Cornisa: FENOMENOLOGÍA DEL RETORNO, POLICÍA DE...
123
UNIVERSIDAD DEL TURABO ESCUELA DE CIENCIAS SOCIALES Y COMUNICACIONES ESTUDIO CUALITATIVO FENOMENOLÓGICO, SOBRE LOS ASPECTOS SUBJETIVOS DEL PROCESO DE LA JUBILACIÓN, EN ALGUNOS OFICIALES DE LA POLICÍA DE PUERTO RICO: RETORNO O NO RETORNO AL MUNDO POLICIAL Por Maritza Rodríguez Lazú PROYECTO DOCTORAL Presentado como requisito para la Obtención del Grado de Doctor en Psicología Gurabo, Puerto Rico octubre, 2015
Transcript of Cornisa: FENOMENOLOGÍA DEL RETORNO, POLICÍA DE...
UNIVERSIDAD DEL TURABO
ESCUELA DE CIENCIAS SOCIALES Y COMUNICACIONES
ESTUDIO CUALITATIVO FENOMENOLÓGICO, SOBRE LOS ASPECTOS
SUBJETIVOS DEL PROCESO DE LA JUBILACIÓN, EN ALGUNOS
OFICIALES DE LA POLICÍA DE PUERTO RICO:
RETORNO O NO RETORNO
AL MUNDO POLICIAL
Por
Maritza Rodríguez Lazú
PROYECTO DOCTORAL
Presentado como requisito para la Obtención del Grado
de Doctor en Psicología
Gurabo, Puerto Rico
octubre, 2015
UNIVERSIDAD DEL TURABO
CERTIFICACIÓN DE APROBACIÓN DE PROYECTO DOCTORAL
El proyecto doctoral de Maritza Rodríguez Lazú fue revisado y aprobado por los
miembros del Comité de Proyecto. El formulario de Cumplimiento de Requisitos
Académicos Doctorales con las firmas de los miembros del comité se encuentra
depositado en el Registrador y en el Centro de Estudios Graduados e Investigación de la
Universidad del Turabo.
MIEMBROS DEL COMITÉ DE PROYECTO
William Casper, PhD
Universidad del Turabo
Director del Comité de Proyecto
Dr. Víctor Manuel García Suárez, PhD
Universidad del Turabo, Recinto de Cayey
Lector del Comité de Proyecto
©Copyright, 2015
Maritza Rodríguez Lazú. Derechos Reservados.
iv
ESTUDIO CUALITATIVO FENOMENOLÓGICO, SOBRE LOS ASPECTOS
SUBJETIVOS DEL PROCESO DE LA JUBILACIÓN, EN ALGUNOS
OFICIALES DE LA POLICÍA DE PUERTO RICO: RETORNO
O NO RETORNO AL MUNDO POLICIAL
Por
Maritza Rodríguez Lazú
Dr. William Casper
Director del Comité de Proyecto
Resumen
Mediante un diseño de estudio de caso y el uso de la entrevista fenomenológica a
profundidad como estrategia de recolección de información, se describió y se interpretó
la experiencia de la jubilación de tres oficiales de la Policía de Puerto Rico.
Paralelamente, fue explorado el dilema y las razones, si alguna, para estos oficiales
retornar al servicio policiaco, tras la jubilación. El análisis, descripción e interpretación
de la información recopilada mediante la entrevista a profundidad, se efectuó utilizando
el Modelo de Harry F. Wolcott. Los resultados obtenidos sugieren, que la experiencia de
la jubilación en los entrevistados se presentó como una crisis normativa de vida,
caracterizada por la existencia de una dicotomía emocional. Los sentimientos de mayor
pertinencia resultaron ser; la frustración, el coraje, la libertad y la nostalgia. La necesidad
de relaciones sociales y la responsabilidad económica que conlleva sustentar una familia,
se destacaron como las razones ofrecidas por los participantes para retornar a trabajar a la
Policía de Puerto Rico, tras la jubilación.
Palabras claves: retiro, jubilación, reservista, policía, retorno, aspectos psicológicos,
aspectos psicosociales, consejería psicológica pre-retiro.
v
DEDICATORIA
Dedico este Proyecto de investigación, tanto a mi esposo Eric como a mi hijo Eric
Jafet, por su total apoyo, confianza y paciencia en este proceso, y a todos aquellos
miembros de la Policía de Puerto Rico, activos y jubilados, por su compromiso, gallardía,
y sacrificio de vida con la sociedad puertorriqueña.
vi
AGRADECIMIENTOS
Agradezco primeramente a Dios por permitirme alcanzar las metas establecidas.
A los tres oficiales jubilados, por compartir sus vivencias y experiencias, sin ningún otro
interés que el de colaborar y aportar al bienestar de las futuras generaciones de jubilados
de la Policía de Puerto Rico. Al Sr. Héctor Pesquera, Superintendente al mando de la
Policía de Puerto Rico y al Sr. Jaime Morales, Presidente Ejecutivo de la Corporación
Organizada de Policías y Seguridad [C.O.P.S], por su interés, compromiso y colaboración
con el tema y los objetivos de este estudio.
De igual forma, a todos aquellos miembros de la Policía de Puerto Rico que
conocieron del proyecto y aunaron esfuerzos en el reclutamiento de los participantes.
Como a los Superintendentes que en lo sucesivo estuvieron en la Agencia y conocieron
del Proyecto, permitiéndome continuar y culminar el mismo.
Por último, y no menos importante, quiero agradecer al Dr. William Casper y al
Dr. Víctor M. García, por sus aclaraciones y correcciones conceptuales, metodológicas y
estilísticas.
Gracias a todos.
vii
TABLA DE CONTENIDO
Página
LISTA DE APÉNDICES ...........................................................................................x
CAPÍTULO I. INTRODUCCIÓN ............................................................................1
Planteamiento del problema ...........................................................................2
Objetivos ............................................................................................2
Preguntas de investigación .................................................................3
Justificación .......................................................................................3
Limitaciones .......................................................................................4
Metodología .......................................................................................4
Hipótesis ............................................................................................6
CAPÍTULO II. REVISIÓN DE LITERATURA ......................................................8
Programa de reservistas: sus inicios ..............................................................9
Definición de retiro ........................................................................................12
Enfoques teóricos ...........................................................................................13
Un proceso individual ........................................................................14
Teoría de roles....................................................................................15
Teoría de la continuidad.....................................................................16
Teoría de etapas .................................................................................17
Perspectiva del curso de vida .............................................................18
Perspectiva de Recursos .....................................................................20
Ajuste de la jubilación: un proceso dinámico basado en recursos .....20
viii
Psicología evolutiva .......................................................................................21
Retiro: ciclo de vida ...........................................................................21
Etapas de desarrollo ...........................................................................22
Proceso de transición .....................................................................................23
Trabajo: aportaciones sociales y emocionales ...................................23
Preparación para el retiro ...................................................................24
Retiro: una perspectiva psicológica ...............................................................29
Aspectos generales .............................................................................29
Aspectos emocionales ........................................................................33
Aspectos psico-sociales .....................................................................42
Análisis de ajuste, satisfacción y otros indicadores .......................................47
Asimilación al cambio .......................................................................47
Programa de planificación .................................................................60
Análisis ..........................................................................................................63
CAPÍTULO III. RESULTADOS, DISCUSIÓN, CONCLUSIONES Y
RECOMENDACIONES .................................................................68
Resultados ......................................................................................................68
Crisis normativa de vida ................................................................................69
Identidad personal y social.................................................................69
Dicotomía emocional .........................................................................70
Asimilación y homeostasis de la crisis ..........................................................73
Entorno y roles ...................................................................................73
Sentido de Protección a otros .............................................................74
ix
Retorno o no retorno al mundo policial .............................................75
Discusión........................................................................................................77
Conclusiones ..................................................................................................81
Recomendaciones ..........................................................................................84
REFERENCIAS .........................................................................................................86
BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA ...........................................................................96
x
LISTA DE APÉNDICES
Página
Apéndice A. Preguntas Guías .................................................................................99
Apéndice B. Boletín Informativo ............................................................................101
Apéndice C. Cartas enviadas y recibidas de los colaboradores ..............................103
Apéndice D. Consentimiento Informado ................................................................108
Apéndice E. Solicitud y Aprobación uso de la Clínica de Servicios
Psicológicos .......................................................................................111
1
CAPÍTULO I
INTRODUCCIÓN
Durante veintiún años realice funciones como oficial de policía en la Policía de
Puerto Rico. Fueron muchas las experiencias que viví dentro de la Agencia. Como
oficial de policía retirada, puedo validar que el trabajo de estos servidores públicos, está
cargado de un sinnúmero de situaciones que por su naturaleza conllevan el envolvimiento
y la evocación de emociones, producto de los sentimientos que en ocasiones el escenario
de trabajo o la situación presente llevan a experimentar. Sin embargo, la mayoría de las
veces es indispensable poder controlar y en ocasiones reprimir, las emociones y los
sentimientos que consigo traiga la experiencia, teniendo como finalidad el mantener, el
preservar y el velar por la vida y las propiedades de los ciudadanos en Puerto Rico.
De forma paralela y como es de conocimiento general, la Policía de Puerto Rico
como agencia gubernamental, encara el reto de lidiar con aspectos administrativos
matizados de burocracia. Como parte de estos procesos, se encuentra el manejo y la toma
de decisiones en diversidad de temas, que en ocasiones y de forma silente, tiene un efecto
sobre la salud mental de estos servidores públicos. Esto, y sin dejar a un lado, lo que
conlleva enfrentar y asimilar la cultura organizacional de la Agencia, que ineludiblemente
envuelve aspectos de personalidad y de carácter, de sus empleados.
Sin embargo, la Policía de Puerto Rico cuenta con un gran grupo de oficiales de
policía retirados, que regresan a trabajar a la Agencia acogidos bajo el Programa del
Cuerpo de la Reserva. Estos oficiales de policía, son denominados dentro de la Policía de
Puerto Rico como reservistas, y de forma general las labores que algunos realizan son de
2
índole administrativa, aunque existen un grupo que lleva a cabo funciones de índole
investigativa.
Es en este punto donde surgen las preguntas, ¿cuáles son las razones existentes,
que los lleva a tomar la decisión de regresar a trabajar a la Policía de Puerto Rico, tras la
jubilación y las experiencias vividas dentro de la agencia? ¿habría la posibilidad de que
no existieran otras actividades y/o trabajos que realizar, luego de acogerse al retiro, que
no fuera dentro de la Policía de Puerto Rico? ¿cómo se desarrolla y manifiesta
psicológicamente, el proceso de la jubilación, en estos servidores públicos?
Tomando esto como base, surge lo que constituye el problema de investigación en
este estudio.
Planteamiento del Problema
Objetivos. Siendo el retiro una etapa normativa de vida, resulta pertinente
conocer cómo se desarrolla y se manifiesta este proceso en los oficiales de la Policía de
Puerto Rico. Mucho se ha escrito sobre los beneficios y los perjuicios que podrían
acaecer en la vida de una persona, como consecuencia del proceso de ajuste, de
asimilación y de satisfacción para con la jubilación.
Partiendo de esto, los objetivos de esta investigación están dirigidos a la
exploración e interpretación fenomenológica de la experiencia de la jubilación en algunos
oficiales de la Policía de Puerto Rico y las razones explicitadas ante el dilema de retornar
a trabajar a la Agencia, por tres oficiales retirados de la Policía de Puerto Rico.
La información recopilada será de utilidad, para toda persona que de alguna forma
esté vinculada y/o preste servicios a esta población. Más aún, al considerar el hecho, que
3
los resultados, las conclusiones y las recomendaciones finales tienen su origen, en la
interpretación que los propios participantes le ofrecieron a la experiencia de la jubilación.
Preguntas de investigación.
¿Cuáles son las interpretaciones fenomenológicas a la experiencia de la
jubilación por algunos oficiales de la Policía de Puerto Rico?
¿Cuáles son las razones explicitadas ante el dilema de volver a trabajar a
la Agencia por los tres oficiales de la Policía de Puerto Rico, tras la
jubilación?
Justificación. Se puede conceptualizar el proceso de la jubilación de los oficiales
de la Policía de Puerto Rico, como uno que comprende una multiplicidad de dimensiones.
Algunas de las dimensiones afectadas tras la decisión de acogerse al retiro son; la familia,
la salud física y emocional, la identidad que la persona tiene de sí misma y dentro de la
sociedad, las relaciones interpersonales, entre otras tantas que podríamos mencionar.
La ausencia de información sobre cómo estos servidores públicos viven e
interpretan la experiencia de retirarse, y algunas de las razones para que unos decidan
regresar a trabajar a la Agencia y otros no tras la jubilación, es un tema casi inexplorado,
pese al impacto multidimensional que esto tiene en sus vidas, sus familiares, sus
relaciones laborales y sociales.
Al momento de este estudio, no se han identificado investigaciones previas desde
un enfoque fenomenológico, sobre los aspectos que rodean el proceso de la jubilación en
los Oficiales de la Policía de Puerto Rico. Este tipo de estudio, brinda la oportunidad de
conocer sobre el tema del retiro desde la perspectiva de los participantes y los resultados
4
obtenidos podrían considerarse para el desarrollo de un programa de orientación y ayuda
para estos servidores públicos.
Limitaciones. Para la realización de esta investigación fue necesario el
establecimiento y firma de un acuerdo de confidencialidad con la Policía de Puerto Rico,
para el manejo y uso de información que pudiera surgir durante las entrevistas,
relacionada con las funciones investigativas, las regulaciones internas y los procesos
administrativos de la Agencia.
Por otro lado, los resultados expuestos en este estudio, son producto del análisis e
interpretación de la narrativa de los participantes y las experiencias vividas por estos,
dentro de la Policía de Puerto Rico. Por lo que existe la posibilidad, que los entrevistados
se hayan reservado información pertinente a los objetivos de estudio, por considerarla
sensitiva u otras razones.
Es importante establecer, que los resultados de esta investigación no deben ser
aplicados a todos los oficiales de policía retirados de la Policía de Puerto Rico, y que los
mismos representan las experiencias vividas y la interpretación que los participantes le
ofrecieron al evento de la jubilación desde su propia perspectiva.
Metodología. El diseño de esta investigación es un estudio de caso,
fundamentado en la concepción filosófica de Martin Heidegger, quien por medio de una
fenomenología interpretativa enfatizaba en la búsqueda, la comprensión y la
interpretación que de forma implícita se encontraba en las experiencias de vida del ser
humano, con el fin de revelar su significado más allá de lo meramente observado. Así, la
fenomenología interpretativa cruzaba los límites de la fenomenología transcendental
propuesta por Edmund Husserl, quien exponía un supuesto filosófico para el estudio de la
5
experiencia basado en la ciencia, pero sin dejar a un lado la intención del observador y
los aspectos sociales e históricos que pudieran influenciar en los resultados de lo
observado. (Álvarez, 2003; Barbera & Inciarte, 2012; Paoli, 2012).
Como estrategia de recopilación de información, se utilizó la entrevista
fenomenológica a profundidad, mediante el uso de preguntas guías (apéndice A), que no
necesariamente rigieron el curso de las entrevistas realizadas, dado que los objetivos de la
investigación estaban dirigidos a la exploración e interpretación que algunos oficiales de
la Policía de Puerto Rico le otorgaban a la experiencia de la jubilación. Además, se
indagó en las razones posteriores al retiro, para que algunos de los entrevistados
regresaran a trabajar a la Agencia en calidad de reservistas y otros no. (Álvarez, 2003;
Lucca & Berríos, 2009).
La identificación y selección de las personas entrevistadas se efectuó mediante el
contacto directo y un boletín y/o cartel informativo (apéndice B), colocado en Agencias
Gubernamentales y Privadas que le prestan servicios a los Oficiales de la Policía de
Puerto Rico, incluida la población de personas jubiladas en esta profesión, luego de las
aprobaciones correspondientes (apéndice C). La participación de los entrevistados fue
libre y voluntaria y no se les proveyó ningún tipo de regalía, obsequio y/o incentivo
económico por su colaboración en el estudio.
A todos los entrevistados se les entregó y discutió el contenido del consentimiento
informado (apéndice D) y firmado voluntariamente. Las entrevistas fueron grabadas,
previa autorización de los participantes. Una vez transcritas, fueron borradas y el
documento fue almacenado en una caja de seguridad, para proteger la confidencialidad de
los entrevistados, separadas del consentimiento informado. Los documentos originados
6
durante el proceso de investigación permanecerán guardados durante un término de cinco
(5) años. Una vez concluya ese periodo, todos los documentos generados, exceptuando
los resultados generales, serán destruidos.
Toda la información recopilada y la identidad de los participantes gozarán de
cláusulas de confidencialidad y sus identidades no serán reveladas bajo ninguna
circunstancia, por lo que para fines de la investigación los participantes fueron
identificados mediante códigos numéricos.
Las entrevistas se llevaron a cabo en lugares seleccionados por los participantes y,
de no ser así, se efectuaron en la Clínica de Servicios Psicológicos de la Universidad del
Turabo, previa autorización y aprobación de la Junta para la Protección de Seres
Humanos en la Investigación, por sus siglas en inglés (IRB). (apéndice E).
Los resultados globales del estudio serán de naturaleza pública y la Policía de
Puerto Rico podrá tener acceso a los mismos. No obstante, ni la Policía de Puerto Rico ni
ninguna otra persona y/o entidad, conocerá información alguna y/o datos relacionados
con la identidad de los participantes que pueda dar base a la identificación de estos.
Para la descripción, el análisis y la interpretación de la información, se utilizó el
Modelo de Harry F. Wolcott, en la modalidad descriptiva de sucesos medulares y un
proceso analítico de búsqueda de patrones, a fin de obtener información pertinente con
los objetivos de la investigación. La interpretación final de los resultados fue de tipo
sugerido. (Lucca & Berríos, 2009).
Hipótesis. Este proyecto de investigación no se dirigió por hipótesis alguna. Su
objetivo fue explorar la interpretación fenomenológica que las personas entrevistadas
ofrecieron a la experiencia de jubilarse de la Policía de Puerto Rico e indagar en algunas
7
de las razones para que algunos de estos consideraran regresar a trabajar a la Agencia y
otros no, tras la jubilación. En este estudio se recopiló información pertinente a la
interpretación de las experiencias en el proceso del retiro en algunos Oficiales de la
Policía de Puerto Rico.
8
CAPÍTULO II
REVISIÓN DE LITERATURA
Como la mayoría de los fenómenos que conforman parte de la vida del ser
humano, el retiro cuenta con explicaciones de base empírica y proveniente de diversas
vertientes. En el campo de la psicología, el proceso de la jubilación ha sido estudiado de
forma cuantitativa y cualitativa. Ramas como la psicología organizacional, la psicología
clínica y la consejería psicológica, son algunas de las disciplinas que trabajan
directamente con el tema del retiro y la población que se ha visto impactada al llegar a
esta etapa de vida.
Todos estos movimientos y descubrimientos científicos, han redundado en
beneficio de la humanidad. Los mismos, han demostrado tener resultados positivos
mediante el desarrollo de modelos y de teorías aplicables, enfocadas en ofrecer una
explicación al fenómeno de la jubilación y cómo este se desarrolla y se manifiesta física,
emocional y socialmente, en la vida de aquellas personas que lo atraviesan.
Dado que los oficiales de policía que componen el Cuerpo de la Reserva en la
Policía de Puerto Rico, forma parte de esta población que se ha visto beneficiada con
estos avances científicos, es indispensable comenzar nuestro recorrido literario con lo que
es el inicio y el origen del Programa de la Reserva y el propósito para el cual fue creado.
Además de la exposición de diversos significados que le han sido otorgados al concepto
del retiro y algunos de los enfoques teóricos que lo analizan y lo describen. Todo esto
seguido, de información descriptiva de los efectos del proceso de la jubilación desde una
perspectiva psicológica y psicosocial. Por último, se abarca el tema del proceso de
9
preparación y de planificación para lograr lo que es catalogado, como un proceso de
ajustes y satisfacción adecuado durante esta etapa de vida.
Programa de Reservistas: sus inicios
La importancia que conlleva el proceso de retiro y/o jubilación en la vida de toda
persona que ha formado parte de la fuerza laboral, no es diferente a la de aquellos que
ejercen profesiones relacionadas con la seguridad. En este proyecto de investigación, se
estará haciendo alusión a algunos Oficiales jubilados de la Policía de Puerto Rico.
De acuerdo con la Ley 53 del 10 de junio de 1996, conocida como Ley de la
Policía de Puerto Rico, las personas denominadas como reservistas son aquellas que
decidieron volver a trabajar en la Agencia, tras la jubilación. Estos, son contratados
previa aprobación del Superintendente, luego de haberse acogido a los derechos del
retiro, ya sea por años de servicio y/o edad. (Estado Libre Asociado de Puerto Rico
[ELA], 1996).
El Programa de la Reserva tuvo sus inicios mediante una orden ejecutiva del
Gobernador del Estado Libre Asociado de Puerto Rico en el boletín administrativo
número 1994-04, bajo el título: Para crear el cuerpo de la reserva de la Policía de
Puerto Rico y proveer para su organización y funcionamiento. De este modo, se crea el
Cuerpo de la Reserva de la Policía como una Superintendencia Auxiliar, aunque en la
actualidad no funciona como tal. (ELA, 1994).
De acuerdo con la orden ejecutiva 1994-04, el propósito del Cuerpo de Reserva
era reclutar aquellos miembros de la Policía de Puerto Rico que se encontraban retirados
por años de servicio y estuvieran pensionados, con el fin de sustituir los oficiales de la
policía que se encontraban activos realizando funciones administrativas y otras no
10
operacionales. (ELA, 1994, p.1). Además del desarrollo de normas y directrices que
rigieran el funcionamiento de dicho Cuerpo y sus componentes, mediante el
establecimiento de guías escritas para la regulación de la supervisión, la evaluación y la
dirección del Programa. (ELA, 1994).
