BOLETIN OFICIAL DE AMEC • CASA DE ALABANZA · ir de poder en poder, de gloria en gloria, de...

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L a búsqueda de la Presencia de Dios genera, produce y afirma una cantidad de bendiciones y testimonios tan enormes que no pueden ser enumerados. Las reflexiones anteriores nos han permitido rasgar la superficie de algunas de ellas. Hemos considerado que esa Presencia nos provee dirección para la vida, nos llena de gozo y nos alimenta en el camino. Hemos visto que esa Presencia redefine y afirma nuestra identidad en el Señor, y no se detiene hasta conseguir que nos parezcamos al Cristo, el Amado de nuestras vidas. E n adición a esto hemos visto que esa Presencia nos invita a adorar conscientes de cómo se afecta nuestro entorno cuando decidimos responder a esa Presencia en Cristo Jesús. Hemos visto que esta respuesta cuesta, que posee un costo personal y emocional invaluable, que implica humillación, que nos obliga a hacer todo lo que podemos y que la adoración verdadera requiere compromiso. Hemos visto que esa Presencia convoca, llama, recluta y comisiona. A hora bien, hemos aprendido que nuestra motivación tiene que ser el deseo de estar cerca del Señor. El salmista lo repasaba en las expresiones vertidas en el Salmo 84. En ese Salmo nos dicen que el que busca al Señor privilegia encontrarle en el Templo, en la moradas amables del Señor. Esos encuentros transforman nuestro vocabulario, siempre convierte la alabanza en el fruto de nuestros labios y garantiza que esto será perpetuo. O sea, que uno puede alabar a Dios de manera ininterrumpida en cualquier situación de la vida. Esos encuentros nos capacitan para transformar cualquier situación negativa de la vida, los “valles de lágrimas,” convirtiéndonos en agentes de cambio. Como decíamos en la reflexión más reciente, es la capacidad de ir de poder en poder, de gloria en gloria, de victoria en victoria (Sal 84:7), de virtud en virtud, de entrenamiento en entrenamiento, de valor en valor, de fuerza en fuerza y de bien en bien. No olvidemos que estas son solo algunas de las traducciones del vocablo hebreo que se traduce como “poder.” En otras palabras, esto es como ir de un nivel de gracia a otro más alto, que uno nunca retrocede, que siempre vamos hacia adelante. N o creo que haga falta evidencia adicional para confirmar lo antes expuesto: la búsqueda de la Presencia de Dios genera, produce y afirma una cantidad de bendiciones y testimonios tan enormes que no pueden ser enumerados. Es muy cierto que todo creyente sabe que tenemos que andar en esa Presencia, acompañados por ella, cubiertos por ella y dirigidos por ella. La Biblia asevera esto constantemente. Por ejemplo, esta es la expresión medular de Eliezer (Gn 24:40), el mayordomo de Abraham cuando testifica acerca de la tarea que se le ha encomendado, la de buscarle esposa al hijo del padre. Dirección: Salida #38, Ave. Trío Vegabageño, Calle Betánces #11 9 de febrero de 2014 • Año 2014 • Volumen IX • No. 417 BOLETIN OFICIAL DE AMEC • CASA DE ALABANZA

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La búsqueda de la Presencia de Dios genera, produce y afirma una cantidad de bendiciones y testimonios tan

enormes que no pueden ser enumerados. Las reflexiones anteriores nos han permitido rasgar la superficie de algunas de ellas. Hemos considerado que esa Presencia nos provee dirección para la vida, nos llena de gozo y nos alimenta en el camino. Hemos visto que esa Presencia redefine y afirma nuestra identidad en el Señor, y no se detiene hasta conseguir que nos parezcamos al Cristo, el Amado de nuestras vidas.

En adición a esto hemos visto que esa Presencia nos invita a adorar conscientes de cómo se afecta nuestro entorno cuando decidimos

responder a esa Presencia en Cristo Jesús. Hemos visto que esta respuesta cuesta, que posee un costo personal y emocional invaluable, que implica humillación, que nos obliga a hacer todo lo que podemos y que la adoración verdadera requiere compromiso. Hemos visto que esa Presencia convoca, llama, recluta y comisiona.

