4.-_Gonzalez-Heidegger y La Muerte

7/25/2019 4.-_Gonzalez-Heidegger y La Muerte

1/17

Disputatio. Philosophical Research Bulletin, Vol.1 No. 1, Jun. 2012, pp. 79-94 Gonzlez Moscosowww.disputatio.eu | ISSN: 2254-0601 | Salamanca-Madrid

Consideraciones en torno a la estructura

ontolgica existencial de la muerte en MartinHeidegger

Considerations on the ontological existential

structure of death in Martin Heidegger

Elsa Gonzlez Moscoso

Recibido: 01-Enero-2012| Aceptado:29-Marzo-2012| Publicado:30-Junio-2012 El autor(es) 2012. | Trabajo en acceso abierto disponible en (m) www. disputatio.eu bajo una licencia CCLa copia, distribucin y comunicacin pblica de este trabajo ser conforme la nota de copyright. Consultas a (B) [email protected]

Resumen:La pretensin del presente texto es el de dar cuenta de la concepcin heideggeriana de la

muerte a partir de las consideraciones de El Ser y el Tiempo. Para tal propsito se describe y desarrollabrevemente algunos elementos centrales tales como la idea de la muerte como fenmeno de la vida yno su simple terminacin; la explicacin de la muerte como posibilidad o un an no; la proyeccinexistenciaria de la propia muerte; la libertad de la muerte como abrirse a ella y la existencia autntica.Todos estos elementos gravitando alrededor del concepto ontolgico-existenciario de la muerte.Palabras clave:Muerte Dasein Sorge Existencia Autntinca Ontologa

Abstract:The aim of the present writing is to offer an account of the heideggerian conception of

death from the considerations ofBeing and Time. For that purpose, this paper briefly describes anddevelops some central elements such as the idea of death as a phenomenon collateral to life and notits simple ending; the explanation of death as a possibility or a not yet; the existentialist projectionof the own death; the freedom of death as an opening to it and to the true existence. All of theseelements gravitating around the ontological-existential concept of death.Key words:Death Dasein Sorge True Existence Ontology

E. Gonzlez Moscoso (B)Universidad de Cuenca, Ecuadoremail: [email protected]

ARTCULO


2/17

80 | La estructura ontolgica existencial de la muerte en Heidegger

Consideraciones en torno a la estructura ontol-

gica existencial de la muerte en Martin Heidegger

Elsa Gonzlez Moscoso

LA FIL OSOFA DESDE SUS COMI ENZOS y de muy diversos modos se ha planteado elhecho de la muerte como problema fundamental, sin embargo, no es sino hasta losplanteamientos del pensamiento contemporneo cuando la pregunta por la muerte,que ya ha dejado de ser una preocupacin por la posibilidad de trnsito o paso, se torna en

un problema que se revela con toda su fuerza; la muerte se muestra como tal o como unareflexin sobre la finitud de la temporalidad humana.

La reflexin filosfica sobre nuestra condicin de finitud y de contingencia, o lo que eslo mismo, sobre el hecho de nuestro evidente carcter mortal dado que, efectivamente,ser real significa de suyo, ser mortal , muestra una preocupacin profunda por intentarcomprender, no precisamente el hecho fsico y biolgico de la muerte, sino su carcterantolgico, especialmente en las direcciones filosficas existencialistas, para las que lamuerte o el hecho mismo del morir humano adquiere plena significacin ms all de lacesacin. La muerte ya no es un mero suceso de la vida, sino su misma determinacinesencial.

De hecho, la relacin entre la vida y la muerte no es de ningn modo un asunto obvioni exento de serias dificultades. La reflexin filosfica en este sentido, sin desconocer quela muerte es un fenmeno natural y tambin social, se cie a la nocin de la muerte comonocin filosfica y no solamente como un fenmeno humano. La filosofa contemporneaha insistido en la preocupacin de la muerte como una condicin decisiva de la existenciahumana y en cuanto tal, nos afecta; de tal modo que la nocin de la muerte, ms all de serconsiderada como la mera cesacin, es entendida y pensada como la muerte propia, el morirde cada quien y en este sentido es de suyo intransferible, irrebasable, irreductible, cierta ysingular.

La consideracin de la muerte propia, responde a la apropiacin humana de la muerte,niega por tanto la absoluta exterioridad de la muerte respecto de la vida, o diramos, mirala posibilidad de formas de interiorizacin humana de la muerte. Esta reflexin filosfica

sobre la muerte tiende hacia la revalorizacin profunda de la vida como determinacinfundamental de lo real. Se trata de pensar entonces la muerte como un fenmeno propio,inmanente a la vida, nada contrario u opuesto a ella, sino como especie de propiedad de la

vida misma.

Hablar de la muerte propia como de una soledad metafsica en el morir, a decirde Ferrater Mora, no es hacer del hombre una mnada absolutamente impenetrablee incomunicable; es poner de relieve que, al personalizarse mximamente, el hombre

Elsa Gonzlez Moscoso | Disputatio [2012] 1-1: pp. 79-94


3/17

La estructura ontolgica existencial de la muerte en Heidegger | 81

usufructa asimismo una mxima dosis de muerte personal.1 Y es que la muerte no essimplemente la terminacin de la vida del individuo, sino su misma revelacin y realizacin.

Y si en la auto-realizacin y autor-revelacin de la persona humana puede descubrirse su ser

en cuanto ser libre, cabr decir que la muerte de cada cual es lo que ms lo acerca a la libertad.

2

Heidegger dir que:

En el morir se muestra que la muerte est constituida antolgicamente por el ser en cada casomo y la existencia. El morir no es un hecho dado, sino un fenmeno que hay que comprenderexistenciariamente...