Posteriormente surge el Reglamento 5032, del 24 de febrero de 1994, mejor
conocido como: Reglamento de la reserva de la Policía de Puerto Rico, donde se
establecían las funciones, los requisitos de reclutamiento y la organización de la
Superintendencia Auxiliar en Asuntos de la Reserva de la Policía. Este reglamento, tuvo
varias enmiendas aprobadas bajo el reglamento 5339, del 5 de noviembre de 1995. En la
actualidad ambos reglamentos están derogados, siendo sustituidos por el reglamento
8133, del 5 de enero de 2012, conocido como: Reglamento del Cuerpo de la Reserva de
la Policía de Puerto Rico, al momento de este estudio. (Policía de Puerto Rico [PPR],
1994, 1995, 2012).
La iniciativa del Gobierno de Puerto Rico, es un ejemplo de que las personas
retiradas y/o jubiladas, independientemente sean de una entidad gubernamental y/o
privada, tienen una función y un rol significativo en la sociedad. Un ejemplo de esto, lo
podemos ver en la orden ejecutiva 1994-04, la cual expone; “Puerto Rico cuenta con
cientos de veteranos de la Policía que poseen los conocimientos necesarios para sustituir
a policías activos en tareas no relacionadas a la protección directa de vida y propiedad”.
(ELA, 1994, p.1).
Aunque la orden ejecutiva 1994-04, visualizaba a los oficiales de policía retirados
en funciones administrativas, no dejaba a un lado ni menospreciaba, lo significativo de
11
sus aportaciones en la Agencia, al unir conocimiento y experiencia, conceptos estudiados
desde la perspectiva policial por Lung (2010).
Lung (2010), centró los objetivos de su investigación en los aspectos subyacentes
en la forma de pensar de los oficiales de policía de recién ingreso y los próximos a
jubilarse, en cuanto a la transmisión de conocimiento. El objetivo de estudio consistió,
en determinar qué factores eran percibidos por ambos grupos, como facilitadores u
obstaculizadores, en la transmisión del conocimiento del trabajo policial de una
generación a otra.
Los resultados del estudio realizado por Lung (2010) revelaron, que los policías
de recién ingreso se preocupan más por factores relacionados con la implementación de
las normas internas/externas de la agencia, el desarrollo de redes de información, el
conocer y entender la cadena de mando, entre otros. En contraste, los policías próximos a
retirarse enfocaban sus esfuerzos en los logros que la división pudiera alcanzar y obtener,
el adiestrarse para los diferentes niveles que componen la jerarquía y posiciones dentro
de la agencia, el trabajo en equipo, la cohesión del grupo e identificar y reconocer la
existencia de talentos en los policías de nuevo ingreso. (Lung, 2010).
Pese a que ambos grupos mostraron sus diferencias en cuanto a lo relevante para
realizar su trabajo policial, estos fueron cónsonos en que una vez el oficial de policía se
retiraba, con ellos se iba el conocimiento producto de su experiencia. (Lung, 2010).
Retomando el tema de los reservistas en la Policía de Puerto Rico, para trabajar en
este cuerpo, es necesario cumplir con varios requisitos dirigidos al cernimiento de las
capacidades y habilidades físicas y/o mentales del candidato, colocando el concepto de
salud mental en una posición de vital importancia para el buen funcionamiento de un
12
individuo. (PPR, 2012). De este modo, el Gobierno se aseguró que las personas que
entraran a proveer servicio a través del Programa de la Reserva, cumplieran con una
buena salud física y mental, a fin de garantizar un buen desempeño y la seguridad de
todos.
Por la naturaleza del trabajo diario de los oficiales de la Policía de Puerto Rico,
son expuestos a situaciones que conllevan altos niveles de riesgo y estrés emocional.
Esta situación, infieren (Tanguay, 2008; Caudill & Peak, 2009), con el tiempo podría
provocar el surgimiento de un síndrome de estrés postraumático (PTSD) u otros
trastornos de índole mental. La literatura demuestra, que acogerse al retiro conlleva una
serie de procesos mentales, físicos y conductuales que pueden variar de persona a
persona. Factores como la salud, la economía, la personalidad, el rol social y el apoyo,
entre otros, tienen un papel significativo en la vida de la persona próxima a retirarse.
Así, los objetivos de este estudio fueron dirigidos a la exploración de; ¿cuáles son
las interpretaciones fenomenológicas a la experiencia de la jubilación por algunos
oficiales de la Policía de Puerto Rico? y ¿cuáles son las razones explicitadas ante el
dilema de volver a trabajar a la Agencia por los tres oficiales de la Policía de Puerto Rico,
tras la jubilación?
Definición de Retiro
Atchley (1976, p.1), definió la palabra retiro como; “una condición donde un
individuo es forzado y/o permite ser empleado a medio tiempo y sus incentivos
económicos provienen de una pensión por concepto de jubilación y un trabajo realizado
en años anteriores para su sustento. Ambas condiciones pueden ser aplicadas a un
individuo para denominarlo retirado”. En cambio, Bowlby (2007), hace referencia al
13
retiro como; “un evento y un estado de ser” (p.16), ya que una vez la persona se retira se
produce un cambio al entrar en una nueva faceta de vida, la cual tuvo su comienzo
mediante la llegada de un evento, como lo es el último día de trabajo o la fiesta de
despedida.
Knoll (2011), expresa que retiro es; un individuo que no quiere o no puede
continuar trabajando y/o simplemente decide que llegó el momento de dejar de trabajar.
Al igual, que aquella persona que solicita los beneficios del seguro social, aún cuando
esté trabajando y/o deje de trabajar sin solicitar tales beneficios.
Para Carter y Cook (1995), “la jubilación puede ser vista como una transición que
implica la ampliación, la redefinición y el cambio de roles”. (p.68).
De conformidad con la definición propuesta por Carter & Cook (1995), Atchley
(1976), Bowlby (2007) y Knoll (2011), podríamos definir y concluir que el retiro es; la
culminación e inicio de una nueva etapa de vida, donde el aspecto financiero reclama un
rol significativo representado por una pensión, producto de los años trabajados y en
concordancia con las normas establecidas por un ente gubernamental o privado, que no
priva a la persona jubilada de continuar trabajando.
Para fines de esta investigación, se considerarán jubilados y/o retirados, aquellos
oficiales de la Policía de Puerto Rico que hayan cumplido 30 años o más de servicio, y
que producto de los años trabajados reciben una pensión, aunque estén trabajando como
reservistas o en otras profesiones.
Enfoques teóricos
El proceso del retiro cuenta con varias vertientes teóricas dirigidas a explicar y/o
describir cómo puede desarrollarse este evento de vida y la forma en que podría ser
14
visualizado por las personas. A continuación, se exponen algunos de estos enfoques, y
cómo cada uno de ellos, busca darle una explicación científica al fenómeno de la
jubilación, partiendo de consideraciones psicológicas, contextuales, evolutivas, sociales,
históricas, entre otras.
Un proceso individual. Lozier & Dooris (1991), señalan que la forma en que se
visualiza el retiro y la decisión de acogerse a este, es un asunto personal. En un estudio
realizado por estos, fueron evaluados 18 factores que se entendían tendrían una influencia
sobre la decisión de acogerse a la jubilación. Un total de 747 miembros de facultad,
pertenecientes a 101 universidades fueron encuestados, unidos a datos relacionados con
posibles jubilaciones del personal docente para el año 2003, provenientes de las mismas
instituciones universitarias.
De los factores estudiados, los de mayor relevancia entre los participantes fueron
los relacionados con aspectos financieros, principalmente el estatus económico en general
y cumplir con los requisitos necesarios para tener derecho a los beneficios de la
jubilación. Durante proceso de evaluación y decisión para acogerse a la jubilación
ponderaban; el tiempo personal y familiar con el cual dispondrían, las condiciones y
políticas asociadas al entorno laboral, la situación económica y los recortes
presupuestarios. (Lozier & Dooris, 1991).
Lozier & Dooris (1991), encontraron además, que la decisión de acogerse al retiro
presentaba diferencias entre los grupos facultativos y lo relacionado al género. De forma
general, el estudio sugiere que los factores de mayor importancia son los de índole
económica, al momento de tomar la decisión de jubilarse, sin concluir que para todos los
15
encuestados resultó ser de la misma manera, lo que demuestra la particularidad e
individualidad del proceso decisional que conlleva la jubilación.
Las diferencias personales al momento de evaluar y decidir acogerse a los
beneficios de la jubilación han sido objeto de estudio durante muchos años. Como
evidencia de esto, encontramos que Nilsson, Rignell & Rylander (2011), efectuaron un
estudio con el fin de identificar hasta que edad las personas encuestadas querían seguir
trabajando o entendían podían continuar trabajando. A estos fines, utilizaron información
los datos recopilados en un estudio realizado en el año 2004, por el “Sewdish National
Institute of Working Life”. Un total de 2822 formularios fueron enviados mediante
correo postal, de los cuales 1792 fueron utilizados en el estudio.
Los resultados de la investigación realizada por Nilsson et al. (2011), sugieren una
diferencia entre las personas que entienden y quieren seguir trabajando hasta la edad de
65 años, enmarcada en la edad de los participantes del estudio. Las personas que se
encontraban en el renglón de los 60-64 años de edad, entendían que podían y querían
seguir trabajando hasta la edad de 65 años, en comparación con aquellos que se
encontraban entre los 55-59 años de edad.
Aspectos sobresalientes en el estudio de Nilsson et al. (2011), fueron; la
importancia e influencia que tienen las relaciones sociales e intrafamiliares, la cercanía de
las relaciones interpersonales y la salud física y mental, primordialmente asociada al
ambiente laboral, a la hora de considerar el retiro.
Teoría de Roles. Carter & Cook (1995), proponen la función social de los roles
en la vida de las personas. De acuerdo con este enfoque, los roles que se desempeñan en
el diario vivir tienen un efecto sobre la auto-definición que el individuo pueda tener de sí
16
mismo. Estos roles, son originarios de las diferentes interacciones, relaciones y
ambientes con los cuales las personas se involucran diariamente. Dado que la jubilación
por sí sola es significado de cambio, la importancia del rol en la vida del individuo será
fundamental en el proceso de transición dentro del proceso del retiro. Las diferencias
individuales y la capacidad de cambiar de un rol a otro, formarán parte de los recursos
psicológicos co los cuales la persona contará, para facilitar el dinámico proceso de la
jubilación.
Desde esta perspectiva teórica, La Bauve & Robinson (1999), señalan que la
sociedad está estructurada en función de los roles que cada persona lleva a cabo, los
cuales tienen un efecto sobre la conducta y las aptitudes del individuo influyendo su
identidad. De acuerdo al rol de mayor frecuencia e influencia en la vida de la persona, ya
sea definido por éste o por la sociedad, será el proceso de ajuste en la jubilación.
Teoría de la Continuidad. Enfatiza la continua existencia de patrones en la vida
del individuo en aspectos relacionados con; la estructura de pensamientos, la conducta y
los aspectos de índole social. Estos patrones no son considerados estáticos, sino que
realizan una función de cambio y adaptación en la vida de la persona, para sentirse
satisfecha, ajustándose a sus expectativas de vida. Es una teoría, dirigida a la realización
de cambios adaptativos, tomando en consideración la conducta, los pensamientos y los
asuntos de índole social que han rodeado a la persona, tanto en el presente como en el
pasado. Constituye una, “persistente existencia de patrones” (Atchley, 1999, p.96), que
se ajustan a las situaciones y/o el ambiente social presente de la persona.
Desde este enfoque, Kim & Feldman (2000), conceptualizan el retiro como la
falta de actividad laboral y la necesidad de mantenerse activo, a fin de no sentirse sin un
17
rol en el contexto social. El que una persona retirada se pueda mantener activa, aún en
actividades voluntarias, es representativo al nivel de actividad y contacto social existente
antes de acogerse al retiro. La existencia de factores externos al individuo que puedan
interferir con la realización de actividades en su retiro, no es significado de que la
persona ya no desea continuar activo, sino que desde este enfoque teórico, la persona
deseará continuar activo y buscará la forma de adaptarse de manera satisfactoria a la
situación que le rodea.
Wang, Henkens & Solinge (2011), afirman que las personas que mantienen una
imagen positiva a lo largo del tiempo, visualizan el retiro como una oportunidad para
mantener sus relaciones y patrones sociales, más que como un evento de pérdida.
Teoría de Etapas. De acuerdo con Atchley (1976), el retiro es un proceso que se
desarrolla por medio de etapas, siendo la primera denominada “honeymoon”. En esta, el
individuo se siente lleno de energía y satisfacción, dirigiéndose al desarrollo de nuevas
actividades y roles. Luego, sigue la etapa del desencanto, caracterizada por un
sentimiento de insatisfacción con la vida de retirado, percatándose que se había forjado
unas expectativas irreales con relación al retiro. Pasado un tiempo, surge la etapa de re-
orientación, en la cual se evalúa el proceso del retiro y el estatus de vida considerando la
posibilidad de realizar cambios. Por último, surge la etapa de estabilidad donde el
jubilado se enfoca en otros aspectos en la vida de mayor relevancia, como por ejemplo la
salud.
Con el fin de probar lo postulado por Atchley (1976), Gall, Evans & Howard
(1997), realizaron un estudio longitudinal que consistió en darle seguimiento a un grupo
de personas jubiladas en su etapa de pre-retiro (2 a 4 meses antes de jubilarse) y un año
18
después de retirarse. Como resultado, encontraron que en efecto existe una etapa donde
la persona jubilada siente un incremento de manera beneficiosa sobre su salud emocional,
energía, satisfacción e incluso en aspectos de índole económica, ese primer año luego de
acogerse al retiro. Esto es lo que Atchley (1976), denominó la etapa de “honeymoon”.
Sin embargo, pasados unos 6 a 7 años de haberse retirado, el panorama presentaba
un cambio significativo, dado que las personas comenzaban a presentar una insatisfacción
personal y su salud emocional comenzaba a decaer, además del surgimiento de problemas
asociados con la salud física. El único renglón que mostró estabilidad luego de dicho
término, fue el relacionado con aspectos financieros. Pese a esto, los hallazgos generales
del estudio no encontraron que el proceso de la jubilación sea un evento estresante de
vida, pero sí, la existencia de factores que influencian en la satisfacción de éste, ya sea a
corto o largo plazo. (Gall et al., 1997).
Perspectiva del Curso de Vida. Esta teoría tiene sus orígenes allá para el 1950,
con C. Wright Mills, quien comenzó realizando investigaciones en aspectos relacionados
con; la biografía y la historia, integrando e interrelacionando ambos constructos, con la
estructura social. (Elder, Kirkpatrick & Crosnoe, 2002).
De acuerdo con Elder et al. (2002), La teoría de Perspectiva del Curso de Vida se
enfoca en el estudio del desarrollo humano hasta la vejez, considerando aspectos como
tiempo y eventos históricos, viéndolos como patrones que emergen de forma gradual
durante los años de vida y su fusión en la identidad social, histórica e individual de las
personas, por lo que la mayoría de las investigaciones realizadas bajo esta enfoque están
fundamentadas en estudios longitudinales.
19
Moen (1996), realizó un estudio sobre el proceso del retiro tomando como base la
teoría de la Perspectiva del Curso de Vida. En el mismo, destacó aspectos asociados al
género, el estatus civil (casado, soltero, viudo, divorciado), el origen étnico, la
preparación académica, la edad, el puesto y las condiciones de trabajo, las regulaciones y
las políticas existentes en cuanto a los beneficios del retiro y como estos tienen un efecto
directo en la forma de ver y transcurrir hacía la faceta del retiro estableciendo una
diferencia entre generaciones.
Algunos de los argumentos expuestos por Moen (1996), fueron; cómo el género
puede influenciar en el puesto, en las actividades y en las habilidades que se desarrollan y
esperan, entre un hombre y una mujer en el lugar de trabajo, y los efectos que estos
pueden tener en la vida de las personas camino al retiro. Destacando, que existe la
posibilidad de que surjan diferencias en las actividades al momento de la jubilación al
considerar la diversidad de roles que cada género ejecuta, sugiriendo que las mujeres
podrían experimentar mayor variedad en las actividades que puedan realizar posterior al
retiro, citando la pluralidad de roles ejercidos por éstas en comparación con los hombres.
Además de, la diferencia entre los beneficios que puede tener una mujer, dado al puesto,
al salario o las tareas laborales, cuando son comparadas con los hombres. Para Moen
(1996), esta diversidad de roles podría representar un grado de diferencia en aspectos
asociados a la salud, una vez llegue el proceso de transición hacia el retiro.
De igual forma, Moen (1996), resalta los cambios y políticas gubernamentales
establecidas con la llegada de Seguro Social y los cambios en las normas relacionadas
con el retiro, entre un género y otro, aumentando la edad para los hombres en
comparación con las mujeres, para acogerse a los beneficios de este programa. Y cómo
20
el surgimiento, no tan solo del Seguro Social, sino de otras compañías dedicadas a pólizas
y planes de retiro, marcaron una diferencia entre un grupo cohorte y otro, y aquellos
predecesores que no tuvieron tales beneficios.
Perspectiva de Recursos. Cuando se habla de recursos desde este modelo
teórico, se hace referencia a la definición propuesta por Hobfoll (2002); como aquellos a
que le damos un valor intrínseco, tales como; la auto-estima, las relaciones cercanas y la
salud, entre otros. Y cómo son valorados, ya que de alguna forma ayudan en la obtención
de recompensas extrínsecas, como; el dinero, el crédito y el apoyo de las redes sociales
con las cuales podamos contar. Estos recursos pueden encontrarse cerca o lejos de la
persona, provenientes de una base biológica o cultural. La función primordial de los
recursos con los cuales la persona pueda contar, es ayudarle a manejar las diversas
situaciones de vida que de alguna forma puedan generar estrés y/o malestar emocional,
promover la toma de decisiones y el cumplimiento de metas trazadas. (Hobfoll, 2002).
En la medida que la persona tenga acceso a estos recursos, el proceso de la jubilación no
será dificultoso. (Wang et al., 2011).
Ajuste a la jubilación: un proceso dinámico basado en recursos. El retiro es
descrito por Wang, Henkens & Solinge (2011), y Wang & Shi (2014), como un proceso
longitudinal con varios niveles de ajuste que influenciará los recursos del individuo,
provocando cambios sobre estos. Este enfoque teórico, centra su atención en los
procesos subyacentes que conforman la vida de las personas, más que en lo bueno o malo
que pueda resultar el acogerse al retiro para un individuo.
Por ejemplo, una persona que se retira y cuenta con una red de apoyo de amigos,
probablemente en su mayoría provenientes del entorno laboral, es probable que ese grupo
21
de amigos sufra una reducción o incremento una vez se retire, lo que bajo esta teoría se
considera un cambio que tendrá sus efectos en el proceso de jubilación. Considerando
los aspectos financieros, un cambio en los incentivos económicos, ya sea en incremento o
descenso del dinero recibido, provocará un efecto sobre la calidad de vida de la persona
retirada. De este modo, todo cambio que pueda surgir, tanto negativo como positivo, en
los recursos con los cuales cuente la persona al momento de jubilarse y posterior a esto,
afectará directamente su estilo de vida en su etapa de retirado, por lo que se convierte en
un proceso dinámico. (Wang et al., 2011; Wang & Shi, 2014).
Psicología Evolutiva
Retiro: Ciclo de Vida. La jubilación es un proceso por el cual toda persona
podría atravesar. Este cambio de vida ha sido documentado, analizado e investigado
desde varias perspectivas; social, psicológica, física, financiera y otras disciplinas afines
con la actividad y el desarrollo humano.
Cuando se hablé de la jubilación, se pensará en un proceso pluridimensional. En
este, los individuos se exponen a la toma de decisiones fundamentadas en
cuestionamientos individuales, colectivos y familiares. Para Papalia, Wendkos & Duskin
(2001), el retirarse del trabajo implica una de las decisiones de mayor envergadura en la
etapa de la vejez.
En los primeros años de la jubilación, las personas presentarán la necesidad de
recibir apoyo emocional a fin de sentirse útiles, valiosas y necesarias hasta procesar el
cambio que esto conlleva. (Papalia et al., 2001). Esto no es diferente para los oficiales
de la policía, existe información en cuanto a los efectos del proceso de la jubilación en
estos trabajadores. Según Rehm (1996), el retiro para los policías no es simplemente el
22
final de años de trabajo, sino que podría ser interpretado como el final de una vida
familiar. Además del comienzo de una vida llena de retos y cambios.
De acuerdo con Caudill & Peak, (2009), la jubilación es más que retirarse de la
“fuerza” con la cual se trabajó probablemente no menos de treinta años. Dada la
naturaleza del trabajo que se lleva a cabo, los autores proponen en el artículo: Retiring
from the “thin blue line”: a need for formal preretirement training, un proceso de retiro
multifacético donde se consideren aspectos físicos, emocionales y financieros, para las
personas que trabajan en los cuerpos policiacos dirigidos a la obtención de un retiro
satisfactorio.
Etapas de Desarrollo. El proceso de la jubilación puede verse en dos de las
etapas de desarrollo psicosocial propuestas por Erik Erikson en el 1963, considerando la
edad del individuo. La primera etapa es la de generatividad vs estancamiento, donde la
virtud a desarrollarse es el cuidado. En la misma, la persona todavía se siente productiva
y creativa en diferentes aspectos de su vida. Por esto, existen personas que luego de
acogerse al retiro, deciden iniciar nuevos proyectos y/o continuar aquellos que habían
postergado. De no ser así, podrían verse sumidas en un tipo de estancamiento que les
genere ansiedad, aburrimiento y empobrecimiento personal, provocando sentimientos de
inutilidad y existiendo la posibilidad de desarrollar algún trastorno psicológico. (Engler,
1996; Corsini, 2011; Papalia, Duskin & Martorell, 2012).