Ahora bien, hemos aprendido que nuestra motivación tiene que ser el deseo de estar cerca del Señor. El salmista lo repasaba en las expresiones vertidas en el

Salmo 84. En ese Salmo nos dicen que el que busca al Señor privilegia encontrarle en el Templo, en la moradas amables del Señor. Esos encuentros transforman nuestro vocabulario, siempre convierte la alabanza en el fruto de nuestros labios y garantiza que esto será perpetuo. O sea, que uno puede alabar a Dios de manera ininterrumpida en cualquier situación de la vida. Esos encuentros nos capacitan para transformar cualquier situación negativa de la vida, los “valles de lágrimas,” convirtiéndonos en agentes de cambio. Como decíamos en la reflexión más reciente, es la capacidad de ir de poder en poder, de gloria en gloria, de victoria en victoria (Sal 84:7), de virtud en virtud, de entrenamiento en entrenamiento, de valor en valor, de fuerza en fuerza y de bien en bien. No olvidemos que estas son solo algunas de las traducciones del vocablo hebreo que se traduce como “poder.” En otras palabras, esto es como ir de un nivel de gracia a otro más alto, que uno nunca retrocede, que siempre vamos hacia adelante.

No creo que haga falta evidencia adicional para confirmar lo antes expuesto: la búsqueda de la Presencia de Dios genera, produce y afirma una cantidad de

bendiciones y testimonios tan enormes que no pueden ser enumerados.Es muy cierto que todo creyente sabe que tenemos que andar en esa Presencia, acompañados por ella, cubiertos por ella y dirigidos por ella. La Biblia asevera esto constantemente. Por ejemplo, esta es la expresión medular de Eliezer (Gn 24:40), el mayordomo de Abraham cuando testifica acerca de la tarea que se le ha encomendado, la de buscarle esposa al hijo del padre.

Dirección: Salida #38,Ave. Trío Vegabageño,

Calle Betánces #11

9 de febrero de 2014 • Año 2014 • Volumen IX • No. 417BOLETIN OFICIAL DE AMEC • CASA DE ALABANZA

Así mismo, no podemos obviar que la reacción inicial e instintiva que produce el pecado es la de esconderse de esa Presencia. Los modelos de los primeros capítulos del primer libro de la Biblia son

ejemplos fieles y demostraciones incuestionables de esto. Por ejemplo, en Gn 3:8 encontramos que esa es la reacción instintiva de Adán y Eva luego de haber caído de la gracia divina:

8 Y oyeron la voz de Jehová Dios que se paseaba en el huerto, al aire del día; y el hombre y su mujer se escondieron de la presencia de Jehová Dios entre los árboles del huerto.

La voz de Dios, la misma que debe, puede y tiene la capacidad de generar fe en aquellos que escuchan sus Palabras, produce

miedo y hace que el ser humano se esconda (“châbâ,” H2244), creer que podemos ocultarnos de ella. Esto se agrava cuando el pecado se transforma en uno multidimensional; cuando se peca contra Dios y contra los demás. Allí procuramos escondernos (“sâthar,” H5641) de esa Presencia, intentar vivir como si pudiéramos estar ausentes de ella, cubiertos con alguna clase de frazada que nos provoque la impresión de que podemos ocultarnos de Dios, vivir sin Él, o que nos produce tanto temor que creemos que nos va a destruir. Esta es la reacción de Caín cuando se sabe sentenciado por Dios, luego de haber asesinado a su hermano Abel (Gn 4:14).

Cuando Dios asume esta postura (Isa 8:17), lo hace porque nuestro pecado ha sido mortal. La buena noticia es que Su misericordia,

ese amor obstinado que tiene por nosotros, no le permite mantenerse alejado de nosotros. Caín no se percata que en vez de ser ajusticiado por Dios, se le ha colocado una marca en la frente, que no es otra cosa sino la oportunidad para que se arrepienta.

El análisis de este vocablo hebreo es muy interesante. Basta considerar que “sâthar” es la reacción de Moisés cuando Dios se

le revela en el Sinaí (Ex 3:6). Esto puede implicar que Moisés estaba muy consciente de los pecados que había cometido. La buena noticia es que en la Presencia de Dios hay remedio para perdonar el pecado y quitar nuestras culpas.

Es importante subrayar que nada ni nadie puede huir, escapar, caminar o correr de la Presencia de Dios. El salmista lo expresa así

cuando dice lo siguiente en el Salmo 139:7

7 ¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde huiré de tu presencia?

Recordemos lo que dice la Palabra en Hebreos 4:13

13 Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.