3

No interesa por tanto a Heidegger la muerte como un acontecimiento terminal, sino lamuerte como una estructura de la existencia humana. Por tanto, interesa a Heidegger unanlisis antolgico o anlisis existenciario como l lo denomina y no un anlisis ntico dela muerte.4 Solo a partir de una comprensin antolgico-existencial se muestra o revela lamuerte como una estructura del ser del hombre, o su estructura existencial de ser para lamuerte.

En la tarea de comprender ontolgica y existenciariamente la muerte, hemos de

considerar al ser de la existencia como momentneo, extendindose entre las dimensionestemporales del pasado, del presente y futuro; en esta medida, los conceptos de muerte yfinitud deben ser pensados en el mbito de la temporalidad, dado que, segn Heidegger, latemporalidad constituye el ncleo ms ntimo del hombre, o aquello que determina la finitudcomo finita. Heidegger entiende el tiempo como un constitutivo de la existencia humana,ponindolo en relacin interna con nuestra existencia.

Efectivamente, enEl Ser y el Tiempo(1927) el anlisis de la temporalidad se presenta en

primer lugar, como explanacin del ser-en el mundo; sin embargo, elDaseino ser ah en sutrascendencia no realiza su vinculacin con el mundo de modo esttico o como a travs deuna serie de ahoras, esta forma de vinculacin corresponde a la concepcin vulgar de tiempoderivado de nuestro trato cotidiano con las cosas: sin principio ni fin, infinito, irreversible yque pasa sin cesar.5

El ser-en-el-mundo y el mundo mismo son afectados por la temporalidad; empero, elDaseino ser ah antes que nada es un ser arrojado en el mundo, como fuera de s, salido

de s, delante de s ante sus posibilidades, dado que elDaseino ser ah es siempre, como1. Ferrater Mora. J. 1967: p.4472. Ferrater Mora. J. 1967: p.4503. Heidegger, M. 1988: p.2624. El anlisis existencial propuesto por Heidegger no pretende dirigirse a la determinacin de un particularasunto o esencia, sino al modo anterior a cualquier forma concreta de existencia. Se entiende los existenciarioscomo estructuras ms bien formales, en este sentido pretenden dar cuenta de algo previo.5. Heidegger (1988: p.380) resume su idea del tiempo del siguiente modo: El tiempo es originalmente comotemporacin de la temporalidad que hace posible la constitucin de la estructura de la cura. La temporalidades esencialmente exttica. La temporalidad se temporaca originalmente desde el advenir. El tiempo es finito.

| Elsa Gonzlez MoscosoDisputatio [2012] 1-1: pp. 79-94


4/17


veremos, un poder ser. El ser ah, en su autenticidad, o lo que es lo mismo, cuando deja deconcebirse como una cosa entre las cosas, se adelanta siempre a s mismo como proyectoo como cuidado (Sorge). El sentido del ser-ah como cuidado es la temporalidad, lo quesignifica que el hombre es el ser del cuidado dado que es un ser temporal, es decir, finito.

En la concepcin heideggeriana del tiempo, el presente ya no es un momentoprivilegiado; solo a partir de la significacin del tiempo como unidad de los tres momentos,pasado, presente y futuro, se comprende como horizonte desde el cual aprehendemos el ser.Todo es temporal, la existencia misma es temporal. De tal modo que el tiempo no es unente, tal como percibe la concepcin vulgar, sino es la expresin misma del hecho de existir,porque existir es temporalizarse. Por otro lado, habr que advertir que la temporalidad nose resuelve en la intencionalidad de la conciencia, como en el caso de Husserl, sino que,

constituye la estructura misma del ser-en-el-mundo.En El Ser y el Tiempo, el anlisis de la existencia se convierte en punto de partida y de

insercin permanente de la cuestin del ser, en cuanto esta debe ser comprendida como ser-ah. Alberto Constante recuerda que lo importante, . . . es ver en la existencia del ah (delser) y en esto precisamente consistira el giro del pensamiento heideggeriano, es decir, lainversin de la perspectiva: Tiempo y ser, retorno desde el horizonte del tiempo al ser, puesms que de un giro del pensamiento, es a la cosa misma.6 No est de ms recordar que

Heideggger no preguntaba por el ser desde el ngulo de la subjetividad, tampoco planteabaun problema antropolgico; la realidad humana se conceba desde el problema del ser. Erael ser mismo, que desde su dimensin temporal afectaba alDasein, planteando el problemafuera de la relacin sujeto objeto, propia de la metafsica tradicional.

Es precisamente desde la dimensin temporal del ser ah, en la perspectiva planteada,desde la que deberemos partir para comprender el fin del ser-en-el-mundo, esto es, lamuerte. El anlisis del el ser-ah y la temporalidad, Heidegger lo aborda en la segunda

seccin de El ser y el tiempo, que intentaremos considerar. Es entonces, desde la necesidadde una perspectiva antolgica y existenciaria, y no subjetiva ni antropolgica, desde dondeHeidegger podr hacer del hombre como ser-para-la muerte el elemento privilegiado deaquello que l llama la existencia autentica.