Es durante la etapa de la generatividad vs el estancamiento, que la virtud de
cuidado emerge. Las personas experimentan la necesidad de cuidar de otros y necesitan
sentir que son parte de la vida de otras personas sintiéndose necesarios, por lo que el
objetivo es; “hacer algo por alguien” (Engler, 1996, p.169).
23
La otra etapa en que la jubilación podría verse es, la de integridad del yo vs
desesperación, donde la virtud es la sabiduría. La misma sería aplicable a aquellas
personas que deciden posponer su retiro. En esta, se reflexiona sobre la vida, viéndola de
forma satisfactoria aun cuando todo lo propuesto y/o deseado no se haya alcanzado. El
aceptar la presencia de partes inconclusas, lleva a la persona a experimentar un grado de
desesperación ante el arrepentimiento de no haberlo logrado. No obstante, la sabiduría
adquirida por el paso de los años y las experiencias vividas, conduce a lo que Engler
(1996) denominó; “un cierre apropiado” (p.170), en la vida del individuo al poder
compartir con otros sus vivencias. (Engler, 1996; Papalia et al., 2012).
Cuando se conceptualiza a los miembros de los cuerpos policiacos desde ambas
etapas del desarrollo psicosocial, pudiéramos sugerir que el desarrollo de las mismas
podría ser observado de forma más aguda en esta población, dado que la función
primordial de su trabajo es cuidar de otros.
Proceso de Transición
Trabajo: Aportaciones Sociales y Emocionales. ¿Qué significa el trabajo en la
vida de las personas? Para Forteza (1990), este rol social es parte central en la vida de
muchas personas, no tan solo por constituir el medio para ganarse el sustento diario, sino
porque por medio de este los individuos satisfacen la necesidad de relacionarse
socialmente, la oportunidad de aprender y de servir, en beneficio de la sociedad para una
mejor calidad de vida.
Según Izquierdo (2012), existen tres categorías para identificar la etapa de la
adultez; la familia, la comunidad y el trabajo. Marin (2004) e Izquierdo (2012),
consideran que el trabajo realiza una función de enlace, entre la sociedad y el individuo,
24
llevándolo a desarrollar una identidad. Sin embargo, la problemática existente en cuanto
al desempleo, se ubica en oposición contraria al discurso general de los beneficios
sociales que emanan del trabajo, principalmente dentro de la población de niños y
jóvenes. (Marin, 2004).
Marín (2004), expone qué, el que una persona se encuentre desempleada, luego de
estar estudiando y preparándose durante años para ejercer una profesión, podría
representar un impacto a la identidad y desarrollo social de ésta, ante la argumentada
relación existente entre el trabajo y la “autorrealización social y personal” (p.45), que
emerge a través del trabajo.
De acuerdo con, Álvaro & Garrido (2006), el trabajo no sólo es para satisfacer
necesidades económicas, también es el mecanismo que las personas tienen para realzar su
vida social ampliando sus relaciones interpersonales, definir su estatus e identidad y
mantenerse activo, ayudándolo a manejar y estructurar el tiempo.
En el caso de los oficiales de policía, el retiro podría significar la pérdida de
autoridad ante la sociedad, un cambio en el estatus social y en el rol que representa ante
la comunidad, la familia y hacia ellos mismos, lo que hace perentorio llevar a cabo un
proceso de consejería psicológica para cuando se acerque el momento de la jubilación.
Preparación para el retiro. Según Forteza (1990), en la experiencia ocupacional
se desarrollan destrezas, conocimientos y aptitudes que expresan una identidad, refuerzan
la autoestima y forman parte en la personalidad, convirtiendo al retiro en un proceso
complejo de adaptación.
Hinden (2001), recomienda que antes de pensar en el retiro, la atención sea
enfocada a asuntos importantes como; la salud, las finanzas, la familia y una visión de
25
vida futura, más que en las “fantasías” (p.2) que la persona pueda estar forjando para
cuando esté retirado. La toma de decisiones apresuradas al momento de evaluar la
decisión de la jubilación, podría culminar en todo aquello que la persona no espera ni
desea para su vida como jubilado, incluyendo aspectos de índole psicológica, incluyendo
un impacto a la relación matrimonial.
Dentro de este contexto, Forteza (1990), describe el retiro como una mezcla de
ventajas, inconvenientes o uno de “ventajas de inconvenientes” (p.106). Para que la
transición hacia la jubilación se efectúe con el menor impacto posible, es imprescindible
considerar dos factores medulares; primero, la disponibilidad de recursos con los cuales
la persona jubilada contará, una vez se complete el proceso del retiro y segundo, los
preparativos efectuados antes de concretar el proceso de jubilación. De esta manera, la
persona podrá tener una idea clara de cómo será su nueva vida y prepararse para trabajar
las situaciones que puedan surgir.
Del mismo modo, Hinden (2001), recomienda que antes de retirarse se evalúe si
es el momento indicado para tomar la decisión y qué actividades o proyectos le gustaría a
la persona realizar, dado que es importante tener un panorama claro en qué asuntos le
gustaría involucrarse o desenvolverse. De forma paralela, es importante analizar el
ámbito laboral que rodea a la persona próxima a jubilarse y qué cambios están surgiendo
dentro de la estructura organizacional que le puedan afectar, ya sea de manera favorable o
desfavorable. Por último, recomienda considerar el efecto que la decisión de retirarse
tendrá sobre la identidad personal y social del individuo y sus relaciones interpersonales,
ya que la mayor parte del tiempo las personas lo pasan en el trabajo.
26
En cuanto a las relaciones interpersonales dentro del entorno laboral y su efecto
sobre el proceso de la jubilación Carter & Cook (1995), sostienen que una persona con
altos niveles de interacciones sociales procedentes del contexto laboral, probablemente
tendrá mayor dificultad para asimilar el retiro, más aún si dichas redes sociales dejan de
existir o disminuye el grado de actividad, producto de la jubilación.
Rehm (1996), sostiene que un oficial que se retira de su trabajo, no tan sólo
representa alejarse de un ámbito familiar, sino es el comienzo de una vida llena de nuevos
retos. Del mismo modo, Digliani (2010), argumenta que una persona que ha trabajado
durante mucho tiempo como oficial de policía, encuentra que no existe otra forma de
vivir una vez se retira, como resultado de los años compartidos con sus “hermanos y
hermanas” (p.223). Además del simbolismo que representa la portación del arma de
reglamento y la experiencia de formar parte del ambiente que permea en la estación
policial. (Digliani, 2010).
Para algunos oficiales de policía el enfrentar la culminación de su carrera, es un
evento estresante y agotador debido a las consecuencias que podría acarrear en su vida.
Rehm (1996), afirma que para algunos policías, la decisión de acogerse al retiro los
convierte en objeto de burla por parte de otros compañeros, lacerando la moral del oficial
de policía próximo a jubilarse. Después de todo, el retiro conlleva enfrentar una gama de
problemas para los cuales probablemente el oficial de policía no está preparado, ante la
falta de destrezas para manejarlos. (Caudill & Peak, 2009).
Complementando lo anterior Paton, Violanti, Burke & Gehrke (2009), consideran
que de acuerdo a la distancia social y psicológica, que el oficial de policía haya puesto
entre él y sus relaciones familiares, será el proceso de transición y de ajuste que
27
enfrentará durante el retiro. Incluyendo las experiencias que el policía haya tenido
durante sus años de servicio, ya que los eventos traumáticos no resueltos producto de su
carrera policial, podrían ser llevados a su vida de retirado.
Sobre el tema de falta de preparación Tanguay (2008), señala que los oficiales de
policía que no se preparan para afrontar la jubilación, podrían experimentar la separación
de algo que es visto como una familia y por consiguiente de la sociedad. Pero no todos lo
consideran de igual manera, Caudill & Peak (2009), observan que para algunos oficiales
de policía el retiro es un regreso significativo a la vida civil, encontrando así formas de
organizarse y estructurarse, forjando nuevos planes. En cuanto al rol del Departamento
de Policía en el proceso del retiro de sus oficiales Violanti, Charles, Andrew, Gu,
Fekedulegn & Burchfield (2011), advierten que muchos departamentos policiacos no
presentan ningún plan de acción para la preparación del retiro y lo que esta etapa de vida
conlleva.
No todos los oficiales de policía deciden retirarse cuando han cumplido con los
años de servicio requeridos. También existen aquellos que por tener buena salud física,
por aspectos financieros, por cambios en los programas de beneficios, por cambios en la
tecnología o simplemente porque su cónyuge aún trabaja deciden postergar la decisión.
(Caudill & Peak, 2009).
Violanti (1990), y Digliani (2010), sugieren que antes de que un oficial de policía
considere el retiro, racionalice la decisión, no tan solo considerando los aspectos
financieros, sino las posibles consecuencias psicológicas. Paralelamente, explorar si
existe algún tipo de conexión emocional para con su profesión y el arraigo hacía su rol
como oficial de la policía. Digliani (2010), señala que si todavía el oficial de la policía
28
siente una fuerte identificación con su rol como policía, probablemente no es el momento
de acogerse al retiro.
Es necesario llevar a cabo un proceso de introspección, donde el oficial de la
policía pueda evaluar cuál será el impacto de la jubilación sobre su sentido de identidad
individual y social, y los posibles cambios que el retiro traerá sobre estos factores.
Además de identificar tareas, trabajos y/o proyectos académicos que pueda realizar y
desarrollar, para mantenerse ocupado, tomando en consideración su bienestar y
satisfacción para con lo que estará realizando. Ahora bien, no perder de perspectiva la
necesidad de tener tiempo para recrearse, compartir y disfrutar, en su etapa como
jubilado. (Violanti, 1990; Digliani, 2010).
En esta línea de pensamiento Roadburg (2013), recomienda que antes de acogerse
a la jubilación, el oficial de policía debe llevar a cabo un proceso de planificación de
metas, mediante el diseño de un plan. En el mismo, el oficial de policía debe establecer
objetivos, destinados a satisfacer sus necesidades individuales y aquellas que eran
satisfechas mediante la realización del trabajo policial, haciendo uso de sus destrezas y
habilidades. Por tratarse de un plan, el oficial de policía tendrá la oportunidad de
evaluarlo, ponerlo en práctica y ajustarlo de acuerdo a sus necesidades. (Roadburg,
2013).
La idea de desarrollar un plan, también es presentada por Eldridge (2015), quien
ejerció funciones como oficial de policía en Vancouver, durante 26 años. De acuerdo con
Eldridge (2015), muchos oficiales de policía tienen dificultades para reconocer e
identificar, las habilidades y las destrezas adquiridas durante sus años de trabajo policial.
Ante esto, recomienda a los oficiales próximos a jubilarse, a organizar y crear un plan
29
escrito, en caso de que tenga planes de continuar laborando en una segunda carrera, luego
de la jubilación.
Después de todo, es importante recordar que “el retiro es una transición y las
transiciones toman tiempo”. (Digliani, 2010, p.226).
Retiro: Una perspectiva Psicológica
Aspectos generales. Cuando se piensa en el retiro Shultz & Wang (2011),
señalan que se trata de un proceso donde lo previamente existente se reforma y lo
definido se redefine, en aspectos asociados al individuo, al grupo, la organización y los
distintos niveles sociales. Sin embargo, existen factores psicológicos inherentes al
proceso que han sido escondidos bajo la sombra de temas exclusivamente relacionados
con las finanzas y la salud física. (Shultz & Wang, 2011; Knoll, 2011).
Un ejemplo de esto, lo podemos ver en Puerto Rico con la entrada en vigor de la
Ley 126 del 3 de agosto de 2014, conocida como “Programa de Orientación y
Planificación para Servidores Públicos”. En la misma, el Estado Libre Asociado de
Puerto Rico, toma una acción afirmativa para la preparación y orientación de los
empleados públicos en cuanto al tema de la jubilación, pero desde una base financiera.
(ELA, 2014).
La Ley 126 expone, que la mayoría de de los empleados públicos desconocen los
beneficios que le cobijan bajo el Sistema de Retiro del Gobierno y no están preparados
para lo que conlleva el proceso de la jubilación. De acuerdo al artículo 4, el propósito de
la Ley está dirigido a la orientación y el desarrollo de factores asociados al área
financiera, dejando a un lado temas de igual relevancia, como son los aspectos
30
psicológicos y las oportunidades que durante esta etapa de vida podrían surgir. (ELA,
2014).
Según Fetherstonhaugh & Ross (1999), las personas toman decisiones de forma
comparativa, tomando en consideración un aspecto en particular sobre el asunto a evaluar
y prestándole mayor importancia a la forma en que se le presenten las posibles
alternativas a la hora de tomar una decisión, mostrando un grado de apatía hacia aquello
que es interpretado como pérdida, prefiriendo lo que entienden es ganancia. De este
modo, la generación de alternativas y la toma de decisiones, se originan considerando
aspectos específicos de la situación a evaluar y no de forma generalizada, en cuanto a los
beneficios que pudieran surgir de la decisión.
Considerando esto, Fetherstonhaugh & Ross (1999), realizaron un estudio
mediante encuesta, para comparar la edad del retiro de 65 años, con la edad de 68 años.
Un 38% de los cuestionarios fueron contestados. Los resultados sugieren, cierto grado de
apatía entre los participantes del estudio a retirarse a la edad de 65 años, por verlo como
una pérdida económica en los beneficios del seguro social. Este incremento y/o pérdida
en la cantidad de beneficios a recibirse, por concepto del seguro social, tuvo igual nivel
de pertinencia en las personas que pensaban retirarse a la edad de 68 años, que en las que
veían la posibilidad de un retiro a la edad de 65 años.
Sin embargo, el factor económico asociado a la cantidad de beneficios que
recibirían del seguro social y como se vería afectado si se retiraban, ya fuese a los 65
años o a los 68 años de edad, tuvo mayor importancia que factores relacionados con la
salud física. Así, el acogerse al retiro con una buena condición de salud, no resultaba
31
atractivo si esto representaba una pensión más baja proveniente del seguro social.
(Fetherstonhaugh & Ross, 1999; Knoll, 2011).
Previo a que las personas tomen la decisión de retirarse, ya se han imaginado
cómo será su vida como jubilado. Ante esto, resulta necesario evaluar los aspectos
psicológicos que dicha decisión conlleva, algo que regularmente no sucede. (Knoll,
2011).
En cuanto al rol que desempeñan los factores psicológicos en la decisión de
retirarse, Hershey, Jacobs-Lawson, McArdle & Humagami (2007), realizaron un estudio
dirigido a conocer la influencia de tres aspectos psicológicos (auto-percepción del
conocimiento financiero, metas y orientación hacía el futuro) en conductas asociadas con
la planificación y el ahorrar para la etapa del retiro, tomando en consideración la
influencia de factores demográficos (edad, género e ingresos). En el estudio, se utilizó
una muestra de 265 trabajadores de mediana edad, producto de un banco de datos de una
empresa de mercadeo internacional. Un total de 650 cuestionarios fueron enviados
mediante correo postal, de los cuales 292 fueron recibidos. (Hershey et al., 2007).
Basado en los resultados de la investigación realizada por Hershey et al. (2007), la
variable relacionada con ingresos económicos tiene una influencia directa sobre las
variables psicológicas estudiadas. De acuerdo con los datos, las personas con mayores
ingresos dentro de la muestra utilizada, mostraron mayor tendencia a pensar en su retiro y
a desarrollar metas claras para esta etapa de vida. Los participantes con un ingreso
elevado, mostraron motivación en la búsqueda de información sobre oportunidades
financieras y aspectos de índole económica, redundando en una conducta de ahorro y
32
preparación para el retiro, brindándoles la oportunidad de disfrutar de una vida
independientemente económica durante la jubilación.
De conformidad con los resultados del estudio realizado, Hershey et al. (2007),
señalan que las empresas dirigidas a la prestación de servicios en cuanto a la
planificación del retiro deberían considerar los aspectos psicológicos que el proceso de la
jubilación conlleva, y no diseñar planes homogéneos para las personas, sin tomar en
consideración multiplicidad de factores que afectan la vida del individuo.
Además del área financiera, existen otras variables externas a la persona que de
alguna forma podrían precipitar la decisión de retirarse, como podría ser el estar cansados
de trabajar o encontrarse insatisfechos con su trabajo. (Knoll, 2011). La insatisfacción
que la persona pudiera estar experimentando, podría ser una razón para concebir un retiro
lleno de felicidad. Esta pre-contemplación de una jubilación colmada de felicidad, ha
sido identificada bajo el término “predicción afectiva” o “affective forescasting” (Knoll,
2011, p. 21), donde la persona se imagina cómo se sentirá si toma la decisión de retirarse.
Dentro de este contexto, Gilbert & Wilson (2007), señalan que los seres humanos
tienen la capacidad de efectuar predicciones sobre su futuro, fundamentándolas en
experiencias anteriores. Esto, los lleva a considerar alternativas que los pueden hacer
feliz o no, basando sus criterios de decisión en la predicción realizada de las experiencias
previas, aún aquellas que no hayan tenido. Mediante la imaginación el ser humano tiene
la capacidad de ubicarse en el aquí y ahora, logrando sentir la experiencia imaginada. De
este modo, las experiencias del pasado se convierten en memoria, la representación
mental de un evento se convierte en percepción y la representación mental del evento en
un futuro se convierte en estimulación. Este proceso, constituye una base en la toma de
33
decisiones, dado que expone al individuo a diversos escenarios emocionales y
sensoriales, que a su vez, tienen un efecto sobre la generación y selección de alternativas.
Shultz & Wang (2011), postulan que de acuerdo a como la persona se haya
identificado con sus funciones laborales será el efecto reflejado en el proceso de retiro y
ajuste al cambio. Un ejemplo sería aquel individuo que por alguna razón no se siente
cómodo en su trabajo, dado al estrés, los retos, las demandas y/o la insatisfacción que
pueda sentir, podría mostrar un proceso de transición y ajuste adecuado. Contrario a esto,
si la persona experimenta que se encuentra en un ambiente laboral saludable y que le
provee satisfacción, esto podría influenciar en el proceso de contemplación del retiro.
Factor que sufre un incremento si se trata de una persona de edad avanzada, que siente
que es tratada con respeto y dignidad, y que su trabajo es valorado y reconocido. (Shultz
& Wang, 2011).
Dado las emociones y sentimientos que la persona experimenta durante el proceso
del retiro, es imprescindible comenzar a enfocar los estudios desde una perspectiva
psicológica con el mismo ímpetu que se enfoca en el ámbito financiero. Comenzando a
considerar el establecimiento de un proceso de consejería psicológica, a fin de que
puedan completar un proceso de retiro satisfactorio, minimizando el impacto sobre el
estado de ánimo de la persona próxima a retirarse o retirada. (Shultz & Wang, 2011).
Aspectos emocionales. El retiro, además de significar el cese de las funciones
labores, también impacta lo que es la identidad del individuo y los diferentes roles que
conforman dicha identidad (Carter & Cook, 1995; La Bauve & Robinson, 1999; Marin,
2004; Izquierdo, 2012). La afinidad que la persona desarrolle con su rol laboral, será
significativa en el proceso de ajuste y transición, convirtiendo el recorrido en un trayecto
34
dificultoso para la persona y aquellas que forman parte esencial de su entorno. (Chiesa &
Sarchielli, 2008).
Sin embargo, existen personas que factores asociados a las finanzas tendrán
mayor significado, que aquellos concernientes al proceso emocional que acarrea el
retirarse. De este modo, si la persona no percibe problemas económicos, probablemente
la resistencia al cambio será menor, dado que el retiro puede conceptuarse como futuras
privaciones a la vida del ser humano, sentimientos de inutilidad e ideas de haberse hecho
viejo y vivir en soledad. Contrario a esto, podría ser percibido como un sentimiento de
libertad. (Forteza, 1990).
Fehr (2012), expone que la personalidad del individuo tendrá un efecto sobre la
perspectiva que tenga del concepto del retiro, señalando que algunos empleados pueden
ver este cambio de vida como una oportunidad para actualizarse e iniciar nuevos
proyectos, sintiéndose vigorizados y llenos de energía. En cambio otros, podrían
visualizarlo como una etapa rutinaria y aburrida, obstaculizando la oportunidad de
disfrutar el mismo y de activar su creatividad.
Sobre este tema, Skoknic (1998), añade que para algunos jubilados, el no
encontrar esas actividades que satisfagan su vida diaria una vez se hayan retirado, puede
llevarlos a desarrollar depresión y una posible dependencia al sentirse limitados y que
necesitan ayuda. El mantenerse activo le permite al individuo, obtener y mantener
nuevas relaciones interpersonales, lo que podría ser beneficioso si se considera como una
fuente de apoyo afectivo. Promoviendo el refuerzo de conceptos asociados con la auto-
evaluación y el auto-respeto, manteniendo un sentido de identidad. (Forteza, 1990).
35
Rehm (1996), argumenta que los retirados pueden presentar rasgos de ansiedad
asociados a las preocupaciones que genera un cambio en el estilo de vida, citando un
estudio realizado en Canadá que sugiere que la mayor preocupación entre un grupo de
policías retirados eran los cambios relacionados con aspectos de índole social y la
inactividad.
Es importante al momento de retirarse, los problemas psicológicos y/o físicos que
una persona haya confrontado durante sus años de trabajo. Caudill & Peak (2009), han
encontrado que personas próximas a jubilarse presentan problemas relacionados con su
auto-actualización, lo que les produce ansiedad al no sentirse preparados para el evento.
