cualquier información relativa al medicamento).• Que su grado de dilución garantice la inocuidad del

medicamento. En particular, no deberá contener más de una parte por 10.000 de tintura madre.

Los medicamentos homeopáticos pueden estar constituidos por una o varias cepas, y su denominación es su nombre latino, que se corresponde con el nombre científico de la sustancia base que da lugar al medicamento homeopático.

Se utilizan en diferentes diluciones y se pueden usar para distintas patologías en tratamientos individualizados.

Los medicamentos homeopáticos no son tóxicos, salvo reacción a alguno de los excipientes.

Su farmacocinética y su farmacodinámica no son conocidas, su eficacia está probada por la experiencia clínica y no es posible estudiar la asimilación o eliminación, ni la interacción con el organismo (no se conoce nada de su proceso LADME).

Se pueden presentar en distintas formas galénicas:Comprimidos, gotas o pomadas, como en alopatía.Gránulos o glóbulos, tipicas de homeopatía.

2.1. Elaboración del medicamento homeopático.

La preparación de medicamentos homeopáticos sigue estos pasos:Preparación de la tintura madre (TM): se obtiene por

maceración de productos naturales (cepas) en una solución hidroalcohólica.

Dilución: se hacen sucesivas diluciones a partir de la tintura madre, hata un nivel infinitesimal.

Dinamización: se basa en la agitación enérgica de la dilución para hacer que la sustancia y el disolvente contacten bien.

Preparación de la forma farmacéutica: a partir de la dilución se puede administrar directamente o prepararse una forma farmacéutica diferente para su administración.

Tintura Madre (TM).

Los medicamentos homeopáticos pueden elaborarse a partir de sustancias vegetales, animales y minerales. Estas sustancias se denominan cepas.

Encontraremos por tanto cepas vegetales, cepas animales y cepas minerales, y procederemos de distinta forma en la elaboración de la TM, según sea el orígen de la cepa.

También se pueden fabricar medicamentos homeopáticos con sustancias de origen diferente:Productos de origen microbiano.Muestras biológicas del propio individuo.

Cepas vegetales.

Son las más utilizadas. Las plantas son cultivadas y recolectadas según las normas de la Farmacopea. Las condiciones varían según la planta y la parte de ésta que se vaya a usar. Una vez en el lugar de fabricación, se emplean inmediatamente, cortándose en pequeños fragmentos y sometiéndose a controles de calidad.

La planta se somete a maceración, que consiste en ponerla en una solución hidroalcohólica durante un determinado periodo y agitando regularmente.

Transcurrido este tiempo, se realizan unos procesos de filtración y se obtiene la tintura madre.

Cepas animales.

Se utilizan animales enteros, partes de ellos, órganos (cepas orgánicas) o algunas secreciones de los animales.

Son suministrados por empresas especializadas y sometidos a todos los controles de calidad y de higiene necesarios.

Las etapas de preparación para llegar a la Tintura Madre son las mismas que con las cepas vegetales.

Cepas minerales.

Se utilizan sales minerales, productos químicos o minerales enteros.

Los minerales son recogidos según criterios de pureza, y al ser insolubles, es necesario someterlos a un proceso de trituración.

Después, el mineral en polvo se diluye y con la solución restante, se llevan a cabo las sucesivas diluciones.

En el caso de minerales insolubles se trituran y el polvo resultante se mezcla con lactosa, lo cual permite realizar luego las diluciones.

Para elaborar los medicamentos homeopáticos hay que destacar dos operaciones imprescindibles: la dilución y la dinamización.

Las diluciones en homeopatía hay que entenderlas como una potenciación de la sustancia, entendiendo que cuánto más diluida esté una solución, más potente será. Este concepto difiere de la medicina convencional o alopática, en la cual se considera que cuanta más cantidad de principio activo haya en el medicamento, más fuertes serán sus efectos farmacológicos.

La dinamización es el proceso mediante el cual se da a una dilución un mínimo de 100 agitaciones enérgicas por minuto. Ésta debe hacerse con cada una de las diluciones que se manejan en la elaboración de un remedio homeopático.

Dilución y dinamización.

Diluciones homeopáticas.