La analtica de la existencia del Dasein o ser ah, a partir de la descripcin de susestructuras ntimas, hace patente en qu consiste el ser del ente en cuyo ser le va estesu ser; resolverse a ir al encuentro de la muerte de una manera autentica hace posible vivirel tiempo futuro para ser en el presente; lo que va siendo es lo que con conciencia autntica,con el estado de resuelto, se ha sido en el pasado, de modo que el futuro surge del pasado,del mismo modo que el pasado slo es autntico en vista de un futuro comprendido; el serah, vive en el presente como ser tendido entre el pasado y el futuro, pero con conciencia ocomprensin, no precisamente intelectual de su finitud, de su facticidad, de su angustiay de su ser para la muerte. En esto precisamente consiste la temporalidad e historicidaddel ser humano. El ser ah vive en el tiempo y en la historia, no porque se encuentre sumido

6. Constante, A. 1986: p.101



5/17


en ellos, sino que el ser ah es histrico y temporal, porque tiempo e historia surgen de sumismo ser. As, se es autnticamente o se tiene una existencia autentica cuando se es demodo finito o se asume comprensivamente como tal; la existencia autntica es entonces lafinita

La muerte, como fenmeno del ser ah, como fin del ser-en-el-mundo, como un fin propiodel poder ser del ser ah, cuyo sentido original es la temporalidad, requiere, entonces deuna analtica existenciaria, Esta exgesis lleva a ver que un poder ser propio del serah reside en el querer tener conciencia moral. Ms esta posibilidad existencial tiende, deacuerdo con el sentido de su ser, a definirse existencialmente por el ser relativamente a lamuerte.7 Ser relativamente a la muerte dado que es en la forma de ser del ser ah comosu posibilidad ms propia de su poder ser. Siendo la muerte un fenmeno del ser ah, como

fin del ser-en-el-mundo inherente al poder ser propio del ser ah, el morir resulta ser unaexperiencia absolutamente propia e intransferible. Como ha dicho Heidegger:

Nadie puede tomarle a otro su morir. 8

O lo que es lo mismo, nadie muere en cabeza ajena; resulta ser una experiencia tansingularmente propia que es imposible realmente, aprender de la muerte de los dems;

ni siquiera logramos tener una vaga intuicin que pueda orientarnos. La muerte es siemprela propia muerte; en palabras de Heidegger:

el morir es algo que cada ser-ah tiene que tomar en su caso sobre s mismo. La muerte es ,en la medida en que es esencialmente en cada caso ma.

9

La muerte se desemboza sin duda como una prdida, pero ms bien como una perdida queexperimentan los supervivientes. En el padecer la prdida no se hace accesible la prdida misma

del ser que padece la muerte. No experimentamos en su genuino sentido el morir de los otros ,sino que a lo sumo nos limitamos a asistir a l.

10

Aunque efectivamente tengamos contacto con la muerte a partir de la muerte de los dems,o sta por alguna razn nos resulte cercana y cotidiana, sin embargo, nunca estamos deltodo preparados y reaccionamos siempre con angustia ante tal evento. Este tipo de angustiaque es existencial, tanto para Heidegger como para Sartre, no consiste en el miedo o el temor

frente a la posibilidad de la muerte, sino en el sentimiento nuestro frente a la captacin dela nada que soy. En el momento de la angustia queda al descubierto la nada de la cada,se revela la nada de la facticidad y la nada de la existencia. Por esto mismo, la angustia escapaz de revelar la posibilidad de la propia muerte.

7. Heidegger. M. 1988: p. 2568. Heidegger. M. 1988: p.2629. Heidegger. M. 1988: p.26210.Heidegger. M. 1988: p.261



6/17


La angustia ante la muerte es ante el poder ser ms peculiar, irreverente e irrebasable. Elante que de esta angustia es el ser en el mundo mismo. El por qu de esta angustia es elpoder ser del ser ah absolutamente. Este no es un sentimiento cualquiera y accidental dedebilidad del individuo, sino en cuanto fundamental encontrarse del ser ah, el estado de

abierto de que el ser ah existe como yecto ser relativamente a su fin.

11

Filosficamente, no hay ms nada, que la nada de la muerte que nos lleva a dejar de estaren el mundo de manera irremediable, esto es, la finalizacin del ser ah o el finar del serah.12 Sin embargo, el finar13 del ser-ah no quiere decir que el ser ah ha llegado finalmentea su realizacin o a la plenitud, por la evidente razn de que el ser-ah, mientras es, essiempre un an no, es decir, tiene que llegar a ser lo que an no es, esto es, que el ser-ahes mientras es, ya su an no, de tal modo que es, al mismo tiempo su fin; sin embargo,este an no, no es lo que falta y deber completarse en algn momento, no es tampoco almodo de una suma de fragmentos que tiende paulatinamente a completarse o a convertirseen real hasta el desaparecer del an no14. Teniendo el ser ah un carcter distinto de losdems seres intramundanos, siendo imposible clasificarlo y categorizarlo como se hace conlos dems entes, el an no, posee ms bien el sentido de una inminencia de un poder serque pertenece al ser-ah, que en realidad es l mismo; el an no pertenece al ser ah antesde que este sea real. El an no solo puede ser aniquilado cuando el ser ah ya no es ms o

ya no es ms un poder ser y esto ocurre nicamente con la muerte.En el pargrafo 48 de El Ser y el Tiempo, titulado Lo que falta, el fin y la totalidad,

Heidegger se propone explicar algunas variantes o formas regionales del fin y la totalidad,como determinaciones antolgicas, siguiendo la necesidad del itinerario de la preguntapor el Ser. Fin y totalidad, frente a la estructura existenciaria del ser ah, resultan serontolgicamente inadecuados, de tal modo que habr que tratarlos como existenciarios,significa exponer el sentido existenciario del llegar al fin del ser ah, y mostrar como ese

final constituye un ser total del ente que existe, es decir, la muerte como posible le pertenecealDasein, ello garantizara segn Heidegger, la posibilidad de una exgesis antolgica de lamuerte.