Previo a esto, Villamil & Duany (1991), citados por Rovira & Rosario (2005),
habían expuesto; la inseguridad, la depresión, la ansiedad y la dependencia como
síntomas emocionales asociados al proceso del retiro, mostrándose como denominadores
comunes en la mayoría de las investigaciones y literatura analizada sobre el tema.
Además, de la correlación existente entre las experiencias laborales, el valor que se le da
al trabajo y las actitudes que se tienen hacia este, cónsono con lo postulado por Rehn
(1996), Caudill & Peak (2009) y Forteza (2012).
Villamil & Duany (1991), citados por Rovira & Rosario (2005), añaden que
cuando las personas se retiran sufren una “crisis de identidad” (p.133), al sentir la pérdida
de su empleo, algo que puede ser considerado como valioso. Este sentimiento de pérdida
y el proceso de ajuste a la jubilación, provocan en la persona un sentimiento de soledad y
aburrimiento, llevándolo a deprimirse. Esto, es consistente con la teoría de roles (Carter
& Cook, 1995; Nilsson et al., 2011) al exponer la importancia del rol laboral en el
individuo y su impacto en el proceso del retiro.
36
Desde esta misma perspectiva, Rovira & Rosario (2005), estudiaron una muestra
de trabajadores puertorriqueños con el objetivo de analizar la correlación existente entre
las actitudes hacia el retiro y las variables de sintomatología afectiva, satisfacción laboral,
locus control, preparación para el pre-retiro, estado de salud, tipo de empleo, empresa y
puesto y algunas de índole socio-demográficas (p. 134). El total de la muestra estuvo
representada por 279 empleados, quienes participaron del estudio de forma voluntaria,
donde 58.4%, fueron mujeres y un 41.6 %, fueron hombres.
Cabe señalar, que entre los instrumentos de medición utilizados por Rovira &
Rosario (2005), para realizar el estudio figura una Escala de Actitudes hacia el retiro,
diseñada y validada por Rosario & Rovira (2002), mostrando validez interna dentro de la
población puertorriqueña.
Los resultados del estudio realizado por Rovira & Rosario (2005), sugieren que
las personas que presentan síntomas asociados a depresión tienden a mostrar
puntuaciones más bajas en la sub-escala relacionada con el miedo, siendo asociado con
una actitud desfavorable hacia lo que constituye el proceso del retiro. Contrario a esto,
personas con altas puntuaciones en la variable de locus control, sugieren la existencia de
menos temor hacia la jubilación, al percibir que tienen mayor control de su vida. Paralelo
a esto, no encontraron diferencia entre las personas que tomaron o no, seminarios para
afrontar el proceso del retiro, llevándolos a inferir que la existencia o no de un seminario
pre-retiro, no afectará la actitud que la persona tenga hacia la jubilación. (Rovira &
Rosario, 2005).
Retomando el tema del retiro en la vida de los oficiales de policía, Digliani
(2010), señala que para un policía que se retira, la despedida representa el fin de un grupo
37
de compañeros, camaradas y soportes de trabajo, algo que podría resultar estresante, al
percibir que será olvidado, luego de tantos años de servicio al cuerpo de la policía. Para
algunos oficiales de policía retirados, esto podría convertirse en un factor precipitante
para el desarrollo de conductas maladaptativas y problemas relacionados con la salud
física. (Caudill & Peak, 2009).
Paton et al. (2009), advierten que algunos policías manejan el sentimiento de
pérdida aceptándolo como tal, creando una barrera protectora bajo las premisas “estoy
contento de dejar este trabajo”, “ser policía no es tan importante para mí” (p. 206),
ocultando el significado real de lo que conlleva la jubilación en su vida. Cuando es
necesario experimentar el sentimiento de pérdida, ya que continuar negándolo puede
convertirse en un problema de índole psicológico. Existen oficiales de policía que
guardan los sentimientos asociados con la pérdida que representa la jubilación bajo una
imagen de “macho” (p.206). Esta aptitud es asumida como mecanismo de protección,
antes que admitir el dolor que se experimenta a consecuencia de haberse retirado, por lo
que es apremiante que el oficial de policía se ajuste a su nuevo entorno y analice los
beneficios que su nueva vida le brindará. (Paton et al., 2009).
Los oficiales de la policía pueden experimentar sentimientos de desprendimiento,
y miedo a desarrollarse o problemas de depresión, al tenerse que jubilar
compulsoriamente por incapacidad física (Violanti, 1990), lo que podría ser devastador
para el oficial de policía al tener que lidiar con dos eventos percibidos como pérdida, la
salud física y el empleo. (Digliani, 2010).
Otros autores como Tanguay (2008) y Caudill & Peak (2009), alertan sobre el
posible desarrollo del síndrome de estrés postraumático (PTSD) a consecuencia de las
38
experiencias vividas durante la carrera policial, dando origen a sintomatología asociada
con ansiedad, problemas intrafamiliares, angustia, desesperanza, desesperación, así como
sueños y “flashbacks”. Incluso, algunos policías retirados que presentan algún tipo de
incapacidad física o condición médica, han mostrado una alta probabilidad de cometer
suicidio, mostrando una tendencia de 45 veces más, que las personas promedio.
(Tanguay, 2008).
Respecto al tema del suicidio, Violanti et. al. (2011), llevaron a cabo un estudio
cuantitativo con oficiales adscritos al Departamento de la Policía en Buffalo. La muestra
utilizada consistió de 3,228 oficiales, quienes laboraron para el Departamento de Buffalo,
entre el periodo del 1 de enero de 1950 al 31 de diciembre de 2005, con un mínimo de
cinco años de servicio. Esta fue dividida en dos grupos, a fin de comparar el índice de
riesgo para cometer suicidio entre los policías que se habían retirado o separado por
diversas razones y aquellos que aún continuaban trabajando. Para establecer las
diferencias entre los grupos, fue utilizada la variable de fecha de ingreso, retiro y aquellos
casos donde se había completado el acto de suicidarse la fecha del deceso.
Basado en los resultados del estudio Violanti et al. (2011), sugieren que aquellos
oficiales de policía que se encuentran trabajando, presentan un mayor índice de riesgo de
cometer suicidio, principalmente entre los primeros cinco años antes de llegar la fecha de
retirarse, en comparación con los oficiales que se encontraban retirados o separados por
diversas razones, promoviendo así la realización de nuevos estudios sobre el tema. Más
aún, cuando el conocimiento general sugiere, que son los oficiales de la policía retirados
los que mayor riesgo de cometer suicidio presentan (Violanti et al., 2011), con una
39
probabilidad de entre cuatro a cinco veces mayor que lo que representaría el riesgo de
morir en el cumplimiento del deber. (Thrasher, 2013).
Para ilustrar mejor el ambiente de camaradería que rodea el trabajo de policía y
los lazos que se desarrollan entre estos, dificultando el proceso del retiro, Violanti (2007),
nos trae la siguiente cita:
“It’s like I belonged to big club. I made my mark, I was one of the
guys, I did my job. Everyone in the station respects you and you get
along good with the sergeants and lieutenants. Suddenly all of that
is gone and you are on the outside looking in. I felt so different. I
called the guys almost every day to see if they still related to me the
same way. I visited the station, wondering what was going on and
wanting to be part of the action. I played golf with the guys, went to
all parties. Somehow, it wasn’t the same. I wasn’t one of them
anymore. It’s hard to explain. I retired, but I couldn’t let go of this
strong attachment”. (Violanti, 2007, p.74).
La existencia de una subcultura dentro del cuerpo policial y el sentirse parte de
esta, unido a la estructura y la disciplina característica en el trabajo policial, puede
convertirse en un obstáculo para acogerse al retiro. El sentido de seguridad, verse
rodeado y condicionado a dicha estructura, durante veinte años o más, podría interferir
con la decisión de acogerse a la jubilación. (Violanti, 2007).
De forma análoga, los estudios llevados a cabo en el Reino Unido y los Estados
Unidos sugieren que no existe diferencia entre las sensaciones y emociones psicológicas
que puede experimentar un oficial de la policía en el proceso del retiro, en comparación
40
con la población en general. Este hallazgo, contradice la opinión generalizada de que los
oficiales de policía pueden ser más susceptibles a los cambios psicológicos al momento
del retiro, debido al estrés y la naturaleza de su trabajo. (Tuohy, Knussen & Wrennall,
2005).
No obstante, el tema de los cambios psicológicos no ha sido el único tópico objeto
de atención y comparación entre los oficiales de la policía y la población en general.
Brandl & Smith (2012), efectuaron un estudio comparativo utilizando muestras de la
población en general y oficiales de la policía, para analizar las expectativas de vida de
estos últimos una vez se acogían al retiro. Para esta investigación Brandl & Smith
(2012), solicitaron datos estadísticos en la Oficina del Sistema de Retiro de la Ciudad de
Detroit, a fin de comparar las muertes ocurridas entre el 1 de enero de 1995 hasta el 20 de
julio de 2010, de personas retiradas que hubieran realizado funciones como oficiales de la
policía y la población en general. Un total de 7,325 personas fueron seleccionadas,
donde 6,873 realizaron otros trabajos y 452 habían sido oficiales de policía.
El estudio de Brandl & Smith (2012), señala datos interesantes. Por un lado
apunta, que aquellas personas que realizaban funciones como oficiales de la policía
muestran una diferencia de 6 años de morir más jóvenes que la población en general. Por
el otro lado, encontraron que los hombres que fungieron como oficiales de la policía
muestran una tendencia a morir más jóvenes, cuando son comparados con sus cohortes
femeninas. Fundamentalmente, revela que aquellos que se retiraron con los años y
requisitos establecidos para el retiro mostraron mayor expectativa de vida, que aquellos
que se acogieron a un retiro temprano por diversas razones.
41
La investigación realizada por Brandl & Smith (2012), guarda una estrecha
relación con un estudio realizado por Violanti, Hartley, Gu, Fekedulegn, Andrew &
Burchfiel (2013), donde también fue objeto de estudio la expectativa de vida de los
oficiales de la Policía. La muestra utilizada consistió en 2,761 oficiales de la policía de
raza blanca, adscritos a la ciudad de Buffalo, Nueva York. Por limitaciones en la
muestra, las mujeres fueron excluidas en el estudio. Los hallazgos de Violanti et al.
(2013), concurren con los realizados por Brandl & Smith (2012), en cuanto a la diferencia
de expectativa de vida de un oficial de la policía en comparación con la población en
general. La diferencia encontrada en el estudio de Violanti et al. (2013), fue de
aproximadamente 21.9 años, al compararlo con la población en general, en
contraposición con los hallazgos de Smith & Brandl (2012), donde la diferencia
encontrada fue de 6 años.
De este modo, los resultados de ambos estudios sugieren, que los oficiales de la
policía mostraron una tendencia a morir más rápido que personas de la misma edad, en
comparación con la población en general. (Brandl & Smith, 2012; Violanti et al., 2013).
Ante esto, Brandl & Smith (2012), señalan que las exigencias laborales del trabajo
policial abonan a que estos trabajadores desarrollen estilos de vida poco saludables
debido a su alimentación y a los altos niveles de estrés, fomentando el desarrollo de
enfermedades físicas, que podría bien redundar en un deceso prematuro, sin brindarle la
oportunidad al oficial de policía retirado de disfrutar de esta etapa de vida.
Mattilla, Joukamaa, y Salokangas (1988), citados por Paton et al. (2009),
realizaron un estudio, encontrando que factores como; los problemas en la niñez, el
retraimiento social, la compulsividad y el estrés en la etapa de pre-retiro, podrían dar
42
margen al surgimiento de problemas para ajustarse a la jubilación. Contrario a esto,
personas con una buena creatividad y el apoyo de un buen grupo social, se le facilitaría
ajustarse al cambio.
De forma parecida, Fretz, Kluge, Ossana & Jones (1989) citados por Paton et al.,
(2009), estudiaron factores asociados a la ansiedad que experimentan algunos
trabajadores en la etapa de pre-retiro encontrando, baja auto-eficiencia, pobre planeación,
inseguridad financiera y problemas de salud.
Aspectos psico-sociales. Cuando un oficial de policía comienza el proceso de
transición hacia el retiro, siente que ha dejado un trabajo caracterizado por la investidura
de autoridad y de responsabilidad, y la relación existente entre éste y la solución de los
problemas comunitarios. Para el oficial de policía, acogerse al retiro significa la pérdida
de años de identidad y de fraternidad. Además de la entrega y pérdida de símbolos
representativos de autoridad, como lo son; la placa, el uniforme y el arma de fuego.
(Rehm, 1996). Argumento que es compartido por Caudill & Peak (2009), quienes
añaden, que los lazos que se desarrollan entre los oficiales de la policía como compañeros
de trabajo y sus experiencias laborales, hacen sentir al policía que se retira la pérdida de
conocimientos, de destrezas y de habilidades, por los cuales la comunidad le pagaba y
que realizaron por mucho tiempo, y la seguridad personal que representa para estos su
trabajo.
Tanguay (2008), destaca los hallazgos de Daniel Goldfarb y Gary Aumiller
(2008). Estos investigadores encontraron, que la mayoría de los oficiales retirados
incrementaron sus solicitudes de servicios psicológicos por problemas relacionados con
ansiedad, depresión, conflictos matrimoniales, pérdida de identidad, problemas de
43
autoestima, insatisfacción con la decisión de retirarse y los motivos que llevaron a la
misma, inhabilidad para organizarse y establecer planes con el tiempo disponible y
aburrimiento. (Tanguay, 2008).
De acuerdo con Digliani (2010), los policías retirados pueden presentar problemas
asociados con uso o abuso de sustancias controladas y/o alcohol, conducta violenta,
problemas alimentarios o pasar muchas horas frente a la computadora, a fin de tener en
qué invertir su tiempo libre.
Un estudio llevado a cabo por Matthew, Liederbach & Freiburger (2010), recopiló
información asociada a conductas delictivas cometidas (agresión simple, guiar bajo la
influencia, agresión agravada, uso de substancias controladas, perjurio, falsa información,
violaciones a la ley de armas, violación de derechos civiles, entre otros), por oficiales de
policía próximos a retirarse. La muestra utilizada, producto de una base de datos en
internet (Google News), fue dirigida a la búsqueda de noticias donde las personas que
cometieron los actos delictivos fueron identificadas como oficiales de policía. Entre el
periodo del 1 de enero de 2005 hasta el 31 de diciembre de 2007, se obtuvo un total de
2,119 casos de actos criminales, donde 1,746 de las personas arrestadas habían sido
oficiales de policía. Algunos de estos oficiales, fueron arrestados en más de una ocasión
y los incidentes involucraban a más de una víctima. (Matthew et al., 2010).
La muestra utilizada en el estudio de Matthew et al. (2010), estuvo compuesta por
oficiales de policía adscritos a diferentes agencias estatales y locales en los Estados
Unidos, incluido el Distrito de Columbia. La mayoría de los casos fueron cometidos por
oficiales de policías varones (95%) y menos de la mitad de las ofensas ocurrieron en
horas de trabajo (46%). Los datos estadísticos recopilados involucraban oficiales de
44
policía en diferentes niveles jerárquicos. Los resultados del estudio de Matthew et al.
(2010), sugieren un declive en la comisión de actos delictivos después de los primeros
cuatro años de servicio, con un leve incremento en la tendencia a conductas delictivas,
entre los 25, 27, 30 y 35 años de servicio, demostrando que existe la posibilidad, que un
policía próximo a jubilarse se involucre en algún acto delictivo y contradiciendo el
argumento, de que mientras más años de servicio tenga el oficial de la policía, mayor
estabilidad presentará en su conducta (buen comportamiento). Mostrando una
disminución en actos considerados como problemas conductuales, hasta llegar a la etapa
del retiro.
Otro dato relevante en el estudio realizado por Matthew et al. (2010), es que uno
de cada cinco oficiales arrestados por actos delictivos en la muestra utilizada, estaba entre
los 18 o más años de experiencia y en el servicio de carrera. En cambio otros, se
encontraban en la etapa final próximos a retirarse. Incluso, pudieron encontrar que los
actos cometidos por oficiales de policía en sus primeros años de servicio, son diferentes a
lo que comenten aquellos que se encuentran en una etapa más desarrollada de su carrera
policial, incluyendo lo que están próximos a retirarse. Matthew et al. (2010), atribuyen
esta diferencia a las posiciones y oportunidades que cada oficial ocupa, así como el
tiempo que dedican a su trabajo.
Ante estos datos, es necesario que las Agencias reconozcan que existe una
posibilidad de que los oficiales de policía próximos a retirarse incurran en actos de mala
conducta y/o criminales. Por lo que es justo considerar, la creación y el desarrollo de
programas dirigidos a orientar a estos profesionales durante la etapa de pre-retiro, a fin de
45
minimizar el surgimiento de este tipo de situación, y que el oficial de policía pueda
realizar una transición saludable hacia la jubilación. (Matthew et al., 2010).
Otra dimensión, objeto de estudio en la vida de los oficiales de policía próximos a
retirarse, es la relación matrimonial. Shultz & Wang (2011), señalan la importancia de
esta en el proceso de ajuste al retiro, ya que el poder disfrutar una buena relación
matrimonial podría ser significado de un mejor proceso de transición. Skoknic (1998),
expone como el tiempo que el cónyuge pasa en el hogar producto del retiro, puede afectar
la relación matrimonial de diversas formas, en especial si las partes no están preparadas
para lo que conlleva este cambio.
Según Digliani (2010), para las esposas de los oficiales de policía, el retiro de
estos podría representar la pérdida de un estatus social. Por eso, muchas esposas, aún
cuando sus esposos se encuentran retirados, continúan refiriéndose a estos como oficiales
de la policía, aludiendo al rango que ostentaban antes del retiro y refiriéndose a estos
como “el Teniente” (Digliani, 2010, p.223), dando pie a pensar sobre lo difícil que es
renunciar a lo que esto representa.
Cuando un oficial de policía se acoge al retiro y empaca sus pertenencias
entregando lo que ellos describen como su más preciada posesión, la placa, sienten que
“han perdido parte de su alma” (Violanti, 1990, p.13). Sumado a esto, se encuentran los
cambios administrativos - laborales que conlleva el retirarse, que podrían representar para
el oficial de policía una baja sustancial en los beneficios de los planes de salud, el salario,
las vacaciones y otros beneficios asociados a su posición. Paralelamente, pueden existir
hijos que estén estudiando y otros compromisos económicos. (Violanti, 1990).
46
En términos generales, Forteza (1990), presenta aspectos que podrían ser
percibidos como agradables para algunas personas que se acogen al retiro; la
disponibilidad de tiempo, el fin a los factores negativos o incómodos provenientes del
empleo y el tener tiempo para fortalecer sus relaciones interpersonales. Sin embargo,
existe otro conglomerado, no tan positivo como; abandonar actividades con las cuales se
estaba familiarizado, la pérdida en el rol social de lo que significa el trabajar, la
probabilidad de una reducción en el círculo social y los problemas para ocupar el tiempo
disponible con otras actividades.
Tuohy, Knussen & Wrennall (2005), realizaron un estudio con 1,300 oficiales de
policías escoceses varones, retirados en el Reino Unido, dirigido a la identificación de los
factores resilentes o que propiciaban, que las personas retiradas participantes del estudio
presentaran síntomas asociados con depresión y ansiedad. En la investigación, no hubo
representación de mujeres oficiales policías retiradas ya que la cantidad de cuestionarios
recibidos para este género fue limitada. De este modo, las variables objeto de estudio
fueron; las razones para el retiro, la edad al momento de retirarse y la existencia de un
trabajo posterior al retiro, ya fuera a tiempo completo o parcial.
Los resultados de la investigación efectuada por Tuohy et al. (2005), sugieren que
aquellos oficiales de policía retirados que cumplieron con la edad establecida para el
retiro y continuaron trabajando en otro empleo luego de haberse jubilado, mostraron
menos indicadores asociados a depresión y ansiedad, que los que se acogieron a un
proceso de jubilación temprana y no buscaron un segundo empleo, quienes sí presentaron
criterios asociados a ansiedad y depresión. En cambio, Tuohy et al. (2005), no
47
encontraron una relación significativa entre la edad al momento de la jubilación y la
realización de un trabajo en esta etapa de vida, con síntomas de depresión y ansiedad.
Como dato relevante, en el estudio llevado a cabo por Tuohy et al. (2005), surge
que lo síntomas de ansiedad pueden mostrarse de forma variable cuando se considera la
edad de los participantes. De igual forma, expone que el acogerse a un retiro temprano
tiene una mayor prevalencia en sintomatología asociada con depresión. Por otro parte, el
factor de razones para acogerse al retiro, podría ser considerado un predictor tanto para la
ansiedad como para la depresión, por lo que puede ser considerado un indicador de
vulnerabilidad, aunque no necesariamente relacionado con la edad al momento de
jubilarse. (Tuohy et. al. 2005)
Otro estudio, realizado por Ramey, Downing & Franke (2009), donde los
participantes fueron oficiales retirados del Departamento de Policía de Milwaukee y
personas de la población en general. Se encontró, que las experiencias vividas por los
oficiales de la policía incrementaba la prevalencia de enfermedades cardiovasculares,
mostrando como principales factores de riesgo enfermedades como la hipertensión, la
diabetes y la hipercolesterolemia. (Ramey et. al. 2009).
Análisis de Ajuste, Satisfacción y otros Indicadores
Asimilación del cambio. Para Solinge & Henkens (2008), el bienestar emocional
significa un proceso de ajuste fácil y exitoso, por lo que ajuste y satisfacción no
necesariamente son sinónimos. Por ejemplo, una persona que padezca una enfermedad,
puede ajustarse a vivir con dicha enfermedad, pero esto no es significado de que disfrute
su vida. El que pueda continuar viviendo, aún con su padecimiento, no es otra cosa que
haberse ajustado al hecho de haber sido diagnosticado con una enfermedad, pero
48
necesariamente no es sinónimo, de que el proceso de ajuste haya sido fácil. Esta
situación es análoga con las personas que se retiran, donde algunos disfrutarán y se les
hará fácil el cambio que conlleva, y a otros no. Pero finalmente, todos lo asimilarán.