En la homeopatía la dosificación del medicamento está relacionada con la dilución y se representa por un número, de manera que cuanto más alto sea ese número, mayor es la dilución.

Tipos de diluciones:Diluciones decimales de Hahnemann. Diluciones centesimales de Hahnemann.Diluciones Korsakovianas.

Diluciones Decimales de Hahnemann.

Se denominan DH y la relación es 1:10.Se preparan 10 ml de dilución, poniendo en un

recipiente 1 ml de TM y 9 ml de diluyente (alcohol de 70º) para obtener la primera dilución decimal (1 DH).

La segunda (2 DH) se obtiene con 1ml de la dilución anterior y 9 ml de diluyente.

Las operaciones se repiten hasta obtener la dilución decimal deseada, teniendo en cuenta que cada vez que se hace una dilución se ha de dinamizar la mezcla.

Diluciones Centesimales Hahnemanianas.

Se denominan CH y la relación de dilución es 1:100.Se preparan 100 ml de dilución poniendo en un

recipiente 1 ml de TM y 99 ml de diluyente (alcohol 70º) para obtener la primera dilución centesimal (1 CH).

Las operaciones se repiten tomando cada vez 1 ml de la última dilución y añadiendo 99 ml de diluyente, hasta obtener la dilución deseada (2 CH, 3 CH, etc.).

También en este caso cada dilución debe ser dinamizada.

Diluciones korsakovianas.

Se denominan K y también se las conoce como del frasco único.

Se llena con TM un recipiente de 100 ml, se vacía y se vuelve a llenar con el diluyente, hasta enrasar otra vez los 100 ml. Gracias a las fuerzas de absorción y adherencia, tras el vaciado de la tintura madre habrá quedado una cierta cantidad de ésta en el recipiente (±1 ml), que quedará incorporada al diluyente. La dilución resultante es 1 K.

Se vacía nuevamente el frasco, se enrasa a 100 ml con el diluyente, se dinamiza y se obtiene la segunda dilución 2 K, y así sucesivamente.

2.2. Presentación del medicamento homeopático.

La dilución homeopática resultante se puede administrar directamente o se puede incorporar a un vehículo inerte, líquido o sólido, con el cual se constituirá una forma farmacéutica distinta.

En la tabla siguiente podemos ver las características de las principales formas farmacéuticas usadas en homeopatía:

Forma de administración.

La principal vía de administración del medicamento homeopático es la sublingual. Por ello se recomienda: Obtener del tubo de gránulos los correspondientes a la toma y

depositarlos directamente en la boca, debajo de la lengua, dejándolo disolver.

En el caso de dosis de glóbulos, se depositaría todo el contenido bajo la lengua y se dejaría disolver.

Las ampollas bebibles y gotas se dosificarán en cucharadas o gotas según la prescripción, pero también hay que mantenerlos en la boca unos instantes antes de tragar.

En pediatría se puede administrar el medicamento disolviéndolo en un poco de agua en una cuchara, en un vaso o en el biberón, sin calentar.

Mientras hacemos un tratamiento homeopático no podemos cepillarnos los dientes con un dentífrico mentolado.

3. PRESCRIPCIÓN Y DISPENSACIÓN.

La enfermedad se caracteriza por una serie de síntomas y signos determinados, pero el médico homeopático, además debe tener en cuenta la forma de enfermar particular de cada paciente a la hora de establecer un tratamiento.

Se debe tener en cuenta, además de los síntomas de la enfermedad: Preocupaciones Sentimientos Deseos Hábitos de vida, etc.

Por ello la homeopatía es una terapia individualizada que trata de ayudar al organismo a restablecer el equilibrio perdido.

3.1. La receta homeopática.En general la receta debe incluir los siguientes datos:

Nombre del medicamento: denominación científica latina de la cepa. Dilución: nº que indica el grado de dilución (1,2,3,…) y la escala de

dilución efectuada (DH: dilución decimal de Hahnemann, CH: dilución centesimal de Hahnemann y K: dilución Korsakovianas).