En el pargrafo mencionado, Heidegger explica el an no o la forma en que la muertele falta al Dasein o ser ah, mostrando que ese faltar se afinca en un pertenecer. En estepertenecer la muerte se muestra como una estructura inmanente a la vida. En la perspectivade dejar ver o mostrar a la muerte como un existenciario y su apropiacin humana,

Heidegger expone la determinacin de la muerte como ese faltar o an no fundado en un11.Heidegger. M. 1988: p.27412. El morir desde el concepto biolgico-fisiolgico mdico o de exitus, no coincide con el concepto filosficoontolgico de finalizar.13. finar en el sentido de cesar. Podra tener algunas variantes ontolgicas. cfr. Heidegger. M. 1988: pp.267-26814. Para explicar el sentido de la muerte como posibilidad, y su determinacin como an no, fundado enun pertenecer, Heidegger acude a tres analogas: la deuda, la lunay la fruta. Estos ejemplos quieren mostrarla modalidad en la que puede afirmarse que la muerte que como posibilidad, le pertenece al Dasein. cfr.Heidegger. M. 1988: 48, pp.266-268



7/17


pertenecer; sin embargo, esta no es una condicin exclusiva de la muerte sino una condicinque caracteriza al ser ah en cuanto tal.

Al ser ah, como poder ser, siempre le falta un algo que an no se ha hecho real, lo quesignifica un constante estado de inconclusin que es propio de la constitucin fundamentaldel ser ah. Entendemos entonces que la existencia como tal no es algo concluso, sino que esy est permanentemente abierta a posibilidades, lo que significa que siempre falta algo en elpoder ser. Heidegger dir que La muerte es un modo de ser que el ser ah toma sobre stan pronto como es15,desde el momento en que llegamos al mundo, la muerte es pues yasu condicin. Y es que elDaseino ser-ah como existencia es siempre un poder ser; el ser delhombre consiste efectivamente en un estar referido a posibilidades en su existir concreto enun mundo de cosas y de otras personas, es decir, es un ser- en -el -mundo. Siendo elDasein

o ser ah siempre un poder ser como posibilidad y no una simple presencia al modo de losentes, el estar muerto no es ms que uno de sus modos de ser. En otras palabras, la muertees una posibilidad existenciaria, un elemento que constituye y no de modo accidental elactual ser del ser ah entendido como proyecto.

La muerte como una posibilidad existenciaria extrema o la determinacin de la muertecomo una posibilidad, despus de la cual ya no es posible otra posibilidad, se estableceprecisamente en la exgesis del ser posible. La muerte de algn modo pertenece al mbito

del an no, no como una pura posibilidad simplemente terminal, sino como un poder ser quedetermina alDaseino ser ah tan pronto como es. La muerte como posibilidad le perteneceal Dasein, pero adems la posibilidad de la muerte es inminente. Heidegger expresa estaidea del siguiente modo:

El haber llegado al fin quiere decir existenciariamente: ser relativamente al fin. El extremoan no tiene el carcter de algo relativamente a lo cual se conduce el ser ah. El fin esinminente para el ser ah. La muerte no es algo que an no es ante los ojos, no es lo que

falta ltimamente, reducido a un mnimo, sino ms bien una inminencia.

16

El ser ah como siendo siempre un poder ser como posibilidad, significa pues, que laposibilidad del ser ah es lo que posibilita todas las posibilidades en tanto que susposibilidades. Por otra parte, decir que el ser ah es un poder ser es afirmar que el serah es ser- posible. La nocin de posibilidad en Heidegger, ciertamente no encajan con losmodelos cotidianos que piensan la posibilidad como un suceso que se presume se llevar acabo, o cuando decimos que algo es posible cuando no es real ni tampoco necesario; porel contrario, aunque las posibilidades son un an-no, estas forman y constituyen el ser ah,no de forma accidental sino constitutiva. La verdadera manera en la que el ser ah existe,es precisamente proyectando posibilidades. Por lo mismo, la muerte como posibilidad nosignifica un mero faltar que deber realizarse en algn momento, sino como una posibilidadsiempre presente y siempre inminente. El ser del ser ah puede comprender su propio ser

15. Heidegger. M. 1988: p.26816.Heidegger. M. 1988: p.273



8/17


que es el poder ser. La comprensin del ser ah est abierta a las posibilidades que residen enl mismo, incluida su ms radical posibilidad que es la muerte. La comprensin del ser aharroja las posibilidades ante l, delante o fuera de l, es decir, que la comprensin proyectaposibilidades como posibilidades y no posibilidades particulares o concretas; la comprensin

abre aquello de lo que es capaz el ser del ser ah como poder ser. Hemos de apuntar que lanocin de comprensin referida por Heidegger, no equivale al de conocimiento intelectual,connota ms bien un poder hacer frente a una cosa; en el sentido descrito, el ser ah nocomprende una cosa particular, sino su propio ser como poder ser. El ser ah como existenciaes aquel ser que posibilita que el ser este presente y pueda adems, comprender su propioser, y ser interpretado, no en el sentido de una cosa particular, sino como un poder ser; estepoder ser es como una especie de lugar en el que se manifiesta y despliega sus posibilidades.El ser ah se despliega en el absurdo de lo dado, es decir, en un lugar preexistente en el cual

se proyecta ms all de si mismo realizndose como proyecto, esto es, que no es todava loque tiene que ser y a de dejar de ser lo que ahora no es; por esto el hombre es anticipacinde s mismo dado que es un ser-en-el-mundo.