El proceso de ajuste y satisfacción hacía la jubilación, ha sido objeto de estudio
desde la perspectiva psicológica, siendo divididos en enfoques por separados. Cuando se
habla de transición, incluye factores asociados a la organización, a la familia y a las
finanzas. Estos interactúan directamente con los que son de índole psicológico. Desde
esta perspectiva, ajuste se define como los cambios venideros como resultado de dicha
transición en la vida del retirado. La satisfacción, es el grado de felicidad que el retirado
tendrá en su nueva vida. (Solinge & Henkens, 2008).
Wang, Henkens & Solinge (2011), señalan que el proceso de ajuste al retiro es un
proceso longitudinal conformado en facetas, dirigido a la obtención de estabilidad y
bienestar emocional. Esta estabilidad, estará fundamentada en la cantidad y calidad de
recursos (económicos, sociales, entre otros) con los cuales la persona pueda contar y los
cambios que estos recursos puedan enfrentar. Al igual que el proceso de transición tiene
sus cambios y síntomas de índole psicológica, el proceso de asimilación también es
afectado por factores psicológicos. Algunos de estos son; la felicidad, el bienestar
emocional, la satisfacción con el retiro y con la vida que este conlleve. Durante el
proceso de asimilación, pueden surgir síntomas asociados con alguna enfermedad mental
como la depresión, y/o conductas maladaptativas como el uso o abuso de alcohol y/o el
fumar en exceso.
Kim & Moen (2002), estudiaron un grupo de empleados (762 participantes), entre
las edades de 50 a 72 años de edad, procedentes de seis alcaldía al norte de Nueva York,
49
Estados Unidos. Los participantes del estudio fueron divididos en tres grupos, entiéndase
los que aún estaban trabajando, lo que en los 2 años subsiguientes se acogerían al retiro y
los que ya se encontraban retirados. En el mismo, fueron integradas las parejas de los
participantes quienes consistieron en 282 hombres y 176 mujeres, esto con el fin de medir
el bienestar psicológico dentro de lo que constituye la dinámica de la relación de pareja,
en el proceso de transición hacia la jubilación.
De forma general, Kim & Moen (2002), encontraron que existe una diferencia
estadísticamente significativa en cuanto lo tópicos analizados (ingresos económicos
suficientes, percepción de la salud física, calidad dentro de la relación matrimonial,
control personal, factores morales y síntomas depresivos). Los resultados de la
investigación de Kim & Moen (2002), sugiere, que los hombres pueden mostrar un
mayor índice estadístico en aspectos asociados con; moral, suficiencia de ingresos y
control personal. Las mujeres en cambio, mostraron mayores síntomas de depresión.
Ambos géneros fueron congruentes estadísticamente en cuanto a; el incremento en los
ingresos y un aumento en la percepción que podían tener sobre su salud física.
Sobre la relación matrimonial, el estudio de Kim & Moen (2002), expone que los
hombres reportaron un descenso dentro de la calidad de la relación matrimonial, luego de
acogerse al retiro, al ser comparados con los hombres que señalaron que su interacción
matrimonial antes del retiro no era buena. No se encontró diferencia alguna, en aspectos
asociados, a si la pareja trabajaba o no al momento del retiro y sus efectos sobre el
proceso de transición y ajuste hacia la jubilación. Lo que sí, Kim & Moen (2002),
demostraron con el estudio realizado, es que existen diferencias en la forma y manera,
50
que tanto el hombre como la mujer pueden percibir, visualizar y procesar la experiencia
de la jubilación, convirtiendo el proceso en uno diverso.
La importancia del proceso de la jubilación sobe el bienestar emocional de las
personas, fue demostrada mediante un estudio realizado por Wang, (2007). Para la
realización del mismo, se utilizó información estadística proveniente de un estudio
longitudinal mediante encuesta sobre la salud y el retiro, auspiciado por el Instituto
Nacional sobre Envejecimiento de los Estados Unidos. Un total de 2,060 formularios
fueron utilizados para realizar el análisis, dividido en dos grupos. Los objetivos del
estudio, fueron dirigidos a examinar la existencia de cambios longitudinales en múltiples
patrones psicológicos durante el proceso de transición y de ajuste a la jubilación de los
encuestados, y si dichos patrones era posible predecirlos en el contexto de los factores
estudiados y el individuo.
Los resultados del estudio de Wang (2007), sugieren que factores como;
mantenerse trabajando luego del retiro, la realización de planes para esta etapa de vida, el
estado civil (casado, soltero, viudo, divorciado, entre otros), el estado laboral del esposo
(a) en términos de si estaba trabajando o no al momento de la jubilación de la pareja, son
aspectos que influyen de manera positiva en la conservación de patrones y bienestar
psicológico durante la etapa de transición y de ajuste al retiro.
De otra parte, aspectos como; dejar de trabajar en un empleo que devenga mucho
esfuerzo físico, el estrés laboral y la insatisfacción con el trabajo que se realiza, son
elementos que tienen un efecto positivo sobre el bienestar emocional de la persona y
promueve la recuperación de patrones en la vida del individuo, durante el proceso de la
jubilación, así como, una buena salud física. Sin embargo, el reglón relacionado con
51
aspectos financieros no mostró ninguna diferencia en cuanto a los cambios de patrones
asociados con el bienestar psicológico durante la transición y el ajuste al retiro, lo que
según Wang (2007), podría estar fundamentado en el hecho de que las personas conocen
que retirarse conlleva cambios económicos y se preparan para los mismos.
Factores como; los atributos individuales, las variables relacionadas con el trabajo
en la faceta de pre-retiro, los aspectos familiares, el proceso de transición del retiro, las
actividades que se desarrollan y el que las personas se involucren luego de retirarse, tiene
un impacto sobre la satisfacción y calidad de vida que el individuo podrá tener una vez
completado el proceso de la jubilación. (Wang et al., 2011). Esto refuerza lo propuesto
en la teoría que describe el retiro, como un proceso dinámico basado en recursos
(resource-based dynamic perspective) (Wang et al., 2011), donde de acuerdo a la
disponibilidad de estos recursos, será el proceso de asimilación y de ajuste al retiro.
Rehm (1996), señala que estudios realizados en Canadá demuestran, que para
muchos oficiales de policía, el retirarse representa un cambio en su vida y en las
actividades sociales. Lo que los lleva a tomar la decisión de no retirarse y a postergar el
retiro, ofreciendo como excusa factores de índole económica. Sin embargo, esto no
puede ser considerado como la norma, ya que muchos oficiales de policía luego de
retirados, logran obtener una vida satisfactoria, al enfocarse en el desarrollo de nuevos
proyectos y metas, llenando así las expectativas que el oficial de policía se imaginó, con
relación a la jubilación.
Incluso, los oficiales de policía una vez retirados, pueden comenzar una nueva
faceta laboral en ámbitos relacionados con; las leyes, los bienes raíces, la política,
convertirse en dueños de negocios e incluso psicólogos. Otros, simplemente no desean
52
invertir su tiempo como personas retiradas en nuevas carreras, encontrando a través de su
familia, el círculo de amigos, las actividades recreativas y/o culturales, y en la prestación
de servicios comunitarios, aquello que necesitan para completar un buen proceso de
ajuste y de satisfacción. (Rehm, 1996).
Considerando las diferentes variables que pueden impactar el proceso de ajuste en
la etapa del retiro, Pole, Kulkarni, Bernstein & Kaufman (2006), llevaron a cabo un
estudio con una muestra de 21 hombres caucásicos, oficiales de la policía retirados,
provenientes de un Departamento de Policía en el estado de Michigan. El objetivo de la
investigación era determinar, si los factores previamente identificados en un cuestionario
para los participantes, basados en aspectos familiares, de personalidad, de salud física y
mental, en la exposición a situaciones traumáticas y a diferentes ambientes laborales, así
como el historial familiar, tenían una mayor o una menor influencia en la resiliencia de
estos oficiales retirados.
La recopilación de datos se realizó, mediante la cumplimentación de un
cuestionario por parte de los participantes, quienes recibieron una pequeña remuneración
económica por su participación en el estudio. Los resultados de la investigación realizada
por Pole et al. (2006), sugieren que factores como; una buena relación matrimonial, un
corto historial familiar de problemas de salud mental, leves rasgos neuróticos de
personalidad, una mínima exposición a situaciones traumáticas en la vida personal, poca
dependencia en el uso de estrategias evasivas, haber estado expuesto a un ambiente
laboral de baja tensión y mayor seguridad, y saber discernir que información compartir
con familiares y amigos sobre asuntos de índole laboral, son factores que correlacionaron
con una buena resiliencia en la muestra utilizada.
53
De todos los factores medidos, los resultados sugieren que el factor de mayor
correlación con una buena resiliencia durante la etapa del retiro, fue el contar con una
buena relación matrimonial. Pole et al. (2006), ofrecen como una posible explicación a
esto, el hecho de que los oficiales de policía con buenas destrezas emocionales y sociales
para mantener una buena relación matrimonial, cuentan con buenas destrezas para
relacionarse con otros miembros de su familia y personas. Incluso, el que un oficial de
policía pueda tener y desarrollar buenas relaciones sociales, ha mostrado tener un efecto
preventivo en el manejo de situaciones traumáticas, convirtiéndose en un factor
promovente de resiliencia para sobrellevar y superar la experiencia vivida. (Andrew,
Howsare, Hartley, McCanlies, Burchfiel & Violanti, 2014).
En cambio, factores negativos como; un historial familiar de salud mental, la
exposición a traumas en la vida personal, mostrar rasgos neuróticos de personalidad, el
uso continuo de estrategias de evasión, y la exposición a estrés laboral, no traumático,
guardan una correlación negativa con el proceso de resiliencia en los oficiales de policía
utilizados en el estudio. (Paton et al., 2009).
Además de las características y factores probados por Pole et al. (2006), como
aspectos contribuyentes a la obtención y desarrollo de una buena resiliencia en los
oficiales de policía retirados. Existen otros temas que han sido investigados y han
demostrados tener un impacto positivo en el proceso que conlleva el retiro. Uno de estos
es la obtención y seguimiento de segundas carreras, una vez terminado el oficial de
policía se acoge a los beneficios de la jubilación.
Sobre este tema Storch (1997), afirma que, el que los policías retirados se
involucren en la obtención de grados universitarios les abre la puerta a un sinnúmero de
54
oportunidades para desarrollar una segunda carrera, que les servirá como herramienta útil
para planear y desarrollar su vida de jubilado. Partiendo de esto, Storch (1997), realizó
un estudio, donde seleccionó una muestra de 20 policías próximos a retirarse en
diferentes departamentos de la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, que se
encontraban realizando tareas de patrullaje. Los resultados del estudio apuntaron, a que
la mayoría de los entrevistados no visualizaban comenzar estudios y/o involucrarse en un
segundo empleo, luego de acogerse a la jubilación. Los encuestados entendían que la
variable relacionada con la edad podía ser un obstáculo para el inicio de estudios
universitarios, y que el ponerse a estudiar podía convertirse en un factor determinante
para atrasar su jubilación. Otros, señalaron que el Departamento donde se encontraban
adscritos no les proveía la orientación necesaria sobre el tema del retiro, ni que planes
podían realizar y/o considerar en esta etapa de vida. (Storch, 1997).
Según Eldridge (2015), señala que existen aspectos importantes que el oficial de
policía debe considerar al momento de elaborar un resume, si es que contempla la
búsqueda de una segunda carrera, tras la jubilación. Todo aquello que esté relacionado
con; oportunidades de supervisión, ascensos y reconocimientos, ya sean por concepto de
su trabajo policial o cualquier labor voluntaria que realice en su comunidad,
adiestramientos y certificaciones, deben formar parte de la información recopilada para
desarrollar un plan, que posteriormente se convertirá en un resume. Para Eldridge
(2015), es imperativo que el oficial de policía sea honesto consigo mismo, reconozca sus
fortalezas y sus debilidades, y sobre todo que vele por su reputación, para evitar
contratiempos futuros a la hora de ser seleccionado para alguna posición laboral.
55
Eldridge (2015), advierte que la decisión de una segunda carrera es algo que debe
ser consultado con el grupo familiar, evaluar las expectativas que el oficial de policía
pueda tener en cuanto al desempeño de una segunda carrera y los efectos que la decisión
pudiera acarrear sobre la familia, las finanzas y su persona.
El trabajo del oficial de policía exige una esmerada preparación, tiempo y
sacrificio. Los oficiales de la policía son entrenados para enfrentar el peor de los
escenarios, llevándolos a desarrollar una personalidad suspicaz, tanto en lo social como
en ocupacional. Esta suspicacia se vuelve casi obsesiva en algunos oficiales. Como
resultado, no es extraño encontrar oficiales de policía “adictos a la acción” (Paton et al.,
2009, p. 210), lo que se convierte en un obstáculo para su buen funcionamiento una vez
retirados. (Paton et. al., 2009).
Desde esta misma vertiente Digliani (2010), señala que algunos oficiales de la
policía califican de contradictoria su vida una vez se retiran. Es por esto, que podríamos
encontrar algunos oficiales de policía retirados, que al preguntarle cómo le va en su
nueva etapa de vida pueden contestar; “estoy más ocupado ahora, que cuando trabajaba”
(p. 225), en respuesta a no aceptar que su actividad diaria ha mermado, al compararla con
sus años de servicio en el trabajo policial. Esta actitud de negación no es aplicable a
todos los oficiales de policía que se retiran. Muchos de ellos continúan laborando y/o
realizando otro tipo de actividades dentro de los mismos Departamentos y Estaciones de
policía. El efecto de esto, es disipar cualquier malestar proveniente de la sensación de
ver que sus actividades cotidianas han mermado.
Roadburg (2013), advierte que el 62% de los policías jubilados, previo a su retiro
trabajaban en diferentes departamentos de policía en Estados Unidos y Canadá. Tras
56
haberse retirado se involucran en actividades estrechamente relacionadas con la labor
policial. Según datos estadísticos, un 53% de los policías que se van a retirar y que se
encuentran adscritos en diferentes departamentos de policía en los Estados Unidos y
Canadá, piensan trabajar luego de acogerse a los beneficios del retiro. No obstante, los
datos demuestran, que un 83% de estos se involucrarán en alguna actividad laboral,
donde recibirán algún tipo de remuneración económica.
Sobre el tema, Martin Beckford (2012), periodista del diario Mail on Sunday
señala, que en Inglaterra, de los 3,600 policías retirados con tan sólo 50 años de edad, la
mayoría de estos regresan nuevamente al departamento de policía de donde se retiraron
para realizar diversas funciones, a fin de aumentar sus ingresos económicos. De
conformidad con la reseña, esta situación ha llevado al Gobierno a realizar cambios
estructurales en el sistema de retiro, relacionados con el requisito de edad para acogerse a
los beneficios. (Beckford, 2012).
Este mismo fenómeno, fue previamente expuesto por el periodista Joseph Berger
(2011), del diario The New York Times. Berger muestra un caso que tiene su origen en el
Departamento de Policía de Nueva York. Allí se encuentra laborando un oficial, que
pese a haber cumplido con los requisitos impuestos por el sistema de retiro del Estado,
continúa en el Departamento ejerciendo sus mismas funciones. Este oficial representa,
uno de los 863 oficiales que continúan laborando luego de haber cumplido con el tiempo
para retirarse, de un universo de 34,805. Contrario a este oficial, otros se acogen a los
beneficios del retiro, pero regresan a trabajar al Departamento de donde se jubilaron.
Según Berger (2011), entre las razones que estos oficiales de policía ofrecen para
regresar nuevamente a trabajar a la misma Agencia están; que sus esposas continúan
57
trabajando, sus hijos ya no están en el hogar y/o la situación económica que impera en el
Estado. Violanti (2007), señala que aquellos oficiales de policía que reciben una
promoción en el empleo o son asignados a trabajar en mejores condiciones de trabajo,
son más propensos a dilatar el proceso de jubilación. Contrario a esto, aquellos oficiales
de la policía que no reciben los mismos beneficios pueden experimentar sentimientos de
baja auto-estima, lo que los lleva a considerar u optar por acogerse al retiro. Cabe
señalar, que para algunos oficiales de policía, el retiro es significado de alivio ante los
altos niveles de estrés que conlleva el trabajo policial. (Digliani, 2010),
Sobre las razones que existen para que un oficial de policía retirado regrese o no
al mercado laboral, Roadburg (2013) postula, que el aspecto económico podría ser un
factor pero que existen otros, que no necesariamente están implicados o relacionados con
aspectos financieros. Con el fin de probar su hipótesis, Roadburg (2013), realizó una
encuesta entre oficiales de policía retirados de diferentes departamentos de policía en
Estados Unidos y Canadá, encontrando que, solamente el 15% de los encuestados aceptó
un trabajo luego de retirarse por razones estrictamente económicas. Un 30% lo hizo por
razones que no están relacionadas con las finanzas, y un 55% regresó al mercado laboral
por ambos aspectos, económicos y no económicos.
El estudio de Roadburg (2013), también arrojó, otros factores asociados con el
regreso a trabajar una vez los oficiales de policía se retiran, como lo son; el querer
involucrarse con otras personas (55%), la satisfacción (55%), los retos (45%), el tener
algo que hacer (45%), el estímulo (40%), el contribuir (30%), la rutina (10%), el
reconocimiento (10%), el poder (5%), la unión de varios factores (25%) y otros (5%).
58
Congruente con los estudios realizados por, Roadburg (2013) y Digliani (2010),
así como con las reseñas periodísticas presentadas por Berger (2011) y Beckford (2012),
la Sra. Viviane Fortuño presidenta de la empresa de consultoría Career Transitions, en
entrevista realizada por Santiago (2013), para el periódico El Nuevo Día, opina que en
Puerto Rico se ha visto un resurgir de personas jubiladas en varios campos laborales,
entre estos la manufactura y las ventas. Esto, con el fin de hacer algo diferente y sentirse
productivas, aunque su jornada laboral no es de ocho horas, sino menos.
Las expresiones de la Sra. Fortuño, refuerzan los hallazgos de un estudio
realizado en Puerto Rico, por la Asociación Americana de Personas Retiradas (AARP,
por sus siglas en inglés), quienes encontraron que el 77% de las 501 personas
encuestadas, con 40 años o más de edad, continúan trabajando tras su jubilación, y otros
deciden dedicar su tiempo libre a actividades comunitarias y/o servicio voluntario en
iglesias u otras instituciones. (Santiago, 2013).
Esta tendencia, de continuar realizando tareas y mantenerse activo durante la
jubilación, fue documentada por Velázquez (2013), en un artículo para el periódico El
Nuevo Día en la búsqueda del sentir de los puertorriqueños en cuanto a los nuevos
cambios realizados al Sistema del Retiro, producto de la entrada en vigor de la Ley 3 del
4 de abril de 2013. Entre las personas entrevistadas, surgen expresiones de una
ciudadana quien señala; “me fui de voluntaria a diferentes zonas. Hago lo que tengo que
hacer, pertenezco a cooperativas, asociaciones de pensionados y busco que hacer. Y el
tiempo lo dedico a tratar de ayudar a los demás” (Velázquez, 2013, p.21).
Pero no todo es satisfacción o progreso en la vida laboral de las personas
retiradas. En su reportaje, Velázquez (2013), nos muestra otro panorama sobre el pensar
59
de las personas jubiladas en Puerto Rico, dejando en evidencia el sentir y la preocupación
en temas relacionados con el discrimen por edad; “No puedo decirte que puedo ir a
buscar trabajo porque, en primer lugar tengo competencia con los jóvenes y segundo,
porque a los viejos los discriminan y no nos respetan” (Velázquez, 2013, p.21).
Sobre el tema del discrimen, Violanti (1990; 2007), expresa que en ocasiones el
encontrar otro empleo es un proceso dificultoso por la estrechez de oportunidades para
los oficiales de policía retirados, y la posible carencia de destrezas y/o habilidades, que
no estén estrechamente relacionadas con el trabajo policial. Añadiendo, que otras veces
los oficiales de policía retirados pueden ser objeto de discrimen, ya sea por edad y/o por
los estereotipos sociales que algunas personas tienen sobre los policías, ya que existen
personas que no consideran a los oficiales de policía personas sensibles, sino que los
consideran y tildan de “rufianes insensibles”. (Violanti, 2007, p. 15). Conviene
distinguir, que si la edad del policía retirado fluctúa entre los 40 y 45 años, la
probabilidad de conseguir un empleo posterior al retiro aumentará, contrario a si la edad
del oficial de policía jubilado se encuentra entre los 50 años o más. (Violanti, 1990).
Otro factor que incide en el proceso de ajuste y satisfacción en la etapa del retiro,
es la relación matrimonial y/o de pareja. Para Digliani (2010), el retiro representa para
muchos oficiales de policía retirados, la oportunidad de retomar su relación matrimonial
y comenzar de nuevo. Convirtiéndose en una nueva etapa de vida para la pareja. En
contraposición a esto, existen parejas, que el proceso de adaptación que conlleva la
jubilación, con la presencia en el hogar del policía recién retirado, de acuerdo con el
Psicólogo John Stratton; “puede ser el tiempo para la fricción o el tiempo para
redescubrirse”. (Digliani, 2010, p. 227).
60
Mejía & Villalobos (2008) exponen, que los éxitos que una persona pueda
alcanzar en su retiro dependerá de la aptitud con la cual éste asuma y enfrente el cambio.