Forma farmacéutica: gotas, gránulos, glóbulos, etc. Posología y duración del tratamiento: individualizados

Diluciones: • Para síntomas locales: diluciones bajas.• Para síntomas generales: diluciones medias.• Síntomas con manifestaciones psíquicas y cronicidad: diluciones altas.

Nº de gránulos: de 3 a 5 por toma.Dosis-glóbulos: son de dosificación en toma única.Frecuencia de dosificación: varía desde varias tomas al día o

administraciones mensuales (en los procesos agudos se utilizan tomas con intervalos cortos)

Hay que respetar las indicaciones que figuran en la receta.

Normalmente se aconseja administrar los medicamentos homeopáticos fuera de las comidas.

Mientras estemos siguiendo una terapia homeopática no debemos usar dentífricos mentolados (existen pastas de dientes con sabores específicos adaptados a estos tratamientos).

3.2. Tratamientos homeopáticos.Características.

Se utilizan sustancias naturales.La acción terapéutica se produce a dosis infinitesimales.Se pueden utilizar combinados con tratamientos de la

medicina tradicional.Pueden utilizarse para un amplio espectro de patologías

leves y crónicas.Un mismo medicamento puede utilizarse para diferentes

patologías.Una misma enfermedad puede ser tratada con distintos

medicamentos según las condiciones particulares del enfermo.

No presentan efectos secundarios ni contraindicaciones.Son asptos para cualquier tipo de pacientes: niños,

ancianos, embarazadas.La principal vía de administración es la sublingual.Pueden ser utilizados también en los animales.

Precauciones.

Deben administrarse fuera de las comidas (media hora antes o una hora después).

Se debe evitar la ingesta de excitantes como el café o el té, sustancias picantes o licores y tabaco en las proximidades de las tomas.

No ingerir cerca de las tomas, sustancias aromáticas como mentol y eucalipto.

Deben conservarse en lugar fresco, preservado de la luz y alejado de sustancias aromáticas o aparatos que puedan generar campos magnéticos.

No deben tocarse con las manos.

En las formas orales, si son líquidas hay que mantenerlas unos segundos en la boca antes de ingerir, y si son sólidas hay que dejar que se disuelvan bajo la lengua.

No se deben reutilizar los envases para otros fines.No deben usarse sin prescripción facultativa o consejo

farmacéutico.

Indicaciones terapéuticas

Aquellas por las que los pacientes recurren más asiduamente a la homeopatía son: Cefaleas y migrañas. Afecciones respiratorias: faringitis, amigdalitis, bronquitis, asma

y rinitis. Afecciones del aparato digestivo: aftas, acidez, malas

digestiones, gastritis, úlceras, diarreas, estreñimiento y náuseas.

Trastornos cardiocirculatorios: hipertensión arterial, varices, hemorroides y pesadez de piernas.

Trastornos osteoarticulares: enfermedades reumáticas, artrosis, artritis, contracturas, esguinces, traumatismos y lumbago.

Trastornos ginecológicos: dismenorreas, síndrome premenstrual, alteraciones del ciclo menstrual y menopausia.

Trastornos urológicos: cistitis (agudas o de repetición) y problemas prostáticos.

Problemas dermatológicos: eczemas, urticarias, alergias solares, acné, herpes, psoriasis y verrugas.

Problemas oftamológicos: conjuntivitis, blefaritis y orzuelos. Trastornos del comportamiento: angustia, estrés, depresión e

insomnio. Cansancio, anemia y fatiga.

3.3. Homeopatía veterinaria.

Las aplicaciones en medicina veterinaria son las mismas a las de la medicina humana.

Los medicamentos veterinarios son especialmente útiles en algunas patologías, como en alteraciones cutáneas, del sistema nervioso, digestivas o reumatismo.

Se utilizan de forma preventiva para mejorar la producción.

No deja residuos, lo que supone una ventaja para el consumo del producto cárnico.

En general, los costes de tratamiento son bajos.

Éstos se pueden utilizar en la mayoría de animales de granja o domésticos, en cualquier edad y en hembras en gestación.

Puede combinarse el tratamiento con otro tratamiento alopático.

Los medicamentos homeopáticos veterinarios, al igual que los humanos, no son tóxicos y no presentan efectos secundarios.