Arrojados en el mundo, que es nuestro espacio y posibilidad de realizacin, nuestraexistencia, como preocupacin surgida de la angustia, se ve proyectada a un mundo en elque tenemos que ser a nuestro pesar, dado que provenimos de la nada y nos realizamoscomo proyecto que se encamina hacia la muerte, da tal modo que la angustia es constitutiva

del ser ah como condicin de ser cado.El hombre es un ser inconcluso, siempre en proyecto incompleto que debe asumir la

muerte como su fin radical. No nos queda otro camino que hacernos responsables de nuestrapropia vida y asumir la propia muerte; la existencia autentica exige pues, reconocer quesomos un ser para la muerte, una verdadera va de acceso a la libertad. El poder ser que esel hombre estara de tal modo condicionado por su irremediable facticidad.

Si existe una posibilidad certera entre todas las posibilidades, esta es la de la muerte;que en su sentido propio, no es otra cosa que un fenmeno de la vida; diramos entoncesque para morir lo nico que hace falta es estar vivo. Esta idea nos conduce a una serie deinterpretaciones, sin embargo para Heidegger, todas las reflexiones sobre la muerte estnsituadas sobre la interpretacin existencial, de tal modo que, una tipologa del morir nosdice ms sobre el vivir del muriente que sobre el morir mismo. No podemos por tanto,de una manera justificada y segura, saber que hay despus de la muerte, sino solamentecuando ha sido comprendida en la plenitud de su esencia ontolgica, es decir, que la clave

de la muerte como problema estara en descifrar la estructura ontolgica de la muerte.

El hecho de que en un anlisis existenciario de la muerte resuenen posibilidades existencialesdel ser relativamente a la muerte radica en la esencia de toda investigacin ontolgica. . . Losproblemas existenciarios apuntan nicamente a poner de manifiesto la estructura ontolgicadel ser relativamente al fin del ser ah.

17

17. Heidegger. M. 1988: pp.271-272



9/17


Ahora bien, Cmo es posible que logremos descifrar la estructura ontolgica-existenciariade la muerte, como pretende Heidegger?

En primer lugar, esto es posible para Heidegger, si se parte de los caracteresfundamentales del ser delDasein, ser ah o ser-en-el mundo, que muestra una existencia quese anticipa as mismo, que al mismo tiempo es facticidad en tanto es en en-el-mundo, y queadems es cada en la medida en que se encuentra siempre en medio de los entes, y en esteestar se mantiene y distrae. Desde el punto de vista existencial, la posibilidad existencial dela muerte se instituye en el carcter abierto delDaseino ser ah que es siempre comprensindel ser y especialmente de su ser propio como anticipacin de s.

En segundo lugar, es posible descifrar la estructura ontolgica de la muerte, si secomprende que el Daseino ser ah como ser- en- el- mundo, como arrojado en el mundo,

existe siempre en la posibilidad de la muerte, aunque esta posibilidad no se haga patente demanera constante, ni se tenga de ella un conocimiento terico. Por otra parte, la muerte solose hace patente en la tonalidad de la angustia, que no es precisamente el miedo a morir, sinocomo dice Heidegger, la angustia es esa disposicin afectiva fundamental del ser ah, o laapertura al hecho de que el ser ah existe como un arrojado estar vuelto hacia su muerte, loque significa que, aunque no quisiramos ocuparnos del tema de la muerte o lo eludamos,no elimina el hecho de estar vuelto hacia la muerte que es en s mismo, una estructura

universal delDasein.Frente a la posibilidad de la muerte, y dejando de lado cualquier perspectiva religiosa,

no hay otra forma de respuesta que la aceptacin lcida; la asuncin serena del hecho, ola decisin anticipadora de la propia muerte, en el decir heideggeriano. Eludir el tema dela muerte, o el intento de huida es propio del estado de cado del Daseino ser ah, que eneste estado de vida cotidiano o modo de temporalidad, en su forma de cado se encuentraentretenido, distrado ocupado entre los dems seres intramundanos, de manera que noenfrenta la posibilidad de la muerte.

Pero, qu entiende Heidegger concretamente por la posibilidad de la muerte, y en queconsiste esta posibilidad? En palabras de Heidegger:

La muerte es una posibilidad de ser que ha de tomar sobre s en cada caso el ser ah mismo(Dasein). Con la muerte es inminente para el ser ah l mismo en su poder ser ms peculiar.En esta posibilidad le va al ser ah su ser en el mundo absolutamente. Su muerte es la

posibilidad del ya no poder ser ah. Cuando para el ser ah es inminente l mismo comoesta posibilidad de l, es referido plenamente a su poder ser ms peculiar. . . Esta posibilidadms peculiar e irreverente es al par la extrema. En cuanto poder ser no puede el ser ahrebasar la posibilidad de la muerte. La muerte es la posibilidad de la absoluta imposibilidad delser ah. As se desemboza (revela) la muerte como la posibilidad ms peculiar, irreverente eirrebasable. En cuanto tal es una sealada inminencia. Su posibilidad existenciaria se funda enque el ser ah es abierto esencialmente para s mismo, y lo es en el modo del pre-ser-ser.Este elemento estructural de la cura tiene en el ser relativamente a la muerte su ms original



10/17


concrecin. El ser relativamente al fin se hace un fenmeno ms claro en cuanto serrelativamente a la sealada posibilidad (eminente) del ser ah que acabamos de caracterizar .

18

De todas las posibilidades de existencia, es la muerte, para Heidegger, aquella incondicio-

nada, insuperable y por lo tanto la ms propia, dada su inminencia y su ineludibilidad, nohay escape posible, tarde o temprano llegar hagamos lo que hagamos, es efectivamente,inherente al ser-en-el-mundo Por lo tanto, la muerte como la posibilidad ms propia del serah, no est sujeta a ninguna condicin, es decir, no es respecto a ninguna otra posibilidad,y es por tanto, imposible superarla.