Si la visión se vuelve universal, conceptuando el proceso de jubilación desde una
perspectiva financiera y se le otorga mayor significado al pensamiento de una vez me
retire dejaré de aportar al sistema económico del país, probablemente esta idea interferirá
con el proceso de ajuste y satisfacción.
Contrario a esto, si la aptitud es de índole positiva, asumiendo el cambio con
madurez y serenidad, empleando el tiempo en el desarrollo de nuevos proyectos,
ajustados a los recursos de la persona jubilada, existe la posibilidad de que pueda lograr
una asimilación más fácil, sintiéndose útil y productivo. (Mejía & Villalobos, 2008).
Programa de Planificación. La mayoría de las decisiones en nuestra vida
conllevan un proceso de planificación. Por consiguiente, es necesario contar con toda la
información relevante y pertinente al tema objeto de evaluación. El retiro no está exento
de este proceso, dado que es un cambio trascendental en la vida de toda persona. Ante
esto, es imperativo realizar un proceso que conlleve la organización de ideas, proyectos y
metas para tomar el mejor curso de acción, al momento de decidir por la jubilación.
En una entrevista realizada por Santiago (2013), para el periódico El Nuevo Día,
el Sr. José Acarón, Director de la Asociación Americana de Personas Retiradas (AARP),
explica que los trabajadores puertorriqueños no se preparan para el retiro, lo que les
podría ocasionar dificultades relacionadas con “el consumismo y la pobre cultura de
ahorro” (Santiago, 2013, p.2). El Sr. Acarón advierte, sobre la importancia de realizar
cálculos matemáticos para determinar si los ingresos provenientes de la pensión de
retirado serán suficientes, y evitar el surgimiento de problemas en esta etapa de vida, ya
61
que ocasionalmente, los ingresos económicos son menores a los compromisos financieros
adquiridos, impactando la calidad de vida del retirado.(Santiago, 2013).
Cuando enfocamos nuestra atención a un programa de planificación de retiro
dirigido a oficiales de la policía, Rehm (1996), Storch (1997), Paton et al. (2009), Caudill
& Peak (2009) & Violanti et al. (2011), recomiendan orientar a los oficiales de policía
desde sus comienzos como cadetes en la Academia, sobre aspectos y cambios asociados a
la etapa de la jubilación. Y lo imperativo que resulta ser, el envolvimiento del
Departamento de Policía en el proceso, así como aquellas instituciones que les prestan
servicios a los oficiales de la policía.
Storch (1997), había propuesto un plan de educación y orientación académica, así
como la realización de foros de discusión posterior al retiro, sobre temas relacionados con
las finanzas y ofertas de empleo, y la creación de un programa para personas que recién
se hayan retirado del Departamento. Dichos foros, serían dirigidos a la discusión de
problemas y situaciones que los oficiales de la policía recién retirados, habían enfrentado
durante el proceso y cómo se habían ajustado a su nueva vida, logrando alcanzar un retiro
satisfactorio.
Rehm (1996), propone la existencia de agencias que ayuden y promuevan a los
oficiales de la policía recién retirados en la búsqueda de oportunidades, fuera del
departamento de la policía, para así exponerlos a otras alternativas y que puedan
visualizar las oportunidades que puedan surgir en otros campos. Un proceso de
orientación prepara al oficial de policía próximo a retirarse, para enfrentar con interés y
buena aptitud los retos que puedan surgir en el proceso del retiro. Rehm (1996),
recomienda que el departamento de policía ayude al oficial de policía en la redacción de
62
cartas y/o resume y lo adiestre en técnicas de entrevista para futuras oportunidades de
empleo, tras la jubilación. Además de considerar la posibilidad, de entregarle al oficial
de policía el arma de reglamento y la placa, como símbolo asociativo entre éste y el
Departamento del cual se retira.
Es de vital importancia, que el Departamento no pierda de perspectiva que un
policía recién reclutado y el oficial de policía veterano, son personas totalmente
diferentes en lo social y en la forma en que visualiza sus funciones oficiales. Por
consiguiente, es imperativo, que todo Departamento de Policía con un programa de
orientación a sus empleados pre-retiro, esté al tanto de los problemas y necesidades de la
población a la que sirve, entendiendo que el proceso de retiro y la planificación de éste,
no es un asunto que podamos ajustar a todos por igual. Siendo pertinente, tener en
consideración las individualidades de la persona próxima a retirarse, prestándole especial
atención, a aspectos psicológicos y sociales. (Caudill & Peak, 2009).
Para Paton et al. (2009) & Tanguay (2008), la integración del sistema familiar en
el proceso de planificación del retiro del oficial de policía es un elemento imprescindible.
Ambos recomiendan un proceso de consejería familiar y de pareja, para mantener y
preservar los canales de comunicación, posterior al retiro. Paralelamente a la creación de
grupos de apoyo, compuestos por oficiales de policía retirados, algo que posiblemente los
mantendrían alejados de posibles conductas maladaptativas, al sentir que todavía tienen
una conexión con la rama de seguridad pública o el Departamento de policía. (Paton et
al., 2009).
Un ejemplo de esto es citado por Tanguay (2008), quien señala, que en un estudio
realizado mediante encuesta en 25 agencias dedicadas a la aplicación de la ley (law
63
enforcement) en el estado de California, se encontró, que sólo la ciudad de San José
proveía un programa de transición y asistencia a los futuros retirados, siendo naturaleza
voluntaria y una duración de seis semanas. En la primera sesión del programa, se les
proveía orientación tanto al oficial de policía como a su esposa. Las siguientes sesiones,
estaban enmarcadas en temas relacionados con; los planes financieros, los beneficios
médicos, los planes que ofrecen el estado y la creación de un programa de ejercicios.
Sobre el tema Digliani (2010), opina, que un retiro exitoso está fundamentado en
una buena planificación, recordando la importancia de prepararse para el mismo, más allá
de lo que representa y significa el área económica. Señalando lo relevante y pertinente,
de los aspectos asociados al ámbito psicológico, y la preparación que la persona retirada
necesita para afrontar los mismos. De este modo, sugiere que antes de acogerse a la
jubilación el oficial de policía pondere lo siguiente; las necesidades financieras
existentes, discutir la decisión de retirarse con la familia, conocer los beneficios a los que
tendrá derecho, incluyendo el seguro médico, analizar el impacto que el retiro tendrá
sobre su percepción individual y social, evaluar su conexión para con su rol policial,
planificar para el tiempo que tendrá disponible y considerar el desarrollo de nuevos
proyectos y segundas carreras. (Digliani, 2010).
Análisis
El fenómeno de la jubilación, ha sido objeto de innumerables investigaciones
científicas dirigidas a entender y explicar el proceso que conlleva y el impacto que este
tiene en la vida de las personas. Sin embargo, la mayoría de estos estudios parten de una
metodología de investigación cuantitativa, fundamentada en paradigmas provenientes del
positivismo y post-positivismo. (Lucca & Berríos, 2009). Muchos de los hallazgos han
64
sido expuestos mediante la agrupación de conceptos y datos estadísticos, mostrando
correlaciones, efectos y hasta la distribución de factores, en cuanto al tema de
investigación. Esto, le otorga un toque mecanicista al estudio y deja a un lado las
características y fenómenos subyacentes en la complejidad del ser humano, que podrían
ser explicados desde un enfoque cualitativo, tomando en consideración la fenomenología
de quien lo vive, más allá de datos numéricos. (Lucca & Berríos, 2009).
La complejidad del trabajo policial y lo que conlleva desde una perspectiva
humana, dieron margen a los cuestionamientos que conforman los objetivos de esta
investigación. ¿Por qué los oficiales de la Policía de Puerto Rico una vez se retiraban,
volvían a la Agencia en calidad de reservistas?, ¿De dónde surgía la necesidad de
regresar a la Policía de Puerto Rico, después de tantos años de arduo trabajo, sacrificio,
riesgo y separación del núcleo familiar?, ¿Existía la posibilidad, de que no encontraran
otro lugar de empleo, y/o no supieran qué hacer con su tiempo libre?
Entre los estudios revisados y los hallazgos analizados al presente, no se ha
detectado una investigación que haga referencia al proceso de la jubilación en los
oficiales de Policía de Puerto Rico, desde un enfoque cualitativo fenomenológico. Sin
embargo, existen un sinnúmero de explicaciones de base científica, en respuesta a las
preguntas antes expuestas, provenientes de diversos países, culturas y Departamentos de
Policía. Dejando establecido la diversidad de factores que muy bien podrían explicar las
razones para que un oficial de policía retorne a su antiguo Departamento, tras la
jubilación, y el proceso emocional que conforma en la vida de estos servidores públicos
el proceso.
65
Partiendo de esto, la literatura nos muestra (Rehm, 1996; Skoknic, 1997; Violanti,
1990, 2007, 2013; Tuohy et al., 2005; Caudill & Peak, 2009; Paton et al., 2009; Digliani,
2010; Violanti et al., 2011; Fehr, 2012; Brandl & Smith, 2012; Roadburg, 2013;Thrasher,
2013), como el oficial de policía retirado, al igual que cualquier otro ciudadano,
atraviesan por ansiedad, incertidumbre, preocupación por el estatus social y económico
de ellos y su familia, miedo a sentirse solos, inútiles y temor a ser olvidados por sus
pares, una vez se jubilan.
Sin embargo, no todos asimilan la experiencia de forma negativa, en la
contraparte se encuentran, los que completan y mantienen un retiro satisfactorio, libre de
cualquier problema de índole mental o físico, considerando el retiro una oportunidad para
emprender nuevos proyectos, o simplemente fortalecer sus lazos familiares y sociales.
Aymerich, Planes & Gras (2010), nos muestran la individualidad del proceso de la
jubilación, en un estudio realizado con 30 personas jubiladas, reclutados mediante
entrevista en centros dirigidos a la provisión de servicios a personas mayores de edad en
la Ciudad de Girona, España.
El propósito del estudio fue identificar las etapas del proceso de la jubilación
propuestas por Atchley (1976), utilizando como estrategia de recopilación de
información, entrevistas profundas semi-estructuradas e inventarios para medir y evaluar
el proceso de transición hacia el retiro, que abarcaban un análisis de las etapas propuestas
por Atchley (1976). (Aymerich et al., 2010).
Los resultados del estudio demostraron, que sólo un 10% de las personas
entrevistadas pasaron por todas las fases propuestas en la Teoría de Etapas (Atchley,
1976; Gall et al., 1997). Y sólo un 16.62% de la muestra, señaló haber experimentado
66
ansiedad y miedo al acercarse la fecha de retiro. Un 6.67% experimentó algún grado de
ambivalencia y un 3.38% sintió un aumento en sus niveles de satisfacción, a medida que
se acercaba el momento de la jubilación. No obstante, el 73.3% señaló, que no
experimentó nada excepcional y que el proceso fue completamente normal sin tener
ningún tipo de influencia sobre su estado de ánimo.
En resumen, los resultados del estudio sugieren la existencia de marcadas
diferencias entre la duración de una fase y otra, así como la forma en que estas se
manifiestan entre una persona y otra. Esto guarda relación con lo expresado por (Loozier
& Doris, 1991; Carter & Cook, 1995; Moen, 1996; Kim & Feldman, 2000; Hobfoll,
2002; Wang & Shi, 2004; Caudill & Peak, 2009; Aymerich et al., 2010; Nilsson et al.,
2011; Wang et al., 2011), cuando hablaron sobre la individualidad del proceso,
considerando al individuo y aquellos factores internos y externos que tendrían un efecto
directo sobre el mismo.
Continuando con el tema de la individualidad del proceso, previo a Aymerich et
al. (2010), Vickerstaff & Cox (2005), realizaron un estudio con el propósito de identificar
las circunstancias individuales y la decisión de retirarse, tomando como base las prácticas
y políticas organizacionales de las empresas para las cuales los participantes laboraban.
Los objetivos de la investigación estaban dirigidos; a la definición que los participantes le
otorgaban al retiro, la asociación entre jubilación y un trabajo en esta faceta de vida, y en
qué medida los entrevistados podían seleccionar cuándo y de qué forma se debía dar su
retiro, de acuerdo a las políticas organizacionales.
Un total de 60 empleados, de tres distintas empresas, formaron parte del estudio.
Aunque el artículo sólo hace referencia a dos, una gubernamental y una privada, ubicadas
67
al Sur de Inglaterra. Todos los participantes fueron sometidos a entrevistas semi-
estructuradas, siendo divididos en tres categorías, pre-retiro, transición al retiro y post-
retiro. (Vickerstaff & Cox, 2005).
Los resultados del estudio sugieren, que el retiro es visualizado, más como un
proceso que un evento, siendo el aspecto financiero una pieza clave en el asunto de la
jubilación, principalmente para las personas con bajos salarios. Además de poco
conocimiento y pobre asesoramientos en prácticas concernientes al programa de retiro
dentro de la organización y servicios relacionados. Dejando establecido, que la
jubilación es un asunto muy individual y de acuerdo a los participantes, las personas
debían tener el derecho de escoger cuando jubilarse, sobre cualquier política
administrativa de la empresa. (Vickerstaff & Cox, 2005).
Aunque el estudio efectuado por Vickerstaff & Cox (2005), guarda similitud con
el aquí realizado, principalmente lo concerniente a la experiencias de los participantes.
El mismo, no está relacionado con los objetivos de esta investigación ni se utilizó una
estrategia de entrevista fenomenológica a profundidad. La investigación de Vickerstaff
& Cox (2005), estuvo fundamentada en las políticas administrativas y las prácticas
organizacionales del programa de retiro de los participantes, dejando a un lado aspectos
emocionales asociados al proceso de pre-retiro y retiro. Estableciendo una diferencia con
esta investigación.
68
CAPÍTULO III
RESULTADOS, DISCUSIÓN, CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
Como parte de este capítulo se exponen los hallazgos finales de la investigación
realizada, prestándole especial atención a los aspectos emocionales que envuelve el
proceso de la jubilación en algunos oficiales de la Policía de Puerto Rico. Los resultados,
conclusiones y recomendaciones expuestos, parten de una base psicológica y psicosocial,
dado que las implicaciones del proceso de ajuste y asimilación del retiro en los oficiales
de la Policía de Rico entrevistados, denotaron la existencia de una relación, entre los
aspectos emocionales inherentes al proceso, el entorno y las interacciones sociales, y las
experiencias de vida.
Partiendo de esto, se presentan recomendaciones dirigidas y en beneficio del
oficial de policía retirado y/o próximo a retirarse, las futuras generaciones de oficiales de
policía y el componente social. La inclusión del sistema familiar y la integración de los
pares, entiéndase los oficiales de policías ya retirados, surgen como recursos de ayuda
para el proceso de asimilación y de ajuste que conlleva el retiro para los oficiales de la
Policía de Puerto Rico. Esto último, unido a la necesidad que existe dentro de la Agencia
en la evaluación y realización de cambios administrativos, a fin de que los oficiales de
policía próximos a retirarse puedan contar con servicios de ayuda y orientación pre-retiro.
Resultados
Para fines de este estudio, fueron entrevistados tres oficiales de la Policía de
Puerto Rico, quienes sirvieron en la Agencia durante un periodo de 30 a 32 años, luego
de los cuales se acogieron a los beneficios de la jubilación. Al momento de retirarse,
69
fluctuaban entre las edades de 51 a 55 años, y al momento de esta investigación se
encontraban entre los 56 a 64 años de edad.
De los tres participantes, dos eran hombres y uno era mujer. Dos de los
entrevistados habían regresado a trabajar al Cuerpo de la Reserva de la Policía de Puerto
Rico y uno se encontraba realizando diversas actividades y tareas, algunas relacionadas
con la prestación de servicios a miembros de la Policía de Puerto Rico.
Del análisis realizado a las entrevistas, surgen dos temas inherentes al proceso de
la jubilación en la vida de los participantes, demostrando que la fase del retiro en algunos
Oficiales de la Policía de Puerto Rico es; una crisis normativa de vida, hasta lograr la
asimilación y homeostasis de la crisis. El primer tema, muestra como el proceso del
retiro impactó la identidad personal y social de los entrevistados, y la dicotomía de
emociones experimentadas cuando llegó el momento de la jubilación. El segundo,
establece la forma en que fue manejado y asimilado el proceso del retiro, hasta alcanzar
el equilibrio de su vida como Oficiales de la Policía de Puerto Rico retirados.
Por último, ubicamos las razones por las cuales algunos de los participantes
decidieron retornar o no a trabajar a la Policía de Puerto Rico, tras la jubilación.
Crisis normativa de vida
Identidad Personal y Social. Para algunos de los Oficiales de la Policía de
Puerto Rico la jubilación es más que dejar de realizar un trabajo que se estuvo haciendo
por los pasados 30 años o más. Representa un cambio en su percepción como individuo
“…que voy a hacer yo ahora, si ya no soy policía…era mi vida la dejé ahí completa
fue…es impactante”, que a la vez tiene un efecto sobre su rol e imagen social “…la gente
te admira, porque la mayoría de la gente admira al policía…”, “…el uniforme te daba
70
standing a ti, de que eres una persona, eres un servidor público, que la persona que está
ahí puede confiar en ti….”
Contrario a esto, para otros la jubilación es un evento de vida ineludible que
siempre va a llegar “…yo cree conciencia de que yo era…el padre…el hijo…el esposo y
que yo tenía una personalidad propia…tuve la oportunidad de estar en un lugar donde
pude prepararme psicológicamente, tuve la capacidad para ello”.
Sin embargo, no se trata solamente de la persona en su carácter individual, sino
que existe su lado social. Aquel que ha logrado crear un sentido de identidad dentro del
grupo al cual se perteneció. Para algunos de nuestros participantes, el retiro fue
significado y conllevó la separación de lo que ellos describen una familia extendida, que
les brindó un sentido de pertenencia dentro de la sociedad “estoy convencido de que las
extensiones mías están ahí en la Policía”, “…una familia, era mi familia extendida”.
Los cuales en momentos difíciles de sus vidas se convirtieron en apoyo emocional y
fortaleza “…cuando murió mi esposo las primeras personas que llegaron a casa fueron
de mi trabajo…”. Esto creó en algunos oficiales un sentimiento de compromiso social
para con sus compañeros “…me sentí que tenía una familia que no podía dejar de buscar
ni llamar, tú sabes”.
Dicotomía Emocional. Fue notable durante las entrevistas, la existencia de
sentimientos encontrados al describir lo que fue y significó para los participantes, el
acogerse al retiro luego de ejercer tantos años como Oficiales de la Policía de Puerto
Rico.
El análisis realizado sugiere, que la emoción de mayor relevancia dentro de la
narrativa de los entrevistados fue la frustración. Sentir que dieron tantos años de su vida
71
y sacrificaron a sus seres queridos por el compromiso y dedicación para con la Policía de
Puerto Rico, y al final del trayecto de su carrera policial percibir que la Agencia para cual
trabajaron no se los reconoció, sintiendo que fueron enviados a una vida civil casi
desconocida. Esto, los llevó a experimentar incertidumbre ante la sensación de sentirse
desinformados sobre qué esperar y qué hacer como oficiales de la policía retirados “…no
recibí orientación ni ninguna charla…”, “… yo creo que la persona que nos dio la
charla sabía menos de lo que sé yo…”, “…si te dan orientaciones de los papeles que
tienes que firmar, las gestiones administrativas que tienes que hacer para que el retiro
comience a pagarte. Pero prepararte a nivel de un tratamiento psicológico, darte unas
terapias, unos talleres para que comprendas lo que es el retiro…no hay nada de eso, es
sencillamente, ¡firma aquí, firma aquí y firma aquí y vete! y vete se acabó…no hay un
programa que ayude a los policías a prepararse psicológicamente. Sencillamente te
retiras ¡vete y ya!”.
Esta frustración se vio agudizada, cuando la decisión de jubilarse no conformaba
parte de los planes establecidos, siendo el resultado de factores externos al individuo
“…te digo que fue atípico porque yo no pensaba en retirarme de la policía a los 51
años…hubo una serie de situaciones que me obligaron a tener que renunciar…que en ese
momento entiendo yo no me debía haber ido, pero me tuve que ir…porque me iban a
afectar la salud…se siente uno inútil, te sientes sin fuerza”.
Pero no tan solo emergieron emociones asociadas con frustración. También
experimentaron, un impacto sobre su sentido de productividad y utilidad, al percibir que
no podrían compartir los conocimientos adquiridos y las experiencias vividas dentro de la
Policía de Puerto Rico, con otras generaciones de oficiales de policía. Sintiendo que
72
dejaron planes inconclusos, dentro de lo que conformó su carrera policial “…mi salida
fue atípica y se quedaron cosas pendientes…me falta, porque en realidad yo entendía que
en ese momento yo tenía este…las herramientas…emocionalmente pues te afecta a ti,
porque es algo que tú no esperas y tienes que adelantarlo como si fuese una enfermedad
que llega sin avisar”.
A lo analizado e interpretado como frustración, se le unió un sentimiento que
podría ser descrito como impotencia. Esto, como resultado de la decisión de retirarse
fuera de los planes establecidos y las percepciones preconcebidas sobre el proceso del
retiro. En fin, un retiro que es considerado a destiempo“…bueno tristeza, de cómo se
llama, cuando tú no tienes…no tienes la fuerza para mejorar las cosas…eso tiene un
nombre, esa palabra. Tú sabes como que tú no tienes la fuerza de poder levantarte y
seguir, te sientes, no sé…te sientes triste, incómodo”.