Este pasaje es uno muy hermoso toda vez que continúa diciendo que nosotros tenemos un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, que su nombre es Jesús el Hijo de Dios y que por lo tanto podemos

retener nuestra profesión. Esto lo dice apoyado en que ese sumo sacerdote puede compadecerse de nuestras debilidades y que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. La conclusión final de ese capítulo cuatro (4) es que podemos acercarnos confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro (Heb 4:14-16).

Sabiendo esto, entonces hay que concluir que el anhelo por la Presencia de Dios no puede ser movido por otra cosa que el amor que busca reciprocar el Amor que recibimos del Padre Celestial. Hemos

visto que los beneficios son muchos. Sin embargo, también hemos visto que nuestra fragilidad y nuestra naturaleza pecaminosa son y serán el impedimento más grande para estar en esa Presencia. Al mismo

tiempo, hemos visto que la misericordia divina no nos permite escapar ni escondernos de ella.

A partir del 19 de Febrero y hasta el 16 de abril de 2014 se estará ofreciendo el nuevo curso de

capellanía en nuestra iglesia. Los conocimientos que adquirirás te podrán ayudar a desempeñar en otras áreas ministeriales. Las clases se ofreceran todos los miércoles a las 7:00 PM. Te invitamos a ser parte del grupo de escogidos que lleve a los más necesitados

Palabra de Aliento y Fortaleza.

PARA MAYOR INFORMACION Y SEPARAR SUS ESPACIOS FAVOR DE COMUNICARSE CON: PASTOR ERNESTO VELEZ (787)769-4011 • HNA. DORIS CARABALLO (787) 454-1375

• HNA MAGIE VIERA- 787- 410-3172

Todo esto apunta que el Amor de Dios (con letra mayúscula) hace lo indecible para que vayamos

y moremos en la Presencia del Altísimo. Es por esto que reitero que el anhelo por la Presencia de Dios no puede ser movido por otra cosa que el amor que busca reciprocar el Amor que recibimos del Padre que está en los Cielos.

Ese anhelo debe ser constante e insaciable. Ese anhelo debe estar definido por el deseo de llegar

ante esa Presencia hay que procurar llegar con regocijo (Sal 100:2) y con alabanza (Sal 95:2). Estas aseveraciones serán el tema central de la próxima reflexión.

Aida Rivera Rivera.........Centro MédicoBrenda Ramos............................Hogar Carla Morales..........Hosp. Aux. Mutuo Cynthia Medina.........................Hogar Daniel Pérez..............................Hogar Gloria Huertas Martínez.............Hogar Héctor Nieves......Hosp. Área Carolina Helen Rivera.......................KissimmeeEdith Morrabal Cintron..Hosp. Aux. Mutuo Irma Torrens...............................HogarLydia Santiago Maldonado...Hosp. El MaestroMary Bauzo.........Hosp. Área CarolinaNilda González.........................Hogar Nydia Ortiz..........................New YorkObdulia Quiñónez..Hosp. Aux. Mutuo Radamés Colon..........................Hogar Sharon Merced...........................TexasPriscila Pizarro....Hosp. Cardiovascular

AVISO IMPORTANTE: Las personas de Capellanía y la Tercera Edad que se registraron para la gira del

sábado 15 de febrero de 2014 en Jayuya, deberán estar en el estacionamiento de la Iglesia AMEC a las 7:00 am para iniciar el proceso de pago y registro antes de abordar la guagua, las cuales saldrán

a las 8:00 am.

Deberán llevar vestimenta de mahon azul, camisa blanca, y abrigo liviano. Además

de sus meriendas

Reunión mensual de Hombres de Impacto

El tema que estaremos compartiendo:

¡Como un hombre cristiano debe manejar sus Finanzas en

estos tiempos!

La reunión está convocada para el miércoles 12 de febrero de

2014 en las oficinas del Hno. Johnny Morales en el edificio

Helvetia. Aquellos hombres que deseen incorporarse al ministerio están cordialmente invitados. Para mayor información de cómo llegar

al lugar de la reunión llamar a Millie Figueroa al

ATENCIÓN: Tiene tu niñ@ problemas con la lectura,

escritura y/o matemáticas?El Centro de Fortalecimiento de Destrezas Educativas tiene

espacios disponibles para niños de 7 a 14 años de edad,

entre los grados de Primero a Octavo, que necesiten fortalecer

la lectura, escritura y/o matemáticas. Llámenos al

(787) 256-3331 Ext. 1 de 4:00 p.m. a 9:00 p.m.

Queremos ayudarle!!!!!