La posibilidad ms propia de la muerte lo es en tanto que el Dasein o ser ah, estsiempre anticipndose as mismo, estando adems en estado de abierto siempre para s

mismo en tanto que ser. Implica que la muerte comprendida como esa radical posibilidad dela imposibilidad de existir aparece con toda su fuerza como especie instrumento de medidaal que debemos someternos, en razn de nuestra capacidad para asumir como posible lapropia imposibilidad de nuestra existencia.

Desde el mismo momento en que el ser ah existe, es tambin esta posibilidad peculiare irrebasable, el ser ah esta entregado a su muerte, la muerte es por tanto inherente alser-en-el-mundo, revelndose en el encontrarse de la angustia.

La muerte como posibilidad ms propia nos induce, ms que a la huida o a la fugatranquilizadora, propia de una existencia inautntica, a la realizacin de nuestra existenciaautentica, es decir, asumiendo la muerte con decisin anticipadora. Estar vuelto hacia lamuerte es poner de manifiesto su carcter de posibilidad, en ningn caso significa comoun malsano inters por adelantar su llegada, ni tampoco estar constantemente pensandoen ella, tampoco es un modo de espera. Para Heidegger la decisin anticipadora de lamuerte y el estar vuelto hacia la muerte, no es efectivamente la muerte fsica o real, sino el

descubrimiento de la muerte en cuanto posibilidad, y este descubrimiento revela la radicalimposibilidad de la existencia.

Cul es entonces, segn Heidegger la manera apropiada frente al impropio modo derelacionarse con la muerte?

Si la muerte es la posibilidad ms propia delDasein, su ms propio poder ser, entoncesel ser ah comprende que debe hacerse cargo por s mismo del poder-ser en el que deforma ms radical est en juego su ser ms propio. De tal modo que singularizado el ser

ah al comprenderse desde su posibilidad ms propia, se asla de su propio ser, lo cual nosignifica asilarse del mundo y de los dems existentes. La singularizacin ms bien permitealDaseinliberarse de su modo de ser impropio o inautntico, recuperando su forma de ser alanticipar la muerte, al adelantarse y comprenderla como siendo su posibilidad ms propia.El concepto de anticipacin de la muerte, pone de manifiesto lo que verdaderamente es laexistencia autentica como relacionada con el mundo en trminos de posibilidades.

18.Heidegger. M. 1988: pp.273-274



11/17


Pero no solo son las otras posibilidades las que son entonces comprendidas en su justadimensin como posibilidades finitas, sino que ahora el Dasein puede tambin relacionarsecorrectamente con los otros, evitando malinterpretar sus posibilidades, forzarlas o desconoceraquellas que lo superan. As, la muerte asla, pero solo para hacer, en su condicin de

insuperable, que elDaseinpueda comprender, como coestar, el poder-ser de los otros.

19

La muerte, como hecho innegable de la experiencia, no es solo una certidumbre fctica, estambin, como se ha argumentado, la posibilidad ms propia del ser ah, sin embargo, espercibido por el ser ah como una amenaza, en el sentido de que el ser ah al adelantarse ala muerte indeterminadamente cierta, se abre a una constante amenaza que brota de su smismo Ah. La amenaza es percibida por el existente, precisamente por la angustia, dado

que en el estar en la angustia se encuentra ante la nada de la posible imposibilidad de laexistencia.

En otras palabras, el existente se da cuenta de que su existencia es imposible, de quepuede no ser, es decir que puede dejar de ser, sin embargo se da cuenta tambin de anexiste y prueba de ello es precisamente la angustia; comprende entonces que todo estopuede desaparecer y que esa desaparicin es posible. No como un posible ms entre otrosposibles que puedan producirse o no, sino como un posible por excelencia, que es el que

propiamente le corresponde al existente como ser finito y contingente que es cuya venidaal mundo y su permanencia en l es pura casualidad, sin ninguna necesidad que pudieraexplicar o justificar su llegada y duracin en el mundo

Ante tan dura comprobacin lo que cabe como posibilidades singulares es, por un ladola huida, consistente en la distraccin, en la dispersin que se produce entre los entesintramundanos y la cada entre ellos, como hemos dicho, o por otro, el resuelto volversea el fin y adelantarse a la muerte, aduendose de su posibilidad ms propia y ejerciendo

de este modo la libertad en su forma ms radical, esto es, aceptando, asumiendo y eligiendolo que de todas maneras ha de cumplirse.

Empero, el encubrimiento cotidiano de la muerte, que aunque la sabe empricamentecierta, no implica necesariamente su certidumbre; sin embargo, la certidumbre y laindeterminacin del cuando de la muerte, como posible a cada instante, es evadida porel ser ah, es entonces un impropio ser relativamente a la muerte.

Ahora bien, Heidegger explica que el ser relativamente a la muerte se ha fundado en

la cura. El ser ah en cuanto yecto, cado ser en el mundo, es el ser ah entregado ala responsabilidad de su muerte. Siendo el ser relativamente a la muerte, efectivamenteconstata la muerte fctica de los otros, sin embargo se esquiva ese ser en la cotidianidad, detal modo que es entonces un ser relativamente a la muerte, impropio.

La impropiedad dir Heidegger:

19.Heidegger. M. 1988: p.283



12/17


representa una forma de ser en que le ser ah puede emplazarse y regularmente se haemplazado siempre, pero en la que no necesita emplazarse forzosa y constantemente. Porqueel ser ah existe, se determina en cuanto ente, segn es, partiendo en cada caso de unaposibilidad que l mismo es y comprende.