Así como coraje, ante lo que constituyó la burocracia administrativa y los eventos
inesperados durante ese último día trabajo, como oficial de policía “…tenía coraje
porque se hizo difícil…que uno trabaja tanto y hace tanto sacrificio en esta Agencia y a
la hora de tu irte, el papeleo, la desorganización…”, “…nadie, nadie. La única persona
que bajo allí fue el Coronel…y fue a burlarse de nosotros. Que no aguantábamos el
empuje, que si cogimos miedo, etcétera, etcétera. Todo el mundo se quedó calla’o,
menos ¿tú sabes quién?”.
Sobre el particular, se le preguntó al participante cómo se sintió ante dicho
evento, siendo su respuesta; “pues me sentí desgraciado. Le dije; “si no tienes nada que
aportar que sea positivo donde tienes la espalda pon la frente y retírate de este grupo
que tú no eres parte de esto”, mostrando la existencia de coraje y de frustración para con
73
la Agencia, y el trato recibido ese último día de trabajo por parte de personas que
conformaban el área de supervisión.
Pero no todos los participantes describieron su experiencia como un evento
cargado de emociones negativas. Otros, tuvieron la oportunidad de vivir experiencias
agradables provenientes de sus compañeros de trabajo, que de alguna manera les facilitó
el proceso de asimilación en ese primer día como personas jubiladas “…todo el mundo
me despidió con un abrazo fuerte”. Sin embargo, este tipo de experiencia no contrarrestó
la sensación de sentirse liberados, una vez se jubilaron de lo que constituyó el trabajo
como oficial de la Policía de Puerto Rico … ¡ah! déjame decirte que sentí un alivio, sentí
que había hecho todo lo que tenía que hacer en mi vida. Me sentí realizada, me sentí
feliz…”, “…me sentí liberado…me sentí como si me hubiesen quitado un peso de
encima”.
La narrativa de algunos de los entrevistados arrojó, que su vida como retirados no
está lejos ni exenta de experimentar un proceso de ajuste como cualquier otro ciudadano
“…porque tienes que ver la realidad de venir aquí en la jubilación tuya sola, que es
dificilísimo,…la parte de jubilada sola es tu decir…llegar a una casa y no encontrarte
con quien hablar, con quien compartir tu comida, con quien salir…aún la jubilada llora,
se tira al piso y llora”, “…porque en la vida civil un policía retirado, la vida civil es un
poco dura”.
Asimilación y Homeostasis de la crisis
Entorno y Roles. Como dato interesante, los participantes hablaron del efecto
que el retiro tuvo sobre su entorno familiar. Una descripción de la dinámica diaria luego
del retiro, sugiere un cambio en los roles dentro del sistema familiar “ahora como yo
74
estoy en casa, yo la llamo y le digo; mira a qué hora vienes, qué quieres comer”, así
como en la percepción que los componentes del sistema tienen del jubilado “la
percepción que tiene mi familia es que yo soy otra persona…con más detalles, más
amoroso, más preocupado, más en casa. Esa es la percepción de ellos, más de mi casa”.
En cambio otros, encontraron el apoyo que necesitaban dentro de la misma
Agencia, luego de haberse jubilado “…ahí encontré a los amigos, a la gente que
realmente me amaba…pero emocionalmente me ayudó en todo el sentido de la palabra,
porque ahí pude sanar la pena que tenía”.
Sin embargo, algunos oficiales de la Policía de Puerto Rico encontraron en el
retiro la oportunidad de realizar un análisis introspectivo “…ahora tengo más madurez,
que estoy más tranquilo, tengo más comunicación con el Señor”. Además de poder re-
estructurar su vida, dedicándose a actividades que le brindan satisfacción, sintiéndose
activos “…yo camino todas las tardes”, “…estoy dedicado a las obras del Señor”,
“…este escribo…juego maquinita, tengo mi billar”. Ofreciéndoles la oportunidad de
extender y mantener un vínculo con la sociedad y de compartir sus vivencias.
Sentido de Protección a otros. Indistintamente, bajo qué circunstancias los
Oficiales de la Policía entrevistados se hayan acogido a su retiro, ni la existencia o la
inexistencia de planes para esta faceta de vida. Todos los participantes compartieron la
alegría y satisfacción que les proporciona el poder compartir las experiencias y
conocimientos adquiridos, durante sus años como oficiales de la Policía de Puerto Rico.
Algunos de los entrevistados, ahora forman parte de grupos comunitarios dirigidos al
servicio de la ciudadanía, convirtiéndose en entes de ayuda y orientación para aquellos
que lo necesitan “trabajando con jóvenes, anoche mismo les estaba dando un taller de
75
prevención de suicidios a jóvenes”. Otros, continúan ligados a lo que constituye el
ambiente policial “…y tan es así, que me fui de la Policía y todavía me llaman. Hoy
recibí una llamada pidiéndome una orientación de un agente que trabaja en Bayamón
Norte…”
Las expresiones de los entrevistados refuerzan lo percibido, en cuanto al sentido
de protección a otros, que se desarrolla como parte de las funciones de un oficial de la
policía. Responsabilidad que se inerva con la identidad y la personalidad del oficial de
policía retirado, formando parte de ellos, más allá de lo que constituye la Policía de
Puerto Rico y la carrera policial de los participantes.
Retorno o no retorno al mundo policial. Dentro de lo que constituyó el proceso
de asimilación al retiro como nueva faceta de vida, hasta alcanzar la homeostasis,
emergen en dos de los entrevistados, dos motivos por los cuales tomaron la decisión de
regresar a trabajar a la Policía de Puerto Rico, tras la jubilación.
El primero consistió, en la relevancia del rol de las relaciones sociales como entes
de apoyo en medio de una crisis de pérdida familiar. Fue dentro la Policía de Puerto
Rico, que uno de los entrevistados encontró la fortaleza que necesitó para ese momento
de vida. El contar con el apoyo de quienes fueron sus compañeros de trabajo en tan
difícil situación, le hizo tomar de determinación de regresar a trabajar a la Agencia
“…pero fue la muerte de mi esposo, porque si él no se hubiese muerto yo no hubiese
vuelto… el trabajar para mí en la Agencia es una parte importante que me ayuda
emocionalmente, me llena el espíritu, me hace…yo puedo ayudar a otras personas”,
reforzando un sentido de utilidad, de poder cuidar y de servir a otros.
76
El segundo, fue la necesidad de cumplir con la responsabilidad social y
económica que conlleva tener una familia, donde la existencia de hijos que se encuentran
en su trayecto hacia la autonomía, se convierte en el eje principal para continuar
trabajando. Esto con el fin de ayudarlos a completar y obtener una vida independiente de
manera satisfactoria “…y cuando uno termina el retiro todavía…que ya más o menos la
época…los hijos volaron y están…están en la universidad o ya se casaron, pero todavía
tenemos el rastro, el lastre de que todos esos préstamos y todas esas evoluciones que
hicimos para poder seguir adelante y sacar los hijos adelante, pues todavía los tenemos
con nosotros…ahora lo único que tengo en mi mente es satisfacer las necesidades
económicas”.
Sin embargo, existen otros, que pese a no haber regresado a trabajar a la Policía
de Puerto Rico luego de haberse acogido a los beneficios de la jubilación, no descartan la
posibilidad de retornar. Movidos por el simple deseo de ayudar a la Agencia, en la
realización de cambios que redunden en beneficio de la ciudadanía “…Yo viví en la
Policía, lo que muchos policías del pasado y del futuro y del presente no vivieron… Pues
yo pertenecí a todas esas etapas, pues quiero pertenecer a la otra que es la reforma. Y
que mi nombre esté escrito ahí. Y eso es todo, aunque trabaje un mes allí nada más…
Porque todo lo que sea para beneficio del ciudadano. Porque en esto no se beneficia la
Policía, los que se están beneficiando...lo que se está buscando es el beneficio del
ciudadano…”. Oportunidad que podría servir para completar proyectos inconclusos,
resultantes de un retiro no esperado, “atípico” como lo describió uno de los participantes.
77
Discusión
Al igual que oficiales de policía de otros países, no relacionados con la Policía de
Puerto Rico. Para los participantes de este estudio, el acogerse al retiro fue más que dejar
un trabajo por el cual recibían una remuneración económica. Representó un impacto a su
identidad personal, y el dejar de pertenecer a un grupo social donde podían encontrar
apoyo en medio de situaciones difíciles de vida. (Chiesa & Sarchielli, 2008; Forteza
1990; Álvaro & Garrido, 2006; Izquierdo, 2012; LaBauve & Robinson, 1999; Rehm,
1996).
El enlace que se desarrolla, entre la persona y su función como Oficial de la
Policía de Puerto Rico, sugiere un grado de agudeza dentro de lo que Erick Erickson
denominó la etapa de generatividad vs estancamiento, dirigida a la obtención del cuidado.
(Engler, 1996; Corsini, 2011; Papalia et al., 2012). Virtud que prevalece en la vida de los
entrevistados, aún luego de acogerse al retiro y que encuentra un modo de expresión
mediante la prestación de servicios comunitarios y compartir sus experiencias y
conocimientos de vida con otros, dentro y fuera de la Policía de Puerto Rico. De forma
paralela, se encuentra el deseo de uno de los entrevistados, de regresar a la Agencia,
teniendo la oportunidad de transmitir los conocimientos y la experiencia adquirida, con
otras generaciones de oficiales de policía, dentro de la Policía de Puerto Rico. Esto, en
congruencia con lo planteado por Lung (2010), cuando expuso la experiencia que
acompaña a los oficiales de policía retirados.
No ha de resultar extraño, que los participantes se mantuvieran realizando algún
tipo de actividad y/o trabajo, ni mucho menos que de una forma u otra fueran trabajos
relacionados y/o dirigidos a la prestación de servicios directa y/o indirectamente, dentro
78
de los constituye el trabajo policial. Es vasta la literatura que expone (Engler, 1996;
Violanti, 1990; Skoknic, 1998; Hinden, 2001; Marin, 2004; Pole et al., 2006; Caudill &
Peak, 2009; Digliani, 2010; Corsini, 2011; Shultz &Wang, 2011; Papalia, Duskin &
Martorell, 2012; Izquierdo, 20012, Roadburg, 2013; Santiago; 2013; Eldridge, 2015), los
beneficios sobre la salud física y mental, y el efecto positivo que tiene sobre el sentido de
identidad individual y social de la persona jubilada, el mantener una vida activa,
mediante la realización de servicios comunitarios, voluntarios y/o en la ejecución de
segundas carreras.
Otro tema expuesto en esta investigación, son los cambios que pueden surgir
dentro del grupo familiar. De este modo, uno de los participantes resaltó los cambios
favorables y positivos que ha podido percibir y disfrutar dentro del contexto familiar,
resaltando el cambio de roles entre los componentes del matrimonio y la percepción que
actualmente los componentes del grupo tienen del jubilado. Lo que es congruente con lo
establecido por (Hinden, 2001; Kim & Moen, 2002; Pole et al., 2006; Digliani, 2010;
Shutz & Wang, 2011) cuando mencionan la relevancia de la relación matrimonial dentro
del proceso de ajuste y satisfacción del retiro y como puede surgir un cambio en las
actividades que realizan los integrantes del grupo familiar.
Además de la familia, los amigos y el grupo social de la persona jubilada
desempeñan un papel significativo dentro del proceso de la jubilación, en ocasiones con
mayor relevancia que el proveniente del contexto familiar. (Chiesa & Sarchielli, 2008).
Sobre el tema uno de los entrevistados nos compartió la experiencia vivida en sus
primeros años como jubilado, al sufrir la pérdida de una persona significativa en su vida.
La unión de ambos eventos, llevaron al participante a vivir situaciones de estrés,
79
encontrando en su grupo de pares de la Policía de Puerto Rico, la compañía y la fortaleza
necesaria para manejarlos y sobrellevarlos. Esto refuerza, lo expuesto por (Shultz &
Wang, 2011; Digliani, 2007, 2010; Caudill & Peak, 2009), en cómo las relaciones con los
compañeros de trabajo y la camaradería existente dentro de la cultura policial influye
sobre la vida de la persona retirada y se convierte en parte de los recursos que se exponen
en la Teoría de Perspectiva de Recursos (Hobfoll, 2002; Wang et al., 2011).
Contrario a esto, el percibir un ambiente laboral cargado de estrés y relaciones
laborales matizadas de situaciones conflictivas, podría significar para la persona próxima
a jubilarse una salida a la libertad, llevándola a experimentar un alivio psicológico,
facilitando el proceso de ajuste y satisfacción durante la etapa del retiro. (Forteza, 1990;
Shultz & Wang, 2011; Digliani, 2007, 2010; Caudill & Peak, 2009). Este fue el caso de
uno de los entrevistados, quien describió su retiro como un evento atípico en su vida, toda
vez que no formaba parte de sus planes y proyectos en el momento en que surgió el
mismo. Sin embargo, el acogerse a la jubilación se convirtió en la mejor alternativa para
proteger su estado emocional, llevándolo a escoger entre su vocación y su salud mental,
colocándolo en una disonancia cognitiva entre su sentido de productividad y el acogerse
al retiro.
El sentido de responsabilidad ciudadana, el cuidar de otros y mantenerse activos
en el campo laboral, ya sea en áreas asociadas con el trabajo policial o no, son algunos de
los factores que todos nuestros entrevistados han vivido de alguna manera en el proceso
de la jubilación. En alusión a esto, uno de los entrevistados narró como luego de
jubilarse de la Policía de Puerto Rico, dedica tiempo al servicio voluntario,
80
principalmente en las Iglesias y como esta nueva faceta de vida lo ha llevado a un
proceso de introspección y mayor conexión consigo mismo.
Esto, según (Carter & Cook, 1995; Shultz & Wang, 2011, Fehr 2012), podrían ser
considerados como eventos normativos de vida, que le brindan la oportunidad de realizar
cambios innovadores en su estilo de vida.
Caudill (2009), Feldman & Beehr (2011), y Rehm (1996), exponen las
dificultades que el retiro puede representar en la vida de los oficiales retirados. Ante
esto, es imperativo tener en consideración las expectativas que todo oficial de policía
próximo a jubilarse pueda tener sobre esta etapa de vida, a fin de minimizar el impacto
emocional y el posible desarrollo de psicopatología asociada al proceso de la jubilación.
En resumen, los participantes de esta investigación concurrieron en que factores
como; los procesos administrativos dentro de la Policía de Puerto Rico para acogerse a
los beneficios de la jubilación, la interacción con algunos supervisores de mayor rango,
una vez se acercaba la fecha de retiro de los entrevistados y la falta de orientación en
cuanto a qué esperar como personas retiradas, tuvieron un efecto sobre sus emociones,
llevándolos a experimentar sentimientos asociados con incertidumbre, coraje y
frustración. Sentimientos que de forma dicotómica, se entrelazaban con una sensación de
libertad, alegría y nostalgia.
Por medio de un programa de consejería psicológica pre-retiro, el oficial de la
Policía de Puerto Rico próximo a retirarse, tendría la oportunidad de obtener información
de los aspectos psicológicos y psicosociales que acompañan la determinación de acogerse
al retiro y el proceso que este conlleva. Además de conocer, sobre los recursos y las
81
destrezas, que de alguna forma le ayudarán y le serán de beneficio en esta nueva etapa de
vida.
Violanti (2014), señala el rol significativo que tienen los Departamentos de
Policía en el proceso de resiliencia de sus oficiales, para poder manejar situaciones de
estrés y eventos traumáticos. He aquí la relevancia de la Policía de Puerto Rico como
Agencia, en preparar a los oficiales de policía para el proceso de la jubilación. Más aún,
cuando los medios de comunicación en Puerto Rico (Velázquez, 2014; Rivera, 2015), han
alertado sobre el efecto que diversos proyectos gubernamentales han tenido sobre los
beneficios del retiro, incluyendo la Ley 3 del 4 de abril de 2013, en las agencias
gubernamentales y sus empleados, incluyendo la Policía de Puerto Rico.
Conclusiones
Los resultados de la investigación realizada demuestran, que el proceso del retiro
en algunos oficiales de la Policía de Puerto Rico es una crisis de normativa de vida,
similar a la de cualquier otra persona, donde se atraviesa por un proceso de asimilación al
cambio hasta llegar a la homeostasis. Durante el proceso, algunos oficiales de la Policía
de Puerto Rico, pueden experimentar un impacto a su sentido de identidad personal y
social, sugiriendo una fusión entre su rol como Oficial de la Policía de Puerto Rico y su
personalidad propia. Así como, sentimientos asociados a frustración y coraje, producto
de los procesos administrativos y el trato percibido al momento de jubilarse, por parte de
la Agencia, convirtiendo al retiro en un camino hacía la libertad y la tranquilidad para la
vida de algunos de estos servidores públicos.
Sin embargo, existe una dicotomía emocional al momento de jubilarse, que se
manifiesta a través de la nostalgia que conlleva el separarse de los compañeros de trabajo
82
de tantos años y dejar de hacer lo que les apasiona y les agrada. Sentimientos que se
contraponen con la alegría de poder liberarse del estrés organizacional y la incomodidad
que algunos eventos dentro de la Agencia producen sobre sus vidas.
Como dato relevante, la falta de información y de orientación, dificulta el
establecimiento de planes concretos y específicos para cuando llega el retiro, teniendo
como resultado en algunos oficiales de la Policía de Puerto Rico, una percepción de
abandono y de falta de agradecimiento por parte de la Agencia, que se une a la
incertidumbre de qué esperar del proceso de la jubilación. De este modo, la decisión de
acogerse al retiro, demostró dentro de los oficiales de policía entrevistados, no estar
asociada a las funciones inherentes del puesto, ni a las dificultades y/o riesgos que
pudieran encontrar en su trabajo, ni el fungir como entes de ayuda a los ciudadanos, sino
a los procesos administrativos y las interacciones con el personal de supervisión. No
obstante, pese a haberse acogido a la jubilación pueden surgir situaciones que empujen a
los oficiales de la Policía de Puerto Rico retirados a considerar y finalmente tomar la
decisión de regresar a trabajar a la Agencia, en calidad de reservistas. Los aspectos
económicos y la necesidad de relacionarse socialmente dentro de un entorno que les
brinda un sentido de pertenencia, fueron las razones explicitadas por los participantes en
esta investigación para entrar al Programa del Cuerpo de la Reserva en la Policía de
Puerto Rico.
Las experiencias laborales, los recursos disponibles y las redes de apoyo
existentes, ejercieron un rol significativo en el proceso de asimilación y ajuste al retiro en
la vida de algunos oficiales de la Policía de Puerto Rico, hasta lograr la homeostasis.
Aunque es necesario considerar, que la calidad de las relaciones sociales que hayan
83
tenido dentro de la Agencia, tendrá una influencia en el proceso de ajuste al retiro y la
decisión de regresar o no a trabajar en calidad de reservistas. Sin olvidar, que las
actividades de despedida dentro del contexto laboral y las experiencias vividas ese último
día de trabajo, conforman parte de las vivencias más recordadas y valoradas, en la vida de
algunos oficiales de la Policía de Puerto Rico.
Paralelamente encontramos, que el retiro es considerado por algunos oficiales de
la Policía de Puerto Rico, una oportunidad para transmitir los conocimientos adquiridos
dentro de la Agencia, convirtiéndose en una forma de mantenerse activos y ocupados.
Además de funcionar como un mecanismo de refuerzo positivo, para la relación
matrimonial y las relaciones sociales. Incluyendo, la existencia de cambio de roles
dentro del sistema familiar y la percepción que los integrantes del grupo familiar puedan
tener del oficial de policía retirado.
Queda establecido, que el Oficial de la Policía de Puerto Rico próximo a jubilarse,
necesita adquirir recursos y destrezas desde una perspectiva psicológica y no meramente
financiera para cuando llegue el momento del retiro. Esto, hace necesario la creación y el
desarrollo, de un programa de orientación y consejería psicológica para estos servidores
públicos, enfocado en el entendimiento del proceso de la jubilación desde su profesión, a
fin de conocer qué pueden esperar durante el mismo y las alternativas existentes para
ocupar el tiempo que tendrán disponible.
84
Recomendaciones
Dado que el enfoque de esta investigación fue dirigido a los aspectos emocionales
subyacentes en el proceso de la jubilación de algunos oficiales de la Policía de Puerto
Rico y las razones existentes para que algunos de estos decidieran regresar a la Agencia a
trabajar en calidad de reservistas. Se plantean algunas recomendaciones para futuras
investigaciones y para la Policía de Puerto Rico como ente Gubernamental, a fin de
mejorar los procesos administrativos y la experiencia de sus oficiales de policía al
momento de acogerse a los beneficios del retiro.
Durante la realización de este estudio, surge una multiplicidad de temas
relacionados con el proceso de la jubilación en los oficiales de la Policía de Puerto Rico,
que podrían dar base a futuras investigaciones, mediante la implementación de otros
paradigmas y métodos de investigación. Algunos de estos temas son; el retiro temprano,
el retiro por razones de salud o incapacidad laboral, el impacto del proceso de la
jubilación en la pareja desde la perspectiva del compañero (a) del oficial de policía, la
relación entre el suicidio y el proceso de la jubilación. Además, los nuevos cambios en el
sistema de retiro de los empleados gubernamentales, con la aprobación de la Ley 3 del 4
de abril de 2013, pueden ser utilizados como una fuente válida para futuros estudios, a fin
de explorar los efectos de la misma sobre la vida de los empleados públicos,
principalmente la salud mental de los oficiales de la Policía de Puerto Rico.