20

Desde este recorrido de lo que Heidegger ha llamado la estructura ontolgico-existenciariade la muerte, llega Heidegger a plantear el concepto ontolgico- existenciario de la muertedel modo siguiente:

la muerte en cuanto fin del ser ah es la posibilidad ms peculiar, irreverente, cierta y encuanto tal, indeterminada, e irrebasable, del ser ah. La muerte es en cuanto fin del ser ah

en el ser de este ente relativamente a su fin.

21

Antes de describir algunas de estas caractersticas de la muerte en cuanto fin del serah, en su exgesis positiva, cabra preguntar si el ser ah puede realmente comprenderesta condicin de ser relativamente a la muerte como su posibilidad ms propia, cierta,irreferente e irrebasable, y como tal indeterminada.

El ser relativamente a la muerte propia, no es otra cosa entonces que una posibilidadexistencial del ser ah, esto que es posible en el plano ntico, lo es tambin en el ontolgico.Para mostrar esta pertinencia Heidegger se ha propuesto mostrar la estructura existenciariade un ser relativamente a la muerte propio. Esta estructura existenciaria muestra ya noprecisamente la fuga o la huida del ser relativamente a la muerte, propia de una existenciainautntica, sino la comprensin privilegiada y autntica del ser ah que se comprendeencontrndose, o el reconocimiento de que somos un ser para la muerte. Comprender,tal como lo advierte Heidegger, no significa simplemente contemplar de forma pasiva unsentido, sino,

...comprenderse en el poder ser que se desemboza en la proyeccin. 22

La proyeccin existenciaria de un ser relativamente a la muerte propio ha de poner demanifiesto, por ende, los elementos de semejante ser, que lo constituyen como un comprenderla muerte en el sentido de un ser relativamente a la posibilidad caracterizada no fugitivo niencubridor.

23

El ser relativamente a la muerte es la posibilidad del ser del ser ah. La muerte encuanto posible, no es un clculo o un pensar deliberadamente en ella, en cuanto tal elser relativamente a la muerte comprende la posibilidad, la asume como su posibilidad mspropia y la soporta en tanto su posibilidad.

20.Heidegger. M. 1988: p.28321. Heidegger. M. 1988: p.28222.Heidegger. M. 1988: p.28723.Heidegger. M. 1988: p.284



13/17


En el ser relativamente a la muerte. . . ha de comprenderse la posibilidad sin debilitacinalguna en cuanto posibilidad, ha de desarrollrsela en cuanto posibilidad, y en el conducirserelativamente a ella ha de aguantrsela en cuanto posibilidad.

24

El ser relativamente a la muerte es en definitiva un poder ser, una posibilidad cierta yextrema que el ser ah deber asumir para s mismo, esto es comprenderse a s mismo en elser del ente, y esto no es otra cosa que existir. Y es que, al estar las estructuras fundamentalesdel ser-en-el-mundo centradas en el estado de abierto, la esencia del ser ah no puede serotra cosa que la existencia.

La Existencia como la esencia del ser ah, quiere decir que el ser-ah es una forma deun poder ser comprensor al que en su ser le va su ser mismo.25 As, la existencia encuanto ma en cada caso es el poder ser libre para ser en propiedad o impropiedad o laindiferencia modal de ambas. Existencia quiere decir, poder ser, pero tambin, propio, laestructura existenciaria del poder ser propio, necesario para la originalidad al ver previo.La posibilidad del poder ser es entonces la posibilidad de la existencia propia.

El ser-ah comprende entonces su condicin de ser relativamente a la muerte, comosu posibilidad ms propia y cierta de su poder ser. Pero esta condicin como posibilidadpropia, es irreferente, solo es posible desde la singularidad del s mismo del ser ah, y estasingularizacin es un modo de abrirse del ah para la existencia. Heidegger dir que Elser-ah slo puede ser propiamente l mismo cuando se pone en posibilidad de ello desdes mismo.26 Por tanto, el ser ah solo puede ser l mismo en cuanto se proyecta y precursala posibilidad de su poder ser ms propio y cierto. Este precursar necesario hace que el serah tome para s y desde s su ms peculiar ser, como ser para la muerte, comprende su serpara la muerte.

Pero esta posibilidad ms propia y cierta del ser ah como ser relativamente a lamuerte, irreferente es tambin irrebasable y singular. El ser relativamente a la muerte

como posibilidad extrema, despus de la cual ya no es posible otra posibilidad, es tambininminente para el ser ah, no se puede esquivar por su peculiaridad de irrebasable, comopretendera una existencia inautntica; por el contrario, el ser ah, de manera autntica,comprende y elige radicalmente la posibilidad de ser para la muerte, o su ms radical poderser.

Heidegger dir que:

Estando en libertad para las posibilidades ms peculiares, determinadas por el fin, es decir,comprendidas como finitas, evita el ser ah el peligro de desconocer, desde su comprensinfinita de de la existencia, las posibilidades de la existencia de los otros que la rebasan. . . Pero,en cuanto posibilidad irreferente, slo singulariza la muerte para hacer, en cuanto irrebasable,al ser ah en cuanto ser con, comprender el poder ser de los otros. El precursar la

24.Heidegger. M. 1988: p.28525. Heidegger. M. 1988: p.25426. Heidegger. M. 1988: p.287


92


14/17


posibilidad irrebasable abre con sta todas las posibilidades que estn antepuestas a ella: poreso reside en l la posibilidad de un tomar por anticipado existencialmente el ser total.

27

La posibilidad del ser ah como ser relativamente a la muerte, como se ha dicho es

tambin cierta, no cabe la duda respecto a ella, es de hecho una realidad cierta Comoposibilidad cierta del ser ah, se hace posible como la posibilidad ms cierta del ser, comosu posibilidad ms peculiar de poder ser, esto solo es posible por el estado de abierto dela posibilidad. De tal modo que la certidumbre de la muerte no viene precisamente dela comprobacin cotidiana de la muerte fctica de los otros, no tiene el carcter de unaevidencia apodctica, dado que esta evidencia no es aquella inmediata, emprica propia dela vida cotidiana. La muerte es adems, una experiencia ciertamente particular en cada caso,un an no, en el sentido descrito. La muerte como la posibilidad ms particular, irreferente,irrebasable y cierta, y en relacin a la certidumbre, es tambin indeterminada. Ciertamentesabemos que tarde o temprano moriremos, sin embargo, no sabemos cundo ocurrir,esta indeterminacin del cundo de la muerte, siendo esta una posibilidad inminente, secaracteriza por ser posible a cada instante.

Ocultar o eludir las caractersticas descritas ontolgico-existenciarias de la muerte,corresponden justamente a la impropiedad del morir, o a una relacin impropia con lamuerte, conforme a la existencia inautntica perdida en la cotidianidad. En tanto queel ser relativamente a la muerte propio no puede evadir esta posibilidad. La proyeccinexistenciaria de la muerte propia radica en hacer evidente las caractersticas mencionadasde la muerte como posibilidad, sin ocultarlas. ElDaseino ser ah, proyecta su propia muerte,se adelanta, se anticipa a su propio morir.28

La anticipacin existencial de la muerte no es la preocupacin o el afn de surealizacin. Heidegger se preocupa de distinguir la posibilidad de la muerte de otros tiposde posibilidades que proyectan la posibilidad como algo realizable; de entender la muerte

en este sentido entonces, se anulara la propia posibilidad de lo posible y entraramos alcampo de lo disponible. Con todo y esto la pregunta por el qu hacer con la muerte, se haceinevitable. Hemos de decir con Heidegger, que nada podemos hacer con la muerte, en elsentido de poder dominarla, producirla o disponer de ella. Sin embargo, la posibilidad delmorir, que no es un hacer, se perfila como la necesidad de un comportamiento adecuado oautntico frente a la muerte, anticipndonos a ella, en otras palabras, la necesidad de unaapropiacin humana de la muerte.

No queda otra cosa pues, que disponerse ante la posibilidad como posibilidad, o dejar sera la muerte como posibilidad evitando convertirla a la objetividad de lo que es puramentedisponible. De lo que se trata frente a la muerte es dejar que sea su posibilidad comoposibilidad que no es una voluntad de domino frente a ella. En este sentido es un abrirse a lamuerte, ponerse en libertad para la muerte, lo cual no significa una eleccin o una decisin,

27.Heidegger. M. 1988: p.28828. El problema de la anticipacin de la muerte, vase en Heidegger. M. 1988: 53


| 93


15/17


sino un disponerse a ser s mismo y ser s mismo solo es posible si sucede en la existenciavivida de cara a la muerte.


94 | La estr ct ra ontolgica e istencial de la m erte en Heidegger


16/17


Referencias

1. Cataldo Sanguinetti, G. (2003), Muerte y Libertad en Martn Heidegger. Philosophica, vol.26:pp.29-53

2. Cohn, P. (1975),Heidegger: Su Filosofa a travs de la Nada. Madrid: Ed. Guadarrama

3. Constante, A. (1975),El Retorno al Fundamento del Pensar (Martn Heidegger). Mexico: UNAM

4. Ferrater Mora, J. (1967), Obras Selectas. Vol.II. Madrid: Ed. Revista de Occidente

5. Heidegger. M. (1988),El Ser y el Tiempo. Trad. J. Gaos. Mxico: Fondo de Cultura Econmica

6. Vattimo, G. (1985),Introduccin a Heidegger. Barcelona: Ed. Gedisa



17/17

DP h i l o s o p h i c a l R e s e a r c h B u l l e t i n

B o l e t n d e I n v e s t i g a c i n F i l o s f i c a

I N F O R M A C I O N E D I T O R I A L D E L T R A B A J O

INFORMACIN DELAUTOR| AUTHORAFFILIATIONS

Nombre y Apellidos: Elsa Gonzlez MoscosoCargo o Puesto: Profesora Titular Principal

Afiliacin y Direccin Departamento de HumanidadesInstitucional: Universidad de Cuenca

Av. 12 de Abril S/N y Agustn CuevaEC010111, Cuenca, EcuadorGrado Acadmico : Magister en Estudios de la Cultura [MA]

Afiliacin Institucional: Universidad del AzuayEmail: [email protected]

INFORMACIN DELTRABAJO| WORKDETAILS

Nombre del Trabajo: Consideraciones en torno a la estructura ontolgicaexistencial de la muerte en Martin Heidegger

Nombre de la Revista: Disputatio. Philosophical Research BulletinISSN: 2254-0601

Numeracin de la Revista: Vol. 1, No. 1, pp. 79-94Fecha de Publicacin: Junio de 2012

Periodicidad: SemestralLugar de Publicacin: Salamanca - Madrid

e-mail: [email protected] site: www.disputatio.eu

NOTAEDITORIAL| EDITORIALNOTE

Tipo de trabajo: Artculo. OriginalReeditado de ninguno

Licencia: CC BY: $\ = 3.0 Unported.Separata: NoISBN: No

El autor(es) 2012. Publicado por Disputatio bajo una licencia Creative Commons, por tanto Vd. puedecopiar, distribuir y comunicar pblicamente este artculo. No obstante, debe tener en cuenta lo prescritoen la nota de copyright. Permisos, preguntas, sugerencias y comentarios, dirigirse a este correo electrnico:[email protected]

4.-_Gonzalez-Heidegger y La Muerte

Documents

Transcript of 4.-_Gonzalez-Heidegger y La Muerte