Mediante este estudio quedó demostrado, que en la Policía de Puerto Rico existe
la necesidad de implementar un proceso de consejería psicológica pre-retiro, donde se no
tan solo participe el oficial de policía próximo a retirarse, sino que se le brinde espacio a
su familia en tan importante evento. Además de servir como apoyo y ente direccional, en
85
el desarrollo y en la implementación, de un plan estructurado con metas y con objetivos,
que incluya las actividades que le gustaría al oficial de policía realizar durante su vida
como retirado. En el diseño de este programa, podría integrarse la creación de una red de
apoyo social, donde los oficiales de policía ya retirados, sirvan como orientadores para
aquellos que están próximos a jubilarse
Sin embargo, la orientación sobre los aspectos que conlleva el proceso de la
jubilación no debería ser relegada a los últimos años de trabajo del oficial de la policía,
sino que se recomienda iniciar un programa de orientación mediante el ofrecimiento de
talleres a los oficiales de la Policía de Puerto Rico, desde sus inicios como cadetes en la
Academia. Para esto, podría tomar como punto de partida, pero no limitándose, los
propósitos expuestos en la Ley 126 del 3 de agosto de 2014. Aunque es importante
destacar, que Ley 126, requiere de una revisión a fin de ser enmendada, para que los
aspectos psicológicos y los aspectos psicosociales inherentes al proceso de la jubilación,
sean temas cubiertos por las Agencias Gubernamentales, en las horas de orientación que
les ofrecerá a los empleados.
Por último, se le recomienda a la Policía de Puerto Rico, evaluar los mecanismos
existentes para la notificación de la cancelación de contratos a los participantes del
programa del Cuerpo de la Reserva y orientar al personal sobre la importancia que estos
tienen para la Agencia y los servicios que ofrecen. Es importante señalar, que las
aportaciones de los oficiales retirados de la Policía de Puerto Rico, pueden servir para
mejorar los procesos administrativos con los que actualmente cuenta a la Agencia en
aspectos relacionados al proceso de la jubilación, redundando en beneficio de los
oficiales de policía próximos a jubilarse y las generaciones futuras.
86
REFERENCIAS
Álvarez, J. L., (2003). Cómo hacer investigación cualitativa: fundamentos y
metodología. México, D.F, Editorial Paidós Mexicana, S.A.
Álvaro, J. L., & Garrido, A., (2006). Trabajo, Ocupación y Bienestar [Reseñado en el
libro Sociopsicología del Trabajo, por Alicia Garrido Luque]. (pp. 99-132).
Barcelona, España. Editores UOC. Recuperado de https://books.google.com.pr
Andrew, M. E., Howsare, J. L., Hartley, T. A., McCanlies, E. M., Burchfiel, C. M., &
Violanti, J. M., (2014). Protective Attributes: resilience in policing [Reseñado en
el libro Dying for the job: police work exposure and health, editado por John M.
Violanti y otros]. (pp. 145-154). Springfield, Illinois. Charles C. Thomas
Publisher LTD. Recuperado de http://www.researchgate.net
Atchley, R. C., (1976). The sociology of retirement. New York. John Wiley & Sons, Inc.
Atchley, R. C., (1999). Continuity theory, self and social structure. [Reseñado en el libro
The Self and Society in aging processes, editado por Carol D. Ryff & Víctor W.
Marshall]. (pp. 94-121). Broadway, New York, Springer Publishing Company.
Recuperado de http://www.books.google.es
Aymerich, M. A., Planes, P. M., & Gras, P. M., (2010). La adaptación a la jubilación y
sus fases: Afectación de los niveles de satisfacción y duración del proceso
adaptativo. Revista Anales de Psicología. 26, 80-88. Recuperado de
http://www.um.es/analesps.com
Barbera, N., & Inciarte, A., (2012). Fenomenología y hermenéutica: dos perspectivas
para estudiar las ciencias sociales y humanas. Revista Multiciencias, 12, 199-205.
Recuperado de http://www.redalyc.org
87
Beckfor, M., (2012, noviembre 18). Revealed: The 3,600 polices who retire at 50…then
go back to jobs with their old force. Mail on Sunday. Recuperado de
http://www.ehis.ebscohost.com
Berger, J., (2011, diciembre 13). Still on Patrol After Two Decades, Valued but Rare.
The New York Times. Recuperado de http:www.nytimes.com
Bowlby, G., (2007). Defining retirement. Perspective Labour and Income, 8, 12-19.
Recuperado de http://www.statcan.gc.ca
Brandl, S. G., & Smith, B.W., (2012). An Empirical Examination of Retired Police
Officers’ Length of Retirement and Age at Death: A Research Note. Police
Quarterly.16, 113-123. doi: 10.1177/1098611112465611
Carter, M. T., & Cook, K., (1995). Adaptation to retirement: role changes and
psychological resources. Career Development Quarterly, 44 (1), 67. Recuperado
de http://eds.a.ebscohost.com
Caudill, C. B., & Peak, K. J., (2009). Retiring from the “Thin Blue Line”: A Need for
Formal Preretirement Training. The FBI Law Enforcement Bulletin. 78, 12-18.
Recuperado de http://www.FBI.gov
Caudill, C. B., & Peak, K. J., (2009). Retiring from the “Thin Blue Line”: A Need for
Formal Preretirement Training (part two). The FBI Law Enforcement Bulletin.
78, 1-7. Recuperado de http://www.FBI.gov
Chiesa, R., & Sarchielli, G., (2008). Prepararse para la Jubilación: el papel del apoyo
social en la gestión de ansiedad. Revista de Psicología del Trabajo y de las
Organizaciones. 24, 365-388. Recuperado de http://www.ehis.ebscohost.com
88
Corsini, R. J. & Wedding, D. (2011). Current Psychotherapies [9na.ed.]. Belmont,
USA. Brook Cole Cengage Learning.
Digliani, J. A. (2010). Reflections of a Police Psychologist. (ed. rev.). USA. XLibris
Corp.
Elder, G., Kirkpatrick, J. & Crosnoe, R., (2002). The emergence and development of life
course theory. [Reseñado en el libro Handbook of the life course, editado por
Jeylan J. Mortimer & Michael J. Shanahan]. (pp.3-19). New York, USA. Kluwer
Academic Publisher. Recuperado de http://www.google.com.pr/books
Eldridge, J., (2015). Second Careers for Street Cops: use your experience as police
officer to start a second carrer, a practical guide for law enforcement officers.
[versión digital Kindle]. Recuperado de http://amazon.com
Engler, B. (1996). Introducción a las Teorías de la Personalidad. Atlampa, México.
McGraw-Hill Interamericana Editores, S. A.
Estado Libre Asociado de Puerto Rico., (1994). Boletín Administrativo 1994-04: Orden
Ejecutiva para Crear el Cuerpo de la Reserva de la Policía de Puerto Rico y
Proveer para su Organización y Funcionamiento. Recuperado de
http://www.app.estado.gobierno.pr
Estado Libre Asociado de Puerto Rico., (1996). Ley 53 del 10 de junio de 1996: Ley de la
Policía de Puerto Rico. Recuperado de http://www.app.estado.gobierno.pr
Estado Libre Asociado de Puerto Rico., (2013). Ley 3 del 4 de abril de 2013: Ley para
Reformar el Sistema de Retiro de los Empleados del Gobierno. Recuperado de
http://www.asr.gobierno.pr
89
Estado Libre Asociado de Puerto Rico., (2014). Ley 126 del 3 de agosto de 2014:
Programa de Orientación y Planificación Pre-retiro para Servidores Públicos.
Recuperado de http://www.microjuris.com
Fehr, R., (2012). Is Retirement Always Stressful? The Potential Impact of Creativity.
Journal American Psychologist. 67, 76-77. doi: 10.1037/a0026574
Feldman, D. C., & Beehr, T. A. (2011). A Three-Phase of Retirement Decision Making.
Journal of American Psychologist. 66, 193-203. doi: 10.1037/a0022153
Fetherstonhaugh, D., & Ross, L., (1999). Framing effects and income flow preferences
in decision about social security [Reseñado en el libro Behavioral dimensions of
retirement economics, editado por Henry J. Aaron]. (pp. 187-209). Washington,
D. C. Brooking Institute Press. Recuperado de: http://www.google.com.pr/books
Forteza, J. A., (1990). La preparación para el retiro. Revista Anales de Psicología. 6,
101-114. Recuperado de http://www.um.es.com
Gall, T. L., Evans, D. R., & Howard, J. (1997). The retirement adjustment process:
changes in the well-being of male retirees across time. Journal of Gerentology:
psychological sciences, 52B, 110-117. Recuperado de
http://www.psychsocgerontology.oxfordjournals.org
Gilbert, D. T., & Wilson, T. D., (2007). Prospection: experiencing the future. Science.
317, 1351-1354. Recuperado de http://www.wjh.harvard.edu
Hershey, D. A., Jacobs-Lawson, J. M., McArdle, J. J., & Hamagami, F., (2007).
Psychological Foundations of Financial Planning for Retirement. Journal Adult
Development. 14, 26-36. doi: 10.1007/s10804-007-9028-1
90
Hinden, S., (2001). How to retire happy: everything you need to know about 12 most
important decisions you make before you retire. New York, USA. McGraw-Hill.
Recuperado de http://eds.a.ebscohost.com
Hobfoll, S. E., (2002). Social and Psychological Resources and Adaptation. Review of
General Psychology, 6, 307-324. doi:10.1037//1089-2680.6.4.307
Izquierdo, R. T., (2012). Life Cycle and Psycho-Social Characteristics of Unemployed
Adults. Revista Salud Mental. 35, 225-230. Recuperado de
http://www.medicgraphic.com
Kim, S., & Feldman, D. C., (2000). Working in retirement: the antecedents of bridge
employment and its consequences for quality of life in retirement. Academy of
Management Journal, 43, 1195-1210. Recuperado de http://eds.a.ebscohost.com
Kim, J. E., & Moen, P., (2002). Retirement transitions, gender, and psychological well-
being: alife-course, ecological model. Journal of Gerentology, 57B, 212-222.
Recuperado de http://psychsocgerontology.oxfordjournals.org
Knoll, M.A., (2011). Behavioral and Psychological Aspects of the Retirement Decisión.
Social Security Bulletin. 71, 15-32. Recuperado de http://www.ssa.gov
La Bauve, B. J., & Robinson, C. R., (1999). Adjusting to Retirement: Considerations for
Counselors. Adultspan Journal. 1, 2-12. Recuperado de
http://www.ehis.ebscohost.com
Lozier, G. G., & Dooris, M. J., (1991). Projecting faculty retirement: factors influencing
individual decisions. Patterns of Faculty Retirement, 81, 101-105. Recuperado
de http://eds.a.ebscohost.com
91
Lucca, I. N., & Berríos, R. R., (2009). Investigación Cualitativa: Fundamentos, Diseños
y Estrategias. (2da. ed.). Cataño, Puerto Rico. Ediciones SM.
Lung, T. H., (2010). Same bed, but different dreams? Comparing retired and incumbent
police officers perceptions of lost knowledge and transfer mechanism. Crime
Law Soc Change, 53, 413-435. doi: 10:1007./s10611-009-9228-7
Marin, L., (2004). El sentido del trabajo como eje estructurante de la identidad personal
y social: el caso de jóvenes argentinos. Fundamentos en humanidades, 5, 43-52.
Recuperado de http://dialnet.unirioja.es
Matthew, S. P., Liederbach, J., & Freiburger, L. T., (2010). Exit Stretegy: An
Exploration of Late-Stage Police Crime. Police Quaterly. 13, 413-435.
doi: 10.1177/109861111.384086
Mejía, M. M, & Villalobos, E. M., (2008). La Crisis de la Jubilación como una
Oportunidad Educativa. Revista Educ.Educ. 11, 179-190. Recuperado de
http://www.ehis.ebscohost.com
Moen, P., (1996). A life course perspective on retirement, gender and well-being.
Journal of occupational health psychology, 1, 131-144. Recuperado de
http://eds.a.ebscohost.com
Nilsson, K., Rignell, H. A., & Rylander, L., (2011). Factors influencing the decision to
extend working life or retire. Journal of Work, Environment & Health, 37, 473-
480. doi: 10.5271/sjweh.318.
Paoli, B. A. (2012). Husserl y la fenomenología trascendental: perspectiva del sujeto en
las ciencias del siglo XX. Revista Reencuentro.65, 20-29. Recuperado de
http://www.redalyc.org
92
Papalia, D. E., Wendkos-Olds, L. & Duskin-Feldman, R. (2001). Desarrollo Humano.
(8va. ed.). Bógota, D.C., Colombia. McGraw-Hill Companies, Inc.
Papalia, D., Duskin, F. R., & Martorell, G. (2012). Desarrollo Humano. (12ma. ed.).
México. MgGraw-Hill Interamericana Editores, S.A. de C.V.
Paton, D., Violanti, J. M., Burke, K., & Gehrke, A., (2009). Traumatic Stress in Police
Officers: A Career-Length Assessment from Recruitment to Retirement. Illinois,
USA. Charles C. Thomas Publisher, LTD.
Pole, N., Kulkarni, M., Bernstein, A., & Kaufmann, G., (2006). Resilience in Retire
Police Officers. Traumatology Journal. 12, 207-216.
doi: 10.1177/1534765606294993
Policía de Puerto Rico., (1994). Reglamento de la Reserva de la Policía de Puerto Rico.
Recuperado de http://www.app.estado.gobierno.pr
Policía de Puerto Rico., (1995). Reglamento para enmendar los artículos 3, 4, 5, 6, 9,
11, 12,16, y 17del Reglamento de la Reserva de la Policía de Puerto Rico. .
Recuperado de http://www.app.estado.gobierno.pr
Policía de Puerto Rico., (2012). Reglamento del Cuerpo de la Reserva de la Policía de
Puerto Rico. Recuperado de http://www.app.estado.gobierno.pr
Ramey, S. L., Downing, N. R., & Franke, W. D., (2009). Milwaukee Police Department
Retirees: Cardiovascular Disease Risk and Morbidity Among Aging Law
Enforcement Officers. Journal AAOHN. 57, 448-453.
doi: 10.3928/08910162-20091019-02
Rehm, B., (1996). Retirement: a new chapter, not the end of the story. The FBI Law
Enforcement Bulletin. 65, 6-11. Recuperado de http://www.ehis.ebscohost.com
93
Rivera, P. M., (2015, septiembre 2). Escasean los policías. El Vocero, pp. 6.
Roadburg, A. (2013). Life After Policing. (2da. ed.). USA. Life after work press.
Rovira, M. L., & Rosario, H. E., (2002). Desarrollo y Validación de una Escala para
Medir las Actitudes hacía el retiro. Revista Puertorriqueña de Psicología. 13, 45-
59. Recuperado de http://www.asppr.net
Rovira, M. L., & Rosario, H. E., (2005). Los Efectos de la Ansiedad, Depresión,
Satisfacción Laboral, Locus Control y algunas variables Sociodemográficas en las
actitudes hacía el retiro. Revista Puertorriqueña de Psicología. 16, 123-147.
Recuperado de http://www.asppr.net
Santiago, C. Y. (2013, mayo 11). La importancia de planificar el retiro en Puerto Rico.
El Nuevo Día. Recuperado de www.elnuevodia.com
Shultz, K. S., & Wang, M., (2011). Psychological Perspective on the Changing Nature of
Retirement. Journal American Psychologist. 66, 170-179. doi: 10.1037/a0022411
Skoknic, C. V., (1998). Efectos de la preparación psicológica para la jubilación. Revista
Intervención Psicosocial. 7, 155-167. Recuperado de
http://www.ehis.ebscohost.com
Solinge, H. V., & Henkens, K., (2008). Adjustment to and Satisfaction with Retirement:
Two of a Kind? Journal Psychologist and Aging. 23, 422-434.
doi: 10.1037/0882-7974.23.2.422
Storch, J. E., (1997). Retiring from Police Service: Educational Needs and Second
Career Planning. Journal Justice Professional.10, 75-92. Recuperado de
http://www.ehis.ebscohost.com
94
Tanguay, V., (2008). Police Retirement: Life After Retirement [monografía].
Recuperado de http://www.policesuicideprevention.com
Thrasher, R., (2013). Standing by uniformed officers: why local governments should
consider a retired officer policy. Public management, 95, 22-23. Recuperado de
http://www.ebscohost.net
Tuohy, A., Knussen, C., & Wrennall, M. J., (2005). Effects of Age on Symptoms of
Anxiety and Depression in a Sample of Retired Police Officers. Journal
Psychologist and Aging. 20, 202-210. doi: 10.1037/0882.7974.20.2.202
Velázquez, B. (2013, marzo 4). Obligados a hacer de tripas corazones. El Nuevo
Día, pp. 20-21.
Vickerstaff, S., & Cox, J., (2005). Retirement and Risk: the individualization of
retirement experiences. Sociological Review, 53, 77-95. Recuperado de
http://www.hosted.exlibrisgroup.com
Violanti, J. M., (1990). Police Retirement: The Impact of Change. Recuperado de
http://www.policesuicideprevention.com
Violanti, J. M., (2007). Police Suicide: Epidemic in Blue. (2da ed.). Illinois, USA.
Charles C. Thomas Publisher, LTD.
Violanti, J. M., Gu, J. K., Charles, L. E., Andrew, M. E., Burchfiel, C. M., & Fekedulegn,
D., (2011). Is Suicide Higher Among Separated/Retired Police Officers? An
Epidemiological Investigation. International Journal of Emergency Mental
Health. 13, 221-228. Recuperado de http://www.researchgate.net
95
Violanti, J. M., Harthley, T. A., Gu, J. K., Fekedulegn, D., Andrew, M. E., & Burchfiel,
C.M., (2013). Life Expectancy in Police Officers: A comparison with the U. S.
General Population. International Journal of Emergency Health and Human
Resilience. 15, 217-228. Recuperado de http://www.researchgate.net
Violanti, J. M., (2014). Police resiliency: an integration of individual and organization.
International Journal of Emergency Mental Health and Human Resilience, 16,
pp. 112 Recuperado de http://ww.researchgate.net.
Wang, M., (2007). Profiling retiree in the retirement transition and adjustment process:
examining the longitudinal change and patterns of retirees’ psychological well-
being. Journal of Applied Psychology, 92, 455-474.
doi: 10.1037/0021-9010.92.2.455
Wang, M., Henkens, K. & Solinge, H. V. (2011). Retirement Adjustment: A Review of
Theoretical and Empirical Advancements. Journal of American Psychologist. 66,
204-213. doi: 10.1037/a0022414
Wang, M., & Shi, J., (2014). Psychological research on retirement. Annual Review of
Psychology, 65, 209-233. doi: 10.1146/annure-psych-010213-115131
96
BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA
Beck, F., Gillison, F., & Standage, M., (2010). A theoretical investigation of the
development of physical activity habits in retirement. British Journal of Health
psychology, 15, 663-679. doi: 10.1348/135910709X479096
Byles, J., Tavener, M., Robinson, I., Parkinson, L., Warner, S. P., Stevenson, D., Leigh,
L., & Curryer, C., (2013). Transforming Retirement: New Definitions of Life
After Work Journal of woman aging, 25, 24-44.
doi: 10.1080/08952841.2012.717855
Escarbajal, A., & Martínez, S., (2012). Jubilación, educación y calidad de vida. Revista
Interuniversitaria de Pedagogía Social, 20, 245-272. Recuperado de
http://www.redalyc.org
Kleiber, D., & Bayón, M. F., & Cuenca, A. J., (202). La educación para el ocio como
preparación para la jubilación. SIPS-Pedagogía Social Revista Interuniversitaria,
20, 137-176. Recuperado de http://www.redalyc.org
Löckenhoff, C. E., Terraciano, A., & Costa, P. T., (2009). Five-factor model personality
traist and the retirement transition: longitudinal and cross-sectional associations.
Psychology and Aging, 24, 722-728. doi: 10.1037/a0015121
Madrid, G. A., (2000). La preparación para la jubilación: revisión de los factores
psicológicos y sociales que inciden en un mejor ajuste emocional al final del
desempeño laboral. Revista Anales de Psicología, 16, 87-99. Recuperado de
http://www.um.es
97
Merrill, H. S., (2012). So are you retired or what?: notes from lifelong journey in search
of possible selves. Adult learning, 23, 153-155.
doi: 10.1177/1045159512452867
Petkoska, J., & Earl, J. K., (2009). Understanding the influence of demographic and
psychological variables on retirement planning. Psychology and Aging, 24, 245-
251. doi: 10.1037/a0014096
Pinquart, M., & Schindler, I., (2007). Changes of life satisfaction in the transition to
retirement: a latent class approach. Psychology and Aging, 22, 442-455.
Doi: 10.1037/0882- 7974.22.3.442
Pinquart, M., & Schindler, I., (2009). Changes of leisure satisfaction in the transition to
retirement: a latent-class analysis. Leisure Sciences, 31, 311-329.
doi: 10.1080/014904009029882275
Potocnik, C., Tordera, N., & Peiró, J. M., (2008). Ajuste al retiro laboral en función del
tipo de retiro y su voluntariedad desde una perspectiva de género. Revista de
Psicología del Trabajo y de las Organizaciones, 24, 347-364. Recuperado de
http://www.researchgate.net
Rappaport, A., (2009). Phased retirement: an important part of the evolving retirement
scene. Benefits Quarterly, 25, 38-50. Recuperado de http://www.ebscohost.com
Reitzes, D. C., & Mutran, E. J., (2004). The transition to retirement: stages and factors
that influence retirement adjustment. International Journal Aging and Human
Development, 59, 63-84. doi: 10.2190/nypp-rffp-5rfk-8eb8
Rodríguez, F. N., (2006). Actitudes hacía la jubilación. Revista Interdisciplinaria, 24, 5-
42. Recuperado de http://www.scielo.org.ar
98
Apéndice A
Preguntas Guías
99
100
Apéndice B
Boletín Informativo
101
102
Apéndice C
Cartas enviadas y recibidas de los colaboradores
103
104
105
106
107
Apéndice D
Consentimiento Informado
108
109
110
Apéndice E
Solicitud y Aprobación uso de la Clínica de Servicios Psicológicos
111
112
113
